Como imitar mármol para la decoración del hogar Se aproxima el otoño y nos surge la necesidad de dar un nuevo aspecto al hogar, modificando la decoración en todos los ambientes. Y es aquí donde entra en juego nuestra creatividad, para poder restaurar y renovar elementos y superficies sin salirnos del presupuesto deseado. Por ello, hoy aprenderemos a tratar superficies para imitar mármol, y renovar así una gran variedad de elementos decorativos y funcionales. Podemos aplicar la técnica de imitación mármol en objetos decorativos, o bien en superficies lisas (como mesas, bandejas y otros muebles) o hasta en columnas y repisas o esquineros. En esta nota, vamos a aprender a transformar cualquier superficie de madera en este material tan decorativo (¡y costoso!), para renovar nuestro hogar. Como en todo trabajo, comenzamos por limpiar la su perficie con un trapo seco, y luego con un trapo humedecido, ya sea en agua tibia o en agua tibia con detergente neutro o jabón blanco. Luego damos un lijado para eliminar ceras o capas de pintura deterioradas, dejando la madera lista para recibir su tratamiento decorativo. Recordá siempre luego de lijar, limpiar la superficie con un trapo de algodón húmedo, para eliminar el polvillo. Ya lista la superficie de madera, damos dos capas de primer o imprimación para sellar los poros, protegiendo la madera y dejándola uniforme y lisa. Recordá dejar secar dos a tres horas entre una y otra capa. Podés utilizar un primer (Pintura que sirve de amarre, baseó primera protección anticorrosión del material a pintar) incoloro, aunque vas a conseguir un mejor acabado utilizando la imprimación del color de las vetas que quieras darle al mármol. En esta selección de color, recordá que la mejor terminación es usar un color de base claro, y un color de las vetas oscuro. Dejamos secar perfectamente, y damos un lijado suave para eliminar cualquier defecto y dejar la superficie bien suave y lisa. A continuación utilizaremos pinturas al óleo, dando una capa bien abundante, para dar el color de base. Podés buscar en internet fotos de mármoles, para determinar el color co lor y el acabado que quieras dar a las piezas y superficies. Cuando el óleo aún no ha secado, dibujás con un pincel las vetas, de manera libre y orgánica, sin preocuparte demasiado por la perfección.
A continuación utilizaremos pinturas al óleo, dando un a capa bien abundante, para dar el color de base. Podés buscar en internet fotos de mármoles, para determinar el color y el acabado que quieras dar a las piezas y superficies. Cuando el óleo aún no ha secado, dibujás con un pincel las vetas, de manera libre y orgánica, sin preocuparte demasiado por la perfección. Mientras vas haciendo esto, vas a ir retirando la pintura y dejando expuesto el color de abajo (el de las vetas), así que asegurate de tener trapos a mano para ir limpiando el pincel para dejar bien marcadas las vetas. Si querés dar un un
efecto más orgánico, en este momento podés utilizar un trapo con aguarrás para ir "deformando" la superficie, dejándola casi texturada. Dejamos secar bien la superficie, durando un o a dos días, dependiendo del clima (podría ser más tiempo). Luego lijaremos con u n papel de lija de grano fino para dejar una textura suave, y aplicaremos un barniz satinado o brillante, para dar un acabado más realista a la pieza. Podés aplicar una o dos capas, dependiendo de la necesidad. Ya seco el barniz, podés hacer un pulido suave con un trapo de algodón, y ya tenés lista tu pieza de mármol.
Imitación a Mármol
Tutorial realizado por Rosamunda Materiales: • • • • • •
Pintura acrílica blanca. Pintura acrílica negra. Barniz para acuarela. Esponja. Pluma. Pincel plano 3/4
Pincel redondo No 8 (según el tamaño de la pieza). Preparación base: •
Aplicar una capa de pintura negra con el pincel plano, extendiendo y cubriendo muy bien toda la superficie. Dejar secar.
Una vez seca se da una segunda mano, que se deja secar también. Realización de las aguas: Se toma un trozo de esponja y se recorta por los bordes para que queden irregulares. También se hace unos agujeros en la superficie con la que se va a pintar para que quede más irregular aún. En un plato se mezclan las pinturas para conseguir dos tonos de grises.¡CUIDADO! se tiene que notar muy bien la diferencia entre los dos. Se apoya suavemente la esponja cogiendo los dos tonos de gris para que se mezclen sobre ella y se va apoyando sobre la pieza que estamos pitando a modo de tampón, pero sin cubrir toda la superficie hay que dejar partes que se vea el fondo. Dejar secar hasta que toda la superficie esté completamente seca. Realización de las vetas: Mojar el canto de una pluma en la pintura blanca. A continuación se va deslizando sobre la pieza apoyándola muy ligeramente, con un leve temblor en la mano y de forma muy desigual por toda la superficie y por los bordes si los tuviera la pieza. Insistir en algunos puntos con el fin de engordar un poco la veta y darle un aspecto más natural. Dejar secar. Barnizado: El acabado se consigue con un barniz que sea muy espeso y brillante y se pone con pincel redondo. Con pequeñas pinceladas se va aplicando sobre la pieza una gruesa capa de barniz hasta cubrirla en su totalidad. Se deja secar 24 horas y si el brillo no fuera el suficiente o el deseado repetir la última operación. Es importante que una vez seco quede muy brillante. Nota: Aunque en la técnica se habla de blanco y negro se puede hacer con cualquier tonalidad que se quiera e imitando cualquier tipo de mármol.Se utilizan estos dos colores para que se vea mejor el contraste.