Escuela de Teatro Facultad de Arquitectura Historia del Teatro Chileno Prof. Cristian Figueroa/ Nicol Rivera Elizabeth Beltrán Riquelme
“Como en Santiago” Daniel Barros Grez
Introducción.
El presente trabajo consta del análisis de la obra Como en Santiago, escrita por Daniel Barros Grez en el año 1875 y la cual es considerada como una de las más importantes de aquella época, pues es a través de un estilo costumbrista que el autor no s llevará a reflexionar acerca de cómo se vivía en aquellos años, una sátira hacia la relación entre clases sociales, aquello por lo que se vivía. Es interesante poder analizas a partir de esto, como es que atreves de estas obras teatrales se puede llegar a analizar en cierta forma el periodo histórico en el que ha sido escrita. Este análisis, presentará en primer lugar al autor de la o bra, el cual si bien no tiene mayor reconocimiento en la época actual, este si fue de gran reconocimiento en la suya; luego se hará una breve síntesis argumental presentando sus principales contenidos, personajes y el estilo que marca la obra.
Daniel Barros Grez.
Nace en la provincia de Colchagua en el año 1834. Considerado un importante escritor de la época. Realizó sus estudios en el Instituto Nacional para luego llevar a cabo su periodo universitario en la Universidad de Chile, egresando en 1850 como ingeniero civil. Así más tarde se incorpora como docente en la facultad de Ciencias y Matemáticas y es así que a partir de ese momento comienza a ser conocido no solo en el ámbito de las ciencias, sino también en la literatura. Su obra se destacó tanto por la publicación de fabulas, novelas como también obras teatrales, destacando en estas últimas. Ahora bien, la importancia de su autoría no solo está en la llamativa combinación de sus prácticas, sino que en cada una de sus obras deja en claro ciertas características de la época en la que vivía; por ejemplo, la tensa relación entre clases sociales, no solo por el nivel económico que poseía cada uno, sino también por el lugar en el que vivía, pues, la ciudad de Santiago ya era considera como aquella con mayor cultura, el lugar donde se concentraba la mejor comodidad y donde la masa política y de mayor rango social aprendían y se desarrollaban de forma social, económica y cultural. Una de sus más importantes publicaciones fue la obra Como en Santiago, escrita en el año 1875, periodo en el cual Chile se encontraba en importantes cambios tanto políticos, económicos como culturales. Pues es importante mencionar que este periodo es gobernado por el liberal Federico Errazuriz Zañartu, entre los años 1871 y 1876, siendo quien logra formar la Alianza Liberal, tras la salida de los conservadores, debido a las inconformidades por parte de estos tras las nuevas motivaciones de carácter laico que proponía el gobierno. Por otro lado el país se encontraba en conflictos con Bolivia y Argentina, lo cual mantenía a este nuevo Chile de manera alerta y movilizada hacia los múltiples cambios que podían suceder, siendo así un preciso momento para dedicarse a la literatura. Finalmente muere en la ciudad de Quillota en 1904.
Síntesis Argumental.
La obra se presenta en primer lugar en una provincia, una casa acomodada, de la cual su dueño es Don Victoriano, quien vive junto a su esposa, Doña Ruperta, su hija, Dorotea y su sobrina Inés a quien acogieron luego de que su madre falleciese. Ahora bien, la obra comienza con Inés, quien tras un rato de haber cantado llega su tía Doña Ruperta para comenzar a llamar su atención, pues su prima debe estar en pleno descanso tras haber ido al baile la noche anterior. Es así, como el gran conflicto comienza a aparecer pues Dorotea ha conocido al diputado santiaguino Faustino Quintalegre, de quien se ha enamorado inmediatamente a pesar de tener un novio con quien ya está comprometida, Silverio, y a pesar de esto ha decido casarse con el diputado, quien en realidad está siguiendo un plan para quedarse con la propiedad de Don Victoriano. Luego, Silverio se entera de la noticia, sin embargo ve en Inés aquel amor que ella había ocultado por corresponder a las órdenes de su tía, así mediante avanza la obra Faustino intenta tomar prontamente el terreno, a la vez que Dorotea se encuentra defraudada pues, Quintalegre no es del todo un caballero, y acaba de ver a Silverio e Inés juntos, prometiéndose amor el uno al otro. Por otro lado, llega Don Manuel, quien apenas ve a Faustino sabe cuáles son las malas intenciones de este y ayuda a Don Victoriano a dar cuenta de ello. Finalmente, una vez que Dorotea le cuenta a su madre que vio a Silverio e Inés juntos, Doña Ruperta cree tener todo bajo su control, sin embargo, Silverio elige quedarse con Inés y por ultimo Faustino no logra cumplir su cometido. Personajes.
Doña Ruperta
Don Victoriano
Inés
Dorotea Don Manuel
Faustino Silverio
Don Victoriano: Esposo de Doña Ruperta, padre de Dorotea, tío de Inés. Es además parte de la municipalidad. En la obra y según el estilo del autor, se puede apreciar en él a aquel personaje que cumple con el rol del provinciano que cumple con las normas y sus deberes, queriendo alcanzar con el estatus de un Santiaguino, resaltando así la importancia que se le dedicaba desde ya, a la capital en dicha época. Sin embargo, en esta ocasión, es llamativa la relación con su esposa, pues se ve sometido a las ordenes éticas y de conveniencia de esta, generando así una mayor importancia en la clase social, que en las relaciones entre hombremujer, ya que durante la obra Doña Victoria destaca su conocimiento cultural que obtuvo al ser parte de Santiago. Doña Ruperta: Esposa de Don Victoriano, madre de Dorotea, tía de Inés. El rol que cumple en la obra, puede ser considerado como uno de los motores a la sátira que hace Barros Grez, en torno a la clase social alta de la época, o a aqu ella que aspiraba a ella, y el rol que cumplía la mujer dentro de esta. Pues a medida avanza la obra, se pueden tener en cuenta los momentos en que Doña Ruperta demuestra ser una mujer clasista- recordando el trato que tiene hacia Inés-, en ella se puede considerar también la ambición por obtener un mejor título en la sociedad, de esta forma se propone incluso a una madre superficial, ya que la relación con su hija Dorotea solo apunta a cumplir con los deseos y ambiciones de ambas. Dorotea: Prometida de Silverio, prima de Inés, amante de Faustino. Representa al igual que su madre la ambición- en este caso de la juventud de esos años- por tener una mejor posición social. Ella ejemplifica incluso mejor, la superficialidad que el autor otorga a la imagen de la mujer de la época, por ejemplo, al comienzo de la obra, Dorotea, entra a escena con un gran lamento, pasando por alto el llanto de su prima, haciendo que esta le otorgue toda su atención y consulte por su estado, a lo cual responde que su padre había encargado un espejo, y este en el camino se había roto, lo cual ella considera lamentable, pues es ese el momento en que necesitaba aún más de el para recibir de forma correcta al diputado Faustino, a pesar de estar comprometida con Silverio. Así tras estas decisiones puede seguir apreciándose la superficialidad de la muchacha hasta el final de la obra, pues al v er que su prometido tras ser dejado a un lado comienza a verse con Inés, Dorotea se lamenta aún más, y lo realmente le importa es que ha sido cambiada por alguien -según la calificación de clases sociales- por alguien menor a ella. Inés: Sobrina de don Victoriano. En ella se puede apreciar el contra punto que entrega el autor a la satírica imagen de la mujer que representa tanto su tía y su prima. Pues en primer lugar no representa a una clase social acomodada, es más se ve atrapada por esta, pues es la familia de su tío quien la recibe tras la muerte de su madre. En varias ocasiones menciona su pobreza y pide ayuda su madre para salir de ella, además está enamorada de Silverio, prometido de Dorotea, sin embargo cuando esta lo deja, ambos tanto Silverio como Inés se declaran mutuo amor.
Silverio: Prometido de Dorotea, hijo de Don Manuel. Se puede considerar que representa de cierto modo una víctima del circulo ambicioso y clasista que propone en los demás personajes el autor, pues al igual que ha Inés, este es pasado a llevar tras las decisiones que toman Dorotea y su madre. Sin embargo una vez es rechazado se da cuenta del amor que Inés le dedica, de esta forma al final de la obra es el quien rompe el estatus a Dorotea siendo el quien la rechaza, para así tomar la mano de Inés. Faustino: Diputado de Santiago, amante de Dorotea. Representa la imagen de la capital, Faustino demuestra la altura social a la cual en esos años se deseaba llegar, sin embargo no se debe olvidad que el autor utiliza esta obra como una sátira a todas estas metas sociales, es así como en la historia este diputado es en realidad un estafador, quien demuestra haberse enamorado de Dorotea solo para así poder conseguir beneficios, como el terreno de Don Victoriano, apuntando así a la política de aquel momento. Don Manuel: Hermano de Doña Ruperta, padre de Silverio. Este hombre representa en la historia al provinciano real, aquel que no desea llegar ni por conveniencia ni por ambición a un estatus más alto, pero de todas formas es mucho más hábil, siendo el quien comienza a dudar desde un principio en los dichos de Faustino, y quien ayuda a develar sus intenciones al final de la obra.
Como en Santiago: Comedia de costumbres en tres actos. Así, tal como lo dice su nombre esta obra consiste en ser una comedia de caracteres costumbristas y ordenada en tres actos. Es importante pues devela tanto en su historia como en sus personajes las particularidades en las que se vivía en dicha época. Es así como podemos no solo fijarnos en las relaciones que existían entre el campo y la ciudad, sino también, como ya se ha hecho énfasis con anterioridad entre las clases sociales, y también el estigma que se tenía ante las acciones ya fuese de un hombre o una mujer. Es además, bastante claro el punto de vista del autor, dejando a quienes provienen de provincia en un lugar caracterizado por el amor y la inocencia desde la cual viven, siendo al contrario una especie de ridiculización para aquellos que en ese entonces vivían en tal ciudad como Santiago. Enfatizando la ambición en ambas mujeres, madre e hija, para que así ya al final de la obra se vieran afectadas tras haber tomado malas decisiones y a pesar de esto, la obra fue escrita desde un punto totalmente cómico. Por otro lado, la obra es claramente de carácter clásico, pues la estructura de esta demuestra una línea argumental que cumple con características aristotélicas, llamando la atención de la utilización seguida de los apartes. Y propone además un estilo realista, manteniendo la información de la época viva en aquel texto.
Conclusión.
Esta obra escrita por Daniel Barros Grez, a mediados del siglo XIX, es sin duda un gran ejemplo para comprender las relaciones que se comenzaron a formarse debido a los cambios políticos que presentaba el país
Bibliografía.
Webgrafía.
http://www.memoriachilena.cl/602/w3-article-3347.html (Daniel Barros Grez) http://www.memoriachilena.cl/602/w3-article-3418.html (Federico Errazuriz)