Fernando urribarri. Castoriadis: La Sublimación Extendida. Zona Erógena. Nº 45. 2000.
CASTORIADIS: LA SUBLIMACIÓN EXTENDIDA FERNANDO URRIBARRI
Este texto corresponde a la conferencia presentada en el "Coloquio Internacional Cornelius Castoriadis" organizado por la Ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales de París (Francis) en junio de 1999. La propuesta principal de esta exposición es presentar la idea de que en la obra de Castoradis hay una elaboración original de la sublimación. Esta elaboración original es tributaria de la doble elucidación de lo historicosocial y de la psique que singulariza a la obra de Castoriadis.(1) El aporte que se deriva de esto es entonces doble. Por un lado articula la sublimación con el campo historicosocial; creando una nueva perspectiva general para pensar la cuestión. Por otro reelabora metapsicológicamente diversos aspectos fundamentales de este concepto. Ambas dimensiones convergen en lo que propongo llamar una concepción extendida de la sublimación. Todo este trabajo innovador, sin embargo, no constituye una teoría de la sublimación, tematizada y sistemáticamente sistemáticamente elaborada en todas -o sus principales- dimensiones. Más bien se trata de una serie de elucidaciones parciales, presentadas a veces como formulaciones explícitas, precisas y extensas, y otras veces como simples indicaciones. En realidad, puesto que no habían sido el foco de su trabajo sistemático y principal, sólo tardíamente Castoriadis llegó a reconocer reconocer la originalidad de sus ideas sobre la sublimación. En 1996, en su segunda visita a Bs.As., Castoriadis comenzó una conferencia sobre el tema diciendo: "Mi amigo Fernando Urribarri sostiene que el concepto de sublimación que he desarrollado en mi obra, sun si se inspira en el pensamiento de Freud, es significativamente distinto. Pues, bien: considero que tiene razón"(2). Este generoso reconocimiento público era el resultado de un proceso. Pues para mi sorpresa, cuando en 1993 conversando sobre mi investigación de sus ideas psicoanalíticas le comuniqué mi opinión -como si se tratara de algo casi obvio -él no
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estuvo de acuerdo. Sólo más tarde -y en parte en el contexto de lo que devino mi trabajo de doctorado bajo su dirección- Castoriadis fue cambiando la suya. Voy a exponer entonces esta serie de renovadoras ideas de Castoriadis sobre la sublimación (que se encuentran presentadas en su obra en diferentes escritos a lo largo de varios años) de acuerdo a una articulación personal -surgida del trabajo recién mencionadoorganizada según tres ejes. En el primer eje -tras establecer la diferencia de perspectivas con el pensamiento de Freud- presentaré la reelaboración y extensión general de la sublimación según Castoriadis. Me referiré a la concepción de la sublimación extendida: por un lado como socialización y por otro como trabajo de la imaginación radical. En el segundo eje expondré una serie de aportes teóricos al concepto de sublimación. Estos pueden considerarse como el complemento metapsicológico de la extensión general de la sublimación correspondiente el primer eje. Me ocuparé entonces principalmente de las modificaciones introducidas en la comprensión de las nociones de objeto de la sublimación, placer sublimatorio, desexualización, tópica de la sublimación y especialmente de una original idea de apoyo. En el tercer eje me referiré brevemente a algunas cuestiones fundamentales para pensar la dimensión pulsional de la sublimación presentes en algunos textos de "Hecho y por hacer". Específicamente a las nociones de pasión y de deseo de dominio de la realidad. Para terminar voy a hacer un breve comentario crítico sobre las ideas de Castoriadis acerca de la sublimación.
1- CASTORIADIS Y FREUD "Freudiano ferviente" -como gustaba definirse - Castoriadis parte de Freud. Conviene entonces empezar recordando brevemente la concepción freudiana de la sublimación. En el "Vocabulario de Psicoanalisis", Laplanche y Pontalis escriben lo siguiente: "SUBLIMACION: -Proceso postulado por Freud para explicar ciertas actividades humanas que aparentemente no guardan relación con la sexualidad pero que hallarían su energía en la fuerza de la pulsón sexual. Freud Este documento ha sido descargado de http://www.educ.ar
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describió como actividades de este tipo la actividad artística y la investigación intelectual. -Se dice que la pulsión se sublima en la medida en que es derivada hacia un nuevo fin no sexual y apunta hacia objetos socialmente valorados". Más allá de alguna indicación marginal, la perspectiva general de Freud toma como modelo la actividad artística y la investigación intelectual. La sublimación es pensada como un destino de la pulsión infrecuente y en gran medida reservado a sujetos extraordinarios. El modelo con el que funciona esta idea es Leonardo Da Vinci. Desde esta perspectiva restringida y restrictiva el psicoanálisis freudiano y posfreudiano tiende a limitar la concepción de la sublimación al cambio de meta pulsional. Esto condenará a estas teorías a pensar la sublimación en una dimensión excesivamente, y casi exclusivamente, intrapsíquica. Correlativamente se descuida y minimiza la importancia del cambio de objeto. Como en la definición del Vocabulario: se dice que la sublimación "apunta" hacia los objetos. El objeto y la sociedad a la que pertenece aparecen como externos al proceso mismo. En contraste con Freud la perspectiva de Castoriadis esta definida por el interés acerca del modo de funcionamiento ordinario del individuo en la sociedad. El modelo de Castoriadis es el ciudadano normal, no el creador extrordinario. Veremos entonces que la primer modificación que Castoriadis introduce es, por decirlo así, de perspectiva: el ángulo para pensar la sublimación es extendido al ser puesto en relación con el campo historicosocial. Esta perspectiva no se define por la pregunta acerca de cómo es posible la creación artística sino la vida cotidiana de los seres humanos, que es siempre una vida social.
1. A-Sublimación y socialización Puede decirse que la noción de sublimación constituye el vector metapsicológico de la teorízación del proceso de socialización. La sublimación es conceptualmente extendida al ser resituada y redefinida en relación a este proceso. Ella es postulada como la dimensión intrapsíquica del proceso de socialización. En primer lugar la sublimación es situada de un modo nuevo. Cito: "La sublimación no es otra cosa que el aspecto psicogenético o
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ideogenético de la socialización, o la socialización considerada como proceso psíquico"(3). Luego, en base a esta nueva perspectiva extendida, es redefinida como "el proceso a través del cual la psique es forzada a reemplazar sus objetos privados o propios de carga libidinal (incluida su propia imagen ) por objetos que son y valen en y por su institución social, y a convertirlos en "causas", "medios" y "soportes" de placer psíquico"(3). Desde el punto de vista psicoanalítico la originalidad de la idea de proceso de socialización consiste en definir y elucidar el proceso de constitución, organización y desarrollo del psiquismo como esencialmente co-determinado por su relación con lo social. La co-determinación social de la psique postulada por Castoriadis radicaliza y supera las ideas freudianas que reconocen en lo social un polo del conflicto psíquico. Pues ya no se trata sólo de la presencia de lo social del lado de la defensa, del yo, del superyo, etcetera. También será preciso reconocer la incidencia de lo social en el terreno mismo del deseo inconsciente. Como ejemplo mencionemos la pulsión anal, la erogenización de la zona anal y la constitución de la heces como objeto libidinal, imposibles de comprender por fuera del proceso de socialización, de la significación social de la propiedad aportada por la madre, etcetera. Esta radicalidad de la idea de co-determinación social de la psique tras la ruptura de la mónada psíquica (el "autismo" del narcisismo primario absoluto) tiene como contrapartida la idea de una oposición radical, irreductible entre la psique y la sociedad. Pero psique y sociedad, además de irreductible, son indisociables. Pues la una necesita de la otra para existir. La sociedad precisa individuo socialmente conformados que la compongan y perpetúen. La psique necesita socializarse para sobrevivir. El proceso de socialización es aquel por el cual la sociedad y la psique procuran resolver recíprocamente estas necesidades. La originalidad de la teorización de este proceso proviene de la elucidación del modo de ser de lo historicosocial y de la psique como imaginario social radical y como imaginación radical, respectivamente. El proceso de socialización se funda en el hecho de que para la sociedad y la sociedad hay, y debe haber, sentido no funcional, sentido imaginario. La psique y la sociedad son y viven a través de la construcción de un mundo propio de sentido. La condición que el modo de ser de la Este documento ha sido descargado de http://www.educ.ar
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psique impone al proceso de socialización es que la sociedad, al arrancarla del encierro monádico originario le de respuesta a su necesidad absoluta de sentido. La sociedad responde mediante las significaciones imaginarias sociales. Estas crean el sentido propio de cada sociedad. Componen un mundo "completo", clasusurado, de sentido que entrelaza indisociablemente la triple dimensión de la representación, del afecto y del deseo o intención. Como dimensión psíquica del proceso de socialización, la sublimación será el proceso por el cual la psique llegará a incorporar las significaciones y su modo de funcionamiento, de puesta en sentido. Desde esta nueva perspectiva, entonces, la sublimación es extendida en varios aspectos: -De ser un proceso extraordinario, propio de seres extraordinarios, pasa a ser considerado un proceso universal que define la constitución del psiquismo de los seres humanos en general. -De proceso acotado (o en otros términos: de destino de la pulsión) pasa a ser un proceso extendido en dos sentidos: por un lado evolutiva o temporalmente a lo largo del proceso de desarrollo del psiquismo; por otro lado también es extendido metapsicologicamente. Un ejemplo de esta doble extensión es la ilustrativa y provocativa formula según la cual "hablar es ya sublimar". Esto sería así puesto que el fin de hablar es comunicarse y no obtener placer sexual, y que el lenguaje es un objeto social. Para fijar las ideas podría sintetizarse lo expuesto hasta aquí con la siguiente formula: sublimar es socializarse. O sea, asimilar las significacionesimaginarias sociales, su contenido y su lógica. Sublimar es entonces un trabajo psíquico de transformación (creación y re organización) de la representación, de puesta en sentido en y por medio de, las significaciones imaginarias sociales. Ahora bien, decir que sublimar es crear sentido o dar significación es decir también que sublimar es imaginar.
1. B- Sublimación e imaginación Castoriadis postula dos condiciones esenciales para la sublimación: Una es la imaginación radical, la otra es el predominio del placer de representación sobre el placer de órgano.
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La imaginación radical es condición de la sublimación en múltiples aspectos, pero antes que nada es su elemento mismo, su fundamento mismo. La psique es imaginación radical, es decir: un flujo indeterminado de representaciones afectos y deseo que es creación y emergencia del sentido para la psique. Es en y por la imaginación radical que la psique existe en el sentido, que debe y puede vivirlo todo como sentido. Sentido que para el ser humano es sentido a-funcional, sentido imaginario. Sentido que no está predeterminado por las regulaciones biológicas, instintivas. Una de las características de la imaginación radical especialmente importante para la sublimación, es que hace posible el simbolismo, el "quid pro quo", la capacidad de ver en una cosa otra distinta. De este modo la imaginación radical hace posible para la psique, por ejemplo, el lenguaje (lo que es casi lo mismo que decir que hace posible la sublimación). Por su parte el predominio del placer de representación sobre el placer de órgano se apoya en la capacidad de la imaginación radical de crear representaciones que son fuente de placer. En la sublimación la imaginación radical da existencia para la psique a las significaciones imaginarias sociales. Esta creación es la condición de posibilidad de otro aspecto del proceso de sublimación: la transformación de las significaciones en objetos, causas o soportes de un placer de representación socializado. La sublimación es entonces elucidada por Castoriadis como un proceso, a la vez, co-determinado por la sociedad y por la creatividad absoluta de la imaginación radical de la psique. Sublimar es socializarse y sublimar es imaginar. Estas dos ideas, inseparables entre si - e inseparables de la elucidación general del modo de ser de la psique y de lo historicosocial - definen la perspectiva extendida del concepto de sublimación en Castoriadis.
2REELABORACIONES METAPSICOLOGICOS
TEORICAS
Y
APORTES
Como ya dije voy a ocuparme ahora de una serie de nociones psicoanalíticas ligadas a la sublimación que Castoriadis conceptualiza de un modo original (3)(4). Las agrupe en cuatro puntos: sobre el
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objeto de la sublimación, sobre la desexualización, sobre el placer sublimatorio, y sobre la noción de apuntalamiento.
2.A- Sobre el objeto Castoriadis redefine metapsicológicamente la sublimación. Lo hace postulando que la sublimación implica una conversion o un cambio de finalidad de la pulsión, pero siempre y esencialmente un cambio de objeto en el sentido más amplio del término. Ahora bien: de que hablamos cuando hablamos de objeto de la sublimación? Cito: "El objeto de la sublimación es y vale solo por su institución social. Resulta lo mismo que decir que la sublimación es la carga de representaciones -o de estados de la representación cuyo referente no es más un "objeto privado" sino un objeto público, es decir social. Y estos objetos sociales son en verdad "invisibles" o "insustanciales": valen en virtud de su constitución o de su impregnación por las significaciones imaginarias sociales". Comentar estas ideas podría merecer todo un texto. Sólo subrayo que el acento puesto en el cambio de objeto de la pulsión en el proceso sublimatorio es el postulado metapsicológico correlativo y complementario de la extensión general de la sublimación. Entre las consecuencias -y las potencialidades- de esta extension de sublimación puede mencionarse la modificación de la tópica psíquica. Lo que se pone en juego es una articulación con lo intersubjetivo y con lo social basada en un modelo de psiquismo heterogéneo y abierto. En cuanto a la sublimación en particular es redefinida tópicamente como el proceso de "instauración de una intersección no vacía del mundo privado y del mundo público, conforme -"suficiente en cuanto al use"- a las exigencias de la institución social". Según Castoriadis el objeto de la sublimación es -u obtiene su sentido de- una significación imaginaria social. Es decir que la sublimación es esencialmente un proceso psíquico de significación. Como es evidente el objeto ya no es "algo (casi externo) hacia lo que apunta la sublimación" sino algo -fuerza y sentido- que es parte esencial de la sublimación y que vectoriza desde adentro el proceso mismo.
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2.B- Sobre la desexualización: sublimación y represión. Para Castoradis la sublimación no puede definirse ni solo ni necesariamente como "desexualización" de la pulsión. El criterio energético es impreciso, e insuficiente para definir la sublimación. No es posible establecerlo como sinónimo ni como aspecto principal del proceso sublimatorio. Pues el grado y la modalidad de la "desexualización" requerida para sublimar no está -ni puede estar- definido por el sujeto sino que es cultural e históricamente variable de acuerdo a la institución social (en base a la cual el sujeto deberá componer sus "indicadores" sublimatorios "intrapsíquicos"). Castoriadis postula que esta "desexualización" se define en cada caso como "suficiente en cuanto a uso y necesidad" social. Si bien la dimensión energética es ineliminable, esta puede resituarse en el contexto de la presente teoría diciendo que de lo que se trata no es -como la metáfora química lo figura- una transformación de la energía sexual en energía deseuxalizada: sino de una transformación del régimen de creación y puesta en sentido de la psique. Desde este punto de vista la sublimación es un avatar del placer de representación. Es por ello que Castoriadis escribe que "represión y sublimación no son dos destinos de la pulsión excluyentes entre sí, sino distribuciones de la energía de libidinización entre las representaciones antiguas y las representaciones alteradas y nuevas"(3).
2.C- Sobre el apuntalamiento La idea freudiana de apuntalamiento (o apoyo) es utilizada de maneras muy distintas por Castoradis. La usa para establecer la relación del imaginario instituido con el primer estrato natural en el nivel del imaginario social. La usa para caracterizar la relación intrapsíquica entre puesta en imagen y puesta en sentido. Y la usa también para pensar la sublimación. Pese a las diferencias de niveles y dominios a los que los distintos usos corresponden, hay algo que no varía: la figura del apuntalamiento es utilizada siempre para dar cuenta de la dimensión "magmática" de una relación, es decir que es irreductible a la lógica matemática o "conjuntista identitaria". Es decir que la figura del Este documento ha sido descargado de http://www.educ.ar
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apuntalamiento constituye una figura especifica de esa lógica de la creación -"lógica de los magmas" según la terminología de Castoriadis Este uso de la noción de apuntalamiento me parece consubstancial con la lógica de los magmas. Justamente porque no es posible establecer una relación de causa a efecto entre lo social y lo psíquico es que esta noción extendida de apoyo encuentra su lugar. Permite pensar la complejidad y la circularidad de la creación en el proceso de sublimación. En cuanto a la sublimación el uso de la noción de apoyo en la reflexión de Castoriadis es doble. Por un lado es utilizado explícitamente el termino "apoyo". Pero por otra parte también existe una cierta idea o figura del apoyo que es usada implícitamente en la elucidación de la sublimación y del proceso de socialización. La noción freudiana de apoyo implica básicamente dos ideas: A-Una idea de coexistencia: apoyo es coexistencia. B-Una idea de creación en la que lo nuevo se funda y es dicionado por lo anterior. Para Freud por la vía del apoyo da el proceso de pasaje de lo autoconservativo a lo sexual. Estas dos líneas de la noción freudiana esta presente en la flexión de Castoradis sobre sublimación. Veamos: 1-por un lado están presentes en la definición de la sublimación como "coexistencia imposible y siempre lograda de lo privado y de lo público"; 2-por otro lado están presentes en la idea de que en la emergencia de la sublimación hay , como en pasaje de lo somático a lo psíquico, ruptura y creación. Pero hay al menos otras tres ideas de Castoriadis que se relacionan con la noción o la figura del apoyo. 1-La idea de que la sublimación puede encontrar su fuente, su orientación y su objeto en el terreno sexual. Esta idea se encuentra en la descripción del proceso evolutivo de socialización, particularmente en la relación con la madre. 2-La idea explícita de que la socialización se apoya en el ser de la psique -en su necesidad absoluta de sentido- y en sus esquemas, a la vez que recíprocamente la psique impone condiciones a la socialización. Cito: «La institución del individuo social...se apuntala en el ser de la psique (y aquí el termino de apuntalamiento adquiere un contenido distinto)».
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3-La idea correlativa a la anterior: La idea de que la sublimación emerge y funciona siempre apoyandose en to social. Es decir: en toda la red imaginaria social sobre la que se apoya el objeto de la sublimación, y que la psique no tiene necesidad de reconstruir ni asumir completa ni permanentemente.
2. E- Sobre el placer sublimatorio. La cuestión del placer sublimatorio es una de las más oscuras. Del trabajo de Castoriadis es posible extraer algunas indicaciones sustantivas sobre este tema. Como hemos visto, la socialización implica esencialmente la incorporación de las significaciones imaginarias sociales. El afecto es uno de las tres dimensiones o componentes esenciales de estas. Castoriadis da el ejemplo de la fe católica. Este afecto -más allá de apoyarse en el ser de la psique- es una creación sociohistorica. Sin este afecto el proceso de creación histórica de individuos católicos hubiera sido imposible. Socialzarse y sublimar es entonces un modo de sentirse en el mundo. Esto es lo que hace que individuos de sociedades distintas no sólo "interpreten" o "vean" de distinto modo el mundo y la vida, sino que lo habiten y que vivan sintiéndolo de otro modo. Si este sentir no fuera a su manera placentero, al menos en sentido amplio, no sería eficaz ni funcional. La socialización no podría funcionar y por lo tanto las sociedades no podrían existir. Este afecto social placentero, propio de las significaciones imaginarias, debe ser considerado como capaz de orientar el proceso de sublimación. Un complemento de esta idea general es el postulado de que para el individuo social aparece un nuevo tipo de placer, el placer sublimatorio. El individuo debe y puede encontrar placer en una modificación del "estado de cosas" exterior a él, o en la percepción de tal "estado de cosas". Para un individuo social debe ser posible obtener placer trabajando, paseando por la ciudad, conversando con un amigo o coleccionando estampillas. Uno de los elementos importantes de este proceso, que incide y define este nuevo tipo de placer, se encuentra en su relación con el proceso identificatrio. Este modelo identificatorio es en uno de sus polos una significación imaginaria social. Pero lo importante en cuanto al placer sulimatorio es que lo que a través del modelo Este documento ha sido descargado de http://www.educ.ar
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identificatorio es también objeto de carga libidinal es siempre una "imagen" del individuo para sí mismo, mediatizada por la "imagen" que el se representa que suminsitra a los otros. Es decir que el placer sublimatorio debe pensarse como resultado de la combinación de distintos registros afectivos: así por ejemplo el de la satisfacción del deseo convertido en deseo de transformación en y de lo real (tras el que resuena el deseo sexual de dominio de la realidad); así también el del sentimiento narcisista de realización identificatoria; y así también el sentimiento de pertenencia y participación propio de cada sociedad.
3- SOBRE LA DIMENSIÓN PULSIONAL DE LA SUBLIMACIÓN: DESEO DE DOMINIO DE LA REALIDAD Y PASIÓN. 3.A.- El deseo de dominio de la realidad: de la ruptura de la monada a la sublimación Esta es una de las contadas ocasiones, sino la única, en que Castoradis formula explícitamente un nuevo aporte a su reflexión sobre la sublimación. En su artículo "Conocimiento y Pasión" tras recordar lo básico de su conceptualización de la sublimación escribe lo siguiente: "Esta elucidación puede y debe completarse a partir de otro elemento: el deseo de dominio de la realidad (y del propio cuerpo del sujeto)". Castoriadis toma la noción de deseo de dominio de la realidad en la obra de Freud. Lo que propone es considerar el deseo de dominio de la realidad como "el retoño y la transposición a la realidad de la omnipotencia narcisita originaria, la omnipotencia del sujeto monádico". El deseo de dominio de la realidad surge tras la ruptura de la monada psíquica originaria. Expresa una de las reacción de la psique frente a la existencia de la realidad externa. Esta realidad es objeto de un deseo que busca dominarla dándole sentido mediante sus propios esquemas monádicos. Tras la ruptura de la monada, la psique separa o divide la investidura libidinal. Por un lado conserva una muy fuerte investidura de sí misma, de su propia imagen, de la que Castoriadis dice que es la condición de la vida psíquica misma. Por otro lado una parte de la investidura se dirigirá hacia los objetos del mundo bajo la forma de
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una pulsión de dominio de la realidad. El nuevo esquema monádico alterado por la clausura sería algo así como "ser uno en/con todo" Los nuevos aportes consisten: En primer lugar en postular el deseo de dominio de la realidad como uno de los motores de la sublimación. En segundo lugar en señalar que puesto que el deseo de dominio de la realidad expresa una búsqueda de sentido según un esquema monádico, este será determinante también para la sublimación. Más precisamente: el esquema monádico -alterado por la ruptura de la clausura de la psique originaria- constituirá uno de los fundamentos de ese trabajo de puesta en sentido que es la sublimación. C- En tercer lugar en que en esta fase la autoinvestidura narcisita y la pulsión de dominio - pese a la prioridad de la primera - son la una condición de la otra. Y las dos son condición de la sublimación. La apertura al mundo se apoya en una des-abolutización del narcisismo primario, tolerada en la medida en que se conserva la una fuerte investidura positiva de sí mismo, de la autorrepresentación. Contando con este soporte -identificatorio se acepta la existencia de un mundo frente al cual surgirá el deseo de dominio. Para Castoradis la libidinización absoluta de la autorrepresentación cerrada de la monada psíquica originaria se encuentra en el individuo social conservada y a la vez radicalmente alterada, como importancia insoslayable para el individuo de "la integridad de su imagen, se su autorrepresentación, en tanto soporte último para él de todo sentido y de toda significación". Lo importante aquí para nuestro tema es la relación indisoluble entre la investidura narcisista y el deseo de dominio dirigido a los objetos de la realidad. De este modo puede establecerse la matriz a la vez narcisista y objetal que caracteriza el funcionamiento psíquico para Castordiadis, y que resulta esencial para entender la sublimación. Por ejemplo en tanto satisfacción del deseo sexual de dominio al servicio de un fin identificatorio y narcisista -y no exactamente a-sexual, como la presencia de la pasión lo revela. E- Castoradis postula la pasión como dimensión inmanente a la sublimación. En "Conocimiento y Pasión" escribe que "todo aquello que en lo que llamamos pensamiento no esté formalizado o sea formalizable vale decir asimilable a un juego mecánico, hace jugar al mismo tiempo a la imaginación y a la pasión humanas".
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Puesto que la sublimación es un trabajo de la imaginación, una de las cosas significativas para nuestro tema es la coextensión de la imaginación radical y la pasión. Aunque comparte con Piera Aulagnier la definición de la pasión como la transformación del objeto de placer en objeto de necesidad, las diferencias con esta autora son enormes: fundamentalmente para Castoriadis la pasión no es -como para Piera Aulagnier- sinónimo de alienación. Un ejemplo concreto de la relación entre pasión y sublimación es la creencia. La existencia efectiva de la psique implica la "apasionada investidura de la imagen de sí y del mundo: En el individuo social la investidura apasionada de las significaciones imaginarias sociales determinará lo que constituye el funcionamiento psíquico heterónomo: la creencia. Esta creencia no es otra cosa que el resultado canónico del proceso sublimatorio en las sociedad heterónomas. En el otro extremo, el otro ejemplo de la relación pasiónsublimación es el filósofo. Este ha investido la verdad como objeto sublimado de pasión. Por otra parte ambos ejemplos permiten ver la correlación de esta cuestión con el tema anterior. Podemos apreciar en estos ejemplo la conjunción en la sublimación de lo identificatorio y de lo pulsional. La pasión es la presencia de la pulsión sexual en el funcionamiento yoico. Es el yo el que, empujado a infiltrado por la pulsión, se apasiona: a veces por las creencias de la tribu, a veces por la búsqueda de la verdad y la justicia. Imaginación y pasión están presentes tanto en la sublimación del individuo heterónomo como en la del sujeto autónomo. *** Espero que quien haya tenido el paciente interés de seguirme hasta aquí encuentre suficientemente fundada mi idea según la cual Castoriadis ha desarrollado una serie de decisivas elaboraciones sobre la sublimación que constituyen el fundamento de una posible reelaboración del mismo. En última instancia el objetivo de este texto no es otro que el de estimular el trabajo en esa dirección. Razón por la que me he concentrado en los principales aportes directos de Castoriadis al respecto, y he procurado limitar mis aportes a la articulación y exposición de los mismos. Aunque es cierto que para ello no he Este documento ha sido descargado de http://www.educ.ar
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podido dejar de utilizar los resultados de mi propio trabajo de lectura y reinterpretación de su obra, considero que lo esencial de lo expuesto no es más que una presentación de conjunto de las ideas de Castoriadis sobre sublimación. Notas 1 -Para tener un panorama general de las ideas y los textos "psicoanalíticos" de Castoriadis puede consultarse mi prologo al libro de Castoriadis "Hecho y por hacer" (EudeBA, Bs.As., 1999). Para una introducción conceptual a su elucidación de la psique puede consultarse el artículo "Psique: imaginación a historia" ("Free Associations Review" Londres, 1999. Versión castellana: ZE 41). 2- Seminario internacional dictado en la Universidad de Buenos Aires, en mayo de 1996. 3-La institución imaginaria de la sociedad (IIS); cap.6 (Tusquets, Bs.As., 1993). 4- Psicoanálisis, proyecto y elucidación (ed. Nueva Visión) 5- «La lógica de los magmas» en los dominios del hombre (ed. Gedisa)
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