> l PSICOLOGÍA I
UN RECURSO TERAPÉUTICO EXITOSO EN ESTADOS
Son las llamadas cartas Kesem: dieciocho mazos con ilustraciones de cuentos ayudan a los psicólogos a destrabar una sesión. Quién desarrolló la técnica, cómo son los naipes, para qué sirven. La relación entre magia y terapia. > Por Raquel Roberti
Uh, tengo terapia, ¿de qué voy a hablar? En la sesión pasada para cuando quise empezar con un tema se me había terminado la hora", protesta Diego mientras guarda papeles en los cajones de su escritorio. Lo dice en voz alta, a diferencia de la mayoria de los que se analizan, quienes con más frecuencia de lo deseable se encuentran paralizados en sus tratamientos psicológicos. No es fácil poner en palabras lo que pasa en el interior de cada uno. Para superar esos momentos en que el silencio se adueña del diván llegaron al país las cartas Kesem, un recurso que se aplica con éxito en Estados Unidos y Europa. El término Kesem significa magia y designa a los dieciocho mazos de cartas con ilustraciones de cuentos. ¿Magia en el diván? "Las cartas funcionan como un juego en el que afloran cosas que ni el paciente esperaba. Eso tienen de mágicas, son disparadores espectaculares y derriban barreras que todos construimos", dice la psicóloga María Florencia Russo (34 años), responsable junto a Débora Serebrisky -médica especialista en psiquiatría de 41 años- de la llegada de las cartas Kesem al país. De los dieciocho mazos sólo uno tiene una aplicación específica, el Cope (afrontamiento, en inglés), que sirve para afrontar situaciones de crisis, catástrofes, guerras o violencia. El 58 Jue Jueves ves 21 21 de sept septiem iembre bre de de 2006 2006
FOTOMONTAJE ALEJO BENEVET
UNIDOS Y EUROPA HACE PIE EN LA ARGENTINA resto permite elaborar en terapia rías ilustró un mazo de cartas, pero el de Laura Landau, psicóloga argentina cualquier aspecto de la vida que se psicólogo alemán Moritz Egetmeyer radicada en Israel y directora desde quiera abordar. "Es una herramienta pensó que podían servir para descu- 1998 del Instituto Ikarón, quien aporasociativa, el paciente asicia la carta brir el verdadero "yo" y las bautizó ta material y su experiencia en el uso con los temas que le preocupan a par- "OH!". de las cartas en asistencia a víctimas tir de determinadas consignas", señaEs que los mazos se pueden usar de violencia sexual, de catástrofes la Serebrisky. con las imágenes hacia arriba siguien- naturales o guerras. Este juego terapéutico no tiene do una consigna tipo "buscate cuando Landau también supervisa el matemeta a superar, objetivos que alcanzar estas contento", o hacia abajo con una rial que usan en los grupos terapéutini competencia a desarrollar, ni elección al azar. "Es muy movilizador cos, donde lograron resultados que siquiera contra las reglas del juego. y la sorpresa es importante -explica ambas califican como "asombrosos": "Tiene que ver con avanzar en la tera- Russo-; la mayoría de las personas "En la segunda reunión una paciente pia, destrabar situaciones o hablar de exclama OH! al ver la carta que sacó y brindó información sobre su historia algo reprimido, aclara Russo. de allí el nombre del mazo." familiar que jamás había aparecido en Mabel comenzó su terapia con sínEl recurso se presentó en el país en la terapia tradicional. Eran datos tomas de depresión, pero como no abril de este año, en el XXII Congreso anteriores a su nacimiento que estaavanzaba trabajaron con las cartas de Psiquiatría de APSA (Asociación ban accionando en su vida actual". boca abajo; la que sacó mostraba una de Psiquiatras Argentinos), y aún son Un conflicto laboral llevó a nena sentada al lado de una figura muy pocos los terapeutas que lo utili- Graciela hacia un consultorio psicolóque podría ser el papá. Apenas la zan. Serebrisky y Russo, fundadoras gico, pero al ver una carta que repromiró, la tiró al piso. El terapeuducía una nena comenzó a ta la levantó, la dejó a un costahablar de una hija que había do de la mesa y le dijo: dado en adopción poco tiempo"Entiendo que no podés hablar después de casarse, hacía ya ahora de este tema, pero en treinta años. algún momento lo vamos a "Los pacientes dicen no se por retomar". La carta estuvo que elegí esa carta, pero siempre meses allí, a modo de recordatenia mucho que ver con el protorio, hasta que Mabel pudo blema que les preocupa -arguhablar de una experiencia de su menta Russo-. La vida actual no infancia. facilita la introspección, más "No es un test y no tiene horas de trabajo, menos tiempo Florencia Russo y Débora Serebrisky, especialistas en terapia Kesem. relación alguna con el Tarot, por eso para pensar, es más difícil hacer un "LAS CARTAS FUNCIONAN no hay interpretación ni entran en tratamiento analítico." juego los conceptos del bien o mal: lo COMO UN JUEGO EN EL QUE No es magia, lo repiten hasta el canque el paciente dice de lo que ve en la AFLORAN COSAS QUE NI EL sancio, pero no pueden dejar de carta es válido e indiscutible, es un PACIENTE ESPERABA. ESO admitir que "hasta los pacientes lo reflejo de la idea que tiene de sí sienten como algo mágico porque TIENEN DE MÁGICAS." mismo o de aspectos personales aunhablan de temas impensados, y todo que en ese momento no esté hablan- del Centro para el Estudio de lo desconocido de uno mismo se condo de sí mismo", sostiene Serebrisky. Recursos Terapéuticos (CERT), dic- vierte en mágico cuando se decubre". El puntapié inicial en las cartas tan cursos sobre las cartas aquí y en el Kesem lo dio el artista canadiense Ely interior, con un marco teórico y Raman: para sacar el arte de las gale- vivencial. Cuentan con la supervisión
IMÁGENES ARTÍSTICAS PARA ELABORAR PROBLEMAS HÁBITAT
MORENA
COPE
PERSONA
El hombre y su entorno en ochenta y ocho paisajes. Este mazo se usa para mejorar las relaciones interpersonales.
El Brasileño Waldemar Andrade pintó imágenes tribales y huellas en la arena. Mazo para crear nuevas historias.
Para trabajar en situaciones de estrés y crisis, con esperanza. Mazo con imágenes de la artista rusa Marina Lukyanova.
Retratos del canadiense Ely Raman. Mazo que permite encontrarse en los demás y ver las caras de una misma persona.
Jueves 21 de septiembre de 2006
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