Yazberth Hazael Contreras Ramón
“CARTAS A QUIEN PRETENDE ENSEÑAR” DE PAULO FREIRE
Octava Carta – “Identidad cultural y educación ” En este capítulo se habla sobre el concepto de identidad. Freire menciona que no somos sólo lo que heredamos ni únicamente lo que adquirimos, sino la relación dinámica y procesal de lo que heredamos y lo que adquirimos. De este modo, considero que a lo que Freire se refiere es que somos seres inmersos en una cultura y entorno particular que nos otorga una identidad, pero que a la vez estamos hechos para aprender. Estamos programados pero no determinados, condicionados pero al mismo tiempo somos conscientes del condicionamiento, que nos hacemos aptos para luchar por la libertad como proceso y no como meta.
Es ahí, donde radica la importancia de la identidad de cada uno de nosotros como sujeto, ya sea como educador o educando en la práctica educativa. Desde mi punto de vista, en la educación es importante sabernos con una identidad y aceptarla, pero también requerimos vernos capaces y conscientes de modificarla a nuestro gusto y beneficio. La educación toma un rol importante en el desarrollo de la identidad de los seres.
De este modo, la identidad se entiende en esta relación contradictoria de que somos nosotros mismos entre lo que heredamos y lo que adquirimos, somos la relación contradictoria en la que a veces lo que adquirimos en nuestras experiencias sociales, culturales, de clase, ideológicas, interfiere vigorosamente a través del poder de los intereses, de las emociones, de los sentimientos, de los deseos, de lo que se viene llamando "la fuerza del corazón", en la estructura hereditaria. Desde mi mirada, somos el resultado de un conjunto de factores y experiencias que nos forman a lo largo del tiempo, aunque no son determinantes pues cada quien, al saberse un ser consciente, puede complementar lo que hereda con lo que adquiere.
Yazberth Hazael Contreras Ramón
Así, la identidad es un factor que se construye y es en la práctica de experimentar las diferencias donde nos descubrimos como yo y como tú reafirmando una identidad. Cabe mencionar que muchas herencias culturales tienen un corte clasista marcada por la clase social a la que pertenecemos. Es ahí donde entra el papel de la educación en donde se pueda reconocer cada identidad y respetarla, pero no tomar una mejor que otra, sino complementarlas.
De este modo, el educador se vuelve un ser político que es capaz de ser comprensivo y consciente del entorno y contexto en que se desenvuelve. Los educadores precisan saber lo que sucede en el mundo de los niños con los que trabajan, el universo de sus sueños, el lenguaje con que se defienden, con maña, de la agresividad de su mundo. Lo que saben y cómo lo saben fuera de la escuela.
Desde esta perspectiva, la escuela democrática no debe tan sólo estar abierta permanentemente a la realidad contextual de sus alumnos para comprenderlos mejor, para ejercer mejor su actividad docente, sino también estar dispuesta a aprender de sus relaciones con el contexto concreto. Es decir, dicha escuela no es aquella en la que sólo el maestro enseña, en la que el alumno sólo aprende y el director es el mandante todopoderoso, sino que es también aquella en donde todos pueden ser humildes y reconocer que se puede aprender el otro.
Yazberth Hazael Contreras Ramón
“CARTAS A QUIEN PRETENDE ENSEÑAR” DE PAULO FREIRE
Novena Carta – “Contexto concreto – Contexto teórico” En esta carta se habla sobre las relaciones que el contexto concreto y el teórico establecen entre sí, sino también los modos como nos comportamos con cada uno de ellos. Entre nosotros, la práctica en el mundo, en la medida en que comenzamos no sólo a saber que vivíamos sino a saber que sabíamos y que por tanto podíamos saber más, inició el proceso de generar el saber de la propia práctica.
Freire toma como objeto de estudio las relaciones entre el contexto concreto y el contexto teórico, así mismo hace referencia a los modos en que nos comportamos en cada uno de ellos. La cuestión central que se nos plantea a nosotros, educadoras y educadores, es la de cómo hacer para que, partiendo del contexto teórico y tomando distancia de nuestra práctica, desentrañemos de ella su propio saber que es la ciencia en la que se funda. En otras palabras, cómo desde el contexto teórico "tomamos distancia" de nuestra práctica y nos hacemos epistemológicamente curiosos para entonces aprehenderla en su razón de ser.
En el contexto teórico, que es el de la formación permanente del maestro o maestra, es indispensable la reflexión crítica sobre los condicionamientos que el contexto cultural ejerce sobre nosotros, sobre nuestro modo de actuar, sobre nuestros valores. La influencia que ejercen sobre nosotros nuestras dificultades económicas, cómo pueden obstaculizar nuestra capacidad de aprender aunque carezcan de poder para "abanicarnos". El contexto teórico jamás puede transformarse en un contexto del puro hacer, como a veces se piensa ingenuamente. Al contrario, es el contexto del quehacer, de la praxis, vale decir, de la práctica y de la teoría.
Yazberth Hazael Contreras Ramón
De los dos contextos que menciona Freire, ¿Cuál es la importancia y la aplicación en el aula? En el aula se busca que el alumno no se quede con el conocimiento, sino que se apropie de él en su vida y le sea útil. La dialéctica entre la práctica y la teoría debe ser plenamente vivida en los contextos teóricos de la formación de cuadros. Por ende, considero es importante conjugar la teoría y la práctica, pues de esta manera el alumno generara sus propias hipótesis y surgirá en él la curiosidad por conocer mas allá de lo que el propio conocimiento le permita.
Así, Freire propone la formación de grupos de estudio integrados por padres y maestros en los cuales mediante el debate se buscarían las razones de ser der las cosas en un contexto teórico. Por otra parte propone un análisis y reflexión critica por parte de los docentes.
