CAPÍTULO II LAGUNAS SELECCIONADAS Y RUTINA DE MUESTREO FABIÁN G ROSMAN Y P ABLO SANZANO 1. ¿Por qué se eligieron las lagunas seleccionadas? Dangavs (2005) argumenta que existen mas de 10.000 lagunas mayores a 10 ha en la provincia de Buenos Aires, de las cuales se debía seleccionar diferentes ambientes para realizar los muestreos y obtener información sobre este tipo de ecosistema. El criterio empleado para ello se basó en diferentes aspectos del compon component entee natural natural o propied propiedade adess intríns intrínsecas ecas de las laguna lagunas, s, así como como cuestio cuestiones nes operativas en función de su ubicación, acceso, distancia, usos primarios e importancia importancia regional, entre las principales. principales. Se destacan el conocimiento previo de la conformac conformación ión de la comunid comunidad ad de peces existen existente, te, superfic superficie ie mínima mínima para poder poder captarla con las imágenes satelitales, antecedentes en cuanto a información limnológica, facilidad para delimitar la cuenca superficial, condición rural o periurbana, periurbana, posibilidad posibilidad de obtener mediciones mediciones hidrometereológicas hidrometereológicas (precipitación, (precipitación, temperatura, nivel hidrométrico), la condición hidrológica (cuenca exorreica o endorreica), endorreica), la inclusión inclusión conjunta en determinadas determinadas imágenes satelitales, así como la capacidad de trabajo para realizar las campañas y analizar las muestras y sus resultados. Uno de los criterios de selección fue la condición de lagunas rurales o periurb periurbana anas. s. Ello Ello se debe debe a que alguno algunoss de de estos estos ambien ambientes tes,, se hallan hallan en cercaní cercanías as o en el mismo ejido municipal de centros urbanos, aunque la mayoría de las lagunas se hallan en zonas rurales; igualmente los usuarios poseen típicamente un orige origen n ciud ciudad adan ano, o, conf confor orma mand ndo o un nexo nexo entr entree am ambo boss sist sistema emas. s. Es válid válido o acot acotar ar que la provincia de Buenos Aires presenta lagunas distribuidas en su territorio y concentra la mayor densidad poblacional de Argentina. Es normal observar, principalmente en ambientes administrados por entidades sin fines de lucro, la instalación de asentamientos en sus orillas, no siempre realizados con la racionalidad ambiental requerida para dicho paisaje, que otorgan características propias al lugar al interactuar de forma mas estrecha lo habitacional y lo rural. En el capítulo XII se abordan diferentes aspectos sociales y culturales vinculados a las lagunas por lo cual es posible evidenciar la incorporación al patrimonio local de los ambientes cercanos a ciudades. Existen también varios proyectos de construcción de clubes de campo a orillas de lagunas pampeanas, y en forma análoga, análoga, varios de estos clubes construyen construyen cuerpos cuerpos de de agua artificial artificiales es como lugar de esparcimiento, recreación o mejora del paisaje. Las razones logísticas aluden a que el destino de las muestras recolectadas eran laboratorios de Olavarría, Azul y Tandil; en algunos casos de análisis específicos (pesticidas, metales pesados) fueron enviadas a Buenos Aires. Tal como fue presentado en el capítulo I, la activa dinámica de las lagunas genera cambios globales en el funcionamiento de las mismas en cortos períodos de tiempo. Una temporada de sequía o de inundación altera significativamente la estructura y funcionamiento del sistema; una pesca excesiva también genera cambios tangibles en la comunidad de peces, así como las mortandades masivas, 39
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introducciones de especies u otros aspectos drásticos que impactan sobre diferentes componentes bióticos o abióticos de la laguna (Ringuelet, 1962 y 1972). En función de los puntos considerados, se seleccionaron las lagunas a muestrear y la frecuencia de visitas a cada una de ellas. La estrategia seguida fue considerar 7 lagunas en la región centro de la provincia de Buenos Aires, con periodicidad de muestreos en forma mensual. Con similar fundamento, se tomaron 3 ambientes en el sudeste bonaerense, pero con menor frecuencia: bimensual o estacional. Por último, se consideraron diferentes lagunas distribuidas en distintas cuencas de la provincia de Buenos Aires, con el objeto de sumar y contrastar información general que posibilite extender aspectos vinculados a la estructura y funcionamiento de las lagunas pampeanas. Las 10 lagunas seleccionadas con mayor frecuencia de muestreos se presentan en la tabla II.1, con su ubicación cartográfica (refieren un punto donde se realizaron estaciones de muestreo) y el partido correspondiente, tipo de cuenca superficial y la superficie de agua libre promedio establecida a partir de las imágenes satelitales analizadas durante el período de muestreo. La figura II.1 presenta la ubicación geográfica de las mismas. Todas ellas con presencia de pejerrey y ausencia de carpas, rodeadas de campos predominantemente de uso agrícola. Las campañas de muestreo limnológico se realizaron entre noviembre de 2004 y noviembre de 2006. Las lagunas estudiadas se localizan en cuatro partidos de la provincia de Buenos Aires, y se incluyen en cuatro cuencas de la clasificación realizada por la subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación (www.hidricoargentina.gov.ar). Las lagunas pertenecientes a los partidos de Juárez (San Antonio, La Salada, El Chifle y La Barrancosa) y Laprida (Del Estado, Quilla Lauquen o Lauquén y El Paraíso) se encuentran ubicadas en las divisorias de las grandes cuencas (del Río Salado, arroyos del Sur). Las lagunas del partido de Balcarce (La Brava) y Gral. Pueyrredón (De los Padres y La Peregrina) se encuentran en la cuenca de arroyos del SE de la provincia de Buenos Aires. En todos los casos, los ambientes se sitúan en las cabeceras de la cuenca, lo cual se presupone, se hallan menos impactadas por las actividades agropecuarias que se realizan en la misma.
Laguna
Sup. *
Coord. Lat. S.; Long. W.
Tipo cuenca
Partido
165,22
37 20 13,8; 60 06 59,6
Endorreica
B. Juarez
La Salada
153,5
37 24 58,6; 59 48 59,1
Endorreica
B. Juarez
El Chifle
132,4
37 24 25,6; 59 47 58,7
Endorreica
B. Juarez
San Antonio
167,3
37 38 04,6; 59 52 09,0
Endorreica
B. Juarez
170 – seca
37 17 00,5; 60 48 05,9
Endorreica
Laprida
100,1
37 29 05,4; 60 29 31,2
Endorreica
Laprida
El Paraíso
93,6
37 34 03,1; 60 48 01,4
Endorreica
Laprida
La Brava
430
37 52 05,8; 57 58 53,5
Afl. y efl.
Balcarce
De los Padres
220
37 55 53,7; 57 44 11,9
Afl. y efl.
Gral.Pueyrredón
90
37 52 03,4; 57 53 46,4
Afl. y efl.
Gral.Pueyrredón
La Barrancosa
Del Estado
Quilla Lauquén
La Peregrina
Tabla II.1. Superficie promedio durante el periodo de campañas, expresado en hectáreas. En casos de excesos hídricos, se producen ingresos o egresos encauzados de las lagunas. El concepto de endorreico se refiere a la ausencia de ingresos o egresos superficiales en condiciones hidrológicas normales.
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Lagunas seleccionadas y rutina de muestreo
Figura II.1. Distribución geográfica de las 10 lagunas muestreadas, la ubicación en cuenca, y el partido en que se encuentran.
2. Laguna seleccionadas 2.1.La Barrancosa
Situada a 20 km de la localidad de Chillar, cercana a 16 de Julio, a 60 km de Azul y 60 km de Olavarría. Esta laguna era empleada en el pasado como balneario, i nc lu so s e l e a si gn ab a u n u so t er ap éu ti co p or l a a lt a s al in id ad . Desafortunadamente no existen registros históricos de determinaciones químicas, pese a la fama curativa de alcance regional. No había peces. En la década de 1980 se produjeron grandes inundaciones que redujeron el tenor salino; ante ello fue introducido en forma exitosa el pejerrey con fines de aprovechamiento. A partir de esa fecha conforma una laguna de referencia en el circuito pesquero deportivo con alta concurrencia dada la cercanía a diferentes ciudades del centro de la Provincia de Buenos Aires, así como por las características de la pesca y servicios brindados. Posee barrancas en sus orillas lo cual le otorga el nombre. En la casa situada en el camino de ingreso a la laguna (distante 200 m de la orilla) se instaló un pluviómetro. Durante el período de trabajo su superficie tuvo un rango de variación de 40 hectáreas (de 181 ha medidas empleando imágenes satelitales en diciembre de 2004, a 140 ha en enero de 2006). 2.2. Laguna La Salada
Situada cerca de Tedín Uriburu, a 8 km de la ruta Nacional 3, con buen acceso durante todo el año. Constituye una de las tantas lagunas con el mismo nombre presentes en la llanura pampeana, asignado popularmente por las propiedades saladas de sus aguas identificadas mediante el gusto. En una de sus orillas se presenta una barranca y como particularidad una isla, que en épocas de bajo nivel es posible alcanzar caminando. Se realiza pesca deportiva del pejerrey, con afluencia de pescadores de la región (Juárez, Azul, Tandil, como principales orígenes). Su superficie varió entre 151 y 158 ha. 41
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2.3. Laguna El Chifle
Se trata de un bajo inundable en forma temporal, que a partir de las inundaciones de la década de 1980 se transformó en laguna permanente. Prueba de ello es que en su interior posee alambrados y restos de un monte, incluso se debió trasladar la traza del camino que conecta la ruta nacional 3 con Tedín Uriburu y ahora rodea la laguna. Una imagen elocuente se presenta en el capítulo III. Se sitúa prácticamente enfrente de la laguna La Salada (separados por 750 m), y al igual que en la misma, se practica la pesca deportiva del pejerrey con rendimientos fluctuantes. Es común que los usuarios, en caso que no satisfagan las expectativas de pesca de un ambiente, concurran al lindero a probar suerte. Posee juncal en sus orillas. Su superficie varió entre 131 y 134 ha. 2.4. Laguna San Antonio
Este ambiente se sitúa a unos 10 km de la ciudad de Juárez, constituyendo un sitio de uso popular para los pobladores de dicha localidad, tanto para la práctica de la pesca deportiva del pejerrey, como por la presencia de un imponente monumento a San Antonio. En la década del 90 se habilitó un ingreso público para la pesca, pero el ambiente fue posteriormente concesionado a una empresa foránea a la región que usufructuaba los recursos pesqueros presentes, realizando siembras de alevinos y cosecha de peces de tamaño comercial. En la actualidad la laguna no está habilitada al ingreso de pescadores deportivos, y debida la cercanía a la ciudad así como el arraigo hacia el ambiente, se generan conflictos constantes entre los propietarios de las tierras linderas a la laguna y los potenciales usuarios de la misma. Se realizan prácticas de deportes náuticos. Su superficie varió entre 163 y 182 ha. 2.5. Laguna Del Estado
Se halla distante 70 km de Olavarría; se accede desde la ruta provincial 51, pero por camino de tierra de difícil tránsito los días posteriores a lluvias. Los linderos a la laguna manifestaron que este ambiente tuvo una seca total en la década del 60, y que antes de ese evento, se practicaba la pesca comercial del pejerrey. Los resultados de los relevamientos limno-ictiológicos realizados en los años 1997 y 2001 muestran condiciones contrastantes. A modo de síntesis es posible manifestar que en 1997 era una laguna de aguas claras, copépodos de gran tamaño dominando el zooplancton, prácticamente sin peces (fehacientemente sin pejerrey), con invasión de plantas sumergidas que otorgaban el predominio a la comunidad del bafon; en 2001 cambió radicalmente a un ambiente de aguas verdes. Se infiere que la exitosa introducción de pejerrey realizada en 1997 fue un factor desencadenante. En diciembre de 2005, el ambiente se secó totalmente lo cual permitió analizar la progresión de diversas variables físico-químicas y biológicas durante el período de muestreo, y a su vez contrastarlas con las lagunas cercanas que no se secaron. En el capítulo III se aborda con más detalles esta condición en uno de sus apartados. 2.6. Laguna Quilla Lauquén
Este hermoso ambiente (“laguna de luna” en lengua mapuche) es aprovechado por el club de Pesca de Laprida, entidad sin fines de lucro que se ocupa del mantenimiento y conservación del lugar. Posee diversas instalaciones en sus orillas como muelle, sombra, casa del puestero, fogones, bancos, etc. En este sitio se instaló un pluviómetro. La tranquera de acceso al lugar se halla a 15 km de la ruta provincial 86, y desde allí por camino consolidado de 3.000 m aproximadamente se arriba al ambiente. El club administrador respeta cupos de captura, épocas de 42
Lagunas seleccionadas y rutina de muestreo
veda, tamaños mínimos, e incluso habilita la pesca del pejerrey sólo los fines de semana. Su superficie varió entre 94 y 108 ha. 2.7. Laguna El Paraíso
Este ambiente es considerado periurbano, ya que se halla muy cercano a la ciudad de Laprida (aproximadamente 1500 m del centro). Posee postes de alambrado en su interior que denotan su expansión areal. Es empleada con diversos fines recreativos, destacándose la pesca deportiva del pejerrey. En sus orillas existe un complejo municipal de piletas e infraestructura para realizar actividades diversas al aire libre. El ingreso es libre, por lo que, potenciado con la cercanía con la ciudad, en forma constante hay personas pescando. Sobre una de sus costas existe un basural a cielo abierto para el cual el municipio está gestionando su erradicación. Las floraciones algales son recurrentes incluso con fuerte olor típico de este tipo de evento, generando en algunas ocasiones mortandad de peces. Su superficie osciló entre 77 y 107 ha. 2.8. Laguna De los Padres
Se ubica en el interior del cordón serrano en el Sistema de Tandilia, lo cual le brinda particularidad y belleza; posee instalaciones diversas en su perilago, que le permiten brindar diferentes usos recreativos, como pesca deportiva, goce del paisaje, avistaje de aves, actividades náuticas incluyendo una cancha de canotaje. Se halla en el predio de una reserva natural de usos múltiples, existe un vivero municipal e infraestructura brindada por un club de pesca, recreos, restaurantes. Su cercanía a Mar del Plata (15 km) la posiciona muy bien como un sitio de esparcimiento satélite de visitantes a dicha localidad turística. Posee sentido histórico, dado que fue un lugar de asentamiento de una colonia jesuítica (a la cual debe su nombre) y actualmente existe un museo tradicionalista en el lugar que fuera el casco de la estancia de José Hernández. La laguna ha tenido diferentes estados de equilibrio, alguno de ellos documentados, pasando por condición de aguas claras invadida por vegetación sumergida, a aguas verdes con el fitoplancton dominante. La pesca del pejerrey ha tenido rendimientos fluctuantes. 2.9. Laguna La Brava
Localizada entre Balcarce y Mar del Plata, en el sudeste bonaerense, se accede desde la Ruta Nacional 226 por camino de 500 m en buen estado de conservación. Hay otro acceso desde la misma ruta, pero por camino de tierra transitando 5 km aproximadamente. Este ambiente posee como particularidad un cordón serrano en una de sus orillas. El club de pesca Balcarce posee infraestructura diversa, un puerto, sala de incubación y alevinaje de pejerrey, muelle y otros servicios diversos. Asimismo existen en el perilago otros emprendimientos privados con fines turísticos y de esparcimiento. Presenta un juncal denso en el ingreso del arroyo afluente, que funciona a modo de filtro natural de sedimentos y retención de otros compuestos acumulándose en sus tejidos. Es empleada con diferentes fines, destacándose la pesca deportiva del pejerrey y actividades náuticas con y sin motor. 2.10. Laguna La Peregrina
Ubicado entre los dos anteriores, este ambiente se denominaba en el pasado La Invernada y era un lugar de descanso de tropas y carretas. A partir de un canal construido desde el arroyo Vivoratá, ingresa agua a la laguna manteniendo el nivel de la misma. Sobre una de sus márgenes posee un murallón de contención 43
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y una compuerta que permite regular su volumen de agua. Existe un muelle, una isla y el juncal en su interior es ralo; presenta baja asistencia de pescadores deportivos de pejerrey. El resto de las lagunas analizadas, con visitas mas esporádicas, fueron: Bragado, Gómez, El Carpincho, Las Mulitas, Indio Muerto, en el Noroeste de la provincia de Buenos Aires; La Salada de Pehuajó, Arrillaga, Blanca Grande hacia el Oeste; Los Chilenos, Saavedra, Puán, La Segovia, Tranier I y Tranier II, Wolfram, Albouy, La Mabel, Albez, Delgado en el Sudoeste; El Coraje en el Sudeste y Las Flores o del Autódromo (Difunto Manuel) en el centro.
3. Rutina en la toma de muestras En forma previa a la realización de las campañas de muestreo, existió una recopilación de antecedentes de cada laguna, consistente en la búsqueda de bibliografía específica, series de datos y cartografía. Consideración de diferentes aspectos geológicos, hidrogeológicos, hidrológicos, topográficos, edafológicos, climáticos, biológicos, ecológicos, de producción y uso de la cuenca, legales, sociales y económicos (Ringuelet, 1962; Ringuelet et al. , 1967; Freyre et al., 1969; Freyre, 1976; Dangavs, 1982; Kruse, 1987; Quirós, 1991; Baigún y Delfino, 1994; Toresani et al., (1994); Grosman, 1995; Pozzobon y Tell, 1995; Gómez, 1996; Grosman et al., 1996; 1999 y 2005; Parada, 1999; Quirós y Drago, 1999; Mireztky et al., 2000; López et al., 2001; Fernandez Cirelli y Miretsky, 2002; Grosman y Sanzano, 2003; Esquiús et al., 2005). Cabe acotar que los antecedentes limnológicos particulares de cada sitio no son abundantes sino de carácter general que incluye alguno de los cuerpos de agua aquí presentados. Los ambientes mejor conocidos en la bibliografía disponible fueron La Brava y De los Padres; ello se relacionaría con el carácter de lagunas permanentes, así como la facilidad de los accesos, los diferentes usos que se realizan, la existencia de instalaciones en sus riberas, cercanía a ciudades y a la Ruta Nacional 226 así como la presencia de universidades nacionales (Universidad Nacional de Mar del Plata y Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires) que las han tomado como objeto de estudio. Los detalles brindados acerca de la rutina de muestreo empleada tienen el objetivo de proporcionar una mayor comprensión de las tareas realizadas. El desarrollo de estudios ecológicos implica dos procesos diferenciales. Por un lado, la realización de “tareas de campo” o de muestreo, consistentes en recabar información y toma de muestras de diferente índole, la cual será procesada y analizada acorde a los objetivos planteados del trabajo. Esta última fase se lleva a cabo en el laboratorio y oficina, donde los resultados obtenidos son contrastados con antecedentes bibliográficos, enmarcados en sus aspectos teóricos y que permiten establecer comparaciones y el logro de conclusiones. Las campañas limnológicas tenían 1 o 2 días de duración acorde a las tareas a realizar en cada una de las diferentes lagunas visitadas, así como la luz natural disponible en los distintos momentos del año. En los casos de muestreos ictiológicos requieren como mínimo 2 días de trabajo. La descripción que se realiza es de un caso tipo, pero en muchas lagunas el énfasis fue colocado en aspectos limnológicos y en otras en la comunidad de peces. Todos los datos obtenidos se vu elcan en planillas elabor adas ad-hoc (encabezadas con lugar, fecha, agentes), que incluyen referencias a las condiciones metereológicas, así como un espacio para observaciones de toda índole. En los casos establecidos, se recoge la información sobre precipitaciones ocurridas en el lugar. En cada ambiente se establecieron estaciones de muestreo seleccionadas en función de las características propias a cada sitio; en el lugar se registraba su 44
Lagunas seleccionadas y rutina de muestreo
posición empleando un sistema de posicionamiento global (GPS). Asimismo se consideró el nivel de agua de la laguna estableciendo un punto fijo a partir del cual se elaboró una escala relativa. Las referencias eran postes de alambrado, muelle, o incluso en algunos casos escalas hidrométricas previamente instaladas. Se realizó un recorrido exhaustivo del ambiente por agua y/o tierra. Esto permitió obtener una imagen visual de las condiciones del sitio en distintos momentos del año. El objeto fue identificar variaciones temporales macroscópicas, usos de la tierra lindera, de la laguna, diferenciar microhábitats dados por sectores de mayor o menor circulación de agua, nutrientes, sedimentos, viento, etc. generando distribuciones diferenciales de las distintas formas biológicas del sistema, tanto vegetales como animales. El disco de Secchi se empleó para conocer la turbidez. Este parámetro manifiesta de forma indirecta la concentración de algas del fitoplancton (ver más adelante determinación de clorofila-a) ya que una mayor densidad de las mismas reduce la distancia de su visualización o turbidez inorgánica dada por diversos compuestos que absorben la luz. Con cinta métrica se determinó en diferentes puntos de la laguna la distancia de disco promediando el valor para su tratamiento. El valor de pH, temperatura y conductividad fue determinado in –situ a nivel subsuperficial (aproximadamente 15 - 20 cm), mediante instrumentos específicos (pHmetro, termómetro y conductivímetro, respectivamente). En días sin viento, se tomaron valores a diferentes niveles de profundidad, estableciéndose en algunos casos diferencias entre extremos (superficie y fondo). Se midió la concentración de oxígeno disuelto en la columna de agua cada 50 cm mediante una sonda. Para determinar la composición química mayoritaria y de fósforo total en agua se extrajeron muestras empleando botellas de PVC rotuladas previamente lavadas con agua del mismo ambiente. Hasta su ingreso al laboratorio son trasladadas en heladeras portátiles. Con un elemento similar a un sacabocado o barreno, se extrae sedimento de la laguna el cual se conserva en recipientes plásticos herméticamente cerrados, para la determinación de fósforo total, materia orgánica y pH. El fitoplancton fue muestreado en forma cualitativa utilizando una red ad- hoc. La identificación se realizó acorde a Guarrera et al. , (1968 y 1972) y Lopretto y Tell, (1995). Para cuantificar la concentración algal se tomó una muestra de agua para determinar nivel de clorofila-a (APHA -AWWA-WPCF, 1992). En forma paralela, se tomaron 2 muestras subsuperficiales de zooplancton con red de 42 micras de diámetro de poro. Se filtraron con la red 20 L de agua tomados de a 10 L. Tanto para fito como zooplancton se fijaron las muestras (cuyo volumen era aproximado a 100 mL) con formol hasta el 4%, en frascos previamente rotulados (nombre de la laguna, estación y fecha). Una vez en laboratorio se homogeneizaron las muestras, cuantificando los zooplanctontes presentes en 5 mL tomados de a 1 mL, valiéndose de una contador automático. Se promediaron los datos. En los casos en que se realizaron muestreos ictiológicos, se emplearon diferentes artes de pesca (red de arrastre a la costa, redes enmalladoras, etc.). El tratamiento seguido a cada ejemplar varió acorde al objetivo particular de cada campaña de trabajo.
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