LOS INDIOS Y LA CONQUISTA ESPAÑOLA América aislada durante milenios era para principios del siglo XVI una compleja interacción de factores internos que dieron lugar a muy variadas sociedades: Estados muy estructurados, Jefaturas más o menos estables y la existencia de tribus nómadas y seminómadas. Todo este mundo autosuficiente experimentó un cambio radical con la llegada del hombre europeo, perpetrándose el choque con un mundo completamente diferente. Ante la invasión española hubo reacciones diferentes: y
Ofrecimiento
de alianzas
y
Colaboración
más o menos forzada
y
Resistencia pasiva
y
Hostilidad constante
Hubo
algo en común entre conquistadores y c onquistados: el asombro ante el descubrimiento de una raza hu mana
desconocida y diferente. Veamos el efecto que causó la invasión en el territorio Inca, en el Azteca y en las zonas periféricas a estas civilizaciones.
El trauma de la conquista: conquista: Se ha logrado descubrir fuentes indígenas, tanto en México como en Perú, que trataban sobre profecías de la llegada de los españoles, aunque estas profecías manifestadas en dichos documentos eran sólo interpretaciones retrospectiva,
tales profecías manif iestan el trauma y el tormento de la llegada del hombre blanco montado en un monstruo de cuatro patas (el caballo), pues esa la llegada del hombre blanco signif icaría el f in de sus tiempos. Estas profecías y señales se lograron tener una gran influencia en la vida cotidiana de las culturas indígenas, pues en el templo de Tenochtitlan, durante todo ese año, cada noche se iluminaba por una columna de fuego que aparecía en el este y se veía subir desde la tierra hasta el cielo entre otras señales. Consecuentemente todo el mito del dios civilizador se esparció
en toda América, luego de su reinado benévolo éste desaparece y promete volver. También se da a mostrar que el fin del Imperio Inca llegaría durante el reinado del duodécimo emperador pues los españoles llegaron a Perú en el año 1519 por el oeste y Atahualpa, sin duda, en el periodo del d uodécimo inca. La reacción de los indios al ver por primera vez a
los españoles fue como ver el retorno de los dioses. Pues cabe mencionar que desde México y Perú se demuestra asombro y extrañeza debido al aspecto y poder tecnológico de los españoles, pues así lo relata el mensaje de Moctezuma a sus mensajeros, que eran hombres blancos los cuales sólo tenían descubierto sus caras, con caballos y una larga barba y de aspecto rubio. Además se asombraron de gran manera cuando se lanzó un tiro de cañón, el cual causo gran admiración por parte de los indígenas, por lo tanto Moctezuma recibió a los españoles como si fueran unos
verdaderos dioses regalándole collares de flores y oro cuando éste fue a recibirlos. En breve tiempo la creencia de la divinidad de los españoles desapareció, debido a su codiciosa conducta sobre la recolección de oro y su brutalidad eliminando así toda así toda fantasía de la deidad española. La caída del imperio Inca y Azteca fue rápida, pese a que los españoles eran sólo unos pocos centenares en comparación con el número indígena, los primeros se benef iciaron enormemente por la superioridad de sus armas y técnicas militares, pues tenían mucha ventaja en ello pues es fácil saber que arma vencería sobre la otra, como por ejemplo la caballería contra la infantería, espadas de acero contra lanzas obsidianas, etc no obstante este fue sólo un factor de importancia relativa, pues más que nada e factor
decisivo sobre las victorias españolas fue el impacto psicológico. La victoria de los españoles también se debió a las divisiones políticas y étnicas del mundo indígena, pues cabe a destacar que el Imperio Azteca y el Imperio Inca se construyeron a base de conquistas, por lo tanto hay que deducir que algunos grupos veía a los españoles no como
invasores sino como libertadores, pues como ejemplo tenemos a los innumerables indios que se unieron a los ejércitos de Cortes y Pizarro, los cuales eran tan numerosos como los aztecas e incas contra los que luchaban. Pues en México, los recién conquistados conquistados totonacas se rebelaron contra Moctezuma y se unieron a los españoles y en P erú, la
facción del Huáscar se unió a Pizarro el cual también recibió ayuda por parte de los cañaris y de los huancas los cuales se negaron a vivir bajo el dominio de los incas. Con la victoria de los españoles el sistema religioso indígena se vino abajo,
sentían que sus dioses habían muerto.
Desestructuración. El trauma de la conquista no sólo afecto psicológicamente al mundo indígena, sino que también afecto en ámbitos
demográf ico, económico, social e ideológico. Pues tras el primer contacto de los indígenas con los europeos las poblaciones amerindias sufrieron en todas partes un gran hundimiento demográf ico. En México de 25 millones en 1519
a 1,9 millones en 1580; en Los Andes de 10 millones en 1530 a 1,5 millones en 1590. Las enfermedades fueron el causante de esta enorme mortalidad indígena. Las enfermedades traídas por los españoles a América fue el causante de un sinfín de muertes indígenas, los cuales estuvieron aislados de la ecúmene de esa época, por l o tanto no desarrollaron anticuerpos capaces de defenderlos frente a estas nuevas enfermedades como la viruela, el sarampión, la gripe, entre otros. La conquista cruel y opresora de los españoles también signif icó una gran alza de la mortalidad
indígena, pues pese a que la gran mortalidad indígena se debió principalmente a la llegada de estas nuevas enfermedades, no hay que negar que la conquista española en si hizo su parte para el aumento de la mortalidad y la disminución de la esperanza de vida de los indígenas. Y como consecuencia de ello , el derrumbamiento de la población desorganizo por completo las estructuras tradicionales de las sociedades nativas.(E jemplo los Mitmaq como islas en territorios aislados, controlados antes de la invasión controlados por el Inca quedaron luego sin esa supervisión.) Antes de la formación del Estado Inca, estos suelos estaban poblados por diversos grupos de diferentes tama ños, cabe mencionar que los incas de la región del Cuzco representaban, al principio un grupo étnico con poca importancia, el cual alcanzo su importancia debido a su posición en la historia. Generalmente hablando la unidad básica de los diversos
grupos étnicos eran los ayllu. Estas unidades básicas estaban agrupadas colectivamente en mitades y luego formaban unidades más amplias hasta abarcar todo el grupo étnico. El Estado Inca era la cima de esta estructura de unidades
interconectadas. Se impuso un aparato político y militar a todos estos grupos étnicos, mientras seguían confiando en la jerarquía de los señores o curacas. Dentro del ayllu en el sentido estricto del término, los pastos eran sostenidos por la comunidad y la tierra cultivable repartida a las unidades familiares domésticas en proporción a su tamaño; así, en teoría, este reparto tenía lugar periódicamente. De acuerdo con la idea del auto subsistencia, que era un rasgo de la sociedad andina, una unidad familiar podía reclamar un trozo de tierra en cada uno de los diferentes sectores ecológicos, y r eunir productos complementarios de diferentes altitudes (maíz, papas, quínoas, pienso para las llamas, etc.). Los nuevos
fenómenos transformaron el mundo precolombino, pues los elementos más nuevos e importantes observados en este proceso de desestructuración son los nuevos sistemas de tributos, la introducción de la moneda y la economía de
mercado. Desde el principio del periodo colonial hasta mediados del siglo XVI, tanto en México como en Perú el nivel de los tributos proporcionados por los encomenderos no estaba regulado por ninguna norma of icial, pues la primera disposición de tasas fue redactada en la década de 1550; además incluía servicios de trabajos consistentes en numerosos y dispares pagamentos: maíz, trigo, patatas, ovejas, cerdos, aves, peces, frutas, coca, sal, ropa y diferentes artículos manufacturados. A menudo cuando no tenían algunos de estos productos, los indios habían de obtenerlos mediante el intercambio, lo que les obligaba a recorrer grandes distancias. También proceden de esta época los tributos
en plata, pero fue una cantidad limitada, comparada con el total de los pagos. Pronto las disposiciones se simplif icaron: los artículos de importancia secundaria desaparecieron, mientras que se incrementó la plata, convirtiéndose en la forma dominante de tributo desde la década de 1570. El tributo español en comparación con el tributo precolombino, el tributo español estaba impuestos por la voluntad de los encomenderos arbitrariamente y sin restricciones, por lo que abundaban con mucha frecuencia los abusos y cobros de tributos excesivos e injustos por parte de los encomenderos hacia los indígenas. Hubo un cambio cualitativo, pues el sistema de la ideología de los incas
estaba en ruinas. En resumen, los españoles heredaron el papel centralizador del Inca y fracasaron al asegurar la distribución de la riqueza en benef icio de todos. Mientras que el sistema de pagos del sistema inca fue equilibrado y circular, mientras que en el tributo español fue desequilibrado y unilateral. Con el desarrollo del tributo en plata desde
1550 los indios se vieron en la necesidad desempeñarse en nuevas actividades con el fin de log rar reunir el precioso metal. Las minas de México, especialmente las de Z acatecas desde 1545, sufrieron una invasión de trabajadores libres. Las minas de Potosí llegaron a ser el principal centro de atracción en los Andes centrales y meridionales.
Otros indios
fueron a trabajar con comerciantes españoles para transportar sus mercancías o iban a las ciudades para trabajar como mano de obra en la construcción de edificios. Por lo tanto se puede establecer que se desarrolla una economía de mercado mermando así la economía tradicional. Entonces los curacas se quejaron de que muchos de sus súbditos trabajaban muy lejos del campo y no volvían. Se desarrolla un proceso de migración que los recaudadores de tributos comenzaron a lamentar, en Perú las guerras civiles entre Pizarro y Almagro hasta 1548 ayudaron a desarraigar la población, pues muchos indios terminaron egresando las masas de vag abundos o permanecieron como yanaconas al servicio de los españoles. Con
el tiempo se originó una fundamental diferencia entre l as jefaturas de los Andes y de México, los primeros gozaban
de un cierto elemento de continuidad, mientras que los últimos se vieron afectados radicalmente por la hispanización de las estructuras política y administrativa. Desde mediados del siglo xvi los españoles implantaron en México los cabildos, formados por gobernadores, alcaldes y regidores elegidos por uno o varios años. La función de estos cabildos consistía en el control de la recaudación del tributo, la administración de la economía de la comunidad y de la justicia en casos menores. La historia de México se caracterizaba por una rápida diferenciación entre los cargos de gobernador y tlatoani: personas diferentes ocupaban ambos cargos, de modo que los recién llegados, que a menudo sólo eran descendientes de macehualtin, se incorporaban a los cabildos y aportaban sangre nueva a los grupos gobernantes. Pero en el vir reinato de Perú, los curacas generalmente continuaban uniendo su cargo al de gobernador, de modo que la renovación de las clases gobernantes fue menos importante. La religión of icial desapareció rápidamente tanto en México como en Perú.
El culto local se mantuvo levemente, pero los indios tuvieron que dejar sus f iestas más importantes y las prácticas que desaprobaban los españoles, sobre todo los sacrif icios humanos. Se destruyeron los templos, se quemaron códices y khipus, los sacerdotes nativos fueron perseguidos. Entre la nobleza nativa la educación de los niños en la religión cristiana ocasiona un choque generacional. Uno de los síntomas más dramáticos de la ruptura de la cultura nativa y de la angustia que causaba, fue el alcoholismo: un fenómeno advertido por todos los cronistas. En la sociedad precolombina
normas estrictas regulaban el uso del pulque (en México) y la chicha (en los Andes): sólo podían ser consumidos colectivamente durante las ceremonias religiosas en honor de los dioses, la bebida los ponía en comunicación con lo sagrado y los nobles que en otro tiempo habían dado un buen ejemplo, ahora inducían a los demás indios a la embriaguez. Por consiguiente, 40 años después de la conquista, la sociedad nativa había sufrido un proceso de desestructuración a todos los niveles: demográf ico, económico, social y espiritual. Los cuales se mantuvieron muy débilmente. T radición y aculturación.
Las tradiciones nativas se enfrentaron a nuevas prácticas que introdujeron los españoles. Tanto en México como en
Perú el consumo de alimentos se mantuvo igual. Los productos europeos no sustituyeron a los nativos. Los Señores pronto aprendieron a hablar y a escribir español mientras que los plebeyos mantenían la trad ición. El objetivo español era hispanizar una clase dirigente que los obedeciera. A lgunos miembros de la nobleza nativa adoptaron las vestimentas españolas para diferenciarse del resto. En el ámbito religioso los indios manifestaron cierto rechazo a la religión
colonial siendo f ieles a sus tradiciones. No obstante en México durante la primera década de la época colonial (hasta
1570), los indios parecían mostrar un verdadero entusiasmo por el cristianismo, este no fue el caso de Perú. Pero en ambos casos, los indios se aferraban tenazmente a sus propias creencias y ritos. Mientras que los españoles consideraban a los dioses locales como manifestaciones del diablo, los i ndios interpretaban el cristianismo como una forma de idolatría. Sin embargo, en vez de fundirse ambas en una síntesis, las dos religiones permanecieron
yuxtapuestas. Visión de Poma del mundo Incaico y Español (Páginas 192 y 193 como ejemplo de encajar las nuevas costumbres y creencias con las tradicionales precolombinas) Pero a pesar de estas supervivencias y continuidades, los
indios pensaban que no podían escapar al cataclismo causado por la dominación colonial.
Resistencia
y revuelta
Los españoles lograron establecer sus dos principales centros de colonización, en México y en Perú. No obstante en las fronteras de estos estados muy pronto surgiría un f érrea resistencia que en algunos casos duró hasta los primeros años
del siglo XX. Pues en esas regiones como en el norte de México, al sur y sureste de Charcas, o en Chile no existían pueblos acostumbrados a un gobierno centralizado y a producir un excedente económico sino que habían indios nómadas que no producían ningún excedente económico y que debido a su movilidad eludían los controles, por lo tanto la colonización en esos territorios fracasó. Uno de estos pueblos fueron los Chirimangos que ofrecieron una férrea resistencia a los españoles, aliándose inclusive
con los Incas, que antes eran sus enemigos.
Manco Inca comenzó colaborando con los españoles pero pronto se decepcionó cuando vislumbró que no eran hi jos de Viracocha sino del demonio. Desde las montañas de Vilcabamba en cuya cima estaba Machu Pichu, lugar sagrado de los sacerdotes nativos- resistió y restauró el estado neoinca. La expansión de Taqui Ongo.: Los predicadores anunciaban el fin del dominio español, los dioses nativos volverían para enfrentar al Dios cristiano para restaurar el imperio. Desde la conquista los huacas por mucho tiempo no habían recibido los sacrificios rituales, y, en su lugar, andaban errantes, abandonados. Para vengarse enviaron enfermedades y muerte a todos los indios que habían aceptado el Evangelio; además v agarían cabeza abajo o se convertirían en llamas o vicuñas. Sólo los indios fieles al culto de l os huacas serían admitidos en el imperio prometido. Las insurrecciones terminaron
cuando Tupac Amarú, descendiente de Manco Inca, fue decapitado ante una multitud aterrada para quienes la segunda muerte del Inca signif icó el f in del mundo. En el extremo sur de Chile, los indios araucanos lograron dar una f érrea resistencia, debido a que estos araucanos
estaban situados al sur del rio Bío-Bío, que a diferencia de las tribus que estaban al norte de tal río, estas no estaban
influenciadas bajo la hegemonía inca, no estaban acostumbrados a producir un excedente económico para pagar tributos, sólo conocían técnicas de cultivo bastante ru dimentarias y además eran nómades y semi-nómades con un sistema político que no iba más allá de los lazos de parentescos, todo esto explica porque los incas y los españoles sólo mantuvieron (en sus periodos) el control en el norte d el río Biobío pero fracasaron en su intento de gobernar la parte sur de este. Pese a que los araucanos eran bastante primitivos, se especializaron en progresar en el arte de la guerra,
al perfeccionar sus armas, al protegerse y al aprender a montar a caballo. En este contexto podemos comprender por qué la expansión europea fracasó en Chile pues hubo especialmente un notable retroceso en 1598 cuando una rebelión general obligó a los españoles a evacuar todo el territorio al sur del río Bío-Bío.
En la zona fronteriza de los chichimecas la expansión española se encontró con una resistencia tan fuerte como la de los chiriguanos o los araucanos. Si esta área había tenido alguna extensión bajo control español a fines del siglo XVI, más al norte la guerra aún continuó contra los pueblos y los apaches. La resistencia chichimeca fue vencida por una nueva y original política basada en la idea de la aculturación: a f inales del siglo los virreyes Villamanrique, y luego, Velasco, introdujeron nuevos métodos destinados a obligar a los indios a que renunciaran a su existencia nómada.
El sistema colonial se impuso en América de diversas maneras. Este proceso tomó formas m uy diferentes: sincretismo (concordancia), resistencia, hibridación, hispanización. Pero entre la cultura española que intentó imponer sus valores y costumbres y la dominada cultura nativa que insistió en preservar sus propios valores y costumbres, el conflicto llega a nuestros días R456j