Eric Hobsbawm - Historia del siglo XX
Capítulo 14: Las décadas de crisis 1973 es la historia de un mundo que perdió su rumbo y La historia de los veinte años que siguieron a 1973 se deslizó hacia la inestabilidad y la crisis. Sin embargo, hasta que la Unión Soviética y la Europa socialista colapsaran por completo, no se percibió la naturaleza mundial de la crisis. En el mundo capitalista avanzado continuó el desarrollo económico, aunque a un ritmo más lento que en la edad de oro. El comercio internacional de productos manuacturados, motor del crecimiento mundial, continuó, e incluso se aceleró, en los prósperos a!os ochenta. "or otra parte, la situación en zonas concretas del planeta era bastante menos halag#e!a. En Asia occidental y América Latina, el crecimiento del "$% se estancó.
África,
En la antigua zona del & socialismo real ' de (ccidente, las econom)as se hundieron por completo después de *++- usia, "olonia, /hecoslovaquia, umania, %ulgaria. 0o sucedió lo mismo en Oriente. /hina y gran parte de los pa)ses del sudeste y este asiáticos, en los a!os setenta se convirtieron en la región económica más dinámica de la econom)a mundial.
La econom)a mundial capitalista prosperaba, pero con ciertos problemas. En la Europa occidental, el desempleo creció, 1unto con la pobreza, la miseria 2mendigos en las calles y personas sin hogar. La desigualdad creció en los pa)ses de econom)as desarrolladas de mercado, en especial desde el momento en que el aumento casi automático de los ingresos reales al que estaban acostumbradas las clases traba1adoras en la edad de oro llegó a su in. Las haciendas gubernamentales se ve)an agobiadas por los con mayor rapidez que los ingresos estatales.
grandes gastos sociales , que aumentaron
3 principios de los noventa empezó a diundirse un clima de inseguridad y de resentimiento incluso en muchos de los pa)ses ricos. Sin embargo, el hecho central no es que el capitalismo uncionase peor, sino que sus operaciones estaban uera de control- nadie sab)a cómo enrentarse a las luctuaciones de la econom)a mundial. Las décadas de crisis ueron crisis ueron la época en la que el estado nacional perdió sus poderes económicos. La 4nica alternativa que se orec)a era la propugnada por la minor)a de los teólogos ultraliberales, reorzada por la aparente impotencia y el racaso de las pol)ticas económicas convencionales. El recientemente creado 5*+6+7 premio 0obel de Econom)a respaldó el neoliberalismo, al concederlo a 8riedrich von Hayek 5*+9:7 5*+9:7 y, dos a!os después, a otro deensor militante del ultraliberalismo económico, ;ilton Friedman. El principal régimen neoliberal, los Estados Unidos del presidente Reagan, aunque oicialmente comprometidos con el conservadurismo iscal y con el monetarismo de 8riedman, utilizaron en realidad métodos
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El sistema productivo de las econom)as capitalistas quedó transormado por la tecnol"gica, y se globalizó o transnacionalizó e=traordinariamente.
re!oluci"n
/onsecuencias- la sustitución del traba1o humano por máquinas, aumentando el desempleo mundial. La tragedia histórica de las décadas de crisis consistió en que la producción prescind)a de los seres humanos a una velocidad superior a aquella en que la econom)a de mercado creaba nuevos puestos de traba1o para ellos. El declive del sindicalismo, debilitado tanto por la depresión económica como por la hostilidad de los gobiernos neoliberales, aceleró este proceso. En los pa)ses ricos del capitalismo ten)an sistemas de bienestar en los que apoyarse. En los pa)ses pobres entraban a ormar parte de la amplia y oscura econom)a inormal o paralela.
La combinación de depresión y de una econom)a reestructurada en bloque para e=pulsar traba1o humano creó una sorda tensi"n que impregnó la pol)tica de las décadas de crisis. 8ueron tiempos en que la gente, con sus antiguas ormas de vida prácticamente arruinadas, estuvo a punto de perder el norte. Esta sensación de desorientación y de inseguridad produ1o cambios y desplazamientos signiicativos en la #ol$tica de los pa)ses desarrollados. En épocas de problemas económicos, los votantes suelen inclinarse a culpar al partido o régimen que está en el poder, pero la novedad de las décadas de crisis ue que la reacción contra los gobiernos no beneiciaba necesariamente a las uerzas de la oposición. Los má=imos perdedores ueron los partidos socialdemócratas o laboristas occidentales. >esde *+9?, muchos de sus partidarios 5especialmente 1óvenes y@o de clase media7 abandonaron los principales partidos de la izquierda para sumarse a movimientos más específicos 2ecologistas, eministas y otros nuevos movimientos sociales. Su importancia no reside tanto en su contenido positivo como en su rechazo de la vie!a política".
% En resumen, durante las décadas de crisis las estructuras #ol$ticas de los países capitalistas democráticos, hasta entonces estables, empezaron a desmoronarse &
Aambién alrededor de *+9? comenzó a producirse una crisis similar que comenzó a minar el mundo de las econom$as de #lanificaci"n centrali'ada. >esde el punto de vista económico, estaba claro que el socialismo necesitaba reormas urgentes. La entrada masiva de la Unión Soviética en el mercado internacional de cereales y el impacto de las crisis petrol)eras de los setenta representaron el fin del campo socialista como una econom)a regional autónoma, protegida de los caprichos de la econom)a capitalista mundial. "ara el sistema comunista, al menos en la esera soviética, se trataba de una cuestión de vida o muerte.
/on todo, la relativa tran#uilidad de la vida socialista no se deb)a al temor. El sistema aisló a sus ciudadanos del pleno impacto de las transormaciones sociales de (ccidente porque los aisló del pleno impacto del capitalismo occidental. Lo que el estado no se propuso cambiar permaneció como estaba antes. La parado1a del comunismo en el poder es que resultó ser conservador.
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Las décadas de crisis aectaron a las regiones del tercer
mundo de maneras muy dierentes.
La 4nica generalización que pod)a hacerse con seguridad era que desde *+9?, casi todos los pa)ses de esta categor)a se habían endeudado proundamente- 3mérica Latina y el /aribe, y (riente ;edio. 3 comienzos de los ochenta se produ1o un momento de pánico cuando, empezando por ;é=ico, los pa)ses latinoamericanos con mayor deuda 23rgentina y %rasil2 no pudieron seguir pagando, y el sistema bancario occidental estuvo al borde del colapso. ;ientras las deudas de los estados pobres aumentaban, no lo hac)an sus activos. En las décadas de crisis la econom)a capitalista mundial decidió &cancelar' una gran parte del tercer mundo.
% El principal efecto de las décadas de crisis fue, pues, el de ensanc(ar la brec(a entre los países ricos y los países #obres & En la medida en que la econom)a transnacional consolidaba su dominio mundial iba minando una grande institución- el estado-naci"n. Las empresas multinacionales ganaban terreno, 1unto con el mercado monetario internacional y los medios de comunicación global de la era de los satélites. "aradó1icamente, a este debilitamiento del estadoBnación se le a!adió una tendencia a dividir los antiguos estados territoriales en lo que pretend)an ser otros más peque!os, la mayor)a de ellos en respuesta a la demanda por alg4n grupo de un monopolio étnicoBling#)stico- mo!imientos autonomistas y separatistas en Cran %reta!a, Espa!a, /anadá, Suiza, >inamarca, Dugoslavia. Este nuevo nacionalismo separatista se trataba de una combinación de tres enómenos-
1) la resistencia de los estadosBnación e=istentes a su degradación *) el ego)smo colectivo de la riqueza, que rele1a las crecientes disparidades económicas entre continentes, pa)ses y regiones
3) la e=traordinaria disolución de las normas, te1idos y valores sociales tradicionales, que hizo que muchos habitantes del mundo desarrollado se sintieran huéranos y despose)dos
En los Estados Unidos, se dio desde finales de los sesenta el auge de los +gru#os de identidad,agrupaciones humanas a las cuales una persona pod)a &pertenecer' de manera inequ)voca y más allá de cualquier duda e incertidumbre 5e1. latinos, orientales, homose=uales en 0ueva Dor<7. Las pol)ticas de identidad y los nacionalismos de ines del siglo $ no eran programas eicaces, para abordar los problemas de ines del siglo , sino más bien reacciones emocionales a estos problemas. "roblemas que el estadoBnación ya no era capaz de resolverlos. La necesidad de coordinación global multiplicó las organi'aciones internacionales con mayor rapidez. /ada vez se consideraba más urgente la necesidad de emprender acciones globales para arontar problemas como los de la conservación y el medio ambiente. Se dispon)a de dos ormas de asegurar la acción internacional•
una de ellas era la abdicación voluntaria del poder nacional a avor de autoridades supranacionales, como la Unión Europa y las (0C.
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la autoridad de los organismos financieros internacionales constituidos tras la segunda guerra mundial- el 8ondo ;onetario $nternacional y el %anco ;undial.
