Capítulo 1. La comunicación. Orígenes y evolución
OBJETIVOS - Definir el concepto de comunicación. - Establecer las diferencias entre información y comunicación. - Conocer una síntesis evolutiva de los procesos comunicativos. - Reseñar el contexto histórico en que surgen los primeros medios de comunicación. - Conocer los principales aportes de las ciencias al estudio de la comunicación. - Esbozar las distintas corrientes de pensamiento que influyeron en la conformación de la teoría de la comunicación.
1.1. Introducción Hoy día, el hombre enciende su televisor, timbra un teléfono, se sienta ante un ordenador, o realiza cualquiera otra de sus acciones cotidianas y se comunica con sus congéneres sin importar ningún tipo de distancias. Esta misma cotidianidad es la que muchas veces nos impide reflexionar sobre la trascendencia de estos actos. Obviamente, no siempre ha sido tan fácil. La comunicación, que es de lo que estamos hablando, ha transitado un largo proceso desde el mismo surgimiento de la raza humana. En este capítulo hablaremos fundamentalmente de los momentos por los que ha trascurrido el proceso comunicativo que nos han permitido l legar hoy a la descripción esbozada en el primer párrafo.
1.2. Antecedentes necesarios para el estudio de la comunicación
El análisis etimológico del término comunicación nos remite a su raíz latina "communicare" que significa "poner algo en común con otro". Ya este análisis establece per se la idea de 'poner en comunidad', de 'compartir' e implica, por tanto, una 'acción participativa'. Comunicación implica también 'comunicantes', 'proceso', 'necesidad', 'capacidad', 'relaciones', 'mensaje', 'código'. A pesar de que en algunas especies animales, que viven en organizaciones bien estructuradas, podríamos hablar de comunicación -en sentido técnico- (en tanto flujo de información, visible por ejemplo en estrategias de caza de las sociedades lobunas); obviamente acotaremos nuestros análisis a la comunicación humana, entendida esta como la transmisión de ideas y pensamientos con el objetivo de "ponerlos en común" con otros, pues, en la escala biológica, somos los seres humanos los capacitados para construir y estructurar lenguajes conformados por símbolos con significados, necesarios para el desarrollo de la comunicación. Todo lenguaje tiene una función reguladora en tanto que a través de él nos comunicamos y coordinamos nuestra actividad. La vida en sociedad presupone la comunicación entre sus miembros y por tanto la creación y utilización de un código de comunicación compartido. El hombre, como ser social, ha ejercido la práctica de la comunicación desde que comenzó a agruparse con sus congéneres para emprender su ininterrumpida marcha ascendente en el dominio del planeta que lo ha acogido. Los conocidos como "Estudios de la Comunicación", que nos ocupan, están muy ligados a avances tecnológicos que permitieron la creación de lo que desde hace ya un tiempo se conoce como "medios de comunicación". Aunque aún cuando evidente, vale aclarar que los estudios de los procesos comunicativos, o teorías de la comunicación, surgieron " pos hoc ", puesto que la comunicación era algo que se había desarrollado a lo largo de la historia humana y que, lógicamente, había atravesado diferentes etapas en su devenir. Nos parece conveniente que antes de adentrarnos en historiar el proceso evolutivo que han tenido los estudios sobre la comunicación, dejemos establecidas las diferencias que esta tiene con respecto a l a información. 1.2.1. Diferencias entre la comunicación y la información
Muchas veces se ha confundido, o se sigue confundiendo todavía, la comunicación con la información. Obviamente, comunicación e información son campos que se entrecruzan constantemente; incluso, las primeras investigaciones que sirvieron para una posterior sistematización de los estudios sobre comunicación y que ayudaron a conformar su cuerpo teórico, provienen del campo de la información, quizás aquí la génesis de esta reiterada confusión, amén de sus puntos de contactos.
Nos parece provechoso que nos detengamos un tanto para dejar establecidas las diferencias entre ellas a la vez que sus imbricaciones. Cabe decir que a finales de la década del 40 del pasado siglo, las primeras investigaciones que posteriormente tuvieron una amplia aplicación conceptual en el campo de la comunicación, provenían fundamentalmente de las intenciones de poder regular los flujos informativos que corrían por los distintos canales técnicos de los jóvenes medios de comunicación. Fue así que Claude Shannon elabora en 1948 su teoría matemática de la información, (que veremos en el acápite 2.2. de las teorías y modelos de la comunicación); con el objeto de mejorar las transmisiones a través del teléfono y el telégrafo. Aún cuando los presupuestos abordados en esta teoría tuvieron una amplia repercusión y aplicación en el campo de la teoría de la comunicación, no debe perderse de vista que la intención originaria de este investigador se concretaba en el campo de la información. Fue Claude Shannon quien hizo la propuesta de utilizar la numeración binaria como forma de simbolizar el procesamiento de la información para su mejor transmisión. Por su parte, y casi de forma sincrónica, el también investigador Norbert Wiener, quien trabajaba al igual que Shannon en los Laboratorios Bell, establece los fundamentos de la cibernética en su conocida obra Cibernética o el Control y Comunicación en animales y máquinas, en la que abunda sobre el orden y el control en cualquier sistema natural o artificial de información. Podemos establecer el concepto de información como "el conjunto de datos, procesados y organizados, sobre un determinado ente o fenómeno. Estos datos son obtenidos fundamentalmente en la interacción con el entorno y donde las percepciones sensibles juegan un papel primordial como base del conocimiento en una posterior integración". Los datos conforman la información y están dirigidos a aumentar la utilidad de la misma. A la vez, la información tiene la propiedad de hacer más cómoda la utilización de los datos, en tanto estos son un medio para organizar la información. La información, por tanto, es base a la vez que resultado de los conocimientos obtenidos en la interacción con el entorno y que en un proceso de espiral ascendente, servirá para "ajustar" las posteriores y sucesivas interacciones con dichos entornos. Podemos asegurar, entonces, que la información es imprescindible para tomar las decisiones correspondientes en nuestra interacción con el entorno. De acuerdo a sus características, la información puede ser clasificada teniendo en cuenta los siguientes parámetros:
Significado: se refiere a su aspecto semántico, es decir, qué es lo que nos dice la información sobre el ente o fenómeno en cuestión.
Importancia: se refiere a la relevancia de lo que nos dice sobre dicho ente o fenómeno. Vigencia: se refiere a si lo que nos dice de dicho fenómeno es una información actual o si ya está desfasada. Validez: hace referencia a la confiabilidad de los datos obtenidos, es decir, si la fuente es fiable o si nos ha proporcionado datos falsos. Valor: se refiere a la utilidad de los datos obtenidos, es decir, para qué nos puede servir dicho cúmulo de datos. Polimorfismo: se refiere a la variedad de formas en que se nos pueden presentar los datos o información sobre el ente o fenómeno.
La información, en tanto datos organizados, constituye un basamento fundamental en nuestro conocimiento de los entornos que nos rodean y con los que interactuamos. Podemos plantear entonces que la información nos permite conseguir los siguientes objetivos:
- Aumentar el conocimiento. - Servir de base para la toma de decisiones. - Evaluar los conflictos para elegir las soluciones adecuadas. - Dotarnos de parámetros evaluativos para poder establecer los controles necesarios.
La información en sí misma no constituye un conocimiento, sino que aporta los datos necesarios que nos permiten documentar la realidad o la parte de ella de la que provienen dichos datos, para que, en un proceso de elaboración y organización de estos, podamos extraer los conocimientos necesarios sobre dicha realidad. La información es un proceso previo; es la actividad consciente del hombre quien la dota de utilidad al valorar lo significativo de la información y organizarla y convertirla en conocimiento. El conocimiento es el proceso conclusivo. Una vez establecidas las diferencias entre Comunicación e Información, pasemos a analizar brevemente algunos antecedentes necesarios antes de adentrarnos en el desarrollo evolutivo de los procesos comunicacionales y el posterior establecimiento de los estudios sobre comunicación. 1.2.2. Breve historia en la evolución de los procesos comunicativos
La práctica de la comunicación ha estado indisolublemente ligada al desarrollo de las sociedades humanas desde su etapa primitiva (Homo Sapiens, 150 mi l años). Primero fueron gestos mímicos y sonidos guturales, hasta que cambios en su evolución física y cognitiva permitieron en primer lugar la aparición del
protolenguaje y luego la aparición del lenguaje como tal, hace aproximadamente 100 mil años. Surgen así las conocidas como "sociedades orales" que antes de la creación de la escritura necesitaron conservar, almacenar y trasmitir todo tipo de información y conocimientos acerca de su historia, mitos, nombres, y rituales. La aparición de la escritura, basada en lo que posteriormente se denominarían símbolos y signos lingüísticos, se produce en el m omento en que los hombres abandonan la vida nómada y pasan de ser recolectores y cazadores a agricultores y ganaderos y donde aparece también la primera división social del trabajo. Las primeras manifestaciones de la escritura fueron, sobre todo, anotaciones contables realizadas por los grupos dominantes, fundamentalmente la clase sacerdotal, que eran los encargados de administrar y contabilizar los excedentes productivos, en un primer momento, y posteriormente, los impuestos cobrados. Estas anotaciones, donde el número tenía mayor protagonismo que la letra, se realizaban en tablillas de arcilla, las cuales suponen el origen de la escritura cuneiforme. La creación de la escritura significó un elemento de diferenciación social, puesto que su conocimiento y control era privativo de los grupos de poder que la utilizó para ejercer su hegemonía sobre el resto de la sociedad y desarrollar así su papel de control y organizador del pueblo. La escritura no aparece de manera sincrónica en el tiempo. Aunque está ligada a la aparición de las grandes civilizaciones antiguas, tendrá manifestaciones temporales y formales diferentes en cada una de ellas. Se conocen cinco grandes civilizaciones antiguas en las cuales se desarrolló la escritura. En la civilización mesopotámica apareció la escritura cuneiforme hace aproximadamente 5 mil años. El antiguo Egipto es famoso, entre otras cosas, por su escritura jeroglífica surgida hace más de 4.500 años. También encontramos escritura jeroglífica desde hace 4 mil años en las civilizaciones surgidas en el Valle del Indo. Los pueblos del Asia crearon la escritura ideográfica hace 3 mil años. En América, los pueblos de Mesoamérica, de gran diversidad étnica y lingüística, acudieron también a escrituras jeroglíficas. Otros pueblos más al sur del continente americano, fundamentalmente los quechuas y los aymaras, crearon un sistema propio en el esplendor de su civilización (hace más de mil años) para almacenar la información. Conocidos como khipus, estos sistemas consistían en cordeles de lana amarrados a una cuerda principal más gruesa, y que en dependencia de la cantidad de cordeles subsidiarios atados a esta cuerda principal, o al lugar que ellos ocuparan, tendrían un significado u otro. Ya hemos visto cómo la escritura aparece ya en las primeras grandes civilizaciones antiguas, aún cuando mantienen la oralidad que sigue teniendo más peso que lo escrito en la preservación de sus culturas. El mundo acústico,
el mundo de la oralidad -planteó McLuhan en "La Aldea Global"- no tiene fin. Estas civilizaciones no fueron asépticas, el comercio y las guerras desarrolladas entre ellas conllevó al intercambio de prácticas sociales y culturales. Es así que los sistemas de escrituras también se interrelacionan llevando a la conformación de distintos alfabetos comunes. Veamos ahora brevemente cómo se desarrolló este proceso en los pueblos del Mediterráneo, hasta la conformación del alfabeto latino, por ser este el que más nos interesa. Los primeros en escribir las consonantes aisladas fueron los pueblos semíticos occidentales ubicados en las orillas del Mar Rojo y en el Mediterráneo: los hebreos y los fenicios. El alfabeto fenicio supone una creación progresiva, pues de la pictografía, que es una representación global, se pasó a signos que descomponen el discurso en sus partes constitutivas. El origen de este proceso se remonta a los siglos XIII y XII a.c. El fenicio arcaico está compuesto de 22 letras, únicamente consonantes y está libre ya de elementos ideográficos. Los principales alfabetos occidentales han tenido su origen en el alfabeto semítico septentrional, o cananeo, datado hace más de 3.500 años en el Oriente Próximo. El precedente del alfabeto occidental fue ideado en las regiones orientales de la costa mediterránea y fue divulgado por los mercaderes fenicios. Los griegos conocieron este sistema de escritura y adoptaron este alfabeto aunque transformaron algunas consonantes y semiconsonantes en vocales. También variaron la dirección de algunas letras y generalizaron la escritura de izquierda a derecha. Esto se suele fechar hacia el 900 a.c. El alfabeto Latino es uno de los alfabetos locales que los etruscos tomaron del griego. Se diferencia de este no sólo en la forma de las letras, sino también en su empleo. En el siglo I de nuestra era estaba constituido de 23 letras. Este alfabeto, heredado por los romanos, con las variantes propias, fue difundido por todo el Mediterráneo y posteriormente a todo Occidente. La expansión de la civilización grecolatina y del cristianismo jugó un papel decisivo en este proceso. En el mundo greco-latino la oralidad continúa teniendo más peso que lo escrito, la escritura es asumida como un soporte de esa oralidad y el desarrollo de las memorias alcanza una connotación muy importante. Son los griegos los que comienzan a desarrollar disciplinas filosóficas de carácter filológico: la or atoria y la retórica. La aparición del lenguaje y de la escritura marcaron un hito en el desarrollo de la sociedad humana, pero, y sobre todo, por el papel determinante que tuvieron en la salvaguarda y transmisión de los conocimientos acumulados. La lengua y la escritura presuponen la existencia de un código de comunicación compartido entre sus conocedores. La escritura y los textos escritos
sirvieron para comunicar con sus contemporáneos, pero además, sirvieron para preservar en ellos (los textos escritos) el legado de sus praxis socioculturales y así, sin proponérselo, comunicarlo a las generaciones siguientes. Al enfatizar en la importancia del lenguaje y la escritura (código lingüístico: oral y/o escrito) en el proceso de la comunicación, tendemos a generalizarlo e identificarlo con la comunicación en su totalidad. Es cierto que es el elemento más idóneo para la transmisión de ideas, pensamientos, sensaciones y emociones, pero no el único. Recordemos que la comunicación es un proceso inmanente a la sociedad humana y que pasarán muchos años para que el texto escrito pueda estar al alcance de las masas por demás analfabetas durante mucho tiempo. De ahí que se haya recurrido a otros soportes a lo largo de la historia, dada la necesidad perenne de comunicar con sus semejantes. La división social del trabajo y la posterior aparición de las clases sociales, determinaron que la actividad intelectual se concentrara en la élite de poder y que esta hiciera uso de aquella como instrumento de dominio social para consolidar su hegemonía. Es así que las clases sociales hegemónicas, para mantener y consolidar los órdenes sociales establecidos, recurren a otros códigos y soportes comunicacionales supletorios, dentro de los cuales el arte y sus manifestaciones tiene un papel destacado por su función comunicativa. No es de extrañar entonces que las expresiones artísticas dominantes en las grandes culturas antiguas (Mesopotámica, Egipto) hayan sido la arquitectura y la escultura y que el sello distintivo de las mismas sea justamente la monumentalidad en su escala constructiva con el afán de provocar un efecto de nimiedad y, por tanto, de sometimiento, en sus observadores. La suntuosidad, ha sido y es, un elemento diferenciador de clases sociales como signo distintivo de su poder y opulencia, y se manifiesta tanto en la decoración de los receptáculos donde ha habitado (casas, palacios, castillos, villas) como en la ornamentación de sus joyas y atributos de poder. El período de la Edad Media se caracterizó, en lo social, por la difusión e implantación del cristianismo. En los monasterios medievales los monjes conservaban el conocimiento acumulado y el legado artístico literar io. Una de sus actividades fundamentales, como "guardianes" del saber, consistía en copiar y reproducir los textos escritos, así como también crear los famosos "manuscritos iluminados". Durante todo el periodo medieval el arte constituyó el soporte fundamental para la divulgación de la fe y los dogmas cristianos. Las iglesias, como únicos espacios congregacionales existentes en la época y donde se ejercía la función catequizadora-educativa, en fin, comunicativa, se llenaron de signos icónicos que transmitían la fe cristiana.
La Catedral Gótica, como el más digno ejemplo de lo antes expuesto, intenta transmitir -y lo logra- el espíritu de recogimiento que convoca a la humildad y obediencia de sus fieles. La luz, matizada a través de los grandes vitrales, llegaba a los amplios espacios, que habían podido ser ampliados gracias a los avances en los materiales y técnicas constructivas. Las grandes alturas, tanto en el interior del templo gótico, como en sus torres-agujas, indicaban a los fieles el camino de ascenso a los cielos bajo la mirada justiciera y amedentradora del 'Cristo Pantocrátor' que los observaba. Un acontecimiento de vital importancia para el desarrollo de los procesos comunicativos, lo constituyó la invención de la imprenta de tipos móviles hacia el año 1450 por el alemán Johannes Gutenberg. Si bien los chinos, conocedores del papel desde el siglo II gracias a un proceso para su fabricación ideado por el eunuco Ts'ai Lun, ya habían comenzado a reproducir textos, mediante un sistema de impresión consistente en presionar sobre papel la tinta depositada en los relieves tallados en trozos de madera; es el invento de Gutenberg, a partir de un sistema de caracteres móviles, el que marcó un antes y un después. Recordemos que hasta ese momento los libros eran producidos o "reproducidos" por los monjes en los monasterios. La copia de un texto de forma manual podía durar años por lo que la creación de la imprenta significó un aporte revolucionario que permitió una rápida reproducción y de un gran número de ejemplares. A finales del siglo XIX (1885), el también alemán Tomar Mergenthaler perfeccionó este proceso gracias a la invención de la linotipia. Estamos ya ante uno de los adelantos tecnológicos que provoca la creación del primer Medio de Comunicación con un mayor carácter social. La imprenta impulsa la escritura y permite la reproducción del libro a gran escala. En estos momentos ya se habían prestigiado las lenguas nacionales en contraposición al latín como lengua única. La imprenta también permitió la aparición de panfletos informativos a finales del siglo XV, que fueron evolucionando hasta lo que hoy conocemos como 'prensa escrita'. 1.2.3. Surgimiento de los medios de comunicación
A mediados del siglo XIX, la II Revolución Industrial, con el surgimiento de grandes espacios fabriles, provoca una mayor concentración de población en las ciudades a partir de los grandes éxodos rurales hacia ellas. Esta misma Revolución Industrial (era de la electricidad) es la que permite el posterior surgimiento de los medios de comunicación hasta llegar a los conocidos como Medios Audiovisuales. Ya habíamos apuntado, con anterioridad, que, obviamente, la aparición de los distintos medios de comunicación estaba siempre ligada al desarrollo tecnológico que posibilitaba su surgimiento. Precisemos ahora la aparición de algunos de ellos:
1.2.3.1. Pren sa esc rita
Como habíamos visto, la creación de la imprenta en el siglo XV marcó una verdadera revolución en el ámbito social y cultural. Con ella la reproducción de los impresos podía ser en cifras significativas, lo que apunta ya a un número mayor de receptores. Durante los siglos XVI y XVII empezaron a surgir numerosos periódicos. En 1645 surge en Suecia el Post-Och Inrikes Tidnindar , que es el periódico más antiguo de los que aún hoy circulan. Sin embargo, no es hasta la segunda mitad del siglo XIX, con las grandes concentraciones humanas en las ciudades, que se generaliza la circulación de periódicos, debido también al abaratamiento de los mismos. 1.2. 3.2. El te lé g r af o
En 1844 el norteamericano Samuel Morse transmite por primera vez un mensaje a través del telégrafo desde la Corte Suprema de los Estados Unidos en Washington D.C., hasta Baltimore, en Maryland. 1.2. 3.3. El te lé fo n o
En 1876 el inventor británico Alexander Graham Bell patenta en Estados Unidos el teléfono, capaz de transmitir señales acústicas por medio de señales eléctricas. Durante mucho tiempo se le consideró el creador de este invento, hasta que en 2002 el Congreso de los Estados Unidos reconoce la autoría del mismo al italiano Antonio Meucci que lo había diseñado desde 1857, pero que en su momento no había podido formalizar su patente ante la oficina de los Estados Unidos por problemas económicos. Hoy día el nombre de ambos está asociado a la invención del teléfono. 1.2.3.4. El c ine
En 1895 se crea el cine. El 28 de diciembre de ese año los hermanos Lumière realizan la primera proyección pública de los fotogramas que recogían la salida de un grupo de obreros de una fábrica francesa en Lyon. 1.2.3.5. La rad io
Otro de los descubrimientos trascendentales para los medios de comunicación lo constituye sin dudas la radiodifusión, que permite la transmisión de señales sin hilo mediante la modulación de ondas electromagnéticas. El invento de la radio ha estado siempre asociado a la figura del italiano Marconi quien estableció la primera patente de la radio en Inglaterra en 1896. Fue también Marconi quien logra por primera vez la transmisión de señales de un lado a otro del Océano Atlántico en 1901. En 1909 recibe el Premio Nobel de Física. En 1912, durante la tragedia del Titanic, la radio jugó un destacado papel en la salvación y rescate de un gran número de víctimas lo que, sin dudas, contribuyó a la popularización del nombre de Marconi asociado como promotor de este invento. Fue Marconi quien consolidó y popularizó esta invención. Ya en 1897 había montado la primera estación de radio del mundo en la isla Wight al sur de Inglaterra y al año siguiente estableció la primera fábrica para producir equipos de transmisión sin hilos en Chelmsford, Reino Unido. Pero, sin embargo, hay que decir que la invención de la radio fue posible gracias a investigaciones y descubrimientos previos, realizados en primer lugar por Maxwell, que en 1865 sentó las bases teóricas de la propagación de las ondas electromagnéticas, lo cual fue posteriormente validado por Hertz en 1888, cuando, con un oscilador y un resonador, realizó la primera transmisión sin hilos de ondas electromagnéticas, sentando así las bases prácticas para el envío de señales de radio. Se destacan también en este campo los estudios y experimentos del académico ruso Alexander Popov, quien en 1895 presenta un receptor capaz de detectar ondas electromagnéticas y que logra una transmisión entre dos edificios de la Universidad de San Petersburgo distantes entre sí a 250 metros, con un sistema completo de recepción-emisión de mensajes telegráficos sin hilos. Por otra parte, el austro-húngaro Nikola Tesla, radicado en Estados Unidos, logra ya en 1893 la transmisión de energía electromagnética sin cables con el primer radiotransmisor. Tesla no lo patenta hasta 1897, posterior a la patente de Marconi. Los litigios jurídicos generados por esto no concluyeron hasta 1943, en que la Corte Suprema de los Estados Unidos atribuye a Nikola Tesla la invención de la radio. De esta manera, también el invento de la radio queda asociado a dos nombres, en este caso Marconi y Tesla, aunque en Rusia siempre se ha defendido la figura de Popov. Ahora, si bien la paternidad de este invento queda diluida entre Marconi, Tesla y Popov; de lo que sí no cabe duda es de su rápido empleo y de la difusión de su uso como Medio de Comunicación. En 1906 tiene lugar la primera emisión de radio en Estados Unidos. En 1920 se crea en Pittsburg la primera emisora regular del mundo con transmisiones diarias de discos musicales. En 1923 se funda en el Reino Unido la British Broadcasting Corporation (BBC) y ya en 1925 funcionan más de seiscientas
emisoras de radio en todo el mundo. En 1931 por primera vez se transmite en directo una ópera desde el Metropolitan Opera House. 1.2.3.6. La tel evis ión
Otro hito importante en el desarrollo de los medios de comunicación lo constituye sin dudas la televisión. La transmisión y r ecepción de imágenes en movimiento y de sonido a distancia y en tiempo real, ha marcado la vida social desde la segunda mitad del siglo XX. Las primeras emisiones públicas de televisión fueron efectuadas en Inglaterra por la BBC en 1927 y en Estados Unidos en 1928 por la Columbia Broadcasting System (CBS) y la National Broadcasting Company (NBC). Estas primeras emisiones utilizaron sistemas mecánicos y los programas no se emitían con un horario regular. La invención del tubo de rayos catódicos para los telerreceptores y del iconoscopio como cámaras de televisión para la transmisión de imágenes, conllevó a la aparición de la televisión electrónica que posibilitó una aceleración en el desarrollo de la industria televisiva y un aumento en la venta de telerreceptores con el consiguiente aumento de telespectadores en las transmisiones regulares. Estamos ya en el momento en que los avances tecnológicos de la sociedad industrial han permitido la creación de un conjunto de medios de comunicación que comienzan a ser masivos, en tanto se generaliza su uso y su consumo, por el abaratamiento de sus costes, lo que permitirá que se conviertan en so portes o instrumentos de procesos comunicativos a escala social. Es justo en el momento que aparecen los primeros grandes medios de comunicación, fundamentalmente la radio y la televisión -por su enorme impacto social-, cuando se consolidan los "Estudios de l a Comunicación" como resultante de las inquietudes epistemológicas originadas por la aparición y uso de estos medios. Se comenzó entonces a conformar un cuerpo teórico para conocer y explicar los fenómenos que a su alrededor se producían.
1.2.4. Interdisciplinariedad en los estudios de la comunicación
Antes de introducirnos en los estudios teóricos como tal, consideramos oportuno tratar de realizar un bosquejo de las condicionantes histórico-sociales (que incluyen lo científico), que nos permita ubicar en su contexto el surgimiento de estos estudios.
Hemos planteado que el estudio de la comunicación adquiere valor científico con la irrupción de los medios de comunicación y los efectos resultantes que los procesos desarrollados en estos provocaban en los grupos sociales. Cabe destacar que los medios de comunicación son sólo instrumentos de la comunicación y no el acto comunicativo en sí . La madurez alcanzada en las distintas ciencias en este período sirve de marco referencial para las nuevas construcciones teóricas que estas inquietudes epistemológicas demandan. Aunque la joven "teoría de la comunicación" se enmarca dentro de los estudios que abordan el campo de lo social, sus construcciones se nutren no sólo de las ciencias sociales y/o humanísticas; sino también de otras ciencias exactas, tal y como veremos, llegándose a conformar un verdadero desarrollo interdisciplinario. Los estudios de la comunicación se nutren así, de otras ciencias y poco a poco, en su devenir, se van permeando de una visión holística en tanto se comprende que el hombre, como objeto y sujeto de la comunicación, es un compendio de lo biológico, lo psicológico y lo social y que un acercamiento a cualquier tipo de actividad humana debe estar abordado desde esta visón global. Todavía hoy una de las discusiones de los teóricos estriba en si otorgar o no categoría de ciencia a estos estudios, es decir, si la comunicación es una disciplina científica como tal, o si es más bien un campo concreto del conocimiento al que se llega a través de otras disciplinas ya consolidadas, y que por tanto pudiera considerársele como una rama de estudios en la que concurren otras ciencias para abordarlo desde las concreciones de cada una de ellas. Lo que sí se puede concluir es que los Estudios de la Comunicación son productos de una reflexión multidisciplinaria, y su riqueza y validez está dada por los variados puntos de vista para abordar su realidad. Los Estudios de la Comunicación, como hemos visto, se al imentan y se apoyan en otras disciplinas consolidadas. Veamos las relaciones más importantes con las ciencias de la época: - Cibernética: esta joven ciencia fue acuñada en 1948 por el matemático estadounidense Norbert Wiener en su libro Cibernética o el control y comunicación en animales y máquinas. Siendo una ciencia interdisciplinar, se ocupa fundamentalmente de los sistemas reguladores, y es aplicable tanto a campos físicos como a los sociales basados en lenguajes. Fue Wiener quien introdujo en la ciencia los conceptos de feed-back o retroalimentación y de cantidad de información, que revolucionaron la teoría de la comunicación. - Matemáticas: fue Claude Shannon (alumno de Norbert Wiener) quien en 1948 publicó en el Bell System Technical Journal (publicación de la entidad donde trabajaba), su conocida "teoría matemática de la información".
Shannon trabajaba en ese entonces en los Laboratorios Bell, una entidad de mucho prestigio que aglutinaba a matemáticos y científicos de primera línea entre los que destaca también Warren Weaver. En su "teoría matemática de la información", Shannon demostró que todas las fuentes de información se pueden medir y que los canales de comunicación tienen una unidad de medida similar. Mostró también que la información se puede transmitir sobre un canal, si, y solamente si, la magnitud de la fuente no excede la capacidad de transmisión del canal que la conduce. Sentó las bases para la supresión de los "ruidos" y "redundancia". Warren Weaver, colaborador de Shannon, dio un nuevo impulso a lo planteado por este al definir tres planos o niveles en los que se superpone el hecho comunicativo: técnico, semántico y de la efectividad. El nivel técnico medirá la capacidad del emisor para enviar el mensaje, el nivel semántico hablará sobre el significado del mensaje transmitido por el emisor y el último nivel medirá la efectividad alcanzada por el mensaje en los destinatarios. Shannon y Weaver conformaron el esquema lineal de comunicación (Fuente/Codificador/Mensaje-Canal/Descodificador/Destino) que aún hoy se usa. - Psicología: la teoría de la comunicación se auxilia en gran medida de la psicología puesto que es esta con cada una de sus cuatro ramas (clínica, educativa, organizacional y social) la que va a pr oporcionarle los conocimientos necesarios para entender la vinculación del hombre con los procesos comunicativos, en tanto objeto y sujeto de la comunicación; y la medida en que en estos procesos se involucran las esferas cognitivas, afectivas y conductuales. - Sociología: una de las ciencias con la que más se entronca la teoría de la comunicación, sobre todo en sus inicios, es, sin dudas, la sociología. Será esta la que le proporcionará la visión y metodología para los estudios de "efectos" o de "impacto social" de los mensajes y la concepción general de las dinámicas establecidas en los grupos humanos así como la interrelación entre las condiciones sociales y la efectividad o no de los procesos comunicacionales. - Lingüística: en tanto que el lenguaje es el denominador más común en los mensajes comunicacionales, las metodologías que estudian su estructura y función han servido de base a los estudios teóricos de la comunicación. - Semiología: el advenimiento de la semiología en la segunda década del siglo XX como ciencia que estudia la vida de los signos y su posterior desarrollo y concreción como campo del saber, ha tenido una extraordinaria incidencia en los estudios de la comunicación. El estudio de los signos y la relación entre significante y significado se traspola a todo acto comunicativo. Charles Pierce, fundador del pragmatismo y de la semiótica moderna, plantea que el instrumento de análisis de toda la realidad es la semiótica puesto que todo puede ser leído como un texto.
- Antropología: esta ciencia aporta a los Estudios de la Comunicación la comprensión de las diferencias culturales entre los grupos humanos y por ende, las diferencias existentes en los procesos comunicacionales desarrollados entre ellos.
Cabe destacar que una de las maneras en que se establecieron estas relaciones entre las distintas ciencias y los estudios de la comunicación conllevó a la apertura de diversos departamentos especializados en estos estudios en muchas Universidades y altos Centros de Estudios e Investigaciones. Otro aspecto a señalar en la conformación de los estudios de la comunicación, está dado por la filiación ontológica de los distintos teóricos que abordan dicho estudio. Es por esto que en muchas construcciones teoréticas resultantes de estos estudios, se percibe la influencia de las distintas corrientes de pensamiento imperantes en la época y que condicionan sus epistemologías en tanto estas corrientes de pensamiento constituyen el marco teórico referencial. Así, muchas teorías estarán permeadas por el nominalismo, el funcionalismo, el mecanicismo, el determinismo, el constructivismo, el estructuralismo u otra; según sea la corriente imperante o la filiación de su creador. Veamos algunas de las más extendidas y que sirvieron de soporte metodológico a muchos de estos teóricos de la comunicación.
1.2.5. Corrientes de pensamiento y posturas epistemológicas que han influido en los estudios de la comunicación
1.2.5.1. Empir ism o
Surgida en la Inglaterra del siglo XVII, esta corriente ha estado presente desde entonces y en una u otra medida, en muchas de las posteriores postulaciones o corrientes vigentes. Aún cuando hoy ya casi superado, su rasgo distintivo es el papel casi totalitario que se le atribuye a la experiencia como fuente u origen del conocimiento. En el campo de los Estudios de la Comunicación, muchos analistas, sobre todo de los "efectos" de los medios en los receptores, evidencian una gran influencia de esta corriente en sus conclusiones. 1.2.5.2. Racio nalism o
Esta corriente, opuesta al empirismo, acentúa el papel de la razón para la construcción del conocimiento otorgándoles a la deducción y a la intuición un peso significativo en este proceso de construcción del conocimiento. Plantean que el poder de la razón no tiene límites y puede alcanzar a todo lo real. 1.2.5.3. Func ion alism o
El funcionalismo es una corriente teórica surgida en Inglaterra hacia 1930 en las ciencias sociales, especialmente en sociología y en la antropología social. Esta corriente se caracteriza por un enfoque empirista que constituye uno de sus antecedentes teóricos. El funcionalismo ha tenido una amplia influencia en los estudios de la comunicación y se ha llegado a asumir como el paradigma de las ciencias o estudios de la comunicación en tanto se identifica ampliamente con la dinámica y los propósitos de los sistemas audiovisuales. El funcionalismo asume las comunicaciones como comunicación social o de masas, por ser la más extendida en la sociedad moderna. La corriente funcionalista se erige en apologética de l a sociedad democrática en tanto plantea que esta es una sociedad en perfecto equilibrio que se mantiene, entre otras cosas, por los "ajustes" que realizan los procesos comunicativos. Los estudios de comunicación basados en la corriente funcionalista proponen una serie de teorías explicativas como la teoría o modelo de la "aguja hipodérmica", la "teoría de los efectos limitados", entre otros. Han sido siempre teorías que tratan de explicar cómo funciona la comunicación social pero sobre todo hacen su mayor énfasis sobre el poder y la influencia de los medios de comunicación en el público. Las teorías de la comunicación basadas en el funcionalismo presuponen que los medios y la comunicación siempre tienen como objetivos obtener un efecto sobre el receptor y convierten a estos efectos en su campo de estudio. 1.2.5.4. Positivi sm o
El Positivismo afirma que el único conocimiento auténtico es aquel que ha surgido de la confirmación y validación positiva de las teorías a través de métodos científicos. Para ello tiene que haber una uniformidad en el método científico independientemente de la diversidad imperante en los objetos o cosas que se estudian. Lo más significativo del positivismo es que sólo admite como válidos aquellas teorías y conocimientos que han podido ser comprobados por la ciencia o que han inducido a "conocimientos científicos" demostrados en la práctica. El desarrollo alcanzado por la ciencia en los últimos tiempos ha permitido la consolidación de esta corriente pues visto de otra m anera, lo que en nuestros
días se acepta como "verdadero", es aquello que ha podido ser comprobado mediante algún proceso positivo. La mayor influencia que ha tenido esta corriente en el campo de los estudios de la comunicación, viene dada por la vertiente conductista en el campo de la psicología y que es justamente la influencia del positivismo en esta ciencia. La psicología conductista surge precisamente de la aplicación de la metodología científica al estudio de la conducta humana. 1.2.5.5. Con duc tism o
Esta es una corriente de pensamiento que conforma a la psicología conductista como ciencia del comportamiento, entendido este como la interacción entre individuos pero en un contexto determinado. Para los conductistas, el contexto es el conjunto de circunstancias en que se produce la acción humana. Los psicólogos que estudian la conducta humana en contexto, le conceden un papel destacado a la interrelación social del ambiente y del individuo como elementos de primer orden donde se conforman y se desarrollan estas conductas. Y es aquí donde muchos teóricos de la comunicación empalman sus análisis con esta rama de la ciencia en tanto a través de ella se pueden estudiar las manifestaciones de determinadas conductas en los individuos, influidos por los medios de comunicación y por los procesos desarrollados en estos. 1.2.5.6. Interaccionismo simbólico
Inscrita dentro de la teoría funcionalista, el interaccionismo simbólico es una corriente de pensamiento relacionada con la psicología social y con la antropología. Su ámbito de inquietudes se concreta en el plano microsocial, en las relaciones del individuo con su entorno más inmediato. Los propulsores de esta corriente de pensamiento son Charles Cooley, Walter Lippmann, Herbert Blumer, George Mead y otros, integrados en la conocida como "Escuela de Chicago". Esta corriente se postula en un contexto en que ya se estudia la opinión pública y los elementos que la conforman y donde la comunicación ha devenido como un hecho social significativo. Se continúa desarrollando hasta el sur gimiento de la semiótica, de la cual toma algunos conceptos. Según el interaccionismo simbólico, y como continuador dialéctico del conductismo, el significado de una conducta se forma en la interacción social y esta interacción transita siempre a través de un proceso comunicativo. El resultado de esta interacción social es un sistema de significados intersubjetivos, un conjunto de símbolos con un determinado significado para los sujetos interactuantes. El contenido del significado no es más que la reacción de los actores ante la acción en cuestión.
Asimismo, el interaccionismo simbólico plantea que la conciencia sobre la existencia propia se forma, al igual que la conciencia sobre otros objetos, en el proceso de la interacción social. Es decir, como derivada de la acción social en que se crea la autoconciencia. La autoconciencia es un resultado, por tanto, de la reacción de los demás ante uno mismo y ante la conducta propia. De ahí que el interaccionismo simbólico plantee que la existencia del "yo" implica la existencia de "otros" como miembros de la interacción y que por tanto, no se estudien las cualidades de un individuo sino es en su relación con los otros. Ahora, de acuerdo con el interaccionismo simbólico, el sujeto no pierde la capacidad de elegir, y al mismo tiempo que es determinado por las experiencias de su interacción social, puede distanciarse de aquellos y de sus propios actos. El término 'interaccionismo simbólico' fue acuñado por Herbert Blumer, quien plantea sus siguientes fundamentos:
Las personas interactúan con su entorno, es decir, con los objetos y con otras personas. Estas interacciones se producen a partir de los significados que los objetos y las personas tienen para ellas. A partir de símbolos. La comunicación es esencial para la constitución del individuo. Los significados obtenidos a través de la comunicación son productos de la acción social. El signo es el objeto que desencadena el significado y el significado, el indicador social que interviene en la construcción de la conducta. Las personas seleccionan, organizan, reproducen y transforman los significados en los procesos interpretativos teniendo en cuenta sus expectativas y propósitos.
1.2.5.7. Con str uct ivis m o
Un poco alejada de las corrientes planteadas anteriormente, se encuentra el constructivismo pero que sin embargo se diseminó ampliamente por distintas teorías epistemológicas en el siglo pasado. Para el pensamiento constructivista, la realidad es hasta cierto punto una invención construida por quien observa esta realidad. Según esta corriente nunca se llegará a conocer la realidad tal cual, ya que cuando se observa al objeto en cuestión lo que se hace es ordenar los datos que este objeto nos ofrece en el marco teórico del que disponemos. Entre otros motivos, su entronque con los estudios de la comunicación está dado por su aceptación del procesamiento de la información, aunque hace la salvedad de que los símbolos empleados en la comunicación son construcciones semióticas (signos y sistemas de significancia) y que tienen relevancia previa como elementos comunicativos pues han estado anteriormente estandarizados.
1.2.5.8. Determin ism o
Esta corriente plantea que todo evento, tanto en el plano físico como en el pensamiento y en las acciones humanas, responde a una causa determinada. Su rasgo más distintivo es su principio de causalidad universal. Y si bien, según los deterministas, el estudio y conocimiento de las causas nos llevará al conocimiento de los fenómenos, esto, aplicado a los estudios de la comunicación, les ha permitido concluir (y en entronque con la psicología conductista) que ante determinadas causas se producirán ciertos fenómenos o conductas. 1.2.5.9. Pos m od ernid ad
Si bien en los últimos años el concepto de posmodernidad se ha ido "acomodando" cada vez más al campo de lo artístico y/o de lo estético, no es menos cierto que en sus orígenes generó todo un pensamiento que atravesó de manera trasversal todas las vertientes del saber, pero sobre todo las del hacer. Surgido en la llamada era de la "crisis de los paradigmas", con la caída del muro de Berlín, el fin de la guerra fría y del mundo bipolar, el movimiento posmoderno, conformado por diversas corrientes, tiene como denominador común el sentimiento del fracaso de los proyectos de renovación que se habían enarbolado en la época moderna y que atañían tanto al arte y la cultura, como al pensamiento y la vida social en general. El pensamiento posmoderno ha tenido y tiene una enorme incidencia en los procesos comunicativos, sobre todo, además, porque coincide con la época en que surgen las nuevas tecnologías de la comunicación y la infor mación, y obviamente, con el proceso de globalización que tiene pr esencia no sólo en el campo económico, sino, y fundamentalmente, en el sociocultural. Es esta la época en que a los medios de comunicación se les denomina el cuarto poder (como elemento que se sumaría a los tres poderes clásicos establecidos desde el período de la ilustración) por la incidencia que tienen en la actividad social y que se demuestra en la generalización del concepto de que lo que no aparece en los medios es como si no existiera. Los medios se vuelven, por tanto, en los vehículos trasmisores de la verdad. Los últimos avances y descubrimientos científicos, sobre todo en lo concerniente a los procesos evolutivos y que hacen referencia a la Biología Molecular, la Neurología, la Etología y otras disciplinas, han abierto un sinnúmero de caminos y nuevas perspectivas acerca de lo cognitivo.
Lo cognitivo se desvela hoy como el tránsito entre el conocimiento conceptual y la praxis general del hombre en su relación con el entorno. El concepto de verdad trasciende lo epistemológico y se adentra en los terrenos sociales y culturales para convertir al conocimiento en un proceso donde los medios de comunicación y los poderes sociales devienen en factores desencadenantes. Lo cognitivo, por tanto, engloba todas las dimensiones del ser humano desdibujando una concepción estrecha y que había sido asumida por la ciencia, que exigía la contrastación de la verdad en los reducidos marcos del empirismo como único garante. Nos pareció oportuno, antes de abordar los Estudios de la Comunicación, y para ubicarnos en su contexto; tratar de ofrecer un mínimo calidoscopio general que mostrara la relación que estos han tenido y tienen con distintas ciencias, así como también el amplio abanico de corrientes de pensamiento imperantes, y que de una u otra forma, han incidido, e inciden, en las distintas teorías que abordan el proceso de la comunicación.