TEMA 24 IDENTIFICACIÓN DE LAS NECESIDADES EDUCATIVAS EDUCATIVAS ESPECIALES DE LOS ALUMNOS CON CO N ALTERACIONES ALTERACIONES DEL LENGUAJE. La elección del presente tema viene dada por la necesidad de fundamentar, de forma consistente, toda toma de decisiones que llevemos a cabo con nuestros alumnos y alumnas. Lógicamente, dicha toma de decisiones tiene que encontrarse fundamentada en una detección de las necesidades que manifiesta el sujeto, necesidades que se basan en una evaluación sistemática, tanto del sujeto como del entorno en el que se desenvuelve. Como mae!"# e$eciali!a en a%&ición ' len(%a)e y si nos basamos en la Orden de 9 de iciembre de !99" y la #esolución de "9 de $bril de !99% que vienen a regular los &quipos de Orientación Orientación &ducativa y 'sicopedagógica y de los epartamentos de Orientación, respectivamente y las funciones de sus miembros, parte de las nuestras se encuentran en la valoración de la comunicación y el lenguaje de nuestros alumnos. (i queremos, por tanto, conocer, las necesidades necesidades que presenta presentann los alumnos alumnos y alumnas alumnas que manifie manifiestan stan alteraciones en el lenguaje, lenguaje, deberemos conocer el contenido de este tema en profundidad.
Pa"a ell# concret concretaremos aremos primero qu) conside consideramos ramos como altera alteraciones ciones del lenguaj lenguaje, e, tanto oral como escrit escritoo, para seguidamente anali*ar el proceso de identificación de las mismas, teniendo siempre en cuenta que las necesidades que presente un estudiante serán individuales y fundamentadas en la evaluación reali*ada al propio alumno o alumna y a su conte+to. 'asamos sin más al desarrollo comentado.
$ntes de comen*ar con el proceso de identificación propiamente dicho, nos parece adecuado concretar a qu) alteraciones nos estamos refiriendo, destacando, al menos someramente, las caractersticas principales de las alteraciones ling-sticas en las que nos vamos a centrar. 'or ello comen*amos el desarrollo de las ALTERACIONES
DEL LENGUAJE ORAL /usto !9901, 2onfort 2onfort y 3uare* "44!1, (ánche* (áin* "4451 y 6allego y 6alla 6allardo rdo !99711, as las con consi sider deramo amoss al alte tera raci cione oness o di difificul culta tades des en la adq adqui uisi sici ción ón o en el des desar arrol rollo lo de dell le lengu nguaj ajee or oral al.. ( u caracterstica com8n es la limitación en el fundamento de los cuatro componentes del lenguaje fon)ticofonológico, semántico, semánti co, morfo morfosintáct sintáctico ico y pragmát pragmático1, ico1, una ve* descartadas patologas auditivas, cognitivas cognitivas y motri motrices ces . entro entro de este grupo nos encontramos con los siguientes:
#etraso simple del lenguaje, o retardo en la evolución madurativa de los diferentes componentes del lenguaje: fon)ticofono fon)ti cofonológico, lógico, morfosintácti morfosintáctico, co, l)+ic l)+icosemán osemántico tico y pragmát pragmático1, ico1, no presentá presentándose ndose alterac alteración ión evident evidentee en las capacidades intelectuales, auditivas o motoras y sin presentar lesión neurológica ;ieto, !99<= /ustos, !9901
>rastornos especficos del lenguaje. (uponen una alteración superior a los dos a?os de diferencia evolutiva en relación con el desarrollo armónico del lenguaje en cualquiera de sus componentes. entro de este tipo de trastornos, el más frecuente es el trastorno fonológicosintáctico, cuyos rasgos son compatibles con la denominada 1
@(A$(@$. La disfasia se considera una perturbación severa o grave de la elaboración del lenguaje, que puede afectar tanto de la e+presión como de la comprensión, repercutiendo en la adecuada organi*ación del lenguaje y en la utili*ación del mismo. 'ara poder hacer un diagnóstico de disfasia se debe haber descartado discapacidad intelectual, auditiva o motora, as como lesiones neurológicas evidentes 2onfort y 3uáre*, !9901.
$fasia. (upone una p)rdida total o parcial de la capacidad de codificar los elementos ling-sticos afasia de /roca1, por lo que se encontrará afectada la e+presión en todos sus componentes= o de la capacidad de decodificar los elementos ling-sticos afasia de Bernice1, por lo que se encontrará afectada la comprensión del lenguaje de los otros. La afasia se encuentra producida por una lesión cerebral adquirida y locali*ada, puede afectar tanto al lenguaje oral como al escrito.
'or otra parte, debemos referirnos a las ALTERACIONES DEL LENGUAJE ESCRITO , pudiendo encontrarse afectados cualquiera de los siguientes procesos psicológicos empleados a la hora de leer y de escribir Didal y 2anjón, "444= Cuetos, #odrgue* y #uano, !99%1:
'rocesos perceptivocognitivos, como por ejemplo la percepción, discriminación y memoria auditivas y visuales percepción figurafondo, memoria auditiva inmediata, discriminación de sonidos similares, etc.1, as como capacidad de atención y movimientos oculares reali*ados al leer, entre otros.
'rocesos motóricos, tanto los relativos a la motricidad gruesa, en cuanto a la organi*ación del espacio, la estructuración del tiempo, esquema corporal en lo relativo al control postural y a las peculiaridades motrices de mano y bra*o1 y lateralidad= como los relativos a la motricidad fina, en cuanto a la sujeción del 8til, la presión sobre el papel y la reali*ación del grafismo.
'rocesos l)+icos, utili*ados para acceder a la palabra escrita, por tanto en estos se encuentran implicadas y pueden encontrarse afectadas tanto en la ruta visual utili*ada para acceder a palabras conocidas de manera directa1 como en la fonológica utili*ada para acceder a palabras largas o palabras desconocidas de manera indirecta1.
'rocesos semánticos, encontrándose afectada la comprensión de lo ledo, bien sea una palabra, una frase o un te+to.
'rocesos sintácticos, pudiendo estar afectada tanto la estructura de la frase escrita como la lectura y utili*ación de los signos de puntuación.
'rocesos de planificación, pudiendo no generar información escrita o no generarla ordenada.
efinidos y desarrollados los puntos esenciales sobre los alumnos con alteraciones en el lenguaje comen*amos el desarrollo de este punto destinado a la IDENTIFICACIÓN DE LAS NECESIDADES DE LOS ALUMNOS que presentan este tipo de alteraciones.
$s, si seguimos la Orden 2inisterial de !E de Aebrero de !99% sobre el proceso de identificación de necesidades y dictamen de escolari*ación de $lumnos con ;ecesidades &ducativas &speciales, entendemos por evaluación 2
psicopedagógica el proceso de recogida, análisis y valoración de la información relevante sobre los distintos elementos que intervienen en el proceso de ense?an*aaprendi*aje que lleva a la identificación de las necesidades educativas especiales de alumnos que presentan o pueden presentar desajustes en su desarrollo personal o acad)mico para fundamentar y concretar las decisiones respecto a la propuesta curricular y sobre los tipos de ayudas que pueden precisar para progresar en el desarrollo de sus capacidades.
$s pues, la identificación de necesidades, tal y como apuntábamos, constituye el primer paso para determinar las necesidades que presentan los alumnos y alumnas, as como las medidas a tomar en su proceso educativo. &sta identificación se va a llevar a cabo a trav)s de la evaluación psicopedagógica. &n consecuencia, esta evaluación será necesaria, no sólo para determinar las necesidades educativas especiales que presente el sujeto en cuestión, sino para poder llevar a cabo cualquier medida e+traordinaria, entre las que cabe destacar: decisiones relativas a su escolari*ación, elaboración de adaptaciones curriculares significativas o determinación de los apoyos.
&sta evaluación psicopedagógica es responsabilidad del especialista en 'edagoga y 'sicologa, pero es competencia del &quipo de Orientación &ducativa y 'sicopedagógica o del epartamento de Orientación, por tanto, si formáramos parte de ellos, nuestra participación deberá ser activa. ;o obstante, todos los profesionales implicados, deberán colaborar en la reali*ación de la misma, por tanto, si como maestros especialistas en $udición y Lenguaje, no formamos parte del &quipo o del epartamento, pero s somos personal de apoyo a la integración dentro del centro educativo, podemos colaborar tambi)n en su reali*ación, especialmente en todo lo concerniente el desarrollo del lenguaje y la comunicación del sujeto, si as lo decide el orientador.
#eali*adas estas consideraciones previas, para poder identificar las necesidades que presenta el sujeto con alteraciones en el lenguaje, debe pasar por un proceso de evaluación individual, en el cual deberán ser anali*a&a
la i(%ien!e +a"ia,le , relativas, tanto al alumno, como al conte+to: entro de las variables relativas al al%mn#, lo primero que debemos concretar es si parte o no de alguna condición de discapacidad, es decir si su alteración ya ha sido detectada o no, por medio de anteriores evaluaciones o si dispone de alg8n certificado de minusvala del Centro /ase correspondiente.
Fna ve* valorado este punto se deberá evaluar su historia acad)mica, su desarrollo, su nivel de competencia curricular y su estilo de aprendi*aje, los cuales pasamos a desarrollar:
(u historia acad)mica, dentro de la cual, se deberá obtener información, entre otros, sobre los siguientes puntos: en qu) centros ha estado escolari*ado, si ha recibido alg8n apoyo, si ha dejado de promocionar alg8n curso, si se le ha reali*ado alguna adaptación curricular, cuál es su curso actual, etc. para ello, bastará con consultar su e+pediente acad)mico. 3
(u desarrollo, dentro del cual, se deberá anali*ar cómo ha sido y es el desarrollo en las diferentes áreas evolutivas. &sta evaluación podrá reali*arse por medio de la administración de test, que iremos destacando= de escalas evolutivas para los más peque?os, como el Curriculum Carolina, el /runetLe*ine, la gua 'ortage o la escala /attelle= de observación directa de la conducta del ni?o o de la observación indirecta, por medio de cuestionarios y entrevistas a padres y profesores. $s pues, las diferentes áreas que es preciso evaluar, son las siguientes:
Desarrollo biológico, en el que, por medio de una anamnesis, se valorarán aspectos como: embara*o y parto, desarrollo evolutivo general cuándo sostuvo la cabe*a, cuando empe*ó a andar, cuándo dijo la primera palabra...1, enfermedades que ha padecido, etc. 'ara evaluar este aspecto, será relevante la figura del pediatra, no obstante, habrá casos en los que sea recomendable derivar al ni?o para un estudio más en profundidad, si se detectara la necesidad a especialistas como el otorrino, el estomatólogo, el oftalmólogo, el neurólogo o el psiquiatra.
&n el caso de encontrarnos ante una alteración en el lenguaje escrito, lo primero que se debe hacer es requerir de un informe del oftalmólogo para ver alguna anomala a este respecto. 'or otro lado, siempre que no encontremos con las alteraciones del lenguaje oral, lo primero que habrá que hacer es descartar discapacidad auditiva antes de concretar que estamos ante una alteración especfica del lenguaje. $s mismo, en el caso de la afasia, el informe del neurólogo será imprescindible para anali*ar el área da?ada y sus posibles consecuencias.
Desarrollo cognitivo, en el que se valorarán aspectos como el cociente intelectual del ni?o por medio de la escala Beschler, concretamente para &ducación 'rimaria se administrara el Bisc1, la memoria por medio del >est @llinois de $ptitudes 'sicoling-sticas, del 2$@ o del >O2$L1 y la atención por medio del test de las C$#$( o del >'1.
'ara poder concretar que un ni?o presenta alteraciones especficas del lenguaje, será necesario descartar primero que )stas vengan dadas por una posible discapacidad intelectual, ya que siempre que hay discapacidad intelectual, el lenguaje del sujeto se encuentra en el mismo nivel que presenta su edad mental, por lo que este punto es de vital importancia en los casos que nos ocupan. $simismo este tipo de problemática suele llevar asociadas dificultades en la atención y en la memoria, que interfieren en el propio desarrollo de los diferentes componentes ling-sticos, especialmente semántico y morfosintáctico.
Desarrollo motor , dentro del cual, habrá que valorar: capacidades motrices coordinación y equilibrio1, capacidades perceptivomotrices espacio, tiempo y esquema corporal1 y habilidades y destre*as caminar, saltar, correr...1. La prueba más completa para evaluar este desarrollo, es el 2(C$ 2cCarthy, aunque pasados los ocho a?os se puede hacer por medio de una observación sistemática del ni?o o de la ni?a, en situaciones habituales de juego.
4
&n los casos que presenten alteraciones en el lenguaje, será importante valorar este aspecto para comprobar si sólo se encuentra afectado el desarrollo ling-stico o si hay un retraso madurativo más generali*ado.
Desarrollo socio-afectivo, en el cual se valorarán aspectos como la autonoma del ni?o, su autoestima y autoconcepto, cómo establece las relaciones con los otros, si es refle+ivo o impulsivo, cuáles son los procesos de identificación que desarrolla, si e+isten conductas agresivas o e+cesivamente egostas más allá de la edad que le corresponde, etc.
$simismo, ante alteraciones del lenguaje, tanto oral como escrito, será preciso observar en qu) medida )stas están influyendo en el desarrollo personal y social del ni?o y hasta qu) punto le están limitando en este terreno, si es consciente de su problema y le averg-en*a hablar en p8blico, si se bloquea ente determinadas personas, etc.
Desarrollo comunicativo-lingüístico oral , que, en nuestro caso, es el que tiene una mayor relevancia, ya que
nosotros podemos tomar un papel activo. entro de esta área se deben valorar los siguientes aspectos:
a.
/ases anatómicas y funcionales, entre las que destacamos:
/ases auditivas, valorando la percepción si se vuelve al or un ruido, si busca el origen del mismo1, la discriminación de ruidos o sonidos similares, de palabras con el mismo final o inicioG1 y memoria auditiva.
/ases respiratorias, evaluando aspectos como el modo respiratorio en reposo si es nasal o bucal1, el tipo de respiración en reposo y hablando si es clavicular, torácica, abdominal o diafragmática, siendo esta 8ltima la adecuada1, conducta respiratoria si hay alg8n gesto asociado a la respiración como levantar los hombros, sacar la lengua o e+cesiva tonicidad en el cuello, entre otras1, coordinación fonorespiratoria e intensidad y direccionalidad del soplo por medio de velas, molinillos, carreras de bolas de papelG1
/ases articulatorias. &n las que e+ploraremos de los órganos y las pra+ias. &n relación con los órganos de la articulación, deberemos comprobar si se observa alguna alteración, como frenillo, macro o microglosia, etc. y si la tonicidad muscular de labios, lengua y mejillas es la adecuada.
&sta e+ploración resulta básica para las alteraciones que nos ocupan ya que los órganos bucofonatorios son los responsables de la articulación de los sonidos y de los mecanismos espontáneos para la producción del habla. $s, los labios, la lengua y los dientes son fáciles de observar, mientras que la mandbula, el paladar y la fosa nasal presentan una mayor dificultad en el análisis funcional. 'or ello, ante cualquier sospecha o detección de una alteración en estos órganos es imprescindible que lo derivemos a especialistas, m)dico estomatólogo o ma+ilofacial. La e+ploración de estos órganos se reali*ará a trav)s de la observación con el fin de detectar posibles alteraciones en los distintos órganos bucofonatorios. 'or otro lado, a trav)s de las pra+ias bucofaciales observamos la habilidad motri* del habla para ejecutar y articular movimientos aprendidos con los labios, lengua y gestos faciales que están ordenados secuencialmente y dirigidos con el propósito de producir fonemas y palabras. 'ara llevar a cabo la e+ploración es necesario observar los movimientos que reali*a el ni?o o la ni?a, tanto en la 5
producción espontánea como en la imitativa, as como en la emisión de los distintos fonemas, con el fin de determinar la soltura y la firme*a de los movimientos necesarios para la producción de la palabra. &sto se debe acompa?ar con determinados actividades que impliquen el movimiento de los distintos órganos bucofonatorios necesarios para la producción de la palabra, como por ejemplo: abrir y cerrar la boca, morro y sonrisa, sacar y meter la lengua, lengua a un lado y a otro, arriba y abajo, relamerse los labios, etc. Las bases auditivas serán especialmente relevantes en los casos que nos ocupan, ya que en los retrasos y trastornos del lenguaje es preciso incidir en la maduración de los componentes auditivos del sujeto en cuestión el @>'$ ofrece una información bastante precisa al respecto1.
,.
Componentes del lenguaje, para ver el grado de afectación de cada uno, especialmente si nos encontramos ante un trastorno especfico o ante una afasia. &stos son:
Aon)tico y fonológico, en sus aspectos segmentales articulación de los diferentes fonemas en posición inicial, media y final, en sinfones y en trabadas y por medio del lenguaje espontáneo, imitado e inducido1 y suprasegmentales ritmo, velocidad, fluide*, entonación1. (e puede valorar por medio del registro fonológico inducido y de una muestra de habla espontánea. (erá importante valorar aspectos como la inteligibilidad de su habla, si e+isten procesos de simplificación fonológica, que procesos reali*a cuando un fonema no le sale omitir, sustituir, distorsionarG1
(emántico, en cuanto al vocabulario que conoce y el que utili*a 2orfosintáctico, en cuanto a como estructura las palabras femeninoasculino, singularplurar y fle+iones verbales1 y las frases tipos de oraciones simples, compuestas, complejas y estructuras de las mismas sujeto, verbo complementos1
'ragmático, en cuanto a los usos y funciones del lenguaje.
'ara estos tres 8ltimos, se precisará de una muestra espontánea del lenguaje del ni?o, as como de la administración de pruebas como la escala #eynell de desarrollo del lenguaje de los cero a los cuatro a?os1, la 'rueba de Lenguaje Oral de ;avarra de los cuatro a los seis1 o la /atera de Lenguaje Objetivo y Criterial de los seis a?os en adelante1.
Desarrollo comunicativo-lingüístico escrito. &n cuanto al desarrollo de su lectoescritura deberemos valorar, por medio de pruebas como el >$L&, '#OL&C eval8a los procesos lectores entre !H y EH de 'rimaria1, '#OL&C(& de 7H en adelante1 y '#O&(C eval8a los procesos escritores a partir de
desarrollo morfosintáctico afectará a los procesos sintácticos y de planificación. 'or tanto siempre, tanto en alteraciones en el lenguaje oral como en el escrito, se deberán evaluar los siguientes procesos:
2otores: si sujeta bien el 8til, el control corporal al escribir, la lateralidad, la organi*ación del espacio en el papel, etc.
'erceptivocognitivos: percepción, discriminación y memoria auditiva y visual, por medio del @>'$, movimientos oculares, percepción figura fondo, etc.
'rocesador l)+ico: si utili*a la ruta visual o la fonológica , en función de si comete errores en palabras conocidas o desconocidas, en homófonos o en slabas aisladas.
'roceso semántico, si comprende lo que lee, si es capa* de e+traer el significado de palabras y te+tos y si es capa* de integrar ese significado en su conocimiento.
'roceso sintáctico, si ordena adecuadamente las frases al escribir y si lee y escribe adecuadamente los signos de puntuación
'roceso de planificación si genera información y si la genera ordenada1
'or tanto, ante la e+istencia de una alteración del lenguaje oral, deberemos reali*ar, primeramente una revisión m)dica que descarte alg8n tipo de problema auditivo, que sea la causante de dicha alteración. $simismo será conveniente una revisión neurológica que concrete alguna lesión cerebral que lleve al diagnóstico de la afasia. eberemos tambi)n descartar un cociente intelectual bajo, ya que entonces no podramos hablar de trastorno del lenguaje sino de una alteración ling-stica ligada a la discapacidad intelectual. #eali*ado las valoraciones m)dicas pertinentes en función de la gravedad del caso1 deberemos reali*ar un &ia(nó!ic# &i-e"encial entre las alteraciones que as lo requieran. &ste diagnóstico diferencial no es fácil de establecer antes de los % a?os. &l diagnóstico supone por lo tanto: un e+amen m)dico, neurológico, auditivo= un e+amen del lenguaje= entrevista familiar para determinar antecedentes y desarrollo evolutivo= observación y registro del propio lenguaje del ni?o y administración de pruebas estandari*adas, todo para determinar el nivel ling-stico del ni?o y detectar otros problemas que puedan encontrarse asociados o, incluso, que sean la causa del mermado desarrollo ling-stico.
;o obstante, ante un retraso severo del lenguaje y un trastorno leve, muchas veces deberemos esperar a ver cómo evoluciona el ni?o, antes de reali*ar un diagnóstico concreto de la alteración que presenta.
'or su parte, una ve* diagnosticada la afasia, por parte del neurólogo, será imprescindible anali*ar aspectos como los siguientes 'e?a Casanova, !99"1: el nivel de lenguaje anterior a la lesión el lenguaje espontáneo, para ver si es fluido o no, tanto en conversación como en descripción de láminas= la repetición de slabas, palabras y frases= la denominación de objetos y dibujos= la comprensión de órdenes de dificulta creciente, as como de designación de objetos, imágenes y partes del cuerpo= la lectura comprensiva y mecánica y la escritura, en lo que a copia, dictado y espontánea se refiere con slabas, palabras, pseudopalabras y párrafos. $qu es importante destacar el test de /oston, 7
especfico para afasias y que anali*a los siguientes apartados: habla espontánea, repetida, denominación, comprensión oral y escrita, lectura y escritura, apra+ias y problemas visoespaciales. Iabrá que valuar tambi)n su Ni+el &e C#m$e!encia C%""ic%la" es decir los objetivos y contenidos que alcan*a y los que no respecto a las diferentes áreas curriculares, cuáles supera y con cuáles tiene dificultades, y cuáles son )stas. (erá, por tanto, función básica del maestro de aula, en cada una de las áreas, y tomará como referencia la 'rogramación de $ula, si se trata de una primera evaluación, o la propia adaptación curricular del ni?o, si se trata de una evaluación al finali*ar la etapa. &l 8ltimo punto a anali*ar del alumno es su E!il# &e A$"en&i*a)e . entro de este, se deberá responder a tres interrogantes: cómo aprende qu) estrategias utili*a, cómo recoge y procesa la información, cuánto tiempo es capa* de permanecer centrado en la tarea, en qu) condiciones aprende mejor y con qu) ayudas, etc.1, cómo se relaciona con el profesor, con sus compa?eros, con otros ni?os, etc.1 y la actitud que tiene ante el aprendi*aje en qu) situaciones está más a gusto y trabaja mejor, qu) tareas le gustan más y cuáles hace con mayor seguridad, cuáles son las recompensas o resultados que más le animan, etc.1 . &sto deberá evaluarse por medio de las actividades de clase, observándolo directa o indirectamente.
Como ya adelantábamos, la información que se recoja no va a ser sólo del ni?o, se deberá recoger tambi)n información sobre el c#n!e/!# en el que se desenvuelve, ya que las necesidades derivadas de esta evaluación pueden deberse tanto a las caractersticas del alumno como a las del conte+to. 'or tanto, dentro del conte+to, podemos valorar información de los siguientes 0por medio de entrevistas y cuestionarios, principalmente1:
C#n!e/!# -amilia" , dentro del cual, habrá que obtener información de los siguientes aspectos: caractersticas de la familia n8mero de hermanos, lugar que el alumno ocupa entre ellos, qui)n se encarga de su cuidado, nivel sociocultural y económico, etc.1, coordinación y cauces de comunicación de la familia con el centro escolar, estimulación que le ofrecen al ni?o y actitudes que presentan ante la dificultad de su hijo sobreprotección, recha*o o aceptación1.
C#n!e/!# #cial , dentro del cual, habrá que valorar: los grupos de referencia que tiene el ni?o si los tuviera1 y las ventajas e inconvenientes del conte+to, como recursos y medios gabinetes, instituciones como O;C&, $;&, A@$'$(, etc.1, disponibilidad o no de espacios naturales, etc.
C#n!e/!# ec#la" , dentro del cual se deberá anali*ar la respuesta que se está dando o que se puede dar desde el centro, el ciclo, el nivel y la propia aula, en cuanto a recursos materiales y humanos, accesos, organi*ación, metodologa, etc. en este aspecto, tambi)n podremos utili*ar el análisis de los diferentes documentos e+istentes en el centro. 8
Fna ve* reali*ada la evaluación psicopedagógica que contemple todos los aspectos anali*ados se pasará a la eterminación de las necesidades educativas especiales más frecuentes. &n este sentido queremos concretar que los resultados obtenidos del proceso de recogida de información, una ve* anali*ados y valorados, se recogerán en un @nforme 'sicopedagógico: documento sntesis que recoge la situación personal y acad)mica del alumno en el momento de la reali*ación de la evaluación y que no presuponen ninguna evolución futura, pero que nos permitirán determinar si presenta o no necesidades educativas especiales y tomar las decisiones oportunas relativas al ajuste de la respuesta educativa que necesita. ichas decisiones requerirán un seguimiento del proceso de ense?an*a aprendi*aje para introducir y modificar los aspectos que se consideren necesarios a lo largo de la intervención educativa propuesta. &ste informe será elaborado por la persona que ocupe la pla*a de 'edagoga y 'sicologa, que haya sido la que haya coordinado todo el proceso.
&n definitiva, el proceso de evaluación psicopedagógica, lleva implcito un proceso de identificación de necesidades. Consideramos, siguiendo las definiciones del Centro ;acional de #ecursos para la &ducación &special !99!1, de 2archesi y 2artn !9941 y de Calvo y 2artne* "44"1 que un alumno presenta necesidades educativas especiales si, por cualquier causa, presenta mayores dificultades que el resto de los alumnos para acceder a los aprendi*ajes que se determinan en el currculo establecido para su edad y precisa, para compensar dichas dificultades una ayuda más especfica que el resto de sus compa?eros, una ve* agotados todos los recursos ordinarios.
$simismo, en la normativa legal vigente, se establece tambi)n la e+istencia de alumnos y alumnas con necesidades educativas temporales y permanentes, por tanto los alumnos protagonistas del presente tema podran encontrarse incluidos dentro de las temporales, por ejemplo en el caso del retraso del lenguaje o de las permanentes, en el caso de la disfasia, precisando, por tanto de recursos y medidas diferentes a lo largo de la escolaridad. Concretamente, la LO& en su ttulo @@, concreta que los alumnos que presenten condiciones personales, en este caso vinculadas con el lenguaje, se contemplarán como alumnos con necesidades especficas de apoyo educativo y la LO2C& establece una sección de alumnado con dificultades de aprendi*aje donde podran incluirse alguna de las alteraciones desarrolladas a lo largo del tema.
Fna ve* desarrollados los aspectos básicos relativos a los alumnos con alteraciones en el lenguaje, as como el proceso de identificación de, tal y como e+iga el epgrafe, queremos finali*ar la e+posición destacando la importancia que un buen proceso de evaluación tiene a la hora de ofertar una respuesta de calidad ajustada a las necesidades individuales de nuestros alumnos, tal y como contempla la Ley Orgánica "J"44% de < de 2ayo de educación y de la Ley Orgánica 0J"4!< de 9 de iciembre para la 2ejora de la Calidad &ducativa LO2C&1. Lógicamente, si queremos ofertar individuali*ación de la ense?an*a, deberemos tener claras cuáles son las necesidades que los problemas de nuestros alumnos pueden generar, no interesando tanto el problema como tal,
9
sino las necesidades generadas por el mismo. &sto nos llevará a intervenciones fundamentadas e individuali*adas que apoyen la integración y la calidad de la educación ofertada en nuestras escuelas.
'ara el desarrollo de este tema, hemos utili*ado las siguientes referencias normativas y bibliográficas:
GALLARDO J.R. ' GALLEGO J.L .!99<1. 2anual de Logopedia &scolar. Fn enfoque práctico. 2álaga: $ljibe. GOROSPE J.M .!9951: Daloración de la deficiencia y la discapacidad en los trastornos del lenguaje, el habla y la vo*. 2adrid: @2((O.
MALDONADO A y cols !99"1. #etraso en la lectura: evaluación y tratamiento educativo. 2adrid: @CC&.
NAR0ONA J. 1 CEVRIE3MULLER C !9951.: &l lenguaje del ni?o. esarrollo normal, evaluación y trastornos. /arcelona: 2$((O;.
ORDEN MINISTERIAL DE 4 DE FE0RERO DE 556 por la que se regula el procedimiento para la reali*ación de la evaluación psicopedagógica y el dictamen de escolari*ación y se establecen los criterios para la escolari*ación de los alumnos con necesidades educativas especiales
PU1UELO M. RONDAL J. ' 7IIG E. "4441. &valuación del Lenguaje. /arcelona: 2asson.
10