2.1.3.: SUBORDINADAS PROPIAS: Desempeñan la función propia de los adverbios (tiempo, lugar y modo) y complementos preposicionales en función circunstancial (causa y finalidad). A: DE TIEMPO: “cuando”, “mientras”, “después de que”, “antes de que”, etc. “Llamaré cuando llegue”. ¿Cuándo? -Entonces, cuando llegue. B: DE MODO: “como”, “según”, “de forma que”, “de la manera que”, etc. -”Hazlo como creas conveniente”. ¿Cómo? -Así, como creas conveniente. C: DE LUGAR: “donde”, “adonde”, “por donde”, “desde donde”, “doquiera que”, etc. -”Vamos donde estuvimos la última vez”. ¿Dónde? -Allí, donde estuvimos.
2.2. SUBORDINADAS ADVERBIALES IMPROPIAS: No desempeñan ninguna función sintáctica en la estructura de su oración principal, pero la necesitan para tener sentido.
D: CAUSA: “porque”, “ya que”, “puesto que”, “supuesto que”, “como” (antepuesto), “pues”, “en vista de que”, “visto que”, “a causa de que”, etc. -”No puedo ir al viaje porque no tengo tiempo”: ¿Por qué? -Por eso, porque no tengo dinero). E: FINALIDAD: “para que”, “a (fin de) que”, etc. -”Te envió a Londres para que estudiaras inglés”: ¿Para qué? -Para eso, para estudiar inglés). 2.2.1.: COMPARATIVAS: Comparan dos elementos en una relación de superioridad, igualdad o inferioridad (los elementos comunes a ambas oraciones, se omiten en la subordinada:
A: SUPERIORIDAD: “más… que…”: “Ella es más alta que tú (eres alto)”. B: IGUALDAD: “tan… como…”: “Ella es tan alta como tú (eres alto)”. C: INFERIORIDAD: “menos… que…”: “Ella es menos alta que tú”. 2.2.2.: CONSECUTIVAS: La segunda oración expresa la consecuencia de la intensidad de la acción expresada en la principal. La diferencia con las coordinadas ilativas está en el matiz de intensidad que requiere la presencia de una partícula intensiva: “tal… que…”, “tanto que”, “de tal manera que”, etc.: “Comí tanto que tuve que vomitar”. 2.2.3.: CONDICIONALES: La oración subordinada expresa una condición considerada necesaria para el cumplimiento de lo dicho en la principal: “si” (“ Si me llamas, voy”), “a condición de que”, “como” (“Como sigas llorando, me voy”), “cuando” (“Cuando el río suena, agua lleva”), “en el supuesto de que”, “en el caso de que”, “siempre que”, “de + infinitivo” (“ De saberlo, lo hubiera contestado”), “construcción de gerundio” (“Estudiando los tres temas, aprobaréis”), “construcción de participio” (“Acorralado, se te enfrentará”), etc. 2.2.4: CONCESIVAS: La oración subordinada expresa un impedimento para el cumplimiento de lo dicho en la principal que no logra anular ni impedir la acción: “aunque” (“Saldré aunque llueva”), “a pesar de que” (“Suspendió a pesar de que hizo un buen examen”), “aun cuando” (“ Aun cuando insistas, no lo conseguirás”), “cuando” (“Me traicionaron cuando (a pesar de que) me debían la vida”), “si bien” (“ Si bien (aun cuando, aunque) estaba tranquilo, le temblaba la voz”), etc. TAMBIÉN: verbo reiterado (“Diga lo que diga“, “haga lo que haga”, “vaya donde vaya, nunca seré feliz”), “aun + gerundio” (“Aun sabiéndolo, no respondió”), con + infinitivo (“Con mentir , no lograrás nada”), “por… que” (“ Por mal que vayan las cosas, siempre hay un rayo de sol”), etc.