Sentido del gusto En el ser humano uno de los receptores que perciben las sustancias químicas del medio externo son las papilas gustativas, localizadas principalmente en la lengua. Las sustancias químicas pueden actuar como estímulos y provocar respuestas en el organismo. Estos estímulos son captados por órganos específicos que generan señales nerviosas las cuales son conducidas hasta los centros nerviosos donde son transformados en sensaciones. El gusto actúa por contacto de sustancias químicas solubles con la lengua. El principal órgano del gusto es la lengua. Esta constituída por músculos que le permiten realizar variados movimientos, y recubierta por una mucosa. La lengua como quimiorreceptor es un órgano musculoso, fijo por su base al piso de la boca y con la punta libre, puede realizar varios movimientos y es humedecida constantemente por la saliva. La cara superior de la lengua aloja unos receptores, que se presentan como pequeñas estructuras abultadas llamadas papilas gustativas. Las Papilas Gustativas: constituyen las unidades gustativas y están situadas en la mucosa y cada una consta de un grupo de células sensitivas en forma de barril conectadas a las neuronas. Las papilas son formaciones epiteliales compuestas por células receptoras o botones gustativos, sensibles a las sustancias químicas disueltas en la saliva secretadas por las glándulas salivales. Por su forma las papilas se clasifican en caliciformes, fungiformes, coroliformes y foliadas. Las coroliformes en forma de corola de numerosos picos, son táctiles y térmicas, mientras que las caliciformes y fungiformes, poseen forma de cáliz y de hongo, respectivamente, y albergan los botones gustativos que tienen forma de botella y emergen de la membrana vítrea, ubicada debajo de la mucosa. El cuello del botón aparece en la superficie libre de mucosa por un orificio del que surgen las papilas gustativas. En torno a los botones gustativos existen ramificaciones de los nervios glosofaringeo y lingual; transmite los estímulos, que así llegan a la médula. En un adulto pueden llegar a haber 9.000 botones gustativos distribuidos principalmente en la punta, los lados y la base de la lengua. Las papilas se especializan en cuatro sensaciones o gustos básicos: DULCE, ÁCIDO, SALADO y AMARGO. La punta es muy sensible a las sustancias dulces y saladas; los lados, a las ácidas, y el sector posterior a las amargas. La sensación del sabor es producida por distintos grados de combinaciones de las impresiones o efectos básicos. El ser humano es capaz de percibir un abanico amplio de sabores como respuesta a la combinación de varios estímulos, entre ellos textura, temperatura, olor y gusto.
Las principales son las papilas caliciformes que son las mas grandes y menos numerosas situadas en la parte posterior cerca de la base de la lengua formando una “V lingual”, las fungiformes tiene forma de hongo, se encuentran en la cara dorsal de la lengua especialmente en los bordes y en la punta, su color rojizo es debido a la multitud de vasos sanguíneos, son algo visibles, que mediante unos órganos microscópicos denominados botones perciben los sabores ácidos, dulces y salados; y las papilas filiformes que tienen forma de pequeñas agujas y están repartidas en toda la superficie de la lengua dispuestas en series paralelas y coraliformes, que son sensibles al tacto y a las temperaturas. Considerando de forma aislada. El sentido del gusto sólo percibe cuatro sabores básicos: dulce, salado, ácido y amargo; cada uno de ellos es detectado por un tipo especial de papilas gustativas. Las casi 10.000 papilas gustativas que tiene el ser humano están distribuidas de forma desigual en la cara superior de la lengua, donde forman manchas sensibles a clases determinadas de compuestos químicos que inducen las sensaciones del gusto. Por lo general, las papilas sensibles a los sabores dulce y salado se concentran en la punta de la lengua, las sensibles al agrio ocupan los lados y las sensibles al amargo están en la parte posterior. Los compuestos químicos de los alimentos se disuelven en la humedad de la boca y penetran en las papilas gustativas a través de los poros de la superficie de la lengua, donde entran en contacto con células sensoriales. Luego de una exposición prolongada a determinado sabor, las papilas gustativas se saturan, y dejan de mandar información, por lo cual, al cabo de un tiempo determinado se deja de percibir el sabor.
MINISTERIO DE EDUCACIÓN SUBSECRETARÍA SUBSECRETARÍA DE EDUCACIÓN COORD. DE DESARROLLO Y EVALUACION CURRICULAR