RESUMEN: “LAS PEDAGOGÍAS PSICOLÓGICAS Y EL GOBIERNO DEL YO EN TIEMPOS NEOLIBERALES” Tomaz Tadeu da Silva: es profesor del Programa de Posgrado en Educación de la Universidad Federal de Río Grande do Sul. Pertenece al Consejo Editorial de las revistas Curriculum Studies; Journal of Education Policy; Discourse; y Heuresis. Es autor de los libros O que produz e o que reproduz em educaçao (Artes Médicas); identidades terminais (Vozes); Escuela, conocimiento y currículo (Miño y Dávila); y Cultura, política y curriculum (con michael Apple y Pablo Gentili; Losada). Coordinó los siguientes libros: Teoria educacional crítica em tempos pós-modernos (Artes Médicas); Alienígenas na sala de aula (Vozes); O sujeito da educaçao (Vozes); Libertades reguladas (Vozes); Neoliberalismo, qualidade total e educaçao (con Pablo Gentili; Vozes); Currículo, cultura e sociedade (con Antonio Flavio Moreira; Cortez); Escola S.A.(con Pablo Gentili; CNTE); Territorios contestados (con Antonio Flavio Moreira; Vozes). LAS PEDAGOGÍAS PSI Y EL GOBIERNO DEL YO EN NUESTROS REGÍMENES NEOLIBERALES: Las pedagogías psi parecen dominar la teoría y la práctica educativa actual. Las reformas educativas y curriculares actuales adoptan el constructivismo como orientación principal. El nuevo profesor de las reformas educativas es una criatura psi. Una característica sorprendente de las pedagogías psi es su indiferencia política, se adaptan fácilmente a regímenes políticos diversos. De acuerdo con la perspectiva de Foucault sobre el neoliberalismo, analizándolo más como una cuestión de gubernamentalidad que de respuesta al capitalismo a problemas económicos, se comprenden las congruencias entre las tecnologías de la subjetividad que se proclaman libertarias y los regímenes políticos orientados por ideologías de derecha, como el neoliberalismo. Desde esta perspectiva, las tecnologías de la subjetividad no son opuestas al dominio estatal, sino la condición misma de gubernamentalidad del Estado. Por tanto, no es paradójico afirmar que más autonomía significa más gobierno.
En este sentido, el énfasis pasa del Estado, hacia las polimorfas estrategias de control de las conductas, dispersas en los intersticios de la vida social. De acuerdo con lo anterior, las perspectivas anteriores de opresión, dominación o exclusión, son insuficientes para analizar las formas de poder actuales. Es necesario incorporar en el análisis las prácticas de autoregulación o autogobierno. Las pedagogías psi se inscriben en una supuesta oposición entre estructuras de poder y conciencias oprimidas que pueden ser liberadas mediante estas prácticas emancipatorias. Mientras tanto, las perspectivas postestructuralistas afirman la inexistencia de una subjetividad original o esencial, exterior a procesos sociales, la subjetividad en una invención del poder. Retoma a Walkerdine para afirmar que el niño constructivista no existe más allá de las prácticas discursivas que lo han constituido como tal. Prácticas como las fichas de observación, los diseños arquitectónicos, las evaluaciones, etc. Esta naturaleza construida conlleva relaciones de poder, materializadas en prácticas de normalización, no solo del niño, sino también de la maestra. Las ciencias humanas y las disciplinas psi no pueden ser estudiadas desde la perspectiva de su progreso lineal, sino desde sus vínculos con las relaciones de poder. Multiplicación en la sociedad contemporánea de expertos en la administración de la conducta. La centralidad del constructivismo sirve para desacreditar otras formas de regulación. ¿Es el constructivismo la última narrativa maestra en la educación? LA DECONSTRUCCIÓN DEL CONSTRUCTIVISMO PEDAGÓGICO El constructivismo pedagógico como ola hegemónica en las discusiones educativas. Propósito del texto: Analizar las condiciones sociales del predominio del constructivismo y crítica realizada desde afuera de sus presupuestos.
Predominio en el sector de vanguardia de la práctica educativa de análisis de factores políticos y macrosociológicos. Se plantea la descripción de la situación actual como una deformación de lo que debería ser una verdadera educación. No se evidencia una tentativa más sistemática para desarrollar una teoría positiva y prescriptiva sobre lo que podría ser la educación. Doble promesa del constructivismo:
Teoría educativa progresista que satisface criterios políticos de personas de izquierda.
Orientación relativamente clara para la práctica pedagógica, teniendo como base una teoría del aprendizaje y del desarrollo humano con sustento científico.
Planteamiento del autor: el predominio del constructivismo constituye una regresión conservadora, aunque los constructivistas no sean conservadores, la constitución social del constructivismo tiene efectos conservadores. Argumentos: El predominio del constructivismo representa un regreso a la hegemonía de la psicología en la educación. El saber psicológico ha proporcionado instrumentos de justificación científica para la dirección del comportamiento humano desde sus fines de regulación y control. La psicología se encuadra en el objetivo de conocer mejor para controlar mejor, para producir subjetividades e identidades. La historia de la educación de masas se caracteriza por un esfuerzo de regulación y control de
la
población
considerada
como
potencialmente
peligrosa
superdotados?
Neurodiversidad? Déficit de atención dispersa? Exámenes de Estado? Al mismo tiempo, la psicología proporcionó la información pero desconectó esta labor de su significado político. Por lo tanto, el predominio de la psicología en la reflexión educativa implicó la despolitización de la educación. Hablar de factores sociales en psicología no resuelve la despolitización, porque se sigue buscando la explicación de los comportamientos individuales, aunque condicionados socialmente. El énfasis es en el comportamiento.
El constructivismo no aísla la educación institucionalizada de su aparato social y político. Ejemplo de esto, la idea de democracia en la educación, se asume que educar a los niños en el constructivismo implica su inclinación por las relaciones democráticas, sin considerar los aspectos políticos y económicos más generales. Inicialmente, la psicología cognitiva no tuvo pretensiones de establecerse como una teoría general de la educación, pero desde su único referente posible, el comportamiento individual. Ejemplo, explicaciones sobre el analfabetismo, asociándolo a un problema de adquisición, de índole individual, y asilando los componentes sociales y políticos asociados al fenómeno. La solución al problema pasa por la escuela exclusivamente, por el uso de determinados métodos. Otra consecuencia del constructivismo es la naturalización y biologización del conocimiento, sin tener en cuenta las funciones sociales y políticas de la educación institucionalizada. Esto implica por lo menos 1) desconocer la influencia de lo social y lo político en los procesos de aprendizaje y 2) desconocer las funciones sociales y políticas de la escuela, más allá de la enseñanza de conceptos. La infancia y el desarrollo no son categorías naturales, sino construcciones sociales e históricas. Es necesario ampliar la perspectiva de la psicología constructivista, complementándola con las formas y los mecanismos que se utilizan para enseñar, como representaciones sociales y políticas. El constructivismo pedagógico pretende estar más vinculado con la liberación y la democratización que con el control y el poder. Sin embargo, lo que puede afirmarse es la diferencia en la visibilidad de las relaciones de poder, no su inexistencia. Las pedagogías invisibles, al enfatizar en la exposición de la intimidad del sujeto, controlan de manera más invisible, pero más eficaz.
El constructivismo también restringe el concepto de epistemología, ya que lo reduce a la génesis de las estructuras mentales individuales, aunque se consideren las influencias del medio o de la historia personal. Mientras para Foucault, la epistemología no solo es conocimiento dentro del hombre sino sobre el hombre, construido social e históricamente. Esto implica una reducción en el conocimiento, ya que conocer no es solamente aprender conceptos, sino que es un acto social y político, con determinados intereses y usos. La solución no sería complementar el constructivismo, sino cuestionar globalmente su representación sobre el aprendizaje y el conocimiento. ¿Qué responsabilidades sociales otorga el constructivismo a los profesores y a las familias? A los profesores, conocer el proceso de cada estudiante, para ajustarse a él. A las familias, acompañar el proceso de cada estudiante, y las familias de clases trabajadoras? Las pedagogías invisibles implican tiempos imprevisibles y ritmos lentos. Por ello se limitan a los niveles primarios de la escolarización. Se tiende a retornar a las pedagogías visibles en los niveles secundarios. Las pedagogías invisibles exigen una vida escolar larga, ¿los estudiantes de clases trabajadoras se encontrarían en desventaja? Convicción constructivista de que, sin importar las condiciones materiales, la pobreza se resuelve con la educación. Analizar constructivismo como práctica discursiva que tiene efectos en la construcción de subjetividades. ¿Qué dice el constructivismo sobre el currículo? ¿cómo se selecciona lo que debe enseñarse en la escuela? EL TRIUNFO DE LAS PEDAGOGÍAS PSICOLÓGICAS Julia Varela: Doctora en Ciencias de la Educación por la Universidad Complutense y en Sociología por la Universidad de París VIII-Vincennes. En la actualidad es Catedrática de Sociología en el Departamento de Sociología VI de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. Ha impartido cursos y conferencias
en numerosas universidades españolas y extranjeras. Y es autora de varios libros entre los cuales están los siguientes:
Modos de educación en la España de la Contrarreforma (1984), El aprendiz de maestro(1984) (en colaboración con Félix Ortega), Las redes de la psicología (1986), Sujetos frágiles (1989), Arqueología de la escuela (1991) y La galaxia sociológica. Colegios invisibles y relaciones de poder en el proceso de institucionalización de la sociología en España (2000) (en colaboración con Fernando Alvarez-Uría), Nacimiento de la mujer burguesa (1997) (traducida al francés en L´Harmattan, París, 2000), Sociología e información (2002),A Ulfe. Socioloxía de unha comunidade rural galega
(2004), Y
Materiales de sociología del arte (2008) (en colaboración con Fernando Álvarez-Uría) En el último tercio del siglo XIX se impuso en Europa la teoría de la degeneración, defendida por Morel, así como la Ley Biogenética Fundamental de Haeckel que también aceptó Spencer en sus Principios de Pedagogía. A su vez, los conflictos escolares con los niños de las clases populares no fueron explicados como desajustes generados por la misma institución, sino por la mala índole de los alumnos. En la medida en que la adaptación se convierte en función general (medida) de la inteligencia, los escolares conflictivos o retrasados fueron sometidos a observación y medida, convirtiéndose en materia prima de los test mentales. Las técnicas psicométricas permitían determinar las diferencias individuales e incluso detectar a los niños que se encontraban en la frontera entre debilidad mental y normalidad. Las pedagogías psicológicas comienzan aplicándose en los años setenta en España en los colegios de minorías selectas, ¿qué efectos tiene su masificación? Las pedagogías psicológicas promueven el juego, la actividad del alumno y la personalización. La acción educativa debe estar orientada a satisfacer los presuntos intereses, a desarrollar su espontaneidad y creatividad, a respetar su ritmo de desarrollo evolutivo.
LA RENTABLEFICCIÓN DEL “NIÑO NATURAL” La verdadera identidad del niño se define a través de códigos psicológicos que creen saber lo que en realidad son los niños y los adolescentes y lo que debe hacerse para educarlos bien. Por ejemplo, la significatividad de los contenidos dependería de su adaptación al nivel específico de desarrollo y a la organización y la secuencia como son transmitidos. Se relega a un segundo plano la función del conocimiento como instrumento para comprender la realidad. De allí el énfasis actual en las destrezas cognitivas frente a los saberes mismos, el énfasis en el cómo enseñar más que en el qué enseñar. La idea del niño natural es una construcción histórica, en este caso vinculada con los jesuitas y con Rousseau, sin embargo, se ignora su condición contingente. Por ejemplo, las representaciones de las madres de lo que son sus niños (y de lo que necesitan) influyen en las formas de educar. Las imágenes de la infancia dependen de las condiciones objetivas, pero también de las reglas en las que se pretende educar a los niños. Las pedagogías psicológicas, por tanto, no son neutrales, sino que parten de una representación particular del niño, así como de lo que debe ser el profesor. Los profesores dejan de ser una autoridad de saber, y se convierten en profesionales polivalentes, flexibles y adaptables en función de las exigencias de las pedagogías psicológicas. Se requiere ser animador pedagógico, orientador del alumno y su familia, con un control menos visible y más difuso, y una vigilancia dulce pero inexorable, para conducirlos al autogobierno, entendido como la interiorización y psicologización extremas. La identidad profesional de los profesores ya no estará vinculada a su formación académica, sino a su capacidad de asimilar las nuevas teorías y prácticas pedagógicas en un proceso constante. Los estudiantes sometidos a estas pedagogías psicológicas se convierten en gente con mucho yo, cada vez más individualizados, infantilizados y cada vez menos autónomos. Apáticos frente a lo que les rodea e interesados en su riqueza interior (como recurso para competir). Los que no se ajustan a esta normalidad, terminarían siendo tratados por especialistas (déficit de atención dispersa? Neurodiversidad? Antipsicología) ¿A QUIÉN FAVORECEN ESTAS PEDAGOGÍAS?
¿Las pedagogías psicológicas podrían efectuar una discriminación positiva para los estudiantes de clases populares? Según Bernstein, entre más se alejen las expectativas despertadas por los nuevos saberes de la realidad de las clases, más se actuará la diferencia entre los resultados de unos y otros grupos. La liberación personal, la diversidad frente a la jerarquización, la expresividad, están ligadas a determinados grupos sociales, son útiles para los herederos con poco capital económico y mucho simbólico que aspiran a escalar en la sociedad. Las nuevas clases medias, que implican una reconfiguración de las familias, con roles más flexibles. Establecen un perfil como el único adecuado y logran beneficiarse de su acceso. (Competencias laborales?) LA INFANCIA EN EL MUNDO POST-MODERNO: LA PSICOLOGÍA DE DESARROLLO Y LA PREPARACIÓN DE LOS FUTUROS CIUDADANOS Valerie Walkerdine: Profesora de la Universidad de Cardiff, Reino Unido, es autora de numerosos libros y artículos sobre la infancia, entre ellos Schoolgirl fiction (Ficciones de alumnas), y Daddy´s Girl: Young girls and popular culture (La hija de papá: Las niñas y la cultura popular). Propósito del texto: Reflexionar sobre los niños y la infancia en un mundo postmoderno, para desprenderse del universalismo y comprender los procesos específicos a través de los cuales los niños se configuran como sujetos en un tiempo y un lugar determinado. La psicología evolutiva como una de las grandes metanarraciones de la ciencia. Sitúa la racionalidad como parámetro global de evaluación y validación. Propone examinar la subjetividad como una construcción que es resultado de unas prácticas específicas, desarrolladas en un contexto particular. Todo el mundo piensa de determinada manera, configura procesos de racionalización, de acuerdo con intereses y necesidades concretas. Pero se ha encumbrado una representación particular de la razón como la única válida y se ha equiparado con la posibilidad de la libertad y la democracia.