Reseña del libro
L ucha de clases clases en en Br asi asi l (1960-2010). (1960-2010).
De Severo Salles.
Las renovadas expectativas depositadas en el desarrollo económico y social de los países latinoamericanos dentro de los marcos del capitalismo, parecen haberse reavivado en los últimos años, a la luz de las diversas experiencias de gobiernos que, desde inicios del siglo XXI, intentan romper con el legado neoliberal impuesto a rajatabla durante las últimas dos décadas del siglo pasado. Asimismo, luego de alrededor de una década de iniciadas dichas experiencias a las que puede caracterizarse, no sin contrapuntos, de progresistas, reinstalan en el debate político sus límites evidentes y contradicciones que parecen reclamar, para su comprensión, el rescate de los marcos de referencia teórica más clásicos del pensamiento de izquierda. En esta coyuntura intenta intervenir Severo Salles con Lucha con Lucha de clases en Brasil (1960-2010), planteándose sintetizar en un relato condensado en algo más de 150 páginas, cinco décadas de luchas de luchas sociales en un país convertido, al calor de estos tiempos, en la economía emergente más importante de Latinoamérica. Con esta empresa el autor se propone llegar a un público amplio que va de militantes políticos a investigadores sociales, basándose en una indagación que repone la centralidad de los conceptos clásicos de la teoría mar xista, xista, analizando “la base material de la oposición y de las luchas entre las clases fundamentales”, desde donde resaltar las restricciones estructurales a que está sujeto cualquier proyecto político emancipador que no no centre su programa en la destrucción del capitalismo. Así, Salles arriba a una mirada pesimista sobre el Brasil actual, desde la que concluye estar asistiendo a la fantasía de una alianza “de los más ricos con los más pobres”, siendo ésta el resultado político de una derrota consumada por la clase dominante a lo largo de los cincuenta años en los que centra su estudio. Con este propósito el autor organiza la obra en cuatro secciones, dedicando a la primera dos capítulos: uno referido a la formación de las clases sociales en Brasil y el segundo a la experiencia “populista” de Joao Goulart. En la segunda sección se analizan los 21 años de la dictadura militar divididos en cinco capítulos en los que se atienden las coyunturas particulares generadas por la aplicación de un programa de “modernización conservadora” por parte de la clase dominante, sus s us efectos sociales y los picos de violencia represiva desatadas por el estado. En la tercera sección Salles Sal les describe la l a experiencia del retorno democrático en el marco de la avanzada neoliberal, en tres capítulos, cada uno dedicado a los períodos de
gobierno que, con sus particularidades, fueron jalonando el proceso. Finalmente en la cuarta sección, de un único capítulo dedicado al gobierno del Partido de los Trabajadores, el autor parece llegar al objetivo, insinuado durante varios tramos de las secciones anteriores, de intervenir críticamente en la coyuntura de Brasil de hoy. El cuerpo central de la obra está precedido por una breve presentación, un siempre útil índice de siglas utilizadas, una introducción donde el autor define y explica las opciones teóricas y políticas desde las que encara su estudio y un breve texto explicativo acerca de los criterios empleados para la periodización y el ordenamiento final del texto. La obra se cierra con una “Nota fin al” a modo de conclusión, un anexo dedicado puntualmente a analizar de manera muy resumida la experiencia del Movimiento de los Sin Tierra y un detalle de la bibliografía de referencia utilizada para la realización de la obra. De lectura rápida y ágil, creemos que Lucha de clases en Brasil, contrariamente a lo advertido por Salles en la introducción, es un material apropiado para quienes intenten realizar una primera aproximación crítica a la historia política brasileña, desde el post varguismo hasta la actualidad. Fundamentalmente porque la obra se basa en un relato compacto y coherente acerca de las dificultades de las diferentes fracciones de la burguesía en saltar la valla que diferencia a una clase dominante de una clase hegemónica. En este sentido, el eje de la obra se concentra en el despliegue táctico y estratégico de la burguesía brasileña, siempre orientada a aplicar reformas sobre la estructura social y económica del país, con el fin de generar el marco óptimo para la acumulación de capital. De tal forma, Salles examina el andamiaje institucional y sus formas coyunturales dado por la directriz burguesa, su quiebre por la excepción, la aplicación de diversas formas de violencia política, efectiva o en grado de latencia y, finalmente, la salida democrática en los 80´, siendo todas estas instancias, momentos particulares de la correlación de fuerzas entre las clases sociales fundamentales. Sin embargo nos parece necesario resaltar algunas debilidades evidentes de la obra, principalmente fundadas en el notable desfase entre el producto final y los propósitos enunciados por el autor en la parte introductoria, conclusiva e, incluso, en el propio título. En primer lugar, creemos que el libro, más que dar cuenta de la lucha de clases en Brasil, es ante todo una historia de la dominación burguesa en dicho país. A lo largo de las secciones y capítulos, Salles detalla ampliamente las alternativas implicadas en cada coyuntura política, poniendo especial atención en la en las respuesta que desde el estado impartieron los sectores dirigentes. Mientras esto sucede, la acción de las clases subalternas es apenas mencionada, y más como complemento al eje central del libro que como objeto de análisis.
Así, sabemos que una vez instalada la dictadura en 1964, esta enfrentó su primer gran desafío hacia 1968 con una gran movilización de estudiantes que fue reprimida, y una creciente organización de la clase obrera en “comisiones de fábrica electas por la base” con un auge de participación en huelgas, pero el autor no dice mucho más. Sabemos que tales sucesos derivaron en el “Estado del desaparecimiento” como respuesta violenta de las clases dominantes hacia 1970. Pero el autor casi no menciona cuales fueron los hechos que empujaron a esos estudiantes a las calles, ni cuál era la composición social de éstos. Tampoco nos dice en que ramas de la industria se registra el incremento de actividad sindical o huelguística, como tampoco se hace referencia a su distribución geográfica. Quizás si, Salles pone más atención en el nuevo sindicalismo surgido al calor de las luchas sociales de fines de los 70´, como también en los “movimientos de acción directa” que cobran importancia durante esa década, pero tales experiencias aparecen apenas conectadas con la declinación de la dictadura y la posterior salida democrática. Por el contrario, estos sucesos son presentados como hechos funcionales a una “burguesía seudoliberal” que asume la dirección de la oposición política. También resulta llamativa la casi absoluta ausencia de análisis referidos al rol de los partidos de izquierda en las cinco décadas estudiadas, salvo algunas líneas dedicadas al PCB y PC do B que de ninguna manera agotan la problemática. Sólo el PT es analizado con alguna atención con el fin de recalcar las conclusiones del libro. Estas desatenciones no serían tan graves si el propio autor no advirtiera en la introducción, que su obra “privilegia el papel de los de abajo”, ya que dicha mención plantea asumir el acervo teórico de una metodología específica, para dar voz a quienes no parecen, a priori, implicados en los grandes procesos históricos. i Contrariamente, presenta a las clases subalternas como actores casi pasivos, interviniendo apenas, mediante chispazos, ante una realidad que los excede, producto de una todo el tiempo insinuada falsa conciencia que los aparta de su misión histórica: la destrucción del capitalismo. Es en este marco que, fenómenos tales como el rol de la iglesia a través de las comunidades cristianas de base son invisibilizados y, por ende, problematizados, más allá de existir estudios completos sobre el tema.ii Más preocupado por exponer a Lula como “hombre del gran capital” , cuestión que al no problematizarse se acerca más al consignismo panfletario que a una apreciación crítica, que por entregar una herramienta de estudio, si no científico, al menos militante, Salles pierde la oportunidad de presentar su obra como lo que es: un breviario de la dominación burguesa en Brasil. Sólo en esta clave puede detectarse algún aporte de este libro al debate político actual.
Notas:
i
Gilly, Adolfo., Historia a contrapelo, México, Era, 2006, pp. 88. Lowi, Michael., “El cristianismo liberacionista en América Latina”, en Gerra de dioses. Religión y política en América Latina. Buenos Aires, Siglo XXI, 1999. ii