REFRANES, FRASES HECHAS, LOCUCIONES1 Y DICHOS INTERPRETADOS
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A buen entendedor pocas palabras: La persona capaz y de buen entendimiento comprende fácilmente lo que
se quiere decir. // La persona inteligente, comprende comprende rápido lo que se quiere decir. A buen entendedor, breve hablador: Refrán que advierte que el sujeto capaz y de buen entendimiento comprende fácilmente lo que se le quiere decir. // La persona inteligente, comprende rápido lo que se quiere decir. A buena hambre no hay pan duro: Cuando la necesidad apremia cualquier cosa es buena. // Cuando se está necesitado de algo, algo, la más sencilla ayuda debe debe ser siempre bienvenida. A buena hambre no hay pan duro, ni falta salsa a ninguno: Se da a entender que cuando aprieta la necesidad no se repara en delicadezas. A caballo regalado no hay que mirarle el diente: Las cosas que nada cuestan pueden admitirse sin inconveniente, aunque tengan tengan algún defecto o falta. // Si algo no cuesta, no se tienen pretensiones. A cada chancho (puerco) le llega su San Martín: No hay persona a quien no le llegue la hora de rendir sus cuentas. A Dios rogando y con el mazo dando: El hombre debe de poner de su parte cuanto es posible, sin esperar que Dios haga milagros. // Debemos hacer de nuestra parte cuanto es posible para el logro de nuestros deseos sin esperar milagros. A donde te quieren mucho no vayas a menudo: Las asiduas visitas causan cansancio y antipatía. A falta de pan, buenas son tortas: Cuando falta de algo, se valora lo que puede reemplazarlo. A grandes males, grandes remedios: Se debe oponer ánimo esforzado y remedios heroicos a las grandes desgracias. // Se debe poner ánimo, esfuerzo y remedios heroicos a las grandes desgracias. A la buena de Dios: Sin pensar. De forma inconsciente. Sin considerar los pros y los contras. Dejando la resolución y el destino en las manos de Dios y de su bondad. A la ocasión la pintan calva: Alude a la posibilidad inminente de alcanzar un logro y que por ninguna causa puede desperdiciarse la oportunidad. A la vejez viruelas: Significa que alguien que no ha hecho algo en su tiempo, cuando era joven, lo hace a destiempo, cuando no es época ni momento para ello. A lo hecho, pecho: Refrán que enseña que hay que afrontar las cosas con fuerza y valentía. // Enfrentar las consecuencias de lo que se ha hecho. A mal tiempo, buena cara: Aconseja recibir con relativa tranquilidad y entereza las contrariedades y reveces de la fortuna. // Cuando las circunstancias parecieran estar en contra de uno, no hay que rendirse, sino poner
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Gram. Grupo de palabras que forman sentido. || Gram. Combinación fija de varios vocablos que funciona como una determinada clase de palabras.
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optimismo, tomar las debidas precauciones, y avanzar hacia adelante. // Hay que saber sobrellevar los problemas de la vida. A marchas forzadas: Ir muy deprisa y tratando de recuperar el tiempo perdido. A menos bultos, más claridad: Se dice irónicamente para restar importancia a la persona que se retira de alguna reunión. A otro perro con ese hueso: La expresión se usa como una forma de desanimar a quien quiere hacernos creer una mentira o bien nos ofrece algo cuya calidad es inferior, invitándolo a que lo intente con otra persona. // Se emplea para rechazar al que propone algo incómodo o desagradable, o cuenta algo que no debe creerse. A ojo de buen cubero: Significa que algo se hace sin un plan preestablecido, calculando aproximadamente o sin medir. A ojos cerrados: Queremos dar a entender que hacemos algo sin mirar o sin pensar, normalmente porque tenemos confianza en los resultados de dicha acción, porque conocemos el asunto del que se habla, o tenemos confianza en una persona o en la calidad de un producto. A ojos vistas: Claramente. A otro perro con ese hueso: Se emplea para rechazar al que propone algo incómodo o desagradable, o cuenta algo que no debe creerse. // Indica la incredulidad ante una aparente falsedad o engaño. A palabras necias, oídos sordos: No se debe prestar atención a tonterías y simplezas. // No hay que hacer caso del que habla sin razón o a quien dice impertinencias. A palo seco: Sin adornos o sin complementos. A pan duro, diente agudo: Debe ponerse actividad y diligencia para concluir las cosas arduas y dificultosas. // Para superar las dificultades, es necesario esforzarse. A quien finge ser tonto ni Dios lo quiere: Quien se finge ser ignorante en busca de algún beneficio, sus actos lo delatan, obteniendo solamente el desprecio de los demás. A quien lo quiere celeste, que le cueste: Señala que el que quiere algo difícil tendrá que trabajar para ganarlo. A quien madruga, Dios le ayuda: Para tener éxito, hay que trabajar y ser activo. // Muchas veces, el éxito depende de la rapidez. A raja tabla: Con rigor. Con dureza; respetando al máximo las leyes o las costumbres. De forma recta, sin salirse de la línea. A regañadientes: Cuando alguien cumple algún mandato de manera forzada, sin ganas y protestando. A renglón seguido: Inmediatamente después. A río revuelto, ganancia de pescadores: Hace referencia a los que medran aprovechando las revueltas y trastornos. la experiencia demuestra que los pescadores cogen mucho más pescado en el agua turbia que en la clara, tal vez porque cuando el agua está turbia los peces no ven los peligros que corren y caen más fácilmente en ellos. A rey muerto, rey puesto: Muy pronto se ocupan los puestos vacantes. // Nadie es indispensable en ningún trabajo o posición. Cuando un puesto o lugar queda vacante, sobra quien lo llegue a ocupar. A rienda suelta: Hacerlo sin control, de manera espontánea y sin atenerse a reglas o normas de comportamiento. A secas: Naturalmente. Sin más explicaciones. Sin calificativos ni intensificadores. La expresión suele utilizarse detrás de un adjetivo: La película es divertida, pero tampoco divertidísima. Divertida a secas. A su tiempo maduran las brevas: Hay que tener paciencia para lograr algo. A tal señor, tal honor: A cada cual se le debe tratar según su condición. A todas luces: Desde todos los puntos de vista. Según todas las opiniones. A tontas y a locas: Sin reflexionar. Sin control. De forma desordenada. A troche y moche2: De forma incontrolada. Si ningún sentido. Sin medida: El profesor repartió suspensos a
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Trochemoche o troche y moche. (De trocear y mochar). A troche y moche. locución. Adverbial coloquial. Disparatada e inconsideradamente.
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troche y moche.
41. Al cabo de cien años todos seremos calvos: Pues para esas fechas estaremos muertos. 42. Al fin y al cabo: Resignación, aceptación de un hecho. 43. Al pan, pan, y al vino, vino: Decir las cosas claramente, sin tapujos ni disimulos. // A las cosas hay que 44. 45. 46.
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llamarlas por su nombre, es decir, hay que proceder con franqueza. Al perro flaco no le faltan pulgas: Al pobre, mísero y olvidado suelen afligirlo todas las adversidades. // Al abatido y caído se le juntan todos los males. Al que de ajeno se viste, en la calle lo desnudan: Quien se atribuye prendas o cosas que no son suyas, se expone a verse despojado de ellas. Acabar (terminar) como el rosario de la aurora: Finalizar una reunión de forma desordenada, tumultuosa o violenta. El rosario de la aurora es una antigua tradición que consiste en reunirse en las primeras horas del día para rezar el rosario. Antiguamente, una vez finalizado el rezo, cuando los fieles se retiraban a sus casas, solían salir a flote las divergencias de tipo político, social o profesional y se organizaban auténticas batallas campales, que comenzaban rompiendo los faroles para evitar que su luz delatase a los alborotadores. Abril, aguas mil: Es normal que llueva mucho en este mes. Agua pasada no mueve molino: Se deben desechar las cosas ocurridas en el pasado que ya no tienen valor. Agua que no has de beber, déjala correr: Es preferible no intervenir en cosas que no atañen a uno. Aguantar carros y carretas: Soportar momentos difíciles. Ahí le aprieta el zapato: Cuando se descubre el punto por el que alguien es más débil, por el que demuestra menos seguridad, o cuando se da con aquello que más le molesta. Ahogarse en un vaso de agua: Tener problemas o no saber cómo reaccionar en una situación que no es complicada. Ahuecar el ala: Marcharse. Abandonar un lugar. En sentido literal sería algo así como hacer un hueco al ala, o sea, desplegarla. Amor con amor se paga: La correspondencia debe ser proporcional a la obligación. Andar con un ojo (cien ojos): Comportarse con precaución extrema, mirando a todas partes por las que puedan venir los peligros. Andar con pies de plomo: Tener cuidado, de actuar con precaución. Andar de cabeza (de coronilla): Actuar de forma desordenada o acelerada, lo que normalmente es debido al exceso de actividad, a una actividad que provoca tal descontrol que la cabeza parece intercambiar su posición con los pies. Andar pisando huevos: Caminar lentamente, o mejor, con una lentitud desesperante. Andarse por las ramas: Divagar. Perderse en explicaciones que no vienen al caso. Antes que te cases, mira lo haces: Deben meditarse los asuntos graves, antes de meterse en ellos. Apretar a alguien las clavijas: Ajustar a alguien las cuentas. Aquí hay gato encerrado: Existe una razón oculta o secreta que no se nos quiere desvelar: Armarse la de Dios es Cristo o armarse la gorga, la de San Quintín, un zafarrancho: Organizarse un gran escándalo, riña o pelea. // Producirse un alboroto o revuelta de grandes proporciones. Arrieros somos y en el camino nos encontramos: Advertencia de venganza. Arrimarse al sol, que más calienta: Buscar el propio provecho acercándose a personas prestigiosas o con poder. Así se cuenta (se escribe) la Historia: Se utiliza esta frase cuando queremos dejar claro que alguien ha dicho algo absolutamente incierto que ha sido tomado, o que podría ser tomado por cierto. Atar cabos: Relacionar entre sí varias pistas o diferentes ideas sueltas. Atar los perros con longaniza: Se emplea especialmente para contestar irónicamente a quien habla de las bondades extremas o del gran beneficio de alguna acción o de algún lugar. Aunque la mona se vista de seda, mona se queda: Por más que se intente, es imposible disimular ciertos atributos negativos. ¡Averígüelo Vargas!: Se utiliza la expresión para dar a entender la suprema dificultad de averiguar, de conocer
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la explicación o los motivos de algo. Don francisco de Vargas era un personaje muy famoso en la corte de los Reyes Católicos. El tal Vargas era el encargado de enterarse e informar a la reina Isabel de todo lo que sucedía en la corte y de las quejas o pretensiones de los cortesanos. La frase, incluso, llegó a figurar como fórmula hecha en los decretos reales. cuando se encargaba a don Francisco alguna misión. 71. Barriga llena, corazón contento: Nos indica de que cuando se han llenado las necesidades faltantes, el espíritu se tranquiliza. 72. Belleza aparente solo es figura, bien sólidas son virtud y cordura: Muchas veces lo que exteriormente aparenta ser bello, interiormente no lo es. En cambio la virtud y la cordura, aunque exteriormente puede que no aparenten belleza, siempre brillan por su grandeza. 73. Boca cerrada y ojo abierto, no hizo jamás un desconcierto: Es preferible observar antes de actuar, para no cometer errores. 74. Boda y mortaja, del cielo bajan: Los acontecimientos felices y los desgraciados dependen del designio de la Providencia. 75. Buscar tres pies al gato: Buscar o ver complicaciones donde no las hay. 76. Cabra por viña, cual la madre, tal la hija: Refrán que denota que los hijos tienen por lo común el genio y costumbres de sus padres. 77. Cada acción, tiene su reacción: Todo está determinado, nada escapa e le ley de acción y reacción. 78. Cada asno, con su tamaño: Según este dicho, cada uno debe juntarse con personas de su misma categoría. 79. Cada loco con su tema: Cada quien hace lo que le gusta de acuerdo a sus intereses. 80. Cada sendero, tiene su atolladero: Siempre habrán dificultades al enfrentar nuevos proyectos. 81. Cada uno sabe dónde le aprieta el zapato: Sólo uno mismo sabe qué es lo que le conviene. 82. Cada uno tiene su modo de matar pulgas: Señala la variedad de formas y modos propios de una persona para pensar y obrar. 83. Caérsele (a alguien) el alma a los pies: Sufrir una desilusión o desengaño considerable. 84. Cantar las cuarenta (a alguien): Decide con resolución y desenfado lo que se piensa aun cuando le moleste. 85. Caras vemos corazones no sabemos: Que no podemos juzgar a alguien por su aspecto, porque no se sabe lo hay en su corazón. 86. Casa con dos puertas mala es de guardar: A más de su sentido recto, aplícase por extensión a los asuntos que presentan varios aspectos. 87. Coger el toro por lo cuernos: Afrontar un asunto difícil con valor y decisión. 88. Como Pedro por su casa: Dícese de la persona que se mueve con desenvoltura en un lugar que no le es propio. 89. Con la vara que mides serás medido: Trata a los demás como te gustaría que te tratasen. // Denota que según tratemos a los demás así nos tratarán. // Frase tomada del Evangelio y denota que según tratemos a los demás así nos trataran. 90. Con paciencia el cielo se gana: Según este refrán, todo es posible con paciencia. 91. Consejo es de sabios, perdonar injurias y olvidar agravios: Aconseja ser tolerante y generoso. 92. Contigo, pan y cebolla: Si estás con la persona amada, no importa el poder adquisitivo. 93. Cortar por lo sano: Poner fin tajantemente con un acto de energía a una situación que causa disgusto. 94. Corriente y moliente: Sin nada extraordinario o notable. 95. Costar (algo) un ojo de la cara: Salir algo muy caro en dinero. 96. Cría cuervos y te sacarán los ojos: Los beneficios hechos a ingratos les sirven de armas para pagar el bien con el mal. // Explica que los beneficios hechos a ingratos les sirven de armas para pagar el bien con el mal. 97. Cuando el río suena, piedras trae: La murmuración tiene siempre algún fundamento, lo cual muchas veces no es cierto. // Los indicios o los rumores sobre algo suelen tener fundamento. 98. Cuando el sol sale, para todos sale: Hay muchos bienes y ocasiones de que disfrutan todos. 99. Cuando hay hambre, no hay pan duro: La necesidad obliga a valorar las cosas mínimas. 100. Cuando las barbas de tu vecino veas pelar, echa las tuyas a remojar: Conviene ser precavido ante lo que se ve venir. 4
101. Cuando menos se piensa, salta la liebre: Las cosas suceden inesperadamente cuando. uno menos lo
imagina.
102. Cuando una puerta se cierra, ciento se abren: Tras una situación desdichada, suele venir otra feliz y
favorable.
103. Dar cuerda a alguien: Otorgarle mayor libertad a una persona, al igual que cuando a un animal atado se le
alarga la cuerda que lo retiene para que pueda moverse una mayor distancia, sin necesidad de abandonar el lugar. 104. Dar de lado (a alguien): Apartarse del trato o compañía de alguien, no hacer le caso, rehuirlo. 105. Dar calabazas (a alguien): Rechazar un requerimiento amoroso. // Suspender en un examen. 106. Dar carta blanca (a alguien): Autorizarle para obrar en un asunto según su propio criterio. 107. Dar en el clavo: Acertar, atinar. 108. Dar gato por liebre: Engañar haciendo pasar una cosa por otra mejor. 109. Dar la cara: Responder uno de sus propios actos. 110. Dar la lata: Fastidiar o molestar con cosas o acciones inoportunas. 111. Dar vuelta la página: Soslayar, olvidar algo, pasar a otro tema, como cuando alguien realmente da vuelta a la página de un libro y deja atrás lo leído. 112. Dar rienda suelta a algo: Dar libre curso a alguna manifestación, estado de ánimo, etc. 113. Darles margaritas a los chanchos: Frase bíblica (Evangelio de San Mateo, VII, 6) que significa desperdiciar cosas buenas en personas que no lo merecen. En realidad, ha habido un error de traducción del latín al castellano, ya que la palabra original es «margaron», que equivale a «perla» (de ahí, «margarina», por el color), de manera que la expresión real es darles perlas a los chanchos, que indudablemente, sería un desperdicio mayor que si les diésemos simplemente margaritas. 114. De altos vuelos: Dicho de una obra, empresa o proyecto, de mucha importancia o muy ambicioso. 115. De armas tomar: Decidido o atrevido, tanto para acometer empresas como para no dejarse atropellar por otros. 116. De baja estofa: De mala calidad, despreciable. 117. De cabo a rabo: Completamente, desde el principio hasta el fin. 118. De enero a enero, la plata es del banquero: Frase de advertencia para el apostador en cualquier juego, a través de la cual se asegura que, al cabo de los doce meses de un año, la ganancia será siempre para la banca, aunque algún apostador afortunado pueda -circunstancialmente- obtener alguna ganancia. 119. De escasas luces: Se dice de la persona poco inteligente. 120. De gustos no hay nada escrito: Cada cual puede tener lícitamente sus gustos, por no ser posible discernir los buenos de los malos. 121. Dejado de la mano de Dios: Desgraciado, abandonado a su suerte. 122. De la vieja guardia: Tradicionalista, aferrado a ideas desfasadas. 123. De mala fe: Con mala intención o con engaño. 124. De mala muerte: Pobre o de escasa entidad o valor. // Aplicado a cosas, de poca categoría. 125. De noche todos los gatos son pardos: En la oscuridad o en la confusión es difícil distinguir una cosa de otra. 126. De nuevo cuño: Creado o aparecido recientemente. 127. De padre y señor mío: Muy grande o extraordinario en su género. 128. De punta en blanco: Vestido de etiqueta o con el mayor esmero. 129. De rompe y rasga: Se dice de la persona de ánimo resuelto y a la que no detienen reparos. 130. De tal palo, tal astilla: Generalmente, como son los padres son los hijos. // Toda acción, obra o producción trae dentro de sí la huella clara del actor, creador o productor. 131. De todo hay en la viña del Señor: En el mundo hay personas y cosas buenas y malas. 132. Defender a capa y espada: Defender con todas las fuerzas y por un motivo justo. 133. Dejar con un palmo de narices: Sorprender a alguien, chasquearlo, privándolo de algo que esperaba conseguir. 134. Del agua mansa me libre Dios, que de la brava me libro yo: Las personas de genio apacible y manso al parecer, cuando llegan a enojarse suelen ser las más impetuosas y terribles. 5
135. Del árbol caído todos hacen leña: Todos procuran sacar utilidad de la desgracia de aquel a quien ha sido
contraria la suerte.
136. Del dicho al hecho hay gran trecho: No se debe confiar enteramente en las promesas, pues suele ser mucho
menos lo que se cumple que lo que se ofrece. // Entre lo previsto o prometido y lo realizado suele haber una gran diferencia. 137. Del uso nace el abuso. El exceso de confianza lleva a la falta de respeto. 138. Desgraciado en el juego, afortunado en amores: Frase que suele decirse para consuelo o con ironía a la persona que pierde en el juego. // Refrán popular que pretende consolar a alguien que pierde un juego. 139. Dime con quién andas y te diré quién eres: Las buenas o malas compañías influyen mucho en las costumbres. // Por lo general los humanos tendemos a ser semejantes a quienes más nos asociamos. 140. Dios aprieta, pero no ahoga: En las situaciones más difíciles siempre podrá encontrarse una solución. // Por muy difícil que sea una situación, nunca debe flaquear la esperanza. 141. Dios castiga sin palo y sin rebenque3: A todos llega la justicia divina. 142. Dios me libre de mis amigos, que de mis enemigos me libro yo: Es más fácil librarse del mal que se hace abiertamente que de aquel que se hace a escondidas. 143. Donde fueres, haz como vieres: Cada uno debe acomodarse a los usos y estilos del país donde se halla. 144. Donde las dan, las toman: Al que hace daño o mal, se suele corresponder de la misma manera. // Los que hablan mal de los demás pueden esperar que también se hable mal de ellos. // Si das algo espera tu recompensa. 145. Donde menos se piensa, salta la liebre: Cuando menos esperas una cosa, puede suceder. // A veces, cuando menos se espera, ocurren las cosas. 146. Dormirse en los laureles: Abandonarse o cesar en un esfuerzo después de haber conseguido un éxito. 147. Echar las campanas al vuelo: Dar publicidad a una noticia jubilosa. 148. Echar leña al fuego: Avivar la gravedad, intensidad, etc., de algo. 149. Echar una mano (a alguien): Prestar ayuda a alguien. 150. Hecha la ley, hecha la trampa: Muchas leyes causan desconfianza por la facilidad de incumplirlas. 151. Hecho y derecho: Dicho de personas, cabal. // Dicho de cosas, que se han ejecutado cumplidamente. 152. El bobo, si es callado, por sesión es sesudo: En ocasiones es prudente callar en vez de hablar sin saber. 153. El mal cobrador hace mal pagador: Hay que cuidar a sus propios intereses para progresar y para ganar el respeto de los demás. 154. El mejor escribano echa un borrón: Todos podemos cometer errores. 155. El gato maullador, nunca buen cazador: Dícese del que habla mucho y obra poco. 156. El hábito no hace al monje: EI exterior de una persona no siempre corresponde a su naturaleza interior. // Por más que uno se esfuerce en dar la apariencia de algo que no se es, nunca se llegará a serlo realmente. 157. El hombre y el oso, cuanto más feo más hermoso: La belleza es en el hombre una cualidad secundaria, importando más otras condiciones. 158. El hombre propone y Dios, dispone: EI logro de las determinaciones humanas depende sólo de la voluntad de Dios. 159. El lobo cambia el pelo, pero no las mañas: Los malos aunque crezcan en edad, no suelen mudar de genio. 160. El muerto al hoyo y el vivo al bollo: A pesar de la muerte de los allegados, la vida ha de seguir. Úsase también para censurar a los que olvidan demasiado pronto a los difuntos. 161. El ojo del amo engorda el caballo: Nadie cuida mejor las cosas que su propietario. 162. El ojo del amo engorda el ganado: Conviene que cada uno cuide de sus bienes. // Conviene que cada uno cuide y vigile su empresa o comercio. 163. El perezoso y el mezquino andan dos o más veces el camino: El perezoso y el mezquino siempre hacen mal las cosas en su primer intento, por lo que tienen que repetir una y otra vez lo que piensan hacer. 3
m. Látigo de cuero o cáñamo embreado, con el cual se castigaba a los galeotes. || 2. Mar. Cuerda o cabo cortos. || 3. Am. Mer. Látigo recio de jinete.
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164. El perro del hortelano, que ni come ni deja comer al amo: Se dice de los que no aprovechan las cosas ni
dejan que otros hagan uso de ellas.
165. El que juega con fuego se quema: La temeridad se paga. 166. El que las hace, las paga: Siempre llega el momento de rendir cuentas. 167. El que no llora, no mama: Para conseguir una cosa conviene pretenderla y hasta pedirle inoportunamente. 168. El que parte y reparte, se lleva la mejor parte: Pues guarda lo mejor para sí. 169. En boca cerrada no entran moscas: Es útil callar y mostrarse discreto, pues evita muchos inconvenientes. 170. En boca cerrada no entran moscas: Indica que lo que menos complicaciones trae es no hablar. 171. En casa de herrero, cuchillo de palo: A veces falta una cosa en el lugar donde nunca debiera hacer falta. //
Allí donde se espera que haya facilidad para encontrar o conseguir una cosa, se verifica precisamente su falta. 172. En cojera de perros, y en lágrimas de mujer, no hay que creer: Pues duran muy poco. Aconseja desconfiar de aspavientos o exageradas lamentaciones. 173. En el país de los ciegos, el tuerto es el rey: Se aprovecha quien es más hábil o tiene alguna ventaja sobre el resto. 174. En martes, ni te cases ni te embarques: Supersticiosamente se considera el martes como día aciago. 175. En todas partes se cuecen habas: Las flaquezas humanas no son exclusivas de ningún lugar. 176. En un abrir y cerrar de ojos: En un instante, con mucha rapidez. 177. Entrar por el aro: Ceder, aceptar algo a pesar de la repugnancia que se siente hacia ello. 178. Es peor el remedio que la enfermedad: Frase proverbial con que se indica que lo propuesto es más perjudicial para evitar un daño que el daño mismo. 179. Estar (algo) por las nubes: Tener algo un precio muy superior a lo normal. 180. Estar (alguien) en la luna / en las nubes: Estar distraído, despistado. 181. Estar (alguien) entre la espada y la pared: Encontrarse en trance de tener que decidirse por una de dos cosas igualmente malas. 182. Estar con la soga al cuello: Encontrarse en una situación apurada o verse amenazado por un peligro inminente. 183. Estar en ascuas: Estar impaciente esperando el resultado de algo o por algo que puede suceder. 184. Estar o ponerse al rojo vivo: Se dice que algo está o se está poniendo al rojo vivo cuando está en un momento de sumo interés. 185. Faltarle (a alguien) un tornillo: Hacer o decir cosas insensatas o alocadas. 186. Fue por lana y volvió trasquilado: Se dice cuando alguien pretende ir a obtener una ganancia, y más bien lo que obtiene es una pérdida. 187. Gallo bueno, tanto en su corral como en el ajeno: Quien se ha preparado correctamente para un oficio o profesión, no se preocupa sobre dónde habrá de ponerlo en práctica. 188. Gallo que no canta, algo tiene en la garganta: Cuando alguien abandona un debate o conservación sin justificación aparente, es porque tiene algo que esconder. 189. Gato escaldado del agua fría huye: Cuando se ha tenido una experiencia negativa, se suelen tomar excesivas precauciones. 190. Genio y figura hasta la sepultura: Indica que la gente conserva su modo de ser toda su vida. // No es fácil cambiar el carácter. 191. Gustar de lo ajeno, más por ajeno que por bueno: Mucha gente no sabe apreciar lo bueno que ya posee y continuamente envidia lo ajeno. 192. Haber gato encerrado (en algo): Haber algo oculto que no se quiere revelar. 193. Hablando del rey de Roma, por la puerta asoma: El momento de nombrar a una persona coincide con el de su aparición. 194. Hacer (alguien) su agosto: Ganar alguien mucho dinero en una coyuntura favorable. 195. Hacer castillos en el aire: Concebir demasiadas esperanzas o ilusiones sobre algo. 196. Hacer de tripas corazón: Sobreponerse al propio temor. // Es cuando se llena una necesidad contando con pocos recursos. No todo lo que parece inservible lo es en realidad. Un ejemplo es el reciclaje de lo que se ha 7
usado una o más veces. 197. Hacer la vista gorda: Fingir que no se ha visto cierta cosa que tendría que haberse denunciado o corregido. 198. Hacer oídos sordos: Desoír, desatender. 199. Hay veces que nada el pato y veces que ni agua bebe: En ciertas ocasiones tienes algo en abundancia y a veces ni para lo más elemental. 200. Haz el bien y no mires a quien: El bien hay que hacerlo desinteresadamente. 201. Hierba mala, nunca muere: La maldad aparece en todas partes. // Cuando una persona ha adquirido malos hábitos, le es muy difícil abandonarlos. 202. Hombre prevenido, vale por dos: El que obra con cautela lleva gran ventaja en cualquier empeño. // Las personas que preveen posibles inconvenientes, se evitan muchos problemas. // Lleva gran ventaja la persona que toma recaudos. 203. Hoy por ti mañana por mí: Las personas deben ayudarse mutuamente. 204. Ir al grano: Tratar o referir lo fundamental de un asunto, sin entretenerse en lo accesorio. 205. Ir por lana y volver trasquilado: Denota que se ha sufrido perjuicio en aquello que se creía sacar provecho. // Sufrir perjuicio en aquello en lo que uno esperaba hallar provecho. 206. Irse con la música a otra parte: Cuando se nota que no se es bienvenido en algún lugar, lo mejor es retirarse de allí. 207. Juego de manos, juego de villanos: Censura la excesiva familiaridad en jugar groseramente a golpes o luchas. 208. Juntos, pero no revueltos: Se trata cuando se da una unión de objetivos entre varias personas o entidades, pero conservando cada cual su propia identidad. 209. Jurado de aldea quien quiera lo sea: Advierte ante lo poco agradecido que resultan algunos puestos en los que hay que tomar decisiones. 210. La cabra siempre tira al monte: Regularmente se obra según el origen de cada uno. // Siempre se obra de acuerdo con el origen de uno. 211. La caridad bien entendida empieza por uno mismo: Conviene pensar en las necesidades propias antes que en las ajenas. // Es natural pensar en las necesidades propias antes que en las ajenas. 212. La codicia rompe el saco. Muchas veces se frustra el logro de una ganancia moderada por aspirar a otra mayor. // Refrán que enseña que muchas veces se frustra el logro de una ganancia moderada por el ansia de aspirar a otra exorbitante. 213. La experiencia es madre de la ciencia: Se da valor al conocimiento que procede de la experiencia. 214. La ocasión hace al ladrón: A menudo se hacen cosas malas que no se habían pensado, por presentarse la oportunidad. 215. La gran victoria es la que sin sangre se toma: Se debe conseguir metas sin hacer daño a nadie. 216. Lo mío, mío, y lo tuyo de ambos: Refrán que critica la avaricia de muchas personas, que no saben compartir y sin embargo se apropian de los bienes e ideas de los demás. 217. Lo que me agrada me sabe a almendras confitadas: Lo que nos atrae no conoce obstáculos o reparos. 218. Lo que mucho se usa, poco dura: El uso constante de las cosas logra su rápido deterioro. 219. Las cañas se vuelven lanzas: A veces algo que empieza como un juego o una broma puede terminar en una pelea. 220. Las palabras se las lleva el viento: Siempre es menos seguro lo hablado que lo escrito. 221. Las paredes oyen: De tenerse muy en cuenta donde y a quien se dice una cosa que importa que esté secreta, por el riesgo de que se sepa. 222. La avaricia rompe el saco: Cuando se quiere más de lo que se puede tener o conseguir se corre el riesgo de perder lo poco con que se cuenta. 223. La caridad bien entendida empieza por casa: Es natural pensar en las necesidades propias antes que en las ajenas. 224. La codicia rompe el saco: Muchas veces se frustra el logro de una ganancia moderada por el ansia de aspirar a otra exorbitante. 8
225. La experiencia es madre de la ciencia: Se da valor al conocimiento que procede de la experiencia. 226. La ocasión hace al ladrón: Muchas veces se hace cosas malas que no se habían pensado, por verse en
oportunidad para ejecutarlas. 227. La ociosidad es madre de todos los vicios: Las personas que no tienen ninguna ocupación son propensas a
caer fácilmente en vicios y malas costumbres. 228. La ropa sucia se lava en casa: No se deben divulgar ni hacer públicos los inconvenientes familiares. 229. La suerte de cada alma, escrita está en su palma: Alude a que existe un destino individual. 230. Lanzar, proclamar o decir a los cuatro vientos: Alguien anuncia algo con el claro afán de que todo el mundo se entere. 231. Las malas nuevas, pronto llegan: Por siempre hay comedidos encargados de propagarlas. 232. Las paredes oyen: De tenerse muy en cuenta dónde y a quién se dice una cosa que importa que esté secreta, por el riesgo de que se sepa. 233. Lo que abunda, no daña: El exceso en las cosas útiles para algún fin no pueden causar perjuicio. 234. Lo que fácil llega, rápido se va: Los bienes que llegan fácilmente, por lo general no se valoran adecuadamente, por lo que no se cuidan, y así, se van rápidamente. 235. Loco de atar: Enajenado o trastornado en extremo. 236. Los niños y los locos dicen las verdades: La verdad se halla frecuentemente en las personas que no son capaces de reflexión, de artificio ni disimulo. 237. Llamar al pan pan y al vino vino: Decir las cosas con claridad y sin rodeos. 238. Llevar o sentir a flor de piel: Algo de lo que está sintiendo es tan evidente que casi puede verse. 239. Mal acaba quien mal empieza: Quien mal empieza una obra, o su vida misma, todo lo que siga haciendo en adelante seguirá equivocado hasta terminar totalmente mal. // Empieza desde temprana edad a llevar una vida correcta y sana, así cuando haya pasado el tiempo te sentirás feliz de ver que todo te sale bien. 240. Mal de muchos, consuelo de tontos: No debemos consolamos porque otros tienen problemas similares. // No hay que conformarse porque a todos vaya mal. 241. Males comunicados suelen ser remediados: Cuando se tienen enfermedades o problemas, su oportuna comunicación ayuda a una pronta recuperación. 242. Mandar (a alguien) a paseo: Despedirse o desentenderse de alguien con enfado o brusquedad. 243. Más sabe el diablo por viejo que por diablo: La larga experiencia lograda con los años vale mucho. 244. Más vale la libertad a la más regalada esclavitud: La libertad aunque costosa es el bien más preciado. 245. Más vale malo conocido que bueno por conocer: Pueden provocar inconvenientes el sustituir una persona o cosa ya experimentada con otra que no se conoce. // El carácter incierto de lo que se desconoce aconseja ser conservador. 246. Más vale maña que fuerza: Se obtienen mayores logros con la habilidad, destreza y tranquilidad, que con la fuerza y la violencia. // La astucia y sagacidad vencen donde no funciona la fuerza. 247. Más vale pájaro en mano que cien volando: Aconseja no dejar las cosas seguras, aunque sean cortas, por la esperanza de otras mayores que son inseguras. // Se aplica a falsas promesas y proyectos irrealizables, que llevan a olvidar lo simple pero seguro. // No hay que renunciar a las cosas seguras ante la perspectiva de conseguir otras mejores pero inciertas. 248. Más vale persona que hacienda: Una persona vale más por sus cualidades y no por su riqueza. 249. Más vale poco que nada: No hay que despreciar las cosas aunque sean pequeñas. 250. Más vale prevenir que curar: Es mejor conocer anticipadamente un daño para evitado, que tener que remediado luego. 251. Más vale ser cabeza de ratón que cola de león: Es más apreciable ser el primero y mandar, aunque sea en pequeño, que ser el último en orden grande. // Es preferible ser el primero en algo de categoría discreta que ser el último en algo importante. 252. Más vale solo que mal acompañado: Las malas compañías llevan al vicio. 253. Más vale un mal arreglo que un buen pleito: Es mejor transigir que exponerse a salir perdiendo. 254. Más ven cuatro ojos que dos. (o Cuatro ojos ven más que dos): Las cosas consultadas y revisadas entre 9
varios, salen mejor.
255. Matar dos pájaros de un tiro: Se dice cuando con una sola diligencia se hace o logran dos cosas. // Resolver
dos problemas con una misma acción. // Hacer o lograr dos cosas de una sola vez. 256. Matar la gallina de los huevos de oro: Forzar por avaricia la ganancia de una cosa hasta el extremo de destruir la fuente de esa ganancia. 257. Meter la pata: Equivocarse. // Intervenir en algo inoportunamente. 258. Meter las narices (en algo): Entrometerse, inmiscuirse en algo. 259. Meterse en camisa de once varas: Expresa que alguien se inmiscuye en lo que no le incumbe o no le importa. 260. Meterse en la boca del lobo: Exponerse a un peligro yendo imprudentemente al sitio donde existe o buscando la situación en que lo hay. 261. Mientras en mi casa estoy, rey soy: Acierto de conformarse con lo que se tiene y no pedir favores, 262. Mondo y lirondo: Pelado, limpio, sin añadidura o complemento de ninguna clase. 263. Mucho ruido y pocas nueces: Se aplica a quien habla mucho y obra poco. 264. Muerto el perro se acabó la rabia: Cesando una causa, cesan con ella sus efectos. 265. Muy poco adelantarás si vuelves la cara atrás: Es conveniente concentrarse en el futuro antes que en el pasado. 266. Nadie diga de esta agua no beberé: Ninguno está libre de que le suceda lo que a otro, ni seguro de que no hará alguna cosa, por mucho que lo repugne. // Ninguno está libre de que le suceda lo que a otro. // No se puede estar seguro de que no se hará alguna cosa en el futuro por mucho que esa cosa repugne en el presente. 267. Ninguno sube al cielo sin escaleras: Necesitamos esforzarnos cuando perseguimos un objetivo. 268. No andarse por las ramas: No detenerse en lo menos sustancial de un asunto. 269. No basta ser bueno, sino parecerlo: Importa, a más de la bondad interior, predicar con el buen ejemplo. 270. No dar pie con bola: Equivocarse reiteradamente. 271. No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy: Recomienda la actividad y censura la holgazanería. // No es conveniente dejar para otro día lo que bien podemos empezar a hacer hoy. Para mañana no sabemos que nos depara el día. // Hay que tratar de vivir el día presente realizando los anhelos. 272. No es oro todo lo que reluce: No hay que fiarse de las apariencias, porque no todo lo que parece bueno lo es en realidad. // Todo lo que a simple vista parece bueno no lo es necesariamente. // Debemos evitar decantarnos por las falsas apariencias. 273. No es tan bravo el león como lo pintan: Significa que una persona no es tan áspera y terrible como se creía, o que un negocio es menos arduo y difícil de lo que se pensaba. 274. No hay arroyo sin fuente: Las cosas suceden siempre por alguna razón. 275. No hay bien ni mal que cien años dure: Las cosas humanas están sujetas a continua mudanza. 276. No hay mal que por bien no venga: A veces, algo negativo trae consecuencias positivas. 277. No hay mejor desprecio que no hacer aprecio: Para dar a entender que la indiferencia es la mejor manera de demostrar a alguien el poco aprecio que se hace de él y de sus obras. 278. No hay peor ciego que el que no quiere ver: Con quien no quiere comprender no valen explicaciones. 279. No hay peor sordo que el que no quiere oír: Son inútiles los medios con que se persuade al que con tenacidad y malicia no quiere hacerse cargo de las razones de otro. 280. No hay plazo que no llegue, ni deuda que no se pague: Es imprudente quien promete hacer una cosa de difícil ejecución fiado sólo en lo largo del plazo que toma para ello, porque últimamente llega y el es preciso cumplir su promesa. 281. No hay que mentar la soga en casa del ahorcado: No es oportuno decir algo que pueda suscitar la memoria de cosas que molesten a alguno de los presentes. 282. No por mucho madrugar, amanece más temprano: No por hacer diligencias antes de tiempo se apresura el logro de una cosa. // A veces, vale más la dedicación y la calidad, que la rapidez. 283. No saber con qué carta quedarse: No saber elegir entre dos o más opciones igualmente buenas en principio. 284. No saber (alguien) de la misa la mitad / la media: Ignorar alguien una cosa o no saber dar razón de ella. 10
285. No se debe escupir al cielo: No se debe ofender a Dios, ni desear a otros cosas nefastas. 286. No se ganó Zamora en una hora: Se debe tener paciencia para alcanzar metas importantes. . 287. No soltar prenda. Ocultar celosamente algo cuya confesión podría resultar comprometedora. 288. No te dejes poner los ojos verdes: Nos aconseja no dejarnos engañar por quien nos habla con mentiras. 289. No tener (algo) ni pies ni cabeza: Ser algo completamente disparatado o absurdo. 290. No tener (alguien) pelos en la lengua: No tener alguien reparos en decir lo que piensa o siente. 291. Nunca dejes el camino llano por el atajo: Hay que considerar todos los puntos de vista antes de tomar una
decisión.
292. Nunca digas de esta agua no beberé: Muchas veces por creer que lo tenemos todo, despreciamos cosas que
en algún momento podrían sernos indispensables. // Nunca menosprecies lo que te parece insignificante, no vaya a ser que un día lo necesites imperiosamente. 293. Nunca falta un roto para un desconocido: Los pobres y desvalidos suelen hallar alivio y consuelo entre los que igualmente lo son. Acostumbra decirlo la persona que por su escaso valer o poco entendimiento se ve desdeñada. También se aplica a dos personas de la misma índole. 294. Obras son amores, que no buenas razones: Deben confirmarse con hecho las buenas palabras, porque ellas solas no acreditan el cariño y la buena voluntad. 295. Ojos que no ven, corazón que no siente: Las desdichas que están lejos se sienten menos que las que se tienen a la vista. // No se sufre por lo que no se sabe. // El sufrimiento causado por algo que no se puede contemplar será siempre menor que el de aquello que se tiene ante los ojos. // Podemos ocultar nuestras emociones si evitamos su origen. 296. Otro tiempo vendrá, el que hoy no puede, podrá: Siempre hay una esperanza de surgir en un momento determinado. 297. Pagan justos por pecadores: Cuando en un grupo de personas con un determinado calificativo, si uno sólo de sus miembros hace algo indebido, se tiende a generalizar y a decir que todos son iguales de incorrectos, así sean miles los correctos y sólo uno el incorrecto. 298. Para dar y tener, seso es menester: Hay que dar a quien se debe y guardar lo que se debe. 299. Para muestra, basta un botón: En prueba de lo que se dice, basta aducir un solo hecho, de entre los muchos que se podría citar. 300. Pasar por alto: Omitir, eludir, no considerar. 301. Pasarse de la raya: Rebasar el límite de lo tolerable. 302. Pedirle peras al olmo: Pretender de una persona o cosa algo que no puede esperarse de ella. 303. Perder los estribos: Enfadarse, irritarse, encolerizarse. 304. Poco aprovecha valor donde falta razón: Es un error convencer empleando la fuerza. 305. Poner (algo) en tela de juicio: Cuestionar la objetividad, la certeza o el rigor de algo. 306. Poner el dedo en la llaga: Acertar o señalar el verdadero origen de un mal, el punto difícil de una cuestión, o lo que más afecta a una persona. 307. Poner los puntos sobre las íes: Puntualizar, aclarar las cosas de tal forma que no haya lugar a dudas o tergiversaciones. 308. Perro ladrador, nunca buen mordedor: Se dice del que habla mucho y obra poco. 309. Perro que ladra, no muerde: Los que hablan mucho, suelen hacer poco. 310. Piensa el ladrón que todos son de su condición: Se suele sospechar de otros lo que nosotros hacemos. 311. Poco a poco hila la vieja el copo: Hacer las cosas paulatinamente y con perseverancia ayuda a alcanzar buenos resultados. 312. Poderoso caballero es don dinero: Con dinero se consigue muchas cosas. // Resalta la importancia del dinero para poder realizar los objetivos. 313. Por la boca muere el pez: Hay que tener cuidado para no hablar demasiado o mal de los demás. // Aconseja ser cauto en hablar. 314. Por dinero baila el perro y por pan si lo dan: La fuerza del dinero influye aún en aquellos a quienes no sirven ni aprovechan. 11
315. Por la boca muere el pez: Muy peligroso puede ser hablar sin discreción. // Es inconveniente hablar más de lo
necesario.
316. Predicar en el desierto: Intentar infructuosamente persuadir a personas no dispuestas a admitir la doctrina o
los ejemplos que se les dan.
317. Quien a buen árbol se arrima, buena sombra le cae encima: Quien se acerca y convive con buenas
compañías, se llena de bendiciones y bienestar. 318. Quien a hierro mata a hierro muere: Se suele experimentar el mismo daño que se ha infligido a otro. 319. Quien fue a Sevilla perdió su silla: La ausencia suele acarrear novedades desagradables o perjuicios contra los que no se puede apelar legítimamente. 320. Quién mal anda, mal acaba: Refrán que advierte ante el desorden y los malos hábitos. // Quien vive desordenadamente, generalmente termina en un mal final. 321. Quien más tiene, más quiere: Dicho popular que hace referencia a la insaciabilidad de la codicia. 322. Quien mucho abarca, poco aprieta: Es preferible hacer una cosa a la vez bien hecho, que muchas de mala manera. // Quien emprende muchas cosas a un tiempo, generalmente no desempeña ninguna bien. 323. Quien mucho habla, mucho yerra: Expresa el inconveniente de hablar en exceso. 324. Quien te quiere te hará llorar: EI verdadero cariño consiste en advertir y corregir al amigo en lo que yerra, posponiendo el sonrojo que le puede causar el fruto que se promete de la represión. 325. Quien tiene tienda, que la atienda (y si no que la venda): Cada uno debe vigilar bien sus negocios. 326. Quien siembra vientos, recoge tempestades: Los malos ejemplos e ideas, tienen funestas consecuencias. // Actuar mal acarrea consecuencias funestas. 327. Río que mucho suena no trae agua buena: Cuando una persona hace mucho alarde de sí misma, o de lo que ofrece o pide, debe de tomársele con mucho cuidado, pues algo oculta entre tanta palabrería. 328. Sacar (a alguien) de quicio / de sus casillas: Enfurecerlo, hacerle perder la calma. 329. Sacar (alguien) fuerzas de flaqueza: Hacer alguien un esfuerzo extraordinario a fin de lograr aquello para lo que se considera débil o impotente. 330. Sano y salvo: Indemne, sin ningún daño o desperfecto. 331. Sarna con gusto no pica: Si se hace algo con gusto, no molestan los sacrificios. 332. Salir o resultar a pedir de boca: Cuando los resultados son excelentes, mejores de lo imaginado, como todos hubieran pedido antes de comenzar. 333. Salirse (alguien) con la suya: Conseguir alguien lo que se propone a fuerza de obstinación. 334. Ser (algo) harina de otro costal: Ser algo ajeno al asunto de que se trata. 335. Ser (algo) pan comido: Ser algo muy fácil o simple de hacer o conseguir. 336. Ser (alguien) un mirlo blanco: Ser excepcional por alguna cualidad, generalmente buena. 337. Ser el último orejón del tarro: Sentir que no lo tienen en cuenta para nada. 338. Ser un cero a la izquierda: No tener ninguna influencia o no ser tenido en consideración en cierto asunto o lugar. 339. Si quieres buena fama, no te dé el sol en la cama: Si quieres que los demás te respetan, hay que trabajar y no ser perezoso. 340. Sin un primero no hay segundo: Todas las actividades siempre llevan un orden lógico de realización. 341. Tanto lo dijo el embustero, que salió verdadero: Indica como la mentira que se repite continuamente se vuelve verdadera. 342. Tanto peca el que mata a la vaca como el que le agarra la pata: Hacen el mismo daño el que realiza la acción incorrecta como el que le ayuda a realizarla o no le pone impedimentos. 343. Tener agallas: Ser valiente. 344. Tener (alguien) mala leche / mala uva: Tener mal carácter. 345. Tener la sartén por el mango: Se dice de cuando se tiene el control total y absoluto de alguna cosa o actividad. // Estar en una situación de superioridad en el manejo de un asunto. 346. Tomarle el pelo (a alguien): Burlarse de alguien con disimulo o ironía. 347. Uno se come la piña, y a otro le duele la panza: Eso sucede cuando alguien malvado se aprovecha de la
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inocencia o ignorancia de otro, y mediante engaños le quita algún bien. 348. Unos nacen con estrella y otros nacen estrellados: Es diverso el destino de los hombres. 349. Vale más pájaro en mano que cien volando: Es más provechoso disponer ya de un bien, que desear muchos que no podemos alcanzar. 350. Ver estrellas: Sentir un dolor muy fuerte y vivo. 351. Ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el nuestro: Se repara antes en los defectos de los demás que en los propios, aunque estos últimos sean mayores. 352. Vivir o estar a cuerpo de rey: Disfrutar de todos los placeres sin ningún tipo de turbación mental. 353. Zapatero a tus zapatos: No debemos inmiscuirnos en algo que nos es totalmente desconocido.
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