12| PONTEVEDRA | CIUDAD
|domingo,8deagostode2010
diariode diariodepontevedra
Crítica
En España proliferan las tertulias en las que el 95% del tiempo la gente se dedica a insultar a los políticos» Galicia
Yo me siento gallego, ¡y cada vez más! Lo soy más que nunca. Es un sentimiento» Esfuerzo
El puesto mas difícil en el que he estado es en el de líder de la oposición. A la gente no le entusiasma la crítica» Periodistas
Los medios no lo deciden todo. Un medio no puede darle instrucciones a un dirigente político»
Mariano Rajoy, en un momento de la entrevista. j aviercervera-mercadillo
[viene de la página anterior] Usted es el gallego que menos habla gallego de toda Galicia.
la que la rumorología popular se ha hecho eco: «Cómo serán, que ya dicen que esa casa es mía».
Le voy a decir algo: yo me siento proundamente gallego, ¡y cada vez más! Es un sentimiento. No responde a ningún acto de voluntad. Yo viví en León entre los cinco y los quince años. En aquella época tampoco se hablaba gallego normalmente en Galicia; de hecho yo estudié en la USC y no se hablaba. Yo me encontraba más cómodo hablando en castellano, me dieron boetadas en todas partes pero al fnal yo decidí ejercer mi libertad. Y me gustaría que todo el mundo la ejerciese. Jamás he criticado yo a nadie por hablar en otro idioma y ni se me ha pasado a mí por la imaginación. Dicho esto, yo ahora soy más gallego que nunca.
También le pertenece uno de los pisos de un millón de euros del edifcio de A Ferrería, en Pontevedra.
¿Se ha galleguizado con los años?
Yo he nacido en Santiago, he vivido toda la vida en Pontevedra: ¡es que he vivido aquí, soy de aquí, y mi padre es de aquí, y mi mujer, y a mis hijos los traigo todas las Navidades y todos los veranos! Y quiero y deseo que estén vinculados a Galicia toda su vida; lo deseo ervientemente. Y así va a ser. No es muy normal que los políticos creen un debate lingüístico que no existe en la calle.
Es cierto que en la calle ese problema no existe. Pero esto pasa con el el catalán. Allí cada uno habla lo que quiere. ¿Usted tiene hijos? No.
Pues cuando los tenga, verá que lo que más le importa en la vida son sus hijos, y además querrá más a sus padres. Querrá para sus hijos lo mejor: que sean mejores que usted, más capaces, más listos. Todo lo que sea libertad en materia educativa será beneicioso. A mí no me gustaría que educase a mi hijo un director general: prefero educarlo yo y que lo eduquen sus proesores. Dentro de una hora Rajoy irá a comer con su amilia a casa de su hermano, a Canelas. Una casa de
¡También! ¡Es verdad! Me llegó por tantos sitios ese rumor que acabé enviándole una carta al constructor pidiéndole la llave. A veces los inundios y las insidias no son tan blancas. De usted se ha dicho de todo.
Es duro. Pero le digo una cosa: el 80% de la gente no lo hace. Claro que a nadie le hace gracia que lo critiquen. Cuando yo empecé en política y me hacían una crítica, le daba vueltas una semana. Ahora ya no. Y además hay críticas razonables que dices: «éste tiene razón». Lo que hay luego es mucha injuria, mucha calumnia, como en internet. Y otra cosa que quiero decirle y que vengo diciendo en privado: es ácil en las tertulias criticar continuamente al político, pero hay políticos muy honorables que hacen su trabajo bien. Desgraciadamente en España, donde prolieran tertulias por doquier, se dedica el 95% del tiempo de ellas a insultar a los políticos. Sobre eso de que usted es gay hasta el señor Guerra se animó haciendo
una chanza públicamente.
No te puedes dejar asustar a sustar por eso. La clave es mantener el equilibrio y darle importancia a las cosas que la tienen, porque a veces nos enredan en temas menores y minucias. ¿Qué pensaba cuando días después de perder las elecciones se le echaron a los tobillos los periodistas que habían pedido el voto para usted?
A lo mejor a usted no le gusta lo que le voy a decir, pero los medios no lo deciden todo. Yo siempre he sido partidario de preservar la independencia de los medios. No encontrará usted a un compañero suyo que le diga que yo haya descolgado el teléono para quejarme de una inormación ni mucho menos para pedirle su cese. Y me gustaría que esa orma de actuar que yo tengo hacia los demás lo tengan los demás conmigo. A un partido político no le puede dictar su estrategia un medio de comunicación. Un medio puede inormar y opinar, pero no darle instrucciones instrucciones a un dirigente político. Yo eso no lo puedo ni lo voy a aceptar, y si lo aceptara no podría ser el presidente de mi país, que es lo que pretendo ser. A los pies de Rajoy descansa un maletín lleno de papeles. El presi-
Feijóo en la Xunta de Galicia
«Alberto tiene mucho mérito. Yo viví sus años de oposición: las cosas no fueron fáciles» dice no haber pensado nunca en gobernar Galicia. «Estoy a otras cosas», dice. Esas «cosas» son las que ya se sacó de en medio Alberto Núñez Feijóo: unas elecciones complicadas en las que acabó ganando por sorpresa. «Alberto Rajoy
tiene mucho mérito. Yo viví su etapa de oposición cuando Fraga dejó la presidencia de la Xunta. Fue muy dura. No tenía todos los apoyos –había otra gente que también quería ser presidente del partido- y se los ganó trabajando con inten-
dente del PP recibió esta mañana una buena noticia: el CIS le da a su partido la mayor ventaja sobre el PSOE: 6,3 puntos. «Yo soy muy cauto con las encuestas, aunque es verdad que es mejor que te digan que estás por encima que no que estás por debajo», dice. ¿Se da cuenta de que cuanto peor le vaya a España, mejor le irá a usted, y que cuanto mejor le vaya al país, peor será para usted?
No es una situacion cómoda pero es inevitable. Yo sobre eso le puedo decir dos cosas: estoy absolutamente convencido de que si en 2008 el PP hubiera gobernado no estaríamos como estamos ahora, porque la política económica que se ha hecho en estos dos años largos ha sido un error monumental. Descarta una moción de censura.
Descartarla no se puede. Pero el problema que tiene la moción es que no es la solución al problema que tiene ahora España: el PP la presentaría, habría un debate y lo perdería. Y a las 24 horas estaríamos en las mismas.
las agencias, llamadas pendientes y una agenda imposible, qué hace aquí metido?
El ser humano tiene sus propias historias interiores. Sí, alguna vez me lo he preguntado. Pero no desde luego ahora, porque creo que lo puedo hacer mejor que el que ahora está, y el objetivo no es a largo plazo. Cuando era ministro dijo que le gustaba su trabajo pero que vivía muy mal.
El puesto mas diícil en el que he estado es como líder de la oposicion. Tengo un papel diícil: la crítica al Gobierno. Y la crítica a la gente no le entusiasma demasiado. Al despedirse, Rajoy vuelve a zambullirse en sus otograías. «Fíjese que cuando era presidente de la Diputación inauguré la luz eléctrica en algunos pueblos de la provincia de Pontevedra. Esto ocurría en Galicia hace menos de treinta años», dice. Ahora lo que no tiene la región más desplazada de España es AVE.
¿Feijóo es un valor en alza en su partido y Camps un valor a la baja?
Blanco tenía la obligación de hacerlo. En 2003, con el Prestige, yo era vicepresidente del Gobierno e hicimos el Plan Galicia. Nosotros hubiéramos hecho el AVE de Galicia por la cuenta que nos tenía. Yo ahí empeñé mi crédito personal, y no estoy dispuesto a tirarlo por la borda. Luego en 2004 ganaron otros y mire ahora como estamos. En su casa se exhiben varios cuadros, entre ellos uno de Lorenzo Macías, el artista pontevedrés allecido hace unas semanas. Desde la puerta de entrada al piso lo primero que ve el visitante es, al ondo, el Atlántico, ya poblado de veleros al mediodía.
Ambos son presidentes de una comunidad importante. Es verdad que la posición de Feijóo es más cómoda en estos momentos, pero la vida se compone también de momentos duros, y lo importante es que uno sea coherente consigo mismo.
De once y media a siete. No escucho la radio ni por la noche ni por la mañana. Prefero no enterarme de nada. Ya al entrar en el coche me echan encima 14 o 15 periódicos y empiezo a darme cuenta de la cruda realidad.
Usted, que tiene plaza de registrador y se esuerza tanto en mostrar una imagen de normalidad, ¿no se pregunta a veces, cuando llega a su despacho y se encuentra con los ‘cristos’ de su partido, despachos de
sidad. Durante cuatro años las cosas no ueron áciles para él, pero hizo una extraordinaria campaña y recorrió Galicia de arriba abajo. Como gallego estoy orgulloso de él; como presidente del PP, enormemente satisecho».
¿Duerme bien?