Dr. Michel Odent
El Nacimiento Renacido
Para mi madre� en su octogésimo octavo cumpleaños
Quiero agradecer a Sara Bershtel de Pantheon Books y a Jane Pincus, quienes me convencieron de que escribiera este libro y me dieron tan preciados consejos.
.1
INDICE
Biografía: 7 Prólogo: 9 Introducción a la edición latinoamericana: 11 Introducción: 15 Pithiviers: 25 Antes: 4 1 No perturbar a las mujeres durante el trabajo de parto: 57
La primera hora y después: 79 Antiobstetricia: 1 1 1 Nacimiento renacido: 133 Notas: 137
BIOGRAFIA Para empezar, Michel Odent era un ciruja
mordía!" y la salud más adelante, en la vida. Michel Odent ha sido tema de muchos pro
no sobrecargado de trabajo, que hacía princi palmente cirugía de emergencia, incluyendo cesáreas.
gramas televisivos, en todo el mundo.
El más conocido documental es la película para televisión de la BBC "Nacimiento Rena
Comenzó a preguntarse cómo podrían evi tarse las cesáreas y desarrolló la unidad de
cido", que puso de relieve la unidad maternal
maternidad en Pithiviers.
de Michel Odent.
No obstante ser éste un lugar insignifican
Ha escrito numerosos artículos de literatura
te, se convirtió en centro de la nueva con
médica y científica. Es autor de un informe publicado por la
ciencia acerca del nacimiento: Un cuarto de alumbramiento como en ca
Organización Mundial de la Salud acerca del
sa, piscinas de agua tibia, alumbramiento ba
nacimiento hogareño en los países industriali
jo el agua, la libertad para ser ruidosa, la li
zados (1991).
bertad de estar en cualquier posición, la im
Así como en el alumbramiento, los libros
portancia de la partera, grupos de canto ...
de Michel Odent revelan su interés por el fu
"Pithiviers es más que la suma de sus par
turo de la humanidad en general. En los últi
tes".
mos quince años, Michel Odent ha escrito los siguientes libros:
Habiendo logrado eso, Michel Odent quiso
- "Uegando al mundo" - Nueva Biblioteca
conocer más acerca de lo que el nacimiento
Americana.
"como en casa" podía ofrecer y trabajó como si fuera una partera.
- "Genese de
Ahora está en Londres, creando el "Institu
O'homme) Ecologique" - Epi -
París.
to de Salud Primordial", cuyo objetivo es estu
- "El Nacimiento Renacido" - Pantheón
Books
diar las correlaciones entre el "período pri-
7
-
Nueva York.
- "Salud Primordial" - El Siglo - Londres. - "El factor zinc: En qué medida el zinc es vital para su salud" (coautor) - Thorsons - Rei
mamíferos" - Albín Michel - París. - "Los ácidos grasos esenciales" - ligier París.
no Unido. - "Vuestro bebé es el más hermoso de los
Londres - Nueva York (1990).
- "Agua y sexualidad" - PingOin-Arkana -
EL NACIMIENTO RENACIDO - 8
l
PROLOGO Cómo el nacimiento puede ser lo que las mujeres quieren que sea y cómo tanto las madres como los bebés se benefician Si mis tres hijos ya grandes se prepararan para los nacimientos de sus propios hijos y
ser el libro que impulse en una nueva direc ción el cuidado obstétrico. En un mundo don
yo tuviera que regalarles sólo un libro, les ofrecería El Naci miento Renacido. El Dr.
de en la mayoría de los hospitales el alumbra
Michel Odent, un científico extraordinaria
tos químicos e intervenciones quirúrgicas téc
miento se ha welto una pesadilla de produc
mente sensitivo y sabio, tiene un modo muy
nicas en nombre de la seguridad -pero sin
elocuente de describir el alumbramiento en su
ninguna base científica evidente para demos
clínica, mientras que al mismo tiempo explica
trar que esas intervenciones sean necesarias
las intrincadas verificaciones biológicas y los equilibrios que la naturaleza ha previsto como
el Dr. Odent contribuye con un significado distinto acerca de la calidad de vida. En la ac
recurso para garantizar que el nacimiento sea
tualidad, muchos médicos -conscientes de
seguro y gratificante. Su libro
que la mayoría de las drogas y los procedi
ayudará a las
futuras madres a confiar en sí mismas para
mientos que se han welto rutinarios desde
dar a luz sin drogas ni procedimientos obsté
los años 50, son potencialmente dañinos
tricos que, cada vez más, están siendo reco
quisieran cambiar su "estilo" y adoptar una
nocidos como peligrosos, tanto para la ma
actitud menos orientada a intervenir. Los mé
dre como para el bebé.
dicos que lean E/ Nacimiento Renacido re conocerán muy pronto los beneficios que trae
El Nacimiento Renacido puede muy bi�
9
el ayudar a una mujer a dar a luz a su hijo, en una atmósfera adecuadamente respetuosa para el principio de una nueva vida.
Las mujeres se dirigen a Pithiviers, en Fran cia, desde todas partes del mundo, para dar a
reformar y humanizar la experiencia del naci miento. El Nacimiento Renacido es uno de ellos. Si usted está embarazada o está pensan do en embarazarse, déle este libro a su doctor o a su partera. Si él o ella no concuerdan con los
luz con el Dr. Odent y sus excelentes parteras,
conceptos expuestos en la obra, esfuércese por
muy bien preparadas, entrenadas especial mente en la cautelosa "no intervención". Las
encontrar a alguien que los lleve a cabo. Cada vida tiene no más que un comienzo. Leyendo
tasas de mortalidad y enfermedad del Hospital
El Nacimiento Renacido, no sólo hará ese co mienzo más seguro, sino también más feliz.
General de Pithiviers,tanto de madres como de bebés, se encuentran entre las mejores en el mundo. Estos impresionantes resultados
Doris Haire
son aún más admirables porque el hospital es
tá situado en una pequeña ciudad, a poca dis tancia de Paris, sin ningún centro especializa do cercano para trasladar casos de problemas de embarazos y nacimientos. Pocos han sido los movimientos destinados a
Presidenta de la Fundación Americana de Salud Maternal y del Niño. Presidenta del Comité de Salud Maternal y del Ni ño, de la Red Nacional de la Salud Femenina.
EL NACIMIENTO RENACIDO 1 O -
INTRODUCCION A LA EDICION LATINOAMERICANA Este libro acerca del alumbramiento, desti
madre y el be bé y en el comienzo de la lac
nado originalmente al público estadouniden se, fue escrito a comienzos de la década de
tancia.
los 80. Por esa época, varios aspectos del
los países latinoamericanos deben ser adverti
El propósito principal de este libro es que
modo de vida americano se esparcieron irre
dos, sin dilación, acerca de los errores come
sistiblemente por todo el mundo.
tidos en Francia, en Estados Unidos y en
Después de dar conferencias en muchos
otros países occidentales.
estados americanos y reunirme con varios
Aún es posible corregir algunos de estos
grupos de "pacientes" y profesionales me
errores. Y ¿por qué un libro latinoamericano ...
convencí de que la obstetricia americana es taba equivocada de modo peligroso.
Esa es la razón por la cual mi prioridad ha
·ahora? Durante estas últimas dos décadas, la ma
sido desafiar con urgencia el modelo ameri
yoría de los bebés occidentales nacieron en
cano.
un entorno electrónico. A fines de los años 60, los obstetras creye
Lo hice, simplemente, resumiendo cuanto aprendí en un hospital estataL
ron que si podían escuchar continuamente
Traté de demostrar cómo usted tiene que
los latidos del corazón del bebé durante el
cambiar radicalmente la apariencia de un
parto gracias a una máquina electrónica,
hospital, cuando es consciente de la impor
crearían la mejor situación posible para inter
tancia ·del entorno en el proceso del alum
venir tan pronto como un bebé estuviera en
bramiento, en el primer contacto entre la
peligro.
11
Pensaron que sería un modo de aumentar
Esto significa que ha llegado el momento de prepararse para la era postelectrónica.
la seguridad. Fue sólo una teoría, no confirmada por un enfoque científico.
Significa también que ha llegado el mo mento de dar cabida a simples y nuevas pre
Recientemente, ocurrieron muchos aconte
guntas en cuanto al efecto del entorno en el
cimientos que sugieren que podríamos estar al final de la era electrónica. Nos hallamos en un punto decisivo en la
proceso del nacimiento y en el primer con tacto entre madre y bebé. Esa es la razón por la cual el contenido de
historia del alumbramiento. Un punto decisi
este libro se vuelve repentinamente temático.
vo significa que hubo un hecho preciso que
Desde que escribí la edición original he am
puede fecharse. Sugiero fecharlo el 12 de di
pliado dramáticamente mi comprensión so
ciembre de 1987.
bre la influencia de los factores ambientales,
Ese día salió un artículo importante en
gracias a la existencia de nacimientos hogare
Lancet, una de las más prestigiosas y autori zadas revistas médicas qel mundo. El artículo incluía ocho importantes y ela borados estudios, en diferentes partes del mundo. En todos estos estudios, donde se trataban decenas de miles de nacimientos, el objetivo fue comparar grupos de mujeres dando a lli.z con la ayuda de una máquina electrónica y grupos de mujeres dando a luz sin la máquina electrónica. Los latidos del corazón fueron es cuchados ocasionalmente por una partera. La mayoría de dichos estudios ya se había publicado en otras revistas médicas autoriza das; lo nuevo fue concentrar todos estos do cumentos. La conclusión global es que el único efecto significativo del uso de la máquina durante el trabajo de parto consiste en aumentar el nú mero de cesáreas y del uso de fórceps. No cambia nada en cuanto a la cantidad de bebés vivos y sanos, al nacer. La interpretación lógica es que el uso del monitoreo electrónico durante el trabajo es algo peligroso. Hace al parto más difícil. Más bebés tienen que ser rescatados por medio de operaciones.
ños. Ahora estoy más consciente de la im
·
portancia de algunos detalles, como el tama ño del cuarto. Un cuarto de alumbramiento debería ser pequeño. Usted tiene más fácilmente un sen timiento de privacidad en un cuarto pequeño. Soy aún más consciente de la importancia de la oscuridad. Ahora me atrevo a decir que el padre del bebé puede obstaculizar el proceso normal del nacimiento cuando se comporta como observador, pues necesita hablar, tiende a establecer contacto ocular con la madre en el momento equivocado o intenta justamente ayudar, mientras el punto consiste en no per turbar. Tengo claro en mi mente que los humanos son mamíferos. Los mamíferos se ocultan, se aíslan para dar a luz. Necesitan privacidad. Aprendí a dar gran importancia al trabajo de algunos científicos como, por ejemplo, Ni les Newton, quien estudió el nacimiento de mamíferos no humanos. Todas las conclusio nes de estos científicos son perfectamente vá lidas en lo que concierne a los seres huma nos. Por ese motivo, en el amanecer de la era postelectrónica, la pregunta clave es: ¿có mo mantener una atmósfera de privacidad
EL NACIMIENTO RENACIDO - 12
'
J
aun en un hospital? Este es exactamente el tema de este libro. Necesitaremos, en el futu ro, maternidades parecidas al hogar. No tendrán nada en común con el área de obstetricia de la era electrónica. Los hospitales de maternidad del futuro ju garán un papel importante en el entrena miento de auténticas parteras. En la era postelectrónica, habrá también algunas buenas razones para adaptar el naci miento hogareño a nuestra moderna vida ur bana. ·pero éste no es el tema del libro. Con el fin
de prepararse para la era postelectrónica, la obstetricia deberá volverse más científica. Ne cesitarnos mejorar nuestro conocimiento sobre los procesos fisiológicos normales en el perio do cercano al nacimiento. Necesitarnos inter pretar con objetividad algunas estadísticas. ¿Por qué el 6% de cesáreas en Holanda y el 25% en otros países? ¿Por qué una tasa de mortalidad perinatal por debajo del 10% en Holanda y una tasa de mortalidad maternal inferior a 1 por 10.000? ¿Por qué tales cifras en el único país industrializado donde un be bé de cada tres nace en casa?
MIC!-IEL ODENr 13 -
INTRODUCCION ondulaciones de carne, inmovilizadas y atra
Una de las mujeres pregunta si puede tomar algo; sus labios están muy secos. "Lo siento;
padas en mesas angostas, bajo luces brillan
nada por boca". La enfermera verifica, con
Yacen como ballenas perdidas, enormes
tes. Sólo una cortina separa a cada una de las
actitud critica, algo que sale en la máquina y
cuatro mujeres, de la siguiente. Desde sus
gira hacia la máquina siguiente.
piernas se proyecta un cable. Está unido a
Esta escena pertenece a un hospital de
una máquina donde un ojo verde guifia con
Alemania Occidental, pero podría ser de
rapidez y desde donde una cinta es vomitada
cualquier sala de maternidad, repleta con to
constantemente, cayendo en pliegues cada vez más tupidos, a medida que pasa el tiem
da la alta tecnología que los obstetras usan. De repente siento que las mujeres no son co
po. Grabando la presión uterina, otro cable,
mo ballenas sino como vacas en una ordefia
también conectado a la máquina, produce su
dora electrónica de la era espacial, ocupando
propia erupción de líneas dibujaditas. "Qué dense quietas" se les dice a las mujeres.
el menor lugar, haciendo el menor ruido, con el nacimiento de cada uno monitoreado, pro
"Cualquier movimiento puede interferir con
cesado, medido y registrado minuciosamente.
la impresión del monitor". Pero les es imposible moverse. Absoluta
"Es tranquilizador", dice una mujer; "me hace sentir segura". Es el único sentimiento que
mente ninguna sensación, desde arriba de su
manifiesta, una vez que su bebé ha nacido.
estómago hasta sus pies. Ajustado a un hom
Haberse sentido segura y luego "aliviada",
bro, está el catéter epidural a través del cual
durante el nacimiento.
puede ser inyectada inás anestesia cuando
Hay otra mujer en trabajo de parto, esta
vuelva cualquier sensación. Una enfermera
vez, en Francia. Se encuentra dentro de una
pasa silenciosamente entre las mujeres, com
pequefia habitación, con luz tenue, acompa
probando el funcionamento de las máquinas.
fiada muy de cerca por su marido y una par-
15
tera. Está en una tarima baja, cubierta con al
luego todo su cuerpo cae en un lienzo que ha
mohadones, que ocupa una esquina del cuar
sido extendido para recibirlo. La madre mira
to, pero prefirió acuclillarse, con su marido
abajo, inmediatamente, recoge a su bebé, lo
sosteniéndola por detrás. Todo es muy, muy tranquilo. No hay ruido de máquinas, ni cam
alza y lo pone en.su pecho. "¡No lo puedo creer! ¡Es increíble! ¡No llores, mi pequeñito!
panillas que suenen; se habla en voz baja. El
¡Mi bebé! ¡Mi bebé! ¡Es fantástico! ¡Increí
movimiento usual de un hospital se ha borra
ble!", exclama una y otra vez, con los ojos lle
do; los teléfonos han sido acallados; no hay
nos de lágrimas, riendo y llorando al mismo
pasos presurosos. Esta es el ala de materni
tiempo. Ella está en los brazos de su marido y
dad donde trabaja Michel Odent.
él la está besando. Nadie interfiere.
Él besa el
Hasta hace I..\I1 momento, la mujer estaba
pie del bebé y a su mujer otra vez. También
caminando por ahí, queriendo estar derecha
está llorando por la alegria y la maravilla de
y .deteniéndose solamente para apoyarse con
todo eso. Así es el alumbramiento para algu
tra su marido, cuando venia una contracción. Pero ahora está empezando la segunda etapa del trabajo y desea doblar sus rodillas y per mitir que baje el peso que siente contra ella,
nas mujeres. Así puede serlo. Conocí a Michel Odent en 1977, después de haber entregado un trabajo en una confe
para que vaya abriendo todos los pliegues
dicho: "El ambiente apropiado para dar a luz
que, como un abanico, están expandiéndose
es exactamente el mismo ambiente en el que
en su vagina, para que ésta se dilate más y
uno hace el amor". Me envió una nota di
más, dejando así que la cabeza del bebé pue da pasar por ahí.
ciéndome: "Yo estoy de acuerdo. Venga a ver
Está totalmente enfrascada en su experien
estaba ocupada, escribiendo en una vieja ca
cia. Nada más importa. Nada más interfiere.
sa, situada en los jardines de Fontainebleu. El
Es como si ella estuviera en su propio círculo de soledad. Sabe exactamente qué tiene que hacer y no necesita instrucciones, porque se halla totalmente sintonizada con su propio cuerpo y con la energía que lo está atrave sando, con grandes olas de deseo por empu
rencia internacional de obstetricia. Yo había
lo que estoy haciendo en Pithiviers". Ese año,
pueblo de Pithiviers quedaba más o menos a media hora de distancia. Esta casualidad fue lo que me permitió co nocerlo y convencerme de que las mujeres de Estados Unidos e Inglaterra tendrían que oír lo que él estaba haciendo. He aquí a un hom
jar al bebé hacia abajo. La partera espera,
bre que no era un mero coreógrafo obstetra,
con las manos en reposo, susurrando ocasio
sino alguien que compartía con las mujeres lo
nalmente, "Bien ... bien ..." De repente, la
que ellas mismas experimentaban y que esta ba de su parte.
mujer deja escapar una larga queja y alli se ve la parte alta de la cabeza del bebé. La partera
Es muy tentador para un obstetra volverse
espera todavía un momento; con la próxima
director del drama del nacimiento. La "direc
contracción, la mujer da un grito que parece
ción activa" del trabajo de parto ahora está
ser de asombro y júbilo, dolor y triunfo -qui
muy de moda y, a los ojos de sus colegas, un
zás también de éxtasis- todo reunido en un
obstetra exitoso es aquél que tiene la posibUi
único sonido. La cabeza del bebé se desliza y
dad de controlar el trabajo de parto y hacer
EL NACIMIENTO RENACIDO- 16
que se asemeje a un modelo. La mujer es pa siva. Es una paciente físicamente inmoviliza da. Su impotencia es mayor, por la posición que le han hecho adoptar, pues yace horizon talmente sobre su espalda con sus piernas a tadas arriba, en los estribos (postura clara mente adoptada para la conveniencia y la co modidad del obstetra y no para la mujer que está teniendo el bebé). Muchas mujeres en cuentran que es muy doloroso y aterrador es tar empujando al bebé para arriba, hacia el aire, mientras yacen en una angosta camilla. Para el alumbramiento, Michel Odent pro vee un entorno en el cual una mujer es libre de hacer las cosas a su manera. Cualquier co sa es permitida. Si quiere gritar, grita. Si pre fiere trabajar en la oscuridad o tener a sus otros hijos con ella -para que estén por ahí- o quiere flotar en una pileta con agua, se la alienta a hacer todo esto. Muchas muje res, espontáneamente, prefieren estar para das para dar a luz, con los pies firmemente plantados en el piso, físicamente ayudadas por el doctor, la partera o su compañero de trabajo. El bebé se desliza al piso y la madre lo ve de inmediato, sin necesidad de que al guien se lo alcance. Michel Odent enfatiza la iniciativa de la madre, también después del nacimiento. En esto, difiere de lo que dice Federico Leboyer, cuyas enseñanzas lo inspiraron, y alguno de cuyos métodos -como el de bañar al recién nacido- usa en Pithiviers. En un filme he cho por Leboyer, la madre está boca arriba, el doctor levanta al bebé y lo masajea mien tras yace sobre el abdomen de la madre o tie ne al bebé aislado de ella, durante el ritual del baño. Ella puede incluso extender sus manos -obviamente, tratando de tocar al bebé pero esto no forma parte de los planes de
Leboyer. Está totalmente centrado en el re cién nacido. Lá relación entre la madre y el bebé es secundaria, algo que tiene que venir subsecuentemente. En cambio, una mujer bajo el cuidado de Mi che! Odent, tiene un rol completamente activo. Es ella la que da a luz. En general, la madre es la primera en tocar a su hijo; es ella quien, jun to con el papá, sostienen al bebé durante el ba· ño, puesto entre las piernas de la mamá. En Pithiviers, todas las personas presentes en un nacimiento se encuentran allí para servir y ani mar a la mujer que está dando a luz. Lo cierto es que Michel Odent está prepa rado para aprender de las mismas mujeres, cosa muy rara en un obstetra. No es otro hombre diciéndoles a las mujeres lo que de berían hacer, otro obstetra dándoles instruc ciones sobre su rol durante el alumbramiento. Michel Odent habla con voz diferente. Él bus ca servir a las mujeres que lo deseen, en un trabajo que es personal, íntimo y una expe riencia profundamente creativa. No ofrece ninguna solución mágica ni rápida, pero tra baja para descubrir un ambiente para el naci miento, en el cual una mujer es, por encima de todo, no una paciente o un útero que se contrae y un canal de nacimiento o una pieza de la complicada maquinaria reproductiva, si . no ella misma. Generalmente, esto sólo sucede cuando una mujer da a luz en un territorio que con trola: en su propia casa, donde el doctor -si hay uno- y la partera son invitados. Por su puesto, no sucede a menudo en los hospita les. Nuestra manera occidental de tener hijos ha producido muchos obstáculos para "hacer lo que viene naturalmente" y ha eliminado to da la sexualidad que tiene el alumbramiento. La intervención obstétrica va desde procedí-
MICHEL ODENf - 17
mientas de rutina dados por las enfermeras -como afeitar el veDo del pubis o adminis trar enemas o supositorios- hasta desgarro artificial de las membranas, goteos intraveno sos de oxitocina, monitoreo electrónico y
Esto, por supuesto, incluso podría ser di cho de Pithiviers. Fmalmente, la autoridad de Pithiviers también está en manos del personal del hospital. Pero lo extraordinario allí, es que Michel Odent ha delegado el poder a las
drogas para tranquilizar, atontar, desorientar,
mujeres. Hay un gesto que asocio con Mi
causar alucinaciones, producir amnesia, cam
che!, que me da la clave de todo esto: él son
biar la química del cuerpo de una mujer y
ríe, con sus ojos brillantes, levantándose de
también privar al feto de oxígeno, convirtien do al recién nacido en un informe mantonci
hacia arriba y pregunta: "¿Y por qué no?"
hombros, aparta sus manos con las palmas
to con dolor de cabeza, en vez de un ser ojia
Cuando las mujeres le preguntan si pueden
bierto, que busca, queriendo aprender.
hacer algo, para pedir su aprobación, invaria
Ahora, los padres están siendo alentados
blemente ésa es su respuesta. Como lo es
para que compartan el alumbramiento, pero nuestra sociedad se ha burlado de la amoro sa, apasionada participación que un padre puede sentir cuando está totalmente involu
otros doctores podría haber parecido ultrajan te o loco: "¿Por qué no?" Lo único que él no va a dar es la clase de
también para todo lo que a la mayoría de
crado en el drama del alumbramiento y no es
ayuda que la mayoría de las mujeres embara
solamente un "observador" durante este tran
zadas espera en estos días: drogas para el do
ce. La persona que la mujer ha elegido para que esté con ella será cálidamente bienvenida sólo mientras él o ella permaneZca fuera del camino, no cuestione procedimientos de ruti na y se vaya cuando se le pida. Ahora, en muchos nacimientos, la función principal del compañero de labor parece ser supervisar el monitor para decirle a la mujer que está en trabajo, cuándo empieza la próxima contrac
lor. Cuando una mujer se inscribe en su uni dad, hay un contrato implícito con él para que no se le administren drogas cuando hay un trabajo normal, pero que recibirá todo cuanto puede dar para ayudarla en su labor con su cuerpo, en vez de pelear o tratar de escapar de él. Aquí es donde algunas de no sotras podríamos cuestionar su compromiso
ción. El simulado entorno doméstico de mu
total con el nacimiento natural y el poder que un obstetra tiene sobre una mujer, durante su
chas salas de parto, en ciertos hospitales
labor de parto. Si una mujer ha de tener po
ofrece confort y bienestar; un gran adelanto
der de elección entre alternativas, ¿no se ten
con respecto a la sala de partos común. Pero es una caricatura del hogar. Mis cinco hijas nacieron en casa y aún no puedo dejar de sentirme un poco sorprendida cuando las mujeres, encantadas con sus experiencias en las salas de parto del hospital dicen: "y me permitieron..." "el doctor me alentó para ha cer tal cosa" o "lo dejaron que mi marido..." etc., etcétera.
dría que extender también a ésta? ¿Acaso no es una necesidad básica humana poder obte ner drogas para aliviar el dolor? Así lo creen las mujeres en Suecia, donde una ley promul gada por el Parlamento garantiza alivio com pleto del dolor para todas las mujeres, duran te el parto. El resultado es que una mujer puede empezar tomando Demerol (al co mienzo de las contracciones, para atontarla
EL NACIMIENTO RENACIDO - 18
un poco), seguir con una epidural (que saca
tencia en que el nacimiento es instintivo y al
toda sensación desde la cintura para abajo) y
go para lo que una mujer no necesita prepa
puesto que la epidural no alcanza para la se
ración, sino que, al contrario, tiene que "desa
gunda etapa del trabajo, probar otro tipo de
prender" lo que su mente consciente ha ad
anestesia para la etapa final.
quirido. ¿Sería ésta otra manera de pedirles a
Las implicaciones de conceder esta alterna
las mujeres que se adapten a un modelo bio
tiva a las mujeres podría alterar totalmente la
lógico de lo que es ser una hembra? ¿Una
atmósfera de la unidad de Michel Odent. Las
manera de disparar la razón y decirles a las
parteras que ahora pueden prestar su aten
mujeres que lo único que necesitan es instinto
ción sin reservas, a la mujer, tendrían que di vidirla entre la mujer y las máquinas. Si las
para poder cubrir el rol maternal? Es precisamente apartándose del conscien temente adoptado nacimiento obstétrico -en
epidurales -la forma más efectiva de alivio del dolor farmacológico- fueran Introduci
el que la mujer es un objeto pasivo en la mesa
das, habría una importante causa para incluir
de trabajo- y también de los propósitos del
monitoreo electrónico. Una vez que el cuerpo
"parto sin dolor'' de Lamaze, que estarnos re
es int�rferido de alguna manera, hay que in tervenir de otras maneras. Y una vez que los
chazando los puntos de vista masculinos del nacimiento, a fin de redescubrir la experiencia
sentidos han sido tapados, los fórceps po
esencial, por nosotras mismas. Ser "racional",
drían ser necesarios. Las posibilidades de te
organizar nuestra más íntima experiencia de
ner que utilizar fórceps pueden acrecentarse
acuerdo con el modelo obstétrico "lógico" del
cinco veces si se ha administrado una epidu
alumbramiento o convertirse en una mujer
ral a la mujer. Michel nunca tiene alumbra
más de cuantas llevan a cabo una proeza
mientos con fórceps. Si a las mujeres se les diera la opción de recibir anestesia epidural,
física, según el "método de Lamaze", es en sí
se verla forzado a tenerlos. Entonces, las mu jeres que ahora dan a luz activamente, se
masculina acerca del nacimiento.
convertirían en pacientes que necesitan ayu da para darse vuelta y a quienes examinaría
deshacemos de las excrecencias culturales del
la enfermera antes y después del nacimiento.
yos instintivos, no está abogando por cual
mismo, básicamente, aceptar la dominación
Es más, cuando Michel dice que debemos nacimiento para poder redescubrir nuestros
Ya no podrían desarrollar funciones en sana
quier simple retomo a alguna idea de lo "pri
actividad. Por otra parte, esto podría querer
mitivo". De hecho, no ha descartado la cultu
decir que aquellas mujeres a quienes no se les
ra. Ha tomado los elementos instituidos por
han aplicado epidurales, inevitablemente reci
nuestra cultura y los ha adaptado para satisfa
birían menos atención, mientras que las par
cer las necesidades instintivas de la mujer du
teras y los obstetras estarían muy ocupados
rante el alumbramiento. Por ejemplo, trabaja
con el operativo del alumbramiento y de "ca
en un ambiente de hospital, no en la casa y
sos interesantes".
previene que profesionales de especial pericia
Hay otro elemento en la manera de pensar
tomarán parte en el alumbramiento. Las lu
de Michel Odent que algunas de nosotras
ces bajas, el grabador con su música -si la
consideramos difícilmente aceptable. Su insis-
mujer lo quiere durante el trabajo- la pileta
MICHEL ODENT - 19
usada para relajación, todos éstos son pro
cálida alegría. Aquéllos de nosotros que
ductos de la organización industrial y de la ci
hemos sido confrontados con una enfermera
vilización moderna. Pero Michel los usa a to
autocrática o un doctor que nos ha tratado
dos para cambiar tanto el ambiente hospitala
como niños irresponsables, sabemos que una
rio, que las mujeres pueden expresar sin nin
mala relación con quienes nos están cuidando
guna clase de inhibición cuanto sienten du
puede arruinar incluso el más feliz de los na
rante el trabajo, dejando libre el camino para
cimientos y convertirlo en una dura prueba. La clave del logro de Michel es la excelente relación de trabajo que tiene con sus parte
un alumbramiento fisiológico, en vez de "me dicalizado". Sin embargo, el impacto de su trabajo en las mujeres de Europa Occidental fue muy
ras, el modo como todos comparten un pro
poderoso, por una razón insidiosa. He aquí a
Pithiviers no sufren las consecuencias negati
un doctor trabajando en un hospital, que for
vas de las malas relaciones entre enfermeras
ma parte de un establecimiento médico y que está demostrando que el alumbramiento pue
y doctores o del ambivalente descontento de enfermeras que se sienten atrapadas en un
de ser mucho más como las mujeres lo quie
sistema obstétrico autoritario, que no pueden
ren. Es como si a las mujeres se les permitie
controlar o cambiar.
pósito común. Las mujeres que dan a luz en
ra hacer las cosas a su manera por primera
El nacimiento, como la muerte, es una ex
vez, desde que Dick-Read habló sobre el efec
periencia universal. Puede ser la experiencia
to de la mente y el cuerpo durante el naci
creativa más poderosa en la vida de muchas
miento, en el siglo XIX. Pero significativa
mujeres. Puede ser una interrupción en el co rrer de la existencia humana, un fragmento
mente, este permiso tiene que ser dado por un médico. Algo que las mujeres saben por ellas mismas, no puede ser reconocido. Las
que tiene muy poco o nada que ver con el sentimiento apasionado que creó al bebé o puede ser vivido con belleza y dignidad. El
experiencias de las mujeres no pueden ser convalidadas hasta que un hombre, preferen
trabajo mismo puede ser una celebración de
temente un doctor con delantal blanco, diga
alegría.
que estas experiencias son aceptables.
El nacimiento es algo que, como mujer,
Michel Odent se da cuenta muy bien de es
comparto de manera intensa e intima con la
ta paradoja. Ha pedido el renacimiento de la
campesina china, con la esquimal, con la mu
partera, tradicional ayudante de la mujer en
jer que vive en una villa miseria en América
trabajos de parto. Y ciertamente fue mucho
del Sur, en una tienda nómade o en un cam
más lejos: en Pithiviers, ha recreado el arte
pamento africano. Esa es la causa por la cual
de la partera; las parteras son el eje del cual
nuestra manera de dar a luz es una cuestión
depende todo lo demás. Son su profesionalis mo y dedicación, su capacidad para amar, los
política. Tiene que ver con el derecho que tiene toda mujer de dar a luz libremente y en
que crean la especial atmósfera familiar para
un entorno amoroso. Mucho de lo que expe
cada mujer que ha tenido un bebé atendido
rimentamos como autocrático, impersonal y
por parteras. No sólo brindan a cada naci
degradante en el cuidado de la salud de las
miento, técnica y mucha atención, sino una
mujeres en general y en el control social de
EL NACIMIENTO RENACIDO 20 -
nuestros cuerpos, está cristalizado en el siste
Este es el desafío que Michel Odent nos
ma del tratamiento de la maternidad. A los
ayuda a realizar: el de cambiar nuestra cultura
ojos de muchas de nosotras, en todo el mun
del alumbramiento. Pero no es ningún "liber
do, las clínicas se parecen a un mercado de
tador". No ofrece salvación a las mujeres que
ganado y a una fábrica obstétrica.
creen en él, aunque en oportunidades la cosa
El nacimiento se ha convertido ahora en importante tema para las mujeres que están luchando por un cambio social en las actitu des de los hombres hacia nuestros cuerpos y
se haya presentado así. A veces, algunas mu jeres buscan a un obstetra con esa idea en la cabeza, transfiriendo a una figura con pode rosa autoridad, las responsabilidades de sus
también para el tratamiento de nuestros
propios cuerpos y experiencias, que ellos no
cuerpos. Por primera vez, las mujeres que
tienen ganas de aceptar. Michel sería el pri
están en el movimiento del alumbramiento (antes fueron apolíticas, justamente por la
mero en decir que aquéllas que quieran tener una total garantía de no sentir dolor, las que
real naturaleza de su preocupación por el
quieran pasar a alguien semejante responsa
hogar y la familia) han unido sus manos con
bilidad, que no acudan a él. En Pithiviers, el
otras, para asumir acción política. En el pasado, muchas feministas rechazaron la
centro del drama no es ni el obstetra, ni el procedimiento del hospital, ni el trabajo del
experiencia del nacimiento o la vieron como
equipo guiando al paciente a través de la la
en la periferia de sus preocupaciones más
bor y el nacimiento, sino la misma mujer y su intensa experiencia. Michel ama el drama del
importantes, como algo que trababa a las mujeres en su herencia biológica. Es eviden te ahora que ésta es un área en la cual se
nacimiento, la excitación de descubrir cómo puede ser y lo que las mujeres realmente
presenta una oportunidad para tomar acción
quieren. Le encantan los alumbramientos,
decisiva.
pero no como alguien que los dirige. Y lo
Los cambios que permitan a las mujeres
más importante de todo, Michel Odent escu
redescubrir los ritmos sexuales espontáneos
cha a las mujeres; está ahí, no para dominar
del trabajo en las prácticas de alumbramien
sino para servir; no para dictar sino para aprender. Él es el testigo de que cada alum
to, en general no provienen de los obstetras. Se están manifestando por la presión que las
bramiento es un viaje de exploración para to
mujeres hacen para tener la oportunidad de
dos aquellos que comparten el trabajo, el do
dar a luz a su manera, a su tiempo, en un en
lor creativo, el misterio y la exaltación.
torno emocionalmente apropiado y con pa sión alegre y desinhibida.
Sheila Kitzinger
MICHEL ODENT - 21
EL NACIMIENTO RENACIDO
Pithiviers
PITHIVIERS Vine por primera vez a Pithiviers en 1962
que también se esperaba que yo supervisase
para hacerme cargo del área de cirugía gene
una pequeña clínica de maternidad, en el hos pital. La clínica era frecuentada principalmen
ral en el hospital. Fue el resultado de un nombramiento lo que me trajo a esta ciudad
te por mujeres de Pithiviers y de los pueblos
de diez mil habitantes, que muy rápido apren
vecinos. Provenían de una gran diversidad de
dí a querer. A corta distancia de París, la re gión de los alrededores de Pithiviers aún ofre
clases sociales. Algunas trabajaban en las fá bricas, otras eran granjeras, comerciantes o
ce todas las ventajas de la vida de campo. La
empleadas públicas. Algunas eran inmigrantes
tierra es fértil, plantada con trigo y remola chas. Los granjeros locales todavía practican
de Portugal, Africa del Norte o inclusive de
la apicultura, cazan alondras y todos los veci�
Oriente. La clínica aceptaba a cualquiera que viniera; no había ninguna "discriminación", ni
nos se dan cita los sábados en el mercado del
por la parte social ni por la médica.
pueblo. A pesar de ser principalmente agríco
En aquel entonces, sólo había una partera
la, la zona está salpicada de pequeños nego
en la clínica, totalmente responsable de la ope
cios y fábricas, incluyendo una fábrica de ga
ración diaria del establecimiento. Ella me lla
lletitas y una refinería de azúcar. En resumen,
maba únicamente cuando el doctor era nece
Pithiviers es la clase de lugar que raramente
sario para practicar una cesárea o aplicar los
se muestra a los turistas. Es sólo otro peque
fórceps. Como cirujano, yo había sido entre
ño pueblo anónimo. En realidad, la mayoría
nado para hacer cosas como extraer vesículas
de los franceses asocian a Pithiviers con un
y reparar piernas fracturadas; estos procedi
bizcocho popular hecho y nombrado por el
mientos parecían tan sólo una extensión na
pueblo. No tienen la menor idea de dónde se
tural de mis habilidades técnicas. Como obs
encuentra Pithiviers.
tetra, lo único que tenía eran las nociones
Cuando empecé mi trabajo aquí, me enteré
más elementales de esta práctica.
25
de las montañas a último momento para dar a luz y se me pedía hacer una cesárea o inter venir con los fórceps o cuidar de los desga rros uterinos. Poco después, cuando se me trasladó a Guinea, pude ser testigo del cons tante esfuerzo, entre las mujeres africanas, que querian pararse o acuClillarse durante el trabajo de parto, en tanto los doctores euro peos y las parteras insistían en que ellas te nían que dar a luz acostadas. Por aquel en tonces, por supuesto, yo estaba de acuerdo con los doctores y nunca reflexioné mucho sobre estos episodios aislados.
Entrando en el Hospital de Pithiviers
Cuando vine a Pithiviers, naturalmente, me
basé en gran parte en la guía de la partera. Gisele, que había estado en la clínica por bas tante tiempo, tenía mucha experiencia. Ga
Mi experiencia previa en obstetricia era mí nima y diluida a través de todos los años que habían pasado. Durante los años 50, había hecho seis meses como interno en una gran sala de maternidad de Paris. En aquellos días era común tener 5 ó 6 mujeres haciendo tra bajo de parto y ocupando una misma habita ción grande. El nacimiento tenía lugar en una atmósfera tipo fábrica, donde el miedo era contagioso. Los doctores a menudo usaban fórceps y raramente hacían cesáreas. Me acuerdo del jefe de obstetricia sólo por un fa moso estilo de fórceps Oos fórceps Suzor) que recibieron esta denominación por él. Durante esta etapa de internado me interioricé muy poco del tema y jamás se me cruzó por la ca beza que algún día practicarla obstetricia. Más tarde, durante mi servicio militar co mo cirujano de guerra en la región berebere de Argelia, fui ocasionalmente llamado cuan do era necesaria la atención obstétrica. De tanto en tanto, mujeres embarazadas bajaban
brielle, que se unió a nosotros después de mi llegada, era joven, llena de energía, recién sa lida de la escuela y muy entusiasta, sobre to do con la psicoprofilaxis, "el método Lama ze"•. No era tanto lo que decían o hacían lo que me hizo realmente poner más atención a la obstetricia por primera vez, sino más bien el hecho de que el intervalo de los quince o veinte años entre los tiempos en que cada una había estudiado la profesión de partera, había ocasionado semejante diferencia en sus prácticas respectivas. Por ejemplo, Gisele, que era mayor, esperarla pacientemente para que el bebé naciera. Al final del alumbramien to, ella diria simplemente: "No lo retenga; re lájese, déjese ir..." Gabrielle, en cambio, esta ba deseando preparar a la mujer desde el •
La
psicoprofilaxls es un método d e preparación para el
alumbramiento, desarrollado en lo años Lamaze, médico francés. una mujer
tiene que
La
escribir o
esto es lo contrario
EL NACIMIENfO RENACIDO - 26
por Fernando
la misma mane leer o a nadar. . . de nuestra actitud.
aprender a dar a luz de
ra que tenemos que aprender a
En un sentido,
50
base de este enfoque es que a
principio del embarazo, para ayudarla con la respiración durante el trabajo y alentarla pa ra que se controlase durante el alumbramien
"¿Por qué cortan el cordón umbilical tan rápi
to. En las etapas finales del trabajo, Gabrielle
cuela".
do después del nacimiento?" A menudo res pondían: "Porque así nos enseñaron en la es
daba órdenes precisas, por ejemplo: "Inspi
Pero a medida que íbamos explorando las
re. . . espire. . . controle su respiración . . . em
razones por las cuales hacíamos ciertas co sas, poco a poco aparecía un cambio apenas
puje. . . " Para mí, sus diferencias proyectaron nueva luz en la práctica obstétrica; me di cuenta de que ésta era algo más que t�cnicas y mecáni
perceptible. Nos volvimos menos dogmáticos y empezamos a experimentar. Un día, una
cas. Paulatinamente comprobaba en qué me
partera le dio a un bebé un baño para cal marlo, a pesar de que sólo tenia dos días. De
dida la experiencia del trabajo de parto de
ahí en adelante, nunca más aceptamos la "re
una mujer dependía de la personalidad y acti
gla" que prohíbe bañar regularmente a los
tud de quien la atendía. Las mujeres eran
bebés hasta que el cordón umbilical se haya
atraídas por el joven entusiasmo de Gabrielle
caldo. Otro día, el bebé encontró el pecho de
y expresaban mayor interés por ella, pero se
su madre enseguida de nacer y, para asom
guramente tendrían un nacimiento mucho
bro de todos, empezó a mamar en la sala de
más tranquilo con Giséle.
partos. Pregunté por qué semejante evento
Aunque oficialmente seguí siendo cirujano, a medida que el tiempo fue pasando, me de
tan gratificante ocurría tan raramente. La res puesta, por supuesto, era simple: en un hos pital es muy común separar a la madre del ni
diqué más y más a la unidad de maternidad. Advertí que los principios en los cuales había basado mi trabajo quirúrgico -simplificación
sarlo, medirlo y hacerle la revisación general.
y eliminación de procedimientos inútiles
Incluso estando juntos, ellos se sienten obser
también podían aplicarse en obstetricia. Las
vados. No tienen privacidad. Una y otra vez,
experiencias pasadas como practicante ya me
esas nuevas experiencias nos hicieron cues tionar la obstetricia convencional. No sabía
habían hecho creer que el tiempo y la pacien cia son los aliados más útiles; la intervención activa debería ser usada con mucha parsimo nia y en casos especiales. En obstetricia ---<:o
ño en el momento del nacimiento, para pe
mos a dónde íbamos, pero íbamos a alguna parte, por nuestro camino. Gradualmente, mientras nuestra práctica
mo en cirugía general- yo estaba convenci
cambiaba, también fue cambiando nuestra
do de que interferir lo mínimo crea muchos
actitud. Antes de venir a Pithiviers, yo sabía
menos riesgos inmediatos y, al mismo tiem po, produce mejores resultados a largo plazo.
muy poco del mundo, aparte de los doctores y los pacientes. Habla estado mirando a la
Paradójicamente, mi real falta de entrena
gente desde una perspectiva médica muy es
miento en obstetricia
trecha; habla compartido el punto de vista convencional del nacimiento como un "pro
hizo que fuera más a
bierto para aprenderla a través de la expe riencia. Me encontré cuestionando los proce
blema médico" que requería "soluciones" téc
dimientos más aceptados: "¿Por qué rompen
nicas. Habla crecido oyendo a los doctores
las aguas?" les preguntaba a las parteras.
hablar de las mujeres embarazadas como
MICHEL ODENf - 27
"pacientes". Cierta vez di una conferencia en
era una experiencia intensa, íntima y envol
una universidad alemana; un obstetra estaba
vente. Como doctor, yo estaba lejos de ser la
traduciendo simultáneamente. Cuando yo
figura central del drama; a veces, hasta me
usaba la frase "mujer embarazada" o "mujer
sentía como un intruso. El criterio preponde
en trabajo de parto" él las traducía como "pa
rante que convierte al alumbramiento en un
ciente" y no podía entender por qué los estu
evento médico, transformó en todo el mundo
diantes objetaban tan vehementemente. Por supuesto, esta actitud no está confinada sólo a la obstetricia. A menudo hay artículos que
las unidades de maternidad en laboratorios de alta técnica y a los seres humanos en objetos
rial quiere decir gente. En todo campo médi
pasivos. En Pithiviers, por el contrario, nues tro reconocimiento del alumbramiento como una experiencia emocional y sexual, nos hizo
co, esta mentalidad contribuye a un incremen
sentir como simples facilitadores, una especie
to en las drogas, en el monitoreo electrónico
de equipo de apoyo, cuya tarea era intervenir
y en intervenciones quirúrgicas. En Pithiviers,
lo menos posible. Puesto que mucho de lo que estábamos ha
se refieren a "métodos" y a "material". Mate
a medida que empecé a conocer a mis "pa cientes" como individuos· y no simplemente
ciendo era nuevo para nosotros, buscamos
como casos médicos, tuve que revisar mi
fundamentarlo en un contexto intelectual.
perspectiva.
Dos nuevas parteras, Dominique y Marie-Jo
A pesar de que yo era cirujano, las mujeres
sé llegaron a la clínica en 1969 y se acopla
a menudo se acercaban a mí para hablarme
ron fácilmente al espíritu de exploración. Re
de variados temas, desde el matrimonio hasta
cibidas hacía poco tiempo, conocían la obste
el control de la natalidad. En los grupos de
tricia únicamente como era practicada en los
planificación familiar a los que me uní para informarme, los debates fueron llevados fuera
hospitales donde la enseñaban, pero eran aventureras y estaban listas para reconsiderar
del plano médico de referencia, más allá de
cuanto habían aprendido. Todos leímos "Me
los temas de prevención y alumbramiento, a
dica( Nemesis " de !van lllich y ampliamos su
los de sexualidad, sentimientos personales y
observación respecto de que los doctores son
expectativas sociales. La gente empezó a de
a menudo esclavos y no dueños de la tecno
cir por qué ellos querían o no tener chicos;
logía que aplican en la práctica de la obstetri
comentaban sus experiencias privadas de tra
cia, en las sociedades industrializadas. Leyen
bajo de parto, de parición y amamantamien
do "Nacimiento sin Violencia" de Federico
to; también hablaban de las conexiones suti
Leboyer, sentimos inmediata simpatía por su
les entre fertilidad y las propias imágenes de
preocupación acerca de la experiencia del na
mujeres y hombres. Me fui convenciendo de
cimiento del niño.
que el alumbramiento, lejos de ser un "pro blema médico", era en general una parte in tegrante de la vida sexual y emocional.
mayor parte de los doctores: un lenguaje que hablaba a nuestra sensibilidad y emociones
Leboyer creó un lenguaje nuevo para la
Por supuesto, en nuestra clínica yo vivía es
tanto como a nuestro intelecto. Nos mostró
ta verdad diariamente. Tanto para las mujeres
al recién nacido, no como un objeto al que
como para los hombres, el alumbramiento
no le es posible ver, oír o sentir, sino como
EL NACIMIENTO RENACIDO - 28
Típica sala de partos
MICHEL ODENI" - 29
una criatura humana con mucha necesidad de calidez y alimento. Resumiendo, Leboyer fue el primer doctor que expresó lo que mu chas mujeres saben intuitivamente sobre sus bebés, a pesar de que los consejos de los es tablecimientos médicos digan lo contrario. En Pithiviers, Leboyer nos dio un encuadre para comprender nuestras acciones y ponerlas en práctica. Bajo su influencia, nuestra sala de partos se convirtió en un lugar mucho más quieto y pacífico, más benevolente para el bebé. Alentamos el contacto prolongado en tre madre e hijo. Por ejemplo, las madres po dían alimentar a sus bebés inmediatamente después del nacimiento. La actitud alerta que observamos, tanto en cuanto a la madre co mo al niño, confirmó nuestra decisión de no utilizar drogas o intervenir si no era nece sario.
Michel Odent y la partera Marie.José Matheault
Respecto de mí, la vida parecía estar tiro neándome hacia dos direcciones diferentes. Por una parte, estaba pasando cada vez más tiempo en la unidad de maternidad. Por otra, estaba mi práctica de cirugía, que todavía me intrigaba, enfrentándome con problemas di
En estos tiempos, la atmósfera en Pithi viers era de gran excitación. Experimentamos aún con más frecuencia, probando nuevas prácticas, y desechando otras. Un día, por
todo de tratar fracturas difirió de los procedi
ejemplo, durante un alumbramiento, dejamos que la cabeza del bebé saliera totalmente por
mientos convencionales, más o menos de la misma manera en que los alumbramientos en
la madre para que la cabeza pasara. Otro día
vergentes, aunque tenían su relación. Mi mé
Pithiviers difieren de la obstetricia convencio nal. Pero cuestionar seriamente los funda mentos de la traumatología moderna y de la
sí misma, sin tocarla o ayudar al perineo de decidimos que los guantes de goma ya no eran necesarios. Cada nuevo paso que dába mos afectaba a cada uno de nosotros, en for
obstetricia al mismo tiempo, estaba más allá
ma diferente. Para Dominique, fue muy difícil
de mis posibilidades. Tuve que tomar una de
dejar de usar los guantes, mientras que Ma
cisión. En 1972, un colega se encargó de la
rie-José tuvo mucha más dificultad en aban
dirección de traumatología y ortopedia, dis
donar la práctica común de acelerar la labor
minuyendo mis continuas responsabilidades como cabeza de la unidad de cirugía. Final
bebé aún no nacido.
mente, estaba libre para dedicarme por com pleto a la obstetricia.
rompiendo las bolsas de agua que rodean al Una psicóloga que acababa de dar a luz en la clínica empezó con grupos, los viernes por
EL NACIMIENTO RENACIDO 30 -
Mujer en trabajo de parto, con la partera Dominique Pourré en la "salle sauvage"
la noche, en los cuales los futuros padres po dían venir a oír todo sobre el trabajo que es
convencional con una mesa de obstetricia, lu
tábamos haciendo. Estas reuniones muy
rúrgica. El ambiente era opresivamente médi
ces fuertes y una multitud de parafernalia qui
pronto incluyeron no sólo a mujeres y pare
co e impersonal, sin duda incompatible con
jas de los aledaños, sino que interesaron a
nuestra óptica transformada acerca del alum bramiento como una experiencia íntima e in
personas de lugares lejanos que tenían razo nes específicas para buscarnos. Una cantidad
cluso sexual. Además, podíamos ver que la
de personas inspiradas por Leboyer, por
mesa de partos (el mueble más prominente
ejemplo, vino a Pithiviers para poder traer al
. en el cuarto) limitaba seriamente la libertad
mundo a sus hijos de la manera como ellas
de acción de la futura madre. Con su sola
querían, suavemente. Otros vinieron sólo pa
presencia, sugería una posición reclinada y
ra hablar, para compartir sus sentimientos de
daba a la mujer muy poca elección, aparte de
esperanza, de miedo, de desilusión, de entu
acostarse sobre su espalda y empezar el tra
siasmo.
bajo. Esta tradicional posición dorsal es, de
Naturalmente, semejante atmósfera, dio lu
hecho, la peor alternativa posible fisiológica
gar a una mayor expresión de libertad duran
mente hablando, tanto para la madre como
te el trabajo de parto y durante el nacimien
para el niño: cuando una mujer yace sobre su
to. Sin embargo, todavía había límites. Nues
espalda, el útero agrandado comprime los va
tro ambiente de alumbramiento seguía siendo
sos sanguíneos más importantes, lo cual dis
lo que siempre había sido: una sala de partos
minuye la cantidad de sangre oxigenada que
MICHEL ODENf 31 -
Bélgica, siglo diecisiete . Un nuevo personaje entra en la escena tradicional del nacimiento: el científico masculino, con su caja que contiene los fórceps de metal.
entra en la placenta y sale de ella. Además,
creencia de que un lugar para dar a luz tiene
semejante posición hace imposible que la
que parecerse más a un sitio donde se hace
mujer aproveche la gravedad para facílitar el alumbramiento.
el amor que a un cuarto de hospital. Este cuarto de alumbramiento, sin embargo, re
Con el objeto de alentar a las mujeres para
presentaba más que un decorado atractivo o
que se sintieran libres, reemplazamos nuestra
una estrategia para alentar una variedad de
antigua sala de partos por una nueva, dise
posiciones de trabajo: era un lugar donde la
ñada por mujeres que habían dado a luz en
mujer podía hacer exactamente lo que querí
Pithiviers. Nuestra "salle sauvage" (o ·cuarto primitivo, como lo llamamos), ha sido conce-
a; sentirse libre para hacer ruido, actuar y ·
moverse como deseara. Fue nuestro primer
bida para la intimidad, el confort y la libertad
paso concreto para devolver el alumbramien
d e acción . Es pequeño. Se tiene más
to a las mujeres. Hacer eso, devolver el
fácilmente un sentimiento de privacidad en
alumbramiento a las mujeres, no es ambición
un cuarto pequeño, pintado en cálidos y ale
pequeña. Después de todo, la historia de la
gres colores y amoblado con una plataforma
obstetricia es principalmente la historia de la
firme y decorada con almohadones de colo
exclusión gradual de las madres, de su rol
res brillantes (pero sin cama o mesa que pu
central en el proceso del alumbramiento. La
diera imponer una posición de trabajo parti
obstetricia moderna se originó en el siglo
cular). Es íntimo -como en casa- acogedor
XVII en Francia, cuando los doctores entra
y está mucho más de acuerdo con nuestra
ron por primera vez en el cuarto del alum-
EL NACIMIENTO RENACIDO 32 -
bramiento y asumieron el rol tradicional de las parteras. Por primera vez se les pidió a las mujeres dar a luz tendidas sobre sus es paldas, para que así los doctores pudieran usar los fórceps con más facilidad. La tradi ción dice que esta práctica comenzó cuando las amantes de Luis XN tuvieron que sopor tar el trabajo de parto en esta posición, para que él pudiera tener una mejor vista del naci miento de sus hijos, desde un escondite ubi cado detrás de una cortina. Desde entonces, el obstetra -con los instrumentos en la ma no, controlando- siempre ha estado parado ante una mujer pasiva. (Por otra parte, la pa labra misma "Obstetricia" deriva del latín ob + stare, que quiere decir "estar parado an
te"). La posición dorsal y la forzada pasividad que ésta impone en la madre, hoy se han vuelto casi universales en nuestras socieda des industriales. Como también lo ha sido el reemplazo de las parteras por doctores, lo que indica una profunda equivocación sobre la clase de privacidad que una mujer necesita cuando está dando a luz. Enorme cantidad de prácticas comunes de obstetricia reflejan una degradación similar del rol de la mujer durante el parto. Por ejemplo, la presteza con la cual los doctores prescriben hoy el guardar cama, la costura del cérvix y la parálisis del útero con drogas, para prevenir nacimientos prematuros; la se paración de la madre, del recién nacido; el consejo automático para que las mujeres se queden en la cama después de dar a luz y la disposición con la cual los doctores aconsejan a las madres discontinuar el amamantamien to, rebajan el rol central de la madre. La psicoprofUaxis convencional hace lo mismo, pero de un modo más sutil. Con este método, en realidad, la mujer colabora para
El momento del nacimiento . . . negarse a sí misma, adoptando u n sistema que "controla" su respuesta al dolor, su respi ración, su posición e incluso los sonidos que ella produce, los aspectos más fundamentales del comportamiento de una mujer en trabajo de parto. Y a pesar de que las observaciones de Leboyer sobre la experiencia del niño du rante el alumbramiento dieron origen a una nueva concientización en nuestra clínica y en el mundo en general, los profesionales del alumbramiento lamentablemente lograron in terpretar su idea de "parto sin violencia" co mo el "método Leboyer", en el cual la aten ción está focalizada en el niño, con exclusión de la madre. Por desdicha, el mismo fenóme no existe en el Este como en el Oeste. En una reciente visita que hice a China, me de cepcionó mucho ver que, a pesar de que la mayor parte de los obstetras son mujeres, ha cen lo posible por copiar las prácticas occi dentales y cometen exactamente los mismos errores.
MICHEL ODENT 33 -
cambios similares en sus niveles de concien cia. Sus ojos miran a lo lejos, se olvidan de las convenciones sociales, se olvidan de sí mismas y de su autocontrol. Muchas de ellas dejan escapar un grito característico, en el momento del parto. Sin embargo, hemos no tado que las mujeres en dicho estado están le jos de estar imposibilitadas, perdidas o "sin experiencia". Por el contrario, actúan delibe rada y espontáneamente, buscando y encon trando con facilidad las posiciones que más les convienen, y que son justamente las más eficaces, fisiológicamente hablando. Sin que nadie les diga nada, saben cómo sostener y alimentar a sus bebitos inmediatamente des pués del parto, de la misma manera que el recién nacido sabe cómo buscar el pecho de su madre. En nuestra clínica, esto parece Nuestra "salle sauuage" es parte de nues
aplicarse a todas las mujeres, sin tener en cuenta su procedencia social o cultural. Des
tro esfuerzo para contrarrestar la marea que
pués de haber visto cuánto se parecían los
ha desplazado a las mujeres y las ha dejado
nacimientos tribales filmados en Nueva Gui
sólo con un rol marginal durante el alum
nea y en Africa del Sur, a los de nuestra "sa lle sauvage", estaba cada vez mas convencido
bramiento; queremos restituirles el que real mente les corresponde, que es el rol cen tral. Nuestra experiencia confirmó repetida
de que había algún componente universal en
mente lo acertado d e nuestra actitud; pudieron demostrarse l a destreza y sabidu
nacido y que -dándole el entorno adecuado, en donde se pudiera sentir libre y desinhibi
ría de la mujer que está trayendo un ser al
da- una mujer podía llegar naturalmente a
mundo.
el comportamiento de una madre y su recién
un nivel de respuesta mucho más profundo
A menudo pudimos observar -sin enten
dentro de ella misma, que por la individuali
der la causa- que las mujeres parecían olvi
dad, la educación que había recibido o la so
darse de sí mismas y de lo que sucedía a su
ciedad de donde provenía.
alrededor, durante el curso de un trabajo no
He encontrado muy difícil describir este
medicado. Cierto día, por ejemplo, filmamos
cambio en un nivel de conciencia más pro
un nacimiento con una gran cámara de tele
fundo durante el trabajo de parto. Pensé lla
visión. Minutos después que el bebé nació, la
marlo "regresión", pero sé que la palabra
joven madre dijo: "¡Lástima que no había na
suena peyorat iva, pues evoca una vuelta a
die para fotografiar al bebé!" Muchas muje
algún estado animal. "Instinto" es un térmi
res, durante el trabajo de parto, pasan por
no que va mejor, a pesar de que también tie-
EL NACIMIENTO RENACIDO 34 -
en estas ocasiones. Cuando las mujeres, du rante el trabajo de parto, se mueven y actú an de acuerdo con sus instintos, en realidad
se están comportando de una manera extre madamente racional; por lo común, tienen alumbramientos más rápidos y fáciles que las mujeres que no pueden hacerlo así. Por eso, en Pithiviers, hacemos todo lo posible para crear un clima en el cual las mujeres puedan, en ese sentido, "olvidarse" de sí mismas. Ahora, parece evidente que el estado ins tintivo que permite a una mujer hacer un trabajo de parto espontáneo, está relaciona do con un equilibrio hormonal especial, cu ya naturaleza exacta aún se desconoce. Sa bemos que la glándula pituitaria posterior tiene que secretar la hormona oxitocina a fin de que las contracciones uterinas
�o
miencen y continúen.• Por otra parte, sabe mos que la secreción de sustancias como la ne algunas resonancias moralizadoras. Fre cuentemente se les dice a las mujeres que deberían hacer o sentir "instintivamente" ciertas cosas y que si no lo hacen, algo les falta. Además, la palabra "instinto" a menu do es desfavorablemente contrastada -y con razón- ya que se dice que las mujeres son "instintivas" y los hombres son "racio nales", como si uno no pudiera ser instintivo y racional al mismo tiempo. Pero no es na da vergonzoso o sexista reconocer que el instinto juega un rol en nuestros comporta mientos, especialmente aquéllos que existen en la intersección de la· naturaleza y la cultu ra, como el hacer el amor, el trabajo de par to o la búsqueda, por el recién nacido, del pezón de la madre. La gente puede benefi ciarse enormemente redescubriendo y ex plotando al máximo su potencial instintivo
adrenalina puede inhibir las contracciones del trabajo de parto o intensificar sus dolo res, de la misma manera que puede inhibir el amamantamiento o también intensos mo mentos de sexualidad. Puesto que estas sus tancias, como la adrenalina, son secretadas típicamente cuando uno tiene frío o miedo, un entorno calmo, que dé confianza, en el cual la mujer se sienta relajada, siempre es beneficioso. También se ha vuelto más y más obvio que las endorfinas juegan un rol importante en el complejo equilibrio hormo nal que posibilita un alumbramiento espon táneo. Las neurohormonas con funciones parecidas a la morfina -esos "opiantes en dógenos"- actúan como calmantes natura'
Algunos estudios recientes sugieren que la oxltocina puede hacer que la gente pierda un poco la memoria. Puede enton ces jugar un rol, impidiendo un poco el dolor.
MICHEL ODENT 35 -
les, no sólo protegiendo del dolor sino tam bién suprimiendo la ansiedad e induciendo un estado general de bienestar. Por ejemplo, altos grados de endorfinas pueden inducir a las llamadas ondas cerebrales Alfa, que es tán asociadas con estados de serenidad o beatitud. Es casi como si la gente siempre hubiera sentido la presencia de esta capaci dad natural de bienestar y hubiera buscado maneras de ponerla en funcionamiento. Co rrer, por ejemplo, aumenta nuestros niveles endorfinos; rezar, meditar, hacer yoga y la acupuntura también pueden hacerlo.
El descubrimiento de los opiantes endóge nos del cuerpo explicaron algo que me había intrigado desde hacía mucho. Durante la gue rra, mientras estaba operando, me sorpren
dió en varias ocasiones encontrar soldados, con serias heridas, no medicados, y actuando como si hubieran tomado calmantes o como si sus cuerpos hubieran secretado alguna sus tancia especial para protegerlos del sufri
En efecto: se ha descubierto que cuanto más
miento. De la misma manera, las mujeres, durante el trabajo de parto, a menudo actúan
mujer, más alto es el nivel de endorfina.
difícil y largo es el trabajo de parto de una
como si estuvieran "naturalmente" drogadas
Este sistema endorfino no siempre juega
y notan lo bien que se sienten entre las dolo
un rol crucial en el trabajo de parto, sino que
rosas contracciones. Incluso he visto a muje res en trabajo, en estados virtualmente estáti
tema de premio" intrínseco que refuerza to
también funciona como una especie de "sis
cos o de éxtasis. Pero para que los poderes
dos los aspectos del comportamiento sexual y
naturales del cuerpo puedan actuar, hay que
de reproducción. Los científicos están descu
dejarlos tranquilos. Darles a las mujeres dro
briendo conexiones entre las endorfinas y la
gas calmantes y hormonas sintéticas (oxitoci
oxitocina -la hormona que, entre otras fun
na artificial)
ciones, estimula las contracciones uterinas
durante el parto -como es la
práctica común en la mayoría de los hospita
durante el orgasmo, el trabajo de parto y el
les modernos- destruirá el equilibrio hormo
alumbramiento- y entre endorfinas y prolac
nal del cual depende espontáneamente el tra
tina, la hormona que estimula la secreción de la leche. Por su parte, el amamantamiento
bajo de parto. Desde luego que el mismo do lor puede retrasar la labor, pero cuando no se
parece aumentar el nivel de la endorfina. Y
usan drogas, el cuerpo se puede defender
ya se sabe que los oplantes crean estados de
contra el dolor de manera natural y efectiva.
dependencia y también contribuyen a desper-
EL NACIMIENTO RENACIDO 36 -
tar el deseo de afectividad, de mimos. Su pre
parto, el nacimiento y el amamantamiento
sencia en grandes cantidades, tanto en la ma
sean partes integrantes de la vida sexual de
dre como en el bebé, inmediatamente des
una mujer. Como disciplina médica, se sigue
pués del alumbramiento espontáneo, sugiere
sin tener en cuenta el potencial impacto ne
que puede perfectamente existir una base
gativo de los doctores masculinos y de los ex
hormonal en el proceso del apego que ocurre
traños, durante el desarrollo del trabajo de
en las primeras horas y en los primeros días
parto, e igualmente se ignora la importancia
después del alumbramiento.l En general, la
de parteras y de ayudantes femeninas. Du
existencia de estas complejas neurohormonas
rante muchos años, nuestra práctica en Pithi
confirma nuestra creencia en la intercone
viers ha cuestionado la obstetricia moderna, a
xión de todos los aspectos de la vida sexual y
tal punto que, hasta la misma palabra "obste
-ya que la secreción balanceada de hormo
tricia", parece extranjera y totalmente inade
nas es un asunto delicado, con alta respuesta
cuada para nosotros.
a condiciones externas- se presenta otro ar
Nuestra clínica ha crecido. Ahora hay siete
gumento poderoso para mostrarse renuente
parteras. El número de nacimientos aquí se
a interferir en la fisiología del proceso del
ha quintuplicado durante los últimos veinte
parto.
años. Como todos los obstetras, aquí en
Permitiéndoles a las mujeres dar a luz a sus
Pithiviers siempre estamos acosados por el
niños, dejándolas. libres para trabajar como
omnipresente espectro del riesgo. Pero nues
quisieran, Pithiviers asumió definitivamente
tras experiencias han mostrado claramente
su carácter muy particular. Por donde mirára
que una actitud que "desmedicaliza" el alum
mos, el trabajo de parto y el parto se habían
bramiento, devuelve dignidad y humanidad al
tornado "medicalizados", más tecnológicos,
proceso del nacimiento y reintegra el control
mientras que en nuestra clínica, estas situa
a la mujer, es también la actitud más segura.
ciones eran simplemente asuntos de madre e
Nuestra política da resultados desde cualquier
hijo. En todas partes veíamos a los doctores
punto de vista, porque hemos advertído una
incrementar el uso de drogas y su interven
marcada disminución en el riesgo, tanto para
ción artificial, mientras que en Pithiviers man
la madre como para el niño; en efecto, nues
teníamos nuestras intervenciones al mínimo
tros resultados se pueden comparar favora
absoluto y considerábamos a las drogas, in
blemente con los mejores del mundo. En un
necesarias y dañinas. La obstetricia actual to
momento en que la mayoría de los países in
davía está centrada en el rol del doctor y en
dustrializados no logra mantener las tasas de
su preocupación sobre cómo controlar y do
mortalidad perinatal* por debajo del diez por
minar mejor el momento del parto. Esta acti
mil, sin incrementar simultáneamente la tasa
tud ha dado como resultado la concentración
de intervenciones y de cesáreas (que a menu
sistemática de los nacimientos normales en
do es tan alta como el veinte por ciento), en
entornos equipados con tecnología de avan
Pithiviers, sin ningún ocultamiento, hemos
zada y vigilancia electrónica de rutina. La obstetricia moderna no sabe nada y le impor ta aún menos el hecho de que el trabajo de
'
Perinatal se refiere a los bebés de más de seis meses de gestación y antes de la edad de siete días.
MICHEL ODENT
-
37
obtenido las mismas bajas tasas de mortali
cosas que nosotros, para las mujeres que de
dad, con índice de cesáreas de sólo seis a sie
sean reivindicar el alumbramiento, para los
Ésta es la más auténtica eviden
padres y madres que quieren experimentar el
cia de que nuestra actitud, que transforma la
nacimiento como un hecho íntimo, para los
te por ciento.
experiencia del alumbramiento, es una alter
clínicos que reciben con beneplácito un re
nativa inteligente y segura.
planteo radical de su práctica, he aquí cómo
Para aquéllos que se preguntan las mismas
sucede el alumbramiento en Pithiviers.
EL NACIMIENTO RENACIDO 38 -
J
Una madre de Inglaterra Después de dos nacim ientos normales durante los cuales, a pesar de todo, sufrí todas fas intervenciones comunes de la obs tetricia convencional, había decidido que mi tercer alumbramiento tenía que ser di feren te. Si todo iba bien, estaba preparada para encontrar una partera e insistir en te ner el bebé en casa. Pero durante una revi sación, me fue confirmado a /as treinta y cuatro semanas, que el bebé venía con pre sentación pelviana y no había miras de que se pudiera dar vuelta. En el hospital local, el doctor sugirió que se decidiera una fecha para que se me indujera el parto y dijo que se podía usar una peridural y los fórceps. Si eso no funcionaba, comprendí que /as cesáreas eran bastante normales para los nacimien tos de ese tipo, ante la presunción de dificultades. La vieja depresión volvió. Yo había desea do desesperadamente que el nacimiento de este bebé fuera natural y todos /os hospita les posibles eran parecidos a los de mi últi ma experiencia, en la que había sentido que el bebé me había sido quitado. En esa ocasión, mien tras me estaban su turando, yo le pregunté al doctor: "¿Por qué durante el alumbramiento somos menos eficien tes que los animales? Ya sentía que me habían arruinado el alumbramiento y estaba preo cupada por la can tidad de "in tervención de rutina" en lo que yo había considerado que era un hecho fisiológico normal. Su res puesta fue: "Es completamente diferente para los animales". Implicaba que las mu jeres no eran eficientes durante el alumbra miento. Yo había visto a este doctor duran te visitas prenatales y parecía haber com-
prendido mis deseos para el alumbramien to. A pesar de esto, había arreglado mi tra bajo de parto para su propia conveniencia y mi sistema nervioso quedó muy alterado, durante muchos meses. Tuve una depresión postparto y yo sabía que el origen no era simplemente hormonal. Me sentí enorme mente defraudada. Ahora, una vez más, mis esperanzas para tener una experiencia mejor parecían completamente perdidas. Para mí, éste iba a ser otro bebé de fábrica. Había oído hablar de Pithiviers; yo sabía que había m ujeres que viajaban allí desde otros países. Sin embargo, difícilmente po día tenerse en cuenta como una posibili dad real para mí; estaba embarazada de treinta y siete semanas. Sin embargo, lla mé al Doctor Odent algunos días después, cuando había decidido que me iba a arre pentir para siempre si no tomaba fuerzas y hacía un esfuerzo por i r a Pithi viers. Le pregunté si podía ir. El me dijo: "¿Por qué no?" Cuando le dije que el bebé venía de nalgas, él respondió: "No importa". Inme diatamente me sentí confiada y con m ucha energía, ante la perspectiva del viaje. Tanto mi esposo como yo sabíamos muy bien que el tiempo sería muy corto, en ca so de emergencia. Además, existía la inevi table reaparición de m i depresión; antes de que me decidiera a ir a Pithiviers, ya había empezado otra vez. Yo sabía que no podría volver a vivir la depresión que había expe rimentado después de m i última i n terna ción y, al mismo tiempo, pretender funcio nar bien como esposa y madre para tres ni ños pequeños. Durante m i última visita prenatal a In glaterra, yo estaba casi desesperada cuan do la enfermera me explicaba con la ayuda
MICHEL ODE.NT 39 -
de una muñeca, cómo nacían los bebés que venían en la posición en la que estaba el m ío. Me oía a mí misma protestando como nunca antes en mis tres embarazos. Le dije a mi doctor: si usted me manda a ese hos pital otra vez, eso ua a term inar conmigo. La enfermera me hizo sentir avergonzada exclam a ndo: "¡SI ese bebé la oyera ha blar!" Inmediatamente me di cuenta de que ya había rechazado "el sistema" por primera vez en mi vida. Ya no me importa ba lo que pensaran si yo hacía alguna his toria. Previamente había sido muy educada y colaboradora con todo el personal médi co, pero esto nó me había llevado a ningu na parte; de hecho, mis hijos habían nacido gracias a mi esfuerzo y probablemente ésta
fuera mi última oportunidad para tomar lo que la vida tenía para ofrecerme. Por una vez tenía que asumir mis propias responsa bilidades, y en Pithiviers me ofrecían una alternativa que me atraía. Incluso la distan cia me atraía. Sentía una especie de nostal gia animal por escapar de todo, tener pri vacidad y encontrar u n lugar especial don de dar a luz. Tenía que llegar a Pithiviers antes de que los trabajos de parto comen zaran. Este bebé iba a ser mío y mío sin riesgos. Le dije a mi doctor: "Las cosas es tán cambiando, ¿no es cierto?" "Sí", res pondió, "pero esto sucede en un país ex tranjero ". Mi esposo le informó más tarde que ahí era exactamente donde nosotros íbamos a ir.
EL NACIMIENTO RENACIDO - 40
ANTES Cada mujer embarazada llega a nosotros
mujeres que hacen ejercicio con regularidad,
con una historia personal única, una familia y
están mejor preparadas para el trabajo que
una cultura que influyen mucho en su trabajo
aquéllas que llevan vidas sedentarias. Una
de parto. En algunas sociedades, éste parece
mamá embarazada que no tiene ninguna se ñal de estrés, desde luego que también va a
ser más fácil que en otras. En algunas fami lias, también hay virtualmente una tradición·
acercarse al trabajo de parto en mejores con
de nacimiento fácil. Durante el alumbramien
diciones.
to, una mujer trae consigo la experiencia de
Por supuesto, no se pueden borrar milagro
toda su vida, remontándose hasta su propia
samente las preconcepciones y las experien cias pasadas de una mujer, pero puede crearse
infancia y nacimiento. Nos interesa saber qué es lo que cada mujer sabe sobre su propio
una atmósfera que va a alentar a las mujeres y
nacimiento, porque a menudo hay una cone
sus compañeros a vivir el alumbramiento de
xión entre cómo fue su nacimiento y cómo
forma diferente. Es especialmente importante
ella misma va a traer a su hijo al mundo. Si
que ellas se sientan como en casa, en nuestra
por ejemplo, una mujer nos dice que su ma
unidad. Las mujeres dan a luz mucho más
dre estaba anestesiada y que ella nació con
confortablemente si están rodeadas por caras
fórceps en un gran hospital parisino, tene mos razones para pensar que su propio tra
familiares, en un ambiente familiar, como bien
bajo va a ser difícil. Si, por el contrario, cuen
en casa. En casa, por supuesto, no sólo las paredes y el mobiliario son familiares, sino
ta que nació simplemente, en casa, probable
lo saben aquéllas que eligen tener sus bebés
mente va a tener un trabajo más fáci l . Ade
también los ruidos, los olores y los colores. Sin
más, los hábitos cotidianos de una mujer tie
embargo, ya que lo más común en estos días
nen tanta influencia como sus actitudes men
son los alumbramientos en hospital, nuestro
tales o su experiencia, para dar a luz. Las
propósito es hacer que el lugar del nacimiento
41
mujer embarazada, especialmente, necesita contacto con otras personas; la presencia de una comunidad que la apoya, la hace sentir
más feliz y más segura. En Pithiviers, hemos designado una gran sala como "lugar de reu nión", justamente para este propósito. Aquí todo el mundo se encuentra para charlar, pa ra asistir a clases o discutir temas. Dejamos este cuarto en un confortable desorden, a propósito. La atmósfera informal tranquiliza a la gente. Los jueves por la noche, ofrecemos una presentación de Pithiviers. Esta reunión suele ser el primer contacto que la mujer o la pare ja tiene con nuestra clínica. De vez en cuan do, gente que no ha planeado dar a luz aquí, también viene en busca de información para que se le ayude a tratar un nacimiento no convencional, en alguna otra parte. Empeza se parezca Jo más posible a una casa. Para
mos con un recorrido del Jugar. Después de
que las futuras madres se sientan cómodas, les
visitar una sala de partos convencional, con
mostramos la unidad y les presentamos a las parteras y asistentes que estarán presentes du
sus paredes blancas, luces brillantes, misterio sas máquinas electrónicas y una mesa de par
rante el alumbramiento. Además, las invita
tos con barras y estribos*, vamos directamen
mos a regresar cada vez que quieran, y hemos
te a nuestra "salle sauvage", en donde nacen
proyectado una serie completa de reuniones
casi todos los bebés en Pithiviers. 8 contraste
semanales, para que se interesen en venir.
entre las dos salas es muy grande. En la "sala
Algunas mujeres tienen necesidad de volver
primitiva", las paredes están pintadas con co
a menudo, casi cada día. Otras acuden por primera vez el mismo día del nacimiento. Es
lores cálidos, las cortinas son color crema y el suelo es color anaranjado. Las luces pueden
tas mujeres, que parecen estar muy calmas
ser bajadas fácilmente. Tenemos mucho cui
con respecto al trabajo de parto, tienden a es
dado en crear una atmósfera especial en este
tar sólidamente enraizadas en sus propias co munidades y, en consecuencia, sienten menos necesidad de participar en las reuniones del
•
La única razón por la cual nosotros aún tenemos salas de par tos convencionales, es que formamos parte de un hospital es tatal
y
estamos obligados a contar con un equipo estándar.
A
hospital, antes del alumbramiento, que mu
pesar de que a veces usamos la mesa para suturar algunos
chas de las otras futuras madres más aisladas.
desgarramientos, nunca es utilizada para el alumbramiento. Si
En estos días en que la gente ya no se habla en el mercado o en la calle, el aislamiento se ha vuelto una fuente general de ansiedad. La
la
sala de
partos alternativa está ocupada, siempre es posible,
incluso en una sala
de partos convencional, cerrar las cortinas, y rápida
poner una sábana en el suelo, introducir más calor mente crear la atmósfera requerida.
EL NACIMIENTO RENACIDO 42 -
En la sala de encuentros
MICHEL ODENT 43 -
cuarto, ya que el proceso del alumbramiento,
En un cuarto vecino, la atmósfera es com
como las experiencias sexuales, son suma
pletamente diferente, aunque también simple.
mente influidas por el entorno: por la luz, los
Los azules predominan. Las paredes pintadas
colores, los muebles. Además, hemos sacado
de color aguamarina evocan las olas en el
todo mueble que sugiera tomar una posición
océano. Cortinas azul marino y grandes plan
particular. Cuando el alumbramiento sucede
tas verdes se suman al sentimiento de sereni
en casa, lo que suele haber es un cuarto con una cama, que sugiere fuertemente una posi ción reclinada para la labor; en el hospital, la
dad. En el medio del cuarto hay una pileta cir cular, color azul cielo, hecha a medida para nuestras necesidades. Hemos descubierto que
mesa horizontal no le da a la madre otra al
reposar en aguas tibias, ayuda a las mujeres,
ternativa más que la de acostarse sobre ella.
durante el trabajo, para relajarse y sentir me
En nuestra sala de alumbramiento, tenemos
nos dolor. Las mujeres pueden sumergirse en
una plataforma grande, baja, cuadrada y con
ella, sin temor.
almohadones, donde la gente puede moverse
Después de esta rápida recorrida, hay un
libremente. Sin desentonar con la vista gene
período general de preguntas y respuestas,
ral del cuarto, hay una silla de madera, para
donde se discuten cuestiones prácticas, médi
partos, realizada por un carpintero cuyo bebé
cas y administrativas. Siempre aclaro con
nació en Pithiviers. También hay un aparato
exactitud lo que hacemos en Pithiviers para ayudar a las mujeres en trabajo de parto y a
de estéreo, una colección de discos y, cerca, un refrigerador con agua, jugos de fruta y va sos.
sus nuevos bebés. La gente que viene a estas reuniones comprende con rapidez que no te-
EL NACIMIENTO RENACIDO 44 -
nemos casi nada que enseñarles en el sentido convencional de la "preparación para el par
respira en forma diferente mientras camina,
to" , y que rechazamos por completo sus as
mientras está de rodillas, mientras está sentada
mientras está parada, mientras está acuclillada,
pectos prescriptivos. Sobre todo, no enseña
o acostada o apoyada en algo o flotando en el
mos una posición de parto "correcta". En
agua. Nuestra actitud está directamente en
oposición a la imagen tan profundamente
conflicto con cualquier psicoprofilaxis conven
grabada en nuestras mentes, de que todas las
cional, como el método Lamaze, que entrena
mujeres deben acostarse durante el trabajo de parto (en francés, el verbo para "trabajo de
a las mujeres a controlar su respiración, sus pensamientos y la expresión de sus emocio
parto" y para "dar a luz", accoucher, en reali
nes. En Pithiviers, explico, hacemos exacta mente lo contrario. En el día del nacimiento, alentamos a. las mujeres que están en trabajo
dad, quiere decir "estar acostada"), subraya mos la libertad de la futura madre de moverse como quiera. Lo que sí hacemos es explicar
de parto para que se rindan a la experiencia,
algunos de los inconvenientes fisiológicos de
para que pierdan el control, olviden todo lo
estar acostadas para dar a luz y aseguramos a
que han aprendido, todas las imágenes cultura
las mujeres que las mejores posiciones para
les, todos los modelos de comportamiento.
ellas son las que encuentran ellas mismas.
Cuanto menos recuerde una mujer lo que ha
Tampoco les enseñamos técnicas de respira
aprendido sobre el "buen" método de tener un
ción. Es imposible prescribir un método de
bebé, más fácil será para ella.
respiración para el trabajo de parto sin indicar
También describo un fenómeno típico de
una posición particular para dar a luz; la gente
los últimos momentos antes del alumbramien-
MICHEL ODENT 45 -
to: la mujer que entra en la parte final de las
jueves a otro. Algunas veces, las preguntas se
contracciones, a menudo siente la necesidad
centralizan en el amamantamiento o en el
de pararse, para flexionar sus rodillas, mien tras se cuelga del cuello de su compañero. En
uso y la eficacia de los exámenes de ultraso nido o en la importancia de una dieta adecua
preparación para este momento, sí que tene
da. La nutrición se está volviendo un tema
mos algo para enseñar, pero no a la madre.
más frecuente en nuestras reuniones de los
Podemos enseñar a su compañero, cómo sos
jueves, con mucha razón; la naturaleza crucial
tener a su mujer durante sus últimas contrac ciones, por las axilas, sin contraer un dolor de
de los hábitos dietéticos ha sido subestimada
espaldas. El padre del bebé, generalmente, es
pocas veces se enfocan en el dolor. Claro, se
tá muy interesado con la perspectiva de seme
habla sobre el dolor del alumbramiento, pero
en el pasado. Curiosamente, las discusiones
jante participación activa, como también lo
siempre enfatizamos que el dolor varía de
están otros posibles ayudantes.
mujer a mujer y que la calidad misma del do
Las conversaciones difieren mucho de un
lor cambia considerablemente cua ndo una
El grupo de canto
EL NACIMIENTO RENACIDO - 46
.J
mujer no tiene que estar acostada sobre su
ne un cambio de frecuencia mucho mayor
espalda sino que puede caminar o relajarse
que el de la voz que habla.
en una pileta con agua tibia. Más aún, la acti
Sin embargo, con el transcurrir del tiem
tud de una mujer con respecto al dolor cam
po, nos dimos cuenta de que el grupo de
bia, a medida que se vuelve más confiada en
canto tenía otros beneficios más inmediatos. Por un lado, el canto provee un modo simple
su propia habilidad para conducirse ella mis ma, a través del trabajo de parto. Insisto mucho en que la gente venga a las
para que las mujeres ejerciten los músculos
. reuniones de los jueves, solamente una vez.
espirar, lo cual también les enseña a relajarse
del diafragma y aprendan a concentrarse en
Primero, ésta es la única manera de que los
durante el trabajo de parto. El canto también
grupos sean chicos; segundo, evita que las
ayuda a las mujeres a sentirse cómodas, de
reuniones empiecen a parecerse a clases.
sinhibidas y expansivas para experimentar y
Aparte de estas restricciones, las mujeres y
dejar escapar toda una gama de emociones.
las parejas son invitadas para volver a la uni dad de maternidad cuando quieran.
las parejas, más oportunidades para encon
Los viernes están dedicados a conversación
trar a madres recientes, muchas de las cuales
El grupo de canto da a las futuras madres y a
informal. No hay moderador y no hay un
siguen viniendo a cantar con los bebés en sus
programa establecido. Se ponen jugos de fru
brazos. Otros miembros de la familia pueden
tas y pastelitos en una mesa, en el medio del cuarto. Es como una pequeña fiesta. La gen te camina y habla libremente. Madres con sus bebitos en brazos encuentran a futuras ma
ver así el lugar del nacimiento: los niños son invitados a cantar con nosotros y a veces también vienen los abuelos. La calidez de es tos encuentros es muy difícil de describir. To
dres, encuentros siempre fructíferos. Una vez
do el mundo canta: las parteras cantan y
más, haciendo esto, estamos muy lejos de
también yo lo hago. Cuando todos cantamos
ejercer un modo de enseñanza, pero sin em
juntos, la separación usual entre "paciente" y
bargo muchísima información es intercambia
profesional se disuelve y una nueva relación
da en estas reuniones y hay muchas cosas que son aprendidas mientras la gente habla y
emerge.
cuenta las experiencias físicas y emocionales
Louise Aucher anima el grupo de canto con
de sus alumbramientos. Los martes nos reunimos alrededor del pia
su cálida y original personalidad. Marie-Loui
no y cantamos juntos. Los cantos comenza
de su vida para ayudar a la gente, enseñándo
ron cuando nos empezamos a interesar en la cuestión de lo que el bebé puede percibir in
utero. Sospechamos que el feto desarrolla un sentido vibratorio difuso, mucho antes de que aparezca el mecanismo especializado del oí do. Quizás mucho antes, el feto podría perci bir sonidos vibratorios, particularmente aqué llos de la voz de la madre que canta, pues tie-
Una mujer extraordinaria, llamada Marie
se, cantante profesional, ha dedicado mucho le a cantar. Mientras .que la terapia musical convencional considera a los individuos sola mente como escuchas, Marie-Louise los con cibe como hacedores de música. (Ha trabaja do con niños y adultos, con pacientes menta les y con quienes padecen el síndrome de Down). En la actualidad, se dedica apasiona damente a cantar con mujeres embarazadas.
MICHEL ODE:I'IT - 47
La primera vez que oí hablar de Marie-Louise fue a través de amigos comunes, en 1976.
para el sentido kinestético del feto, que es una fuente del buen equilibrio para después.
Como nosotros, ella estaba n i teresada en ex
Pero, por sobre todo, es un placer cantar y
plorar los efectos del sonido, particularmente
bailar. Y el placer jamás debe ser subestima
de la voz de la madre, en el feto. Un día vino
do; no puede sino exaltar el embarazo.
a visitar Pithiviers y le pregunté si no querría
Los miércoles, un joven pediatra viene re
concurrir regularmente. Compramos un pia
gularmente a Pithiviers para discutir el cuida
no e invitamos a las mujeres embarazadas a venir y cantar con ella. Desde entonces, el
do postnatal del bebé. Este encuentro abierto provee otra oportunidad para que toda la fa
grupo de canto ha sido una de las alegrías de
milía pueda conocer la clínica y para que
Pithiviers. Marie-Louise nos recuerda cons
otras mujeres embarazadas puedan estar cer
tantemente que no sólo percibimos vibracio
ca de madres experimentadas.
nes con nuestros oídos, sino con todo nues
Nuestro grupo de "Yoga y Maternidad", los
tro cuerpo. Ella sabe cómo lograr los diferen tes estados de ánimo en todos nosotros. Al gunos días se arregla para crear una especie
jueves por la tarde, es guiado por una joven mujer llamada Ghanda, experimentada maes tra de yoga, que tuvo su bebé aquí, en 1975.
de calma quieta; otros, una explosión de ale
Ghanda sintió que sus conocimientos de yoga
gre excitación. Mayor que los otros miem
la habían ayudado durante su trabajo de parto
bros de nuestro equipo, algunas veces toma
y que podía ser útil para otras mujeres que
el rol de abuela. Cuando ella está con noso
iban a dar a luz. Se ofreció a dar clases de yo
tros, realmente nos sentimos parte de una
ga en la clínica y yo la alenté para que así lo
comunidad.
hiciera. El grupo de yoga es un éxito y conti
A menudo, el grupo de canto termina bai
núa hasta ahora. Este grupo está totalmente
lando, ya sea danzas folklóricas tradicionales
de acuerdo con nuestra filosofía de ayudar a
o bailes como el vals. El movimiento involu
las mujeres a descubrir aquellos recursos que
crado en la danza puede ser muy benéfico
serán muy útiles para ellas durante el trabajo de parto y durante el alumbramiento y que harán la intervención médica muy innecesa ria. 8 yoga puede ayudar a las mujeres a sen tirse menos inhibidas y a usar sus cuerpos de muchas maneras nuevas. Por ejemplo, a tra vés del yoga, muchas mujeres vuelven a des cubrir la posición de cuclillas que cada niño conoce tan bien y que es especialmente bené fica para las mujeres, durante el trabajo de parto. Por otra parte, el aumento de secrecio nes hormonales durante el embarazo, le da a la mujer una flexibilidad física muy superior y permite que estos ejercicios sean más fáciles de hacer.
EL NACIMIENTO RENACIDO 48 -
Además, nosotros alentamos a las mujeres que tienen intención de dar a luz en nuestra clínica, a que participen en varias actividades al aire libre. La natación es altamente reco mendada. En muchas ciudades de Francia, las piscinas públicas tienen horarios especia les reservados para mujeres embarazadas.
Durante este tiempo, la temperatura del agua generalmente se eleva hasta 30° e y, a ve ces, i.ma partera y una nadadora experimen tada guían a las mujeres para que realicen va rios ejercicios de relajación. Denis Brousse, instructora de natación de Montpellier, tiene algunas ideas interesantes para ofrecer a las mujeres embarazadas. Piensa que la gente que nunca aprendió a nadar a menudo es la que se encuentra más a gusto debajo del agua, pürque aún no ha experimentado el te ner que luchar contra la sensación de estar sumergida. Denis alienta a las mujeres para que lleven a cabo estos aprendizajes: dejarse ir, caer pasivamente en el agua, sumergirse completamente, hacer sonidos al mismo tiempo que exhalan y tocar el fondo de la pi leta. Estas mujeres pueden vencer el pánico que las lleva ·a emerger a la superficie rápida mente y experimentan un sentimiento de fuerza y bienestar. Es un excelente ejercicio para combatir la ansiedad.
MICHEL ODENT 49 -
Queridísimo papá: Hay u na reu n ión semanal que no me querría perder por nada del m undo. Anoto las fechas muy cuidadosamente y aun sin consultar mi calendario, nunca he faltado a ninguna. ¿Y adónde voy? A cantar a la Clínica de Maternidad. Nuestra querida abuela, Marie-Louise, siempre está ahí, fiel a su trabajo o más bien, a su piano. Cuan do nos habla, una de las voces más agrada bles que haya oído jamás llena el cuarto. Todos escuchamos muy atentamente, sabo reando cada palabra como si fuera una ex quisitez. Estamos encantados, cautivados. Cuando se sienta al piano, las notas caen como perlas y su voz resuena cantando pa ra todos los bebés que aún no han nacido y para las madres que los llevan dentro. Con la simplicidad de una verdadera artista, ¡lo gra llevarnos a todos a la Opera! Cuando can tamos "La flute et la belle e a u ", n i siquiera nos damos cuenta de cuán alto llegamos, hasta que nos encontramos en las n ubes, cantando un si bemol. ¿Có mo pudimos ir tan arriba y luego bajar; sin herirnos? De repente, Marie-Louise se pone a hablar con uno de los pequeños. Siempre tiene una palabra amorosa, un pensamien to dulce para los niños, para todas las vo ces frescas que están listas para cantar. A justa sus anteojos sobre la nariz y ya esta mos otra vez en marcha hacia las esferas celestiales de las canciones de cuna. Co menzamos a cantar A-rro-rró m i niño, Ase rrín, aserrán y se reú nen todos para el gran baile con La Pájara Pinta. Sonriendo aún, pasa a temas más serios: amor verda dero, amor triste, el mundo de los adultos. Marineros abordan barcos para los países
de sus sueños y no serán olvidados. Habla mos del amor y el pájaro azul de la felici dad canta por un momento en nuestras vi das. Abruptamen te, Marie-Louise acelera el ritmo. Las melodías van más y más rápi do. Nosotros nos apuramos tratando de se guir el paso acelerado, pero ¿adónde va mos?, nadie lo sabe. ¡Ufff! ¡Se necesita una profunda respiración después de semejan te canción! Marie-Louise se levanta. Sus ojos juguetones brillan detrás de sus an teojos. Estamos todos rodeados de calidez, por su sonrisa y su espíritu brillante, la poesía de la niñez, la felicidad de vivir con sus pala bras y su música. Imprevistamente, nos es tá pidiendo que bailemos, que corramos las sillas, que flotemos libremente con las me lodías de su guitarra y, de repente, nos en contramos todos bailando. Un día, Marie-Louise estaba de mejor hu mor que de costumbre. Yo, curiosa, le pre gunté por qué. Su respuesta fué simple: "Acabo de venir de los tribunales. Mi veci no me ha tapado todas las cañerías y la si tuación es tan ridícula ¡que me ha puesto de un humor maravilloso!" Bueno, yo veía lo que ella quería deci r. Cuando uno can ta, la vida canta y nada puede detener la co rriente de burbujas de alegría dentro de uno. Marie-Louise es tan joven que es imposi ble creer lo vieja que realmente es. Ha vis to florecer setenta y dos primaueras, pero su corazón es eternamente joven. ¡Cómo te gustaría Marie-Louise, papá, tú que eres violinista y conquistador! Tu hija que te quiere.
EL NACIMIENTO RENACIDO - 50
A pesar de que las actividades diarias de una mujer juegan un rol importante en su prepara ción para el nacimiento, el cuidado médico prenatal tiene una importante influencia en el progreso del trabajo de parto y del alumbra miento. Actualmente, en Francia, los exáme nes prenatales son obligatorios durante el ter cero, el sexto, el octavo y el noveno mes. Al gunos doctores y algunas mujeres encuentran necesario o útil concertar revisaciones adicio nales. De cualquier manera, es el estilo y no el número de exámenes prenatales lo que deter mina la naturaleza de su influencia. Demasiado a menudo esas consultas tratan el embarazo como si fuera una enfermedad. El curso rutinario de estas sesiones frecuente mente provoca más problemas que los que re suelve. Para empezar, la visita prenatal trae generalmente a la luz algún elemento de preo cupación potencial sobre el cual, sin duda, el doctor enfocará su atención: el cérvix es de masiado corto, demasiado suave o está medio abierto; el bebé es demasiado grande o dema siado pequeño para su edad de gestación; la madre ha ganado mucho peso o no lo bastan te; su presión arterial es demasiado alta o de masiado baja; la forma o el tamaño de su pel vis no es favorable, etc., etc. En general, se si gue con un examen de ultrasonido, dando al doctor más probabilidades de descubrir algún detalle preocupante sobre la posición de la placenta o el tamaño y forma del feto. Fmal mente, hay tantos análisis de sangre y orina que el resultado de por lo menos uno de ellos es probable que caiga fuera del nivel "nor mal". Una consulta de este tipo, por lo común termina con que el doctor prescribe alguna medicación, y a veces, incluso guardar cama. Hay un segundo tipo de consulta que pue de ser llamada neutra y que a menudo desha ce los efectos del primer tipo. En Pithiviers, preferimos las consultas del segundo tipo. La
revisación puede ser muy breve; un doctor avezado necesita muy poco tiempo para cap tar las cosas esenciales. El primer paso es buscar las anomalías que requerirían acción inmediata. Sin embargo, en muy pocos casos es útil o ni siquiera posible actuar luego de un diagnóstico problemático. Las infecciones uri narias pueden ser tratadas y se aconseja la in ternación cuando las proteínas se depositan en la orina, cuando hay una fuerte subida de presión inesperada, cuando un edema indica un diagnóstico positivo de una preeclampsia (un estado de toxemia y causa importante de fatalidad en mujeres embarazadas). También sugerimos que una mujer que está trabajando en un lugar muy cansador y a disgusto, se to me vacaciones si puede lograr recibir los be neficios durante su ausencia. Sólo solicitamos los análisis de orina y san gre más rudimentarios y raramente usamos exámenes de ultrasonido. Esto sorprende tan to a los doctores como a las futuras madres, porque el uso del ultrasonido ya se ha welto rutina en la mayoría de las clínicas y de los hospitales. La gente parece adjudicarle cuali dades casi mágicas a estos exámenes, creyen do que van a resolver toda clase de posibles problemas. Por supuesto que un examen de ultrasonido puede proveer una gran cantidad de información para satisfacer la curiosidad de los padres y de los doctores. Pero al final, sin embargo, pocas veces nos da más n i for mación que el diagnóstico de un doctor bien avezado. Aun si estos exámenes a veces nos dicen algo que no se hubiera podido descu brir por otros métodos, hemos descubierto •
•
En
Francia, una mujer puede dejar su trabajo
y
seguir reci
biendo pago desde la sexta u octava semana antes del naci miento hasta diez semanas después de éste. Además, un doctor puede prescribir descanso en cualquier momento seguro nacional francés cubrirá la ausencia.
MJCHEL ODENT - 51
y
el
que raramente nos llevan a un cambio de procedimiento.
cos, lo cual vuelve mucho más problemático el hecho de abortar o no. En todo caso, debe
Por ejemplo, supongamos que un examen de ultrasonido hecho con mucho anticipo muestre que la placenta está pegada al útero, demasiado abajo. Este descubrimiento puede causar gran ansiedad en la mujer, y sin embar go, el doctor está inhibido para hacer algo has ta el momento del nacimiento. Es más, no tie ne ningún sentido preocuparse por ello, ya que el lugar de la placenta se vuelve importante só lo al acercarse el fin del embarazo, cuando la mayoría de esas placentas tienden a separarse del cérvix, de todas maneras. Durante el traba jo de parto, es fácil para un doctor experimen tado chequear manualmente que la placenta no se encuentre en el camino. Si en verdad cubre por completo la apertura cervical, entonces se puede aconsejar una cesárea. Si la cubre sólo de manera parcial, el trabajo de parto puede continuar, teniendo siempre en cuenta la posi bilidad de una intervención, cuando la madre pierde demasiada sangre o el feto corre cual quier peligro, de cualquier modo. Otra cosa que suele suceder comúnmente
rla destacarse que muchos bebés con esa cla se de defectos están destinados a morir por
es que el ultrasonido revela un embarazo de mellizos con bastante anticipación. Sin em bargo, a veces sólo un feto continuará el de sarrollo. En vez de depender del resultado de este examen, lo único que uno necesita hacer es esperar pacientemente hasta el séptimo u
causas naturales In utero o después de algu nos dias de nacidos. Otra razón frecuente pa ra el uso del ultrasonido es confirmar la fecha precisa de la concepción, y por ende, la fecha de nacimiento. Incluso, cuando la futura ma dre ha tenido periodos irregulares, un obstetra experimentado puede casi siempre fijar la fe cha con la misma precisión, haciendo las pre guntas pertinentes y examinando a la mujer al principio del embarazo. En general, los exá menes de ultrasonido, aunque sean muy inte resantes, no son útiles desde el punto de vista práctico. En Pithiviers, por lo común, esos exámenes suplementarios se llevan a cabo cuando van a tener un efecto definitivo en las decisiones del doctor o de la mujer embaraza da. Esta regla general hace que queden muy pocas ocasiones para utilizarlos. Además de este principio de intervenir lo menos posible, hay otras razones para limitar el uso del ultrasonido. Es importante recordar que aún no hay modo de saber hasta qué pun to la exposición al ultrasonido -incluso duran te muy corto tiempo- puede afectar a la ma dre o al feto. A pesar de que muchos médicos y técnicos de ultrasonido creen que este proce dimiento no es dañino, se están llevando a ca
octavo mes de embarazo, cuando el doctor
bo investigaciones en gran escala sobre los efectos genéticos del desarrollo fetal y condi ciones hematológicas y vasculares del sistema
trasonido puede detectar algunas anomalías, como anencefalía o espina bífida. Para que
inmune y muchos más. 2 Ya que estas investi gaciones acaban de empezar, es demasiado pronto para llegar a conclusiones definitivas. Lo único que puede hacerse es esperar a ver qué sucederá dentro de cuarenta años, cuando una o dos generaciones hayan sido literalmen te arrulladas in utero por ondas sonoras.
puede detectar mellizos, con facilidad, durante un examen externo profundo. A veces el ul
este descubrimiento tenga valor práctico, sin embargo, debe ser hecho con bastante antici pación como para poder interrumpir el emba razo. El aparato de ultrasonido nunca puede estar 100% seguro de semejantes diagnósti-
EL NACIMIENTO RENACIDO 52 -
Otro examen prenatal controvertido es la amniocentesis. Consiste en usar el ultrasonido para determinar la posición del feto y luego in sertar una aguja a través de la pared abdominal de la madre para obtener una muestra del líqui do amniótico. De ahí se extraen células fetales que se ponen a crecer en un cultivo, hasta que sea posible determinar su composición cromo sómica. Usualmente, la amniocentesis se hace a las dieciséis semanas de gestación, más o menos, y los resultados están listos después de alrededor de tres semanas. Se ha vuelto nor mal para las mujeres de más de treinta y cinco años hacerse la amniocentesis, ya que cuanto mayor es la mujer, mayores son los riesgos de tener un bebé con el síndrome de Down. En Pithiviers, estamos abiertos a la amnio centesis. En algunos casos excepcionales, cuando hay enfermedad genética en la fami lia, la amniocentesis puede llegar a aliviar los temores de una mujer y ayudarla a sentirse más tranquila, pero en la mayoría de los ca sos, sin tener en cuenta la edad de la mujer, nunca la urgimos a hacerse ese test. Lo que si hacemos, es darle toda la información po sible, para que pueda calcular los riesgos in volucrados y decidir por si misma. Debe com prender que la amniocentesis es útil única mente si,. luego de obtener resultados anor males, ella considerara abortar. EJ procedi miento mismo implica un riesgo de aborto de un 0,5 a un 2%. Ciertos estudios también su gieren mayor incidencia de dificultades respi ratorias para el recién nacido y una correla ción con mayor tasa de malformaciones orto pédicas, si la madre ha tenido una amniocen tesis en el segundo trimestre. También la alentamos a interpretar las estadísticas dentro de un cuadro positivo. Por ejemplo, en vez de decir que una mujer en 109, de más de cuarenta años, corre el riesgo de tener un be bé con el síndrome de Down, ¿por qué no
considerar que semejantes mujeres tienen 99% de posibilidades de tener un bebé gené ticamente sano? Nuestra meta es informar, nunca alarmar. Como resultado, muchas mu jeres, en Pithiviers, renuncian a hacerse el test de la amniocentesis. 3 Desde la publicación americana de este libro se ha presentado un nuevo test para re conocer anormalidades genéticas antes de las doce semanas. Es la biopsia coriónica. EJ ries go de aborto relacionado con este nuevo test no ha sido todavia evaluado adecuadamente. Y, por último, nuestro modo de tratar el riesgo del nacimiento prematuro no está para nada conforme con las doctrinas populares de varios años atrás. Una verdadera obsesión por los bebés prematuros ha hecho que mu chos doctores adoptaran una actitud preventi va agresiva. En muchos paises, el reposo en cama es comúnmente prescripto para evitar el trabajo de parto prematuro, y sin embargo, ningún estudio ha podido demostrar que el confinamiento en cama haya tenido semejan te efecto. Por eso, nosotros somos muy es cépticos con respecto a lo efectivo de seme jante prescripción. Esta política en contra de guardar cama también está motivada por nuestra preocupación de que, una inmoviliza ción prolongada, puede llevar a una privación fetal sensorial, limitando el ingreso al ór-gano vestibular -la parte interior del oído- que procesa información sobre la posición del cuerpo y eventualmente asegura el equilibrio apropiado. Además, el órgano vestibular, probablemente afecta la orientación del feto in u tero; las deficiencias en su función pue den dar como resultado presentaciones pélvi cas o de hombro. Desde nuestro punto de vista, la frecuente prescripción de guardar ca ma puede ser vista como otro ejemplo de in trusión de la obstetricia en el proceso del na cimiento. A las mujeres se les dice no sólo
MICHEL ODENf 53 -
que se acuesten durante el alumbramiento si no también durante todo el embaraw. En la misma línea, también cuestionamos la
sionalmente. Como les digo a las mujeres embarazadas: no es el cervix el que determi na cuándo comienza realmente el trabajo de
práctica de prescribir drogas que inhiben las contracciones uterinas, para prevenir el alum bramiento prematuro. Primeramente, estas drogas -q_ue las mujeres llegan a tomar du
parto, sino el mismo bebé. La mayoría de los países europeos tienen ahora una tasa de bebés prematuros del 6 al
rante días, semanas o incluso meses- tienen intensos efectos contrarios: palpitaciones, ma reos y un malestar general. Si una mujer viene a nosotros preocupada porque siente contrac ciones uterinas, primero establecemos si es que no está empezando el trabajo de parto. Después aclaramos que el útero es un músculo y no un recipiente inerte; las contracciones ejercitan y fortifican los músculos uterinos y pueden proveer estímulos que el bebé necesi ta. Si la mujer se queja de que estas contrac ciones son dolorosas, un baño caliente puede aliviar ese malestar. Segundo, tememos que estas drogas puedan inhibir el despertar del de sarrollo adecuado de las funciones sensoriales fetales. Nos preocupa particularmente la afir mación de algunos médicos, que pueden de terminar si un niño ha sido o no gestado bajo la influencia de esas drogas, por la sensibilidad de su piel, después del nacimiento. Finalmente, es poco usual para nosotros hacer un cerclaje. El cerclaje consiste en ce rrar el cérvix con puntos, lo que suele hacer se hacia el tercer mes de embarazo. Más co mún eri Francia que en los Estados Unidos o Inglaterra, el cerclaje es indicado para reme diar un cérvix que se abre prematuramente.
El diagnóstico de "incompetencia cervical" es, sin embargo, muy subjetivo. Además, el trabajo prematuro está raramente relaciona do con la condición del cérvix. En hospitales donde el cerclaje es común, la tasa de bebés prematuros no es significativamente más baja que en otros lugares donde esto se hace oca-
7%, lo que constituye una leve disminución con respecto a los años precedentes. Esta ten dencia de disminución de nacimientos prema turos, desde el año 1970, ha sido directamen te atribuida a la actitud médica agresiva, que incluye exámenes prenatales más frecuentes, tecnología de avanzada y la prescripción de nuevas drogas. Pero puede haber otras razo nes para esa merma. En nuestra clínica, don de las actitudes opuestas prevalecen, de los mil nacimientos antes del 3 1 de diciembre de 1973, el 4,9% fue de prematuros; de los mil nacimientos antes del 3 1 de diciembre de 1980, el 2,5% fue de prematuros.* La reciente y continuada disminución en nuestra ya baja tasa, puede explicarse por el hecho de que, durante la pasada década, las mujeres que vinieron a Pithiviers tenían ma yor solvencia económica, lo que quiere decir que tendían a estar en más saludables condi ciones físicas con menos probabilidades de empezar el parto prematuramente. Sin em bargo, la diferencia estadística entre nuestros números y el mundo en general es demasiado grande como para ser atribuida únicamente a este factor. Quizás una correlación alternativa podría establecerse entre nuestra baja tasa de nacimientos prematuros y nuestro estilo ge neral de cuidado prenatal. A veces no podemos evit�r pensar si las mujeres embarazadas no ganarían más vi niendo a cantar con nosotros, que yendo a otro examen prenatal. •
Para simplificar, llamamos "prematuros" a todos los bebés que nacen con un peso menor a 2,400 kilos.
EL NACIMIENTO RENACIDO 54 -
MICHEL ODENf 55 -
EL NACIMIENTO RENACIDO 56 -
NO PERTURBAR A LAS MUJERES DURANTE EL TRABAJO DE PARTO El proceso del nacimiento es un proceso in voluntario. Uno no puede ayudar a un proce so involuntario. El asunto está en no pertur barlo. La parturienta puede inhibirse por la
avanzado. Si la mujer se queda en la clínica durante toda la primera etapa del trabajo -la etapa en que el cérvix se está dilatando gra
presencia de gente o por la actitud que ésta
dualmente- la asistimos, pero no de un mo do preconcebido; hemos aprendido por ex
tenga.
periencia a no ser ni mecánicos ni dogmáti
Una mujer en trabajo de parto llega a la clí
cos. Cada mujer es diferente y, por supuesto,
nica. Su primer contacto con la partera es
cada trabajo será diferente. Nosotros acepta
importante; la mirada amable, la sonrisa, las
mos eso. No planeamos estrategias especia
palabras y los gestos de la partera tienen un
les, ni adoptamos reglas rígidas.
efecto benéfico en el trabajo de parto. Las
Esto no interfiere con una labor de equipo.
decisiones tomadas en este momento tam
Habiendo trabajado juntos desde hace bas
bién pueden ser muy significativas. Por ejem
tante tiempo, a menudo podemos comunicar
plo, una partera experimentada podrá deter
nos con una simple mirada o un gesto. Tam
minar la etapa precisa de trabajo en que se
poco quiere decir que no tenemos procedi
encuentra la mujer. Si acaba de empezar, la
mientos generales; al contrario, algunos han
partera puede aconsejarle que espere antes
evolucionado naturalmente a lo largo de los
de venir a la clínica, quizás que haga una ca
años, en armonía con nuestro interés por la
minata o incluso que vaya a su casa por un
flexibilidad, la innovación y la importancia
rato, si vive cerca. Si la mujer vuelve a un en
central de la madre. Estas pautas generales se
t o r no familiar, es probable q u e cuando
aplican por igual a todas las mujeres sin tener
regrese a la clínica, el trabajo ya esté bien
en cuenta su pasado, tanto a una mujer que
•57
ha visitado la clínica regularmente como a
fortable. La mayoría se quita sus anteojos o
una que haya llegado a nosotros durante la
sus lentes de contacto, para concentrarse
etapa de trabajo activo. Estas pautas genera
totalmente en su interior.
les se aplican a las mujeres que nosotros co
A la mujer que está en trabajo de parto se
nocemos bien y a las mujeres que apenas he mos conocido; a las trabajadoras y a las inte
la urge a confiar en lo que ella siente, a mo verse como le parezca, a tomar, de manera
lectuales; a las que viven en la ciudad o en el
espontánea, cualquier posición. Puede cami
campo; a las francesas o a las extranjeras.
nar, sentarse, arrodillarse, apoyarse en al guien o en algo o también acostarse, si eso le
Para empezar, en Pithiviers, queremos des truir la imagen tan incrustada en la cultura
es cómodo. Cuando se les da esta libertad,
occidental, de una mujer embarazada, como
las mujeres raramente eligen la posición dor
paciente. No alentamos a las mujeres que en
sal o la de semisentada, por largos períodos
tran en el hospital a ponerse rápidamente su
de tiempo, porque simplemente no están có
camisón e irse a la cama. La primera etapa del trabajo puede tener lugar en el cuarto, en
modas. Por la misma razón, evitan yacer so bre sus espaldas hacia el fin de su embarazo y
la gran sala de reuniones o en la sala de
prefieren, en cambio, enroscarse de costado.
alumbramiento. Durante este tiempo, algunas
Si una mujer en trabajo de parto está sobre
mujeres prefieren caminar por los corredores
sus espaldas y duda en moverse o cambiar de
o pasear por el jardín. En Pithiviers insistimos
posiciones, a veces sucumbimos a la tenta
en que todo es posible.
ción de explicarle que para ella, esta posición
Mientras la primera etapa del trabajo prosi gue y las contracciones se vuelven más inten
restringe el oxígeno transferido al bebé, por que interfiere con el flujo de sangre al útero,
sas, la madre siente necesidad de pasar a un
comprimiendo la aorta y la vena cava.
lugar más calmo, con luces más suaves. La
Por lo general, esta explicación es innecesa
mujer, escuchando a su propio cuerpo, nece
ria, ya que la mayoría de las mujeres, en las
sita concentrarse; puede encontrar las distrac
primeras etapas del trabajo, instintivamente
ciohes externas como intrusas. Un ambiente
prefieren pararse, inclinándose hacia adelante,
sereno puede colaborar en gran medida con
apoyándose en un mueble o simplemente
la transición de una mujer a su propio mundo
afirmarse sobre manos y rodillas. • No es ca
interno. Muchos mamíferos, después de todo, dan a luz en la oscuridad, quietos, en rincones
sual que tantas mujeres encuentren esta posi
alejados. No es sorprendente, entonces, que
go tiempo; en efecto, reduce el dolor, especial
los seres humanos también busquen semejan
mente los dolores de espalda. Además, es una
tes lugares para trabajar y alumbrar. Nuestra
especie de envoltura física hacia el interior,
ción espontáneamente y la conserven por lar
"salle sauvage" está diseñada para llenar este requisito. Idealmente, todo estímulo sensorial tendría que ser reducido. En algunos casos, una música suave realza el sentimiento de cal
ma y quietud. El cuarto es lo suficientemente cálido como para que la mujer se sienta con-
•
Cuando la mujer está en cuatro "patas", generalmente hay una
pierna que está más alta o un lado que está más adelante
que el otro. Puesto que la cabeza del bebé tiene que hacer una espiral en la pelvis, el nacimiento es, por naturaleza, un fenó meno asimétrico. Ésta es otra de las razones por las cuales la posición de yacer en una posición simétrica es inaproplada.
EL NACIMIENTO RENACIDO 58 -
Mujer en trabajo, paseando con amigos
que le facilita ignorar distracciones externas.
Las parteras se encargan de las cosas fun
(Esta postura se parece a la que se adopta pa
damentales; se aseguran de que el cuarto esté
ra orar; en sí misma, es una transición a un di
cálido, oscuro y tranquilo y que cada mujer se
ferente estado de conciencia). Arrodillarse
sienta libre de cambiar las posiciones como
también parece jugar un rol importante desde
quiera. Ofrecen agua, jugos de fruta, miel y
el punto de vista mecánico. En
caso de pre
azúcar, que proveen a las mujeres con los lí
sentaciones pelvianas, que a menudo causan los trabajos más largos y difíciles, facilita la ro
quidos y calorías que necesitan para poder hacer el arduo trabajo del alumbramiento. Es
tación de la cabeza del bebé en la pelvis. Co
bastante fácil enseñar a otros cómo seguir es
mo la parte más pesada del cuerpo del niño es
tos pasos de nuestra rutina. Pero ayudar a
su espalda, el bebé tratará de rotar hacia el
una mujer en trabajo involucra mucho más
frente del útero, cuando la mujer está en cua tro "patas". Resumiendo, el caminar, arrodi
que estas simples tareas. Incluye empatía, in tuición e inspiración; es un arte.
llarse, sentarse, pararse, apoyarse en alguien o
Es el sentido de la intuición lo que hace que
en algo son las posiciones de trabajo básico
una partera pueda "sentir" si las personas pre
más comunes, pero cada una tiene innumera
sentes durante el trabajo de parto juegan un
bles variantes individuales.
rol positivo o negativo. A menudo, durante el MICHEL ODENT 59 -
Durante el trabajo,
la mujer es libre de ponerse en cualquier posición
que encuentre espontáneamente . . .
EL NACIMIENTO RENACIDO 60 -
parto, las mujeres quieren tener cerca a al guien que ellas conocen y parecerla que nece sitan establecer tma relación especial con, por lo menos, una persona. En nuestra sociedad, a menudo esta persona es el papá del bebé. Sin embargo, no siempre es lo mejor para tma mujer, tener a su compañero allí. La presencia de algtmos hombres es benéfica, mientras que otros, lo único que hacen es retardar la labor. A veces, tm hombre muy ansioso va a preocu parse y va a tratar de ocultar esa preocupa ción hablando demasiado; esta charla puede distraer a la mujer que está tratando de con centrarse en su trabajo. Me acuerdo de una mujer que no podía sobrepasar tma dilatación de ocho centímetros; cuando su esposo dejó el cuarto para tomarse tm corto descanso, su be bé nació. A pesar de que esta mujer nos había
La ternura es más importante que la técnica
dicho que ella quería que su marido estuviera presente, su cuerpo estaba diciendo lo contra
o la hermana ha tenido un parto espontáneo
rio. Un hombre particularmente sobreprotec
y natural, le dará tm conocimiento positivo de la experiencia del acontecimiento; si nunca ha
tor y posesivo, también puede tener efecto muy negativo en un trabajo de parto. Con tinuamente masajea, acaricia y abraza a su
tenido niños o si ha tenido solamente naci
mujer, que le pertenece. Anticipa sus requeri
mientos por cesárea, le puede traer miedo y ansiedad. Otras mujeres prefieren que haya
mientos, más que responder a ellos.- La mujer
varias personas con ellas, en la clínica. He
en trabajo de parto requiere calma, pero lo ú
mos notado que muchas de estas mujeres tie
nico que puede proveer él es estímulo. A ve
nen trabajos largos y difíciles. Una noche,
ces los hombres tienen dificultad para obser
mientras las parteras y yo estábamos mirando
var, aceptar y comprender el comportamiento
televisión, vimos llegar un auto. Una mujer
instintivo de una mujer durante el alumbra
embarazada, aparentemente en trabajo de
miento. Por lo contrario, a menudo tratan de
parto, salió del auto, seguida por un hombre,
evitar que ella se salga de tm estado racional,
una mujer, una chica joven y otro hombre con
autocontrolado. No es tma mera coincidencia
tma cámara. La primera reacción de las parte
que en todas las sociedades tradicionales, las
ras fue: "Bueno, parece que nos espera tma
mujeres en trabajo de parto son asistidas no por hombres, sino por otras mujeres que ya
y trabajosa. Quizás algunas mujeres quieren
han tenido niños.
estar rodeadas de gente en este momento,
larga noche". Tenían razón: la labor fue larga
Algunas futuras madres prefieren traer a
por algún oculto temor o inseguridad con res
tma hermana o amiga a la clínica. Si la amiga
pecto a la labor. Sin embargo, estos sentí-
MICHEL ODENT - 61
mientos de ansiedad pueden volverse aún más
admitir hombres. El trabajo de parto, el alum
fuertes si la mujer en trabajo de parto siente
bramiento y el amamantamiento son parte de
que la están mirando o que debe jugar algún
situaciones sexuales y el sexo de los presen
rol específico en relación con quienes están
tes tiene que ser tenido en consideración. El
presentes. Por otra parte, las mujeres que son
contacto entre el asistente al nacimiento y la
muy apegadas a sus familias o comunidades,
mujer en trabajo puede ser extremadamente
a menudo se sienten reconfortadas durante el
íntimo e intenso. La mujer en trabajo de par
trabajo por la presencia de la gente a la que
to se halla en un estado físico y emocional es
están acostumbradas a ver todos los días.
pecialmente vulnerable, lista para volverse de
Ocasionalmente, una mujer puede llegar a
pendiente de su asistente al nacimiento, por
la clínica con su propia madre. Esto puede
lo menos por un momento. Los matices se
ser muy útil si la madre ha tenido varios niños
xuales que podrían acompañar semejante
sin intervención médica, pero no madres que
contacto con un asistente masculino podrian
han dado a luz entre las décadas del 50 y el
perturbar a la mujer durante el trabajo y no
60. Mucho de lo que las madres han experi
dejarla actuar con la apertura y la espontanei
mentado en alumbramientos en esa época ya
dad que ella querría, o inclusive después, po
no tiene vigencia. Además, las prácticas mé
dria hacerla sentir avergonzada de lo que ha
dicas alrededor del nacimiento siguen cam
revelado sobre ella misma. Claro que no es
biando muy rápidamente, así que puede ser
tan simple. Aparte de la importancia de que
bastante difícil para las madres darles infor
el ayudante o la ayudante
maciones válidas a sus hijas, como se hace en
menina, la cualidad esencial que el asistente
sea masculino o fe
las sociedades tradicionales. La diferencia en
al nacimiento -ya sea hombre o mujer- de
experiencia y conocimiento explica algunas
be tener es habilidad para ayudar a la mujer a
de las tensiones que hemos observado entre
sentirse segura y tranquila.
madres e hijas. En muchos casos, esta dife
Resumiendo: privacidad, intimidad, oscuridad,
rencia puede ser salvada con gran efectividad
calma, libertad para hacer ruido y trabajar en
por el acompañamiento de una experimenta
cualquier posición y la proximidad de las par
da y comprensiva partera.
teras que no se comporten como observadoras
Nunca alabaremos suficientemente la im
son cruciales para una primera etapa de trabajo
portancia de las parteras. Cualquiera sea la
espontáneo. Iluminación fuerte, ruidos fuertes,
práctica particular de la obstetricia, más mu
máquinas frías e intrusos enmascarados, típicos
jeres tienen trabajos y nacimientos normales
del entorno de los hospitales modernos, suma
cuando las parteras presentes juegan un im
dos a la ausencia de las parteras, la negación o
portante rol durante el alumbramiento, ya sea
la ignorancia de su importancia y el confina
en Irlanda, en Holanda o aquí, en Pithiviers.
miento de las mujeres en trabajo, a posiciones
Es muy importante que las parteras sean mu
restringidas, todo esto inhibe el trabajo en sí.
jeres, una verdad que aparentemente no es
Sin embargo, aun cuando una mujer está
tan obvia como parece, ya que las escuelas
en la atmósfera más favorable, la dilatación a
de parteras en países como Italia, Francia,
veces se detiene y las contracciones se hacen
Suecia y el Reino Unido han comenzado a
más dolorosas y menos eficaces. En este caso,
EL NACIMIENTO RENACIDO 62 -
Una mujer con la partera, en la "salle sauvage"
un baño caliente puede proveer algún alivio.
creando un estado de relajación mental. La
Ahora hay dos pequeñas piletas en la clínica,
relajación, a su vez, trae una dilatación rápida.
que usamos para estos casos. La mujer se su merge en el agua caliente, casi siempre hasta
fn ocasiones, cuando el trabajo no está pro gresando, el abrir una canilla, el ver y oír co
el cuello. A veces, una mano atenta, suave
rrer al agua, hace que el nacimiento suceda
mente sostiene su cabeza, mientras sus oídos
¡antes de que la pileta se llene!
también se sumergen. fn la pileta, el trabajo
Tendemos a reservar nuestras piletas para
de parto se hace más fácil, más cómodo, me
las mujeres que tienen dolorosas e ineficaces
nos doloroso y más eficaz. Por un lado, el
contracciones (alrededor de los cinco centí
agua hace que la mujer no tenga peso; puede
metros de dilatación). Pero el agua puede ser relajante para las otras, también. Puede ser
flotar y ya no debe luchar contra el peso de su propio cuerpo durante las contracciones. Además, el calor del agua reduce la secreción
tan reconfortante como un amante, una ma dre o una partera. La afinidad de las mujeres
de adrenalina y relaja los músculos. El agua
embarazadas con el agua aún es un misterio
también puede inducir ondas cerebrales Alfa,
para nosotros. Muchas futuras madres dicen
MICHEL ODENr 63 -
que son atraídas por el agua; sienten una gran necesidad de zambullirse en las olas o de soñar que están flotando en la superficie, por largos periodos de tiempo. Algunas mu jeres fuertemente atraídas por el agua duran te el embarazo, lo están aún más durante el trabajo de parto. No obstante, hay otras que nos dicen que no les gusta el agua o que no saben nadar. Sin embargo, cuando comienza el trabajo de parto, estas mismas mujeres de repente van hacia la pileta, entran con frui ción ¡y no quieren salir! Mientras la primera etapa del trabajo de parto llega a su fin, por lo común, la mujer sa le de la pileta. Siente la necesidad de volverse más activa, para ayudar a que el bebé emerja. A menudo, en este momento, la mujer puede tener una mirada distante en sus ojos e incluso parece que estuviera en un mundo diferente; si habla, repetirá palabras aisladas u oraciones simples. Para nosotros, éstos son signos de
que está respondiendo a lo que es Instintivo dentro de ella y que ha llegado a un buen equi librio hormonal. Lejos de considerar su estado como irracional y desamparado, estarnos muy seguros de que ella sabe mejor qué hacer para ayudar a su bebé a venir al mundo. Nuestro modo de terminar la secuencia de la segunda etapa de la labor -cuando la dila tación del cérvix está completa- es muy dife rente de la práctica médica común. La mayo ría de los profesionales hacen una revisación vaginal, para decidir si una mujer tendria que empezar a empujar o no. Nosotros podemos generalmente distinguir las etapas del trabajo, sin exámenes internos que, en todo caso, de berian ser mantenidos al mínimo. Sabemos que la segunda etapa del trabajo ha comenza do cuando la mujer que ha estado parada o caminando, de repente quiere doblar sus ro dillas durante las contracciones y tiene una urgente necesidad de agarrarse de algo o de
EL NACIMIENTO RENACIDO - 64
alguien. Si ella y su compañero están parados cara a cara, abrazándose, ella se va a colgar
tente puede sentir que viene una contrac
de su cuello, durante las contracciones. Si su
ción, poniendo su mano derecha sobre la parte de arriba del útero de la mujer. Cuando
compañero está de pie detrás de ella, quizás se acuclille mientras él la sostiene por debajo
tente deslizará sus manos por debajo de las
de los brazos. La mujer se deja ir. Mientras grita, con su vulva totalmente abierta y sus piernas completamente separadas, parecerla que todo su cuerpo se abriera de repente. Puede suceder que relaje el músculo de los
la contracción comienza, en general el asis axilas de la mujer, para tenerla de las manos
o sostenerla de los pulgares. Él o ella se que dan derechos, parados, detrás, sin reclinarse hacia adelante, convirtiéndose en una espe
esfínteres y descargue su recto. El relajamien
cie de respaldo humano. Si una mujer trabaja de cuclillas, dos personas pueden sostenerla
to de estos músculos y su fuerte y típico grito,
al mismo tiempo: una experimentada y la
van totalmente en contra del comportamiento
otra que esté cercana a la mujer, pero que es
. social tan profundamente establecido. Nos di ce que la mujer que está en trabajo ha entrado
mujer también puede preferir estar frente a
en un óptimo estado instintivo de conciencia;
nueva ante la situación y quizás vacilante. La
en otras palabras, ha logrado el perfecto equi
su compañero y colgarse de su cuello, con sus piernas muy abiertas. Esta posición, en la
librio hormonal. Muchas mujeres, en Pithiviers, dan a luz en
cual los pies de la mujer por momentos se le vantan del piso, también es extraordinaria
posición acuclillada, con alguien que las sos tiene por detrás; posición eficaz desde el
mente útil. Relaja los músculos abdominales y del perineo, asistiendo al descenso del be
punto de vista mecánico, pues maximiza la
bé. La -persona que está abrazando a la mu
dirección del peso, minimiza el esfuerzo mus
jer no puede evitar presionar suavemente su
cular y el consumo de oxígeno y facilita la re
abdomen y eso facilita que pueda abrir sus
lajación de los músculos del perineo. El asis-
piernas.
MICHEL ODENT 65 -
Nacimiento en posición acucliUada, ayudada
EL NACIMIENTO RENACIDO 66 -
J
MICHEL ODENf - 67
Aunque en nuestra clínica, las posiciones comunes para la segunda etapa del trabajo
sultado de nuestro uso de las piletas. Algunas veces, las mujeres están tan relajadas en la pi
son las de estar acuclillada o colgada del cue llo, de ningún modo se convierten en una re
leta que no quieren salir del agua, a pesar de que sienten que el trabajo está desarrollándose
gla de conducta. Una mujer es totalmente libre
rápidamente. Aquí también, las mujeres pare
de encontrar una posición que la conduzca a
cen saber que no es nada peligroso dar a luz
la comodidad y a la relajación. Puede adoptar
en el agua; no hay riesgo para el recién naci
toda una variedad de posiciones asimétricas, sentada con una pierna estirada o recostada hacia un lado; puede querer recostarse, tirarse sobre un lado, sentarse en una silla o ponerse en cuatro "patas". (Adviértase que esta última
do, porque -después de todo- el único en torno que él conoce es el acuático. El bebé va a empezar a respirar aire a través de sus pul mones sólo una vez que haya salido a la su perficie y note de repente la diferencia en at
postura se parece mucho a la posición de cu clillas. Si se deja a una mujer a la que se está
mósfera y temperatura, por primera vez. Nun ca hemos hecho hincapié en que tengan a los
ayudando, a acuclillarse, ella se va a poner en cuatro "patas"). Incluso puede dar a luz en el
bebés debajo del agua, pero este inesperado
agua, nuevo e interesante progreso, que es re-
(veinte o treinta veces por año).
alumbramiento sucede varias veces al mes
Nacimiento en el agua
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MICHEL ODENf 69 -
EL NACIMIENTO RENACIDO 70 -
Cualquiera sea la posición que la mujer
mayoria de las veces, la mujer, durante el
encuentra, hemos advertido que al ayudarla,
parto, sabe exactamente lo que está sintien do y ciertas instrucciones pueden ser conflic
la ternura es tan importante como la técni ca. Asistentes experimentados pueden perci bir los sentimientos de calma, de tensión o
tivas con su propia experiencia. Yo trato de no decir nada. Si hablo, expresaré algo asi
de temor de una mujer, por la textura y la
como: "Bien . . . bien . . . Deje venir al bebé . . "
humedad de su piel. Cuerpo contra cuerpo,
Si la mujer parece atrapada por el temor al
.
piel contra piel, una partera va a confiar mu
fracaso, uno puede sugerir: "no empuje, no
cho más en tocar y abrazar a la mujer, más
empuje" . . . o "no se retenga; grite, llore si quiere ... .
que en hablarle. Cuando le habla, usará pa labras simples, palabras que hasta un niño podria comprender. S i n embargo, l a s
"
Esta es nuestra manera de no interferir du
palabras son generalmente innecesarias en
rante el parto. Las estrategias identificadas con nosotros juegan un rol importante, pero
momentos como éste y algunas indicaciones �amo "empuje" o "¡más fuerte!"- pue
nuestra meta es mucho más amplia. Quere mos ayudar a las mujeres a dar a luz con con
den tener efectos realmente negativos. La
fianza.
MICHEL ODENT - 71
Una madre de América Latina Dicen que durante las h oras anteriores al acto de dar a luz, uno pierde contacto con el mundo exterior. Eso fue lo que me pasó a mí. Me encontré en otro universo, en un planeta distante, navegando en un mar de sensaciones. Era una noche muy extraña. La gente estaba durmiendo. Y ahí estábamos nosotros, Philipe y yo y la otra pareja, despiertos durante toda la noche, entre el dormitorio y fa sala de alumbra mientos. La otra pareja tuvo su bebé a eso de las cinco de la mañana. Estábamos asombrados ante fa vívida imagen de ellos volviendo, en fa oscuridad, con su bebé en los brazos. Era reconfortante saber que una mujer podía dar a luz y después cami nar por sus propios medios. Era muy re confortante. En cierto momento, las contracciones se volvieron más agudas, más violentas. Me agarré de Philipe, después, de u n piano, después de Philipe otra vez. El cuarto se convirtió en una secuencia de idas y veni das. El dolor se h izo difícil de controlar. Era parte de mí y no tenía fin, ni principio. Cuando el Dr. Odent llegó, me dirigí hacia donde estaba la partera; parecía ser muy lejos. No podía comprender el porqué del · dolor sin fin. Y allí fue donde me volví una con el mar. El dolor se movió a un nuevo lugar; era más sordo. Nuria, nuestro bebé, estaba allí. La podía sentir, centímetro por centímetro, re corriendo lentamente su camino. Me sentía
tan bien dejando que mi cuerpo se sumer giera en ese mar de sensaciones, cerrando mis ojos, dejar que las olas me balancearan suavemente. .. Un día, en un pequeño pue blo en la India, me crucé con un anciano vestido de blanco. Se sentó en el u mbral de una puerta, con sus manos puestas en posi ción de plegaria. Al pasar yo, levantó su ca beza mirándome . ¿Para saludarme? ¿Para bendecirme con su paz? Yo caminé suave mente y le contesté con el mismo gesto. Es te incidente y el mar están entretejidos con las infinitas hebras del espacio y el tiempo que marcaron el nacimiento de Nuria. A veces le pido a Philipe que se siente y me cuente lo que en realidad pasó, qué vio, ya que mi memoria es de otro mundo.
EL NACIMIENTO RENACIDO 72 -
Una madre de París L a posición más cómoda para mí era arrodi llada en el piso, con mi torso recos tado sobre u n sillón. Cuando el Dr. Odent entró, me dolía tanto que me puse a llorar. Lo vi irse sin decir una palabra. Pronto volvió con una mujer de más o menos vein te años, con gu ardapolvo blanco. Era una estudiante de enfermera, que se quedó cer ca de mí, desde ese momento. Cuando sen tí la siguiente contracción, me tiré en sus brazos y un fuerte lazo comenzó a crecer entre nosotras. Sentí su calidez, su gentile za. Fui mos juntas a la sala de alumbra miento. Con cada contracción, la agarraba fuertemente, h asta que e l dolor pasaba. Siempre le estaré agradecida, por todo lo que me dio. Antes, cuando estaba sola en
mi cuarto, había· tratado de "controlar" el dolor con ejercicios de respiración profun da. La presencia reconfortante de la enfer mera trajo u n cambio notable: ya no traté más de controlarme. Gritaba en cada con tracción. Mis gritos no se detuvieron hasta una hora y quince minutos después, cuan do el bebé nació. Estos gritos me sorprendieron mucho. Con mi primer hijo, no había sentido nin gún deseo ni de gritar ni de llorar. Ahora tenía la impresión de que estaba levantan do a todo el hospital con mis gritos. En mi vida h abía chillado tanto como esa vez. Era como si los gritos no me pertenecieran. Cuando llegó mi marido, justo antes del nacimiento, lo tranquilicé: "No te preocu pes, no lo puedo evitar; me siento bien gri tando. Siéntate". En u n momento dado, me oí a mí misma gritando de una manera diferente: gemidos largos, temblorosos, co mo los gritos de u n bebé. Ahora me doy cuenta de que estos gritos me protegían, no del dolor sino de una inscripción trau mática de ese dolor en mi psique. Era una especie de catarsis; por el grito, hacía que el dolor dejara mi cuerpo. Hacia el fin de mi trabajo, empecé a d� cir malas palabras. No me acuerdo lo que dije: había perdido todo control sobre mis sentidos. Esta experiencia h a quedado por encima del real momento del nacimiento. ¡Pensar que me pude comportar así ante otras personas! Y sin embargo fue como si, después de h aber perdido mi propia voz durante tantos años, la hubiera recupera do.
MICHEL ODENT 73 -
Una madre de Leeds Lunes, 7 de diciembre. Eddie tuvo que apurarse para tomar el desayuno. Treinta millas por un camino derecho, plano, bor deado de árboles, a través de la campiña francesa, corriendo hacia Pithiviers. La po esía se me escapaba; las con tracciones ve nían cada quince árboles... La partera me examina: probablemente sea hoy, esta tarde. Parece dentro de mu cho; son sólo las diez. Estamos muy excita dos. El dolor se vuelve más insistente. Des pués de un rato, las contracciones empie zan, rápidas y furiosas. Mis piern as pare cen n o sostenerme. Me recuesto en uno de los sillones de la sala de reun iones. Por un instante tengo u n a duda; ¿por qué no me dan la epidural? Así n o estaría sufriendo este dolor. Me parece que n o lo puedo aguantar. Es demasiado al mismo tiempo; n o soy una heroína. Empiezo a gritar y eso me ayuda. El dolor todavía está ahí, cada vez más fuerte, pero el gritar lo h ace so portable. De repente en tierro mi cabeza en el saco de Eddie que está tirado en el sofá. Su olor está allí. También él está, pero co mo el dolor es tan fuerte, n o quiero que me toque. Extrañ amente, él está calmo. Son las 11 y 1 O. Le digo a Eddie que vaya a buscar a alguien; el dolor es demasiado grande. La partera y el doctor Odent llegan, se ren os y reconfortan tes. L a dilatación es completa, para su sorpresa y mi alivio. El Dr. Oden t h abla de aguas azules y de pla yas; empiezan a llenar la pileta. Con Eddie y el doctor Odent a mi lado, me voy al cuarto de alumbramiento. El sol está en trando a través de las ventanas. El
Dr. Odent está tarareando suavemente. En el cuarto de alu mbramiento, me desvisto. El cuarto está a media luz: azulejos marro nes en las paredes, el piso de u n color cáli do y u n a gran plataforma con varios al mohadones y una gran silla de parto. Es toy muy agradecida por e l silencio; los sen tidos sólo pueden recibir cierta cantidad de estímulos al mismo tiempo. En sólo diez minu tos, siento una tremen da necesidad de e mpujar. La partera está allí, instantáneamen te, azorada por la rapi dez con que progresa e l trabajo. Estoy res pirando a través de la parte superior de mi garganta. El Dr. Oden t entra. Se rompen las aguas. La partera, suavemente, sugiere que yo adopte u n a posición semiacuclilla da, ayudada por Eddie. Al principio no es toy muy segura, pero ayuda. Cada contrac ción me supera y aún grito muy fuerte, pe ro sólo mientras dura la contracción. El resto de la gente está calma, quieta, alenta dora. El Dr. Oden t me da terrones de azú car, para la energía, y agu a (bebí como tres cuartos litros en total). De repen te, puedo sentir que la cabeza está b ajando. Me ale gra porque estoy deseando dormir, bebé o n o bebé. Mientras me paro durante las contracciones, me balanceo sobre mis pies muy suavemente. L a cabeza está visible. Eddie me está ayudando. Un empujón y sien to que el bebé va saliendo. La partera lo agarra; me parece que lo ayudó u n ¡x:r quito a girar. Mi memoria de ese segundo está mezclada con excitación. Eddie me deposita en el suelo y en ton ces, me ponen al bebé en mis brazos. Estoy asombrada: no se dice n i u n a palabra. El bebé llora un poquito y después se pone a buscar el pecho. Todo es tan tranquilo y
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tan Intenso... La partera y el Dr. Odent permanecen en un rincón, disponibles pe ro totalmente discretos. E l momento nos pertenece a nosotros tres. Alguien trae un
recipiente con agua de la pileta (donde no tuve tiempo de meterme). Camille, nues tra hija, aún unida a mí, se desmadeja en el agua.
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EL NACIMIENTO RENACIDO - 78
LA PRIMERA HORA Y DESPUES Hay muchos que sienten que la primera
bé aterrice en el suelo. Después del nacimien
hora después del nacimiento es un tiempo
to, la madre -que estaba acuclillada hasta
muy importante tanto para los bebés como
entonces- se sienta en el suelo. Muchas mu
para las mamás. Puede determinar, en parte,
jeres, espontáneamente, se sientan con sus
de qué modo los niños se relacionan con sus
espaldas derechas, cuando llega ese momen
madres, lo que a su vez puede afectar cómo se van a acercar a otra gente y al mundo que
to. Una vez que la mamá está sentada, le po-· nemos al bebé entre sus rodillas, en la "posi
los rodea. Este período crítico después del
ción de seguridad", es decir, sobre el estóma
nacimiento puede muy bien influir en la capa
go y con la cabecita hacia un lado. De este
cidad de amar de una persona y en la capaci
modo, aunque el bebé todavía tenga un poco
dad de apego en general. Por eso nos ocupa
de líquido en su boca y carezca aún de refle
mos especialmente de proveer un clima cáli
jos eficaces para proteger sus vías respirato
do y seguro que lleva a la intimidad entre ma
rias, la fuerza de gravedad evita que esos flui
dre e hijo, en esos momentos.
dos vuelvan a los pulmones. El bebé reposa
Como hemos descripto, muchas mujeres,
en esta posición sólo durante algunos segun
en Pithiviers, dan a luz en la posición acucli
dos, los suficientes para dejar salir un vigoro
llada, ayudadas. En nuestra clínica, las parte
so grito, respirar profundamente algunas ve
ras no tocan el perineo ni sostienen la cabeza
ces, toser o estornudar, ponerse rosadito y
del bebé, cuando sale. Una vez que la cabeza
mostrar un lindo tono de piel. El cuarto está
del bebé aparece y rota p·or sí misma, a veces la asistente debe ayudar suavemente para que
bien caldeado, pero si es necesario, se puede
salgan los hombros. En general, todo el cuer
madre toma al bebé en sus brazos. El bebé
po del bebé se desliza por sí solo y la tarea de
todavía está unido por el cordón umbilical; la
la asistente es, simplemente, evitar que el be-
posición vertical de la madre hace esta rela-
cubrir al bebé con una mantita. Entonces, la
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nacimiento, a no ser que los padres estén in teresados en astrología y nos pidan que anotemos el preciso momento en que su hijo respiró por primera vez. Los profesionales ocupados, impacientes por ir a otra cosa, a menudo tratan de apurar este período del postalumbramiento. Para nosotros, sin embargo, éstos son momentos preciosos. No hay nada que perder ¡y tanto que ganar! dejando que la madre y su hijo empiecen a conocerse a su ritmo, con cal ma... Por una parte, sabemos que el prolongado contacto piel con piel y particularmente, que el bebé mame, sumados a las intensas emo ciones sentidas en este momento, estimulan las secreciones hormonales de una mujer. A su vez, estas secreciones causan más con tracciones, necesarias para expulsar la pla centa espontáneamente. La placenta puede
La "posición de seguridad"
salir en el primer momento de contacto en tre la mamá y el bebé o puede también salir después de treinta minutos o más. No hay por qué apurarse. Es más importante que la
ción tan rica y completa como es posible.
placenta se despegue fácilmente que el he
Cada parte del cuerpo del bebé está en con
cho de que salga con rapidez; cuanto menos
tacto con su madre. Ambos se miran casi in
apuro haya, menor es el riesgo de hemorra
mediat. amente; la intensidad de este momen
gia. Cuando una mujer siente las contraccio
to es sentida por todos los que están presen
nes señalando el desprendimiento de la pla
tes. A menudo, la madre responde a los gri
centa, naturalmente, va a estar menos con
tos del bebé con sonidos afectuosos y simples
centrada en el bebé por algunos momentos.
palabras: su diálogo comienza. Si el padre se
Va a querer recostarse, teniendo al bebé en
encuentra presente, en general está muy
sus brazos; y si es así, es mejor que se re
emocionado y, con frecuencia, llorando. La
cueste sobre su lado izquierdo, a fin de no
cámara fotográfica de la familia suele quedar
comprimir la vena cava. También quizás
olvidada en un rincón, a menos que la parte
quiera volver otra vez a la posición de cucli
ra piense en tomar algunas fotos.
llas, ayudada (en general, durante una con
No hay reloj en el cuarto de alumbramien
tracción). Ocasionalmente es útil presionar
to. Nos tomamos nuestro tiempo. Nadie
justo arriba del hueso púbico para verificar si
piensa en registrar el momento exacto del
la placenta se ha desprendido (si el cordón
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umbilical no se mueve hacia arriba, la pla
para hacerlo, siempre y cuando el cordón sea
centa está lista para ser expulsada). Pero es
lo necesariamente largo como para que el
to causa dolor e incomodidad a la madre, y
contacto de la madre y el bebé resulte cómo
raramente es necesario. La mayoría de las
do. Cuando lo cortamos antes de haber ex
veces, la expulsión de la placenta sucede sin ninguna clase de interferencia de nuestra
pulsado la placenta, no siempre es imprescin
parte.
el cordón, del lado del bebé. De todas for
Somos muy flexibles con respecto a cuán do cortamos el cordón. Mientras la madre y
mas, nunca pinzamos el lado más cercano a
el bebé estén felices juntos, no hay razones
desprendimiento de la placel}ta.
dible usar pinzas. Podemos hacer un nudo en
la madre, puesto que eso parece inhibir el
EL NACIMIENTO RENACIDO 82 -
Una madre de Inglaterra Fui levantada desde atrás una vez más, para fa contracción final; el bebé nació en dos pujos, creo. Pareció deslizarse por su propio peso. En el cuarto de alumbramien to ni siquiera una vez consideré una respi ración especial, jadeo o pujos. Hice lo que sentí que estaba bien para que mi bebé na ciera. Me bajaron a una posición sentada, mientras que el bebé aparecía. El Dr. 0dent recogió al bebé y me lo dio inmedia tamente d iciendo: "Aquí está su bebé". Nunca olvidaré esas cuatro palabras, mien tras viva. Me dejaron tranquila para que abrazara a mi bebé y lo empezara a cono cer. El primer sentimiento fue una necesi-
dad de abrazarlo; el segundo fue curiosi dad por saber el s exo; era una nenita y puedo recordar claramente que este descu brimiento lo sentí como un privilegio más que un derecho, porque los d octores n o m e l o habían permitido, en mis dos alum bramientos previos. Repetía la palabra: "Hola. . . " -encantada de poder finalmente saludarla. Los demás miraban, simplemen te. Nadie interrumpía. Nadie trataba d e quitármela.
Una madre de los Estados Unidos Mientras caminaba hacia el cuarto de alumbramiento, sentí que empezaba otra
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contracción. Me puse de cuclillas y me apo yé contra la cama. Las aguas se rompieron mientras empujaba con esa contracción; mi hijita de tres años, Alissa, asustada, lan zó un gritito; n o se esperaba eso. El Dr. (). dent le habló suavemente en inglés, expli cándole que el bebé pron t o estaría aquí. Empujé y la cabeza del bebé coronó. Des cansé; después, con la contracción siguien te, empujé otra vez. Finalmente, una terce ra vez. Me sentía como montada sobre las olas de verano en la playa, en Nueva Jer sey, durante mis días de secundario; las olas eran muy altas y las más altas siempre parecían venir de a tres. Todo e l tiempo, el Dr. Ode n t continuaba hablándole su ave mente a Alissa, tranquilizándola: "Sí, sí, re almente es la cabeza del bebé"; "Mira e l pelo"; "Ya llega". Con esa contracci ón , Genevieve n ació. La pusieron en el piso y después me ayu daron a sen t arme. La levanté y empezó in mediatamente a oler en mi pecho. Luego de algunos minutos, trajeron u n a pequeñ a bañera y la bañé allí, entre mis piernas, to davía unida a ella por el cordón. Ali ssa y George también me ayudaron. Entonces, pinzaron el cordón y George lo cortó. La partera la sacó del agua y la pesó, la vistie ron y se la dieron a Ali ssa. Alissa estaba extasiada; ella había querido una hermani ta. Cuando Genevieve empezó a protes-
tar; Allssa dijo: "Mamá, mejor que le des el pecho". Media hora después del naci miento, George tenía a Genevieve en sus brazos y las enfermeras me ayudaban, mientras, en cuclillas, yo expulsaba la pla centa.
Una madre de Dijon Dos pujos fuertes y Amélie entró en el mundo. Salió como una bala de cañón y, haciendo un gracioso arco, cayó en las ti bias sábanas sostenidas por la partera. Sa lió tan rápido que, por u n a fracción de se gundo, pensé que iba a aterrizar en el sue lo. Era la una y quince de la mañana. La partera la puso sobre mi estómago. Me senté exhausta, sobre mi propia sangre cá lida. La proeza física que acababa de reali zar me había dejado extenuada. Repetía sin cesar las mismas palabras: "¿Esto es mío? ¿Es realmente mío? ¡Amé líe , ya pasó.. . lo hicimos!" Empecé a explo rar a mi bebé, este minúsculo ser que pate aba sin soltar un sonido. Primero n oté que era una nena. Estaba en cantada; había de seado que fuera una nena todo el tiempo. Después le miré su cara. Sus rasgos, claros y finos, tenían la suave huella de u n a son risa. Era tan pequeña y tan bella. . . No po díamos dejar de mirarla.
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..J
A veces, ya sea antes o después que se ex
feliz de descubrir el mundo, no haría esa pre
pulsa la placenta, ponemos un pequeño reci
gunta. Por supuesto que el baño también tie
piente lleno de agua calentita cerca de la ma
ne un benéfico efecto fisiológico: es un modo
dre, para que ella pueda bañar a su bebé. Sin
excelente y agradable de estimular la piel del
embargo, esto no es rutina; los recién naci
bebé.
dos necesitan primero los brazos de su ma dre. La gente a veces pregunta por qué baña mos a los bebés tan rápido después del naci
La técnica de darle el baño no es lo más importante. Las manos prácticas de un profe sional pueden saber mejor cómo sostener el
miento. Bueno, realmente no podemos con
cuello del bebé y no su cabeza, con cuánta confianza sumergir su cuello y sus orejas, pe
testar esta pregunta. Es como si nos estuvie
ro ciertamente, son preferibles las manos de
ran preguntando: "¿Para qué darles ese pla
los padres. Además, nuestro énfasis en que la
cer?" Cualquiera que haya visto a un recién
madre bañe a su recién nacido cuestiona lo
nacido durante el baño, con sus ojos abiertos,
que postula comúnmente la obstetricia tradi-
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J
las películas hubieran sido mostradas en el or den cronológico correcto Oa de Leboyer pri mero) la audiencia habría podido apreciar, que nosotros simplemente llevamos sus acer tadas ideas, un paso más adelanté. De hecho, el trabajo de Leboyer, en gene ral, nos hizo mucho más sensibles con res pecto a cómo tratar a los recién nacidos. Después de bañar al bebé y cortar el cordón, por ejemplo, pesamos al bebé pero nunca lo medimos en ese momento; como Leboyer subraya, medirlo involucra un penoso e inne cesario estiramiento de la espina dorsal del bebé, y en todo caso, el único resultado es un número aproximado. Después de haberlo pe sado, lo vestimos. Ahora, la madre lo vuelve a tomar en sus brazos y, eventualmente, el recién nacido vuelve a mamar o lo hace por primera vez. El cional: que la mujer que acaba de dar a luz es
tiempo de la primera mamada varia con cada
pasiva. Lo detectamos incluso en la práctica
madre y con cada bebé. Puede suceder inme-
de Leboyer, donde la madre da a luz yacien do sobre su espalda y es el doctor, la partera o el padre, quien baña al bebé. Así, el baño se vuelve parte de la separación de la madre y el niño. Se intenta compensar al bebé del shock de esta separación, dándole la posibili dad de volver a la suavidad y calor acuáticos de los meses pasados en el vientre materno. Para nosotros, el baño tiene un sentido dife rente: es algo que la madre hace ella misma, como parte del continuo contacto con su propio hijo. Me di cuenta de esta diferencia en una conferencia durante la cual fue pro yectado el filme Nacimiento, de Leboyer, después de haber mostrado el filme de una madre bañando a su propio bebé, en Pithi viers. La audiencia reaccionó negativamente a la escena del baño de Leboyer, percibiendo en ésta la eliminación de la madre. Quizás si
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diatamente o a la hora o a la media hora des pués del nacimiento. En general, "el reflejo de raíz" aparece dentro de la hora y nosotros observamos, mientras el bebé mueve la cabe za de un lado a otro, para encontrar el pezón de su madre. Para que el amamantamiento precoz tenga lugar en el cuarto de alumbramiento, se de ben crear las condiciones que estimulen los sentidos del bebé, a fin de que funcionen al máximo. Es más fácil para el bebé mamar cuando la madre está sentada derecha que cuando está reclinada hacia atrás, porque así el pezón es más accesible para la boca del bebé. Y es mejor aún si las manos del bebé . están libres para moverse. Hace un tiempo empezamos a envolver a los recién nacidos en mantas, ya que vestirlos después del baño representaba tenerlos separados de sus ma dres por un tiempo más largo. Sin embargo, pronto notamos que estos bebés generalmen te comenzaron a mamar más tarde y com-
prendimos que tal actitud estaba relacionada con el hecho de que sus manos no se halla ban libres para tocar la piel de sus madres. Todos los sentidos juegan un rol en e l "apego precoz". Probablemente, los bebés establecen parcialmente los primeros lazos con sus madres, por el olfato; por eso los olores antisépticos de los hospitales pueden tener un efecto de interferencia para estable cer los lazos precoces. También puede inter ferir la presencia de mucha gente durante el alumbramiento. La calma y el silencio son muy importantes. Cuanto menos cantidad de gente haya, menor cantidad de ruido y más fácil comunicación entre la madre y el bebé. Ya que los bebés abren sus ojos mientras ma man, el cuarto debe ser iluminado suavemen te, para que no les moleste. Vale la pena ad vertir que las necesidades básicas para una mujer en trabajo de parto -las luces bajas, el silencio y el calor- son las mismas que las de los recién nacidos.
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miles de veces, la seguimos mirando con un encantamiento infinito. No sólo los bebés sa ben adónde buscar y encuentran los pechos
El orden de los acontecimientos varia un poco cuando los bebés nacen en el agua Es to es algo especial, en Pithiviers. Es muy emocionante ver a un bebé flotar hacia la su
de sus madres casi inmediatamente, sino que
perficie del agua. Me acuerdo que una bebita
las madres también saben qué hacer; actúan
subió sola a la superficie, sin ninguna asisten
instintivamente para ayudar a mamar a sus
cia. El cordón era muy largo y, de repente, vi
A pesar de haber observado esta escena
bebitos. La madre se sienta, acerca su bebé a
mos ¡que el bebé nadaba en la superficie! En
su pecho, lo mira a los ojos y mueve el pecho
caso de nacimientos en el agua, el cuarto no
hasta que el pezón entra en la boca del bebé.
debería ser sobrecalentado, porque el conta&
A veces, incluso, una madre que no tenga la
to con el aire fresco es especialmente efedir
menor intención de amamantar a su bebé,
vo para estimular las primeras respiraciones
empezará a hacerlo inmediatamente después
del bebé cuando se lo saca de la pileta. Hasta
del nacimiento; unas horas más tarde recor
este día, nunca hemos tenido necesidad de
dará que tenía planeado darle la mamadera.
limpiar las vías respiratorias después de estos
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nacimientos, ni tampoco tuvimos infecciones menores o complicaciones, asociadas con na . cimientos debajo del agua. Por lo general, después de un nacimiento debajo del agua, la madre se arrodillará y re cibirá a su bebé exactamente como si estuvie ra fuera de la pileta. Si el bebé siente frío, na da más fácil que un baño caliente allí mismo. Pero nunca hemos intentado prolongar la in mersión del bebé después del nacimiento, como algunos lo hacen. El recién nacido ne cesita calor humano, necesita estar en los brazos de su madre y sentir su suave contac-
to. A pesar de que hay mujeres que desean quedarse en la pileta después de haber dado a luz, preferimos que salgan del agua justo antes de expulsar la placenta, para eliminar cualquier posibilidad de que el agua penetre en el torrente sanguineo a través de los vasos sanguineos que están abiertos en el útero y cause una embolia. Sólo recientemente se ha welto objeto de un estudio científico la primera hora después del nacimiento. Hasta los años 1930 y 1940, los psicoanalistas eran realmente los únicos en reconocer la importancia de los primeros
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momentos. Su interés en la infancia, sin em
este 1azo.4 En 1968, Terkel y Rosenblatt tra
bargo, permaneció en el campo de lo acadé
taron de determinar si ciertas sustancias regu
mico y abstracto. Pasaban muy poco o nin
laban el comportamiento maternal cuando
gún tiempo con madres y recién nacidos. Se
eran transportadas en el plasma de la sangre.
concentraban en el simbolismo maternal de
Inyectaron a un grupo de ratas vírgenes con
leche y pechos y enfatizaban al máximo la
plasma tomado de una madre rata, dentro de las veinticuatro horas después del parto y a
importancia del hambre-satisfacción, en la formación del lazo de la madre con el hijo. Su exclusivo interés en este vínculo oscureció el hecho de que un bebé tiene otras necesida
otro grupo de ratas vírgenes con plasma de ratas que no habían parido. Un tercer grupo fue inyectado con una solución salina. las ra
des, por ejemplo, la necesidad de contacto.
tas vírgenes inyectadas con plasma de ratas
Esto tuvo alguna importancia en el trabajo de
madres mostraron un significativo comporta
Konrad Lorenz y Nikolaas Tinbergen, publi
miento maternal, mucho antes que las ratas
cado en los años 1950, que por primera vez expuso a los ojos del público la etología (el estudio científico del comportamiento ani
de los otros grupos. La cuestión del compor tamiento maternal parecía entonces conecta da con la actividad de las hormonas sexuales
mal). Todo el mundo oyó hablar de los gan sos de Lorenz que, después del nacimiento,
bajos niveles de progesterona en la sangre de
(los altos niveles de estrógeno y prolactina y
se apegaban al primer cuerpo grande con el cual entraban en contacto, incluso creyendo
las ratas, inmediatamente después del parto).
que un hombre barbudo o una gansa de car tón era su madre. Con la etología, llegaron
este descubrimiento. Sin embargo, una gran cantidad de datos quedaron sin explicación.
los conceptos de "apego", "lazo" y períodos
Por ejemplo, ratas no inyectadas con el plas
Inyecciones de esas hormonas confirmaron
"críticos" o "sensitivos"; fases relativamente
ma posterior a la parición de las otras ratas,
breves durante las cuales se piensa que ocu
exhibieron el mismo comportamiento mater
rren los principales cambios de comporta miento. Los científicos empezaron a estudiar
nal, después de un contacto continuo con be bés ratas, durante varios días. ¡Esto sucedía
las tempranas relaciones entre madre e hijo
incluso con machos! Terkel y Rosenblatt deci
en aves, ratas, cabras y simios. Pero hasta el
dieron proponer un "período de transición",
día de hoy casi ningún estudio etológico ha
durante el cual la regulación del comporta
investigado lazos tempranos entre las madres
miento maternal pasó de una base hormonal
humanas y sus bebés. Los pocos que lo han
a una base no hormonal.
hecho son difíciles de interpretar, a causa de
Inesperadamente, en la última década, el
la incontrolable interferencia del personal
descubrimiento de las neurohormonas contri
médico y de la tecnología --común en todos los hospitales occidentales- durante el pro
buyó con otro importante dato, al fundamen to fisiológico del "lazo maternal". 5 Aún no
ceso del nacimiento.
sabemos precisamente cómo funciona el sis
Investigaciones realizadas durante la déca
tema neurohormonal, pero lo que sí sabe
da del 60 pusieron en evidencia las bases es
mos es que las endorfinas -las neurohormo
pecíficamente hormonales y fisiológicas de
nas que alivian el dolor- también estimulan
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_j
EL
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los sentimientos de placer y bienestar; co mienzan a actuar en la amistad, el amor, el
dría servir como.un maravilloso modelo de cómo pueden ser la afección y el apego. Con
sexo y en las relaciones afectivas de cualquier
esto no quiero decir que las mamás y los be
índole; inducen a dar cuidados, a mimar y
bés que no gozan de la oportunidad de seme
producen hábitos de dependencia mutua. Las
jante primer contacto ideal estén peor, a la
neurohormonas, entonces, juegan un rol en
larga, que quienes pueden tenerlo o que estos
toda forma de apego y afectos en la vida dia ria, independientemente de la actividad o de
bebés, necesariamente van a tener menos ra ices cuando sean adultos o van a ser menos
las hormonas sexuales. Eventualmente, pue
aptos para amar o sentir placer. La cultura, el
den llegar a explicar la activación del com
entorno y el condicionamiento social ejerce rán, en cualquier individuo, mayor efecto que
portamiento maternal, aun en ausencia de parto. Las neurohormonas también figuran de
cuanto suceda durante algunos períodos "crí ticos" tempranos y, seguramente, pueden
manera importante durante el nacimiento,
compensar cualquier carencia del principio.
tanto durante el trabajo (cuando, según he
Después de todo, los seres humanos no son
mos visto, ayudan a aliviar el dolor) como
gansitos. Pero, ¿por qué no hacer el comien
después del parto. Al advertir, con posteriori
zo lo más positivo posible? ¿Por qué no au
dad al parto, que los niveles endorfinos son elevados en la sangre materna y en la del be
mentar todas las posibilidades? ¿Acaso noso tros, éomo obstetras y parteras, como profe
bé, nos damos cuenta hasta qué punto el sis
sionales, no somos responsables por algo que está más allá de la asistencia estrictamente
tema endorfino contribuye a crear lazos de interdependencia entre la madre y el hijo, el proceso de "lazo maternal". El hecho de que el nivel de endorfinas en la sangre es más al- ' to después de un nacimiento vaginal que des pués de una cesárea es otro argumento a fa vor de la no perturbación del nacimiento. Una crítica similar puede hacerse con refe rencia al uso de las drogas contra el dolor y de las hormonas sintéticas, las que compi tiendo con las hormonas naturales, alteran el complejo balance hormonal natural, afectan el estado de ánimo de las madres después del nacimiento y, de esa manera, influyen en las dinámicas del lazo maternal. Todos estos descubrimientos nos alientan para que estemos muy atentos y pongamos mucho cuidado en facilitar este importantísi mo primer contacto entre madre e hijo. El la zo inicial del bebé con otro ser humano po-
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médica? Mejorar los contactos iniciales que la gente tiene con los demás, al comienzo de sus vidas, es una manera concreta de huma nizar nuestro mundo.
En Pithiviers, una vez expulsada la placen ta, la madre, el bebé, el padre, la partera y ocasionalmente el doctor van a un cuarto cer cano. Por lo general, el bebito ya ha empeza do a mamar. Muy a menudo, la mamá cami na hasta su cuarto llevando a su bebé en los brazos. Cada uno de estos cuartos tiene al la do de la cama, una cuna de madera, fabrica da por el padre de un bebé nacido en Pithi viers. Además, hay una sillita muy baja, en realidad un verdadero "prie-dieu" (reclinato rio), que parece haber sido especialmente di señado para la comodidad de una madre que
En la habitación
amamanta. las mujeres pueden tener todos los invitados que quieran. Una cama extra es tá siempre lista para la persona que acompa ñe a la madre.
Por supuesto, no hay ninguna nursery central en Pithiviers. Los bebés siempre se quedan con sus mamás·. Las mismas parteras que ayudaron a la mamá durante el trabajo están disponibles durante el tiempo de post parto en que la madre se queda en el hospi tal. las asiste cierto número de mujeres, la mayoría de las cuales también son madres. Estas asistentes (varias de las cuales han tra bajado aquí durante veinte años), limpian los cuartos y sirven las comidas. También les muestran a las madres cómo cambiar paña les, ofrecen útil consejo para el amamanta miento e informan acerca de cualquier cir cunstancia inusual -como ictericia o cam bios en el comportamiento del bebé- a al guna de las parteras o al doctor. El trabajo de las parteras y de las asistentes libera a la ma dre de toda preocupación material durante su permanencia en la clínica, para que pueda
EL NACIMIENTO RENACIDO 96 -
La partera y una madre durmiendo con
MICHEL ODENf 97 -
su
bebé
EL NACIMIENTO RENACIDO 98 -
.J
poner toda su atención en su bebé y en ella misma. Ninguna regla o rutina del hospital in terfiere con la creciente relación entre madre e hijo. En semejante entorno, se hace muy fácil satisfacer las necesidades básicas de un recién nacido. Los bel;>és necesitan la presen cia tranquilizante de la mamá: su calidez, su contacto, su voz, su olor, la sensación de su piel. Los bebés necesitan moverse, ser arru llados en los brazos de sus madres. El arrullar y hamacar a un bebé ha sido subestimado desde el principio de siglo; los pediatras, pre ocupados con los gérmenes y las calorías, le dieron poca importancia a la función vestibu-
lar, que regula el equilibrio y otras coordina ciones motoras y requiere estimulo -en este caso, provisto por el balanceo- para su de sarrollo. Naturalmente, los bebés también ne cesitan mamar y, sobre todo, cuando se les antoje. Estas necesidades fundamentales se pueden satisfacer casi inmediatamente, cuan do una madre está lo más cerca posible de su recién nacido, tanto de día como de noche. Los bebés parecen estar mucho más calmos y mucho más felices cuando se hallan en la cama de sus mamás que cuando están en sus cunas, aun cuando la madre no se encuentre cerca; quizás porque allí todavía pueden per-
MICHEL ODENf 99 -
cibir su olor y esto los tranquiliza. A las ma
veinticuatro horas al día, rápidamente va a
dres se las alienta para que cambien ellas mismas a sus bebés y los bañen diariamente.
aprender cuáles son sus necesidades y de seos. Va a desarrollar la sensibilidad para las
Esto último es un aspecto original de la vida
expresiones de su bebé y no interpretará ca
en Pithiviers. En cierta época, en los hospita
da llanto o grito como un pedido de leche, lo
les, hubo una disposición que prohibía bañar
cual, a menudo, acarrea problemas de ama
al niño hasta que el cordón umbilical se hu biera caído, lo que generalmente significaba una espera de alrededor de dos semanas. Sin embargo, desde 1963, las madres, en nues tra unidad, han bañado a sus bebés desde el nacimiento en adelante, sin ningún problema y para gran placer de ambos. Con respecto a la nutrición, una madre que está con su bebé
mantamiento. Alentamos la paciencia, para establecer el amamantamiento. A fin de disminuir cual quier presión que pueda sentir una nueva ma dre, le recordamos que los bebés realmente no necesitan ni leche ni otras muchas calo rías, hasta los dos o tres días. De hecho, an tes de este tiempo, los pechos no contienen
EL NACIMIENTO RENACIDO - 100
leche sino calostro, un líquido de alta calidad, rico en anticuerpos. Es sólo al tercer día que la leche real baja. A veces, hay problemas de tiempos: la leche baja antes de que el bebé tenga hambre o el bebé tiene hambre antes
y vulnerables. Otro factor puede ser que las madres, en nuestra clínica, toman parte tan activa en el cuidado de sus bebés, que se crea un sentimiento de plenitud y se familiariza a las madres primerizas con sus nuevas respon
de que la leche baje. Las asistentes, realmen
sabilidades. Así, cuando una mujer nos deja
te pueden ayudar en estos casos, para tran
para irse a su casa, no tiene que encarar de
quilizar a la madre y para que no se sienta
repente, una total y nueva situación frustran te, sino que ya está habituada y tranquila con
impaciente o frustradá. La posibilidad de se mejantes problemas convierte al tercer día después del nacimiento en el peor para dejar
el cuidado de su bebé. Aparte de clínicas como la nuestra, hay
la clínica. No se requiere que las mujeres se
muy pocos lugares dedicados a cumplir con
queden por un determinado período de tiem
las necesidades de los recién nacidos. Por
po; son libres de irse cuando quieran. Sin embargo, la mayoría encuentra que lo mejor es irse dentro de los primeros dos días o si
ejemplo, la necesidad del bebé de poder iden tificar a su madre y tenerla cerca, a menudo
no, cuatro o cinco días después.
los hospitales modernos. Miembros del per
Salvo algunas frustraciones momentáneas, la depresión de postparto es rara en nuestra clínica. Mucha gente que ha trabajado o dado a luz en grandes hospitales se da cuenta muy pronto que, relativamente, muy pocas muje res en Pithiviers están deprimidas después del alumbramiento. Es posible que el modo en que las mujeres dan a luz en Pithiviers, las ha ga menos vulnerables a la depresión. Sabe mos que esos estados de ánimo, hasta cierto punto, son el resultado de un desequilibrio hormonal. Cada nacimiento es seguido de re pentinas alteraciones en los niveles de estró geno, progesterona, prolactina, oxitocina y endorfinas. Sin embargo, respetando el equi librio hormonal de una mujer durante el tra bajo de parto y el nacimiento y evitando el uso de drogas, probablemente eliminamos muchas tensiones hormonales anormales , y por ende, decrece la posibilidad de la depre sión de postparto. Además, el entorno alen tador de la clínica también puede tener efecto consolador y nutriente en las madres noveles
sonal del hospital, frecuentemente toman el
es imposible de satisfacer en la mayoría de
lugar de la madre y causan innecesaria confu sión al bebé. Las nurseries en China y en Eu ropa del Este son casi caricaturas de esta si-
MICHEL ODENf -101
tuación: docenas de bebés yacen envueltos estrechamente, uno al lado del otro, para ser llevados como paquetes a sus madres, cuan do llega el momento de alimentarlos. Una mi rada a semejantes escenas hace que uno se dé cuenta de la gran necesidad de cambio. Irónicamente, en Pithiviers, la resistencia más fuerte para el cambio, a menudo proviene de las madres de las mujeres que vienen a dar a luz. Sobre todo si ellas dieron a luz en los años '50 y '60, en una época en la· que el amamantamiento no era valorizado y a las mujeres se les decía una y otra vez, que la ex cesiva atención " estropearía" al niño; que dándole de mamar cuando pidiera, llevaría al desarrollo de "malos hábitos". Estas mujeres se sienten mal cuando ven a sus hijas o nue ras responder a las necesidades de sus bebés, de ser alimentados, tenidos en los brazos y mimados cuando lo reclaman. Obviamente, si una madre no "escucha" a su bebé por miedo de alentar "malos hábi tos", la criatura no va a tener más salida que la de terminar por someterse a semejante tra tamiento. Pero tarde o temprano va a pagar se un precio. Aunque no enteramente conclu yentes, los resultados de un número de estu dios importantes muestran correlación entre ciertos sucesos durante la vida fetal, el alum bramiento y la primera infancia y una varie dad de enfermedades posteriores. Por ejem plo, Nikolaas Tinbergen, el etólogo inglés y ganador del Premio Nobel, ha identificado factores específicos como -alumbramientos con fuertes fórceps y prolongada separación ( de la madre después del nacimimtcr- como "patógenos" (productores de enfermedad); en este caso particular como causas posibles de autismo. Personalmente, siempre estuve predispues-
to a darle gran importancia y valor a la tem prana edad y la primera infancia, gracias a que mi madre trabajó en una escuela forma dora de maestras para jardines maternales. Ella fue influida profundamente por figuras como María Montessori, una pionera en la educación de los niños pequeños, quien estu dió los posibles efectos a largo plazo de las experiencias de los bebés durante las prime ras horas de sus vidas, en su desarrollo poste rior. El trabajo de Montessori tuvo nuevo sig nificado para mí en una época de mi vida, cuando en Pithiviers, mi previa experiencia médica convirgió con nuestra reconsideración de la práctica de la obstetricia. Como ciruja no, a menudo traté adultos con enfermeda des como úlcera péptica, colitis ulcerante e hipertiroidismo. Cada vez que intenté descu brir el origen y la naturaleza de las llamadas enfermedades "psicosomáticas", era llevado inevitablemente a alguna consideración de la primera infancia del paciente. El hecho de tratar semejantes enfermedades y trabajar al mismo tiempo en la unidad de maternidad, hizo que mi continuo n i terés se enfocara en la primera infancia y los principios de la rela ción madre e hijo. Me volví curioso con res pecto a la perspectiva psicoanalítica e in,triga do por el trabajo de los etólogos que· habían estudiado los primeros contactos entre ma dres animales y sus proles e investigado los períodos críticos del proceso de esta interre lación. El concepto fascinante de "inhibición de acción" formulado por Henri laborit -el fi siólogo francés que, en 1952, introdujo la clo ropromazina, la primera droga neuroléptica (modificadora del comportamiento)- provee una importante llave para nuestra compren sión del vínculo que hay entre traumas tem-
EL NACIMIENTO RENACIDO - 102
pranos y desarrollo posterior. Laborit usó el término "inhibición de acción" para describir el modelo de comportamiento de sumisión básico, un estado patógeno, que resulta cuan do un organismo no está en posición de res ponder al estrés, ya sea peleando o huyendo. Experimentando con ratas, Laborit pudo ras trear el origen de alta presión arterial en las situaciones de continua frustración. Las ratas, en una jaula, recibían repetidos choques eléc tricos. Algunas tenían acceso a una puerta abierta; otras no podían huir. Algunas esta ban en una jaula con otras ratas y podían pe lear; otras estaban aisladas. Sólo aquellas ra tas que no podían ni pelear ni huir, sufrieron una indudable alza en la presión arterial. El punto es que la naturaleza exacta o la causa del estrés es un factor menos significativo que cómo puede actuar uno para aliviarlo, si es que puede. Esto es ciertamente verdadero en los humanos. Basta pensar en cuán desagra dables son, en nuestras propias vidas, esas si tuaciones de frustración, sin ninguna posibili dad de alivio o de resolución. Estudios hormonales confirman la teoría de Laborit. La "inhibición de acción" genera una secreción de noradrenalina y cortisol; el corti sol mismo desencadena la inhibición de ac ción y el resultado es un círculo vicioso que explica la generación de la angustia. Sólo una acción que viola el modelo dando un premio, puede romper el ciclo. Además, como sabe mos que la noradrenalina contrae los vasos sanguineos, acelera los latidos del corazón y eleva la presión arterial y que el cortisol tiene varios efectos a largo plazo, como el de dis minuir el sistema inmunológico y destruir el timo, podemos predecir terribles consecuen cias, en caso de repetida inhibición de ac ción. Es obvio que semejantes reacciones
hormonales continuadas (reacciones a las si tuaciones patógenas) son factores Ounto con causas genéticas y otras causas) -en la etio logía- de las que solíamos 11amar "enferme dades psicosomáticas" . Estas incluyen la de presión, alta presión arterial, úlceras, aler gias, disfunciones sexuales, partos difíciles, colitis, irregularidades del sistema inmunológi co, cáncer, en resumen, todas las enfermeda des que asociamos con la civilización moder na. A pesar de que Laborit no relaciona explí citamente sus descubrimientos con las expe riencias comunes de los recién nacidos, lo podría haber hecho. Es precisamente en las primeras etapas de la vida (cuando el "hor monostato" que, desde el cerebro, regula el nivel hormonal del cuerpo, es puesto en mar cha), que estas situaciones de comportamien to son más propensas a generar la patolo gía. 6 Muchos bebés pasan días, semanas e in cluso meses en prolongados o casi crónicos estados de "inhibición de acción". Separados de sus madres durante horas, sujetos a duros exámenes médicos, sus pedidos de comida ignorados, probablemente aprendan bien temprano que sus llantos tendrán muy poco o ningún efecto en lo que sucede a su alrede dor. A nuestras madres y abuelas se les ense ñó que los bebés no debían ser "malcriados", en otras palabras, que ellos debían ser mante nidos en estado de "inhibición de acción". En Pithiviers, nuestra meta es prevenir estas si tuaciones patógenas, satisfaciendo los deseos fundamentales del bebé. El mejor modo es a segurarnos de que, en los primeros días, la madre y el niño estén juntos y sean accesibles uno al otro, en todo momento. Si bien los hospitales convencionales rara mente satisfacen las necesidades fundamenta-
MICHEL ODENf - 103
les de los bebés nacidos en término, la situa
fueron expuestos a experiencias sensoriales
ción es aún más aguda en el caso de los be
excepcionalmente ricas desde muy temprana edad, una muy probable hipótesis, ya que en
bés prematuros. Actualmente, la prematurez está vista como una desventaja y es temida, porque a menudo se la asocia con una mayor
los días anteriores a la existencia de la neona tología, los bebés prematuros, probablemente
susceptibilidad a la enfermedad, a los proble
debían su supervívencia a la constante sensiti
mas emocionales y al retardo mental. Sin em
vidad y vigilancia de sus atentas y comunicati vas madres.
bargo, sin negar los potenciales problemas que pueda haber, recordemos que Galileo,
Ahora, la prematurez se caracteriza, desa
Pascal, Darwin y Einstein fueron prematuros
fortunadamente, por la separación de la ma
y, en un sentido, todos los seres humanos,
dre y el niño y por una profunda privación
comparados con la mayoría de los mamífe ros, nacen en estado de inmadurez. (Sus sis
sensorial en un momento crucial del desarro
temas no están totalmente formados todavía).
una nursery de cuidados intensivos, a menu
Su madurez se realiza dentro de un contexto
do recibe menos estímulo sinestésico y vibra
social, donde ellos experimentan temprana mente un intenso estímulo sensorial. Las cla
torio que un feto de la misma edad in utero cuando, en realidad, necesita más. EJ entorno
ses específicas de estímulo varían de una cul tura a otra y de un indivíduo a otro, pero el
llamada incubadora, es obviamente aislante;
estímulo sensorial de cierta clase es universal.
el constante ruido del motor sirve para en
¿Qué puede decirnos esto con respecto a los niños nacidos "antes de término"? A pesar
sentido para el bebé. EJ bebé no puede ni to
de que la madurez del sistema nervíoso cen tral está determinada por ciertos imperativos
car a su madre, ni oír su voz. Eso es terrible mente descorazonador, dada la especial im
cronológicos ligados al código genético, el
portancia que tienen para el niño, los estímu
llo de la vída del bebé. Un bebé prematuro en
en esa jaula húmeda de vidrio o de plástico,
mascarar todos los sonidos que pueden tener
despertar de las funciones sensoriales, clara
los sensoriales y el contacto humano. Alimen
mente, es un estímulo esencial para su desa rrollo. Por ejemplo, simples exámenes han
to y calor no serán suficientes para llevar
demostrado que los bebés prematuros, a los
ciones motoras.
energía al cerebro o ejercitar tempranas fun
cuarenta y cinco días después de la concep
Para empezar, ¿por qué no se pone la in
ción, generalmente tienen una función vesti
cubadora en el cuarto de la madre? Cualquier
bular más avanzada que los bebés de la mis
madre puede entender que una incubadora es
ma edad, nacidos en término. Entonces, la
simplemente una caja de plástico o de vidrio
prematurez no lleva necesariamente a una in
con un termostato adentro, una pieza de tec
capacidad física y emocional; al contrario, los
nología bastante manejable. Además, agre
bebés prematuros que están rápidamente ex
gando una estufa en el cuarto, es posible sa
puestos a ricos y variados estímulos pueden
car al bebé de la incubadora, sin riesgos. Cu
muy bien convertirse en algunos de los más
bierto con cálidas frazadas, aun el bebé pre
avanzados en su desarrollo. Quizás algunos
maturo puede pasar la mayor parte de su
de nuestros genios nacidos prematuramente
tiempo en los brazos de su madre y puede ser
EL NACIMIENTO RENACIDO - 104
La mamá conserva al bebé prematuro en su cama, con la incubadora al iado
hamacado, tocado, acariciado, recibir cosqui
go extraño sucede, ella siempre será la pri
llas, mientras se le habla o amamanta. El be
mera en notarlo. Los bebés más pequeños
bé prematuro, también, puede empezar a co
que conservamos en la clínica y no manda
nocer a su madre, acostumbrarse a su voz, a
mos a la unidad de cuidado intensivo neona
su aroma y a su tacto. De hecho, la composi
tal, fue un par de mellizos, cada uno con un
ción de la leche de su madre está perfecta
peso de 3.5 libras. Durante su estadía en Pi
mente adaptada para las necesidades espe
thiviers, los mellizos fueron separados de su
ciales de su bebé prematuro. 7 No es sorpren
madre solamente una vez durante una hora,
dente que la mayoría de las madres, en Pithi
cuando salió a comprar algunas cosas al pue
viers, eligen usar las incubadoras lo menos
blo. Nunca tuvimos que mandar a bebés naci
posible, prefiriendo tener a los bebés en la
dos con un peso inferior a 5.5 libras a la uni
cama, con ellas. Cuando un bebé prematuro
dad pediátrica después de haber decidido cui
y su mamá están juntos todo el tiempo, es
dar de ellos en la clínica, y lo que es más, es
asombroso lo rápido que se vuelven una uni
tábamos siempre impresionados por el pro
dad autónoma, independiente del personal
greso rápido que esos chicos hacían estando
del hospital. Gracias a este íntimo contacto,
al cuidado de sus madres; a menudo estuvi
la madre va a conocer mejor a su bebé: si al-
mos de acuerdo en que se los llevaran a casa
MICHEL ODENf - 105
cuando aún tenían un peso inferior al nor mal. (Por el contrario, semejantes bebés, si estuvieran en las unidades de cuidado neo natal, serían mantenidos en incubadoras, durante una o dos semanas más). Realmen te, hemos empezado a sospechar que, mu chas de las alteraciones metabólicas obser vadas con frecuencia en bebés prematuros, están ligadas no al hecho de que son pre maturos sino a la ausencia o reducción de estimulo sensorial y de afecto humano -es pecíficamente a la separación de la madre y el bebé- común en la mayoría de los hos pitales modernos. Desafortunadamente, obstáculos prácticos a menudo hacen imposible este acercamiento ideal entre madre e hijo, incluso en nuestra unidad. Una madre que ya tiene varios niños en casa, a veces no puede quedarse en el hospital durante varias semanas, con su bebé. Además, al seguro nacional francés no se lo convence fácilmente para que cubra los cos tos de su hospitalización por más de doce días, a pesar de que, por lo general es menos costoso que la permanencia del recién nacido en una unidad de cuidado intensivo. Estas di ficultades prácticas en cierto modo, se hallan ligadas también con nuestra quizás excesiva prudencia. A pesar de la "falta de calidez" de la incu badora, las hemos utilizado en casos en los cuales habría sido posible, simplemente, pres cindir de ellas. No nos sentimos preparados para seguir totalmente el ejemplo del pediatra
colombiano que manda los bebés prematuros a su casa, después de sólo uno o dos días, re comendándoles a las madres que se queden con ellos día y noche, en estrecho contacto corporal, como los bebés canguros en la bol sa de su madre. Los resultados de nuestro acercamiento al prematuro no pueden interpretarse estadísti camente, pues no hemos tenido suficientes casos, hasta ahora. Aún así, entre 1 9 7 8 y 1984, a cien bebés con un peso menos de 5 . 5 libras, se los mantuvo constantemente con sus madres. Antes que la madre deje la unidad de mater nidad, dialogamos con ella sobre varios temas, desde contraconcepción hasta cochecitos. Nos asegurarnos de hablarle sobre la Uga de la Le che, organización internacional fundada hace treinta años por mujeres que quisieron hacer que el amamantamiento fuera más fácil y más satisfactorio tanto para las mamás como para los bebés. Es importante que las mujeres estén informadas sobre qué esperar del amaman tamiento, pues muchos doctores saben tan po co sobre esto que no pueden aconsejar a las madres acerca de qué hacer cuando surgen problemas, y entonces, demasiado rápidamen te, les aconsejan darles mamaderas. Desde este momento, es la madre "la que toma las riendas". Quedamos a su disposi ción para ayudarla, si hubiera algún proble ma. Pero si hemos hecho nuestro trabajo de manera adecuada, ahora ella estará lista y de seando manejarse por sí misma.
EL NACIMIENTO RENACIDO 106 -
Una madre de París Era primavera. Cada martes íbamos para cantar con Marie-Louise a la unidad de ma ternidad. Yo estaba embarazada de dos me ses, cuando hicimos nuestra primera visita. A la salida del colegio podía oír a mi hija de cinco años mandándose la parte con sus amigas: "Me voy a bailar y a cantar al hos pital donde nacen los bebés". Fantasía: Marie-Louise canta a propósito de la vida y mí bebé canta a la vida adentro de mí. El verano llega a Pithiviers, inun dando al pueblo con la luz del sol. En Be auce, los campos dorados cubren la tierra. Pasamos las vacaciones en la hostería de la campiña, dirigida por Madame de la Forge. Ella trabaja en el hospital y también canta allí. Su hospitalidad no tiene límites. Un día durante la cita con un pediatra, mi hija es atraída por Martine, una joven futura madre. Juegan juntas y hacen paja ritas de papel. Una amistad nace. "Bueno, lo prometo: mañana vamos a hacer jun tas un picnic en el césped". Pero al día si guiente Martine y Didier, nuestros nuevos amigos, no están allí. En el hospital, una asistente nos informa que su bebé está por nacer en el cuarto 126 . Le vamos a hacer una corta visita. Didier me pide que me quede con Martine durante unos cinco mi nutos, mientras él fuma un cigarrillo. Esta ban acampando, cuando los primeros "sig nos" comenzaron durante la noche. Marti ne está por dar a luz. Quiere compartirlo conmigo, para volver a traer los viejos la zos entre mujeres. Martine se sienta en la pileta para aliviar las contracciones fuertes. Mi hija entra y sale en puntas de pie. ¿Ten dría que tratar de alejarla de la realidad
del nacimiento? Muy pronto la oigo tocan do el piano en el cuarto de canto; sus ma nitas tocan las teclas como si fueran alas de mariposas cepillándose en un verde pra do. La cabeza del bebé coronó. "Me he quedado sin fuerzas, yo. . . " Martine larga un grito de queja. El bebé de Martine ha nacido y llora sua vemente en sus brazos. "¡Mi hijo!", dice a sombrada: "¡Ahora tienes tu propia vida!" El sudor de mi cara está mezclado con lá grimas de alegría. "¿Podemos ir al picnic ahora?" grita mi hija, al entrar en el cuarto. Varios días después, me pregunta pensa tiva: "Mamá, ¿eso es la vida?" "Sí", le con testo. Y su respuesta es: "¡Oh! ¡Es maravi lloso!" Un mes más tarde, hacemos el viaje fa miliar desde París a Pithiviers. Los puebfe rinos están cefebrando fa fiesta local. Flo res. Bandas. "Mayorettes". Mis contraccio nes, que empezaron esa mañana, se ouel ven regulares mientras seguimos el ritmo de la música. A eso de las ocho de la noche deshago mi vafija en el cuarto 1 26. Mi hija está encantada escuchando mágicas histo rias que le cuenta su padre. Pronto se que da dormida. A medianoche, nace Baptiste. Su padre me ayudó con todas sus fuer zas, mientras que una asistente se asegura ba de que su precioso agarre fuera firme. Nuestra partera esperó pacientemente. Y ahí estaba yo, sentada en ef piso, con mi bebé en mis brazos. Se le preparó un pe queño recipiente para bañarlo. Una enfer mera estudiante, a quien conocí en los � siones de canto, se sentó a mi espalda, ha ciendo de confortable respaldo. Obseroé mientras el papá de Baptíste cortaba el
MICHEL ODENT - 107
cordón umbilical, que aún estaba u nido a mí. Volvi mos a nuestro cuarto; Baptiste iba en los brazos de su padre. E n la cama, Baptiste yace dormido a mi lado. Se des pi erta, trata de mamar; se vuelve a dormir otra uez. Recuerdo otra noche de nacimien to, una noche sin dormir, gris de tristeza, rodeada de vacío: en cuanto mi hija nació, ¡fue sacada de mi lado para que yo descan sara! Aquí, en Pithiviers, a uno no le sacan sus hijos. Se dan tiempo y espacio para que nu evos lazos se creen y crezcan. Al otro día, una enfermera sugiere que cambiemos al pequeño Baptiste, pero está dormido. Así que esperamos. Y yo toda vía estoy al/í cuando s e despierta. El/os s i mplemente me dan consejos generales; yo sé qué hacer. Han pasado cuatro meses. El nudo tan sólidamente hecho en Pithivi ers se ha vu el to cada vez más fuerte con cada día q u e pasa. ¡Miren a Baptiste, dejando mi pecho para sonreírme, para mirar a su padre, cu ya voz escucha! La primera vez que hizo e so, no s e dio cuenta de que al sonreírse po día perder mi pezón y empezó a gritar.
Cuando lo encontró de nuevo, ¡sonrió otra vez! En Pithiviers, yo estaba viva durante el nacimiento; era capaz de disfrutar cada momento. Compartí mi experiencia con las mujeres asistentes, infinitamente atentas hacia mí y mi bebé. Y para u n hombre de be ser una experiencia inolvidable ayudar a dar a luz a la mujer que ama. Seco al tembloroso Baptiste después de su baño y le canto las ti ernas palabras de Marie-Louise: Tu n'au ras jamais froid, Je semerai la laine, Tu n'au ras jamais froid, Je planterai la soie. . . You '/1 never be cold, 1'11 sow seeds o/ wool. You '/1 neuer be cold, I'/1 plant silks unto/d .. . Jamás tendrás frío, Sembraré semillas de lana. Jamás tendrás frío, Plantaré Incalculable seda.
EL NACIMIENTO RENACIDO - 108
MICHEL ODENT - 109
ANTIOB STETRICIA Es fácil imaginar las objeciones que un obs
han sido consideradas como casos· especiales
tetra convencional puede tener con respecto
o difíciles en otras partes y quieren saber qué es lo que nosotros podemos hacer de diferen
a nuestra manera de encarar el nacimiento en Pithiviers. Esos doctores pueden argUir
te. Por ejemplo, es típico encontrar en nues
que nuestra práctica es adecuada sólo para mujeres sanas, con embarazos de "bajo ries go" (de las que se espera un parto sin compli
tra clínica, a mujeres de más de treinta y siete años o de treinta y siete a cuarenta y tres o cuarenta y cuatro años, que ya han tenido
caciones) y que para todas las demás muje
una cesárea y ahora quieren la oportunidad
res, es potencialmente peligroso. Es cierto
de hacer un trabajo natural y tener la posibili
que la mayoría de los nacimientos en Pithi
dad de dar a luz por vía vaginal. Además, una
viers no tienen problemas. Sin embargo, esto
clínica de maternidad a unos treinta kilóme
no se debe al bajo riesgo de la población de
tros, que aún no tiene medios quirúrgicos,
la clínica. No seleccionamos a las posibles
nos envía mujeres con problemas durante el
madres ni enviamos a aquéllas con posibles
trabajo de parto. Evidentemente, estas muje
problemas a otro hospital, ni tampoco hace
res no se pueden calificar como embarazos
mos propaganda para atraer sólo un cierto
de "bajo riesgo".
segmento de la población. De hecho, muchas
Así que, contamos, por lo menos, con
mujeres que vienen a Pithiviers lo hacen pre
nuestra cuota de casos difíciles. Sin embargo,
cisamente porque tuvieron problemas en pre vios trabajos y partos. Algunas, habiendo vis
para nueve de cada diez mujeres que dan a luz en Pithiviers, la calidez, la oscuridad, la
to muchos doctores y muchas unidades de
privacidad, la calma, la tranquilidad, la liber
maternidad, están extremadamente preocu
tad de movimiento y la presencia de sensibles
padas, y a causa de esto, no podemos espe
ayudantes durante el nacimiento, son sufi
rar una labor y un nacimiento fáciles. Otras
cientes para asegurar un tranquilo progreso
111
en el trabajo. En realidad, cuanto más difícil
trabajo normal e ignoran por completo los
parece que va a presentarse el trabajo, más
factores perfectamente comunes que pueden
atención prestamos a la calidad de la atmós
modificar el proceso, sin que eso sea causa
fera.
para alarmarse o intervenir. El resultado final
Los problemas son la excepción, aun con
es que, cada nacimiento, es visto como un problema potencial.
aquellas mujeres cuyas experiencias pasadas nos llevaron a creer lo contrario.
En Pithiviers, por supuesto que no duda
El establecimiento médico cita con frecuen
mos en intervenir médicamente cuando es
cia el "factor riesgo" -la legítima preocupa
necesario. No estamos contra la tecnología
ción por la seguridad de la madre y el niño
médica y no negamos la importancia de las
para justificar la "medicalización" del proceso
contribuciones tecnológicas en el campo de
del nacimiento y desacreditar toda otra alter
la obstetricia. Lo que hacemos es evitar cual
nativa: ya sean nacimientos caseros o centros
quier riesgo innecesario para la madre y el
de nacimientos fuera del hospital o unidades
bebé. Sin embargo, nuestra dedicación para
de maternidad en hospitales, como es el caso
ayudar a las mujeres a dar a luz por sí solas,
de Pithiviers. Pero no está realmente bien
determina cuándo y cómo intervenimos, si se
claro si esta actitud (que involucra el difundido
generara algún problema; puesto que la si
uso de sedantes, hormonas artificiales para
tuación de cada mujer es diferente, no puede
estimular el trabajo, epidurales y otras aneste
haber un modelo de rutina general para in
sias, fórceps y las cesáreas diarias) ha dismi
tervenir. Y ya que consideramos al nacimien
nuido el "factor riesgo", puesto que gran par
to como un acontecimiento personal e ínti
te de esta intervención médica introduce nue
mo, hacemos todos los esfuerzos posibles
vos riesgos. Además, este énfasis en casos de
para minimizar la naturaleza invasora de la
alto riesgo sirve muy pobremente a los intere
asistencia médica. Como resultado, muchos
ses de la gran mayoría de las mujeres, que
aspectos de nuestra práctica eliminan los pe
tienen embarazos y alumbramientos "norma
ligros que la obstetricia convencional ha crea
les". Desafortunadamente, la mayoría de los
do: cuando las mujeres tienen la libertad de
doctores están mucho más interesados en la
moverse durante el trabajo de parto y asumir
enfermedad que en la salud. Creen que la
las posiciones de alumbramiento verticales,
buena salud es simplemente la ausencia de
algunas complicaciones nunca aparecen y
enfermedad. Como resultado, doctores y es
muchas intervenciones comunes se vuelven
tudiantes de medicina se refieren con fre
innecesarias.
patología. Se pasan la mayor parte del tiem
cial de las membranas; un procedimiento que
cuencia a la obstetricia ; sólo cuando implica po preparándose para todas las cosas terri
Tomemos, por ejemplo, el desgarro artifi
•
se ha vuelto cada vez más frecuente, aunque
bles que podrían ir mal durante el embarazo y
su justificación médica sea discutible. En los
el alumbramiento. Los estudiantes saben todo
hospitales modernos, es normal romper las
acerca de la placenta previa y de la toximia
membranas que contienen las aguas en las
aguda, pero para cuando se reciben, han
que flota el feto, al comienzo del trabajo.
aprendido muy poco sobre la fisiología de un
Cuando la presión de una contracción hace
EL NACIMIENTO RENACIDO 1 1 2 -
que las membranas se hinchen, se pueden
les el romper las membranas parece acelerar
romper fácilmente con cualquier instrumento
el trabajo, probablemente se esté ante mem
sin filo. Una de las razones que dan los doc tores para este procedimiento (amniotomía) es que acelera el trabajo, lo cual se supone
branas que se hubieran roto muy rápidamen te por sí solas. En Pithiviers, raramente· rompemos las
practicantes rompen las membranas, es para
membranas, a fin de dejar que el trabajo de parto siga su curso fisiológico natural. En
determinar el color del líquido amniótico. Es
cambio, si pensamos que es necesario hacer
te color puede proporcionar datos que ayu
una revisación especial para ver la condición
dan a saber en qué condiciones está el bebé y a veces puede indicar peligro fetal. Si en al
en que se encuentra el bebé, inspeccionamos
que es bueno. Otra razón por la cual los
las membranas con un amnioscopio: un tubo
gún momento el feto es privado de oxígeno,
de metal equipado con una luz al final. Con el
protegerá sus órganos vitales -como el cora
amnioscopio podemos ver el color del líquido
zón y el cerebro- y comprometerá el flujo
amniótico a través de las membranas transpa
de oxígeno que va a otros órganos menos
rentes, sin tener que romperlas. Tampoco ve mos la necesidad de usar monitoreo interno
cruciales. Cuando esto sucede, los intestinos se retraen y se vacían en el líquido amniótico,
electrónico para chequear y verificar los lati
rrón, lo cual sugiere que el bebé ha sufrido o
dos fetales continuamente. Por una parte, es ta intrusión agresiva en el mundo del bebé no
está sufriendo por la privación de oxígeno.
está exenta de riesgo. Por otra parte, el bebé
dándole un tinte amarillento, verdoso o ma
Una tercera razón para romper las bolsas es
probablemente está sufriendo porque la mu
posibilitar a los doctores el uso de un monitor
jer está inmovilizada sobre sus espaldas, con
eléctrico interno fetal que requiere ajustar un
su útero presionando contra la vena cava y
electrodo en el cráneo del bebé para verificar
sus contracciones aumentadas por hormonas
el peligro fetal.
sintéticas; entonces sí, el monitoreo electróni
Desde nuestro punto de vista, ninguna de
co constante se vuelve necesario. En nuestra
éstas son razones suficientemente buenas pa
clínica, donde las mujeres se mueven libre
ra una intervención de rutina. Primero, no es tá del todo claro por qué una aceleración ruti
mente y no se usan drogas, las dos principa les causas de peligro fetal son eliminadas. Es
naria del trabajo es deseable. Para empezar,
por lo tanto innecesario para nosotros hacer
la rotura de las membranas da más posibilida
otra cosa que escuchar intermitentemente el
des a la infección tanto para la madre como
latido fetal con un estetoscopio obstétrico
para el niño. Sobre todo si la mujer tiene que
convencional. Si la mujer está parada o si es
trabajar yaciendo sobre su espalda, ya que en
tá en la pileta, es más práctico recurrir al
esta posición, el líquido no puede salir por
Doptone, pequeño instrumento que se pare
abajo y para afuera. Romper las membranas
ce a una afeitadora eléctrica y se usa con on
también destruye su función potencial como
das de ultrasonido de muy baja frecuencia,
protección adicional para el cordón y para el
para detectar los movimientos cardíacos del
cráneo del bebé, durante las etapas finales del
bebé. El Doptone es considerado seguro por
trabajo. Por último, en esos casos en los cua-
muchos médicos, porque su onda es baja en
MICHEL ODENT - 113
presión y en intensidad. Sin embargo, puesto
para estimular o reforzar las contracciones
que sus efectos a largo plazo todavía no son
uterinas. El Pitocin es prescripto cuando una
conocidos, no lo usamos en las primeras eta
mujer no logra tener el equilibrio hormonal
pas del embarazo; si lo tenemos que utilizar
necesario durante el trabajo, para secretar
durante el parto, lo hacemos por breves in
bastante oxitocina capaz de generar las con
tervalos.
tracciones o bien las contracciones suficiente
Hay sólo dos situaciones en las cuales juz
mente fuertes. Sabiendo lo que ya sabemos
gamos necesario romper las membranas: la
sobre el efecto del entorno para la mujer que
primera, cuando el trabajo cesa totalmente,
está trabajando, no debería sorprendernos
una vez que la dilatación cervical se ha com
que el ambiente de un hospital convencional
pletado. Este es un problema que encontra
no sea muy apropiado para trabajos espontá
mos raramente, ya que si somos suficiente
neos y eficaces. Los alrededores desconoci
mente pacientes, por lo general el trabajo
dos, las luces brillantes, las máquinas que inti
vuelve a empezar de manera espontánea. El
midan, los sonidos extraños, el constante ir y
segundo es cuando la placenta está baja pero
venir de gente extraña hacen bastante impro
no cubre absolutamente la apertura cervical
bable que una mujer pueda lograr el equilibrio
(placenta prevía marginal). En este último ca
hormonal requerido. Por eso el Pitocin se
so, una vez que las membranas se han roto,
vuelve necesario en tantos nacimientos de
algunas mujeres pueden dar a luz vaginal
hospital. Sin embargo, no es una alternativa
mente, sin peligro de hemorragia. Sin embar
ideal. Las hormonas sintéticas, aun en dosis
go, salvo estos ejemplos especiales e inusua
prudentes, nunca pueden reemplazar el ba
les, no es excepcional en Pithiviers que los
lance hormonal fisiológico perfecto. Además,
bebés nazcan con las membranas intactas cu
la experiencia nos ha enseñado que las con
briéndoles la cabeza; éste es un signo de bue
tracciones reforzadas artificialmente con Pito
na suerte en muchas culturas del mundo. Por
cin, a causa de su a veces excesiva fuerza y
supuesto que, algunas veces, las membranas
mayor frecuencia, tienen más probabilidad de
se rompen ellas solas antes de que las con
privar de oxígeno al feto, que las contraccio-
tracciones empiecen. Si esto sucede, espera
. nes naturales. Finalmente, estudios recientes
mos que el trabajo comience y nos asegura
han demostrado una relación entre el uso del
mos de que el agua esté limpia, lo cual es un
Pitocin y de la glucosa (el azúcar que se en
indicador del estado de salud del bebé. No
cuentra en la solución del drip intravenoso, a
hay que anticipar ningún riesgo por esta rup
través del cual el Pitocin es administrado) y la
tura espontánea y normal, pero evitamos ha
ictericia neonatal.
cer exámenes vaginales durante estos mo
Por eso, en Pithiviers, hacemos todo lo po
mentos, para minimizar la posibilidad de in
sible para crear un entorno en el cual la mu
fección. Otra práctica que cuestionamos es el
jer va a secretar su propia oxitocina, hacien
uso rutinario de Pitocin. El Pitocin (una forma
do innecesario el Pitocin. Empleamos Pitocin
sintética de la hormona oxitocina) es la droga
en menos de un nacimiento cada cien, sólo si
que se usa más frecuentemente en todo el
la dilatación no progresa y el descenso del
mundo durante todas las etapas del trabajo,
bebé se hace difícil. (Nunca administramos Pi-
EL NACIMIENTO RENACIDO - 114
tocin cuando hay presentación pelviana, por
ne que decir cuándo lo debe hacer. Si sus es
razones que serán tratadas más adelante, en
fuerzos no son exitosos, el bebé tiene que ser
este mismo capítulo). Muy suavemente empe
sacado con fórceps.
zamos el goteo de Pitocin. Si los latidos del
La obstetricia convencional justifica el uso
bebé se hacen más lentos (aunque sea en gra
de epidurales y otros procesos anestésicos di
do mínimo), cesamos el drip inmediatamente;
ciendo que evitan a las madres un gran dolor.
si todo sigue bien, continuamos hasta que el bebé haya descendido y la dilatación sea
eliminan la participación activa durante el
completa. A veces, una dosis minúscula es
parto. Además, los mismos doctores que abo
suficiente para que la dilatación y el descenso sean completos. En cuanto se puede -es de
gan por su uso se niegan a reconocer que, gran parte del dolor del alumbramiento es
cir, cuando el bebé ha coronado y está listo
creado por su insistencia en que las mujeres
para nacer- suspendemos todo el Pitocin.
Las epidurales sacan el dolor, pero también
deben dar a luz en una posición determinada,
Abrir el armario de las medicinas para bus
así como por el uso rutinario del Pitocin, que
car drogas de cualquier tipo no es en absolu to una rutina en nuestra clínica. Excepto en
trae contracciones artificialmente fuertes y en su prescripción de otras drogas para alterar el
las ocasiones mencionadas más arriba en que
equilibrio hormonal y probablemente inhibir
usamos Pitocin, casi nunca administramos drogas durante el trabajo de parto. Narcóti
la producción natural de opiantes. En cierto
cos, tranquilizantes y calmantes, todos ellos atraviesan la placenta y tienen efectos depre
sentido, la obstetricia convencional no deja a la mayoría de las mujeres otra opción sino la de solicitar epidurales y algún otro alivio arti
sivos en el bebé. (Los efectos a largo plazo de estas drogas en el recién nacido, desde el Pi
ficial.
tocin a los calmantes, aún no se conocen; hay estudios en desarrollo). Tampoco usamos
nacimiento es particularmente difícil, brinda
anestesia local, como epidurales, tan popula
jarse en una pileta de agua tibia y, eventual
res en muchos hospitales. La epidural se
mente, de permanecer un rato a oscuras, so la, libre para ser tan ruidosa como ella lo de
efectúa insertando una aguja entre dos vérte bras lumbares, introduciendo un catéter y lue
En vez de recurrir a las drogas cuando un mos a la futura madre la posibilidad de rela
see. En ocasiones sugerimos una o dos gotas
go inyectando una anestesia que desensibiliza
de alcohol en forma de punch o champagne,
o paraliza la región inferior de la mitad del
para ayudar a la mujer a que se relaje. Tam
cuerpo de una mujer. Las epidurales hacen
bién hemos experimentado con algunas otras
bajar la presión arterial -lo cual tiene que
alternativas, aparte de los calmantes quími cos. Por un tiempo tratamos de reducir el tra
ser remediado por drips intravenosos- e in hiben contracciones uterinas; entonces las
bajo de parto con acupuntura. Paradójica
dosis de Pitocin se hacen necesarias. Cuando
mente, mi viaje a China nos desalentó en la
la dilatación es completa y el descenso del be
intención de proseguir en esta línea. De he
bé ha terminado, la mujer, por supuesto, no
cho, me enteré de que la acupuntura tradicio
puede sentir cuándo tiene que empujar para
nal china raramente es usada durante naci
ayudar al bebé a emerger y entonces se le tie-
mientos. Esto no es el resultado de ignoran-
MICHEL ODENT - 115
cia o indiferencia por parte de Jos acupuntu ristas masculinos. Por el contrario, la acupun tura es utilizada en obstetricia. El punto Zhi yin del meñique del pie, se cree que hace dar welta a los bebés en presentación pelviana durante el embarazo y el Renzhong, en el la bio superior, puede ser usado para revivir a los recién nacidos. Pero la poca frecuencia del uso de acupuntura durante el trabajo, pro bablemente refleja una actitud tradicional que sabiamente reconoce que, tratar de influir en el trabajo de parto, implica perturbar un pro ceso en extremo complejo, al cual es mejor dejar intacto. A pesar de haber tenido algún éxito con la acupuntura, era imposible de aplicar mientras la mujer estaba caminado por ahí, cambiando posiciones o flotando en
dolor de espalda y también permite que la di latación progrese. Por último, cuando hay un trabajo de parto
el agua, por lo tanto, eventualmente, la aban
especialmente difícil, una mujer debe usar to
donamos. Tenemos muy poca experiencia
da la fuerza que tenga, para traer a su hijo al
con la homeopatía durante embarazo y par
mundo. Confiamos en las capacidades pro
to, pero nos ha sorprendido la aparente efi
pias de la mujer y en su potencial durante el
cacia del "caulofillum 4CH" usado alternati vamente con "actea racemosa 4CH" (pildori
trabajo; esa confianza ha sido constantemen te reforzada por nuestras experiencias en la
tas puestas debajo de la lengua de la mujer
clínica.
que está en trabajo). Algunas parteras pien
Lo mismo sucede para el momento del
san que estos remedios homeopáticos hacen
alumbramiento . Los obstetras reaccionan
que el trabajo sea más fácil, más rápido y me nos doloroso. De tanto en tanto, usamos "te
bastante enérgicamente cuando les decimos que los fórceps no han sido usados en Pithi viers desde 1963 y, en lo que nos concierne,
rapia lumbar de reflejo" para aliviar, cuando las contracciones se sienten dolorosamente
pertenecen a los museos. Semejantes reac
en la parte baja de la espalda y la dilatación
ciones apasionadas no deberian sorprender,
se ha detenido en unos cinco centímetros.
ya que los fórceps son tan básicos en la prác
Esto involucra inyectar pequeñas dosis de
tica de la obstetricia moderna como lo es la
agua intradérmicamente, en el área lumbar.
posición supina; eliminando ambas cosas, de
Se ha demostrado, mediante estudios, que Jos impulsos de dolor originados en la piel
hecho hemos sacudido los fundamentos de la práctica de la obstetricia moderna. No debe
pueden inhibir impulsos de dolores profun
ríamos olvidar que las mujeres, en un princi
dos. Después de un intenso dolor local mo
pio, tuvieron que yacer sobre sus espaldas,
mentáneo, dicho tipo de terapia generalmen
en angostas y altas mesas de parto, para que
te trae alivio Inmediato para este específico
los doctores pudieran usar los fórceps con
EL NACIMIENTO RENACIDO - 1 16
más facilidad. El uso de fórceps para sacar al bebé del cuerpo de la madre desplaza com pletamente el proceso natural del alumbra
de 0.4 Kg. por cm., un número muy bajo pe ro suficiente para nuestras necesidades. Cuando la presión llega a este punto, mante
miento. A veces, los nacimientos con fórceps
nemos una ligera tracción en el tubo de go
deben ser acompañados de anestesia, hacien
ma, tirándolo suavemente en la dirección de
do el proceso tanto más intruso y peligroso.
la cabeza del bebé. Durante las contraccio
Claro que, en la mayoría de los casos, el en
nes, la taza ayuda a evitar que la cabeza del
trenamiento y la destreza de quien lo practica
bebé se vuelva a subir por la vagina de la ma
son más importantes que el tipo de instru mento usado. Pero es desafortunamente ver
dre. Mientras tanto, por su parte, la madre sigue colaborando con el bebé afuera, usando
dad, que los fórceps no pueden ser conside
el extractor al vacío como una ayuda para sus
rados como seguros en cualquier mano y muy pocos son los que pueden usarlos con la
propios esfuerzos. La cabeza del bebé que empuja contra el perineo estimula una más
suficiente delicadeza y seguridad. En Pithiviers, el abandono de la posición
alta secreción de oxitocina, lo que desencade na contracciones eficaces (el reflejo Fergu
dorsal ha convertido los fórceps en piezas ob
son). Por esta razón, si se ha estado usando
soletas. En los raros casos en que las contrac
el goteo de Pitocin, lo discontinuamos en
ciones de la madre son insuficientes para em
cuanto el bebé ha bajado lo suficiente como
pujar a su bebé sin ninguna ayuda, aun cuan
para usar el extractor al vacío. Una vez que
do el descenso está completado y el cérvix
las contracciones son buenas y fuertes, guia
absolutamente dilatado, utilizamos en su lugar
mos la cabeza del bebé suave pero firmemen
un aparato llamado "extractor al vacío". Este
te hacia afuera. El bebé desciende con facili
instrumento (que se emplea aproximadamen
dad y la cabeza, generalmente, corona des
te en un 6% de todos los nacimientos en
pués de varias contracciones. Uegados a este punto, a veces sacamos la taza y procedemos
Pithiviers), consiste en una pequeña taza suje tada por un tubo de goma a un frasco. Con un simple inflador como para bicicleta, se crea el vacío en el frasco, para que la taza se
como de costumbre, mientras la madre adop
adhiera a la superficie. A pesar de que puede
to práctico y seguro; nunca falla, es extrema
ser usado en cualquier posición, el extractor
damente fácil de usar y no requiere anestesia.
ta la posición que mejor le convenga. En re sumen, el extractor al vacío es un instrumen
al vacío es utilizado cuando la madre está en
Lo utilizamos en el cuarto de alumbramiento,
una posición semisentada, ayudada por su
pero también podría ser apliéado durante na
compañero o asistente. La taza es insertada
cimientos en los hogares.
en su vagina y puesta en la cabeza del bebé,
Después del uso del extractor al vacío, al fi
lo más cerca posible del hueso púbico de la la taza se adhiere a la cabeza del bebé. Un
nalizar la primera etapa del trabajo, las muje res en general están aptas para valerse de sus propios recursos y dar a luz. Muchas madres
dispositivo indica la cantidad exacta de pre
no tienen la sensación de que sus bebés les
madre. Cuando se bombea para crear el vacío,
sión que está siendo aplicada. En cuestión de
fueron extraídos; algunas de ellas hasta se ol
cinco minutos, la presión alcanza alrededor
vidan de que fueron asistidas por el extractor
MICHEL ODENf 1 1 7 -
al vacío. En cambio las mujeres cuyos bebés han sido sacados con fórceps, nunca lo olvi dan. En lo que concierne a los bebés, des pués de la extracción al vacío, se suele for
hemos encontrado necesarias en sólo un 7 % de todos los nacimientos en Pithiviers. Hace mos una episiotomía sólo cuando hay causa de preocupación por el estado físico del be
mar un pequeño chichón en sus cabezas, que
bé, por ejemplo, en caso de presentación
desaparece por completo luego de algunas
pelviana. En ese caso, la episiotomía va a evi
horas.
tarle al bebé ya estresado, esas últimas con
Significativamente, los extractores al vacío son muy conocidos y usados sólo en los
tracciones, que van a ayudarlo a nacer más rápidamente.
países donde las mujeres tienen control sobre
La verdad es que las episiotomías son rara
el entorno del nacimiento. Originalmente fue
mente necesarias cuando las mujeres dan a
ron desarrollados en Suecia, un país con lar ga tradición en parteras. En China, donde la
luz en la posición de cuclillas, con asistencia, como tan a menudo es el caso en Pithiviers.
mayoría de las obstetras son mujeres, las asis
Esta posición asegura la máxima presión pél
tentes a menudo usan una versión muy rudi
vica, óptima relajación muscular, elasticidad
mentaria del método del extractor. Los fór
perineal extensa y el mínimo esfuerzo muscu
ceps, que literalmente arrancan el nacimiento
lar. También provee la mejor salvaguardia
a la madre y lo ponen en las manos del doc
contra serias rasgaduras de perineo. Cuando
tor, son usados exclusivamente en países
una mujer yace sobre sus espaldas con sus pies en los estribos y trata de empujar contra la gravedad, es muy posible que se origine un desgarro en los tejidos profundos, por debajo de la superficie de la piel. Sin embargo, en la
donde los hombres dominan el campo de la obstetricia. En los Estados Unidos, por ejem plo, donde a las parteras no se les ha dado su Jugar, el uso de fórceps es muy alto. Otro proceso que se practica comúnmente en el momento del alumbramiento y que no
posición acuclillada, ayudada, cualquier des garramiento será superficial y sanará rápida
sotros efectuamos sólo en circunstancias muy
mente. Otras maneras de prevenir serias ras
particulares, es la episiotomía. La episiotomía
gaduras de perineo es evitar dar órdenes
consiste en cortar la apertura vaginal con tije
(" ¡empuje!" " ¡ no empuje!"), que muy rara
ras a fin de agrandarla, para facilitar el pasaje
mente están afinadas con lo que la mujer
del bebé. Siempre se hace en la "fourchette",
siente y también evitar tirar de la cabeza del
es decir, en la parte de atrás de la apertura
bebé para que salgan los hombros.
vaginal. A veces el corte es derecho hacia
Otras de las razones por las cuales las epi
atrás (línea media); otras, hacia un lado (me dio-lateral). Esto suele efectuarse justo antes
siotomías son tan ocasionales en nuestra clí
de las contracciones finales, cuando el peri
nica es simplemente porque a nuestras parte ras no les gusta hacerlas, lo que trae a cola
neo es distendido por la presión de la cabeza del bebé y se ha vuelto relativamente insensi
ción la cuestión de que, por ahí, esta cortadu
ble; la mujer no siente dolor. Mientras que las
específicamente masculina. Por supuesto, los
ra de la vagina refleja alguna insensibilidad
episiotomías son rutinarias en la mayoría de
obstetras convencionales siempre han tratado
los hospitales modernos (95 %), nosotros las
de justificar su práctica. Argumentan que las
EL NACIMIENTO RENACIDO - 1 1 8
episiotomlas reducen la posibilidad de un fu
de cesáreas es mucho más alta en hospitales
turo prolapso* uterino, aunque no hay ningu
privados que en hospitales públicos. (Un hos
na evidencia científica que apoye esta hipóte
pital privado registra ¡una tasa del 80%!).
sis. En mi propia experiencia quirúrgica, he
Además, el peligro de ser procesado juega un
observado que el prolapso tiene muchas más
papel importante. Hoy en día, un obstetra ra
probabilidades de ocurrir cuando los médicos
ramente es condenado por hacer una cesárea
aceleran la labor artificialmente, poniendo
innecesaria, pero si un bebé muere durante el
más presión en los músculos o por nacimien
trabajo de parto, es fácil decir a posteriori
tos con fórceps, que realmente dañan los
que la operación podría haberlo salvado. La
músculos. El hecho de que las episiotomías
manera más simple de evitar problemas lega
sean una rutina, generalmente hechas sin ra
les es ser absolutamente convencional. A este
zón, hace que se vuelva aún más insoporta
respecto, nosotros, en Pithiviers, somos muy
ble el saber que pueden causar a las mujeres
vulnerables. Otro factor que contribuye al au
dolor y problemas sexuales durante muchas
mento de la tasa de cesáreas es que, en estos
semanas después. Semejantes complicacio
días, los estudiantes de medicina no están
nes no surgen tras un desgarre natural, que
siendo entrenados para lidiar con trabajos
cicatriza mucho más rápido que una episio
complicados, como presentaciones de pelvis
tomla.
o, incluso, con largos trabajos de parto nor
Las consecuencias de nuestra actitud qui
males, sin recurrir a la cirugía. Una vez más,
zás estén demostradas en forma más dramá
la medicina convencional parece tratar el mis
tica, con nuestra tasa de cesáreas del 6 al
mo alumbramiento como una complicación,
7%, que contrasta muy provocativamente
un caso patológico que necesita intervención.
con las cada vez más altas tasas de todo el
Una de las razones fundamentales para el au
mundo (19% en los EE.UU., en 1982; 13%
mento de las cesáreas puede ser la necesidad
en Inglaterra y 15% en Francia). El más fa
bien establecida por los obstetras masculinos,
moso profesor de obstetricia en Francia, re
de controlar el proceso de nacimiento. Cier
cientemente declaró que él pensaba que un
tamente, el dramático aumento en la tasa de
20% de tasa de cesáreas era sumamente ra
cesáreas (en los EE.UU., de 4,5% de alum
zonable. A este aumento se le dan muchas
bramientos en 1 9 6 5 a 2 5 % a finales de
explicaciones. Los médicos, de buena fe, lo
1980) sugiere que las cesáreas ya no se usan
atribuyen a la creciente preocupación por la
más sólo como un método de nacimiento de
seguridad del bebé, pero también están invo
emergencia para salvar la vida de la madre y
lucrados otros factores. A pesar de que las ra
el niño. Por supuesto, hay razones indiscuti
zones financieras sean raramente predomi
bles para hacer cesáreas, pero este aumento
nantes, en algunos países, la operación pro
de la frecuencia parece cada vez más cuestio
porciona mucho dinero a los hospitales priva
nable. Desafortunadamente, el trauma físico
dos. En Rio de Janeiro, por ejemplo, la tasa
y emocional asociado con los nacimientos
•
Una condición en la cual los músculos vaginales, heridos o
por cesárea, que alguna vez llevaron a que las
desgastados durante el alumbramiento, ya no pueden soste
mujeres protestaran, ha sido olvidado por la
ner al útero.
costumbre. Las mujeres se acostumbraron a
MICHEL ODENT
-
119
J
la idea de las cesáreas, precisamente porque
to con drogas, practicada comúnmente en Jos
ahora, semejante procedimiento es tan co mún -y hemos llegado a la segunda o a la
hospitales occidentales, produce una labor más difícil, más dolorosa y prolongada y con
tercera generación de madres a quienes los
frecuencia puede ser el preludio de una cesá
nacimientos "medicalizados" han sido im
rea. También lo es la ruptura artificial de las
puestos- y porque también está fuertemente
membranas, posible origen de un prolapso
apoyado por la institución médica.
del cordón umbilical. (Por el contrario, los
En las raras instancias en que el alumbra miento por v1a vaginal es realmente no acon sejable o imposible, nosotros, como cualquier otra persona, efectuamos cesáreas. Por ejem plo, nunca dudamos en hacer una cesárea cuando el bebé se presenta en forma frontal (con la frente en vez de la parte de atrás o el tope de la cabeza sobre el cérvix) o en posi ción transversal (cuando el bebé está atrave sado en el útero). También la hacemos cuan do hay un prolapso repentino del cordón por más de cinco o diez minutos antes del momento probable del nacimiento . (Esta compresión del cordón es muy peligrosa, porque va a reducir y luego suprimir el inter cambio de sangre entre el bebé y la placenta, cortando así la fuente de oxígeno para el be bé). Una cesárea también es inevitable si hay algún obstáculo en el camino del bebé, como es una placenta previa que cubra completa mente el cérvix. Y por último, cualquier peli gro fetal inesperado puede llevar a una cesá rea. Obviamente, cada grupo de asistentes al nacimiento tendrá su propio criterio para cal cular los riesgos y las indicaciones. Es signifi cativo, sin embargo, que en Pithiviers, las ce sáreas aparecen con menor frecuencia que
prolapsos en los cordones raramente suceden
en cualquier otra parte. El hecho es que los procedimientos de los hospitales (notable
cuando las membranas no son rotas artificial mente). Al salir el líquido en el cual el cordón umbilical flota fuera de la bolsa, el cordón puede pasar por debajo de la cabeza del bebé y ser apretado por completo; de esa manera, la llegada de oxígeno es bloqueada. El resulta do es el peligro fetal, y entonces, la cesárea se vuelve necesaria. Las drogas que aceleran el trabajo también pueden interferir con la lle gada de oxígeno al bebé, pues éste es priva do de oxígeno durante las contracciones; las inducidas con Pitocin artificial son más fuer tes y más frecuentes que las espontáneas. Una vez más, el resultado puede ser el peli gro fetal y, en consecuencia, una cesárea. Las drogas para calmar el dolor, a menudo administradas a la madre para aliviarle el su frimiento de las contracciones inducidas por el Pitocin, pueden perturbar el proceso del trabajo y también llevar a una operación ce sárea. Hablando más generalmente, los pro cedimientos profesionales de los hospitales: la inserción de monitores electrónicos (que a menudo registran falsos peligros fetales), los exámenes vaginales, los goteos intravenosos, todo eso puede inhibir el trabajo de la mujer.
El miedo detiene el trabajo y, entonces, se juzga la necesidad de practicar una cesárea. Es alarmante pero verídico. Cuanto más in
mente ausentes en nuestra clínica), a menudo
terviene la medicina en el alumbramiento,
crean por sí mismos la necesidad de efectuar
más difícil y complejo se vuelve todo. Nuestro
las cesáreas. La inducción del trabajo de par-
bajo porcentaje de cesáreas en Pithiviers, su-
EL NACIMIENTO RENACIDO - 120
giere que una práctica cuyo primer objetivo es ayudar a la mujer a dar a luz sin perturbar
tra experiencia con bebés de presentación
el proceso fisiológico en ningún momento, es
pelviana, nos hemos dado cuenta de que ob servando el progreso natural de la primera
la mejor manera de disminuir el número de
etapa del trabajo, tenemos las mejores indica
operaciones cesáreas. En Pithiviers, casi nun
ciones para saber a qué atenernos hasta el úl
ca planeamos cesáreas. Aunque sospeche
timo momento. Esto quiere decir que no ha
mos que una cesárea puede llegar a ser nece
remos nada que pueda interferir con la pri
saria, preferimos esperar que el trabajo de parto empiece espontáneamente. Después, dependemos de nuestra experiencia para
mera etapa del trabajo: ni Pitocin, ni baño en
ayudamos a tomar decisiones rápidas. Prime ramente -ya que tenemos razones para cre er que el sistema endocrino fetal juega un rol
na razón para pensar que la segunda etapa del trabajo pueda crear algún problema. Nuestra única intervención será insistir en la
en la puesta en marcha del principio del tra bajo- cuando el trabajo empieza espontáne
miento, ya que mecánicamente es la más efi
la pileta, ni ninguna mención de las palabras "de nalgas". Si todo sale bien, no hay ningu
posición acuclillada, ayudada, para el naci
amente, quiere decir que el bebé ha desarro
caz. Reduce la posibilidad de que tengamos
llado adecuadamente las glándulas pituitaria y
que sacar al bebé hacia afuera y es la mejor
adrenal y está lo bastante maduro como para
manera para minimizar el tiempo entre la ex
lidiar con los rigores del trabajo y del naci
pulsión del ombligo del bebé y su cabeza, que
miento. Segundo, parece ser que las contrac
podría resultar en la compresión del cordón
ciones uterinas durante el trabajo jt,�egan un rol estimulando el sistema neuroendocrinoló
umbilicar y privarlo de oxígeno . Jamás nos atreveríamos a arriesgarnos a hacer un parto
gico del bebé; no queremos privar al bebé de ninguna parte de este estímulo.
viera en una posición dorsal o semisentada.
con presentación pelviana si la madre estu
Por último, dentro del campo del trabajo y
Por otra parte, si las contracciones en la
el alumbramiento, uno aprende rápidamente
primera etapa del trabajo son dolorosas e
a esperar lo inesperado. A veces, una mujer
ineficaces y la dilatación no progresa, rápida
tendrá una rápida y fácil labor aunque los
mente debemos dejar de lado la idea de un
profesionales creían que sólo era posible una
alumbramiento por via vaginal. Si no, vamos
cesárea. Por ejemplo, a mujeres que en otras
a tener que encarar el peligro del "punto de
oportunidades habían tenido cesáreas, a ve
no retorno", a último momento, cuando lue
ces se les dice que siempre tendrán que dar a
go de la aparición de las nalgas del bebé, ya
luz de esa manera. Sin embargo, en nuestra
sea demasiado tarde para cambiar estrategias
clínica, una de cada dos mujeres que previa
y decidir hacer una cesárea. Sin embargo, a
mente ha tenido cesáreas, logran dar a luz por vía vaginal. Tampoco los nacimientos
cuando la primera etapa del trabajo es difícil
que vienen con presentación pelviana justifi
y la situación no mejora, la mayoría de los
pesar de que siempre hacemos cesáreas
can siempre esta operación, aunque esto, a
nacimientos que vienen con presentación de
pesar de todo, se haya vuelto una regla en
pelvis, en nuestra clínica, terminan siendo na
muchos hospitales convencionales. Por nues-
cimientos por via vaginal.
M!CHEL ODENT - 121
Una presentación pelviana en la posición acuclillada, ayudada
En dos situaciones, a veces, planeamos las cesáreas por adelantado: la primera es cuan
modo de que su estado no desemboque en una eclamsia (convulsiones seguidas por un
do una madre desarrolla una preeclamsia. Si
estado comatoso, que puede causar la muerte
una mujer tiene un incremento abrupto en la
a ella o al bebé). La mayoría de los casos de
presión arterial hacia el final del embarazo y
preeclamsia ocurren en las últimas semanas
hay proteínas en su orina, la hospitalizamos y
del embarazo; a veces, aparecen incluso du
la tenemos bajo cuidada observación. Si se
rante el trabajo de parto.
tiende sobre su costado izquierdo, para aliviar
En ocasiones, hacemos una cesárea sin
la presión en la vena cava, su presión arterial
esperar que comience el trabajo de parto
a veces baja y puede dar a luz normalmente.
espontáneamente, cuando un embarazo du
Una mujer en este estado no tendría que to
ra más de lo requerido. Sin embargo, es re
mar ningún medicamento. Si le vienen re
almente raro que u n bebé llegue con retar
pentinos dolores de cabeza y siente como
do; hay una tendencia a subestimar la fre
una barra en el estómago o si el amnioscopio
cuencia con que esto sucede, generalmente
muestra que las aguas no están claras, se ha
porque la madre o el obstetra han calcula
rá una cesárea, inmediatamente. Es el único
do mal o se han equivocado sobre la fecha
EL NACIMIENTO
RENACIDO - 122
MICHEL ODENT - 123
de concepción. Cuando estamos seguros
de cesáreas en relación con la "postmadu
de que una mujer está con verdadero retra
rez", se mantiene muy bajo.
so, se le hace una amnioscopía cada treinta
En general, las cesáreas en nuestra clínica
y seis horas; mientras el líquido amniótico
se reducen a medidas de emergencia. Nues
se presente claro, esperamos pacientemen
tra actitud disminuye de manera significativa
te. No vemos ninguna buena razón para in
la tasa de intervenciones, porque nosotros no
ducir el trabajo de parto en forma rutinaria
hacernos cesáreas automáticamente, sino
con goteos intravenosos de Pitocin o rom
cuando éstas son absolutamente necesarias.
per la bolsa, en semejantes casos. A veces,
Y dado que por lo general terminarnos deci
una vez por año, esa amnioscopía revela el
diendo hacer una cesárea de una manera to
líquido amniótico coloreado o en disminu
talmente inesperada, inmediatamente antes
ción; esos signos de peligro fetal requieren
del nacimiento, no podemos usar anestesia
intervención inmediata. Si la futura madre
que requiera larga preparación, corno sucede
ya ha tenido bebés, quizás rompamos las
con la epidural. Usarnos una típica anestesia
membranas y veamos qué pasa, antes de
general liviana que dura lo suficiente para la
decidir hacer una cesárea . En caso de que
operación y operarnos con la mayor rapidez
la mujer sea primeriza, generalmente espe
posible. A menudo, el padre está presente
ramos un trabajo más largo y más difícil;
durante la cesárea para recibir a su bebé y es
entonces, en general preferimos hacer una
frecuente que el bebé esté mamando, dentro
cesárea inmediatamente, para no añadir di
de las dos horas.
ficultades. Con esta estrategia, el número
Tanto en el alumbramiento vaginal corno
Usando el estetoscopio, para limpiar las vías respiratorias
EL NACIMtENTO RENACIDO - 124
en la operación cesárea, las horas que siguen
excepcionales, pondremos un tubo dentro de
inmediatamente al nacimiento también son tenidas como períodos posibles de peligro para las madres y sus bebitos recién nacidos.
las vías respiratorias del bebé y soplaremos aire rítmicamente, directamente dentro de sus pulmones. Si el recién nacido continúa te
También aquí nuestra filosofía y experiencia
niendo dificultades respiratorias o si hubiera
nos han llevado a minimizar la intervención
habido un exceso del líquido amniótico du
y, cuando es indicado, optar por los medios que sean menos intrusivos.
rante el alumbramiento (que a menudo coin
El bebé puede tener problemas justo des pués del nacimiento. En la mayoría de los hospitales, es una práctica común introducir un tubo en la nariz y en la boca de cada bebé para abrir los conductos inmediatamente des pués del nacimiento. Con frecuencia, éste es el motivo que se da para la inmediata separa ción de la madre y el niño. En Pithiviers, el recién nacido es inmediatamente puesto en la "posición de seguridad": sobre su estómago y con su cabecita sobre un lado. En esta posi ción, las vías respiratorias del bebé están pro tegidas, aun si sus reflejos todavía no son lo suficientemente fuertes como para que tosa o llore. No hay ningún peligro y se puede espe rar pacientemente algunos instantes, para que el tono muscular y los reflejos mejoren. Luego, sin embargo, si el bebé todavía no respira, hay que limpiar las vías respiratorias. Para este propósito, usamos la parte del este toscopio obstétrico monoaural que tiene for ma de embudo -el extremo se pone sobre la
una sonda para verificar si el esófago está obstruido. Por último, debe considerarse la
boca y la nariz del bebé- y suavemente se
el proceso de trabajo ha sido respetado todo el tiempo. Además, hemos descubierto que una mujer puede evitar una hemorragia, simplemente sentándose derecha para recibir a su bebé, después de haber dado a luz. Cuando está en posición vertical, inclinándose suavemente hacia adelante para abrazar a su bebé, su úte ro -todavía pesado- reposa sobre la vena cava y la sangre puede circular fácilmente
aspira la mucosa a través del embudo. Algu nos bebés requieren una asistencia corta de ventilación con una máscara de oxígeno. Después de algunos segundos, el recién naci do generalmente puede respirar por sí mismo y empieza a llorar. Pero ¿qué pasa si, des pués de transcurridos unos minutos, el bebé todavía no puede respirar sin ayuda de la máscara de oxígeno? En semejantes casos
cide con los problemas respiratorios), usamos
posibilidad de que el problema respiratorio esté relacionado con una malformación que puede ser corregida quirúrgicamente, como un esófago bloqueado o una hernia de dia fragma.
La salud de la madre también puede correr riesgos, inmediatamente después del alum bramiento. En caso de nacimiento por cesá rea, los riesgos para la madre son estadística mente más serios que aquéllos causados por alumbramiento por vía vaginal. En caso de un parto vaginal, si hay alguna dificultad en el desprendimiento de la placenta o si comienza una hemorragia, puede ser requerida la aten ción inmediata. Primero compensamos la pérdida de sangre; después sacamos la pla centa manualmente y usamos drogas oxitóci cas para ayudar a que se contraiga el útero. Estos problemas ocurren pocas veces en Pithi viers; en realidad casi nunca suceden, cuando
MICHEL ODENr - 125
J
El temprano amamantamien
se evite perturbar esta interrelación de la ma
to y el contacto piel con piel de la madre con
dre con su recién nacido, ya que las hemorra
por sus venas.
el niño también pueden ayudar a prevenir he
gias son potencialmente más peligrosas fuera
morragia materna; aparentemente, ambos
del hospital.
procesos estimulan la secreción de oxitocina
Nuestra estrategia es fácil de sintetizar: casi
y a su vez hacen contraer el útero, ayudando
siempre esperamos que el trabajo de parto
tanto al despegue como a la explusión de la
empiece por sí solo. Si el alumbramiento por
placenta. Nuestro 1% de intervención para
vía vaginal parece dificultoso, tenemos tres
extraer la placenta manualmente habla con
técnicas médicas a nuestra disposición: el Pito
fuerza en favor de respetar la fisiología inte
cin (raramente); extracción al vacío y episioto
rrelacionada de la madre y del niño, después
mía (a veces); si el alumbramiento por vía vagi
del alumbramiento. Cuando el nacimiento su
nal parece imposible o peligroso de cualquier
cede en el hogar, es aún más importante que
manera, no dudamos en hacer una cesárea.
EL NACIMIENTO RENACIDO - 126
MICHEL ODEI'IT
-
127
Dominique Pourré, partera Llegué a Pithiviers como partera, h ace diez años, más por instinto que por elec ción. Pero elegí quedarme. Todo lo que he aprendido acá acerca de las mujeres, de los hombres, de los doctores, de las parteras -y de mí misma- ha hecho que me fuera i mposible volver a cualquier trabajo que descuida esta sabiduría, que se concentra solamente en el en trenamiento, internacio nes y exá menes. Los últimos diez años me han enseñado u n a cosa muy importante: las mujeres deben tener cuidado de no po nerse tan totalmente en manos de doctores y parteras, cuando van a dar a luz a sus ni ñ os. Como profesion ales, hemos sido en trenados para ser fríos, distantes, técnicos, a sus ojos; con esto n o h acemos ningún mal. Entonces, ¿cómo podemos n o conti nuar creyendo y haciendo creer a los de-
más, que las mujeres, dentro de este cam po del alumbramiento, carecen de creativi dad e incentivo y que ellas esperan nues tras soluciones? Actuamos por ellas, les en señamos, organizamos sus vidas en teras -incluso sus emociones- durante estos momen tos cruciales. Fue respecto de este en trenamiento, de estas actitudes, del con tinuo refuerzo de esta autoridad y jerarquí a, que mi década en Pithiviers transcurrió como un prolongado y triunfante desafío. L a idea básica sobre las madres, de Mi che/ Odent, era la siguien te: "No siga el consejo de nadie más. Nadie sabe mejor que usted lo que es bueno para su bebé". La futura madre era ahora responsable por lo que iba a convertirse en una ocasión de alegría. En vez de dejar que otro trajera su bebé al mundo, que lo confortara o que le diera el primer baño, era ella quien iba a hacerlo; ella iba a participar. Yo misma acababa de tener un hijo y quizás esto me hizo más sensible a estas verdades. Pronto decidí que, a pesar de las tradicionales prerrogativas de mi rol como partera, ya no podía ser la primera en to car al bebé. Ya no llevaría al recién nacido a otro cuarto, por alguna misteriosa razón que ya he olvidado hace mucho. He dejado de usar guantes de goma, para que el pri mer contacto del bebé sea con la piel hu mana. No fué fácil, pero trataba. Y dejaría que el bebé fuera acariciado por su madre. Y yo digo dejaría, porque n osotros, los pro fesi onales, aún conservábamos el poder. Todavía dábamos la luz verde para la libe ración y expresión de las emociones o más frecuen temen te (como las convenciones y la rutina n os habían enseñado), la luz roja. Las madres tenían que empezar a tomar
EL NACIMIENTO RENACIDO - 128
sus propias in iciativas. Ya no podían sentir
"quitadora " oficial, ¡estaba tan aliviada, a la
temor por la fragilidad y el contacto resba
vista del bebé! Solía pensar: "¡Ahí está, un
loso de sus bebés. Les teníamos que decir:
varoncito, aquí está, vivo! Lo puedo tener,
"Usted puede tener a su bebé usted m isma.
tengo el derecho. " ¡Oh! , estaba tan asustada
Busque hacia afuera y tome esos pequeños
de que pudiera no existir. . . Sí, como tú, la
bracitos que la están buscando a· usted. No
madre. Yo tenía los mismos sentimientos, la
tenga m iedo, usted puede hacerlo. Es su
misma ansiedad. "Y ahora te voy a hacer un
bebé". No es nuestro, no es del' doctor, no
regalo: tu bebé. Pero primero tengo que exa
es un producto extraño de la sabiduría mé
minarlo, bañarlo, pesarlo, vestirlo". Parecía
dica, de la técnica o del poder. Pero no era
i n te r m i n a ble la c a n t idad de cosas o de
tan simple como sonaba.
personas a las cuales el bebé tenía que perte
Uno no renuncia al sancionado rol profe
necer aparte de su madre. Y estos "quitado
sional de "quitadora de bebés", sin una gran
res de bebés", vestidos de blanco, estas m is
dosis de a u tonegación. Cuando yo era la
teriosas figuras que hablaban fuerte y toma-
MICHEL ODENf - 129
J
EL NACIMIENTO RENACIDO
-
130
ban las decisiones ¿qué era lo que estaban o
quiere que se termine; que quiere gritar;
cultando debajo de las máscaras de gasa?
que lo ua a hacer. La oigo mien tras grita y
¿El temor a la muerte, el temor de las muje
ya no trato de aquietarla más. Ella se vuel
res? ¿No podríamos encontrar otra manera?
ve mi maestra. La escucho, estudio sus lec
¿Realmente damos tanta sensación de segu ridad? ¿Cómo pueden realmente /as mujeres
ciones. Yo también estoy embarazada, em barazada con sus palabras, sus dolores, sus
creer que nosotros sabemos más sobre estas cosas que ellas?
extraños gritos que ni ella misma reconoce como propios.
Así que ahora, ¡a sacarse las máscaras! ¡Los roles se han revertido!
Estoy asombrada. No hay nada que ense ñarle. Ella está empujando por la uida, so
Estoy acá, oyéndola: ¿qué está sintien
la. No la tengo que tocar. Me grita: "¡No se
do? La puedo ayudar si usted me dice qué
acerque!
es lo que qu iere. Hábleme, enséñeme. Yo
la!"
no quiero pararme enfrente de usted, acti ua y poderosa.
creativa, tiene inventiva, está llena de vida.
Hoy, en Pithiuiers, me puedo sentar dis
Busca lo que quiere. Está exhausta ¡y sin
cretamente, escuchar,
¡Estoy dando a luz! ¡Déjeme so
Se pone cómoda y yo me tengo que
acomodar a su posición. Ella se mueve. Es
participar de un ac
embargo tan vital! Cuando se tira sobre mí,
to íntimo. La mujer está parada. Ella me
estoy cubierta con su sudor. Estoy obligada
dice lo que está pasando: que siente cam
a hacer lo que ella quiere. Pero ella es ma
bios en su cuerpo; que quiere empujar; que
ravillosa, ella es la vida que está por traer
quiere abrirse un poco más; que las mem branas llenas de agua se están hinchando
al mundo. Ya no me pregunta ni el tiempo, ni el sexo, n i el peso. En cambio, simple
entre sus dedos. Me dice lo que quiere: ca
mente grita con placer. Yo me voy del cuar
lidez; agua calien te; las caricias de su mari
to, exhausta, llena de sus emociones y de
do o estgr sola o quizás mis propias cari
su alegría.
cias. Expresa lo que siente: cuánto duele;
Durante diez años en Pithiviers, me han enseñado: que donde las mujeres estén en
si quiere que las enfermeras estudiantes, con sus grandes ojos abiertos se vayan del cuarto, porque están deteniendo algo den
libertad, aprenderemos cómo dar a luz de la mejor manera. Ellas nos lo van a mos
tro de ella; que no soy siempre tan suave y
trar. Ellas uan a confiar en nosotros. Miren,
gen ti l como ella querría que fuera; que
mírenlas, escuchen con atención . . .
MICHEL ODENT - 1 3 1
Mural de la sala de encuentros, pintado por el padre de un bebé nacido en Pithiviers
EL NACIMIENTO RENACIDO 132 -
NACIMIENTO RENACIDO U n día, durante un juego de preguntas y
bre de rechazar cualquier forma de prepara
respuestas en una radio francesa, le pregun
ción que pretenda "enseñarle" cómo dar a
taron a los participantes: "¿Qué hay de espe
luz. Es libre de moverse como desee, durante
cial sobre los nacimientos en Pithiviers?" No
el trabajo. Las parejas son libres de actuar co
era una pregunta fácil. Incluso yo hubiera te
mo crean conveniente, en la privacidad del
nido dificultad para elegir la respuesta ade cuada, de una sola línea. La respuesta "co rrecta" fue: "Las mujeres dan a luz en cucli
cuarto de alumbramiento. Introducir libertad en una institución no es ni fácil ni trivial. De hecho, los conceptos de
llas". Cierto, pero también había una canti
"libertad" e "institución" parecen incompati
dad de otras respuestas posibles: el rol promi
bles, por definición. Sin embargo, como
nente de las parteras; contacto prolongado entre madre e hijo; baños para los recién na
nuestra experiencia lo ha demostrado, se puede hacer más de lo que generalmente se
cidos; grupos de canto; luces suaves; música; piletas con agua caliente para relajación.
trata de hacer. Idealmente, las instituciones de verdad pueden ofrecer una sensación
Pero Pithiviers es más que la suma de to
comunitaria.
das estas partes. Representa una actitud, una
En nuestros esfuerzos por crear libertad en
fe en el potencial instintivo de los seres hu
el entorno del alumbramiento, estamos conti
manos y en la sabiduría innata de las mujeres
nuamente cuestionando nuestros roles como
para traer a sus hijos al mundo. Pithiviers
profesionales. Los profesionales en general y
afirma el alumbramiento como una experien
los representantes de la comunidad médica
cia sexual y alienta la espontaneidad y, ante
en particular, a menudo inhiben el comporta
todo, la libertad. Una mujer embarazada es li
miento de los futuros padres, mucho más que
bre de visitar nuestra maternidad tan a menu
cualquier persona lega, común. En Pithiviers,
do o tan espaciadamente como quiera. Es li-
tratamos de ser lo más discretos posible, po-
133
mente, de que no ocurre nada anormal. A
les de placenta (0,9 %); 10 muertes perinata les (7, 1 por mil) y 22 bebés separados de sus madres ( 1 , 5 %) para ser trasladados a las uni
pesar de que nuestros métodos y nuestra filo
dades de cuidado intensivo pediátrico.
sofía desafían lo que se asume y las prácticas obstétricas que prevalecen, nos parece que,
cido. Ha pasado a ser de una unidad tradicio
niéndonos fuera del camino, quedándonos en la parte de atrás y, asegurándonos simple
Durante la última década, Pithiviers ha cre
medido aún por los estándares obstétricos
nal de maternidad de pro'!incia, a algo como
tradicionales como son la morbidez perinatal
un centro internacional de alumbramiento,
y materna y las tasas de mortalidad, Pithiviers es un éxito. Por ejemplo, desde el 15 de ene ro de 1982 hasta el 30 de junio de 1983, de 1 4 0 2 nacimientos, 93 fueron cesáreas (6,6%); 73, extracciones al vacío (5 , 2 %); 84, episiotomías (6 %); tres extracciones manua-
un punto focal para la nueva concientizaci6n, sobre la importancia de cambiar las condicio nes del alumbramiento. La idea de humanizar el parto había estado ganando fuerza no sólo en Pithiviers, sino también en muchos lugares del mundo. A menudo, estos aislados centros
EL NACIMIENTO RENACIDO - 134
de innovación se concentraban en los aspec tos personales, más que en los médicos o téc
nica para filmar y hacernos entrevistas a no
nicos, del alumbramiento. Involucraban a
sotros y a las mujeres que daban a luz aquí. Parece ser una de las tareas básicas de Pithi
gente fuera de la corriente principal de la me
viers, el actuar como catalizador de una exci
dicina occidental, que sentía la necesidad de
tante nueva percepción; el constante flujo de
una actitud más holística y espiritual respecto
amigos y visitantes nos ayuda a difundir la pa
del bienestar y a aquéllos interesados en las posibilidades terapéuticas del tacto, del soni do, de la música, de la luz, del color y del
labra. Sin embargo, esta nueva conciencia no vie ne sin sus propios dilemas internos. Por
agua. Antropólogos, psicoterapeutas, sociólo
ejemplo, ¿cómo podemos conciliar la parado
gos, ecólogos y educadores del alumbramien
ja inherente de basarnos en los profesionales
to también se unieron. Al mismo tiempo, las
de la ciencia, en los profesionales médicos,
parteras y los pediatras de todo el mundo es
para ayudarnos a redescubrir y apoyar las ca
taban pidiendo más alto reconocimiento de las verdaderas necesidades de las mujeres y de los recién nacidos y llamando la atención
pacidades naturales de las mujeres o los pro cesos naturales de los lazos que se forman
sobre cómo estas necesidades habían sido ig noradas u olvidadas por los médicos. Fuera de los círculos profesionales, mujeres y hom bres preocupados, estaban cuestionando las
entre los bebés y sus mamás? ¿Cuál es el rol apropiado de un hombre en un movimiento que trata de devolver la experiencia del alum bramiento a las mujeres? Estas son las pre guntas que me perturban. En la actualidad,
prácticas y actitudes de los nacimientos médi
estoy considerando seriamente abandonar la
cos convencionales, luchando para cambiar
obstetricia; éste es el momento que los obste
las.
tras masculinos podrían elegir para retirarse
Ahora, estos grupos diferentes se están co municando cada vez más entre ellos. A pesar
progresivamente y restituir el alumbramiento a las mujeres.
de las distancias geográficas que existen, han
La crisis crónica de obstetricia que se ha
creado una poderosa red mundial que pone
ido formando durante varios cientos de años
en contacto a los pioneros de la nueva obste tricia en Europa, EE.UU., América Latina,
ha llegado ahora a un punto agudo. La revo
Nueva Zelandia, Australia y Japón. Pithiviers
no va a ser puesta en marcha por los profe
ha jugado un rol muy importante en el desa rrollo de esta red internacional y ha sido un
sionales de la obstetricia; ni siquiera por la profesión médica en general. No es que la
foco clave. Durante los últimos quince años,
ciencia no tenga que hacer contribuciones,
lución que muchos de nosotros está buscando
padres y madres, parteras, profesionales de
en el futuro. El progreso en las disciplinas
la salud y propulsores de la medicina alterna
científicas, como por ejemplo en la neurofi
tiva de todas partes del mundo, se han reuni
siología, a pesar de su aparente distancia de
do en Pithiviers para hablar de su trabajo y compartir ideas. Equipos de televisión y pe
la obstetricia, puede contribuir a esta revolu ción. Creo que la naturaleza del trabajo y del
riodistas de Francia, Alemania, Gran Breta
parto va a ser más y más comprendida como
ña, Australia y Japón, todos vinieron a la clí-
un proceso cerebral involuntario que puede
MICHEL ODENf - 135
ser estudiado con mucho acierto por todos aquéllos que se preocupan por los cambios fi siológicos de la conciencia, como el sueño y el orgasmo. Pero el movimiento más podero
mujer. Nuestro ambicioso proyecto, que tra baja por humanizar y feminizar el nacimien to, usa maneras muy simples para el logro
so de esta revolución está en las mismas mu
de este fin. De hecho, las mujeres de la zona que han dado a luz en nuestra clínica,
jeres.
se refieren a nuestra manera de hacer las
En cómo las mujeres dan a luz, en cómo
cosas, como simple sentido común. Estas
nacen los bebés; todo eso está profunda
mujeres encuentran nuestra actitud tan ob
mente ligado a nuestra forma de ver la na
via que no pueden imaginar por qué hay
turaleza, la ciencia, la salud, la medicina, la
tantos visitantes y tantos equipos de filma
libertad y las relaciones humanas, especial
ción aquí. Vale la pena reflexionar sobre es
mente, las relaciones entre el hombre y la
te asombro.
EL NACIMIENTO RENACIDO - 136
NOTAS l. El campo de la investigación neurohormonal está en ebullición; cada día hay nuevas hipótesis, nuevos descubrimientos. Nos ha parecido útil reu nir las diferentes referencias bibliográficas que su gieren la importancia de las endorfinas durante el alumbramiento, el lazo entre madre e hijo y la se xualidad en general. Ver:
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EL NACIMIENTO RENACIDO - 138
El doctor Michel Odent (que además de ser el director de la Unidad de Maternidad de Pithiviers durante los últimos veinte años, es cirujano) es un pionero del nacimiento, de fama internacional. Sus conferencias, artículos y libros han tenido gran influencia en doctores, parteras y madres de todo el mundo.