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LA DOCTRINA DE LA MADRE MARIA
S I L V E R I O
LA
MANCO
DOCTRINA de
MADRE
la MARIA.
COMO LA DIFUNDlA PARA CURAR LAS ENFERMEDADES DEL CUERPO Y DEL ALMA
C 0 N S 1 D E R A C I 0 N E S C l E N T i P I C A S
15 de Noviembre Noviembre 114 1149 9
Buenos Aires
Queda hecho et deposits que marcs la ley 11.723
© by E DIT OR IAL GAY MI -
Buenos Buenos Air Aires es,, 1963
Imprest) en la Argentina. — Printed in Argentina
Grato recuerdo
A mi santa santa mad mad re, en las frant franter eras as del otro otro nmndo, nmndo, que qu e conocio y amo amo a la madre Maria, Maria, figura figura pa tri areal en el planet planeta tier ti erra ra,, dedico dedico la la historia historia humana humana de su glori gloriosa osa vida, como grato recuerdo a su memoria. El Amor.
ACLARANDO CONCEPTOS Lo que el lector va a leer le er en estas paginas paginas no es es d fruto vulgar vulgar de un un charlatanismo charlat anismo sin' contr c ontrol, ol, sino la medulosa edulosa practica adquirida adquirida en los textos que tratan la cienci cie nciaa d del el alma en forma encomiable, sin el rebuecamiento fantastico de los los que la tergiversan con un censurable censurable fin lucrative. Los conoeptos que los neofitos han difundido, y dif-unden todavia, todavia, es necesario aclararlos aclara rlos y destruirlos destruirlos con la verd verdad ad sin macula, esa verdad que he encontrado en innumerables textos que hablan de la vida, de la muerte. muerte. de la encarna* encarna* cion, y nos explica de donde venimos y adonde vamos. Que si para algunos esta santa mujer que fue la madre Maria ha sido una *embaucadora», la mayoiia la ha glorificado, erigiendole un mon monum umento ento en el altar alt ar de las la s almas que se beneficiaron benefic iaron con co n sus magnifi ma gnificas cas conferenc confe rencias, ias, tan Henas de ese amor que solamente solamente Cristo pudo pudo diseminar entre en tre sus hermauo hermauoss de la tierra. tier ra. Por Po r esa razon r azon y otras much muchas que el lector lecto r encontrara encon trara leyendo leyendo con carino cari no el contenido contenido de este libro humano es que vamos a destruir los falsos y equivoca-
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L i DOCTBI DOCTBINA NA DE LA MADRE MADRE MAJUA AJUA
dos conceptos que no lograron empaoar, justo es decirlo, la luz espiritual de la santa madre, que fue enviada de Dios a la tierra tier ra con el virtuoso poder poder de de curar cur ar las imperfecciones imperfecciones del cuerpo y del alma. SUverio Manco.
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PREDIJO LA GUERRA DE 1914 Todo cuanto se dice en este libro no es mas que la pura, la exacta exa cta verdad verdad,, por la que tanto brego la madre Maria. Ella esta corroborada por las maniiestaciones maniiestaciones de personas personas que fueron sus hijos espirituales y cuyo recuerdo perduxa todavla en sus almas, tolalmente entregadas a la religidn de Cristo. Y para que se desasnen los que la censuraron injustamente voy a referir una de sus tantas predict;iones que, a su debido tiempo, provoco el asombro de los que aun «no estaban cam la madre Maria®, Corria el afio 1914; nadie, como es logico, pensaba en una lucha de potencies, esas lucbas absurd absurd as y contraproducentes para su propio progreso. Sin embargo, la madre Maria, enviada de Dios a la tierra, como Cristo, dijo en una de sus conferencias estas per durab durable® le® pala pa lab bras ra s: «Revent ar a un gran gran hormiguer hormiguero o humano y la sangre correra como el agua del arroyo*. Nada mas exacto, exacto, pues, al poco tiempo, estallo estallo la contienda europea y sus consecuencias se experimentaron experimentaron en
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LA DOCTRINA DE LA MADRE MARIA
todas partes. partes. Y , tal como como lo dijo di jo ella, la santa misionera misionera,,
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POR UNA UNA TRAYEC TORIA LUMINOSA LUMINOSA E S CONDUCIDA SU RELIGION Prueba cabal de que aun no se ha olvidado a la madre Marla es la fe que he eomprobad eomprobado o en los que fueron fueron y siguen si si end endo sus adeptos. adeptos. Y me ha sido dado observar obser var que su religion es conducida por una trayectoria luminosa por su actual actual direct dir ect ora, la senorita senorit a Consuelo Consuelo Quinteros. La he oido hablar .por primera vez el domittgo 28 de setiemhre de 1947, en el mismo templo-escuela donde dictaba sus clases la -m -mad adre re Maria. Mar ia. Agustin Agustin Tomaselli Toma selli me habia hab ia dicho: dicho : «N «No o falte, y vera cuan profundos son los temas que desarrolla la actual directora de la religion de Cristo*. Atento a su pedido y deseoso de comprobar comprobar su afirmacion, concurrt a aquella cita de honor, cuyo recuerdo sera imperecedero. Mujeres y bombres de todas las edades formaban la com' pacta y abigarrada concurrencia, calculada mas o menos en dos dos mil personas. personas. Muchos hsbia hs bian n Ilegado Ilegado de lej lej os, de Gene' ral Belgrano, de Las Flores, de la Capital y otras ciudades.
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LA DOCTBIWA DE LA MADRE MARIA
Se advert ia en todos todos la ansiedad de escuchar escuc har la l a palabra fer* vorosa y ccmvincente de la Quinteros; alma saturada en las fuentes del Supremo Hacedor, para bien de la humanidad que sufre y que quiere internarse en el camino de la perfeccion. Todo era silencio en el iecinto, recogiroiento total de los espiritus, como preparandose a recibir con prof undo carifio la arenga espiritual que reconforla las almas. Contenido el aliento, atento el oido, oido, la vibrat vib ration ion sublime sublime de palabras bdlas bdl as se hizo air en el templo-escuela donde la abigarrada concurrencia escuchaba con atencion. La directora de tan humana religion, Gonsuelo Quinteros, initio su conferencia con frases realmente sencillas, pero Ilenas de amor, a fin de que todos pudieran comprender, extrayendo de tan interesantes lecciones la verdadera esencia de la vida. Ninguno de los que niegan a Dios y cachetean a Crista Crist a puede puede tachar tac har de erroneos sus sus conceptos, que constituyen un manual de sanas enseiianzas. D ija ij a verdad verdades es magnificas magnificas al al refer! rse a la encarnacion y reencarnacion de los espiritus que no ban alcanzado su grado necesario de perfection. Trato, tambien otros puntos su* raaraente interesantes, relacionados con la religion de la madre Marta, Marta, evidenciando un profundo conocimiento conocimient o de las enfermedades que afectan el cuerpo y las que atosigan el alma. En tal sentido sentido exhorto a los fieles a superarse en la creencta en Dios para ser ma mass bumanos bumanos y men menos os egob eg obta tas; s; no una sino varias veces recordo a la ponderable discipula de Pancho Sierra, que tanto lucho por el bienestar de la burnanidad. Al comienzo evoco a Eleuterio Cueto, que tuvo destacada act uacion junto junto a la madre Maria Ma ria y fue un borobre eano para la religion. Considero que tales conferencias confer encias debier an ser mas mas Irecuentes, puesto que ellas llevan luz a los cerebros y quielud a las almas que viven amarradas al odio y el rencor.
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¡HASTA DESPUÉS DE MUERTA! Contrariamente a lo que podría argumentarse argumentarse eoti respecto a las las personas que acuden acuden sin intermitencia intermit encia a pedir alivio para sus dolencias frente a la tumba que guardan los restos de la madre Maria, puedo asegurar que no es el acendrado fanatismo de siempre lo que las conduce allí, precisamente, ente, dond dondee nadie ignora que no exist ex istee el alm almaa sino el cuerpo, y la fe inquebrantable hacia una religión tan humana eomo la de la inolvidable muerta. Yo he visto a mujeres y hombres arrodillarse ante la tumba de la madre María y pedir, con palabras suplicantes, la ayuda espiritual que tanta falta hace a los que navegan tumultuosa y desordenadamente sobre la tierra. No se puede admitir que se llame fanáticas a esas personas que tienen «fe en Dios» y han hecho un culto de «la religión de Cristo», puesto que hay en ellas un profundo conocimiento de lo que son la vida y la muerte, la materia y el espíritu. Las comprobaciones realizadas en vida de la madre María Marí a con respecto respecto a sus curas maravillosas, maravillosas, se repiten a 13
LA DOCTRINA DE LA MADRG MARIA
dia-rio ahora, «cuando no esta con nosotros rnaterialmente*., Porque, Porq ue, eiendo Io infinito, infin ito, sin el alelargamiento corpore corporeo, o, continua realizando obras maravillosas que dejan la sensa tion de un ocultismo perfecto y que no pueden llamarse railagros lagr os desde ningun punto de vista. Y por por much as razones razones no hay que confundir a la gente tratandola de fanatica y empecinada empecinada si es que se la ve llegar lle gar en caravana hasta hasta la tumba de quien fue su protectors, material y espiriluah mente, fiasta e! momento de abandonar este planeta para dirigirse al mundo de los iguales. Todos los dias se renuevan las ofrendas florales, las suplicas y las plegarias de los que aun despues despues de muerta la am aman an con la inquebran table fe de 6iempre 6iempre,, con el profund profundo o carino carin o de los convencidos convencidos.. Y la vibration de cada ser frente a la tumba de la madre Maria se advierte de inmediaio en sus ojos y en sus rostros satisfechos por el bien que desde las estrellas envia, para todos, el espiritu sano de la hum humana predicadora predicado ra del glorioso cre cr e do. do. No No hay una sola persona de las que acu acude den n a rendirle rendirle tribute que no reciba bienestar y alivio a sus dolencias, A esto, pues, no se le puede llatnar fanatismo, sino Fe, que se va multiplicando multiplicando a medida que transcu transcurre rre el tiempo tiempo en el relo] de la vida material, que es un crondmetro que nunca falla. El desfile diario ante la tumba de la madre Maria es la afirmacidn rotunda de «la fe en Dios y la religion de Cris ta ». Porque, suplicando suplicando a ella, nunca anochece an ochece en la mita
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FUE UNA SANTA MISION LA DE LA MADRE MARtA Respetar todas las doctrinas, ciencias o ideas, es la o'bligacion moral de todo ser que se precie de cullo y educado. Nadie tiene el derecho de reirse o burlarse de nadie, puesto que si bien es cierto que somos mortales, no todos podemos asimila asimilarr nuestro nuestro don espiritual, espiritual, de donde donde facilmente facilmente ee de duce que una parte bastanle numerosa de los que pueblan el piano terrestre niegan la existencia de Dios y olros lo con* (unden (unden con Jesus, Jesus, siendo dos cosas distintas. Por Po r eso, eso, no temo temo equivocarme equivocarme al afirmar afir mar que (ue una santa misioti misioti la que llevo a cabo la madre Maria durante todo el tiempo que le toco vivir entre nosotros. Prueba de ello son los cenlenares de .personas que encontraron alivio espiritual y moral concurriendo a la casa de la calle Rioja, unas y olras a su modesta desta casita de Villa Turdera. jHasta jHas ta los incred incredulos ulos hallaban hallaban alivio a sus males! No era, pues, un milagro, sino el gran poder de la santa madre que diluia sus flu idos magneticos sobre la humanidad doliente. IS
LA DOCTBINA DE LA MADRE MARIA
Aun cuando, para poder cumplir su mision —venida al mund mundo o precisamente para par a eso— tuvo que pasar sus tribulat ribulaciones, su guia espiritual no la abandono tin solo instanle y su obra humanitaria fue aclamada en todas partes por quienes le tuvieron ie y besaron sus manos hasta la hora de su muerte. Jamas el curanderismo tuvo similitud con la obra de la madre Maria, y no pudo tenerla desde ningun punto de vista, por ouan ouanto to el curanderismo curanderismo implies implie s la mentira y el el engano, la muerte y la desesperacibn. En cambio, camb io, la virtuosa virtuosa y santa madre que que tanto bien bie n hizo a la humanidad humanidad sufriente sufrient e jamas jam as penso lucrar lucr ar con el poder curativo que Dios le habia confiado, porque era sana de cuerpo y de alma. Seres Ser es eomo la madre Marta siempre bacen fal falta ta en el mundo, por cuanto las curas sin drogas ni medictnas perleneoen a la clencia de Dios, desde la creacion del universo.
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CASTILLA CASTILLA LA V IEJA, CUNA DE SU NACIMIENTO informes recogidos en fuente fidedigna y que merecen enters confianza, sabemos que la madre nacio el 22 de octubre del del afio 18 1855 55,, en un pueblecito pueblecito de Espan Espanaa llama do Subiete, provincia de Castilla la Vieja. 5e sabe tambien que bus padres fueron Marcelino Loredo y Maria Otaola. Fue asi como esta rnujer, que con el andar del tiempo ha’bria de asombrar al mundo por la mision que le toco desempenar, como todos los inmigrantes sintio grandes deseos de conocer la Argentina, Argent ina, y tras un breve canrbio de de ideas ideas emprendio emprendio el arriesgad arri esgado o viaj vi aje, e, con las ansias de mas am amplios plios horizontes. La madre Maria llego, pues, a nuestro pais cuando apenas contaba 14 anos, radicandose radicandose en la localidad de Saladi* Ho, provincia de Buenos Aires. Castilla Castilla la Vieja la vio part partir ir un dia sonrieDte, Hevando en eu rostro reflejada la alegria, su inmensa satisfaction de muchachita buena, buena, que qu e mas de una vez vez se habi ha biaa dormido con P ot
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el canto de la abuela, mientras mientras hilab hilabaa afanosamente en su rueca. Los floridos 14 anos de la inteligente muchachita radicada en 'Saladillo lueron lueron factores factores mas que suficientes suficientes para que, tres anos mas tarde, es decir, en 1872, 1872 , se casara con Jose Jo se A. Demaria, Demaria, del del que envi enviud udo o en 1876. Cuatro anos despues volvio a contraer matrimonio con Aniceto Zubiza, que fallecio en el ano 1891. Estos datos datos biograf bio graficos icos de la madre Mari M ariaa eran sum sumamente necesarios en este libro, en el que se historia su vida desde que, con fortaleza de espiritu, emprendio viaje desde la madre patria hasta la Argentina, en un pequeno barco de vela. Es bueno que digamos aqui que, segun etla misma declaro en mas de una oportunidad, penso que Dios la alenlaba en sus deseos deseos de trasladarse hasta la Argentina. Argentina. ^Era ^Er a una iluminad iluminadaa en el ano 18 1891 91?? jNo jN o se sabe! Pero su su fe inqu inqueebran table en Dios era como como nn timon timon que manejaba el barco ba rco de su vida.
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LA MADRE MARlA, DISC1PULA DE PANCHO SIERRA Escribo estas paginas mediante, tal vez, la intmrencion de su propio espiritu, que ya no volvera a encamar nuevamente, puesto que su mision en el planeta tierra ha terminado. Y, si debo hacer caso a mi subconsciente, puedo asegurar que hay tnagnificas concepciones e intenciones en cada parrafo parraf o de mi libr libro, o, que no no es un manual anual de de recetas para curar enfermos sino el glosario de toda una vida consagrada al bien de la humanidad. Cabe destacar que la madre Maria fue discipula de Pancho Sierr Sie rra, a, otro misionero incomprend incomprendido ido lambien, com o ella, pero que muchos recuerdan todavia por aus asombrosas curas. Hasta el momento de agravarse de su tisis y de su cancer que la tenia completamente abatjda, pvtes nada habia logrado la ciencia medica, la madre Maria ignoraba la existencia de tan venerado maestro. Lo conocio en forma circunstancial y cuando estuvo en
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LA DOCTRINA DE LA HADRE MARIA
su presencia Pancho Sierra Ie reprocho amablemenle, por que no habia ido a verlo antes siendo que «ella» se encontraba en «el». (Fue (F uero ron n aquellas palabras una una profunda profunda revela velacion para la madre Maria? ^Que quiso declr el maestro con aquella su franqueza de hoiubre bueno, que curaba y repartia dinero entre los pobres? Los incredulos y neofitos, que forman el mundo malerialista exterior, no lograron conocer jamas la acendrada significacion nificacio n de las palabras de Pancho Pancho Sierr Sie rra, a, por que que todos todos lo rechazan y hasta niegan la existencia de Dios. La verdad, innegable a todas luces, es que Pancho Sierra euro a la madre Maria, haciendola meditar profundamente acerca de su total restablecimiento. Desde entonces fue una misionera de la doctrina practicada por Pancho Sierra y a la vez vez fervor osa discipula. discipula. ^Cuantas personas, aun, no recoidaran la historica y modesta casila de la calle Rioja, 771, donde, como un homenaje, se exhi'bia exhi'bia un hermoso busio de Pancho Sier Si erra ra?? Porque es muy probable que haya alguien que recibio los beneficios benefic ios curati cu rati vos vos de la madre madr e Maria, Maria , como como ella ell a los lo s encontro yendo a visitar al inolvidable maestro. Alii fue, en la casita de la calle Rioja, donde realizo las mas asombrosas curas y donde donde era er a venerada, a la vez, por miles y miles de «enfermos incurables* que iban a verla y se curaban. Y, como Pancho Sierra, no solamente sanaba enterm enter m ot sino que distribuia dinero entre los pobres.
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NO EJERCI6 NUNCA EL CURANDERISMO LA MADRE MARlA Besde Bes de hace hac e muchisimo muchisimoss an os viene subsist iendo iendo en el cam campo doctrinari doctri nario o y cientifico cie ntifico el censurable aIan de obstruir la obra, grande y magnifies, de los seres que tienen el privi lege de ser superiores a otros, moral y espiritualroente. Para Par a el los, los, hasta el egoism ismo es un factor fact or prep pr epon onde deran rantt para sostener la negacid negacidn n de lo que no han visto, vist o, porque —dioen— no puede ereerse en lo que no esta facultado para colocarse al alcance de nuestros ojos. Imperdonable error el de esa gente que ni siquiera tiene la nocion de lo que somos, de donde venimos y adonde vamos, cientificamente hablando. La madre Marta, al igual que otros misioneros, soporto la infamante calumnia de los incredulos y £por que no decirlo ci rlo?? tambien de los los hom ombres bres austeros austeros e inteligenles que hast ha sta niegan la existencia exist encia de Dios. Peto Pe to ella ell a no ejerci ejer cio o nunc nunc a el curanderismo, ni siquiera le acicateo lal deseo, porque, como he dicho ya en paginas an-
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LA D0CTR1NA DE LA MADRE MARIA
teriores, era de magmtud sorprendente su eoncentracion espiritual y no podia en modo alguno fracasar en su afan de curar «a ios incurables*. Yo mismo he vi9to desfilar por su casita de Villa Turdera a centenares de personas, hombres, mujeres y ninos que iban a agradecerle la salnd recuperada, la tranquilidad del bogar restablecida. Porque la genie, desampaTada por la ciencia elemental del materialismo, iba en 'busca de la otra ciencia, la oculta, fa que no puede verse, para entregarse a Oios y pedir alivio a sus dolencias. dolencias. Y eso no era curanderismo curanderismo sino algo supe supe rior a los propios medios de la derra, emanado de poderes pcrfectos y logicos como la fuerza solida del pensaimienlo mismo. Por experiencia puedo afirmar que la obra de los curanderos ha sido siempre nefasta, en cambio, la realizada por la madre Maria ha sido una obra de bien comun y de la que nunca se habran dicho los elogios necesarios, por cuanto la siembra fue muy prodiga en el sentido moral y espiritual.
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FE, ESPERANZA Y CARIDAD L a
madre Maria no fue una fanaiica de su doctrina ni menos enos una una charlatan charla tan a, como como tuvieron la osadia de afi afirma rmarr los eneraigos declarados de la ciencia de Dios. iPorque ella fue una misionera entusiasta y predico eon profundo carino esta bella trilogia de palabras: Fe, Esperanza y Caridad
Todas sus conferencias, pronunciadas con ese anhelo de mejoramiento eapiritual, tuvieron la virtud de atemperar defectos y errores, Iievando a las almas un poco de perfeccion, y luz a los cerebros cargados de materialisrao. En muchfsimos hogares se recuerda la figura patriarcal de esta digna representante de Dios, en este e ste mundo undo tan lleno de desastrosas imperfecciones. Fe, esperanza y caridad, recomendaba la madre Maria, porque sin fe no puede baber esperanza, y para tenerla es necesario practicar la caridad.
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LA DOCTRINA DE LA MAD MADRE MARIA
Pero, Pero, ^que entiendcn de todo todo eslo eslo los materialist materiali st as, los que se aeuestan blasfemando contra Dios y si amanecen con un dolor en cualquier parte del cuerpo le suplican un alivio? ^Que ^Que puede puede interesar interesar esta filoso fil osofia fia human human a acerca ace rca de una mi sionera del del blcn, blcn, a los que niegan la fuerza del pen* pen* samiento y profan an a Dios a cada instant instante? e? No pretendo, con este libro, exaltar unicamenle las cualidades y bondades de quien quien hizo tanto Lien a la humanidad, humanidad, sino que es mi deseo deseo ha hace cerr comprender a esa misma misma humanidad humanidad la imporimportancia de las palabras que sirven de titulo a este capitulo, en la biisqueda de un mejoramiento moral y espiritual. Estamos en la era de la comprension, practicamente calculada, y, sin embargo, la ejecu ej ecutori toriaa es distinta, porque porque a menudo la humanidad, salvo raras excepciones, se aparta de su eje central para colocarsc en el misino nivel de los irracionales. La madre Maria, con sus conferencias trato de encaminarla por el camino del bien, y su mano estaba pronta para hacer una caridad.
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iER A UN GRAN GRAN PODER DE SUGESTION SUGESTION EL DE LA MADRE MARlA? Casos Casos como el de esta venerab venerable le mis! onera era no son muy frecuentes en esta parte del pi anet net a tierr tie rra, a, porque, a pesar de la gran cant idad de estudiosos que realiz realizan an experimentos experimentos notables, la supercheria y la ignorancia, presentes en todas las manifestaciones de la vida, tratan de -anular los experi mentos entos realizados realizados como como exponentes de de una una fuerza fuerza mental superior a las otras en el mas amplio concepto del poder de la sugestion. Todo ello ello existe, existe, desde desde luego, y nada nada hace suponer lo contrario, porque las curas realizadas por la madre Maria ban sido realmente maravillosas, y quienes ban recuperado la salud salud freeuentandola freeuentandola y siguiendo sua cons consej ejos os ban ban sido desde entonces los mas consecuervtes partidarios de su doctrina. En su casita de la calle 9 de Julio, en Turdera, he presenciado senciado en varias ocasiones ocasiones el desfile diario de mujeres, hombres y niiios Ilevando, al retirarse, un gran alivio a sus dolencias morales y materiales. Los incredulos decian que como se iban a ctirar los en-
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LA DOCTRINA DE LA MADRE MARIA
fermos si no tomaban remedios, remedios, y que quien era e ra ella para eompctir con los medicos. Tales afirmsciones carecian de fundamenlo y la propia propi a naturalc naturalcza za se encargo encargo de destruir destruirlas las con el triunfo triunf o magntfico del del metodo curativ cura tivee de la tnadr tnadree Maria. Ann en la actualidad se )e recuerda con co n carino, como un eterno agradecimienlo de los que se favorecieron favorecie ron con con sus sus consejos de amor y de esperanza.
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EVIT6 SUICIDIOS Y DRAMAS QUE A MENUDO PROVOCA LA MISERIA Por el hecho de haber conocido de cerca a la madre Ma ria puedo afirmar, con respecto a sus curaciones, que evito suicidios y dramas que a menudo provocan la miseriB y la desesperacion desesperacion,, fa d ores tenaces que violentan vi olentan los animos y destruyen hogares. Curas estupendas resultan estas, por cuanto es el alma la que esta enferma, y no es la medicina la que puede llevarle un alivio. Y , sin embargo, pese a la tenacidad de los increduloa, increduloa, muchos hombres sin trabajo, desesperados, enfemtos mora les, llegaron llegaron hasta la ma madre dre Maria Maria y sus sus palabras devolv devolvieieion io n la tranquilidad a sus espiritus, espirit us, reco'bra reco'brand ndo o a la vez vez el sentido de la persuasion. De ese modo, concurriendo asiduamerrte a escuchar las palabras palabras de de la noble misionera, aquilat aqui lataron aron su fe en Dios, olvidandose olvidandose por comp completo de desesperars desesperarsee y matar. matar. A buen seguro que nada habria logrado la ciencia medi-
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LA DOCTRINA DE LA MADRE MAftU
ca en )os casos en que la enfermedad se halla en el alma y no en el ouerpo, Porgue no hay duda de que la fe y la sugestion curan el alma y a la vez vez el cuerpo, lo que que no hace la otra ciencia, pues fracasa en la mayorfa de los casos. Por otra parte, haga la prueba el que quiera; sin estar pensar en una enfermedad enfermedad y al poca tiemeniermo se puede pensar po habra que llamar al medico, en la creencia de que nece* sita una cura medicinal. Eso se llama sugestion arse a si mis mo mo,, y cuando real* mente se esta enfermo las curas se realizan en igual forma. Pero Per o nada nada tiene tiene que ver con ello el curanderismo, curanderismo, que solo practice prac tice n los embaucad embaucadores. ores.
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LA MADRE MARIA FUE UNA MISIONERA DE VERDAD Es necesario destacar en este libro li bro qua la madre Maria file ana misionera de verdad, y que si se le confundio con una vulgar curandera no ba sido porque mereciera tal cahimnia si no por el hecho hecho de haber ha ber surgido en distintas distintas par pa r tes los embaucadores que se decian sus diseipulos. Naturalmente que lo que que tales personas kacia kacian n no era ejercer el apostolado de una mision sino el aprovechamiento indebido de su nombre para lucrar a costa de los que pere grin ab an en busca de un alivio alivio a sus sus dolenc dolencias ias.. Desenganados por la vulgar estafa de esos aprovechados malandrines comenzo a divulgarse la especie de que la madre Maria Mar ia era una una embaucadora embaucadora camo las que hacian haci an su agosto con el dinero de los creyentes. Pero tal hecho importaba un descredito descredito para pa ra su obra doctrinaria y no era posible que subsistiera. Porque la madre Marfa no pidio nunca nada a nadie por el bien que disemino sobre la humanidad doliente, y dio en
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LA DOCTRJNA DE LA MADRE MARIA
cambio todo lo que pudo a los que Hegaron junto a ella en buses de un alivio y un bocado de pan. £sa ha sido la obra humana y justjeiera que realizo en el mundo la discipula de Pancho Sierra y cuyo espiritu, al dejar su envoltura corporea, se elevo al cosmos para eontinuar desde alii su mision de bien y de amor a la humanidad. 'Ella 'Ella se daba exact exa ctss cuenta del del ma mall que cometian cometian las almas perversas que en su nombre sorprendian sorprendian la l a buena fe de los creyentes y un sufrimiento moral la atoaigaba. Porque comprendia, la buena bermana, que la doctrina se perjudicaba con las acciones de los perversos y era necesario detener detener la avalancha aval ancha de los canallas. Pero ella triunlo sobre todos y pudo pudo realizar su obra contra viento y marea, bajo ba jo el cielo de su segund segundaa Patria Pa tria.. Pues «no «no hay ma mall que dure cien anos*, anos *, y todo llega a su meta final.
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HACIENDO LA CARIDAD FOR LAS RUTAS DEL BIEN Quiero Quiero reconstruir reconstruir en las las paginas de eate eate libro libr o la escena que prescnciaron prescnciaron mi miss ojos aquella aquella tarde, tarde, leja le jana na ya, y a, en que que un poeta popular cai'do en desgracia llego junto a la madre Maria con ia desesperacion en el alma. Era tanta la fe que lo animaba para lograr un alivio a su miseri a, que se anticipo al agradecimiento con con unos versos sencillos y humildes, escritos por el mismo para elogiar la.obra de la madre Maria. Luego de guardar las carillas donde se hacia justicia a su obra, recompenso a su autor con un billete de dies pesos. ^Esperaba esa retribucion aquel poeta popular caido en desgrac des gracia? ia? |No! |No! Recuerdo bien que que et mismo mismo me lo confeso confeso eon estas pahbras: —La madre comprende el dolor ajeno, porque no pense en su ayuda y mi fe va a trjplicarse ante este hecho. Ciertamente, como el lo dijo, su fe no decayo un apioe porque comprendio que la madre Maria era una verdadera salvadora de la humanidad. 31
LA
DOCTRINA
DE
LA
MADRE
MARIA
El hombre hizo llega llegarr a mis manos una copia copia de aquello aquelloss versos qu que e tanto tanto agrada agradaro ron n a la madr madre e Maria, Maria, que son los los qua an an ssguida trans transcr cribe ibe.. Dicen asi: |Oh f Santa Santa madr madre e Maria Maria que alivias todos los males, y te aman los mortales con sincera idol idolatria. »
»
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En tu dootri dootrina na yo creo creo y a tu poder me remito, madre, porque neceaito; es que la paz yo deseo. •
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Vivo suiriendo suiriendo y sin calma bajo el poder del destino, sigo triste mi camlno y estoy estoy erifenno del del alma, *
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Escucho con atencion tus consejos, y en la lucha tiene tiene todo todo aquel que que escucha escucha alivio en el corazon. 32
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DOCT DOCTRIN RINA A DE LA LA MADRE MADRE MARIA MARIA
Por eso, madre Maria, evoco tu nombre santo, y te pido.mienlras tanio, que allvies la pena mia. El gesto de la madre Maria fue presenciado por -muchas personas que se encontraban en su casila de Villa Turdera, Io que prueba irrefutablemente que la noble misionera iba por las rutas del bien haciendo la caridad. Por otra parte, cabe destacar que la madre Maria llevo el alivio alivi o a muchos hogares azotados por la l a miseria, miseria, y ningun necesitado que fue a visitarla se volvio sin una esperanza.
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CONTINUADORA DE LA OBRA DE CRISTO Yo, que he tratado de cerca a la madre Maria, puedo asegurar, sin s in tern ternor a equivocarme, que ella ell a fil filee la continuadora de la obra de Cristo en el planeta tierra. No vaii a ser pocos los que duden de mis palabras, preguntandome con asombro: — ^Con ^Continu tinuado adora ra de la obra de Cristo? Y esa incredulidad que no tiene razon de ser solo pueden permitirsela aquelios que niegan a Cristo mismo, por ouanto la obra de la madre madre Maria Maria tien tienee gran similitud con la del del drvino maestro. La trayectoria limpia de la excelente misionera y la enorme cantidad de adeptos que se sumaron a ella para enaltecerla, hablan en forma terminante de la mision cumplida en favor de la humanidad. He visto llegar hasta la madre Maria earavanas de seres que ya no podian aobrellevar sus amarguras, desesperados y casi vencidos, en busca de sus pala bras de amor amor y de de esperanzo. esperanzo. Y alii, junto junto a ella, ell a, oyendo oyendola la dar consejos, sus facciones iban adquiriendo, poco a poco, 35
LA DOCTRIHA de la madre maiua
la vilalidad que necesitaban aquellas almas. Y alii, junto a ella, revivia revivia Cristo, el conductor conductor de la humanidad, humanidad, que que logro despertar la fe fe y el entusiasmo en los los que fueron sus hermanos. Y la madre Maria, que fue Una virtuosa para el dolor ajen aj eno, o, ba con tinuado la obra de Cristo con la fe inquebranta ble de los seres que luchan para obtener la regeneracion de las almas. Y asi a si como, en aquel aquel entonces, Cristo encontrd en su su camino a los detractores, tambien los encontro la ma madre dre Maria. Pero ella ell a hizo caso omiso omiso a cuanto se interpuso interpuso en an senda y siguio haciendo el bien, porque asi se lo babia impuesto el propio Dios. Y Cristo la iluminaba desde el cielo.
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SEMBRANDO ESPINAS NO SE RECOGEN FLORES Cuando la madre Marfa dio comtenzo a la mlsion que habia de consagrarla en forma for ma amplia y definitiva tuvo, para las personas adictas a la ciencia del alma, palabras que paulatinamente fueron coneretando la base granitica de su doctrina. Segun me expresa un viejo vecino de Lanus, Julio de la Fuente, ella fue la que en cierta oportunidad que la visito en su casfta de la cafie Rioja, para convencerlo de que haciendo mal no pod pod fa esperar bien, le dijo di jo que «sembrando «sembrando espinas no era posible que se recogieran flores*. flores*. Tales palabras las recuerda con profun profund d o eariiio mi in i n fo rmante, porque, asegura, a traves traves de los anos anos pudo pudo comprobar que realmervte hay que hacer obras buenas para que Dios hag?. Hegar la consabida recompensa. Las palabras que tan noblcmente noblcmente expresara la ma madre dre Marfa Marfa,, que son las que me sfrven sfrven de tftulo, tftulo, const ituyen una fuente de Hmpidas aguas que disuelven las escorias del alma. Son como devocionario donde se han ido exferiorizando 37
LA DOC DOCTR TRINA INA DE U
MADR MADRE E MARIA MARIA
las humanas acctones que sirvieron de base a muchos que eran incredulos y I-uego abrazaron la doctrina que difundio la madre Maria. Puedo afirmar que una vez que se llego a la cotnprension exacts de lo que importaba el ideal de tan entusiasta difundidora didora de la ideologia ideologia de de Jesu Jesus, s, fueron muchos muchos los que se sumaron a los que ya formaban el ejercito de los adeptos de la cristiana mision. •Sembrando espinas no se recogen flores», dtjo la benefica fi ca madre que que tan to arao arao a sus sus hij h ijos os y por quienes quienes lucho, imponiendose los mas rudos sacrificios. Ella se enfrento con los que le hicieron objeto de las criticas tic as mas absurdas, pero nunca recu recurri rrio o a la venganza como medio expeditivo, porque la madre mad re Maria Mar ia representaba a Cristo y no le era posible proceder torcidamente. La ciencia del alma le habia ensenado a ser buena sembradora brad ora y, por eso, eso, jam ja m as se desvid desvid de la senda que conduce al perfecciooamiento de los espiritus que se encuentran atrofiados. Sus palabras fueron puertas abiertas a la esperanza, y, a la vez, el elixir que saturo de salud los cuerpos y las almas. Por eso yo he besado sus manos, siempre prontas para tenderse al dolor.
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NUNCA PIDI6 NADA PARA ELLA Los detractor detractores es de la mad madre Maria Maria fomentaron una una gueguefra fr a rnfame rnfame cont co ntra ra ella, ella, que, desde desde foie foieg go, no tenia razon razon de ser, ya que su mision se tradujo siempre en beneficio de la humam humamdad dad.. Tanta Tantass cosas se dijeron dijer on en su cont contra ra,, que se ha perdido la cuenta de los infundios, Ilenos de cinismo y ere* tinismo. Entre cuanto se dijo para escarnecerla esta aquelto del
LA DOCTRINA DE LA MADRE MARIA
comporla corao la madre Maria, curando y ayudando a los pobres? Solo los que no entienden o niegan la ley de Dios acomeien la tare a denigrante, por cierto, ciert o, de censurar censurar a quienes estan muy por enciina enciina de sus infam in famia ias; s; y nada logran con sus diatribes. Pero quien, como y o, l»a viajado por el interior de las almas, pucde, pucde, con suma suma facilida facilidad, d, comprobar probar que muchos uchos seres que despotricaron despotricaron contra contra la madre madre Maria, Maria, enconIrando se enfermos y no liallandu alivio a sus dolencias, acudleron a ella para reslablecerse, Results increible, pero csa es la verdad de las cosas, la dura verdad, que nadie podra destruir, por las pruebas existentes. Todo esto evidencia que ha trlunfado, trlunfado , sobre sob re todas, la ponderable doclrina de Maria, la enviada de Dios. Y el triunlo tr iunlo result result a mas mas significa si gnificativo, tivo, por po r cuanto se trata de un acontecimienlo sin preoedentes, provocado por los incredulos que buscaron la salud en «la manera de curar de la madre Maria*.
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NO FUERON MILAGROSAS LAS CURAS DE LA MADRE MARfA Todo cuanto contiene este libro es, indudablemente, sencillo cillo y liumano, liumano, porque asi fue la l a misioncra misi oncra cuya vida y dootrina describe con inmenso carifio. No es mi intencion barer gala de una fraseologio altisonante, porque las verdades deben decirse hasta con pobreza lileraria. Pero es e! caso que. en honor a la verdad, precisemerrie, debo decir qne no fueron milagrosas las curas real!zadas por p or la road roadre Maria. Porque l puede llaroarsc milagro al herbo de que, como a firm an los ocultistas ocultistas bindfies, una una persona persona se niantenga en el aire sin estar apoyada en ninguna parte? De ninguna ninguna manera, por cuanto nada tiene que ver la milagreria mila greria con los poderes poderes ast ast rales y la fuerza pujan pujante te del del pensamiento. Claro que, en esta parte del conlinente, no hemoe alcanzado todavia el grado mixirno de comprension, para dar su juslo valo valorr a lo que que no alcan alcanza zan n a ver ver nues nuestro tross ojos ni pue-
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den comprender nuestros espiritu,s que aun no han evoluc tonado ado hacia hacia la perfeocicn, perfeocicn, Desde que cono conoci ci a la madre madre Maria hasta el prese presence nce,, jamas pense ense que que sus sus curas curas se realiz realizab aban an por mi milag lagro. ro. Porque, ei tel hubiera sido mi manera de pensar, habiera incurrido en un grave error, de acuerdo con mis cono ci mi mien entos sobre sobre la ciencia ciencia del del alm alma. a. Hubiera negado a sabiendas el poder poder que Dios coloc col oco o en bus manos para beneficiar a los enfermos del cuerpo y del alma. Ella fue benefact benefactora ora de la humanid humanidad ad doliente, de esa humanidad humanidad que en iargas carava caravan n as llegaba llegaba hasta ella en busca de salud, que no podian devolverle otros seres de en jundios jundioso o tale talent nto. o. Su alma, que ya no vuelve a la tierra, ocupa, como es 16gico, un sitial de preferencU junto al Supremo Hacedor.
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YO NO LOS LLAMO, ELLOS VIENEN A Ml
Cuand Cuando o se desea profundiza profundizarr Va Va vida de cualq cua lqui uier er pers perso o na que haya desempenado una mision en la tierra, no hay que precipitar los acontecimientos, provocando un contrasentido en las apreciac apreciacion iones. es. Y, sin andar con tantos regateos, digamos, siempre en hono ho norr a ia verda verdad d que mantiene su juri ju risspru pr udent de nt a con el alma, que la obra de la Madre Maria fue de una ensenanza estupenda a todas luces, porque ella estuvo inspirada en el bien de la humanidad. A este respecto no faitaron los charlatanes que propalaron ron a los cuatro cuat ro vientos que que la Madre Maria Mar ia reali r ealizaba zaba un un fructifero negocl-ado. Tal infundio Ilego, como es logico, a su conocimiento, pero ella sonrio ante tamaiia infamia y dijo, en un aparte de sus interesantes disertaciones, a quienes le escuchaban, estas inolvidables palabras: «Yo no los 11amo, ellos vienen a mi*. <;Saben los incredulos que quisa decirles la Madre Marla con tan acertada afirmacion? 43
LA DOCTRJNA DE LA MADRE MARIA
den den comprender nuestros espirit espi ritu,s u,s que atin no han evolu evolu tion ado ado hacia la perfection, Desde que que conoci conoci a la madre madre Maria hasta el presente, presente, jamas pens pensee que que sus sus curas curas se realiz realizaba aban n por milagro. ilagro. Porque. si tal hubiera side mi manera de pensar, bubiera incurrido en un grave error, de acuerdo con mis conocimientos sobre la ciencia del alma. Hubiera negado a sabiendas el poder que Dios coloco en sus manos para para bene be nefi fici ciar ar a log log enfermos del del cuerpo y del alma. Ella Ell a fue benefact bene factors ors de la hum humanid anidad ad dolient doliente, e, de esa humanidad humanidad que en largas largas caravan as llegaba llegaba hasta ella en busca de salud, que no podian devolverle otros seres de en jundioso jundioso talen talento to.. Su alma, que ya no vuelve a la tierra, ocupa, como es 16gico, un sitial de preferencia junto al Supremo Hacedor.
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YO NO LOS LLAMO, ELLOS VIENEN A Ml
Cuando se desea profundizar la vida de eualquier perso na que haya desempenado una misioti en la tierra, no hay que precipitar los acontecimientos, provocando un conUaaenlido en las apreciaeiones. Y, sin andar con tantos regateos, digamos, siempre en honor a la verdad verdad que mantiene mantiene su jurispr jur isprude udeneie neie con con el alma, que la obra de la Madre Maria fue de una enscnanza eat eat upen upend da a todas luces, porque porque ella ella estuvo inspirada inspirada en el bien de la humanidad. A este respecto no faitaron los charlatanes que propalaron a los cuatro cuatro vientos que que la Madre Maria Mar ia realizaba reali zaba un un fructifero negoclado. Tal infundio llego, como es logico, a su conocimiento, pero ella sonrio ante tamaiia infamia y dijo, en un aparte de sus interesantes disertactones, a quienes le escuchaban, eatas inotvid&bles palabras: ■Yo no los llamo, elkts vienen a mi>. ^Saben los incredulos que quiso decides la Madre Marla con Lan acertada afirmacion? 43
LA DOCTRINA DE LA MADRE MARIA
Creo firmemente que no, por cuanto, los que censuran una eosa que no comp co mpren rende den, n, esl& esl&n Suer Suera de la orbita que con duce a un discreto entendimiento. Con tales palabras, bras , la madre Maria quiso expresar expresar la grandeza de su modest! modest! a, ya que, como lo afi afirmo rmo slempre, los que no podian cur c ur arse acudian a ell a sin que los llamara. llamara. Conviene desfacar que no era una profesion la que estaba dcsempefiando, slno un mandato de Dios, con todas las condiciones espirituales necesarias. Porque, al decir de los que, por su incapacidad, no pueden afirmarse sobre una base sollda en lo positivo, la Madre Marfa se enriquecio «despiumando» a la gente. Error imperdonable de quienes son la negacion de lo su blime, en la teon'a astral de los sentimientOB, que repercute, como un mandoble, sobre las rutas dignificadas por los misioneros de una santa causa. La ciencia del alma no estuvo nunca en conflicto con ninguna otra ciencia y siguio una trayectoria Utopia de asperezas que interrumpen el funcionamiento organico de las eoncepciones astrales. Es en tal virtud que la Madre Maria, puesta en esa tra yectoria, logro difundir una una doctrina doctrin a por la que, )i3sta el presente, despues de su muerte se le tribute el mas santo y liumano de los recuerdos.
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MUCHOS COMERCIARON EN NOMBRE DE LA MADRE MARIA Hace algunos anos, os, encontrandome encontrandome en la ciudad de Las Flores, pude enterarme de que muchos habian comerciado con el nombre de la Madre Maria. Me hablo de ello una seiiora — Jo Jose seffa Ruiz Ruiz de Villegas— Vil legas— que, por espacio de algunos anos, habia vivido en Canuelas, desde donde se trasladaba hasta Turdera, a fin de recuperarse de una cruel y torlurante enfermedad. Me decia la seiiora de Villegas; — No se si usted usted creera cre era en e n estas cosas, pero yo puedo puedo asegurarle que la madre Maria me devolvio la salud que habia perdido. Debido Debido a mi sufrimiento, moral y material, yo estaba deprimida y cansada a la vez de ingerir medicinas. De todas partes Uegaban a su casa caravanas de enter* mos, mo s, llevando llevando en sus labios la su plica plica de un alivio ali vio,, y, y , al entrar entrar en su templo-escuela, el poder divino de la madre convertia en sonrisas las muecas de la amargura. Y debido a esa circunstancia no faltaron personas ines* -lo
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crupulosas que hicieron comercio hasta con los relratos de la Madre Maria. Ante las declaraciones de esta senora, que posiblemente se encontrara despojada ya de su envoltura material, cabc destacar el hecho de que esas personas, tras de combatir a la madre Maria y su doctrina, lucraron escandalosamente con su nombre. Ahora esta aclarado el misterio de tantos embaucadores que se decian discipulos autorizados de la popular misionera, cuando ella Jamas los tuvo y censuro siempre a quienes percibieron dinero en su nombre. Los hechos bablan en forma harto elocuente con respecto a las curas realizadas por la madre Maria, y la gratitud de los beneficiados se traduce en el recuerdo de tan elevado espiritu que, a pesar de no haberse corporizado, marttiene latente su bondad humana hacia los adeptos que dejo en la tierra. Pero, en la frondoaidad de las pasiones absurdas y desconcertantes demostradas por equellos que fa negaron una y mil veces y luego invocaron su nombre para un interesado comercio, ipudo comprobarse la malignidad de los canallas que, tarrtbien a su debido tiempo, tuvieron su sancio-n moral y definitiva. Ahora, desde el espacio, ella contempla el panorama de la vida y pensara, seguramente, que no debe faltarle su ayuda a los que fueron sus consecuentes adeptos.
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iERA UNA VIDENTE LA MISIONERA? Cuando esta mlsionera del bien y de la bumana justicia aparecio en el escenario de la vida, no faltaron los comenlarios lar ios crueles crueles y sangrientos de aquellos aquell os que no supieron supieron valorar so oportuna llegada, tan bienhecbora en ona epoca en'queel materialismo absorbente libraba su empecinada batalla en perjuicio de la humanidad doliente. 'Los que no pusieron en duda sus palabras, que xesultaron ron profeticas, se inter i nteriori iorizaron zaron prontamente prontamente de sus sus anhelos anhelos redentores y se hici hiciero eron n adept dept os de su mismo credo, credo, de su prop propla doctrina. doctrina. Algunos los motejaron de fanaticos, provocando la incertidurrrb rrrbre re en los los inexpe inexpert rtos. os. Pero estaba de Dios que la discipula de Pancbo Sierra debia llevar adelaute su obra, porque la madre Maria no se amii Ian am Ian6 ante las eriti eri tica cass acerbas, acerbas, conti nuan nuando do triunfalmente su mision de aliviar las dolencias del cuerpo y del alma. iQuien osaria detener la avalancha de enfermos que de la capital y las provincias se acercaban a ella en procirra de salud? 4 7
LA DOCTRINA DE LA MADRE MARIA
] Imposible Imposible intenlarlo! intenla rlo! La mas mas leve insinuati insin uation on podria delerminar consecuencias desagradables, desde el raomento que los enfermos se curaban luego de haber concurrido algunas veces al templo de la madre Maria, que, como es pu blico y notorio, funcionaba con la anuencia de Dios en su casifa de Turdera, Y cuando su popularidad popularidad habia habia llegado a todos los rincones de la patria, alguien con una clara vision de las cosas, dijo que la madre Maria era una una vidente. vidente. No habia una opi nion definitiva en el concepto, pero el traducia en oertidumbre lo que los incredulos tratafban de entorpecer. ^Era, pues, una vidente la madre Maria? No se le alcanzo a definir definir en ese aspecto, aspecto, pero no bay duda duda de que su misidn, misidn, llevada a feliz termino por por las curas realizadas, realiza das, la coloca en el propio nivel de un claro entendimiento sobne las enfermedades del cuerpo y del alma. No obstante algunas divergencies, yo, que he conocido de cerca a la hermana misionera, puedo afirmar que por su sabia experiencia y pulcritud de alma bien merecia ser una vidente. Esta palabra, que encierira una virtud de alto valor equivale a una de las mas justas justas expresiones que se pueden tener para quienes cumplen en el mundo una mision como la que cumplio la inolvidable madre Maria.
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ERA UNA APASIONADA DE SU DOCTRINA Cada vex qae he logrado conve con vene nerr con ella he podid podido o cotnprobar cotnprobar hasta hasta la evidencia que nunca s e sinti sin tio o molesta molesta por la mision que Dios le fiabia conferido. A1 contrario, se mostsro siempre apasionada por su doctrina y las pal&bras aaom aao maban aban a sus sus Iabios Iabi os con la dulzura dulzura infi infini nita ta de los los seres privilegiados. Refiriendose a la doctrina que muchos no quisieron comprender, me dijo, en cierta oportunidad, que cl dia en que su espiritu hubiera de abandonar la envoltura corporea nadie iba a continuar su obra como ella, desinteresadamente, para para bien de la human! human! dad. dad. En efecto, sus palabras profeticas profeti cas se cumplieron, cumplieron, por cuanto hasta el presente no aparecio otra madre Maria como la verdadera. Solo se ha tenido noticia de las mentirosas, de las que, creyendo barer fortuna, se atribui'an todos los titulos imaginables para poder enganar mejor, invocando siem pre el nombre inmacuiado de la misionera que, aunque lejos, 49
LA DOCTRINA DE LA MADRE MATliA
no nos abandona. Porque la madre Marla era una enviada de Dios a la tierra y su accion curativa tenia que tener su asiento en esta patria generosa para las buenas gentes. Este li'bro que escribo en su boinenaje demostrara a las generaciones futuras la obra humana y grandiosa de la noble raisionera espiritual. Alguien, muy profundizado en esta ciencia, me pregun to hace muy poco tienopo si conocia alguna otra mujer de las mismas condiciones de la madre Marla. Como es Iogico, y ante su asombro, le respond! que no, advirtiendole a la vcz que las *vulgares curanderas* eran simples delincuentes que tarde o temprano tendrian el condigno castigo. Todo ello ello esta vinculado vinculado al prof pr of undo undo vaticinio vati cinio de la ma madre dre Maria, que que no comercio con la facultad que Dios le habia conferido luego luego de su grave enfermedad, que atendio solicito soli cito aquel gran misionero que se llamo Pancho Sierra. Es posible que en todo el orbe existan personas que han afcrazado un ideal doctrinario; que si no poseen las facultades pertinentes para la accion curat curativa iva procuran, por lo menos, adapt aptarse a la la ley de Dios, haciendo bien en vez de mal. Esto fue el gran amor de la madre Maria.
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iPUEDEN CURARSE LAS ENFERMEDADES SIN MEDICINAS? £sta £sta fue la pregunta pregunta que una sen ora formulaha formul aha en cierta cierta oportun oportunidad idad a la l a madre Maria. Y no lo hizo en lono de mofa sino con el objeto de cerciorarse de si, en realidad, como le habi'an dicho, ella podria atemperar eus doleocias sin ingerir ri r ningun ningunaa clase clase de medicina. La respuesta de la madre madre Marla no se hizo esperar y fue la siguiente: “El mejor me dico siempre ha sido Dios, y no hay ni habra quien lo supere, mi querida hermanita, iporque debes saber que solo £1 puede conocer con eracdtud las enfermedades del cuerpo y del alma. ^Acaso Jesus no dijo a Lazaro
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Ail ora bien, acerca del del inte in terr rro o gate ga te que que sirve de tltulo tltulo a estas Hn Hneas eas se ban hecho los mas variados comentarios. comentarios. No voy a mencionarlos detalladamente, pero si quiero destaca r que que en distintas distintas oporlunidades los propios medicos se ban aparta do de sus conocimientos cientif cie ntifico icos, s, confiando la curadon del enfermo a un>a dominante fuerza invisible, cuya moleoula principal es su pensamiento. Se argumentara, ante esta afirmacion mia, que en tales casos la sugestion desem* pena un papel papel preponderan preponderant©, t©, opinion opinion que no es es posible posible recharech azar, por cuanto ella fundaments la realidad de muchas curaclones. Pero, sin apartarme del tema, dire que las composiciones quimicas que contienen las la s medicinas son son siempre siempre perj perj Ltdici tdicifd fdes es para par a el organismo organismo humano, Se han dado casos en que la ciencia medica ha fracasa* do, triunfando brillantemente ese poder oculto que muchos se han empenado en desconocer y negar.
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LA MADRE MARIA FRENTE A LAS INJUSTAS CRITICAS DE LOS INCREDULOS Se ha dicho, alguna vez, que ]a madre Maria se enfadaba cuan cuando do las critic cri ticas as de de los incredulos arreciaban arreci aban con co n el objeto de restar meritos a la humana y bienhechora mision que seguia con profundo carino. Puedo asegurar que todo e!lo es mentira y que, Iejos de irritarse la bondadosa misionera tenia palabras de perdon para todos los que de un modo u ottro la hacian bianco de sus imprecaciones. Recuerdo que en una ocasion hizo un alto a su magnifies conferencia de ese dia para manifestar lo siguiente: —“Esos que me atacan comprenden muy bien el alto sig nifi nifies es do de mi mi doctrina, doctrina, pero, pero, como yo «m «mee les tiro una una mig aja aj a », se vuelven vuelven fa medic edico os contra contra rai, ofendiendo ofendiendo al propi propio o Dios. Sin embargo, los perdono perdono y no lengo para ellos el mas leve rencor”. Esas palabras de la madre Maria ratifican las proyecciones de su credo, porque su avanzada avanzada de bien y de amor hacia el projimo no podra olvidarse nunca, pese a sus detractores. Y a Iraves de ellos se advierte el hecho punible, in53
LA DOCTRlNA DE LA MADRE MAjdA
congruente, del delito preparado a mansaiva, en forma siniestra, *tjue es el de pagar para silenciar las critricas». Por eso gritaba la prensa mercenaria, la de ayer, la de hoy y la de siempre, porque existira mientras existan las ambiciones y e! egoisrao. Pero la madre Maria termino su apogtola do eon la mas ampli ampli a satis sa tisfac facti tion on de su alma noble noble y generosa, libre de pecados, floreciente de ternura. Y la bondad sobre sus labios era como una rosa roja de su querida Castilla la Vieja.
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EL RECUERDO DE UNA CURA QUE PARECtA IMPOSIBLE Como lie dicho en otra parte de este lib Com li bro, ro , yo free liente la rasa de la madre Maria porque le tenia una fe inquebrantable y porque me agradaban muebo sus conferencias sumamente interesantes, De aquel entonces surge el recuerdo de una una cura que pareel reel a realmente imposible. Y digo •impo •impo ssible* por cuanto se trataba de un hombre joven que no po dia ni siquiera dai un paso por la flojedad desconcertanle de sus piernas. A pesar de mi fe, confieso francamente que dudaba de que aquel hombre, inutil ya —al parecer—■para toda su vida, pudiera recuperar las fuerzas necesarias para no depender de *su cocheoito*. Sin embargo, al mes y medio lo vi llega llegar, r, con mi consiguiente asombro, ca minando sin dificultad alguna. {Se {S e habia habi a cur ado ado radicalmente! Esa vez, la madre Maria estuvo elocuentisima al referirse al hombre de ‘las piernas lisiadas, que escuchaba con profundo fundo recog imien miento sus cariiiosa cari iiosass palabras. palabras. Creo que el hom bre se llamaba Daniel y era de Tres Arroyos. La ultima vez que lo vi, mi euriosidad me Uevo a interrogarlo, para saber lo que opinaba de su cura. Y me res55
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pondio pondio de de esla manera: manera: *Cuando en mi mi pueblo me me dijeron dij eron de visilar a la madre, luego de baber sido declarado incurable por la cienci ci enciaa medic medica, lo hice sin ninguna esperanz esperanzaa y, como es logico, sin fe de curamie. Ahora puedo decir que be vuelto a nacer y a la madre debo la vida*. Era elocuente el fervor que aquel hombre ponia en sus palabras cuando se referia a su cura, que 61 creia obra del milagro. El lector se preguntara como aquel hombre pudo curarse sin el auxilio de la ciencia mcdica. Y lo hara con nn poquito de asombro, porque no esta compenetrado como corresponds de Ios secretos de Dios y de su ponderable poder oculto. La madre Maria fue un simbolo, por la pureza de su credo y su glor glorios iosaa di fusion entre la l a humanid humanidad ad doliente. doliente.
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COMO CRISTO, LA MADRE MARfA t a m b ie n
fu e
perseguida
y
calumniada
Esto que que voy a tratar tra tar abora era e ra sumamente sumamente necesario y no podia faItar en mi libro libro,, que es como un devocio devocionari nario o en el que se aprenden las oraciones del alma y la manera de aprend aprender er a ser un poquito poquito mas buenos cada dia. Porque Por que,, como Cristo, la madre Maria tambien fue perseguida y calum niada. nia da. jQu jQ u e causa fundam fundamental ental hubo para tanto revuelo y alliara all iaraca? ca? ^Por cuenta de de quien quien o quienes se desataba contra ella la jauria de los eternos incredulos? No habia que ahondar mucho para evidenciar evidenciar e] e] desord desorden en cerebral cereb ral de los ca1uraniad ores, ores, que nunca nunca entendicron cron rrada de de la fuerz fuerzaa poderosa del Supremo Hacedor, Claro que la evolucion del tiempo nos demostro, a los que amamos a Dios, que la madre Maria murio glorificada y no vencida, al contrario de Cristo, que fue torturado tort urado hast a exhal exhalar ar el ultimo ultimo suspiro. La ma madre dre Maria marchaba por la ruta diviiia hacia la perfeccion de las almas y jamas ae detuvo ante las absurdas e inconexas reflexiones de los enemigos de la paz y la concordia. Cuanto mas se le censuraba mas seguia adentrandose en el corazon 57
LA DOCTRINA DE LA MADRE MARIA
de ]os que iban a su templo para olvidar odios y rencores y aprender el verdadero signi/icado del bien y de la justicia. En su avanzada avanzada espirltual busco sicmpre "’la la claridad clar idad merit merit diana para predicar an credo divino, su ideal doctrinario, que fue cumbre de sublimes inspiraciones cn el de&envolvimiento de la vida misma. Pern los mercachifles mercachifles de la sensibilidad sensibili dad humana dejaron dejaron el tendal de doloridos a su paso por el camino de la infamia, A ellos no los molesto el mandoble huracanado de los icono clast as, signo de interrogacion interro gacion frente a las cualidades div diviinas de la madre Maria. Como al Maestro, muchas veoes la negaron porque no conmulgaban con su credo, prineipio basico de una ciencia infinita. Y hoy todavia subsiste su grato recuerdo.
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UNA CUMBRE: EL AMOR; UN ABISMO: LA PASION l a madre Maria Mar ia no noss saco, a much muchos, de un error err or que no veiamos, que no era posible ver porque la confusion bullia dentro do nuestro propio cerebro. Creiamos que el amor y la pasion eran dos expresiones del alma que seguian la misma lrayectoria. lrayectoria . Sin Si n embargo, embargo, de acuerdo con lo que hem hemos apren aprendid dido o partic par ticipan ipando do de sua convi c onvicci cciones ones human humanas, podemos afirmar ahora lo que ella nos explico hace mucho con bellas frases que no sera posible olvidar. «Una cumbre: el amor; un abismo: la pasion*. Asi lo dijo dij o la ma madre dre Maria Mar ia y asi es realmeule, realmeule, porque lo hem hemos compro comprobad bado o ha hasla sla la cvidencia. Porque Porq ue cl alma atosigada por la pasion no logra concentrarse en su esfera correspondiente, ya que la pasion puede ser absurda, bastarda, fuera de lo comun, de la logica. La pasion violenta, inconcebible, es la que provoca los dramas escalofriantes, incontenibles. Es ella, la pasion rayana en salvajismo, la que armo la mano de un horabre de setenta anos que ultimo a punaladas a una criatura de doce, que podia ser su biznieta. Por eso, la pa sion es el el abismo donde donde va a estrell estrellarse arse indefect ibleraente ibleraente 59
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lo que no pued puede, e, jam ja mas, as , conc conceb ebir ir la mente humana. Bien estuvo la madre Maria cuando en forma minuciosa y amplia trato trato este est e lema, para par a que coniprend ieran totlos que no es lo mismo la pasion que el amor. Porque del amor brotan los eentiinientos divinos, que bumanizan las almas y florecen como en un jardin de ensueno. Pues, como lo explicaba la madre Maria, se puede querer a una persona por amor y no por pasion, porque esta ultima siempre es desenfrenada y en cambio el amor es un bello triunfo del del alma perfects. perfe cts. ^Cuantas ^Cuantas veces — decia decia ella, la madre ma dre— — se ban ban dado dado casos en que el amor de de hija hija y padre se ha convertido convertido en una pasion denigrante, denigrante, incestuosa, incestuosa, infa in fa-memente mente absurda que avasalla los los fueros fuer os del del padre y la mora m oral? l? ^Cuantas veoes —agregaba— fue la propia madre que hizo suyo al hijo, castigaba por una pasion frenetica y sin control? Y la madre Maria, maestra inolvidable en la escuela de la vida, aclaraba aclar aba los conceptos para par a hacernos comprender comprender el error y ensenarnos a pulimentar nuestras almas tan Ilenas de asperezas, en aquel errtonce3. Pero, a pesar de su noble apostolado, tuvo su contra, que manejaban manej aban todos aquellos que no crelan en Dios porque por que no estaba al alcance de sus ojos y negaban a Cristo porque no lo habian conocido.
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AGUSTlN TOMASELU HABLA CON CARIftO DE.LA MADRE MARIA Con el proposito de evocar a la santa misionera y embellecer luego luego las paginas de mi mi libro lib ro con las impresiones recibidas, me fui hasta la casila que ocupara la madre Maria en Turdera, calle 9 de Julio, 750. Mientras oprimo el boton del timbre, su figuta gloriosa se agranda {rente a mis ojos y,me parece verla, junto a la senrilla balaustrada, sonreir a los incredulos con la satisfaccion del deber cumplido. A mi Ilamado acude un bombre de regular estatura. Es el cuidador de la casa. Se Hama Agustin Tomaselli, con domicilio en Lo mas de Zamora, calle Pedernera, 565. No bien mis labios pronuncian con uncion el nombre de la madre Maria, Tomaselli se descubre y habla de ella con profundo profundo carino. Dice: — *Yo *Y o no me olvidare olvidare nunca nunca de esa santa mujer, de quien hace cerca de 30 anos he recibido los beneficioa cura tives. Soy un creyente de su noble doctrina y la venero». A medida que este hombre habla su rostro va adquiriendo proyecciones sublimes. Parece un iluminado. — * jAh jA h ! la buena mad madre re Maria, Maria , aun desp despue uess de haberse
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alej ado de la tierra tie rra,, sigue adorand adorando o a sus sus h ijo ij o s como le adoramos a ella*. Y en tanto escucho las serenas palabras de Tomasell Tomaselli, i, advierto que qu e los que pas an frente frente al templ templo o de la madre Maria no la han olvidado: las mujeres se persignaban y los hombres se descobrian. Todo ello evidencia que la madre Maria vive a traves de los tiempos en el recuerdo de todos los que recibieron sus beneficios. El templo-escuela donde ella dicto clases de cultura espirilua-1 eneuentrase contiguo a la casa-babitacion y lleva el numero 770. Tomaselli dice: — *Mire *Mi re usted esas letras letr as esctilpidas esctilpidas en el frente, si no const it uyen uyen una rut a para las alma almass que, extraviadas, extravi adas, llegaion un dia al recinto en buses de alwio a sub dolencias, in curables segun los expertos*. Y leo la siguiente inscripcion: ■LA FE EN DIOS Y LA RELIGION DE CRISTO*. Pienso, entonces, en la canallada de los larsantes, que apedrearon a la madre Maria, y en quienes lorman el ejercito de creyentes de su doctrina. Agustin Tomaselli permanece descubierto mientras habla en forma elocuente de la madre Maria. Este hombre es un agradecido lervoroso de los bienes espirituales recibidos y se emoeiona cuando le digo: — «MI «MI libro sera el mejor mejo r homenaje a la memoria memoria de la madre Maria y una leccion de moral en pro de la Religion de Cristo*.
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LOS INCRfiDULOS INCRfiDULOS CONTRA CONTRA LA CIENCIA DEL ALMA Un senor que dijo dij o llamarse Zenon Zenon Hernandez y que encontre a escasa distancia de donde actuo la madre Marla, al enterarse del objeto de mi visita a Turdera, me expreso su satisfaction con las slguientea palabras; .—«Creo —«Creo que su libro libr o va a tener un e r ito it o sorprendente, sorprendente, porque hay millares de adeptos que ban de leerlo con cariiio, puesto que usled no es un desconocido en el campo cientifico. Lo se mesurado en tales experiencias, porque su obra es am amplia plia y la madre madre Maria Ma ria necesitaba un glosador de su capacidad y cualidades para exaltar sus virtudes. Pero diga algo de los incredulos que estan contra la ciencia del alma*. Era aquel hombre un creyente sincero, profundamente compenetrado de la obra de la madre Maria. Y, sin querer, sus palabras trajeron a mi memoria las criticas acerbas de los incredulos que se desataron cuando la mad madre re Maria aband abandon ono o la casa de la calle Ri Rioj ojaa para trasladarse a Turdera, en casa de una amiga suya. Los entonces claudicantes de la religion de Cristo aprovecharon la circunstancia para desatar sus iras contra la misionera, di>
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ciendo que habia abandonado la capita] perseguida por h policia. A esos infames sc referia Zenon Hernandez cuando hablo de los incredulos que atacaban la ciencia del alma. Nada de cuanto aseguraron fue cierto, porque -la nudre Maria, dignificada en el sacrificio, continuo su obra de bien comun sin que nadie la molestara. Todo era el producto d« una campana de difamacion contra el la, de la que no no aerian ajenos algunos senores estudiosos, interesados en que etla no continu con tinual al a sus curacion curaciones. es. Aun Aun quedan quedan en Tempeiley Tempeiley personas que la recuerdan y que, a pesar de no ser creyentes, hablan en forma elogiosa de sus innumerables curas. Pero los enemigos enemigos de Dios, que maldicen a Ciisto, Ciist o, tratan, tratan , por tod todos los medios, de restar restar mcritos e importancia a su obra, obra, que es eterna. Sin embargo, cuando se encuentran en una situacidn dificil, se olvidan de sus herejias y saplican: — *;Ayudame, *;Ayudame, Dios Dios mio!»
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UNA SUCESORA: CONSUELO QUINTEROS Y SUS MAGNlFICAS CONFERENCIAS Esta vez ha perdido total consistencia un refran popular, por cuanto no ha ocurrido como lo predice. Me refiero al de *muerto el perro se acabo la rabia>. Cuando nos abandon 6 en forma material la madre Maria, muchos asnos de dos patas lo proclamaron a todos los vientos, porque.su malignidad asi se lo aconsejaba. Sin embar go, perdieron la partida, como otras veces, porque la simiente diseminada por la madre Maria ha fruotificado y su obra continue en pie todavia. Una sucesora, Consuelo Quinteros, es la que ahora dicta clases de moral y cultura espiritual en el mismo templo-escuela dond dondee las dictara dictar a aquel gran esptritu que aun desde desde el espacio no nos abandona. Esta noble liermana, que sigue con inmen inm enso so car ca r ino tan ejempla ejemplarr apostolado, apostolado, habla habl a tambien con la ternura de una madre amantisima cuando se dirige a sus hermanos creyentes. Desarrolla temas altamente espirituales, tan prof undo undos, s, que que solo solo un tarado moral deja de jari riaa de de comcomprender. render. Revive sobre sobre sus sus labio lab ioss a quel quel la dulee expresio expresion n tan co65
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mun en los de la madre Marin, Aventajada discipula, ha sabido eata buena buena her mana heredar heredar las cualidades de la ma madre dre Marfa unicameute por amor a la humanldad. Ilabla con el corazon henchido dc emociones sanas y senlimientos nobles, transmitiendo sus mensajes espiriluales, que constituyen un sueno divino para los que buscan la paz y la Concordia en las fuenies sublimes de la ciencia del alma, Quienes, como yo, hemos asistido a las las confer conferenci encias as de la madre Maria, que fueron un torneo Inacabable de ensenanzas, estamos pcrfectamente vinculados a sn obra, conlinuada en forma car ca r inosa, como ya he dicho, dic ho, por la hermana Quin Quin teros, que no s e da tregua en diseminar la semilla del amor y del bien en nombre de Dios y de Jesus. Jes us. ^Que ^Que tienen que decir los materialista9 ante la divulgacion de Un noble doc* trina? No creo que intenten desmerecerla, como basta ahora lo han han hecho, con el proposito proposito — infantil— infantil — de anularla, anularla, por cuanto los cimientos son de una solidez unica y nada se lo* graria en ese sentido. Ademas, los creyentes, que se cuentan a milia res, respaldan, con el corazon corazon abierto abiert o a la la bondad bondad y al amor, la tarea ennoblecedora y Humana de Consuelo Quinteros.
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EL AMOR Y LA FE EN DIOS DESMATERIALIZAN LAS ALMAS En mis andanzas, como lo he afirmado en otras partes —-en el libro, en el periodismo y en la tribuna—, he hallado mas caras que corazones, Quiero dedr que hay seres que no se conmueven conmueven por por nada del mundo mundo y se rien rien mas Men del dolor ajeno. Con esos seres he tenido que enfrentarme con marcada frecuencia y he podido compro-bar que la maldad ha endurecido sus corazones, a tal extremo, que a los propios familiares les han negado su ayuda. Qlra cosa hubiera sido si el malerialismo. tan peijudicial, siempre, se hubiera en* coni rado ausente de esas esas almas, almas, porque sol am amen ente as! puede prodigarse prodigarse a rnanos Henas. P or eso la madre Mari Ma riaa bizo adeptn adeptnss eon su predica predica de amor y de fe, porque coroprendio que unicamente de esa manera la humanidad llegaria a en* contrarse a si misma, para el mejor desempeno de su bella miaion. Amor y fe fe en Dios Dios acous acousej ejaba aba a cada cada momento des* es* de el mismo sitial dende hey lo hace la hermana Quinteros; amor sublime sublime y fe tempi tempiada en el yunque yunque de la cienci cie nciaa par paraa combatir combat ir las imperfecciones imperfecciones del del alma, era la consigna. A 67
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traves de los anos se generalizo ampliamente, y desd desdee los pueblos y ciudades ihan Uegando los enfermos junto a la madre Maria, con el anbelo de la total recuperacion de la salud perdida. No bubiera necesidad de tantos contratiempos si exi exist stie iera ra un poco mas mas de fe en Dios y amor a lo los semeseme j an ante tess que que lucha luchan n por el mejor mejoram amlen lento to de las alm almas. as. Por eso, eso, todo ser se r que no cree cre e ni en si migmo igmo es un descarrlado de la senda del bien, cuyo destino es volver muchas veoes a la tierra, rra , hasta tanto se perfe perfecci ccione one espir-itu espir-itualm almente ente.. Ann cuando parece que hemos llegado al grado maximo de civilizacion, en oca siones, los sere seress human os se coloca col ocan n en el mlsmo nivel de las besfias. Por todo eiio es necesario difundir mas am* pliamente la doctrina que inmortalizara a la madre Maria. De esta manera resultaria mas facil centralizar en nuestro me dio la realidad de la vida; vid a; y porque nos encontramos en este mundo mundo,, que es el mas atra atrasado sado de los planet as.
NO ES CIERTO QUE LA MADRE MARIA COBRABA PARA CURAR En una reciente visita que hice a Temperley Temperley y Turdera, he podido acercarme a algunas personas con el proposito de realizar realizar una una compu compulsa lsa de las especiea especiea que hacian hacian circ ci rcul ular ar los incredulos para conveniencia de terceros. Luego de pedirme que no diera sus nombres, hablaron en forma amplia de la madre Maria, cuyo recuerdo sobrevive a los anos transcurridos curridos desd desdee su muerte. Desmintieron la especie del pago pago de la cura, aseguran asegurando do que que no e ra cier c ierto to que ella cobrara cobra ra para curar. Yo, que he sido un adrairador de la extraordinaria naria raisionera rais ionera,, me siento emocionado al comprobar que aun aun hoy, hoy, □ diecinu diecinueve eve anos anos de su fallecimiento, se le sign con inquebrantable fe. Pero deseo dejar oonstancia de que nada hay de cierto en todo lo que se ha dicho para desmereoerla a los ojos del inundo inundo.. A Aun un ma mas: s: ella ella no puso puso nunca precio precio a sus curas, porqne Dios era quien las hacia por su intermedio y su nohleza no podia llegar a convertirse en una fuente de egoismo. Al contrario, en mas de una ocasion yo mismo la he visto deja de jarr dinero en ma mano noss de los necesitados. necesitados. Y tal cosa no van van 69
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a realizarla reali zarla los charlatanes embaucadores embaucadores,, porque ellos lo quieren todo todo para para si; s i; en cambio no se comport an de tal ta l ma* ma* nera los que tiencn fe en Dios y en Jesus y han sido alumnos de la madre Maria. Mari a. Ellos son los que compre comprende nden n el dolor de las l as madres y la zozobra de los padres cuando la miseria ser ia golpea golpea a sus puertas. puertas. En cambio en en los otros, en los que dicen que curan y cobran elevados honorarios, no sera posible encontrar un atomo de sentimiento. Quiere decir, ent once® ce®, que esos son los los comercian comerciantes tes in fames que sorprenden labuen a fe de los enfermos y los estafan. Si a ellos se les persigue, foacen bien, porque constituyen una especie de secta peligrosa para la sociedad. La madre Maria fue ejemplo de amor, de bondad y de cultura, y dejo nobles ensenanzas que sirven para curar el alma y el cuerpo. Aguslfn Tomaselli lo repite a cada instairte: — *La *L a madre Maria fue un un alm almaa buena buena y carinos cari nosa; a; por eso no me olvidare nunca de ella».
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«MADRE MARfA, QUE ESTAS EN EL CIELO...» Como ya Como ya h hee dicho, no se trata tra ta de un caao aislado aislado que, indudablemente, indudablemente, podria podria no aceptarse en forma veraz, sino que, desde hace muchiaimos ahos, el mundo oye el nombre de la madre Maria con ese tintineo agradable que deja excelente impresidn en las almas. Es asi como, dia Iras dia, se van repitiendo y triplicando las caravanas de creyentes que iban hacia la madre Maria en procura de beneficios espirU tuales tan necesarios para el cuerpo y el alma. £>Puede concebirse que si ella liubiera sido lo que decfan los ignoranles se le iba a tener tanto carino y aun despues de muerta? ^Creen los farsanles que la gente no comprendio, desde un prindpio, quien era la madre Maria y que fin llevaba llevaba su doclrina, doclri na, basada en la religion de Crist C risto? o? I mpolentes e incapaces de podcr igualarse a ella, no encontraron otro medio medio mas a mano mano para vengarse vengarse que la crit cr itic icss san* san* grienta grient a y absurd absurda, esgri esgrimida mida desde desde las sombras, porqu porquee sus detradores ador es no dieron nunca la car ca r a. Todo cuanto se diga en favor de la madre Maria siempre result a poc'o comparado con su obra, eonocida, eonoci da, claro claro esta, esta, 71
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lambien en su pais de origen. Y tanto se le ama y se le adora, que no son pocos Ios que le suplican supl ican una ayuda mediante la presente oracion o ruego divino, que pertenece a algun ser de otro plancta superior al nuestro: «MADRE MARfA, QUE ESTAS EN EL CIELO Y DESDE TU MUND MUNDO O NOS NOS VES PADECER, PADECER , TUS TU S HIJ HIJOS OS TE PIDEN UN POCO DE ALIVIO A TANTA TORTURA QUE CAUSA EL DESDEN. SI DIOS Y JESOS TE OFRECIERON LA PALMA DE SER LA ELEGID ELE GIDA A EN LA SANTA SANTA MISION, TO PUEDES PEDIR A ELLOS, ;OH! MADRE, QUE PONGA EN LAS ALMAS UN POCO DE AMO-R, CONFIAMOS EN TI, MADRECITA QUERIDA, LOS QUE CONTINUAMOS TU SANTO IDEAL. LA SOPLICA NUESTRA LLEGARA A TU MUNDO TRADUCIDA EN DULCE Y PIADOSO REZAR». Ante este este hecho tan elocuente elocuente no puede uede dudarse de la bondad de la madre Maria, porque si ella no hubiera sido lo que fue nadie la recordaria y su nombre hubiera caido ya en el olvido. Ocurre, sin embargo, lo contrario, y cuanto mas distante se coloca en el Stempo la fecba de su desaparicion terrenal, mas se agranda en el recuerdo su ftgura patriarcal de misionera de un credo de amor y de juslieia.
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LOS QUE NO ESTAN TODAVlA... Cuanto mas se profundiza la doctrina de la madre Maria, mas inieresa i nieresante nte se encuentra, encuentra, en todos sus aspectos. aspect os. No liay escollos que puedan impedir su marclia triunfal, y aquellos que la siguen siguen difund difundiericlo iericlo cumplen cumplen una oblig obl igaci acion on moral mor al,, como seres ya en vE vEas de perfec per fecci cionam onamien iento. to. Los que han leido con atencion las paginas de este libro mio, que se me antoja un breviario de bellas concepciones que llegan al alma, habran podido comprender cuan grande fue la madre Maria, enviada de Dios y sana difundidora de la religion de Cristo. Y habran apreciado tambien, en definitiva, que la human]* dad necesita de una fuente de enscnanza donde se aprenda a ser nienos malo, menos egois eg oista ta y mas sensibl sens iblee a) dolor ajeno. aje no. Por eso he creido crei do oportuno oportuno decir a los que desee eseen n perfeccionarse espirituahnente, que no pierdan mas tiempo y traten por todos los medios de adentrarse en los dominios de esa santa sant a doctrina de la madre Maria. Mari a. £Que cuesta acerearse al templo-escuela donde la hermana Consuelo Quinte* ros dicta clases elementales de real experiencia para el cuerpo y el alma? Los que no estan todavia en ese camino del 73
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bieri tienen que llcgar hasta el para comprobar la pureza de mi palabra y la lealtad soberana de tan bella doctrina. Piensen, los que niegan el poder de Dios y la existencia de Cristo, que toda cienc ciencia ia que irat ir atee de de humanizar log log espiritus, no puede ser, en modo alguno, perniciosa ni contraproducente. Porque, en medio medio de la maidad, en ocasiones exoesiva, cabe y debe primar e! amor que que o [recio Jesus Jesu s cuando cuando fue carne y espiritu entre nosotros, para que las generaoiones futuras no tengan que censurarnos. La juventud, especialmente, debe acudir acudi r a fuentes dond dondee se le prepare para las luchas primordiales en la vida, para que conozca la ciencia del cuerpo y del alma y la comprenda como es necesario. El camino mas cercano para lograr el perfeccionamiento espiritual es el que enseiia la doctrina de la madre Maria, fuente de verdadera ciencia humana, aclamada y defendida por grandes intelectuales. Los eternos incredulos, que han han criticado criticado a la 'mas huma na de las misioneras del credo del amor y la justicia divina, tambien tendrian que deponer egotsmos y no pensar en mitrir el cuerpo solamente solamente si no tambien el espiritu. espirit u. Na Nada da se gana haciendo mal, pero mucho se consigue practicando el bien. Entren. pues, en ese camino del amor y la esperanza, los que no estan todavia...
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MURI6 HACK DIECINUEVE AS'OS LA MADRE MARIA Yo he dicho en otras partes que, cuando se ha Ilegado al term! term! no de una una mision y el esplritu debe abandonar abandona r la materia mat eria,, nada nada ha hay y que lo retenga en un luga lu gar; r; que por por obra obra de Dios Dios y del tiem tiempo po ha de convert convert irse irse en esa es a nada que que no vemos pero que admitimos, poTque as! es necesario para el desenvo desenvolvimien lvimiento to humano humano.. Y en un 2 de octubre de 192 19 2 8 la la madre Maria se durmio en este mundo para despertarse en otro de los imindos babitados del Cosmos, desde donde con* tinua anim animand ando o a quienes no pod pod ran olvidarse olvidarse jamas jam as.. Habia Habia Ilegad Ilegado o a este mundo mundo de crueldades crueldades y desesperanzas el 22 de octubre de 1855. Cuando partio faltaban veinte dias para cumplir cumplir los setenta y tre t ress arms. arms. Producido su fail failed ed miento, miento, pronto se conocio en todas partes, y los que fueron y siguen siendo de los suyos lloraron con amargura. Parecia que era mentira, que la madre Maria no habia muerto y que aun se oian sus palabras de amor y de bondad en el templo-escuela que vistio sus mejor mejores es galas gal as con sus santas santas ensenanzas. ensenanzas. AqueAqueHa transformacion de la abnegada educadora de almas arranco lagrimas de amargura a quienes la amaron con profundo
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carino. car ino. Alguien durante durante el e l velatorio de sus rest os, se preguntaba ta ba de donde salia sali a tanta gente, pues era un ir y venlr de de compaota muchedu muchedumbre mbre — hombres, mujeres y nifios— que iban a dejar sus lagrfmas sobre la mortaja de la madre Ma ria. ri a. La faz sonrienle sonri enle de ia anciana anci ana — ni el ■u ■ultim ltimo instante instant e pudo evitar aquella sonrisa franca y Humana— era el indicio de que se iba tranquila de la santa roision cumplida tal como lo habia dispuesto Dios, Pudo advertir, quicn observe con senrimiento, senrimient o, que hasta en a quel instante instante supremo supremo la fe continuaba latente en todos los que habian ido a verla por ultima vez. Porque, al aoercarse al ataud, los labios se movian tremulos, como pidiendo algo, lo que evidenciaba el dolor de todos los que habian sido sus sus akuimos. akuimos. El sepelio sepelio de sus restos, como es de suponer, dio lugar a una imponente manifestacion de hondo pesar por la perdida de tan abnegada maestra del bien, del amor y de la esperanza. Los que cuidan mas la materia que el espiritu pensaron, seguramente, que nadie la tendria en el recuerdo, pero lia sido todo lo contrario, contrari o, porque porque dcsde entonces hasta la fecha, que ban transcurrido diecinueve anos, se le ama como si estuviese con nosotros en espiritu y materia. Estoy seguro de que, a cualquiera que se 1c preguntara acerca de ella, dirla: — * jL a ma madre dre Maria fue una una santa santa 1*.
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EL TRIBUTO DE TODOS LOS DIAS Una prue prueba ba del gran carino car ino que se profesa a la mad mad re Maria Maria es el desfile desfile interminable de mujere muj eres, s, bombres y ninos ninos junto a la tum tumba que guar guard d a sus rest resto os. Van, todavia, despues de muerta, a que el espiritu de la santa misione misionera ra los aliente en la l a lucha por la vida y les les de aalu aa lud d y bienestar. bienestar. Y eso no es fanatismo, fana tismo, como podria suponerse, sino la fe que aun no se ha perdido, que esta hien * arraigada en las almas de quienes quienes ban abrazado tan humana doctrina. El tributo de todos los dias junto a la tumba que nadie deja de visitar lo constituyen las Cores y las plegarias que, que, como una una necesidad necesidad del del alma, Ilevan alii alii eon e on el mas profundo de los carinos, los seres, agradecidos, unos, y peticion antes, antes, otros, otros, que forman forman la caravana caravana de los creyentes, creyentes, para que que no se pierda la fe ni se olvide olvide la doctrina. Y la ciencia humana que cura las enfermedades del cuerpo y del alma sigue su luminosa trayectoria desde el mismo temploescuela donde la animara la madre Maria y la conocieramos todos, todos, para par a bien de nuesiros propios destinos. La difunde un alm almaa buena bu ena y generosa, Con Consuelo suelo Quinteros, y la difunden los seres que, como Agustin Tomaselli, estan agradeci77
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dos a la aatita misionera. Porque, a su paso por la tierra, la madre Maria Mar ia dejd grandes grandes ensefianzas y estupendos beneficios para el cuerpo y el alma. Nadie que tenga un poco de criteria dejara de comprender que su presencia en este atraeado eado planet planet a eera, ra, mas que necesaria, ne cesaria, imprescindible imprescindible,, como como la propia presencia de Jesus. Por eso escribo este libro, para reivindicar a la madie Maria despues de su muerte, que es la translormacion definitiva del ser humano. Creo que nadie dejara de leerlo, porque es el devocionario de mis mis sentires y porque la lectura lectur a de sus paginas es la autentica receta para las enfermedades del cuerpo y del alma.
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S U M A R I O Pag.
Crato Crato recucrdo recucrdo ......................... ...................................... .......................... ........................... ........................... ...................... ......... 5 Aclarnndo Aclarnndo conceptos conceptos ..................... .......... ...................... ...................... ...................... ...................... ...................... ............... .... 7 Prcdijo la gucrra gucrra de 1 9 1 4 ......................... ...................................... ........................... ........................... .................. ..... 9 For una trnyectoria luminosa es conducida sit religion ................ 11 iHasta despues de inucrta! ............................ 13 ........................................... ............................ ....................... .......... Fue una santa santa ntisi ntisidn dn k de la la madre madre M a r i a .................................... 15 Castilla la Vieja, cuna de su nociiniento .............................. 17 ............................................ .............. La madre Mark discipula de rancho Sierra .................................. 19 No ejercid ejercid nunca nunca cl curande cura nderism rismo................ o.............................. ........................... .......................... ............. 21 Fe, Fe , espera esperanza nza y caridad ..................... .......... ...................... ...................... ...................... ...................... .................... ......... 23 a Era un gran podcr de sugestion el de la madre Maria? .............. 25 Evitd Bukidio Bukidioss y dramas que a menu menu do ptovoca ptovoca la m is e r ia .......... 27 La madre Marta fue una misionera de verdad ................................ 29 lfaciendo la caridad por las rutas del Lien .............................. 31 ...................................... ........ Conlinuadora de la obra de Cristo ......................... ........................................ ........................... ............ 35 Sembrando espinas no ae recogen Iloies .......................... 37 ........................................ .............. Nunca Nunca pidi pidid d nada para e l l a .............................. ........................................... ......................... ......................... ............. 39 No fueron milagrosas las curas de la madreM madreM a r ia ........ ............ ......... ......... ......... ....... 41 Yo no los lla llamo mo;; olios vien vienen en a mi ...................... ........... ...................... ........... 43 Muclios uclios comerciaron ett nomb nombre re de la madre madre M a r l a ...................... 45 Era una vidente la ntisionera? ............................ i ........................................... ............................ ............... .. 47 Era una apasionada dc su doclrina .............................. ............................................ ...................... ........ 49 Pucdrn cururso las enfermedades sin medicinas? ........................ 51 l La mad madre re Maria (rente a laa laa injustas criticas de los incredul incredulos os . . 53 El recuerdo de una cura que parccia iinposiblc .............................. 55 Como Cristo, la madre Maria lambicn fue perseguida y calumniada.................................................................................. ..................... 57 Una cumhre: el amor; Un akismo: la pasidn .................................. 59 Agustin Tnmaselli Tnmas elli habla con carino de lamadre lamadreMaria Maria ............... 51 Los incredulos contra la ciencia cienc ia del del alma .............................. 63 ..................................... ....... Una sucesora, sucesora , Con Consuelo suelo Quinteros, y sus magnific magn ificas as conferenci confe rencias as 65 El am amor or y la fe cn Dios ios desmat desmateria erializa lizan n las a lm a s ............ ........... 67 No es cierto que que la mad madre re Maria cobraba para c u r a r .................... 69 * Madre Madre Maria, que estas estas en en el cie c ie lo ,..> ,. .> ........................... 71 .......................................... ............... Los que no estan todavia todavia ..................... .......... ...................... ...................... ...................... ..................... ................ ...... 73 Murio hace diecinueve anoa la madre Maria .................................. 75 El trikuto de todos (os dias ...................................................... ........... 77 .
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qul qulroma romanc nciia (adivi divina na
ci6n por por las linoas de las manos) manos).. etc. El verdadero axto axto para Inicla Iniclars rse e en los secretos de las las ciencias ciencias ocultas. ocultas. Rove lacion laciones es y reglas as sacadas sacadas de los prin prin cipalos autores autores de alquimia Slosoii Slosoiia. a. magne magnetismo tismo,, etc.
L A U L T IM A P A L A B R A D E L A M A G IA
Q U IR O M A N C IA ^r,° de COnOCer el d‘,s d‘,sllin1°
alia be lo c obah stico • Fi F illros contra et amo. ■ Arte Arte d . evocar a los muerlos muerlos -
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Escamcteo • Cartomancia ■Juegos Juegos do salon • Juego Juegoss de teatro teatro - Sortileglos Sortileglos de amor amor y odio odio • La magia y el amor
IL
S IB IL A
Secretos de Alberto el Grande nunca hasta hoy revelados. revelados. Nuov Nuovo o arte de echar echar las cartas cartas • Ciencias Ciencias ocullas ocullas y secretos secretos de quimica y iisic iisica a por por los celebres tratadistas tratadistas de magia.
M A G IA
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Contione Contione el secrete de lo. lo . suencs y interpretacion. en los sucosos de la vlda. como asi asi tambien ol numero compjoto
•Trans •Transmi misi sion on del del pensa pensamt mten en.o .o ■Mag ■Mag, neltemo. neltemo. sexual, etc. O S IR IS
La magia taUsmdnica taUsmdnica (en prensal.
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jueqos jueqos de axar • todo lo concornientc concornientc para conteguir la fortuna. fortuna.