INFANCIA DE JESÚS, SEGÚN LOS SERMONES ESOTERICOS DE JESUS Por FABIO RAMIREZ (RE-EDITADO POR MEIREM)
CARMELO (JHASUA NIÑO)
El resplandeciente doble astral del niño dormido se detuvo a pocos pasos del asombrado grupo y claramente pronunció estas palabras: “Benditos seáis en la sencillez de vuestro corazón, y en los santos anhelos de verdad y justicia que os traen a mí. "Y porque sois míos desde largas edades, habéis merecido que la Eterna Ley me permita este acercamiento, que anudará más fuerte aún el lazo que os une conmigo. "Algunos de vosotros me acompañaréis hasta que yo sea subido a la cumbre, y otros iréis al más allá antes de ese día. "Unos y otros necesitaréis la fuerza divina que hace los héroes, los mártires y los santos, porque es la jornada final, y el Eterno Amor se desbordará sin medida sobre todo el que sea capaz de percibirlo. Fe, esperanza y valor que la hora se acer ca…”. "Y levantando su mano etérea que en la penumbra parecía un resplandor de estrella, les bendijo con el signo de los Grandes Maestros. MONTE TABOR (JHASUA NIÑO)
“Amigos del pasado, del presente y del porvenir: La cadena no interrumpida d e inmolaciones cruentas de vuestro Mesías Instructor toca a su fin. Vosotros lo sabéis como yo. Mis sacrificios terminarán muy en breve, pero los vuestros continuarán durante veinte siglos más que faltan para el final de este ciclo de evolución. Y así como este holocausto mío será el más espantoso y terrible, porque es la apoteosis del Amor-redentor, igualmente serán para vosotros XX siglos de inmensos martirios sin honra y sin gloria, antes bien, sobrecargados de oprobios y de infamia, hasta el punto de que la humanidad dudará si sois justos o sois réprobos. réprobos. "También para vosotros será la apoteosis o las tinieblas pasados estos veinte siglos que os dará la Eterna Ley, para forjar vuestra grandeza o vuestra ruina, según que caminéis siguiendo mis huellas, o torzáis vuestro rumbo en pos de ideales que no son los míos.
"En esta etapa final de Jhasua-Cristo, quedaran refundidas como en una sola claridad, todas las actuaciones anteriores que sólo aparecerán ante la ciega humanidad, como pasajes brevísimos de meteoros iluminando las tinieblas de las pasadas edades. El heroico apostolado de Juno y de Numú en Lemuria, la mansedumbre invencible de Anfión, y la
Sabiduría de Antulio en Atlántida; el Amor tiernísimo de Abel, la siembra de paz y de justicia de Krishna, el renunciamiento supremo de Buda, la fuerza formidable de Moisés taumaturgo y legislador, todo se sumerge en la luz divina para formar la apoteosis de Jhasua-Cristo, que dirá ante Dios y los Hombres: Hice cuanto fue posible hacer; todo fue consumado. "Niño aún, sólo podéis cooperar al despertar de mi Yo superior, fortaleciendo mi espíritu y cultivando mi mente, a fin de avivar en ellas las llamas vivas del conocimiento que brilló tan radiante en horas lejanas. Mas cuando yo me haya despertado y me haya reconocido a mí mismo, permaneced tranquilos y serenos en vuestras cavernas sin alarmaros, cuando veáis aparecer los primeros relámpagos de la tempestad, que ya os anuncio que llegará tan formidable y terrible, que guardarán de ella memoria los veinte siglos que os faltan a vosotros de vidas terrestres en este ciclo de evolución planetaria. "Seréis dignos de lástima, si en plena borrasca llegáis a dudar de la misión divina de Jh asuaCristo; mas es inevitable que en su corazón de hombre sea clavado también el dardo de esa duda; como los sentiréis clavarse vosotros en vuestra carne en etapas finales. La ley exige a los redentores, que ningún dolor les sea extraño de aquellos a que está sujeta la humanidad que redimen y que salvan. "Mis Esenios de las cavernas, mis discípulos, mis aliados, mis apóstoles, mis mártires del futuro; yo os doy en esta hora, la suprema bendición de mi amor, para que ella os sirva de estrella polar en los obscuros siglos que habéis de vivir todavía en esta Tierra, entre fangales de vicio, de sangre y de llanto. Y aunque muchas claudicaciones marcarán lunares de sombra en vuestras existencias existencias futuras, cuidad de que sea sin manchas la final, porque ella marcará vuestra gloria y felicidad, o vuestra desdicha por otro ciclo de evolución. Paz y Amor sobre todos vosotros que sois míos hasta la eternidad!”. TEMPLO DE JERUSALÉN (JHASUA-NIÑO)
-¿Qué me queréis?. -Puesto que has escuchado el debate y que lo has comprendido, dinos cuáles de nosotros estamos en la verdad. El Altísimo se complace a veces en hablar por la boca de un párvulo. -Estas palabras fueron pronunciadas por el Gran Sacerdote con gran dulzura y casi sonriendo a la vista del niño.
-Y vos que sois aquí el Jefe Supremo, ¿no podéis ponerles de acuerdo?, -preguntó cándidamente el niño. El asombro comenzó en los oyentes ante tal respuesta. -Siendo así -continuó Jhasua- Jehová os contestará por mi boca. “No me conoce ni me comprende quien habla de mi cólera y mis castigos. Yo soy una esencia, una luz, una vibración permanente y eterna. ¿Puede encolerizarse la esencia, la luz, la vibración?. Vosotros os encolerizáis, y bajo el impulso de la cólera, castigáis, mas Yo no soy un hombre revestido de vuestra grosera materialidad”. Así dice Jehová, el inmortal que no tuvo principio ni tendrá fin. Y el niño guardó silencio. Los Doctores se miraban unos a otros, y los que ocultamente eran Esenios, comprendieron con luz meridiana que aquel niño era un vaso que contenía un raudal de luz divina que se derramaba sobre la Tierra. -La Sabiduría habla por tu boca, niño -dijo el Gran Sacerdote-. Hacedle pues, las preguntas conducentes a la aclaración de las cuestiones que se trataban. -Sin que hagáis ninguna pregunta, yo hablaré, porque Jehová dirá lo que Él quiere que sepáis. “Vosotros no conocéis al Padre Celestial porque sois cobardes y estáis llenos de miedo. -¡Niño!… -se oyeron varias voces. -No lo toméis a ofensa, porque Jehová nunca ofende, sino que dice la verdad, -continuó impasible Jhasua-. Sí, estáis llenos de cobardía y de miedo, y a la Divina Sabiduría no la conquistan los miedosos, sino los valientes para colocarse frente por frente a lo desconocido, al Eterno Enigma, no de potencia a potencia y con insólito orgullo, sino con el amor de hijos que ansían conocer a su padre. Y entonces el Padre se les descubre y les dice: “Aquí estoy. Conocedme para que podáis amarme como dice la Ley, más que a todas las cosas de la Tierra. "¿No veis que es un contra sentidos que mande a sus criaturas amarle sobre todas las cosas de la Tierra, y luego se encolerice y animado de ira y de furor les castigue despiadadamente despiadadamente como hace un mal amo con sus infelices esclavos?. "La Ley debería decir entonces: "Temerás a Dios más que a todas las fuerzas y formas del mal que hay en la Tierra".
"Os digo que tenéis miedo de escudriñar la verdad divina, y por eso sigue ella siendo una diosa escondida y esquiva que no quiere mostrarse a los hombres. Sabéis que Dios es inmutable inmutab le y os permitís hablar de su ira y de su su cólera. Encolerizarse Encoleriz arse es mudarse, es cambiar de estado, y esto es otro contrasentido, porque si en momentos dados se llena de ira y de furor, no es inmutable y es una blasfemia atribuir al Altísimo, tan grave imperfección; propia de las atrasadas criaturas de la Tierra. "Dios es inmutable y porque lo es, permanece impasible ante todos los errores humanos, ante todas las hecatombes de mundos y humanidades. "Dios sabe que las inteligencias encarnadas, recién llegadas a los dominios de la inteligencia y de la razón, están aún, bajo el gobierno de la fuerza bruta que es la materia en humanidades primitivas; ¿cómo pues, ha de encolerizarse contra el orden establecido por Él mismo, o sea que todas las humanidades adquieran lenta y paulatinamente el conocimiento, la sabiduría y la bondad?. "Si la Ley Divina dice: “Amarás al Señor Dios tuyo con toda tu alma, con todas tus fuerzas y sobre todas las cosas”, es evidente que Él quiere como único don, el amor de todas sus criaturas de todos los mundos, y por tanto lo que más le complace, es que sus criaturas se esfuercen en conocerle porque nadie ama lo que no conoce. "En resumen, todo lo bello y bueno nos viene de Dios que es nuestro Padre Universal, y todo lo malo tiene su origen en nuestros errores, en nuestra ignorancia y en nuestras iniquidades”. iniquidades”. Y el niño que había ido adquiriendo más y más animación, calló de pronto y juntando sus manos sobre el pecho y levantando a lo alto su rostro como iluminado de suave claridad, exclamó: “¡Padre mío! Señor de los cielos, haz que los hombres te conozcan y sólo así te amarán!”… CENÁCULO DE NICOLÁS DE DAMASCO (JHASUA NIÑO)
-Yo estoy aquí porque vosotros queréis que la Divina Sabiduría baje a vosotros por la boca de un párvulo que apenas si sabe cuándo sale el Sol. "Y Jehová dice así: "Si tenéis puro y sencillo el corazón, yo bajaré a vosotros con toda mi claridad.
"Y aquellos que me busquen en espíritu y en verdad, me encontrarán en todas las cosas que viven y que mueren desde los soles que brillan en el espacio azul, hasta la oruga que se arrastra por la tierra. "Yo he arrancado un pedazo de Mí mismo -dice Jehová- y es el Mesías que os mando. Es mi Verbo, mi Palabra Eterna grabada en las olas de los mares que, os dan la carne de sus peces y el esplendor de sus perlas; grabadas en las montañas que os dan piedra para vuestras viviendas y oro para vuestro regalo y vuestro bienestar; grabadas en los árboles que os dan sus maderas y sus frutos; en las bestias todas de la Tierra que os sirven para vuestra vida. "Yo soy la Luz Eterna -dice Jehová- y mi Mesías es un rayo de esa luz. "Yo soy el Poder, la Energía, la Fuerza que veis en todo cuánto vive, y mi Mesías es una vibración de ese Poder, de esa Energía, de esa Fuerza que está por encima de todos. "Él ha surgido de Mí, y vive en Mí, y piensa y siente en Mí ahora, y mañana y por toda la eternidad. "Él os lleva mi mensaje de Amor y de Luz, pero vosotros haréis con él como habéis hecho con todos aquellos que en Mi Nombre os llevaron la Verdad. "Y ¿qué os dirá Moisés si es Él que irá hacia vosotros?. "Mi Ley que fue Mi Mensaje llevado por él, está sepultada bajo una montaña de prescripciones y mandatos que habéis ido acumulando, con lo cual no habéis hecho sino encadenar las conciencias y cargar de temor y espanto las almas, que no saben cómo poner de acuerdo la debilidad y miseria propia de su escasa evolución con los furores de Jehová, el terrible Dios tirano y déspota que habéis creado en vuestras monstruosas alucinaciones, en vez del Dios-Creador D ios-Creador por su Amor Omnipotente que se da continuada y eternamente a todo cuanto vive y alienta en el Universo. "Soy Uno, pero tan grande que dentro de Mí se mueven todos los mundos y todas las humanidades que viven en esos mundos. "La luz que os alumbra y el aire que respiráis son emanaciones mías; y vosotros mismos que os creéis a veces tan grandes no sois más que una vibración de mi Energía Eterna. "Dentro de Mí vivís, os movéis y sois aún sumergidos entre el oleaje pesado de vuestro atraso y grosera materialidad.
"Si un día por Moisés os di como primera ley el Amor hacia mí, y hacia vuestros semejantes semejantes emanados todos de Mí, por el Mesías que ahora esperáis y llamáis, no os daré otra ley sino aquella misma, llevada a la altura suprema del Amor por encima de todas las cosas creadas. "Y porque soy inmutable y eterno, y soy el aliento de toda vida, veo, sé y percibo cuanto pensáis y obráis y sentís; y ninguna de vuestras obras malas, me afecta ni siquiera como el ondular de un cabello. ¡Inmutable!…¡Eterno!…, son frases, cuyo significado está más allá del alcance de vuestra mentalidad. "¡Qué horrible blasfemia pronunciáis cuando habláis de la ira de Dios, de la cólera de Dios, el furor de Dios!… "Mi justicia que es inexorable -dice Jehová- no es ejercida ni por la cólera, ni por el furor, sino por la Ley Suprema de causas y efectos, que rige invariablemente en todos los mundos del vasto universo. "Y si vosotros que sois imperfectos amáis a vuestros hijos, vuestras obras, vuestras ideas, vuestros pensamientos, subiendo en la escala de lo infinito, encontraréis claramente demostrado mi amor eterno y en grado infinito, sin límites, para todo lo que surgió de Mí mismo, y es como una prolongación mía, como un hálito mío, como un resplandor de mi Luz Eterna. "Las Inteligencias llegadas a la perfección más completa en todas sus facultades, son mi Idea, mi Pensamiento, mi Voluntad, mi Verbo, mi Palabra Eterna, mi Amor inconmensurable. Ellas están están en Mí y Yo en Ellas formando así la maravillosa Unidad Divina que es Luz, Energía y Amor”.