Estudio de La Exposicion a Los Humos Generados en La Soldadura de Acero Inoxidable

Estudio de la exposición a los humos generados en la soldadura de acero inoxidable

Estudio de la exposición a los humos generados en la soldadura de acero inoxidable

Edita: Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales Diseño y Maquetación: Tresalia Comunicación Autor: José Mª Santurio Díaz, (Técnico de Prevención del Área de Higiene Industrial del IAPRL) Depósito Legal: AS 01570-2016 Imprime:

ÍNDICE 1.

Introducción

5

2.

Humos de soldadura del acero inoxidable

7

2.1.

7

Los procedimientos TIG y MIG

2.2. Contaminantes químicos

3.

4.

5.

6.

7.

8

Efectos sobre la salud

11

3.1.

Toxicocinética

11

3.2.

Toxicidad

12

Criterios de valoración

17

4.1. Evaluación de la exposición ambiental

17

4.2. Valores límite ambientales (VLA)

18

Metodología

23

5.1.

24

Criterios de selección y tamaño de la muestra

5.2. Desarrollo experimental

27

5.3. Materiales y métodos

27

Datos recopilados

29

6.1. Particularidades de la soldadura del acero inoxidable

30

6.2. Extracciones localizadas

31

Análisis de datos

33

7.1.

Plantilla

33

7.2.

Organización preventiva

34

7.2.1. 7.2.2. 7.2.3. 7.2.4.

34 35 36 37

7.3.

Modalidad de la organización preventiva Delegados de prevención Evaluación de riesgos y planificación preventiva Identificación del riesgo por exposición a Cr y Ni

Trabajadores afectados

38

7.3.1. Listado de trabajadores 7.3.2. Formación e información de los trabajadores 7.3.3. Vigilancia de la salud

38 38 40

7.4.

7.5.

7.6.

8.

Técnicas de soldadura y procedimientos de trabajo

41

7.4.1. Técnicas de soldadura 7.4.2. Procedimientos de trabajo 7.4.3. Sistemas de extracción de humos

41 42 42

Equipos de protección, vestuarios y ropa de trabajo

43

7.5.1. Equipos de protección individual 7.5.2. Vestuarios 7.5.3. Ropa de trabajo

43 44 47

Prohibiciones y su señalización

48

7.6.1. Prohibiciones 7.6.2. Señalización

48 49

Resultados del control ambiental

51

8.1. Comparación de resultados con el VLA-ED

52

8.2. Resumen de resultados

53

8.2.1. Exposición a cromo 8.2.2. Exposición a níquel 8.2.3. Exposición a manganeso 8.2.4. Exposición a molibdeno

9. 10.

11.

53 55 56 57

Conclusiones

59

Recomendaciones

63

10.1. Sobre la organización preventiva

63

10.2. Sobre los trabajadores afectados

64

10.3. Sobre los equipos de trabajo

64

10.4. Sobre ventilación y extracción localizada

65

10.5. Sobre la protección individual

65

10.6. Sobre la ropa de trabajo y los vestuarios

65

Bibliografía

67

Anexo

69

1

INTRODUCCIÓN El Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales (IAPRL) tiene, entre otras funciones, la de investigación, en materia de prevención de riesgos laborales, y la de ofrecer asesoramiento técnico, con el fin de reducir los riesgos a los que pueden estar expuestos los trabajadores del Principado de Asturias. Entre los proyectos contemplados en el Plan de Salud, Seguridad y Medio Ambiente Laboral del Principado de Asturias (2007-2010), se incluyó el titulado: “Estudio de la exposición a los humos generados en la soldadura de acero inoxidable”, enfocado a conocer las condiciones en las que los trabajadores desarrollan sus tareas, con especial atención a los contaminantes generados en dichas operaciones y, en particular, a la exposición al cromo y níquel presente en la composición de los humos El hecho de que ambos agentes químicos tengan la consideración de cancerígenos, hace que a los trabajos de soldadura del acero inoxidable les sea de plena aplicación lo dispuesto en el R.D. 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo.

El trabajo se ha centrado, básicamente, en cuantificar el grado de exposición de los trabajadores del sector metal, particularmente en talleres de fabricación y metalisterías, y en analizar la adecuación de los centros de trabajo y de las actividades preventivas desarrolladas en ellos, a la vigente normativa sobre la protección de los trabajadores frente a los riesgos laborales relacionados con la exposición a humos de soldadura del acero inoxidable, para, a la vista de los resultados obtenidos, orientar correctamente futuras acciones preventivas encaminadas a incrementar, cuanto sea posible, la protección de la seguridad y salud de los trabajadores potencialmente expuestos.

2. Humos de soldadura del acero inoxidable

2

HUMOS DE SOLDADURA DEL ACERO INOXIDABLE La soldadura es, en la actualidad y en cualquiera de sus variantes, el procedimiento de unión más ampliamente utilizado en la industria de la conformación metálica. Dependiendo de las condiciones en que se realicen, los trabajos de soldadura pueden suponer un serio riesgo para la salud de los trabajadores, debido a las sustancias tóxicas (humos metálicos y gases) que se desprenden en el proceso de soldeo. Existe una amplia variedad de procedimientos de soldadura, siendo los más utilizados aquellos que se basan en el arco eléctrico. Particularmente para los aceros inoxidables, se utilizan sobre todo dos técnicas de soldadura al arco denominadas: TIG (electrodo de tungsteno con gas inerte), y MIG (electrodo metálico con gas inerte), respectivamente.

2.1. LOS PROCEDIMIENTOS TIG y MIG. [1] Los aceros inoxidables, aquellos que están aleados con altos contenidos en cromo y níquel, se emplean en circunstancias en que es necesario disminuir la tendencia a la oxidación del acero al carbono. Su correcta soldadura no admite, en principio, cualquier tipo de técnica, siendo las dos ya mencionadas las más habituales.

Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales

7

El procedimiento TIG emplea una corriente de gas inerte para proteger la soldadura. El arco se hace saltar entre un electrodo de tungsteno y el material de base y, por una boquilla que rodea al electrodo, se hace llegar helio o argón de tal modo que envuelva completamente al arco y a la masa fundida de metal, eliminando así toda atmósfera oxidante. Como gas protector puede emplearse también nitrógeno, o mezclas argón-6% hidrógeno para el níquel y sus aleaciones, o argón-12% hidrógeno para los aceros inoxidables. Si se utiliza una atmósfera protectora de gas inerte y una varilla de metal de aportación, y se hace saltar el arco entre éste y el material a soldar, se tiene el proceso de soldadura MIG. El arco funde tanto el metal a unir como el procedente del electrodo, alimentando así la soldadura como metal de aportación. Los electrodos metálicos se consumen rápidamente por lo que, para no interrumpir la operación, se suele emplear un hilo continuo. En el procedimiento MIG, los gases protectores que se utilizan son el nitrógeno, mezclas de argón y helio, y mezclas de argón y CO2.

2.2. CONTAMINANTES QUÍMICOS.[1] y [2] La alta energía del arco eléctrico ocasiona un gran aumento de la temperatura en los materiales que se emplean en las técnicas de soldeo, lo que provoca una emisión de vapores metálicos y de fundentes, que contaminan el ambiente del soldador. El arco también puede producir gases tóxicos, como el ozono. Los humos de soldadura son una mezcla compleja de partículas y gases generados por el fuerte calentamiento de las sustancias presentes en el entorno del punto de soldadura: - Las propias piezas a soldar. - Los recubrimientos superficiales de dichas piezas. - Los materiales de aporte. - El aire en la zona de soldadura y su posible contaminación.

8

Estudio de la exposición a los humos generados en la soldadura d e acero inoxidable

2. Humos de soldadura del acero inoxidable

El acero inoxidable no suele llevar ningún recubrimiento superficial, y el material de aporte es muy parecido, en su composición, al material de base de las piezas. Por otra parte, los gases utilizados en las técnicas de soldadura del inoxidable no son tóxicos ni reactivos, con lo que el problema de generación de contaminantes en el aire se suele reducir a los óxidos de nitrógeno y al ozono, problema compartido con los tipos de soldadura habituales del acero al carbono. Sin embargo, procedentes del metal base de las piezas, son característicos del acero inoxidable los óxidos de hierro, manganeso, cromo, níquel, y en ocasiones molibdeno. Los diferentes procesos de soldadura tienen distintas tasas de generación de humos y gases, pero la contaminación del ambiente que respira el soldador puede causarle problemas respiratorios y otras enfermedades, si la concentración de agentes químicos resultase elevada o el tiempo de exposición fuese excesivo.

[1]

Fuente: “Riesgos higiénicos existentes en las operaciones de soldadura con arco eléctrico”. Instituto Cánta-

bro de Seguridad y Salud en el Trabajo. [2]

Fuente: “El soldador y los humos de soldadura”. Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales.


9

3. Efectos sobre la salud

3

EFECTOS SOBRE LA SALUD Los riesgos derivados de la exposición a los humos de soldadura están relacionados con la nocividad de los agentes químicos que se desprenden o se forman en los procesos de soldeo, y que pueden provocar daños diversos en la salud de los trabajadores. Las exposiciones continuadas a concentraciones moderadas de contaminantes, causan intoxicaciones crónicas que pueden dar lugar al desarrollo de enfermedades profesionales. En determinadas condiciones pueden suceder intoxicaciones agudas, por exposiciones a concentraciones muy elevadas de contaminantes, que den lugar a accidentes de trabajo. En ambos casos la gravedad puede variar desde leves trastornos pasajeros hasta patologías graves, incluso con desenlace fatal. Otros efectos menos ligados a la severidad de las exposiciones son los derivados de la presencia de agentes sensibilizantes, cancerígenos y teratógenos en los humos de la soldadura.

3.1.

TOXICOCINÉTICA.[1]

El humo se produce al condensarse los vapores, con la formación de partículas sólidas. Esas partículas son muy pequeñas y presentan tendencia a aglomerarse. Diversos estudios apuntan a que las partículas tienen, en su mayoría, diámetros de 1 µm o menores, lo que supone que el humo en este rango de dimensiones sea muy respirable.


11

El tamaño de la partícula de polvo determina el tipo de lesión. La mayoría de las partículas más gruesas, entre 50 µm y 100 µm, no pueden penetrar en las vías respiratorias, quedando retenidas en las fosas nasales y la garganta, y son eliminadas más tarde por el organismo, mediante la deglución, secreción nasal o la expectoración de las mismas. El resto de partículas más finas (< 50 µm) pueden penetrar hasta los pulmones y las inferiores a 5 µm lo hacen hasta los alvéolos pulmonares. En general, las partículas de un tamaño suficientemente pequeño flotan en el aire formando una suspensión de la que caen lentamente. Las de mayor tamaño sedimentan y el resto se mueven con el movimiento del gas que las soporta. En el depósito y retención pulmonar de estas partículas, intervienen factores tanto anatómicos y fisiológicos como de índole puramente física, como el tamaño de las partículas. Así las de diámetro superior a 30 µm carecen de importancia fisiológica, ya que rara vez penetran en las vías respiratorias. Tanto la composición química como la concentración total son de gran importancia para valorar el riesgo higiénico ocasionado por los humos de la soldadura. Se supone que la mayor parte de los metales están en forma de óxidos, pues las partículas metálicas se combinan rápidamente con el oxígeno en las proximidades del arco. El humo está formado por una mezcla compleja de contaminantes, y como tal ha de ser considerado cuando se evalúa su toxicidad.

3.2. TOXICIDAD.[1], [2] y [3] Los principales efectos perjudiciales derivados de la inhalación de humos de soldadura pueden clasificarse, de manera general, de la siguiente forma: a) Efectos agudos:

Se entienden como tales aquellos que sobrevienen por exposiciones a altas concentraciones de contaminantes, muy por encima de los VLA, durante periodos cortos de tiempo (una jornada laboral) y que provocan daños relacionados con el concepto de “accidente de trabajo”. Así algunos metales como el cadmio, cobre, berilio, cromo y níquel, tienen efecto irritante sobre los tejidos y pueden originar inflamaciones pulmonares (neumonitis) y acumulaciones de líquidos (edemas) de distinta gravedad según el metal y la severidad de la exposición.

12



Ciertos gases y vapores, como los ácidos clorhídrico y fluorhídrico, la acroleína, el ozono, el dióxido de nitrógeno y el fosgeno, provocan irritación de las mucosas de las vías respiratorias y del tejido pulmonar, y dependiendo de su concentración y del tiempo de exposición, pueden ocasionar desde leves irritaciones hasta edemas. Para algunas sustancias, como las cuatro primeras citadas en el párrafo anterior, su inmediata acción irritante sobre los ojos, la nariz y la garganta puede servir de alerta al trabajador, por el contrario en el caso del dióxido de nitrógeno, el fosgeno y los metales citados al principio, su inhalación puede pasar desapercibida y no manifestarse síntomas de intoxicación hasta pasadas 24 horas desde la exposición. El monóxido de carbono y el dióxido de nitrógeno modifican la composición de los glóbulos rojos de la sangre, con lo que su función oxigenadora de los tejidos queda temporalmente disminuida. Ello provoca jaquecas, aturdimiento y malestar crecientes conforme aumenta la dosis inhalada, pero en condiciones muy desfavorables podría llegarse a la inconsciencia o incluso a la asfixia química. Los humos metálicos pueden provocar la conocida como “fiebre de los metales” caracterizada por síntomas similares a los de la gripe, que se presentan durante la noche posterior a la exposición y que, normalmente, remiten sin dejar secuelas. b) Efectos crónicos:

Se consideran efectos crónicos aquellos que se presentan como consecuencia de largos periodos de exposición a concentraciones moderadas de contaminantes, a menudo por encima de los VLA. Son los más característicos de la inhalación de todo tipo de humos de soldadura y se manifiestan tras largos años de trabajo, incluso finalizada la vida laboral, debido a su progresiva acumulación en el organismo o al proceso de deterioro de los órganos afectados. Estos daños, de naturaleza y gravedad variables, se corresponden con el concepto de “enfermedad” profesional”. Las finas partículas que forman los humos pueden penetrar hasta la zona más profunda de los pulmones y a lo largo del tiempo llegar a causar daños de muy distinta relevancia, desde neumoconiosis benignas con leves sobrecargas pulmonares, como ocurre con el hierro, hasta graves fibrosis como las causadas por el berilio. La exposición continuada a gases y vapores irritantes puede conducir a patologías bronco pulmonares crónicas, como en el caso de los fluoruros. Ciertos metales, como el berilio, cadmio, cobre, manganeso y plomo, y gases como el monóxido de carbono y el monóxido de nitrógeno, se disuelven en la sangre pulmonar y se distribuyen por todo el organismo pudiendo llegar a originar deterioros progresivos en diferentes órganos.


13

c) Efectos sensibilizantes:

Se dice que una sustancia es sensibilizante cuando después de exposiciones, más o menos prolongadas o intensas a ella, se origina una hipersensibilidad de manera que posteriores exposiciones mínimas desencadenan reacciones fisiológicas adversas muy superiores a las que cabría esperar. Los humos de soldadura pueden contener alguno de estos agentes sensibilizantes capaces de actuar fundamentalmente sobre el sistema respiratorio, siendo el asma su manifestación más común. d) Efectos cancerígenos:

Dependiendo de los procesos, o por formar parte de los materiales que se están soldando, en los humos de soldadura pueden estar presentes sustancias potencialmente cancerígenas. Salvo en el caso del cromo, los estudios actuales no permiten definir con suficiente certeza el carácter cancerígeno de los humos de soldadura en general. Sin embargo, estudios epidemiológicos indican que los cánceres bronco pulmonares tienen una mayor incidencia, en una relación 14 a 10, entre los soldadores que entre la población general. e) Efectos teratógenos:

Se consideran sustancias teratógenos aquellas que pueden perjudicar el desarrollo del feto durante el embarazo. En los humos de soldadura presentan esta propiedad el plomo, el monóxido de carbono y, posiblemente, el cadmio y el pentóxido de vanadio. En la siguiente tabla se resumen las principales características toxicológicas de los metales presentes en el acero inoxidable, y que han sido objeto del presente estudio:

14



Intoxicación aguda

Intoxicación crónica

Gastrointestinal: dolor abdominal, vómitos, diarrea, hemorragia intestinal. Insuficiencia renal aguda por necrosis tubular. Insuficiencia hepática. Coagulopatía.

Cutánea: úlceras indoloras en dorso de las manos y dedos, dermatitis de contacto. Respiratoria: rinitis, úlcera, perforación del tabique nasal. Cancerígeno de pulmón y de senos nasales y paranasales.

Fiebre de los metales.

Respiratoria: rinitis, perforación del tabique nasal, sinusitis, anosmia. Cutánea: dermatitis de contacto. Cancerígeno de pulmón y de senos nasales y paranasales. Cáncer bronco-pulmonar o etmoidal.

Manganeso

Neumonitis química: neumonía mangánica.

Alteraciones respiratorias. Cuadro neuropsiquiatrico: “psicosis mangánica”, “síndrome parkinsoniano” con hipertonía y temblor de extremidades inferiores.

Molibdeno

Irritación del tracto respiratorio.

Dolores articulares. Daños hepáticos.

Cromo

Níquel

[1]

Fuente: “Riesgos higiénicos existentes en las operaciones de soldadura con arco eléctrico”. Instituto Cán-

tabro de Seguridad y Salud en el Trabajo. [2]

Fuente: “El soldador y los humos de soldadura”. Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales.

[3]

Fuente: “Sistemas de ventilación para el control de los riesgos higiénicos en los procesos de soldadura”.

Foment del Treball Nacional.


15

16


4. Criterios de valoración

4

4. CRITERIOS DE VALORACIÓN Puesto que en los humos procedentes de la soldadura de acero inoxidable se encuentran agentes cancerígenos, no debe perderse de vista que los efectos sobre la salud producidos por estos son de tipo estocástico, lo cual quiere decir que no existe una relación directa entre el nivel de exposición y los efectos característicos. No obstante, se admite la existencia de una relación entre la exposición y la probabilidad del efecto, lo que permite deducir que cuanto más baja sea la exposición a estos agentes menor será el riesgo. Para agentes cancerígenos, como es el caso de los compuestos de cromo y níquel, el mantener la exposición por debajo de un valor máximo determinado no permitirá evitar completamente el riesgo, aunque sí podrá limitarlo. Por ello, los límites de exposición adoptados para dichos agentes no deben entenderse como valores para garantizar la protección de la salud, sino unas referencias máximas para la adopción de las medidas de protección necesarias y el control del ambiente de los puestos de trabajo.

4.1. EVALUACIÓN DE LA EXPOSICIÓN AMBIENTAL Para los compuestos metálicos presentes en los humos de soldadura, ha de realizarse de acuerdo con el siguiente método de toma de muestras y análisis, del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (I.N.S.H.T.): - MTA/MA-025/A92 Determinación de metales y sus compuestos iónicos en aire Método de membrana / espectrofotometría de absorción atómica.


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En todos los casos, las tomas de muestra se realizan en la zona de respiración de los trabajadores, para posteriormente obtener las concentraciones de agentes químicos inhalados por aquellos. Las concentraciones así obtenidas se comparan con los valores de referencia fijados para los agentes contaminantes, con el fin de evaluar la exposición de los trabajadores. De dicha comparación, para los compuestos de cromo y los de níquel, se puede obtener lo siguiente: 1- La exposición supera el valor límite establecido:

En ese caso deben identificarse las razones por las que se sobrepasa dicho valor, adoptar las medidas apropiadas para corregir la situación y repetir la evaluación para constatar su eficacia. 2- La exposición está por debajo del valor límite:

La situación de riesgo puede considerarse tanto más controlada cuanto más por debajo del límite se encuentre el nivel de exposición. No obstante, siempre se deben prever las medidas de prevención que, dentro de lo razonable, hagan tender al ideal de exposición cero. Para los compuestos de manganeso y molibdeno, el criterio de comparación con el valor límite que se aplica es el habitual en el caso de agentes químicos en general, y viene explicado en la Guía Técnica de Agentes Químicos del I.N.S.H.T.

4.2. VALORES LÍMITE AMBIENTALES (VLA) Con anterioridad al año 2011 existía un valor límite ambiental para humos de soldadura, que fue retirado en el año 2012 al haberse quedado obsoleto por la actualización del VLA de los componentes. Debemos hacer notar que los compuestos de cromo hexavalente están clasificados como carcinógenos de categoría C1B, y que su óxido es soluble en agua. Los óxidos del resto de metales considerados en el presente estudio, son compuestos insolubles, excepto el óxido de molibdeno que es ligeramente soluble en agua. Los Límites de Exposición Profesional para Agentes Químicos en España 2015 , publicados por el I.N.S.H.T., establecen los siguientes valores límites ambientales de exposición diaria (VLA-ED):

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AGENTE QUIMICO

VLA-ED

VLA-EC

NOTAS

Cromo metal (2008)

2 mg/m3

no establecido

VLI

Compuestos inorgánicos de Cr(II) y de Cr (III) insolubles, como Cr.

2 mg/m3

no establecido

VLI

Cromo VI, compuestos inorgánicos solubles, excepto los expresamente indicados, como Cr.

0,05 mg/m3

no establecido

VLB, c, Sen, r

Cromo VI, compuestos inorgánicos insolubles, excepto los expresamente indicados, como Cr.

0,01 mg/m3

no establecido

c, Sen, r

1 mg/m3

no establecido

Sen, r

Níquel, compuestos inorgánicos insolubles, excepto los expresamente indicados, como Ni.

0,2 mg/m3

no establecido

c, Sen, r

Níquel, compuestos inorgánicos solubles, excepto los expresamente indicados, como Ni.

0,1 mg/m3

no establecido

c, Sen, r

Manganeso elemental

0,2 mg/m3

no establecido

Compuestos inorgánicos de Manganeso, como Mn.

0,2 mg/m3

no establecido

Molibdeno elemental: fracción inhalable (2009).

10 mg/m3

no establecido

c

Molibdeno elemental: fracción respirable (2009).

3 mg/m3

no establecido

d

Compuestos insolubles de Molibdeno, como Mo. Fracción inhalable (2009).

10 mg/m3

no establecido

c

Compuestos insolubles de Molibdeno, como Mo. Fracción respirable (2009).

3 mg/m3

no establecido

c,d

Compuestos solubles de Molibdeno, como Mo. Fracción respirable (2009).

0,5 mg/m3

no establecido

c,d

Níquel metal


19

NOTAS: (VLI)

Agente químico para el que la U.E. estableció en su día un valor límite indicativo. Todos estos agentes químicos figuran al menos en una de las directivas de valores límite indicativos publicados hasta ahora. Los estados miembros disponen de un tiempo fijado en dichas directivas para su transposición a los valores límites de cada pais miembro. Una vez adoptados, estos valores tienen la misma validez q ue el resto de los valores adoptados por el país.

(VLB)

Agente que tiene Valor Límite Biológico específico.

(c)

Los términos “soluble” e “insoluble” se entienden con referencia al agua.

(d)

Véase UNE EN 481: Atmósferas en los puestos de trabajo. Definición de las fracciones por el tamaño de las partículas para la medición de aerosoles.

(Sen)

Sensibilizante.

(r)

Esta sustancia tiene establecidas restricciones a la fabricación, la comercialización o el uso en los términos especificados en el “Reglamento (CE) nº 1907/2006 sobre Registro, Evaluación, Autorización y Restricción de sustancias y preparados químicos” (REACH) de 18 de diciembre de 2006 (DOUE L 369 de 30 de diciembre de 2006). Las restricciones de una sustancia pueden aplicarse a todos los usos o sólo a usos concretos. El anexo XVII del Reglamento REACH contiene la lista de todas las sustancias restringidas y especifica los usos que se han restringido.

Los compuestos de cromo (VI) tienen establecido un Valor Límite Biológico (VLB) de acuerdo con lo siguiente: AGENTE QUIMICO

Cromo (VI), humos solubles en agua (2008)

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INDICADOR BIOLÓGICO

VLB

MOMENTO DE MUESTREO

Cromo total en orina

10 µg/l

Principio y final de la jornada laboral (4)

Cromo total en orina

25 µg/l

Final de la semana laboral (1)

(1)

Significa después de cuatro o cinco días consecutivos de trabajo con exposición, lo antes posible después del final de la última jornada, dado que los indicadores biológicos se eliminan con vidas medias superiores a las cinco horas. Estos indicadores se acumulan en el organismo durante la semana de trabajo, por lo tanto el momento es crítico en relación a exposiciones anteriores.

(4)

El valor se refiere a la diferencia de los resultados de las muestras tomadas al final y al principio de la jornada laboral.



En general, los VLB representan los niveles más probables de los Indicadores Biológicos en trabajadores sanos sometidos a una exposición global a agentes químicos, equivalente, en términos de dosis absorbida, a una exposición exclusivamente por inhalación del orden del VLA-ED. Los VLB no están concebidos para usarse como medida de los efectos adversos ni para el diagnóstico de las enfermedades profesionales. El control biológico debe considerarse complementario del control ambiental y, por tanto, ha de llevarse a cabo cuando ofrezca ventajas sobre el uso independiente de este último. El control biológico puede usarse para completar la valoración ambiental, para comprobar la eficacia de los equipos de protección individual o para detectar una posible absorción dérmica y/o gastrointestinal.


21

22


5. Metodología

5

METODOLOGÍA El estudio, cuyos resultados finales se recogen en el presente documento, se había iniciado con anterioridad al año 2009, en el marco de una encuesta general que tenía por objeto conocer, dentro de las empresas del sector del metal, el número de ellas que hacían trabajos de soldadura sobre acero inoxidable y en que cuantía (horas totales de exposición/por año y horas de exposición/trabajador por año). Teniendo como punto de partida ese listado de empresas que soldaban inoxidable, se seleccionó una muestra representativa que fue objeto de estudio más detallado, en una segunda etapa que arrancó en el año 2010, durante la cual se hizo el trabajo de obtención de datos. Dicha etapa se desarrolló entre abril de 2010 y octubre de 2011 y, además de la recogida de muestras, se recopiló, mediante el uso de cuestionarios, toda aquella información considerada relevante para el estudio que se pretendía. Siempre sin perder de vista la posterior explotación global de los resultados, en cada empresa se realizó un análisis de las condiciones observadas, con la emisión de un informe particularizado para cada centro de trabajo, donde se recogían los resultados obtenidos así como, en su caso, las deficiencias encontradas. Dichos informes incluían indicaciones sobre recomendaciones preventivas y posibles medidas correctoras, al ob jeto de que pudieran ser utilizados por las empresas para la mejora de las condiciones de trabajo de sus empleados.


23

5.1. CRITERIOS DE SELECCIÓN Y TAMAÑO DE LA MUESTRA El sector de los transformados metálicos incluye una serie de actividades tales como la carpintería metálica, la construcción y reparación naval, la construcción metálica y calderería, y la metalistería, en las que ocasionalmente o como trabajo principal se puede encontrar la soldadura de aceros inoxidables. Dado que muchas de las empresas del sector metal solo se utiliza acero al carbono, la selección del universo muestral hacía imprescindible un importante filtrado previo sobre la información proporcionada por la Base de Datos de la Seguridad Social para Asturias. Por medio de la encuesta anteriormente aludida, se determinó en 147 el número de empresas, de las actividades enumeradas con anterioridad, en las que la soldadura de acero inoxidable tenía una especial relevancia. Su distribución por horas de exposición resultó ser la siguiente: Tabla I. Distribución del universo muestral por horas de exposición.

Exposición

Nº de empresas

% sobre universo

< 100 h. totales/año

27

18,4

100 a 300 h. totales/año

36

24,5

> 300 h. totales/año y < 150 h./trab. año

7

4,7

> 300 h. totales/año y > 150 h./trab. año

77

52,4

147

100

Suma:

24


5. Metodología

Atendiendo al tamaño de las empresas, la distribución sería la que se puede ver en la tabla II: Tabla II. Distribución del universo muestral por tamaño de las empresas.

Plantilla

Nº de empresas

% de la muestra

1 a 5 trabajadores

22

15

6 a 10 trabajadores

32

21,7

11 a 25 trabajadores

41

28


27

18,3


13

8,8


3

2

> 150 trabajadores

9

6,2

147

100

Suma:

Organizando el universo muestral de manera que se relacione el número de expuestos a humos de soldadura de acero inoxidable en función del número total de trabajadores de la empresa, se obtiene el resultado que se muestra en la tabla III. Tabla III. Distribución del número de expuestos según tamaño de la empresa.

Plantilla

1 a 3 exp.

4 a 8 exp.

9 a 20 exp.

> 20 exp.

1 a 5 trabajadores

22

0

--

--

6 a 10 trabajadores

22

10

--

--


18

19

4

--


13

9

4

0


3

7

3

1


1

1

1

0

> 150 trabajadores

1

2

3

3


25

En consonancia con la realidad del sector, se deduce de la anterior clasificación que los trabajos con acero inoxidable ocupan a pocas personas en relación al total de trabajadores del sector del metal. Las empresas de menor tamaño especializadas en este tipo de soldadura suelen emplear a la práctica totalidad de la plantilla, mientras que en las empresas más grandes, estos trabajos son desarrollados por un pequeño número de soldadores especializados. Hemos constatado también que se produce una importante variabilidad en cuanto a carga de trabajo, pues salvo determinadas metalisterías, la soldadura de acero inoxidable no es habitual en trabajos de calderería y montaje metálico en general. Para la confección de la muestra de empresas, se partió de las 147 ya mencionadas, teniendo en cuenta que la situación socioeconómica que se vivía en los años 2010 – 2011 había hecho desaparecer varias de ellas, ocasionado la reducción de plantillas y rebajado notablemente la carga de trabajo. Finalmente se hizo el muestreo sobre 71 empresas, lo que ha supuesto más del 48% de las de partida; y se estratificó de la siguiente forma: Tabla IV. Distribución de la muestra.

Plantilla

Nº de empresas

% de la muestra

1 a 5 trabajadores

15

21,1

6 a 10 trabajadores

12

16,9


19

26,8


12

16,9


7

9,9


2

2,8

> 150 trabajadores

4

5,6

71

100

Suma:

Las empresas fueron elegidas teniendo en cuenta que estuviesen ubicadas por toda la geografía del Principado de Asturias

26


5. Metodología

5.2. DESARROLLO EXPERIMENTAL Tuvo lugar mediante los siguientes pasos: a) Contacto con las empresas seleccionadas, solicitando su colaboración e informándoles de las pretensiones del estudio. b) Visita orientada a la valoración cualitativa de la empresa, con comprobación visual de lugares de trabajo y entrevista semiestructurada por medio de una lista de chequeo (ver Anexo I). En el transcurso de esta, se evaluaban distintos parámetros preestablecidos y se analizaba la documentación preventiva. La información recopilada era volcada en una base de datos confeccionada al efecto, a la vez que parte de ella servía para establecer las estrategias para posteriores tomas de muestras. c) Realización de uno o más muestreos de humos de soldadura, en trabajos sobre acero inoxidable, con posterior volcado de resultados a la base de datos. d) Estudio y explotación de resultados, que da lugar a la presente Memoria.

5.3. MATERIALES Y MÉTODOS La toma de muestras y análisis se llevó a cabo de acuerdo con el método MTA/MA-014/ A88 (1), del I.N.S.H.T., puesto que en las fechas de puesta en marcha del proyecto aún existía un Valor Límite Ambiental para los “humos de soldadura”, y era el indicado para ello, además de que los captadores eran compatibles con el posterior análisis de metales mediante el método MTA-MA-025/A92. Se utilizaron bombas portátiles de medio caudal, ajustadas a 1,5 l/min, y los elementos de captación fueron filtros de membrana de acetato de celulosa, de 0,8 µm de tamaño de poro, montados sobre soportes de celulosa de 37 mm, en cassettes de poliestireno de dos cuerpos. La determinación de la exposición se llevó a cabo con la estrategia adecuada para que los resultados fuesen representativos de la exposición del trabajador durante las operaciones que realiza habitualmente durante su jornada y en las condiciones habituales de trabajo. Los muestreos fueron principalmente personales, en la zona de respiración de los trabajadores. Puntualmente, en operaciones en las que se estimó relevante, se realizaron también captaciones de tipo ambiental con el fin de valorar la dispersión de la materia contaminante. El análisis de las muestras, con sus respectivos blancos, tuvo lugar en el Laboratorio del Área de Higiene Industrial del I.A.P.R.L.


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6. Datos recopilados

6

DATOS RECOPILADOS Mediante el cuestionario o lista de chequeo, ya mencionada, se pretendió recopilar un conjunto de datos que complementasen a la información puramente cuantitativa, obtenida a través de la toma de muestras, a la vez que sirviese de punto de partida para la estrategia de muestreo, a modo de “encuesta higiénica” . La clasificación de esta información se orientó a obtener un conocimiento global de la realidad del sector en estudio, en relación con el riesgo particular que se valoraba, teniendo en cuenta la normativa de aplicación y, especialmente las disposiciones particulares exigidas por el R.D. de agentes cancerígenos. Se ha recabado información sobre diversos aspectos preventivos, desde los directamente organizativos hasta los de implantación de medidas de protección, pasando por la formación de los trabajadores, y sin olvidar el conocimiento de las tareas y procedimientos de trabajo con las particularidades propias de cada empresa. La lista de chequeo se organizó en los siguientes apartados: 1- Datos de la empresa: recoge la razón y domicilio social, datos de contacto, plantilla y organización preventiva, tipos de soldadura y carga de trabajo. 2- Valoración documental: para los aspectos clave de la evaluación de riesgos y planificación preventiva, así como de las acciones formativas y vigilancia de la salud. 3- Protección colectiva: en el que se valora el sistema de extracción localizada, la limpieza de los lugares de trabajo, la gestión de los residuos, y el estado de las instalaciones de aseo.


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4- Protección individual: para valorar la utilización de protecciones respiratorias adecuadas, así como de ropa de trabajo y de protección. 5- Procedimientos de trabajo y señalización: donde se da cuenta de si existen, su grado de implantación y la señalización en relación a las prohibiciones de fumar, comer y beber en los lugares con riesgo de exposición. 6- Instalaciones de aseo: recoge la información relativa a las mismas en consonancia con las obligaciones establecidas por el R.D. de agentes cancerígenos. Adicionalmente, se incluyeron un apartado sobre previsión de poder efectuar mediciones en la empresa, y de notas, para efectuar cuantas anotaciones y consideraciones sobre cuestiones puntuales de especial interés se estimasen oportunas durante el transcurso de la encuesta. Se comentan seguidamente algunas particularidades del sector, que resultan importantes para enfocar y aclarar la explotación de los resultados, y se recogen también algunas anotaciones sobre máquinas y elementos de extracción localizada asociados a las mismas.

6.1. PARTICULARIDADES DE LA SOLDADURA DEL ACERO INOXIDABLE Los aceros inoxidables no suelen utilizarse para grandes construcciones, salvo en el caso de aplicaciones especiales, tales como depósitos resistentes a agentes químicos corrosivos, o en las instalaciones destinadas al procesado de alimentos, bebidas, medicinas, etc. Por otra parte, el propio aspecto natural de estos aceros junto con su resistencia a la corrosión, los hace muy adecuados para la fabricación de elementos decorativos, o para su uso en ambientes marinos. Las grandes piezas de calderería fabricadas en acero inoxidable, exigen técnicas de soldeo tales como la de electrodo revestido, o la MIG, pues permiten realizar cordones de soldadura más gruesos y un rápido avance de las costuras. Como contrapartida, esas técnicas producen un mayor volumen de humos metálicos. En trabajos de metalistería decorativa, o en la fabricación de elementos constructivos de menor tamaño, como por ejemplo: barandillas, bandejas de chapa fina, conducciones, etc., el método de soldeo preferido es el TIG.

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6. Datos recopilados

Dicha técnica deja costuras mucho más finas, aptas para un posterior acabado, ofrece la posibilidad de alcanzar una mayor precisión en los trabajos y genera menos cantidad de humos, a costa de un avance más lento en el trabajo.

6.2. EXTRACCIONES LOCALIZADAS Todos los procedimientos de soldeo empleados con el acero inoxidable, a excepción del de arco sumergido, producen la emisión de humos metálicos al ambiente, lo que hace necesario instalar algún tipo de captación. La técnica MIG, al igual que la MAG (si bien ésta no es apenas de aplicación en aceros inoxidables), utiliza antorchas dotadas normalmente de un sistema de extracción en la propia boquilla, que suele resultar razonablemente eficaz, aunque siempre es recomendable complementarlo con algún tipo de extracción localizada, instalada de tal manera que no interfiera con la atmósfera protectora proporcionada por el gas. Por sus características de velocidad de avance y por el tipo de uniones que se realizan con ella, la soldadura con electrodo revestido exige la utilización de procedimientos de extracción localizada, que habitualmente suelen ser de tipo portátil. Su eficacia sólo queda garantizada si el soldador se ocupa de posicionar correctamente la boca de captación a medida que avanza la costura. La soldadura TIG, por su parte, también requiere de extracción, pero su uso en trabajos que a veces se realizan en una mesa de soldeo, permiten aplicar también otros métodos de extracción de humos tales como las campanas o las rendijas.


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7. Análisis de datos

7

ANÁLISIS DE DATOS Para la recogida de datos se utilizó el cuestionario elaborado al efecto, que es el que se muestra en el ANEXO I. Se contemplaban apartados específicamente orientados a profundizar en el conocimiento del sector desde el punto de vista de las instalaciones, los procesos, y los procedimientos de soldadura, así como otros encaminados a recopilar los datos relativos a los aspectos preventivos de las empresas (evaluación de riesgos, vigilancia de la salud, formación e información de los trabajadores, equipos de protección, etc.). Se comentan seguidamente los resultados que se deducen del análisis de dicha información, reunida mediante entrevistas a los responsables de las empresas visitadas así como a través de la documentación preventiva aportada.

7.1. PLANTILLA La investigación se realizó en las actividades de montajes y calderería que, en el momento de su desarrollo, contaba con unas 147 empresas en nuestra región, que trabajasen con aceros inoxidables y cumpliesen los criterios ya expuestos en el apartado 5.1. de esta memoria.


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De ellas, se eligió una muestra de 71 empresas, con la siguiente distribución en cuanto al número de trabajadores: Gráfica I: Distribución por número de trabajadores

6% 3% 21%

10%

17%

17%

1 a 5 trabajadores 6 a 10 trabajadores 11 a 25 trabajadores 26 a 50 trabajadores 51 a 100 trabajadores 101 a 150 trabajadores más 150 trabajadores

26%

El estudio abarcó a 499 trabajadores directamente afectados por el problema de exposición a humos de soldadura de acero inoxidable, de un total de 4597 trabajadores, lo que representa un 11% del total.

7.2. ORGANIZACIÓN PREVENTIVA 7.2.1.

Modalidad de organización preventiva

La organización preventiva predominante es el Servicio de Prevención Ajeno, seguido del Servicio de Prevención Propio, en el 6% de los casos. También ha existido un testimonial 1% de empresas de carácter familiar, en las que la prevención estaba asumida por el propio empresario.

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Gráfica II: Modalidad de organización preventiva

6% 1% 1% 1%

91%

Sin organización preventiva Asumida por el empresario Trab. Designados + SPA SPA SPP + SPA

Se encontró un residual 1% de empresas que carecían de cualquier tipo de organización preventiva.

7.2.2. Delegados de Prevención.

Las empresas con más de cinco trabajadores tienen derecho a designar estos representantes especializados, con funciones específicas en materia de prevención de riesgos laborales, elegidos, como regla general, por y entre los representantes del personal. En la siguiente gráfica se muestran los resultados hallados con respecto a esta figura preventiva. Entre las 71 empresas encuestadas, no hemos encontrado ninguna que tuviese designado Delegado de Prevención, dentro de su organización preventiva, estando por debajo del mínimo de los 5 trabajadores en plantilla. De las de más de 5 trabajadores, nos encontramos con un total de 36 empresas en las que no habían sido elegidos los Delegados de Prevención.


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Gráfica III: Delegados de prevención

Sí existe No existe

51%

49%

7.2.3. Evaluación de riesgos y planificación preventiva

Este requisito obligatorio para todas las empresas con trabajadores por cuenta ajena, se cumplía en el 99% de las sometidas a estudio. Gráfica IV: Evaluación de riesgos y planificación de la prevención

1%

99%

Existe No existe

Mientras que sólo el 1% de la muestra no disponía de ninguna documentación preventiva.

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7.2.4. Identificación del riesgo por exposición a cromo y níquel

Algo menos de un tercio de las empresas tenían identificado este riesgo en su evaluación, mientras que no lo estaba en el 69% de las mismas. Gráfica V: Riesgos por humos de soldadura de inoxidable

31% Identifican riesgo No lo identifican 69%

La evaluación de riesgos derivados de la exposición por inhalación a estos agentes químicos, requiere obtener datos cuantitativos para valorar el grado de las exposiciones de los trabajadores. Gráfica VI: Evaluación higiénica ambiental

35% Existe No existe

65%

En sólo el 35% de los casos estudiados se habían realizado mediciones. La evaluación ambiental es necesaria salvo que el empresario demuestre claramente, por otros medios de valoración, que se ha logrado una adecuada prevención y protección


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frente al riesgo. No obstante la Guía Técnica de Agentes Químicos, del INSHT, recomienda que en el caso de cancerígenos, mutágenos, tóxicos para la reproducción y sensibilizantes, se realicen siempre mediciones Siempre debe documentarse y, si circunstancialmente no se considerase necesario efectuar mediciones, la evaluación debería incluir las razones en que se fundamentan para ello. En ninguno de los casos encontrados que carecían de la evaluación ambiental se había hecho un razonamiento justificativo sobre la ausencia de dichas mediciones.

7.3. TRABAJADORES AFECTADOS 7.3.1.

Listado de trabajadores

El preceptivo listado de trabajadores expuestos a humos de cromo y níquel (cancerígenos), se encontraba elaborado en las tres cuartas partes de la muestra. Gráfica VII: Listado de trabajadores expuestos a humos de soldadura de inoxidable

25%

Elaborado No elaborado 75%

Es este un requisito que viene recogido en el artículo 9 del R.D. 665/1997, de 12 de mayo, sobre agentes cancerígenos. 7.3.2. Formación e información de los trabajadores

Los resultados obtenidos, representados en la gráfica VIII, indican que en la práctica totalidad de las empresas estudiadas, los trabajadores habían recibido formación y estaban informados de los riesgos para la salud y seguridad derivados de su trabajo, mientras que sólo en un 1% de los casos no se había cumplido con dicha obligación.

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Gráfica VIII: Formación e información de los trabajadores

1%

Existe No existe

99%

Por otra parte, de entre aquellas que habían proporcionado formación e información a sus trabajadores, en sólo un 30% de ellas había sido específica de los riesgos a los que se ven expuestos, incluyendo el riesgo por humos de soldadura de acero inoxidable. Gráfica IX: Tipo de formación

70%

Formación específica Formación general 30%

En el resto de los casos se encontró que la formación e información proporcionada tenía un carácter totalmente general, contraviniendo así lo dispuesto en los artículos 18 y 19 de la Ley 31/1995, de 8 de noviembre de prevención de riesgos laborales.


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7.3.3. Vigilancia de la salud

Se llevaba a cabo en la totalidad de las empresas analizadas. Gráfica X: Vigilancia de la salud

0%

Existe No existe

100%

Pero esta resultó ser específica de los riesgos asociados al puesto de trabajo solamente en un 20% de los casos. Gráfica XI: Especificidad de los reconocimientos médicos

20%

Específica No específica

80%

La vigilancia de la salud debe ser específica y periódica para los trabajadores, en función de los riesgos inherentes a su puesto de trabajo. Dicha vigilancia debería realizarse tanto en función de los riesgos derivados de los productos químicos a los que están expuestos, incluido el prodecente del cromo y níquel, como de las características personales de cada trabajador.

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7.4. TÉCNICAS DE SOLDADURA Y PROCEDIMIENTOS DE TRABAJO Se comentan en este apartado los resultados sobre aspectos del proceso productivo, y del equipamiento, que están directamente relacionados con la gestión del riesgo de exposición a humos de soldadura de acero inoxidable.

7.4.1.

Técnicas de soldadura.

La gráfica XII muestra la distribución según el tipo de soldadura que se utiliza en las empresas estudiadas. La mayoría de ellas combinan más de una técnica de soldeo. La mayor carga de trabajo en soldadura de inoxidable, en el momento de realizar el estudio, provenía de empresas de metalistería que realizan trabajos finos para los que la técnica apropiada es la soldadura TIG. Gráfica XII: Tipos de soldadura

7%

11% 13%

Manual

13%

Semiautomática (MIG-MAG) TIG Manual + Semi. 30%

15%

Manual + TIG Semi. + TIG Manual +Semi. + TIG Manual +Semi. + TIG + Automática

8% 3%

De aquí que en la gráfica se destaque un 30% de las muestreadas como usuarias exclusivas de este tipo de soldadura. Las seguirían en orden de importancia un 15% de empresas que combinan dicha técnica con la de la soldadura semiautomática; un 13% de ellas que sólo utilizarían semiautomática, y otro 13% que usarían las tres mencionadas. Lo restante de la distribución corresponde a empresas que realizan grandes trabajos de calderería en materiales inoxidables.


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7.4.2. Procedimientos de trabajo

En la gráfica XIII se representa la distribución de la muestra en función de si tenían establecidos procedimientos de trabajo específicos para la soldadura del acero inoxidable. Gráfica XIII: Procedimientos específicos de trabajo

Establecido para soldadura de INOX No establecido

86% 14%

Nos encontramos con que solamente en un 14% de las empresas se encontraban implantados tales procedimientos.

7.4.3. Sistemas de extracción de humos

La gráfica XVI muestra los tipos de ventilación encontrados en el estudio. Gráfica XIV: Sistemas de extracción de humos

9%

47% General natural

33%

General forzada General natural + Extracción localizada General forzada + Extracción localizada

11%

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Casi la mitad de las empresas estudiadas no contaban más que con ventilación general natural, lo que sumado al 11% adicional que contaba con ventilación general forzada, arro ja un preocupante 58% de empresas que no utilizaban sistemas de extracción localizada. Siendo la extracción localizada el sistema de protección colectiva más indicado para los trabajos de soldadura, sólo disponían de ella un 42% de las empresas, encontrándose en un 9% combinada, además, con ventilación general forzada.

7.5. EQUIPOS DE PROTECCIÓN, VESTUARIOS Y ROPA DE TRABAJO Se dedica este apartado a analizar unas cuestiones que vienen expresamente reguladas en la normativa de aplicación sobre agentes cancerígenos, y cuya observancia tiene un especial interés en el control del riesgo de exposición a humos de soldadura de acero inoxidable. 7.5.1.

Equipos de protección individual

El R.D. 665/1997, de 12 de mayo, sobre agentes cancerígenos, prescribe medidas individuales de protección cuando la exposición no pueda evitarse por otros medios. Aún siendo el método más eficaz, si se utiliza correctamente, para la eliminación de los humos de soldadura en la zona de respiración de los trabajadores, las extracciones localizadas disminuyen el riesgo de exposición pero no lo evitan completamente. La gráfica XIX muestra que el tipo de equipo de protección personal respiratoria encontrado más frecuentemente en las empresas ha sido la autofiltrante. Todos los casos en que se utilizaba equipo autofiltrante se trataba de mascarillas con eficacia FFP1, alguna FFP2, y más raramente semimáscara con filtro polivalente. Gráfica XV: Equipo de protección personal respitaroria

13% Ninguno 13%

Mascarillas Cascos ventilados Mascarillas y cascos

66%

8%


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Destaca un sensible 8% de casos en que no disponían de ningún tipo de equipo protección personal (EPI) respiratoria. También cabe señalar la utilización de cascos autoventilados en un 26% de las empresas combinándolo, además, en la mitad de ellas con el uso de protección personal autofiltrante. Aún disponiendo de EPI respiratorio, se ha detectado un 12% de empresas en las que su uso quedaba a criterio del trabajador. Gráfica XVI: Uso de la protección personal respiratoria

12%

Usan siempre Usan según tarea

88%

No obstante, en la mayoría de las empresas el uso de las protecciones personales respiratorias se encontraba prescrito obligatoriamente.

7.5.2. Vestuarios

El R.D. 665/1997, de 12 de mayo, sobre agentes cancerígenos, establece en el apartado 1c del artículo 6, entre otras medidas de higiene personal y protección individual, el disponer de lugares separados para guardar de manera separada las ropas de trabajo o de protección y las ropas de vestir , lo que en la práctica supone, como mínimo, disponer de

dobles taquillas. Adicionalmente, sería una buena práctica preventiva que los vestuarios contasen con algún tipo de compartimentación con el fin de separar las zonas de aseo de las de vestuario propiamente dicho. Todas las empresas estudiadas disponían de algún tipo de local con función de vestuario y aseo. Se han considerado como vestuarios compartimentados aquellos en los que la zona de taquillas y la de aseo eran independientes o estaban dotados de suficiente separación, resultando susceptibles de individualización con razonable facilidad.

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Como se muestra en la gráfica XVII, una quinta parte de las empresas visitadas cumplían las condiciones para considerar compartimentados sus locales de aseo; el 80% restante no. Gráfica XVII: Vestuarios

20% Compartimentados No compartimentados 80%

Respecto a las taquillas, nos hemos encontrado unos resultados muy similares, y no relacionados con la compartimentación de los vestuarios. Así, ha habido empresas que disponían de ambas medidas, otras con dobles taquillas pero vestuarios no compartimentados, algunas con los locales de aseo compartimentados pero dotados de taquilla única, y finalmente unas pocas sin compartimentación y con una única taquilla. Los resultados respecto a la dotación de las taquillas son los que figuran en la gráfica XVIII. Gráfica XVIII: Taquillas

37%

Taquilla única 63%

Doble taquilla


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El 63% de las empresas objeto de estudio disponían de dobles taquillas, frente al 37% que tenían una única taquilla por cada trabajador. Si consideramos la limpieza de los vestuarios y aseos, respecto a la periodicidad con que se acometía, tenemos los resultados que se cuantifican en la gráfica XIX. Gráfica XIX: Limpieza de los vestuarios

13% 32% Diario Dos veces por semana Tres veces por semana

20%

Semanal

35%

Un 35% realizaba la limpieza a diario; una cifra similar (32%) la realizaba semanalmente. El 33% restante limpiaba estos locales entre dos y tres veces a la semana. Y en cuanto a los métodos de limpieza empleados, la gráfica XX muestra la distribución de las distintas posibilidades en la muestra. Gráfica XX: Método de limpieza

6% 15%

Fregado Aspiración y fregado Barrido y fregado Aspiración, barrido y fregado

11% 68%

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Los métodos de limpieza óptimos son aquellos que se realizan humedeciendo las superficies a limpiar, como en el caso del fregado que se utilizaba como procedimiento de limpieza único en un 68% de la muestra. Combinado el fregado con el otro método más adecuado que es la aspiración, se encontró en un 11% de las empresas. El barrido, que es el procedimiento de limpieza más contraindicado se utilizaba en un 15% de los casos combinado con el fregado y en el 6% restante, junto con aspiración y fregado.

7.5.3. Ropa de trabajo

El citado R.D. 665/1997, dicta también entre las medidas de higiene personal y protección individual, en el apartado 1b del artículo 6: proveer a los trabajadores de ropa de protección apropiada o de otro tipo de ropa especial adecuada.

Gráfica XXI: Ropa de trabajo

6% 8% Específica Desechable No específica

86%

En un 86% de las analizadas se venía usando únicamente la ropa de trabajo proporcionada por la empresa, específica de los trabajos de soldadura: buzos ignífugos, capuces, delantales de cuero, guantes y manguitos. En un 8% se utilizaban prendas desechables para determinados tipos de tareas muy concretas. Finalmente, se encontró un 6% del total de la muestra que declaró utilizar prendas de trabajo no específicas. En lo tocante a la obligación de que el lavado de la ropa de trabajo se haga por cuenta de la empresa y la prohibición expresa de que los trabajadores se la lleven a sus domicilios a tales efectos (artículo 6.3 del R.D. 665/1997), los resultados encontrados son los que se recogen en la gráfica XXII siguiente.


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Gráfica XXII: Lavado de la ropa de trabajo

Trabajador A cargo de la empresa

92% 8%

Sólo en el 8% de los casos la empresa se hacía cargo del lavado de la ropa de trabajo.

7.6. PROHIBICIONES Y SU SEÑALIZACIÓN Finalmente, se muestran los datos obtenidos respecto a la prohibición de comer, beber y fumar en las zonas de trabajo donde exista riesgo de exposición, así como la existencia de señalización a este respecto. 7.6.1. Prohibiciones

El R.D. 665/1997, de 12 de mayo, prohíbe expresamente comer, beber y fumar en las zonas de trabajo donde exista riesgo de exposición, obligando al empresario a adoptar las medidas necesarias para que se cumpla. En la totalidad de las empresas visitadas, existían locales adecuados para comer y beber, sin embargo respecto a la prohibición de fumar se encontraron diversas situaciones: desde empresas en las que no se había establecido tal prohibición, hasta aquellas en las que existía y se cumplía, pasando por las que la tenían establecida pero se advertían claras evidencias de su incumplimiento. Habida cuenta de que la vía de entrada de los agentes químicos procedentes de los humos de soldadura es fundamentalmente la inhalatoria, la prohibición de fumar en los lugares de trabajo se hace especialmente importante. En la gráfica XXIII se muestran los resultados obtenidos respecto a esta prohibición en el conjunto de empresas objeto del presente estudio, donde se puede ver que el 93% de ellas, independientemente de su cumplimiento formal o no, prohibían fumar en los lugares de trabajo.

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Gráfica XXIII: Prohibición de fumar

7% Establecida prohibición No establecida

93%

7.6.2. Señalización

Sólo se ha tenido en cuenta la referente a la antedicha prohibición Gráfica XXIV: Señalización de prohibido fumar

34%

Señalizada prohibición No señalizada 66%

Casi dos terceras partes de las empresas estudiadas tenían señalizada la prohibición de fumar. Por el contrario, en ninguna de las empresas de la muestra se ha encontrado señalización alguna respecto a la prohibición de comer y beber en las zonas con riesgo de exposición.


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8. Resultados del control ambiental

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RESULTADOS DEL CONTROL AMBIENTAL Para evaluar evaluar la exposición a los metales, objeto de interés, contenidos en los humos de soldadura, se ha aplicado el criterio basado en la relación de la concentración medida con el valor límite de exposición diaria (VLA-ED). (VLA-ED). No obstante no debe perderse de vista el hecho de que, con agentes cancerígenos, debe tenderse hacia la “exposición cero”, y que mantener la exposición por debajo de un valor máximo determinado no permite evitar completamente el riesgo, aunque sí limitarlo. Los resultados se han obtenido tomando muestras en la zona de respiración de los trabajadores, mientras realizaban tareas propias de su puesto de trabajo, en condiciones representativas del mismo. Se han adquirido muestras atendiendo a lo establecido en la Guía Técnica para la evaluación y prevención de los riesgos relacionados con los agentes químicos presentes en los lugares de trabajo. En cada empresa seleccionada se realizaron tomas de muestras en días aleatorios. Cada jornada de muestreo comprendió las siguientes siguientes mediciones: - Muestras personales a entre 1 y 3 trabajadores, con duraciones comprendidas entre los 6 y los 160 minutos, dependiendo del tipo de tareas realizadas por el trabajador. - Al menos un blanco por jornada. - Muestras ambientales para conocer el grado de dispersión de los contaminantes en el ambiente de trabajo. Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales

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Las condiciones que se deben cumplir, y en nuestro caso se han cumplido, para poder aplicar el procedimiento son las siguientes: 1- La concentraci concentración ón promedio de la jornada de trabajo debe ser representativa de la exposición laboral. 2- Las condiciones de operación del trabajo se han de repetir regularmente y los factores que den lugar a las emisiones deben de ser específicas del proceso o instalación: a largo plazo las tareas y el proceso no cambian de forma significativa entre jornadas. 3- Las condiciones de operación que se puedan diferenciar claramente se evaluarán por separado.

8.1. COMPARA COMPARACIÓN CIÓN DE RESUL RESULT TADOS CON EL VLA-ED Por tratarse de cancerígenos, los límites de exposición adoptados para el cromo hexavalente (0,05 mg/m3) y para compuestos inorgánicos insolubles de níquel (0,2 mg/m3), no pueden entenderse como referencias para garantizar garantizar la protección de la salud de los trabajadores, sino una referencia máxima para la adopción de las medidas de protección necesarias y el control del ambiente de los puestos de trabajo. Una vez realizadas las mediciones ambientales, para valorar si la exposición a los agentes químicos considerados es aceptable o inaceptable se ha seguido el sistema de decisión a partir de un pequeño número de muestras (UNE-EN 689 Anexo C) que se resume seguidamente: 1- Obtención de la Exposición Diaria (ED), que es la concentraci concentración ón media ponderada, referida a una jornada de 8 horas. 2- Cálculo de la relación entre el valor de ED obtenido y el valor límite VLA-ED, obteniendo así el índice de exposición de la jornada: I 1= ED / VLA-ED. 3- Análisis del valor del índice de exposición, con el siguiente criterio de decisión: a)

Si I1<0,1, la exposición es aceptable. Puede considerarse que es improbable que se supere el valor límite en cualquier jornada.

b)

Si I1>1, la exposición es inaceptable y debe procederse a corregir la exposición.

c)

Si 0,1
4- Si I1 e I2 e I3 e … In ≤0,25, la exposición es aceptable. 5- Si I1 o I2 o I3 o … In >1, la exposición es inaceptable. Deben adoptarse medidas para corregir la exposición.

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6- Si I1 e I2 e I3 e … In ≤1, pero no se cumple (4), se halla la media geométrica (MG) de los índices, y se le aplica el siguiente criterio de decisión: a) b)

Si MG ≤0,5, la exposición es aceptable. Si MG>0,5, no es posible alcanzar una conclusión definitiva. Puede optarse por obtener un nuevo índice y seguir el procedimiento desde (4), o detener el proceso de evaluació evaluaciónn concluyendo la necesidad de establecer un control periódico de la exposición, o bien implantar medidas específicas de prevención y repetir la evaluación después de su puesta en funcionamiento.

Esta metodología, basada en las probabilidades de superar el valor límite asumiendo un determinado error, a favor de una filosofía preventiva, no asegura cual es el valor de la concentración media ponderada ambiental más probable, sino que se limita a establecer, con un grado de fiabilidad elevado, si se superará o no el VLA-ED.

8.2. RESUMEN DE RESUL RESULT TADOS El control ambiental se efectuó en 17 centros de trabajo, muestreando a un total de 30 trabajadores. Esto ha supuesto la toma de 120 muestras, cuyos resultados se resumen a continuación.

8.2.1. Exposición a cromo

Si considerásemos que los compuestos de cromo de las muestras analizadas lo son de las especies divalente y trivalente de este metal, y por tanto aplicando un VLA-ED de 2 mg/m3, tendríamos que la exposición resulta inaceptable en un 6% de las empresas. Exposición a compuestos de Cr (considerando divalente y trivalente)

6% Aceptable Inaceptable

94%


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Por contra, si se presupone que todo el cromo contenido en las muestras es de tipo hexavalente (VLA-ED de 0,05 mg/m3), la exposición resulta inaceptable en el 82% de los casos estudiados. Exposición a compuestos de Cr (considerando hexavalente)

82%

Aceptable Inaceptable 18%

En la práctica, los compuestos de cromo presentes en los humos de soldadura son una mezcla de ambas especies. Adicionalmente, dado el carácter cancerígeno del Cr(VI), independientemente del resultado obtenido, deben adoptarse todas las medidas técnicas necesarias para reducir la exposición tanto como sea posible. Merece la pena señalar que, en aquellas empresas para las que la exposición a cromo considerado como Cr(VI), ha resultado aceptable, disponían de sistemas de extracción localizada y se utilizaban correctamente durante el desarrollo de los trabajos. Asimismo, en las empresas donde la exposición a cromo como Cr(II y III) ha dado un resultado inaceptable, los trabajos se correspondían con la soldadura en el interior de piezas de contorno cerrado y de tamaño no muy grande. Evidentemente en estos casos, considerando como cromo hexavalente, la exposición resulta igualmente inaceptable.

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8.2.2. Exposición a níquel

Teniendo en cuenta que los óxidos de níquel son compuestos inorgánicos insolubles, consideramos un VLA-ED de 0,2 mg/m3, tendríamos que la exposición resulta aceptable en un 70% de los casos, e inaceptable en un 6%.

Exposición a compuestos de Ni

24%

6%

70%

Aceptable Inaceptable No definido

En casi una cuarta parte de las empresas analizadas no se ha podido llegar a una conclusión definitiva respecto a la exposición a compuestos de níquel. Al igual que lo ya comentado para el Cr, debemos hacer notar que por el carácter cancerígeno de los compuestos de Ni, independientemente de que el valor de exposición diaria (ED) pudiese estar suficientemente por debajo del VLA-ED, deben adoptarse todas las medidas técnicas posibles para reducir la exposición al mínimo.


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8.2.3. Exposición a manganeso

Los resultados obtenidos son de exposiciones aceptables en un 70% de los casos, así como un 12% de inaceptables. Cabe comentar que la exposición a compuestos de manganeso en trabajos de soldadura de aceros inoxidables proviene, principalmente, de aquellas técnicas en que se utilizan electrodos revestidos. Las operaciones de soldadura semiautomática y TIG, no suelen dar valores significativos puesto que, de estar presente, el agente químico proviene del contenido en el material de base, que lo contiene en pequeñas cantidades.

Exposición a compuestos de Mn

12% Aceptable Inaceptable No definido 18% 70%

Para los compuestos de manganeso hay casi una quinta parte de las empresas analizadas en las que no se ha podido alcanzar una conclusión definitiva respecto a la exposición de los trabajadores.

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8.2.4. Exposición a molibdeno

El molibdeno, salvo en aleaciones inoxidables especiales, está presente en pequeñas cantidades en el metal de base. La experiencia obtenida respecto a los compuestos de este agente químico es que las exposiciones a sus compuestos resultan aceptables, con valores muy bajos de ED, en todos los casos considerados.


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9. Conclusiones

9

CONCLUSIONES De entre las conclusiones que se pueden derivar del presente estudio, podemos señalar como más destacables las siguientes: 1-

El 64% de las empresas del sector son de pequeño tamaño, con menos de veinticinco trabajadores. Gran parte de la actividad preventiva en la empresa podría ser asumida por el empresario; sin embargo, dado el carácter carcinogénico de los agentes químicos presentes en los humos de soldadura del acero inoxidable, son necesarias evaluaciones higiénicas de los contaminantes, lo que implica contar con el auxilio de un Servicio de Prevención Ajeno para tal menester.

2-

En el momento del estudio aún se ha encontrado un 1% de empresas que carecían de toda organización preventiva.

3-

La figura del delegado de prevención sólo está presente en el 49% de las empresas.

4-

También se ha encontrado un 1% que no disponía ni de evaluación de riesgos, ni de planificación preventiva. Sin embargo, de las que si habían elaborado la evaluación, sólo en un 31% tenían identificado expresamente el riesgo de exposición a cromo y níquel, y sólo en un 35% de los casos se había realizado una evaluación higiénica ambiental por medio de mediciones. En el resto, el riesgo de exposición se evalúa de manera muy genérica.

5-

De las tomas de muestras realizadas por este Instituto, se deduce que la exposición a compuestos de níquel es inaceptable en un 6% de los casos, y no se puede llegar a una conclusión determinada en un 24% adicional; mientras que para el manganeso hay un 12 % de casos inaceptables y un 18% de indeterminaciones.


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6-

Por lo que respecta al cromo, las exposiciones inaceptables se darían en un 6% de los casos si consideramos que todas las muestras corresponden a especies divalentes y trivalentes de este metal. Si se presupone que todo el cromo muestreado es hexavalente, las exposiciones inaceptables ascenderían al 82%.

7-

El 75% de las empresas había elaborado el listado de trabajadores potencialmente expuestos.

8-

Solamente un 1% de las empresas no habían proporcionado a sus trabajadores la obligatoria formación, ni ningún tipo de información relacionada con los riesgos que se derivan de su trabajo. De aquellas que sí habían cumplido la obligación anterior, sólo el 30% proporcionó formación e información específica.

9-

La vigilancia de la salud se llevaba a cabo en la totalidad de las empresas visitadas. Únicamente en un 20% de ellas, era específica de los riesgos a los que estaban expuestos los trabajadores.

10- Sólo un 14% de las empresas tiene establecidos procedimientos de trabajo específicos para la soldadura de acero inoxidable. 11- Las extracciones localizadas están presentes en un 42% de los casos; menos de la mitad de los estudiados. 12- En un 8% de las empresas no se tiene prevista la utilización de equipos de protección personal respiratoria en ningún caso. Entre aquellas que sí lo tienen previsto, hay un 12% en las que el uso de los mismos se deja a criterio del trabajador o se prescribe para determinadas tareas, pero en general se vigila poco su utilización. 13- Solamente el 20% de las empresas posee vestuarios con algún grado de compartimentación, pero en el 63% de los casos los trabajadores disponen de doble taquilla. 14- En todas las empresas se proporciona ropa de trabajo, pero en un 6% dicha ropa no tiene un carácter específico para su uso en trabajos de soldadura. 15- Hemos encontrado un 8% de empresas en las que el lavado de la ropa se hace a cargo propio de la misma. 16- Un 93% de las empresas tenían establecida la prohibición de fumar en los lugares de trabajo, y el 66% la tenían señalizada.

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9. Conclusiones

Como resumen podemos concluir que la situación preventiva en el sector de las empresas del metal que realizan soldadura sobre acero inoxidable admite un amplio grado de mejora, en especial en lo relativo al cumplimiento de los preceptos que regulan expresamente la protección de los trabajadores frente a los agentes químicos cancerígenos. Sin perjuicio de que el principal objetivo del estudio era conocer la realidad del sector que nos ocupa en relación al riesgo de exposición a cromo y níquel en los trabajos de soldadura, a la luz de los resultados obtenidos parece oportuno que el Instituto, en el marco de sus competencias, emprenda acciones que contribuyan a mejorar la situación detectada. Dichas acciones se concretarán en el próximo Plan de Salud, Seguridad y Medio Ambiente Laboral del Principado de Asturias.


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10. Recomendaciones

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RECOMENDACIONES Debemos hacer notar que, dado que los aceros inoxidables tienen contenidos variables de cromo y níquel, en el sector objeto de este estudio es plenamente de aplicación el R.D. 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo, teniendo que observarse los principios de prevención recogidos en el artículo 5, que incluyen la necesidad de eliminar o reducir al mínimo posible los riesgos para la salud de los trabajadores mediante, entre otras medidas, la minimización del tiempo e intensidad de las exposiciones. Para los agentes químicos cancerígenos no existe un nivel de exposición que pueda considerarse totalmente seguro. Por tanto, para hacer frente a los riesgos vinculados a su exposición, se debe aplicar el primer principio de la acción preventiva minimizando el contacto con el agente contaminante, haciendo especial hincapié en el correcto uso de los sistemas de extracción localizada. Además de lo hasta aquí expuesto, con el fin de mejorar las condiciones higiénicas ambientales existentes en estas empresas, se proponen seguidamente una serie de medidas correctoras que, entre otras, sería necesario adoptar.

10.1. SOBRE LA ORGANIZACIÓN PREVENTIVA 1-

El empresario debe realizar la prevención de los riesgos laborales mediante la integración de la actividad preventiva en su empresa y la adopción de las medidas que sean necesarias para la protección de la seguridad y salud de los trabajadores. Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales

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2-

Para ello debe contar con una organización preventiva que cubra las áreas de Seguridad, Higiene, Ergonomía y Psicosociología, y Medicina del Trabajo. Todas las empresas que dispongan de trabajadores por cuenta ajena están obligadas a realizar una evaluación inicial de los riesgos , a la que se refiere el artículo 16 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y el capítulo II del Reglamento de los Servicios de Prevención, que debe ser difundida entre los propios trabajadores para que conozcan los riesgos a los que están sometidos y las medidas preventivas de aplicación.

3-

La evaluación de riesgos de la empresa debe identificar a todos los trabajadores expuestos a los riesgos detectados, como establece el artículo 5 del Reglamento de los Servicios de Prevención, debiendo incluir las tareas relacionadas con la actividad principal, así como otras tareas secundarias que puedan aparecer en situaciones puntuales, tales como mantenimiento, limpieza, etc. Además se debe tener en cuenta a los trabajadores especialmente sensibles.

4-

En las empresas con más de cinco trabajadores, éstos tienen derecho a designar representantes especializados, con funciones específicas en materia de prevención de riesgos en el trabajo, que sean elegidos, como regla general, por y entre los representantes del personal.

5-

Se debe realizar una evaluación higiénica, con una completa identificación de todos los agentes peligrosos, incluidos los cancerígenos; y además, tal como se establece en el artículo 3.1 del R.D. 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo, se ha de determinar la naturaleza, el grado y la duración de la exposición, para aquellos que no hayan podido evitarse.

10.2. SOBRE LOS TRABAJADORES AFECTADOS 1-

Se debe llevar a cabo una correcta formación e información de los trabajadores, para que conozcan los riesgos y los minimicen con métodos de trabajo adecuados.

2-

Se ha de realizar una vigilancia específica y periódica de la salud conforme a los riesgos inherentes a su puesto de trabajo. Esta vigilancia debería realizarse en función de los riesgos derivados de los agentes a que se ven expuestos, incluido el cromo y níquel, así como de las características y circunstancias personales de cada trabajador.

10.3. SOBRE LOS EQUIPOS DE TRABAJO 1-

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Los equipos de trabajo adquiridos con posterioridad al 1-1-95, deberán disponer de los siguientes documentos: a) Marcado CE. b) Declaración CE de conformidad expedida por el fabricante. c) Manual de uso e instrucciones.


10. Recomendaciones

Los equipos adquiridos con anterioridad a dicha fecha, deben haber sido adecuados conforme a lo recogido en la disposición transitoria única del R.D. 1215/1997, de 18 de julio, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud para la utilización por los trabajadores de los equipos de trabajo. 2-

El manual de instrucciones debe estar disponible en castellano.

10.4. SOBRE VENTILACIÓN Y EXTRACCIÓN LOCALIZADA 1-

Según el R.D. 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las condiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo, todos los centros deberán disponer de una buena ventilación general, ya sea natural o forzada, que garantice, como mínimo, la impulsión de 50 m3/h por cada trabajador.

2-

Sin perjuicio de lo anterior, en trabajos de soldadura con técnicas que no incluyan aspiración localizada de humos en la propia boquilla del portaelectrodos, deberán utilizarse sistemas de captación de humos portátiles.

3-

Los sistemas de extracción localizada, integrados o no, deben mantenerse adecuadamente siguiendo las instrucciones y recomendaciones del fabricante.

10.5. SOBRE LA PROTECCIÓN INDIVIDUAL. 1-

Para determinadas operaciones con elevado riesgo de exposición (soldadura en espacios cerrados, fabricación de grandes piezas de contorno cerrado, etc.) debe valorarse la necesidad de utilizar equipos de protección personal respiratoria.

2-

Los equipos de protección personal, apropiados y certificados, así como los folletos informativos del fabricante, deberán estar disponibles para los trabajadores.

3-

Se debe determinar un procedimiento de control periódico de los equipos de protección individual, así como establecer una frecuencia de cambio de los mismos que garantice su eficacia protectora.

10.6. SOBRE LA ROPA DE TRABAJO Y LOS VESTUARIOS. 1-

Debe establecerse la prohibición de que los trabajadores lleven la ropa de trabajo a sus domicilios. El lavado de la misma debe correr a cargo de la empresa.

2-

Los vestuarios deben estar dotados de doble taquilla, de manera que no se pueda mezclar la ropa de trabajo con la de calle.

3-

En la medida de lo posible debería tenderse a compartimentar los vestuarios, delimitando una zona limpia, ausente de toda posibilidad de contaminación, en la que dejar la ropa de calle.


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11. Bibliiografía

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BIBLIOGRAFÍA -

Ley 31/1995 de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, y posteriores modificaciones.

-

Ley 54/2003, de 12 de diciembre, de reforma del marco normativo de la prevención de riesgos laborales.

-

R.D. 39/1997, de 17 de enero por el que se aprueba el Reglamento de los Servicios de Prevención, y su posterior modificación.

-

R.D. 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo.

-

R.D. 1124/2000, de 16 de junio, por el que se modifica el Real Decreto 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo.

-

R.D. 349/2003, de 21 de marzo, por el que se modifica el Real Decreto 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo, y por el que se amplía su ámbito de aplicación a los agentes mutágenos.

-

R.D. 374/2001, de 6 de abril, sobre la protección de la seguridad y salud de los trabajadores contra los riesgos relacionados con los agentes químicos durante el trabajo.

-

R.D. 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo.

-

R.D. 1435/1992 de 27 de noviembre, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud para la utilización por los trabajadores de los equipos de trabajo.


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-

R.D. 773/1997, de 30 de mayo, sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud relativas a la utilización por los trabajadores de equipos de protección individual.

-

Guía Técnica para la evaluación y prevención de los riesgos relacionados con la exposición durante el trabajo a agentes cancerígenos o mutágenos, del I.N.S.H.T.

-

Guía Técnica para la evaluación y prevención de los riesgos relacionados con los agentes químicos presentes en los lugares de trabajo, del I.N.S.H.T.

-

Guía Técnica para la evaluación y prevención de los riesgos relativos a la utilización de los lugares de trabajo, del I.N.S.H.T.

-

Guía Técnica para la evaluación y prevención de los riesgos relativos a la utilización de equipos de trabajo, del I.N.S.H.T.

-

Guía Técnica para la utilización por los trabajadores de equipos de protección individual, del I.N.S.H.T.

-

Método de toma de muestras y análisis MTA/MA – 014/A11. Determinación de materia particulada (fracciones inhalable, torácica y respirable) en aire. Método gravimétrico. I.N.S.H.T.

-

Método de toma de muestra y análisis MTA/MA – 025/A92. Determinación de metales y sus compuestos iónicos en aire. Método de membrana / espectofotometría de absorción atómica. I.N.S.H.T.

-

“Chromiun, Nickel and Welding”. IARC Monographs on the evaluation of carcinogenic risks to humans. (International Agency for Research on Cancer. 1990).

-

“El soldador y los humos de soldadura”. (OSALAN - Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales. 2009).

-

“Riesgos higiénicos existentes en las operaciones de soldadura con arco eléctrico”. (Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo. 2011).

-

“Sistemas de ventilación para el control de los riesgos higiénicos en los procesos de soldadura”. (Foment del Treball Nacional. 2010).

-

“Manual de aceros inoxidables para soldadores”. (INDURA, S.A. 2010).


Anexos

ANEXO Cuestionario utilizado en el proyecto


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Anexos


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Estudio de La Exposicion a Los Humos Generados en La Soldadura de Acero Inoxidable

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