TEORÍA Y ENSEÑANZA DE LA LITERATURA World is a symbol maze, the fictional is an existential reference. Literature emerges like a permanent activity with non positivist frontiers. Then, the models of literary analysis overlap interpretation levels and textual hermeneutics, adjacent with the general theory of discourse analysis anal ysis literature investigates the aesthetic emphasis of speech in general and only the reading premeditation amid a non obligation of reference as for its possible world, chooses the encounter between text and reader like artistic activity. !nterpretation in the sense of the decomposition of layers of the textual surface toward the construction of the symbol "supported in the aesthetic architecture and the world vision through the aesthetic proposal# hermeneutics in the sense of the philosophy then defines the analysis methodology "and not necessarily the methodology, methodology, in first instance, in itself#.
“Ya somos, el pasado, que seremos.”
$l ser, una construcci%n simb%lica por Enrique Enrique Ferrer Ferrer Corredor Corredor a Jorge Luis Borges Borges
El mundo es un entramado de símbolos, la ficcionalidad es una referencia referencia existencial. La literatura emerge como una actividad permanente con fronteras no positivistas. Entonces, los modelos de análisis literario traslapan niveles de interpretación y hermenutica textual, colindantes con la la teoría general de análisis análisis del discurso! discurso! la literatura indaga indaga el nfasis esttico del discurso en general y sólo la intencionalidad lectora en medio de una no obligatoriedad de referencia en cuanto a su mundo posible, elige el encuentro entre texto y lector como actividad artística. "nterpretación en el sentido de la descomposición de capas de la superficie textual hacia la construcción del símbolo #soportado en la ar$uitectura esttica y la visión de mundo a travs de la propuesta esttica%! hermenutica en el sentido de la filosofía $ue define la metodología de análisis #y no necesariamente la metodología, en primera instancia, instancia, en sí misma%.
1.
$l espacio literario
La problem&tica respecto a la definici%n de fronteras de la disciplina, respecto a la consolidaci%n de un m'todo cient(fico y respecto a los resultados en t'rminos explicativos de la materia literaria, no son un privilegio de la teor(a literaria. )tras disciplinas, disciplinas, en particular de las ciencias humanas, acusan iguales o aa *rof. de literatura y pol(tica, en las +niversidades ntonio ntonio -ario, $xternado y Libre. dem&s, dirige la /evista *apeles del 0pto. de !diomas de la +. . -.
mayores tropiezos. La psicolog(a, la econom(a y la misma ling1(stica, se fragmentan su constructo cient(fico sigue corrientes de pensamiento diverso su paradigma se mueve de acuerdo al foco de an&lisis. 2a desde 0ilthey, 3adamer, recientemente con los postestructuralistas y los llamados postmodernos se ha sealado como parte de esta problem&tica la dependencia inicial de las ciencias humanas con respecto al m'todo cient(fico de las ciencias naturales y formales, as( como su transformaci%n conceptual y autonom(a dial'ctica.
!ncluso ciencias formales como la l%gica y las matem&ticas, m&s all& de tener
superado el problema ideol%gico en la construcci%n de su objetividad, han sido cuestionadas en el estatuto de la dial'ctica de su lenguaje. s(, el problema sobre una posible p'rdida del paradigma en la teor(a literaria deber(a tener en la cuenta algunos par&metros 4ue van de una perspectiva general a la particularidad de la disciplina misma5 a# $l car&cter universal de la transformaci%n "no necesariamente crisis, sino modernidad inacabada# en las ciencias humanas. b# $l concepto vigente sobre los meta6 discursos b en cuanto a su estatuto y su producto as( como la tendencia a fundir estos en una relaci%n estructurada6estructurante.c c# $l car&cter moderno de la est'tica, estatuto reformulado desde 7ant y sealado con gran precisi%n por 3adamer, en el sentido del car&cter auto6reflexivo del arte actual "de la modernidad#. d# La definici%n misma de lo 4ue deber(a ser la ocupaci%n de la literatura, problema planteado desde *lat%n, nutrido por la represi%n medieval, promotor de meta6discursos como el 8arroco, el /omanticismo y las 9anguardias como pre&mbulo de la postmodernidad art(stica. d Lo literario no es un tipo de discurso sino un grado de recurrencia en la modalidad discursiva. -o es un hecho positivo consumado, sino un continuo hist%rico. :%lo el af&n clasificatorio nos cierra las fronteras entre los g'neros.e e# La incursi%n de los resultados de la indagaci%n te%rico literaria en el conjunto del saber tanto de las ciencias humanas e incluso en su
correlato y participaci%n en la construcci%n cient(fica en
general. -o importa 4ue este proceso emerja en ocasiones con autonom(a, en otros casos con fronteras fr&giles de objetividad e incluso como mero veh(culo del saber. b b $n parte, desde la fractura de la postmodernidad ilustrada por Lyotard en La ;ondici%n *ostmoderna pero sobretodo con un
dd ;uando *lat%n expulsa a los poetas de su /ep>blica, no est& expulsando al artista en s(, sino al rapsoda impostor. s(, *lat%n hace un favor a la literatura al otorgarle un papel activo en la construcci%n de la verdad bajo premisas 'ticas. $agleton, 3adamer y el propio
ee *odemos ver a 8ajt(n en $st'tica de la ;reaci%n 9erbal, en el cap(tulo sobre Los g'neros del discurso. *or ejemplo5 un estilo universalizado se puede constituir en g'nero "lo kafkiano#. $n todo caso, la frontera entre g'nero y estilo es tenue, se estructura no un concepto positivo del g'nero sino en un concepto hist%rico de las formas portadoras de contenido. $ntendidas 'stas no como mero material portador "alg>n formalismo# sino como un continuo generador de significantes cuyos s(mbolos cargados de significados se constituyen en nuevos significantes, en un proceso infinito de abstracci%n del mundo "*lat%n, 8arthes, 0errida, entre tantos#.
2. Perspectivas de análisis
$l mundo como totalidad es simb%lico. $l hombre, en su 4uehacer, suma sus mundos parciales en la b>s4ueda del s(mbolo fundacional, >ltimo y totalizante. La literatura indaga el modo como el hombre simboliza su existencia a trav's de tejidos de palabras. :in embargo, la literatura no es el mero juego de palabras sino la construcci%n de ?cosas@ con palabras con algunos recursos est'ticos y estatutos particulares, 4ue antes de fragmentar en tipos de discursos la producci%n est'tica ling1(stica, nos seala la posibilidad de descubrir cualidades del discurso en general. ATornar geom'trica la representaci%n, vale decir dibujar los fen%menos y ordenar en serie los acontecimientos decisivos de una experiencia, he ah( la primera tarea en la 4ue se funda el esp(ritu cient(fico. $n efecto, es de este modo como se llega a la cantidad representada, a mitad de camino entre lo concreto y lo abstracto, en una zona intermedia en la 4ue el esp(ritu pretende conciliar las matem&ticas y la experiencia, las leyes y los hechos.B f Los recursos est'ticos no son privilegio de un tipo de discurso en particular, s%lo podemos observar grados de esteticidad, pretensiones art(sticas desde el autor y el lector. Lo art(stico participa de la intencionalidad de la enunciaci%n "en las obras denominadas literarias estas marcas son evidentes# y en este sentido, los marcos del enunciado imponen un camino de lectura en cuanto a su estatuto de verdad "ficcional#. s(, pareciera 4ue los recursos est'ticos, el estatuto de verdad "no obligaci%n de un mundo posible con referencia al mundo de la vida# y una intencionalidad emergente desde el texto y con la complicidad del lector, definen el material de trabajo de la teor(a literaria.
$n este contexto retomamos el cuestionamiento a la teor(a literaria y al estudio de la literatura en general, en cuanto a la vigencia de su paradigma. $l agotamiento de 'ste, en t'rminos de Caus, g6 el cl&sico6 humanista, el hist%rico6positivista, y el est'tico6formalista 6, implica
en primera instancia una
reformulaci%n del eje autor6texto6lector. $l desarrollo de la teor(a literaria ha evolucionado bajo el privilegio de este orden en su construcci%n y validez discursiva. 0e los excesos de la biograf(a "mera historia de autores y no de textos#, pasamos a la estrechez textual "algunos formalistas#, ahora asistimos a la tiran(a del lector "/ecepci%n#. f f 8achelard 3ast%n. Dormaci%n del esp(ritu cient(fico. *&g. E. gg Caus citado en Las fronteras de los estudios literarios de DranFois *erus, revista La *alabra "-o G,H,IJ de KJJJ#. *&g. H aI.
3.
La teoría literaria
ntes 4ue optar por un privilegio entre emisor, texto y receptor, debemos observar5 la perspectiva metaf(sica de la construcci%n te%rica en literatura, el transcurso hist%rico6hermen'utico de la producci%n y comprensi%n textual en su propuesta est'tica y, la formulaci%n de modelos 4ue integren esta tr(ada categ%rica en una b>s4ueda del hombre como s(mbolo. $s decir, un camino desde lo metate%rico hacia lo metodol%gico, desde 'ste hacia el producto interpretativo vuelto sobre la literatura misma. ALa hermen'utica es la teor(a sobre la comprensi%n e interpretaci%n de textos literarios. :e diferencia del m'todo exeg'tico "el modo sistem&tico de proceder en la comprensi%n# y de la ex'gesis "el ejercicio de la comprensi%n e interpretaci%n#.B h $n primera instancia, la hermen'utica estudia la filosof(a de la interpretaci%n y no centra su inter's fundamental sobre la interpretaci%n del objeto en cuesti%n "ex'gesis#. $studia el sentido operativo de la metodolog(a utilizada en la ex'gesis misma. s(, la teor(a literaria est& constituida por el conjunto de m'todos desarrollados en el marco de la hermen'utica literaria, cada uno de estos privilegia una perspectiva. La cr(tica literaria enfrenta el texto independiente a un constructo te%rico previo. :in embargo, esta frontera es sutil y obedece a un prop%sito pedag%gico. 0el mismo modo, desde el punto de vista del producto de la ex'gesis, toda actividad interpretativa implica los supuestos de perspectiva tanto de 4uien la realiza, de los textos en cuesti%n y de 4uien eval>a dicha interpretaci%n. $n cada instancia pueden surgir posibilidades semi%ticas diversas as(, cada instancia y su m'todo implican un acuerdo comunicativo entre los interlocutores. $n este sentido, los estudios literarios presentan una gran variedad de escuelas de pensamiento 4ue intentan abstraer su discurso metodol%gico ya sea en el marco de la teor(a, de la cr(tica literaria o de la historia de la literatura
para no entrar en clasificaciones m&s
tediosas. $ntonces, los estudios
interpretativos surgen como aplicaci%n de alguno de estos meta6discursos y de la combinaci%n de los mismos. $n cada caso de los mencionados puede surgir un enfo4ue semi%tico, estructuralista, hist%rico, psicoanal(tico, entre otras escuelas o simplemente desde la cr(tica literaria en general. $stas doctrinas de hh :chMkel Luis lonso. puntes de
pensamiento proporcionan herramientas a los enfo4ues m&s gruesos mencionados arriba a manera de tipos de m'todos. $n todo caso las fronteras no son definitivas cuando de ciencias humanas se trata. 4.
La enseñanza de la literatura
$ste debate sobre la enseanza de la literatura tiene ya cierta antig1edad en el 0pto. de !diomas de la +. . -. :u estudio como expresi%n simb%lica de la comunicaci%n oral o escrita establecida como suceso intencional est'tico o art(stico representa un momento crucial en la construcci%n de un profesional de las ciencias de la educaci%n, en particular si su especialidad se orienta hacia el estudio de las lenguas y la cultura ling1(stica. $l estudio de la literatura se desenvuelve como suceso integrador de la cultura y la comunicaci%n del hombre fragmentado. $merge del hecho casual y meramente est'tico hacia su funci%n mediadora entre la realidad inmediata y la simbolizaci%n de la misma como expresi%n del hombre contempor&neo ya postmoderno. Adico estructurante de un mejor adolescente, todos, atributos necesarios dentro de la formaci%n del futuro educador. La literatura m&s all& de su funci%n ling1(stico6did&ctica, es un Aescenario simb%lico del mundoB. $l mundo no se agota en la mirada positivista, a trav's de la literatura abstraemos y prefiguramos el mundo, posibilitamos una versi%n de la realidad. $l camino de la indagaci%n literaria sugiere una din&mica de estrategias ling1(sticas en un &mbito comunicativo con pretensiones est'ticas, lo cual implica hechos positivos, cient(ficos, est'ticos es decir, un entramado ideol%gico. $ntonces el signo literario y su expresi%n simb%lica transcurre en doble v(a5 :e j j 0ebray /'gis. 9ida y =uerte de la !magen. *&g. OI "$l subrayado es m(o#.
articula desde la capacidad de manipular la lengua en la b>s4ueda de formas cargadas de contenidos convertidos en mega6significados, en formas hechas. :e desarticula en un retorno al origen, en un proceso deconstructivo donde el lector articula la puesta en forma de la obra a partir de un encuentro ideol%gico tendiente a la apropiaci%n del mundo propuesto. $s f&cil entender entonces las importancia de la literatura desde sus primeros pasos, emergiendo desde los g'neros primarios del discurso "8ajt(n, IHGH#, hacia los g'neros m&s complejos donde la forma constituye una carga ideol%gica en un sentido amplio de esta palabra, incluso una connotaci%n pol(tica "$agleton, IHGP#. Tanto la estructura art(stica de la novela en su totalidad como las funciones art(sticas de cada uno de sus elementos no son menos ideol%gicos ni sociol%gicos 4ue los ideologemas 'ticos, filos%ficos o pol(ticos incluidos en la novela. *ero la ideolog(a art(stica de la novela es para un investigador literario m&s inmediata, m&s primaria 4ue los ideologemas extra6art(sticos apenas reflejados y doblemente refractados en ella. k
$studiamos el hecho literario con particular inter's pedag%gico como un mecanismo 4ue construye caminos para hacer caminos, 4ue genera procesos para indagar y producir Aformas hechasB y 4ue en definitiva obliga al educando a la producci%n en t'rminos de interpretaci%n estructural, funcional y pragm&tica de los textos. $ste proceso implica un fen%meno ideol%gico donde la forma art(stica act>a como una puesta en forma de una visi%n de mundo. $ntonces, la educaci%n literaria nos prepara en la construcci%n y deconstrucci%n de este fen%meno simb%lico6ideol%gico. ALa vida de las sociedades contempor&neas est& dirigida desde ahora por una nueva estrategia 4ue desbanca la primac(a de las relaciones de producci%n en beneficio de una apoteosis de las relaciones de seducci%n.B l $ste proceso implica la construcci%n y manipulaci%n de herramientas ling1(sticas funcionales, pragm&ticas e ideol%gicas 'stas retroalimentan todo el fen%meno de la comunicaci%n humana en un
k k 8ajt(n, =ijail. $l ='todo formal de los estudios literarios. *&g. NG. ll Lipovetsky, 3illes. La $ra del vac(o. *&g. IE.
proceso 4ue se inicia en un nivel s(gnico, pasa por el hecho aleg%rico y culmina con la construcci%n y deconstrucci%n simb%lica de la realidad.
. Peda!o!ía y didáctica de la literatura
-os ubicamos a4u( en los par&metros de la ciencia, de la tecnolog(a y de la t'cnica. -os movemos en esta secuencia conceptual de los principios cient(ficos hacia la capacidad de construir tejidos conceptuales >tiles con base en la ciencia finalmente, la t'cnica consiste en la realizaci%n concreta, ya sea material o intangible, de herramientas utilizables directamente en la transformaci%n del mundo. 0el mismo modo, la pedagog(a nos provee de la rigurosidad conceptual cient(fica en el &mbito educativo mientras 4ue la did&ctica obedece a la construcci%n de estrategias puntuales al interior de las disciplinas del saber. !gual 4ue en la secuencia ciencia, tecnolog(a, t'cnica, no existe una linealidad definida en el sentido causal aun4ue en el mundo contempor&neo, el camino 4ue va de lo cient(fico a la t'cnica surge con mayor facilidad, el camino de abstracci%n acumulado por nuestros antepasados ilumina nuestro proceder. $stas relaciones metodol%gicas entre el concepto y su realizaci%n en el mundo de la vida, surgen en la vida acad'mica y cient(fica de un modo irregular. 2a sea por la inventiva misma del hombre, ya sea por la tradici%n y la inercia profesional, la humanidad va construyendo el mundo con o sin conceptos cient(ficos igual, elabora estrategias de uso. :in embargo, es claro 4ue entre m&s desarrollado sea un pa(s, m&s definida estar& la secuencia ciencia6tecnolog(a6t'cnica y en nuestro caso pedagog(a6t'cnica. $l saber cient(fico gu(a las acciones de los hombres en la b>s4ueda de la precisi%n y la claridad conceptual. $l privilegio de la actividad cient(fica reducida a la construcci%n de medios de producci%n con miras al crecimiento y ajenos a un desarrollo
integral, desvirt>a este rigor de la secuencia.
$ntonces, surge la necesidad de retornar al sentido de la polis griega5 s%lo podr(amos hablar de desarrollo y no de un mero crecimiento, en la medida en 4ue se concibe 'ste como la construcci%n de comunidades donde sea propicia la libertad del hombre "martya :en, KJJJ#.
La construcci%n del discurso pedag%gico y did&ctico de la literatura "y es el caso de otras disciplinas#, deber& observar en primera instancia la coherencia pol(tica "el e4uilibrio entre individuo y sociedad# en aras del estudio de las visiones de mundo deber& recurrir a las herramientas ling1(sticas e interdisciplinarias con el fin de realizar la deconstrucci%n discursiva y deber& producir estructuras meta6
te%ricas, metodol%gicas y t'cnicas, con el fin de realizar procesos interpretativos interactuantes entre la racionalidad y la experiencia. La direcci%n epistemol%gica racionalidad6experiencia no se impone, aun4ue prevalezca en el mundo contempor&neo. A*ero un poema no puede reducirse a su funcionamiento ling1(stico. $n 'l, el lenguaje est& fuertemente entrelazado con el ima!inario" en todas las dimensiones de esta palabra. Los nios deben poder experimentarlo no s%lo como lectores atentos, creativos, sensibles a las connotaciones, sino tambi'n como productores de poemas.B ll Dinalmente, resta la tarea de seguir formulando estos constructos te%rico6pr&cticos, los modelos pedag%gicos y las did&cticas de la literatura son ya numerosos, incluso sin 4ue importe el hecho de 4ue las did&cticas con frecuencia obvien o ignoren la existencia de los modelos pedag%gicos. La escasa rigurosidad global, en uno y otro caso, hace de sus propuestas en las relaciones hermen'utica6 metodolog(a6ex'gesis apunten a prop%sitos locales. A$ste fue el siglo de la violencia como pasaporte de la universalidad. -adie 4ued% exento de la capacidad de daar a sus semejantes. ;asi se dir(a 4ue a mayor adelanto t'cnico, menor adelanto moral.B ";arlos Duentes# #. Los modelos de enseñanza
$n el modelo propuesto en este trabajo la interpretaci%n textual traza un recorrido polif%nico dentro del marco expuesto y precisa un enfo4ue semi%tico 4ue privilegia la emergencia del an&lisis desde el texto a trav's de un proceso descriptivo, pragm&tico y finalmente ideol%gico. $n esta secuencia metodol%gica se integran de acuerdo con las necesidades las doctrinas de pensamiento. :in embargo, el resultado de la indagaci%n no obedece a la linealidad expuesta sino a la construcci%n total de un s(mbolo resultante como discurso de la interpretaci%n. $l modelo5 m ;omo sugerencia b&sica para estudiantes y docentes del &rea reseamos un modelo estructurado en tres niveles para su manipulaci%n pedag%gica5 descriptivo, pragm&tico e ideol%gico. :in embargo, este llll Colibert C. Dormar nios lectores y productores de poemas. *&g. I. mm $ste modelo es la sumatoria de acercamientos a diversos autores como 8ajt(n, Lotman, 8al, 8arthes, Lozano, 0ebray, 0eleuze, *lat%n, 7risteva,
proceso no se reduce a una implementaci%n sucesiva sino reclama una concepci%n integral5 el nivel superior deber& abstraer el precedente as(, en el nivel ideol%gico la interpretaci%n recoger& el material analizado en instancias primarias con el fin de ilustrar tesis m&s abstractas concebidas como lectura total de la obra. continuaci%n se comenta grosso modo cada uno de los niveles, 'stos evolucionan desde el 4u', hacia el c%mo y el para 4u'. s(, el modelo no pretende encasillar el an&lisis sino propiciar herramientas, adem&s su car&cter meta6te%rico permite nutrirlo con variantes de gusto personal y Q o re4ueridas en an&lisis particulares. 9eamos5 a. 0$:;/!*T!9) "-ivel I# 5 Dragmentar el discurso en unidades ling1(sticas b&sicas, comunicativas, sociales, etc., 4ue caractericen la propuesta discursiva de la obra, en particular a4uellas unidades referidas al hecho est'tico "lo art(stico se define en la intenci%n marcada en un nivel sint&ctico6 b. sem&ntico#, lo est'tico es un hecho hist%rico referido a la lectura de lo propuesto. ;ategor(as como la m'trica, la densidad de la frase, la adjetivaci%n, la descripci%n espacio6temporal, etc., ilustran este nivel. c. */3=RT!;) "-ivel K#5 :ugiere relacionar las categor(as del nivel anterior de modo funcional, ya no como meros elementos sino como una ma4uinaria puesta en marcha. 0e este modo empezamos a indagar la raz%n de ser de la disposici%n de los elementos en su funci%n pragm&tica. $s d. decir, se trata de revelar el dispositivo art(stico, la forma ar4uitect%nica "8ajt(n# o la estructura de la obra art(stica "Lotman#. !lustremos este nivel5 cuando el escritor escoge el punto de vista del narrador "entre otros aspectos de la focalizaci%n#, ya tiene en mente una funci%n, una intenci%n, un mecanismo narratorio. e. !0$)LS3!;) "-ivel P#5 0ispuestos los elementos, descubierta la ruta funcional, debemos armar la propuesta ar4uitect%nica soportando una visi%n de mundo, una lectura del mundo "8ajt(n, Lotman, 8ourdieu, otros#. $ste nivel deber& recoger el hecho est'tico m&s all& de la mera intenci%n art(stica. $n este camino proponemos la formulaci%n de hip%tesis de sentido indagadoras de las estructuras de la obra como un decir algo acerca del mundo a trav's de la propuesta est'tica. Lo dicho y la forma se funden en la construcci%n del s(mbolo y su vigencia.
$. %st&tica" símbolo y visión de mundo
La literatura es un reflejo complejo de la realidad, tambi'n la literatura se plagia a s( misma, incluso la realidad plagia la literatura en ocasiones en definitiva la literatura es realidad hecha s(mbolo, el ser se realiza en la enunciaci%n, si imaginas ya eres, el mundo posible es el mundo enunciado, de lo 4ue no se puede hablar es mejor guardar silencio "Wittgenstein#. $ste es el &mbito metaf(sico de la construcci%n del estatuto epistemol%gico de la literatura en sus relaciones subsidiarias con la teor(a del lenguaje en general. !ncluso *aul 0e =an se atrevi% a proponer un modelo ling1(stico con la literatura como eje fundacional.
0ios mueve al jugador, y 'ste, la pieza, Uu' 0ios detr&s de dios la trama empieza de polvo y tiempo y sueo y agon(asV "jedrez, Corge Luis 8orges#
trivium cl&sico ret%rica, gram&tica y dial'ctica, como disciplinas b&sicas daban paso al 4uadrivium, geometr(a, astrolog(a, aritm'tica y m>sica. 0el mismo modo, la literatura es un veh(culo y un fin en s( mismo en la construcci%n de capital humano. +n fin en s( mismo, en la medida en 4ue el profesional de la educaci%n desarrolla una capacidad indagadora del mundo, propia y potenciada sobre sus estudiantes, mediante la aprehensi%n de la historia de la literatura, mediante el desentraamiento de sus estructuras y secretos, mediante la manipulaci%n de las habilidades ling1(sticas en el 4uehacer literario. +n veh(culo, en la medida en 4ue el hecho literario no es neutral ni es inocente, cualidades 4ue se acent>an cuando el profesor posee la formaci%n ling1(stica, hist%rica y pedag%gica cuando el profesor es un gu(a cr(tico trascendente "7ant#. A...si es cierto 4ue la filosof(a y las ciencias han olvidado el ser del hombre, a>n m&s evidente resulta 4ue con ;ervantes se ha creado un gran arte europeo 4ue no es otra cosa 4ue la exploraci%n de este ser olvidado.B I Entonces, la literatura se erige en un te&ido esttico, como hacedor de un lengua&e $ue reflexiona sobre su propia forma #en el marco de los estatutos ya se'alados, pues las matemáticas tambin son de otro modo autorreflexivas%! es símbolo en el camino de abstracción de la realidad a travs de sus propuestas artísticas y! lee el mundo en una interpretación fundida entre el contenido fabulado y la estructura $ue lo soporta.
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