El Inmenso Poder de La Mente Tomo III (Fassman)

EL INMENSO PODER DE LA MENTE TERCERA PARTE

FA S E D IN Á M IC A : S U G ES T IÓ N E H IP N O SIS

SUMARIO

I n t r o d u c c ió n ..........................................................................................

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Historia y conceptos sobrela hipnosis...................................

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I.

La s u g e s t i ó n .......................................................................................................11

II.

Acondicionam iento............................................................................. 16

III.

Experiencias de s u g e s t i ó n ............................................................ 23

IV.

H i p n o s i s ..............................................................................................29

V.

Sistemas de in d u c c ió n .................................................................................. 34

VI.

Sugestión post-hipnótica.................................................................................. 48

Vil.

Cómo extirpar los hábitosperniciosos a través de la h i p n o s i s ..............................................................................................55

VIII.

La hipnosis y la p a ra p s ic o lo g ía ..................................................... 67

IX.

Cómo ofrecer una brillantedemostración de sus poderes m e n t a l e s ............................................................................................. 74

X.

A u t o h ip n o s is ...................................................................................................... 78

XI.

H ip n o t e r a p ia ..................................................................................... 82

XII.

Investigaciones personales y encolaboración .

.

.

88

Conclusión.............................................................................................. 93

Depósito legal: B. 29.3A4 * 1970 (III)

19/0, — Ediciones Ariel* S . A .r A v.

/.

Antonio, 134 *138 *

Esplttgues de Llobrepot (Barcelona)

INTRODUCCIÓN

Si ha estudiado y practicado con dedicación los libros anteriores, está ya en condiciones de penetrar y dominar este conjunto de sistemas que le pondrán en el camino de la gran ciencia de la Hipnosis. En los últimos años, todos los medios de información mundial han proporcionado a sus lectores una enorme cantidad de literatura acerca del hipnotismo; gran parte de ella errónea. Esto ha contribuido a que el hombre de la calle, y también muchos profesionales, tengan un con­ cepto falso de ella. Yo he tratado no sólo de corregir esta mala infor­ mación, sino de demostrar con hechos que la hipnosis no posee nada de misterioso. Esta adquisición le permitirá resolver mejor los problemas impor­ tantes de su vida diaria y profesional, así como influir positivamente sobre los demás, mejorando sus relaciones interpersonales. Tan pronto sea conocedor de su técnica y mecanismo, una práctica constante desa­ rrollará su poder volitivo, aumentando su ascendiente sobre otros. Todas las palabras, sistemas, gestos y contactos que le indico están comprobados como los mejores. Trate de aprovechar cuantas oportu­ nidades se le presenten para practicar; si así lo hace, puede estar seguro de que podrá llegar a ser un hábil y experto hipnotista.

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HISTORIA DEL HIPNOTISMO

Esta ciencia probablemente es tan antigua como la humanidad. Ya en las antiguas civilizaciones se practicaba, pero estaba condicionada al fanatismo religioso y al arte de curar. Los grandes sacerdotes guar­ daban estos secretos celosamente, y sólo eran transmitidos a unos pocos iniciados; donde más se practicó fue en Egipto; los papiros nos mues­ tran los clásicos templos del sueño, en donde se curaban los males de la mente y del cuerpo. También en Grecia y en muchos otros países fue practicada. Hipócrates, considerado como el padre de la Medicina, seguramente sabía mucho de ello cuando decía: "El alma ve muy bien, al cerrar los ojos, las afecciones del cuerpo". En el año 1874 apareció Mesmer, médico vienés, que causó un gran revuelo con sus curas espectaculares; todavía no se conocía la explicación normal del sueño hipnótico. Mesmer atribuía el fenómeno a un fluido que exteriorizaba el ser humano, al que denominó Magne­ tismo. Al correr el tiempo, tanto sus teorías como sus prácticas cayeron en el descrédito, y el Mesmerismo dio paso al moderno hipnotismo psicológico. Fue James Braid, médico inglés, el descubridor del moderno hipno­ tismo. El utilizó, por primera vez, el término HIPNOTISMO, del griego HIPNOS, que significa sueño; todavía hoy, muchos de sus métodos prevalecen en la práctica hipnótica. Durante varios años la hipnosis conservó su prestigio y esplendor, a pesar de ser duramente combatida por sus dos enemigos comunes: la ignorancia y la superstición. En Francia, Charcot, Bernheim, Janet y otros le dieron un impulso definitivo, aportando nuevos y valiosos conceptos. Charcot, el famoso médico de Ja Safpétriére, afirmaba que la hipnosis era únicamente un fenómeno patológico y que sólo podía ser provocada sobre histéricos. Sus afirmaciones no sólo fueron comba­ tidas, sino desmentidas en la práctica por Bernheim y Liebeaud, fun­ dadores de la escuela de Nancy. Luego, durante varios años, cayó en el olvido, una de las causas fue la aparición de Freud, médico austríaco, que implantó el psicoanálisis. Hoy, el hipnotismo ha reafirmado su crédito, especialmente después de las dos últimas guerras. Desde hace algunos años, todos los países

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del mundo se han interesado por él, y hoy ocupa el legítimo lugar que le corresponde y ha pasado a ser, no solamente un valioso auxiliar de la medicina y la cirugía, sino también, en el campo psicológico, un medio eficaz para modificar tendencias y conceptos en el comporta­ miento humano, y para extirpar vicios como el de fumar, el alcohol y el droguismo. Así, la hipnosis constituye un arma poderosa contra la infi­ nidad de males que azotan a la humanidad.

gado. En muchas ocasiones, personas acusadas de delitos han intentado defenderse, manifestando haber obrado bajo la influencia hipnótica; afortunadamente, tos jueces no se han dejado convencer y han des­ cartado semejantes subterfugios. Si el hipnotizador no logra despertar al sujeto, ¿éste quedará defi­ nitivamente dormido? FALSO: El sujeto sigue hipnotizado hasta cuando el hipnotizador

FALSOS CONCEPTOS

lo despierte; pero, en cualquier otro caso, el sueño hipnótico se trans­ forma lentamente en sueño natural, del cual el sujeto saldrá comple­

¿La hipnosis es una especie de magia negra, sin ninguna base cientí­ fica? FALSO: La hipnosis es actualmente una parte de la psicología. Los estudios de laboratorio han terminado con el miticismo que envolvía este desconocido tema, la mayoría de las veces presentado bajo una falsa luz. La ciencia moderna ofrece una clara explicación de cómo obra la hipnosis: la mente humana opera sobre dos planos diferentes: el consciente y el subconsciente. Normalmente ambos funcionan juntos, como un cochero y su caballo. La mente consciente, el cochero, decide cuándo y por dónde quiere andar; el trabajo material lo efectúa el caballo, el subconsciente. Si la atención del cochero se distrae, es decir, si se concentra en otro punto (la concentración es la antecámara de la hipnosis), otra persona puede ocupar su puesto y conducir el caballo. Esto es lo que sucede en la hipnosis, si el hipnotizador se sirve de un procedimiento especial, además de sus dotes naturales, para llamar la atención del sujeto. Conseguida la atención consciente, el hipnotizador habla directamente a la mente subconsciente y ésta obedecerá, como el caballo. ¿Solamente los débiles de mente, neuróticos o personas sin volun­ tad pueden ser hipnotizadas? FALSO: Está demostrado que es imposible hipnotizar a las personas

tamente descansado. Los prodigios de memoria que parecen imposibles al sujeto en es­ tado normal, ¿pueden ser evocados en trance? CIERTO: Generalmente, ninguno de nosotros puede recordar los acontecimientos acaecidos en la primera infancia, sobre todo en lo que hace a lugares y fechas, pero éstos recuerdos no están completamente perdidos, pues han quedado fielmente registrados en nuestra memoria inconsciente, de la que pueden surgir, si se conoce el medio para lograrlo. Según afirman algunos operadores, mediante la hipnosis es factible resucitar la memoria hasta la niñez; por otra parte, la moderna medicina, para el tratamiento de los complejos y traumas, se sirve de la hipnosis, aplicando el método del regreso de la memoria. Por este procedimiento, personas que habían olvidado una lengua extranjera, estudiada en temprana edad, vuelven a hablarla con facilidad. ¿U n sujeto en trence posee cualidades clarividentes y telepáticas? CIERTO: La agudeza de los sentidos del sujeto aumenta de una manera increíble. Bajo la influencia de la hipnosis, la concentración y el esfuerzo se intensifican considerablemente. Se han registrado casos extraordinarios en los que el sujeto ha visto lo que antes no podía ver; ha advertido hasta las mínimas variaciones de la temperatura; oído imperceptibles ruidos y sentido la más leve presión dactilar.

débiles de mente. Los mejores sujetos, desde el punto de vista de la hipnosis, son aquellos fuertes de mente, capaces de saberse concentrar. ¿Los hipnotizados rehúsan obrar contra su código m oral? CIERTO: La moral está tan profundamente arraigada en la mayoría

A un individuo hipnotizado, ¿se le pueden provocar alucinaciones? CIERTO: Mediante la hipnosis se puede lograr fácilmente la ilusión de ver objetos y personas que no existen; oler perfumes imaginarios y

de las personas que forma parte inseparable de su estructura subcons­

escuchar música, exactamente como ocurre en los sueños. Estas aso­ ciaciones tienen origen en las palabras del operador y las imágenes se

ciente. El hipnotizador no puede modificar esto, tan hondamente arrai­

forman en el subconsciente del sujeto. La mente consciente, que nor-

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malmente selecciona y separa asociaciones fantasiosas similares, queda fuera de acción. La hipnosis, «I trance y el sueño, ¿pueden ser idénticos?

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SUGESTIÓN

FALSO: No es absolutamente necesario que el sujeto esté completa­ mente en estado de trance, es decir, de sueño inconsciente. Existen casos en los que el sujeto está plenamente consciente del ambiente en que se halla y obra según el mandato del hipnotizador; al retornar a su estado normal recuerda perfectamente todo lo que ha sucedido. En la analgesia, obtenida con la hipnosis, el cuerpo del sujeto está completamente insensible al dolor; también puede lograrse un estado de rigidez tal que el sujeto es capaz de soportar considerables pesos, y en e! sonambulismo, que es un estado más profundo, el sujeto acepta órdenes post-hipnóticas, es decir, que, una vez despierto, realizará acciones que el operador le ha dado durante el estado hipnótico. ¿E l sujeto no se acuerda nunca de lo que ha pasado durante la hipnosis? FALSO: El sujeto sólo conscientemente olvida aquello que ha pa­ sado durante su trance de hipnosis. Todo lo ocurrido queda registrado en la mente subconsciente. Si el sujeto es hipnotizado de nuevo, él mismo puede recordar y escribir lo que aconteció en la sesión prece­ dente, como ocurre durante el sueño natural: todo el mundo sueña, pero la diferencia entre una y otra persona está solamente en el re­ cuerdo. Hay quien recuerda únicamente una parte, y también quien no recuerda absolutamente nada. ¿Las mujeres son más propensas que los hombres al hipnotismo?

El fenómeno hipnótico empieza por la sugestión. La sugestión es la aceptación de una orden por parte del sujeto, sin discutirla. La su­ gestión dirigida, mediante procedimientos y sistemas preconcebidos, constituye la base de la hipnosis, en todas sus fases. La sugestión representa una de las fuerzas más trascendentales en las relaciones humanas.

FALSO: No existe diferencia alguna para la disposición del trance

La sugestión es una fuerza de eficiencia social incomparable e in­

hipnótico entre la mujer y el hombre. Asimismo, no hay distinción en­

fluye en forma positiva o negativa en todas las relaciones humanas.

tre una y otra raza.

La publicidad dirigida es una demostración palpable de los diver­ sos sistemas de sugestión para convencer y vender el producto.

¿La facultad de hipnotizar es un don natural? FALSO: Cualquier persona con mediana cultura puede aprender la hipnosis, y su destreza dependerá de la persistencia en el estudio, de su práctica y aplicación: lo mismo que es necesario en cualquier otra actividad humana.

Para comprender mejor la naturaleza y funcionamiento del fenó­ meno, es necesario un conocimiento profundo de la naturaleza humana, así como también de los diversos procesos mentales que en ella inter­ vienen. Volveremos a la figura de la parte in¡ciática. Veamos lo que ocurre cuando, mediante un sistema o técnica adecuada, lanzamos una serie de estímulos organizados y persistentes sobre el cerebro del sujeto: dichos estímulos establecen un foco de conexión en la corteza cerebral.

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A medida que son repetidos, el foco se va extendiendo a través de esta zona. Por una ley de reflexología, sabemos que: "A mayor grado de excitación, mayor grado de inhibición". Mediante este proceso, las

LA PALABRA COMO ESTÍMULO AUDITIVO

Su voz debe ser clara, segura, calmada, modulada, evitando tonos altos y bajos, así como el estridente o débil. Una voz clara y segura transmite confianza al sujeto. Por el contrario, una voz agitada, inse­ gura y estridente suministra estímulos negativos. Hasta ahora, usted ha educado diversos aspectos de su personalidad: en adelante es muy importante que eduque su voz; de lo contrario, tendrá dificultades. ¿Se ha escuchado alguna vez a sí mismo? Seguramente que no. Pues le sugiero que lo haga. Colóquese frente a un espejo por cinco minutos, todos los días. Escúchese. Capte atentamente sus defectos de articula­ ción, entonación y acento. Si la naturaleza le dotó de una voz pobre, mediante este ejercicio podra modificarla y obtener control sobre sus cuerdas vocales. Pronto advertirá el cambio en las demás personas cuando su voz sea firme y armoniosa. La voz refleja el funcionamiento de nuestro mecanismo mental: el que piensa claro, habla claro, y si su mente trabaja en forma confusa, su voz será débil e incoherente. No olvide que el ritmo físico y mental está reflejado en el timbre de su voz.

PRUEBAS DE SUGESTIONABILIDAD A través del rostro podrá saber el índice de susceptibilidad del

funciones inherentes al consciente van disminuyendo hasta quedar éste

sujeto. Este sistema ha sido utilizado por mí durante muchos años y a él precisamente le debo gran parte de mis éxitos. Observe las figuras números 3, 4, 5 y 6:

totalmente bloqueado, obteniendo de esta manera el estado de cre­ dulidad o sugestivo, considerado como el umbral de la hipnosis. Observe un barco, cuya estructura o casco representa nuestro or­ ganismo; los motores, el subconsciente; el capitán que dirige el barco y que imparte las órdenes al cuerpo de máquinas, el consciente. Lo que uno logra en el acto sugestivo es desplazar al capitán; po­ nerse en su lugar e impartir las órdenes dirigiendo el barco, que equi­ vale a ser el dueño del automatismo del sujeto. ESTIMULOS QUE PREFERENTEMENTE USAMOS PARA CONSEGUIR LA SUGESTIÓN

La palabra, como estímulo auditivo, constituye el arma primordial, como lo es el bisturí en manos del cirujano. Los demás: visual, táctil, olfativo y gustativo, son secundarios. Más adelante explicaré deteni­ damente el uso progresivo de ellos en la técnica de la sugestión. La escala de sugestionabilidad es como sigue; 12

13 Z . ----F A S M I A V

(]IJ )

EL TRIANGULAR

LA PRUEBA DEL PÉNDULO

Generalmente e$ el más sensible de todos. El porcentaje aproxi­

Utilice un péndulo común; sí carece de él, puede ser reempla­

mado es de un 80 por ciento de factores positivos y sólo de un 20 por ciento negativos. Es favorable por su mucha imaginación; por su mar­

zado por un anillo, atándole un cordel o cinta de unos 30 centímetros de longitud.

cada tendencia a la credulidad y su facilidad para concentrarse, facto­ res que son muy buenos elementos. Entre ellos se encuentran algunos sonámbulos, aptos también para la telepatía y la clarividencia, fenó­ menos que pertenecen a los paranormales y que se estudian en otro capítulo. EL OVOIDE

Este individuo posee un alto grado de imaginación y una gran dosis de emotividad. Los factores positivos ascienden a un 60 por ciento y a un 40 por ciento los negativos, que se opondrán a nuestro objetivo. Posee mucho amor propio, sujeto a cambios temperamentales, lo que constituirá una compulsión negativa que podrá fácilmente interferir. Fie. 7 EL CILÍNDRICO

Este tipo de físico es introvertido y analítico; tiene dificultad para concentrarse, siendo éste el mayor escollo con que se tropieza. El por­ centaje de sensibilidad para su acondicionamiento desciende a un 40 por ciento de factores positivos, mientras sube a un 60 por ciento el de los valores negativos. EL CUADRANGULAR

Es positivo y práctico. Escéptico por naturaleza. Poco cooperativo y su porcentaje de positividad para la sugestión desciende a un 20 por ciento; el restante 80 por cierto es de factores negativos. Debo acla­ rarle que estas clasificaciones sintetizadas deberá usted ampliarlas re­ pasando las lecciones de Fisiognomía que ya estudió. OTRAS PRUEBAS DE SUGESTIONABILIDAD Ésta es una de las pruebas utilizadas con mayor frecuencia para comprobar el grado de sensibilidad a la sugestión: Ordene al sujeto que se apoye de costado contra la pared, con los ojos cerrados; dígale que empuje con fuerza el dorso del puño contra ella durante un minuto. Luego ordene al sujeto que se aleje de la pared y que trate de relajar su brazo. Generalmente, éste se elevará en forma espontánea. Si así sucede, es la confirmación de que el sujeto es alta­

En un cartón de unos 15 cm de diámetro dibuje una esfera de reloj. Proceda de la siguiente manera: dígale al sujeto que tome el pén­ dulo entre el dedo índice y el pulgar y que lo sitúe perpendicularmente sobre el centro de la circunferencia. Pídale que piense intensamente en la dirección que desee que el péndulo oscile: de derecha a izquierda, o viceversa, o verticalmente. Ordénele que píense en la hora en que desee despertar y adviértale que no debe hacer ningún esfuerzo voluntario para mover el péndulo. Si el péndulo oscila según las órdenes mentales, el sujeto es alta­ mente sensible a la sugestión. PRACTICAS PARA LA LECCION

Repase el capítulo de fisiognomía. Haga prácticas de clasificación con los sujetos o personas con las cuales establezca contacto en el día de hoy. Coléquese por cinco minutos diarios frente a un espejo: converse consigo mismo y prosiga hasta que esté satisfecho de su tono de voz y de su dicción.

mente sugestionable.

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que expresen lo mismo: "Este sencillo procedimiento que le voy a en­ señar pertenece a las más recientes adquisiciones de la Psicología Ex­

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ACONDICIONAM IENTO

perimental. Es un nuevo sistema que permite descansar científicamente a través de la relajación. Cuando aprenda le será fácil recuperar las

Va a establecer el primer contacto con el sujeto a través de la pa­ labra, de los gestos y de la mirada. Aquí logra la primera conexión o rapport hacia el bloqueo de su consciente, o sugestión. REGLAS QUE DEBERÁ TENER MUY EN CUENTA

Su voz y sus gestos deberán ser naturales, reflejando convicción y confianza en sí mismo. No pose con aspecto de abandono ni encor­ vado. No olvide que una voz áspera y autoritaria produce efectos con­ trarios a los deseados. Háblele en tono cordial. Recuerde que necesita de su cooperación para llevar a cabo su propósito. Estimúlelo por su buena ayuda y cooperación prestadas. No ordene nada al sujeto que pueda herir su amor propio. Tóquelo lo menos posible: le está ordenando a través del estímulo verbal. Si se muestra refractario, no insista; dígale que saber relajarse y concentrarse no es cosa fácil para la mayoría de las personas y que las que lo consiguen al primer intento demuestran estar en posesión de un excelente equilibrio mental y físico. Frente a cualquier situación inesperada o fracaso, tome contacto; respire profundamente y compruebe que está relajado. De esta manera le será fácil descubrir la causa del mismo y cuál fue el error que cometió. Ya está en posesión de los conocimientos teóricos necesarios para enfrentarse a la práctica: sabe cómo funciona la maquinaria mental que va a poner en marcha. Nada de lo que va a realizar está fuera de sus posibilidades. CÓMO DIRIGIRSE AL SUJETO

Al establecer el primer contacto con el sujeto' es necesario anali­ zarlo según las clasificaciones fisiognómicas antes expuestas. PRIMERA PRUEBA Invítelo a que tome asiento, lo más confortablemente posible. Dí­ gale que coloque las manos sobre las rodillas. Diríjase al sujeto, más o menos, en los siguientes términos, los que podrá modificar siempre

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Fie. 8

energías perdidas en sus tareas cotidianas. Es muy sencillo; basta que siga mis instrucciones". Dígale: "Respire pausada y profundamente varias veces". Debe usted contar: "Uno... Dos... Tres...", siguiendo el ritmo respiratorio del sujeto. "Cierre los ojos, levante el brazo derecho. Déjelo caer flojo, abandonado, sin tensión. Olvídese de su brazo derecho; piense úni­ camente en su brazo izquierdo; realice lo mismo: levántelo y déjelo caer suavemente, comprobando que todos los músculos, desde el hom­ bro hasta la punta de los dedos, están flojos y abandonados. Olvídese de su brazo izquierdo. Piense únicamente en su pierna derecha: afló­ jela más y más, déjela suelta, floja, abandonada. Haga lo mismo con su pierna izquierda. Respire ahora varias veces, pausada y profunda­ mente. Dirija su mente a los hombros y a la espalda; déjela descansar suavemente sobre el respaldo de la silla, comprobando que están todos los músculos flojos y abandonados. Abra suavemente la boca; com­ pruebe que sus mandíbulas también están flojas y abandonadas. Ex­ perimenta un agradable bienestar y siente todos los músculos de su cuerpo flojos..., livianos".

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PARA SABER SI LA RELAJACIÓN HA SIDO OBTENIDA

hasta la rodilla: "{Atención! Uno, dos, tres... Su brazo pesa más y más, pesa muchísimo, cae, cae irresistiblemente; está llegando a la rodilla, cae más y m ás... C a e ..., ca e ..., cae". SI esta prueba ha sido efectiva, demuestra que hemos establecido el foco de conexión necesario para acentuar el proceso sugestivo. Importante: Observe que este primer proceso consta de tres etapas: Etapa núm. 1. — Exposición de lo que usted desea del sujeto. Etapa núm. 2 .— Expectativa. En ella se deja al sujeto en espera de lo que va a ocurrir, y Etapa núm. 3. — Acción. Cuando la orden se convierte en efecto ¡deomotor. Estas tres etapas deberá tenerlas en cuenta en todas y cada una de las experiencias siguientes.

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Levante suavemente el brazo del sujeto y suéltelo. Si cae pesada­ mente, hemos obtenido una relativa y favorable relajación y concen­ tración para pasar a la primera prueba de acondicionamiento.

Importante: Observe que en esta primera prueba ha utilizado un solo tipo de estímulo: el auditivo, a través de la palabra. SEGUNDA EXPERIENCIA

El sujeto, sentado o en pie. Ordénele que cierre los ojos y relaje todo su cuerpo. Si observa que está tenso, invítelo a que respire pro­

PRIMERA EXPERIENCIA

fundamente por tres veces consecutivas. Coloqúese en la parte pos­ terior; apoye sus dedos suavemente sobre los hombros de él y dígale:

Fio. 10

Dígale que extienda el brazo derecho a la altura del hombro. Ordé­ nele que piense únicamente en él. Dígale que dentro de un instante su brazo lo sentirá muy pesado, desde el hombro hasta la punta de los dedos, y que caerá lentamente

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Fin, II

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"Dentro de un instante sentirá que su cuerpo comienza a oscilar a la derecha y a la izquierda. ¡Atención! La oscilación va a comenzar: U n o ...,

que utiliza en el estímulo táctil, denominadas zonas hipnógenas, son zonas consideradas más sensibles que otras partes del cuerpo.

d o s..., tres..." Quite las manos de los hombros mientra ordena: "Osci­ lación... La oscilación es cada vez más fuerte..., más y más intensa".

CUARTA EXPERIENCIA

Cuando desee terminarla diga: "La oscilación ha terminado". Habrá advertido que en esta segunda prueba se han utilizado dos sistemas de estímulo: el auditivo, a través de su palabra, y el táctil, mediante el contacto en los hombros. TERCERA EXPERIENCIA

Fie. 13

El sujeto en pie; pies juntos, y usted frente a él. Extienda los brazos y ponga las manos, suavemente, sobre sus hombros. Ordénele que Fie. 12

abra los ojos y le mire fijamente. Usted deberá mirarle al centro de la frente, donde entendemos que se encuentra el consciente, mientras le dice: "Dentro de un instante se inclinará irresistiblemente hacia m í...

El sujeto, en pie. Ordénele que siga con los pies juntos. Colóquese ahora frente a él. Mírele a la frente mientras le dice: "Dentro de un

¡Atención! U no ..., d o s..., tres...". Al tiempo que retira sus manos, ordene: "¡C a e ..., ca e ..., irresistiblemente cae!"

instante sentirá que su cuerpo se inclina irresistiblemente hacia atrás. ¡Atención!" Mientras pronuncia ¡Atención! tóquele con su mano suave­ mente la frente y colóquese en la parte de atrás del sujeto, ponien­ do las palmas de las manos suavemente sobre sus omoplatos. Diga: "U no ..., d o s..., tres...", y mientras retira las manos suavemente, or­ dene: "Se inclina más y m ás..., ca e ..., ca e ... Yo le sostengo... C a e ..., irresistiblemente cae". Sostenga al sujeto colocando sus manos debajo de las axilas de él. En esta tercera fase ha usado tres tipos distintos de estímulos: vi­ sual, a través de la mirada; auditivo, a través de la palabra, y táctil, con el contacto en los omoplatos. También se habrá dado cuenta de cómo, a través del aumento de

Importante: Si el sujeto ha reaccionado positivamente a estas prue­ bas, está en buen camino para el bloqueo total de su consciente. En estos primeros intentos no debe esperar que todos los sujetos reaccionen en forma favorable. No pierda la calma. Tome contacto y analice las causas de su fracaso. Observe si usted es el culpable por haber usado una técnica equivocada, o si fue por causa del sujeto, debido a factores de resistencia inconscientes, los que, siguiendo ade­ lante en la sugestión, podrá eliminar, en la mayoría de los casos. Mu­ chos de aquellos que en los primeros intentos son negativos, después resultan ser los mejores.

estímulos, va precipitando al sujeto al estado de sugestión. Las zonas 20

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p r a c t ic a s

Reproduzca mentalmente las cuatro técnicas anteriores. Visualice su sujeto como si estuviera delante de usted; siga todos los pasos en forma metódica, Memorice los diálogos de cada una de estas experien­ cias. A la primera oportunidad que se le presente, practique. Cada éxito que obtenga constituye una clavija positiva en su subconsciente y aumenta la confianza en sí mismo.

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EXPERIENCIAS DE SUGESTIÓN

PRIMERA

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Su sujeto, sentado; compruebe que sigue bien relajado y ordénele que cierre los ojos. Dígale en tono suave, pero convincente: "Dentro de un instante, sus párpados empezarán a sentirse pegados; tan pe­ gados como si fuese con goma, de tal manera que cuanto más quiera abrirlos menos podrá... ¡Atención! U no ..., se pegan" (toque muy sua­ vemente los párpados del sujeto con las yemas de los dedos). "D os..., más pegados... T res..., completamente pegados... Imposible abrirlos; trate, y cuanto más lo intente, menos puede, ¡imposible abrirlos..., imposible! Dentro de un instante podrá abrir los ojos: ¡Atención! U no ..., d o s..., tre s..., ábralos, ya puede; ¡bien abiertos!" SEGUNDA

Ordénele que extienda los brazos y entrelace los dedos. Dígale: "Dentro de un instante, sus dedos quedarán cerrados y pegados, de la misma forma que quedaron sus ojos" (tome las manos del sujeto entre las suyas). "U no ..., se pegan... D os..., más pegados... T res..., com­ pletamente pegados; imposible separarlos... ¡Trate, y mientras trate, menos puede! Imposible separarlos... ¡Atención! Dentro de un instante podrá separarlos. U no... Dos... Tres... ¡Sepárelos, ya puede!'' 22

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toque los pies del sujeto). "Dos..., más pegados. Tres..., completa­ mente pegados... ¡Imposible levantarlos! Pruebe... ¡Cuanto más in­ tente, menos puede! ¡Atención! Dentro de un instante podrá levantar los pies. ¡Levántelos, ya puede!" CUARTA

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TERCERA

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Ordene al sujeto que se ponga en pie. Dígale: "Lo mismo que que­ daron pegadas sus manos, ahora sus píes quedarán pegados y firmes al suelo, de tal manera que cuanto más quiera levantarlos para cami­ nar, menos podrá. ¡Atención! U no ..., se pegan" (con su mano derecha

Ordénele que extienda su brazo derecho; mírele fijamente, pero no precisamente a sus ojos, sino al centro de la frente, y dígale: "Dentro de un instante, su brazo se pondrá rígido, tan rígido como una barra de hierro; cuanto más intente doblarlo, menos podrá. ¡Atención! U no..., rígido" (mientras da esta orden pose suavemente su mano sobre el brazo del sujeto). "D os..., más rígido... Tres..., completamente rígi­ d o... Trate de doblarlo... Imposible... Cuanto más trate, más rígido se pone... Imposible doblarlo; pero dentro de un instante podrá do­ blarlo... Uno... Dos... Tres... ¡Dóblelo!... ¡Ya puede! QUINTA

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Fia 16

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Entréguele un lapicero o un cigarrillo,- dígale que lo sostenga entre

Invítelo a que pronuncie su nombre. Dígale que dentro de un mo­

el pulgar y el índice. Explíquele que el lapicero, poco a poco, que­ dará pegado a sus dedos, y cuanto más quiera soltarlo, menos podrá:

mento sentirá un nudo en la garganta que le impedirá pronunciarlo, y que cuanto más intente hacerlo, menos podrá: "¡Atención!... U no ...,

"U no ..., sus dedos quedan pegados al lapicero... D o s..., más pega­

empieza a sentir el nudo... D o s..., el nudo es más fuerte... Tres..., el

d os... T res.,,, completamente pegados... Pruebe... (Imposible! Dentro

nudo está totalmente cerrado... Imposible pronunciar su nombre... ¡Imposible) Pero dentro de un instante el nudo va a desaparecer. ¡Aten­ ción!... U no... Dos... Tres... ¡Ya puede! ¡Hable!... ¡El nudo desapa-

de un instante podrá soltarlo... U no... Dos... Tres... ¡Suéltelo! ¡Ya puede!"

recio! SEXTA OCTAVA

Frc. 19

Ordénele que extienda su brazo con la palma de la mano hacia arriba. Coloque una moneda en ella. Dígale que sus dedos se están poniendo rígidos y que, cuanto más intente cerrar la mano para aga­ rrar la moneda, menos podrá: "¡Atención! U no ..., sus dedos se ponen rígidos... D o s..., más rígidos... T res..., completamente rígidos... Im­ posible cerrar la mano. Pruebe y, cuanto más trate, menos podrá ce­ rrar la mano. ¡Atención!... U no... Dos... Tres... ¡Cierre la mano! ¡Ya puede!"

F ig. 21

Invítelo a que cuente hasta diez. Dígale, por ejemplo, que el nú­ mero 5 desaparecerá de su memoria y que, cuanto más trate de re­ cordarlo, menos podrá... "¡Atención! U n o ..., el número cinco se borra de su memoria... D o s..., más borrado... T res..., completamente bo­ rrado" (mientras da la orden, toque con su dedo índice la frente del sujeto, suavemente). "Imposible recordarlo... ¡Cuanto más intente, me­

SÉPTIMA

nos lo recuerda! Dentro de un instante recordará perfectamente el nú­ mero cinco. ¡Atención! U no... Dos... Tres... ¡Dígalo, ya lo recuerda!" Importante: Procure que exista un perfecto sincronismo entre sus gestos y sus palabras. Trate de evitar las interrupciones. Le recomiendo que memorice los diálogos, con el objeto de no interrumpir los siste­ mas. No olvide que, cada vez que interrumpe, el consciente del sujeto vuelve a trabajar por su cuenta. Por eso es tan importante la continui­ dad. Le sugiero que ensaye varias veces con un sujeto imaginario, sen­ tado en una silla, o frente a un espejo, antes de realizar estas expe­ riencias. Repita varias veces hasta dominar a la perfección estos pro­ cesos. Tome las cosas con calma. De ninguna manera conviene ir dema­ Fie.

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siado de prisa. Exprésese con la mayor claridad; hable despacio. Toda

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frase importante debe ser repetida, evitando toda posible confusión. Estudió la base de la hipnosis: la sugestión. Consiguió ir elimi­ nando en su sujeto las respuestas del consciente hasta obtener el blo­ queo total del mismo. Resumiendo: ha logrado establecer un foco de conexión con su corteza cerebral. En este caso, a cada estímulo sumi­

L-C-IV

HIPNOSIS

nistrado hay una respuesta inhibitoria. El automatismo está bajo su control, pues en estas condiciones hemos desplazado al capitán y somos nosotros los que damos las órdenes al cuerpo de máquinas, y el barco tomará el rumbo que nosotros deseemos. Importante: Le recomiendo no intentar la inducción hipnótica hasta no estar familiarizado con estas prácticas de sugestión y acondiciona­ miento. Busque la oportunidad para practicar con sujetos y trate de corregir los errores que pudiera haber cometido antes. No hable ni actúe mecánicamente. Tome contacto y compruebe que siente y visua­ liza lo que está diciendo.

Fie. 22

El fenómeno hipnótico se logra a través de la relajación y de la concentración ordenadas. En esta situación se suministra una serie de estímulos hasta lograr la disociación de ciertas zonas cerebrales. PROFUNDIDAD

Esta se produce a medida que aumentamos los estímulos a través del foco de conexión que ya establecimos. Este proceso, en apariencia, es similar al sueño natural. Por la noche, cuando usted se va a la cama, el sueño llega por la fatiga del día; también por el ambiente propicio, ¡unto con un determi­ nado grado de comodidad, y por la ausencia de sugestiones estimu­ lantes. La diferencia entre uno y otro estriba en que, en este último, los estímulos condicionantes son suministrados por el operador. EL PROCESO NEURO-FISIOLÓGICO

Imagínese el cerebro frontal como un tablero de ajedrez: los cua­ dros negros impulsan la contracción de los músculos; los cuadros blan­ cos inhiben esa contracción. Los negros dicen: (Camine! Los blancos: ¡Pare!

29

28 J . — FA33HAH ( l l l )

El estado hipnótico se logra cuando los centros de inhibición son

SIGNOS DE COMPROBACION

activados y todo el cuadro es bloqueado. La diferencia entre el sueño inducido y el natural radica en que, en el primero, la inhibición es parcial y, en el segundo, es completa, si bien los resultados son totalmente opuestos. GRADOS DE PROFUNDIDAD HIPNOTICA

A medida que vamos suministrando diversos estímulos a través del foco de conexión que ya establecimos se va excitando más y más su corteza cerebral, inhibiendo las zonas que corresponden a los diversos grados de profundidad hipnótica. Fie. 24

Una de las manifestaciones que permite confirmar que está en este grado es el esfuerzo que hace para abrir los ojos, sin conseguirlo. Otra la obtendremos levantando suavemente el párpado y comprobando que el globo ocular está vuelto hacia arriba. Segundo grado: En este estado, los párpados ya no demuestran ningún temblor. Siente el cuerpo y las extremidades invadidas por una intensa pesadez.

Según muchos experimentadores, existen varias fases de profun­ didad, pero mi experiencia personal me ha llevado a la conclusión de que muchas de estas fases corresponden a lapsos intermedios de las tres primordiales que yo clasifico: PRIMER GRADO: HIPNO!PAL O LETÁRGICO SEGUNDO GRADO: MEDIO O CATALÉPTICO TERCER GRADO; PROFUNDO O SONAMBÚLICO

Para mejor comprensión, enumeraremos cada uno de estos grados. Frc. 25

Primer grado: En este grado, e! sujeto siente deseos de cerrar los ojos. Una vez cerrados intenta abrirlos suavemente, sin poder conse­ guirlo; su faz muestra una gran pasividad. A veces aparece un ligero tembtor en los párpados. En muchas ocasiones esboza una ligera son­ risa; esto ha desconcertado a infinidad de principiantes, pero en reali­ dad constituye un efecto reflejo inconsciente.

Si se le levanta el brazo, allí quedará estático, pues el sujeto se niega a realizar cualquier esfuerzo por su cuenta. Se advierte una cierta rigidez en el brazo. Tercer grado: En éste, además de presentar algunas características del segundo, aparecen muchas otras. La respiración es abdominal y

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31

más profunda; la cabeza tiende a caer pesadamente sobre los hombros. Si le levantamos un brazo y lo soltamos, éste se desploma sobre la

3. 4.

Amnesia parcial. Anestesia en guante.

pierna.

5.

Obediencia a las órdenes post-hipnóticas simples.

Tercer grado: Profundo o sonambúlico

SIGNOS DE COMPROBACION

1. 2.

Puede abrir los ojos sin salir del trance. Puede hablar sin despertarse.

3. 4.

Alucinaciones positivas y negativas. Amnesia completa.

5.

Anestesia total y post-hipnótica.

6. 7.

Sugestiones post-hipnóticas a largo plazo. Rapport total y desinterés completo.

CAMBIOS APARENTES

En las primeras etapas; cuando el sujeto cierra los ojos es la con­ firmación de que entró en el primer grado. El temblor de los párpados 1 Fie. 26

(síntoma muy común) indica que la profundidad aumenta. La respira­ ción superficial está, generalmente, ligada a la primera etapa. Cuando, ésta es abdominal y profunda es signo evidente de un trance, también

La alucinación; Ordénele que abra los ojos y que siga profunda­

más profundo.

mente dormido. Dígale que verá un niño sentado a su lado y que con mucho cuidado lo tome en los brazos. Si la alucinación ha sido efec­ tiva, tenemos la confirmación de que está en un grado profundo de hipnosis, PARA CONOCER EL GRADO DE PROFUNDIDAD Es siempre difícil medir con exactitud el grado de profundidad. ESCALA DE MEDICION Y SÍNTOMAS

Primer grado: Hipnodial 1. 2. 3.

Cierre ocular. Respiración más lenta. Mayor rapport entre operador y sujeto. Control del automa­

4.

tismo. Obediencia a las sugestiones táctiles, olfativas y gustativas.

5.

Sensación de pesadez en todo el cuerpo.

Segundo grado: Medio o cataléptico 1. 2.

32

Intensa inhibición muscular. Catalepsia parcial o total.

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y más grande y más cerca de sus ojos. Su intensa luz cansa sus pár­ pados, y siente sus párpados pesados y cansados; más pesados y can­

L-C-V

SISTEMAS DE INDUCCION

No existen dos sujetos que reaccionen en idéntica forma. Uno de los secretos ansiosamente buscados por muchos para llegar a ser bue­ nos hipnotistas estriba precisamente en saber qué sistema de inducción será el más apropiado. Pretender obtener un gran porcentaje de éxitos en la hipnosis utilizando únicamente uno o dos sistemas es caminar hacia el fracaso. Usted deberá familiarizarse con los doce diferentes sistemas que a continuación le indico; tan pronto aprenda a observar las reacciones del sujeto, ellas le indicarán cuál es el más adecuado. Hago énfasis en la necesidad del buen acondicionamiento, a través de las primeras pruebas de sensibilidad, primero, y de las de sugestión, después. NO OLVIDE que un sujeto bien acondicionado, prácticamente está ya hip­ notizado.

sados. Siente deseos de cerrarlos. Ya se van cerrando; ya están com­ pletamente cerrados y la estrella se va alejando. Se aleja más y m ás... Cada vez se la imagina más y más pequeña..., más y más diminuta, y siente una agradable pesadez; siente los brazos pesados y la cabeza pesada y cansada... Le invade un sopor intenso... Siente un sueño agradable... Sueño ..., sueño..., dorm ido..., dorm ido..., profunda­ mente dormido. Tan pronto como el sujeto empiece a sentir que sus párpados pesan, usted debe seguir afirmando esta misma sensación. NO SE ADELANTE A LOS ACONTECIMIENTOS

Está manejando un mecanismo: limítese a seguirlo. Tan pronto se han cerrado los ojos sabemos que ha entrado al primer grado. Primer paso: Dígale que siente el cuerpo invadido por una suave pesadez y que se siente muy tranquilo y confortable. Segundo paso: Ordénele que nada le interesa de todo lo que le rodea; que solamente escucha su voz; que ningún ruido exterior tur­

MÉTODOS DE INDUCCION

bará ese estado de bienestar. N.* 1 — MÉTODO DE LA ESTRELLA

Tercer peso: Compruebe que el automatismo está bajo su control. Opere de la siguiente manera: ordénele que dirija su atención a su brazo derecho; que éste se vuelve muy liviano y dentro de un ins­ tante comenzará a elevarse hasta la altura del hombro. Diga: "U no ..., d o s..., tres...", como lapso de expectativa, y a continuación ordene: "Su brazo sube, se eleva, su b e..., y sube más y m ás... Flota en el aire como si fuese una plum a..., y, así como su brazo, siente todo el cuerpo liviano y como si flotase". Si el brazo se ha elevado normalmente, he­ mos obtenido la respuesta de que está en primer grado de profundi­ dad y que su automatismo está bajo nuestro control. Hable en tono convincente, pero muy suavemente. No olvide que Frc 27

El sujeto está perfectamente acondicionado,- las tres primeras prue­ bas fueron positivas, y algunas de sugestión, también: lo tiene en con­

"sueño" equivale a monotonía; cuanto más monótono y sin ninguna interrupción sea suministrado el estímulo, más rápida y segura será la respuesta que deseamos obtener. Importante: No pregunte nada. Ordene, únicamente.

diciones de ser inducido al primer grado de hipnosis. Dígale: "Mire al techo. Imagínese un círculo negro; en el centro de este círculo, una estrella de cinco puntas, brillante, despide una luz

¿Cuándo debe usarse este sistem a?

intensa. La estrella se desprende del círculo y desciende lentamente. Se acerca. Cada vez se hace más grande y cada vez se la imagina más

Cuando, a través de las pruebas de sensibilidad y de acondicio­ namiento, descubrimos en el sujeto una gran dosis de imaginación.

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Especialmente será indicado para personas de configuración facial tri­ angular y en algunos casos para ovoides.

usar, de preferencia, en sujetos de configuración facial cilindrica y tam­ bién en la ovoide. N.° 3 — MÉTODO MIXTO (de los dos anteriores)

Fie. 29

Este sistema difiere del anterior en que, mediante el sincronismo parpebral, logramos un relativo cansancio, favorable a la rápida in­ ducción. MODO DE OPERAR

Al sujeto acondicionado ordénele que le mire a los ojos; usted mi­ rará al punto central de su frente. Explíquele que contará hasta 20 y que, cada vez que pronuncie un número, él deberá cerrar y abrir los ojos. Es importante que el sujeto entienda bien el mecanismo que va­ mos a seguir: "U no ..., d o s..., tre s..., cuatro..., cinco... (abra las voca­ les todo lo más que pueda), se is..., siete...". Observe atentamente si el ritmo parpebral disminuye. Tan pronto ocurra esto, comience con las siguientes sugerencias: "Sus párpados comienzan a sentirse mucho más pesados y cansados... Siente intensos deseos de cerrarlos... Ya están completamente cerrados... Siente las piernas agradablemente pe­

Ordénele que le mire a los ojos y dígale: "Voy a contar hasta veinte, y cada vez que yo pronuncie un número impar cierre los ojos; cuando yo pronuncie un número par, los abre, y cada vez que abra los ojos se imaginará una estrella en el techo". Espere la confirmación del su­ jeto de que lo ha comprendido. "U no ..., d o s..., tre s..., cuatro..., cin­ co ..." (Compruebe que sigue el sincronismo indicado.) "Seis..., los párpados empiezan a sentirse muy pesados y cansados..., más y más pesados y cansados... Mucho más pesados y cansados... Está sintiendo muchos deseos de cerrarlos..., y ya se están cerrando... Siente las pier­ nas ligeramente pesadas; y los brazos, y todo el cuerpo invadido por un agradable sopor que le proporciona un agradable bienestar; siente el cuerpo más y más liviano y la sensación de pesadez se va haciendo cada vez más intensa... Siente sueño..., sopor..., sueño..., sopor." Como siempre, en la metodología seguiremos los pasos 1, 2 y 3. CUÁNDO EMPLEAR PREFERENTEMENTE ESTE SISTEMA

sadas... y los brazos y la cabeza..., y todo su cuerpo lo siente agrada­ Si durante las pruebas de acondicionamiento advierte que el su­

blemente pesado... Le invade una sensación de sopor... de la cabeza a los p ie s..., y siente sus piernas y brazos flojos y pesados... Cada vez

jeto tiene dificultad en concentrar su atención y se distrae fácilmente,

más flojos y más pesados..., y el sopor es más y más intenso..., y es como un agradable sueño..., un sueño que se hace cada vez más y

será efectivo emplear este sistema mixto. Mediante el contaje de pares e impares logrará que fije su atención. El cansancio parpebral acelera

más profundo. Siga los pasos 1, 2 y 3, ya indicados.

el proceso de la inhibición cortical y lo precipita al sueño, evitando así la interferencia negativa de la dispersión.

Este sistema resultará más efectivo en sujetos con menos imagi­ nación que los triangulares y más analíticos e introvertidos. Se debe

Importante: Trate de sentir y visualizar lo que está ordenando. No olvide: el fenómeno hipnótico no es más que una proyección psicológica

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que establece una intensa relación con el sujeto. Usted transmite lo que siente y no podrá transmitir lo que no es capaz de sentir ni poseer. EJERCICIOS PRÁCTICOS

Repase mentalmente toda la metodología de los tres sistemas de inducción. Sí piensa en imágenes, será sumamente fácil interpretarlas con palabras, y así memorizará más fácilmente los diálogos. Aproveche cuantas oportunidades se le presenten para practicar. N.° 4 — MÉTODO DE FIJACION Fio. 31

yo pronuncie un número impar, usted acerca la mano a los ojos; cuando yo diga un número par, retira la mano, siempre mirando fijamente el punto trazado en la palma. Poco a poco, su brazo se está volviendo muy pesado y cada vez le cuesta más trabajo realizar el movimiento. Los párpados le están pesando cada vez más y más y, al igual que el brazo, los párpados se vuelven pesados y cansados... Cada vez sentirá más y más deseos de cerrarlos; ya sus párpados se están cerrando... y cada vez tiene más dificultad en poder mover el brazo. Los ojos están Fie, 30

Tome un objeto cualquiera, preferentemente brillante: un lapicero, un encendedor, un llavero, etc. Coloque el objeto a una distancia de 20 cm, a la altura de los ojos del sujeto, formando un ángulo casi recto. Ordénele que mire con toda atención dicho objeto y, mientras tanto, que cuente mentalmente de I a 20. Dígale: "Siga contando y mirando fijamente al objeto. Poco a poco, sus párpados empezarán a sentirse pesados y cansados... Más pesados

completamente cerrados, y ya no percibe el punto en su mano. Lo mismo que su brazo están sintiendo sus piernas..., todo su cuerpo..., pesado..., cansado..., y le invade una agradable sensación de sopor y sueño... Cada vez siente más y más sueño..., sueño..., dorm ido..., dorm ido..., profundamente dormido..,". Ejecute en seguida los prime­ ros tres pasos, reforzando así la conexión con el sujeto: déle la suge­ rencia de que solamente está escuchando su voz, que ningún ruido ex­ terior le perturbará y que únicamente saldrá de ese estado cuando usted se lo ordene.

y cansados... Sumamente pesados y cansados... Siente muchos deseos de cerrarlos... Ya se están cerrando... Ya están cerrados; completa­

N,° 6 — MÉTODO MIXTO DE FIJACIÓN MEDIANTE LA ROTACIÓN BRAQUIAL

mente cerrados. Está sintiendo igualmente todo su cuerpo pesado; le está invadiendo un intenso sopor... El sopor se hace cada vez más profundo y más agradable. Siente sueño,.., sueño..., dorm ido..., pro­ fundamente dorm ido..., dormido". En este instante está en el primer grado de hipnosis. Siga la meto­ dología de los pasos 1, 2 y 3. N.° 5 — METODO DE FIJACIÓN CON EL MOVIMIENTO BRAQUIAL

Dígale que muestre la palma de su mano derecha. Márquele un puntito en el centro de la mano con un lapicero. Dígale: "Cada vez que

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Fio. 32

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Ordene que haga un movimiento de rotación envolvente con los brazos. Dígale: "Al mismo tiempo, siga con la vista el movimiento de los dos pulgares y cuente, mental y lentamente, del número uno al cuarenta. Poco a poco, sus brazos empiezan a sentirse cansados, y el movimiento de rotación va volviéndose más y más lento. Los párpa­ dos se están sintiendo, también, muy cansados. Cada vez más can­ sados..., y los brazos van girando muy lentamente... Los párpados se van cerrando más y más; ya siente intensos deseos de cerrar los párpados... Cada momento que pasa tiene menos fuerza para mover sus brazos... Los ojos se están cerrando..., completamente cerrados; al iguaj que los brazos, siente las piernas pesadas y todo el cuerpo pesado y agradablemente cansado... Siente que le invade un intenso y agradable sopor... Está sintiendo sueño, agradable y profundo... Cada vez se hace más profundo y más agradable..., dorm ido.,., dor­ m ido..., profundamente dormido". Siga la metodología de los tres pasos, indicada anteriormente. Importante; No olvide suavizar el tono de su voz. Trate de abrir las vocales lo más que pueda, con el objeto de conseguir no sólo dicción correcta, sino también la continuidad necesaria para lograr el estímulo monótono persistente, indispensable para una correcta inducción hip­ nótica. Muy importante: Si durante la inducción se bloquea y su subcons­ ciente no le suministra las palabras adecuadas, acuérdese de tomar contacto, así logrará la inmediata conexión con su conjunto de me­ morias. EJERCICIOS PRACTICOS PARA ESTA LECCION

Fie. 33

pegados con cola, y cuanto más intente separarlos, más pegados que­ darán". Siga con el movimiento de rotación y continúe diciéndole: "Mien­ tras sus manos se pegan una con otra, sus brazos los va sintiendo pesa­ dos y cansados... Mucho más pesados y cansados... Cada vez más pesados y cansados, y lo mismo que sus brazos... siente sus párpa­ d o s..., muy pesados y cansados..., cada vez más pesados y cansados... Siente deseos de cerrarlos... Ya se cierran... Ya están cerrados..., com­ pletamente cerrados..., y sus manos se sueltan una de otra... Siente sus piernas muy pesadas y cansadas..., siente un sopor intenso que invade todo su cuerpo... Cada vez el sopor es más agradable y más intenso... Siente sueño..., sueño..., sueño..., dorm ido..., dorm ido..., dorm ido...". Continúe con la metodología de los tres pasos. N.° 8 — SISTEMA INDIRECTO

Repita con imágenes todos los procesos de estos sistemas de fija­ ción. Por favor, no se preocupe de las palabras: si graba las imágenes, las palabras vendrán después, por sí solas y sin ningún esfuerzo. N.° 7 — SISTEMA INDIRECTO, PROCEDIMIENTO BRAQUIAL

Ordénele que cruce los dedos. En este caso retrocederemos al pro­ cedimiento de atar las manos, una con otra, que ha estudiado en las pruebas de sugestión. Dígale que extienda los brazos al frente y que ¡unte las manos, entrelazando los dedos unos con otros. Sujete con sus manos las del individuo y vaya imprimiendo un movimiento lento con los brazos del sujeto, mientras le va diciendo: "Sus dedos se van sin­ tiendo cada vez más y más pegados unos con otros, como si estuvieran

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Colóquele al sujeto en la mano un objeto cualquiera: un encende­ dor o una moneda. Ordénele: "Cierre su mano, apretando fuertemente el objeto... Siga apretando fuertemente... Cada vez le costará más y más apretar el objeto... Sus dedos los va sintiendo muy cansados..., y cada vez siente más dificultad para apretar el objeto...". Invítelo ahora a que cuente a la inversa, empezando por el número treinta;

pesando más y m ás... Ya los ojos están completamente cerrados... Siente un intenso y agradable sopor que recorre todo su cuerpo... Desde la cabeza hasta los pies... Experimenta una agradable sensación de pesadez.,., cada vez más y más intensa... Siente sueño... Mucho sueño... Siente sopor..., dorm ido..., profundamente dormido...". Ejecute los pasos 1, 2 y 3.

dígale que, a cada número que cuente, su mano la va sintiendo más y más liviana; que los dedos se le irán aflojando más y más, mientras sus párpados se van volviendo muy pesados,.. Cada vez más cansados

N.° 10 — SISTEMA DIRECTO

y pesados..., y que va sintiendo deseos de cerrarlos: "Ya se están cerrando.,., completamente cerrados... Todo su cuerpo lo siente agra­ dablemente pesado... y le invade un intenso sopor y sueño... Sueño cada vez más agradable y más profundo... Profundamente dormido... Sueño..., sueño profundo". Siga los pasos 1, 2 y 3, ya indicados.

Fie. 36

Este sistema será utilizado con éxito con aquellos sujetos que, aun­ que fueron positivos en las pruebas de sensibilidad y de sugestión, no pueden evitar una resistencia inconsciente, cuyo estímulo incondicionado puede ser motivado por el miedo a la hipnosis, a través de una mala información recibida. Este método indirecto dará resultados úni­ camente cuando no esté el sujeto advertido de lo que vamos a realizar. Es muy eficaz en las sesiones en grupo, cuando el acondicionamiento se logra por simple'transferencia. Dígale que extienda los brazos al frente,- colóquele entre las manos un objeto. Ordénele que apriete fuertemente. Dígale que siga apre­ tando fuertemente el objeto y que cuente mentalmente los números im­ pares, entre el uno y el cuarenta: 1, 3, 5, 7, 9, etc., y que: "A medida que va contando los números, sus dedos se van aflojando más y más, y la presión de las manos va cediendo lentamente, y siente que el ob­ jeto va aumentando de peso a cada momento, y cada vez tiene más dificultad para sostener el objeto entre las m anos..., mientras los párpa­ dos se van volviendo más y más pesados y cansados... Mucho más pesados y cansados... Siente deseos de cerrarlos..., y tan pronto cierre los ojos soltará el objeto de las manos, porque cada vez le está

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MODO DE OPERAR

Dígale en tono firme: "¡Míreme a los ojos! ¡Cierre los ojos! ¡Duer­ ma! ¡Dormido... profundamente dormido!"; mientras coloca su mano derecha sobre la frente del sujeto, su mano izquierda debe realizar un movimiento muy suave de rotación, con la cabeza del sujeto, y al mismo tiempo sugerirle que: "Siente sus piernas pesadas y cansadas... igual­ mente sus brazos... todo su cuerpo agradablemente pesado... Sueño... sueño profundo... Profundamente dormido". No olvide seguir la técnica de los tres pasos.

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EJERCICIOS PRÁCTICOS

Como en los anteriores, relájese y cierre los ojos. Visualice las imá­ genes. Vea el cuadro mental como s¡ estuviera sucediendo; después memorice bien todos los diálogos, evitando así la duda y la interrupción cuando opere. Y no olvide practicar en ia primera oportunidad que se le presente. N.° 11— MÉTODO SENSORIAL

Éste deberá ser usado cuando todos los anteriores hayan resultado negativos, y en sujetos muy dispersos, con gran dificultad para lograr, no solamente una buena relajación, sino también la necesaria concen­ tración. Al suministrar un conjunto de estímulos a la vez, tanto senso­ riales como auditivos, se logra una intensa fatiga en los diversos cen­ tros nerviosos, precipitando de esta manera la inducción. No soy partidario de ninguna clase de aparatos para obtener mi propósito, pues la pregunta del sujeto siempre será: "¿Dónde está el poder de este señor, si para hipnotizarme se ve obligado a recurrir a esos artefactos?" Conocemos la importancia que tiene el estímulo "PRESTIGIO" en todo acto hipnótico, y por ello no debemos evitar que

Fie. 38

El sujeto estará sentado cómodamente en una butaca o canapé; una vez relajado y positivo en las tres pruebas de sensibilidad, ponga cerca de su oído (a 20 cm de distancia) el reloj despertador. La vela, colo­ cada a la altura de sus ojos, sosteniéndola el operador con la mano; invítele a que escuche el tic-tac del reloj atentamente y que siga mi­

conviene destruir esta creencia, ya que constituye un factor condicio­

rando la llama de la vela. Dígale que poco a poco la llama se va debili­ tando más y más y que el sonido del reloj se va alejando lentamente: "La llama de la vela se va extinguiendo más y m ás... y se hace cada

nante positivo. Usted deberá proveerse de los siguientes aparatos:

vez más d ébil... Empieza a sentir sus párpados más pesados y can­ sados... Y la llama la ve cada vez más tenue... más d éb il... Ha per­

el sujeto tenga el concepto de que el acto implica fuerza y poder. No

dido la fijeza de la m irada... Siente deseos de cerrar los ojos... Ya están completamente cerrados...". Bájele los párpados suavemente, mientras le dice que va sintiendo su cuerpo muy liviano; que todos sus miembros los siente como si fuesen de goma. Dígale: "Se vuelven más livianos... y siente deseos de dormir... Le invade sopor en todo el cuerpo... y siente sueño... Cada vez más sueño... Más y más sueño... duerma... dormido... dormido... dormido". No olvide los pasos 1, 2 y 3 que se han indicado atrás. N.° 12 — OTRO SfSTEAAA SENSORIAL Fie. 37

Una pequeña lámpara de mano de poco voltaje, preferentemente de color azul, o verde pálido; una vela, un hipnodisco de espiral, un reloj despertador tamaño grande; puede suplir el despertador por un metrónomo (aparato que sirve para medir el tiempo, en la música). Como estímulo coadyuvante auditivo puede servirse de un tocadiscos, con música clásica muy suave.

Fio. 39

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45 4. — FAS5UAM ( l ! t )

El sujeto en la misma posición que el anterior; después de haber

TECNICA PARA LA PROFUNDIZACIÓN AL TERCER GRADO

obtenido una buena relajación y condicionado previamente, coloque la linterna de mano, o la luz fija, a una distancia de tres metros del sujeto y a una altura de medio metro por encima de los ojos. Conecte el toca­ discos con música suave y con muy poco volumen. Ordénele que cuente mentalmente a la inversa, de 100 a 1; que siga escuchando la música atentamente y que mire fijamente la luz o, en su lugar, el hipnodisco de espiral. Dígale que siga contando y escuchando la música. Usted continúe con las mismas sugerencias anteriores: "Sus párpados se van sintiendo más pesados y cansados... mucho más pesados y cansados... Sumamente pesados y cansados... Ya están cerrados... Está sintiendo el cuerpo agradablemente flojo... pesado... Todos sus miembros flo­ jos... Le va invadiendo un intenso sopor. Y siente sueño... dormido... dormido... Profundamente dormido". Repita la metodología de los pasos 1, 2 y 3, indicada ya. Importante; Aprendió los diversos sistemas de inducción, compro­ bados por mí como los más efectivos. Permítame que le repita que la habilidad del buen hipnotísta consiste en aplicar al sujeto el sistema apropiado, según su tipo y forma de reaccionar. La atenta observación de esas diversas reacciones le proporcionará la indicación precisa sobre cuál método es el más efectivo.

Fie. 40

Coloque las manos en la parte de atrás de la cabeza del sujeto, apoyándole los pulgares en la nuca. Muévale suavemente la cabeza, mientras dice: "Poco a poco su brazo irá cayendo, y a medida que cae le invade un sueño, más y más profundo. Cada vez siente que el cuerpo está más liviano, y el sueño es más profundo". Invítele a que respire varias veces y dígale: "A cada respiración que realiza, el sueño es más y más profundo". "A cada nueva respiración siente todo el cuerpo más pesado... Más cansado... mucho más cansado, y el sueño se hace cada vez más placentero y más profundo." Haga la comprobación de que ha llegado al tercer grado de profundidad, o sonambúlico, como lo indi­ camos atrás: dígale que va a abrir los ojos y que seguirá profundamente

Importante: Tenga muy en cuenta las recomendaciones que le voy

dormido: "tan pronto abra los ojos, verá un niño muy pequeño, sentado

haciendo, pues todas ellas son de una máxima importancia para obtener

a sus pies, que le inspirará gran ternura y lo tomará en sus brazos".

éxito.

Lo mismo que esta alucinación, cualquier otra similar puede ser utili­ zada. Si la alucinación ha sido obtenida, es la confirmación de que se

EJERCICIOS PRACTICOS

encuentra en el tercer grado.

No intente operar directamente con sujetos sin antes haber memo-

Importante; Repítale la alucinación varias veces en forma clara.

rizado el diálogo verbal que va a utilizar. ¡Por favor, no se precipite!

Evite alucinaciones penosas, ya que en un sujeto hiperemotivo pueden

La precipitación constituye uno de los mayores obstáculos para una

provocarse alteraciones emocionales intensas. La alucinación lo mismo puede ser positiva que negativa.

buena inducción. Si se altera emocionalmente, tome contacto respirando profundamente. Siempre tenga en cuenta la intima conexión que esta­ blece con el sujeto: si está alterado, él percibe esta alteración. Si se siente inseguro, él sentirá la misma inseguridad. SISTEMAS PARA PROFUNDIZAR

Una vez que el sujeto esté en el primer grado o hipnodial seguire­ mos dándole sugerencias de sueño, más y más profundas: "Sus miem­ bros están cada vez más pesados". Repitiendo estas sugestiones va­ rias veces, le elevaremos el brazo a la altura del hombro; si queda inmóvil, será la confirmación de que se encuentra en el segundo grado.

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haya sido cumplido el signo-señal, proceda como se indicó anterior­ mente: duérmalo y bórrele la orden que le ha dado. L-C-VI

SUGESTIÓN POST-HIPNÓTICA

SUGESTIÓN POST-HIPNÓTICA BAJO SIGNO-SEÑAL: "GESTO"

La sugestión post-hipnótica consiste en dar una orden, para que sea realizada después de despertar. FORMA DE OPERAR

Al sujeto, en segundo y tercer grados de profundidad, dígale en forma muy clara: "Tan pronto salga de este estado sentirá irresistible­ mente deseos de saludar al señor X" (le dirá su nombre y el lugar que

Fie. 41

ocupa), y le preguntará con mucho interés por su salud y la de su familia". O , por ejemplo, ordénele que tan pronto salga de ese estado, dirá por tres veces, en voz alta, su nombre. Una vez que la sugestión post-hipnótica ordenada ha sido cumplida, invítele a tomar asiento; de nuevo dígale con voz firme, mirándole a los ojos: "Duerma, dormido,

Dígale: "Tan pronto despierte, cada vez que yo saque el pañuelo de mi bolsillo usted sentirá una fuerte picazón en la punta de la nariz, que le obligará a rascarse". Proceda, después, como en el caso anterior.

profundamente dormido". Bórrele la orden dada de la siguiente ma­ nera: "¡Preste atención! La orden que le he dado de que usted, tan

INDUCCIÓN POR SUGESTIÓN POST-HIPNÓTICA BAJO SIGNO-SEÑAL

pronto despertara, iría a saludar al señor X, queda totalmente borrada".

nuncie la palabra 'Azul' empezará a sentir sus párpados pesados y

Repita esto tres veces. Luego despierte al sujeto, no sin antes darle las

cansados; tendrá deseos de cerrarlos y sentirá que le invade un intenso sopor, hasta caer en un sueño profundo". Proceda como se indicó

sugerencias ya indicadas, o sea: "Tan pronto despierte se sentirá mental y físicamente tranquilo y reposado; la experiencia ha sido muy agra­ dable". Importante: Al ordenar las sugestiones post-hipnóticas, procure hablar lentamente y con la máxima claridad. Cualquier confusión o malentendido podría anular el efecto. Repita dichas sugestiones por lo menos tres veces, como ya se dijo, y en seguida pregúntele si entendió bien. Si así es, él moverá la cabeza en forma afirmativa. No olvide que bajo el trance hipnótico no habla, a menos que le sea ordenado. SUGESTIÓN POSTHIPNÓTICA BAJO SIGNO-SEÑAL: "PALABRA"

Dígale: "Después de haberse despertado, cada vez que yo pro­

anteriormente. Importante: Siempre que vaya a hacer uso de este signo-señal le aconsejo que tome las precauciones necesarias, a fin de que el sujeto no sufra alguna caída inesperada. Antes de utilizarlo, cerciórese de que se encuentra cómodamente sentado, o recostado. No lo use jamás estando el sujeto de pie. No olvide que bajo este signo-señal entra en hipnosis profunda automáticamente. Muy importante: Por ningún motivo debe ordenar al sujeto nada que pueda atentar contra su integridad física o sus principios morales, pues entonces él hará todo lo posible por resistir, hasta despertar.

También, mediante la sugestión post-hipnótica, podemos crear un reflejo condicionado: signo-señal.

AMNESIA ORDENADA POR SUGESTIÓN POST-HIPNÓTICA

Ejemplo: Al sujeto, de preferencia bajo trance profundo, dígale:

Aunque la amnesia se hace presente en muchos casos, sin ser or­

"Después de haber despertado, cada vez que yo pronuncie la palabra

denada, es necesario sugerirla si desea que no se acuerde de lo que le sucedió al sujeto durante el trance. Dígale: "Cuando despierte nada recordará de lo que sucedió durante este estado; todo está borroso, y cuanto más trate de recordar, menos

LUZ, usted sentirá deseos irresistibles de-aplaudir. Cada vez que yo pronuncie la palabra 'luz', aplaudirá con fuerza". Obtenga la confir­ mación de que ha entendido bien esta orden post-hipnótica. Tan pronto-

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recordará". Al despertar proceda como siempre; no se olvide de las

MANERA DE QUITAR LA ANESTESIA

sugerencias de descanso.

Diga: "Ahora quítese el guante de la mano izquierda y, a medida que se va quitando el guante, su mano se va volviendo sensible... La siente cada vez más sensible... Ya siente todas las sensaciones en ella". Haga la comprobación dando unos golpecitos en la mano y espe­

EJERCICIOS PRÁCTICOS

Cuando realice sus experiencias de relajación, aproveche para memorizar; véase dando órdenes post-hipnóticas y vea cómo se cumplen.

rando la reacción del sujeto al leve dolor que esto le produce.

No intente practicar sin antes asegurarse de que memorizó las fases y REGRESION DE LA PERSONALIDAD

técnicas adecuadas.

Regresión de la personalidad significa lograr que, bajo hipnosis,

CÓM O LOGRAR LA ANESTESIA

regrese el sujeto mentalmente a edades anteriores; por ejemplo: si cuenta 20 años, podrá sugerirle que retorne a los 15 años; el individuo se comportará, hablará y escribirá tal como si en esos momentos viviera équella época de su vida. Lo que ocurre en la regresión es que el sujeto recuerda con extra­ ordinaria nitidez todas las impresiones, hechos y acontecimientos que quedaron indeleblemente impresos en su memoria inconsciente. El uso terapéutico de la regresión es de extraordinario valor en la hipnoterapia, pues por medio de ella es posible descubrir la causa desencade­ Fie. 42

Una vez comprobado que se encuentra en segundo o en tercer grado, dígale: "En su mano derecha tiene un guante muy grueso; pa­ rece de plástico: sólo falta que se lo coloque en la mano izquierda". Tan pronto termine los movimientos para colocárselo, sugiérale que: "Su mano izquierda está totalmente protegida; su mano se vuelve insensible... Ya no siente su mano", repitiendo varias veces: "¡Total­

nante de cualquier desajuste de la personalidad, inclusive el origen de muchos hábitos arraigados y vicios perniciosos. Nos facilitará llegar a la raíz del mal, y es lógico que si conocemos la causa será más fácil destruir el efecto. PROCEDIMIENTO

mente insensible..,!". Compruebe ahora la sensibilidad pellizcando esa parte. Mientras realiza la prueba de que la anestesia se ha pro­ ducido, siga repitiendo: ¡"No siente su m ano..., insensible... insen­ sible...!" CÓMO REALIZAR LA TRANSFERENCIA DE LA INSENSIBILIDAD A CUALQUIER PARTE DEL CUERPO

Por ejemplo: al hombro derecho. Dígale: "La misma insensibilidad que está sintiendo en esta mano (a va a sentir en el hombro derecho y éste parecerá como si fuese de madera... Ya no siente nada... insensible... insensible... totalmente insensible...". Con este mismo procedimiento puede ir ordenando in­

Fig, 43

sensibilidad en cualquier parte del cuerpo. Siempre hay que principiar con la sugerencia del guante y realizar la comprobación de insensibi­ lidad en la mano.

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AI sujeto, una vez inducido, háblele de esta manera: "¿Qué edad tien e...? Bien, voy a señalarle una edad anterior a la de ahora; cuando

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yo cuente hasta tres, inmediatamente usted recordará lo que ocurrió en esa edad. ¡Atención! Uno... d os... tres... Empieza a recordar la edad d e ... (x) años..." Hacer la regresión en ciclos de 7 años, hacia atrás. "Cuénteme qué le pasó en esa época de su vid a ... ¿Con quién vi­ v ía ...? ¿Quiénes eran sus amigos preferidos...? ¿Cuáles eran sus aspi­ raciones...? ¿Q ué era lo que más le disgustaba? ¿Cuál fue el mayor desagrado que tuvo en esa e d a d ...?" Es muy importante que lleve al sujeto progresivamente en este proceso de regresión. Evite dar saltos muy largos en las edades; limite sus preguntas a lo más apropiado, según la edad que le sugirió. Manténgase siempre alerta y observe bien sus reacciones; en cualquiera de ellas puede descubrir alguna causa

colóquele el frasquito con amoniaco a cierta distancia de la nariz. Si está simulando, hará una mueca de desagrado. Si el trance es auténtico sentirá el delicioso perfume que usted le sugirió. MANERA DE PASAR DEL SUEÑO FISIOLÓGICO AL HIPNÓTICO

perturbadora, arraigada en su subconsciente, ya sea motivada por un shock emocional o por algún conflicto reprimido. Al descubrirlo, tendrá la oportunidad de desentrañarlo; de ponerlo frente al sujeto y ayudarle a solucionarlo hasta que se vea libre de él para siempre. Durante la regresión, generalmente observamos que la condición psicosomática del sujeto es la causa de muchos desequilibrios psicofisiológicos. En estos casos, el procedimiento es algo más largo, y será conveniente recurrir a trances más ligeros con el objeto de que él tome parte activa en la terapia y así lograr una amplia reeducación y renovación de con­ ceptos. Las diversas técnicas que se utilizan, luego de sumir al sujeto en el sueño hipnótico, son: la persuasión, la confesión, la discusión, la reedu­ cación, la orientación y la integración de la personalidad. En todos estos procedimientos, la acción debe efectuarse entre los dos primeros grados. No olvide nunca que la hipnosis está contraindicada en epilépticos, esquizofrénicos y psicópatas, o en cualquier otra clase de enfermos mentales. COMO DESCUBRIR A LOS SIMULADORES

Durante sus prácticas se encontrará, inesperadamente, frente a si­ muladores: es una forma muy común de evadirse de la hipnosis autén­ tica. Generalmente se trata de individuos que tienen miedo a enfren­ tarse a la hipnosis, y por este motivo se adelantan a los acontecimientos. En la mayoría de los casos lo hacen con tal perfección que, no siendo un hipnotista muy experimentado, será difícil descubrirlo. Un sistema muy eficaz es el uso del amoníaco. Cada vez que trate de realizar expe­ rimentos de hipnosis deberá ir provisto de un diminuto frasco de amoníaco y, tan pronto entre en sospecha de que la persona simula el trance, bastará darle la siguiente sugestión olfativa: "Dentro de un mo­ mento le voy a ofrecer un delicado perfume de rosas". Al mismo tiempo

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Fie. 44

Deberá escoger, preferentemente, el transcurso de las primeras horas, después de que la persona haya conciliado el sueño. Proceda de esta manera: acérquese quedamente y principie por adoptar su mismo ritmo de respiración; una vez logrado, tómele delicadamente el pulgar derecho con su pulgar y su dedo índice derechos. Empiece a hablarle suavemente de esta manera: "Me escuchará y no despertará; seguirá durmiendo profundamente con un sueño tranquilo. Cada momento me escucha mejor, sin despertar; seguirá durmiendo profundamente y tranquilo". Insista hasta obtener una respuesta; ésta será la prueba de que ha pasado al sueño inducido. A continuación puede hacer las preguntas que crea convenientes, con la seguridad de que le contestará. Al terminar, déle sugestiones de amnesia y de que seguirá durmiendo profunda y tranquilamente toda la noche. Antes de intentar esta experiencia tome la precaución de preparar la excusa conveniente para justificar su presencia a su lado, en el caso de que despertase. Muy bien puede ser un vaso de agua en la mano y si despierta decirle: "Usted se encuentra mal", etc., o algo parecido. Importante: Siempre que efectúe la anestesia, evite pasar una aguja a través de la piel del sujeto, procedimiento falto de ética que es utili­ zado frecuentemente por hipnotistas profesionales. Para una compro­ bación bastará con pellizcarle en la mano y observar su reacción.

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Muy importante: Durante la regresión procure que esté presente algún familiar del sujeto. Nunca la haga en grupo. De todas maneras le aconsejo que evite la regresión, de no ser estrictamente indispen­ sable para ayudar al sujeto. Al tratar de comprobar si un sujeto está simulando, procure tener el frasquito de amoníaco a prudente distancia, ya que el aspirar el líquido podría producirle irritación en las mucosas nasales. EJERCICIOS PRÁCTICOS

Relájese e imagínese al sujeto: repita la prueba del guante para sugerir anastesia. Ordénele retroceder a edades anteriores, sobre todo familiarícese con los diálogos. No olvide que un término cambiado produce efectos diferentes a los deseados. Finalmente, siéntese al borde de una cama.- vea al sujeto dormido profundamente; sincronice su respiración con la de él y ensaye el estímulo táctil con el pulgar del sujeto, en la forma más suave posible. Entrénese en hablarle en forma casi imperceptible, aumentando lentamente el tono de voz.

L - C Vil

CÓM O EXTIRPAR LOS HÁBITOS PERNICIOSOS A TRAVES DE LA HIPNOSIS

EL HABITO DE FUMAR

Tan pronto la persona haya manifestado su deseo de alejarse de este hábito, proceda de la siguiente manera: Pregúntele: "¿Cuántos cigarrillos fuma al día?" "¿Ha intentado al­ guna vez alejarse de este vicio empleando su fuerza de voluntad?" Una vez que haya obtenido respuesta, dígale: "Debe saber que su colaboración es tan indispensable como lo es la aplicación de mis sis­ temas y mi buena voluntad de ayudarle,- por lo tanto, le ruego que siga fielmente todas mis instrucciones". Comience obteniendo una bue­ na relajación. Si en este primer intento no la logra, es preferible dejarlo para otra sesión. Trate de insistir hasta obtener un segundo grado de hipnosis. Tan pronto haya logrado la respuesta del mismo, déle la siguiente sugestión post-hípnótica, como estímulo condicionado. Su­ pongamos que ha manifestado que fuma 20 cigarrillos diarios; entonces dígale: "De ahora en adelante, a partir del momento en que despierte, cada vez que saque un cigarrillo de su bolsillo y se disponga a fumar mirará la hora, y sólo si su reloj marca la hora completa, sentirá deseos de fumar; en caso contrario, si intenta fumar, su cigarrillo tendrá un gusto insípido y ligeramente amargo. No le producirá ningún placer y sentirá cada vez más y más amargor en la boca. Sin embargo, el amar­ gor desaparecerá tan pronto tire el cigarrillo". Esta sugestión deberá ser repetida, como mínimo, seis veces consecutivas. Durante los siguien­ tes cuatro días será necesario repetir esta sugestión post-hipnótica, ob­ servando si durante esos días la sugestión ha sido efectiva. De ser así, pasaremos a la segunda etapa. SEGUNDA FASE

Dígale: "De ahora en adelante, cada vez que intente sacar un ci­ garrillo del bolsillo para fumarlo mirará su reloj, y únicamente lo fumará si marca una hora par, o sea: las 2, las 4, las ó, las 8, etc. Si intenta fumarlo cuando su reloj no marque la hora par, sentirá amargor en la boca y un malestar todavía más intenso que el anterior, y no olvide que tan pronto tire el cigarrillo estas molestias desaparecerán".

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Repita seis veces esta sugestión post-hipnótica durante cuatro días consecutivos: una sesión diaria, con las mismas sugerencias. TERCERA FASE ■

t

Una vez comprobado que la segunda fase ha sido positiva, dígale: "De ahora en adelante, cada vez que intente fumar un cigarrillo mirará, como siempre, su reloj, y únicamente fumará si éste marca las siguientes horas: 9, 1, 5, etc.; es decir, cada 4 horas. Si intenta fumar a cualquier otra hora, el cigarrillo le sabrá más amargo que nunca; tan desagradable lo sentirá, que se verá obligado a tirarlo. Tan pronto lo tire, estos sínto­ mas desaparecerán". Repita esta sugestión post-hipnótica diariamente, Fie. 45

durante cuatro días. Si esta última etapa ha dado un resultado positivo, pasaremos a la última fase, siempre que el sujeto manifieste el deseo de no querer fumar ni un solo cigarrillo. ÚLTIMA FASE

Una vez que esté en trance, por lo menos en segundo grado, dí­ gale: "De ahora en adelante, cada vez que intente fumar un cigarrillo sentirá la boca amarga y el cigarrillo tendrá un gusto tan desagradable que solamente tirándolo podrá librarse de esa molestia". Como siem­ pre, repita por lo menos seis veces esta sugestión. Refuerce la misma en sesiones diarias, consecutivas. Si al final los resultados no son del todo efectivos, tendrá que comenzar de nuevo por la primera etapa, hasta obtener el resultado deseado. Importante: La práctica me ha demostrado la necesidad de extirpar el hábito de fumar en forma lenta y progresiva. Los resultados son totalmente contradictorios cuando se intenta quitar el vicio de raíz. EJERCICIOS PRACTICOS

Relájese e imagínese cómo el sujeto tira el cigarrillo y cómo expe­ rimenta desagrado al fumar. Insista en esta visualización durante los días que dure el tratamiento. COMO EXTIRPAR EL VICIO DEL ALCOHOL

La hipnoterapia del alcohólico difiere de la del que tiene el hábito de fumar debido al acondicionamiento del organismo para eliminar determinada cantidad de alcohol. Por este motivo, la ayuda que po­ demos prestar al alcohólico dependerá más que del operador, del

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sincero deseo del sujeto para abandonar el vicio. Éste vive en constante tensión, y recurre al alcohol porque tiene efectos relajantes, y así le aleja de las motivaciones de frustración, miedos ocultos, complejos, etc., todos ellos factores desencadenantes de esa tensión. Antes de empezar el tratamiento es importante un acercamiento íntimo con el sujeto. Dicho acercamiento nos puede proporcionar datos valiosos y definitivos para conocer la causa o causas que le inducen a refugiarse en e! alcohol. Una vez que se haya establecido este rapport de confianza estaremos en condiciones de comenzar. El sistema es más o menos como el usado para el hábito de fumar, con la diferencia de que en el alcohólico el tratamiento deberá ser muchísimo más lento, si se quiere obtener éxito. Entendemos que para lograr una buena relajación tropezamos con algunas dificultades y fac­ tores de resistencia inconscientes y que serán necesarias varias sesiones para obtener una relajación relativa y una adecuada concentración mental. Iniciaremos la inducción hipnótica utilizando preferentemente un método de cansancio parpebral y braquial combinados. En los varios casos que he tratado, los métodos indirectos han sido los que me han proporcionado un efecto más rápido y satisfactorio. PRIMERA SEMANA

Una vez logrado el segundo grado le diremos lo siguiente: ' Está con sus amigos (o asiste a una reunión social); en este momento le están ofreciendo una copa de licor; lo bebe y lo siente como siempre: de sabor agradable. Ahora se acerca otro invitado y le llena por segunda vez la copa; también ésta la saborea con agrado. ¡Le ofrecen una tercera y también siente placer, pero mucha atención! Ahora le ofrecen una

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cuarta copa y tan pronto principia a bebería siente un sabor muy desa­ gradable. Empieza a sentir amargor en la boca, y la garganta se le está secando, pero estas sensaciones desaparecerán tan pronto deje de be­

solo sujeto le proporcionará una íntima satisfacción y le estimulará a trabajar para alejar a otros seres desdichados de la garra destructiva del alcoholismo.

ber". Las sugerencias deberán ser repetidas por lo menos seis veces y será necesario reforzarlas en varias sesiones durante ocho días. SEGUNDA SEMANA

Empezaremos esta segunda etapa, siempre que la primera haya dado resultados positivos; de lo contrario, hay que repetir una semana más la sugestión de la semana anterior.

PRACTICAS

Durante el tratamiento, en sus relajaciones diarias visualice al su­ jeto; véalo frente a usted; sitúe su imagen en medio de un grupo de personas; observe cómo las sugestiones post-hipnóticas son positivas. Sienta profundamente la satisfacción que le proporciona el haberlo con­ seguido. Repita esta imagen varias veces.

En esta segunda etapa le daremos las mismas sugerencias que en la primera, con la diferencia de que en vez de sentir efectos desagra­ dables en la cuarta copa, le diremos que los experimentará en la tercera. Hay que seguir suministrando estas sugestiones por espacio de una semana, en sesiones alternas. Si el resultado es positivo, pasaremos a la tercera semana, operando como en las anteriores, con la diferencia de que las sugerencias de mal sabor y síntomas desagradables ocurrirán al intentar tomar la segunda copa. Si al final de esta tercera etapa muestra deseos de beber una sola copa (la que le es necesaria para poder alternar con sus amigos), deberá Fie. 46

respetar este deseo, pero si le manifiesta que desea alejarse definitiva­ mente del licor, durante otra semana se le dan las sugestiones siguien­ te: "De ahora en adelante, cada vez que intente tomar un solo sorbo de licor, éste le sabrá amargo,- sentirá la garganta seca y le producirá una sensación de molestia y desagrado. Estas molestas sensaciones de­ saparecerán tan pronto deje de tomar". Si al cabo de una semana el efecto ha sido positivo, podremos estar seguros de que la sugestión post-hipnótica ha surtido el efecto deseado. Si no fuese así, deberá repetir el mismo sistema de sugestiones por dos semanas más. ” En el 90 por ciento de los casos, siguiendo estas indicaciones y res­ petando la metodología, obtendrá éxito.

En primer lugar trataremos sobre el hábito de los barbitúricos y tranquilizantes en general. Se cuentan por millones las personas que buscan alivio a su tensión en los fármacos. Su tratamiento deberá ser enfocado a través de la rela­ jación, ya que su práctica constituye un alivio inmediato camino para un alejamiento definitivo de ellos. Operaremos de la siguiente manera: Inicialmente interrogaremos a nuestro sujeto sobre las toma diariamente; supongamos que sean cuatro. Después logrado una buena relajación, empezaremos la inducción

y abre el

dosis que de haber hipnótica

Importante: Le recuerdo que no debe intentar nunca extirpar el

hasta llegar a un 2 .° grado de profundidad. Entonces dígale lo siguien­

vicio de raíz; suponiendo que tuviese éxito, por tratarse de un sujeto muy susceptible a la hipnosis, los efectos secundarios podrían ser más

te: "Tan pronto haya salido de este estado, únicamente podrá tomar tres dosis durante el día y se sentirá más calmado y relajado que si

dañinos y destructivos que el mismo hábito.

hubiera tomado cuatro. Tendrá una sensación de bienestar tan agra­

Muy importante: Antes de intentar este tratamiento debe establecer

dable como la que experimenta en este momento. Notará que sus

conversaciones amigables con el sujeto, y nunca comenzar sin haberse

músculos están flojos y sus nervios tranquilos". Repita esta sugestión

cerciorado de que sinceramente quiere alejarse del hábito. No olvide que muchos alcohólicos conscientemente manifiestan estos deseos, pero subconscientemente alimentan el contrario. El éxito obtenido con un

post-hipnótica por seis veces, como mínimo. Durante tres días realice

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una inducción diaria, repitiendo a cada inducción la misma sugestión post-hipnótica.

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Transcurridos estos tres días, debe darle la siguiente sugestión post-hipnótica. "Ya no necesitará más de dos tomas para obtener un estado de máxima tranquilidad. Sus músculos estarán cada vez más y más flo¡os. Ya no tendrá necesidad de tomar ninguna otra dosis". Repi­ tiendo las sugestiones por varias veces consecutivas. Los próximos pasos serán para la reducción a una sola pastilla, y la última etapa, la de las sugerencias repetidas de que, de ese momento en adelante, ya no necesitará recurrir a ninguna pastilla para sentirse bien, reposado y tranquilo. Que trabajará y realizará todos sus actos cotidianos sintiendo sus músculos flojos y sus nervios relajados. El hábito de alcaloides como opio, morfina, etc., debe ser tratado de acuerdo con el grado de intoxicación; para obtener éxito con el tra­ tamiento hipnótico, éste debe consistir en ir suprimiendo la intoxica­ ción lentamente, disminuyendo las dosis en forma progresiva. En casos que he tratado por hipnosis, he invertido de 10 a 12 semanas, y en los casos de intoxicación aguda, el tiempo de tratamiento ha sido mayor. Las sesiones de hipnosis serán tres por semana, y las sugestiones post­ hipnóticas suministradas deberán tener una duración mínima de 40 minutos cada una. Usted debe seguir el mismo ritmo que en los casos de alcoholismo, con la diferencia de que en éste la reducción de las dosis tiene que ser muchísimo más lenta. Antes de comenzar, asegúrese bien que el sujeto, consciente y subconscientemente, desea alejarse del hábito. Únicamente así tendrá probabilidades de éxito. Casos muy rebeldes resisten a la hipnosis, y el sujeto entonces deberá ser inter­ nado en un establecimiento de los muchos que existen para estos tristes casos. Importante: Evite hablarle de que su caso es difícil, aunque usted

Fie. 47

tan pronto se acueste, tendrá la misma sensación de bienestar que está sintiendo en este instante. Sus músculos se irán aflojando... y conse­ guirá un sueño profundo y reparador. A la mañana siguiente desper­ tará alegre y con el ánimo bien dispuesto para enfrentarse a sus tareas cotidianas". Repita estas sugestiones, en días sucesivos, por lo menos seis veces en cada sesión. Como ayuda coadyuvante recomiendo un baño tibio (no caliente), antes de acostarse, y baños de sol, tomados en forma metódica y progresiva. Por ejemplo: el primer día cinco minutos, aumentando un minuto diario hasta llegar a veinte, y tomar el sol en ropas menores, con aceite para la piel y unos lentes oscuros. La mejor hora, según la latitud, es de 9 a.m. a 11 a.m. Mientras más temprana la hora, mejor. Después del baño de sol, reposar en la sombra con el cuerpo abrigado por media hora. Indíquele que verifique si su cama queda con la cabecera al norte y los pies al sur. Si no es así, sugiérale que la cambie: de norte a sur va la línea magnética de la tierra. CÓM O ALIVIAR LA JAQUECA

considere que lo es. Repítale, una y otra vez, que si él colabora le será fácil liberarse de este hábito. Nunca trate de extirparlo en forma drás­ tica, y tenga muy en cuenta que aun después de haber terminado el tratamiento con éxito se le debe suministrar algún sustituto inofensivo, o placebo. Por ejemplo, en el caso de la cocaína, sustituirla con bicar­ bonato de sodio. COMO ELIMINAR EL INSOMNIO

La correcta relajación ordenada y las prácticas efectuadas por el sujeto, tan pronto le hemos enseñado los diversos sistemas, constituyen un alivio definitivo al problema del insomnio.

Cuando su origen se deba a un estado de tensión continuada, será

El tratamiento por sugestión post-hipnótica deberá ser realizado de la siguiente manera: Una vez en segundo grado, dígale: "Cada noche.

suficiente el aprendizaje de la relajación, y operando bajo hipnosis, las sugestiones son las siguientes: "Cada vez su dolor de cabeza se irá ex­

Fie. 48

60 5. — FA5&UAN ( l l l )

Ó1

tinguiendo hasta desaparecer por completo". El tratamiento por hip­ nosis es necesario realizarlo en dias alternos. En el caso de que no ceda, su origen puede ser orgánico, y entonces deberá indicarle que consulte a su médico. Cierto es que el 90 por ciento de los dolores de cabeza no son causados por motivos orgánicos, sino por la tensión nerviosa; si el caso es ése, en pocas sesiones los síntomas irán disminuyendo hasta desaparecer. Importante: Si usted no es médico, deberá limitar sus prácticas de hipnosis a todo lo que no implique curación de enfermedades, adminis­ tración de medicamentos o manipulación de partes del cuerpo. No ol­ vide que quitar un síntoma constituye un acto perjudicial para la salud del sujeto, pues el síntoma puede ser el aviso de una dolencia grave su obligación en estos casos es ayudar, ordenando a la persona que acuda al médico para un examen minucioso.

nuadas; las sugerencias, adecuadas a cada caso y repetidas muchísimas veces. No olvide que en la repetición está el éxito. En los casos de niños de corta edad en los que, por tener dispersa la atención, se encuentra dificultad para la inducción hipnótica, deberá servirse del sueño fisioló­ gico. Trate de operar en las dos horas siguientes de haber conciliado el sueño, pues está comprobado que durante este lapso tenemos acceso al subconsciente del niño. Las sugerencias repetidas en ese estado, usando un tono de voz bajo, son tan efectivas como bajo la inducción hipnótica, con la sola diferencia de que el tratamiento debe ser mu­ chísimo más prolongado para lograr los mismos resultados. En mis experiencias, y en muchas de las de mis alumnos que han empleado estos sistemas para alejar a sus hijos de hábitos y formas de comporta­ miento perniciosas, los resultados obtenidos han sido positivos en más del 80 por ciento de los casos tratados. Si se ve obligado a emplear este último método, es conveniente usar su imaginación y condicionar al niño a través de una historia, relatada en un tono de voz suave y

p r á c t ic a s

Relájese y visualice en su pantalla mental al sujeto que está ayudando. Véalo libre de su vicio o aliviado de su insomnio; acos­ tado, durmiendo plácidamente, con la cabeza fresca, bien relajado y tranquilo. Haga trabajar los tres elementos: PENSAMIENTO, EMOCIÓN

monótono, a la hora habitual en que el niño se dispone a conciliar el sueño. El estímulo "palabra", empleando la monotonía, le precipitará al sueño fisiológico; después de la historia debe darle las sugestiones que el caso requiera.

y ACCIÓN. LA HIPNOSIS APLICADA AL DEPORTE Entre los muchos sistemas utilizados para estimular la capacidad física, el más común es a través de las drogas. Este procedimiento ha sido justamente combatido. En varios países se utilizan con gran éxito la hipnosis y la sugestión para lograr idénticos resultados, sin la menor posibilidad de efectos

Fie. 49

secundarios perturbadores. En Estados Unidos, las grandes ligas de basketball y otros centros de deportes cuentan con un experto en sugestión. La correcta aplica­ ción de los métodos de relajación en grupo mejora notablemente el

Entre los varios hábitos posibles de ayudar mediante la hipnosis figura el comerse las uñas, tics involuntarios, eneuresis (mojar la cama), timidez, diversas formas negativas de comportamiento, falta de con­ centración para el estudio y varios complejos de inferioridad. Todos ellos son el producto de una tensión nerviosa acumulada en mucho

sismo. De cualquier manera, la posibilidad de lograr la victoria estará

tiempo. La relajación constituye un elemento básico y definitivo para

en relación directa con la aplicación de procedimientos que consigan

su erradicación. Como coadyuvante efectivo, las sugestiones post-hipnóticas, suministradas bajo primero o segundo grado, constituyen un sistema psicoterapéutico de valor incalculable. Al igual que en los casos de extirpación de un vicio, las sesiones deberán ser cortas, pero conti­

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rendimiento de cada uno de los componentes del equipo y, como es lógico, influye en el de la totalidad. Las sugestiones post-hipnóticas adecuadas eliminan la aprensión y aumentan la confianza en sí mismo, alejando la tensión y el nervio­

eliminar los diversos factores psíquicos inhibitorios. No existe ninguna razón en contra de que un experto en hipnosis utilice sus conocimientos para obtener del deportista su máximo ren­ dimiento. 63

FASCINACION DE ANIMALES

Tercer movimiento: Coloque al animal patas arriba sobre una mesa.

Fig. 54

Fie. 55

Fig. 56

Cuarto movimiento: Suelte la mano derecha que sujeta las patas. Fie. SO

Quinto movimiento; Colóquele su mano derecha, con la palma de Es un error muy popularizado creer que los animales pueden ser hipnotizados, al igual que los seres humanos; por ser irracionales, no admiten la sugestión verbal, excepto cuando las palabras que pronun­ ciemos sirvan como clave para desencadenar algún reflejo condicionado preestablecido. En realidad, lo que hace el hipnotizador cuando se trata de animales es provocar una parálisis senso-motora mediante estímulos táctiles que obran como excitantes sobre diversos centros nerviosos, logrando de esta manera una determinada inhibición cortical hasta dejar al animal totalmente paralizado. Este acto causa en el auditorio gran impacto y su ejecución es fácil, pero los movimientos y estímulos táctiles suministrados deben ser precisos y en puntos claves. Observe las figuras y familiarícese con las posiciones de sus manos al tomar el animal:

la mano extendida, y con la punta de los dedos alcance el centro de las patas delanteras (pechuga). Realice un estímulo muy suave sobre esa parte. Sexto movimiento; Suelte la cabeza, que ha mantenido en la mano izquierda, mientras sigue sujetándolo con su mano derecha. Procure que el animal quede recto sobre la mesa.

Fie. 57

Fie. 51

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SOBRE UN GALIO

Primer movimiento; Con su mano derecha tome el animal por las patas y manténgalo en posición vertical. Segundo movimiento; Deslice su mano izquierda por detrás del pescuezo hasta sujetar la cabeza suavamente entre su mano. Mueva los dedos de su mano izquierda, estimulando la parte posterior de su cabeza y pescuezo: "carótidas". Mientras realiza este movimiento mire fijamente al animal, al objeto de dar al acto más espectacularidad.

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Séptimo movimiento: Suelte su mano derecha y deje al animal libre, tumbado patas arriba; quedará totalmente inmóvil por el tiempo que usted quiera. Sin tocar al animal, efectúe pases con ambas manos, simulando que son pases magnéticos; aunque dichos movimientos carecen de efecti­ vidad, causan gran efecto. ACTO DE DESPERTAR AL ANIMAL

Haga un movimiento con sus dos manos, dirigido a la cabeza del animal, mientras que, disimuladamente, sopla muy fuerte sobre sus ojos. El animal perderá inmediatamente su inmovilidad. Idéntico sistema podrá ser usado con toda clase de animales que

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L - C - V t ll

LA HIPNOSIS Y LA PARAPSICOLOGIA

Entendemos por fenómenos para norma les ei conocimiento que podemos tener de las cosas sin la intervención de nuestros sentidos sensoriales. Es importante distinguir los que se producen en forma inconsciente, es decir: que ocurren ocasionalmente, sin que intervenga Fie. 58

sean manejables, tales como: conejos, patos, palomas, toda especie de pájaros, reptiles, etc, FRENTE A l PÚBLICO

Importante: No intente realizar esta experiencia con perros y gatos porque, aunque la inhibición es posible en ellos, mediante el estímulo táctil en las dos partes indicadas, éstos, al sentir la excitación motora, ladran, se mueven y arañan; dificultades que deslucen totalmente los efectos positivos de ella. Muy importante: Antes de coger al animal tome contacto y com­ pruebe que no está tenso. Aunque le parezca extraño, el animal per­

nuestra voluntad, de los que pueden ser provocados volitivamente por nosotros. La telepatía: La posibilidad de poder captar el pensamiento de otras personas. La clarividencia o percepción extrasensorial: La facultad de ver a través de los cuerpos opacos. La metagnomía: La facultad que permite, mediante el contacto de un objeto perteneciente a una persona, ponerse en relación anímica con ella. La escritura automática: La posibilidad de escribir sin la intervención de la mente consciente.

cibe su tensión muscular y esto influye en el resultado de la experiencia.

La psicoquinesis: La facultad que permite la exteriorización de las

Ejercicios prácticos: Relájese y visualice claramente, en su pantalla

vibraciones psíquicas, logrando desplazar con ellas objetos inanimados.

menta), al sujeto que quiere ayudar en la corrección de sus hábitos.

La premonición o precognición: La facultad de predecir un aconte­

Véalo claramente, modificado y alejado de esa forma de comporta­

cimiento que todavía no ha sucedido. Estos fenómenos han sido estudiados y comprobados por un gran

miento. Si emplea el sueño fisiológico, repita las sugerencias varias veces en estado de relajación y ensaye su tono de voz hasta que con­ sidere que es correcto. Practique con varios animales antes de ofrecer una demostración en grupo. Ensaye una y otra vez los movimientos indicados anterior­ mente.

número de centros parapsicológícos esparcidos por el mundo y que en forma minuciosa y objetiva están dedicados a su investigación. Todas estas facultades constituyen diferentes manifestaciones de un proceso básico desconocido. El mayor obstáculo con que ha tropezado la investigación de labo­ ratorio ha sido la dificultad de eliminar los factores inhibitorios, tales como ambiente, estado emocional del sujeto y otros factores negativos que son elementos perturbadores. Muchos de estos fenómenos han sido realizados en el cuarto oscuro de los centros espiritistas; es bien sabido que, en dichos centros, la des­ carga emocional del ambiente, condicionado por estímulos religiosos, favorece su manifestación. Para encontrar usted sujetos que posean algunas facultades para­

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normales puede realizar los tests comprobatorios que más adelante le indico mientras practica la hipnosis. Descubrir un buen sensitivo cons­ tituye, ba¡o todos los aspectos, una gran adquisición. No intente en­

nadie la vea. Introdúzcala en un sobre opaco del mismo tamaño de la

contrar la explicación racional de los mismos porque hasta hoy ningún investigador lo ha logrado.

METAGNOMÍA

He aquí los tests comprobatorios que deberá efectuar para cada una de las facultades paranormales: En primer lugar, reproduzca estos dibujos en forma de cartas ma­ nejables:

rsn Estrella

A

O+ A Círculo

Cruz

Triángulo

Siempre en trance profundo, entregue al sujeto un objeto que per­ tenezca a una persona que usted conoce; así será fácil una ulterior com­ probación. Dígale que coloque el objeto en la palma de su mano iz­ quierda, cubriéndolo con su mano derecha, y que relate todo lo que acuda a su mente en este instante: estado anímico, acontecimientos, molestias, etc. No tomaremos en cuenta uno o dos aciertos entre varias respuestas. Siempre serán necesarias varias sesiones continuas, aun en el caso de que en el primer intento se hayan obtenido resultados aceptables.

Ondas

Fie. 59

Estos son los símbolos de E. S. P. (Extra Sensorial Perception): Per­ cepción Extra Sensorial: un círculo, una estrella, una cruz, un triángulo y unas ondas. Sitúe al sujeto bajo el trance hipnótico que le sea posible. Coloqúese detrás de él, escoja una de las cartas E. S. P. y dígale: "Den­ tro de un instante voy a tratar de transmitirle uno de estos símbolos. Imagínese un cuadro negro a la altura de sus ojos; allí aparecerá la imagen de la carta que le esté transmitiendo. Tan pronto perciba la ima­ gen en su pantalla negra, dígalo. Si prefiere dibujarla en un papel, hágalo". Usted deberá visualizar nítidamente el símbolo que le trans­ mite y verlo grabado en el cuadro negro que se supone está frente a los ojos del sujeto. Si de diez pruebas seis resultan positivas, habrá indicios suficientes de que posee facultades telepáticas. Menos de este porcentaje, la facultad es dudosa y será necesario realizar nuevas se­ siones comprobatorias. De uno a tres aciertos en cada diez intentos deberá considerarse una respuesta negativa, toda vez que este por­ centaje entra en el cálculo del azar. No olvide que antes de despertarlo debe darle las sugestiones si­ guientes: "En la próxima sesión, sus facultades telepáticas se agudi­ zarán más y más; cada día percibirá mejor los mensajes mentales que yo le transmita". CLARIVIDENCIA

Para este test opere en la misma forma que en el anterior, pero tomando la precaución de escoger una carta al azar, sin que usted ni

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carta, sugiriéndole que trate de ver la carta que está dentro del sobre.

ESCRITURA AUTOMÁTICA

Coloque frente al sujeto un papel de tamaño grande y un lapicero en su mano derecha y dígale: "Continúa plácida y profundamente dor­ mido. En este infante ya no siente su mano derecha. Su mano comienza a moverse y, sin que tenga conocimiento de ello, se mueve y escribe". Si así ocurriere, estaremos frente a un sensible con esta facultad. En sesiones ulteriores, obtendremos información precisa a través de la escritura automática, sin que él tenga conocimiento de todo lo que escribió. PSICQQUINES1S

Dígale que una fuerte vibración se desprenderá de todo su cuerpo sobre un pequeño objeto. Al principio, la vibración será ligera y el objeto se moverá. Repita las sugerencias varias veces consecutivas; si hay un efecto positivo, estamos ante una persona de facultades paranormales nada comunes. Importante: EJ objeto debe permanecer a una distancia aproximada de 25 a 30 cm del sujeto. DESDOBLAMIENTO

Diga: "Usted seguirá sentado donde se encuentra y poco a poco sentirá una pequeña sacudida en su plexo solar, como si algo se des­ prendiese, y experimentará suavemente la sensación de que camina al lugar a donde yo le dirija". Dígale que se dirija a tal o cual lugar. En el primer intento, ordénele que vaya a alguna estancia contigua, con el objeto de poder comprobar lo que va percibiendo. Serán necesarias

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varias sesiones para la comprobación definitiva de que el sujeto posee esta facultad. PREMONICIÓN

Ordénele que abra los ojos y que continúe profundamente dor­ mido. Dígale que en ese instante está leyendo la prensa de tal fecha futura que le indica. Ordénele que vea la noticia o el suceso más im­ portante que aparece en primera página: espere obtener la confir­ mación en el día previsto. Si la premonición realizada es positiva, repita este test en otras sesiones hasta obtener un porcentaje valioso que confirme definitivamente la posesión de esta rara y valiosa fa­ cultad.

Fie. 60

concentración mental tiene su reacción muscular inconsciente, más o menos intensa. Tan pronto se familiarice con esta técnica, le resultará

Importante: Mientras esté realizando los tests, nunca anticipe los

sumamente fácil captar las reacciones musculares en las demás perso­ nas y podrá descubrir cuándo una persona miente. Es sabido que toda

resultados, ni positiva ni negativamente. No insista si el primero y el

mentira produce diversas reacciones neuromusculares, a veces imper­

segundo intentos han sido negativos. Si en alguna de estas compro­ baciones obtiene respuestas positivas, espere al día siguiente; nunca

ceptibles, que, observando con máxima atención, es posible captarlas. El detector de mentiras está basado en la lectura de estas reacciones,

repita la sesión el mismo día. Los indicios que nos hacen sospechar que el sujeto posee facultades

a las que aun los espías, que son personas muy habituadas a controlar sus reacciones emocionales y musculares, sucumben.

paranormales son múltiples y muy variados: uno de los más comunes es cuando manifiesta que ha sido sonámbulo en alguna oportunidad,

Para iniciarse deberá comenzar por captar un número entre el 1 y el 10, o del 11 al 20. Proceda de la siguiente manera: Pídale a la per­

o que alguna vez soñó un acontecimiento que más tarde se cumplió.

sona que piense un número entre el 1 y el 10. Diga: "Yo iré contando

Si bien es cierto que éstos constituyen una base, están lejos de ser una evidencia. Muy importante: Si el azar le favorece y tropieza con un sensible con alguna facultad, por favor, no se entusiasme demasiado. Si arras­ trado por una lógica emoción fatiga al sujeto, es probable que en las siguientes oportunidades se resista a la inducción hipnótica y así usted perderá una magnífica oportunidad. Es mejor efectuar sesiones cortas y espaciadas para que de esta manera él se someta gustoso en otras oportunidades. PRACTICAS

Estudie bien las palabras y sugerencias que debe dar en cada uno de los tests comprobatorios. TELEPATÍA MOTORA O PSEUDOTELEPATÍA Esta forma de telepatía es denominada Gumberlanismo, ya que se atribuye a dicho personaje ser el iniciador de la misma. Está basado en la simple lectura muscular, teniendo en cuenta que todo acto de

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los números lentamente en voz alta, y cuando llegue al número que usted pensó, diga mentalmente: 'Éste es' Tome la mano del sujeto y observe atentamente su rostro; al pro­ nunciar el número que él pensó, usted notará una reacción en cual­ quiera de los músculos de la cara o en la mano que tiene entre las suyas. Esta sencilla experiencia causa gran efecto y todos quedan con­ vencidos de que usted posee facultades telepáticas. Una variación interesante de lo anterior consiste en pedir al sujeto que piense el nombre de una persona que se encuentra en el grupo. A continuación, usted diga a los del grupo que cada uno dé su nombre en voz alta; advierta al sujeto que, tan pronto como oiga el nombre que ha pensado, diga mentalmente: "Éste es". Proceda de igual manera que en la anterior experiencia: tómele la mano y observe atentamente las reacciones musculares cada vez que escucha un nombre. TELEPATÍA MOTORA Para la siguiente experiencia deberá hacer un pequeño preámbulo, diciendo algo como lo siguiente: "¡Mucha atención! Como han podido comprobar, soy capaz de captar en la mente de otra persona el número o el nombre que piense. Ahora voy a demostrarles que también es

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posible para mí encontrar un objeto cualquiera que uno de ustedes esconda en cualquier lugar de esta sala". A continuación pida que le sea prestado un objeto y entréguelo a otra persona para que lo es­ conda. Ahora diga: "Mis ojos serán vendados con un pañuelo cual­ quiera"; solicítelo a la dueña de la casa o a uno del grupo. Explíqueles que para llevar a cabo esta experiencia necesita una persona que sepa con exactitud en dónde está escondido el objeto y que le dirija men­ talmente. "Todo lo que haré será tomar su pulso para poder estable­ cer contacto mental con ella."

Una vez que pueda interpretar fielmente las reacciones musculares le será sumamente fácil saber cuándo una persona miente deliberada­ mente. Dos son los grupos musculares que reaccionan inconsciente­ mente cuando la persona miente: si permanece sentada, observe sus manos y comprobará en ellas una pequeña contracción en el instante de mentir. Otros músculos que reaccionan casi siempre son los de los ojos; al mentir se advierte una efectiva reacción de expectativa, como diciendo: " ... a ver si te lo has creído". Muy importante: Si desea utilizar este maravilloso secreto de lec­ tura, impóngase la condición de no revelarlo a nadie. Tan pronto sus amigos sean conocedores de él, estarán dispuestos a establecer control sobre sus propios grupos musculares y habrá perdido usted la opor­ tunidad de poder interpretar sus reacciones. PRÁCTICAS Empiece ensayando con cualquiera y procure conservar la actitud mental antes indicada. Dígale que piense en una dirección: derecha, izquierda, atrás, arriba, abajo, y, tomándole el pulso, usted irá diciendo

Coloqúese delante de su guía; tómele el pulso y dígale que piense, no en el objeto ni en el lugar en donde está, sino en el camino y en los obstáculos que debe usted salvar para llegar al mismo. Tan pronto

frente a grupos más numerosos. Antes de comenzar tome contacto,

se concentre podrá captar nítidamente sus reacciones musculares a tra­ vés de su pulso, las que le indicarán con precisión la dirección exacta

respire profundamente y así, siendo dueño de sí mismo, le será fácil concentrarse para captar las sutiles reacciones musculares de los demás.

cada una de las direcciones en que él está pensando. Ensaye primero ante un grupo muy reducido para después poderlo efectuar con éxito

que debe tomar. Una vez que sepa la dirección exacta, suéltele el pulso por unos instantes. Vuelva a tomárselo después de haber dado unos cuantos pasos en la dirección captada y tome otra vez contacto para obtener una nueva y precisa información. Esta experiencia, bien reali­ zada, causa asombro en el grupo y todos llegan a la convicción de que usted es un experto telepático. Importante: No repita ninguna experiencia. Su actitud mental, desde que inicia la demostración, debe ser la de no imaginarse nada. Déjese ir automáticamente, siguiendo las indicaciones de los movimientos musculares inconscientes que el sujeto le va suministrando. Con un poco de entrenamiento, estoy seguro de que se familiarizará con este tipo de lectura muscular y de que podrá efectuar espectaculares experiencias telepáticas. Tan pronto obtenga el primer éxito, no solamente ganará confianza en sí mismo, sino que creará un poderoso estímulo condi­ cionado de prestigio en su auditorio. Algunos de mis alumnos han lle­ gado a ser verdaderos expertos en este tipo de lectura. Muchos de ellos lograron abrir la combinación de una caja fuerte con sólo tomar contacto con el pulso del sujeto que conocía dicha combinación.

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L - C - IX COM O OFRECER UNA BRILLANTE DEMOSTRACION DE SUS PODERES MENTALES

Si a estas alturas ha estudiado bien mis lecciones y las ha practicado, se encuentra en magníficas condiciones para poder ofrecer una brillante demostración de estas disciplinas mentales a sus familiares y amigos, o también a un auditorio más numeroso. Su habitual discurso de presentación deberá ser corto, interesante e informativo. Si no es así, será fácil que su público caiga en el aburri­ miento. No olvide que él está frente a usted para presenciar una de­ mostración de mentalismo y no para escuchar una conferencia. A me­ dida que gane en experiencia, intuitivamente aprenderá a modificar su discurso para que sea adecuado a cada tipo de auditorio. El lugar donde actúe debe estar provisto de un semicírculo de sillas. Antes de comenzar, tome contacto, respire profundamente y, sobre todo, tenga una sonrisa amigable.

mentos, la concentración y el silencio son elementos indispensables". No olvide que usted depende totalmente de su público y que necesita su cooperación para poder ofrecer una representación con éxito. Sepa que el 20 por ciento del público es altamente sugestiona­ ble, así que siempre se encuentran diferentes sujetos que permiten hacer una buena demostración. No se desanime si por cualquier even­ tualidad encuentra un público hostil y poco cooperador. Un público más o menos numeroso está compuesto de la siguiente manera: 20 por ciento de escépticos, 60 por ciento de curiosos y 20 por ciento de espectadores casuales que han venido a distraerse. Los del grupo de curiosos serán sus mejores sujetos. Haga lo posible para dirigirse a ellos y estudiar sus rasgos faciales, observando las reglas de clasificación que le indiqué en la segunda parte. Seleccione primero a los triangu­ lares y, a falta de ellos, a los ovoides, y así sucesivamente. Si logra un primer éxito con cualquiera de estos sujetos, convencerá a los escép­ ticos de que mucho se puede esperar del hipnotismo. Ellos estarán poco a poco seguros de que usted es un experto en lo que hace. Al mismo tiempo ganará el interés de los observadores casuales, de tal manera que ellos estarán deseosos de ver lo que puede usted ofrecerles. PRIMERA EXPERIENCIA

Dígale al auditorio que cada vez que usted diga un número, del 1 al 20, cualquiera de ellos pronuncie el nombre de un objeto o un nombre propio, etc. Advierta que escuchará una sola vez estas pala­ bras, que las grabará en la memoria y que podrá repetirlas correlati­ vamente a la inversa y también salteadas. Empiece lentamente y vaya asociando las palabras, tal como aprendió en la segunda parte. Repítalas después en forma correlativa, luego a la inversa y, finalmente, salteadas. Si ha estudiado el calendario perpetuo del libro segundo, diga al Fie. 62 PALABRAS DE PRESENTACIÓN

"Señoras y señores: Voy a tener el placer de ofrecerles unas demos­ traciones científicas de mentalismo. A través de ellas podrán observar cuán fácil es manejar en mi memoria palabras y números. "Comprobarán cómo una mente disciplinada puede captar el pen­ samiento de otra y encontrar un objeto perfectamente escondido sin utilizar el órgano visual, y, a través del poder de la mente, dejar in­ móvil a un animal e influir en la voluntad de otra persona. Antes de comenzar debo advertirles que prefiero el silencio a los aplausos que me puedan prodigar. Ustedes saben muy bien que, para estos experi­

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auditorio: "Señoras y señores: Está grabado en mi memoria todo el ca­ lendario desde el año 1900 hasta el 2000. Cualquiera de ustedes puede decir una fecha memorable de su vida: fecha, mes y año, que yo al instante le diré qué día de la semana era o será. Le ruego a la persona que me indique una fecha que esté segura de saber el día de la semana al que corresponde, para así poder hacer la comproba­ ción de mi respuesta". También puede suministrar al auditorio calen­ darios de varios años para así poder efectuar una comprobación inme­ diata. Esta experiencia, bien realizada, causa asombro al auditorio.

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SEGUNDA EXPERIENCIA

espectaculares e inofensivas; por ejemplo: sensación de frío; que son

Diríjase a una persona del auditorio, preferentemente de configu­ ración triangular; dígale que piense un número del 1 a l l 0 y que usted se lo adivinará. Proceda según las indicaciones para esta experiencia.

grandes violinistas o pianistas y están ofreciendo un concierto o que conducen un automóvil.

TERCERA EXPERIENCIA

pronto haya sido cumplida. Al finalizar, agradezca amablemente al auditorio la atención que le prestaron.

Solicite un objeto a un espectador e invite a que alguno lo esconda. Explique que lo encontrará con tos ojos completamente vendados, uti­ lizando la mente de una persona que sepa concentrarse. Proceda según las indicaciones ya estudiadas. CUARTA EXPERIENCIA

En el caso de que usted cuente con algún animal adecuado, como un gallo, un conejo, un pájaro, etc., realice una demostración de fas­ cinación del mismo. QUINTA EXPERIENCIA

Anúncieles que les ofrecerá unas demostraciones de sugestión y de hipnosis, para lo cual le es más necesaria que nunca la cooperación de algunos voluntarios. Diga: "(Ahora, mucha atención! Todos cuantos deseen tomar parte en esta interesante prueba de relajación, tengan la amabilidad de ponerse en pie. A los que no lo deseen, les ruego per­ manecer sentados. ¡Atención! Los que se encuentran en pie extiendan sus brazos al frente; cierren los ojos y sigan mis indicaciones. Com­ prendo muy bien que para algunas personas es muy difícil poderse concentrar. Precisamente esta experiencia sirve para descubrir a aque­ llos cuya facilidad de concentración es más rápida.

Para finalizar la sesión ordene a cada uno de sus sujetos una su­ gestión post-hipnótica simple. No olvide quitarles la sugestión tan

Importante: Nunca ordene a sus sujetos nada que pueda herir su amor propio o que pueda causar una molestia física o moral. Abstén­ gase de realizar en grupo ninguna demostración de regresión ni de anestesia. No olvide que la duración máxima de una demostración en grupo no debe pasar de una hora en total. Si así lo hace, ellos quedarán siempre deseosos de presenciarla de nuevo. Antes de intentar ofrecer estas experiencias a un grupo numeroso, debe realizarlas varias veces en uno pequeño de amigos y familiares. Si cumple mis instrucciones, esté seguro de que obtendrá un gran éxito y ganará prestigio; esto aumentará la confianza en sí mismo. Trate de aprovechar cuantas oportunidades se le ofrezcan para poder practicar. Es natural que en las primeras sesiones se sienta algo inseguro, y hasta es muy posible que olvide las palabras que debe usar; si así sucediera, no se olvide de tomar contacto y respirar profundamente por dos o tres veces. PRÁCTICAS

Dos días antes de la sesión, relájese y véase en su pantalla tal cual deberá comportarse. Viva intensamente la sensación de éxito y de se­ guridad personal frente a su público.

Cierren los ojos y respiren profunda y pausadamente por tres veces consecutivas. ¡Mucha atención! Ahora, los que se han concentrado van a sentir, a través de mi mente, sus brazos pesados, y éstos irán ca­ yendo lentamente. ¡Atención! U no ..., d o s..., tres... Los brazos pesan..., pesan más y m ás... y van cayendo..., caerán irresistiblemente...". Observe a los que han resultado positivos, cayendo sus brazos; in­ vítelos a sentarse en las sillas previamente dispuestas. Empiece con las experiencias de sugestión 2, 3 y 4. Si alguno de ellos no resulta posi­ tivo, invítelo a regresar a su lugar. Prosiga con las experiencias de sugestión en estado despierto con los restantes. Tan pronto considere que están suficientemente condicionados, empiece la inducción hipnó­ tica, aplicándole a cada uno el sistema que considere más apropiado. A continuación puede efectuar otras pruebas que resulten altamente

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77 6 . --- FA SSH A N ( ] [ [ )

tizar estas ocho sesiones los resultados no han sido satisfactorios, no se impaciente; cambie al siguiente: método parpebral. Siga, cada ocho

L-C-X

AUTOHIPNOSIS

Es lograr para sí mismo un estado de profundidad intensa de suges­ tión que, una vez conseguida, le permita darse órdenes a sí mismo. Tan pronto esté adiestrado y la use con constancia, le será posible ali­ viarse muchos males y modificar sus formas de comportamiento, sus malos hábitos y, al propio tiempo, estimular la relajación y la concen­ tración. A través de la autohípnosis se llega a obtener acceso directo

días, empleando un método distinto y tenga la absoluta certeza de que encontrará el sistema adecuado para lograr la autohípnosis. En el caso, poco probable, de que usted, por causas' y resistencias de tipo subcons­ ciente, no la haya logrado, le recomiendo que utilice los dos sistemas sensoriales más apropiados, que son: el hipnodisco, como estímulo vi­ sual, y un simple reloj despertador para el auditivo. Sitúe el hipnodisco frente a sus ojos mientras escucha atenta­ mente el tic-tac del reloj. Entre tanto visualice y repita las sugerencias mentalmente sobre si mismo: "Mis párpados se vuelven más y más

tando a medida que aquélla va siendo más profunda. También le será

pesados y voy sintiendo intensos deseos de cerrarlos; siento mi cuerpo cansado y pesado..., etc.", al igual que (a metodología, que ya conoce, utilizada en la heterohipnosis.

fácil clavarse sus propias clavijas, que se conectarán a su debido tiempo y responderán en forma positiva en el momento necesario.

Otro sistema con resultados bastante positivos, especialmente cuan­ do los otros han fallado, consiste en utilizar una grabación en cinta

Los sistemas para la autohípnosis son muchos y variados, pero si sigue el que le indico llegará con facilidad a obtener un grado de pro­ fundidad aceptable y suficiente para sus diversas motivaciones. Éste

magnetofónica.

al subconsciente, ya que las respuestas del consciente se van debili­

ha sido adoptado por muchos de mis alumnos y todos los que persis­ tieron han obtenido grandes progresos.

LA AUTOHIPNOSIS PARA ESTUDIAR Una vez que haya encontrado el sistema de inducción más ade­ cuado, es sumamente importante conUnuar con el mismo y proseguir

METODOLOGIA PARA LA AUTOHIPNOSIS

hasta lograr un perfecto acondicionamiento. Ahora y siempre que ne­ cesite estudiar, podrá hacerlo de la mejor manera y con el menor es­

Vamos a partir de la base de que ya está en capacidad de obtener una aceptable relajación muscular. Una vez lograda, imagínese que

fuerzo. El grado de profundidad considerado más favorable es el equiva^

usted es su propio sujeto. Háblele a su cuerpo tal como lo haría a un sujeto a quien intentara hacerle la inducción hipnótica. Al igual que en

lente a un primer grado en la hipnosis. En este estado experimentará un agradable sopor y una abstracción total a todo estímulo alterador,

(as técnicas que aprendió de inducción hipnótica, aquí también es indis­

tanto interno como externo. Este sistema es efectivo para todos, pero

pensable que vaya escogiendo cuál es el método más adecuado. Co­

especialmente indicado para los estudiantes dispersos. Tan pronto lo haya obtenido, proceda de la siguiente manera: tome el libro y em­

mience con los primeros sistemas de acondicionamiento indicados para obtener la sugestión en estado despierto. Empiece con los brazos,- siga con los ojos y las manos. Insista por varios días en estas tres pruebas de acondicionamiento. Ordénese mentalmente como si se tratara de otro sujeto. No prosiga con otras experiencias hasta no haber obtenido una respuesta afirmativa en cualquiera de estas tres pruebas. La persis­ tencia es indispensable, puesto que las respuestas del consciente se van debilitando cada vez más y más. Una vez obtenido este resul­ tado positivo, usted estará en buen camino para obtener la autohípnosis completa. Empiece por el primer sistema de inducción: método de la estrella, y prosiga con el mismo por ocho días consecutivos. Si al fina-

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piece leyendo toda la lección. Hágalo como si se tratara de leer el pe­ riódico, es decir: sin el menor interés en estudiar. Lea con máxima rapidez. Ahora cierre el libro. También cierre los ojos e imprima movimiento a las diversas imágenes que captó. Sin darse cuenta, las asoció fácil­ mente. Ya está usted familiarizado con este sistema desde cuando estu­ dió los procedimientos para el desarrollo de la memoria. Repita por tres veces consecutivas la misma operación y pruebe de repetir en voz alta todo cuanto logró retener. Quedará asombrado al comprobar que le resulta fácil repetir la lección, no literalmente, claro está, sino el resu­

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men de la misma. Lo importante es que aprendió y estudió con el mí­ nimo de esfuerzo, sin gastar energías y mientras reposaba. Desde este instante, el estudiar, lejos de ser una actividad desagradable, resultará algo muy grato para usted. A medida que se vaya acondicionando a este sistema, cada vez le será más fácil y placentero y se sentirá di­

tra n d o e n e l e sta d o a u to h ip n ó tico . A c a ric ie esta im a g e n y trate d e v i­ v irla m e n ta lm e n te . S o ste n g a las im á g e n e s d e to d a s las v e n ta ja s q u e la a u to h ip n o sis le p u e d e rep o rtar. V e a có m o ha m o d ifica d o , a tra v é s d e la m ism a , a q u e lla s te n d e n c ia s y fo rm a s d e c o m p o rta m ie n to n e g a tiv a s para su v id a .

choso al tener la convicción de que puede estudiar mientras descansa. Enseñe este método a sus hijos. No olvide que primero es una buena relajación y luego es el estudio, y así éste, en vez de ser un acto penoso, se convierte en un pasatiempo. DESH1PNOTIZACIÓN

Para obtenerla bastará que unos momentos antes de la inducción se repita varias veces la hora en que desea salir de este estado. Esta orden post-hipnótica, o clavija conectada, responderá en el momento preciso. Si tuviese dificultad para abrir los ojos, no se impaciente. Siga el método empleado con cualquier sujeto cuando deseamos que la su­ gestión o la hipnosis desaparezcan: ordénese que contará hasta cinco y que al escuchar ese número sus ojos se abrirán. Importante: Me permito advertirle que, en muchos casos, el sujeto me ha manifestado que no había sentido tos efectos reales de una hip­ nosis profunda. Generalmente, estas personas tienen un concepto falso de lo que es la hipnosis. En la autohipnosis no se pierde la consciencia, como muchos se imaginan. La autohipnosis se sitúa entre un primero y segundo grado de profundidad y equivale a la total abstracción, que fácilmente logran los yoguis y otras sectas orientales. La resistencia a la obtención de la autohipnosis corresponde a un esfuerzo negativo anterior, que generalmente es inconsciente; en este caso se deberá ape­ lar a todos los medios necesarios para disipar esa compulsión. Muy importante: Cuando se disponga a practicar la autohipnosis, busque un tugar adecuado que reúna las condiciones de confort y si­ lencio necesarios. Si está interesado en aprovechar la autohipnosis para lograr un sueño fisiológico más profundo, una vez bien relajado y antes de em­ pezar los procesos de autohipnosis, deberá visualizarse durmiendo profunda y plácidamente y verá nítidamente la hora en que desea despertar. Visualice estas imágenes por varias veces consecutivas. PRACTICA5

Durante las horas del día, y mientras realiza sus tareas habituales, tome contacto, sienta el placer de verse profundamente relajado y en­

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8)

mente está activa hace el oficio de censor, y a través de ella pasan los

L-C -X I

HIPNOTERAPIA

El uso de la hipnosis en la medicina y en la psicología aplicada ha constituido un gran éxito después de la última guerra mundial. Cierto es que algunos profesionales, al desconocer la técnica hip­ nótica, no la han apreciado en todo su valor. A pesar de esto, se cuen­ tan por millares los médicos y psicólogos que logran éxitos fabulosos después de un sincero acercamiento a ella. De por sí, la historia de la hipnosis revela la larga lucha de muchos

estímulos externos para alojarse en la mente subconsciente. El hlpnotista, mediante procedimientos diversos, inhibe al censor y de esta forma puede llegar fácilmente a la mente subconsciente y controlar pensamientos y acciones. En la psicoterapia, el psicólogo trata de evocar experiencias de la niñez; de la misma forma, el hipnotísta puede obtener una muy com­ pleta información de la mente subconsciente, descubriendo las causas de las distintas perturbaciones y, por medio de sugerencias apropia­ das, logra implantar nuevas y positivas actitudes, ayudando, de manera eficaz, a tantas personas que permitieron que demasiados estímulos negativos pasaran a su mente subconsciente, como, por ejemplo, páni­ cos, temores ocultos, ansiedad, complejos de inferioridad y otras tantas

hombres tenaces contra las ciegas fuerzas de la superstición y la igno­ rancia.

formas negativas de pensar.

Con la aparición del psicoanálisis de Freud, el hipnotismo tuvo un relativo decaimiento; mas en su libro "Papeles coleccionados", Freud

La hipnosis puede enseñar al sujeto a relajarse de cuerpo y mente. La corrección de malos hábitos, como eneuresis (mojarse en la cama),

admite que, "sí bien la hipnosis no está al alcance de todos, un retorno parcial sería necesario". En esto demostró Freud ser un verdadero pro­

roerse las uñas y variados tipos de perversión sexual, responden muy favorablemente a la acción hipnótica.

feta. Es curioso observar cómo ha adquirido gran auge después de períodos de gran tensión, especialmente en las dos últimas guerras mun­

Es conocida la importancia que Freud atribuía a los sueños: consi­ deraba la explicación de éstos como un camino seguro para descubrir

diales, donde se precisaba la aplicación de métodos rápidos para el

el subconsciente, asegurando que el significado real de los mismos se

tratamiento de neurosis y toda la secuela de trastornos que la guerra lleva en sí.

había de encontrar en el contenido latente y no en el manifiesto, ya

La hipnosis, utilizada en forma inteligente, ofrece un amplio campo,

que el contenido manifiesto había sido alterado por el censor. En la hipnosis puede enseñarse a soñar al sujeto, obedeciendo a una orden,

desde su aplicación en el psicoanálisis en las diversas ramas médicas hasta los procedimientos psicológicos, para obtener cambios de com­

y asimismo bajo el sueño fisiológico, respondiendo a una sugestión post-hipnót¡ca.

portamiento en el aspecto educativo. Formas de conducta negativas pueden ser reemplazadas por otras positivas bajo la sugestión y la

También se ha demostrado su eficacia en dermatología, en sus varias formas como eczemas, urticarias, etc. Es un hecho la extirpación de las verrugas con el uso de la simple sugestión; resulta de gran utilidad a los especialistas en obstetricia para lograr el parto sin dolor; igualmente, en odontología su campo de acción está ya bien probado y definido.

hipnosis. La palabra, al igual que las drogas, puede producir estos y otros muchos efectos: el su¡eto recordará mejor y también logrará alucina­ ciones específicas; tendrá más atención, estímulo, etc.; asimismo, con­ seguirá extirpar hábitos perniciosos y arraigados, como el uso desme­

En todos los tipos de psiconeurosis en los que la desordenada forma

surado del alcohol, de las drogas, del tabaco, etc. Son muchos los que aseguran que la hipnosis inhibe la voluntad del

de pensar del sujeto hace que se sienta afectado de los más variados síntomas orgánicos, la hipnosis consigue resultados verdaderamente sorprendentes.

individuo; ¡nada más erróneo! Esta objeción carece totalmente de base real y tan sólo la formufan aquellos que ignoran por completo su técnica y su mecanismo. Al sujeto, en vez de eliminarle su poder volitivo, se le estimula, y él lo desarrolla con la cooperación del hipnotísta. Para entender el fenómeno es preciso, ante todo, conocer la actua­ ción y funcionamiento del consciente y del subconsciente. Cuando la

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Sabemos que muchos de los trastornos fisiológicos son producidos por una idea insistente perturbadora, fruto de la imaginación; así, el secreto estriba en aplicar el mismo proceso que causó el mal; excitar la imaginación a la inversa, ya que el mal no está en poseer dema­ siada imaginación, sino en la forma en que es utilizada.

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Como la imaginación venció a la voluntad, en el procedimiento hipnótico es utilizado el poder de la imaginación del sujeto. En la forma en que un hombre débil usaría la astucia para vencer a un contrincante

autoexploración. Este procedimiento lleva consigo resultados conside­

más fuerte, el hipnotista usará de la misma imaginación que provocó el mal, pero ya con sugestiones positivas: ideas nuevas que pasarán

TIPOS DE TRASTORNOS EN QUE LA H1PNOTERAP1A ES MAS EfECTIVA

al subconsciente y lograrán el efecto deseado. En la práctica, el primer paso es siempre enseñar al sujeto a rela­

rablemente duraderos.

Son, entre otros: la hipocondría, enfermedades vasculares, asma, úlcera péptica, colitis, jaqueca, dermatosis, obesidad, diabetes, sordera histérica, tartamudez, insomnio, etc.

jarse. La sensación de alivio que experimenta al disminuir su tensión logrará que entre la confianza de que podrá liberarse de sus desagra­ dables molestias. Durante la última guerra mundial, la necesaria evacuación para proteger al niño provocó infinidad de problemas emocionales y psico­ lógicos, tanto en los padres por verse separados de sus hijos, como en éstos por el proceso de adaptación a medios y ambientes extraños, y así, muchos de ellos adquirieron reacciones de ansiedad y malos hábi­ tos, lo que proporcionó un campo abonado para la aplicación de pro­ cedimientos hipnóticos con manifiesto éxito. Grupos de estos niños fueron sometidos a sesiones continuadas de relajación, acompañadas de sugestiones estimulantes. Los casos más difíciles fueron tratados individualmente, con resultados extraordinarios.

EN LA REHABILITACIÓN NEUROMUSCULAR

Independiente del tratamiento medicamentoso habitual, la hipnosis, convenientemente aplicada, restablece el equilibrio emocional, tan com­ prometido por el trauma. La reciente aplicación de las terapias musica­ les rítmicas son un exponente de la importancia del factor sugestivo en este tipo de trastornos. En fisioterapia, entre las varias técnicas empleadas está, en primer término, la sugestión. La relajación en grupo, así como el tratamiento individual mediante el acontecimiento sensorio-imaginativo, han sido comprobados como excelentes en este aspecto. La hipnosis acelera considerablemente la recuperación y facilita el nuevo aprendizaje.

En el aspecto educacional, la participación de la hipnosis para lo­ grar éxito es definitiva.

LA IMPORTANCIA DE LA FE Y EL PLACEBO

En un centro pedagógico de un populoso barrio pude efectuar un test comparativo entre un grupo de alumnos sometidos a hipnosis, con

En los tiempos en que la hipnoterapia se desligó de la magia, todas las formas de curación a través de la mente se dividieron en dos: las

las consiguientes sugerencias estimulantes, como, por ejemplo: "Encon­ trarás tus estudios fáciles y desearás estudiar m ás"... "Podrás concen­

condicionadas a alguna forma de creencia religiosa y las profanas.

trarte mejor", etc. El porcentaje de notas óptimas de este grupo quedó de manifiesto con respecto al grupo no tratado.

En una respuesta así resulta más efectiva la cura hipnótica que la obte­ nida a través de la fe religiosa, y aquélla dependerá siempre del grado

No pretendo afirmar que la hipnosis lo solucione todo; esto no sería

de condicionamiento del sujeto. Dice Paracelso: "Sea falso o verdadero

cierto, pero sí asegurarles que constituye una ayuda valiosísima en muchos aspectos de la psicología aplicada.

el objeto de la fe, el resultado será siempre idéntico". Llegamos, pues,

La aplicación adecuada de la hipnosis y de la sugestión ofrece la

practican en religiones y sectas no son más que formas de sugestión,

ventaja de poder formar nuevos hábitos positivos. En diversos aspectos de reeducación y reacondicionamiento, los efectos son más positivos y duraderos que los de otros métodos aplicados a nivel no hipnótico. Este tipo de condicionamiento hace disminuir el temor y la ansie­ dad y equilibra el estado emocional del individuo. Aun en aquellos sujetos refractarios a la hipnosis puede lograrse efectividad por medio de la relajación y la autohipnosis, para lo cual el individuo necesita del conveniente adiestramiento. La autohipnosis se emplea también con gran éxito para fines de

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Se sabe que la fe nace de la convicción y utiliza la imaginación.

a la conclusión de que todas las formas de curación por la fe que se con elementos condicionantes variadísimos, según su ritual. En los procedimientos hipnóticos también se usan diversos estímu­ los condicionantes, tales como ambiente, prestigio y actos indirectos o por transferencia. Una de las explicaciones más aceptables de este tipo de curaciones es la de que todos los elementos puestos en juego tienden a movilizar los procesos de recuperación que se hallan presentes siempre en todo ser humano. El placebo es otro sistema indirecto de sugestión. Muchos profe­

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sionales de la medicina, psicología y odontología que lo utilizan dan demostración evidente de los óptimos resultados obtenidos. Un prestigioso odontólogo, alumno mfo, utiliza el placebo para mitigar los dolores postoperatorios: muestra al paciente el "último me­ dicamento" salido al mercado, haciendo hincapié en la gran dificultad para conseguirlo, a la vez que relata y describe minuciosamente sus maravillosas propiedades; así obtiene resultados positivos en un 95 por ciento de los casos. Esto no hace más que confirmar la capacidad de todo su¡eto para responder en forma somática a cualquier tipo de convicción, suminis­

no,caiga en evasiones a través de hábitos perniciosos, como el de las drogas, el alcohol, etc. Es preciso adiestrar al individuo en los procedimientos de relajación física y mental y, mientras se halle bajo el trance, repetirle sistemática­ mente las sugerencias beneficiosas; éstas pasarán al subconsciente y serán aceptadas por él, sin reservas y en la medida de lo razonable que ellas sean. Deben usarse imágenes mentales o emotivas para poder obtener mejores resultados. A través de la relajación, el individuo, siempre que lo desee, puede visualizar los cuadros descritos por el hipnotista, pues es sabido que

trada directa o indirectamente.

una imagen aceptada por el subconsciente tenderá siempre a ser rea­ lizada; éste queda abierto de par en par, siempre que el consciente se

PROCEDIMIENTO USUAL

inhibe, lo que ocurre con mayor intensidad bajo hipnosis y más débil­ mente bajo relajación. En hipnoterapia nunca debe recurrirse a la voluntad del individuo:

El primer paso será el acostumbrado interrogatorio, a fin de saber si el sujeto abriga algún prejuicio contra la hipnosis. Tan pronto se ha obtenido un grado aceptable de profundidad con el empleo de la me­ todología adecuada (basta un grado ligero de inducción}, el sujeto pon­ drá toda su atención a las sugestiones del hipnotista, excluyendo de su mente cualquier pensamiento perturbador. Todos los Hipnotistas con práctica saben muy bien que para obtener resultados efectivos no se precisa un grado hipnótico profundo. Bas­ tará un estado de completa relajación (trance ligero), que permite al sujeto ser un cooperador activo en su propia ayuda. Como resultado, aumenta su propia confianza y adquiere la convicción de que él es factor importante en la solución de su problema. Utilizando la hipnosis como una disciplina de la mente, se prepara

utilizar la fuerza de voluntad para vencer una tendencia o un hábito es un absurdo; sería como intentar vencer al adversario mediante la fuerza bruta en lugar de utilizar la inteligencia. El hipnotismo, como una fuerza natural, puede servirse de esas maravillosas fuerzas que en nosotros existen, estimulando y aumen­ tando la potencia de la mente, igual que puede aumentar el vigor físico. El incremento de esta fuerza mental, combinada con la imagina­ ción, es el binomio efectivo para el logro de resultados positivos en el hombre.

al sujeto para afrontar su caso con sus propios medios. Para esto, una vez ganada la confianza del individuo, se le repite con insistencia que sólo le aqueja "el hábito de pensar", que ha logrado al igual que otros adquieren el del cigarrillo, el del alcohol, etc.; así, la convicción de mejorar quedará establecida y los resultados no se harán esperar. EL FACTOR DE LA VIDA MODERNA

Es por excelencia la enfermedad de los nervios y todos los sín­ tomas secundarios. El temor existencial hace acumular tensión nerviosa que busca, en muchas ocasiones, su escape en conductas irregulares y negativas, como la depresión, el pavor, el asma, el insomnio, etc., y es allí precisamente en donde debe entrar, como objetivo básico, la acción del hipnotista, para actuar sobre el sujeto con sugerencias que le ayuden a escapar de su tensión, proporcionándole medios positivos para que 86

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L. A. — CALI — COLOMBIA

A. B. — ASUNCIÓN — PARAGUAY

Un soldado de 21 años. Se hallaba en el Hospital Militar de Asun­ ción y me fue remitido por el capitán médico: una noche, estando de

Joven de 23 años, remitido por su médico; padecía de claustro­ fobia. No podía permanecer en ningún lugar cerrado. Había sido so­ metido a tratamiento por más de un año sin resultados positivos. Re­

guardia, repentinamente sonó un tiro, lo que le proporcionó un fuerte

currió a la hipnosis. A pesar de no haber resultado un buen sujeto, después de varias

shock que lo dejó mudo por más de un año. En el hospital no se le apreció ninguna lesión orgánica, pero sí un fuerte trauma emotivo.

sesiones pudo penetrar en una iglesia sin experimentar angustia. Con­ tinuó sus estudios con normalidad. Fue adiestrado en la relajación.

Sometido a tratamiento hipnótico respondió favorablemente desde un principio, y luego de unas cinco sesiones comenzó a pronunciar las primeras palabras, recuperando el habla totalmente.

M. A. — MADRID— ESPAÑA

I. B. — PUERTO RICO

39 años, actriz, padecía de una afasia aguda. Su médico, después

Un hombre de 34 años, con cuatro hijos; director de un Banco.

de haber agotado todos los recursos usuales, le aconsejó la hipno-

Frente a cualquier situación se ruborizaba; esto le proporcionó tal con­ trariedad que se volvió introvertido, a la vez que su capacidad de tra­ bajo disminuyó. Consecuencia: fue separado de su cargo temporal­

terapia. Resultó ser un excelente sujeto hipnótico. Se logró la regresión y se pudo descubrir el factor desencadenante. De joven perdió a su padre y, posteriormente, a su hermana mayor. Su único apoyo fue su

mente,- él se sometió a un tratamiento médico sin resultados positivos. Su médico le aconsejó recurrir a la hipnosis. Después de las primeras

madre, hacia la que se proyectó por mucho años; ya había tenido una frustración amorosa. Mientras se hallaba en una gira artística falleció

sesiones sin grandes resultados, se logró saber la causa desencadenante. Relató todas las incidencias de la niñez, y entre ellas una, que era la

repentinamente su madre y la noticia le fue comunicada mientras es­ taba en escena. Como consecuencia del shock se desencadenó la afasia.

causante de su dolencia: en la escuela, un día fue robado un reloj de

Después de muchas sesiones empezó a pronunciar algunas palabras, aunque con dificultad. A través de adecuadas sesiones de relajación, primero, y luego con sugerencias post-hipnóticas, se recuperó total­ mente y pudo volver a la escena.

a todos en fila, y a él lo señaló como el culpable del robo, siendo, al

pulsera, del pupitre de su inmediato compañero. El maestro los colocó igual que todos sus compañeros, inocente. Recientemente, al sufrir una infidelidad, se le desencadenó otra vez el síntoma de) rubor. Se resta­ bleció después de varias sesiones hipnóticas y hoy ocupa de nuevo su cargo.

E. T. — BUENOS AIRES — ARGENTINA

Señora de 61 años. A consecuencia de una caída quedó imposibi­ litada por varios meses. Sanado el trauma de la pierna, los médicos la dieron de alta, pero seguía impedida para andar, alegando fuertes dolores en la rodilla. Agotaron todos los recursos para hacerla entender que su pierna estaba sanada y que no había impedimento alguno para andar. En vista de su resistencia, optaron por el hipnotismo.

T. L. — MADRID — ESPAÑA

Alumna de uno de mis cursos; 24 años, muy inteligente. Durante el curso, al llegar a la fase de la fascinación sobre animales y presen­ társele una gallina para la experiencia, repentinamente empezó a gri­ tar, presa de angustia. Fue sometida a hipnosis y se le ordenó recordar todas las fuertes impresiones recibidas desde la infancia, y relató lo

Resultó un sujeto muy difícil, pero a pesar de todo se pudo des­ cubrir la motivación de su resistencia a andar, Bajo hipnosis reveló que su marido, antes de su caída, salía todas las noches, pero que mientras se hallaba imposibilitada se quedaba en casa para acompañarla. Por otra parte, sus tres hijos se volvieron más solícitos y cariñosos con ella,

siguiente: "Son las 9 de la mañana y estoy dándole de comer a las gallinas, con Marta, mi hermana,- de repente mi madre, asomada al

y la idea de perder todas estas ventajas le impedía volver a andar. Se le

toma. Con el uso de sugestiones post-hipnóticas apropiadas, antes de

suministraron sugestiones post-hipnóticas adecuadas; se le proporcio­ naron nuevas motivaciones y volvió a caminar normalmente.

finalizar el curso, pudo por sí misma fascinar el ave sin experimentar el menor contratiempo.

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balcón, pide auxilio..." Su padre había muerto de repente de un co­ lapso cardíaco y el fuerte impacto se asoció, en su subconsciente, con la gallina; cualquier relación con este animal le desencadenaba el sín­

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R. S. — QUITO — ECUADOR

Fotógrafo de 23 años. Su médico era alumno de mi curso. Además de fotógrafo ejercía como instructor en la Escuela del Sindicato de Chó­ feres. Un día, mientras enseñaba a conducir a una muchacha, ésta per­ dió el control e iba a precipitarse sobre dos hombres que descargaban

CONCLUSIÓN

un camión; él puso el pie en el freno y pudo evitar un fatal accidente. Aquella noche le fue imposible conciliar el sueño; fue perdiendo el estímulo para el trabajo y el insomnio persistió, provocándole fuerte tensión, y la imagen del accidente se volvió obsesiva. Se le suminis­ traron tranquilizantes, sin resultado. Durante el curso fue sometido a hipnosis, respondiendo favorablemente desde el primer momento. Se le administraban continuadas sugerencias post-hipnóticas, después de reproducir la misma escena, causante del shock. Se le convenció de que sus reflejos eran extraordinarios, gracias a lo cual evitó la desgracia. El estado depresivo y el insomnio fueron desapareciendo y pudo rea­

Al llegar al final estaré satisfecho si me concede el mérito de haber sido claro y simple. Claridad en la exposición de los principios y en los ejercicios prácticos. No he pretendido buscar la perfección en el estilo, ya que esto está fuera de mi alcance. Para que usted comprendiera mejor, me he visto obligado a repetir muchos términos y frases; también he procurado prescindir de las complicaciones misteriosas, de las que son amantes muchos espíritus exaltados por el fanatismo. 3i estudió y practicó con dedicación, habrá cosechado excelentes

nudar su trabajo.

frutos; si no lo ha hecho así, le recomiendo que vuelva a comenzar desde el principio. Jamás se arrepentirá.

R, M, — BUENOS AIRES — ARGENTINA

Permítame recordarle que considero este libro estrictamente con­ fidencial. Procure no desprenderse de él. Algún día podrá serle de gran utilidad.

34 años; empleado de una importante compañía. Repentinamente, al escribir, su mano temblaba fuerte y espasmódicamente. Después de tratamientos diversos sin resultado, acudió a la hipnosis. Bajo trance fue fácil descubrir la causa. Estaba muy resentido contra el gerente de la Compañía por no haberle ascendido; como consecuencia de esta fuerte repulsión reprimida se manifestó el síntoma. Bajo sugestión post-hipnótica se le administraron sugerencias compensatorias y cons­ tructivas que le rehabilitaron el equilibrio psicomotor y logró escribir sin molestias.

Tenga siempre presente el más alto sentido de la ética, especial­ mente en la práctica de la hipnosis. Haga honor a la admiración que suscitará en los demás. Utilícelo siempre con propósitos sanos y jamás tendrá que arrepentirse. No me despido, ya que, cada vez que lea o practique, será como si caminásemos juntos. Hasta siempre, amigo,- que la paz mental y el éxito le acompañen siempre.

A. P. -— BOGOTA — COLOMBIA

FASSMAN

39 años, casado, dos hijos. Se inscribió en uno de mis cursos con el propósito de alejarse del alcohol. Su capacidad de trabajo había dismi­ nuido considerablemente, volviéndose agresivo hasta el punto de gol­ pear a su esposa, lo que motivó su separación. Acudió a varios proce­ dimientos para alejarse del vicio que le producía tanta desgracia, sin resultado alguno. Recurrió a la hipnosis; era sujeto difícil y, después de varias sesiones, se le dieron sugestiones post-hipnóticas que le crearon un reflejo condicionado de repulsión al alcohol. Aprendió y practicó asiduamente la relajación y la autohipnosis. Hoy está libre del vicio y el hogar fue reconstruido.

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