PRE FACIO No siempre son las partidas en las que se despliega el mejor ajedrez las que dejan los recuerdos más vivos. Por el contrario, a veces la ruptura de la l ínea lógica de pensamiento durante una partida da por resultado un laberinto de complicaciones caóticas y es el ingredien te que da a la partida su sabor característico. En ocasiones, una derrota espectacular es más interesante que una victoria sencilla. Esta selección de 80 partidas da una idea del ajedrez combativo por el que siempre he aboga do. Muchas datan del periodo comprendido entre 1 985 y 1 990, cuando yo era el único jugador fuera de la entonces Unión Soviética que desafiaba con regularidad la hegemonía soviética en las pruebas del ciclo del Campeonato del Mundo y en la carrera por el Campeonato del Mundo. La cuarta partida, crucial, del encuentro disputado con Kárpov en Kuala Lumpur, con la que concluye más o menos este periodo, se analiza con mucho detalle, en especial la fascinante fase final, y también figura la novena partida que jugué contra Short en San Lorenzo del Escorial, 1 993, partida aproximadamente igual de importante en la final del ciclo siguiente. Mi partida contra Yusúpov, Bugojno, 1 986, la sexta partida del encuentro jugado contra lvanchuk, Hilversum, 1 991 , y la última partida del Campeonato del Mundo contra Kárpov, Yakarta, 1 993, están recién comentadas. Las demás partidas, con comentarios, se habían publicado antes en el Schaakbulletin o en la New in Chess Magazine. He hecho correcciones y añadido nuevos análisis donde ha sido necesario. Jan Timman Ámsterdam, septiembre de 1 994
l.
Julian Hodgson
Timman-Hodgson Lugano, 1983
Defensa Siciliana
1. e4, c5 2. t[jf3, d6 3. d4, cd4 4. t[jd4, t[jf6 5. t[jc3, a6 6. i,e3, e6 7. f4, b5 8. �f3, JÍ,b7 9. JÍ,d3, t[jbd710. g4, t[jc5 A fin de evitar las complicaciones que surgen más tarde en esta partida, Portisch y Ribli, contra Hübner y Trepp respectivamen te, en Lucerna, 1 982, optaron por 1 0 . . . . , b4 y no jugaron 1 1 . . . . , tt:J c5 más que después de 1 1 . t[je2, con el inconveniente de que las blancas tienen la jugada defensiva, natural, 1 2. t[jg3. No obstante, los dos húngaros obtuvieron una buena posición, aunque Ribli se metió más tarde en problemas irresolu bles y acabó perdiendo. 11. g5, b4 12. gf6, bc3 13. fg7, i,g7 14. b4, ...
Sl21.5
�b6 1 8. t[je6, �b4 1 9. t[jg7, <;t>d8 20. �h5, � c7 2 1 . e5! , con virulento ataque. 16. l:i.c1, l:;Ic8 Era mucho más fuerte 1 6 . ... , �b6, ya que 1 7. t[je6, �b4 1 8. JÍ,d2, �c3 1 9. t[jc7, <;t>d8 es bueno para las negras. Después de 1 7. t[jc2, �b5, obtienen un juego muy activo por el peón. 17. .l:í.g1, JÍ,f618. <;t>e2, h5 Privando a la dama blanca de la casilla h5. 19. f5, ...
N
N
La mejora de Hübner en comparación con 1 4. bc3, captura que él había jugado antes contra Portisch (Abano Terme, 1 980). 14. ..., t[jd3 15. cd3, ... Ambos reyes están relativamente expues tos, pero la centralización en masa de las blancas les da las mejores oportunidades en esta posición. 15. ..., c2 Una novedad. Browne jugó aqu í 1 5 . . . . , l:i.c8 contra Hübner, Chicago, 1 982, que lo barrió después de 1 6. 1:t g 1 , JÍ,f6 1 7. !I c1 ,
Preparación necesaria antes de tomar en c2. 1 9. t[jc2 directa fracasaba por 1 9 . . . . , JÍ,b2, y 1 8 . .l::!.c 2, l:r.c2 1 9. t[jc2, �c7 no era muy atractivo en vista del hecho de que 20. n c1 volvería a tropezar con 20 . . . . , JÍ,b2. 19. ..., e5 Forzada, ya que 1 9 . . . . , JÍ,d4 fracasa por la jugada intermedia 20. fe6, y entonces 20 . . . . , JÍ,f6 pierde por 21 . JÍ,g5. 20. t[jc2, d5 Parece que las negras obtienen buen con trajuego por el peón, pero con unas pocas jugadas astutas, las blancas lo cortan de raíz. 21. i,c5, a5 22. � e3, ... Dejando vacante la casilla f3 como refugio seguro para el rey si el alfil negro asoma por a6.
10
PARTIDAS SE LE CTAS DE
22. ..., �d7
Permitiendo a las blancas liquidar para lle gar a un final ganado por medio de una ines perada expedición que realiza la dama. Sin embargo, las negras no habrían tenido suficien te compensación por el peón de todos modos.
GRANDE S MAE STROS
23. �hS!, ... Amenazando la torre y el alfil. 23. ..., �es 24. ed5, �as 25. b5!, ... Obligando a las negras a consentir el cambio de las damas después de todo. 25. ..., .l::!.hS 2S. baS, i,as 27. .U. g8, �d7 28. bt.eB, _tes 29. l2Ja3, ... El caballo amenaza con penetrar provo cando efectos devastadores. 29. ..., i,g5 30. i,e3, i,e3 31. �e3, i,b7 32 . .ld e5, �dS 33. � as, i,d5 34. � as, _tes 35. l2Je4, �d5 Y antes de que me diera tiempo a jugar 36 . .ld aS, las negras abandonaron.
2.
Klaus Berg
Berg-Timman Lugano, 1983
Defensa Tarrasch
1. é2Jf3, é2Jf6 2. e4, es 3. g3, l2Je6 4. j,g2, e6 S. 0-0, dS 6. edS, edS 7. d4, j,e7 8. é2Je3, 0-0 9. b3, ... El arma favorita de Uhlmann contra la Defensa Tarrasch. Sin embargo, el doble fian chetto probablemente dé a las blancas menos posibilidades de obtener ventaja que la línea principal con 9. j,g5. 9. ..., j,g4 Esto es lo que me jugó Keres en Tallin, 1 973. Es probable que desarrollar el alfil sea más fuerte que 9. ..., é2Je4, más habitual. 10. �b2, .Ue8 No era tan bueno 1 0. ..., j,f3 1 1 . j,f3, é2Jd4 1 2. j,g2, seguido de 1 3. e3, y las blan cas recuperan el peón y conservan la pareja de alfiles. 11. deS, j,es 12. 1de1, ... Contra Keres, jugué 1 2. é2Ja4 primero, pero tampoco me reportó ventaja alguna des pués de 1 2. ..., �e7 1 3. .Uc1 , l:!. e8 1 4. �d3, �d7 1 5. é2Jd4, é2Jd4 1 6. �d4, �c1 1 7. !1c1 , j,a3 1 8. .Ue1 , j,b4 1 9. j,c3, j,c3 20. é2Jc3, d4 2 1 . é2Je4, l2Je4 22. j,e4, y en esta anodina posición decidimos hacer tablas. 12. ..., .Uea Pensé esto durante un buen rato. La justi ficación táctica es 1 3. é2Jd5, j,f2 1 4. .Uf2, é2Jd5 1 5. l2Je5, l2Je5 1 6. 1:ic8, j,c8 1 7. �d5, �c7, y ahora es imposible 1 8. j,e5, l:re5 1 9. .l::i. f7 en vista de 1 9. ..., �b6, y las negras ganan. 13. l2Ja4, j,ta El orden de jugadas de las blancas ha hecho posible esta retirada. 14. h3, j,ts Era mala 1 4. ..., j,h5 en vista de 1 5. j,f6, �f6 1 6. �d5, j,g6 1 7. �b5!, y las negras no tienen compensación por el peón.
TD 4.81 .
1S. é2Jd4, j,e4 16. é2Je6, be6 17. j,d4, Desafortunada jugada, que incluso hace que la posicion blanca sea un poco desfavora ble. Era correcta 1 7. e3. 17. ..., j,a3 18. ld e3, j,g2 19. j,f6, ... La alternativa 1 9. �g2, l2Je4 20. .l:t c2 también dejaría a las negras con una partida cómoda después de 20. ..., c5 21 . j,b2, �b2 22. lLJb2, d4, con algo de presión sobre la posición blanca. 19. ..., �f6 20. �g2, hS 21. h4, d4 22. l::te 2, eS
A las negras no les importa que los peones queden fijados en las casillas del mismo color que el alfil; obtienen espacio, y las blancas no tienen nada mejor que cambiar el caballo por el alfil. 23. �d3, .tí. es 24. �f3, �g6 2S. �d3, �e6 26. �f3, �e6 27. é2Jb2, ... Esto debería haberse hecho tres jugadas antes. 21. ..., j,b2 28. �b2, .Uea Pese a la desaparición de las piezas menores, las negras se las han ingeniado para mantener la presión sobre la posición blanca. 29. .u fb1' .u fS
12
PARTIDAS SE LE CTAS DE
Tomar en e2 no habría conducido más que a un cambio total de piezas. La jugada del texto le aprieta las clavijas a la posición blanca. 30. �d3, �es 31. �g1, �f6 32. ld f1, Desagradable, pero no había nada más. 32. ..., g5 Otra opción era 32 . ... , l:le3 33. �d1 , l:t c3, pero no me gustaba la posibilidad de que las blancas intentaran cambiar su pasiva torre con 34. ld c2. La jugada del texto da la señal de ataque. 33. hg5, �g5 Pero esta captura es, como m ínimo, inexacta . Era correcta 33. . . . , .l:lg5. 34. f4, ...
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Completamente correcta. Las blancas tie nen que aceptar un debilitamiento de su posi ción para no verse arrolladas. 34 , �g4 35. �f3?, ... •
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GRANDE S MAE STROS
Pero ahora las cosas van de capa caída con rapidez. Era correcta 35. .ll f3, seguida, después de 35. ... , h4, de 36. b4 a fin de crear contrajuego. En esta línea se ve lo mal situa da que está la torre de f5; si hubiera una torre en g4 y la dama estuviera en f6, la posición de las negras todavía sería ganadora. 35. ..., .l:;Ie3!
Las negras no tienen nada que objetar a cambiar las damas, puesto que las torres penetrarán con efectos devastadores. 36. �g4, hg4 37. �f2. ll h5 38. � g1, � h2 39. l::i.g2, l:r. h1 40. � d2, aS 41. ld c2, � c3 42. l:I b2, ... Pierde enseguida, pero 42. .l::t d2 tampoco era buena en vista de 42 . ... , � cc1 43. e4, 1l ce1 ! 44. l::t h2, � ef1 ! , dando mate o ganan do una torre. 42. ..., .tí.cc1 Las blancas abandonaron.
3.
Hans Bohm
Bohm-Timman Hilversum, 1983 Campeonato de los Países Bajos
Gl3.8
Defensa Grünfeld
1. d4, tbf6 2. c4, g6 3. tbe3, dS 4. �f4, �g7 S. e3, es No confío en la variante del sacrificio de peón con 5. ... , 0-0 (ya no). Es una de las bazas más fuerte del club de los adversarios de la Grünfeld, dirigido por el GM por correspondencia Mulder Van Leens Dijkstra en sus tentativas por condenar la Grünfeld. 6. deS, ¡vas 7. ¡va4, ... Este cambio de las damas es otro de los métodos favoritos de Van Leens Dijkstra. Parece bastante inocente, pero la práctica por correspondencia ha mostrado que las negras deben jugar con exactitud a fin de no tener problemas. 7 , ¡va4 8. t2la4, tbe4 Precursora de un juego agudo. La alterna tiva 8. ... , tba6 deja a las blancas con buenas posibilidades de obtener ventaja después de 9. cd5, tbd5 1 0. i.,b5, i.,d7 1 1 . i.,d7, �d7 1 2. 0-0-0, �c6 1 3. tbf3. 9. i.,b8, Transponiendo, cambiando el orden de jugadas, a la partida Bohm-Schmidt, Polanica Zdroj, 1 980, en la que las blancas, luego de 9. f3, i.,d7 1 0. fe4, i.,a4, capturaron en b8, jugada que Schmidt premió con un signo de exclamación en el lnformator. Al tomar en b8 primero, Bohm quería evitar la variante 9. f3, e5, que, de todos modos, yo no había planea do. Yo había preparado otra cosa. 9 ..., i.,d7 9. ... , ,llb8 1 0. f3, tbf6 también parece jugable, pero quería entrar en lo que había preparado en casa. 10. f3, i.,a4 11. fe4, •
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11 , de4! Mucho más fuerte que tomar en b8. Bohm Schmidt había continuado con 1 1 . ... , ll b8 1 2. ed5, i., b2 1 3. ,l:í.b1 , i.,c3 1 4. �f2, 0-0 1 5. tbe2, i.,a5 1 6. t2lf4, .tlfc8 1 7. tbd3, i.,c2 1 8. ld b5, i.,c3 1 9. i.,e2, a6 20. ,llb 6, i.,as 21 . ,llb 2, i.,d3 22. i.,d3, � es 23. tr.hb1 , l:I c7, y las blancas podían haber conservado la ventaja, según Schmidt, con 24. g4, segui da de 25. g5. Con la textual, las negras impi den que las blancas construyan un fuerte centro y crean al mismo tiempo un peligroso peón «C» pasado que les permite recuperar dentro de poco la pieza sacrificada. ¡El club de los adversarios de la Grünfeld tiene una lucha cuesta arriba por delante! 12. �e7!, ... Después de mucho pensar, las blancas encuentran la única réplica. 1 2. i.,g3, �b2 1 3. .l:lb1 , c3 1 4. �d3, 0-0-0 1 5. �e2, ,lld3 1 6. �d3, ll d8 les habría creado graves pro blemas. 12 , lde8 13. .,tg3, Luego de impedir que las negras enro quen por el flanco de dama, las blancas retro ceden más con el alfil. 13 , i.,b2 14. � b1, e3 1S. i.,d3, l:t eS Una decisión difícil. Con 1 5. ... , ,lld8 1 6. �e2, .l'd d3 1 7. �d3, i.,b5 1 8. �c2, i.,a4, .
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PARTIDAS SE LE CTAS DE
las negras podían haber forzado las tablas por jaque continuo, pero después de estudiar con detalle la posición, concluí que pueden aspirar a ganar sin correr riesgos. 16. tL'le2, c2 17. g b2, ... Las blancas, con buen criterio, deciden devolver estrictamente el material en vez de jugar la pasiva 1 7. l:i.c1 , que habría dado posición superior a las negras luego de la sencilla 1 7. ... , 0-0. 17. ..., c1'ii' 18. .:1Jc1, .U. c1 19. �f2, 1:1. h1 20. .u. b7, o-o En esta posición pensaba al decidirme por 1 5. ... , .llc5. Las blancas obtienen al menos un peón y algo de iniciativa por la calidad, pero es una iniciativa pasajera. 21. .l::í. e7, ... De nuevo la mejor jugada, que permite a las blancas mantener la partida en los límites de las tablas. Para la alternativa 21 . .ti. a7, las negras tenían lista 21 . ... , .U. d8; p. ej. : a) 22. i_c4, .ti. d2 23. �f3, i_d1 24. �f4, �f8. Puede que las blancas hayan escapado del mate, pero es indudable que no tienen buena salud. b) 22. i_e5, i_e8! 23. i_c4, �f8, y las negras tienen una ventaja sólida. Con la jugada del texto, las blancas captu ran un importante peón, que de lo contrario las negras no habrían tenido que ceder. El peón ••a•• , por otra parte, estaba perdido de todos modos. 21. ..., l:rd1 22. .Sa7, .Sd2
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GRANDE S MAE STROS
Obligando al rey a ir a la primera fila, ya que 23. �f3 fracasa por 23. ... , i_d1 . 23. �e1, .1:!. d3 24. ld a4, .U. c8 Las blancas tienen suerte de que la torre negra quede encerrada luego de 24. ... , _a: e3 25. �d2. Mediante la textual, en combinación con la jugada siguiente, las negras fuerzan un cambio de torres o ganan el peón «a». 25. �e2, 1:1 dd8 26. a3, ... Las blancas deciden conservar el peón «a». Posteriormente, Bohm sugirió 26. i_e5, con idea de poner el alfil en la gran diagonal y mantener tres torres en el tablero. Después de 26. ... , .Sa8 27. .ld c4, 1da2 28. �f3, !:!. a6 (a fin de mantener al alfil fuera de f6), las negras tienen posibilidades de ganar en la práctica, como en la partida, aunque de manera objeti va la posición es tablas. 26. ..., .l::!.aB 27. tras, .Sas 28. i_d6, f6 Por desgracia, las negras se ven obliga das a poner el peón en una casilla negra. Después de 27. ... , �g7 28. e5, sería difícil poner el rey en juego. 29. i_b4, �f7 30. �d3, �e6 31. h3, h5 32. �e2, ... El rey vuelve sabiamente a la seguridad que da f3. 32. ..., .Sc8 33. �f3, .U. c4 34. i. e1, g5 35. i_a5, ... 35. i_g3, poniendo el alfil en la diagonal b8-h2 y cediendo el peón «a», tampoco habría dejado a las negras verdaderas posibilidades de ganar. Los peones «e» doblados están prestando un gran servicio defensivo a las blancas; no puede hacerse retroceder a su rey. Lo único que pueden intentar las negras es marchar con el rey hacia d3, pero las blan cas pueden desactivar este plan enviando el alfil a atacar por detrás el vulnerable peón «f». 35. ..., �es
JAN TI M MAN:
MI AJE DRE Z AUDAZ
15
d4 y el rey en g3, ya que el peón «e» garanti za que no puede hacerse retroceder más al rey. Con la textual, las negras consiguen ale jar al rey enemigo del lado corto. 41. i.,e7, � h3 42. �f2, �g4 43. �e2,
36. i.,e1?, ... Después de la excelente defensa realiza da desde la jugada 1 2 en adelante, las blan cas cometen un error decisivo al verse un poco apremiadas por el tiempo. Era correcta 36. i.,d8 a fin de contestar a 36 . . . . , 1::!. e4 37. i.,f6. No puede ponerse a las blancas en Zugzwang, ya que después de 36 . . . . , ti_a4 pueden echar mano de 37. i.,e7. Tenía la intención de jugar 36 . . . . , g4, pero la posición que se produce luego de 37. hg4, hg4 38. �g4, f5 39. �f3, fe4 40. �g3 sigue siendo tablas, incluso sin el peón «a» . El peón «g» blanco bate las casillas f3 y h3, impidiendo así penetrar al rey negro. 36. ..., � e4 37. i.,c3, ... La mejor posibilidad de las blancas. El peón «f, era tabú, ya que se perdería el alfil luego de 37. i.,f6, g4. 37. ..., �f5 38. g4, hg4 39. hg4, l::!,g4 40. i.,f6, Jd h4!
La única jugada que gana. Las blancas estarían bien si pudieran establecer el alfil en
De lo contrario, el rey se vería obligado a ir a la primera fila. 43. ..., � h2 44. �d3, .l:!. h7 Ahora que se ha dejado vacante la casilla f3 para el rey, las negras echan al alfil de la diagonal h4-d8. 45. i., c5, �f3 46. e4, ... 46. a4 no ofrecía esperanzas en vista de 46 . . . . , 1:t d7 47. �c4, � e4, y el peón "g" corre sin obstáculos. El peón "a" se captura rá en a7. 46. ..., Ud7 47. �c4, �e4 48. a4, .ti d1 Llama la atención cuántas jugadas prepa ratorias tienen que hacer las negras antes de lanzar a la carrera el peón <
4.
Anatoli K.árpov
Kárpov-Timman Plovdiv, 1983 Campeonato de Europa por Equipos
Defensa Siciliana
1. e4, es 2. éL:\f3, d6 3. d4, cd4 4. éL:\d4, éL:\f6 S. éL:\c3, e6 Después de ganar a Kárpov con la Variante Scheveningen en Mar del Plata el año ante rior, había probado la Rauzer tanto en Londres como en Linares (1 983) antes de Plovdiv. Ambas partidas fueron tablas muy luchadas, pero ninguna de ellas me dio moti vos para estar satisfecho de la apertura. Así que decidí echar mano de la Scheveningen una vez más. 6. g4, h6 7. � g1, ... Esta jugada casi ha reemplazado total mente a 7. g5, antes popular. 7. ..., éL:\c6 En Mar del Plata, jugué 7 . . . . , il,e7, pero el planteamiento de Kárpov contra Sax (8. il,e3, éL:\c6 9. 'iYe2!) hizo que buscara otros cami· nos. Como se verá, aplazar el desarrollo del alfil de rey tiene sus ventajas. 8. il,e3, Esto es lo que Kárpov había jugado contra Andersson y Spasski en Turín el año anterior. Hoy en día hace furor 8. h4, con la intención de ir a la caza de peones después de 8 . ... , h5: 9. g5, éL:\g4 1 0. il,e2, 'iYb6 1 1 . il,g4, hg4 1 2. éL:\c6, bc6 1 3. 'iYg4, y no está claro en absoluto que las negras tengan compensa ción suficiente por el peón. Ejemplos de la práctica reciente sugieren que no la tienen. Aunque Kárpov obtuvo una brillante victoria frente a Spasski en Tilburgo con 8. h4 dos años y medio antes, yo no esperaba que la volviera a jugar. Variantes así, de ganancia de peón con consecuencias inciertas, no son de su gusto. 8. ..., a6 Spasski, en Turín, jugó con audacia 8 . . . . , g5 y obtuvo una buena posición luego de 9. 'iYd2, éL:\eS 1 0. il,e2, éL:\g6. También aqu í es •••
Sl20.7.3
mucho más fuerte jugar la dama a e2, ya que 9. 'iYe2, éL:\eS 1 0. h4 es muy bueno para las blancas. 9. 'iYe2, éL:\d4 10. il,d4, eS 11. il,e3, il,e6 12. h4, ...
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Este avance debe jugarse en el acto. En una simultánea contra el compositor de estu dios belga Missiaen jugada en Hilversum, hice 1 2. 0-0-0 y acabé con posición perdida tras 1 2 . ... , 'iYaS 1 3. f4 (es mejor 1 3. il,d2), b5 1 4. feS, de5 1 5. éL:\dS, il,d5 1 6. ed5, 'iYa2 1 7. il,d4, 0-0-0! 12. ..., g6! Una jugada nueva. Las alternativas eran: a) 1 2 . . . . , d5 1 3. ed5, tbd5 1 4. 0-0-0, 'iYaS 1 5. tiJdS, il,d5 1 6. il,f4, con amplia ventaja de las blancas; b) 1 2 . . . . , éL:\d7 1 3. gs, hgs 1 4. il,gs, g6 1 5. 0-0-0, Il:c8 1 6. 'iYd2, 'iYaS 1 7. �b1 , y las blancas son muy superiores; Matulovié Janosevié, Cto. de Yugoslavia, 1 972; e) 1 2 . . . . , l;Ic8 1 3. g5, hg5 1 4. hg5, Jl.c3 1 5. gf6, Jl.e3 1 6. 'iYe3, gf6 1 7. 'iYc3, 'iYb6; hasta aqu í Kurajica-Spasski, Solingen, 1 974. Según el primer jugador, las blancas podían haber consolidado la ventaja con 1 8. 0-0-0; p. ej.: 18 . . . . , 'iYf2 1 9. 'iYc7, 'iYcS 20. 'iYb7, il,a2 21 . b3, 'iYc3 22. Z:t d3, etc.
JAN TI M MAN:
MI AJE DRE Z AUDAZ
Con la jugada del texto, las negras impi den que el peón «g» blanco marche sobre g6. 13. g5, ... Necesaria, pues la amenaza era 1 3 . . . . , .ll c8, y entonces las negras no tendrían que sacrificar en e3 luego de 1 4. g5, ld c3 1 5. gf6. 13. ..., hg5 14. hg5, étJhS Después de 1 4 . . . . , é2Jd7, las negras se habrían encontrado en Matulovié-Janosevié. Es obvio que el caballo está situado de mane ra mucho más activa en h5, en especial por que puede saltar a f4 enseguida. 15. 0-0-0 l2jf4 16. �f4, ... Este cambio, en resumidas cuentas, es una concesión, ya que cuesta a las blancas el control de las casillas negras y al mismo tiem po abre la diagonal a1 -h8 al alfil de rey enemi go. Después de cualquier jugada de dama, las negras se quedarían en f4; p. ej. : 1 6. �f3, l:Ih4, y ahora a 1 7. �g3 se contesta 1 7 . . . . , .tí:g4. 16. ..., ef4 ,
B
17. l2jd5, ... Lo mejor. 1 7. e5 parecía atractiva, pero hay la fuerte réplica 1 7 . ... , �g7! Considérese: a) 1 8. l::i.d 6, �a5 1 9. lle6 (de lo contra rio, las negras tienen una posición espléndida debido a la caída del peón de e5) 1 9 . . . . , fe6 20. �e4, �e5 21 . �g6, rt;e7, y no parece que las blancas tengan compensación sufi ciente por la calidad.
17
b) 1 8. ed6, �c3! 1 9. bc3, �a5, y el rey blanco corre mucho más peligro que el negro. Las negras ya amenazan 20 . . . . , �a3 y cap turar el peón «d•• con jaque, y si 20. d7, se van al flanco de rey con 20 . . . . , rt;f8. El peón, tan avanzado, está sentenciado. ¡Las negras están mejor! Después de la textual, la posición carece de vida, y a las negras les resulta fácil mante ner igualada la partida. Así, la novedad teórica adoptada en la jugada 1 2 es perfecta para solucionar los problemas de apertura del segundo jugador. 17. ..., �g7 18. �f3, ... Tomar en f4 era demasiado peligroso: 1 8. l2jf4, �b6, y si las blancas quieren evitar el horrible debilitamiento de las casillas negras que se produce después de 1 9. b3, las negras recuperan el peón y tienen un juego excelen te. Tanto 1 9. l2jd3 como 1 9. c3 se contestan con 1 9 . . . . , �a2 . 18. ..., �d5 19. l:tdS, �b6 20. c3, �es Por desgracia, 20 . . . . , llc8, para mante ner al alfil blanco fuera de c4, era imposible. Las blancas pueden tomar en f4 con confian za, ya que el sacrificio de alfil en c3 no es decisivo: 21 . �f4, �c3 22. bc3, .id c3 23. rt;d 1 , �b2 24 . .l::í. d2! , �b1 25. rt;e2, �b5 26. rt;e1 o 24 . . . . , .l:ic1 25. rt;e2, �b5 26. l:td3. Las negras no tienen nada en ambos casos. 21. �c4, .l::i_ h2 22. .l:i. d2, �c7 En principio, había planeado situar el rey en e7, pero luego cambié de opinión en vista de la posibilidad 1l g1 -g4xf4, prometedor sacrificio de calidad al estar el rey negro en el centro. La textual prepara el enroque por el flanco de dama. 23. � d5, 0-0-0 24 .u h1' 1dh1 25. �h1' 1dhB 26. �d1, .ld h2 26 . . . . , .ld h5 era un poco más exacta, pero en realidad no hay mucha diferencia. La posi ción está igualada y así va a seguir. .
PARTIDAS SE LE CTAS DE GRANDE S MAE STROS
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27. a3, ... Ciertamente, no 27. "iVb3, f3! , y las blan cas tienen graves problemas. 27. ..., � g2 28. "iVb3, Ahora la dama sí puede salir, ya que a 28 . . . . , f3 se contesta 29. �b1 . El rey blanco puede huir a a2, y la torre, a c2. 28. ..., � gS 29. .ii.f7, ]dg1 30. �c2, �b8 31. .ii. e6, ... De lo contrario, no puede bloquearse el peón <
•••
39. eS!, ... Ahora las blancas cambian el peón «e» por el « g » , cambio mucho más ventajoso para ellas. Es verdad que esto tampoco les da ataque, pero pueden seguir molestando al adversario porque las negras no tienen con trajuego. 39. ..., j_es Es malo 39 . . . . , deS 40 . .Sd1 , y las negras tienen grandes problemas. 40. 1:1 gS, �b6 41. .iL e4, b1 h8 42. ki fS, Ud8 43. .iL dS, as Este cambio de peones proporciona un necesario alivio. 44. baS, ... Durante los análisis post mórtem, Kárpov sugirió no hacer este cambio y jugar ensegui da 44. 1:!. f7. Yo había planeado 44 . . . . , a4 45. �a3, .Uca contra esto, ya que a 46. c4 se contesta 46 . . . . , l:::t c7, y las blancas no han logrado nada. 44. ..., �as 4S. � f7, .l:!. c8 46. �a3, ... Impidiendo 46 . . . . , .l:,Ic5. 46. ..., �b6 47. �b4, l:r eS 48. j_e6, dS
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La jugada secreta. El quid es que el final de alfiles que se produce luego de 49. llb7, �c6 50. j,d7, � b7 51 . �c5, b4! 52. � b4, � b6 es fácil de aguantar. Las negras, a pro pósito, no deberían intentar forzar las tablas enseguida, ya que después de 52 . . . . , d4? 53. c4, d3 54. �a3!, d2 55. j,a4, están impo tentes ante los peones pasados y ligados. 49. l::íd7, �c6 50. �b3, j,d6 51. .ldh7, j,es 52. j,fS, �b6 53. l:i, d7, �c6 54. j,g4, j,d6 55. .U h7, j,es 56. .id h6, �c7 57. 1:1. h7, �c6 58. .U.f7, j,d6 59. j,d7, �b6 60. j,ea, Uca 61. .l::!.f6, ...
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61. ..., .U.e8 61 . . . . , �c5 era asimismo posible, ya que 62. j,b5, .U.b8 63. �a4, ld a8 hace tablas de inmediato. Las blancas, probablemente, intentarían algo como 62. j,f7, seguida de 63. .l:':. f5. Así pues, decidí cambiar los alfiles por que eso conducía a un final de tablas teóricas pese a que se pierde un peón. 62. .ti. d6, �es 63. l:rf6, ld e3 63 . . . . , b4 era atractiva, ya que después de 64. cb4, �d4 65. .l:!. f4, �e3, el peón negro sería tan bueno como los tres blancos. Posteriormente, estaba contento de no haber la hecho, ya que luego de 63 . . . . , b4 64. cb4, �d4 65. b5! , �e3 66. b6, �f3 67. b7, las tablas no están garantizadas ni mucho menos. La columna «e» es tabú para el rey negro en vista de 67 . .lde7. 64. 1:1 f4, b4
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En este punto volvió a aplazarse la partida; se reanudaría a la mañana siguiente (las dos primeras sesiones habían sido de 3 a 8 de la tarde y de 9.30 a 1 1 .30 de la noche). 65. .U.b4, ... Kárpov selló esta jugada sin pensar mucho. Después de 65. �c2, bc3 66. bc3, las negras pueden jugar 66 . . . . , I:r e1 , pero el método más convincente para hacer tablas es 66 . . . . , d4 67. cd4, �c4 68. �d2, .Ue8, y las blancas no pueden hacer nada. 65. ..., II f3 66. �a4, .k!. f8 67. .U.h4, .U.aS 68. �b3, .U.g8 69. �c2, � g2 70. �b1, �c6 71. �a2, .U.f2 72. �a3, _llg2 73. U h8, �c7 74. b4, .Ug3 Ahora que el peón «b» ha avanzado, la torre negra «se pega•• al peón «C•• . 75. �b2, .l::í, f3 76. �c2, .ilg3 n. .l:Ih6, .U.f3 78. bS, ... De lo contrario, las blancas no progresan. 78. ... , .l::i. g3 79. ld c6, �d7 Después de hacer yo esta jugada, Kárpov ofreció las tablas de inmediato. Su rey no podrá cruzar la tercera fila.
Cuando se jugó esta partida, llevaba cinco rondas sin ganar. Además, me había enfrenta do a Sunye cinco veces y todavía no había conseguido ganarle nunca. En resumen: la situación pedía a gritos una victoria. 1.lZJf3, d5 2. b3, i,g4 Después de 2 . . . . , c5, las blancas no debe rían jugar despreocupadamente 3. j,b2 en vista de 3 . . . . , f6, y no pueden impedir la forma ción de un fuerte centro enemigo, sino 3. e3, después de lo cual la partida transpone a un sistema que a Yusúpov le gusta emplear con blancas hoy en día. 3. i,b2, i,f3 4. gf3, e6 En una partida Pi'ibyi-Despotovié se siguió con 4 . . . . , lZJf6 5. e3, g6 6. c4, c6 7. cd5, cd5 8. i,f6, ef6 9. d4, i,b4 1 O. � e2, lZJc6 1 1 . i,g2, �a5 1 2. f4, 0-0, con juego incierto. Con la textual, las negras evitan que se doble el peón «f, al jugar el peón "e" antes de desarrollar el caballo a f6. Hice esto al supo ner que las negras ya están un tanto mejor porque las blancas tienen peones doblados, y no veo razón alguna para cambiar esta valora ción ahora. 5. e3,lZJf6 6. f4, i,d6 Aquí 6 . . . . , g6, a fin de poner el alfil de rey en fianchetto después de todo, era una posibi lidad muy buena. En cambio, concebí el plan de hacer . . . , e5. 7. c4, VJ/ie7 8. � g1, ... Buena jugada. Ya en fase temprana de la partida se da a las negras a elegir entre dos opciones desagradables: enrocarse delante de la columna "g" semiabierta, lo que augura un inminente ataque blanco, o debilitar un poco su posición. 8. ..., g6 No me entusiasmaba mucho el enroque, ya que con 9. �f3! las blancas pueden impli-
car a la dama en el ataque muy rápidamente. En este caso, el alfil de rey blanco se desarro lla a d3, desde luego. 9. �c2,lZJbd710.lZJc3, c6 11. a3, ... Garantizándose la pareja de alfiles. 11. ..., a6 Preparando . . . , e5. Después del cambio en d5, las negras quieren tomar con el peón «C» sin temer un salto de caballo a b5. 12. i,e2, •..
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I mpidiendo . . . , e5, ya que después de 1 2 . . . . , e5 1 3. fe5, i,e5 1 4. f4, las negras se verían obligadas a cambiar en c3 en cir cunstancias desfavorables. 12. ..., � g8 El objetivo principal de esta misteriosa jugada es quitar la torre de la sensible gran dia gonal. Las negras tienen un leve problema con el rey. Enrocar por el flanco de rey seguía sien do demasiado peligroso en vista de 1 3. h4, h5 1 4. j,d3, y las blancas amenazan un sacrificio devastador en g6. Enrocar por el flanco de dama tampoco era muy atractivo. Después de 1 2 . . . . , 0-0-0 1 3. d4, seguido de 1 4. c5 y la marcha de los peones "a" y «b•• , las blancas podrían montar un ataque al rey con bastan te rapidez. Así pues, decidí mantener el rey en el centro.
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13. b4,... Las blancas también tienen problemas con el rey. Con la textual, preparan el enroque en el flanco de dama, pero al mismo tiempo dan a las negras la oportunidad de realizar el plan iniciado en la jugada sexta. La alternativa era 1 3. d4, a la que las negras replican 1 3 . .. . , h6 y 1 4 . . . . , g5. 13. ...,es 14. feS, i,es 1S. f4,i,c3! Perfectamente jugable en estas circuns tancias. Las negras ceden asimismo su otro alfil, pero obtienen a cambio una sólida inicia tiva. 16. i,c3, é2le4 17. 0-0-0, ...
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El rey no está muy seguro en el flanco de dama, pero no había otra manera de evitar el jaque de dama en h4. 17. ...,aS 18. cdS,... Las blancas no podían mantener cerrada la columna «C», ya que después de 1 8. � b2, t2lb6 les resultaría difícil dar con una conti nuación satisfactoria. 18. ...,cdS 19. �b2, UcB 20. i,bS,... Ni aquí ni allí. Era más fuerte 20. i,f3 a fin de intentar obligar al caballo, fuertemente cen tralizado, a declarar sus intenciones. Si las negras decidieran cambiar en c3 -estratégica mente muy ventajoso ahora que la dama no puede capturar ahí-, el alfil blanco estaría en la casilla correcta. 20. ...,ab4 21. ab4, é2ld6? Pero ahora la jugada 20 de las blancas cobra sentido de repente. Era mucho más fuerte 21 . . . . , �f8, que es lo que había pla-
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neado en pnnc1p1o. Después de 22. i,d7, �d7 23. �b3, �b5!, las negras tienen una posición excelente. Solamente cuando la torre se vaya de d1 , por ejemplo después de 24. .id a 1 , cambiarán las negras en c3, y a 24. i,d4 se contesta la fuerte 24 . . . . , .ldc4. 22. �d3,... Las blancas no aciertan a aprovecharlo del todo. La textual es, ciertamente, más fuerte que cambiar en d7, que dejaría a las negras con posición superior, pero había una jugada defensiva todavía mejor, a saber, 22. �a4! Es esencial que las blancas obliguen al adversa rio a cambiar el activo caballo de d6 por el alfil de rey. La iniciativa de las negras se ha eva porado, y deben intentar mantener la posición en equilibrio con 22 . . . . , �e6, seguida de 23. . . . , � e7. 22. ..., �fB
Sin pensar mucho, puse el rey a un lado después de todo, lo que es un poco menos fuerte que hacerlo en la jugada anterior, pero sigue siendo suficiente para obtener un juego confortable. El único problema es que el peón «d>> queda colgando, y esto es más un peque ño «farol>> que un sacrificio de peón convin cente. Las negras no tienen que esperar más que tablas. 23. J!i,gS,... Una jugada totalmente inesperada, que tampoco obtiene gran cosa. Por otra parte, no hace mucho daño a la posición blanca. La continuación crítica es 23. �d5, é2lb6, y ahora:
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a) 24. �g5, lZ:Jb5 25. �b5, lZ:Jc4 26. <;t>c1 , �e4!, y las amenazas 27 . . . . , lZ:Ja3 y 27 . .. . , l¿je3 no pueden pararse a la vez. b) 24. �d4 ! , �e6 25. i,d3, t¿j bc4 26. i,c4, lZ:Jc4 27. <;t>c2, y ahora todo lo que les queda a las negras es buscar la repetición de jugadas con 27 . . . . , l¿ja3 28. <;t>b2, t¿jc4. 23. ..., tZJ b6 24. � d4, ... El sacrificio de calidad 24. l:t. d5 sería bueno si las negras se vieran obligadas a tomar en b5 después de 24 . . . . , t¿jd5 25. �d5, pero en vez de eso cambian el otro alfil con 25 . . . . , lZ:Je4, y entonces las blancas no tienen com pensación suficiente por la calidad. Durante todo el medio juego, el alfil de dama blanco es el alfil bueno, y el de rey, el malo. 24. ..., h6! Esta tranquila jugada intermedia obliga a la torre a volver con las manos vacías, ya que 25 . .l::t e5 fracasa por 25 . . . . , l¿jc4, y 25 . .l::t d5 tiene los mismos inconvenientes que en la jugada anterior. Por último, 25. �b6, hg5 26. fg5, t¿je4 es muy bueno para las negras. 25. .l:;Igg1, �e6 Defendiendo el caballo de manera indi recta. 26. i,d3, t¿jbc4 Era mala 26 . . . . , t¿je4 en vista de 27. f5! , t¿ja4 28. <;t>b3, �c6 29. i,e4, de4 30 . .l:b. c1 , y las negras tienen graves problemas. Una posible alternativa era 26 . . . . , l¿ja4 a fin de cambiar el alfil bueno, pero después de 27. <;t>b3, lZ:Jc3 28. dc3 es muy cuestionable que las negras estén mejor. 27. i,c4, lZ:Jc4 Las blancas pueden contestar a 27. �c4 28. �e5 con confianza porque después de 28 . . . . , l:í. b4?? 29. i,b4 el caballo está cla vado. 28. <;t>b3, ... Gracias a la presencia del peón <e7
GRANDE S MAE STROS
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Por fin se han comunicado las torres. 29. d3, ... Durante la partida, pensé que 29. b5 tal vez fuera desagradable para las negras, pero posteriormente vi que apenas reportaría nada después de 29 . . . . , <;t>d7 30. i,b4, ti. c7, y las negras refuerzan su posición con tranquilidad. La textual prepara el cambio de las damas, que se produce en el momento justo, ya que el rey blanco vuelve a estar un poco más expuesto que el negro. 29. ..., t¿jd6 30. �es, .l::!.c6 31. �e6, <;t>e6 32. gde1?, ... Apuradas de tiempo, las blancas permi ten penetrar a la torre negra. Era correcto 32. Ud2, .t:i. gc8 33. i,b2, con posición apro ximadamente igualada. 32. ..., .ld gc8 33. i,b2, Uc2 34. e4, ... Las blancas deciden sacrificar un peón a fin de obtener contrajuego activo. Las alterna tivas 34. h4, � h2 35 . .U. h1 , .ld h1 36. I1 h1 , h5 y 34. .id h1 , 1:1 d2 35. .U. d1 , ti. e2 36. 1::1. de1 , l;I cc2 eran todavía peores. 34. ..., de4 Este cambio de peones abre la tercera fila como base de ataque para las torres. La aper tura de la columna «d» es de menor importan cia. A 34 . . . . , 1dh2 no habría seguido 35. ed5, <;t>d7, ganando las negras con facilidad, sino 35. f5, gf5 36. gf5, <;t>d7 37 . .l:i. d5, y las blan cas recuperan el peón. 35. de4, .!::!. h2 36. f5, gf5 37. ef5, <;t>d7 Ni que decir tiene que las negras no deben capturar el peón.
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38. � d1?, ... Luego de esta jugada en apariencia obvia, es probable que las blancas estén perdidas. Era correcta 38. � g3 a fin de proteger la ter cera fila y amenazar 39. I;i, d3. Después de 38 . . . . , l,l cc2 39. _ic3, ld ce2 40. b! d1 , �c6, las negras siguen teniendo posibilida des de ganar, pero dada la reducida cantidad de material la pregunta es ¿cuántas? 38. ..., � h3 39. �a2, I:!. c2 Sin dar tiempo a las blancas de sacar par tido de la clavada en la columna «d». 40. �b1, ... La última jugada hecha en apuros de tiem po. Era un poco mejor 40. �a1 , aunque tras 40. . . . , �c6 41 . � c1 , .U. c1 42. 1:t c1 , � b5, las negras progresan con facilidad. 40. ..., l:i, e2 Manteniendo al alfil fuera de e5 al tiempo que se amenaza 41 . . . . , l::í, b3.
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41. j_g7, ... La jugada secreta. El final de cuatro torres que se produce luego de 41 . ld d4, ld b3 42. l::t gd1 , li bb2 43. �a1 , .ld a2 44. �b1 , U eb2 45. �c1 , �c7! 46. ll d6, l:tb5 no ofrecía esperanzas porque 47 . .1::1 d7, �b8 48. l:l f7 fracasa por 48 . . . . , l:í, a1 49. �c2, .tí.c5, ganando una torre. 41. ..., �c6 42. .l::i, c1, �b6 No 42 . . . . , � b5 en vista de 43. � gd1 , y de repente el bando blanco tiene mucho con trajuego. 43. _id4, �b5 Ahora que el alfil bloquea la columna «d», el rey negro consigue penetrar en la posición blanca. 44. .ti, c2, ... Y el resto es cuestión de técnica, aunque 44 . .l::i. c5, �a4 habría hecho que la posición blanca fuera más desesperada todavía. 44. ..., l:í, c2 45. �c2, Qjf5 46. i,c5, b6 47. _if8, Qjd4 48. �b1, h5 49. � f1, f5 Esto requirió algo de cálculo. 50. ld f4, ... A 50. _ig7 se habría contestado 50 . . . . , Qjf3, muy fuerte. 50. ..., �c4! 51. j_g7, � b3 Las blancas abandonaron.
6.
John Van der Wiel
Van der Wiel-Timman Tilburgo, 1983 Torneo Interpolis
RL 20.1
Ruy López
1. e4, e5 2. t¿jf3, 4.Jc6 3. ii,b5, a6 4. ii,a4, 4.Jf6 5. o-o, ii,e7 6. .U. e1, b5 7. ii,b3, d6 8. c3, o-o 9. d4, ii,g4 10. ii,e3, ... La alternativa es 1 O. dS. Como Gulko, que obtuvo muchas victorias con ella hace algu nos años, Van der Wiel prefiere claramente la textual. 10. ..., ed4 11. cd4, d5 12. e5, t¿je4 13. h3, ... En la Enciclopedia, Matanovié indica aqu í 1 3. t¿jd2, con l a continuación 1 3 . . . . , 4.J d2 1 4. �d2, ii,f3 1 S. gf3, i,b4 1 6. �c2, i,e1 1 7. �c6. ii,b4 1 8. ii,dS, y las blancas tienen clara ventaja. Esta variante ya había aparecido en la obra de Fischer Mis 60 mejores partidas en los comentarios a su partida contra Korchnói (Estocolmo, 1 962). Es extraño, no obstante, que Matanovié, en la última edición* de la Enciclopedia no mencione la partida Amason-Torre, Sochi, 1 980, en la que las negras obtuvieron una buena posición luego de 1 6 . . . . , t¿jaS! (en vez de 1 6 . . . . , ii, e 1 ) 1 7. ii,d2, ii,d2 1 8. �d2, t¿j b3 1 9. ab3, �d7. Sin embargo, tal vez siga siendo la mejor posi bilidad de las blancas, porque el sacrificio de calidad que prepara la textual tiene graves inconvenientes. [*Timman se refiere a la segunda (o quizás a la tercera) edición; en la cuarta (tomo «C» -C91 -, 2000) tampoco figu ra, y ha variado todo por completo. La línea que se da ahora -y no como principal- es 1 3. 4.Jc3, 4.Jc3 1 4. bc3, �d7 1 S. ii,c2, 4.Jd8 1 6. �d3, g6 1 7. ii,h6 (Fishbein-lbragimov, Maringá, 1 99 1 ) , ii,fS 1 8. �d2, l:!. e8 1 9. h3, con peque ña ventaja de las blancas según Fishbein; 1S . . . . , fS se indica como incierta (N. del t.)] 13. ..., ii,h5 14. g4, ii,g6 15. 4.J h2, i,b4 16. f3, ii,e1 Encauzando el juego hacia Panchenko Torre, Sochi , 1 980, en la que el alfil negro
fue a e1 vía h4. En el torneo O H RA de 1 983, jugué 1 6 . . . . , �h4 contra Van der Wiel, jugada que, según Panchenko, indicó Petrosián . Después de la sobria 1 7. l:l e2, 4.Je7 1 8. �c1 , tuve que sacar la conclu sión de que las negras están totalmente perdidas. 17. �e1, 4.Jg5 18. t¿jc3, 4.Je6
B
Sin duda la mejor jugada. En Panchenko Torre, las blancas se quedaron con ventaja luego de 1 8 . . . . , t¿j b4 1 9. �d2, 4.J h3 20. �g2, eS 21 . � h3, c4 22. a3. 19. ii,d5, ... Panchenko desaprueba esta jugada en sus comentarios, indicando 1 9. l:t. d1 , t¿j b4 20. �e2, aS 21 . �bS, con ventaja de las blancas, pero 1 9 . . . . , t¿jaS! 20. i,dS, c6 es mucho más fuerte, y es dudoso que las blan cas tengan compensación suficiente por la calidad. El problema recurrente de la posición blanca es que el caballo está al margen del juego en h2. Este tema vuelve más tarde en la partida. 19. ..., 4.Jcd4 Esta posición la evalúa Panchenko -es probable que de manera errónea- como cla ramente mejor para las negras. 20. � d1, ...
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La única jugada. Después de 20. itd4?, c6! , las blancas habrían perdido la calidad sin tener la menor compensación. 20. ..., es No es tan bueno 20 . . . . , CZ'lc2 2 1 . �f2, CZ'le3 22. �e3, �h4 porque las blancas entonces no se meten en 23. itaS, �g3, sino que impiden el jaque intermedio con 23. f4! Después de 23 . . . . , l:l: adS 24. f5, CZJg5 25. itg2, la situación no es del todo clara. Con la textual, las negras mantienen el caballo en su fuerte posición central recién adquirida. 21. f4?, ... Luego de. esto, es claro que las blancas se llevan la peor parte. Era correcto 21 . itaS, �aS y solamente entonces 22. f4. Investiguemos:
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Todo esto parece muy prometedor, pero las blancas aguan la fiesta con la intermedia 25. CZ'ld5! La torre tiene que volver a 17, y es dudoso que las negras tengan compensación suficiente por el peón. Durante la partida, tam bién estudié 23 . . . . , l:t. eS para intentar sacar partido de la apertura de la columna «e», pero después de 24. �f2. no parece muy promete dora; p. ej. : 24 . . . . , b4 25. f5, bc3 26. fg6, y en vista de la terrible amenaza 27. f7, la ventaja es de las blancas. e) 22 . . . . , ite4. La mejor jugada, dadas las variantes que acaban de señalarse; el quid es que después de 23. itd4, it h 1 , las negras han apostado el alfil en la gran diagonal. Sería aconsejable, por tanto, que las blancas busca ran un final de tablas con 23. CZ'le4, �e4 24. itd4, �e1 25. l:l e1 , CZ'ld4 26. Wf2. La posi ción carece de vida. 21. ..., b4 22. itaS, ...
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(análisis) a) 22 . . . . , b4 23. CZ'le2, CZ'lf3 24. CZ'lf3, �f3 25. �f2! (la única jugada), �h3 26. �g3, y las blancas fuerzan el cambio de las damas, después de lo cual recobran el peón y tienen buen juego. b) 22 . . . . , f5 23. ef6, y ahora el sacrificio de pieza 23 . . . . , 1::1 f6 24. f5, CZ'lf5 es muy tentador. Si se acepta, las complicaciones son favora bles a las negras. Considérese: 25. gf5, itf5 26. CZ'ld5, li g6 27. CZJg4, itg4 2S. CZ'le7, Wf7 29. CZ'lg6, itd1 30. CZ'le5, y aqu í no 30. ... , Wf6 en vista de 31 . CZ'ld7, we7 32. CZ'lc5!, con ventaja de las blancas, sino 30. . . . , WgS! 31 . �d1 , �e4, y las negras recuperan con intereses el material sacrificado.
22. ..., bc3! Luego de 22 . . . . , �aS, la partida habría transpuesto a la variante «a•• del comentario a la jugada 21 de las blancas. La textual se basa en cálculos precisos. 23. it g2, ... Después de esta retirada, las blancas están perdidas sin remedio. Su única posibili dad era 23. bc3, �aS 24. cd4, aunque las negras conservan la ventaja tras 24 . . . . , cd4 . Por ejemplo: a) 25. itd2, itc2 26. � d1 , d3, y el caba llo amenaza con penetrar en d4. b) 25. f5 es la mejor posibilidad de las
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PARTIDAS SE LE CTAS DE
blancas. Después de 25 . . . . , de3 26. �e3, no tienen por qué apresurarse a recuperar la pieza; por otra parte, las negras siguen siendo superiores, ciertamente, a causa del debilita miento de la posición del rey enemigo. Una jugada fuerte es 26 . . . . , �c6, amenazando 27 . .. . , �c2. 23. ..., cb2 24. f5, ltJfS! El quid de la jugada 22 de las negras. Se sacrifica la dama porque no puede impedir-
GRANDE S MAE STROS
se que el peón « b » corone. Esto es posible en parte por la mala posición del caballo blanco. 25. ];1 d8, .U, d8 26. j,gS, ... Un final más bonito era 26. �b1 , l:1 d1 ! 27. �d1 , tt:Je3, y las negras se quedan con una pieza más. 26. ..., tt:Jg5 27. �b1, .l:i. b8 Las blancas abandonaron.
7.
Yasser Seirawan
Timman-Seirawan Yogyakarta, 1983 Torneo de la Primera Dama
Una idea relativamente nueva en esta posición. Las blancas sacrifican un peón a fin de abrir el centro y empezar a atacar al rey negro. La vieja jugada 1 O. l2lc3 no da mucho después de 1 0 . . . . , �b8. 10. ..., cd4 Seirawan hizo esta jugada sin pensar mucho. Aceptar el sacrificio de peón mediante 1 0 . . . . , i.,e4 es muy interesante. Parece que las blancas tienen dos posibilidades de jugar al ataque: 1 1 . d5 y 1 1 . tt:Jg5. Ambas han de probarse en el ajedrez de torneo. 11. es, i.,f3 Magerrámov-Chéjov, URSS, 1 982, conti nuó con 1 1 . . . . , t2l e4 1 2. i.,c2, d3 1 3. i.,d3, tt:Jec5 1 4. i.,c2, y las blancas tenían un juego mucho mejor según Chéjov en el lnforrnator. Él estudia 1 1 . . . . , l2ld5 y 1 1 . . . . , tt:Jg4 como alternativas, pero no analiza la jugada del texto. Sin embargo, yo me había preparado a fondo contra ella, porque 1 1 . . . . , i. f3 parece ser la única manera de probar el inconvenien te de la estrategia blanca sin aceptar el peón. Al ceder la pareja de alfiles, las negras debili tan el flanco de rey enemigo.
12. gf3, l2l hS 13. f4, g6 1 3 . . . . , �h4 es interesante; por ejemplo: a) 1 4. f4, i. c5 1 5. fe6, fe6 1 6. i. e6, .Uf8, con juego muy agudo, que tal vez dé las mejo res perspectivas a las negras. b) 1 4. � d4, i.,c5 1 5. l':i, e4, 0-0 1 6. f5, y las negras tienen la sorpresa 1 6 . . . . , tt:Jg3!, con juego incierto. 14. l::!. d4, ... 1 4. f5 es prematura, ya que las negras tie nen la fría respuesta 1 4 . . . . , tt:Jg7! , defendien do la debilidad de e6 y poniendo el caballo en juego al mismo tiempo. 14. ..., �b6 Tras gastar mucho tiempo, Seirawan elige un plan que no es fácil de encontrar. La torre se ve desalojada de d4 (a 1 5. i. e3 se respon de 1 5 . . . . , i.,c5 1 6. � d6, �c7), pero la dama parece estar mal situada en b6. 1S. l':i, d1, l':i, d8 16. ltJc3, i.,e7 17. fS!, ... Potente avance en verdad, ya que el caba llo negro no puede volver a g7. 17. .. , 0-0 Las negras deberían hacer caso omiso del peón «f,, , ya que después de 1 7 . . . . , ef5 1 8. l2l d5 perderían de inmediato. 18. i.,e3, i.,cs La dama no tiene buenas casillas: luego de 1 8 . . . . , 'ifc6 1 9. fe6, fe6 20. l2ld5 o 1 9 . . . . , t2l e5 20. i.,d5, la posición negra pronto se derrumbaría. 19. l':i, d6, ... .
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PARTIDAS SE LE CTAS DE
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Las blancas deben prevenir todo cambio en e6. A medida que avance la partida, verá por qué la jugada efectuada asegura la inicia tiva. 19. ..., J,e3! La mejor réplica. Las negras ceden la dama a cambio de torre y alfil. Esperan atem perar la iniciativa de las blancas y crear una sólida disposición defensiva. Una vez más, la dama no tiene jugadas buenas a su disposi ción; por ejemplo: a) 1 9 . . . . , V/!ic7 20. fe6, t¿je5 21 . .id d8, � d8 22. t¿jd5. b) 19 . . . . , V/!ia7 20. bl ad 1 ! , y la clavada del caballo de d7 es mortífera. 20. � b6, J,b6 21. .ll d1' ... Todavía no hay necesidad de cambiar en e6. En realidad, las blancas pierden una pieza después de 2 1 . fe6, fe6 22. J,e6?, �ha 23. t¿je4, t¿jf4 24. V/!ig4, tt:J e5 y aun que hagan una jugada mejor que 22. J,e6?, el segundo jugador no tendrá problemas. 21. ..., t¿jc5 22. V/!if3!, Ahora se amenaza aplastar en c6. 22. ..., t¿jb3 23. ab3, J,d4 24. � d3, ...
Las blancas, obviamente, no se molestan en proteger el peón «e•• y se preparan para doblar la dama y la torre en la columna ••d•• . 24. ..., ef5 La manera errónea de aguantar la partida. Debería haberse jugado 24 . . . . , J,e5; enton ces, las blancas siguen con 25. ld d8, I:r d8 26. fe6, fe6 27. V/!ie3, y a continuación: a) 27 . . . . , J,c3 28. bc3, creando un peón pasado contra el que el caballo es impotente. b) 27 . . . . , J,g7 28. V/!ie6, � h8 29. V/!ia6, t¿jf4, con juego activo y algunas posibilidades de hacer tablas. 25. v¡¡¡ d1' j, b6 26. ttJ d5, .Id b8
8
•••
Parece que las negras han sabido encarar sus problemas, puesto que las posibilidades de las blancas son escasas después de 27. t¿j b6, l':t. b6 28. � d6, 1l bb8. Es poco proba ble que se cree un peón pasado, y 29. e6 no ofrece más que magras ganancias en el ata que. Después de mucho pensar, encontré una idea para revitalizar la partida. 27. .ld h3!, .••
JAN TI M MAN:
MI AJE DRE Z AUDAZ
Preparando un sacrificio de calidad para despedazar el flanco de rey negro. La posición dominante del caballo blanco cobra ahora más importancia. 27. ..., �d8 Después de la partida, Seirawan sugirió que 27 . . . . , .l:i. fd8 tal vez hubiera sido más activa. Sin embargo, incluso entonces tienen problemas las negras, ya que 28. .l:!. h5, gh5 29. ltjf6, �f8 30. 'lWh5, l:t d2 fracasa por 31 . 'lWh6. La textual mantiene al caballo fuera de f6, pero tiene el inconveniente de que las torres ya no están comunicadas. 28. I:t, h5, gh5 29. 'lWh5, �h8 30. 'lWf5, .)l g8 31. �f1, l:t g7 Parece que las negras han establecido una defensa, pero las dos próximas jugadas de las blancas muestran lo tambaleante que es. 32. ltjf4, �g8 33. e6, �e7 34. ltj h5,... Esto gana la calidad, ya que 34 . . . . , fe6 35. 'lWe5 perdería una torre. 34. ..., l::t f8 35. t2Jg7, �g7
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Al avanzar este peón, se ha construido una fortaleza que será difícil de demoler. En muchas líneas, el peón «e» interfiere los pla nes de las blancas. 39. �f3, h5 Tal vez hubiera sido más sensato mante ner el peón en h7, ya que la dama tiene ahora acceso a g6. Por otra parte, el peón en h4 estará bien protegido por el alfil. 40. 'lWe2,h4 Es imposible salvar el peón «a» porque a 40 . . . . , ld a8 se responde 41 . 'lWg2, y el rey negro está atascado. 41. 'lWa6, ld d8 42. 'lWe2,...
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La partida ha llegado a su fase técnica y debería ganarse si las blancas juegan con exactitud. Por tanto, 36. b4! es lo indicado para que la dama pueda atacar los peones del flanco de dama. Sin embargo, las blancas incurren en algunas pequeñas inexactitudes que hacen problemática la victoria. 36. 'lWe5, �g6 37. �g2,... Todavía debería probarse 37. b4. 37. ..., b4 38. f4,... Es preferible tomar en f7. 38. ...,f5
La posición aplazada. El problema de las blancas es que el rey no puede usar la colum na «d>> y, así, no puede penetrar en la posición negra. Durante el aplazamiento, encontré un plan para ganar que consistía en ceder el peón «e», de modo que pudiera forzarse la entrada en juego del rey. Seirawan dijo pos teriormente que temía un plan que implicara que el rey blanco fuera a h3 a fin de obligar al negro a ir a f6, y se perdería el peón <
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PARTIDAS SE LE CTAS DE
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49. �d3, ... Desde luego. Como el rey ya no tiene cor tado el paso, las blancas no amenazan más que proteger el peón «e» con la dama. 49. ..., �e6 50. �e3, �d7 Luego de 50 . . . . , �f7 51 . �es, la única manera de mantener el peón «f» sería hacien do una jugada pasiva como 51 . . . . , �ea. 51. �d4, br f6
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(análisis) La torre no puede abandonar la fila a causa del jaque aplastante en e8. La única jugada razonable es 46 . . , .l:i. g8, después de la cual se hace retroceder a las negras mediante 47. �d7, �f6 48. �d4 (no 48. �h4. � g4 y 49 . . . . , ld f4) 48 . . . . , �g6 49. �g1 , �h7 50. �a7, :S g7 51 . �d7, �g6 52. �e8, � h6 (52 . . . . , �f6 53. �h8!) 53. �h8, �g6 54. �g2, y el juego negro no tiene salvación, ya que la torre está demasia do pasiva. Sin embargo, las negras tienen otra juga da en vez de 45 . . . . , ld d8. Pueden probar 45 . . . . , � d2; a 46. �b2 se responde 46. . . . , M. d8, y como les toca jugar, las blancas no pueden crear una posición de Zugzwang por que no deben perder de vista la casilla d3 para impedir un jaque de torre. El plan para ganar que se adopta en la partida es más eficaz, como veremos. 42. ..., !I d6 43. �e3, )d d8 44. �e2, �f6 45. �e5, �g6 46. �e3, ... Las blancas repiten jugadas a fin de tener más tiempo para jugar con exactitud antes del segundo aplazamiento. 46. ..., �g7 47. �g1, �f6 48. h3, � f8 Después de 48 . . . . , � e6, las blancas lo tienen un tanto más fácil; p. ej. : 49. �g7, .l:!, d5 (de lo contrario se pierde un peón) 50. �g8, �d6 51 . �g6, �d7 52. �b6, Zugzwang. La única jugada que evita la pérdi da de un peón es 52 . . . . , .Id eS, pero eso per mite al rey blanco penetrar vía d3. . .
52. �g1!, ... Esto mantiene al monarca negro fuera del flanco de rey. Otras jugadas harían mucho más ardua la tarea de las blancas; p. ej . : 52. �f3, �ea 53. �es, �f7 54. �d5, �f8 55. �a8, �f7 56. �b8, y aunque las negras están en Zugzwang no está del todo claro que pierdan la partida después de 56 . . . . , �g7 57. �ea, �d6 58. �d5, �f4 59. 'iV b4, �g3, ya que el peón pasado debería darles contrajuego. Al mantener al rey negro fuera de f7, puede evitarse un posible jaque de alfil en d6, con lo que a la larga se gana un peón sin que las negras tengan compensación. 52. ... , � f8 53. �d5, g f6 54. 'iV g8, ... 54. �es es más exacta, pero la textual es adecuada por completo. 54. ... , g a6 55. 'iVb8, U h6 Las negras no tendrían jugadas acepta bles después de 55 . . . . , .l:::!. as 56. �d4. 56. 'iVb7, �d8 57. �e5, .Id f6 58. 'iVb8, Aquí, la partida volvió a aplazarse. El peón «f» negro está a punto de caer, pero la victo ria todavía dista de ser fácil.
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58. ..., �d7 59. �g8, ll c6 Las negras ceden voluntariamente un peón, ya que tras 59 . . . . , � f8 60. �g6, �d8 61 . �e6 estarían atadas de pies y manos. 60. �f5, !l f6 61. �es, .ld c6 Las negras intentan aguantar la sexta fila, con la esperanza de que las blancas jueguen 62. f5, J:t eS 63. �e4, .ld c6 y no puedan luego más que lamentar que su rey ya no pueda acceder a la casilla f5. En vez de eso, la dama tratará de forzar el Zugzwang. 62. �d5, �c7 63. �as, �b7
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Esta jugada es l a más tesonera, ya que después de 63 . . . . , �d7 64. �a7, �d8 65. �b8, �d7 66. �b7, .i:I c7 67. �d5, segui do de 68. � e6, se ha abierto brecha en las defensas negras. 64. �a4!, ... Zugzwang, solamente puede jugar el alfil . 6 4. ..., i,f8 65. �b5, �c7 66. �as, .l:i. b6 Después de 66 . . . . , � b7 67. �d5, de nuevo se abrirá brecha en las defensas negras. 67. �a7, li b7 68. �a6, i,g7 69. �d5, � b6 70. �a7, .l::í. b7 71. �as, �b8 72. �d8, �a7 73. �h4, ... El resto es fácil. 73. ..., �a6 74. �d8, i,b2 75. f5, i,c3 76. f6, 11 h7 n. �c6, ... Las negras abandonaron. Considero esta interesante partida en todas sus fases la mejor que jugué ese año. Hay que admitir que cometí algunas inexacti tudes entre las jugadas 35 y 40, pero eso con dujo a un final que fue problemático y, por tanto, muy instructivo.
8.
Eric Lobron
Timman-Lobron Sarajevo, 1 984, ronda 4
QO 13.2.9
Ga mbito de Da ma R ehu sa do
1 . c4, e6 2. ltjc3, d5 3. d4, ltjf6 4. cd5, ... La Variante del Cambio es la manera más eficaz de evitar la Variante Tartakower, que Van der Wiel y Lobron emplearon con regula ridad en Sarajevo. 4 . ... , ed5 5. j,g5, j,e7 6. e3, ltj bd7 7. j, d3, c6 8. 'ii'c2, ttJ h5 Un antiguo plan, que últimamente ya no se usa en absoluto. Las negras fuerzan un cam bio de alfiles y mantienen el rey en el centro un poco más; puede que finalmente enroquen por el flanco de dama. Al mismo tiempo, se prepara un ataque de minorías alternativo con . . . , g6 y . . . , f5. Creo que esta disposición, cier tamente, tiene sus ventajas. 9. j,e7, 'ii'e7 1 0. ltj ge2, .. . A 1 0. ltjf3 se contesta 1 0 . . . . , ltjf4, con juego fácil para las negras. 10 . ... , g6 1 1 . h3, ... Impidiendo 1 1 . . . . , f5, a la que se contesta con la fuerte 1 2. g4. En la Enciclopedia encon tré más tarde la partida Pachman-Guimard, Buenos Aires, 1 960, en la que se siguió con 1 1 . 0-0-0, ltjb6 1 2. h3, j,e6 1 3. �b1 , 0-0-0 1 4. ltja4, �b8 1 5. ltjc5, con ligera ventaja de las blancas. Es mejor 1 4 . . . . , ltja4 1 5. 'ii'a4, �b8, después de lo cual es cuestiona ble que las blancas hayan obtenido algo. 11 . ... , ltjg7 1 2. ltjf4, ... Una jugada obvia, pero probablemente no la mejor. Era correcta 1 2. 0-0-0 a fin de jugar el caballo a g3 si fuera necesario. 1 2 . ... , ltjf6 Excelente réplica. Las negras amenazan igualar por completo con 1 3 . . . . , J.,f5, de modo que la próxima jugada de las blancas es más o menos forzada. 1 3. g4, ...
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1 3 . ... , g5 De nuevo una buena reacción , que tam bién pone de manifiesto los inconvenientes de la jugada 1 2 de las blancas. Las negras tienen la intención de tomar la iniciativa en el flanco de rey. 1 4. ltjg2, ... No es precisamente una gran casilla para el caballo, pero las blancas deben mantener e3 defendido a fin de poder avanzar el peón «f» . Después de 1 4. ltjfe2, h5 1 5. 0-0-0, las negras no deberían ir a ganar el peón ense guida, ya que luego de 1 5 . . . . , hg4 1 6. hg4, � g8 1 7. f3! , 'ii'e 3 1 8. �b1 , las blancas tie nen peligrosas posibilidades de ataque por el peón sacrificado. Tomándoselo con calma, las negras pueden obtener un juego excelente: pri mero 1 5 . . . . , j,d7 (en vez de 1 5 . . . . , hg4), y ahora la amenaza es 1 6 . . . . , hg4 1 7. hg4, 0-0-0, y no puede salvarse el peón ••g••. 1 4. ... , h5 1 5. 0-0-0, J. e6 No puede abrirse la columna ••h» , desde luego, hasta que las torres negras estén comunicadas. Uno se pregunta, sin embargo, si no debería haberse desarrollado el alfil a d7. Lobron se decidió por e6 porque no le gusta ban demasiado las consecuencias de 1 5 . . . . , j,d7 1 6. f4. Y es verdad que después de 1 6 . . . . , hg4 1 7. fg5, ltjfh5 1 8. h4 la posición
JAN TIMMAN: MI AJEDREZ AUDAZ
parece favorable para las blancas, ya que las negras siguen sin poder enrocar por el flanco de dama. 1 6o �a4!, Una manera un tanto original de impedir que las negras enroquen por el flanco de dama y comuniquen las torres. 1 60 a6 Parece mejor 1 6 . . . . , j,d? a fin de jugar . . . , c5, pero psicológicamente esta jugada era difícil de hacer porque las negras acababan de decidir dónde poner el alfil. La textual supo ne un leve debilitamiento del flanco de dama negro, como veremos. 1 10 �as, Las blancas siguen intentando impedir la maniobra del enroque. 1 7o �d8 1 8o �b4, �e? 1 9o tba4, 000
000,
33
Abrir la columna «h» no era estrictamente necesario, pero tampoco hace daño alguno a las negras. 21 o hg4, o-o-o 220 f3, Estando tan debilitado el flanco de dama negro, las blancas no tienen por qué preocu parse demasiado por una excursión de la dama a g3. 220 � b8 23o tbcS, j,cB 000
000 ,
000
000,
000
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Las negras todavía no pueden enrocar por el flanco de dama, ya que a 1 9 . . . . , 0-0-0 se contesta 20. j,a6; el quid es que después de 20 . . . . , ba6 21 . tLlb6, � b8 22. ibd5, se que dan con un peón menos. Pueden impedir la pérdida del peón jugando 20 . . . . , hg4, pero incluso entonces 21 . h4! da claramente las mejores perspectivas a las blancas. Si inten tan cambiar el orden de jugadas haciendo pri mero 1 9 . . . . , hg4, 20. tLlb6! acaba de manera definitiva con sus sueños de enrocar por el flanco de dama. 1 90 aS Así, este nuevo debilitamiento es más o menos forzado. 200 �c3, hg4 000,
Después de esta jugada, Lobron ofreció tablas, lo que me dio la oportunidad de estu diar la posición una vez más. ¿Están mejor las blancas? Su estructura de peones es sóli da, pero los peones «e» y «f» podrían llegar a ser débiles. Ambos jugadores tienen un caballo situado de manera poco afortunada, pero parece que las negras conseguirán acti var el suyo primero. De todos modos, las blancas tienen una ligera ventaja, pues el peón de a5 constituye el punto de partida de un ataque al rey. Si este peón estuviera toda vía en a?, la ligera ventaja sería, ciertamen te, de las negras. 24o j_c2, Dejando vacante la casilla d3 para un caballo. 24o tbe6 2So ibd3, �g3 Una jugada muy bien meditada. Las negras quieren llevar el caballo de e8 a d6, lo que solamente es posible si controlan la columna «h» . Esta expedición de la dama obli ga a las blancas a cambiar en h8. 260 .l:lhB, tlh8 27o t2Jge1 , �c7 000
000,
PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
34
B
Hasta ahora, Lobron se ha defendido de manera excelente, pero volver con el rey al centro es un error decisivo. Era correcta 33 . . . . , � b8, contra la que tenía la intención de jugar 34. �b3 a fin de continuar con 35. .Ud3 des pués de 34. . , �c7. Al transferir la dama de b2 a b3, las blancas han dejado vacante una casilla para el rey, y la amenaza es ahora 36. .id c3. No veo cómo podrían defenderse las negras de esto. Sin embargo, hay una asombrosa jugada defensiva, que demostró Korchnói en los análisis post mórtem: 34. . . . , �a8! (en vez de 34. . . . , �c7). Si la dama blanca estuviera en b2, esto vendría a ser un suicidio, ya que la torre iría de d3 a a3, pero al estar en b3, a las blancas les resulta difícil con tinuar el ataque; p. ej.: 35. �a3, �a7 o 35. �b2, f6 36 . .l::i.d 3, � h1 37 . .i,d1 , tLlb5, con una partida muy incierta. Luego de 33. . .. , �b8, las blancas, desde luego, pueden bus car la repetición de jugadas con 34. �b2, pero es dudoso que tengan algo más. Después de, p. ej., 34. e4, las negras tienen 34. . . . , tLlb5. 34. e4, tLlf4 35. � c5, ... Otra potente jugada. Se pone a las negras a la defensiva todavía más. 35 . ... , �c7 Era más tenaz 35 . . . . , �c7, aunque las blancas siguen teniendo varias posibilidades buenas incluso entonces; es probable que la más prometedora sea un sacrificio de caballo en c6. 36. ct:Jd5, tLld5 37. ed5!, ... El momento correcto para abrir la posición. El caballo de d6 tiene que estar ahora pen diente de f7, y el rey negro parece estar incó modo en extremo. 37. ... , f6 38. �d6!, ... . .
Habiendo cumplido su m1s1on, la dama vuelve a defender el peón «a» . Ahora ha llega do el momento de que las blancas lancen una ofensiva antes de que las negras puedan lle var el caballo a d6. 28. b4!, ... Este agudo avance debilita la posición del propio rey de las blancas, pero sus posibilida des de ataque tienen preferencia. 28 . ... , ab4 29. tLlb4, ct:Je8 30. �b2, �b6 La única defensa aceptable. 31 . ct:Jed3, tLld6 32. ct:Je5, ... Los caballos han entrado en la refriega con ganas. 32 . ... , �c7 Amenazando ahuyentar al caballo de e5 con 33 . . . . , f6. 32 . . . . , f6 enseguida no era posi ble en vista de 33. ct:Jbc6, �c7 34. tLlb4, y las blancas ganan. 33. �c3, ...
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33 . ... , �d8?
JAN TIMMAN: MI AJEDREZ AUDAZ
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35
Bonita jugada final . Después de 38 . . . . , � d6 39. lL\c4, �c7 40. d6, las blancas ganan una pieza neta. Las negras abando naron.
9.
Slavoljub Marjanovié
Marjanovié-Timman Sarajevo, 1 984, ronda 7
FR 17.11.8
Defensa Fra ncesa
1 . e4, e6 2. d4, dS 3. tZ:ld2, tZ:lf6 4. es, tZ:lfd7 S. c3, eS 6. j,d3, tZ:lc6 7. tZ:le2, cd4 8. cd4, f6 9. ef6, ttJf6 1 o. o-o, j,d6 1 1 . ttJf3, 'fic7 1 2. tt:Jc3, a6 1 3. j,gS, o-o Una idea interesante de Keene es 1 3 . . . . , tt:Jg4 a fin de contestar a 1 4. h3 1 4 . . . . , tZ:lh6. En la partida Hutchings-Keene, Barcelona, 1 975, esto dio muy buen resultado porque las blancas cambiaron en h6. En vez de eso, 1 5. 'fjb1 ! es la jugada crítica. Se ha impedido el plan de jugar el caballo a f5 después del enroque y las blancas tienen mejores pers pectivas. Luego de la jugada del texto, las blancas tienen la ocasión de llevar el alfil a g3. 1 4. j,h4, tZ:lhS En combinación con las dos jugadas que siguen, una estrategia que Korchnói ha intro ducido recientemente. Las negras no tienen por qué temer el sacrificio de alfil en h7 porque las blancas pierden ímpetu tras 1 5. j, h7, �h7 1 6. tt:J g5, � h6. 1 S. llc1 , ... En Kudrin-Korchnói, Beersheva, 1 984, se siguió con 1 5. li e1 , g6 1 6. � c1 , 'flg7! 1 7. j,b1 ' j,d7 1 8. j,g3, tt:Jg3 1 9. hg3, g5 20. 'fjd3, l::tf7 21 . ,Ucd1 , Uaf8 22. � d2, � h8 23. tZ:ld1 , j,c7 24. 'fle3?, .)¿ f3! 25. gf3, j,f4, y las blancas abandonaron. Aunque las blancas no hubieran cometido la grave equi vocación de la jugada 24, habrían tenido pro blemas de todos modos. Su juego sin plan ya les había dado peor posición. También en la presente partida, a Marjanovié le resulta difícil encontrar un buen plan, así que surge la pre gunta: ¿puede encontrarse alguno? 1S . ... , g6 1 6. j,b1 , 'flg 7!
B
Esta jugada es la que cambia, en mi opi nión, la valoración de toda la variante de «Un poco mejor para las blancas» en «Un poco mejor para las negras» . Se quita la dama de la columna «C•• , poco segura, y se pone en una casilla desde la que ataca el peón de d4, protege la posición del rey y puede implicarse en un posible ataque al rey enemigo. 1 7. �h1 , ... Las blancas pensaron durante mucho tiempo esta jugada de rey, un tanto misterio sa. Sin duda, la jugada crítica es aquí 1 7. tZ:la4 a fin de capitalizar la ausencia de la dama negra del flanco de dama. ¿Pueden las negras, por otra parte, explotar la posición del caballo blanco? Estudié el sacrificio de calidad 1 7 . . . . , k!, f3. Ahora las blancas se ven obligadas a debilitar gravemente el flanco de rey, ya que las negras ganarían una pieza limpia después de 1 8. 'fjf3, 'fjd4. Así pues, 1 8. gf3. Ahora la pregunta es si las negras tienen compensación suficiente. Luego de 1 8 . . . . , tZ:lf4 1 9. j,g3, 'fjh6 20. � h 1 ' 'fjh3 21 . .l:;1 g 1 , se han parado todas las amenazas directas, y las blancas siguen amenazando penetrar en b6 con el caballo. Una respuesta sólida a 1 7. tZ:la4 es, en cambio, 1 7 . . . . , j,d7. Las blancas pueden entonces dejar al
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adversario sin la pareja de alfiles con 1 8. ébb6, pero esto no haría más que eliminar el alfil malo. 17 . ... , j,d7 1 8 . .l:Ie1 , ... Ya era demasiado tarde para 1 8. lba4, pues con la nueva situación, el sacrificio de calidad 1 8 . . . . , 1::!. f3 sería fuerte. El quid es que después de 1 9. gf3, ébd4 20. lbb6, las negras pueden dejar la torre de a8 colgan do: luego de 20 . . . . , j, bS! 2 1 . lba8, j,e2 22. I;[ c8, j, f8, las blancas deben ceder la dama. Esta variante no dice mucho en favor de la jugada 1 7 de las blancas. 1 8 . ... , l::i,f7 A las negras les gustaría doblar las torres en la columna «f» . 1 9. lbe2, ... Controlando la casilla f4 para poder estu diar un salto de caballo a gS sin que las negras puedan jugar la torre a f4. 1 9 . ... , \t>h8
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Después de 23. lLJgS, 1:,í. f2 24. j, f2, � f2, las negras tienen dos piezas por una torre. 21 . ... , h6 Las negras, finalmente, deciden aceptar este leve debilitamiento después de todo. 21 . . . . , gS ya no era muy atractiva, por des gracia, porque con 22. ltJgS, 1:í.f2 23. j,f2, .Uf2 24. bi f3! , las blancas se llevan la mejor parte. 22. j,g3, ... Solamente ahora, cuando las negras han jugado . . . , h6, retiran las blancas el alfil. 22. ... , ltJg3 23. ltJg3, .Id f4 24. lbe2, .l::I 4f6 25. ltJg3, ...
N
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Preferí evitar . . . , h6 porque esa jugada debilitaría un poco el peón de g6 y quitaría la casilla h6 a la dama. A 20. ltJgS podría seguir 20. . . . , !:!. ff8, después de lo cual todavía hay tiempo para ahuyentar al caballo de gS. 20. a3, ... Las blancas se preparan para jugar 21 . .ld c3, seguida de doblar las torres por la columna «e» . 20 . ... , l:I af8 21 . 1::!. c3, ... Al estar el rey en h8, 21 . ltJgS, Id f6 22. ébf3 no es garantía de que se repitan juga das, ya que hay la venenosa 22. . .. , gS!
25 . ... , j,e8! El inicio de una sorprendente maniobra de alfi l . Las negras quieren transferirlo a g8, desde donde defiende las casillas vitales e6 y h7. 26. Uce3, j,f7 27. <;t>g1 , j,g8 28. �d3, j,f4 Inexactitud que podía haber permitido igualar a las blancas. Era correcta 28 . . . . , j,c7 a fin de llevar el alfil a b6 e incrementar la pre sión sobre el peón de d4. 29. J::l: 3e2, �f7 29 . . . . , j,c7 ya no era tan buena en vista de 30. ltJeS, y después de 30 . . . . , j, eS 31 . deS, la casilla f2 está lo bastante defendida. Con la textual, vuelve a atacarse indirectamente f2.
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PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
30. b4, ... Marjanovié ya tenía graves apuros de tiempo aquí y dejó escapar la ocasión de jugar 30. 1:!. f1 !, que da protección suplementaria al peón. Luego de 30 . . . . , gS 31 . t¿jes, �es 32. deS, .l:I f4, hay aproximadamente igualdad de oportunidades. 30 . ... , g5 31 . h3, �c7 Ahora está claro que las negras vuelven a llevar la voz cantante. 32. tL'lf1 , �b6 El sacrificio de calidad 32 . . . . , � f3 no era convincente porque las blancas, después de 33. gf3, Jib6, tenían la posibilidad 34. ld e6.
33. etJ 1 d2, � g7 Ahora que el caballo ya no amenaza aso mar por hS, la dama vuelve a esta casilla vital. 34. t¿jb3, _ldf4 35 . .l:í:d1 , g4 Ha llegado el momento de emprender más acciones en el flanco de rey. 36. tL'lh4, t¿je7 37. g3?, ... Muy apurado de tiempo, Marjanovié per mite que lo arrollen. Era correcta 37. t¿jcs, aunque las negras conservan la ventaja con 37 . . . . , j,cs, seguida de 38 . . . . , �f6. 37. ... , gh3 Desde luego. 38. �h1 ?, . . . Un error garrafal, pero después de 38. t¿jg6, t¿jg6 39. �g6, �g6 40. Jig6, llf3, las blancas habrían tenido asimismo graves problemas. 38 .... , .u. h4 39. f4, � g4 40. �h2, tL'lf5 Las blancas abandonaron.
10. Ulf Andersson Timman-Andersson Londres, 1 984 Torneo Phillips & Drew, ronda 5 Defensa Sicilia na
1 . e4, eS 2. t2Jf3, e6 3. d4, cd4 4. itJd4, t2Jc6 5. l2Jc3, a6 6. �e3, l2Jf6 7. �d3, d5 Así jugó Fischer contra Spasski en su 21 .ª y última partida del encuentro disputado en Reikiavik en 1 972, que también fue la últi ma partida seria de Fischer durante veinte años. a. ed5, ed5 9. o-o, �d6 1 o. �e2, ... Spasski jugó 1 0. l2Jc6, bc6 1 1 . �d4, después de lo cual las negras tuvieron una partida fácil. No hay razón para reforzar el centro negro. La jugada del texto bate la casi lla g4, y ahora las blancas amenazan 1 1 . �g5 a fin de aumentar la presión sobre el peón <> aislado. 1 0 . ... , h6 1 1 . l:re1 , 0-0 1 2. �f3, .lle8 1 3. h3, .. . Esta jugada me llevó algo de tiempo. Las blancas doblan la guardia sobre la casilla g4 y preparan la transferencia del caballo de d4 a f4, lo que les permitirá ejercer más presión sobre el peón <f2, �f4 1 9. �d8, .ld d8 20. �a4 o 1 8 . . . . , �b6 1 9. g3, las negras no tienen compensación suficiente por la calidad, y luego de 1 6 . . . . , bc6 1 7. 4:Je6, kte6 1 8. �d4 no tienen compensación sufi ciente por el peón. 1 6. �f4, �b6 Las blancas tienen la pareja de alfiles, pero no controlan la casilla bloqueadora d4, mientras que las negras, en general, están
Sl39.4
muy activas. La posición está más o menos equilibrada.
1 7. �d2, .ldad8 Las negras amenazan desarrollar una peli grosa iniciativa con 1 8 . . . . , tbe4. 1 8. t2Ja4, �d4! Obligando de nuevo al caballo a retroce der. 1 8 . . . . , VJJja ?, desde luego, era mala en vista de 1 9. �e?, penetrando. 1 9. l2Jc3, �d2 Las negras podían haber vuelto fácil mente a b6 aqu í, pero cambiar las damas tampoco es malo. El segundo jugador con serva la iniciativa en el final, lo que constitu ye un contrapeso suficiente de la pareja de alfiles blanca. 20. �d2, t2Jb4 Este salto de caballo es más fuerte que 20. . . . , l2Jd4, ya que las negras se reservan la opción de avanzar el peón <
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23. ltJe2!, ... Sacrificio de peón a fin de hacerse con la iniciativa. También era forzado, ya que las negras tienen un peón de ventaja en condi ciones mucho más favorables después de 23. i,d1 , d4 24. ltJe2, ltJa2! 25. .l::í. a1 , i,c2. 23. ... , étJc2 24. i,c3, .U. d8 La única jugada para impedir que las blan cas obtengan ventaja. 25. g4, ... Obligando al alfil a ir a la desfavorable casilla h7, ya que tanto 25 . . . . , i,d3 como 25. ... , i,g6 se contestan con la fuerte 26. étJf4. 25 . ... , i, h7 26. étJd4, ... Jugado con calma. Con 26 . .ld d1 , étJe4 (la única jugada razonable) 27. i,a5, � d7 28. i,e4, i,e4 29. étJc3, las blancas podían haber forzado las tablas (29. . .. , i,f3 30. � d3, ltJe1 31 . .Ue3, etc.). Con la textual, el sacrificio de peón es irreversible. 26 . ... , étJd4 27. i,d4, ... Las blancas tienen excelente compensa ción por el peón, en especial puesto que el alfil negro no puede intervenir en la defensa. 27. ... , i,e4 Necesaria jugada intermedia. Después de 27 . . . . , ltJe8 28. i, b6, las negras perderían el peón «d», ya que no deben permitir que la torre blanca invada la última fila. 28. i,e2, Las blancas se esfuerzan por mantener viva la posición. Tomando en f6 y e4 respecti vamente podían haber conducido la partida de inmediato hacia las tablas. ••.
28 . ... , ltJe8 Manteniendo a la torre blanca fuera de c7. 29. f3, i,g6 30. �f2, f6 31 . a4, �f7 Adoptando un plan inferior. Las negras quieren llevar el rey al centro, pero resulta que su seguridad no está garantizada ahí. Era correcta 31 . . .. , i, f7 a fin de neutralizar la columna «C» con 32 . . . . , i,e6 y 33 . . . . , 1lc8. Andersson tenía miedo de 32. i,d3, pero luego de 32 . . . . , i,e6 33. i,g6, i,f7, las blan cas no tienen más que tablas, puesto que a 34. i,f5 se contesta 34 . . . . , étJd6. 32. b4, �e6 33. f4!, .. . Fuerte avance que parece bastante extra ño a primera vista porque las blancas ceden la vital casilla e4. Bien mirado, resulta, sin embargo, que esta casilla solamente es ideal para el caballo. Las circunstancias fuerzan a las negras a llevar el alfil a la casilla vital, lo que significa que, una vez más, no podrá intervenir en la defensa, mientras que las blancas ganan terreno. 33. ... , i,e4 34. b5, ab5 35. f5, �e7? Perdiendo un tiempo que la posición negra difícilmente puede permitirse. Era correcta 35 . . . . , �f7 a fin de quitar el rey de la zona de peligro con la mayor rapidez posi ble. Andersson ya ten ía apuros de tiempo aquí. 36. i,bS, �f7 37. i,b6, l::r a8 38. i,d7,
Los alfiles penetran en la posición enemi ga, y el rey adversario se ve obligado a retro ceder más en el flanco de rey. 38 . ... , g6 Después de 38 . . . . , �e7 39. i,e6, b!_a4 40 . .i:!.c8, .l::tc4 41 . .l:t.b8!, las blancas gana rían por ataque. La torre negra no puede dar más que unos pocos jaques. 39. aS, �g8 Perdiendo enseguida, pero ya era difícil aconsejar algo bueno. Cambiar en f5 no ayu daría sino a las blancas, puesto que la torre podría usar la columna «g» como vía de invasión. 40. fg6!, i,g6 41 . .id c8!, ...
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La consecuencia del cambio de peones anterior. Al no poder acceder el alfil negro a la gran diagonal, el cambio de las torres gana. 41 , ,l:tc8 .
...
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La jugada secreta. Las negras abandona ron sin reanudar el juego. Después de 42. �ca, lt:Jd6 43. �b7, lt:J b7 44. a6, el peón alejado es imparable.
1 . e4, es 2. 'Llf3, d6 3. d4, cd4 4. 'Lld4, 4Jf6 5. 'Llc3, a6 6. ite3, es 7. f4, b5 8. �f3, itb7 9. itd3, 'Llbd7 1 0. g4, b4 La alternativa 1 0 . . . . , 'Llc5 conduce a un juego prometedor para las blancas después de 1 1 . g5, b4 1 2. gf6, bc3 1 3. fg7, itg7 1 4. b4! , como han demostrado ejemplos de la práctica anteriores. 1 1 . 4Jce2, 'Llc5 1 2. 4Jg3, ...
24 . . . . , <;t>g7 25. ite4, 4J g4 26. vt/ig4, como sucedió en la partida, las negras también habrían estado muy bien situadas si hubieran capturado en e4 con el alfil. En cambio, juga ron 26 . . . . , .l:!. e4 27. vt/ig3, �d7 28. b3, <;t>g8 29. 1:!. f4, a5 30. h4, h5 31 . ld f6, Ug4 32. '{lVe5, ite4
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Chandler-Ribli, Londres, 1 984 Posición después de 32 . . . . , ite4 1 2 . ... , .ld cB Una jugada nueva . En Hübner-Portisch, Lucerna, 1 982, se jugó 1 2 . . . . , vt/ic7; Chandler también tuvo que vérselas con esta jugada contra Helgi Olafsson en Reikiavik dos meses antes. Aunque las negras ganaron ambas par tidas, me parece que el juego blanco puede mejorarse en algunos puntos. Es significativo que Ribli jugara 1 2 . . . . , 'Llfd7 contra Chandler en la ronda anterior del torneo de Londres. Después de 1 3. 0-0-0, g6 1 4. l:!. hf1 , it g7 1 5. f5, 'Lle5 1 6. vt/ie2, 0-0 1 7. <;t>b1 , .l:!,e8 1 8. R f2, 1:!. c8 1 9. ld df1 , d5, las negras tenían una posición excelente y, tras algunas compli caciones, podrían haber liquidado para llegar a un final ganado: 20. 'Lle6, fe6 21 . fe6, l:!. e6 22. itc1 , .S c7 23. 'Llf5, de4 24. 4J g7, y aquí 24. . . . , ed3 25. 'Lle6, de2 26. 'Lld8, ef1 vt!f 27. .Uf1 , ite4 habría sido aplastante. Luego de
33. .l:!. b6! ! , itc2 34. <;t>c2, Uc7 35. � b 1 , vt/id3 36. <;t>a1 , vt/ic3 37. itb2, vt/ie5 38. l:!. b8 y aquí abandonaron. Para completar el cuadro: en la ronda siguiente, jugué con blancas contra Ribli, y después de 1 3 jugadas teníamos en el table ro la misma posición que Chandler-Ribli. Intenté mejorar el juego de las blancas con 1 4. h4, que recrudeció mucho la batalla des pués de 1 4 . . . . , vt/ic7 1 5. <;t>b1 , 0-0-0 1 6. h5, ite7 1 7. vt/ie2, <;t>b8 1 8 . .ti hf1 , .l:í. hf8 1 9. f5, ith4 20. �h2, g5!?, y finalmente la partida fue tablas. 1 3. g5, tLlfd7 1 4. h4, es La reacción corriente. Al avance de las blancas en el flanco de rey se responde el avance en el centro . 1 5. 'Llb3, ...
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La mejor casilla de retirada para el caballo. 15 . ... , ef4 1 6 . .tf4, t;Je6 No 1 6 . . . . , t;Jes en vista de 1 7 . .tes, deS 1 8. 0-0-0, y las negras tienen graves proble mas de desarrollo. 1 7. t;Jf5, ... Intentar conservar el alfil de dama habría costado valioso tiempo. Después de 1 7 . .te3, t;JeS 1 8. �e2, g6, las negras completarían el desarrollo sin dificultad y establecerían una posición excelente. 17 . ... , t;Jf4 1 8. �f4, t;Je5 1 9. o-o-o, g6 20. t;Je3, .tg7 21 . �b1 , ...
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23. hg6, hg6 24. � h7, a5? Esto es demasiado impetuoso. Teniendo disponible la casilla bS, a las blancas se les da un punto de partida para lanzar una peligrosa ofensiva. Era correcta 24 . . . . , .ld e? a fin de proteger más el delicado punto f7. 25. t;Jd4!, t;Jd3 Ceder el caballo, excelentemente situa do, era una triste necesidad. La desagrada ble 26 . .tbs era la amenaza. 26 . .id d3, l:t c7
8 N
Hasta este punto, había jugado bastante rápido, pero aquí me sumí en una profunda reflexión. Si el peón «h» negro estuviera en hS, las negras podrían obtener una posición prácticamente ganadora enrocando. A 21 . . . . , hS, sin embargo, se contestaría 22. gh6, .th6 23. �g3, y el rey negro no tiene casilla segu ra. Por otra parte, tampoco me gustaban las consecuencias de 21 . . . . , 0-0 22. hS; no obs tante, se me escapó que las negras pueden defender de manera indirecta, pero sólida, la amenazada casilla h7 por medio de 22 . . . . , �c7! 23. �h4, .th8, y el control de las casi llas negras les da excelentes perspectivas. Si las blancas intentan ponerles obstáculos con 24. t;Jas, 24 . . . . , t;Jf3 es fuerte. 21 . ... , �b6? 22. h5, .r! g8 Una solución al problema posicional mucho menos satisfactoria, que, sin embargo, no tenía por qué haber redundado en perjuicio mío.
En este punto, todavía estaba razonable mente satisfecho de mi posición. Después de 27. t;Jf3, �c6! 28. � d6, �e4, a modo de ejemplo, las negras tendrían buenas posibili dades con la pareja de alfiles, pero la próxima jugada de Chandler da en la diana. 27. � g7!, .tí. g7 28. t;Jg4, ... El caballo va camino de f6, orgullosa casi lla, desde donde dominará por completo a la torre de g7. 28. ... , �c5 T ras esta desafortunada jugada, las negras están perdidas sin remedio, pero las alternati vas tampoco parecían prometer mucho. Tanto después de 28 . . , .llc4 29. t;Jf6, �e7 30. es como de 28 . . . . , llcS 29. t;Jb3!, las negras podrían considerarse afortunadas si consiguie ran devolver la calidad quedando solamente en inferioridad posicional. 29. t;Jf6, �e7 30. e5!, ... Con este avance, las blancas pueden afir mar que tienen ventaja decisiva. No hay manera de capturar el peón. Tanto 30 . ... , deS . .
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como 30 . . . . , �e5 tropiezan con la devastado ra 31 . 1:í.e3. 30. ... , d5 La única posibilidad, pero al tener esta estructura de peones, las negras son pesimis tas respecto al futuro. Añádase a ello el hecho de que se me estaba acabando el tiempo y a Chandler le quedaba más de una hora, y se verá el panorama.
perderían, ya que 34. b3, �c2 conduce al mate. 32 �b6 33. l¿j d6, .U. c3 •
...
,
B
B
31 . l¿j e4!? ... Después de mucho pensar, Chandler se decide por buscar un final brillante. Esto no era necesario, ya que después de la factible línea 31 . �h4, l:t c8 (¿qué, si no?) 32. �h6, 1lgg8 33. t¿jg8, !:!. g8 34. �h7, seguida de 35. e6, habría igualdad de material, y las blan cas tendrían un ataque aplastante. Sin embar go, la textual no estropea nada. El caballo sigue su viaje a d6 y no puede tomarse en vista de 31 . . . . , de4 32. �f6, �ea 33. �d8!!, �d8 34. lLJc6 y 35. !:t. d8 mate. Es compren sible que Chandler, habiendo visto esta variante, no pudiera resistir la tentación de hacer esta jugada. 31 . ... , .a: h7! La única defensa. Las negras cuentan con el hecho de que el rey blanco no tiene un res piradero. Después de 31 . . . . , �b6 32. �f6, tendrían una pieza menos. 32. b3, ... El final que se produce después de 32. l¿jc5, l::i. h 1 33. �c1 , .ll c1 34. �c1 , ld c5 no sería del todo claro, mientras que luego de 32. a3?, .U. h1 33. �a2, �c41as blancas incluso '
En situaciones desesperadas, complícale siempre la vida al adversario todo lo posible y plantéale todas las continuaciones de aspecto sólido que puedas. La alternativa 33 . . . . , l::i.c8 perdería después de 34. �f6, �f8 35. l¿j e6, �g8 36 . .ld h3!, y se daría mate a las negras al cabo de pocas jugadas. 34. l:t d1 , Las blancas siguen el camino recto. Era tentador 34. �f6, �f8 35. l¿j b7, ya que las negras no pueden capturar el caballo en vista del mate en dos, pero hay dos alternativas: a) 35 . . . . , .ti. d3. Chandler tenía miedo de este sacrificio de dama. Después de 36. �b6, ld d1 37. � b2, n hh1 ' las negras tienen dos caballos menos, pero hay una amenaza de mate que será difícil de parar. Un estudio sobrio de la posición, sin embargo, muestra que las blancas pueden ganar de manera bas tante sencilla con 38. c3; p. ej. : 38 . . . . , l:t b1 39. �c2, l:i. hc1 40. �d2, bc3 41 . �d3 o 38. ... , � d2 39. l¿jc2, .U hh2 40. �c5, seguido de 41 . cb4, y ganan. Es muy importante que las blancas tengan de reserva este jaque de dama en la jugada 40. b) 35 . . . . , �f6. Esto es lo que me proponía hacer. Después de 36. ef6, � h 1 37. �b2, l':í. d3 38. cd3, 1! h2 39. l¿jc2, Ug2, las negras obtienen un peón pasado y no carecen de oportunidades. 34 ... , .,tea •••
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Desesperada tentativa de incorporar el alfil a la defensa. 35. Il f1 ?, ... Después de esta jugada, no se ve una manera clara de ganar. Era correcta 35. �f6 para obligar al rey negro a ir a f8. Luego de 35. . . . , �f8 36. Id f1 , las negras no pueden defenderse de modo adecuado.
N
(análisis) Las blancas amenazan 37. éL\e6 (pero no 37. �g6? en vista de 37. .. , tí f3! ! , y de repente las negras se llevan la mejor parte; este motivo vuelve a aparecer más tarde en la partida). A partir de la posición del diagrama, las negras pueden intentar defenderse de las maneras siguientes: a) 36. ... , �g4. Ilustra la amenaza blan ca 37. éL\e6, �e6 (37. ... , �g8 38. �g6!) 38. �e6, ld c7 39. �e8, �g7 40. .l:lf7, n f7 41 . �f7' y mate en la próxima jugada. b) 36 . . . . , a4. Elegante pero infructuosa tentativa de parar 37. éL\e6. Después de 37. éL\e6, �e6 38. �e6, �f2!, las negras toman el control de la situación, pero luego de la revulsiva 37. ba4, la posición negra no resulta ser mejor. e) 36 . ... , .l:t e3. La defensa más ingeniosa. 37. éL\e6 ahora es imposible debido a 37. ... , �e6 38. �e6, 1:l e1 , y 37. �g6 sigue sin servir en vista de 37 . ... , ld f3. Aunque tomen en c8, no está claro que las blancas ganen con los caballos contra la torre, porque el peón ccg» está sentenciado. La única mane.
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ra de ganar es 37. éL\c6! ! , capitalizando la ausencia de la torre de la columna «C». Las blancas tienen la doble amenaza 38. éL\f7 y 38. �e?, que deja a las negras impotentes. 35 . ... , �e6 Ahora las negras, en realidad, han levan tado una especie de l ínea defensiva. 36. éL\e6, ... En el boletín diario, Keene afirmó errónea mente que 36. �f6 todavía ganaba. Después de 36 . . . . , �d7 37. éL\e6, fe6, las blancas no pueden esperar más que las tablas luego de 38. �g6 porque 38. �f8 se refuta con 38 . .. . , �d8. 36 . ... , �e6 Ciertamente, no 36. ... , fe6 debido a 37. �f8, y mate en dos. 37. �f6?, ... Después de este jaque, las blancas ya están peor. Era correcto 37. �g4, �e? 38. éL\c8, y las blancas recuperan la calidad y tie nen una posición favorable. Luego de 38. . .. , .Uc8 39. �c8, �b5!, las negras probable mente resistirán por los pelos. 37. ... , �d7 De repente, parece que las blancas han echado el resto. 38. e6, . ¿Qué, si no? 38 . ... , fe6 39. éL\f7, �c7! ..
El rey sale de la zona de peligro. 40. �g6?, ... Ahora las negras podían haber ganado enseguida. Era correcta 40. éL\e5, aunque
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las negras siguen estando mejor después de 40. ... , � b7, seguida de 41 . ... , I:i.hc7. 40. ... , l:Ich3? La última jugada hecha en los apuros de tiempo. Ganaba 40 . ... , .l:!. cf3!, el mismo lance que en el comentario a la jugada 35 de las blancas. Las negras ganan el caballo, ya que dan mate por fuerza después de 41 . 1::!. f3, .l:I h1 42. �b2, ¡fd4 43. c3, ¡fd1 . Es curio so que las blancas, que podían haber lanzado un ataque decisivo pocas jugadas antes, no tengan ahora ni un simple jaque. 41 . ¡ff6, ...
En este punto se aplazó la partida. 41 . ... , ::í. h1 La jugada secreta. En la pausa, pronto me convencí de que ninguno de los bandos podía emprender tentativa alguna de victoria. 42. g6, .u f1 43. ¡ff1' ti. g7 44. ¡ff6, ... Tablas a sugerencia de las blancas. Después de 44 . . . . , ¡fg1 45. � b2, I;I g6 46. ¡fe?, �b6 47. ¡fd6, �a? 48. ¡fe?, �a6 49. ¡fea!, las negras no pueden escapar del jaque perpetuo. Quizás, la conclusión más justa para una emocionante partida.
12. Hans Ree Timman-Ree Ámsterdam, 1 984 Torneo OHRA, ronda 2 Ga mbito de Da ma R ehu sa do
1 . d4, t2Jf6 2. c4, e6 3. t2Jf3, d5 4. l2Jc3, i,e7 5. i,g5, o-o 6. e3, t2lbd7 7. i,d3, ... Una vieja jugada de Botvínnik que se llamó «la variante del tiempo perdido» en los primeros libros de teoría. Es la homóloga de la «variante de la lucha por un tiempo» que se introduce mediante 7. .1:!. c1 , c6 8. �c2. Varios grandes maestros rusos de la generación posterior a Botvínnik (Spasski, Bronstein, Korchnói, Polugaevski) siguieron haciendo la jugada del texto, cuyo objetivo es evitar posiciones sosas permitiendo cons cientemente la creación de un peón «d» ais lado. 7 . ... , c5 8. o-o, cd4 9 . ed4, dc4 1 0. i,c4, l2lb6 En los comentarios a su partida contra Vidmar, Nottingham, 1 936, Botvínnik sugirió 1 0. ... , a6 a fin de responder a 1 1 . a4 1 1 . ... , t2lb6. Como sugirió Botvínnik, la jugada a4 debilita el flanco de dama blanco, pero tam bién puede ser buena para las blancas. Ese fue el caso en la partida que jugué pocos meses antes con negras contra Seirawan. Después de 1 O. ... , a6 1 1 . a4, t2lb6 1 2. i,b3, i,d?, él no hizo una de las jugadas teóricas conocidas 1 3. �e2 o 1 3. l2Je5 (en ambos casos se replica 1 3. ... , i,c6, con posición razonable), sino que aprovechó el momento en que las negras todavía no controlan sufi cientemente el centro mediante 1 3. a5! La continuación fue 1 3. ... , l2Jbd5 1 4. i,d5, l2Jd5 1 5. l2Jd5, ed5 (no 1 5. ... , i,g5 1 6. t2lb6, ganando la calidad) 1 6. .Ji,e7, �e7 1 7. �d2, y las blancas tenían una sólida ventaja posi cional. 1 1 . i, b3, t2Jfd5 En Botvínnik-Vidmar, las negras desarro llaron primero el alfil de dama mediante 1 1 . ... , i,d7. La jugada del texto la había sugerido
QO 12.7.4
como mejora Alekhine en el libro del torneo. Pienso que la jugada de Vidmar, en definitiva, no es peor. 1 2. i,e7, VJ!ie7 1 3. lle1 , l:,d8 1 4 . .idc1 , Hasta aquí, estas jugadas ya se habían hecho en Korchnói-Záitsev, Cto. de la URSS, 1 962. Las negras habían continuado con 1 4. ... , t2lf6 1 5. �e2, �b4 1 6. l2Je4, t2lbd5 1 7. l2Jc5 y aquí podían haber jugado fácilmente 1 7. ... , b6! según Korchnói. El quid táctico es 1 8. .l::i.c 4, �b5 1 9. i,a4, �a5 20. .li,c6, bc5 2 1 . i,a8, i,a6 22. i,d5, .l:t d5, y las negras tienen buena partida. Otras tenta tivas de hacer que esta variante redunde en beneficio de las blancas también están con denadas al fracaso; p. ej.: 21 . .l:I a4, �e? 22. i,a8, i,d7 o 2 1 . Jdc5, �b6 22. i,a8, i,a6. En ambos casos, las negras recobran el material con intereses. Esto significa que la jugada 1 7 de las blan cas se quedó en agua de borrajas. Es mejor jugar, por ejemplo, 1 7. .S c4, y como el alfil de las negras todavía no está desarrollado, las blancas tienen clara ventaja. 1 4 . ... , éL\c3 Ree gastó mucho tiempo aquí. La calidad no soluciona por completo los problemas de las negras. 1 5. �c3, ... Es indudable que 1 5. bc3 merecía estu dio. Elegí la jugada del texto para poder lle var las torres al ataque en el flanco de rey. Al mismo tiempo, pensé que las negras toda vía no podían desarrollar el alfil de manera óptima. 1 5 . ... , i,d7 ¡A pesar de todo! Aquí pensé durante unos cuarenta minutos. 1 6. d5, ...
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Pese a todo el tiempo que empleé, aún no estaba seguro de las consecuencias de este avance. La razón principal de decidirme a hacer esta jugada fue el hecho de que ya había gastado mucho tiempo en ella y había comprendido las complicaciones subsiguien tes bastante bien. 1 6 . ... , � d6 Sin invertir demasiado tiempo, las negras deciden meterse en un final claramente desfa vorable. Es verdad que después de 1 6. ..., i,e8 1 7. l:í.d3 la posición negra no puede reforzarse, pero la jugada crítica era 1 6. ... , i,b5 a fin de impedir 1 7. 1::1 d3. Después de la partida, Ree dijo que rechazó esta jugada por que no planteaba una amenaza. Es probable que sea más importante pre guntar: ¿qué amenazan las blancas? a) 1 7. a4, i,a6 1 8. a5, 'Lld5 1 9. i,d5, �f6, y las negras recobran la pieza y tienen buena partida. b) 1 7. 'Lld4, 'Lld5! 1 8. � g3 (esto amena za 1 9. 'Llb5, así como 1 9. !ig7) 1 8. ... , 'Llc7 1 9. �g4, �f6, y la iniciativa de las blancas se ha extinguido. e) 1 7. �d4. Las blancas planean res ponder a 1 7 . ... , �d6 1 8. '@c5; luego de 1 8 . ... , 'Lld5 1 9. �b5, 'Llc3 20. bc3, está claro que tienen las mejores posibilidades. 1 7. ... , i,c6 1 8. de6! también es ventajoso para las blancas. Sin embargo, las negras tienen la sutileza 1 7 . ... , 'Lld5! 1 8. i,d5 y aquí 1 8. ... , i, c6. Ahora que la dama blan ca está en d4 en vez de en d 1 , Ud3 ya no es eficaz.
d) 1 7. �d2! La jugada que había planea do. Se amenaza 1 8. de6, así que las negras deben quitar la dama de la columna «e». 1 7. ... , �f6 es mala a causa de 1 8. 'Lle5, con la amenaza 1 9. l;lf3, y 1 7 . ... , �f8 1 8. 'Lld4 también acaba mal para las negras. 1 7. ... , �d6 es lo mejor, a fin de contestar a 1 8. 'Lld4 1 8 . ... , i,e8. Durante la partida, tuve que encajar algunas decepciones al darme cuenta de que 1 9. de6, �d4 20. ef7, i,f7 21 . l:I e8, li e8 22. �d6 no puede jugarse a causa de 22 . ... , U e1 mate. 21 . i,f7, Wf7 22. ld f3, Wg8 tampoco es bueno, porque el mate en e1 sigue ahí. Por eso es por lo que planeé 1 9. Ud3. Después de 1 9. ... , 'Lld5 20. 'Llf5!, ef5 21 . i,d5, las blancas tienen compensación sufi ciente por el peón. 1 7. de6, .. La alternativa es 1 7. ttJg5, sacrificando un peón por ataque. Luego de 17 . ... , ed5 1 8. i,c2, las negras deben defenderse con cuidado. 1 8. ... , h6 es mala a causa de 1 9. i, h7, Wf8 20. 'Llt7!, con ataque ganador. Por tanto, es necesaria 1 8. ... , g6, impidiendo que las blancas penetren en f6 con el caballo; p. ej.: 1 9. �d4, �d4 20. 'Lle4?, �e7, y de nuevo hay la desagradable amenaza de mate en la primera fila. 17 . ... , i,e6 1 8. � d6, l:Id6 1 9. i, e6, ld e6 20. �e6, fe6 A primera vista, no parece que pasen muchas cosas. En un final de torre y caballo, un peón débil no es un gran problema; tam poco desempeña un papel destacado en un final de torres. Sin embargo, con su próxima jugada, las blancas consiguen forzar el cam bio de las torres, y en el final de caballos que sigue la debilidad del peón «e» es un factor importante. 21 . �c7, ... .
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21 . ... , 1;Id8 La única contramedida. 21 . . . . , .ld ca per dería un peón después de 22. ld ca, lL\ca 23. lL\g5, e5, y ahora no la apresurada 24.lL\f3?, porque luego de 24 . . . . , e4 25. lL\d2, lL\d6 26. <;t>f1 , <;t>f7 las negras pueden defender el peón «e» a tiempo, sino 24. <;t>f1 . Tras 24 . . . . , lL\d6 25. <;t>e2, las negras pueden probar: a) 25 . . . . , h6. Después de perder un tiempo aquí, el peón «e» está perdido de verdad. 26. lL\f3, e4 27. lL\d2, <;t>f7 2a. <;t>e3, <;t>e6 29. lL\e4, lL\c4 30. <;t>d4,lL\b2, y las blancas pue den elegir entre tomar el peón ccb» o el cch» . b) 25 . . . . , e4 26. <;t>e3, lL\c4 27. <;t>d4!, lL\b2 2a.lL\e4, y las blancas ganan definitiva mente un peón a causa de la fuerte centraliza ción de sus piezas. El juego podría continuar con 2a. . .. , b6 29. <;t>c3, lL\a4 30. <;t>b3, ganando, o 2a . . . . , <;t>fa 29. lL\d6, b6 30. ttJca, ganando también; 2a. . .. , lL\a4 29. lL\c5!, lL\c5 30. <;t>c5, <;t>f7 31 . <;t>d6 da un final de peones ganado. 22. <;t>f1' 1ld7 23. Jl d7, lL\d7 24. lL\g5,
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Esta jugada de caballo es la más fuerte aquí. Después de 24. tL\d4, e5 (no 24 . . . . , <;t>f7 25. lL\b5, ganando un peón) 25. lL\b5, a6 26. lL\d6, b6, seguido de 27 . . . . , <;t>e7, ali geraría la tarea defensiva de las negras. 24. ... , lL\c5 Interesante tentativa de defender la posi ción mediante un juego activo. Sin embargo, 24 . . . . , e5, obvia, habría sido más fuerte; p. ej. : 25. <;t>e2, h6 26. lL\e4, b 6 27. <;t>d3, <;t>f7 2a. <;t>c4, <;t>e6 29. <;t>b5, lL\ba, y las negras aguantan temporalmente. A las blancas les resulta difícil convertir la ventaja en victoria. 25. b4, lL\a6 A las negras les gustaría jugar 25 .. . . , h6, pero el final de peones que surge tras 26. bc5, hg5 27. <;t>e2 lo ganarían las blancas; p. ej.: 27 . . . . , <;t>f7 2a. <;t>d3, e5 29. <;t>c4, <;t>e6 30. g4, y las negras pronto se verán en Zugzwang. 26. a3, lL\c7 27. <;t>e2, Esta jugada obvia exigió cálculos precisos. 27 . ... , h6 Las negras podían haberse desembaraza do del peón débil con 27 . . . . , lL\b5, pero eso no solucionaría sus problemas. Después de 2a. a4, lL\c3 29. <;t>d3, lL\a4 30. lL\e6, el caballo negro tendría dificultades; p. ej. : 30 . . . . , b6 31 . <;t>c2, a5 32. <;t>b3, ganando, o bien 30 . . . . , lL\b2 31 . <;t>d4, b6 32. b5, y las negras pierden el peón cea» . 28. lL\e4, <;t>f8 Inexacta jugada que podía haber conduci do a la derrota con rapidez. Era necesaria 2a. . . . , b6 para contestar a 29.lL\d6 con 29 . . . . , a6. 29. lL\d6, . . ..•
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29 . ... , b6 29 . . . . , g5 no es mejor en vista de 30. \t>d3, a6 31 . \t>d4, y el rey de las blancas se abre paso. Ahora se ve lo poco afortunada que fue la maniobra de caballo iniciada en la jugada 24 de las negras. 30. \t>d3, Me quedaba muy poco tiempo, y no acer té a aprovechar la jugada 28 de las negras. 30. tt:\c8 es la continuación más aguda y fuer za la victoria después de: a) 30. . .., tt:\b5 31 . a4, tt:\c3 32. <;t>d3, tt:\a4 33. tt:\a7, tt:\b2 (de lo contrario, 34. \t>c2) 34. \t>d4, y las negras pierden el peón «b». b) 30. . . . , a5 31 . \t>d3 (no 31 . tt:\b6, ab4 32. ab4, tt:\a6 33. b5, tt:\c7, y las negras recobran el peón) 31 . . . . , ab4 32. ab4, y el rey blanco irrumpe: 32. ..., b5 33. \t>d4 o 32 . ... , tt:\d5 33. \t>c4. 30 . ... , a6 31 . tt:\c4, tt:\d5 Las negras han conseguido establecer una línea de defensa. Ahora el plan de las blancas es ampliar su influencia en el centro. 32. \t>d4, <;t>e7 33. g3, \t>d7 Las negras podían haber obstaculizado el avance del peón «f» con 33. . . . , g5, pero la objeción a esta jugada es que su peón «h» es vulnerable. 34. f4, \t>c6 35. \t>e5, tt:\c7 Pensándolo mejor, las negras deciden no activar más el rey. Después de 35 . . . . , \t>b5 36. tt:\b2!, lo único que han logrado es que ya no pueda impedirse la penetración del rey blanco. Es importante notar que 36 . . . . , tt:\b6 37. ab4, \t>b4 38. \t>e6, a5 39. \t>f7, a4 40. tt:\a4 no es suficiente para las negras. 36. tt:\d6, \t>d7 Más pasividad. Ante 36 . ... , a5, había pla neado 37. g4; p. ej. : 37 . . . . , ab4 38. ab4, tt:\d5 39. b5, \t>c5 40. h4, y las blancas pueden seguir reforzando su posición a placer. 37. f5, ... Cambiando finalmente el peón «e» débil a fin de incrementar la presión en el centro. 37 . ... , ef5 38. tt:\f5, ...
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Esta es la clase de posición que esperaba al meterme en el final de caballos. Me recor daba la partida Botvínnik-Jólmov, Moscú, 1 969. El ex campeón mundial también dirigió la partida hacia un final de caballos, que ganó por la dominante posición de su rey.
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Botvínnik-Jólmov, Moscú, 1 969 Posición después de 35. �c5 En la partida de Botvínnik se siguió con 35. ... , \t>c7 36. tt:\g5, f6 37. tt:\h7, f5 38. h4, f4 39. tt:\f8, b6 (Botvínnik sugirió 39. ... , f3 40. g3, tt:\f5 41 . tt:\g6, tt:\g3 42. <;t>d4 como mejor posibilidad para las negras en la práctica, aun que las blancas ganan un peón) 40. \t>d4, tt:\f5 41 . \t>e4, tt:\h4 42. tt:\e6, \t>c6 43. tt:\f4, \t>b5 (contra 43 . ... , g5, gana 44. g3) 44. g3, tt:\f5 45. tt:\g6, tt:\h6 46. tt:\e5, \t>a4 47. tt:\c4, \t>b3 (o 47. ... , b5 48. tt:\e5, \t>a3 49. tt:\c6) 48. tt:\b6, \t>a3 49. tt:\d5, \t>b3 50. f4, \t>c4 51 . tt:\c7, \t>b4 52. tt:\a6, y las negras abandonaron. 38. ... , tt:\e8 39. g4, ...
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Ahora el flanco de rey negro está inmovili zado. 39 . ... , tLlf6 40. h3, ... La última jugada antes del control de tiem po, con mi banderita colgando. 40. 'Llh6 gana con más rapidez porque después de 40 . . . . , �c6 41 . g5, t¿jd7 42. �e6, las negras siguen sin poder tomar el caballo. 40 . ... , hS Incluso con una defensa pasiva, las negras estarían perdidas sin remedio. 41 . gS, t¿jh7 42. h4, 'Llf8 Luego de 42 . ... , g6 43. t¿je3, las piezas blancas penetrarán de manera decisiva. 43. t¿jg7, t¿jg6 44. �f6 .... La continuación más directa, pero 44. �d5 también era suficiente para ganar. 44. ... , t¿jh4 45. tL:lhS, �c6 46. 'Llg3, �dS
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47. a4, ... Las negras están ahora en Zugzwang, y su rey debe dejar la casilla clave d5. 47. t¿jf5 era menos convincente a causa de 47. . . . , t¿jg2 48. g6, t¿jf4, y las negras pueden cam biar el caballo por el peón ••g•• . 47 . ... , bS 48. aS, �c4 49. t¿jfS, t¿jg2 so. �es, ... Centralización hasta el final. Las negras abandonaron porque no pueden impedir que el peón «g•• corone.
1 . d4, é2Jf6 2. c4, e6 3. l2Jc3, .. Nikolié juega 3. é2Jf3 casi de manera exclusiva, pero en esta partida elige la varian te clásica de la Nimzoindia, que es muy popu lar en la actualidad. 3 . ... , �b4 4. �c2, o-o 5. a3, �c3 6. 'iVc3, b6 7. é2Jf3, �b7 8. e3, d6 Con negras, algunos jugadores han recu rrido aquí a la preventiva a . . . . , a5, pero me parece que las blancas no deberían renunciar al plan de adelantar el peón «b» dos casillas. 9. b4, é2Jbd7 1 0. �b2, ... .
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1 0 . ... , l2Je4 Aquí, 1 O . . . . , a5 es una alternativa impor tante. Hort-Seirawan, Linares, 1 983, continuó con 1 1 . �e2, l2Je4 1 2. 'iVd3, ab4 1 3. ab4, .l:la1 1 4. �a1 , 'iVaa 1 5. 'iVb1 , 'iVa3 1 6. �d3, ld aa 1 7. 0-0, é2Jdf6, y las negras tenían la iniciativa. Seis meses más tarde, Polugaevski intentó mejorar el juego de las blancas contra Seirawan (Tilburgo, 1 9a3) mediante 1 5. 0-0, pero después de 1 5. . .. , 'iVa2 1 6. llc1 , � aa 1 7. l2Je1 , d5! , las negras volvían a tener una posición activa. Quizás las blancas deberían mantener cerra da la posición con 1 1 . b5; p. ej. : 1 1 . . . . , l2Je4 1 2. 'iVc2, f5 1 3. �e2, ld f6 1 4. c5, y en Browne-Andersson, Brasilia, 1 9a1 , se conti-
nuó con 1 4 . . . . , �d5 1 5. c6, ltJfa 1 6. �c4, 'iVe7 1 7. 0-0, � h6 1 a. �d5, ed5 1 9. l2Je1 , 'iVh4 20. h3, l2Je6 21 . 'iVb3, é2Jf6, y las negras tienen un juego excelente. Cerrar así a cal y canto el flanco de dama en la jugada 1 5 no parece muy recomendable. En Knezevié Gerusel, Porz, 1 9a1 -1 9a2, las blancas siguie ron con 1 5. �c4!, mucho más fuerte, y después de 1 5 . . . . , �c4! 1 6. 'iVc4, bc5 1 7. dc5, bt g6 1 a. cd6, cd6 1 9. 0-0, !:í. ca 20. 'iVe2, a4 21 . l:t ac1 , estaban mucho mejor. En la partida Novikov-Lputián, URSS, 1 9a3, las negras sacrificaron una calidad con 1 4 . . . . , bc4 (en vez de 1 4 . . . . , �d5) 1 5. dc5, é2Jdc5. Sin embargo, luego de 1 6. �f6, 'iVf6 1 7. 0-0, l2Jc3 1 a. é2Jd4, l2Je2 1 9. 'iVe2, �e4 20. Ufd 1 , a4 2 1 . f3, �d5 22. jdab 1 , ,Uba 23. Ub4 no habían obtenido del todo compensa ción suficiente por ella. Así pues, parece que 1 1 . b5 es la réplica más fuerte a 1 O . . . . , a5, y que las blancas tie nen entonces buenas posibilidades de lograr ventaja en la apertura. Un plan alternativo es 1 0 . . . . , 'iVe7 a fin de atacar el centro blanco después de 1 1 . �d3 con 1 1 . . . . , c5. El ejem plo más reciente es Kárpov-Polugaevski, Cto. de la U RSS, Moscú, 1 9a3, en la que se continuó con 1 2. 0-0, cd4 1 3. é2Jd4, l2Je5 1 4 . .U. ac1 , .l:::!, fea 1 5. 'iVd2, é2Jd3 1 6. 'iVd3, d5 1 7. cd5, y las negras podían haber igualado el juego mediante 1 7 . . . . , �d5 (en vez de 1 7 . . . . , é2Jd5, continuación de la partida). En los comentarios a su partida contra Gligorié (Lucerna, 1 9a2), Kaspárov pone un signo de interrogación a 1 1 . �d3 y recomien da 1 1 . �e2. Esto se jugó en Forintos-L. A. Schneider, Reikiavik, 1 9a2, pero esa partida no es un ejemplo tan bueno de las posibilida des de la posición porque las blancas acaba ron prematuramente con la tensión central
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después de 1 1 . . . . , tLle4 1 2. �c2, cS 1 3. deS, beS 1 4. bS y se vieron aplastadas en el flanco de rey. Luego de la normal 1 3. 0-0, seguida de 1 4. l:i. fd1 , es probable que las blancas estén un tanto mejor. El objetivo de la textual es emprender acciones directas en el flanco de rey. 1 1 . �c2, f5 1 2. �e2, ... Una jugada perezosa. Es mejor 1 2. �d3 a fin de contestar a 1 2 . . . . , tiJgS 1 3. dS! En Faragó-Grószpéter, Cto. de Hungría, Budapest, 1 981 , las blancas obtuvieron un juego prome tedor después de 1 3. . . . , tLlf3 1 4. gf3, tLleS 1 S. 0-0-0, �e7 1 6 . .i:1hg1 , nf7 1 7. f4, tLld3 1 8. �d3, edS 1 9. cdS, .)leS 20. ld gS. Ante 1 2. �d3, las negras deberían continuar con 12 . . . . , aS, y si 1 3. bS, pueden jugar 1 3 . ... , t¿jgS. La casilla eS quedará disponible para el caballo de d7 si las blancas adelantan el peón ccd» . La jugada de caballo también está justifi cada como réplica a 1 3. 0-0. 12 . . . . , t¿jg5 1 3. �d1 , ... No podía jugarse al ataque con idea de enrocar por el flanco de dama porque ante 1 3. h4 las negras replicarían con energía 1 3 . . . . , tLle4!, y las blancas han debilitado gra vemente su posición. 1 3 . ... , tLlf3 1 4. �f3, .. Después de esto, las negras obtienen una ventaja posicional modesta, pero duradera. Tal vez habría merecido la pena estudiar 1 4. gf3, aunque las negras tienen una partida muy confortable después de 1 4 . . . . , �h4. 1 4. ... , �e4! Las negras fuerzan ahora el cambio de los alfiles en circunstancias muy favorables. 1 5. �e4, ... Después de 1 S. 0-0, �gS, las blancas no pueden evitar el cambio del alfil y se ven some tidas a un fuerte ataque al entrar en juego la torre negra vía f6. Entonces, sorprendente mente, habríamos llegado a una posición casi idéntica -con los colores cambiados- a Fischer-Mecking, Palma de Mallorca, 1 970. Después de 1 . b3, dS 2. �b2, eS 3. tLlf3, tLlf6 4. e3, tbc6 S. �bS, �d7 6. 0-0, e6 7. d3,
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�e? 8. �c6, �c6 9. tLleS, !:!.eS 1 0. tLld2, 1 1 . f4, tLld7 1 2. �g4, ttJes 1 3. �es, �f6 1 4. id f3, las blancas tenían una posición de ataque abrumadora, que dio por resultado la captura de un peón luego de 1 4. ... , �e? 1 S. l:taf1 , aS 1 6. � g3, �es 1 7. feS, fS 1 8. ef6, .l:! f6 1 9. � g7! La única diferencia impor tante entre ambas partidas es que Fischer jugó el Ataque Nimzowitsch, mientras que yo jugué la Nimzoindia. 15 . ... , fe4 1 6. d5, ... Una jugada dudosa. Debería haberse efectuado 1 6. �g4 porque las negras se ven obligadas a cambiar las damas luego de 1 6 . . . . , �f6 1 7. 0-0. Después de 1 7 . . . . , �fS 1 8. �fS, J:d fS, las negras están un poco mejor, pero su ventaja es menor que en la partida. 1 6 . ... , e5 Desde luego. El alfil se estrella ahora con tra una roca, y lOS peones ccC» y ccd>> de las blancas podrían ser débiles más tarde, des pués de ... , c6 o ... , bS o ambas jugadas. 1 7. �g4, tLlf61 8. �e6, ... o-o
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.
1 8 . ... , .i:!.f7! Iniciando un plan de ataque infrecuente, pero fuerte. 1 9. o-o, �fa Consecuencia de la jugada anterior de las negras. 20. f4, ... Las blancas se ven prácticamente obliga das a buscar contrajuego de esta manera. No había tiempo de intentar contraatacar en el flanco de dama; p. ej. : 20. a4, � e8 2 1 . �h3,
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g5! 22. �f5 (de lo contrario, la dama blan ca está en posición peligrosa tras 22 . . . . , g4) 22 . . . . , �h6 23. a5, �h4, con la amenaza 24 . . . . , 4Jg4. Si las blancas intentan impedir eso con 24. h3, las negras abren el flanco de rey con 24 . . . . , g4. 20 . ... , ef3 21 . � f3, ... Nikolié tenía en principio la intención de jugar 2 1 . gf3, pero temió las consecuencias de 21 . . . . , b5! Bien es verdad que las negras tienen claramente las mejores posibilidades después de 22. cb5, .U e8 23. �h3, é2l d5 24. ki ae1 , 1::!. f6, dado que no hay coopera ción alguna entre las tropas blancas. Con todo, esta línea tal vez sea preferible, puesto que ahora las blancas se ven abocadas a jugar un sombrío final. 21 . , �eS! Puede que el lector se pregunte por qué las negras no quisieron entrar en el final hace dos jugadas y ahora sí. La razón es que la casilla e4 está ahora disponible para el caba llo. En la continuación se verá la importancia de esta casilla. 22. �es, ld c8 23 . .U c1 , ... ...
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23 . ... , c5 Con esta jugada, las negras mantienen su macizo frente de peones y al mismo tiempo impiden el avance c5, que sería posible luego de, p. ej. , 23 . . . . , 4J e4 24. � f7, �f7 25. c5, bc5 26. bc5, t2lc5 27. i_e5, y si 27 . . . . , é2ld3, las blancas tienen 28. I:í. f1 a su disposición. 23 . . . . , c6, a propósito, también habría sido una buena alternativa a la jugada del texto.
Durante la partida, pensé que entonces las blancas tendrían una salida mediante 24. c5, pero posteriormente me di cuenta de que las negras se quedan con un saludable peón de ventaja en un final de alfil y caballo después de 24 . . . . , cd5 25. cd6, � c1 26. i,c1 , é2ld7! , y el peón pasado de las blancas será presa fácil. 24. b5, ... El primer jugador intenta mantener cerra da la posición todo lo posible a fin de camuflar la debilidad de sus peones. Si tomara el peón al paso, no habría manera de impedir la pérdi da del peón «C» : 24. dc6, .l:!. c6 25. b5, l:i, c8 26. a4, � fc7 27. i,a3, 4Je4, y las blancas deberían abandonar. También 24. bc5, bc5 sería desastroso, porque las negras penetra rían por la columna «b» . 24 . ... , a6 25. ba6, ld a7 26. 1.:!. f2, .l::i.a6 27. ll b1 , ... Las blancas han construido una posición desde la que pueden mantener a raya las amenazas directas como, p. ej. , . . . , b5. Sin embargo, el alfil tiene que sufrir por ello, y eso decide su destino. 27. ... , é2le4 28 . .U c2, .l:i. f8 29. i_c1 , ... 29. l;;i. f1 era más persistente. En ese caso, las negras jugarían para hacer . . . , b5; p. ej. : 2 9 . . . . , .U. b8! 30. id b1 , b 5 31 . i,c1 , b4! , y el peón «b» pasado pronto obligará a las blan cas a ceder material. 29. ... , h5 30. i,b2, .U a4
Ahora se ha impedido 31 . !:!. f1 en vista de 31 . . . . , 1d f1 32. �f1 , ld c4, y ganan.
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31 . h4, ... Esto debilita la posición blanca todavía más, pero luego de 31 . .i_c1 , � a7! 32. ld b6, .U. af7 33. g3, b!. f1 34. �g2, .ll 1 f2 35. � f2, .l:t. f2, seguido de 36 . . . . , .ll c2, tampoco habría habido esperanza para las blancas. 31 . ... , l:I f6 32. �h2, � f2 33. I;i. bc1 , .ld d2!
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La torre penetra más en la posición blanca sin que se la moleste. 34. <;t>h3, ]d d3 35 . .l:!. e1 , ... O 35 . .l::!. e2, .l::!. d2! , y ganan. 35 . ... , Qjd2 Las blancas abandonaron. Se capturarán todos sus peones del flanco de dama.
14. Lajos Portisch Portisch-Timman Hilversum, 1 984 Sexta partida del Encuentro Defensa I ndi a de Da ma
1 . d4, ct::\ f62. c4, e6 3. ct::\ f3, b6 4. ct::\ c3, �b4 5. �g5, ... En la segunda partida, Portisch transpuso a una Nimzoindia jugando 5. 'iVc2, pero eso condujo a una experiencia bastante desastro sa para él. 5 . ..., �b7 6. �c2, ... 6. e3 es más habitual. 6 . ... , h6 7. �h4, g5 En mi opinión, este avance lo condena la teoría erróneamente por la partida Uhlmann Golombek, Zagreb, 1 965. La jugada teórica es 7. ..., c5, pero decidí abandonarla por miedo a una línea preparada. a. �g3, ct::\ e4 9. �es, ... Exactamente así continuó Uhlmann en la partida mencionada. Portisch reflexionó sobre la textual durante veinte minutos. 9 . ... , f61 0. d5, ...
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Esto es una novedad que se le ocurrió a Portisch en el tablero. El caballo de c3 queda protegido de repente por el alfil. Posteriormente, Sosonko dijo que Murey había tenido la misma idea. En general, no se recomienda, pero en este caso es una mejora en comparación con la partida Uhlmann-Golombek, en la que se continuó con 1 O . �g3, �c3 1 1 . bc3, d6 1 2. e3,
Q l2.3
ct::\ d 7? 1 3. d5! , ed5 1 4. cd5, �d5 1 5. 0-0-0, �b7 1 6. �a6 ! , y las negras ten ían graves problemas. Deberían haber jugado 1 2. ... , f5, después de lo cual se encuentran en una conocida posición teórica con un tiempo suplementario. 1 0 . ... , ed5 1 0. ..., fe5 1 1 . 'iVe4, 'iVf6 es malo a causa de 1 2. h4! , y las blancas obtienen una peligro sa iniciativa. 1 1 . cd5, �c3 Este cambio es necesario antes de tomar en d5. Después de 1 1 . ... , �d5 1 2. 0-0-0, �c3 1 3. l::r d5! , las blancas tendrían rápida mente la sartén por el mango. 1 2. �c3, �d5 1 3. o-o-o, ct::\ c3 1 4. 'iVc3, �f7 El alfil deja la gran diagonal a fin de prote ger el flanco de rey, un tanto debilitado. 1 5. h4, ... 1 5. e4 era una alternativa, pero después de 1 5.. ... , 'iVe7 (no 1 5. ..., ct::\ c6 1 6. �b5) 1 6. e5, ct::\ c 6! 1 7. ef6, 'iVc5, las negras no tienen nada que temer. Al contrario, incluso cuentan con posibilidades un poco mejores. 1 5 . ... , g4 1 6. ct::\ e5, ... 1 6. ct::\ d4 era inocua a causa de 1 6. ... , 'iVe 7, amenazando forzar el cambio de las damas mediante 1 7. ... , 'iVc5. Aunque la juga da del texto parece amenazadora, las negras lo tienen todo bajo control. 1 6 . ..., �h5!
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pero no es abrumadora. Al fin y al cabo, el alfil blanco está bloqueado por peones, y su rey no está tan seguro. 1 7 . 'iVc2!, Posteriormente, oí que esta jugada se había criticado bastante, pero en realidad es posible que sea la mejor que tienen las blan cas en esta posición. Algunas alternativas son: a) 1 7. g3. Esto parece bastante bueno, pero las apariencias engañan. Las negras replican (como en casi todos los casos) 1 7. ... , 'iVe7; 1 8. i,g2, feS 1 9. i,a8, c6 no es muy atractivo para las blancas, y después de 1 8. lt:Jd3, lt:Ja6 1 9. i, g2, c6 20. lt:Jf4, i,f7, poca compensación tienen. Las negras están listas para enrocar por el flanco de dama. b) 1 7. e3. Esta jugada impide el desarrollo del caballo a a6, pero también ahora la com pensación por el peón es vaga después de 1 7. ... , 'iVe7 1 8. lt:Jd3, lt:Jc6 1 9. lt:Jf4, i,f7, seguido de nuevo del enroque por el flanco de dama. Más aún, el ataque por sorpresa 1 8. lt:Jd7 no es suficiente a causa de 1 8. ... , lt:Jd7 1 9. i, b5, 0-0-0, y las blancas están acabadas. e) 1 7. l::t d3. Una de las pocas jugadas después de la cual 1 7. ... , 'iVe7 no basta debi do a 1 8. .il e3. También 1 7. ... , 0-0 1 8. 'iVc4 sería malo para las negras, pero 1 7. ... , d6 es una réplica fiable, aunque las negras tengan ahora algunos agujeros en su posición (c6 y e6). Sosonko sugirió 1 8. lt:J g4, con el quid de que después de 1 8. ... , i,g4 1 9. 'iVd4 las blancas recuperan el material. Esto parece muy fuerte, pero luego de 1 9. ... , 'iVd7! las negras van bastante bien; p. ej.: 20. 'iVf6, 'iVh7! 21 . � e3, �d7 o 20. 'iVe4, �f7 2 1 . 'iVa8, c6, y l a dama blanca está cazada. d) 1 7. l::t d5. Un rodeo para recobrar el peón. Tras 1 7. ... , 'iVe7 1 8. lt:Jd7, l¿j d7 1 9. .l::i. h5, lt:J e5 20. e3, 0-0-0, las negras están bien porque la torre de las blancas está fuera de juego. e) 1 7. 'iVd4. Además de la textual, la única manera de recobrar el peón sin demasiado •.•
Una respuesta insólita, pero de hecho es la única jugada que tienen las negras. Por más antiestética que pueda parecer la casilla h5, desde ella el alfil domina al caballo blanco en el flanco de rey. 1 6. ... , i,e6 era mala debi do a 1 7. tt:J g6, seguida de 1 8. lt:Jf4. Después de esta jugada, Portisch se puso a pensar durante mucho rato. Pasados veinte minutos, vi que había apuntado una jugada -tiene la costumbre de apuntar primero la jugada que quiere hacer-, pero casi media hora después se decidió por otra jugada, muy sorprendente, por cierto. Mientras tanto, a los aficionados que seguían la partida por televi sión les había asustado la valoración según la cual mi posición era una ruina y la afirmación de que Portisch estaba decidiendo la manera más eficiente de demolerla por completo. Esta comunicación tal vez proviniera de los comen tarios que hizo el locutor al público ese día, pero no debe excluirse la posibilidad de que esos comentarios se interpretaran mal. En cualquier caso, la opinión general era que Portisch no tardaría mucho en igualar el resul tado del encuentro. Por lo menos dos veces antes, a los espectadores que se hallaban en el estudio de la emisora KRO -donde jugábamos- se les había informado mal. Durante la primera y la quinta partidas, el comentarista del día insinuó que mi posición era desesperada, aunque en los momentos en cuestión no era mala en absoluto. En la posición del diagrama, las blancas, sin duda, tienen compensación por el peón,
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perjuicio. Las negras responden 1 7 . . . . , W/ie7 1 8. tL'lg4, li f8.
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del todo; es difícil decir si el alfil es más fuerte que el caballo, y ambos reyes están en posi ciones un tanto inseguras. Tal vez las blancas puedan ejercer presión por las columnas «C» y «d» más tarde, pero, por otra parte, las negras tienen posibilidades de levantar un fuerte centro o conquistar la casilla d4 para el caballo. Hay aproximadamente igualdad de oportunidades. 20 . . , �f8 Esto plantea un dilema a las blancas: ¿tie nen que sacrificar el peón «f, o deben jugar 21 . f3, poco atractiva? 21 . �h5, ... Portisch elige la primera posibilidad. Durante la partida, pensé que la textual era floja, pero ahora tengo que admitir que no es tan mala. La manera más lógica de sacrificar el peón era 21 . g3; después de 21 . ... , � f2 22. i, h3, c6 23. J::1 hf1 , ld f1 24. ld f1 , �e?, la posición de las negras es relativamente sólida debido a la presencia del peón de d7. Además, las negras siempre tienen en reser va un jaque en c5. Dvoretski sugirió 23. .l::i, d2 o 23. t!. d3 (en vez de 23. .l:l. hf1 ) a fin de doblar las torres en la columna «d>> . Entonces, las negras deberían continuar con 23 . . . . , �e? 24. l:í.hd1 , d5! , puesto que no tienen que temer el jaque en c8. Luego de 23. .Ud2, �e? 24 . .l:l. hd1 , d5 25. ld c2, �d7 26. �d7 (no 26. � d5? a causa de 26 . . . . , l:d f1 ! , y las negras ganan) 26 . . . . , tL'ld7 27. ld d5, tL'lc5 28. .U e5, .ld. g8, las negras aguantarían con bastante comodidad. Portisch rechazó 21 . f3 a causa de 21 . . . . , tL'la6, y el caballo llega a la casilla vital c5. 22. e4, tL'lc5 23. i,b5, �c8 es una línea importante; 24. b4 fracasa por 24 . . . . , a5! , y a 24. � d5 puede responderse satisfactoria mente 24 . . . . , .Uf6. 21 . ... , ¡ve6 22. �b1 , ... La dama blanca está fuera de juego de momento, pero las blancas amenazan remediar este defecto con 22. g3, seguida de 24. j, h3. Pensé un buen rato y decidí bus car unas tablas forzadas. .
(análisis) Ahora es demasiado peligroso tomar en h6 a causa de 1 9. tL'l h6, f5, y el caballo tiene cortada la retirada. Por tanto, una continua ción normal sería 1 9. tL'le3, tL'lc6 20. �c3, 0-0-0. En esta infrecuente posición, es proba ble que las negras tengan las mejores perspec tivas, porque se han adelantado un poco en el desarrollo y su rey está un tanto más seguro. 1 7. ... , feS No 1 7 . . . . , �e? a causa de 1 8. ltJg6, y la posición negra sería inferior. 1 8. �f5, ... Recobrando todo el material con un solo golpe. 18 . ... , �e7 1 9 . �h5, � d8 20. � g4, . . .
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Las blancas han recobrado el peón, pero la posición sigue siendo muy difícil de valorar: ambos bandos todavía no se han desarrollado
.
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b) 26. it h3, .id f7 27. j,e6! Esta maniobra es lo que hizo que abandonara ulteriores ten tativas de ganar. En todo caso, dado el resul tado del encuentro, pocas razones había para forzar las cosas. Después de 27 . . . . , .:!. g7 28. 1::!. hf1 , �ea 29. j,d5, las blancas tienen fuer te presión por el peón, que pueden recobrar en todo momento. 24. g3, itJ b4 25. ab4, ...
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22 . ... , ctJC6 22 . . . . , itJa6 era la alternativa, a fin de responder a 23. a3 23. ... , itJc5. Las blancas replican 24. g3, y 24 . ... , .l:I f5, con la intención de jugar 25. �g4, n f2, no es tan buena a causa de 25. it h3!, kt h5 26. ite6; después de 26 . . . . , ltJe6 27. g4, las negras tienen una calidad menos. Por tanto, es preceptiva 26. ... , e4, pero, ciertamente, no es esta la manera de jugar a ganar. 23. a3, ... Hay que impedir 23 . . . . , itJ b4; p. ej. : 24. e3, itJ b4 24. b3, �c6!, y las blancas tienen problemas. Sin embargo, las negras deben evitar 24 . . . . , n f2 25. j,c4, itJa2 26 . .l::!. d3!, y resulta que las complicaciones redundan en beneficio de las blancas. 23 . ... , aS Iniciando un sacrificio de pieza que condu ce al jaque perpetuo. La alternativa era 23 . . , .U f2 a fin de cambiar las damas después de 24. g3 mediante 24. ... , 'iYf5 25. �f5, .:!. f5. Las blancas tienen ahora las posibilidades siguientes: a) 26. .)d d7, �d7 27. j, h3, itJd4 28. e4, �e6 29. I;I f1 , I;I f8, y la ventaja es de las negras. . .
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En este momento, Portisch ofreció las tablas, que rechacé porque me pareció que llevar a cabo la combinación de tablas sería un digno final del encuentro. 25 . ... , ab4 26. it h3, �a2 27. �c2, �c4 28. � d2, ... Ciertamente, no 28. �b1 debido a 28 . . . . , �e4 29. �c1 , .l:!_ a1 , y las negras ganan. 28 . ... , �d4 Las negras no tienen más que tablas, ya que si 28 . . . . , �d5, son posibles tanto 29. �e3 como 29. �c2, b3 30. �c3. 29. �c2, �c4 30. �d2, �d4 Tablas.
15. Oleg Romanishin Timman-Romanishin Wijk aan Zee, 1 985 Torneo Hoogovens Ruy Lópe z
1 . e4, e5 2. iLJf3, lL'lc6 3. i, b5, a6 4. i,a4, iLJf6 5. o-o, i,e7 6. l':( e1 , b5 7. i, b3, d6 8. c3, o-o 9. h3, lLJa5 1 0. i,c2, c5 1 1 . d4, lL'lc6 1 2. iL'l bd2, cd4 1 3. cd4, ... Una vieja variante, ideada por Keres, que se usó de manera regular en la década de 1 960. Romanishin es uno de los pocos juga dores de elite que sigue mostrando interés por esta línea en la actualidad. 13 . ... , iL'ld7 1 4. iL'lf1 , ... 1 4. iL'l b4 y 1 4. d5 son las alternativas prin cipales. Elegí la textual porque Ljubojevié había batido con ella convincentemente a Portisch el año anterior. 14 . ... , ed4 1 5. iL'ld4, iL'ld4 1 6. �d4, lLJe5 1 7 . .ti. d1 , ...
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Esta jugada es la novedad de Ljubojevié, que probablemente no reporta tanto como los primeros ejemplos de la práctica tienden a indi car. La jugada antigua era 1 7. � d1 , pero en la partida Lobron-Romanishin, Sarajevo, 1 984, las negras estaban bien después de 1 7 . . . . , i,f6 1 8. 4Je3, i, e6 1 9. a4, l:t c8! 20. ab5, ab5 21 . i, d2, ¡yb6 22. i,a5, �c5 23. i,b3, iLJg6. 17 . ... , i,b7 Desde luego, 1 7 . . . . , i,h3 no es buena debido a 1 8. ¡ye5, y las blancas ganan dos piezas por una torre. La textual es más fuerte
R L 23.2
que la jugada de Portisch, 1 7 . . . . , �e?. En Ljubojevié-Portisch, Tilburgo, 1 984, las blan cas obtuvieron un final superior después de 1 8. iLJe3, i,h3 1 9. iLJd5, �d8 (a 1 9 . . . . , �c2 se contesta 20. Id d2) 20. iLJe7, �e? 21 . � d6, � d6 22. lld6, i, e6 23. b3, 1::i. ac8 24. ld d2. 1 8. iLJ g3, ... Ahora g3 es la casilla correcta para el caballo, puesto que las blancas no pueden desarrollarse con facilidad luego de 1 8. lL'le3, I:r. c8; contra 1 9. i,d2 y 1 9. i,b3, el bando negro efectúa 1 9 . . . . , i,f6 y tiene un juego excelente. 1 8 . ... , �c7 En la última ronda, Romanishin introdujo la importante mejora 1 8. . .. , i,f6! contra Spraggett. Después de 1 9. �d6, �ca 20. �d2, 1::!, d8 21 . �e2, �c4, las negras tenían excelente compensación por el peón. 1 9. i,b3, .l:!. fd8 Esto no solamente da protección suple mentaria al peón ••d•• , sino también deja libre la casilla f8 para el alfil. 20. i,e3, ... Las blancas están ahora listas para con testar a 20 . . . . , i,f6 21 . �b6. 20. ... , iLJc4 21 . iLJ h5, ... Esto, además de atacar g7, priva al alfil negro de la casilla f6. 21 . ... , i, f8 22. .t!. ac1 , 1:!. ac8 22 . . . . , d5 era una alternativa importante. Romanishin no la jugó por miedo a la línea 23. e5, �e5 24. Id c4, �h5 25 . .l::!. c7. La posición parece muy amenazadora para las negras, pero, de hecho, tienen poco de lo que preocuparse después de 25 . . . . , i,c8, planeando contestar a 26. i,d5 26 . . . . , i,e6. El planteamiento más prometedor para las blancas es probable que sea 23. ed5, .U d5
JAN TIMMAN: MI AJEDREZ AUDAZ
24. �g4. 24 . . . . , l:i, d1 25. jLd1 , ltje3 no sirve debido a 26·. ltjf6, � h8 27. �h4, cam biando las damas. En otras líneas, las piezas blancas también apuntan amenazadoramente al rey negro. 23. l:í, c3!, El principio de una peligrosa ofensiva. Las blancas podían haber continuado tranquila mente con 23. jLc4, bc4 24. ltjf4, pero luego de 24 . . . . , g6 25. ltjd5, jLd5 26. �d5, jLg7 no me parece que tengan una ventaja excesi va. Tras la deliberación de rigor, me decidí por la textual, habiendo determinado, para decep ción mía, que la tentadora 23. jLh6 fracasa por 23 . . . . , �c5. 23 . ... , �e7 24. jL h6!, Ahora sí sirve. 24. ... , �e5 La única defensa. 25. J:I g3, .••
.•.
••.
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un prometedor sacrificio de calidad: 28. 1::!. e4! , ld e4 2 9 . ltjf6. Después d e 2 9. . . . , gf6 30. jLf6, jLg7 31 . .l::i, g7, �fa 32. � h7, �ea, las blancas tienen claramente las mejores posibilidades por la pareja de alfiles y su gran superioridad en el flanco de rey, pero no se gana por fuerza. 26. jLg5, Esto gana por lo menos una calidad. 26 . ... , �d4 27. ,ld d4, ltj b2 Las negras capturan un peón, puesto que de lo contrario no tendrían compensación alguna por la calidad. Sin embargo, al alejar el caballo de la acción, permiten al adversario iniciar un ataque de mate. 28. e5!, ltjc4 29. jLd8?, ... Una pena. Después de 29. ltjf6, el rey no habría podido sobrevivir a la fuerza combina da de las piezas blancas. Desde luego, habría que jugar con precisión tras 29 . . . . , � h8 30. 1d h4, h6 31 . jL h6, jLh6; aquí, las blancas deben evitar 32 . .ti. h6, � g7 33. 11 h7, �f8 34. e6, � e7, y el rey escapa. No fue hasta la tarde, durante el aplazamiento de dos horas, cuando descubrí 32. .Id g6!, fg6 33. n h6, � g7 34 . .l::i.h7, �f8 35. e6, que conduce al mate. Esta posición merece un diagrama. ••.
N
25 . ... , g6? La equivocación decisiva. Solamente jugando 25 . . . . , jLe4! podían haber resistido las negras. El primer jugador puede probar entonces: a) 26. jLg7, jLg7 27. � g7, � h8, y ahora 28 . .id f7 fracasa por 28 . . . . , jLg6. Tampoco se logra nada después de 28 . .l!1 g5, �d4 29. l;I d4, jLg6. b) 26. jLg5! Como en la partida, esto es el método correcto. Parece que las blancas ganarán la calidad, pero las negras pueden impedirlo mediante 26 . . . . , �d4 27 . .l:t d4, l:í. e8. Ahora el bando blanco, a su vez, tiene
(análisis) Se amenaza mate mediante e7 además de .l::1 f7. Es curioso que las blancas no nece siten en particular el alfil de rey para este ata que de mate. Habiendo dejado pasar esta
PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
62
oportunidad, tienen por delante una espinosa tarea técnica. 29 . ... , _ldd8 30. �c4, bc4 31 . ed6, U d6 La alternativa era 31 . . . . , �d6; después de 32. tLlf6, <;t>f8 (32 . . . . , <;t>g??? 33. g d6) 33. t¿jh7, <;t>g7 34. t¿jg5, las negras tienen dos maneras de intentar aprovechar el peón «C» pasado: a) 34. . . . , �g3 35 . .ldd8, c3! 36. t¿je6!, c;t>f6 (o 36. . . . , fe6 37. fg3, y ganan) 37. ll d1 ! , y las blancas tienen excelentes posibilidades de explotar su superioridad de material. b) 34. . . . , c3 35. 1:!. c3, � h2 36. <;t>h2, _j¿d5 37. tLlf7!, �g2 38. <;t>g2, �f7 39. M. a3, .id d6 40. ll a5, con un final técnica mente ganado. 32 . .l::Id6, ... Por norma, el cambio de las torres es favo rable a las blancas, pero aquí hay el factor añadido de que les costará esfuerzo mantener la iniciativa. 32 . ... , � d6 33. t¿jf6, <;t>ta 34. �c3, <;t>e7 35. t¿jg4, �d5 36. t¿je3, Así, las blancas capturan el peón «C» . La lucha contra la pareja de alfiles es problemáti ca tal como están las cosas. 36 . ... , �e6 37. t¿jc4, � b4 38 . .i::i.c2, h5 39. tLle5, ... Romanishin iba mal de tiempo aquí, y traté de ponerle nervioso con más maniobras de caballo. 39 . ... , �d6 40. tLlc6, <;t>d7 41 . t¿jd4, �d5 42. t¿jb3, ... Mi intención original era jugar 42. li d2. Si las negras juegan distraídamente 42 . . . . , �b4. después de 43 . .l::t d1 no pueden impe dir la maniobra t¿jd4-c2-e3, y se cambia un alfil. Lo indicado es 42 . . . . , �c4, y a las blan cas les resulta difícil progresar. 42 . ... , � b4 43. tLlc5, ... Justo antes del control de tiempo, decidí cambiar el caballo por uno de los alfiles y sacrificar el peón «a» . Objetivamente, es pro bable que no sea el mejor plan, porque, como se verá, las blancas no pueden ganar el final. Sin embargo, desde un punto de vista prácti••.
co, la jugada del texto está justificada porque el final de torre y caballo contra la pareja de alfiles es asunto fatigoso. 43 . ... , �c5 44. �c5, �a2 45. f3, <;t>d6
8
46. l;Ic8, 46. .l:!. c1 era menos exacta debido a 46. . . . , <;t>d5, seguida de 47 . . . . , �c4, 48 . . . . , <;t>c5 y el avance del peón «a» . 46 . ... , �d5 Esto amenaza avanzar el peón «a•• a a4. En este momento, el plan de 46 . . . . , <;t>d5 no sirve; por ejemplo: 47. <;t>f2, �c4 48. <;t>e3, �f1 49 . .ti.c2, h4 50. <;t>f4, y las blancas ganan en el flanco de rey. 47. 1::tc1 , ... Impidiendo el avance del peón «a•• . 47 . ... , �c6 Amenazando 48 . . . . , a5 una vez más. 48 . .ti.a1 , � b5 49. <;t>f2, <;t>e5 El plan correcto. El rey negro debe ir al flanco de rey, puesto que luego de 49 . . . . , �c5 50. <;t>e3, Wb4 51 . <;t>d4 pocas espe ranzas tendrían las negras. 50. <;t>e3, <;t>f5 Aquí, las negras habrían podido trasladar felizmente el rey a g7, como mostraré más tarde. 50 . . . . , h4, sin embargo, habría sido demasiado optimista porque el peón «h>• negro es débil después de 51 . f4, <;t>f5 52. 1:I c1 , seguido de 53. �c5. 51 . g3, we5 52. h4, ... •••
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52 . . . . , �d5? Ten ía dudas sobre mis posibilidades de ganar si el rey negro permanecía en el flanco de rey, ¡ pero Romanishin decide trasladarlo al flanco de dama de todos modos! El plan correcto habría sido esperar; por ejemplo: 52. . .. , �f6 53. � c1 , �e5 54. .l::!_c5, �f6 55. �e4, �g7 56. �e5, .,te2 57. f4 (hay que intentar romper con f5), .,tb5 58. !:!. c7, .,td3 59. � a?, .,tb5 60. f5, gf5 61 . �f5. Si el peón «a» no estuviera, las blancas tendrían ganada esta posición. Sin embargo, las negras pueden usar este peón a fin de ganar tiempo para hacer . . . , f6, privando al rey enemigo de las casillas e5 y g5. Es importan te que sitúen el alfil en la diagonal h3-c8 a tiempo: 61 . . . . , .,te2 62. �g5, a5 63 . .l::!.a 5, f6 64. �f5, .,tg4 65. �e4. Después de algunas maniobras, las blan cas pueden llegar a la posición siguiente:
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(análisis)
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Las blancas juegan ahora 1 . .Ub4, ame nazando 2. n g4. La única manera de parar esto es jugar 1 . . . . , .,th3, y entonces las blan cas no pueden progresar. 53 . �f4!, . . . Posteriormente, Romanishin dijo que esperaba 53. g4 a fin de ir a g7 de todos modos después de 53 . . . . , hg4 54. fg4, �e6. Esto son unas tablas de problema: 55. h5, gh5 56. gh5, �f6 57 . .llg1 , .,ta4! (la única juga da: el alfil amenaza ir a c2; 57 . . . . , .,td7 58. h6, .,tf5 59. l:I f1 pierde) 58 .l:!. g2, .,tc6, y las blancas no pueden mantener al alfil enemigo alejado de la diagonal. Por suerte, vi esta cela da a tiempo. 53 . . . . , � es 54 . g4, � b4 55 . gh5, gh5 56 . � g5, .,t e2 57 . f4, . . . Las blancas tienen el tiempo justo para salvar el peón «f» antes de arrasar el flanco de rey. 57 . . . . , as 58 . � e1 , .,t g4 59 . f5, . . . Indudablemente, no 59. .l:l e???, f5, des truyendo toda posibilidad de victoria. 59 . . . . , a4 60 . b1 e7, ... Las negras abandonaron. Después de capturar en f7, las blancas pueden sacrificar la torre por el peón ••a» con confianza. .
16.
Rafael Vaganián
Timman-Vaganián Linares, 1985
Defensa Francesa
1 . e4, e6 2. d4, d5 3. lt:Jc3, �b4 4. e5, c5 Una leve sorpresa, puesto que Vaganián juega con frecuencia 4 . . . . , b6. 5. �d2, ... Una continuación pasada de moda, que, en mi opinión, está subestimada por los teó ricos. 5 . ... , lt:Je7 6. lt:Jb5, �d2 7. �d2, 0 -0 8. c3, lt:Jbc6 9. f4, a6 La teoría prefiere 9 . . . . , lt:Jf5. La jugada de Vaganián es un poco curiosa, pero no está tan mal. 1 0. lt:Jd6, cd4 1 1 . cd4, lt:Jf5 1 2. lt:Jf5, ef5 1 3. lt:Jf3, �e6 1 4. �e2, l::í.c8 1 5. U c1 , �b6 1 6. � 12 Como esperaba cambios generalizados en la columna «C», puse el rey un poco más cerca del centro en vez de enrocar. La próxi ma jugada de Vaganián fue una agradable sorpresa. • ...
N
1 6. ... , f6 Abrir la posición resulta ser ventajoso para las blancas. 1 6 . . . . , lt:Ja5 o 1 6 . . . . , lt:Je7 era lo indicado, después de lo cual se cam bian las torres, y es probable que también las damas. Las blancas conservan una lige ra ventaja por su alfil bueno y la estructura de peones más sólida, pero no es suficiente
FR 1 0.1
para contar con verdaderas posibilidades de victoria. 1 7. ef6, gf6 El segundo jugador se ve obligado a dis locar su estructura de peones en el flanco de rey porque después de 1 7 . . . . , l:tf6 1as blan cas tienen 1 8 . .l::!.c5, seguida de 1 9. �hc1 , y están listas para entrar en acción por la columna «C» . 1 8. �c3, ... Aqu í no puede jugarse 1 8. �c5 a causa de 1 8 . . . . , lt:Jd4, de modo que hay que empezar a doblar las torres de manera más modesta. 1 8 . ... , il.,f7 El alfil va camino de h5 al tiempo que se despeja la columna «e•• para las torres. 1 9. 1;! hc1 , .Uce8 Poco sentido tenía la alternativa 1 9. �h5 a causa de 20 . .Uc5. 20. .Uc5, .Ue4 21 . il d3, l:tfe8 El conocido sacrificio de calidad ruso, que aquí no es un verdadero sacrificio a causa del jaque que sigue en e3. Las blancas escapan de él con su próxima jugada. 22. �g1 , .l::t e3 Esto conduce a la derrota. La única posibi lidad era 22 . . . . , �c7, pero las blancas podían seguir tranquilamente con 23. g3, y persisten las debilidades de la posición negra. Era muy malo 22 . . . . , lt:Jd4 23. il.,e4, lt:Je6 24. �f5, lt:Jc5 25. �d4, lt:Ja4 26. b3, �d4 27. lt:Jd4, lt:Jb6 28. Uc7, con juego destructivo.
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23 . tt:'le5!, feS 23 . . . . , l::td3 24. tt:'ld3, tt:'ld4 no dejaría posibilidades a las negras después de la lacó nica respuesta 25. <;t>h1 , y las blancas tienen una calidad de ventaja. 24 . �e3, e4 Vaganián confiaba en esto. El alfil blanco tiene que jugar, y entonces cae el peón «b» de las blancas. Al menos, así parece a primera vista. 25 . i_c2!, �b2 Después de 25 . . . . , �b4, se habría res pondido, sencillamente, 26. nd1 . 26 . i,a4, . . .
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La iniciativa de las negras ha tocado a su fin. No tienen nada después de 26 . . . . , tt:'ld4 27. i,ea, i,ea 28. nd1 ' tt:'le2 29. <;t>f1 . 26 . . . . , �a2 27 . i,c6, bc6 28 . l::tc6, �a4 29 . h3, ll e6 30 . ll e6, i.e6 31 . l::tc7, .i,d7 32 . <;t> h2, . . . Las negras abandonaron.
17.
Ognjen Cvitan
Timman-Cvitan Zagreb-Rijeka, 1985, ronda 12
Defensa India de Rey
1 . d4, Qjf6 2. c4, g6 3. Qjc3, j,g7 4. e4, d6 5. f3, o-o 6. j, e3, b6 7. j, d3, QJfd7 Interesante jugada que yo no había visto antes. Las negras preparan el avance . . . , eS, pero no con las habituales 7 . . . . , a6 o 7 . . . . , j,b7. La textual también es el comienzo de una serie de curiosas maniobras de caballo. 8. Qjge2, ... Más tarde, en un manual de teoría, vi que Schwarz recomienda aqu í 8. f4 y afirma que las blancas están claramente mejor luego de 8 . . . . , eS 9. dS, e6 1 0. Qjf3. Esto, sin duda, es verdad, pero evité 8. f4 a causa de 8 . . . . , eS! Después de tanto 9. feS, deS 1 o. dS, QJcs como 9. deS, deS 1 O. fS, j,h6!, las negras tienen contrajuego razonable. 8 . ... ,es Ahora la amenaza posicional es 9 . . . . , Qjc6 1 0. j,c2, eS, y las negras toman el con trol de la casilla d4. 9. j,c2, Qjc6 1 0. d5, Qjb4 1 1 . j,b3, ...
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Kl 45.2
Una jugada inesperada. 1 1 .' . . . , QJes pare ce más lógica, puesto que tras 1 2. 0-0, j,a6 1 3. a3, Qjbd3 1 4. 'ii'd 2, las negras tienen el sacrificio de pieza, más o menos forzado, 1 4 . . . . , Qjb2 1 S. 'ii'b 2, Qjc4 1 6. j,c4, j,c4. Cvitan había mirado esta posición al preparar se en casa, pero no se atrevió a ponerla en práctica. No les resulta fácil a las blancas fre nar la fuerza combinada de la pareja de alfiles y la mayoría de peones del enemigo en el flan co de dama, pero me parece que las negras, objetivamente, no tienen compensación sufi ciente por la pieza. 1 2. 'ii'd2, ... Al proteger el peón «b», las blancas se preparan para contestar a 12 . . . . , Qja6 1 3. QjbS. 1 2 . ... , QJeS Las negras se benefician del hecho de que 1 3. 0-0, j,a6 1 4. a3 se refuta ahora mediante 1 4 . . . . , j,c4, puesto que el alfil de b3 no está protegido. 1 3. f4, ... Esto es posible porque el peón «b» está protegido, y las negras perderían una pieza después de 1 3 . . . . , Qjed3 1 4. �f1 . 1 3 . ... , Qjg4 1 4. j,g1 , Ambos bandos están gastando una gene rosa cantidad de tiempos jugando las piezas menores -las negras, los caballos, las blan cas, los alfiles- para evitar cambiarlas. 1 4 . ... , Qja6 Hora de retirarse. 1 5. h3, Qjf6 1 6. j,c2, ... El alfil de rey planea volver a d3. 16 . ... , QJc7 1 7. j,d3, a6 1 8. l::i,c1 !, ... El plan correcto. Las blancas tienen que contestar a . . . , bS con b3 para mantener su posición central. 1 8 . ... , b5 .••
Infrecuente casilla para el alfil , pero es importante mantener defendido c4. Luego de 1 1 . j,b1 , QjeS 1 2. b3, bS! 1 3. cbS, a6, las negras gozarían de una peligrosa inicia tiva. 1 1 . ... , jdb8
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MI AJEDREZ AUDAZ
Probablemente, era mejor 1 8 . . . . , e6 para abrir la columna «e» antes de jugar . . . , b5. 1 9. b3, tL'ld7 Ahora 1 9 . . . . , e6 era menos favorable a causa de 20. e5! ; p. ej. : 20 . . . . , de5 21 . i_c5, .U. e8 22. d6, y el caballo no tiene más que la penosa retirada a a8. 20. i,e3, ...
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Es hora de valorar los resultados de los tiempos perdidos. En diez jugadas, los caba llos negros han llegado a casillas que podían haberse alcanzado en cuatro jugadas. Las blancas han hecho ocho jugadas de alfil, y los alfiles han vuelto donde estaban hace trece jugadas, a buenas casillas de desarrollo que podían haberse alcanzado en dos jugadas. Así pues, ambos bandos han perdido seis jugadas, y aunque las blancas no han ganado tiempo alguno, están claramente mejor a causa de su ventaja de espacio. 20 . ... , e6 21 . de6, ... La réplica natural. En la posición semia bierta que surge ahora, la ventaja de las blan cas es más patente. 21 . ... , fe6 22. o-o, b4 De lo contrario, las negras tienen que estar pendientes de proteger su peón «b». 23. tt:Ja4, ... El caballo está sorprendentemente bien situado en la banda del tablero, ya que ayuda a la tentativa blanca de atacar la estructura de peones negra con e5. 23 . ... , VJ/ie7 24. lZ:Jg3, ... Ahora 25. e5 es una amenaza real.
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24 . ... , i, b7 Las alternativas tampoco eran satisfacto rias, como puede verse por: a) 24 . . . . , 'ii' h 4. Ahora las blancas deben estar alerta, ya que 25. U f3? fracasa por 25 . . . . , l¿Je5! Es necesaria 25. � h2, pero des pués de 25 . . . . , tL'lf6, deben volver a tener cui dado, puesto que 26. i_e2?, VJ/ig3 cuesta un peón. 26. VJ/ie2, h5 27. �g1 ! es el curso correcto, y las blancas deben ganar, porque las negras pierden la dama tras 27 . . . . , VJ/ig3 28 . .l:!. f3, VJ/ih4 29. i,f2. b) 24 . . . . , i,d4. Quizás, la mejor opción que tenían las negras. No obstante, las blan cas están mejor después de 25. � h2: a . . . , e5 se sigue respondiendo f5, y las negras apenas tienen contrajuego. 25. !:!. cd1 , ld bd8 Era demasiado tarde para 25 . . . . , i,d4 porque luego de 26. i,d4, cd4 27. VJ/ib4, i_e4 28. VJ/ia5, las negras pierden un peón. 26. i,e2!, ... El quid de esta jugada se verá más tarde. 26 . ... , tL'lb8 26 . . . . , tL'lf6 era mala a causa de 27. e5, pero 26 . . . . , d5 era más difícil de refutar. Las blancas deberían jugar 27. cd5, ed5 28. ed5, tL'ld5 29. i,c4, � h 8 30. i,d5, i,d5 31 . .l::r fe1 , y las negras no tienen jugadas razo nables, ya que el caballo tiene que estar pendiente de proteger c5. 27. eS!, ...
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Fuerte, pero también necesaria, ya que de lo contrario el caballo negro llegaría a d4.
PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
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27 . . . . , deS 28. i,cs, �h4 Ahora se ve con claridad el quid de la juga da 26 de las blancas. Después de 2S . . . . , �d2, el alfil de e2 bloquea la senda de la torre hacia g2. 29 . �b4, i,a8 30 . �e1 , . . . La mejor manera de proteger el caballo. 30 . . . . , �d1 Luego de 30 . . . . , ef4 31 . i,fS, l:i.fS 32. lL!h1 , seguido de 33. i,f3, las negras no tie nen suficiente compensación por la calidad. 31 . i,d1 , . . .
Después de esta pasiva jugada, las negras se quedan sin opciones. Era necesaria 35 . . . . , ltJe5, amenazando 36 . . . . , lL!f3. Las blancas deberían replicar entonces 36. ltJc5, lL!f3 37. i,f3, y la situación sigue bajo control tanto después de 37 . . . . , ef3 3S. i,c7, fg2 39. �e1 como de 37 . . . . , �f4 3S. i,e4, y las blancas tienen un peón más. 36 . i,g4!, . . .
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31 . . . . , l:i.f4 Esta captura indica que las negras con sienten en aceptar la dislocación perma nente de su estructura de peones. No había alternativa, sin embargo, ya que después de 31 . . . . , ef4 32. i,fS, i,d4 33. � h2 , fg3 34. �g3, el alfil de fS se encuentra de repente sin protección. 32. � h2, . . . Las blancas tienen la intención de capturar en f1 con la dama. Sin embargo, 32. i, b6 pro bablemente era más exacta, planeando con testar a 32. . .. , liJeS 33. .l:t f4. Las negras tampoco tienen compensación suficiente por su dislocada estructura de peones después de 32 . . . . , ld f1 33. �f1 , liJeS 34. i,e3. 32 . . . . , liJd7 33 . i,e3, �f1 34. �f1 , e4 Ahora las negras tienen algo de contra juego porque a 35. �f4 puede contestarse 35 . . . . , �dS, seguida de 36 . . . . , i,e5, y tie nen sus oportunidades. 3S . i, t4, liJe S
Esto obliga al otro caballo a ocupar asimis mo un puesto defensivo. La lucha de las pie-· zas menores continúa. 36 . . . . , lL!f8 37 . liJeS, . . . Está claro que las blancas se han hecho con la iniciativa. Las negras no pueden eludir la pérdida de un peón. 37 . . . . , ltJf6 38 . i,e6, � h8 39 . i,c8, . . . Excelente posición para el alfil, mantenien do g4 bajo control. 39 . . . . , h6 40 . i, d6, . . . Ahora las blancas amenazan cambiar las damas con 41 . �f4. 40 . . . . , liJ6h7 41 . �f7. ... Esta penetración es decisiva. 41 . . . . , �d8 42 . i,e6, liJe S 43. lL!e6, . . . Las negras abandonaron. Después de 43 . . . . , �gS 44. �g6, ya no tienen espe ranza alguna.
18.
Krunoslav Hulak
Timman-Hulak Zagreb-Rijeka, 1985, ronda 14
Defensa N i mzoindia
1 . d4, tLl f6 2. c4, e6 3. tt:J c3, .i,b4 4 . .i,gS, h6 S . .i, h4, es 6 . dS, .i,c3 7 . bc3, d6 8. e3, es 9. f3, ... Empecé a hacer esta jugada diez años antes y, aunque me convencí gradualmente de que esta variante no da ventaja a las blan cas, la uso de vez en cuando, ya que condu ce a posiciones vívidas. 9 . . . . , tLl bd7 1 0 . i,d3, gS 1 1 . i, g3, VJ/je7 1 2 . tt:Je2, Solía jugar aquí 1 2. VJ/ic2 para impedir el avance . . . , e4. Más tarde encontré que c2 no era la casilla ideal para la dama después de todo -a veces el alfil se retira a c2- y dirigí la atención hacia el tipo de juego más abierto que surge después de la próxima jugada de las negras. 1 2 . . . . , e4!? Las negras no necesitan hacer esto, pero, como muestra Hulak, ciertamente no tiene nada de malo. 1 3 . i, e4, Ante todo, las blancas deben desembara zarse de su alfil malo. 13 . . . . , tLle4 1 4 . f e4, ltJf6! Esto es mucho más fuerte que 1 4 . . . . , tt:Je5, que me jugó Kudrin en Wijk aan Zee (1 985). 1 S . es, deS 1 6 . tt:Jc1 , . . . Infrecuente jugada. Las blancas quieren trasladar el caballo a una casilla mejor, pero esto requiere tiempo, y mientras tanto las negras pueden llevar su caballo a d6. Era más sencilla 1 6. VJij d3 para mantener al caballo y el alfil de las negras fuera de e4 y f5 respectiva mente, pero luego de 1 6 . . . . , e4 1 7. VJ/id2, i,f5 o 1 7 . . . . , i,g4, las negras tienen pocos problemas. La posición está más o menos nivelada. 16 . . . . , tLle4 1 7 . VJ/if3, . . .
Nl 25.1 .1
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1 7 . . . . , tt:J g3? Esto es ilógico. Las negras ceden su exce lente caballo por un alfil bastante débil. Las alternativas eran: a) 1 7 . . . . , f5 1 8. VJ/jh5 (no 1 8. tLld3, tt:Jg3 1 9. VJ/ig3, f4 20. VJ/if2, i,f5, y las negras tie nen un juego excelente) 1 8 . . . . , �f8 1 9. VJ/ig6!, seguido de 20. 0-0, y las negras tienen algunos problemas. b) 1 7 . . . . , tLld6! Ahora 1 8. tLld3 está fuera de lugar a causa de 1 8 . . . . , tt:Jc4 1 9. VJ/je4, b5 (se amenaza 20 . . . . , f5) 20. d6, i,b7 (no 20. . . . , VJ/ib7? 21 . d7! , y las blancas ganan mate rial), y después de 21 . VJ/jc4, bc4, el caballo de d3 está colgando. Así pues, es necesaria la modesta 1 8. VJ/ie2, seguida de 1 9. tLlb3 y 20. tLld2 para mantener los puntos c4 y e4 sufi cientemente protegidos. También aquí hay más o menos igualdad de oportunidades. Las blancas pueden intentar ejercer presión por las columnas semiabiertas, mientras que las negras pueden intentar avanzar el peón «h». 18. VJ/ig3, fS Las negras siguen jugando con energía. 1 8 . . . . , i,f5 era más segura, con objeto de poner el alfil en g6. Después de 1 9. VJ/if3, i,g6 20. e4, las blancas tienen una ventaja modesta, pero sólida. 1 9 . o-o, ...
PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
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Enrocándose antes de poner el caballo en juego. 1 9. t¿jd3 directa era menos fuerte a causa de 1 9. ... , f4; véase también la variante «a» del comentario a la jugada 1 7 de las negras. 1 9 . ... , e4 Aguda tentativa de mantener al caballo blanco alejado de sus mejores casillas, pero, como mostrará la partida, esta estrategia no sirve. 1 9. ... , 0-0 era asimismo insatisfactoria a causa de 20. t¿jd3, �e8 21 . .idf2, seguido de 22. .a; af1 , y las blancas prepararán a placer un destructivo sacrificio de calidad en f5. 20. a4!, ... Ahora se amenaza 21 . t¿jb3, b6 22. a5, con contundente iniciativa. 20. t¿jb3 era peor en vista de 20. .. . , b6 21 . a4, a5, y las blancas no han obtenido nada. 20 . ... , as 21 . ,l:.b1 , Esto amenaza 22. �b6, con presión para lizadora. 21 . ... , I:í,a6 •..
B
t¿jb3. Las blancas recolectan el peón «C» con la dama y la ponen en la casilla ideal d4. 2S . ... , �f7 26. 'iVcS, 'iVd6 La mejor posibilidad de las negras, a la espera de 27. 'iVd6, ld d6 28. �f5, �g6 29. �e5, �b8 30. 'Lle2, nf6, y de repen te tendrían abundante contrajuego. 26. ... , 'iVb6 no era suficiente a causa de 27. 'iVb6, U b6 28. c5, l:i. b1 29. t¿je2, y no hay mane ra de parar los peones blancos. 27. 'iVd4, .l:1c8 28. t¿jb3, Ahora las blancas amenazan avanzar el peón «C» de manera destructiva. 28 . ... , 'iVa3 29. t¿jd2, 29. t¿ja5 también era buena, pero no me gustaba la idea de que las negras pudieran destruir el frente de peones blanco después de 29. ... , 'iVa4 30. t¿jc6 con 30. ... , ld cc6 31 . dc6, 'iVc6. Durante los análisis post mórtem, Hulak demostró la variante siguiente para mostrar que las blancas deben ganar: 32. c5, f4 33. !:!. b1 ' fe3 34. nb2, e2 35. 'iVf6!, y las blancas ganan el final de peones. 29 . ... , 'iVcS •••
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B
En apariencia la única jugada, pero ahora viene un duro golpe. 22. l:r b7!, ... Este sacrificio de calidad hace pedazos el bastión de las negras. A 22 . ... , 'iVb7 se con testa 23. 'iVe5, así que no hay elección. 22 . ... , j,b7 23. 'iVb8, 'iVd8 24. 'iVb7, g f6 Mediante esta defensa, las negras pueden eludir una catástrofe directa, pero ahora las blancas van por el peón «C». 2S. 'iVbS, Este jaque es mucho más fuerte que 25. •••
Las negras también habrían estado iner mes ante los peones blancos luego de 29. ... , 'iVe7 30. �b1 , seguida de 31 . .Ub5. 30. 'iVf6!, Mediante esta treta, las blancas entran en un final de torres que se gana fácilmente. 30 . ... , �f6 31 . l2Je4, �es 32. tt:Jcs, .l;IcS 33. �d1 , I;tc4 34. d6, .l::i.c8 3S. d7, �d8 36. � f2, �e6 37. �e2, ... Las negras abandonaron. •••
19.
Oleg Romanishin
Romanishin-Timman Taxco, 1985 Torneo Interzonal
Defensa India de Dama
1 . d4, ttJ f6 2. c4, e6 3. ttJ f3, b6 4. g3, i,a6 5. t2Jbd2, i, b4 6. 'lj'c2, i,b7 7. i,g2, i,e4 Una conocida maniobra. Las negras incre mentan su influencia en el centro antes de ceder uno de los alfiles. 8. '!j'b3, i,d2 9. i,d2, 0 -0 1 0. 0 -0, d6 1 1 . '!j'a3, ... Curiosa jugada. Las blancas animan a que se adelante el peón cea•• negro a fin de refor zar el avance de su peón «C•• a c5 cuando lle gue el momento. 11 . ... , t2Jbd7 1 2. ld ac1 , '!j'e7 1 3. ,ldfd1 , 1::i,fe8 Esto protege la dama, lo que a veces puede ser importante. Las negras se han abstenido de avanzar el peón cea•• durante tres jugadas, prin cipalmente porque puede que sean ellas las que deseen jugar ... , c5 y, por tanto, quieren mantener flexible su formación de peones. Romanishin percibe que ha llegado el momen to de tomar la iniciativa en el flanco de dama. 1 4. b4, e5 La acción correcta. Sin el avance b4, a ... , e5 se respondería d5, después de lo cual las negras tendrían problemas de espacio. Ahora 1 5. d5 no es tan buena a causa de 1 5. ... , b5! 1 6. cb5, t2Jb6, y las negras controlan la posi ción. Por tanto, las blancas se deciden por otro avance. 1 5. c5!, ... Ahora las blancas obtienen ligera ventaja. 1 5 . ... , dc5 La mejor reacción. Las blancas obtendrían clara ventaja posicional después de 1 5. ed4 1 6. cd6, cd6 1 7. i,f4. 1 6. dc5, bc5 1 7. bc5, h6 Jugada útil en casi todos los sentidos. Las piezas menores del bando blanco no pueden usar ahora g5.
Ql 1 4.3
1 8. i,a5?, ... Romanishin pasa por alto la amenaza posi cional de las negras. 1 8. i. c3 era mejor a fin de mantener la posición enemiga bajo presión. Después de eso, la mejor defensa de las negras era jugar 1 8. ... , i,d5, seguida de 1 9. ... , c6.
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1 8 . ... , t2Jb8! El caballo se dirige a su casilla ideal, c6. 1 9. i,c3, tt:J c6 20. 'iVa4, '!j'e6 El propósito de la jugada 1 7 de las negras queda patente: el caballo blanco no puede entrar ni atacar por g5. Las negras ya están un poco mejor. 21 . h3, ... Preludio de una extraña acción, pero falta ba un plan bueno. 21 . ... , ,ldad8 22. i,a1 , i,d5 23. e3, .l::í,d 7 24. g4, ... Obviamente con la intención de seguir avanzando ese peón. 24. ... , ,ided8 Ahora 25. g5 no haría sino debilitar la posi ción del primer jugador porque tras 25. ... , tt:Je4, las blancas tendrían problemas irreso lubles después de, p. ej., 26. gh6, '!j'g6! 25. :te1 , U b8 25. ... , l2Je4 era la alternativa, aprovechan do el hecho de que las blancas perderían la
PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
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calidad después de 26. ébe5, ébe5 27. i,e4, i,e4 28. �e4, ébd3. Sin embargo, luego de 26 . .l::!.c 2!, la situación es menos clara. Entonces, la maniobra de cambio estratégica 26 . ... , éLJg5 no sirve a causa de 27. tt:Jg5, hg5 28. e4, y las blancas ganan material. 26. i, c3, 1:( dd8 De nuevo había inconvenientes tácticos en relación con 26 . . . . , ébe4, esta vez debido a 27. i,e5. Puede intentarse 27 . . . . , ébf2, pero durante la partida no me gustaba la res puesta 28. e4!
Las negras no pueden quitar la torre de d5, y las blancas tienen la oportunidad de acercar el rey al centro, lo que es útil de cara al final que se avecina. 32 . ... , �d7 32 . . . . , ébe7 33. i,d5, ébd5 era la alternativa, de modo que a 34. c6 podía responderse 34. . . . , e4. Sería mejor para las blancas conti nuar con 34. e4, ébf4 35. �e6, ébe6 36. c6, y su alfil no sería lo malo que es más tarde en la partida.
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(análisis) Descubrimos durante los análisis post mórtem que esta complicada situación acaba ría en tablas forzadas después de 28 . . . . , ébe5 29. ébe5, �e5 30. ed5, �g3 31 . �d7, ébh3 32. �h1 , ébf2. La jugada del texto allana el camino a . . . , ébe4. 27. l:i.ed1 , ébe4 Por fin. A las negras no tiene por qué preo cuparles 28. .l:l d5, ya que las blancas esta rían acabadas luego de 28 . . . . , �d5 29. i,e1 , ébc5 30. �c2, ébd3. 28. i,e1 , éLJgS Esto fuerza el cambio de los alfiles, des pués de lo cual a las blancas no les queda más que el alfil malo. 29. éLJgS, hg5 30. .ti.d5, ... Las blancas ganan algo de tiempo para organizar las defensas al tomar primero con la torre. 30. ... , .UdS 31 . �c4, �bd8 32. �f1 , ...
33. i,dS, ... Romanishin ya tenía graves apuros de tiem po y decidió capturar la torre antes de que fuera demasiado tarde. Después de la partida, mostró que 33. i, e4! es más fuerte. La idea es que las blancas recuperan la calidad en circunstancias más favorables luego de 33 . ... , ll d3 34. �b5, ébe7 35. c6. Por tanto, las negras tienen que jugar 33 . ... , g6, seguida de 34. ... , f5, tras de lo cual las blancas tienen mejores perspectivas defensivas que en la partida. 33 . ..., �d5 34. �d5, �d5 35. �e2, ...
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JAN TI M MAN:
MI AJEDREZ AUDAZ
Se ha impedido que entre la torre negra, pero la posición de las blancas sigue siendo extremadamente incómoda debido al alfil malo y los peones «C» y «h» débiles. 35 . ... , f6 36 . .tlc4, �f7 37. j,c3, �e6 38. e4, U d8 39. l::ta4, ... La mejor posibilidad. La pérdida del peón «h» era inevitable, así que las blancas deci· den cederlo aquí a fin de crear contrajuego en el flanco de dama. 39 . ... , l::i, h8 40. �d3, .l::th3 41 . �c4, �h1 42. U a3, ,Uf1 La jugada secreta. Me di cuenta durante el aplazamiento de dos horas de que la victoria no era sencilla en modo alguno. La superiori dad de las negras en el flanco de rey no puede realizarse todavía; las blancas pueden impedir que la torre enemiga tome los peones situan do el rey en b5 y la torre en a6. Al final, encon tré un plan para ganar bastante largo y pesado, pero eficaz al fin y al cabo. 43. I;1a6, �d7 44. � b5, l:;tb1 45. �c4, �c1 Zugzwang. Las blancas deben retirarse con el rey. No harían sino privar a la torre de casillas de retirada si avanzaran el peón «a» y quedarían en Zugzwang de todos modos; p. ej.: 46. a3, �f1 47. � b5, 1:( b1 48. �c4, l:!,c1 , etc. 46. �d3, .idf1 Las blancas tienen que proteger ahora el peón «f». 47. �e3, 1::!. g1 ! Es importante forzar f3, como se verá más tarde. 48. f3, 1d b1 49. �d3, .U. b7 50. �c4, CL:lb8!
73
B
El objetivo de las maniobras efectuadas con la torre. Las negras retiran el caballo por segunda vez en la partida, esta vez para poner el rey en c6. De la misma manera que c6 era ideal para el caballo en el medio juego, lo es para el rey en el final. 51 . 1:!,a3, �c6 52. j, b4, a6 53. �d3, .. Ahora se ve con claridad la importancia de forzar f3. La torre blanca podía haber entrado vía h3 si el peón siguiera en f2. 53 , CL:ld7 El rey y el caballo han intercambiado los puestos. 54. ld a3, La maniobra CL:ld7-f8-g6-h4 no puede impedirse jugando 54. .!::!. d 1 ' .idb8 55. nh 1 ' I:t g8!, así que las blancas deciden mantener el peón «a» en el punto de mira. 54 , l::ta7 55. j,e1 , l::í.a8 56. j, t2, CL:lf8 Otra razón por la que era útil obligar al peón de f2 a ir a f3: el caballo va a atacarlo desde h4. 57. l::í.a5, ct:Jg6 58. Jda3, aS 59. j,e3, ... .
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PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
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Aquí, la partida se aplazó por segunda vez. Los análisis mostraron que las dificulta des técnicas ya no son tantas. 59. ..., ttJ h4 60. i. d2, ... 60. i.f2 era la alternativa, después de la cual tenía en la manga el siguiente plan de vic toria: 60 . . . . , a4 61 . i,g1 , .l::!.d 8 62. l:t.a4, t¿jf3 63. i_e3 (o 63. i,f2, l:ld2 64. i_e3, .llc 2, y las negras ganan con facilidad) 63 . . . . , t¿jd2 64. wc3 (o 64. i,d2, n d4!), 4Jf1 65. i,g1 , ld d2!
B
(análisis) Las blancas se ven obligadas a ceder su inútil alfil a no ser que deseen caer en 66. 1:i a6, Wb5 67 . .1:! e6, llg2 68. a4, wa4 69. Wc4, t¿jd2, y las negras ganan .
60 . ... , l::i.d8 61 . i,c3, t¿jf3 62. nas, 4Jd2 63. i.d2, nd2 64. ld a6, Wb7 65. �a4, ... La última posibilidad de las blancas. Después de 65. l:;I e6, �a2 66. ld e7, Wc6 67. n g7, tí.d2, perderían sin lucha. 65. ... , l:t d1 ! Cambiar las torres no daría por resultado más que tablas. La textual vuelve a dejar en Zugzwang a las blancas. Luego de 66. Wb5, las negras pueden jugar 66 . . . . , nc1 y, tras 67. l:t c4, c6 68. Wb4, .l:::!. g 1 , capturan el peón decisivo. 66. a3, �d2 67. wc3, llg2 68. wc4, .i:íd2 69. wc3, l:le2! El plan correcto, después de repetir juga das una vez. El rey blanco ya no puede ir a c4, y a 70. Wd3 se respondería 70 . . . . , ld e1 y 71 . . . . , Wc6. 70. �c4, Wc6 71 . a4, l:i.g2 72. aS, It g3 Este curso es el más exacto. 73. Wb4, .l::í. g4 74. a6, .tr g1 . Y las blancas abandonaron.
1 . e4, e5 2. éLl f3, éLl c6 3. d4, ed4 4. éLl d4, éLlf6 Como en Londres en el año anterior, el campeón del mundo no se mete en 4 . . . . , i,c5. 5. tL'lc6, bc6 6. e5, VJ/ie7 7. VJ/ie2, éLld5 8. c4, i,a6 9. VJ/ie4, éLlf6 En Londres, Kárpov jugó de inmediato 9 . . . . , éL'lb6, que conduce a la partida a través de otro orden de jugadas. 1 0. VJ/ie2, éLld5 1 1 . éL'ld2, ...
so 4.4.8
metió en problemas después de 1 4. a5, tL'lc8 1 5. b4! 1 4. cd5, i,f1 1 5. d6, ...
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Ahora que ya he tenido dos veces esta posición en el tablero, comienzo a darme cuenta de que lo más que pueden alcanzar las blancas es la repetición de jugadas. Las blan cas solamente pueden jactarse de tener la estructura de peones un tanto mejor, pero es más importante que las negras puedan orga nizar una movilización de las tropas con más fluidez que el adversario. 1 1 . ..., o-o-o 1 2. VJ/ie4, éL'lb6 1 3. a4, ... Handoko jugó de la misma manera contra Kovacevié en Zagreb-Rijeka, 1 985. Yo tuve una mala experiencia con 1 3. c5 contra el campeón del mundo en la partida mencionada antes. 1 3 . ... , d5! Desde luego, esta jugada es la reacción correcta. Kovacevié jugó 1 3 . . . . , � b7 y se
Las negras tomarían la iniciativa sin esta jugada intermedia. 1 5 . ... , �d6 También puede jugarse 1 5 . . . . , cd6 sin demasiados reparos, puesto que las blancas no obtienen nada luego de la larga variante 1 6. VJ/ic6, VJ/ic7 1 7. VJ/ic7, �c7 1 8. ed6, i,d6 1 9. �f1 ' i, b4 20. éL'lf3, b:i. d1 21 . �e2, nh1 22. i,f4, � b7 23. i:lh1 , .l::!,e8 24. i,e3, tL'la4. 1 6. éL'lf1 ' ... Difícil elección. 1 6. �f1 no era tan buena porque después de 1 6 . . . . , ,U.d5 las blancas no pueden continuar con 1 7. éL'lf3 debido a 1 7 . . . . , .Ud1 . 1 6. I:i. f1 también tiene sus problemas debido a 1 6 . . . . , jld5, dificul tando más que el rey pueda trasladarse a un lugar seguro. El juego podría continuar con 1 7. éL'lf3, éL'ld7 1 8. i,f4, tL'lc5 1 9. VJ/ic4, VJ/i e6 20. �e2, g5! 21 . i,g5, 1d g8, y las blancas tienen graves problemas. 1 6 . ... , l.:!.e6! Kárpov pensó durante mucho tiempo esta oscura jugada de torre. En combinación con la jugada siguiente, es una solución sublime al
PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
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problema de la posición. Las blancas habrían obtenido buena partida después de otras juga das; por ejemplo: a) 1 6 . . . . , f6 1 7. lbe3!, �es 1 S. �c2, seguido de 1 9. 0-0, y las blancas obtienen buenas posibilidades debido a la debilitada posición del rey negro. b) 1 6 . . . . , � dS 1 7. f4, �d7 1 S. j_e3, y ahora 1 S . . . . , aS es lo mejor porque después de 1 S . . . . , fS 1 9. ef6, gf6 20. aS! , fS 21 . �c2, j_b4 22. <;t>f2, el caballo tiene que volver a aS. Luego de 22 . . . . , j_as 23. ld aS, .l::taS 24. �c3 o 22 . . . . , .idaS 23. l:í. aS, j_as 24. b4! , j_b4 2S. �b2, las negras pierden material. 1 7. f4, g5!
Esto conduce finalmente a la pérdida de un peón, pero durante los análisis post mór tem Kárpov señaló con tino que las conse cuencias de 20. <;t>f2, f6! habrían sido todavía más desagradables para las blancas; por ejemplo: 21 . fgS, fgS 22. i.,gs, I:r eS 23. j_t4, .ld fS, con abrumadora iniciativa negra. 20. ... , j_d2 21 . lbd2, gf4 22. gf4, lbd5 23. o-o, .ld g8 24. <;t>h1 ' u g4
8
8
El método hecho a medida para abrir la posición. 1 8. g3, .. . Difícilmente puede ser esto una decisión agradable, pero ¿qué más había? Después de 1 S. lbg3, gf4 1 9. j_f4, �b4 20. �b4, j_b4 21 . <;t>f2, lbdS 22. <;t>f3, lbf4 23. <;t>f4, ll heS, la posición de las blancas sería prác ticamente desesperada, y 1 S. lbd2, gf4 1 9. 0-0, �eS 20. <;t>h 1 , �es tampoco da posibi lidades suficientes a las blancas. 1 8. ..., �b4 El cambio de las damas es el método más seguro para mantener la ventaja posicional. 1 9. �b4, ... 1 9. lbd2 era mala debido a 1 9 . . . . , gf4 20. gf4, .l:l gS, y el rey blanco permanece cau tivo en el centro. 1 9 . ... , j_b4 20. i.,d2, ...
Así, el segundo jugador gana el peón ccf» . Sin embargo, al no tener las negras más que peones aislados, las blancas no carecen de posibilidades. 25. lbb3?, ... Después de esto y de la próxima jugada de las blancas, la posición debería perderse. La idea de maniobrar con el caballo hasta eS es demasiado optimista. Era correcta 2S. lbc4, dejando a las negras las posibilidades siguientes: a) 2S . . . . , lbt4 26. lbe3, .idh4 27. lbfS, haciendo tablas por repetición de jugadas. b) 2S . . . . , ll f4 26. � f4, lbf4 27. :1 f1 ' lbd3 y ahora 2S. � f7 o 2S. l:lfS es suficien te para mantener el equilibrio. e) 2S . . . . , f6! La única manera de jugar a ganar. Después de 26. fS, .ideS 27. b3, fe5 2S. f6, e4 29. f7, l:t fS 30. lbe5, 1I gS 31 . lbc6, <;t>d7, las negras tienen mejores perspectivas, aunque no creo que se haya sobrepasado el margen de las tablas. 25 lbf4 26. nae1 ' ... Mi intención original era 26. .idad1 , pero descubrí que luego de 26 . . . . , ld e5 27 . .idd4, •
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�f5 las blancas no pueden explotar la doble clavada. Sin embargo, eso seguía siendo pre ferible a la textual porque ahora las negras ganan por fuerza.
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32. U f7, l:Ig1 33. �g1 , ct:Jb4 34 .ldh7, •
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26. ... , ¡¡eg6 Un alivio. Durante la partida, había visto que después de 26 . . . . , .ldh6! no hay defensa contra la amenaza 27 . . . . , 1::[ g2. Luego de 27. �g1 , !'! gh4, cae el peón de h2, y 27 . .l:I f2, ctJd3 pierde la calidad. Sin embargo, las blan cas también están perdidas después de la tex tual. La amenaza es 27 . . . . , ctJh3, seguida de 28 . . . . , 1::!. g1 y mate. 27. .ti,f3, h5 Incrementando tranquilamente la presión. Las negras planean avanzar el peón «h» hasta h3. 28. ctJd4, ctJd5 Evitando, con buen criterio, 28 . . . . , h4 debi do a 29. ltJf5, amenazando tanto 30. ct:Je7 como 30. ct:Je3. 29. Il d1 ' l:d e4! Fuerte. Ahora 30. Il f7 fracasa por 30 . . . . , ct:Je3. 30. ct:Jb3, J::( e2 31 . :1 g1 , l:! e5 Durante los análisis post mórtem, Kárpov sugirió 31 . . . . , ld g1 32. �g1 , .l:;1 b2 como una manera más sencilla de ganar. Sin embargo, después de 33. ct:Jc5, l:tc2 34. e6, f6 35. ct:Je4, .l:t e2 36. ltJf6, ganar es menos fácil que en la partida. Luego de 36 . . . . , l:te6 37. ltJh5 o 36 . . . . , h4 37. ct:Jd7 ! , l::!.e 6 38. ct:Jc5, el primer jugador conserva algunas posibilidades.
34 . ... , ctJd3 Aquí, Kárpov iba bastante escaso de tiem po: le quedaban unos dos minutos para el resto de las jugadas, y empezó a jugar la fase técnica de manera inexacta, algo raro en él. Era correcta 34 . . . . , � b7, que garantiza la vic toria sin complicaciones a causa de la mayo ría de peones en el flanco de dama. 35. ltJd4, � b7 36. b3, a5 De nuevo inexacto; las negras pueden preparar el avance del peón «C» mediante 36. . . . , a6, evitando la incursión del caballo a b5. 37. b!h6, ltJb4 38. �f2, 1:te4 La tercera inexactitud, después de la cual la ventaja de las negras se derrite como la nieve bajo el sol. Debería haberse jugado 38 . . . . , c5, y después de 39. ct:Jb5, c4! 40. bc4, c6 41 . ltJd6, � b6 las negras todavía tienen posibilidades de ganar a causa de la debilidad de los peones blancos del flanco de dama. 39. ct:Je&, �b6 40. �f3, Il e1 41 . h4!, ...
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PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
La última jugada antes del aplazamiento. La mayoría de los expertos que estaban en la sala de juego pensó que yo ten ía buenas posibilidades de hacer tablas. Consideré que había más o menos igualdad de oportu nidades, evaluación que confirmaron los análisis del aplazamiento. El peón « h » de las negras está a punto de caer, y deben encontrar una manera de capturar rápida mente el peón « b » , puesto que de lo contra rio el peón pasado de las blancas será demasiado peligroso. 41 . ... , lt:Jd5 La jugada secreta. Yo había tenido en cuenta también 41 . ... , .l::i. b 1 . Las blancas replican 42. lt:Jd4, y luego de 42 . . . . , �c5 43. lt:Je6 lo mejor para las negras es retroce der con el rey y repetir jugadas. 42. lt:Jd4, �e3 Ante 42 . . . . , .1:1 f1 , las blancas pueden jugar 43. �g3, lt:Jf6 44. �g2, 1:l f4 45. lt:Je2, seguido de 46. lt:Jg3, y la posición está en equilibrio. 43. �f2. 1l c3 44. .rt. h5, nd3 Las negras podían haber ganado un tiem po mediante 44 . . . . , �c5. Quizás no quisieron bloquear la senda del peón «C» , pero el curso de la partida deja claro que deberían evitar avanzar este peón. 45 . lt:Jf3, ... El primer paso hacia la salvación. Debido a esta ganancia de tiempo, las blancas han conseguido defender temporalmente sus dos peones del flanco de dama. 45 . ... , llb3 46. 1l f5, ... La mejor casilla para la torre. Se mantiene alejado al caballo negro, y el peón «h>> tiene vía libre. 46 . ... , Idb4
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46 . . . . , �c5 47. h5, �b8 era más sencillo y conducía velozmente a las tablas. 47. h5, �c5 Después de pensar durante mucho tiem po, Kárpov decide no capturar el peón «a» y opta por una variante que podía haber obteni do ¡con dos tiempos más! -véanse los comen tarios a las jugadas 44 y 46 de las negras-. Quizás era posible 47 . . . . , l::!.a4, aunque entonces las negras deben estar preparadas para sacrificar la torre por el peón « h » ; p. ej. : 48. h6, li e4 49. b:i. f8! (probablemente n o vio esta jugada al decidirse por su jugada 46) 49 . . . . , ld e7 50. lt:Jg5, a4 51 . h7, llh7 52. lt:Jh7, � b5, y gracias a la posición del caballo blan co, fuera de juego, las negras pueden hacer tablas justo a tiempo. 48. h6, .idb8 49. .ld h5, ... 49. h7, .l::i. h8 50 . .l:l f7 habría ofrecido algu nas posibilidades más, pero la posición no se gana después de 50 . . . . , � b4 51 . lt:Je5, lt:Jf6 52. .Uf6, .ld h7 53. .U. f4, �a3 54. lt:Jc6, U h2. El peón «a» blanco es demasiado débil para que haya verdaderas posibilida des de ganar. 49 . ... , l::t h 8 50. h7, � b4 51 . �h6, ... Las blancas amenazan ahora 52. lt:Jg5, ganando la torre, pero las negras no dejan que las cosas vayan tan lejos. 51 . ... , lLJ f6 52 . 1::!. f6, .idh7 53 . �f4, � a3 54. �e2, !'! d7 55. lt:Jd2, .l:l d8 Decididamente, no 55 . . . . , c5? 56. lt:Jc4, �a4 57. lt:Jb6 o 56 . . . . , � b4 57. lt:Je5, ld d4 58. lt:Jc6, y ganan. 56. �c4, ld b8 57 . .U. c1 , U b4
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Aquí volvió a aplazarse la partida. La juga da secreta fue 58. �d3. A la mañana siguien te, decidí ofrecer tablas. Hay que admitir que las blancas tendrían pocas dificultades para capturar los peones «C» doblados, y quizás más tarde siguiera el peón «a», pero en un final de torre y caballo contra torre la tarea defensiva es tan fácil que no tendría sentido intentarlo. Korchnói siguió durante cuarenta
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jugadas más contra Hübner en Merano (1 980), pero eso fue en un encuentro, y a veces no hace daño darle la lata al adversa rio sin necesidad. Fischer no hizo sino diez jugadas más contra Gheorghiu en Vinkovci (1 968), y es probable que solamente porque Gheorghiu, como era de esperar, había ofre cido tablas de manera prematura.
1 . d4, CiJf6 2. CiJf3, b6 3. � g5, ltJe4 Dudosa incursión que permite a las blan cas desarrollarse con mucha fluidez. 4. �h4, g6 5. CiJbd2, CiJd2 Sunye rechazó 5 . . . . , �b7 en vista de 6. CiJe4, �e4 7. d5, y parece que el alfil de e4 tiene dificultades. Esto tal vez no sea tan malo después de 7 . . . . , �g7; p. ej. : 8. CiJg5, e6! 9. ltJe6, �h4 1 0. CiJg7, �f8 1 1 . �d4, .1:1 g8, con un desequilibrio que no es desven tajoso para las negras. En vez de 7. d5, las blancas pueden obtener ventaja en la apertu ra sencillamente con 7. e3, �g7 8. �d3. Después de la textual, las negras tienen más problemas. 6. �d2, � b7 7. ()-()-()!, La manera más rápida de movilizar las tropas. 7 . ... , .tg7 8. e4, . .. Otro quid de la jugada anterior. No es bueno capturar el peón «e»; por ejemplo: 8 . . . . , �e4 9 . .ile1 , d5 1 0. �d3, f5 1 1 . ltJg5, �h6 1 2. �f1 !, y la amenaza 1 3. f3 no puede pararse de manera satisfactoria. 8 . ... , o-o 9. e5, ... La influencia del primer jugador en el cen tro es tal que probablemente pueda conside rarse que el bando blanco tiene ganada esta posición . 9 . ... , c5 9 . . . . , d6 era la jugada más obvia, después de la cual las blancas pueden continuar con la fuerte línea 1 0. e6, fe6 1 1 . CiJg5, �d7 1 2 . .!:. e1 , �h6 1 3. f4 y tienen abrumadora com pensación por el peón. En vez de sacrificar el peón, 1 0. �e3, incrementando la presión, también es una posibilidad. 1 0. d5, ... Es curioso: las blancas han jugado el Ataque Torre, más bien lento, pero después ..•
QP 6.8.1
de diez jugadas sus dos peones centrales ¡ han cruzado a territorio enemigo! 1 0. ... , f6
Una manera poco atractiva de atacar el centro, pero no había nada mejor. Tras 1 O . . . . , d6 1 1 . ed6, �d6 1 2. �g3, seguido de 1 3. ltJe5, la situación de las negras sería deses perada. 1 1 . e f6, ef6 1 2. �g3, ... Esto prepara el avance del peón « h » . 1 2 . ... , .ta6 Después de pensar durante mucho tiem po, las negras se deciden a aliviar un tanto su tarea defensiva cambiando un par de alfiles. 1 3. h4, ... 1 3. d6 era tentadora, pero luego de 1 3 . . . . , �f1 1 4. �d5, � h8 1 5. �a8, �g2 1 6. llhg1 , �h3, la posición no es del todo clara pese a que las negras han perdido la calidad. 1 3 . ... , .tf1 1 4. l:í.df1 , .l::í,f7 1 5. h5, g5 1 6. h6, �f8 1 7. }de1 , ...
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Grave inexactitud. Era correcta 1 7. d6 a fin de mantener la torre y el alfil de rey enemigos fuera de juego. Aquí, las negras no tienen con trajuego alguno; por ejemplo: 1 7 . . . . , Qjc6 1 8. � h5! y ahora la dama tiene que quedar se en d8 para impedir un sacrificio de caballo en g5 que de lo contrario decidiría la partida. 17 . ... , d S 1 8. !:!.e S, ... Preámbulo de un sacrificio posicional de calidad. Las blancas también podían haber mantenido la ventaja posicional mediante 1 8. 'iYd3, Qjd7 1 9. 'iVf5, pero no estaba seguro de lo significativo que sería esto des pués de 1 9 . . . . , Qje5 20. i,e5, de5, y la posi ción de las negras es sólida, aunque peor. 1 8 . ... , QJas 1 9. 'iYd3, QJc7 20. 'iVfS, ... La consecuencia de la jugada 18 de las blancas. Se sacrifica la calidad a fin de mante ner constreñida la posición negra y obtener un peón pasado avanzado. 20 . ... , i,e7 Dejando sitio en f8 a la torre. Después de 20 . . . . , Qje6 21 . de6, ll c7 22. Qjh2, c4 23. Qjg4, i,e7 24. Qje3, el rey blanco llega a tiempo de bloquear los peones negros. 21 . .l:!. d1 , Qje6 22. de S, .l:::í, f8 23. QJh2, ... El caballo va camino de pastos más ver des. También estudié 23. Qjh4 a fin de jugar el caballo a f5 cuanto antes. Sin embargo, las negras pueden reaccionar con 23 . . . . , � h8 24. 'iYg4, 'iYc8! 25. 1:1, e1 , d5 26. QJf5, 'iYb7, levantando parcialmente el bloqueo y obte niendo las mejores oportunidades. 23 . ... , 'iYe8 24. Qjg4, .Ud8 25. Qje3, 'iY g S 2 S. c4, ...
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Las blancas deciden refrenar el peón «d», puesto que luego de 26. 'iYg6, hg6 27. Qjd5, � feS no pueden hacer nada mejor que tablas repitiendo jugadas con 26. Qjc7. 2 S. ... , 'iVh S 26 . . . . , a6 habría sido mejor continuación, a la que se habría replicado 27. f3, b5 28. i,e1 . Entonces, 28 . . . . , bc4 sería mala en vista de 29. i,a5, y la posición de las negras se estaría deteriorando visiblemente. Deben mantener cerrada la posición con 28 . . . . , b4, dificultando la penetración de las blancas. 27. 'iYdS, La casilla ideal para el caballo es f5. 27 . ... , g4 28. l:i.d2!, ... Una jugada importante. Tanto 28. �c2 como 28. �b1 eran malas debido a 28 . . . . , f5, y las negras usurpan la iniciativa. 28 . ... , f5 Sin esta jugada, las negras no pueden esperar zafarse del control blanco. 29. Qjf5, 1::!. f5 Después de 29 . . . . , 'iYg5, 30. i,h4! es fuerte; por ejemplo: 30. . . . , .Uf5 31 . i,g5, � d5 32. .Ud5, y el final deberían ganarlo las blancas. 30. 'iVfS, 'iYg S 30 . . . . , i,g5 no era suficiente debido a 31 . 'iYg4, seguida de 32. f4. 31 . 'iYg S, hg S 32. ,lde2, ... Ahora el peón de g4 está sentenciado. No obstante, es difícil ganar porque el peón pasa do tan avanzado que tienen las blancas es vulnerable. 32 . ... , �g7 33. g e4, ... •..
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PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
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33 . ... , �f6 33. . . . , .llh8 era la alternativa, activando la torre. En ese caso, las blancas mantienen la ventaja mediante 34. ng4, 1:!. h 1 35. �d2 (no 35. �c2, .l::!. e1 ), .U. b1 36. b3, l:!. b2 37. �d3, .Ua2 38. �f4, i.,f6 y, después de esta serie de jugadas forzadas, continúan sutil mente con 39. R f3! El peón «d•• está ataca do, y a 39 . . . . , .l:i.a5 o 39 . . . . , l:i.b2 puede contestarse 40. �e4. 34. .l:r. g4, g5 35. .id e4, d5 36. cd5, l:[d5 37. f3, � f5 Una inexactitud en los apuros de tiempo. 37 . . . . , b5 habría ofrecido mejores posibilida des de hacer tablas, al poner en movimiento la mayoría de peones del flanco de dama cuan to antes. 38. i.,b8, a6 39. g4, .. . Obligando al rey a retroceder. 39 . ... , �f6 40. �c2, ... Esto priva a la torre negra de la casilla d3. 40. ... , b5 41 . b3, i.,d8 Esta jugada, efectuada justo antes del aplazamiento, posibilita que las blancas ganen por fuerza. Después de 41 . . . . , 1;ld8 42. i.,e5, �g6, seguido de 43 . . . . , ld c8 y 44 . . . . , _ldc6, su tarea técnica habría sido mucho más difícil. 42. i.,c7!, ... Exacta réplica. 42. i.,g3 era menos con vincente debido a 42 . . . . , �e7, y a 43. f4 se contestaría 43 . . . . , i.,c7, puesto que 44. f5?, i.,g3 45. f6, �ea no conduce a nada tangi ble.
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42 . ... , i.,e7 La jugada secreta. Todos los finales de torre los ganarían las blancas con facilidad. 43. i.,g3, �g6 Forzada porque las blancas amenazaban 44. f4. 44. i.,c7, �f6 45. a4!, ... Esto pone a las negras en Zugzwang su torre no tiene jugadas. 45 . ... , �g6 Es importante señalar que con 45 . . . . , c4 46. bc4, .)lc5 47. i.,a5!, l:Ic4 48. i.,c3, �g6 49. l:[c4, bc4 50. i.,e5, i.,b4 51 . i.,d4 las negras están en Zugzwang; p. ej. : 51 . . . . , i.,a5 52. e7, �f7 53. i.,f6, y ganan. 46 . .ld eS, ... Esto no debería ir precedido de 46. ab5, ab5 47. 1:!. e5 porque luego de 47 . . . . , �e5 48. i.,e5, i.,f6! 49. i.,d6, c4 50. bc4, bc4 51 . i.,b4, i.,e5 52. i.,e7 (las blancas amenazan 53. i.,d8, e4 54. e7) 52 . . . . , i.,f6! no se gana. 46 . ... , _idd4 El final de alfiles que se produce tras 46. . . . , .U. e5 47. i.,e5 se habría ganado; por ejemplo: a) 47 . . . . , i.,f6 48. i.,d6, c4 49. bc4, bc4 50. i.,b4, i.,e5 51 . i.,e7, i.,f6 52. i.,f6, �f6 52. �c3, �e6 54. �c4, y el final de peones se gana con facilidad. b) 47 . . . . , c4 48. bc4, ba4 49. i.,d4 (decidi damente, no 49. �c3? , i.,f6! , haciendo tablas) 49 . . . . , i.,f6 50. i.,e3, i.,e7 51 . c5! , �f6 52. i.,g5!, �g5 53. c6, y ganan. 47. ab5, ab5 48. i.,b6, 1::td6 Las negras podían haber tendido una cela da jugando 48. ... , �f4 49. i.,c5, �f6. Después de 50. Idf5, .ti.f5 51 . i.,e7, �e6 52. gf5, �e7 53. �d3, �f6 54. �e4, b4, el final de peones es tablas, pero las blancas pueden ganar con 50. i.,e7, �e5 51 . i.,g5, seguido de 52. e7. 49. i.,cs, 1::1 c6 so. b4, �f6
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51 . .l:!. e3!, ... Lo más exacto. Las blancas se proponen pasar a un final de peones ganado. Después de 51 . 1::r f5, �e6 52. �d3, i,f6, seguirían lidiando con algunas dificultades técnicas.
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51 . ... , i,cs 52. k!c3, �e6 El quid de la jugada 51 de las blancas era que tras 52 . . . . , �e6 53 . .l:r. c5, l::!. c5 54. bc5, �d5 55. f4, gf4 56. g5, f3 60. �d2, b4 61 . g6, �e6 62. c6 uno de sus peones corona prime ro, y con jaque, además. 53. bc5, b4 O 53 . . . . , �e? 54. � b3, �d7 55. �b4, �c6 56. l:Ia3, seguido de 57. �a6, y ganan. 54. l::t c4, .ld c6 55. � b3, �e6 56. �b4, �d5 57 . .ld c1 , ... Las negras abandonaron.
22.
Rafael Vaganián
Timman-Vaganián Montpellier, 1985 Torneo de Candidatos
Defensa Francesa
FR 1 0.4.5
1 . e4, e6 2. d4, dS 3. l¿jc3, i_ b4 4. eS, eS s. a3, i_as Esta arriesgada jugada la empleaba Botvínnik con regularidad en la década de 1 950. Durante los meses precedentes, Vaganián la había usado más de una vez con éxito; por eso pedí a Hort, mi ayudante, que investigara las mejores réplicas de las blancas. De las profun didades de su memoria recuperó una partida en la que había jugado con negras contra Grefe en Lone Pine hacía varios años. Grefe había elegido un método que a Hort le pareció muy fuerte. 6. b4, cd4 7. �g4, ... La alternativa es 7. l¿j b5, como jugaron Ljubojevié y Short contra Vaganián en Biel este mismo año. Yo mismo jugaba a menudo esta posición con negras cuando tenía unos dieciséis años. Las blancas pueden abrigar esperanzas de tener una ligera ventaja, pero la textual es más aguda. 7 . ... , l¿je7 8. baS, dc3 9. �g7, �gB 1 0. �h7, l¿j bc6 1 1 . f4, �aS 1 2. �b1 , •••
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La jugada de Grefe. La intención es obs truir el desarrollo ulterior del flanco de dama negro. En Grefe-Hort, Lone Pine, 1 979, se siguió con 1 2 . . . . , �c7 1 3. l¿jf3, i_d7 1 4. �d3, d4 1 5. g3! , 0-0-0 1 6. i,g2, l¿jf5 1 7. 0-0,
l¿jce7 1 8. l¿jg5, y las blancas tenían mejores posibilidades. En sus comentarios a la partida en el lnformator 27, Hort afirmaba que la posición después de 1 7 . . . . , l¿ja5 (en vez de 1 7 . . . . , l¿je7) es incierta. Desde entonces, ha abandonado esa valoración, y, verdadera mente, las blancas están mejor después de que la dama negra se retire; han obtenido una versión favorable de la variante 5 . . . . , i,c3 6. bc3, c5 7. �g4, etc., al tener el caballo en f3 en vez de en e2. 1 2 . ... , i_d7 Esta jugada es el planteamiento correcto ante los problemas de las negras. Se sacrifi ca el peón «b>> a fin de obtener la iniciativa. En la Enciclopedia se da 1 2 . . . . , l¿jd4, siguiendo la partida Sorokin-Dmitrijevsky, URSS, 1 960, en la que las negras, luego de 1 3. l¿j h3?, i_d7 1 4. l¿jg5, 0-0-0! 1 5. l¿jf7, l¿jf5 ya disfrutaban de ventaja decisiva. El curso adecuado es 1 3. �d3, con complica ciones parecidas a las de la partida. [En la 4.ª edición de la Enciclopedia (tomo «C>> -C1 8-, 2000) 1 2 . . . . , l¿jd4 se da como línea secunda ria, con la secuencia 1 3. �d3, l¿jef5 1 4. l¿jf3, l¿jf3 1 5. �f3, i,d7 1 6. J:l b7, sin valo rarla. Como línea principal se da 1 2 . . . . , i,d7 1 3. l¿j f3, 0-0-0 1 4. � d3, d4 1 5. g3, l¿j f5, con compensación por el material sacrificado. La jugada de Timman que sigue a continuación, 1 3. ld b 7, aparece como variante secundaria, en la que se cita, precisamente, esta partida con Vaganián. (N. del t.)] 13 . .U. b7, l¿jd4 1 4. �d3, l¿jefS 1 S. l¿jf3, Forzando el cambio del caballo negro. 1 5. l¿je2 habría sido un error a causa de 1 5. . . . , i, b5, y las negras tienen la sartén por el mango. 1S . ... , l¿jf3 1 6. �f3, l:t cB?
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Esto ya es, probablemente, el error decisi vo. Era necesaria 1 6 . . . . , i,c6, jugada obvia, y las blancas continúan con 1 7. .!::!. b4. Las negras conservan compensación por el peón, pero como pasa tantas veces en este tipo de posición, la pregunta es si esta compensación es suficiente. Vaganián eligió la textual por error de cálculo. Pensó que a 1 6 . . . . , i,c6 podía responderse 1 7. .ll b3? y no vio que después de 1 7 . . . . , lL'ld4 1 a. �c3, lL'l b3 la dama negra está protegida y la blanca está clavada, lo que permite a las negras quedar se con una torre neta de ventaja. [La Enciclopedia cita aquí 1 6 . . . . , i,c6 1 7. ld b4, �c5 1 a. �f2, d4 1 9 . .)lg1 , a5 20. n b1 , �d5, con compensación por el material sacrificado; Sax-Vaganián, Wijk aan Zee, 1 9a9. (N. del t.)] 1 7. j,d3!, ... Preliminar del sacrificio de torre que se avecina. 1 7 . ... , i, c6 No había nada mejor. Como réplica a 1 7 . . . . , lL'l h4, 1 a. �h5 y 1 a. �f2 habrían sido muy fuertes. 1 8 . .ll f7!, ...
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Consecuencia de la jugada anterior. Las negras deben aceptar el sacrificio en cualquier caso en vista de la inminente 1 9. �h5. 18 . ... , � f7 1 9. �h5, �e7 20. i,f5, .ld cf8 La defensa más tesonera. Después de 20 . . . . , ef5 21 . �h7, �e6 22. �h6, �d7 23. �d6, �ea 24. �e6, las blancas reco-
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brarían la torre y conservarían algunos peo nes de ventaja. 21 . �h4, �es La única jugada, puesto que luego de 21 . . . . , <;t>d7 22. i,e6!, �e6 23. �h6, las negras están perdidas sin remedio. 22. �h6!, ... El método correcto de mantener la iniciati va. La situación habría sido menos clara tras 22. j,e6, l:;I g2, puesto que a 23. �h5, �da 24. �h6 se habría respondido 24 . ... , �c5! 22 . ... , � c7 Las alternativas siguientes pierden rápida mente sin dar oportunidad alguna. a) 22 . . . . , ef5 23. �c6, �da 24. i,e3, y la intervención del alfil garantiza un ataque decisivo. b) 22 . . . . , �c5 23. �e6, �da 24. 'li'c8, �e7 25. �c7, �ea 26. j,d7, y ganan. Por medio de la textual, las negras consi guen hasta cierto punto mantener intacta su posición, parcialmente devastada. 23. �e6, � d8 24. i, h3, Las blancas tienen nada menos que cua tro peones ligados y pasados, y ahora es aconsejable consolidar la posición. 24. ... , d4 25. 0-0, d3 Desesperada tentativa de tomar la inicia tiva. 26. cd3, � b6 27. n f2, ... No 27. � h 1 ??, desde luego, en vista de 27 . . . . , i, g2. Era posible 27. d4, '1Wd4 2a. � h 1 , pero después de 2a . . . . , .,td7 1as cosas no me parecían del todo claras. 27 . ... , �c7 28. � c4, ld hB Las negras se preparan para devolver la calidad en h3 a fin de obtener juego por las casillas blancas. 29. d4, �b1 ••.
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PARTIDAS SELECTAS DE GRANDES MAESTROS
30. d5, �c1 31 . ll f1 , �e3 32. �h1 , � b8 Con 32 . . . . , �b6, las negras podían haber tendido otra celada: 33. �c3, .l:! f4! , y tienen muchísimas oportunidades. 33. f5, 33. e6 y 33. U c1 son algunas de las opciones que deberían dar la victoria a las blancas. 33. dc6, �c7 34. �b4, ... Las negras abandonaron. Se les da mate velozmente. Como tan a menudo hizo en este torneo, Vaganián se muestra especialmente ingenio so en posiciones desesperadas. Con la tex tual, se propone replicar a 30. �c3 30 . . . . , .l:r h3 31 . gh3, �e4, y las negras tienen com pensación posicional por el déficit de cinco (!) peones. Decidí conservar la iniciativa.
23.
Garri Kaspárov
Kaspárov-Timman Hilversum, 1985 Cuarta partida del Encuentro
Defensa Nimzoindia
1 . d4, éLlf6 2. c4, e6 3. étJf3, b6 4. tLl c3, i, b4 5. i,g5, i, b7 6. e3, h6 7. i. h4, g5 8. i.g3, éLle4 9. 'iYc2, Kaspárov pensó esta popular continuación durante una media hora. Al parecer, no le acabó de convencer el sacrificio de peón (9. éLld2) en la segunda partida de este encuentro después de todo. 9 . ... , .i,c3 1 0. bc3, d6 1 1 . j,d3, f5 1 2. d5, tt:Jc5 ..•
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Ya había estudiado esta jugada algunos años antes y llegué a la conclusión de que da buen juego a las negras. Se la mencioné a Ribli durante el Encuentro de la URSS contra el Resto del Mundo en 1 984. Le tocaba jugar contra Vaganián en la última ronda, y el tanteo era tan desalentador -nos llevaban tres pun tos de ventaja- que incluso con negras tenía mos que jugar a ganar. Ribli decidió usar la idea y obtuvo ventaja, pero dejó que se le escapara de las manos en la quinta hora. 1 3. h4, ... Los pocos ejemplos de esta línea que había entonces variaban con 1 3. éLld4. En Vaganián-Ribli, Londres, 1 984, se continuó así: 1 3 . . . . , 'iVf6 1 4. f4, gf4 1 S. ef4, tLl ba6 1 6. tt:Je6, tt:Je6 1 7. de6, 0-0 1 8. 0-0, tt:Jcs, y la posición de las negras era excelente. Ribli
Nl 26.3.5
asevera en sus comentarios en el lnformator que las negras también tendrían ventaja des pués del sacrificio de pieza 1 7 . .i,fS, tt:Jg7 1 8 . .i,g6, �d?. 13 . ... , g4 1 4. éLld4, 'iVf6 1 5. 0-0, éLlba6 1 6. étJe6, étJe6 1 7 . .i,f5, ... El mismo sacrificio de pieza que en los comentarios de Ribli. En este caso, es prácti camente forzado, ya que las negras estarían todavía mejor que en Vaganián-Ribli después de 1 7. de6, 0-0 1 8. e?, �f?. 1 7 . ... , tt:Jg7 No es una casilla muy buena para el caba llo, pero si no la columna «f» se habría abier to con mayor furia todavía. 1 8 . .i,g6, �d7 1 9. f3, � af8 Las negras llegan justo a tiempo de conju rar el peligro inmediato existente en la colum-
20. fg4, 'iYe7 21 . e4, �c8 Las negras completan el enroque artificial en el flanco de dama antes de dirigir el caba llo de a6 a mejores casillas. La posición es difícil de valorar; las blancas tienen un puñado de peones por la pieza, pero sus dos alfiles no pueden destacar debido a la naturaleza semicerrada de la posición. El pro blema de las negras es que el caballo está mal situado en g?. 22. 'iYd2, <;t> b8 Despejando c8 para el alfil y, con buen cri terio, no preocupándose del peón de h6. 23. la f8, ... Esto es demasiado avaricioso. 23. 'iYd4 habría sido más fuerte, preparando el avance eS. Las cosas no serían fáciles para las negras entonces, y tendrían que devolver la calidad después de 23 . . . . , tt:Je8 24. eS, deS 2S. 'iYeS, l{Wes 26 . .,tes, ya que a 26 . . . . , � hg8 se responde 27. .i,h?. Las blancas
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también tienen buenas posibilidades luego de 26 . . . . , ct:Jd6 27. j, h8, Il h8 28. l:tf4, aunque la posición no es del todo clara. 23 . ... , J::r f8 24. 'lj'h 6, _tea Ahora se ve el objeto de la jugada 22 de las negras. Las blancas tienen un incómodo problema posicional que solucionar a causa del ataque al peón «g».
2S . .U. e1 , ... Interesante jugada. Las blancas sacrifican el peón «g» a fin de dar la mayor fuerza posi ble al avance e5. Las alternativas habrían sido más débiles, como ilustran las variantes siguientes: a) 25. j,f5, ct:Jc5 26. 'lj'g5, ct:Jf5 27. ef5, 'lj'f7, y los cuatro peones no son compensa ción suficiente por la pieza. b) 25. g5. Kaspárov sugirió al día siguien te que podía haber obtenido ventaja decisiva con esta jugada. Me sorprendió oír esto, pues to que la dama blanca quedará fuera de juego. Durante la partida, yo había visto la l ínea 25 . . . . , ct:Jc5 26. nf1 , bt f1 27. �f1 , j,a6 28. �g1 , j,c4, con la amenaza 29 . . . . , ct:Je4 30. j,e4, 'lj'e4 31 . 'lj'g7, j,d5 y mate pron to. Más tarde, Kaspárov indicó que las blancas pueden parar esta amenaza de mate median te 29. 'lj'h7! , con la intención de jugar j,f2 y j,d4 o � h2, seguido de h5 y h6. Da 29 . . . . , j,d3 30. e5, j,g6 31 . 'lj'g6, de5 32. h5 y concluye: "Y la posición de las blancas es lo bastante buena para ganar» . Mucho más fuer te, sin embargo, es 29 . . . . , j,e2, con las posi bilidades siguientes:
a) 30. j,f2, 'lj'f8! 31 . j,d4?, 'lj'f1 32. � h2, ltJd3, con ataque ganador. b) 30. � h2, � b7, y ahora 31 . h5 no sirve a causa de 31 . . . . , 'lj'g5 32. 'lj'g7, j,h5 33. j,d6, j,g6 34. 'lj'c7, �a6 o 32. h6, ltJh5 33. j,d6, j,f1 34. 'lj'c7, �a6, y, de nuevo, las negras ganan por ataque. 2S . ... , j, g4 Ha caído el primer peón blanco. 26. eS, ... Una jugada desconcertante, pero no buena. Era necesaria la temática 26. e5, y las blancas, probablemente, obtendrían suficiente contrajuego después de 26 . . . . , de5 27. j,e5, ct:Jf5 28. j,f5, �f5 29. d6, 'lj'd7 30. dc7, � b7 jugando 31 . c5! El quid de la jugada del texto es que luego de 26 . . . . , ct:Jc5 27. e5, de5 28. j,e5, ct:Jf5 seguiría la victoriosa 29. j,c7! La diferencia es que el caballo no puede tomar en c7. Sin embargo, las negras tienen otra manera de debilitar la iniciativa de las blancas. 26. ..., 'lj'f6! Esto clava el alfil de rey, así que las blan cas se ven obligadas a sacrificar otra pieza más. 27. ed6, j,hS 28. eS, ... A 28. dc7 seguiría simplemente 28. �b7, y los peones blancos serían bastante inofensivos. 28 . ... , 'lj' g6 29. 'lj' g6, j, g6 30. e6, ...
N
El frente de peones de las blancas parece amenazador, así que las negras tienen que apresurarse a sacrificar al menos una pieza a
JAN TI M MAN:
MI AJEDREZ AUDAZ
cambio de los miembros más peligrosos de la infantería blanca. 30 . ... , lZJcS Las negras no tienen por qué preocuparse de que las blancas capturen en c7; p. ej. : 31 . dc7, � b7 32. i,d6, 1:r e8 33. g4, i,e4! 34. c4, i,f3, y los peones blancos no irán muy lejos. 31 . d7, ... La continuación lógica. 31 . ... , 4Jd7 32. ed7, ll d8 33. ld e6, ... La mejor posibilidad de las blancas. 33 . ... , i, hS? 33 . . . . , i,f5 habría dado mucho mejores posibilidades de victoria. Kaspárov tenía la intención de responder a esto 34. 11 f6, de modo que después de 34 . . . . , � f7 pudiera continuar con 35. i,e5, y las piezas negras, ciertamente, no estarían bien coordinadas. Es mejor 34 . . . . , i,d7, sin embargo. La partida podría continuar entonces como sigue: 35. .id f7, 4Jf5 36. i,f4, �ca 37. h5, .l::í. h8 38. g4, 4J h6! 39. i, h6, ll h6 40. l:í. g7, i,g4! 41 . l::i.g4, l:;l h5 42. c4, 1:i. f5, y es probable que las negras debieran ganar el final de torres subsiguiente, aunque no estoy convencido de ello al 1 00%. 34. i, eS, ll d7 3S. � h6, ... De repente, las negras deben tener cuida do de no perder una pieza en condiciones desfavorables. 3S ... , i,f7 Cediendo el caballo, todavía mal situado, para obtener una iniciativa en el flanco de dama. Las alternativas son: a) 35 . . . . , i,e2, señalada por Keene. La idea es 36. 11 h7, ll e7 37. i,g7, � b7!, seguido de 38. . . . , i,d3, y el alfil de las blan cas está perdido. Sin embargo, las blancas tienen una solución inesperada: 37. d6! , � e5 38. d7, 4Je6 39. .id e7, y las negras tienen que ceder ambas piezas menores por el peón «d». Esta línea me recuerda la celada que tendí a Chernin en Montpellier. b) 35 . . . . , i,d1 . La versión mejorada. Ya no es lo bastante bueno replicar a 36. I:t h7, .
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ld e7 con 37. d6, y 37. i,f6, l:!. e1 (no 37 . . . . , .)¿ f7 a causa de 38. i,d4) 38. �f2. � e2, seguido de 39 . . . . , 4Jf5, también da la victoria a las negras. La única posibilidad de las blan cas es responder a 35 . . . . , i,d1 36. g4! , y el caballo negro sigue mal situado y las blancas tienen buenas posibilidades de hacer tablas con sus dos peones pasados y ligados. 36. i,g7, i,dS 37. i,es, i,a2 38. hS, ... Kaspárov tenía apuros de tiempo y siguió adelante de manera apresurada con su peón más avanzado. Posteriormente, llegamos a la conclusión de que las blancas deberían haber jugado 38. g4, adelantando el peón hasta g6 lo antes posible. Además, la torre blanca podía haber vuelto a entrar en juego vía h5. 38 . ... , � b7 Preparándose para avanzar el peón «a>> . 39. g4, a S 40. gS, i, c4 Una decisión difícil, justo antes del primer control de tiempo. Las negras bloquean el peón «C» enemigo, haciendo que el peón «a» sea más peligroso todavía. Por desgracia, como mostrará la continuación de la partida, las blancas pueden ahora arrancar unas tablas. Por tanto, 40 . . . . , a4 habría sido mejor después de todo, ya que las blancas se verían obligadas a sacrificar un peón en la próxima jugada con c4, y las negras se que darían con buenas posibilidades de ganar con su peón de ventaja. No es tan importante que los peones blancos estén más avanza dos, ya que el alfil podría cambiarse por los dos si fuera necesario. 41 . g6, l::!, dS Tregua esencial, puesto que 42. 1:! h7 era una amenaza. 42. i,f4, .ti. fS 43. i,g3, a4 44. l::i, h7, ld es 4S. h6, ... Bajo ningún concepto deberían las blan cas jugar 45. i,d6, porque después de 45. . . . , a3 no puede impedirse que el peón "a" corone. 4S. ... , a3 46. .U. e7, ...
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La única manera de parar el peón «a>> . Las negras ganan luego de 46. 1:!. d7, a2 47 . .ld d1 , ld b5, seguido de 48 . . . . , J;! b1 . 46 . ... , a2 47. Ii. e1 , ... Los peones blancos han avanzado lo sufi ciente para crear contrajuego adecuado con tra el peón «a>> . 47 . ... , i,.d3 48 . h7, l:r h5 Esto conduce a la captura de ambos peo nes pasados de las blancas, pero ¡ay! , a expensas del peón <> .
