HIDROELECTRICA HIDROELECTRI CA CORANI A partir de la instrumentación se realizará un control diario Corani conocerá estado de la represa después de 50 años
La central de Corani genera 54 MW de potencia, el agua turbinada escurre por un canal de fuga hasta un embalse de compensación, compensación, para luego ser conducido por un túnel y tuberías de presión hasta la central hidroeléctrica de Santa Isabel donde se genera cerca de 94 MW de potencia. El agua de Corani cuenta con un embalse de regulación interanual que hace trabajar dos centrales hidroeléctricas y actualmente junto a la Corporación Ende se desarrolla el proyecto de San José. La Empresa Eléctrica Corani S.A. inició este año el proyecto de ampliación del programa de instrumentación de la represa que permitirá conocer y controlar la esta estabi bili lida dadd y las las defo deform rmac acio ione ness que que ha sufr sufrid idoo a lo larg largoo de los los 50 años años de funcionamiento. El proceso de instrumentación durará un año y a partir de ahí se realizará un control diario, cada hora se tendrá información de la represa a ser enviada a una base de procesamiento de de datos para su análisis correspondiente. correspondiente. Normalmente el tiempo de vida de una represa es de 30 a 40 años, mientras que Corani S.A. tiene 50 años, por lo que este programa de instrumentación permitirá conocer el estado real de la represa, anunció el gerente general de la Empresa Eléctrica Corani S.A., Javier Pari, al aclarar que aunque la represa se encuentra superficialmente en buen estado, el estudio develará qué pasa por dentro y dará un panorama más amplio. Explicó que por primera vez se realiza este trabajo en el país, el mismo consiste en la instalación de instrumentos y aparatos de control para estudiar cómo se comporta el cuer cuerpo po de la repr repres esa, a, el horm hormig igón ón,, el verte vertede dero ro,, las las filt filtra raci cion ones es y cont contro rola larr las las deformaciones que ha sufrido la represa en 50 años. Este proceso de automatización permitirá contar con información en tiempo real de diferentes parámetros, lo cual permitirá estudiar la posibilidad de elevar el coronamiento de la represa y vertedero, puesto que teóricamente es posible embalsar mayor cantidad
de agua, subiendo más el nivel de agua y en función a esos resultados se tomarán decisiones a futuro, afirmó Pari. El
embalse
El volumen que almacena la represa de Corani S.A. es de 145 hectómetros cúbicos de los cuales el volumen útil es 138 hectómetros cúbicos, el resto es un volumen muerto que no puede ser usado en la generación. “Acumular agua es un trabajo muy complicado, Corani S.A. tiene más de 20 kilómetros de túneles, 50 kilómetros de canales de conducción para llevar agua a la represa y más de 100 kilómetros de caminos vecinales paralelos a las obras civiles, por lo que en esta época de lluvia el uso es muy intenso para verificar que no existan derrumbes, desbordes, arrastre de sedimentos y el control de las tomas, canales y túneles esté despejado”, explicó Pari. Recordó que el año pasado en similar fecha ya hubo un rebalse de la represa, este año se espera llegar a un nivel óptimo. En enero de este año recién empezó a subir el nivel de agua de la presa producto de las lluvias, las dos últimas semanas de febrero se tuvo aportes importantes de caudal de agua. Actualmente se cuenta con un 80% de la capacidad de la represa; sin embargo, el nivel óptimo de agua es llegar al 100% para que permita realizar un importante trabajo con el Comité Nacional de Despacho de Carga (CNDC), señaló Pari. La hidrología depende mucho del clima y en ese sentido la época de lluvia se ha retrasado cambiando el ciclo normal de llenado del embalse normalmente en los meses de noviembre y diciembre se tenía buena acumulación pero la época de estiaje del pasado año provocó que la represa llegue a sus niveles mínimos; es decir, cerca de un 15 % de su capacidad de embalse, con un nivel en el que sigue habiendo agua, pero que no puede ser utilizado en la generación, explicó el ejecutivo de Corani S.A. Sin embargo, indicó que pese al estiaje del año pasado, si el régimen de lluvias continúa, se prevé que también haya un rebalse que sería positivo porque las máquinas continuarán trabajando al 100%. “Corani S.A. es la represa más grande de Bolivia, su regulación permite al Comité de despacho de carga programar la generación de tal manera que en las horas pico la generación eléctrica esté garantizada para el país”, remarcó Pari. Centrales
hidroeléctricas
La central de Corani cuenta con cuatro máquinas que generan 54 megavatios (MW) de potencia, el agua turbinada escurre por un canal de fuga hasta un embalse de compensación, para luego ser conducido por un túnel y tuberías de presión hasta la central hidroeléctrica de Santa Isabel donde se genera cerca de 94 MW de potencia con cinco generadores. El agua de Corani cuenta con un embalse de regulación interanual que hace trabajar dos centrales hidroeléctricas y actualmente junto a la Corporación Ende se desarrolla el proyecto de San José que utilizará esta misma agua. “Lo más importante de contar con la represa es la garantía que los aportes de los ríos sean regulados, no haya crecidas y tampoco se seque, que aún después de 50 años exista
caudales de aporte. Corani sigue siendo la central hidroeléctrica más importante en Bolivia debido a que ningún sistema en Bolivia tiene agua regulada, solo de paso”, resaltó Pari al acotar que “el agua constante asegura la provisión de energía barata”.
INFORMACIÓN TÉCNICA Hidrología: El área de drenaje abarca a 590 km2; con precipitación media anual entre 650 - 2565 mm y un caudal medio anual de 7,35 m3/s. GEOLOGÍA: El área de aprovechamiento hidrológico abarca una región andina caracterizada por una secuencia de formaciones paleozoicas, de roca sedimentaria y en menor grado metamórfica. Los estratos aparecen fallados, plegados y erosionados entre los 4200 y 1700 m.s.n.m., el rumbo regional de las rocas sedimentarias, los ejes plegados y los planos tiene dirección N - NO. En orden ascendente se presentan formaciones ordovícicas de Anzaldo, San Benito y las silúricas de Cancañiri y Kirusilla, compuestas por pizarras, cuarcitas, areniscas y lutitas. El manto rocoso está delineado por una amplia gama de suelos que incluye los residuales, las morrenas y otros tipos de sedimentos lacustres. La cobertura del suelo en las partes altas de las montañas es muy delgada o inexistente. Presa: Mixta de tierra - escollerado con núcleo de arcilla, filtros de arena-grava y escollerado de piedra. • Altura máxima: 30 m • Ubicación: km 64 camino Cochabamba - Santa Cruz • Longitud de cresta: 683,30 m • Elevación de la cresta: 3248,37 msnm • Latitud: 17° 13’ 27” S • Longitud: 65° 53’ 24” O • Borde libre normal: 2,80 m Vertedero: Tipo salto sky, constituido con materiales de piedra - hormigón y pantalla impermeable. (Inyecciones de cemento). • Longitud: 270 m • Altura máxima: 9m • Nivel de rebalse: 3245,50 msnm Embalse Corani: • Nivel máximo de operación: 3245,50 msnm • Nivel mínimo de operación: 3228,50 msnm • Máximo nivel crecida: 3243,62 msnm • Volumen útil: 138,99 Hm3 • Área inundada: 1414 Ha