Continuando Continuando la inspiración filosófica filosófica y literaria literaria de las glosas de Eugenio d’Ors (de cuya noción del sacrificio trata el primero de los artículos que componen el presente volumen), volumen), «Fragmentarium «Fragmentarium re!ne diversas diversas notas y ensayos escritos por "ircea Eliade en los a#os treinta$ %edicados, en e&presión del autor, al «lector inconformista y curioso, estos apuntes no se limitan a refle'ar la enciclopdica voracidad intelectual de Eliade$ %etrs de los ms variados asuntos a*ordados en ellos (la +istoria y la pre+istoria, el genio y la creación, la literatura y la ciencia, los misterios y el follore, C+ina y la revalori-ación de la Edad "edia) late la penetrante visión visión del +istoriador +istoriador de la cultura cultura y de la religión, religión, el cual cual se sirve sirve de las las e&per e&perie ienci ncias as y los los datos datos para para compon componer er el cuad cuadro ro del del +om*re +om*re contemporneo e indagar en la «fuente de la vida espiritual$ Estas anotaciones de Eliade e&ponen una l!cida reivindicación de la li*ertad creadora del +om*re, al par que la dolorosa conciencia de la permanente posi*ilidad de su naufragio$
"ircea Eliade
Fragmentarium Fragmentarium
.ítulo original/ Fragmentarium "ircea Eliade, 0121 .raducción/ Cristian 3uliu 4riesanu y Federico de Carlos Otto
4l lector
%espus %espu s de Solilocvii (0125 (0125)) y Oceanografie (0126), la presente colección es el tercer tercer volume volumenn de notas notas y ensayos ensayos que entrego entrego al lector lector$$ E&ceptu E&ceptuando ando dos artícu artículos los (aparecidos en 0125), las pginas reeditadas en este volumen fueron escritas entre los a#os 0127 y 0121$ 8o pertenecen tanto al gnero del diario íntimo cuanto al gnero de los cuadernos de tra*a'o, y fueron pu*licadas en revistas (la mayoría en Vremea) con la e&presa intención de reunirlas alg!n día en un solo volumen$ 9arte de las presentes notas fueron redactadas con la esperan-a de retomarlas y ampliarlas en un futuro cercano$ :in em*argo, las reedito a+ora en la forma fragmentaria y sucinta que tenían cuando salieron de mi pluma$ 9or una parte, porque su ela*oración se +a visto retrasada indefinidamente, +a*ie +a* iendo ndo de'a de'ado do el autor autor +ace +ace tiem tiempo po de ser ser el du due#o e#o imper impertu tur*a r*a*l *lee de su propi propiaa producción$ 9or otra parte, porque, en su eventual forma tcnica tc nica y ampliada, de'arían de ser accesi*les para el lector al que est destinado el presente li*ro, por la sencilla ra-ón de que en tal caso su sitio ms apropiado serían las revistas revistas especiali-adas especiali-adas y de difusión limitada$ limitada$ :iempre +e tenido un lector inconformista, que no se contenta*a con la lectura de mis novelas y ensayos, sino que conserva*a una curiosidad intacta por otro tipo de o*ras, menos fcil fciles, es, se enti entiend ende, e, pero pero tan tan signi signifi ficat cativ ivas as como como las las prime primera ras$ s$ Es un unaa suer suerte te +a*e +a*er r encontrado encontrado a este lector y sentirlo sentirlo tan cercano$ cercano$ ;n lector que no reivindica reivindica derec+os so*re <0= mi producción y al que no le molesta que, despus de Maitreyi , le ofre-ca una novela difícil, y despus de Huliganii<5=, unos cuentos fantsticos$ 4lgunos de mis li*ros (Santier, Oceanografie Oceanografie,, Alquimie Alquimie asiatica asiatica<2=), que +ace die- o quince a#os difícilmente +a*rían encontrado un editor, estn a+ora agotados gracias al lector inconformista, que no se asusta ni de un diario íntimo, ni de la confesión pattica, ni de los estudios tcnicos que de'an adivinar un estilo de pensamiento$ >ams +e escrito para adular o retener al lector, y este mrito (porque sin duda se trata de un mrito) lo reivindico para toda mi producción$ Ciertamente me +a alegrado el «&ito de p!*lico de una novela como Maitreyi, pero no me +a impe impedi dido do segui seguirr escri escri*i *ien endo do para para el lect lector or inco inconfo nform rmis ista ta,, para para su curi curiosi osidad dad intelectual, para su sensi*ilidad intacta$ :iempre +e tenido la certe-a de que el de*er del escritor es recurrir a la inteligencia del lector, a su cultura y a su daimon teórico$ %udo de que la me'or manera de +acerse querer y comprender sea escri*iendo li*ros «fciles$ 9or eso pu*lico con fruición una nueva colección colección de ensayos y fragmentos$ El lector podr encontrar en las pginas de este li*ro suficientes puntos de contacto entre mi producción literaria y el otro grupo de escritos, los ms teóricos$ 8o s si estos !ltimos aclaran un poco ms mi «literatura? pero estoy seguro de que la completan$ @uiero dar las gracias, tam*in aquí, a mis amigos Aladimir y Constantin %onescu, sin cuya atenta cola*oración no +a*ría podido ver la lu- el presente volumen$ "3BCE4 E34%E
:o*re un cierto «sacrificio
Convencido de que «el sacrificio es la ley de la e&presión y de que «sacrificar es vivir, Eugenio d’Ors acostum*ra quemar, cada noc+e de a#o nuevo, una pagina recin escrita$ ;ne page, une page *ien remplie, crite avec attention, amour et longue fatigue fatigue est immole en +olocausteD :ur l’amas de papiers d’un manuscrit, une allumette y a mis le feu? flamme et fume se sont envoles au loin travers la fentreD<6=$ o que ms emociona de esta confesión es la ceremonia y la grave melancolía del «sacrificio$ 4 este acto, que tomado en sí mismo tendría mediocres consecuencias, se le confiere confiere una significació significaciónn religiosa$ 8o dudaría en pensar que, despus de +a*er quemado una pgina al comien-o de cada nuevo a#o, Eugenio d’Ors se sintiera ms fuerte, ms rico, ms sereno ante su propia versatilidad$ :e trata de un sacrificio llevado a ca*o seg!n todos los cnones de la religión y del "editerrneo$ 8o falta la ofrenda? pero tampoco falta la proporción, el sentido de los límites y de las normas$ GCuntos a*surdos sacrificios no +acemos cada uno de nosotros cuando inmolamos a la nada y al sue#o tantas intenciones, tantos pensamientos, tanta generosidadH I no estoy pensando en las «grandes cosas, como co mo nuestra vida por e'emplo, que casi nunca llegamos a transformar en una «o*ra maestra? maestra? o en nuestra «'uventud, «'uventud, que no sa*emos sa*emos vivir +asta la incandescencia final, sino que la consumimos poco a poco, sacrificando a la inanidad las ms patticas +oras de amor, de desesperan-a, de contemplación o de melancolía$ "e refiero a algo muc+o ms modesto/ a ciertos pensamientos que se quedan a mitad de camino, a ciertos poemas que nunca llegaremos a escri*ir$ Jay días en los que, Kcómo lo diríaL, se me revela con tanta claridad el sentido del mundo y del +om*re, que los cielos se a*ren de repente encima de mí$ I sin em*argo, estos días se van, como todo lo que nos pasa$ 8o sa*emos guardar nada, no definimos nada, ni para nosotros, ni para los dems$ En tales momentos tengo la sensación de mi plenitud y la certe-a de que nunca ms llegar a dudar de lo que +e conquistado o descifrado entonces$ I sin em*argo, tam*in esos momentos pasan y se consumen, de'ndonos muy pocos y muy imprecisos pensamientos$ GCuntas +oras privilegiadas no +a*r sacrificado a la vacuidadH En lugar de intentar definir y precisar, de su*rayar los matices y los detalles, me +e conformado con anotar unas cuantas pala*ras fugaces en la +o'a de un cuaderno, pala*ras que, en tales momentos de plenitud, me parecían suficientes para conservar el pensamiento, pero que, en realidad, ni siquiera *asta*an para evocarlo$ 9or supuesto que ning!n pensamiento llevado +asta el final, ninguna analogía o correspondencia descu*ierta, ninguna intuición ms o menos personal, se pierden para siempre$ Aolvemos a encontrarlos, a veces con sorpresa, despus de una semana o despus
de un a#o? en el conte&to de una conversación, de una lectura, de un paisa'e$ 9ero no se trata solamente de conservar un pensamiento apro&imativo, sino de llevarlo +asta el final y formularlo con la m&ima precisión$ I el crecimiento y la formulación de este pensamiento no se pueden reali-ar en las +oras neutras, ti*ias, sino precisamente en los momentos de plenitud, cuando, tal como dice el poeta Camil 9etrescu, «puedes ver las ideas$ 9or desgracia, sacrificamos precisamente estos instantes de gracia$ I este sacrificio no tiene nada que ver con la ceremonia de Eugenio d’Ors$ 8o tiene ninguna significación, es involuntario y, casi siempre, inconsciente$ "e pregunto cuntos grandes escritores +a*rn tra*a'ado en sus +oras de «gracia$ E&ceptuando algunos poetas, como un :+elley por e'emplo, la mayoría de los escritores +an escrito a rfagas y seg!n el capric+o del a-ar$ 4lgunos lo +acían cuando no tenían dinero, otros, cuando se lo e&igían los reyes o los editores, otros, *a'o el impulso de la vanidad, los celos o la neurastenia$ 8iet-sc+e escri*ió a menudo *a'o la opresión imperiosa de la «inspiración, pero esta vertiginosa y pattica inspiración no se parece a la quietud y la plenitud de la comprensión$ 8o quiero decir que su producción, movida por el +am*re, la am*ición, la necesidad o la neurastenia, no est a la altura de su genio o de su talento$ :implemente, creo que un enorme n!mero de pginas geniales +an sido sacrificadas a la nada? que muc+os li*ros que podrían +a*er sido escritos no llegaron ni siquiera a ser empe-ados$ empe-ados$ En una pala*ra, pienso que cada gran escritor escritor del mundo +a sacrificado por lo menos un fragmento fragmento genial a la vacuidad, rec+a-ando la formulación formulación de un pensamiento pensamiento o la anotación de un poema que la gracia le otorga*a en una +ora de plenitud$ 8o es ninguna vergMen-a confesar que los escritores van construyendo sus o*ras al a-ar, seg!n las necesidades del momento, del editor, del p!*lico o del capric+o$ Casi toda nuestra producción ensayística y novelística es fruto de las circunstancias$ I esta situación no re*a'a en a*soluto sus eventuales mritos$ :implemente nos +ace so#ar con los li*ros no escritos de los grandes autores$ Cuando +ace die- a#os Niovanni 9apini me confesa*a, en una pattica carta, «no <+a*er= llegado a escri*ir ni la centsima parte de lo que tenía que decir, pens que esta*a e&agerando$ Con el tiempo, sin em*argo, +e empe-ado a darle la ra-ón$ :eguramente no +e llegado a escri*ir el ms *ello li*ro que podía +a*er escrito a los veinte a#os, y es muy pro*a*le que no escri*a tampoco el ms *ello li*ro a los treinta$ I lo mismo ocurre con todo todoss nosot nosotros ros// sacri sacrifi fica camo moss lo me'o me'orr de nosot nosotros ros,, de nu nuest estro ro arte arte o de nue nuest stro ross pensamientos, ofrecemos of recemos sacrificios incesantes inces antes a la vacuidad$ a !nica melancolía que nos proporciona este sacrificio es el +ec+o de no tener ninguna significación, de no enriquecer a nadie, de no aca*ar ni perfeccionar nada$ «:acrificas porque no logras estar «presente en aquella +ora o en aquellos cientos de +oras de plenitud, porque sucum*es a la ilusión de que podrías conservarla para siempre$ :olamente despus de +a*er adquirido suficiente e&periencia o una cierta edad te das cuenta de lo que podrías +a*er +ec+o$ I solamente tú te dars cuenta de ello$ os dems, los que te miran desde fuera, no se darn cuenta de que tu o*ra, tan «grande y tan «amplia, «amplia, es solamente solamente un islote informe de lo que podrías +a*er +ec+o$ 8adie puede adivinar nuestro propio naufragio$ I puede que una de las infatiga*les raíces de nuestra desesperación *rote de allí$
G@u maravilloso sería si cada uno de nosotros se decidiera a sacrificar solamente una pgina, escrita escrita en la noc+e de a#o nuevo, para que así llegase llegase a escri*ir escri*ir todas aquellas *ellas y desconocidas pginas que inmolamos constantemente cons tantemente a lo largo de todo el a#oHD
8ota so*re el genio
«.odo lo que pertenece al genio es sagrado$ 4sí empie-a 4rdengo :offici su volum volumen en de apu apunt ntes es y diari diarios os Tacuinno Tacuinno di Arno org!i org!i (Firen-e, 0122)$ «:i %ante o eopardi +u*ieran escrito, en un oscuro momento de su vida genial, alguna inepcia o estupide-, esa inepcia y esa estupide- seguirían siendo dantescas o leopardianas y no las del literato OD, 9D o "D En un li*ro mío anterior ( "sa#el "sa#el y las aguas del dia#lo<7=) encuentro las siguientes líneas que, sin em*argo, no volvería a firmar/ 8o e&iste el genio integral y lo ms sensato es pensar que no pueda e&istir? si no, el admirador lo leería cegado por el velo de la adoración y glorificaría incluso el !ltimo deslide su ídolo, al tiempo que le quedarían sellados para siempre los innumera*les *uenos li*ros escritos por otros$ En una pala*ra, lo que merece ser ala*ado es la e&cepcionalidad, allí donde est$ 9or supuesto que no e&iste el genio integral? afortunadamente para el resto de los mortales, me atrevería a a#adir$ 9orque el ms e&quisito espectculo al que podemos asistir es esta espontnea e intermitente mediocridad de los genios$ :olamente delante de una tontería tontería o estupideestupide- firmada por un genio (y, gracias a %ios, no escasean) escasean) te das cuenta de la pertur*adora distancia que te separa a ti, +om*re mediocre, de un creador$ 9ero KcómoL, te preguntars estupefacto$ Io nunca +a*ría tenido la audacia de proclamar tal tópico o tal ineptitud y $l, el genio, Gla pensó y la firmóH I a pesar de todas estas mediocridades, fallos e ineptitudes, l sigue siendo un genio, y t!, un +om*re corriente$ Cuando empieces a entender esto, tam*in entenders la distancia enorme que te separa de un genio$ :olamente entonces vislum*rars la mediocridad de tu condición, tu nulidad mental$ G.!, que creías ciegamente en la inteligencia, en la originalidad, en la profundidad, en la co+erencia, en el talento y en qu s yo qu otras virtudes espiritualesH GI de repente descu*res que un genio puede ser est!pido, mediocre, +asta ridículo a veces, otras veces vulgar, y casi siempre insulsoH O sea, que todas aquellas virtudes espirituales que te encanta*a reconocer como incipientes en ti, y que creías e&istían en su grado ms alto y totali-adas en un genio, +an de'a de'ado do de tene tenerr algún valor (por (por lo menos menos desde desde este este pu punt ntoo de vista)$ vista)$ 8o una mayor inteligencia, ni una mayor originalidad, originalidad, etc$, resuelven la ecuación del genio$ El genio, como la santidad, go-a de una perfecta autonomía del con'unto de las facultades facultades mentales$ Es totalmente otra cosa, y esto «totalmente otro e&aspera, entristece o deleita (seg!n las circunstancias) a todos los dems +om*res, los agraciados «+om*res corrientes$ :i os ponis a leer las «estupideces «estupideces de los genios, sus pginas mediocres, vulgares y sin inspiración, una enorme desesperación se apoderar de vosotros$ .e dars cuenta de
que tú nunca llegar%s a escri#ir así& .!, como yo, como el otro, siempre siempre intentamos decir cosas interesantes, originales, profundas, y, so*re todo, decirlas *ien o, por lo menos, de manera correcta$ I si no somos capaces de superarnos, intentaremos, al menos, permanecer siempre iguales& I esto no ocurre por tu propia iniciativa$ Es algo que todo el mundo, todos los li*ros te ense#an/ perfeccionarte, no decir estupideces, pensar siempre algo nuevo, profundo, personalD KCómo no desesperarte ni entristecerte cuando ves que estas virtudes no te llevan demasiado le'osL .!, que +as amado la profundidad de %ostoievsi y +as pensado que ella es el sello del genio, Kno te +as so*recogido leyendo las pginas llenas de tópicos y supersticiones del 'iario de un escritor L O sea, que un genio «profundo puede ser vulgar y com!n, sin de'ar, ni por un instante, de ser un genio$ ;n escritor genial como al-ac puede escri*ir confusamente, sin ninguna originalidad, de forma mediocre$ ;n eopardi puede comentar los te&tos de los antiguos como si fuera el catedrtico de una universidad alemana$ audelaire, genio de la parado'a y de la triste-a, tam*in puede escri*ir un pensamiento que parecería sacado del ms insulso manual de tica/ «3l y a dans tout +omme, toute +eure, deu& postulations simultanes, l’une vers %ieu, l’autre vers :atan
8ota so*re los «enfermos
8o s quin, ni en qu circunstancias, +a dic+o que no e&isten enfermedades, sino sola solame ment ntee enfer enfermo mos$ s$ En cual cualqui quier er caso, caso, esta esta fórm fórmula ula resum resumee a la perfec perfecci ción ón cier cierta ta concepción mdica, la de los tiempos modernos, y a menudo +e podido escuc+arla en *oca de algunos mdicos$ ;no de mis amigos Q non non igno#ilis medicus Q la considera incluso la !ltima pala*ra de la ciencia mdica$ Es difícil decidir si es realmente la !ltima pala*ra de la ciencia mdica o si lo es el neo+ipocratismo (o el neo+umorismo moderno, como tam*in se le llama) que integra de nuevo al +om*re en el seno de toda la vida orgnica$ 9ero de algo podemos estar seguros/ del &ito y de la actualidad de la fórmula «no e&isten enfermedades, sino solamente enfermos$ :i pensamos *ien, esta fórmula no es tan sorprendente para los tiempos actuales$ actuales$ Era inevita*le inevita*le que desaparecieran desaparecieran las categorías (enfermedades) (enfermedades) en una poca de individualism individualismoo a*soluto a*soluto (0RRST012S), para de'ar sitio a los individuos (enfermos)$ Cuando el acento acento recae recae so*re los individu individuos os y no so*re los tipos, tipos, ni so*re so*re la clase, incluso los fenómen fenómenos os de desord desorden en orgni orgnico co se «indiv «individu iduali ali-an -an$$ EmpieEmpie-an an a e&isti e&istirr solame solamente nte «enfermos$ as enfermedades se transforman en esquemas demasiado imprecisos, a los que no les corresponde casi nada dentro de la realidad clínica$ 9or otra parte, cuando los +om*res se diferencian demasiado desde el punto de vista psicológico, tam*in empie-an a diferenciarse desde el punto de vista *iológico$ as pocas clsicas conocían solamente enfermedades, no enfermos$ ;n cle*re +istoriador +istoriador de la medicina, medicina, Uarl :ud+of, +a demostrado demostrado que cada poca +istórica tiene su propia enfermedad específica, su enfermedad «estructural$ 9or e'emplo, la lepra en la 4ntigMedad, la peste en la Edad "edia, la sífilis en el Benacimiento, la tu*erculosis en el Bomanticismo, el cncer en la Vpoca "oderna$ Cada una de estas enfermedades e&presa (o corresponde a) la concepción fundamental de cada poca so*re la e&is e&iste tenc ncia ia$$ a lepr lepra, a, en la 4ntig ntigMe Meda dad, d, corr corres espo pond ndía ía al dest destin inoo (ind (indiv ivid idua ual, l, se so*reentiende)? la peste e&presa a la perfección la concepción trgica y som*ría de la e&istencia que domina*a la Edad "edia (ingentes muc+edum*res aniquiladas de golpe, como por una maldición o un castigo divino)? la sífilis no podía tener «&ito ms que en una poca en la que el li*ertina'e florecía, la cortesana tenía un papel so*resaliente y el via'e era un estilo de vida? la tu*erculosis, por una parte, correspondía al patetismo clorótico del Bomanticismo y, por otra, llegaría a ser una «enfermedad social provocada por la miseria ur*ana, secuela de la Bevolución industrial? y, por fin, el cncer sería la e&presión fiel del encuentro de la Vpoca "oderna con lo «irracional (ya sea en la física, ya en las filosofías vitalistas)$ 8o s si +e resumido fielmente los resultados o*tenidos por el erudito profesor :ud+of$ :in em*argo, +e es*o-ado este esquema con la intención de preguntarme si el enfermo como tal no es el fenómeno típico típico de nuestra poca? poca? si lo ms característico característico de la
actualidad no es una enfermedad, sino la desorgani-ación del cuerpo +umano, la anarquía vital, la pulveri-ación de los síntomas, en una pala*ra, la aparición del enfermo, elemento irreducti*le a unas categorías precisas, que se comporta como un «irracional o un eterno «desconocido frente a las formas clínicas$ Es normal que a la anarquía metafísica (positivismo y vitalismo) le corresponda una anarquía psicológica (el individualismo) y una anarquía *iológica (los enfermos)$ a enfermedad enfermedad significa significa un acontecimien acontecimiento to patógeno con síntomas precisos, los mismos para todos los pacientes& a aparición aparición del enfermo en el mundo y en la +istoria +istoria de la medicina, medicina, la apari aparici ción ón del enferm enfermoo como como catego categorí ría, a, pulver pulverii-aa los los sínt síntom omas? as? el pacie pacient ntee ya no pertenece a un tipo, sino que es, casi siempre, un caso& Cada individuo tiene su propia enfermedad$ E&asperado por tantas variedades y matices, por tantos síntomas «personales, el mdico de a+ora reconoce que su ciencia es impotente para intervenir en estos centros anrquicos$ Vl se limita, seg!n su propia e&presión, a «ayudar a la naturale-a$ Esto significa que, delante de lo «irreducti*le y lo «irracional, apela a las fuer-as del orden que el enfermo todavía conserva dentro de sí$ El mdico intentar restaurar el orden y la armo armoní níaa org orgni nica ca dism dismin inuy uyen endo do la anar anarqu quía ía a trav travs s de un unaa acci acción ón «p «pol olic icía íaca ca, , introduciendo su*repticiamente «defensas en el organismo$ 9orque l, como científico, ya no se atreve a creer en nada que no sea la vida y el poder de la naturale-a$ a anarquía permanece latente en cualquier +om*re y el mdico sa*e que no puede +acer nada contra ella$ El !nico remedio es la voluntad de curación del enfermo, es decir, su voluntad de orden y de armoníaD 8uestra poca conoce tcnicas curativas personales, como es, por e'emplo, el psicoanlisis$ Esta tcnica varía de +om*re a +om*re$ 8o e&isten categorías, síndromes, tipos clínicos$ E&iste una infinidad de matices, de variaciones, de «personalidades$ 9or otra parte, el psicoanlisis e&presa a la perfección la concepción moderna so*re el +om*re y las enfermedades/ todos los +om*res estn enfermos$ E&isten tantas enfermedades como +om*res$ Ja desaparecido el límite preciso entre la salud y la enfermedad$ Cualquier individuo es una revolución permanente$ I en esta «revolución el mdico ya no se pone del lado de la policía, sino que pasa al *ando de la insurrección$ El mdico psicoanalista, consciente de la universalidad de la anarquía, +a de'ado de tener fe en una restauración total del orden$ :e limita a o*tener un «armisticio orgnico y su*liminal$ :e conforma con rescatar a su paciente del furor de la locura, de la anarquía a*soluta$ 8o importa si le transforma en un loco reservado y tímido, porque de una forma u otra todos estamos locos$ o importante es que el armisticio perdureD Creo que el psicoanlisis e&presa el !ltimo límite del individualismo$ Esta tcnica es un fiel refle'o de la total desagregación de las «categorías clínicas$ El «enfermo +a*ía entrado en la +istoria de la medicina a partir de la segunda mitad del siglo W3W, pero nunca +a*ía dominado de una manera tan despótica el pensamiento mdico como lo +ace en el decenio de supremacía psicoanalítica$ El enfermo +a encontrado en el psicoanlisis su tcnica ideal/ en primer lugar, un mdico que se preocupe incansa*lemente por l, y una ciencia que le cree en todo y le perdona todo$ ;na ciencia que, so*re todo, se preocupa por todo lo que es personal e íntimo en su enfermedad, que no le confunde con una clase entera de pacientes, sino que respeta su autonomíaD
4l prin princi cipi pioo de esta esta nota nota conf confes esa* a*aa qu quee no sa*í sa*íaa si el refr refrn n «n «noo e&is e&iste tenn enfermedades, sino solamente enfermos sigue siendo tan vlido +oy en día como +ace diea#os$ 9arece que la medicina se +a encaminado definitivamente +acia un neo+umorismo, +acia los vie'os dogmas climticos y orgnicos de Jipócrates$ Jipócrates, sin em*argo, no conocía a los «enfermos y conocía muy pocas «enfermedades$ En cam*io, clasifica*a el mundo orgnico en función de los «climas y a los tipos +umanos en función de sus «+umores$ E&istía una secreta armonía entre las -onas siderales, los climas terrestres y los +umores +umanos$ >untos, constituían un «cosmos, un todo vivo y armónico$ os tipos +umoral +umorales es son catego categoría ríass en las cuales cuales los enfermo enfermoss partic participa ipann orgni orgnicam cament ente$ e$ os enfermos se integran en estos tipos +umorales y estos tipos tampoco son autónomos, sino que estn en estrec+a relación con los climas e incluso con los astros$ 4+ora, a travs del neo+umorismo, el enfermo vuelve a estar integrado en el cosmos, es solidario de las realidades orgnicas y climatricas que le preceden y le superan$ 9odemos reconocer en las !ltimas concepciones de la ciencia mdica una vuelta a la vida rítmica y armónica, a un Cosm Co smos os que que es con consi side derad radoo como como un todo, como una totalidad, vuelta que podemos descifrar tam*in en la actual orientación de las ciencias y de las filosofías$ Jec+o significativo que de*ería +acernos refle&ionar$ 4 pesar de todo, el signo de nuestra poca podría ser el totalitarismoD
:o*re los misterios degradados
.engo delante de mí un li*ro muy reciente, pu*licado por el escritor %imitri "ere'ovsi/ Atl%ntida (elgrado, 012S? trad$ italiana, 012X)$ Este volumen est incluido en la serie de estudios «esotricos del novelista ruso$ a recensión del editor lo resume así/ «1$PSS a#os antes de Cristo todo un continente se sumergió en el ocano? el gran escritor ruso lo rescata, contndonos las catstrofes de la +umanidad primordial$ El pro*lema de la 4tlntida es muy serio, no solamente para la ciencia universitaria, sino para todos los que quieren conocer los orígenes de las tradiciones europeas$ :in em*argo, el modo en que "ere'ovsi anali-a la tradición de la 4tlntida me parece sint sintom omt tic icoo de una cier cierta ta ment mental alid idad ad de nuest nuestro ro tiem tiempo$ po$ El auto autorr sa*e sa*e mant manten ener er continuamente al lector en un estado de tensión *ien calculada? ests esperando que so*revenga, en cualquier momento, la revelación de un gran «secreto, que el autor retrasa y oculta con gran +a*ilidad$ +a*ilidad$ os capítulos, capítulos, enca*e-ados enca*e-ados por títulos títulos mgicos, se dividen dividen en prrafos fulgurantes, algunas veces de sólo dos o tres líneas$ Esta división o*edece a una intención muy precisa/ el lector tiene que ser iniciado en la solemnidad de esta lectura, leer concentrado y emocionado cada línea, tal como se leen las inscripciones$ 9or otra parte, casi la mitad del li*ro est compuesto por citas? y la reunión de las citas tam*in o*edece a una meticulo meticulosa sa estrat estrategi egia$ a$ "uc+as "uc+as de ellas ellas provien provienen en de los evangeli evangelios os y del Timeo de 9latón$ El lector siempre agradecer que se le citen versículos de los evangelios$ %e alguna form forma, a, +ala +alaga ga su pequ peque# e#oo orgu orgull llo, o, le +ace +ace ms ms sole solemn mne, e, ms ms «p «pro rofu fund ndo o,, ms ms «franciscano$ a tcnica de citar a*undantes te&tos evanglicos tiene mayor &ito en los países católi católicos cos o grecoTor grecoTortod todo&os o&os,, dond dondee el cono conocim cimien iento to de la Escritu Escritura ra es apro&i apro&imat mativo ivo$$ .am*i m*in los los e&t e&tract ractos os de 9lat 9latón ón,, espe especi cial alm mente ente del del Timeo, est estnn dest destiinado nadoss a proporcionarles a estos novelistas filósofos un mayor n!mero de admiradores$ El lector siempre estar encantado de aprender algo «sencillo y claro so*re algo indefinido, pero arc+iconocido desde el instituto$ I estar tanto ms dispuesto a completar las lagunas de su formación, cuanto que el autor no le ofrece un li*ro acadmico e insípido, que podría encontrar en cualquier li*rería o *i*lioteca, sino un agrada*le y misterioso via'e en *usca de la 4tlntida$ .am*in es de gran efecto, y "ere'ovsi descu*rió este truco +ace muc+o, citar algunos algunos te&tos te&tos «miste «misterio riosos sos?? como como mencio mencionar nar,, por e'empl e'emplo, o, el -i#ro de los Muertos egipcio (sin e&plicarle que los orientalistas del siglo pasado +a*ían llamado así a una simple colecc colecció iónn de impre impreca caci cion ones es funer funerari arias, as, y que que no se trat trataa en a*sol a*solut utoo de un li*r li*roo «misterioso)$ «misterioso)$ I todavía todavía es me'or si se cita el -i#ro de Henoc, alg!n apocalipsis siríaco, o algu algunos nos te&t te&tos os cald caldeo eos, s, como como por por e'em e'empl ploo la leyend leyendaa de Nilga Nilgame mes+$ s+$ 9ruden 9rudenci cia, a, sin sin
em*argo$ :i se a*usa de los te&tos, el efecto no ser el mismo$ En ning!n caso se tiene que llegar a aplastar al lector *a'o el peso de lo ine&trica*le$ 8o sea que llegue a sospec+ar que se +a renunciado al «misterio y que se +a empe-ado a +acer «cultura, «+istoria o «erudición$ %ad al lector lo que es del lector? un nuevo nom*re, cada tres pginas, y por tres veces en cada pgina los arc+isa*idos nom*res/ >es!s, san 9a*lo, 9latón, :+aespeare, Noet+e$ "s recomenda*le a!n es la tcnica de "ere'ovsi/ montones de citas de poetas, especialmente de los poetas rusos$ Esto nunca falla$ El lector siempre te agradecer +a*er compro*ado, gracias a tu li*ro, la amplitud de su cultura, que empie-a con 9latón y aca*a con :ergei Esenin$ 8o +ay que despertar en l comple'os de inferioridad, recordarle lo que no sa*e o lo que no tiene la paciencia de aprender$ Becurdale, pues, a Nilgames+, pero qudate allí$ Eso le su*e la moral$ En cuanto a la «sustancia del li*ro, la tcnica de "ere'ovsi sigue siendo infali*le/ el misterio recortado$ Escri*e con sencille- y profundidad$ ;tili-a la mayor cantidad de may!sculas/ Yr*ol, Fuego, Ocano, %emonio, etc$ %ivide la pgina en prrafos enca*e-ados por n!meros y los prrafos en proposiciones cortas$ I la proposición corta divídela divídela a su ve- en un impresionant impresionantee n!mero de may!sculas$ may!sculas$ 9ero nunca tienes que decir en una frase todo lo que se podría decir$ a otra mitad del pensamiento se guarda para otra frase, para otro prrafo, para otro capítulo, para otro li*ro$ 9rotege el misterio recortndolo$ 4*rele al lector la mayor cantidad de ventanas +acia el infinito, +acia aquellos 00$7SS a#os que +an pasado desde la desaparición de la 4tlntida$ 4y!dale a sentirse em*argado por el misterio, por su propia profundidad, por su gran sa*iduríaD 8o es difícil adivinar a quin +a sustituido actualmente "ere'ovsi en la conciencia europea/ a "aurice "aeterlinc$ Jacia 01SS esta*an de moda los «secretos del alma? 9aul ourget +acía la psicología de las mu'eres de sociedad y "aeterlinc +alaga*a a sus lectoras con una parapsicología de salón$ 9or aquel entonces se +a*la*a muc+o de las investigaciones metapsíquicas, de psicometría y ocultismo perfumado (!ltimos coleta-os del «satanismo prerromntico), y "aeterlinc «interpreta*a estas e&periencias equívocas con versos versos sim*oli sim*olista stas, s, alegorí alegorías as y aforism aforismos os palpit palpitant anteme emente nte agnó agnósti sticos$ cos$ a «Nran «Nran %esconocida era entonces el «alma$ El destino del alma, en una poca de floreciente y cómodo individualismo, era descifrado y perfumado por los li*ros de ingenua filosofía de "aet "aeter erli linc nc$$ as as mu'e mu'eres res (pero (pero tam* tam*i inn los los ang anglo losa' sa'on ones es en gener general al)) se sentí sentían an so*recogidas por los misterios del alma, que la ciencia no +a*ía profanado todavía y la filosofía oficial no +a*ía domesticado$ Era delicioso descu*rir, al comps de la prosa rítmica de "aeterlinc, que el +om*re podría tener una vida de ultratum*a, y que esta vida parecía ser misteriosa, porque, evidentemente, Ge&istía el .iempo, el :ue#o y so*re todo el %estinoH I despus, nos recuerda "aeterlinc, e&isten los ca*allos de El*erfeld, esos milagrosos ca*allos que podrían tener un alma$ I entonces KquLD El falso misterio, el pseudotrance, la vulgaridad profunda de toda la o*ra ensayística y «filosófica de "aeterlinc "aeterlinc +an resucitado como por arte de magia en los «misteriosos «misteriosos li*ros de "ere'ovsi$ 9or supuesto que +oy en día el alma +a pasado de moda$ Aivimos en una poca en la que el colectivismo +a de'ado su impronta incluso so*re el misterio$ 4+ora casi nadie est interesado por su alma, porque la atención de todos est orientada +acia el futuro (el apocalipsis) o +acia el pasado de la +umanidad (la proto+istoria, la 4tlntida)$
:ería muy instructivo tra-ar el proceso de degradación que +a sufrido el misterio$ En cualquier poca e&isten +om*res, y por desgracia estos +om*res son la elite de los tiempos modernos, que no pueden renunciar al misterio, pero que al mismo tiempo se muestran incapaces de entender su valor metafísico o religioso$ 4sí como en el siglo pasado, cuando el positivismo +a*ía e&cluido a la metafísica y la mística del campo de las preocupaciones oficiales, la sed de a*soluto se manifesta*a a travs del espiritismo, de la misma forma asistimos a+ora a una nueva degradación del misterio$ %egradación que corresponde a nuestro propio «estilo, que lleva el sello del colectivismo? en lugar de estar preocupado por su propio misterio, el +om*re de +oy se preocupa por el misterio de las -onas oscuras de la +istoria de la +umanidad, por la 4tlntida, por el fin del mundo, etctera$ Estas -onas oscuras de la vida de la +umanidad, sea el pro*lema de la 4tlntida, sea la pro*a*le tragedia de un síncope del mundo occidental, merecen toda nuestra atención$ :ola :olame ment ntee que que no se pued pueden en reso resolv lver er f%cilmente, con con li*r li*ros os como como los los qu quee firm firman an "ere'ovsi o >$ BiviZre$ "s a!n, tales pro*lemas permanecern inaccesi*les para las masas cultivadas que, por muc+o que lo intenten, no podrn superar su opacidad metafísica ni su mediocridad espiritual$ Como Freud, [ells y tantos otros grandes +eterodo&os del mundo moderno, "ere'ovsi "ere'ovsi piensa que cualquiera que se +aya gastado cien lei
es!s el %esconocido, encontrar la solución de un gran misterio misterio metafísico$ metafísico$ Beconocemos aquí la misma característic característicaa propia de la poca mode modern rna/ a/ secu secula lari ri-a -arr lo a*so a*solu luto to,, cree creerr que que cualquiera, sin sin asce ascesi sis, s, sin sin esfu esfuer er-o -oss orquestados y sin una vocación, puede «descifrar el secreto del mundo$ I, evidentemente, para que este «secreto pueda ser «descifrado por cualquiera, para que pueda ser asimilado por cualquiera y solamente al precio de dos o trescientos leí o o leyendo dos o tres li*ros, este secreto se llamar luc+a de clases, racismo, psicoanlisis o Atl%ntida.
8ota so*re el patriotismo
9ienso que muy pocos de los que se dedican al estudio de la +istoria de las nacionalidades europeas y del origen de la «conciencia nacional en el continente sa*en que el a*ad >oaquín de Fiore (finales del siglo W33 y principios del W333) +a sido el primer patriota italiano$ Fue el primero en confesar su esperan-a en la unidad de 3talia$ 9ara l, los enemigos de la nación itlica, del populus latinus, eran los enemigos del «pue*lo elegido$ I todas todas las las +orda +ordass *r*a *r*aras ras del del 8o 8ort rte, e, lom* lom*ar ardos dos,, franco francos, s, norma normand ndos, os, germ german anos, os, desempe#a*an el mismo papel que el de los asirios en la +istoria del otro pue*lo elegido, los 'udíos$ Ellos vienen para «castigar, para cumplir el mandato del :e#or? los italianos sufren por culpa de sus incursiones, como sufrieron los 'udíos por culpa de los *a*ilonios y los asirios/ porque no +an sido dignos guardianes de la nueva ley que %ios les +a*ía entregado a travs de >esucristo$ os italianos son el !ltimo pue*lo elegido, despus de los 'udíos y los griegos, y por tanto ms venera*les a!n? Kacaso no se +a*ía dic+o «los !ltimos sern los primerosL El lector podr encontrar reunidas todas las referencias «patrióticas de los escritos de >oaquín de Fiore en el li*ro de E$ 4nitc+ov /oac!im de Fiore et les milieu0 courtoisoaquín de Fiore se formó en un medio lleno de elementos tnicos griegos y que en Cala*ria se +a*ía desarrollado desarrollado una fuerte corriente místicoTasctica místicoTasctica de tinte ortodo&o, especialmente especialmente *a'o la influencia de san 8ilo$ Cuando se escri*a la +istoria del prerrenacimiento, +a*r que tomar en cuenta todos estos datos$ 9orque las ideas del a*ad cala*rs +an influido en todo el prerrenacimiento, y estas ideas +a*ían nacido en el Oriente ortodo&o$ 9or 9or a+o a+ora ra,, nos nos inte interes resaa desta destacar car otro otro aspec aspecto to del pro*l pro*lem ema$ a$ "e parec parecee muy significativo que lo que podríamos llamar una «conciencia nacional surgiera al mismo tiempo que una rica corriente proftica, impregnada de visiones apocalípticas y esperan-as escatológicas$ Es verdad verdad que cualqu cualquier ier concien conciencia cia nacion nacional al implic implicaa un cierto cierto profeti profetismo smo$$ :i recordam recordamos os cómo cómo +emos +emos llegad llegadoo nosotro nosotros, s, los rumanos rumanos,, a for'ar for'ar nuestra nuestra con concie cienci nciaa nacional, nacional, podremos entender me'or la relación orgnica que une profetismo y patriotismo$ patriotismo$ El fin del siglo WA333 y el principio del siglo W3W, sin em*argo, +an conocido una «conciencia nacional iluminada y fecundada por profetismos de corte social, con una
estructura laica e ilustrada$ En Occidente, y especialmente en Francia y en 3talia, este profetismo, social y patriótico al mismo tiempo, era contrario a la 3glesia católicoTromana$ 9or una parte, por su primacía durante siglos, por otra parte, por su universalismo y ecumenicidad$ a Bevo Bevoluc lució iónn franc francesa esa,, fuent fuentee de todos todos los los patri patriot otism ismos, os, +a sido sido el prime primer r movimiento que +a puesto en circulación la idea de «ra-a (los no*les eran odiados por ser «germn «germnico icos, s, conq conquis uistad tadores ores,, «e& «e&tra tran'e n'eros ros), ), de «va «valor lores es nacion nacionale ales s y «creaci «creacione oness tnicas (la diosa Ba-ón es una diosa francesa, etctera)$ Je vuelto a recordar estas cosas arc+iconocidas para que apare-ca con mayor claridad la significación del patriotismo de >oaquín de Fiore$ .enemos que se#alar desde el principio que, aunque el a*ad cala*rs +a*ía confesado siempre ser un fiel s!*dito de la :anta :ede, su profecía no fue *ien reci*ida por las autoridades papales$ :a*emos que la orden orden domin dominic icaa (y, (y, lo que que es ms ms grave grave,, el mismo mismo san san u uen enav avent entur ura, a, maest maestro ro del del pensamiento franciscano) criticó con dure-a las profecías del a*ad cala*rs y que el concilio de 4nagni anatemati-ó gran parte de ellas$ >oaquín de Fiore encontró una dura resistencia en el seno de la 3glesia católicoTromana$ 9ero no por sus ideas «patrióticas, sino por su antropología y su visión de la +istoria universal, dividida en tres grandes fases o edad edades es,, y por por prof profet etii-ar ar la inmi inmine nenc ncia ia de la !lti !ltima ma,, la edad edad del del Espí Espíri ritu tu y del del perfeccionamiento del +om*re al margen de los ritos de la 3glesia católica$ ca tólica$ 9ero 9ero a nosot nosotros ros nos parec parecee inte interes resant antee se#al se#alar ar qu quee el prime primero ro en +a* +a*la larr de patriotismo +aya sido s ido precisamente un profeta cala*rs, que +a*ía *e*ido en las fuentes del cristianismo oriental$ .am*in nos parece sintomtico que las profecías de >oaquín de Fiore +ayan sido criticadas por las autoridades y los teólogos de la 3glesia católicoTromana, ecumnica y universal$ Esta*a en la naturale-a de las cosas que ocurriera así/ porque, tal como +a demostrado el profesor 8ae 3onescu en dos artículos pu*licados en la revista de crítica teológica 1redania, las 3glesias ortodo&as pueden ser nacionales, pero el catolicismo no puede ser ms que supranacional$ I es lógico que >oaquín de Fiore, el ms original místico y profeta del catolicismo, al que Boma no pudo canoni-ar, es lógico, digo, que este a*ad cala*rs, alimentado por ideas y visiones orientales, sea el primero en tener la intuición del patriotismo$ 9ero este patriotismo, formado por la conciencia de pertenecer a un pue*lo elegido, penetrado por ideas mesinicas y fecundado por la ms ferviente mística, no +a vuelto a aparecer en la +istoria moderna +asta el surgimiento de los rusos, pue*lo eminentemente «ortodo «ortodo&o$ &o$ as otras otras variante variantess del patrioti patriotismo smo +an nacido nacido fuera del cristianismo$ El patriotismo tipo, el de los franceses, es laico y anticlerical por antonomasia$ antono masia$ En nuest nuestro ro país, país, la generac generació iónn de 0R6R 0R6R (los (los pa2opt2tii<1=) +a*ía introducido un patriotismo proftico y social, pero (aun cuando tenía tintes «*í*licos, como co mo en el caso de Elia Eliade de Badu Badullescu escu)) sin sin ning ning!n !n cont contac actto vivo vivo con con la 3gle 3glesi sia$ a$ os os pa2opti2tii, los revolucionarios rumanos, imita*an el anticlericalismo francs$ I tenían ra-ón solamente a medias? porque aunque la ortodo&ia no se +a*ía inmiscuido en la economía y la política, tal como lo +a*ía +ec+o la 3glesia católicoTromana desde el principio de su e&istencia, sin
em*argo, en la poca fanariota<0S=, se impregnó de elementos «e&tran'eros (los griegos) y empe-ó a entrometerse en los asuntos mundanos$ (4unque de una forma meramente pasiva, porque los curas y los mon'es griegos se enriquecían a costa del pue*lo, pero no tenían la vitalidad suficiente para dominar políticamente el país$) a actitud anticlerical de los revolucionarios rumanos era en todo similar a la actitud anticatólica de los franceses$ 9orque la 3glesia ortodo&a era por aquel entonces e0tran+era y sus rique-as salían del país +acia las -onas de donde provenía tam*in su poder secular (comprese (comprese con Boma)$ Cuando la ortodo&ia rumana volvió a ser de nuevo nacional, ya no podía estar en conflicto con el patriotismo$ Joy en día, todos los indicios nos avisan de una nueva intervención del cristianismo oriental, ortodo&o, en la +istoria rumana$ .al irrupción de la ortodo0ia en la +istoria ser fecunda solamente en el marco de una filosofía cristiana de la +istoria (como la de >oaquín de Fiore, por e'emplo) que no escamotee la e&istencia de los pue*los elegidos$ a 3glesia ortodo&a no podr 'ustificar su inters por la +istoria ms que en el marco de la concepción concepción teológica teológica de «pue*lo «pue*lo elegido$ 4+ora 4+ora +a vuelto otra ve- el tiempo tiempo de los «profetas «profetas y de los «filósofos «filósofos de la +istoria, +istoria, continuadores continuadores de >oaquín >oaquín de Fiore$ Es decir, de los que sa*rn +acer fructificar su ense#an-a, que +a fracasado en Occidente, aunque +a*ía visto la lu- en nuestras tierras de Oriente$
4scesis
4ndr Nide confesa*a, en una pgina del cuarto cuaderno de su 'iario (3uvres, vol$ 3A, p$ 725), su sorpresa y alegría al descu*rir esta afirmación de audelaire/ «’ironie considre comme une forme de la macration<00=$ 4ntes de audelaire, el infeli- enamorado y panfletario dans :\ren Uieregaard +a*ía creído en la misma «ironía considerada como una forma de maceración$ ;na «forma de maceración, es decir, una forma de ascesis$ ;na especie de ascesis laica$ 9ero con el mismo fin y con los mismos resultados/ la descomposición del +om*re profano, la aniquilación de las formas superficiales de equili*rio$ Eres irónico contigo mismo, o con tus vecinos, para disolver una cierta ingenuidad o una vulgaridad espiritual? para e&orci-ar, +umillndola, una comodidad demasiado +umana$ ;tili-as, pues, una tcnica perfectamente asctica? porque ste es el o*'etivo de cualquier ascesis/ macerar la carne, disolver los estados de conciencia alimentados por el *ienestar de la carne$ as recientes interpretaciones, que quieren ver en audelaire «un martyr sans nom (Fra (Fran] n]oi oiss "aur "auria iac, c, C+ C+ar arle less du o os) s),, se apoy apoyan an so*r so*ree te&t te&tos os muy muy pare pareci cido dos$ s$ a «voluptuosidad que *usca audelaire tiene la misma función que la «ironía/ maceración, +umillación, descomposición? en una pala*ra, ascesis& El +om*re se +umilla a travs de la «voluptuosidad, se disuelve, se reduce a sí mismo a un plasma amorfo en el cual se agitan la desesperan-a y la inanidad$ e'os de colmar el ser, la voluptuosidad *audelairiana lo empo*rece$ El gesto inaugural de la tcnica asctica es este empo*recimiento del ser +umano/ la reducción del +om*re a lo que le es propio, a lo que no supera la condición +umana? a la inanidad, al gusano, al polvo$ :olamente despus de +a*er macerado al +om*re, ponindole delante de la insignificancia de su condición, la ascesis cristiana (como la asitica, por otra parte) le podr ense#ar el camino de la redención/ la reali-ación del +om*re a travs de su des+umani-ación$ El punto de partida de cualquier ascesis es una desvalori-ación de la vida profana, una «pesimista intuición de la e&istencia +umana como tal$ a misma desvalori-ación de la vida profana, que tantos «mrtires sin nom*re +an puesto en prctica (desde :ócrates +asta Uieregaard), late en el meollo de la ironía *audelairiana$ El !ltimo li*ro de Emil Cioran, -acrimi 2i Sfin4i<05=, es un trgico e'emplo de lo que puede significar la maceración de sí mismo a travs de la parado'a y la invectiva$ GJay tantos pasa'es e&asperantes en este li*ro melancólico, pasa'es que +an desorientado +asta a sus sus ms ms fervie fervient ntes es defe defenso nsores res y que que no pueden ser defendidos #a+o ningún conceptoH 9odemos tomar nota de ellos y sufrir por el autor, pero nada ms$ 8o tienen ninguna e&cusa$ Ofrecen la impresión de que Emil Cioran los +a escrito y pu#licado solamente para aislarse cada ve- ms, para volver ms impenetra*le su soledad, para desanimar +asta a sus
ms íntimos allegados$ ;n +om*re alcan-a la soledad a*soluta cuando ya no puede ser defendido$ Concedamos, pues, que Emil Cioran +a alcan-ado su o*'etivo/ ciertas pginas (muy pocas por cierto) de su li*ro cortocircuitan cualquier comunión viva con el mundo e&terior, con la gente que le quiere, le comprende o le «admira$ 4lguien +a*la*a de su irresponsa*ilidad$ Cono-co *ien a Emil Cioran? y puedo decir que aquí , en algunos pasa'es casi infernales de este li*ro, +a sido ms responsa*le que nunca$ Cioran, que no conoce la ironía, e&plota en cam*io +asta la saciedad la invectiva y la parado'a sarcstica$ -acrimi 2i Sfin4fi es una continua y penosa «maceración$ .odo se disuelve, disuelve, se descompone, descompone, se macera en este li*ro$ o que con una terminología terminología desgastada desgastada llamaríamos «e&ageración, en Cioran reci*e la impronta asctica de la voluptuosidad e ironía *audelairiana$ 9or supuesto que es e&asperante, deprimente y escandaloso, pero como cualquier otro acto de m&ima desesperación, cuando te das cuenta de que nada resiste a esta corrosión, de que la e&istencia, como el sue#o, es una a*surda vacuidad universal$ 9ero Kqu ocurriría si este deprimente y escandaloso espectculo tuviera, en la intención del autor, una finalidad pedagógica y un valor ascticoL El +om*re puede resistir a cualquier forma de descomposición$ ;n fenomenólogo como 4urel Uolnai +a*la*a recientemente del «disgusto como un admira*le instrumento de autodefensa del ser$ .odo lo que sufre un proceso de corrosión (la suciedad, la putrefacción), como todo lo que aparece y crece con una vitalidad monstruosa (las colonias de larvas, los gusanos, los ratones, etc$), produce disgusto por su vertiginosidad? el ser +umano teme su rea*sorción en una categoría m!ltiple, su aniquilación en una masa viva$ I a pesar de todo (Uolnai no lo sa*ía), todas las formas de ascesis utili*an el disgusto como instrumento de contemplaci5n& a meditación so*re cadveres (en la 3ndia, encima de ellos), ellos), la meditación meditación en los lugares lugares a*andonados o en los cementerios son prcticas o*ligatorias$ a suciedad del del cuerpo, la agitac agitación ión fe*ril de los parsitos parsitos,, los +arapos, +arapos, las enfermedades repugnantes (la lepra, el lupus, la viruela, etc$), son tcnicas ascticas fervorosamente fervorosamente recomendadas, recomendadas, por lo menos como e'ercicios introductorios$ El neófito tiene que reali*ar el el disgusto +asta la mdula de su ser/ sentir que todo se descompone en este mundo de ilusiones y dolor, que todo deviene? es decir, «pulula$ :olamente despus de +a*er alcan*ado esta pesimista intuición, el asceta podr instalarse en la indiferencia y la quietud, indiferencia y quietud que le +acen mirar de la misma forma «un peda-o de tierra o una 'oya de oro, un tro-o de carne en la carnicería o el suave muslo de una mu'er, como re-an los antiguos tratados +ind!es$ Creo que el escndalo que provocan ciertas pginas de -acrimi 2i Sfin4fi cumple una función asctica no solamente para su autor (que logra así aislarse de una manera a*soluta), sino tam*in para el lector, que tendr que pasar por la misma «maceración real, aunque orientada en otro sentido$
8ota so*re la conversación
Encuent Encuentro ro en Fnelo Fnelonn ( 'ialogues 'ialogues des morts, WW3A) la siguiente afirmación/ «C’est peu que d’tre *rave dans un com*at, si on est fai*le dans une conversation<02=$ "e parece una de las fórmulas ms logradas del clasicismo$ a o*ligación de entender la forma de vida y de pensamiento que te pertenecen? el de*er de +acerlos inteligi*les para los dems$ 8o a travs de argumentos personales, ni por una iniciativa propia, sino a travs de la interpretación de las normas o de las verdades reveladas$ (9or otra parte, el dogma revelado desempe#a, entre los cristianos, el mismo papel que las normas en la cultura mediterrnea$) En una *atalla eres y permaneces t! mismo? la valentía, el a-ar y el destino deciden so*re la suerte de la luc+a y de tu vida$ En una conversación el punto de apoyo se encuentra fuera de ti mismo$ .!, como individuo, ya no decides nada? porque no se trata de una controversia en la que podrías vencer a travs de la capacidad dialctica, la inteligencia o el ingenio, sino de una conversación que discurre en un nivel e&trapersonal, e&trapersonal, en la que se apela directament directamentee a las normas, a los dogmas, a la verdad y lo a*soluto$ a primera o*ligación impuesta por el clasicismo es entender y +acer al otro que entienda la forma de vida y de pensamiento que te pertenecen$ I esta «transmisión y clarificación se reali-an a travs de la conversación, a travs de la tradicional tcnica socrtica$ .odo lo que no puede ser e&presado e&p resado y formulado for mulado est ms all de las normas$ I el que no se somete al principio de la formulación, formulación, el que no puede conversar, conversar, se coloca ms all de la norma cívica$ Es un *r*aro, porque «+a*la como un e&tran'ero (#ar#ari*o)? o es un mlec!a, es decir, un tartamudo (en la lengua snscrita, mlec!a viene de la raí- mlec!, «*al*ucear, «tartamudear, y significa «*r*aro)$ as lenguas indoeuropeas utili-an para designar la *ar*arie y la falta de civilidad (es decir, decir, de tradici tradición) ón) pala*ra pala*rass que e&p e&presa resann la incapac incapacida idadd de !a#lar correctamente, de +a*lar la «lengua verdadera (griego, snscrito)$ os que conocían y emplea*an solamente lenguas vernculas eran llamados «*r*aros$ a distinción entre categoría y vida, entre categoría y acontecimiento se formula*a, tanto en la 3ndia como en Nrecia, en trminos lingMísticos/ por un lado esta*a la lengua verdadera (ve+ículo de la tradición y de la ra-ón) y, por el otro, la lengua vern%cula (ve+ículo de la vida y de las emociones)$ :erí :eríaa tant tantoo ms ms inte interes resan ante te sa*er sa*er cómo cómo +a conce concept ptua uali li-a -ado do el 'uda 'udais ismo mo esta esta clasif clasifica icación ción de los pue* pue*los los y de los +om*re +om*res$ s$ 4dems 4dems de goi (en (en plura plurall go6im), que signif significa ica «pu «pue*l e*loo e&tran' e&tran'ero, ero, no 'udío 'udío,, encontr encontramo amoss en Oseas Oseas la e&p e&presi resión ón lo6ammi («pue*lo que no es mío)$ «"ío, es decir, de Ia+v$ Ia no es la +istoria ni la civilidad la que divide los pue*los, sino %ios$ 9ara los 'udíos, solamente 3srael era pue*lo en el verdadero sentido de la pala*ra? porque era el !nico pue*lo elegido, predestinado para elevarse por encima del devenir universal, y +asta por encima de la +istoria, para traer al
mundo la 'usticia y el amor, prefigurando el paraíso en la tierra$ os otros, «los pue*los corrupt corruptos os del paganism paganismo, o, eran, eran, para el 'udais 'udaismo, mo, lo6am, qu quee sign signif ific icaa nopue#lo (%$ 5 att attes es,, Apologia dell67#raismo, Boma, 0157 0157,, p$ 6R)$ 6R)$ 9ara 9ara los 'udío 'udíos, s, ser un pue#lo significa +a*er sido elegido por %ios, estar cerca de l, ser amado por l$ El resto de la +umanidad simplemente pertenecía a la nada espiritual y tnica$ Eran «pue*los ilusorios porque participa*an en el devenir universal como participa un organismo o un u n ser vivo que, despus de vivir un tiempo, perece$ 3srael, al tener su punto de referencia fuera del campo de la +istoria, no participa*a en este devenir y no era destruido por el tiempo$ Es el !nico pue*lo que no se agota en la vivencia, que no es corrompido por la vida$ 4sí como :ión no +a sido alcan-ado por el %iluvio (seg!n la tradición ra*ínica), así tam*in el pue*lo de 3srael no quedar atrapado en la +istoria, en las grandes aguas del devenir$ a distinción entre griegos y *r*aros, entre los +ind!es arios y las po*laciones autóctonas, no arias, se formula*a como incapacidad de conversaci5n& 8o puedes +a*lar de las normas con alguien que «tartamudea, con alguien que no comprende *ien tu idioma$ Entre los 'udíos y los noT'udíos la distinción se formula*a en trminos de amor y #oda& 3srael +a sido elegido por %ios$ Ia+v es el 8ovio del pue*lo israelita$ Entre 3srael y su %ios se esta*lecen la-os de amor y de destino$ Ia+v Ia+v +a elegido a la que ser su s u novia en la tierra, la !nica que ser fecunda, que reci*ir el mensa'e divino (monoteísmo) y al "esías$ Ia+v amena-a y castiga a menudo a su pue*lo elegido, pero nunca lo a*andona (4ntiguo .estamento), .estamento), porque est predestinado8 %ios !a amado, !a elegido& En la 3ndia la +umanidad se dividía así/ por una parte esta*an los arya (los no*les), que +a*la*an una lengua «divina, «construida (el snscrito)? por otra parte esta*an los anarya, los que no tenían ni tradición, ni civilidad, ni ley, los que «*al*ucea*an (mlec!a)$ En Nrecia, la +umanidad (+asta 4le'andro "agno) se dividía entre los que conocían el idioma de las normas y los que conocían solamente los idiomas vernculos$ En am*as situaciones la distinción se +acía sin tener en cuenta al pue*lo$ o que separa*a a los +om*res entre ellos era la ley civil y racional, la tradición espiritual, la comprensión de las normas, todos ellos criterios impersonales$ El 'udaismo dividía la +umanidad en trminos nupciales/ por un lado esta*a la 9ovia y por el otro la multitud multitud de los noTelegidos$ noTelegidos$ :olamente la voluntad de Ia+v Ia+v puede separar a los +om*res entre ellos, y no la tradición, ni las normas o la «conversación$ a voluntad que elige, ama, recompensa y fecunda a un solo pue*lo$
9roto+istoria o edad media
as naciones europeas se dividen en dos grandes grupos/ las naciones que +an tenido una Edad "edia gloriosa, de cuyas convulsiones +a *rotado el Benacimiento, y las que +an tenido una Edad "edia incipiente, insignificante, derivada$ a primera categoría de naciones +a creado, en gran parte, la +istoria civil, espiritual y cultural de Europa$ 9or un lado, porque la Edad "edia occidental +a*ía sa*ido conservar y fructificar la +erencia grecoTlatina, grecoTlatina, que es el fundamento de toda creación creación duradera en nuestro continente$ continente$ 9or el otro lado, porque la Edad "edia +a*ía «convertido «convertido a la +istoria el caos tnico tnico instaurado en Europa despus de la invasión de los *r*aros$ Es o*vio que la cultura europea moderna es creación casi e&clusiva de aquellos pue*los que +an tenido una Edad "edia gloriosa? incluso la «conciencia +istórica, o ms recientement recientementee el +istoricismo, +istoricismo, tam*in tam*in son creación creación suya$ Cuanto ms insignifica insignificante nte es la +erencia medieval de un pue*lo, tanto ms confusa es su conciencia +istórica$ 3ncluso la misma noción de +istoria tiene otro rango en una cultura que +a pasado por una Edad "edia gloriosa (Francia, 4lemania, 3talia, 3nglaterra)$ Cuando el siglo W3W puso en circulación el +istoricismo, confiriendo valor espiritual a cualquier +ec+o +umano que se integra en la duración temporal, esta concepción alcan-ó un &ito ms duradero en los países con una gran tradición medieval$ El siglo W3W puede ser llamado, con toda propiedad, el siglo de la +istoria$ 4unque se +a*ían +ec+o grandes esfuer-os para el conocimiento de cualquier !istoria, las elites se interesa*an solamente por el pasado de ciertos países$ .odo lo que se escri*ía so*re los dems países solamente tenía relevancia en calidad de material, de información suplementaria o argumento para sostener ciertas tesis +istóricas$ .enemos que reconocer que el siglo W3W, como el principio del siglo WW, +an manifestado una curiosidad ms duradera y ms sincera por una tri*u africana o australiana (evidentemente, por su valor etnogrfico y sociológico) que por la +istoria de Bumania, ulgaria o :er*iaD El indi ndividu vidual alis ismo mo,, el posi posittivism vismo, o, el ant antisim isim*o *ollismo ismo,, qu quee deri deriva va*a *ann espontneamente de la mentalidad +istoricista de este siglo, no podían encontrar un filón demasiado atractivo en el pasado de los pue*los que carecían de una Edad "edia gloriosa? es decir, sin grandes personalidades, sin muc+os acontecimientos, sin muc+os documentos escritos, sin grandes transformaciones sociales y económicas que pudieran fundamentar con *rillante- una teoría$ 9ero 9ero todo todoss los los indi indici cios os nos nos de'a de'ann adiv adivin inar ar un unaa tota totall supe supera raci ción ón tant tantoo del del +istoricismo, por una parte, como del individualismo y del positivismo, por otra$ Joy en día, el acontecimiento +istórico como tal, que el siglo pasado considera*a como un +ec+o !ltimo que tenía su ra-ón de ser en sí mismo, empie-a a perder su autonomía, para tran transfo sform rmar arse se en la mani manifes festa taci ción ón de una una fuerfuer-aa irra irraci ciona onall («de («dest stin ino o,, «p «pue* ue*lo lo, ,
«sím*olo)$ El !ec!o +a de'ado de ser interesante en sí mismo o integrado en la serie de los !ec!os !umanos que le preceden (económicos, políticos y sociales)$ "s *ien, el +ec+o nos interesar casi siempre como una «clave para la comprensión de un +om*re o de una poca? l sim#oli*a, totali*a& 4dems, el desinters +acia el «acontecimiento +istórico, sea en el m*ito individual, sea en el m*ito comunitario, y dentro de sus coordenadas de tiempo y lugar, va en aumento desde el principio del siglo WW$ Becurdese el inters creciente por la etnografía, el follore, la sociología y la antropología, que van ms all del acontecimiento para *uscar la categoría$ .odas estas ciencias intentan sacar al +om*re de la Jistoria, para tener en cuenta solamente la Aida$ 9ero tam*in ellas (creación del «espíritu +istórico del siglo W3W) parecen perder en los !ltimos veinte a#os su primacía$ a vida del +om*re como tal interesa cada ve- menos y pasan a un primer plano otras realidades? no la categoría social o económica, sino el destino o el sím#olo$ Vste es el origen de la pasión que las elites de +oy manifiestan por la pre+istoria, las ra-as, las mitologías y los sím*olos$ El siglo W3W +a sido el siglo ms limitado y reduccionista reduccionista de todos los que +a conocido la cultur culturaa europea? europea? el sím#olo le era totalmente inaccesi*le (por eso el sim*olismo se vio for-ado a *uscar un precario refugio en la poesía y en la francmasonería, así como la «mística encontró refugio en el espiritismo)$ .odo lo que acontece en la actual cultura europea nos +ace pensar en una pronta restauración del sím*olo como instrumento de conocimiento$ 9or a+ora, o*servamos que en ciertos países el inters se +a despla-ado desde la !istoria a la proto!istoria proto!istoria$ a tradición ya no se *usca en la Edad "edia, sino en la cuna de la ra-a, en los orígenes del pue*lo$ ;n «documento pre+istórico, que +ace cincuenta a#os interesa*a solamente a los especialistas, adquiere +oy en día un valor espiritual , sim*ólico$ El pasado ya no es valorado por el mero +ec+o de +a*er sido !istoria, sino ms *ien por el +ec+o de ser originario$ El documento +a sido despla-ado a un segundo plano, quedando solamente el signo, el sím*olo$ 3nteresa menos la crítica te&tual o la cronología e interesa ms la la comprensi5n del documento$ 9ero esta «comprensión no +a alcan-ado todavía muc+o rigor formal, porque va ms all de la letra del te&to o de la forma del monumento, para encontrar el sím*olo que se manifiesta allí$ I el «sím*olo est presente y se e&presa, a veces, con muc+a ms pure-a y rique-a ('unto a otros fenómenos originarios) en las -onas sin +istoria, pero con muc+a pre+istoria, que en las -onas que +an podido tener una participación gloriosa en la +istoriaD Bumanía no +a tenido una gran Edad "edia, pero +a tenido una pre+istoria por lo menos de igual envergadura, si no superior, a la pre+istoria de las grandes naciones creadoras de cultura de Europa$ Frente a la Edad "edia germnica, la Edad "edia rumana palidece? frente al Benacimiento italiano, nuestro «Benacimiento del siglo WA333 apenas despuntó$ 9ero la proto+istoria nos pone en pie de igualdad con las etnias germnicas y latinas$ :i las nuevas disciplinas se consolidan definitivamente en la cultura europea, entonces se empe-arn a valorar aquellos pue*los que +an tenido una proto+istoria y no los que +an tenido una Edad "edia$ 9or paradó'ica que pare-ca esta afirmación, no de'a de ser cierta$ K4caso la visión revolucionaria no +a colocado a Busia, por su mesianismo, a la ca*e-a ca*e-a de los los pue pue*l *losL osL (El mesian mesianis ismo mo es, es, por otra part parte, e, la mism mismaa pasi pasión ón po porr la proto+istoria, pero entendida re#ours
fecunda y un Benacimiento magníficoL K4caso la cultura contempornea no aprecia ms :iria o el Cucaso, por su +istoria y proto+istoria, que %almacia, con una Edad "edia tan floreciente y un Benacimiento tan originalL Estando así las cosas, podríamos +a*lar de la «oportunidad que tiene Bumania de valorar tanto espiritual como culturalmente su pasado$ 8o es nuestra «+istoria la que interesar a Europa$ 9or otra parte, la +istoria propiamente dic+a interesa cada ve- menos a los creadores de cultura, +a*iendo llegado a ser alimento predilecto de las masas$ (K8o recuerdan que la literatura «transformista floreció en la poca de decadencia de las teorías evolucionistas, cuando los *iólogos intenta*an nuevas +ipótesisL) Bumania, sin em*argo, tiene una proto+istoria y una pre+istoria so*resalientes$ 4quí, en nuestras tierras, +a crecido un «fenóm «fenómeno eno orig origin inari ario$ o$ 4q 4quí uí se +an +an mani manifes festa tado do sím*ol sím*olos os y se +an +an tran transm smit itid idoo tradiciones$ Este tipo de realidades, que +ace treinta o cuarenta a#os solamente desperta*an un inters mediocre, +an llegado a ser inaprecia*les$ El origen de un sím*olo vale tanto como el descu*rimiento de una dinastía de faraones$ El descu*rimiento de la cuna de un pue*lo interesa ms que descifrar d escifrar un manuscrito medieval$ Ia no es una gloria tan coti-ada ser creador de +istoria$ "uc+o ms valioso es pertenecer a una «ra-a originaria$ Es y no es tan interesante tener una gran literatura, un arte moderno valioso o una filosofía personal$ .odas .odas estas cualidades se +an visto superadas por la participación participación en una gran «tradición «tradición espiritual que +unde sus raíces en la proto+istoria y que la +istoria no +a +ec+o ms que adulterar$ :iendo ste el fenómeno espiritual que se est perfilando en Europa, tenemos que reconocer que se adapta de maravilla a las condiciones de Bumania$ Ja*ría sido muy difícil +acer fructificar nuestra e&periencia cósmica e +istórica en la línea del siglo W3W$ Otros pue*los nos superan de entrada, por nuestra carencia de una Edad "edia o de un Benacimiento significativos$ Joy, en cam*io, Joy, cam*io, las circunstancias circunstancias +an cam*iado$ :i supiramos supiramos sacar provec+o provec+o de la igualdad que se nos ofrece, y aunque este momento espiritual no durara ms que una o dos generaciones, estaría garanti-ada nuestra presencia en la cultura europea$ 8o olvidemos que los países escandinavos +an entrado en la cultura europea a finales del siglo pasado, cuando el individualismo y el drama protestante domina*an Francia, y !an so#revivido a la desaparición del momento espiritual que les a*rió las puertas$ En cam cam*io, *io, el desc descu* u*ri rim mient ientoo del del sím sím*o *olo lo,, desp despu uss de tanto antoss sigl siglos os de incomprensión, no podr fecundar la espiritualidad europea solamente en el espacio de unas cuantas generacionesD 9ara sacar provec+o de este momento espiritual se necesitarían, sin duda, algunas reformas que, sin +acernos vanas ilusiones, no se van a reali-ar demasiado pronto$ 9or e'emplo, nuestro preocupante inters por la «+istoria tendr que ser corregido por la urgente promoción de los estudios de antropogeografía, pre+istoria, proto+istoria y follore$ as investigaciones «*alcanológicas tienen que ser llevadas +asta su límite e&tremo/ la pre+istoria de la península$ I, por supuesto, +an de ser entendidas con un espíritu radicalmente distinto al espíritu que guía los esfuer-os de nuestros investigadores actuales$
.enemos nemos que que sa*er sa*er adivinar me'or la orientación espiritual de la futura Europa para adelantarnos y llegar a los resultados precisos que los investigadores e&tran'eros se vern for-ados a tomar en cuenta$ :i no, volveríamos a caer en el mismo drama que +a marcado a la ciencia rumana? +acer filología romnica despus de que sta +aya sido iniciada en otros países? +acer follore despus de +a*er sido descu#ierto por otros, siguiendo siempre el modelo de otros países$ Esta ve-, el momento espiritual europeo nos coloca en primera fila, y, al tener el «fenómeno originario en casa, podríamos superar nuestra «mala famaD
El miedo a lo desconocido
El «miedo a lo desconocido es y +a sido, desde los tiempos de ucrecio, un prete&to «suculento para todos los filósofos y aficionados que se proponían descifrar los orígenes orígenes de las religiones, religiones, de las mitologías mitologías y de la moral$ Cada ve- que quieres +a*lar del «+om*re primitivo, te ves casi o*ligado a recordar su miedo a lo «desconocido, fuente inagota*le de todas las creencias, supersticiones o &tasis que +an +umillado la condición +umana$ El miedo a lo desconocido +a ofrecido a los eruditos la oportunidad de verter sus ca'ones repletos de fic+as, y no sería e&agerado decir que la *i*lioteca escrita por el prodigioso sir s ir >ames Fra-er se fundamenta, fund amenta, en gran parte, en el miedo y la fascinación que q ue lo desconocido +a e'ercido siempre so*re el alma +umana$ 9or eso sería arriesgado lan-arnos lan-arnos a una discusión en la que los argumentos, argumentos, en su mayoría de orden estadístico, estadístico, se suceden a lo largo de miles y miles de pginas de etnología, antropología y follore$ 9ero podríamos apuntar aquí unas cuantas o*servaciones relacionadas con este controvertido pro*lema y dedicrselas a aquel lector inconformista y curioso para quien escri escri*o *o,, casi casi e&cl e&clus usiv ivam amen ente te,, desde desde +ace +ace *ast *astant antee tiemp tiempo$ o$ "e parece parece que no se +a su*raya su*rayado do con suficient suficientee clarida claridadd uno de los motivos motivos del miedo a lo desconocido, del mied miedoo que e&pe e&perim rimen enta tann los los «+om «+om*re *ress primi primiti tivos vos, , les moins moins civili civilis$s s$s
+errero o del aeroplano$ 4 veces, este miedo puede revestir formas paro&ísticas? y aun cuando los +om*res +an de'ado de tem*lar o aullar delante de una cosa o persona nueva, el miedo seguir persistiendo$ 8ada puede atemori-ar ms el alma del +om*re que el miedo que provoca la deformación o la supresión de la imagen que tiene de sí mismo$ El miedo a la muerte +unde sus raíces en esta misma imagen antropológica$ 8o es ste el lugar adecuado para plantear este grave pro*lema, pero intentar demostrar, en un tra*a'o de pró&ima aparición, que el miedo a la muerte +unde +u nde sus raíces en e n la negaci5n de la idea que el !om#re se !a construido de sí mismo $ o que llamamos «sentimiento de la muerte y «miedo a la muerte es, por otra parte, algo derivado? al principio e&istía solamente el miedo a los muertos $ 9ero volvamos al prete&to de este artículo$ %ecíamos que, muc+as veces, el miedo a la destrucción de la imagen que el +om*re se +a +ec+o de sí mismo puede revestir formas ms *enignas$ En este caso se limita a un tipo de resistencia pasiva, que pocas veces llega a convertirse en violencia$ El mensa'e de Cristo, que invierte la caduca economía del mundo antiguo, es decir, que arranca de cua'o la antigua imagen que el +om*re se +a*ía for'ado de sí, no tropie-a solamente con la violencia del paganismo, sino tam*in con la resistencia pasiva de cada +om*re, de cada convertido por separado, porque a cada uno le costar desprenderse de ciertas formas mentales y de una cierta imagen antropológica$ 9ero Kqu ocurre con la resistencia que encuentran los genios, los reformadores, los moralistas o cualquier otra personalidad creadoraL .odo esto es demasiado o*vio para que sigamos insistiendo en ello$ Jagamos en cam*io una peque#a o*servación, relacionada e&clusivamente con el mundo moderno (postmedieval) que go-a, en sus m*itos ur*anos, de una gran variedad de imgene imgeness antropo antropológ lógica icas? s? en el mundo mundo moderno moderno despier despiertan tan desconfi desconfian-a an-a y temor temor no solame solamente nte las personali personalidad dades es fuertes fuertes,, sino sino cualqui cualquier er +om*re +om*re vivo vivo que, por su mera presencia, puede llegar a ser una fuente inagota*le de inquietudes y angustias$ .al como decía Noet+e (que entendía perfectamente la lógica y el sím*olo del +om*re moderno), cada individuo es un demonio para el compa#ero en cuya intimidad vive durante un lapso ms largo de tiempo? es decir, la fuer-a que aca*ar por arruinar la imagen que tiene de sí$ Estos +ec+os se vuelven, sin duda, cada ve- ms evidentes a medida que avan-amos +acia las fuentes de la vida espiritual del +om*re$ Jemos demostrado en un li*ro muy reciente (:osmologie :osmologie 2i alc!imie alc!imie #a#ilonian; #a#ilonian;<06=, Aremea, 012X) que la importancia del descu*rimiento de la metalurgia radica*a en la modificación que +a*ía provocado en la imagen que el +om*re tenía de sí mismo y del cosmos, y no en el mero +ec+o en sí o en sus consecuencias tcnicas y civili-adoras$ a revolución mental provocada por la presencia de los los meta metale less en la e&pe e&peri rien enci ciaa +um +umana, ana, pres presen enci ciaa qu que, e, a trav travs s de inte interm rmin ina* a*le less +omologaciones, !a permitido el acceso del +om*re a otros niveles cósmicos, inalcan-a*les +asta entonces, precede y so*repasa en importancia al progreso tcnico y económico que la e&plotación de los metales +a*ía facilitado$ En otro li*ro, -os orígenes de la agricultura, intentar demostrar la revolución mental que +a desencadenado el descu*rimiento de las tcnicas agrícolas y de los ritmos de la vida vegetal$ Estos descu*rimientos (por no recordar otros como el calendario, la astronomía, etc$), al poner al +om*re en contacto con cosas tan nuevas, no solamente llegaron a adoptar durante muc+o tiempo el disfra- de las tcnicas
mgica mgicass (porque (porque atemori*a#an), sino que tam*in destruyeron por completo la antigua imagen que aqul tenía de sí mismo$
Aaloraciones Aaloraciones de la Edad "edia
O*servemos cómo 'u-ga*an y, so*re todo, qu$ veían los +om*res del siglo WA333 y del W3W en la Edad "edia/ +orrores y tinie*las (en el siglo WA333) y el arte gótico (en el siglo W3W)$ .odo el siglo WA333 est dominado por la «novela negra inglesa y la polmica volteriana contra el monacato y los valores cristianos$ os li*ros de mayor &ito del siglo WA333 eran novelas que tenían como +roe a un fraile perverso y la acción tenía lugar casi siempre en la «edad oscura (dar< age)$ :olamente a+ora los +istoriadores literarios +an empe-ado a e&plorar la influencia que +an tenido novelas como T!e Mon< (0X17) (0X17) de "$ N$ <07= <0P= e^is o T!e "talian, or t!e :onfessional of t!e lac< 1enitent (0X1X) de 4nne Badcliff so*re toda la literatura europea del siglo W3W$ Joffmann, [alter :cott, Aictor Jugo, Neorge :and, etc$, todos +an escrito *a'o la impresión producida por estas novelas negras po*ladas de monasterios tene*rosos, frailes malvados, doncellas que eran víctimas inocentes del sadismo monacal, de crímenes y +orrores sin fin$ "e permito recomendarle al lector curioso una admira*le y documentada monografía so*re estas novelas frenticamente anticatólicas y de espíritu antimedieval/ -a carne, la morte e il diavolo nella letteratura romantica ("iln_Boma, 0120), de "ario 9ra-<0X=$ a pasión con la que se devora*a este tipo de literatura en aquella poca no podía ser igualada ms que por el frenesí de la polmica antimedieval y anticatólica de Aoltaire oltaire una generación antes$ 9ara el espíritu del siglo WA333 la Edad "edia se reducía al +orror, a la infamia, a los paisa'es l!gu*res, a los crímenes y el sadismo$ ;na verdadera «edad oscuraD os romnticos del siglo W3W +an descu*ierto en la Edad "edia el arte gótico$ a sensi sensi*il *ilid idad ad romnt romntic icaa supo supo valo valorar rar el ideal ideal y la vida vida medi medieva evall po porqu rquee antes antes +a*í +a*íaa descu*ierto el arte gótico? +a*ía descu*ierto las ruinas de los castillos, las som*ras de las catedrales, las pinturas de los monasterios$ :olamente despus de +a*er pasado por este +ec+i-o visual, el Bomanticismo pudo descu*rir algunos de sus propios ideales en la Edad "edia? la sencillesencille- de la vida, el pat!os erótico, la autenticidad, el «fenómeno originario, etc$ 9ero no es difícil darse cuenta de que, detrs de esta valoración emptica de la Edad "edia que +a*ía reali-ado el Bomanticismo, todavía su*sistían algunos elementos de la actitud negativa y polmica del siglo WA333$ 4nte todo, se conserva lo «pattico, lo «e&tra#o, lo «l!gu*re de las novelas de e^is y Badcliff$ .am*in su*siste en el Bomanticism Bomanticismo, o, aunque latente, la actitud actitud crítica crítica de un Aoltaire ltaire frente a la escolstica, escolstica, por e'emplo$ a mística medieval, el «dia*olismo y la «magia medieval son descu*rimientos del Bomanticismo, pero santo .oms, y la escolstica en general, siguen permaneciendo e&tra#os para el genio romntico, como lo +a*ían sido para los enciclopedistas$ El tomismo es un descu*rimiento reciente$ a Summa t!eologiae t!eologiae volvió a circular en los seminarios catól católic icos os a part partir ir de la segund segundaa mita mitadd del del sigl sigloo W3W W3W (+ast (+astaa ento entonce ncess se estud estudia ia*an *an principalmente comentarios y compendios tomistas)$ I la actualidad de la Summa en la cultura europea profana se de*e, en gran parte, a "aritain y Nra*mann? es decir, a las dos !ltimas dcadas$
Niotto +a sido descu*ierto por los romnticos, como tam*in la poesía de los trovadores$ 9ero la 'ivina :omedia y el franciscanismo, dos grandes cum*res de la Edad "edia, no +an de'ado ninguna +uella en el espíritu de los romnticos$ %ante era demasiado teólogo, demasiado «sim*ólico y de una profundidad que el Bomanticismo no podía enten entender der// la profun profundi dida dadd dog dogm mti tica ca$$ Ja Ja*í *íaa demasi demasiad adaa «fuer«fuer-a a en %a %ant ntee y eat eatri ri-recorda*a demasiado las virtudes teologales, casi no tenía *iografía$ I el Bomanticismo, que +a*ía e&altado a 4*elardo y Eloísa (vidas patticas), o a la aura de 9etrarca (río de lgrimas), pasó respetuosamente al lado de eatri-$ :an Francisco +a*ía sido descu*ierto por el protestantismo (Beuss, :a*atier) y por los laicos sentimentales como Benn, en la segunda mitad del siglo W3W$ 9ara los romnticos, san Francisco era demasiado sencillo, y su patetismo, poco *iogrfico$ 8o +a*ía acontecimientos trgicos en la vida de san Francisco$ 9or eso los romnticos, cuando +an querido entregarse a emociones fuertes y «vivencias místicas frenticas, +an re*uscado en otros sectores del cristianismo$ I +an descu*ierto a :^eden*org, a 9aracelso, a 8ostradamus$ as generaciones ilustradas, que +a*ían sido las predecesoras inmediatas de los romnticos, tenían gustos todavía ms impuros$ Cagliostro, el martinismo, los «magneti-adores, los rosacruces y otros misterios degradados constituían el alimento espiritual de las elites anteriores o contemporneas a la Bevolución Bevolución francesa$ El siglo WA333 degusta*a degusta*a con voluptuosidad voluptuosidad T!e Mon< de e^is, porque esta novela veía en el monacato católico una fuente de +orrores, al mismo tiempo que el «siglo de las luces se +undía complaciente en un ocano de pseudo misterios y mistagogías de una incompara*le mediocridad$ Jace tiempo escri*í un peque#o artículo («a («ass `luc `luces es’’ de sigl sigloo WA WA33 333 3,, en :uv=ntul ), ) , en el qu quee come coment nta* a*aa *revem *revement entee los los <0R= vol!menes vol!menes de 4ugu 4uguste ste Aiatte Aiatte -es sources occultes du romantisme (9arís, 015R) y no tiene sentido volver so*re este tema$ Je demostrado demostrado innumera*les innumera*les veces, y a*arcando a*arcando una multitud multitud de fenómenos, fenómenos, que la mistagogía mistagogía y el pseudo ocultismo triunfan triunfan en las pocas en que la mística y la metafísica son atacadas$ @uien +a de'ado de creer en los misterios, creer en el mesmerismo y la francmasonería? quien +a de'ado de creer en el paraíso, creer en el espiritismoD I Gqu diferencia a*ismal encontramos entre la concepción de nuestro siglo y la «valoración de la Edad "edia +ec+a por los siglos WA333 y W3WH 9ienso so*re todo en los pensadores que todavía viven y que +an pu*licado en los !ltimos veinte a#os$ 8uestra poca sa*e ver algo algo totalmente distinto en la Edad "edia$ En primer lugar, empie-a a ver y a entender el sím#olo (%ante, (%ante, la arquitectura arquitectura sagrada, los fedeli d6amore con sus lengua'es lengua'es «secretos) y la primacía de lo trascendente (metafísica y mística)$ En segundo lugar, +a descu*ierto la presencia en la Edad "edia de lo que se puede llamar una continuidad tradicional/ los gremios, los estados feudales, el papado$ 9ero el paisa'e monstico, la canción del trovador y el patetismo de los idilios de un ca*allero +an de'ado de fecundar la vida interior del +om*re moderno$ Vl es capa- de ver en en la Edad "edia algo completamente distinto a lo que veía el +om*re del siglo WA333 que leía a e^is, o el romntico del siglo W3W que leía a Aictor Jugo$ :i pensamos en "aritain, Ben Nunon, Evola, 4nanda Coomaras^amy, etc$, podemos decir, sin miedo a ridiculi-ar el verso de Camil 9etrescu, que las elites de +oy ven en la Edad "edia las ideas$ o que ms asom*ra e interesa en ella es su inmensa capacidad racional y sim*ólica$ Joy en día, cuando cuesta tanto convencer a alguien (y +ace die- a#os era todavía peor) de la autonomía de la idea y de la eficacia
espiritual del sím*olo, volvemos con admiración la mirada +acia la pasión por el dogma, la alegoría y el sim*olismo de la Edad "edia$ a Epoca "oderna "oderna empie-a empie-a a superar superar la visión visión !ist5rica de la Edad "edia (cf$ nuestro artículo «9re+istoria y Edad "edia)$ I al mismo tiempo descu*re los valores trans+istóricos que esta poca tan tradicional y espiritual al*erga*a$ ogramos desprendernos de la !istoria medieval, despus de +a*ernos desprendido del paisa+e medieval (con el ocaso del Bomanticismo)$ I descu*rimos con asom*ro que la especificidad de la Edad "edia no reside tanto en su «+istoria o en su «devenir como en lo que tiene de supra+istórico, tradicional y universal/ su sim*olismo y su metafísica$
%e una antropologíaD
;no de los ms sa*ios +om*res de nuestro siglo, el venera*le sir >ames Fra-er, concl con cluí uíaa su o*ra o*ra maest maestra, ra, la cle* cle*re re >ama dorada (en 05 tomos), con unas cuantas consideraciones pesimistas so*re la condición +umana$ El sa*io ingls sostenía que toda la +ist +istor oria ia +uman +umanaa se reduce reduce a una caden cadenaa inin ininte terru rrump mpid idaa de críme crímene nes, s, estu estupi pidec deces es e im*ecilidades incura*les$ En todos los sitios y en todas las pocas el +om*re +a pensado mal, no +a aprendido nada o se +a +ec+o una idea errónea de las cosas? y, lo que es ms grave a!n, nunca +a logrado desprenderse de estos pecados ancestrales$ El «primitivo no +a muerto? ni el mensa'e de >esucristo, ni el Benacimiento, ni la ciencia moderna +an logrado acallarle$ 9ero la antropología antropología y la etnología etnología actuales no se atreven a ser tan pesimistas pesimistas como lo eran cuando Fra-er levanta*a levanta*a su monumental monumental o*ra$ En primer lugar, ya nadie cree en la «*ar*arie y la «*rutalidad de los primitivos$ a vida mental de stos es tan co+erente como la de los griegos antiguos, pero se manifiesta en otras fórmulas$ I lo que +a*ía entristecido a sir >ames, lo que l llama*a la «estupide- del primitivo, transmitida por tradición +asta el +om*re moderno, constituye para nosotros, qui-, el ms preciado o*'eto? porque estas «estupideces «es tupideces son una serie de afirmaciones teóricas que forman en con'unto un sistema, y su !nico pecado consistía en no +a*er sido comprendidas por la mente europea, saturada por el positivismo y el dar^inismo$ a etnografía moderna +a empe-ado a apreciar el profundo valor metafísico de los sím*olos y los ritos, los cuales para sir >ames Fra-er solamente eran síntomas y gestos de una congnita «estupide-$ 4l contrario/ +oy en día muc+os pensadores y filósofos de la cultura intentan descifrar el sentido de estos «sistemas caídos en el olvido incluso para las sociedades que los +an creado$ .odos los esfuer-os de la etnografía y de la filosofía de la cultura parecen converger en un mismo resultado, de considera*le importancia/ la primacía que tiene la teoría en cualquier sociedad !umana de tipo arcaico$ :i antes se pensa*a que solamente la «civili-ación europea supo li*erar al +om*re de su esclavitud a las necesidades *sicas de la vida para +acerle capa- de contemplación, +oy en día se o*serva que la teoría tiene, en la mayoría de las culturas arcaicas y «primitivas, una primacía que nunca +a vuelto a alcan-ar ni en las ms perfectas y modernas sociedades europeas$ El +ec+o de que esta teoría no se apoye ni en Euclides ni en Coprnico es otra +istoria$ 9ero sa*ía integrar al +om*re en el cosmos y conferirle una dignidad que +a perdido +ace muc+o tiempo dentro de las culturas modernas$ a +omologación del +om*re con el cosmos, el mito de la criatura criatura en relación relación orgnica con la naturale-a, naturale-a, la solidaridad de la persona +umana con la vida glo*al que la rodea, que la precede o la sigue, son «teorías que nada tienen que envidiar a las modernas concepciones so*re el sentido y la dignidad del +om*re$ 9ero no es este grave asunto el tema de nuestra presente nota$ :olamente pretendía ilustrar la afirmación que +a*ía +ec+o antes, es decir, la afirmación de la primacía de la
teoría en cualquier sociedad +umana tradicional, a partir de unos cuantos e'emplos que +an *urlado +asta a+ora la vigilancia de los filósofos de la cultura$ 9ongamos un caso/ los que q ue intentan intentan demostrar que lo económico no siempre siempre prevalece en una cultura, +a*rían podido encontrar un e&celente argumento en la +istoria de la tela llamada
civili-ados$ En todo el mundo circumpacífico e&iste un comple'o iconogrfico con sentido cosmológico que representa a un monstruo con un +om*re en la *oca$ El sentido de este comple'o iconogrfico es que el primer +om*re +a*ía nacido de la divinidad de las tini tinie* e*la las$ s$ En ning ninguna una de las las cultu culturas ras circ circum umpac pacíf ífic icas as que cono conocen cen este este comp comple le'o 'o iconogrfico se practica el cani*alismo, pero los +a*itantes de algunas islas del 9acífico no +an comprendido su sentido cosmológico y +an interpretado el sím*olo en su sentido concreto, llamando a la divinidad protectora «devoradora de +om*res$ a antropofagia es el resul resulta tado do de una una teorí teoríaa degen degener erada ada,, de la inca incapac pacid idad ad de compr comprend ender er el sent sentid idoo cosmológico de un sím*olo iconogrfico$ 4l +a*er visto a un +om*re entre las fauces de una divinidad de las tinie*las, +an creído que el +om*re es «devorado por la divinidad y +an inaugurado los sacrificios +umanos$ 4sí se +an vuelto antropófagos$ 9or elementales que sean sean esto estoss deta detall lles, es, nos nos ayuda ayudarn rn,, sin sin em*ar em*argo go,, a comp compre rende nderr el papel papel qu quee +a desempe#ado la teoría en la +istoria de la +umanidad y, so*re todo, la incapacidad de los +om*res para conservar una concepción cosmológica o teológica$
as cosas ocultasD
9ara las así llamadas «sociedades primitivas cualquier secreto es una amena-a$ ;na cosa oculta se vuelve, a travs del mismo acto de su ocultamiento, una amena-a para el +om*re y la colectividad$ ;n pecado es, sin duda, un +ec+o grave$ 9ero un pecado que no +a sido confesado, que +a sido ocultado, se transforma en un +ec+o terri*le$ as fuer-as mgi mgicas cas que despi despiert ertaa su ocu ocult ltac ació iónn pue puede denn lleg llegar ar a amena amena-ar -ar alg! alg!nn día día a toda toda la comunidad$ 9or eso, cuando ocurre alguna desgracia, cuando desaparece la ca-a, cuando de'a de llover o se pierden las *atallas, todos los miem*ros de la colectividad se apresuran a confesar sus pecados$ a confesión se +ace casi siempre antes o durante una actividad esencial para la vida de la comunidad (ca-a, pesca, guerra, etc$)$ Cuando los +om*res luc+an en la guerra o ca-an, las mu'eres que se quedan en casa confiesan sus pecados, para que el secreto ocultado no arruine los esfuer-os de los +om*res$ 9or eso las sociedades primitivas y arcaicas no conocen los secretos particulares, personales$ Cada uno sa*e so*re s o*re su vecino todo lo que tiene que ver con co n su vida íntima$ I no solamente lo sa*e por la confesión de los pecados, sino por la forma de convivir a diario con la gente que le rodea$ Je evocado en otra ocasión el valor sim*ólico sim*ólico de las *andas del #ati< de de >ava y el sim*olismo del 'ade en C+ina$ :eme'antes :eme'antes sociedades no conocen los secretos secretos personales$ personales$ ;tili-ando ;tili-ando una fórmula qui- desor*itada, se podría decir que los +om*res se vuelven transparentes los unos para los otros$ .odo lo que +acen y todo lo que significan en el seno de la comunidad se e&presa a travs de em*lemas, colores, vestimentas y gestos$ I cuando un individuo «comete algo en secreto, se apresura a traerlo a la lu-, confesndolo en vo- alta$ 9ara las sociedades primitivas y arcaicas el secreto es e&clusivamente dogmtico, nunca anecdótico$ %ic+o de otro modo, algunos +ec+os tienen que ser conservados en secreto, *ien protegidos de la curiosidad de los dems, pero estos +ec+os no tienen nada que ver con la vida profana del individuo (quin es, en qu tra*a'a, a dónde va, qu pecado +a cometido, etc$), sino con una realidad trascendente y sagrada$ Estos +om*res conservan ciertos secretos, siempre relacionados con la religión y con su concepción metafísica, secretos que se transmiten a los 'óvenes a travs de una ceremonia de iniciación$ En cam*io, cam*io, todo lo que tiene que ver con la esfera privada de la e&istencia e&istencia individual, individual, todo lo que depende del +om*re como tal, es p!*lico o se +ace p!*lico a travs de confesiones orales$ o que +emos llamado anecdótico pertenece precisamente a este m*ito de los acontecimien acontecimientos tos individuales, individuales, de las significacione significacioness profanas/ profanas/ estado social, vocación, vocación, origen, intención, etctera$ os primitivos primitivos no aceptan elevar los acontecimientos acontecimientos profanos al rango de misterio que, por naturale-a y necesidad, es el dominio e&clusivo de las realidades sagradas$ El secreto es natural y o*ligatorio sólo cuando se refiere a las cosas sagradas y a las teorías
metafísicas$ (9or e&tra#a que pare-ca esta afirmación, los primitivos, así como los pue*los de cultura arcaica, tienen unas concepciones metafísicas muy co+erentes, aunque stas estn formuladas casi e&clusivamente con medios prediscursivos/ arquitectura, sim*olismo, mito, alegoría, etc$ ;na cosmología y una teología melanesias no son menos metafísicas que la filosofía presocrtica$ a !nica diferencia reside en su modo de manifestación/ la primera est formulada a travs del mito y del sím*olo, la segunda, segund a, a travs del discurso$) 9or eso, cualqui cualquier er acontec acontecimi imient entoo profano profano,, «de «demas masiad iadoo +umano +umano,, que intent intentaa esconderse, elevarse al rango de misterio, se transforma en un centro de energías malignas$ El secreto no conviene a las cosas de este mundo$ a cualidad de misterio no puede ser usurpada por un simple accidente en el ocano del devenir universal ms que *a'o el riesgo de transformar este «secreto profano en una fuente negativa, portadora de calamidades para toda la comunidad$ 4sí como es un sacri sacrile legi gioo trat tratar ar las las real realid idad ades es sagra sagrada dass como como si fuera fuerann profa profana nas, s, así así tam* tam*i inn es un sacrilegio sacrilegio otorgar a las cosas profanas un valor sagrado$ .anto .anto en un caso como en otro se produce una inversión de valores$ valores $ I para cualquier lógica rigurosa (como lo es la lógica primitiva) una inversión de valores puede provocar una pertur*ación de toda la armonía cósmica$ El universo es solidario solidario con el +om*re$ +om*re$ 9or eso el secreto es una amena-a amena-a para las sociedades primitivas, primitivas, porque pertur*a los ritmos cósmicos y provoca pr ovoca sequías o mala suerte en la pesca, etctera$ :i se nos nos permi permite te con concl cluir uir esta esta nota nota con un unaa refl refle& e&ió iónn so*re so*re las las socie sociedad dades es modernas, dir que estamos en me'ores condiciones para comprender el enorme a*ismo que las separa de la mentalidad tradicional$ En una sociedad moderna los +om*res no son «transparentes el uno para el otro$ Cada uno de ellos es un peque#o tomo separado de los dems$ :i no se presentan, no sa*en nada o casi nada el uno so*re el otro$ En el me'or de los casos sa*en leer la graduación de un militar o el sentido de una insignia$ 9ero no sa*en nada so*re su descendencia, su vida social, su disposición anímica$ En una sociedad moderna se necesita muc+a intimidad y un trato prolongado para conocer a los que le rodean a uno$ En cuanto al carcter peligroso del secreto, las cosas ocurren 'ustamente al revs en las sociedades modernas$ Neneralmente Neneralmente se ocultan ocultan con sumo cuidado tanto la vida interior interior como los acontecimientos personales$ Estamos acostum*rados a apreciar la discreción de la gente y uno de los motivos de la admiración que profesamos a los ingleses es su magnífica discrec discreción ión$$ Ocu Oculta ltamos mos nuestra nuestrass aventu aventuras, ras, nuestro nuestross «pe «pecado cados, s, es decir decir,, todo todo lo que pertenece a los niveles profanos de la condición +umana, todo lo que no tenga valor metafísico, todo lo que est destinado a desaparecer en el devenir universal$ En cam*io, las sociedades modernas desconocen los secretos que tienen que ver con el m*ito de las realidades religiosas y metafísicas$ Cualquier +om*re, de la edad que sea, y sin importar qu preparación intelectual tenga, puede entrar en una iglesia distinta a una de su confesión, puede leer cualquier te&to sagrado de la +umanidad, puede atacar cualquier metafísica$ as grandes verdades religiosas y metafísicas, que otrora se transmitían *a'o 'uramento en el marco de severas ceremonias de iniciación, a+ora se editan y se traducen en todos los
idiomas modernos y cualquiera puede comprarlas a cam*io de unos cuantos lei$ En cam*io, un adu adult lteri erioo descu descu*ie *iert rtoo puede puede provo provoca carr un escn escndal dalo, o, y la confe confesi sión ón de un +ec+o +ec+o demasiado íntimo es un sacrilegio$
Espeleología, +istoria, folloreD
%esde +ace muc+o tiempo quería conocer, a travs de un tra*a'o escrito para los no iniciados, la actividad del 3nstituto de Espeleología de Clu', dirigido por un científico de renom renom*re *re univ univer ersal sal,, el doct doctor or Emil Emil Baco Bacovi vita ta$$ os os fascí fascícu culo loss de iospeologica que casualmente cayeron entre mis manos permanecían cerrados, para mi ignorancia, *a'o siete llaves$ 9ero aun así me resistía a renunciar$ :a*ía que el doctor Bacovita estudia desde +ace ms de cuarenta cuarenta a#os estos misteriosos misteriosos enclaves de la -oología/ -oología/ la oceanografía y la fauna de las cuevas$ Esta*lecido despus de la guerra en Clu', donde dirige el 3nstituto de Espeleología 'unto con B$ >eannel (+asta 015X) y 9$ 4$ C+appuis, y ayudado por sus 'óvenes cola*oradores "argarita y Badu Codreanu, el doctor Bacovita es uno de los pocos científicos rumanos que +a creado escuela? es decir, que +a sa*ido fomentar un ritmo de tra*a'o constante y una orientación metodológica precisa en el 3nstituto que dirige$ ;na escuela científica rumana me parecer siempre un +ec+o digno de tenerse en cuenta$ 9ero nosotros Kpodríamos aprender algo de unas preocupaciones tan a*stractasL K4lgo que pueda aclarar o poner a prue*a, si se quiere, la estructura espiritual rumanaL ;n 'oven matemtico, cuya amistad me enorgullece, me confesa*a un día que las matemticas rumanas tienen una orientación muy precisa/ es decir, que la mayoría de los matemticos rumanos muestran un inters especial por ciertos pro*lemas y se desinteresan, casi por completo, de otra serie de pro*lemas que, sin em*argo, apasionan a los matemticos polacos o 'udíos$ :i este +ec+o es cierto, significa que incluso las ms a*stractas operaciones mentales llevan impresa la marca de unas disposiciones que pertenecen a lo impondera*le/ disposiciones de estructura, de estilo, de etniaD Je leído, pues, con muc+ísimo inters el capítulo dedicado a la *iología del volume volumenn que +a pu*lica pu*licado do recient recienteme emente nte la 4cademia 4cademia Bumana/ Bumana/ -a vie scientifique en >oumanie, vol$ 3, Sciences pures, ucarest, 012X (pp$ 027T01P)$ 4llí se presentan de una forma escueta y clara los tra*a'os del 3nstituto de Espeleología de Clu'$ 8o intentar resumir lo que se dice allí, porque tampoco es ste el sitio apropiado para +acerlo$ 9ero +e o*servado que uno de los o*'etivos del 3nstituto es precisamente la verificación del mtodo del profesor Bacovita/ la sustitución de la noción de especie por la de lina+e (lign$e, neam<01=)$ 9arece ser que este mtodo +a sido aplicado por primera ve- y con todo su rigor en la pu*licación pu*licación del 3nstituto, 3nstituto, iospeologica$ "todo que no solamente nos proporcionaría un instrumento de tra*a'o sino tam*in una cierta «filosofía *iológica$ 9orque si el concepto de especie implica una visión esttica, el de lina+e ?neam) implica la noción de +istoria, de desarrollo en el tiempo$ 4sí pues, ya no es necesario clasificar las espec especie iess en funci función ón de sus sus carac caracte terí ríst stic icas as prese present ntes es (que (que pod podrí rían an ser ser secund secundari arias as o accidentales), sino en función de su descendencia en el tiempo, es decir, so*re la *ase de su +istoria$ +istoria$ Este mtodo le +a llevado al doctor Bacovita Bacovita a proponer la siguiente fórmula/ -a
ta0onomie ne peut @tre que de la p!ylog$nie appliqu$e<5S=$ :ustituyendo la primacía del espacio (la distri*ución geogrfica) por la primacía del tiempo (el despliegue del «lina'e), el doctor Bacovita +a introducido en la *iología la noción de !istoria$ I este mtodo, que l
+a sido el primero en aplicar, +a dado resultados e&cepcionales$ %e la misma forma en que la aplicaci aplicación ón del concept conceptoo de !istoria en etnografía (Nrae*ner, 9eter :c+midt, etc$) +a revolucionado esta ciencia$ Jaciendo literalmente «+istoria natural, el doctor Emil Bacovita +a sustituido la noción de especie por la de lina'e$ Ja sustituido una concepción esttica, *asada en la distri*ución geogrfica (el espacio), por una concepción dinmica/ el despliegue del lina'e en el tiempo$ .engo que confesar que este mtodo, aplicado al principio con tanto &ito en la espeleología, para penetrar despus en el campo de la *iología general, tiene un sesgo rumano$ 8o solamente porque los rumanos tendríamos una especial inclinación +acia el tiempo en detrimento del espacio$ a discusión de esta afirmación nos llevaría demasiado le'os y por eso optamos por eludirla$ 9ero no podemos de'ar de'ar de o*servar que la !istoria +a dominado la cultura rumana moderna desde sus inicios mismos, desde Cantemir$ 8o podemos olvidar que casi todos nuestros grandes creadores se +an +a n dedicado, en un sentido u otro, a +acer +istoria$ Es fcil comprender la o*sesión por la +istoria que atraviesa toda la cultura rumana moderna$ :e *usca*an los orígenes, se ponían a prue*a los derec+os +ist +istór óric icos os de nue nuest stro ro pue*l pue*lo, o, se promo promoví víaa la no no*l *lee-aa del lina lina'e 'e rumano rumano$$ Cuand Cuandoo despert despertamo amoss a una «co «conci ncienci enciaa nacional nacional solame solamente nte pod podíam íamos os eno enorgu rgull llecem ecemos os de la !istoria de nuestro pue*lo$ "i+ai Eminescu, a pesar de ser un poeta y un metaffsico, investigó con pasión la +istoria rumana$ Casi todos nuestros grandes +om*res de Estado +an tenido una verdadera pasión por la +istoria y la arqueología$ K4caso es de e&tra#ar que el doctor 3strati, químico de formación, se +aya ocupado en investigaciones +istóricas y arqueológicasL KO que un *acteriólogo como el doctor Cantacu-ino pasara sus noc+es leyendo vie'as crónicasL I Kno es digno de admiración que un estudioso como el doctor Bacovita, cuando intentó formular su mtodo de investigación *iológica, se viera for-ado a pensar !ist5ricamenteL Otro detalle significativo, tam*in relacionado con la espeleología$ .al como apunta el profesor Aoinov, el autor del informe contenido en el volumen -a vie scientifique en >oumanie, los tra*a'os pu*licados en la iospeologica del doctor Bacovita +an demostrado que los troglo*ios, que todavía pue*lan las cuevas, pertenecen a una fauna +ace muc+o tiempo e&tinguida$ «:on fósiles vivientes, que representan a veces estadios muy antiguos, terciarios o incluso secundarios$ Becuerden esta e&presión/ f5siles vivientes$ 8o solamente clarifica una gran cantidad de fenómen fenómenos os *iológ *iológico icoss que +asta +asta a+ora a+ora +an permanec permanecido ido *astant *astantee impreci imprecisos$ sos$ a e&presión «fósiles vivientes podría ser adoptada, pero, so*re todo, entendida, por todos los que se dedican al estudio del follore$ 9orque, así como las cuevas conservan una fauna arcaica, arcaica, muy importante importante para la comprensión comprensión de los grupos -oomórficos primitivos, primitivos, y que no son fosili*a#les, de la misma forma la memoria popular conserva formas mentales primitivas que no +an de'ado +uella en la +istoria, precisamente porque no podían
e&presarse *a'o formas duraderas (documentos, monumentos, grafías, etc$)? en una pala*ra, porque no eran fosili*a#les$ a lu-, el aire, la tierra las des+acían, las derretían$ .odavía +oy podemos encontrar en el follore formas pertenecientes a distintas eras, formas que representan etapas mentales arcaicas$ 4l lado de una leyenda con un sustrato +istórico relativamente reciente o una canción popular de inspiración contempornea, podemos encontrar formas medievales, precristianas o incluso pre+istóricas$ 9or supuesto que los folloristas no desconocen estos +ec+os$ 9ero me atrevo a decir que muy pocos los comprenden$ "uy pocos folloristas entienden que la memoria popular, de la misma forma que una cueva, puede conservar documentos autnticos de e&periencias mentales que la actual condición +umana no solamente +a vuelto imposi*les sino incluso increí#les $ :i se le +u*iera dic+o a un *iólogo de +ace oc+enta a#os que todavía viven animales de la era terciaria se +a*ría *urlado de uno$ El doctor Bacovita +a tomado so*re sí la tarea de demost demostrar rar cien cientí tífi ficam cament entee este este +ec+o +ec+o$$ os os foll follori orist stas as qu quee aspir aspiran an no solam solament entee a coleccionar el material con el que tra*a'an, sino tam*in a comprenderlo, tendrn muc+o que aprender del mtodo que el erudito profesor de Clu' +a aplicado para la investigación de las cuevas y la restauración de la +istoria de la fauna oscura$
>adeD
4*andonemos la melancólica inutilidad de las 'oyas y las piedras preciosas seg!n el sentir del mundo moderno y trasladmonos mentalmente a una cultura a*solutamente solidaria con una piedra preciosa Qel 'adeQ que +a encontrado en su sim*olismo una admira*le e&presión/ C+ina$ Olvidemos las capric+osas y personales valoraciones de que son o*'eto entre las mu'eres por su alto precio, por su escase- o distinción$ Cualquiera puede conocer la psicología del occidental aficionado a las 'oyasD 8o encontraremos ning!n significado profundo detrs de estos collares y 'oyas$ :olamente la sed de lu'o, de distinción y prestigio/ eso es todo$ I si alg!n esteta intenta e&presar la fascinación que le sugieren estas piedras, si alguna aristócrata neurótica trata de redescu*rir su magia, sólo lograrn construir un sim*olismo pragmtico y ar*itrario detrs del cual ya no se podr adivinar la intuición del valor sim*ólico o ritual de las piedras preciosas? sólo atis*os menores y coquetería personal, o*ras de aficionado, accesi*les e&clusivamente para l y para su peque#o grupito, pero no para todos sus contemporneos$ 4dem 4d ems, s, este este sim*ol sim*olis ismo mo util utilit itari ario, o, inve invent ntad adoo por ciert ciertos os mode moderno rnos, s, resul resulta ta muy superficial? no movili-a toda la vida interior, ni la penetra, ni la em*ellece$ 9ermanecer al margen de su e&periencia como un o*'eto e&terior y caduco$ I todos los esfuer-os modernos por e&presar, integrar o sim*oli-ar no podrn llegar ms all de estos fracasados intentos$ 9orque ya no pertenecen a una actividad colectiva «fantstica, a una e&periencia social que conecte permanentemente el follore con la institución, sino que se trata de iniciativas personales, es decir, individuales y contingentes$ El sím*olo no tiene ning!n valor ni puede e&presar la realidad si no se alimenta de la vida de una cultura, si no es lengua'e lengua'e +a*itual de los +om*res, si no es vivo, significativ significativo, o, accesi*le para cualquiera? si no es producido por la actividad «fantstica, mítica, de toda la sociedad$ Je elegido el 'ade como ve+ículo del sim*olismo c+ino por ser precisamente el ms desconocido y, desde mi punto de vista, el ms fascinante$ El 'ade es el sím*olo de la reale-a y del poder en el orden social? y, en el orden cósmico, encarna la esencia de la pure-a del principio masculino ( yang yang ), ), de lo inmuta*le y lo eterno$ Vste es el origen de esa relación entre 'ade e inmortalidad que +a*ían revelado los alquimistas c+inos? por eso se tapan las «nueve a*erturas del cuerpo con piedras de 'ade/ para conservar el cadver, +acindolo solidario de la esencia imperecedera del principio yang $ as imgenes del Cielo, la .ier .ierra ra y los los Cu Cuat atro ro 9unt 9untos os Cardi Cardinal nales es se repre represen senta tann de un unaa forma forma a*st a*strac racta ta en construcciones de 'ade (e&cepto el Oeste, que es representado por un tigre)$ «a tum*a sólo significa el cam*io de morada? y si el muerto es rodeado por las imgenes de los seis dioses cósmicos, ello significa la continuación de la e&istencia despus de la muerte, en compa#ía de los dioses de su vida terrenal ($ aufer, /ade& A Study in :!inese Arc!eology and >eligi5n<50=, pp$ 050T055? el li*ro de aufer, pu*licado en 0105 por el Field "useum for 8atural Jistory de C+icago, es la ms autori-ada monografía so*re el 'ade)$ %urante la dinastía C+ou el 'ade +a*ía llegado a utili-arse internamente, como alimento (aufer, p$
51P)$ I en el taoísmo tardío se +a*ía impuesto la idea de que es el alimento de los espíritus, capa- de asegurar la inmortalidad inmortalidad (%e Nroot, >eligious System of :!ina <55=, vol$ 3, pp$ 5X0T 5X2? vol$ 33, p$ 217)$ ;n te&to de UoTJung re-a/ «:i las nueve a*erturas del cadver se tapan con oro y 'ade, aqul se conservar y ya no se pudrir$ El oro sim*oli-a la misma natural naturale-a e-a imperecedera del principio viril, así como las perlas sim*oli-an la vida y la fecundidad, en estrec+a relación con las conc+as, icono del principio femenino (la vulva b la conc+a b la perla b el segundo segundo nacimie nacimiento nto b la inmortal inmortalida idad? d? cf$ nuestro nuestro li*ro li*ro -a Mandragore)$ os c+inos +acían tam*in maravillosos amuletos de 'ade en forma de cigarras, em*lema de la resurrección$ El filósofo [ang C+ung apunta*a/ «4ntes de despo'arse de su capara-ón, la cigarra es una crislida? cuando lo desec+a, pasa del estado de larva al estado de cigarra$ El espíritu vital de un muerto, de'ando su cuerpo, puede ser comparado con una cigarra que a*andona su crislida (Fore, -unHeng , 3, p$ 5SS? citado por aufer, p$ 2SS, n$ 0)$ >unt >untoo a este este sim*o sim*oli lismo smo cósm cósmic icoo e&pre e&presad sadoo por el 'ade 'ade flor florec eció ió,, en todo todo su esplendor, el sim*olismo de las 'erarquías y de los sentimientos +umanos$ El 'ade revela*a la posición social, la vocación, el estado anímico y la filosofía de un c+ino$ a forma, el color, la distri*ución o el momento del día en que se lleva*a el adorno de 'ade, forma*an, 'untos, una especie de lengua'e secreto y a la ve- accesi*le para todos, que e&presa*a, plsticamente, el ser del individuo definindolo me'or que cualquier otro lengua'e$ El emperador, sustituto sustituto terrestre del sol, lleva*a lleva*a unas diminutas diminutas +ac+as de 'ade que representa*an la virtud misma de la :o*eranía y del 9oder$ I cada clase de no*les feudales era solidaria y esta*a sim*oli-ada por un o*'eto de 'ade, de forma y peso específicos$ Cuando nacía un ni#o, se le de'a*a 'ugar con 'ade, sím*olo de la dignidad (aufer, p$ 0SS)$ 9ero el 'ade tenía tam*in un papel de a*rumadora importancia en la vida domstica? cada intención, cada sentimiento era e&presado por los colores o el sonido de los ornamentos de 'ade que se lleva*an colgando alrededor de la cintura$ Con su gran intuición rítmica y su paciente aplicación, los c+inos +a*ían logrado armoni-ar los sonidos de las distintas especies de 'ade de tal manera que stos revela*an las ms secretas intenciones$ El novio que visita*a a su novia colga*a de su cintura una pie-a de 'ade que le decía/ «te ec+o de menos? otra que indica*a/ «el sol en primavera? y al andar, su ruido producía esta sentencia/ «El +onora*le cora-ón se diluye en la Jonora*le 9a-$ a sustancial necesidad del c+ino de estar en contacto permanente con las 'erarquías cósmicas y con la especial 'erarquía social de la que forma*a parte es fundamental para una 'usta comprensión del sim*olismo del 'ade$ El 'ade no es solamente un sencillo amuleto, una 'oya o un souvenir $ Es el signo celestial *a'o cuya protección el individuo individuo +a nacido y crecido, crecido, y sin cuya presencia se sentiría aislado y triste$ 8o es ni un tótem, ni una insignia tri*al, tri*al, sino la pura e&perienci e&perienciaa «fants «fantstic tica a de la ra-a, ra-a, e&presad e&presadaa sim*ól sim*ólica icamen mente te y actuali-ada por cada familia, por cada individuo$ El periodo C+ou (primer milenio a$ C$) desarrolló un cudruple sim*olismo sim*olismo para el 'ade que se colga*a de la cintura/ el movimiento rítmico y la e&plosión sonora de los
ornamentos, que alegra*an a la persona que los lleva*a y que impresiona*an a sus compa#eros? testimonio de amistad y de amor? e&presión del rango del individuo dentro de la 'erarquía de clases oficiales, seg!n la calidad y el peso del 'ade? y, por fin, el carcter em*lemtico de la vocación y del gremio, que introducía a su portador de una forma inmediata en el m*ito de otra sociedad (aufer, p$ 01X)$ 9an Uu, el autor del tratado 1ai !u t6ung , e&plica así la vocación sim*oli-ada por el 'ade/ os o*'etos que se llevan colgados en el cinturón dan a conocer las +a*ilidades y las intenciones de alguien$ 9or eso, el que cultiva el camino moral sin fin ( tao, el «camino, en el sentido de la escuela confuciana), llevar un anillo$ El que fundamenta su conducta so*re la ra-ón y la virtud ( tao t@!, en el sentido de ao i), llevar las 'oyas
«Conse'os para el que va a la guerra
En una carta de 5R de 'unio de 0R76 4le'andro 4le'andro Jadeu aconse'a*a a su +i'o .adeoT .adeoT 9etriceicu Jadeu so*re la forma de comportarse en la guerra$ El 'oven .adeo (que todavía no +a*ía cam*iado su nom*re por el de ogdan), ogdan), se +a*ía alistado alistado en el e'rcito ruso poco tiempo antes y su padre no de'a*a de ocuparse de l mandndole dinero, conse'os y nimos$ Je aquí un fragmento que me parece verdaderamente significativo/ En casa de Criste esucristoHD$ .oma nota, +i'o mío, de este conse'o de nuestros antepasados ($ 9$ Jadeu, 'iario íntimo, trad$ del ruso y ed$ de E$ %voiceno, "nceputurile literare ale lui & 1& 1& Ha2deu, 012P, p$ 556)$ %e momento no nos interesa investigar la procedencia +istórica de estos :onse+os para el que va ala guerra& Je reproducido el citado fragmento para facilitar una difusión ms amplia$ "erece, sin duda, ser conocido y meditado largamente$ 8o solamente para recuperar «la e&periencia de nuestros antepasados, como creía 4le'andro Jadeu, sino porque ante todo revela el carcter no profano, p rofano, sagrado, de la luc+a y de la guerra$ Ciertamente no nos resultaría difícil componer una lista de +ec+os etnogrficos para mostrar el origen mgico de la castidad y la pure-a que nuestros antepasados considera*an imprescindi*les para la victoria en el com*ate$ :in duda, los guerreros de muc+as tri*us salva'es Qcomo los pescadores o los ca-adoresQ tenían que guardar castidad cada ve- que salían a una nueva e&pedición$ a castidad en sí misma tiene un valor mgico$ :er casto significa, en cierto sentido, suprimir la condición +umana y, en cualquier caso, superar el estado profano$ El primero y ms importante instinto es el instinto se&ual$ :u supresión definitiva (ascetismo) o su suspensión temporal (la castidad, impuesta por la guerra, el luto, las calamidades, etc$) anulan la condición +umana$ El +om*re casto acumula un arsenal de «fuer-as mgicas que le marcan y +acen que fructifique cada acción que lleve a ca*o$ :i va de pesca o de ca-a, la presa ser a*undante? si va a la guerra, estar siempre a salvo de las flec+as enemigas y sus armas alcan-arn siempre el *lanco$ 9ero, ms all de estos orígenes mgicos (algunas veces muy dudosos) de la castidad del guerrero, podemos entrever su significación metafísica$ El guerrero autntico Bel !$roe Q est por encima enc ima de la condición +umana, igual que el sacerdote o el asceta$ "ediante la luc+a, el guerrero a*andona el estado profano, superando los valores de la vida *iológica,
psicológica y social en los que esta*a instalado +asta aquel momento$ El +roe, como el sacerdote, sacerdote, es un individuo individuo que sacrifica& El mundo grecorromano +a*ía concedido un valor sagrado a la guerra? es decir, la asimila*a a un sacrificio ritual$ os vencedores eran los +om*res que sacrifica*an sacrifica*an las vidas de los enemigos, enemigos, igual que los sacerdotes sacrifican, so*re el altar, los animales consagrados$ 9ero este sacrificio no podía ser llevado a ca*o sin unas purificaciones previas? de otro modo, el animal sacrificado no sería ms que una *estia *estia degollada$ 4sí 4sí pues, al igual que el sacerdote que se prepara para un sacrificio respeta previamente la castidad, mantenindose purificado durante todo el tiempo que dura el ritual, aislado, por tanto, de cualquier estado profano, tam*in el guerrero de*e guardar la pure-a ritual durante la luc+a (el «sacrificio)$ 9ero la seme'an-a entre el guerrero y el sacerdote (y en un nivel superior entre el !$roe y el santo) es todavía ms profunda$ En efecto, a la condición +umana y profana no sólo le pertenece la impure-a (y especialmente la impure-a se&ual), sino tam*in la pasión, el deseo, el odio, etc$ Eres «+om*re porque deseas que sucedan ciertas cosas para tu propia satisfacción? o, tal como nos dice el !agavad Cita, porque *uscas el fruto de tus acciones ( p!alatris!na p!alatris!na)$ El +roe, como el santo, +a superado esta p!alatris!naD am*os +an real realii-ad adoo lo que se llam llamaa la p!alatris!na vairagya, «la renuncia a los frutos de sus acciones$ El +roe, como el santo, no conoce en adelante la pasión, el odio, el deseo$ :e +a vuelto «aptico, «indiferente$ El santo no odia nada ni a nadie$ I el +roe de'a de «odiar a su contrincante$ Ia no posee ning!n criterio individual$ 8o conoce ms que las reglas o*'etivas de la luc+a que corresponden a las leyes o*'etivas de un ritual$ 9or eso, la «victoria «victoria propia del +roe es un estado, no un acontecimiento$ El +roe es «vencedor en pleno com*ate y sigue siendo vencedor aunque +aya perecido en l$ a tradición de la luc+a como un sacrificio en el que el guerrero cumple el papel de sacrificante o sacrificado se +a conservado viva, como +emos visto, en la +eroica "oldavia$ I se +a conservado con asom*rosa fidelidad/ «Ae a la guerra con la misma santidad con la que vas a comulgar en los santos sacramentos$ El sentido de esta frase no tiene que ver sólo con la pure-a ritual, sino tam*in con la transformación moral por la que tiene que pasar el que va a la guerra$ 9ara reci*ir los santos sacramentos no solamente tienes que ir «purificado sino tam* tam*i inn apaciguado? vas con amor y olvidndote de las cosas terrenales, superando cualquier elemento pasional$ 4sí pues, si vas a la guerra, tienes que olvidar cualquier pasión$ 8ing!n odio o miedo puede nu*lar la mente del guerrero$ guer rero$
as plantas de >agadis+ ose
Cuando el visitante del instituto de sir >agadis+ ose en Calcuta vuelva a casa por la noc+e lo +ar con unas asom*rosas impresiones y con un pro*lema de filosofía de la cultura para meditar$ 3magínense un inmenso la*oratorio distri*uido alrededor de un parque de una melancólica *elle-a, por el que corren en li*ertad apaci*les ciervos$ a puerta del instituto lleva, al estilo +ind!, una inscripción en snscrito y una imagen en *ronce de la diosa :aras^ati, protectora de las artes y de las ciencias$ En la primera mitad del edificio encontramos una magnífica sala de conferencias con vidrieras orientales y con todas las comodidades occidentales$ 9ero lo que ms emociona e impresiona son los la*oratorios? decenas de +a*itaciones *lancas, *ien iluminadas y aireadas, donde se almacenan, en estanterías, los aparatos de inimagina*le sensi*ilidad inventados por >agadis+ ose, y la *i*lioteca con cristales a+umados a+ umados donde +an quedado arc+ivadas miles de vidas y muertes pertenecientes a los tres reinos$ Aeamos de qu se trata$ 8i ms ni menos que de la unidad del mundo orgnico e inorg inorgnic nico, o, demost demostrada rada y 'usti 'ustifica ficada da por los cuarent cuarentaa a#o a#oss de invest investiga igacio ciones nes físico físicoTT fisiológicas de sir >agadis+ ose$ @ui- diris que es una verdad científicamente reconocida y populari-ada +asta la saciedad$ E&actamente? pero Kacaso son iguales los criterios y la orientación en la o*ra de un científico +ind! y en EuropaL En Europa, la unidad del mundo +a sido reconocida partiendo desde su *ase inorgnica, inerte, muerta? el mundo es uno porque todos los fenómenos pueden ser reducidos a una fórmula cuantitativa, incluso los fenómenos de vida$ Becuerden a oe* y a Fli& le %antec, que +an reducido la vida orgnica a la mecnica y los tropismos y osmosis a meros procesos físicoTquímicos$ :e trata de una identidad que se fundamenta so*re la participación en la materia y es go*ernada por sus leyes$ Es una solidaridad con la parte inerte del mundo$ 9or el contrario, ose llegar a formular la misma identidad partiendo de la vida y no de la muerte& :us e&perimentos demuestran la presencia de una vida nerviosa en las plantas y no de una vida vegetativa en los animales? y demuestran capric+o y li*ertad en la actitud de los minerales (mineral #e!aviour ) y no una conducta mineral en la vida de las plantas$ O*serven que la síntesis se reali-a con otros elementos y en otras -onas que las arc+iconocidas (y a+ora caídas en desuso) síntesis materialistas europeas$ 8o tengo la pretensión de resumir todos los resultados científicos de >agadis+ ose? stos se encuentran recogidos en sus ms importantes o*ras<52= ( 1lant 1lant response response as a means of p!ysiologic p!ysiological al investigati investigationD onD :omparative :omparative electro electrop!ysi p!ysiologyD ologyD >esearc!es on t!e irrita#ility of plantsD -ife movements in plants , 5 vols$? >esponse in t!e living and nonliving , etc$), así como en la e&celente monografía crítica del profesor 9atric Nedde Ne ddess T!e life and t!e Eor< of Sir /agadis! :& ose <56= (editada, como los anteriores
vol!menes, por ongmans Nreen, ondres)$ "i inters se centra en la síntesis del *otanista +ind!, en su mtodo científico y su
imaginación creadora, y me pregunto si, detrs de ellas, no estar funcionando el mismo genio imaginativo y sinttico de la conciencia +ind!$ ose, despus de sus admira*les tra*a'os so*re la electricidad y el magnetismo, se concentra a+ora en la fisiología de las plantas, especialmente en su sensi*ilidad y su reacción a los estímulos e&teriores$ os *otanistas europeos, despus de los e&perimentos llevados a ca*o por los fisiólogos alemanes 9feffer y Ja*erlandt, e&plica*an la sensi*ilidad de una planta como la mimosa, por un simple desequili*rio +idromecnico momentneo y no por una transmisión nerviosa anloga a la animal$ Ellos no podían aceptar un sistema de trasmisión de la e&citación similar a una red nerviosa$ nerviosa$ ose demuestra, utili-ando aparatos e&tremadament e&tremadamentee precisos precisos (especialment (especialmentee el resonant recorder recorder , presente a+ora en todos los la*oratorios) la identidad de naturale-a del impulso nervioso tanto en una planta como en un animal$ %emuestra que las plantas padecen el mismo cansancio periódico que los animales y que los r*oles empie-an a dormir a partir de las 05 p$m$ y se despiertan a las R a$m$ %emuestra que los r*oles incluso son capric+osos y que pueden negarse a dar frutos durante ciertos a#os? pero si se les golp golpea ea,, se corr corrig igen en y dar darnn frut frutos os en a*un a*unda danc ncia ia al a#o a#o sigu siguie ient nte$ e$ Ja Jayy r*o r*ole less e&tremadamente sensi*les, cuyas +o'as se repliegan cuando son golpeados$ En el parque del instituto se encuentra un ar*usto seme'ante y es asom*roso ver cómo repliega sus +o'as cuando lo golpeas$ ose compara las estructuras glandulares de ciertas plantas con las glndulas animales$ 9ero Gcuntas otras maravillas no podr descu*rir en las +a*itaciones del instituto de Calcut Calcutaa un visita visitante nte armado de pacienci pacienciaH aH 9or e'emplo, e'emplo, el registro (record ), ), so*re una lmina a+umada, de un m!sculo de rana/ la línea punteada, que est tra-ando la agu'a conectada a las vi*raciones del m!sculo, tiene el mismo ritmo que el de una planta e&citada$ as lminas se pueden comparar$ O tam*in la +istoria de una agonía vegetal gra*ada so*re una lmina a+umada/ una mimosa into&icada con cloroformo y despus muerta$ :i la comparas con la otra lmina, la que testimonia la agonía de la rana, difícilmente podrían ser diferenciadas una de otra$ a misma larga luc+a que aca*a de la misma forma espasmódica tanto en la planta como en el animal (la agu'a *a'a *ruscamente de cinco centímetros a algunos milímetros)$ 4l revelar el misterio de la vida de los r*oles, sir >agadis+ ose +i-o algo e&traordinario/ con el fin de trasplantar algunos r*oles a Calc Calcut uta, a, los los sedó sedó con con narcó narcóti tico cos, s, como como suced sucedee con el paci pacien ente te inco inconsc nscie ient ntee qu quee es transportado a la mesa de operaciones$ 8o menos fascinantes son ios e&perimentos so*re los cristales y minerales$ Jay minerales que se enfadan y se resisten a la transmisión de la electricidad, así como +ay cristales cristales que refle'an refle'an o refractan refractan la lu- en función función de su *uena o mala disposición$ disposición$ I estoy utili-ando los mismos trminos de un profesor +ind! de física, gran discípulo de sir >agadis+, que repitió este e&perimento delante de mí las veces que quise$ 4qul +a*la*a del «castigo y la «domesticación de un mineral, del «capric+o de un cristal, de la «fatiga del +ierro, etc$ os recuerdos que de'a una visita al instituto de ose son verdaderamente prodigiosos$ 9ero la actividad de este *otanista plantea tam*in un pro*lema de filosofía de la
cultura$ Es decir/ Kpor qu precisamente un científico +ind! y solamente +ind!, tra*a'ando al margen de cualquier preocupación filosófica y con mtodos estrictamente de la*oratorio, +a logrado demostrar la unidad de la vida, la unidad de su ritmo, pero no en un sentido «*e+aviorista o materialista, sino en el sentido de la sa*iduría +ind!, desde los Aedas +asta +oyL 9orque los Aedas y toda la literatura snscrita posterior +an repetido +asta la saciedad que «todo es uno? la realidad es una y los +om*res la llaman de muc+as maneras$ :i sir ose +u*iera sido un filósofo y +u*iese construido un sistema de filosofía panteísta, le +a*ríamos comprendido enseguida? porque la filosofía no es otra cosa que la organi-ación y la 'ustificación de las e&periencias de una ra-a, de un tiempo, de una cultura$ 9ero ose no es un filósofo ni un místico? l no tiene una mirada contemplativa ni reconstituye dialcticamente la unidad de la vida? e&perimenta con ella y la registra en el la*oratorio, apoyndose en documentos precisos, de la misma forma en que los científicos occidentales de dcadas pasadas e&perimenta*an y registra*an en la*oratorios la física de de la Vida& Vida& Con la !nica diferencia de que ose llega a demostrar todo lo contrario, sensi*ilidad nerviosa, li*ertad y personalidad, allí donde aqullos encontra*an solamente mecnica$ K4caso la ciencia depende de una eltansc!auung racial racial o personal, así como lo +acen el arte, la cultura o la filosofíaL 9orque la síntesis de ose no es otra cosa que la demost demostrac ració iónn de las las intu intuic icio ione ness +ind! +ind!es$ es$ 9rest 9restem emos os aten atenci ción ón a la grave graveda dadd de las las conclusiones que podemos sacar$ El mito de'aría de ser entonces lo que los estudiosos antropólogos pretendían que era, para ser la intuición de una verdad? la actividad mística no sería una mera construcción fantstica, sino una e&periencia concreta traducida a conceptos, etc$ I esto significa que cualquier cosa que +aga un +om*re, por muc+o que intente despersonali-arse (como ocurre con la ciencia) no puede romper el círculo de +ierro de su conciencia racial$ Evidentemente, si tra*a'a de una forma sincera y consecuente, si quiere crear (tal como +a creado ose) y no solamente tomar prestados conocimientos ya adquiridos (como +an +ec+o tantos otros científicos +ind!es)$ ose mismo nos confiesa cul es el punto de partida de esta creación/ «o !nico que s es que la visión de la verdad surge solamente en el momento en que +an desaparecido todas las fuentes de distracción y la mente +a alcan-ado la cima de la serenidad, volvindose esttica (discurso de inauguración del instituto)$ 9ero Kacaso no es precisamente sta la condición requerida por toda la filosofía +ind!L
8avigare necesse est
8o s muy *ien qu es el turismo y tampoco lo +e practicado$ En cam*io s lo que es via'ar solo y lo que significa via'ar sin rum*o fi'o, y so*re este gnero de via'e me gustaría escri*ir$ 9uede que sea muy agrada*le acudir a una agencia de via'es, de'ar una foto y un fa'o de *illetes *illetes y, con las maletas listas en la estación del tren, presentarse el día fi'ado para partir siguiendo un itinerario preesta*lecido$ 4grada*le y, seg!n parece, la !nica forma de salir del país en estos tiempos tiempos de restricciones restricciones monetarias y guerra aduanera$ Io Io en cam*io +e conocido otros tiempos y los mayores +an conocido posi*lemente tiempos a!n me'ores$ :i +oy te decidías por ir a Espa#a, ma#ana i*as a *uscar el dinero y al día siguiente esta*as cómodamente instalado ante la ventana de un vagón de tercera con todo el mundo por delanteD En 015X estuve tres meses en 3talia y volví pasando por Nrecia y .urquía, con sólo die- mil lei& Ja sido mi ms *onito via'e a 3talia, porque tenía la valentía del po*re, descu*ría los ms pintorescos +ostales y elegía los ms arriesgados men!s$ 4lgunos confiesan con orgullo/ «:oy un verdadero via'ero$ I quieren darte a entender muc+as cosas al +acer esta afirmación$ 9ero no s si se refieren a otra cosa, ms grave, ms solemne y que me parece esencial$ a falta de egoísmo del via'ero$ ;n verdadero verdadero via'ero aprende a 'u-gar de otra forma el mundo, a entenderlo entenderlo de una forma ms altruista, a desear menos cosas para sí$ 4postaría a que una estadística nos demostraría que veinte de cada cien propietarios no +an cru-ado nunca la frontera$ El via'e es el peor enemigo del sentimiento de propiedad$ @ui- mi sentimiento de indiferencia y desprecio por cualquier forma de propiedad se de*a al +ec+o de que +aya recorrido desde los trece a#os casi todos los rincones de mí país, y que desde los quince me arriesgu casi todos los veranos a perecer en alguna e&cursión desca*ellada$ 9ero se trata de un asunto muc+o ms serio de lo que parece a primera vista$ 9or mi parte, recuerdo +a*er estado muy triste el día que descu*rí que tenía algo mío/ una *i*lioteca, una mesa de tra*a'o, una cama$ .enía la sensación de que todas estas cosas, que eran mías, me +acían ms inerte, ms estril, ms mediocre$ mediocre$ 8o puedo decir que me sintiera ms feli- en una +a*itación +a*itación de +otel$ 9ero estoy seguro de que estaría ms feli- en una casa totalmente e&tra#a, a la que tendría que llevarme solamente los li*ros y la ropa$ 8o os apresuris a contestarme que el pro*lema de la felicidad no tiene nada que ver con nuestro tema de conversación$ 9ertene-co a la clase de +om*res que piensa que cualquier cosa que +agamos en este mundo seguramente tiene alguna relación con el pro*lema de la felicidad$ .anto .anto ms el via'e, que es la me'or propedutica a la moral y, consecuentemente, el ms seguro medio para alcan-ar la felicidad$ 4l fin y al ca*o la gente se va de via'e para olvidarse de sí misma, por muy atractiva que sea la m&ima de Ueyserling cuando dice que «el ms corto camino +acia mí mismo es un via'e alrededor del mundo$ Olvidarse de sí mismo? es decir, suspender la pro*lemtica de tal momento espiritual, renunciar a los tropismos y a los automatismos de la vida diaria, salir de sí mismo$ 9or eso un via'e de amor, en el que los amantes tienen o'os solamente para ellos
mismos, no tiene ning!n sentido y resulta tan artificial, tan desafortunado$ 8o pueden salir de sí mismos o saldrn los dos a la ve-, para reencontrarse otra ve- 'untos delante de una o*ra de arte o de un monumento natural$ 4lgu 4lguno noss decl declam aman an,, no sin sin mela melanc ncol olía ía en la vo vo-/ -/ «Ga «Gass evas evasio ione nesH sH Gas Gas inmensidadesH G:alir, +uir, ser feli-H$ Esta melancolía pre o postam*ulatoria me parece de un mal gusto detesta*le$ 8unca tienes que arrepentirte de las cosas que +as visto$ I no tienes que arrepentirte tampoco de las cosas que todavía no +as visto y acaso nunca llegars a ver$ Es una nostalgia +umillante, femenina, que nos empon-o#a el alma y nos +ace odiar a la gente y los lugares que nos rodean$ O, ms grave a!n, nos +ace so#ar est!pidamente con cosas que +an pasado o que no +an ocurrido todavía$ El encanto y el valor del via'e residen en su espontaneidad, en su carcter irreversi*le$ ;n via'e es una e&periencia !nica, parecida a un largo sue#o que nunca volver a repetirse o a un n!mero que sale una ve- en la lotería y es casi imposi*le que vuelva a salir$ a mayoría de los +om*res que +an via'ado muc+o siempre llevarn con ellos una discreta a#oran-a$ Es a*surdo$ 8o entiendo qu es lo que se puede a#orar$ El via'e no es como una 'uerga de amigos que se pueda repetir cuando lo desees, en cualquier local nocturno, en cualquier ciudad$ El via'e, por la sencilla ra-ón de ser una salida de sí mismo, una renuncia provisoria a tu «personalidad, pertenece a aquella difícil categoría de +ec+os +umanos que llamamos «aventura$ I no tiene ning!n sentido a#orar o intentar repetir una aventura$ a vida de un +om*re tiene cierto ritmo, así como lo tiene la gran vida que nos rodea, la vida de la naturale-a$ Bitmo que nos o*liga a orgías al principio y despus a una vida de larvas$ 8adie puede escapar de este ritmo, y tampoco la vida colectiva$ GOs +a*is dado cuenta de qu necesarias, qu *iológicas son las orgías en la vida colectiva (las saturnales, las fiestas y, ms recientemente, las revoluciones), con cunta precisión punt!an la masa gris de la vida cotidiana, de los días de tra*a'o sórdido, días de larvaL El mismo +ec+o +ec+o puede puede dete detect ctars arsee en la vida vida de cada cada +om*re +om*re$$ os os «mome «moment ntos os fant fantst stic icos os u orgisticos son indispensa*les? y surgen siempre entre periodos de tra*a'o y esfuer-o prolongado$ El via'e, adems de otras muc+as funciones, cumple tam*in esta función fantstica, necesaria para el ritmo de la vida +umana$ a civili-ación del continente *lanco +a podido crecer porque +a sa*ido su*limar esta necesidad orgistica, orgistica, del +om*re y de las masas, en formas cada ve- menos nocivas$ %esde las orgías *quicas o saturnales se +a pasado a la corrida de toros, las fiestas campesinas y !ltimamente a las grandiosas manifestaciones organi-adas por los fascistas, comunistas o na-is$ a misma necesidad orgistica +a sido su*limada tam*in desde un punto de vista individual$ os +om*res de +oy leen novelas policíacas o se em*orrac+an y *ailan +asta la e&tenuación durante ciertos días, para poder tra*a'ar como larvas el resto de la semana$ En otras pocas, la misma gente rapta*a a las mu'eres, se mata*a entre sí o *e*ía y 'uga*a (el motivo de la li*eración, la evasión, +a permanecido el mismo) para poder satisfacer su instinto orgistico$ El via'e podría ser una efica- ayuda para la satisfacción de este ritmo que rige tanto la vida del +om*re como la vida colectiva y cósmica$ I una condición esencial sería devolverle el carcter de momento fantstico, orgistico, irreversi*le y, so*re todo, que este momento de aventura y salida de sí mismo est equili*rado por un largo periodo de larva, de tra*a'o ciego y continuo$ %e otra forma destruiríamos el ritmo y terminaríamos como
vaga*undosD
os li*ros pascuales o so*re la necesidad de un "anual del perfecto lector
9ara el +om*re moderno la lectura es un vicio o un castigo$ eemos para pasar los e&menes, para informarnos o sencillamente por motivos profesionales$ :in em*argo, pienso que la lectura podría tener funciones ms no*les, es decir, ms naturales$ 9or e'emplo, podría introducirnos en las estaciones, revelarnos los ritmos que nos envuelven (y que nosotros +emos a*andonado por estupide- o ignorancia)$ a primavera o el solsticio de verano son fenómenos cósmicos que e&perimentamos tanto *iológica como afectivamente? es decir, en contra de nuestra voluntad, de una forma oscura y ms o menos al a-ar$ 9or supuesto que cada uno de nosotros puede perci*ir en sí mismo el misterio del gran desper desperta tarr veget vegetal al$$ 9ero 9ero Gqu Gqu sign signif ific icat ativ ivoo pod podrí ríaa llega llegarr a ser ser este este prese present ntim imie ient ntoo si pudiramos descifrar sus em*lemas, sus sím*olos, sus sentidos universales y a*solutosH a*s olutosH :in duda, e&isten poemas escritos en varios idiomas que nos ayudarían a penetrar efectivamente en la primavera si llegramos a sa*er cómo y cundo leerlos$ a lectura podría ser una maravillosa tcnica propedutica, propedu tica, que introdu'era al +om*re y le ense#ara los ritmos y las estaciones$ 3nauguraríamos la primavera con un li*ro? meditaríamos con otro en la semana de pascua? la noc+e de san >uan (56 de 'unio) nos encontraría reunidos, fortificados y elevados por la lectura de las pginas de un li*ro solar$ 8uestra peque#a *i*lioteca de li*ros esenciales se parecería a un calendario calendar io interiori-ado$ a lectura volvería a encontrar su función primordial, mgica? la de esta*lecer el contacto entre el +om*re y el cosmos, la de recordar a nuestra limitada y frgil memoria una vasta e&periencia colectiva, la de iluminar los ritos$ 9or e'emplo, a+ora tenemos por delante dos semanas de pascua$ Ellas podrían llegar a significar ms que una mera ocasión de reconfortantes y fciles lecturas$ 9odríamos leer y asimilar pginas que nos ayuden a crecer, a avan-ar, es decir, a asimilar la revelación cósmica y teologal de estos catorce días que una ve- cortaron la +istoria en dos$ 9odríamos releer con un cora-ón ms a*ierto los evangelios? pero tam*in otros te&tos, te&tos de ms difícil circulación, porque nunca logran salir del reducido círculo de los especialistas$ .e&tos &tos de los los que que nada nada sa*e sa*em mos, os, porq porque ue nadi nadiee no noss +a +a*l +a*lad adoo de sus sus virt virtud udes es contemplativas$ 9ero nuestra ignorancia no se limita solamente a los li*ros pascuales$ 8os falta un autntico «"anual del perfecto lector donde tanto el neófito como el +om*re formado encontrarían aquella información de orden íntimo que ni las enciclopedias ni los tratados les ofrecen$ eemos los li*ros que +an caído por a-ar en nuestras manos o los li*ros que nos recomiendan nuestros padres y amigos, en el instituto o en la *i*lioteca$ eemos a %ostoievsi antes que a Aictor Jugo y a Nide antes que a Benan$ 4lcan-amos una edad en la que este vicio tiene que ser temperado sin +a*er conocido algunos grandes li*ros de la adolescencia o de la primera 'uventud$ 8o solamente sufrir nuestra «cultura, incompleta, fragmentaria, fracturada, sino tam*in, lo que es muc+o ms grave, nuestra e&periencia
afectiva$ ;n «"anual del perfecto lector nos a+orraría todos estos inconvenientes, estas prdidas in!tiles de tiempo, estas graves g raves lagunas$ Encontraríamos Encontrar íamos allí una lista de li*ros por edades, temperamentos y estaciones$ 9or e'emplo, li*ros que tienen que ser leídos en la adolescencia, otros que tienen que ser leídos cuando uno se enamora o va de ca-a$ i*ros para el oto#o, para la noc+e de san 4ndrs, para par a la semana de pascua, para el solsticio de verano$ E&iste, con toda seguridad, una sutil armonía, que muy pocos tienen la suerte de descu*rir a tiempo, entre las etapas del alma y los fenómenos cósmicos$ .enemos una «4ntología del oto#o, pero no tenemos informaciones e&actas so*re la tcnica necesaria para meditar so*re ella, interiori-arla o ale'arla cuando nos n os a+oga su emoción$ Creo que este «"anual podría incluir informaciones menos severas$ 9or e'emplo, qu +ay que leer cuando se est triste o cansado, o de vacaciones? o cuando se quiere animar a alguien, devolverle las fuer-as afectivas que +a desperdiciado est!pidamente, etc$ .enemos decenas de miles de fórmulas farmacuticas, de tónicos, pócimas o %ios sa*e qu ms, pero nadie +a pensado en utili-ar tcnicamente esta enorme energía espiritual que permanece latente en los li*ros$ a literatura puede ser un e&traordinario estimulante$ Cono-co por lo menos a una docena de 'óvenes que +an fortalecido fortalecido sus almas desgarradas desgarradas de adolescentes leyendo el omo finito de 9apini$ 8o se trata de moral, ni de pedagogía? ni siquiera de una +igiene espiritual$ :olamente de una tcnica que podría proporcionar al +om*re +om*re moder moderno no fuent fuentes es desco descono noci cida dass de ener energí gíaa y de con conte temp mpla laci ción, ón, tcni tcnicas cas de armoni-ación con las estaciones, con las revelaciones$
«8o me interesaD
Comentando una o*servación del se#or Camil 9etrescu, el 'oven escritor 9ericle "artinescu escri*ió un artículo dedicado a la muerte de la polmica$ Es verdad que muy pocos 'óvenes de la nueva generación se dedican a la actividad polmica$ Jemos a*andonado los «puya-os y las «gracias, 'unto con el «calam*ur y el «c+isme, para las tertulias literarias de caf$ "e da igual lo que se dice de mí? esta fórmula, confesada o no, resume a la perfección la actitud de la mayoría de los «'óvenes ante sus críticos o sus detractores$ detractores$ El profesor 8ae 3onescu me decía que +a*ía de'ado de interesarle la crítica de la gente que no pensa*a como l$ 9or supuesto que se piensa en los propios pro*lemas, las propias e&periencias? se piensa para superar un dolor o para aclarar una confusión, y no para convencer a a alguien$ :i ese alguien tiene las mismas e&periencias y le agitan los mismos dramas, nos seguir y entender$ :i no, «no me interesaD 4 primera vista, esta fórmula parece ruda y cínica$ 9ero no es ni lo uno ni lo otro$ Es la form formul ulaci ación ón de una acti actitu tudd muy o*'et o*'etiv iva, a, muy ra-on ra-ona*l a*le$ e$ 9or supues supuesto to qu quee soy contemporneo de muc+ísimas manifestaciones espirituales, culturales y sociales, y ser contempor%neo significa conocerlas y dar cuenta de ellas$ 9ero e&iste tam*in otro tipo de contemp contemporan oraneid eidad/ ad/ la contempo contemporan raneida eidadd su*'et su*'etiva iva,, cualitativa& Es decir/ me interes interesan an solamente los +ec+os que puedan ser significativos y sustanciales para mí$ :e trata de una elec elecci ción ón,, de una una sel selecci ección ón pers person onal al ent entre todo todoss los +ec+ +ec+os os y sign signiifica ficaci cion ones es contemporneos$ O*servo y registro todo lo dems, pero no luc+o contra ello, no pierdo mi tiempo polemi-ando$ a polmica no solamente supone una gran pasión por la verdad, sino tam*in muc+o tiempo li*re$ 9arece que, para una gran parte de la elite, +a cam*iado incluso la concepción del «tiempo$ "uy pocos siguen creyendo en el fluir infinito del tiempo, en un tiempo eterno que produce una continua evolución, un progreso infinito$ os 'óvenes de a+ora estn ms cerca de una concepción apocalíptica del tiempo$ 4lgunos creen que el ciclo actual de civili-ación est a punto de terminar? otros creen que se acerca una nueva era social? otros viven en el pnico$ "a#ana todo puede cam*iar o desaparecer$ K4caso queda tiempo para la polmica, para la discusión, la controversia o el calam*urL 8o queda tiempo ni para la crítica$ os +om*res +an empe-ado a darse cuenta de que no se +a creado nada en la +istoria de la +umanidad a travs de la crítica& a +istoria no registra ms que la creaci5n, la afirmación$ ;na generación como la actual, o*sesionada por la creación, desec+ar muc+as cosas$ 8o se trata solamente de la creación artística o filosófica, de una proyección +acia fuera de formas y pensamientos personales$ a creación significa, en primer lugar, equili*rio, estilo, carcter orgnico, fertilidad$ :upongo que ninguna otra generación +a estado ms o*sesionada que la nuestra con la edificación org orgni nica ca de su propi propiaa vida$ vida$ Je o*se o*serva rvado do que muy po pocos cos escri escrito tore ress 'óve 'óvenes nes estn estn fascinados por su o*ra literaria, por la profesión de escri*ir$ El escritor de antes era casi un
maníaco$ Aivía en la *o+emia, escri*ía donde podía, +a*la*a solamente de literatura y tenía sus ídolos literarios$ os 'óvenes escritores de +oy tienen o*sesiones diametralmente opuestas? en primer lugar, tienen la o*sesión de su propia vida, que no quieren desperdiciar enterrndola *a'o un montón de fórmulas o*soletas o a+ogar en el *ienestar$ Casi todos tienen tienen preocupa preocupacio ciones nes e&trali e&traliter terari arias/ as/ metafís metafísica ica,, tica, tica, vida vida social social$$ :e muestr muestran an muy prudentes cuando se trata de su vida? intentan transformarla en su verdadera o*ra maestra$ Es lo que imprudentemente se +a dado en llamar autenticidad& 9ero, en el fondo, solamente se trata de la o*sesión por el estilo de vida, estilo orgnico, personal y vivo$ 8o es difícil comprender, en esta situación, por qu la mayoría de los 'óvenes, sin ser cínicos o *r*aros, contestan a menudo/ «8o me interesa$ Es muy difícil pro*ar algo con ideas$ Es infinitame infinitamente nte ms fcil pro*arlo con creación, con o*ras$ al-ac cayó varias veces en el ridículo, pero la escena ms ridicula de su vida ocurrió cuando intentó e&plicar en un caf por qu +a*ía escrito -6enfant maudit& :olamente se puede discutir en serio con los que aceptan previamente tus ideas$ 4 los otros escuc+adles, arc+ivad sus opiniones y saludadles educadamente$
:o*re el destino de la novela rumana
8o me propongo intentar una definición de la novela$ 9ero es incontesta*le que, así como en los cuentos predominan los acontecimientos y en el drama los conflictos, la novela es un li*ro de persona'es$ :e podría escri*ir fcilmente una novela sin acontecimientos o sin conflictos$ asta con que +aya en ella un solo persona'e$ El novelista es li*re para *uscar sus persona'es en cualquier cualqu ier m*ito? pueden ser geniales gen iales y e&altados como en -ouis -am#ert , o primit primitivo ivoss y tel!ri tel!ricos cos como en -a #endici5n de la tierra de Unut Jamsun$ Auelvan Au elvan a releer -ouis -am#ert ? es una novela casi sin intriga$ ;n li*ro en el que vive un solo +om*re, a quien no le ocurre casi nada +asta el final de la novela? ms de la mitad de las pginas de este li*ro estn llenas de digresiones místicoTantropológicas, fragmentos filosóficos y cartas e&altadas$ I a pesar de todo, -ouis -am#ert sigue sigue siendo una de las me'ores novelas de al-ac y est entre las o*ras maestras del Bomanticismo, aunque al-ac pensa*a, cuando la escri*ió, que +a*ía superado el BomanticismoD 9or supuesto que es preferi*le que los persona'es de una novela sean +om*res e&traordinarios$ ;n li*ro con persona'es que 'ustifiquen la dignidad +umana es, al mismo tiempo, un li*ro que eleva la categoría de la literatura a la que pertenece$ a calidad de una literatura aumentar, si puede presumir de mayor n!mero de tipos y persona'es persona'es que lleven el drama de la e&istencia a su clíma&$ Becordamos la novela francesa a travs de Noriot, "adame ovary, >ulien :orel o "anon escaut$ a novela rusa, a travs de 4na Uarenina o Basolniov$ ;na literatura como la italiana en cam*io, donde la novela no +a *rillado espec especia ialm lment ente, e, no est est ligad ligadaa en nuest nuestros ros recue recuerdo rdoss a ning! ning!nn perso persona na'e 'e$$ 4pen penas as si recordamos a Ben-o o a enoD 8o creo demasiado en la novela social, la novela polmica o la novela manifiesto$ Creo que disponemos disponemos de suficientes suficientes documentos documentos literarios para no de'arnos de'arnos enga#ar por la moda$ %espus de la Bevolución francesa se +a producido muc+a literatura social, se +an escrito cientos de novelas proletarias, con curas *andoleros, con vi-condes sdicos, con o*reros y campesinos animados por los ms no*les ideales, pero ninguna de estas o*ras *ien intencionadas +a so*revivido$ O, me'or dic+o, nos +a quedado la novela n ovela en fascículos, fas cículos, la novela para todos$ .am*in al-ac +a intentado +acer novela social y +a tenido &ito en la medi edida en que que +a logra ogrado do crea crearr tipos, +om*res +om*res e&cepci e&cepcional onales$ es$ a me'or me'or nove novela la «comu «co muni ni-an -ante te es -e Sang noir de Nuillo Nuillou&, u&, novela que supera supera toda toda la producc producción ión contempornea francesa a travs de aquel e&traordinario Cripure, persona'e plenamente autónomo, fustico, que se de'a consumir, con ms pena que gloria, por una grandiosa conciencia teórica del mundo$ :i podemos dar alg!n sentido al trmino de «novela comuni-ante<57= (porque la novela social o proletaria significa, pro*a*lemente, li*ros con tesis polmicas o li*ros accesi*les para todos y, si es posi*le, anticapitalistas? algo parecido a las novelas en fascículos), su sentido no podría ser ms que ste/ li*ros con +om*res nuevos, nuev os, +om*re +om*ress env envuelt ueltos os en con confli flicto ctoss ms profundos, profundos, +om*res +om*res ms li*res li*res y ms trgicos$ .anto en "alrau& como en Nuillou& encontramos esta especie de +om*res que
viven viven dramas dramas e&cepci e&cepcional onales, es, porque porque tienen tienen una e&cepci e&cepcional onal capacid capacidad ad de li*ert li*ertad ad y sufrimiento$ 9ero estos persona'es poseen una grandiosa conciencia teórica del mundo$ Como Co mo los los person persona' a'es es de %o %ost stoi oiev evsi si y 9roust 9roust$$ a capac capacida idadd para para la li*er li*erta tadd y el sufrimiento, la conciencia de un destino o el miedo a la muerte, al fracaso, stas son las raíces espirituales de am*ert, de Uirilov o de 9roustD a novela rumana, +ay que reconocerlo, no *rilla precisamente por sus persona'es e&cepcionales, e&cepcionales, o por +om*res que puedan llegar a ser mitos (como +an llegado llegado a serlo una Nrandet o un Basolniov)$ 4penas si se pueden contar con los dedos de una mano todos los persona'es memora*les de la novela rumana$ Io, por mi parte, no lo intentaría$ En cualquier cualquier caso, solamente solamente desde +ace unos quince a#os +an empe-ado empe-ado a escri*irse novelas con persona'es vivos, perfectamente creados$ 4ntes e&istían esquemas, tipos automati-ados (como %an, etc$) producidos por la mentalidad de la poca$ 9or desgracia, el ms dotado novelis nove lista ta que tenemo tenemos, s, iviu$ iviu$ Be*reanu Be*reanu,, nos +a ofrecid ofrecidoo muy pocos tipos& :u enorme talento sa*e mover con asom*rosa facilidad las masas, las tierras, los pue*los$ 4 e&cepción de 3on, no encuentro otro persona'eTmito en las magníficas novelas de Be*reanu$ a novela rumana, que pasa +oy en día por una asom*rosa y revolucionaria autosup autosuperac eración ión,, triunfa triunfar r defini definitiv tivame amente nte cuando cuando logre logre imponer imponer dos o tres tres tipos tipos de persona'esTmitos en la literatura universal (no se trata del tipo del avaricioso, avar icioso, el amante, el celoso, etc$, sino de persona'es que sepan participar lo ms intensamente posi*le en el drama de la e&istencia? que tengan un destino, que sepan padecer en su propia carne o que lleguen a encarnar la agonía del conocimiento, etc$)$ ;n pue*lo crea, a travs de su follore y su +istoria, mitos$ I una literatura crea, especialmente a travs de su pica, persona'esT mitos$ a fuer-a creadora de un novelista consiste, en primer lugar, en su capacidad de crear +om*res, +om*res nuevos y en gran n!mero$ 8o la fcil reproducción de meros papeles sociales (el *uen padre, el padre pervertido, la mu'er culpa*le, el +i'o pródigo, la doncella enga#ada, etc$), sino la creación de +om*res nuevos, de +om*res que participen en el esfuer-o por conocer de la poca contempornea$ os persona'es de la novela rumana, en su gran mayoría, no poseen todavía una conciencia teórica del mundo (una de las pocas e&cepciones, qui-, sea Fred en 7l lec!o de 1rocusto)$ .am*in les falta una conciencia de su propio destino$ 8o s si la literatura rumana posee un solo persona'e que se +aya suicidado por pura desesperación o por un drama metafísico$ 9ero cono-co muc+os que se +an suicidado por amor, a*urrimiento o +am*re$ En la novela rumana no e&iste todavía ning!n místico, ning!n e&altado, ning!n cínico$ El drama de la e&istencia no +a sido a*arcado +asta las mismas raíces del ser$ os persona'es rumanos estn todavía le'os de tomar parte en la gran *atalla *a talla contempornea que se da alrededor del pro*lema de la li*ertad, del destino del +om*re, de la muerte y del fracaso$
9rofanos
8o logro comprender en la actitud de mis contemporneos su indignación contra los profanos, contra su intromisión en la valoración de unas realidades que desconocen por completo$ 9or e'emplo, una serie de +om*res inteligentes protestan cuando un profano interviene en la vida artística de un país, criticando a ciertos escritores por ra-ones morales y rec+a-ando a ciertos poetas por criterios de gramtica o de l&ico$ o que causa asom*ro no es esta espontnea solidaridad de los artistas contra un profano que intenta aleccionarlos a partir de otros criterios que los meramente artísticos$ :e trata, en el fondo, de un admira*le instinto de conservación espiritual? los artistas y los e&pertos en las tcnicas artísticas artísticas comprenden demasiado demasiado *ien la autonomía de los valores artísticos artísticos como para no defenderse con ve+emencia contra la ms grave confusión/ la confusión de los planos, la confusión entre arte y moral, por e'emplo, o entre poesía y gramtica$ 9ero los mismos artistas y e&pertos en las tcnicas artísticas tam*in llegan a +acerse culpa*les Qen otras circunstanciasQ del mismo pecado de la confusión de planos$ 8o +ace muc+o, algunos de los que militan +oy contra los profanos en el arte se entrometían, como profanos tam*in, en otros pro*lemas de la vida espiritual? por e'emplo, en mística, metafísica y dogma$ 8o recuerdo recuerdo a ning!n ning!n crítico crítico literar literario io que +ay +ayaa milita militado do alguna alguna ve-, de forma forma cualificada, contra la mística o la metafísica? es decir, que +aya tenido una sólida cultura mística o metafísica, una *uena documentación +istórica y, so*re todo, una intuición e&acta de las realidades suprasensi*les$ Cuando seme'ante incompetente, un «profano, se entromete para 'u-gar realidades que conoce superficialmente, que no es capa- de intuir, se +ace culpa*le del grave pecado espiritual de la confusión de planos$ 9ero este pecado se presenta en casi todos los campos del espíritu, no sólo en el campo del arte o de la moral? y, por lo tanto, tiene que ser diagnosticado allí donde se d$ a intervención del profano siempre lleva consigo una confusión de valores$ I como la cultura europea vive, desde +ace ya varios siglos, *a'o la marca de lo profano (la 3lustración, 3lustración, el positivismo, positivismo, el mar&ismo, mar&ismo, el freudismo, freudismo, el racismo, racismo, el +istoricismo), todos estamos soportando, casi sin indignarnos, esta confusión$ 9or eso me parece muy e&tra#a (y, en cierto sentido, en contradicción consigo misma) la actitud de algunos de mis contemporneos que protestan cuando un gramtico o un mdico 'u-gan una o*ra de arte, pero no protestan cuando un crítico literario, un mdico o un erudito 'u-gan una metafísica, una mística o un dogma$ :e nos contestar/ contestar/ esto significaría que sólo un místico est cualificado para 'u-gar una e&periencia o una teoría mística y que solamente un creyente est cualificado para opinar so*re una creencia$ En efecto, así de*e ser$ 8o se puede 'u-gar una realidad espiritual ms que conocindola? y no se la puede conocer ms que enfocndola desde dentro de su propio plano de e&istencia$ 8o se puede 'u-gar una o*ra de arte ms que conocindola y contemplndola estticamente$ :e la puede aceptar o rec+a-ar, pero se tiene que conocerla antes, que amarla con anterioridad$ 4mando la poesía, se pueden contemplar
los o*'etos poticos y estar cualificado para 'u-gar a un poeta$ 4mando las realidades suprasensi*les (es decir, creyendo en su e&istencia y su autonomía), se puede 'u-gar, se puede reci*ir o rec+a-ar r ec+a-ar una metafísica, un dogma o una e&periencia mística$ :e tiene que qu e estar Qtanto en un caso como en otroQ cualificado/ no confundir los planos, no ser un profano$ En otras pala*ras/ se tiene que creer en la e0istencia de la realidad que se est 'u-gando y en su autonomía espiritual$ 9or supuesto, tales afirmaciones no convencen a casi nadie$ 9or otra parte, ni siquiera se +an +ec+o con ese propósito$ 9ero siempre resulta interesante o*servar la intromisión, intromisión, cada ve- ms profunda, profunda, del profano en la vida espiritual espiritual y cultural cultural de Europa$ Jace dos o tres siglos, la confusión de planos se manifesta*a en los niveles superiores? entonces se trata*a de teología y filosofía, de dogma y ciencias naturales (este trmino lo utili-amos, por supuesto, en el sentido que tuvo desde el Benacimiento +asta inneo)$ Empe-ando con el siglo W3W, la «confusión de planos, la intervención de los profanos, +a tenido una amplitud y una e&tensión inimagina*les$ os valores espirituales +an sido identificados con niveles de realidad cada ve- ms *a'os? el pensamiento, con el cere*ro, el geni genio, o, con con la locu locura ra,, la sant santid idad ad,, con con la se&u se&ual alid idad ad,, el arte arte,, con con la copr coprof ofil ilia ia,, la espiritualidad, con la luc+a de clases, la cultura con la sangre del pue*lo que la +a producido, etc$ Esta «masificación y empo*recimiento empo*rec imiento de la intervención del profano, pr ofano, del noiniciado, responde, sin duda, a la estructura íntima del siglo W3W? siglo que 'u-ga*a la valide- de cualquier realidad apoyndose e&clusivamente en criterios sensoriales$ Jasta para reafirmar la inmortalidad del alma el siglo W3W +a necesitado prue*as sensoriales, «testimonios? de a+í el espiritismo/ la ms vulgar y «masificada concepción de la inmortalidad que +aya formado el +om*re$
:upersticiones
4 menudo, las etimologías pueden rescatar una pala*ra y devolverle su ms no*le senti sentido do primi primigen genio io$$ Es lo que ocur ocurre re con con esta esta pala* pala*ra/ ra/ «supe «superst rstic ició ión n,, qu quee deri deriva va,, clar claram amen ente te,, de superstat ( superstitionem, superstitionem, superstare), «lo que est encima, lo que permanece en el fluir inaca*a*le de los tiempos$ os folloristas italianos podían +a*lar de sopraviven*e, aludiendo a aquellas costum*res o ideas populares que las alimentaron anta#o$ :in em*argo, el sentido de «superstición es ms rico y ms «no*le que el sentido de la pala*ra italiana sopraviven*e& 8o se trata solamente de una forma que simplemente so*revive, sino de una idea o de un ritual que «permanece por encima de la +istoria$ 8o solamente solamente so*revive por espacio de una o dos generaciones, generaciones, o de unos cuantos siglos, sino que est% por encima del tiempo? como una norma eternamente vlida, como un 9rincipio o un :ím*olo$ 9or 9or supue supuest sto, o, no todas todas las las supers supersti tici cione oness tiene tienenn un carc carcte terr supra suprate temp mpora oral$ l$ Cualquier idea o rito que se +aya conservado no es capa- de refle'ar esa intuición primordial de las normas, de los principios fundamentales, metafísicos (lu- y tinie*las, muerte y resurrección, el centro, el polo, etc$)$ "uc+as supersticiones tienen un origen meramente +istórico, local y +umano? sas tam*in son !tiles, en este caso para las ciencias profanas (sociología, +istoria, follore), pero per o no para la sim*ólica o la metafísica$ Este Es te tipo de supersticiones pueden ser llamadas, con propiedad, sopraviven*e? son documentos que +acen referencia a la vida de un grupo +umano o a la +istoria de una cierta región$ 4unque esta vida local +aya quedado configurada, la mayoría de las veces, por esquemas teóricos muc+o ms antiguos y de otro nivel$ 9or e'emplo, las leyendas creadas alrededor de 4le'andro "agno asimilaron muc+os elementos e&traídos de los mitos de los dioses y los +ro +roes es$$ El ca*a ca*all ller eroo No No-o -onn de %ieu %ieudo donn nn, , qu quee mató mató al «d «dra ragó gón n de Bo Boda das, s, fue fue transformado transformado en un +roe seg!n todas las reglas del mito y, así, un +ec+o +istórico +istórico y local se convirtió, en la conciencia popular, en una nueva versión del antiguo mito/ el Jroe y el %ragón$ .eniendo en cuenta todas estas «leyes de lo fantstico, tendríamos que reali-ar, a nuestro 'uicio, una separación de aquellas supersticiones que no tienen nada de +istórico, sino que verdaderamente +an «permanecido por encima, desde tiempos inmemoriales$ (En un li*ro de pró&ima pró&ima aparició aparición, n, -a Mandragore& 7ssai sur les origines des l$gendes<5P=, +emos intentado demostrar e ilustrar la valide- de este mtodo$) a mirada escptica del profano ya no tendr ninguna n inguna 'ustificación para par a rec+a-ar en *loque el enorme corpus de las supersticiones$ 9ues en l se +an conservado intuiciones y sím*olos que preceden a la +istoria misma y cuya co+erencia nos permite +a*lar de una «lógica del sím*olo, despus de que otros lo +ayan +ec+o de su metafísica$
Aestido y sím*olo
KJa*is contemplado alguna ve- las tiras de tela de un #ati<, uno de esos escuetos tra'es que se llevan en >avaL :e trata de unas telas multicolores con complicados y la*erínticos di*u'os$ 8ing!n o'o europeo sería capa- de descu*rir diferencias significativas entre las tiras del #ati<, aparte de su colorido, por supuesto/ un tra'e parece amarillo, otro ro'o, etc$ I aun así, cada tira tira de #ati< tiene tiene su propia y concreta significación$ Esos di*u'os la*erínticos +a*lan, para el avisado o'o del 'avans, ms y me'or que una pgina llena de e&plicaciones$ Cada signo es un sím*olo$ ;n 'avans se dar cuenta enseguida del tipo de +om*re que tiene delante/ si es rico o po*re, si es de la sierra o del litoral? qu profesión tuvieron sus padres o quin es su novia, etc$ :i anali-a detenidamente su tra'e, se dar cuenta +asta de los detalles ms íntimos, porque el sim*olismo de la vestimenta no esconde nada$ :e dar cuenta, por e'emplo, de ad5nde se dirige nuestro transe!nte/ si va a una *oda, o a +acer un negocio, o a una fiesta$ .odas las «ocasiones, todos los «acontecimientos +an quedado como gra*ados en los recovecos de estos la*erintos policromados$ El +om*re no quiere esconder nada, porque a travs del tra'e que lleva puesto aquel día se integra en un orden supraindividual$ I todos los sím*olos, los em*lemas, las alegorías impresos so*re una tira de #ati< no no tienen otro sentido que integrar definitivamente al individuo en un orden que lo trasciende$ 4l mismo tiempo, este sim*olismo, resultando tan familiar para todos los miem*ros miem*ros de la comunidad, comunidad, +ace posi*le una comuni5n perfecta y natural$ natural$ 8o es necesaria ninguna «presentación, ninguna «introducción, como dicen los ingleses cuando +a*lan de poner en contacto a dos personas$ El sim*olismo de la vestimenta +a*la por sí solo y lo +ace para todo el mundo/ para un ni#o o para un anciano, para un erudito o para un campesino$ Ia +emos anali-ado en otra ocasión el sim*olismo del 'ade dentro de la cultura c+ina$ as pulseras de 'ade, adornadas con piedras de colores y formas distintas, que producen ciertos sonidos al c+ocar entre sí, cumplen el mismo papel que los vestidos de #ati< en en >ava$ Bevelan, de una forma natural, sencilla y sin ninguna ostentación, el rango social, la situación financiera, los deseos y la edad de la persona que lleva la pulsera$ En una sociedad sociedad estruct estructurad uradaa so*re so*re fundame fundamento ntoss tradic tradicion ionale aless no e&isten e&isten los «secretos personales, la privacy& I no e&isten secretos porque todos los gestos del +om*re tien tienen en una una sign signif ific icac ació iónn que que le prec preced edee y le so*r so*rep epas asa$ a$ 4sí como como en Orie Orient ntee la alimentación, ese gesto tan elemental y profano, llega a ser un ritual , es decir, reci*e un significado y un valor ms all de su función orgnica, tam*in los dems gestos +umanos se integran en un orden que trasciende no sólo al individuo, sino tam*in a la sociedad$ 9orque si el individuo est integrado en la sociedad a travs de miles de «rituales permanentes, la sociedad, a su ve-, est integrada en el orden cósmico$ El +om*re de las culturas culturas tradicional tradicionales es no est% solo? pero esto no significa simplemente que no est solo en
la sociedad (como se +a intentado intentado en las luciferinas luciferinas civili-acio civili-aciones nes occidentales)? occidentales)? significa que no est solo en el cosmos$ I esto es muc+o ms significativo$ Estos +om*res ya no tienen secretos porque ya no los necesitan$ Aiven orgnicamente, conectados al gran misterio del cosmos$
El !ltimo instanteD
:i el siglo W3W +a sido, tal como se +a dic+o, el siglo de la +istoria, el siglo WW es el siglo de la sociología y de la etnografía, ciencias +istóricas por e&celencia$ Es muy signi signifi ficat cativ ivoo que, que, desde desde +ace +ace cien cien a#o a#oss +asta +asta a+o a+ora ra,, los los esfue esfuerr-os os del del pensa pensami mien ento to occidental convergen +acia un mismo fin/ conocer y e&plicar el pasado$ El «pasado del cosmos y de nuestro planeta? la evolución de las especies, el origen de las ra-as y de los pue*los? el origen y la evolución de d e los idiomas, las etapas de las instituciones sociales, la +istoria de las religiones, etc$ .odas las ciencias de carcter +umanista, desde el arte y la literatura +asta la etnografía y el follore, +an ido integrndose en el marco epistemológico de la disciplina +istórica$ %e +ec+o, los «adelantos que se +an producido en cada uno de estos estos campo camposs se de*e de*en, n, en prim primer er luga lugar, r, a la apli aplica caci ción ón del «mt «mtodo odo +ist +istóri órico co$$ Becordemos, por e'emplo, el caso de la etnografía, que solamente +a llegado a ser ciencia desde el momento en que introdu'o el criterio +istórico en el estudio de las civili-aciones primitivas$ K4 quin se le +a*ría ocurrido, en el siglo WA333, escri*ir una Historia de la sociedad melanesia, tal como la escri*ió Bivers en 0106L Cuando Aoltaire y "ontesquieu escri*ían so*re los «primitivos y los «orientales, esos pue*los servían a Europa como e'em e'empl plos os de la ause ausenc ncia ia de +ist +istor oria ia$$ os os enci encicl clop oped edis ista tas, s, como como los los rom romnt ntic icos os,, conside considera*a ra*ann a los pue pue*lo *loss e&traeu e&traeurope ropeos os como como un con'unt con'untoo de realida realidades des +umanas +umanas «puras, originarias, ms all de la +istoria y del devenir, que +a*ían conservado, a lo largo de los siglos, su «civili-aci «civili-ación ón natural, no contaminada contaminada por guerras religiosas religiosas e in'usticias in'usticias sociales$ 9ero la etnología moderna, con un Bivers o un Nrae*ner, +a descu*ierto +istoria +asta en la vida de la ms insignificante tri*u australiana$ El siglo WW +a aprendido a aplicar el mtodo +istórico especialmente a los campos que carecen de lo que llamamos «documentos +istóricos (monumentos, inscripciones, te&tos)$ a etnografía y la pre+istoria +acen +a*lar a un arco, a un instrumento de pesca o a un di*u'o con la misma precisión con la que una crónica escrita o los muros de una fortale-a testimonian las vicisitudes de un pue*lo$ %esde +ace ya casi un siglo, la conciencia europea +a e&plorado el pasado, etapa por etap etapa$ a$ 4 mitad mitad del del sigl sigloo W3W W3W surgi surgiero eron, n, ante ante los los o'os o'os europ europeos eos,, las las ruina ruinass de las las civili-aciones enterradas en el olvido durante miles de a#os/ Egipto, .roya, a*ilonia, :usa, Cnosos? despus Elam, >udea, :umer, las culturas +itita, +ind!, iraní? despus 4sia Central y los castillos del desierto de Uat+ay? %ura Europos y ;garit$ a lista no es ni muc+o meno menoss compl complet eta, a, y tamp tampoc ocoo prete pretende nde serlo serlo$$ 9ero 9ero la +umani +umanidad dad nu nunc ncaa +a*í +a*íaa teni tenido, do, simultneam simultneamente, ente, una conciencia conciencia tan e&+austiva e&+austiva de su pasado Qdesde la pre+istoria pre+istoria +asta la Edad "edia y desde los primitivos +asta las sociedades perfectas del BenacimientoQ como llegó a tenerla Europa en los !ltimos cien a#os$ ;sando una imagen casi *rutal, se podría decir que Europa est visionando, desde +ace alg!n tiempo, todas las etapas de su +istoria y del pasado de la +umanidad en general$ .odo lo que alguna ve- e0isti5, todo lo que +a vivido, todo lo que, en su día, dio sentido a la e&istencia, est gra*ado como en una película en la conciencia europea$ europe a$ :e podría decir que, así como un individuo revive, en e n sus
!ltimos instantes, su propia vida +asta en los ms peque#os e insignificantes detalles, de la misma forma Europa est contemplando +oy, en su terri*le agonía, todas las etapas de la vida +istórica de la +umanidad, desde los tiempos ms remotos +asta el presente$ Europa, el mundo moderno, vuelve otra ve- a recordar toda su vida, antes de entrar, entrar, definitivament definitivamente, e, en su ocaso$ Jasta los mismos optimistas, que no creen en una inminente caída de la cultura europea, se ven for-ados, sin em*argo, a reconocer esto, por lo menos/ que el mundo actual est presenciando un final de ciclo$ @ue, pase lo que pase despus del futuro cataclismo, las form formas as de la vida vida y el pens pensam amie ient ntoo euro europe peos os,, crea creada dass po porr el Bena Benaci cimi mien ento to y las las revoluciones sociales e industriales que le +an seguido, sern enterradas y superadas definitivamente$ Ja*iendo Ja*ien do llegad llegadoo a este este final final de ciclo, ciclo, la con concie ciencia ncia europea europea est est revivi reviviendo endo mentalmente, como en una película, la +istoria universal$ @ui- podríamos e&plicar toda una serie de e&tra#as manifestaciones de nuestro tiempo (la relación entre el n!mero de las ctedras de +istoria de nuestro tiempo y la caída de la natalidad en Francia? el intento de la 4lemania 4lemania na-i de liquidar liquidar la o*sesión o*sesión por la +istoria y la creación de mitos pre+istóricos pre+istóricos y «fenómenos originarios racistas, etc$) partiendo de este fenómeno$
«"uerto en vida
En 4nnam e&iste la costum*re de que los ancianos, una ve- que +an presentido su pró&imo fin, preparen un *anquete *anque te funerario para la familia, como si ya +u*ieran muerto$ :i el anciano se recupera y sigue viviendo es considerado, desde el punto de vista 'urídico y social, como un muerto& :u mu'er es viuda y sus +i'os +urfanos? ya no puede participar en los rituales ms que en la medida en que tam*in los muertos son aceptados en ciertas ceremonias$ En la 3ndia encontramos una creencia similar, la así llamada samprIdana& El anciano, presintiendo su cercano fin, transmite a su +i'o toda su «persona psicomental$ as ;panisad descri*en admira*lemente esta ceremonia$ El anciano coloca a su +i'o de tal forma que la mano de ste toque levemente la mano de aqul, y su pie, el pie de l, etc$ %espus empie-a empie-a el ritual propiamente propiamente dic+o$ En el supuesto supuesto de que el anciano so*reviva, so*reviva, 'urídicamente ser considerado como muerto? estar *a'o la custodia de su +i'o (porque su +i'o ser, desde aquel momento, su verdadero yo) y lo ms pro*a*le pro*a*le es que a*andone a*andone su casa para vivir el resto de sus días en el *osque, practicando la ascesis en la soledad$ a condición de «muerto, en vida, que en ciertas sociedades orientales se alcan-a a travs de unos rituales de fisiología mística (la «transmisión de los sentidos del maestro al discípulo) o de ceremonias funerarias anticipadas, tiene analogías en otras sociedades +umanas$ 9ienso, por e'emplo, en un filósofo que lo +aya meditado todo, +asta sus !ltimas consecuencias, que +aya suprimido los o*stculos, superado los conflictos y resuelto las ant antinomi nomias as?? un fil filósof ósofoo que que se +ay +aya reco reconc ncil iliiado ado con con el Co Cosm smos os y con con %ios %ios,, compren comprendi dindol ndoloo todo todo y formula formulando ndo esta «co «compre mprensi nsión ón en un sistema& K4caso este +om*re no ser, de a+ora en adelante, un muerto en vidaL K8o se encontrar totalmente reconciliado, reconciliado, como ning!n otro +om*re vivo podría estarloL estarloL Bepitiendo Bepitiendo una fórmula muy conocida, podemos decir que el sistema de un filósofo es su piedra funeraria$ %espus de que lo +aya comprendido y formulado todo, Kqu otra e&periencia puede animar o fecundar su concienciaL 9ara l ya no tienen secretos ni %ios ni el Cosmos? ya no ser em*argado por ning!n entusiasmo, e&periencia o duda$ 4unque su cuerpo siga en vida, ese +om*re ya no pertenece a nuestro mundo$ %esde el punto de vista espiritual, ser un muerto? en el sentido de que +a alcan-ado la perfección y la forma ms aca*ada de equili*rio$ Je recordado la ceremonia funeraria de 4nnam y el rito +ind! del sampradIna para que se vea claramente que la condición de «muertos en vida, de +om*res que ya no pertenecen a la sociedad que los al*erga, +a e&istido desde siempre$ El anciano que +a llegado al um*ral de la muerte es, en cierto sentido, alguien perfecto? todo lo que podía aprender de la vida ya lo +a aprendido$ En el caso de la 3ndia, l transmitir a su +i'o las funciones «impersonales de su ser$ %espus de este ritual, ya no tendr ms la-os físicos con la tierra$ .odo lo que en l +a alcan-ado su perfecci5n lo «depositar (en un sentido mgico, concreto) en su +i'o$
Oro
Cuando el ilustre teólogo oriental reci*ió el apodo de >uan «oca de oro, esta e&presión no aludía tanto a la #elle*a de su discurso cuanto a su veracidad& El teólogo cristiano e&presa*a a la perfección la verdad, la realidad& El mundo oriental conserva*a y prolonga*a así, en los al*ores del cristianismo, una antigua tradición que sim*oli-a*a la verdad con el oro$ :e decía de algo que era «de oro cuando de'a*a de ser +umano, transitorio, cuando se salía de la +istoria$ ;n +om*re con un «cora-ón de oro era un +om*re que +a*ía superado la condición +umana, que +a*ía traspasado, de alguna forma, el um*ral de lo trascendente, acercndose a la santidad$ I esta santidad, e&presada por la fórmula «cora-ón de oro, significa*a que aquel +om*re vivía la verdad a*soluta$ a*soluta$ El acento se pone, pues, en el conocimiento integral de la realidad y no solamente en la *ondad del cora-ón, tal como podría parecer al principio$ ;n +om*re con un «cora-ón de oro ser, por supuesto, muy «*ueno y muy caritativo, pero esta *ondad es una consecuencia del conocimiento de los primeros principios$ «El oro es la realidad, re-a una antiquísima sentencia +ind! (Satapat!a ra!mana)$ I reencontramos la misma concepción en cualquiera de las antiguas culturas tradicionales$ 8o se trata solamente de un sím*olo de la realidad, o de los «principios, tal como sucedía en C+ C+in ina, a, por por e'em e'empl plo, o, dond dondee el oro oro repr repres esen enta ta*a *a el prin princi cipi pioo yang , la «real «realid idad ad inaltera*le inaltera*le,, solar, solar, las normas cósmicas$ a significación significación del oro es muc+o ms profunda$ ;n «cuerpo de oro es un cuerpo místico, compuesto por pala*ras sagradas, reveladas (esta idea est presente, especialmente, en la literatura sagrada +ind!)$ >uan «oca de oro es, pues, el transmisor de un cuerpo místico oral, de un dogma revelado$ El +om*re con un «cora-ón de oro es el +om*re que vive en este cuerpo místico de la verdad a*soluta$ :olamente así comprenderemos la *!squeda alquímica del oro/ como *!squeda de los principios de la realidad e intento por asimilar las normas$ 4similación que se puede reali-ar reali-ar de varias formas, sea asimilación asimilación mgica (a travs de la introducción introducción del oro en el organismo +umano), sea mística o metafísica$ o que me parece fascinante en estas etimologías sagradas es el descu*rimiento, detrs de unas fórmulas que, a primera vista, parecen profanas, relacionadas solamente con costum*res y supersticiones +umanas, de unos significados metafísicos$ 8ada o casi nada era casual en la «vida de los antiguos$ .odo tenía su sentido y su significación precisa? y estas significaciones, anali-adas una por una, nos de'an entrever una visión metafísica de una co+erencia perfecta$ 4llí donde +asta a+ora sólo ramos capaces de ver simples manife manifestac stacion iones es de una «menta «mentalid lidad ad prelógi prelógica, ca, empe-am empe-amos os a descu*ri descu*rirr una aca*ada aca*ada formulación de las normas$ El m*ito profano, el m*ito de los acontecimientos sin significación, ocupa*a un lugar reducidísimo en la vida de los antiguos$
El camino +acia el centro
a tcnica socrtica se fundamenta en la certe-a de que cualquier +om*re tiene la verdad en sí mismo? lo !nico que +ace falta es recordrsela, +acer que salga a la lu-$ 4lgunas filosofías +ind!es parten de la misma certe-a$ 9or e'emplo, el sam+ya y el yoga, al perseguir Qcomo cualquier «sistema de filosofía +ind!Q la autonomía a*soluta del espíritu, su li*ertad, llegan a +acer la siguiente afirmación/ cualquier alma ( purus!aD purus!aD spiritus) es, de !ec!o, li*re, autónoma? lo que ocurre, sencillamente, es que el +om*re no se da cuenta de esta verdad$ El fin de la filosofía es, pues, seg!n el sam+ya, llegar a comprender, a darse cuenta de esa li*ertad del alma$ .anto para :ócrates como para algunas filosofías +ind!es, el +om*re sufre porque ignora el valor y la «condición «condición de su propia alma$ alma$ Es decir, decir, ignora su propio «centro$ El sufrimiento, el drama, el desastre de la condición +umana se de*en a una a*surda amnesia/ el +om*re no recuerda la verdad (:ócrates), no reconoce su propia alma (sam+yaTyoga)$ (sam+yaTyoga)$ 9ero conviene mati-ar que «alma no se refiere aquí (como en ning!n otro sitio de la metafís metafísica ica +ind!) +ind!) a la psyc!$ o al anima, a la vida psicomental considerada como una mani manifes festa taci ción ón suti sutill de la mate materi ria, a, sino sino al noJs, al spiritus, es decir, a una entidad ontológica$ a salvación, tanto para :ócrates como para la filosofía +ind!, consiste en la capacidad del +om*re de recordar , o de reconocer , la verdad$ 4+ora *ien, esta «verdad est ya en el +om*re y constituye el centro mismo de su ser$ 9oco antes de :ócrates, las ;panisad +a*ían proclamado/ KTú eres estoL ?tat tvam asi& «Esto, es decir, ra+ma, la realidad a*soluta, idntica con Itman, con el «alma ( spiritus spiritus) del +om*re$ El camino +acia la «sa*iduría o +acia la «li*ertad es un camino +acia el centro de tu ser$ Vsta es la definición definición ms simple simple que podemos dar de la metafísica metafísica en general$ general$ I es interesante o*servar que la religión puede reci*ir una definición similar/ el camino +acia el «centro$ Ciertamente, cualquier acto religioso presupone una salida del m*ito profano (que correspondería, en el orden metafísico, a la salida del devenir, de la vida y de la +istoria) y una entrada en una -ona sagrada (templo, lugar de sacrificio, tiempo lit!rgico, estado estado de orac oració ión, n, etc$ etc$)$ )$ El m*it m*itoo sagrad sagradoo por e&cel e&celen enci cia, a, el templo o el altar , es considerado Qen todas las tradiciones religiosasQ el «centro del mundo (cf$ nuestro li*ro :osmologie :osmologie 2i alc!imie alc!imie #a#ilonian;, #a#ilonian;, 012X, pp$ 20 ss$)$ 4sí pues, la entrada sacrificial en una -ona sagrada es el camino +acia el centro, +acia la realidad a*soluta$ 9orque lo sagrado significa esto/ el esse, la realidad a*soluta, opuesta a lo profano/ el devenir, la vida, en una pala*ra, el non esse& 9or supuesto que estos «caminos +acia el centro Qtanto el camino de la metafísica como el de las religionesQ religionesQ tienen direcciones direcciones contrarias/ contrarias/ la metafísica metafísica descu*re el centro
en el +om*re +om*re (tat tvam asi)? la religión lo descu*re en lo sagrado, fuera del +om*re (das gan* Andere)$ 9ero aun así, esa diversidad de «direcciones no tiene por qu confundirnos, +acindonos pensar en una incompati*ilidad de am*os caminos, el metafísico y el religioso$ 9orque si es verdad que, en el caso del itinerario metafísico, el +om*re descu*re la realidad a*sol a*solut utaa (el (el Itman) en sí mismo, tam*in es verdad que este principio ontológico no pertenece al +om*re en cuanto tal, sino que le precede prec ede y le trasciendeD
Aacuidad
a conciencia +umana est igualmente aterrori-ada tanto por la profundidad de la nada nada como como por por el a*so a*solu luto to$$ .anto nto ante ante el non esse esse como ant ante el esse, el +om*re e&perimenta idntico terror$ a e&periencia «mística no est provocada solamente por el esse (%ios), sino tam*in por el non esse, el vacío a*soluto, la nada (non esse)$ .oda la mística «e&tremista del *udismo Qa la que, por otra parte, se la etiqueta de ni+ilistaQ tiene sus raíces en esta e&periencia de la nada$ Jan sido muc+os los «místicos *udistas que se +an pasado toda la vida disolviendo la sustancia del universo, des+aciendo sus forma formas, s, vol! vol!me menes nes,, apar aparie ienci ncias? as? *usca *uscando ndo con inte intensi nsidad dad la gran gran ilusi ilusión ón que se desenvolvía, dominadora, por de*a'o de las así llamadas «realidades$ I ante la 8ada suprema, ante ese a*ismo de noTser, los *udistas +an e&perimentado el mismo terror, el mismo rapto e&ttico que nos conmueve en las confesiones de los místicos cristianos$ :in em*argo, tam*in tam*in es verdad que en el itinerario místico, místico, cristiano o islmico islmico el terror ante el non esse desem*oca desem*oca en el descu*rimiento descu*rimiento de %ios, del :er supremo$ supremo$ 4unque tam*in aquí nos encontramos, a menudo, con la confesada incapacidad del místico de distinguir entre esse y non esse, entre %ios y la 8ada$
:ue#o
Jerclito decía de los aedos, sicofantes y mistagogos que «en estado de vigilia se comportan como la gente dormida, mirando cada uno +acia su mundo personal, al contrario que los +om*res despiertos, que tienen un solo mundo, el mismo para todos$ :i esta cita +u*iera caído *a'o la mirada de Constantin 8oica cuando esta*a escri*i escri*iendo endo su *ello *ello li*ro Mat!esis, posi*lemente la +a*ría comentado y utili-ado para ilustrar su tesis$ Constantin 8oica intenta asumir, en Mat!esis, la defensa de las culturas de tipo geomtrico, en contra de las culturas de tipo +istórico$ O, como decía Jerclito, la defensa de las culturas de los +om*res despiertos, los que «tienen un solo mundo, com!n para todos, en contra de las culturas, tan variadas e impenetra*les, de los «+om*res que duermen$ a cultura de los +om*res despiertos, de aquellos que participan en una misma reali realidad dad,, !nic !nicaa y unive universa rsal/ l/ +om*re +om*ress e&trov e&trovert ertid idos, os, qu quee miran miran +aci +aciaa afuera afuera,, que se encuentran con las mismas cosas, con la misma lu-, la misma ley? y al lado de esta cultura !nica y universal de tipo geomtrico se encuentra la pluralidad de las culturas +istóricas, creación de los +om*res introvertidos, que miran +acia su interior («cada uno +acia su mund mundoo perso persona nal l,, como como nos decí decíaa Je Jer rcl clit ito)? o)? orga organi nism smos os aisl aislad ados, os, impen impenet etra* ra*le les, s, dominados por su potente vida orgnica (suya y sólo suya/ «autntica)? sintiendo y 'u-gando la realidad con criterios e&clusivamente oníricos$ Ciertamente, el sue#o es la característica de cualquier cultura +istórica$ El sue#o es el sím*olo del aislamiento, de la coincidencia con los grandes procesos orgnicos$ En el sue#o entramos en contacto con las fuentes de la vida, en l «se crean las formas +istóricas (transformación orgnica, fermentación)$ 9ero el «sue#o «sue#o no signif significa ica,, en este este caso, caso, inconsc inconscien iencia cia,, sino sino recogim recogimien iento, to, unificación, introversión, vuelta a la vida orgnica$ I no es mera casualidad que ucian laga, el estudioso de la filosofía del estilo de la cultura rumana, el +om*re que ms y me'or +a escrito, entre nosotros, so*re la polivalencia de las culturas +istóricas, +aya titulado titulado su principal principal volumen de poesía -a ala#an*a del sueNo& El sue#o desempe#a, desempe#a, en la poesía y el teatro de laga, un papel decisivo/ es la vuelta a la unidad orgnica primordial, el eterno estado paradisíaco de la creación carente de conciencia$ El sue#o es, casi, un estado prenatal, em*rionario, en el que la vida ya no est separada de la conciencia? en l ya no e&iste li*ertad, pecado, drama$ «El p'aro sin sue#o ( Avram Avram "ancu), «el gran p'aro enfermo ( -a -a cump;na apelor ), ), es el sím*olo del a*andono de la unidad em*rionaria, la prdida de la conciencia paradisíaca, la ruptura del continuum orgnico$ «El p'aro sin sue#o mira +acia afuera? indaga los espacios? previene los grandes acontecimientos +istóricos$ 9or eso, el poeta lo
implica en el nacimiento del mito revolucionario revo lucionario de 4vram 4vram 3ancu$ a misma concepción del sue#o Qcomo estado creador y e&tticoQ volvemos a encontrarla, por e'emplo, en otras culturas de tipo +istórico$ 4sí, los taoístas c+inos, que conside considera*a ra*ann el sue#o, sue#o, la +i*erna +i*ernació ciónn y el &tasi &tasiss como como e&p e&perie erienci ncias as origin originari arias, as, en «circuito cerrado, sin desperdiciar la vida, sin perderla ni proyectarla +acia afuera$ 9or otra parte, !nicamente en Europa +a sido ridiculi-ado el sue#o? solamente ciertos pue*los occidentales lo consideran como un sím*olo de la pere-a, de la estupide- y la esterilidad espiritual$ En otras culturas el sue#o es un sím*olo del recogimiento perfecto, de la autonomía y de la creación$ a misma ironía +eracliteana con respecto al sue#o volvemos a encontrarla en la secta de los fedeli d6amore, si nos fiamos de uigi Aalli ( "l "l linguaggio segreto di 'ante, p$ 0X5a)$ En el lengua'e secreto «dormir significa estar en el error, estar ale'ado de la verdad? es decir, pertenecer a la 3glesia católicoTromana$ Vita nuova significaría, precisamente, la salida del sue#o (y de la «muerte) por o*ra del amor$ %esde %ante +asta a+ora, la sim*ología del sue#o como privación, como un error, +a dominado toda la cultura occidental$ a concepción original, con valencias tan e&tra#as en las culturas orientales, que ucian laga +a poeti-ado en -a ala#an*a del sueNo, es tanto ms valiosa para nosotros$ :e opone categóricamente a Occidente/ a esos «+om*res despiertos con un solo mundo, com!n para todos$
%os tipos de creadores
;na «personalidad creadora solamente tiene una alternativa/ valorar la e&istencia en un sentido nuevo y «personal o restaurar las normas$ 9ara la primera posi*ilidad podemos citar a %ostoievsi o Noet+e? para la segunda, a %ante, Calderón, :+aespeare, Bacine$ 9ara estos !ltimos autores casi no se plantea el «pro*lema de la personalidad$ Ellos se mueven entre las normas, las verdades y, en cualquier caso, ms all de los «estilos culturales$ culturales$ En este sentido, la tcnica tcnica dramtica dramtica de Bacine encuentra una perfecta rplica en Ulidsa$ Como Bacine, Ulidsa crea seg!n los cnones, seg!n una tradición milenaria que le precede$ 9ero tanto Bacine como Ulidsa reali-an una saluda*le «regeneración de las normas, alcan-an una gracia y una perfección inalcan-a*les +asta ellos$ Esta verdad es evidente en el campo de las artes plsticas y la arquitectura$ Jasta el Benacimiento, Benacimiento, el artista no aporta*a nada «original «original a travs de su creación$ creación$ :e limita*a limita*a a conservar conservar y transmitir transmitir los cnones, cnones, los principios principios cuya valide-, antes de ser «esttica, «esttica, era «metafí «metafísic sica$ a$ os templo temploss del "edite "editerrn rrneo, eo, los santuar santuarios ios cristi cristianos anos,, la iconogr iconografí afíaa cristiana, para no recordar el arte +ind!, arte canónico por e&celencia, todas las o*ras de arte de la 4ntigMedad y de la Edad "edia eran «+uellas ( vestigii) de lo trascendente trascendente en la +istoria? «+uellas que guia*an el espíritu +umano, ayudndole a ascender so*re la escalera del conoc conocim imie ient ntoo meta metafí físic sico$ o$ 9ero 9ero incl incluso uso cuand cuandoo no se trat trata* a*aa de los los «p «pri rinc ncipi ipios os metafísicos, como era, por e'emplo, el caso de Bacine, las normas de la condición +umana, normas que no tenían nada que ver con el individuo, seguían estando presentes$ En conclusión, es normal que no +aya acuerdo entre estos dos tipos de creadores, los «conformistas tradicionalistas (en el sentido metafísico del trmino/ tradición primordial, supra+istórica) y los inconformistas$ 9ero genios como %ostoievsi descu*ren, 'unto con los niveles de e&istencia +umana que +a valorado, las normas de estos nuevos territorios$ El infierno infierno y el paraíso descu*iertos por %ostoievsi %ostoievsi pertenecían pertenecían desde +ace muc+o tiempo a la e&periencia +umana$ %ostoievsi no +a +ec+o ms que valorar , a travs de su o*ra, estos oscuros m*itos de la e&istencia$ Jasta l, los que +a*ían logrado penetrar allí no tenían la conciencia de participar en un valor , de que su e&periencia tenía una significación +umana$ Como muc+o, pensa*an que se +a*ían desviado fuera de la +umanidad, tal como ocurre con todas las místicas de la «tinie*la, que +a*ían aparecido en Eurasia muc+o tiempo antes de %ionis %ioniso, o, 'unto 'unto con todas todas las e&p e&perie erienci ncias as demtr demtrica icass (e&peri (e&perienci encias as que parecía parecíann ser «posesiones, que de'a*an una fuerte impresión de «+umillación, de «inconsciencia)$ %ostoievsi +a restaurado, si podemos decirlo así, las normas de esta e&istencia demtrica$ a «vida en el sótano, despus de %ostoievsi, +a de'ado de tener una conn connot otac ació iónn peyo peyora rati tiva va,, de conf confus usió ión, n, caos caos y neur neuros osis is$$ a vida vida su*t su*ter err rne neaa +a reencontrado, si no sus «leyes, por lo menos su ritmo, su función creadora en la e&istencia$ 9ersfone, la +i'a de la diosa %emter, madre de todos, que permanece durante nueve meses en el 3nfierno, de*a'o de la tierra, y tres meses a la lu- del día, esta 9ersfone, matri- de
todas todas las formas, formas, ocano ocano de las potenci potencias, as, tam*in tam*in tiene sus normas/ las normas de la oscuridad tel!rica de la noc+e su*terrnea y prenatal$ Es evidente que, al rescatar este nuevo continente mental para la sensi*ilidad europea moderna, %ostoievsi %ostoievsi +a descu*ierto descu*ierto al mismo tiempo tiempo las normas que rigen estos nive nivele less en apari aparienc encia ia tan tan «conf «confuso usos$ s$ 4sí pue pues, s, incl incluso uso aquí aquí,, en las las profun profundi didad dades es demtricas del ser +umano, siguen rigiendo normas, leyes y principios$ a personalidad de %ostoievsi es a*rumadora porque, siendo el primero en rec+a-ar el itinerario de %ante, nos guía a travs de los a*ismos su*terrneos del ser +umano$ 8o e&iste, pues, un punto de vista «individual en la o*ra de %ostoievsi, tal como e&iste en la o*ra de un Oscar [ilde, por poner un e'emploD
:o*re una cierta li*ertad
4+ora, cuando todo el mundo se plantea apasionadamente el pro*lema de la li*ertad, no carecería de inters preguntarnos por el sentido de esta pala*ra$ El siglo W3W +a pregonado la li*ertad individual y +a concedido numerosos numer osos derec+os al pensamiento y a los instintos individuales$ %e +ec+o, una definición de la li*ertad de acuerdo con el espíritu del siglo pasado podría ser sta/ la participación participación del individuo individuo en el mayor n!mero posi*le posi*le de derec+os$ :e era li*re para creer o no creer en %ios, porque se +a*ía conquistado el derec+o a la li*ertad religiosa$ :e era li*re para divorciarse, porque se +a*ían conquistado ciertos derec+os relacionados con la vida conyugal$ :e era li*re para pensar cualquier cosa, porque se +a*ía conquistado el derec+o a la li*ertad de conciencia$ I un largo etctera$ :e comprende fcilmente que esta li*ertad de tipo contractual poco o nada tiene que ver con el pro*lema de la li*ertad en sí$ :e trata de un n!mero limitado de derec+os, conquistados gradualmente? derec+os muy agrada*les y !tiles, pero que no implican, en a*soluto, la li#ertad del del individuo$ :er li*re significa, ante todo, ser responsa*le ante la propia conciencia$ Eres li*re en relación con tu vida? es decir, cada acto que reali-as te implica? tienes que dar cuenta de l$ a participación en los derec+os, sin em*argo, no te implica para nada? es una «li*ertad e&terior, automtica? es como un permiso de li*re circulación por la vida civil y particular$ 8o arriesgas nada *eneficindote de l? no te implica ni moral ni socialmente$ 9armonos a pensar, por un momento, en lo que significaría un +om*re realmente li*re, en el verdadero sentido de la pala*ra$ :e trataría de un +om*re capa- de responder con su propia vida de cada acto que reali-a$ 8o puedes ser li*re si no eres responsa*le/ la verdadera li*ertad no implica «derec+os, porque los derec+os te son otorgados por otros y no te implican en a*soluto$ :olamente eres li*re cuando respondes de cada acto que reali-as$ Nrave responsa*ilidad, ya que se trata de tu propia vida, que puedes perder (es decir, puedes fracasar) o que puedes +acer fructificar (es decir, puedes crear )$ )$ 4l margen de estos dos polos Qel fracaso o la creaciónQ creaciónQ no alcan-o a ver qu otro sentido podría tener tener la li*ertad$ Eres li*re, es decir, eres responsa*le de tu propia vida/ la puedes ec+ar a perder o la puedes reali-ar? te conviertes en un autómata y un fracasado o en un +om*re vivo y entero$ as pocas que +an ignorado este sentido de la li*ertad +an producido el índice mayor de fracasados$ Es lo que +a ocurrido con el siglo W3W, que +a promovido una li*erta li*ertadd e&teri e&terior, or, sin responsa responsa*il *ilida idadd y meramen meramente te contract contractual ual$$ En este este sentido sentido,, por paradó'ico que pueda parecer, parec er, la Edad "edia conoció una mayor li#ertad& os +om*res de la Edad "edia vivían ms responsa*lemente, ms ca*almente? cada acto de su vida les implica*a? podían perderse o salvarse (salvación o perdición en su sentido cristiano)$ El miedo a la responsa*ilidad +a o*ligado al +om*re moderno a renunciar a la
li*ertad para tener ms derec+os$ 9ero lo !nico que merece la pena conservar de todas las «li*ertades conquistadas, desde la Bevolución francesa +asta a+ora, es el derec+o a ser li*r li*re$ e$ %e %ere rec+ c+oo del del que que casi casi nadi nadiee sa*e sa*e saca sacarr prov provec ec+o +o$$ 9orq 9orque ue real realii-ar ar acto actoss no sanciona*les no significa ser li*re$
El siglo de la +istoria
El siglo W3W +a sido llamado, entre otras cosas, el «siglo de la +istoria$ Fue entonces cuando se crearon los mtodos de investigación científica del pasado? fue entonces cuando se instituyó una «perspectiva +istórica$ 9uede que sea verdad que el siglo W3W +aya creado los mtodos científicos de investigación +istórica$ (4unque algunos puedan plantear, y con ra-ón, la pregunta Kqu tipo de mtodo científico es aquel que e&cluye a priori el milagro de la +istoriaL ;n mtodo verdaderamente verdaderamente o*'etivo o*'etivo sólo puede constatar +ec+os? y en ning!n caso puede e&cluir como «imposi*les una serie de ellos$ Becientes investigaciones +an pro*ado, por e'emplo, la «posi*ilidad de la incom*usti*ilidad del cuerpo +umano$ .enemos cientos de documentos +agiogrficos que nos +a*lan de esta incom*usti*ilidad$ :in em*argo, el mtodo +istórico los elimina, desde el principio, como «imposi*les$ 4+ora *ien, resulta que este +ec+o +a sido pro*ado$ K%ónde queda la «o*'e «o* 'eti tivi vida dad d cien cientí tífi fica caL) L) 9ero 9ero en ning ning!n !n caso caso se pue puede de +a*la +a*larr de su «pe «persp rspec ecti tiva va +istórica$ os +om*res de este siglo creían en el progreso como en una novísima invención y que sólo un pu#ado de grandes sa*ios de todo el pasado de Europa (Euclides, Nalileo, 8e^ton, avoisier) +a*ían contri*uido realmente al progreso del conocimiento +umano$ En ning!n otro momento +istórico la solidaridad con los esfuer-os de conocimiento de toda la +umanidad +a sido ms limitada que en el siglo W3W$ .ener «perspectiva +istórica significa ser consciente de todo lo que te solidari-a con el pasado? conocer todas las etapas del proceso científico$ os +om*res del siglo W3W pensa*an, sin em*argo, que la «ciencia empe-a*a con ellos$ .odo lo que se +a*ía +ec+o anteriormente Qcon muy contadas e&cepcionesQ era ignorado$ Ellos creían seriamente que la Edad "edia fue una poca oscura$ I tam*in creían, con la misma seriedad, que la ciencia la inauguraron los antiguos griegos? que la medicina y las ciencias naturales +asta el siglo W3W no eran ms que enciclopedias a*arrotadas de supersticiones, etctera$ ;n siglo que piensa muy seriamente que el verdadero «progreso empie-a con l no puede ser llamado un siglo con perspectiva +istórica$ Es, por lo menos, e&tra#o que, aunque su afición reina fuera la +istoria, el siglo W3W no +aya acertado en ninguno de sus 'uicios +istóricos$ 8o se trata solamente de «errores, de una investigación imperfecta de los documentos, sino de una incapacidad orgnica de entender la +istoria, de dar cuenta de la solidaridad e&istente entre todos los esfuer-os de la +umanidad por el conocimiento$ a perspectiva +istórica es una creación de nuestro siglo, cuando el imperativo de la +istoria +a de'ado de tener la supremacía$ :olamente a+ora se +a comprendido el progreso? que empie-a con las civili-aciones civili-aciones pre+elnicas pre+elnicas y no termina nunca («progreso que, para algunos, no es ms que una continua decadencia)$ :olamente a+ora se +a comprendido la función creadora de la Edad "edia, se +a
clarificado la noción de Benacimiento, se +a entendido el modesto papel del siglo W3W en la +istoria de las ciencias (le'os de marcar un +ito, el siglo W3W no puede, ni muc+o menos, compararse, en altura científica, con la poca de Euclides o la de Coprnico)$ 8unca el +om*re se +a visto ms «aislado y solitario que en el siglo W3W? solo, a pesar de la grande-a de sus descu*rimientos, a pesar de la rique-a de sus conocimientos, de la superioridad de su comprensión$
4nalogías
El «nuevo romanticismo de nuestra poca es un +ec+o *astante controvertido$ :eg!n algunos sociólogos, a la mentalidad europea creada despus de la Bevolución y las guerras napoleónicas le correspondería la mentalidad creada despus de la Bevolución rusa y la guerra europea$ 8o s cunta verdad se esconde en esta afirmación$ af irmación$ 9ero no de'an de sorprenderme s orprenderme e&tra#as correspondencias entre el Bomanticismo y la Vpoca "oderna$ 4l racismo contemporneo y sus implicaciones *iológicas (el nudismo, la pure-a de sangre, el deporte como ve+ículo de la fuer-a) le corresponde el inters romntico por los «+om*res «+om*res primitivos primitivos (germnicos, *r*aros, *r*aros, «primitivos, «primitivos, amerindios), considerados considerados puros, sencillos e incontaminados por la civili-ación$ 4l desprecio por la «ra-ón, desprecio eminentemente romntico, le corresponde +oy la apología de la fuer-a, el +eroísmo y las grandes +a-a#as$ El gran error romntico con respecto a la «persona +umana (la aparición del «individuo y su pro*lemtica, el ale'amiento del sentido y el valor clsico del +om*re) encue encuent ntra ra su ms ms aca*a aca*ada da corre correspo spond ndenc encia ia en la gran gran con confu fusi sión ón mode moderna rna entre entre el «indiv «individu iduo o y la persona persona,, con confusi fusión ón que con conduce duce fatalm fatalmente ente a un colecti colectivis vismo mo mal entendido (de orden político, etctera)$ I por fin, otra gran similitud entre el Bomanticismo y la mentalidad moderna/ se vuelve a plantear el pro*lema de la muerte y de la nada (la renovación del pensamiento católico, Ulages, Jeidegger, etc$), pro*lema que tanto el positivismo como las filosofías de principio de siglo +a*ían descuidado casi por completo$ co mpleto$
:olidaridad
a o*ra de un escritor aumenta su valor y revela sus aspectos menos conocidos cuando es leída desde la perspectiva de creaciones y e&periencias literarias ulteriores$ al-ac, por e'emplo, gana enormemente despus de la aparición de 9roust$ En -a comedia !umana encontramos gran n!mero de pginas consideradas in!tiles y sin sustancia tanto por la crítica como por po r los lectores$ :e trata de esas largas, pesadas, pesada s, grises gr ises y, sin em*argo, sumamente sumamente precisas descripciones, descripciones, que no +a*ían gustado gustado ni en 0R6S ni en 01SS$ %espus de la lectura de 9roust, sin em*argo, cam*iaron tanto el criterio del en'uiciamiento literario como las premisas de la contemplación esttica? y aquellos aspectos «inertes y muertos de -a comedia !umana +a*rían reci*ido una vida y un valor inconce*i*les de no +a*er e&istido la aportación de 9roust$ a o*ra de un genio pone al alcance del lector nuevos instrumentos de conocimiento que le permiten contemplar, desde un nuevo punto de vista, las o*ras del pasado$ Je mencionado a al-ac, 'unto a 9roust, porque es el caso ms patente$ ;na gran o*ra de arte no tiene por qu temer a las futuras creaciones$ ;na o*ra de arte, que se e&plica +istóricamente por una «corriente o una «escuela literaria, empie-a a co*rar nuevas dimensiones una ve- desaparecida la corriente o la escuela a la que pertenecía$ 9orque solamente entonces se revelan otros medios de contemplación y en la o*ra es posi*le entrever la *elle-a vedada para sus contemporneos$ 9or eso, un genio artístico es grande no sólo por su o*ra, sino tam*in gracias a la lu- que sta derrama so*re las creaciones anteriores$ :e trata de una impresionante Q aunque posi*lemente involuntariaQ solidaridad de de los genios$ 9odríamos decir que ning!n creador es suficientemente grande como para poner a disposición de sus contemporneos todo todoss los los inst instru rume ment ntos os de cono conoci cimi mien ento to y cont contem empl plac ació iónn qu quee requ requie iere re su o* o*ra ra$$ Beali-ndola, nos o*liga a tra*a'ar muc+o para que podamos apropirnosla$ .endrn que aparecer otras o*ras, otros descu*rimientos y e&periencias estticas para que su grande-a y su profundidad se vuelvan asequi*les$ 8o se trata de tiempo, sino de creaciones geniales, de creadores$ 8o es el transcurrir del tiempo el que enriquece una o*ra literaria, sino las futuras creaciones que arro'an nuevas luces so*re ella$
Crítica y raciología[27]
8o de'a de asom*rarme que sólo J$ :anielevici se interese con pasión por el pro*lema de las ra-as$ El !nico entre los críticos rumanos, o, incluso, el !nico entre los críticos europeos$ I a pesar de todo, el pro*lema y la investigación so*re las ra-as tendrían que resultar apasionantes para los críticos? para "i+ail :e*astian y er*an Cioculescu, por e'emplo$ 9orque tanto la crítica literaria como la investigación so*re las ra-as aspiran a la clasificación, a una clarificación de los contornos, a la salida del «caos tnico$ 4sí como la crítica literaria separa las o*ras y las reagrupa de nuevo seg!n tipos y familias, la raciología separa conglomerados dentro del *loque de una misma comunidad e intenta precisar su fisonomía, fisonomía, los e'es +istóricos, +istóricos, las fuer-as creadoras$ a crítica crítica literaria literaria act!a en el interior de una una ampl amplia ia comu comuni nida dadd de fenóm fenómeno enoss lite literar rario ioss cont contem empo porn rneo eoss y esta esta*l *lece ece,, sin sin em*argo, em*argo, diferencias, asociaciones, asociaciones, filiaciones filiaciones y una continuidad continuidad de tipos ms all de esta comunidad contempornea, en su +istoria o con sus vecinos$ .am*in la investigación so*re las ra-as implica un e'ercicio similar$ ;na mente preocupada por la crítica literaria tendría que estar, casi por o*ligación, interesada por el pro*lema de las ra-as$
.eoría y novela
.anto lo pico puro como la «poesía pura son una estupide-$ ;na gran creación pica tam*in de'a entrever los medios de conocimiento de la poca, el sentido de la vida y el valor del +om*re, las conquistas científicas y filosóficas del siglo$ Estas grandiosas creaciones picas +an sido reali-adas por Ba*elais, :terne, al-ac, .olstoi, %ostoievsi$ :ería a*surdo pro+i*ir la teoría en una o*ra pica? sería tam*in a*surdo pedirle a un novelis nove lista ta sólo descrip descripción ción o sólo sólo aconte acontecim cimient ientos$ os$ Jan e&isti e&istido do tam*i tam*inn nove novelis listas tas «puros? se llama*an ola, Noncourt, "aupassant$ 8ovelistas que se +an esfor-ado por no generali-ar, filosofar o violentar la realidad en el nom*re de una idea o de un ideal$ 9ero todo todoss los los dems dems creado creadore ress pic picos, os, desde desde Ba*e Ba*ela lais is +ast +astaa .+om .+omas as "ann, "ann, nu nunca nca +an +an renunciado a su dignidad +umana, a los pro*lemas del conocimiento y de la moral, a la teoría$ 9or supuesto, esta teoría podría llegar a per'udicar a la o*ra si se introduce en e&ceso, o medio digerida como en al-ac, o si se pone al servicio de un profetismo e&traartístico como en .olstoi$ 9ero no siempre la teoría se manifiesta como un elemento autónomo, da#ino para la economía íntima de una o*ra$ En los casos ms felices (Ba*elais, :terne, utler, 9roust, :tend+al), impregna toda la sustancia del li*ro$ «.eoría, es decir, inteligencia, dignidad +umana, valentía ante el destino, desprecio por los tópicos$ K9or qu +uyen los novelistas de esta misión de lo picoL a misión de refle'ar una poca no solamente *a'o su aspecto social, sino tam*in *a'o su aspecto teórico y moral? es decir, refle'ar los esfuer-os contemporneos por ampliar el conocimiento, los intentos de valorar la vida, de solucionar el pro*lema de la muerte? en una pala*ra, Kpor qu +uyen de la responsa*ilidad, por qu dudan de crear +om*res nuevos, +om*res movidos no sólo por los instintos, sino tam*in por la inteligencia, en este a#o de 012SL ;na gran o*ra no solamente refle'ar la sociedad contempornea, sino, so*re todo, las fronteras del conocimiento que +a alcan-ado el individuo, sus victorias teóricas$
%ostoievsi y la tradición europea
En la literatura europea no e&isten discontinuidades, saltos o revoluciones$ %e Ovidio Ovidio a los trovado trovadores, res, de la poesía medieva medievall a %an %ante te y 9etrarc 9etrarca, a, de la 1rincesse de :lves a :tend+al y 9roust, el caudal de la inspiración literaria sigue siendo siempre el mismo/ la mu+er y y la tur*ación que provoca en el alma$ .anto Ovidio como 9roust +an accedido a la contemplación del mundo a travs de la mu'er, del amor o de los celos$ .am*in el vie'o Jomero esta*a su*yugado por el mismo «demonio teórico$ El drama, la +istoria, la salvación ocurren siempre en torno a una mu'er? llmese Jelena de .roya, 8ausicaa o 9enlope$ 9or supuesto, su puesto, la mu'er educada *a'o la imagen de 4tenea se comporta de una forma muy distinta a la mu'er desenfrenada que aparece en las orgías de %ioniso$ 9ero el papel dram%tico central de la mu'er permanece siempre idntico en casi toda la literatura europea$ 4lgunas veces, la continuidad del tipo literario femenino resulta casi asom*rosa/ Ovidio, los trovadores, 9etrarca, %ante$ Otras veces, la mu'er no es ms que un agente dentr den troo del drama drama// Cerv Cervant antes es,, :+ae :+aesp spear eare, e, Cald Calder erón, ón, Noe Noet+ t+e$ e$ EmpeEmpe-an ando do con con los los romnticos, Europa vuelve a caer en el fervor «ovidiano/ toda la casuística erótica, los celo celos, s, el dram drama, a, +ast +astaa lleg llegar ar a la dete detest sta* a*le le lite litera ratu tura ra afro afrodi disí síac acaa de los los auto autore ress contemporneos de tercera fila$ 9ero todos, a*solutamente todos, creen que el alma +umana puede acceder a los estados límite (condenación, salvación) a travs de la mu'er? el varón contempla y siente la realidad a travs de ella$ 4 esta lu-, Kno aparece %ostoievsi como algo e&cepcional, con su separación, casi titnica, titnica, de esta tradición tradición europea? con su valentía para crear +om*res que sufren, esperan, se +unden o se salvan sin la mu'erL En la o*ra de %ostoievsi encontramos menos mu'eres que en la de cualquier otro gran autor europeo$ os grandes +roes dostoievsianos e&isten y viven dram%ticamente su propio destino, aut5nomamente& :olamente en ciertas tragedias de :+aespeare Europa fue capa- de entrever esta autonomía del +om*re, esta luc+a con su destino$ En %ostoievsi, en cam*io, el +om*re llega, por primera ve-, a ser víctima de su destino sin el drama del amor, sin ese agente de sufrimiento y de felicidad que +a*ía sido siempre, en la literatura europea, la mu'er$ 9or eso, desde cierto punto de vista, %ostoievsi podría ser considerado como aquel que forma parte de la literatura e&tralaica, la literatura asc$tica europea$ :us persona'es/ persona'es/ +om*res que sufren directamente directamente,, sin mediaci5n alguna? que conocen la nada o los a*ismos de la e&istencia desde su propia plenitud interior y no por el amor de de una mu'er o por el mero +ec+o de estar +untos& @ue el amor +aya provocado en la literatura europea tantos desastres y tantas crueldades se e&plica muy *ien por la m&ima de Noet+e/ cualquier varón es un demonio para la mu'er que tiene al lado$ El drama y el sufrimiento surgían de la incapacidad del +om*re para soportar un amor a*soluto? de la carga demoníaca creada por la presencia de dos !om#res 'untos$ a mu'er y el amor amor desem desempe pe#a #a*an *an,, aqu aquí, í, el pape papell de cata catali li-ad -adore oress del etern eternoo drama drama +uman +umano$ o$ %ostoievsi %ostoievsi tuvo la valentía valentía de resolver resolver este enigma volviendo volviendo a sus premisas iniciales/ iniciales/ el
+om*re solo, frente a frente con su destino, con la nada$
a solidaridad en el error
G@u gran satisfacción les produce a los +om*res la solidaridad en el errorH Casi siempre, siempre, sin em*argo, ocurre involuntaria involuntariamente mente$$ Ellos mismos se sienten sienten avergon-ados avergon-ados al ver a la gente a la que tendrn que aceptar como compa#eros$ asta +a*er caído víctima de un solo y fundamental error Qel error de la confusi5n de los planos, por e'emploQ para sentirse solidario con una infinidad de +om*res que +an caído en el mismo error inicial y en un nivel progresivamente ms *a'o$ 9or e'emplo, *asta negar la divinidad de >es!s para ser solidario, a pesar tuyo, de una serie de confusiones cada ve- ms *urdas y groseras$ 8iegas la divinidad divinidad de >es!s y afirmas que +a sido solamente un gran +om*re? pero otro sostendr sostendr que >es!s fue solamente un profeta social, un revolucionario? un tercero te dir que >es!s fue un sentime sentimenta ntal? l? un cuarto, cuarto, inetT inetT:ang :anglet let,, afirma afirmar r que >es!s >es!s fue un loco? loco? otros, otros, situndose ms a*a'o todavía, llegarn +asta a negar la e&istencia de >es!s$ .odos ellos se diferencian entre sí !nicamente en los detalles, importantes desde su óptica, pero muc+o menos importantes desde un punto de vista o*'etivo? porque todos coinciden en un gran error inicial/ negar la divinidad Qes decir la realidad , la autonomía Q de Cristo$ %esde el punto de vista esttico, tales errores fundamentales, fruto de la confusión de los planos, llevarn llevarn a solidaridades solidaridades ridiculas$ ridiculas$ :i atacas a 4rg+e-i 4rg+e-i por su inmoralidad (y ( y no por ra-ones estticas), ests o*ligado a contraponerlo a Aol*ur 9oian e 3lie %$ 9apag 9apag+eo +eorg rg+e +e$$ 9or supues supuesto to,, ento entonce ncess prote protest star ars s y argu argume ment ntar arss que no lo ests ests comparando con Aol*ur 9oian sino con Eminescu, por e'emplo, que fue un poeta moral$ 9ero te vers o*ligado a solidari-arte, tam*in, con Aol*ur 9oian e 3lie %$ 9apag+eorg+e, que son poetas morales$ 9uedes invocar a Jomero, a %ante, a Aictor Jugo, pero, por muc+os que sean los nom*res ilustres que cites, no podrs «desolidari-arte de Aol*ur 9oian, que es poeta sólo si confundes poesía y moralidad$ 9ara mí, un mal poeta no es poeta, por moral que qu e sea$ 9ara 9 ara ti, si pretendes ser co+erente, Aol*ur 9oian estar 'unto a %ante (porque los dos +an sido igualmente morales), e 3lie %$ 9apag+eorg+e tendr% que ser colocado 'unto a Aictor Aictor Jugo$ G@u ridícula se vuelve la situación de N$ "$ Aldescu, que es un escritor, cuando un crítico demasiado puritano le compara con novelistas como %umitru A$ Caiu, 9a'ur Enigm, Aasile upu %um*rveanu, Bodica Frun-escu y %elaT.reiT3-voareH .odos son escritores morales y todos pueden ser contrapuestos, por un astuto crítico, a .udor 4rg+e-i, Jortensia 9apadatTengescu y 9erpessiciusD .am*in la luc+a política e ideológica puede imponer una involuntaria solidaridad$ 9or e'emplo, 4ndr Nide tiene que ir en compa#ía de un 4ragon o un "arcel "arcel desde que se +a vuelto comunista$ 4ndr Nide est o*ligado a luc+ar al lado de unos im*ciles y en contra de +om*res de otro credo político entre los que encontrar, como en cualquier
grupo, muc+os im*ciles, pero tam*in a un C+arles "aurras y a un .+ierry "aulnier$ El sentimiento de solidaridad con los mediocres y los im*ciles es, por supuesto, dramtico, pero so*re l prevalecer el instinto de luc+a que une a gente tan variada$ %urante la guerra, un sa*io que est en el frente tiene que reci*ir órdenes y luc+ar 'unto a unos im*ciles o mediocres, para enfrentarse, tal ve-, a amigos o apreciados colegas suyos$ a solidaridad en la luc+a Qsea la guerra que es la luc+a de toda una nación, sea la acción políticaQ es un gran drama para la persona +umana? drama fatal e irreducti*le, pero que es, al mismo tiempo, una ascesis$ .e o*liga a renunciar a tus mritos propios, a tus criterios personales, a tu redención, para llegar a ser un simple n!mero, un instrumento instrumento en manos del destino, un elemento insignificante dentro de la colosal confrontación entre dos naciones o dos partidos políticos$ Esta solidaridad solidaridad en tiempos de guerra, y s5lo en tiempos tiempos de guerra, no tiene que ser confundida con la solidaridad en el error$ En tiempos de guerra ya no eres li*re para elegirD el destino +a elegido por ti$ 9ero este lapso de tiempo acaparado por la luc+a no tiene que ser inst instit ituci uciona onali li-a -ado do *a'o *a'o ning ning!n !n conc concept epto$ o$ Cualq Cualqui uier er otra otra soli solidar darid idad ad fuera fuera de la solidaridad en la luc+a se de*e a la ignorancia y a la indignidad +umana$ 9orque en todos los dems casos el +om*re es li#re para elegir, 'u-gar y comprender$ En tiempos de guerra, .udor 4rg+e-i puede escri*ir en la misma mesa que Aasile upu %um*rveanu y puede que el 'efe de despac+o prefiera las pginas escritas por este !ltimo, por ser ms +eroicas$ 9ero en tiempos de pa- cualquier confusión entre estos dos escritores se de*e !nicamente a la ignorancia, al error profano y a la indignidad$
Orgía
"e resulta difícil entender la necesidad de algunos escritores, algunas veces muy grandes escritores, de recurrir a metforas y comparaciones$ I todavía entiendo menos su tcnica, su 'uego mental$ KCómo es posi*le sorprender una cosa, delimitarla y evocarla, si en el mismo instante en que la «evocas so*re el papel sientes la necesidad de a*andonarla, de compararla con otra cosa, de transfigurarlaL 8o entiendo qu mecanismos desconocidos se ponen en marc+a en la mente de un escritor al escri*ir/ «:us manos, como lmparas, recogen el tem*lor del p'aro, cuerpo de tinie*la dispersaD$ dispersaD$ %emos por sentado que esta frase no es una *urda copia, que no est construida so*re precisos y a*urridos modelos$ :upongam :upongamos os que e&presa e&presa algo, algo pensado, intuido, visto mentalmente por el escritor 'usto en el mismo instante de su plasmación$ K9or qu milagro se +a desvanecido el elemento concreto (gesto, estado de nimo, +ec+o, acontecimiento, episodio, «atmósfera, llamadlo como queris) que el escritor quería representarL "e resulta muy difícil re+acer este itinerario$ :in duda, estamos +a*lando de estructuras mentales diferentes, y alguien a quien no le +a salido una metfora en su vida (como es mi caso) no puede intuir estos procesos$ :in em*argo, me pregunto/ Kcómo puede la metfora llegar a dominar +asta tal e&trem e&tremoo el espí espírit rituu de un escri escrito tor, r, cómo cómo pued puedee lleg llegar ar a impo imponer nerle le un unaa tcni tcnica ca tan tan automticaL I so*re todo me pregunto/ Kcómo no llega a marearse el escritor que asiste a esta disolución de sus o*'etos mentales en el mismo acto de su revelaciónL 8o puede ser tan sencillo ver cómo, «de*a'o de tus propias narices, todo se transforma, se macera, se lic!a, se evapora? o*'etos que aparecen y desaparecen, llamados por otros y e&presados por otra cosa que lo que ellos son en su inmediate-? un río aterrador en el que todo se pierde entre evocaciones, alegorías y metforas$ "e parece alucinante la li*ertad que se arrogan de repente las cosas, este derec+o a e&pandirse al infinito, de des*ordar y salir de sus cauces, de correr arri*a y a*a'o, de invadirlo todo, en *!squeda de un signo que «las e&prese$ Es muy difícil apuntar todo lo que «ves dentro de tu campo mental, en el mismo instante de la composición$ I si encima se le a#ade esta «li*ertad que los o*'etos se arrogan para disfra-arse o sustituirse los unos a los otros, seg!n su propio al*edrío o fantasía, seg!n su magia oscura, Kqu pasarL Es impropio utili-ar aquí el trmino «magia, porque lo que llamamos generalmente «correspondencia mgica tiene otra función que la metfora y, en un sentido ms amplio, que la comparación$ Entre todos los niveles de la realidad, entre todos los planos de lo real e&isten ciertas correspondencias, pero stas no pueden ser descu*iertas ni por la mera fantasía literaria ni por la li*ertad automtica de las imgenes$ 9or otra parte, estas correspondencia correspondenciass no tienen tienen nada de sorprendente, sorprendente, espontneo o encantador encantador en ellas$ ellas$ .odo lo con contra trario/ rio/ casi siempr siempree parecen parecen vulgare vulgaress e insign insignifi ificant cantes$ es$ I las metfor metforas, as, tengo tengo entendido, aspiran a la originalidad, la sorpresa y el asom*ro$ 9odría tratarse, sin em*argo, de una «magia oscura? es decir, de un cierto frenesí que va impregnando las pala*ras, los sentidos, las imgenes? de su re*elión contra las
normas y contra lo concreto? el acto demoníaco de la descomposición y la disgregación, de la autoTanulación$ .am*in en los ritos orgisticos se trata de una «magia oscura$ a orgía no significa solamente la sensualidad violenta y sangrienta, sino tam*in una evasión de las normas, de las leyes? la superación de la personalidad, la prdida en la masa, la anulación de la identidad$ El rito del «cam*io, la sustitución de la «identidad, son muy frecuentes en las orgías? las mu'eres pertenecen a todo el mundo y en una orgía ocurren no solamente adulterios, sino tam*in incestos$ En una orgía cada uno puede ser otra persona u otra cosa? puede sustituir a otro, arrogarse su s u identidad, +acerse pasar por l$ K4caso no ocurre lo mismo con la metfora y con el a*uso de comparaciones, cuando cualquier cosa puede ser e&presada por cualquier otraLD
as ideas en la pica
a desconfian-a que muestran los críticos literarios y las elites +acia la «novela de ideas, su gran admiración por lo pico puro, no es ms que una forma derivada de esno*ismo$ Casi la mitad de las grandes o*ras maestras de la literatura son novelas de ideas$ .oda la o*ra de %ostoievsi des*orda de «ideas? %icens est lleno de controversias eruditas? 9roust est o*nu*ilado por «a*stracciones? las o*ras de Ba*elais, Cervantes, "an-oni, "an-oni, .+omas .+omas "ann, estn saturadas de «cultura, «cultura, «erudición, «erudición, «ideas$ «ideas$ I Kqu decir de Tristram S!andy, donde toda la novela no es ms que una intermina*le divagación teológicoT+istóricoTmilitarL 3ncluso novelas tan «puristas como Ana Parenina a*undan en controversias y monólogos$ .endríamos que conta*ili-ar las pginas de teoría social y agrícola que se encuentran en Ana Parenina? o el espacio que ocupan en Cuerra y pa* las las informaciones +istóricas y las controversias ideológicas entre persona'es$ a mitad de la o*ra de al-ac consiste en «ideología$ 8ovelas enteras como "llusions perdues (2 vols$), Splendeurs Splendeurs et misres misres des courtisanes courtisanes (5 vols$) estn formadas por una sucesión de peque#as monografías monogr afías so*re la imprenta, el comercio de li*ros, la condición del escritor, el arte del teatro, el secreto de las grandes finan-as, la organi-ación de la policía y de las crceles, etc$ 8o e&iste ninguna novela de al-ac en la que la «idea, la «cultura, la «teoría, el «dilogo filosófico no campen a sus anc+as$ El ms pico de los novelistas, el ms grande creador de persona'es desde :+aespeare +asta a+ora, nunca +a tenido miedo a contaminarse con las ideas y la cultura$ I lo que es ms grave/ esta cultura es apro&imativa y sus ideas son casi siempre comunes$ 9ero ni siquiera este defecto +a logrado +acer enve'ecer su o*raD KCul es entonces el origen de nuestra superstición de lo «pico puroL En primer lugar, la culpa la tiene la influencia francesa o, me'or dic+o, la formación francesa de nuestros críticos y de nuestras elites$ Francia, que +a creado y a*usado de las ideas, que +a tenido a los ms grandes y gloriosos «escritores teóricos, +a empe-ado a sentir +orror frente a cualquier pica impura, cualquier teoría, o frente a la «cultura presente en una novela$ Vste es el origen de la grande y melancólica admiración que Francia confiesa por las novelas inglesas, que le parecen «puras y «sencillas, cuando en realidad a*undan tanto en ideas como en +ec+os$ I como el gusto rumano es, casi siempre, siempre, una prolongación prolongación del *uen gusto francs, tam*in nosotros +emos empe-ado a suspirar por lo pico puro, aunque nuestros escritores, dic+o sea de paso, no +an sufrido nunca de un e&ceso de inteligencia o de cultura$ 9ero, adems de la influencia francesa, tam*in podemos adivinar una nueva forma de esno*ismo en el cansancio que provocan las novelas de ideas$ El esno*ismo de la «santa simplicidad y de la ignorancia$ %esde que todo el mundo +a aprendido a leer y la cultura est al alcance de todos, ya no es un signo de distinción manifestar preocupaciones intelectuales, *uen gusto o información$ .odo lo contrario/ a+ora est de moda una dosis de ignorancia, y, si puede ser, de mal gusto$ :i confiesas que una película es me'or que el Fausto, todo el
mundo sa*r apreciar tu elección$ elección$ I esto ocurre en toda Europa$ Europa$ Entre nosotros, en menor medida, de momento$ Cualquiera que se tome la molestia de leer una sola o*ra maestra de la novela, se dar cuenta de la +ipocresía que esconde esta actitud$ :olamente -a 1rincesse de :lves, Manon -escaut y y 1aul et Virginie Virginie, que ms *ien son cuentos que novelas, pueden presumir de «pure-a$ 4dems, se argumenta que las citas y las «referencias eruditas estropean la economía de una novela$ al-ac, %ostoievsi, .olstoi o 9roust a*undan, sin em*argo, en referencias precisas$ 9or otra parte, es a*surdo creer que si dices/ «Aasilescu me +a +a*lado de la inmortalidad del alma, +aces $pica, y si escri*es/ «Je leído en un li*ro de ergson, +aces teoría& :i el persona'e +a pensado y vivido el pro*lema por sí mismo y seg!n sus fuer-as fuer-as,, seguimo seguimoss tenien teniendo do un !ec!o, sin importar que ste +aya sido provocado por la lectura de ergson o por la conversación con Aasilescu$ .am*in me parece in'ustifica*le el miedo al dilogo inteligente e interesante$ a gente tam*in puede +a*lar de cosas importantes, no solamente de tonterías$ K9or qu es a*sol a*solut utam ament entee impr impresc escin indi di*l *lee que que un dil dilogo ogo sea tier tierno no e insi insigni gnifi fica cant ntee para para ser considerado $picoL
a vitalidad de las +ere'ías
8inguna generación puede escapar al triste destino de luc+ar contra una antigua y grave confusión, que el tiempo se encarga de actuali-ar y renovar sin cesar$ Jace tres generaciones esta*a de moda la disputa «el arte por el arte o «el arte de tendencia$ GCunta tinta desperdiciada, cunta energía gastada in!tilmenteH 9ero nada ms terminar esta polmica, empe-ó una nueva disputa/ «arte nacional y «literatura popular$ as polmicas levantadas en torno a los movimientos Sem;n;torul y y 1oporanismul <5R= no se +an apagado todavía$ :in em*argo, +oy en día somos testigos de otra grave confusión/ «arte proletario y «arte colectivo$ :e olvida que una colectividad tiene sus propios medios de e&presión (follóricos, místicos y sim*ólicos) y que estos medios, perteneciendo a otra estruct estructura ura mental mental,, creados creados por una vida vida colect colectiva iva,, *a'o *a'o ning!n ning!n con concep cepto to pued pueden en ser adoptados por el artista, +om*re que se distingue de los dems precisamente por su capacidad de profundi-ar en su e&periencia individual, de perfeccionar su autonomía espiritualD ;n ridículo y al mismo tiempo trgico o*stculo se levanta ante cada nueva generación, y sta tiene que luc+ar contra l, a riesgo de perecer si no lo +ace$ G@u triste destino es ste, seg!n el cual en lugar de concentrar sus fuer-as para una nueva creación, los los +om* +om*re ress se agot agoten en apar aparta tand ndoo o*st o*stc cul ulos os de su cami camino no,, luc+ luc+an ando do cont contra ra las las supersticiones, contra las +ere'ías y los tópicos de la contemporaneidadH I, a pesar de todo, un destino que tiene que ser asumido$ :olamente luc+ando contra las confusiones y las +ere'ías actuales se puede mantener viva la tradición de la inteligencia, se puede reali-ar aquella solidaridad de los esfuer-os +umanos +acia el conocimiento, solidaridad que es la *ase de la cultura y una de las pocas glorias verdaderamente autnticas de nuestro continente$ Es triste y deprimente ver que un 'oven de +oy tiene que desperdiciar sus fuer-as luc+ando contra la misma confusión o +ere'ía que com*atieron los +om*res inteligentes de 01SS, de 0R1S, de 0RRS o desde principios del siglo pasado$ 9ero es un de*er de cada 'oven conservar intacta la tradición de la inteligencia, la continuidad de la no*le-a +umana$ as verdades se olvidan olvidan con facilidad, facilidad, pero las confusiones confusiones y los errores se adaptan a cualquier circunstancia y vuelven a aparecer *a'o nuevos disfraces, ms modernos, ms atractivos, ms fascinantes a+ora$ Es falso decir que no +ay nada nuevo *a'o el sol$ a +ere'ía siempre es nueva$
;na cierta incapacidad
a suprema prue*a para los +om*res y, en consecuencia, para los pue*los es la capacidad de contemplación en el sufrimiento$ En este sentido, los asiticos (especialmente los +ind!es y los c+inos) poseen una incontesta*le ascendencia so*re nosotros$ Ellos confieren a la contemplación una importancia tan grande que ni la ms tremenda po*re-a física o moral los aplasta, los +unde en la animalidad$ 9ero los que realmente se muestran incapaces de contemplación en el sufrimiento son los rusos, por lo menos sus persona'es literarios$ os persona'es rusos siempre encuentran refugio, cuando estn amena-ados por la miseria física y moral, en la *e*ida, en la +umildad, en la *estialidad$ El «mal encarna, para los rusos, una fuer-a tan grande que no se atreven ni siquiera siquier a a mirarlo de frente, si no ceden directamente a su seducción$ a miseria, cualquiera que sea, suprime en ellos cualquier cualquier posi*ilidad posi*ilidad de contemplación contemplación$$ Entonces Entonces encuentran encuentran refugio en la *estialidad, *estialidad, en la inconsciencia o en la +ere'ía$ En ning!n caso pueden resistir al sufrimiento, ni lo pueden superar a travs de la contemplación$ En el follore follore y las costum*res costum*res rumanas encontramos una serie de indicios que nos autori-an a pensar que somos, o +emos sido, uno de los pocos pue*los europeos que +an tenido la e&periencia de la contemplación en el sufrimiento$ 8o se trata solamente de una resistencia pasiva al sufrimiento? de una aceptación del dolor y de las calamidades$ 9odemos se#alar actitudes verdaderamente contemplativas? es decir, una perfecta quietud interior, signo de la superación de los criterios individuales$ 4sí, por e'emplo, la muerte del pastor de Miori4a<51=, que no solamente no se esfuer-a por evitar la muerte y el sufrimiento, sino que est plenamente «reconciliado y sereno$ 8ada muestra con mayor claridad la falta de estilo y de sustancia del persona'e *arrio*a'ero rumano (es decir, d ecir, la inmensa mayoría ma yoría de los rumanos ru manos que qu e viven en la ciudad) que el miedo al sufrimiento, su incapacidad de contemplación en el dolor$ Este ciudadano (cuya mentalidad +a contaminado al *urgus, al intelectual, etc$) a+ogar su dolor en el vino? y despus de un amor infeli- se em*orrac+a y se va de putas$ 8o llega al crimen, como sus +omólogos rusos$ 9ero siempre ec+ar mano de una especie de filosofía reconfortante en la que la ironía *alcnica se me-cla con un escepticismo occidental *arato/ «GIa pasarH, «G.odas (las mu'eres) son igualesH$ I frente a la muerte, despus de +a*er salido del primer momento de estupor y cuando la ceremonia religiosa est a punto de terminar, *uscar una fórmula que le permita resolver el dolor y la ignorancia que le a*ruma, escamoteando al mismo tiempo la contemplació contemplación/ n/ «G4sí es la vida, como el +uevoH, +uevoH, e&clamar, empe-ando a resignarse y a disipar con esta fórmula las nu*es del dolor, la ignorancia y el miedo$ :i solamente pudiramos llegar a vislum*rar qu profundos y «contemplativos sigue siguenn sien siendo do esto estoss mist misteri erios os (la (la muert muerte, e, el amor amor)) en las las comu comuni nida dade dess rural rurales es de
BumaniaD
a eterna disputa
os teólogos teólogos y los filósof filósofos os cristi cristiano anoss +an +ec+o +ec+o con consid sidera* era*les les esfuer-o esfuer-oss por resolver el pro*lema de la gracia y del li*re al*edrío$ Este pro*lema sigue siendo, incluso +oy en día, una de las provocaciones ms inquietantes de la mente +umana$ I, sin em*argo, Gcómo se simplifican las cosas si te decides a atacarlas de frenteH El li*re al*edrío es lo que corresp corresponde onde,, en el plano plano de la condición condición +umana, +umana, a la gracia divina$ divina$ %ios %ios pued puedee elegir li*remente a los +om*res que quiere salvar$ a gracia es, pues, la virtud divina de ofrecer la condenación, ón, la desapari desaparició ción) n) o la vida (la salvación, la eternidad)$ El li*re muerte (la condenaci al*edrío es la virtud +umana de elegir entre entre la muerte y la vida? es decir, elegir el camino que conduce a la salvación o a la perdición? perdición? imitar a %ios o al %ia*lo$ %ia*lo$ El li*re al*edrío al*edrío no se opone a la gracia, gracia, sino sino que se corresponde con ella$ Esto no significa, para la teología cristiana por supuesto, que el que +a decidido elegir el *ien, sirvindose del don del li*re al*edrío, se salve necesariamente$ :ignifica solamente que %ios, seg!n su voluntad y su li*ertad, no es el !nico que elige a los +om*res$ El +om*re tam*in puede elegir entre entre vida eterna y muerte y puede elegir li#remente& 9ero si se le concede esta vida o esta muerte despus de +a*er +ec+o su elección, eso es otro asunto$ Es importante el +ec+o de que, dentro de los límites de la condición +umana, el +om*re pueda elegir li*remente la suerte que desea con toda su alma$ El +ec+o de que %ios pueda decidir la desaparición de unos y la inmortalidad de otros +a causado el asom*ro de algunos pensadores$ 9ero Kno es ms asom*roso a!n que +aya +om*res que puedan elegir, por su propia decisión (en virtud de la li*ertad de disponer de sí mismos), la muerte o la vida eternaL
El conocimiento «gordinico
El «nudo gordiano no es solamente una preciosa leyenda so*re la iniciativa +umana, +umana, sino tam*i tam*inn un tipo especial de conocimiento que +a desempe#ado un papel considera*le en la +istoria del espíritu +umano$ :im*oli-a todas las victorias de los investigadores que, al a*ordar cierto pro*lema, lo +an +ec+o desde un punto de vista totalmente diferente a los criterios contemporneos$ %esestimar o ignorar por completo los intentos intentos anteriores de resolver un pro*lema, pro*lema, intentar su solución desde fuera, partiendo desde otras premisas, utili-ando otros instrumentos de investigación, presuponiendo otra visión del mundo, +e aquí el meollo del tipo del conocimiento «gordinico$ Este tipo de conocimiento aparece especialmente en las pocas de transición de una fase cultural a otra, de un estilo a otro$ :in duda, el conocimiento «gordinico es el tipo de conocimiento que tendr preeminencia en nuestros tiempos$ 9or e'emplo, seg!n mi opinión, solamente una solución «gordinica, desde fuera, podr resolver el pro*lema de la muerte$ :i partimos desde los datos *iológicos, de la clula, el cere*ro, la relación con la vida anímica, metapsíquica, etc$, no llegaremos a avan-ar ni un paso en la revelación del misterio de la muerte$ .enemos que partir desde otro tipo de datos y siguiendo una demostración indirecta$ En efecto, podemos o*servar que, en ciertos casos, la ley de la gravedad queda a*olida y el cuerpo +umano puede elevarse en el aire (los e'emplos de levitación son confirmados +oy en día por la ciencia)? se puede o*servar tam*in tam*in que, en algunos casos, la ley de la com*ustión com*ustión del cuerpo +umano queda a*olida y que ciertos +om*res pueden permanecer so*re *rasas encendidas sin sufrir el ms mínimo da#o (casos *ien anali-ados y unnimemente aceptados)$ :e impone, pues, la siguiente siguiente conclusión/ en ciertas ciertas situaciones, situaciones, las leyes físicas y *iológicas *iológicas que condicionan condicionan la vida +umana pueden ser derogadas$ 4nte esta conclusión, el pro*lema de la muerte reci*e otro sentido$ a interdependencia de la vida orgnica y la vida anímica ya no es tan categ categóri órica ca$$ 9orqu 9orquee si las las leye leyess de la vida vida org orgni nica ca pue puede denn ser ser a*ol a*olid idas as en cier cierta tass circ circuns unsta tanci ncias as (levi (levita taci ción ón,, inco incom* m*ust ustió ión), n), tam* tam*i inn po podr drnn ser ser a*o a*oli lida dass en otras otras circunstancias (por e'emplo, la muerte)$ 9osi*lemente, si investigramos en esa dirección llegaríamos a unos resultados efectivos$ El con conocim ocimien iento to «go «gordi rdini nico co presupon presuponee el inconfor inconformis mismo, mo, la imagin imaginaci ación, ón, el riesgo, la eficacia$ eficacia$ :o*re las manc+as *lancas de los antiguos antiguos mapas se podía leer/ !ic sunt leones& %urante cientos de a#os se trasmitía esta información de +om*re a +om*re y de sa*io a sa*io, +asta que uno de ellos se +acía la pregunta/ «KI si no +ay leonesL$ I partía por su cuenta c uenta para convencerse in situ& :e +an +ec+o muc+os descu*rimientos geogrficos por gente que partía para encontrar lo que figura*a en los mapas$ 9ero +ay otros descu*rimientos, descu*rimientos +ec+os por gente que partía para convencerse de que los mapas eran enga#osos, tal como ellos sospec+a*an desde el principio$
%etalle
Entre tantos li*ros que me apetece leer se encuentran los dos vol!menes de efe*vre des 8ottes titulados -6attelage, le c!eval de selle ) travers les =ges y :ontri#utions ) l6!istoire de l6esclavage<2S= (9icard, 9arís, 0120)$ 8o s si alg!n día tendr tiempo para leerlos$ 9ero las conclusiones de estos documentados estudios me parecen, despus de +a*er leído una larga recensión, de una importancia e&cepcional$ El autor demuestra, entre otras cosas, que las tan famosas cal-adas romanas eran inapropiadas tanto para los via'es individuales como para los transportes comerciales$ .al conclusión cam*ia radicalmente nuestro 'uicio +istórico$ 9ero escuc+en lo que viene a continuación/ %el estado rudimentario de las tcnicas de transporte por ruta, el autor deduce la inelucta*le inelucta*le necesidad del transporte efectuado por +om*res? +om*res? la insuficiencia insuficiencia de la tracción animal es la principal causa de la esclavitud que, en el mundo occidental, se de*ilita y e&tingue, sin ninguna intervención legislativa, en la Edad "edia, para reaparecer, con todo su rigor, en la 4mrica 4mrica del siglo WA3 por las mismas ra-ones que motivaron motivaron su e&istencia e&istencia en el mundo antiguo$ Je ofrecido esta e&tensa cita de la recensión recensión del li*ro de 8ottes porque me parece una magnifica apología del +om*re$ Vste es, en efecto, muc+o menos malo de lo que parece$ :us instintos, a veces, son suyos su yos solamente a medias? la otra mitad es una creación de la geografía$ 4lguien, un gran estudioso, demuestra que la esclavitud no es tanto una creación del +om*re como de la geografía$ K8o se trata de una verdadera voluptuosidad moralLD
Fidelidad
%e una carta de audelaire/ «>e crois en effet (mais '’y suis trop intress) que la fidlit est un des signes du gnieD<20=$ a fidelidad es la resignación al destino? o la perfecta conservación de las normas$ :ignos de gran +om*ría, en cualquier caso/ no ale'arse de las normas, no ir contra el propio destino$ a voluntad de conservar, de resistir o*stinadamente en medio de la corriente del gran río? quedarse inmóvil, sereno? tranquilidad, contemplación$ En las culturas tradicionales (3ndia, C+ina, etc$) e&iste una cierta «fidelidad a las doctrinas, a las normas$ 8o interesa la «novedad, el «cam*io, la aventura? no se quiere ser «original$ 8o se quiere descu*rir algo nuevo, personal, porque esta agitación y estos cam*ios no llevan a ninguna verdad? las normas no cam*ian, son impersonales$
%etalle
3gnoro la antigMedad que pueda tener la «teoría panse&ual$ 8o ca*e duda de que Freud no +a sido el primero en generali-ar con tanto radicalismo la importancia del acto se&ual$ Je aquí un te&to c+ino, del siglo 33 d$ C$, e&traído de un tratado alquímico (Ts6an T6ung :!6i) de [ei 9oTIang, y que transcri*o aquí tanto por su originalidad como por su escasa circulación circulación (la traducción traducción sigue la versión inglesa de u C+’iangT[u, C+’iangT[u, pu*licada en "sis, octu*re 0125, pp$ 520T5P5? nuestro fragmento est en la pgina 576)$ El +om*re +a nacido para estar so*re el vientre y la mu'er so*re la espalda$ Estas formas de conducta conducta estn predeterminada predeterminadass desde el tiempo tiempo de su e&istencia e&istencia prenatal$ prenatal$ Ellos se comportan de esta manera no solamente durante su vida, sino tam*in despus de la muerte$ < 9ota 9ota/ os c+inos creían que una a+ogada flota*a so*re la espalda y un a+ogado so*re el vientre$= 9ero no +an aprendido de sus padres a colocarse así$ El origen de todo esto es el acto se&ual$
a eterna equiparación
El aislamiento que padecen los genios y los +roes en el mundo no es ms que una ilusión$ :iempre +an e&istido su*terfugios para equiparar su e&cepcional presencia con la eterna mediocridad$ a tendencia general de la sociedad es la de equiparar, la de medir con el mismo rasero, la de suprimir la «unicidad$ El genio o el +roe no de*e permanecer solo, pero tampoco rodeado por los que tienen su misma envergadura$ Jay que demostrar por todos los medios que su aparición no es e&cepcional, que sus ideas o sus +a-a#as tam*in «pertenecen a otros, que e&isten las «ad+esiones$ "ecenas era elevado a la misma altura que Airgilio porque «comprendía su arte$ ar*usse era puesto al lado de "&imo Nori porque los dos se +a*ían afiliado a la literatura proletaria$ 9opescu es citado +oy en día al lado de ucian laga porque los dos +an +a*lado del «alma rumana$ Otro 9opescu es el igual de 4ron Cotru porque tam*in +an cantado «+eroicamente$ I un tercero es colocado a la misma altura que 8ae 3onescu porque estudia los mismos «pro*lemas$ :iem :iempre pre +an +an e&is e&isti tido do medi medios os para para equ equip ipara ararr los los valo valore ress y los los no valores& os +om*res que luc+an por las mismas «ideas, que utili-an las mismas fórmulas$ ;rec+e y Jadeu eran iguales, porque los dos eran «patriotas$ Eminescu y odnrescu eran citados 'untos, porque p orque los dos do s eran er an «tristes y cola*ora*an con la revista :onvor#iri literare& literare& 9ara un crea creado dorr geni genial al es una una verd verdad ader eraa cat catst stro rofe fe +a*e +a*err sido sido comp compre rend ndid idoo po porr sus sus contemporneos$ 9orque si dos docenas de mediocres estn dispuestos a «ad+erirse a su o*ra, su unicidad quedar comprometida a los o'os de los contemporneos$ 9odría ser incluso peor/ se podría decir de l que se +a «ad+erido, que se +a convertido$ K4caso no se +a dic+o +ace poco que 9apini se +a convertido al nacionalismo, l que +a*ía creado el nacionalismo italiano del siglo WW y que +a*ía luc+ado por su cuenta durante 07 a#osL
as místicas inferiores
G@u feli- e&presión +a encontrado 9+ilippe de Flice al titular un li*ro suyo so*re los «venenos sagrados y la e*riedad divina 7ssai sur quelques formes inf$rieures de la mystiqueH o que es realmente trgico en la condición +umana es este eterno retorno a las «formas inferiores de la mística$ Cuando ya no puedes, o por lo menos tienes la impresión de que no puedes, «perderte en %ios, te perders en el alco+ol, en el opio, en el peyotl o o en una +isteria colectiva$ a «mística permanece? porque el instinto del +om*re de perderse, de entregarse, sigue siendo tan orgnico y fuerte como su instinto instinto de conservación$ conservación$ .ienes .ienes que salir de ti mismo de una forma u otra$ I cuando cuando el amor ya no te puede salvar, te salva el alco+ol, el opio o la cocaína$ os rituales siguen siendo los mismos/ aislamiento del mundo («*e*e solo, se dice, signo de que se trata de un verdadero alco+ólico, uno que oficia), la consagración del tiempo y del lugar donde se asimila la drogue divine, etc$ I permanece igualmente la sed de olvidarse, de perderse en un «a*soluto de esencia tó&ica$ os dioses no mueren, decían los +umanistas$ 8o mueren, pero enve'ecen, se vulgari-an, llegan a las ms e&tremas formas de degeneración, en la conciencia y en la e&pe e&peri rien enci ciaa del del +om* +om*re re,, por por supu supues esto to$$ Ia no cree creess en %ion %ionis iso, o, pero pero cont contin in!a !ass em*orrac+ndote y esta *orrac+era es cada ve- ms triste y ms vulgar, ms desesperada$ 4lgunos via'eros que +an vuelto de la ;nión :ovitica +a*lan de la «mística del tractor, que +a sustituido a la mística ortodo&a o sectaria$ 8o se trata, por supuesto, de la necesidad del +om*re de tener un «ideal, de una fe en un mito, en un +om*re, en una idea, sino de la necesidad del +om*re de perderse a sí mismo$ I cuando ya no puedes perderte en la santísima .rinidad, te pierdes en la «mística del tractor$ 9arece que la maldición del +om*re moderno es desli-arse cada ve- ms a*a'o, saciar su sed de perderse a sí mismo con formas cada ve- ms *a'as de «mística$ El luciferismo del +om*re moderno ya no consiste en su re*elión contra %ios (para +a*lar en trminos muy amplios), sino en una re*elión contra %ios a travs de la *urda imitación de su o*ra$ 3mitación y contra+ec+ura, +e aquí los verdaderos estigmas del luciferismo$ 9orque te opones a la religión sustituyndola rpidamente por otra religión, inferior$ Benuncias a la mística de una santa .eresa, pero adoptas la mística inferior del tractor o del opio? te ofreces a ti mismo, te «inmolas, para perderte en el ser inefa*le del tractor, para par a que triunfe el culto del tractor$ O, en el caso del opio, te ofreces para poder aniquilarte como individuo, como ser aislado y dolorido, descu*riendo descu*riendo otra realidad, realidad, a*soluta, aquel «orden e&celente e&celente del que +a*la*a +a*la*a .+omas de @uincey$ @ue los instintos del +om*re permanecen intactos es una verdad elemental que los «racionalist «racionalistas as siempre olvidan$ I la sed de salvación del +om*re est en el orden natural de las cosas$ Cualquier cosa que +aga, y por muc+o que cam*ie, el +om*re seguir deseando, esperando y pensando que se salva, que encuentra el sentido central de la
e&istencia, que valora su vida$ a sed de redención, +e aquí el sentido de aquel e&tra#o instinto del +om*re por entregarse, por perderse$ Cuando este instinto encuentra una salida natural, «mística, la religión sa*e canali-ar los impulsos +umanos$ 9ero a menudo ocurre que el individuo de'a de creer o se le pro+í*e creer en un orden trascendente de realidades, en la religión$ Este cam*io, le'os de li*erar al +om*re, le vulgari-a, de'ndole a merced de las místicas inferiores$ Cuando de'as de creer en el paraíso, empie-as a creer en el espiritismo$
4nalogías y sím*olos
Je encontrado encontrado en el li*ro de la se#ora C$ F$ eyel eyel T!e Magic of Her#s<25= (ondres, 015P, p$ XX) un detalle que plantea un montón de preguntas inquietantes$ a autora, despus de resumir y comentar las doctrinas de N$ $ 9orta, el creador de aquella e&tra#a «ciencia llam llamad adaa p!ytognomonica, nos nos recu recuer erda da que que a menu menudo do se +an +an po podi dido do conf confir irma marr las las misteriosas relaciones descu*iertas por el ilustre napolitano entre plantas, animales y enferme enfermedade dades$ s$ 9or e'empl e'emplo, o, partien partiendo do de sus fantsti fantsticas cas suposic suposicion iones, es, se +a podido podido descu*rir el tratamiento del reumatismo con salicilato? el salicilato +a sido e&traído de la corte-a del sauce, un r*ol que vive en los lugares +!medos, +!medos, allí donde tam*in se coge el reumatismo$ Esta coincidencia podría dar pie a innumera*les especulaciones$ E&istiría, pues, una simpatía de naturale-a mgica entre todas las formas creadas que pertenecen a cierto medio cósmico$ a +umedad que produce el reumatismo +a creado, al mismo tiempo, la sustancia específica (el salicilato) que podría curarlo$ ;n mundo de correspondencias y de analogías mgicas$ .al como pensa*a 9orta, no solamente la sustancia de las plantas estaría en relación directa con cierta enfermedad, sino tam*in su forma o la forma de sus flores, raíces y +o'as$ Ciertamente, en la siguiente pgina de la se#ora eyel encuentro otro detalle significativo/ «8o e&iste ni una sola especie venenosa en la familia de las cruciferas (C$ F$ eyel, op& cit&, p$ XR)$ G4dmitamos que estamos ante una coincidencia pertur*adoraH 9orque no s si se tiene noticia de alguna familia de plantas que no tenga por lo menos una especie da#ina$ :olamente la familia de las cruciferas, nos instruye nuestra autora, no tiene ninguna variedad venenosa$ Este +ec+o puede significar muc+as cosas$ 4nte todo, puede significar que cualquier forma, cualquier sím*olo o*edece a una cierta ley de su ser, ley que le impide desempe#ar ciertas funciones$ Cualquiera que sea el orden de realidad donde se manifiesta seme'ante forma, que corresponde a cierto sím*olo, tendr siempre una significación muy precisa$ El cosmos, pues, no carece de sentido en sus estructuras$ estructuras$ as formas geomtricas, geomtricas, adems de tener los valores y funciones que les +a otorgado la mente +umana, tam*in tienen otro tipo de valor, un valor m%gico, e&tra+umano$ El sím*olo central del cristianismo, la cru* , no est prefigurado en aquellos signos solares (la esv%stica, etc$), sino que se encuentra, est predeterminado, en la misma constitución del cosmos, est presente en el mundo vegetal, antes incluso de la aparición del +om*re$ El +om*re no crea sus sím*olos, sino que stos le son impuestos desde fuera, le son dados, revelados? en una pala*ra, le preceden$
a tcnica del desprecio
"alrau& "alrau& +a tenido tenido una ve- ms ra-ón titulando titulando su !ltimo li*ro -e temps du m$pris& 4ntes que una poca +eroica, la nuestra es una poca del desprecio$ 9or otra parte, el +eroísmo tiene muc+as afinidades con el desprecio$ .anto uno como otro son actitudes aristo aristocrt crtica icas, s, muy solita solitaria riass y de una tensió tensiónn moral moral e&asper e&asperant ante$ e$ KCómo KCómo podríam podríamos os defendernos contra los est!pidos ms que desprecindolosL K@u otra cosa podríamos +acer contra las fuer-as que nos quieren convertir en im*ciles ms que luc+ar contra ellas aun sin suerte, es decir, sin lograr una victoria/ solos, +eroicos, aristocrticosL a ridícula confusión propia de los tiempos modernos +a visto en la aristocracia una plaga social$ :e +a confundido la noción de aristócrata Qindispensa*le, Qindispensa* le, por otra parte, par te, para cualquier civili-ación y cualquier +umanismoQ con la clase social de los aristócratas, clase desde +ace muc+o corroída por vicios vicios y parali-ada por su propia esterilidad$ esterilidad$ Es o*vio que sólo los am*iciosos y los advenedi-os pueden seguir esperando algo de esta aristocracia de sangre, espada y oro$ 9ero no podemos renunciar impunemente a la noción misma de aristocracia? y no podemos renunciar ms que a riesgo de +umillar el +umanismo, de oscurecer todavía ms la confusión que reina a nuestro alrededor$ 4l fin y al ca*o, Ka qu otra cosa se dedican los +om*res realmente vivos y creadores de nuestra poca sino a despreciar y a luc+arL Estos valores morales Qlos de la luc+a y el desprecioQ son característicos de cualquier elite, de cualquier aristocracia$ El desprecio es la forma ms +umana de luc+ar$ os animales tam*in luc+an, tam*in sufren, tam*in odian$ 8o odiar a un +om*re? solamente despreciarlo/ +e aquí un tipo de luc+a que es, al mismo tiempo, contemplación y ascesis$ Es casi una purificación/ porque te li*era de la esclavitud de la pasión ms +umillante, el odio$ Es una ascesis perfecta, porque no te a*andonas a los encantos de una pasión cualquiera, sino que, así, logras dominarla y esterili-arla$ 9oder despreciar a un +om*re, a una sociedad, un clima +istórico? despreciar sinceramente, sinceramente, con serenidad, sin crispación, crispación, sin nimo de vengan-a es un gesto moral que pocas veces podemos encontrar entre nuestros contemporneos$ Es un gesto olímpico$ I, sin em*argo, detrs de l se oculta la aventura ms terri*le$ 9orque lo que nos +ace titu*ear al emprender el camino del desprecio Qque es, al mismo tiempo, el camino del aislamiento, el camino ms seguro +acia la soledadQ es la angustia de salir de la +istoria, de arriesgarnos a no ser contemporneos de las grandes transformaciones morales, sociales y políticas que nos rodean? es decir, de permanecer solos y estriles en medio de las incesantes metamorfosis +umanas$ 8os limitamos a conformarnos con creer que cualquier cosa que ocurra en el m*ito de la +istoria es significativa? que cualquier nueva forma de vida moral y social es un progreso$ Vste es el origen del instinto que nos +ace permanecer en la contemporaneidad y ser solidarios con los que act!an y piensan por nosotros$ Vste es el origen de nuestro miedo a despreciar lo que pasa a nuestro alrededor/ alrededor / a despreciarlo en su totalidad, en *loque y sin reticencias$ 9orque
Kqu ocurriría si ellos tuvieran ra-ónL Ellos, es decir, los otros, muc+os y est!pidos o pocos y semid semidoc octo tos, s, +om*re +om*ress de despa despac+ c+oo u +om*re +om*ress de la call calle, e, +om*re +om*ress perfec perfecta tame ment ntee contemporneos de los acontecimientosD a tcnica del desprecio conduce inevita*lemente a la aventura$ %esprecias en nom*re de una tradición o de un instinto instinto que te dice que no todo lo que pasa en la +istoria +istoria es significativo? que no todo lo que ocurre es necesariamente un progreso? que el mundo no siempre va +acia adelante o +acia lo me+or , sino que, a menudo, va sin ton ni son, dirigido dirigido por fuer-as oscuras, in+umanas y estriles$ .am*in .am*in desprecias porque te sientes aristocrtico, +eroico, luc+ador, pero los acontecimientos, cuando llegan a su declive, nunca son +eroicos, ni siquiera portadores de valores, de 'erarquía$ o que pasa, lo que se consume, es siempre amorfo, irracional, «accidental$ El desprecio presupone una visión a+istórica$ Es decir/ el desapego con respeto a los acontecimientos, la creencia en los significados$ Bivarol no se solidari-ó con la Bevolución francesa? es decir, no creyó en la fuer-a creadora de los acontecimientos, no creyó en la !istoria? se conformó simplemente con los significados morales de su poca$ I, sin em*argo, Bivarol tuvo ra-ón? no resultó enga#ado por su actitud anti+istórica$ El +om*re siguió siendo siendo igual de funesto y de inesencial , tanto antes como despus de la Bevolución$ os os sign signif ific icado adoss moral morales es enco encont ntrad rados os por Biva Bivarol rol sigue siguenn todav todavía ía en pie, pie, aunqu aunquee el fenómeno revolucionario se +aya e&tinguido y +aya sido superado (la *andera de la Bevolución de 0XR1 +a sido pisoteada +oy día por los militantes de otra revolución)$ 4ctitud anti+istórica, es decir, actitud apocalíptica$ os acontecimientos no crean la +istoria? la +istoria no significa progreso? el mundo avan-a a trompicones? el mundo puede tener, pues, un final? y un final precipitado$ Eso es lo que piensan +oy día unos cuantos +om*res, posi*lemente los ms perspicaces del momento? entre los que no podemos olvidar a Ben Nunon, que re!ne, adems de otras virtudes, una formida*le capacidad de desprecio por el mundo moderno en su totalidad$ 8o creo que +aya e&istido 'ams un +om*re que desprecie ms categóricamente y con ms fuer-a la contemporaneidad como este prodigioso Ben Nunon$ I nunca +a de'ado entrever en su desprecio, olímpico, sereno y compacto, la ms leve +uella de odio, de irritación o de melancolía$ Es un verdadero maestro$ os riesgos del desprecio, la «aventura que inaugura esta tcnica, no de*en, sin em*argo, intimidar a un +om*re de estructura +eroica, un +om*re que ama, al mismo tiempo y con la misma fuer-a, la luc+a y la soledad$ a +uida del mundo, el aislamiento frente a los acontecimientos, en una pala*ra, la distancia con respecto a las esencias caducas e infernales de la sociedad, es un camino admira*le para los que no conocen al demonio de la luc+a, para los que estn dotados de una «estructura contemplativa$ 9ero para los otros, los que no pueden vivir sin la soledad, pero tampoco sin la luc+a, el desprecio es la ms efica- tcnica/ es luc+a (porque es ascesis), ascesis), pero es, al mismo tiempo, tiempo, autodominio, perspectiva, espacio, «contemplación$ Es e&tra#a la frecuencia con la que aparecen en la o*ra de "alrau& los trminos «contemplación y «sentido$ :us li*ros a*undan en +om*res que sufren porque quieren
lograr un criterio seguro de contemplación$ :u*yugado por la sed de «sentido (de la e&istencia), "alrau& rescata y actuali-a la e&presión de "ontaigne/ la condition !umaine& I al lado de esta sed casi orgnica de contemplación y soledad (sed o, me'or dic+o, destino), destino), "alrau& (estructura (estructura +eroica, +eroica, aristocrtica aristocrtica)) cultiva cultiva la acción$ 4sí, tuvo que llegar, fatalmente, a la tcnica del desprecio, aunque no fuera en a*soluto un anti+istoricista$
El +ec+o
.odos .odos estamos de acuerdo en que el conocimiento conocimiento +umano *usca el !ec!o y no los !ec!os& 9odemos tener delante mil plantas sin llegar a entender por eso el «+ec+o esencial de la vida vida veget vegetal al$$ 9odem 9odemos os leer leer mil mil doc docum ument entos os so*re so*re la Bevo Bevolu luci ción ón france francesa sa sin sin acercarnos por eso ni un solo paso a este «+ec+o sin precedentes en la +istoria europea$ 9ero Kcómo elegimos, de los millones de +ec+os que nos rodean, aquellos pocos +ec+os que son esencialesL KCómo llegamos a o*tener un +ec+o a partir de una multitud de docum doc umen ento tos, s, para para despu despus s tran transfo sform rmar arlo lo en un acto acto de conoc conocim imie ient ntoL oL I po podem demos os plantearnos otra o tra pregunta/ Ksomos nosotros noso tros los que elegimos y transformamos transfor mamos aquel +ec+o verdaderamente significativo de entre un millón de otros +ec+os o es este +ec+o el que so*resale entre todos ellos, por ser cualitativamente distinto del millón de +ec+os que le preceden y le siguenL O*serv O*se rvem emos os con con aten atenci ción ón el comp compa# a#er eris ismo mo qu quee surg surgee entr entree do doss 'óve 'óvene nes, s, compa#erismo que a menudo se transforma en amor$ Entre ellos ocurren innumera*les cosas sin ninguna importancia (gestos, conversaciones, miradas, situaciones, etc$)$ Jec+os que se disipan sin llegar a provocar una germinación, sin llegar a tener una «secuencia orgnica$ (%ecimos tantas cosas que se pierden irremedia*lemente? tantos gestos, sonrisas, e&plosiones sentimentales que duran un momento y desaparecen al siguiente momento, sin +a*er de'ado +uella, sin de'ar ning!n conocimiento, ninguna significación en mi conciencia o en la tuya$ tuya$)) 9ero 9ero ocu ocurre rre que, que, de repen repente te,, un unaa nimi nimied edad, ad, un +ec+o +ec+o vu vulg lgar ar pue puede de transformar la camaradería de dos 'óvenes en amor$ ;na nimiedad (una mirada, s5lo una de las miles que +an intercam*iad intercam*iado? o? una pala*ra, pala*ra, entre otras miles miles de pala*ras, pala*ras, un paisa'e, paisa'e, un mati-, mati-, etc$), una nimiedad nimiedad que les +ace evadirse de su medio normal, neutro, inundado por +ec+os, y que les em*ru'a, les empu'a +acia una locura !nica que podríamos llamar, sin ning!n miedo, 4*soluto$ o mismo ocurre en el mundo *iológico$ Ocurren millones de +ec+os en un organi organismo smo (Gcunt (Gcuntos os tropism tropismos, os, cunto cuntoss fenóme fenómenos nos de nutric nutrición ión,, cunto cuntoss progreso progresoss oscurosDH)$ oscurosDH)$ I, sin sin em*argo, em*argo, no tienen e&cesiva e&cesiva importancia importancia en la vida de este organismo organismo (es decir/ significació significación, n, «secuencia orgnica, orgnica, «destino) «destino) ms que unos pocos entre todos ellos? el +ec+o de la germinación, de la fecundación? la creaci5n& En la +istoria de los pue*los, en la +istoria del espíritu +umano, sólo los actos de creaci5n tienen importancia$ :olamente ellos pueden ense#arle algo al +om*re$ I Kqu otra cosa es la virtud de aprender sino un aspecto de la eternidadL 9odríamos decir que el destino es la luc+a consigo mismo, la elección del +ec+o esencial entre los millones de +ec+os que ocurren en uno mismo y a nuestro alrededor? la luc+a consigo mismo, con la significación (la fecundación, los ni#os, la gloria, acto creador
con «secuencia orgnica en cualquier caso) que se puede atri*uir o no a la propia vida personal$
4lgunos modestos
os +om*res que parecen ser verdaderamente modestos son, en realidad, los ms grandes orgullosos y su am*ición es ilimitada$ 8unca olvidar la emoción con la que me em*arqu en la lectura de 1ensamientos de un !om#re cualquiera, el e&celente li*ro del profesor 8$ 3orga$ 9ero no llegu a comprender del todo una cosa/ Kpor qu «un +om*re cualquieraL 8$ 3orga es, y su e&celencia *ien lo sa*e, un +om*re fuera de serie$ I, sin em*argo, en todos sus li*ros como memorialista o so*re la moral quiere ofrecer de sí mismo la imagen de un po*re +om*re, de un po*re científico que intenta +acer algo en nuestro modesto país, etc$ 9odríamos pensar, leyendo seme'antes confesiones, que el se#or 3orga es un tímido y un modesto$ 9ero *a'o su apariencia de modestia se esconde la conciencia de su propia genialidad y el orgullo de esta genialidadD 4lguien me di'o/ Q8o soy tan orgulloso como para no reconocer que soy s oy un gran +om*reD I una ve-, escuc+ando las ala*an-as entusiastas de un amigo suyo, el mismo +om*re me confesa*a/ Q:oy un +om*re modesto, me resulta tremendamente agrada*le que se +a*le de míD a'o su apariencia paradó'ica, estas confesiones esconden una verdad$ ;n gran orgulloso sa*e muy *ien que por muc+o que le ala*en, adulen o e&alten, nunca se podr decir todo so*re l$ Vl es tan grande, tan e&cepcional, tan !nico, que es preferi*le que no se diga nada so*re l o que l mismo pare-ca modesto, «un +om*re como cualquier otro, antes de que se diga simplemente de l que es un gran +om*re$ El profesor :$ %$, al lado de quien +e pasado *astante tiempo, tiempo, era muy consciente consciente y esta*a orgulloso de su o*ra, de los cuatro grandes tomos de filosofía que +a pu*licado$ "e +a*ía acostum*rado a considerarle un vanidoso sin igual +asta el día en que leí la confesión de un e&cepcional estudioso, que +a*ía escrito y pu*licado una *i*lioteca entera de o*ras eruditas$ :u confesión empe-a*a en este tono/ «:oy un po*re investigador sin suerteD$ 9odríamos decir cualquier cosa de nuestro estudioso menos que era un «po*re investigador sin suerte$ Era cle*re, era considerado la mayor autoridad de su tiempo, tenía infinidad de discípulos y era rico$ Entonces, Kpor qu esta irritante modestia, que no llega*a a convencer a nadieL "e podríais contestar/ los grandes +om*res intentan y sue#an con producir una o*ra tan e&traordinaria, que lo que sus po*res fuer-as les permiten reali-ar no son ms que fragmentos insignificantesD 4dmitamos que esto sea cierto (aunque lo dudo? muc+os
creadores que +a*lan de su «po*re persona estn convencidos de la grande-a de su o*ra y a veces lo confiesan confiesan en sus diarios íntimos íntimos o en sus cartas, etc$)$ 9ero si es así, entonces el orgullo de estos creadores me parece terrorífico, demi!rgico$ G3magínense qu opinión tienen de sí mismos, de su poder, de su genio, si aquellas o*ras maestras que +an creado les parecen *agatelasH "e +a fascinado durante muc+o tiempo la leyenda que conta*a que Airgilio, mori*undo, pidió que su 7neida fuera destruida, destruida, una «po*re o*ra fracasada, fracasada, una *agatela$ 9ero a+ora me doy cuenta del enorme orgullo que se escondía de*a'o de la apar aparen ente te mode modest stia ia de Airgil rgilio io?? si la 7neida era una *arati *arati'a 'a imperf imperfect ecta, a, entonce entoncess Gimagínense qu O*ra aspira*a a crear AirgilioH :o#a*a con ser un demiurgo$ .enía una opinión e&traordinaria de su genio$ 9ensa*a que podría !acer , que podría crear una una o*ra mil veces ms *ella que la 7neida. I Gqu ingenuo resulta, despus de ests consideraciones, el orgullo ruidoso de al-acH Vl, que pensa*a de sí mismo Qy realmente lo eraQ ser un genio? que decía que su par era 8apoleón y que el mundo no podría nunca olvidar a su pap NoriotD 9or lo menos al-ac tenía la conciencia de que su o#ra coincidía, aunque imperfectamente, con su poder$ 8o pensa*a, como Airgilio, que lo que +a*ía creado no era *ueno, que qu e su poder de creación supera*a con creces lo que +a*ía reali-ado, que, en cualquier cualquier caso, su «ideal «ideal artístico era tan grandioso que ni siquiera V podía reali-arloD
"elancolía
Ga melancolía de +a*er perdido tus correspondencias «cósmicasH G4curdate de que +u*o un tiempo en el que a cada momento de la vida del +om*re le correspondía, le «respondía, un acontecimiento cósmicoH 4ntes, el +om*re *aila*a en los solsticios, encendía encendía fuegos en la noc+e de san >uan, +acía *odas en ciertas ciertas noc+es, se entristecía entristecía y se alegra*a con la vida de la luna$ G@u perfecta armonía con los ritmos cósmicos, qu milagrosa correspondencia entre el *aile del +om*re y la trayectoria de los planetasH Cualquier cosa que el +om*re +acía, tenía otro «peso, encontra*a eco en otros niveles$ 4unque peque#o y vulnera*le, como siempre lo +a sido, el +om*re era sin em*argo un o'o en el que se refle'a*an los espacios siderales, un cora-ón en el que la sangre latía con el mismo ritmo que el del universoD Ga melancolía que despierta esta li*ertad moderna del +om*re, que puede *ailar, cele* cele*rar rar o vela velarr cuand cuandoo quie quiere re y como como quiere quiereHH a deses desesper perac ació iónn qu quee produ produce ce este este aislamiento anrquico en un cosmos viviente$ Eres t! mismo, solamente t! mismo, li*re para perderte, para a*andonarte a merced de cualquier com*ustión interior, como si estuvieras encarcelado en una 'aula de +ierro, aislado del resto del mundo$ :ientes que por encima de ti pasan cosas inimagina*les, en lo invisi*le, y que todas estas cosas ya no «encuentran una respuesta en ti$ 4quella milagrosa red que te ata*a al resto del universo se +a roto +ace muc+o tiempo$ tiempo$ Jay noc+es en que la conciencia conciencia de esta ruptura te desespera$ I otras veces permanece solamente su melancolía$
El derec+o a decir *analidades
:upongo que +a*is o*servado la naturalidad con la que un pensador paradó'ico como ;namuno o inquieto como Uieregaard afirma cosas tan simples, tan perogrullescas o francamente triviales$ :iempre me +a asom*rado la forma de escri*ir de ;namuno? a una parado'a difícil o rica en matices le seguir sin falta una trivialidad o un detalle erudito que otro escritor se avergon-aría de citar por ser demasiado com!n$ Con qu seriedad y locuacidad discute ;namuno la etimología de la pala*ra «agonía, recordndote varias veces que en griego significa «luc+a y teniendo el aire de +a*er descu*ierto l mismo este signi signifi fica cado do$$ Co Conn qu seri seried edad ad cita cita Uier Uiereg egaa aard rd te&t te&tos os arc+i arc+ico cono noci cido doss del del 4n 4nti tiguo guo .estamento, que los protestantes conocen pro*a*lemente de memoria, los su*raya, los anota y se asom*ra l mismo de la fuer-a que tienen, posponiendo pgina tras pgina la e&cepcional interpretación que tienes la impresión que +a*ía prometidoD I, sin em*argo, estos tópicos o trivialidades no molestan en la o*ra de un ;namuno o un Uieregaard$ :ientes que incluso estas «verdades eternas +a*ían sido interiori-adas y vividas antes de ser citadas$ :ientes que todas las citas triviales que te ofrece un erudito enciclopedista como ;namuno se despo'an durante un instante de su gloriosa trivialidad para ser de «carne, +ueso +ues o y sangre, como l decía? sientes que pueden pued en alimentar$ @u decepcionantes son, en cam*io, las trivialidades de la o*ra de un 4natole France, especialmente las que a*undan en sus pginas de filosofía escptica y perfumada$ @u difícil es soportar el tópico en un «clsico de segunda mano, en un «clsico de nuestros tiempos$ Es evidente que el derec+o a decir trivialidades y tópicos se conquista con muc+a muc+a difi dificul culta tad$ d$ I los los prime primeros ros en conqu conquis ista tarl rloo son los los grande grandess inqu inquie ieto toss y despistados del mundo$ Cuando %on @ui'ote te confiesa que todos los +om*res son mortales, ests tan asom*rado y emocionado que te entran ganas de llorar$
%iligeD
Je descu*ierto *astante tarde esta afirmación de san 4gustín/ 'ilige et quod vis fac? «Gama y +a- lo que quierasH$ Es, sin duda, una de las ms valientes aserciones del cristianismo? y, al mismo tiempo, la fórmula ms fiel del mensa'e de Cristo? el voca*lo que lo condensa$ a li*ertad a*soluta se conquista a travs del amor$ 9orque solamente así el +om*re sale de sí mismo, se li*era de la *estia y del demonio$ :olamente una li*ertad así es *enfica para el pró'imo, para la «colectividad$ "uc+o despus de san 4gustín, Ba*elais incita*a a los +umanistas a so#ar delante de la inscripción de .+lZme/ fais ce que voudras& GCuntas paginas no se +an escrito so*re esta inscripciónH GCuntas nostalgias no +a*r provocado aquel encantador monasterio en el cual cada uno podía +acer lo que queríaH I aun así, el te&to de Ba*elais no es tan cómodo como parece$ 4 menudo nos apetece +acer una serie de cosas menos agrada*les para nuestro vecino? otras otras veces, pueden ser cosas terri*les terri*les o desprecia*les$ desprecia*les$ El +om*re «normal y corriente, el +om*re «en sus ca*ales, es casi siempre decepcionante$ :olamente cuando ama, cuando sale de sí mismo, puede ser li*re y al mismo tiempo permanecer en la comunidad$ :an 4gustín y Ba*elais, dos ideales opuestos, dos mundos opuestos/ el cristianismo, fundado so*re una comunidad de amor, y el mundo moderno, fundado so*re la igualdad, etc$, o so*re los contratos sociales, etc$, o so*re los intereses económicos comunes, etc$ %esde el Benacimiento +asta +oy el +om*re +a so#ado con +acer lo que quería$ :e olvida de que este quod vis fac pierde su sentido +umano si es utili-ado con nostalgia ra*elaisiana, si es e&tirpado de la comunidad de amor y separado del mandamiento esencial/ dilige& El mundo moderno est e&asperado por el «terror cristiano$ Ciertamente, el terror es real$ K@u podría resultar ms antiptico que esta infatiga*le invitación al amor, que esta li*ertad a*soluta que se te ofrece solamente cuando amas, cuando renuncias a ser t! mismo, a ser un +om*re «en tus ca*alesL
os solitarios
«8ing!n +om*re atrae a las muc+edum*res con ms fuer-a que aquel que vive en soledad, apunta 9apini en su Sant6Agostino& I nos recuerda a san 4ntonio, a quien la gente acudía simplemente porque tenía fama de ser el ermita#o ms austero, y a >$T>$ Bousseau, este laico cuya soledad se vio a menudo arruinada por sus admiradores y admiradoras, atraídos por la fama de su aislamiento$ El solitario rompe tan violentamente con la ley fundamental de la condición +umana, +umana, que es la con convive vivenci ncia, a, el amor amor por alguien, si no por el pró'imo, que atraer irres irresis isti ti*l *lem ement ente, e, como como una una fuer-a fuer-a mgi mgica ca$$ a asces ascesis is,, que impl implic icaa la sole soleda dad, d, la contenci contención ón de los instin instintos tos y especia especialme lmente nte del instin instinto to esencial esencial// la se&uali se&ualidad dad,, era considerada en sí misma como una enorme fuer-a mgica$ 3r en contra de la naturale*a !umana significa significa superarla, acercarse acercarse a los dioses, a aquellos aquellos depósitos de energía energía física y espiritual$ a soledad es la primera superación de la condición +umana y la ms difícil de alcan-ar$ .al desapego presupone una fuer-a so*re+umana? aunque sea una fuer-a mgica, asimilada directamente por la dura prctica de la soledad y la ascesis (como pensa*an los +ind!es), o una fuer-a religiosa, enviada al mon'e que vive en el desierto por %ios mismo (tal como creen los cristianos), esta fuer-a asom*rar y atraer a los +om*res$ Estando cerca de esta fuente so*re+umana, en contacto directo con el asceta que la posee, los +om*res esperan o*tener alg!n *eneficio *eneficio para ellos mismos/ salud, poder, salvación$ salvación$ I en el caso de un solitario laico como Bousseau, aprender un mtodo de vida, o qui- incluso la felicidad$ El asceta +ind! luc+a*a contra los dioses? y stos, atemori-ados por las fuer-as mgicas que +a*ía acumulado a travs de sus tcnicas solitarias, le ponían en el camino inimagina*les trampas, tentndolo con *ellas mu'eres, con cnticos o *ailes$ ;n asceta cristi cristiano ano luc+a* luc+a*aa contra contra los demoni demonios, os, tam*in tam*in atemoriatemori-ados ados por el poder que +a*ía adquirido el mon'e (poder que le lleva*a +acia la salvación, es decir, le ale'a*a de su influencia? o que tenía un influ'o *enfico so*re toda la comunidad, de*ilitando el go*ierno demoníaco en el mundo)$ ;n asceta laico luc+a*a consigo mismo, con la triste-a, con la inutilidad o con sus e&altaciones interiores$ 9ero, en cualquier caso, l tam*in era un vencedor$ ;n +om*re que puede permanecer solo es un mago seme'ante a los dioses, decían los los +ind +ind!es !es?? es algu alguie ienn que +a descu* descu*ie ierto rto el mist misteri erioo de la feli felici cida dad, d, decía decíann los los contemporneos de BousseauD :olamente o*servando el fervor de las multitudes que acuden a la presencia de los solitarios te das cuenta de cun sediento de felicidad est el mundo modernoD
El lpi- de ;namuno
«:ólo pienso con un lpi- en la mano, confesa*a ;namuno en una entrevista$ Je encontrado gente que considera esta tcnica mental como una manía o, ms grave a!n, como una prue*a de falta de autenticidad$ autenticidad$ :i solamente solamente piensas provocado o sostenido sostenido por un o*'eto, un gesto o cierto cierto poema, este tipo de comportamien comportamiento to Kno traiciona traiciona una falta de originalidad o de espontaneidad del pensamientoL El lpi- que ;namuno cogía en la mano para poder pensar tiene, sin em*argo, una profunda significación$ Es una preparación para la meditación, similar a los otros «preparativos que conoce la +istoria/ la ascesis, la purificación previa, las posiciones +ierticas del cuerpo (que tienen tanta importancia en la 3ndia/ las así llamadas «posiciones yógui yóguica cas, s, las las asanas)$ Coges el lpi- en la mano, así como otros cierran los o'os o armoni-an armoni-an su respiración respiración o tapan sus oídos o toman su frente entre las manos$ .e .e preparas para reci*ir los pensamientos, para e&aminarlos, para «profundi-ar en ellos$ .am*in .am*in se nos ocurren pensamientos en otros momentos, en circunstancias ms o menos frívolas$ 9ero a+ora, sin em*argo, ests decidido a meditarlos, a seleccionarlos? a+ora eres responsa*le, porque ests concentrado, li*re$ ;namuno, ;namuno, que solamente solamente puede pensar con el lpi- en la mano, vuelve a repetir repetir un antiguo ritual, del que no tenemos por qu avergon-arnos$ :e trata de un gesto que indica el paso de la frivolidad y la casualidad a la meditación y la responsa*ilidad$ respon sa*ilidad$ 4l mismo tiempo es un ve+ículo, un au&ilio para la concentración$ a mente +a sido resta*lecida en sus derec+os? derec+os? aquel o*'eto, o*'eto, gesto o posición que el +om*re +a elegido elegido significa el primer paso +acia el pensamiento responsa*le$ 8o importa que sea un lpi- o una posición ascticoT meditativa, la tcnica sigue siendo la misma? el efluvio de la vida psicomental +a sido canali-ado, delimitado, «concentrado$ El pensamiento responsa*le es inaugurado por este gesto voluntario, sím*olo tam*in del reposo que le sigue$
4utenticidad
K4caso la autenticidad no es un aspecto oscuro del idealismoL Beali-ar tu propia vida, real realii-ar ar tu pensamiento y tu forma de sentir , solamente tuya, intraduci*ie, pura «vivenc «vivencia ia,, Kno signifi significa ca acaso acaso !acerla, inventarla tú mismoL "e parece que cualquier idealismo se fundamenta en la creencia de que el +om*re puede !acer el el mundo al mismo tiempo que +ace su pensamiento$ 9or eso el idealismo tiene tantos puntos en com!n con la magia$ .am*in la autenticidad parte del mismo presupuesto/ la creencia de que nada nos es dado desde fuera o que todo lo que es dado así no es realmente vivo, no tiene valide-, no tiene significación$ a autenticidad, como estilo de vida y pensamiento, sería, pues, una degradación de la conciencia mgica$ a magia cree que el +om*re puede ser y +acer cualquier cosa$ a autenticidad se conforma con muc+o menos/ uno no puede ser cualquier cosa, no puede !acer cualquier cualquier cosa$ 8o puedes ser, por e'emplo, un genio o un creador de mundos, o %ios mismo (tal como afirma la magia)$ 9ero puedes puedes ser tú mismo (es decir, sin ninguna alteración, alteración, sincero, sincero, actual, vivo) y puedes !acer una suma de cosas gracias a tu fuer-a interior? cosas que, todas 'untas, constituyen tu mundo, en cuya organi-ación +as participado y que +as construido seg!n tus necesidades necesidades y tus posi*ilidades$ posi*ilidades$ a autenticida autenticidadd es, pues, una variante vulgar, popular del idealismo$ I tanto la autenticidad como el idealismo son naufragios de la conciencia mgica$ Crees que puedes +acer y des+acer el mundo a tu anto'o (la magia)? pero llegas a convencerte de lo a*surdo de esta demiurgia y entonces piensas que el mundo se +ace conocindolo (idealismo)? y, al final, tienes que conformarte con vivir autnticamente, aunque sea una peque#ísima parte de este mundo (autenticidad)$
El +orror a lo anglico
4 propósi propósito to del fenómen fenómenoo de «con «conden densaci sación ón de las e&presi e&presiones ones espirit espiritual uales es europeas, fenómeno que cada ve- se manifiesta con ms fuer-a a partir del Benacimiento +asta +oy, o*servad cómo se condensa la m!sica$ Vsta se +a vuelto ms densa, ms «tectónica (volumen, orquestación, simultaneidad) con el Benacimiento, para llegar a ser «sólida con el arroco y aspira a adoptar formas cada ve- ms «pesadas con los instrumentos musicales del siglo W3W$ En la Edad "edia la m!sica se e&presa*a con instrumentos «puros/ la conc+a, la guitarra de cuatro cuerdas, el arpa, etc$ 9ero la tendencia del espíritu «moderno a entrar en contacto con realidades cada ve- ms «densas se puede detectar incluso en la creación de los instrumentos musicales$ 8o es la «resistencia de los materiales la que +a creado la m!sica moderna, sino que la m!sica, para poder e&presarse, +a creado resistencias materiales/ el volumen fónico, f ónico, la polisinfonía, la desafinación$ Estamos +a*lando de la necesidad de intuir la realidad en sus aspectos «pesados (necesidad que reencontramos en la física, en la filosofía, en la economía política, en la pica)$ El +orror de todo lo que es puro, simple, simple, anglico/ +orror sintomtico sintomtico de la Europa moderna$
4utenticidad
O*'eci O*'ecione oness que pue puede de levant levantar ar la autent autentici icidad dad$$ a vivenci vivencia, a, la e&perie e&perienci ncia, a, la autenticidad no son ms que nuevas formas y e&presiones de la mentalidad positivista, e&perimental, e&perimental, empírica$ empírica$ a primacía primacía de lo concreto (de la peor calidad)? calidad)? la superstición superstición de las «compro*aciones e&perimentales? ninguna afirmación so*re el mundo es vlida si no se fundamenta so*re «e&periencias, es decir, so*re «prue*as y «documentos$ a tiranía de los documentos y de las compro*aciones e&perimentales es una secuela de la mentalidad positivista del siglo W3W, cuando incluso el pro*lema (e&clusivamente metafísico) de la supervivencia post mortem del alma se discutía so*re la *ase de documentos (espiritismo, ciencias metapsíquicas)$ a autenticidad es un retroceso al empirismo? actitud antiplatónica$ Bespuestas que podemos alegar contra estas o*'eciones$ a autenticidad siempre aspira a e&presar lo concreto? es, pues, una tcnica de lo real, una reacción contra los esquemas a*stractos (romnticos o positivistas), contra los automatismos psicológicos$ a autenticidad es solamente un momento del gran proyecto por recuperar lo concreto que caracteri-a la vida cultural del !ltimo cuarto de siglo (el &ito de la fenomenología, 9roust, el neo+ipocratismo en la medicina, el valor concedido a la e&periencia irracional en la investigación de las religiones, el inters por la etnografía y el follore)$ a autenticidad se escapa a la mentalidad del siglo W3W, porque no confunde lo real con lo palpa*le$ Otorga cierto valor a los documentos, a las e&periencias, solamente porque stos participan en lo real? evita, de esta forma, los automatismos, los esquemas formales, las ilusiones$ e'os de mostrar una actitud antimetafísica, la autenticidad e&presa una enorme sed ontológica de conocimiento de lo real$
"s all de las etimologías
4 veces se llega a descu*rir todo un sistema de pensamiento en una simple e&presión ver*al, sistema que no +a de'ado ning!n rastro en la actual etapa mental de Euro Europa pa$$ 9or 9or e'em e'empl plo, o, deci decimo moss de una una idea idea o de un unaa cosa cosa inco incomp mple leta ta qu quee «n «noo es <22= suficientemente redonda $ Cuando una afirmación +a sido llevada +asta su e&presión ms perfecta, se dice que «es redonda$ ;n pensador que profundi-a y perfecciona sus teorías no +ace otra cosa que «redondear su sistema$ Esta popular e&presión refle'a una antiquísima concepción cosmológica/ la esfera es la f5rmula de la perfecci5n& .anto ms perfecta es una cosa cuanto ms se acerca a la esfera, cuanto ms se acerca su forma o su movimiento a la esfera o al movimiento circular$ a aspiración a la perfección es una tendencia a lo esfrico$ ;n sistema de afirmaciones logra convencerte, logra imponerse como una necesidad despus de +a*er sido redondeado/ es decir, en el momento momento mismo en que supera la forma larvaria o fragmentaria y se organi-a como un todo, cuando «se mantiene en pie por sí mismo$ Jay que su*rayar una ve- ms la plasticidad de la lengua rumana$ El rumano e&presa la idea de perfección totali-adora a travs de una imagen plstica cuyas valencias sim*ólicas +an permanecido intactas$ Esta esfera, que se de'a adivinar como raí- de la e&presión «redondear, no era solamente la fórmula de la perfección, sino tam*in la fórmula geomtricoTsim*ólica de la realidad a#soluta, de la realidad tal como era antes de ser dividida en dos (micro y macrocosmos, o*'eto y su'eto) por la creación$ «Bedond «Bed ondea earr una una cosa cosa no solam solament entee sign signifi ifica ca darl darlee forma, sino tam*in darle realidad , darle una e&istencia singular, autónoma$ ;na cosa *ien redonda es una cosa de cuya realidad nadie dudaría$
a resistencia al genio
Je encontrado en un vie'o li*ro de "ont+erlant algunas o*servaciones que no +an perdido todavía su actualidad? y, sin duda, no la perdern durante muc+o tiempo/ «On ne demande pas un +omme d’avoir de la valeur, ou seulement d’tre un caractZre? on lui demande d’tre sympat+ique, cela veut dir tre coulant, se prter au& com*ines, russir ( Au0 Au0 fontaines du d$sir )<26=$ :er simptico, +e aquí otra prue*a del sentimentalismo europeo y americano, de la incapacidad del +om*re moderno de pensar de una forma impersonal$ :e dice con nfasis que los occidentales occidentales «viven entre realidades, realidades, al tiempo tiempo que el Oriente Oriente est flotando flotando en lo «a*stracto$ :in em*argo, el sentimentalismo occidental prue*a lo contrario$ 4 un +om*re no se le 'u-ga por su valor, como dice "ont+erlant, por lo que es o lo que representa$ :e le 'u-ga por su apariencia? si es simptico o no lo es$ Cada ve- se utili-a menos, en los 'uicios de valor, el criterio o*'etivo e impersonal$ 9or otro lado, esta simpatía se conquista a travs de una total integración en la mediocridad$ «Car le mdiocre est ce qui plaht, parce que nos 'uges s’y retrouvent c+eeu&<27=, apunta*a "ont+erlant$ o mediocre resulta atractivo porque no te trastorna, no te cam*ia, no te em*ru'a$ Cualquier ser +umano se resiste ante una cosa o persona inaudita, nueva, revolucionaria$ 8o sa*es qu +acer con ella, no sa*es cómo reaccionar delante de una persona así$ a novedad, como ya +e dic+o en otra ocasión, anula el conocimiento que el +om*re tiene de sí mismo? o, en cualquier caso, lo confunde, lo oscurece$ @uant ce qui est simpleme @uant simplement nt +ors du commun, commun, cela cela paraht paraht ridicule& :urtout en France, nation petiteT*ourgeoise, et qui adore le petit$ %ante, "ic+elT4nge, :+aespeare, yron, [agner ont d’a*ord t 'ugs ridicules, ici, parce que «*i-arres, c’estTTdire autre c+ose que petitsT*ourgeois (i#id $) $)<2P=$ a fero- crítica que "ont+erlant +ace a Francia vale para casi todos los países de Europa y 4mrica$ El genio posee demasiada magia? pertur*a la conciencia que el +om*re tiene de sí mismo, lo saca de los estrec+os límites de su ser$ El +om*re medio, el +om*re mediocre, necesita un «raro a su medida? alguien que le divierta y pertur*e de una forma agrada*le$ a generación francesa, que se resistía a %ostoievsi y a 8iet-sc+e, aplaudía en cam*io a un Catulle "endZs o a un 9ladan, escritores que tenían «misterios perfumados, «secretos y «revelaciones accesi*les$ I tam*in gustan muc+o, especialmente a las elites, algunos escritores oscuros, espirituales, paradó'icos? pero no por su talento, sino por su rare-a, por los fragmentos caducos e idiotas de sus o*ras$ 4 esto se de*e, por e'emplo, el &ito de >ean Cocteau$ I, +oy en día, el de %imitri "ere'ovsi$ ;n autor como Ben Nunon, un >ulius Evola, un Coomaras^amy permanecen totalmente desconocidos ms all del círculo limitado de sus lectores$ El mundo *usca las «revelaciones verdaderas en los li*ros de "ere'ovsi, tal como +ace cincuenta a#os las *usca*a en los li*ros de teosofía$
;n significado de los signos
"e gusta el título de una revista, Signos/ pocas pala*ras podrían presumir de una sustancia espiritual ms rica$ El sentido conferido a este voca*lo puede llegar a ser la piedra angular de una cultura? cultura? porque de una forma se presenta presenta una cultura cultura que interpreta interpreta e interiori-a interiori-a el sentido mgico de la pala*ra «signo «signo y de otra, totalmente totalmente distinta, las culturas que +an asimilado asimilado el sentido metafísico o proftico de los signos$ G@u diferencia entre los profetas 'udíos, que transforma*an los acontecimientos +istóricos y las anomalías *iológicas en signos de la volunt voluntad ad divina divina,, y los mediter mediterrne rneos, os, que veían veían en el signo la forma pura, los límites perfectos, la normaH I tam*in Gqu diferencia entre el sentido mgico del signo, fuer-a inmanente, energía condensada que el imperativo del rito perfecto o del ver*o preciso pone a disposición del oficiante, y el sentido profticoTcristiano de los signos, tal como lo +a enten entendi dido do,, por por e'em e'empl plo, o, un >oaqu >oaquín ín de Fiore Fiore,, qu quee inte interp rpret reta* a*aa los los sign signos os como como un unaa manifestación secreta del ritmo de la +istoria universal, ritmo que, a su ve-, era el caminar de %ios so*re la tierraH? tierraH? %ios se manifestó al principio principio (en el 4ntiguo 4ntiguo .estamento .estamento)) *a'o el rostro del 9adre, despus (con el cristianismo) *a'o el rostro de la segunda persona de la .rinidad (>es!s), y finalmente como Espíritu :anto (la poca «apocalíptica de la li*ertad espiritual)$ 9odríamos ela*orar toda una filosofía de las culturas europeas y euroasiticas teniendo como punto de partida esta interpretación y las distintas formas de interiori-ación de los sentidos del signo& GI qu fecunda sería tal investigación si la amplisemos tam*in a otros m*itos culturales, asiticos, austroasiticos, ocenicos y amerindiosH 4llí donde los te&tos son cada ve- ms escasos y oscuros, donde los monumentos y los signos adquieren una importancia capital y un sentido ecumnico, directamente accesi*le para todos los miem*ros de la comunidad$ 9ero no me atrevería a aventurarme tan le'os en esta *reve nota$ "e agrada, entre otras cosas, el sentido mediterrneo del signo/ límite, distinción, detención$ 8o se trata aquí de la «detención de la vida, de una muerte formal, sino de la fi'ación de la mente so*re los límites del esse& "s all del signo, es decir, ms all de la forma y del sentido, empie-a el devenir o la nada, que son rostros o aspectos del non esse, del asat& a detención de una cierta vida, se so*reentiende? una *arrera para la corriente vital orgistica? límite del escurridi-o, amorfo devenir psicomental$ 9ero cualquier detención de esta vida oscura e insignificante tam*in es un triunfo de la eternidad y de las normas$ 8inguna de las confusiones que +a valorado la +eterodo&ia moderna es tan grave como la confusión de la Aida con el impulso vital, con el devenir *iológico y la duración psicomental$ .odas .odas las otras culturas o estilos europeos y afroasiticos afroasiticos +an separado claramente la Aida (a la que sim*oli-a*an sim*oli-a*an con las normas y los
ritmos cósmicos, el :ol, la una, etc$) del mero devenir oscuro, carente de cualquier otro contenido metafísico que no fuera la temporalidad (que sim*oli-a*an a travs de las aguas, las larvas, el infierno, niveles que ni siquiera participan en la e&istencia, porque no conocen ni la forma, ni la memoria)$ Estoy enamorado del sentido mediterrneo del signo, que te o*liga a pararte en el um*ral del pro*lema del noTser, o*ligndote o*ligndote al mismo tiempo tiempo a ver y respetar respetar las normas, los límites, las formas$ Este acto de o#ediencia es (o podría ser) un acto de dominio so*re ti mismo, so*re la vida que fluye a travs de ti y te mantiene en la corriente del devenir$ El signo es el sello que distingue el ser del noTser y te ayuda, al mismo tiempo, a identificarte y a ser tú mismo, a no devenir, «llevado por la corriente vital y colectiva$ Cualquier acto de o*ediencia es un acto de go*ierno, de detención del río amorfo, infra+umano$ :olamente así podríamos comprender el milagro griego? aquellos que +an sido capaces de ver mayor n!mero de formas y signos que todos los dems, aquellos que se +an detenido delante de ellos, los +an respetado y «normali-ado? precisamente estos +om*res +an alcan-ado la ms plena li*ertad de la que tengo noticia en Occidente y +an creado las ms numerosas y fuertes personalidades$ os *r*aros y los paleoTorientales, que no +an encontrado en el itinerario de su ment las formas y las normas, que pasa*an con facilidad del esse al non esse y que confundían la eternidad con la nada, no +an logrado alcan-ar ms que una triste li*ertad (orgistica, delirante) y no +an conocido nunca la personalidad antropológica, sino solamente la inspiración, insp iración, la o*sesión y la posesión (divina, mgica, etc$)$ 9ero igual de grave es tam*in la muerte de las significaciones en una cultura fundada so*re los signos y el límite$ Cuando la li*ertad llega a ser li*ertina'e y el +om*re *usca el sentido de una forma (norma, institución, sím*olo) en los niveles ms *a'os e infra+u infra+uman manos os (el freudism freudismo, o, el positiv positivism ismo, o, etc$), etc$), estamos estamos asisti asistiend endoo a una terri*l terri*lee confusión de planos, que en el me'or de los casos nos llevaría a un *arroco espiritual$ a esterilidad que +a contagiado *uena parte de la cultura occidental contempornea se de*e precisamente a este prolongado reinado de las formas muertas? y cuando se +a intentado +acer una nueva interpretación de las formas, se +a +ec+o *uscndoles el «origen en los niveles infra+umanos/ el se&o, la sangre, las clulas, los tótems, etctera$ 9arece ser que nuestro tiempo es lo suficientemente maduro como para reavivar y +acer fructificar los signos, encontrndoles la fuente y la 'ustificación metafísica en otros niveles que los descu*iertos por la sociología, la *iología o el +istoricismo$ Esta nueva compren comprensió siónn del signo supera el estril formalismo europeo y nos defiende al mismo tiempo de una nueva caída en el devenir escurridi-o e infra+umano que los antiguos +elenos, nuestros ms pró&imos modelos, +a*ían vencido$
"3BCE4 E34%E$ 8acido en ucarest en 01SX, se licenció en filosofía en 015R$ Aia'ó a la 3ndia, donde residió +asta 0120 y estudió snscrito, religión y filosofía +ind! con %asgupta$ Fruto de esta e&periencia fue su tesis doctoral so*re el yoga$ Jasta el inicio de la segunda guerra mundial ense#ó +istoria de las religiones en la ;niversidad de ucarest$ E&iliado en 9arís en 0167, fue profesor en la Vcole des Jautes Vtudes y en la :or*ona$ 4 esta etapa, en la que comen-ó a escri*ir en francs, pertenecen o*ras, como su Tratado de !istoria de las religiones (0161), gracias a las cuales se fraguó su reconocimiento como comparatista y fundador de una metodología para el estudio de las religiones$ Cola*oró con Carl Nustav >ung en el círculo Eranos y con Ernst >Mnger en la revista Antaios& En 017P se trasladó a los Estados ;nidos$ 4llí desarrolló su la*or docente e investigadora en la ;niversidad de C+icago, donde ocupó la ctedra de Jistoria de las religiones +asta su muerte en 01RP$ "ircea Eliade no fue un simple erudito, sino tam*in, y desde muy temprano, un nota*le ensayista, articulista, memorialista y narrador$ 4sí, aunque entre sus pu*licaciones ms ms impo import rtant antes es ca*e ca*e se#al se#alar ar la inaca inaca*a *ada da Historia de las creencias y de las ideas religiosas (01XPT01R7) y la 7nciclopedia de las religiones religiones, de la que fue director, es autor de numerosos ensayos y novelas$
8otas
<0=
Maitreyi& Maitreyi& -a noc!e #engalí, Uairós, arcelona, 5SSS$
<5=
-os +5venes #%r#aros, 9reT.e 9reT .e&tos, &tos, Aalencia, Aalencia, 011R$
<2=
Alquimia asi%tica, 9aidós 3*rica, arcelona, 0115$
<6=
«;na pgina, una pgina llena, escrita con atención, con pasión y muc+o esfuer-o, ser sacrificada sacrificada en +olocaustoD +olocaustoD una cerilla +a prendido prendido fuego al montón de papeles papeles de un manuscrito? llama y +umo se +an esfumado a lo le'os a travs de la ventanaD$ Eliade cita la traducción francesa de una glosa de Eugenio d’Ors («a page paienne, en jd$, Au grand Saint:!ristop!e, trad$ de "$ y "me$ .issier de "allerais, B$ 4$ Corra, 9aris, 0125, pp$ 5P5T5P7)$ Esta glosa, pu*licada originalmente en cataln, fue recogida en versión castellana en E$ d’Or d’Ors, s, -a filosofía del !om#re que tra#a+a y +uega (reed$, i*ertarias_9rod+ufi, "adrid, 0117, pp$ 0X5T0X2)$ ( 9& 9& del e$) <7=
EspasaTCalpe, "adrid, 5SS2$
«En cada +om*re, y en cada momento, e&isten dos impulsos simultneos, uno +acia +acia %ios %ios y el otro +acia :atn$ :atn$ Cf$ C+$ audela audelaire ire,, Mi cora*5n al desnudo y otros escritos p5stumos, Aaldemar, "adrid, 0111$
"oneda nacional rumana$ ( 9& 9& del t&)
/oaquín de Fiore y los medios cortesanos&
<1=
El nom*re nom*re que lleva lleva,, en la cult cultura ura ruman rumana, a, la gene generac ració iónn de intel intelect ectual uales es revolucionarios de 0R6R$ ( 9& 9& del t&) <0S=
Vpoca de la +istoria de Bumanía (0X00T0R50)$ a clase dirigente del país provenía del *arrio *ar rio Fanar de Constantinopla Consta ntinopla y esta*a formada por griegos gr iegos ricos$ r icos$ ( 9& 9& del t&) <00=
«a ironía considerada como una forma de maceración$
<05=
-%grimas y santos, título de un li*ro de E$ "$ Cioran pu*licado en Bumanía en 012P ( 'e 'e l%grimas y de santos, .usquets, arcelona, 01RR)$ <02=
«8o es gran cosa ser valiente en una *atalla si no tienes ning!n talento para la conversación$
<06=
:osmología y alquimia #a#il5nicas, 9aidós 3*rica, arcelona, 0112$
<07=
7l mon+e, Aaldemar, "adrid, 011R$
<0P=
7l italiano, o el confesionario del penitente negro&
<0X=
-a carne, la muerte y el dia#lo en la literatura rom%ntica, El 4cantilado,
arcelona, 0111$ <0R=
-as fuentes ocultas del >omanticismo&
<01=
9eam es el trmino rumano traducido por «lina'e$ ( 9& 9& del t&)
<5S=
«a ta&onomía no puede ser ms que la filogenia aplicada$
<50=
/ade& n estudio de arqueología y religi5n religi5n c!inas&
<55=
7l sistema religioso religioso de :!ina&
<52=
-a respuesta de las plantas como medio de investigaci5n fisiol5gicaD 7lectro fisiología comparadaD "nvestigaciones so#re la irrita#ilidad de las plantasD -os movimientos vitales de las plantasD -a respuesta en los seres vivos y en los inanimados& <56=
-a vida y la o#ra de sir /agadis! :& ose&
<57=
.rmino acu#ado por Eliade$ ( 9& 9& del t&)
<5P=
-a mandrdgora& 7nsayo so#re so#re los orígenes de las leyendas&
<5X=
.rmino acu#ado por Eliade en rumano (rasiologie) para designar el estudio sistemtico de las ra-as$ ( 9 9 del t&) <5R=
Corrientes Corrientes ideológicoTlit ideológicoTliterarias erarias de la cultura rumana de principios del siglo WW que ideali-a*an la vida rural en oposición a la vida ur*ana$ Cultiva*an una literatura de inspiración rural e +istórica$ ( 9& 9& del t&) <51=
O*ra maestra del follore rumano$ ( 9& 9& del t&)
<2S=
7l tiro de ca#allos, el ca#allo de silla a trav$s de los tiemposD :ontri#uciones a la !istoria de la esclavitud& <20=
«9ienso realmente (pero estoy demasiado involucrado en esto) que la fidelidad es uno de los signos del genio$ <25=
-a magia de las !ier#as&
<22=
Eliade Eliade anali-a anali-a aquí la e&p e&presi resión ón rumana rumana nu e destul de rotun+it, «no +a sido suficientemente redondeada$ ( 9& 9& del t&) <26=
«8o se le pide a un +om*re ser valeroso valeroso o solamente ser un +om*re de carcter? se le pide ser simptico, lo que significa ser tolerante, consentir las com*inaciones, tener &ito$ <27=
«o que gusta es la mediocridad, porque nuestros 'ueces se reconocen en ella$
<2P=
«En cuanto a lo que es inusual, simplemente parece ridículo& Especialmente en Fran Franci cia, a, naci nación ón pequ peque# e#o* o*ur urgu gues esaa que que adul adulaa lo pequ peque# e#o$ o$ %a %ant nte, e, "igu "iguel el Yn Ynge gel, l, :+aespeare, yron, [agner, al principio eran calificados aquí de ridículos porque eran raros, es decir, diferentes del peque#o*urgus$