Nivel: 7 Humano ♂ Categoría: Ilusionista APA 7 Puntos de Vida:130 Turno: 80 HA: 0 Desarmado HD: 5 Esquiva TA: (Gabardina +5) FIL2 CON 1 PEN 3 FRI 2 CAL 3 ELE 3
ENE 0
AGI 7 FUE 5 DES 5 CON 7 POD 15 INT 15 VOL 6 PER 5 RF 65 RM 100 RP 55 RV 65 RE 65 Presencia: 60
Regeneración 1 Acciones por turno: 2
Cansancio: 7 Tipo de Movimiento: 7
Ventajas y Desventajas: - Don (-2) - Artefacto (-1) - Lenta Curación(+1) - Fácil Posesión (+1) Proyección Mágica: 0 ACT: 200 Zeon: 725 Regeneración Mágica: 320 Turno: 80 PV: 130 Nivel de Vía: 296/310 Teorema Mágico Shamánico Metamagia: Proyección Mágica determinada, Forzar Velocidad, Aguante al Daño Sobrenatural, Magia Oculta, Elevación, Doble Conjuro Innato
Habilidades Secundarias: Acrobacias 10, Atletismo 42, Estilo 125, Persuasión 205, Advertir 97, Animismo 105, Tasación 0, Valoración Mágica 105, Frialdad 8, Disfraz 100, Ocultarse 40, Robo 100, Sigilo 160, Arte 0, Trucos de Manos 101 AUTOR:
♫ Dystopia ( Y Ya tch )
VonClouve
Nombre real: Cobalt Walzach Rango: Investigador Freelance Lugar de nacimiento: Mar Interior, Archipiélago de Forneo Edad: 28 Estilo de Combate: Apoyo a compañeros Etnia: Asher Altura: 1,80 Peso: 73 Kg Hobbies: Los juegos de azar: naipes, dados. Lo que más aprecia : Descubrir la verdad para el mundo Lo que más detesta : La intolerancia y la incomprensión
Historia Cobalt, ese hombre intrépido, ágil de lengua y valiente de corazón. Un hombre felizmente nacido en el Archipiélago de Forneo que se crió tranquilamente con sus padres en un ambiente feliz y creció con una relativa comodidad. Cobalt, el adolescente que veía ante sus ojos los cientos de héroes y exploradores que poblaban el mundo (Forneo es un conglomerado de islas muy visitadas por turistas de todo el mundo). Cuando cumplió la edad de marcharse de casa, con una buena educación y una recomendación de sus padres (una familia burguesa adinerada); les dijo adiós a todos y se marchó con una sonrisa. Adonde lo llevó la fortuna, es lo de menos. Cobalt ha viajado. Ha visto mundo. Ha soñado maravillas y contemplado horrores. Por eso no es nada raro (aunque en estos tiempos sí lo sea) que la Magia, la auténtica Magia, despertara en él de forma natural e incipiente. Como ese compañero que, llamado por la curiosidad innata del muchacho, alzara la chispa necesaria para ayudarle en su cometido.
El Don Ocurrió en Remo. Cobalt pudo ser espectador durante los últimos días de la masacre de Remo, cuando apenas quedaban comités de soldados imperiales que se dedicaban a rematar a los muertos y los heridos se contaban por cientos. Cobalt desembarcó en Remo con un permiso especial para cubrir la noticia (trabajaba para un periódico importante, la revolución de la alta sociedad abeliense) y cuando llegó allí, la tragedia lo descompuso. Ni corto ni perezoso, Cobalt se puso a echar una mano y ayudó a rescatar a decenas de heridos, no todos lamentablemente con perspectivas de sobrevivir. Entre otros, Cobalt se coló en los escombros de una casa muy antigua y sacó de su sótano a tres bebés de aspecto extraño. La temerosa madre los cogió con agradecimiento y Cobalt se ofreció a pagarles el alquiler de una habitación justo al lado de la suya
propia y proteger –muy celosa era la señora- su identidad. Parece ser que este acto de amabilidad despertó algo en él. Como los Antiguos Magos, fue su prueba de madurez. Cobalt pasó una fiebre gravísima durante una semana; y los doctores lo achacaron sin duda a la exposición a epidemias propia de un territorio en catástrofe: eran cientos como Cobalt cada día los que caían víctimas de terribles fiebres. Pero para Cobalt fue distinto. Porque cuando se despertó, Cobalt podía Ver. Después de Ver, y gracias al consejo de la señora cuyo nombre nunca supo, Cobalt comenzó primero a Andar –acumular magia- y después a hablar –realizar conjuros-. Cobalt comenzó a sentir y adquirir conciencia de los espíritus a su alrededor. Aunque las primeras impresiones fueron chocantes, todo sucedió de una manera tan… amable, que hasta la propia mujer estaba sorprendida. Y la Magia hinchió a Cobalt y aprendió a apreciar la Magia como la fuerza que los espíritus ejercen en el mundo, y a darle las gracias. Y la Magia se portó bien con él.
Viajes Después de eso, Cobalt comenzó a darse cuenta de lo poco que sabía en realidad. Que apenas había empezado a conocer el mundo. Que era el protagonista de su propia vida, y decidió dedicarse en cuerpo y alma a descubrir los misterios del mundo, los que ayudaran a la gente. La profesión de Cobalt es tan arriesgada como pionera. Cobalt es un reportero freelance; freelance; se dedica a ir allá donde las noticias vuelan y descubrir la verdad de lo acontecido. Esto por supuesto no sólo le ha hecho convertirse en una figura, de por sí; respetada y poderosa, sino que se las ha apañado para mantener un anonimato espectacular y ha llegado a conocer compañeros de todo tipo y condición.
Ahora Actualmente, Cobalt se encuentra encerrado en su despacho de Abel leyendo y examinando informes que se “cuelan” gracias a sus contactos. Está investigando su próximo destino, y parece que ha encontrado algunas pistas muy interesantes para su próxima aventura…