CEREBRO D MUJR Y VAN
CEREBRO D MUJ Y D VAN ,
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el oigen de todo hombe, vaón o mue. En los mamífeos la natualeza está dispuesta de tal modo que uno o una tiene que veni necesaiamente de «uno y una». Esto es, la identidad biológica masculina o femenina es natual. Existe en los mamífeos una baea biológica inanqueable a la posibilidad de que nazca un hio o una hia de un pade sin una made, o de una made sin un pade. Todo cigoto, esultado de una fecundación, equiee paa desaollase que cada pa de sus comoso mas posean la do ble imponta, que sólo posee la suma de los comosomas de los gametos de los pogenitoes. Po ello, los tipos de epoducción asexual tales como clonación o patenogénesis no existen en los mamífeos. El embión, desde el comienw de su desaollo, tiene que i elimi nando la imponta comosómica heedada. Y al tiempo que se boa la imponta paental, se moldea su popia imponta en cada uno de los co mosomas de cada célula del oganismo en constucción. De esta ma las células, según el luga que ocupan, van desaollándose hasta intega se en teidos y óganos con su mofología y sus nciones popias. En lí neas geneales se puede deci que este poceso lo ealiza igual el oganis mo femenino que el masculino; peo no totalmente. Los mismos genes actúan de ma difeente según el sexo; paa un gupo amplio de genes existe una coelación ente sexo y cantidad de gen expesado. La dispai dad en la expesión genética explica po qué vaones y muees divegen en téminos de iesgo, p evalencia y gavedad de algunas enfemedades. Solamente en los gametos, duante su mación, se maca la totali dad de los paes de comosomas con un etiquetado totalmente masculino o totalmente femenino. Este hecho tiene su signicado biológico: los ga metos son las células de la tansmisión de la vida. No existen paa que viva el individuo que los poduce, sino paa tansmiti vida. Cada game to, espematowide y óvulo, usa las instucciones adecuadas duante su popia mación y maduación e iá macando su DNA según el patón femenino o masculino. Po tanto, no sólo son difeentes los comosomas X e El detemi nismo genético del sexo es más intenso. La imponta genética de los paes de comoso mas, y no sólo de los comoso mas sexuales, da a los ga metos la identidad como célula geneativa masculina o femenina, y les conee una nción singula especíca y complementaia en la tansmi sión de la vida. Existe además una heencia genética, la mitocondial, que pocede exclusivamente de la made. Las mitocondias contienen una única mo lécula de DNA con una seie de genes que, en su mayoía, codican po teínas del metabolismo enegético. Cada espematowide posee en su wna intemedia ente y mitocondias con una copia de DNA mitocon-
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dial cada una, mientas que el óvulo contiene apoximadamente . mitocondias. Las mitocondias del espematowide se incopoan al óvu lo con la fecundación. Seían capaces de expesa su inmación, peo se degadan selectivamente duante las pimeas etapas del desaollo em bionaio. La conclusión es evidente: las mitocondias de un individuo son siempe de oigen mateno. Con esto, paa cada uno, el apo te gené tico mateno es mayo que el pateno3• 1 .3. simetría ncional de los gmetos pateo mateo en la concepción
Paa que una fecundación tenga éxito, los gametos masculino y fe menino deben pode establece un idlogo molecur conceto, que les pemita activase mutuamente y constitui el nuevo individuo. La fecun dación sólo tiene luga cuando ambas células se encuentan en unas con diciones adecuadas de maduación4• Los gametos patenos, espematozoides, maduan en las vías efeen tes del tacto genital masculino y tienen que se capacitados ea del cuepo del vaón: ustamente el tacto genital femenino. Una vez eya culados eseel vaón, los espematozoides son aún incapaces de fecun da un óvulo; deben esidi cieto tiempo en el tacto genital femenino, paa que se poduzcan en ellos los cambios que eciben colectivamente el nombe de capacitación, puesto que dan al espematowide la capacidad de fecunda. Sólo una pequeña acción de los espematowides iniciales está capacitada y continúa su migación h aciael óvulo, y el camino está oientado po moléculas del tacto femenino. Los gametos matenos maduos, óvulos, son células inmóviles y de mayo tamaño que los espematowides; almacenan elementos nutitivos y moléculas que van a se usadas duante las pimeas etapas del de saollo embionaio. Duante el poceso de difeenciación del óvulo, se poduce un aumento consideable del númeo de mitocondias y de la acumulación de divesas sustancias, en pevisión de una posible fecunda ción e inicio del desaollo del embión. ste hecho hace que la pertenencia de unas personas a u n grupo humano por ejemplo, to dos los hombrs actuales al a n miliar que inicia el tip o humano Homo sa pie pueda ser determinado por el tipo del mitocondrial que se transmite sólo por ía femenina. n cierto sentido, s er hombre se puede denir como ser «nacido de mujer». EZ RATALLA, . e RABURU, . (2006): Los quice pmeos d de ua vi humaa 2. ª ed., unsa, Pamplona.
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El poceso de activación mutua de los gametos no es simultáneo sino secuencial; comienza con la activación del espematozoide, inducida po la inteacción especíca con una poteína de la cubieta del óvulo. La activación pemite al espematozoide peneta las cubietas del óvulo y se capaz de fusionase con la membana plasmática del mismo. Entonces el óvulo es activado e inducido a inicia una seie de cambios mológi cos y bioquímicos, que p emiten la seie de eventos sinconizados eque idos paa la concepción. La sinconización de los eventos se efectúa gacias al incemento en los niveles intacelulaes del ión calcio, en el inteio del óvulo en fecun dación. Este incemento se po duce ceca del sitio donde ha tenido luga la inteacción del espematozoide, y se extiende como una onda a tavés del citoplasma en unos pocos segundos. Duante las hoas que siguen a la fusión de óvulo y espematozoide, el mateial genético de cada uno de los pogenitoes se eestuctua y pepaa paa inicia la expesión especí ca de sus genes, contolada po los iones calcio. El óvulo posee un polo en el que se sitúa el mateial genético y, duante el poceso de fecundación, se va haciendo una célula más y más asimética, gacias a que se establece un nuevo polo difeente, que es el sitio po el que penetó el espematozoide. La mación de un plano en te ambos polos es esencial paa la polaidad del cigoto concebido, ya que de esta ma se establecen sus ees dosovental y cabeza-cola duante el desaollo embionaio tempano. La constucción del oganismo del hio está oientada en el espacio po la asimetía ceada en el óvulo po efecto de la entada del espematozoide. Cabe ama, miando a la dinámica de la fecundación, que en este poceso la asimetía ncional de las células geminales masculinas y fe meninas, pemite una plena complementaiedad en la tansmisión de la vida: un «desde» el vaón a un «en» la mue; y un «desde» el espemato zoide a un «en» el ovulo. . L GENES DE LA SEXUALIDAD SENTES EN LOS CROMOSOMAS X E ERMITEN EL DESARROLLO DIFENCIADO DE LAS GÓNADAS ESECÍFIS DE LA MUJER Y DEL VARÓN
El comosoma Y posee la inmación genética especíca, de la que caece el comosoma X (gua ), que dicta que el embión se desaolle a cuepo masculino. Es el gen llamado SY localizado en la egión del bazo coto del comosoma que tiene inmación paa un cto de teminante del testículo, el TD Este cto hace que, en la séptima se-
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Figura 1 : Diferencias genéicas enre célu las con doación genéica
3 S
P
2
P
MS
PR
osco S
D4
X
"
y Los cromosomas sexuales tienen regiones seuoautosmicas (PAR) especificas del X (NPX) y específicas del cromosoma Y (MSY), cuyos genes no se recombinan los de uno con los del otro. Las diferencias sexuales entre organismos XX y XY se deben a la dife rencia de dosis de los genes en NPX y los genes presentes en MSY. Y también a que las mujeres, pero no los varones, heredan la impronta paterna en el cromosoma X (Xp), he redado del padre. Las diferencias sexuales se crean además debido a que el organismo femenino es un mosaico de células que expresan diferentes copias de los genes por un uso preferencial de uno de los cromosomas X, mientras que los varones no presentan mosaicismo celular, ya que sólo tienen u n cromosoma X, necesariamente materno, Xm . En la parte inferior de la figu ra se mu estra la posición del gen PC DH X presente en el cro mosoma X y el gen PCDHY, presente en el cromosoma Y. Este gen codifica una proteína, la caherina que estable en el cerebro conexiones entre las neurona s. Cada uno d e es tos genes está regulado a través de una región promotora diferente que liga hormonas sexuales.
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mana de gestación, se inicie el poceso de masculinización del embión humano, activando en cascada los genes que causan la tansmación de las gónadas embionaias indifeenciadas en testículos fetales. En la pate infeio de la gua se muesta una peculiaidad de la composición genética de los comosomas sexuales humanos: un mismo gen PCDH, está pesente en el comosoma X (PCDHX) y en el como soma Y (PCDHY). Este gen codica una poteína, la cah erina, que esta blece en el ceebo conexiones ente las neuonas y la copia pesente en cada uno de los comosomas X o Y, está egulada a tavés de una egión pomotoa difeente. Es deci, se expesa obedeciendo a señales difeentes. Las señales son homonas sexuales y po esto, el gen se expesa en momen tos difeentes de la constucción del ceebo de mue o de vaón, duante el desaollo embionaio, en nción de las concentaciones homonales especícas. Es una de las bases genéticas más impotantes del dimosmo sexual del ceebo humano. El testículo fetal es una glándula muy activa que poduce homonas masculinas, la testosteona y la homona antimülleiana, y ma los ga metos masculinos (gua ). La testosteona es un esteoide andogénico que peneta po disión en las células y puede unise a un ecepto del citoplasma que le taslada al núcleo y en él egula la expesión de los ge nes. El ecepto de la testosteona está codicado po el gen (Tfm) situado en el comosoma X. La homona antimülleiana es una poteína codi cada po un gen localizado en el extemo del bazo coto del comosoma . Su acción consiste en detene los conductos de Mülle impidiendo que se desaollen gónadas femeninas, que deivan de ellos. Po tanto, paa la difeenciación masculina hacen lta tanto el comosoma Y como el X y la colaboación de otos comosomas. Los genes del comosoma Y ponen en macha el pogama de la masculinidad en el momento ade cuado del desaollo del embión vaón, haciendo posible que los conduc tos de Wol se co nvietan en el apaato genital masculino. Po ota pate la ausencia del comosoma Y es necesaia, peo no su ciente, paa el poceso de feminización gonadal del embión. Duante un cieto tiempo, se supuso que la difeenciación de las glándulas me ninas no está deteminada genéticamente, sino que la difeenciación ha cia el fenotipo femenino del cigoto ea la ma espontánea, mientas que el desaollo masculino vendía a se como una coección de ésta, debida a las instucciones escitas en los genes del comosoma Sin em bago, actualmente se conoce la existencia de una egión del comosoma X, DSS, que voece el desaollo de los ovaios, y con ello la síntesis de las homonas sexuales femeninas, e inhibe el desaollo de los testículos. Esta zona contiene aquellos genes que, dependiendo de la dosis (doble en
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el embión mue po tene dos comosomas X), diigen la síntesis de los ctoes de la feminización, y, po tanto, la mación de los gametos fe meninos y del cuepo femenino en sus deteminaciones especícas. Así pues, la biología humana no apoya las intepetaciones aceca del signicado de la feminidad como «ausencia pasiva de masculinidad». Cie tamente, los genes del comosoma Y ponen en macha el pogama de la masculinidad, y su eecución impide que el pogama basal de las pime as etapas del desaollo embionaio continúe con una difeenciación fe menina. Ahoa bien, la difeenciación especíca femenina exige las dosis de expesión de genes popios de la feminidad. Aunque la gónada sea estuctualmente indifeenciada al inicio del de saollo fetal (en amb os sexos tiene conductos de Wol y de Mülle), existe difeencia en las células que las constituyen, las llamadas células geminales, que tienen, según sean de un oganismo masculino o femenino, un patón de mación difeente. Desde estas células se maán los gametos, cuya maduación se ealiza a pati de la pubetad, diigidos po las homonas. Los gametos femeninos maduan siguiendo ciclos de cambios de concentaciones homonales; y los masculinos de ma continua. Esta asimetía ente una siología cíclica en la hemba y la lineal del macho, tiene signicado biológico con elación al difeente papel que uegan am bos en la tansmisión de la vida. Y en el hombe constituye la base bioló gica de un modo de se, de pecibi la ealidad, de habita el mundo, etc. , diveso y popio de la pesonalidad masculina o de la pesonalidad me nina, como se tataá después. 2.1. ecto de algunas alteraciones genéticas cromosómicas en la determinión sual
La mutación de algunos genes de los pogamas de la deteminación sexual poduce síndomes de malmación del fenotipo o anomalías tersexo 5. Los genes que altean la nomal constucción de las gónadas pue den esta localizados en los comosomas sexuales, o en otos. Estos genes codican poteínas que pueden se eguladoas, homonas, eceptoes homonales, o poteínas que diigen la síntesis y metabolismo de las ho monas sexuales. Po eemplo (gua ), la alteación del gen SY situado en la e gión del bazo pequeño del comosoma Y, y que codica un cto 5 AAUGLIN, . , y NAOE, . . (2004): «ex dtrmination and di rntiation», Eng ] Med 350, pp 367-378.
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Figura 2: os genes de la deerminación sexual dirigen la formación de las gónadas masculinas o femeninas a pa rir de una esrucura feal in diferenciada
(�;: 3-HSD
Pseudohermafrod1tsmo femenno
\
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(XX)
Exceso e anrogenos
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46 X)
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odtismo
Los genes específicos de la inducción del programa de la masculinidad o la feminidad co difican proeínas reguladoras. Por la acción de esos facores reguladores se inicia, des de una gónada indiferenciada, la consrucción de los esículos feales o de los ovarios fe ales, de acuerdo con el sexo cromosómico (XX o XY) del embrión. Cada gónada feal es capaz de sineizar las hormonas masculinas o femeninas correspondienes y con ello se consruye el raco genial diferenciado del varón o la mujer. Una muación en los genes de la deerminación sexual da lugar a la consrucción anormal de gónadas con fenoipo intersexo (modificada de MacLaughlin M. D . , 2004).
egulado de la expesión de otos genes, causa una falta de desaollo go nadal. La alteación o ausencia de oto gen, A, que codica el ecepto de las homonas masculinas, poduce un síndome de insensibilidad a andógenos, que se taduce en un pseudo-hemaoditismo, en que las gó nadas son incompletas de los dos sexos. La alteación del gen C , si tuado en el comosoma O genea un pseudo-hemaoditismo en vaones po falta de ncionalidad de la enzima -hidoxilasa del metabolismo homonal. La alteación en el comosoma del gen , que codica la -hidoxilasa, poduce pseudo-hemaoditismo femenino. En otos casos las alteaciones son comosó micas. Así, la ausencia de un comosoma X ona mujees (O con el síndome de Tune 6 • Men NG, R. F, y arr, . H . (1 966) : «he anatomy and histology of X human embryos and fetuses», Anat Rec., 1 5 5 , pp 369-384.
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tas que la taslocación del SY desde el comosoma Y a un X, oigina hemaoditas con genoma X y mación de gónadas tanto femeninas como masculinas7• . L CROMOSOMA X HMANO TIENE NA DENSIDAD EXCECIONAL DE GENES QE SON ESENCIALES AA EL DESARROLLO NORMAL DEL CEREBRO
El hecho de que el comosoma X contenga una gan, e inusual, den sidad de genes implicados en la constucción del ceebo, plantea, una vez más, la idea de que la expesión de los genes del comosoma X con tibuye de ma deteminante al dimosmo ceebal. La mayo pate de los estudios han centado la atención en el clásico «dogma» de la neu obiología aceca del papel esencial que desempeñan las homonas en la oganización difeencial del ceebo masculino y femenino. Cietamente las homonas sintetizadas en el ceebo a concentaciones difeentes en la vida postnatal del niño o de la niña, causan la difeenciación de las áeas que egulan la conducta sexual, localizadas en el hipocampo. Ahoa bien la síntesis de las homonas y de sus eceptoes en el ceebo femenino y masculino depende, en denitiva, de la pesencia en las células ceebales del pa de comosomas X o , y su nomal contenido genético ª. Los comosomas X e Y humanos son asiméticos especto al conteni do en los genes que dictan el desaollo ceebal. Genealmente las célu las del cuepo femenino, con dos comosomas X, inactivan uno de ellos; de esta ma los divesos ó ganos y tejidos que constituyen el oga nismo femenino y masculino se constuyen a pati de la misma dosis de expesión de genes. Sin embago, en el ceebo femenino divesos genes del comosoma X escapan a la inactivación, y se expesan a pati de los dos comosomas, del activo y del inactivado; es deci, en doble dosis es pecto del ceebo masculino9• Po ota pate, el ceebo es un mosaico de células según se expesen unas u otas de las copias de genes ligados a la inactivación de uno de los dos comosomas X, el pateno o el mateno. 7 ERKOVITZ, . .; ECNER, P .; ARCANTONIO, . ., et al. (1992}: «he role of he sx-determnng rgon of he chromosome ( n he etology of 46, true hermaphrodtsm», Hum Geet 88, pp. 41 1-4 16. 8 . las excelentes rvsons: RNOLD, P (2004}: «x chromosomes and bran gende>, Na & Nsece 5, pp. 1-8; w P X, . ; RISAM, ; EN, X.; KIM, -H., e TO, . (2004); «nrvw: x hromosomes and ran exual e rentaton», 145 , pp. 1 057-1062. 9 ARREL, .; TTTLE, et a (1999}: « rst-generaton X-nactvaton pro le of he human X chrmosome», Pc. Nat. Aca. Sci. U, . 96, pp. 14.440-14.444.
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Esto oigina una vaiabilidad mayo (mayo númeo de alelos, o copias distintas del mismo gen, paa cada gen) en la constitución genética de la que se pate paa constui el ceebo femenino. Es peciso insisti en el hecho de que la inteligencia no depende diec tamente de los genes. No existe el gen de la inteligencia, como no existe el gen de la agesividad, o de la tenua. La constitución del ceebo humano, y en mayo gado que la mación de cualquie oto ógano, es un poceso epigenético es deci, los cambios se genean con el poceso mismo, en que los genes existentes se expesan de ma egulada con enome peci sión, a lo lago del tiempo y del espacio ceebal, diigidos po señales que apaecen en los tiempos y lugaes adecuados. Los genes decisivos paa las aptitudes mentales se acumulan en el comosoma X que pota tanto el va ón como la mue. Se explica así el hecho de que el númeo de discapaci tados mentales es mucho mayo ente los vaones, como también es más elevado el númeo de los vaones que tienen un valo del coeciente intelec tual (CI) más alto que el de la media 10• Po el contaio, las muees tienen valoes de CI más homogéneos, con un pocentae meno en los extemos de mínimos o mximos. Esto es debido a que potan dos comosomas X di feentes y, po tanto, se amotiguan los extemos; mientas que los vaones son más vulneables a un cambio en un gen ceebal del comosoma X. Se considea que, en la evolución humana, la selección natual, en alianza con la selección cultual, dio luga a que las bases genéticas paa la inteligencia humana se hayan ido incementando. Es posible que en los inicios de la humanidad, un vaón bien dotado en su comosoma X de ge nes del desaollo ceebal, estuviea meo pedispuesto a un estilo de vida más cultual y técnico, que le pemitiía vivi más tiempo. Ello unido a que pudiea esulta más atactivo paa las muees, de ma que había podido dea más descendientes. De esta ma, el tipo de comosoma X del vaón, que pedispone a un buen ceebo básico, pasaía al acevo ge nético de sus hias y así, leos de pedese, se había ido pesentando con más ecuencia en el genoma de la humanidad. 3.1. n gen del cromosoma X especíco para la construcción del cebro humno, ha pasado cromosoma Y en la elución del homb
En la línea evolutiva de los gandes simios, tuvo luga una etapa en la que se meoaon las condiciones geneales paa un modo de vida pau HAMEISTER, H. (2004): «enétca de la ntelgenca», Mete cerebro 8, pp 46-47.
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rada po un buen ceebo 1 1 • Después, con la sepaación del linaje que oiginaía el chimpancé 12, se eon dando una seie de eventos de cam bio en el contenido inmativo, que condujeon a los asgos mofológi cos, anatómicos y ncionales especícos del géneo Hoo, del que sólo existimos los omosapins. El cambio fenotípico más espectacula e la modicación de la ex pesión de genes que egulan la constucción del ceebo, esencialmente de aquellos que actúan duante el desaollo embionaio. Esto pemite que se inicie la estuctuación de áeas ceebales capaces de po cesa es pecícamente la inmación13• Los cambios en la expesión de los genes están causados po cambios en la estuctua de los comosomas. La eo denación de comosomas es un poceso que ha jugado un papel esencial en la evolución de los pimates y, en paticula, los cambios en la eode nación de los comosomas sexuales constituyen un mecanismo univesal en la evolución biológica. Pues bien, el acontecimiento cítico que condujo al establecimiento de las mayoes difeencias ente el ceebo del hombe y el de los pima tes, y que constituyó el evento pimaio de la sepaación de omoa pa ti de individuos ust alopith ecus, está asociado con los cambios en la e oganización de los comosomas sexuales, X e Y. Nos hemos efeido antes a que sólo en la especie humana existe una copia en cada comoso ma del gen PCDH. El análisis de la evolución de este gen ha pemitido conoce que en la línea Hoo se podujo un paso de inmación gené tica del X al Y. La egión del X tansfeida al Y contiene genes candidatos a se la base molecula de la apaición de la latealización de los hemisfe ios ceebales en que se apoyan los asgos cognitivos14• Uno de ellos es pecisamente el PCDH que codica una molécula de adhesión que está implicada en las inteacciones especícas ente neuonas y que se expesa en el ceebo. Po tene las dos mas del gen, PCDHX y PCDHY15, en su egión eguladoa una secuencia que es econocida especícamente po 1 1 ARKI, . (2004) : «How to make an ape bran», Na Genic 36, pp. 1 .034 -1 .036. 12 «he hmpanzee equencng and nalyss onsorum. nal sequence of he chmpanzee genome and comparson wth he human genome», Natu 437, pp. 69-87 (200 5) ; «he nternaonal Hap ap onsorum. haplotype map of he human geno me», Nature, 437, pp. 1 .299- 1 .320 (2005) . 1 3 . EZ RATALLA, . (2007): La dinmica de olución humana M con menos, unsa, Pamplona. 1 4 TEELE, . (1998): «erebral asymmetry, cognve lateraly, and human evolu on», Current Psycho of coiton 17, pp. 1202-1214; ROW, . (2000): Did Homo sapiens speciate on the chomosome?, Psyc.0 0 . 1 1 .0 0 1 .language-sex-chromosomes. .crow. 1 5 LANCO, P a (2000): «onservaon of PHX n mammals; eprsson of human genes prdomnanly n bran Mammalian Genom 1 1, pp. 906-91 4.
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ctoes homonales sexuales (gua ), al menos pacialmente, causan el dimosmo sexual del ceebo humano, como se comentó anteiomente. En esumen, los genes localizados en los comosomas sexuales in uyen en el dimosmo sexual duante el desaollo del ceebo po dos vías: causando difeencias en la sececión gonadal y actuando diecta y especícamente en las células X o X Este peiodo constituye la pime a ventana de tiempo en la o ganización copoal y constucción del cee bo de ma difeencial. . L A IDENTIDAD BIOLÓGI SEXUADA TIENE FUNDAMENTALMENTE BASE GENÉTI
El sexo de un se humano es la expesión nal de la acción de nume osos y divesos componentes que actúan coodinados en el tiempo. Tiene siempe un compo nente genético y comosómico, que diige el estableci miento de las gónadas. Estas deteminan el componente genital, somático, y ealiza la difeenciación sexual de la estuctua y nciones ceebales 1 6 • Finalmente se intega el compo nente psicológico. La identidad sexual es una pedisposición potenciada po las homo nas sexuales geneadas en el oganismo en mación, mediante la expe sión de los genes especícos de la feminidad o masculinidad. Se ha suge ido que existe un hipotálamo de vaón y oto de muje, como se tataá más adelante. Cietamente, en los animales algunos núcleos neviosos pesentan un tamaño difeente en nción de su petenencia a un macho o una hemba. La homeostasis del oganismo está contolada ndamen talmente po este ganglio cental del sistema nevioso autónomo. El hi potálamo ma pate del sistema límbico y coodina la expesión copoal de los estados emocionales; es un cento coodinado de espuestas tanto somáticas como autónomas o vegetativas. Po ello es el pincipal cento egulado de la conducta sexual. Las atas macho o hemba no se inteesan po igual po un entono desconocido. En la hemba el compotamiento está diigido po los nive les homonales cíclicos de ma dependiente de la situación homonal. Si las hembas están en la fase del ciclo de estógenos b ajos, pedispuestas paa la concepción, exploan con cuiosidad petinaz, a difeencia de los machos. Si no están en esa se se compotan igual que los machos. Este tipo de «egulación homonal del compotamiento» tiene sentido bioló EGOV, ., y UILMN, (1 996) : « erebro, hormonas y orentacón sexual», en El cerebro ntimo. Ensayos sob neuciencia, d. . ora, r, arcelona, p 132.
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gico: enconta paeja. También el instinto exploado de las mades oe doas se da homonalmente egulado, ya que los estógenos son bajos después del pato. En el hombe, las conexiones ecípocas del hipotálamo y el sistema límbico con la coteza ceebal, povocan que los estados emocionales se hagan conscientes, geneando los sentimientos, y pemiten que el com potamiento instintivo sea tansmado en conducta humana. Aunque la difeenciación conductual humana es poco conocida aún, es clao que el pime componente de sentise vaón o muje se establece en los niños a los dos años y medio. A esta edad, la identidad sexual está sepaada de la sexualidad, que se maniesta más tade. Aunque se pensaba que la identidad sexual se deivaba psicológicamente, a tavés de pistas sociales ecibidas po el niño según la apaiencia de sus óganos genitales exte nos, van apaeciendo estudios que modican esa hipótesis. Un estudio ealizado en 17, ha analizado a jóvenes genética mente vaones y nacidos con un defecto complejo y poco ecuente, que se asocia a gave insuciencia fálica. Las alteaciones genéticas hacen de ciente la actividad de algunas enzimas y conducen a malmaciones du ante el desaollo embionaio; estas alteaciones conllevan que los e cién nacidos vaones, paezcan niñas; y en la mayo pate de los casos, se les cíe como niñas. Más adelante suen una viilización sevea duante la pubetad, que hace que muchos de ellos teminen po adopta una identidad masculina. El objetivo de este estudio ea compob a la idonei dad, defendida duante años, de asignales al nace al sexo femenino paa ayudales así a supea el p oblema de la caencia de ó ganos mascu linos. analiza etospectivamente el tatamiento que han ecibido los niños nacidos con estados intersexo, el tabajo ha supuesto una opotuni dad de valoa la inuencia penatal de los andógenos en el desaollo sexual de los sujetos genéticamente vaones. Del gupo de muchachos es tudiados, de ente y años, catoce habían sido asignados en el mo mento de su nacimiento al sexo femenino de ma social, legal y quiú gica; los pades de los dos estantes se negaon a hacelo y los educaon como vaones. Paa evalua exhaustivamente el desaollo de la nción e identidad sexual de estos menoes, los investigadoes elaboaon un am plio cuestionaio. El análisis de las espuestas demostó que ocho de los catoce sujetos, asignados al sexo femenino, se sentían vaones duante el 1 7 EINER, ., y ERART, . P (2004): «scorant sexual dentty n soe ge netc males wth cloacal trphy assgned to female sx at brth», Eg Med. 350, pp. 333-341 .
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tiempo de estudio, que osciló ente los y los meses; mientas que los dos educados como vaones continuaban declaándose como tales. Cuando se les pidió que se clasicaan según su identidad sexual declaada, cinco sujetos explicaon que estaban viviendo como mujees; tes amaon que vivían con una identidad sexual poco claa, aunque de ellos dos se habían declaado vaones en el cuestionaio; y los otos o cho vivían como vao nes, seis de los cuales se volvieon a asigna el sexo masculino. Los su jetos tenían o bien modeados o bien macados inteeses y actitudes de las consideadas típicas del sexo masculino. Otos estudios1 8 se han centado en chicas con la malmación in tersexo, conocida como síndome de hipeplasia adenal congénita (CAH); po esta causa en los comienzos del desaollo fetal suen exposición a un exceso de andógenos. Esto pemite analiza el posible efecto sobe la identidad sexual de las homonas masculinas en la época penatal, a la vez, que analiza la inuencia de la apaiencia física de los genitales, que no coesponde con el sexo genético. Las chicas con CAH eon similaes a las chicas contol; su identidad sexual no se elaciona con la viilización de sus genitales, si son tatadas de pequeñas y educadas como niñas. No obstante, la contovesia aceca del tatamiento de estos niños de condi ción intersexo, es deci con discodancia ente difeenciación sexuada y apaiencia física, deja mucho de esta esuelta. po ota pate, se con ma una vez más la complejidad del desaollo pesonal de la identidad sexual. Los datos paecen indica que, aún en el caso de malmaciones du ante el desaollo gonadal, el sexo viene deteminado po los genes de la feminidad o masculinidad. Son estos los que ponen en macha la po ducción difeencial de las homonas sexuales en la vida penatal, a las do sis que coesponden a cada sexo; y así la impegnación sexual del ceebo se poduce a consecuencia de las señales homonales. 4.1. Genes orientación u
Una cuestión más que debatida es la de qué subyace a la difeente tendencia sexual en vaones y mujees hacia las pesonas del sexo opuesto. 1 8 ERENBAUM, . ., y AILEY, . . (2003}: «cts on ndr dntty of Prna tal ndrogns and ental pparanc: vdnc from rls wth ongntal drnal Hy prplasa», in Endoino Meab 88, pp. 1 . 1 02-1 10 ; ERENBAUM, . .; R, . .; K, . ., y ESNIK, . . (2004}: «Psychologcal adustmnt n chldrn and aduls wth congntal adrnal hyprplasa», Pediat 144, pp. 741 -746.
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Se siguen buscando datos que la contadigan, y que puedan, po el con taio, apoya la idea de que la oientación sexual hacia pesonas del mis mo sexo es opcional. La hipótesis más sólida, po ahoa, popone que son los genes de los comosomas sexuales los que contolan de ma diecta la deteminación sexual y que, al menos en p ate, pedisponen la tenden cia sexual de cada sexo 19• III. SIGNIFIDO NATURAL DE DIFEENCIACIÓN SUAL En los mamífeos, «se macho señala Choza20 quiee deci tene millones de micogametos, pode epoducise múltiplemente en múlti ples hembas. Los que fecundan a más hembas son los que dejan más descendencia, y esa es la azón de la competencia ente los machos ... Se hemba quiee deci acumula enegía en el óvulo paa la constitución de un nuevo oganismo (tanto macho como hemba), y la que más y mejo lo hace es la que deja más descendencia. Esa es la azón paa la elección po pate de la hemba de un macho de ente los divesos posibles». La única ma de «amase» los individuos es el éxito en la epo ducción. La selección natual deja paso a los que lo consiguen y elimina a los que no. El compotamiento sexual mide, po tanto, el mantenimiento de la especie. El instinto sexual, como todo instinto, media el conocimien to de la nción epoductoa: acopla la espuesta eclamo sico al tiem po de fetilidad de la hemba. Es la ma de sabe cuándo, cómo, y en qué cuantía, la especie necesita de sus descendientes paa mantenese. La selección natual ha hecho posible una evolución difeente de los dos comosomas sexuales. El comosoma X se ha consevado con muy pocas vaiaciones mientas el comosoma Y es el que más cambios ha su ido a lo lago de la evolución de los mamífeos21• El comosoma X se ha petechado de genes impotantes paa la vida, mientas el Y ha pedi do inmación y mantiene solamente, en las difeentes especies, los ge nes del pogama de la masculinidad. El compotamiento sexual del macho se caacteiza po loga deja sus gametos, ea de sí, en múltiples hembas; la semilla ha de sali ese 1 9 l fenómeno de la orentacón sexual es muy compleo y rqur un tratamento es pecco de los ctores que predsponen la orentacón hom osexual. . la extensa rvsón: AIG, . ; HARER, ., y AT, . . (2004) : «he genetc bass r sx dernces n hu man behavour: ole of te sx chrmosomes», Anna ofHuman Genc 68, pp. 269-284. 2° O Z, . (1991 ): Antpogía de suali Instituto de Cienci para Fami a, d. alp, pp. 47-48. 21 n análss de este proceso puede hallarse en EZ ATAL, . (2007), o. c.
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su oganismo y alcanza la hemba en una competencia que es indepen diente de la cópula. Paa la hemba el éxito está en ella: en el númeo y la calidad de los óvulos que p oduzca en ella y en la capacidad de aceta en la elección del macho. El se humano, po su caácte pesonal, «aoja» las ataduas del ins tinto, que ata el compotamiento al dictado de los genes. La manifestación especíca del amo pesonal sexuado no esta acoplada al ciclo biológico de fetilidad femenina, ni dictada po él. Es una elección mutua intepe sonal, que no esta pautada po las leyes de la selección natual. Po ello, un pime modo de conoce la difeente apetua del vaón y la muje como pesonas, es centa la atención en el modo de paticipa en la po ceación. Esto es, en qué dice aceca de la pesona la patenidad o la ma tenidad b iológica. Las ciencias de la vida apotan un conocimiento valioso aceca de la difeencia de la apotación matena y patena en la concepción y de saollo del hijo, y en la implicación de los cuepos de ambos. La diec ción ese y del donase del uno y de la ota dene lo especíco de la masculinidad y feminidad en la tansmisión pesonal de la vida humana. En palabas de Pedo Juan Viladich, «El vaón es en cieto sentido «don» de su semilla patena y la muje «aceptación econocedoa» en cuanto made del se que conjuntamente han concebido, no obstante dento de su seno, que es otundamente una colosal ma de se "acogid'»22• Tan colosal ma de acogida, qu e su seno es habitación paa huma niza los afectos del hijo mientas se va desaollando en ella. La gesta ción, en el cuepo pesonal de la made del hijo engendado en ella, es una unidad de sentido biológico y de sentido pesonal. La biología hu mana apota un aspecto pondamente signicativo del caácte peso nal de la matenidad. El cuepo mateno es la pimea habición que no suple un hipotético úteo aticial. El encuento inicial con la made es humano; da el teminado afectivo, que le pemitile asimila e incopoa las estuctuas males del ambiente a las estuctuas oganizadas po la heencia, y le dotan de una capacidad de adaptación a su mundo pecu lia. Una «udimbe» en teminología de o Caballo, que le pe mite la vida pesonal, biogáca, ceativa y cultual. La ciencia muesta la inuencia de la situación pesonal y los hábitos de la made en la cons tucción o «cableado» del ceebo del hijo que gesta. La humanización pimodial del hijo que la made lleva en su se no, excede la biología de la gestación. Hace del seno mateno u n ámbito el pimeo de elacio22 IDRIC, P (2000): Lapabra de muer, ocumentos , 2 8, pp 37-38.
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nes pesonales. También en este sentido, todo hombe puede se denido como nacido de muje. El cuepo mateno no solo concibe y gesta el hijo, sino que guada memoia de él después de su nacimiento. En ella ocue que «cada hijo, cuyo cuepo la made acoge y vive de ella, deja huella en ella: algunas cé lulas jovencísimas del hijo ... pasan al cuepo de la made a tavés de la ciculación sanguínea que compaten ambos. Dejan memoia de la vida compatida con el hijo y, a tavés de él, también del pade»23. Desde un a descipción fenomenológica, apaece la difeencia peso nal en la taea de da vida a un hombe. «El vaón al dase sale e sí mis mo. Saliendo de él se entega a la muje y se queda el. La muje se da peo sin sali de ella. Es apetua paa pode acoge ella. Su modo de dase es distinto al del vaón y a la vez complementaio . .. La muje acoge el uto de la apotación de los dos y lo guada hasta que gemine y se de saolle. Todo este poceso, aunque él es también potagonista, se ealiza ea del vaón. Posteiomente la muje es apetua paa da a luz un se que tendá vida popia24. Desde la intuición de los poetas, Kaol Wojtyla ha descito así la ma tenidad, poniendo en boca de la made unas palabas diigidas al hijo: «No te vayas. Y si te vas, ecueda que pemaneces en mí. E n mí pema necen todos los que se van. Y todos los que van de paso, hallan en mí un sitio suyo; no una fugaz paada, sino un luga estable. En mí vive un amo más ete que la soledad ( .. .) No soy la luz de aquellos a quienes ilumino; soy más bien la somba en que eposan. Somba debe se una made paa sus hijos. El pade sabe que está en ellos : quiee esta en ellos y en ellos se ealiza. Yo, en cambio, no sé si estoy en ellos; sólo les sien to» 25. La elación de la made con el hijo se extiende a la elación con to das las demás pesonas. La condición sexuada del cuepo humano, a difeencia del oganis mo animal, contiene una especial capacidad de manifesta el se pesonal y de expesa su capacidad más excelente, que es ama. Vaón y muje sa23 EZ RATALL, . (20 07) : Epmer viae de vi, d. Palabra, oleccón de olsllo , adrd. 24 ASTILLA RTZAR, . (1996): Peona femenina peona mina, ocumentos d nsttuto de encas para la amla, 22: «escubrr la condcón sexuada dentro de la persona sólo se puede hacer con prposcones, que son los térmnos gramatcales que des crben las racones. varón le correspondería la prposcón dde, pues parte de sí para darse a los demás. la muer le correspondería la preposcón en: pues se abre dando acog da en sí msma. a persona varón se podría descrbr, entonces con ser-con-desde, o coexs tenca-desde, y a la muer como ser-con-en, o coexstenca-en». 2 5 OJ, . (1990): pndor de paternid, d. , pp. 17 1- 172. tado en ASTILL, o .
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len d e sí mismos y acogen al oto y a los otos de mas peculiaes y po pias, qu e maniestan su difeente condición sexuada pesonal. . A ESEFICIDAD ERSONAL DEL VARÓN Y MUJER Y DE IGUALDAD
Cietamente, como se viene mostando, el signicado humano del dimosmo vaón-muje dice elación diecta a la difeencia natual de la patenidad y la matenidad humanas. Peo ¿se agota ahí? Paece obvio que no: la feminidad y la masculinidad son dos modos de se afectado, de poyecta, de tene posibilidades y de compende el mundo y com pendese a sí mismo. La búsqueda de espuesta al poqué de esos mo dos, nos emite a los oígenes mismos de la humanidad. Según apaece en los mitos clásicos, los vaones y las mujees se oi ginan po patición asimética de un nte vivo. Esto es lo especíco de la feminidad y masculinidad, la complementaiedad asimética data del oi gen de los sexos y hace así de cada uno de ellos una mitad incompleta. Sin embago, paa la tadición judeo cistiana, el oigen de la huma nidad tiene su inicio en la apaición de un vaón y una muje, cada uno con nombe popio, y que juntos eciben el encago de constitui la milia humana, y de conoce y domina la tiea y todo lo que contiene. Génesis (vesículos -) naa la ceación po pate de Dios de la pi mea muje y del pime hombe, ambos pesonas titulaes de un cuepo de vaón y de un cuepo de muje especíco, dento de la común natua leza humana. Es obvio que un elato como el del Génesis tiene una eza muy difeente según sean las ceencias de quien lo lee. Sin embago, no cabe duda de que paa todos contiene una iqueza intelectual ponda2 6 • Po demos admiti que lo que Dios dice ahí sobe cómo donó el se a Adán y qué le conó, y como le donó el se a Eva y qué le conó, lo dice espec to al oigen y la especicidad de cada vaón y cada muje. O po demos no 2
l lenguae smbólco que se usa en este texto es el únco capaz de lustrar las cues tones dcles que carecen, al menos en esa época, de unos conceptos ontológcos satsc toros. a realdad, la exstenca de los hombres como varnes y como mueres en este caso, debe tener necesaramente una congruenca y una correlacón con las manfestacones a las que se accede por el conocmento boló gco y por el ontológco, el cultural y el relgoso. l acceso a cada uno de os prsenta una certa autonomía, y a su vez una certa dependenca de cada nvel con respecto a los demás. o se pretende aquí buscar concdencas, sno lu mnar el conocmento de cada nvel con el conocmento que se aporta desde los otros n veles.
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admitilo. En cualquiea de los dos casos, ese texto abe una pespectiva impotante paa nuesta autocompensión como pesonas sexuadas. En ese texto, Adán es un individuo humano solitaio, cuyo nombe es el nombe hebeo de la especie Am equivale a hombre. Y po que «no es bueno que el hombe esté solo», Dios hizo cae un sopo so be él y de él mismo sacó oto se humano igual y lo colocó ente a él. Al despeta, el que antes había estado solo, se encuenta acompañado y exulta con un gito de admiación y de gozo po enconta ayu seme jante a él, «cane de mi cane y hueso de mis huesos». Y Eva le acoge sin media palaba. Vaón y muje tienen un modo distinto de abise y de dase: el va ón se abe hacia ea mientas que la muje se abe hacia dento, aco giendo. En este sentido, el modo de pocea, aunque indudablemente no es el único ni el más impotante modo de ama, pesenta de una ma nea plástica esta ealidad. Hay, po tanto, en el hombe un dimosmo esncial y po ello hay un modo, una ma femenina y ota masculina, de ealiza la taea de vivi y habita el mundo. Son dos subjetividades idénticas cuya difeencia viene deteminada tan solo po la elación de oigen. Ahí adicaía la pincipal difeencia ente vaón y muje, en se dos tipos de pesonas distintas, que se aben ente sí de un modo espec tivo difeente y complementaio. Pesona no signica lo mismo aplicado al vaón que aplicado a la muje. Hay una difeencia ente ellos en el da y en el ecibi; en el modo de sabe de sí y de dispone de sí, que es distinto. Esto es: el caácte po pio de tal asimetía es de oigen y no sólo nción de la matenidad y pa tenidad biológicas. . VENTUANDO UNA HIÓTESIS DESDE BIOLOG ACERC DE AARICIÓN TÁ DEL RIMER «É» Y IMEA «E» Todo se humano está constituido po el cuepo como «Él» o «Ella». Ellos en su igualdad y su difeencia son el oigen de la humanidad, de la histoia y de la cultua. Se entiende el inteés, pácticamente univesal, po conoce en qué consiste una difeencia que no ompe la igualdad; en cómo es un ceebo de vaón y cómo un ceebo de muje, en la igualdad de un ógano que es pesupuesto paa las manifestaciones de la inteligen cia y la libe voluntad. Especialmente se entiende el inteés po pecisa qué hay de pemanente y qué de cultual en la condición sexuada. Duante demasiado tiempo la heencia cultual ha tansmitido el lenguaje simbólico de este texto del Génesis como una descipción tem-
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poal y no como lo que es: una descipción de la esencia de la feminidad y la masculinidad. En efecto, que Eva apaezca sacada de Adán («la cos tilla de Adán«) ha sido intepetado, no pocas veces, como señal de la su peioidad del vaón sobe la muje. Ahoa bien, que Eva poceda de Adán no signica que es hija de Adán, sino esposa. La ayuda adecuada. Adán de nomina a Eva como oto «yo» en la humanidad común. Cada uno es pesona y la difeencia ente ellos posee el mismo ango ontológico. La difeencia no ompe la igualdad. ¿Puede la biología actual oece un escenaio paa la apaición i multdnea de la igualdad y la difeencia? Podemos ama que la wología no, peo sí la biología humana. El escenaio en el que se pudo desaolla este evento único lo com ponen tes escenas. Dos de ellas se esquematizan en la gua . La pi mea debe da azón de que una especie pueda sugi de ota po poce sos de eodenación comosómica. La segunda debe da azón de que se constituyan dos individuos con la misma dotación genética y se sin em bago difeente la composición del pa de comosomas sexuales; uno y una X La tecea, debe explica que la humanidad no se haya consti tuido como especie, sino milia humana, es deci desde una única pae ja. También en esta tecea escena la biología humana tiene algo que de c. A) Una cunación incluye un evento evolutivo. La fusión de los ga metos de un macho y una hemba austalopitecina es seguida de una e odenación comosómica que cambia puntualmente la estuctua del ma teial genético y con ello del contenido inmativo. Este acontecimiento se ha dado con ecuencia en la evolución bio lógica. De hecho las eodenaciones comosómicas constituyen el cambio genético pincipal causante de la sepaación de especies en la línea evolu tiva de los pimates27• En efecto, un cambio evolutivo po eodenación del mateial genético, duante el poceso de la fecundación, genea un in dividuo «híbido intemedio». Esto es, uno o vaios de sus paes de co mosomas son asiméticos: uno de los del pa «N» es N y el oto N*. Uno, N, es igual a los dos comosomas del pa de sus pogenitoes, y el eodenado, N*, es difeente. Estos híbidos intemedios NN* son muy poco fétiles y no se epoducen con cilidad ente sí. Sin embago, sí AVARRO, ., y ARTON, . H. (2003): «hromosomal speciation and molecular divergence accerated evolution in rearranged chromosomes», Sciece, 300, pp. 321-324; , . ., y ING, . (20 04): «enes and speciation», Nat. Geet 5, pp. 1 14-122; ANG, . ; ANG, X., y PDA, . (2004): «esting he chrmosomal speciation hypo thesis r humans and chimpanzees», Geome R 14, pp. 845-85 1 .
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Figura 3: n posible escenario de la aparición de los pri meros homb res varón m u j e r
i
no n l in iio d l undn d nsos (46 XY) Cambos evolutvos en el genma dante la fecndacón
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Reorganiza los cromosomas eoganiza los cromosomas sexales
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Una única fecundación desde los gameos de los anecesores humanos, acompañada de un eveno evoluivo de reordenación cromosómica y ransposición de maerial genéico del cromosoma proohomo X al proohomo Y, genera el conenido genómico oal de la especie humana. En la pare inferior, se muesran los primeros pasos del desarrollo de un embrión varón. Lo s primeros pasos de gemelos idénicos varones. Y cóm o, si l a fecund ación va acompa ñada de un eveno evoluivo, una división celular asimérica en el reparo de los cromoso mas sexuales humanos, aporaría el maerial de parida para la consiución simulánea de un cigoo humano XX y oro XY.
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pueden hacelo con los NN. La sepaación o cue cuando en el tanscu so de una pocas geneaciones se poduce una baea epoductoa ente los individuos con los dos comosomas del pa iguales a los pogenitoes NN y aquellos otos en que los dos comosomas del pa son los eode nados, N*N*. En la evolución de los mamífeos, el comosoma Y ha ido pediendo genes, cuyas copia se guadaon en el X, de manea que se e quedando educido de tamaño y con escasez de genes. Ahoa bien, en el caso hu mano, junto a la eodenación de algunos comosomas, se pudo da un poceso extaodinaiamente peciso de eodenación de los comosomas sexuales y del que no se conocen pecedentes. Los datos obtenidos de la compaación de genomas, muestan un fenómeno peculia en la evolu ción de los comosomas humanos: un paso de mateial genético del X pehumano al Y pehumano. Además no se tansee un mateial in mativo cualquiea, sino pecisamente una egión que contiene genes paa la constucción de un ceebo, que pueda se humano y además ceebo de vaón28• Podemos supone lo siguiente (gua ): El comosoma protohomo X (heedado de nuesto antecesoes Austapitecus) se eoganiza y se dupli ca duante la fecundación. Uno de estos dos comosomas Hoo X se duplica de nuevo29 y oigina el nuevo pa X de Hoo. El oto X se em paeja con el poto que había ecibido una copia del agmento del X, y constituye el pa de Hoo. El esultado de las eodenaciones y du plicaciones comosómicas, duante ese peculia poceso de fecundación, es el paso de un genoma de austalopitecino, con los paes de comoso mas autosómicos y un pa sexuales a un genoma humano doble: un conjunto mado po los paes y un pa X (es deci, una dotación genética humana femenina) y oto conjunto con los paes más un pa (dotación genética humana masculina) . Esta célula con un genoma humano doble y con doble pa de co mosomas sexuales X-, no es un individuo, no es un cigoto. No es cuepo humano, sino genoma humano duplicado y pepaado paa una división celula. Enciea el patimonio genético común de los hombes. Es el Am genéico Tal patimonio genético ha de contene el comoso ma Y paa se genoma completo de la especie, poque sólo el comosoma Y 28 C. lo indicado anteriormente acerca del gen CDH presente en el X y en el hu manos (gura 1 ) . 29 ótese que la rpetición, o la perdida, de uno de los cromosomas sexuales durante la concepción de un vrón o de una mujer, no es un fenómeno inusual. isten mujeres X, con el síndrome de urner, y vrones con el síndrome de linefelter.
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tiene el pogama de la masculinidad. Peo, insistimos, el patimonio co mún no tiene caácte pesonal, no es un individuo, aunque esté conteni do en la estuctua celula que esulta de la sión de los gametos de los antecesoes. El genoma humano se ha constituido desde «e l bao de la tiea» en una emodelación de la oganización de vaios paes de comosomas. Se destaca aquí uno de los eventos qu e tuvieon luga en la evolución hacia el hombe. Es el hecho de la eodenación de una egión del comosoma X que pemite, siguiendo un mecanismo popio de la duplicación de e giones30, tansfei un agmento al comosoma Y. El comosoma Y hu mano es el único comosoma sexual de mamífeos que pota ese ag mento que pecisamente contiene genes del ceebo. El agmento del comosoma X, cuya copia que se taspone al tiene un contenido in mativo tan peculia, que, sin él, el ceebo del vaón no podía se un ce ebo humano. B) Una cunción puee concluir con constición e os cigotos. El poceso de constitución de un individuo, con la fecundación de los gametos de sus pogenitoes, es dinámico y equiee un peiodo de tiem po como proceso consyente. Como se ha descito antes, a lo lago del tiempo de la fecundación los dos gametos se activan mutuamente, cam bia la estuctua del mateial genético apotado po los pogenitoes y acaba apaeciendo un cigoto con los ejes copoales conguados. Cada una de las etapas de este poceso es coodinada po los iones calcio. En algunas ocasiones, y debido a alteaciones de los niveles de calcio, el «óvulo en fecundación», antes de constituise como cigoto, se divide en dos « óvulos en poceso de fecundación» (pate infeio de la gua ). Cada uno d e estos óvulos en fecundación acaba el poceso y el esultado es la constitución de dos cigotos, hemanos gemelos idénticos y del mis mo sexo31. Es deci una sola fecundación de un sólo óvulo y un sólo espemio, ha dado luga a dos cigotos que se desaollan cada uno a embión, feto, y nacido. Son los gemelos denominados homocigóticos. Supongamos, po último, que en un poceso de fecundación se in seta un evento evolutivo del tipo que acabamos de descibi. El esultado de tal fecundación seían dos individuos gemelos de la misma nueva es30 l mecanismo por el que una región del DNA se duplica y la copia, o duplicado, se inserta en un cromosoma distinto se conoce como transposición. uele consistir en transcri bir el fragmento de DNA a RNA de hebra simple, y a continuación una trascripción inver sa de este RNA a DNA de doble hebra, que se inserta en otro lugar del genoma. stos ag mentos se denominan eementos móvi o transposones. s una de las causas más ecuentes de cambio de la inrmación genética con consecuencias evolutivs. 3 1 . EZ RATALL, N., e RABURU, . , o. c.
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pecie, peo de difeente sexo. Dos mas igualmente humanas, necesa iamente sexuadas y asiméticas ente sí en cuanto una es X y la ota Dos pesonas. Ninguna de las dos pesonas pocede de la ota po vía de geneación. Adán no engenda a Eva32; tampo co Eva es un on de Adán poque seía oto vaón. El oigen de ambos tampoco es, como se eeja en los mitos, una patición en dos de un viviente que les dejaía incom pletos. Solamente el Génesis apota, con su lenguaje simbólico, que la muje es sacada del patimonio genómico común. Una ma de que apaezcan «simultáneamente uno y una», del co mún patimonio genético humano, es la que acabamos de descibi: el óvulo en fecundación que pota el genoma sacado del común sin el co mosoma es necesaiamente un genoma X, que constituye un cuepo de pesona muje. Mientas la ota pate del genoma que mantiene el comosoma Y se constituye en cuepo de pesona vaón. C) Se reconocn como personas iales y rentes. El pime hombe y la pimea muje tienen la capacidad de econocese mutuamente como iguales. Y al econocese como pesonas ealizan un «aislamiento p ocea do>> del esto de sus antecesoes, que hace de su pole la familia humana33• En el mundo animal se necesitan vaias geneaciones paa que se es tablezca una baea epoductiva ente los antecesoes, que pemanecen sin cambio genético, y los nuevos individuos que han evolucionado, po eodenaciones comosómicas. Es un poceso evolutivo ecuente en que el aislamiento genético se ealiza meced a la baja infetilidad de los hí bidos. Sin embago, el oigen del géneo humano no exige de suyo la e ciencia natual de un mecanismo de aislamiento epoducto. Es la unión de sus cuepos pesonales, como esposos, lo que les conviete en los pi meos pades. Podemos ama que el poceso ha sido único poque una especie animal no se ma de una sola paeja. En esumen, la dinámica de los pocesos de constitución de los indi viduos en la fecundación, y la dinámica evolutiva de especies complejas como los pimates, nos pemiten popone un escenaio posible a la apa ición a simultánea del pime vaón y la pimea muje desde unos ante cesoes no humanos Un poceso evolutivo posiblemente único en la his toia evolutiva, peo que evela una hipótesis coheente con todas las leyes de la fecundación, de la geneación de dos gemelos, y de las pime as etapas del desaollo embionaio. l dám «dormido », al que ios hace caer en el sopor, puede simbolizar que dán no causa a va, ni siquiera es concausa de la creación de va. EZ ATALLA, . (2000}: «rigen monogenista y unidad del género huma no: reconocimiento mutuo y aislamiento procreador», Scrta Theoca, , p. 205.
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. S IGNIFIDO HMANO DE LA SIMLTANEIDAD DE ORIGEN El escenaio posible es coheente con la biología; es un escenaio po sible. De ninguna ma se petende ni ama que e así y mucho me nos que es la única explicación. Ahoa bien, lo que nos inteesa aquí es el signicado humano, el sentido humano de la con-ceación de los dos cuepos, naado con el lenguaje del Génesis. ¿De qué es signo el cuepo de vaón heteocomosómico a dife encia del cuepo de la muje )? La biología apota ese dato que hemos consideado impotante aceca del diveso contenido inmativo de los dos comosomas del pa sexual: el X es lo común a ambos sexos, la igual dad especto de si mismo; el Y pota la inmación paa la difeencia es pecto de sí mismo. Se vaón es posee en sí mismo la identidad y la dife encia de la natualeza humana especto de sí mismo. El signo del cuepo de muje, «sacada de» consiste en contene en sí el momento de la identi dad de la natualeza especto de sí misma, peo no el de la difeencia. El Am genéico, el hombe, no es eal. La pesona humana es ela ción y apetua hacia sí mismo y hacia ea. Po ello, la muje constitui da en don puede se puesta ante el vaón paa que éste se auto-conozca como pesona al econo cela como «la ota pesona» . Sólo entonces Adán es pesona humana, puesto que paa un sujeto la autoconciencia de se una pesona sólo es posible en elación con ota subjetividad. Solo se pue de se una pesona si hay al menos os pesonas. Sólo a pati de entonces es cuando se puede deci que la natualeza humana tiene una existencia «vedadeamente eal». Y como pesonas humanas que han de tansmiti la vida pesonalmente po geneación, el inicio de la humanidad no podía habe tenido luga, ni con dos vaones, ni dos mujees, sino desde uno y una. Es lo que apota con nitidez la biología y el lenguaje de la Biblia. Situa la difeenciación sexual en la apaición simultánea de los pi meos sees humanos a nivel ontológico, signica caacteiza a la huma nidad como ealidad elacional, es deci pesonal. La capacidad humana de ama es una amación de natualeza ontológica. La ayuda adecuada del intelocuto natual, no es ayuda en el oba, sino en el se, en el exis ti y conlleva mutua ecipocidad que es asimética. Iguales y con com plementaiedad asimética. Dos modos pesonales de habita el mundo poque son dos mas pesonales de pecibi el mundo. Cada uno un modo especico y singula de dase. Ambos, al se ealidad elacional pesonal, son iguales como témi nos de una elación. La difeencia está en el sentido de la elación misma. La elación de oigen dene al vaón como el que «da paa ecibi» o «ama y es amado». Y a la muje, como la que «ecibe paa da» y «es amada y ama».
CAPÍTULO II CEREBR DE RÓN Y CEREBR DE JER. DS HEISFERIS
DOS FOMAS HUMANAS DE PENSAR
Y DOS HEMISFEIOS EN TODO CEEBO
. D MENTALIDADES EN CADA HOMBRE En todo hombe coexisten dos mentalies, dos estilos de pensa, dos miadas a la ealidad que pueden esta equilibadas o puede habe un pedominio macado de una de ellas con inhibición de la ota. Uno de los pesupuestos ceebales de que existan dos mas de mia la eali dad, es el hecho de que todo ceebo humano consta de dos pates o es tuctuas: los dos hemisfeios deecho e izquiedo, que ncionan de ma nea difeente aunque íntimamente coodinados. Paa ealiza las taeas de pocesamiento de la inmación, tanto intena como extena, ambos hemisfeios usan caminos distintos, e incluso paticipan en gado distin to de las taeas comunes del ceebo. La aquitectua ncional latealizada existe en el ceebo de cada una de las pesonas. Peo la mente de cada se humano es una, la uni dad vital de cada pesona conlleva un equilibio en el ncionamiento de los dos hemisfeios. El cento de gavedad de este equilibio se desplaza a lo lago de la vida de cada hombe hacia uno u oto hemisfeio, según su biogafía. Ahoa bien, cada uno, según sea po natualeza genética vaón o muje, tiene de ma innata el cento de gavedad localizado especí camente según su sexo. La maduez pesonal el equilibio psíquico, que cada uno alcanza mejo o peo con su popia vida, se maniestan en un ceebo que n-
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ciona amónicamente. Un ceebo humanizao (maduado po una vida pesonal plena) puede pasa a pime plano la miada anatica o la mia da contemptiva, e inhibi la ota, en divesos momentos según la acti vidad que se ealice, el estado inteio en que se encuente, etc. Y todo esto es posible p o la capacidad de da paso de ena los pocesos neu onales, que es una capacidad innata al hombe. Ahoa bien, teniendo to dos los hombes esa pedisposición innata, sólo con la epetición de actos libes, sólo con hábitos intelectuales vitudes, cada uno alcanza me jo o peo la habilidad humana popia de libease del encieo de los pocesos ceebales, pecisamente enando o estimulando la excitación neuonal. Cada hombe puede aoja las ataduas del ncionamiento automático de los cicuitos neuonales puede da paso o cambia la di ección al «estado mental» que emege de ese ncionamiento ceebal. Una de las mentalidades, se caacteiza po una ete valoación de los sentimientos afectos, que si se acompaña de un cieto echazo hacia el azonamiento abstacto, puede llega a domina la vida. La mentalidad con esta ma pedominante de mia la ealidad se considea, e incluso se ha denominado, primitiva ecibe este nombe poque esta ma de pensa con una ete caga emocional es típica de sociedades pimitivas, en el sentido de poco tecnicadas. Efectivamente, cuando la supeviven cia no está gaantizada po el do minio cientíco-tecnológico del mundo, se hace fácilmente pedominante el sistema emocional del ceebo, que llega a asigna a los estímulos una signicación especial. Así, po ejemplo , la actitud ente a la duda aceca de si el Sol seguiía saliendo cada día, llevó antiguamente a las pesonas a dota al asto con podees sobenatu ales convetile en sujeto de su adoación. Esos podees exta-cósmicos son paa una mentalidad polaizada en ese extemo, tan eales o más que la popia ealidad. La mentalidad pimitiva paece esponde a un pedominio del cee bo deecho, que pocesa la inmación de ma global, está mejo conectado al sistema neuonal qu e pocesa los afectos, el sistema límbico, que el hemisfeio izquiedo. Desde esta miada, se tata no tanto de co noce el mundo mediante análisis deducciones, sino de apehendelo emotivamente, unise afectivamente con él. El hemisfeio deecho agua antes que el izquiedo; madua en la vida de cada se humano duante los dos pimeos años después del nacimiento. También en la histoia de la Humanidad comenzó a tene el pedominio antes, solo más tade tomó eza el oto modo de azonamiento que pocesa el hemisfeio izquie do. Esta es una ma de azona secuencial lineal, que abstae las cua lidades de la ealidad las genealiza, que está nomalmente asociado a las áeas de la coteza asociativa ceebal.
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A medida que s e desaollan las capacidades d e abstacción y genea lización de popiedades, las otas capacidades más emotivas y concetas, pocesadas en las estuctuas del sistema límbico, pueden pasa a segundo témino. Pasa a segundo plano en el lenguaje neuosiológico signica inhibilas, taea que llevan a cabo moléculas especícas: los neuotansmi soes inhibidoes. Es deci, paa que la capacidad moea de abstacción pase a ocupa el pime plano, es necesaio que los inteeses pácticos in mediatos y las conexiones emotivas de la expeiencia, pasen al segundo plano. a su vez, el yo conscinte puede hace que desapaezcan las inhi biciones a las que, con ecuencia, la coteza ceebal somete las estuctu as límbicas. De esta ma, cada pesona es capaz de enta, con libetad inteio, al mundo de expeiencias tan pondamente humanas como son las eli giosas, las atísticas, o las ceativas. Tanto la capacidad de acecase a la ealidad con un pensa analítico y lineal, o con un pensa contemplativo, global y unitivo con la ealidad, son capacidades humanas inheentes a la pesona. Hasta tal punto son humanas que cada uno de los hombes, sea vaón o sea muje, sólo alcanza la plenitud pesonal cuando las amoniza; cuando, como se suele deci, «cabeza y coazón unidos». La mentalidad moerna, occidental tiene la peculiaidad de se a la vez lógica y pe-lógica, acional e iacional. Es muy ecuente que, en este caso, se pesente una tendencia a cona mucho más en el conoci miento que le apota la ciencia y a vivi apoyado en la técnica, al mismo tiempo que se ecue a las pácticas de yoga o las dogas paa gusta las sensaciones de comunión con el univeso. Conviven ambos extemos en muchas pesonas; además, vaía de una pesona a ota, la popoción en te el mundo emocional y paticipativo y el mundo lógico-expeimental. Hasta el punto de que el hombe actual no se identica genealmente con ninguno de los dos, sino con una hibidación de ambos caente de amonía. El esultado es, con ecuencia, una doble vida en lo cotidiano. La taea de amoniza, de alcanza la unidad de los divesos compo nentes de la vida, es taea de cada uno. De hecho, la asimetía ncional de los hemisfeios deecho e izquiedo de todo ceebo humano, está de teminada genéticamente po pocesos tempanos de la vida fetal. Es ésta una pimea ventana de tiempo en el establecimiento de los códigos cee bales. Más tade, con el desaollo fetal y duante los pimeos meses de la vida, se cean y maduan los módulos, los opeadoes, que haán posi bles los efectos subjetivos e intepesonales en la expeiencia humana. Esto es, haán de sustato a esos dos mundos de cada se humano. Y más tade aún, con la pubetad, el ceebo tiene una modulación intensa de las áeas en que se sitúan los centos de gavedad de la actividad. En esta
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etapa macaán el compás los niveles de homonas masculinas y femeni nas, que a su vez se sintetizan de acuedo con la especíca dotación gené tica que ecibieon. Peo ya en este peiodo, la educación, la cultua y so be todo las esoluciones pesonales, toman las iendas de la conducta y de la maduación o humanización de un ceebo que pemanece plástico toda la vida. . L DOS HEMISFERIOS DE TODO HOMBRE DIFIEREN EN LAS TAREAS QUE TIENEN ASIGNADAS
La gua muesta un esquema geneal del ceebo humano. Los dos hemisfeios ceebales no son idénticos en lo que se eee a su es tuctua. El suco de Silvio tiene difeente diección en ambos hemisfeios po lo que la oganización espacial de los lóbulos es ligeamente distinta. Peo lo que más les distingue es la nción. Po ejemplo, el hemisfeio iz quiedo es dominante paa la oganización del lenguaje ya que ocupa más egiones de ese hemisfeio paa lleva a cabo esa nción. Po el con taio el deecho es dominante paa la capacidad de oientación del espa cio exteio guiada po la visión. Po ota pate, el hemisfeio izquiedo tiende intínsecamente a un estado de motivación amativo, gobenando las situaciones activas de acecamiento del sujeto especto del mundo y de los demás; y también especto del compotamiento moto, debido a que su actividad está me diada po el neuotansmiso dopamina. Po el contaio, el hemisfeio deecho está pedispuesto a se más eceptivo y más compometido en es tados de atención y eexión mediados po la actividad del neuotans miso noadenalina. En la base de las difeencias ncionales de las divesas áeas del cee bo está la existencia de una divesidad de estuctuas ceebales. Son di feentes operaores coivos que conectan con las divesas áeas asociati vas de la coteza ceebal, y siven paa ealiza difeentes nciones mentales de análisis de la ealidad. Así, los dos hemisfeios en el ceebo de todo se humano se distin guen, en pime luga, en cuanto a los modos de pocesa. El deecho po cesa el lenguaje constituido po sensaciones no verbas e imágenes; ealiza las epesentaciones de los signicados múltiples no vebales de las pala bas, como son la pecepció n visual y espacial. El izquiedo ealiza los po cesamientos lógicos y lingüísticos, el signicado vebal de las palabas. En la ealización del tabajo el deecho es como un cento de eco nocimiento de los patones, mientas que el izquiedo constuye las e pesentaciones de la ealidad. El deecho econoce las caas; y el mundo
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que él constuye contiene la inmación deivada de los estados emocio nales de los demás. Envía mensajes a tavés de expesiones ciales, y el tono de voz. Po el contaio, el izquiedo es incapaz de egista o inte peta ideas emocionales no vebales. El hemisfeio deecho tiene como cto de motivación el mundo in teio de la mente, mientas que el izquiedo tiene la memoia semántica Figura 4: Visa laeral dorsal venral del cerebro h umano
C. somatosensorial C motora
Bca
nacción scia ot gamación gniia
VET
Wk
q
h
La corteza cerebral de los dos hemisferios está dividida en cuatro lóbulos: frontal, parietal, temporal y occipital. La parte anterior de los lóbulos frontales es el sustrato de numerosas funciones cognoscitivas que organizan y controlan la conducta. En los lóbulos parietal, frontal y temporal, se localiza /a corteza asociatia que m edia la s funciones cognitivas del cerebro la capacidad de actuar, ordenar, y decid ir en respuesta a estímul os externos o a motivaciones internas. Las áreas de Broca y Wernicke procesan el lenguaje. Los dos hemisferios difieren funcionalmente. El hemisferio izquierdo está motivado para la aten ción y la acción enfocada hacia fuera, exteamente mientras el derecho está motivado para la acción y la atención enfocadas desde el interior
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Operdores cognitivos El operador abstracto se reqiere para formar conceptos generales a partir de percepciones concretas. Est configrado en toda la corteza espe cialmente en la asociatia. El operador ho/ístico permite er el mndo como n todo y conecta con la corteza parietal del hemisferio derecho. El operador existencial da el sentido de lo qe el cerebro mestra como real, se sita en el sistema l mbico. n operador de alores emociona/es asigna n alor emotio a lo qe se percibe desde el sistema lmbico. El operador reduccionista permite a la mente er «el todo» diidido en ss partes; se sita en el hemisferio izqierdo. n operador cuantitativo, qe permite abstraer la cantidad de la percep cin de arios elementos aporta na capacidad innata del hemisferio iz qierdo. El operador causal, qe interpreta la realidad como na secencia de casas y efectos, procesa en el hemisferio izqierdo. El operador binario redce todo a pares de conceptos opestos, opera en la regin inferior del lblo parietal izqierdo.
de objetos del mundo exteio. Po la mayo densidad de inteconexiones el hemisfeio deecho posee mayo sensibilidad al estado del cuepo, al canza signicados conscientes más diectos, y taduce a gestos las eaccio nes emocionales más pimaias. El hemisfeio izquiedo, al tene más cilidad de taduci a palabas las sensaciones expeimentadas de ma visceal, pemite una adaptación de los estados emocionales paa encon ta los ecusos necesaios en las divesas situaciones que se pesentan en las elaciones sociales. Po último, el hemisfeio deecho, a tavés de la coteza obitoon tal, es más capaz que el izquiedo de egula los estados de excitación del cuepo. El hemisfeio deecho puede considease el lado pesimis, en cuan to que la activación del lóbulo ontal pocesa emociones negativas, mie do, o ansiedad. Po el contaio, el izquiedo es consideado el lado op mis debido a que la activación ontal izquieda poduce sentimiento de felicidad. Esto signica sólo que el hemisfeio izquiedo eviste mayo impotancia paa las emociones positivas y el deecho en las negativas; signica simplemente que ambos hemisfeios contibuyen de manea di feente a emociones más o menos agadables. Además, ambos ealizan un cieto epato de taeas, peo es una sim plicación ama que el hemisfeio izquiedo es el consciente y el dee cho el inconscinte. El izquiedo se ocupa pefeentemente de la elaboa-
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ción consciente del lenguaje y el deecho guadaía una mayo elación con la atención espacial inconsciente. Así po ejemplo, la solución escalo nada de poblemas, a tavés del uso consciente de eglas lógicas, implica ía el izquiedo; mientas que el deecho cumpliía una misión cítica en la esolución de poblemas mediante la pecepción intuitiva. En algunos expeimentos se ha podido segui el asto de la pecepción intuitiva den to del ceebo, ya que enconta solución a una cuestión equiee tiempo e intevienen multitud de pocesos cognitivos. Se ha intentado aveigua qué egiones ceebales se encagan de la eestuctuación y la pecepción intuitiva; esto es, el momento del «eueka». Los datos sugieen que ese es tado, que expesa la conciencia de habe esuelto un poblema lógico, pocede de la tansmisión al hemisfeio izquiedo del esultado de los pocesos inconscientes, que tabaja el hemisfeio deecho, y que llevan a la pecepción intuitiva 1• En síntesis, podemos deci que el hemisfeio izquiedo está motiva do paa la atención y la acción encada «hacia ea», extenamente, mientas que el deecho esta motivado paa la acción y la atención en cadas «desde el inteio». . NA INTELIGENCIA GLOBAL Y VARIOS TIOS DE INTELIGENCIAS EN TODO HOMBRE
La inteligencia es una capacidad multidimensional difícil de medi cuantitativamente. La pimea pueba de habilidades cognitivas paa me di la de inteligencia se debió a Binet 2 y e el oigen de los actuales coe cientes intelectuales (CI). Se tata de unas escalas méticas que pemi ten medi si la inteligencia analítica de un individuo es nomal, según su edad. La mente humana posee una estuctua permannte que apota, a cada hombe, una deteminada capacidad intelectual analítica, emocional y social. La pimea, conocida como sistemdtica, es po temino medio más ete en los vaones; mientas la segunda, la capacidad de empaa, (capacidad de pecibi el popio estado inteno, y el de los demás) suele se más alta, po témino medio, en las mujees. La inteligncia social abaca condiciones más amplias que la empatía. Nos centaemos en es1 NBLIC y LLINGER (2006): «Percepción intuitiva», Mente cerebro, 20, pp. 50-57. 2 ERGE, N (20 07) : «led ine! o los orígenes del cociente intelectual», Mente ce bro, 23, pp. 74-79.
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tos tipos debido a que el dimosmo del ceebo da cuenta de las dife encias según el sexo. La maduación de las difeentes estuctuas tiene itmos natuales y unas son más dinámicas que otas; p eo, son estuctu as que sólo con el ejecicio de las nciones popias llegan a madua. Po ota pate, es peciso señala que la capacidad intelectual contem pva no es pedominio de ninguno de los sexos. Es una actitud de la mente que se da espontáneamente, o se busca, y de la que todo ceebo es capaz. 3.1. Cebro lóbulo ontl del hemisferio i7uierdo
La capacidad humana de abstae, anticipase y decidi, que son ati butos de la inteligencia, exige un buen ncionamiento de los cicuitos neuonales de la coteza de los lóbulos ontales: la egión que se deno mina cerebro ecuvo. El ejecicio cognitivo no solo pocesa, congua y econgua los pocesos mentales especícos, sino que econgua el ce ebo mismo. La maduación de esta estuctua es especialmente dinámi ca. H asta la edad de los años la conmación de esta estuctua cee bal no está acabada plenamente. Es signicativo que esta egión no se desaolla y madua condicio nada po las homonas, como ocue con otas estuctuas ceebales. Po el contaio, está pacialmente contolada po ctoes ambientales y cul tuales, tales como una pesión tempana paa asumi papeles adultos y compometese en la toma de decisiones complejas; esto es, con la activi dad. Es deci, madua al itmo de la popia biogafía. Lo más destacable de los lóbulos ontales, especialmente el izquie do, es que tienen una base innata. Cada hombe nace, con independen cia de su sexo, con una deteminada capacidad intelectual basal baja, media o alta que mantendá a lo lago de su vida, y en la que se apo yaán ulteioes desaollos. La capacidad intelectual basal medida con los tes índices de lectua, escitua y aitmética, se coelaciona diec tamente con la tayectoia del poceso dinámico de maduación de los lóbulos ontales3, ente los y los años de edad apoximadamente. El espeso de la coteza ceebal de la egión ontal izquieda aumenta de ma especialmente aceleada hasta la adolescencia en los niños y en las niñas más inteligentes. Cuanto mayo es el incemento del espeso coti A, P REENSTEIN, D ; ERC, .; LASEN, .; ENROOT, R; GTAY, N.; VANS, A; AOORT, . , y IEDD, . (200 6} : «ntlectual ability and cortical devopment in childrn and adolescents», Nature, 440, pp. 676-679.
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Figura : a capacidad inelecual no esá relacionada con el dimorfismo sexual
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La trayectoria de maduración de la corteza frontal del hemisferio izquierdo es especial mente plástica en los niños y en las niñas con alto coeficiente intelectual. El espesor de esa área cortical au menta a gran veloci dad entre los 7 y los 1 3 años y se detiene el in cremento del espesor. Sin embargo, el aumento de espesor, con la edad, de esas mis mas zonas en el hemisferio derecho no guarda correlación con el nivel de inteligencia. Modificada de Shaw, P., 2006.
cal en esa áea en el hemisfeio izquiedo, hasta los años, mayo es el coeciente intelectual (CI). Sin embago, no hay coelación ente el CI y el cecimiento en espeso de la coteza ontal del hemisfeio deecho. La gua muesta la tayectoia del cambio del espeso de la coteza ce ebal del lóbulo ontal izquiedo de chicos y chicas con un alto coe ciente de inteligencia (CI) . Esto no signica que la capacidad de abstacción se adquiea duan te el desaollo tadío. Po el contaio, en los bebés pequeños el pensa miento tiene ya un cieto nivel de abstacción. Los niños maniestan una inteligencia pecoz, puesto que a los tes meses paecen posee ya un con cepto muy coheente de su entono. Signica que la inteligencia basal viene dada y tiene como apoyo mateial el dinamismo de cecimiento del espeso de la coteza que ocue en esas edades paa todos. Lo que cam bia es la velocidad a que cece hasta los años. Muy ápido en los niños y niñas muy inteligentes. Velocidad intemedia o baja en el caso de niños y niñas con inteligencia media o b aja, espectivamente.
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3.2. Cebro activción del lóbulo temporl decho
La miada contempva pemite una ma de se en el mundo es pontánea, que es una ma más póxima a lo eal que a la consciencia intelectual. Cuando la mente humana capta de ma connatual, espon tánea y contemplativa el mundo, el p ensamiento se encuenta en contac to diecto con la ealidad. Es capaz entonces de cono ce los aquetipos, es deci aquellas estuctuas mentales que dan oigen siempe, en todas las cultuas y épocas históicas, a las mismas imágenes. Paa contempla es peciso ena el pensamiento discusivo. No p ensa discusivamente no es una vuelta a la niñez, sino un eemplaza el estilo in telectual activo po oto modo de pecepción, que es la pecepción intuitiva. El pensa contemplativo es activa las estuctuas cognitivas y de pecepción automáticas, el sistema límbico, que pemite una ganancia en intensidad y iqueza sensoial, a expensas, quitando del pime plano, la categoización abstacta y la difeenciación analítica, lo popio del pensa discusivo. La actividad contemplativa apovecha las memoias almacenadas en el cee bo, que pueden esta más o menos sometidas a la consciencia analítica. En esumen, el poceso neuonal que subyace a la expeiencia con templativa consiste en des-automatiza aoja o ena la excitación de los cicuitos sensoiales, po la acción de neuotansmisoes inhibidoes de las sinapsis y, con ello, inhibi aquellas estuctuas psicológicas de la mente que oganizan, delimitan, seleccionan, e intepetan los estímulos que llegan del exteio. Es un modo de deshace la automatización de los sistemas diigidos hacia ea, hacia el mundo exteio. Se oigina así la supesión tempoal de las nciones de oganización del mundo de las pecepciones y de lo cognitivo y, con ello, queda pemitido el acceso a esos aspectos de la ealidad que nomalmente lta la mente analítica. No se piensa entonces con palabas, sino que se contempla la ealidad, y esa contemplación puede llega a se inble En efecto, en la expeiencia extema de contemplación, unida a la suspensión tempoal del pensamiento lógico-analítico, el ceebo ejecuta una desconexión ncional tansitoia de la comunicación ente hemisfe ios ceebales, de ma que las vivencias de totalidad y fusión «con lo oto», popias del hemisfeio deecho, no pueden expesase vebalmente; esto es, no hay acceso a los centos del lenguaje del hemisfeio izquiedo. Hemisfeio en el que también se encuentan las nciones analíticas del pensamiento. A este estado mental, como a todos los estados mentales, puede llegase pesonalmente éxtasis eligioso, ceativo, amooso po el alma, o po la acción macológica de una doga que active la zona coespondiente del ceebo, el sistema límbico en este caso.
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Incluso, este tipo de estado mental se puede alcanza, o voece, po pácticas de elajación copo al y abandono del pensamiento conce to, que tatan de consegui un estado en que no se piensa en nada. De hecho la expeiencia mística, de intensa unión con Dios, se acompaña de los síntomas de la activación del sistema límbico4• La exis tencia de estas estuctuas esponsables de la expeiencia mística obvia mente no demuesta, ni niega la existencia de lo sobenatual. Lo que muesta es que existen en el ceebo estuctuas que hacen posible estas expeiencias humanas de comunicación con Dios, de comunicación con lo absoluto. Lo que sí explica es que el fenómeno eligioso sea univesal, pesente en todas las cultuas. El sentido eligioso es innato al se humano. Tanto la capacidad de contemplación como la capacidad de abstae, y pocede a un modo de pensa analítico, son ambas, capacidades po pias de la natualeza humana. Son posibles poque el ceebo humano es así. Cada se humano heeda unos genes que dictan la mación de un ceebo, el de cada uno, que es pesupuesto paa el ncionamiento de la mente. Y cada uno, a pati de lo que le viene dado p o natualeza, se ta baja, con la vida, la amonía pesonal. Un hombe puede mutila una u ota ma de mia la ealidad, ambas humanas y ambas equeidas paa la plenitud pesonal. Puede mutila, o puede «exagea», una u ota. Pue de povoca desmedidamente el pedominio de una u ota, poduciéndo se de esta ma disociaciones pesonales, doble vida, que muchas veces acaba afectando, o incluso dañando, a la oganización ncional misma del ceebo. 3.3. Cebro estructuras del sistema límbico
La expeiencia subjetiva conlleva la emoción de ma inheente, e incluye la evaluación del signicado de los estímulos, y la inteacción con . UBIA, F . (2004): La conión divina, rakontos, ritica, 2 . ed. , arcelona. «icultad de epresar lo que se ha vivido común a la inmensa mayoría de emociones y afectos ya que surgen de regiones cerebrales con conexiones pobres con las regiones del ha bla; la disolución del yo que se reere a síntomas del lóbulo temporal; la distorsión o pérdi da del sentido del tiempo y del espacio característica de los ensueños ; la sensación de objeti vidad y realidad prondas que se da cuando la amígdala se activa y da sentido biológico a los estímulos externos ... a superación del dualismo y las contradicciones . .. a visión de lu ces brillantes y cegadoras que sue ocurrir en afectación o activación patológica de estruc turas límbicas. la sensación de felicidad, bienestar, paz, alegría típica de cuando el cerebro produce endornas».
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Figura 6: orea prefronal esrucuras del sisema lmbico Md
Hp Hpp
Cortez refot oroter
Á
Cotez ortofrot El sistema límbico consta de una serie de estructuras laminares, núcleos y vías nervio sas, cuyos circuitos neuronales codifican la emoción y la motivación. La ínsula procesa los sentimientos viscerales, el hiotálamo organiza las hormonas producidas en las góna das, el hiocamo guarda mem oria de las emociones y se relaciona con el aprendizaje y memoria. La amíala es el núcleo de los instintos y está gobernada por la corteza pre frontal. La lánula ituitaria participa en la regulación de la acción hormonal. La corteza refrontal controla las emociones y evita que se vuelvan desmedidas, frenando la activi dad de la amígdala. La corteza cinulaa anterior procesa el sopesar las opciones y la toma de decisiones.
el entono. Los pocesos emocionales son pate ndamental de los dos hemisfeios y, de hecho, los cicuitos de valoación y excitación, están pesentes en ambos. No obstante, las emociones pimaias pueden se ex peimentadas de ma más intensa e inmediata en el hemisfeio deecho que en el izquiedo. De hecho, los afectos pueden de suyo se expesados a tavés de las expesiones ciales o con modicaciones en el tono de voz, y tanseen inmación sobe los estados intenos al mundo exte io, al igual que lo hacen las palabas. La gua muesta las estuctuas del sistema límbico que, como se tataá más adelante, pesentan dimosmo sexual. En psicología se viene utilizando el témino «inteligencia emocio nal», que tata de explica y de medi de qué modo la atención a las emo-
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ciones ayuda a desenvolvese e n la vida diaia. S e ha denido5 como el conjunto de talentos, o capacidades, en cuato dominios: a) capacidad paa pecibi las emociones de ma pecisa, que se suele expesa como «lee las caas»; b) capacidad de aplica las emociones paa cilita el pensamiento y el azonamiento; esto es, utiliza los sentimientos positi vos; c) capacidad paa compende las emociones, y d) capacidad paa contola las emociones. La «inteligencia emocional» tiene elación aun que no es exactamente igual que la capacidad de paa, que a su vez se engloba dento de la noción más amplia de «inteligencia social». La capacidad de «sistematiza» y de «empatiza» van ligadas de ma coheente en cada pesona, aunque el cento de gavedad de tal equili bio se desplaza genealmente, y de ma innata, en los vaones hacia la pimea y en las mujees hacia la segunda. Aunque hay que señala que ealmente, emoción y pensamiento son insepaables paa todas las peso nas. De hecho la patología conocida como autismo, como se tataá más adelante, se considea el extemo del típico ceebo masculino: ausencia total de empatía con pobe, o a veces nomal o incluso ica, capacidad de sistematización. LAS DIFEENCIAS GENÉTIS Y O X) GENERAN
DIFEENCIAS EN EL CEEBO DE VAÓN Y DE MUJE
Cada individuo se constituye, como vaón o muje, con la concep ción desde los gametos de sus pogenitoes. Con el nal del poceso de fecundación se genea la tayectoia vital de cada uno, que es un poceso de desaollo y constucción del oganismo, y de cada una de sus pates, que sigue la dinámica que se denomina epigenética; esto es, dinamismo que se egula y amplica con el poceso mismo . Con esta misma dinámi ca se constuye cada ógano. La tayectoia tempoal en la que se cea el espacio ogánico, dife enciando óganos, tejidos y sistemas según los ejes copoales cabeza cola, dosovental y deecha e izquieda, apaece con el poceso vital mismo. Genes y medio son impescindibles paa la autoconstucción del oganismo y de sus pates; y, de modo especial y más dinámico aún, del ce ebo. El estado de los genes cambia con el poceso; y el medio inta y extacelula, e incluso exteio al oganismo, es también, al mismo tiempo que el genoma, cambiante. 5 RWAL, D., y ALOVEY, P (2006): «nteligencia emocional», Mente cebro, 16,
pp 10-20.
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1 . RES MOMENTOS E MOUCÓN E L ERESIÓN IFERENCIAL E ENES URNTE CONSTRUCCIÓN EL CEREBRO, SEÚN EL SEO
La constucción del ceebo de cada se humano tiene peculiaidades asombosas. Alcanza un gado de complejidad anatómica y ncional muy elevado especto a los pimates más cecanos, los chimpancés, sin que los miembos de la especie humana posean más genes paa ello. Ocue que paa constui el ceebo se cuenta con una egulación de la expesión de los genes pecisa, amónica, sensible a las inteacciones y e xible. En efecto, los mecanismos de egulación de la expesión de estos genes, pemiten ealiza múltiples combinaciones 6 en cada momento, y en cada luga del espacio ceebal, duante la difeenciación a neuonas de las células pecusoas. La pincipal base molecula, de esta capacidad inusual de abi y cea conmutadoes de la expesión de los genes, es el hecho de que las egiones pomotoas de los genes del ceebo, especialmente los localiza dos en el comosoma X, son capaces de econoce una gan vaiedad de fctores e reción, y son enomemente sensibles a sus concentaciones. Más aún, la actividad de las neuonas depende de la síntesis de moléculas neuroansmisores que ealizan las taeas de conectalas en cicuitos, y que son el esultado de la expesión selectiva y egulada de genes en las dive sas neuonas. Las moléculas eguladoas de la expesión difeencial en vaones y mujees son ndamentalmente las hormonas sexuales. Éstas, a su vez, de penden paa ejece su acción de la pesencia en las células ceebales de receptores hormonas eeccos, cuya síntesis está también diigida de ma nea difeencial en deteminadas áeas ceebales. Po ota pate, en el in teio de las neuonas se ealizan tansmaciones de unas homonas en otas, diigidas po enzimas especícos; los genes que codican estas en zimas son popios del sexo, y su expesión está también egulada en el es pacio ceebal y en el tiempo. En la elaboación de cada ceebo, masculino o femenino, conuyen divesos ctoes que inman, amplican la inmación genética y la etoalimentan de manea epigenética, especialmente en tes momentos de la vida.
6 C RUGLYAK, ., y TERN, D . . (20 07) : «n mbarrassmnt of witchs», Scien ce, 317, pp 758-759.
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1 . 1 . En la etapa prenatal se genera la estructura generl dimórca
En el peiodo penatal la expesión de los genes popios de cada sexo, da paso a la constucción de las gónadas. Las gónadas fetales ealizan una pimea poducción de homonas sexuales masculinas y femeninas, lo que pemite la constucción del plan geneal especíco del ceebo de va ón y del ceebo de muje. El mecanismo pincipal es pemiti la expe sión selectiva de aquellos genes que tienen en su egión pomotoa una secuencia capaz de se econocida po una homona especíca del sexo. Es peciso ecoda que la mación de los ovaios y testículos feta les se ealiza a tiempos distintos dependientes del sexo, po lo que el cee bo de muje y el del vaón eciben las señales homonales en difeente momento de su desaollo embionaio. Po esto, las homonas se encuen tan las células pecusoas de las neuonas en difeente gado de madua ción y oquestan el desaollo ceeb al según el patón femenino o mascu lino. Un ejemplo, lo constituye el gen PCDH del que, como se comentó en el capítulo anteio, existe una copia en el comosoma X y ota en el con un pomoto difeente. En otos casos no intevienen las homonas sexuales. Po ejemplo, los genes del comosoma X que escapan a la inactivación de uno de los dos comosomas X7• Algunos datos pemiten popo ne que en las pime as etapas del desaollo embionaio el dimosmo geneal del ceebo de vaones y mujees, se debe también a este poceso: los genes que esca pan a la inactivación del comosoma X están expesados en doble dosis en el ceebo femenino8• La expesión de los genes de este tipo es depen diente de la imponta paental. Es deci, dado que la estuctua del co mosoma X que pocede del pade p) es difeente de la del comosoma X que se heeda de la made (Xm), las copias de un gen pesentes en uno u oto comosoma se egulan difeencialmente; esto es, según su impon ta. De tal manea que sólo una de las copias del gen se expesa en las mu jees, la del Xp, y no se expesa en vaones que sólo contienen un Xm. 7 l proceso de inactivación de uno de los dos cromosomas X tiene lugar en cada cé lula del cuerpo de la mujer, y está en nción de igualar la dosis de epresión de genes en el desarrollo y ncionamiento del organismo femenino o masculino. e dice de los genes que escapan a la inactivación de un X, de aquellos que se epresan las dos copias, o del gen que está precisamente en el cromosoma inactivado; esto es, genes cuya epresión se activa especcamente en las mujeres. 8 D, C. .; ARENCE, .; MA, N. . ; PRICE, C. ; BURNER, ; RIS TON, . ; RACKOAK, R . ; ÜREIND, ., y KUSE, . H. (2003): «osage-sensitive X-linked locus inuences he dvelopment of amigdala and orboitoontal cortx, ans far recognition in humans», Brain, 126, pp. 2.431-2.446.
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Concetamente en la egión 1 1 . 3 del bazo pequeño del comosoma X p 1 1 . 3 ) hay un gupo de genes con «imponta» que se equieen paa el nomal desaollo de las mujees. Estos genes se expesan selectivamente en momentos concetos del desaollo ceebal. Las mujees con el sín dome de Tune, (,X) que caecen de uno de los comosomas X, tie nen alteaciones en la oganización ceebal y décit mental, especial mente en el pocesamiento de la inteligencia social, en la que paticipa la amígdala. El hecho, tan llamativo, de que el décit neual dependa de que el comosoma X que pota una muje con síndome de Tune sea de he encia matena o patena, se ha podido pone de maniesto al analiza las caacteísticas de dos gemelas idénticas con caencia ambas de uno de los comosomas X9• Una de las gemelas había heedado necesaiamente la copia patena del X ( ,Xp) y la ota hemana la matena (,Xm) . Ambas poseían el mismo CI. Sin embago, la que heedó el X mateno, estaba mucho más afectada que la ota, tanto en las estuctuas ceebales como especto a las capacidades de sistematización y empatía. En geneal las mujees Tune (,Xp) tienen mejo equilibada la conducta social que las que son (,Xm). De hecho, éstas padecen más ecuentemente tastonos de autismo. Divesos datos apuntan 10 a que ente los genes de la egión 1 1 . 3 del bazo coto del comosoma X, existe el gen que codica la enzima mono amina oxidasa, del metabolismo del neuotansmiso dopamina. El pa tón de expesión de este gen es difeente según el sexo. Los niveles de esta enzima son signicativamente más altos en los vaones que en las mu ees. Po último, la llegada de testosteona al ceebo del feto vaón de ocho semanas de gestación tae consigo el diseño de las difeentes estuc tuas ceebales dimócas. Esta homona cambia el tamaño de las es tuctuas po doble efecto: a) destuye células de las áeas elacionadas con la comunicación; b) induce polifeación de otas, concetamente las que pocesan los impulsos y espuestas sexuales y las implicadas en los centos de agesión. Mientas el ceebo femenino sigue su cuso sin mas culinización. En esumen, el dimosmo sexual se inicia, en el sentido masculino o femenino, según la dotación genética. En las pimeas dieciocho semanas 9 E, A. .; REUND, .; PLOTNICK, .; AUMGARDNER, ; REEN, .; OZER, A. C.; EDER, .; EM, C., y ENCKLA, . . (1 99 3) : «h cts of X monosomy on brain dvlopmnt: monozygotic twins discordant r urnrs syndrom», A Neuro 34, pp. 95-107. D, C. . (2003) , citado.
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del desaollo embionaio ocue la mayo pate de la constucción de los cicuitos neuonales especícos de cada sexo, diigido po la egulación de los genes y los efectos de las homonas sobe las áeas ceebales. 1.2. los primeros aos de vida se produce un «bao» del cebro en hormonas suales
En la llamada pubetad inntil, a la tempana edad de un pa de años, las gónadas bican una gan concentación de homonas; en los chicos este peiodo dua unos nueve meses y hasta dos años en las chicas. Cuando los estógenos, poducidos po los ovaios, inundan su ceebo, las chicas empiezan a concentase en sus emociones y en la comunicación, especialmente en la hablada. Es debido a que activan los cicuitos ceeba les que se están mando, emacándose más los de aquellas áeas dedica das a la obsevación, comunicación, e incluso, las estuctuas del ceebo matenal. Los chicos se vuelven menos comunicativos y tienden a da ó denes, competi, a apoyase en la eza física, y a concentase, po ejem plo en un juguete, en un odenado, etc. Su ceebo, inundado po la tes tosteona, se hace menos sensible a las emociones y a la elación social. Tas la pubetad inntil, duante la inncia bajan los estógenos y la testosteona en ambos, peo los niveles de estógenos siguen siendo más altos en las niñas que en los niños. Paece, po tanto, que no es del todo cieto que las difeencias sexuales povengan pincipalmente de que los pades, y el entono, les eduquen como chicos o como chicas. El cee bo con que nacen las chicas es ya difeente del ceebo con el que nacen los chicos. Es el ceebo el que dicta las difeencias de conducta ente ellos. Po esto, los impulsos de los niños son tan innatos que ebotan, una y ota vez, aunque se intente una educación unisexo. Existen inclina ciones innatas. No existe el ceebo «unisexo«; los cableados del ceebo femenino y masculino son difeentes. elata al especto, la neuopsiquiata de la Univesidad de Califo nia, Louann Bizendine en su libo «El ceebo femenino» 1 1 lo siguiente: Una de mis pacientes egaló a su hija de tes años y medio, muchos ju guetes unisexo, ente ellos un vistoso coche ojo de bombeos en vez de una muñeca. La made iumpió en la habitación de su hija una tade y la encontó acunando al vehículo en una manta de niño, meciéndolo y di ciéndole: «No te peocupes camioncito, todo iá bien». 11 RIZENDINE, . (2007) El cebro femeio, 5 .ª d., ibs, pág. 3 3.
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Esto no es poducto de la socialización, sino de que el ceebo no es unise. Duante algún tiempo se discutió si las pefeencias po juguetes y juegos seguían los dictados del ceebo, o de la cultua. Se conoce ac tualmente que hay inclinaciones innatas. Incluso, se han visto en pima tes pefeencias po juguetes de diveso tipo. Los pimates macho se inte esaon po juguetes «masculinos», que puedan se lanzados al espacio y sean duos de ompe, y las hembas mostaon pefeencia po los «fe meninos», aquellos que les pemitan mejoa habilidades; igual que en los niños. Además, estos animales no mostaon ningún tipo de pefeen cias según su sexo, po juguetes de tipo «neuto». Puesto que los animales no tienen la pesión social que maca la cultua humana, este expeimen to, eama que las pefeencias se deben a las difeencias innatas de la condición biológica sexuada. Po ota pate, se ha visto que bebés con sólo un día de vida, emple an más tiempo en mia a los ostos si son niñas, o si son niños en mia objetos que se mueven. El examen más intenso de las caas no supone una necesidad, sino una aptitud natual e innata paa la obsevación: el ceebo femenino apota una pedisposición a es a cultad. Es deci, las pefeencias y aptitudes no son mea consecuencia de es teeotipos cultuales, sino de una pedisposición innata a un modo de e lacionase según el sexo. Cuando se eta la existencia de esos pesupues tos ceebales de la pesonalidad y de las tendencias de compotamiento, que muesta la biología humana, se está combatiendo la popia natuale za de la pesona vaón o de la pesona muje. Ahoa bien solamente son pesupuestos; la biología no aheoja la ealidad humana. Y además, tanto los ceebos masculinos y femeninos están pogamados po una combinación única y pesonal de genes y educación, de natualeza y cultua. 1.3. la pubertad se producen grandes cambios hormonales que rerman el cableado cerebral lineal en el vrón cíclico en la mujer
Duante la adolescencia el ceebo cece ápidamente, al compás de las homonas, eoganizando y po dando los cicuitos que macan el modo de pensa, senti y compotase. Hay egiones del ceebo que equieen los estógenos paa su actividad, tanto en las mujees como en los vao nes; en estas egiones están pesentes enzimas especícas que convieten la testosteona en estógenos. Y a su vez, los estógenos tienen sus ecep toes especícos en cantidad difeente en las divesas egiones ceebales.
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Figura 7: n las regi on es coricales subcoricales del cerebro humano exise dimorfismo generado por la p resencia de recepores de eseroides hormonales
Rgi on con bao n ivl d cpto to /� -
gio co alto ivl d cpto d to
Las áreas del cerebro humano que tienen una gran concentración de receptores hormona les son las más dimórficas, gracias a ello las hormonas ejercen su función diferencial en el cerebro del varón y de la mujer. En las mujeres es mayor la cantidad de receptores en la corteza frontal y media del sistema lmbico. En los varones es mayor en la corteza frontal medial , l a amígdala y el h ipotálamo. Se marcan en gris oscuro o negro las áreas de concen tración mayor en el cerebro femeni no, en g ris claro las áreas no di mórficas, y están rayadas las áreas de mayor cantidad en cerebros masculino s. Mod ificado de Goldstein , J. , 2001 .
De esta ma, los estógenos modulan la actividad ncional de las dife entes áeas12• La gua muesta la distibución dimóca de los ecep toes de estógenos en divesas áeas del ceebo femenino y masculino. A lo lago de la vida adulta, tanto en vaones como en mujees, existe muy poca elación ente las nciones cognitivas y las homonas endógenas13 12 OLDSTEIN, . ; EIDMAN, . ; HORTON, . ; AKRIS, .; ENNEDY, . . ; AVINESS, .; R , ARAONE, . , y SUANG, . . (200 1 ): «ormal sexual dimorphism of the adul human brain assessed by in vivo magnetic rsonance imaging>>, Ceb Cort, 1 1 , pp. 490-497. 1 3 HALAR, .; HINES, .; UMARI, ; EROTRA, .; EELER, ., y ARMA, g. (2005): «ex ierences and ndividual ierences in ognitive Perrmance and heir ationship to ndogenous onadal Hormones and onadotropins», Behaviora Neurosciec 1 19, pp. 104-1 17.
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Figura 8 : ambios hormo nales en el ciclo men srual de la m ujer L L L
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ciculantes. La homona masculina testosteona asienta el pensamiento es pacial, y lo hace con mayo meza en los pimeos estadios del desaollo que en la juventud y en la maduez. Po ello, las taeas que implican epe sentación espacial son patimonio del vaón; es deci, po témino medio los vaones tienen mayo endimiento en esas taeas. Los niveles de testos teona son más altos po la mañana que po la noche y más altos también en otoño que en pimavea. En los vaones esas habilidades tienen elación lineal invesa con la concentación de homona: los mejoes esultados los consiguen en los momentos en que la concentación es meno. Po el contaio, cietas capacidades cognitivas, más fáciles paa las mujees, y en las que po témino medio sacan mejo puntuación, vaían en nción diecta a la concentación de estógenos14• En las mujees las habilidades de cualquie tipo se potencian, o inhiben, en nción de las concentaciones de homonas sexuales, que vaían duante el ciclo mens tual (gua ). Este ciclo tiene un pico de subida y caída de estógenos antes de la ovulación, y tas la ovulación se poduce un aumento tanto de estógenos como de pogesteona, hasta la siguiente menstuación. La pogesteona, desempeña el papel pincipal: cuanto mayo es su concen tación tanto más simético nciona el ceebo. En la muje, a difeencia del vaón, los niveles homonales cambian cíclicamente, lo que cilita o diculta deteminadas actividades de modo oscilante. 1 4 FT, . (2005): «strógenos y cerebro», Mete cerebro, 10, p 1 9 .
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. ISTEN IFERENCIAS ANATÓMICS EN EL CEREBRO E VARONES Y MUJERES La existencia de áeas con difeente volumen en los lóbulos ceebales no implica difeencias de la inteligencia global en vaones mujees. Sin embago, el dimosmo sexual en las áeas elativas a la inteligencia sí su pone que ambos tienen difeentes sustatos neuales de la inteligencia. Diferencis ntómics de zons de l cortez cerebrl en vrones mujeres En los arones, la parte de la corteza parietal implicada en la percep cin del espacio es mayor que en las mujeres. Por el contrario, ellas poseen una mayor densidad de neuronas en las zonas de la corteza del lóbulo temporal, asociado con el procesamiento y la comprensin del lenguaje. La corteza prefrontal controla las emociones y pone freno a la amgda la; es mayor en las mujeres y adems madura un año o dos antes que en los homres. Tamién es mayor en las mujeres la corteza cingulada anterio que so pesa las opciones y toma decisiones y es el rea de las preocupaciones menores.
Diferencis ntómics de zons del sistem límbico en vrones mujeres De las estructuras del sistema lmico son mayores en las mujeres a) la ínsula que procesa los sentimientos iscerales; ) el hipotálamo que organiza las hormonas; c) el hipocampo que guarda memoria de las emociones; d) la glándula pituitaa, que produce las hormonas de la fertilidad y pone en mar cha el programa del cerero maternal mediante la produccin de hormonas. Por el contrario en los arones es mayor la amígdala, que procesa los instintos goernada por la corteza prefrontal. La amgdala contriuye a las respuestas emocionales rpidas y automticas e independientes de cual quier contexto. En el cerero del arn los centros del hipotálamo relacionados con la sexualidad tienen dole tamaño que las estructuras correspondientes del cerero femenino. Véase figura para la localizacin de las diersas reas cererales.
Compaativamente, las mujees con igual CI que los vaones, mues tan más áeas implicadas en la inteligencia 15 (gua ) . En los vaones la 1 5 HAIER, . ; ]UNG, . . ; EO, . A; HED, ., y KIRED, . (20 05 ): «e neuroanatomy of general intligence: sex matters», Neuromage, 25, pp 320-327.
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Figura 9: as mujeres implican para la inteligencia global diferentes áreas ue los ho mbres
ARN Materia grs
UR aea g rs
Maea bla ca
Fontl
Sgitl derecho
Izquierd
Derecho
Occpta
Las mujeres utilizan má s áreas, i ncluso de materia blanca, para la inteligencia qu e los varones. Los varones emplean áreas de materia gris de los lóbulos parietales y las mujeres de los temporales.
elación ente el CI y mateia gis es más intensa en los lóbulos ontal y paietal, asociados a la inteligencia sistemática, mientas que en las muje es es más intensa la actividad del lóbulo ontal que limita con el áea de Boca, implicada en el lenguaje. Es deci, alcanzan igual CI peo activan do difeentes egiones ceebales. Esto signica que no hay un patón único neuoanatómico paa la inteligencia geneal y, po eso, los tipos de ceebos masculinos y femeninos son equivalentes intelectualmente.
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3. EL CEREBRO FEMENINO TIENE MS /T FUNCIONAL, MIENTAS QUE EL MASCULINO ES MS ÉTC
El estudio de las disnciones ceebales de pacientes co n lesiones e n uno u oto hemisfeio, ha pemitido conoce que existe una asimetía ncional, una latealización, más ponunciada en el ceebo del vaón especto a la del ceebo de la muje. En el ceebo del vaón, los dos he misfeios se distinguen con nitidez en lo que se eee a deteminadas es tuctuas y en la ma y ecoido de vaias cicunvoluciones en las que se asientan, de ma pefeente, divesas nciones. Po el contaio, en el ceebo femenino los dos hemisfeios son más paecidos ente sí. e cientemente se ha empezado a cono ce que también dieen en cuanto a la oganización de cada uno de los hemisfeios, azón po la que no po cesan de igual ma una misma inmación. También dieen en la disposición de los haces de bas neviosas que unen los dos hemisfeios ceebales, y que constituyen el cuerpo callo so. Esta estuctua es más obusta en mujees especialmente en su sección posteio, el roete, así como en las uniones menoes ente hemisfeios. Es deci, en las mujees los dos hemisfeios inteactúan con mayo inten sidad que en los vaones, apotando un eezo a la simetía de sus he misfeios. La especialización de los dos hemisfeios del ceebo humano se ealiza sobe la base de la igualdad de lo humano. Solamente es el modo difeente de pocesa lo que hace distintas las habilidades popiamente femeninas, mayoes en la mayo pate de las mujees, de otas masculi nas, más altas po témino medio en los vaones. Tanto la asimetía hemisféica del vaón como la simetía de la mu je tienen sus ventajas y sus inconvenientes. Un ceebo asimético puede pocesa de ma auda inmaciones de áeas póximas, antes de que se tansmitan al oto hemisfeio; es lógico que es una ventaja de la asime tía, ya que cuanto meno sea la distancia ente áeas conectadas tanto más ápido es el pocesamiento de la inmación. Po ota pate, la si metía tiene la ventaja de pemiti una meno popensión a los tastonos ncionales ante daños de un hemisfeio, ya que puede usa el oto. III. DIFEENCIAS ESPECÍFICAS DEL CEEBO DE VAÓN Y DE M UJE . ETOOLOA P EL ANLISIS E LOS ESTAOS MENTALES Las técnicas actuales de las neuociencias (la tomogafía de emisión de positones, PE y las imágenes ncionales de esonancia magnética,
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Figura 1 0: l cerebro se pu ed e parcelar a fin de situar una neuroimagen funcional
B d
T
T Md
3
La parte supe rior de la fi gura m uestra secciones de cortes horiz ontales del cerebro desde la región ventral hacia la d orsal. En la parte inferior se m uestran secciones coronales del cerebro desde la región frontal (rostral) hacia la occipital (caudal).
I) pemiten analiza qué zona del ceebo está ncionalmente acti va, y en qué medida, mientas se ealizan difeentes actividades. Las imá genes ncionales han dado luga en los últimos años a la posibilidad de «ve» el ceebo en acción (gua O y po tanto pode conoce cómo pocesa los estímulos y como esponde. Gacias a esta tecnología, y al conocimiento de las áeas ceebales con mayo o meno númeo de eceptoes paa las homonas femeninas y masculinas, actualmente la idea establecida aceca de que las difeencias en las habilidades de mujees y vaones no esponden sólo a los difeentes
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niveles homonales, ha dado paso a un paadigma más amplio. En efecto, el ceebo del vaón y de la muje tabajan de manea difeente en áeas tan to cognitivas como de conducta; e incluyen lenguaje, memoia, emoción, visión, pocesamiento de caas, oientación espacial e incluso audición. Es impotante ecoda que hablamos exclusivamente de activación o desactivación de áeas ceebales como manifestación empíica y en ese sentido, como medida, del estado mental de las pesonas que de saollan en ese momento una deteminada taea o pocesan una emo ción. En este estudio cuando hablamos de afectos o de estados de lici dad, nos estamos eiendo no al sentimiento vivido subjetivamente, sino solamente a las emociones que subyacen. Las emociones son estados más complejos que las meas sensacio nes. Las econocemos expeimentalmente po los pocesos ceebales que elaboan y los gestos no vebales, o las alteaciones de los itmos cadia cos, etc., que las acompañan. Po eso se tata de povoca en el laboato io un deteminado sentimiento evocándolo con la visión de una toga fía, una secuencia de una película; o incitando a ecoda un deteminado momento emotivo, etc. De esta ma se puede elaciona posteiomen te el estado mental geneado con las imágenes de activación o desactiva ción de áeas ceebales tomadas en esos momentos con las técnicas de neuomagen. . DIFERENTE ILIA E VARONES Y MUJERES P IERSAS TAREAS Muje y vaón no usan las mismas áeas del encéfalo paa esolve muchas de las taeas, incluso cuando lo hacen con idéntico endimiento. El uso de difeentes vías es innato y viene deteminado en última instan cia po las difeencias de los genomas. Ahoa bien, aunque las homonas diigen algunos aspectos de la neuosiología masculina y femenina, las inuencias homonales sobe el ceebo no son nunca tan adicales como las que se dan, po ejemplo, en el contol de la apaición de las gónadas o de los caactees sexuales secundaios. ecogemos a continuación algunos pocesos analizados en la litea tua cientíca. Excede aquí explica las bases neuoanatómicas o neuo siológicas que subyacen a esos pocesos. Destacaemos exclusivamente la difeencia en cuanto a la activación de áeas ceebales, cuando una de teminada actividad la ealizan vaones o mujees. Y en algunos casos nos jaemos en la activación de las áeas ceebales cuando una deteminada taea la ealizan mujees en divesas etapas del ciclo menstual, a n de ve la inuencia de los niveles ciculantes de homonas.
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2. 1 . Para ls tas visuoepaciales los rones tienen mar hilid
Las taeas de oientación espacial, guiadas po la vista, son más fáci les, po témino medio, paa los vaones que paa el común de las muje es, como se ha puesto de maniesto en numeosos análisis. Ellos sacan mejo puntuación en puebas de memoización y detección de mas, en geometía, en la lectua de mapas, en la punteía en el tio, etc. Se ha estudiado qué ocue en el ceebo mientas se ealiza la activi dad de otación mental de objetos en las tes dimensiones. Esta actividad equiee imagina la gua miada desde distinta oientación. Cuando se ha ealizado un análisis compaativo ente hombes y mujees, que pe sentaban igual habilidad y simila puntuación, se ha po dido conoce que, aún entonces, usan difeentes estategias paa esolve mentalmente este tipo de taea • La gua muesta la difeencia existente en el patón de activa ción de la coteza ceebal cuando vaones y mujees hacen gia mental mente una gua geomética en las tes dimensiones. Las mujees paa esolve estos poblemas ealizan una activación bilateal en la zona supe io e infeio del lóbulo paietal, del gio tempoal infeio y de las áeas pemotoas. Los vaones muestan áeas de activación asiméticas: latea lizadas a la deecha del áea paietal-occipital, a la izquieda del lóbulo paietal supeio y de la coteza motoa. Hay, po tanto, difeencias tanto en las áeas que se activan como en la latealización. La ealización de esta actividad equiee el uso de áeas del lóbulo tempo al y paietal del hemisfeio deecho; estas áeas en el hemisfeio iz quiedo están ocupadas po la oganización del lenguaje. La asimetía de los hemisfeios explica que los vaones tengan más habilidad visuoespa cial, dado que tienen libe de las taeas de lenguaje esta zona en el hemis feio de la deecha y emplean plenamente ese lóbulo paietal. Po el con taio las mujees, con menos latealización de las nciones, tienen el lenguaje epatido en los dos hemisfeios y, con ello, ocupan paa esta nción zonas del hemisfeio deecho que se encagan de la capacidad vi suoespacial. Las difeencias están, pues, en las estategias cognitivas que equie en la intevención de divesas áeas ceebales (pate infeio de la gua ). La estategia femenina es pedominantemente de «ecuedo y eco nocimiento» (lóbulo tempoal-occipital del hemisfeio deecho) mientas RDAN, .; üSTENBERG, ; HEINZE, H. .; AEL, P y ncke, . (2002): «omen and men eibi dierent cortical activation patternsduring mental rotation tasks Nropchoa, 40, pp. 2.397-2.408 .
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la masculina es de «onstui» manipulando mentalmente el objeto a n de eoientao en el espacio. Figura 1 1 : strategias d iferenc iales para resolver problem as mentales de rotación espacial de objetos geométricos
UJEE
VE
Las mujeres muestran una activación (marcada en blanco) bilateral en el surco intra parietal y en el lóbulo parietal superior e inferior, en el giro temporal inferior y en el área premotora. Los varones muestran activación del surco derecho parietal-occipital, del sur co intraparietal izqu ierdo y del ló bulo su perior parietal izquierdo. La parte inferior de la figura muestra un esquema de la estrategia femenina, a dife rencia de la masculina, para resolver una tarea de rotación espacial, en la que alcanzan igual puntuación. Consiste en el mayor uso de ambos hemisferios y en incluir un tercer paso entre las conexio nes del área visual pri mari a (1 ) y la corteza del estriado (2) ; esta blece conexiones con la zona inferior temporal y occipital (3) y la corteza del estriado. La zona parietal (4) solapa también el surco intraparietal en las mujeres, y en ambos se al canza finalm ente la corteza premotora (5). Modificada de Jordan, K. , 2002 .
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La habilidad de las mujees paa esta taea «masculina» diee en distintas ses del ciclo menstual. Tas la menstuación cuando el nivel de los estógenos es mínimo aumenta la testosteona, ealizan esta acti vidad con una habilidad simila a la de los vaones (gua ), peo manteniendo su popia estategia. Sin embago, el endimiento empeoa con la elevación de estógenos. Las difeencias cíclicamente tempoales de las habilidades de las mujees en nción de los estógenos se debe a que estás homonas potencian la activación pefeente de áeas, situadas en uno u oto de los hemisfeio, que dieen en la cantidad de eceptoes ceebales paa la homona que poseen las distintas áeas. Figura 1 2 : Á reas cereb rales con maor inens idad de acivación seleciva en varones o en mujeres en areas visuoespaciales
Varones
Mujees
Aunque la puntuación de esta tarea mejora en las mujeres en situación de bajo ni vel de estrógenos, sin embargo siguen activando las áreas con mayor concentración de receptores de estrógenos, diferentes de las áreas empleadas por los varones. Modificada de Gizewski, E.R., 2006.
En ambos sexos la epetición de la taea mejoa el endimiento. Es deci, estas áeas del ceebo son plásticas en todos los hombes. 2.2. L mujeres tienen mayor uidez verbal que los varones
Las mujees aventajan a los hombes en uidez vebal. Esta activi dad equiee el ujo de inmación de uno a oto hemisfeio mejoa en las mujees en la situación en que la concentación de estógenos es alta, se en que las mujees tienen una espuesta ceebal dinámica más alta que en el esto de las ses.
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ción consciente del lenguaje y el deecho guadaía una mayo elación con la atención espacial inconsciente. Así po ejemplo, la solución escalo nada de poblemas, a tavés del uso consciente de eglas lógicas, implica ía el izquiedo; mientas que el deecho cumpliía una misión cítica en la esolución de poblemas mediante la pecepción intuitiva. En algunos expeimentos se ha podido segui el asto de la pecepción intuitiva den to del ceebo, ya que enconta solución a una cuestión equiee tiempo e intevienen multitud de pocesos cognitivos. Se ha intentado aveigua qué egiones ceebales se encagan de la eestuctuación y la pecepción intuitiva; esto es, el momento del «eueka». Los datos sugieen que ese es tado, que expesa la conciencia de habe esuelto un poblema lógico, pocede de la tansmisión al hemisfeio izquiedo del esultado de los pocesos inconscientes, que tabaja el hemisfeio deecho, y que llevan a la pecepción intuitiva 1• En síntesis, podemos deci que el hemisfeio izquiedo está motiva do paa la atención y la acción encada «hacia ea», extenamente, mientas que el deecho esta motivado paa la acción y la atención en cadas «desde el inteio». . NA INTELIGENCIA GLOBAL Y VARIOS TIOS DE INTELIGENCIAS EN TODO HOMBRE
La inteligencia es una capacidad multidimensional difícil de medi cuantitativamente. La pimea pueba de habilidades cognitivas paa me di la de inteligencia se debió a Binet 2 y e el oigen de los actuales coe cientes intelectuales (CI). Se tata de unas escalas méticas que pemi ten medi si la inteligencia analítica de un individuo es nomal, según su edad. La mente humana posee una estuctua permannte que apota, a cada hombe, una deteminada capacidad intelectual analítica, emocional y social. La pimea, conocida como sistemdtica, es po temino medio más ete en los vaones; mientas la segunda, la capacidad de empaa, (capacidad de pecibi el popio estado inteno, y el de los demás) suele se más alta, po témino medio, en las mujees. La inteligncia social abaca condiciones más amplias que la empatía. Nos centaemos en es1 NBLIC y LLINGER (2006): «Percepción intuitiva», Mente cerebro, 20, pp. 50-57. 2 ERGE, N (20 07) : «led ine! o los orígenes del cociente intelectual», Mente ce bro, 23, pp. 74-79.
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El áea del lenguaje está latealizada al hemisfeio izquiedo en los hombes y, en cambio, en ambos hemisfeios, en las mujees17• La activa ción ceebal duante las taeas de uidez vebal ocue en la coteza pe ontal, incluyendo el gio ontal infeio. Las imágenes de actividad cee bal duante los ejecicios de econocimiento de letas, ima o signicados, se encuenta latealizada en las egiones del gio ontal infeio izquiedo en los vaones, mientas que se activan las de ambos lados, izquiedo y de echo, en las mujees. Las mujees además activan selectivamente en el lado izquiedo el áea del tálamo. Sin embago, las difeencias en cuanto a la tealización son menos macadas que en las taeas de otación mental. En esumen, tanto las mujees como los vaones activan el lóbulo paietal supeio del hemisfeio deecho en las taeas de otación mental; los vaones activan el gio ontal infeio izquiedo y las mujees el gio ontal infeio de los dos hemisfeios al ealiza taeas de uidez vebal. Y las mujees activan un mayo númeo de espacios que los vaones paa ealiza ambos tipos de actividades 18• 2.3. Otras hilides con diferencias sen so
En otas habilidades, como las motoas, hay también difeencias. Las mujees supean a los vaones en los movimientos nos y secuenciales de los dedos. Po el contaio los vaones son más hábiles en taeas de ao ja objetos con pecisión; contolan mejo la musculatua axial, más ce cana al tonco. Tales difeencias se distinguen ya desde la tempana edad de unos tes años. También se ha descito 19 que los vaones activan el áea del gio su peio paietal y del infeio occipital del hemisfeio deecho, al ealiza taeas que equieen memoia a coto plazo; las mujees, con más capaci dad en este tipo de memoia, muestan un aumento de la latealización hacia el hemisfeio izquiedo en este áea. HAUSMANN, . (200 4) : «arón o mujer: cuestión de simetría», Mente cerebro, 7, pp. 58-61 . IZWSKI, . . ; RAE, . ; ANKE, . ; RSTING, . , y ENF, (200 6) : «en der-specic cerbral activation during cognitive tasks using nctional : comparison of women in mid-luteal phase and men», Neuroradioo, 48, pp. 14-20 ; MIN, H. ; AR MA, .; HINES, .; NDRW, .; IMMN S, A., y UMARI, (20 06) : omparable ac tiviy with dierential behavioural performance on mental rtation and overt verbal uency tasks in healthy men and women», E Brain R, 169, pp. 1-14. ELL, . .; ILLSN, . .; ILMAN, A. H.; AVE, ., y ILVERSTNE, P H . (20 06) : «ales and females dier in brain activation during cognitive tasks», Neuromage, 30, pp. 529-538 .
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En la taea de memoiza una lista de palabas que están escuchan do, las mujees exhiben una mayo intensidad en la activación en áeas de la coteza peontal que los hombes20• 3. DIFERENCIAS ESPECÍFICS EN EL PROCESAMIENTO E LAS EMOGONES
Las emociones básicas despietan los sentimientos elementales de miedo, ia, alegía, tisteza, acecamiento, epugnancia, cuiosidad, so pesa, etc. Son univesales y, a la vez, íntimos a cada pesona, ya que se elaboan en nción del inteio y alejadas de los estímulos inmediatos. En las emociones se distinguen tes elementos: a) la expeiencia subjetiva, o sentimiento, que puede se analizado inteiomente po cada uno y co municado hacia ea; b) los afectos, que nunca son neutos sino agada bles o desagadables, y c) el componente cognitivo del sentimiento, de pendiente de los pocesamientos de la coteza. Es deci la emoción se siente, se expesa y apota cono cimiento. El pesupuesto neual incluye el sistema límbico y el lóbulo tempo al con el qu e conecta, además de algunas egiones de la coteza peon tal. Y son pesupuesto neual esencial las zonas que inman aceca del cuepo: los sistemas de castigo y ecompensa y sus conexiones con la me moia. Po ello, una vez que la inmación sensoial es evaluada, al inte gala en la amígdala con la inmación pocedente de los sistemas de eezo, tanto de ecompensa como de castigo, las disposiciones innatas de la amígdala son activadas automáticamente y se ponen en macha las divesas espuestas a pati del hipotálamo y tonco encefálico. Po último, se incluyen los sistemas que pocesan las espuestas co poales. La espuesta se compone de vaios elementos: a) la activación del sistema moto paa genea postuas y gestos; b) la activación del sistema nevioso autónomo, cuyas señales van a genea en las vísceas el estado asociado habitualmente con la situación desencadenante; c) la activación del sistema endocino, y d) la activación de núcleos geneadoes de neu otansmisoes como la noadenalina, seotonina, dopamina y acetilcoli na. Los tes pimeos inciden en el cuepo causando el estado emocional y el cuato genea cambios en el pocesamiento cognitivo. TEIN, . .; ERRAM, .; PLDRACK, .; NAGNSN, .; REITER, H. .; AKRIS, . ; DMANM . . ; SUANG, . , y EIDMAN, . . (200 5} : «ex iernces in Prontal ortical rain ctivity uring of uditory erbal orking emory Nropschoo, 19, pp 5 0 9 - 5 1 9 .
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Se tata ahoa de conoce cómo pocesan las emociones los vaones y las mujees, y cuál es el dimosmo ceebal que pemite las difeencias. Los estudios de Eileen Ludes21 han puesto de maniesto que la cor te temporal femenina pesenta un patón de sucos más intenso, espe cialmente en el hemisfeio deecho. Los sucos aumentan la coteza sin aumenta la masa y pemiten mayo conexión ente las neuonas. Existe también un cieto dimosmo en la corte orbitoontal, im plicada en la epesentación de los estímulos emocionales, y en el silen ciamiento o en el eezo de los estímulos asociados al apendizaje y al contol socio-emocional. Desde el punto de vista anatómico, esta coteza se divide en dos egiones según las conexiones neuoanatómicas al hipo tálamo y la elación con el sistema neuoendocino. El ncionamiento de la coteza obitoontal anteio-media y posteio-lateal se difeencia duante el pocesamiento de las emociones negativas y positivas, especti vamente. En mujees, la actividad de la coteza a estímulos emocionales lin güísticos vaía dependiendo de la se del ciclo22• Concetamente, la acti vidad anteio-media paa estímulos negativos, ente a neutos o positi vos, incementa en la se pemenstual y decece en la postmenstual. Mientas que existe un patón inveso en la coteza lateal. Es deci, el ci clo menstual modula la especíca actividad de las egiones de la coteza obitoontal ante los estímulos emocionales. Los estudios de neuoimagen23 muestan que la amíga es una es tuctua cítica que paticipa en las difeencias de ambos sexos en cuanto a la espuesta de las memoias emocional y sexual. La amíga está de lante del hipocampo, en la pondidad del lóbulo tempoal. Es de gan impotancia paa la expeiencia emocional, ya que es esencial paa inte peta las emociones de otas pesonas. Esto se hace continuamente de modo inconsciente, y tiene valo paa la supevivencia, puesto que e que los estímulos extenos de acuedo con los inteeses del oganismo, es deci con su signicación b iológica. Las mujees poseen una mayo co nexión coteza obitoontal/amígdala que los hombes, lo que signica una mayo capacidad paa contola las eacciones emocionales.
UDERS, . (2004}: «os pliegues», Mete cerebro, 9, p. 5. PRTESCU, X.; PAN, H.; LTEMUS, .; UESCER, PLANECS, .; WEN, .; ILBERSWEIG, ., y TERN, . (2005}: «Ürbioonal cortex activiy rated to emoional prcessing changes acrss he menstrual ccle», PNAS, 102, pp. 16.060-16.065. HAMANN, . (20 05 }: «ex iernces in he esponses of he Human mygdala», Neurosciet, 1 1, pp. 288-293.
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3 . 1 . L mujeres son más vulnerables a situiones de conicto interpersonal
Las mujees son más vulneables que los vaones a la pesión psico lógica en elación con los demás que suponen los conictos intepeso nales. También son más susceptibles a algunas alteaciones psiquiáticas, tales como depesión, desodenes de ansiedad y tastonos de la alimen tación. Po ejemplo, existe difeencia de actividad ceebal, especto a los va ones, cuando ambos peciben estímulos lingüísticos desagadables24, y sobe todo si concienen a las elaciones intepesonales. En las mujees, las palabas desagadables activan signicativamente más el núcleo cau dado bilateal y el núcleo putamen izquiedo que las palabas neutas ( gua 1 3 ) . Sin embago, en la mayoía de los hombes no hay difeencias en el nivel de activación ente palabas desagadables y neutas. Los nú cleos caudado y putamen constituyen el cuepo estiado, que ecibe in mación de gandes áeas de la coteza y del sistema límbico y planica la espuesta motoa. Las difeencias ente los dos sexos en la actividad ceebal mientas pocesan estímulos no placenteos está en elación con los conictos in tepesonales. Estas áeas, que man el cuepo estiado, en la base del cáneo, y eciben inmación de gandes áeas de la coteza ceebal y del sistema límbico, desempeñan un papel esencial en las mujees al e gula la sensibilidad femenina a la inmación desagadable aceca de di cultades intepesonales. Esto es, el ceebo femenino, en las elaciones pesonales, eacciona con una alama mucho más negativa que el mascu lino ante la idea de cualquie conicto, y al estés. Se ha obsevado en atas que la estuctua del hipo campo, áea impli cada en el apendizaje y la memoia, cambia en espuesta al estés agudo o cónico de manea difeente en machos y hembas25• El estés a coto plazo causa un cambio difeencial en las neuonas: aumenta la densidad de espinas dendíticas en los machos mientas decece en las hembas. Las espinas son estuctuas donde las denditas eciben las señales excitadoas de otas neuonas. En cambio, en los machos, la complejidad del ambien te no afecta a las aboizaciones de las denditas. Este tipo de cambios en las neuonas del hipocampo, si se extapolan a los humanos, supondían IRA, . , ÜKAMT, ., ÜKADA, ., EDA, K y AMAWAKI, . (20 05) «ender diernces in brain activiy toward unpleasant linguistic stimuli concerning interpersonal rationships: an study», Eur Arch Psch Cin Neurosci, 25 5, pp. 327-333. . ILL, . (200 5) : «His brain, her brain», Scienc Ameican, 292, pp. 40-47.
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Figura 13: n las mujeres las palabras desagradables activan significativamente más que las palabras neutras el núcleo bilateral el núcleo putamen iquierdo Sgl
el
Corol
RONS
MUJRS E n los varones n o hay diferencias de activación entre las palabras neutras y desagrada bles. Modificada de Shi rao, N. , 2005.
difeencias en la inuencia del ambiente en el apendizaje: el estés agudo cilitaía el apendizaje memoia en los chicos lo educiía en las chi cas. Sin embago, sentise cohibidos a lago plazo haía más vulneable el hipocampo de los chicos, mientas que no afectaía a las chicas. Es deci, el ceebo de las mujees está mejo equipado p aa tolea el estés cóni co que el ceebo de los vaones. Se debe considea desde esta pespecti va en qué medida cómo, puede difei en ambos sexos el ambiente óp timo paa el apendizaje. 3.2. L mujeres tienen más capacidad de percibir los componentes emotivos
Tanto los vaones como las mujees detectan cambios en el tono de las voces. Sin embago, sólo las mujees eclutan nuevos ecusos adicio-
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Figura 14: Varones muj eres usan d iferentes estrategias para comprender la expresión facial de las emociones de alegría tristea
Expió fliz
Expió tit
Va
D
1
Mu
Cuando se ven y procesan caras con expresión feliz, varones y mujeres usan áreas de los dos hemisferios. Para las emociones negativas las mujeres usan el hemisferio izquier do y los varones el derecho. Modificado de Lee, T. M., 2002.
nales paa pocesa las voces cuando el cambio del tono tiene valo emo cional 2 6 . Se ha ealizado el estudio de la activación ceebal cuando se pesen tan a examen una seie de caas felices, ota seie de caas tistes y ota de expesión neuta, a un gupo de mujees y oto simila de vaones27• El econocimiento y pocesamiento de emociones positivas y negativas está latealizado en ambos hemisfeios, peo su pocesamiento está inteco nectado. En ambos sexos hay más activación con las caas felices del he misfeio izquiedo, en áea ontal bilateal y paietal izquieda. Sin em bago, paa las caas tistes las mujees activan más el izquiedo y los vaones más el deecho (gua 14). Esto sugiee que la latealidad del pocesamiento de la emoción cial es emocional y sexualmente especca: vaones y mujees usan coe CIRMER, . ; TRIAN, ., y RIEDERICI, . (20 05): «ex diernces in he pr attentive processing of vocal emoional eprssions», Neurort, 16, pp. 635-639. EE, . . . ; , H. - .; HSAINE, .; IA, -. ; D, h.- ; ENA, . . .; ANF, h. . H.; , P ., y a o . -H . (2002) : «ender diernces in neural co rrlates of cognition of happy and sad ces in humans assessed by nctional magnetic r sonance imaging», Neuroscience Lette, 333, pp. 13-1 6.
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latos neuonales bastante difeentes cuando pocesan caas con expesión feliz o tiste. 3.3. La memoria emocional es más intensa en l mujes
La amígdala, que desempeña un papel cítico en el apendizaje emo cional y la inteligencia social, es estuctual y ncionalmente dimó ca28. Las conexiones neuonales de la amígdala con el esto del ceebo la sitúan en un luga pivilegiado, tanto paa la espuesta ápida a los estí mulos, como a las inuencias siológicas y a las espuestas conductuales. Su localización adyacente al hipocampo inuye en la ceación y almace namiento de memoias. La amígdala esponde pimaiamente a la eza e intensidad de los estímulos emocionales placenteos, o desagadables, y está implicada en la mación de la memoia emocional. En geneal, las pesonas genean y guadan mejo en la memoia los acontecimientos emocionantes que los neutos. Las mujees etienen más etemente la memoia de las emociones que los hombes y ecuedan con más viveza los acontecimientos. Vaios estudios de neuoimagen han analizado el efecto de la emoción sobe la memoia29. Y se ha podido co noce que, aunque la intensidad del ecuedo es popocional al caácte emotivo tanto en vaones y mujees, sin embago, la actividad neual tie ne luga en la amígdala izquieda paa las mujees y en la deecha en los hombes. En las mujees, coincide en el mismo hemisfeio la egión im plicada en las eacciones emocionales y la egión que pocesa la memoia de las expeiencias emocionales, mientas que en los vaones estos poce sos ocuen en difeente hemisfeio. Se explica así el hecho de que las mujees posean mayo memoia emocional que los vaones. Además de las difeencias ncionales ente la amígdala izquieda y deecha ente vaones y mujees, existen también difeencias anatómicas. En pime luga, esta estuctua ceebal es mayo en los vaones30• Ota HAMANN, . (20 05 ), citado en 23 . ILL, .; HAIER, . .; ITE, . .; ALLN, .; LATRICK, .; WREN CE, ., y cols. (2001}: «ex-lated diernce in amygdala activiy during emotionally in uenced memoy storage», Neurobio Lear Mem, 75, pp. 1 -9 ; ILL, .; ESMND, . .; A, ., y ABRIEL, . . . (2002}: «ex dierences in he neural basis of emoional memories», oc Nat Ac Sci USA, 99, pp. 10.789-10.794; ILL, .; NCAER, .; LATRICK, . ; LKIRE, . ., y URNER, . (2004} : «ex related hemispheric lateralization of amygdala nction in emotionally inuenced memoy: an investigation», Lea Mem, 1 1, pp. 261-266. ° omo se coment anteriormente, el hecho de que unas estructuras cerebrales die rn en el tamaño según el sexo, se debe a que contienen gran cantidad de los receptors de
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difeencia estuctual es especto a las áeas neuonales con las que conec tan. En los vaones la amígdala tiene más conexión con el hipotálamo in teviniendo en la conducta sexual, como se tataá más adelante. Estos datos son coheentes con el papel que desempeña la izquieda y la dee cha en los adultos, y con las difeencias en el estilo cognitivo que usan los vaones y las mujees paa codica las expeiencias emocionales. La mayo memoia emocional no siempe es beneciosa paa las mujees, ya que puede lleva a desódenes de la ansiedad. Po ejemplo, se ha podido obseva31 el efecto que tiene la memoización de palabas de una lista, si se insetan palabas con contenido emotivo ente otas neu tas. Se afecta la memoización de aquellas palabas neutas pesentes jus tamente antes de las que tienen contenido emotivo. Este deteioo, ela cionado con la nción de la amígdala, es mucho mayo en la muje que en el vaón. 3.4. sentido del humor de las mujes es más emotivo
También vaón y muje usan de ma difeente el ceebo paa pe cibi y apecia el humo 32• La apeciación del humo supone b ásicamen te la pecepción de las inconguencias, paa lo que son necesaias vaias estuctuas ceebales. La compesión e integación del estimulo tiene un coelato neuoanatómico cotical; mientas que el sentimiento de dive sión o de echazo equiee estuctuas subcoticales. Tanto vaones como mujees pocesan los estímulos divetidos, o no divetidos, con activación de las zonas implicadas en el pocesamiento del lenguaje; ambos sexos muestan activación de las mismas áeas que paticipan en la compen sión semántica de lo coheente, y del humo, cuando se pesenta un es tímulo divetido. Incluso no hay difeencias en lo que encuentan dive tido los hombes y las mujees. La espuesta al humo pesenta caacteísticas univesales. Ahoa bien, las mujees eclutan egiones especícas del ceebo en mayo ex tensión que los vaones cuando se les pesenta un estímulo humoístico. En pime luga, activan la coteza peontal del hemisfeio izquiedo las hormonas sexuales. as diferncias en tamaño se cran ndamentalmente durante el de sarrollo temprano y dirigido por las hormonas sexuales. TRANGE, . .; HURLEMANN, ., y LAN, . . (2003) : «n emotion-induced retrgrade amnesia in humans is amygdala- and beta-adrnergic dependent», Proc Nat Acad Sci USA, 100, pp. 13.626-13.631 . M, . ; BBS, . ; , . ; ENN, , y E, . (2005 ): «ex diernces in brain activtion icited by hum, PNAS, 102, pp. 16.496-16.50 1.
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Figura 15: Varones mujeres perciben igual el sentido del humor usando d iferentes estrategias uees
oes
N
Los varones y las mujeres para procesar el humor activan la corteza de la zona de unión del l óbulo temporal con occipital ( 1 ) , g iro frontal inferior (2) y la zona extrema del lóbul o temporal (3). Las mujeres activan más que los varones la corteza prefrontal dorso-lateral del hem isferio izquierdo (4). Exhi ben además una activación de la zona subcortical, gene radora de dopamina que incluye el núcleo accumbens (Nac), de forma proporcional con la intensidad hu morística, a diferencia de los varones. Mod ificado de Azim , E. , 2005.
más que los vaones, lo que sugiee un mayo gado de pocesamiento ejecutivo y de codicación basada en lenguaje. Y exhiben además una mayo activación de la egión límbica, lo que muesta una mayo inte gación del conocimiento y la emoción (gua 1 5 ) . Además en las muje es la actividad del núco accumbens (Nac), que ma pate de la egión subcotical geneadoa de dopamina, se coesponde con la intensidad humoística; sin emb ago en los vaones no hay coelación. Es deci, hay en las mujees un mayo componente emocional ante el estímulo humoístico. Sin embago, y sobe la base de ecluta esta tegias divegentes, cada uno alcanza un sentido de lo divetido semejante y un compotamiento equivalente ante esos estímulos. Esto indica que las conductas no dependen de las divesas estategias que se usan paa pocesa. I INTELIGENCIA SOCIAL Y ALGUNAS ALTERACIONES EN LAS ESTUCTUS CEEBLES Los ceebos femeninos pedisponen más a la empatía y los masculi nos a la sistematición. Son dos dimensiones del pel cognitivo, que se equiliban en cada pesona. Sin embago, en algunas pesonas se dan ce ebos «extemos»: una hipe-sistematización con hipo-empatía y a la in vesa. Desde este punto de vista, el autismo puede considease como el
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extemo masculino33• Mientas que en el extemo femenino, las caacte ísticas de la empatía están exageadas y apaece blindada la capacidad de sistematiza. Algunos considean como ceebo femenino extemo el de los niños niño s con síndome síndo me de Wil Williams: liams: pestan una exageada exageada atención a las ca as y hablan con enome cilidad. Se conocen vaios tastonos que in volucan volucan la inteligncia social34• La base neuológica de la empatía coinci de con la bas b asee de la inteligencia social que tiene como coelato la nción nción coodinada de tes egiones: la amígdala, la coteza obito-ontal y on tal media, y el suco y el gio supeio supe io tempoal. tempo al. 1 . E AUTISMO, UN CEREBRO CL T
El autismo autismo es un tastono heedita he editaio, io, más ecuente ecuente en e n los vaones, vaones, y que se caacteiz caacteizaa po un desequilibio de la sistematizac sistematizació iónn y la empa tía (SE). Los autistas muestan décit en las caacteísticas que denen la inteligncia socia en téminos de comunicac comun icación ión y capacidad de imagi imagi nase la la mente de los demás. Los que padecen padece n este tastono tastono no son capa ces de entende enten de qué piensa la gente gente o qué les ocue; tienen falta falta de emo tividad e inteés; pesentan etaso o ausencia del lenguaje, y caencias paa la elación elación social, como p o ejemplo, ejempl o, no n o mian a los los ojos oj os.. Al Al mismo tiempo, pesentan exceso de compotamientos popios de una ete sis tematización, como es la epetición obsesiva po ejecicios que suponen pensa exclusivamente en téminos: entada-opeación-salida35• Además, estas habilidades de sistematización sistematización se centan en unas pocas po cas taeas taeas en e n las que se especializan y en las que llegan a se especialmente diestos, como matemáticas, música, memoización de hoaios de tenes, po ejemplo, etc. etc . Una Un a vaiante vaiante del autismo es el síndome de Aspe Aspege ge (AS) (AS) en el que los niños poseen una CI nomal, o alto, y que llegan a desaolla el len guaje. Sin embago, sigue siendo en ellos muy baja la capacidad de disci mina emociones po la expesión de la caa y paticulamente de los OJOS.
El autismo conlleva anomalidades en la estuctua y nción de la amíg amígdala, dala, en la l a coteza obito- obito -ontal ontal y en la l a coteza ontal ontal media me dia (gu (gu- ARN-EN, ARN- EN, . (20 02) : «he extrme extrme male male brain theory theory of autism», TNDS 248-254 . i Coitve Sciec, 6, pp. 248-254 ARN-EN, ., y ELMNTE, . . (2005): «utism: indow nto he vlopment of he he ocial ocial and he naly nalyic ic rain», Au R Neurosc, 28, pp. 109- 126. a disnción disnción neural del del autismo se ha visto visto también como una débil cohereca ge es , carncia de la nción nci ón de conexión de las percepciones locales y detalladas detalladas en la era; esto es, perepción global. na parelación de los estímulos y una atención centrada en los detalles.
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Figura 16: Perfil de compartimentación asimétrica en t rastornos rastornos de la capacidad de e mp ata ata
DD
Las regiones de los lóbulos frontales del hemisferio derecho son las más aumentadas respecto a los controles en los pacientes de autismo y en niños con «Desordenes del len guaje ligados al desarrollo» (DLD), y las occipitales las que menos. En negro se indican las unidades que tienen asim etría etría en el hem isferio isferio izquierd o, en gris las asimetrías asimetrías regio regio nales del derecho. Modificada de Herbert, M. R., 2005.
a 16). Las conexiones defeentes afeentes ente la amígdala la egión egión cotical cotical del ceebo, pedispone n a este est e tipo tipo de tastono tastonos:s: a) la ba b aja acti vidad de la amígdala supone décit en las taeas de infei emociones de las expesiones ciales; b) la educida actividad de la coteza ontal me dia del hemisfeio izquiedo genea escasa capacidad de empatía; c) la baja actividad actividad de la coteza obito-ontal obito -ontal da luga a la escasa capacidad de econoce los estados mentales de otos; la baja conexión del suco supeio tempoal tempo al genea la incapacidad de habla con sonidos. sonido s. Las disnciones en este cicuito paecen debidas a desódenes du ante el desaollo, asociados con la baja dosis de expesión de genes del comosoma X, que caecen de homólogo en el que paticipan en el dimosmo sexual3 6 • El autismo se asocia en conceto con los genes KUSE, .: «X-lynked genes and he neural basis of social cognition», Novartis Fo u n d Smp, 251, pp. 84-98. e han descrito dos regiones del cromosoma X implicadas en
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NLGN y NLGN que codican poteínas implicadas en las conexiones
neuonales37• neuonales 37• Existe, Existe, po tanto, falta de conexi co nexión ón de áea áeass concetas3 8 , de bido a alteaciones alteaciones en el volumen duante el desaollo desaollo embionaio emb ionaio y post natal. Se poduce una macocefalia postnatal, ente los 2 y los 4 años. Los cambios de volumen se genean en áeas especí espe cícamente camente latealiz latealizadas adas de ambos hemisfeios. Unas nciones son más vulneables a los cambios anatómicos que o tas tas y éstas pueden nciona con nomalidad. no malidad. La gua 1 6 ecoge las asimetías de volumen de egiones alteadas en ceebos de autistas, compaadas con el ceebo de sanos. Existe una asimetía mayo en los autistas en wnas coticales de la izquieda que de la deecha. La elación deecha-i d eecha-izquie zquieda da de volumen de cada áea es in vesa en los autistas especto a los contoles con toles.. Las áeas coticales más afec afec tadas son pecisamente aquellas que son esenciales paa las nciones cognitivas más complejas, como el compotamiento social y el lenguaje. 2. DESÓRENES EL LENUAJE LIAOS ESARROLLO (DLD)
El síndome DLD (desoden (deso den del lenguaje lenguaje asociado a alteaciones alteaciones del desaollo) tiene en común con el autismo la alteación de las asimetías egionales. Se ha compaado el ceebo de niños nomales ente 6 y 1 2 años, con niños niñ os autistas autistas y niños con desoden del desaollo del lenguaje lenguaje (DLD)39, buscando la asimetía en los volúmenes. En el DLD, a difeen cia del autismo, muesta una pequeña, peo signicativa, pédida de asi metía a la izquieda compaada con los contoles (gua 1 6 ) . 3. fNROME E URNER
Algunas caacteísticas del fenotipo ceebal de las mujees con sín dome Tune se asocian también con las caacteísticas de los autistas, el autismo autismo : la rgin 1 5q - 1 3 (prxima al gen gen que codica codica el rceptor rceptor ) ) y la 1 7q 7q 1 .2 (cercana (cercana al al gen que codica la proteína transportadora de la serotonina} . AMAISM .; QUAC, H.; ETANCUR, .; TAM, .; LINEAU, ., y cols. (2003 } : «utations «utations of he Xlinked Xlinked genes genes encoding neuroligins neuroligins 3 and 4 ar ar associated with with autism», Nat G, 34, pp. 27-29. ARN-EN, ARN-EN, . (2004} : «he cogniti cognitive ve neuros neuroscience cience of autism», autism», Neuro Neu rosur Pch, 75, pp. 945-48. HERBERT HERBERT, . . ; IEGLER, IEGLER, . .; . ; EUTSC, EUTSC, . . ; ' RIEN, . . ; ENNED ENNEDY, . .; ILIEK, P .; . ; AKRDJIV AKRDJIV,, . .; HDGSN, .; AKE AKEK, K, .; AKRIS, . , y NESS, NESS, . r. (2005}: «rain asymmetries in autism and developmental language disorder: a nested whole-brain analysis», analysis», Brai, 128, pp. 21 3-226. 3-226.
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como es la falta falta de econo cimiento de expesiones expesiones ciales ciales de miedo. Las mujees (45,X) tienen un aumento signicativo del tamaño de la amíg dala, mayo incluso que los vaones, mientas que es sin embago meno en las mujees 47,X. Como se comentó antes, antes, tienen tienen altea alteada da la la mo noamin no aminaa oxidasa A(MAO A(MAOA) y B(MA B (MAOB OB),), que q ue está implicada en la desami nación oxidativa de vaios neuotansmisoes incluyendo la dopamina y seotonina. La actividad anomal de estos neuotansmisoes conlleva de sódenes del desaollo neuonal, pedominantemente los décit de cog nitiva social. SIGN SI GNIF IFICA ICADO DO HUMANO HUMANO DE LA LA DIFEENCIA DIF EENCIA DE LAS ESTR EST RATEGIAS ESPE E SPECÍFI CÍFIC CAS Se pueden saca algunas conclusiones del dimosmo que se ha ana lizado. En pime luga, las taeas que equieen actividad pefeencial de áeas de uno u oto de los hemisfeios las ealizan mejo, en geneal, los vaones cuyo ceebo es ncionalmente más asimético que el ceebo de las mujees. mujees. Mientas que las taeas taeas que equieen el p aso de la l a inma ción de un hemisfeio a oto, las ealizan mejo las mujees, po témino medio, debido a su mayo simetía simetía ncional. ncional. Las difeencias anatómicas, químicas y ncionales de los ceebos de muje muje y de vaón apo tan la aíz aíz biológica biol ógica del de l distinto distinto ecuso ecuso a los he misfeios ceebales paa acomete divesas taeas po pate de unos y otas. Este Este difeente difeente tazado de los lo s cicuitos neuonales neuo nales es innato in nato y causa causa do po la difeente dotación genética que ecibe cada uno en la concep ción. La constucción del ceebo duante el desaollo embionaio y la vida postnatal, amplica estas difeencias genéticas a tavés de las con centaciones centaciones de las homonas especícas especícas de cada sexo. sexo. En efecto, efecto, como se se ha efeido, efeido, la mayo mayo o meno meno asimetía asimetía ncional de d e los dos hemisf h emisfeios eios se establece ndamentalmente en la etapa fetal y, posteiomente, los ni veles homonales potencian la ncionalidad de las áeas de mayo con centación centación de los eceptoes ecepto es con los que inteactúan inteactúan especícamente. especícamente. Las difeencias en las estategias cognitivas y emocionales popias de cada sexo sexo supone que ambos poseen p oseen memoias, habilidades, pef p efeen een cias, etc., popias del sexo femenino o masculino. El ceebo de la muje está cableado cableado de un modo m odo tal ta l que esulta esulta más pedispuesto paa p aa la empa tía, mientas que el del vaón está mejo pedispuesto paa oientase en el espacio exteio. Ese modo, difeente y especíco de inteesase y ela cionase con la l a ealidad, ealidad, es posible po po la difeencia difeencia de la asimetía asimetía en la latealización de los hemisf he misfeios eios del vaón vaón y la muje. El cento de gavegave-
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dad intelectual del vaón está hacia el polo de las actividades popias del hemisfeio izquiedo. La muje amoniza mejo lo acional y emotivo po posee mayo simetía ncional de los hemisfeios. Ahoa bien, aunque las difeencias ente vaones y mujees tengan un sustato biológico, las semejanzas son mucho mayoes que las difeen cias40. Todas ellas son habilidades humanas. Po eso, lo que en unos son pedisposiciones innatas, puede se modelado en los otos, mediante deci siones libes que genean actuaciones y modulan la conguación ceebal. Todo ello es conguente con la elación natual de ambos en la tans misión de la vida. Hunde las aíces en los cicuitos popios del ceebo animal que dicta los compotamientos que pemiten la supevivencia de la especie. Los ceebos animales macho y hemba empiezan desaollán dose de modo difeente en el úteo mateno, de ma que los impulsos especícos están plasmados en los cicuitos neuonales. Se entiende que en las sociedades humanas cultualmente menos tecnicadas, la mejo visión espacial del vaón le capacitaía paa la caza de ecusos ea del ámbito educido de la vida milia. La muje, con un ceebo con las nciones más bilateales, tiene un uso de lenguaje que pemite la comunicación de estados intenos y cilidad con los mo dos de comunicación no vebal, esencial paa el cuidado de los hijos pe queños. Intui lo que les ocue a otos, econocelo en la expesión cial, es una habilidad natual que es ndamental en una made, paa enten de a los bebés y sabe lo que necesitan. Tales difeencias macan el sentido natual humano del difeente pa pel de la made y el pade en la educación tempana del niño. La con guación amónica del ceebo del niño equiee ecibi los modos po pios de manifestación de los afectos de la masculinidad y feminidad. Se ha descito41 que la comunicación tempana afectiva ente los pades, o allegados, y el niño oigina una alineación de los estados mentales, que pue de entendese como una coodinación mutuamente egulada ente los he misfeios deechos e izquiedos de pades e hijos; po el contaio, la falta de caiño implica una gave pédida de este modo de comunicación. En las pimeas fases del desaollo de l niño, el hemisfeio deecho es más activo y cece más ápidamente. La comunicación ente los hemisfe ios deechos pemite las comunicaciones afectivas que sitúan y asientan los estados emocionales pimaios a pati de señales no vebales. La na40 MURA, . (1 992} : «erebro de varón y cerebro de mujer», Ivtigació e cia, noviembre, pp 77-84. 4 1 IEGUEL, . . (1 999}: The devepig mid ward a Neurobio ofIteeoal peiece, he uilrd Press, ew ork, ondon.
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tualeza, a tavés de la lactancia, ha p evisto que la made tenga l a ceca nía natual en los pimeos momentos de la vida, con una mayo capaci dad de activa su hemisfeio deecho. Pasada esta pimea fase, hacia los dos años desaolla dominante mente el izquiedo, que es el intepetado de las nciones lógicas paa deduci causa efecto. La alineación ente hemisfeios izquiedos potencia la atención a los objetos en el mundo, y menta los diálogos eexivos en los que el lenguaje es utilizado como co de atención sobe los esta dos mentales de otos. Esta doble alineación puede menta la intega ción bilateal ente los dos hemisfeios. De hecho, hasta nal del tece año de vida no se poduce en el niño la comunicación ente ambos he misfeios, y con ello inicia la amonización pesonal del hijo educado po ambos. La patenidad y matenidad, incluso en el nivel biológico, no es asi mética solamente en lo que especta a la concepción y gestación y da a luz. La conguación básica del ceebo del hijo equiee de elación pe sonal con muje y vaón, made y pade, o de quienes hagan sus veces. Como todo lo humano el sentido pesonal no se agota en el sentido biológico, poque la vida humana no es mea biología. Como todo lo hu mano, la pesonalización de la intínseca condición sexuada no está dicta da po la biología y, sin embago, no se poduce a espaldas de la condición biológica natual. Po el contaio, lo especíco de la condición sexuada se deiva de la nalidad de las inclinaciones natuales del hombe. Como con todo lo humano, los pocesos de supevivencia animal quedan eleva dos a capacidad cognitiva y elacional, libe, pecisamente al pesonaliza lo copoal. Si un vaón nace inteesado en constui, analiza y exploa y una muje nace inteesada en la expesión emocional, en la elación y en mantene la amonía, signica que su ceebo se ha hecho paa ese dise ño. Las indicaciones, que les popo cionan aquello paa lo que nacen he chos, dicen a cada uno qué es el cento de gavedad de su se y con ello la azón de su ob a en todas las dimensiones pesonales de una vida huma na milia, pofesional y social. Lo que nos viene dado, y no es elegido, centa la oientación de la miada a la ealidad. Más aún, lo que dene un cuepo de vaón o de muje, es signo de la pesona que se es.
CAPÍTULO III E CEREBR Y S FECS IGDS NSI SI ÓN DE ID
NEUOLOGÍA DE LOS AFECTOS VINCULADOS
A LA POCACIÓN
La capacidad de ama es la cultad más especícamente humana. Hay dos tipos de amoes ligados a la tansmisión de la vida muy asenta dos, po eso, a la copoalidad sexuada pesonal. La inclinación íntima y ponda de la made a ama a los hijos ocu pa una posición única y pivilegiada en la conducta y los sentimientos humanos. Esta tendencia natual es una de las más podeosas motivacio nes de la acción humana. En cieta medida, junto al amo omántico, o enamoamiento, se ha celebado en todas las épocas, y en las difeentes manifestaciones del ate, como unas de las más bellas e inspiadas mani festaciones de la conducta de los hombes. Todo hombe tiene la potencialidad de quee a alguien como hijo , y además hacelo con corazón de pade y de made. Peo el coazón de ma de no es igual al de pade, y a la invesa, poque los cicuitos del ceebo de vaón y del ceebo de muje son como son, y divesos en cada uno. La matenidad cambia a la muje tansmando su ceebo estuctual y ncionalmente; y, en cieta medida, de ma ievesible: deja huella. El ceebo innato de la muje esponde, poniendo en acto los cicuitos más etes de la natualeza, a las consignas básicas que se inician con el ceci miento del feto y avanzan y se eezan hasta el nacimiento. Más tade, duante la lactancia, el tacto, el olo, y la intimidad piel conta piel, man tiene en la made un estado mental muy peculia. También los vaones pades biológicos, y las mades y los pades adoptivos, y en geneal las pesonas tas un contacto íntimo y diaio con
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un bebé, desaollan esa inclinación natual que se pesonaliza en el modo de ama matenal. Las claves físicas (olo, tacto, etc.) genean nuevas pis tas neuoquímicas en el ceebo, que cean y eezan los cicuitos coes pondientes y genean un vínculo ete y aaigado. Es el cerebro matea El amo omántico genea también un intenso vínculo especíco en la elación ente un vaón y una muje. En el cerebro enamorao se genea un estado en buena medida simila al ceebo matenal, y usando estate gias similaes, peo también distintas, en el vaón y la muje. La ma de apego del enamoamiento añade al amo matenal y patenal un componente eótico. Componente que genea el vínculo especíco del cerebro emparao que también tiene algunos componentes divesos en el vaón y en la muje. Como coesponde a este tipo de estudio, no se tataá la neuosio logía de la afectividad en geneal, ni de la poceación y el place sexual, en geneal. Se analizan los datos de la liteatua cientíca aceca del di mosmo ceebal que es el pesupuesto, y apota la pedisposición pa ticula, al amo sexuado y a la matenidad/patenidad especícas del se humano muje, y del se humano vaón. Los datos de las neuociencias se han obtenido, con las técnicas que se señalaon en el capítulo anteio, analizando las emociones placenteas que poducen la vista de una togafía del hijo o de la pesona amada, o togafías con contenido eótico, o incluso la sensación placentea que puedan poduci el olo de deteminadas sustancias. La neuología de estos afectos está especialmente ligada a la copoa lidad sexuada. Tienen en pime luga un sistema emocional especializa do que ecibe entadas sensoiales, las intepeta, y genea espuestas de conducta autónoma y endocina. En segundo luga, paticipan un conjunto de sistemas especializados de memoia a coto plazo, que mantienen la inmación sobe los estímulos pesentes; y a este sistema se unen unas nciones ejecutivas que ecupean inmación de lo guadado en la memoia. Lógicamente se equiee una activación de la coteza. Y en ultimo témino, se ealiza la elaboación de la espuesta emocional, que conlleva cambios de conducta, cambios del siste ma nevioso autónomo pesión ateial, itmo cadiaco, sudación, etc., y cambios de las espuestas homonales que son señalados continuamente al ceebo tanto po al uta neual como po la uta química. A medida que se poducen esos cambios, la pesona los pecibe y si gue su despliegue tempoal. Senti una emoción incluye la expeiencia de esos cambios yuxtapuesta a las imágenes mentales que iniciaon el ciclo. Cuando los compo nentes que acabamos de descibi ncionan juntos, es inevitable la expeiencia emocional consciente. Esto es, paa se conscien-
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Efectos mentles med idos por ne urohormons neurotrnsmisores Oxitocin: Mimosa encuentra placer en ayudar y serir. Cortisol rispado arumado estresado sensile fsica y emocional mente.
sopresin igilosa en segundo plano energas masculinas sutiles y agresias
Dopmin: eurotransmisor que participa en la regulacin los moi mientos y en los circuitos de compensacin, cuya actiidad genera una sen sacin agradale
tes de una expeiencia el contenido inmativo deb e esta en la memoia activa o ncional y, a su vez, hace efeencia a uno mismo. Es bien co nocido que el hecho consciente univesal no es «los sentimientos exis ten», sino «yo siento». 1. ÁREAS CEREBALES IMPLIAS EN LOS VÍNCULOS AFECTIVOS
Los componentes neuales que pocesan los afectos ligados a la tansmisión de la vida, son divesas estuctuas pefectamente coodina das. Algunas de ellas pesentan dimosmo estuctual o ncional. El cuado esume las divesas áeas implicadas. y algunas de ellas se pesen tan en la gua 1 7. Figura 1 7: a pas cerebrales y localiación de áreas implicadas en las emociones
Corteza cerbr
b iunvo
ll
x TALM IPA AMÍGA Cgl
Crp
R
dl
El núcleo central, de las tres capas concéntricas del cerebro, humano es el más antiguo en la escala filogenética y es el pri mero en formarse en el desarrollo emb rionario. Se co noce como cerebro retiliano por ser el ámbito del control de las funciones vegetativas, de los deseos, e i nstintos in conscientes. Está cubierto por el conjunto de estructuras que forman el sistema lmbico que procesa las emociones, y este, a su vez, puede ser con trolado por la tercera capa, la corteza cerebral
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Cortez cinguld Es la parte medial de la corteza cereral que perte nece al sistema lmico y participa al igual que el giro cinguldo en los mecanismos de la emocin y motiacin. Comisur nterior Haz redondo de firas neriosas que cruza la lnea media cereral. La parte anterior son firas de los ulos olfatorios y la posterior une los lu los temporales Cortez entorrinl. ecie aferencias de las reas de asociacin y do pamina y proyecta al hipocampo. Cuerpos mmilres cleo del hipotlamo posterior implicado en los circuitos de memoria deido a que sus aones alcanzan el hipocampo a tra és del frni. órnix. Firas del sistema lmico que recie del hipocampo y las ena a los cuerpos mamilares del hipotlamo Hipocmpo. onsolida las informaciones recientes transformando la memoria a corto plazo en memoria a largo plazo. Gnglios bsles. eci en informacin de g randes reas de la corteza cereral y del sistema lmico, y su funcin est relacionada con la planifi cacin y la m emoria motora Giro dentdo Del hipocampo recie aferencias de la corteza entorrinal Ínsul. Lulo situado en el fondo del surco de ili, entre los lulos frontal, temporal y parietal. Núcleo prventriculr cleo que proyecta la informacin del tlamo a la corteza cereral de forma no especfica Núcleo suprquismático o supróptico Del hipotlamo anterior Parte de sus células producen oitocina que se segrega a la neurohipfisis Tálmo Estructura sucortical diidida en tres partes relacionadas con el sistema lmico y la corteza. ituada en el centro del cerero constituye la a de entrada para todos los estmulos sensoriales a ecepcin del olfa to. En la zona posterior lateral encuentra el núcleo geniculdo, esencial para la isin consciente fr para las definiciones el Diccionario de las Neurociencias. F Mora y M. anguitetti, lianza Ed
Coeza cingulada
La coteza cingulada se divide en dos egiones ncionalmente dife entes. La egión anteio es el áea que tiene mayo contibución al modo de compotase, debido a que modula todo el espacio que el cee bo emplea paa la afectividad y paa el ajuste de las espuestas en la ela ción con los demás. Las difeencias individuales en la espuesta a aquellos etos que se pesentan en elación a los demás y lo demás, es pate de lo que descibe la pesonalidad. La zona anteio suele se asimética en geneal. Un lado deecho más pominente es más ecuente en las mujees que en los vaones. La
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Figura 1 8 : a ona anterior de la cortea cingu lada de recha tiene un tamaño variable
G t
S
Sg g
En las mujeres, l a zona anterior de la corteza cingu lada es mayor en e l hem isferio derecho que en el izquierdo. Cuando la zona derecha ocupa gran extensión abarca la región del sur co intralímbico, o del segundo surco de la corteza cingulada. Modificada de Pujol, J., 2002.
gua 1 8 muesta que el tamaño de la zona anteio deecha vaía mucho de unos individuos a otos. En geneal, el mayo tamaño implica pesen cia de la coteza límbica y paalímbica, lo que conlleva que el áea ante io y la posteio sean ncionalmente difeentes. Se ha estudiado la elación ente la pesonalidad, o estilo de compo tamiento, y la vaiabilidad mológica de la egión anteio del gio de la corteza cingua en mujees y vaones1• Los que poseen una gan exten sión de la egión anteio deecha de la coteza cingulada, se desciben a sí mismos como pesonas con gan peocupación po los poblemas que se les puedan pesenta, tímidos con los extaños, se tigan fácilmente, tienen miedo a lo incieto. Es deci, caacteísticas de la intovesión y de PUJL, .; EZ, .; EU, .; ARDNER, .; ALLEJ, . ; ADE, ., y PA, (20 02) : «natomical ariability of the nterior ingulate yrus and asic imensions of Human Personality», Neuromage, 15, pp 847-855.
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una dependencia emocional de los demás. Cuando esta pesonalidad se da en mujees suele habe una gan expansión de la zona anteio de la coteza cingulada del hemisfeio deecho. Solamente en las mujees esta egión es más gande en el hemisfeio deecho que en el izquiedo, lo cual es llamativo ya que, en geneal, el ce ebo de las mujees es más simético que el de los vaones. Sin embago, está en concodancia con el mayo ecuso al sistema límbico y el papel que desempeña el hemisfeio deecho en el contol del compotamiento. Este hemisfeio es más ecaz que el izquiedo en pocesa las señales de aleta, e inteviene en las eacciones que se dispaan po los estímulos. Tam bién en el lóbulo ontal deecho se pocesan las espuestas a las emocio nes de miedo y disgusto. Po el contaio, el izquiedo está más implica do en el contol de la motivación y compotamientos de acecamiento. Las pesonas extovetidas y con gan iniciativa, tienen mayo supe cie del áea izquieda de la coteza cingulada posteio. CEEB O MATENAL
El ceebo matenal inicia su constucción con el comienzo del em baazo, con el delicado diálogo molecula que pemite la simbiosis pe cta made-hijo, tas la anidación del embión en el úteo. A lo lago de la gestación sintetiza homonas y su ceebo está inundado po ellas. Hay cambios en estuctuas ceebales que cambian sus estados mentales; es deci, cambia la ma como p iensa, siente y mia la ealidad. El ceebo es especialmente plástico con la atención a la vida incipiente y deja hue llas en los cicuitos neuonales, que son imboables. El ceebo matenal es un ceebo motivado, siempe atento y deci didamente potecto, que pedispone a la made a cambia sus eacciones y sus pioidades en la vida. Otas taeas pasan a segundo plano. El cee bo es así; cuanto más intensamente se hace algo, más neuonas se dedi can a ello. Señala Louann Bizendine en «El ceebo femenino»2, que la pime a ase que debeía deci un niño es «mamá te encogí el ceebo». En efecto, el ceebo disminuye de volumen total en los últimos meses del embaazo, ecupeándose ceca del tiempo del pato. La causa de esa con tacción no es que se piedan neuonas, sino que la actividad exige una conexión muy intensa ente las neuonas. Con tal actividad, se hace ea2 .
., p
122.
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lidad que algunos caminos secundaios se tansman en auténticas autopistas, que son, en gan medida, paa toda su vida. Los cicuitos neuonales del amo matenal ecogen los de los cee bos matenales de las hembas animales. El poceso de vinculación ani mal emplea un mecanismo que activa la vía especíca de los sistemas de ecompensa del ceebo. Cada alumbamiento en la natualeza tae un valo a la Tiea; la hemba que le da a luz siente ecompensa po la nueva vida. En el alumbamiento humano, es povebial la alegía mate nal po el hijo que tae al mundo, po el valo inconmensuable de la no vedad adical que es cada hombe3• 1. L COMPS DE OTOCINA
La oxitocina es un nonapéptido libeado po el hipotálamo a tavés de la pituitaia posteio. Sintetizada po el ceebo mateno, desempeña un papel cental a tavés de su nción de dispaa los cicuitos de la con anza de la made. Duante el pato, el ceebo matenal está conectado con pecisión al hijo tavés de la oxitocina. Cuando el bebé está a témi no, emite señales que bajan la pogesteona matena, al tiempo que se po duce una pimea subida de oxitocina. Los pulsos de oxitocina se epiten a lo lago del pato hacen al úteo contaese al ceebo activa ecep toes cea nuevas conexiones ente las neuonas. La lactancia también eeza el ceebo matenal mediante la libeación de oxitocina po el contacto físico con el bebé que succiona. La neuohomona oxitocina está cucialmente implicada en el poce samiento del vínculo matenal 4 además de media la memoia de elacio nes pesonales, social, el apendizaje 5• lgo tan prondamente natural humano puede elicar los trastornos emocionales que sue la madre ante un aborto espontáneo. on más motivo se dan en el caso de un aborto provocado. ebería ser un motivo de relexión los sistemas de anticoncepción, que intentan que la muer no sepa si estuvo o no embarazada y acostumbrala así a erradicar la señal de alerta de la emoci ón maternal. as consecuencias deshumanizantes de cortar las raí ces más prondas del ser del hombr engendran, necesariamente, una violencia desmedida e incontrolable. 4 NSEL, . ., y NG, . . (200 1 ): «he neurobiology of attachment», Nat R ., 2, pp. 129-136; ENDRICK, . . (2000): «Ütocin, motherhood and bon ding», Exp Physiol, 85 , pp. 1 1 1- 12 4; PEDERSEN, . . ( 1 997): «Ütocin control of ma ternal behavior. egulation by sx steroids and ospring stimuli», A Acad Sci. 807, pp. 126-145. 5 ERGUSON, . , NG, . . ; HEARN, .; NSEL, . ., y INSLOW, . , (2000) : «ocial amnesia in mic lacking the otocin gene Nat Get, 25, pp. 284-288.
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La made siente eufoia po la elevación de oxitocina dopamina; la pesencia en el ceebo de estas sustancias poduce estados mentales de deseo de unión, o apego. El ceebo matenal está así pedispuesto a asu mi el vínculo consciente del amo al hijo, que, cuiosamente, desconec ta el pensamiento juicioso las emociones negativas. Así mientas en el ceebo matenal se encienden los cicuitos del place que poducen esta dos de alegía apego, no «puede ve» en el hijo defecto alguno. Los sentidos, vista, oído, tacto sobe tod o olto se hacen intensos. El olo el tacto del bebé jaán los cicuitos del ceebo de tal manea que se induce de ma natual el afán de potección defensa. 2. ÁREAS CEREB ES ACTIVAAS Y S ESACTAAS
Las técnicas de neuoimagen han pemitido obseva las áeas cee bales activadas cuando la made contempla togafías de los hijos, te niendo como contol las de otos niños de simila edad, de miliaes o conocidos como contoles adicionales. La gua 1 9 muesta la actividad ceebal especíca del amo matenal. Como puede obsevase todas las egiones activadas son bilateales. Las egiones de la coteza que apaecen activadas, están sólo indiecta mente asociadas con pocesamientos cognitivos o emocionales «eleva dos», en el sentido de teoizados. Se activa la coteza de la ínsula media, el gio de la coteza cingulada en la zona vental, la coteza obito-ontal peontal lateal; una egión de la coteza occipital, cecana al áea vi sual la coteza fusifome lateal. Divesas áeas de la capa subcotical se activan también especca e in tensamente: los ganglios basales, tanto el cuepo estiado (putamen núcleo caudado) como el gb pal/i; la sustancia nega con la que conectan. Se encontó, además, activación de la pate vental-posteio del tá lamo que solapa con el ceebo medio, en la egión paacental de mate ia gis. La activación de esta zona está elacionada especícamente con el amo matenal. ecibe conexiones diectas con áeas del sistema límbico que contienen gan densidad de los eceptoes de las dos neuohomo nas; también está implicada en la supesión del dolo duante expeien cias de intensa emoción como puede se el nacimiento del hijo 6 • La e ND, .; , . .; VNAS-BERG, .; ANG, .; , .; ROSAWA, .; GREN, . ; OSEN, .; EKMAN, . , y UNDEBERG, . (200 2} : «patd massag-lik sti mulation induces long-trm cts on nocicption: contribution of otocinrgic mcha nisms», Eu Nrosci, 16, pp. 330-338.
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Figura 19: egiones activadas en el cerebro maternal
Iq
v
En la corteza se activan la ínsula medial la zona ventral el giro de la corteza cingulada anterior (Ca); la corteza orbito-frontal (-F) y prefrontal lateral (pFL); una región de la corteza occipital (O) cercana al área visual y la corteza fusiforme lateral (FL). La actividad subcortical es tam bién b ilateral en el estriado , E. No se muestran en la figu ra la zona de sustancia negra y de la sustancia gris de la región paracentral y la parte ventral-posterior del tálamo, que también se activan. Modificada de Bartels, A. , 2004.
gión p aacental de mateia gis tiene también conexiones con la coteza obito-ontal 7• La coteza obito-ontal lateal se activa con el place vi sual, los estímulos visuales, táctiles y oltivos que son otos aspectos de las emociones positivas del amo matenal. Po ota pate, las mades humanas, a difeencia de las no-humanas, desaollan emociones adicionales al instinto matenal, de ansiedad, tiste za e incluso sobesalto a los uidos y que constituyen sistemas de potec ción de los bebés8• La activación del gio de la coteza cingulada anteio elacionada con la ansiedad y la tisteza9, sugiee un potente vínculo de sentimiento de empatía de la made y ugencia o peocupación po la atención del niño; con ecuencia, se expesa en la llamada depesión pos pato. Las mades activan el gio sime, implicado en el pocesamiento de la expesión de las caas, tanto po el aumento de atención, como po 7 avada, ., ompany, , eedor, ., ruz-izzolo, .., einoso-uarez, F, (20 00) . he anatomical con nections of he macaque monkey orbioontal cortex. review. Cereb. Cort 1 0, pp. 220-242. 8 ORBERBAUM, . P.; EWMAN, . .; HORWITZ, . .; UBNO, . .; YDIARD, . .; HAMNER, . .; NING, . ., y EORGE, . . (2002) : « potenial role r halamo cingulae circuitry in human maternal behavior», Biol. Psychiatry, 51 , pp. 431- 445. 9 TTI, .; AYBERG, H . .; RANNAN, . . ; INNIS, . ; EABEK, , y , (2000): «ierential limbic-cortical correlates of sadness and anxiey in healhy subects: implications r aective disorders», Biol. Psychiat, 48, pp. 30-42.
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Figura 20: egiones desactivadas en el cerebro maternal y en el cerebro romántico
La corteza p refrontal med ia ( pF m) , la corteza cingulada posterior (cCp) , la corteza tempo ral media (cTm), la zona de unión parieto-occipital (-P) y los polos temporales (PT). Por último está también impl icada la am gdala (A) . Modificada de Bartels, A. , 2004.
la emoción10 que conlleva. Esta activación es especíca de la vinculación matenal y tiene un enome sentido: la habilidad que pemite una ápida lectua de lo que les ocue a los niños. Po último, hay egiones que se desactivan en el ceebo matenal ( gua 20). El patón de desactivación es bilateal, aunque afecta ndamen talmente al lado deecho. Las áeas en que se supime la actividad están asociadas con las emociones negativas y con la elaboación de enjuicia mientos; man pate del llamado ceebo social. Son las áeas del hemis feio deecho, peontal lateal, occipital-paietal, gio paacingulado on tal, la coteza cingulada posteio, la tempoal media y el polo tempoal. En e l ceebo matenal se inactiva la amígdala en ambos lados (gu a 20). La amígdala, que pocesa las emociones negativas de agesión y miedo 1 1 y está implicada en los enjuiciamientos sociales y emocionales12, PESSOA, .; ENNA, .; UTIERREZ, ., y NGERLEIDER, . . (2002): «eu ral processing of emoional ces requires attention», Proc Nat!. Acad. Sci. USA, 99, pp. 11.458-11.463. REITER, H. .; TFF, . .; ALEN, P. .; NNEDY, . .; A, . .; KNER, . .; TRAUSS, . .; HYMAN, . ., y OSEN, . . (1996): «esponse and habituation of the human amygdala during visual processing of cial expression», Neuro, 17, · 875-8 87; ORRIS, . .; RIT, .; PERRETT, . .; OND, .; UNG, . .; ALDER, . ., y LAN, . . (1 99 6) : « dierential neural response in the human amyg dala to fearl and happy cial expressions», Nature, 383, pp. 81 2-81 5. LS, . ; RANEL, ., y AMASIO, . . (1 99 8) : «he human amygdala in so cial udgment», Nature, 393 , pp. 470-474.
EL CEREBRO Y LOS AFECTOS LIGADOS A TRANSMISIÓN DE VIDA
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contiene eceptoes de oxitocina que modula el cicuito neual que sub yace al conocimiento social 13• La oxitocina egula la amígdala educiendo el miedo y modulando la agesión. De este modo el ceebo matenal eac tiva los cicuitos de elación humana ejeciendo una nción clave en el pocesamiento de los afectos. El cerebro social alinea la corteza frontal medial e inferior con la amg dala creando una ruta que potencia el procesamiento de los estmulos rele antes socialmente
III. CEEBO ENAMORADO DEL VAÓN Y DE LA MUJE 1. ÁREAS CEREB ES ACTIVAAS Y REAS ESACTIVAAS
El llamado amor romdnco o enamoamiento, es una de las conductas humanas más «ilógicas«: es involuntaio, intensica o disminuye emociones, y se hace ciego a los defectos, o deciencias del oto. En este sentido se dice de la made que está enamoada de su bebé y se han podido analiza las coincidencias neuonales de ambos afectos14• En ambos estados mentales se activan wnas comunes y se desactivan las mismas wnas sub coticales. En el ceebo enamoado, a difeencia del matenal, no se activan las egiones del ceebo medio. Po ota pate, en este tipo de vínculo se ac tivan especícamente áeas del hipotálamo, hipocampo y gio dentado, que no se activan con el amo matenal y que están implicadas en la exci tación sexual. Las egiones que se activan pefeentemente en el amo omántico, es tán implicadas en el pocesamiento de oto tipo de emociones, como la exEl circuito formado por el sistema lmico, el ncleo dorsomedial del t lamo y la orito-frontal y prefrontal est implicado en la regulacin de la conducta seual Estos circuitos estn estrechamente relacionados entre s a traés del fascculo cereral medio que incluye los principales centros responsales de los sistemas cererales de recompensa y castigo
RSC, ; SLINGER, .; EN, Q.; IER, .; IS, .; DDANTI, .; RU E, H. ; ATTAY .; ALLOFER, ., y YER-INDENBERG, . (20 05 }: «Ütocin odu lates eural ircuitry r ocial ognition and ear in Humans», The Joual of Neus ciece, 25, pp 11.489-11.493. ARTELS, ., y EKI ,. (2004}: «he neural correlates of maternal and romantic !ove», Neuromage, 2 1 , pp 1 . 1 5 5 - 1 . 1 6 6 .
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clusión social, o las expeiencias placenteas tales como el contacto fico. Estas wnas ceebales eejan no tanto el place sexual, como el inteés po conoce la intención positiva de vinculación intepesonal 15• Son wnas de la coteza peontal, de la wna paietal-tempoal, y de los polos tempoales, que constituyen un pel de áeas invaiablemente activadas con la capaci dad de detecta las emociones e intenciones popias y de otas pesonas. Las áeas comunes activadas, man pate de los cicuitos de ecom pensa que tienen una alta concentación de eceptoes paa las neuoho monas oxitocina y vasopesina, que median la adquisición de vinculacio nes pesonales1 6 ; la densidad de los eceptoes diee en estas áeas según el tipo de sentimiento que pocesan. La gua 20 muesta las áeas especícamente desactivadas del cee bo omántico, compaadas con las inactivadas también en el ceebo ma tenal. En ambos vínculos se supime la actividad de áeas en que están asociadas con las emociones negativas y con la elaboación de enjuicia mientos, el llamado cerebro socia Las neuohomonas oxitocina y vasopesina están implicadas en el pocesamiento del vínculo matenal y de apaeamiento animal 17• Los ci cuitos neuonales que se activan en el ceebo omántico, son un sistema de motivación difeente del áea ceebal del impulso sexual, aunque ten ga wnas que se supeponen. Los efectos de ese amo «echaw», el ena moamiento tempano, al igual que los efectos iniciales de los nacóticos, dispaan los cicuitos de ecompensa. Se poduce una cieta «adicción» en esos pimeos estadios amoosos, de ma que hay anhelo po el senti miento extasiado de esta juntos y hasta puede llegase a una cieta depen dencia mutua del oto. Las manifestaciones de afecto de la paeja sellan el 1 5 ALLAGER, H. ., y RIT, . . (2003): «unctional imaging of "theory of mind», e Co Sci., 7, pp. 77-83; ISENBERGER, . .; IEBERMAN, . ., y LLIAMS, . . (2003): «oes reection hur? study of social exusion», Sciece, 302 , p. 5 .64 3; RIT, . ., y RIT, . ( 1 99 9) : «nteracting minds - biological basis Sciece, 286, pp. 1.692-1.695; OLLS, . .; 'ERTY, .; RINGELBAC, . .; N CIS, .; WTELL, ., y LONE, F (2003): «epresentations of pleasant and painl touch in he human orbitoontal and cingulate cortices», Cb. Cort, 13, pp. 308-317; RUNET, .; ARFATI, . ; HARDY-AYLE, . ., y ECETY, . (2000 ) : « P investigation of he attributi on of intentions with a nonverbal tas>, Neuromage, 1 1, pp. 1 57- 166. 1 6 OU, F ; RIBOLLET, .; UBOIS-AUIN, . , y REIFUSS, . . ( 1 9 9 1 ) : «ocali zation of high-anity binding sites r otocin and vasopressin in he human brain. autoradiographic study>>, Brai R. 555, pp. 220-232. 1 7 NSEL, . ., y UNG, . . (200 1 ). «he neurobiology of attachment», Nat R ., 2, pp. 129-136; ENDRICK, . . (2000): «Ütocin, motherhood and bon ding», . Physio, 85 , pp. 1 1 - 12 4; PEDERSEN, . . ( 1 99 7): «Ütocin control of ma ternal behavior. egulation by sex steroids and ospring stimuli», A. Acad. Sci., 807, pp. 126-145.
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vínculo y dispaan los cicuitos ceebales de la conanza, asociada a la sececión de la oxitocina. El impulso impulso de enamoamiento en amoamiento está siempe latente, peo pe o pemanece enamoado equiee los cicuitos ceebales de vinculación pesonal y la memoia emocional. Cuando se desaolla desaolla este poceso po ceso se necesita necesita meno estímulo estímulo de oxitocina y dopamina paa sostene sosten e el vínculo vínculo emocional. emo cional. El impulso impulso básico paa p aa la vinculac vinculació iónn ománti o mántica ca está integado integado de ma ma in nata en los cicuitos del ceebo que se pelan p elan duante el desaollo desaollo cee bal uteino. Posteiomente, se lab an vaiaciones vaiaciones individuales individuales en los ci cuitos del afecto y la conanza, según los cuidados que se eciban en la inncia inncia y las pimea p imeass expeien expeiencia ciass emocionales. emocio nales. El enamoamiento genea una elación emocional ente las dos pe sonas que paece tene «vida popia», necesidad de se alimentada paa pemanece y hace pemanente el vínculo afectivo. La disposición indi vidual paa enamoase y cea cea ese vinculo vinculo,, como paa la ceación de los divesos divesos tipos tip os de vínculos afectiv afectivos, os, puede pue de afectase afectase po las l as vaiaciones vaiaciones en los cicuitos ceebales causadas po po la expeienc expeiencia, ia, a tavés tavés del estado ho ho monal del ceebo. Po ejem ejemplo, plo, el estés del del entono en tono puede p uede alenta o e na la ceación de vínculos. vínculos. En geneal, los vínculos emocionales y los lazos que se establecen con las pimea p imeass guas guas potectoas duan toda tod a la vida: vida : se convieten convieten en en pate de los cicuitos ceebales po la vía del eezo dado en las expe iencias iencias eiteadas eiteadas de cuidados sicos sicos y emocionales, o po su ausencia1 8 • Son So n los cicuitos cicuitos de seguidad seguidad y conanza. Si estos son escasos, el impul so de enamoamiento e namoamiento se da, peo p eo tiene el sello de a coto plazo; la vincu vincu lación emocion em ocional al a lago plazo plazo p uede se más dicil de loga y mantene. El ceebo ceeb o es así; así; y los vínculos natuales n atuales dejan deja n huella en él y afectan afectan a la popia biogafía, aunque como es obvio no de la ma deteminante de lo genético. El hecho hecho de que que paa p aa danos a con conoce oce a ndo, ndo , o llega ll ega a co noce a ndo a una pesona, sea necesaio conoce la histoia, la bioga fía pesonal, es de una ponda lógica natual. 2. DIFER DI FERENCIAS ENCIAS EN EL VARÓN Y MUJER
La conducta de vinculación, cuyo pesupuesto emocional incluye el contol po las neuohomonas neuohomon as poducidas po po la pituitaia pituitaia y el hipotála18
lgunas lgunas estadísticas estadísticas sustentan que las personas se enamoran de otras que tienen al gún parecido a los padres naturales o adoptivos. ICKS, . (2003): «lección de pare a», Mete cerebro 4, pp. 84-89
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mo, dieen en vaones mujees. El ceebo masculino emplea la vaso pesina paa p aa la vinculación vinculación social milia. Mientas que el ceebo fe menino usa pimodialmente la oxitocina los estógenos. Los vaones tienen más eceptoes de la vasopesina vasopesina las mujees más eceptoes paa la oxitocina. Ambos neuopéptidos aumentan los niveles de dopamina. Y ambos, vaones mujees, eaccionan a la invesa ante el estés. Los vaones ex peimentan impulso imp ulso las mujees echazan los impulsos. La azón paece se que la homona del estés, el cotisol, bloque b loqueaa la acción acción de d e la oxitoci oxitoci na en el ceebo femenino femenino . Los datos de un análisis ealizado sepaando en un gupo los vaones en oto las mujees, evelaon que en ambos se activan las egiones es pecícas del vinculo omántico (gio dentado e hipotálamo) que no se ac tivan en el ceebo matenal. No obstante, la egión vental de la coteza cingulada anteio, que se activa en el ceebo matenal, muesta también una activación en el ceebo enamoado femenino, peo no en el mascu lino. En esumen, el pocesamiento de ambos sentimientos, matenal enamoamiento, implica áeas comunes otas difeentes, difeentes, e implica acti vación de unas desactivación de otas. Es deci, los pocesos de estable cimiento de vínculos afectivos siguen un mecanismo de activación de los sistemas de ecompensa del ceebo que es simultáneo con la desactiva ción de los cicuitos esponsables del juicio cítico de las emociones emocio nes ne gativas. La activación especíca de egiones del hipotálamo en el ceebo enamoado eeja el componente de impulso eótico, inheente a este sen timiento timiento 19• I DIMOFI DI MOFISM SMO O DEL DE L CEEBO CEEBO SEXU SEXUAL Una cuestión cental que se plantea actualmente, es hasta qué punto los mecanismos ceebales establecidos duante el desaollo fetal son 1 9 RNOW, . .; ESMOND, . .; ANNER, . .; LOVER, . H.; OLOMON, .; PN, . . ; UE, UE, , y TS, . (2002): «rain activation and sexual arousal in he althy, heterosexual males Brai 125, pp. 1.014-1.023; ERRIS, . ; NOWDON, . ; NG, . . ; NG, . . Q.; IEGLER, IEGLER, .; GURBIL, .; UDWIG, UDWIG, . ; ULTZ-ARK ULTZ-ARKEN, EN, . .; , .; ÜLSON, . , et a (200 1 ) : «unctional «unctional imaging of brain activ activity ity in cons cious monkeys monkeys respondin respondingg to to sexuall sexuallyy arousing cues», ,, 1 2 , pp. 2. 23 1 -2 .2 36 ; MA, .; ER, . .; ER, . .; RGOUIN, ; UDOIN, .; BERT, ., y UREGARD, . (200 2) : rea reass of brain activtion activtion in males and an d females females during viewing viewing of erotic lm excer excerpts», pts», Hum Brai Mapp, 16, pp. 1-13.
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jos, jos , y condicionantes «inexibles» d e una tendencia sexual, sexual, e incluso de un compotamiento compo tamiento sexua sexuall 2º. El dimosmo sexua sexuall del ceebo es un hecho. hecho . No hay datos que apoyen que el hombe pueda nace con un ceebo se xualmente neuto, que después sea modelado socialmente, con indepen dencia del sexo biológico. El ceebo se difeencia, como ceebo de vaón o como ceebo de muje, antes del nacimiento; y sobe esta base actua án las homonas pincipalmente en la inncia y pubetad, y a lo lago de la vida. La conducta sexual está en elación diecta con la epoducción. En los animales la difeenciación sexual del sistema nevioso cental es mea mente biológica, y bastante simple tanto en los aspectos mológicos como ncionales. En el se humano, humano , el poceso es mucho más complejo, complejo , puesto que se añaden ctoes psicológicos, sociales, cultuales y de con ducta pesonal, que se supeponen a los biológicos y se inuyen mutua mente. Como coe co espo sponde nde a los actos humanos la tansmisión tansmisión de la vida vida no se educe a los pocesos p ocesos siológicos que la sustentan, sustentan, sino que se abe a la capacidad pesonal de entega y aceptación de la pesona del oto sexo. Lo cual no signica que la conducta sexual sea abitaia, ni indife ente. Existe, como se comentó anteiomente, una coincidencia adical, natual y no meamente cultual, ente el gesto humano que expesa la donación-aceptación don ación-aceptación mutua en la unión copoal de un vaón vaón y una mu mu je, y el gesto de engenda: esa unión es justamente la que pemite que se hagan mutuamente fecundos. Esa coincidencia adical, anatómica, siológica y exist existencial, encial, hace que el signicad signicadoo de la unión unió n copoal peso p eso nal vaón-muje no esté sometido a las ideas de moda, o a las opciones. Ni tampoco educida a la satiscción del meo impulso natual que lleva a los actos popios po pios de la tansmisión de la l a vida. vida. La tansmisión tansmisión de la vida humana humana tiene un caácte caácte pe pe sonal. so nal. De ahí que lo que conocemos de la neuología de la epoducción animal no sea extapolable, sin más, a la neuología sexual humana. El instinto epoductivo animal es una tendencia podeosa, y en el hombe la eza del deseo amooso tiene motivaciones subconscientes, peo que están contoladas po estuctua estuctuass ceebales subcoti subco ticales. cales. En efecto, efecto, en el 20
oda persona se eperimenta habitualmente a sí misma como varón o como mujer coincidiendo con la condición genética y fenotipo masculino y femenino. n casos excep cionales la identidad sexual está en conlicto con la anatomía y sexo biológico (transexuali dad) y en o tros casos la o rientación sexual sexual heteros heterosexual exual típica que implica la atracción o el deseo amoroso por las personas del sexo opuesto, se dirige hacia personas del mismo sexo (homosexualidad).
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hombe, el cicuito implicado en la egulación de la conducta sexual está mado po el sistema límbico y el tálamo, que conecta con la coteza obito-ontal y peontal. Estas áeas se elacionan ente sí a tavés del scículo ceebal medio, que incluye los pincipales centos esponsables de los sistemas ceebales de ecompensa y castigo; tales sistemas tienen el contol po la coteza del lóbulo ontal, especícamente humano. Esto signica, po una pate, que su sentido natual no es abitaio. al mismo tiempo, que no existe un condicionamiento deteminista que haga que «lo sentido» tenga necesaiamente que se «onsentido». ma que el hombe no tiene la deteminación o automatismo d e los instintos de los animales no es lo mismo que deci que el sexo se elige, o que la conducta sexual es indifeente humanamente. AS REAS CEREBRLES EL HIPOTLAMO QUE PROCESAN
LA CONUCTA SEUAL SON IFERENTES EN EL VARÓN Y LA MUJER
El hipotálamo, que ma pate del sistema límbico, es un áea cu cial paa la egulación de la epoducción y nciones autónomas. Las zo nas ceebales asociadas a la tansmisión de la vida son dos egiones del hipotálamo eguladas po los esteoides sexuales: el áea peóptica y cen tomedial del hipotálamo. La gua 2 1 muesta dos cotes de estas áeas que pemiten visualiza las divesas estuctuas. Figura 21 : s uema de dos cortes coronales de l área dimórfica p reóptica del h ipótalamo
En un corte coronal de la zona anterior (rostral) , se pueden ver do s de los n úcleos inters ticiales del hipotálamo anterior: NIHA1 y NIHA2. Otro corte coronal hacia la región cau dal, permite la observación de los otros dos nú cleos intersticiales N I HA3 y NI HA4, la zona posteromedial del núcleo de la estría terminal (NETpmit) y el núcleo paraventricular (NP V). Ligeramente modificada de Guillamón , A., 2007.
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Desde lo s tabajos de Goski se conocía que en la ata existía un nú cleo sexualmente dimóco del áea peóptica (NSD-APO). En 1 9 8 5 , Saab and Flies21 descubieon e n el áea peóptica del hipotálamo del ceebo humano un núcleo equivalente a este. Coesponde al NIHA, tiene el doble de tamaño y doble númeo de células en el vaón que en la muje. Son tambien de mayo tamaño, en el vaón, los núcleos intesti ciales del hipotálamo anteio NI HA y NIHA, y la zona posteomedial del núcleo de la estía teminal (NETpmit). El núcleo sexualmente dimóco del áea peóptica se desaolla ha cia la mitad de la gestación; de hecho, se distingue ya en el ceebo fe tal 22. Tas el nacimiento, el volumen y el númeo de células no alcanzan aún el 1 8 % y %, espectivamente. Sin embago, alcanza un pico en el númeo de neuonas ente los dos y los cuato años. Posteiomente, se establece la difeencia según el sexo, debido a que en las mujees se van pediendo neuonas mientas en los vaones pemanecen hasta los 50 años. La pubetad inntil en que se poduce el baño del ceebo en homonas sexuales, es impotante paa la consolidación del dimosmo del hipotá lamo. Las áeas ceebales que pocesan la conducta sexual son de mayo tamaño en el vaón que en la muje. Coesponden al hipotálamo y a zo nas adyacentes del sistema límbico conectado al ceebo eptiliano y a la coteza ceebal ontal (gua 17). 1.1. Regulación hormonal del dimorsmo sual
En la egión pe-óptica del hipotálamo se poduce un decapéptido, la homona libeadoa de gonadotopinas (GH), que actúa sobe la hi pósis anteio contolando la sececión de ho mona luteinizante (LH) y de homona estimulante de los lículos (FSH). Estas homonas, a su vez, contolan la sececión de homonas gonadales (testosteona, estóge nos y pogesteona). 21
WAB, . , y LIERS, . (1985): « sexually dimophic nucleus in the human brain Sciece, 228, pp. 1 .1 12-1 .1 17. 22 WAB, . (1995): «evelopment of the human hypothalamus», Neurochem R, 20, pp. 509-5 19 ; WAAB, . , y HMAN, . . (1995): «exual dierentiation of he human hypothalamus in relation to gender and sexual orientation», Neurosci , 18, pp. 264-270; E, ; , . . ; INWARI, .; DGAR, . . ; RGELLO, . ; NES, . ., y BET, . (200 0): «he interstiial nuclei of he human anterior hypothala mus: an investigation of sexual variation in volume and cell sie, number and density», Brai R, pp. 254-258 .
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La pesencia o ausencia de testosteona duante el peiodo peinatal, diige la apaición de una ed neual masculina, o femenina. La impeg nación en sentido masculino equiee la pesencia de los testículos fetales, que bican testosteona. El ceebo tansma esta homona en esta diol, mediante un poceso de aomatización. Los estógenos, cuando es tán a alta concentación masculinizan las edes neuales. Y sin embago, no masculinizan a las mujees, a pesa de que éstas los biquen en mayo concentación en el ovaio fetal. Se debe a que duante el peiodo peina tal, la homona se une a una poteína tanspotadoa, la al-fetopotei na, y el complejo homona-tanspotado se intoduce en el inteio de las neuonas. La concentación de estógenos es, po esto, en el ceebo femenino meno que en los vaones. Las homonas sexuales actúan en el ceebo egulando la expesión de genes, mediante la unión a un ecepto intacelula. La causa de que existan áeas dimócas en el hipotálamo de vaones y mujees, es la desi gual distibución de los eceptoes de estógenos y andógenos. Los eceptoes intacelulaes de estógenos23 están pesentes a dife entes concentaciones, según el sexo, a lo lago de la zona ostal-caudal del hipotálamo (gua 22). Las mujees tienen más ecepto es que los va ones en la egión ostal de la diagonal del áea de Boca (DBB), en nu cleo ventomedial y en la egión caudal del cuepo mamila (MB). Los vaones tienen más densidad de eceptoes de estógenos que las mujees, situados en el núcleo sexualmente dimóco del áea medial peóptica, el núcleo paaventicula y el áea lateal hipotalámica. Los eceptoes de andógenos en el hipotálamo humano también se hallan distibuidos de ma difeente en vaones y mujees24• Geneal mente los vaones expesan más númeo de eceptoes nucleaes que las mujees en el hipotálamo caudal y en el complejo cuepo mamila (MBC). En los vaones, a difeencia de las mujees, se obseva gan in tensidad en las neuonas de la diagonal al áea de Boca, en las del núcleo lateomamila (LMN), y en el medial mamila (MMN) . Las intensas difeencias, según el sexo, de la concentación de ecep toes en el áea del cuepo mamila del hipotálamo posteio, son debidas a las difeencias de concentaciones de andógenos ciculantes. Esta es RUIJVER, .; ALESAR, . ; SILA; NGA, . . ; NMEOA, ., y WAAB, . (2002): «strogen eceptor istribution in te Human Hypotalamus in elation to ex and ndocrine tatus», Comp. Neurol, 454, pp. 1 1 5-1 39. ERNANDE-ASTI, .; RUIJVER, .; DR, . . , y AB, . (2000): «he ex ierences in the istribution of ndrogen eceptors in the Human Hypotalamus», Comp. Neurol, 425, pp. 422-435.
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Figura 22: os receptores n ucleares d e estrógenos y andrógenos se d istribuyen en varones y muje res de forma desigual a lo largo del eje rostro-caudal del hipotálamo
d d
En los tres cortes coronales, desde la región más rostral a la caudal del hipotálamo, se señalan en negro las zonas de mayor concentración de los receptores en las mujeres y en punteado las zonas de mayor concentración de receptores en los varones. Las dife rentes áreas se designan con las abreviaturas: Fornix, Fx; Comisura anterior, AC; Núcleo paraventricular, PVN; Núcleo supraquiasmico, SCN; Núcleos sexualmente dimórficos, SN; Núcleo supraóptico, SON; Diagonal área Broca, DBB; Núcleo hipotálamo ventrome dial, VMN; Cuerpo mamilar, BM; Núcleo medial mamilar, MMN, Núcleo lateromamilar, LMN. Modificada de Kruijver, F . P. M ., 2002, y Fernandez-Guasti, A., 2000.
tuctua está implicada en la egulación de alteaciones de la sexualidad humana, como la pubetad pecoz, posiblemente poque inhibe la libea ción de gonadotopinas. Sin emb ago, estas difeencias de concentación de eceptoes de andógenos en el MBC no paece que tengan elación con la oientación e identidad sexual. La pogesteona es también un potente modulado de la actividad neuonal. Esta homona actúa sobe muchas neuonas, incluidas las de la coteza ceebal. Su acción tiene inuencia en la depesión pospato en
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los cambios de humo y estado de ánimo asociados a la menstuación. La pogesteona se sintetiza a pati del colesteol en las células de la glía, y ealiza nciones de comunicación intecelula. Además, en el hipotálamo se han encontado difeencias sexo-depen dientes en los neuotansmisoes. Las difeencias en las eacciones emo cionales ente ambos sexos tienen una base biológica que, en pate, de pende de cambios en los neuotansmisoes inducidos po estas homonas. La acción de las homonas gonadales sobe el ceebo se poduce de una ma totalmente inconsciente, peo afecta al modo de actua, a la activi dad intelectual y al estado de ánimo. . L HOMBRES CECEN EL TIPO E ESENCENANTES SEALES E LOS ANIMALES En la mayoía de los mamífeos, el olo juega un papel ndamental en el instinto sexual. Las feomonas son sustancias químicas segegadas po el oganismo y que al se detectadas po oto individuo, afectan al ce ebo neuoendocino y al compotamiento epoducto. Las feomonas que segega la hemba, oquestan los compotamientos especícos del sexo del macho. Según el punto de vista tadicional, la difeenciación se xual queda jada duante el desaollo del ceebo; las homonas sexuales inducen la mación de los centos que contolan el compotamiento sexual del macho, e impiden la mación de esos centos ceebales de la hemba. Sin embago, ecientemente25 se ha compobado que, en atones, el compotamiento epoducto como macho o como hemba, no queda totalmente deteminado en el desaollo. La pecepción de feomonas ha pemitido hace cambia el compo tamiento sexual en la ata hemba adul ta2 6 . En estos expeimentos se ha obsevado que la clave está en el ógano vomeonasal. En efecto, el cambio de compotamiento se poduce en ato nas mutantes en el gen Tpc, que codica paa una poteína con n ción de canal iónico especíca del ógano vomeonasal. Además, cuando se elimina dicho ógano en el animal adulto, aunque no se modiquen las homonas sexuales, se induce un compotamiento sexual masculino, que incluye agesión a las cías y falta de compotamiento de la lactancia. MCI , ; X, ., y , . (200 7): nctional circuit underlying male se xual behaviour in the female mouse brain. Nature doi:10.1038/nature06089. A, . ., y REEDVE, . (2007): «emales can also be om ars», Nature doi: 10 .1 038/05892.
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Este expeimento muesta que además de existi el pel de cicuitos ceebales masculino y femenino que induce ho monalmente duante el desaollo el compotamiento coespondiente a cada sexo, estos ci cuitos pueden se conectados, o desconectados, po moduladoes especí cos de sexo, al menos en las atas hembas. 2 . 1 . los roedos iste un dimoñSmo del órgano meronasal del sistema olti
El ógano vomeonasal es la pimea neuona de una ed sensoial que pocesa los oloes elacionados con la epoducción. La inmación oltoia captada en este ógano, llega a la egión del áea peóptica del hipotálamo, donde se encuenta el núco sexualmente imóco el drea preóptica (NSD-AP), que diige el compotamiento. El ógano vomeo nasal es sexualmente dimóco y su difeenciación está causada po la testosteona inmediatamente después del nacimiento. Es deci, las células que eciben el estímulo e inician el análisis de la inmación oltoia conceniente a la conducta sexual, dieen de un sexo a oto. La ed neuonal que pocesa estos oloes, consta de estuctuas se cundaias y teciaias que eciben y pocesan la inmación captada po el ógano; ambas pesentan dimosmo27• El nivel secundaio lo consti tuye el bulbo ovo accesorio, que tiene un volumen mayo en el macho que en la hemba, y es dependiente de la testosteona en el peiodo post natal tempano. Esta dependencia se encuenta también en estuctuas del nivel teciaio: el acto ovo accesorio y el núcleo de la estía temi nal. Los machos tienen mayo volumen y mayo númeo de neuonas en el núcleo de la estía teminal medial posteio. Po el contaio, las hem bas tienen mayo volumen, y mayo númeo de células, en el núcleo de la estía teminal medial anteio y en el lateal anteio. El patón de difeenciación según el sexo, paece se geneal en ma mífeos; y las caacteísticas concetas dependen del papel que el olto tenga en la inducción de la conducta epoductoa. En pimates, en los que la vista es pedominante y el sistema vomeonasal es udimentaio, el sistema oltivo sigue teniendo un papel en la epoducción. La nción de ecoge los oloes lo desempeña entonces la mucosa oltoia, con gan concentación de eceptoes oltivos. 27 UILMN, ., y EGOVIA, . (200 7): «l sexo del cerebro», Mente Cerebro, 25,
pp 68-77.
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2.2. Dimorsmo sual en el sistema oltivo humano
En el hombe, el sentido del olto no tiene la potencia ni la capaci dad de discimina oloes que tiene el de los demás mamífeos. Una bue na pate de los genes que codican paa los eceptoes del olto, se han pedido en el poceso evolutivo que sepaó a los individuos Homo de los chimpancés28• El bulbo oltivo ocupa una extensión de la coteza cee bal mucho más pequeña que en el esto de pimates; además, los hom bes caecen de bulbo oltivo accesoio, el ógano vomeonasal no es ncional. No obstante, paece que algunos oloes paticipan en la activación de los centos asociados a la conducta sexual que existe un pequeñísimo dimosmo sexual ncional en el sistema oltivo29• En las mujees, cuan do se les da a ole compuestos tipo andógenos a altas concentaciones, se activa el hipotálamo, con el cento de gavedad en el núcleo p eóptico ventomedial. Po el contaio, en los vaones se activan los núcleos ven ticula dosomedial del hipotálamo, cuando huelen sustancias tipo es tógenos (gua 23). Figura 23 : D imo rfismo en el sistema olfativo huma no
Muj
La percepción olfativa por m ujeres de sustancias tipo and rógenos, activa el núcleo preóp tico y ventromedial. Y en los varones, la percepción olfativa de sustancias similares a los estrógenos, activa los núcleos ventricular y dorsomedia l. Modificada de Savic, l . , 2001 .
Los oloes en geneal están intensamente elacionados con las emo ciones la memoia. En las mujees el sistema oltivo paa los divesos oloes activa, más que en los vaones, el hipocampo bilateal, la amígdala deecha, la coteza obitoontal, la coteza tempoal media la coteza 28 . EZ RATAL, . (2007): «a dinámica de la eolución humana. ás con menos», unsa, Pamplona. 29 AVIC, .; ERGLUND, H . ; ULYAS, . , y ND, (200 1 ) : «melling of dorous ex Hormone-like ompounds auses ex-ierentiated Hypothalamic ctiations in Humans», Neuron, 31 , pp. 661-668.
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insula basal deecha. Los cicuitos neuonales de las mujees son más sensibles en el peiodo pe-ovulación; po ello, pueden detecta el casi impeceptible olo de los andógenos en el sudo. El sentido biológico paece clao: la mayo sensibilidad a ctoes sico-químicos del vaón en la fase fétil de la muje, estimula el impulso que cilita la poceación 30• En los vaones lo s oloes activan, más que en las mujees, la corte entorri nal izquieda, la corte insur dosal izquieda y el globo pdlio vental deecho. No paece, po tanto, que existan feomonas en humanos; y, po tanto, no diigen el compotamiento sexual. menos no existen con la potencia ni el deteminismo del animal; a su vez, el olo de las feomonas no se pocesa siguiendo la vía del ógano vomeonasal hacia los núcleos dimócos del hipotálamo. Lo que paece, más bien, es que existen sus tancias deivadas de las homonas sexuales que actúan como sensoes quí mcos. 3. DIFERENCIAS, SEÚN EL SEO, EN EVALUACIÓN EMOCIONAL E LOS ESTÍMULOS SENSORIALES: AMÍALA
Como se indicó anteiomente, la amígdala es un áea clave en la evaluación emocional de los estímulos sensoiales. La amígdala izquieda y deecha son difeentes en el pocesamiento de la memoia emocional en mujees y vaones31• Las mujees activan la izquieda y los vaones la deecha. Estudios de neuoimagen han puesto de maniesto que la amíg dala se activa más en hombes que en mujees cuando ambos obsevan togafías eóticas. También se activa más el hipotálamo, que ma pa te del sistema emocional y sive de salida paa las espuestas neuovegeta tivas. La activación e máxima duante la visión de togafías con conte nido sexual explicito, mientas que no hubo difeencias de activación cuan do las togafías ean neutas, o no explícitas sexualmente. Estos datos, que ponen de maniesto que la amígdala y el hipotálamo exhiben más actividad en vaones que en mujees, cuando pocesan los mismos estímu los visuales con caga sexual, apoyan la especulación aceca de que pudie AAM, . .; ANSEN, y cols. (20 00) : «ects of fragance on feme sexual arou sal and moods across he menstrual cycle», Psychophysio, 37, pp. 76-84; AMMER, . (1 983) : «ndrostadienone a male pheromone?, Ethol Socio/, 14, pp. 20 1-207. HAMANN, . (20 05 ): «ex ierences in he esponses of he Human mygdala», Neurosciett, 1 1 , pp. 288-293.
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an epesenta una popensión de los vaones a genea una mayo es puesta del apetito sexual a los estímulos visuales. Ota difeencia de la nción de la amígdala ente vaones y muje es32 se ha obsevado en la conducta sexual consumatoia. En el vaón, a difeencia de la muje, decece la actividad de la amígdala izquieda. CEEBO EMPAEJADO Paecen existi vaias áeas que pocesan el place sexual 33; y vaones y mujees elaboan las sensaciones de place de ma paecida. En estudios de neuoimagen 34, tomados mientas vaones y mujees contemplaban tos de la pesona amada y se les animaba a pensa en ella e imaginásela, se obsevó la activación de cuato áeas del sistema límbi co siméticamente situadas en los dos hemisfeios. El hecho de que estas áeas se activen con la eufoia de la cocaína, sugiee que el amo sexuado epesenta un ámbito pacial de estados de euia, no sólo en el aspecto psicológico, sino también desde el punto de vista neuológico. El ceebo epate la compleja taea de la emoción placentea ente difeentes ámbitos. Una pimea áea implicada en la vinculación exa minada en este expeimento en que la emoción sexuada se povoca po la visión de togafías de la pesona queida, es la coteza visual. Cuan do se compaa la activación de esta zona con la activación ante la con templación de tos de amigos, no hubo difeencias. Esto conma que el ceebo visual se limita a tansfei la inmación objetiva al ceebo emocional. En segundo luga, se encontaon activados los centos que pocesan la excitación sexual y que son los que apotan el componente eótico al amo omántico. El amo y el deseo sexual conjuntamente paecen des peta actividad del estiado (núcleo caudado y putamen) y de algunas egiones del hipotálamo. El tece módulo se encuenta en la coteza cin gulada anteio, que econoce los sentimientos, algo sin duda esencial paa la vivencia amoosa. El cuato es un dominio pacial del lóbulo in sula. Este lóbulo muesta más actividad cuanto más atactivos les pae HLSTEGE, .; EORGIADIS, . .; PANS, . . .; EINERS, . C.; AN DER AA, H. C. ., y EINDERS, . . . (2003 ) : «rain actiation during human male eja culation», Nsci. 23, pp. 9 .1 85-93. WARTING, . (2003): «eurotransmisors y centros de placer», Mete cerebro, 3, pp. 5 1-57 . ARTELS, ., y EKI, . (2003 ) «mor en imágenes», Mete cereb, 3, pp. 58-5 9.
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Figura 24: Activación de amígdala e hipotálamo en varones y mujeres cuando observan fotografías con contenido erótico
Varones
Mujeres
Modificado de Hammann, S., 2005.
cen los ostos pesentados. Intega la inmación visual sensoial en el mundo de los sentimientos. Como en toda expeiencia de vinculación, se poduce desactivación de la amígdala del lado deecho. Los sentimientos amoosos pueden so ca la actividad de estas egiones, que justamente están activas en estados depesivos o de tisteza. Estas áeas guadan a su vez elaciones con todas las egiones ceebales. En cada caso, estas conexiones se utilizan de ma nea muy distinta; po eso toda expeiencia amoosa se nos muesta sin gula y exclusiva. El impulso sexual es natualmente humano. En el mundo animal, es obvio que el instinto sexual no evolucionó paa satisce el place, sino paa impulsa la epoducción; de ahí que la satiscción del instinto conlleve a situaciones de apego, o vínculo, que oientan el compotamiento al objetivo peciso paa la epoducción. De hecho, la concentación de las homonas en sange sube signicativa mente duante la cópula, y de ma sexo-dependiente: en los machos aumenta la vasopesina en la se pevia a la copulación, p aa después li bea oxitocina; y las hembas libean sólo oxitocina. Este incemento homonal duante el apaeamiento, es un posible cto de talecimiento de la vinculación de la paeja. No se quiee de ci con todo esto que las homonas povoquen una conducta. Simple mente aumentan la pobabilidad de que, en cietas cicunstancias, sobe venga un compotamiento que es siempe integado en la unidad del oganismo. En todo compotamiento instintivo el agente que pone en macha la espuesta especíca es más la ocasión que la causa.
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1 . DIFERENCIAS, SEÚN EL SEO, EN PREISPOSICIÓN A ELEIR EL TIPO E «PAREJA IEAL»
La Etología muesta que en el mundo animal los machos paecen he chos paa coteja a las hembas y que es caacteístico de éstas selecciona a quienes las petenden. La selección natual se asegua así que los mejo dotados paa la vida tansmitan sus caactees a la descendencia. De ahí que algunas caacteísticas extenas del fenotipo (cuiosamente incluso la simetía copoal) o habilidades (po ejemplo la pepaación del hábitat) sivan de pauta, lógicamente inconsciente, en la elección de paeja. La dinámica del amo sexual cuenta, en su pime impulso, con esta sabiduía ancestal de la natualeza. Soba deci que el compomiso pos teio es un acto humano libe. Lo que se ama es que las pimeas apoximaciones tienen algo de inconscientes; algo así como si la mente enamoada estuviea de alguna ma diseñada po los tipos natuales que tiunon epoductivamente en la evolución. Algo hay en la gua copoal, en las caas, y hasta en las edades de la paeja que se escoge, que están inuenciadas po patones establecidos y heedados. El texto de Louann Bizendine35 que se oece a continuación eeja esa especie de heencia: «La vedad es que somos mucho más pedecibles de lo que pensamos. En el cuso de nuesta evolución como especie, los cee bos han apendido a identica a las paejas más sanas, las que pobable mente nos daán hijos, y a aquellas cuyos ecusos y actitud podán ayuda a sobevivi a nuesta descendencia. Las lecciones que apendieon los hom bes y mujees pimitivos, están hondamente codicadas en nuestos mode nos ceebos como cicuitos neuológicos del amo. Están pesentes desde que nacemos, y en la pubetad se activan po oba de cócteles de sustancias neuoquímicas de acción ápida. El sistema es hábil. Nuestos ceebos identican una paeja potencial y, si se ajusta a nuesta lista ancestal de de seos, conseguimos el apote de sustancias químicas que nos inundan con un impulso de atacción ... Llamémosle amo o encapichamiento. Ese es el pime paso dento del antiguo camino de empaejamiento. Se han abieto las puetas al pogama ceebal de coejo-empaejamiento-poceación». Un estudio de las pefeencias en mateia de vaones de más de diez mil mujees, petenecientes a teinta y siete cultuas de todas las pates del mundo, descubió que las mujees tienen menos inteés en el atacti vo visual de un posible maido que en su capacidad paa pospea36 y su «l cerebro femenino», o c pp. 81 -82. , . (1 99 0): «nternational preferences in selecting mates: study of 37 cultu res», joural of Css-Cural Psycho, 2 1 , pp. 5-47.
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capacidad de delidad. Los vaones, sin embago, peeen esposas atac tivas que coinciden con los asgos mofológicos que apotan señales vi suales de fecundidad 37, y po supuesto la capacidad de delidad. En esumen, como ocue con todo lo humano, la atacción especí ca ente un hombe y una muje hunde las aíces en el tasndo biológi co, que contibuye a establece y mantene un vinculo intepesonal, ca paz de cea el ámbito natual de la tansmisión de la vida humana. Los códigos ceebales, en los que paticipan unas estuctuas neuonales con cetas que genean neuotansmisoes y neuohomonas, se activan en deteminadas situaciones y con ello pedisponen el compotamiento es pecíco hacia su objetivo. Y, como en todo lo humano, concuen siempe dos constantes. Una, que la pedisposición natual a la espuesta pecisa al impulso no es deteminante. Todo hombe po se libe puede libease de queda en ceado en el cicuito ceado del automatismo animal y po ello puede esponde, o no, y esponde de una ma u ota. Y dos, que la cultad humana de tansmiti la vida no se educe a los mecanismos de la epo ducción animal, al mismo tiempo que no puede se destuida la oienta ción natual de la cultad. La biología muesta que bajo el amo especíco ente un vaón y una muje subyace esa «vinculación de paeja» que la natualeza ha cea do y eceado paa aseguase la tansmisión de la vida. Peo no basta la neuobiología paa compende la pondidad humana de esa vincula ción vaón-muje. El hombe excede la mea vinculación convitiéndola en la iqueza del amo intepesonal compometido, poque no está en ceado en el automatismo de los pocesos de la epoducción animal. Po eso, sólo bajo la óptica de la capacidad de ama del hombe, y en con ceto bajo la óptica de la dinámica natual del amo sexuado, puede en tendese el caácte pesonal del fenómeno de la tansmisión de la vida humana.
UTZWOL, . (2006) •udging female gurs new methodological approach to male attractiveness judgments of female waist-to ratio», Bio Psycho, 71 , pp. 223-229.
EG
El análisis de los datos cientícos d e este estudio, tal vez pueda suge i al lecto algún punto de eexión aceca de cuestiones muy debatidas en la cultua actual, y no siempe esueltas con igo. He buscado las difeencias del cuepo humano, femenino y masculi no, en los presupuestos biológicos genéticos y neuonales. En los últimos años, hemos podido conoce algo más del ceebo y de cómo se constuye y elaboa desde la heencia genética de cada uno, y con esto se ha poge sado en el caácte dimófíco que p esenta el ceebo humano. El témino presupuesto tiene aquí un signicado muy peciso. Pesu puesto es mucho más que un pecedente tempoal. Son las condiciones necesaias que pemiten, en cada tiempo y en cada momento, vivi hu manamente. Poque los códigos ceebales no son las causas de la con ducta. Ni los innatos, ni los que elabo amos con la vida, que es taea pe sonal de cada uno. Justamente la biología humana pone de maniesto que todo viviente humano, po selo, es un viviente libeado del encieo en el automatismo de los pocesos biológicos. Cada pesona es capaz de libeación del enclaustamiento en el n del meo vivi animal y de la e poducción, popio de los individuos del esto de las especies. El cuepo humano expesa y maniesta siempe a la pesona titula de ese cuepo. De ahí que la atención se haya centado pecisamente en aquellos núcleos en los que el hombe aoja las ataduas del meo instin to animal. Con esto, se ama que esos pesupuestos biológicos son na tuales en un doble sentido . Natuales en el sentido de que man pate de los ciclos po los que el animal elaboa sus espuestas instintivas, ante aquellos estímulos que paa ellos signican algo en elación con su biolo gía; y son, así, desencadenantes del compotamiento animal. Y natuales en cuanto que los gestos especícamente humanos tienen un signicado
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básico popio, que excede con mucho las convecciones meamente cultu ales y lo que se pueda enseña educacionalmente. Dicho de ota manea, los pesupuestos natuales que apota la ciencia no son opcionales; y las pesonas individuales, y la sociedad, no se pueden distancia de ellos sin expeimenta una pedida signicativa de las efeencias que necesitamos paa vivi humanamente. Lo que nos apota la genética, el desaollo em bionaio y las neuociencias, son los cimientos mateiales sobe los que constui la plenitud de la vida humana. Si el cuepo humano es así, y el cuepo del vaón y el de la muje son difeentes, y son difeentes en las estategias de sus ceebos, estas di feencias nos popocionan pistas del caácte pesonal de unos y de otas. Vaón y muje, no son difeentes sólo en nción de su distinta y obvia elación de cada uno con la tansmisión de la vida, y con la aten ción a la vida humana naciente. Sólo paa los animales la epoducción es la única azón po la que son sexualmente difeentes. El cuepo de la mu je y el cuepo del vaón son distintos, y muestan la difeencia nda mental e incuestionable que hunde sus aíces en el mismo oigen natual: son vaón y muje «ontológicamente», si se me pemite esta expesión. En la Gecia clásica tenían muy claa la distinción adical ente natu aleza hysis) con un signicado eal, y no manipulable y costum be (nomos). Eso les pemitía el diálogo fecundo que petendía descubi lo más popio del se humano. Así, podían ama que el nomos de la ti anía ea contaio a la natualeza del hombe, a la que coespondía oi ginaiamente vivi en libetad; la liteatua giega está llena de ejemplos en todos los ámbitos de la vida: basta lee la «Antígona» de Sócles paa pecibilo. Hipócates asumió este planteamiento paa desaolla su Me dicina y deni la salud y la enfemedad al magen de cualquie plantea miento subj etivo. Esta heencia de los antiguos giegos ha llegado a nuestos días, ma cando un camino que hunde sus aíces en la acionalidad. Sin embago, paece habe suido algunos «accidentes» gaves duante el ecoido que, al menos tempoalmente, han difuminado en buena medida las e feencias más básicas de lo que constituye el vivi humano. Estos plante amientos «accidentados» se pueden educi a tes. De una pate, la heencia que Feud nos dejó, más allá de las genia les intuiciones que constituyen el ndamento del psicoanálisis. Pues sus genealizaciones indebidas de caácte psicológico y losóco caecen del igo cientíco, analítico y sintético, de sus apotaciones ndamentales. Y así intoduce, en nuesta visión del hombe y del mundo, el convenci miento de que los males psíquicos tienen su oigen en la epesión de los impulsos sexuales.
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En segundo luga, la evolución sexual de los años 60, que «einven tó» los componentes del sexo. Lo convitió, a los ojos de una gan mayo ía, en exaltación dionisiaca; popuso y, en deteminados ambientes, logó la pansexualización de todas las actividades humanas; y alentó las mas de vida que poducen el máximo place sexual con el mínimo compomiso. En pocos años, la mentalidad dominante en muchos am bientes, ha llevado a petende y loga no po cas veces la total sepa ación ente sexualidad humana y poceación, ompiendo la coelación ente su signicado natual y sus expesiones cultuales; y educiendo la poceación a mea epoducción, como en el esto de los mamífeos. Finalmente, la evolución sexual dio pie paa entende y plantea la libeación de la muje ndamentalmente cuando no exclusivamen te como libeación de la «epesión» del sexo, sobe todo en su dimen sión matenal, afectiva y de compomiso de delidad matimonial. Como se puede apecia, en este lago itineaio paecen habese pe dido, paa muchos, las efeencias pesentes en los cimientos de nuesta cultua. Como consecuencia, todo es elativo, todo es subjetivo y todo es opinable; cuiosamente, todo menos esas tes amaciones, que se pe sentan con petensiones de dogmas intocables. Paece que sea un camino sin etono. Afotunadamente no es así, po que la ealidad natual es teca en sus expesiones, como hemos podido apecia a lo lago de estas páginas. Pe cisamente po eso, es posible ecupea el sentido humano de tantas ea lidades de la vida, del mundo, de la natualeza. ..; ente ellas, la pateni dad y la matenidad, y la natualeza de los vínculos miliaes. El deseo de felicidad de todo hombe puede ealizase en la medida en que busque con libetad y lo encuente, paa luego adheise a él el sentido eal y pondo de su popia copoalidad sexuada, inscita en su popio se. La ciencia expeimental biología molecula, genética, neuociencias y desaollo embionaio apota el sustato básico e innegable a tene pesente en la educación, la cultua, la eexión antopológica, etc., sin tegivesa lo que la natualeza nos oece en cuanto sees humanos. Sin duda que esa tegivesación, de hecho, podemos ealizala, puesto que so mos libes. Peo no esulta indifeente ni equivalente. Nadie en su sano juicio niega que la sexualidad sea ente de place, po ejemplo. Peo ago ta ahí toda su ealidad y su sentido, es empequeñecela antopológica mente e ignoa los abundantes datos que la ciencia nos popociona; en te ellos, la «teca» divesidad vaón-muje. Cono en que estas páginas, necesaiamente beves, voezcan el diálogo abieto y seeno, iguoso, sobe temas que apuntan a cuestiones
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ndamentales de la vida y de las elaciones pesonales. Podemos sugei, a modo de ejemplo, algunas de estas cuestiones que pecisan de muchas pespectivas paa su cono cimiento pleno poque son, de suyo, intedisci plinaes. El estudio y la eexión aceca de ellas, podían eniquecese desde los avances de las neuociencias y de la biología humana: A) La igualdad esencial ente el vaón y la muje. La noción de pe sona ha de da azón de que la pesona eal se da en dos mas copoa les «ontológicamente» distintas. Vaón y muje se distinguen reción mua origina· es deci: son iguales en cuanto pesonas, peo se difeen cian en el modo en que cada uno se abe a la elación con los demás y con lo demás, pecisamente po la difeencia copoal. Difeencia que no ompe la igualdad esencial. B) Paa ambos, el cuepo es sio y manifestación de la pesona. Hay actividades y nciones que no implican intínsecamente al cuepo en su dimosmo sexuado. Po tanto, son igualmente ealizables, con pleno de echo, po vaones y mujees concetos que tengan la capacidad paa ello, se a cual se a su sexo, sin disciminaciones negativas o positivas. C) En la misma línea, hay sentimientos y afectos que se expesan en la sonisa, el apetón de manos, la eveencia ... En denitiva, abundantes mas de expesión copoal que no implican intínsecamente el caácte dimóco de la copoalidad sexuada. Basta pensa, a modo de ejemplo, en los gestos en tono a la hospitalidad, que intoducen a alguien en la intimidad del popio hoga. D) Po el contaio, las acciones en las que la copoalidad en cuanto cuepo sexuado es sino de lo que se ealiza, exigen la especi cidad de la pesona vaón o de la pesona muje, sin que esta exigencia sea disciminatoia. A la vista de los datos cientícos, paece que no sig nica lo mismo deci «este es mi cuepo», si lo dice un vaón o lo dice una mue. E) La difeencia manifestada en el estudio de los datos aceca de la copoalidad sexuada, muesta cómo la sexualidad, tal como la oece la natualeza biológica del se humano, es el único ámbito en que una pe sona puede se adicalmente de la ota, a la vez que esa elación se abe a la elación pateno-lial. El cuepo del vaón y el cuepo de la muje son de tal manea, que se da la coincidencia ente el gesto personal de ente ga-donación plena y el gesto de engenda. El signicado de esa unión copoal no es equipaable a ninguna ota, ni anatómicamente, ni sioló gicamente, ni desde el sistema homonal, ni desde la visión que apotan las neuociencias, ni desde las manifestaciones psicológicas y afectivas de ese dimosmo copoal.
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Basta con estos botones de muesta, que no s on lo s únicos; ni siquie a me ateveía a ama que sean los más impotantes. Peo, al menos, paecen se elevantes. Se equiee un diálogo seeno distendido, en donde sea posible apota luces nuevas desde el igo cientíco la acio nalidad, sin pesiones de ningún tipo. Estas páginas no petenden se más que una pequeña apotación a esa taea.
COLECCIÓN TEXTOS DEL INSTITUTO DE CIENCIAS PA LA FAMI LIA. UNIVESIDAD DE NAVARA
rón y mujer: respues e Biblia,
Gonzalo Aanda.
ología el cuerpo y e sexualia,
Estudios de exégesis bíblica de vaios autoes. Elemen tos para una losoa e fmilia (2.ª edición), Fancesco d'Agostino. Filología el hombre Una anopogía e intimia (5.ª edición), J. Vicente-Aegui J. Choza. An topología e sexualia,
Jacinto Choza.
Sexo y culra Andlisis el comportaminto sexual (2.ª edición),
Aquilino Polaino-Loente .
Ocho lecciones sobre el amor humano (4.ª edición),
Tomás Melendo Ganados.
xtos e Sociología e fmilia, Selección de textos estudios peliminaes de Enique Matín López. rapia fmiliar y conyuga Princios moes y proamas, Aquilino Polaino-Loente Domingo G acía Villamisa. Cómo rmarse n éca a avés e literara. Andlisis estéco e obras literarias (2. ª edición)
Alnso López Quintás.
El impacto el niño austa en fmilia,
Aquilino Polaino-Loente, E. Doménech Cuxat. Las rens fmiliares en el Impuesto sobre Rnta e s personas sicas,
Fancisco Cañal.
Evaluación psicológica y psicopatogica e fmilia (2. ª edición), Aquilino Polaino-Loente Pedo Matínez Cano. Las bos: sexo es y erecho (2.ª edición coegida aumentada),
Joan Caeas.
Diversia regional e los moelos e min ia n Eaña,
Antonio Moeno Almácegui.
El éxsis e in mi Ontología el amor humano en mds e Aquin o,
Juan Cuz Cuz.
La nupcialia n Navarra Andlisis socio-emodco 1975-1991,
Caolina Montoo Guich.
El origen histórico e un sistema e hereero único, Antonio Moeno Ana Zabalza.
comunicación n para Eores psicogkos mecuntes (2.ª edición), Aquilino Polaino-Loente Pedo Matínez Cano. Envecimiento emodco y mo rli en Navarra 1975-1991,
Doloes López de Heedia.
Familia y sociea Una inoucción a sociogía e fmilia,
Enique Matín López.
¿ Qué puee hacer el méico por fmilia el enrmo?, Aquilino Polaino-Loente otos. Funamntos e psicología e personalia (2.ª edición),
Aquilino Polaino-Loente.
La fm ilia como dmbito eucativo,
Auoa Benal (Ed.).
Al servicio el amor y e via,
Augusto Samiento.
Antopología para inconrmes (2.ª edición),
Juan Fenando Sellés.
Filosoa e fmilia,
Fancesco D'Agostino.
Familia y cambio social n paña el siglo
Catalina Montoo Guich (Di.), Dolo es López Henández, Neus Capaós Civea.
Eucar h@s interactiv@s,
Fenando Gacía Fenández Xavie Bingué Sala.
CEREBR DE VARÓN VARÓN Y CEREBR DE M UJER. DS EMISFERI E MISFERIS S
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Figura 16: Perfil de compartimentación asimétrica en t rastornos rastornos de la capacidad de e mp ata ata
DD
Las regiones de los lóbulos frontales del hemisferio derecho son las más aumentadas respecto a los controles en los pacientes de autismo y en niños con «Desordenes del len guaje ligados al desarrollo» (DLD), y las occipitales las que menos. En negro se indican las unidades que tienen asim etría etría en el hem isferio isferio izquierd o, en gris las asimetrías asimetrías regio regio nales del derecho. Modificada de Herbert, M. R., 2005.
a 16). Las conexiones defeentes afeentes ente la amígdala la egión egión cotical cotical del ceebo, pedispone n a este est e tipo tipo de tastono tastonos:s: a) la ba b aja acti vidad de la amígdala supone décit en las taeas de infei emociones de las expesiones ciales; b) la educida actividad de la coteza ontal me dia del hemisfeio izquiedo genea escasa capacidad de empatía; c) la baja actividad actividad de la coteza obito-ontal obito -ontal da luga a la escasa capacidad de econoce los estados mentales de otos; la baja conexión del suco supeio tempoal tempo al genea la incapacidad de habla con sonidos. sonido s. Las disnciones en este cicuito paecen debidas a desódenes du ante el desaollo, asociados con la baja dosis de expesión de genes del comosoma X, que caecen de homólogo en el que paticipan en el dimosmo sexual3 6 • El autismo se asocia en conceto con los genes KUSE, .: «X-lynked genes and he neural basis of social cognition», Novartis Fo u n d Smp, 251, pp. 84-98. e han descrito dos regiones del cromosoma X implicadas en
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NLGN y NLGN que codican poteínas implicadas en las conexiones
neuonales37• neuonales 37• Existe, Existe, po tanto, falta de conexi co nexión ón de áea áeass concetas3 8 , de bido a alteaciones alteaciones en el volumen duante el desaollo desaollo embionaio emb ionaio y post natal. Se poduce una macocefalia postnatal, ente los 2 y los 4 años. Los cambios de volumen se genean en áeas especí espe cícamente camente latealiz latealizadas adas de ambos hemisfeios. Unas nciones son más vulneables a los cambios anatómicos que o tas tas y éstas pueden nciona con nomalidad. no malidad. La gua 1 6 ecoge las asimetías de volumen de egiones alteadas en ceebos de autistas, compaadas con el ceebo de sanos. Existe una asimetía mayo en los autistas en wnas coticales de la izquieda que de la deecha. La elación deecha-i d eecha-izquie zquieda da de volumen de cada áea es in vesa en los autistas especto a los contoles con toles.. Las áeas coticales más afec afec tadas son pecisamente aquellas que son esenciales paa las nciones cognitivas más complejas, como el compotamiento social y el lenguaje. 2. DESÓRENES EL LENUAJE LIAOS ESARROLLO (DLD)
El síndome DLD (desoden (deso den del lenguaje lenguaje asociado a alteaciones alteaciones del desaollo) tiene en común con el autismo la alteación de las asimetías egionales. Se ha compaado el ceebo de niños nomales ente 6 y 1 2 años, con niños niñ os autistas autistas y niños con desoden del desaollo del lenguaje lenguaje (DLD)39, buscando la asimetía en los volúmenes. En el DLD, a difeen cia del autismo, muesta una pequeña, peo signicativa, pédida de asi metía a la izquieda compaada con los contoles (gua 1 6 ) . 3. fNROME E URNER
Algunas caacteísticas del fenotipo ceebal de las mujees con sín dome Tune se asocian también con las caacteísticas de los autistas, el autismo autismo : la rgin 1 5q - 1 3 (prxima al gen gen que codica codica el rceptor rceptor ) ) y la 1 7q 7q 1 .2 (cercana (cercana al al gen que codica la proteína transportadora de la serotonina} . AMAISM .; QUAC, H.; ETANCUR, .; TAM, .; LINEAU, ., y cols. (2003 } : «utations «utations of he Xlinked Xlinked genes genes encoding neuroligins neuroligins 3 and 4 ar ar associated with with autism», Nat G, 34, pp. 27-29. ARN-EN, ARN-EN, . (2004} : «he cogniti cognitive ve neuros neuroscience cience of autism», autism», Neuro Neu rosur Pch, 75, pp. 945-48. HERBERT HERBERT, . . ; IEGLER, IEGLER, . .; . ; EUTSC, EUTSC, . . ; ' RIEN, . . ; ENNED ENNEDY, . .; ILIEK, P .; . ; AKRDJIV AKRDJIV,, . .; HDGSN, .; AKE AKEK, K, .; AKRIS, . , y NESS, NESS, . r. (2005}: «rain asymmetries in autism and developmental language disorder: a nested whole-brain analysis», analysis», Brai, 128, pp. 21 3-226. 3-226.
CEREBR DE VARÓN VARÓN Y CEREBR DE M UJER. DS EMISFERI E MISFERIS S
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como es la falta falta de econo cimiento de expesiones expesiones ciales ciales de miedo. Las mujees (45,X) tienen un aumento signicativo del tamaño de la amíg dala, mayo incluso que los vaones, mientas que es sin embago meno en las mujees 47,X. Como se comentó antes, antes, tienen tienen altea alteada da la la mo noamin no aminaa oxidasa A(MAO A(MAOA) y B(MA B (MAOB OB),), que q ue está implicada en la desami nación oxidativa de vaios neuotansmisoes incluyendo la dopamina y seotonina. La actividad anomal de estos neuotansmisoes conlleva de sódenes del desaollo neuonal, pedominantemente los décit de cog nitiva social. SIGN SI GNIF IFICA ICADO DO HUMANO HUMANO DE LA LA DIFEENCIA DIF EENCIA DE LAS ESTR EST RATEGIAS ESPE E SPECÍFI CÍFIC CAS Se pueden saca algunas conclusiones del dimosmo que se ha ana lizado. En pime luga, las taeas que equieen actividad pefeencial de áeas de uno u oto de los hemisfeios las ealizan mejo, en geneal, los vaones cuyo ceebo es ncionalmente más asimético que el ceebo de las mujees. mujees. Mientas que las taeas taeas que equieen el p aso de la l a inma ción de un hemisfeio a oto, las ealizan mejo las mujees, po témino medio, debido a su mayo simetía simetía ncional. ncional. Las difeencias anatómicas, químicas y ncionales de los ceebos de muje muje y de vaón apo tan la aíz aíz biológica biol ógica del de l distinto distinto ecuso ecuso a los he misfeios ceebales paa acomete divesas taeas po pate de unos y otas. Este Este difeente difeente tazado de los lo s cicuitos neuonales neuo nales es innato in nato y causa causa do po la difeente dotación genética que ecibe cada uno en la concep ción. La constucción del ceebo duante el desaollo embionaio y la vida postnatal, amplica estas difeencias genéticas a tavés de las con centaciones centaciones de las homonas especícas especícas de cada sexo. sexo. En efecto, efecto, como se se ha efeido, efeido, la mayo mayo o meno meno asimetía asimetía ncional de d e los dos hemisf h emisfeios eios se establece ndamentalmente en la etapa fetal y, posteiomente, los ni veles homonales potencian la ncionalidad de las áeas de mayo con centación centación de los eceptoes ecepto es con los que inteactúan inteactúan especícamente. especícamente. Las difeencias en las estategias cognitivas y emocionales popias de cada sexo sexo supone que ambos poseen p oseen memoias, habilidades, pef p efeen een cias, etc., popias del sexo femenino o masculino. El ceebo de la muje está cableado cableado de un modo m odo tal ta l que esulta esulta más pedispuesto paa p aa la empa tía, mientas que el del vaón está mejo pedispuesto paa oientase en el espacio exteio. Ese modo, difeente y especíco de inteesase y ela cionase con la l a ealidad, ealidad, es posible po po la difeencia difeencia de la asimetía asimetía en la latealización de los hemisf he misfeios eios del vaón vaón y la muje. El cento de gavegave-
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dad intelectual del vaón está hacia el polo de las actividades popias del hemisfeio izquiedo. La muje amoniza mejo lo acional y emotivo po posee mayo simetía ncional de los hemisfeios. Ahoa bien, aunque las difeencias ente vaones y mujees tengan un sustato biológico, las semejanzas son mucho mayoes que las difeen cias40. Todas ellas son habilidades humanas. Po eso, lo que en unos son pedisposiciones innatas, puede se modelado en los otos, mediante deci siones libes que genean actuaciones y modulan la conguación ceebal. Todo ello es conguente con la elación natual de ambos en la tans misión de la vida. Hunde las aíces en los cicuitos popios del ceebo animal que dicta los compotamientos que pemiten la supevivencia de la especie. Los ceebos animales macho y hemba empiezan desaollán dose de modo difeente en el úteo mateno, de ma que los impulsos especícos están plasmados en los cicuitos neuonales. Se entiende que en las sociedades humanas cultualmente menos tecnicadas, la mejo visión espacial del vaón le capacitaía paa la caza de ecusos ea del ámbito educido de la vida milia. La muje, con un ceebo con las nciones más bilateales, tiene un uso de lenguaje que pemite la comunicación de estados intenos y cilidad con los mo dos de comunicación no vebal, esencial paa el cuidado de los hijos pe queños. Intui lo que les ocue a otos, econocelo en la expesión cial, es una habilidad natual que es ndamental en una made, paa enten de a los bebés y sabe lo que necesitan. Tales difeencias macan el sentido natual humano del difeente pa pel de la made y el pade en la educación tempana del niño. La con guación amónica del ceebo del niño equiee ecibi los modos po pios de manifestación de los afectos de la masculinidad y feminidad. Se ha descito41 que la comunicación tempana afectiva ente los pades, o allegados, y el niño oigina una alineación de los estados mentales, que pue de entendese como una coodinación mutuamente egulada ente los he misfeios deechos e izquiedos de pades e hijos; po el contaio, la falta de caiño implica una gave pédida de este modo de comunicación. En las pimeas fases del desaollo de l niño, el hemisfeio deecho es más activo y cece más ápidamente. La comunicación ente los hemisfe ios deechos pemite las comunicaciones afectivas que sitúan y asientan los estados emocionales pimaios a pati de señales no vebales. La na40 MURA, . (1 992} : «erebro de varón y cerebro de mujer», Ivtigació e cia, noviembre, pp 77-84. 4 1 IEGUEL, . . (1 999}: The devepig mid ward a Neurobio ofIteeoal peiece, he uilrd Press, ew ork, ondon.
CEREBR DE VARÓN Y CEREBR DE MUJER. DS EM ISFERIS
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tualeza, a tavés de la lactancia, ha p evisto que la made tenga l a ceca nía natual en los pimeos momentos de la vida, con una mayo capaci dad de activa su hemisfeio deecho. Pasada esta pimea fase, hacia los dos años desaolla dominante mente el izquiedo, que es el intepetado de las nciones lógicas paa deduci causa efecto. La alineación ente hemisfeios izquiedos potencia la atención a los objetos en el mundo, y menta los diálogos eexivos en los que el lenguaje es utilizado como co de atención sobe los esta dos mentales de otos. Esta doble alineación puede menta la intega ción bilateal ente los dos hemisfeios. De hecho, hasta nal del tece año de vida no se poduce en el niño la comunicación ente ambos he misfeios, y con ello inicia la amonización pesonal del hijo educado po ambos. La patenidad y matenidad, incluso en el nivel biológico, no es asi mética solamente en lo que especta a la concepción y gestación y da a luz. La conguación básica del ceebo del hijo equiee de elación pe sonal con muje y vaón, made y pade, o de quienes hagan sus veces. Como todo lo humano el sentido pesonal no se agota en el sentido biológico, poque la vida humana no es mea biología. Como todo lo hu mano, la pesonalización de la intínseca condición sexuada no está dicta da po la biología y, sin embago, no se poduce a espaldas de la condición biológica natual. Po el contaio, lo especíco de la condición sexuada se deiva de la nalidad de las inclinaciones natuales del hombe. Como con todo lo humano, los pocesos de supevivencia animal quedan eleva dos a capacidad cognitiva y elacional, libe, pecisamente al pesonaliza lo copoal. Si un vaón nace inteesado en constui, analiza y exploa y una muje nace inteesada en la expesión emocional, en la elación y en mantene la amonía, signica que su ceebo se ha hecho paa ese dise ño. Las indicaciones, que les popo cionan aquello paa lo que nacen he chos, dicen a cada uno qué es el cento de gavedad de su se y con ello la azón de su ob a en todas las dimensiones pesonales de una vida huma na milia, pofesional y social. Lo que nos viene dado, y no es elegido, centa la oientación de la miada a la ealidad. Más aún, lo que dene un cuepo de vaón o de muje, es signo de la pesona que se es.
CAPÍTULO III E CEREBR Y S FECS IGDS NSI SI ÓN DE ID
NEUOLOGÍA DE LOS AFECTOS VINCULADOS
A LA POCACIÓN
La capacidad de ama es la cultad más especícamente humana. Hay dos tipos de amoes ligados a la tansmisión de la vida muy asenta dos, po eso, a la copoalidad sexuada pesonal. La inclinación íntima y ponda de la made a ama a los hijos ocu pa una posición única y pivilegiada en la conducta y los sentimientos humanos. Esta tendencia natual es una de las más podeosas motivacio nes de la acción humana. En cieta medida, junto al amo omántico, o enamoamiento, se ha celebado en todas las épocas, y en las difeentes manifestaciones del ate, como unas de las más bellas e inspiadas mani festaciones de la conducta de los hombes. Todo hombe tiene la potencialidad de quee a alguien como hijo , y además hacelo con corazón de pade y de made. Peo el coazón de ma de no es igual al de pade, y a la invesa, poque los cicuitos del ceebo de vaón y del ceebo de muje son como son, y divesos en cada uno. La matenidad cambia a la muje tansmando su ceebo estuctual y ncionalmente; y, en cieta medida, de ma ievesible: deja huella. El ceebo innato de la muje esponde, poniendo en acto los cicuitos más etes de la natualeza, a las consignas básicas que se inician con el ceci miento del feto y avanzan y se eezan hasta el nacimiento. Más tade, duante la lactancia, el tacto, el olo, y la intimidad piel conta piel, man tiene en la made un estado mental muy peculia. También los vaones pades biológicos, y las mades y los pades adoptivos, y en geneal las pesonas tas un contacto íntimo y diaio con
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un bebé, desaollan esa inclinación natual que se pesonaliza en el modo de ama matenal. Las claves físicas (olo, tacto, etc.) genean nuevas pis tas neuoquímicas en el ceebo, que cean y eezan los cicuitos coes pondientes y genean un vínculo ete y aaigado. Es el cerebro matea El amo omántico genea también un intenso vínculo especíco en la elación ente un vaón y una muje. En el cerebro enamorao se genea un estado en buena medida simila al ceebo matenal, y usando estate gias similaes, peo también distintas, en el vaón y la muje. La ma de apego del enamoamiento añade al amo matenal y patenal un componente eótico. Componente que genea el vínculo especíco del cerebro emparao que también tiene algunos componentes divesos en el vaón y en la muje. Como coesponde a este tipo de estudio, no se tataá la neuosio logía de la afectividad en geneal, ni de la poceación y el place sexual, en geneal. Se analizan los datos de la liteatua cientíca aceca del di mosmo ceebal que es el pesupuesto, y apota la pedisposición pa ticula, al amo sexuado y a la matenidad/patenidad especícas del se humano muje, y del se humano vaón. Los datos de las neuociencias se han obtenido, con las técnicas que se señalaon en el capítulo anteio, analizando las emociones placenteas que poducen la vista de una togafía del hijo o de la pesona amada, o togafías con contenido eótico, o incluso la sensación placentea que puedan poduci el olo de deteminadas sustancias. La neuología de estos afectos está especialmente ligada a la copoa lidad sexuada. Tienen en pime luga un sistema emocional especializa do que ecibe entadas sensoiales, las intepeta, y genea espuestas de conducta autónoma y endocina. En segundo luga, paticipan un conjunto de sistemas especializados de memoia a coto plazo, que mantienen la inmación sobe los estímulos pesentes; y a este sistema se unen unas nciones ejecutivas que ecupean inmación de lo guadado en la memoia. Lógicamente se equiee una activación de la coteza. Y en ultimo témino, se ealiza la elaboación de la espuesta emocional, que conlleva cambios de conducta, cambios del siste ma nevioso autónomo pesión ateial, itmo cadiaco, sudación, etc., y cambios de las espuestas homonales que son señalados continuamente al ceebo tanto po al uta neual como po la uta química. A medida que se poducen esos cambios, la pesona los pecibe y si gue su despliegue tempoal. Senti una emoción incluye la expeiencia de esos cambios yuxtapuesta a las imágenes mentales que iniciaon el ciclo. Cuando los compo nentes que acabamos de descibi ncionan juntos, es inevitable la expeiencia emocional consciente. Esto es, paa se conscien-
EL CEREBR Y LS AFECTS LIGADS A TANSMISIÓN DE VIDA
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Efectos mentles med idos por ne urohormons neurotrnsmisores Oxitocin: Mimosa encuentra placer en ayudar y serir. Cortisol rispado arumado estresado sensile fsica y emocional mente.
sopresin igilosa en segundo plano energas masculinas sutiles y agresias
Dopmin: eurotransmisor que participa en la regulacin los moi mientos y en los circuitos de compensacin, cuya actiidad genera una sen sacin agradale
tes de una expeiencia el contenido inmativo deb e esta en la memoia activa o ncional y, a su vez, hace efeencia a uno mismo. Es bien co nocido que el hecho consciente univesal no es «los sentimientos exis ten», sino «yo siento». 1. ÁREAS CEREBALES IMPLIAS EN LOS VÍNCULOS AFECTIVOS
Los componentes neuales que pocesan los afectos ligados a la tansmisión de la vida, son divesas estuctuas pefectamente coodina das. Algunas de ellas pesentan dimosmo estuctual o ncional. El cuado esume las divesas áeas implicadas. y algunas de ellas se pesen tan en la gua 1 7. Figura 1 7: a pas cerebrales y localiación de áreas implicadas en las emociones
Corteza cerbr
b iunvo
ll
x TALM IPA AMÍGA Cgl
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El núcleo central, de las tres capas concéntricas del cerebro, humano es el más antiguo en la escala filogenética y es el pri mero en formarse en el desarrollo emb rionario. Se co noce como cerebro retiliano por ser el ámbito del control de las funciones vegetativas, de los deseos, e i nstintos in conscientes. Está cubierto por el conjunto de estructuras que forman el sistema lmbico que procesa las emociones, y este, a su vez, puede ser con trolado por la tercera capa, la corteza cerebral
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Cortez cinguld Es la parte medial de la corteza cereral que perte nece al sistema lmico y participa al igual que el giro cinguldo en los mecanismos de la emocin y motiacin. Comisur nterior Haz redondo de firas neriosas que cruza la lnea media cereral. La parte anterior son firas de los ulos olfatorios y la posterior une los lu los temporales Cortez entorrinl. ecie aferencias de las reas de asociacin y do pamina y proyecta al hipocampo. Cuerpos mmilres cleo del hipotlamo posterior implicado en los circuitos de memoria deido a que sus aones alcanzan el hipocampo a tra és del frni. órnix. Firas del sistema lmico que recie del hipocampo y las ena a los cuerpos mamilares del hipotlamo Hipocmpo. onsolida las informaciones recientes transformando la memoria a corto plazo en memoria a largo plazo. Gnglios bsles. eci en informacin de g randes reas de la corteza cereral y del sistema lmico, y su funcin est relacionada con la planifi cacin y la m emoria motora Giro dentdo Del hipocampo recie aferencias de la corteza entorrinal Ínsul. Lulo situado en el fondo del surco de ili, entre los lulos frontal, temporal y parietal. Núcleo prventriculr cleo que proyecta la informacin del tlamo a la corteza cereral de forma no especfica Núcleo suprquismático o supróptico Del hipotlamo anterior Parte de sus células producen oitocina que se segrega a la neurohipfisis Tálmo Estructura sucortical diidida en tres partes relacionadas con el sistema lmico y la corteza. ituada en el centro del cerero constituye la a de entrada para todos los estmulos sensoriales a ecepcin del olfa to. En la zona posterior lateral encuentra el núcleo geniculdo, esencial para la isin consciente fr para las definiciones el Diccionario de las Neurociencias. F Mora y M. anguitetti, lianza Ed
Coeza cingulada
La coteza cingulada se divide en dos egiones ncionalmente dife entes. La egión anteio es el áea que tiene mayo contibución al modo de compotase, debido a que modula todo el espacio que el cee bo emplea paa la afectividad y paa el ajuste de las espuestas en la ela ción con los demás. Las difeencias individuales en la espuesta a aquellos etos que se pesentan en elación a los demás y lo demás, es pate de lo que descibe la pesonalidad. La zona anteio suele se asimética en geneal. Un lado deecho más pominente es más ecuente en las mujees que en los vaones. La
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Figura 1 8 : a ona anterior de la cortea cingu lada de recha tiene un tamaño variable
G t
S
Sg g
En las mujeres, l a zona anterior de la corteza cingu lada es mayor en e l hem isferio derecho que en el izquierdo. Cuando la zona derecha ocupa gran extensión abarca la región del sur co intralímbico, o del segundo surco de la corteza cingulada. Modificada de Pujol, J., 2002.
gua 1 8 muesta que el tamaño de la zona anteio deecha vaía mucho de unos individuos a otos. En geneal, el mayo tamaño implica pesen cia de la coteza límbica y paalímbica, lo que conlleva que el áea ante io y la posteio sean ncionalmente difeentes. Se ha estudiado la elación ente la pesonalidad, o estilo de compo tamiento, y la vaiabilidad mológica de la egión anteio del gio de la corteza cingua en mujees y vaones1• Los que poseen una gan exten sión de la egión anteio deecha de la coteza cingulada, se desciben a sí mismos como pesonas con gan peocupación po los poblemas que se les puedan pesenta, tímidos con los extaños, se tigan fácilmente, tienen miedo a lo incieto. Es deci, caacteísticas de la intovesión y de PUJL, .; EZ, .; EU, .; ARDNER, .; ALLEJ, . ; ADE, ., y PA, (20 02) : «natomical ariability of the nterior ingulate yrus and asic imensions of Human Personality», Neuromage, 15, pp 847-855.
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una dependencia emocional de los demás. Cuando esta pesonalidad se da en mujees suele habe una gan expansión de la zona anteio de la coteza cingulada del hemisfeio deecho. Solamente en las mujees esta egión es más gande en el hemisfeio deecho que en el izquiedo, lo cual es llamativo ya que, en geneal, el ce ebo de las mujees es más simético que el de los vaones. Sin embago, está en concodancia con el mayo ecuso al sistema límbico y el papel que desempeña el hemisfeio deecho en el contol del compotamiento. Este hemisfeio es más ecaz que el izquiedo en pocesa las señales de aleta, e inteviene en las eacciones que se dispaan po los estímulos. Tam bién en el lóbulo ontal deecho se pocesan las espuestas a las emocio nes de miedo y disgusto. Po el contaio, el izquiedo está más implica do en el contol de la motivación y compotamientos de acecamiento. Las pesonas extovetidas y con gan iniciativa, tienen mayo supe cie del áea izquieda de la coteza cingulada posteio. CEEB O MATENAL
El ceebo matenal inicia su constucción con el comienzo del em baazo, con el delicado diálogo molecula que pemite la simbiosis pe cta made-hijo, tas la anidación del embión en el úteo. A lo lago de la gestación sintetiza homonas y su ceebo está inundado po ellas. Hay cambios en estuctuas ceebales que cambian sus estados mentales; es deci, cambia la ma como p iensa, siente y mia la ealidad. El ceebo es especialmente plástico con la atención a la vida incipiente y deja hue llas en los cicuitos neuonales, que son imboables. El ceebo matenal es un ceebo motivado, siempe atento y deci didamente potecto, que pedispone a la made a cambia sus eacciones y sus pioidades en la vida. Otas taeas pasan a segundo plano. El cee bo es así; cuanto más intensamente se hace algo, más neuonas se dedi can a ello. Señala Louann Bizendine en «El ceebo femenino»2, que la pime a ase que debeía deci un niño es «mamá te encogí el ceebo». En efecto, el ceebo disminuye de volumen total en los últimos meses del embaazo, ecupeándose ceca del tiempo del pato. La causa de esa con tacción no es que se piedan neuonas, sino que la actividad exige una conexión muy intensa ente las neuonas. Con tal actividad, se hace ea2 .
., p
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lidad que algunos caminos secundaios se tansman en auténticas autopistas, que son, en gan medida, paa toda su vida. Los cicuitos neuonales del amo matenal ecogen los de los cee bos matenales de las hembas animales. El poceso de vinculación ani mal emplea un mecanismo que activa la vía especíca de los sistemas de ecompensa del ceebo. Cada alumbamiento en la natualeza tae un valo a la Tiea; la hemba que le da a luz siente ecompensa po la nueva vida. En el alumbamiento humano, es povebial la alegía mate nal po el hijo que tae al mundo, po el valo inconmensuable de la no vedad adical que es cada hombe3• 1. L COMPS DE OTOCINA
La oxitocina es un nonapéptido libeado po el hipotálamo a tavés de la pituitaia posteio. Sintetizada po el ceebo mateno, desempeña un papel cental a tavés de su nción de dispaa los cicuitos de la con anza de la made. Duante el pato, el ceebo matenal está conectado con pecisión al hijo tavés de la oxitocina. Cuando el bebé está a témi no, emite señales que bajan la pogesteona matena, al tiempo que se po duce una pimea subida de oxitocina. Los pulsos de oxitocina se epiten a lo lago del pato hacen al úteo contaese al ceebo activa ecep toes cea nuevas conexiones ente las neuonas. La lactancia también eeza el ceebo matenal mediante la libeación de oxitocina po el contacto físico con el bebé que succiona. La neuohomona oxitocina está cucialmente implicada en el poce samiento del vínculo matenal 4 además de media la memoia de elacio nes pesonales, social, el apendizaje 5• lgo tan prondamente natural humano puede elicar los trastornos emocionales que sue la madre ante un aborto espontáneo. on más motivo se dan en el caso de un aborto provocado. ebería ser un motivo de relexión los sistemas de anticoncepción, que intentan que la muer no sepa si estuvo o no embarazada y acostumbrala así a erradicar la señal de alerta de la emoci ón maternal. as consecuencias deshumanizantes de cortar las raí ces más prondas del ser del hombr engendran, necesariamente, una violencia desmedida e incontrolable. 4 NSEL, . ., y NG, . . (200 1 ): «he neurobiology of attachment», Nat R ., 2, pp. 129-136; ENDRICK, . . (2000): «Ütocin, motherhood and bon ding», Exp Physiol, 85 , pp. 1 1 1- 12 4; PEDERSEN, . . ( 1 997): «Ütocin control of ma ternal behavior. egulation by sx steroids and ospring stimuli», A Acad Sci. 807, pp. 126-145. 5 ERGUSON, . , NG, . . ; HEARN, .; NSEL, . ., y INSLOW, . , (2000) : «ocial amnesia in mic lacking the otocin gene Nat Get, 25, pp. 284-288.
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La made siente eufoia po la elevación de oxitocina dopamina; la pesencia en el ceebo de estas sustancias poduce estados mentales de deseo de unión, o apego. El ceebo matenal está así pedispuesto a asu mi el vínculo consciente del amo al hijo, que, cuiosamente, desconec ta el pensamiento juicioso las emociones negativas. Así mientas en el ceebo matenal se encienden los cicuitos del place que poducen esta dos de alegía apego, no «puede ve» en el hijo defecto alguno. Los sentidos, vista, oído, tacto sobe tod o olto se hacen intensos. El olo el tacto del bebé jaán los cicuitos del ceebo de tal manea que se induce de ma natual el afán de potección defensa. 2. ÁREAS CEREB ES ACTIVAAS Y S ESACTAAS
Las técnicas de neuoimagen han pemitido obseva las áeas cee bales activadas cuando la made contempla togafías de los hijos, te niendo como contol las de otos niños de simila edad, de miliaes o conocidos como contoles adicionales. La gua 1 9 muesta la actividad ceebal especíca del amo matenal. Como puede obsevase todas las egiones activadas son bilateales. Las egiones de la coteza que apaecen activadas, están sólo indiecta mente asociadas con pocesamientos cognitivos o emocionales «eleva dos», en el sentido de teoizados. Se activa la coteza de la ínsula media, el gio de la coteza cingulada en la zona vental, la coteza obito-ontal peontal lateal; una egión de la coteza occipital, cecana al áea vi sual la coteza fusifome lateal. Divesas áeas de la capa subcotical se activan también especca e in tensamente: los ganglios basales, tanto el cuepo estiado (putamen núcleo caudado) como el gb pal/i; la sustancia nega con la que conectan. Se encontó, además, activación de la pate vental-posteio del tá lamo que solapa con el ceebo medio, en la egión paacental de mate ia gis. La activación de esta zona está elacionada especícamente con el amo matenal. ecibe conexiones diectas con áeas del sistema límbico que contienen gan densidad de los eceptoes de las dos neuohomo nas; también está implicada en la supesión del dolo duante expeien cias de intensa emoción como puede se el nacimiento del hijo 6 • La e ND, .; , . .; VNAS-BERG, .; ANG, .; , .; ROSAWA, .; GREN, . ; OSEN, .; EKMAN, . , y UNDEBERG, . (200 2} : «patd massag-lik sti mulation induces long-trm cts on nocicption: contribution of otocinrgic mcha nisms», Eu Nrosci, 16, pp. 330-338.
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Figura 19: egiones activadas en el cerebro maternal
Iq
v
En la corteza se activan la ínsula medial la zona ventral el giro de la corteza cingulada anterior (Ca); la corteza orbito-frontal (-F) y prefrontal lateral (pFL); una región de la corteza occipital (O) cercana al área visual y la corteza fusiforme lateral (FL). La actividad subcortical es tam bién b ilateral en el estriado , E. No se muestran en la figu ra la zona de sustancia negra y de la sustancia gris de la región paracentral y la parte ventral-posterior del tálamo, que también se activan. Modificada de Bartels, A. , 2004.
gión p aacental de mateia gis tiene también conexiones con la coteza obito-ontal 7• La coteza obito-ontal lateal se activa con el place vi sual, los estímulos visuales, táctiles y oltivos que son otos aspectos de las emociones positivas del amo matenal. Po ota pate, las mades humanas, a difeencia de las no-humanas, desaollan emociones adicionales al instinto matenal, de ansiedad, tiste za e incluso sobesalto a los uidos y que constituyen sistemas de potec ción de los bebés8• La activación del gio de la coteza cingulada anteio elacionada con la ansiedad y la tisteza9, sugiee un potente vínculo de sentimiento de empatía de la made y ugencia o peocupación po la atención del niño; con ecuencia, se expesa en la llamada depesión pos pato. Las mades activan el gio sime, implicado en el pocesamiento de la expesión de las caas, tanto po el aumento de atención, como po 7 avada, ., ompany, , eedor, ., ruz-izzolo, .., einoso-uarez, F, (20 00) . he anatomical con nections of he macaque monkey orbioontal cortex. review. Cereb. Cort 1 0, pp. 220-242. 8 ORBERBAUM, . P.; EWMAN, . .; HORWITZ, . .; UBNO, . .; YDIARD, . .; HAMNER, . .; NING, . ., y EORGE, . . (2002) : « potenial role r halamo cingulae circuitry in human maternal behavior», Biol. Psychiatry, 51 , pp. 431- 445. 9 TTI, .; AYBERG, H . .; RANNAN, . . ; INNIS, . ; EABEK, , y , (2000): «ierential limbic-cortical correlates of sadness and anxiey in healhy subects: implications r aective disorders», Biol. Psychiat, 48, pp. 30-42.
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Figura 20: egiones desactivadas en el cerebro maternal y en el cerebro romántico
La corteza p refrontal med ia ( pF m) , la corteza cingulada posterior (cCp) , la corteza tempo ral media (cTm), la zona de unión parieto-occipital (-P) y los polos temporales (PT). Por último está también impl icada la am gdala (A) . Modificada de Bartels, A. , 2004.
la emoción10 que conlleva. Esta activación es especíca de la vinculación matenal y tiene un enome sentido: la habilidad que pemite una ápida lectua de lo que les ocue a los niños. Po último, hay egiones que se desactivan en el ceebo matenal ( gua 20). El patón de desactivación es bilateal, aunque afecta ndamen talmente al lado deecho. Las áeas en que se supime la actividad están asociadas con las emociones negativas y con la elaboación de enjuicia mientos; man pate del llamado ceebo social. Son las áeas del hemis feio deecho, peontal lateal, occipital-paietal, gio paacingulado on tal, la coteza cingulada posteio, la tempoal media y el polo tempoal. En e l ceebo matenal se inactiva la amígdala en ambos lados (gu a 20). La amígdala, que pocesa las emociones negativas de agesión y miedo 1 1 y está implicada en los enjuiciamientos sociales y emocionales12, PESSOA, .; ENNA, .; UTIERREZ, ., y NGERLEIDER, . . (2002): «eu ral processing of emoional ces requires attention», Proc Nat!. Acad. Sci. USA, 99, pp. 11.458-11.463. REITER, H. .; TFF, . .; ALEN, P. .; NNEDY, . .; A, . .; KNER, . .; TRAUSS, . .; HYMAN, . ., y OSEN, . . (1996): «esponse and habituation of the human amygdala during visual processing of cial expression», Neuro, 17, · 875-8 87; ORRIS, . .; RIT, .; PERRETT, . .; OND, .; UNG, . .; ALDER, . ., y LAN, . . (1 99 6) : « dierential neural response in the human amyg dala to fearl and happy cial expressions», Nature, 383, pp. 81 2-81 5. LS, . ; RANEL, ., y AMASIO, . . (1 99 8) : «he human amygdala in so cial udgment», Nature, 393 , pp. 470-474.
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contiene eceptoes de oxitocina que modula el cicuito neual que sub yace al conocimiento social 13• La oxitocina egula la amígdala educiendo el miedo y modulando la agesión. De este modo el ceebo matenal eac tiva los cicuitos de elación humana ejeciendo una nción clave en el pocesamiento de los afectos. El cerebro social alinea la corteza frontal medial e inferior con la amg dala creando una ruta que potencia el procesamiento de los estmulos rele antes socialmente
III. CEEBO ENAMORADO DEL VAÓN Y DE LA MUJE 1. ÁREAS CEREB ES ACTIVAAS Y REAS ESACTIVAAS
El llamado amor romdnco o enamoamiento, es una de las conductas humanas más «ilógicas«: es involuntaio, intensica o disminuye emociones, y se hace ciego a los defectos, o deciencias del oto. En este sentido se dice de la made que está enamoada de su bebé y se han podido analiza las coincidencias neuonales de ambos afectos14• En ambos estados mentales se activan wnas comunes y se desactivan las mismas wnas sub coticales. En el ceebo enamoado, a difeencia del matenal, no se activan las egiones del ceebo medio. Po ota pate, en este tipo de vínculo se ac tivan especícamente áeas del hipotálamo, hipocampo y gio dentado, que no se activan con el amo matenal y que están implicadas en la exci tación sexual. Las egiones que se activan pefeentemente en el amo omántico, es tán implicadas en el pocesamiento de oto tipo de emociones, como la exEl circuito formado por el sistema lmico, el ncleo dorsomedial del t lamo y la orito-frontal y prefrontal est implicado en la regulacin de la conducta seual Estos circuitos estn estrechamente relacionados entre s a traés del fascculo cereral medio que incluye los principales centros responsales de los sistemas cererales de recompensa y castigo
RSC, ; SLINGER, .; EN, Q.; IER, .; IS, .; DDANTI, .; RU E, H. ; ATTAY .; ALLOFER, ., y YER-INDENBERG, . (20 05 }: «Ütocin odu lates eural ircuitry r ocial ognition and ear in Humans», The Joual of Neus ciece, 25, pp 11.489-11.493. ARTELS, ., y EKI ,. (2004}: «he neural correlates of maternal and romantic !ove», Neuromage, 2 1 , pp 1 . 1 5 5 - 1 . 1 6 6 .
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clusión social, o las expeiencias placenteas tales como el contacto fico. Estas wnas ceebales eejan no tanto el place sexual, como el inteés po conoce la intención positiva de vinculación intepesonal 15• Son wnas de la coteza peontal, de la wna paietal-tempoal, y de los polos tempoales, que constituyen un pel de áeas invaiablemente activadas con la capaci dad de detecta las emociones e intenciones popias y de otas pesonas. Las áeas comunes activadas, man pate de los cicuitos de ecom pensa que tienen una alta concentación de eceptoes paa las neuoho monas oxitocina y vasopesina, que median la adquisición de vinculacio nes pesonales1 6 ; la densidad de los eceptoes diee en estas áeas según el tipo de sentimiento que pocesan. La gua 20 muesta las áeas especícamente desactivadas del cee bo omántico, compaadas con las inactivadas también en el ceebo ma tenal. En ambos vínculos se supime la actividad de áeas en que están asociadas con las emociones negativas y con la elaboación de enjuicia mientos, el llamado cerebro socia Las neuohomonas oxitocina y vasopesina están implicadas en el pocesamiento del vínculo matenal y de apaeamiento animal 17• Los ci cuitos neuonales que se activan en el ceebo omántico, son un sistema de motivación difeente del áea ceebal del impulso sexual, aunque ten ga wnas que se supeponen. Los efectos de ese amo «echaw», el ena moamiento tempano, al igual que los efectos iniciales de los nacóticos, dispaan los cicuitos de ecompensa. Se poduce una cieta «adicción» en esos pimeos estadios amoosos, de ma que hay anhelo po el senti miento extasiado de esta juntos y hasta puede llegase a una cieta depen dencia mutua del oto. Las manifestaciones de afecto de la paeja sellan el 1 5 ALLAGER, H. ., y RIT, . . (2003): «unctional imaging of "theory of mind», e Co Sci., 7, pp. 77-83; ISENBERGER, . .; IEBERMAN, . ., y LLIAMS, . . (2003): «oes reection hur? study of social exusion», Sciece, 302 , p. 5 .64 3; RIT, . ., y RIT, . ( 1 99 9) : «nteracting minds - biological basis Sciece, 286, pp. 1.692-1.695; OLLS, . .; 'ERTY, .; RINGELBAC, . .; N CIS, .; WTELL, ., y LONE, F (2003): «epresentations of pleasant and painl touch in he human orbitoontal and cingulate cortices», Cb. Cort, 13, pp. 308-317; RUNET, .; ARFATI, . ; HARDY-AYLE, . ., y ECETY, . (2000 ) : « P investigation of he attributi on of intentions with a nonverbal tas>, Neuromage, 1 1, pp. 1 57- 166. 1 6 OU, F ; RIBOLLET, .; UBOIS-AUIN, . , y REIFUSS, . . ( 1 9 9 1 ) : «ocali zation of high-anity binding sites r otocin and vasopressin in he human brain. autoradiographic study>>, Brai R. 555, pp. 220-232. 1 7 NSEL, . ., y UNG, . . (200 1 ). «he neurobiology of attachment», Nat R ., 2, pp. 129-136; ENDRICK, . . (2000): «Ütocin, motherhood and bon ding», . Physio, 85 , pp. 1 1 - 12 4; PEDERSEN, . . ( 1 99 7): «Ütocin control of ma ternal behavior. egulation by sex steroids and ospring stimuli», A. Acad. Sci., 807, pp. 126-145.
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vínculo y dispaan los cicuitos ceebales de la conanza, asociada a la sececión de la oxitocina. El impulso impulso de enamoamiento en amoamiento está siempe latente, peo pe o pemanece enamoado equiee los cicuitos ceebales de vinculación pesonal y la memoia emocional. Cuando se desaolla desaolla este poceso po ceso se necesita necesita meno estímulo estímulo de oxitocina y dopamina paa sostene sosten e el vínculo vínculo emocional. emo cional. El impulso impulso básico paa p aa la vinculac vinculació iónn ománti o mántica ca está integado integado de ma ma in nata en los cicuitos del ceebo que se pelan p elan duante el desaollo desaollo cee bal uteino. Posteiomente, se lab an vaiaciones vaiaciones individuales individuales en los ci cuitos del afecto y la conanza, según los cuidados que se eciban en la inncia inncia y las pimea p imeass expeien expeiencia ciass emocionales. emocio nales. El enamoamiento genea una elación emocional ente las dos pe sonas que paece tene «vida popia», necesidad de se alimentada paa pemanece y hace pemanente el vínculo afectivo. La disposición indi vidual paa enamoase y cea cea ese vinculo vinculo,, como paa la ceación de los divesos divesos tipos tip os de vínculos afectiv afectivos, os, puede pue de afectase afectase po las l as vaiaciones vaiaciones en los cicuitos ceebales causadas po po la expeienc expeiencia, ia, a tavés tavés del estado ho ho monal del ceebo. Po ejem ejemplo, plo, el estés del del entono en tono puede p uede alenta o e na la ceación de vínculos. vínculos. En geneal, los vínculos emocionales y los lazos que se establecen con las pimea p imeass guas guas potectoas duan toda tod a la vida: vida : se convieten convieten en en pate de los cicuitos ceebales po la vía del eezo dado en las expe iencias iencias eiteadas eiteadas de cuidados sicos sicos y emocionales, o po su ausencia1 8 • Son So n los cicuitos cicuitos de seguidad seguidad y conanza. Si estos son escasos, el impul so de enamoamiento e namoamiento se da, peo p eo tiene el sello de a coto plazo; la vincu vincu lación emocion em ocional al a lago plazo plazo p uede se más dicil de loga y mantene. El ceebo ceeb o es así; así; y los vínculos natuales n atuales dejan deja n huella en él y afectan afectan a la popia biogafía, aunque como es obvio no de la ma deteminante de lo genético. El hecho hecho de que que paa p aa danos a con conoce oce a ndo, ndo , o llega ll ega a co noce a ndo a una pesona, sea necesaio conoce la histoia, la bioga fía pesonal, es de una ponda lógica natual. 2. DIFER DI FERENCIAS ENCIAS EN EL VARÓN Y MUJER
La conducta de vinculación, cuyo pesupuesto emocional incluye el contol po las neuohomonas neuohomon as poducidas po po la pituitaia pituitaia y el hipotála18
lgunas lgunas estadísticas estadísticas sustentan que las personas se enamoran de otras que tienen al gún parecido a los padres naturales o adoptivos. ICKS, . (2003): «lección de pare a», Mete cerebro 4, pp. 84-89
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mo, dieen en vaones mujees. El ceebo masculino emplea la vaso pesina paa p aa la vinculación vinculación social milia. Mientas que el ceebo fe menino usa pimodialmente la oxitocina los estógenos. Los vaones tienen más eceptoes de la vasopesina vasopesina las mujees más eceptoes paa la oxitocina. Ambos neuopéptidos aumentan los niveles de dopamina. Y ambos, vaones mujees, eaccionan a la invesa ante el estés. Los vaones ex peimentan impulso imp ulso las mujees echazan los impulsos. La azón paece se que la homona del estés, el cotisol, bloque b loqueaa la acción acción de d e la oxitoci oxitoci na en el ceebo femenino femenino . Los datos de un análisis ealizado sepaando en un gupo los vaones en oto las mujees, evelaon que en ambos se activan las egiones es pecícas del vinculo omántico (gio dentado e hipotálamo) que no se ac tivan en el ceebo matenal. No obstante, la egión vental de la coteza cingulada anteio, que se activa en el ceebo matenal, muesta también una activación en el ceebo enamoado femenino, peo no en el mascu lino. En esumen, el pocesamiento de ambos sentimientos, matenal enamoamiento, implica áeas comunes otas difeentes, difeentes, e implica acti vación de unas desactivación de otas. Es deci, los pocesos de estable cimiento de vínculos afectivos siguen un mecanismo de activación de los sistemas de ecompensa del ceebo que es simultáneo con la desactiva ción de los cicuitos esponsables del juicio cítico de las emociones emocio nes ne gativas. La activación especíca de egiones del hipotálamo en el ceebo enamoado eeja el componente de impulso eótico, inheente a este sen timiento timiento 19• I DIMOFI DI MOFISM SMO O DEL DE L CEEBO CEEBO SEXU SEXUAL Una cuestión cental que se plantea actualmente, es hasta qué punto los mecanismos ceebales establecidos duante el desaollo fetal son 1 9 RNOW, . .; ESMOND, . .; ANNER, . .; LOVER, . H.; OLOMON, .; PN, . . ; UE, UE, , y TS, . (2002): «rain activation and sexual arousal in he althy, heterosexual males Brai 125, pp. 1.014-1.023; ERRIS, . ; NOWDON, . ; NG, . . ; NG, . . Q.; IEGLER, IEGLER, .; GURBIL, .; UDWIG, UDWIG, . ; ULTZ-ARK ULTZ-ARKEN, EN, . .; , .; ÜLSON, . , et a (200 1 ) : «unctional «unctional imaging of brain activ activity ity in cons cious monkeys monkeys respondin respondingg to to sexuall sexuallyy arousing cues», ,, 1 2 , pp. 2. 23 1 -2 .2 36 ; MA, .; ER, . .; ER, . .; RGOUIN, ; UDOIN, .; BERT, ., y UREGARD, . (200 2) : rea reass of brain activtion activtion in males and an d females females during viewing viewing of erotic lm excer excerpts», pts», Hum Brai Mapp, 16, pp. 1-13.
EL CEREBRO Y LOS AECTOS LIGADOS A TANSMISIÓN DE VIDA
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jos, jos , y condicionantes «inexibles» d e una tendencia sexual, sexual, e incluso de un compotamiento compo tamiento sexua sexuall 2º. El dimosmo sexua sexuall del ceebo es un hecho. hecho . No hay datos que apoyen que el hombe pueda nace con un ceebo se xualmente neuto, que después sea modelado socialmente, con indepen dencia del sexo biológico. El ceebo se difeencia, como ceebo de vaón o como ceebo de muje, antes del nacimiento; y sobe esta base actua án las homonas pincipalmente en la inncia y pubetad, y a lo lago de la vida. La conducta sexual está en elación diecta con la epoducción. En los animales la difeenciación sexual del sistema nevioso cental es mea mente biológica, y bastante simple tanto en los aspectos mológicos como ncionales. En el se humano, humano , el poceso es mucho más complejo, complejo , puesto que se añaden ctoes psicológicos, sociales, cultuales y de con ducta pesonal, que se supeponen a los biológicos y se inuyen mutua mente. Como coe co espo sponde nde a los actos humanos la tansmisión tansmisión de la vida vida no se educe a los pocesos p ocesos siológicos que la sustentan, sustentan, sino que se abe a la capacidad pesonal de entega y aceptación de la pesona del oto sexo. Lo cual no signica que la conducta sexual sea abitaia, ni indife ente. Existe, como se comentó anteiomente, una coincidencia adical, natual y no meamente cultual, ente el gesto humano que expesa la donación-aceptación don ación-aceptación mutua en la unión copoal de un vaón vaón y una mu mu je, y el gesto de engenda: esa unión es justamente la que pemite que se hagan mutuamente fecundos. Esa coincidencia adical, anatómica, siológica y exist existencial, encial, hace que el signicad signicadoo de la unión unió n copoal peso p eso nal vaón-muje no esté sometido a las ideas de moda, o a las opciones. Ni tampoco educida a la satiscción del meo impulso natual que lleva a los actos popios po pios de la tansmisión de la l a vida. vida. La tansmisión tansmisión de la vida humana humana tiene un caácte caácte pe pe sonal. so nal. De ahí que lo que conocemos de la neuología de la epoducción animal no sea extapolable, sin más, a la neuología sexual humana. El instinto epoductivo animal es una tendencia podeosa, y en el hombe la eza del deseo amooso tiene motivaciones subconscientes, peo que están contoladas po estuctua estuctuass ceebales subcoti subco ticales. cales. En efecto, efecto, en el 20
oda persona se eperimenta habitualmente a sí misma como varón o como mujer coincidiendo con la condición genética y fenotipo masculino y femenino. n casos excep cionales la identidad sexual está en conlicto con la anatomía y sexo biológico (transexuali dad) y en o tros casos la o rientación sexual sexual heteros heterosexual exual típica que implica la atracción o el deseo amoroso por las personas del sexo opuesto, se dirige hacia personas del mismo sexo (homosexualidad).
