Catequésis con papás y padrinos de niños que se van a bautizar

“PASTORAL LITÚRGICA” Diócesis de Celaya

“Catequesis con Papás y Padrinos de niños que se van a Bautizar”

P. Joaquín Domínguez Luna

Celaya, Gto.

2010





Febrero

INTRODUCCIÓN Es muy común escuchar de los “interlocutores” de nuestra actividad pastoral ciertas observaciones o críticas; con frecuencia se percibe “lo bueno” y con mas frecuencia “las deficiencias”. La pastoral del bautismo no escapa a esa realidad. Entre las personas de nuestras parroquias se escucha que “las catequesis prebautismales son pobres en contenido” o que lo que se dice ahí no tiene relación directa con el sacramento del bautismo (salirse de tema), o a veces quienes imparten las charlas son personas de “buena voluntad”, pero con poca preparación, o desprovistos de material específico. Ante esta situación, estos apuntes pretenden ser un subsidio a la pastoral prebautismal para papás y padrinos de niños que se van a bautizar; son un servicio y una guía que puede enriquecerse-adaptarse a las circunstancias, en nuestra diócesis de Celaya. Se han tomado como principales fuentes: la Sagrada Escritura; el Ritual del bautismo de niños, incluyendo su introducción general llamada preanotanda; el Código de derecho canónico; el catecismo de la Iglesia católica y el documento conclusivo de la V conferencia del Episcopado latinoamericano y del Caribe, Aparecida. Además se han utilizado los subsidios que ha ofrecido el CELAM y la comisión episcopal de pastoral litúrgica de México. Sabemos que la preparación y celebración del bautismo son una gran oportunidad, no sólo para añadir nuevos miembros a la iglesia, sino además fortalecer en la fe y reintegrar en la comunidad eclesial a sus familiares1. Por eso este subsidio tiene como interlocutores a los papás y padrinos de los niños que se van a bautizar y a todo bautizado que quiera renovar su testimonio de fe tomando como punto de partida la gracia y testimonio bautismal. Muchos de los asistentes a nuestras catequesis prebautismales son personas que expresan su fe “ocasionalmente”, por lo que conviene que se aproveche este momento al máximo para ayudarles a madurar en la fe en Cristo; para lograr todo esto recomendamos:

1

-

Que el sacerdote animador de pastoral profética prepare, acompañe, reanime y apoye al equipo de “catequesis prebautismal”.

-

Que el párroco o sacerdote animador se haga presente en las catequesis, al menos en algunos momentos (por ejemplo para hacer la introducción o dar él mismo algún tema).

-

Que los temas sean diligentemente preparados y organizados, utilizando abundante material didáctico.

-

Que los expositores sean seguros en su expresión y se sujeten al contenido temático, evitando el abuso en compartir experiencias personales.

CELAM-CEM, “El bautismo. Sugerencias pastorales”, p5.

2

-

Que los temas se expongan íntegros en su contenido.

-

Para el tema bíblico recomendamos leer las citas directamente de la Escritura.

-

Para el tema litúrgico recomendamos ensayar algunas partes de la celebración utilizando el Ritual del sacramento del bautismo (o el ritual de sacramentos).

-

Para el tema pastoral sugerimos leer directamente las disposiciones disciplinares del Código Derecho Canónico.

-

Que la celebración del bautismo sea preparada y dignamente realizada (lecturas, cantos, signos).

Recordamos a sacerdotes y fieles que las catequesis prebautismales NO SON OPCIONALES: -

Porque es deber u obligación de los sacerdotes, en su función de enseñar o evangelizar, “procurar que quienes piden los sacramentos se preparen para recibirlos con la debida evangelización y formación catequética”2 .

-

Porque “Los laicos tienen derecho a recibir una sólida formación humana… doctrinal, social, apostólica” 3.

“Los fieles tienen derecho a recibir de los pastores sagrados de ayuda de los bienes espirituales de la iglesia principalmente de la Palabra de Dios y los sacramentos” 4. Seamos optimistas y reanimemos nuestras metas pastorales esforzándonos en la tarea de la nueva evangelización, de la conversión personal y pastoral, construyendo, en nuestra realidad. Diocesana y parroquial, el Reino de Dios y respondiendo generosamente a la vocación que hemos sido llamados. Y así realizar nuestro ser de discípulos y misioneros en nuestras comunidades. Recordemos que la misión continental, pedida por el CELAM en Aparecida, tiene que ver mucho con la Iniciación Cristiana.

Julio 2010

Pbro. Joaquín Domínguez Luna.

2

Cf. C. 843 §2. Además Cf.CC 890 y 914.

3

D.P. 794

4

C. 213.

3

ASPECTOS INTRODUCTORIOS 1. Oración inicial: “Señor Dios, que nos has llamado a la vida; que nos has incorporado a Cristo y a su Iglesia desde el día de nuestro bautismo; que nos pides el buen testimonio del amor; te pedimos tu gracia para atender estas reflexiones. y así poder celebrar compromiso bautismal”. O bien: “Dios nuestro, que abres las puertas de tu Reino a quienes renacen del agua y del Espíritu Santo, haz fructificar en nosotros la gracia del bautismo para que libres de toda culpa, podamos alcanzar la herencia que nos has prometido. Por nuestro señor Jesucristo…”5. O bien: “Señor, tú que nos has hecho participes de la muerte y resurrección de tu hijo por medio del bautismo, Concédenos vivir de manera nuestros compromisos bautismales, que demos frutos abundantes de vida cristiana y podamos llegar a la plenitud del gozo eterno. Por nuestro Señor Jesucristo…”6. 2. ¿Cuáles serán los contenidos temáticos?: Después de esta introducción - motivación (en la cual estamos), tendrémos los siguientes temas indispensables: Fundamento bíblico del sacramento del bautismo”. Celebración litúrgica del sacramento del bautismo”. Aspecto Jurídico - Pastoral del sacramento del bautismo”. Teológico o doctrinal sobre el bautismo (efectos y dimensiones)”7 . Además se recomiendan los siguientes temas: Pastoral de la iniciación cristiana a la luz de Aparecida Algunos aspectos en los ritos de iniciación El catecumenado de los primeros siglos 3. ¿Cuál es la finalidad de estas catequesis?: Todo sacramento requiere cierta preparación en quien lo va a recibir, Cuando se trata de niños, la preparación se refiere a los padres y padrinos… El objetivo principal de la preparación no es tanto aumentar en los padres del niño el conocimiento teórico del cristianismo, sino encender, reanimar o intensificar la fe”8. No veamos estas charlas como mero requisito molesto para “poder bautizar”; más bien hay que entenderlas como una hermosa oportunidad para recordar y actualizar la gracia y el compromiso de nuestro propio bautismo. En el espíritu de Aparecida podemos describir estas catequesis como un catecumenado postbautismal 9, en el contexto de la “Reiniciación cristiana de adultos”.

5

ORACION COLECTA del Martes de la III Semana de Pascua (Misal Romano p. 189).

6

ORACION COLECTA del Sábado de la IV Semana de Pascua (Misal Romano p. 200)

7

Son los temas que presentan los praenotanda de los diversos rituales de los sacramentos.

8

CELAM-CEM, “El Bautismo, Sugerencias Pastorales”, Buena Prensa, México 19972. N.23, p.12.

9

Cf V CELAM, Aparecida n 288.

4

4. En el contexto de la misión evangelizadora de la Iglesia: “La necesidad y urgencia de la instrucción pre-bautismal nunca debe tomarse como una imposición, sino como un servicio y un deber que la iglesia ejerce, obedeciendo el mandato de Cristo de anunciar el Evangelio…”10. Al respecto, la actual legislación de la iglesia afirma: “Los padres del niño que va a ser bautizado, y asimismo quienes asumirán la función de padrinos, han de ser Convenientemente ilustrados sobre el significado de este sacramento y las obligaciones que lleva consigo…”11. 5. En el contexto de la vida sacramental de la Iglesia y en la Iglesia: 5.1 ¿Qué son los sacramentos? Los sacramentos son signos sensibles y eficaces de la gracia, instituidos por Cristo y confiados a la Iglesia, a través de los cuales se nos otorga la vida divina12. 5.2 ¿Cuántos son y en qué grupos se dividen? Son siete y se dividen en tres grupos: Sacramentos de la iniciación cristiana (Bautismo, confirmación y Eucaristía); sacramentos de curación (Penitencia y Unción de los enfermos); y sacramentos al servicio de la comunión y de la misión (Orden sacerdotal y Matrimonio). Todos corresponden a momentos importantes de la vida cristiana 13. 5.3 Estas catequesis son el primero de tres momentos íntimamente unidos; recordemos que “Todo sacramento es cúlmen y fuente de vida Cristiana, es decir, que no puede llegar a el sin preparación y que no se puede considerar terminado tras su celebración, sino que debe prolongarse en la vida” 14. Por lo que pastoralmente podemos decir que “todo sacramento tiene tres momentos”: preparación, celebración y prolongación en la vida:

ANTES

DURANTE

ConocerFortalecer La gracia y el compromiso bautismal

Catequesis o charlas

DESPUES de la celebración

Celebrar recibir El sacramento del bautismo

Celebración litúrgica

VivirTestimoniar El bautismo recibido

Vivencia

TEMA I: PASTORAL DE LA INICIACIÓN CRISTIANA A LA LUZ DE APARECIDA 1. La realidad pastoral de la Iniciación cristiana15. Preparación-celebración-testimonio 10

Decanato de Dolores Hidalgo, “Instructivo Pastoral…” N18, p.5.

11

Código de Derecho Canónico (1983) C. 851 §2.

12

Cf CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA. Compendio, CEM. México2006, n 224,p 72

13

Cf Idem, n 250, p 79

14

DIEZ DE SOLLANO Alfonso, “El bautismo” Catequesis prebautismales. Diócesis de Texcoco, México, 1996, P. 3.

15

Cf. LEÓN OJEDA Felipe de Jesús, “La iniciación Cristiana”, col. A la luz de Aparecida… 2, CELAM, Buena Prensa, México 2008, p 19-26.

5

1.1 Solicitud de los sacramentos. Es bueno que mucha gente pida los sacramentos; lo que no es muy bueno es que a veces quienes los piden no tienen clara conciencia de la dignidad y vivencia de fe de los sacramentos; tampoco es bueno el que los pastores nos vayamos a los extremos en cuanto a las exigencias catequísticas previas a la recepción (tan bonachones que no se exige ninguna preparación, o tan exigentes que pedimos muchísimas catequesis y sólo de nuestra parroquia). Con frecuencia se percibe cierta prisa en que el niño se bautice o haga la primera comunión, pero si los papás viven en amasiato no se les percibe que lleven prisa en casarse por la Iglesia. Quieren acercar a su hijo a Dios, pero ellos no se acercan primero. 1.2 ¿Cuáles son las razones o motivos para pedir los sacramentos? Muchas veces los motivos son de lo más correcto: porque se tiene la fe en Cristo y se desea que los hijos tengan y robustezcan esa fe, se incorporen plenamente a Cristo y su Iglesia. Otras veces los motivos son totalmente superficiales: “porque ya tiene la edad”; “porque es la costumbre cultural”. Y lamentablemente hay hasta motivos que rayan en lo mágico y supersticioso, por ej. En el bautismo16 : “Para que se le quite lo enfermizo, lo chillón” “para quitarle el cuerno”; “Dios no nos vaya a castigar por no bautizarlo”. También a veces hay pretextos para retrasar el bautismo: “lo bautizaremos hasta diciembre, que viene su padrino desde Texas”. 1.3 ¡Son una buena ocasión para hacer fiesta!: La recepción de los sacramentos de iniciación va acompañada de una verdadera fiesta popular, con su riqueza y sus peligros: se consolida la amistad y hay alegría; pero se cae frecuentemente en el comercialismo, alcoholismo y derroche. Incluso algunos retrasan la celebración del sacramento hasta que haya dinero para fiesta. 1.4 ¿Y el proceso de catequesis? El ideal sería que después del bautismo el niño iniciara un proceso de catequesis, dentro del cual a su tiempo recibiera los demás sacramentos; y también que los adultos estuvieran en un proceso de formación en la fe; y que esta formación fuera en su templo parroquial correspondiente. Pero la mayoría de las veces esto no es así, porque se ve la catequesis como “momentos en función de recibir sacramentos”; y también se busca la parroquia donde pidan menos catequesis. A veces también es cierto que la calidad de las catequesis no son tan buenas: lugares incómodos, agentes no muy preparados, contenidos muy pobres, entre otros… 1.5 Tendencias pastorales. Entre los pastores existen dos tendencias: la de una pastoral de conservación con su práctica rutinaria de sacramentalización (se tiende a privilegiar los momentos de recepción de sacramentos, y la catequesis está en función de preparar estos momentos, se reciben en fiestas patronales o aniversario del Señor cura); y la de quienes buscan una pastoral entusiasta, de procesos, revitalizando la pastoral de la Iniciación o reiniciación 16

COMISIÓN EPISCOPAL DE PASTORAL LITÚRGICA DE MÉXICO, “El Bautismo. Sugerencias pastorales”, Buena Prensa, México 1997, p 7-8.

6

cristiana (hay equilibrio entre la catequesis y la recepción sacramental, que por su sentido pascual debe de ser en la vigilia Pascual o en domingos de pascua, o en algún domingo de tiempo ordinario en la misa “por el pueblo”). 1.6 La participación litúrgica y la vivencia sacramental. Muchos fieles participan en los sacramentos, se acercan a la confesión y comunión Eucarística; pero se calcula que sólo el 10% de los católicos van a misa dominical, y de ese 10% sólo de 1 a 3 se acercan a comulgar. Y algo mas difícil de calcular es la vivencia cristiana, pues hay quien dice “yo no soy católico, sólo soy creyente”; o “soy católico pero no estoy de acuerdo en…”; “voy a misa cuando me nace” (egoísmo y sensiblería); “La misa siempre es lo mismo” (en casa nuestra comida preferida es lo mismo; un partido de fut o una telenovela es lo mismo). 1.7 Desconocimiento del Ritual de la Iniciación Cristiana. Parte del ritual son las “Introducciones generales” u “observaciones previas” o “Praenotanda”. Existen tres tipos en torno al bautismo: Introducción general a la Iniciación Cristiana; Introducción general a la Iniciación cristiana de adultos (RICA); Introducción general al Bautismo de niños (OBP). Estas observaciones previas son de rico contenido Bíblico-teológico y pastoral-litúrgico. También existen los “praenotanda” de la Confirmación y Eucaristía; y la IGMR sobre la celebración Eucarística. 1.8 Pluralidad y deficiencias específicas. Cuando el que pide el bautismo es un adulto se le debe de preparar para recibir los tres sacramentos de iniciación en la vigilia Pascual. A veces se desconoce el proceso de catecumenado17 que se debe seguir. Para estas celebraciones el párroco debe pedir permiso al obispado, y en el caso de los mayores de 14 años se le debe ofrecer la celebración de los sacramentos al obispo. Existe diferencia de edades para recibir la confirmación; y hay dos modalidades en el orden de los sacramentos: Bautismo-Confirmación-Eucaristía y Bautismo-Eucaristía-Confirmación. También en ocasiones es muy breve o largo el tiempo entre los dos últimos sacramentos, como su preparación catequística. El sacramento del bautismo de niños generalmente sí se recibe en su lugar más oportuno: “el templo parroquial correspondiente” pero a veces los otros dos sacramentos se reciben fuera de (colegios). 1.9 Otras debilidades específicas en la pastoral del bautismo: los papás que piden el bautismo se encuentran en situación irregular (amasiato); o algunos papás proponen padrinos que viven en unión libre, éstos no pueden ser padrinos, porque uno de los requisitos es que “lleven una vida congruente con la fe y con la misión que van a asumir”18. Mientras la legislación eclesiástica pide que “procuren los padres, los padrinos y el párroco que no se imponga un nombre ajeno al sentir cristiano”; o sea que se de un nombre con referencia cristiana, en la práctica a veces no sucede así y se les ponen nombre como “Tláloc”, “azucena”, o en otro idioma “Ivonne”, “Peter”, “Giovanni”, etc. A veces se pide y se conceden bautismos “especiales”, que más bien son 17

El Vaticano II mandó restablecer y revisar el catecumenado de adultos: SC 64-66; AG 14; CD 14.

18

Introducción a la Iniciación Cristiana n 10; C 874 § 1.

7

individualistas, lo malo es que algunos sacerdotes los conceden; recordemos que las acciones litúrgicas no son acciones privadas, sino acciones eclesiales 19. En razón de estas situaciones el documento de Aparecida, Mons. Víctor Sánchez y P. Felipe de Jesús de León describen a la iniciación cristiana como “Pobre o fragmentada”20 . 2. Identidad, elementos y efectos de la iniciación cristiana 2.1 La iniciación Cristiana es “El proceso catequético y sacramental a través del cual se llega a ser cristiano, incorporándose al misterio de Cristo y de la Iglesia, por el aprendizaje global de la vida de fe y la celebración de los tres ritos sagrados que consagran la existencia del creyente”21 . De acuerdo con el catecismo de la Iglesia católica es, ante todo, don de Dios 22 mediante la gracia de Jesucristo y por mediación de la Iglesia. Es inserción de la persona en el misterio de Cristo, muerto y resucitado por medio de la fe y de los sacramentos 23. El documento de Aparecida en un solo número describe qué es la iniciación cristiana, sus elementos y sus dos tipos de destinatarios o interlocutores: “La iniciación cristiana, que incluye el kerigma, es la manera práctica de poner en contacto con Jesucristo e iniciar en el discipulado… Nos da la oportunidad de fortalecer la unidad de los tres sacramentos y profundizar en su rico sentido. La iniciación cristiana, propiamente hablando, se refiere a la primera iniciación en los misterios de la fe, sea en la forma de catecumenado bautismal para los no bautizados, sea en la forma de catecumenado postbautismal para los bautizados no suficientemente catequizados. Este catecumenado está íntimamente unido a los sacramentos de la iniciación: Bautismo, Confirmación y Eucaristía, celebrados solemnemente en la Vigilia Pascual. Habría que distinguirla, por tanto, de otros procesos catequéticos y formativos que pueden tener la iniciación Cristiana como base24. 2.2 Desde estas tres descripciones percibimos sus elementos: Proceso catequético (que en el caso de bautismo de adultos es el catecumenado, con sus siguientes momentos: Kerigma o precatecumenado; catecumenado; el tiempo de la purificación y de la iluminación –en cuaresmay catequesis mistagógicas en tiempo de Pascua). Proceso sacramental: Bautismo confirmación y Eucaristía; y el testimonio o estilo de vida Cristiano.

19

Cf. C 837.

20

Cf. Aparecida n 287; LEÓN OJEDA Felipe de Jesús, “La iniciación Cristiana”, p 7 y 25.

21

KELLER Miguel Angel, O.S.A., “La iniciación Cristiana. Bautismo-confirmación”, CELAM-CEM, México 1995, p 20. 22

Catecismo de la Iglesia católica n 1212.

23

“La iniciación cristiana se realiza mediante el conjunto de los tres sacramentos: el Bautismo, que es el comienzo de la vida nueva; la confirmación, que es su afianzamiento; y la Eucaristía, que alimenta al discípulo con el cuerpo y la sangre de Cristo para ser transformado en Él” (catecismo n 1275). 24 Aparecida

n 288.

8

2.3 Efectos: incorporación al Misterio de Cristo y de la Iglesia. Pero estos efectos no hay que entenderlos como un “paquete” de gracia que se recibió el día, o los días, en que se recibieron los sacramentos, y ya! Sino como una realidad que con la libertad humana y gracia de Dios se va consolidando día con día.

3. Líneas operativas y proyecto: 3.1 Tener en cuenta que hay dos modelos de Iniciación cristiana: *Una, la más frecuente entre nosotros, por la que son bautizados los niños pequeños y posteriormente, a la edad adecuada, se acercan a la confirmación y a la primera comunión. Que a papás, padrinos y niños la catequesis sea adecuada, rica, renovada. *Otra, más escasa cuya frecuencia va en aumento, en la que alguien mayor de 7 años solicita el bautismo y por ello debe recibirlo en una sola celebración, junto con la confirmación y la Eucaristía. Que se siga todo el proceso catecumenal. Las dos implican un proyecto de iniciación en la vida cristiana, el primero más directamente orientado a la familia, porque el candidato es menor de edad y es indispensable el acompañamiento y testimonio de sus papás; el segundo es un proceso en donde el más responsable de la continuidad de la vida cristiana es el propio candidato. 3.2 Consolidando la unidad del proceso de catequesis y de recepción de los sacramentos de iniciación. Cuidando su equilibrio catequético y celebrativo, los signos que manifiestan unidad (ropa blanca, promesas bautismales, cirio pascual y vela encendida, etc). 3.3 La parroquia ha de ser el lugar donde se asegure la iniciación cristiana; Es el modelo eclesial común propuesto por la eclesiología actual. 3.4 Que los ya iniciados logren entusiasmarse: teniendo un itinerario para consolidar su fe inspirado en los pasos del catecumenado, que parta de la recepción del kerigma y se oriente a la misión. Es decir, un proceso de discípulos a misioneros. A este respecto el documento de Aparecida propone el siguiente esquema25 : 1) Encuentro personal con Cristo 26 (Kerigma o precatecumenado). 2) Opción consciente y libre por Cristo27 (aspecto de voluntad y libertad). 3) Conocer a Cristo: formación28. (catecumenado? Inserción en teoría) 25

Cf. PEÑA V. Eduardo, “Los laicos discípulos misioneros”, A la luz de Aparecida 12, p 24-27; DA 289-294.

26

Cf. Aparecida n 12 y 28.

27

Cf. Aparecida n 136.

28

Cf. Aparecida n 18.

9

4) Seguir a Cristo29: estilo de vida desde Cristo (inserción en la práctica) 5) Vivir en comunidad30. Inserción en el cuerpo místico de Cristo: la Iglesia. 6) Ser misionero de Cristo31. Participando en la misión se camina hacia la santidad 32. Esto es posible mediante una conversión personal y pastoral, en una espiritualidad de comunión y participación (Cf. DA. 370, 291, 368).

TEMA II: ALGUNOS ASPECTOS EN LOS RITOS DE INICIACIÓN . 1. En los aztecas - La vida, es más una responsabilidad que sólo la contemplación de un don (dado por el sol). Uno debe ser consciente de lo recibido y renovarlo mediante el rito. Se debe “luchar” por no perder la vida (pesimismo). - La muerte no da miedo. Se le encuentra estoicamente y se le sella con el sacrificio o la guerra. - Vida y muerte son inseparables. - Los hombres estamos en este mundo brevemente, no somos eternos. Los ritos inyectan el gusto por la vida y el camino a Dios. - El rito de iniciación: identifica a la nueva criatura, mientras que la familia la acepta como miembro. - La comunidad, por medio de algunas instituciones forman la persona (“corazón y rostro”. Mayor ideal = “tener un rostro y corazón”). Los sabios son los encargados de forma la persona. - El rito de inserción e imposición del nombre. a) Preparación al rito (incluida la comida) b) Ceremonia por la mañana. c) Tocar al niño tres veces con agua (labios, pecho, cabeza). Oraciones propias. d) Levantar al niño al occidente. e) Imposición del nombre y entrega del símbolo (mantilla). f) Grito del nombre (para que todos lo llamen así). Todos, especialmente los niños, llaman al “nuevo” con su nombre. 29

Cf. Aparecida n 139 y 147.

30

Cf. Aparecida n 156 y 164.

31

Cf. Aparecida n 144, 167, 174

32

Cf. Aparecida n 148.

10

g) Llevan al niño entre teas ardientes del cuarto de la casa al patrio, y comienzo de la comida.

2. En el judaísmo 2.1. La circuncisión - La circuncisión, como rito celebra la vida. Es el signo de que alguien ha nacido a la vida física y de Dios. Es pertenecer al pueblo elegido; pero esto debe ser rejuvenecido, pues sin persistencia (pues también es un reto y desafío) todo se derrumba. - La circuncisión consiste en la remoción del prepucio en el hombre (practicada con cuchillo de piedra Ex 4,25= práctica antiquísima). Y realizada por otros pueblos. Es posible que los hebreos la tomaran de los egipcios (símbolo de llegada a la pubertad). Pero le dieron un sentido propio (de alianza). Era realizada al octavo día del nacimiento. El rito tenía dos partes: circuncisión más oraciones e imposición del nombre (como misión a realizar). - Entre los babilonios era un signo para despreciarse; en cambio pata los judíos representa la pertenencia al pueblo (Gn 17,11). Ya en tiempo de la dominación griega, los hebreos prehelénicos sintieron vergüenza por ella (1 Mac 1,15) siendo Antíoco el que la combata con todas sus fuerzas (1 Mac 2, 46). - Para los rabinos, la circuncisión en símbolo de la alianza. Y tiene un valor sacrificial (como la sangre derramada). Ver Ef 2, 11-13- La circuncisión será un verdadero problema cultural en la conversión de los paganos. Pues surgirá toda una corriente rigorista de que se nace judío y no se hace uno judío. Esta corriente la podemos ver en Nehemías (con la prohibición de los matrimonios mixtos). Pero esta corriente de pensamiento es frenada con otra (que fragua en Rut, Tobías y Judit) donde Dios ve con beneplácito a los paganos. ¿Es posible aceptar a los paganos? Para Sammai es imposible aceptar a un pagano (a lo mucho puede ser “temeroso de Dios”); para Hillel si es posible abrirse a los paganos, pues “la salvación viene de los judíos” (Jn 4,22). - Con Pablo, el mismo sentido de la circuncisión estará contenido en el Bautismo. Por eso ésta ya está superada. Además, él retomará la importancia de circuncidar (=singo de la opción fundamental) primero el corazón (incluso los oídos) antes que la carne (ver Dt 10.16; Jr 4,4). - Tras la circuncisión, el hebreo ya pertenece al pueblo judío. Y para mantener este estatus de pertenencia (tarea a considerar) vienen distintas prácticas rituales, entre ellas deben destacarse los distintos baños purificatorios. Con éstos, el hebreo puede ofrecer culto a Dios.

2.2. El bautismo de los prosélitos - La Biblia hebrea va a traducir el concepto ger (=extranjero en palestina) como Prosélitos (=pagano incorporado al mundo judío). Lo cual no era necesariamente (aunque 11

posteriormente si) un converso a la religión judía. En la diáspora, muchos paganos se sentían atraídos a la religión y espiritualidad judía. - En Est 8,17 se habla de que muchos empezaron a hacerse judíos (por el acercamiento a ellos). Esto se llama judaizar. - Juan Hircano toleraba a los extranjeros en palestina a cambio de que se hicieran judíos (Josefo). Pero esto trajo conversiones “a fuerzas”. Para los rabinos, estas eran inválidas (Talmud Yabamot). Por eso mismo se hablará de primero circuncidar el corazón (convertirse sinceramente) antes que la carne. - Pero ¿Cómo era el modo de hacerse judío? (1 Mac 2,4-5) ¿Siendo pagano, alguien se puede convertir al judaísmo? Si: con la circuncisión, el bautismo- Tabal- (previo a ofrecer el culto) y la ofrenda. El bautismo de los paganos se hacia en la piscina de Siloé (durante el Templo de Salomón) y es el colmen del proceso de conversión: yendo de peregrinos a Jerusalén y bautizarse para purificarse y ofrecer un sacrificio a Dios. - En algunas sinagogas surgirán algunos procesos de conversión de los paganos (a modo de catequesis). Especialmente en el estudio de las Escrituras y los comentarios de los rabinos (p.e. el Talmud y la Mishná) Todo desembocará en la fe en Dios y la fidelidad a la Toráh; sin esto, es inválida cualquier circuncisión. - Los problemas en la conversión de los paganos hacia el judaísmo serán; los prejuicios y desconfianza de los judíos a los paganos (“son judíos con mancha”) debido a los mismos ataques de los paganos; el combate a la idolatría (cierto desprecio al mundo pagano. “Nada de rescatable”); y las divisiones al interior del judaísmo. La situación será: ¿Cómo atraer a los paganos? - Nótese: los cristianos resultarán más abiertos a los paganos en el proceso de conversión. 3. El Bautismo de Juan Será el Bautista quien retome del bautismo de los prosélitos el sentido purificatorio y procesual. Es decir, es el signo externo de la actitud interna de conversión al Señor (asumir el baño como expresión externa de la vuelta a Dios). Juan es un bautizante en agua. Este rito de sumergir en agua de rio, revive el paso en el mar rojo para introducirse en la tierra prometida (Jos 3-4). Simboliza el dejar atrás la muerte e introducirse en la realidad del pueblo de Dios (libre). Esto se representa ante un testigo (la actitud-compromiso de morir al pecado y entrar a formar parte del pueblo de la tierra prometida). El incumplimiento de los mandamientos había hecho que muchas desgracias cayeran sobre el pueblo (entre la invasión romana). Por eso el pueblo deseaba convertirse a Dios (disponerle la vida). Todo esto se aprecia en algunos movimientos de renovación, donde el bautismo es importante para ellos. Esta dimensión penitencial del bautismo no es propia del 4Ev. Más bien, éste acto ha sido re-dirigido para manifestar (Cristofanía) al Mesías a Juan, y éste a los demás. (1,7).

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Para reflexionar: 1. ¿Qué es para ti el bautismo como rito de inserción? 2. ¿Lo expuesto hasta el momento aclara-enriquece tu bautismo? 3. ¿Qué elemento retomas para ti? ¿Qué haces tuyo? 4. El bautismo es un don de Dios por mediación de la Iglesia ¿Pero es más una tarea a asumir con responsabilidad? ¿Estás de acuerdo?

TEMA: III:

FUNDAMENTO BÍBLICO DEL SACRAMENTO DEL BAUTISMO

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Objetivo: Fundamentar, desde la lectura y reflexión de algunos textos de la Sagrada escritura, el Sacramento del bautismo.

Punto de partida: ¿Qué tan importante es el agua para nuestra vida diaria?33 ¿Para qué sirve? ¿Qué pasa cuando no hay agua? ¿Qué usos le damos? (Escuchar respuestas de asistentes). Así como el agua en nuestra vida diaria nos lleva a las ideas de vida y limpieza, en la historia de la salvación y en la vida de la iglesia se utiliza el agua y tiene significado de vida y limpieza espiritual; veamos algunos textos bíblicos que nos recuerdan este significado. 1 Figuras o simbolismos en el antiguo testamento34 Especialmente algunos relatos bíblicos de los libros del Génesis y el Éxodo, han sido objeto de una reinterpretación simbólica, para encontrar en esos relatos tipos o figuras sobre el bautismo. 1.1 Gn. 1, 1-2 Las aguas primitivas sobre las que reposa el Espíritu Divino para fecundarlas simbolizan las aguas bautismales en las que el mismo Espíritu opera la regeneración o nueva creación. 1.2 Gn. 7,8 Las aguas torrenciales del diluvio nuevo nacimiento de los hombres: Noe, salvado del agua del arca, simboliza al cristiano salvado del pecado por el agua del el arca de la iglesia. (recomendable leer la 2ª lectura del I cuaresma, ciclo B: 1Pe 3,18-22).

prefiguran el diluvio en el bautismo en Domingo de

1.3 Ex. 14 Las aguas del mar rojo, que permiten al pueblo de Israel salir de Egipto (tierra de esclavitud), es la figura por excelencia del bautismo cristiano, en cuya agua somos liberados del mal e incorporados a Cristo.

33

Este apartado sobre la importancia del Agua lo he tomado de: “Preparación al bautismo”, SEDEC de la Diócesis de Tula Hgo., Tula 1996, p 4-5. 34

Para abundar en este sub-apartado me he basado y se recomienda consultar KELLÉR, Miguel Ángel, “La iniciación Cristiana de Adultos”, Bautismo-confirmación, CEM, México 1995, p. 67-68; “Orientaciones para Pastoral Sacramental”, Bautismo de los niños, iniciación cristiana de Adultos, Comisión episcopal de Pastoral Litúrgica de México, p. 21-25.

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2 El bautismo en el Nuevo Testamento Es sobre todo en el Nuevo Testamento donde encontramos los fundamentos del sacramento del bautismo: N.S. Jesucristo instituye el sacramento y hay testimonios de que las primeras comunidades cristianas administran y reciben el sacramento: 2.1 Mt. 3 1-12 El bautismo que administra Juan Bautista: No equivale a nuestro bautismo, porque el bautismo de Juan era un signo penitencial de arrepentimiento y purificación, que motivaba a cambiar, a dar buenos frutos (algo parecido a la ceniza que recibimos al iniciar la cuaresma). Leer el texto de la Biblia. 2.2 Mt 3 13-17 Jesús recibe el bautismo de Juan35. En Jesús el bautismo de Juan tiene otro sentido, pues Jesús; semejante a nosotros menos en el pecado (Heb. 4,15), no necesitaba pedir perdón ni convertirse; tampoco se bautizo para ser MESIAS o Hijo de Dios desde ese momento, porque YA LO ERA. Entonces, ¿por qué se dejó bautizar por Juan? RESPUESTAS: -

Para manifestar su acuerdo y comunión con la línea profética de Juan Bautista: La CONVERSION para preparar la llegada del Reino de los Cielos.

-

Para manifestar su solidaridad con su pueblo pobre, pecador y necesitado de liberación, Jesús no es pecador, pero se siente solidario con los pecadores de su pueblo.

-

Para manifestar su condición de Mesías e Hijo de Dios, asumirla personalmente y aparecer públicamente ante el Pueblo que era enviado (Recordemos que a partir de este acontecimiento Jesús inicia su vida o ministerio publico = sentido MESIANICO). ACLARACIONES:

-

Jesús de Nazaret no recibió nuestro actual sacramento del bautismo.

-

Es hasta después cuando Jesús instituye el sacramento, pero NO QUIERE DECIR QUE NO EXISTIAN SEMEJANZAS ENTRE EL BAUTISMO DE JESUS Y EL NUESTRO:

-

Se usa igualmente el agua, signo de Vida, purificación…

-

Hay presencia del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

-

Al igual que Jesús, en nuestro bautismo somos reconocidos como Hijos de Dios.

-

Somos enviados a una misión. (Leer la cita bíblica).

2.3 Mt. 3, 11 y Jn. 1, 26.33-34 Juan el Bautista reconoce y anuncia a Jesús como superior y anuncia el bautismo que trae Jesús. El mismo Jesús distinguirá el bautismo con agua, recibido de Juan y el bautismo en el Espíritu que se recibirá después de Pentecostés. 35

Cf. La exposición detallada de KELLÉR Miguel Ángel, “La iniciación Cristiana” p.70-81.

15

2.4 Jn. 3,5 y Mc. 16, 15-16 Necesidad del Bautismo: El bautismo es condición necesaria para entrar, en esta vida, a la dinámica del Reino de Dios (Leer Jn. 3, 4-5). Recibir el anuncio de la Buena Nueva, creer o tener fe en Cristo y ser bautizado son condiciones para la salvación (Leer Mc. 16, 15-16). 2.5 Mt. 28, 16-20 Después de resurrección Jesús se presenta como Todopoderoso ante sus discípulos y manda que se haga discípulos a todas las gentes, bautizándoles y enseñándoles a guardar todo cuanto Jesús ha dicho (Leer Mt. 28, 16-20). 2.6 Según el libro de los Hechos de los apóstoles las primeras comunidades cristianas administran el bautismo, dándose el esquema Conversión-Bautismo (Hech. 2,38); Anuncio de Buena Nueva-bautismo (Hecho 8, 26-40; 10, 44.48); y muy posiblemente se bautizaban a los niños (Hech.16, 15.33; 1 Cor. 1, 16). Atención: para la segunda parte de este tema sólo se han abordado textos de los libros históricos del nuevo testamento; sin embargo, en el último tema se abordan también textos que fundamentan su aspecto ético. Además, en el evangelio de Juan están tres textos preciosos de carácter bautismal, que se leen los domingos III, IV y V de cuaresma del ciclo a: Capítulos 4,9 y 11, La Samaritana, el ciego de nacimiento y la resusitación de Lázaro; AGUA, LUZ y VIDA.

TEMA IV: EL CATECUMENADO DE LOS PRIMEROS SIGLOS Entre la historia bíblica y nuestra propia historia existe un puente de XX siglos de la vida e historia de la Iglesia. Durante estos siglos han ido en dinamismo la doctrina y los ritos de los sacramentos. De capital importancia es la etapa siguiente a los tiempos del nuevo testamento, porque es el primer esfuerzo catequístico-sacramental en torno a la inserción y participación sacramental de la vida de la Iglesia en la iniciación cristiana de adultos. En este apartado se 16

presenta brevemente la identidad, etapas históricas, elementos constitutivos y personajes del catecumenado antiguo 4.1 El catecumenado de los primeros siglos es el modo y las etapas de incorporar a los convertidos (generalmente adultos) al misterio de Jesucristo en la Iglesia. Lo podemos describir como “el proceso catequístico sacramental” en el cual se da una sólida evangelización y se reciben, como culmen sacramental, el bautismo, la confirmación y la Eucaristía. 4.2 En cuanto a las etapas históricas distinguimos los siguientes momentos: El esplendor se tiene hacia finales del siglo II e inicios del siglo III; en esta etapa, desde el contexto de algunas persecuciones regionales en el imperio romano, es sincero y difícil el llegara ser cristiano; puede hablarse de una estructura catecumenal en tres momentos: catequesis, ritos de los tres sacramentos y ritos post-bautismales. Algunos consideran como época de oro del siglo IV-V. Recordemos que al inicio del siglo IV (en el año 313) se terminan las persecuciones con el acuerdo llamado edicto de Milán; En el año 325 se tiene el primer concilio universal, en Nicea, el cual exigió al menos, una preparación bautismal mínima de 15 días; pero la mayoría de obispos prefirieron la duración de al menos una cuaresma. Y en el año 381 el emperador Teodosio hace oficial en el imperio la religión cristiana. Ante estas situaciones la Iglesia tiene el reto de enfrentar las conversiones masivas frecuentemente viciadas en las motivaciones. Pastores y padres de la Iglesia36 se esfuerzan en consolidar el contenido doctrinal y el proceso catecumenal. – algunos aspectos negativos: catecúmenos van retrasando el bautismo, el catecumenado va reduciendo su duración, la “consignatio” (raíz de la actual confirmación, unción reservada al obispo) se separa ocasionalmente de los ritos postbautismales. Creciente Decadencia (s. VI – XVI): La práctica generalizada del bautismo de niños, hasta la desaparición del bautismo de adultos, dará lugar durante esta época a una profunda crisis de las estructuras de iniciación en la Iglesia. En el s. VI, el tiempo del catecumenado –cuya duración anteriormente era por lo general de unos tres años- se reduce a los 40 días del tiempo cuaresmal, para desaparecer de hecho ya en el s. VII. Sólo se conservan, desde entonces, los breves ritos de introducción a la liturgia bautismal en el caso de los niños o – en los extrañísimos casos de algún bautismo de adultos- una apresurada preparación antes de Pascua o Pentecostés. Desde el s. VIII, al multiplicarse las parroquias y hacerse imposible la presencia del Obispo en todas las celebraciones pascuales, la “consignatio” o confirmación se separa ya definitivamente de la liturgia bautismal, lo mismo que la recepción de la eucaristía: la “edad de la discreción” (7-9 años) es la época en que le bautizado recibirá la confirmación y la eucaristía, como expresamente –en relación con la primera participación en la eucaristía- legisla más tarde el Concilio Lateranense IV (1215). Desde el s. IX se multiplican las fechas de celebraciones bautismales, antes reservadas para el tiempo pascual y Pentecostés. La teología del pecado original y la alta tasa de mortalidad

36

Por ejemplo: S. AMBROSIO, Sobre el Símbolo; Id., Sobre los sacramentos; S. AGUSTIN, La catequesis de los incipientes (=De cathequizandis rubidus); S. JUAN CRISOSTOMO, Catequesis bautismales; S. BASILIO MAGNO, sobre el bautismo; S. CIRILO DE JERUSALEN. Catequesis mistagógicas…

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infantil, urgieron la práctica del bautismo a los pocos días del nacimiento del niño, común en los siglos X- XI y posteriormente considerada grave obligación.

:

Etapas del Catecumenado antiguo

ETAPAS

PRE CATECUMENADO

DURACIÓN

Ilimitada

E N T R A

CATECUMENADO

E L E C C

D Uno o más años A

I O N

R E

I N

PREPARACIÓN CUARESMAL

Cuaresmas

C E L E B

MISTAGOGIA

R Tiempo Pascual A C I O N

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CONTENIDOS

FINALIDAD

CELEBRACIONES

Anuncio Evangélico

Despertar la fe y la conversión

C Catequesis integra y E graduada P C I O N Profundizar la fe A D M Celebración de la Palabra. I Exorcismos menores. S Bendiciones. I O N

Encuentros Humanos

E N E L Acogida

CATEGORÍAS

Precatecúmenos (simpatizantes o interesados)

D E L N O M B R E

Retiro intensivo. Preparación inmediata

Madurar las decisiones

Tres escrutinios: 3°,4° y 5° domingo de cuaresmas.Entregas del Símbolo y del Padre Nuestro.

O L L A M A M

C A Iniciación T E C

FUNCIONES

S C R I P C I O N

U Catecúmenos, Oyentes M (Candidatos) E N A D O

I E N T O

Iluminación

Catequesis sacramental y D litúrgica E L O S Integrarse en la comunidad S A C R Eucaristías comunitarias. A Aniversario del Bautismo. M E N T O S V I G I L I Contemplación A P

Elegidos, Competentes, Iluminados (decididos o aspirantes)

A Neófitos (nuevos S cristianos) C U A L

Promotores del Catecumenado Antiguo

Justino (+ 165) Roma Hipólito (+ 253) Occidente (latín) 19

Occidente (latín)

Cartago

Milán

España

Oriente (griego)

Tertuliano (160-220) Cipriano (200/210-258) Agustín (352-430)

Ambrosio (339-397)

Paciano de Barcelona (+c. 392) Gregorio de Elvira (+c. 392) Isidoro de Sevilla (560-633) Ildefonso de Toledo (+667)

Alejandría

Clemente (140/150-215) Orígenes (185-254)

Jerusalén

Cirilo (315-386)

Antioquía

Todoro de Mopsuestia (350-428) Juan Crisóstomo (354-407)

Siria

Basilio de Cesarea (329-379) Gregorio de Nacianzo (330-390) Gregorio de Nisa (335-395)

TEMA V: LA CELEBRACIÓN DEL SACRAMENTO DEL BAUTISMO 37 Objetivos: Presentar el esquema de celebración litúrgica del bautismo para motivar a una participación activa y fructosa, especialmente en papás y padrinos. Explicar el significado de los ritos y signos litúrgicos. Lograr una celebración realmente festiva. ESQUEMA DE LA CELEBRACIÓN: A la entrada del templo o bautisterio: Monición introductoria Se hace conciencia por la alegría del nacimiento de los niños, que serán bautizados en Cristo, y se invita a participar en la celebración.

37

Para este tema me he fundamento especialmente en: “Sentido teológico del sacramento del bautismo a partir del rito” en Sugerencias pastorales para el bautismo” CELAM-CEM; Ed. Buena Prensa, p. 17-38.

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1. Ritos iníciales: Recepción y acogida a la entrada del templo. Los bautizandos y sus papás y padrinos son recibidos en la puerta del templo parroquial para significar que todavía no pertenecen a la Iglesia, a la cual se entra por la puerta del Bautismo. 1.1 Interrogatorio o diálogo del ministro con los papás y padrinos sobre el nombre del niño, la petición del Bautismo y advertencia sobre el compromiso de educar a ese infante en la Fe. El dialogo sobre el nombre es rico en significación. Cada ser humano es único, irrepetible, Insustituible en su singularidad personal. En el caso de los niños pequeños, son los padres quienes piden el bautismo para sus hijos, comprometiéndose así educarlos en la Fe, dentro de la Iglesia. 1.2 La señal de la Cruz o signación de los niños en la frente. Enseguida el ministro y luego los papas y padrinos trazan la señal de la Cruz sobre la frente del niño. ¿Qué significa esto? Así como se marcan libros y otros objetos con el nombre del dueño; y también es común encontrar a muchas personas que andan con el distintivo o emblema de su equipo deportivo o escuela; así la Cruz en el cristiano es signo de pertenencia a Cristo. (Ensayen brevemente estos ritos). 1.3 Procesión. Si los ritos iniciales se han realizado -a la entrada del templo parroquial, enseguida se hace la procesión hacia el interior del templo o al baptisterio parroquial. (Canto) 2. Liturgia de la Palabra: En la Escritura Cristo está presente (SC 7). Es el mismo Dios quien nos dirige su Palabra (1Tes. 2,13). La liturgia de la Palabra de Dios tiene por finalidad avivar la fe de papás y padrinos e implorar a Dios el fruto del Sacramento. 2.1 Lecturas bíblicas. Se proclaman algunas lecturas bíblicas con algún salmo y un texto del Evangelio. Las lecturas nos recuerdan cómo Dios interviene en nuestra historia. 2.2 Homilía. El ministro aplica al aquí y ahora la palabra de Dios que ilumina y fundamenta este sacramento del Bautismo. 2.3 Oración de los fieles o Peticiones: Los fieles invocan la gracia y misericordia de Dios, sobre todas las personas, para poder testimoniar con la vida nuestro bautismo. 2.4 Invocación de los santos o letanía. En este momento la Iglesia peregrina en la tierra se une a la Iglesia Triunfante del Cielo. Invocamos a los santos, porque antes que nosotros y mucho mejor que nosotros vivieron la vida bautismal en este mundo. Son nuestros intercesores, estimulo y ejemplo a seguir. 2.5 Oración de exorcismo. El ministro pide a Dios que se libere a los niños del pecado original, y habite en ellos el Espíritu de Dios. 2.6 Unción Prebautismal. El celebrante traza la señal de la cruz sobre el pecho del bautizando con el OLEO DE CATECÚMENOS (recordemos que catecúmeno quiere decir aquel que se está 21

preparando para el bautismo). Los antiguos luchadores se ungían con óleo el cuerpo para fortalecer sus músculos y para dificultar que los contrarios los agarrasen. De una manera semejante el bautizando se preparará para las luchas que deberá trabar para ser fiel a la vocación cristiana. Esta unción significa la FUERZA DE CRISTO, de la cual queda revestido el bautizando. 3. Liturgia del sacramento: 3.1 Oración de bendición sobre el Agua. El ministro pronuncia la hermosa oración, que evoca varios pasajes bíblicos donde se narra la intervención de Dios en la Historia de la Salvación. 3.2 Promesas bautismales: Renuncias al mal y Profesión de Fe. Los papás y padrinos hacen estas promesas en nombre de los niños, a la vez que renuevan su compromiso de Bautizados. Se interroga sobre la renuncia al pecado, a sus manifestaciones y por consiguiente al demonio, autor y principio del pecado. Se interroga sobre la credibilidad o fe hacia nuestro Dios Trinitario, la Iglesia, la vida eterna. (Ensáyese). 3.3 BAUTISMO. El ministro derrama el Agua sobre la cabeza de los niños pronunciando su Nombre (s) y la forma Trinitaria. Papás y Padrinos contestarán: “Bendito sea Dios que nos ha elegido en Cristo” (Ef 1,4). (Durante el bautismo es preferible que sea la mamá la que tenga el niño en brazos38). Es de gran importancia la fuente o pila bautismal 39, amovible y bella, signo de la maternidad de la Iglesia. 3.4 Unción con el Crisma. El AT da testimonio de cómo en el pueblo judío, como en otros pueblos orientales, se ungía con aceite a las personas destinadas a cumplir una misión especial: los reyes, los sacerdotes y en ocasiones los profetas. Así, Samuel recibe la misión de ungir a Saúl como primer rey de Israel (1Sam 9,16); los sacerdotes de la familia de Aarón también deben ser ungidos (Ex 28,41); y a Elías le ordena Dios ungir a su discípulo Eliseo como profeta (1Re 19,16). Pero el Ungido por excelencia es Jesús de Nazaret, a quien le decimos Cristo, que en griego significa ungido y en hebreo se dice Mesías. Él, al comenzar su ministerio, al ser bautizado, recibe la unción de lo alto, que es el Espíritu de Dios: “Dios a Jesús de Nazaret le ungió con el Espíritu Santo y con poder” (Hech 10,38). La Iglesia al nacer, es ungida por el Espíritu Santo, es enviada a cumplir su misión (Hech 2 1-41). Cada persona, en la celebración del bautismo, es ungida en la coronilla de la cabeza con el sagrado crisma para que, como miembro de Cristo y de la Iglesia continúe hoy la misión en sus 3 dimensiones: Profética: en la escucha y transmisión de la Palabra de Dios; Sacerdotal: participando en los sacramentos; y Real-pastoral, en la búsqueda del estilo de vida desde los valores del Reino de Dios. 3.5 La vestidura Blanca. Simboliza que el niño es nueva criatura, revestido de la gracia de Cristo resucitado. 38

Cf. “Sugerencias para una celebración adecuada del bautismo” en Sugerencias pastorales para el bautismo, p. 54.

39

Cf C 858

22

3.6 Entrega de la vela encendida a papás y padrinos. Los papás encienden su vela del Cirio Pascual (Signo de Cristo resucitado, luz del mundo, luz para nuestros pasos y signo de la Fe viva), entre papás y padrinos toman la vela en alto, mientras el sacerdote dice a ellos sobre el deber de cuidar y acrecentar esa luz, signo de la Fe. (recomendable leer el texto de la aclamación y la 2ª lectura del IV domingo de cuaresma, ciclo B: Jn 8,12 y Ef 5,8-14). 3.7 Effeta. El sacerdote toca los oídos y la boca de los niños, mientras dice: “El señor Jesús, que hizo oír a los sordos y hablar a los mudos, les conceda a su tiempo escuchar su Palabra y profesar la fe, para alabanza y Gloria de Dios Padre”. AMEN. 4. Ritos conclusivos: 4.1 Padre Nuestro. Toda la Asamblea, en nombre de esos niños, llama a Dios “Padre” recitando la oración de los hijos de Dios. 4.2 Bendición a las mamás, los papás y a toda la Asamblea. 4.3 Despedida. El ministro despide a la Asamblea. Algunos aspectos generales en torno a la celebración: - El tomar películas y fotos está permitido, siempre y cuando sea en los momentos, lugares y modo que permita el sacerdote celebrante (Avisarle, antes de la celebración)40. - “Se recomienda mucho la confesión y la comunión Eucarística de toda la familia el día del Bautismo de uno de sus miembros, a lo cual debe invitarse también a los Padrinos”41. - Puede suceder que algún niño llore durante la celebración. Conviene que en tales casos los niños sean llevados por uno de sus familiares a un lugar aparte, espacioso, durante la proclamación de la palabra, la homilía”. (Cuando llore el niño hay que alimentarlo, o cambiarle el pañal o simplemente llevarle a otro lugar). - La preparación y celebración del bautismo se hace principalmente a papás y padrinos, pero es recomendable que asista a la Celebración TODA LA FAMILIA.

40

Cf. Las “Normas para el desempeño de los fotógrafos y camarógrafos en las celebraciones litúrgicas” dadas en nuestra diócesis en diciembre del 2001. En la actualidad la Pastoral litúrgica diocesana está reformulando este reglamento. 41

MORENO Vidal, “Catequesis sobre los sacramentos de la Iniciación Cristiana, Ed. Privada, Dolores Hgo., 1983-84, p. 29, e Instructivo del Decanato de Dolores Hgo. N.8. 41CELAM-CEM, 42Idem, p.

“El Bautismo, Sugerencias Pastorales” , México, 19972

40, N 1

23

24

TEMA VI: Aspecto Jurídico-Pastoral del sacramento del Bautismo. OBJETIVO: Presentar a papás y Padrinos cuáles son las circunstancias o disposiciones disciplinares que debemos observar y que debe reunir el sacramento del bautismo, para su validez, licitud y digna celebración. 1. La realidad pastoral 42: La población de nuestra Patria, casi en su totalidad, es un pueblo de bautizados en la Iglesia católica, preguntémonos: ¿Qué motivos llevan a nuestro pueblo a ser pueblo de bautizados? Entre otras razones posibles, agrupamos algunas que nos parecen más generales: +Razones mágicas: “para que se le quite lo chillón” o “lo enfermizo” +Razones sociales: “Para que Don fulano sea nuestro compadre y tener compadres de dinero = palancas” +Razones económicas: Para que el ahijado tenga ayuda económica por parte del padrino”. +Razones tradicionales: “voy a bautizar a mi hijo, porque todos bautizan y toda mi familia ha sido católica” +Razones teológicas equivocadas: “vamos a bautizar para que Dios no nos castigue”, “para quitarle el cuerno. +Razones teológicas correctas: “porque tengo mi fe en Cristo y queremos que nuestro hijo, desde el inicio de su vida tenga la misma fe”. Para borrarle el pecado original y ofrecerle la vida de Gracia, la salvación”. Para que sea miembro de Iglesia…”. 2. Funciones y ministerios en la celebración del bautismo43: La preparación del bautismo, su digna celebración y la formación cristiana de los bautizados es tarea que incumbe muy seriamente a TODO EL PUEBLO DE DIOS, es decir a la IGLESIA, que transmite y alimenta la fe recibida de los apóstoles 44. ¡Quitémonos la idea de que éstas tres tareas corresponden sólo a los sacerdotes! 2.1 Los Padres de los bautizados. En el bautismo de los niños, el ministerio y función de los padres tiene mayor importancia que ministerio y función de los padrinos, por el mismo orden natural. +Antes de la celebración del bautismo importa mucho que los papás, llevados por su propia fe, se preparen para una celebración consciente. +Tiene suma importancia su participación en la celebración: +Piden públicamente que el niño sea bautizado. +Lo signan en la frente después del celebrante, +Pronuncian las renuncias al mal y la profesión de Fe; +Llevan al niño hacia la fuente bautismal (la mamá lo sostiene), +Tienen en la mano el cirio encendido; 42

CELAM-CEM “El bautismo, Sugerencias Pastorales”, México, 1996, p. 7s.

43

Para este apartado me baso en “Ordo Baptismi Parvulorum”, Parte 2, el Bautismo de niños, n. 6s.

44

Praenotanda del Sacramento del Bautismo, No.7.

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+Son bendecidos con fórmulas propias al finalizar la celebración. +Si alguno de los papás no es católico, se le pide solamente que habiendo solicitado (o permitido) el bautismo del niño, prevea para que éste sea educado en la fe bautismal, o que por lo menos lo permita. (Incluso puede asistir a la celebración del bautismo). +Después del bautismo, los papás tienen que guiar al niño, con sus palabras y buen ejemplo, para que vaya conociendo a Dios y a su tiempo lo vayan preparando para que reciba la primera comunión y luego la confirmación. Por lo tanto, los primeros catequistas de la educación en la fe de un niño SON SUS PAPÁS; al respecto el Catecismo de la Iglesia Católica dice: “Por la gracia del sacramento del matrimonio, los papás han recibido la responsabilidad y el privilegio de evangelizar a sus hijos…”45 . Recordemos que inmediatamente antes de que alguien se una en matrimonio, el sacerdote hace aquella pregunta comprometedora: ¿Están dispuestos a recibir con amor los hijos que Dios les dé y a educarlos en la ley de Cristo y de la Iglesia? A esta pregunta quienes se casen responden que SÍ, aunque después no cumplan (los dos) con ese compromiso. 2.2 Los Padrinos. La actual legislación de la Iglesia nos pide que “En la medida de lo posible, se le ha de dar un padrino… o una sola madrina, o uno y una”46. +Su función es doble: - Juntamente con los papás, presentar al niño que va a recibir el bautismo (Esto acompañar y participar en la celebración litúrgica) como testigo de la fe de la Iglesia. - Y procurar que después lleve una vida cristiana congruente con el bautismo y cumpla fielmente las obligaciones inherentes al mismo47. +Por lo tanto se requieren ciertas condiciones o requisitos 48 para que alguien sea admitido como padrino o madrina: -

Que haya sido elegido por quién va a bautizarse, o por sus padres, o por quienes ocupan su lugar o, faltando éstos por el párroco o ministro.

-

Que tenga capacidad para ésta misión e intención de desempeñarla:

-

Que haya cumplido 16 años de edad (18 en nuestro país49);

-

Que sea católico y haya recibido los sacramentos de la iniciación cristiana;

-

Que se lleve una vida congruente con la fe y con la misión que va a asumir.

-

Que no esté afectado por una pena canónica legítimamente impuesta o declarada;

45

Catec. Igl. Cat., No. 2225.

46

Código de Derecho Canónico, C 873 y el comentario, en el Código especial para México.

47

Cf. C872.

48

Son los requisitos que menciona el Código de Derecho Canónico, C.874 § 1.

49

Cf. Decanato de Dolores Hidalgo, “Instructivo pastoral para el bautismo de niños”, No. 10 y véanse los cc. 97 y 98.

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-

Que no sea el padre o la madre de quien se ha de bautizar.

+Interpretando este canon y en la tradición pastoral de nuestras parroquias, podemos puntualizar las siguientes notas pastorales: - No puede haber más de dos padrinos; si son dos, deben ser hombre y mujer; si es sólo uno es indiferente50. Se pide que sean casados por la Iglesia, o hermanos de sangre; por lo que: no se recomienda a padrinos que sólo sean amigos entre ellos; no se admitirá como padrinos a los amancebados 51 -quienes viven como esposos sólo casados por lo civil-, ni aún en separado, o a quienes lleven una vida escandalosa en la comunidad Cristiana. Quienes profesan otra religión o sea un acatólico (protestante) sólo puede ser testigo del bautismo junto con un padrino católico. - De preferencia deben escogerse padrinos que vivan en la comunidad para que frecuenten a los ahijados y éstos lo tomen como “modelos de vida Cristiana”. - El trato y convivencia de los padrinos debe ser siempre, en primer lugar hacia el ahijado, -a quien ayuda espiritual y tal vez materialmente-; también debe haber buen trato hacia los compadres (pero es triste oír “voy a ver a mis compadres” ó “a comer con mis compadres” y se olvida al ahijado) 2.3 El ministro del bautismo. +El ministro ordinario del bautismo es el Obispo, el presbítero y el diácono52 ; al obispo hay que ofrecer el bautismo de los adultos, por lo menos el de aquellos que han cumplido 14 años 53. +El ministro extraordinario del bautismo54. Si está ausente o impedido el ministro ordinario, administra lícitamente el bautismo un catequista ú otro destinado para esta función por el ordinario del lugar; y en caso de necesidad (como peligro de muerte), cualquier persona que tenga debida intención y emplee la materia y la forma exigidas 55. 2.4 El sujeto del bautismo (De los que han de ser bautizados) + “Es capaz de recibir el bautismo todo ser humano aún no bautizado, y sólo él“56. El bautismo sólo se recibe una vez y para siempre. “Para bautizar lícitamente a un niño se requiere: que den su consentimiento los padres, o al menos uno de los dos; o quienes legítimamente hacen sus veces; que haya esperanza fundada de que el niño va a ser educado en la religión católica; si falta por completo esa esperanza, debe

50

Cf. Comentario al C. 873 del C. para México; “Orientaciones para la Pastoral Sacramental” Buena Prensa , n. 44, p.33

51

Para ésta y las siguientes sugerencias véase en: MORENO Vidal, “Catequesis sobre los sacramentos de la iniciación cristiana”, p. 29 y DECANATO DE DOLORES HIDALGO, “Instructivo Pastoral para el bautismo de niños”, n. 9-12 52

Cf. C. 861§§1

53

Cf. C. 863

54

Cf. C. 861 §§2

55

Cf. Cc. 849 y 850

56

C. 864

27

diferirse (retratarse) el bautismo, según las disposiciones del derecho particular, haciendo saber la razón a sus padres”57 . “Cuando hay duda sobre alguien fue bautizado, o si el bautismo fue administrado válidamente, y la duda persiste después de una investigación cuidadosa, se le ha de Bautizar bajo condición”58 . “El niño expósito o que se halló abandonado, debe ser bautizado, a no ser que conste su bautismo después de una investigación diligente”59. “En la medida de lo posible se deben bautizar los fetos abortivos, si viven”60. 2.5 Los catequistas (o agentes de la pastoral prebautismal) +Nuestros obispos mexicanos afirman: “Queremos resaltar que ser catequista es una vocación en la Iglesia, que nace de su misma condición de bautizado y confirmado. Por lo mismo, todo catequista de tener conciencia no solamente de su pertenencia a la Iglesia, sino también de sus quehacer evangelizador, que realizará mejor en la medida en que viva profundamente su comunión eclesial”61. “El catequista es antes que nada, hombre o mujer de la comunidad, porque de ella sale para servirle y construirla, en y desde la vida de la comunidad “ 62. El catequista es signo de la Iglesia misionera, debe tener un contacto frecuente con los sacramentos, con la Palabra de Dios, personas de oración; pues para poder “hablar de Dios” primero hay que “hablar con Dios”. Son un apoyo a la comunidad y a los sacerdotes, generosos en el tiempo que regalan para construir el Reino de Dios. ¿Qué haríamos sin ellos? 2.6 La Asamblea Cristiana. Todas las personas ya mencionadas, reunidas para la Celebración Litúrgica del bautismo, formamos LA ASAMBLEA CRISTIANA, entendida como “La reunión de bautizados que, por participar del sacerdocio común, son convocados por el Espíritu, para celebrar gozosamente, a través de los signos, la presencia salvadora de Cristo”63. 3. La materia y la forma 3.1 La materia: El bautismo se confiere válidamente sólo mediante la ablución con agua verdadera, acompañada de la debida forma verbal64. Fuera del caso de necesidad, el agua debe

57

C. 868

58

C.869 § I

59

C. 870

60

C. 871

61

CEEC, “Guía para la catequesis de México”, Méx., 1997, p. XI

62 Así

resume el P. Abel Fernández, en “Diccionario de Pastoral Urbana”, Ed. Privada, Méx., 1994, p. 39-41

63

CEPLM, “La Celebración de la Eucaristía”, Méx., 1989, p. 11

64

Cf. C.849

28

estar bendecida, según las normas de los libros litúrgicos 65; y se ha de administrar ya esa por inmersión o por infusión, de acuerdo con las normas de la Conferencia Episcopal66 . Agua verdadera es la que se entiende en sentido común, ya sea natural o hecha químicamente, puede ser de cualquier fuente, aunque sea mineral, de río, de mar, lagos, lluvia de pozo, nieve o hielo derretidos 67.Materia inválida sería el sudor, la saliva, las lágrimas, líquido extraído de plantas, vino, refresco, cerveza, etc. 68 3.2 La forma verbal consiste en las siguientes palabras, que pronuncia el ministro mientras derrama el agua o sumerge al bautizado “(nombre) yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo” 69. La forma no puede ser alterada (cambiar, quitar palabras) porque no habría sacramento; añadir palabras a la formula sería ilícito 70. 4. Tiempo y lugar de la celebración “Aunque el bautismo puede celebrarse cualquier día, es sin embargo aconsejable que, de ordinario, se administre el Domingo o, si es posible, en la Vigilia Pascual” 71 . Esto para manifestar con claridad la índole Pascual del Bautismo, pues en la Vigilia Pascual y el Domingo la Iglesia conmemora la Resurrección del Señor; en Domingo, el bautismo puede celebrarse también dentro de la Misa72. “Fuera del caso de necesidad, el lugar propio para el bautismo es una Iglesia u Oratorio. Como norma general, el adulto debe bautizarse en la Iglesia parroquial propia, y el niño en la Iglesia parroquial de sus padres, a no ser que una causa justa aconseje otra cosa” 73. En el templo parroquial: porque la dignidad del sacramento lo exige. En el templo parroquial: porque sólo en las parroquias hay pila bautismal, libro de bautismos, óleos y el párroco, que regula las celebraciones de bautismo.

65

Cf. C. 853

66

Cf. C. 854 La CEM no ha determinado nada al respecto. Por lo tanto la administración del bautismo se ha de dar según las normas universales, es decir, por infusión o inmersión. 67

Cf. CONC. FLORENCIA, Decr. Pro Armenis: Dz 696, y CONC. TRID. Ses. VII C. 2 De bapt: Dz 858

68

Cf. MEDINA Mario, “Derecho Canónico Sacramental”, Apuntes. UPM, Méx., 1998, p. 4

69

Cf. Mt. 28, 19: CONC. TRID. Ses. VII C.4 Dz 860. También es válida, según el Conc. De Florencia, la forma indicativa, impersonal, empleada en Oriente: “Que sea bautizado tal siervo de Dios en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo”, Dz. 696 70

Cf. MEDINA Mario, “Derecho Canónico Sacramental”, p. 5

71

C. 856

72

Cf. “Ordo Baptismi Parvulorum”, n. 9

73

C. 857

29

En el templo parroquial de los padres (del niño), o sea que de acuerdo al domicilio que tienen los papás se pertenece a una comunidad parroquial, señalada, territorialmente hablando74 . “La fuga de los fieles hacia otros lugares donde el bautismo se celebra sin exigencias, es ruptura de la unidad y señal de una pastoral que no educa al Pueblo” 75. Fuera del caso de verdadera necesidad (por ejemplo lejanía u otras circunstancias) 76 pastoral no se administre el Bautismo fuera del tiempo y lugar señalado. 5. Bautismo en caso de urgente necesidad Por urgente necesidad entendemos sobre todo “el peligro de muerte” 77 . En estos casos recordemos que cualquier persona (papás, catequistas, médicos, enfermeras, comadronas etc.) pueden y deben bautizar al niño enfermo, siempre y cuando: tenga la intención de bautizar, utilice agua natural y mientras derrama el agua pronuncie la fórmula Trinitaria78. Es aconsejable que haya algún testigo que pueda probar su administración79 ; y si el niño no muere debe de ser llevado la notaria parroquial, para que se tengan los ritos explicativos y sea anotado en el libro de bautismos (Pero NO se debe bautizar nuevamente). El Bautismo en Peligro de muerte se puede hacer cualquier día y en cualquier lugar (hospitales, casas, etc.); no es necesario que el agua esté bendita. 6. Edad para el bautismo “Los Padres tiene obligación de hacer que los hijos sean bautizados en las primeras semanas; cuanto antes después del nacimiento, e incluso antes de él acudan al párroco para pedir el sacramento para su hijo y prepararse debidamente” 80. “En las primeras semanas”; hay que interpretarlo ampliamente, para dar tiempo suficiente a la preparación del Sacramento y de otros detalles. Cuando el bautismo se atrasa por mucho tiempo, también deberá ser responsabilidad del párroco de recordar a los padres sobre la grave responsabilidad de hacer bautizar a su hijo81. Respecto al tiempo para conferir el bautismo, téngase presente, primeramente, la salvación del niño, para no privarlo del beneficio de este sacramento; luego, la salud de la madre, para que ella también pueda participar, en cuanto sea posible, finalmente, atendiendo el bien del niño, que es 74

Comentarios al C. 857, que ofrece el CIC EDICEP; Edición especial para Méx., p. 400

75

“El Bautismo, Sugerencias Pastorales”, CELAM-CEM, Méx., 1997², p.39

76

Cf. C. 859

77

el Pbro. Dr. MARIO MEDINA también llama ‘Urgente necesidad’ a los casos de Persecución religiosa ó desacuerdo familiar (negligencia de papás) acerca del bautismo. APUNTES UPM, p. 11 78

Cf. “Ordo Baptismi Parvulorum”, Observaciones preliminares generales, n. 16-17 y C. 849 y 850

79

Cf. C875

80

C. 867, 1

81

MEDINA Mario, “Derecho Canónico Sacramental” , Apuntes, UPM, Méx., 1998, p. 11

30

más importante, téngase también presente la necesidad pastoral, es decir, el lapso de tiempo suficiente para la preparación de los Padres y el ordenamiento razonable de la celebración, de modo que se manifieste la índole del rito como conviene82 . Es absurda la idea protestante del bautismo hasta los 30 años: ¿Quién te asegura que el niño llegará a esa edad? ¿Por qué no ofrecer la riqueza de la fe y de la salvación cuanto antes? 7. Nombre del niño. “Procuren los padres, los padrinos y el párroco que no se imponga un nombre ajeno al sentir cristiano” 83. Corresponde a los papás elegir, previo diálogo, el nombre o los nombres que llevará su niño (a); sugerimos que cada uno le “escoja” un nombre, para que el niño se llame de acuerdo a deseo de ambos papás. Recomendamos que sea el nombre de un misterio Divino (por ej. Trinidad) o de un misterio de Cristo (por ej. Encarnación, Ascensión) o de un misterio de la Sma. Virgen (por ej. Asunción), o de una advocación Mariana (Refugio, Dolores, Socorro). También puede llevar el nombre de algún ángel (Gabriel, Misael, Rafael) puede llevar el nombre de algún santo o santa (Agustín, Cecilia, Pedro, Antonio, etc.) Y recuérdese que poner el nombre de un santo, es encomendar a ese niño bajo la protección de ese santo. ¿Qué significa dar nombre al niño? El nombre es SEÑAL DE AMOR PERSONALIZADO; así nos ama nuestro Padre Dios que “numera y conoce a cada una de las estrellas por su nombre” (Sal. 147,4), que “cuenta cada arena del mar, cada gota de lluvia, cada día de la eternidad” (Ecclo. 1, 2) Así nos ama Cristo Jesús que es “el Buen Pastor que conoce a cada una de sus ovejas por su nombre” (Jn. 10,14) 84 . Al nombrar un niño con su Nombre Propio, se expresa que es único e irrepetible (No se debe comparar ni con los hermanos). Es muy recomendable fijarse en el significado de nombre, y si es nombre de algún santo, investigar, y luego hacerle ver al niño la vida de ese santo. Que el nombre sea una tarea, una vocación a realizar, recordemos que a nuestro Señor se le puso el nombre de “JESUS”, que quiere decir DIOS SALVA. Pastoralmente: -No recomendamos nombres que se desconoce su significado, y que a veces se usan porque “se oye bonito”. -No recomendamos nombres en otro idioma, (Peter, Tony…) pues, a veces el nombre es muy gringuito, pero el apellido muy mexicano. -No recomendamos nombres de personajes artísticos o de novelas de moda.

82

Cf. “Ordo Baptismi Parvulorm”, n. 8

83

C. 855

84

Cf. DIEZ DE SOLLANO Alfonso, “El bautismo”, Catequesis prebautismales, p. 9-13

31

-Es “superstición consultar el calendario para ver qué nombre le toca” 85 . Es mejor consultar un libro de santos86 para ver cuál de ellos nos reanima a la fe y a la vida cristiana. 8. Aspecto comunitario “Las acciones litúrgicas no son acciones privadas, sino celebraciones de la misma Iglesia; por lo tanto en la medida en que su propia naturaleza postule una celebración comunitaria y donde pueda hacerse así, se realizarán con la asistencia y participación activa de los fieles” 87 “Ante el individualismo religioso de muchos cristianos (practicantes en general de los sacramentos, pero sin sentido de pertenencia eclesial), urge destacar el carácter esencialmente comunitario de los sacramentos” 88 para crear comunidades vivas que celebren su fe en comunidad. “Como todos los sacramentos, el bautismo es una acción de Cristo y de la Iglesia. Ello exige que, a ser posible, no se celebre de forma individual y privada, sino en la forma prescrita en los libros litúrgicos. Así resplandece mejor su carácter comunitario y eclesial” 89. La posición social ó económica nunca puede ser criterio para privilegios o discriminación. Todos los niños nacidos recientemente serán bautizados, a ser posible, en común en el mismo día90 . Salvo el caso de verdadera necesidad pastoral: los fieles no deben de pedir, ni los sacerdotes debemos aceptar los “bautismos particulares” porque se pierde el aspecto comunitario-eclesial91 . 9. Casos especiales de bautismo de niños92 ¿Qué decir de los papás que sólo están casados por lo civil y piden el bautismo para sus hijos? -o sea viven en amasiato- A los papás de niños que viven en amasiato o unión libre, no se les debe negar el bautismo, pero es una oportunidad para que, sobre todo los sacerdotes dialoguen con ellos sobre las causas por las cuales no se han casado, sobre la vivencia de su fe, pues ¿cómo es que quieren acercar a su niño a Dios, y ellos no se acercan? Si no hay algún impedimento para casarse por la Iglesia, deberá el párroco hacerles ver la contradicción entre la petición del bautismo para sus hijos y su propio estado, que rechaza el amor conyugal de los bautizados. En esta cuestión han de evitarse dos extremos: La rígida 85

MORENO Vidal, “Catequesis sobre los sacramentos de la iniciación Cristiana”, p. 28-29

86

Recomendamos el libro “Vivieron el Evangelio” de HAVERS Guillermo, Ed. Buena Prensa.

87

Cf. C. 837

88

KELLER Miguel Ángel, “La Iniciación Cristiana”, Bautismo-Confirmación, p. 242-243

89

Comentario al C. 850, que ofrece el CIC, Edición especial para México

90

Praenotanda del Bautismo, n. 27

91

Cf. Decanato de Dolores Hgo., “Instructivo pastoral para el bautismo de niños”, n.17, p.5

92

Recomendamos leer detenidamente “El Bautismo, Sugerencias Pastorales,” CELAM-CEM, P.14s, que analiza al menos cuatro casos especiales.

32

severidad y rechazar el bautismo de los niños hijos de Padres no practicantes o no creyentes, y por otro, la excesiva debilidad o complacencia de admitir tales niños al bautismo, sin que exista la menor esperanza de que van a ser educados Cristianamente93.

93 A. A.

V. V., “Nuevo Derecho Parroquial”, BAC, Madrid, 1994, p. 137

33

TEMA VII: TEOLÓGICO O DOCTRINAL (Efectos y dimensionesdel sacramento) OBJETIVO: Concientizar sobre la gran riqueza de la GRACIA que nos trae el bautismo, para reanimar nuestro compromiso de “Pueblo de bautizados” y a la vez procurar que estos efectos o gracias se vayan desarrollando en los hijos o ahijados. 1. Bautismo-bautizar. Palabra que viene del griego baptizein, que significa “sumergir”, “introducir dentro del agua”, la inmersión en el agua simboliza sepultar, sumergir al hombre en el misterio Pascual de Jesucristo, es decir, su Muerte y Resurrección94. (Puede leerse Rm. 6, 1-14). Este sacramento es llamado también “baño de regeneración y de renovación del Espíritu Santo” (Tt. 3, 5), como nos lo dice Jesús en su diálogo con Nicodemo: “…nadie puede entrar en el Reino de Dios, si no nace del Agua y del Espíritu Santo” (Jn. 3, 5) Este baño es llamado “iluminación” porque el bautizado se convierte en hijo de la Luz, y en Luz él mismo (Ef. 5, 8). 2. Efectos del sacramento del bautismo a) Perdón del pecado original y de todos los pecados (dimensión antropológica) Por el bautismo, todos los pecados son perdonados, el pecado original y todos los pecados personales, así como todas las penas del pecado 95. b) Nuevo nacimiento, o sea el estado de gracia hace del recién bautizado una “nueva creación, se nace a la salvación y la Biblia lo expresa como “nueva criatura” (2Cor.5, 17) de “hombre nuevo” (Col. 3,9-10), de “renacer” (Jn. 3,5), de “Paso de las tinieblas a la luz” (1Pe. 2,9), del “Pecado a la Gracia” (Rm. 6, 1-4). c) Nos hace hijos de Dios (Dimensión filiativa) El que recibe el bautismo es constituido “Hijo de Dios”: “Todos ustedes son hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús” (Gal. 3, 26). d) Nos incorpora a Cristo (Dimensión Cristológica) El bautizado se incorpora a Cristo; vive en y hacia Cristo, en íntima comunión, participando realmente de su misterio Pascual. Los términos y símbolos se multiplican para intentar expresar el misterio profundo de la relación entre Cristo y el bautizado: “crucificado”, “sepultado”, “resucitado”, “vivificado”, “revestido”, “a su semejanza”. El bautizado vive en Cristo y Cristo vive en él (Gal. 2,20) por la fe y a partir del bautismo. La inmersión bautismal era, en la antigüedad, una bella imagen de la “sepultura-resurrección” del bautizado96. (Además se puede leer Rm. 6, 1-11; Col. 2, 12. 3,3; Gal. 3, 27). e) Nos hace templos del Espíritu Santo (Dimensión Pneumatológica) Bautizados en un solo espíritu (Tit. 3,5; 2Cor. 1, 21s; Ef. 1, 13; Heb. 6, 4-6): El bautismo cristiano es bautismo de

94

CF. ORTEGA Felipe, “Guía para la preparación prebautismal”, p.34

95

Cf. CEC, n. 1263

96

KELLER Miguel Ángel, “La Iniciación Cristiana”, p. 90

34

regeneración y renovación en el Espíritu Santo, que nos urge, nos sella y nos da las primicias de la Salvación. El Espíritu Santo habita en el bautizado (1Co. 3, 16s; 6, 19; Rm. 5,5) 97. f) Nos incorpora a la Iglesia (Dimensión eclesiológica) Somos, desde el bautismo, cuerpo místico de Cristo (1Cor. 12, 13ss; Col. 2, 11s; Ef. 4, 3-6 y 5, 25-27) El bautismo nos incorpora al nuevo Pueblo de Dios, la Iglesia, enriquecido por la diversidad de dones, carismas y funciones. g) Nos capacita para producir buenas obras (Dimensión Ética) Muertos al pecado (Rm. 6, 11-14; Gal. 5, 16-26; Ef. 4, 8-14; Col. 3, 1ss) El cristiano resucitado con Cristo, está llamado a vivir una vida nueva, no puede tener la misma conducta que si no estuviera bautizado. h) “En términos jurídicos, se dice que los bautizados adquieren la personalidad jurídica, o sea, se hacen sujetos de los derechos y deberes propios de los cristianos (cc 96, 204)” 98. 3. Dimensiones del sacramento del bautismo Cinco dimensiones o núcleos teológicos –íntimamente conexos, ineludiblemente inseparables e intrínsecamente complementarios- conforman el contenido básico de la teología bautismal: 3.1 Dimensión cristológica: El bautismo cristiano se entiende, evidente y fundamentalmente, en relación con la persona y el misterio de Cristo. Es siempre un bautismo “en el nombre del Señor Jesús” o, simplemente, “en Cristo Jesús”. Es sorprendente, en efecto, comprobar la creativa riqueza con que el vocabulario cristiano intenta expresar la real, personal y sacramental relación que se establece entre Cristo y los bautizados: configurados con Cristo, revestidos de Cristo, incorporados (insertados o injertados) a Cristo, hechos Cristo, copartícipes (capaces de compartir) de su vida-destino-misión… Primordialmente, el bautismo es comunión en el misterio pascual de la muerte/resurrección del Señor. Éste es, sin duda, el tema central de la teología del bautismo, basado en los textos paulinos (Rom 6,3ss; Col. 2, 11-13), bella y profundamente glosado por los Padres en su catequesis bautismal, simbólicamente expresado en la liturgia, subrayado en el Magisterio y analizado desde diversas perspectivas por los teólogos. Esta participación del bautizado en el misterio pascual de Jesucristo es simbólica/sacramental, pero real y dinámica. Se realiza en el bautismo y se actualiza en la vida. Cori-morir con Cristo significa morir al mundo enemigo del Reino y sus falsos ídolos. Con-resucitar con Cristo significa, precisamente, recibir de Él esa nueva vida, experiencia de liberación, de amor, de filiación. 3.2 Dimensión eclesiológica: El bautismo, al identificarnos con Cristo, nos hace miembros de su Cuerpo que es la Iglesia (1 Cor 12). Nos incorpora a la Iglesia, es la puerta de entrada a la comunidad de los que creen en Cristo. Cuando acontece en el bautismo no es algo individual: tiene un profundo sentido 97

Idem.

98

Comentario al C. 849, del CIC, Edición para México.

35

comunitario-eclesial. Un sentido, no obstante y lamentablemente, con frecuencia olvidado en la forma de entender, celebrar y vivir el bautismo, tantas veces individual e individualista. La Iglesia hace el bautismo la “Mater Ecclesia”. La Iglesia es la madre-virgen, que engendra nuevos hijos de Dios en su seno, la fuente bautismal. En la Iglesia y por la Iglesia nacemos, renacemos, para Dios. Su mediación maternal justifica, según toda la tradición, la posibilidad del bautismo de los niños “en la fe de la Madre Iglesia”. La incorporación o agregación a la Iglesia y el consiguiente sentido de pertenencia eclesial debe concretarse por la vinculación real a una comunidad (parroquial, normalmente, o no). Adquiere su mejor expresión externa en la celebración solemne y comunitaria del bautismo. Y supone su expresión plena en los diversos niveles: comunión en la fe, comunión con la jerarquía, comunión eucarística (para los bautizados no católicos, el Vaticano II habla de una comunión “no perfecta” o “no plena”: (UR 3,1; 4, 8). 3.3 Dimensión pneumatológica: Cristo, la Iglesia y el Espíritu son –a la luz del Nuevo Testamento, la teología desde la Patrística y la liturgia, toda-inseparables en la obra de la salvación. Vivir en Cristo y vivir en el Espíritu es prácticamente lo mismo, por recurrir a un testigo importante y explícito en este tema, para Pablo. La Iglesia no se concibe sino a partir de Pentecostés; ella es, según la fórmula litúrgica, “la unidad del Espíritu Santo”. La dimensión cristológica y eclesiológica del bautismo conllevan, pues, su dimensión pneumatológica. Los datos bíblicos no dejan lugar a dudas: el bautismo cristiano es bautismo es bautismo en el Espíritu, y no sólo de agua. Así lo anuncia ya el Bautista (Mt. 3, 11), se prefigura en el bautismo de Jesús (Mt. 3, 16), se atestigua en la fórmula bautismal de Mt. 28, 19, y se explícita a lo largo de todo el corpus paulino (cfr., por ejemplo, 1 Cor 6, 11; 12, 13; Tit. 3, 5-6) 3.4 Dimensión Antropológica: En el bautismo, pasamos con Cristo y en virtud de su muerte y resurrección, del pecado a la gracia, de las tinieblas a la luz, del hombre viejo al hombre nuevo, de la opresión a la liberación, la muerte a la vida, del egoísmo al amor. En segundo lugar, la dimensión antropológica del bautismo es importante en cuanto significa la parte que corresponde al ser humano en el bautismo, es decir su respuesta a la iniciativa divina de salvación en Cristo. El bautismo no es –no lo es ningún sacramento- un ritual mágico que salva automáticamente al margen de la libertad humana. Es gracia, don de Dios, pero siempre libre y responsablemente. 3.5 Dimensión escatológica El bautismo nos incorpora a Cristo en su Pascua, no hace con-morir y con-resucitar en El. Y la Pascua del Señor es el acontecimiento escatológico por excelencia, la plenitud de los tiempos. La primera carta de Pedro subraya precisamente esta perspectiva (1 Pe 1, 3-5): Dios, Padre de Jesucristo, mediante la resurrección de Cristo nos ha reengendrado a una vida nueva, a una esperanza viva, a una herencia incorruptible, reservada en los cielos –en la consumación escatológica- para los creyentes, a quienes el poder de Dios protege por la fe para la salvación definitiva de los últimos tiempos. 36

El bautismo nos incorpora a la Iglesia, que es a su vez sacramento del Reino, comunidad escatológica, mediación salvadora hasta la definitiva venida del Señor. Un exagerado “eclesiocentrismo” teológico no puede hacernos olvidar que la Iglesia se ordena totalmente a la realidad escatológica del Reino, del que es semilla, signo, instrumento y servidora. Es urgente, pues recuperar la dimensión escatológica del bautismo, su sentido como primer símbolo profético del Reino, su radical orientación hacia un mundo nuevo que hay que construir. Ni la vida cristiana del bautizado, ni los compromisos bautismales de sanidad y conversión, tienen pleno sentido sin esta referencia a la realidad escatológica del Reino y su relación con el compromiso por la liberación integral (cfr. Medellín 1,5). Cuanto hemos dicho más arriba sobre el Magisterio y la teología latinoamericanos acerca del bautismo, cobra pleno sentido a la luz de esta perspectiva: hacer presente hoy la realidad escatológica del Reino –con sus valores, exigencias y criterios- en el seguimiento de Jesús.

37

CONCLUSIONES El conocimiento y vivencia de los sacramentos de Iniciación nunca termina, por lo que en cualquier edad y situación se debe de seguir profundizando en los sacramentos. La tarea evangelizadora de la Iglesia es de todos los bautizados, todos somos corresponsables de la instrucción catequética de los demás. Desde el contexto de la misión permanente y continental debemos esforzarnos en la profundización y maduración de la fe. Después de haber participado en estas catequesis no hay que caer en el “que bonito”; sino en un entusiasmo por participar más alegremente en las celebraciones de los sacramentos y, especialmente a un renovado testimonio de vida. Otra consecuencia que debe tener el haber participado en estas catequesis es el despertar el interés personal en profundizar en la teología y espiritualidad bautismal, en la cual se incluye insistentemente su testimonio como luz del mundo99.

99

Cf Aparecida, nn 209-215.

38

ANEXO ASPECTOS PRÁCTICOS-REQUISITOS PARA TRAMITAR EL BAUTISMO, EN LA NOTARIA PARROQUIAL El Papá 100 (o la mamá) son los responsables de tramitar el bautismo del niño (a); se deberán llevar los siguientes requisitos: +Boleta de matrimonio de papás. +Boleta de matrimonio de padrinos; si son hermanos hay que presentar las boletas de bautismo, si son (o es) realmente soltero (a) boleta de bautismo. +Acta de registro civil del niño. +Comprobante de pláticas recientes, firmados y sellados (de un año a la fecha). +Presentar credenciales de elector, si lo solicita el notario. +El estipendio correspondiente. +Si pertenecen a otra parroquia, presentar permisos por escrito del Párroco correspondiente.

100

Cf. MORENO Vidal, “Catequesis sobre los sacramentos de la iniciación Cristiana”, p. 28.

39

BIBLIOGRAFÍA A. A. V. V., NUEVO DERECHO PARROQUIAL, BAC, Madrid, 1994 BARRADAS Celestino, “El Bautismo y la Confirmación”, 22 Catequesis, Ed. Sn. José, SEDEC, Arq. De Jalapa, Ver., 1990 BIBLIA LATINOAMERICANA CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA, (Coeditores Católicos de México), Ed. Buena Prensa, México, 1992² CEEC, “Guía para la catequesis de México”, México, 1997 CELAM-CEM, “El Bautismo, Sugerencias Pastorales”, México, 1997² CODIGO DE DERECHO CANÓNICO, EDICEP, Edición Especial para México, Valencia, España, 1994 DE GASPERIN Mario, “Instrucción prebautismal”, Ed. Privada, SEDEC, Xalapa, Ver., 1978 DIEZ DE SOLLANO Alfonso, “El Bautismo”, Catequesis prebautismales, Ed. ESFL, Guadalajara, Jal., s/a DOCUMENTO DE PUEBLA DUPUIS Luís Jorge, “El bautismo de su niño”, Ed. Clavería, México, 1991, SEDEC de la Diócesis de Ciudad Victoria, Tamaulipas. HUALDE Antonio, “Bautismo y Comunidad”, Catequesis para el bautismo de los niños, Ed. Paulinas, Bogotá, Colombia, 1986 “Instructivo pastoral para el bautismo de niños”, Decanato de Dolores Hgo., Ed. Privada, Dolores Hgo., 1983-84, Coord. P. Antonio Torres. KELLER Miguel Ángel, “La Iniciación Cristiana”, Ed. CELAM, México, 1995 MEDINA Mario, “Derecho Canónico Sacramental”, Ed. UPM MENUDO Amador, “Catequesis prebautismales”, Ed. Verbo Divino, Navarro, España, 1985 MISAL ROMANO, Pablo VI, Ed. Buena Prensa, México, 1999 P. FERNÁNDEZ Abel, “Diccionario de Pastoral Urbana, Ed. Privada, México, 1994.

Índice La tabla de contenido está vacía porque el documento no utiliza ninguno de los estilos de párrafo seleccionados en la ventana “Inspector del documento”.

40



1.1 LAS AGUAS PRIMITIVAS………………………………………………………………………………………………… ………..13

1.2 LAS AGUAS TORRENCIALES DEL DILUVIO……………………………………………………………………………………13

1.3 LAS AGUAS DEL MAR ROJO………………………………………………………………………………………………………13 2. EL BAUTISMO EN EL NUEVO TESTAMENTO……………………………………………………………………………………………… 14 TEMA IV: EL CATECUMENADO DE LOS PRIMEROS SIGLOS…………………………………………………………………..16

ETAPAS DEL CATECUMENADO ANTIGUO…………………………….. ………………………………………………………….18

PROMOTORES DEL CATECUMENADO ANTIGUO………………………. ………………………………………….…………..19 TEMA V: LA CELEBRARCION DEL SACRAMENTO DEL BAUTISMO…………………………………………………………20

1. RITOS INICIALES: RECEPCIÓN Y ACOGIDA A LA ENTRADA DEL TEMPLO…………………………………..……….20

2. LITURGIA DE LA PALABRA…………………………………………………………………………………………….………. …..20

3. LITURGIA DEL SACRAMENTO…………………………………………………………………………………………….... ......21

4. RITOS CONCLUSIVOS……………………………………………………………………………………………… …………….....22 TEMA VI: ASPECTO JURÍDICO-PASTORAL DEL SACRAMENTO DEL BAUTISMO……………………………………..24

1. LA REALIDAD PASTORAL…………………………………………………………………………………………………… ……….24

2. FUNCIONES Y MINISTERIOS EN LA CELEBRACIÓN DEL BAUTISMO……………………………………………………24

3. LA MATERIA Y LA FORMA…………………………………………………………………………………………………...... 27

4. TIEMPO Y LUGAR DE LA CELEBRACIÓN……………………………………………………………………………….…….28

5. BAUTISMO EN CASO DE URGENTE NECESIDAD…………………………………………………………………………..29

6. EDAD PARA EL BAUTISMO…………………………………………………………………………………………………… …29

41



7. NOMBRE DEL NIÑO………………………………………………………………………………………………………… …….30

8. ASPECTO COMUNITARIO……………………………………………………………………………………………… ………..31

9. CASOS ESPECIALES DE BAUTISMO DE NIÑOS……………………………………………………………………………..31 TEMA VII: TEOLÓGICO O DOCTRINAL SOBRE EL BAUTISMO (EFECTOS DEL SACRAMENTO)…………………32

1. BAUTISMOBAUTIZAR………………………………………………………………………………………………..… 32

2. EFECTOS DEL SACRAMENTO DEL BAUTISMO……………………………………………………………………32

3. DIMENSIONES DEL SACRAMENTO DEL BAUTISMO…………………………………………………………...33

3.1 DIMENSIÓN CRISTOLÓGICA………………………………………………………………………….…33

3.2 DIMENSIÓN ECLESIOLÓGICA…………………………………………………………………………..34

3.3 DIMENSIÓN PNEUMATOLÓGICA………………………………………………………………………34

3.4 DIMENSIÓN ANTROPOLÓGICA…………………………………………………………………………34

3.5 DIMENSIÓN ESCATOLÓGICA……………………………………………………………………………35 CONCLUSIONES………………………………………………………………………………………… ……………………………………….36 ANEXO……………………………………………………………………………………………………… ……………………………………….37 BIBLIOGRAFÍA…………………………………………………………………………………………… ……………………………………….38

42