Babelia
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0 1 0 2 E D O I N U J E D 2 1 O D A B Á S , S Í A P L E . 8 6 9 O R E M Ú N
Herta Müller “Las frases verdaderas están siempre relacionadas con una herida profunda”
SUMARIO
Agustín Fernández Mallo
Babelia
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EN PORTADA Cecilia Dreymüller / Ignacio Vidal-Folch
¿‘Perdidos’ o ‘Flashforward’? 4
Herta Hert a Mülle Müllerr Dece Decenasde nasde miles miles de homb hombres res y muje mujeresde resde ori origenalemánfuero genalemánfueron n dep deporta ortadosde dosde Ruma Rumaniaa niaa camp campos os de de trabajo trabaj o enUcra enUcrani niaa en1945 en1945,, en entreello treelloss lamadredela pre premi mio o No Nobe bell deLite deLiterat ratur uraa 20 2009y 09y suamig suamigo o elpoet elpoetaa Os Oska karr Pas Pastio tior. r. Todo lo que tengo lo llevo conmigo, la última novela de la escritora, narra el sufrimi sufrimiento ento de todos ellos desde la perspectiva de un joven de 17 años, álter ego de Pastior. “Sólo un intelectual es capaz de analizar y poner en palabras vivencias tan extremas”, afirma Müller en una entrevista realizada en Berlín. Foto: David Gannon / AFP / Getty Images
IDA Y VUELTA El último pintor Antonio Muñoz Molina
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EL LIBRO DE LA SEMANA Cuentos completos, de Thomas Mann L. F. Moreno Claros
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Cristo en las salitreras J. Ernesto Ayala-Dip
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Entrevista Entrevist a con Justo Navarro Rosa Mora
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CÓMIC Carlitos y Snoopy, sesenta años después José Manuel Sánchez Ron
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El padre del manga para adultos Andrés S. Braun
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PENSAMIENTO Compromiso en el arte Javier Gomá Lanzón
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SILLÓN DE OREJAS De copas con Circe Manuel Rodríguez Rivero / Max
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MÚSICA Gino Paoli, en busca de la canción perfecta Carles Gámez
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CINE Un cuarteto de cine Rocío García
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PURO TEATRO Los virus de Marburg Marcos Ordóñez
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DIOSES Y MONSTRUOS Realidad con arte Carlos Boyero
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Extra
Babelia Luchas e historias Artistas que buscan dar sentido al pasado en nuevas interpretaciones de viejos conflictos
John Berger / Juan Bosco Díaz-Urmeneta / Anatxu Zabalbeascoa Guernica realizado por niños parisienses de hoy.
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blog de Babelia La revista cultural de EL PAÍS clausura mañana la cobertura especial que ha preparado para la 69ª Feria del Libro de Madrid con la mesa redonda El legado de los nórdicos al mundo. Particip Participarán arán el novelista noruego Dag Solstad, el escritor danés Lars Sidenius y el editor español Diego Moreno, de Nórdica Libros. Será a las 13.00 en el pabellón Círculo de Lectores. En el blog de Babelia se puede consultar la videogalería en la que 18 escritores escritor es respondieron a la pregunta: “¿Qué personaje de la literatura le hubiera gustado ser?”, y los diferentes chats con una veintena de autores. ̈ Del Retiro al
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EL PAÍS BABELIA 12.06.10
Babelia ha fichado a 10 escritores de España, Portugal y los 8 países de América con selecciones en Sudáfrica para que sigan a sus equipos y comenten la cita futbolística. El blog se convierte en una cancha literaria de la mano de Domingo Villar por España, Manuel Jorge Marmelo por Portugal, Oliverio Coelho por Argentina, Rafael Gumucio por Chile, Milton Fornaro por Uruguay, José Pérez Reyes por Paraguay, João Paulo Cuenca por Brasil, Fabrizio Mejía Madrid por México, Edmundo Paz Soldán por Estados Unidos y Eduardo Halfon por Honduras, que es guatemalteco y brindará el panorama centroamericano. castellano llano ̈ El Mundial en caste
UN EJEMPLO de texto en el que no se le ant anticip icipan an acon acontec tecimie imienntos al lector podría ser el Quijote;su te; su tram trama a se des desarro arrollaa llaa medi medi-da que el lector lector convive con sus personajes. En el extremo contrario,, hay cuentos trario cuentos en los que el finales fin ales undatodado undatodado,, y lacons laconseecución de la obra consiste en ir desvelando cómo los acontecimiento mie ntoss han ido dev devini iniend endo o hasta has ta lle llegar gar al est estado ado act actual ual.. Ejemplo Ejem plo de esta liter literatura atura “anti “anti-cipatoria” lo encarna El lazarielautorse orse si sitú túa a al llo de Torm Tormes: es: elaut fina fi nall deloshech deloshechosy, osy, co comosi mosi de la propia tradición oral se trata- Ilustración de Soledad Calés. ra, nos cuen cuenta ta su hist historia. oria. Lo que separa a estas dos maneras de encarar la narración no es otra que la definición de “lo moderno”. Si el Quijote es la primera novela moderna se debe en parte a que narra “sobre el vacío”, de manera claramente orgánica y sin saber, como en la vida misma, qué le va a ocurrir a ese rocín a esa célula; no acepta la tradición oral,, aqu oral aquell ella a queya sab sabe e el fin final al de la his histor toria ia y esc esceni enific fica a y mon monta ta un decorado no para presentarla, sino para re-presentarla: una característica claramente premoderna pero perpetuada en manifestacion fest aciones es cult cultural urales es comoel folc folclore lore,, la relig religión,el ión,el rock(especia rock(especiallmente los subgéneros del metal) y en general todo aquello que implique mitología y rito. Esta dualidad nos remite al debate sobre el origen de la vida. Los creacionistas afirman que la vida es un cuento en el que Dios creacionistas afirman ya cono conocía cía el final, final, sólo tuvo tuvo que poner poner en marcha su máquin máquina a de narrar y así todos somos una especie de marionetas en su Gran Ficción. Para los darwinistas, como en el Quijote, la vida se desarrolla según nociones sujetas al azar de lo mutante, la ficción nunca está escrita y, en último extremo, no existe esa Gran Ficción. ció n. En el cin cine, e, gra grande ndess pel pelícu ículasson lasson cue cuent ntos os ora orales les,, se aju ajusta stan n al “arquetipo lazarillo”, por ejemplo, Ciudadano Kane o Rebecca. En ambas todo comienza por el final, “Rosebud…”, “anoche soñé que regresaba a Manderley…”, la historia comienza por lo que “no deberíamos saber” para más tarde ir reconstruyéndola. En el extremo contrario, películas “modernas” [en este sentido de la palabra palab ra moder moderno], no], hall hallamos, amos,Los Los pája pájaros, ros, Hitchcock; El pla planet neta a de los simios (la original, original, Frank Franklin lin J. Schaf Schaffner fner), ), o llev llevando ando la no anticipación al límite de la perfección, Exotica de Atom Egoyan, o Hana-Bi de Takeshi Kitano. En el inconmensurable mundo de las teleseries contemporáneas, el ejemplo de no anticipación vendría encarnado por Perdidos, en la que el espectador va perdiendo el equilibrio a cada momento al mismo tiempo que los personajes [se habla ya de esta teleserie como del Quijote Quijote de de las narraciones visuales].El visua les].El caso cont contrario rario lo enco encontram ntramos os en otra recie reciente, nte,FlashFlash forward, forwa rd, en la que todo el planeta Tierra sufre un desmayo de pocos minutos para, en ese ínterin, cada persona ver su futuro; la narración narra ción consiste consiste en desen desentrañar trañar cómo demonios demonios librar librarse se de ese futuro que aún no se ha producido, pero que ya está escrito. Todos estos ejemplos, de lo que realmente hablan es de dos cosmovisiones: la que admite la existencia de la complejidad de los sistemas vivos [la vida como una suma de catástrofes] y la cercana al determinismo newtoniano. ț Agustín Fernández Mallo (A Coruña, 1967) ha publicado recientemente la novela Nocilla Lab (Alfaguara. Madrid, 2009. 184 páginas. 16 euros) y el ensayo Postpoesía: hacia un nuevo paradigma (Anagrama. Barcelona, 2009. 176 páginas. 15 euros euros). ).
EL RINCÓN
Quince títulos forman parte de la Biblioteca Eduardo Galeano (Siglo XXI). “La libertad ha marcado mi literatura”, afirma el autor.
Foto: Ricardo Ceppi
“Cerrado por fútbol” Eduardo Galeano se atrinchera en su hogar de Montevideo para ver “el juego bien jugado” del Mundial N ADA EN esta casa es inoc inocente ente.. “Todasestas “Todasestas son cosas quer queridas idas porqu porque e tien tienen en vida vivida vivida”, ”, compartimos un café en su escritorio, rodeados de cuadros, grabados y cerdos de distintos dice dic e Edu EduardoGale ardoGaleano ano,, mie mientr ntras as señ señalauna alauna de lasmucha lasmuchass cer cerámi ámicasmexic casmexicana anass de Ocu Ocumimi- tamaños y hechuras (“toda mi vida he coleccionado chanchitos; será porque es un animal chu que atesora (“hechas por mujeres tristes, golpeadas por sus maridos; mujeres aporrea- de destino triste que no tiene prestigio mítico ni histórico”). Caminantegustosoy Camin antegustosoy metód metódico,abuelo ico,abuelo de cinc cinco o nieto nietoss y padrede cuatr cuatro o hijo hijos, s, conv conversaersadas que sin embargo hacen un arte de la pura libertad, muy sexual, con gran capacidad de alegría”) o destaca una Maternidad en mármol blanco: “La primera escultura de Ernesto dorartes dorartesana anall y nar narrad rador or a fue fuego go len lento to (“c (“corri orrijo jo cad cada a pág página20, ina20, 25 vec veces,soy es,soy man maniát iáticode icode la Cardenal” Carde nal”.. Carto Cartografía grafía viven vivencial cial y liter literaria, aria, este es el espa espacio cio donde el autor de deMemoria Memoria del per perfec fecció ción n y pub public lico o unlibrocada 4 o 5 año años”) s”),, Gal Galean eano o asu asume me laavent laaventurade urade esc escrib ribir ir conel uego, montevideano nacido en 1940 y ciudadano ilustre del Mercosur, vive desde que se aso asombr mbro o de “unniñ “unniño o per perpet petuo” uo”.. “Lalibe “Laliberta rtad d hamarcad hamarcado o mi lit litera eratur tura. a. La may mayor or par parte te de lo jubiló jubil ó del exili exilio o en 1985 1985.. Y tambié también, n, el mapa donde el padre de Las venas abiertas de que he escrito tiene asiento en lo real, pero la realidad tiene mucho misterio. Realista es América Amér ica Latina Latina disfr disfruta uta la reedición reedición íntegra de su obra, premi premiada ada en distintos idiomas, idiomas, que también quien es capaz de contar la realidad que necesita”. De su apuesta por la pasión al está haciendo Siglo XXI en Argentina. En ella, Galeano se propuso contar retazos de la deporte hay un paso y un anticipo de lo que será para el autor de El fútbol a sol y sombra historia “desde el punto de vista de los que no no han salido en la foto”. “Estoy “Estoy comprometido Sud Sudáfr áfrica2010 ica2010:: “Nipálp “Nipálpito itoss ni cáb cábala alas.Cada s.Cada vezme imp import orta a men menos os quécami quécamiset seta a tie tienenlos nenlos jugadores que me brindan la alegría del juego bien jugado. jugado. Eso sí, mi mujer, Helena, Helena, y yo conla pasión pasión hu human mana a y conla certeza certeza de quesomos mucho mucho más más quelo que no noss han dic dicho ho jugadores que somos. Eso genera amores y odios. Eso me vincula continuamente con las causas que est estamo amoss muyatar muyataread eados.Desd os.Desde e queesta queestamosjunt mosjuntos os enla vid vida, a, hac hace e 34años,el pri primerdía merdía de entiendo justas. La voluntad de recuperar la memoria de las mujeres, de los negros, de los cada Mundial colgamos en la puerta de entrada un cartel hecho por nosotros mismos que humillados, de las civilizaciones no escuchadas: la India, la China…”, precisa mientras dice ‘cerrado por fútbol’ y no lo quitamos hasta que hay campeón”. Raquel Garzón ț EL PAÍS BABELIA 12.06.10
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ESPECIAL FERIA DEL LIBRO DE MADRID / En Portada
“Nadie hablaba voluntariamente de aquello, me crié con el silencio angustioso en que estaba envuelto”, señala Herta Müller sobre la deportación a los campos de trabajo soviéticos, tema de su nueva novela. Foto: Efe / Jack Mikrut 4
EL PAÍS BABELIA 12.06.10
La vida extrema “Las frases verdaderas están siempre relacionadas con una herida profunda”, dice en una entrevista Herta Müller. La Nobel recrea las vivencias de los rumanos de origen alemán deportados a Ucrania en 1945, entre ellos, su madre y el poeta Oskar Pastior. Por Cecilia Dreymüller paraimaginarmee un esce escenario nario.. Adem Además,disás,disen nombre de la culpa colectiva, en con- antes. Y aunque sabía que él había sido de- paraimaginarm naturalmente, de los apuntes de las rre modernista de la Literatur- cepto de trabajos de reparación. Cercan portado, no me había atrevido a preguntar- ponía, naturalmente, conversaciones con Pastior Pastior,, que era haus en el centro de Berlín de 100.000 rumanos de origen alemán fue- le. Le tenía una admiración y un respeto largas conversaciones tremendo. Se acordaba de entra una mujer de apariencia ron transportados en vagones de ganado enormes, era un gran poeta, un personaje de un detallismo tremendo. demasia asiado do ven venera erado.No do.No con conceb cebía ía queél se todo, y, por por cierto cierto,, disponía disponía de una mente mente y frágil, envuelta en amplios ro- hacia el Este. No sabían adónde los lleva- dem pajes negros. Las facciones du- ban y, una vez allí, ignoraban cuánto tiem- iba a abrir ante mí. Yo era una amiga, pero de un lenguaje para transmitirlo. Solo un generación, ión, ¿cómo iba a compartir intele intelectual ctual es capaz de analizar y poner en ras,, nobl ras nobles,sin es,sin eda edad, d, le conf confier ieren en una bell bellee- po debían permanecer en los campos de de otra generac palabrass vivenci vivencias as tan extremas. extremas. A otra perza singular, como de condesa transilvana. trabajo. Al final fueron cinco años, que pa- conmigo sus recuerdos dolorosos? Pero lo palabra sona, a, queno dis dispon ponee delinstru delinstrumen mento to men men-Su fig figuramenud uramenudaa y sum sumame amentediscr ntediscretapaetapa- saron en condicion condiciones es inimaginables. Reali- curioso fue que cuando le expliqué mi pro- son verbaladecua baladecuado,simple do,simplemen mente te le sup supeesa inadvertida entre la clientela igualmente zaron trabajos extremadamente duros en yecto le gustó. Parecía que tenía no solo taly ver discreta del café; solo alguna ceja se alza en minas de carbón, en la construcción y en gana ganas, s, sino sino nec necesi esidad dad de habl hablar ar de est estaa par par-- ra. Oskar Pastior era poeta y había creado respetuosa señal de reconocimiento. Herta los koljós, las granjas colectivas. No había te de su vida que había silenciado tantos un lenguaje para su experiencia. El “ángel años.Y s.Y as asíí empe empezóa zóa co cont ntarm armee co cosa sass qu quee yo del hambre” hambre”,, esa especie de monstruo de la Müller (Nitzkydorf, 1953, Rumania, premio comida, muchos murieron de hambre. No año teníancon íancon quéresis quéresistirel tirel frí frío, o, la gen gente te trab trabaa- apu apunta ntaba ba en cua cuader dernos nos.. Lleg Llegué ué a lle llenarcuanarcua- inanició inanición n que en la novela acompaña a los Nobel de Literatura 2009) se acerca con el ten intemperiee y moría congelada. tro cuadernos hasta su muerte repentina. deportados a todas partes, es de él. Tamandar de una persona tímida. Habla con jaba a la intemperi “pala del corazón”, corazón”, que direct directamenamenvoz baja, si bien firme, y con este ligero Sufrieron todo tipo de infecciones y enfer- Fue algo completamente inesperado. Era bién la “pala acento de los rumanos de habla alemana medades a causa de las terribles condicio- mayor, tenía 78 años, pero estaba bien. Y te es una pala con una hoja en forma de que conse conservarondurante rvarondurante sietesiglos su idio- nes sanitarias y la mayoría de los que muy ilusionado con el libro porque había- corazón. Me dio tantas metáforas que, sin embargo, go, corre correspon sponden den a reali realidade dadess que dema y sus costumbres del sur de Alemania sobrevivieron volvieron mutilados o con mos acordado escribir la novela a cuatro embar en esa Ruman Rumania ia multi multiétni étnica ca dond dondee conv convivieivie- enfermedades crónicas. manos. Existían ya unas treinta páginas. rivan exactamente de lo vivido. Hay que añadirque aña dirque Osk Oskar ar Pas Pastio tiorr man manten tenía ía unarelaron rumanos, húngaros, judíos, gitanos y P. ¿Su madre habló con usted de su exción de amor-odio con sus recuerdos. Le búlgaros. Se confiesa agotada por los com- periencia? perseg per seguíandía uíandía y noc noche.Él he.Él dec decía ía queprefe quepreferiripromisos que le acarrea el Nobel, aunque R. Nadie hablaba voluntari voluntariamente amente de ría no tener que acordarse. De ahí que era sus ojos claros y vivos, la mirada directa, aquello. De mi madre oía desde niña frases capaz de describir meticulosamente los obdan fe de una inusual fuerza vital. Sin esta co como mo:: “E “Ell vi vient ento o esmás fr fríoque íoque la nie nieve ve”,o ”,o “Nadie hablaba jetos, la gente, los distintos trabajos. En el jetos, energía tal vez no hubiese logrado abando- “una patata caliente es como una cama cacampo,, para sobrevi campo sobrevivir vir mental mentalmente,había mente,había nar su Rumania Rumania natal, todavía todavía en plena plena dic- liente”, o “la sed es peor que el hambre”, voluntariamente de tadura del conducator Nicolae Ceausescu. quemetí dire directa ctamen mente te en la nove novela.Pero la.Pero en aquello. Fue Oskar llegado a identificarse con los trabajos que le tocaban, y lo mismo con los materiales. No hubiese soportado las represalias por un momento dado, en el año 2001, me di Te hablaba de los distintos tipos de carbón, negars neg arsee a col colabo aborarcon rarcon la Seg Seguri uritat tate, e, la vig vigii- cuenta de que quedaba cada vez menos Pastior el primero en dearenaa o decem dearen decemen entocomode tocomode unaman unamante te.. lancia,los lanc ia,los int interr errogat ogatori orios,la os,la cen censura sura.. Aho Ahora ra gente que me pudiera hablar de lo que le abiertamente” te” La fras frasee sar sarcás cástic ticaa del pro protag tagonis onista ta sob sobre re su lleva un cuarto de siglo viviendo en Alema- pasó allí. Que cada vez era más difícil acce- hablarme abiertamen jornada en la mina, “Cada turno una obra nia, país donde publicó en 1984 su primer der a testimonios directos, pues mi madre, de arte”, es literalm literalmente ente de él. libro no censurado, En tierras bajas. Ahora que había mantenido contacto contacto con algunos publicaen publ icaen Esp Españasu añasu últi última ma nov novela, ela, Tod P. Entiendo. Como forma forma de salir de la Todo o lo de los deportados en nuestro pueblo despuéss demarcha pué demarcharsea rsea Ale Aleman mania,me ia,me inf inform ormaaue tengo lo llevo conmigo (Siruela). P. ¿Y qué hizo usted entonces? pasividad del sufrimiento se apropió de R. Prime Primero ro no hicenada. Estab Estabaa parali paralizaza- esta realidad insoportable. Leo Auberg, PREGUNTA. Dos meses antes del fallo ba sobre la desaparición de cada vez más conocidos dos y familia familiares. res. Yo siemp siempre re me ha- daporel do dolorde lorde lapérd lapérdid ida,no a,no po podí díaa es escr crii- en la novela, lo consigue con su imaginael Premio Nobel publicó usted esta nove- conoci bíainteresad sado o poreste tem tema, a, he esc escrit rito o bas bas-- bir. Había sido un gran amigo, una persona ción y su lenguaje dadaísta. En su ensayo a sobre la deportación de los alemanes de bíaintere extraor ext raordin dinaria aria,, y dura durantecasi ntecasi un año est estuve uve De cómo se inventa la percepción, habla Rumania Ruma nia a camp campos os de traba trabajo jo rusos en tante sobre ello, tanto ensayo como ficción. de duelo. Después retomé los cuadern cuadernos os y usted, ya en 1991, de este fenómeno: el 1945. 194 5. ¿Po ¿Porr quéeligióeste tem tema a queha sid sido o En todos mis libros anteriores sale, si bien solo de forma secundaria. En Alemania se decidí seguir adelante con la novela por mi ser humano inventa una percepción proilenciado tanto tiempo en Rumania? RESPUESTA. RESPU ESTA. El tema me ha rond rondado ado ha llevado a cabo una larga concienciación cuenta, también en homenaje al amigo. piaporque piaporqu e “loque vem vemos os sobr sobrepa epasa sa nue nuesspor la cabeza durante muchos años, pues histórica, en relación con el fascismo y la P. Llama Llama la atenc atención ión el cono conocimie cimiento nto tros limites”. R. Sí,creoque la lit litera eratur turaa hac hacee es esto,acoto,acomi madre fue uno de los deportados, y me guerra, pero en los antiguos países del Este, de los lugares y la recreación de las sensaBulgaria, a, queda ciones físicas: sobre todo, el hambre, pero ge ese tipo de invenciones. he criado con el silencio angustioso angustioso en que como Rumania, Hungría o Bulgari staba envuelto, las alusiones veladas, la tod todavíamucho avíamucho porhacer.Por esoempec esoempecéé a también el calor, el frío, el agotamiento… P. ¿De qué manera influye su expeintuición del sufrimiento que había detrás. hacer entrevistas a los supervivientes, viajé La ambi ambientac entación ión de la mina, del camp campo o de riencia personal del totalitarismo en su En Rumania esto era un tema tabú —y si- a Rumania, a mi pueblo, y hablé con gente trab invención ción de la perce percepció pción? n? ¿Agu ¿Agudizó dizó trabajo ajo,, el pais paisajey ajey las cond condicio iciones nes clim climátiáti- inven ue sin ser investigado a fondo— porque queconoc queconocía. ía. Sinembarg Sinembargo, o, no saq saqué ué much mucho o casposee casposeen n un ver verism ismo o inc increí reíble ble.. ¿Có ¿Cómo mo se su mirada? vocaba el recuerdo del pasado fascista. A en limp limpio.Fue io.Fue Osk Oskar ar Past Pastior ior,, el poe poeta ta rum rumaa- hizo con esa información? R. Yo creo que que aquí hay dos dos temas: temas: por no-alemán án afinca afincado do en Alemania, Alemania, el primeR. Para empezar, leí muchísima docu- un lado, los factores que llevan a una a la la gente no le gustaba que le recordasen no-alem hablarm armee abie abierta rtamen mente. te. Des Despué pués, s, mi- mentación histórica. Existe toda una litera- escritura y, por otro, lo que sería una conque el Gobierno de Antonesc Antonescu u fue fiel alia- ro en habl o de Hitler. Solo porque el Ejército ruso ré en el cementerio de Timisoara la placa tura sobre los distintos tipos de campos de ciencia política. Yo habría desarrollado una concie cienci nciaa pol polític íticaa crí crític ticaa y res resist istent entee de toinvadi inv adió ó elpaísen ago agostode stode 194 19444 y lo der derroro- dedicada a la memoria de los muertos en internamiento rusos, sobre los gulags, los con doss mo modosen dosen Rum Ruman ania.Ya ia.Ya latení lateníaa an ante tess de ó seprodu seprodujoen joen Rum Rumani aniaa el súb súbitocamb itocambio io los campos de trabajo, que han colocado campos de trabajo, etcétera, aparte de los do empezar ar a escrib escribir, ir, a los 14 años. e régimen. Todos los soldados rumanos fin finalme almente nte,, y me apun apunté té nom nombre bress quepuse clás clásico icoss de Solz Solzheni henitsi tsin n o Shal Shalámov ámov.. De empez habían participado en las campañas hitle- a los personajes de la novela, revestidos de gran ayuda fue también un viaje que hice P. En su primer libro, En tierras bajas , ianas de destrucción de la Unión Soviéti- las historias que él me había contado contado.. con Pastior a Ucrania, a la cuenca del Do- nacela “ran “rana a alem alemana ana”, ”, que repre represent senta a paa, per pero, o, en ene enero ro de 194 19455 —to —todav davía ía mes meses es P. ¿O sea que Oska Oskarr Past Pastior ior (192 (19277- néts, para visitar los sitios de su cautiverio. ra la niñ niña a nar narrad radorael orael esp espíri íritu tu decontr decontroly oly antes de que terminara la guerra—, solo 2006), que es el álter ego del protagonista, No quedaba nada de los barracones del denuncia dentro de la minoría alemana. R. Sí,la ranaalema ranaalemana na fueel pri primerdicta merdicta-los miembros de la minoría alemana fue- Leo Auberg, no figuraba como punto de campo, pero sí estaban las minas. Y, sobre todo, ver la amplitu amplitud d del horizont horizonte, e, el gran on envi enviadosa adosa Ucra Ucrania nia paratrabajo paratrabajoss forz forzaa- partida de su novela? os de reconstrucción reconstrucción.. Fueron deportados R. No, habí habíaa emp empeza ezado do a tra trabaj bajar ar en ella espacio vacío de la estepa, fue fundamental Pasa a la página siguiente
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OR LA PUERTA de la señorial to-
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ESPECIAL FERIA DEL LIBRO DE MADRID / En Portada Viene de la página anterior
dor que conocí. Ya asomaba en la guardería y el colegio. Lo observaba todo ya en mi infanc infancia, ia, de un modo que entonces todavía perman permanecía ecía abstracto, pero que luego se iba a concretar: el Estado totalitario, la omnipresencia del servicio secreto. Te enseñaba a inventarte no solo una percepción sino una apariencia con la que los podías engañar. P. En otr otro o ens ensay ayo o dic dice e queproba queprobable ble-mente cada autor tenga solo una única frase propia. ¿Cuál sería la suya?
R. Esta frase, naturalm naturalmente, ente, no existe existe,, no puede existir en la práctica. Pero es una frase que una está escribiendo sin cesar,que ces ar,que hac hacee quesigas esc escrib ribiend iendo. o. Es una frase veraz. Una frase que demues demues-tra su verdad por sí misma. Es este tipo de frases que una quiere escribir y que también busco como lectora. En ellas sucede algo contigo. Si después de 30 páginas en un libro no he encontrado una frase así, dejo de leerlo. A mi modo de ver, las frases verdaderas están siempre relacionadas con la experiencia de una perturbación, con una ofensa de la persona, con una herida profunda. Muchas veces estas ofensas tienen que ver con la guerra, con los lager, con los regímenes men es tot totalit alitario arios. s. Pie Pienseen nseen la lite literatu ratura ra de Imre Kertész, en la de Jorge Semprún —siempre escribe únicamente sobre su
“Ver la amplitud, el gran espacio vacío de la estepa, fue fundamental ara imaginarme un escenario” experie exp erienci nciaa en el cam campo po de Buc Buchenhen wald—;pienseen Lobo Antune Antunes, s, en Thomas Bernhard o en Aleksandar Tisma, el novelista serbio. Tisma dejó una obra tan funda fundamenta mentall para ente entender nder los total totaliitarism tar ismos os y no rec recibi ibió ó nin ningún gún Pre PremioNomioNobel. Duele de verdad que un autor como Tisma se haya descub descubierto ierto y galardo galardonanado tan tarde, solo por vivir en un país quele eng engañópor añópor el rec recono onocim cimien ientometomerecido. De todos modos, escribir no es algo que se hace por diversión. Es más bien bie n lo con contrar trario io y, sinembarg sinembargo, o, la esc escriritura no te suelta suelta.. Cuando finalmente llego a emp empeza ezarr a esc escrib ribir, ir, me dedic dedico o a ello tan obsesivamente que no consigo pensar en otra cosa, día y noche. Me absorbe todas mis fuerzas y cuando termino dejo de escribir por largo tiempo. Yo no soy capaz de escribir siempre. P. ¿Es enton entonces, ces, en estas pausas pausas entre libro y libro, cuando trabaja en sus poemas-collage?
R. Sí, representan una especie de pasatiempo relajante.
P. ¿Cree que el Nobel beneficia a su obra, al darle una difusión nueva o le perjudica, al reducir la maquinaria mediática diát ica sus cont contenido enidoss com complejo plejoss a tópi tópi-cos simplificados y planos?
R. No, mire mire,, yo pued puedo o abst abstrae raerme rme por completo completo del Premio Nobel. No me siento con él a esta mesa. Naturalmente, Naturalmente, significa un bonito reconocimiento, como los otros premios que he recibido. Y, por sup supuest uesto, o, est estoy oy muy agra agradec decida, ida, pues pu estoque toque pa parael rael re rest sto o demi vi vida da yano necesito preocuparme de cómo llegar a final del mes. Porque esto en mi vida ha sido así a menudo. El premio ni es malo ni esbueno.Y yo,de hec hecho,gusto ho,gustosam samenente me olvidaría de él (risa burlona) si la gente no se empeña empeñara ra en record recordármelo ármelo constantemente. ț El hombre es un gran faisán en el mundo / En Tierras bajas. Traducción de Juan José Solar. Siruela y bolsillo en Punto de Lectura. Madrid, 2010. 140 y 191 páginas. Los pálidos señores
con las tazas de moca. Traducción de José Benalmádena, ádena, Luis Reina Reina.. E.D.A. Libros. Benalm 2010. 19,20 euros. 232 páginas. 6
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La experiencia de la esclavitud Müller ha creado en Todo lo que tengo lo llevo conmigo una obra lírica, dramática y comprometida que invita a la fraternidad. Un testimonio sobre los 100.000 rumanos enviados a la reconstrucción de la antigua URSS tras la Segunda Guerra Mundial Todo lo que tengo lo llevo conmigo
madre sí —el señor Müller se alistó en la mitad de ellos pudieron emigrar a Alelas SS—, y su novela sobre la experiencia mania y Austria, y otros 50.000 regresade la esclavitud tiene muy poco de fic- ron a la Rumania comunista. (A partir de ción y está muy literalmente inspirada 1958 y sobre todo tras los acuerdos de en las confidencias de varios supervivien- Willy Brandt con el régime n de Bu carest, tes, especialmente su amigo el poeta Os- docenas de miles de rumanos de origen Tot el que tinc, ho duc al damunt kar Pastior, nacido en Hermannstadt (Si- alemán, so pretexto de “reagrupación fabiu) y deportado después de la Segunda miliar” y previo pago de cierta cantidad Traducción de Joan Fontcuberta i Gel Guerra Mundial a un campo de trabajo de las divisas que codiciaba el Estado Bromera. Valencia, 2010 en Ucrania, protagonista y personaje na- rumano, pudieron emigrar a la RFA. Des262 páginas. 19,90 euros rrador de la novela bajo el alias de Leo- pués de la caída del régimen comunista pold Auberg. Según cuenta Müller en un emigraron 100.000 alemanes más. Hoy postfacio sobre su relación con Pastior, en Rumania queda una comunidad muy Por Ignacio Vidal-Fol Vidal-Folch ch “le con conté té que qui quisie siera ra esc escribi ribirr sob sobre re reducida). “Todo lo que tengo lo llevo conmiSOBRE LA VIDA y la muerte en los campos ello. Él quiso ayudarme con sus recuerde esclavos durante el régimen soviético dos. Nos reuníamo reuníamoss con regulari regularidad, dad, él go…”, es la primera frase de la novela, es ya considerable el número de testimo- contaba y yo anotaba anotaba”. ”. que se repite como salmodia. El relato se nios de los superviviendistribuye en 64 capítutes y de los trabajos de los breves o fragmentos que em empi piez ezan an en las los inve investi stigado gadores res en postrimerías postri merías de la guelos arch archivos ivos abie abiertos rtos rra co con n las pr prime imeras ras tras la caída del bloque experiencias sexuales del soviético. El secretismo absolut abs oluto o sob sobre re lo que narrador, homoeróticas, allí sucedía, preocupasórdidas y clandestinas, ción constante del régien un parque nocturno, a los 17 años, y su reclumen, y el régimen mistamiento tamient o y transp transporte orte mo, son ilus ilusion iones es del junto con otros tres mil pasado. Ahora, gracias pres pr esos os en un tr tren en de a lo loss li libr bros os de An Anne ne mercancías a un campo Appleb aum —Gulag—, d e G us us ta ta w H er er lili ng ng en Ucrania para traba jar e n un koljós, una fá—Un mundo aparte—, de Marg Margaret aretee Bube Buberrbrica, unas minas, escombreras, línea férrea, Neumann —Prisionera obras… de Sta Stalin lin y Hit Hitler ler:: un Según avanza el relamund mu ndo o en la os oscu curi ri-to y se presenta “el ánquee vi vien enen en a dad—, qu gel del hambre” que seagregarse a los vía crucis clásicos de Varlam rá co comp mpañí añíaa de es esos os Shalámov —Relatos de años cada vez más proSolzhenititfunda e íntima, y luego Kolymá— y Solzhen recuerdo imborrable sin —Archipiéla —Archipiélago go Guhasta la muerte, la perilag—, además de la mepecia pec ia de Leop Leopold old Aumoria mor ia ca carce rcelar laria ia del berg se fragmenta en espolaco Alexander Wat cenas breves y elusivas, —Mi siglo—, por citar algunos de los que se a menudo de un dramavienen editando editando en Estismo paroxístico, paroxístico, con paña pa ña en lo loss úl últi timo moss frases densas de experiencia,, ninguna (esceriencia años, año s, se co conoc nocen en las na ni frase) previsible macrocifras, macroc ifras, las granni conven convencional: cional: aquí, des magnitudes de la cael abogado que roba cutástro tás trofe, fe, y tamb también ién se conoce una miríada de charadas char adas de sop sopaa del detalles, infernales detaplato de su esposa cada Imagen tomada en abril de 1945 en Rumania. Foto: Associated Press llitos. vez que ésta desvía la Como es lógico, enmirada del plato plato y si ésta le sorprende se excusa: tre estos libros, los me“Total, una cucharada más o menos…”; jores, es decir, los más logra dos y más más allá, la tipología de las distintas claprecisos en la transmisión de las impreses de piojos (Wat también tiene alguna siones, experiencias y padecimientos de La peripecia de Leopold los prisioneros, y por consiguiente los páginasobre el tema);después, el acontemás valiosos como herramientas para la Auberg se fragmenta en cimiento fabuloso de la llegada de una preservación de la memoria e instruc- escenas breves y elusivas, postal de la familia, ¡y qué postal!; luego, un sueño: “En el sueño comprendí con ción de las generaciones venideras, si no claridad que estaba muerto, pero no me como valladar para que no se repitan a menudo de un apetecía decírselo a mi madre”; luego, aquellos hechos, son los que han escrito pensamientos delirantes en la frontera las víctimas. En el terre terreno no de la ficción, dramatismo paroxístico del poema surreal, como la liebre blanca además, adem ás, parece claro que sol solo o ést éstas as están legitimadas para literaturizar aqueque crece en las concavidades de las me jilla s de los esclav os, ex pulsán doles d e la llo. Aquí toda impostura sería bochornosa, como suelen serlo las películas bonisPastior y Müller pertenecían a la mino- vida; la descripción apasionada, propia tas sobre la Shoa, se filmen o no “por la ría de rumanos de origen germánico, co- de un poeta enamorado, de la “armuecocinar como buena causa”. No, aquí todavía hay y lectividad numérica y económicamente lle”, hierba que se puede cocinar debe haber clases. Por eso a la entrada considerable, que en vísperas y durante espinacas, pero en verano se hace leñode algunos campos de trabajo siberianos la Segunda Guerra Mundial fue fuerte- sa e incomestible… Libros como esta novela de un lirisun rótulo informa del precio de la visita mente influida y penetrada por la ideolopara los turistas y añade —esto es sensa- gía nazi y aportó buen número de reclu- mo sepulcral, o como los mencio mencionados nados cional— que la entrada es gratis “para ex tas voluntarios a las SS y a la Wehrmacht. más arriba, se le harán arduos de transiprisioneros y descendientes”. Por lo me- En enero de 1945, un total de 100.000 de tar a un lector con imaginación sensible nos así lo cuenta Frank Westerman en su estos ciudadanos —todos los hombres (¡perdón!), pero exigen su atención, que excelente Ingenieros del alma. entre 17 y 45 años y las mujeres entre 18 y les preste su oído siquiera como un míClaro que hay excepciones a esa re- 30— fueron enviados a campos de trabajo nimo compromiso con la idea de fratergla. Todo lo que tengo lo llevo conmigo, en territorio soviético para contribuir por nidad. ț novela de Herta Müller, es una. La escri- tiempo indeterminado indeterminado a la reconstructoraa alem tor alemanaana-ruma rumana, na, dis disting tinguida uida el ción de la URSS. De éstos, éstos, 10.000 fallecie.com año pasado con el Nobel de Literatura, ron en los trenes o en los campos, de + no fue deportada a la URSS para trabajar hambre, frío o enfermedades. Los demás ̈ Primeras páginas de Todo lo que liberados al cabo de cinco años; tengo lo llevo conmigo, de Herta Müller. como esclava (nació en 1953), pero su fueron liberados Herta Müller Traducción de Rosa Pilar Blanco Siruela. Madrid, 2010 270 páginas. 18,95 euros
IDA Y VUELTA
(2005), ), de M.Barceló,se exhib exhibe e enCaixaFor enCaixaForum um (corte (cortesíadel síadel artis artista). ta). Moi/Yo (2005
El último pintor Por Antonio Muñoz Molina
H
E VUELTO A Madrid a tiempo pa-
ralos úl últi timo moss dí díasde asde laFer laFeriadel iadel Libro y de la gran exposición de Miquel Miqu el Barc Barceló. eló. Las arb arboled oledas as del Retiro y las del paseo del Prado amortiguan la luz de cal que suele ser el primer impacto impa cto del regr regreso, eso, cuando uno sale en taxi del aeropuerto en la mañan mañana a de verano y se encuentra encuentra de nue nuevo vo en esas peri periferi ferias as desér de sértic ticasen asen lasque sól sólo o cr crece ecen n ma matoj tojos os de esparto espa rto y grúa grúass de espe especula culadore dores. s. La luzhiere los ojos no habituados a ella igual que la bronca política hiere los oídos en la radio del taxi, en la que parece continuar la misma tertulia trufada de exabruptos que uno escuchó hace unos meses en otro taxi que entonces lo llevaba hacia el aeropuerto. En el aire tan seco crepitan las formas de las cosas. Las barbaridades que se dicen con naturalidad en la radio suenan más agresivas porque el español hablado en España tiene tien e unaasperez unaaspereza a de yesc yesca. a. Es urge urgente nte buscar las zonas de civilización con la misma destreza antigua con que se eligen en verano lashabi lashabita tacio cionesfresc nesfrescas as en la lass ca casasy sasy las aceras acer as de somb sombra. ra. Recié Recién n lleg llegado,uno ado,uno recu recu-pera el gusto civilizado de compartir unas cañas cañ as de cerv cerveza eza y unas unas rac raciones iones de ensa ensalaladilla rusa y albóndigas en salsa y almendras almendras fritas y saladas saladas,, exquisitam exquisitamente ente bruñidas de aceit ac eite, e, y se hac hace e de nue nuevo vo lamism lamisma a pre pregun gun-ta, cómo en un país en el que hay tanto talento para los placeres diarios de la vida los disc discurso ursoss púb públicostiendencon licostiendencon tan tanta ta freuenciaa uen ciaa labrut labrutali alida dad;cómo d;cómo es pos posib ible le que oexist oex istan an la ca calid lidez ez ins instin tintiv tiva a y cor cordia diall y esa roser ros ería ía quelo asa asaltaa ltaa un uno o a cua cualqu lquierhora ierhora que encienda la televisión y que no llega a tales tal es ext extrem remos os en nin ningúnotro gúnotro lug lugardel ardel mun mun-o; en vir virtudde tudde quélógic quélógica a pu puede eden n coi coinc ncidi idirr n losmism losmismos os día díass lascorr lascorrida idass detorosy la lass
ferias del libro; cómo puede haber el índice ca caníafísic níafísica, a, la hil hiler era a de pue puesto stoss de lib libros ros en más alto de donaciones de órganos y tam- la avenida de un parque, dan a la literatura bién el de barbarie municipal y maltrato a una terrenalidad que resalta su presencia los animales y despilfarro de fondos públi- obj objetiv etiva a en el mun mundo,su do,su con condici dición ón devíncucos en las fiestas de verano. lo entre los seres humanos más allá de la soleda edad d esq esquiv uiva a de cad cada a un uno. o. Mir Miro o lascara lascarass No entiendo nada. Llego al Retiro, una sol mañan mañ ana a de sá sábad bado, o, tanatur tanaturdid dido o porla luz de los lectores, en el tiempo tan breve de como por el desorden del sueño, y como cadasaludo cadasaludo,, petic petición ión de nom nombre,firma, bre,firma, mihaceaño ha ceañoss qu que e noven noveníaa íaa laFer laFeriadelLibr iadelLibro o rad rada a últi última,mano ma,mano estr estrecha echada da en la desp despediedime doy más cuenta de su singularidad: la da. El misterio de una identidad intuido en mezcla mezcl a demo democrát crática ica de los comer comercian ciantes tes y el minuto escaso de un encuentro. Algunos los literatos y la multitud, de la jardinería de esos lectores traen un libro publicado y de la literatura. Bajo por el paseo del hace casi un cuarto de siglo, el papel de amarill rillento ento.. Otros Otros,, Prado Prad o y frente frente a las verjas verjas del del Botánicome Botánicome mala calidad reseco y ama encuentro el lujuriante jardín vertical que otras, no habían nacido cuando yo escribí cubre un muro en la fachada de CaixaFo- las novelas que vienen a que les dedique. rum y un elefante de bronce de tamaño Quealgu Quealguiensigaleye iensigaleyend ndo o esa esass pá págin ginasde asde las natural natu ral apoy apoyado ado acro acrobáti báticame camente nte en su que casi no me acuerdo provoca sorpresa y trompa extendida. gratitu gra titud,pero d,pero no ali aliviael viael fon fondo do dedesaso dedesasosiesieEnla Fer Feria ia delLibr delLibro, o, ent entreel reel cal calor or pol polvovo- go. Qué certezas puede tener tener uno sobre nariento rien to y el fres fresco co de losárbole losárboles, s, ami amigos gos libr libree- da, ahora menos que nunca. Ese estado de ánimo tiñe luego la visita ros me hablan de las dificultades de estos tiemp tie mpos: os: cuá cuáll ser será á el por porve venirde nirde los lib libros ros y a la exposición de Miquel Barceló. En una de la lass lib libre rería ríass en un una a épo época ca tanvert tanvertigi iginos nosa a época en la que los enterados del arte dan de cambios tecnológicos; cómo sobrevivirá la pintura tan por obsoleta como lo están la cultura literaria, el hábito solitario y pa- ya según otros la novela y el libro, Barceló ciente de leer, en un país donde la casta es un pintor de una ambición heroica, de política polí tica ha dise diseñad ñado o el siste sistema ma educ educativ ativo o una integridad en el ejercicio de su trabajo como com o unaherra unaherramie mientapara ntapara dif difund undir ir la igno igno-- incesante que hace acordarse de aquellos rancia. ranc ia. Me sien siento to en una caseta, caseta, con los pintores proteicos que no descansaban temores recobrados de siempre —¿vendrán —¿vendrán nunca, que parecían aspirar a medirse no lectores,me lecto res,me qued quedaréen aréen algú algún n mome momento nto so- sólo con toda la riqueza y la variedad del lo y sin saber qué cara poner cuando me mundo visible sino con la historia entera mire mir e lagenteque pas pasa? a?—. —. Cu Cuand ando o me inc inclili- del arte. Cuando lo que se lleva en galerías, no par para a escr escribirla ibirla prim primera era ded dedicat icatoriapienoriapien- en bienales y museos de lo último es una so enlo sig signif nifica icativ tivo o y lo pre precar cario io quepued quepuede e asepsia de ocurrencias carísimas ejecutaserese ges gesto. to. El pa pacto cto de fr frate aterni rnida dad d pa parci rcial al das por asistentes mal pagados o de juegos digitales, les, Barceló acentúa más entre autor y lector en el que se basa la de manos digita literatura no necesita la mediación de una que nunca la parte material y artesanal de firma, y ni siquiera la existencia de un libro su ofic oficio, io, la cel celebr ebraci ación ón de la vid vida a org orgáni ánica, ca, impresoen impr esoen pape papel. l. Perola ded dedicat icatoria oria,, la cer- delo qu que e ger germi minay nay loque secorr secorrom ompey pey se
pudre y se tran transform sforma a en otra cosa, la mezmezcla entre la deliberación del talento y los azares y los contratiempos de lo inesperado, las resistencias y las imposiciones de los materiales, el control de una línea y la acepta ace ptaciónde ciónde unamanc unamancha ha de acu acuare arela la que se extiende sobre el papel y se convierte como com o sinpropó sinpropósit sito o en unasilue unasilueta ta hum humana ana.. El lienzo y el papel son cuarteados por el vientoseco vie ntoseco deldesie deldesierto rto en Mal Malí, í, hor horad adado adoss por las termitas o mordidos por monos o ratones. Entre mis pinturas he vuelto a ma-
tar un escorpión que se comía las termitas que se comían mis papeles, escribe en uno de sus Cuadernos de África, publicados tan espléndidamente espléndidam ente por Gala Galaxia xia Guten Gutenberg. berg. Un autor autorretra retrato to retom retomado ado despu después és de veinte añ años os tien tiene e aho ahora ra ma manch nchas as de hum humeda edad d y una especie de barba terrosa que es un nido de av avispa ispass queaprov queaprovech echaro aron n un pli pliegu egue e de la tela tela.. Un gra gran n gori gorila la mon montañ tañoso oso sen sentatado en un rincón con ese aire de exilio irremediable que tienen los gorilas en las jaulasmira absor absorto to al vacío como recap recapaciacitandosobreunasoled tan dosobreunasoledadque adque talvez se pa parerece a ladel pi pint ntor or de po poco co má máss decinc decincue uent nta a años que conoció el éxito de muy joven y ahora intuye o teme, a contracorriente de la moda que en otro tiempo lo favoreció, el crepúsculo crepú sculo del oficio oficio al que ha dedicado dedicado su su vida.. Pero Barceló sabe que no hay más vida alivio para la incertidumbre que seguir trabajando: pintando, dibujando, modelando el barro, escribiendo páginas de esos cuadernossuyosque der nossuyosque tien tienen en unaprese unapresenci ncia a dra dra-mática, como de haber sobrevivido intactos a la intemperie del desierto. ț Miquel Barceló. Barceló. 1983-2009. La solitude organisative. CaixaForum. Madrid. Hasta mañana. obrasocial.lacaixa.es/
EL PAÍS BABELIA 12.06.10
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ESPECIAL FERIA DEL LIBRO DE MADRID / El Libro de la Semana
Excepcionales intermedios de Thomas Mann El autor de La montaña mágica y Los Buddenbrook escribía sus relatos y novelas cortas —entre ellas, La muerte en Venecia— en el tiempo que transcurría entre sus obras extensas. Al igual que sus grandes novelas, están llenos de música y filosofía, de reflexiones sobre lo apolíneo y lo dionisiaco, y se leen sin pausa. Ahora se publican en un volumen único Cuentos completos Thomas Mann Traducción de Nicanor Ancochea, Francisco Ayala, Joan Fontcuberta, Juan José del Solar, Oliver Strunk y Rosa Sala Edhasa. Barcelona, 2010 952 páginas. 29,50 euros
Por Luis Fernando Moreno Claros
latos titulado El pequeño señor Friedemann. El editor quedó tan encantado con aquella colección de historias breves que lo animó a que escribiera algo de mayor envergadura, y tres años después saltó a la fama con Los Buddenbrook, una novela extensa y excepcional que conmocionó al público de la época. Con el éxito inicial como escritor, Thomas Mann se consagró a la literatura. Su extraordinaria cultura y su sensibilidad dotaban a sus obras narrativas de una vigorosa altura dramática sólo comparable a la alcanzada en el siglo XIX por autores como Maupassant, Chéjov o Dickens, pero desco desconocida nocida en Aleman Alemania, ia, donde después de Goethe, Mann marcó
H AY QUE CELEBRAR esta magnífica edición de los relatos relatos y las novelas novelas cortas cortas del gran Thomas Mann (1875-1955 (1875-1955)) como un acontecimiento editorial. Reunida en un solo tomo encontramos la literatura breve del autor de La montaña mágica, dispersa dispe rsa hasta ahora en varios volúmenes, algunos descatalogados.. Lla dos Llamar mar “cu “cuenentos” a la narrativa breve de Man Mann n res result ulta a un tanto inapropiado y puede prestar se a equívocos; más acertado es hablar de “relatos lat os y nov novela elass cor cor-tas”. Desde las primeras narraciones del joven Mann, tan frescas como La voluntad de ser feliz o Glaudius Dei, c on on l as as q ue ue debu de butó tó en rev revist istas as literarias, hasta el último relato de cuantos publicó, ya al final de su vida, La engañada, el estu estupendo pendo retrato psicológico de una dama menopáusica enamorada, el volum volumen en contien con tiene e asimismo asim ismo los emblemáticos Tonio Kröger y Tristán, así com como o La muer muerte te en Venecia, la novela breve bre ve que más fam fama a continúa granjeando a su autor e inspiradora de la melancólica película pelíc ula de Visco Visconti. nti. Beach huts Calvados, Normandy France , foto de Bernard Jaubert. Junto a estos encontramos Señor y perro, La ley y Las cabezas trocadas, historias un punto de inflexión y se erigió en remenos célebres célebres que las anter anteriores; iores; lo presentante de una “germanidad” a la mismo mis mo que esa del delici icia a de nar narrac ración ión que siempre trató con suma ironía y de anecdótica tan significativa titulada De- la que se mofó con la más absoluta seriedad. sorden y dolor precoz. En 1898, Thomas Mann publicó en la Sus novelas más extensas se leen sin editorial Fischer su primer tomito de re- pausa, al igual que los relatos, que remi-
ten a un mundo propio pleno de sugerencias existenciales y estéticas. Miembro de la gran burguesí burguesía a dec decaden adente, te, podrida en lo interior y refinada en lo externo, Mann planteó en su obra agudos problemas en nada ajenos a su propia vida. En sus relatos, al igual que en
La esencia de Goethe Fausto. Una tragedia Johann Wolfgang von Goethe Edición bilingüe bilingüe de Helena Cortés Gabaudán Gabaudán Abada. Madrid, 2010 872 páginas. 43 euros
No te olvides de vivir Goethe y la tradición de los ejercicios espirituales Pierre Hadot Siruela. Madrid, 2010 176 páginas. 21,95 euros
EL F AUSTO de Goethe —el Quijote de las letras germanas— no se traducía al castellanodesde hace más de veinte años; años; ahora ve la luz esta novedosa y flamante versión firmada por la actual directora de los institutos Cervantes de Bremen y Hamburgo. Experta traductora de Heidegger y 8
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Hölderlin entre otros, la salmantina Helena Cortés presenta un magnífico trabajo en el que intenta reproducir la forma estética de la obra original, lo que consigue con largueza. Su versión se lee con sumo placer tanto por su musicalidad poética como por la pureza y actualidad de su lenguaje.El leng uaje.El Fausto es una obra de extraordinaria riqueza estilística y que exige un trabajo de orfebre en la traducción —casi imposible— a otra lengua; la diversidad de regi registro stross lit literar erarios ios desp despleg legados ados por Goethe, la enorme variedad de sus versos (más de 12.000) y formas poéticas, desde las clásicas clásicas has hasta ta las más jug juguet uetona onass y rebuscadas, lo convierten en un manual lírico sin parangón. La obra, tan extraña como com o fas fascin cinant ante, e, con consta sta de dos part partes es ciertamente diferenciadas: en la primera, publicada en 1808, el erudito Fausto, se-
cundado por Mefistófeles, el diablo con el que ha pactado vender su vida a cambio de hallar la felicidad, seduce a la inocente Margarita,en Marga rita,en una histo historia ria típica y conve convenncional, y la más leída y conocida. La segunda gund a part parte, e, en la que Goet Goethe he trabajó durante treinta años y que se publicó tras su muerte, poco tiene que ver con la anterior. Es lo más extravagante y descabelladescabellado jamás escrito en alemán. Imposible de representar en un teatro, se asemeja a una sucesión de raros sueños simbólicos, plagados de guiños filosófico filosóficoss y herméticos que ponen a prueba la atención y la sorpresa del lector. El hombre Goethe y el artista se dieron aquí enteros, este fue su testamento vital; como Joyce hiciera con Ulises, también el autor de Werther legó a la humanidad esta obra genial para el desciframiento, el gozo estético y la
sus novelas, late el drama de la eterna confro con fronta ntació ción n del art artista ista con la vida real, lo mismo que ese empeño en tratar la muerte y la enfermedad como síntomas ineludibles ineludibles de la vida que pugna por mantenerse mantenerse y perpe perpetuars tuarse e en una juventud eterna e inalcanz able. Los relatos surgían como intermedio de las obras extensas; a menudo inspirados en una anécdota o en un ambiente, como ese de los balnearios en los que sus huéspedes se enamoraban perdidamente de ilusiones huyendo de una realidad apática. El ambiguo Thomas Mann supo descridescribir en cualquiera de estas joyas —lo mismo que Proust o Stefan Zweig— los goces y los sinsabores del enamor ena morami amient ento: o: lo confesable confesa ble y lo inconfesable fes able de las pasiones eróticas, sublimadas en el arte o alentadas por este. Sus relatos está están n lle llenos nos de múmúsica y filosofía, de reflexiones sobre lo apolíneo y lo dionisiaco, sin ocultar las tendencias mórbido-román mórbido-román-ticas de su época; tras la apare aparente nte form formalialidad de un estilo magnífico, pulido hasta el extremo, se esconden un sinfín de símbolos y detalles que sugieren prof profund undas as refl reflexio exio-nes; es una literatura densa, introspectiv introspectiva, a, irónica y trágica, tanto como el mundo interior de aquel artista de insuperable talento qu que e fu fue e Th Thom omas as Mann. Las traduccio traducciones, nes, la mayoría ya conocidas, son de altura, así que la fidelidad a los textos originales está asegurada, lo mismo que el disfrute de la elegante y minuciosa prosa pro sa del nov novel elist ista a de Lübeck en estas espléndidas versiones al castellano. ț
.com Primeras páginas de Cuentos completos, de Thomas Mann. +
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reflexión. Gracias al generoso aparato crítico, traducido de una de las más importantes ediciones alemanas, el lector hispahispanohablante nohabl ante cuenta con el asesoram asesoramiento iento necesario para enfrentarse a este descomunal monumento literario sin ingenuidad, pues de lo contrario poco comprenderá del complej complejo o univers universo o goethian goethiano. o. Muy oportuno oportuno como comp complem lemento ento o preámbulo a la lectura de Fausto es este ensayo del gran helenista francés Pierre Hadot sobre el vitalis vitalismo mo y el espiritualisespiritualismo apasionado de Goethe. El vate alemán se interesó siempre por los misterios de la Naturaleza y por las honduras metafísicas de la existencia; seguidor de Spinoza, kantiano y epicúreo a la vez, fue poco amigo de la embr embrolla ollada da fil filosof osofía ía delidealis delidealismo mo ale ale-mán, y siguiendo a los griegos de la Edad Dorada y clásica buscó la claridad filosófica sin por ello olvidarse de vivir: concibió la existencia como un placer placer en sí misma a pesar de su dolor; un todo en perpetuo cambiodel que que el ser huma humano no parti participa cipa en indisoluble unidad. L. F. M. C. ț
ESPECIAL FERIA DEL LIBRO DE MADRID / Narrativa
Viajeras Por Ana Rodríguez Fischer Fotografía captada en 2005 en el desierto de Atacama, al norte de Chile.
COMO SU TÍTULO anuncia, Compañeras de viaje , este libro de relatos —el quinto de
Foto: Reuters / Iván Alvarado
Cristo en las salitreras El chileno Hernán Rivera Letelier, premio Alfaguara por El arte de la resurrección, es un fabulador nato cuyas historias transcurren en un paisaje árido, hostil y proclive al espejismo El arte de la resurrección Hernán Rivera Letelier Alfaguara. Madrid, 2010 254 páginas. 18 euros
Por J. Ernesto Ayala-Dip EL NOVELISTA CHILENO Hernán Rivera Rivera Letelier es dueño de un mundo propio. Se fragua ese mundo con el oficio de la frase bien construida, como si fuera concebida paraa el oíd par oído, o, y el emp empeñoindec eñoindeclin linablede ablede la invención. Rivera Letelier es un fabulador nato. Es consecuente con un paisaje físico que parece siempre el mismo mismo.. Suelos áridos, desérticos, proclives al espejismo. Y probablemen probab lemente te a los asuntos humanos más insospechados. Una suerte de sobrenaturalidad natural idad táctil, casi conta contagiosa. giosa. No faltan en nin ningunade gunade susnovela susnovelass lospáramo lospáramoss e salitres. Las salitreras. Y en ese mar de oledad lunar están los cúmulos de gentes esignadas a su suerte: la pobreza, el caciquismo y la arbitrariedad. Estos elementos no están por estar. Tienen Tienen una función narativa rat iva.. Fac Facilit ilitan an la inc inclus lusiónde iónde la ima imagin ginaaión. Hacen que la verdad humana lo sea n la me medi didaen daen qu quee la ve verd rdad ad es esté téti ticadescadespliegue su poder de convicción. En territoiostan inh inhósp óspito itos, s, un llam llamadode adode la fáb fábula ula más inesperada es una luz. (Los parajes míticos, tan familiares en la literatura latinoamericana). Ese llamado puede ser una rquesta perdida en el desierto o un malabarista del balón, una especie de Mesías que un remoto pueblito salitrero espera on unci unción: ón: Fat Fatamo amorga rganade nade amo amorr conbannovelass en la a de música y El fantasi fantasista, sta, novela
que RiveraLetelier crea figur figuras as legend legendarias arias,, dispositivos dispositiv os imprescind imprescindibles ibles para metabolizar con infalible eficacia la realidad representada. En estas novelas el autor chileno resume su filosofía de la novela. En El arte de la resurrección, el autor vuelve a su sistema narrativo. Retorna a su paisaje habitual. La soledad recurrente y hostil. Ahora la historia transcurre al lado de una oficina salitrera. Volvemos a situarnos al norte de Chile, casi al borde de Bolivia. Un hombre, Domingo Zárate Vega, es durant dur antee 22 año añoss elCrist elCristo o de Elq Elqui.Un ui.Un hom hom-bre de 40 años que deambula atizando a los explot explotadores adores y descr descreídos eídos auténticas proclamas redentoras. De pueblo en pueblo su palabra aglutina a los que necesitan consuelo y esperanza. Los pobres, los tullidos y los mudos. Pero el cuadro no estaría completo compl eto si no se le sumara al infati infatigable gable mártir de los pecados del mundo la prostituta Magdalena. Contra lo que pudiera parecer, no estamos ante una parodia. Tampoco poc o ant antee un dispend dispendio io de ironía ironía y hum humor, or, aunqueambo aun queamboss exi exista stan n en susdosi susdosiss imp impres res-cindib cin dibles les.. Dom Doming ingo o Zár ZárateVega ateVega semete en la fig figura ura de un Cris Cristo to chi chilen leno o quecree est estar ar llamado llamad o a repet repetir ir en las salitreras salitreras la experiencia existencial y apostólica del fundador del Cristianismo. La resurrección es una cuestión capital en la interpretación del Cristianismo y en la investigación de la figura histórica de Jesucristo. Sin resurrección ció n no hayfe, dic dicen en unos unos;; sinresur sinresurrec recció ción n hayiguall un ho hayigua homb mbreque reque vi vien enee al mu mund ndo oa luchar por la justi justicia cia y la compasión, compasión, afirman otros otros.. La figura de Magdalena Magdalena tampoco es cas casual ual en la nov novela ela.. Ning Ningún ún eva evange ngelio lio afirma taxativamente que Magdalena haya
sido una prostituta, aunque sí los hay que afirman que era una pecadora. En la novela de Hernán Rivera Letelier, su título y la presencia prese ncia de Magdale Magdalena na nos recuerdan quehay unateor unateoría ía queatri queatribuy buyee la res resurr urrecección ció n a la imp impres resión ión quese lle llevó vó Mag Magdal dalena ena al ver el cadáver de su maestro (¿o amante?). Una impre impresión sión real, probablement probablementee la auténti auté ntica ca con conmoc moción ión cri cristi stiana ana ant antee un cuerpo real, devino con el tiempo en relato. Desconozco los conocimientos bíblicos de Rivera Letelier. ¿Y si esta novela fuera también una relectura de Cristo? ¿Una relectura progresista de los Evangelios, una interpretación terrenal? Encontré en El arte de la resurrección una fisura que su autor no atinó a disimular. La insistencia del narrador (me refiero a la vozquenarradesd vozquenarradesdee unaambi unaambiguaterc guaterceera persona) en adjetivar a su protagonista de mil maneras posibles me reafirma en la creencia de que Rivera Letelier apuró la extensión de su novela. O calculó mal el dibujode dib ujode su hér héroe,que oe,que hubi hubieraneces eranecesita itado do tal vez menos atributos barroquizantes y más densidad psico psicológic lógica. a. Hernán Rivera Letelier ha escrito una buena novela. La idea de una especie de loco premeditado en el desierto, vociferando en nombre de Cristo su diagnóstico moral de la sociedad de sutiemp sutiempo o (lo (loss año añoss cua cuaren renta)y ta)y de tod todos os los tiempos, tiene gancho novelístico y el autor chilen chileno o ha sabid sabido o explo explotarlo.Recuertarlo.Recuerdo sie siemp mpre re una unass pa palab labra rass de Har Harold old Bloom: “Puede que Jesús fuera un enigma hasta para él mismo”. ¿Y si Domingo Zárate Vega fuera él también un enigma? O el personaje que me parece que también se está mereciendo otra novela. ț
Soledad Puértolas— reúne 15 piezas que narran la experiencia del viaje vivida por mujeres de muy distinto tipo, edad y condición. No son viajes aventureros ni exóticos, y no es casual que el primero de ellos, ‘Música’, trate de los incidentes comunes y corrientes —una avería, por ejemplo— que pueden sobrevenir en un viaje en coche de Madrid a Galicia de una familia media que se va de vacaciones. Hay también viajes de juventud, el de la joven que se marcha a Inglaterra a trabajar de au verano y des descub cubreel reel swingin pair un verano swinging g London, o el de otra que decide visitar a dos amigos universitarios “exiliados” en el París de los años setenta por su actividad políticadurante polí ticadurante la dict dictadura adura.. En otrosrelatos, las mujeres acompañan a sus maridos en sus viajes de negocios o a los países adonde se trasladan por motivos profesionales, nale s, afro afronta ntando ndo un bue buen n puñ puñado ado de “tiempos muertos”, propicios a la soledad y la espera. Otras mujeres viajan solas y con un propósito previo —descansar, distraerse trae rse— — que se ver veráá trun truncad cado o por porque que otros viajeros viajeros entran en sus vidas y luego se van dejándoles la imagen de una mano “desnuda,mirandohacia “des nuda,mirandohacia el suelo suelo”. ”. En ocasiones, ellos o ellas se encuentran con una compañera inesperada: la extrañeza. Y casi todos los viajeros regresan ligeramente transformados, con un bagaje vital más rico del que portaban al parti partir. r. Más que la acción, en los relatos cuenta la situ situació ación. n. De ahí la cuid cuidados adosaa recr recreaci eación ón —muchos viajes se narran desde la posterior evocación o recuerdo recuerdo— — de ambiente ambientes, s, espacios, personajes o detalles, y la fina exploración de emocione emocioness y sentimie sentimientos. ntos. Buen ejemplo de ello lo tenemos en ‘Espe jos’, que transcurr transcurree en la casa de la protago protago-nista, y que es uno de los más breves, a la par de los más inquietantes inquietantes e intensos. intensos. O el titulado ‘Masako’: un relato casi estático, queen buen buenaa part partee tran transcur scurre re en la inte interiorioridad y la fantasía de una mujer que se llama, precisamente, Alicia. ț
Compañeras de viaje. Soledad Puértolas. Anagrama. Barcelona, 2010. 217 páginas. 18 euros
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ESPECIAL FERIA DEL LIBRO DE MADRID / Narrativa, Ensayo y Poesía
Justo Navarro “Mis poemas son accidentales” Enigma Antoni Casas Ros Seix Barral. Barcelona, 2010 191 páginas. 17 euros
N ARRATIVA. E NIGMA NIGMA,, la segunda novela del escritor catalán (en lengua francesa) Antoni Casas Cas as Ros Ros,, es una obra obra coral amb ambien ientad tadaa en Barcel Bar celona ona.. La nar narrac racióncorre ióncorre a car cargo go de sus cuatroprotagonistas, cuatroprotagonis tas, Joaquim, Joaquim, Zoe, Naoki y Ricardo, que se van pasando el testigo de relatar los hechos; en cuanto al barcelonismo, se detecta en un cuidado disseny al que no falt faltan an mot motivo ivoss bar barroc rocos. os. Vean si no: muertespor muer tespor enca encargo,enredo rgo,enredoss amor amorosos osos,, impulsos criminales, traumas, arrepentimientos y expiaciones tan públicas y sangrientas comoautosde co moautosde fe.Tamb fe.Tambiénaquí iénaquí,, com como o suc suceedía en el Quijote, el desencadenante de la acción acció n es la liter literatura:los atura:los cuatroprotagoni cuatroprotagonisstas, todos letraheridos, deciden formar un comando para vengar la insufrible tendencia de los escritores a estropear sus obras con finales que, a su parecer, no son de recibo. No desvelaré su plan, pero sí diré queno esel úni único co ras rasgo go fel felizm izment entee ima imagin ginaativo de la novela, en donde se defiende la lásica teoría barroca de que todos somos person per sonaje ajess de unaficci unaficción ón a la quellamam quellamamos os vida. Para demos demostrar trar que que así es, es, expone expone esta teoría precisamente un personaje secundaio llamado Enrique Vila-Matas, homónimo el colaborador de este diario y reconocido scritor que, según ciertos rumores, se esondería tras el nombre de Antoni Casas Ros. Sea como fuere fuere,, el miste misterioso rioso y jamás visto vis to aut autorde orde El teor teoremade emade Almo Almodóva dóvar r vuelve a acertar con el tono de divertimento, el buen ritmo y un artificio literario muy de agradecer en estos tiempos de realismo de baja intensidad. Fernando Castanedo
Historia de España en el siglo XX Julián Casanova y Carlos Gil Andrés Ariel. Barcelona, 2009 414 páginas. 29 euros
El escritor vuelve a la poesía tras más de 20 años. Mi vida social es un libro diarístico con una nueva voz poética donde él encuentra la palabra sobre el silencio impuesto
Por Rosa Mora EINTITRÉS o 24 años después, después, Justo Navarro (Granada, 1953) vuelve a la poesía con Mi vida social, 47 esti estimulant mulantes es poem poemas,que as,que hablan de la infancia, de la incomunicación, del pasado y el olvido, de la muerte, del silencio. Publicó Los nadadores en 1985 y Un aviador prevé su muerte en 1986, con el que obtuvo el Premio de la Crítica de poesía. Luego llegaron las novelas, pero nada de poesía. Hasta ahora. Como dice él, ha recuperado la palabra. “Cuando escribes poesía te inventas una voz, pero llega un momento en que esa voz que te has inventado ya no te la crees”. Varios el ementos han influido en esa recuperación de la palabra. El primero, el bendito insomnio creativo de Navarro. “Por la noche cuando no puedo dormir me invento poemas. Nacen en un momento men to no pre precis ciso, o, cie cierrolos rrolos ojo ojoss y emp empieiezo a ver cosas en la oscuridad. Los pienso con ritmo y si por la mañana los recuerdo, los escribo. Por eso mis poemas son accidentales. El año pasado, viví seis meses en Pisa y me fui con la sensación de liquidación, de cambio. Me llevé una serie de poemas que había impreso y seguí escribiendo en Italia. En Pisa, me di cuenta de que había encontrado una nueva voz poética. Se los pasé a mi amigo José María Pérez Zúñiga para ver qué le parecían. Le gustaron. Los leí unas 40. 000 veces y se lo envié a Manuel Borrás (Pre-Textos)”. “El libro, más que unas memorias, es diarístico, ha ido creciendo a partir de incidentes del día, algo que oía en la calle o me contaba un amigo, o vivía yo, o cosas leídas esos días, no de poemas, de novela novelas, s, denovelas decrímenesy misterio, sobre todo, y de canciones populares oídas al azar en la radio o en un bar”. Su poesía del siglo XXI es diferente de la que escribió en los años ochenta. “La anterior era con rima, sonetos ingleses, y con un material mucho más literario”. Ahora hay una voluntad de transparencia… hasta cierto punto. “Tenía dudas de que los poemas dijeran sólo lo evidente, transparentes: las cosas son así. Los poemas tienen que ser claros como una carta comercial, decía Gil de Biedma, pero a mí me gusta que puedan significar tres o cuatro cosas”. “La poesía, con sus tradiciones métricas y for-
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males, a las que uno debe o quiere ceñirse, es una buena vía para que uno se descubra diciendo lo que no pensaba decir, lo que era incapaz de decir. Hay quien quie n ve los proc procedimi edimientos entos formales como una atadura, como una mordaza. Pero yo creo que es al contrario: son procedimientos para acercarse a decir lo que, con las palabras de todos los días, resulta indecible”. Navarro ha situado sus poemas en un periodo que va de 1959 a 1994. “Es arbitrario, pero es una época en la que me sentí sen tí expu expulsad lsado o del mundo tal como creía que era. Cuando te das cuenta de que ya no eres tan maravilloso. 1959 fue el año en que mi padre se arruinó. Una época de desmora desmoralización, lización, desolación desolación y negrura familiar” familiar”.. La figura del padre está muy presente en Mi vida social, así como en algunas de sus novelas (Hermana muerte o La casa del padre). “La presencia del padre es muy pode poderos rosa. a. Era gene generoso roso,, libe liberal, ral, abierto, con gran capacidad para escucharte, como pocos padres lo fueron en aquellos tiempos. Pero tenía un carácter tan fuerte, a veces depresivo, que provocaba una ola de silencio”. No es difícil imaginarse lo que debió ser arruinarse en 1959 y sufrir un embargo. “Cuando voy a Granada (Navarro vive en Nerja), veo fantasmas, apariciones, al final con quien me encuent encuentro ro es conmigo mismo”. El poema ‘Curriculum vi- “La poesía es una buena vía para que uno se descubra diciendo tae’ es, en cierto sentido, un resumen del libro. Hay otro poema, ‘Otros modos de provocar prov ocar afas afasia’, ia’, est estreme remecedo cedor: r: “(…) tencia de animales / que pueden orienUna vez me contaba que la voz / de su tarse por el eco / de sus propios sonidos, padre le provocaba / afasia, eso me di- los murciélagos”. jo / pará lisis de la muscul atura voca l, siLos poema poemass de Navarr Navarro o son muy muy accelencio, lengua / atada. No aprendíamos sibles y es fácil para el lector sentirse retórica, / el arte de persuadir, sino el representado en ellos, conectar con su arte / de enmudecer, / a uno mismo o al voz poética. adversario”. Navarro es un buen hacedor de títu“Me lo contó un amigo. Creo que los los y aparece en ellos una divertida coinpoemas son una metáfora: estoy encon- cidencia: Los nadadores, Un aviador pretrando por fin la palabra, también también sobre vé su muerte, sus dos primeros poemael silencio impuesto”. rios, El alma del controlador aéreo o MeHablando de silenci silencios, os, otro poema moria moriass de astro astronaut nauta, a, en este libro de que el lector no debería perderse, perderse, como poem poemas. as. No es gratu gratuito. ito. “Habl “Hablan an de extra extra-todos, claro, es ‘Batman’: “Me hablaba el ñamiento. Escribir es lanzarse al espacio jefe, y no / era de mí de quien hablaba, exterior, o bucear. El aviador prevé su pero al hablarme, y hablarme de sí mis- muerte es un homenaje al poema de mo / tan fervorosamente, hablaba / de Yeats ‘El aviado r irlandés prevé su mu ermí, de cómo me juzgaba digno / de sus te’. Era el prefer preferido ido de su muerte”. palabras un momento, o así lo pensé. Y, mientras / él creía que yo sólo escucha- Mi vida social. Justo Navarro. Pre-Textos. Valenba / (o así yo lo creía), / recordé la exis- cia, 2010. 62 página páginas. s. 10 euro euros. s.
HISTORIA. H AY LIBROS a simple vista imposibles de escribir y este es uno de ellos. La historia de España en el siglo XX no cabe en 375 páginas de letra legible y generosidad interlineal, así que es mejor abandonar el proyecto de escribirlo y de leerlo, a no ser que se sepa de antemano que es imposible. Entonces puede suceder algo juicio no equivale aquí, afortunadamente, posterior engrudo de intereses materiales tan inesperado que de un libro imposible a neutralidad ni para los elementos más y falsedades morales está contado en vasalga un libro espléndido que no renuncia remotos ni para la actualidad inmediata. rios libros (alguno de ellos del mismo Jua las síntesis atrevidas, pero tampoco al Igu Igual al queel bal balanc ancee de la tra transi nsició ción n dem demoo- lián Casanova). Pero la claridad de criterio microdetalle ilustrativo, que se escribe con cráti crática ca es inequ inequívoc ívocament amentee posi positivo, tivo, es val valee par paraa el pas pasadoremo adoremoto to tam tambié bién:la n:la pé pérrconcie con cienciade nciade un públ públicodesinf icodesinforma ormado do pe- tamb también ién just justaa la llama llamada da de aten atención ción sobre sobre dida de las colonias en 1898 hace mucho ro al mismo tiempo formado y que, por el relat relato o edulc edulcoradoy oradoy embus embusteroque teroque entr entree tiempo que se bajó de la escena dramática tanto, agradecerá la orientación del exper- los medios y los propios políticos a veces para convertirse en un alivio social y civil, to —como lo son Julián Casanova y Carlos acab acaban an haci haciendo(para endo(para dañode la cred credibil ibilii- mientras que la evaluación positiva de la Gil Andrés— para determinar los espacios dad democrática actual pero, sobre todo, República no oculta que en alguno de sus calientesdel calie ntesdel deba debate te histo historiogr riográfic áfico o sin ato- para daño de la lucidez y la explicación tramos los socialistas “rompieron con el sigarle con pugnas de gremio o discusio- raci racionalde onalde los pro proces cesos os hist históric óricos).La os).La Igle Igle-- proceso democrático y con el sistema parnes casi privadas. El acierto abarca el tono sia no sale muy bien parada en este tomo, lamentario”, atraídos por el modelo bolensayísti ensa yístico co de la pros prosaa y la fluid fluidez ez expositi expositi-- pero no podía ser de otro modo: su com- chevique. Pero treinta páginas después se va del relato, pero se consagra sobre todo portamiento político en este siglo ha sido leer leeráá que la frag fragment mentació ación n soc social ial y la deslegitimación ón democrática galopante en en el modo en que se defiende un punto nefasto. Las dificultades que vivió para di- deslegitimaci de vista propio sobre varios de los elemen- geri gerirr la tran transfo sformac rmaciónde iónde la soci sociedadespaedadespa- toda Europa en aquellos años no “condutos más conflictivos. La ecuanimidad de ñola de preguerra y lo que le costó salir del cía nece necesari sariament amentee a una guerr guerraa civil civil”. ”. Hu10
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bo que hacer algo más para socavar el orden hasta el fondo y destruirlo para tantos años.. Ya sé que es un faci años facilísim lísimo o eslo eslogan, gan, pero este breve libro sintetiza la versión más civilizada, racional y cuerda que el siglo XXI tiene hoy del pasado siglo XX.
Jordi Gracia
La leyenda negra Joseph Pérez Traducción de Carlos Manzano Gadir. Madrid. 2010 266 páginas. 22 euros
HISTORIA. EL HISTORIADOR francés de origen español Joseph Pérez estaba condenado por su propia obra —los Reyes Ca-
grafía sobre Felipe II y la conquista y colonización colonizac ión de América América,, capítulos ambos de especial resonancia en esa guerra de palabras, ha desarticulado gran parte de los argumentos en contra del primer y mayor imperio de Occidente; ni Felipe fue un monstruo, ni América un geno genocidi cidio; o; aunq aunque ue eso no impi impide de que en buena parte de Europa esas tergiversaciones versaci ones sigan haciendo ley. El francés no se limita a un recorrido lineal del asunto, sino que el libro, conciso y sumamente legible incluso para público no esp especia ecializa lizado, do, es una estu estupend pendaa aproximación al fenómeno de la decadencia de España, que ni fue tanta, ni tan súbita. Pérez abunda, por añadidura, en una especie de leitmotiv que conecta el libro con la actualidad: la España del XVII son los Estados Unidos de hogaño; quien levanta un imperio ha de estar preparado a pagar un alto precio con el desafecto y el mal trato de sus pares. M. Á. Bastenier
no pensaba decir, lo que era incapaz de decir”, opina Justo Navarro. Foto: García-Santos
Curriculum vitae Acabé Aca bé los est estudi udios os con fac facili ili dad y hon honor. or. Empecé a trabajar sin la mediación de mi padre. Fui a Londres y volví. Encontré a mi padre más callado que nunca, más enmudecido enmude cido y más mutante, avergonzado de envejecer, de haber envejecido. envejecido. Esperaba en la puerta del Hotel Alhambra: le había caído encima una sombra, igual que cambia la luz de un día espléndido por un movimiento movimi ento invisible de una nube casi invisible, aunque la nube desaparece y vuelve el esplendor, y la sombra de encima de mi padre no se iba. —No queda en ti nada de ti —me dijo.
tólicos, la guerra de los comuneros— a tratar un asunto tan saduceamente utilizado por los enemigos de la Monarquía hispánica como con desenfadado patrio-
tismo por sus defensores. El historiador adopta, según la fórmula francesa de estado de la cuestión, un punto de partida voluntariosamente voluntarios amente equidista equidistante nte entre unos y otros. Barbaridades las hubo, manipulaciones también. Pérez traza una línea mediana en la práctica mucho más favorable a España-Castilla que a sus detractores. Estos son, primero y principal, el estatuderato holandés que utilizó esos materiales materiales como arma en la guerra de independencia independencia de los Países Bajos; y a renglón seguido se apuntaron Inglaterra y algunos poderes menores. El autor no incluye a Francia entre los grandes culpables que, sin embargo, otros autores citan prominentemente, y sí subraya en cambio que la más moderna historio-
Diccionario de Nueva York Alfonso Armada Península. Barcelona, 2010 408 páginas. 23,50 euros
LFONSO A RMADA RMADA perten CRÓNICA. A LFONSO pertenece ece a esa generación de corresponsales internacionales que eclosionó en la España democrática de los años ochenta y noventa, gente que combinaba el rigor y la rapidez con el espíritu aventurero y la escritura de calidad. Para alguien así, Nueva York es un inmenso tesoro de historias. Armada, que vivió siete años en esa ciudad, contó las suyas en sus crónicas para ABC, en un par de libros anteriores y, como aún le quedaban muchas en el tintero, vuelve a la carga en este Diccionario de Nueva York. El libro arranca con el testimonio de un ciego marroquí residente en la Gran Manzana que suelta algo inesperado, inesperado, algo que desbarata los prejuicios sobre el individualismo y la insolidaridad de los neoyorquinos: “Antes de que solicites ayuda ya hay alguien dispuesto a echarte una mano”. Bravo Resistiendo en Gaza. por Alfonso Armada: recalentar los topiHistorias palestinas cazos que espera el público es lo que Carla Fibla y Fadi N. Skaik hace el corresponsal mediocre; contar Prólogo de Maruja Torres las cosas como son es lo que distingu e al Península. Barcelona, 2010 bueno. Cada entrada de este diccionario es 271 páginas. 22,90 euros un relato corto. ¿Por qué se llama GoENSAYO. L A N AKBA de 1948 se llevó por tham a Nueva York? ¿Cuántos homeless delante muchas cosas. De entre las po- pudieron morir en el derrumbe de las cas recuperadas destaca el derecho de Torres Gemelas? ¿Es verdad que los inlos palestinos a contar su propia histo- dios mohawk fueron los mejores obreros ria. Ha sido este un objetivo mayor de la para los rascacielos porque no sentían palestinidad, que ha tardado décadas en vértigo? ¿Tienen algunos locales neoyorconseguirse y aún ha de ser defendido. quinos el papel higiénico cortado en hoHistoriaa person Histori personal al y legitim legitimidad idad política jitas para que los judíos practi cantes no van unidas. Negada una de las dos, la tengan que desgarrarlas del rollo los días otra no existe. Por ello no ha carecido de de sabbat? ¿Por qué hay tantas biblioteimportancia para la restauración palesti- cas públicas si, según se dice, los nortena la implicación de los intelectuales ex- americanos no leen? ¿Sigue en pie el vietranjeros en la pugna de narrativas aso- jo sauce del jardín priva do del 229 Este ciada al conflicto. En la guerra de Gaza de la calle 48? ¿Cómo era visitar el Metrode 2008 2008-200 -2009, 9, san sangre gre palestina palestina y blo blo-- politan Museum de la mano de Penny queo informativo israelí fueron de la ma- Proddow? ¿Es cierto que las ostras, las no, como viene siendo habitual. Carla orquídeas y las perlas son allí el signo de Fibla y Fadi N. Skaik recorrieron, cinco la elegancia? ¿Qué escribió Maiakovski meses después, los restos de la hecatom- sobre el puente de Brooklyn? ¿Es la del be y recogi recogieron eron las histori historias as personales Rainbow Room la mejor vista de Manhatde 29 habitantes de la Franja. El conjun- tan? ¿Crea adicción The New York Times, to abarca todo el espectro social (obre- un periódico que es progresista cuando ros, empre empresarios sarios,, estudi estudiantes, antes, artist artistas, as, se lee de atrás hacia delante y conservamadres de familia, etcétera) y político dor leído de delante hacia atrás? Y mu(Hamás, Fatah, yihad islámica). Los pro- chas más preguntas e interrogantes que tagonistas figuran con su propio nom- rondan por esta gran ciudad muy bien bre y su representación fotográfica, a fin resueltas aquí. de certificar (y no es gratuito) su existen Armad a cita textos sobre Nueva York cia, o de impedir su negación. Compar- de más de cien autores. Queda claro que ten la rabia y las ganas de vivir, y difie- fue allí en busca de una ciudad de noveren en lo demás, como le ocurre a la la…, y la encontró. Pero su estancia tergente de cualquier parte. Los testimo- minó con otra cosa. En su entrada sobre nios inciden, en términos generales, en los 102 minutos que tardaron las Torres la matanza de civiles, el uso del fósforo Gemelas en desplomarse, escribe: “Jablanco y la destr destrucción ucción de infrae infraestruct structuu- más pensé cuando dije sí a Manhattan ras educativas y sanitarias. Y brillan las que las guerras que había dejado en Áfripequeñas historias de cada cual, como la ca me iban a perseguir hasta esta orilla”. de un joven que solo conoce su aldea, a De una manera que aún no tenemos cl aescasos escas os 30 kilómetros kilómetros de Gaza, por Google ra, el 11-S fue el final de cierto Nueva Maps. Luz Gómez García York. Javier Valenzuela
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ESPECIAL FERIA DEL LIBRO DE MADRID / Cómic
Carlitos y Snoopy, 60 años después Muchas de las tiras de los Peanuts son tratados de filosofía existencial en dibujos. Dos libros recorren la biografía de su autor, Charles M. Schulz, y su mundo creativo en 2.000 historietas. Por José Manuel Sánchez Ron crítico algo que le ha aco acompa mpañad ñado, o, y que haquerido, desde hace tanto que ha perdido perd ido la cuen cuenta ta del tiempo transcurrido? Éste es el problema al que se enfrenta en la presente ocasión quien escribe estas líneas. Porque ha sido fiel a la pandilla de los Peanuts, los Charlie Brown (Carlitos), Snoopy, Linus, Sally, Lucy, Schroeder, Peppermint Patty o Woodstock, el pajari pajarillo llo de erráticos vuelos, desde hace tantos años que no puede recordar cuántos. Antes de pasar a formar parte de la legión de seguidores de la pandilla Peanuts, había seguido a otros cómics legendarios, leyendo con avidez las aventuras del Capitán Trueno y del Hombre Enmascarado, los episodios de Hazañas Bélicas y también las historias de Disney (mis preferidos fueron siempre el pato Donald y el Tío Gilito), sin olvidar los que prota protagoniz gonizaban aban aquel aqu el ya cas casii pre prehis histór tórico ico TBO, pero el grupo de Carlitos y Snoopy siempre tuvo para mí algo que ningu ninguno no de todos esos poseía: humanidad, humanidad, una compleja y con frecuencia atormentad men tadaa hum humani anidad dad.. Y ade además más condensada en cuatro o cinco viñetas, no como las elabo elaboradas radas historias historias de Tintín o de Astérix. Se trataba de un grupo de niños y de un perro, sí, pero ¡Dios mío, cuántos problemas y complejos sufrían! Aun siendo muchas de sus historias inverosímiles —¿cómo va a ser posible encontrar a un perro que intenta intenta compone po nerr un unaa no nove vela la te te-cleand cle ando o una máq máquin uinaa de escribir sentado encima de su caseta?—, algunas de sus angustias e inseguridad guri dades es son tam tambié bién n las nuestras. ¿Cuántos no se habrán sentido
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ÓMO EVALÚA un
como Carlitos, que buscaba siempre co- reció la última, en la que, sintiendo ya al sas que nunca conseguía? ¿Es acaso difí- lado el final, se despedía de sus lectores. cil entender que Schroeder ame con pa- Medio siglo imaginando y dibujando hissión a Beethoven y que desee convertirse torias, construyendo un mundo social poen un gran pianista, practicando sin ce- liédrico que se fue diversificando a lo larsar en su piano de juguete? ¿No hemos go de los años. soñado cualquiera de nosotros —al meEstá bien que después de tanto tiemnos alguna vez, ¡santo cielo!— ser más de po, alguien, David Michaelis, se haya eslo que parece nos corresponde? Y el egoís- forzado por producir una biografía bien mo inaguantable de Lucy, ¿es raro en el documentada y argumentada de Schulz. mundo del que formamos parte? Muchas Más allá de introducirnos introducirnos en la historia de las tiras de los Peanuts son, como to- personal del creador de Carlitos y Snoodas las viñetas de El Roto, tratados de py, algo que se hace y con bastante detafilosofía existencial en dibujos. lle (de hecho, con demasiado), el gran El creador de ese mundo tan imposi- interés de este Schulz, Carlitos y Snoopy. ble como real, Charles M. Schulz, nació Una biografía es que muestra el origen el 26 de noviembre de 1922, publicó de algunos de los personajes de Peanuts. su primera primera tira de Así, compro bamos que Carl itos es poco los Peanut Peanutss el 2 menos que el álter ego del niño Charles de octubre octubre de Schulz y que el primer perro que éste 1950 y no dejó tuvo se llam llamaba aba Snoo Snooky. ky. El seg segundo undo,, de dibujar- Spike, era, como Snoopy, un poco loco y l a s h a s t a un mucho payaso. La vieja cuestión de si su muerte: los creadores creadores inventan o se nutren, defalleció el 12 purándolas, de sus vivencias, se decanta de febrero de en el caso de Schulz por la segunda posi2000, y el día bilidad. siguiente apaPara celebrar los sesenta años de vida de los Peanuts se ha publicado otro libro que los homenajea mediante el sencillo procedimiento de reproducir, en gran formato, con una magnífica calidad y organizadas cronológicamente, casi dos mil de sus tiras. Incluido en un buen estuche, el libro pesa tres kilogramos y medio (una de mis hijas —que conoce bien a su padre— lo encontró en una librería de Zúrich y no dudó en emprender la en estos tiempos no tan sencilla tarea de incluirlo en su equipaje cuando vino unos días a Madrid en avión). Pero merece la pena, créanme, cargar con semejante tocho, esforzarse en mantenerlo abierto abierto al ir pasa pasando ndo sus hojas. Junto a las tiras, los
ha demostrado sobradamente su madurez, capacidad y ambiciones, como por la terrible realidad de que, lo que en tiempos fue una verdad, hoy es paradójicamente su principal carencia. A la vista de las novedades editoriales, el cómic es un medio fundamentalmente dirigido al lector adulto. La huida del tópico ha hecho desaparec desa parecer er aquel aquellas las obras que tenía tenían n en el más pequeño su objetivo, aprovechando el indudable atractivo y la capacidad pedagógica que la historieta tenía para el lector infantil. Afortunadamente, los autores Ed Carosian y Maxi Luchini se han embarcado en la suicida empresa de reivindicar la necesidad de un tebeo infantil, que tiene en obras como Manu en la playa o La caca mágica su mejor Manu en la playa / La caca mágica exponente. Narraciones sin palabras que saben cómo lograr que el dibujo hipnotiEd y Diego Arandojo / Sergio Mora ce al más pequeño desde una compliciMamut Comics. Barcelona, 2010 dad que no renuncia a jugar con el hu48 y 40 páginas. 15 y 13 euros mor, la ingenuidad o incluso con ese punto gamberro de desvergonzada esca“LOS TEBEOS son para niños”. Frase recurrente que cualquier aficionado al cómic tología que propone Sergio Mora. Obras ha su sufr frid ido o co con n to tono no pe peyo yora rati tivo vo y deliciosas que atraparán también la miraburlón… Y terriblemente errónea. Tanto da del adulto por su exquisita factura porque la historieta es un medio que ya gráfica. Álvaro Pons 12
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De izquierda a derecha, Carlitos, Snoopy y Woodstock, tres de l
seguidores de este grupo encontrarán todo tipo de detalles. ¿Sabían, por ejemplo, que al principio la camiseta de Carlitos era blanca; la clásica con la tira en forma
autor que ha dado obras tan extraordinarias como La guerra de las trincheras y que toma presencia, de una forma u otra, en casi toda su comicgrafía. Más sorprendente es que, pese a la reiteración, el autor de ¿Huele a muerto o qué? consiga siempre encontrar una perspectiva distinta que añada nuevos niveles de reflexión y análisis. Con la ayuda del historiador histori ador Jean Pierre Verney, el dibu jante aborda una despiad ada denun cia de la guerra y sus consecuencias, pero renunciando a la secuencia narrativa tradicional de la historieta. Compone así un ret retrat rato o de ins instan tantáne táneas as del horr horror or que van acompañando el relato del guionista y que, paradójicamente, irán adquiriendo rie ndo un sen sentido tido dis discurs cursivo ivo prop propio. io. ¡Puta Guerra! Más allá de su función ilustradora, las imágenes se constituyen en una narraJacques Tardi y Jean Pierre Verney ción visual que se sobrepone a la palaTraducción de Enrique Sánchez Abulí bra para encontrar su propia lógica, lógica, de Norma. Barcelona, 2010 una contund contundencia encia inapelable, brutal. 144 páginas. 20 euros Un doble discurso paralelo que se retroaNO ES UNA SORPRESA encontrar una obra limenta, reforzándose y multiplicándose del dibujante francés Jacques Tardi (Va- hasta conseguir una de las obras más lance, 1946) centrada en la Primera Gue- potentes y sorprendentes de este veterarra Mundial, un tema recurrente para el no autor. Á. P.
to de Martin Luther King, Robert Kennedy, un gran admirador de los Peanuts, animó a Schulz a que introdujese un personaje de color: Franklin, el niño negro, hizo su aparición el 31 de julio de 1968? Desde hace tiempo suelo decir que si existiese semejante cosa, yo querría reencarnarme en cigüeña. Pero ahora que tengo en mis manos este libro, me entran dudas. Porque me ha dado la ocasión de recordar que el 10 de marzo de 1969 —cuatro meses, por tanto, antes que los astronautas Armstrong y Aldrin alunizaran en el Mar de la Tranquilidad con el módulo lunar del Apollo 11 —Snoopy llegó a la Luna. “¡Lo conseguí! ¡Soy el primer Beagle en la Luna!”, decía en la tira de aquel día un Snoopy provisto de un casco espacial, añadiendo: “He vencido a los rusos… He vencido a todo el mun-
¿Cuántos no se habrán sentido como Carlitos, Carlit os, que buscab buscaba a siempre cosas que nunca conseguía? La pandilla sie siempr mpree tuvo humanidad, una compleja y con frecue fre cuenci ncia a ato atorme rmenta ntada da humanidad do… ¡Incluso he vencido a ese estúpido gato de la casa de al lado!”. Dos meses más tarde, el módulo de mando de la misión Apolo 10 fue bautizado con el nombre nomb re Charlie Brown, y el módulo lunar, todavía no tripulado, que se utilizó para descender a la Luna, se llamaba Snoopy. Sí, me parece que si hay que reencarnarse, que sea en un perro, pero no en un perro cualquiera: ¡Quiero ser Snoopy! ț Schulz, Carlitos y Snoopy: Una biografía. David
Michaelis. Traducción de Óscar Palmer Yánez. Es Pop Ediciones. Madrid, 2010. 607 páginas. 28 euros. Celebrating Peanuts by Charles M. Schulz: 60 years. Paige Braddock y Alexis E. Fajardo, editores. Andrews McMeel Publishing, LLC. Kansas City, 2010. 534 páginas. www.schulzmuseum.org.
ideados por Charles M. Schulz.
de zigzag, que ya nunca abandonaría, llegó el 21 de diciembre de 1950? ¿Qué Schroeder recibió su primer piano en septiembre de 1951 y que reveló su amor por
Burka Babes
Peter de Wit. Traducción de Huan Manwë Glénat. Barcelona, 2010 64 páginas. 13,95 euros PETER DE W IT IT comenzó a publicar tiras cómicas de mujeres con burka en el diario holandés Volkskrant . Es fácil dibujarlas: basta con trazar un objeto con forma de buzón negro y provisto de una estrecha
Beethoven enseguida, el 26 de noviembre? ¿Que Lucy, la irascible hermana de Linus, la misma que aparta, una y otra vez, el balón de rugby a Carlitos cuando
éste está a punto de patearlo, apareció por primera vez con su stand de psiquiatra el 27 de marzo de 1959? ¿O que en junio de 19 68, po co despu és del asesina-
ranura. Lo difícil es suscitar una sonrisa. Es imposible resistirse a una crítica tan inteligente como divertida de una prenda más sudario que atuendo. “¡Qué mala pata!”, le dice una mujer a otra, “llevamos el mismo conjunto”, suspira. En otra viñeta, dos amigas arrastran una gruesa cuerda que sale de sus burkas. “¡Estos tampones afganos son una pesadilla!”, se lamentan. Unas páginas más adelante, adelante, ven a la presentadora del informativo invisible bajo la tela negra. “Se la ve ya muy vieja, ¿verdad?”, comentan. Habían nacido las Burka Babes, mujeres ocultas que charlan entre ellas sobre la sexuali sexualidad, dad, los maridos, la religi religión, ón, la moda, los hijos hijos o las vacaciovacaciones, como se ha hecho siempre. No hay nada más peligroso que el humor y, sin embargo, Holanda parece estar Autobio llena de artistas sin miedo y con humor en Cyril Pedrosa esta época turbulenta. turbulenta. Esta es la prime primera ra Traducción de Eva Reyes de Uña recopilación de Wit en España; la segunda Norma Editorial. Barcelona, 2010 acaba de aparecer en Holanda. No se pier- 48 páginas. 9,95 euros dan estas viñetas irónicas, ácidas, surrealistas… También dramáticas, como esa en SER UN PRO PROFET FETA A “verde “verde”” requie requiere re tiemp tiempo, o, la que una mujer yace en el diván del fuertes convicciones y entusiasmo para no psicoanalista y le dice: “Me miro al espejo des desfal fallec lecer er ant antee los ret retos os que pla plante ntean an act actos os y pienso: ¿quién soy yo?”. Nuria Barrios tan pequeños pequeños como hacer la comp compra. ra. Pero
.com Primeras páginas de Carlitos y Snoopy: Una biografía, de David Michaelis. +
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ser un ecologista serio requiere, sobre todo, sentido del humor. Cyril Pedrosa, antiguo militante de los Verdes, retrata en este cómic ligero y divertido su vida “ecológica” en Francia junto a su mujer y sus dos hijos. Su compromiso implica continuas disyuntivas alternativas y deriva en situaciones tan absurdas como cómicas. Como cuando la piscina de plástico donde juegan los niños se convie con vierteen rteen unaciénag unaciénagaa ant antee la neg negati ativa va de los padres de utilizar cloro. O cuando la ropa se llena de manchas porque rechazan lavar con lejía lejía.. Las decisiones decisiones políti políticas cas de jan, efec efectivam tivamente,huellas. ente,huellas. PeroPedrosa sabe que no hay nada como la ironía para equilib equ ilibrarla rarla uto utopíacon píacon el pri princi ncipiode piode rea realilidad.. Y asíse bur dad burla la desí mis mismocuand mocuando o cue cuennta cóm cómo o tir tiró ó un man manual ual par paraa con constr struir uir cas casas as con paredes de paja que entusiasmaba a su mujer. O cuando confiesa entregarse a sus placeres prohibidos —el queso, las salchichas cóctel…— en los viajes de trabajo. ¡Ah, los extraños pecados ecologistas! O cuando relata cómo la presencia de piojos en las cabezas de sus hijos bastó para desbaratar sus sofisticados argumentos a favor de los tratamientos “no químicos”. Pedrosa ya ha terminado la segunda entrega. N. B. EL PAÍS BABELIA 12.06.10
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ESPECIAL FERIA DEL LIBRO DE MADRID / Cómic
El padre del ‘manga’ para adultos Más apreciado fuera que en Japón, Yoshihiro Tatsumi introdujo encuadres propios del cine y compuso páginas enteras sin diálogos. “Escribo para mí mismo”, dice el historietista
Por Andrés S. Braun T ATSUMI (Osak (Osaka, a, 1935) nos cita en Saboru, un local a medio camino entre una cripta y un bar de estética polinesia que sigue siendo la guarida por excelencia de las criaturas que pululan por Jimbôcho, el barrio tokiota donde se asienta buena parte de la industria indust ria editorial de Japón. Aquí conoc conocen en bien a sensei sensei (maestro) (maestro) Tatsumi. Él es el padre del manga gekiga, aquel que apeló por primera vez a un público adulto en Japón. Mientr Mie ntras as el teb tebeo eo occ occide identa ntall emp empezóa ezóa rec recoonocer la madurez del medio, Tatsumi y los integrantes del taller Gekiga, entre los que se contaban autores hoy reconocidos como Takao Saito (Golgo 13), emprendieron en Japón Jap ón su pro propiacruzad piacruzadaa a fin finale aless de los cin cin-cuenta cue nta.. No apo aposta staronpor ronpor tra transg nsgred redir ir la moral burguesa sino que intentaron emplear los circuitos convencionales para brindarle al lector recursos narrativos más sofisticados, temáticas y géneros más adultos —como el suspense o el drama— alejados del cómic de aventuras infantil tan popular en la época. El seinen, como se llama hoy al manga dirigido a lectores mayores de 20 años, no sería lo mismo si Tatsumi y sus colegas no hubieran empezado a rasgar el encorsetam encor setamiento iento al que las editoriales editoriales niponas tenían sometido al tebeo. “La Nueva Isla del Tesoro, de Osamu Tezuka (cuya versión publicó en Españ Españaa Glénat), su primera obra de éxito publicada en 1947, fue el tebeo que nos marcó. Vimos quese pod podía ía hac hacer er alg algo o dif difere erente nte”, ”, rec recuer uerda da Tatsum Tat sumii conuna so sonri nrisa sa dib dibuja ujadaen daen sucontundente rostro al que acompañan unas gruesas grues as gafasy su cabel cabello lo encre encrespado spado.. “Además tuvimos la suerte de empezar en las editori edi toriale aless que ven vendían dían a los kashibon —tiendas de alquiler de tebeos— en Osaka. Allí ni siqui siquiera era había reunio reuniones nes editoriales editoriales como en Tokio. Lo importante era que la portada fuera llamativa para que se alquilara la obra. Gracias a eso, pudimos empezar a buscar nuevas fórmulas”, fórmulas”, rememora. Sin embargo, la revolución del gekiga no fue un camino de rosas rosas.. “Tuvim “Tuvimos os muchas barre barre-ras, especialmente cuando nos mudamos a Tokio.Muchos consi considerar deraron on nuest nuestras ras historias violentas y perniciosas para los niños, aunque no nos dirigíamos al público infantil. Por otro lado, las editoriales intentaban meternos en cintura y nos decían que el lector adulto no existía, que los niños dejaOSHIHIRO
Duelo de caracoles Sonia Pulido y Pere Joan Editorial Sins Entido. Madrid, 2010 112 páginas. 19 euros
C APTAR LA NATURALIDAD de la vida ha sido obsesión continua de los creadores. Pintores, literatos, cineastas o fotógrafos han intentado tenta do plasma plasmarr en sus obras obras los eleme elementos ntos básicos de lo cotidiano, aun a sabiendas de que cualquier resultado no dejaría de ser, paradójicamente, una ficción manipulada 14
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ban de leer tebeos cuando entraban en se- no del his histor toriet ietist istaa y edi editor tor cali califor fornian niano o cundar cun daria” ia”,, apo aposti stilla.La lla.La his histor toria ia de esalucha Adrian Tomine, Tomine, responsable responsable de que buena está recogida en los dos tomos que compo- parte de su obra se haya traducido al inglés. nen Una vida errante, obra autobiográfica “A petición suya estoy dibujando la contique además ofrece una visión de los años nuación de Una vida errante. Arranca en del milagro económico japonés. 1960,, don 1960 donde de se que quedó dó el anteri anterior or volu volumen men,, y
Viñeta de La vida errantre, en la que Yoshihiro Tatsumi se dibuja a sí mismo.
“He sudado mucho con Una vida erran- recoge la desaparición de las tiendas kashite, pero no la considero mi obra cumbre, es bon, pero sobre todo la explosión del gekiga algo aparte dentro de mi producción. Nun- y la aparic aparición ión de la revist revistaa Garo”. Esta nueva ca quise escribir una autobiografía. Fue una obra también recoge el estrés que padeció suerte que Mitsuhiko Asakawa, de la edito- ento entonces nces,, cuan cuando do tení teníaa que entr entregartres egartres purial Mandarake, me propusiera dibujarla en bli blicac cacion iones es de 100 pág página inass a la sem semana ana.. Una 1994 y publicarla por entregas en la revista- vez, él y los cinco ayudantes que había concatálogo de la casa. Lo que no imaginé fue tratado para dar abasto con los pedidos dique se publicaría en España y en Estados bujaro bujaron n 50 págin páginas as en una noche porq porque ue se se Unidos” Unid os”,, añad añadee Tats Tatsumi,que umi,que acab acabaa de regr regree- les había pasado el plazo. “Es la historia del sar de Singapur donde un productor inde- boxeador que aparece en Venga, saca las pendiente ha rodado una película basada joyas joyas (Ponent (Ponent Mon, 2004)”. en Una vida errante combinando anima Antes de eso, Tatsumi se había pasado introducir ucir en ción ci ón y ac acci ción ón re real.El al.El en enca carg rgo o enel qu quee ah ahoo- años buscando la manera de introd ra trabaja también viene de fuera, de la ma- sus tebeos patrones narrativos procedentes
de la realidad. Quizás por eso Pere Joan y Sonia Pulido han han decidido decidido que que la mejor mejor forma de refle reflejar jar al ser humano es obser observarlo varlo tranquilamen tranqu ilamente, te, casi en el anonimato como pedía Zavatt Zavattini ini para el neorre neorrealismo alismo perfe perfeccto, para después detenerse a traducir gestos y mirada miradass como pensa pensamient mientos os y sensa sensaciociones.. Hayque hac nes hacerl erlo, o, cla claro,en ro,en un mom moment ento o donde don de mej mejor or semuestr semuestree la ese esenci nciaa huma humana, na, como en el del yantar comunal. A fin de cuentas, decía Vázquez Montalbán que la cocina era una metáfora de la cultura, que transforma la brutalidad de la muerte y engullido de un ser vivo en una exquisita operación cultural, compartida en este caso a ritmo rit mo de bat batida ida man mandib dibular ular.. Es pos posibleque, ibleque, ahí, en ese momento único, las personas liberen sus prejuicios y hablen con libertad suficiente para decir “las verdades de la vida”. O no, quién sabe. Lo mejor, dejar que los amigos compartan con alegría una olla de caracoles a orillas del Mediterráneo y que el lápiz de Pulido ejerza de varita mágica que abra sus mentes, creando sorprendentescuadro den tescuadross de cáli cálidoscolore doscoloress don donde de los pensamientos toman forma y sentido, convirtiendo al lector en voyeur imprevisto de intimidades ajenas. Frívolas y ligeras, pero tan reales, o más, como la vida misma. Y, quizás, más humanas que nunca. Á. P.
Alicia en un mundo real Isabel Franc y Susanna Martín Norma Editorial. Barcelona, 2010 144 páginas. 16 euros LICIA ES JOVEN, soltera, lesbiana y periodis A LICIA ta. Como en cualquier descripción, el orden de dichos factores puede variar según la perspectiva. Alicia vive con un gato capado y gordo Fari(Farinelli), y que se parece extraordinariamente al gato de Cheshire en Alicia en en el País de las Maravillas Maravillas . Pero Fari,
de las lecturas que devoraba con fruición —desde El conde de Montecristo hasta las novelas policiacas de Mickey Spillane— y antee tod ant todo o de su pas pasiónpor iónpor el cin cine. e. “Ad “Adora oraba ba sobre todo el cine europeo europeo por encima del de Hollywood y sus finales felices. Una de las películas que más me marcó fue la francesa Des gens sans importance (1956), de HenriVerneuil.Salí del cinepensando:quierohacerr al rohace algoasí goasí en enmanga; manga; un cóm cómic ic don donde de no hagan falta diálogos para expresar algo”. Esos influjos le llevaron a introducir encuadres propios del séptimo arte, a diseñar con mimo los escenarios, a componer novedosas puestas puestas en página o a dibuja dibujarr viñetas o incluso páginas enteras sin diálogos. Del cine eur europe opeo o tam tambié bién n par pareci eció ó her hereda edarr su gus gus-to por los finales abruptos que aparecen en la mayoría de las historias cortas que han compilado en España La Cúpula y Ponent Mon.. “Nun Mon “Nunca ca he que querid rido o dir dirigi igirr al lec lector tor,, me gusta que ponga de su parte, que complete el antes y el después de la historia”. Esas historias histor ias plagad plagadas as de seres atormentados atormentados —ya sean prostitutas, delincuentes u oficinistas— y que exprimen las miserias de la posgue pos guerrao rrao de la vid vidaa tok tokiot iotaa pud pudier ieron on lee leerrse por primera vez en castellano a principios de los ochenta en la revista El Víbora. “Después de que el gekiga viviera su explosión, el sexo se hizo muy presente. Siempre lo he empleado en favor de la narración, nunca gratuitamente, y además se encuentraen mi pro propioproce pioproceso so cre creati ativo vo ya que me he inspirado mucho en artículos de las seccionesde cio nesde suc suceso esos. s. Y cre creo o que misrecue misrecuerdo rdoss de inf infanc ancia ia tam tambié bién n inf influye luyen. n. Viv Vivía ía cer cerca ca del aeropuerto de Itami, en Osaka, que pasó a ser una base estadounidense tras la guerra. Recuerdo ver a soldados manteniendo relaciones sexuales con japonesas en los bosques próximos a mi casa. Y también que estos est os reg regala alabanglobosa banglobosa losniñosque lue luego go resultaban ser preservativos”, recuerda entre risotadas. “Muchos autores te dirán que escriben paraa suslecto par suslectores res,, par paraa con contar tarlesalgo… lesalgo… Per Pero o yo he llegad llegado o a la conclusión conclusión de que escrib escribo o para mí mismo. Para extraer cosas de mí, cosas que pueden resultarme resultarme vergo vergonzosa nzosass y que no me gustaría contar de otra manera. Claro que si pretendes vivir de esto tienes que gus gustar tar a los lecto lectores res,, y es fab fabulos uloso o sab saber er que tantos me aprecian, sobre todo en el extranjero extran jero”, ”, señal señalaa estehistorieti estehistorietista sta que vive ahora entre el cariño del públic público o foráneo y la indiferencia que le despierta el manga actual. “Admiro la sofisticación de los dibu jantess japoneses jante japoneses actuales, pero desde hace diez años no hay ningún manga que me sorpre sor prenda nda.. Lo últ último imo queme gus gustó tó fue Bola de Dragón, de Akira Toriyama. Después todo se ha vuelto mediocre mediocre.. La indust industria ria se ha dormido en los laureles”. ț
Una vida errante 1 y 2. Traducción de X. Astiberri.
Bibao, 2010. 432 y 416 páginas. Bibao, páginas. 24 eur euros os cad cada a tomo.
al contrario que el gato de Lewis Carroll, no tiene el don de aparecer y desaparecer a voluntad. Lo único que desaparece en esta ficció fic ción n aut autobi obiogr ográfi áfica ca esun pec pecho ho dela pro pro-tagonista. tagoni sta. A Alicia, álter ego de Isabel Franc, Franc, una de las autoras, le descubren un cáncer de mama. Entre el diagnó diagnóstico stico y su decisió decisión n de tat tatuar uarse se una sal salama amandr ndraa sob sobre re la cic cicatr atriz iz que dejará la mastectomía, en lugar de hacerse reconstruir el pecho, hay un largo camino de incertidumbre, dolor y confusión. Estaa his Est histor toria,narrad ia,narradaa con iro ironía nía y un dib dibujo ujo lleno de gracia, describe el proceso como si fueseel fue seel iti itiner nerariode ariode un via viaje je “ll “llenode enode ave avennturas,lleno tur as,lleno de exp experi erienc encias ias”, ”, tal com como o dec decía ía Kavafis en su poema Ítaca Ítaca.. Alicia pasa por las distintas etapas del cáncer: el apoyo imprescindible presc indible,, aunquetambién agobia agobiante,de nte,de las amigas, la búsqueda de soluciones alternativa nat ivas, s, la mut mutilac ilación ión,, la pér pérdid didaa delpelo, el rechazo teñido de miedo que esta enfermedad a veces provoca, la aceptación del nuevo cuerpo, el desafío de la sexualidad, el difícil retorno a la normalidad… Alicia en unmundoreal puedeservi puedeservirr de ayu ayuda da a qui quieenes se encuentren en la misma situación que la protagonista, pero no es un libro de autoayud auto ayuda. a. Pos Posee ee un ali alient ento o máslargo máslargo:: el de la cre creaci ación.Quién ón.Quién sab sabee si, al crecer, crecer, la Alicia Alicia de Lewis Carroll no habría sido así. N. B.
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PENSAMIENTO
Compromiso en el arte El verdadero arte siempre ha servido al progreso moral. Ahora debe cooperar para convencer al hombre a que incline su voluntad por la civilización
Por
Javier Gomá Lanzó Lanzón n
asuma responsabilidades? ¡Qué desatino! ¡Qué anticuado! Y, sin embargo, amigo mío, siempre ha sido así. A veces pareciera cie ra que la poét poética ica romántica romántica,, con su insistencia en la pura expresividad subjetiva y su lema de l’art pour l’art , desentenido de cualquier otro designio que no ea el arte mismo, haya sido cosa de siempre, cuando sucede lo contrario, es el Romanticismo el que, en un vuelo de pájaro obre la historia universal, aparece como fenómeno reciente, apenas de un par de iglos atrás, por mucho que últimamente u cos cosmov movisió isión n hay haya a tin tintad tado o la ent entera era oncienc onci encia ia mod modern erna a has hasta ta torn tornars arse e la imagen natural del mundo del hombre ontemporáneo. Por mi parte, opino que l verdadero arte, a lo largo de los diferentes periodos históricos, nunca ha dejado e servir responsablem responsablemente ente al progre progreso so moral del hombre, y a esta regla no es xcepción el arte romántico de la subjetividad, que contribuyó, de manera refleja, aun sin proponérselo, al buen suceso de la causa civilizatoria entonces en liza. Dirán:: ¿qué relaci Dirán relación ón con esta causa pueden tener, por ejemplo, Los padeci padeci-mientos mient os del joven Werther, cuyo suicidio final incitó a una juventud alemana ya bastante basta nte infla inflada da de sentim sentimental entalismo ismo a quitarse estúpidamente la vida ante el primer contratiempo amoroso (algunos llevaron var on su mim mimetis etismo mo has hasta ta ves vestir tir en el fatídico momento, como el modelo literaio, levita azul y chaleco amarillo)? ¿No es sta novela más bien —como la mayoría e las obras maestras de los siglos XIX y X— un ejemplo de torpe negligencia moal? ¿Qué responsabilidad cabe apreciar n las hermosísimas pero decadentes rememoraciones del narrador de En busca el tiempo perdid perdido o o en las mór mórbid bidas as aventu ave nturas ras de Asc Aschen henbac bach, h, el hér héroe oe de Muerte en Venencia? ¿Qué en las experimentaciones menta ciones formales y lingüís lingüísticas ticas del Ulises de Ulises de Joyce? Por no mencionar la liteatura dadaísta dadaísta o la surrealista, surrealista, porque qué otra inspira inspiración ción hallamos en ellas ino la embriagada autoafirmación del yo y el desprecio nihilista hacia las institucioinstitucio-
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UE EL ARTE
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Dirk Bogarde, en un fotograma de la película
Muerte en Venecia
La mayoría del arte que hoy se produce permanece aún enredado en el añejo paradigma de la liberación subjetiva nes sociales de convivencia, cuya ruina anhelan? Y, sin embargo, sí, en todas estas manifestaciones del arte de la subjetividad romántica, mánti ca, y en otras tantas que podría podrían n citarse, descubrimos un altísimo servicio a la humanidad. Desde la Ilustración, la única elección posible para el hombre civilizado era militar en la bandera de la
(1971), de Luchino Visconti.
liberación liber ación subjetiva subjetiva en lucha contra la opresión ideológica y política que habían convertido en norma los Estados absolutos del Antiguo Régimen. Y esas novelas que narran de mil maneras las tribulaciones del individuo en conflicto con una sociedad que lo aliena contribuyeron decisivamente cisivam ente a la educa educación ción sentimental del yo moderno y le despertaron al sentimiento de su propia dignid dignidad, ad, resistente al interés interés gen genera erall del Estado Estado y al bien común que éste administra, porque, simpatizando con esos personajes cuyos destinos se agitan entre tantas adversidades, los lectores percibimos como injustas las violaciones que sufren en sus vidas y, de paso, también en las nuestras y, aprendiendo a aborrecer esos atropellos, nos nace el apetito de más y más libertad. Paralelamente, Paralelam ente, la experimentación formal que practica la vanguardia artística y literaria es también una forma de libera-
ción, en este caso estilística, porque en esos juegos formales se reivindica la originalidad del creador, que rompe con las técnicas, las rutinas y los oficios heredados, aparentemente necesarios y sancionados por una tradición de grandes maestros, pero que los artistas modernos, con sus audaces transgresiones, demuestran que son artificios históricos y susceptibles de cambio. De manera que, en suma, tanto en el fondo como en la forma, la literatura de la subjetividad, gracias a la genuina persuasión del arte, mucho más eficaz en la reforma refor ma de la sent sentimen imentali talidad dad que los tratados discursivos, nos enseñó la pasión por la libertad y el amor a nosotros mismos. Esta Est a lec lección ción ya est está á apr aprend endida ida.. Ese amour de soi que soi que recomendaba Rousseau está sobradamente establecido en nuestros corazones. corazones. La misión histór histórica ica del arte de la subjetividad está cumplida. La nueva misión es ahora otra y está relacionada con hallar la manera de armonizar, en con conviv vivenc encia ia pac pacífic ífica, a, a mil millon lones es de subjetividades enamoradas de ellas mismas y poco acostumbradas acostumbradas a no conceder conceder-se a sí mismas todos sus caprichos. Bien mirado, es una especie de milagro que el hombre acepte las inhibiciones inmanentes a la civilizada vida en común, que suponen restricciones a la libertad individual. ¿Por qué conducirme como persona civilizada si es más gratificante ser un bárbaro? Han de ponerse en juego todos los resortes que resulten persuasivos para convencer al hombre a que incline su voluntad por la civilización, pese a todos los gravámenes que conlleva. La tarea civilizatoria ahora pendiente es la urbanización de la espontaneidad instintiva del yo como paso previo a la transformación de éste en ciudadano. Y en este cometido, el arte, que acumula elevadas reservas de poder carismático y transformador transformador del corazón, es un cooperador necesario. Esa promesa de felicidad del arte —de todo arte, incluso del más sórdido—, ese encantamiento que vierte sobre la reali realidad dad inhóspita del mund mundo, o, contribuye contri buye a hacer más soportables soportables las limitaciones limita ciones impuestas por la socieda sociedad d de los hombres a las pulsiones bárbaras del yo. Es impensable una civilización sin una poética, pues sin ella los gravámenes a la libertad se nos harían odiosos. El problema estriba en que la mayoría del arte que hoy se produce permanece aún enredado en el añejo paradigma de la lib libera eración ción subjetiva subjetiva pese a que sus fuentess hace tiempo que queda fuente quedaron ron exhaustas, y esta discordancia está retrasando el momento en que el arte asuma su responsabilidad también en el nuevo periodo histórico, histórico, el democrático, democrático, que, si quiere ser viable, ha de arreg arreglarse larse una poética propia, no heredada. El desfase se aprecia con particular pregnancia en las artes plásticas, pero también en la literatura. Alguien debería razonar sobre la actualidad actua lidad de las olvidadas novelas de educación. Quizá yo mismo lo haga en una entrega próxima. ț
SILLÓN DE OREJAS
Por
Manuel Rodríguez Rivero
Ilustración de Max.
De copas con Circe compañeros de Ulises, cal calor.Comome or.Comome dij dijo o mi ami amigo go el po polif lifacé acétitiel de las muchas tretas, sigo el co editor (y arbitrista) Manuel Ortuño, haconsejo cons ejo de Circ Circee (Odisea, XII, bría que conseguir que, tras la pausa del 40-50) y durante mi paseo por la almuerzo, las casetas no abrieran antes feria me coloco en los oídos tapones de de las ocho de la tarde: con la siesta cera melosa, para no oír a las ignotas sire- hecha y el horno empezando a enfriarse. nas que reclaman mi atención con el ex- La de este año está resultando una feria clusivo propósito de perderme: como nos clim climatol atológic ógicamen amente te nadanórdica y come comerrrecuerda Pietro Citati en un lúcido ensayo cialme cialmente nte más bien desigu desigual. al. A los editoal que siempre regreso con provecho (Uli- res (que traen su fondo) no parece irles ses y la Odisea, Galaxia Gutenberg, 2008), tan mal. Y tampoco a los libreros que han el canto de aquellas divinidades marinas sido capaces de conseguir abajofirmantes es inefable, y por eso el invidente (pero espectaculares: esos que todo el mundo nada sordo) Homero nunca llega a descri- sabe quiénes son, cobren o no anticipos bírnoslo con claridad. Pero mi curiosidad de seis dígitos. Otros se quejan de que está muy lejos de la de Ulises, que se hizo sólo se venden (bien) poco más de quince atar al mástil para escucharlo sin riesgo, y título títulos, s, empezando por el de María Dueopto por protegerme. Y es que con mu- ñas, posible reina de la feria (el rey, claro, chos de los autores que se apuntan al rito Arturo Pérez-Reverte). Descubro tambi én de la firma me sucede como con la mayo- revivals que me lle llenan nan de no nost stalg algia: ia: ría de los “famosos” cuyas vidas se exhi- Paidós reedita La función del orgasmo, de ben en las telebasuras: ignoro de quiénes Wilhelm Reich, y Álvaro Pombo le ha puesse trata. En la feria firma todo dios, desde to prólogo a la reedición de Eros y civilizaprofesionale profe sionales, s, como Antonio Gala, hasta ción (Ariel), de Marcuse, del que conservo aficionados, como Esperanza Aguirre: en- un ejemplar (Joaquín Mortiz, 1965; la mistre estos dos extremos todo un cortejo de ma traducción de Juan García Ponce) más celebridades y desconocidos. Ante los pri- soba sobado do que las cuentas cuentas del rosario rosario de meros se forman colas, colas, en torno a los se- monsignore Rouco Varela. En cuanto a la gundos lo único que colea es la indiferen- oferta más meritoria, mi voto va para la cia de quienes sólo persiguen escrutar el librería Polifemo, cuya propietaria, Feli proteico prote ico rostro de la fama. Por lo demás, Cor Corvil villo,se lo,se ha mar marcad cado o un mag magníf níficocatá icocatá-en mis rêveries de paseante (nada) solita- logo y una caseta comercialmente suicida rio, descubro efectos sorprendentes, co- (pero ya sabrá sacarle partido) acerca de mo ese pequeño espacio compartido —el “libros sobre libros”. Por lo demás, con lo azar, pero también la necesidad— por que me costaron las copas en uno de los talanta (la editorial de Jacobo Siruela) y quiosc quioscos os de bebida bebidas, s, hubiera podido adla Fundación Federico Engels, y que me quirir varios libros de bolsillo: pero, ya suscita una leve fantasía acerca de lo dis- ven, preferí darle las gracias a Circe por su tinto que habría sido el mundo si, por conse consejo, jo, y la invité a unos gins and tonic. jemplo, Marie-Antoi nette (guillot inada Luego la divina maga me convenció para l 16-X-1793) y Saint-Just (guillotinado (guillotinado el pasar el verano en su palacio de Ea, que es 8-VII-1794) hubieran coincidido en un muy fresquito. Ya les contaré (espero que anapé “confidente” durante una recep- no me pase como al pobre Elpenor, que se ión en las Tullerías. Lo peor de la feria: el emborrachó y se cayó desde la terraza).
C
OMO LOS
Bifurcaciones
tores hay algún aún más improbable millonario que quiera hacer una donación de luMIREN, HASTA hoy nunca les había pedido jo a la Biblio Biblioteca teca Nacional de aquí (ahora nada. Ustedes (si existen) están ahí, en el condirec condirecció ción n vac vacant ante, e, y a pun punto to de cel celebr ebrar ar improbable futuro, y yo, aquí, anclado en su tricentenario) o de Argentina (de la que este ahora inasible y junto a una ventana Borges fue director), no pierda esta ocasión entreabierta a través de la que me llega el de ganarse el cielo literario. Más vale eso runrún de los aparatos aparatos de aire acondiciona- que, con la que está cayendo, seguir invirdo,confundidocon do,confun didocon el zumb zumbidode idode un mole moless- tiendo en el sector bancario. to moscardón (tengo a mano el aerosol de Fogo) que se ha colado en la penumbra de la habita habitación, ción, enamo enamorado rado quizás(el dípte díptero, ro, me refiero) de la luminosidad mesmerizan- EL F INANCIAL INANCIAL T IMES, IMES, habitualmente leído tede lapant lapantall allaa demi or orde dena nado dor.Hacemur.Hacemu- por gente bien alimentada (los que no lo cho calor, pero no crean que deliro. Ahí va: están lo aprovechan para envolverse el bonecesito conseguir, antes de las 10.00 (hora cata o la fiambrera), le ha dedicado una de Nueva York) del día 23 entre 200.000 y elogiosa reseña a The Book of Tapas, el 300.000 dólares. Ese es el precio de salida nuevo libro que Inés Ortega ha publicado que la firma de subastas Bloomsbury ha en la muy exquisita Phaidon, donde ya hapuesto a las 12 frágiles páginas manuscritas bía aparecido su adaptación del célebre (por una sola cara, en papel de libro comer- 1.080 recetas de cocina, la biblia gastronócial rayadoverticalme rayadoverticalmente nte para consi consignar gnar los mica de Simone Ortega (Alianza Editorial, asient asi entos,con os,con el “hab “haber”impre er”impreso so en el áng ánguu- 1972). Que como coautora del libro figure lo supe superiorderecho riorderecho)) de El jar jardínde dínde lossende lossende-- también la madre solo es un homenaje ros que se bifurcan, el magistral relato de ucrónico a quien fue maestra de Inés (y de Borgesen Bor gesen el quese ade adelan lantab tabaa lit litera eraria riamen men-- un par de generaciones de españolitos), te la ide ideaa del hip hipert ertext exto o muc mucho ho ant antes es de que quien ha heredado apellido, gusto y critela Red la universalizara. El manuscrito, re- rio y lleva muchos años publicando sus dactado en 1941, apareció en la revista Sur propias recetas en múltiples libros que se el mismo año. Y su traducción inglesa en reeditan constantemente. El de ahora, cu1948 en el muy popular Ellery Queen’s Mis- yas easy recipes se adaptan a gustos anglotery Magazine, dando a conocer al autor al sajones, entiende las tapas como “cocina público anglófono. Desde entonces la in- en miniatura”: por eso no resulta extraño fluencia del relato (recogido en 1944 en Fic- que figuren como tales clásicos de la gastronomía como la spanis ciones) no ha cesado de crecer. Y lo que spanish h tortilla o el anahora se subasta es nada menos que el ma- dalusian fried fish. Por lo demás, lo peor nuscrito original (incluyendo correcciones de estos libros es que acaban con mis bueal mar margen gen)) de aqu aquell ellaa his histor toria ia de la queBioy nos propósitos dietéticos. Ojeando el de Casaress afirma Casare afirmaba ba que demos demostraba traba “las posi posi-- Phaidon (basado en El libro de las tapas, bilidades literarias de la metafísica”, y en Alianza), mis glándulas salivares han funcuya trama de espías y eruditos existe un ciona cionado do como locomotoras. locomotoras. De maner maneraa laberinto laberi nto infin infinito ito y una novelainterminab novelainterminable. le. queahoramism queahoramismitopongoproa itopongoproa a la nev nevera era,, Miren, yo no lo quiero para mí, no soy tan a ver si me preparo unos tomatoes filled fetichista fetic hista.. Pero si entremis impro improbableslecbableslec- with sardines o algo por el estilo.
Tapas
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MÚSICA / Entrevista
Gino Paoli, en busca de la canción perfecta El músico ha construido una intensa obra musical sin renunciar a su proyección popular. El artista italiano celebra sus 50 años de creación con un nuevo disco y lamenta que la música que se hace ahora sea “más business que pasión”
Por Carles Gámez
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ESDE HACE mediosiglo lascancio lascancio--
truyendo sobre esa fórmu truyendo fórmula la origin original. al. Para mí el artista es un creador de preguntas, un fabricantede fabri cantede inter interrogac rogaciones iones,, y estas nunca se acaban porque cada día la vida te ofrece preguntas pregu ntas.. Por lo que respe respecta cta a mí, al menos como artista, trato trato de no escribir escribir las mismas mis mas cos cosas, as, sie siempr mpre e bus busco co alg algo o más más,, plantearme otras preguntas”. Es sin duda estabúsqueda estabúsqu eda la quele ha con conduc ducido ido a escr escriibir una canción como Il Pettirosso contenida ensu últ últimoálbum imoálbum,, Storie, dond donde e cuen cuenta ta el intento de violación de una niña por un anciano anci ano quemuere ante antess de real realizarsu izarsu terri terri-ble acto despertando la piedad de la pequeña ante el cadáver del hombre. Frente a la polémica suscitada por su canción, el can-
los mejores, por eso prefiero cultivar las dudas, no las certezas”. Una infancia infancia marca marcada da por la Segun Segunda da Guerra Mundial y la muerte, una primera vocación plástica como pintor, que nunca ha abandonado, y el descubrimiento de la canción como instrumento expresivo y forma de gan ganar ar din dinero ero.. Pao Paoli li har hará á el trá tráns nsitode itode una vida bohemia, que quedará memorizada en la melancólica melancólica balada La gatt gatta, a, al mundo mun do de lasfansy losfest losfestiva ivalesde lesde mús música ica.. “Mis raíces musicales son el jazz, la canción francesa fran cesa,, desd desde e lueg luego o la canc canción ión popu popular lar italiana, pero también está la ópera, la música sinfónica sinf ónica y otras referencias. referencias. Creo que el artista es alguien que va embotellando una
nes de Gino Paoli (Monfalcone, 1934) tienen reservado un lugar destacado destaca do en el dispen dispensario sario sentimental de la sociedad italiana. italiana. Composiciones como Il cielo in una stanza, Sapore di sale, Senza fine o fine o Che cosa c’é han c’é han puntuado la Ita Italiadel liadel mil milagroecon agroeconómi ómico co queLuch queLuchino ino Visconti Visco nti radiog radiografiab rafiaba a en blan blanco co y negro con Rocco y sus hermanos y Vittorio Gassman recorría frenéticamente en La escapada. Una Italia que abría las orejas y recibía con sorpresa los temas existencialistas que cantabanlos cant abanlos port portavoce avocess del popintelectual, telect ual,los los cantau cantautores tores —eltérmino tiene aquí su acta de nacimiento— con su desasosiego anímico y actitud inconformista. Domenico Modugno había lanzado su Volare en el Festival de San Remo anunciando cian do el des despegu pegue e de la nue nueva va can can-ción ció n tri tricol color or y enGéno enGénova,una va,una ser serie ie de intérpretes-autores, Bruno Lauzi,UmbertoBindi,Luigi Ten Tenco, co, Sergio Endrigo, Fabrizio De Andrè y Gino Paoli, recogerán el testigo de la nue nueva va ola ola.. Can Cantan tantescomo tescomo Mi Mina na y Ornella Vanoni Vanoni transforman transforman esta canzone diversa en pequ pequeñasobras eñasobras maestrasde maes trasde liri lirismoy smoy con consum sumo o tel teleevisivomientrascomienzana deste deste- jersealgunos corsés corsés moral morales. es. “Para “Para mí la evolución en estos cincuenta años”, señala Gino Paoli, “ha sido bastante negativa. Cuando yo comencé menc é en aquel aquellos los años sesenta, sesenta, había mucha más pasión y mucho menos business, ahora sin embargo, tene tenemos mos muchí muchísimo simo business pero a cambio poquísima pasión. Hoy en día lo que se busca es que el producto sea rentable como una pastill pas tilla a de jabó jabón. n. Ten Tenemos emos otro discurso, que forma parte de un métod mé todo o do dond nde e nose tra trata ta la cul cultutura como una inversión a largo plazo, sino que las inversiones tienen que ser a corto plazo, y esto también sirve para la canción, un producto duct o de vent venta a que se consume consume rápidame pid amente nte,, y lue luego go se des desech echa”.En a”.En 1963 19 63 enlas rad radiosde iosde med media ia Eur Europa opa Para Gino Paoli, el artista debe plantear interrogantes en sus nuevas creaciones. Foto: Roberto Coggiola se escucha el saxo de Gato Barbieri subrayando subrayan do la canción canciónSap Sapore ore di saserie e de inf informa ormacion ciones,que es,que lue luego go vanmadule, un canto de vibrante sensualidad que ha tautor ha defendido el papel del creador y seri dejado la relación entre el músico y una ante las cámaras de la RAI ha rechazado las rando, pero después, todo este magma, toacusacion aciones es de indu indulgen lgencia cia haci hacia a los pedó pedófifi- do esto que ha ido almacenando tiene que joven actriz llama llamada da Stefa Stefania nia Sandr Sandrelli. elli. La acus canción lo posiciona como el abanderado losque des desde de alg algun unas as tri tribun bunas as le hanlanz hanlanzaa- salir, transformado en otra cosa”. Como a de unneorr unneorroma omanti nticis cismo mo mus musica icall queha se- do. “Empecemos diciendo una cosa: creo otros intérpretes italianos, la herencia frangregado en este medio siglo algunas de las en las preguntas, no en las respuestas. Un cesa de los Brassens, Ferré y Brel le servirá más bellas palabras de amor de la canción hombre decente debe hacerse preguntas, y de cabecera musical dejando una excelente popular popul ar itali italiana. ana. “Es verdad verdad”, ”, dice Paoli, frecu frecuente entement mente e respo responder nder con otras pre- versión del casi intocable Ne me quitte pas “que “qu e a men menudoel udoel art artist ista a en encue cuentr ntra a un una a fór fór-- guntas. Los que llevan las respuestas en el (Non andare via) mientras difunde las canmula y después la repite toda la vida, cons- bolsillo, mi experiencia me dice que no son ciones de Serrat, traduciendo, entre otras,
Crónica sentimental en 10 temas Il cielo in una stanza
1 Para la leyenda ha quedado la grabación de Mina. Después de registrarla en el estudio toda la orquesta se pondrá de pie aplaudiendo mientras algunos no pueden contener las lágrimas en los ojos.
Sapore di sale
2 Los arreglos de Ennio Morricone y una melodíaa queatra melodí queatrapa pa loscoraz loscorazone oness bañ bañado adoss de arena are na y agu aguaa sal salada ada.. Pao Paoli li com compon ponía ía la ban banda da sonora definitiva de los felices sesenta.
La gatta
3 El tiempo pasado como algo irrecupe18
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rable y huidizo, y el recuerdo de aquellos días de felicidad felicidad y pobreza, pobreza, y canciones canciones junto al mar y una gata siamesa, testigo y cómplice que perseguía estrellas en el cielo.
Gli inn innamor amorati ati son sono o semp sempre re sol solii
4 Otra vez el amor y quizás la huella de
la poesía de Prévert reflejada en esos enamorados que vagabundean por la ciudad, en los bancos de los parques exhibiendo su ternura a los extraños.
Senza fine
5 El amor como un bucle interminable, sin tiem tiempo, po, ni medida.Sin medida.Sin fin. Paoli Paoli le le cons cons--
truía su gra truía gran n him himno no de amo amorr a Orn Ornell ella a Vanoni sellando una larga historia de escenarios, complicidades y canciones.
Sassi
6 La canción popular italiana alcanzaba una de sus cimas. Paoli expresaba en apenas cuatrominutos todala tensi tensión ón del senti sentimient miento o amoroso amoro so y quizá quizáss tambi también, én, su inevit inevitable ableocaso. ocaso.
Albergo a ore
7 Les amants d’un jour, Paoli se sirve de unos de los tí unos títul tulos os de la Pi Piaf af par paraa con conta tarr co con n delicad deli cadezaa ezaa tra travésde vésde losojos de un cam camare are-ro el suicidio de una pareja de amantes en un hotel de habitaciones por horas.
Genova non é la mia città
(Genovaa per noi), 8 Como Paolo Conte (Genov
Mediterráneo, Mediterrá neo, una canción que ha acabado por formar parte de su repertorio, como expresión de su paisaje vital, la Liguria. “Para mí el Mediterráneo significa tener los pies en el agua. He nacido y he vivido con los pies en el agua. Para mí Mediterráneo también significa sentirte más próximo de un catalá cat alán n o de unmarse unmarsellé lléss quede unmilan unmilanés és o deun par parisi isino no,, por porqu que e elmar aca acaba ba dej dejánándote una huella, y el Mediterráneo lo hace de una manera muy particular”. Integrant Inte grante e de una gene generaciónque raciónque busc buscaaba dar a la can canció ción n unadigni unadignidadexpre dadexpresiv siva aa través de la música y los textos, reconoce que“no se pue puede de esc escrib ribir ir esoque lla llamam mamos os la can canció ción n per perfec fecta” ta”.. “Lacanci “Lacanción ón es un un flas flash h emocional, emoci onal, la traduc traducción ción de unas emocion emoc iones,de es,de algoabstra algoabstracto,que cto,que trata lo más posible de acercarse a esas emocion emo ciones,aunqu es,aunque e sinllegara con conseseguirlo totalmente. Quizás la canción que más se ha acercado acercado a atr atrapa aparr esas emociones que quería expresar ha sido Sassi”. En un mundo o negocio musical donde los artistas se dividen en dos categorías, aquellos que no se mercantilizan canti lizan y el resto resto,, Paoli ya hace tiempo que decidió formar parte del primer pri mero o por hig higien iene e men mental tal.. Un Una a elecciónque elec ciónque le ha procu procurado rado algu algunas nas épocas de ostracismo musical, quizás por esa naturaleza anárquica y libertaria, heredera de aquella mauvaise réputation brasseniana que ha querido reflejar en el gato, objeto de atención en alguna de sus composiciones. “Me gustan los gatos porque son la representación de lo que yo entiendo como la libertad. Para mí la libertad liber tad no es el estado estado del tigre tigre en la jungla, jungl a, para mí la libertad libertad es la capacidad de ser libre donde hay restricción, y el único animal que saber vivir, sin import importunar, unar, en un espac espacio io restricti rest rictivo, vo, cons conservan ervando do su tota totall libe liberrtad, es el gato, por eso me gusta”. A sus 75 años rehúye con vehemencia la etiqueta de clásico. “Nunca me he sentido un clásico, tengo la pretensión de continuar estando vivo, no quiero quie ro con convert vertirmeen irmeen un monu monumen men-to, quiero ser una persona, que sigue viva, que continu continua a buscando buscando,, preguntándose”. Quizás en un instante de locura locu ra de esa búsqueda existencial existencial hace 47 años decidió pegarse un tiro en el corazón. Afortunadamente, no era el día dí a se seña ñala ladoy doy so solole lole de dejó jó elrec elrecue uerd rdo o deun pedazode ped azode pl plomoaloja omoalojado do ensu cue cuerpo rpo.. Qui Qui-zás un día dé con esa canción perfecta que traduzca con exactitud sus emociones. Y sigue cantando con su grupo de jazz en pequeños clubes canciones de Chet Baker y a la gata que tenía una mancha negra… ț Storie.
Gino Paoli. www.ginopaoli.it.
Paoli vuelve a la ciudad junto al mar para escribir otra historia de amor, esta vez con el paisaje que ha iluminado sus ojos desde la infancia.
Ti lascio una canzone
9 Toda la tradición y aliento romántico de la canción italiana y la música como acto de amor generoso que une los corazones desunidos y acompaña el amor que vendrá.
Boccadasse
10 Los viejos amantes se reúnen de nuevo, Gino Paoli y Ornella Vanoni reviven los días del pasado, la casa junto al mar y el viento furioso, pero la memoria y el tiempo no siempre discurren en la misma dirección y la ironía quizás sea ahora el mejor recuerdo… C. G.
MÚSICA / Discos
Los Madison
José Mercé
Vendaval Good Sounds
Ruido EMI
EN LA LÍNEA LÍNEA de Nacha Pop, 091 o Los Secretos, Los Madison están llamados a ser una de las grandes formaciones del pop-rock en español. El grupo madrileño debutó en 2007 con Días de vértigo, pero aquello no pasó de ser el difícil primer paso, una declaración de buenas intenciones a modo de supervivencia en un saturado y caprichoso mercado discográfico. Y si dicen que mantenerse siempre es más complicado, el plástico de ahora rompe la cáscara con energía, prometiendo días de vino y rosas. Amparado por Miguel Ríos y Quique González, fans del grupo, Vendaval es la confirmación de una banda que accede a la primera división y juega con los mejores elementos: amor por los clásicos (en la línea de Springsteen o Jackson Browne), propuesta honesta y sin alardes esnobs y composiciones en castellano, con una lírica de calle cercana al oyente. Un soplo refrescante y vitalista que anima el espíritu espír itu con la promesa de un rock and roll que no engaña. Fernando Navarro Midnight Choir Amsterdam Stranded Glitterhouse / Nuevos Medios
“COMO UN
UNA NUEVA sonoridad para la vieja alianza. Se trata del cuarto disco conjunto de José Mercé con el produc productor tor Isidro Muñoz, que vuelve a ser además el compositor de todas lasmúsicas lasmúsic as y let letras ras,, sal salvo vo en la aco acostu stumbr mbraada versión, esta vez Nanas de la cebolla de Miguell Hernán Migue Hernández dez según el modelo de Serrat. La querencia del productor por la canción ció n es dom domina inantey ntey se imp imponeen oneen lostemas por bulerías —Amane —Amanecer, cer, Fe, Ruido— , salvo quizásen La Llav garra ra y com compás pás.. Llave, e, conmás gar Pero poco importa, la imaginación de Muñoz, renovadora en textos y músicas, encuentr cue ntraa la rép réplic licaa en el met metal al git gitanode anode Mer Mer-cé, que torna flamenco cuanto toca. Y si no, ahí está la deliciosa balada Contigo. Para los que echen de menos algo más tradicional u ortodoxo, unas soleares con marchamo familiar (Mar (María ía Bala Bala)) o las alegrías, que son el único corte con la compañía del toque de Moraíto, Moraí to, al que una inopor inoportuna tuna enfer enfermedad medad lo mantuvo alejado de la grabación. El peso de las guitarras recae principalmente en la nueva generación que representa el propio hijo de Morao, Morao, Diego, Diego, y Dani de Morón. Morón. Sus aportaciones marcan esa nueva sonoridad en contraste con el toque clásico de Juan Carlos Romero, Romero, invita invitado do en dos temas. Un disco, pues, marcadamente guitarrero con dos únicas excepciones: la de la rumba, de acusad acu sado o tin tintecaribe tecaribeño ño conel pia piano no de Jes Jesús ús Cayuela Cay uela,, qui quien en tam tambié bién n int interv ervien ienee en la ver ver-sión de las Nanas. Pasión Vega y Carlos de Pepa comparten, por cierto, estrofas con el cantaor en esa versión. Fermín Lobatón
pájaro en el cable, como un Mariel Martínez borracho en un coro nocturno he intenta- Perfume de tango do a mi manera ser libre”.De libre”.De este verso de Leonard Cohen (Bird On Wire) procede el nombre de Midnight Choir, banda sueca que transitó por la música desde 1992 a 2004. El que nos ocupa fue el tercero (y el más estimulante) de los cinco álbumes que publicó. De manera que Amsterdam OZ Y GUITARRA. Poco más. La voz de MaStranded es una reedición, sí, pero de un V OZ disco hermoso y perturbador. Registrado riel Martínez, fuertemente tanguera, vigoen Lisboa en 1998, diríase que el material rosa y sentida, y la guitarra de Alejandro con el que están hechos sus sueños se ha Picciano, eléctrica pero empleada como impregnado del sentimiento del fado para una clásica, próxima al jazz. En ocasiones, lograr atmósferas más intensas. Anótese, algunas gotas de color: bandoneón, violín, además, que estamos ante una grabación bajo, piano. Así de desnudos se acerca esconceptualmente conceptualm ente contemporá contemporánea. nea. Amster Amster-- ta pareja porteña afincada en Madrid en su segunda entrega discográfica a un candam Stranded se presenta junto con otro CD, que recoge piezas inéditas, maquetas, cionero que bebe en los clásicos (Stámpoacústicos y primeras versiones de algunas ni / Expósito, Gardel / Lepera), pero que canciones. Salvando todas las distancias también recuerda a heterodoxos como el salvables, Midnight Choir recue recuerda, rda, por su recientemente fallecido Quintín Cabrera o manera man era de enf enfren rentars tarsee al dis discurs curso o del al productor del disco, Litto Nebbia. De ock, a The Nits (todavía en activo), otra todo ello resulta un trabajo cálido, equilibandano anglo anglosajon sajonaa peroigualmente ex- brado, urbano, moderno y tradicionalista, citante. Javier Losilla sincero y hermoso. Juan Puchades
Piano de fresa y chocolate José María Vitier graba su primer disco en solitario, editado con un DVD que dirige Jorge Perugorría Por Carlos Galilea
do”, recu do”, recuerda erda.. “Esmi prim primer er dis disco co en soli soli-tario,per tar io,pero o cre creo o qu quee nova a se serr el últ último imo”. ”. Jorgee Peru Jorg Perugorr gorría ía firmael firmael DVD de Pulso de vida para el que tuvo acceso al archivo fotográ fot ográfic fico o de losVitier.“Tene losVitier.“Tenemosmucha mosmucha fe en esa mirada mirada tan tan limpia y tan desenfadesenfadada que tiene de las cosas. Y creo que armóesas hist historia oriass rela relacion cionadascon adascon cada pieza musical de una forma muy inspirada”. Vitier y Perugorría se conocieron a mediados de los años noventa durante el rodaje roda je de Fresay chocola chocolate. te. Y la música de José María Vitier se escucha en películas como la de Gutiérrez Alea y Tabío, El sig siglo lo de las luces (Solás), Un señor muy viejo con unas alas enormes (Birri) o Lista de “Tengo que reconocer que espera (Tabío). “Tengo
SE V E A José María y a su mujer, Silvia, entran ent randoen doen unaigle unaiglesiay siay lue luegoa goa él to tocan can-do el piano bajo un Cristo que cuelga del techo. tec ho. “Labasílic “Labasílicaa de San Fran Francisc cisco, o, en La Habana Vieja, es ya emblemática para el acontec acon tecer er musi musical cal cuba cubano no y se ha conver conver-tido en mi sitio predilecto de conciertos. Por la mística que tiene el lugar y porque dispone de un estupe estupendo ndo piano”, explica el compositor y pianista. “Esa búsqueda de lo espiritual espiritual se acomoda acomoda a mi forma forma de ver las cosas”. Sus padres, los poetas Cintio Vitier y Fina García Marruz, “fueron figuras de un cierto tipo de sentimiento religiosoy, a la vez, de izquier izquier-das, muy importante para la historiade hist oriade la cult cultura ura cuba cubana” na”.. Hasta ahora José María Vitier (La Habana, 1954) no se había lanzado a grabar un disco de piano solo. Ese requisito casiimprescindible casiimprescin dible,, segúnFernando Trueba, para todo pianista que se precie. “Es saldar una deuda con un instrume instrumennto que empecé a tocar cuando aún no llegaba a los pedales y a través del cual llegué a la composición”. compos ición”. La cultura pianística en Cuba es cosa muy seria: seri a: desd desdee Cerva Cervantes ntes,, Saumell o Lecuona hasta Frank Emilio, Gonzalo Rubalcaba o Chucho Valdés. “Siempre he pensado que en Cuba el piano El pianista José María Vitier. tiene entidad de símbolo nacional. Yo admiro mucho la obra de los pian pianista istass cuba cubanos nos porq porque ue me sorprende a veces notar que mi músicreo que cuando componían estaban in- ca tiene un deje un poco melancólico. ventando el país musical. Aquellos crio- Aunque, como me dijo alguien una vez, la llos más o menos acomodados interpre- belleza, si es que uno la alcanza, nunca es tan un rom romanti anticis cismo mo euro europeo peo,, sob sobre re tod todo o triste en el fondo”. “Yo estudiaba piano, chopiniano, en el que se empiezan a fil- pero de joven tocaba la guitarra. A veces trar los ritmos de lo africano. Ellos empieempie- digo, en broma y en serio, que la guitarra zan a hacer síncopas, y bajos anticipados, daba muchas más posibili posibilidades dades para co y una melódica melódica cubana”. “En “En otros discos discos sas que eran para mí muy importantes en míos el piano también es protagonista, y ese momento. Si uno empezaba a noviar algunoscasi algu noscasi sonde pian piano o sol solo, o, per pero o sie siemm- la guitarra era mucho más práctica”, dice pre al final uno se engolosinaba con un sonr sonriend iendo. o. “Emp “Empezab ezabaa la nuev nuevaa canc canción ión y percusionista o un bajista, y los proyectos había que saberse las canciones de Silvio terminaban por ser más de cámara”, ad- y de Pablo. En realidad yo aprendí para mite. “Éste surgió en la imaginación de pod poder er toc tocar ar lascancio lascancionesde nesde la tro trova va trad tradiiSilvia Silv ia com como o un dis disco co quetratab quetratabaa de rep reproro- cional. Y me parece muy evident evidentee que en ducirr el pian duci piano o que ella ella esc escucha ucha en en nues nuestra tra mi forma de tocar el piano hay algo de la casa por las mañanas. Por eso tiene mu- guitarra. Me influyó muchísimo. Quería cha paz, no es tan esp especul eculativ ativo o como que mi música instrumental tuviera la viotros míos en los que hay otros vericue- bración, el estreme estremecimient cimiento o que había tos, otras búsquedas. Es íntimo, casi do- con esos señores de casi cien años a los méstico podría decirse. Y, sin lugar a du- que se les iba la vida en lo que estaban das, un disco de pareja. Una vez dije que cantando”. Silvia estaba siempre adivinando la músicaque a mítoda mítodavíano víano seme hab habíaocur íaocurri ri-- Pulso de vida está editado por Sello Autor. ț
Dente L’amore non è bello L’amore Ghost / Green Ufos
CON UN AÑO de retraso, se distribuye en España el álbum elegido mejor disco independiente italiano en 2009. Dente es el alias del músico de Fidenza (Parma) Giuseppe Peveri, antiguo guitarrista de grupos como Quicc o La Spina, Qui Spina, y ahor ahoraa can cantau tautor tor rampan rampan-te. Este tercer largo lo confirma: alguien capaz de mirar a los clásicos (el lirismo de Lucio Battisti y algún deje de Francesco de Gregori) sin dejar de irradiar frescura. Se mueve con elegancia entre la melanc melancolía olía y la vocación irónica y puede presumir de acompañantes, sobre todo por los notables arreglos de viento de Enrico Gabrielli, arreglista reciente del gran Vinicio Capossela. Ramón Fernández Escobar EL PAÍS BABELIA 12.06.10
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CINE / Reportaje
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Dirección: Pedro Almodóvar. Música: Alberto Iglesias
Pedro Pedr o Almodóvar
Fernando León
sobre Alberto Iglesias
sobre Lucio Godoy
“
SENTIMENTAL, trans“ parente y discreta. Pe-
LBERTO IGLESIAS pro A LBERTO porciona compa porciona compañía ñía y cobijo. Es como un techo cuando llueve y un vestid ves tido o cua cuandose ndose est estáá a la intemperie. Mis películas nacen con vocación musical y él sabe llenar esa necesidad de un mod modo o pre precis ciso, o, paciente, generoso. ț
Un cuarteto de cine “Todo el cine es una máquina de seducción”, afirma Alberto Iglesias. El archipremiado compositor reflexiona, junto a los también músicos Roque Baños, Lucio Godoy y Fernando Velázquez, sobre la línea paralela al guión que trazan quienes ponen la música a la película
Por Rocío García
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A CITA NO FUE en un restaurante, ni
siquiera delante de unas cervecitas, comotantasvecesse había habían n prom promeetido para luego incumplir casi de inmediato. inmed iato. Son los móviles los que se ocupan de mantener la conexión entre estos cuatro músicos de cine que hoy se reúnen en una de las salas del Teatro Real de Madrid. Alberto Iglesias, Roque Baños, Lucio Godoy y Fernando Velázquez, cuatro compositores dedicados a crear música para cine,se mue muestr stran an com como o lo queson: uno unoss ami ami-goss qu go quee hac hacee ti tiem empono pono seven seven.. Su tr trab abaj ajo o lo realizan individualmente, a las órdenes de los directores y siempre sometidos a una historia, histo ria, pero la grande grandeza za que prop proporcion orcionan an al cine ya está fuera de toda duda. Sin olvidar que las bandas sonoras se han convertido en uno de los reclamos más importantes del mundo discográfico, la música de cine en España ha dejado de ser la gran arrinconada. nad a. Dire Directo ctoresy resy pro produc ductor tores es ya no dud dudan an de la importancia de la música en ese recorrido vital que es una película. La tradición viene de lejos. Nombres como los de José Nieto o Ángel Illarramendi están en la memoria y el corazón de todos estos músicos que no solo se han hecho un hueco en nuestro país, sino que algunos ya han salt saltado ado las front fronterasy erasy su pres prestigioresuetigioresuena en la industria internacional y más conretamente en la gran meca del cine que es Hollywood. Alberto Iglesias (San Sebastián, 1955) es uno de ellos. Con siete goyas, dos premios de la Academia de Cine Europeo y os candidaturas a los Oscar de Hollywood por El jardinero fiel (Fernando Meirelles) y es Cometas en el cielo (Marc Foster), Iglesias es in duda el compos compositor itor españ español ol de cinemás espetado y admirado. Otro nombre indispensab pen sable le en el pan panora orama ma int intern ernaci aciona onall es el e Javier Navarrete (Teruel, 1956), que ha puesto puest o música música,, entreotros título títulos, s, a las pelíulass de Gui ula Guille llermo rmo delToro (El labe laberint rinto o del quee ya es está tá auno o El espi espinaz nazo o del diablo) diablo) y qu instal ins taladoen adoen LosÁngele LosÁngeles. s. Per Pero o jun junto to a aqu aqueellosque dec decide iden n bus buscarproyec carproyecció ción n fue fuera ra de nuestras fronteras, hay otros que vienen a nuestro país en busca también de mayor fortun for tuna. a. Est Estee es el cas caso o delpropi delpropio o Lucio Lucio Gooy y de su compa compatriot triotaa Federico Jusid, de 6 añ años os,, qu quee vi viveen veen Ma Madr driddesd iddesdee hac hacee ca casi si iez y desde aquí participa en el trabajo de eries de televisión (Gran Reserva), además e firmar junto a Emilio Kauder la banda 20
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sonora de la exitosa y multipremiada El secreto de sus ojos, de Juan José Campanella. Jusid combina su trabajo en el cine y la televisión con su faceta de concertista de piano y compositor. El proceso creativo de este músico tiene un ideal: poder trabajar con el director desde el mismo momento del comienzo comienzo del pro proyec yecto to par paraa que sus composiciones afecten o puedan afectar al tempo musical de la película. “Creo que la música debe ser una mirada más”, asegura. El cuarteto convocado en el Real es eso, un cuarteto. En el caso de la música de cine en España bien podía haber sido un quinteto, un sexteto, e incluso una orquesta completa. Los cuatro, con procesos creativos diferentes, aunque siempre ligados a las imágenesy al gui guión,son ón,son un eje ejempl mplo o delpoder delpoderoso oso abanico abanic o que se vive en Españ Españaa en este arte de poner música a las imágenes.
La inspiración
LBERTO IGLESIAS es un composit A LBERTO compositor or tranqui tranqui-lo y elegant elegante, e, del que todos resaltan su humildad y generosidad. Al que todos admirany habl hablan an con un res respet peto o cas casii cel celest estial.El ial.El segundo compositor en recibir el Premio Nacionall de Cine (2007), siete años después Naciona después de José Nieto, dice que la repercusión que ahora tiene la música de las películas en Españaes Esp añaes tod todo o gra gracia ciass al aug augee delcineespañol. “Nosotros hemos ido creciendo con él. Antes había había muy poco cuidado cuidado no solo solo con la música, sino también con otros aspectos de las películas que gozaban de presupuestos mínimo mínimos. s. Eso ha cambiado cambiado y tambié también n el oído de los directores y la opinión de los productores. La música se ha convertido en Espa Es pañaen ñaen unarmamuy út útil il pa paramejo ramejorarla rarla película, para hacerla más atractiva ante el espectador”, asegura el compositor, quien reconoce que ese aspecto algo secundario quetenía has hasta ta hacepoco la mús músicainclus icaincluso o le atraía. El compositor que empezó de casualidad —“p —“pensá ensándol ndolo o bien bien,, la casu casualida alidad d mantenida deja de ser casualidad”— con películas de realizadores vascos (Montxo Armendáriz, Armendár iz, Imanol Uribe o Julio Medem) se ha convertido en el colaborador perfecto de Pedro Almodóvar, con el que ha trabajado en todas sus películas (siete en total) desde La flor de mi secreto. Ahora, después de estrenar en el Auditorio de Madrid el Cuarteto breve para el Tokio String Quartet —“la música… pura, no sé cómo llamarla, tiene que tener su propio espejo, como una página en blanco sin referencias, sin una
Los lunes al sol. Dirección: Fernando León. Música: Lucio Godoy
leada con la ale leada alegrí gría, a, pero también también con la tristeza;; sol tristeza soleada eada,, mela melanncólica, cólic a, próxi próxima…, ma…, así es la música que Lucio ha hecho, hec ho, hace hoy par paraa mis pel pelícu ículas. las. Mús Música ica que es emoción, esperanza, herida abierta. ț
Celda 211. Di
Daniel Monzón
Juan A. Bayona
sobre Roque Baños
sobre F. Velázquez
UNA DE LAS razones “ de por qué hago cine
onzón. Música: Roque Baños
es para poder trabajar con Roque. Me aporta todo aquello que yo no sé alcanzar con la imagen, una atmósfera, un clima. Más que música, lo que hace es cine, siempre pegado a la historia. ț
SU MÚS MÚSICA ICA aporta “ sentido emocional. A la
El orfanato. Dirección: J. A. Bayona. Música: Fernando Velázquez
De pie, de izquierda a derecha, Lucio Godoy, Fernando Velázquez y Roque Baños. Sentado, Alberto Iglesias. Foto: Gorka Lejarcegi
historia detrásque la pueda disto historia distorsiona rsionar”—, r”—, ultima la banda sonora para el filme de acción de Paul Haggis The next three days, y lee el guión de La pie piell que habito, habito, que Almodóvar Almodó var rodará el próximo próximo verano. Siempre al servicio de las historias y las directrices de los realizadores, dice Iglesias que él espera siempre a las imágenes para componer —“cuando leo un guión no oigo nada, nad a, per pero o cua cuando ndo veo imá imágen genes es sí oig oigo o cocosas”—, que no tiene un estilo de trabajo determinado, y que la libertad se la da la inspiración. A pesar de su larga trayectoria, siente que no ha pasado la sensación de aprendizaje. “Es muy doloroso y al mismo tiempo muy divertido, me encantaría tener mayor fluidez, ser el amo”, se lamenta este músico que dice buscar películas que le toquen que n conlas queconsi queconsiga ga sed seduci ucirr al esp espect ectaador.. “To dor “Todoel doel cin cinee es unamáqui unamáquina na de sed seducucción. La música tiene que ser, como lo es el montaje o la fotografía, una mezcla de seducción y credibilidad”.
La versat versatilidad ilidad
ROQUE B AÑOS cree que un músico de cine tiene que tener la cualidad de la versatilidad. “Los distintos géneros de películas requieren de esa habilidad, de no ser así la capacidad creadora quedaría muy limitada”, asegura este compositor nacido en Jumilla (Murcia) en 1968 y que debutó en el cine, casi 30 años después, con la banda sonora de Carreteras secundarias, de Emilio Martínez Martín ez Lázaro. Baños ve con optimismo el panorama actual de la música de cine —“el momento actual es uno de los más propicios que hemos vivido porque estamosconsigu moscons iguien iendo do queesa mús músicallegue icallegue,, de manera más profunda, al gran público”— y apunta la importancia de que cada vez hay más músic músicos os nove noveles les que se está están n prep preparanarando para dedicarse a este ámbito del cine. Ligado de manera tenaz a realizadores como Álex de la Iglesia (La comunidad, Los Monzón n (con crímenes de Oxford) o Daniel Monzó el que ha colaborado en todos sus filmes, incluyendo el último, Celda 211), Baños es de la opinión de que los realizadores se estándandocuentaa cad tándandocuent cadaa vezmás de la imp imporortancia de la música en una película “por la carga emocional que contiene”. “Es capaz de contar sin palabras palabras lo que no se ve en la imagen, es una línea paralela al guión”. ¿Cómo se trabaja a las órdenes de un realizador? realiz ador? ¿Dónde encuentra encuentra el músico esa libertad tan necesaria para crear? Baños lo tiene también claro. “El músico de cine tiene libertad para crear, pero siempre atendiendo a las directrices del director o el productor. Para que el trabajo se desarrollebien rro llebien,, el mús músicoha icoha de te teneruna neruna cap capaci aci-dad de comprensión y entendimiento con el director, así el result resultado ado final será mejor para la obra en su conjunto. Y también una mentali men talidad dad abie abierta rta a loscambioso modi modific ficaaciones que este nos pueda solicitar”. Baños trabaja en la película que acaba de rodar Álex de la Iglesia Iglesia (Balada triste de trompeta) y para desp después ués de veranose pondr pondráá con una nueva entrega de Torrente.
vez que se desarrolla la trama,los prota protagonis gonistas tas viven un proceso interno más abstracto abstracto que noes exp expres resadocon adocon palabras sino con música. El discurso ha de fluir natural y no subrayar lo que es obvio. ț
“aquí está mi película, a ver qué puedes hacer con ella”. Es una línea muy fina y delicada la que separa ambos conceptos, en opinión de Godoy, un músico unido al cine de real realizad izadores ores como Fern Fernando ando León, Miguel Albaladejo o Gerardo Herrero. “Yo pienso que cuando te llaman es que confían en ti y eso me proporciona una gran tranquilid tranquilidad”, ad”, aseguraeste compositor que desde niño, cuando se colaba con su hermano mayor a ver películas de Fellini, ya le llamaba la atención atención la música música que envolvía las historias. Godoy, que durante muchos años trabajó de productor musical con Alberto Iglesias y en películas como Los otros o Mar adentro, de Alejandro Amenábar, está convencido de que, aunque la música sigue siendo un punto flaco dentro de los presupuestos de un filme, sí ha habido un cambio por parte de la prod producc ucción ión para tenerla más en cuenta y, sobre todo, el público que valora la creativi creatividad dad de las bandas sonoras. sonoras. Godoy busca el flechazo, el latigazo interior que le provocan las escenas. “Yo creo que cada película trae una música que está ya ahí y que uno lo que tiene que hacer es encontrarla. Es lo que yo llamo la búsqueda de la música. Lo que más me atrae de mi trabajo es encontrar el tono, la textura y el tempo de cada película. Me invade más la película o los personajes que la propia música. A veces todo sale de un fotograma que te pega fuerte y que sabes que ahí está lo que buscas”, asegura el compositor de Los lunes al sol (Fernando León), con el que ganó el premio a la mejorbanda sonora de la Academ Academia ia de las Artes y las Ciencias de la Música, mientras ya trabaja en Amador, el filme que el realizador madrileño acaba de rodar.
Suerte y trabajo
ELÁZQUEZ es expresivo y hablaFERNANDO V ELÁZQUEZ dor. Encantado de aparecer en ese lujoso cuarteto de cine, no para de preguntar e indagar. Fueron muchos años de trabajos casi anónimos y sin cobrar, tanto que su madre se dirigía a él como el “compositor sinfronteras”.Especia sinfronter as”.Especializad lizado o en cinefantást cinefantástiico conmiste conmisterio,muert rio,muertes es y ase asesin sinato atos,a s,a est estee vizcaí viz caíno no de 33 años años,, bec becari ario o dura durantetres ntetres en el Teatro Real, le puso en el mapa, como él se encarga de aclarar, la música que realizó para el exitoso título de Juan Antonio Bayona El orfanato. “El mérito es de la película y desu di dire rect ctor or,, yosolohe he hecholo cholo qu quee te tení níaa que hacer y estoy muy orgulloso de ello”, dice un día soleado de Madrid, cerca de la casa-e cas a-estu studioque dioque tie tiene ne en la cap capita ital.l. De momento, ya tiene listo el score del filme Lope , de And Andruc rucha ha Wad Waddin dingto gton, n, y el enc encarg argo o de la nueva película de Bayona, The imposible , con Ewan McGregor y Naomi Watts. Aplica la norma de la flexib flexibilidad ilidad con el director para tratar de entenderle y ponerse a su ser servic vicio.“El io.“El dire directo ctorr sab sabee lo quequiere quequiere,, pero no sabe cómo se hace. Y ahí estamos nosotros”, asegura este chelista profesional, que sueña con llegar al dominio de Alberto Iglesias. “Domina lo que hace y lo lleva adonde quiere. Es capaz de crear la realidad”.
La desped despedida ida
LOS MÚSICOS, disci disciplinad plinados os y colabo colaboradore radores, s, se van despidiendo paulatinamente, tras ir posando uno a uno para fotografías indiviLa confianza H AY MUCHAS maneras de buscar la fuente duales. Todos quedan de nuevo para verse relajados con con familia familia e hijos. ¿Se ¿Se vedela lib liber ertad tad.. Luc Lucio io God Godoy oy (Pa (Paran raná, á, Arg Argenen- ya más relajados rán?? A tod todosnos osnos que queda da al men menos os est estaa mañ mañaatina, 1958) la encuentra cuando siente la rán confianza confian za del direct director. or. O esa confianza o na en el Real, agradable y productiva. ț
Música para camaleones Por Isabel Coixet MIENTRAS AS escucho Songs ESCRIBO ESTO MIENTR for Lulu de Rufus Wainwright y pienso
enuna es esce cenaen naen un ca caféde féde Vi Vien enaa delos años treinta con personajes salidos de una novela de Joseph Roth, sonido de cuchar cuc harilla illass de pla plato to con contraplato traplatoss de por por-celana y risas distantes. Mi vida ha estado marcada por la más ecléctica banda sonora: sonor a: recue recuerdo rdo que cuandomis padre padress escuchaban música los domingos por la mañana,, yo me sentaba en el balcón de mañana mi casa y me imaginaba historias que aunque poco o nada tenían que ver con los temas que sonaban, para mí estaban ferozmente unidas a esa música. Por algunaa raz gun razón ón quevariosaños de psi psicoa coanánálisis no conseguirían desentrañar, Lucho Gatica cantando Relo Relojj no mar marque quess lashoras era el fondo que tenían historias de piratas que me inventaba que no eran más que inocentes variaciones de la trama de La isla del tesoro. Mario Lanza y sus gorgoritos de la Serenata de las mueranel anel fo fond ndo o co con n elque meimag meimagin inaalas er ba historias de detectives en la época en la que transcurren Los tres mosqueteros. El tem temaa de Fra Franci nciss Lai par paraa Un hom hombrey brey una mujer, era el tema que más sonaba hasta el punto de que el single del dabaremedi edio. o. dabadádabadabadá se rayósin rem Enmicabezael dabadabadá erala mús músiica que acompañaba a unos niños que resolvían resol vían miste misterios rios mient mientras ras comían tarta de arándanos. Esta experiencia infantil con la música en el balcón ha sido primordial para entender cómo trabajo con las bandas sonoras de mis películas. Para empezar escribo escri bo con música, música, y muchas veces una determinada canción me ha inspirado secuencias secue ncias enter enteras, as, compo comportamie rtamientos, ntos, réplicas, finales. Escuchar Hope there’ s someone de Antony and The Johnsons fuecrucial fuecruci al no sól sólo o para para fil filmar mar una de las secuencias secue ncias más bonitas bonitas de La vi vida da se secre cre-ta de las palabras palabras sino para entender más a los personajes que pululaban por la plataforma petrolífera. Canciones archiconocidascomo GodOnly kno knows ws cantada por los niños de un colegio en los años setenta redimensionaron momentos especialmente emocionantes de Mi vida sin mí. He trabajado en tres películas con Alfonso Villalonga, un músico, actor, cantante y compositor de enorme talento con el que comparto un sentido del humor comp completam letamentemarciano.Alentemarciano.Alfonso fon so ent entien iende de a dur duras as pen penas as queen mis últimas dos películas no haya utilizado una banda sonora orquestal al uso, sino temas ya existentes existentes que escogí personalpersonalmente. Elegy ten tenía ía tan tantostemasde tostemasde pia piano no clásicos clásic os tocad tocados os por el personaje personaje que interpreta terpr eta Ben Kingsle Kingsley, y, que un soundhubieraa sidocompletame sidocompletamente nte track al uso hubier redundante. Mapa de los sonidos de Tokio fue una película concebida en torno a los tem temas as que había había esc escuch uchado ado sin tretregua mientras la escribía. Me resultaba imposi imp osibledesl bledesliga igarlade rlade ell ellosy osy delos so soninidos de la ciudad. Creo Cre o queun cin cineas eastatieneque tatieneque sen sentir tir-se libre a la hora de afrontar una banda sonora y arriesgarse a que le tachen de lunático o de cursi o hasta de las dos cosas a la vez. Si son las canciones de Belle and Sebastian las que te fascinan, utilízalasaunque utilí zalasaunque esté estéss cont contandouna andouna historia de romanos: puede ser que la voz nasal y melancólica de Stuart Murdoch redimensione una escena épica aunque banal de una carrera de cuadrigas. Si no funciona, siempre estarás a tiempo de acudir a John Williams o a sus discípulos. Lo que quiero decir es que si una escenaa es prede escen predecible cible,, una músic músicaa prede prede-cible puede acabar de destrozarla. Cuando vi, años más tarde, Un hombre y una mujer me decepcionó ver que Anouk Aimée y Jean-L Jean-Louis ouis Trinti Trintignant gnant no era eran n niñ niños os ni res resolv olvían ían nin ningúnmiste gúnmiste-rio ni comían tartas de arándanos. ț
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PURO TEATRO Por
Marcos Ordóñez
Los virus de Marburg Tres altas influencias (Kushner, Lepage, Paul T. Anderson) bullen en la obra de Guillem Clua, ambicioso mosaico de la desazón contemporánea y una de las sorpresas de la temporada TENCIÓN A Guillem
Clua y a Mar- doble mazazo de la muerte del primogénito apología). Lo que han leído hasta ahora es atentado do al presi presidente dente Reaga Reagan. n. Virus merotráiler,un apre apretadí tadísimoresumenargusimoresumenarguburg: un dra dramat maturgo urgo a seg seguir uir y y el atenta mental al de de Marb Marburg: urg:ni ni pued puedo o dest destripa riparr desa desa-una obr obraa de amb ambici ición ón inf infrec recuen uente, te, rampantes: la intolerancia, el catastrofismo ment conla queel TNC TNC aca acaba ba de apu apunn- y, en la segunda parte, parte, el Alzheimer. Alzheimer. Episo- rro rrollosni llosni hayespac hayespacio io par paraa anal analiza izarr tod todos os los tarse tar se otr otro o bue buen n tan tanto. to. Marburg Marburg esuna esuna fu funn- dioafric dioafricano ano:: Mar Marburg burg,, Uga Uganda nda,, 1999 1999.. La vís vís-- giros e implicaciones de las tramas. Los ción desmesurada (casi tres horas), irre- pera del fin de siglo junta en una capilla al cuatro episodios avanzan en un continuo gular, con intensos subidones poéticos y pad padre re Gab Gabrie riell (Sa (SantiPons),un ntiPons),un sac sacerd erdoteenoteen- temporal, como si tuvieran lugar simultáabismales caídas en el artificio, pero rebo- viado por el Vaticano para investigar un neamente, pero abundan las sorpresas y las sante de ideas y talento. Tampoco es habi- presunto milagro, y una misionera negra, imagi imaginativ nativas as ruptu rupturas ras forma formales:audacessalles:audacessal Acanit it (Car (Carol ol Muak Muakuku) uku),, con convenc vencidade idade la in- tos en el tiempo (el episodio de Pensilvania tual la altura del listón: yo diría que los mo- Acan delos del os de Cluason Ton Tonyy Kus Kushne hnerr (lo (loss mie miedos dos minencia del apocalipsis. Virus invitados: la se retoma treinta años más tarde, cuando milenaristas y la exuberancia narrativa de sus prota protagonist gonistas as son ya ancian ancianos), os), víncul vínculos os Ángeless en Améric Ángele América), a), Robert Lepage Lepage (la imen flashback flashback (el (el descreído padre Gabriel es bricación caleidoscópica de las historias) y un fervoroso seminarista en el episodio aleel temblor del fin del mundo, de la vitalidad mán)) o en cla mán clave ve oní oníric ricaa (la mis mision ioneraAcanit eraAcanit acucia acu ciada da po porr la ang angust ustia ia y elcaos,que sob sobrere- Tenemos cuatro episodios, viaja “astralmente” a la casa de la vieja Claivolaba vola ba losmosai losmosaicosde cosde Vidas cruzad cruzadas as (Car(Carre). Rafel Duran ha dirigido con brío al excelente reparto, aunque cabría reprocharle ver / Altman) o Magnolia de Paul Thomas cuatro lugares, cuatro algunas exasperaciones formales (el sobre Anderson. Anders on. Clua quiere abarcar muchísimo, muchísimo, tiempos, cuatro espacios tanto temática como geográficamente, a la cargado éxtasis místico del sacerdote, sacerdote, cuanmane ma nera ra deBene deBenett i Jo Jorn rnet et (o (otr tro o pa padr dree —o tí tío o en el mismo escenario, do la acot acotació ación n simp simpleme lemente nte indic indicaa “searroabuelo— posible) en la infravalorada Saladilla y persigna ante el Cristo sangrante”) o mandra. Aquí mandra. Aquí tenem tenemos os cuatroepisodiosen- muy bien servidos el fastidioso tono brujil que le permite a trelazados, trelaz ados, cuatro lugares llamados Mar Vicky Peña Peña en la primera primera parte, parte, contrap contrapesaesaburg; cuatro tiempos, cuatro espacios en el do por su excelente composición en la segunda. Entre los tropiezos de Guillem Clua mismo mis mo esc escena enario rio,, muybien ser servid vidos os porRafelLladó,, el ilu felLladó ilumin minado adorr Kik Kiko o Pla Planasy nasy el son sonii- fal falta ta de fe o su con contra trario rio,, el exc excesode esode pen pensasa- señalaría la falta de medida (el larguísimo do del maestro José Antonio Gutiérrez (algo miento mágico (a decidir según las convic- monólogo inicial de Claire), ciertas torpezas opaco,sin opa co,sin emb embarg argo, o, en lasescen lasescenas as dellabo- cione cioness de cada uno). Episo Episodio dio australiano: australiano: de escritura (los diálogos concebidos para ratorio). Episodio alemán: Marburg (Hes- Marburg (Queensland, Australia), 2010. Un “pasar información” a un interlocutor que en), 1967. Una pareja de científicos, Tom meteorólogo, Dundy (Eduard Farelo) recibe ya la conoce) y la tendenc tendencia ia a los golpes de (Ivan (Iva n Ben Benet) et) y Hel Helga ga (Vi (Victo ctoria ria Pagès),en Pagès),en cri cri-- la vis visitade itade Buc Buckk (Fe (Ferra rran n Vil Vilajo ajosan sana),un a),un ado ado-- ef efect ecto. o. Noes quela int intrig rigaa delepis delepisodi odio o ame ame-chat gay. gay. ric ricanoo anoo la dec decisi isión ón fin final al de Tomen el epi episosois senti sentimental mental y laboral laboral,, descu descubren bren que sus lescente al que ha conocido en un chat horas pueden estar contadas a causa del El virus de la cuarta historia (la más contro- dio alemán no sean creíbles, pero huelen a virus Ébola. Episodio americano: Lake Mar- vertida) no es tanto el sida sino el anhelo de mecanismo forzado para crear un suspense burg, Pensilvania, 1981. Una familia funda- contagio, en un cóctel explosivo de pulsión un tan tanto to tra trampo mposoen soen el pri primercasoy mercasoy com como o mentalista mental ista —Nancy (Vicky Peña), Walter de muerte, liberación y vínculo amoroso. (A “pu “puntode ntode gir giro”,cuand o”,cuando o el int interé eréss com comenz enzaa(Oriol Genís) y Claire (Fina Rius)— recibe el decidir, igualmente, si su final es crónica o ba a decaer, en el segundo. Hablando de
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giros, tampoco convence el radical cambio de tercio de Dundy, que pasa en un pispás de la sensatez erótica al abrazo nihilista. Abunda,, sin embarg Abunda embargo, o, lo bueno,lo brillan brillante, te, lo poderoso: la narración que fluye y que te atrapa. Y los personajes inesperadamente complejos, como el padre Gabriel, que de entrada parece un malo de El código Da Vinci yy acaba revelándose (bravo para Santi Vinci Pons) como un racionalista sediento de absolu so luto to:: Cl Clua ua setomamuy enseri enserio o (c (cos osaa ra rara ra enun aut autor or “mo “moder derno” no”)) el asu asuntode ntode la rec recuuperación de su fe, y es tan bello como sereno el enf enfoqu oquee de su ent entend endimi imient ento o fin final al con Acanit, Acani t, pese a que la peripecia peripecia psicotró psicotrópica pica del episodio hacía temer una degradación farsesca. farse sca. Tambié También n está estupe estupendamen ndamente te pautad pau tado o el diá diálog logo o ent entre re el jov joven en Gab Gabrie riell y el sardónico sardón ico y agoniz agonizante ante Tom (impe (impecable cable Ivan Benet), o la escena, que recuerda al mejor Patrick Marber, en la que asistimos a dos invocaciones simultáneas: el sacerdote que intenta recuperar su línea directa con Dios mientras el joven Buck (hiperenergético Ferran Vilajosana) envía un mail a su diosa, dios a, terre terrenalme nalmente nte encar encarnadaen nadaen KylieMinogue. Otros grandes momentos de la segunda parte, más ceñida y rotunda que la primera (quizás porque Clua puede volar ahí sin el lastre de lo expositivo) son la ya citada “visita astral” de la misionera y el intercambio de revelaciones (un desinhibido homenaje a Harper y Mr. Lies en Ángeles en América) Améric a) y, poco más tarde, el viaje último de las dos hermanas al lago recreado en la habitació habit ación n delhijo: hermo hermosa sa metá metáforay foray conmovedor mano a mano de Vicky Peña y Fina Rius. Marburg Marburg ha ha sido una de las sorpresasde pre sasde la tem tempor porada ada.. Est Estáá pid pidien iendo do a gri gri-tosun transfer transfer al al Marí Maríaa Guer Guerrero—de rero—de Naci Nacioonal a Nacional— y tampoco creo que tarde su estreno extranjero. No conocía el trabajo ante an terio riorr deGuil deGuille lem m Clu Clua, a, pe perono rono vo voyy a pe perrderme lo que haga a partir de ahora. ț
Dirección de Rafel Marburg, de Guillem Clua. Dirección Duran.. Teatr Duran Teatre e Naciona Nacionall de Catalu Cataluña. ña. Barcel Barcelona. ona. Hasta el 20 de junio. www.tnc.cat. www.tnc.cat.
DIOSES Y MONSTRUOS Por
Carlos Boyero
Realidad con arte La serie The Wire, como Los Soprano, ha demostrado que las esencias del mejor cine también son posibles en la televisión
C
(poca) que se ha estas series pertenecen exclusivamente a la dad dad,, a com comple plejid jidad,a ad,a mat matice ices,a s,a lu lucesy cesy so somm- zont zontes es estu estudiand diando o las clave clavess de la econ economía. omía. encontrado encontrad o al azar, hacie haciendo ndozapgeogra grafíadel fíadel DVD DVD,, a losinol losinolvid vidabl ables es atr atraco aco-- bras, a humanidad. Dudo que tanta veraciThe Wire , como las auténticas obras de zap- geo merece que se escri escriban ban libros sobre ping o siguiendo recomendacio- nes hasta el amanecer de una droga que no dad le haga mucha gracia a los políticos. arte, merece Aunque ue no se manchen de sangr sangre, e, son los ella ella.. Acaba de apare aparecer cer uno instr instructiv uctivo o y ness fia ne fiable bles, s, con un cap capítu ítulo lo de se deja consumir en raciones pequeñas ni Aunq jefess de la corrupción. corrupción. Los educa educadores dores siensien- excelente. La brillante introducción de DaThe Wire en Wire en tel televi evisió sión. n. La pru pruden dencia cia lesim- para hacer simplemente llevadero un tiem- jefe pone pon e no dar lim limita itada da opi opinió nión n de lo que han po vac vacío. ío. Deb Debes es de ten tenerl erla a sie siempr mpre e a man mano, o, ten debilidad por la cuarta temporada. Los vid Simon, bendito coautor de la serie, no visto vis to y oíd oído o fug fugazm azmen ente te cua cuandoen ndoen un una a reu reu-- se con convie vierte rte en un una a ne neces cesida idad d y un una a pas pasión ión.. periodistas del papel se identifican con el tiene desperdicio. Ni la magnífica reflexión nión los adorad adoradores ores incon incondicio dicionale naless de esta No pro provoc voca a res resaca aca y te sig sigue ue sor sorpre prendi ndiend endo o incie incierto rto futu futuro ro que pron pronostic ostica a la quin quinta, ta, que de Rodrigo Fresán. Tampoco la entrevista seriepuedenpasarseembelesadashoras seriepuedenpasarseembeles adashoras de- y deleitando deleitando cuando vuelves a revisa revisarla rla del demencialmente sigue sin estar disponible que le hace Nick Hornby a Simon, incluida batiendocon bati endocon gozo gozosa sa comp complici licidad dad sobresus pers personaj onajes,memoriz es,memorizandoseandosecuencias, repitiendo diálogos, exhibiendola bie ndola fas fascin cinaci acióny óny el éxt éxtasi asiss que solo sol o pu puedeprov edeprovoc ocar ar elamor.Los in iniicialmente cialme nte escép escépticos ticos o descon desconcertacertados, los que no han descubierto todavía huell huellas as de milagr milagro o artístico en unos adoles adolescente centess negro negross que trapichean con droga en la calle y expresan con jer jerga ga ine inente ntendi ndible ble cos cosas as muy raras mientras que las escuchas de la policía les acechan, también bié n acc accede ederána rána eseimpaga eseimpagableplableplaneta net a y se ena enamora morarande rande The Wire al Wire al consta con statar tar que no es un pro produc ducto to que se pueda consumir de vez en cuando cuand o siguie siguiendo ndo una program programaación telev televisiva, isiva, con doblaj doblajes es impos imposiibless (ca ble (casi si tod todos os rec rechin hinan,no an,no te cre crees es nada, desprenden falsedad y aroma a teat teatro ro malo malo,, peroson espe especial cialmenmente grot grotesc escos os cua cuandoponenvoces ndoponenvoces en español a joveznos delincuentes de Baltimore), con pausas publicitarias, sin conti continuidad nuidad.. Admitirá Admitirán n que la estructura, la complejidad y la atmósfera de The Wire tienen mucha másrelacióncon másrelac ióncon tod todo o lo queasoc queasociaiamos al gran cine que con la imagen ancestral de una serie de televisión. Probablemente, porque el cine nos ha aco acostu stumbr mbradoa adoa la cal calidad idad,, mie mienntras que identificamos las series de televis tel evisión ión conla med medioc iocrid ridad, ad, lo rutinario, la fórmula, lo previsible, lo prescindibl presc indible. e. La produc productora tora HBO ha cambiado cambiad o las reglas reglas.. Ha demos demostrado trado Imagen de The Wire, la serie creada por David Simon en 2002 basada en su experiencia durante 13 años como cronista de sucesos en The Baltimore Sun. quelas ese esenci ncias as del mej mejor or cin cine e tam tam-bién son posibles en un medio coprimero ro al últim último o capít capítulo,cuando ulo,cuando creessa- en lastiend lastiendas as de est este e paí país, s, aun aunquetodoslos quetodoslos esta arries arriesgada gada decl declaració aración n de princ principios ipios:: mo la tel televi evisió sión,que n,que loscere loscerebro bross máspode- prime rosos ros os en el art arte e de nar narrarhistor rarhistoriasmedian iasmediante te bérte bértela la de memor memoria. ia. No No hay que prest prestársel ársela a adict adictos os como Dios manda manda la hayan pirateapiratea- “La pauta que sigo para intentar ser verosíimágenes, los guionistas con imaginación y a nadie, pero sí regalársela a las personas do hace tiempo en Internet o adquirido en mil desde que empecé a escribir ficción es talento, talen to, los actore actoress convi convincen ncentes tes y magné magnétiti- que quieres. Hay que guardarla con mimo, sus viajes al extranjero. Yo no puedo elegir. muysenc muysencill illa: a: quese jod joda a el lec lectormedio tormedio”. ”. ț cos pueden pueden ofrecer ofrecer aho ahora ra lo mejor de sí com como o las obr obras as com comple pletas tas de Sha Shakes kespea peare re y Todas me dejan feliz y noqueado. Pero sí mismos en un formato que a lo largo de su de Steve Stevenson nson,, las mejor mejores es pelícu películas las (casi to- tengo mis personajes personajes favoritos. No es su The Wire. 10 dosis de la mejor serie de la televihistor his toria ia ha hec hecho ho lossufic lossuficien ientesmérit tesméritos os pa- das son buenas) de Ford y de Wilder, las protag protagonista onista,, el altern alternativame ativamente nte admira- sión. Intro Introducció ducción n de David Simon. Relato de ra ser despreciado. cancionesde canc ionesde Sinat Sinatra, ra, los disco discoss de Coltr Coltrane, ane, bley nec necio io McN McNult ulty. y. Sie Siempreestoydesea mpreestoydeseann- Georg George e Pelec Pelecanos. anos. Textos de Rodri Rodrigo go Fresán Fresán,, queaparezca ca Omar Omar,, esehomose esehomosexua xuall tan Nick Hornby, Jorge Carrión, Es probable que si las cinco temporadas los recu recuerdos erdos maravillosos, maravillosos, esas cosas que do queaparez Carrión, Iván de los Ríos, de The Wire o Wire o las seis de Los Soprano tuvie- con un poco de suerte te van a acompañar viril, ese Llane Llanero ro Solitar Solitario io con principios, Marc Pastor, Margaret Talbot, Marc Caellas, Soran prog programac ramación ión fijaen el inig iniguala ualable ble espa espa-- hasta el último día. ese atracado atracadorr con intran intransferib sferibles les código códigoss de phie Fuggle. Errata Naturae. Madrid, 2010. 238 ciode un una a sa salade lade cin cine e unpúbl unpúblic ico o tanmed tanmediaia Y, por supu supuesto esto,, cada espe espectado ctadorr tiene honor. Siento tanta simpatía como piedad páginas. 21,90 euros. namente selectivo como fiel decidiera que su temporada favorita en esta obra maestra porBuble porBubles, s, el con confid fident ente e yon yonquiexpert quiexperto o en compensa comp ensa salir de casa y pagar pagar una entr entrada ada queno se hapermi hapermitid tido o elmínim elmínimo o des desfal falle lecici- super supervivenc vivencia. ia. Y me encan encanta ta la intel inteligenc igencia, ia, The Wir Cuatro o tempo temporadas. radas. DVD. Warner Warner.. Wire. e. Cuatr para compartir compartir con otros espe espectador ctadores es el mient miento. o. Los camel camellitos litos calle callejeros jeros sienten la luc lucide idez, z, la ele elegan ganciay ciay el tem templedel pledel det detecec- www.hbo.com/the-wire/index.html. Los Soprano retratado o en cuerpo cuerpo y alm alma. a. tiveLeste tiveLesterr Frea Freamon mon.. Y me da muc mucho ho mied miedo o (1999-2007). Colección completa. DVD. Warner. placer de ver en la gran pantalla estas obras que les han retratad Stringe ngerr Bel Bell, l, el nar narco co que amplía hori- www.hbo.com/the-sopranos/index.html extraordinarias. A falta de ese experimento, Tam Tambié bién n losmader losmaderos.Todoshuele os.Todoshuelen n a rea realili- Stri ONOZCO GENTE
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