Vivir Sin Miedo Descubra Una Nueva Manera de Vivir Sin Panico, Fobias, Miedos o Ansiedad - Enrique Suarez

VIVIR SIN MIEDO

VIVIR SIN MIEDO Descubra una nueva manera de vivir sin pánico, fobias, miedos o ansiedad

a mis hijos Guille, Kenia, Marime y a todos los que me ayudaron en el camino.

Suárez, Enrique Guillermo Vivir sin miedo : descubra una nueva manera de vivir sin pánico, fobias, miedos y ansiedad. - 1.a ed. - Buenos Aires: Lumen, 2013. 312 p.; 22x15 cm. ISBN 978-987-00-1017-3 1. Superación Personal. I. Título CDD 158.1

Diseño de tapa: Guillermo Suárez (h) - [email protected] Diseño y diagramación de interior: Guillermo Suárez (h) Fotografía: Martín Amestoy - [email protected] Diseño de ilustraciones: Lucas Masaro – www.megustatuchaqueta.com.ar

No está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni su tratamiento informático, ni su transmisión de ninguna forma, ya sea electrónica, mecánica, por fotocopia, por registro u otros métodos, ni cualquier comunicación pública por sistemas alámbricos o inalámbricos, comprendida la puesta a disposición del público de la obra de tal forma que los miembros del público puedan acceder a esta obra desde el lugar y en el momento que cada uno elija, o por otros medios, sin el permiso previo y por escrito del editor. © 2005, 2006, 2008, 2009, 2010, 2013 por el autor. © Editorial y Distribuidora Lumen SRL, 2013

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PRÓLOGO Del DR. GAYUBO

Vivir sin miedo es el anhelo de todos nosotros y escribir un prólogo para un libro tan estimulante como éste, es para mí un honor y una gran satisfacción. El autor, entre sus agradecimientos, comenta que el libro me encantó. Así es, me encantó y me entusiasmó, a tal punto que no pude abandonar su lectura. Quería llegar al final porque fue escrito desde su experiencia y contagia por su sencillez y sinceridad. Más allá de algunos entusiasmos donde todo se puede, nos basta con saber que si bien no todo, mucho se puede; y el doctor Suarez nos invita a intentarlo con maniobras a nuestro alcance. Quiere y lo resalta en su carta de presentación: mostrarnos que es posible vivir sin miedos y con alegría. Evidentemente el autor deseaba abrir las puertas del consultorio, salir a la comunidad y llegar a muchos para aliviarles el sufrimiento. Hablando del hombre de las cavernas y su aislamiento, nos cuenta: aquél aprendió que en grupo estaba más seguro. Mi maestro, García Badaracco, nos advierte que cuando los pacientes se reúnen, el grupo facilita la convivencia, la posibilidad de pensar, de resolver conflictos y el aprendizaje recíproco. Que el intercambio de experiencias enriquece a todos. En el grupo encuentran límites seguros que contienen su destructividad fantaseada; pueden empezar a desprenderse de las redes de interdependencia patológica, tanto internas como externas, que les daban una engañosa vivencia de seguridad. Una nueva oportunidad para que, quien sufre por sus miedos, pueda aprovechar sus potencialidades virtuales detenidas. Si bien sabemos por experiencia que del dicho al hecho hay un gran trecho, las explicaciones del doctor Suarez y las recetas que con tanto énfasis nos brinda, permiten que, abandonando el aislamiento y la impotencia, nos agrupemos y nos apuntalemos con la esperanza, que ya es curativa, de lograr algo bueno por nosotros. Para desarrollar su tarea, el trabajador en Salud Mental se mueve en varios ámbitos: el de la prevención primaria, el servicio de Salud Mental en el hospital general, el hospital psiquiátrico, los servicios intermedios, el consultorio con la psicoterapia individual, vincular, grupal, familiar, multifamiliar y esta nueva apertura que permite extender la ayuda a mucha más gente. Ámbito que empezó con los grupos de Alcohólicos Anónimos y sigue expandiéndose en estos grupos de Autoayuda. Tanto a Alcohólicos Anónimos como a estos grupos, arriban seres que sufren y que no llegan al consultorio ni al hospital y pacientes en tratamiento, pero necesitados del grupo para saltar del dicho al hecho. Nosotros también tenemos adentro un hombre de las cavernas que se rebela contra los límites razonables y nos cuesta muchos esfuerzos contenerlo. El doctor Suarez nos da una buena mano para lograr esa resistencia que nos permita ganar confianza en nuestra lucha contra los miedos arcaicos. Leerlo será un provechoso placer.

Dr. Jesús Felix Gayubo Médico Psiquiatra y Psicoanalista.

PRÓLOGO Del AUTOR

Siempre quise escribir un libro y nunca lo hice, también deseaba llegar a personas con necesidades, brindarme y ayudarlas y si bien lo hice, no fue lo suficiente para mi deseo, siempre encontraba razones que lo justificaran y postergaba todo para “algún día” y en marzo del 2000, el “algún día” llegó y comencé a cumplir mis sueños. Propuse a un paciente crear un Grupo de Autoayuda, para tratar las dificultades que tenían personas como él, con Ataques de Pánico, Fobias, Ansiedades y Miedos. Así nació “El Fobi”, un “club” muy especial que en su primera vez, reunió a cinco personas. Al cabo de diez años, llegamos gratuitamente a cientos de personas. Nos reunimos semanalmente en varias ciudades de Argentina y desde el 2006, con participantes de otros países en el chat del Fobi sin que hayamos hecho nada especial para que así ocurriera. La experiencia fue y es hermosísima y la gratificación emocional inmensa. Me faltaba el libro, y esto que hoy ustedes tienen en sus manos es lo que logré. Unas pocas páginas al comienzo contienen respuestas a las preguntas más comunes que se formulan sobre el tema y otras más tratan sobre los conocimientos y técnicas que recomendamos para superar el problema y mejorar la calidad de vida. Su resultado se refleja en las cartas que fueron escritas por personas que nos contaban de sus experiencias y progresos, y que incluimos al final de cada capítulo y en la sección “Cartas Recibidas”. Algunas páginas de la sección “Cuentos Contados” fueron escritas por mí a partir de ideas originales, otras a partir de ideas “prestadas” por autores anónimos. Otras más me llegaron por Internet sin que haya sido posible identificar al autor. Otras páginas contienen pensamientos o frases que utilizamos en las reuniones como herramientas para “disparar” reflexiones que luego se traducen en cambios personales y crecimiento espiritual. Reunir toda esta experiencia, entre dos tapas, no sé cómo se denomina, y no creo que importe mucho. Pero al hacerlo me guía un solo objetivo: “mostrarles que es posible vivir sin miedos, con alegría y además mejorar la calidad de vida”. Dr. Enrique Guillermo Suárez

AGRADECIMIENTOS t%S3PCFSUP7BMMFKPT .ÏEJDP$MÓOJDP QPSTVTBQPSUFTZTVHFSFODJBTFOUPEPFMUFYUP t%S0TWBMEP.BJOBSEJ .ÏEJDP$BSEJØMPHP QPSTVTBQPSUFTFO$BSEJPMPHÓB t%S 3PCFSUP 2VBUSPDDIJP .ÏEJDP (JOFDPPCTUFUSB QPS TVT BQPSUFT FO Reproducción. t%S4BOUJBHP#PTDIFSP .ÏEJDP"OFTUFTJTUB QPSTVBQPSUFTFO3FTQJSBDJØO t-JD.BSJBOB%B$POUP -JDFODJBEBFO-FUSBT Z-JD.BSJFMB0MNPT 1TJDØMPHB Clínica) por sus observaciones, sugerencias y correcciones al texto original. t%S3PCFSUP-FJCPĊ .ÏEJDP-BCPSBM QPSTVTPCTFSWBDJPOFT DPSSFDDJPOFTBMUFYUP por su permanente estímulo y aliento. A su entusiasmo se debe en gran medida el haber alcanzado la meta. t4SB$PDB.JOHP7EBEF-FJCPĊQPSTVTPQJOJPOFTEFMFDUPSBJODBOTBCMF t(VJMMFSNP (VJMMF

.BSÓB&VHFOJB ,FOJB Z.BSÓB"NFMJB .BSJNF

NJTUSFTIJKPT a Guille debo el diseño de la Tapa y del personaje que ilustra el texto, junto a Lucas Mascaro, su compañero y amigo; también el “paso” a computadora de los esquemas y dibujos; y a todos, en particular a Marime y Kenia, por sus aportes a la diagramación y correcciones al texto, por sus gestiones para inscribir este trabajo y por su contagioso entusiasmo para concretarlo. t"UPEPTMPTNJFNCSPTEFi&M'PCJwZBMPTRVFFTDSJCJFSPODBSUBTZNFBMFOUBSPODPO sus testimonios a emprender este camino y desde entonces por su estímulo y apoyo incondicional. t " UPEPT BRVFMMPT RVF MFZFSPO DBQÓUVMPT BJTMBEPT Z NF BMFOUBSPO B DPOUJOVBS en particular a Marilina, Andrea y Sandra, quienes lo leyeron completo, cuando aún no había recibido ningún tipo de tratamiento y estaban aterradas, sin saber qué les pasaba, sus palabras fueron, más o menos estas: “¡se puede”!, ¡la vida es hermosa!”. t "M %S 3PRVF $BSQJP RVJFO BQPSUØ BUJOBEBT TVHFSFODJBT Z TF EJTQVTP B BDPNQB ñarme en la aventura y especialmente al Dr. Félix Gayubo, quien además de brillante psiquiatra y psicoanalista, es escritor premiado. Él me entusiasmo para seguir adelante porque el libro “le encantó”, y esa opinión viniendo de quien viene es para mí, muy pero muy valiosa. t1BSBUPEPTFMMPTMI GRATITUD por ayudar a ponerme en el umbral de una nueva etapa de mi vida. t"UPEPTBRVFMMPTRVFIJDJFSPOQPTJCMFRVFMB1SJNFSB&EJDJØOTFBHPUBSBFONFOPTEF cuarenta días y nos alentaron con sus comentarios para a ir “por más”. t : B MPT RVF USBTNJUJFOEP EF iCPDB FO CPDBw IJDJFSPO QPTJCMF BMDBO[BS MPT ejemplares, sin que nadie mas nos apoyara.

Guillermo Suárez

DEL AUTOR

Dr. ENRIQUE GUILLERMO SUÁREZ - MÉDICO CIRUJANO Universidad Nacional de Córdoba(1971) - MÉDICO PSIQUIATRA Universidad Nacional de Bs.As. ( 1977) - MÉDICO LEGISTA Universidad Nacional de Bs.As. (1977) - Especialista JERARQUIZADO en PSIQUIATRÍA Y PSICOLOGÍA MÉDICA Colegio Médico de Pcia. de Bs.As. (1987) -Especialista CONSULTOR en PSIQUIATRÍA Y PSICOLOGÍA MÉDICA Colegio Médico Pcia. de Bs.As. (2000) - Fundador del Grupo de Autoayuda “EL FOBI” (2000) con sede en varias ciudades de Argentina.

ÍNDICE PARTE I INTRODUCCIÓN t¿Qué nos pasa? t¿Por qué nos pasa? t¿Por qué a mí? t¿Cómo superarlo? tDecálogo del Fobi tDisfraces del miedo tRecomendación muy importante t“Estoy luchando y descubriendo que se puede... una soga llega al fondo del pozo...” t“Si piensas que...”

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PARTE II : INFORMACIÓN Y TÉCNICAS Capítulo I LA HERMANDAD tEscala de autoevaluación tHabía una vez Capítulo II ANATOMÍA DEL MIEDO t¿Qué es el miedo? tComo una nuez tLa materia gris tSomos millonarios t¿Resistentes o Vulnerables? tHacer gimnasia con el cerebro t¿Cómo funciona todo esto? tUn viaje en el tiempo tAlgo nos fue quedando tAhora que ya somos humanos t¿Cómo funciona el miedo? t¿Qué les ocurre a las personas que sufren ataques de pánico o fobias? t¿En qué consiste este desorden? t¿Y esta anormalidad se puede corregir? t¿Cómo hacerlo? tNo somos monos por unos pocos genes tAclaraciones tHabía una vez

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Capítulo III LOS NEUROTRANSMISORES tMensajeros en cadena tHaciendo contacto tPara la vida o para la muerte tLa energía nerviosa t¡Están identificados!... ¡sigue la búsqueda! tLa farmacia interior t¿El huevo o la gallina? tUsted elige lo que produce tLos tóxicos emocionales tLas endorfinas

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Capítulo IV LAS ENDORFINAS t¿Qué son las endorfinas? t¿Cómo fabricar endorfinas?

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Capítulo V EL ESTRÉS t¿Estrés o Stress? tEn búsqueda de una definición tAgentes Estresores tLos Estresores producen: Estrés tEl Estrés depende de un eje tEfecto dominó tPreguntas del millón tSignos precoces de Estrés elevado tLo popular y lo biológico : Humor en serio t¿Cómo disminuir el nivel de Estrés? tLas Siete Reglas tReflexión finaL

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Capítulo VI LOS MANDATOS tEl elefante tUn mandato es una orden tLa educación equivocada tLa educación correcta tSe graban tal como llegan tLos más sutiles: se copian tGrabar de nuevo t“Ser uno mismo...”

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Capítulo VII LA HISTORIA PERSONAL. t¿Qué es la historia personal? tEs única e irrepetible

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tTestimonios tHilo invisible tAl perdonar... modifico

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Capítulo VIII SUBIENDO LA MONTAÑA t“Un poema sin rima”... “La Grieta”

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Capítulo IX EL DIÁLOGO INTERIOR t¿Qué es el diálogo interior? t¿Cómo puede ser? tPensamientos feísimos tCuatro tipos tAsí soy... así es tCómo contrarrestar los pensamientos negativos tEmpresario cinematográfico tEl poder de las palabra t¿Y entonces?... las autoafirmaciones tHabia una vez

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Capítulo X AUTOESTIMA t¿Qué es la Autoestima? tAutoestima Baja tMi máquina de escribir tConsejos prácticos para comenzar a cambiar t¿Dale, juguemos a ser...? t“Hoy soy una persona más segura de sí misma... aprendí a perdonar y a perdonarme... no soy la misma... soy mejor”

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Capítulo XI FRACCIONAR Y DESMENUZAR tLa película t¿Qué son los pensamientos automáticos? tLa filmación tHabía una vez

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Capítulo XII RESPIRACIÓN y RELAJACIÓN I “RESPIRACIÓN” tSistema Respiratorio tAnatomía del sistema respiratorio tFisiología del sistema respiratorio tPiloto automático tDe guardia las 24 hs. y... con escáner tDejar de respirar... voluntariamente tTodo se acelera

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tRespiración y miedo tEl problema aporta la solución tResumiendo tComo lograr respiraciones profundas

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II “RELAJACIÓN” tYoga y otras prácticas tMeditación tOración tOtras Técnicas tMi Propuesta: “ECM”

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Capítulo XIII FABRICAR LOS SÍNTOMAS, MANEJARLOS Y CONTROLARLOS t¿Cuáles son? tCírculo vicioso tRomper el círculo tRecomendar tProvocar los síntomas tExposición interoceptiva cardiovascular tExposición interoceptiva respiratoria tExposición interoceptiva neurovegetativa tLa clave tLa verdad sea dicha tConclusión t“Una vez dijo como al pasar y fue ¡Maravilloso!, ¡me sentí liberada!”

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Capítulo XIV AFRONTAR Y LIBERARSE tFrente a la situación tAntes... ahora t¿Cuándo lo haremos? t¿Cómo lo haremos? tHabía una vez

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Capítulo XV LOS PSICOFÁRMACOS tPreguntas y respuestas. tComentario final

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PARTE III: CARTAS RECIBIDAS t“Che doctor” t“Quizás esta sea la ultima vez” t“Nunca falta ese duende que recorre el salón” t“Pude manejar la situación...y esta vez ¡gané yo!” t“Sentís por fin esa paz que tanto buscabas”

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PARTE IV: CUENTOS CONTADOS t“La Señora. de las galletitas” t“La locura quiso jugar a la escondida” t“Los tres viejitos invitados a cenar” t“Las piedras preciosas” t“Las Bellotas” PARTE V: PENSAMIENTOS / FINAL / BIBLIOGRAFÍA tPensamientos para reflexionar tFinal tArsenal Atómico - Botiquín de Emergencia t¿Cómo salir de una Crisis inminente? t“Mensaje para aquellas personas que asisten a alguien que presenta un Ataque de Pánico o una Crisis de Ansiedad” tPlanilla para anotar “Mis” logros t¿Se acuerdan? tBibliografía tComentarios de lectores

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PARTE I Introducción

Vivir sin Miedo | Introducción

¿QUÉ NOS PASA? Con esta pregunta solemos iniciar nuestras charlas dirigidas a todo público. En ellas tratamos de exponer diversas formas en que el miedo se expresa o manifiesta dando lugar a diferentes clases de síntomas. Estos, agrupados, nos permiten dar nombre propio a formas clínicas particulares, lo cual reviste importancia, pues permite al médico especialista determinar tratamientos específicos según la forma clínica que adopten los síntomas. En todo momento destacamos un hecho central: el denominador común de este tipo de dificultades es el miedo. Los síntomas son los disfraces que el miedo adopta. TRASTORNO DE PÁNICO Cuando el miedo adopta la forma de crisis que se presentan de manera inesperada, en lugares y circunstancias impensados, y acompañadas de las siguientes manifestaciones, constituyen lo que se conoce como Trastorno de Pánico (TdeP): Síntomas físicos: Aumento de las pulsaciones Aumento de la frecuencia respiratoria Sudoración de manos, cara y cuerpo Palpitaciones Sensación de opresión en el pecho Sensación de asfixia o sofocación Sequedad de boca Necesidad de orinar Inestabilidad en la marcha o mareos Síntomas Psíquicos: Temor creciente hasta llegar al paroxismo del miedo: el pánico Sensación de pérdida del control de sí mismo Sensación de muerte inminente Sensación de que se va a enloquecer Ansiedad y desesperación Deseos de correr en busca de auxilio o refugio

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¿Qué nos pasa?

Todos estos síntomas no se presentan juntos, en forma masiva, sino que se van agregando de manera gradual, durante unos diez minutos desde el comienzo de la crisis. Por lo general, no siempre se presentan todos. Cuando aparecen por lo menos cuatro de ellos, podemos decir que esa persona sufre una Crisis de Pánico. La crisis que se desarrolla con todos los síntomas, es una crisis completa. La que se desarrolla con sólo algunos de ellos, es una crisis parcial. De cualquier modo, entre el comienzo y el final de la crisis transcurren entre 15 a 20 minutos y sólo deja como consecuencia un cansancio muy grande y una sensación de frustración, con miedo a tener nuevamente miedo como el que se acaba de experimentar. Suele, además, hacerse una “asociación” entre la crisis y las circunstancias o el lugar donde ocurrió, por lo que en lo sucesivo se tendrá temor de entrar en un supermercado si la crisis se presentó allí o de hacer una cola si la crisis se produjo mientras esperaba en fila para ser atendido. Esta asociación es caprichosa, es decir, carente de razonabilidad, pero así ocurre. Es común también que estas crisis determinen una serie interminable de estudios clínicos, neurológicos, de laboratorio, o especiales como una tomografía o una resonancia magnética nuclear de cerebro, entre otros, que para frustración de quien tuvo la crisis, arrojan un resultado normal. Decimos para frustración, porque todo aquel que pasó por una crisis de pánico desearía tener “algo”, y si ese algo se pudiera “operar”, mejor aún: “cualquier cosa es preferible a repetir la crisis.” La normalidad física determina otra frustración, pues los médicos suelen despedir al paciente diciéndole: “Quédese tranquilo, porque es todo nervioso”, sin saber que sus palabras no llevan consuelo, sino más agobio, si ello fuera posible. Cuando la Crisis de Pánico se repite, entonces hablamos de Trastorno de Pánico. AGORAFOBIA Lo expuesto trae aparejada una nueva experiencia psicológica, por demás desagradable, que es la sensación de vulnerabilidad, desprotección, desamparo, desasosiego y miedo creciente acompañado de inquietud y ausencia de paz. Como consecuencia se suma la necesidad imperiosa de encontrar soluciones inmediatas o vías de escape de la situación, o imaginar las posibles vías de lle-

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gada de auxilio, libre de obstáculos, ante la remota posibilidad de que la crisis se presente nuevamente. Este miedo a la posibilidad de una nueva crisis y la necesidad de sentirse protegido y seguro ante semejante amenaza es lo que se conoce como Agorafobia. Este término médico en un principio se utilizó para expresar “rechazo o intolerancia o miedo paralizante a los espacios abiertos”, pues en griego “ágora” se le llamaba a la plaza o mercado. Pero en la actualidad se lo usa para identificar al miedo a estar solo y a la necesidad de evitar aquellos lugares donde no se tengan vías de escape fáciles o no exista posibilidad de auxilio inmediato ante la posibilidad de que se presente una Crisis de Pánico. En forma gradual, entonces, comienza a cambiar la vida de la persona afectada (para mal, por supuesto), quien experimenta en “carne propia” el miedo que debe sentir una gacela frente a un león en medio de la selva o la insignificancia que debe sentir una hormiga ante la “nube tóxica” del aerosol de un jardinero, o la desprotección que debe sentir un cachorro cuando su mamá se aleja y lo priva de cuidados y atención. El cambio consiste en una modificación de costumbres y de hábitos. La persona afectada comienza a experimentar: Miedo a estar sola en la calle o en espacios abiertos. Al agravarse, este miedo lleva a evitar los lugares que no sienten como seguros, inclusive el círculo de restricciones se va estrechando hasta el punto de tener miedo en la propia casa (Nota: una paciente permaneció 20 años sin poder ir más allá del baño contiguo a su cuarto. Dentro de su propia casa, no podía ir a la cocina ni al living). Desamparo que lleva a la búsqueda de personas u objetos que den sensación de “seguridad”: esposo o hermanos o padres (familiares directos capaces de proteger) o “botellitas” de agua, chicles, medallitas, estampitas, medicamentos, teléfonos de médicos amigos o de guardias médicas, entre otras muchas cosas. (Nota: una paciente necesitaba despertar a su esposo durante la noche para que la acompañara al baño que se encontraba contiguo al cuarto matrimonial). Determinación previa de posibles vías de escape o de arribo de pronto auxilio en caso de que la crisis se presente, la persona evita los lugares cerrados o se coloca cerca de una puerta o ventana o evita aviones, trenes, subterráneos,

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¿Qué nos pasa?

colectivos, lugares con mucha gente, embotellamientos de tránsito, túneles, puentes o reuniones sociales. Es decir, todos aquellos lugares que puedan presentar dificultades para alejarse en busca de un sitio seguro. Como contrapartida, sólo encuentra momentos de paz en lugares donde la posibilidad de auxilio es inmediata, como por ejemplo cerca de la guardia de un hospital (Nota: es lo que hacía un paciente que para obtener algo de paz, se instalaba con su esposa a tomar mate en la vereda de la guardia médica del hospital local y allí pasaba horas y horas, pues su infierno comenzaba cuando debía alejarse para dormir en su casa. Con él comencé “El Fobi”). ¿Cuáles son las situaciones o lugares que evitan las personas que tienen Agorafobia? - Estar sola en su propia casa - Bañarse estando sola en casa - Salir sola - Salir sola caminando (aunque puede hacerlo en vehículos) - Conducir alejado del cordón de la vereda derecha (para poder estacionar en caso de incremento del tránsito) - Concurrir a supermercados, shoppings, cines, teatros, fiestas - Hacer colas - Discutir - Tener que decir que NO - Aviones, trenes, subterráneos, ascensores modernos (cerrados), ómnibus de larga distancia, escaleras mecánicas, puentes, túneles. La asociación entre Trastorno de Pánico y Agorafobia es lo usual. Es raro observar ambos cuadros en forma separada. FOBIA ESPECÍFICA Existen casos en que síntomas como los que se observan en los Ataques de Pánico se presentan sólo ante la presencia de algo: un objeto, situación, animal o persona, que se constituye entonces en el objeto generador de fobia, es decir, de un sentimiento de profundo rechazo y aversión con intenso miedo y terror. Se lo denomina objeto fobígeno específico. 28


Los síntomas de la Fobia son los ya mencionados para el Trastorno de Pánico. Según las personas, son de intensidad creciente dependiendo del tiempo que se demore en alejarse del objeto o situación generadora de la sintomatología. No siempre se presentan todos los síntomas y a veces son siempre los mismos. Sin importar su intensidad, ni su calidad, ni su cantidad, nadie que los haya vivido desea exponerse nuevamente a ellos, por lo que es habitual evitar el objeto o situación fobígena y para ello no existe límite de esfuerzo o gasto de energía: si hay que subir 10 pisos para evitar el ascensor, se va por la escalera; si hay que caminar más cuadras para evitar el gato que se sabe está allí, se las camina. Las situaciones o hechos o cosas capaces de generar estos síntomas dependen de cada persona y de su historia personal sin que exista, en la mayoría de los casos, una explicación comprensible que torne lógica la reacción. En la experiencia de la consulta o en los relatos de “El Fobi”, hemos escuchado que tanto puede generar fobia: un botón blanco de cuatro agujeros, como un caracol, el viento, una tortuga o una mariposa. Todo esto forma parte de lo que llamamos los “disfraces que adopta el miedo”, sobre los cuales hablaremos más adelante. TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA En este trastorno no se presentan los síntomas que ya describimos para el Trastorno de Pánico o la Fobia, sino que existe una sensación más difusa y menos intensa, pero más permanente. ¿En qué consiste? Es una sensación vaga de que algo malo o feo o desagradable “me está por ocurrir” y ello “me da temor, me mantiene inquieto y en zozobra”. Esto se conoce como: ansiedad anticipatoria. Suele comenzar “al poner los pies en el suelo al levantarme a la mañana y sólo cesa al levantarlos del suelo cuando me acuesto por la noche”, tal como lo expresó un paciente. Existen otros tipos de trastornos donde interviene la ansiedad, como el Trastorno Obsesivo Compulsivo o el Síndrome de Stress Postraumático. No nos detendremos en ellos pues son cuadros especiales que tienen otro tipo de enfoque y tratamiento.

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¿POR QUÉ NOS PASA? Numerosas hipótesis intentan explicar las causas por las que, sorpresiva e inesperadamente, una vida que hasta ese momento se desarrollaba en forma normal, sufre un cambio tan rotundo como el que ocurre luego de haber sufrido la primera crisis de pánico. O de qué manera un temor a algo fue agravándose hasta el punto de que “me aterroriza su presencia o tener que enfrentarlo, a pesar de que mi inteligencia me indica que mi miedo es irracional”. Las hipótesis dicen que, para que todo esto ocurra, deben estar presentes: factores vinculados a la herencia (padres miedosos trasmiten su miedo a los hijos), factores vinculados a la educación (padres miedosos son modelos que los hijos copian) y factores vinculados a experiencias negativas sufridas en algún momento temprano del desarrollo psicológico de la persona (por ejemplo: ataques sexuales o de animales) A veces se dan todos los factores o a veces sólo uno de ellos. En todo caso, pareciera producirse una alteración que determina una sensibilidad extrema de los “sensores del peligro”, de tal modo que estos se activan sin que haya peligro real, amenaza o riesgo de sufrir algún tipo de daño físico o psicológico. Podríamos asimilar la situación a la de una casa que tiene esas alarmas cuyos sensores o detectores colocados en todo el perímetro y en las aberturas (puertas y ventanas), se activan cuando detectan algún movimiento que interrumpe el rayo infrarrojo que los liga uno con otro. Las alarmas se colocan para que se activen cuando un intruso pretende ingresar al domicilio, en cuyo caso, además de tocar bocinas y sirenas, llaman automáticamente por teléfono a un amigo o a la policía. Sin embargo, con frecuencia la alarma se activa por el movimiento que produce un gato o una paloma, ignorantes de toda la electrónica instalada para protegernos de los malvivientes. Entonces, casi nadie le da importancia al escándalo que se produce en el sector o barrio, a veces durante horas. Si este ejemplo lo trasladamos a lo que ocurre en nuestro cuerpo, podríamos decir “que estamos las 24 horas con la alarma activada, sin que exista peligro real o concreto” y en consecuencia nuestra vida, así vivida, se transforma en “un infierno” que de acuerdo con las expresiones más escuchadas, no se lo deseamos ni “a nuestro peor enemigo”.

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¿Por qué nos pasa?

¿Dónde está ese “sensor del miedo” que nos funciona tan mal? Parecería que se encuentra ubicado en un núcleo de cuerpos de neuronas llamado “Locus Cerúleos”, en un sector del Sistema Nervioso Central (SNC) denominado Protuberancia, ubicado aproximadamente, en la parte superior de la nuca en su unión con la cabeza, dentro del “estuche óseo” formado por los huesos del cráneo y los de la columna vertebral, que lo mantienen protegido de la misma manera que a todo el SNC del que forma parte. Es en ese lugar donde, sostienen las hipótesis, se produce un exceso de un neurotransmisor llamado Noradrenalina. Pero también parecen tener responsabilidad otras estructuras más primitiva del cerebro humano, que forman lo que se denomina Cerebro Límbico, así como otros neurotransmisores tales como: Serotonina, Adrenalina y Ácido Gamaaminobutírico, entre los más de 200 conocidos. Conocer todo esto no nos ayuda, sin embargo, no se trata de una parte del organismo a la que se puede practicar cirugía y reemplazar como uno hace cuando se cambia el sensor de una heladera, por ejemplo. El sensor térmico de la heladera, vulgarmente conocido como “el automático”, es la pieza que al detectar una elevación de la temperatura interior del artefacto activa el motor para que comience a producir frío, y lo detiene cuando el frío es suficiente, para volver a activarlo cuando se calienta, y así sucesivamente. Cuando el sensor se deteriora, la heladera “no corta” y entonces es necesario reemplazarlo. De igual modo y para poder expresarlo con claridad, nuestro sensor del miedo “no corta”. Pero como el reemplazo no es posible, deberemos tratar de corregirlo u ordenarlo con técnicas que existen y de las que nos ocuparemos más adelante. ¿POR QUÉ A MÍ? Esta es la pregunta que se hacen todas las personas que sufren algunos de los trastornos mencionados. Su respuesta no es fácil. De manera muy genérica podríamos decir que algo ocurrido en la vida entre el nacimiento y el momento presente determinó condiciones de personalidad que originaron determinadas conductas o tipos de respuestas ante tales o cuales estímulos. Estas condiciones o estructuras básicas o mínimas o necesarias son 34


las que deben estar presentes para que pueda actuar o influir cualquier sobrecarga emocional aislada o crónica y desencadenar los distintos cuadros clínicos que ya describimos. La sobrecarga emocional que “me pone en el límite de mi tolerancia física y psíquica” se llama stress o estrés. Para decirlo con claridad: no sufre trastorno de pánico, fobias o ansiedad quien quiere, sino quien tiene condiciones de personalidad tales que determinan un bajo nivel de tolerancia a la sobrecarga emocional. La sobrecarga emocional y también física que conocemos como stress es el factor o elemento que la vida moderna ha traído consigo y que ha incrementado el diagnóstico de estos cuadros que, si bien antes eran conocidos, no se encontraban tan difundidos. ¿QUÉ ES EL STRESS? Es una forma normal que tiene el organismo de reaccionar ante aquellas situaciones que significan una amenaza para su integridad física o psicológica. Esta respuesta normal en verdad me prepara física y emocionalmente para que, ante el peligro, pueda eludirlo y huir o enfrentarlo y luchar. Según mi criterio o mi capacidad para evaluar todas las posibilidades, podré tomar una decisión que me proteja y, en consecuencia, resultar indemne o, por el contrario, seré incapaz de decidir y entonces la ansiedad y el miedo resultarán “paralizantes”. Nuestra respuesta a las situaciones de stress nos da la pauta de nuestro nivel de tolerancia y en consecuencia de nuestra capacidad o incapacidad para desarrollar síntomas como cuadros de pánico o fobias. Pero... ¿por qué somos así, con tan bajo nivel de tolerancia al stress? No lo sabemos o sí, por todo lo que veremos más adelante. Tal vez el relato de una película basada en un hecho real sirva para ilustrarlo mejor. La película mostraba el caso de un niño que fue abandonado en un bosque y durante siete años fue cuidado y alimentado por lobos. El niño había crecido entre los lobos por lo que, comprensiblemente, comía como lobo y aullaba como lobo. Algo similar es lo que les ocurre a los niños que son excesivamente protegidos o que ven conductas de miedo en su entorno: copian las actitudes de miedo. 35

¿Por qué nos pasa?

No es nuestra intención descargar culpas en los padres. Todos los que somos padres sabemos que por nuestros hijos hicimos y hacemos lo mejor de lo mejor, y nuestro máximo deseo es que sus vidas sean mejores que las nuestras. Pero no siempre resulta como lo soñamos, no por mala fe, sino por errores que cometemos y que son producto de la ignorancia. Así las cosas, en estos tiempos de rapidez, de instantaneidad y fugacidad, crece el nivel de stress. Las sobrecargas y las exigencias, entonces, actúan sobre “un terreno” que ya está preparado. La suma del stress y “el terreno vulnerable” determinan que la vida de algunas personas se transforme, y comiencen a fabricar por sí mismas la prisión que los mantiene privados de su libertad. Esta prisión es imaginaria, pero cada día engrosa sus paredes y achica su interior, haciéndose cada vez más opresiva. Día a día se agrava la situación, y la consecuencia final, después de tanto gasto de energía para mantener activa la “construcción de la prisión”, es la depresión; como si no hubiésemos tenido ya suficiente sufrimiento.

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¿CÓMO SUPERARLO? ¿Cómo salir de la “prisión” o de la “trampa” que con tanta paciencia nos supimos construir? Pregunta difícil, pero de respuesta sencilla: simplemente desarmando todo lo que construimos para ATRAPARNOS o ENCERRARNOS. “Pero, ¿cómo se hace?, no es tan fácil como usted lo dice, Doctor”, me dicen los pacientes. Lo cual es cierto, pero agrego: nada es fácil sin compromiso y sin tiempo suficiente. Si nos comprometemos, es decir, ponemos nuestra voluntad, decisión, atención y determinación para lograrlo y además, tenemos la paciencia de perseverar el tiempo que sea necesario, sin lugar a ninguna duda: Lo lograremos. ¿Cómo? Apelando a tres herramientas: 1. GRUPOS DE AUTOAYUDA, donde podemos: t Compartir experiencias. t Recibir información responsable que disipe las dudas y elimine los fantasmas producto de la ignorancia. t Aprender técnicas concretas que sean útiles en el momento de enfrentar las distintas situaciones. 2. MEDICACIÓN prescrita por un médico psiquiatra especializado. Existen diversos psicofármacos que pueden aliviar la dificultad hasta tanto la persona pueda resolver por sí misma el trastorno. 3. PSICOTERAPIA a cargo de un terapeuta especializado/a en Terapia Cognitiva - Comportamental. Nuestro grupo ha cumplido y cumple con la función para la que fue creado y los resultados obtenidos se reflejan en la sección Cartas Recibidas. Pero ¿cómo es que se puede lograr un cambio tan notable como el que experimentan los autores de esas cartas? Quizás la respuesta esté en la confluencia de personas decididas a “curarse” y la incorporación de conocimientos transmitidos en forma sencilla, todo lo cual permite “la re-cognición”, es decir el “re-aprendizaje” y un comenzar de nuevo. 39

¿Cómo superarlo?

Los capítulos que siguen tratan de lograrlo. En ellos, nos expresamos como lo hacemos en nuestras charlas, tal como nos lo han pedido reiteradamente. Pero antes de avanzar en la lectura, que pretendemos resulte interesante, útil y práctica, debemos señalar algunas claves que deben ser aceptadas si se desea que el éxito corone los esfuerzos. Estas “directivas” no son difíciles de cumplir, por el contrario, son muy fáciles y agradables. Le sugiero que las copie con letra clara y grande, y las coloque en un lugar visible para leerlas varias veces en el día. Ellas son: DECÁLOGO DEL FOBI 1. Aprende a quererte y a soñar y lograrás lo que quieras. 2. No existen en tu vocabulario las palabras “No puedo”. 3. Mi mente construyó una trampa y mi mente la desarmará. 4. Mi prisión es imaginaria y los barrotes que me limitan no existen. 5. No juzgues... no critiques y mucho menos a tí. 6. Lo que pasó... ya pasó y no lo puedes modificar. Lo que pasa ahora mismo depende de tí... lo que vendrá depende de lo que hagas hoy... hazlo... arriésgate... ¡vive! 7. Siembra amor y cosecharás amor... siembra broncas y cosecharás odios. 8. Como los bebés que aprenden a caminar... inténtalo una y otra vez y no te rindas nunca. Al final tú también correrás la gran carrera. 9. Nadie lo hará por tí... empieza ya y no protestes, te hará falta toda la energía... no la malgastes. 10. Ruega a Dios o al Universo y pídele lo que quieras... pero al final dile “hágase tu voluntad”... “hágase tu voluntad” y confía en Él... DISFRACES DEL MIEDO El miedo se “disfraza” de las más variadas cosas, situaciones o hechos. El “ropaje” que finalmente adopta es lo que reconocemos como “fobia a tal o cual cosa”. El listado de todos los “disfraces” que adopta el miedo puede ser infinito. A veces son insólitos, muchas veces increíbles y otros, graciosos. Pero siempre son muy angustiantes para quien los padece.

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Lo que sigue es una enumeración de aquellas fobias que escuchamos en las reuniones del Fobi o en el consultorio. En relación con cosas inanimadas: Estatuas, estampitas, botones blancos de cuatro agujeros, elásticos, máquinas que funcionan con monedas, fichas o tarjetas, computadoras, cajeros automáticos, escaleras, depósitos de agua en los techos de las casas, antenas de televisión, ventanas abiertas, agujas, globos. En relación con cosas con movimiento: Escaleras mecánicas; aviones, ascensores, automóviles, colectivos. En relación con situaciones personales: Estar sola, salir sola, muerte de seres queridos, cáncer de familiares, morirme, desmayarme, transformarme, desempeñarme como músico, el fracaso, el ridículo, no ser aceptado/a, hacer cola, viajar en auto, viajar sola, comer de noche, bañarme estando sola, bañarme detrás de la cortina del baño de noche, asfixiarme, que la gente piense mal de mí, escuchar mi horóscopo, fallar, equivocarme, fracasar, no poder mantener mis valores, envejecer, no llegar a vieja, ser enterrado vivo, el sufrimiento humano en general, las guerras, la tortura, estar frente a personas más importantes e instruidas, escribir, sentirme vacía, dormirme y no despertar, la miseria, tomar decisiones, no tener qué comer, la pobreza, los robos y asaltos, no llegar ser alguien en la vida, la soledad, alejarme de mi casa, “envenenar a mi familia por contaminar lo que cocino, con lavandina u otros tóxicos que además no tengo en la cocina y no recuperar la calma hasta que todos hayan hecho la digestión”. En relación con las personas: A estar con médicos, el dentista, mi marido, reuniones sociales, muerte de seres queridos, hablar en público, percibir miradas, dialogar con desconocidos, reuniones con mucha gente, matar a un familiar, muerte de gente joven, relacionarme, ser desaprobada, tener que decir NO. En relación con el espacio: Encierro, vacío, lugares cerrados, lugares abiertos con gente, lugares en altura (que no sean planta baja), supermercados, rutas, aglomeraciones, viajes largos, hospitales, oscuridad, espacios grandes, mirar a través de ventanas. En relación con fenómenos “extrasensoriales”: Apariciones, vírgenes, fantasmas, duendes.

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¿Cómo superarlo?

En relación con la naturaleza y el cuerpo: Luz, sangre, vómitos, tormentas, rayos o relámpagos, viento, enfermedades, accidentes. En relación con animales: Arañas, víboras, perros, gatos, caracoles, tortugas, mariposas, pájaros, palomas, pelaje de perros, pelos de gatos, plumas. Sin clasificar: Muerte, lo que haya después de la muerte, lo desconocido, la incertidumbre, la vida. En relación con la salud: Cáncer de familiares, infarto, rotura de aneurisma. RECOMENDACIÓN MUY IMPORTANTE Lo que continua es lo que opera el cambio que tanto anhelamos... Leamos un tema por vez y luego dejemos pasar algunos dias para reflexionar sobre lo leído y poner en práctica las recomendaciones. Necesitaremos tiempo para lograrlo, cada uno tiene el suyo. No nos preocupemos si hay demoras o alguna recaída, ocurre con frecuencia. A lo largo del texto iremos insertando cartas enviadas por quienes pasaron por lo mismo, allí podra percibir lo que queremos alcanzar. Todos queremos lo mismo, entonces: Manos a la obra... ¡Juntos llegaremos a la cumbre! “ESTOY LUCHANDO Y DESCUBRIENDO QUE SE PUEDE... UNA SOGA LLEGA AL FONDO DEL POZO” Estimado Doctor y compañeros del Fobi : No sé cómo empezar esta carta pero hace días que tengo ganas de escribirla. Tal vez lo primero que pueda contarles es que el Fobi se ha convertido en un refugio para mí, un lugar en donde nos reunimos verdaderos “Luchadores” de la vida porque cada día que pasa es, por lo menos para mí, una batalla ganada al “embudo negro” sobre cuyos bordes camino permanentemente. Muchas veces me siento como un equilibrista que camina cuidadosamente por una cuerda (la vida) con la ayuda de una vara (mi psicóloga, mi buena voluntad y ahora este grupo de autoayuda) para mantener el equilibrio y llegar al otro lado. 42


Desde que asisto al Fobi me he dedicado a observar y escuchar con atención a cada uno de los presentes: muchos o algunos levantan la mano y preguntan, otros escuchan desde su silencio, pero puedo afirmar que siento que he llegado al lugar indicado, con gente con la que me siento identificada porque sé que a ustedes les puedo abrir el corazón, mi alma y decirles, aquí estoy, esta soy yo... con todos mis temores, sin camuflajes. Si bien reconozco que siempre fui muy emotiva, sensible, idealista y con una gran tendencia a luchar contra molinos de viento, hubo un momento en mi vida que marcó un antes y después. A partir de ese momento mi vida dio un vuelco que todavía no alcanzo a comprender, se había sembrado en mi pecho la semilla de la ansiedad que regada por el estrés dio un árbol gigante de frutos negros, estos frutos son mis ataques de pánico, que si bien no han sido permanentes, sí han tenido periodos de gran intensidad. Desde el principio no me quedé con los brazos cruzados, busqué, leí, visité varios médicos, lo conversé con mi familia, escuché charlas por televisión. La cabecera de mi cama se llenó de libros de autoayuda .Tenía dentro una desesperación por descubrir qué me pasaba, por qué cada mañana me despertaba con un miedo en la garganta y en el pecho, con arcadas, palpitaciones y sudor, con los ojos desorbitados y con mil hormigas dentro del cuerpo, con ganas de llorar y llorar y lamentando que se levantaran mis hijos, porque no quería que me vieran así. Sólo ustedes pueden comprender esto y para mí es como una bocanada de oxígeno, una soga que llega al fondo del pozo. Hoy cuando me veo y los veo formando parte de este grupo, pienso que en realidad somos mucho más fuertes de lo que creemos. Pensemos que si llegamos hasta este grupo, aunque sea arrastrándonos, es porque no renunciamos, no nos dejamos vencer, es porque queremos ponernos de pie y si bien tropezamos mil veces y caemos otras tantas, nos volvemos a levantar aunque sea en una sola pierna y seguimos; decididamente creo, que hay dentro de cada uno de nosotros una gran fortaleza, la fuerza de los que recorren el camino más difícil, el de llegar hasta nosotros mismos, una expedición interna en la que el único equipaje que llevamos es “nuestras ganas de llegar”, reconocernos únicos e irrepetibles, aceptarnos y amarnos.

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¿Cómo superarlo?

Bueno Doctor y Fobi - compañeros, hasta aquí llega esta carta que espero se pueda sacar algo para aportar al grupo. Estoy tratando de encontrar el camino de regreso a casa y deseando que el caminito transitado durante este último tiempo, se cubra de yuyos para no verlo nunca más y me repetiré “Yo puedo, Yo puedo, Yo puedo” Silvana (Ave Fénix) “SI PIENSAS QUE...” Si piensas que estás vencido... lo estás. Si piensas que no te atreves... no lo intentarás. Si piensas que no puedes... no lo lograrás. Si piensas que perderás... ya has perdido.Porque en el mundo encontrarás que el éxito comienza con la voluntad del hombre. Los buenos resultados dependen de tu actitud ante la vida. Porque muchas carreras se han perdido antes de haberse corrido y muchos cobardes han fracasado antes de haber empezado su tarea. Piensa en grande y tus hechos crecerán. Piensa en pequeño y te quedarás atrás. Piensa que puedes y podrás. Todo depende de tu actitud. Tienes que esforzarte por surgir. Tienes que estar seguro de tí mismo, antes de que puedas ganarte un premio. La batalla de la vida no siempre la gana el hombre más fuerte o el más hábil, tarde o temprano el hombre que gana es aquel que... ¡¡CREYÓ PODER!!

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PARTE II

Información y técnicas

Vivir sin Miedo | Capítulo 1

CAPÍTULO I “LA HERMANDAD” Hace ya bastantes años, mis hijos estuvieron fascinados con una película titulada “Karate Kid”. El personaje de la película era un adolescente delgadito que sufría el abuso de otros de mayor tamaño y que además eran activos practicantes de karate. Cansado de las burlas y abusos, decidió aprender karate y visitó a un Gran Maestro, un anciano retirado, pequeño y frágil como él. En principio el maestro se negó, pero ante su insistencia aceptó, con una condición: si quería ser un experto debía cumplir con todas las actividades o tareas que le diera. El joven aceptó entusiasmado, por fin podría aprender los secretos del karate y la técnica de la famosa postura de ataque, llamada “La Grulla”. Pero grande fue su frustración cuando el maestro le dio un gran tarro de pintura y un pincel y le dijo: “toma esto y pinta la cerca de mi casa, cuando termines avísame” y sin comprender el joven, fue e hizo la tarea... luego de tres días finalizó y, orgulloso, se presentó ante el maestro y pensó: “ahora sí empezaremos con ‘el karate’ y nuevamente sus expectativas se frustraron al escuchar del maestro: “ahora ve nuevamente y repite con una segunda mano de pintura, toda la cerca”. Sobre el final de la película, el muchacho comprende el porqué de la inexplicable conducta del maestro. En este momento ud. y yo vivimos una situación parecida, pues le pediré que comience a practicar algunas cosas aparentemente no relacionadas con el objetivo que nos propusimos. Las explicaciones vendrán al final del libro... pero no estarán escritas... surgirán solas y claramente en su propia mente. ¿Qué le voy a pedir que haga? 1. Aplique a su vida el sistema ABS Por supuesto que no hablo de la conocida sigla ABS (anti-bloqueumsystem) que identifica al sistema de frenado de los modernos automóviles. Aunque, en cierto modo, es una tarea que le ayudará a que su vida no este “frenada o bloqueada”.La tarea consiste en dar o repartir no menos de 7 ABS, es decir 7 Abrazos, 7 Besos y 7 Sonrisas, cada 24 horas, comenzando ahora mismo. 49

La Hermandad

Lo debe hacer con mucho entusiasmo o sin ningún entusiasmo, con ganas o sin ganas, no importa la calidad (por ahora). 2. Borre de su vocabulario las palabras NO PUEDO Cada vez que quiera pronunciarlas, “sorpréndase” no encontrándolas... pues usted SÍ PUEDE lograr lo que se proponga, sólo necesita tiempo, constancia y determinación. Eso sí que está en su interior a su disposición. Lamento decirle que si esto no es así, debería pensar sobre sus reales deseos de superar sus miedos. 3. Sólo por hoy propóngase poner en práctica todo lo que le sugerimos, es decir “copie” lo que a otros ya les dio resultados satisfactorios, sólo por hoy. 4. No se juzgue, ni se condene, por el contrario: sea comprensivo y téngase paciencia, no será facil, cada uno tiene su tiempo, respételo. 5. No espere ayuda de nadie, el éxito llegara por su esfuerzo y dedicación, este libro pretende ser su guía y contiene las claves que otros ya utilizaron con éxito. Pero es solamente Usted quien lo hará posible. Si tiene ayuda “extra” mejor, será bienvenida. 6. Haga una consulta con un médico especialista psiquiatra para tener una supervisión profesional responsable sobre su diagnóstico y evolución y para evaluar la necesidad de psicofármacos. 7. Haga una consulta con un terapeuta especialista en Psicoterapia Cognitivo Comportamental: Esta es la técnica indicada para este tipo de afecciones. No son muchos los profesionales capacitados en este tipo de psicoterapia. No obstante ello, su intervención con la orientación técnica que tenga, será de capital importancia en todo el proceso de curación. Ahora es el momento de que apliquemos lo que llamamos: ESCALA DE AUTOEVALUACIÓN Al iniciar esta lectura y antes de entrar de lleno en los conocimientos y técnicas que exponemos a continuación, es conveniente completar una Escala de Autoevaluación, para que luego más tarde, al final del libro, la completemos nuevamente y podamos comparar así, los logros obtenidos. Entonces veremos si estamos en 50


condiciones de integrar el grupo de selectos “Guerreros Vencedores del Miedo”. Una Hermandad milenaria, nacida en lejanas tierras y de la que hablaremos más tarde... Esta escala se aplica para autoevaluarnos a lo largo del proceso de recuperación de nuestras dificultades con respecto al miedo y todas sus variantes y responde a la pregunta “¿cómo me siento últimamente?” La respuesta que daremos tendrá que ver con un estado general referido a cómo estamos en determinado momento del proceso y no a cómo nos sentimos hoy en particular. Ejemplo: Una persona que, desde hace algún tiempo, incluso años, sufre miedos o pánico, podrá decir: “¡pésimo!”, que en nuestra escala corresponde a un 0, o decir: últimamente me siento “muy mal” o “mal”, que corresponderá a 1, 2 o 3, y así sucesivamente. Posiblemente nadie se sienta “de 10”, que es estar “excelente”, pues no nos explicaríamos su interés por estos temas, pero no descartamos que haya lectores con esta condición, que quizás estén aprendiendo a entender a la persona que tienen a su lado y eso sería un acto de amor. Elija un número de la Escala del Bienestar, el número que mejor refleje su estado y enciérrelo con un círculo. Luego agregue la fecha. ESCALA DEL BIENESTAR FECHA .................................. 0.....1......2......3.......4.......5.......6.......7.......8......9......10 Pésimo Muy Mal Mal Regular Bien Muy Bien Excelente Resérvela, al final del libro la completaremos nuevamente y podremos visualizar el nuevo estado, el que alcanzaremos con dedicación, constancia y responsabilidad; para ese entonces no sólo habrá pasado el tiempo, también su cerebro habrá experimentado cambios muy positivos. HABÍA UNA VEZ... ... hace ya muchos años, en las tierras de Aragón, España. Allí vivía un Dragón que asolaba la región. Nadie estaba seguro dónde vivía, si en las profundidades de una caverna o en el fondo de lago. Tampoco tenían muy definido su aspecto, aunque una aldeana que dijo verlo, quedó impresionada por sus grandes ojos rojos. El dragón, mantenía asustada a toda la población y exigía que cada 51

La Hermandad

día le ofrendaran dos carneros, los que eran dejados en un lugar determinado en la costa del lago. Con el paso del tiempo, los carneros comenzaron a escasear y entonces la gente del pueblo acordó que, en lo sucesivo, se le ofrendaría una persona en lugar de los carneros. Para evitar problemas se resolvió que el azar eligiera a la víctima de entre todos ellos mediante un sorteo y así se hizo. Hasta que un día la elegida fue la hija del Rey. Inútiles fueron los ofrecimientos de tesoros, tierras y dinero que hizo el Rey para evitar que la Princesa fuera devorada por el dragón, encarnación de todos los miedos. Finalmente, cuando la bella Princesa esperaba desolada frente al lago su triste final, apareció un caballero montando un blanco corcel. Sobre su pecho destacaba una cruz blanca en el paño rojo que cubría su armadura. Ese color, además, era el de su capa, la que flameaba orgullosa con la brisa de su marcha. El resuelto caballero enfrentó a la bestia y luego de una feroz lucha, le clavó su lanza en el corazón. Cuenta la leyenda que, en el charco de la sangre derramada, nació un rosal de flores rojas y que el misterioso caballero, fue luego santificado y pasó a la historia como San Jorge, el guerrero que enfrentó y venció el miedo de todo un pueblo. Lo que no cuenta la leyenda es que, desde entonces, nació una Hermandad secreta, cuyos miembros se animaron a enfrentar y vencer al miedo. Desde entonces invocando a San Jorge, se reúnen en distintos lugares para celebrar sus logros. Cada nuevo miembro de la Hermandad de los Guerreros Vencedores del Miedo es recibido como tal, luego de superar algunas pruebas, muy similares a las que enfrentaremos a lo largo de esta aventura que iniciamos ahora mismo.

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CAPÍTULO II “ANATOMÍA DEL MIEDO” ¿QUÉ ES EL MIEDO? El miedo es una emoción normal y saludable, que está en nuestro organismo para protegernos de todo aquello que nos pudiera dañar, o sea, de todo aquello que pudiera ser peligroso para nuestra integridad y equilibrio. Al activarse, el miedo nos pone en una actitud de alerta y esto se plasma o se traduce en una atención concentrada y focalizada en el hecho o cosa que nos amenaza. Amenaza que, de concretarse, nos afectará física, psíquica o socialmente. Es por ello que el miedo es una emoción que nos protege. Esta disposición psíquica de atención concentrada en el peligro se acompaña, además, por una reacción física (muscular, glandular, cardiovascular y respiratoria) que nos pone en estado de alerta máxima y preparados para la acción: sea ésta de lucha “enfrentar” o de huida “escapar”. Si el peligro puede ser destruido, entonces elegimos la conducta de enfrentar y en consecuencia lucharemos; en cambio, si lo evaluamos en forma negativa y no nos sentimos en condiciones de destruir el peligro, elegiremos la conducta de evitar el enfrentamiento y entonces huiremos. De esta manera en ambos casos se logra el objetivo que el miedo resguarda, esto es mantener la integridad física y mental y recuperar el equilibrio porque la amenaza ha desaparecido. ¿DÓNDE SE ENCUENTRA? Todo este sistema que se pone en marcha ante la percepción de la amenaza, se encuentra en el Sistema Nervioso Central (SNC) cuyo órgano principal es el cerebro. Éste y otras estructuras interconectadas entre sí se encuentran alojadas dentro del cráneo que, como sabemos, es de huesos planos unidos entre sí para formar una “bóveda”, apta para proteger adecuadamente a tan exquisitas y sensibles estructuras. Éstas son: La Corteza Cerebral El Cerebro Límbico El Hipotálamo 55

Anatomía del Miedo

COMO UNA NUEZ Supongamos que tomamos una nuez con nuestros dedos. Lo primero que notamos al tacto, es la dureza de su cáscara, tan dura como la consistencia de un hueso. Al abrirla, vemos que esta cáscara cubre y protege al fruto interior color amarronado, que es consistente aunque más blando y lleno de elevaciones y pliegues, separado en dos mitades que se unen en su parte media. Nuestro cráneo y el cerebro que está en su interior son, comparativamente, muy parecidos a lo que es una nuez. Los huesos del cráneo cubren y protegen el interior: nuestro cerebro, que también tiene una superficie irregular, con elevaciones y surcos, claramente separado en dos hemisferios que están unidos por unas fibras que los interconectan entre sí y con otras estructuras del Sistema Nervioso. Ellas se prolongan hacia abajo alojándose dentro de la columna vertebral. La superficie cerebral tiene un color habano claro que, al colorearla con sales de plata para mirarla en el microscopio, toma una tonalidad grisácea, por lo que a este sector se lo denomina: “sustancia o materia gris”. Allí se encuentran los cuerpos de las neuronas, que son las células que procesan la información que captamos con nuestros sentidos, producen pensamientos y emociones y ordenan a todo el resto del organismo realizar cada una de las acciones que nos mantienen vivos y nos hacen sentir como tal. El Sistema Nervioso Central (SNC) es aquel que mantiene el control ordenando y organizando todo, por sobre todos los demás órganos. Los cuerpos de las neuronas, no sólo están en la corteza cerebral, también se agrupan en núcleos grises que se encuentran por debajo de la superficie de la corteza y a lo largo de todo el SNC, formando “islas” en medio del conjunto de fibras. Estas fibras, a modo de “cables” conducen información desde o hacia el núcleo de la neurona. Allí, en el núcleo de cada neurona, se procesa la información, se la compara con la ya existente, se la clasifica, se la archiva y es allí donde, al final del proceso, se emiten las respuestas u órdenes para que los distintos órganos las ejecuten. Al conjunto de fibras que llevan y traen la información en el interior del SNC, se lo denomina sustancia blanca porque ese es el color que toma al ser coloreado con las sales de plata. Estas fibras se agrupan formando haces o vías de conducción, que se prolongan en estructuras cada vez menos complejas a 56


medida que se alejan del cerebro, formando lo que llamamos tronco cerebral. Cuando este tronco cerebral abandona el cráneo para alojarse en el interior de la columna vertebral, forma lo que se llama médula espinal. Las fibras, a medida que nos alejamos del cerebro, abandonan el SNC para dirigirse a los distintos órganos o estructuras, es por ello que el tronco cerebral ya transformado en médula espinal se va adelgazando hasta que al final, en el extremo inferior de la columna vertebral, las últimas fibras forman lo que se llama: cola de caballo. Cuando una persona tras un accidente sufre la sección o corte de fibras a nivel de la médula espinal, se produce la parálisis y la insensibilidad de todos los sectores correspondientes. Lo que se interrumpe en realidad es el paso de la información: a los miembros inferiores no les llega la orden cerebral de moverse o caminar y tampoco llega al cerebro la información sobre dolor, temperatura, solidez del suelo que se pisa o simplemente la sensación de sentir que se tienen piernas propias. LA MATERIA GRIS El SNC consta básicamente de neuronas que forman la sustancia gris y de fibras que llevan y traen información que forman la sustancia blanca. Si uno observa con el microscopio la sustancia gris, observará una especie de selva donde existen cientos de miles de matorrales o árboles con sus troncos de los que salen, también, ramas que se tocan con las ramas del árbol vecino. En esta maraña, tan intrincada, los troncos de los árboles serían los cuerpos de las neuronas y sus ramas o prolongaciones, lo que llamamos dendritas (palabra que viene del griego y significa: árbol.). Estas dendritas se extienden hasta conectarse con las prolongaciones de las neuronas vecinas y así van formando un verdadero tejido, cuya trama es una red de información. En el cuerpo de la neurona, más precisamente en su núcleo, es donde se elabora o procesa la información, la que es enviada hacia la neurona vecina y ésta a su vecina y así sucesivamente. La neurona, además de las llamadas dendritas posee una prolongación más larga, como si fuera la cola de un barrilete, que se llama axón. La energía nerviosa circula en un solo sentido: ingresa información por las dendritas hacia el 57

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cuerpo celular, llega al núcleo, se procesa y luego de elaborada una respuesta, se la envía por el axón hacia la próxima neurona de la cadena y así, hasta el órgano o sistema que ejecutará lo resuelto. Las neuronas y sus extensiones o prolongaciones, dendritas y axones, se interconectan formando una red o tejido por el que circula información que luego se propaga por las fibras hacia todos los rincones del organismo. Estas fibras serían como “los hilos de cobre que tienen los cables que conducen la electricidad”, los que van reuniéndose hasta formar gruesos cordones que se alejan del SNC constituyendo lo que llamamos nervios. A medida que los nervios se van alejando del SNC se van haciendo más delgados, pues van dejando fibras en los distintos puntos terminales, ya sean órganos, músculos, piel, etc. De esta manera podemos ver que nuestro organismo es un gran circuito de información por el que circula energía nerviosa que recorre ida y vuelta toda nuestra humanidad para mantenernos vivos y en contacto con lo externo. SOMOS MILLONARIOS... (*) Nacemos con aproximadamente 100.000.000.000 (cien mil millones) de neuronas, las que establecen alrededor de 100.000.000.000.000 (mil veces cien mil millones) conexiones. Recordemos que a partir de una célula que aporta el papá (el espermatozoide) y de una célula que aporta la mamá (el óvulo) se completa la información necesaria para crear un ser humano. Cuando se produce la fecundación del óvulo, cada padre aporta la mitad de la información grabada y codificada en los genes que están contenidos en los cromosomas tanto del óvulo como del espermatozoide, a partir de allí la célula primitiva, producto de esa unión, comienza a multiplicarse, diferenciarse y especializarse para dar forma a aquello que nueve meses más tarde, será un ser humano recién nacido.

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¿RESISTENTES O VULNERABLES? (*) Para alcanzar el número de neuronas con las que cada bebé nace, alrededor de cien mil millones es necesario que, en nueve meses, se fabriquen más o menos 250.000 neuronas por minuto. Estas neuronas, luego, deben viajar y acomodarse en el lugar adecuado y una vez allí hacer las conexiones correspondientes, que son las básicas al momento de nacer. En síntesis, los bebés nacen con las neuronas necesarias para toda una vida, pero sus conexiones o vínculos todavía tienen que establecerse durante su crecimiento (rápidamente en los primeros años y más lentamente luego). El número de conexiones que se establezcan, dependerá de la cantidad de estímulos que el recién nacido reciba de su entorno. Así, a un recién nacido al que no se estimula adecuadamente con juegos, palabras, música, al que no se mima, o directamente se abandona, está destinado a ser una persona disminuida, deficiente o vulnerable porque no establece conexiones suficientes, las que sólo se logran si existe estímulo exterior adecuado. En un bebé que fue suficientemente estimulado, ya a los dos años de edad, se le notará la picardía y la viveza en su mirada. Es en ese tiempo, en los primeros años de la vida de una persona, donde se “preparan” los resistentes y los vulnerables. Estímulos adecuados determinan personas resistentes con muchas conexiones, que es similar a decir que tienen muchas más respuestas, recursos mentales para resolver situaciones sin que éstas los bloqueen o anulen. Estímulos insuficientes determinan personas vulnerables, con pocas conexiones, es decir con escasos recursos, menos plásticos, menos adaptables y poco aguantadores. Con todo lo hasta aquí expresado podríamos afirmar que “las conexiones que se establecen luego de nacer determinan el futuro de una persona y en gran medida cómo pensará, aprenderá y actuará en la adultez”. Sinapsis: así se llama a estos vínculos o conexiones o contactos entre las neuronas. Las sinapsis o conexiones se establecen durante toda la vida, así es que cada vez que incorporamos un nuevo conocimiento o una nueva experiencia, la neurona crea nuevas dendritas que se interconectan; de este modo la red

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informática cerebral está en mejores condiciones de proveernos las respuestas adecuadas ante distintas situaciones de la vida. Por ello, porque el cerebro hace permanentemente nuevas conexiones, podemos afirmar que el cerebro con el que nos levantamos no es el mismo con el que nos acostamos. HACER GIMNASIA CON EL CEREBRO El cerebro es un órgano vivo en permanente expansión que necesita ser estimulado a través del arte, el conocimiento, el estudio, la música, el intercambio social, etc. Las conexiones se seguirán realizando siempre, en la medida que también podamos destrabar patrones de conexión ya utilizados, permitir el ingreso de nueva información a nuestro cerebro, o utilizar nuevos patrones de lógica, probar y experimentarlo todo. El objetivo es mantener a nuestro cerebro activo, ágil y despierto, es decir mantenerlo “en forma”. Todo lo que llega a nuestra vida, ayuda: leer, hacer ejercicios matemáticos, resolver acertijos o hacer palabras cruzadas, escuchar radio, asistir a conferencias o charlas, investigar sobre un tema y profundizar su conocimiento, jugar ajedrez, imaginar cosas, buscar soluciones o innovar para salir de la rutina, en suma: estar atentos para hacer ejercicios con las neuronas. Esto no sólo nos mantiene jóvenes, sino que nos da una mejor vida y además nos protege del deterioro que produce el paso de los años. ¿CÓMO FUNCIONA TODO ESTO? Con lo hasta aquí expresado, hemos incorporado conocimientos elementales, pero necesarios, para poder avanzar en nuestra búsqueda: entender cómo “funciona” el miedo para “protegerme”, y cómo “funciona” “anormalmente” para “transformar la vida en un infierno”. UN VIAJE EN EL TIEMPO (*) Cuando la vida apareció en nuestro planeta, lo hizo en el mar y ocurrió cuando una molécula empezó a reproducirse a sí misma, es decir se duplicó. Al hacerlo comenzó un ciclo evolutivo que ya lleva más de 4 mil millones de años. Nota (*): Prof. Dr. Carlos Soria, “Vulnerabilidad y Resiliencia”, X Congreso Argentino de Psiquiatría (Oct. 2000)

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Como seres humanos somos la expresión actual de esa, la primera molécula. Cuando la primitiva célula duplicada a su vez se duplicó y se reunió con otras, formó organismos en apariencia distintos, pero hechos de la misma materia y dotados de la misma capacidad de duplicación o reproducción. Cuando la cantidad de células reunidas fueron numerosas, comenzaron a formarse nuevos seres cada vez más complejos. Pero al hacerlo, hubo algunas células que quedaron aisladas en el interior del nuevo ser, alejadas del medio ambiente desde donde se nutrían y hacia donde arrojaban lo que no les servía. Entonces se hizo necesario crear un sistema que trajera los alimentos y que se llevara los desechos, para que el organismo siempre estuviera en equilibrio. Es decir que no le faltara ni le sobrara nada. Para ello, fue necesario “crear” un sistema de “bomba y cañerías” que llevara y trajera todo lo necesario desde el medio líquido que las rodeaba, y así se originó el primer Sistema Circulatorio. Pero para saber qué le faltaba y qué le sobraba, el organismo tuvo que crear un sistema de señales que le permitiera organizar esta información y esta creación fue lo que sería el antecedente evolutivo del Sistema Nervioso Central. ALGO NOS FUE QUEDANDO... Les propongo ahora que nos metamos en ese mar en donde nació la vida y en donde nació el sistema que permite la vida: estamos en el mar, el inmenso mar y somos unas cuantas células aisladas que nos reproducimos a rápida velocidad y, con la misma premura, también incorporamos el conocimiento del medio... Somos células aisladas, pero seres vivos al fin y en permanente evolución. Pasan unos cuantos millones de años y miles de litros de agua oceánica dan forma a una ameba y, por un instante antes de morir, comprendemos nuestra existencia y seguimos evolucionando. Pasan millones de años más y nuestro cuerpo ya es de pez, pequeño y sin huesos, pero vivo y curioso. Un día el pez ve el sol y quiere más. Millones de años después nuestro cuerpo de pez se ha hecho mayor y al acercarnos a la costa, intentamos reptar por la playa aunque aún no podemos respirar... Luego de otros millones de años e intentos que fracasan, nos adaptamos a respirar en el aire y nos arrastramos por la playa. Finalmente logramos vivir en el agua y en la tierra... 61

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Ahora que ya salimos del mar y podemos respirar, nuestro cuerpo ya es mayor , nuestro aspecto es como el de los reptiles de nuestros días. Si bien hasta entonces teníamos un Sistema Nervioso de “ameba” y luego de “pez”, recién cuando evolutivamente somos “reptiles” podemos reconocer estructuras nerviosas de cierta complejidad, a lo cual llamamos: Sistema Nervioso o Cerebro Reptiliano. Este es un Sistema Nervioso muy primitivo, que sólo le permite al reptil respirar, alimentarse, mantener la circulación, el equilibrio y la armonía entre todas las funciones del organismo y reproducirse. Millones de años nos llevó poder desarrollar nuestras patas y recorrer el espacio. Y mucho tiempo después el cielo nos llamó y quisimos conocer la copa de los arboles y luego del paso de otros millones de años nos trepamos a los árboles y pudimos alimentar a nuestra cría con el alimento que viene desde nuestro interior, la leche materna. Así nos transformamos en mamíferos. Nuestra cabeza para entonces va adquiriendo mayor volumen, pues en su interior la información que creó conexiones cerebrales ya ocupa más lugar físico. Nuestro aspecto en esta época es el de un mono. Nuestro sistema nervioso de Mono tiene una nueva estructura que se ha sumado al anterior Cerebro Reptiliano, se trata del Cerebro Límbico. El Cerebro Límbico se agrega por encima del Cerebro Reptiliano y determina que aparezcan la memoria y las emociones, lo que nos permite como mamíferos del nivel del mono, incorporar la capacidad de distinguir “lo que nos gusta” de “lo que no nos gusta” y tener memoria para tratar de repetir lo que nos da satisfacción y rechazar lo que no nos satisface, como así prepararnos para la lucha o la huida ante la percepción de un peligro. Así vivimos en un eterno presente, sin conciencia de futuro, ni de vejez, ni de muerte, sólo interesados en los placeres de la comida y la sexualidad y rechazando su carencia y el dolor. Así estábamos muy bien, pero el avance arrollador de la evolución de la vida, nos lleva a caminar en dos patas, dejar la copa de los árboles y desarrollar más el volumen de nuestro cráneo, especialmente en la región frontal, la que está en la frente por encima de los ojos. Con el paso de los años nuestra experiencia como monos ha dado a luz una nueva capacidad, una nueva formación cerebral que llamamos Corteza Cerebral Pre-Frontal. Esta estructura, recientemente incorporada, es la que nos hace seres humanos y la que nos coloca en el tope más alto de la creación. 62


La aparición de la Corteza Cerebral Pre-Frontal en la superficie del cerebro, implica que más neuronas se han incorporado y más conexiones se han desarrollado; esto determina la aparición de lo que llamamos inteligencia, con el pensamiento, la razón y la capacidad de imaginar o crear situaciones no vividas. Ningún ser vivo en nuestro planeta ha desarrollado un Sistema Nervioso Central tan complejo y maravilloso como el que tenemos los seres humanos. La incorporación de la Corteza Cerebral Pre-Frontal nos permite la capacidad de tener conciencia de nosotros mismos, poder prever y resolver situaciones reales o imaginarias, comprender y formular conceptos abstractos, interpretar símbolos, escribir, leer, reír. También nos permite incorporar conceptos éticos, es decir, comprender la dualidad del bien y el mal, y conceptos estéticos, como lo bello y lo feo, así como también crear herramientas que nos faciliten la vida y adoptar en cada caso la conducta más adecuada para resolver la situación que se nos presente, aún cuando ella no nos resulte familiar o conocida. Tener voluntad y deseos de superación y sentir que somos nosotros quienes decidimos, y que no somos llevados por impulsos desconocidos como les ocurre a los animales. EL CEREBRO HUMANO CONTIENE EL CEREBRO DEL MONO Y EL CEREBRO DEL REPTIL. Esta Corteza Cerebral (perfil de humano) está por encima del Cerebro Límbico (perfil de mono), el que a su vez está por encima del Cerebro Reptiliano (perfil de reptil) (ver figura 2) y este “estar por encima” implica una relación de mayor jerarquía para lo más reciente y subordinación de los niveles más inferiores al nivel inmediato superior. Cuanto más antigua o primitiva haya sido su aparición, más rudimentarias son sus funciones: una serpiente es biológicamente menos que un mono, y un mono es menos, biológicamente, que el hombre. El hombre es el único ser que en su cerebro contiene el cerebro del reptil, el cerebro del mono y el cerebro del humano. Esas estructuras nerviosas nos fueron quedando como recuerdo de nuestros antepasados a lo largo del tiempo. Si pudiéramos detenernos y observar cada uno de los instantes que median entre el momento de la concepción de un ser humano y su nacimiento, podría63

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mos observar en nueve meses, los cuatro mil millones de años que en la tierra lleva evolucionando la vida. Y por supuesto que veríamos, todos los estadíos que hemos descripto: célula aislada, ameba, pez, reptil, mono y ser humano. Dios nos muestra en cada embarazo, el milagro de la vida y su permanente y maravillosa transformación. Hace sólo 250.000 años que el hombre está como tal en el planeta. Desde aquel entonces, su Sistema Nervioso evolucionó hasta la actualidad, y varios cambios se produjeron; sin embargo, en nuestro cerebro, ciertas estructuras permanecieron. Todos los seres humanos tenemos una estructura de reptil en lo más profundo del cerebro y esa estructura se llama Hipotálamo. Allí se encuentran los núcleos grises, que tienen bajo su control a todas las funciones que permiten que la vida se mantenga en forma automática las veinticuatro horas de todos los días de nuestra vida: desde allí se comanda la respiración, la circulación, el metabolismo, se mantiene la temperatura corporal y otras funciones que deben permanecer constantes; la reproducción y todo lo que se relaciona con lo más primitivo, con lo vegetativo, que es decir la vida tal como la de un reptil y aún como la de un vegetal o planta, que están un escalón más abajo. También tenemos en nuestro cerebro humano la estructura evolutiva del Sistema Nervioso de los mamíferos, al que llamamos Cerebro Límbico por el cual poseemos memoria y emociones, lo que nos permite repetir lo que “me gusta” y rechazar lo que “no me gusta”, reaccionar con alegría y satisfacción ante las situaciones de placer por lo general vinculadas con la alimentación y la sexualidad y reaccionar con miedo ante las situaciones amenazantes y gracias a ello prepararnos para actuar, ya sea luchar o huir, y así recuperar el estado de paz y equilibrio. Pero, como ya dijimos, el cerebro humano tiene además una estructura mucho más reciente o más nueva evolutivamente considerada, que es la Corteza

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Cerebral Pre-Frontal, con la que adquirimos la capacidad de pensar, razonar y con ello muchas otras funciones que ya analizamos. Para entender mejor estos conceptos sobre el funcionamiento del cerebro, observemos nuestro televisor: allí vemos la imagen y todos sabemos que dentro de nuestro aparato no hay ninguna persona actuando, sino que el televisor está diseñado para “leer” los miles de puntos que le llegan a través de un cable o de una antena, para proyectarlos en una pantalla que es lo que finalmente nosotros vemos. Del mismo modo actúa el cerebro. Las ondas lumínicas o fotones captados por los ojos llegan a la corteza occipital que está en la parte posterior del cerebro y entonces vemos lo que el ojo percibió. Del mismo modo oímos con la corteza temporal; reconocemos por el tacto con la corteza parietal; saboreamos con la cara inferior de la corteza frontal y olemos con un área próxima a ésta. Aunque el cerebro humano hace mucho más que recibir toda la realidad que fluye por los nervios luego de ser captada o percibida por los sentidos: debe decodificar el enjambre de moléculas agrupadas en eso que aún no sabe qué es, ordenarlo y representarlo en las áreas de la corteza cerebral que le corresponde. Recién entonces, en una pantalla hecha de grasas, péptidos, electrolitos y agua, puede localizar en su mente y en el espacio exterior, reconocer una forma y ubicarla en el tiempo. Si estoy percibiendo una mariposa, recién después de la intervención de mi cerebro puedo verla en su forma y estado. Pero a diferencia del cerebro animal, el cerebro humano puede dotar a cada representación sensorial de un significado como, por ejemplo, al ver la mariposa inferir que se acerca tiempo de calor y además ver en ella la belleza e interpretarla simbólicamente como una expresión de alegría, ternura, amor y maravillarse por toda la creación. Y lo más importante: el cerebro humano nos permite seleccionar conductas que “yo elijo” como respuesta, incluida la conducta de “no elegir” o de elegir una respuesta con valor ético, estético o espiritual. Esta cualidad, el ejercicio del libre albedrío, es lo que nos permite decidir sobre nosotros mismos. El haber incorporado lo que llamamos: inteligencia, pensamiento, razonamiento, y la conciencia de sí mismo como autor, protagonista y ejecutor de mis actos, es lo que nos hace seres humanos.

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Resumiendo: la incorporación de la corteza cerebral pre-frontal hizo que los seres humanos seamos los seres vivos más evolucionados de este rincón del universo por encima de otros organismos como las bacterias, los virus, las plantas o los animales, con los que compartimos el mismo material biológico pero con estructuras, funciones y organización tan distintas que nos dan la oportunidad de reconocer la “chispa” divina detrás de cada expresión de nuestra vida a través del tiempo. AHORA QUE YA SOMOS HUMANOS Ahora que nuestro viaje en el tiempo nos trajo hasta la actualidad, podemos proyectarnos hacia el futuro. Gracias a la incorporación de la corteza cerebral pre-frontal nos acercamos a la comprensión del TODO y LA VIDA porque nos permitió acceder a conceptos supra-humanos como el universo, el tiempo, o la vida y la muerte. En este viaje, también, hemos descubierto que hay algo que nos mueve a evolucionar, que decide y nos conduce como persona, que intuye sin conocer, que ama, admira, o que se conecta con un centro espiritual superior y percibe el paso del tiempo, de lo eterno y lo infinito. Esa expresión que, tímidamente, reconocemos mas allá de la mente es nuestra alma, una “pequeña porción” de Dios experimentándose a sí mismo. ¿Y qué ha sido nuestro viaje en el tiempo, sino un esfuerzo para ser cada vez mas conscientes de lo que somos y de DIOS? Sin embargo este viaje de la vida no termina pues se expresa en lo eterno, en el sinfín. Y así como una vez fuimos ameba y más adelante fuimos reptil y mono, hoy nuestro cuerpo y cerebro siguen evolucionando. Este proceso de re-creación continua hace que siempre estemos asistiendo al cambio de nuestra información genética dando por resultado la aparición en la faz de la tierra de nuevos seres humanos, pero no nos referimos a “nuevos” por recién nacidos, sino que hablamos de nuevos seres, más evolucionados que nosotros. Todos podemos darnos cuenta, que el hombre de hoy es muy distinto al hombre de las cavernas. Se produjo a lo largo del tiempo un imperceptible aunque a la vez notable cambio.

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¿CÓMO FUNCIONA EL MIEDO? Juan es una persona común y corriente, que respira y que en este momento está haciendo la digestión. Hace un ratito nomás, comió pollo con papas porque tenía hambre y a pesar de haber apagado el horno, la temperatura de la cocina lo hace transpirar. Está agotado, de repente se da cuenta de que tiene ganas de evacuar su vejiga. Entonces Juan se levanta y va al baño. Todo esto ocurre en forma automática y autónoma gracias al Hipotálamo o Cerebro Reptiliano, que Juan y todos nosotros tenemos. Él no tiene conciencia de que todo el funcionamiento de su organismo se realiza sin su control y que además ocurre sin que ello le demande ningún tipo de esfuerzo o atención. Podríamos decir que es como tener conectado “un piloto automático” para todas aquellas funciones que hacen posible la vida gracias, repetimos, a los núcleos grises que tiene en su Hipotálamo o Cerebro Reptiliano. Vuelve a la cocina y apremiado por la sed se dirige a la heladera, toma un vaso con jugo de frutas y lo bebe hasta el final. Luego sonríe mientras se dispone a lavar el vaso sucio, pero cuando llega a la pileta de la cocina observa una cucaracha que raudamente comienza a corretear para hundirse por el agujero del desagüe. Su cara ahora expresa repugnancia y fastidio, pues su memoria asocia a la cucaracha con la suciedad, la enfermedad y la muerte. Un escalofrío recorre su espalda y un estado de inquietud o nerviosismo lo invade: tiene la sensación psicológica de miedo, de amenaza a su seguridad y equilibrio, se ha interrumpido su paz. Estas sensaciones de satisfacción, de enojo o de miedo dependen del Cerebro Límbico, que es responsable de la memoria y de las emociones. Pero como éste está estrechamente relacionado con el Hipotálamo, no puede evitar estimularlo; entonces todos los centros que allí están, se activan: se acelera la respiración, se acelera el pulso, aumenta la secreción de hormonas, sube su presión, le aumenta la transpiración, se tensan sus músculos, aumentan las ganas de evacuar el intestino y la vejiga; es decir que todos los sistemas vitales se exaltan, con lo cual se altera el equilibrio que Juan tenía hasta ese momento.

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Todo esto ocurre en instantes y sin que Juan haya podido hacer nada para evitarlo, pero como él es una persona dotada de Corteza Cerebral PreFrontal tiene la capacidad de razonar y buscar soluciones o respuestas que le devuelvan la paz y el equilibrio; entonces piensa “es una cucaracha más entre los millones que existen... Deberé aumentar las medidas de higiene y tal vez, poner más cucarachicida por la noche... Bueno, ahora a dormir... mañana será otro día”, y mágicamente la ansiedad se disipa, el ritmo cardiaco se normaliza y la respiración se hace suave e imperceptible, ya no transpira y una sensación de relajamiento lo invade y comienza a bostezar. ¿Qué ocurrió? La corteza pre-frontal le ordenó al cerebro límbico que cesara su alarma pues no era una situación peligrosa ni amenazante ya que “una cucaracha no significa un peligro inmediato” y a su vez el cerebro límbico le ordenó al hipotálamo “normalizar todas las funciones, pues el peligro ya no existe, ni tampoco hay fastidio ni alegría” y todo el organismo se puso en posición de relajamiento y dispuesto para el descanso, entonces, con una sensación de bienestar, Juan se fue a dormir. Todo este proceso ocurre en instantes y Juan apenas toma conciencia de todo lo que él protagonizo a través del razonamiento que le dispuso u ordenó la conducta más adecuada ante la situación dada. Al otro día Juan se levantó radiante y decidió salir a caminar con su perro llamado Capricho, quien demostró su alegría moviendo la cola. Capricho estaba exhausto luego de la larga caminata; comandado por su Hipotálamo de perro fue corriendo con la lengua afuera (que sería su modo de transpirar), con la respiración y el pulso acelerado, hacia un charco de agua sucia para calmar su sed (no siente asco pues ésa es una sensación humana). Pero cuando ya estaba tranquilo, moviendo la cola, apareció un desconocido (aunque podría haber sido un gato, otro perro o cualquier amenaza) y Capricho se puso alerta con las orejas paradas, la cola recta y los pelos de su cuello erizados preparándose para atacarlo o huir. Todas funciones comandadas por su Cerebro Límbico de perro. Juan intentó explicarle que el señor con el garrote era bueno y que sólo quería jugar, pero fue inútil pues Capricho no lo podía comprender. Lo único que el animal puede hacer es huir, luchar o esperar a que la amenaza desaparezca, ¿por qué? pues porque carece de corteza cerebral pre-frontal, y por ello 68


no puede analizar la situación, ni razonar o encontrar variantes fuera de las tres posibles ya señaladas. Finalmente lo único que desactivó la alarma de su mascota, fue mostrarle aquellos gestos que él tiene grabados en su memoria como no amenazantes o tranquilizadores, por ejemplo: no mirarlo a los ojos o mostrarle las manos abiertas y hacia abajo. Ahora sí estamos en condiciones de comprender que ante una situación de amenaza surge el miedo tanto en Juan como en Capricho, y en ambos la respuesta inmediata es una exaltación o aceleración de las funciones vitales, lo cual nos pone en condiciones de alerta máxima para la acción. Pero la diferencia fundamental entre Juan y Capricho está en que Juan tiene corteza cerebral pre-frontal que le permite adoptar una conducta distinta a la de huir, luchar o esperar desesperadamente que la amenaza cese... Capricho, en cambio, no tiene más que esas tres únicas opciones. ¿QUÉ LES OCURRE A LAS PERSONAS QUE SUFREN ATAQUES DE PÁNICO O FOBIAS? La conducta de las personas que tienen miedos, fobias o ataques de pánico se encuentra estrechamente vinculadas con una alteración que los hace actuar en forma tan primitiva como los mamíferos que sólo tienen cerebro límbico y reptiliano. Dicho en otros términos, las personas con miedos, fobias o ataques de pánico se comportan en forma tan irracional como Capricho ante una situación de peligro y no utilizan la corteza cerebral pre-frontal de la que están dotados, con un agravante: a veces no es necesario que el peligro sea percibido, a veces es suficiente con imaginarlo, como les ocurre a las personas que sufren Fobias Específicas, así como también cuando el miedo se presenta porque sí, sin ninguna razón que lo justifique, como ocurre en los Ataques de Pánico. ¿Por qué esto ocurre así?, ¿Por qué algunas personas tienen fobias o ataques de pánico? La respuesta no es sencilla ni breve, pero ya estamos en condiciones de adelantar que “por diversas causas que se han ido sumando, se produjo una alteración en el funcionamiento del cerebro de esas personas, en virtud del cual el miedo que está en ellos para protegerlos, se descontrola o se descalibra, 69

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dando como consecuencia una actitud de alerta permanente las veinticuatro horas del día, lo que determina que las vidas de esas personas se transformen en una especie de infierno.” Pero esta alteración no significa daño sino tan sólo desorden. Se deberán corregir algunas cosas y todo volverá a ser normal. ¿EN QUÉ CONSISTE ESTE DESORDEN? Cuando percibo, por ejemplo, con mis ojos, una situación peligrosa o amenazante, recién tomo conciencia de lo que veo una vez que los haces luminosos llegan a la región occipital con la que el cerebro decodifica esta información lumínica, la clasifica y la compara con las imágenes guardadas y entonces surge la escena completa: alguien que no conozco me está apuntando con un arma y a la vez me dice que esto es un asalto. Al mismo tiempo la información sonora circuló por otras vías para ser decodificada en la región temporal. Toda esta información de imagen y sonido, y podríamos agregar de olores, así como otras señales, se analizan en distintas zonas del cerebro y todas se canalizan hacia la región de la corteza frontal para que allí se le agregue, además, la interpretación de gestos, de actitudes, circunstancias que rodean al hecho, de la presencia o no de elementos tranquilizadores, etc. Pero antes de llegar a la región frontal, y como al pasar, esa información “sin procesar” deja un pequeño aviso o anticipo en el Cerebro Límbico, lo que genera una reacción de inquietud o pequeño temor, que es transmitido al Hipotálamo, que recibe este mensaje: “existe la posibilidad de que haya que luchar o huir, pero por ahora nada más que eso”. Después que la corteza cerebral pre-frontal intervenga, quizás surjan novedades que permitan interrumpir el estado de pre-alerta, por ejemplo: no es un asalto de verdad, sino que es una filmación para una película. O sí, es un asalto en serio pero el que empuña el arma es un niño de cinco años con un revólver de juguete. Entonces la corteza cerebral pre-frontal ordena al cerebro límbico y éste al hipotálamo: volver todo a la normalidad, a la paz y al equilibrio. Pero si la corteza frontal analiza que este sujeto que me apunta es un verdadero delincuente y que para colmo de males está nervioso, de inmediato informa al cerebro límbico y éste al hipotálamo para que todo el organismo se ponga en alerta máxima para la lucha o la huida. 70


Pues bien: en las personas con trastorno de pánico o fobias, toda la información recogida por los sentidos, deja como anticipo en el Cerebro Límbico casi el 100 % de la información, activando el miedo y el hipotálamo, y con ello el estado de alerta máxima. Como consecuencia, muy poca o casi nula información llega a la corteza frontal, de tal modo que ésta, al no procesar todos los datos aportados por los sentidos no puede determinar que se trata de una filmación o que el asaltante es un niño inofensivo o si, por el contrario, se trata de un asalto de verdad con un delincuente armado y nervioso. Como la respuesta razonable no llega a tiempo, las personas experimentan las reacciones de un miedo sin congruencia con la realidad, desproporcionado, desmedido: sienten que se mueren, que les va a estallar el corazón o que mueren asfixiados, y mientras ven cómo van a huir arrojándose por la ventana o cómo eliminar al que se interponga en su camino hacia la guardia del hospital donde los van a salvar, o bien el miedo es tan masivo, intenso y brutal que la persona bloquea todos los sistemas y queda como congelada, como frizzada, con la sensación de que se muere irremediablemente, aunque esto no ocurra. ¿Y ESTA ANORMALIDAD SE PUEDE CORREGIR? Se corrige aprendiendo a usar la Corteza Cerebral Pre-Frontal que todos los seres humanos tenemos. Está allí, en nuestro cerebro, desde que nacimos y la usamos para muchas cosas, pero en el tema de los miedos no la usamos. Pero no lo hacemos porque tengamos el extraño placer de disfrutar de las fobias o de los ataques de pánico, no. No la usamos porque en algún punto de nuestra historia personal se produjo un desvío por demás inconveniente. Mucho no importa cuándo ni por qué, lo que verdaderamente importa es superar este desorden para ser libres y autónomos. Y aunque no lo podamos creer, el sólo hecho de estar incorporando toda la información hasta aquí brindada, no solo creó nuevas conexiones de sus dendritas y mayor espacio en su memoria, sino que además, en lo sucesivo, no podrá evitar detenerse a pensar antes de reaccionar ante cualquier situación de amenaza: “No sos un perro o un mono. Podés actuar como un Ser Humano usando la corteza frontal que Dios te dio”.

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¿CÓMO HACERLO? “No podemos cambiar nuestras emociones a voluntad, pero sí podemos cambiar nuestros pensamientos y las emociones los seguirán”. Esto quiere decir que, como dependen del Cerebro Límbico, no podemos controlar nuestras emociones: sentimos miedo o alegría, furia o amor, y no podemos decirnos “no tengas miedo” o “no estés contento” o “sentí amor”. En cambio sí podemos, usando nuestra corteza cerebral pre-frontal, pensar lo que elijamos pensar y automáticamente la emoción seguirá al pensamiento. Dicho de otro modo si pensamos “me muero” o pensamos “en negro o negativo”, tendremos emociones desagradables y angustiantes, pero si pensamos en “cosas lindas”, en “colores / positivo”, tendremos emociones placenteras. Si sentimos miedo y pensamos catastróficamente, el miedo crecerá. Pero si logramos pensar en algo agradable o placentero, el miedo cederá. NO SOMOS MONOS POR UNOS POCOS GENES Esta capacidad de pensar es la que nos hace humanos y esa diferencia, ¿dónde se origina? Podríamos decir que “en el manual de instrucciones para hacer un ser humano” del que todos venimos dotados. ¿Qué significa todo esto?, pues que tanto el mono como nosotros los seres humanos tenemos casi las mismas instrucciones para “armarnos” pero los seres humanos tenemos algunas diferencias en la información genética recibida respecto del mono y allí esta la clave. El 100% de la información genética que se necesita para hacer un ser humano y que aportaron por partes iguales papá y mamá, es muy similar al que aporta mamá y papá mono, tan similar como que es idéntico en un 98,3 % al del ser humano. Es decir que el monito nacido de esa unión no será un bebé humano tan sólo por la pequeña diferencia de 1,7 % de la información genética recibida. Y es por ello que no tendrá la capacidad que determina la diferencia tan fundamental que con nuestros antepasados tenemos, la capacidad de pensar y razonar. Como más adelante veremos, todos estos conocimientos nos serán de mucha utilidad para poder comprender mejor otros conceptos, que iremos incorporando con un objetivo muy claro: cuanto más sepamos sobre el miedo, en mejores condiciones estaremos para enfrentarlo y superarlo. 72


ACLARACIONES Todo lo hasta aquí trasmitido es información científica, adaptada y simplificada para ser comprendida por todas las personas, aunque no tengan información médica o biológica. Adentrarnos en la complejidad y extrema delicadeza de algunos hechos que ocurren en la intimidad del cerebro y cada una de las células de nuestro organismo, sería abundar innecesariamente y complicar las cosas. HABÍA UNA VEZ ... “... un niño de seis años que se acercó a su madre y le preguntó: `mami ¿de dónde venimos nosotros?´ y ella lo atrajo hacia sí y le dijo: `venimos de Adán y Eva, los primeros seres humanos...´ No conforme con la respuesta, le formuló la misma pregunta a su papá quien casualmente había dejado este libro sobre la mesa y reflexionaba sobre todo lo leído y pausadamente le respondió con toda seriedad: que en realidad descendemos de los monos. Entonces el niño regresó con su mamá y le contó lo que le había dicho su papá, ella lo miró y le dijo “pero hijo mío, tu padre se está refiriendo a su familia, no a la nuestra”.

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CAPÍTULO III “LOS NEUROTRANSMISORES”

MENSAJEROS EN CADENA ¿Qué son los neurotransmisores? Son sustancias químicas que intervienen en el proceso de transmitir información entre un punto y otro de la larga cadena informativa que despliega nuestro Sistema Nervioso Central. La información “viaja” entre un punto y otro del Sistema Nervioso por medio de fibras o nervios, que son los “cables” que interconectan a todos los rincones del cuerpo humano con la “central”. Mientras esta información está en las neuronas, en la intimidad del cerebro, es descifrada, clasificada y luego transformada en respuestas, las más adecuadas para cada situación. La respuesta producida, una especie de “orden” que se debe ejecutar, nuevamente viaja hasta el lugar del organismo que finalmente, se encargará de “cumplir con lo ordenado”. Por si fuera poco, esta información se guarda o almacena, para que en el futuro se pueda volver a utilizar o para compararla con información que recién llega y poder así dar una respuesta cada vez mejor. La información que se transmite y que circula por el Sistema Nervioso Central, lo hace en forma de impulsos eléctricos, a lo largo de una “cadena” donde cada neurona es un “eslabón” que se contacta con el siguiente y así sucesivamente. HACIENDO CONTACTO Ese contacto entre neuronas no es superficie con superficie, o “piel” con “piel”, sino que entre ellas existe un espacio real que las separa. Ese espacio que existe entre la membrana que recubre una neurona y la membrana de “su vecina”, no es recorrido por el impulso eléctrico. Éste, al llegar allí 77

Neurotransmisores

estimula unos microdepósitos que contienen sustancias químicas que se secretan y se “vuelcan” en el espacio que separa una neurona de la próxima. Las moléculas químicas que recorren el espacio entre neuronas, se llaman: neurotransmisores. Una vez que el cruce se hizo y el neurotransmisor fue “recibido”, se reinicia el “viaje” de la información hasta el núcleo de esa neurona receptora: allí se “elabora una respuesta” que se “comunica” del mismo modo a otras neuronas y así, hasta que finalmente el conjunto de neuronas elabora “la respuesta definitiva”, la que resulta en una “orden para ser ejecutada”; que nuevamente “viaja”, abandonando el cerebro a través de los haces llamados “nervios”. Así, luego de sucesivos pasos, se llega al extremo de la “cadena”, es decir, al sitio donde se ejecutará la “orden”. Todas estas señales que viajan por el Sistema Nervioso Central (SNC), lo hacen en cada uno de los aproximadamente cinco mil contactos de cada una de las más de cien billones de neuronas, unos cientos de millones de veces por segundo y durante toda la vida. Con microscopios muy delicados se ha llegado a la intimidad de ese contacto entre neuronas, contacto que se llama sinapsis (término que quiere decir “unión” y fue acuñado por Scott Sherrington, premio Nobel de Medicina 1932). Los neurotransmisores, no sólo son mensajeros entre las neuronas, también viajan por la sangre y actúan a distancia sobre otras células, como por ejemplo los glóbulos blancos, provocando efectos directos sobre el nivel de defensas del organismo, tal como si fueran un Sistema Nervioso Circulante. Este hecho nos demuestra la estrecha vinculación que existe entre el Sistema Nervioso y el Sistema Inmunológico. Es por ello que los enojos, tristezas, etc. pueden ser causa de una baja de las defensas y entonces, de la aparición de enfermedades en el cuerpo. PARA LA VIDA O PARA LA MUERTE Conocer cuáles son, dónde actúan, qué efectos producen y cómo están en las distintas enfermedades de la mente, es de una importancia capital. Ello nos permitirá crear medicamentos que bloqueen el paso de determinado neurotransmisor que sabemos es el responsable de tal síntoma o, por el contrario, crear sustancias que estimulen el aumento de tal o cual neurotransmisor que “escasea” o bien fármacos que “simulen” ser el neurotransmisor natural y así provocar su efecto. 78


Claro que estos conocimientos también tienen un interés “estratégico” para ciertos países, pues han permitido el desarrollo de armamentos químicos, que no son más que sustancias tóxicas que bloquean a ciertos neurotransmisores provocando la muerte. Tal es el caso del llamado “Gas Nervioso”. O armamentos biológicos, como el que difunde la toxina botulínica que provoca la muerte por un mecanismo similar. Estas “armas” fueron usadas en la Primera Guerra Mundial y más recientemente en la guerra entre Irak e Irán. Pero esto de provocar la muerte bloqueando neurotransmisores ya era conocido por los indios del Amazonas, quienes usaban flechas envenenadas con “curare”, con lo que bloqueaban a un neurotransmisor y provocaban la muerte (que era lo único que sabían y les interesaba para su propia supervivencia). Por un mecanismo similar provocan la muerte el veneno de serpientes (yarará, coral, cascabel) y también por su neurotoxicidad provoca la muerte, aunque más lentamente, el veneno que significan las sustancias que se usan para “drogarse” tales como cocaína, éxtasis, heroína, LSD, etc. LA ENERGÍA NERVIOSA La energía nerviosa es, no sólo lo que ocurre en la sinapsis, sino lo que ocurre antes y después de la acción o efecto del neurotransmisor, es decir la progresión de la información en el interior de las ramas o prolongaciones de las neuronas; esta progresión se hace por un fenómeno eléctrico, similar al que ocurre cuando acciono la tecla que enciende la “luz de la cocina”, por ejemplo. Esta “energía eléctrica cerebral” puede ser captada colocando electrodos en la superficie de la cabeza, tal como captamos la “energía eléctrica cardíaca” colocando electrodos en el tórax. Así es como se obtienen el “electroencefalograma” y el “electrocardiograma”. Hoy en día también es posible dosar o medir algunos neurotransmisores mediante análisis de sangre o de orina, lo cual es de importancia para el diagnóstico de ciertos cuadros psicopatológicos, aunque este tipo de exámenes por ahora sólo se realizan en centros de cierta complejidad bioquímica. En este momento podemos decir que en la intimidad del Sistema Nervioso se producen en forma permanente fenómenos bioquímicos y eléctricos, que son los responsables finales de que la información sea transmitida en forma per79

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manente entre todos los sectores responsables de mantenernos vivos, así como también de los estados de ánimo, la memoria, la inteligencia, de “mis ganas”, de “mí estar en paz”, de “mi ser feliz”, de “mi esperanza”. Cuanto más sabemos sobre los neurotransmisores, más próximos estamos de conocer la causa íntima de las conductas de la persona y las alteraciones que subyacen en los cuadros psiquiátricos. Aunque quizás lo más importante radica en la posibilidad de diseñar medicamentos que corrijan las anomalías. ¡ESTÁN IDENTIFICADOS, SIGUE LA BÚSQUEDA! Las investigaciones realizadas sobre los neurotransmisores han permitido identificar a muchos de ellos, como así también los efectos que producen y las alteraciones que se originan cuando faltan o se encuentran en exceso por distintas causas. Se han identificado más de doscientos y se presume que son muchísimos más; muchos de ellos no sólo actúan a nivel cerebral sino que también producen efectos en otros lugares del organismo, como por ejemplo: la contracción muscular, la regulación de la presión arterial, la contracción de la pupila, la regulación del calibre de los bronquios, etc. Los más conocidos son: t4FSPUPOJOB, identificado en el cerebro humano en 1957 y con responsabilidad en la depresión, trastornos alimentarios, ritmo del sueño, actividad sexual. t"DFUJMDPMJOB que parece tener responsabilidad en la enfermedad de Alzheimer y que además interviene en el proceso de contracción muscular. t"ESFOBMJOB que es responsable de la sensación de excitación y de la elevación de la “presión sanguínea”, entre otros efectos. t/PSBESFOBMJOB con alguna responsabilidad en la depresión, en ciertos cuadros de “falta de energía” y en las crisis de pánico. t%PQBNJOB con alguna responsabilidad en cuadros psiquiátricos graves y en la Enfermedad de Parkinson. Podríamos continuar identificando a los hasta hoy conocidos, pero ello, si bien es de interés médico, no nos aportaría mayores elementos para alcanzar el objetivo que nos hemos fijado: simplificar lo complejo para facilitar la adopción de soluciones prácticas. 80


LA FARMACIA INTERIOR Hasta aquí hemos incorporado conocimientos que nos permiten comprender que en nuestro interior tenemos sustancias o moléculas que producen efectos variados. Esas sustancias que están allí a nuestra disposición, lo están en lo que podríamos llamar “La farmacia Interior” o “La farmacia Natural” o “La farmacia de Dios”. ¿Qué es esto de la “Farmacia Interior” o “Farmacia de Dios”? Efectivamente, en nuestro interior tenemos neurotransmisores, es decir, sustancias naturales que tienen efectos antidepresivos, antipanicosos, energizantes, ansiolíticos, etc. Y también los tenemos capaces de provocar ansiedad, taquicardia, alucinaciones, miedo, terror, malestar, desasosiego, etc. La proporción entre unos y otros hace la diferencia entre las personas, ya que todos somos iguales de la piel para adentro, pero no todos tenemos la misma calidad ni cantidad de neurotransmisores. Es elemental considerar que los seres humanos pensamos porque los neurotransmisores hacen que ello ocurra. Pero también podemos afirmar que el pensamiento puede provocar la presencia de determinados neurotransmisores en el cerebro y en todo el organismo. ¿EL HUEVO O LA GALLINA? ¿Que apareció primero, el huevo o la gallina?, ¿el pensamiento o el neurotransmisor? De hecho existe una larga polémica científica y/o filosófica que aún no ha dado respuesta a este interrogante. Hasta ahora si bien ya sabemos cómo progresa la información y cómo se transmite de neurona a neurona, nada hemos dicho sobre dónde o quién “fabrica” la información. La respuesta no es fácil porque sólo se sabe que todo ocurre en el núcleo de la neurona, donde se encuentra el ADN (Ácido Desoxirribo Nucleico) formando los genes, los que a su vez están contenidos en 46 cromosomas (como ocurre en cada una de todas las células del cuerpo humano). En ese ADN que está en los genes se halla “guardada” la clave para “fabricar” todo lo que somos y todo lo que necesitamos para vivir, esto quiere decir que en cada una de mis células está contenido “el todo de lo que soy yo” y podríamos agregar “el todo de lo que seré”.

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Ese ADN, además, nos identifica como único ser vivo portador de los códigos genéticos que nos distinguen de todos los demás seres vivos existentes, lo cual nos hace únicos (y además irrepetibles). Lo podemos ver cuando nos miramos al espejo y nos comparamos con las demás personas y más claramente en nuestras huellas digitales. En la neurona y su núcleo con el ADN, se fabrican los “moldes” para que luego, en el citoplasma (así llamamos a todo lo que rodea al núcleo celular hasta el borde o membrana, lo que sería el límite o “piel” de la célula), según esos moldes, se “fabriquen” los neurotransmisores y otras sustancias necesarias en el proceso. Sin embargo seguimos sin saber cómo es que la información es “producida” en el núcleo, antes de ser “enviada” de “viaje” hacia su destino en la próxima neurona. Lo cual quiere decir más o menos lo siguiente: “que sabemos cómo llega un programa de televisión al aparato que está en el living pero nadie aún ha visto a los actores en el estudio de televisión filmando el programa que yo estoy viendo. ¿Existen los “actores” en el “set” del núcleo? o ¿el núcleo de la neurona “capta” la información del espacio cuántico que nos rodea y se comporta tal como un “aparato” de radio que capta las “señales” que están en el espacio y las decodifica en la canción que escuchamos?” No existe respuesta conocida en la actualidad. USTED ELIGE LO QUE PRODUCE Pero dejemos de lado cuestiones tan complejas y retomemos el camino que nos conducirá a encontrar soluciones en nuestra “farmacia interior”. Para ello, todos los conocimientos que hasta aquí fuimos incorporando, los englobaremos en una clasificación práctica que tiene en cuenta los efectos o acciones; así establecemos dos grandes grupos de sustancias neurotransmisoras: 1) Sustancias “Malhechoras” o Tóxicos Emocionales 2) Sustancias “Bienhechoras” o Endorfinas Nuestro cerebro produce estas sustancias en todo momento y en todas las situaciones, sean estas de frustración, sufrimiento y dolor, o por el contrario, de satisfacción, alegría y placer, ¿Quién determina la supremacía de unas u otras en un momento dado? La propia persona, el YO de cada uno, aunque no nos demos cuenta de ello ni podamos evitarlo. 82


Si bien el mundo y las circunstancias de la vida nos “impactan” de uno u otro modo, somos nosotros mismos los que “permitimos”, conscientes o no, que esos hechos o situaciones produzcan o generen los tóxicos emocionales que nos perjudican o bienhechores que nos favorecen. La secuencia de hechos es así: captamos una cosa o situación o hecho con nuestros sentidos o con nuestra conciencia y, en forma automática e inmediata, se producen neurotransmisores que actuando en determinados sitios o zonas del cerebro nos hacen “sentir” la emoción correspondiente, sea esta de “sufrimiento” o de “placer”. Esta respuesta automática e inmediata es inevitable y nos permite la experiencia de “sentir” o “vivenciar” la emoción. Pero luego de esa primera respuesta automática, nuestro YO retoma la capacidad de elegir la actitud o conducta más saludable para sí mismo. Y es en ese momento donde confluyen los condicionamientos genéticos, familiares, culturales, experiencias de vida, etc. que hacen que todas las personas no tengan la misma capacidad para restituir el “equilibrio”, es decir “estar en paz”, que es decir: “un estado de bienestar que no es de sufrimiento ni de placer, sino simplemente de estar bien”. Contrariamente a lo que se suele pensar, esos condicionamientos se pueden “neutralizar”, haciendo posible una vida feliz. ¿Cómo lograrlo? Mucho se ha escrito sobre esto, y muchos arriesgan “recetas” que no se aplican y varían entre sí, pero en lo que sí coinciden todos, es en los ingredientes que se necesitan: amor, sueños por cumplir, esperanza, aceptación o no-resistencia, desapego, vivir en presente, entrega sin condiciones y servicio al prójimo. Sin tantas especulaciones y recetas, trataremos de demostrar que, en este preciso instante, “uno mismo” puede lograr la producción de unos u otros neurotransmisores, con el sólo auxilio de la imaginación: a) Tenga a mano un block de notas, lápiz y un espejo cualquiera. b) Cierre sus ojos durante tres minutos e imagine: “que cae a las profundidades de un pozo donde hay cientos de ratas que rápidamente se lanzan sobre usted y comienzan a morderlo por todos lados y con 83

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sus labios siente los pelos del vientre de una de ellas que le esta mordiendo la nariz, en medio de la oscuridad y el silencio, sólo interrumpido por sus propios gritos desesperados, mientras siente cómo unas serpientes comienzan a subir por sus piernas”. c) Ahora obsérvese en el espejo y escriba en el papel todas las sensaciones que tuvo durante la experiencia que duró sólo tres minutos. d) Nuevamente cierre sus ojos durante tres minutos e imagine: “que está en una playa de aguas color turquesa, muy transparentes y tibias, tendido en una reposera y a su lado alguien que lo tiene tomado de la mano, lo mira con ternura mientras le ofrece un jugo helado, le dice que ya llegó el cheque con la renta de sus departamentos en el exterior y que además le dieron ganas de hacer el amor una vez más”. e) Ahora mírese en el espejo y escriba todas las sensaciones que tuvo durante la experiencia que duro sólo tres minutos. f ) Compare ambas listas con lo que sigue: LOS TÓXICOS EMOCIONALES (moléculas dañinas) ¿Qué provocan? Ansiedad, miedo, fastidio, desgano, tristeza, desinterés, insomnio, transpiración en manos, aceleración del pulso o taquicardia, sensación de opresión en el pecho, dolor de cuello o dolor de cabeza por contractura muscular, mareos, deseos de llorar, ahogo o sensación de falta de aire, irritabilidad, desasosiego, disminución del apetito alimentario y/o sexual, acidez, sensación de cansancio permanente y de “embotamiento de la cabeza” y disminución de las defensas del organismo frente a las “agresiones” del ambiente. Propensión a las enfermedades infecciosas o a afecciones por “desconocimiento de las células propias” como ocurre con las enfermedades llamadas “por autoinmunidad” o como ocurre con simples “bloqueos emocionales” que impiden embarazos por ejemplo. Cuando perduran en el tiempo suelen determinar una hiperactividad del sistema hipotálamo-hipófiso-adrenal y contribuir al desarrollo de afecciones clínicas, como por ejemplo: 84


Generales: Cáncer Autoinmunidad: Esclerosis en placa, Esclerodermia, Lupus eritematoso Inflamatorias: Artritis reumatoidea Gastrointestinales: Gastritis, Úlcera gástrica, Colon irritable Respiratorias: Asma Cardiovasculares: Hipertensión arterial, Enfermedad coronaria, Arritmias, etc. Dermatológicas: Psoriasis ¿Cuáles son las causas o situaciones que provocan su presencia preponderante y en consecuencia, todas o algunas de sus manifestaciones? tLa principal causa es el Estrés, tema que veremos en un capítulo especial. tLas situaciones de conflicto entre personas: sean familiares, conyugales o laborales. tEl trato con personas conocidas por su actitud derrotista, quejosa, hipocondríaca o como se las conoce vulgarmente, “mala onda” o “negativas”. tLa “adicción” al trabajo. tLa actividad rutinaria y aburrida. tLa actividad intensa y continuada sin pasión por hacerlas y sin pausas renovadoras. tLa falta de contacto con la naturaleza por largos períodos. tLos duelos breves o prolongados. tLas frustraciones o fracasos amorosos, económicos, sociales o profesionales. tLa pérdida del nivel de vida alcanzado. tLos rasgos de personalidad: hipervigilante, controladora, rígida, perfeccionista, insegura de sí misma, reprochadora. tLas broncas acumuladas, los odios guardados, los dolores del alma que perduran, la persistente presencia del pasado en el presente, los autoreproches y los sentimientos de culpa. tLa ausencia de manifestaciones de amor y la falta de contacto físico con otro ser humano, o con animales o plantas. tEl exceso de café, té y mate, así como de comidas ricas en grasas y “conservantes”.

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¿Cómo evitar su prevalencia y en consecuencia sus manifestaciones? tObviamente: evitar o eludir las causas que la provocan. tAdoptar una actitud más amorosa con uno mismo y con el prójimo. tBuscar auxilio profesional cuando no se obtienen resultados por uno mismo. No es una tarea sencilla, pero tampoco imposible, aunque es mucho más fácil “neutralizarlas” produciendo altos niveles de ENDORFINAS. LAS ENDORFINAS (moléculas bienhechoras) Están identificadas y su estructura química es muy parecida a la de la morfina, sustancia usada desde la antigüedad por ser el más potente analgésico conocido y por producir una sensación placentera que se describe como la que se tiene luego de “haber hecho el amor en forma espectacular, haber comido exquisitamente y haber bebido el mejor vino de su vida, todo junto”. Su nombre deriva de allí, de su parecido con morfina (morfina deriva a su vez de Morfeo: Dios del sueño), pero a diferencia de ésta, son sustancias naturales y producidas en el interior por el propio organismo humano (endo: quiere decir interno; lo opuesto a exo o externo), o sea que ENDORFINA es la “morfina interior o natural”. ¿Qué provocan? Todas las sensaciones placenteras que se puedan describir: desde sentir “chispitas en el alma”, pasando por “mariposas en la panza” o “tocar el cielo con las manos” o “viajar a las estrellas”. Es posible que el momento del orgasmo sea la máxima expresión de placer del ser humano, aunque aquellos que han podido experimentar la presencia de la divinidad afirman otra cosa, así como aquellos que han trascendido su propia humanidad al servicio del prójimo. ¿Cuáles son las causas o situaciones que las hacen prevalentes? t Todas las que su imaginación le dicte como posibles productoras de placer, el que debe ser procurado responsablemente y respetando la libertad, la dignidad, las creencias y los derechos de las personas e instituciones. t La risa. t El caminar o trotar con regularidad. t Recibir y dar caricias. 86


t Besar. t Enamorarse. t Hacer el amor. t Darse los “gustos”. t Comer dulces y chocolates (“sin culpas”). ¿Cómo hacer para aumentar su presencia y qué logramos con ello? En el capítulo titulado “LAS ENDORFINAS”, nos extenderemos sobre el tema. Pero desde ya sepámoslo: si uno orienta su vida a mantener un elevado nivel de endorfinas, se está vacunando contra el sufrimiento, el dolor y la enfermedad. Ah!, un aviso importante: “LAS ENDORFINAS SÓLO ESTÁN DISPONIBLES EN LA FARMACIA INTERIOR O FARMACIA DE DIOS”

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CAPÍTULO IV “LAS ENDORFINAS” ¿QUÉ SON LAS ENDORFINAS? Como ya vimos en el capítulo anterior, son sustancias o moléculas químicas que fabrica nuestro organismo. Ellas son las responsables de nuestros estados de bienestar, satisfacción y placer. Su estructura química es de una gran similitud con la morfina, sustancia ampliamente conocida por su alto poder analgésico y su capacidad de producir estados de paz infinita. Este es el efecto que buscan los morfinómanos que, a sabiendas o no, quedan atrapados por el elevado poder adictivo que posee, situación que produce daño físico y psicológico. Las Endorfinas también poseen poder analgésico y capacidad de producir sensación de bienestar, paz, satisfacción y placer, pero a diferencia de aquella, son naturales y saludables, ya que además de hacerlo sentir bien y pleno, lo protege de enfermedades y por si fuera poco, además lo rejuvenece. La mayor dificultad que tienen es que sólo se fabrican en “nuestro interior” y no se pueden transfundir, salvo a través de la leche materna y en dosis suficientes para el placer del bebé. Fabricar endorfinas, posiblemente, sea la actividad más placentera que se le pueda recomendar a alguien. No requiere ningún entrenamiento especial, ni dinero, ni esfuerzo alguno, sólo se necesita la disposición mental y física para hacerlo; quizás éste sea el obstáculo más difícil de sortear: la actitud o disposición para lograr estar bien cuando no lo estamos. En verdad, cuando existe un proceso depresivo normal, duelos recientes por muerte o separaciones u otras pérdidas, o enfermedades físicas o dificultades económicas, resulta difícil remontar el humor disminuido y más aún cuando el malestar psicológico es profundo y/o prolongado. Dejando de lado estos casos que requieren un necesario tiempo de elaboración psicológica de la pérdida, y sin que se plantee la necesidad de una intervención profesional especializada, el saber sobre la existencia de estas moléculas bienhechoras en el interior de nuestro organismo, es de por sí una ventaja, en particular, al comienzo de los procesos, cuando una intervención oportuna puede evitar el desarrollo o acortar la duración de un estado que se anuncia. 91

Endorfinas

Un buen nivel de endorfinas no sólo proporciona la sensación de bienestar, tranquilidad y paz, sino que además logra aumentar el nivel de defensas y, en consecuencia, elevar la protección frente a cualquier tipo de agresión al organismo; así el “ataque” provenga del exterior o del interior de uno mismo. Y esto es válido tanto para las agresiones “físicas” como las que producen virus y bacterias, como para las agresiones psicológicas. Esto lo podemos ver claramente en los enamorados. Su alto nivel de endorfinas hace que no solamente se sientan maravillosamente bien sino que, expuestos a situaciones que a otros los enfermarían, a ellos no les afectan, tampoco les llegan los comentarios negativos, ni nada que se encuentre fuera del microambiente en que viven. En el caso particular de las Crisis de Pánico deben tenerse muy en cuenta, pues un buen nivel de Endorfinas aleja la posibilidad de sufrirlas. No se ha informado de crisis o ataques en momentos o circunstancias de verdadero estado de placer y, en cambio, es constante el desarrollo de las mismas en circunstancias de tensión o sobrecarga emocional, real o imaginaria de la persona. ¿CÓMO FABRICAR ENDORFINAS ? Como ya lo dijimos, es cuestión de mentalizarnos en la necesidad de fabricarlas. Para ello es necesario, incorporar algunas claves o principios básicos que todos conocemos pero no aplicamos. Ellos “abonarán” el terreno donde “florecerá” el bienestar: NADIE LO HARÁ POR NOSOTROS. Procuremos ser autores, protagonistas o espectadores, o todo a la vez, de todas aquellas situaciones que nos den placer o satisfacción, que sean legales, saludables para nosotros y los demás, y respetuosas de las normas de convivencia entre las personas. Dicho en pocas palabras: hagamos mucho de todo aquello que nos gusta, que no esté prohibido, que sea saludable y evitemos, en la medida de lo posible, todo aquello que no nos gusta. Sobre todo evitemos preocuparnos por el placer ajeno: nosotros no somos los responsables del placer de los otros, ni la fuente de los deseos.

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VIVAMOS EL PRESENTE tPerdón Perdonemos a todos aquellos que nos hicieron daño, nos causaron dolor o pena, incluidos nosotros mismos. Abandonemos aquí mismo esa pesada mochila que arrastramos llena de culpas propias o ajenas y aceptemos que las cosas fueron como fueron y que hagamos lo que hagamos, no cambiarán. Los malos recuerdos y los rencores acumulados se guardan en una fuente de lágrimas, por eso, al traerlos al presente siempre vienen húmedos de dolor y tristeza y reiteran las mismas angustias y sufrimientos que ya nos lastimaron una vez. Al pasado y a toda su pesada carga dejémosla allí de la mano del perdón y de la aceptación, y proyectémonos al futuro que es hoy y que nos está esperando para “que hagamos realidad todo lo que deseamos”. Hoy es un buen día para comenzar de nuevo. Mientras no podamos perdonar todo lo que creemos nos hicieron o todo lo que nosotros creemos le hicimos a otros, el pasado nos seguirá dañando a nosotros mismos y a nadie más. Eso es precisamente lo que estamos logrando aquí y ahora, mientras no usemos el recurso del perdón. El perdón es un regalo que nos hacemos a nosotros mismos. tAceptar Aceptar quiere decir: comprender que las cosas son como son, que esto es lo que hay, es no resistir, ni oponerse, ni quejarse, ni protestar, ni buscar explicaciones, responsables o culpables de la realidad. Aceptar es comprender que “si hoy llueve”, haga lo que haga no podré modificar esa realidad y no importa por qué está ocurriendo, pues el saberlo tampoco modificará nada. Aceptar no es sinónimo de conformarse. El conformarse es adaptarse pasivamente a la realidad y esperar que las cosas cambien por sí mismas, sin nuestra intervención y a pesar de nuestro malestar. Veamos un ejemplo: - No Acepto: llueve y me quejo de ello “pues se me arruinó el día. Si salgo me mojaré y me enfermaré y ¿qué hago mientras llueve?,

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¡Se me complicó el día!, ¡¿ Justo hoy tiene que llover?!” - Me conformo: “y bueno... llueve... esperaré a que pare” - Acepto: llueve. Si es invierno: “me abrigo, busco el paraguas y pienso en lo que haré ahora a pesar de la lluvia, o cambio mis planes y me dedico a mí mismo o...” Si es verano: “¿qué tal si camino bajo la lluvia y me dejo acariciar por las gotas?” o “¿qué tal si juego a pisar los charcos como cuando era niño?” tDediquemos todas nuestras energías a “fabricar los recuerdos del futuro” sintonizando con el “aquí y ahora” No existe mejor momento que el actual. El Hoy es un regalo que nos llega con cada amanecer y por eso se llama presente. Si ponemos toda nuestra energía al servicio de darnos un presente hermoso, éste será un recuerdo dentro de un tiempo. De “nuestra actitud” depende que siempre estemos alerta y que, pese a los obstáculos y dificultades que seguramente encontraremos en nuestro camino, tengamos la determinación de vivir “AQUÍ Y AHORA”. Los buenos momentos se guardan en una fuente de estrellas, al traerlos al presente vienen con un brillo que se hace sonrisa e ilumina la mirada. tNo posterguemos nuestros sueños o deseos Hagamos un listado con los: “a mí me gustaría...”, donde resalten los deseos postergados para una mejor ocasión y entonces pensemos: que esa ocasión o momento ya llegó, la ocasión es hoy mismo, no hay mejor momento que hoy para empezar a curar tantos olvidos y postergaciones acumuladas a lo largo de una vida desconectada de uno mismo y del presente. tHabía una vez... ...Una persona que cayó por un barranco hasta que logró sostenerse de las raíces de un árbol. Arriba del barranco había un oso inmenso que quería devorarlo. Abajo, listos para tragarlo cuando cayera, estaban seis tigres tremendamente hambrientos. Cuando el oso daba una tregua, oía el rugir de los tigres, próximos a sus pies. Así desesperado y pensando que su fin estaba próximo, observó que a su izquierda había una frutilla roja, linda y brillante. En un esfuerzo supremo, apoyó su cuerpo, sostenido solamente por la mano derecha y, con la izquierda, tomó la frutilla. Cuando pudo mirarla mejor quedó admirado por su belleza. Entonces llevó la frutilla a la boca y disfrutó su sabor dulce y suculento. 94


Fue un placer supremo comer aquella frutilla tan rica. Quizás me preguntes: “Pero, ¿y el oso?”... Olvida al oso y ¡come la frutilla! ¿Y los tigres? Mala suerte de los tigres, ¡come la frutilla! Siempre existirán osos queriendo comer nuestras cabezas y tigres queriendo arrancar nuestros pies. Eso hace parte de la vida, pero es importante saber comer las frutillas, siempre. Nosotros no podemos dejar de comerlas sólo porque existen problemas. Come la frutilla, no dejes que ella escape. Puede no haber otra oportunidad para experimentar algo tan sabroso. Relájate y vive un día a la vez: ¡come la frutilla! Los problemas están en la vida de todos, pero la gran verdad es que el mejor momento para ser feliz es ahora... ¡no dejes pasar el momento! Esto no significa ignorar lo que nos está sucediendo, sabemos cuáles son nuestros problemas, sabemos también que puede suceder o tal vez no, pero también en este instante algo maravilloso puede estar sucediéndonos y por dejarnos llevar por los problemas dejamos de vivenciarlo como se debe. Y así se nos pasa la vida, de problema en problema. No dejes pasar los buenos momentos, no los ignores, ni pienses que esto bueno que ahora, en este instante, está sucediendo se repetirá algún día. Cada momento de nuestra vida es único e irrepetible: ¡No te lo pierdas! Con estas premisas ya asumidas nos ponemos a la tarea de fabricar ENDORFINAS:

LA RISA La risa y el buen humor son recursos rápidos para generar endorfinas. Entonces procuremos acercarnos a personas “ocurrentes” , “graciosas” o de “reconocido buen humor”, aquellas que en medio de una reunión se las reconoce por su risa. Concurra a espectáculos cómicos o escuche grabaciones con cuentos o participe de “Talleres de Risa”, práctica que gradualmente se va difundiendo como una terapia accesible y eficaz. Cuando más adelante cada uno de nosotros se sienta más seguro de “sí mismo”, notaremos que podremos hacer chistes sobre lo que nos pasa. Esa será una muy buena señal de que estamos en el buen camino.

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LA ACTIVIDAD FÍSICA: TROTAR - CAMINAR La actividad física es productora de endorfinas si se es constante en su práctica. Seguramente conocemos a alguno de los “fanáticos” del trote o de las caminatas enérgicas (no de paseo) que si no salen a realizar su actividad, sienten “como que les falta algo”. Es que las endorfinas producen una especie de saludable adicción. Estas actividades aeróbicas son más efectivas cuando se circula por sectores arbolados o con la mayor cantidad de naturaleza posible. Caminemos regularmente cada mañana durante cuarenta minutos, antes de comenzar con las actividades del día y veremos que la disposición para la jornada es más positiva. Si podemos repetirla al atardecer, mucho mejor. NO NOS PRIVEMOS DE ESOS PEQUEÑOS GUSTOS O PLACERES QUE TODOS TENEMOS Podemos comenzar por redactar un listado de las cinco o diez cosas que más nos gustan y compartirlas con alguien cercano, con ganas de ayudarnos a lograrlo y por qué no, invitarlo a ser cómplice de nuestros deseos. Seguramente en ese listado habrá cosas o situaciones particulares, y personalísimas. Son esos pequeños placeres que todos tenemos: “me encanta que me rasquen la espalda”, “a mí me gusta que me rasquen la cabeza”, “me gusta tomar champagne de vez en cuando sin que haya un motivo para festejar”, “sentarme a tomar algo en la vereda de una confitería en una mesa con sombrilla”, “leer el diario recién abierto por mí”, “darme un baño de inmersión”, “tomar una cerveza bien helada”, “pedir un helado de Sambayón”, “tomar mate inmediatamente después de almorzar”, “meter el pan en la salsa que se está cocinando”... etc. No sólo no nos privemos sino que, de vez en cuando, hasta sería bueno abusar de ello. A pesar de un amigo que decía: “todo lo bueno está prohibido o es caro o engorda”, lo cual no es cierto. - LOS GESTOS DE TERNURA Todos los gestos de ternura generan altos niveles de endorfinas: el abrazo, la caricia, el beso, las miradas de amor, las palabras de gratitud o reconoci-

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miento de méritos o aptitudes son expresiones que nuestro organismo recibe con placer, sin importar su origen. Ocurre igual cuando uno las brinda a su vez a otra persona. Este intercambio es mucho más efectivo cuando se realiza con personas queridas o cercanas, sin embargo, y como el cerebro “no distingue”, también son válidas las caricias o muestras de afecto que provienen de otras personas y también de los animales domésticos. - BESAR El acto de besar puede ser una expresión de respeto, de cariño, de amor o de pasión. Existen muchos tipos de besos, pero el más importante por lo intenso es el beso apasionado de los enamorados. Cada vez que podamos besemos a las personas queridas y estimulemos su práctica, nos beneficiará a todos. - ENAMORARSE Es la situación ideal, en ella la producción de endorfinas es constante y abundante. No es fácil llegar a ese estado, aunque los que lo logran se “zambullen” en un mundo donde todo está bien, todo es bello, el tiempo no importa, tampoco lo que digan los demás, las incomodidades no molestan, etc. Y además, físicamente, se pueden “ver” los beneficios de un alto nivel de endorfinas: piel tersa, mirada chispeante y cara sonriente. Podemos afirmar en consecuencia que las endorfinas rejuvenecen. HACER EL AMOR La sexualidad humana es la mayor fuente de placer que tenemos como seres vivos normales y, en consecuencia, es cuando alcanzamos los mayores niveles de endorfinas, en particular cuando se alcanza el instante del orgasmo. Cuando ese momento se logra con la persona amada, se tiene la oportunidad de alcanzar, en “vivo y en directo”, la experiencia de sentir el alma: sin tiempo, sin defensas, con entrega sin condiciones, sin egoísmo y en común unión con el otro. Los seres humanos tenemos la posibilidad de aparearnos sin necesidad de esperar a una especial época del año, sin que haya necesidad de procrear y por puro placer. No se prive cuantas veces pueda. - COMER CHOCOLATES Y DULCES (“sin culpas”) Los “dulces” son el alimento preferido de las neuronas y en particular el chocolate. 97

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- DESCUBRIR EL PLACER DE LAS COSAS COTIDIANAS Y SIMPLES Disfrutemos de un buen descanso, de una buena comida o de un paseo porque sí o de los gestos de amor u ocurrencias de nuestros hijos, sobrinos, nietos, o de las cosas que pasan a nuestro alrededor y en las que no habíamos reparado. Volvamos a mirar viejas fotos o saquemos para releer “esas” cartas que tan celosamente guardamos en algún rincón, o cerremos los ojos y recordemos momentos felices, o soñemos despiertos con proyectos y anhelos, en todos los casos las endorfinas acudirán a la cita y lo harán sentir bien. - SERVIR AL PRÓJIMO Ésta es quizás, junto a la sexualidad, la mayor fuente de producción de endorfinas. Practiquemos la caridad, la solidaridad y el servir al prójimo que necesita o sufre y no esperemos nada a cambio. Ese acto de entrega o de servir al otro, al margen de lo que a esa persona pueda significarle o no, producirá en nosotros una automática sensación de bienestar por las endorfinas producidas. Existen numerosos ejemplos de personas que ratifican esta afirmación, algunos de ellos han logrado elevarse hasta niveles de santidad, niveles donde el amor, el perdón y la compasión brotan espontáneamente. Para finalizar tengamos muy presente que: Nunca debemos perder una oportunidad de divertirnos o de ayudar al prójimo o de demostrar afecto y amabilidad a las personas. No nos privemos de una buena dosis de endorfinas y recordemos... nadie lo hará por nosotros (aunque se aceptan colaboraciones).

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CAPÍTULO V “ESTRÉS”

¿ESTRÉS o STRESS? Ambos términos son correctos. El primero es la adaptación fonética al idioma español, de la palabra inglesa usada para definir un estado psicofísico que se presenta en determinadas circunstancias tanto en los animales como en los seres humanos; su significado aproximado es TENSIÓN, es decir, “una sobrecarga que exige una respuesta máxima” (la misma que sufre un neumático cuando se le ingresa aire) o la PRESIÓN que hace que “un organismo se deforme y se ADAPTE a una circunstancia distinta a la que tenía previamente” (como las deformaciones que sufre el neumático según las irregularidades del terreno). No obstante ello, y en coincidencia con estos términos, todas las personas tienen una idea de lo que significa Estrés, y ellas coinciden en señalar que es un “estado de tensión” que precede a la aparición de síntomas más o menos graves o de verdaderos cuadros clínicos, cardiovasculares, respiratorios, digestivos, infecciosos o dermatológicos. Algunos asimilan ese estado a una sensación de “presión intolerable” o de “sobrecarga”. Otros consideran que es uno de los problemas que trajo la vida actual, fruto de cada vez mayores y variadas exigencias. El tema comenzó a estudiarse con detenimiento, luego de que Cannon en 1929 presentara un trabajo en el que describía una serie de manifestaciones que se producían en los organismos vivos cuando eran sometidos a situaciones amenazantes. Estos trabajos luego fueron retomados por Hans Seyle, médico endocrinólogo, nacido en Viena en 1907, quien vivió en Canadá y falleció en 1981. Él fue quien describió los síntomas y los agrupó bajo el nombre de Síndrome General de Adaptación señalando que “el estrés es el modo normal de responder que tiene el organismo cuando está amenazado”. Desde entonces numerosos autores se ocuparon del tema, pero aún hoy no existe acuerdo para definirlo con precisión. Lo cierto es que el término se ha usado y se usa con significados varios como: “es algo agudo que se presenta en determinadas situaciones y produce daños en la salud” o “es la causa de un estado de agotamiento”, etc. 101

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EN BUSQUEDA DE UNA DEFINICIÓN tPRIMERAS ESCENAS “Un rugido interrumpe el descanso del hombre en la caverna, está recostado junto a su compañera, luego de una jornada en la que logró cazar un venado que apenas lo lastimó. Atento se yergue, ve una sombra y con sigilo arroja una piedra para alejar a la fiera amenazante. Sus músculos están tensos, preparados para la acción, sus pelos están erizados, su pulso está acelerado y siente el palpitar de su corazón, mientras un sudor frío humedece su frente y un ligero temblor se apodera de sus manos, siente además miedo y toda su atención está puesta en la amenaza...” “Un grito interrumpe la tarea del Sr. Martínez en su oficina, está concentrado tratando de completar el trabajo que deberá entregar en horario a su Jefe, un acosador que lo único que le importa son ‘los resultados’ ya que para él las personas son números ‘descartables’. El grito que acaba de escuchar, no está dirigido a él sino “al pobre Ramírez al que en cualquier momento lo echan’, ahora viene hacia aquí, se acerca, ‘seguro para preguntarme porqué llegué tarde y no me va a entender que el tránsito se interrumpió por un asalto con toma de rehenes, cerca del colegio de mis nenas’. Sus músculos están tensos, le duele terriblemente la nuca y la cabeza, su pulso está acelerado, siente los latidos de su corazón, un sudor frío cubre su frente, un ligero jadeo en su respiración y un temblor en sus manos, siente miedo, ansiedad e impotencia: necesita imperiosamente su trabajo, todos sus pensamientos están concentrados en ese momento”. “Un estridente sonido llega a sus oídos, es la sirena de la ambulancia que llega hasta el lugar del accidente, hace minutos un camión sin luces se les vino encima y los embistió, todos están heridos, la mamá va de uno a otro tratando de socorrerlos, tiembla de miedo, siente la intensidad de los latidos de su corazón y la tensión de sus músculos, no siente ningún dolor ni le importa saber si está o no herida, lo único que importa es auxiliarlos”. “Unos imponentes acordes llenan de música todo el templo, un suave murmullo acompaña las miradas sonrientes dirigidas hacia la joven que del brazo de su padre se dirige al altar, por fin llego el día de su boda, está ansiosa aunque feliz, 102


su pulso está acelerado, puede sentir los latidos de su corazón y la tensión de sus músculos, sonríe con una mueca pues el momento no es para risas, hace muchos días que viene acumulando tensiones, preparándose para ese momento en el que comienza una nueva vida”. “El llanto de un bebé se escucha en medio de la noche, la mamá presurosa se levanta y rápidamente se acerca a su cuna, lo alza y lo acurruca entre sus brazos... no tiene fiebre, respira normal, tiene hambre... mientras le da de mamar, piensa: ‘otra vez con ojeras a la oficina’ y luego: “buscar a Jorgito y al Super’ ,‘no tengo casi nada en la heladera’, ‘y esta noche la fiesta de Eduardo’, ‘lo tengo un poco abandonado’... ‘y mamá que no me asegura que vendrá a cuidarlos’ ,‘pobre, es tan buena’ , ‘Huyyy!, hoy tengo Ginecólogo!’, ¿qué hago para la cena?”. “Una suave brisa trae consigo un olor que la grácil gacela percibe y de inmediato reconoce que cerca está el temible leopardo, su pulso se acelera, sus pelos se erizan y sus músculos se tensan, levanta su cabeza y mira a su alrededor en busca del mejor sitio por donde escapar urgente”. “Un ruido en el patio despertó al perro que dormía plácidamente, de inmediato olfateó algo extraño y sus pelos se erizaron, los latidos de su corazón se hacen más intensos”... etc. Como apreciamos, todas estas PRIMERAS ESCENAS tienen algo en común: 1- Todas muestran el desarrollo de una serie de manifestaciones físicas y psíquicas a partir de un hecho o situación que, de alguna manera, interrumpe un estado previo de reposo, tranquilidad o bienestar. En otras palabras: estar bien, en equilibrio, en paz. 2- No importa la intensidad del hecho ni su calidad, aunque sí importa la cognición o interpretación que del mismo hace el ser vivo que lo percibe. Intencionalmente, el relato de PRIMERAS ESCENAS lo iniciamos con el hombre de las cavernas pues en aquellos tiempos el hombre ya sufría estrés cuando era amenazado por las fieras o los grandes animales, por los fenómenos de la naturaleza (tormentas, huracanes, terremotos), o por el aislamiento (aprendió que en grupo estaba más seguro); entonces incorporó a su memoria que ante la 103

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amenaza sólo tenía dos caminos: la lucha o la huida. Y su organismo desarrolló un sistema para protegerlo: es lo que Hans Seyle describió como Síndrome General de Adaptación y que todos nosotros llamamos ESTRÉS. O sea que, en principio, el estrés fue un desarrollo tendiente a dar protección al hombre. Los grandes animales desaparecieron de la tierra y el hombre incorporó la agricultura como medio de proveerse el sustento, con lo cual la caza y sus peligros perdieron preponderancia y con ello el concepto que se tenía de la supervivencia: ya no sobrevivía el “más fuerte” sino el “más sabio”. No obstante, la actitud de lucha / huida ante la amenaza quedó incorporada a la memoria del hombre hasta hoy. También la poseen incorporada los animales que tienen cerebro como para tener memoria y “saber” qué cosas les producen rechazo o profundo desagrado, dolor y sufrimiento, como ya vimos. Los estudios sobre el Estrés se impulsaron durante la II Guerra Mundial luego de ver las consecuencias que se presentaban en los soldados, expuestos a la amenaza permanente de perder la vida por acción del enemigo y también las de los civiles sobrevivientes de los campos de concentración. En la actualidad y luego de la guerra de Vietnam se definió un cuadro psiquiátrico denominado Síndrome de Stress Post-Traumático (PTSD = POSTTRAUMATIC STRESS DISORDER) en el que se reúne la sintomatología que se presenta como consecuencia del Estrés Agudo por hechos de violencia, guerras, catástrofes o delitos. Éste es uno de los diagnósticos que junto con el Trastorno de Pánico, el Trastorno de Ansiedad Generalizada, Fobia Específica y Trastorno Obsesivo Compulsivo, integra el grupo de las afecciones englobadas bajo el título de Trastornos de Ansiedad. Ahora retornemos al Estrés y a las dificultades que encontramos al definirlo. Lo hasta aquí expuesto nos permite afirmar: 1. Tanto los animales como los seres humanos sometidos a presión, exigencia o amenaza (agentes estresores), desarrollan respuestas que tienen por finalidad preparar al organismo para la acción, con el objetivo manifiesto de recuperar el equilibrio perdido como consecuencia de la irrupción de la presión / exigencia / amenaza.

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2. La característica de la presión o exigencia (agente estresor) puede ser agradable (boda, nacimiento de primer hijo, obtener un premio, primera cita, etc.), o amenazante y desagradable (discusión, accidente, inestabilidad laboral, acoso sexual o laboral, sirena, gritos, rugido, temperaturas extremas, etc.). 3. Aunque independientemente de la calidad del agente estresor, lo que importa es la capacidad de la persona o animal de mantener su paz y bienestar a pesar de lo que está sucediendo. 4. En consecuencia, podría concluirse que existiría en todos los seres humanos, un nivel individual y personal de resistencia a soportar determinadas situaciones, o una mayor vulnerabilidad frente a los mismos hechos. Es decir que todos nosotros estamos ubicados entre dos extremos: uno, el de la “Vulnerabilidad” (personas “frágiles o de poco aguante”) y otro, el de la “Resiliencia” (*) (personas “resistentes o de mucho aguante”). tSEGUNDAS ESCENAS 1. Final y Cierre Sin Acción El rugido se aleja de la entrada de la caverna, el grito calla en la puerta de la oficina, la sirena cesa: ha llegado al hospital, el llanto del bebé se calma, la boda finaliza, la gacela vuelve a pastar en otro sitio, el perro no escucha nada extraño... Todo ha vuelto a la “normalidad”, el corazón late normalmente, la presión arterial está en niveles normales, no hay transpiración, ni piloerección: se ha recuperado el equilibrio perdido por un momento. En este “final y cierre” se recupera de inmediato el estado de equilibrio previo. Todo lo que el organismo “armó” en el estado de “alerta” y de preparativos para la acción, se “desarmó” pues no fue necesario llegar más allá. No fue necesario salir huyendo ni atacar al agente estresor para destruirlo. En este caso, el Estrés de corta duración hizo que por unos momentos se pusieran en acción los “mecanismos” que normalmente usa el cuerpo para mantener la vida en caso de exigencia. Si se me permite la comparación es como probar (*) Resiliencia: término adoptado de la física y que alude a la propiedad que tienen algunos materiales de hacerse “más aguantadores” o resistentes ante mayores presiones, temperaturas, etc. 105

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un motor “poniéndolo a fondo” sólo por unos minutos. Y aunque no lo parezca, esto es saludable para el motor y también para el organismo y el cerebro, pues la secreción de unas hormonas de la que luego hablaremos (glucocorticoides) en “dosis pequeñas o bajas”, hace que las neuronas aumenten sus conexiones dendríticas (más conexiones = más posibilidad de resolver dificultades o sea que aumenta la capacidad de conocer, comprender, resolver) y además que se estimule la neurogénesis: la neurona no puede reproducirse como otras células del cuerpo, pero se ha comprobado que existen neuronas de “reserva” que ante un factor de crecimiento, llamado NGF (Nerve Growth Factor) se suman a las existentes. Las neuronas más sensibles a la acción de las hormonas del estrés son las de una región llamada Hipocampo y que pertenece al Cerebro Límbico donde se procesa la memoria temporaria o de corto plazo y el reconocimiento que permite distinguir lo importante de lo no importante o irrelevante. En síntesis y dicho en otros términos: “un poquito de estrés: estimula y sienta bien”. 2. Final y Cierre con Acción No en todos los casos en las primeras escenas podremos tener acción. Quizás el hombre de las cavernas, la gacela o el perro puedan enfrentarse a la necesidad de tomar una decisión rápida: luchar o huir. Lo harán y será lo más saludable, pues si no actúan y se quedan paralizados, todo lo que el organismo “armó” se agotará y se “desarmará”, quedando a disposición del agente estresor o estresante, y es allí donde el más débil sucumbe. 3. Final y Cierre con Adaptación Pero ¿qué pasa con el que no puede ni luchar ni huir como el hombre de la oficina, ni hacer nada más que esperar a que todo pase, como la chica en su boda, o la mamá y la ambulancia, o la mamá y su bebé?. La falta de acción conduce a una situación en la que el organismo que preparó todo para actuar no lo hizo y, en cambio, se tuvo que adaptar a lo que estaba ocurriendo y desarmar en silencio los preparativos. Es en este 106


momento, que el organismo toma nota de todo lo ocurrido y habilita una especie de cuenta corriente donde registra las molestias ocasionadas y el costo correspondiente y nos dice: “gastá tranquilo, ténes crédito, algún día te pasaré la cuenta toda junta, pero no te aflijas, antes de que eso ocurra te haré algunas advertencias”. Este precio que todos pagamos por adaptarnos a las situaciones estresantes, es lo que modernamente se conoce como “Carga Alostática”. 4. Final y Repite la Escena Luego de recuperado el equilibrio como en la escena anterior, un nuevo o el mismo agente estresor entra en escena y se repite todo: la tensión, las palpitaciones, el jadeo, la transpiración, etc. En este caso el final no es tal, pues se repite y se repite sin poder establecerse una pausa o cese. Y es entonces cuando nos encontramos con el estrés al que todas las personas hacen referencia cuando dicen “estoy estresado”, o cuando alguien cercano nos señala “tenés que parar un poco, te estás matando”. Éste es el estrés que como factor importante, aunque no el único, está detrás de: Trastornos del Humor (depresión), Trastornos de Ansiedad (Trastornos de pánico, Trastorno de ansiedad generalizada), Infarto y Arritmias cardiacas, Hipertensión arterial, Trastornos digestivos (dispepsias, úlceras gástricas, colon irritable), Trastornos Respiratorios (asma bronquial), Trastornos Dermatológicos (psoriasis, vitiligo), Enfermedades Infecciosas y Cáncer (por disminución de las defensas), además del Envejecimiento Prematuro. Ya está confirmado que el Estrés prolongado y repetido va produciendo “daños” en el cuerpo y a nivel cerebral, daños que no se notan de inmediato, sino después de un tiempo. Imaginemos lo que ocurre con un motor al que se lo vive poniendo “a fondo” a cada momento. Inevitablemente se deteriora y se gasta rápidamente hasta fundirse antes de lo previsto. Algo parecido pasa con nuestro organismo. Los daños que se producen en todos los sistemas, vascular, digestivo, etc., van en aumento y al cabo del tiempo comienzan a aparecer las primeras señales (fatiga prematura o injustificada, tristeza inmotivada, etc.). Volveremos sobre este punto. A nivel cerebral, se ha determinado que las mismas hormonas (glucocorticoides) que estimulaban la neurogénesis, la arborización y mayores conexiones 107

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dendríticas en niveles o “dosis” bajas como las que se obtienen en el estrés ocasional y de breve duración, producen todo lo contrario en niveles o “dosis” altas, como las que se obtienen en el estrés continuado o sostenido. O sea que un poco de estrés es bueno, pero mucho estrés es muy dañino porque produce “poda de dendritas, atrofia y muerte neuronal”. Y esto se traduce en inhabilidad para discriminar lo importante de lo accesorio, para mantener la atención y para grabar los hechos recientes. La enfermedad aparecerá tarde o temprano, justo en el momento en que la “Carga Alostática” sea excesiva y el “cuerpo cierre la cuenta corriente, retire el crédito y pase la factura para cobrar toda la deuda de una sola vez”. AGENTES ESTRESORES ¿Cuáles son las situaciones o hechos capaces de producir Estrés? Son tan variados como la vida misma y su incidencia dañina depende directamente de la persona que está expuesta a su acción. Por ejemplo: para algunos, dar una conferencia es una situación placentera y para nada estresante, pero para otros es una experiencia aterradora, aún para aquellos que están habituados a hacerlo. En líneas generales, mediante encuestas, se han determinado distintas situaciones de la vida actual, evaluadas por las personas como los eventos más estresantes, estableciéndose este ordenamiento, en el cual el tope es 100. t.VFSUFEFIJKP 100 t.VFSUFEFDØOZVHF 90 t%JWPSDJP 75 t1SJTJØO 65 t.VFSUFEFVOGBNJMJBS 63 t%FTPDVQBDJØO 60 t*OTFHVSJEBE1ÞCMJDB 60 t$BTBNJFOUP 50 t&NCBSB[P 40 t.VEBO[B 31 t/BWJEBEFT 12

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Como vemos se mencionan eventos desagradables y otros agradables. El listado podría ampliarse con otras situaciones y así se considera: INTENSIDAD

Leve

ESTRÉS AGUDO

- Ruptura afectiva

- Discusiones familiares

- Inicio escolar

- Insatisfaccione laborales

- Graduación de estudios

- Barrio o zona peligrosa

- Matrimonio Moderado

ESTRÉS CRÓNICO

- Separación Conyugal - Pérdida de empleo - Jubilación

- Incompatibilidad Conyugal - Dificultades económicas serias - Dificultades con superiores - Estar a cargo de los hijos como único progenitor

-Divorcio Grave/extremo

- Nacimiento del 1º hijo - Diagnóstico de afección grave - Muerte de la esposa

Catástrofico

- Desocupación, pobreza - Enfermedad grave de uno mismo o de un hijo - Lesiones físicas

- Violación

-Abuso sexual

- Muerte de un hijo

- Secuestro y cautividad

- Suicidio de un conyuge

- Experiencia en campo de concentración

- Catástrofe natural devastadora

Existen otras situaciones estresantes tales como: t Ruidos excesivos de motores, bocinas, sirenas. t Contaminantes ambientales por exceso de estímulos: carteles publicitarios, semáforos, smog, exceso de tránsito y de humo por escapes de motores o por falta de espacios verdes, árboles, flores, fuentes, etc. t Inseguridad personal por incremento de delitos de todo tipo. 109

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t Inseguridad laboral y sobreexigencia para alcanzar resultados en plazos preestablecidos. t Acoso sexual o acoso laboral. t Soledad. t Vida rutinaria y/o aburrida. t Calor o frío excesivo. Entre los profesionales médicos las especialidades más estresantes son: t"OFTUFTJB t5FSBQJBJOUFOTJWB t$JSVHÓB LOS AGENTES ESTRESORES PRODUCEN: ESTRÉS Y nuevamente estamos como al principio, en la necesidad de definir la palabra que no tiene traducción adecuada, que todos saben lo que significa y produce, pero sobre la que aún no hay acuerdo para definirla. No obstante, lo intentaremos: “El Estrés es la respuesta psíquica y física que el organismo pone a disposición del individuo para ser utilizada en caso de necesidad, ante la presencia de un elemento que amenaza o que perturba su aparente estado de equilibrio o paz. Esa respuesta, si bien es similar para todos, tiene variaciones en cuanto a su intensidad y duración, dependiendo la misma de la capacidad o nivel de Resiliencia o Vulnerabilidad que el mismo individuo haya desarrollado a lo largo de su experiencia de vida y de la persistencia o no de los agentes estresores”. EL ESTRÉS DEPENDE DE UN EJE Un eje es una barra con dos extremos. En nuestro organismo tenemos un “eje” imaginario que une varias estructuras. En el extremo superior está el Hipotálamo y la Hipófisis y en el inferior las glándulas Adrenales, por ello se lo llama: “Eje Hipotálamo Hipófiso Adrenal”. Inmediatamente por debajo y como “colgando” del Hipotálamo, al que se encuentra íntimamente unida, se encuentra la glándula Hipófisis también llamada Pituitaria, la que tiene bajo su “dirección” a todas las glándulas del organismo y, entre ellas, a las llamadas Suprarrenales o glándulas Adrenales 110


que se encuentran montadas en la parte superior de cada riñón. Así es que, el “eje” imaginario se extiende entre el Hipotálamo y la Hipófisis en el centro de la cabeza y las glándulas Adrenales que están a la altura de los riñones en la parte baja de la espalda. Estas tres pequeñas estructuras son las responsables de los grandes cambios que se producen cuando el estresor se presenta. tHipotálamo es la “central” que tiene bajo control a todas las funciones relacionadas con lo básico o mínimo que se necesita para mantener la vida: el latir del corazón, la respiración, el hambre, la sed, la temperatura, etc, funciones vitales mínimas, tal como la de los vegetales. Por ello se dice que es el nivel cerebral más primitivo y elemental, responsable de la vida “vegetativa”, el mínimo compatible con la vida misma. Ese control lo efectúa a través de nervios que actúan directamente en los lugares donde se producirá el efecto, ellos son: 1) Sistema Simpático que es “estimulador” o excitatorio. Por ejemplo: acelera el pulso, aumenta la presión arterial y la frecuencia respiratoria, agranda la pupila del ojo (midriasis), hace que se “paren los pelos” (piloerección), que las glándulas sudoríparas produzcan sudor y que las sudoríparas de los lugares con pelos (axila, genitales) segreguen sudor espeso y con olor, que se contraigan los esfínteres y entre ellos el del ano, etc. Uno de los estímulos más importantes que produce, lo realiza sobre la glándula suprarrenal para que segregue adrenalina y noradrenalina, hormonas que refuerzan los efectos ya señalados. 2) Sistema Parasimpático que es “frenador” o inhibidor, produciendo así, casi todo lo contrario y también hace que las glándulas nasales y lagrimales segreguen moco y lágrimas (el llanto alivia porque llega junto con el parasimpático que “frena” la excitación). tHipófisis: El Hipotálamo actúa estimulando directamente a la glándula Hipófisis para que ésta segregue “sus” hormonas, las que a su vez estimulan 111

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la secreción de todas las hormonas que producen las demás glándulas del organismo, según el siguiente esquema:

tSuprarrenales : De todas las glándulas que dependen de la Hipófisis, las que tienen directa y estrecha relación con el Estrés son las glándulas Suprarrenales (que como ya lo expresamos, estan en el extremo superior de cada riñón). También se las denomina adrenales por una de sus hormonas: la Adrenalina. Las suprarrenales son dos glandulas pequeñas y en su interior se distinguen dos zonas: una periférica, la corteza, y otra central llamada médula. La corteza es estimulada por una hormona hipofisiaria llamada ACTH (Adreno Cortico Trophy Hormon). La corteza suprarrenal segrega dos tipos de hormonas: 1) los Mineralocorticoides que actúan en la regulación de los “minerales” delv tipo Sodio, Potasio y Cloruros. De todos los mineralocorticoides la hormona más destacada se llama “aldosterona” y ella actúa a nivel del riñón 112


reteniendo o permitiendo que se elimine Sodio, Potasio o Cloruros según las necesidades del organismo. 2) los Glucocorticoides que intervienen en el metabolismo de los “azúcares”, proteínas y grasas. De todos los Glucocorticoides el que más se destaca es el “cortisol” tambien llamado “hidrocortisona”. La principal función del Cortisol es hacer que aumente la cantidad de glucosa (Nota: la glucosa es un Hidrato de Carbono popularmente conocido como “azúcar” que al “destruirse” o “quemarse” produce energía; podríamos decir que es el“combustible” del cuerpo). Al aumentar la glucosa en sangre, ésta queda disponible para el “consumo” del cerebro (alimento preferido de la neurona) y de los músculos que necesitan “energía” para “moverse”. Tanto los músculos como el cerebro en el estado de alerta son los que más energía consumen y necesitarán más aún en caso de tomar una decisión de lucha o de escape. Para lograr ese aumento de glucosa se estimula su “fabricación” en el hígado y además se “bloquea” su utilización por las demás células del organismo. También estimula el aumento de los aminoácidos circulantes y los concentra en el hígado para tenerlos de reserva para fabricar más glucosa a partir de ellos. Además moviliza los depósitos de grasas con el mismo fin de “fabricar”, a partir de ellas, más glucosa, aunque al aumentar tanto la cantidad de glucosa circulante, “interviene” el páncreas segregando insulina, pues “desde su óptica” se está produciendo una especie de diabetes (aumento de glucosa). Por ello el exceso de glucosa “debe ser bajado”. La insulina comienza a transformar a esa glucosa nuevamente en grasa y esta grasa “recién creada” va a depositarse en una región en especial: el abdomen (“panza de estrés”). La médula de las Suprarrenales a su vez, al ser estimulada directamente por vía del sistema Simpático, segrega dos hormonas. Ellas son: 1) Adrenalina: tiene un importante efecto sobre la actividad cardiaca, aumentando la fuerza del latido y su frecuencia. Además aumenta el metabolismo excitando e incrementando la actividad de todos los tejidos. También estimula el incremento de glucosa en sangre. 2) Noradrenalina: provoca constricción de los vasos por donde circula la sangre con lo que sube la presión arterial, aumenta la actividad cardiaca, relaja los movimientos intestinales y dilata la pupila. 113

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Como se puede ver, todos los efectos señalados “refuerzan” los que produce el sistema Simpático. La única diferencia es que estos efectos hormonales son más duraderos y amplios pues llegan con la sangre a todas las células del cuerpo y no sólo a las que reciben inervación simpática. EFECTO DOMINÓ ¿Cómo actúa el estresor para desencadenar el “efecto dominó”, donde la estimulación avanza, como cuando uno pone fichas de dominó en fila y con sólo empujar la primera se provoca que toda la fila caiga a medida que cae la anterior? Lo primero que ocurre es la percepción de la amenaza. Es necesario verla, oírla, olerla, tocarla o sentirla, fuera del organismo o dentro de él. Las señales captadas por los sentidos son distribuidas por un núcleo llamado tálamo y son enviadas a las áreas cerebrales correspondientes para que se haga conciencia de lo que se capta. Simultáneamente se envían señales a un sector del Cerebro Límbico llamado Amígdala (por su forma de almendra) para ser reconocidas o no como “familiares” y a un sector muy relacionado, llamado Hipocampo (por su forma de “caballito de mar”), que es donde se procesa la memoria afectiva. Desde allí se envían estímulos hacia el Hipotálamo para que éste envíe los mensajes para las secreciones hormonales de la Hipófisis y ésta, a su vez, a cada una de las glándulas y entre ellas a las Adrenales y... etc. Éste es el modo en que los acontecimientos se precipitan hacia la “cascada” de efectos que uno tras otro se irán produciendo a lo largo del “eje” que sería más propio llamarlo: “Eje córtico límbico hipotálamo hipófiso adrenal”. PREGUNTAS DEL MILLÓN Cabe en este momento hacer una pausa para formular algunas preguntas: t¿Este efecto “dominó” o “cascada” se produce siempre? La respuesta es No. Ello depende de varios factores que tienen que ver con el estresor, con su persistencia, su intensidad y con la mayor o menor vulnerabilidad del individuo. De acuerdo a esto, existen barreras o diques que a medida que se van superando conducen a respuestas

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parciales que se van sumando hasta hacerse completas. Antes de cualquier otra acción, el cerebro procede a una rápida evaluación personal (propia de ese cerebro y de esa persona) y considera la calidad del estresor a nivel cortical y límbico. Esto determina que de acuerdo, ya sea a la fugacidad, a la familiaridad o al conocimiento que tenga del estresor, se evite que la estimulación siga rumbo al Hipotálamo. Esta es la primer barrera a superar: la Córtico Límbica. Si el estresor se perpetúa en el tiempo o su intensidad es muy grande, o bien la vulnerabilidad del individuo es alta, esa primera barrera se supera y se produce la estimulación del Hipotálamo. Entonces se disparan las respuestas que dependen del Sistema Simpático, que son respuestas de corto plazo, inmediatas, las que rápidamente se pueden revertir o anular. Esta es la segunda barrera, la de los nervios simpáticos, los que en sus extremos liberan NEUROTRANSMISORES del tipo Adrenalina y Noradrenalina. Si esta barrera no se supera, aún es posible desarmar el estado de alerta sin consecuencias para la salud. Si el estresor o los estresores se perpetúan y se hacen crónicos, o son de gran intensidad, la segunda barrera es superada y entonces se estimula la Hipófisis y se desencadenan las respuestas NEUROHORMONALES que son respuestas de largo plazo, es decir persistentes, porque una vez lanzadas no se pueden detener. Además llegan a todos los rincones del organismo pues se vuelcan directamente en la sangre circulante y a largo plazo: no son saludables. tEn síntesis: ¿el Estrés que protege, puede además dañar? La respuesta es: Sí. Todo depende de la cantidad y la calidad del estresor y de la capacidad del individuo para superarlo o adaptarse. t¿Se puede vivir sin Estrés? La respuesta es: No. Y eso tiene que ver con la respuesta anterior y la vida misma. Un poco de Estrés: estimula y sienta bien pero mucho y durante largo tiempo produce daños. El Estrés en sí no es la dificultad, sí lo es el trato que se le dé o el modo como se lo resuelve.

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SIGNOS PRECOCES DE ESTRÉS ELEVADO “Si arrojamos una rana a un recipiente con agua hirviente, apenas toca el agua, la rana salta despavorida, pero si la ponemos dentro del recipiente con agua fría y luego calentamos el agua gradualmente, la rana morirá sin darse cuenta que el agua hirviente la mató”. Lo mismo pasa con el Estrés. Por lo general nadie nota que su propio nivel es elevado, pero sí lo advierten las personas allegadas, que con todo cariño dicen: “tenés que aflojar un poco”, “te estás matando”, “bajá un cambio”, “tomáte unas vacaciones”. ¿Cuáles son esas señales? t Fatiga: “vivo cansado”, “no tengo fuerzas”. t Inquietud motora: “no puedo estar quieto”, “si no tengo nada que hacer me pongo nervioso”. t Trastornos del sueño: “no duermo bien”, “me despierto”, “no descanso”. t Fallas de memoria reciente: “no sé dónde dejé las llaves”, “¿qué iba a hacer?”, “se me hizo una laguna”. t Sensación de embotamiento: “no puedo pensar, estoy como bloqueado”. t Hiperactividad: “no puedo parar”, “todo lo hago rápido: descansar, el amor”, “el domingo es terrible: me aburro y extraño la actividad”. t Irritabilidad: “me enojo cada vez más fácil y por tonteras”. t Impaciencia ante el ritmo más tranquilo de otros. t Tendencia a calificar despectivamente las actividades improductivas, de ocio o diversión y a los que las realizan. t Tristeza inmotivada: “no sé qué me pasa: no tengo ganas de nada”. t Dolor cervical: “me duele la nuca y los hombros y muchas veces la cabeza”. t Elevado consumo de alcohol y de tabaco: “a veces tengo dos cigarrillos prendidos uno en la mano y otro en el cenicero y no lo advertí”, “siento que ‘una copita’ me alivia, pero se me está yendo la mano”.

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t Fasciculaciones musculares: “me tironea el labio o me ‘late’ el párpado”. t Digestión laboriosa: “cualquier cosa me cae mal”, “tengo acidez”. t Constipación o diarrea frecuente. t Frecuente sensación de: “opresión en el pecho” o de “nudo en el estómago”. t Resfríos o anginas a repetición. t Tos seca, ronquera, eructos o hipo sin motivo aparente. t Eyaculación precoz o anorgasmia. t Tendencia a adoptar conductas de riesgo: velocidad elevada tanto en ciudad como en rutas, conducción peligrosa con maniobras bruscas e imprudentes. t Tendencia a conductas hostiles o agresivas por motivos nimios. t Tendencia a buscarse problemas o involucrarse en conflictos. t Signos médicos que indican que la Carga Alostática es elevada: 1. Aumento de Presión Arterial Sistólica de más de 148 mm de Hg. 2. Aumento de Presión Arterial Diastólica de más de 83 mm de Hg. 3. Aumento de tejido adiposo abdominal 4. Relación colesterol Total/HDL mayor de 5,9 5. Aumento del Cortisol, Epinefrina, Norepinefrina y DHEA-S en orina. Un signo aislado carece de valor. El médico los debe valorar en conjunto con el resto del examen clínico. LO POPULAR Y LO BIOLÓGICO: HUMOR EN SERIO (signos agudos de estrés elevado) El acervo popular ha registrado varios hechos biológicos relacionados con el estrés y el miedo a través de estas expresiones: “se le pararon los pelos” (alusión a la piloerección) “se le puso la piel de gallina” (alusión a la misma piloerección) “se le frunció el ...” (alusión a la contracción del esfínter anal ) “no le cabía un alfiler” (alusión al mismo esfínter) “se le perló la frente” (alusión a la sudoración) “el perro olió que tenía miedo” (alusión a la sudoración axilar y genital) 117

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“se puso duro” (alusión a la contracción muscular) “se puso blanco como un papel” (alusión a la vasoconstricción) “tenía los ojos como el dos de oro” (alusión a la midriasis) “temblaba como una hoja” (alusión a la ansiedad) “sentía el corazón en la boca” (alusión a la taquicardia) “me corrió un frío por la espalda” (alusión a la sudoración fría) “se hizo encima” (alusión al relajamiento de los esfínteres luego de la contracción inicial) “me lloré todo” (alusión a la secreción lagrimal que llega cuando todo el sistema se “frena” por acción del parasimpático) ¿CÓMO DISMINUIR EL NIVEL DE ESTRÉS? Mucho se ha escrito sobre las consecuencias que el estrés produce en el organismo. Cualquier persona, con poco que use su Corteza Cerebral, se da cuenta que es necesario hacer algo antes de enfrentar las consecuencias, que no es inteligente sufrirlas para recién actuar... Pero nosotros elegimos: comenzamos a prevenir ahora mismo, o no lo hacemos y preferimos enfrentar lo que se presente. En ese caso: cuando estemos solos, desnudos y cubiertos con una sábana blanca, en la cama pulcra, rodeado de aparatos y tubos, en el silencio de la sala de Terapia Intensiva y pensemos, si con un poco de suerte aún lo podemos hacer, nos preguntaremos: “¿valió la pena?” y pensaremos en nuestros seres queridos, y en todas las pequeñas cosas que fuimos dejando en el camino, nos haremos promesas y hasta nos acordaremos de Dios y llegaremos a la siguiente conclusión: “debo cambiar, lo único valioso que tengo son mis afectos, las personas que me quieren, debo pensar más en mí y en ellos”. Evitemos la experiencia... cambiemos ahora, no esperemos a enfrentar las consecuencias, porque luego es más difícil, aún cuando no hayan quedado secuelas. Ello, en el supuesto de que tengamos la oportunidad de volver a empezar. Muchos no la tienen. Volvamos por un momento a “la ranita” que permanece en el agua sin “darse cuenta” que la temperatura sube gradualmente, hasta llegar al punto en el que irremediablemente morirá.

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t*NBHJOFNPTRVFDBEBVOPEFOPTPUSPTFTMBiSBOJUBw RVFFMBHVBFTFM “tipo de vida que estamos llevando”, que la temperatura del agua es “el estrés” y que la hornalla que calienta el agua está al máximo y tiene una perilla que sólo podemos accionar nosotros mismos para “ponerla al mínimo o apagarla”. t/PTFDPOPDFBÞOVONÏUPEPPBQBSBUPRVFQFSNJUBNFEJSFMOJWFMEF Estré, salvo algunos parámetros clínicos - psiquiátricos, que se hacen evidentes cuando “la temperatura ya subió bastantes grados”. t&ODPOTFDVFODJBZDPOPDJFOEPDØNPPDVSSFOMBTDPTBT BOUFTEFDBMDVMBSiB ojo” y por lo general mal, lo indicado es hacer que el nivel de estrés se mantenga bajo o no exista por largos y frecuentes períodos. A esto nos referíamos cuando decíamos: “accionar la perilla que apaga o pone en mínimo el fuego de la hornalla”. Antes de avanzar en las sugerencias para disminuir el nivel de Estrés, es necesario hacer algunas aclaraciones, sin las que el continuar carece de sentido. Ello además, nos dará una idea de la “temperatura” que estamos soportando en la actualidad: A - Situación personal en la que se encuentra cada uno: 1. Está pasando por un momento tranquilo y relajado de su vida y esta lectura le parece interesante para mejorar su calidad de vida. 2. Nota que tiene alguno de los síntomas que indican “que algo no está funcionando bien”, en ese caso, estará ávido por continuar adelante. 3. Sabe que tiene muchos de los síntomas que ya se han mencionado, pero cree “que a mí no me va a pasar nada grave” o “no me importa”. Entonces lo que sigue le parecerá una tontería más de las tantas que se escriben. En ese caso le sugiero, consultar con un especialista psiquiatra quien le hará el diagnóstico apenas lo invite a tomar asiento, pues usted le responderá: “estoy mejor de pie”. Si está en la posición 1 o 2 siga adelante. Si está en la posición 3: comience nuevamente. B- Está leyendo bajo las siguientes condiciones: 1. Relajado en su casa o en un lugar lleno de naturaleza y sin apuro.

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2. En su cama, la 14 A, en la sala del Hospital o Sanatorio, dispuesto a empezar de nuevo. 3. En su trabajo o rumbo a él, con incomodidad y apuro. Salteando párrafos y pensando en lo que hará a continuación. Si está en la posición 1 o 2 siga adelante. Si está en la posición 3: comience en otro momento. C- Tiene las siguientes expectativas: 1. “Creo que soy muy valioso para mí y para los que de mí dependen, porque los amo y me aman sé que pondré en práctica todos los consejos saludables que reciba”. 2. “Nunca imaginé que mi mente fuera tan poderosa como para “enfermarme” y mucho menos que lo fuera de igual modo para “curarme”. Esto me “abre los ojos” y me determina a estar más atento conmigo mismo para evitar las consecuencias” 3. “Todo muy interesante, pero a la vez muy difícil de llevar a la práctica, pondré voluntad pero no sé si podré. Con los problemas que tengo no creo que tenga tiempo, después de todo, estoy haciendo lo mejor que puedo para asegurar el futuro de todas las personas que quiero”. Si está en la posición 1 o 2: siga adelante. Si está en la posición 3: comience nuevamente, no ha entendido nada. LAS SIETE REGLAS Son reglas o normas elementales, básicas, que permiten cuidar el cuerpo, el cerebro, la mente y además retardan el envejecimiento, protegen la salud y en muchos casos, logran restituirla cuando se la perdió y no es demasiado tarde. Muchas veces se piensa que “su práctica no es posible” por distintas razones, todas ellas comprensibles y justificadas. Pero a los efectos de evitar las consecuencias, todas esas justificaciones no nos sirven para nada. Un amigo me decía: “pero por mi trabajo y donde vivo, no puedo hacer mucho de lo que me sugerís” y efectivamente tenía razones para expresarse así; y entonces le dije: “las consecuencias vendrán tarde o temprano sin

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importar nada”. Pretender una excepción es tan ilusorio como pretender excepciones para la “ley de gravedad”. Las “SIETE REGLAS” que recomendamos son fáciles de practicar, agradables, motivadoras y eficaces. Memorícelas ahora mismo y aplíquelas en todo momento, garantizan la “alegría de vivir”... REGLA Nº 1: REGLA DE LOS MI “Mi Persona - Mi Familia” REGLA Nº 2: REGLA DE LAS PAUSAS “Pausas frecuentes... Ritmo pausado” REGLA Nº 3: REGLA DE LAS TRES “A” “Alimentos - Agua - Aire” REGLA Nº 4 : REGLA DEL TODO Y NADA “Todo Natural, Nada Artificial” REGLA Nº 5: REGLA DEL CÍRCULO “Empezar y Terminar” REGLA Nº 6: REGLA DE LA FE “Fabricar Endorfinas” REGLA Nº 7: REGLA 787 “7 Minutos 8 Horas 7 Días” REGLA Nº 1: REGLA DE LOS MI “Mi Persona - Mi Familia” t El orden es correcto, primero “mi persona”: pues es lo más valioso que tenemos: “Si yo estoy bien, saludable y feliz porque me cuido y me quiero, estaré mejor para irradiar amor y alegría a todas las personas que me rodean y sobre todo a las que dependen de mí”. t Abandonemos ese concepto que justifica la conducta autodestructiva: “me mato por ellos”, sin darnos cuenta de que al hacerlo, no sólo se producen daños, sino que, además, sembramos culpas, malhumor, malos modos y sobre todo: ausencia, como papás, como esposos. t No se prive de sus pequeños placeres.

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t Ocupémonos de mantener siempre un aspecto agradable, ello genera “buena onda” en nosotros y en los que nos rodean. t Por sobre todo hagámonos un espacio y un tiempo para nosotros exclusivamente. t En segundo lugar está “mi familia”: examinemos nuestra propia vida y veremos que las cosas que nos van quedando a cada uno de nosotros, son las “alegrías del alma” y para nada las cosas materiales. t Cultivemos nuestros afectos, hagámoslos crecer, no los posterguemos, disfrutemos de nuestra pareja y de nuestros hijos cada día, de nuestros seres queridos, y no lo dejemos para más adelante, para cuando “tenga tiempo”. El momento es ahora. Elimine de su semana por lo menos dos días: “ayer” y “mañana”, démonos la satisfacción de la ternura, del gesto amoroso, del jugar con alegría, del dar y recibir caricias y sonrisas, y de servir con amor haciendo más fácil la vida del otro. REGLA Nº 2: REGLA DE LAS PAUSAS” “Pausas frecuentes... Ritmo pausado” t-BBDUJWJEBEEFTFOGSFOBEBZFMSJUNPWFSUJHJOPTPTPOBHFOUFTFTUSFTPSFT importantes. Son propios de las grandes ciudades donde parece que todos están contagiados del mismo apuro o urgencia y cuando se van de vacaciones se llevan consigo la misma urgencia de la que presuntamente escapan. t"QSFOEBNPTBIBDFSQBVTBTMPJOEJDBEPFTUPNBSOPTDJODPNJOVUPTEFSFMBY de no hacer nada o hacer algo que nos gusta, charlar con alguien, dar un pequeño paseo, hacer ejercicios o tomar un té. Estos cinco minutos se deben tomar cada una hora de trabajo. Si uno es de los que dicen “ya termino y descanso” y sigue y sigue... cuando termine y descanse será tarde, el estrés ya hizo el daño. Es ideal hacer una pausa de diez o quince minutos para hacer una pequeña siesta (aunque sea en el mismo sitio donde estamos trabajando). t-PNJTNPPDVSSFDPOMPTMBSHPTQFSÓPEPTEFUSBCBKPTJOWBDBDJPOFTP pausas: es más saludable siete días de vacaciones cada tres meses de trabajo que treinta días al final del año. t1FSPRVJ[ÈTMPNÈTJNQPSUBOUFFTUPNBSDPODJFODJBEFRVFFMSJUNP acelerado y vertiginoso daña la salud y nada ni nadie podrá evitar el dolor, 122

ni el sufrimiento ni todas las ingentes dificultades que implica el enfermar y que todo ello se “deberá enfrentarlo solo”. A lo sumo nos acompañará nuestra familia, pero sólo hasta el borde de la cama. A partir de allí seremos nosotros y nuestros pensamientos, de nada nos servirán el dinero, ni las posesiones, ni los premios, ni las medallas, ni todos los méritos o jerarquías alcanzados con “tanto esfuerzo”. REGLA Nº 3: REGLA DE LAS TRES “A” “Alimentos - Agua - Aire” Todos son necesarios para mantener la vida, pero si no ponemos atención en su calidad y proporciones, estaremos dañando nuestro cuerpo y disminuyendo nuestra resistencia para enfrentar la enfermedad y el envejecimiento. ALIMENTOS: t Lo indicado es consumir alimentos de fácil digestión, de alto valor nutritivo y ricos en fibras. Algunos de ellos son particularmente atractivos porque son los preferidos del cerebro. t Se recomienda hacer cinco o seis comidas al día que contengan: frutas y verduras, semillas de lino, sésamo, germen de trigo, nueces, almendras, pasas de uva, champignones, ajo, cebolla, tomates y verduras de color amarillo y anaranjado, y verduras de hoja verde oscuro. t Los aceites deben consumirse fríos y de la variedad conocida como Omega (que contiene ácidos grasos N-3). Se deben evitar los aceites calientes. t Las carnes se pueden consumir con moderación pero magras; lo ideal es el pescado ya que contiene un alto grado de ácidos grasos N-3(Omega) que actúan directamente a nivel cerebral constituyéndose en prácticamente un “reparador” cerebral de los daños que provoca el estrés y la depresión. t Los alimentos señalados son proveedores de Vitaminas A y C y de triptofano y fenilalanina, que son las moléculas que usa el organismo para “fabricar” numerosos neurotransmisores que mantienen elevado el humor y el estado de bienestar.

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t Cuando nos dispongamos a comer, hagámoslo con tiempo suficiente para sentarnos y permanecer tranquilos con nuestro alimento, para disfrutar de sus sabores y aromas. El comer es un ritual que implica preparar la mesa donde recibiremos lo mejor para nuestro cuerpo y salud y donde, si es posible, intercambiaremos palabras, atenciones y gestos amables con otras personas. En este marco, una taza de leche o un trozo de pan tiene más valor energético que un plato de alto valor nutritivo por muy bien presentado que esté. t No ingiramos alimentos si estamos apurados, enojados, fastidiados, preocupados o estamos en el mismo sitio donde trabajamos. Tampoco lo hagamos si estamos de pie o leyendo el diario o mirando televisión. t Recordemos que es más importante cómo ingerimos los alimentos que comemos, que la calidad de los mismos. t Por la noche es aconsejable dejar pasar dos horas entre la última comida y el sueño nocturno. t Evitemos el exceso de café, mate y té, todos ellos contienen sustancias estimulantes que aumentan nuestra ansiedad. AGUA: Es fundamental y casi obligatorio ingerir dos litros de agua por día, aparte de todos los demás líquidos que se ingieran. El agua es el elemento del que está compuesto el 90% de nuestro cuerpo y si todo funciona bien, se elimina arrastrando impurezas y desechos en la orina, respiración y transpiración. Es además el elemento que impregna cada célula, manteniéndola húmeda y lubricada, y en particular a la neurona, lo que hace a su funcionamiento óptimo (la falta extrema de agua produce alucinaciones: recuerde esas películas en el desierto, donde los extraviados “ven” “oasis de aguas cristalinas” o “puestos de cerveza helada en medio de la nada”). Lo ideal es tener una botella de 2 litros de agua corriente o lo que es mejor, agua mineral envasada, con unas gotas de limón, y beberla a lo largo del día en la frecuencia y cantidad que se desee hasta terminarla antes de irse a dormir. El limón es muy rico en vitaminas y minerales, estimula la circulación, ayuda a reducir la presión arterial, favorece la digestión y fortalece el sistema inmunológico. Es, en general, un “desintoxicante” natural. 124


Puede beber otros líquidos, pero esta “botella suya” debe beberla hasta dejarla vacía al término de la jornada. AIRE: El Oxígeno que contiene el aire que respiramos es vital para la vida. Las células sin el Oxígeno que necesitan, mueren. Las células que menos resisten a la falta de Oxígeno son las neuronas. Por eso es tan importante la calidad del aire que se respira. El aire de las ciudades está fuertemente contaminado. En algunas de ellas se informa a la población sobre el grado de contaminación que tiene el aire, tal como a cada momento se informa sobre la temperatura y la humedad, y muchas veces se les recomienda “no salir de sus casas hasta tal hora” o “no usar sus vehículos por ese día”. Obviamente el aire puro está donde hay naturaleza, donde hay árboles que son los descontaminantes naturales y principales productores de Oxígeno. Rodeémonos de plantas y unámonos a los que luchan por su conservación y estaremos haciéndonos un servicio a nosotros y a toda la humanidad. REGLA Nº 4: REGLA DEL TODO Y NADA “Todo Natural, Nada Artificial” TODO NATURAL: t Con respecto a los alimentos en particular, prefiera aquellos sencillos y venidos directamente de la naturaleza a nuestra mesa, sin grandes preparaciones, ni cocciones, ni agregados de lo más variados, para que parezcan más atractivos (colorantes), o para retardar su desnaturalización (conservantes). t Busquemos la luz; la mejor hora es, en verano, el amanecer justo cuando la noche se vuelve día. Procuremos de vez en cuando esperar ese momento y contemplar el horizonte. El mismo efecto se logra al atardecer cuando el sol se hunde “en el mar a dormir, mientras un servidor” al decir de Joaquín Sabina. t Salgamos a caminar por espacios arbolados e incrementemos cada vez el tiempo dedicado a esta práctica: estaremos más relajados y mejor dispuestos para las actividades de la jornada o para aliviar tensiones luego de ella. Si podemos caminar descalzos sobre la arena de una playa o sobre el pasto es mucho mejor, ya que se estimulan naturalmente muchos centros nerviosos de la planta de los pies que envían señales al cerebro y llevan mensajes de bienestar. 125

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t Tratemos de mantener una actividad que esté en sintonía con la naturaleza que nos rodea y con la suya propia: 1. Aliméntese cuando tenga hambre y no lo haga cuando no lo tenga. 2. Duerma de noche y trabaje o pasee durante el día. 3. De vez en cuando, en verano, camine bajo la lluvia. 4. “Metámonos en el ruido” de un amanecer con el canto de los pájaros o con el sonido de las olas rompiendo en la costa o en el “tintineo” de un arroyo entre las piedras o el croar de las ranas, el canto de los grillos o el aletear de las chicharras cuando se preparan para ir a dormir. Si no podemos “en vivo”, cerremos los ojos y escuchemos una grabación con todos estos sonidos naturales. 5. Recostémonos en un lugar al aire libre y miremos las nubes en el cielo y “juguemos” con sus formas o sumerjámonos en la profundidad de una noche estrellada y si es posible, démonos un “baño de luna llena”. NADA ARTIFICIAL t Evite las comidas hechas con aceite caliente o con exceso de condimentos o largamente conservadas o industrializadas. t Evite fumar tabaco o ingerir alcohol o consumir sustancias que le creen la ilusión de bienesta, que le quiten el hambre o que le proporcionen “viajes” sin moverse de su sitio. t Evite los lugares con alto nivel de sonidos, aunque vengan disfrazados de música. REGLA Nº 5: REGLA DEL CÍRCULO “Empezar y Terminar” Es muy importante saber cuándo cerrar los círculos para poder abrir uno nuevo. EN LO COTIDIANO: t No mantengamos varios frentes abiertos, esto quiere decir: no comencemos una nueva actividad o a tratar una nueva dificultad si aún no cerramos la que teníamos entre manos. t Evitemos acumular tareas o actividades, tratemos de fraccionar la realidad y manejar un problema por vez. t Tratemos de implicarnos por completo en lo que estamos haciendo: 126


mientras hacemos el amor, hagamos el amor; mientras comemos, comamos; mientras trabajamos y pensamos, trabajemos y pensemos; mientras dialogamos con alguien, dialoguemos e interesémonos de verdad por ese ser humano (y sepamos que las personas se dan cuenta y distinguen cuando son tratadas con interés o son tratadas como si se tuviera interés en ellas). EN LA VIDA: Cerremos capítulos, demos vuelta la página, cerremos el círculo, aprendamos a reconocer cuando algo se terminó, por más dolor que nos produzca, dejémoslo ir y abandonemos las preguntas: los porqué y qué fue lo que sucedió y por qué a mí, pues seguiremos perpetuando sin sentido respuestas que de nada sirven en este presente que vivimos hoy. Todos debemos aprender que no es posible seguir en un trabajo que ya no existe, ni estar al lado de alguien que no me quiere tener en su vida o a quien no quiero tener a mi lado, ni vivir en casas que ya no están, ni frecuentar a alguien que no me responde, ni irme de viaje sin desprenderme de lo que dejo. Y cuando lo comprendamos debo dejarlo ir, soltarlo, desprenderme, pues si seguimos enredados en el pasado: el desgaste será infinito. Entonces, cierro etapas de mi vida y para ello: destruyo papeles o cartas, retiro fotos, elimino recuerdos o documentos que me sigan haciendo añorar el pasado, y aprendo que en la vida a veces se gana y a veces se pierde. Y no esperemos que nos devuelvan, ni que nos agradezcan, ni que nos reconozcan, ni que se den cuenta de quiénes somos, ni que nos comprendan porque no saben de tal cosa o que se calló por tal otra. Cerremos el círculo, miremos hacia delante y esperemos la llegada de lo nuevo y no nos desesperemos ni pretendamos que mágicamente todo vuelva a estar bien, lo estará cuando sea el momento. No olvidemos que los círculos de la vida comienzan cuando otro se cierra. Un nuevo círculo puede incluir a antiguas relaciones o viejos trabajos, claro que al igual que nosotros no serán los mismos. Es mejor: desprenderse, cerrar, clausurar, soltar y mirar confiado hacia adelante... pues allí está la vida. 127

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REGLA Nº 6: REGLA DE LA FE “Fabricar Endorfinas” Para lo cual volvemos al CAPÍTULO IV, allí encontraremos el detalle de todas las actividades que son capaces de “inundarnos” de bienestar. REGLA Nº 7: REGLA 787

“7 MINUTOS” Tomémonos 7 minutos y hagamos alguna de estas 7 cosas: 1. Salgamos y demos un pequeño paseo mientras respiramos profundamente, compremos alguna golosina o hagámonos un regalito, entremos en una librería a hojear libros o a recorrer una florería (y si podemos elijamos un libro o una flor). 2. Escuchemos alguna música relajante, como por ejemplo: canto de pájaros, sonido de olas rompiendo en la costa, gotas de lluvia, sonidos de burbujas, cantos de grillos, música oriental o clásica. 3. Bailemos solos, alguna música rítmica pero no estridente ni con sonidos agudos. 4. Permanezcamos en silencio en un sector donde nadie nos pueda interrumpir y pensemos en algo lindo que tenemos por hacer sin olvidar ningún detalle o pensemos en algo lindo que nos pasó y revivámoslo o volemos con la imaginación realizando proyectos mágicos. 5. Hagamos algo con las manos: reguemos las plantas, juntemos hojas, cortemos ramas, transplantemos macetas, hagamos un ramo de flores. Ordenemos un placard y tiremos la mayor cantidad de cosas, para crear espacio para las cosas nuevas. Practiquemos alguna habilidad con las manos: artesanías, tejido, aeromodelismo, coleccionar estampillas o monedas, etc. 6. Hagamos ejercicios de elongación, pongámonos a trotar o a bailar allí mismo. Si se puede practiquemos natación, gimnasia acuática, gimnasia jazz o concurramos a un lugar donde hagan hidromasajes. 7. Juguemos con un niño o con un perro (no es aconsejable con un gato porque ellos perciben los estados de tensión), o hablemos por teléfono con un amigo al que hace mucho tiempo no vemos; juguemos con un balero, tejamos crochet, etc. 128


“8 HORAS” Es la más elemental de todas las recomendaciones: 8 horas para DORMIR 8 horas para TRABAJAR 8 horas para DIVERTIRSE Analicemos nuestra vida en relación con estas proporciones y veremos que le dedicamos más horas al trabajo, horas que se las quitamos a la diversión o al sueño. Corrijamos esta conducta nociva y tóxica de “vivir para trabajar” por la de “trabajar para vivir”. “7 DIAS” Si disponemos de siete días, lo ideal es alejarse del ambiente donde se desarrolla la vida de todos los días. El cambio y la sensación de alivio se notan apenas nos alejamos veinte kilómetros. Hagamos escapadas cortas y frecuentes, son más efectivas y reparadoras que las largas y complicadas. REFLEXIÓN FINAL Revisemos cada día “el precio que pagamos por vivir” y tratemos de que no sea muy alto. Simplifiquemos, fraccionemos, desdramaticemos, vivamos intensamente el presente, disfrutemos de todo lo que tenemos y confiemos en Dios...

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CAPÍTULO VI “MANDATOS”

EL ELEFANTE Cuando era niño, una tarde de invierno, junto con mis tías y una “banda” de primos fuimos a ver un gran circo que había llegado a la ciudad. En esos tiempos eran verdaderas atracciones y para muchos, la única oportunidad de ver animales exóticos a los que conocíamos sólo por los libros o el cine. Las delicias más grandes eran los payasos, los trapecistas con sus pruebas en lo alto de la gran carpa y los animales: leones, monos, tigres de bengala y el más grande y “bueno”: el elefante. Tanto al entrar como al salir nos sorprendía su tamaño y mansedumbre; permanecía con una pata atada a una pequeña estaca de madera clavada en el suelo, mientras con su trompa recogía pasto seco y se lo introducía en su pequeña boca. Carlitos, mi primo, el que después se hizo Ingeniero, le preguntó a mi tía Mecha: “¿por qué el elefante no está en una jaula como los demás animales? Con su tamaño y fortaleza podría arrancar la estaca y escapar para hacer lo que quisiese”, mi tía no supo qué responder y sólo atinó a decirle: “Carlitos ¡hacés cada pregunta!” Años después supe la respuesta: Cuando el elefante aún es pequeño se lo sujeta con una soga a un árbol y se lo deja allí durante días. Entonces el elefantito trata de liberarse, para jugar libremente y tira de la soga, embiste el tronco del árbol, “se enoja”, “patalea”, intenta nuevamente hasta que, luego de un tiempo se cansa y “graba” en su cerebro el mensaje: “Contra esa cosa de madera que me impide moverme: NO SE PUEDE” y en lo sucesivo cualquier elemento, tronco, palo o palito al que lo “aten” significará: NO SE PUEDE. De acuerdo a su registro el elefante “razonará”: NI ME MOLESTO. Del mismo modo los seres humanos (en nuestro desarrollo psicológico), recibimos en la infancia: mensajes dotados de similar “poder” que llamamos MANDATOS, los que nos llegan de quienes nos educan, nos enseñan, nos guían, nos orientan, nos dan ejemplos o son nuestros modelos, sean ellos nuestros padres, maestros, la sociedad, la cultura o la religión. 133

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Estos MANDATOS en muchos casos son necesarios y saludables, pero en muchos otros, no lo son. UN MANDATO ES UNA ORDEN Un mandato es una orden que se debe cumplir sin objeciones, debate ni comentarios porque, además, lleva consigo una amenaza de castigo en el supuesto caso de incumplimiento. Ese castigo puede ser físico o psicológico, temporal o eterno, dependiendo del ámbito en que se desarrolle. En los ámbitos donde se manejan con estrictas reglas de disciplina las sanciones suelen ser muy severas . Lo mismo ocurre en el ámbito laboral y en el religioso. En el ámbito familiar, algunos padres son proclives a este tipo de disciplina y adquieren “fama” de severos por ser estrictos respecto del cumplimiento de sus órdenes o directivas. Éstos son francos y directos, pero hay otros más sutiles que ejercen su poder por medio de la culpa y otros recursos que veremos más adelante. De cualquier modo, los mandatos tienen por objeto influir de manera inapelable en la conducta de las personas. Su incorporación se va haciendo en forma gradual, hasta que se completa y determina conductas como si nacieran de uno mismo. LA EDUCACIÓN EQUIVOCADA A los varones se los educa como proveedores, fuertes y protectores y además duros e inexpresivos y hasta agresivos: “los hombres no lloran, hágase macho”. Se les regalan juguetes violentos: revólveres, pistolas, ametralladoras, cascos de combate, etc. o bien autitos deportivos o camiones de transporte, fortalezas con cañones, etc. Por otro lado, una mujer, nuestra mamá, agrega sin decirlo: “una mujer estará a tu lado para hacer tu comida, tener la ropa limpia y procurarte lo que te haga falta cuando llegues a casa”. Más adelante al niño se lo prepara para que sea promiscuo cuando le preguntan: ¿cuántas novias tenés? Los mandatos que se incorporan son consecuentes: debes luchar, debes destruir, debés triunfar, no debés emocionarte, ni llorar; una mujer se ocupará de cocinarte, lavar tu ropa, atenderte y algunas cosas más; además te darán la diversión que necesites, cuando tú quieras... 134


A las mujeres se las educa como amas de casa, necesitadas de protección intelectual y emocional, económicamente dependientes y sexualmente pasivas. Se les regalan jueguitos de cocina, tabla de planchar, set de limpieza, muñecas a quienes cuidar, fabricarles ropitas, enseñarles a caminar, etc. Más adelante juegan a la maestra, al papá, a la mamá y al doctor (y allí aparece algún varoncito en el papel del personaje intelectualmente superior). Todo esto está cambiando a pasos agigantados, tanto es así que el sólo hecho de escribirlo ya es una reliquia. La mujer ha abandonado ese rol pasivo y dependiente y los varones el rol dominante y activo, y ello ya se ve en el modo como se relacionan las parejas actuales: mucho más simétricas y complementarias entre sí. Pero así como se incorporaron estos mandatos culturales en esta parte del mundo, también incorporamos mandatos familiares: nuestra familia es de médicos, así que tenés que ser médico; la hija menor debe quedarse soltera para cuidar a sus padres; si te portas mal vendrá el cuco o el hombre de la bolsa o si te portas mal te pondremos una inyección (mensaje nefasto al momento de necesitar un inyectable), o si te portas mal, mamá se morirá; no lo mandés a ese ¡no ves que es medio tonto!, ; aprendé de tu hermano, ese sí que es inteligente; ¡pobrecita!... tu hermana sí que es bonita; tenés que buscarte un tipo con mucha plata, no seas tonta como yo que me equivoqué con tu padre; etc. LA EDUCACIÓN CORRECTA Pero también existen mandatos religiosos y culturales que si no se cumplen son motivo de sanciones o castigos que nos traerán sufrimiento y dolor o nos conducirán a sitios donde el sufrimiento será eterno. Muchos de estos mandatos sirvieron en algún momento de la historia de la humanidad para que las personas se controlaran a sí mismas y así se evitó el desorden y el caos que implicaba el que cada uno hiciera lo que quisiera, sin consideración por el otro. Existen mandatos que son respetados universalmente sin que estén escritos en ningún lado, son los mitos y tabúes. Por ejemplo: la prohibición de relaciones sexuales entre familiares (relaciones incestuosas: madre-hijo, padre-hija, entre hermanos, etc.), la prohibición de comer carne humana (canibalismo), la prohibición de quitarse la vida (suicidio), etc. 135

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Todo lo hasta aquí mencionado entra en nuestro cerebro como información y silenciosamente va modelando nuestra historia. Y nos va dotando a cada uno de un eje o hilo conductor que es el sistema de valores que, en lo sucesivo, guiará nuestros actos o conducta, la que será moral y acorde con las reglas sociales de convivencia entre seres humanos. Éste es el sentido de la incorporación de esta información que, en lo sucesivo, nos hará actuar como seres que saben “lo que está bien y lo que está mal” y “que saben lo que deben hacer y lo que no deben hacer y asumir las consecuencias de sus actos”. Pero en este proceso tan necesario y saludable se agregan mensajes o información que no tienen el sentido mencionado y que crean dificultades en la vida de una persona. Durante muchísimos años esto se vio claramente en el área de la sexualidad, donde la influencia de la religión la relegó a su función reproductora. SE GRABAN TAL COMO LLEGAN ¿Cuál es el mecanismo por el que estos mensajes se arraigan en nuestro cerebro con tanta fuerza? Cada uno de estos mensajes conlleva una carga emocional y afectiva y ello les confiere capacidad para condicionar la conducta durante el resto de la vida, porque fueron incorporados en un momento particularmente vulnerable de la existencia. Cuando son mensajes que llenan de culpa, miedo o vergüenza, nos impiden lograr ser libres y autónomos. Y entonces, como el elefantito de nuestro relato, vivimos condicionados por el pasado: “no puedo ser quien verdaderamente soy”. La culpa, el miedo y la vergüenza determinan un sentimiento de pequeñez, de pobre valoración de sí mismo, lo que produce adultos con muy baja autoestima. LOS MÁS SUTILES: SE COPIAN En las personas con dificultades o síntomas relacionados con el miedo destructivo o patológico, a esta condición de baja autoestima se le agrega un mandato que se incorpora casi sin palabras, silenciosa y constantemente, y que sus autores o responsables ignoran por completo, ese mandato es “contra el miedo NO SE PUEDE”. Eso es lo que “se enseña”, eso es lo que se muestra...

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¿Cómo es posible que padres que quieren lo mejor para sus hijos, sean capaces de dar este mandato tan dañino?... Es que no lo dan, sólo lo actúan. Aquellos padres que sufren con sus miedos y temores o con sus síntomas de fobia o pánico, viven y están allí junto a sus hijos y estos copian sus conductas de miedo o sus conductas sobreprotectoras, las que en el fondo son manifestación de sus propias angustias e inseguridades. Los niños copian todo de las figuras que los rodean ya que son sus modelos, y en ese todo están incluidas las conductas de miedo manifiesto o el mensaje más sutil que implica la sobreprotección y el culto por el perfeccionismo. Esta actitud de los modelos del niño, ya sean sus padres, sus abuelos o sus educadores, son determinantes para que en la adultez, estén dadas las condiciones para repetir la historia que tanto querían evitar los mismos papás que sufrían con sus miedos. La sobreexigencia para la obtención de resultados, la rigidez de las reglas familiares, la enseñanza para la no-expresión de los sentimientos, la desvalorización constante, las críticas permanentes, las amenazas de abandono, el castigo físico, el abuso psicológico, la ausencia de aprendizaje sobre ejercicio de responsabilidades, de autovalimiento y autonomía o de asunción de riesgos, son mandatos más sutiles que van modelando una personalidad: rígida, perfeccionista, dependiente, con escasa capacidad para expresar afectos, con pobre o nula autoestima, temerosa e insegura. Cuando esta personalidad se enfrenta o expone a la sobrecarga que significa el estrés, aparecen los síntomas de la ansiedad en cualquiera de sus formas clínicas. Esto ocurre en la mayoría de los casos como producto de la ignorancia sobre estos temas. Y no hay nada que reprochar a nadie, pues nadie en la educación de sus hijos actúa de mala fe, a pesar del papel de mártires: “¡con todo lo que yo hago por vos!” o de dictadores: “haga lo que le ordeno y ¡no llore!” que adoptan. Lo que ocurrió en el pasado, ocurrió así y sólo cabe aceptarlo, pues no es posible volver atrás para modificarlo. En lugar de lamentarnos por ello pongamos manos a la obra para corregirlo a partir de hoy, a partir de nuestra realidad actual.

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Fabricar los Síntomas

GRABAR DE NUEVO Pero volvamos sobre nuestros pasos para fijar el concepto que sigue: Cada uno de nosotros, por el sólo hecho de ser humanos y tener cerebro de humanos, no deberíamos actuar como el elefante que permanece unido por la soga a la insignificante estaca. El elefante, con su cerebro de elefante, no puede razonar para comprender que las condiciones que determinan su conducta actual, no son las mismas que le tocó enfrentar allá lejos en su pasado. Pero nosotros sí, nosotros podemos razonar, comprender y darnos cuenta de cómo son las cosas, y entonces, por un simple acto de voluntad y determinación: desgrabar los mensajes mal grabados y regrabar los mensajes correctos:, mensajes que nos liberen de culpas, miedos y vergüenzas. Todas estas creencias del pasado, a través de las cuales filtramos y teñimos nuestro presente, son las que no nos permiten ser libres, autónomos y capaces de hacer lo que deseemos. No es fácil lograr ser uno mismo cuando se arrastran mandatos que tuercen nuestros deseos, nuestros sueños o nuestros anhelos. Pero no es imposible. El simple hecho de comprenderlo y querer superarlos ya es el comienzo de esa transformación. Quizás sea necesaria una ayuda psicoterapéutica para hacer el resto. En el próximo capítulo nos ocuparemos de otros mensajes o experiencias mucho más especiales y personales, que impactan en forma particularmente intensa en la vida de una persona y que suelen ser el origen del miedo que los atormenta desde entonces, en forma directa y clara o disfrazada de algo relacionado con lo vivido. “ SER UNO MISMO…” Ser uno mismo es decir sí, aunque todos digan no. Es juzgar tus propias acciones, sobre la base de la acción misma y no juzgarla por la aprobación o desaprobación de los demás. Ser uno mismo es el mayor reto que tenemos en la vida. Si tú no vives tu vida por tí, ¿quién es el que vive tras esas facciones tuyas? Sé tú mismo. Es la única manera de sentirse de verdad persona. Sé tú mismo. Libre y responsable. Toma el timón de tu vida. No lo dejes en manos de otros... “¿QUIÉN NOS TIENE ATADOS? NADIE NOS TIENE ATADOS... SOMOS LIBRES” 138


CAPÍTULO VII “LA HISTORIA PERSONAL”

¿QUÉ ES LA HISTORIA PERSONAL? La historia personal es la suma de todas y cada una de las experiencias que a lo largo de la vida, desde el nacimiento y hasta la actualidad, se fueron agregando para modelar lo que hoy somos: un ser humano que no obstante su permanente transformación ha logrado este cuerpo y esta personalidad, los que a su vez nos han dado una identidad que hace que se nos distinga de todos los demás seres humanos del planeta. En este preciso instante, el último y más reciente de todos los instantes de nuestra vida: “somos lo que somos, y esto que somos en este momento, es el ‘modelo’ terminado, el ‘último modelo’ de toda una vida vivida desde el día que llegamos al mundo desnudos y aterrados ante tanta cosa nueva, tan distinta de las perfectas condiciones que habíamos tenido durante nueve meses, en el vientre de mamá”. Todos los seres humanos somos iguales en un sentido y distintos en otro. Iguales de la piel para adentro en lo físico o anatómico: todos los estómagos y corazones son iguales y las arterias van por los mismos sitios sin importar la raza, ni el sexo ni el lugar del mundo donde estemos, pero somos todos distintos y únicos en todo el universo por la forma en que todo ese conjunto de materia se pone en acción o movimiento, es decir: cómo es vivida. La materia esta formada por átomos, los que no son más que puñados de energía, llamados quantum y eso es lo que somos en última instancia, energía pura, materializada en huesos, músculos, órganos, etc. los cuales de la piel para adentro son casi idénticos para todos los seres humanos, pero que de la piel para afuera nos va distinguiendo a unos de otros, ya sea el color de la piel, la contextura física, el color de los ojos, etc. Es allí donde se refleja “la marca o el sello distintivo” que nos dan nuestros padres. Esto que hace al aspecto tiene su correlato en lo psicológico que es donde las diferencias son más notables, pues vivir la vida de cada uno es una experiencia intransferible y única; ello es lo que nos hace distintos y especiales. El “manual de instrucciones para hacer un ser humano” se encuentra 141

Historia Personal

en los 46 cromosomas que están en el núcleo de cada una de la células de nuestro cuerpo: la mitad de esas instrucciones, 23 cromosomas, las aportó la madre y la otra mitad, 23 cromosomas, las aportó el padre. Hasta hace muy poco era necesaria la intervención de ambos para engendrar una nueva vida, pero ya no. Si se toma cualquier célula del cuerpo y se le “extraen” los 46 cromosomas que están en el núcleo y se los “agregan” a un óvulo de la madre (al que previamente se le “sacaron” los 23 cromosomas que tenía en su núcleo y que estaban esperando la llegada de los 23 cromosomas que aportaría el padre) sin la intervención de los dos padres ya se tienen los 46 cromosomas que se necesitan para “hacer” un ser humano. Luego se implanta este “ óvulo” tan particular, en un útero apto de cualquier mujer y al cabo de nueve meses, si todo sale bien, se obtiene: un clon, es decir una réplica exacta del “dueño” de los 46 cromosomas que gracias a la “manipulación genética”, creó a este recién nacido, pero: ¿quién es el padre?... ¿y la madre?... ¿quiénes son sus hermanos y sus tíos?... Lo cual es un “problema grave” a corto plazo, según lo plantea mi amigo, el Dr. Carlos Soria, con su típico humor cordobés: “¿a quién invita el clon para su cumpleaños?”. Con lo hasta aquí expresado queda claro que a pesar de toda la ingeniería genética desplegada, ese clon, ese calco perfecto de sí mismo nunca podrá ser idéntico a sí mismo. ¿Por qué?, porque nada ni nadie podrá replicar o reproducir las condiciones ni las experiencias “por las que pasé yo mismo”, “porque nadie ni nada podrá repetir mi HISTORIA PERSONAL”, historia que se fue metiendo en todos los rincones de nuestro ser para modelarnos tal como los dedos de un escultor van dando forma a la arcilla. El resultado final será siempre “el último modelo” de nosotros mismos, el que por supuesto será cada vez mejor en cuanto a sabiduría y experiencia, aunque un poco menos lozano y activo cada vez. ES ÚNICA E IRREPETIBLE La Historia Personal es, valga la repetición, personal e intransferible, pues no sólo las experiencias son únicas, sino que el modo en que estas repercuten o impactan en el psiquismo también varían, incluso entre hermanos sometidos a similares experiencias educativas o de crianza, o aquellos que debieron sufrir violencias físicas, abusos sexuales o abandonos, etc. 142


Cuando tratamos a personas con Fobias específicas solemos encontrar una estrecha relación entre el objeto, situación o hecho que les produce fobia o rechazo intolerable y su historia personal. Esta relación suele ser directa y manifiesta, y otras veces está “disfrazada” u oculta. Cuando a través de la psicoterapia se llega al punto donde podemos unir nuestro presente de angustia, con nuestro pasado doloroso, humillante o vergonzante, es como llegar al sitio donde tenemos clavada la espina y al reconocerla, nos la podemos sacar y sentir cómo nuestra alma se alivia de tantos años de sufrimiento y dolor. Llegar hasta allí no es fácil, porque a veces la propia mente encierra el secreto bajo siete llaves en el último rincón del inconsciente, ya que revivirlo nos expone a una angustia infinita e insoportable. Otras veces permanece allí, oculto, pero con una potencia tan grande que hace que aflore en síntomas o en ensueños / pesadillas o conductas particulares (“fobia a las arañas”: cuando era niño tenía terror de que lo regalaran como regalaban a los gatitos de la gata de la casa... Los gatos “arañan”). TESTIMONIOS Para ilustrar lo expuesto, recopilamos testimonios que pudieran establecer una relación directa entre el síntoma actual y la historia personal de cada protagonista, y esto fue lo obtenido (los nombres son ficticios): MARÍA JOSÉ Síntoma. Yo no podía usar pulseras ni brazaletes o relojes pulsera y tampoco podía escuchar hablar de suicidio, ni de muerte, ni de velorios. Historia Personal: Cuando yo tenía siete u ocho años, una tarde de verano, me hamacaba bajo el parral de mi casa y decidí ir a jugar a la casa pegada a la mía con un bebito de entre uno y dos años que era el nietito de mi vecina. Entré en la casa (y aquí se produce una laguna en mi mente y salto al hecho en sí ): Yo estaba sentada con el nene a “upa” mío sobre los sillones de un tapiz borravino, cuando sonó el timbre. En mi ansiedad y luego de decirle a mi vecina que atendiera, fui a la puerta y allí parado frente a mí y suplicando por la presencia de Nora, mi vecina, estaba el sobrino con las venas de la muñeca cortadas y chorreando sangre. Había intentado suicidarse con un hacha. Fue ¡horrendo!, 143

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me quedé muda. Llegó mi vecina y por sugerencia de alguien lo acostaron en el suelo con los brazos extendidos para que no perdiera tanta sangre. Ya estaba allí mi mamá, mi abuela y mi papá. Creo que quisieron llevarme adentro pero no quise (esto se me confunde mucho).Creo que alguien le tomaba los brazos para contener la sangre, la ambulancia no llegaba y había ya más gente, que no sé cómo llegó. La cuestión era que se discutía en qué auto lo llevaban para que no se muriera desangrado. Mi papá no lo llevó, mi mama se lo impidió. Se lo llevó una ambulancia. La mamá del bebito con quien yo jugaba, refregaba con un cepillo y balde la sangre que se había impregnado en las piedras del frente de la casa. Restregaba mucho y la sangre no salía. El olor a esa sangre mezclada con portland y tierra no pude olvidarlo nunca. Este episodio sí... hasta hace un tiempo en que pensando en mi temor conecté con este horroroso hecho. A veces me pregunto por qué me tocó a mí abrir la puerta y ahora que escribo me pregunto por qué me dejaron luego, presenciar todo aquello. Días más tarde vi al muchacho, que se había salvado, con vendas en sus muñecas. Creo que por eso me incomodan tanto los relojes, las pulseras. Siento como que me oprimen las venas de las muñecas. Cada vez que estoy bajo un momento de estrés o tensión absoluta, me duelen las muñecas, ¡qué espanto! Hoy en día recordar o percibir aquel olor a la sangre pegada en la piedra me revuelve el estómago, me carga de angustia, me dan náuseas y de hecho me duelen las muñecas. ¡Basta! un asco haber recordado, a pesar de que escribirlo me hace bien para descargar, ¡un asco! JOSEFINA Síntoma: No salgo con mis amigas porque si me dan ganas de ir al baño, voy, pero debo mantener la puerta del baño abierta y me da vergüenza, porque la gente o los mozos pasan por allí y me ven. Entonces no salgo. Historia Personal: Cuando era niña, era algo traviesa y mi mamá me encerraba en el baño como castigo y me dejaba allí con la luz apagada y la puerta cerrada con llave, durante horas, a pesar de mis ruegos. Esta imposibilidad de estar en sitios cerrados la he cargado durante toda mi vida, ya tengo sesenta y cuatro años y es más fuerte que yo.

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ALBERTO Síntoma: No puedo ver películas de submarinos, ni escuchar noticias de personas que se cayeron en un pozo o que están atrapados en una mina, porque comienzo con síntomas de asfixia. Sufrí mucho cuando se hundió el submarino ruso y cuando un chico se cayó en un pozo y era noticia permanente por televisión. Un día permanecí toda la noche rezando frente al aparato para que lo rescataran con vida. Historia Personal: No recuerdo ningún hecho en particular que haya originado esta conducta, pero a mi papá le pasaba lo mismo. Siempre estaba mirando si había alguna abertura para que pasara el aire del exterior, aunque sea chiquita. Lo único que me pasó a mí fue que una vez que mi abuela me había tejido un pullover de cuello redondo, al probármelo, me quedó atascado a mitad de la cabeza y yo me desesperé por que creí que me moría asfixiado. ANTONIO Síntoma : Si veo una gallina o un pollo vivo, me muero de miedo y me corre un frío por la espalda. Por lo demás no tengo ningún tipo de miedo con mis casi sesenta años. Historia Personal: Cuando tenía unos seis años, mi madre enfermó y fue necesario internarla durante un mes. Entonces cada hijo fue repartido en casa de familiares, hasta que se repusiera. A mí me toco ir al campo, con mi tía y mis tres primos que eran un poco más grandes que yo. El mismo día de mi llegada fui recibido también por las gallinas que andaban libremente por los alrededores de la casa, eran unos animales que nunca había visto y mientras las miraba sorprendido, uno de mis primos las azuzó como para que me atacaran y me asusté de tal modo que todos se rieron. A partir de entonces lo hicieron infinidad de veces durante todo el mes a pesar de mis ruegos y mis lágrimas. ADRIANA Síntoma: Me aterra la palabra suicidio Historia Personal: Me tocó convivir muchos años con mi hermana mayor, de las cuatro que somos, la que cada vez que discutía fuerte o estaba mal, nos

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decía que se iba a matar tomando cinco o diez pastillas de “xxxxxxxxx” y luego se acostaba y yo quería impedir que se durmiera o luego la llamaba cada vez que la veía dormirse o me moría de miedo pensando que jamás despertaría. Ésto duró muchos años, aprendí a esconderle las pastillas cada vez que podía. A veces yo había sido el motivo de algún disgusto y me sentía muy muy culpable. Hoy entiendo que no lo hizo de mala persona sino de ignorante, pero al recordarlo mi corazón se resquebraja con una mezcla de rencor, por la injusticia, la desazón y la opresión en el pecho. Pero mi historia no termina allí, pues todo se actualizó cuando una amiga de una amiga, a la que yo conocía, se suicidó arrojándose desde un edificio. Desde entonces no pude acercarme a balcones o terrazas. Pero ahora ya todo está pasando gracias a Dios, a usted y a mí. MARIELA Síntoma: Tengo miedo a soñar o proyectar el futuro y además ataques de pánico. Historia Personal: Tenía una amiga, la más amiga y ella le tenía miedo a la muerte y a morirse y se murió joven después de tener familia y entonces yo sentí que no tenía la vida por delante como yo creía. Además de mi amiga, en mi casa, mis padres son muy miedosos a las enfermedades y además les cuesta demostrar cariño ya que no lo aprendieron porque los dos tienen historias muy tristes y duras. ALEJANDRA Síntoma: Tengo mucho miedo de quedarme sola en casa por miedo a que me pase algo. Historia Personal: Siempre me protegieron y salía acompañada o me quedaba en casa siempre con alguien. MARÍA ESTHER Síntoma: Me altera y me asusta todo lo relacionado con accidentes de personas y además las personas con dificultades físicas. Historia personal: Éramos 7 hermanos. Cuando era pequeña, mis padres de noche se disfrazaban de espantapájaros o brujos y nos asustaban diciendo que si nos portábamos mal ese personaje nos llevaría. 146


SUSANA Síntoma: Yo temo morir de una enfermedad y entonces cada vez que me duele algo pienso que voy a morir, cancelo planes, no quiero viajar, ni puedo estar sola, duermo con la luz prendida. Historia Personal: Entre los cuatro y nueve años prácticamente me crió mi abuela y ella todos los días estaba enferma de algo distinto, para llamar la atención. Cuando mi mamá trabajaba de noche, yo dormía con ella en su cama y cuando algo le dolía se pasaba toda la noche quejándose en voz alta. Ella le cuenta a todo el mundo, orgullosa, todas sus operaciones y enfermedades. La diferencia entre ella y yo es que a ella le gusta estar enferma. Creo que algo pude haber copiado de mi abuela, ya que ahora sé que a nosotros, las personas, nos encanta copiarnos. ALFONSINA Síntoma: Tengo mucho miedo a estar sola o salir sola con mi hijo de tres años y que me agarre una crisis estando sola con él, porque me aterra que él se quede en mi casa encerrado si yo me desmayara o lo que fuere, lo mismo si me pasara en mi auto o en mi negocio... ¡¿qué haría él en ese momento?! Es por eso que siempre trato de estar o salir con alguien. Mientras él fue bebé y hasta hace un año y medio, yo no tenía ningún problema y andaba para todos lados. Historia Personal: Creo que todo se debe a que mi mamá es exactamente igual o peor tal vez. Cuando yo era chica, ella salía mucho conmigo, pero siempre se descomponía y yo no sabía qué hacer. Ahora que yo la sigo acompañando a varios lados, odio cuando a determinada hora ella se tiene que tomar su pastilla en donde sea y delante de quien sea. Yo no quiero llegar a ser así y no entiendo cómo puede ser que yo haya copiado estas cosas horribles de ella y ahora yo esté en su mismo lugar. La diferencia es que yo busqué ayuda al año y ella demoró veinte años. Ahora las dos estamos juntas acá porque deseamos salir adelante. MARÍA ROSA Síntoma: Tengo miedo a estar sola en la calle. Historia personal: Este miedo me lo trasmitió mi mamá a quien se lo transmitió mi abuela. 147

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MARCELO Síntoma: Me aterraba cometer un error en mi trabajo o no poder hacer algo que me ordenaran. Además tenía ataques de pánico. Historia Personal: Cuando era niño, siempre, pero siempre mi papá me decía “tonto” o “inútil” y se burlaba de mis palabras o de mis dibujos y eso me mortificaba mucho, pero él lo seguía haciendo a pesar de todo, pues le resultaba gracioso al igual que a mis hermanos. Ya adulto, ponía mucho esfuerzo en hacer las cosas bien, pues temía ser señalado como inútil o incapaz y ello me dejaba extenuado. Por suerte y gracias al tratamiento he podido cambiar de actitud. Ahora hago igual las cosas bien, pero “no me mato” para lograrlo. MARÍA EUGENIA Síntoma: Me muero de miedo cuando veo un gato, siento olor o veo pelos de gato. No visito amigos que tengan gatos en sus casas. Historia Personal: Cuando tenía 10 años, un día salimos de compras con mis padres y hermanos y regresamos apurados pues ya había comenzado en TV la novela que seguía toda la familia... Nos sentamos en el sofá del living y nos concentramos en la pantalla... hasta que alguien se dirigió a la cocina y abrió la puerta y sorpresivamente desde allí saltó hacia mi cabeza un gato de la calle que nadie se explica cómo entró y quedó encerrado en la cocina...Yo miraba absorta la novela cuando de pronto una cosa peluda me arañaba la cara con sus patas... fue una experiencia aterradora y desde entonces no quiero ver ni hablar de gatos... SANDRA Síntoma: No puedo aprender a nadar... porque por más que me esfuerzo no puedo meter la cabeza dentro del agua. Ya he hecho tres cursos para aprender a nadar. Pero mi fracaso se repite. Historia Personal: Hace muy poco me enteré accidentalmente, pues un hermano me contó sin querer, que mi madre en una ocasión y a raíz de que me salía sangre de la nariz cuando tenía unos cinco o seis años, me tomó de los cabellos y me sumergió la cabeza en una pileta de lavar ropa, en forma reiterada para lavarme la sangre y que a pesar de mi desesperación lo siguió haciendo.

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Por otras conductas que ella tuvo conmigo no la tengo en ningún altar como se suele tener a las mamás. Aún hoy a mis cuarenta años, pretende que haga lo que a ella le parece. Demás está decir que no se lo permito. Este próximo verano intentaré nuevamente aprender a nadar... sé que ahora lo lograré. VANESA Síntoma: Me dan terror los globos y el ruido cuando explotan o cualquier ruido parecido, por eso para las fiestas de fin de año sufro igual que los perros. Historia Personal: Cuando tenía unos cuatro o cinco años, mamá hizo en casa mi fiesta de cumpleaños a la que vinieron muchos chicos. Todo estuvo bien hasta el momento de la piñata. Todos estábamos esperando las juguetitos y caramelos que mamá había guardado allí adentro, pero cuando explotó, todos los chicos se lanzaron a recogerlos y cayeron sobre mí y me aplastaron hasta casi asfixiarme: desde entonces cuando me invitaban a cumpleaños y llegaba el momento de la piñata a mí me recluían en el otro extremo de la casa. HILO INVISIBLE En cada uno de estos testimonios vemos un hilo invisible que une el pasado de dolor y sufrimiento con un presente de angustia y miedo. Seguir ese hilo no es tarea fácil. Lo indicado es solicitar ayuda profesional que guíe la experiencia de sumergirnos en nuestra historia personal y con ese auxilio recomponer la historia ya que un futuro brillante sólo se puede lograr si se deja atrás un pasado triste con sus cargas de penas, fracasos y miedos a repetir las experiencias dolorosas. Pero existe una acción que usted puede hacer en la intimidad de su corazón, hoy mismo y sin ayuda de nadie y esa acción es: PERDONAR. Con ello, podaremos nuestro jardín de todo aquello que no permite que las rosas crezcan. Debemos perdonar a las personas que en este trayecto forzosamente nos lastimaron, que nos negaron aquello que deseábamos, que no nos comprendieron o incluso que nos traicionaron o nos dañaron física o emocionalmente.

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Historia Personal

Se trate de una herida que nos hayan provocado nuestros padres, alguien que nos ha olvidado o un hecho casual que nos dañó. Todos hemos sufrido alguna vez por causa de otra persona. ¿Qué sentimos por quien nos dañó? ¿Intentamos alguna vez comprender por qué actuó de ese modo? ¿Somos capaces de olvidar la ofensa sufrida? ¿Sabemos perdonar?. Para curarnos debemos PERDONAR Perdonar a quien nos olvidó. Perdonar a quien nos agredió. Perdonar a quien nos hirió. Perdonar a quien destruyó lo que amábamos. Perdonar a quien pudiendo no nos dio lo que necesitábamos. Perdonarnos a nosotros mismos por sentir lo que sentimos y aceptar y cuidar al niño asustado, enojado o confundido que llevamos dentro y rodearlo de un infinito amor. Convertirnos en amor para que el amor sea. Y entonces así, crecer libres de toda atadura y de todo miedo y poder sentir cómo la paz regresa a nosotros. AL PERDONAR... MODIFICO Pero existe un hecho biológico que es de suma importancia conocer, que está relacionado con la memoria, el recuerdo y el perdón. Cada hecho o situación que se vive o se experimenta, se “graba” y se almacena como recuerdo en lo que se llama memoria, y el proceso por el que se evoca o trae al presente se llama recordar o evocar. No todos los hechos o situaciones se guardan o fijan en la memoria con la misma intensidad. Los recuerdos de corto plazo, los recientes, son inestables por unas 6 horas, antes de transformarse en recuerdos de largo plazo. Estos recuerdos de largo plazo, sí se guardan más firmemente en el archivo de la memoria, sobre todo cuando llevan un alto componente emocional. Cada vez que traemos desde el pasado un hecho guardado en la memoria y lo recordamos en el momento presente, por algunas horas volverá a ser inesta-

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ble tal como les ocurre a los recuerdos de corto plazo, antes de ser guardados nuevamente en el archivo de la memoria. Es en ese momento donde debemos introducir el perdón, para que el recuerdo vuelva al archivo de la memoria con un nuevo componente que lo atenúa, suaviza o transforma. Recientes comunicaciones médicas sobre las investigaciones neurobiológicas del cerebro y la memoria comprueban que esto es posible y quizás éste sea el fundamento o la explicación del por qué muchas personas que han perdonado, han logrado atenuar o eliminar el sufrimiento que los recuerdos dolorosos provocan.

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CAPÍTULO VIII “SUBIENDO LA MONTAÑA” Ésta es una de las canciones que cantábamos en mi adolescencia, mientras escalábamos decididos la montaña elegida. Hoy la recuerdo, porque de eso se trata exactamente lo que vamos a hacer. Hasta ahora y luego de recorrer siete capítulos, hemos obtenido información sobre los posibles diagnósticos relacionados con el miedo, además de conocimientos sobre él, sobre su función normal de protección y el por qué deja de hacerlo. También vimos la influencia que tiene en todo lo que nos pasa, la personalidad que nos hicimos a lo largo de los años y el papel determinante que sobre todo esto tiene el estrés. Para explicar cómo ocurrieron las cosas, qué es lo que está pasando y por qué, podríamos esquematizar diciendo que:

Pues bien, si lo que vamos a hacer es subir la montaña del éxito para alcanzar la cumbre de la curación, ya estamos en condiciones de hacerlo. Tenemos todo lo necesario, ahora viene la tarea del ascenso, aunque previamente analizaremos el plan que sí o sí nos conducirá a la cumbre. REVISEN SU “EQUIPO” Y VERIFIQUEN: 1 - Comprendí cómo funciona mi cerebro 2 - Practico el Perdón y No juzgo 3 - Vivo en presente 4 - Soy solidario

Sí Sí Sí Sí

No No No No 155

Subiendo la montaña

5 - Doy los 7 ABS (Abrazos, Besos, Sonrisas) 6 - Fabrico Endorfinas 7 - Disminuyo el nivel de estrés

Sí Sí Sí

No No No

Si alguna de sus respuestas no fue afirmativa, debe saber que con “equipos” incompletos, suelen presentarse dificultades. Ahora mismo y mientras nos preparamos para iniciar la marcha, practicaremos un ejercicio de respiración, el que “nos sacará de muchos apuros”: Observe su propia respiración y notará que rítmicamente hacemos dos movimientos, uno de “meter” aire en sus pulmones, que se llama inspiración y otro de “sacar” aire de sus pulmones, llamado espiración o exhalación. Ahora contemos cuántas veces hacemos estos movimientos en un minuto, simplemente hagámoslo y veremos que todas las personas inspiran y exhalan unas catorce veces por cada minuto. Esto en condiciones normales y de reposo. Si realizamos alguna actividad física o nos ponemos ansiosos, esta frecuencia aumenta. Sobre el detalle de esto nos ocuparemos más adelante. Por ahora haremos lo siguiente: Inspire por la nariz... lento y profundo como si quisiera “tragarse todo el aire del ambiente” e inflar sus pulmones al máximo, luego retenga el aire lo más que pueda en el interior del pulmón, luego exhale lentamente y por la boca, como para “no guardarse ni una sola gota de aire en su pulmón”. ¿Ya lo hizo?, recuerde: respirar lento y profundo... ahora repítalo, siete veces más. ¿Ya lo hizo?, ahora descanse. Dentro de unos momentos y mientras esté haciendo cualquier otra cosa, barriendo, pelando papas, en la oficina, etc. repita otra serie de siete y descanse. Al final del día debe completar por lo menos “siete tandas de inspiración / exhalación”, grabe este esquema:

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Repetir este ejercicio por lo menos: Siete veces por día Cuando ya lo haya practicado tanto que le sale casi automático, úselo frente a cualquier situación difícil que se le presente, incluso crisis de pánico. Verá que “funciona”. Ahora sí, vamos al plan de ascenso: Para llegar a la cumbre, iniciaremos la marcha en busca de nuestra primera estación: “EL DIÁLOGO INTERIOR”, allí nos detendremos para analizar cómo es para cada uno y qué debemos hacer para contrarrestarlo. Luego seguiremos subiendo hacia una estación que nos dará cierta dificultad: “LA AUTOESTIMA”, allí nos aclimataremos durante un tiempo para luego avanzar por un terreno relativamente fácil hasta la estación: “FRACCIONAR Y DESMENUZAR” donde reuniremos todo nuestro equipo para el ascenso final. Luego subiremos hasta “RESPIRACIÓN” y “RELAJACIÓN” y allí nos tomaremos un descanso antes de enfrentar la parte que más asusta, la de “FABRICAR LOS SÍNTOMAS Y MANEJARLOS”, para luego y de inmediato hacer el último esfuerzo y el asalto final para llegar a la mismísima cumbre: “AFRONTO Y ME LIBERO”. Una vez en la cumbre, disfrutaremos del panorama que se desplegará ante nuestros ojos: una nueva vida... libre e independiente y miraremos hacia atrás y nos enorgulleceremos de nuestro esfuerzo, coraje y determinación por lograrlo, lloraremos de alegría por todo ello, daremos las gracias a todos los que nos ayudaron y muy especialmente: “me felicitaré por poner todo mi ser para vencer a un enemigo que parecía invencible”. Luego de ese, nuestro momento de gloria, nos dispondremos a leer los testimonios de todos aquellos que nos precedieron en la cumbre en “CARTAS LEIDAS”. También, antes de emprender el regreso, leeremos algunos relatos que nos llenarán de nuevas energías en “CUENTOS CONTADOS” y luego iniciaremos el descenso, para llegar al llano y mezclarnos con las personas que, por no tener lo que nosotros tuvimos, se perdieron la hermosa experiencia de sentir la felicidad de haber logrado, ¡TRIUNFAR!... ¡CONFÍE!... ¡ASÍ SERÁ!

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“UN POEMA SIN RIMA Y... SIN MÉTRICA” Doctor y amigos: Mi experiencia del lunes pasado fue muy fuerte, tan fuerte que destrabó en mí la capacidad de crear textos literarios, la que tenía bloqueada desde algo muy fuerte que pasó con un paciente mío de Fonoaudiología en el año 1998. Yo antes siempre escribía y publicaba algunas cosas. Ésta es sin rima y sin métrica. LA GRIETA Cuando tenía cinco años sentí que una pequeña fisura se abría debajo de mis pies. Al principio la miré asustada pero luego pensé que si separaba un poquito mis pies, podía seguir viviendo con mi pequeña fisura. Con el correr de los años, y la erosión que provocaban los distintos momentos difíciles de mi vida, la grieta crecía y yo seguía separando mis piernas pero no la miraba, para olvidarme que estaba. Caminaba con mi grieta, pero sólo yo la veía. Un día se produjo un gran movimiento sísmico y yo miré la grieta y en ese momento creí que me caía, me mareaba, me aterrorizaba, me angustiaba... ... podía seguir separando las piernas pero necesité ponerme una venda para no estar tan inestable. Siguieron los temblores de tierra bajo mis pies y en un momento, mi fisura se transformó en un agujero negro que me chupó y me llevó hasta un fondo que no tenía final.

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Mi agujero, estaba lleno de telarañas del pasado, de miedos, de fantasmas, de voces, de sonidos, de parálisis, y yo estaba sola, en el final infinito de la ansiedad. Hasta que un día después de tanta soledad una luciérnaga pasó cerca de mi pozo y sugirió que ante la nada de mi parálisis algo podía hacer y eso era REZAR. Otro día hubo un gran tornado y a mi agujero negro, le llegó algo de tierra así pude subir un poquito y escuchar una voz que me decía: “Hay muchos como vos que están en otros pozos al lado del tuyo y hay un MAGO que te puede fabricar una escalera de sabiduría, de humanidad, de amor y de abrazos tan profundos, que te va a enseñar a volar y así despegar del fondo de la soledad y el pánico.” Cuando desplegué mis alas, noté que estaba más liviana, que no cargaba con mis máscaras y mi armadura, y desde la superficie del pozo pude mirar a lo lejos... y ver... una cumbre muy alta. Estaba cerca, pero no sabía cómo llegar hasta ella. Y otra vez el MAGO, me explicóque para alcanzar la cima, él me podía mostrar el camino,sólo tenía que CONFIAR y hacerme cargo de mi APRENDIZAJE. Hoy estoy al pie del cerro intentando subir y sé que podré hacerlo. También el MAGO, me dijo que ésta es la primera cumbre, pero que hay todavía cumbres más altas a las que podré acceder en el largo camino de mi existencia. Hoy me siento una ALPINISTA, que está preparando su mochila para escalar, con una fuerza distinta, 159


una fuerza, que me permite empezar a tenderle mi mano a otros que están en sus agujeros negros y todavía no tienen la fuerza para poder desplegar sus alas y volar hacia lo maravillosa que puede resultar la vida en LIBERTAD y sin MIEDO. Con metáforas traté de expresar lo que me pasó y me está pasando. Todavía siento ganas de llorar y no puedo. Pero al menos hice una catarsis del sentimiento que tengo dentro. Y le repito ustedes me devolvieron la vida. MIL GRACIAS. Un abrazo DELIA

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CAPÍTULO IX “EL DIÁLOGO INTERIOR”

¿QUÉ ES EL DIÁLOGO INTERIOR? Es esa “conversación” que tenemos con nosotros mismos y durante la cual nos hacemos preguntas y nos respondemos o bien nos decimos cosas, reflexionamos y tomamos decisiones, o sacamos conclusiones sobre cosas que nos pasan a nosotros o a otras personas. También en esa, la intimidad de nuestros pensamientos, es donde “sentimos” o “percibimos” la ansiedad y el miedo que nuestros propios pensamientos nos producen y donde sufrimos sin que nadie se de cuenta de lo que nos está pasando o a veces también, es el lugar donde nos reímos o disfrutamos sin que nadie lo advierta; también allí construimos estrategias o elegimos la conducta más adecuada para enfrentar tal o cual cosa. En suma, llamamos Diálogo Interior, a los cientos de pensamientos que, en un instante y en forma simultánea, atraviesan “el firmamento” de la mente, sin que en ningún momento la persona deje de tener el control sobre ellos y la certeza de que esos pensamientos le son propios. En ciertos cuadros psiquiátricos esta sensación de pertenencia no existe y los pensamientos son como impuestos o ajenos y no como originados en la propia mente. No es el caso de los pacientes afectados de fobias o ataques de pánico aunque muchas veces durante las crisis tengan la horrible experiencia de que “están perdiendo el control de sus pensamientos y de sí mismos” Este diálogo interior, una especie de “charla” que tenemos con nosotros mismos, es un proceso que se desarrolla en nuestro cerebro y es de una velocidad, sutileza y complejidad, tan fuera de nuestra imaginación que parecieran datos de ciencia - ficción. Todo lo que captamos con nuestros sentidos o imaginamos con nuestro cerebro, en última instancia nos conduce a la asignación de significados que le dan sentido a lo captado y ese significado será diferente de acuerdo al mundo interno personal de cada uno. La velocidad con la que interpretamos y asignamos significados es más o menos como leer un libro de trescientas páginas en un segundo y poder luego explicarlo. 165

Diálogo interior

El Diálogo Interior es el más íntimo y privado de los actos de una persona, pues nada ni nadie puede acceder a él y es por eso mismo franco, directo y sin censura de ningún tipo y cuando voluntariamente se lo desea transmitir, se lo adapta a las circunstancias o al interlocutor, por lo que ni aún así, expresado voluntariamente, suele ser fiel. Por ello todos aquellos que se arrogan el “poder” de leer el pensamiento ajeno son nada más que aprovechadores de la ignorancia de la gente. ¿CÓMO PUEDE SER? El Diálogo Interior, según su contenido, puede ser: Neutro, Positivo o Negativo. 1- Diálogo Interior NEUTRO: Cuando el Diálogo Interior es neutro, “el yo mismo” dialoga consigo y analiza la realidad que lo circunda, sus propios sentimientos y sensaciones, y luego “elabora” toda la información y al final del proceso “saca conclusiones” sobre los hechos o sus pensamientos, y adopta entonces una conducta activa o no adopta ninguna. Todo se realiza en instantes, constantemente, en un clima de paz y armonía interior, sin que se genere ningún tipo de malestar ni satisfacción. Es lo que ocurre durante la mayor parte del día en las personas que no tienen dificultades ni enfrentan situaciones que requieran una atención que los “distraiga” o “los saque” de un aparente estado circunstancial de equilibrio o paz interior. Dicho en otros términos, es el estado que tenemos cuando decimos: “no pasa nada”. Pero cuando algo en mi entorno o en mi interior rompe ese estado de equilibrio, surgen pensamientos que transforman ese diálogo neutro en POSITIVO o NEGATIVO... dependiendo su “tonalidad” o característica de la personalidad de cada uno. 2- Diálogo Interior POSITIVO: Cuando ante determinadas situaciones o dificultades, se genera en mí un principio de malestar, en forma natural o espontánea surge una “voz interior” que me tranquiliza o me “aconseja” y me dice: “quédate tranquilo todo va a estar bien, ya has salido de situaciones peores”, “todo se va arreglar”, “quizás sería conveniente prestar un poco más de atención y cuidado”, “ voy a rogar y confiar en Dios”, “confía 166


en tus conocimientos”, “ya se darán cuenta de tus méritos”, “disminuí el ritmo”, “no te arriesgues tanto”, “procura ser más prudente la próxima vez”, “mira mejor en quien confías”, etc. Entonces podemos observar cómo la ansiedad disminuye y nos acercamos al estado de equilibrio y al Diálogo Interior Neutro habitual. Pero todo esto es muy distinto en las personas que presenta algún tipo de Trastornos de Ansiedad, porque básicamente a lo largo de su vida fueron edificando una personalidad de ciertas características, lo que al fin determina la prevalencia de un Diálogo Interior Negativo el cual, desde ya adelantamos, se puede modificar y hacerlo positivo. 3- Diálogo Interior NEGATIVO Tiene lugar en aquellos que tienen Autoestima baja y determinadas características de personalidad: se trata de personas que suelen tener tendencia a ser perfeccionistas, lo cual las hacen exigentes con los demás y consigo mismas y para ello requieren un gasto de energía extraordinario para “controlar” y “supervisar” los actos propios y ajenos. Sufren cuando no pueden ejercitar el “orden y la perfección” (por ejemplo: si van de visita a otra casa y observan un cuadro ligeramente torcido, no prestan atención a la conversación pues desearían dirigirse hacia el cuadro y ponerlo derecho. O bien se enojan consigo mismos cuando alguna tarea o actividad no salió perfecta o bien no obtuvieron la calificación más alta al ser evaluados, etc). Por otro lado son extremistas... es decir se manejan en los extremos: es blanco o es negro... tienen como una incapacidad para distinguir los grises o las gamas que existen entre dos puntos opuestos. Abusan del uso de términos como: nunca, jamás, siempre y tienen tendencia a generalizar, es decir, a partir de un aspecto o detalle sin importancia son capaces de sacar conclusiones negativas sobre algo, como por ejemplo: “ese detalle lo arruinó todo” o “si no me saludó es porque no me quiere”. Otra característica es la rigidez: son rígidos e inflexibles, una vez que concluyeron que algo es de un modo tal como lo pensaron o interpretaron, no son capaces de revisar su conclusión aunque estén equivocados, así es que se dicen “si yo lo siento así es porque es así”. 167

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Son además dependientes, tienen necesidad permanente de consultar y pedir opinión sobre lo que es más conveniente hacer o decir y les cuesta decidir o elegir. Esto los transforma en personas que se apegan a las cosas y a las personas, son aferrados y les cuesta despedirse y desprenderse (por ello tienen tendencia a acumular cosas inservibles).Todas estas características les brindan control y les dan así una aparente seguridad. PENSAMIENTOS FEÍSIMOS Pero la característica mas sobresaliente es que son imaginativos, por lo que serían excelentes artistas, por lo creativos. Pero la imaginación que tienen está distorsionada y sólo genera pensamientos FEÍSIMOS al captar casi exclusivamente los aspectos negativos de la realidad, aún cuando no los haya visiblemente... un dolor o molestia pasajera en instantes es llevado a la categoría de “cáncer” o “infarto”. Y lo que es más notable aún, es lo que ocurre ante una situación placentera, ideal para disfrutarla, en ese caso se dicen “si lo disfrutás lo pagarás con sangre” o “ya llorarás de tristeza la alegría de hoy” o “vos no tenés derecho al placer” . ¿Cómo son los pensamientos FEÍSIMOS ? son:

Son pensamientos : a) Catastróficos: anticipan dolor y sufrimiento como consecuencia de hechos desastrosos que van a ocurrir en forma más o menos inmediata (catástrofes que se anuncian). Tales como, si voy a dar un exámen: “seguro que no aprobás” o si voy a salir: “te dará una crisis”, “te vas desmayar en medio de la calle”, o al estar en tal lugar: “te van a mirar y se darán cuenta”, “ te van a preguntar qué te pasa”. b) Terminantes: son tal como se presentan, no importa si son exagerados o improbables, no admiten ninguna consideración, ni análisis, es decir que son aceptados tal como son. 168


c) Hirientes: como no existe censura interior y el concepto que se tiene de uno mismo es pobre, no se ahorran improperios dirigidos a sí mismo. d) Descalificantes: esta es una variante que descalifica o desmerece con palabras o frases tales como: “no vas a poder”, “otra vez te está pasando, ¿te lo dije o no?”, “cómo no te va a pasar a vos, si siempre.”, “¿quién te creés que sos ? “, “¿quién te va a mirar a vos con la cara que tenés?”, “sos un inútil”, “si lo intentás, harás un papelón”, “yo no valgo nada”, “¡no seas ridícula!”. e) Insultantes: es más de lo mismo, pero mas directo: “tarado”, “inútil”, “feo”, “tonto”, “iluso”, “torpe”, “sos menos que” y otros más fuertes por supuesto. f ) Impiadosos: Cuando se formulan los autoinsultos o descalificaciones, la persona se trata a sí misma sin ningún tipo de consideración o misericordia, de tal modo que hasta el enemigo más odiado recibiría mejor trato de su parte. g) Miedógenos: Está quizás sea la característica más directa como gatilladora de las eventuales crisis de ansiedad o pánico. Suelen comenzar con la pregunta: “¿y si...?”, los pensamientos que se instalan anuncian el peligro y este automáticamente se presenta tal como si ocurriera en realidad. Dicho en otros términos: “si yo pienso que voy a tener una crisis de pánico... la tendré”, pues al pensarla la estoy comenzando a preparar, luego es cuestión de tiempo para que se haga realidad. Pero del mismo modo, “si pienso que no la voy a tener, la crisis no vendrá”. Así de sencillo y ya veremos cómo lograrlo. h) Indubitables: Los pensamientos de este tipo son inapelablemente ciertos y por lo tanto no existen dudas acerca de su veracidad. Se instalan de este modo, pues la persona en ningún momento duda de su verdad o certeza porque después de todo “es cierto porque yo siento que es cierto” y con ese argumento se cierra toda otra consideración. Cuando estos pensamientos vienen a la mente, suelen arrastrar tras de sí otros pensamientos o imágenes por lo general dolorosas o generadoras de culpas. Estas contribuyen a disminuir aún más la autoestimay al sumarse o agregar “argumentos”, cada vez van logrando mayor credibilidad, por lo que el pensamiento negativo adquiere prontamente la categoría de verdad indiscutible. Y hasta parecen producto de una reflexión inteligente que permite conclusiones tales como 169

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“deberías” o “tendrías que”. Resultan en general exigencias autoimpuestas por mandatos de perfección que son imposibles de cumplir, generan más culpas y mayores sentimientos de desvalorización. CUATRO TIPOS Siguiendo al Prof. Alfredo Cía, pueden describirse cuatro tipos de personalidades en las que se da el Diálogo Interior Negativo: 1- El Preocupado: Es aquel que vive imaginando lo peor. Todo lo por ocurrir se presiente como catastrófico. Vive imaginando o temiendo desgracias... se sobresalta si escucha sirenas y directamente imagina que en ella trasladan a un familiar que sufrió un accidente. Si percibe una molestia en su pecho... no piensa: “es una molestia pasajera”, en cambio piensa: “esto es cáncer”. Siempre está atento y vigilante para detectar las pequeñas señales que indiquen un cambio y a partir de allí desarrollan una cadena de razonamientos que concluyen en “lo peor”. Suelen además hacer lo mismo a partir de su imaginación, luego de hacerse una pregunta típica: “¿qué pasa si?”: “me quedo solo o sola”, “ si se dan cuenta”, “si me agarra una crisis”... “si me miran”... “si cierran la puerta”, “si bloquean la salida”, “si me ataca en medio del vuelo”, “si me preguntan”, “si tengo que dar la mano”. 2- El Autocrítico: Es aquel que vive preocupado y atento a las cosas que hace y cómo las hace; vive juzgando y criticando su propio comportamiento, destacando las fallas o errores que él cree produjo, son aquellos que se dicen a sí mismo: “no fuiste atento”, “lo que dijiste no fue inteligente”, “hiciste el ridículo”. Son personas que creen que cualquier cosa que digan los demás es mejor que lo que ellas puedan decir, entonces no se animan a hacer preguntas por temor al ridículo y procuran pasar desapercibidos. Son dependientes y siempre están en búsqueda de opiniones ajenas cuando deben resolver cuestiones que dependen de ellos... “vos que harías: ¿me caso o no me caso?”, “¿me separo o no me separo?”, “¿viajo o no viajo?”, “¿no tenés ganas de hacer pis?”, “¿me acompañás, asi me ayudás a elegir?”. Son las personas ideales para “venderles” cosas, pues por temor al ridículo: compran celulares o tiempos compartidos o cualquier cosa que no quieren... Lo mismo les pasa cuando sienten que deben 170


comprar algo en el comercio en el que ingresaron sólo para hacer una pregunta sobre un precio y les terminaron mostrando todo lo que tenían y no necesitaban... “¿qué van a pensar si no compro algo?” 3- La Víctima: Más conocido como el “mala onda”. Se queja de todo, todo el tiempo. Se siente desprotegido y sin esperanza ... “yo sí que estoy mal y lo más grave es que para mí no hay solución” Vive pronosticando calamidades propias y ajenas, aunque no hace nada para evitarlas, porque luego siente algo de placer cuando acierta en su pronóstico... Claro que cada vez que acierta, es para sufrir... les encanta decir: “¿viste?”, “¿te lo dije o no te lo dije?”... por ello mismo son boicoteadores de cualquier iniciativa o intento de lograr algo: “no va a andar”... “ya es tarde para eso”... “yo no puedo”... “no vale la pena”... 4- El Perfeccionista o Autoexigente: Es muy parecido al Autocrítico, pero en lugar de quedarse “apichonado” o “quieto y callado” como para que nadie se de cuenta de su presencia, se lanza a actuar y a hacer cosas, pero con un nivel de autoexigencia exagerado, pues todo lo “tiene” que hacer perfecto, no tolera errores. Tiende a creer que su valor depende de sus logros materiales, del nivel social que alcance, de cuánto lo quieran o de cuánto es aceptado por los demás... se exige más de lo necesario y despliega una energía envidiable, claro que al cabo paga las consecuencias por el alto nivel de estrés que desarrolla. Suele decirse: “no te estás esforzando lo suficiente”, “no aflojes”, “debo ser el mejor” y se ignora cuando ocasionalmente se escucha a sí mismo: “¿vale la pena tanto esfuerzo?” También ignora los llamados de atención de los que supuestamente son los destinatarios de tanto “sacrificio”. Cualquiera de los cuatro tipos descriptos, “el preocupado”, “el autocrítico”, “ el víctima” o “el perfeccionista”, tienen un gasto de energía mayor al de las demás personas y la consecuencia a lo largo del tiempo suele ser la depresión. Además mientras prestan atención al mantenimiento de un sistema que los proteja de angustias mayores, viven en un estado de angustia perpetua que no les deja “tiempo”, ni “ganas” para disfrutar la vida, la cual pasa por un costado sin que se den cuenta. ASÍ SOY... ASÍ ES... Cabe en este momento hacer una salvedad: cuando dijimos sobre las características psicológicas de la personalidad en la que suele desarrollarse el Diálogo 171

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Interior Negativo o cuando describimos algunas personalidades en particular, debe entenderse que esas características no siempre se ajustan perfectamente a la realidad de las personas, ya sea porque no se dan todas juntas o por no ser tan acentuadas, por lo que pueden no corresponder a la imagen que sobre nosotros mismos tenemos. No obstante ello y si las tuviéramos, a partir de este momento, cabría analizarlas, reflexionar y ver si en realidad no constituyen un obstáculo para lograr el bienestar, y si así es: proponernos el cambio... cambio que sólo se puede lograr a lo largo del tiempo y desde el interior de uno mismo, pues nadie cambia por pedido de otro y tampoco se logra de un día para otro. El cambio ¿es posible?: SÍ, para ello, cada vez que nos sorprendamos a nosotros mismos en alguna de las conductas que describimos y que nos causan dificultades en nuestra vida, propongámonos cambiarla por aquella que creemos debería ser. ¿Es fácil?: No, no es fácil... pero con paciencia y tiempo se logra. Para facilitar ese cambio daremos algunas claves que nos servirán de guía. El objetivo del cambio es lograr que uno sea, lo opuesto de: 1- Perfeccionista. 2- Extremista 3- Rígido 4- Dependiente 5- Imaginativo Catastrófico 6- Aferrado Entonces la propuesta es ser: 1- Generoso : con uno mismo y con los demás... perdone y perdónese, permítase errores y equivocaciones. Todos, aún los más encumbrados, los cometen, ¿por qué Usted no?... Los que lo quieren saben eso y por ello no dejaran de valorarlo. Después de todo, sólo Dios es perfecto, nosotros sólo somos seres humanos imperfectos. 2- Amoldable: Es exactamente lo contrario de “rígido”. Esto significa que debo “desestructurarme” y aceptar que la vida y sus cosas varían en forma constante y que de nada valen mis esquemas, pues ya la vida misma me ha demostrado que la mayoría de los problemas se resuelven solos, sin mi inter172


vención y que tanto las cosas más lindas como las más feas llegaron a mi vida en forma inesperada y sorpresiva. Lo ideal es adaptarse a las situaciones según se presenten, y dejar de lado la pretensión de que “las cosas se amolden a mis deseos”, pues ello por lo general no ocurre y sólo se obtiene frustración y ansiedad. Procure no tener expectativas y disfrute con la aventura que significa cada amanecer y con él, un nuevo día lleno de sorpresas. Abandone la idea de que las personas deben cambiar para adaptarse a lo que uno cree que deben ser, no lo harán, en cambio acéptelas y ámelas como son y si así no le gustan, siga buscando, quizás encuentre a alguien que “encaje” en su modelo. Trate de borrar de su vocabulario las palabras: jamás, nunca, para siempre, ninguno, todos y procure tener su mente y su corazón abierto a todo lo que llegue a su vida. Escuche antes de opinar o decidir sobre algo. Pregunte, no se quede con lo que cree o siente que es. 3- No Aferrado o Desprendido: Esta expresión la usamos para oponerla a la característica “aferrados” o “adheridos” a las cosas o a las personas. Por esta condición, se siente a las personas como de su propiedad, al igual que los objetos que la rodean o que fue acumulando a lo largo de la vida. Por ejemplo las mujeres guardan ropas en previsión de hipotéticos “tiempos difíciles” o “para cuando adelgace” o “para cuando vuelva la moda”, también atesoran bolsas de comercios y de supermercados y otros diversos objetos tales como medicamentos a medio usar y vencidos, junto a recuerdos tales como piedras o caracoles de no se sabe qué playa, aros sueltos o relojes averiados, lápices de colores, saquitos de té usados o capuchones de lapiceras extraviadas, papelitos con teléfonos de no se sabe quién o listados de compras, junto con billetes y monedas inservibles y manojos de llaves que nadie sabe a qué puertas corresponden... todo ello en la parte superior de la heladera y ¿en su puerta?: más medicamentos vencidos (de los chicos que ya están en la facultad), mermeladas, caldos y especias vencidas hace años. En un rincón por lo general del lavadero puede uno encontrar un verdadero “yacimiento arqueológico” de revistas, diarios, folletos, boletas, tickets, trapos, juguetes, botones, cubeteras, zapatillas, cordones, etc. Los varones aprecian “guardar” por las dudas: clavos, trozos de alambre, tornillos, trozos de madera o de caños, canillas en desuso, rieles de cortinas o trozos de cualquier cosa o repuestos de autos que ya no tienen, etc. 173

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El estar adherido a las cosas y a las personas nos expone a un gran dolor al momento de enfrentar situaciones vitales particulares: mudanzas, viudez, alejamiento de los hijos, etc. y junto con ello lo que es más determinante, perpetúa la ligazón con el pasado y demora el desprendimiento de todo lo que lo condujo a este, nuestro presente tan lleno de sufrimientos. En consecuencia y como símbolo de su deseo de empezar de nuevo: haga una limpieza profunda y tire a la basura lo que no sirve y regale lo que sí sirve. Alguien se lo agradecerá, porque tendrá menos frío o se pondrá contento simplemente... y de paso, crearemos espacio para que nos lleguen cosas nuevas, modernas y lindas. 4- Autónomo: Significa lo opuesto a dependiente. Para lograr la autonomía en nuestras decisiones y actos, debemos antes conocernos y valorarnos y luego comenzar a tomar decisiones por uno mismo. Quizás al principio debamos hacerlo gradualmente, hasta que comprobemos que no es tan difícil “ser uno mismo”... que a veces se acierta y que a veces se yerra... Pero siempre estará en nosotros la satisfacción de que seremos los protagonistas de nuestra vida y que ya no seremos lo que otros quieren para nosotros. 5- Balanceado: Esta es la condición que oponemos a la característica extremista, es decir, esa condición que hace que las cosas sean un extremo u otro... es blanco o es negro, pues no se acepta que entre ellos existe una amplia gama de grises. Llevado al plano de las relaciones y en base a esta característica se exageran las virtudes ajenas y se desmerecen las propias: “ellos si pueden, yo no podré”, “ellas gustan porque son lindas y simpáticas, yo soy fea y además tonta”. Y respecto de las cosas o situaciones, todas las apreciaciones son dramáticas y exageradas: “una molestia o dolor es un cáncer o un infarto”, “un murmullo es un comentario negativo”, “una mirada es una crítica”; y cuando algo sale mal, por ejemplo si finaliza una relación, piensan: “ ahora sí que me quedaré sola”. Nada es así, las personas están metidas en sus problemas y no nos prestan una especial atención... procuremos sonreír siempre, esa es la mejor tarjeta de presentación ante cualquiera. Con solo sonreír embellecemos nuestro rostro. Analicemos cuánto de cierto hay en nuestras afirmaciones y comprobaremos que tenemos tendencia a exagerar lo malo a ver tragedias donde no las hay y en consecuencia vivimos angustiados porque sí. 174


Tratemos de ver el lado positivo de las cosas, aún las más difíciles lo tienen y a partir de allí construyamos una nueva realidad más positiva y estimulante. 6- Agua: Para el final hemos incluido esta palabra. Lo hemos hecho pensando que con este elemento de la naturaleza simbolizamos todo lo que necesitamos saber y hacer, ya que el agua de un río, por ejemplo, fluye y en su desplazamiento se va adaptando a los obstáculos que encuentra a su paso, no se aferra a un modo, se amolda al terreno. Si es necesario se hace “rápido” o se detiene,regula su fuerza: se balancea y elige su camino y lo pone en práctica, porque es autónoma. Y a su paso es generosa con todos los que encuentra, dándose sin límites, para finalmente llegar al mar que es el lugar a donde quería llegar. Pues bien, si ahora enfrentamos las características de personalidad en las que prospera el Diálogo Interior Negativo con las características que proponemos como objetivo a lograr, nos encontramos con esto: Perfeccionista Extremista Rígida Dependiente Imaginativa Aferrada

Generoso Amoldable No aferrado Autónomo Balanceado Agua

Como claramente vemos... si nos lo proponemos, podremos decir: “antes PERDÍA... desde que logré hacer como el agua sólo: GANABA” ¿CÓMO CONTRARRESTAR LOS PENSAMIENTOS NEGATIVOS? Como ya vimos en capítulos anteriores, nuestro cerebro es un órgano maravilloso y de una complejidad extrema, a tal punto que la computadora más compleja creada por el hombre equivale a menos del 1% de lo que es capaz el cerebro humano. Pero así como es de complejo, tiene algunos aspectos que si los conocemos y aprendemos a “manejar”, nos pueden ayudar a estar mejor y superar algunas dificultades. Veamos un ejemplo: 175

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1) Un varón sano ve una mujer hermosa en la playa que le atrae fuertemente y en respuesta al estímulo, se excita sexualmente. 2) Ahora, el mismo varón, está solo en su casa y piensa en lo que ocurrió esa tarde en la playa y nuevamente se excita sexualmente. ¿Qué quiere decir esto?... quiere decir que el cerebro da la misma respuesta a la realidad que vemos con nuestros ojos y a la realidad que vemos con los “ojos” de nuestra mente... es decir nuestra imaginación (que es producto del mismo cerebro). En otros términos podríamos decir que nuestro cerebro, al momento de responder, no distingue entre lo que es real y lo que es imaginario. Saber esto es de gran importancia, pues con sólo imaginarnos situaciones placenteras, obtendremos respuestas de placer... Claro que, del mismo modo, cada vez que imaginamos situaciones de catástrofe obtendremos respuestas de sufrimiento y angustia. EMPRESARIO CINEMATOGRÁFICO Si suponemos que nuestra mente es un cine... en su pantalla pueden proyectarse películas dramáticas o de terror y tendremos las consecuencias correspondientes: angustia y sufrimiento. O bien proyectarse películas románticas o comedias y tendremos las consecuencias correspondientes: placer, ternura y risas. ¿Pero sabe una cosa?... ¡los dueños del cine somos nosotros y en el cine de nuestra mente se pasan solamente las películas que nosotros permitimos! EL PODER DE LAS PALABRAS Del mismo modo actúan las palabras. Ellas representan cosas, es decir simbolizan la realidad... así cuando digo “perro”, automáticamente en la pantalla de su mente aparece un perro cualquiera... aunque si digo “bueno”... en su cerebro aparecerá una pregunta que dirá “¿bueno qué?”. En cambio en el mío aparecerá un perro color champagne, grande, de raza Labrador, ¿sabe por qué?, pues porque así se llama mi perro: “Bueno” y yo tendré una sensación de ternura y amor. Pero si digo “pirugo” ni usted ni yo representaremos nada, pues no sabemos qué es un “pirugo” y no lo sabremos porque es una palabra que acabo de inventar. Cada cosa que yo pienso, a los efectos de la respuesta que dará mi cerebro, es in176


mediata e instantánea: Si pienso que tendré un ataque de pánico... en ese mismo instante ya comencé a prepararlo... del mismo modo si pienso que no lo tendré... en ese mismo instante ya se comenzó a diluir. ¿Cuál es la importancia de saber todo esto? Pues que el Diálogo Interior Negativo es en gran medida el responsable de las respuestas de ansiedad y miedo que elabora nuestro cerebro que se manifiestan físicamente como sed de aire,taquicardia, etc., etc. ¿Y ENTONCES? ¿Cómo elimino o transformo el diálogo interior negativo?... Lo haremos usando también palabras, aunque sólo usaremos aquellas que sabemos son capaces de provocar respuestas distintas, es decir respuestas positivas. A estas palabras o frases, las llamamos: AUTOAFIRMACIONES. Las autoafirmaciones son palabras que provocan pensamientos que originan respuestas de bienestar, de reconocimiento de mi propio valor, de tranquilidad, de seguridad y de esperanza. Deben cumplir ciertos requisitos para que sean efectivas. 1) Deben ser formuladas en primera persona. 2) No deben contener la palabra que simboliza lo que quiero evitar. 3) Deben ser formuladas en presente. 4) Deben evitar usar el negativo. 5) Deben ser creíbles. Veamos algunos ejemplos: Autoafirmación Incorrecta No voy a estar nervioso No tendré miedo No podré

Autoafirmación Correcta Yo estoy tranquilo Lo haré, estoy seguro, puedo hacerlo Estoy pudiendo

Diálogo Negativo ¿Qué pasa si? ¿Sentís como te morís?

Autoafirmación que lo contrarresta Nada pasa... yo lo estoy manejando Nadie se muere de esto, estoy vivo 177

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Sos tonto, inútil y feo No valés nada Te va a dar un infarto Te morirás asfixiada Te desmayarás Sos insignificante

Soy único, especial y distinto Soy valioso y me merezco todo lo bueno Nunca durante una crisis de pánico El organismo está diseñado para que eso no ocurra. Todo lo contrario: la presión arterial sube Soy valioso, por eso estoy en el mundo

Podríamos decir, en líneas generales, que cada uno debe analizar el tipo de autodiálogo negativo que se le presenta en forma permanente o ante una situación dada y formular sus propias autoafirmaciones para contrarrestarlas. Para ello tenga en cuenta: 1) Evite generalizar lo negativo: “si no podés ahora no podrás nunca” “eso es mentira, ya estoy pudiendo” 2) Evite focalizar (poner el foco en el detalle negativo): “sí, estoy mejor... ¿pero viste?... ese detalle lo arruinó todo” “sí, estoy mejor... aún me faltan detalles pero ya los superaré” 3) Evite juzgar y sacar conclusiones sin preguntar: “si no me saludó, es porque no me quiere” “seguro que está preocupado y no me vio... le preguntaré” 4) Evite la rigidez y el pensamiento extremista: “¿yo al psiquiatra?... ¡ni loco!” “iré... es un médico y me puede ayudar” HABÍA UNA VEZ ... un viejo granjero que tenía muchos animales, pero sobre todo aves en una gran jaula, allí había gallinas y gallos... entre ellos había dos que se destacaban del resto, uno de plumas negras muy “altivo y señorial” y el otro idéntico pero de plumas doradas... ambos con una gran cresta colorada que caía como una boina sobre sus largos cuellos. El granjero no sabía ya qué 178


hacer ante las frecuentes peleas entre estos dos gallos, por lo que decidió consultar con el viejo sabio del pueblo, a quien le planteó el problema y le dijo: ¿ Cuál de los dos gallos saldrá triunfante y será el amo del gallinero? y el sabio le respondió: el que tú alimentes. Del mismo modo en nuestro interior... triunfará el diálogo que nosotros mismos alimentemos. HABÍA UNA VEZ... ... un hombre que estaba de viaje y entró al paraíso por accidente. En India dicen que en el paraíso hay árboles que cumplen los deseos. Uno simplemente se sienta bajo ellos, pide un deseo e inmediatamente el deseo se cumple, sin que medie tiempo alguno entre el deseo y su cumplimiento. El hombre estaba cansado, así que se quedó dormido debajo del árbol de los deseos. Cuando se despertó sentía tanta hambre, que dijo: “me siento tan hambriento, me gustaría comer algo”. E inmediatamente aparecieron flotando en el aire, una serie de manjares deliciosos. Tenía tanta hambre que no prestó atención en averiguar de dónde venía la comida: cuando uno tiene hambre no está en actitud filosófica. Inmediatamente se puso a comer, la comida era deliciosa. Una vez saciado, miró a su alrededor y le surgió otro pensamiento: “Si pudiera beber algo...” y en el paraíso no hay prohibición alguna, así que de inmediato apareció un buen vino. Relajado, bajo la suave brisa del paraíso, a la sombra del árbol, comenzó a pensar: “¿qué está pasando?, ¿estoy soñando o aquí hay fantasmas que están jugando conmigo?” y aparecieron los fantasmas. Eran feroces, horribles, nauseabundos. El hombre comenzó a temblar y pensó: “ahora, seguramente me matarán...” y lo mataron. Ésta es una parábola muy antigua y muy significativa. Tu mente es el árbol que cumple los deseos. Cualquier cosa que pienses tarde o temprano se realiza. A veces pasa tanto tiempo que olvidas por completo que alguna vez habías deseado esto mismo y no puedes conectar el origen. Pero si observas con profundidad verás que tus pensamientos te están creando a tí mismo y a tu vida. Ellos crean tu infierno, crean tu cielo. Crean tu miseria y tu alegría. Crean lo negativo y lo positivo. Aquí todos son magos. Y cada uno está tejiendo un mundo mágico a 179

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su alrededor... en el que luego se enredan. La araña misma queda atrapada en su red. Nadie está torturándote excepto tú mismo. Y una vez que entiendes esto, las cosas comienzan a cambiar.Entonces puedes darle la vuelta, puedes convertir tu infierno en tu cielo, es simplemente cuestión de tener una visión diferente.Toda la responsabilidad es tuya. Piensa que podrás y podrás... piensa que no podrás y no podrás. Piensa en positivo y no dudes del resultado (Osho).

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CAPÍTULO X “AUTOESTIMA”

¿QUÉ ES LA AUTOESTIMA? Literalmente es: cuánto me estimo o me quiero a mí mismo. Esto significa el valor que nos asignamos a cada uno de nosotros, la imagen y el concepto que uno mismo tiene de sí mismo, independientemente de lo que los demás piensen o digan de nosotros. Según la valoración que cada uno hace de sí mismo, surge un nivel o grado de cuánto “me quiero”, y así es que las personas dicen de sí mismas “que se sienten bien” y que “están contentos consigo mismos”, lo que se expresa como una Autoestima normal. Tener una Autoestima normal, es algo que se siente y se lleva como algo natural, no como una carga o un problema; ello determina que la persona actúa y se desenvuelve como segura de sí misma, dispuesta a asumir riesgos, con confianza en sus capacidades y talentos, por lo que está siempre dispuesta a conocer gente y a probar cosas nuevas. Se suele decir de ellos: “ella / él no se hace problemas”, “se ríe de todo”, “es tan simpática/o y bien dispuesta/o”... por otro lado son capaces de hacer bromas sobre su aspecto físico, sobre sus errores, torpezas o equivocaciones; son flexibles, se adaptan fácilmente a cualquier situación y aceptan críticas u observaciones sin sentirse disminuidos o “atacados”. En cambio las personas que tienen un pobre concepto de sí mismos sufren tienen dificultades para llevar una vida normal libre de limitaciones y cargan con lo que se llama una Autoestima baja. ¿Cuál es la causa por la que algunas personas tienen una Autoestima baja? La respuesta no es fácil, ni única. Por lo general el proceso se inició allí lejos en la infancia, donde el niño en formación no recibió los estímulos adecuados para desarrollar un concepto elevado sobre sí mismo o si los recibió lo fue para desarrollar una pobre consideración de sí mismo, como ya vimos en el capítulo de “Los Mandatos” y en el de “La Historia Personal”. Muchos padres en el afán de proteger a sus hijos, se exceden y sin quererlo, hacen hijos incapaces de tomar decisiones o de hacerse responsables de sus actos 185

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de la conducción de sus vidas, por lo que llegado el momento de valerse por sí mismos, resultan postergados y ello genera sentimientos de inutilidad. Por el contrario existen padres o figuras significativas en la vida del niño que expresamente tienen actitudes o cometen actos o usan expresiones que desvalorizan, desmerecen, descalifican o humillan al punto de que el niño crece “convencido” de que es “tonto” o “feo” o “inútil” o “aburrido”, que es un “desastre” y que lo será para “toda la vida”. La Autoestima está presente en todas las personas. Mientras somos bebés y cuando aún mucho no entendemos todo lo que pasa a nuestro alrededor, nos comportamos espontánea y libremente, expresando nuestros sentimientos en forma directa: “lloramos y pataleamos” cuando no nos gusta algo o queremos algo, y “sonreímos y reímos” cuando algo nos gusta o alguien nos cae simpático. En esos momentos toda nuestra conducta está libre de cualquier tipo de condicionamiento. Más adelante cuando comenzamos a movernos y a interactuar con otras personas, bebés o niños o adultos, tampoco nos aflige nuestro aspecto físico ni nuestra vestimenta. A medida que crecemos, las cosas empiezan a cambiar. Toda la soltura y espontaneidad con la que nos conducíamos, comienza a encontrar opiniones, reglas, normas y comentarios, que silenciosamente van recortando y moldeando nuestro modo de ver el mundo y a nosotros mismos. Este es el tiempo en el que la visión de nosotros mismos comienza a crecer o no, de acuerdo a la experiencia de vida de cada cual. Dicho en otros términos: la autoestima tendrá una evolución normal mientras nadie ni nada interfiera en su desarrollo... pero si alguien o algo se ocupa de interferir, la autoestima quedará aprisionada o comprimida y será como un resorte apretado entre los dedos: más pequeño de lo que es en realidad, con mucha energía por desarrollar y que sólo necesita soltarse para ser quien verdaderamente es. En este proceso no sólo tienen responsabilidad los padres, sino también los hermanos, educadores, compañeros de escuela y más tarde, las parejas o cónyuges. AUTOESTIMA BAJA Se dice de una persona que “tiene autoestima baja” cuando: 1) Tienen tendencia a pasar desapercibidos porque les aterra el ridículo. 186


Algunos pierden mucho tiempo disimulando defectos físicos que creen tienen y que “todos observan”. La extrema delgadez y el sobrepeso también se asocia a una baja autoestima. En el caso de extrema delgadez, está relacionado con un cuadro particular, popularmente conocido como “Bulimia y Anorexia” cuya raíz está en la creencia de que la aceptación y aprobación social, y con ello la capacidad de ser “amada”, están ligadas al concepto de belleza física y que según muestra la televisión “no es concebible si no se es delgada o flaca”. Lo que estas personas no perciben es que mientras no resuelvan su “flacura” psicológica, su aspecto físico carece de importancia. En el otro extremo tenemos el sobrepeso, que resulta de exceso en la ingesta y escaso o nulo gasto energético, como consecuencia de otra distorsión de la imagen corporal que tiene de sí mismo: “cuanto mas gorda esté, confirmaré lo poco que valgo y todos tendrán razón para rechazarme, pues yo no valgo nada”. Obviamente lo correcto y por razones de salud es tener un peso ideal y proporcionado a la estructura ósea de cada uno. La autoimagen debe coincidir con la aceptación feliz de lo que tengo: mucho, poco, grande o chico. No importa ni la cantidad ni el tamaño. Lo que verdaderamente importa y “atrapa” de verdad es: “lo que no se ve”. 2) Hablan poco, no hacen preguntas ni dan opiniones, se ríen con disimulo y tratan de hacer lo que se espera que hagan, se sientan con cuidado, por lo general sus conversaciones se limitan a comentarios formales y de ocasión: “sí”, “no”, “qué cosa, ¡¿no?!”, “uhmmm”, “¡claro!”, “es así”. 3) Tienen tendencia a compararse con otros y a sentirse invariablemente inferiores, en lo físico, en lo intelectual y en lo social. Su sentimiento permanente es: “yo no valgo nada, soy insignificante y creo que además todos se dan cuenta de ello”. Les cuesta decir NO o pedir o enfrentar o discutir con alguien y les aterra tomar decisiones y prefieren que otros las tomen por ellos. Tienen tendencia a creer que todo lo malo que pasa a su alrededor es por su culpa. 4) Aunque lo más característico es el Diálogo Interior Negativo. Ya lo analizamos en el capítulo anterior y vimos los rasgos de personalidad más destacables en las personas que lo tienen y cómo se hace para cambiarlos. Básicamente el Diálogo Interior Negativo se mantiene porque la propia 187

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persona lo alimenta con frases o pensamientos negativos, los que son falsos o exagerados. Por ejemplo se dicen: “sos fea” y se lo creen aunque sea una mentira y son incapaces de decirse: “sos linda” pues no se lo creen porque es una mentira. ¿Cuál es la verdad?... la verdad es que NO IMPORTA, pues los resultados serán los que nuestro cerebro produzca, de acuerdo a lo que nosotros nos digamos, no de acuerdo a la realidad... si nos decimos: “fea o feo” el cerebro “se lo cree” y producirá “tóxicos emocionales” y automáticamente harán que nuestra cara deje de sonreír, se le acentúen sus arrugas, nos angustiemos y perdamos la calma. En cambio si nos decimos: “linda o lindo”... aunque no nos lo creamos, nuestro cerebro producirá “endorfinas” y nuestro rostro se pondrá terso, sonriente, nos tranquilizaremos y nos darán ganas de hacer cosas. “¿Cuál mentira me conviene más? LA QUE ME AYUDA A ESTAR MEJOR... entonces a partir de ahora me diré y me comportaré como HERMOSA e INTELIGENTE y más adelante agregaré más cualidades” 5) Existen personas que tienen su autoestima baja pero se esfuerzan para que no se note y a veces se transforman en arrogantes y soberbios, lo que resulta en una deformación que la “sufren” las personas que están a su alrededor. Hasta ahora hemos comprendido: - Que este “ser que soy y que no quiero ni me gusta”, es el resultado o la consecuencia de los modelos que tuve, de las cosas que me dijeron, de las cosas que me hicieron o de las que me dieron o no me dieron. - Que “esto que soy, es un ser que claramente advierto como equivocado”. - Que en consecuencia, esto significa que “sé cómo debería ser idealmente para que yo mismo esté contento conmigo mismo”. - Que “no sé cómo hacerlo, es decir cómo encontrar el camino para lograrlo”. Pues bien... vamos al encuentro de quien verdaderamente soy: Para ello es necesario saber algunas cosas que, por lo general, se pasan por alto. t Todos los seres humanos somos producto de una selección que hace la naturaleza. En virtud de ello, solo sobreviven los mejores, los mas aptos. Tengamos en cuenta que de los quientos óvulos que tiene una mujer para 188


fecundar en toda su vida, sólo unos pocos son fecundados. Cuando ello ocurre, es porque un espermatozoide de los más de doscientos sesenta millones que se “lanzan” en una eyaculación, pudo alcanzar al único óvulo apto de cada mes. En ese momento, se inicia el embarazo, pero solo treinta de cada cien, llegan a término y se “concretan” en un ser humano. Uno de ellos somos cada uno de nosotros. Es grato saber que en su momento ya fuimos elegidos y desde entonces superamos con éxito numerosas pruebas, para llegar a este momento. Surge de inmediato la pregunta: ¿para qué vinimos al mundo?... esa respuesta existe, muchas personas la han encontrado y han sido inmensamente felices al “zambullirse” en su “misión” o tarea. Si no la encontramos, no es para afligirse, muchos llegan al final de sus vidas sin saberlo. La respuesta se encuentra en nuestros genes, los que pueden manifestarse en otras vidas, las de nuestros descendientes, o en la nuestra a través de nuestros talentos o capacidades naturales. t Nadie elige nacer, ni dónde ni cuando, pero ocurre y ese día es tan importante que lo recordamos cada año de nuestra vida. Nacemos absolutamente desprotegidos e inmaduros, pero cualesquiera que hayan sido las condiciones, alguien nos cuidó, nos alimentó y nos protegió, por ello hoy estamos aquí y debemos agradecer a quienes lo hicieron. Que además esas mismas personas pudieron haber cometido errores, es posible... nadie enseña “cómo hacer una persona”; por lo general se aplica la sencilla fórmula de hacer “lo que hicieron conmigo”. Lo único cierto es que haya sido como haya sido, no es posible cambiar la historia... lo que fue: fue.Sin embargo, hoy estamos en condiciones de ver hacia el pasado y usando toda la experiencia e inteligencia, respondernos: ¿cuánto de cierto hay en las cosas que me hicieron creer?... ¿soy yo mismo o soy cualquier otra cosa? t No existe en todo el Universo ningún ser vivo que sea igual a cada uno de nosotros, lo cual equivale a decir que somos seres Únicos y además Especiales e Irrepetibles. Eso puede verse en nuestras impresiones digitales, pero también se siente en el alma de las personas. La naturaleza o Dios nos ha seleccionado para mejorar la especie, para que la evolución de la humanidad no se detenga, en consecuencia aunque aún no lo sintamos, 189

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cada uno de nosotros es muy valioso. Esta verdad implica que las cosas que son únicas no se pueden comparar... pero las comparaciones se hacen y ¿qué resulta?: que en algunas cosas soy realmente “bueno” y en otras “un desastre”... si miro hacia un lado soy poca cosa y si miro hacia el otro soy “mejor”. Vos ¿cómo sos?, la respuesta es que, al igual que todas las demás personas, nosotros somos una mezcla de virtudes y defectos en “dosis” o proporciones tan “exquisitamente” determinadas que nos hacen seres ÚNICOS en todo el universo, aunque al igual que todos los demás seres humanos, sin importar ni sus estudios, ni su nivel social, ni su edad, ni su dinero, en algún momento sentiremos que nuestro valor no es suficiente y tendremos sentimientos de inseguridad, temor y necesidad de protección. Le pasa a todas las personas. En este momento estamos en condiciones de afirmar las siguientes verdades: t Que llegar a este punto donde nos encontramos no fue producto de la casualidad, sino de una rigurosa selección, donde se eligen los mejores y más aptos. t Que a pesar de las dificultades y de las cosas que nos tocaron experimentar, hemos llegado a la edad que tenemos y estamos en condiciones de mirar hacia atrás y ver cuántos errores se cometieron y cuántas mentiras nos creímos . Y además comprender que esta realidad de hoy “es lo que hay... es lo que tengo” y que de nada valen los lamentos, ni las quejas, ni los reclamos, pues nada cambiará de lo que ya fue: esto es aceptar, lo que no significa conformarse. Pues si bien “acepto que soy así: no estoy conforme con ello”. t Que somos Únicos, Especiales e Irrepetibles. t Que tenemos que descubrir cuál es nuestro papel en el planeta Tierra. t Que si nos comparamos con otros, resulta que a cada uno de los otros le pasan las mismas cosas que nos pasan a nosotros y que todos tienen, como nosotros, algo para destacar y algo para disimular. t Que a pesar de que no nos sentimos valiosos/as, hay personas que sí nos ven hermosos/as, inteligentes, de buen corazón, simpáticas/os y nos quieren y desean que los miremos, les hablemos, los escuchemos, los queramos o los deseemos... 190


“Aunque Tú no lo creas, en este preciso momento: Alguien está muy orgulloso de tí, hay alguien que está pensando en tí, alguien está preocupado, alguien te extraña, alguien quisiera estar contigo, probablemente alguien necesita hablar contigo, alguien espera que no estés en problemas, alguien te está muy agradecido por el apoyo que le has dado, a alguien le gustaría estrechar tu mano, alguien espera que todo resulte bien, alguien te necesita para ser feliz, alguien quiere demostrarte cuán importante eres, hay alguien celebrando todos tus logros, alguien quiere darte un obsequio, alguien quiere acariciarte, alguien desea decirte “te amo”, alguien admira tu fortaleza, tu sabiduría, tu sonrisa, tu mirada, tu experiencia, tu dulzura, tus ganas, tu ternura, tu empeño, tu sinceridad, tu bondad, hay alguien que está pensando en tí mientras sonríe, intenta protegerte, alguien necesita que lo perdones, o alguien quiere decir simplemente “gracias por estar allí”, alguien está recordándote y deseando que tú estuvieras con él, ahora mismo, alguien le pide a Dios por tí, alguien valora tus consejos, recomendaciones o advertencias y está pendiente de tí, posiblemente alguien quisiera estrecharte entre sus brazos, alguien desearía detener el tiempo por tí, alguien pide a Dios por tu amistad y cariño, existe alguien que no puede esperar para verte, alguien te quiere por lo que eres, alguien adora la manera en que le haces sentir, existe quien quisiera significar algo para tí, a alguien le afecta todo lo que hagas, alguien está complacido de que seas su amiga/o, alguien pasó toda la noche en vela sólo pensando en tí, alguien está viviendo sólo porque existes tú, alguien está deseando que lo comprendas, alguien quiere encontrarte para conocerte mejor, a alguien le gustaría estar cerca de tí ahora, alguien extraña tus regaños, tu ayuda, alguien tiene confianza en tí, alguien sabe que tú vales la pena, alguien necesita tu apoyo, tal vez alguien está esperando una llamada tuya, alguien te considera más que un amigo, aunque tú no lo creas así, seguro hay alguien que ahora está llorando por tí, alguien escucha una canción que le hace recordarte, alguien necesita que cuando lo veas le des un beso” ¿Sabías que ese alguien ve en tí lo que tú no ves?... que no lo veas no quiere decir que no lo tengas o no lo seas... acaso sin auxilio del espejo ¿podrías decirme el color de tus ojos... o la expresión de tu rostro o el encanto de tu sonrisa?... ¿Sabías que las demás personas son el “espejo” donde se refleja tu alma... lo que verdaderamente eres?... (1) 191

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En verdad ¿quién es este personaje que está “interpretando mi vida”?; desde ya que soy Yo, pero... ¿sé cuál es mi “papel” en esta “película”?... ¿sé quién soy cuando me despojo del personaje?... ¿qué encuentro en la intimidad de mis pensamientos cuando hago una pausa en la “actuación” de mi vida y dejo de ser, por un momento, ese personaje que esta allí, con esos padres y hermanos, con ese trabajo o esa profesión y en este lugar, con estas personas y con estos problemas o alegrías?... ¿quién soy de verdad?... La respuesta está en nuestro interior. Cuando vuelvo la mirada hacia el interior debo tratar de ver el brillo del diamante que todos somos... pues “sin cada uno de nosotros” el mundo no sería igual... Nadie tiene poco valor... todos somos igual de valiosos... aunque cada uno sienta que: “yo debo ser la excepción”... “nadie notará si yo falto”. MI MÁQUINA DE ESCRIBIR Eso es lo que pensaba la letra “e” de la máquina de escribir de un amigo: “Aunqux mi maquina dx xscribir xs dx un modxlo antiguo, funciona muy bixn, xcxpto por una sola txcla. Ustxd podria pxnsar qux con todas las otras funcionando corrxctamxntx, una txcla qux no funciona podria apxnas sxr notada; pxro solo una fuxra dx lugar puxdx arruinar xl xsfuxrzo dx las dxmas. Ustxd podra dxcirsx a ustxd mismo “Buxno yo soy solo una pxrsona: Nadix sx dara cuxnta si no doy lo mxjor dx mi”. Pxro xsto significa una difxrxncia, porqux para sxr xfxctiva una organizacion nxcxsita dx la participacion activa dx cada uno hasta lo mxjor dx su habilidad. Por xso la proxima vxz qux ustxd pixnsx qux no xs importantx, rxcuxrdx a mi vixja maquina dx xscribir. ¡Ustxd xs una pxrsona clavx! y más lx digo: para qux xl mundo sxa y la humanidad xvolucionx Ustxd xs ¡muy pxro muy nxcxsario! (2) Pero volvamos a esos momentos de encuentro conmigo mismo y entonces: tMe busco Supongamos que aparecieron unos parientes lejanos que lo localizaron y quieren saber de usted, ¿qué les diría?, con seguridad comenzaría la carta describiéndose físicamente: altura, color de ojos y cabello, etc. y luego continuaría diciendo “soy: buena/o, simpática/o... etc”. 192


Haga, entonces, un examen de usted mismo y escriba en una hoja sus características físicas y psicológicas, sea sincero, no exagere nada... ¿Tiene alguna capacidad?, ¿cocina bien?, ¿es buen profesional?, ¿es buen amigo?, ¿sabe escuchar?, ¿cómo es su sonrisa?. Una vez que sabe cómo es Usted t Me acepto “Esto es lo que soy y esto es lo que tengo estas son mis virtudes y estos son mis defectos, es lo que hay es, lo mejor que pude lograr con todas las dificultades que me tocó superar, siempre puse lo mejor de mí para lograrlo y esto es lo que logré, no sé si es mucho o es poco pero yo sólo sé lo que me costó y también sé que este “modelo”, el último “modelo”, es mejor que el del año pasado, le he sumado conocimientos y experiencias, he aprendido de mis errores y aspiro a ser cada día un poquito mejor, no es fácil, pero lo estoy intentando... claro que algunos errores involuntarios cometí” y entonces... t Me Perdono “Porque soy humano como todos... me equivoco igual que todos y así como soy capaz de perdonar los errores ajenos... me perdono a mí mismo” porque t Me Quiero “Porque sólo yo sé el esfuerzo que pongo para lograr ser mejor, para que todos los que de mí dependen estén bien y contentos tanto que a veces me olvido de mí mismo y eso no debe ocurrir pues no debo olvidar que el mejor modo de tener amor para dar, es quererme y mimarme mucho” o sea t Me Valoro “Por ser un ser humano capaz de dar amor, ser confiable, responsable, luchador, honesto, solidario, buena madre, padre, hijo, esposo o esposa, buena en la cocina, en mi trabajo, en mi profesión, etc.” y con todo esto t Me Hago Un Lugar “ Y pongo los límites para que todos sepan cuál es mi espacio y para ello... aprendo a decir los tres NO: - “Basta, hasta aquí, no avancen más allá de este límite que pongo...yo seré lo que yo quiera, nadie puede indicarme lo que quiere o le gustaría que sea ... sólo yo puedo -“No debo ir más allá de los límites que los demás me fijan, pues sería invadir al otro y no respetarlo” 193

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- “No soy la Mujer Maravilla o Superman, que todo lo puede no sólo me agoto sino que a veces no dejo que los demás se hagan responsables, libres y autónomos, mi familia no es mi identidad, sólo está junto a mí” y con todo esto comprendo que t Me Merezco “Todo lo bueno que llega a mi vida, “ya está pagado”, los méritos los hice antes pues no es cierto que “si lo disfrutas ahora lo pagarás con dolor o sufrimiento” y con todo esto: t Me Lanzo “A vivir la vida que Dios me dio, tal como la soñé, tal como la quise vivir desde siempre, para eso no le debo nada a nadie, ni a mi madre ni a mi padre que, a pesar del paso de los años, aún pretenden tener injerencia en mi vida” y... t Me Arriesgo “Pues sólo los que se arriesgan, ganan y obtienen lo que se proponen, y es allí en la aventura del vivir donde se va logrando la felicidad” y... t Juego “Y me divierto como los niños despreocupado por los resultados disfruto cada momento de mi vida” y... t Protagonizo “Con toda la energía la vida que yo elegí y será mi vida y míos serán los errores y los aciertos... y no le deberé nada a nadie” y entiendo que... t Yo soy lo que yo hago de mí mismo ¿Para?... t Ser feliz y vivir cada minuto de mi vida, con plenitud y alegría, sintiendo cada noche al irme a dormir que realmente valió la pena todo el esfuerzo pues mi alma está en paz y... t Ser amado y amar... sentir que soy importante para alguien y dar lo mejor de mí para que otros seres sean felices y... t Servir... que es amar al prójimo como a uno mismo. CONSEJOS PRÁCTICOS PARA COMENZAR A CAMBIAR 1. Sea comprensivo con usted mismo... recuerde que usted deberá estar con usted mismo toda la vida. 194


2. Dése permisos, hágase regalos y dése los gustos, esto es: acaricie su alma. 3. No tema el ridículo... se sorprenderá gratamente con las cosas que descubrirá. 4. No se deje atropellar... y disfrutará con los resultados. 5. No se deje presionar... y reserve su decisión de acuerdo a lo que usted cree, aunque a veces se equivoque. 6. Aprenda de sus errores y disfrute de sus aciertos... como lo hacen todos. 7. Sonría con los labios y con la mirada... con ellas abrirá puertas y corazones. 8. Cuide su aspecto... dice mucho sobre cuánto se quiere. 9. No rechace los halagos... diga gracias y dígase “te felicito”. 10. No trate de ser perfecto... con tratar de ser mejor, es suficiente. 11. No se resista, deje fluir la vida, abra su corazón y su mente, no busque excusas, ni sea cómodo, comience ya... y si falla: vuelva a intentarlo. 12. Comprenda que usted es el mejor Yo del que es capaz y que se merece todo lo bueno que tiene y todo lo que llegará a usted. 13. Trate a todas las personas que se crucen en su camino con todo el amor del que sea capaz... ellos como usted también están librando una dura batalla. 14. Sea usted mismo y no lo que los demás quieran. 15. Hoy es un muy buen día para empezar a serlo. ¡¿DALE, JUGUEMOS A SER... ?! Cuando era niño, en el verano, junto con dos amigos, entrábamos gratis al cine gracias al tío de uno de ellos que era el boletero. Allí pasaban en “continuado” la misma película entre las 14 y las 20 hs. Las había de cowboys, de gladiadores, de guerra. Cada una duraba en pantalla una semana, nosotros las veíamos dos veces por día por lo menos, y la gran diversión era a la tardecita: si jugábamos a los gladiadores por ejemplo, nos disfrazábamos con lo que teníamos a mano y luchábamos y reproducíamos los diálogos tal como los actores en la película, los mismos gestos, las mismas poses, nos sentíamos verdaderos gladiadores y si nos tocaba morir, elegíamos 195

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al que mejor muerte lograba... Si alguien nos hubiera visto, seguro que tendría la sensación de que “éramos de verdad”. Pues bien, hoy les voy a proponer... ¿qué tal si jugamos a ser? a ser la primera actriz o el primer actor de una película titulada: “UNA VIDA DIFÍCIL”... (cuyo argumento es muy parecido a su propia vida). En este caso el protagonista hará todo teniendo en cuenta las siguientes instrucciones, que deberá mentalizar y poner en práctica al pie de la letra... Así, como Director le digo: “necesito una actuación brillante... olvídese si le duele algo o tiene fiebre o tiene miedo...nada pasará... sólo es la filmación de una película... lo elegimos a usted porque creemos que es la persona ideal por su parecido al personaje del libro... puede inventar diálogos pero en todo momento debe actuar como si fuera hermoso, seguro de sí mismo, inteligente, y además siéntase amado y como si todos estuvieran esperando su llegada, lo quiero ver caminar erguido... con una sonrisa encantadora, una mirada franca que diga cosas y ahora por favor vaya con el peinador, a maquillaje y luego elija su vestuario... empezamos a filmar en dos horas... ah!... hoy lo haremos todo el día, así que prepárese” ¿Lo hacemos?... ¿cree que podrá?... si su respuesta es sí... el papel es ¡suyo! ¿y sabe una cosa?... Ser uno mismo es más fácil, más cómodo y más lindo que ser el que equivocadamente creo que soy... solo déjese llevar por lo que siente... y no abandone ni deje de intentarlo... ni espere a un futuro porque... el futuro ¡llegó hoy! Propóngase actuar un solo día como si fuera: Hermosa/o... inteligente... y segura/o de sí misma/o... Luego compare los resultados... si no salió del todo bien... inténtelo por otras 24 horas, verá que al final le saldrá sólo, sin esfuerzo y sentirá que por fin Usted es el que siempre quiso ser. Algún día alguien pensando en Usted dirá algo asi:

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“Hay gente que con sólo decir una palabra, enciende la luz y los rosales... que con sólo sonreír entre los ojos nos invitan a viajar por otras zonas y nos hacen recorrer toda la magia... Hay gente que con sólo dar la mano, rompe la soledad, pone la mesa, sirve el puchero, coloca guirnaldas... Hay gente que con sólo empuñar una guitarra, hace una sinfonía de entrecasa... Hay gente que con sólo abrir la boca, llega hasta los confines del alma, alimenta una flor, inventa sueños, hace cantar al vino en las tinajas y se queda después como si nada... Y uno se va de novio con la vida, desterrando una muerte solitaria, pues sabe que a la vuelta de la esquina... hay gente que es así... tan necesaria!! Hamlet Lima Quintana “HOY SOY UNA PERSONA MAS SEGURA DE SÍ MISMA, APRENDÍ A PERDONAR Y A PERDONARME, NO SOY LA MISMA... SOY MEJOR”

¡Hola, “Doc”! Cada jueves que falto al FOBI siento que le fallo a Usted y, por supuesto, al grupo. Estoy bastante ocupada con el trabajo, y organizando un viaje con colegas de trabajo; YO! la que no se animaba a viajar ni a Monte en el verano pasado, todavía 197

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no pasó un año y ya fui tres fines de semana seguidos a Bs.As. (por estudio y trabajo) y cada uno resultó un viaje de placer finalmente. Y todavía me quedan algunos más. Aunque tiendo a ir por el camino del pensamiento negativo, lo cambio casi automáticamente. El hecho de animarme y no angustiarme unos días antes del viaje, es un logro muy grande, ¿no? Es más, ahora,es como que estoy esperando el próximo viaje cada vez que regreso a Bahía. De a poquito vuelvo a ser la que era, una apasionada por viajar; mejor dicho, y como Usted dice siempre, vamos siendo cada vez mejores personas, pues no soy la misma Samanta. Hoy soy una persona mucho más segura de mí misma, una persona que se anima a correr más riesgos, una persona que siente tranquilidad y paz interior, una persona que intenta vivir cada día lo más apasionadamente posible, agradeciendo desde una ducha caliente (sin tener miedo de estar sola),hasta del estar con los seres más queridos; una persona que aprendió a perdonar y a perdonarse, a vivir sin rencores, a no atarse al pasado pensando que podría haber sido mejor; al contrario, aprendiendo de ese pasado y comprendiendo que todo lo que nos sucede es enseñanza, aprendizaje, crecimiento... incluso: esto que nos pasa... Gracias Doc. por todo lo que aporta en nuestra vida cada jueves. Logra que modifiquemos y cambiemos para bien. ¿Se dá cuenta de eso? Seguramente que sí... Pero para mí es importante decírselo. Un beso SAMANTA

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CAPÍTULO XI “FRACCIONAR Y DESMENUZAR” LA PELÍCULA Finalizamos el capítulo anterior con la brillante actuación suya como protagonista principal de una película... pues bien, en este capítulo seguiremos en el set de filmación. ¿DE QUE SE TRATA ESTO DE FRACCIONAR Y DESMENUZAR? Nuevamente asumo el rol de Director y la / lo convoco a Usted para darle instrucciones sobre la escena que filmaremos hoy y entonces le digo: - “Hoy, usted que tan bien hace su papel porque refleja seguridad y dominio de su ambiente y tiene ese look tan sensual... tendrá que protagonizar una escena en un supermercado donde está haciendo compras y de pronto comienza a sentir una creciente sensación de angustia, aceleración del pulso, opresión en el pecho y falta de aire, al punto de que siente que se muere asfixiada, es un ataque de pánico y entonces desesperadamente abandona el carro con todo adentro y sale como enloquecida en busca de la salida y nada más por ahora ¿qué opina?, ¿lo podrá hacer?, necesito que los que vean la película sientan lo que el protagonista sufre... ¿me entendió?” -“Sí entendí, pero lo que Usted no sabe es que yo sufro de ataques de pánico en la vida real y me aterra el sólo pensarlo”... -“Bueno, mejor entonces, lo podrá hacer mejor que nadie, filmaremos la escena por partes e iremos analizando cada gesto, cada pensamiento, cada sensación y luego rodaremos todo junto, pero sólo cuando estemos listos y seguros de lo que filmaremos... es decir que antes de filmar vamos a FRACCIONAR la escena en cada una de sus partes y vamos a DESMENUZAR cada pensamiento, sensación, actitud y juntos iremos logrando lo mejor.” En consecuencia, FRACCIONAR Y DESMENUZAR será como sentarnos juntos: usted “el actor o la actriz” y yo “el director” de la película. Nos imaginaremos la escena de punta a punta y trataremos de no dejar nada librado al azar, lo analizaremos todo. Comenzaremos por la hora y el lugar: ya sabemos que la escena es en un supermercado, por la tarde, casi al anochecer, el horario en que suele haber más clientes haciendo sus compras. 201

Fraccionar y Desmenuzar

¿Cómo se siente la / el protagonista? - “pésimo... ya estoy temblando... me aterra pensar que debo entrar allí, me late el corazón a mil por hora y siento que me quiere saltar del pecho”... ¿Cuáles pensamientos se le presentan automáticamente? - “el más importante es uno que me dice: ‘ahora sí que te vas a morir’, otro es: ‘no vas a poder’, otro: ‘ves que siempre es igual’... sos tan tonta e ingenua”. - Si me permite, ¿podría decirme si los pensamientos automáticos que se le presentan cada vez que enfrenta una situación difícil, amenazante o complicada son siempre los mismos? - Sí por lo general son los mismos... - O sea ¿qué los tiene identificados? - Sí. - Eso facilita las cosas. ¿QUÉ SON LOS PENSAMIENTOS AUTOMÁTICOS? Son pensamientos que se presentan en forma espontánea en determinadas situaciones o momentos. Los hay agradables, que traen consigo emociones placenteras y los hay desagradables o torturantes, que traen emociones de angustia y miedo. Por lo general, son pensamientos fuertemente ligados a emociones personalísimas de cada uno. Por ejemplo el sólo hecho de escuchar “nuestra canción”, desencadena en los enamorados en forma “automática”, los pensamientos y recuerdos de esos días y con ellos una sensación de satisfacción y placer. Lo mismo ocurre con ciertos perfumes o el contacto con ciertas superficies, el escuchar tal palabra, ver tal gesto o determinada prenda, etc. Pero del mismo modo, ciertos pensamientos traen consigo emociones de angustia, sufrimiento y miedo. ¿Cuáles son en su caso?... ¿cuál es el más repetido? Es importante identificarlos, para poder luego crear pensamientos que los neutralicen o para analizar qué tienen de verdaderos, que probabilidades tienen de hacerse ciertos ya que, por lo general, son creencias falsas o equivocadas, producto de la falta de conocimientos. Por ejemplo: todo aquel que pasó por una crisis de pánico, piensa que se va a morir, lo cual es falso... por la sencilla 202


razón de que el organismo está diseñado para que no ocurra, como lo veremos más adelante. Los pensamientos automáticos se presentan trayendo unidos a ellos, la emoción correspondiente: si el pensamiento es placentero traerá una emoción placentera, si el pensamiento es de terror traerá una emoción de miedo y angustia; por eso es tan importante aprender a cambiar el pensamiento, pues automáticamente cambiará la emoción que lleva unida. Por lo general los pensamientos que traen consigo emociones de angustia y sufrimiento, son aquellos que se presentan cuando nos acercamos a situaciones o cosas que nos dan miedo o cuando debemos enfrentar hechos que amenazan nuestra paz y tranquilidad o cuando debemos tomar decisiones. ¿Cómo son los pensamientos Automáticos? Cuando nos ocupamos del Diálogo Interior Negativo hicimos alusión a este tipo de pensamiento, el que reúne algunas características: a) Sobrestimación o Exageración: En virtud de ello se exageran los peligros o dificultades de una situación: -“si viajas, el colectivo tendrá un accidente” -“cuando yo suba, seguro que el ascensor se detendrá entre dos pisos” -“el aire de ese salón no será suficiente... hay mucha gente” Se magnifican las virtudes ajenas: -“el sí que es inteligente, ¿cómo voy a opinar yo que no sé nada de nada?” -“ella sí que es linda, ¿cómo le puedo gustar yo que soy tan feo?” Se minimizan las propias: -“sí, eso me salió bien, pero fue casualidad” -“dicen que soy bonita, porque no me vieron cuando me levanto” -“dicen que soy inteligente, creo que se burlan, no existe alguien más tonto” Agrandan las experiencias negativas (“Dramatizan”): -“hiciste todo lo que te dijeron y te ‘agarró’ igual, es inútil: no se puede” -“tropezaste y casi te caés, sos un desastre: ¿quién va a querer salir con vos?” -“balbuceaste como si fueras una nenita... ¡sos de terror!” Exageran las equivocaciones mínimas (“Magnifican”): -“no usaste la palabra adecuada: ¡sos una bestia!” 203


-“me olvidé de saludarlo para su cumpleaños: se va a enojar” -“me lo pidió para hoy y no pude: ahora me despiden” b) Minimización: Desmerecer o despreciar las habilidades, virtudes y logros propios: -“dicen que cocino bien: por una sola cosa que probaron... no saben” -“dicen que soy agradable y simpática... lo dicen porque creo que me quieren y me tienen lástima” -“sí, es cierto: aprobé, pero fue sólo suerte” -“sí, me salió bien, pero fue casualidad” c) Generalización Consiste en sacar conclusiones prematuras a partir de un solo hecho negativo y generalizar: -“Si no me saludó es porque está enojado conmigo: nadie me quiere” -“Intento pero no me sale: nunca podré hacerlo” -“Intento ser Yo misma pero siempre termino haciendo lo que los demás quieren: todo está mal” -“Otra vez compré esto que no necesito por vergüenza a decir que no: es imposible siempre lo mismo” Palabras que identifican la generalización: nunca, siempre, nadie, todos, ninguno. d) Filtrado o Focalizado Consiste en poner el foco o el acento sólo en lo negativo de una situación, ignorando cualquier mención a aspectos positivos: -“Sí, pude estar en la fiesta y me divertí, pero ¿viste? casi no hablé” -“Lo hice, pude viajar, pero me costó mucho y además estoy medicada” -“Es cierto, estoy pudiendo... pero me falta mucho todavía” e) Razonamiento emocional Es la tendencia a juzgar, evaluar o interpretar sobre la base de los sentimientos, es decir, en base a lo que la persona siente. Esto parte de la creencia falsa de que lo que se siente es lo verdadero. -“Si siento que soy tonto es porque soy tonto” -“Si siento que no me querés es porque no me querés” -“Si siento que no confías es porque no confías” 204


Las personas que se guían por esos pensamientos suelen actuar impulsivamente sin detenerse a razonar, ni a preguntar; dan por cierto lo que piensan y actúan en consecuencia, produciendo dificultades en las relaciones entre las personas. f ) Los “debería” Son pensamientos inflexibles que suponen reglas correctas e incuestionables: Cualquier desviación es “inaceptable”. -“deberías ser perfecto” -“debería ser amable y simpático aunque no lo sienta” -“nunca debería dejar que se note mi enojo” -“yo debería poder superar fácilmente esto que me pasa” g) Interpretación del pensamiento ajeno o lectura del pensamiento: Consiste en juzgar los sentimientos ajenos y reacciones de los demás sin escuchar ni mirar atentamente al otro y sin darse cuenta de sus reales intenciones o necesidades. Dicho en otros términos es: “dar por cierto que lo que yo siento que el otro siente, es lo que siente; o creer que lo que yo creo que piensa, es lo que está pensando” -“Si no me saludó es porque está enojado conmigo” -“Por la cara que puso, le parecí muy tonta” -“Está serio... ¿qué hice mal?” -“No habla... seguro que tiene otra, ya no me quiere” LA FILMACIÓN -“Atención a todo el piso, haremos una prueba de la escena en el supermercado... los extras a sus puestos... ¿estamos listos? - dije elevando la voz. -“Nooo... estoy transpirando y me falta el aire” - me respondió la primera actriz. -“¿Qué dice?” - pregunté alarmado y luego agregué “veamos qué es lo que le está pas ando exactamente... por favor, yo le pregunto y Usted me contesta... ¿está de acuerdo?” -“Sí” ¿Dónde estamos y qué vamos a hacer? -“Estamos por filmar una escena en un supermercado, donde yo voy a tener un ataque de pánico”. 205


-¿Cuál es la emoción o sentimiento que en este momento tiene? -“Tengo miedo y angustia” -“En una escala de NADA a INSOPORTABLE, usted ¿cuánto miedo y ansiedad tiene? Veamos: NADA = 0 POCO = 1 MODERADA = 2 BASTANTE = 3 MUCHÍSIMO = 4 INSOPORTABLE = 5 -¿Cuál es el pensamiento que automáticamente viene a su mente, lo puede identificar? -“Sí, uno que dice: ‘no vas a poder’ y además otro que dice: ‘ahora sí te vas a morir” -“Pues bien detengamos la acción sólo por un momento, para analizar lo que estamos haciendo” - “Sabemos el lugar donde ocurrirá la acción y qué es lo que vamos a hacer. Es decir que estamos “aquí y ahora” en el presente y pensando en el futuro: Usted y yo”. Lograr estar en el presente y además pensar, es de un valor incalculable, pues significa que se está poniendo en marcha la Corteza Cerebral Pre-frontal que como ser humano Usted tiene, y no está huyendo despavorido como lo haría un mono o un perro asustado. - “Sabemos el nivel de miedo que está soportando, el que le irá indicando hasta donde va a llegar, antes de que su ‘Cerebro Límbico de mono’ lo lleve lejos de allí” (un nivel 2 es tolerable, pero un nivel 3 indica: abandonar por ahora y reintentar más tarde o mañana). - “Sabemos el pensamiento automático que viene a su mente para alimentar su conducta de mono o perro asustado. En este caso es: ‘no vas a poder’ y ‘te vas a morir”. Entonces, ahora estamos en condiciones de incorporar un nuevo elemento, que le dé nuevos impulsos a la Corteza Cerebral Pre-frontal de ser humano que usted tiene y para ello preguntamos: 206


- “¿Qué de cierto o verdadero tienen los pensamientos automáticos?” - “¿No habrá estado creyendo mentiras todo este tiempo?” - “¿Cuáles son las evidencias en las que se apoyan estas creencias?” Por ejemplo: 1. ¿en qué se apoya para creer que durante una crisis de pánico se puede morir?... le respondo: se apoya sólo en la sensación y en la creencia de que eso le ocurrirá... ¿pero sabe?: no es cierto, pues nadie se ha muerto... Usted que ya tuvo una o varias crisis anteriores puede dar testimonio. Además para su conocimiento le informo que el organismo durante las crisis hace lo que hace normalmente cuando es exigido... algo parecido a correr una cuadra a toda velocidad, lo que obviamente: no mata a nadie. Entonces usted tiene miedo de algo que no es posible. Nadie se ha muerto ni se puede morir durante una crisis de pánico. Ahora usted puede elegir: sigue creyendola mentira y continúa sufriendo o se apoya en la verdad y deja de sufrir. 2. ¿en qué se apoya para creer que no puede?, ¿en que siempre le pasa lo mismo?, ¿qué es imposible?, ¿que ya lo ha intentado todo y no puede?, entonces le digo: puede que hasta ahora las cosas hayan sucedido así, pero cientos de personas ya lograron superar las crisis de pánico y llevan una vida normal, ¿qué de diferente tiene usted?, le digo más, usted que llegó hasta este punto del libro, ¿realmente cree que no puede? no lo creo, es más: estoy seguro de que siente que todo es posible y que ahora sí podrá. Si ante cada situación difícil o amenazante logra mantener bajo control sus emociones y puede pensar y razonar... con seguridad encontrará una solución... quizás no la mejor, ni la más creativa... pero encontrara una respuesta, y esa respuesta por venir de su Corteza Cerebral Pre-Frontal será HUMANA y por esa sola condición será una respuesta INTELIGENTE... ¿Qué respuestas humanas e inteligentes de la Corteza Cerebral Pre-Frontal le daremos a los “mensajes que Yo mismo me formulo” para “estimular” la conducta animal y emocional del Cerebro Límbico tipo mono o perro?... LE RESPONDEREMOS CON OTRAS PREGUNTAS O AFIRMACIONES:

“¿De dónde saqué yo que esto es así?” “¿Cuál es la evidencia comprobada de que esto que yo me creo es verdad?” “¿Preguntaste si lo que a vos te parece, es realmente así?” 207


“¿Si otros pueden , por qué vos no?” “¿Sabes más o menos cosas que antes?” Veamos algunos ejemplos: -“si viajás, el colectivo tendrá un accidente” “Sí, los colectivos suelen tener accidentes, aunque en relación a los millones de viajes que se hacen por día, la frecuencia es ínfima y cada día mejoran más las condiciones de seguridad para ese tipo de viajes. Además diariamente millones de personas hacen esos viajes sin dificultades porque el riesgo es casi cero”. Por otro lado respóndame a esta pregunta: “¿Usted acierta siempre que anuncia algo por ocurrir?”... si su respuesta es afirmativa, dígame: ¿qué hace viajando en colectivo?... -“seguro que el ascensor se detendrá entre dos pisos cuando yo suba” “No, es muy raro que eso ocurra y todo esta diseñado para que en esos casos se resuelva la situación en menos de cinco minutos... a lo sumo deberá tener un poco más de paciencia o acaso usted ¿escuchó alguna vez que alguna persona en el mundo haya muerto asfixiada o por cualquier otra causa al quedarse encerrada en un ascensor?... la respuesta es: NO. Es más, recientemente salió en los diarios que “un Señor permaneció desde el viernes y hasta el lunes encerrado en el Tesoro de un Banco... salió en condiciones de normalidad y no tuvo ninguna dificultad durante los tres días de encierro... ¿cómo hizo?... sólo mantuvo la serenidad para pensar y así controló la situación. -“el aire de ese salón no será suficiente... hay mucha gente” “Esta es una afirmación producto de la ignorancia que normalmente tiene la gente, ya que los millones de moléculas de oxígeno que existen en un ambiente donde hay muchas personas son suficientes para todos, porque ninguna construcción común, ni siquiera un ascensor todo cerrado, es tan hermético como para no permitir una mínima renovación del aire, y si lo fuera en su diseño se prevé esa renovación. En ciertos sitios donde se produce una especie de sellamiento de las entradas de aire como derrumbes en minas o avalanchas, puede ocurrir que se agote el oxígeno disponible, pero en ese caso, los síntomas de falta de oxígeno no se manifiestan de inmediato, ya que primero lo hacen los que producen el exceso de anhídrido carbónico y ello determina una respiración lenta y profunda todo lo contrario de la respiración que usted cree tendría”. -“él sí es inteligente, ¿cómo voy a opinar yo que no sé nada de nada?” “Es posible que alguien sea muy inteligente y ello facilita las cosas pues hace que 208


todos podamos dar nuestra opinión, porque los verdaderamente inteligentes son los más comprensivos, abiertos y deseosos de escuchar todas las opiniones, pues son los primeros en comprender la magnitud de su propia ignorancia... opine con libertad y encontrará que usted también dice cosas inteligentes, aún sin tener estudios”. Detengámonos en este punto, y en la intimidad de su hogar y mientras logra fijar su mente: imagine aquellos momentos en los que “debe enfrentar situaciones” y pregúntese serenamente cuáles son sus pensamientos automáticos más frecuentes y luego haga un análisis detallado de ellos y trate de “destruirlos” con argumentos que usted mismo buscará en los rincones de su mente, con el auxilio de todo lo que hasta ahora ha aprendido. Si no los encuentra, busque a alguien que sepa o acérquese a las personas cercanas en el afectos o algún profesional y pregunte e infórmese, no vaya a ocurrir que usted aún hoy “siga creyendo en los camellos de cada 6 de enero”... Cuando yo era niño... un buen día alguien me contó la verdad sobre la Historia de los Reyes Magos. Sorprendido por la revelación y mientras pensaba en las veces que había dejado pasto y agua para los camellos de Gaspar, Melchor y Baltasar, fui corriendo y con gran suficiencia los reuní a papá y mamá y les dije: que ¡ya sabía! y me lo confirmaron... “habían mantenido una ilusión para colmarme de regalos junto con los Reyes Magos” y desde entonces no tuve más regalos... inútil fue mi deseo de volver a “creer” para que todo volviera a ser como antes, pues cuando uno sabe la verdad no puede “volverse” para seguir en el engaño. HABÍA UNA VEZ... ...una paciente llamada Virginia, quien cada vez que salía de una de nuestras charlas le contaba a su novio todo lo que había escuchado, como modo de reafirmar lo aprendido y además para que él estuviera al tanto de las técnicas. En esta ocasión Virginia y su novio aprendieron todo lo referido a Fraccionar y Desmenuzar. Cierta vez, durante un viaje y mientras ella comenzaba a manifestar una crisis de pánico, escuchó a su novio que con algo de desesperación le decía con vehemencia... “¡triturá Virginia!... ¡triturá!”... ella se sorprendió pues ignoraba lo que él le quería decir y mientras la crisis cedía... ambos estallaron en una carcajada al comprender que triturar, era la versión sintética de Fraccionar y Desmenuzar. 209


CAPÍTULO XII “RESPIRACIÓN Y RELAJACIÓN”

I- “RESPIRACIÓN” Cada una de las personas que alguna vez ha sufrido un Ataque de pánico tiene la creencia de que durante una de esas crisis “irremediablemente morirá” por asfixia o por falta de aire (o por un infarto). A todos me alegra decirles que no es posible, por la sencilla razón de que nuestro Sistema Respiratorio está “diseñado” para que no ocurra. Todos además creen que si aprenden a respirar, prácticamente habrán solucionado el 80 o 90% del “problema” y no me extrañaría que luego de leer el índice de temas, alguien “se venga directamente” a este capítulo en busca de “la solución”. Lamentablemente debo decirles: si el capítulo está puesto en este lugar, es porque de nada servirá su lectura anticipada. Como veremos, su importancia es menor en relación a todos los otros temas que hasta aquí expusimos. Es más, hasta podríamos evitarlo, dada su importancia secundaria. Por ello sigamos los pasos sugeridos y no tratemos de acortar camino. SISTEMA RESPIRATORIO El sistema respiratorio está conformado por un conjunto de órganos que tienen por función tomar el Oxígeno del aire, llevarlo al interior del cuerpo e introducirlo en la sangre para que ésta lo lleve a cada una de las células del organismo, pues este Oxígeno es necesario para la vida. Del mismo modo, pero a la inversa, tomar el Anhídrido Carbónico, producido en cada célula como residuo o producto de desecho de su actividad, para que transportado por la sangre, sea retirado de ésta y expulsado al aire. El Oxígeno es necesario para cada célula del organismo, las que sin él mueren, aunque no todas al mismo tiempo: las que menos resisten son las neuronas, las que sólo toleran la falta de oxígeno por un máximo de tres a cuatro minutos. El Anhídrido Carbónico es tóxico para la célula y si se acumula en ellas porque no se puede eliminar, produce la muerte celular. Esto significa que la función respiratoria es la que le permite a los seres vivos

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Respiración y Relajación

incorporar el Oxígeno necesario para mantener la vida y a la vez eliminar el Anhídrido Carbónico que les resulta un tóxico mortal. Nuestro cuerpo hace esta tarea unas doce a catorce veces por minuto, unas veinte mil veces por día, las veinticuatro horas de cada día de la vida de una persona; ello sin contar las variaciones en más o en menos, que a lo largo de ella se producen, por ejemplo cuando hacemos actividad física intensa o nos agitamos por distintas causas, dormimos, hablamos, practicamos deportes acuáticos que requieran sumergirnos o respiramos en zonas geográficas altas, etc. También y del mismo modo, ningún órgano de todo nuestro cuerpo permanece inactivo, ni aún durante el sueño. Eso es lo maravilloso de la creación, saber que todo, absolutamente todo, está perfectamente “diseñado” para funcionar correctamente las veinticuatro horas durante muchos años y sólo sufre deterioros por el paso del tiempo y por “los malos tratos” que nosotros mismos le damos. El sistema respiratorio se compone de órganos con características y disposición ideal para la función que deben cumplir. A las características físicas de los órganos se le llama “anatomía” y al cómo funcionan se le denomina “fisiología”. ANATOMÍA DEL SISTEMA RESPIRATORIO Los órganos que pertenecen al Sistema Respiratorio son: NARIZ Y BOCA: Son las aberturas por donde puede ingresar o salir el aire que contiene el Oxígeno (O2) que necesitamos y el Anhídrido Carbónico (CO2) que nos daña. Lo ideal es que el aire ingrese por la nariz, ya que esta tiene en su interior una muy rica red sanguínea, que le transmite calor al aire que pasa a través de ella y de ese modo al entibiarse, no es irritante para las demás superficies por las que se deslizará hasta la intimidad de los pulmones. LARINGE: es el órgano que continua a la faringe. (La faringe es un tubo que le es común al aparato respiratorio y al digestivo, pues por allí pasa el aire con destino final: pulmón y los alimentos con destino final: estómago, intestinos, etc.).El aire que ingresa por la nariz o por la boca, circula por la faringe para luego entrar en la laringe, por donde pasa directamente hacia la tráquea.

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En cambio cuando el aire sale en busca del exterior, al pasar por la laringe, como ya dijimos, actúa sobre las cuerdas vocales provocando su vibración, haciendo posible entonces, con el auxilio de la boca y la lengua, la emisión de sonidos con ciertas características: la palabra hablada, la que provista de un significado, permite la comunicación entre las personas. TRÁQUEA Y BRONQUIOS: La Tráquea es un tubo de unos once o doce centímetros, que continua a la laringe y que en su extremo inferior se divide en dos tubos llamados Bronquios. Cada bronquio penetra en los dos pulmones, el derecho y el izquierdo. Visto desde fuera, este ingreso a los pulmones se encuentra más o menos en el centro de la línea imaginaria que une las tetillas masculinas o los pezones femeninos. Una vez en el interior de los pulmones, los dos grandes bronquios comienzan a bifurcarse en bronquios de menor calibre, llamados bronquiolos, hasta que al final desembocan en una especie de “ampolla” llamada lobulillo alveolar. Tanto la tráquea como los bronquios tienen una superficie interior muy delicada, parecida a la que vemos en el interior de la boca, pero más suave aún, con unos filamentos microscópicos llamados cilias; cumplen la misma función que los pelos de la nariz: retener y eliminar las impurezas que acompañan al aire que se respira. PULMONES: Son dos, uno derecho y otro izquierdo. Cada uno de ellos es la suma total de millones de pequeñas ampollas llamadas alvéolos pulmonares. En estos alvéolos, ubicados en el último rincón de cada pulmón, es donde terminan cada uno de los millones de bronquiolos. Podríamos tomar como ejemplo, un racimo de uvas al que le sacamos todas las uvas, ¿qué nos queda?: una especie de árbol sin sus hojas. Esas ramas “peladas”, desde la más gruesa a la más fina tienen igual aspecto que los bronquios, con la diferencia de que en el pulmón son huecas. Ahora “coloquemos” nuevamente las uvas que tenía el racimo, aunque ahora, en lugar de contener la pulpa, pongámosle aire y entonces tendremos algo parecido al alvéolo pulmonar. Los pulmones serían la suma de cientos de estos “racimos de alvéolos” que están directamente unidos a los bronquiolos que llegan hasta ellos.

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FISIOLOGÍA DEL SISTEMA RESPIRATORIO Las “tareas” que debe cumplir el Sistema Respiratorio son varias y relacionadas entre sí, con el objetivo de que cada célula del cuerpo disponga del Oxígeno que necesita y a su vez pueda eliminar el Anhídrido Carbónico, que como producto de desecho se produce en cada célula. Ello implica que debe ocuparse de 1) VENTILACIÓN: Como ya expresamos es la acción en virtud de la cual el aire que está en la atmósfera que nos rodea, es ingresado al organismo por uno de los dos orificios que tenemos con ese fin: la boca y la nariz. El aire así ingresado circula por la faringe, pasa por la laringe, se desliza por la tráquea, los bronquios y los bronquiolos hasta llegar al alvéolo pulmonar. Cada alvéolo pulmonar es una especie de media esfera, que se une con la vecina formando un racimo como los que se pueden observar cuando se vacían cada uno de los granos del fruto llamado granada. Este racimo de mitades de esferas huecas unidas por sus bordes quedan como “colgadas” de un tubo (el bronquiolo) que es por donde llega el aire. Esas medias esferas tienen una cara en contacto con el aire y la otra cara en contacto con los vasos sanguíneos que contienen sangre, según podemos apreciar en el siguiente esquema: Racimo de alvéolos conteniendo aire con moléculas de Oxígeno(O2) que ingresan por el bronquiolo y moléculas de Anhídrido Carbónico (CO2) que salen por el mismo bronquiolo. Todos los alvéolos están rodeados por arterias capilares que contienen glóbulos rojos. Con cada minuto de respiración, en condiciones normales pueden ingresar unos cuatro litros y medio de Oxígeno y salir otro tanto de Anhídrido Carbónico. Todo este volumen de Oxígeno se desplaza hasta el último rincón

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de ambos pulmones, los que si pudiéramos desplegarlos ocuparían una superficie de unos noventa metros cuadrados. El Oxígeno llega allí para ser “transferido”, molécula por molécula a cada glóbulo rojo que, contenido en pequeños vasos arteriales tan delgados como un cabello, llamados capilares, están desplegados en la otra “cara” del alvéolo pulmonar. El alvéolo tiene dos caras, una en contacto con el “aire” y otra en contacto con los capilares por donde circula la sangre. En condiciones normales no se usa toda la capacidad respiratoria, sino solo una pequeña parte, a punto tal que, en condiciones de ejercicio extremo, puede aumentarse hasta veinticinco veces. En el otro extremo, la vida se mantiene aún con dos a cuatro respiraciones profundas por minuto, lo cual significa un volumen de aire de solo un litro y medio. ¿Cuál es el sentido de saber todo esto?... pues comprender que los pulmones tienen un margen “muy elástico” y amplio para mantener la vida aún en condiciones extremas de sobrecarga o de déficit. Incluido la “falta” de aire que usted cree “sufre” durante una crisis de pánico. 2) DIFUSIÓN: Como ya vimos, una vez que el aire llegó hasta el alvéolo pulmonar, debe ser traspasado a la sangre para que esta lleve cada molécula de Oxígeno a todos los rincones del cuerpo para entregárselo a las células, las cuales lo necesitan para mantener la vida. La sangre circula, dentro de arterias capilares, adosadas a una de las “caras” de la pared alveolar. Estos capilares son tan delgados que en su interior los glóbulos rojos o eritrocitos circulan uno detrás del otro, en “fila india” y en algunos sectores logran “pasar” gracias a que deforman su contorno. Los glóbulos rojos tienen en su centro una molécula llamada Hemoglobina que es la encargada de unirse a cada molécula de Oxígeno o de Anhídrido Carbónico. Arteria capilar conteniendo glóbulos rojos,que a su paso por el alvéolo, van dejando moléculas de CO2 y tomando moléculas de O2. A su paso por el pulmón, cada glóbulo rojo de los cuatro millones y medio que normalmente existen en un centímetro cúbico, “recoge” del alvéolo pulmonar, una molécula de Oxígeno. En ese mismo paso por el pulmón, “deja” en el alvéolo pulmonar una molécula de Anhídrido Carbónico. Esto es lo que 217


se denomina intercambio gaseoso o hematosis y se realiza en toda la sangre circulante por los pulmones: unos cien centímetros cúbicos en un instante dado... unas cuatrocientos veces por minuto... las veinticuatros horas del día, durante toda la vida de una persona. Para tener una idea aproximada de lo que esto significa, pensemos que en una cuchara de sopa “caben” quince centímetros cúbicos y si por el pulmón pasan cien centímetros cúbicos, ello equivale a unas siete cucharadas soperas, las que en total contienen unos cuatrocientos setenta y dos millones de glóbulos rojos, “desfilando de uno en fondo” por todo el pulmón mientras van dejando y tomando moléculas de Anhídrido Carbónico y Oxígeno respectivamente, todo ello sin la intervención de la voluntad ni de la conciencia. 3) TRANSPORTE Una vez que cada glóbulo rojo “tomó” una molécula de Oxígeno, circula por los vasos arteriales rumbo al corazón a donde llega a través de las Venas Pulmonares. Allí en el corazón, la sangre con su contenido de glóbulos rojos, recibe un “fuerte” impulso... un latido cardíaco que lo lanza hacia todos los rincones del cuerpo y luego otro y otro, hasta unas setenta veces por cada minuto en condiciones de reposo. Al llegar a la célula, el Oxígeno ligado a la hemoglobina del glóbulo rojo, es entregado en la membrana celular para que esta lo utilice para la vida. En ese mismo acto, la célula entrega la molécula de Anhídrido Carbónico a la misma hemoglobina que acaba de descargar el Oxígeno. Es como llevar “un pedido a domicilio” y en el mismo vehículo cargar los desechos del día. El Anhídrido Carbónico ligado a la hemoglobina de cada glóbulo rojo, inicia entonces el viaje de regreso hacia el alvéolo pulmonar para que éste lo reciba de la sangre y lo arroje al exterior. Entonces,nuevamente se reinicia el ciclo de VENTILACIÓN, DIFUSIÓN Y TRANSPORTE, cada instante de toda la vida, desde la primera inspiración justo en el momento en que nos cortaron el cordón umbilical por donde hasta ese momento nos llegaba el Oxígeno que nos enviaba mamá. En ese momento crucial, se inflan los pulmones y comienza el ciclo que sólo se interrumpirá al final de la vida. 218


Es tranquilizador saber que ningún detalle ha sido dejado al azar y que todo está previsto perfectamente para funcionar sin la intervención de la conciencia, dejando la mente libre para que se ocupe de alcanzar la felicidad. Por si fuera poco, el “diseño” es durante mucho tiempo a prueba de malos tratos: humo del cigarrillo, smog ambiental, polvillo en suspensión, exceso de peso, etc. Todas “obras” del hombre. 4) REGULACIÓN DE LA RESPIRACIÓN Este es quizás, el punto de máximo interés en cuanto a saber la verdad sobre esos pensamientos negros y catastróficos que torturan anunciando una muerte inminente por asfixia. Como ya señalamos en el Capítulo II, todas las funciones o tareas que llevan a cabo los órganos y aparatos para mantener la vida, lo hacen porque están “comandados” o “dirigidos” desde una “especie de central” que está en la parte más profunda del cerebro y que se extiende hacia abajo en estructuras que evolutivamente, son muy primitivas: el Hipotálamo o Cerebro Reptiliano. PILOTO AUTOMÁTICO Esta dirección o comando se ejerce desde allí para todo el organismo sin la intervención de la conciencia es decir, sin la participación de la corteza cerebral, por lo que podríamos decir que nuestra vida depende de un piloto automático llamado Hipotálamo “que hace y deshace” sin la intervención de la voluntad. Se entiende que “por más voluntad que se ponga” no se pueden detener los latidos del corazón, ni la eliminación de los deshechos, ni la digestión, ni el procesamiento de los nutrientes, etc. La única excepción es la respiración: este es el único sistema que además del “piloto automático” a cargo del Hipotálamo, puede recibir órdenes originadas en la conciencia, es decir en la corteza cerebral pre-frontal, por lo que voluntariamente se puede dejar de respirar PERO SÓLO DURANTE TREINTA o CUARENTA SEGUNDOS. Más allá de ese tiempo el Hipotálamo se hace cargo sí o sí y la respiración se restablece en forma automática. De allí surge la imposibilidad de “dejar de respirar voluntariamente para siempre”, pues el Hipotálamo lo impedirá. Si se inspira antes y se acumula Oxígeno, se puede “dejar de respirar por dos o tres minutos” pero no mucho mas, depende de la práctica que se adquiera. 219


Los centros nerviosos que comandan la respiración se encuentran en la zona bulboprotuberancial del Sistema Nervioso Central. Esta región continúa al cerebro y se corresponde aproximadamente con la parte superior y posterior del cuello, es decir la nuca. Esos núcleos grises que están formados por cuerpos de neuronas se agrupan y constituyen lo que se llama: CENTRO RESPIRATORIO. Éste hace que los músculos responsables de la respiración se contraigan y relajen rítmicamente, haciendo que todo el tórax se expanda, aumente su capacidad para que los pulmones se “inflen” con el aire que ingresa (inspiración) o se “comprima” , disminuyendo así su capacidad y provocando que los pulmones se “desinflen” y en consecuencia expulsen el aire que contienen (espiración o exhalación). En síntesis: existen músculos responsables de la inspiración y otros responsables de la espiración, los que se contraen y relajan, de acuerdo a lo que “ordena” el centro respiratorio. DE GUARDIA LAS VEINTICUATRO HORAS Y CON ESCÁNER El Centro Respiratorio hace su “tarea” día y noche, adaptando su ritmo a las distintas condiciones: ejercicios, embarazo, altitud, anemia, fiebre, afecciones cardíacas, respiratorias, intoxicaciones, etc. Para ello tiene en cuenta la información que le llega desde distintos lugares del cuerpo, los que serían una especie de “vigías”, “alarmas” o “sensores” con “escáner” (como ese instrumento electrónico que lee los códigos de barra cuando la cajera del supermercado pasa rápidamente los productos delante de una luz y en la caja aparece el nombre del producto, sus características y el precio). Estos lectores le informan al Centro Respiratorio, cuánto Oxígeno contiene la sangre, si es suficiente o insuficiente y cuánto Anhídrido Carbónico, si es excesivo o no; si la presión arterial es suficiente, si los músculos respiratorios hacen su tarea sin obstáculos y si las condiciones de pH son las indicadas (Nota: el pH es algo que indica la acidez o alcalinidad de la sangre. Tiene que tener un valor siempre igual y el pulmón es uno de los encargados de corregirlo cuando se desvía). Toda esta información es “procesada” por el Centro Respiratorio, el que elabora una respuesta adecuada para mantener o restituir la normalidad, cuando está alterada.

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DEJAR DE RESPIRAR... VOLUNTARIAMENTE Pero como ya dijimos existe un factor que influye sobre el centro respiratorio y tiene que ver con la corteza cerebral. En virtud de este factor cortical, cada persona tiene capacidad de respirar según le parezca, lo puede hacer lenta o rápidamente, en forma superficial o profunda, el tiempo que lo desee, incluso puede, voluntariamente, dejar de respirar pero, en este caso, y como ya lo expresamos, solo por treinta o cuarenta segundos. Comprender este concepto del doble “comando” que posee la respiración es muy importante, pues permite acceder a una verdad y destruir una mentira que durante mucho tiempo transformó “su vida en un infierno”. TODO SE ACELERA Como ya vimos en capítulos anteriores, en especial cuando nos referimos al Estrés, cada vez que nos enfrentamos a algo que es amenazante o peligroso, se produce una respuesta del organismo. Respuesta que es normal e igual para todos los hombres y animales, que no es más que la preparación para la acción, sea esta de lucha o de huida frente a la amenaza. Esta preparación consiste en la puesta en marcha de lo que llamamos el Eje Hipotálamo Hipófiso Adrenal y con ello una serie de manifestaciones psíquicas: miedo, atención focalizada en la amenaza, ansiedad, etc. y físicas: aceleración del pulso o ritmo cardíaco (taquicardia), contracción de músculos, transpiración, palidez, aumento de la presión arterial, etc. y AUMENTO DE LA FRECUENCIA RESPIRATORIA o TAQUIPNEA (taquipnea: taqui = rápido; pnea = aire ).Esto significa que existe un factor emocional: la percepción de algo peligroso o amenazante, capaz de acelerar el ritmo cardíaco, el ritmo respiratorio y en general todos los ritmos, que como ya vimos se debe a los neurotransmisores que se liberan. ¿Cuánto dura este estado de hiper-alerta?... sólo el tiempo que se tarde en tomar la decisión de huir o de enfrentar el peligro. Desaparecida la amenaza, todo vuelve a la normalidad en forma gradual.

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RESPIRACION Y MIEDO ¿Cómo es la respiración cuando se siente miedo o ansiedad? Es rápida y superficial parecida a la de los perros agitados y distinta de la que se presenta cuando se hace actividad física, por ejemplo, luego de correr una o dos cuadras. En este caso se siente una necesidad de aire y se presenta una respiración rápida y profunda. Es decir que el miedo da una respiración rápida y superficial y el ejercicio da una respiración rápida y profunda. La respiración rápida y profunda técnicamente se llama DISNEA (dis = mal; pnea= aire) con HIPERVENTILACIÓN (hiper = mucho, grande; ventilación= intercambio de aire). Esto significa que aumenta la cantidad de inspiraciones y espiraciones por minuto así como su profundidad, por lo que ingresa más aire con oxígeno y sale más aire con anhídrido carbónico. Así hasta que el centro respiratorio “lee” que la cantidad de oxígeno y de anhídrido carbónico en sangre están en niveles normales y entonces la respiración se normaliza. Este tipo de disnea que se produce durante el esfuerzo da la sensación de “falta de aire”, pero no se acompaña de angustia ni de “sensación de muerte”. En cambio, la respiración rápida y superficial, técnicamente llamada DISNEA con HIPOVENTILACION (hipo = poco, pequeño; ventilación = intercambio de aire) se presenta cuando el factor ansiedad o miedo está presente. Este tipo de respiración si bien aumenta la frecuencia respiratoria, al ser superficial no resulta suficiente para aportar el oxígeno necesario ni para eliminar el anhídrido carbónico acumulado por lo que la “sensación de falta de aire es real” lo que produce más ansiedad y miedo, y refuerza la “sensación de muerte”... Esta misma situación desesperante es, sin embargo, la que aportará la solución, a pesar de que la persona NO INFORMADA ignore como actuar ante la emergencia. EL PROBLEMA APORTA LA SOLUCIÓN ¿Cómo es que la dificultad aporta la solución? Dijimos que el centro respiratorio “lee” los niveles de oxígeno y de anhídrido carbónico y que dispone lo que haga falta para normalizar la situación. Pues bien: luego de unos minutos de respirar rápido y superficial el nivel de anhídrido car-

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bónico en sangre aumenta, ya que se elimina en forma insuficiente precisamente porque la respiración es superficial y rápida. Este nivel alto de anhídrido carbónico en sangre, al ser “leído”, hace que a pesar de la ansiedad y el miedo, el centro respiratorio “ordene”: respirar lento y profundo... con lo que en algunos minutos todo vuelve a la normalidad. Esta es la razón médica, científica, fisiológica y anatómica, por la que una persona no puede morir de asfixia durante una crisis de pánico pues su propio centro respiratorio se lo impedirá. Asimismo, gracias al doble “comando” que tiene el centro respiratorio, cada persona, usando su corteza cerebral pre-frontal puede, “ordenarse” a sí misma: “calmate, respira lento y profundo” y con ello está ayudando en forma efectiva a lo que el centro respiratorio hará de todos modos. Existen algunos ejercicios, que consisten en inspirar aire rico en anhídrido carbónico, tal como el que “arrojamos” cuando espiramos o exhalamos. Así por ejemplo se recomienda respirar cubriendo la boca y la nariz con las propias manos, como si fuera una mascarilla para volver a inspirar el mismo aire que se espira, o bien hacerlo dentro de una bolsa de papel que se adosa alrededor de boca y nariz, así como dejar de respirar por unos segundos. En todos estos casos, lo que se busca es aumentar la concentración de anhídrido carbónico en sangre, para apurar la respuesta que nos dará el centro respiratorio. Pero vaya Usted a contener la respiración o a ponerse las manos o una bolsa de papel alrededor de la boca cuando está sintiendo que se muere asfixiado, en ese momento “entregaría” su alma al mismísimo demonio por un tubo de Oxígeno. ¿Por qué cuando se siente miedo aumenta la frecuencia respiratoria? Pues porque el Cerebro Límbico del que ya hablamos, con sus estructuras relacionadas con las emociones, el miedo y la memoria, “activa” o “estimula” al Hipotálamo que está por debajo y subordinado a él. La respuesta del hipotálamo es una exageración de lo normal... es como preparar al organismo para ganar una carrera de mil metros con “récord mundial”, o para luchar y vencer a un enemigo que “me está golpeando”. Es por ello que aumenta la frecuencia respiratoria, la frecuencia cardíaca, las secreciones, etc. todo lo cual es normal y saludable. Como oportunamente señalamos, el cerebro límbico está bajo la “supervisión”

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de la corteza cerebral pre-frontal, la que ejerce su “poder” por medio del pensamiento... de ahí la importancia de mantener el control de los pensamientos, para así actuar sobre las emociones, que son inmanejables de por sí pero que, como ya dijimos antes, tienen la “debilidad” de seguir a los pensamientos. Entonces al cambiar el pensamiento, podemos cambiar la emoción. RESUMIENDO La respiración es algo tan maravilloso que la naturaleza se reservó el derecho de manejarla por sí misma. Está visto que cuando nos metemos con nuestras emociones de ansiedad o miedo “jadeamos como perros con calor” y eso no es ni saludable ni elegante... Pero si intervenimos con nuestro pensamiento inteligente, entonces sí: la naturaleza nos da permiso, por el tiempo que deseemos, para respirar en forma saludable y humana hasta que sin darnos cuenta, le entreguemos el “control” a nuestro “piloto automático” y entonces quedamos libres para hacer lo que se nos ocurra, como era antes, como será a partir de ahora. CÓMO LOGRAR RESPIRACIONES PROFUNDAS Existen varios ejercicios para lograr la respiración llamada diafragmática o abdominal. El diafragma es un músculo que se extiende como un tabique, entre el contenido del tórax y el contenido del abdomen. Tiene forma de campana y cuando se contrae, se aplana y agranda la capacidad del tórax provocando en consecuencia la entrada de aire a los pulmones, a la vez que empuja hacia abajo el contenido del abdomen; a simple vista se observa que este sobresale (“saca panza”). En cambio cuando se relaja, empuja los pulmones para que saquen el aire: a nivel del abdomen se ve como si se hundiera (“mete panza”). Todo esto sucede sin el movimiento de los hombros ni del resto del tórax. a) Ponga el dedo anular en el ombligo y luego: Trate de respirar desde “abajo”, desde el abdomen. No desde “arriba”, desde los hombros. Inspire por la nariz como si se “chupara” todo el aire. Mantenga el aire contenido en los pulmones. Luego exhale por la nariz o boca como si inflara un globo. 224


Hágalo lo más lentamente que pueda, durante cinco o diez minutos. Observe cómo el dedo que puso en el ombligo se eleva o se hunde con los movimientos de inspirar o de exhalar. Repítalo siete veces al día por lo menos, hasta que se familiarice con la técnica. b) Repita el ejercicio, pero ahora acostado boca abajo. Una vez familiarizado con la técnica, haga una caminata a paso rápido, respirando como aprendió o suba algunos pisos por la escalera. Cuanto más lo practique, mejores serán los resultados. Recurra a este tipo de respiración cada vez que se sienta ansioso con miedo o crea que va a tener una crisis de pánico. II - “RELAJACIÓN” La contractura muscular es una de las consecuencias de los estados de ansiedad constantes y prolongados. Estos se presentan en determinadas personas sometidas a tensiones, dificultades, exigencias, situaciones amenazantes y se percibe como dolor en determinados grupos musculares: los músculos del cuello y espalda, los de la mandíbula (por dormir con los dientes apretados), etc. La relajación es la acción de poner a esos músculos en reposo, para restituir el bienestar. Existen numerosas técnicas y actividades que procuran alcanzar este estado. Algunas de ellas sugieren: buscar un sector tranquilo donde recostarse o sentarse, para tratar de soltarse y lograr tener la sensación de liviandad o de “ser un muñeco de trapo”, tratando además de poner la mente en blanco. Otras técnicas enseñan a contraer en forma gradual distintos grupos musculares, por sectores, para después relajarlos. Por ejemplo cerrar con fuerza la mano y mantener el puño apretado unos minutos y luego soltarlo... luego lo mismo con el brazo... con los músculos del cuello... y así hasta recorrer todo el cuerpo. YOGA Y OTRAS PRÁCTICAS Lo más indicado es iniciarse en prácticas como YOGA donde rápidamente adquirirá destreza para lograr relajaciones efectivas, guiado por un instructor que le enseñará varias técnicas. Los baños de inmersión semanales, cuando se dispone de bañera, con sales aromáticas y alguna música suave y relajante, son muy efectivos. 225


Si no es posible lo anterior puede hacer una ducha prolongada, destinando algunos minutos para hacerse unos “MHD” (Masajes Hidrotermales Domésticos, L. Rony 1999): a) Colóquese bajo la ducha caliente con el cuello flexionado (“pera contra el pecho”), de tal modo que el agua caliente le dé en la nuca. b) En esa posición, mueva suavemente la cabeza de un lado a otro y luego haga un movimiento como si la estuviera haciendo girar, mientras cuenta lentamente hasta diez. c) Eleve ambos hombros lentamente como si estuviera haciendo el gesto de “qué me importa” y lo repite diez veces. d) Dirija ambos hombros hacia delante y luego hacia atrás, diez veces, haciéndolos rotar sobre sí mismos. e) Coloque sus brazos hacia atrás y trate de alcanzar con la mano el codo opuesto mientras cuenta hasta diez. f ) Todos los ejercicios se deben hacer al comenzar la ducha y se repiten antes de finalizar. MEDITACIÓN Esta es una práctica llegada desde Oriente y consiste en procurar establecer una conexión entre la “psiquis personal y el alma cósmica”, la “fuerza que crea las galaxias y a la vez sostiene la flor más frágil en lo alto de una montaña”, “el campo de la conciencia pura y de las infinitas posibilidades”, “el campo cuántico”, “el espíritu puro”, “la energía y la fuerza de todo lo que es”, “todo lo que es, es Amor”, “Dios es Amor” (Dr. Deepak Chopra). La Meditación se puede practicar sentado en una silla, sillón o el suelo, y básicamente consiste en permanecer en silencio, con los ojos cerrados, mientras mentalmente se procura no tener ni pensamientos ni emociones, sino sólo silencio; para ello se dispone de una herramienta llamada “mantra” y que repetida mentalmente, logra eliminar el “barullo” de los pensamientos. Esta práctica se hace diariamente una o dos veces por día, durante veinte minutos cada vez. Existen estudios cerebrales, cardiológicos e inmunológicos que demuestran que los “meditadores” se encuentran con más ánimo, con más energía, menos ansiedad y mayor protección inmunológica. 226


En la actualidad, algunos grandes hospitales de EE.UU. están comenzando a emplearla como complemento de los tratamientos ortodoxos, para mejorar la calidad de vida de los pacientes. ORACIÓN Aquellos que son creyentes tienen en la oración un recurso directo de conexión con Dios. Las oraciones al comenzar el día y al finalizarlo tienen un efecto sanador, que se da por igual con las oraciones que hacen otras personas por nosotros, como las que nosotros hacemos por ellas. En su libro “Conocer a Dios”, el Dr. Deepak Chopra describe un estudio realizado por la Universidad de Duke en EE.UU., durante el cual se demostró el poder de la plegaria: “para ello se estudiaron ciento cincuenta pacientes que habían sufrido intervenciones cardíacas y se los dividió en cinco grupos, todos ellos recibieron tratamiento y cuidados similares y se los controló con todos los parámetros: presión sanguínea, exámenes clínicos, etc. Ninguno de ellos supo que por sólo un grupo, se pidió a siete comunidades religiosas de todo el mundo que rezaran por ellos; así, entre otros, hubo oraciones de carmelitas de Baltimore, monjes budistas de Nepal, rabinos judíos de Jerusalén y el resultado fue, que sólo los pacientes del grupo por el que se oraba no sufrieron complicaciones y se recuperaron un 50% mejor que cualquiera de los integrantes de los grupos que no “recibían” oraciones por ellos”( Informe Duke: presentado en 1998 a la Asociación Americana del Corazón). Aún así, existe una marcada renuencia de la comunidad científica, a examinar las conexiones entre las plegarias y la curación. OTRAS TÉCNICAS Existen numerosas técnicas que procuran objetivos similares: entre ellas cabe mencionar al Tai-Chi-Chuan, que es un ejercicio de la antigua China que promueve la relajación con suaves movimientos y la Visualización Creativa, que consiste en “imaginar” lo que se desea como medio para “comenzar” el largo camino hasta que el deseo se haga realidad. MI PROPUESTA: “ENCUENTRO CONMIGO MISMO” (ECM) Mi recomendación y hasta tanto podamos recurrir a alguna de las prácticas 227


hasta aquí mencionadas, es comenzar cada día, antes o después del desayuno, con la siguiente práctica: Elija un lugar tranquilo y cómodo donde usted “tendrá un encuentro con usted mismo”, durante quince a veinte minutos. Cuando esté tranquilo, con los ojos cerrados, acompañado por una música suave (las hay especiales para relajación) y lo más “blandito” que pueda: Respire lento y profundo, tres o cuatro veces como para renovar todo el aire de sus pulmones y luego retome su respiración habitual, aunque esta vez procure “meterse con su imaginación en el interior de sus pulmones”, tratando de “sentirse Oxígeno” y así “recorrer”, “deslizándose”, por el interior de su garganta, tráquea y bronquios hasta “llegar” al último rincón de sus pulmones; luego salga del mismo modo pero en busca del espacio exterior”. Imagínese como “el jefe (su conciencia) que recorre el cuartel donde la tropa rebelde (su sistema respiratorio), reconoce la autoridad y el poder que tiene sobre todos ellos”. Luego de algunos minutos: Repita monótonamente una palabra en silencio. Por Ej: ohm - yin – heim (palabras sin significado y que despejan pensamientos). Si puede, permanezca con la mente en silencio. Si no puede, imagínese en el lugar de sus sueños, junto a quien más desee tener a su lado, o bien proyecte en la “pantalla” de su mente lo que más desea que se haga realidad y no ahorre detalles. Sobre el final y antes de abrir sus ojos, pida sus deseos más urgentes y los más importantes. Ruegue por usted. Al principio, puede tener deseos de levantarse a los pocos minutos. No obstante ello, continúe con la práctica. Con el tiempo verá que ese encuentro con usted mismo se transforma en una necesidad, porque comprobará que le permite estar mucho mejor durante toda la jornada. Esta práctica no tiene contraindicaciones médicas.

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CAPÍTULO XIII “FABRICAR LOS SÍNTOMAS, MANEJARLOS Y CONTROLARLOS” Todos aquellos que han pasado por la experiencia de una crisis de pánico o se han expuesto al hecho de enfrentar “la cosa” o situación que les aterroriza (objeto fobígeno), conocen todos y cada uno de los síntomas que se presentan, los que se constituyen en sí mismos, en la prueba evidente o la confirmación “palpable y real” de la sensación de que: “irremediablemente moriré”. ¿CUÁLES SON? Ellos son principalmente los siguientes: A- Síntomas Físicos: 1. Aceleración del pulso y aumento de la frecuencia (Taquicardia) e intensidad de los latidos del corazón (Palpitaciones), lo que produce la sensación desagradable de que “el corazón parece querer saltar del pecho” o de que “algo aprieta con fuerza el corazón” (Dolor Precordial). 2. Sensación de asfixia al dificultarse la entrada de aire por “obstrucción del paso a nivel de la garganta”, como si una mano invisible estuviera apretando el cuello (Sensación de Asfixia o Sofocación), acompañado de una intensa “sed de aire” (Disnea). 3. Mareos, con sensación de caída inminente (Mareos con Inestabilidad en la marcha). 4. Transpiración intensa de manos, cara y cuerpo (Sudoración de manos, cara y cuerpo). 5. Deseos de vomitar (Náuseas), Vómitos o Molestias abdominales (Retortijones). 6. Calambres, Hormigueos o Temblores (Parestesias). 7. Sequedad de boca o, por el contrario, aumento excesivo de la salivación (Sequedad de boca o Sialorrea o Hipersalivación). Calor súbito con enrojecimiento de la cara (Calor y Rubicundez) o palidez tipo “blanco como un papel” (Palidez).

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8. Necesidad imperiosa de orinar (Urgencia miccional). B- Síntomas Psíquicos: 9. Temor creciente hasta llegar al paroxismo del miedo: el pánico. 10. Sensación de pérdida del control de sí mismo, como “volverse loco” o sensación de que “no soy yo al que le está pasando”(Despersonalización). 11. Sensación de “muerte inminente”. 12. Desesperación y angustia. 13. Deseos de correr en busca de auxilio o refugio. En este preciso momento debemos saber que: Ninguno de estos “síntomas” representan ningún tipo de gravedad o peligro para la vida de las personas. La razón es que la mayoría de ellos se presentan en innumerables situaciones normales o habituales de la vida; además, pueden ser fabricados “a voluntad” y si ello es posible, significa que no dañan, ni son peligrosos. Acotemos, de paso, que estos “ síntomas” no significan “enfermedad”, sino que son “sensaciones normales o fisiológicas”. Todos los síntomas físicos que ya mencionamos los podemos “reproducir” a voluntad y experimentarlos en forma directa, es decir “a propósito”, sin que nos produzcan ninguna consecuencia, ni sufrimiento, ni angustia, ni miedo. Los síntomas psíquicos, en cambio, no pueden ser “reproducidos” sin sufrirlos. No se puede evitar sentirse todo lo “mal” que se siente cuando se tiene miedo o angustia. Es como experimentar el dolor. Sólo se sabe lo que duele verdaderamente, cuando es uno mismo el que experimenta el dolor. Las experiencias del miedo, de la angustia, sufrimiento o dolor son experiencias personales, únicas e intransferibles. Todas estas manifestaciones varían en su intensidad y duración de acuerdo a las características de la personalidad que las experimenta y de las condiciones particulares o circunstancias en que se presentan. Cualquiera sea el caso, podemos afirmar que el pensamiento hace que su intensidad y duración varíe en más o en menos. Es sabido que una madre es capaz de vencer al miedo para salvar a su hijo en peligro; o que un enamorado vence al miedo y al dolor y se enfrenta hasta dar su vida por proteger a su amada; o aquellas personas que son 232


reconocidas por su entrega al servicio del prójimo y que lo hacen a pesar de los peligros, las privaciones o las condiciones adversas en las que deban hacer su tarea; similar situación se plantea cuando el pensamiento está condicionado por ideologías o fanatismos. De igual modo, existen pensamientos que determinan un aumento de la intensidad del dolor, de la angustia y del miedo. como ya lo hemos visto a lo largo de los capítulos que precedieron al actual. Y esto es, exactamente, lo que ocurre durante la Crisis de Pánico. CÍRCULO VICIOSO Durante una Crisis de Pánico, se presenta un tipo de pensamiento: “distorsionado”, “negro”, “negativo”, “catastrófico”, “extremista”, “rígido”, “dramático” que, aplicado a las manifestaciones fisiológicas normales del miedo, hace que lo normal y saludable se “transforme” en la mente de la persona que lo experimenta en “patológico y peligroso”, generándose un círculo vicioso que los pacientes describen como “infernal”. En efecto, la sensación de peligro o amenaza, provoca miedo y síntomas físicos propios del miedo, lo que produce más miedo y en consecuencia más síntomas físicos de miedo. Estos vienen a confirmar la sensación de descontrol o de muerte inminente, lo cual genera más miedo y entonces más síntomas físicos de miedo, y así hasta que el organismo se agota y a los quince minutos aproximadamente, rompe el círculo, cede la tensión y en forma gradual restituye el equilibrio perdido y la normalidad. ROMPER EL CÍRCULO Este círculo “infernal” de: miedo síntomas físicos más miedo mayor intensidad síntomas físicos más miedo se puede interrumpir si se logra comprender que los síntomas físicos que produce el miedo: No son peligrosos ni son capaces de producir daño alguno.

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Para comprenderlo usaremos una técnica que se llama: “EXPOSICIÓN INTEROCEPTIVA” (1) ¿Qué significa?: experimente por Usted mismo, provoque “a propósito”, los síntomas que tanto le preocupan y “vea” o sienta lo que es tener palpitaciones, taquicardia, sudoración, mareos, asfixia, sofocación, náuseas o calor, sin que ello se acompañe de angustia, ni miedo. De tal modo, Usted mismo tendrá la “prueba” o “comprobación” en “vivo y en directo” de que: t/PTPOQFMJHSPTPT t2VFVTUFEQVFEFQSPWPDBSMPTZDPOUSPMBSMPT t)BDJÏOEPMPTNÈTTVBWFT t)BDJÏOEPMPTEFTBQBSFDFSPQSPWPDÈOEPMPT nuevamente. ¡Cuantas veces desee! RECOMENDAR De acuerdo a lo anunciado, existen numerosos ejercicios capaces de “provocar” similares “síntomas físicos” a los que se presentan durante las Crisis de Pánico o cuando se aproxima al objeto o situación provocadora de Fobia Específica. Los agruparemos de acuerdo al Sistema que esté involucrado: Cardiovascular, Respiratorio, etc. Pero antes, algunas recomendaciones: Consulte con su médico para que lo evalúe y le diga si existe alguna limitación particular. Por ejemplo: si usted está afectado de Epilepsia, no es aconsejable los ejercicios de “exposición interoceptiva respiratoria”, pues puede desencadenar una crisis epiléptica. Si existe enfermedad cardíaca o anemia, no es aconsejable hacer los ejercicios de “exposición interoceptiva cardiovascular”, etc. En general las personas mayores suelen tener alguna limitación de movimientos, pero los más jóvenes y saludables no suelen tener ningún tipo de limitación. - Elija el ejercicio y el momento más adecuado para practicarlo y sólo cuando ya “sienta” que está en condiciones de hacerlo. Puede comenzar con

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alguien que lo observe o practique el ejercicio junto con Usted - Cuando lo haga practíquelo en forma gradual, aumentando cada día un poco más la intensidad, mientras se va “familiarizando” con las sensaciones que Usted mismo se provocará. - Si Usted “siente” ansiedad o miedo antes o durante la prueba, es algo muy bueno... pues le permitirá elaborar pensamientos o frases tranquilizadoras, demostrativas de lo inofensivo de las sensaciones físicas que está experimentando. - Detenga el ejercicio si el nivel de ansiedad o miedo es alto e inténtelo nuevamente al día siguiente, y trate de avanzar cada vez un poco más. - Tenga a mano un cuaderno para hacer anotaciones y comentarios sobre el nivel alcanzado, cómo se sintió, qué pensó, cómo se alentó, qué logró y cuál será el próximo objetivo a conquistar. - Recuerde la escala que usamos para “medir” el grado de ansiedad en el capítulo “Fraccionar y Desmenuzar” y aplíquela a todos los ejercicios: ¿cuánto miedo y ansiedad alcanza durante el ejercicio? NADA UN POCO MODERADA BASTANTE MUCHÍSIMO INSOPORTABLE

=0 =1 =2 =3 =4 =5

- Interrumpa la prueba cuando tenga un nivel de ansiedad 2, es decir, moderada e intente al día siguiente llegar más lejos con el ejercicio, pero sin sobrepasar el nivel de ansiedad 2. PROVOCAR LOS SÍNTOMAS A. EXPOSICIÓN INTEROCEPTIVA CARDIOVASCULAR: Aceleración del pulso y aumento de la frecuencia e intensidad de los latidos del corazón (Taquicardia) lo que produce la sensación desagradable de que “ el

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corazón parece querer saltar del pecho” (Palpitaciones) o de que “algo aprieta con fuerza el corazón” (Dolor precordial): t Cuente las pulsaciones que tiene en reposo. antes de comenzar el ejercicio y verá que lo normal es entre sesenta y cien pulsaciones por minuto (es igual de normal sesenta y dos o noventa y ocho pulsaciones por minuto). Para tomar el pulso utilice los dedos índice y mayor de la mano derecha. Coloque el brazo izquierdo, con la palma de la mano hacia arriba y luego busque el latido, en el borde de la muñeca, del lado donde está el dedo pulgar. t Trote en el mismo lugar durante 2 o 3 minutos y luego, t Cuente las pulsaciones y verá que subieron hasta cien o cientoveinte aunque el numero es muy variable. Ello depende de la edad, del estado físico y del entrenamiento deportivo. Un joven de veinticinco años de edad puede aumentar a unas doscientos pulsaciones por minuto. Un adulto de cincuenta y cinco años de edad lo hace a unas cientocuarenta por minuto. El ciclista ganador del último Tour de Francia, tenía treinta y cinco pulsaciones en reposo y doscientos en plena carrera, lo que da una idea del margen de elasticidad del músculo cardíaco. Para darle mayor tranquilidad, reproducimos la tabla que usan los cardiólogos cuando toman pruebas de sobrecarga cardíaca y los límites normales de tolerancia según la edad. Los valores que se consignan son los topes que determinan la interrupción del ejercicio. TABLA ERGOMÉTRICA DE FRECUENCIA CARDÍACA SEGÚN EDAD edad F.C.* 17 203 25 195 30 190

edad F.C. edad F.C. 50 170 70 150 55 165 75 145 60 160 *F.C. = Frecuencia Cardíaca t Si continúa durante más de tres minutos, las pulsaciones subirán más, tal como lo hacen cuando corre una o dos cuadras, o cuando sube rá236

edad F.C. 35 185 40 180 45 175


pidamente dos o tres pisos por la escalera, o como cuando tiene fiebre, pudiendo llegar, sin afectar la función cardíaca, hasta ciento sesenta latidos por minuto. t El pulso que tomamos en la muñeca, es la repercusión que tiene en las arterias cada latido cardíaco. Este latido lo podemos palpar directamente poniendo la palma de la mano a la altura de la parte izquierda del pecho. Cuando el latido es “fuerte” como consecuencia del ejercicio se puede sentir cómo el corazón “palpita” bajo nuestra mano. Al final del ejercicio se podrá comprobar: t Que el aumento de la frecuencia cardíaca y las palpitaciones son inofensivas, y que el ejercicio suele “producir” taquicardias más elevadas aún que las que se presentan en las Crisis de Pánico. t Que la transpiración que se produce es consecuencia del calor en todo el cuerpo y principalmente en la cara, lo que se debe a su vez al aumento de la sangre circulante, todas respuestas normales del organismo sometido a la exigencia del ejercicio. t Que también se presenta “agitación” y “aumento de la frecuencia respiratoria”. t Que se puede “provocar” taquicardia y palpitaciones y controlar su duración e intensidad. t Que si se desea completar el cuadro con “un dolor precordial”, ello no es posible, pues el mismo es la expresión física de la ansiedad y durante este tipo de pruebas no se presenta. Si este dolor aparece en condiciones de “ejercicio” y en ausencia de ansiedad, conviene consultar con un cardíologo. Al finalizar la ejercitación se podrá comprobar que todo vuelve a la normalidad, en aproximadamente diez minutos. t Que los ataques de pánico no llevan a ataques cardíacos. t Que los ataques cardíacos tienen otros síntomas. t Que las palpitaciones y la taquicardia sólo expresan la capacidad que tiene el corazón de responder a mayores exigencias, lo que es indicativo de buena salud. t Que entre las mayores exigencias se encuentran las emociones de miedo o de amor, es por ello que en el corazón, el inconsciente colectivo ha depositado “el amor y el odio” y la imaginación popular ha creado 237


las expresiones: “no me cabía el corazón de la alegría”, “se me paró el corazón del susto”, “de la emoción: le dio un ataque cardíaco”, “ lo vi y me empezaron a transpirar las manos y tenía el corazón en la boca”, etc. B. EXPOSICIÓN INTEROCEPTIVA RESPIRATORIA Sensación de asfixia por dificultad de entrada de aire por “obstrucción de su paso a nivel de la garganta”. como si una mano invisible estuviera apretando el cuello (Sensación de asfixia o sofocación), acompañado de una intensa “sed de aire” (Disnea). a) Respire por la boca como si fuera “un perro con calor”, rápido y superficial, durante un minuto o un minuto y medio. b) Antes de que se complete un minuto podrá notar que se suman mareos, palpitaciones, hormigueos en brazos y piernas, sequedad de boca y garganta, temblores, sudoración y sed de aire... todo lo cual es como si estuviera en una verdadera Crisis de Pánico. c) Deténgala cuando Usted lo desee: respirando lento y profundo como ya lo hemos explicado anteriormente. Pero cada día avance un poco más, siempre evitando superar el nivel de Ansiedad: Moderada. Otros ejercicios que se pueden practicar para “familiarizarse” con la sensación de “falta de aire” son: a) Inspire profundo como para llenar sus pulmones y luego contenga la respiración lo más que pueda y observe su comportamiento frente a un espejo. Mientras, dígase a Usted mismo palabras o frases alentadoras que le demuestren lo inofensivo que es interrumpir voluntariamente el ingreso de aire. Comprobará, además, que llegará el momento en que aunque Usted no quiera comenzará a respirar profundamente. b) Pruebe apretar suavemente su garganta con una mano y mantenerla allí dificultando el paso del aire durante uno o dos minutos. La presión de la mano puede ser intensa y no obstante ello no interrumpirá totalmente el paso del aire... pero ésa es exactamente la sensación que se tiene durante la Crisis de Pánico... se tiene la sensación de que el aire no pasa, pero la realidad es que sí pasa.

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Al finalizar estos ejercicios podrá comprobar: t Que haga lo que haga y piense lo que piense su organismo, pasados unos minutos, respirará como debe, como sabe. t Que la sensación de obstrucción del paso del aire a nivel de la garganta es pura imaginación, ya que no es verdadera ni real. Usted podrá decirme: “pero es tan notoria que no puede no ser real” y yo le respondo: “¿ vio en Navidad a Papá Noel en la puerta de los comercios con su bolsa de regalos?... a pesar de que lo ve y lo puede tocar... ¿es real?.. NO... aunque Usted lo esté viendo”... Papá Noel es un personaje imaginario, no es ni real... ni verdadero... t Que si se respira lento y profundo, el retorno a la normalidad es rápido. t Que a pesar de que cada vez que sufre un Ataque de Pánico, piensa y siente que se morirá asfixiado... ello aún no ha ocurrido... NI OCURRIRÁ JAMÁS por todas las razones que ya expusimos (Ver capítulo de Respiración).

C. EXPOSICIÓN INTEROCEPTIVA NEUROVEGETATIVA 1- Mareos, con sensación de caída inminente (Mareos con inestabilidad en la marcha). a) Cierre los ojos y gire sobre sí mismo durante 1 minuto, o corra alrededor de una silla y luego, al detenerse, trate de mantener el equilibrio. b) Tenga cuidado de no lastimarse cuando pierda el equilibrio y ruede por el piso. c) Compruebe por Usted mismo que los mareos no sólo no representan ningún peligro, sino que ahora le provocan risa. 2- Transpiración intensa de manos, cara y cuerpo a) Abríguese con varios pulóveres y póngase junto a un calefactor hasta que transpire intensamente. b) Compruebe por Usted mismo que la transpiración es inofensiva y que es el modo que tiene el organismo para refrescar la piel. c) Si se siente ridículo haciendo este ejercicio, ríase de Usted mismo... es muy

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importante aprenderlo, pues ayuda a quitarle dramatismo a las cosas desagradables que nos suceden. 3- Vómitos o molestias abdominales (Náuseas, Retortijones, etc.). a) Podría introducirse dos dedos en la garganta para irritar la úvula (“la campanilla”) y provocar el vómito o tomar una purga para experimentar molestias abdominales... b) Pero no vale la pena hacerlo, es bastante desagradable cuando ocurre de verdad como para hacerlo a propósito. 4- Calambres u Hormigueos o Temblores (Parestesias). a) Apriete fuertemente los puños y contraiga los músculos del brazo y piernas y los del cuello y adopte la postura de los fisicoculturistas y manténgase así durante 2 minutos. b) Al soltarse notará dolor y temblor que no representan ningún tipo de riesgo. c) Si quiere experimentar hormigueo. siéntese sobre sus piernas en el suelo durante algunos minutos. Al levantarse sentirá hormigueo que es una respuesta normal a la compresión de determinados nervios. d) Todas estas manifestaciones, demás está decirlo, son inofensivas. 5- Sequedad de boca o, por el contrario, aumento excesivo de la salivación, calor súbito con enrojecimiento de la cara o palidez tipo “blanco como un papel” (Sequedad de boca, Sialorrea o Hipersalivación, Calor y Rubicundez y Palidez). a) Algunos medicamentos pueden producir sequedad de boca, en particular algunos antidepresivos que se usan para tratar las Crisis de Pánico. Existen otros capaces de aumentar la secreción de saliva. b) No obstante. no se justifica la ingesta de ninguno de ellos para realizar esta prueba. c) Ya hemos visto cómo provocar calor y enrojecimiento de la cara. por lo que no insistiremos sobre ello. LA CLAVE Como ya lo expresamos no es posible voluntariamente sentir miedo o angustia... pero si usamos la imaginación o el pensamiento quizás las podamos provocar, claro que la experiencia será tan desagradable como cuando tenemos angustia y miedo “de 240


verdad”... las emociones son iguales, no cambian, sean ciertas o imaginarias. Pero existe un elemento que nos permite “manejar” y “cambiar” las emociones presentes en un momento dado y ese elemento es el pensamiento. Lo hemos repetido muchas veces: “cambie el pensamiento y logrará que cambie la emoción”. Porque “la emoción es como un perrito “sabandija”, hace lo que quiere sin que nada le importe, pero tiene de bueno que va donde va su amo: el pensamiento”. Si durante el Ataque de Pánico el pensamiento dominante es que se va a morir o que se volverá loco o que perderá el control de sus actos, la emoción que lo acompaña es lógicamente de angustia y miedo. Pero si piensa todo lo contrario, la emoción que lo acompañará será totalmente distinta. Es más, si puede pensar en algo placentero, la emoción será de placer; si piensa en algo tierno, la emoción será de ternura; si piensa en algo gracioso la emoción será de risa y alegría, y así según sea su pensamiento será su emoción. LA VERDAD SEA DICHA 1. ¿Cómo hacer para no pensar “que me estoy muriendo asfixiado”? Luego de leer el capítulo sobre Respiración y de haber hecho la experiencia de Exposición Interoceptiva, más todo lo que ya aprendió sobre su condición de ser humano que piensa, más todo el material que ya incorporó a sus “neuronas”... ¿Usted aún se cree la mentira que “inventó” su mente?... Si la respuesta es afirmativa, le recomiendo comenzar nuevamente con la lectura desde la página numero uno. Si desea ahorrarse la tarea le digo: no se preocupe pues nadie se murió en todo el mundo de una crisis de pánico ni se morirá porque ello es imposible, por todas las razones médicas que ya explicamos. 2. ¿Cómo hacer para no pensar “que me estoy volviendo loco”? Informándose e incorporando conocimientos sobre el funcionamiento del cerebro y del psiquismo, sobre lo que significa “estar loco” y sobre el proceso que conduce a estarlo. Para ello, como Psiquiatra, le digo que los términos “loco” y “locura” no son términos médicos ni psiquiátricos. El significado popular que se le asigna es el de “perder la razón y transformarse en alguien ajeno a este mundo” (de ahí viene el término “enajenado”), incapaz de pensar ordenada y 241


coherentemente, sin conciencia de situación y con falta de congruencia entre lo que se piensa y lo que se siente”. Pues sepa Usted que una de las características más destacadas del Ataque de Pánico es la perfecta congruencia entre lo que piensa y lo que siente, la perfecta conciencia de lo que está sucediendo y el razonamiento correcto y adecuado de acuerdo a las circunstancias que se están viviendo... en suma: exactamente todo lo contrario de lo que equivocadamente cree le va a ocurrir a su mente. Ahora que lo sabe: elija pensar lo que quiera. 3. ¿Cómo hacer para no pensar “que estoy perdiendo el control”? Esta es una experiencia que suele presentarse alguna vez en la vida de las personas cuando se enfrentan a situaciones inesperadas y súbitas, por lo general relacionadas con pérdidas de personas queridas o pérdidas de nivel social o económico o estado civil, o situaciones de estrés agudo, etc. y ello no implica un daño irreparable ni definitivo. Las personas lloran, se desesperan, gritan, se descontrolan, quieren huir del lugar... todo ello es posible pero no significa nada más que una crisis pasajera de descontrol o desesperación. CONCLUSIÓN Como se comprende claramente, durante un Ataque de Pánico o mientras se enfrenta a lo que produce Fobia, se presentan una serie de síntomas físicos y psíquicos que, por su misma naturaleza conducen a agravar la situación, lo que determina un estado de desesperación extrema. Este círculo vicioso de miedo, síntomas, más miedo, más síntomas, se rompe con: t Información y conocimientos que eliminen las “fantasías” producto de la ignorancia sobre estos temas. t Ejercicios que permitan familiarizarse con los síntomas para poder controlarlos. t Aprendizaje de técnicas concretas para eliminar los síntomas que se presenten. Con todos estos elementos, ya estamos en condiciones de enfrentar al miedo en cualquiera de “sus presentaciones”... pues a esta altura: ya le hemos perdido el respeto que le teníamos y en el próximo capítulo vamos directo a enfrentarlo para vencer.

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“UNA VEZ DIJO ALGO Y FUE ¡MARAVILLOSO, ME SENTÍ LIBERADA!”

Hoy necesito comunicarme con ustedes... los extraño un montón. No pensé que estas reuniones fueran tan “adictivas”. A todo esto, aun no me presenté... soy Susana y hace unos seis meses que concurro a las reuniones. No pensé nunca que me podía ayudar a resolver mis problemas y a mejorar mi situación. Los primeros tres meses, escuchaba al Dr. pensando: ¿cómo voy a poder yo?, ¿a esta edad?. Sí, me sentía mal, pero las reuniones eran tan simpáticas. Yo ya no quería enfrentar nada, si bien hacía muchas cosas mecánicamente, nada hacía por mí, no tenía proyectos personales, no trataba de mejorar mi vida y mi estado de ánimo por entonces era torturante. Me ocurría a veces, que no podía pasar el umbral de la puerta, me aislaba cada vez más. Entonces empecé a leer mis apuntes de El Fobi... “Fraccionar y Desmenuzar”... reconocer nuestros pensamientos automáticos, aquellos que condicionan nuestras emociones y reacciones. Fue lo primero que intenté hacer y de “torturada” pase a sentirme “interesada”, pasé del “cómo me siento”, al “¿por qué me siento así?” y mis tensiones se aflojaron un poco. “Cambie su Diálogo Interior”: recién ahí, caí en cuenta de cuán horrorosos eran mis pensamientos y cómo debía cambiar... cambiarlos a exactamente lo contrario para poder mejorar. Es difícil, lo estoy intentando, pero ya tuve algunos logros. “Mejore su Autoestima”: esto es más difícil aún, es tal vez lo que más me cuesta. No obstante, a esta altura ya sé que puedo mejorar y con la ayuda de Ustedes, lo voy a seguir intentando. “Respiración”: también la practiqué. Pero de todos mis intentos, lo que más me ayudó fue lo que una vez, como al pasar dijo el Doc. “Los sentimientos no se pueden cambiar, pero sí podemos cambiar nuestros pensamientos... y los sentimientos van detrás”. Maravilloso, fue maravilloso, me sentí liberada de sentimientos indeseables y de situaciones insufribles. Sé que mis cambios externos no son tan impactantes, pero ¡qué tranquilidad!, ¡qué paz!. Es como haber madurado. Gracias fobi... los amo a todos. SUSANA. 243


CAPÍTULO XIV “AFRONTAR Y LIBERARSE”

Hemos llegado a este punto, ya casi en el final del camino, donde por fin nos pondremos a prueba, todos nosotros. Ustedes que avanzaron a lo largo de todas estas páginas, incorporando información y técnicas, se encuentran ahora en el momento de enfrentar o afrontar “la cosa” que, durante tanto tiempo les produjo dolor y sufrimiento al punto de quitarles las ganas de seguir viviendo. Yo, que se las dí, me daré con la prueba de saber si fui claro y pude llegar a todos ustedes y ayudarlos a ser libres. FRENTE A “LA SITUACIÓN” Hagamos un esquema sobre este preciso momento, en el que cada uno de nosotros, hombre o mujer, adulto o joven, se encuentra frente a lo que le produce miedo, terror o pánico. Ante ello, se pueden adoptar dos tipos de actitudes:

Escapar

Enfrentar

1. Una de ellas es ESCAPAR de “la situación”, lo cual determina que, de algún modo, uno se “desvalorice” por su falta de coraje; por otro lado, esa misma actitud de huida hace que “la cosa” crezca de tal modo, que cada vez produce más ansiedad que la anterior con lo que su poder crece, aumenta. Esta actitud de huida sirvió hasta ahora para protegernos momentáneamente, pero fue la principal causa de que uno se sintiera cada vez peor, durante todos los días durante mucho tiempo.

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Afrontar y Liberarse

2. La otra conducta es ENFRENTAR y para ello, hemos llegado hasta aquí: para enfrentar y superar “la situación” y de este modo eliminarla para siempre, pues “miedo que se enfrenta, miedo que desaparece”. Pues bien... ¿qué ha sucedido con la persona que debe enfrentar “la situación o cosa” de un tiempo a esta parte?... Claramente existe un “antes” cuando no teníamos información , ni conocimientos, ni guía , ni control de ningún tipo, ni sabíamos como actuar y un “ahora” en el que hemos incorporado todo lo que nos faltaba. En algunas personas, puede hasta aparecer cierta actitud “desafiante”, lo que resulta muy estimulante y alentador. Veamos:

ANTES t.BOEBUPT t)JTUPSJB1FSTPOBM t%JÈMPHP*OUFSJPS/FHBUJWP t1FOTBNJFOUPT'FÓTJNPT t1FSTPOBMJEBERVFPERDÍA t$FSFCSP-ÓNCJDP t.POP1FSSP t/PNFWBMPSBCB t/PFYQSFTBCBNJTBGFDUPT t"VUPFTUJNB#BKB t3FTQJSBDJØO4VQFSmDJBM t$POUSBDUVSBEP t%SBNBUJ[BCB t&TUSFTBEP t$SFÓBRVFNFNPSÓB 248

AHORA t7JWPFMQSFTFOUF FMJKP:P t1FSEPOP t%JÈMPHP*OUFSJPS1PTJUJWP t"VUPBmSNBDJPOFT tPersonalidad que GANABA t$PSUF[B$FSFCSBM1SFGSPOUBM t4FS)VNBOP t.FWBMPSPZNFRVJFSP t%PZBCSB[PT CFTPTZTPOSJTBT t"VUPFTUJNB"MUB t3FTQJSBDJØO1SPGVOEB t3FMBKBEP t.FSÓP t.BOFKPFM&TUSÏT t4ÏRVFOPFTQPTJCMF


t-PTTÓOUPNBTNFBOVMBCBO t1TJDPGÈSNBDPT/P t3FDVSTPT.ÈHJDPT t"MUP/JWFM5ØY&NPDJPOBMFT t&OEPSmOBT{RVÏ

t-PTNBOFKPZPNJTNP t1TJDPGÈSNBDPTMPRVF diga mi médico t3FDVSTPT$JFOUÓmDPT t"MUP/JWFMEF&OEPSmOBT t&OEPSmOBTMBTGBCSJDPZP

Como podemos ver, ya no somos los mismos, ahora somos distintos, hemos incorporado conocimientos que han desplazado el miedo que había en nuestro interior. Por todas estas razones, lo indicado es elegir la conducta de ENFRENTAR: ¿Cuándo lo haremos? Cuando sintamos que ya estamos preparados para hacerlo. Esto no quiere decir que no tendremos temor o miedo, sí lo sentiremos, sobre todo al dar los primeros pasos orientados a superar el obstáculo... pero como consecuencia directa de todo lo aprendido, será un miedo “manejable” y para nada “paralizante”, tal como el que tiene cualquier persona ante situaciones especiales, en las que se expone a riesgos o evaluaciones. ¿Cómo lo haremos ? En forma gradual. A) En principio nos tomaremos nuestro tiempo para hacerlo, por ahora sólo en el “escenario” de la mente, apelando a la imaginación. Para ello, recordemos por ejemplo la crisis de pánico más “fuerte” que hayamos tenido y no dejemos de lado ningún detalle, ni el lugar, ni nuestro aspecto, ni conducta, y vayamos haciéndole las correcciones que se nos ocurran: ¿cómo hubiera sido mejor, actuar?, ¿cómo hubiera sido mejor, pensar?... ¿qué “herramienta” de todas las que ahora conocemos, nos hubieran ayudado de verdad a superarla?... de hecho, el capítulo de Respiración y Relajación y el de Fabricar los Síntomas y Controlarlos, son de aplicación directa para la Crisis de Pánico, que por sus mismas características, se presenta en forma “inesperada” y es tan “aterradora” porque se “interpretan” equivocadamente las manifestaciones físicas del miedo de las que, para colmo, “no se puede” escapar, pues están en la persona misma. 249


En el caso de las fobias específicas y con el auxilio de la imaginación representemos el hecho, el animal o el objeto ante cuya presencia se desencadenan todos los síntomas del miedo. Por ejemplo: t Imaginémonos dando una conferencia ante cientos de personas o subiendo a recibir un premio, dando un examen o saliendo por primera vez con alguien que nos gusta. t Imagínemonos salir solos de nuestra casa y seguir caminando hasta el supermercado, y entrar y recorrer las góndolas mientras llenamos el carro y luego salir y pagar en la caja. t Imagínemonos frente a la cucaracha, caracol, mariposa, ratón, víbora, araña, o ante una tormenta de rayos y relámpagos; en un día de viento fuerte, en el interior de un avión; o en un largo túnel o puente; frente al cajero automático; sacándose sangre para un análisis; cuidando enfermos; recorriendo el interior de iglesias; participando de una manifestación de protesta; tomando un subterráneo o un colectivo de larga distancia; entrando a un cementerio o concurriendo a un velorio; subiendo al avión que lo llevará en un largo viaje. En síntesis: representemos en la “pantalla” de nuestra mente aquello que tanto nos aterra y hágamoslo todas las veces que podamos hasta que al pensarlo no nos “dé cosa”. Una vez que nos familiarizamos “mentalmente” con la situación que queremos superar, pasaremos al siguiente paso: B) Hacer realidad todo lo que hasta ahora hicimos “mentalmente”... Por ejemplo: tener en nuestras manos una mariposa de papel, una araña de goma o un sapo de peluche... o bien salir de nuestra casa solos hasta una cuadra... o pararnos por algunos minutos en la entrada del supermercado... o subir solamente un piso por el ascensor... o acercarnos hasta la baranda del balcón y mirar brevemente al vacío... o ir al aeropuerto y pedir recorrer un avión en tierra... todo esto se puede hacer, al principio con alguien que nos observe y nos CONTROLE, para darnos auxilio si surge alguna dificultad... lo que desde ya descartamos. C) Luego de esta primera aproximación, deberemos ir aumentando la exposición en forma paulatina hasta hacerla completa. No importa el tiempo que 250


demande lograrla, no dejemos de hacerlo ni lo posterguemos indefinidamente... porque todo, absolutamente todo, está a nuestro favor en este preciso momento. D) Afrontemos cada día un poco más, seamos constantes, si es posible todos los días un avance, aunque sea pequeño, hasta que en un plazo razonable podamos hacerlo en forma completa. Por supuesto que nos sentiremos ansiosos cada vez, pero eso es bueno, pues la presencia de esta ansiedad nos estará indicando el “camino”... en donde está el “obstáculo a superar”. E) Interrumpamos si la ansiedad es de un nivel alto y volvamos a intentarlo más tarde. F) Es posible que las cosas no salgan todo lo rápido que nuestra ansiedad quisiera. No nos desanimemos ni nos impacientemos. Lleva un mínimo de seis meses lograr un afrontamiento completo. Además en el camino se suelen presentar recaídas. No asustarse, es habitual que así ocurra, y no quiere decir que estamos volviendo para atrás. En cambio, comprendamos y aceptemos que esto le ocurre a todas las personas que están en un proceso de aprendizaje, entrenamiento y preparación en habilidades que no tenían. Es como aprender a caminar: todos lo hicimos alguna vez, nadie nos enseñó, simplemente lo hicimos, nos caímos muchas veces y a pesar de los golpes lo volvimos a intentar... y teníamos menos de un año de edad cuando al fin lo logramos. La clave es: no deje de intentar... sólo pierden los que se rinden. G) No dudemos en consultar con nuestro terapeuta todos y cada uno de los pasos, e inclusive, pedirle su acompañamiento. H) Cada día aumentemos nuestra exposición y comprobemos por nosotros mismos que sí se puede... y felicitémonos por lo que vamos logrando. Compartamos con alguien que comprenda cada pequeño logro que obtengamos, premiémonos por ello, festejemos y brindemos. No importa si el logro es pequeño, pues es un buen motivo para “fabricar endorfinas”, alégremonos y cada vez estaremos mejor y llegaremos más lejos. I) La mejoría se demora o no llega cuando no estamos motivados, ni somos constantes y nuestras prácticas son irregulares e incompletas. O bien no adquirimos las herramientas o instrumentos necesarios, por leer los capítulos anteriores por encima y “al galope” salteando párrafos para llegar rápido al final. Este libro no es una novela ni una obra literaria; es, o pretende ser, una guía 251


práctica... una especie de receta de cocina a la que debemos seguir en todos sus detalles, para lograr el éxito que coronó el esfuerzo de otras personas que, como nosotros, tenían similares dificultades. Si creemos que no hicimos las cosas del todo bien, volvamos a comenzar desde la primera página. J) No intentemos avanzar si el nivel de ansiedad es alto. Es mejor dejar y volver a intentar más tarde o al día siguiente. Pero... sigamos intentando, todos lo logran... ¡nosotros también!... como vemos, ya estamos muy cerca del final: Lo más dificil ya lo hicimos. K) Y cuando finalmente logremos exponernos completamente: gritemos... lloremos... y saltemos de alegría... ¡Triunfamos! L) Yo no estaré allí para abrazarlos y felicitarlos por el “milagro” que tanto soñaron y que hicieron realidad... pero ténganme en sus pensamientos porque quiero hacerles un pedido: busquen a otras personas que les pase lo mismo y ayúdenlas a encontrar el camino de la libertad, usen para ello todo lo aprendido y cuente su propia experiencia, tal como lo hacemos en nuestro grupo de Autoayuda, EL FOBI. M) Al final del libro pusimos algunas páginas en blanco. Úselas para anotar sus comentarios, sus progresos, sus emociones, sus alegrías y sus angustias y cómo hizo para superarlas... Póngales la fecha... con el tiempo, al releerlas serán de mucho estímulo para su vida. N) Tenga esta guía cerca para eventuales consultas o repaso de algunos temas, mientras va logrando “meterse” a vivir la vida que siempre quiso... una vida libre... independiente... autónoma, en la que su mayor preocupación sea: disfrutar de cada instante. HABÍA UNA VEZ... Un hombre sabio y piadoso que clamaba al cielo por una respuesta. El hombre aquel encabezaba un grupo de misioneros que oraban por la paz del mundo, para lograr que las fronteras no existieran y que toda la gente viviera feliz. La pregunta que hacían era: ¿Cuál es la clave, Señor, para que el mundo viva en armonía? 252


Entonces, los cielos se abrieron y después de un magnífico estruendo, la voz de Dios les dijo: comodidad. Todos los misioneros se miraron entre sí, sorprendidos y extrañados de escuchar tal término de la propia voz de Dios. El hombre sabio y piadoso preguntó de nuevo: ¿Comodidad, Señor?, ¿qué quieres decir con eso? Dios respondió: La clave para un mundo pleno es “Como di: dad”. Es decir, así como yo les di: dad vosotros a vuestro prójimo. Como di: dad vosotros fe; como di: dad vosotros esperanza; como di: dad vosotros caridad; como di sin límites, sin pensar en nada más que dar: dad vosotros al mundo. Sigamos la clave: COMO DI: DAD.

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CAPÍTULO XV “PSICOFÁRMACOS” Este capítulo se anexa para información general del paciente que recibe una prescripción médica que incluye medicación con acción psicotrópica, lo que quiere decir “que actúa en la psiquis”. No será un compendio de psicofarmacología. Solamente incluirá algunas pautas que es necesario que cada uno conozca para disipar algunas “fantasías” que suelen crearse, cuando se carece de información responsable. Para ello nos formularemos las preguntas más comunes que se hacen sobre el tema y luego daremos la respuesta en cada caso. PREGUNTAS Y RESPUESTAS 1. ¿Siempre es necesario tomar algún psicofármaco para tratar el Trastorno de pánico, la agorafobia, la fobia específica o el trastorno de ansiedad generalizada? No siempre. Pero el único que puede determinar su necesidad, debe ser un médico, si es psiquiatra mejor y si se especializa en Trastornos de ansiedad, mucho mejor aún. Claro que antes de indicarse un medicamento para cualquier tipo de afección, es necesario tener un diagnóstico correcto, porque de no ser así, el tratamiento tampoco lo será. Por ello, consulte a un médico que le inspire confianza y trasmítale todas sus sensaciones: cuándo comenzaron, cómo se presentaron, qué consultas hizo anteriormente, qué medicamentos le indicaron, en qué dosis, cuál fue la respuesta y cuánto duró el tratamiento. Luego sométase a los estudios que le indique: psicodiagnóstico, estudios clínicos, neurológicos, de laboratorio y otros más modernos, de cada vez mayor uso en psiquiatría, tales como: Mapeo cerebral o Resonancia Magnética Cerebral (RMC) o Tomografía por Emisión de Fotón Único Cerebral (SPECT), que van dejando en el pasado a la Tomografía Computada de cerebro (TAC). 2. ¿Algunos pacientes pueden salir adelante sin necesidad de ingerir psicofármacos? Sí, es posible. Pero sólo su médico puede evaluarlo. No lo puede hacer ni usted ni esos “opinadores” que nunca faltan y que carecen de todo y les sobra irresponsabilidad. 257

Psicofármacos

3. Los psicofármacos que se indican para el tratamiento de cualquiera de los Trastornos de ansiedad, ¿curan? El concepto clásico es que no, aunque eso está en discusión en la actualidad. Recientes estudios están llegando a la conclusión de que los fármacos psicoactivos llegan al sitio donde se encuentra el “desorden biológico” y lo modifican, es decir reparan o corrigen “la avería”. No obstante: sí, se sabe con certeza que pueden ser de gran utilidad para avanzar en el proceso de curación si, paralelamente, se van adquiriendo los nuevos conocimientos y destrezas que aporta la Terapia Cognitivo Comportamental y si se recibe el apoyo de grupos de Autoayuda. No se “encierre” en una actitud que lo puede mantener en el sufrimiento sin sentido y, en cambio acepte lo que su médico le indique, pues él es el único capacitado para hacerlo. 4. ¿Qué hago si al leer los prospectos que acompañan a los medicamentos me asusto por la cantidad de cuidados, efectos secundarios y contraindicaciones que suelen tener? Hable con su médico y planteele sus inquietudes, para que se las aclare. Por ejemplo, “tal medicamento es para tratar la epilepsia ¡y yo no soy epiléptico!” o “este es un antidepresivo ¡y yo no estoy depresivo!” Su observación es correcta, pero no sus conclusiones: ocurre que algunas moléculas que se usan para tratar las crisis de pánico o la fobia específica o el trastorno de ansiedad generalizada, son sustancias que, en un principio, fueron usadas como antiepilépticos, pero luego se vio que tenían mayor utilidad como ansiolíticos y antipanicosos, tal es el caso del psicofármaco clonazepan (el que se presenta en las farmacias bajo distintas denominaciones, en distintas concentraciones y formas de administrar). Por otro lado se ha comprobado que muchos de los antidepresivos modernos, (son varios, con distintos nombres comerciales y concentraciones) se han mostrado como muy eficaces para tratar el trastorno de pánico, la fobia social y el trastorno obsesivo compulsivo. 5. Si los tomo, ¿corro el riesgo de volverme adicto? Su médico controlará su evolución y será el responsable de ello. No obstante, sepa que, en particular, las medicaciones que se usan para tratar los trastorno de pánico, ansiedad generalizada y fobias, son de casi nulo poder adictivo, tal el caso de clonazepan que, además, es la molécula de elección para tratar las adic258


ciones a drogas alucinógenas (cocaína, LSD , etc.). Otras sí tienen potencialidad adictiva, y los riesgos crecen si usted se automedica y no tiene ningún control. 6. ¿Existe la posibilidad de que “deba aumentar la dosis porque me voy acostumbrando”? Las dosis se aumentan o se disminuyen según la evolución y ello está en manos de su médico. Aumentar las dosis por acostumbramiento no es un riesgo esperable. 7. ¿Cuánto dura un tratamiento con psicofármacos? Por lo general, un poco más allá del tiempo que usted demore en adquirir las habilidades que se espera desarrolle a través de la TCC (Terapia Cognitivo Comportamental) y haya enfrentado con éxito a todos sus miedos. Ese tiempo es de un año a dos años y depende de su constancia, dedicación y compromiso con el proceso de curación, el que ese tiempo se acorte. Nuestra experiencia indica que ese tiempo es menor a seis meses. 8. ¿Mientras hago tratamiento con psicofármacos puedo ingerir otros medicamentos? Consulte con su médico, algunos medicamentos anulan el efecto de los psicofármacos porque “compiten” e interfieren en su metabolización, o bien los potencian, aumentando sus efectos. 9. ¿Si mientras los estoy tomando quedo embarazada, existen riesgos para el bebé?” No. Pero consulte de inmediato. Lo ideal durante el embarazo es no ingerir ningún tipo de medicamentos, pero en ciertos casos son inevitables. Estudios recientes revelan que los medicamentos que se usan para tratar pánico, fobias y ansiedad tales como clonazepan, lorazepan y antidepresivos IRSS, son inocuos para el bebé. 10. Si me siento bien ¿puedo bajar la dosis que me indicaron? No lo haga. Consulte con su médico. Puede que usted se “sienta bien” porque está tomando la dosis adecuada y al disminuirla por su cuenta, retorne el malestar y usted interprete esto como “estoy mal porque me falta la droga, me estoy haciendo adicto”, lo cual es un error tras otro. No se meta con lo que ignora. Deje que se ocupe quien sabe. 11. El consumo de café o fumar ¿pueden influir en el tratamiento?

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Psicofármacos

Sí, pues la cafeína que contiene el café es excitante y ansiógeno (es decir, generador de ansiedad), al igual que el exceso de té y mate, junto con el tabaco de los fumadores; todos compiten por el mismo sitio donde se metabolizan o actúan algunos psicofármacos, en particular antidepresivos. Modere su consumo. 12. La cantidad de miligramos de un mismo medicamento, de un paciente respecto de otro, ¿indica que está más grave? Para nada. Pues cada dosis es individual y depende de muchos factores: la edad, el peso, la toma de otros medicamentos. Por eso no es aconsejable preguntar ¿cuántos miligramos de... tomás vos?”, “Yo tanto ¿y vos?” y alejarse fastidioso o contento sin que haya ninguna razón para ninguna de las dos actitudes. 13. ¿Cuál es el órgano más afectado por el consumo prolongado de psicofármacos? Por lo general el hígado, que es donde se procesan los medicamentos. No obstante se necesitan años de altos consumos de psicofármacos para que se manifiesten síntomas. En las personas de edad pueden producirse dificultades en la capacidad de aprendizaje y en la memoria. 14. ¿Cuándo comienzan a actuar los psicofármacos? Todos los psicofármacos tienen un período de espera antes de comenzar su acción. En el caso de los ansiolíticos ese período de “espera” casi no existe, pues su acción es casi inmediata. No así los antidepresivos que demoran entre siete y veinte días en comenzar a actuar, dependiendo de las características farmacológicas de cada uno de ellos. Pregúntele a su médico sobre cuándo comenzará a actuar el medicamento que le prescribió, para que usted no interprete ese período de espera como “esto no me hace nada”. 15. ¿Cuáles diagnósticos de los Trastornos de Ansiedad se benefician más con el tratamiento psicofarmacológico? Los diagnósticos son: 9 Crisis de Pánico y Trastorno de Pánico 9 Agorafobia 9 Fobia Social 9 Trastorno de Ansiedad Generalizada 9 Trastorno Obsesivo compulsivo 260


9 Estrés Agudo y Síndrome de Estrés Post-Traumático 9 Cuando se agregan otros diagnósticos como: Depresión o Trastorno Bipolar 16.¿ Cuáles son los Psicofármacos más usados para tratar las crisis de pánico, las fobias específicas y el trastorno de ansiedad generalizada? Con su nombre químico (monodroga), ellos se presentan en comprimidos o algunos también en gotas, bajo distintos nombres comerciales o de “fantasía”: Ansiolíticos: Clonazepan 0,25 mg - 0,50mg -1 mg y 2mg (comprimidos y gotas) Alprazolan 0,25 mg - 0,50 mg - 1 mg - 2 mg (comprimidos) Antidepresivos: Tricíclicos: imipramina 10 y 25 mg (comprimidos), clomipramina 25 mg IRSS y Duales: fluoxetina 10 y 20 mg, paroxetina 10 mg - 20 mg -12,5 mg CL - 25 mg CL, sertralina 50 y 100 mg , citalopran 20 mg Nota: cada uno de ellos tienen características distintas: si bien su efecto es similar, unos producen sueño y son ideales si existe insomnio. O aumentan el apetito y otros lo quitan. Unos son más indicados para fobia social y otros, para trastorno de ansiedad generalizada. Por ello el médico especialista es quien debe prescribir el más adecuado para cada caso en particular. 17. ¿Si me aumentan la dosis quiere decir que estoy empeorando? No. Lo indicado es comenzar con dosis bajas y desde allí ir subiendo gradualmente hasta alcanzar el nivel terapéutico individual, lo cual es parte de una estrategia de tratamiento y no está relacionado con la evolución o “gravedad”. 18. ¿Cómo debo interrumpir el tratamiento si no puedo consultar al médico? Hágalo reduciendo las dosis gradualmente hasta que en el término de una semana a diez días deje de tomarlos. No lo haga de un momento para otro. COMENTARIO FINAL Los medicamentos son producto de arduas y costosas investigaciones. Están a nuestra disposición para mejorar la calidad de vida, eliminando las causas de las 261

Psicofármacos

enfermedades o aliviando las consecuencias de ellas. Por ello deben ser considerados como uno de los recursos que tiene “nuestro médico” para ayudarnos en el proceso de curación. Confíe en él y no deje de trasmitirle sus dudas, formule las preguntas que hagan falta y no se guarde nada. Acepte sus indicaciones pues él es quien más sabe sobre el tema y quien debe “organizar” la “estrategia terapéutica” para recuperar la salud y en su caso particular “la paz interior y la alegría de vivir”. Ponga de su parte todo el esfuerzo, responsabilidad y compromiso que hagan falta para lograrlo. Cuando el tiempo pase y los logros se vayan sumando, se podrán abandonar las “herramientas” o las “armas” que ya “dejaron de ser necesarias”. Cuando llegue ese momento, usted ya habrá incorporado en su “interior” todo lo necesario para ser: libre, independiente y capaz de vivir en paz, con entusiasmo y esperanza. En la sección que sigue, se podrán leer los testimonios de personas que les pasaba algo parecido a lo suyo, pero que ya lograron lo que usted tanto desea.

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Vivir sin Miedo | Parte III

CARTAS RECIBIDAS

1. “CHE DOCTOR” 2. “QUIZÁS ÉSTA SEA LA ÚLTIMA VEZ” 3. “NUNCA FALTA ESE DUENDE QUE RECORRE EL SALÓN” 4. “PUDE MANEJAR LA SITUACIÓN...Y ESTA VEZ ¡GANÉ YO!” 5. “SENTÍS POR FIN ESA PAZ QUE TANTO BUSCABAS”

NOTA DEL AUTOR: Todas las cartas, unas pocas de las muchísimas recibidas, han sido transcriptas sin modificaciones. Se respetaron los textos y expresiones de gratitud, por varias razones: 1. Porque tanto los elogios como los regalos nunca deben rechazarse. Tal como lo dije siempre. 2. Porque le hacen muy bien a mi corazón y a mi autoestima. 3. Porque ello me alienta a continuar en este camino de servicio que una vez soñé. 4. Y porque cuando se alcanza un sueño, no debe ser uno el que le quite “brillo”. Otros se encargarán de ello. Se oirán críticas y comentarios negativos, algunos podrán servir para mejorar, otros no. Pero en la esencia, nada cambiará, pues cuando se tiene la convicción y el placer de estar haciendo bien, no hay más “remedio” que seguir haciéndolo. Por último, quiero agregar: Por más elogios que uno pueda recibir, no debe creérsela, porque cada uno de nosotros somos apenas instrumentos de Dios, y nada más que eso.

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Cartas Recibidas

1. “CHE DOCTOR” ¿Qué te puedo decir que exprese todo, todo lo que he recibido acerca de éste ¡tu invento!, como vos decís Vos doctor, decís que sabés cosas de nosotros cuando nos miras, nosotros también sabemos, con mirarte, saber de tu persona, que entendés qué nos pasa. Porque en algún momento, vos también lo has vivido. Más allá de la profesión médica y tu especialidad psiquiátrica, todo junto hace a la efectividad. Nos gusta, tu ética, tu humor, tu voluntad y disposición de cedernos tiempo... tu tiempo. Vamos a estar orando a Dios para bendecirte espiritualmente, hablar bien de tu alma. Que Dios también cuide tu cuerpo. Nosotros somos humanos con todas nuestras limitaciones, pero creemos que te encomendamos a Dios para que Él te pueda dar la cobertura que vos necesitás. Gracias, muchas gracias. MERI Nota del Autor: La autora de esta carta, transcripta literalmente, es de origen mapuche. Ella así me lo explicó cuando se lo pregunté. 2. “QUIZÁS ÉSTA SEA LA ÚLTIMA VEZ” Quizás sea ésta la última vez que nos veamos y no quiero dejar pasar la oportunidad sin decirle a usted doctor, cuánto le agradezco todo lo bueno que nos dio en este tiempo, su tiempo, su humor, su capacidad y sobre todo el cómo nos hace fácil lo difícil. Cada jueves me voy con algo suyo o del grupo y eso me ayuda a vivir mejor... y por eso quería agradecer hoy y no mañana, porque como usted nos dice: “en ésta mi última hora, exprimo la naranja de la vida y me tomo todo el jugo y en la hora que comienza dentro de 10 minutos... haré lo mismo”. Gracias MARÍA E. 3. “NUNCA FALTA ESE DUENDE QUE RECORRE EL SALÓN” Cuando me fui de su consultorio y salí a la calle, todo me parecía distinto, más llevadero, hasta el aire que respiré en la vereda era nuevo. Cuando llegué a mi casa, le dije a mi esposo: “tuve la conversación más hermosa que te puedas imaginar”. Les cuento también que mi progreso tiene sus altibajos, hay días que me devoro todo y otros días en que todo me devora a mí. Voy descubriendo el naci266


miento de una nueva persona... desconocida para mí, pero siempre sospechada. Intuitivamente siempre supe, que yo no era lo que mostraba, que llevaba puesto un disfraz para actuar en el teatro de la vida, representando a un personaje que no me simpatizaba, pero que de alguna manera me convino en determinado momento de mi vida.Hoy me animo a hacer y a decir cosas que antes me eran difíciles, ahora estoy más sociable, me juego más por mis opiniones, defiendo mis ideas con argumentos inteligentes y no con caprichos, siento una gran potencia interna, como un volcán que ha entrado en actividad y esto me crea angustia, porque es como que no me reconozco, no sé cómo manejar estos nuevos sentimientos, siento una mezcla de vértigo, temeridad y a la vez ganas de volver a mi cárcel, es como que no me animo a mirarme y reconocerme tal cual soy. Cuando vengo al “Fobi” siento que llego a “La sociedad de los poetas muertos” (para los que vieron la película) porque siento, que dentro de cada uno de nosotros vive “un poeta” que surge de nuestra vulnerabilidad, de nuestra sensibilidad, de nuestra “habilidad” para darle vuelta a las cosas y sorprenderlas por detrás. Y volviendo a la película, en ella el protagonista, repite una frase en latín: “carpe diem” que significa “toma el día de hoy” “vive el momento presente”. El Doctor tiene razón, todos los jueves nuestro grupo fluctúa en su cantidad de asistentes, pero el que nunca falta, es ese “duende” que corre por el salón tejiendo nuestros pensamientos. Cuando los jueves me voy de acá, siento que salgo de una reunión secreta y miro a la gente que me rodea en la calle, con la picardía de quien se siente dueño de un tesoro y lamentando que muchos que tienen el mismo problema nuestro, no se animen a venir y se pierdan el milagro que cada jueves a la misma hora, tiene lugar en este salón. Con mucho cariño SILVANA 4. “PUDE MANEJAR LA SITUACIÓN...Y ESTA VEZ ¡GANÉ YO!” Queridos compañeros del Fobi y querido Doctor Les escribo esta, mi primera carta, después de mucho tiempo que quería hacerlo y no me animaba, tal vez por miedo o quizás por vergüenza. Son las dos y media de la mañana y hoy estoy decidida. 267

Cartas Recibidas

Quiero contarles un poco lo que me pasa... tengo miedo de viajar en avión, a las tormentas y principalmente lo que más me perturba, es el miedo a tener “cáncer” o que algún familiar lo padezca. Viniendo al grupo descubrí, que no sólo tenía ataques de pánico, sino que también sufría de fobias, ansiedad y depresión. Esto comenzó hace ya unos cinco años. Como verán no me privé de nada, las tengo todas. Pero bueno, estoy “poniendo el lomo”, como dice el Doc. y todas las energías que me quedan todavía, para salir de esta prisión que yo misma construí. Para ello uso todas las herramientas que aprendo jueves tras jueves. Les cuento que no estoy pasando por un buen momento, pues internamos a mi suegra de urgencia y mi pensamiento automático como es de imaginar fue: “tiene cáncer”... obviamente no fue así. Yo estaba mejorando lentamente, día a día, hasta que pasó esto con mi suegra. Mis pensamientos negros, rondaban en mi mente, hasta el punto en que pareció venir un ataque de pánico, que ya hacia más de dos años que no tenía. De inmediato, me acordé de las técnicas que había aprendido, como por ejemplo: respirar profundo 7 veces... desviar mis pensamientos del problema... y así la crisis que quería venir fue desapareciendo de a poquito. Sé que se puede volver a repetir, pero ahora me siento preparada para enfrentarla... pensaba que en este tiempo no había avanzado mucho... pero me di cuenta de que si... ya que pude manejar la situación y esta vez gané yo. También sé, que llegará el día en el que mi cabeza hará el famoso “clic” que todos esperamos. Siento que así será... aunque no es gratis, lo lograremos con esfuerzo, dedicación y no dejando de venir a las reuniones. Al Doc y a mis viejos compañeros: gracias, porque sin ustedes, no hubiese logrado lo que ya logré y a los nuevos, a lo que recién llegan, les digo que no aflojen, que al principio uno puede sentirse un poco perdido, pero se van a enganchar a poco de andar, ya que siempre repetimos los temas y no lo olviden: “¡se puede!”...y “¡todos vamos a poder!” Cuando nuestras cabecitas hagan el famoso “clic”, todo pasará a ser un mal recuerdo. Pero eso sí: “Ojito- Ojazo”...cuando estemos recuperados a no hacerse los vivos y chau...tenemos un compromiso: ayudar a los que vengan atrás nuestro… ellos nos necesitan. Bueno... muchas gracias a todos...los quiero mucho. ANDREA

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5. “SENTÍS POR FIN ESA PAZ QUE TANTO BUSCABAS” Hoy, más que una carta, quiero contarles una historia de vida, especialmente a vos que venís por primera vez, desesperado, angustiado, sin ganas de vivir, y lo peor de todo, sin un poco de paz en el corazón. Así llegué yo por primera vez a pedir ayuda, creyendo que nada ni nadie podría sacarme de ese infierno que sólo yo conocía y vivía día a día. Todo empezó hace ya 11 años, pasó mi adolescencia y crecí en un mundo de fantasía porque estaba aislada, debido a mis fobias, ataques de pánico, pensamientos horribles y miedo a morirme. No salía a ningún lado, me sentía agotada, todo me molestaba, la gente, mi familia, los ruidos, ya no tenía fuerzas para continuar. Sabía, además, que por más empeño que pusiera cada día, todo era más difícil cada vez, más aún, con la incomprensión de los demás frente a lo que me estaba sucediendo. Así fue que empecé mi tratamiento y la participación en el “Fobi”, acá con todos ustedes que tienen historias más o menos parecidas. Pero, lo más importante que les quiero contar es el cambio que ocurrió en mi vida hace casi tres meses. Cuando llegué creí que era un lugar donde te escuchan, te ayudan o te enseñan a sobrellevar todo esto, pero lo que me ocurrió a mí en especial, no fue exactamente eso. Estoy, de a poco, superando casi todos mis miedos, algunos todavía cuestan, pero eso me tiene sin cuidado, lo importante es lo que cambió dentro mío. Hoy mi mente, mi corazón, mis ganas y todo en mí es maravilloso. Es sentir que un día te levantás y descubrís adentro tuyo algo nuevo, mágico, inexplicable, que le da valor a toda tu vida, encontrás el camino exacto por el cual debés ir y ves claramente tu meta; que es lo que debés cumplir en esta vida ¿y sabés lo que sentís?... sentís por fin esa paz que tanto buscabas. Abrí los ojos, viví el presente aunque tu pasado haya sido horrible como el mío. No te quedes ahí, seguí, avanzá, abrí puertas, que en alguna de ellas quizás éste la solución. Aferráte a lo que tengas y no dejes que nada ni nadie te quite los sueños, viví hoy, no pienses en mañana, valorá todo lo tuyo, querélo, queréte, porque valés, sos único y todo, o casi todo, tiene solución. Gracias a ustedes porque son muy solidarios y a usted doctor por poner esa buena onda, y sobre todo a Dios que cambió mi vida. KARINA

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PARTE IV Cuentos Contados.

Vivir sin Miedo | Parte IV

CUENTOS CONTADOS

1. “LA SRA. DE LAS GALLETITAS” 2. “LA LOCURA QUISO JUGAR A LA ESCONDIDA” 3. “LOS TRES VIEJITOS INVITADOS A CENAR” 4. “LAS PIEDRAS PRECIOSAS” 5. “LAS BELLOTAS”

Nota: Todos los cuentos fueron escritos por el autor, a partir de historias propias o relatos anónimos, escuchados en distintos ámbitos . En particular “La Sra. de las Galletitas” (Analogía Santiago Pont Lezica sobre texto de Jorge Bucay), “La locura quiso jugar a la escondida” (Anónimo) y “Los tres viejitos invitados a cenar” (Anónimo) fueron difundidos por FM Milenium, a quienes agradecemos la autorización para publicarlos.

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Cuentos Contados

1. “LA SEÑORA DE LAS GALLETITAS” Cierta tarde de verano, una mujer que debía abordar un tren que la llevaría hasta su casa, comprobó con fastidio que aún faltaba una hora para la partida. Resignada ante la situación, compró un paquete de galletitas y una pequeña botella de agua mineral y se sentó dispuesta a esperar en uno de los bancos que había en el andén; al mismo tiempo que acomodaba sus compras, extrajo un pequeño libro que luego comenzó a hojear sin mucho interés. A su lado y sin anuncio, tomó asiento un joven, con aspecto de estudiante, quien a su vez, comenzó a leer un libro con mucho entusiasmo. Casi como al descuido, extendió su brazo y tomó un paquete de galletitas lo abrió y con sus dedos extrajo una que se comió con total displiscencia y satisfacción. La señora, bajó su libro y le dirigió una de esas miradas “matadoras”... “¡cómo podía ser tan caradura de comerse sus galletitas!, por lo menos, pudo haber ¡pedido permiso!”, pensó. Pero no dijo ni una palabra, quizás fuera “suficiente con la mirada” y permaneció expectante. Nuevamente el joven tomó otra galletita y mientras se la comía, recibió de la mujer sentada a su lado, otra mirada cargada de reproche, pero la ignoró por completo. La mujer, en cambio, asombrada ante tanto desparpajo, tomó a su vez una galletita y mostrándosela al joven, le dijo con la mirada: “¡ves lo que hago con mi galletita, me la como! y con decisión se la metió en la boca... exagerando un gran mordisco. “¡Ahora sí!”, pensó, “¡se dará cuenta de lo que está haciendo con mis galletitas!” Por toda respuesta, el joven le dió otra hermosa sonrisa. La mujer muy enojada, pensaba... “así están las cosas ahora, no hay respeto, ni buena educación... si le digo algo a este joven mal educado, quizás me consiga un momento difícil o una irrespetuosidad, nunca se sabe cómo reaccionarán las personas... ¿qué convendrá hacer?”. El joven advirtió la turbación de la mujer y tomando una nueva galletita, la miró y en sus narices se la comió. La mujer, a esta altura, no sabía si estallar en cólera o reír frente a tanta desfachatez y tomó otra galletita y blandiéndola como una espada se la acercó al rostro del joven y de un solo bocado se la engulló como si recién saliera de una

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huelga de hambre. Por toda respuesta, recibió una sonrisa aún más encantadora. Y así siguió el duelo, hasta que sólo una galletita quedaba en el paquete, “no será tan caradura de comerse la última” pensó la mujer con lógica, producto de su educación... mientras miraba atenta, cuál sería el próximo movimiento. El joven miró a la señora, sonrió y tomó la última galletita con sus dedos y dirigiéndose a ella se la mostró como diciéndole: “¿Quéres?”. La respuesta fue una mirada cargada de furia, sorpresa e indignación, acompañada de una actitud de inmovilidad expectante, como la de aquellos que no atinan a hacer nada. Ante la ausencia de respuesta, el joven partió en dos la galletita y le extendió una de las mitades. Ella la tomó en silencio, al tiempo que se ponía de pie, pues por los parlantes habían anunciado la partida del tren que debía abordar. Con brusquedad giró sobre sus talones y se dirigió al tren, con el rostro rojo de ira y todo su cuerpo temblando. En un cesto que encontró a su paso, arrojó con violencia su media galletita... “¡qué vergüenza!”, alcanzó a murmurar indignada. Ya en el tren y mientras por la ventanilla miraba al joven, que aún permanecía en el mismo banco en el andén, abrió su cartera para buscar la botella de agua, necesitaba humedecer su boca... pero allí junto con el agua, en su cartera, estaba su propio paquete de galletas... Entonces en medio de la intimidad de su bochorno y vergüenza comprendió a qué conduce el juzgar apresuradamente hechos o personas. 2. “LA LOCURA QUISO JUGAR A LA ESCONDIDA” Un día, la locura propuso jugar un juego que consistía en que todos los atributos del alma humana corrieran a esconderse, mientras ella contaba hasta mil... luego los buscaría por todos los sitios y el primero en ser descubierto sería el que debería tomar su lugar, contar nuevamente y buscarlos a su vez. La soberbia dijo de inmediato “la escondida es un juego estúpido”; por qué no se le había ocurrido a ella, pensó la perfección, siempre atenta para juzgar a los demás. El entusiasmo mucho no entendió, pero fue el primero en anotarse. También lo hizo el optimismo seguro de su triunfo. La alegría comenzó a saltar y contagió a la apatía que muchas ganas no tenía. La duda no sabía qué hacer y le preguntó al pesimismo, quien sólo atinó a decir “no va a andar”.

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Finalmente la locura comenzó a contar y todos salieron en busca de su escondite. La pereza se arrojó tras la primera piedra que encontró. La generosidad sólo encontraba sitios que pensaba eran ideales para otros: éste tan oscuro y sucio es ideal para la mentira y este sitio tan vacío y con tantas necesidades es para la caridad. La bondad miraba atenta, lista para ayudar a todos, mientras la maldad tomaba notas sobre dónde se escondía cada cual, ya vería qué hacer con esa información. La verdad no quiso esconderse, pues total tarde o temprano siempre la encontraban. La rigidez no conseguía amoldarse en su espacio a pesar de los consejos de la flexibilidad, claro que lo hacía sin el auxilio de la humildad y la ternura, pues esta última estaba amarrada por la formalidad y el temor al ridículo. Rápidamente se pudo ver cuando el éxito se subía a lo alto de un árbol, mientras la envidia se quedaba agazapada a su sombra. El egoísmo encontró un lugar, cómodo y confortable, para lo que tuvo que engañar a la inocencia que se quedó sin esconderse. La ira se cruzó con el odio y olvidando el juego se trenzaron a los gritos. La pasión y el deseo se fueron juntos y se escondieron en un volcán. La fe subió a los cielos. La belleza se sumergió en la superficie del cristalino lago. La dulzura se escondió en el perfume de las flores y la suavidad en el vuelo de una mariposa que fue a posarse en un hermoso rosal en flor. Mientras todo esto ocurría, la locura se aproximaba al final de su conteo... Pero el amor, que aún no había encontrado un lugar para esconderse, miró y miró para todos lados, sin atinar con el lugar más adecuado, hasta que siguiendo el vuelo de la mariposa, descubrió el rosal y allí fue directamente, riendo por tan bello escondite. “Novecientos noventa y nueve y... mil” dijo la locura y salió a buscar. A los pocos pasos encontró a la pereza... y más allá a la duda, quien aún no decidía qué lado de la pared era mejor para ocultarse. El egoísmo se descubrió solo, pues donde se escondía resultó que era un nido de avispas. La angustia estaba en una oscura cueva y la fe que conversaba con Dios. En el cielo, fue descubierta por su voz. Las vibraciones y los ruidos que hacía el volcán, descubrieron a la pasión y el deseo. En lo alto del árbol, descubrió al triunfo junto con el éxito e inmediatamente dedujo dónde estaba la envidia.

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Pero por más que buscó y buscó, no pudo encontrar al amor. Finalmente le pareció que estaba en el rosal. Entonces tomó una horquilla y comenzó a sacudir el rosal, hasta que se sintió un doloroso grito. Las espinas del rosal habían herido los ojos del amor... La locura pidió perdón, “no quise dañar”, “fue sin querer”, se deshizo en disculpas y le dijo al amor... “puedo ser tu lazarillo para siempre”... y desde entonces, desde que por primera vez se jugó a “la escondida” se dice que: “El amor es ciego y la locura siempre lo acompaña” 3. “LOS TRES VIEJITOS INVITADOS A CENAR” Cierta mañana, cerca del mediodía, una señora que regresaba luego de haber hecho compras en una despensa cercana, observó muy próximo a la entrada de su casa, a tres viejecitos que conversaban en voz baja y reían con timidez. Estaban sentados en el suelo y su aspecto era humilde pero pulcro, uno era calvo, otro usaba una delicada y larga barba y el tercero se destacaba por el color grisáceo de sus ojos. Los tres tenían en su opinión: “cara de buenos” y entonces se le ocurrió invitarlos a almorzar. Pero la respuesta de uno de ellos, fue una pregunta: - “Le agradecemos señora, pero antes díganos si el jefe de la familia está en la casa...” Como a esa hora su esposo estaba en el trabajo, respondió: - “No, mi esposo no está”. - “Entonces no podemos aceptar su invitación, gracias de todos modos” y reanudaron su charla. La señora quedó sorprendida por el hecho y al anochecer, al regresar su marido, le contó lo ocurrido. - “Invitémoslos para la cena” propuso su esposo de inmediato. Secando sus manos en el delantal de cocina, la señora salió y nuevamente se dirigió a los viejitos y les dijo: - “Mi esposo ya está en casa y entonces, ahora sí, espero que nos acompañen a cenar”. Uno de ellos se puso de pie y dijo: - “Mire señora, mi nombre es Amor, él se llama Abundancia y él se llama Éxito”-, y cada uno se levantó e inclinó la cabeza en señal de respeto al ser presentado... - “... pero, no podemos aceptar su invitación porque sólo uno de

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nosotros puede acceder a ella. Los tres juntos no podemos, así es que, por favor, elija a uno de nosotros para compartir su mesa”. Nuevamente la mujer, sorprendida, contó a su marido lo que acababa de ocurrir, y entonces, éste le dijo: -“Si el caso es invitar... invitemos a ABUNDANCIA que es lo que nunca sobra”, mientras reía por su juego de palabras. - “No, si el caso es así... mejor invitemos a ÉXITO” dijo la mujer. - “¿Y si invitamos a AMOR?- dijo la hija de seis años y agregó -“eso sí que sería bueno”- mientras jugaba con su muñeca preferida. Los esposos se miraron y sin palabras se dijeron:“¡es una buena idea!” La señora salió nuevamente y les dijo: -“Hemos decidido que AMOR sea nuestro invitado, así es que por favor sígame”. AMOR se puso de pie y siguió los pasos de la mujer rumbo a su casa, pero de inmediato, también se levantaron ABUNDANCIA y ÉXITO y se pusieron a caminar tras los pasos de ellos. Sorprendida nuevamente, la mujer detuvo su marcha y les dijo: - “¿Cómo es que me dijeron que no podían aceptar los tres juntos y ahora nos están acompañando?”. -“Verá, le contestó ABUNDANCIA - si usted me hubiera elegido a mí o a ÉXITO, uno sólo hubiera ingresado a su casa y los otros dos nos hubiéramos quedado afuera... pero como usted eligió a AMOR, nosotros siempre lo acompañamos: vaya donde vaya AMOR, allí vamos nosotros... él es el único que no está solo”, por eso: “Donde está el amor, el éxito y la abundancia lo acompañan” 4. “LAS PIEDRAS PRECIOSAS” - ¿Qué tal si para festejar el fin del milenio, hacemos un pequeño brindis, aquí mismo?, dijo el médico que coordinaba el grupo de autoayuda que, desde hacía varios meses, se reunía cada semana. Todos los presentes tenían algún tipo de dificultad vinculada al miedo: trastorno de pánico, fobia a tal o cual cosa, o simplemente miedo, ansiedad;

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también concurrían personas con depresión, algunas que estaban aburridas, y otras que sólo eran acompañantes o curiosos, estudiantes de psicología, medicina y hasta estudiantes de “marketing” interesados en este nuevo fenómeno de los grupos de autoayuda. La respuesta fue unánime: ¡sí! De inmediato se formó una “comisión de fiestas”, que se ocuparía de todos los detalles. Todo debería estar preparado para la reunión de “El Fobi” previa a la Nochebuena. “El Fobi” era el nombre familiar con el que se conocía al grupo que los convocaba semanalmente. Guillermo, el psiquiatra que coordinaba el grupo, pensó: “Qué lindo sería poder regalarle a cada uno, algo que conservaran con cariño y hacer que la fiestita fuera algo emocionalmente significativo, para que el paso del tiempo no trajera el olvido”. Este deseo, por ahora, era nada más que eso... pero cuando al deseo se le agrega la acción... los sueños se hacen realidad. ¿Qué regalar a cada uno?... se preguntó y agregó, respondiéndose a si mismo: una espiga de trigo. No... es muy común, muchos la tienen por San Cayetano y con el tiempo se va deteriorando, se respondió. ¿Qué tal una piedra?... eso está mejor, se dijo. Y allí se puso en marcha para obtener 50 o 60 piedras, pequeñas, negras, comunes. Luego pidió a unas ancianas internadas en una Institución que las lavaran y lustrasen. Ellas lo hicieron encantadas de ser útiles y además así, de paso, pudieron romper con la rutina y el aburrimiento. Mientras lo hacían, comentaban entre ellas... - son para una fiestita del Doctor... y me dijeron, que debemos frotarlas mucho y con todo el cariño porque son para regalar. - ¡No te puedo creer Ofelia!, ¡que el Doctor vaya a regalar estas piedras! Debe estar pasando un mal momento, dijo Margarita. Y todas rieron con sus ocurrencias.

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Alguien forró unas cajas, donde se depositarían los deseos que cada uno debía escribir en papeles entregados al confirmar su concurrencia. Las piedras irían en una cesta adornada con cintas y moños navideños. Todo estaba dispuesto y por fin llegó el gran día. Vinieron todos los que se esperaban y alguno más. Al llegar depositaban dentro de una caja negra, “sus miedos” escritos en una hoja blanca, y “sus deseos” escritos en papel amarillo, dentro de una caja de igual color. Se formaron pequeños grupos que conversaban y reían. Para muchos de los presentes, esa era su primera fiesta en los últimos 30 años. Guillermo pidió silencio y repartió al azar los papeles blancos con “los miedos”. Luego cada uno leyó el que le tocó en suerte y expresó el destino que quería darles al expulsarlos de sus vidas... algunos eran delicados como... “Que se vayan al infierno” y otros más fuertes e irreproducibles, pero mucho más decididos. Luego de estrujar el papel con toda la energía de la que es capaz alguien que lucha por su vida y su libertad, lo arrojaban de vuelta a la caja negra. Más tarde, Guillermo los arrojaría a las llamas, y sus cenizas al viento junto al mar para que nunca más regresasen y así se los comentó. A medida que completaban este “ritual”, cada uno tomaba “un deseo” de la caja amarilla, y de una cesta donde estaban todas desordenadas, una piedra, pequeña, brillante y negra, sin nada que la pudiera destacar del resto. -Cada piedra que llevan consigo, no es más que una piedra, de las más comunes de todas las piedras... pero verán que todos nosotros las haremos “piedras preciosas”... dijo Guillermo, haciendo una pausa teatral, para lograr el mayor efecto de sus palabras. -Estas piedras tan comunes, son en verdad “especiales” pues cada una de ellas es distinta de la otra, ni mejor ni peor, tal como somos nosotros. Además, todas brillan, tal como brillamos nosotros, son duras, como nuestra determinación para superarnos y salir adelante. Y a partir de ahora que están en sus manos, tendrán la energía que cada uno de ustedes le transmitirá, dijo y agregó: busquen entre los presentes a

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alguien y mirándolo a los ojos, agradézcanle con la mirada por todo lo bueno que hizo por ustedes. Le darán de regalo su piedra, con vuestra energía y toda la energía de quien la buscó, de quien la preparó, de quien la acomodó en la cesta y la de todos nosotros que estamos disfrutando de este momento. Entonces, en silencio cada uno entregó su piedra, la mayoría con miradas brillantes de emoción. Luego invitó a acercarse a aquellos “que hayan recibido más de una piedra” y también, aquellos “que no hayan recibido ninguna”. - Los que hayan recibido más de una piedra, han sido elegidos porque brillan un poco más que otros y ahora son capaces de atraer personas y cosas... es decir amor y abundancia, por lo que deben agradecer a Dios. Y dirigiéndose a un pequeño grupo de caras tristes agregó: - En cambio ustedes que no han recibido ningún regalo, han sido elegidos para mostrarnos como éramos todos nosotros la Navidad pasada... antes de conocernos... para ustedes, tenemos una sorpresa: recibirán las únicas piedras que tienen energía extra, la que le agregaron los elegidos que hoy brillan y tienen “magnetismo”. Dicho esto, cada uno regaló sus piedras, menos una que guardaron para sí. Luego, uno a uno, leyó el deseo escrito en el papel amarillo y se hicieron brindis y comentarios por lo ocurrido. Casi todos lloraban de alegría, que es lo más hermoso que le puede pasar a alguien. Desde entonces las piedras fueron: “piedras preciosas” para siempre y el sueño de Guillermo se había hecho realidad. Dejó la lapicera en el escritorio, suspiró como siempre lo hacía cuando redondeaba un pensamiento... pero de inmediato se puso en movimiento: había mucho que hacer, sólo quedaban dos semanas para la fiesta del Fobi. Nota: La fiesta se concretó tal como se describe y este cuento se leyó al finalizar la reunión, lo que fue una sorpresa para todos los presentes. Las piedras aún se conservan como uno de los “tesoros” más valiosos que cada uno posee.

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5. “LAS BELLOTAS” ... y les recomiendo mucho este libro, dijo el médico psiquiatra que estaba dirigiéndose a nosotros, un grupo de personas acorraladas por los miedos, que temerosas nos habíamos acercado a escuchar el mensaje de esperanza que había llegado, no sé muy bien cómo, hasta esta ciudad tan llena de historia. Aquí en el sur, donde comienza el fin del mundo, la Patagonia …allí encontrarán una pregunta que todos deberíamos hacernos con frecuencia...“¿Qué harías si no tuvieras miedo?” y al responderla tendrán la respuesta de lo que quieren en la vida, luego sólo resta iniciar el camino... continuó diciendo como si fuera tan fácil y sencillo. Cuando terminó la reunión me fui a mi casa pensando en todo lo ocurrido y decidí que debía leer ese libro. Al día siguiente, luego de leer la última página me dije... si no tuviera miedo querría salir solo y disfrutar de todo lo que me rodea y encontrar cosas nuevas que me den alegría. Como allí se expresa, eso sería “mi queso... mi queso nuevo”. Y como si hubiera ocurrido un milagro, salí a caminar solo y me alejé de los lugares seguros, tratando de respirar profundo y haciendo todas las otras cosas que ya había aprendido. Caminé por la costa del río Negro entre las rosas mosquetas, los árboles de bellotas y los azahares con todos los perfumes que me recordaban mis aventuras de la infancia, allí mismo en ese lugar. Por momentos parecía amenazar una crisis de pánico, entonces retrocedía cien metros y respirando profundo los volvía a andar, cada vez llegaba más lejos y seguro. Cada tanto me detenía y con un palito escribía en el barro “estoy en busca de queso nuevo”. Mientras caminaba pensaba en mis progresos, me alegraba por ello y comencé a juntar bellotas, jugaba con ellas, las pateaba, las recogía y las lanzaba hacia el río... hasta que me imaginé que eran “pequeñas muestras del queso que buscaba” y que sería bueno juntar unas cuantas para llevárselas a mis compañeros del grupo... una para Cristina que había hecho tantísimos avances; otra para Coco que sin pensarlo era un coordinador nato; ésta para Noelia tan perfeccionista y bien dispuesta; otra para Mirta a quien le cuesta valorar sus progresos y que 284


se hace el “bocho” con Pablo Echarri; esta otra para Lucinda que ahora puede ir a fiestas y a todos lados; ésta para Nancy que no sólo cambió su vida sino que además se puso más linda; ésta para Norma que aunque llegó más tarde ya tiene vida en su mirada y se la ve más animada; ésta para Guillermo siempre atento para la ocurrencia oportuna; esta otra para Sonia un poco demorada en sus progresos; ésta más grande y especial para Roxana que con su testimonio nos alentó a seguir este camino... y todas estas otras bellotas se las entregaré al doctor para que se las dé a cada uno del grupo de Bahía Blanca, como testimonio de que por aquí también estamos pudiendo. Tras ello, cerré la bolsa y emprendí el regreso. Al día siguiente salí a caminar y mi esposa me acompañó en la salida... hacía muchísimo tiempo que no lo hacíamos y esa tarde me dijo el piropo más lindo que he escuchado... ¿sabés una cosa... que es muy lindo volver a caminar a tu lado? y yo sentí que había regresado por fin de un largo viaje por el infierno del miedo, estaba vivo, feliz y con lágrimas de alegría les agradecí a cada uno, a estos amigos... los nuevos amigos, estos que Dios me dio en el sufrimiento y que por ello quiero tanto. Y me puse a pensar en mí y recordé el cuento del águila y me dije: Adrián sos como el águila del cuento que nos contó el doctor... ¿te acordás? cuando nos dijo: Sabrán ustedes que el Águila es el ave de mayor longevidad en su especie, llega a vivir setenta años. Para llegar a esa edad, a los cuarenta, deberá tomar una seria y difícil decisión. A los cuarenta años sus uñas están apretadas y flexibles, lo que le impide tomar a sus presas de las cuales se alimenta. Su pico, largo y puntiagudo se curva, apuntando contra el pecho. Sus alas están envejecidas, pesadas y sus plumas gruesas, con lo que se le hace muy difícil volar. Entonces el Águila tiene dos alternativas: morir o enfrentar un doloroso proceso de renovación, que dura 150 días. Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de la montaña, quedarse ahí en un nido cercano a un paredón y donde no tenga necesidad de volar. Después de encontrar ese lugar, el águila comienza a golpear con su pico en la pared hasta conseguir arrancarlo. Una vez arrancado, deberá esperar el crecimiento de un pico nuevo con el que desprenderá una a una sus uñas. Cuando las nuevas uñas nacen y luego crecen, comenzara a sacar, una a una sus plumas viejas. Después de cinco meses, sale

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por fin en su primer vuelo, ya renovado para vivir treinta años más. En nuestra vida, muchas veces tenemos que resguardarnos por algún tiempo y comenzar un proceso de renovación. Para poder continuar en un vuelo de victoria, es necesario desprendernos de costumbres, tradiciones y recuerdos que nos causaron dolor. Solamente libres del peso del pasado podremos aprovechar el resultado valioso que una renovación siempre trae… Tomé una bellota y mirando al río la arrojé lejos, lejos... allí donde dejé mis plumas.

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PARTE V Pensamientos - Final

Vivir sin Miedo | Parte V

PENSAMIENTOS PARA REFLEXIONAR Los siguientes son pensamientos con los que iniciamos cada una de las reuniones del Fobi a lo largo del tiempo. Muchos de ellos además, son autoafirmaciones que en varias ocasiones han sido útiles para evitar crisis, o para modificar actitudes o conductas que no proporcionaban ninguna alegría o satisfacción: “No importa lo difícil que sea: nunca, pero nunca, dejes de luchar y jamás te rindas” “Si siempre haces lo mismo... obtendrás más de lo mismo” “Sólo pierde el que se rinde” “Si buscas una mano que te ayude, la encontrarás al final de tu brazo” “Ayer es historia, mañana es un misterio, hoy es un regalo, por eso se llama: PRESENTE” “Cada mañana tengo la oportunidad de empezar de nuevo” “El poder está en ti... las fuerzas y la potencia también” “Hoy estoy fabricando los recuerdos del futuro” “No te pongas la venda antes de tener la herida” “Cuando tú naciste todos reían y sólo tú llorabas... vive como para que cuando tú mueras, todos lloren y sólo tú sonrías” “La realidad comienza en tu mente”

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Pensamientos | Final

“No puedo modificar deliberadamente mis emociones... pero sí puedo modificar mis pensamientos... y las emociones siguen a los pensamientos” “No te vayas a dormir sin haber dado 7 abrazos, 7 besos y 7 sonrisas”... este es el Sistema ABS para que tu vida no se bloquee” “Tener valor no es no tener miedo, sino saber cómo manejarlo” “Aprendemos a hacer algo, haciéndolo. No hay otra manera” “Cualquier momento es bueno para empezar y ningún momento es tan terrible como para claudicar” “Cuando pienses que las cosas no salen según tus planes... piensa que Dios tiene uno para ti” “Los únicos que ganan son los que no se rinden” “Si otros pudieron... yo también voy a poder” “La fortaleza está en la imaginación” “Sólo puede perjudicarte aquello que no enfrentas” “Miedo que se evita: crece... Miedo que se enfrenta: desaparece” FINAL 1) En numerosos pasajes, sobre todo en las cartas, se hace mención al “Arsenal Atómico”. Aquí lo reproducimos, sólo es una síntesis de lo expuesto. Va también una guía práctica para enfrentar las Crisis de Pánico.

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ARSENAL ATÓMICO tDIÁLOGO INTERIOR: modificar tAUTOESTIMA: aumentar tESTRÉS: disminuir tRESPIRACIÓN: ejercitar tRELAJACIÓN: practicar tENDORFINAS: producir t$POABS: no menos de 7 por día y CDC (Compromiso - Dedicación - Constancia): a full DAS (Dar - Amar - Servir): sin límite BOTIQUÍN DE EMERGENCIA 1. Yo puedo 2. Recordar cosas lindas 3. Si estás adentro: salí... si estás afuera: entrá 4. De esto nadie se muere 5. No dura más de 15 Minutos 6. Es imaginario 7. Respirar pausado y profundo ¿CÓMO SALIR DE UNA CRISIS INMINENTE? t Respirar profundo y pausado en tandas de 7, luego pausa y repetir otra tanda de 7 y así hasta completar 7 tandas. t Si no cede: Buscar urgentemente en el archivo de mi memoria, un momento hermoso que me haya tocado vivir... Y si busco y busco y no encuentro: Imaginarme a dónde iré y qué haré cuando tenga muchísimo dinero... Y a quién se lo regalaré cuando no sepa qué hacer con él. t Si no cede: Cambiar de aire... salir si estoy dentro de algún lugar o entrar si estoy afuera. t Si no cede: Ponerme a hacer algo con las manos: regar el jardín, cambiar de lugar las macetas, escribir una carta contando lo que me pasa o diciéndole a alguien cuánto lo quiero. t Si no cede: Pedirle a alguien cercano que me tome la mano... o si es co291


nocido o familiar que me abrace... pero que no hablen ni me digan nada, que sólo estén a mi lado. t Si no cede: Acostarme con dos almohadas en la espalda y dejar que la crisis se desarrolle y entonces: t Pensar que de esto nadie se muere. t Mirar el reloj y contar los minutos que faltan para que la crisis finalice... No duran más de 15 minutos. t Pasada la crisis: un buen baño y luego: t Escribir ¿Cómo fue?... ¿Cómo me sentí?... ¿Qué hice durante ella?... ¿Cuál fue el nivel de miedo que tuve?. Luego ponerle la fecha, la hora y una reflexión final que “me sirva” para la próxima. t No olvidar que todo lo que “me pasa” es imaginario. “MENSAJE PARA AQUELLAS PERSONAS QUE ASISTEN A ALGUIEN QUE PRESENTA UN ATAQUE DE PÁNICO O UNA CRISIS DE ANSIEDAD” t Tómele la mano y no diga nada, si se lo permite, abrácelo. t Luego pregúntele qué quiere hacer. t En lo posible no lo contradiga t Haga lo que él quiera en ese momento. t Al estar atacado por un miedo intensísimo, que no sabe a qué, no le diga: NO PASA NADA, pues a ella o a él SÍ le está pasando algo aterrador... en cambio dígale YO ESTOY AQUÍ y TE QUIERO AYUDAR. t Muéstrele una respiración LENTA Y PROFUNDA y trate de que acompañe sus movimientos y ritmo. No insista si no lo acepta. t Si le piden que se vaya, hágalo pero permanezca cerca y hágaselo saber. 2) Notas para “mis logros, apuntes y reflexiones”

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PLANILLA PARA ANOTAR “MIS” LOGROS QUIERO LOGRAR

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Colocar aquí, por ejemplo: “salir solo/a” o “Viajar a...”

LOGRADO EL (poner fecha) Colocar fecha en que lo “hice realidad”

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¿SE ACUERDAN... Y llegamos al final en este momento retomaremos un tema anunciado en el comienzo. ¿Recuerdan cuando completamos la Escala del Bienestar?. Allí elegimos un número que reflejaba nuestro estado al comenzar la lectura; pues bien, ahora haremos lo mismo, pero evaluando “¿cómo estamos hoy, luego del paso del tiempo y de todo lo leido?”. ESCALA DEL BIENESTAR FECHA..................... 0.......1........2........3.........4.........5.......6.......7.......8.........9.......10 Pésimo Muy Mal Mal Regular Bien Muy Bien Excelente No sabemos el puntaje que cada cual elegirá, ni cuánto hemos logrado de todo lo que nos propusimos. Pero de algo sí estamos seguros: lo intentamos con todo nuestro corazón y hemos pasado por todas las pruebas, y todo ello es suficiente para ser bienvenido a la:

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¿Se acuerdan de la historia que les contamos sobre San Jorge y el Dragón?... Pues bien, la leyenda continúa y nos dice: Que la Hermandad se reúne en distintos puntos de la Tierra, pero es en Endorfinland donde tiene lugar la ceremonia donde se los ordena “Gran Caballero”. En una ceremonia secreta y muy privada, reciben con todos los honores un pergamino que los acredita como tales. El que nos corresponde a cada uno, se encuentra en la próxima página, complete con su nombre el espacio en blanco y guárdelo celosamente. Cuéntenos de sus progresos e inquietudes. Como integrante de nuestra Hermandad de Guerreros Vencedores del Miedo, participará de todas las actividades que realicemos, para ayudar a todos aquellos que hoy son víctimas de miedos y otras ansiedades, y también, para festejar nuestros adelantos en pos de reconstruir un vivir feliz en la Tierra. Nuestro Chat: ingresar a nuestra página www.vivirsinmiedofobi.com los sábados a las 11.30. Allí se informarán cambios de horario. Del autor: [email protected] Los grupos FOBI integran la Red SANAR con sede en Argentina, Bolivia, Chile, México y USA. www.drfobia.com

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Vivir sin Miedo

BIBLIOGRAFÍA GENERAL Bibliografía Capítulo II “ANATOMÍA DEL MIEDO” 1- Alvano Sebastián: “Fundamentos neurobiológicos de la ansiedad” en “Actualización de Diagnóstico y Tratamiento en Psiquiatría” Ansiedad y Depresión. Año 1 n º 1. Asociación Argentina de Psiquiatras. Productos Roche. 2002. 2- Bonet J., Luchina C.: “La integración mente - cuerpo: La historia del concepto, nuestra propuesta de trabajo”. En “Estrés y procesos de enfermedad”. Arias P. y col. Editorial Biblos. 1998. Bs.As. Argentina. 3- Cardinali Daniel.: “Manual de Neurofisiología”. “Fisiología del Hipotálamo y del Sistema Límbico”. 7º Edición .Bs.As. 1977. 4- Carpenter M. B.: “Neuroanatomía Fundamentos”. 4º Edición. Editorial Carpenter M. B. Buenos Aires. Gráfica Williams & Willkins Panamericana. 1999. 5- Cia Alfredo H.: “Estrategias para superar el Pánico y la Agorafobia”. Manual Práctico de Recursos Terapéuticos”. 1º Edición. Editorial El Ateneo. Bs.As. 1999. 6- Chen Shih, Chen K, Gallaher T.: “Molecular biology of serotonin receptors. A basis for understanding and addressing brain functions”. In Psychopharmacology. The Fourth Generation of Progress. Ed. by Bloom F. and Kupfer D. Raven Press. Nueva York. USA. 7- Chopra Deepak: “Conocer a Dios”. Plaza Janes Editores S.A. Junio 2000. 8- Damasio A.: “La sensación de lo que ocurre”. Editorial Debate. Barcelona. España. 2001. 'SB[FS" .PMJOPĊ1 8JOPLVS"i#BTFTCJPMØHJDBTEFMBGVODJØOOPSNBMZQBUPMØHJDB del cerebro”. Editorial Espaxs. España. 1996. 10- Gazzaniga M.: “El pasado de la mente”. Ediciones Andrés Bello. Barcelona. España. 1999. 11- Goldar J.C.: “Cerebro Límbico y Psiquiatría”. Editorial Salerno. Bs.As. 1975. 12- Goldar J.C.: “Anatomía de la Mente”. Editorial Salerno. Bs. As. 1993. 13- Goorman J. M., Leibowitz M. R.: “A Neuroanatomical hypothesis for panic disorder”. American Journal Psychiatry n º 146 .1989. 14- Guitelman A.et al.: “Unidad Hipotálamo Hipofisiaria”. Neuroendocrinología Clínica. Edimed. Bs.As. 1983. 15- Kotliarenco M., Cáceres I., Alvarez C.: “Resiliencia: Construyendo en adversidad”. Ceanim. 1996. Chile. 16- Le Doux J. “El cerebro emocional” Ediciones Ariel - Planeta. España. 1999. 17- López Matos A.: “Vulnerabilidad genética y adquirida al estrés”. Simposio Gador. “Estrés, Ansiedad y Depresión”. X º Congreso Asociación Argentina de Psiquiatras. Bs.As. Octubre 2000. 18- López Mato A.: “Psiconeuroinmunoendocrinología”. Editorial Toquito. Bs.As. 1996. .BD-FBO1 (VZPU3i-FTUSÓPT$FSWFBVYEFM})PNFw&EJUJPOT-BĊPOU 20- Marquez M.: “Bases psiconeurobiológicas de la ansiedad”. Boletín Neurológico. Fundación Alfredo Thomson. 2001.

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Bibliografía

21- Marquez M: “Trastorno de Pánico, Ataques de Pánico” en “Actualización de Diagnóstico y Tratamiento en Psiquiatría”. “Ansiedad y Depresión”. Año 1 nº 1. Asociación Argentina de Psiquiatras. Productos Roche 2002. 22- Re R., Bautista M.: “Nuestra Salud Mental - Psicoeducación, prevención y tratamiento”. Editorial San Pablo. Bs.As. Argentina. 2002. 23- Rozados R., Bokser L.: “Psiconeuroendocrinología”. En Guitelman A. y col. Unidad Hipotálamo Hipofisiaria. “Neuroendocrinología Clínica”. Bs.As. Argentina. Edimed. 1983. 24- Soria Carlos: “Vulnerabilidad y Resiliencia”. Simposio Gador. “Vulnerabilidad al estrés, ansiedad y depresión”. X º Congreso Asociación Argentina de Psiquiatras. Octubre 2000. Referencias : (1),(2) y (3). 25- Soria Carlos: “El Genoma Humano”. XI º Congreso Asociación Argentina de Psiquiatras. Bs.As. Octubre de 2002. Bibliografía Capítulo III “NEUROTRANSMISORES” 1. Alberts B., Bray D. y otros: “Molecular biology of the cell”. 3º Edition. Editorial Garland Pub. Inc. New York. USA 1994. 2. Arias P. Bonet J.: “Estrés y Procesos de Enfermedad”. Editorial Biblos. 1998. Bs.As. 3. Bonet J.: “Vulnerabilidad a la ansiedad y la depresión y su relación con enfermedades médicas” en “Ansiedad y Depresión: mascaras de la vulnerabilidad”. nº 2. Información Científica Gador. Bs.As. 4. Boullosa O., López Mato Andrea: “Actualización sobre neurotransmisión serotoninérgica”. Información Científica Gador. Bs.As. 5. Chopra Deepak: “Las 7 Leyes Espirituales del Éxito”. Grupo Editorial Norma. Colombia. 1995. 6. Chopra Deepak: “La Curación Cuántica”. Editorial Grijalbo de C. V. 1994. México. 7. Fernández Labriola R.: “Depresión: Referencia a las Hipótesis Biológicas, Laboratorio, Diagnóstico y Tratamiento” en Psiquiatría Biológica. Fundamentos y Aplicación Clínica. Editorial Científica Interamericana. Bs.As. 1988. 8. Moizeszowicz J., Moizeszowicz M.: “Psicofarmacología y Territorio Freudiano”. Volumen I. Editorial Paidós. Agosto 2000. Bs. As. 9. Sthal S.: “Psicofarmacología Esencial”. Fascículos 1 a 6. Información Científica Gador. Bs.As. mayo 1998. Bibliografía Capítulo IV “ENDORFINAS” 1- Beck A.: “Con el amor no basta”. Editorial Paidós. España. 1990. 2- Cía Alfredo: “Estrategias para superar el pánico y la agorafobia”. Editorial El Ateneo. Bs. As. 1999. 3- Goleman D.: “La inteligencia Emocional”. Javier Vergara Editor. Bs.As. 1997. 'SB[FS" .PMJOPĊ1 8JOPLVS"i#BTFT#JPMØHJDBTEFMB'VODJØOOPSNBMZQBUPMØHJDB

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Vivir sin Miedo

del cerebro”. Editorial Espaxs. España. 1996. 5- Jampolsky G.: “Amar es liberarse del miedo”. Editorial Los libros del Comienzo. España. 1994. 6- Jampolsky G.: “Adiós a la culpa”. Editorial Los libros del Comienzo. España. 1992. 7- Jampolsky G.: “Desde la oscuridad hacia la luz”. Editorial Los libros del Comienzo. España. 1994. 8- Re R., Bautista M.: “Nuestra Salud Mental”. Editorial San Pablo. Bs.As. 2002. 9- Rojas Enrique: “¿Quién Eres?”. Editorial Planeta. Bs. As. 2002. 10- Rojas Enrique: “El Amor Inteligente”. 14º Edición. Editorial Planeta. Bs.As. 2000. Bibliografía Capítulo V “ESTRÉS” 1. Alvano S.: “El procesamiento agudo de las emociones: El miedo y la ansiedad. Nuevas líneas de investigación de fármacos ansiolíticos” en Psicofarmacología (Publicación Universitaria de Psicofarmacología y Neurociencias . Facultad Medicina UBA. Año II nº 11. Septiembre 2001. 2. Bonet J.: “El estrés como factor de vulnerabilidad: de la molécula al síndrome”. Simposio Gador XIXº Congreso Argentino de Psiquiatría de APSA. Mar del Plata. Abril de 2003. Información Científica Gador. 3. Brian L.: “Estrés, Citoquinas y Depresión”. Conferencia Central en Simposio Internacional: Diagnóstico Psiquiátrico y Neurofarmacología de la Sección de “Clasificación, Evaluación Diagnóstica y Nomenclatura” de la Asociación Mundial de Psiquiatría (WPA). Agosto 2003. Córdoba. Argentina. Información Científica Gador. 4. ButlerYeats W.: “Posttraumatic Stress Disorder: Psychology, Biology and the Manichaean Warfare Between False Dichotomies”. Editorial The American Journal of Psychiatry 152/7. July 1995. 5. Caputo J., Rodríguez Echandia E.: “Algunas consideraciones acerca de la Investigación sobre Estrés en Humanos” en Revista de Psiquiatría de la Cátedra de Psiquiatría de la Universidad Nacional de Cuyo nº 9/10. Mendoza. Diciembre de 1997. 6. Fadel D.: “Procesamiento Sistémico del Sistema Nervioso Central” en Psicofarmacología (Publicación Universitaria de Psicofarmacología y Neurociencias . Facultad Medicina UBA.). Año II nº 10 . Julio 2001. 7. Gallo J.: “De la adaptación a la Conducta”, en Rp / Internet, Año 7 nº 20. Junio 2003. 8. Gallo J.: “Estrés, tras las huellas de la memoria” en Rp / Internet Año 7 nº 21.Agosto de 2003. 9. Guyton A.: “Tratado de Fisiología Medica”. Editorial Panamericana. 3º edición. México. 1967. 10. López Mato A.: “Vulnerabilidad genética y adquirida al estrés: alteraciones de receptores cerebrales del hipocampo”. Simposio Gador X Congreso de la Asociación Argentina de Psiquiatras. Bs.As. Octubre de 2002. Información Científica Gador nº 7 “Estrés, Ansiedad, Depresión”. 11. Ray Oakley: “Cómo la mente enferma y cura el cuerpo”. Conferencia en Simposio Internacional: Diagnóstico Psiquiátrico y Neurofarmacología de la Sección de “Clasificación,

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Bibliografía

Evaluación Diagnóstica y Nomenclatura” de la Asociación Mundial de Psiquiatría” (WPA). Agosto 2003. Córdoba. Argentina. Información Científica Gador. 12. Soria C.: “Vulnerabilidad y Resiliencia”. Simposio Gador Xº Congreso de la Asociación Argentina de Psiquiatras. Bs.As. Octubre de 2002. Información Científica Gador nº 7 “Estrés, Ansiedad, Depresión”. 13. Stagnaro J.: “Vulnerabilidad al estrés, ansiedad y depresión”. Simposio Gador Xº Congreso de la Asociación Argentina de Psiquiatras. Bs.As. Octubre de 2002. Información Científica Gador nº 7 “Estrés, Ansiedad, Depresión”. 14. Zieher L.: “El procesamiento neurobiológico de las emociones remodela la estructura/ función en amplios sectores del cerebro” en Psicofarmacología (Publicación Universitaria de Psicofarmacología y Neurociencias. Facultad de Medicina UBA.). Año II nº 11. Septiembre 2001. 15. Zieher L.: “De la neurona a la mente IIº: La integración Sistema Nervioso- Cuerpo Mente” en Psicofarmacología. (Publicación Universitaria de Psicofarmacología y Neurociencias . Facultad Medicina UBA). Año II nº 10. Julio 2001. Bibliografía Capítulo VI “LOS MANDATOS” 1- Chopra Deepak: “Conocer a Dios”. 1º Edición. Editorial Plaza & Janes. España. 2000. 2- Ey Henri: “Tratado de Psiquiatría”. 8º Edición. Editorial Toray Masson. España 1978. 3- Ey Henri: “La Conciencia”. 1º Edición. Editorial Gredos. España. 1976. 4- Le Doux Joseph: “El Cerebro Emocional”. Editorial Planeta. Bs. As. 1999. 5- Rojas Enrique: “¿Quién eres?”. Editorial Planeta. Buenos Aires. 2002. 6- Segú H.: “Conductas sexuales inadecuadas”. Lumen Editorial. Bs.As. 2000. Bibliografía Capítulo VII “LA HISTORIA PERSONAL” 1- Aceves Octavio: “La Felicidad esta en Ti”. Ediciones Martínez Roca S.A. 1999. Barcelona .España. 2- Beck A.: “Con el amor no basta”. Editorial Paidós. 1990. Barcelona. España. 3- Davey G. C. L.: “Classical conditioning and the acquisition of human fears and phobias: A review and synthesis of the literature” Advances in Behavior Research and Therapy .1992. 4- Gurmendez C.: “Teoría de los Sentimientos”. Fondo de Cultura Económica. Madrid. 1981. 5- Jampolslky Gerald G.: “Amar es liberarse del miedo”. Editorial Los libros del Comienzo. 1994. Madrid. España. 6- Festa P.: “Por amor, solo por amor”. Editorial Grupo Zeta. 1997. Barcelona. España. 7- Marías J.: “Mapa del mundo personal” Alianza Editores. 1993. Madrid. España. 8- Rojas E.: “Remedios para el desamor”. Ediciones Temas de Hoy. Madrid. 1994. 9- Rojas E.: “El amor Inteligente”. Ediciones Temas de Hoy .14º edición para Argentina. Editorial Planeta. 2000. Bs.As. Argentina.

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10. Marina J. A.: “Teoría de la Inteligencia Creadora”. Editorial Anagrama. 1993. Barcelona. España. 11. Ortega y Gasset J. : “Sobre el Amor”. Editorial Plenitud. 1957. España.“Estrés, tras las huellas de la memoria” Rp /Internet, pagina 2 y 3 Año 7 nº 21. Agosto de 2003. Laboratorio Gador S.A. Bibliografía Capítulo IX “EL DIÁLOGO INTERIOR” 1. Barlow D.: “Anxiety and its disorders: The Nature and Treatment of Anxiety and Panic”. The Guilford Press. New York. 1988. 2. Beck A.T., Emery G.: “Anxiety Disorders and Phobias: a Cognitive Perspective”. Basic Books. New York. 1985. 3. Beck A. T., Freeman A.: “Cognitive Therapy of Personality Disorders”. Guilford Press. New York. 1990. 4. Benson H., Prados W.: “El poder de la Mente” Editorial Grijalbo. Barcelona. 1989. 5. Canals Gustavo A.: “El proceso de nuestro conocer postula un nuevo paradigma epistémico” (1) y (2) Ensayo. Universidad de Oxford UK. 2002 6. Cía Alfredo.: “Estrategias para superar el Pánico y la Agorafobia”. Editorial El Ateneo. Bs.As. 1999. 7. Cía Alfredo: “La ansiedad y sus Trastornos”. Editado por Productos Roche S. A. Q e I. Bs.As. 2002. 8. Cía Alfredo: “Ansiedad, estrés, pánico, fobias”. Estudio Sigma. Bs.As. 1994. 9. Jampolsky Gerald: “Amar es liberarse del miedo”. Editorial Los Libros del Comienzo. Madrid. 1994. 10. Le Doux J.: “El cerebro emocional”. Editorial Planeta. Bs.As. 1999. 11. Liaño H.: “Cerebro de Hombre, Cerebro de Mujer” Ediciones B S. A. Barcelona. 1998. 12. Magoun H. W.: “El Cerebro Despierto”. Editorial La Prensa Médica Mexicana. México. 1980. Bibliografía Capítulo X “AUTOESTIMA” 1. Aceves Octavio: “La Felicidad esta en Ti”. Ediciones Martínez Roca SA. Barcelona. España. 2. Beck A.: “Con el amor no basta”. Editorial Paidos. 1990. Barcelona. España. 3. Festa P.: “Por amor, sólo por amor”. Editorial Grupo Zeta. 1997. Barcelona. España. 4. Jampolslky Gerald G.: “Amar es liberarse del miedo”. Editorial Los libros del Comienzo. 1994. Madrid. España. 5. Rojas E. “Remedios para el desamor” Ediciones Temas de Hoy. Madrid. España. 1994. 6. Rojas E.: “El amor inteligente”. Editorial Planeta. 14º Edición. Bs.As. 2000. 7. Ortega y Gasset J.: “Sobre el Amor”. Editorial Plenitud. 1957. Madrid. España. Bibliografía Capítulo XI “FRACCIONAR Y DESMENUZAR”

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Bibliografía

1. Barlow D.: “Ansiety and its disorders: The Nature and Treatment of Ansiety and Panic”. The Guilford Press. New York. 1988. 2. Beck A.T., Emery G.: “Ansiety Disorders and Phobias: a Cognitive Perspective”. Basic Books. New York. 1985. 3. Beck A. T., Freeman A.: “Cognitive Therapy of Personality Disorders”. Guilford Press. New York. 1990. 4. Cía Alfredo.: “Estrategias para superar el Pánico y la Agorafobia”. Editorial El Ateneo. Bs.As. 1999. 5. Cía Alfredo: “La ansiedad y sus Trastornos” Editor Productos Roche S. A. Q e I. Bs.As. 2002. 6. Cía Alfredo: “Ansiedad, estrés, pánico, fobias”. Estudio Sigma. Bs.As. 1994. 7. Jampolsky Gerald: “Amar es liberarse del miedo”. Editorial Los Libros del Comienzo. Madrid. 1994. 8. Wolpe J.: “The Practice of Behavior Therapy”. Penguin Press. New York. 1969. Bibliografía Capítulo XII “RESPIRACIÓN Y RELAJACIÓN” 1. Benson H., Klipper M.: “Relajación”. Editorial Pomaire. España. 1997. 2. Cia Alfredo: “Estrategias para superar el Pánico y la Agorafobia”. Editorial El Ateneo. Buenos Aires .1999. 3. Chopra Deepak: “La Curación Cuántica”. Editorial Grijalbo. México. 1994. 4. Chopra Deepak: “Conocer a Dios”. Editorial Plaza Janes. Barcelona. Julio 2000. 5. Chopra Deepak: “El camino de la Abundancia”. Javier Vergara Editor SA. Bs.As. 1995. 6. Guyton Arthur: “Tratado de Fisiología Medica”. Editorial Interamericana S.A. 3º Edición. México. 1967. 7. Cossio P., Fustinoni O., Rospide P., Martínez F.: “Medicina Interna”. CTM Servicios Bibliográficos. Sexta Edición. Argentina. 1991. 8. Fauci A. S.: “Manifestaciones principales y presentación de las enfermedades”. Separata de la obra “Harrison: Principios de Medicina Interna”. 14º Edición McGraw - Hill Interamericana de España. Fascículo IIº. 1998. Laboratorio Casasco. Servicio Actualización Medica Fascículo 7. 9. Smith J.: “Entrenamiento Cognitivo - Conductual para la relajación”. Desclee de Brouwer. España. 1992. 10. Re R., Mateo B.: “Nuestra Salud mental” Editorial San Pablo. Bs.As. 2002. Bibliografía Capítulo XIII “FABRICAR LOS SÍNTOMAS, MANEJARLOS Y CONTROLARLOS” 1. Barlow D., Craske M.G.: “Mastery of your Anxiety and Panic”. Graywind Publications. NewYork. 1989. 2. Barlow D. “Anxiety and its disorders: The nature and treatment of Anxiety and Panic”. Guilford Press. New York. 1988.

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Vivir sin Miedo

3. Benson H., Prado W.: “El poder de la Mente”. Editorial Grijalbo. España. 1997. 4. Cía A.: “Estrategias para superar el Pánico y la Agorafobia”. Editorial El Ateneo. Bs.As. 1999 5. Cía A.: “La Ansiedad y sus Trastornos”. Edición Productos Roche. Buenos Aires .2002. 6. DSM IV. “Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales”. Editorial Masson. España. 1997. 7. Bonnet E. “Medicina Legal” Tomo II Asfixiólogia. López Libreros Editores. Bs.As. 1980. 8. “Clínicas Medicas de Norteamérica - Psiquiatría en Medicina Interna”. Editorial Interamericana. México. Julio 1979. Bibliografía Capítulo XIV “AFRONTAR Y LIBERARSE” 1. Barlow D.: “Anxiety and its disorders: The nature and treatment of Anxiety and Panic”. Anxiety and Panic”. Guilford Press. New York. 1988. 2. Benson H., Prado W.: “El poder de la Mente”. Editorial Grijalbo. España. 1997. 3.Cía Alfredo: “Estrategias para superar el Pánico y la Agorafobia”. Editorial El Ateneo. Buenos Aires. 1999. 4. Cía A.: “La Ansiedad y sus Trastornos” Edición Productos Roche .Buenos Aires. 2002. 5. Re R., Mateo B.: “Nuestra Salud mental”. Editorial San Pablo. Bs.As. 2002. Bibliografía Capítulo XV “PSICOFARMACOS” 1. Cía A.: “Diferencias Farmacocinéticas y Farmacodinámicas entre Clonazepan y Alprazolan, en el tratamiento del Trastorno de Pánico con o sin Agorafobia”. Revista Argentina de Psiquiatría Biológica. Vol. II nº 9 y 10. Bs.As. 1995. 2. Cía A.: “Estrategias para superar el Pánico y la Agorafobia”. Editorial El Ateneo. Bs.As. 3. Cía A.: “La Ansiedad y sus Trastornos”. Edición Productos Roche .Bs.As. 2002. 4. Cía A., Fernández Labriola R., Moizeszowicz J.: “Task Force sobre Trastornos de Ansiedad Documento nº 1 Milnacipran en Trastornos de Ansiedad” en “Psiquiatría Biológica 2002”. Compilado por Fernández Labriola R. y Kalina E. Editorial Gabas. Bs.As. 2002. 5. Cía A.: “Fobias Farmacoterapia” en “Ansiedad y Depresión” “Actualización de diagnóstico y tratamiento en Psiquiatría” Año 1 nº 2 Publicación de Asociación Argentina de Psiquiatras. Bs.As. 2002. 6. Kalina E.: “Farmacoterapéutica con Clonazepan. Nuestra Experiencia” en “Psiquiatría Biológica Argentina 2001” de Fernández Labriola F., Kalina E. (compiladores). Cangrejal Editores. Bs.As. 2001. 7. Kalina E.: “Nuevos esclarecimientos acerca de la problemática actual de las depresiones: clínica y farmacoterapéutica” Revista Psiquiátrica. Año 1997 nº 1. Bs.As. 8. Fernández Labriola R.: “Los múltiples Usos del Clonazepan” en “2000 Neuropsicofarmacología”. Cangrejal Editores. Bs. As. 2000. 9. Moizeszowicz J.: “Psicofarmacología Psicodinámica”. Volumen IV. Editorial Paidos. Bs. As. 1998.

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Bibliografía

10. Moizeszowicz J., Moizeszowicz M.: “Psicofarmacología y Territorio Freudiano”. Editorial Paidós. Bs.As. 2000. 11. Moizeszowicz J.: “Psicofarmacología Psicodinámica- Aspectos Neuroquímicos y Psicológicos”.Editorial Paidós. Bs.As. 1982. 12. Wikinski S.: “Tratamiento Farmacológico de Trastorno de Pánico y TAG” en Revista de Psicofarmacología Año II nº 9. Mayo 2001. Bs.As.

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Comentario de Lectores

COMENTARIO DE LECTORES Los siguientes comentarios sobre “VIVIR SIN MIEDO”, fueron extraídos de las paginas correspondientes de www.cuspide.com y www.tematika.com Allí, los lectores en forma espontánea, formulan comentarios que: “se transcriben textualmente...” Rubén Darío M.(empleado): “Es un libro muy bueno, que de forma clara ayuda a quienes sufrimos el problema del miedo. La manera en que esta escrito hace que su lectura sea agradable y entendible brindando una enorme ayuda”. Nahuel (Creativo Publicitario): “Un libro profundo, que penetra en los abismos más intensos del ser humano con total sencillez. Un libro de autoayuda, pero también de aprendizaje. Un viaje de ida hacia un espectro tan misterioso como sorprendente. La parte gráfica impacta y hace más llevadera la lectura”. Graciela P. (docente): “Es un libro muy claro y didáctico. Describe con tanta precisión los síntomas y sensaciones del mundo que se forma adentro de los que padecemos fobias o pánico, que el lector – paciente siente que alguien le puso palabras científicas a lo que no podíamos explicar. Brinda comprensión, un lugar, respeto por el dolor del otro, y estrategias científicas para manejar nuestros síntomas hasta superarlos. Ayuda científicamente a recuperar la alegría de vivir siendo uno mismo. Las ilustraciones excelentes ya que con un grado de humor desdramatizan y emiten mensajes directos”. Silvia D.(ama de casa): “Este libro de Vivir sin Miedo, del doctor Enrique Guillermo Suárez es excelente, es el mejor libro de auto ayuda que leí, yo que tengo fobia social me esta ayudando muchisimo se lo recomiendo a todas las personas que estén pasando por lo mismo, fobias , miedos ,etc., de verdad ayuda un montón” Raúl (médico): “Excelente! hasta los colegas que no estamos en el tema debemos leerlo. No solamente sirve para refrescar conocimientos, sino que nos sirve para ayudar a

nuestros pacientes. Todos estamos reflejados en algunos de sus capítulos. Un gran libro de autoayuda. Felicito a su autor por su claridad para escribir”. Nicolás S. J. (estudiante) ”Una persona que vive el común denominador del MIEDO, esta sumergida en un infierno del cual pocas personas saben aconsejar como salir. Gracias a que leí este libro hoy les puedo decir que me cambio la vida, que hubo un clic, y que esto no es inexplicable. Este libro brinda herramientas sumamente accesibles y convencionales para mejorar su calidad de vida. Yo recomiendo este libro con total autoridad, pues salí, gracias a el, del séptimo infierno del Dante”. MAIL RECIBIDO MIENTRAS PREPARÁBAMOS LA 4º REIMPRESIÓN, EN SEPTIEMBRE DE 2006 “PUEDO VIVIR SIN MIEDO, ENTENDERÁ ¡QUE ESTOY FELIZ! Querido doctor: Tal vez le parezca extraño el asunto... pero sucedió así. Mire, le cuento, mi hermana, estudiante de psicología de la Universidad de Tucumán, me regalo el libro, ya que yo era fóbica desde hace 10 años.¡¿Me entiende, el tiempo que viví, solo de pensamientos negativos?! Sucede que tenia que viajar si o si a Buenos Aires, ya que operaban a mi madre de la columna y “la única que podía ir” era yo, entre comillas la única que podía ir, ya que mi hermana, era la única que sabia de mi serio problema y ella resolvió regalarme el libro y enviármelo a San Juan (me olvide de contarle que vivo en San Juan, tengo 40 años, y cuatro hijos maravillosos). Ella solo pretendía que hiciera una sencilla lectura del mismo, pero sucedió que mientras mas incursionaba, en el mismo libro lo dice... si llegó hasta acá, es porque puede!... comencé mi etapa de recuperación. Como usted dice, solo estoy escalando cerros, pero estoy convencida que podré llegar a la cima. Estoy feliz Doctor, pude subir al subte (previo ejercicio de relajación, lo hago todos los días cuatro veces, a las siete respiraciones profundas, tan es así que lo estoy incorporando) además deje a mis amigas las pastillas, ya no las llevo escondidas en todos los rincones posibles del bolso, ni un tranquilizante... solo respiro y de veras que no me morí cuando sufría de los

ataques de pánico... ¡ah! y lo ¡más! subí a un ascensor diminuto, para dos personas, en Suipacha al 42 en Buenos Aires ¡hasta el cuarto piso!, ¡jajajaja!, ¿cómo pude vivir con miedos atroces tanto tiempo?! Bueno y lo mas importante es que soy alumna de 5º año de la carrera de Trabajo Social, y estoy haciendo la residencia en salud, en el servicio de Pediatría del Hospital Marcial Quiroga, me estoy capacitando en Educación para la Salud y creo que en febrero o marzo me estoy recibiendo de licenciada y estoy con serias intenciones de proponerle conformar un grupo en San Juan. No se como iniciar el pedido solo se, que si funciona como ALCO, en donde los gordos recuperados son los que dirigen al grupo, me animaría hacerlo. Se que este mail es re loco, re apurado, pero si usted supiera que he puesto en practica cada uno de los pasos que propone en el libro, y que sirve, que finalmente puedo vivir sin miedo, entenderá ¡que estoy feliz!... Desde San Juan, un gran abrazo... ANSICE CARTAS RECIBIDAS con Motivo del 10º cumpleaños de EL FOBI, mientras preparábamos la 6º Edición. Querido doctor: Por dónde empezar para agradecer tanto. Hace 10 años que padezco de pánico, con algunas pausas, pero que clásicamente retornaban ante el comienzo de las clases (soy mamá y docente). Estaba en el shopping (mi segunda casa según mis amigos), entré en la librería y ahí esperándome exhibido todo cerradito, me esperaba un libro, con su título “VIVIR SIN MIEDO”, dudé si llevarlo o no, estaba entre miles de libros sobre el tema, el vendedor rasgó la cubierta que lo protegía y al leer el índice, sin dudarlo lo compré. Ya en casa, al leerlo, no podía creer que alguien explicara tan perfectamente lo que me sucedía y además decir a todos los que nos rodean, cómo ayudarnos. Un día le mandé un mail al autor, lo hice por hacer, como quien dice, “el último manotazo de ahogado” y créanme ¡Jamás imaginé que me contestaría! Me sentí re-importante al ocuparse de mi situación e informarme del FOBICHAT. Ese grupo de amigos, de corazón tan grande, que nos ayudan sin nada a cambio. Llevo un año con ustedes y son increíbles los cambios que tuve, pasé por alegrías,

tristezas, angustias, esperanzas, pero sobretodo, puedo decir que hoy me siento FELIZ. Y se lo atribuyo a usted, a Conce y a Guido, a mí y a mi familia que tanto me ayudan. ¿Mis logros? Puedo salir sola, frecuento lugares que antes ni me imaginaba: por ejemplo ir a la cancha (me encanta), a recitales (venciendo viejos mensajes: “no son lugares para vos, son peligrosos”); ¡crucé el puente Rosario – Victoria! (antes con sólo pensarlo me daba el ataque), ¡me siento tan libre! Y más: pude viajar, manejar y disfrutarlo: pasé por miles de puentes y el broche de oro: el túnel subfluvial (todo trasmitido por wi-fi a Guido, Conce, Gloria, Champo, Gabi, Fer y Elena del Fobichat). ¿Qué más decir? Que lo creado por usted: el libro y el Fobichat, con los fantásticos amigos “online”, a los que no conozco personalmente: me devolvieron la vida y eso es ¡maravilloso! Doctor, muchas gracias, estoy orgullosa de tenerlos allí. Le mando un gran abrazo, mejor dicho: siete ABS, míos y de mi familia. ¡GRACIAS! CARINA

desde Rosario, Provincia de Santa Fe, Argentina. ¡Hola Doc! “Escribo esta carta porque siento la necesidad de contar en algún lado cómo han ido cambiando las cosas en mi vida de un tiempito a esta parte. Durante mucho, muchísimo tiempo (18 años aproximadamente) me sentí muy muy mal, cada vez peor y peor, me hundía en el fango, no podía aferrarme a nada ni a nadie para sostenerme, no podía salir, mi pozo era cada vez más profundo, más oscuro y las fuerzas para intentar salir, eran cada vez menos, al final ya ni fuerzas había y en este punto sólo me ayudaría ¡un milagro! Y ese milagro llegó a mi vida de la mano de El Fobi… Ese día vi el inicio del camino por recorrer y me convencí de que las cosas podían ser diferentes. Desde entonces, todo cambió hasta hoy, y sólo pasó un mes: tengo ganas, planes, proyectos y energía. Creo que volveré a ser la persona que una vez fui: feliz, libre, sin miedos y con ganas de vivir plenamente. Así es que ¡allá vamos! ¡manos a la obra!” Hoy a tres años de aquella carta, a un día de cumplir 36, puedo y quiero decirle: ¡lo he logrado! gracias al libro “Vivir sin miedo”, a usted y a las reunio-

nes de los jueves a las que tuve oportunidad de concurrir, pero sobretodo a mis distantes y tan queridos compañeros del Fobichat de todos los sábados a las 11:30. ¡GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS! No me cansaré de darles las gracias porque nunca me olvidaré de dónde vengo para saber siempre a dónde quiero ir. ¡7 ABS! y ¡FELIZ CUMPLEAÑOS FOBI! Gaby Puerto Madryn, Provincia de Chubut, Argentina.

Vivir Sin Miedo Descubra Una Nueva Manera de Vivir Sin Panico, Fobias, Miedos o Ansiedad - Enrique Suarez

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