Vértebras cervicales vértebras cervicales
La columna vertebral
Una vértebra cervical
Latín
[ TA TA ]: ]: vertebrae cervicales
TA
A02.2.02.001
Enlaces externos Gray
Tema 21 # 97
Las vértebras cervicales son las que se sitúan en el cuello cuello permitiendo permitiendo su movilidad, entre el cráneo con el cual soporta su peso y las vértebras torácicas. torácicas. En humanos se disponen en número de siete, y se denominan C1 (atlas), C2 (axis), C3, C4, C5, C6 y C7 (vértebra prominente). Durante la flexión lo hacen en 40°, mientras que en extensión 75°. Poseen foramenes transversos, lugar donde pasa la vena y arteria vertebral. vertebral. Las dos primeras vértebras cervicales tienen una morfología especial, por lo tanto se denominan atípicas y sus nombres son respectivamente atlas y axis axis..
La séptima cervical también se llama vértebra prominente, por la mayor longitud de su apófisis espinosa. La vértebra cervical tipo está conformada por las siguientes partes:
Cuerpo: es alargado tranversalmente. Presenta las siguientes caras: superior, inferior, anterior, posterior, lateral. En la unión de su cara superior, anterior y laterales, se puede observar, a cada lado, una apófisis en forma de gancho, denominada apófisis unciforme. Foramen vertebral: es triangular de base anterior, con un eje transversal superior al eje anteroposterior. Apófisis tranversa: presenta en sus haces un agujero denominado foramen tranverso por donde pasa la arteria vertebral y la vena homónima. Esta apófisis, se implanta por medio de dos raíces, una anterior, que se une al cuerpo de la vértebra, y otra posterior, que se une al pedículo. El extremo libre (vértice) de la apófisis termina en dos tubérculos (anterior y posterior) que prestan inserción a distintos elementos. Apófisis articular: en número de tres (dos superiores y uno inferior), son oblicuas y de superficie articular plana. Las superiores apuntan hacia atrás y arriba, mientras que las inferiores, apuntan hacia adelante y abajo. Las apófisis articulares superiores nacen del pedículo de la vértebra, inmediatamente posteriores a la apófisis transversa. Apófisis espinosa: es corta y en la mayoría de los casos, aunque no en todos, está bifurcada, el vértice puede estar inclinado hacia la derecha o a la izquierda.
Índice
1 Elementos que forman el arco vertebral 2 Vértebras o 2.1 Primera vértebra cervical o Atlas o 2.2 Segunda vértebra cervical o Axis o 2.3 Tercera vértebra cervical o 2.4 Cuarta vértebra cervical o 2.5 Quinta vértebra cervical o 2.6 Sexta vértebra cervical o 2.7 Séptima vértebra cervical 3 Véase también
Elementos que forman el arco vertebral
Pedículo: sus escotaduras (2) tienen casi el mismo tamaño. Lámina: de forma cuadrilátera (1), más larga que ancha. Lámina densa: se encuentra en la región interna de las vértebras cervicales, fácilmente ubicables por los nervios bulbo-raquídeos.
Vértebras Primera vértebra cervical o Atlas Artículo principal: Atlas (anatomía)
El atlas es una vértebra incompleta; en efecto, no tiene verdadero cuerpo vertebral que está representado por la apófisis odontoides del axis. Los elementos restantes están más o menos reducidos. La apófisis espinosa está representada por el tubérculo posterior. Las apófisis articulares, por las cavidades glenoideas, por una parte, y por otra, por las carillas planas situadas en la cara inferior de las masas laterales. La lámina, por el arco posterior. Los pediculos, por las partes laterales de este arco, en donde se ve el canal de la arteria vertebral. Está constituida por dos masas laterales, unidas entre sí por un arco anterior y otro posterior. Las masas laterales tienen la forma de un seguimiento de cilindro colocado verticalmente. La cara superior presenta una carilla articular de forma elipsoide: es la cavidad glenoidea del atlas. Su eje mayor, oblicuo hacia delante y adentro, es dos veces más largo que su diámetro transversal. Se articula con el cóndilo del occipital. La cara inferior tiene una segunda carilla articular para el axis. Ésta es plana o muy ligeramente cóncava, mirando oblicuamente hacia abajo y adentro. De la cara externa nacen las apófisis transversas. La cara anterior y la cara posterior se continúan cada una con la extremidad del arco correspondiente. La cara interna es muy rugosa. Presta inserción al ligamento transverso. El arco anterior. Aplanado atrás, presenta: En la parte anterior, una pequeña eminencia central, el tubérculo anterior del atlas; En la parte posterior, y siempre en la línea media, una carilla articular, oval, de eje mayor transversal, destinada a articularse con la apófisis odontoides del axis. El arco posterior presenta, como el arco anterior, en la línea media y parte posterior, una eminencia mamelonada llamada tubérculo posterior del atlas. En la cara superior de su extremidad externa se ve un canal(surco de la arteria vertebral), en el que se aloja la arteria vertebral.
Segunda vértebra cervical o Axis Artículo principal: Axis (anatomía)
Lo que esencialmente caracteriza al axis es la presencia, en la cara superior de su cuerpo, de una eminencia vertical, la apófisis odontoides o diente del axis. En esta apófisis hemos de distinguir, examinándola de abajo arriba: La base, el cuello, el cuerpo y el vértice. En sus caras anterior y posterior se ven dos carillas articulares: la anterior, para el arco anterior del atlas, la posterior, para el ligamento transverso. La apófisis espinosa es muy ancha; las apófisis transversas son cortas y su vértice no está bifurcado..
Tercera vértebra cervical es la vértebra donde se concentra la mayor parte del equilibrio.
Cuarta vértebra cervical Quinta vértebra cervical Sexta vértebra cervical En la apófisis tranversa tiene un tubérculo anterior muy desarrollado llamado tubérculo de Chassaignac, el cual es un punto quirúrgico para ubicar a la arteria carótida primitiva.
Séptima vértebra cervical También se le llama prominente y se caracteriza por su larga apófisis espinosa, no bifurcada. Además, se diferencia de las otras vertebras cervicales ya que la Arteria Vertebral NO pasa por el foramen transverso, solo pasa la Vena Vertebral.
En anatomía humana, las vértebras torácicas o vértebras dorsales son las doce vértebras de la parte central de la columna vertebral. Están a continuación de las cervicales y son más gruesas y menos móviles que éstas. A ellas les continúan las vértebras lumbares. Al proceder de la primera vértebra torácica hasta la duodécima, cada una es más voluminosa que la anterior. El tamaño, la forma y el número de las vértebras de otros animales vertebrados varía, por ejemplo, los condrictios, como los tiburones y las rayas, tienen un esqueleto cartilaginoso.1 La rotura del disco intervertebral es más frecuente en las regiones torácicas y sacras, bien sea por una lesión o por un proceso inflamatorio.2
Índice
1 Características 2 Vértebras torácicas peculiares o 2.1 Primera vértebra torácica (T1) o 2.2 Segunda vértebra torácica (T2)
2.3 Tercera vértebra torácica (T3) o 2.4 Cuarta vértebra torácica (T4) o 2.5 Quinta vértebra torácica (T5) o 2.6 Sexta vértebra torácica (T6) o 2.7 Octava vértebra torácica (T8) o 2.8 Novena vértebra torácica (T9) o 2.9 Décima vértebra torácica (T10) o 2.10 Undécima vértebra torácica (T11) o 2.11 Duodécima vértebra torácica (T12) 3 Imágenes adicionales 4 Véase también 5 Referencias o
Características Véase también: Términos anatómicos de localización
Típica vértebra torácica, vista desde arriba: las flechas apuntan a los pedículos. Las vértebras torácicas tienen características que comparten con las otras vértebras, así como características peculiares a su grupo vertebral. El cuerpo de cada vértebra torácica de la columna vertical soporta el peso de la vértebra que se encuentra encima (y del cráneo), mientras que el arco permite crear una zona en forma de canal a lo largo de la columna que protege la médula espinal. El cuerpo de la vértebra — la parte más voluminosa de la vértebra — localizado en el medio de la región torácica, es ancho tanto antero-posterior como transversalmente, y un tanto más grueso por detrás que por delante.3 El cuerpo es cilíndrico, con la forma de un corazón, con dos carillas articulares, superior e inferior. Cada carilla articula con la carilla inferior de la vértebra que está por encima y con la carilla superior que está por debajo. Se distinguen de las restantes vértebras de la columna por el hecho de que presentan facetas costales a cada lado del cuerpo, con las que se articulan con las costillas, así como facetas en las apófisis transversas para la articulación con los tubérculos de las costillas, con la excepción de la vértebra 11va y 12va. Los pedículos, los pilares a cada lado del cuerpo vertebral,1 a cada lado de la apófisis espinosa central,4 se dirigen hacia atrás y un tanto hacia arriba, y los nódulos inferiores son de mayor tamaño y profundidad que en cualquier otra región de la columna vertebral.
Típica vértebra torácica, vista desde arriba: las flechas apuntan a las láminas. Las láminas por detrás de los pedículos que forman la mayor parte de la mitad postolateral del agujero raquídeo.1 Son anchas, gruesas y se sobreponen por encima de aquella de la subsiguiente vértebra, como tejas en un techo. El agujero raquídeo o vertebral, es relativamente pequeño y de forma sensiblemente circular. La apófisis espinosa es larga, triangular y se dirige oblicuamente hacia abajo, y termina en una extremidad tuberculada.1 Esta apófisis espinosa se sobrepone una a la otra a partir de la quinta hasta la octava, perdiendo la dirección oblícua de las restantes. Cada una de las apófisis articulares superiores (hay una a cada lado) es una placa plana de hueso que se proyecta desde la unión de los pedículos y las láminas, se dirige hacia atrás y levemente hacia afuera, por medio del cual se articula con el hueso adyacente por arriba. Cada una de las apófisis articulares inferiores (hay una a cada lado) está fusionada también con las láminas, y sus facetas articulantes se dirigen hacia adelante y hacia el medio, para encajar con la apófisis superior de la vértebra por abajo. Las apófisis transversas — una derecha y otra izquierda — parten del arco detrás de la apófisis articular superior y los pedículos. Son muy anchas, fuertes, considerablemente largas, e inclinadas hacia atrás y abajo, y terminan en una extremidad cuboidal, delante de la cual hay una superficie pequeña y cóncava para la articulación del tubérculo de la costilla respectiva. No se observa ningún agujero en esta apófisis, como sí lo tienen las vértebras cervicales.
Vértebras torácicas peculiares
La primera y luego desde la novena hasta la duodécima vértebra y sus peculiaridades. La primera vértebra torácica, denominada T1, es atípica, en comparación con las otras vértebras torácicas. Las vértebras T9 a T12 son igualmente atípicas, debido a sus características peculiares.
Primera vértebra torácica (T1) El cuerpo de la primera vértebra torácica es ancho transversalmente, su superficie superior es cóncava y con labios ascendentes en cada lado. En el borde superior de su cuerpo hay una fosita costal completa para la cabeza de la primera costilla y, más abajo, una semicarilla en el borde inferior para la parte superior de la cabeza de la segunda costilla. Las superficies articulares superiores se dirigen hacia atrás y la apófisis espinosa es gruesa, larga y casi horizontal. Las apófisis transversales son también largas y las hendiduras vertebrales son más profundas que en las otras vértebras torácicas.
Segunda vértebra torácica (T2) Presenta todas las características de una vértebra tipo, se diferencia al igual que la T3, T4, T5 por tener su carilla articular de la apófisis transversa cóncava, y excavada.
Tercera vértebra torácica (T3) Presenta todas las características de una vértebra tipo, se diferencia al igual que la T2, T4, T5 por tener su carilla articular de la apófisis transversa cóncava, y excavada.
Cuarta vértebra torácica (T4)
Presenta todas las características de una vértebra tipo, se diferencia al igual que la T2, T3, T5 por tener su carilla articular de la apófisis transversa cóncava, y excavada.
Quinta vértebra torácica (T5) Presenta todas las características de una vértebra tipo, se diferencia al igual que la T3, T4, T2 por tener su carilla articular de la apófisis transversa cóncava, y excavada.
Sexta vértebra torácica (T6) Presenta todas las características de una vértebra tipo, se diferencia al igual que la T7, T8 y T9, por poseer carillas articulares planas en la apófisis transversa. (articulares superiores)
Octava vértebra torácica (T8) Presenta todas las características de una vértebra tipo, se diferencia al igual que la T6, T7 y T9, por poseer carillas articulares planas en la apófisis transversa. (articulares superiores)
Novena vértebra torácica (T9) La vértebra T9 puede no presentar facetas articulares inferiores para la décima costilla de cada lado. En algunos individuos puede presentar dos carillas articulares en cada lado. De ser así, la T10 tendrá semifacetas en vez de facetas completas para la décima costilla. Se diferencia al igual que la T7, T8 y T6, por poseer carillas articulares planas en la apófisis transversa. (articulares superiores)
Décima vértebra torácica (T10) La vértebra T10 tiene — con la excepción ya mencionada — sólo una faceta articular entera (no semifaceta) a cada lado, localizada parcialmente sobre la superficie lateral del pedículo. No posee facetas inferiores, se aprecia en la pieza ósea, al palpar una pequeña tuberosidad, ya que las costillas inferiores a la décima sólo poseen una carilla en su cabeza.
Undécima vértebra torácica (T11) En la vértebra T11, el cuerpo se acerca en forma y tamaño a la de las vértebras lumbares. Las facetas articulares para las costillas son de mayor tamaño que en las vértebras superiores y están localizadas generalmente sobre los pedículos, los cuales son a su vez más resistentes que en el resto de la región torácica. El apófisis espinoso es corto y casi horizontal. La apófisis transversa es también corta, tuberculada en su extremidad y no tienen facetas articulares.
Duodécima vértebra torácica (T12)
La vértebra T12 es de características muy similares a la T11, pero se distingue de ella por sus superficies articulares inferiores, que son convexas y se dirigen hacia los lados para cuadrar con la de la primera vértebra lumbar. Por la forma general del cuerpo, las láminas y la apófisis espinosa, la cual se asemeja a una vértebra lumbar, y por cada apófisis transversa, se puede dividir en tres elevaciones: una superior, una inferior — que corresponden con las apófisis accesorias y mamilares de la vértebra lumbar — y un tubérculo lateral. Se pueden presenciar remanentes de estas tuberosidades en las apófisis transversas de las vértebras Las vértebras lumbares (vertebrae lumbales) son los segmentos más macizos de la columna vertebral, tanto más voluminosas son en cuanto más abajo esté situada en la columna lumbar. El disco intervertebral es espeso, ocupando un tercio del cuerpo vertebral, lo que constituye un factor de movilidad. Se caracterizan por la ausencia del foramen transverso — parte de las apófisis transversas — así como por la ausencia de facetas articulares a cada lado del cuerpo de la vértebra. Las vértebras lumbares están situadas en la región lumbar , entre las vértebras torácicas y el hueso sacro. Como toda vértebra, las lumbares consisten anteriomente en un cuerpo vertebral y posteriomente en un arco, el cual soporta siete apófisis. Entre ellos se forma el agujero o foramen raquídeo, por donde discurre la médula espinal.
Índice
1 Características 2 Vértebras o 2.1 Primera vértebra lumbar (LI) o 2.2 Segunda vértebra lumbar (LII) o 2.3 Tercera vértebra lumbar (LIII) o 2.4 Cuarta vértebra lumbar (LIV) o 2.5 Quinta vértebra lumbar (LV) 3 Imágenes adicionales 4 Véase también
Características Características generales de la vértebras lumbares:
Cuerpo: se caracterizan por presentar un cuerpo vertebral grueso en comparación con otras vértebras, más ancho de lado a lado que de adelante a atrás y más grueso en la sección anterior que la posterior. Las superficies superior e inferior son planas o ligeramente cóncavas, por detrás son cóncavas y constreñidas en el frente y los lados. Foramen: el agujero raquídeo tiene forma triangular, siendo más largo que las vértebras torácicas, pero más pequeñas que las cervicales. Los pedículos son muy fuertes, dirigidas hacia atrás, y cambian su morfología desde la primera vértebra hasta la última lumbar:
Aumentan su grosor, de unos 9 mm en la L1, hasta unos 18 mm en la L5. o Incrementan la angulación del plano axial desde 10 grados hasta unos 20 grados a nivel de la L5. o Los orificios vertebrales son considerablemente más profundos en las vértebras más bajas. Una apófisis espinosa: de forma cuadrilátera. Dos apófisis transversas: se denominan "Apéndices Costiformes" y son los homólogos de las costillas Torácicas y/o Dorsales. Cuatro Apófisis articulares: 2 superiores y 2 inferiores. En la apófisis articular superior existe un mamelón óseo llamado apófisis mamilar . La disposición cóncava de las apófisis articulares permite mayores movimientos a ese nivel. Dos láminas vertebrales: son procesos óseos que conectan las apófisis espinosas de los pedículos y forman la porción posterior del agujero raquídeo. Son estructuras fuertes, cortas, amplias y con forma cuadrilátera. En la región lumbar superior son más altas que anchas, mientras que en las vértebras lumbares inferiores, son más anchas que altas. Dos Pedículos: de notable grosor. El pedículo es a veces usado como portal de entrada al cuerpo vertebral en los procedimientos de fijación de clavos o en la puesta de cemento óseo, así como en la kifoplastia o vertebroplastia. o
Vértebras Las vértebras son cinco, nominadas del siguiente modo:
Primera vértebra lumbar (LI) Sus apófisis articulares superiores, presentan una carilla articular cóncava atrás y adentro, su apofisis articular inferior, presenta carilla articular convexa, y mira hacia adelante y afuera, al igual que la T12, por eso es muy fácil de confundirla con la vértebra T12 (12°vértebra torácica)
Segunda vértebra lumbar (LII) Sólo se puede reconocer si se tienen las anteriores vértebras, esto por su engrosamiento en tamaño. Se considera que son del mismo individuo... La distancia entre sus apofisis articulares superiores e inferiores va aumentado en cada vértebra más a caudal.
Tercera vértebra lumbar (LIII) La vértebra L3 es un elemento de palanca muy potente en la estabilidad lumbar, que presenta en su parte anterior inserciones de los músculos psoas y diafragma, muy importantes en la terapia osteopática, por sus múltiples relaciones articulares y viscerales.
Desde un punto de vista biomecánico, el centro de gravedad del cuerpo se ubica alrededor de esta vértebra y es el centro de la lordosis lumbar. Esto le confiere una mayor relevancia osteopática, ya que será una zona de especial interés en cuanto a movilidad se refiere, tanto a nivel particular de dicha vértebra como del segmento lumbar en conjunto. Esta vértebra cobra mayor importancia aún si recordamos que es el pivote osteopático de la movilidad lumbar y centro de la viceromotricidad, es decir, se relaciona directamente con la movilidad y motilidad viscerales de la zona abdominal. Es, además, la llave de las líneas antero-posterior y control de gravedad. Pero al igual que la L1, L2, L3 Y L4 es muy difícil de reconocer.
Cuarta vértebra lumbar (LIV) Entre la articulación de la L4 y L5 es donde generalmente se realizan las punciones lumbares para la extracción de líquido cefaloraquideo por su fácil palpación y por su abertura, lo que permite la entrada de la aguja hasta el espacio subaracnoideo.
Quinta vértebra lumbar (LV) La quinta vértebra lumbar presenta su particularidad en la articulación con el sacro. Dicha articulación (diartroanfiartrosis) es llamada promontorio, presenta un ángulo más abierto. Este punto es muy importante para medir el ángulo de inclinación correspondiente. Se puede reconocer, viéndola desde un plano sagital, del resto porque su altura anterior es mayor a la altura posterior, vale decir la longitud anterior del arco del cuerpo es mayor que la longitud del arco posterior del cuerpo de la misma, así es que se ve "acuñada". Vista en un plano frontal posterior el diámetro transverso de las apófisis articular superior se presenta mayor que el diamtetro transverso o distancia entre las apofisis articulares superiores. Este es un dato importante a la hora de describir las características de una vértebra lumbar, ya que estás son las encargadas de recibir la mayor carga de peso, de ahí su grosor y tamaño.
Hueso sacro Sacro
Hueso sacro, vista lateral.
Hueso sacro en el medio, vista frontal.
Latín
[ TA ]: os sacrum
TA
A02.2.05.001
Enlaces externos Gray
Tema 24 # 106
El hueso sacro (Os sacrum) es un hueso corto, impar, central y simétrico, oblicuo, compuesto por cinco piezas soldadas (vértebras sacras) en forma de pirámide cuadrangular, con una base, un vértice y cuatro caras, anterior, posterior y laterales. Sus alas sacras en las zonas laterales, se unen con las palas ciáticas de la pelvis. Se encuentra debajo de la vértebra L5 y encima del coxis y entre los huesos coxales, con todos los cuales se articula. Contribuye a formar la columna vertebral y la pelvis. Su función principal es transmitir el peso del cuerpo a la cintura pélvica. El borde anterior de S1 es sobresaliente y se denomina promontorio sacro. El vértice se articula con el cóccix. El orificio vertebral del sacro se denomina conducto sacro. Contiene
las raíces nerviosas de la cola de caballo (raíces de nervios espinales situados debajo de L1). En las caras pélvicas y dorsal del sacro aparecen 4 pares de orificios sacros a través de los cuales emergen ramos dorsales y ventrales de los nervios espinales. En él se insertan los músculos:
Ilíaco en la base Piramidal en la cara anterior Isquiococcígeo en los tramos laterales En la cara posterior: gran dorsal, dorsal largo, sacrolumbar , tranverso espinoso, glúteo mayor
Los romanos le dieron este nombre porque correspondía a la parte entregada a los dioses en los sacrificios.1
Coxis Coxis
vista posterior y anterior del cóccix
Latín
[ TA ]: os coccygis
TA
A02.2.06.001
Enlaces externos Tema 24 # 186
Gray
En los humanos y otros primates sin cola (grandes primates) desde el Nacholaphitecus, el coxis o cóccix (del latín coccyx, y éste del griego κόκκυξ /kokis/)1 es lo que queda de una cola ahora vestigial. La palabra "cóccix" se pronuncia cóxis (/kóksis/). Se trata de un hueso corto, impar, central y simétrico, compuesto por tres o cuatro piezas soldadas (vértebras coccígeas) en forma de triángulo, con base, vértice, dos caras laterales y dos bordes. Se encuentra debajo del sacro, con el cual se articula y al que continúa, formando la última pieza ósea de la columna vertebral. Sirve de apoyo para muchos ligamentos y músculos. La última vértebra coxis (Co1) puede ser independiente. El coxis es un vestigio del esqueleto de la cola que está presente en los embriones humanos desde el final de la cuarta semana hasta el inicio de la octava semana del desarrollo embrionario (Moore y Persaud, 2003). La cara pélvica del coxis es cóncava y bastante lisa, y la cara dorsal posee apófisis articulares rudimentarias. La Co1 es la más grande y ancha de todas las vértebras coxígeas. Sus apófisis transversas cortas se comunican con el hueso sacro, y sus apófisis articulares rudimentarias forman las astas del coxis, que se articulan con las correspondientes del sacro. Las tres últimas vértebras coxígeas suelen fusionarse durante las etapas intermedias de la vida, creando un hueso arrosariado, de donde procede su nombre. Con la vejez, la Co1 suele unirse con el sacro y las vértebras coxígeas restantes se funden en un solo hueso. El coxis no participa con las demás vértebras para soportar el peso corporal en bipedestación; sin embargo, en sedestación puede flexionarse anteriormente de forma ligera, lo que indica que está soportando parte del peso. El coxis ofrece inserciones para parte de los músculos glúteo mayor y coxígeo y para el ligamento anocoxígeo, intersección fibrosa de los músculos pubocoxígeos. El coxis se clasifica dentro de los huesos de las extremidades inferiores ya que las vértebras de la columna están unidas al sacro y este posteriormente al coxis, por debajo del sacro continúan las vértebras coxigeas, las que sí reciben la categoría de huesos vertebrales.
Índice
1 Lesiones 2 Véase también 3 Referencias 4 Enlaces externos
Lesiones Una fractura en el coxis es una ruptura en la rabadilla, las causas más frecuentes para las fracturas de coxis incluyen:
Caídas sobre los glúteos. Con frecuencia, patinar y otras actividades que desembocan en caídas en posición sentada contribuyen a este tipo de fracturas. Durante el parto, los recién nacidos pueden romperse el coxis cuando atraviesan el canal.