Ubicado en el número 303 del Boulevard Miguel de Cervantes Saavedra, en la colonia Ampliación Granada, encontramos el hermoso Museo Soumaya de Plaza Carso. El edificio es vanguardista, asimétrico y destaca por su estructura. Su arquitecto-diseñador es Fernando Romero. La idea del edificio es presentar al público las colecciones de arte de Carlos y
Soumaya Slim, promoviendo así, la cultura entre la gente. El museo está albergado en un espacio de 17000 metros cuadrados, y seis niveles (sin contar el vestíbulo) de 6000 m2. La parte externa brilla por los 16 mil hexágonos incorporados. Hay en el interior un aula Telmex, un auditorio para 300 personas, un Café Sanborns y otros restaurantes; asimismo, hay una biblioteca con más de 3000 volúmenes. Los niveles intermedios se encuentran conectados por rampas de duela que permiten el ascenso a personas de la tercera edad y discapacitados. También cuenta con elevadores, aunque con la presencia de grupos, tienden a saturarse. La altura de cada nivel varía desde los 4 metros, hasta los 13.
Sobre las colecciones: c olecciones: Las 6 salas exhiben los siguientes “temas” 1: Exhibición de monedas virreinales, republicanas y del segundo imperio; 2: Retrato mexicano del siglo XIX y artes aplicadas; 3: Antiguos maestros europeos y novohispanos; 4: Paisaje mexicano y europeo del siglo XIX;-impresionismo y primeras vanguardias; 5: Culturas mesoaméricanas del occidente;-Arte mexicano del siglo XX; 6: La era de Rodín; escultura europea de los siglos XIX y XX.
En la primer sala encontraremos una exhibición de medallas, billetes y monedas, éstas van desde el siglo XVI hasta el XX. Dentro de la segunda, hallaremos piezas de los tres rubros del retrato mexicano: de la academia de San Carlos, el popular y el regional. Hay obras magníficas de Hermenegildo Bustos, Juan Cordero, Pelegrín Clave y R oque, entre otros. En el área de artes aplicadas, encontraremos varios artefactos y utensilios decorados que se usaban en el siglo XVIII, XIX y XX principalmente, pr incipalmente, aunque hay piezas que datan de hace 2000 años. Dicha colección comprende cucharas, muebles, biombos, relojes y m ucho más.
Si entramos a la tercer sala, , encontraremos varios óleos de Juan Correa, Miguel Cabrera, José de Páez y otros m aestros pintores del virreinato. Muchas de estas pinturas, no só lo se admiran por el cuadro en sí, sino que hasta el marco es bello al tener incrustaciones de concha nácar o de carey. El arte sacro es lo más exhibido aquí. En la sección de los maestros europeos, hallaremos muchas obras que no necesitan presentación: Tintoretto, Murillo, el Greco, Rubens y más, exponen aquí. Hay obras para todos los gustos, desde el neoclásico o el barroco hasta el manierismo y el expresionismo.
Al subir a la cuarta sala, nos toparemos con obras relacionadas al paisajismo; hay bastantes obras marinas y pinturas de los siglos XVIII y XIX referentes al México de esas épocas. También hay algunos biombos decorados sumamente bellos, y una o bra que llama mucho la atención:
La representación de la Ciudad de Celaya hecha con papel arroz, cuyos detalles son extraordinarios. La quinta sala que expone arte mesoamericano, tiene figurillas, braseros, incensarios, vasijas y cráneos con epigrafías. Se acompaña por la gráfica documental hecha por Luciano Castañeda.
La quinta sala, ubicada en el último nivel , muestra la era de Rodin, la cual compone el acervo más grande de este artista fuera de su natal Francia. Aquí encontraremos en exhibición algunas de sus primeras obras y muchas famosas como: El beso y las tres sombras, y Los Burgueses de Calais. Presentes también están esculturas de Camille Claudel y Bourdelle, Maillos, Pina y Carrier-Belleuse. En resumen, la exhibición del museo es enorme y atractiva.
Consideraciones importantes al visitar el museo: La entrada al museo es completamente gratuita para TODO el público. Es posible pedir visitas guiadas para un grupo (mínimo siete), por un costo de $100.00 pesos por grupo. El museo abre sus puertas de 10:30 a.m. a 6:30 p.m. Sin embargo, debido a la extensión de las salas, se recomienda llegar con bastante tiempo para apreciar todo lo exhibido, o visitarlo en distintas ocasiones. Hay dispositivos de seguridad a la entrada, por lo que es recomendable no llevar nada que pueda ser considerado como arma o amenaza para la colección (cutters, navajas, pinturas o solventes), ya que la mayoría de las piezas están expuestas sin protección. Hay pese a esto, una línea de estrellas indicando la distancia mínima para ver la obra, además de que el personal de seguridad está atento a que se respete este límite. El Museo Soumaya-Plaza Carso cuenta también con tienda en la que se venden libros, juegos didácticos, postales, rompecabezas y muchas cosas más. También hay diversos talleres culturales en su interior. En sí, es un gran nuevo espacio para la cultura; si usted es un conocedor de arte, podrá pasarse horas descubriendo el simbolismo de los cuadros (¡intente ver cuántos de los proverbios flancos c onoce!) y si simplemente le gusta el arte, ¡usted disfrutará de un día inolvidable!
