Universidad Simón Bolívar CEC-223 Ensayo No 1 4 de febrero de 2017 Mata, Alejandro C.I 26454473, Carnet 14-10647 Firma:
-------------------------------------------------La influencia del populismo y las informaciones falsas en la política Occidental
Nos centraremos en estudiar la forma e n como la nueva retórica populista ha afectado la base con la que se construye la opinión pública de los individuos y como esto ha alterado el sistema democrático de los principales territorios referentes en materia de libertades (Estados Unidos y Europa Occidental) haciendo énfasis principalmente en dos procesos electorales ocurridos en 2016, la salida del Reino Unido de la Unión Europea mejor conocida como “Brexit” y la elección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos de América. Veremos la forma en la cual a través de ciertos estímulos se puede ganar el apoyo de un público específico y además nos iremos dando cuenta de que la forma en que está funcionando la democracia no está ayudando a resolver los problemas de todos los ciudadanos, por lo que esta debe adaptarse rápidamente o seguirá en decadencia. Primero haremos un breve recuento histórico, después se explicará cómo debería funcionar un sistema democrático y se mostrará la re lación que este posee con la opinión pública, para luego definir la cognición política y explicar como se construye la opinión política, seguido de esto hablaremos del contexto actual en que se e ncuentran los países a estudiar en esta materia, luego explicaremos como el factor del populismo ha influido en la política y por último enunciaremos los aspectos que deben mejorarse para dar solución a este problema. Luego de finalizar la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos surgió como la primera potencia económica y la influencia que tuvo en Europa Occidental gracias al Plan Marshall fue muy importante ya que, de ahí en ade lante, junto con Alemania, Francia e I nglaterra se transformaron en los exponentes de un sistema democrático y libre en el que sus ciudadanos eran tomados en cuenta en las decisiones del Estado. La democracia y el libre mercado merc ado basados sobre el respeto a los derechos humanos le han dado a la humanidad el mayor progreso económico y social hasta ahora registrado en nuestra breve
historia en el planeta. Y aunque ningún sistema político debe seguirse ciegamente como dogma, Churchill parece no equivocarse al haber dicho que la democracia es la peor forma de gobierno excepto todas las otras que se han probado1. Un sistema democrático no debe ser fijo e invariable, sino que está obligado necesariamente a se r criticado y cuestionado por los ciudadanos constantemente para así poder adaptarse efectivamente a los inmensos y complejos cambios de c ontextos que ocurren en el trascurso tr ascurso del tiempo en una sociedad moderna. En la actualidad tanto la estructura como estabilidad de las grandes democracias occidentales se encuentran en peligro. Parece que no está funcionando adecuadamente y esto nos lo está demostrando la opinión pública de los habitantes de estos países a través de estudios de opinión y en las urnas electorales. Las opiniones políticas varían según las experiencias y creencias del individuo, las mismas surgen de la mente y por ende de la reflexión, Castells (2009, p. 202) nos explica que “la cognición política ha sido un factor decisivo en la evolución de la humanidad, fomentando la cooperación y la toma de decisiones colectiva en la búsqueda de la supervivencia y el bienestar”. Y es que que fue necesario que existiera esta noción para que los humanos pudieran plantear e n conjunto el contrato o pacto social en el que se da el primer paso de la primitividad a la sociedad. Estudiar este proceso es fundamental debido a que en la modernidad existe un consenso (al menos e n occidente) de que la opinión de la mayoría definirá las agendas políticas de las naciones. Según la teoría de la inteligencia inte ligencia afectiva, las emociones más importantes para el comportamiento político son el entusiasmo (y su opuesto la depresión) y el miedo (y su contrario la calma). ¿Cómo toman una dirección positiva o negativa las emociones frente a un acontecimiento concreto? Castells (2009, p. 203). La interrogante que plantea Castells es fundamental y cualquier persona interesada en el tema se la realizaría a sí mismo, ya que surge cierta inquietud al comprender que para tomar decisiones racionales a la hora de resolver los problemas de la colectividad partimos de nuestro mundo cognitivo que a su vez e stá dominado por las emociones, entonces nos encontramos en una encrucijada porque somos seres r acionales y no racionales al mismo tiempo que deberían tomar únicamente decisiones basadas en la razón para seguir existiendo como especie cómodamente en el planeta. Esto se presta para que un candidato a la hora de convencer a sus electores sobre su agenda política no necesariamente deba apelar a la c alma o el entusiasmo del público desde lo positivo y lo honesto, sino que puede a través de la demagogia incitar al odio y a el miedo para así generar
también entusiasmo. El problema radica en que cuando el apoyo electoral y popular ha surgido de estas emociones negativas dando el poder a populistas y fascistas las consecuencias han sido catastróficas a lo largo de la historia. Esto no significa que los candidatos en una elección deban omitir los problemas que enfrentan las comunidades (más bien ese es el error de los demócratas actuales) sino que es necesario generar un cierto grado de ansiedad en los ciudadanos al explicarle con claridad los problemas que enfrentan, para de ahí partir hacia soluciones constructivas. En Europa existen una gran cantidad de problemas por abordar, por ejemplo: la austeridad, el alto desempleo juvenil, el choque cultural que representa rec ibir millones de refugiados, el terrorismo, entre muchos otros. En Estados Unidos resalta el hecho de que la globalización ha traído riqueza y prosperidad a las grandes ciudades, pero las zonas rurales desindustrializadas han sido afectadas negativamente y muchos trabajadores del sector manufacturero han per dido sus trabajos por lo que culpan a China de esta situación. Existe una frustración cada vez mayor en ciertos grupos de personas que se sienten abandonadas y su opinión no es tomada en cuenta ya que el hecho de tener elecciones e lecciones y otras consultas populares no es garantía de que la democracia esté siendo eficiente a la hora de resolver los problemas de los ciudadanos. Este malestar es real, por eso, para mantener los principios democráticos y la estabilidad es necesario entenderlo y luego tomar las acciones necesarias. Esta frustración está siendo aprovechada por los populistas de derecha declarados enemigos del establishment que
últimamente están ganando bastante reconocimiento y aprobación por parte
de la gente. Estos populistas se han caracterizado por apelar a la demagogia, además de priorizar los sentimientos a los hechos de la realidad y se apoyan en el odio hacia un enemigo interno o externo. De esta manera según Castells C astells (2009, p. 211) crean e stímulos emocionales que puedan generar un apoyo político determinado aprovechando el hecho de que los c iudadanos toman decisiones gestionando su parte consciente e inconsciente (guiada por por lo emocional). Estas herramientas han sido clave por años para poder conseguir que part e de la opinión pública se vuelva favorable hacia ellos y aunque hace pocos años eran sector es minoritarios hoy en día están cerca de construir mayorías. Se debe reconocer que las críticas al establishment tienen un grado de razón, las elites políticas parecen haber perdido el contacto co n los ciudadanos. Por eso el auge reciente del populismo es una forma en la que los votantes disconformes están expre sando su malestar pidiendo un cambio
en la forma en que se están realizando las cosas. Esto ha dado pie a que se esté n haciendo muy populares ideas que se creían haber dejado en el pasado como el racismo o planteamientos proteccionistas contrarios al libre mercado que podrían generar una guerra comercial global. La cuestión radica en que la opinión pública ahora se e stá construyendo de una forma no muy eficiente porque a pesar de que en esta era digital existen una gran cantidad de medios a los que un ciudadano puede acceder para informarse existe una tendencia generalizada a solo recibir información de fuentes que compartan la ideología del lector, además de que las redes sociales facilitan la difusión de noticias noticias falsas. Este aislamiento ideológico comunicacional comunicacional es muy grave porque como explica Castells (2009) “Un mayor grado de conocimiento proporciona a la gente
más recursos intelectuales para una autorracionalización que apoye sus interpretaciones erróneas inducidas por las emociones”. (p. 212) . Entonces vemos que los ciudadanos al cerrarse a recibir
solo cierta tipa de información y noticias están dejando de reflexionar sobre los temas del acontecer nacional lo que se presta para que sus opiniones tengan menor base argumentativa y puedan ser incoherentes. Los gobiernos democráticos se están enfrentando a la tarea titánica de tratar de ser lo más transparentes y claros posibles al transmitir los hechos debido a que la opinión de los ciudadanos ahora puede girar en torno a asuntos que pueden ser verdaderos o falsos, no hay garantías de que lo que se está informando al público sea confiable y veraz porque no se puede monitorear toda la información que ronda por medios de información físicos y digitales. Federico Romero, profesor del European Institute U niversity explica en una entrevista concedida a la BBC lo siguiente: “El principio democrático está enraizado en muchas sociedades y no hay nadie que la esté cuestionando abiertamente. Lo que sí se observa son tendencias más autoritarias dentro de ese sistema de gobierno”2. Lo que plantea es c ierto porque hasta ahora hemos visto que
la frustración de los ciudadanos se busca drenar por medios democráticos como las elecciones, hasta el momento no se han buscado variantes fuera de esta, aunque está claro que, si la situación se mantiene así, seguirán llegando al poder de las grandes potencias lideres con tendencias más autoritarias. Los partidos tradicionales están fallando a la hora de ser influentes en la política, existen fallas en las tres condiciones necesarias que nos menciona Paul Beck (1977, p. 117-118) “exposición, comunicación y receptividad”.
Hay una desconexión con el electorado debido a que esto s fallan en poder generar los cambios
que los ciudadanos desean, mientras que los populistas han sido más inteligentes para transmitir sus ideas a las masas al colocar constantemente e n la mente del público asuntos polémicos que necesariamente no parten de hechos verdaderos, e n otras palabras, generan el estímulo ideal (odio, ira) en la parte cognitiva de los ciudadanos para ganar su apoyo. Además, el electorado ya no tiende a seguir partidos institucionalizados, sino que está comenzando a optar por una alternativa más directa: votar por quien esté ofreciendo lo que necesita sin importar mucho el simbolismo político. Por eso el reto de las democracias occidentales es dar solución a los problemas de los sectores afectados por la globalización los cuales sienten que no están siendo tomados en cuenta. El problema es bastante complejo y difícil de abordar porque como nos dice Westen (2007) “Los
datos de la ciencia política son evidentes: la ge nte vota al candidato que le provoca los sentimientos adecuados, no al que presenta los mejores ar gumentos” (p. 125). Este hecho nunca
va a cambiar, somos seres que van a decidir en base a los estímulos que recibamos, nuestras decisiones no van a ser siempre r acionales, solo podemos hacerlas lo más racionales posibles. Este punto hay que reconocerlo ya que un hecho particular reside en que la democrac ia se sustenta en una opinión pública que es tomada en cuenta, debe existir una retroalimentación entre el gobierno y los gobernados que genere acciones por parte de los primeros, pero también la opinión pública puede destruir las bases de una democracia cuando esta no se forma óptimamente o si la misma es fundada desde la ignorancia y e l odio. Con esto se confirma la tesis te sis de Lippman (1922, p. 29) de que las o piniones sólidas de que se requieren del individuo que vive en un entorno democrático son inalcanzables para la totalidad de los ciudadanos. Por eso el odio y la frustración que e stos sienten daña el proceso de retroalimentación Gobierno-ciudadano al querer aventurarse con líderes que representen ideologías xenófobas, nacionalistas y autoritarios. Los partidos democráticos tradicionales y no tradicionales deben entender y aceptar las señales que les está transmitiendo este público moderno y renovarse eficazmente siendo mucho más cercanos a las comunidades para demostrarle a las personas (generalmente de áreas rurales y adultos mayores) que pueden ayudar a resolver sus problemas en medio de una globalización que ayuda a muchos pero que también perjudica a otros.
Bibliografía 1. Churchill, Winston (noviembre, 1947) Parte del discurso en la C ámara de los Comunes. 2. Max Seitz (2016) Del Brexit Br exit a Donald Trump: ¿fue 2016 un mal año para la democracia, como dicen muchos? http://www.bbc.com/mundo/noticias-in http://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-38342673 ternacional-38342673
