PROGRAMA DE PREVENCIÓN DE LA DEPRESIÓN EN LATERCERA EDAD. ESTEREOTIPOS NEGATIVOS SOBRE LA VEJEZ. PREVENTION PROGRAMME OF DEPRESSION IN THE ELDERLY . NEGATIVE STEREOTYPES OF ELDERLINESS.
Carlota de Sousa González. Centro de Psicología Bertrand Russell.
RESUMEN.
Hay varios factores de riesgo de la depresión en las personas de la tercera edad. Éstos serán mencionados más adelante. En este programa nos centraremos en uno de ellos: “los estereotipos negativos sobre la vejez que conducen a un envejecimiento pasivo”. Esta idea del envejecimiento pasivo es un factor de riesgo de la depresión en las personas mayores, por lo que es de interés social diseñar un programa de prevención psicológica dirigido a modificar falsas creencias hacia la vejez y así evitar que las personas mayores más vulnerables caigan en comportamientos de pasividad física y mental (envejecimiento pasivo). ABSTRACT.
We know several risk factors of depression in the elderly. These will be dealt with afterwards. In this course, we will focus on one of them: “the negative stereotypes of elderliness that lead to passive aging.” This idea of passiveness is a risk factor of depression in the elderly. Therefore, it is of social interest to devise a programme of psychological prevention in order to modify false beliefs towards elderliness. The programme will prevent that the most vulnerable elder people fall into physical and mental inactiveness. PALABRAS CLAVES.
Envejecimiento activo. Depresión. Estereotipos negativos sobre la vejez. KEY WORDS
Active aging. Depression. Negative stereotypes of elderliness.
1. INTRODUCCIÓN. Desarrollo demográfico de personas de la tercera edad. La primera tendencia demográfica del Siglo XX fue el drástico incremento de la proporción de personas mayores de 65 años. El número real de adultos de edad avanzada ha aumentado casi 10 veces en los últimos años. Una influencia importante es que después de la expansión de la tasa de natalidad, a finales de la década de los sesenta y de los setenta, la tasa de nacimientos disminuyó, lo que provocó un aumento de la proporción de ancianos. También la esperanza de vida ha aumentado hasta un grado sin precedentes. Hay dos hechos más destacables acerca del panorama del último período de la vida: a) Que está constituido principalmente por mujeres b) Que contiene más y más individuos muy ancianos. Es bueno aclarar que no hay un único punto en el que una persona se convierta en “mayor”, pero la mayoría de los gerontólogos tienden del mismo modo a seleccionar una cifra de 60 ó 65 años para marcar la edad de comienzo o edad umbral. Definiciones de la depresión en personas de la tercera edad. Los Trastornos del Estado de Ánimo (TEA) tienen como característica principal una alteración del estado anímico y del humor en la persona que lo padece a cualquier edad durante el ciclo de la vida. Los TEA tienen una mayor prevalencia, en un año y a lo largo de la vida, en las mujeres que en los hombres mayores. La tercera edad es uno de los grupos de población más expuestos a la depresión y aunque tal vez nosotros no pertenezcamos a este grupo, tenemos familiares que la pueden estar sufriendo. Aquellas personas que son mayores de sesenta años tienen cuatro veces más posibilidades de sufrir depresión. Esto se debe a que por lo general este grupo se siente más cercano a la muerte, ya no se siente útil ni en la familia ni en la sociedad y muchas veces sus allegados y el sistema en sí les hacen a un lado. Generalmente, el adulto mayor que sufre depresión expresará mucha tristeza y, parecerá que se ha echado a morir aunque no lo diga directamente, pues es posible que sienta que su condición a nadie le va a importar y que no hará ninguna diferencia que lo diga. También puede ser que calle porque no conoce su condición y adjudique todos sus síntomas al hecho de que está viejo. De todas las etapas evolutivas, es la vejez la que más aprehensiones provoca en los seres humanos pues comienzan a perderse, de manera progresiva, diferentes capacidades tanto intelectuales como físicas, comenzando a ser evidentes a partir de los 60 años. Según Janet K. Belsky, la depresión es un trastorno mental real que puede
responder a muchas causas. La predisposición tanto genética como de la personalidad, las experiencias vitales previas, las pérdidas actuales y anteriores y los fracasos son otros tantos factores que asociados pueden producir depresión o contribuir a ella. Según Janet, la depresión no sólo puede parecer muy diferente, desde un punto de visto clínico, en diferentes individuos, sino que el anciano puede adoptar una forma cualitativamente distinta de la que puede tener un adulto más joven. Muy a menudo la depresión en la edad avanzada nace de una sensación de incapacidad y desesperanza frente a lo inevitable, las pérdidas reales.
Síntomas de la depresión en personas de la tercera edad.
Los síntomas más comunes en la depresión son: un humor disfórico, la pérdida de interés y la ansiedad. Los síntomas físicos pueden incluir dificultad para dormirse, pérdida de apetito y de la libido, falta de energía y fatiga fácil. Existe a menudo un sentimiento de incapacidad y de ineficacia respecto al presente, de desesperanza respecto al futuro y de inutilidad y fracaso respecto al pasado.
Prevalencia y futuro de la depresión en personas de la tercera edad.
La prevalencia de la depresión en los mayores de 65 años se estima entre el 12-15%. El 12,5% para los varones y el 14,5% para las mujeres. Futuro: a la luz de los resultados, en las depresiones de los ancianos se ha pasado de un anterior nihilismo a un optimismo prudente. Se obtiene la recuperación en el 90% de los casos y recaen en el 29%. En estudios a largo plazo, de unos 4 años de evolución, se observa una clara mejoría en aproximadamente tres cuartas partes de los casos. En la evaluación no influye ni el sexo ni la edad, pero sí la intensidad de los síntomas afectivos y el mayor declinar en las funciones cognoscitivas. La evaluación resulta menos favorable si existe: -Presencia de deterioro cognoscitivo. - Más enfermedades somáticas. - Falta de soporte social. Cuadro más grave. - Mayor cronicidad. - Más incapacidad funcional. Recurrencia mayor. - Comienzo más tardío.
Factores de riesgo de la depresión en las personas de la tercera edad. a) Estado físico. b) Deterioro cognitivo. c) Estereotipos negativos sobre la vejez: envejecimiento pasivo. d) Relaciones interpersonales, apoyo social.
e) Experiencias estresantes. f) Riesgo/Carga genética. a) Estado físico: la depresión puede deberse a cambios biológicos originados por la propia enfermedad física o por su tratamiento. También la depresión puede ser una reacción al estrés producido por la disminución de las capacidades que provocó la propia enfermedad física a causa del dolor.
b) Deterioro cognitivo: la disfunción cognoscitiva puede ser la causa de la depresión, lo que suele ser bastante frecuente en las primeras fases de los procesos demenciales como reacción ante la conciencia de enfermedad y de déficit.
c) Estereotipos
negativos sobre la vejez: todos los estereotipos negativos existentes en nuestra sociedad sobre la vejez (irritables, débiles, aislados…) conducen a la persona anciana a la pasividad, situación en la que la persona mayor no confía en sus capacidades, no cuida de sí misma, etc. (Este factor de riesgo será explicado más adelante).
d) Relaciones interpersonales: las dificultades interpersonales y los síntomas depresivos presentan una alta correlación. Las interacciones interpersonales no recíprocas pueden precipitar la depresión. e) Experiencias estresantes: las experiencias estresantes han sido identificadas como variables relacionadas con la depresión. Entre los acontecimientos más comunes y estresantes entre mayores, destacan: la enfermedad física, la muerte de seres queridos, los problemas financieros, los conflictos de familia y la necesidad de institucionalización. f) Riesgo genético: los factores genéticos también ayudan a explicar la depresión en la vejez, aunque parece ser que la depresión de inicio temprano tiene una mayor carga genética que la depresión que emerge en la vejez.
2. FACTOR DE RIESGO QUE SE EVALÚA: LOS ESTEREOTIPOS NEGATIVOS SOBRE LA VEJEZ QUE CONDUCEN A UN ENVEJECIMIENTO PASIVO.
Durante años ha habido una mayor inserción en nuestra cultura de la conceptualización negativa de la vejez.
Los prejuicios contra la vejez, como cualquier otro prejuicio, son adquiridos durante la infancia y luego se van asentando y racionalizando durante el resto de la vida de los seres prejuiciosos. Algunos de estos estereotipos negativos son: -
Los individuos de edad avanzada piensan y actúan con lentitud. Depresivos. Inteligencia y memoria reducida. Fatigados. Sin coordinación. Se vuelven irritables e incontrolables. Se vuelven distraídos, están llenos de recuerdos y son locuaces. El interés y la actividad sexual decaen. Débiles y con falta de interés. Inútiles socialmente. Solitarios. Esperan a la muerte. Entran en una segunda infancia, atrapados en un egocentrismo cada vez mayor, exigiendo más de su entorno de lo que están dispuestos a ofrecer. Se desvinculan. Se vuelven improductivos.
Todos estos estereotipos pueden conducir a una forma de envejecimiento pasivo, en el cual la persona mayor no se valora, no se cuida, no cree en sus posibilidades, se aísla, no se siente feliz, no se responsabiliza de sí mismo y piensa negativo. Esta idea del envejecimiento es un factor de riesgo de la depresión en las personas mayores, por lo que es de interés social diseñar un programa de prevención psicológica dirigido a modificar falsas creencias hacia la vejez y así evitar que las personas mayores más vulnerables caigan en comportamientos de pasividad física y mental (envejecimiento pasivo).
3. PROGRAMA DE PREVENCIÓN DEL ENVEJECIMIENTO PASIVO. Con el programa de Prevención y Detección precoz lo que se quiere conseguir es una disminución de la probabilidad de sufrir este trastorno. OBJETIVOS: Objetivo general: contribuir a aumentar el nivel de salud física y psíquica y la calidad de vida de la población anciana, promoviendo, paralelamente, la mejora de su bienestar. Así como mejorar la consideración social que se tiene de las personas mayores y también mejorar su autoestima.
Objetivos específicos: • • • • • • • • • • • • • •
Combatir los estereotipos negativos sobre la vejez y el envejecimiento. Eliminar los posibles prejuicios acerca del cambio conductual en las personas mayores. Conseguir una actitud positiva hacia la vejez y el envejecimiento. Desarrollar una actitud de autonomía en el mayor. Favorecer una actitud positiva hacia la mejora cognitiva y de la memoria en los mayores. Fomentar la implicación en tareas cognitivas. Impulsar una visión favorable hacia las actitudes preventivas en el área cognitiva en los mayores. Prevenir el tabaquismo y el alcohol. Promocionar la actividad física en todo el proceso de envejecimiento. Asegurar una alimentación adecuada. Apoyar acontecimientos agradables en la vejez como factores preventivos de la depresión y la soledad. Fomentar los comportamientos pro-sociales. Fomentar la participación social. Impulsar la confianza en la propia capacidad.
Un primer paso eficaz es evaluar las creencias contenidas en los estereotipos negativos de la vejez, ya que pueden influir en la conducta y en la salud física y psicológica de las personas mayores. Este programa podría estar dirigido a todas las personas de edad comprendida entre 55-58 años (la correspondiente a la segunda crisis humana) si bien se considera conveniente desde el punto de vista práctico, hacer una selección de la población objetivo, como por ejemplo escoger personas cuyo trabajo tenga unas características tales como: sedentarismo, aislamiento social, estrés, etc. Considero necesario pasar: BDI II: inventario que evalúa las diferentes manifestaciones de la depresión. (Beck). CENVE: cuestionario de estereotipos negativos sobre la vejez. En este cuestionario se evalúan preguntas tales como: -
La mayor parte de las personas, cuando llegan a los 65 años de edad, aproximadamente, comienzan a tener un considerable deterioro de memoria. – Las personas mayores tienen menos interés por el sexo. – Las personas mayores se irritan con facilidad y son “cascarrabias”. – La mayoría de las personas mayores de 65 años tienen alguna enfermedad mental lo bastante grave como para deteriorar sus capacidades normales. – Las personas mayores tienen menos amigos que las más jóvenes. – A medida que las personas mayores se hacen mayores, se vuelves más rígidos e inflexibles. – La
mayor parte de los adultos mantienen un nivel de salud aceptable hasta los 65 años aproximadamente, en donde se produce un fuerte deterioro de la salud. – A medida que nos hacemos mayores perdemos el interés por las cosas. – Las personas mayores son, en muchas ocasiones, como niños. – La mayor parte de las personas mayores de 65 años tienen una serie de incapacidades que les hacen depender de los demás. – A medida que nos hacemos mayores perdemos la capacidad de resolver los problemas a los que nos enfrentamos. – Los defectos de la gente se agudizan con la edad. – El deterioro cognitivo (perdida de memoria, desorientación o confusión) es una parte inevitable de la vejez. – Casi ninguna persona mayor de 65 años realiza un trabajo tan bien como lo haría otra más joven. – La mayor parte de las personas, cuando llegan a los 65 años de edad aproximadamente, comienzan a tener un considerable deterioro de la memoria. El cuestionario al que se hace referencia (CENVE) fue publicado en la revista Mult Gerontol (2005);15 (4):212-220. Autores: María José Blanca Mena, Concepción Sánchez Palacios y María Victoria Trianes. Este cuestionrio se realiza a partir del de Montorio e Iza (1991) y el de Palmore (1988), que son suficientemente aceptados en la literatura psicológica. La puntuación oscila entre5 y 20 puntos para cada una de las tres partes que se compone el cuestionario: salud, motivacional-social y carácterpersonalidad. Las preguntas se evalúan de 1 a 4. Significando 1 muy en desacuerdo, 2 algo en desacuerdo, 3 algo de acuerdo y 4 muy de acuerdo. Se concluyen que las personas que mantienen en alto grado los estereotipos negativos hacia la vejez se corresponden con el siguiente perfil: bajo nivel educativo, no participan en actividades sociales, no mantienen actividad física, mantienen una actitud negativa hacia su propio proceso de envejecimiento y obtienen bajas puntuaciones en autoestima y optimismo. Se sugiere que los resultados que mantienen en alto grado los estereotipos negativos hacia la vejez puede constituir una población de riesgo depresivo.
Desarrollo del programa: El programa se va a desarrollar a lo largo de tres semanas. Las sesiones, que serán dos por semana, tendrán una duración de dos horas cada una, con un total de doce horas.
Primera sesión:
Como hemos seleccionado a las personas que obtienen en la evaluación un alto grado de estereotipos negativos hacia la vejez, en esta sesión lo que se quiere es combatir y eliminar dichas ideas y los posibles prejuicios acerca del cambio conductual en las personas mayores. El proceso será el siguiente: 1. Definición y explicación de “estereotipo”. Un estereotipo es una imagen o idea aceptada comúnmente por un grupo o sociedad. El término se usa a menudo con sentido negativo, causando distorsión porque se hace más énfasis en algunos aspectos del grupo mientras que se ignoran otros. Los estereotipos suelen ser descripciones basadas en lo subjetivo, no en lo objetivo.
2. Información de los estereotipos negativos asociados a la vejez más comunes en nuestra sociedad: - Los individuos de edad avanzada piensan y actúan con lentitud. - Depresivos. - Inteligencia y memoria reducida. - Se vuelven irritables. - El interés y la actividad sexual decaen. - Inútiles socialmente. - Solitarios. - Se vuelven improductivos. 3. Discusión de estas ideas. - Reestructuración cognitiva (siempre que sea posible). -Cambiar el foco de atención a los aspectos positivos del envejecimiento y a personas mayores activas. 4. Explicación de las consecuencias negativas que se pueden producir sobre ellos mismos si mantienen esas ideas. -
Depresión. Aislamiento. Inactividad. Dependencia. Preocupación. Ansiedad.
Segunda sesión: Una vez eliminadas y combatidas dichas ideas y prejuicios sobre el envejecimiento, el objetivo en esta sesión es conseguir una actitud positiva hacia la vejez y el envejecimiento. El proceso será el siguiente: 1. Que realicen cada uno de ellos una lista con las ventajas posibles que pueden obtener al cambiar sus ideas acerca de la vejez. 2. Reforzar cualquier idea que pueda producir un cambio positivo en la actitud hacia el envejecimiento.
Tercera sesión: Después de conseguir en los pacientes una actitud positiva hacia la vejez y el envejecimiento, el objetivo a conseguir en esta sesión consiste en desarrollar una actitud de autonomía en el mayor. El proceso será el siguiente: 1. Extinguir las conductas de dependencia. “Pedir ayuda”, “esperar a que otros hagan las cosas”, “no hacer la comida”, “no bañarse”, etc… 2. Fomentar conductas relativas a la autonomía personal. “Salir de casa”, “bañarse”, “hacerse la comida”, “cuidarse a sí mismo”, etc. 3. Reforzar las conductas relativas a la autonomía personal. “Muy bien”, “Así las cosas marcharán mejor”, “Eres un@ campeo@”, “Fenomenal”, etc. 4. Auto-refuerzo. “¡Qué bien que lo he hecho!”, “¡qué bien que lo he intentado”, “¡la próxima vez será más fácil!”, etc. 5. Fomentar la toma de decisiones evitando la búsqueda de apoyos externos. Técnicas de solución de problemas, saber lo que le gusta, no
preguntar a los demás. 6. Aumentar el sentimiento de control. “Puedo controlar muchas cosas de mi vida”, “me siento orgulloso de mí”.
Cuarta sesión: En esta cuarta sesión el objetivo se centra en el área cognitiva (atención, memoria, percepción, orientación y juicio). Se busca favorecer una actitud positiva hacia la mejora cognitiva, fomentar la implicación en tareas cognitivas e impulsar una visión favorable hacia las actitudes preventivas en el área cognitiva en los mayores. El proceso será el siguiente: 1. Informar de los cambios en las funciones cognitivas. •
Cambios en la memoria primaria: esta memoria es la referida a los momentos en que lo sentido o experimentado está todavía en el foco de atención consciente. No hay decremento con la edad, pero si hay interferencias o se exige una reorganización del material a recordar, empeoran los resultados.
•
Cambios en la memoria secundaria: esta memoria interviene en el momento en el que ya se ha procesado la información y se debe recuperar. Existe dificultad con la edad cuando se pide recuerdo libre o cuando la complejidad del material aumenta.
•
Cambios en la memoria a largo plazo: se produce poco decremento con la edad. Es muy importante para la adaptación en la satisfacción vital.
•
Cambios en la memoria a corto plazo: presenta más decremento con la edad. Se encuentran problemas en el registro y procesamiento de la información.
2. Informar acerca de la necesidad de ejercitar la memoria. Es muy importante ser conscientes de la importancia que tiene ejercitar la memoria. Este ejercicio ayuda a: - Prevenir la aparición y desarrollo de trastornos de la memoria. - Preservar la autonomía de la persona. - Enseñar las áreas que intervienen en la memoria y su funcionamiento. - Promover el aprendizaje de estrategias mnemotécnicas. - Evitar o reducir las preocupaciones que se generan sobre esta área.
3. Presentación fotográfica.
Quinta sesión: En esta quinta sesión el objetivo se centra en el área de salud. Nos dirigimos a prevenir el tabaquismo y el alcohol, promocionar la actividad física en todo el proceso de envejecimiento y asegurar una alimentación adecuada. El proceso será el siguiente: 1. Informar de los aspectos negativos del consumo de alcohol y tabaco: El consumo de alcohol a largo plazo afecta negativamente tanto al organismo como al comportamiento. En el organismo provoca psicosis, encefalopatías, gastropatías, hepatopatías, pancreopatías, polineuritis, miocardiopatías. Tolerancia y síndrome de abstinencia. En el comportamiento provoca una disminución en el rendimiento laboral, aumento de la posibilidad de accidentes, perturbaciones de las relaciones sociales y familiares, agresividad, irritabilidad, exhibicionismo y mayor porcentaje de suicidios. El consumo de tabaco a largo plazo que también afecta negativamente tanto al organismo como al comportamiento. En el organismo provoca una disminución de la memoria, dolores de cabeza, fatiga, bronquitis, enfisema pulmonar, cáncer de pulmón, boca y de laringe y disminuye el rendimiento deportivo. En el comportamiento provoca un aumento de la dependencia psíquica y manifestaciones comportamentales derivadas de los momentos de abstinencia (irritabilidad, ansiedad, etc…) 2. Promocionar los aspectos positivos del mantenimiento de la actividad física en todo el proceso de la vida. El proceso de envejecimiento no se puede evitar pero se puede retardar, y uno de los recursos que ha dado buenos resultados en este intento es la actividad física. Los estudios demuestran que el cuerpo puede recuperar de 10 a 13 años de su aptitud operativa cuando se adopta la actividad física como un hábito de vida. La actividad física como componente para la salud es importante y no
puede ser reemplazada ni por la medicina, ni por conferencias, ni por lecturas. Ventajas: La actividad física previene las caídas al fortalecer las piernas y mejorar el equilibrio. También se necesita la actividad física para fijar el calcio y combatir la osteoporosis. Así como para flexibilizar las venas y las arterias, que ayuda en la prevención de problemas cardiovasculares y la mejora del retorno venoso, que a su vez mejora los problemas de varices. 3. Explicación de la importancia que tiene mantener una alimentación adecuada. La salud, en cualquier etapa de la vida, está condicionada en gran parte por lo que se come día a día. En la tercera edad, cuando los achaques son una constante, la atención que ha de prestarse a los alimentos que se ingieren y a la forma de cocinarlos es de capital importancia si se quieren prevenir visitas al médico. Las personas mayores pueden ver disminuidas sus dolencias con una alimentación sana y equilibrada cuya elaboración, además, llega a ser una entretenida y creativa tarea. La cocina supone que es una actividad que es beneficiosa no sólo para el estómago, sino también para la mente; hacer la lista de la compra, recordar los ingredientes o estar atento a los tiempos de cocción suponen un sano ejercicio mental. 4. Presentación fotográfica
Sexta sesión: En esta sexta sesión el objetivo se centra en el área personal y social. Aquí fomentamos el apoyo a acontecimientos agradables en la vejez como factores preventivos de la depresión y la soledad, los comportamientos prosociales y la participación social. El proceso será el siguiente: 1. Explicación de las ventajas de la realización de actividades agradables. - Las actividades contemplan un enfoque práctico, activo y de interrelación y se realizan de forma voluntaria, sobre todo en el
tiempo libre. - Las actividades giran en torno a la cultura cotidiana, la memoria cultural y los valores sociales por lo que se trabaja: solidaridad, participación y comunidad. - La realización de actividades gratificantes aumenta el nivel de control y autoeficacia. - La realización de actividades gratificantes fomentan una actitud positiva hacia la vejez y hacia la vida. 2. Destacar las consecuencias positivas/ventajas de los comportamientos pro-sociales y la participación social. 3. Ejemplos de actividades gratificantes y sociales. • Actividades deportivas y de carácter físico: billar, ajedrez, petanca, psicomotricidad, paseos, movilización, gimnasia de mantenimiento. • Actividades de carácter intelectual: aulas de cultura, grupos de lectura, música, corales. Exposiciones: artes plásticas, pintura, fotografía… • Actividades de carácter social: convivencias, voluntariado, visitas a museos… • Actividades de destreza manual: encuadernación, cerámica, grabados, madera… • Actividades de carácter psicológico: entrenamiento para desarrollo cognitivo, llevar a cabo dinámicas de grupo, etc. • Actividades diversas: actuaciones, cine, cuidado de animales y plantas… 4. Presentación fotográfica.
4. SEGUIMIENTO. Una vez aplicado este programa de prevención a la población seleccionada, es conveniente hacer un seguimiento para ver la incidencia que puede tener este programa en el cambio de las ideas hacia la vejez. En este sentido, transcurridos dos años, aplicaremos otra vez los tests anteriormente citados con el fin de comprobar la evolución de las ideas y ver hasta qué punto incide este programa en la población. 5. CONCLUSIÓN. Como ya se ha comentado en otro apartado, hoy día en Europa la esperanza de vida se ha incrementado de forma extraordinaria en las últimas décadas.
Por consiguiente vemos necesario la utilización de programas que ayudan a la persona mayor a optimizar sus habilidades y potenciales. Uno de los programas más extendidos es el llamado “envejecimiento activo”, cuyas características y definición son las siguientes La palabra “activo” se refiere a una continua implicación social, económica, espiritual, cultural y cívica, y no simplemente a la capacidad de permanecer físicamente activo. La vejez activa refleja el deseo y la capacidad de la persona mayor para mantenerse involucrada en actividades productivas. La vejez activa significa que, en gran medida, la persona de edad mantiene actividad mental, actividad física y actividad social. -Birren (1996) utiliza el término vejez activa para aludir a los mayores que, en la última etapa de la vida, son relativamente aptos y disponen de los recursos necesarios para desempeñar actividades de modo consciente. -La OMS utiliza el término envejecimiento activo para indicar el proceso de optimización de las oportunidades de la salud, participación y seguridad de las personas mayores, con el fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen. Por lo cual, para la OMS, el envejecimiento activo es el proceso de aprovechamiento máximo de las oportunidades para tener un bienestar físico, psíquico y social durante toda la vida. Para finalizar se puede afirmar que con este programa se consigue una actitud más receptiva en las personas adultas hacia el posible programa de intervención o envejecimiento activo.
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