El camino hacia la madurez ¿Por qué tantos seres humanos se aferran a su propia desdicha y confusión, cuando podrían abrirse a otras realidades? Madurar emocionalmente es la tarea esencial de nuestra vida n!ela "annuti #uenos $ires - La madurez emocional es la base del crecimiento psicológico y espiritual de todo ser humano. La evolución de cada persona arraiga en la propia madurez afectiva; no existen personas “evolucionadas espiritualmente” si no son maduras emocionalmente. La autonomía y la madurez emocional son dos caras de la misma moneda una persona madura es autónoma! ya "ue est# anclada en el centro mismo de su ser desde donde llega a ser aut$ntica e íntegra. Lo sepamos o no! nuestra b%s"ueda m#s honda e íntima nos impulsa a la integración. &sí como a la vida la conocemos por fragmentos! tambi$n nuestro propio ser se nos revela en pe"ue'as porciones! si es "ue nuestra nuestra sensibilidad est# abierta y dispuesta a percibirlo. ()u$ significa madurar emocionalmente* +espuestas cargadas de pre,uicios! ignorancia e ingenuidad dan cuenta de "ue hay una mitología muy arraigada en la psi"ue "ue nos hace creer creer "ue la madure madurezz es alcanza alcanzarr un “estado “estado ideal ideal de perfec perfecció ción”. n”. uando uando intentamo intentamoss conseguir una determinada imagen! o ser alguien especial o perfecto "ue nunca se e"uivoca! no somos realmente nosotros mismos! con honestidad y verdadera compasión. Lamentablemente! lo "ue se nos ense'a en la ni'ez no es la coherencia sino el conformismo; entre la voz de la apariencia y la del corazón! crecemos inseguros y sometidos a la tiranía avasallante de lo exterior. uanto m#s descuidamos nuestro desarrollo interior! con mayor rigidez tratamos los aspectos m#s banales de la educación. recer recer es madura madurarr e implic implicaa correr correr el riesgo riesgo de encont encontrar rarnos nos con aspecto aspectoss lumino luminosos sos y oscuros de nuestro ser. Las personas inmaduras son las "ue se resisten a asumir su realidad sombría y permanecen ciegas a sus carencias afectivas primarias. adurar es integrar! pero ("u$ sucede cuando los deseos "ue albergamos se contraponen entre sí! cuando los anhelos y los pensamientos opuestos nos producen conflictos* /ntonces uno sufre y raramente se torna consciente de su fragmentación "ue es lo "ue origina el conflicto! n%cleo del sufrimiento psicológico. (u#l es la causa de esta fragmentación* Las religiones! la filosofía y diversas disciplinas cien cientí tífic ficas as han han inten intenta tado do!! con con mayo mayorr o meno menorr prof profun undi dida dad! d! capt captar ar y respo respond nder er a esta esta interrogante esencial. 0ero lo cierto es "ue en la vida de cada persona persona hay división! división! hay conflicto y! detr#s de todo ello! acecha el desorden! la confusión! un af#n y una ansiedad sin límites. (/s necesario vivir atrapados en esta desdicha* 1uestras propias contradicciones mane,an los hilos invisibles de las decisiones vitales. &treve &treverno rnoss a devela develarlas rlas!! poder poder descub descubrir rir e integr integrar ar esas partes partes de nuestra nuestra alma "ue a%n
ignoramos! o bien no aceptamos o rechazamos! constituye la tarea m#s honda y humana del verdadero camino hacia la salud. 0ara entregarnos a un encuentro profundo con nuestro ser esencial! son condiciones indispensables la confianza! el respeto y el amor a uno mismo.
%acío emocional 2odos estamos necesitados de escucha! de tiempo! de dedicación y de contacto afectivo sincero! pero sin un arraigo emocional genuino se hace difícil establecer vínculos saludables y sostenidos. /n nuestra $poca disociada y confusa estamos educados y adiestrados para el hacer! y raramente sentimos lo "ue hacemos y cómo lo hacemos; pareciera "ue se vive en un laboratorio mental en el "ue nuestro sentir m#s profundo "ueda excluido. &%n hoy persiste una sobrevaloración de lo masculino "ue desconfía de los aspectos femeninos de nuestro ser el afuera! lo r#pido! la pura lógica racional y lo lineal sofocan el adentro! lo lento! lo introspectivo! lo intuitivo. 1uestros sentimientos est#n cada vez m#s desnaturalizados se los reprime! se los trivializa o manipula! y a menudo nuestras costumbres y formas de vivir cotidianas se vuelven artificiales 3actitudes falsas! relaciones falsas y actividades falsas4. 1o permitimos "ue nuestros sentimientos se desarrollen completamente; actuamos para domesticar nuestras emociones en lugar de observarlas con atención! comprenderlas y así madurar afectivamente. 5ivimos desarraigados emocionalmente! sin confianza! sin espontaneidad y sin un verdadero contacto con esa cualidad sutil y llena de ri"uezas dentro del vínculo con los otros. 6entimientos heridos! soledad! dolor! sensación de inutilidad y una erosión de los valores y del sentido de la vida nos hablan de "ue hemos empobrecido la dimensión m#s preciosa de nuestro existir y evidencian la lesión "ue sufre nuestra sensibilidad m#s íntima. “Las emociones no son un lu,o! sino un comple,o recurso para la lucha por la existencia” 3&ntonio 7amasio4. /n una sociedad adictiva como la nuestra! en la "ue todos estamos muy pendientes de lo "ue obtenemos! consumimos e incorporamos! creemos e intentamos ilusoriamente compensar con tanta vor#gine el vacío emocional con el "ue se vive. & menudo! el exceso de ob,etos materiales! de actividades "ue tenemos en la vida nos "uitan la paz interior; pero el problema no est# en las cosas o en lo "ue hacemos sino en nuestra actitud! en nuestro enga'o interior. 8emos llenado nuestros corazones con las cosas de la mente! con brillantes palabras y elocuentes discursos! con ambiciones desmedidas! vanidades y lirismos desesperados! pero nuestros corazones est#n vacíos. /l corazón es el guardi#n de nuestra verdad! es el "ue sabe con exactitud lo "ue nos falta! lo "ue necesitamos; pero (es posible descubrir esa verdad cuando sacrificamos la necesidad de
ser leales con nosotros mismos! de comunicación sincera! de comprender y ser comprendidos! de amar y ser amados*
Morir de é&ito “La verdadera profundidad se encuentra detr#s de los espe,os” 3arguerite 9ourcenar4. (ómo llegar a esas infinitas profundidades cuando la mayoría de la gente vive prisionera de la imagen "ue le devuelven los otros* :ndigentes de la mirada a,ena! muchos se infligen la obligatoriedad del $xito casi todo es c#lculo! habilidad y astucia para alcanzar ob,etivos y resultados. (u#ntas veces se relegan los sentimientos internos en aras de lo pragm#tico* 0ara esta mentalidad! basada puramente en lo externo! todo debe ser m#s f#cil! expeditivo y en mayor cantidad. ual"uier cosa "ue re"uiera menos traba,o y mayores beneficios resulta sumamente atractiva. uchas veces en el día! se renuncia a alg%n valor de sentimiento a cambio de una venta,a externa. 9 nuestra sensibilidad paga el precio. n precio "ue m#s tarde resultar# insoportable a trav$s de un sinn%mero de síntomas y sufrimientos. u#ntas personas viven atrapadas en una vida mecanizada! artificial y ,am#s llegan a saber "ue $sa es la causa de su llanto. 1ing%n sustituto externo puede calmar la necesidad de contacto íntimo con la propia interioridad y la de los otros. La madurez pasa ineludiblemente por el aprendiza,e! pero en esta cultura exitista hay una tendencia a agilizar el proceso natural "ue tiene cada ser humano para aprender! no se respetan los tiempos propios! los modos propios de recorrer el camino; se borran las diferencias y se pierde singularidad en nuestro ser. (u#l es la diferencia entre el $xito y el fracaso* 0ara una persona madura no hay acontecimientos in%tiles! todo es aprendiza,e y tanto el $xito como el fracaso de,an de ser meras distinciones creadas por la soberbia y la ignorancia humana. /l proceso de aprendiza,e contin%a siempre! de una manera infinita y los cielos est#n abiertos para "uienes aprenden. La aut$ntica fuerza de nuestra vitalidad irrumpe cuando somos capaces de aceptar e integrar los aspectos m#s fr#giles y vulnerables de nuestra personalidad "ue! en general! suelen manifestarse a trav$s de nuestras imposibilidades y errores. La exacerbación del $xito "ue promueve nuestra sociedad actual no es m#s "ue una huida constante del reconocernos limitados. “+eivindico mi b%s"ueda constante! mis e"uivocaciones! mi asombro y no el atrincherarse por miedo a vivir” 3larice Lispector4. 5ivir es el mayor via,e de descubrimiento "ue puede realizar un ser humano y! como en todo via,e! sólo descubrimos cuando superamos los estrechos límites de nuestros pre,uicios y mandatos! cuando estamos abiertos y atentos a lo "ue nos susurra la vida.
Morir de amor 7evenidos adultos! seguimos siendo emocionalmente ni'os malheridos! necesitados y carentes; el problema es "ue la gran mayoría lo ignora y permanece ciega a sus carencias afectivas primarias. /l miedo al dolor y los blo"ueos enmascararon por a'os el acceso a ese ni'o "ue hay en nosotros y! de este modo! la propia realidad emocional se vuelve invisible para la conciencia. uanto m#s tempranas son las carencias afectivas mayor es el estado de insatisfacción! vacío y hambre emocional. 0ero mucha gente no "uiere saber nada de su propia historia y! por consiguiente! tampoco saben "ue! en el fondo! se hallan constantemente determinados por ella por"ue siguen viviendo en una situación infantil no resuelta y reprimida. n “hambriento emocional” est# dispuesto a todo para aplacar su hambre y sus conductas suelen ser estrategias de supervivencia "ue provienen del desamparo y la soledad de la infancia. 8ambrientos de una presencia maternante! de una mirada atenta y exclusiva! de contacto c#lido e íntimo! de una fuerza nutritiva "ue nos despierte el deseo y la pasión por vivir! buscamos sustitutos de toda índole "ue! en tanto suced#neos! ,am#s pueden conectarnos con la verdadera necesidad. /l movimiento de la vida nos impulsa a una b%s"ueda permanente pero una cosa es la b%s"ueda vital inherente al crecimiento y otra muy distinta es la b%s"ueda compulsiva en la "ue! la necesidad de incorporar vorazmente lo "ue sea
Madurar es inte!rar
(ómo ad"uirir conciencia de nosotros mismos cuando la propia ceguera emocional nos impide abrazar con amor esas partes sombrías de nuestro ser! "ue alguna vez rechazamos o no "uisimos o creímos irredimibles y blo"uearon nuestra capacidad para sentir y amar* +econocer nuestros dones es tan esencial como reconocer las heridas y! por ende! las propias limitaciones. 8ay una br%,ula interna "ue nos orienta en este arduo reconocimiento y "ue puede hacer accesible a nuestra vida consciente nuestra historia y nuestra verdad nuestras emociones y sentimientos "ue son comple,os procesos psicobiológicos. 1o podemos "uerernos! respetarnos ni entendernos a nosotros mismos si ignoramos los mensa,es de nuestros sentimientos! sobre todo! de los sentimientos llamados “negativos” como la rabia! el dolor y el miedo "ue tienen un origen real aun"ue! cuando persisten en el tiempo! suelen ser casi siempre reacciones a heridas pasadas. (ómo transformar las llamadas emociones negativas en sentimientos sensatos* 1ing%n sentimiento es eterno si podemos vivirlo. uando lo comprendemos desde la propia historia ya no se necesita temerlos. La ceguera forzada hacia estos sentimientos se paga con enfermedades corporales o anímicas. 9 los sentimientos positivos fingidos no sólo duran poco sino "ue tambi$n nos fuerzan a vivir con m#scaras y! tarde o temprano! habr# "ue afrontar las consecuencias del autoenga'o. 2odo ser humano necesita la verdad a toda costa y los sentimientos aut$nticos son la puerta de entrada; sin ellos se permanece atrapado en una c#rcel invisible de ilusiones! apariencias y de compulsión al sufrimiento. /n nuestras vidas hay m#s unidad de la "ue parece! pero si "ueremos ser adultos y vivir una vida aut$ntica! nueva y creativa es esencial la aceptación e integración de los distintos aspectos de nuestro ser "ue se nos revelan! implacablemente! en cada etapa de nuestro crecimiento personal. &ceptación "ue no es pasividad sino lucidez y limpidez en nuestra mirada para ver las cosas tal como son! sin condenar ni ,ustificar! sino integr#ndolas. /sta comprensión profunda exige silencio y soledad; esa soledad y ese silencio "ue nada tienen "ue ver con el aislamiento y "ue no re"uieren cualidades extraordinarias sino un estado de alta sensibilidad. 6in la interferencia del pasado adviene una comprensión en la "ue hay verdadero esclarecimiento y en la claridad hay dicha. La integridad! la conciencia! la responsabilidad y la lealtad a uno mismo nos devuelven! sin duda! la dignidad de ser.
n!ela "annuti Miembro del 'onse(o de )edacción de )evista 'riterio, #uenos $ires