Julián de Ajuriaguerra

 JULIÁN DE AJURIAGUERR AJURIAGUERRA A  Julián de Ajuriaguerra Ajuriaguerra Ochandiano, Ochandiano, nació nació el 7 de enero de 111 111 en !il"ao E#$a%a, &allece &allece el '( de )a*o de 1( de la edad de +' a%o#, era de nacionalidad rance#a * e#$a%ola, #u ocu$ación- .#i/uia0ra, ca0edrá0ico * $#icoanali#0a $#icoanali#0a  Julián de Ajuriaguerra fue médico especialista en neuropsiquiatría, profesor franc francés és y ademá además, s, psic psicoan oanal alis ista ta.. Él fue fue un de los los repr repres esent entan ante tess más importantes de la psiquiatría del siglo XX. En cuan cuanto to a sus sus oríg orígene enes, s, se segú gún n Aguir Aguirre re y uim! uim!n n "#$$ "#$$%& %&,, Juli Julián án de Ajur Ajuria iagu guer erra ra 'c(a 'c(and ndia iano no fue fue co cons nsid idera erado do )e*tr )e*trem emad adam ament ente e +asc +asco o prin princi cipa palm lment ente e por por su ca carác rácte terr pudo pudoro roso so en la form forma a de se serr y ciert cierto o desasosiego al e*ponerse a los demás. En relaci!n a su familia, su padre llamado Juan de Ajuriaguerra oi-olea conocido por su seriedad y austeridad era pro+eniente de un linaje de agricultores "era tolerante con las ideas y actitudes de los demás&. or otro lado, su madre /eodosia 't*andiano A*pe procedente de una familia con o0cio ferreter. Ella fue casada en primeras nupcias con Arrese, teniendo a  Jesús ArreseA*pe, el cual in1uy! so2re el destino de Julián de A. "Ej. 3ecidi! so2re sus nom2res, orient! a estudiar francés y a estudiar fuera de su país&. 4egú 4egún n el li2r li2ro o )5a 6ida ida y '2ra '2ra de Juli Julián án de Ajur Ajuria iagu guer erra ra "#$$ "#$$%& %&,, se menciona que él tu+o +arios (ermanos. /eresa naci! en #$7# y 8osario en #$7%. Am2as fallecieron a los %9: a;os de edad. En #$7: y #$7< naci! Juan y =la+io, respecti+amente. 5uego, >ariana en #$7? y Julián el el ? de enero de #$$#. En #$%? ingres! a la =acultad de @iencias para estudiar medicina, siendo destacado como )2rillante estudiante. estudiante. Al a;o después, entr! a la =acultad de >edi >edici cina na de arís arís.. 5uego uego,, en #$:7 #$:7 entr entr! ! co como mo inte interrno en Asil Asilos os siquiátricos del 3epartamento del 4ena, para estudiar la especialidad. En septiem2re de ese a;o pu2lic! su primer tra2ajo "muy poco citado& )5e oyau oyau 8ougeB ougeB Anatom Anatomie, ie, (ysio (ysiologi logie, e, sysi sysiopa opat(o t(olog logíe íe "El "El núcleo núcleo rojoB rojoB anatomía, 0siología y 0siopatología&. En #$:C, o2tu+o o2tu+o su título de 3octor en medicina. El contacto con maestros 3éjerine y Jean 5(ermitte, le permitieron reci2ir orientaci!n en sus in+estigaciones con temáticas so2re el funcionamiento cere2ral, el tono muscular y la psicomotricidad. or lo que sus autores fundamentales fueron Jean iaget "cola2oraría posteriormente en ine2ra& y Denri allon "arís, "arís, #F#?$9#$C%&. 4egún Aguirre y uim!n "#$$%&, descri2en que Julián de A. tu+o de maestro a 5acan, relaci!n que implic! un gran fer+or y trato personal afa2le, llegándole a regalar su 2i2lioteca. @omo co @omo cont nte* e*to to soci socio o (ist (ist!r !ric ico, o, en form forma a para parale lela la a su formac formaci! i!n, n, se encontra2a la uerra @i+il Espa;ola. Él se decide trasladar de =rancia a Espa;a para participar acti+amente en aquella luc(a ya que se oponía al facismo y a los golpes militares. En #$G<, se casa con =rance y se traslada

nue+amente a =rancia. Es a(í, donde comienHa su formaci!n en psicoanálisis "encuentra al psicoanalista 8ené 3iat-ine y comienHa a tra2ajar con ni;os portadores de trastornos del lenguaje y psicomotrices&. or otro lado, en ese momento él toma decisiones importantes para su +ida. 5a primera es que se nacionaliHaría como francés y la segunda es que formaliHaría su situaci!n profesional y académica "estatuto e*tranjero (ace que no sea pagado&. Al pasar el tiempo, el #$Otodo de 8elajacion de Ajuriaguerra aporta el que contempla el a2ordaje +er2al de los con1ictos afecti+os a ni+eles profundos.

A.OR2E3 DE JULIAN AJURIAGUERRA 1 E3!O4O DE UNA 5ARRERA .3I6UIÁ2RI5A ULGURAN2E Ajuriaguerra estudi! >edicina para ser psiquiatra y poco después de terminar su carrera o2tu+o por oposici!n el título de Mnterno de los Dospitales de arís. En sus inicios, en arís, estu+o en contacto con la prestigiosa Escuela =rancesa de siquiatría y cola2or! so2re todo en la @átedra de Denry @laude y más tarde en la de otro +asco, Jean 3elay, natural de ayona. En esos lugares coincidi! con muc(os de los que serían posteriormente grandes 0guras francesas como Denry Ey, con quien polemiH! en +arios congresos o Jacques 5acan el famoso psicoanalista. 4in em2argo, su espíritu independiente, de alguna manera )li2ertario, le lle+! a esta2lecer un contacto estrec(o con 0guras menos centrales académicamente como 3e @leraem2ault, a quien admir! muc(o y con el que tu+o una relaci!n estrec(a. En in+estigaci!n cola2or! estrec(amente con dos de las grandes 0guras de la eurología =rancesa, 5(ermitte con quien re0n! los conocimientos so2re la identidadB el conocimiento de sí mismo y el de los demás. Así mismo se interes! por el tono muscular, tra2ajando con Décaen, con quien escri2i! un tratado so2re el tema y con un profesor "como lo sería él posteriormente& del @ollege de =ance, Denry allon, con quien in+estig! so2re la importancia del tono muscular en la e+oluci!n infantil.

4egún él mismo dijo, el estudio del tono en los ni;os le lle+! a interesarse en el sicoanálisis y eligi! a ac(t, presidente de la poderosa sociedad psicoanalítica de arís "fundada en #$%C& como analista, tal y como lo (icieron 5e2o+ici, 3iat-ine, arcía adaracco o 4ifneos.  /ras la uerra >undial algunos psiquiatra progresistas, en un grupito en el que él jugo un papel de lideraHgo, como lo muestra el nom2re +asco que adoptaron ")atía&, fundaron el céle2re )4ector #: en el que, apoyados por la Administraci!n, crearon programas asistenciales no+edosos que pretendían difundir por el territorio francés en lo que se +ino a llamar )siquiatría de sector, uno de los integrantes fundamentales de la re+oluci!n de los ser+icios psiquiátricos en el mundo. 5a rele+ancia de sus tra2ajos cientí0cos y la creati+idad que demostr! en estos proyectos asistenciales fueron decisi+os para que fuera nom2rado @atedrático de siquiatría y 3irector de la @línica siquiátrica de el Air en de ine2ra el a;o #$<$. Allí, a lo largo de #? a;os, desarroll! un modelo asistencial que se (iHo conocido en el mundo entero y particip! en los progresos de la siquiatría de aquellos a;os con un grupo entusiasta de cola2oradores, organiHando cuatro 4imposia internacionales so2re otros tantos temas cla+es de la moderna siquiatría 2iol!gica. aralelamente enriqueci! la siquiatría infantil y fa+oreci! la acti+idad de los psicoanalistas gine2rinos en las tareas asistenciales principalmente e*tra9(ospitalarias, creando ser+icios am2ulatorios no+edosos en la ciudad. 4e retir! a los C< a;os y reci2i! el prestigioso )ri* de enO+e, que peri!dicamente distinguía a los personajes de cualquier campo que más (a2ían contri2uido al prestigio de esa ciudad. =ue nom2rado rofesor del elitista @ollege de =rance, donde ense;! e in+estig! con su equipo de arís durante < a;os en una cátedra que se cre! para él con el nom2re de )europsicología del desarrollo. 4e retir! después a 6illefranque en el aís 6asco9francés y desde allí cola2or! como profesor (onorario en la ense;anHa de la Ini+ersidad de il2ao y dirigi! el lan de 8eforma de la Asistencia psiquiátrica del aís 6asco, que (a estado +igente (asta (ace pocos a;os. Esta la2or ingente que (e resumido a +ista de pájaro dej! una (uella indele2le en la siquiatría internacional. 3eseo en estas páginas concentrarme un poco en algunos aspectos en los que esa in1uencia se mani0esta más de un cuarto de siglo después.

' DEL 2ONO U35ULAR A LA E.A28A 3esde la década de los <7 del pasado siglo, se produjo una +erdadera re+oluci!n en el conocimiento de la siquiatría infantil a partir de la o2ser+aci!n del comportamiento de los ni;os desde su nacimiento en relaci!n con su am2iente. El tra2ajo, realiHado de forma 2astante independiente en distintos centros de in+estigaci!n desde perspecti+as tan distintas como la Etología, la sicología genética, la ediatría, y la eurología, con1uy! en una )europsicopatología del desarrollo que se desarroll! en los decenios siguientes a partir, so2re todo, de los progresos de las eurocencias. 5as consecuencias (an sido de enorme importancia, no s!lo para la siquiatría infantil sino para la del adulto y la del anciano. En arís, Ajuriaguerra (a2ía prestado, como (e dic(o antes, una atenci!n particular a las alteraciones de la corporalidad deri+adas de determinadas lesiones cere2rales y que comprometen la distinci!n entre sí mismo y el otro. 4iguiendo a Denry allon, Julián Ajuriaguerra se interes! por las relaciones que la afecti+idad tiene con el tono muscular, so2re todo en el

lactanteB )5a +ida de los demás, dijo, es sentida y re1ejada por el cuerpo del ni;o, 2ajo la forma de reacciones t!nicas, (ipert!nicas o de pasi+idad que son a la +eH incorporaci!n de el otro y manipulaci!n de la agresi+idad propia. asándose en estas o2ser+aciones ela2or! un método de relajaci!n que lle+a su nom2re, inspirado en el Entrenamiento Aut!geno de 4c(utH, pero que introduce la inno+aci!n de in+itar al paciente a que +er2alice sus con1ictos para poder tra2ajar psicoterapéuticamente con las +i+encias )t!nicas. >ás tarde e*tendi! esa noci!n que él llam! )diálogo t!nico al intercam2io con la madre de caricias, gritos, miradas, sonrisas, soplos. Así  mismo, estudiaría posteriormente en ine2ra la desintegraci!n progresi+a del tono muscular y la aparici!n de unos nue+os comportamientos en el curso de la desintegraci!n de las demencias degenerati+as.

'1 Ele)en0o# neuro9$#ico9:#iológico# Ajuriaguierra denomin! )equipo de 2ase al conjunto de factores innatos con que el ni;o se enfrenta al desarrollo y se interes! en especial por la e+oluci!n psicomotora. 5os ni;os interactúan con sus padres "con su madre, so2re todo& en una relaci!n que +a modulando sus diferentes funciones. A+anHándose a los descu2rimientos actuales, se;ala2a este autor que (a2ía una interrelaci!n entre la euro0siología cere2ral y la in1uencia del entorno en el proceso de especi0cidad de las neuronas y de las sinapsis. 4e adscri2ía al paradigma neuro2iol!gico de la )autoorganiHaci!n de los procesos neuro2iol!gicos por el que el genoma se nos presenta como la memoria a muy largo plaHo de los procesos autoorganiHadores que determinaron las características generales de la especie. 8ecorda2a que la esta2ilidad de la memoria genética está compensada por el aHar de las recom2inaciones genéticas y el de la memoria epigenética o el aHar de la +ida. Ajuriaguerra estudi! "inicialmente con André /(omas y con otroe cola2oradores después&, en ancianos y en ni;os, la eurología madurati+a y la 'ntogénesis del funcionamiento neuro9psicol!gico del desarrollo. or otra parte, con Denri allon, estudi! las relaciones entre la +ida emocional y el tono muscular. 5le+! al má*imo desarrollo las relaciones entre el tono, la e*presi!n corporal y la +ida emocional. 3escri2i! c!mo el ser (umano, aunque esté callado, )(a2la a tra+és de su cuerpo, y )(a2la con y para el )'tro, esta2leciendo una comunicaci!n que es un +erdadero )3iálogo  /!nico. Ese es el modo de comunicaci!n principal al comienHo de la +ida y, aunque luego pierde cierta rele+ancia, tam2ién en el adulto. En efecto, la armonía del tono muscular se relaciona íntimamente con el área afecti+o9 cogniti+a, propia e intransferi2le de cada indi+iduo. or ejemplo, las emociones pueden llegar a producir alteraciones "a +eces pro*ísticas& en el tono. 3. Julián pu2lic! con arcía adaracco otro tra2ajo so2re este tema en el que se;alan el escollo que surge en la relaci!n con el paciente cuando un pro2lema psicol! gico actúa so2re el cuerpo y la importancia de sa2er comprenderlo, contemplándolo como una forma que tiene el paciente de )(a2larnos de ese cuerpo. 4e;alan los autores que el aprendiHaje del tono muscular es una parte del aprendiHaje de la 8ealidad. Ajuriaguerra record! tam2ién que Escalona (a2l! de ni;os acti+os y ni;os inacti+os. or su parte, esta2leci! una tipología del desarrollo de la psicomotilidad en los dos primeros a;os del ni;o, fácilmente e+alua2le, que aún (oy sigue presentando interés.

'' ;acia una ana0o)
capacidades ejecuti+as. En el caso del autismo infantil le es más difícil a ese autor a+enturar una (ip!9 tesis, aunque 8iHHolatti (a propuesto algunos elementos.

'( Le#ione# cere"rale# * 0ra#0orno# de la iden0idad En #$<% Ajuriaguerra pu2lic! con >. Décaen sus estudios so2re la Mntegraci!n y la desinte graci!n de algo que con nom2res +ariados y no siempre equi+alentes se (a llamado )imagen espacial del cuerpo, )esquema postural, )imagen de uno mismo, )imagen de nuestro cuerpo o )somatognosia. 4e 2asaron esos autores en los trastornos somatogn!sicos que (allaron en numerosos casos de lesiones encefálicas, en particular, el desconocimiento o la des+aloriHaci!n de la propia (emiplejia, "anosognosia y anosodiaforia, respecti+amente&, la sensaci!n de ausencia de un (emicuerpo, las ilusiones de transformaci!n corporal y las ilusiones de miem2ros fantasma "en amputados&. En lo que concierne al cuerpo en su relaci!n con el espacio, estudiaron de las desorganiHaciones del gesto, de la orientaci!n y del conocimiento de ese cuerpo en el momento de )actuar o de )ser actuado "apra*ia constructi+a y apra*ia del +estirse&. /rataron, además, de las pertur2aciones somatogn!sicas en el transcurso de determinados síndromes psiquiátricos como la despersonaliHaci!n, el fen!meno del do2le o sosias, la autoscopia y el fen!meno de desaparici!n de la imagen en el espejo "autoscopia negati+a&. 3ecety "%77G& se;ala que el (ec(o de distinguirse a sí mismo del otro es fundamental en la empatía. arece que el l!2ulo parietal inferior del (emisferio derec(o se acti+a más cuando el sujeto es imitado por otro y el l!2ulo parietal del (emisferio iHquierdo se acti+a más cuando el sujeto imita al e*perimentador. En el l!2ulo parietal y en el c!rte* frontopolar del (emisferio derec(o se detecta un fuerte aumento del meta2olismo cuando los sujetos toman la perspecti+a de otro. En cam2io, si los sujetos imaginan una acci!n en primera persona, se acti+an más la ínsula, el girus postcentral y el c!rte* parietal del (emisferio iHquierdo. or otra parte, gracias a nuestra capacidad de representaci!n interna del mundo e*terior y de nosotros mismos, no es necesario que realicemos una acci!n para conocer sus consecuencias, porque podemos anticiparla y simularla mentalmente. >uc(os estudios realiHados con técnicas de neuroimagen pretenden identi0car las regiones cere2rales implicadas en la simulaci!n mental de las accionesB áreas premotrices, motrices primarias, parietales y cere2elosas, con predominio del (emisferio derec(o. 6ittorio allese dice que las in+estigaciones (an puesto en e+idencia los mecanismos neurales que median entre la e*periencia personal que tenemos so2re nuestro cuerpo y las apreciaciones que tenemos so2re los demás. Ese conocimiento personal, relacionado con la e*periencia corporal, permitiría nuestra relaci!n 0na con los otros y la intersu2jeti+idad. Es la )simulaci!n corporaliHada, de la que el sistema de neuronas espejo es quiHás una 2ase. 5a simulaci!n, para este autor, no es necesariamente el resultado de un esfuerHo cogniti+o consciente y +oluntario para interpretar las intenciones ocultas de las conductas pú2licas de los demás, sino más 2ien un mecanismo 2ásico del funcionamiento de nuestro cere2ro. Este mecanismo parece jugar un papel importante en nuestra apro*imaci!n al mundo, porque representa el resultado de posi2les acciones, emociones o sensaciones que uno podría realiHar o e*perimentar y sir+e para atri2uir ese resultado a otro organismo.

 /am2ién se (a +isto que las +ariaciones de los índices 0siol!gicos asociadas a la e*presi!n de las emociones "ritmo cardiaco, presi!n arterial, sudoraci!n& son semejantes en las personas que actúan de determinada manera, en las que las o2ser+an tal acci!n y en las que la imaginan. =elician se;ala que, en general, se piensa que la designaci!n de partes del cuerpo conlle+a un sistema de representaci!n común de características +isuoespaciales tanto en el cuerpo propio como en el cuerpo de otros indi+iduos. 4in em2argo, la o2ser+aci!n de dos pacientes en que (a2ía (a2ilidades disociadas, conduce a cuestionar ese modelo.

'= .#ico9#ociologuc(os comportamientos de ese tipo "como la )resonancia motriH, el diá9 logo t!nico& se e*plican, como (emos descrito antes, por la acti+aci!n automática de las representaciones motrices y la ausencia de in(i2ici!n. @omo es sa2ido, actualmente se (an descu2ierto neuronas en el c!rte* premotor del mono "regi!n implicada en la programaci!n de los mo+imientos +oluntarios& que se acti+an cuando se ejecuta una acci!n orientada (acia un o2jeto "coger un troHo de alimento, por ejemplo& y cuando él o2ser+a al e*perimentador realiHar la misma acci!n. En el (om2re, con neuroimagen funcional, se (a +isto que cuando o2ser+amos una acci!n realiHada por otra persona, se acti+an las regiones cere2rales del c!rte* premotor y del c!rte* parietal especialiHadas en la generaci!n de acciones integrales. Esta resonancia motriH se organiHa de forma somatotípica, porque las Honas del c!rte* premotor "que programan las unidades musculares implicadas en un gesto dado& que se acti+an a la +ista de una acci!n realiHada por otro, son precisamente las que son responsa2les de la acci!n real. @uando el sujeto perci2e mo+imientos imposi2les "por ejemplo un gesto de la mano que atra+iesa la ca2eHa& la

regi!n del c!rte* prefrontal +entromedial implicada en la detecci!n de con1ictos o de inco(erencias, se acti+a fuertemente. arece que fue 3arPin el primero en descri2ir los procesos emocionales en los animales "su propio perro, en particular& y el (om2re, y en proponer una continuidad de mecanismos entre las diferentes especies "3ecety, %77G&. 5as emociones ejercen funciones preeminentes en la mo+iliHaci!n de respuestas adaptati+as en las situaciones de urgencia "por ejemplo, modi0caciones meta2!licas, endocrinas y +egetati+as que preparan la (uida o la luc(a&. @ompartimos con otros animales un conjunto de mecanismos de tratamiento de la informaci!n emocional que juegan un papel regulador en la +ida en grupo. Estos mecanismos residen en un conjunto de circuitos neuronales especí0cos del sistema lím2ico, que unen la amígdala al c!rte* temporal, al c!rte* singular, y al c!rte* or2itofrontal. 3eterminada emoci!n, una +eH acti+ada por se;ales del am2iente, desencadena una cascada de reacciones a corto término "por ejemplo, (uir de un depredador& o a largo término "por ejemplo, e+itar ese peligro en el futuro&. ara 3ecety "%77G&, sin em2argo, s!lo el (omo sapiens estaría dotado de la capacidad de )mentaliHaci!n, es decir de considerarse o considerar a los otros como seres cuyo comportamiento está causado por estados mentales "intenciones, creencias, emociones& que pueden ser similares o diferentes a los nuestros. 4e;ala que, cuando un recién nacido escuc(a llorar a otro 2e2é, tiene tam2ién tendencia a (acerlo, por un mecanismo ligado al contagio emocional, precursor de la empatía. Esta reacci!n ante la ansiedad del otro se mani0esta e*clusi+amente (acia los seres (umanos y no es desencadenada cuando el 2e2é es e*puesto al llanto de un 2e2é c(impancéB el 2e2é comparte las emociones con las personas con las que puede identi0carse y esta2lece s!lo con ellas una distinci!n entre sí mismo y el otro. 'tra capacidad propia a los comportamientos inter9relacionales es la de controlar la +iolencia. In llamado )in(i2idor de la +iolencia forma parte del mecanismo cogniti+o de comunicaci!n no +er2al descu2ierto por 5orenH "5orenH, #$?7& en el animal. Ese in(i2idor inter+iene en las que se pueden llamar )emociones moralesB empatía, simpatía, culpa2ilidad, remordimientos. 5os ni;os desde el mes :$ distinguen sin am2igQedad dos tipos de normas. or una parte, las )reglas morales propiamente dic(as que se re0eren a la felicidad, a la justicia, a los derec(os, y que están fundadas so2re la (onestidad y la idea de e+itar (acer el mal y las juHgan o2ligatorias. or otra parte, )las reglas con+encionales, que se juHgan no generaliHa2les y contingentes, incluso si dependen de una pretendida )pala2ra de 3ios y que están fundadas en la organiHaci!n social. El ni;o )psic!pata "antisocial& no muestra en cam2io ninguna reacci!n emocional al malestar del otro, es +iolento y agresi+o, sin remordimientos ni culpa2ilidad. '> .#ico$a0olog
'>1 La de#e)$a0a(ler&, trastornos de personalidad "por ejemplo el trastorno narcisista& y otros cuadros psiquiátricos "3ecety, %77G& se encuentra una carencia de empatía, una )desempatía. 4e suele a0rmar que las lesiones +asculares del (emisferio derec(o están asociadas a dé0cits emocionales. 5as lesiones del c!rte* prefrontal dorsolateral y medial pueden conlle+ar un trastorno de la e*presi!n de las emociones, una falta de

moti+aci!n a in+olucrarse en interacciones sociales y a +eces un estado general de apatía. Ina lesi!n del c!rte* or2itofrontal altera esencialmente la +i+encia emocional. 4e a0rma que los pacientes con síndrome de Asperger tienen, como los que presentan otros síndromes del espectro autista, alteraciones en la empatía "una forma diferente de )sentir& que los )neurotípicos. or otra parte se (a postulado que la alteraci!n del sistema de neuronas espejo di0cultaría la imitaci!n en los sujetos con Asperger, lo que cuadraría con teorías sociales como la )/eoría de la mente. %.<.%. /ono muscular e intersu2jeti+idad en las demencias @on sus cola2oradores de ine2ra, Ajuriaguerra a2ord! la desintegraci!n de las funciones sim2!licas y del tono muscular en las demencias desde un punto de +ista )retro9genético en relaci!n con sus conocimientos profundos de la ontogénesis de las funciones, so2re lo que (a2ía in+estigado, tanto, en su época de arís. Aunque o2ser+! que ciertos tipos de e+oluci!n remedan aquellas que se descri2en en los ni;os a lo largo de su desarrollo, Ajuriaguerra no se dej! em2aucar por una posi2le equi+alenciaB en el ni;o, cada estadío, en equili2rio, está destinado a integrarse en otro más amplio y  jerárquicamente superiorK pero en el caso de los dementes, los estadíos, aunque parecidos, están en desequili2rio y destinados a reducirse a sistemas más elementales. 4í es cierto que en el demente se encuentran semejanHas )fotográ0cas estáticas con el ni;o en e+oluci!n, Ajuriaguerra demostr! que los retrocesos in+oluti+os no tienen que ser necesariamente superponi2les a los ni+eles de integraci!n del ni;o. El aspecto (ist!rico de la degradaci!n sigue ciertas normas formales de retrogénesis sucesi+as, teniendo, claro está, una patogenia no reducti2le a la de la ontogénesis, @on las prue2as de e+aluaci!n de iaget, Ajuriaguerra descu2ri! c!mo las conductas de los dementes se desorganiHan en un orden constante e in+erso al orden jerárquico de su e+oluci!n en el desarrollo genético.  aralelamente a los trastornos de las funciones sim2!licas, se produce a lo largo de la e+oluci!n de las demencias degenerati+as una progresi+a desintegraci!n del tono muscular que puede inducir a aplicar err!neamente a estos pacientes el diagn!stico de enfermedad de ar-inson. 5a )demenciaci!n (ace reaparecer formas de comportamiento muy primiti+as instinti+o9re1ejas que e*isten en los ni;os pero +an desapareciendo a lo largo de la e+oluci!n infantil. 4on los trastornos que Ajuriaguerra llama )fen!9 menos de imantaci!n re1ejo de prensi!n, re1ejo oral y táctil, 0jaci!n de la mirada, superposici!n al modelo. Así mismo reaparecen fen!menos que (a2ían desaparecido en el ni;o cuando madur! el tono muscular, como las sincinesias y las estereotipias. Es necesario se;alar que las concepciones de Ajuriaguerra so2re la empatía tenían una repercusi!n decisi+a en su la2or como maestro. 3urante los tiempos en que dirigi! los ser+icios psiquiátricos de ine2ra instaur! entre los que éramos residentes de psiquiatría el aprendiHaje de las relaciones interpersonales, ofreciéndose como modelo en las sesiones clínicas con los pacientes y aconsejándonos que participáramos en grupos dinámicos de re1e*i!n que se ofrecían en su 3epartamento. Así mismo nos anima2a a que aprendiéramos su técnica de relajaci!n en los cursos que allí  auspicia2a. Am2as e*periencias resulta2an e*tremadamente útiles para el desarrollo de las (a2ilidades interpersonales y la relaci!n empática con los pacientes y a ellas me (e referido recientemente.