El versátil jardín mexicano Desde el punto de vista ambiental y paisajístico, México es una tierra de contrastes, con paisajes que van desde el desierto hasta el exuberante bosque tropical, y desde las frías alturas de los volcanes hasta las cáli das playas. Sin embargo, lo más representativo son las zonas yermas de la frontera con Estados Unidos, donde la l a huella hispana dibujó con singular personalidad su arquitectura y jardines. Ni colonial ni árido; ni tropical ni temporal; fresco, acogedor y despejado: así es el verdadero jardín mexicano.
¿Cómo se logra el típico "estilo mexicano"?· mexicano"? · Para lograr un inequívoco sello mexicano –que no corra el riesgo de confundirse con lo colonial o lo español- la arquitectura es determinante: nada mejor que el diseño regional característico, que interpretó a su modo la gran casa de hacienda (formas ( formas simples y austeras, paredes gruesas y toscas, uso de materiales artesanales como rodones, adobe y fibras- y colores fuertes). En fuertes). En la misma línea, el jardín mexicano también armoniza con la arquitectura contemporánea y la mediterránea. Sin embargo, el efecto puede no ser tan explícito en otros estilos.
· El patio es quizá el espacio más característico que dejó como herencia la colonia española: con superficies pavimentadas y escasa vegetación -austera en su exterior- su apariencia va cambiando hacia adentro, gracias a espacios abiertos, con gran profusión de plantas cultivadas en macetas. · Las grandes vasijas de cerámica y maceteros dispuestos sobre el pavimento son lo más definitorio y expresivo del estilo: pueden ser muchos y de varios tamaños, acogiendo distintas especies, desde coloridos geranios hasta perfumados laureles; si son pocos, deben ser de dimensiones importantes, dispuestos simétricamente en el patio o contra los muros. · Una fuente de agua o pozo en uno de los muros o en el centro, sobre piso pavimentado con cerámica de barro, imprime un aire inconfundible, además de cálido y acogedor. · Reconociendo la innegable influencia española, la mayoría de las especies florales calzan con lo mexicano, de preferencia las buganvilleas y jazmines contra un muro o cerca de la terraza, los geranios, mandarinos y limoneros, romero, laurel y cactus grandes en macetas. · Para dar mayor sensación de frescura se utilizan palmeras –solas o en pequeños grupos-, especialmente para delimitar espacios como la terraza. · No se usan manchones de pasto ni macizos arbustivos, que –aunque armónicosterminarían por desdibujar el efecto deseado, quitándole el sello mexicano al jardín. · Otra opción son cactus y algunas suculentas plantadas de manera aislada y rodeadas únicamente de maicillo y algunas rocas. Sin embargo, es un diseño algo purista y radical para nuestro país, con excepción de la zona norte.
¿Cuál es el mejor lugar?· Cualquier sitio soleado, algo seco y sin heladas es apto para crear un rincón mexicano. · Para evitar caer en extremos, puede desarrollarse en rincones: en el patio de acceso, un patio interior o una terraza pequeña, simplemente como un detalle. Esto permitirá resaltarlo más y lucirlo mejor, como un agradable foco decorativo. · Por el tipo de especies y la forma de cultivo el jardín mexicano es muy fácil de
mantener; no necesita de mucha dedicación ni tampoco cuidados especiales; además, se puede disfrutar en toda época del año. Es
ideal para lugares donde escasea el agua. Las plantas usadas son muy resistentes al sol y poco propensas a enfermedades. Sólo hay que tener la precaución de regar en las horas de menor calor, exigencia que se hace vital para plantas cultivadas en macetero al exterior. · Las palmeras y los cactus no necesitan ni poda ni atenciones especiales. · Para mantener las especies florales armónicas y compactas, conviene podar a finales de la temporada. Es recomendable renovarlas cada 4 o 5 años, para garantizar esplendor por largo tiempo. A comienzos de primavera hay que recambiarles la capa superficial de tierra y abonar con superfosfato triple (para estimular la floración). · Es necesario chequear a principios de temporada el tamaño y el estado de los maceteros: hay que reemplazar cuando las raíces han crecido demasiado o la planta acusa alguna enfermedad radicular.
La terraza y accesorios decorativos· El estilo del mobiliario es bastante libre, aunque los muebles de madera o fierro son especialmente indicados. Los tapices, en colores contrastantes y con diseños geométricos. · Bienvenidas las piletas de piedra con sistema de agua corriente; también, piezas cerámicas o de piedra adosadas al muro, con figuras como cabezas de león o figuras humanas. · Revestimientos de piso: en gris de un color y con pequeños tacos cerámicos incrustados de modo de formar diseños; el huevillo, mejor aún si delinea figuras; si el espacio es pequeño y bien definido, también puede usarse un revestimiento cerámico en colores ocres, rojizos o azules. · Maceteros en terracota, greda o piedra reconstituida, de todas formas y tamaños, hasta los gigantes; también vasijas esmaltadas, siempre que sean azules o verdes. · Canastos de fibra y coloridas frutas artificiales; composiciones decorativas hechas con cortezas de árbol y cactus secos
Los magníficos jardines del México antiguo eran característicos de los monarcas de entonces. En ellos se cultivaban hortalizas y árboles frutales, y aunque eran hechos expresamente para el placer de los señores parecen haber contenido flores y plantas medicinales. •
Las florestas son muy amenas, frescas, y de muchos árboles y yerbas. Tienen yerbas y árboles de diversas flores. Tienen aguas, manantiales o de río; con que se riega. Es lugar de tierra fértil, es lugar apacible y muy deleitoso. Están plantados en floresta árboles de muy olorosas y preciosas flores (fray Bernardino de Sahagún, 1577). •
No olvidemos las huertas de flores y árboles olorosos, y de muchos géneros que dellos tenía [Motecuhzoma], y el concierto y paseadero dellas, y de sus albercas, estanques de agua dulce, cómo viene una agua por un cabo y va por otro, e de los baños que dentro tenía, y de la diversidad de pajaritos chicos que en los árboles criaban; y que de yerbas medicinales y de provecho que en ellas tenía, era cosa de ver; y para todo esto muchos hortelanos; y todo labrado de cantería … (Bernal Díaz del Castillo, 1568). •
Cacahu acuáhu itl o cacao (T h e o b r o m a c a c a o L.), libro XI, f. 123r.
Yolloxóchitl o flor de corazón (Talauma mexicana), f. 53v .