HISTORIA DEL TRAJE Y DE LOS TEXTILES 1
05. La Modernidad en occidente: La estética del Barroco
05. La Modernidad en occidente: La estética del Barroco
Introducción A medida que avanzó el Renacimiento, se observó con mayor claridad el gusto por la forma y el movimiento a expensas de la línea recta. Los juegos de luces y la asimetría otorgaban identidad al estilo conocido como Barroco.
Podemos definir al Barroco como la exaltación de la forma y el movimiento, el claroscuro. En esta etapa todo tiende a “enrollarse” y “torcerse”, se quiebra y se resuelve en línea curva, donde las luces y sombras juegan con sus contrates, dando la sensación de vida.
El sereno equilibrio de los primeros tiempos del Renacimiento, adquirió sensación de opulencia, majestuosa y riqueza en el Barroco. La figura humana se destacó a partir de la redondez y el ideal de fecundidad de una clase prospera y feliz, que se manifestó por un gusto o canon estético marcado por la redondez. La línea tonel, abultaba la silueta, descubriendo los hombros en generosos escotes. Francia se consolidó como árbitro de la moda y la vanguardia en el desarrollo de las artes decorativas e innovaciones estéticas. Esta tendencia se vio acentuada desde lo político con el advenimiento de los Borbones al trono Español. Por su política de estado, Francia impuso su estilo y productos a toda Europa. Luis XIV, ya en el pleno ejercicio de su reinado, fue quien dio origen al protocolo, creando Versalles como palacio y centro político donde vivió con su corte. El nacimiento de la Diplomacia se manifestó, entre otros ítems, con los envíos semanales que Francia realizaba a Inglaterra, de los modelos de tamaño natural y de los atuendos “correctos” que trataban de promocionar de esta manera materiales y accesorios fuera de sus fronteras. De aquí se acuñó el término moda que empleamos actualmente.
01. El sistema vestimentario: sus materiales y características Además de las telas de exquisitos materiales, tales como la seda, el lino y los hilados metálicos, con los que producían taffettas, brocados y terciopelos, es el auge y esplendor lo tuvo el encaje, manufactura artesanal a la aguja o con “bolillos”. El encaje, pieza de “gran maestría” en su ejecución, denotaba poder económico y “refinamiento estético” por su uso como complemento en los más variados elementos de la indumentaria. Estaba presente en todas las prendas, alcanzando su tendencia hasta el uniforme militar.
UADE / FACO / Licenciatura en Diseño Textil e Indumentaria
Para mencionar solo una de las localidades más representativas, la ciudad de Calatrava, en la Mancha, poseía 11.000 almohadillas, un proporcional a la cantidad de encajera a bolillos que trabajaban en la zona. En Francia, Lyon, se encontraba el centro textil más importante, imponiendo las fábricas lionesas su técnica, estilo y gusto al resto de Europa.
01
En relación a las telas labradas, sus brocados y derivados adquirieron un estilo propio, con guías de flores, listados y el empleo de brillantes colores, que no pudieron ser copiados en los otros grandes centros europeos. Francia se hizo centro de la industria de la moda y sus accesorios. Hasta 1675, solo los sastres eran los responsables de la confección de las vestimentas (femeninas y masculinas). Para esta fecha, se habían establecido diferentes ramas derivadas de la profesión: costureros y costureras, bateras y tejedoras de capas, modistas, peleteros, guanteros, especialistas en belleza y peinadores. Estos nuevos rubros se vieron estimulados por el teatro, que ejerció su influencia desde el palacio de Versalles para el lanzamiento de nuevas modas y modos.
En Versalles, se impusieron una serie de reglas vinculadas al teatro, peculiares y relacionadas al uso de los antifaces, los lunares de terciopelo, el uso de polvos y coloretes.
1.1 Estilo Luis XIV Este estilo, puede a su vez se divide en tres grandes etapas, que coinciden con el crecimiento “cronológico” y político de Luis XIV.
Veamos… • • •
1er. periodo - 1644-1661: Juventud. El Inicio de su Reinado. 2do. periodo - 1661-1670: la plenitud del Poder. La centralidad política: La Corte de Versalles. 3er. periodo - 1670 -1715: La adultez y los cambios socioculturales.
Mujeres: Primera y segunda época de Luis XIV Se mantenía el uso del cuerpo “rigidizado”. Se había adopción el escote ovalado, de hombro a hombro, sin cuello, que descubría la redondez de los hombros. Las mangas eran muy anchas hasta el antebrazo, con terminación de volados “insinuantes”. Para una mejor ornamentación y belleza, estos volados se aplicaban sobre el ya existente en la manga de la prenda. La falda se componía de dos superpuestas: una que permanecía por debajo y otra que la cubría como abrigo, recogiéndose por detrás con una terminación en cola. El largo estaba establecido según las leyes del protocolo por la condición de la portadora (marquesa, duquesa, etc.), que se recogía hacia atrás dejando ver la falda en toda su ornamentación, llamándola burlonamente “modesta”. Estas largas colas eran llevadas por pajes. Generalmente era un criado traído de alguna de las colonias, que se lo vestía llamativamente con sedas de colores.
Este sistema de faldas sobrepuestas en las primeras décadas en Versalles, se resolvía con una variante de sobrefalda con importante cola. Referencia: http://www.chateauversailles.fr
En los años de Versalles se impuso en la cabeza un tocado de línea vertical, que se usaba inclinado hacia delante, llamado fontange, realizado con telas almidonadas, cintas y encajes, que tendían a estilizar la silueta. Este armazón se preparaba con una “toca” de dos o tres hileras de volantes de encajes en alto, y el cabello recogido, destacando esta especie de “peineta” de metal. El peinado imponía bucles pequeños sobre la frente y dos largos bucles a los costados de la cara cayendo sobre los hombros. En esta etapa, comienza a usarse dentro del palacio una “monoprenda de abrigo” que se calzaba sobre las demás conocida como “habit a la francesa”. Esta prenda poseía mangas y los bajos se recogían como si fuesen una falda atrevida.
La monoprenda de abrigo cambiaría el tipo de escotaduras,
La Duquesa Madame de la Fontange, impuso
siendo estas cuadrangulares.
la moda del fontange, en un gesto juguetón y provocativo ante el Rey, en una salida de caza, al volarse su sombrero.
UADE / FACO / Licenciatura en Turismo y Hotelería
01 02
Todo vestido estaba embellecido por bordados, apliques de encajes, trenzas, moños y profusión de cintas. El sistema vestimentario estaba básicamente compuesto por: • Camisa • Calzones • Medias • Corsé • Enagua “secreta” • Cuerpo del vestido • Falda modesta • Sobre falda “atrevida o bribona” • Calzado: chinela veneciana
En Versalles se imponía la moda del “negligé” para estar dentro de las habitaciones. Esta consistía en un manto suelto sin cinturón, similar al tapado o abrigo general usado en ese momento, llamado “manteau”.
El traje de “caza” o de montar conocido como “amazona” se organizó siguiendo las premisas de la estética masculina de casacón y casaca con la cravatte de encaje en el cuello. Como las mujeres montaban de costado, esta amazona tenía las riendas de su caballo en la mano izquierda y si era un día soleado su parasol sostenido en la derecha.
Hombres El traje masculino sufrió grandes transformaciones, iniciando las tipologías vestimentarias que aún se verán en el traje durante el siglo XIX. Al inicio de esta etapa, los jubones cortos y abiertos dejan ver generosamente las camisas. Los puños y cuello se adornan con volados de encajes. El calzón quedaba enganchado para adquirir la forma de un calzón amplio (el rhingrave). Como abrigo, se usaban capas redondas, cortas, llevadas sobre los hombros solo apoyada sobre uno de ellos, de forma negligè. En esta época aparecieron las grandes pelucas de pelo natural crin o pelo de cabra. Se peinaban partidas en dos bandas de apretados bucles que caían hasta la cintura. A su vez, la cabeza se cubría con sombreros blandos, de fieltro, con amplia ala y adornados con varias plumas.
Transformaciones del atuendo masculino Esta moda exaltada, rodeada de cintas, moños y encajes fue transformándose lentamente. Luis XIV 2da. Época, en Versalles El calzón se estrechaba para ser prendido bajo la rodilla sobre las medias de seda. Desapareció así el derroche de cintas y encajes, la superficie del traje se hizo más lisa y apareció el bordado metálico. La camisa solo era visible por medio de sus puños y cuellos y se adornaba con una corbata de encaje anudada. La capa se sustituyó por una prenda de origen militar: la casaca. Esta prenda se ajustaba a la cintura con largos faldones y grandes vueltas en las mangas y puños, como así también en los bolsillos.
En un comienzo, su uso era concedido por
El sombrero del momento era el tricornio que se solía llevar bajo el brazo.
Versalles.
UADE / FACO / Licenciatura en Turismo y Hotelería
privilegios otorgados por el mismo rey, que en una estricta etiqueta fue impuesta en
01 03
Hacia 1670, tercera etapa estilística de Luis XIV, el lujo ostentoso fue decreciendo y la vestimenta masculina transformándose, ya que el Casacón, nunca se quitaba y, de ser una segunda prenda, se transformó en la prenda exterior del caballero. Esto llevó a que la casaca interior también fuera transformándose en una prenda que no se veía, por lo que su morfología fue más adherente y con detalles solamente en las partes visibles: la línea de la cintura estaba bien definida en el entalle del casacón. Por la espalda, detrás de cada cadera, el faldón daba amplitud a la prenda, cortado y decorado con hilera de botones. Los bordados de oro y plata se limitaban a los anchos puños del casacón, conocido en la actualidad como vesta o casaca y en la pechera de la casaca interna. En los delanteros, cuando los botones y los ojales eran dispuestos con trenzas de pasamanería, se los denominaba “brandeburgos”.
Esta moda se impuso por los electores de Brandeburdo, Francia, en 1674. Su uniforme estaba conformado por unas capas que tenían a este avio como sistema de prendedura.
Veamos a continuación la composición del sistema vestimentario masculino durante el período de Luis XIV… 1º época de 1664-1680 Compuesto por: •
Camisa de lino
•
Calzones interiores
•
Medias, de seda roja
•
Calzones “rhingrave”. Manojos de cintas
•
Jubón recto corto y/o casaca larga de caza con bolsillos y puños
•
Peinado largo enrulado, recogido en trenzas
•
Sombreros bi y tricornio
•
Zapato con tacón 5cm, de color rojo
2do. período 1661-1670 Durante este período, se comenzó a dejar de usar los calzones amplios, retornando el modelo de calzón más justo, acompañando un nuevo gusto estético por las combinaciones de las prendas. La corte de Versalles y el protocolo creado en esta época por Luis XV le otorgó importancia al casacón de privilegio. Lentamente se impuso como moda el uso de este tipo de prendas, por la amplitud de su tamaño y la importancia que la misma reviste, cubriendo las piezas de vestir de debajo. Las prendas que conformaban este sistema estaban compuestas por: •
Camisa de linon (interior)
•
Calzones interiores (bragas)
•
Medias (de seda roja para el rey) que generalmente se sujetaban con ligas
•
Calzones de perneras más adherentes, sujetos con un pulsillo debajo de la rodilla
•
Casaca larga hasta la primera cadera
•
“CASACON” de privilegio o Casacon
•
“Cravatte”
•
Peluca In-Folio, color castaño, larga hasta los hombros con bucles y rizos
3er período 1670 -1714 Durante esta época, se mantuvieron las mismas prendas del sistema del período anterior.
UADE / FACO / Licenciatura en Turismo y Hotelería
01 04
1.2 Estilo Luis XV Este siglo marcó un cambio en las tipologías vestimentarias que se fueron manifestando década a década. Estilísticamente, siguiendo las artes plásticas podemos hallar dos estilos: •
“Rococo” hasta 1750, que coincidió con el periodo de la regencia y primeras décadas de su gobierno. Transición al “Neoclásico” hasta su muerte 1774.
•
El rococo refinó las curvas y sus detalles eran pequeños. Predominaron los tonos pasteles: gris, rosa, celeste y los motivos textiles resaltaban la combinación tono sobre tono, trabajando con hilaturas de oro y plata. La ornamentación tendía a disminuir en su tamaño, dejando pequeños motivos de canastillas y ramilletes de flores y frutos que se ordenaban en guías verticales, dando origen a las famosos droguets.
Rococo: Este estilo, cuyo nombre deriva de los vocablos rocalli y coquille, que significan respectivamente rocalla y concha. Son estos ornamentos y motivos los que caracterizaron este estilo, marcado por el movimiento, la asimetría y la vinculación temática con la naturaleza. Este estilo afectó a todos los aspectos del arte, moda, costumbres y artes decorativas. A partir de 1745, este estilo, que es sinónimo
COMENTARIO DEL DOCENTE El comercio con los países americanos y asiáticos puso “en auge” las telas muy livianas de algodón conocidas vulgarmente como Indianas o cotonias, y las de seda como las tafettas
de Francia por sus detalles y suavidad de las formas y ornamentaciones, se lo conoce como estilo “Pompadour”, uno de los favoritos del Rey Luis XV.
de teñidas en la urdimbre. Una importante dama, la Marquesa de Pompadour, fue accionista de la Compañía de Indias, y la responsable de introducir el gusto por las “chinoiseries”, y las telas y motivos decorativos orientales.
Luis XV contrajo matrimonio con una princesa polaca: Maria Leczinska, sin embargo, la influencia en la moda y las artes estuvo dada por sus dos amantes: Madame de Pompaudour y Madame Du Barry.
Madame de Pompaudor, es considerada la “madre de la Ilustración”. Amante de las artes y las ciencias, llevó a este
El sistema vestimentario masculino
estilo a su máximo de refinamiento. Asimismo, estimuló las corrientes intelectuales, que hicieron de este siglo como el “siglo de las
Estaba constituido básicamente por: •
Camisa con cuellos y puños de encaje
•
Calzones interiores
•
Calzones de seda natural adherentes
•
Medias de seda que se sujetaban con ligas o se enrollaban a la altura de la rodilla. Montaban sobre éstas los bajos acordonados o con hebillas del calzón.
•
Pelucas que se llevaban recogidas en diferentes formas y empolvadas en color blanco color blanco.
luces”.
Casacón con ruedo armado, con faldones de cuatro a cinco pliegues en los laterales sujetos con un importante botón a la altura de la cadera, que remarcaban la amplitud del ruedo del Casacón y la rigidez del mismo. El faldón de la casaca, cuyo largo llegaba a las rodillas, estaba reforzado y rigidizado con hilos tipo barba de ballena. Su prendedura remarcaba la línea de la cintura y la amplitud del mismo en el ruedo. Larga hasta la rodilla, solía llevarse abierta en los botones inferiores para lucir la casaca o vesta de debajo, que cada vez más se transformaba, hasta llegar a no tener mangas y dar origen al chaleco Las mangas eran largas, con un amplio puño de vuelta, permitiendo dejar ver las prendas de debajo y el gran puño de encaje de la camisa. La espada se llevaba en el traje civil, sujeta en la cintura o en el tahali.
Luis XV. Nació en 1710, bisnieto de Luis XIV. Regencia: Luis Felipe Duque de Orleans
UADE / FACO / Licenciatura en Turismo y Hotelería
01 05
Tipos de pelucas… El pelo con el cual estaba tejida la peluca se llevaba recogido hacia atrás, quedando la frente al descubierto. Según la manera de recorgerlo y los detalles del peinado que marcaban la cara, existían diferentes tipos de pelucas. Las más representativas y que alcanzaron una difusión masiva de su uso fueron: •
Con Coleta. Si esta coleta esta vestida con una bolsa de terciopelo negra: se llamaba con “sapo y solitario”.
•
Ramille (la coleta es trenzada).
•
Cadogan (tres rulos horizontales rígidos, enmarcan la cara).
•
Alas de paloma (mechones a los costados de la cara).
Cambios morfológicos en las prendas masculinas a partir de 1750 Para 1750, la tendencia a las prendas adherentes hizo que la casaca, comenzara a sesgar los bordes de la prendedura frontal para exagerar visualmente la geometrización de las formas abiertas. Esto trajo aparejado un cambio en los grandes bolsillos con importantes tapas, que empezaron a desaparecer de estas prendas. Por otra parte, la casaca interna perdió sus mangas y sufrió las transformaciones, que dieron origen al chaleco. Entre 1730 y 1740, las modas inglesas de la caza fueron imponiendo nuevas prendas, como el redingote, a partir de la segunda mitad del siglo XVIII, y los paños de lana las polainas de cuero. Ya en 1770 apareció el cuello de pie pequeño.
Detalle curioso para la ornamentación: El proceso de manufacturar perlas ratifícales fue perfeccionado por Jaquin de Paris alrededor de 1680. Su invención fue aceptado y las mismas acompañan a las piedras preciosas de los joyas y bordados.
El químico alemán Joshep Strasser, inventó un proceso para crear brillantes “falsos”. Presentado en 1745, se conocieron como joyas de Estraburgo.
El sistema vestimentario femenino
Principalmente constituido por:: •
Falda “atrevida o bribona”: Es la más exterior que se colocaba sobre las otras dos. Poseía abertura delantera. Las faldas amplias adquirieron su forma por los ahuecadores.
•
Peinados bajos, frente despejada
•
Maquillaje: polvos rouges, lunares y aguas perfumadas. Surgió el perfume “al alcohol”
•
Bastones de marfil, o de caña de malaca
•
Camisa interior y calzón
•
Medias de seda con ligas
El traje que caracterizó a esta época, especialmente a la regencia, era el conocido como “Robes volantes”, “Contouches” o “Hábit a la francesa” estilo Watteau. Esta monoprenda con mangas, se calzaba dejando ver la falda modesta y el cuerpo rigidizado por el canesú de la espalda o drapeado “Watteau”, otorgando amplitud a la prenda en la espalda desde el cuello.
Modelo Ingles 1760-1765
Los colores que predominaron fueron pasteles, con alusión a la naturaleza, amarillo canario, rasa, celeste cielo, etc.
UADE / FACO / Licenciatura en Turismo y Hotelería
01 06
Contouche espalda
LECTURAS COMPLEMENTARIAS
El estilo “Pompadour” se caracterizó por un exquisito protocolo y ceremonial para el traje de corte. Los trajes hicieron uso exclusivo del ahuecador “paniers”, llegando las faldas a tener más de 1 metro de ancho, para lo cual, las aberturas de los grandes salones, el ceremonial galante de acompañar a las damas, se vio “transformado” para poder acompañar a esta extravagancia.
Fukai, Akiko. Moda. Una historia desde el siglo XVIII al siglo XX: la colección del Instituto de la Indumentaria de Kioto. Taschen. Italia, 2003. Goncourt, Edmundo y Julio Goncourt. La mujer en el siglo XVIII. Galerias Witcomb, Buenos Aires, 1946. Hart, Avril and Susan North. Fashion in Detail. Fron the 17th and 18th centurias. 1998 The Board of Trustees of the Victoria and Albert Museum. London. Köhler, Carl. A history of costume. Dover Publications, Inc. New York Laver, James. Breve Historia del Traje y la Moda.
COMENTARIO DEL DOCENTE Lo invitamos a leer la siguiente bibliografía para completar los temas vistos en esta clase. El Texto de Julio de Goncourt, que se publicó en 1862, representó una pintura sobria y detallista de una de las épocas más interesantes y ricas de la cultura occidental, especialmente
COLABORARON EN ESTA EDICIÓN Autor: Lic. Patricia Raffellini Asesoramiento didáctico: Lic. Paola Dellepiane Diseñador gráfico: D.G. Marcela Frias
la francesa. Fue una historia femenina escrita por hombres del siglo XIX, por lo tanto ciertos adjetivos de la obra, reflejan la postura del siglo que le dio nacimiento.
Hasta el próximo encuentro!
UADE / FACO / Licenciatura en Turismo y Hotelería
01 07