Fernandez, Ana Maria - El Campo Grupal (Doc)

Colección Psicología Contemporánea

Ana María Fernández

El campo grupal Notas para una genealogía

Prólogo de Armando Bauleo

Ediciones Nueva Visión

Buenos Aires

A Nicolás, Emilio y Francisco, mis hijos

I!BN "#$%&$'%(")%*

+ ("" por Ediciones Nue-a .isión !AIC /ucumán 0)1, Buenos Aires, 2ep34lica Argentina 5ueda hecho el depósito 6ue marca la ley (()'0 Impreso en la Argentina7Printed in Argentina

El libro que aquí se presenta tiene su antecedente en el trabajo srcinal escrito

como postulante al Concurso de la Cátedra de Teoría y Técnica de Grupos de la Facultad de Psicología de la Universidad de uenos !ires" sustanciado en #$%&' !quella primera producci(n tenía como eje el tema solicitado en tal concurso) *+E,isten los grupos -umanos' Fundamentaciones*' .ucesivas reelaboracio nes -an trans/ormado aquel te,to de setenta páginas en el volumen que se o/rece -oy a su publicaci(n' .i bienun luego de ciertos casi tresrecorridos a0os de trabajo poco queda de aquel primer te,to" el actual conserva eje de temáticos y de autores" consecuencia del requisito académico en el marco del cual /ueron pensados los problemas centrales de este libro' Fuerte motor de sus distintas versiones -a sido el diálogo con los alumnos" quienes con sus preguntas e impresiones -an orientado muc-os de sus tramos' !l mismo tiempo" la discusi(n y la crítica del equipo docente de dic-a cátedra -an permitido su enriquecimiento y pro/undi1aci(n' .in el estímulo de tal marco académico es probable que este libro no -ubiera sido posible' .us páginas llevan la impronta de largos diálogos con 2uan Carlos de rasi" 3arcelo Percia y 2osé !ntonio Castorina' .u presencia va muc-o más allá de las citas en que son mencionados puntualmente' También llevan el a/ecto y la e/iciencia de 3ercedes 4(pe1" .andra ora5ievic- e 6sabel Temprano" quienes reali1aron el *invisible* trabajo mecanográ/ico' ! todos ellos" muc-as gracias'

Ana María Fernández Buenos Aires, diciembre de 1988.

PROLOGO DE UNO INCLUIDO COMO LECTOR EN EL TEXTO EL CAMPO GRUPAL:

NOTAS PARA UNA GENEALOGIA

Estoy de acuerdo con !na 3aría Fernánde1" Pavlovs5y" Eco" etc'" en que la inclusi(n del lector pueda proporcionar otras e,tensiones o entendimientos a un te,to' 7e todas /ormas" en un momento determi nado" me pregunté si me incluí solo o alguien me -abía empujado' 3is recuerdos son con/usos pero me pareci( in8til esta di/erenciaci(n" sobre todo cuando ya me encontraba sumido en la lectura del libro' 4ectura complicada ya que e,isten al menos dos niveles o líneas que me comprometen 9en este caso me incluyen de más: -aciéndome más intrincada esa lectura' Una de las líneas" el contenido del libro" polémico" interesante; la segunda línea" mi conocimiento de !na 3aría y del conte,to sociouestro alejamiento de la !'P'!'" a través de Plata/orma" tenía como una de sus /inalidades comen1ar a romper aquella aglutinaci(n' Esa /inalidad era ensayar y observar si el pensamiento psicoanalítico podía continuar su desenvolvimiento /uera de su institucionali1aci(n' >o buscaba promover la autodesignaci(n ni el ritual del pase" sino más bien colocar en otra disposici(n los interrogantes sobre la transmisi(n como así también situar otra actitud sobresumidos esa línea ondulante que a la -istoria de los conceptos' Es decir" no quedar y agarrados" en locorresponde que 2' C' 7e rasi sinteti1a # en una simpática e ir(nica /rase) *asta de je/es" el je/e*' En su libro" !na 3aría Fernánde1 es minuciosa y cada paso se trans/orma en *dos pasos adelante" uno atrás* es decir" va y viene en cada cuesti(n no s(lo como manera de encadenar sus apreciacione s en la aparici(n e -istoria de las nociones" sino también para se0alar lo que éstas aportaron al campo grupal y c(mo ellas deberían ser sometidas a una elucidaci(n crítica' ( 8e Brasi, 9 C :8esarrollos so4re el grupo % Formación:, en Lo Grupal 5, B3s6ueda, Buenos Aires, (")

Esa minuciosidad apunta a dos cuestiones) una" metodol(gica" donde se reali1a un punteo de los elementos enunciados -asta a-ora en el campo grupal" para luego anali1ar c(mo se /ueron trans/ormando
Entremos en la primera línea del por qué era complicada la lectura' .i dije que es un libro *interesant e* con esto no me re/iero particul armente a que sea bello o atractivo en sentido literario; no -ace so0ar con paraísos perdidos" ni permite una /alsa complacencia o una mera complicidad' Es interesante al revés) por las polémicas que suscita" por las opiniones contrastantes que estimula" por las -ip(tesis que abre" por los sentimientos que provoca' Es un interés despertado por el deseo de una disputa alrededor de lo'"" contenidos" de las apreciaciones y de la misma -istoria que desarrolla" 7e aquí que este *interesante* sea más interesante' Aeamos algunas problemáticas' Un problema inicial surge ya en la página #B" en la cual dice) *!sí las cosas" los discursos con respecto a la grupalidad /ueron organi1ando una in/atigable Torre de abel*' En la página #$) *se en/ati1a una di/erenciaci(n) los grupos no son lo grupal " importa por lo tanto una teoría de lo que -acemos y no una teoría de lo que es D C(mo se construyen los conocimientos sobre lo grupal y no qué son los grupos*' .ubrayé en la /rase de la página #B porque no sé bien si la palabra *grupalidad* suplanta a *los grupos*' Es decir si la /rase no debería decir *D los discursos respecto a los grupos organi1aron una in/atigable Torre de abel*' .iempre -e tenido dudas sobre la relaci(n 9o correlaci(n: entre grupo
primera la cuesti(n es más espinosa' En la grupalidad" su enunciabilidad es muc-o más joven" podríamos decir de /ines de siglo pasado" y luego resurge después de la .egunda Guerra 3undial" pero su -istoria como proceso" para todos los autores" se -unde en la pre-istoria' 7e esta manera la *grupalidad* aparecería o se0alaría una situaci(n anterior a socialidad y a individualidad' 4o que me llev( a investigar esta línea es que yo mismo indicaba lo grupal como mediaci(n o como intermediario" entre la sociedad y el individuo' .obre todo porque la mediaci(n y el intermediario aparecían ligados al proceso de trans/ormaci(n y cambio 9pág' & de esta obra: importante en nuestra perspectiva del proceso grupal" di/ícil de imaginar" al cual Pic-on @iviere le asignaba la /igura de *espiral*' Entonces tuve que pensar en adelante yendo -acia atrás' @e/le,ioné que si Freud decía que primero era la Psicología .ocial y luego se instalaba una Psicología 6ndividual 9Psicología de las 3asas y !nálisis del Ho: no s(lo -ablaba de campos disciplinarios sino también de procesos mentales' Entonces creí observar que *Psicología .ocial* era la manera de dar una denominaci(n a un engarce de elementos" anteriores al surgimiento de la individualidad' Pude observar que tanto en trabajos anteriores 9 Tótem  Tab! : como en sus apreciaciones de lo /ilogenético" Freud no se apartaba de lo que en aquella /rase -abía sinteti1ado' Esto me estimul( a buscar en otros autores' Uno de los que más atraen a esta cuesti(n es Pierre Clastres ' y sus labores en !ntropología Política" los artículos que anteceden al /amoso manuscrito de 4a oetie *4a servidumbre voluntaria*" en los cuales Clastres y 4a/orgue discuten y establecen la problemática relaci(n entre lo Uno y lo 38ltiple' ! esto se adjuntará adiou 0 se0alando al *dos -egeliano* como una vía de movimiento en la comprensi(n del Uno y lo 38ltiple' Aayamos agregando los estudios sobre cultura cretense" en el período minoico" 1 los trabajos sobre el pasaje de la oralidad a la escrituras'# !lgunas /rases de Clastres para repensar aquel mundo primitivo) *Ciertas cosas no pueden /uncionar seg8n el modelo primitivo sino cuando la poblaci(n es poco numerosa' =" en otras palabras" para que una sociedad sea primitiva es necesario que ' Clastres, P La societá contra lo Stato, Feltrinelli, 2oma, (")) y Antropología política, ;edisa, Barcelona, ("1 0 Badiou, A Théorie du suject, 8u !euil, París, ("' 1 Faure, P La vita quotidiana a Creta ai tempi di Minosse, 2i<ppenheim, A? La Antica Mesopotamia !itrato de una civilitá, Ne@ton Compton, 2oma, ("$

sea numéricamente e,igua*' 7espués describe ese tipo de mundo con una economía de subsistencia 9otro tipo de rapport entre tiempoo quisiera aquí abundar en estos detalles" s(lo deseo indicar por d(nde moverse en la b8squeda de datos para pensar la *situaci(n primitiva*' En el mismo psicoanálisis" pueden encontrarse ciertos ejemplos de esta problemática' Unos pocos a0os después de Tótem  Tab!" Ferenc1i escribe su T$alassa' Pero /ue un discípulo de él" lmre ermann &" 8ltimamente resurgido y se0alado como un autor *interesante e importante* por todas las tendencias psicoanalíticas" quien retorna y desarrolla nuestra temática" a partir del punto particular de *la naturale1a de los instintos primitivos*' Aolviendo a Freud se0alaré que en varios momentos de su obra indica la correlaci(n entre *la neurosis" el comportamiento in/antil y el del -ombre primitivo'*Podríamos entenderlo *cualquiera que se condujese como un primitivo en nuestro mundo actual sería visto como un ni0o o como un neur(tico*' Fui e,presando ciertas ideas que estoy investigando y contrastando que permiten pensar la grupalidad antes de que se con/iguren la socialidad y la individualidad 9y las disciplinas que se /ueron -aciendo cargo:' =tras interrogaciones se abren cuando las dos genealogías 9la de los grupos y la de la grupalidad: se *tocan*' >o sabría decir bien en cuántos momentos o circunstancias esto acontece" o para resolver qué problemas te(ricos" pero puedo plantear como -ip(tesis 9contin8a siendo una investigaci(n: que después de la .egunda Guerra 3undial
que su/re el marco visibleo -abla de trans/erencias positivas o negativas que" para él" tienen otra connotaci(n' Pero también" tant o para ion como para Pic-on @iviére" un otro concepto /orma parte de los conocimientos del campo grupal' Estoy -ablando de la contratrans/erencia y de la contraidenti/icaci(n proyectiva 9que para nosotros -arían más densa la noci(n de implicaci(n:' ) Neri, Claudio :?es presuposs de 4ase:, en 'ion % los grupos, 2e- Francaise de Psychotherapie de ;roupe, París, ("& Neri, C  Letture 'ioniane, Borla, ("

Por lo tanto los cuerpos conceptuales que -acen a la grupalidad"
Armando Bauleo %enezia, &unio de 1989. INTRODUCCION

Elucidar es el trabajo por el cual los -ombres intentan pensar lo que -acen y saber lo que piensan'  =elt
C' Castoriadis

A. Para una elucidación crítica del cam! "rual

Es indudable que a partir de la instituci(n de los primeros disposit ivos grupales" muc-o se -a escrito sobre grupos' Puede observarse que a lo largo de los 8ltimos cincuenta a0os se implementaron /ormas de trabajo muy diversas que incluyen abordajes colectivos entre sus recursos tecnol(gicos) capacitaci(n de personal de empresas" modernas pedagogías" programaci(n de actividades creativas" gesti(n de participaci(n social" implementaci(n de políticas de salud" proyectos de investigaci(n
campo despliega? +7esde qué criterios poner a consideraci(n su legitimidad disciplinaria? +Con qué /ormas de lectura locali1ar aquellos nudos problemáticos que insisten y atraviesan los diversos dispositivos que se instituyen? 4a propuesta que aquí se presenta intenta introducir al lector en algunas de las principales líneas problemáticas que el campo de lo grupaI presenta' En lugar de reali1ar un recorrido por las grupos aspira plantear problemas' En tal sentido" cuando se di/erentes detiene enteorías algunasobre de ellas no trata deapresentar sus ideas en apretada síntesis) más bien se apoya en sus nociones para interrogar los problemas que tales teori1aciones -an -ec-o posibles y así anali1ar sus criterios de demarcaci(n y la inscripci(n de sus prácticas' 6nterroga algunas producciones te(ricas problemati1ándolas; las abre a la crítica) pregunta de qué premisas parti( un autor o corriente" qué interrogaciones se /ormul(" c(mo las respondi(" por qué -abrá producido tales respuestas y no otras" cuáles /ueron sus impensables' 7esde sus respuestas reconstruir sus preguntas" desde sus enunciados te(ricos in/erirlas condiciones de posibilidad de tal producci(n' 7esplegar sus enunciados para poder sostener un desa/ío) +c(mo -acer para pensar tales problemas de otro modo? En síntesis" se propone un criterio de elucidación crítica)

Elucidar es una) labor propositiva" una e,ploraci(n acerca deD inacabada" sujeta a revisiones y ajustes provisorios" aunque no por eso menos rigurosos; se tratará de pensar sobre lo -ec-o mientras se buscará conocer con mayor precisi(n eso que como -ec-o deberá ser des-ec-o" para entender su irradiada composici(n" otorgando a la actividad de
.e -ace necesario para tales objetivos" en primer lugar" una misi(n -ist(rica a los saberes y prácticas grupales; -isto ria en un sentido geneal(gi co" es decir con el interés de indagar c(mo se -an constituido los saberes sus discursos" sus dise0os grupales" sus dominios de objeto" la instituci(n de sus prácticas y sus demarcaciones disciplinarias' !nali1ar" por lo tanto" las condiciones de producci(n de tales saberes) te(ricas y epistémicas" pero también institucionales e -ist(rico:, en ?o ;rupal 1, B3s6ueda, Buenos Aires, ("&

n8cleos que
presuponer que aquello que una teoría *no ve* es interior al ver" en tal sentido sus invisibles son sus objetos pro-ibidos o denegados; puede pensarse entonces que el nivel de lo enunciable que una teoría despliega será la transacci(n" el compromiso discursivo" pero también institucional<-ist(rico de sus visibilidades y sus invisibilidades" de aquello que le es posible pensar y de sus impensables" de sus objetos a/irmados y sus objetos denegados' Teori1aciones posteriores" en tanto acumulan" re/utan" rede/inen las producciones te(ricas previas y se sit8an desde otras demandas sociales y otros marcos institucionales" producen a" u ve1 dispositivos grupales que generan */en(menos* grupales yKo se posicionan en otro lugar del a priori individuo
=bviamente" presentar una elucidaci(n crítica con todos los requisitos se0alados en esta introducci(n con/ormaría una obra de envergadura muy superior a los objetivos de este libro' .ería muy interesante al respecto" una labor colectiva; /rente a tal an-elo es que se espera puedan resultar de utilidad estas primeras notas para una genealogía del campo grupal'

#. Una manera de leer$ una manera de en%ar

4a manera de leer que una actitud de elucidaci(n crítica implica se aleja cuidadosamente de un tipo de abordaje a los te,tos y autores muy di/undido en el medio *psi*' >ecesariamente debe buscar criterios de lectura que se aparten del te,to
través de con/rontaciones locales y no globales; donde las teorías puedan pensarse desde lo m8ltiple y no desde lo uno' Uno de los prop(sitos de este libro es proporcionar algunas -erramientas conceptuales < que ayuden a desdibujar los círcul os que muc-as veces enci erran importantes producciones te(ricas en grandes relatos totali1adores' Cuando un sistema te(rico totali1a o bien un proceso de banali1aci(n al ser *aplicado* otros en campossedisciplinarios o su/re bien opera reduccionísmos insalvables sobre el acampo cuesti(n' Por el contrario" si se crean condiciones para su des
diluir el /antasma que atraviesa las /ormaciones grupales" /antasma que con/unde las acciones en grupo 9dispersivas e intrascendentes: con las e,periencias grupales que se reali1an orientadas por una concepci(n desde la cual se anali1an y justi/ican' (1

C. L!% tre% m!ment!% ei%t&mic!%

Con el prop(sito de buscar alg8n ordenamiento para la indagaci(n a reali1ar a través de la abel de los grupos" se se0alarán tres momentos epistémicos' En la constituci(n de saberes y que-aceres grupales" tales momentos" más que indicar un sentido cronol(gico" e,presan ciertas /ormas características de pensar las legalidades grupales' >o puede decirse que unos sucedan a otros linealmente" sino que si bien es posible delimitarlos con cierta claridad" /recuentemente se pueden encontrar rasgos de un momento epistémico en los siguientes' (1 8e Brasi, 9C :8esarrollos so4re el ;rupo Formación:, en Lo Grupal 5 B3s6ueda, Buenos Aires, (")

4os autores o corrientes que se anali1an en cada uno de ellos no son e,cluyentes; ni siquiera podrían considerarse unánimemente como los más importantes' .implemente son aquellos de mayor di/usi(n en el mundo académico en el marco del cual este libro -a sido gestado' #& .i son ellos y no otros los que se toman en consideraci(n" esto se debe a que -an sustentado algunas cristali1aciones de ciertos lugares comunes que interesa poner en interrogaci(n en este libro'

El primer momento epist(mico se organi1a a partir de pensar al grupo como un todo' 4a in/luencia de la estalt$eorie -i1o posible a/irmar que en un grupo" el *todo es más que la suma de las partes*' (& ay allí un primera intuici(n" aquella que otorga a los peque0os colectivos un plus irreductible a la suma de sus integrantes' Es en la indagaci(n de tal plus que se delimitan los primeros recortes disciplinarios' Entre ellos se destaca" sin duda" la 7inámica de los Grupos' 3ás allá de la di/usi(n de las teori1aciones que esta corriente pone en enunciado con respecto a los grupos" es importante destacar que apro,imadamente entre #$LM y #$M() se instituyeron ciertos criterios en virtud de los cuales comen1( a pensarse en *arti/icios* grupales para abordar algunos con/lictos que acontecían en las relaciones sociales' Cobran visibilidad con/lictos -umanos en la producci(n econ(mica" en la salud" en la educaci(n" en la /amilia" y las instancias organi1ativas de la sociedad pasan a considerarlos como parte de los problemas que deben resolver' .in embargo" pareciera suponerse que tales con/lictos no pueden ser abordados mediante los recursos previamente e,istentes; e,igen nuevas /ormas de intervenci(n y especialistas adecuados a tales /ines' 7esde di/erentes puntos de srcen se inventa una nueva tecnología) el 7ispositivo Grupal" y un nuevo técnico) el coordinador de grupos' @ápidamente se multiplican los diagramas técnicos y los campos posibles de aplicaci(n' ! su ve1" muy disímiles serán las teori1aciones que intentarán dar cuenta de aquello que acontece en los dispositivos grupales instituidos' Estos movimientos se sostuvieron desde una convicci(n) el grupo" en tanto todo" (# !i 4ien mencionados puntualmente en -arios pasajes de este li4ro, no se oGrece una elucidación más sistemática de los dispositi-os grupales instituidos por la concepción operati-o de grupos y el psicodrama psicoanalítico !in em4argo, han constituido instrumentos teórico%tcnicos de suma importancia en mi Gormación Futuros tra4ajos intentarán sal-ar tal ausencia (& .ase capítulo III () !i 4ien este desarrollo se inicia en EE y algunos paí ses de Europa, se eHtiende rápidamente a ciertos países periGricos como la Argentina

es más que la suma de las partes' Tal plus grupal -ace de los grupos" a partir de allí" espacios tácticos con los que se intentará dar respuesta a m8ltiples problemas que el avance de la modernidad despliega' 7esde entonces" teori1ar el plus grupal -a sido una preocupaci(n constante de las di/erentes corrientes grupalistas' Todas en/rentan una misma di/icultad) el plus grupal es /ácil de poner encuenta evidencia" vuelve sumamenteque di/ícil producir enunciados te(ricos que den de élpero y del se orden de legalidades lo sostienen'

El segundo momento epist(mico se /ocali1a alrededor de la b8squeda de organi1aciones grupales; es decir nuclea aquellos intentos que buscan dar cuenta de las instancias de determinaci(n que -acen posibles los movimientos grupales que -abían cobrado visibilidad en los dispositivos que se instituían por doquier' El psicoanálisis -ace aquí aportes insustituibles"#% tanto en el plano te(rico como en el dise0o y di/usi(n de dispositivos grupales en el área de la clínica psicoterapéutica' 4o mismo podría decirse de los grupos operativos de Pic-on @iviére aunque en áreas más vastas) educaci(n" salud" intervenciones comunitarias" etcétera' En el interior del campo psicoanalítico" la polémica se centrará en dilucidar si los grupos constituyen un campo de aplicaci(n del saber y la técnica psicoanalítico" o si e,igirán la elaboraci(n de instrumentos te(ricos y técnicos especí/icos; constituirán sus propios conte,tos de descubrimiento y
El tercer momento epist(mico '$ se per/ila" justamente" a partir de las di/icultades que presentan las disciplinas de objeto discreto para abordar ciertas realidades disciplinarias sin caer en alg8n reduccionismo 9sociologismo" psicologismo" psicoanalismo:' .i las l(gicas de objeto discreto '( /ueron necesarias para poder reali1ar las básicas las disciplinas más /ormali1adas de lasotros ciencias -umanas" -oydemarcaciones muc-as de ellas se de encuentran preocupadas en encontrar instrumentos metodol(gicos que permitan dar cuenta de aquellas áreas que resisten abordajes unidisciplinarios'''

Esta tarea no es sencilla' Produce /uertes tensiones epistémicas e institucionales' El campo grupal" en la b8squeda de su legitimidad" se despliega -oy en la compleja labor de desmontar dos /icciones siempre recurrentes) la -icción del indiiduo" que impide pensar cualquier plus grupal y la /icci(n del grupo como intencionalidad que permite imaginar que el plus grupal radicaría en que ese colectivo , =adrid, ("'

de
EL 'OCA#LO GRUPO ( )U CAMPO )EMANTICO

A. Pr!ducción *i%tórica del +!ca,l! "ru!

.e abordará en este punto la etimología del vocablo que es motivo de la presente elucidaci(n; más allá de la relevancia -ist(rica que esta tarea pueda presentar" interesa pensar dentro del campo semántico mismo' .e espera que las líneas de signi/icaci(n puestas de mani/iesto" -agan posibles ciertas visibilidades con respecto a las diversas producciones de sentido que la palabra *grupo* -a disparado -ist(ricamente' Tanto el término /rancés groupe" como el castellano grupo" reconocen su srcen en el término ital iano groppo o gruppo' roppo aludía a un conjunto de personas esculpidas o pintadas" pasando -acia el siglo NA666 a signi/icar una reuni(n de personas" divulgándose rápidamente su uso coloquial'

El groppo scultorico es una /orma artística propia del @enacimiento" a través de la cual las esculturas que en tiempos medievales estaban siempre integradas al edi/icio" pasan a ser e,presiones artísticas en volumen" separadas de los mismos" que permiten para su apreciaci(n caminar a su alrededor" es decir" rodearlas; cambia así la relaci(n entre el -ombre" sus producciones artísticas" el espacio y la trascendencia; al mismo tiempo" otra de las características a se0alar del groppo scultorico es que sus /iguras cobran sentido cuando son observadas como conjunto" más que aisladamente' Contemporáneamente a la inclusi(n del vocablo en lengua /rancesa" se imponen en inglés y en alemán vocablos análogos; se0ala !n1ieu '0 que las lenguas antiguas no disponen de ning8n término para designar una asociaci(n de pocas personas que comparten alg8n objetivo en com8n' /0u( 'uiere decir 'ue no $a palabra /0ue lo no nombrado no e2iste /0u( tiene un niel de e2istencia por deba&o de su posibilidad de representación Para problemati1ar aun más esta interrogaci(n" podría agregarse que" si bien un vocablo es construido para -acer re/erencia a una producci(n e,istente" los actos
#. Línea% de %i"ni-icación

'0 An
)spacios nD, ', Buenos

Pareciera ser que una de las primeras acepciones del término italian o groppo" antes de llegar a ser reuni(n o conjunto de personas era nudo' 7erivaría del antiguo proven1al gropOnudo; éste a su ve1 derivaría del germano ruppa O masa redondeada" aludiendo a su /orma circular''#

ruppQQQQRgropQQQQR groppoQQQQRgrupo 3alemán4

3asa

3proenzal4

3italiano4

>U7=

redondeada

Círculo

Co-esi(n

Grupo

Están presentes" entonces" en el vocablo dos líneas que /recuentemente se encuentran en la re/le,i(n sobre lo grupal" o (tese que aun en la actualidad generalmente se elige la distribuci (n circular en el trabajo con grupos' Esta /orma tan característica connota algo que trasciende el espacio mismo" que va más allá de la eventual organi1aci(n de sus actividades; implica" en realidad una particular estructuración de los intercambios entre los integrantes ' Es '# An
/recuente encontrar en este punto la acentuaci(n de la igualdad jerárquica atribuida a la /orma circular de ubicaci(n; esto signi/ica a/irmar que sentarse en círculo -ori1ontali1a o democrati1a la relaci(n entre los miembros de un grupo' En realidad" el mero sentarse en círculo no determina igualdades jerárquicas ni aten8a los juegos de poder en el mismo' Por el contrario" parecerían ser de muc-o más peso aquellos intercambios que se organi1an desde ese circular
elegida posibilita'

C. Re-erente% etim!ló"ic!%

En primer lugar sorprende la modernidad del vocablo' +Sué signi/icaci(n tendrá que con anterioridad a la modernidad no e,istiera un término que diera cuenta de una reuni(n de un n8mero restringido de personas con un cierto objetivo com8n? En otras temáticas -a sido investigada la relaci(n entre la presencia o ausencia de determinados vocablos y su signi/icaci(n en la cultura de la época' !sí P-' !ris ') -a trabajado la ausencia de la noci(n de ni0o en la sociedad /eudal y la correlativa ausencia de vocablos que nominaran a los ni0os" o lo que es igual" la presencia de distintos términos que dan la idea de ni0o a partir del momento -ist(rico en que éste comien1a a particulari1arse del mundo de los adustos' 3uestra" asimismo" c(mo se produce una correlaci(n entre este proceso de *poner palabra* y la construcci(n de campos disciplinarios especí/icos
atrios y en las pla1as' !l mismo tiempo se produce la nucleari1aci(n de la /amilia; ésta inicia un proceso de trans/ormaciones reduciéndose desde sus e,tensas redes de sociabilidad /eudal -asta con/ormar la /amilia nuclear moderna' Este tránsito de *la casa* a *la /amilia* no es una cuesti(n atinente s(lo a la -istoria de la vida cotidiana" sino que punt8a tránsitos claves desde las relaciones de producci(n -asta la constituci(n de laselsubjetividades; acent8a particulari1ados" la intimidad" la individuaci(n" las identidades personales" uso de nombressey apellidos etcétera' 4a preocupaci(n por la noción de indiiduo comparte el escenario de surgimiento de las ciencias -umanas; con ellas nace dentro de la gran pregunta a la que estas nuevas áreas del saber intentan dar respuesta) + 0u( es el 6ombre ? cada una de ellas desde su ángulo de mira" pero todas preocupadas por la individualidad; preocupaci(n ésta impensable dentro de las sociedades /eudales' En las /ormas del ser social del /eudalismo no -abía lugar para ninguna pregunta sobre el individuo; sí tenían una /uerte vigencia los interrogantes respecto a las obligaciones de los -ombres con 7ios" por ejemplo; pero ausentes estaban las nociones de individuo" individualidad" intimidad" é,ito individual" /elicidad personal' 4a temática de la individualidad o de la identidad personal" comien1a a desarrollarse con el advenimiento de la sociedad industrial" al mismo tiempo que lo privado y lo p8blico reestructuran tanto sus territorios como sus signi/icaciones" y se organi1a un cambio radical en las prioridades de la vida" apareciendo en primer plano el libre albedrío y la /elicidad personal' ' Paulatinamente se van delineando las áreas del saber que con/ormarán las ciencias -umanas o -umanidades y las antropologías /ilos(/icas' El ombre" él mismo" se tomará como objeto privilegiado de re/le,i(n en estos campos de saberes; los tiempos de las ta,onomías serán reempla1ados <7escartes mediante< por la pregunta por el ser de lo -um ano' 4a temática de la sub&etiidad adviene así al escenario /ilos(/ico
personas' .ostiene un cambio signi/icativo
En síntesis" el vocablo grupo surge en el momento de constituci(n de la subjetividad moderna' .u etimología re/iere a un n!mero restringido de personas asociadas por un algo en com!n ' .e destacan dos líneas en tal rastreo etimol(gico) la /iguraci(n nudo" que sugiere interrogaci(n sobre qué es lo que -ace nudo y lleva implícitos necesarios enlaces y desenlaces entre sus integrantes" y la /iguraci(n círculo" que remite a las -ormas de intercambio que se producen entre los miembros de tales grupos" .e insistirá más adelante en la líneas de /iguraci(n nudo como /orma de re/erirse a los grupos' !van1ando un poco más" tal ve1 /uera pertinente aclarar que no se usa aquí el término nudo en un sentido anal(gico) *el grupo es como un nudo*" sino
'" !horter, E 0p cit

Con la /igura nudo" se intenta subrayar los anudamientos
D. Primera% untuaci!ne% ante% de a+anar

4uego de esta somera incursi(n por el campo semántica del vocablo grupo" se -ace necesario reali1ar algunas puntuaciones que permitan delimitar con mayor precisi(n el área de re/le,i(n del presente trabajo' Frente a algunas preguntas muy clásicas respecto a los grupos" como *+cuántos individuos con/orm an un grupo?*" se centrará la re/le,i(n sobre con&untos restringidos de personas; quedan por tanto e,cluidos de esta elucidaci(n grupos -umanos más amplios" colectividades" masas" clases sociales" etcétera' .e -a visto ya que el mero *juntarse* no constituye un grupo; entonces" *+cuándo un conjunto de personas se con/orma como grupo?*' 7esde la etimología -a podido observarse que el groppo scultorico poseía cierta /orma particular de agrupamiento y que posteriormente el vocablo grupo comen1( a designar reuni(n de personas" círculo de personas con algo en com8n" *agrupaciones de o/icios" comerciales" etc'* Es decir que serán necesarias determinada actiidad en com!n  ciertas -ormas organizacionales ' Por otra parte" la /igura nudo indica que en tal agrupamiento se /ormarán *anudamientos
las /ormaciones psíquicas de sus integrantes" o si
Caítul! II

LO )INGULAR ( LO COLECTI'O

H mi soledad no ataca más que la inteligibilidad de las cosas' 3ina -asta el /undamento mismo de su e,istencia' Cada ve1 me asaltan más dudas sobre la veracidad del testimonio de mis sentidos' .é a-ora que la tierra sobre la que se apoyan mis dos pies necesitaría para no tambalearse que otros" distintos de los míos" la pisaran' Contra la ilusi(n (ptica" el espejismo" la alucinaci(n" el so0ar despierto" el /antasma" el delirio" la perturbaci(n del oídoD' el baluarte más seguro es nuestro amigo o nuestro enemigo" peroD alguien odioses" alguien'0$

0$ 8el log*oo( de 2o4inson en la isla !peran
A. Antin!mia indi+idu!/%!ciedad

.i bien en la actualidad puede considerarse que las relaciones de los seres -umanos con el medio que los rodea son in-erentes a la propia -umani1aci(n" el problema de la relación de los indiiduos entre sí -a sido considerado desde di/erentes puntos de vista' Podrían esquemati1arse las posiciones más opuestas diciendo que desde una de ellas se considera al individuo" en tanto singularidad" como una realidad en sí mismo; s(lo él percibe" piensa" ama u odia" se siente responsable" toma decisiones" etcétera' El grupo" la sociedad" lo colectivo serían generali1aciones te(ricas que no tendrían otra consistencia que la realidad misma de ese individuo' En la tesis contraria" el individuo como tal" independientemente de los demás sería una mera entidad l(gica' Vnicamente el grupo" el colectivo" la sociedad" son reales; s(lo a través de dic-a realidad se presenti/ica la instancia individual' .eg8n esta concepci(n" el individuo sería producto de su ambiente" sea él conscient e o no de ello' =" dic-o de otra manera" el individuo sería un cruce de relaciones sociales' Como puede observarse" tanto en una como en otra posici(n" la relaci(n individuoo debe entenderse esta pre/erencia como una consideraci(n de mayor importancia del psicologismo con respecto al sociologismo<" la justi/icaci(n de tal insistencia radica en otra a/irmaci(n) aquella que ubica al psicologismo o al psicoanalismo como los impensables más /recuentes de la cultura *psi*' !sí" por ejemplo" dentro de las posiciones psicologistas en la psicología académica" puede observarse la presencia de la antinomia 6ndividuo< .ociedad en el campo grupal" en la tajante divisoria de aguas entre *individualistas* y *mentalistas* que recorri( los primeros tramos de este campo disciplinario' ! su ve1" esta 0( 2ussell, 9 La amnesia social, 8os culturas, Barcelona, ("))

polémica desarrolla nuevas /ormas argumentases en el campo del psicoanálisis" cuando esta disciplina incorpora /ormas grupales de trabajo clínico< aquí una de las divisorias se -a establecido entre aquellos que -an nominado a su que-acer grupa como psicoanálisis en grupo y aquellos que lo -an llamado psicoanálisis de grupo' Pero el interés de estas puntuaciones no es s(lo -ist(rico" la preocupaci(n con respecto a lapor tensi(n entreque lo singular y lo colectivo" así también la necesidad de su re/le,i(n caminos no se deslicen -acia corno los clásicos reduccionismos cobra absoluta vigencia en la actualidad tratando de superar las /ormas dicot(micas de abordaje de esta temática' !sí por ejemplo interrogaciones tales como) +cuál es la dimensi(n de lo social -ist(rico en la constituci(n de la subjetividad?" +cuál es el papel de la subjetividad en los procesos -ist(rico
El sentimiento que e,perimentan los individuos y los grupos de sus posiciones respectivas y las conductas que dicta ese sentimiento" no son determinados inmediatamente por la realidad de su condici(n econ(mica sino por la imagen que de ella se -acen" la cual jamás es /iel" sino que es siempre la in/le,i(n del juego de un conjunto complejo de representaciones mentales'00

=bsérvese c(mo desde este tipo de planteos" quedan en cuestionamiento diversas antinomias simultáneamente" así no s(lo lo singular y lo colectivo sino también lo objetivo y lo subjetivo" lo material y lo ideal" la economía y la cultura" abriendo nueas -ormas de enlace entre lo imaginario  lo social '

#. E%aci!%

0' Castoriadis, C La instituci+n imaginaria de la sociedad, /us6uets, Barcelona, ("0 -ase al respecto el trmino :imaginario social: usado por el autor 00 Bonnet, 9 :?e mental et le Gonctionnement des socits:, 2e- ?OArc nD )', Paris

4a preocupaci(n por pensar las relaciones y di/erencias entre individuos y sociedades es" sin duda" una característica /undante en las ciencias -umanas" las /iloso/ías y las ciencias y prácticas políticas de la 3odernidad' En este sentido" se se0alan dos espacios donde estas consideraciones se -an desplegado; si bien cada uno de ellos -a dado características propias al tratamiento de la tensi(n entre lo singular y lo colectivo" no está de más subrayar que suelen presentar amplias 1onas de entrecru1amiento' .e -ace así re/erencia al espacio cientí-ico)acad(mico y al (tico)político'

#. spacio cientí-ico)acad(mico

4a oposici(n 6ndividuo<.ociedad -a atravesado la psicología y la pedagogía a través de las interminables polémicas nature)nurture y la sociología a través" por ejemplo" de la célebre oposici(n Tarde<7ur5-eim; estas polémicas *clásicas* no s(lo -an constituido los debates /undadores de las ciencias -umanas" por el contrario" pueden encontrarse aun -oy" por ejemplo" en las discusiones sobre el srcen del lenguaje" la psicología del conocimiento" etcétera' !traviesan" asimismo" tanto las di/erentes conceptuali1aciones sobre los grupos -umanos en las diversas orientaciones de la psicología social como también los abordajes psicoanalíticos con grupos) anális is del grupo o en grupo" etcétera' .e -a se0alado que los primeros intentos para comprender" en el campo de la psicología" la problemática grupal" se organi1aron en un traslado mecánico de conceptos de la psicología *individual* de la época; en reacci(n a esta /orma de abordaje de corte *individualista* se ubicaron las tesis sustentadas por 3c7ougall" 7ur5-eim" etc'" que se re/irieron al grupo enunciando una mentalidad grupal' 01 Esta polémica se desarrolla en el cruce de un debate entre dos posiciones doctrinarias encontradas" la tesis individualista y la tesis de la mentalidad de grupo; da cuenta" de alguna manera" de la di/icultad de poder comprender la articulaci(n del /uncionamiento de las /uer1as sociales con los actos de los individuos' Ha !sc- se0alaba que *los grupos parecen más poderosos y a la ve1 menos reales que los individuos y" si bien parecen poseer propiedades que trascienden las individuales" s(lo los individuos pueden srcinarios*' 0# Para la tesis indiidualista" los individuos constituyen la 8nica realidad y tiende a negar realidad a los grupos" en tanto sostiene que' los procesos psicol(gicos ocurren tan s(lo en los individuos y éstos constituyen las 8nicas unidades accesibles a la 01 Asch, ! $sicología social, Eude4a, Buenos Aires, ("&1 0# Asch, ! >p cit

observaci(n' Por lo tanto" si los individuos son los 8nicos actores reales" el término grupo constituye una /icticia abstracci(n cuando pretende algo más que re/erirse a la suma de reacciones recíprocas de los individuos' 7e esta /orma" para la tesis individualista" en rigor" no e,isten los grupos; *grupo* será un término colectivo" que -ace re/erencia a una multiplicidad de procesos individuales' .iguiendo esta línea de re/le,i(n" para comprender los /en(menos sociales debemos rastrearlos -asta llegar a las propiedades de los individuos; de tal /orma en tanto éstos son los 8nicos actores sociales" los acontecimientos de un grupo" las instituciones" creencias y prácticas" siguen los principios de la psicología individual y son producto de las motivaciones individuales' En síntesis" no e,iste en los grupos" en las instituciones" ni en las sociedades" nada que no -aya e,istido previamente en el individuo'0& *4as acciones de todos no son nada más que la suma de las acciones individuales tomadas separadamente*' 0) En oposici(n a las tesis individualistas" se desarroll( la noción de mentalidad de grupo' ! partir de la observaci(n por la cual cuando los seres -umanos viven y act8an en grupos" surgen */uer1as y /en(menos* que siguen sus propias leyes y que no pueden ser descritos en términos de las propiedades de los individuos que los componen; a/irmarán" por ejemplo" que el lenguaje" la tecnología o las relaciones de parentesco no constituyen el producto de las mentalidades y motivaciones individuales sino que" por el contrario" son procesos que poseen leyes propias" di/erentes e irreductibles a los individuos' !lgunos autores como 7ur5-eim se re/ieren al grupo como una entidad mental) *las mentalidades individuales al /ormar los grupos D srcinan un ser D que constituye una individualidad psíquica de una nueva índole*' 0 Consideran al grupo como una entidad distinta de la suma de los individuos; a/irmarán" asimismo" el e/ecto de las /uer1as sociales y de las instituciones sobre los individuos' 7e acuerdo con esta tesitura el individuo aislado constituye una abstracci(n; /uera del grupo no posee carácter de/inido" si bien sus potencialidades son necesarias para el /uncionamiento del grupo" no son causa de los acontecimientos del mismo' 4a noci(n de mentalidad de grupo intenta e,plicar la /recuente observaci(n por la cual muc-os acontecimientos colectivos e,-iben una direcc i(n de/in ida" se desarrollan y mantienen a menudo sin relaci (n con las intenciones de los individuos" atribuyendo entonces intencionalidad al proceso en cuesti(n; en ese sentido es que !sc- puntuali1( aquello que denomin( * la -alacia antropomór-ica de la tesis de la mentalidad de grupo* ya que" si bien esta corriente parte de una premisa correcta" por la cual se constata que la acci(n de un grupo produce e/ectos que superan los e/ectos de los individuos aislados" a partir de ello deduce la 0& .d 0) Allport, F ("'1Q Citado por Asch, op cit 0 8urRheim, E Citado por Asch, op cit

e,istencia de una mente de grupo que otorgaría direcci(n e intencionalidad a los momentos grupales' Esta *mente de grupo*" en consecuencia" sería cualitativamente análoga a la *mente individual aunque cuantitativamente supra individual*' En síntesis" si bien operaron una importante reacci(n a las tesis individualistas
En consecuencia" es importante subrayar que esta antinomia clásica de las ideas sociales p cit

como premisa implícita desde donde no s(lo se piensa la articulaci(n de lo singular y lo colectivo" sino también se *lee* el conjunto de los acontecimientos grupales' En las ciencias -umanas" los a priori conceptuales /orman parte del campo epistémico desde donde se constituyen las condiciones de posibilidad de un saber " se delimitan sus áreas de isibilidad e inisibilidad " su s principios de ordenamiento sus -ormas de enunciabilidad ' =peran" por lo te(ricas tanto" en nivelde de organi1ando la l(gica interna de las nociones y elalto dise0o los productividad dispositivos tecnol(gicos de una disciplina" desde donde se interpretan los acontecimientos allí gestados' Es decir" que si bien act8an en /orma implícita lo reali1an desde el cora1(n mismo de las teori1aciones e intervenciones de un campo disciplinario' En general estos a priori -acen posible la *resoluci(n* de la tensi(n de los pares antitéticos por los que oscilan estos campos del saber" los cuales desde su constituci(n se despliegan en tres pares de opuestos) 6ndividuo<.ociedad" >aturale1a
+7e d(nde surge esta concepci(n antag(nica de individuos ver sus sociedades? Cobra presencia en el escenario libera l europeo de los siglos NA66 y NA666" pero merece 1( Para un análisis del a priori Identidad%8iGerencia -ase Fernánde<, A= ?a diGerencia seHual en Psicoanálisis teoría o ilusiónK 8epto Pu4licaciones, Fac de Psicología, BA, Buenos Aires, ("#

responder -oy a una /uerte revisi(n por cuanto +qué dimensi(n es el individuo? +qué dimensi(n es la sociedad? +-asta d(nde llegan uno y otra? En realidad" el Polo *individuo* es una perspica1 /alacia de las teorías que creen que la sociedad puede de/inirse como una agregaci(n de individuos" y a su ve1 el polo *sociedad* es algo muc-o más complejo que su /ormulaci(n descriptiva' 3ás a8n" lo más cuestionable consiste" tal ve1" en colocar al individuo y a la sociedad en una relaci(n antin(mica' 1' En este sentido es elocuente el planteo de Canguil-em) qui1á no se -a observado bastante que la etimología de la palabra -ace en realidad del concepto individuo una negaci(n' El individuo es un ser en el límite del no ser" dado que no puede ser /ragmentado" sin perder sus caracteres propios' Es un mínimo ser' Pero ning8n ser es un mínimo' El individuo supone" necesariamente en sí su relaci(n con un ser más vasto" y apela a un /ondo de continuidad que se destaca' 10

Como se planteaba en el capítulo anterior la noci(n del *individuo* se produce en aquel momento de la -istoria de =ccidente a través del cual la *sociedad* es pensada como un conjunto de productores sostienedel asímundo" las indagaciones de las del sujeto que se interrogan por el libres; conocimiento abandonando las/iloso/ías certe1as que otorga la /e y el orden religioso para desplegar las di/erentes problemáticas de la subjetividad; en este incipiente -ori1onte econ(mico" tecnol(gico" político y /ilos(/ico se destacará una nueva /igura) el individuo" s(lida ilusi(n del capitalismo naciente por la que es pensado indiviso" libre y aut(nomo' .e crean así las condiciones para el paulatino nacimiento de las ciencias -umanas; el ombre se constituye desde di/erentes saberes para ser pensado abriendo un espacio propio a los -umanismos" antropologías /ilos(/icas y ciencias -umanas; en palabras de 4évi<.trauss)

El pensamiento clásico y todos
1' LaminsRy, ; !eminario :Instituciones:, Cátedra de Psicología !ocial, Carrera de Psicología, BA, ("# 10 Canguilhem, ; La teoría celular, citado por Ponta lis, 9 en 6espués de 7reud, !udamericana, Buenos Aires, (")1 11 ?-i%!trauss, C Seminario% ?a Identidad, Petrel, Barcelona, ("(

Es entonces con la noci(n de individuo 9sujeto no dividido de la conciencia: que los saberes modernos organi1aron sus re/le,iones sobre el ombre' Pero aun más" también la noci(n de individuos sustentará las prácticas y teorías del libre mercado" las /iguras de la gobernabilidad con el contrato" el consumo y la representatividad de las democracias de lalamodernidad' >uevas /ormas políticas y subjetivas de pensar los enlaces sociales" regulaci(n de sus con/lictos y la /orma de negociaci(n de sus contratos' Como una mera re/erencia cronol(gica y sin pretender igualar jerárquicamente estas áreas disciplinarias" puede constatarse que los siglos NA66 y NA66" /ormulan sus interrogaciones centr ales -acia el ser del individuo" el siglo N6N -acia el ser de la sociedad 97ur5-eim" 3ar,:" pero -abrá que esperar -asta el siglo NN para que puedan tomar /orma aquellas cuestiones re/eridas al ser de los grupos" 7e todos modos pareciera bastante e,plicable que los primeros discursos sobre la grupalidad /ueran desplegando sus enunciados en el paradigma de individuo
4a especi/icidad de lo grupal la aportan los individuos que lo /orman; -abrá que estudiar indiiduos en grupo' •

4a especi/icidad de lo grupal es aportada por un plus a los individuos agregados; -abrá que estudiar grupos' •

! primera vista se podría pensar que tomar a los grupos como totalidades ubicaría

a las teorías que esto sostienen" a /avor de la e,istencia de una especi/icidad grupal" pero se verá más adelante que no siempre esto es así'

X' spacio (tico)político

4a antinomia 6ndividuo<.ociedad tiene también una inscripci(n ético
Puede observarse que también desde las prácticas y teorías políticas se -an ido 1# 8otti, 9 :.icio y nue-o li4eralismo:, ConGerencia del Ciclo :8emocracia y /ransGormación !ocial: Centro de Estudios para la /ransGormación Argentina Fundación Banco Patricios, setiem4re ("# 1& Fernánde<, A = :Formaci ones colecti-as y represión soci al:, tra4ajo presentado en las jornadas del mismo nom4re, Buenos Aires, ("#

desarrollando determinadas preocupaciones por los grupos -umanos' !lgunos autores ubican incluso sus aportes como parte de una psicología social no o/icial' 1) .i bien en este trabajo se abordarán las Preocupaciones académico
político" presenta solamente un valor e,positivo; en los -ec-os entrecru1amientos permanentes de estos espacios -an recorrido la -istoria de la constituci(n del campo de saberes y prácticas grupales' !sí" las investigaciones de urt 4eYin 9psicol(gico de la Escuela de erlín" emigrado a Estados Unidos en #$LM: sobre los grupos democráticos" autoritarios y *laisse1 /aire*" se desde organi1aron a partir de psicol(gico" una interrogaci(n sobre elcolectivo na1ismo)como +c(mo pudo producirse" el punto de vista un /en(meno el na1ismo?" +c(mo es posible prevenir psicol(gicamente tales /en(menos? En Zil-elm @eic-" sus elaboraciones sobre los /en(menos de masas y el grupo /amiliar /ueron animados" asimismo" por una pregunta política) +por qué las masas obreras alemanas optaron por el nacional socialismo y no por la alternativa socialista o comunista? Esta interrogaci(n lo llev( a anali1ar el papel jugado por el grupo /amiliar" rede/iniendo la ideología como una /uer1a material' En los primeros pensadores sobre lo grupal) ' 4eYin" 3oreno" Pic-on @ivire" estuvo siempre presente una /uerte preocupaci(n por el cambio social' Pensaban a los grupos 9más allá de lo di/erentes que pudieran ser sus concepciones de la trans/ormaci(n social o los dispositivos grupales que dise0aron: como instrumentos válidos para la *reali1aci(n* de las /uertes utopías sociales que los animaron' .i bien este tipo de preocupaciones parecería estar ausente en la incorporaci(n de dispositivos grupales en el área de la asistencia psicoterape8tica" sin embargo los psicoanalistas ingleses que empe1aron a trabajar con grupos" buscaban una /orma de abordaje e/ica1 en la re-abilitaci(n de los combatientes ingleses de la .egunda Guerra internados en los -ospitales psiquiátricos militares' !simismo pueden se0alarse este tipo de enlaces en los aportes sartreanos sobre los grupos -umanos' En su :rítica a la razón dial(ctica 9#$[M: .artre abre un campo de re/le,i(n) el -ombre /rente al grupo y la -istoria colectiva; re/le,i(n sobre lo grupal pero que busca" sin duda" respuesta a una dolorosa interrogaci(n política +de qué manera -a sido posible un /en(meno como el stalinismo? También se pueden incluir aquí las preocupaciones y replanteos sobre los grupos desarrollados por el !nálisis 6nstitucional" de indudables in/luencias sartreanas' !utores como 4oureau" 4apassade" !rdoino" retomarán el interés por los grupos en las instituciones" las condiciones para el despliegue de sus potencialidades autogestivas" la dialéctica de lo instituido
C. La relación "ru!/%!ciedad

4a relaci(n grupo
6>76A67U=

.=C6E7!7

Psicología

.ociología

Pedagogía

!ntropología

Psicoanálisis

Economía

etc'

etc'

3ediaciones

Psicología .ocial Psicología de los Grupos Psicología de las 6nstituciones

Esta noci(n de los grupos como campos de mediaciones -a intentado *resolver* la tensi(n entre lo singular y lo colectivo a través de la categoría de intermediación' .i bien dic-a categoría merece revisi(n" es necesario destacar que mantiene la presencia del polo social en su análisis de la dimensi(n grupal' Por el contrario" puede encontrarse /uerte tradici(n en cierta /orma de reduccionismo *psi*" en aquellas corrientes que centran su análisis de los acontecimientos grupales en las interacciones entre sus integrantes" unrespecto en/oque adesus losco-esiones" grupos plegados sobre sí mismos de donde si bien se abreproduciendo visibilidad con lidera1gos e interacci(n roles" etc'" se invisibili1an los atravesamientos institucionales" sociales e -ist(ricos que con/luyen en la gesti(n de tales movimientos grupales' Esta /orma de *grupismo* al reducir los aconteceres grupales a algunos de sus movimientos" suele operar un e/ecto de teoría por el cual estos *grupos
especi/icad de los acontecimientos grupales; puede encontrarse en aquellas /ormas de abordaje donde el dispositivo grupal es visuali1ado s(lo como un espacio
D. La cate"!ría de intermediari!

Esta caracteri1aci(n de los grupos como mediadores" es decir" como espacios intermedios entre *individuos* y *sociedades* lleva implícito cierto concepto operativo" a través del cual dados dos conjuntos di/erentes previamente demarcados -abrá que" posteriormente" buscar sus relaciones" sus puentes articuladores' ! su ve1" y correlativamente con lo anterior" dadas dos disciplinas ya constituidas
pensar la articulación ? Plantea que" por de/inici(n" esta categoría -a -istoria estado destinada a pensar lo psicosocial articular" utili1ándose en di/erentes disciplinas) psicología" de las mentalidades" psicoanálisis" antropología' Es necesario subrayar que esta categoría es puesta en /uncionamiento cuando tales disciplinas se -an visto /rente al desa/ío de pensar desde sus di/erentes campos de demarcaci(n" las relaciones entre subjetividad e -istoria" entre inconsciente y cultura" etcétera' .in embargo" sostiene este autor que dic-a categoría no -a sido objeto de una elaboraci(n su/iciente en las disciplinas que trabajan con ella' Esta situaci(n parecería contrastar con el status que tal categoría -a cobrado en la /iloso/ía" donde) #$ LaSs, 2 :?a categoría de intermediario y la articulación psico%social:, 2e- de Psicología y Psicoterapia de ;rupo, /omo .II nD ( Buenos Aires, ("1

el pensamiento de lo intermediario 9la cualidad de medio: es una de las categorías más pregnantes de la -istoria de las ideas' !traviesa todo el campo de la /iloso/ía occidental) en su apogeo con Plat(n 9con las categorías del mésostes y del méta,u:" vigorosa en teología y meta/ísica" se impondrá aun a las corrientes prerracionalista y racionalista y luego volverá con más /uer 1a en el siglo N6N en las disci plinas cuya tarea consis tirá en dar cuenta de la #(

trans/ormaci(n temporal o de un vínculo entre organi1aciones -eterogéneas'

Plantea este autor tres caracteres generales asociados a la categoría de intermediario)

#' 4o intermediario como /unci(n de lo articular" por c'I cual lo intermediario /unciona en el campo de lo discontinuo" en tanto resultado de una separaci(n entre elementos que se trata de rearticular" por medio de una suerte de *b pass * te(rico' 7esde esta perspectiva" lo intermediario está pensado también como un proceso de reducci(n de antagonismos' Este proces( se re/iere también a lo discontinuo" pero a un tipo de discontinuidad basada en los con/lictos que se dan en un campo de /uer1as de oposici(n" se trata entonces de articular" bajo di/erentes /ormas" a los elementos en con/licto' X' 4o intermediario ligado a la presentaci(n de un proceso de trans/ormaci(n y pasaje" asociada por ende al pensamiento del movimiento' L' .i bien las dos primeras características -acen aparecer lo intermediario como la necesidad de lo continuo" principio o agente de concatenaci(n" proceso de pasaje de un orden a otro" la tercera insiste en su /unci(n estructurante y en su responsabilidad respecto del pasaje de una estructura a otra'

!demás de se0alar estos tres aspectos de lo intermediario" a\s propone una distinci(n entre 6ntermediarios de Tipo #" que operan en un campo -omogéneo" en el interior de una misma estructura o de una concatenaci(n" e 6ntermediarios del Tipo X" que articulan dos conjuntos -eterogéneos" -eter(nomos" de niveles l(gicos di/erentes' 4a cuesti(n de la articulaci(n psicosocial re/iere particularmente a un intermediario del tipo X" puesto que se trata de dos polos psicol(gico y sociol(gico" que se -an constituido en el curso de su oposici(n di/erenciada' a\s plantea que un punto de vista #( LaSs, 2 0p cit

como éste podría admitir o no la mediaci(n entre niveles -eter(nomos" pero subraya que" /recuentemente" y sobre todo en las /ases constitutivas de los campos disciplinarios" el resultado del debate evoluciona asiduamente -acia posiciones reduccionistas' .in duda la cuesti(n del intermediario dista muc-o de estar resuelta; su vaguedad conceptual suelelairintermediaci(n acompa0ada en ámbitos de valoraciones negativas" en tanto suele asociarse conalgunos lo neutro" lo mi,to" lo bastardo" lo impuro' Este tipo de ane,iones asociativas" sin duda acentuadas desde las disputas por la -egemonía en el campo intelectual" -ablan de las di/icultades que tales intentos de articulaci(n presentan' Estas cuestiones no s(lo se0alan problemas te(ricos de compleja demarcaci(n' .e presentan también en la cotidianeidad de las prácticas grupales orientando las mismas -acia algun os de los reduccionismos mencionados líneas arriba" seg8n los a priori conceptuales que se pongan en juego en tal terreno' >o debe olvidarse que dic-os a priori -an operado previamente como impensables en el dise0o de sus dispositivos' 7e esta manera al crear condiciones para producir determinadas e,periencias grupales
@esumiendo" muc-as son las /ormas que los reduccionismos pueden presentar' Tanto las teori1aciones como el lugar de la coordinaci(n suelen oscilar entre dos /icciones) la -igura del gran indiiduo o el espe&ismo de los grupos como intencionalidad ' En este sentido se vuelve necesario un cambio de paradigma; de un criterio antin(mico de individuos s' sociedades" -acia una operaci(n conceptual que pueda evitar una /alsa resoluci(n reduccionista y se permita sostener la tensi(n singular< colectivo' .ingularidad descarnada de soportes corporales indivisos' Colectividad que en las resonancias singulares produce anudamientos
E. Pr!,lema ei%t&mic!

En un intento ueva manera de pensar 4o Uno y 4o 38ltiple" intentando superar los encierros que la l(gica del objeto discreto impone" abriendo la re/le,i(n -acia /ormas epistémicas pluralistas" transdisciplinarias' En este sentido vuelve udos constituidos por m8ltiples -ilos de unidades disciplinarias que se enla1an en el pensar lo grupal' Esto implica un movimiento bascular por el cual se vuelve imprescindible sostener las categorías de análisis especí/icas" particulares" de los recortes disciplinarios y
desarticulaci(n; entre ellas pueden mencionarse) la posibilidad de construir un objeto te(rico Wgrupo*" la lectura de los acontecimientos grupales plegados sobre sí mismos 9los grupos *islas*:" el psicoanálisis como disciplina e,plicativa*" unívoca" de los movimientos grupales" o la negaci(n de la especi/icidad disciplinaria del campo grupal'

4a aparici(n de propuestas transdiscíplinarias#0 da cuenta del surgimiento , =adrid, ("' #1 Benoist, 9= >p cit

unívocos" implica no s(lo el intercambio entre di/erentes áreas de saber sino la crítica interna de variadas regiones de una disciplina que" al transversali1arse con otros saberes" pone en interrogaci(n muc-as de sus certe1as te(ricas' ##

Caítul! III

LA DEMANDA POR LO) GRUPO)

A. La ilu%ión de l!% !rí"ene%

4a psicosociología naci( en el cruce de numerosas disciplinas ya /ormadas o en curso de /ormaci(n" tales como la psicología social" el psicoanálisis" la psicopedagogía" la sociología de cuya las preocupaci(n organi1aciones" a/anarse quede elsusconjunto conocimientos sonetcétera' los gruposPuede -umanos tiene uno puntos dede srcen en la imperiosa demanda proveniente de la práctica social empresarial" con particular locali1aci(n en los Estados Unidos en los a0os XM' #& 4a introducci(n de este nuevo dominio del conocimiento -abía comen1ado" sin duda" con anterioridad a que tal demanda se -iciera operativo en encargos concretos' !sí los trabajos de Tarde" 3c 7ugall" 4e on" e incluso las primeras investigaciones de ## !e retoma esta cuestión en el capítulo .II #& ?ourau, 2 )l análisis institucional, Amorrortu, Buenos Aires, (")#

3oreno son anteriores a la Primera Guerra 3undial' 3ás allá de cierto interés -ist(rico" estas *condiciones de origen* de las producciones técnico
#) Anp cit # ?ourau, 2 0p cit

.i bien es comprensible que estas di/erenciaciones /ueran invisibles en los momentos /undacionales de este campo de intervenci(n merecen ser se0alados en tanto con suma /recuencia puede observarse
#. La din0mica de "ru!%

urt 4eYin" psicol(gico de la Escuela de erlín" emigrado en #$LM a Estados Unidos" aport( principios de la estalt$eorie al estudio de la personalidad y posteriormente al estudio de los grupos' Esta -abía demostrado que la percepci(n y el -ábito no se apoyan en elementos sino en *estructuras*' 4a Teoría de la Gestalt puso en evidencia" e,perimentalmente" re/utando el asociacionismo" c(mo en ciertas condiciones< cabe a/irmar que * el todo es más 'ue la suma de las partes *' .eg8n esta corriente la e,plicaci(n de los /en(menos perceptuales debía intentarse a través de una unidad de análisis
#" Anp cit

7ado que esta e,periencia se reali1a a comien1os de la .egunda Guerra 3undial alcan1a gran celebridad' 7a /undamento cientí/ico a la valoraci(n del ideal democrático al demostrar que en los grupos conducidos democráticamente la tensi(n es menor" pues la agresividad se descarga en ellos de manera gradual en lugar de acumularse y producir apatía o estallidos" como en los otros dos grupos' Concluye que el grupo democrático" al alcan1ar más /ácilmente el equilibrio interno" es más constructivo en sus actividades' ! partir de allí 4eYin comien1a a desarrollar sus -ip(tesis centrales sobre los grupos) el grupo es un todo cuas propiedades son di-erentes a la suma de las partes. l grupo  su ambiente constituen un campo social dinámico, cuos principales elementos son los subgrupos, los miembros, los canales de comunicación, las barreras. Modi-icando un elemento se puede modi-icar la estructura. El grupo es un campo de /uer1a en *equilibrio casi estacionario*' Este equilibrio no es estático" sino dinámico" resultante de un juego de /uer1as antag(nicas) por un lado" las /uer1as que constituyen las partes en un todo; por otro las /uer1as que tienden a desintegrar al conjunto' Como puede observarse es una concepci(n netamente *gestaltista*) el juego de /uer1as e,puesto se piensa tan s(lo en relaci(n al todo; lejos de que las partes puedan e,plicar ese todo" da cuenta de cada una de ellas en sus relaciones con todas las demás'&$ En consecuencia" uno de los problemas más importantes para urt 4eYin y sus colaboradores es la investigaci(n de la unidad del grupo  su permanencia como totalidad dinámica 9de allí los numerosos estudios de esta escuela sobre la co-esi(n grupal" la relaci(n de los miembros entre sí" los procesos de interacci(n" etc':" como así también" las relaciones dinámicas entre los elementos  las con-iguraciones de con&unto' a nacido la
&$ .iet 9 Los métodos estructuralistas en Ciencias Sociales, Amorrortu, Buenos Aires, (")"

impulsa" es decir" su dinámica'&(

4as relaciones descubiert as en laboratorio sobre grupos *arti/iciales* pasan a ser estudiadas luego en agrupamientos de la vida cotidiana) talleres" escuelas" barrios" etc'" en la convicci(n de que el peque0o grupo permite vencer las resistencias al cambio y provoca la evoluci(n de las estructuras del campo social 9/ábrica" consumidores" opini(n p8blica" etcétera:' ! partir de ese momento trabajará la temática del cambio social y la resistencia al cambio con la célebre e,periencia de modi/icaci(n de costumbres alimentarlas de #$L' Trabaja sobre la resistencia de las amas de casa norteamericanas durante la .egunda Guerra a incluir ac-uras en la dieta alimentaria; se -acía necesario modi/icar estos -ábitos en virtud de la /alta de carne que el abastecimiento de las tropas ocasionaba',8 *7escubre* que tomar una decisi(n en grupo compromete más a la acci(n que una decisi(n individual; que es más /ácil cambiar las ideas y las normas de un grupo peque0o que las de los individuos aislado s 9costumbres alimentarlas" rendimiento en el trabajo" alco-olismo" etc': y que la con/ormidad con el grupo es un elemento /undamental /rente a la resistencia interna para el cambio' .e plantea la necesidad de reorientar la /uer1a resistencias al servicio del cambio' En tal sentido los dispositivos grupales que dise0a se le presentan e/icaces para tal objetivo' 4a Teoría del Campo elaborada por ' 4eYin o/reci( una gran posibilidad de &0 estudio de los grupos y dio lugar a vastísimas aplicaciones en sus discípulos; -i1o posible la consolidaci(n de las *técnicas de laboratorio social* y la *6nvestigaci(n< !cci(n*" instrumentos que -an e,cedido en su implementaci(n su lugar srcinario para aplicarse en muy variados campos de las ciencias sociales' 4os aportes de la Teoría del Campo -an tenido gran in/luencia en ámbitos muy disímiles; puede observarse incluso" la impronta de algunos de sus postulados
P' .bandi,, plantea que la concepción le*iniana del grupo como un todo signi-ica el abandono de la posición 'ue coloca al indiiduo en primer plano ' .e0ala" sin embargo" que si bien 4eYin acent8a la interdependencia de" los miembros" mantiene invisibles los presupuestos sobre los que se /unda tal interdependencia; considera" asimismo" que serán los aportes psicoanalíticos respecto a los procesos identi/icatorios" las relaciones emocionales y los procesos inconscientes los que -arán posible a-ondar en esta cuesti(n'

C. Criteri!% ei%t&mic!% de 1urt Le2in

6nteresa resaltar de este autor' algunas posiciones epistemol(gicas desde donde pensaba lo grupal' .i bien es sabido que urt 4eYin tom( diversas nociones de la Física" es importante se0alar que no import( de esta disciplina tanto sus leyes como sus principios metodol(gicos; puso én/asis en la construcci(n te(rica de conceptos que no derivan de la e,periencia' En
&& !4andi, P Psicología de ;rupo, erder, Barcelona, (")& &) ?e@in, L 8inámica de la personalidad, =orata, =adrid, ("&"

4o que es a-ora importante para la investigaci(n de la dinámica" no es abstraer un -ec-o de su situaci(n" sino descubrir aquellas situaciones en las que los /actores determinativos de la estructura dinámica total se mani/iestan con más claridad y pure1a' En ve1 de una re/erencia al promedio abstracto de tantos casos -ist(ricamente dados como sea posible" se da la que corresponde al contenido concreto de una situaci(n especí/ica*' &

3uc-as veces" en Psicología .ocial" la Teoría del Campo de 4eYin /ue interpretada en un sentido *globalista* o totalista" esto es" como si su aporte alas ciencias -umanas -ubiera consistido en sostener la imposibilidad de dividir por análisis el campo y luego reconstruirlo desde las partes así obtenidas' Ha se -a dic-o que aport( la premisa de la estalt$eorie *el todo es más que la suma de las partes* para sus análisis sobre los grupos" pero la intenci(n de 4eYin iba muc-o más lejos" en el sentido de especi/icar la noci(n *estructural* mediante un tratamiento matemático' !sí" por ejemplo" !le, avelas llev( a cabo esta precisi(n trasponiendo la *topología* de 4eYin qui1á lo esencial de su teoría del campo< a una representaci(n grá/ica carente de ambig^edades' ! pesar de sus insu/iciencias" la concepci(n estructural de 4eYin sigui( /irmemente la tendencia metodol(gica apenas esbo1ada por los psic(logos de la Gestalt" que llevaba desde la simple descripci(n de las totalidades irreductibles" al análisis e,plicativo' .us aportes constituyen un intento de e,plicarlas interacciones observables por un sistema de leyes" que se intenta reconstruir por modelos matemáticos' .in bien -ered( de los psic(logos de la Gestalt la noci(n de /orma como un todo organi1ado" no cay( como ellos en el reduccionismo /isicalista del equilibrio estático; sin embargo" mantuvo en com8n con esta escuela el olvido de la perspectiva -ist(rica' En virtud de que el campo s(lo da cuenta de la conducta en un momento dado" se inscribe en una psicología de los estados momentáneos' &" 7e tal manera" el dinamismo del campo estructural /ue pensado por 4eYin en términos estrictamente espaciales" dejando de lado la dimensi(n temporal y con ella la perspectiva -ist(rica' @esumiendo" la línea que va de Elton 3ayo a urt 4eYin reviste

D. Primer m!ment! ei%t&mic!: el t!d! e% m0% 3ue la %uma de la% arte%

4a pregunta por el grupo" en tanto *todo más que la suma de las partes* se -a constituido en un interrogante clásico en la -istoria de la llamada Psicología de los Grupos' ! partir de la aplicaci(n que ' 4eYin reali1a de esta premisa de la estalt$eorie a los grupos" -a sido divisoria de aguas con respecto al tema' Fuertes a priori conceptuales -an orientado las tomas de posici(n de totalistas y elementalistas' )$ Este aporte de la Gestalt a las primeras conceptuali1aciones sobre los grupos resalta la idea de totalidad" a/irmando un jal(n importante a /avor de la b8squeda de la especi/icidad disciplinaria; crea las bases para que pudieran particulari1arse estos conjuntos" -asta el momento diluidos entre 6ndividuos y .ociedades' 7e esta /orma" a partir de estos principios de demarcaci(n se crean las condiciones para la producci(n de dispositivos técnicos y la organi1aci(n de los primeros discursos sobre la grupalidad' .in embargo" la relación todo)partes es un problema cuya respuesta es siempre compleja; porque aun aceptando que el todo /uera" en los grupos" más que la suma de las partes" +c(mo categori1ar tal plus?" +qué relaci(n se asigna al todo con respecto a las partes? El tratamiento de la relaci(n todo
ellas o entre las partes y el todo:' Establecidas las relaciones de las partes entre sí" y con el todo" no sería una re/utaci(n al planteo que -ubiera situaciones aditivas entre partes)( o momentos de particulari1aci(n de partes' !l mismo tiempo" para un interés estructuralista" la relaci(n todonico  no como las diersidades de lo M!ltiple')0 !sí como los pensadores post)estructuralistas intentan" en los 8ltim os a0os" pensar otras /ormas demeramente articulaci(nun entre acontecimientos y estructura" manera que el primero no sea e/ecto de la segunda" también sede inclinan a tal considerar otras /ormas de relaci(n todo
Ha no creemos en esos /alsos /ragmentos que" como los peda1os de una estatua antigua" esperan ser completados y vueltos a pegar para componer una unidad que además es la unidad de srcen' Ha no creemos en una totalidad srcinal ni en una totalidad de destino' Ha no creemos en la grisalla de una insulsa dialéctica evolutiva que pretende paci/icar los peda1os limando sus bordes' >o creemos en totalidades más que *al lado*' H si encontramos una totalidad tal" al lado de partes" esta totalidad es un todo *de* aquellas partes" pero que no las totali1a" es una unidad *de* todas aquellas partes" pero que no las uni/ica" y que se a0ade a ellas como una nueva parte compuesta aparte'

)( Castorina, 9A 0p cit )' Bohosla-sRy, :;rupos propuestas para una teoría:, 2e- Argentina de Psicología, nD '', Buenos Aires, diciem4re (")) )0 .ase :El todo no lo es todo: capítulo I.Q )1 8eleu
Es interesante la re/ormulaci(n planteada por estos autores en tanto acent8an el carácter 'ue posee lo m!ltiple? irreductible a la unidad ' 7e tal manera piensan el todo como producido" como una parte al lado de las partes que ni las uni/ica ni las totali1a sino que se aplica a ellas organi1ando relaciones transversales entre elementos que mantienen toda su di/erencia en sus propias dimensiones' 4a relaci(n todo
En síntesis" el reconocimiento de un todo) el grupo" -a tenido una importancia -ist(rica en la demarcaci(n de los sabores y que-aceres de la grupalidad' Posiblemente -a sido la /orma intuitiva" embrionaria" de demarcaci(n de un campo propio para los /en(menos grupales" no reductible a los /en(menos individuales' En ese sentido" también puede pensarse que el campo semántica en una de sus /iguraciones) círculo" debe operar signi/icancia en el término todo' El grupo imaginado como un todo más que la suma de las partes" constituye un primer momento epist(mico en la institucionali1aci(n de saberes y prácticas grupales' Tal ve1 no /uera e,agerado a/irmar en ese sentido" que esta premisa -a con/igurado un imaginario -undador de este campo disciplinario" es decir" -a operado
E. An0li%i% de la demanda

+Cual es la situaci(n político
)# !e retoma esta cuestión en los capítulos I. y . )& Benoist, 9= 0p cit  !eg3n este autor los imaginarios Gundadores tienen el poder de poner desde una disciplina en Gormación nociones 6ue para el consenso de la poca resultan poco acepta4les !on cuerpos de proposiciones Gundacionales 6ue se caracteri
momento en que Elton 3ayo reali1a su intervenci(n en la Zestem Electric Company ? )) Ha en una etapa de gran empresa los empresarios comien1an a comprender la necesidad de regularla producci(n en todos sus aspectos) maquinaria" mano de obra" distribuci(n' Es la época de la organi1aci(n cientí/ica del trabajo 9Taylor:' El técnico sobresaliente en ese momento de la sociedad industrial es el ingeniero
7esde E' 3ayo y ' 4eYin se organi1a una disciplina) la
estratégica dominante*' +Cual urgencia? .in duda" mantener  me&orar el niel de producción de la gran empresa" estimulando las relaciones in/ormales entre los operarios; la /utura disciplina de las @elaciones umanas -a construido aquí uno de sus pilares /undacionales' Pero también re/or1ar los ideales democráticos" operar sobre el consumo" etc'; la 7inámica de Grupos se e,pandirá rápidamente por diversos campos) empresarial" educacional" de mercado" etcétera' Por tanto" urgencia situada -ist(ricamente" en /unci(n de imperativos econ(micos y políticos del sistema del que /orma parte' El momento y el lugar en que surgi( la 7inámica de Grupos no /ueron accidentales' 4a sociedad norteamericana de los a0os LM proporcion( el tipo de condiciones necesarias para que surgiera este movimiento' Entre ellas merece destacarse la apuesta que los sectores -egem(nicos de dic-a sociedad -abían reali1ado en /avor de la ciencia" la tecnología y la soluci(n racional de sus problemas como pilares de su progreso' 4a convicci(n de que una democracia puede mejorar tanto la naturale1a -umana como la sociedad a partir de la educaci(n" la religi(n" la legislaci( n y el trabajo duro' 7esde esa perspectiva comien1a a desarrollarse la inversi(n econ(mica en la investigaci(n y ésta a considerarse como un motor /undamental de resoluci(n de los problemas de la sociedad; es decir que se va consolidando la creencia de que el sistemático descubrimiento de los -ec-os /acilitaría la soluci(n de *problemas sociales*' !sí cuando luego de la .egunda Guerra 3undial comen1( la rápida e,pansi(n norteamericana ya estaban preparados para dar apoyo /inanciero a dic-a investigaci(n; ésta provino no s(lo de instituciones y /undaciones académicas" sino también de empresas y organi1aciones interesadas por *mejorar las relaciones -umanas* y por el propio gobierno /ederal' ( 2unto a estos /actores" cabe se0alar que parte del mundo ' académico norteamericano de la aépoca -abía iniciado empírica en las ciencias sociales* que opondría la especulaci(n sobresula*rebeli(n naturale1a de los /en(menos -umanos la necesidad de investigar e,perimentalmente los /en(menos sociales cobrando rápido e importante desarrollo una psicología social de metodología

)" !o4re el carácter no natural de las necesidades sociales, -ase Castoriadis, C 0p cit $ Foucault, = )l discurso del poder, Folios, =Hico, ("0 ( Cart@right, 8 y Tander, A  6inámica de grupos .nvestigaci+n % teoría =Hico, ("$ ' Cart@right, 8 y Tander, A 0p cit

, /rillas,

e,perimentar' 6nteresa en este punto contrastar la demanda social en la que se inscribi( la microsociología empresarial norteamericana con las condiciones de producci(n que -icieron posible la invenci(n y posterior despliegue de los grupos operativos a partir de Pic-on @ivire en la !rgentina' 7esde su mítica intervenci(n en el ospicio de las 3ercedes 0 y la E,periencia @osario1 que dieron los primeros dise0os de trabajo" pueden puntuali1arse algunas di/erencias' Tal ve1 la más signi/icativa sea que no surgen desde un requerimiento de los centros de poder institucional" ni los orienta la intenci(n de consolidar -egemonías instituidas' 3uy por el contrario" sus locali1aciones iniciales" como muc-os de sus desarrollos posteriores" se implantaron en los márgenes de las instituciones o en los intersticios de las -egemonías; en muc-os casos /ueron animados por marcadas utopías contrainstitucionales' .i las latencias de una demanda social ponen en evidencia un vacío +a que urgencia del socius los grupos operativos /ueron respuesta? Esta demanda por los grupos en la !rgentina 9décadas del [M y BM: se produce en un cuerpo social agitado" momento de auge de las luc-as populares' Gran parte de la intelectualidad de los [M se caracteri1( por estar imbuida de /uertes utopías sociales' 3uc-os de los pro/esionales del campo *psi* que implementaron estas prácticas /ueron críticos de los autoritarismos institucionales) jerarquías médico<-ospitalarias" autoritarismo psiquiátrico
e,cesivo a1ar en el *socius]"' !l mismo tiempo" el entramado social en que muc-as disciplinas y pro/esiones inscriben sus prácticas" suele constituirse en un impensable signi/icativamente resistente'#

Por otra parte se -ace necesario superar cierto maniqueísmo derivado muc-as veces de las posturas epistemol(gicas alt-userianas que postularon rupturas un tanto ilusorias entre momentos precientí/icos o ideol(gicos H momentos cientí/icos" a partir de la constituci(n del objeto /ormal abstracto de una disciplina" subestimando la necesidad de la articulaci(n entre ciencia y práctica social" entre la productividad de los saberes y la e/icacia de los poderes' !sí punt8a Foucault la articulaci(n saber
4os dispositivos grupales que se produjeron desde 3ayo<4eYin" necesariamente" dada la demanda social a la que respondieron" debieron mantener en la invisibilidad los atravesamientos institucionales" políticos e ideol(gicos en los que" sin embargo" quedaron inscriptos tanto sus discursos de la grupalidad como sus intervenciones técnicas' >o debe subestimarse" sin embargo" que tales dispositivos -icieronlidera1gos" posible la visibilidad de importantes mecanismos de /uncionamiento de los grupos) roles" di/icultades en la toma de decisiones" cambio" resistencia al cambio" juegos tensionales dentro del grupo" etcétera' ! partir de estas visibilidades posibles" se organi1aron sus enunciables' 2unto a estos visibles dejaron como sus invisibles necesarios los procesos inconscientes que atraviesan tales mecanismos como así también la inscripci(n institucional y sus e/icacias en el seno mismo de tales mecanismos grupales' Esto no signi/ica crítica a supuestos errores" sino puntuaci(n de las nuevas y necesarias visibilidades en el intento de comprensi(n de las producciones de posteriores enunciados de la grupalidad' Ha que si
4. El nacimient! de l! "rual

!ntes de avan1ar se -ace necesario aclarar el sentido en que se utili1an los términos ("#

 !aidón en :=odernidad Inconsciente y ;rupos: utili
4os dispositivos grupales /orman parte del 7ispositivo de los Grupos" en la medida en que -ist(ricamente" a partir de las primeras e,periencias de ' 4eYin y E' 3ayo por un lado" las e,periencias de 3oreno y el dise0o de la clínica psicoanalítica de instancias por otro" se inaugura una modalidad que abre espacios de un n8mero numerable de personas para la producci(n de e/ectos especí/icos en diversas /ormas de intervenciones institucionales' Suiere acentuarse de esta manera el carácter virtual de los e/ectos de grupo" di/erenciando estas elucidaciones de aquellas animadas por un interés (ntico) precisar qué es un grupo' Por el contrario" se sostiene
s(lo si los individuos se acercan su/icientemente unos a otros es posible dar una interpretaci(n sin necesidad de gritar; de la misma manera es necesario que todos los miembros de un grupo puedan comprobar los elementos en los que se /undamentan las interpretaciones' Por estas ra1ones el n8mero y el grado de dispersi(n del grupo deben ser limitados' El -ec-o de que el grupo se constituya en un lugar determinado y en un momento determinado" es importante por las razones mecánicas sealadas " pero no tiene mayor signi/icado para la producci(n de /en(menos de grupo; la idea de que ello sea signi/icativo surge de la impresi(n que establece que una cosa comien1a en el momento en que su e,istencia se -ace palpable D la e,istencia de la conducta de grupo se -ace evidentemente más /ácil de demostrar" y aun de observar" si el grupo se constituye como tal' "0

Esta intuici(n de ion subraya que" si bien los seres -umanos son impensables por /uera de grupos" los grupos se vuelven visibles a partir del montaje de dispositivos "' Bion, V, )&periencias en grupos, Paidós, Buenos Aires, ("&0 "0 Bion, V 0p cit El su4rayado es mío

técnicos tales que permitan demostrar y observar las conductas de grupo' .e presentan -asta aquí dos niveles de e,istencia de los grupos) el primero /áctico" en tanto -ec-os sociales; el segundo del campo disciplinario" por cuanto al montarse los sucesivos dispositivos grupales del 7ispositivo de los Grupos" los grupos paulatinamente se vuelven visibles" observables" comprobables" e,plicables" e,perimentables" teori1ables" es decir" enunciables' En este sentido la microsociología instituir dispositios grupales localiz ó uno de los nacimientos a lo grupal. Antes de ella,al los grupos estaban a$í, en una inmediatez tal, 'ue no se eían'

Caítul! I'

5ACIA UNA CLINICA GRUPAL

A. Primer!% di%!%iti+!% "ruale% tera&utic!%

.e considera que los primeros intentos de abordajes colectivos con /ines terapéuticos /ueron las actividades iniciadas por Pratt en #$M&" al introducir el sistema de *clases colectivas* en una sala de pacientes tuberculosos' El objetivo de esta terapia consistía en acelerar la recuperaci(n /ísica de los en/ermos" mediante una serie de medidas sugestivas destinadas a que éstos cumplieran de la mejor manera posible su régimen dentro de un clima de cooperaci(n o" mejor dic-o" de emulaci(n' 4as clases o sesiones a las que concurrían más de cincuenta pacientes" constaban de una breve con/erencia del terapeuta que disertaba sobre la -igiene o los problemas del tratamiento de la tuberculosis; a continuaci(n" los pacientes /ormulaban las preguntas o discutían el tema

con el médico' En estas reuniones" los en/ermos más interesados en las actividades colectivas y los que mejor cumplían con el régimen" pasaban a ocupar las primeras /ilas del aula" estableciéndose un escala/(n jerárquico bien de/inido" conocido y respetado por todos' En vista de los buenos resultados que daba este método" Pratt escribi( un trabajo preliminar en #$M[" que ampli( en los a0os subsiguientes; pronto" otros probaron su técnica con resultados similares' "1 El mérito de Pratt /u e utilizar en -orma sistemática  deliberada las emociones colectias con una -inalidad terap(utica' .u técnica se apoyaba en dos pilares) activar en /orma controlada la aparici(n de sentimientos de emulaci(n y solidaridad en el grupo y asumir" él mismo" el papel de una /igura paternal ideali1ada' El método incentivaba un /uerte enlace emocional del en/ermo con el médico; ilustra grá/icamente dic-o prop(sito su sistema de promociones que premiaba *al buen paciente*" permitiéndole que se sentara cada ve1 más cerca de él en las reuniones' Considerando la importancia de la ideali1aci(n del médico" no es de e,tra0ar que la estructura y /unci(n de este tipo de grupo /uera similar a las de ciertos grupos religiosos que persiguen /ines parecidos' ! los métodos que -an seguido la orientaci(n de Pratt se los -a denominado genéricamente" terapias e2$ortatias parentales 'ue act!an 7por7 el grupo'"# .e dice que act8an *por* el grupo" porque incitan y se valen de las emociones colecti vas aunque no intenten comprenderlas' .e busca la solidaridad del grupo con /ines terapéuticos; Pratt" uc5 y C-apel utili1aron este método como una /orma au,iliar de los tratamientos médicos de pacientes con trastornos orgánicos cr(nicos 9tuberculosos" diabéticos" etcétera:'"& En versiones más actuales puede encontrarse este tipo de técnicas au,iliares en algunas /ormas de tratamientos de obesos que toman como uno de sus resortes terapéuticos el *carisma* del médico" generalmente muy reconocido socialmente' ! partir de esta primera corriente" que todavía cuenta con sus adeptos" se produjo una interesante di/erenciaci(n; las terapias 'ue act!an 7por7 el grupo, con una estructura -raternal. n este caso, el dinamismo es análogo? incitar  canalizar emociones colectias en grupos solidarios; el tipo de relaci(n entre el grupo y el terapeuta es" sin embargo" diametralmente opuesto al de la corriente ejempli/icada por Pratt' En lugar de ideali1ar el médico esta corriente estimula una /raternidad que busca el mayor sostén entre sus miembros" disminuyendo al má,imo el lidera1go centrado en el técnico' "1 ;rin4erg, ?, ?anger =, 2odrigu, E $sicoterapia de grupo, Paidós, Buenos Aires, (")( "# ;rin4erg y otros, 0p cit "& Pratt, 9 The $rinciples o# class Treatment and their applications to varoius Chronic 6iscases, osp !ocial !er-ice, ("'' Citado por ;rin4erg y otros, >p cit

El ejemplo más acabado de esta tendencia terapéutica se encuentra entre los *alco-(licos an(nimos* 9los !'!':; esta organi1aci(n" iniciada en #$L&" cobra rápida aceptaci(n en los a0os siguientes" en EE'UU'" di/undiéndose luego por muc-os países' 4os !'!'" más que un grupo terapéutico en strictu sensu " /orman generalmente una sociedad con contribuci(n econ(mica y participaci(n voluntaria de sus miembros" algo así como una asociaci(n de alco-olistas re/ormados' El e/ecto terapéutico se basa en la presunci(n de que el e, alco-olista puede in/luir más e/ica1mente a otro alco-olista" este 8ltimo es capa1 de establecer la1os más plenos con su re/ormador" al saber que éste -a tenido el mismo problema y
era más e/ica1 cuando eran agrupados que aisladamente' Sueda la pregunta operando" +por qué?) /'u( intercambios allí se producían para generar tales resultad os /cuáles $an sido los enlaces sub&etios entre sus integrantes, /'u( -iguras emblemáticas se organizan desde  organizan a, tan particular -orma de inscripción institucional .i se observa el dispositivo montado a partir de Pratt puede verse" en primer lugar" que trabajaba conesgrupos que obviamente pueden recibiragrupamientos el nombre de restringidos; por lo tanto" muy improbable que losno enlaces de tales -umanos se organi1aran desde los mismos parámetros por los que se -a estudiado que se organi1a un peque0o grupo' .in duda en los grupos amplios no pueden encontrarse iguales condiciones que en los restringidos para desencadenar los procesos identi/icatorios y trans/erenciales' 3iradas recíprocas" nombres" cercanías" ubicaci(n en círculo" etc'" son condiciones propias de los grupos peque0os que -acen posible que tales procesos se organicen en /orma de redes cru1adas" dando así a los agrupamientos restringidos su peculiaridad' Por tal motivo" se -ace necesario pensar los grupos numerosos en su especi/icidad' .i bien los procesos identi/icatorios entre los integrantes son muc-o más lábiles" otros son los caminos por los que producen sus anudamientos< desanudamientos'") En el caso de las terapias e,-ortativas parentales" los enlaces se producen a través de /uertes líderes *carismáticos*' En estos dispositivos
Suiere se0alarse al pasar" la di/erencia de las signi/icaciones imaginarias que este tipo de enlaces colectivos parece disparar en sus integrantes) soporte solidari o" sostén identi/icatorio" con aquéllas registradas por !n1ieu en los grupos amplios" quien acent8a" en dic-os agrupamientos" la amena1a de pérdida de la identidad personal y trans/erencias negativas de tal amplitud e intensidad que se vuelven temibles para los coordinadores' .i bien los primeros dispositivos grupales terapéuticos que instrumentaron las *emociones del grupo* como resorte curativo no teori1aron sobre esta situaci(n" desde un nivel empírico comprobaron que el grupo
#. Alicaci!ne% iniciale% del %ic!an0li%i% a l!% "ru!%

.e abordarán a-ora los aportes psicoanalíticos de orientaci(n anglosajona en el trabajo y teori1aci(n sobre lo grupal' Esta corriente tuvo alta incidencia en nuestro medio y /ue pionera en la organi1aci(n de dispositivos grupales con /ines psicoterapéuticos" donde por primera ve1 se utili1aron conceptos y /ormas técnicas del psicoanálisis para la comprensi(n de los grupos -umanos' =riginariamente pensados con /ines psicoterapéuticos" estos dispositivos se aplicaron luego en la /ormaci(n de coordinadores de grupo y en las intervenciones institucionales 93a,Yell 2ones y E' 2acques:' Esta corriente" dentro de las terapias colectivas" tuvo una importancia muc-o mayor que las anteriores no s(lo por su gran di/usi(n sino por las consideraciones te(rico
!l pasar del análisis *individual* al *colectivo*" inmediatamente se presenta un problema" /a 'ui(n interpretar En el contrato psicoanalítico esto parece tan obvio que ni siquiera se pregunta" pero cuando el terapeuta se vio en/rentado a varios individuos en tomo a él" la direcci(n de la interpretaci(n adquiri( un status problemático' En la soluci(n de este dilema -a estribado una de las principales di/erencias técnicas
"" ;rin4erg y otros, 0p cit

s(lo con un planteo que toma al grupo como una gesta6t" entramos en el terreno de la microsociología' !quí se considera el campo multipersonal como un /en(meno digno de ser estudiado por sí mismo' Es una psicoterapia *del* grupo y no del individuo *en* el grupo" o de los pacientes *por* el grupo'($$

En /unci(n de esto denominaron a su técnica *psicoterapia de grupo*" di/erenciándola de aquellos que interpretaban al individuo Wen* el grupo y de los que act8an *por* el grupo" manejando las emociones colectivas sin interpretarlas' Fundamentan su planteo alegando *la aplicaci(n consecuente y total del psicoanálisis" al grupo con su técnica estrictamente trans/erencial*' !dvierten la importancia de interpretar a los participantes en su sesi(n 8nicamente en /unci(n del aquí y a-ora dado que esta /orma técnica permite que las respuestas provoc adas integ ren al grupo' .e0alan los inconvenientes que traen las interpretaciones individuales y no trans/erenciales' !sí" por ejemplo" seg8n estos autores" la interpretaci(n dirigida a un acontecimiento de la -istoria de uno de los pacientes produciría un cambio de clima inmediato" ya que los demás sintiéndose e,cluidos" se distancian y entran en rivalidad con la persona a quien se -a interpretado' Plantean que en tal caso se está reali1ando un análisis individual" perturbado por la presencia de varias personas' Polemi1an /uertemente con otros terapeutas que interpretan en /orma individuali1ada; re/or1ando sus argumentos dicen)

al adoptar un criterio de integraci(n estamos siguiendo una línea actual de interpretaci(n de los procesos que acontecen en los diversos terrenos' En biología Zolterec5 de/ine el concepto de *organismo* como algo que es muc-o más que la suma de las partes' ($(

7i/ieren con otros psicoanalistas de la misma orientaci(n como Foul5es" para quien la trans/erencia abarca una peque0a parte de lo e,presado por el grupo' asándose en las sensaciones contratrans/erenciales interpretan" en el aquí y a-ora del grupo la -antasía inconsciente en sus m!ltiples mani-estaciones'

($$ ;rin4erg y otros, 0p cit ($( ;rin4erg y otros, 0p cit  >4sr-ese aQ el uso del reGerente microsociológico como soporte de esta práctica psicoanalíticaM 4Q la noción de grupo como organismoM eQ la insistencia del dilema singular%colecti-o

C. El t!d! n! l! e% t!d!

4as psicoterapias de grupo psicoanalíticas -asta aquí presentadas suelen agruparse en dos tendencias) Psicoanálisis en grupo y Psicoanálisis del grupo' 6nteresa locali1ar este punto por cuanto debe relacionarse con algunas cuestiones planteadas previamente' Tomando a los psicoanalistas del grupo" esto es" que anali1an al grupo" podría pensarse que ésta sería la corriente que" superando el eventual *individualismo* de la anterior" en tanto toma al grupo como un todo" -a rescatado la especi/icidad de lo grupal' Pero si se reali1a un análisis más deten ido se podrá observ ar que" si bien se interpreta al T =7=
de la -icción del grupo como intencionalidad.

Con respecto a la relaci(n todo
($1 Pichon 2i-ire, E 6el $sicoanálisis a la $sicología social , Nue-a .isión, Buenos Aires, (")) ($# En realidad, más 6ue e-entuales signiGicaciones imaginarias de igualdad jerár6uica, la disposición en círculo co4ra rele-ancia en tanto modiGica la situación del campo -isual con respecto al psicoanálisis de contrato dual Es decir, todos, incluido el coordinador, en igual posi4ilidad -isual, por lo tanto implicados en los juegos de mirada

Esta corriente al incorporar al nuevo dispositivo las cuestiones básicas de la técnica psicoanalítico clásica abri( virtualidades que permitieran descentrar la coordinaci(n con respecto a los lidera1gos y cre( las condiciones para la lectura de los procesos inconscientes circulantes en los grupos' Entonces" se instituyeron grupos; a-ora bien" retornando la pregunta de Pontalís >?,) +qué -acen cuando instituyen grupos? !nali1an a una gran unidad indivisa" a la cual le dirigen similares interpretaciones que a las personas que optan por un psicoanálisis de contrato dual' ion>?@ -a se0alado que" cuando las personas entran en estado regresivo /antasean al grupo como una totalidad amena1ante de su integridad individual; en realidad" no -ay necesidad de entrar en estados muy regresivos para e,perimentar un /uerte sentimiento de amena1a" si la intervenci(n interpretante posiciona a tal persona siendo parte" estando adentro" de un gran individuo' +C(mo no tener en cuenta la productividad de tal intervenci(n provocando imágenes" violentando sentidos" etcétera? >o se toman en este trabajo algunas cuestiones muy polémicas que esta orientaci(n -a despertado en el interior de la comunidad psicoanalítica" tales como el grado de e/icacia del psicoanálisis del grupo con respecto al psicoanálisis *individual*" o a las críticas al *5leinismo* de su /orma de trabajo; no -ay que olvidar que ése era el psicoanálisis de/orma" los a0os &M<[Ma0os en la !rgentina' Tuvieron sinsus duda el costo degeneran los pioneros; de tal cuando después son anali1adas producciones" una sensaci(n ambivalente" me1cla de admiraci(n por su iniciativa de abrir caminos nuevos y al mismo tiempo una suerte de incomodid ad /rente a la precariedad inevitable de sus tecnologías' En el intento de reconstrucci(n geneal(gica es conveniente detenerse en un punto signi/icativo" /por'u( $abrán isto un 7gran indiiduo7" +por qué -abrán pensado la e,istencia de una /antasía inconsciente grupal? .in duda el pensar a los grupos como grandes individuos se trans/orma en un obstáculo epistemol(gico para pensarlos en sus propios sistemas de legalidades" sin embargo es probable que /rente a esta pregunta no pueda /ormularse una 8nica respuesta' abrá que poner en juego di/erentes cuestiones problemáticas' .in duda ésta /ue la /orma de poner en enunciado cierta constataci(n que reali1a todo coordinador de grupos con respecto al plus grupal' Ese algo más que allí se constata pero que es di/ícil poner en palabras" atribuirle causas" establecer leyes' !l producir sus discursos sobre la grupalidad" esta corriente qued( restringida por cierta tendencia del psicoanálisis
esto es" a considerar el sistema de legalidad propio para el campo psicoanalítico" como absolutamente válido para interpretar regiones de otras territorialidades disciplinarias; esto implica no considerar otros campos disciplinarios como tales" sino como meros espacios de aplicaci(n del psicoanálisis' Este tipo de e,trapolaciones que suelen constituir
imprescindible di-erenciar la escuc$a analítica como instrumento imprescindible en el traba&o con grupos )aun por -uera de la clínica) de la 7comprensión7 de los acontecimientos grupales desde alguna narratia psicoanalítico de los mismos' ! partir de aquí" y volviendo a planteos de páginas anteriores" puede a/irmarse que el pensar la totalidad no garanti1a la absoluta demarcaci(n del campo disciplinario; -abrá que pensar de las partes entrecon sí con el todo'particulari1ados Una ve1 armadadeesta articulaci(n el todolas norelaciones tiene por qué contradecirse momentos las partes; asimismo" dentro de este conjunto -abrá que pensar cuáles son los organi1adores que relacionan al todo y las partes" a las partes en sí' Tal ve1 lo que más interesa subrayares reincidencia que esta /orma de pensar la relaci(n todo
/rente a los individualistas que ostentaban al individuo como prueba corp(rea de sus argumentaciones; una mente de grupo antropom(r/icamente pensada" debía ser la prueba más contundente en épocas en que el ombre se constituía en nuevo mandatario de la modernidad' El psicoanálisis del grupo
grupal* indi/erenciado que se e,presa a través de ellos'

D. Del líder al !r0cul!

4a incorporaci(n del *setting* psicoanalítico en el trabajo con grupos otorg( las condiciones para descentrar al lugar de la coordinaci(n de los lidera1gos; es decir" abri( la posibilidad para que sus producciones se asentaran sobre mecanismos di/erentes a la sugesti(n' >o menos importante es la vía que así se /ue abriendo para alejar a los grupos del /antasma de la manipulaci(n' >(tese que se dice abrir la posibilidad y no suprimir la sugesti(n y la manipulaci(n por cuanto ambos" al igual que la neutralidad analítica" siempre caminan por el di/ícil sendero de la vacilaci(n' ((1 7e al todos modos" las condiciones trans/erenciaque del merece *setting* analítico campo grupal produjeron" de -anneutralidad sido un que jal(nlasigni/icativo subrayarse; la introducci(n de la escuc-a analítica" con sus condiciones de neutralidad y abstinencia" al desmarcar la coordinaci(n de los lidera1gos" dej( a ésta en mejores condiciones para la elucidaci(n del acontecer grupal; sin embargo" los psicoanalistas del grupo que -icieron posible este signi/icativo aporte" sesgados en el acto de lectura por el estilo 5leiniano propio de ese momento institucional del psicoanálisis" reciclaron otra /orma de poder de la coordinaci(n; en tanto el coordinador" en el acto interpretante" develaba lo oculto del grupo" se instituía en un nuevo lugar de saber
se encontraron dentro de una teoría de la representación)e2presión y sostenían una noci(n de todo en el que se subsumen las partes" se organi1aron las condiciones para re
EL )EGUNDO MOMENTO EPI)TEMICO

A. Cierta e%eci-icidad "rual 6La n!ción de %uue%t!% ,0%ic!%7

ion reali1( una primera e,periencia con grupos como psiquiatra militar inglés durante la .egunda Guerra 3undial' Estaba encargado de un -ospital de unos MM -ombres donde se volvía imposible reali1ar abordajes psicoterapéuticos individuales y en el que reinaba la indisciplina y la anarquía' .e le ocurri( ver en ello una situaci(n psicoanalítica en la que el *paciente* era una comunidad" considerar la actitud de los soldados como una resistencia colectiva" adoptar la actitud de no intervenci(n del analista ante esta realidad y limitarse e,clusivamente a las relaciones verbales' .u objetivo /ue obligar a esta colectividad a tomar conciencia de sus di/icultades" a constituir un grupo propiamente dic-o y volverse capa1 de organi1arse a sí misma' Promulga un reglamento) los -ombres setodo reunirán en grupos que tienensu poractividad objeto una actividad di/erente; cada grupo es libre" en momento" de abandonar y volver al cuartel a condici(n de comunicarlo al vigilante je/e; la situaci(n del conjunto se e,aminará todos los días a mediodía' Tras un período de vacilaciones" debido a los -ábitos reinantes y a la duda sobre la buena /e del médico" los ensayos se multiplicaron -asta el punto en que un grupo logra especiali1arse en la organi1aci(n del diagrama de las actividades que desarollaban todos los días' ion" al principio" denunciaba con sus propios actos la ine/icacia que los soldados acusaban al Ejército; se negaba a intervenir en los problemas suscitados por los robos y abandono de obligaciones devolviendo esta situaci(n colectiva a la colectividad' .e inici( así la /ormaci(n en sucesivas etapas" de un *espíritu de cuerpo*) protestas colectivas contra los irresponsables" b8squeda de actividades que elevaron el sentimiento de dignidad personal y rápida salida de los recuperados' ! su ve1" comen1( a observarse que este espíritu se imponía a los recién llegados y actuaba

su evoluci(n personal de manera signi/icativa' ((# 7espués de la guerra" ion se ocup( de la readaptaci(n de los veteranos y antiguos prisioneros de guerra a la vida civil" con un método de psicoterapia de grupo que se planteaba como objetivo *tratar de comprender las tensiones que se mani/iestan en el curso de las sesiones" entre sus integrantes*' Estas primeras e,periencias /ueron organi1ando las producciones te(ricas de ion sobre lo grupal' 3uy sintéticamente" enunci( que el comportamiento de un grupo se e/ect8a a dos niveles" el de la tarea com8n y el de las emociones comunes; el primer nivel es racional y consciente) todo grupo tiene una tarea que él mismo se da" el é,ito de la misma depende del análisis correcto de la realidad e,terior" de la distribuci(n y ordenada coordinaci(n de los roles en el interior del grupo" de la regulaci(n de las acciones por medio de la b8squeda de las causas de é,itos y /racasos y de la articulaci(n relativamente -omogénea de medios y objetivos' .in embargo" observaba que cuando se agrupa gente que individualmente puede comportarse de manera ra1onable /rente a un problema" basta con agruparlos para que se vuelvan di/ícilmente capaces de una conducta racional colectiva; /rente a esto ion pens( en la predominancia de los procesos psíquicos *primar ios*; llega de esta manera a la conclusi(n de que la cooperaci(n consciente entre los miembros del grupo" necesaria para el é,ito de sus actividades" requiere de una circulaci(n emocional y /antasmática inconsciente entre ellos; la importancia atribuida a la misma le permiti( a/irmar que incluso la cooperaci(n puede ser parali1ada o estimulada por ella' 7estac( que los individuos reunidos en un grupo se combinan en /orma instantánea e involuntaria para actuar seg8n unos estados a/ectivos que denomin( *supuestos básicos*; estos estados a/ectivos son para ion arcaicos" pregenitales" y se los reencuentra en estado puro en la psicosis' 7escribi( tres supuestos básicos a los que el grupo sin reconocerlos se somete alternativamente; e,presan algo así como /antasías grupales" de tipo omnipotente y mágico" acerca del modo de obtener sus /ines" de satis/acer sus deseos; caracteri1ados por lo irracional de su contenido" tienen una /uer1a y Wrealidad* que se mani/iesta en la conducta del grupo; son inconscientes y muc-as veces opuestos a las opiniones conscientes y racionales de los miembros que componen el grupo' Todos ellos son producciones grupales que tienden a evitar las /rustraciones in-erentes al aprendi1aje por e,periencia" en tanto esto implica es/uer1o" dolor y contacto con la realidad' 4os denomin( supuesto básico de dependencia, supuesto básico de ata'ue  -uga  supuesto básico de apareamiento. 4a narrativa de un grupo bajo el supuesto básico de dependencia sustenta el argumento por el cual el grupo está reunido para que alguien" de quien éste depende en /orma absoluta" provea la satis/acci(n de todas sus necesidades y deseos; implica la creencia colectiva de que ese alguien tendrá por /unci(n proveer seguridad al grupo; es ((# Bion, V >p cit

la creencia de una deidad protectora cuya bondad" potencia y sabiduría no se cuestionan' El supuesto básico de ataque y /uga consiste en la convicci(n grupal de que e,iste un enemigo y que es necesario atacarlo o -uir de él" en tanto la 8nica actividad de/ensiva /rente a este objeto es su destrucci(n 9ataque: o evitaci(n 9-uída:' Por 8ltimo" cuando opera el supuesto básico de apareamiento sus integrantes producen una creencia colectiva e inconsciente por la cual un -ec-o /uturo o un ser no nacido resolverá sus problemas; constituyen una esperan1a de tipo mesiánico; lo importante en este estado emocional es la idea de /uturo más que la resoluci(n en el presente' Para algunos autores estos aportes de ion -an resultado de gran utilidad para *ordenar* las muc-as veces oscuras situaciones emocionales de los grupos" ya que al delimitar tres grandes con/iguraciones emocionales especí/icas" el coordinador dispone de un nuevo instrumento para la comprensi(n de los /en(menos de los que participa' ((& .e -a considerado a los supuestos básicos como reacciones grupales de/ensivas a las ansiedades psic(ticas" reactivadas por el dilema del individuo dentro del grupo y la regresi(n que este dilema le impone' 4os supuestos básicos re/ieren a un nivel emocional primitivo que coe,iste seg8n ion con otro nivel de /uncionamiento que es del grupo de traba&o ; con este término alude a otro tipo de mentalidad y cultura grupal que la que rige en los grupos de supuesto básico" ya que en los grupos de trabajo las actividades se reali1an racional y e/icientemente; sus líderes son aquellos integrantes que pueden o/recer al grupo las propuestas más aptas para el desarrollo de sus tareas' Grupo de supuesto básico y grupo de trabajo coe,isten" determinando un con/licto recurrente en el grupo' En síntesis" la actividad de un grupo de trabajo se ve /recuentemente inter/erida por la aparici(n de /actores emocionales; esta aparici(n puede ser en /orma de dependencia" de agresi(n y -uída" o por la /ormaci(n de un apareamiento mesiánico' !simismo el supuesto básico predominante orienta las opiniones del grupo en un momento dado 9mentalidad grupal: y da cuenta de la cultura del grupo en esa situaci(n; así por ejemplo la cultura del grupo de dependencia" basada en el supuesto básico del mismo nombre" se organi1a buscando un líder que cumpla la /unci(n de proveer las necesidades del grupo' ! principio de #$% el comité pro/esional de la Tavisto5 Clinic le solicit( que tomara a su cargo grupos terapéuti cos empleando su propia técnica; es muy sugerente la /orma en que el propio ion relata esta propuesta)

((& ;rin4erg, ? y otros3 .ntroducci+n a las ideas de 'ion, Nue-a .isión, Buenos Aires, (")'

En realidad no tenía elementos para saber lo que el Comité entendía con esto se re/iere a su propia técnica" pero era evidente que para ellos yo -abía trabajado anteriormente con grupos terapéuticos' En verdad" s(lo -abía e,perimentado tratando de persuadir a grupos de pacientes que la tarea del grupo /uera el estudio de sus tensiones" y supuse que el comité deseaba que -iciera esto de nuevo' Era desconcertante que el Comité pareciera creer que los pacientes pudiesen en tales grupos' Ello grupos me -i1oenpensar desde ununo principio su idea acerca de loser quecurados -abía sucedido en aquellos los que yo era de losque integrantes" era muy di/erente de la mía' 7e -ec-o" la 8nica cura de que podía -ablar con certe1a estaba en relaci(n con un síntoma propio" comparativamente sin importancia) la creencia de que los grupos debían tomar mis es/uer1os con simpatía' .in embargo" consentí y" en consecuencia" después de las /ormalidades debidas me encontré sentado en una sala con oc-o o nueve personas >@

ion sostenía que cuando un individuo en grupo tiene la creencia de que el grupo e,iste como algo di/erente a la suma de los individuos" esto es producto de un estado regresivo de tal integrante; alimenta tales /antasías porque su regresi(n implica una amena1a de pérdida de su particularidad individual" esto le di/iculta ver al grupo como un agregado de individuos' Un agregado de individuos) esto es el grupo para ion' >>9 Esta aseveraci(n parecería ser contradictoria con sus nociones de mentalidad grupal y cultura grupal' Tal enunciaci(n no se le escapará a Pontalis" quien apoyándose en el planteo bioniano sostendrá que el grupo es una /icci(n" una /antasía' Es realmente interesante esta aparente contradicci(n bioniana porque como dirá el autor citado" *nadie" psicosoci(logo o no" puede considerar cientí/ica la de/inici(n de un grupo como el de un agregado de individuos' Es muy cierto que un grupo puede ser objeto de observaci(n o de análisis*' ((" 4a srcinalidad de ion para este autor sería entonces la de a/errarse a los dos e,tremos de la cadena" ya que si en el campo sociol(gico el grupo es una realidad especí/ica" cuando /unciona como tal en el campo de la psiquis individual
grupo se combinan en /orma instantánea e involuntaria para actuar de acuerdo a los supuestos básicos' Produce aquí un planteo original) los supuestos básicos" verdaderos organi1adores grupales" es decir" reguladores implícitos de los comportamientos grupales que permiten pensar en la e,istencia de un sistema de legalidades implícito en el desorden de losde-ec-os empíricos /antasmáticos regulan el accionar los individuos en elgrupales; grupo; deestos todos organi1adores modos para ion los tres supuestos básicos emergen como /ormaciones secundarias de una escena primitiva más antigua' 4os supuestos básicos serán nudos /antasmáticos colectivos en el grupo en un momento dado" así se re/erirá !n1ieu a ellos'('$ 4a teoría de los supuestos básicos puntua li1(" por primera ve1 dentro del campo psicoanalítico" operadores organi1acionales no individuales; aquí tal ve1 radique su mayor importancia" en tanto" como se0ala auleo" * consiguió producir un instrumento para entender lo 'ue sucede al grupo como grupo*'('( En este sentido" pueden considerarse los supuestos básicos como es'uemas subacentes 'ue organizan
#. El %e"und! m!ment! ei%t&mic!: l!% !r"aniad!re% "ruale%

+En qué radica la importancia de la noci(n de los supuestos básicos? Para una reconstrucci(n geneal(gica marca unanteriores avance en lostomaban discursos de ladiscurso grupalidad" en el particular con respecto a propuestas que como te(rico nivel /enoménico y también /rente a aquellas que trasladaron en bloque *lo psicoanalítico* al grupo'

('$ Nótese 6ue reaparece el trmino nudo An
.in duda" el planteo de los supuestos básicos como organi1adores implica una b8squeda de un sistema de legalidades propio" especí/ico del campo grupal; seg8n !n1ieu" -asta ion la comprensi(n psicoanalítica de los grupos consistía en un psicoanálisis aplicado al grupo ya que" -asta entonces los grupos no se -abían considerado aun dentro de esta disciplina como un posible campo" de descubrimientos' 4a noci(n de supuestos básicos es un primer intento" dentro de los aportes psicoanalíticos" de tomar a >o los -abría grupos que ya no como un campo aplicaci(n sinode como campo de descubrimiento' subestimar que unodede los resortes estaun posibilidad -aya sido la /alta de urgencias e,plicitada por ion de denominar psicoanalíticos a los tratamientos grupales por él desarrollados' 4a relevancia geneal(gica otorgada a la noci(n de supuesto básico como organi1ador grupal" no debe impedir resaltar las objeciones que o/rece su implementaci(n técnica" ya que suele operar restrictivamente en la lectura de los acontecimientos grupales" tipi/icando los mismos seg8n *contenidos* preestablecidos; asimismo" suelen inducir en el coordinador un adentro grupal ilusorio" cerrando su lectura -acia el grupo plegado sobre sí mismo 9grupo isla:' 7e todos modos" términos bionianos tan controvertidos como mentalidad grupal" cultura grupal" que él mismo no alcan1( a desarrollar su/icientemente" no deberían desec-arse con ligere1a; -abría que revisarlos" con un criterio de elucidaci(n crítica que permita las recti/icaciones necesarias" ya que es probable que allí pudiera estar en germen cierta intuici(n de que los grupos arman -ormas propias dibujando los acontecimientos grupales; en ese sentido" estos términos sin duda con/usos" podrían pensarse como un intento de poner en palabras alguna intuici(n con respecto a los enlaces de subjetividades" a los anudamientos
C. El encar"! a #i!n 8 %u r!ducción teórica

Es importante detenerse en las condiciones de producci(n de la noci(n de supuesto básico' En primer lugar ion es psiquiatra de un -ospital militar en plena guerra" es comandante y las personas con las que trabaja en sus grupos son soldados u o/iciales generalmente de rango in/erior' Es un representante de la autoridad tanto militar como psiquiátrica; sin embargo" se ubica /rente a ellos en una actitud más cercana a la postura de un psicoanalista que a la de un militar superior jerárquico' >(tese que esto sucede en los a0os M" cuando a8n la cultura *psi* no se -abía desarrollado lo su/iciente como para que las personas pudieran tomar con cierta naturalidad el encontrar a alguien en actitud de psicoanalista en los lugares más inesperados' Estos soldados -an obtenido un coordinador de grupos" pero -an perdido necesariamente un je/e militar; -an ganado a alguien que al descentrarse de las /ormas de lidera1go propias de esta instituci(n" deja sin sostén aquello que ya Freud -abía descripto en ;sicología de las masas  análisis del o" como la estructura libidinal uno
maneras de enunciabilidad " rescatando la primera y abriendo a revisi(n la segunda' 7e tal modo" al subrayar la inscripci(n institucional
+! qué urgencia social -abrá respondido la implementaci(n de dispositivos grupales con /ines terapéuticos en las Fuer1as !rmad as ritánicas? 4a psiquiatría inglesa tenía que encontrar un sistema di/erente al alemán que terminara con la desmorali1aci(n de las tropas; un sistema destinado a reabsorber e/ica1mente las angustias y solidaridades de grupos" para la vida y para la muerte" y que se asentara sobre bases di/erentes al -ec-i1o" aglutinador típico del ejército na1i; -abía que restituir" personal y militarmente a los innumerables inadaptados" delincuentes y neur(ticos que a/luyeron en #$M a los -ospitales británicos' 4a presi(n de esta urgencia
.obre esta base aturalmente no -ay (rdenes ni sanciones; cada ve1 que se apela a su intervenci(n" ion como Psicoanalista devuelve la pelota a los interesados' ('1 ('0 ?acan, 9 :?a psychia trie anglaise et la guerra: , en E-olution psychiatri6ue, ("1) Agrade
>o -ay castigo ni tampoco reempla1o del objeto deteriorado" robado o perdido; al grupo le corresponde valorar lo que -a pasado' Fueron doscientos cincuenta psiquiatras los destinados a esta labor" junto a ion" pueden mencionarse @ees" @ic5man y Foul5es; este 8ltimo trabaj( en -ospitales de' la !rmada ritánica'('#

6nteresa resaltar varias cuestiones' En primer lugar esta intervenci(n de los psicoanalistas ingleses /isur( una /uerte antinomia" que a8n conserva su vigencia) psiquiatría p8blica
4a necesidad masia de asistencia ) de aquí en más será una de las ra1ones -abituales en los países de signi/icativo desarrollo de la cultura *psi*" para implementar dispositivos grupales con /ines psicoterapéuticos'

Esta realidad no puede naturali1arse' 3uy por el contrario e,ige su interrogaci(n +qué signi/ica la e,istencia de requerimientos masivos de asistencia psicoterapéutica? +Formulaci(n de qué -uecos sociales son e/ecto? o" dic-o de otra manera" +a qué vacío social somos respuesta cuando instituímos grupos?

Caítul! 'I ('# FoulRes, ! Therapeutic Group Anal%sis, ; Allen X n@in ?td, ?ondon, ("&1 ('& ?acan 9 0p cit

LO) ORGANI9ADORE) 4ANTA)MATICO)

A. 5acia la enuncia,ilidad de l!% !r"aniad!re% -anta%m0tic!%

4os aportes rese0ados en este capítulo corresponden a las teori1aciones del grupo liderado por 7idier !n1ieu que incluye /iguras muy destacadas tales como Pontalís" a\s" 3issonard" ejarano" por citar los más conocidos en la !rgentina' Esta corriente *intenta precisar que" desde el punto de vista psicoanalítico" el grupo puede aspirar a un status di/erente de aquel que tiene en el campo te(rico y práctico de la Psicología .ocial*;(') desarrolla gran parte de sus investigaciones a partir de sus e,periencias con grupos breves y llamados de /ormaci(n; si bien incluyen técnicas psicodramáticas y de relajaci(n en sus seminarios" se instituye como corriente con un /uerte interé s en di/erenciarse del psicodrama moreniano y de la microsociología leYiniana' Esta di/erenciaci(n es altamente estratégi ca para ellos" por cuanto los trabajos derivados de 4eYin y 3oreno eran *una de las mayores re/erencias utili1adas" criticadas e incorporadas o abandonadas por numerosos psicoanalistas que se orientaron antes de #$[%" -acia la práctica grupal*' (' 9! partir de esto puede entenderse la virulencia de algunos tramos críticos de los trabajos ya célebres de Pontalis" publicados en el volumen "7espués de Freud* y a los que se remite con /recuencia en este libro': ('" El interés de este grupo es muy di/erente al de la microsociología; a partir de *4a /unci(n inconsciente (') LaSs, 2 :Elementos para una historia de las prácticas y de las teorías de grupo en sus relaciones con el Psicoanálisis en Francia:, !evista de $sicología % $sicoterapia de Grupo, /omo .II, nD (, Buenos Aires, ("1 (' LaSs, 2 .*idem

de un grupo*" *El grupo como objet o*" de Pontalis" y *El grupo es un sue0o*" de !n1ieu" constituyen sus propias bases para una lectura psicoanalítico del grupo" desconociendo aun los trabajos de Foul5es" !nt-ony y ion' Ponen el acento en el grupo como objeto en el sentido psicoanalítico del término< y como proceso psíquico; el grupo como objeto de investiduras pulsionales" de representaciones imaginarias y simb(licas" de" proyecciones y de /antasías inconscientes' Pontalis escribe en #$[L)

no basta con detectar los procesos inconscientes que operan en un grupo" sea cual /uere la srcinalidad de la que se es capa1) aunque uno ubique /uera del campo de análisis la imagen misma del grupo" con las /antasías y valores que ella comporta" de -ec-o se elude toda cuesti(n sobre la /unci(n inconsciente del grupo'

! su ve1 !n1ieu" sugiriendo un paralelismo entre el grupo y el sue0o postula una -ip(tesis esencial para comprender
consideran esta cuesti(n" puntuali1ando *el encuadre psicoanalítico debe /avorecer la emergencia" la elaboraci(n y la interpretaci(n de las /ormaciones y de los procesos psíquicos imbricados en la situaci(n de grupo*; de tal modo que a/irman que * la situación grupal se desarrolla a partir de las características del dispositio ) la enunciaci(n de la regla /undamental" cimiento de todo trabajo psicoanalítico" es el acto que instituye el dispositivo" -ablar libre y abstinencia entre los integrantes del grupo y el analista de (0$

toda otra relaci(n que no sea la e,igida por la escuc-a y la palabra psicoanalítica'] @esulta claro a partir de estos conceptos que esta corriente no se propone ni una e,periencia adaptativa a las normas grupales ni un conocimiento objetivo de los /en(menos del grupo" ni la creaci(n permanente del grupo' Tienen un objetivo muy distinto) proporcionar el encuadre" el dispositivo y la situaci(n apta para una e,periencia *srcinal*" en la que se busca la emergencia" la liberaci(n y reacomodaci(n de algunas /ormaciones y procesos psíquicos que gracias a las propiedades del dispositivo dise0ado se develan
/uncionamiento de los modelos socioculturales' Esta noci(n" desarrollada por a\s" puntuali1a que -abrá grupo" y no simple reuni(n de individuos" cuando a partir de los aparatos psíquicos individuales tiende a construirse un aparato psíquico grupal más o menos aut(nomo; este aparato se organi1a sosteniendo la tensi(n entre una tendencia al isomor/ismo y una tendencia al -omomor/ismo; mientras que el aparato psíquico individual busca su apoyo en el cuerpo biol(gico" el aparato grupal lo -ace en el tejido social' Frente a la aseveraci(n de la microsociología con respecto a que el grupo es una comunidad" !n1ieu se pregunta +comunidad de qué? .eg8n este autor el grupo es una puesta en com8n de las imágenes internas y de las angustias de sus participantes; dirá)

el grupo es un lugar de /omentaci(n de imágenes; es una amena1a primaria para el individuo' 4a situaci(n del grupo cara a cara 9reuni(n" discreci(n" trabajo en equipo" vida comunitaria con compa0eros que apenas conoce" en n8mero superior al que normalmente convive a las relaciones sentimentales" sin una /igura dominante por cuyo amor uno pueda sentirse protegido y unido a los demás: es vivida como una amena1a para la unidad personal" como una puesta en cuesti(n del yo' El grupo lleva al individuo muy lejos -acia atrás" allí donde no se -abía constituido a8n como sujeto" donde se sentía desag regado; la imagen com8n del grupo
4as metá/oras del grupo como organismo viviente -an mantenido largamente su e/icacia por cuanto" invocando el *nosotros* dan idea de un cuerpo /rente a la imagen anterior de cuerpo despeda1ado; sostendrá que la /uer1a persuasiva de esta metá/ora radica en que *Corresponde a la realidad imaginaria del grupo" porque e,presa" del mismo modo que los mitos" la trans/ormaci(n de las imágenes que dirigen el juego de /uer1as subyacentes*' !van1ando en su argumentaci(n sostendrá que *entre el grupo y la realidad" entre el grupo y el propio grupo" -ay algo más que relaciones entre unas /uer1as reales) -ay primitivamente una relación imaginaria*' Esta producci(n de imágenes e,plica /en(menos y procesos que -asta ese momento -abían permanecido invisibles o atribuidos a otras causas' Puntuali1a saga1mente) *el 8nico observable es el grupo" a-ora bien" lo observable queda sin concepto*' ! través de sus e,periencias con grupos de diagn(stico dirá) *el grupo es e,perimentado por cada uno como un espejo de m8ltiples /acetas devolviéndole una imagen de sí mismo de/ormada y repetida -asta el in/inito' .e puede admitir" en principio que en toda situaci(n de grupo 9grande" peque0o" de trabajo" de diversi(n" cultural o econ(mico: -ay una representaci(n imaginaria subyacente" com8n a la mayoría de los (0( An
miembros del grupo" o mejor dic-o es en la medida en que e,iste esta representaci(n imaginaria en la que -ay unidad" algo com8n en el grupo' Estas representaciones pueden ser un obstáculo para el /uncionamiento del grupo respecto de los objetivos que le son asignados por la sociedad" por su status" o por las motivaciones de sus miembros y pueden ser la causa por la que llegue a parali1arse su /uncionamiento; pero cuando un grupo /unciona e/ica1mente es también una representaci(n imaginaria la que le permite encontrar solidaridad/inalmente y la e/icacia' conservadas y superadas 9au-$eben: laconstituyen
puede parali1ar sus acciones si varios /antasmas individuales luc-an entre sí por imponerse" o la unidad aparente de un grupo puede /or1arse en la coalici(n de/ensiva contra tal /antasma individual' El */antasma individual* es una escena imaginaria que se desarrolla entre varios personajes; de ellos !n1ieu deriva que el /antasma tiene una organi1aci(n grupal interna; en su conducta" síntomas" sue0os nocturnos" aeltítulo sujeto de reali1ar escena" estando sus presente en lasus misma generalmente detrata espectador y nouna de (0' actor' 4as posiciones que -ace ocupar a los demás y que él mismo ocupa son permutables pero su estructura permanece la misma; cada personaje resulta de una o varias identi/icaciones y una o varias /iguraciones de procesos psíquicos; el aparato psíquico utili1a las identi/icaciones del individuo para devolverle" representadas" las instancias psíquicas y pulsiones que obran en él y dramati1ar sus relaciones y con/lictos' @ené a\s -a elaborado partiendo de esto la -ip(tesis de una -omología entre la organi1aci(n grupal interna del /antasma y la situaci(n grupal" en la que algunos miembros sirven a otros" unas veces como puntos identi/icatorios y otras como soportes proyectivos para su t(pica subjetiva y sus pulsiones' s esta organización grupal interna del -antasma indiidual, lo 'ue -undamenta la posibilidad del -enómeno de resonancia ' -antasmática 4a resonancia /antasmática es el reagrupamiento de algunos participantes alrededor de uno de ellos" el cual -ace ver o da a entender a través de sus actos" su manera de ser o sus palabras" su 9o uno de sus: /antasma individual inconsciente' .e subraya el carácter de reagrupamiento" esto quiere decir no tanto acuerdo como interés" convergencia" eco" estimulaci(n mutua' En tanto portador de un deseo reprimido" un /antasma suscita en aquél ante el que se devela el -orror" la /ascinaci(n o la indi/erencia seg8n despierte
indiidual inconsciente es el primer organizador del grupo, las imagos  los -antasmas srcinarios constituen el segundo  tercer organizadores del grupo '(00 4uego de esta clasi/icaci(n !n1ieu reconocerá que todo no se reduce a la psicología y que sin duda e,isten organi1adores econ(micos" sociol(gicos" -ist(ricos" etc'" del grupo" conocidos o por investigar" pero aclara que esto no es de su incumbencia'

#. Pr!,lema% de demarcación

En puededeobservarse que !n1ieu y su escuela retornaránencuentran?" la intenci(n de ionprimer en la lugar b8squeda organi1adores grupales' +Sué organi1adores el /antasma individual prevaleciente" imagos y /antasmas srcinarios' .us investigaciones precisan algo" sin lugar a dudas muy importante) no $a -antasma grupal " es decir" el plus de los grupos no radicaría en un -antasma colectio' .e re/uta de esta manera la idea de una mente
(00 Esta corriente toma como modelo los tres organi
producciones inconscientes singulares; la otra no puede pensar otras /ormas de producciones subjetivas que no sean las in-erentes a la singularidad' Esta corriente /rancesa salva el impasse de la oposici(n antin(mica con la puesta en enunciado de la grupalidad del -antasma sin guiar, condición de posibilidad de la resonancia -antasmática grupal ' +En qué radica la posibilidad de resonancia /antasmática? En la grupalidad del /antasma; esto es que" en tanto el /antasma es una esceni/icaci(n que se desarrolla entre varios personajes" es siempre una imagen colectiva y posee" por tanto" una *estructuraci(n grupal interna*; de allí su carácter organi1ador en los grupos' 7e la misma manera" las imagos y los /antasmas universales crean condiciones para constituirse en otros organi1adores de las instancias de la vida colectiva' Es claro entonces" el -antasma indiidual es grupal, 'ue es di-erente a decir 'ue $a un -antasma de grupo'' Es decir que" la integraci(n de las personas reales a una situaci(n grupal" dadas las características antes mencionadas" dispara" movili1a" las instancias o /ormas grupales de su propia subjetividad' Por esto pueden agruparse' !quello que resuena y -abla o act8a desde los participantes de un grupo son posiciones en la escena /antasmática' 4a singularidad
campo disciplinario" o una limitaci(n de los abordajes de objeto discreto? +=pera aquí el a priori individuo
para nominar psicoanálisis a los procedimientos psicoterapéuticos de grupo que él llev( adelante" esta corriente a/irmará a los grupos como espacios válidos para investigar /ormaciones inconscientes" y sin duda lo son" a condici(n de no considerar estas e,ploraciones como estrictas investigaciones de lo grupal; en ese sentido podría a/irmarse que esta corriente se -a preocupado por dise0ar espacios grupales que -agan posible el despliegue y la investigaci(n de /ormaciones inconscientes' Es decir que no se propone centralmente investigar grupos" sino para investigar /ormaciones inconscientes' Estoque no implementa e,cluye quedispositivos sus aportescolectivos constituyan conceptuali1aciones de gran importancia y a esta altura ineludibles para investigadores del campo grupal' 6neludibles a condici(n de poder reali1ar ciertas delimitaciones' (0) .i bien puntuali1an que entre el aparato psíquico grupal y el individual o se invalida o subestima la importancia de estos aportes que -an posibilitado" como ya se dijo" la elucidaci(n de los anudamientos
El te,to /reudiano es particularmente ilustrativo" en su revisi(n de las concepciones de la psicología social" del abismo 'ue separa a la psicologización de la sub&etiación' H esto es" en verdad" psicoanálisis de masas" lo cuallasdemasas ninguna tomadoni como una ni aplicaci(n del psicoanálisis a lo social; no manera tienen nipuede madreser ni padre" pulsiones deseos" así como no e,isten los /antasmas colectivos de las multitudes' Cualquier aseveraci(n en este sentido no -ace más que desvirtuar el rigor /reudiano al considerar la cuesti(n" pues Freud solamente estableci( las condiciones estructurales del sujeto que posibilitan que *-aga masa*' En otras palabras puso el /undamento subjetivo del -ec-o de masas" su principio material' 3asa es lo que el sujeto no puede dejar de -acer por el -ec-o de ser sujeto) eso es lo que Freud demostr(' =per( una desustanciali1aci(n del -ec-o de masas al dar sus condiciones de causaci(n" pero de ello no se sigue la posibilidad de reinscribir en este campo al ni0o" sus progenitores o una pulsi(n cualquiera" pues eso sería

(0) !uelen encontrarse en nuestro medio articulaciones de aportes de Pichon 2i-ire con la escuela de An
volver a sustanciali1arlo" trans/ormando el paso dado en una nueva psicología' (0

En el mismo sentido es que se a/irma que el -acer visible la grupalidad del /antasma individual como virtualidad de la resonancia /antasmática en los grupos da cuenta de las condiciones estructurales del sujeto para que *-aga grupo] 9o *-aga nudo*:' En tal ra1(n resulta relevante para una genealogía de lo grupal di/erenciar el aporte que esta escuela psicoanalítica reali1a para la comprensi(n de las condiciones estructurales del sujeto para que *-aga grupo* de una narrativa psicoanalítica por la cual pueden sustanciali1arse" y psicologi1arse" o psicoanaliti1arse procesos grupales' +Sué signi/ica aquí sustanciali1ar?) trans/ormar ciertos procesos grupales que determinado dispositivo y su marco te(rico -acen posibles" en los procesos esenciales o /undantes o determinantes de un grupo; al esenciali1arlos se los ubica como determinantes estructurales de todo otro movimiento grupal con la consiguiente centrali1aci(n te(rica y pro/esional del campo disciplinario que logre tal -egemonía; de esta manera la escuc-a del coordinador privilegiará necesariamente estos procesos como /undantes; y el pensamiento del te(rico puede sesgarse -acia la ilusi(n de completud por la cual desde el objeto discreto de su disciplina puede dar cuenta /e-acientemente de un campo complejo" discontinuo y paradojal como el grupal' En síntesis" esta corriente que desde un primer momento se propone como uno de sus objetivos centrales dar un estatuto psicoanalítico al trabajo con grupos aporta inteligibilidad con respecto a las condiciones por las cuales el sujeto de su disciplina" el sujeto inconsciente" entra en resonancia /antasmática y *-ace] grupo' ! partir de allí sería una e,tensi(n indebida a/irmar que los grupos son /antasmáticos o que la identi/icaci(n es el motor de los grupos' (0" 4a resonancia /antasmática" la identi/icaci(n" etc'" son aquellos motores grupales sobre los que el psicoanálisis por las características de su objeto de estudio y los dispositivos que dise0a para revelarlo" se encuentra posibilitado de producir visibilidad y enunciabilidad' En la !rgentina" esta con/usi(n epistémica suele re/or1arse desde las prácticas grupales mismas" en tanto la mayoría de ellas se despliegan dentro de la clínica psicoanalítico" de tal suerte que allí sí el eje del trabajo son
para abrir visibilidad a tales juegos" ya que es precisamente esto lo que busca anali1ar' asta aquí no parecería -aber ning8n problema' Este surge cuando se produce un salto epistémico en el cual se organi1an varias operaciones simultáneas) en primer lugar" permanece en invisibilidad el -ec-o de que los procesos grupales *observados* son aquell os que el dispositivo dise0ado -ace posibles de ver' ! partir de allí" estos procesos que visibili1a deeste a considerarse como los toma procesos grupales determinantes tododispositivo" acontecer pasan grupal; cuando esta jerarqui1aci(n una /orma globali1ante se crean las condiciones para otorgar a tales procesos las características de sustancia" de esencia grupal' En otros casos" esto posiciona una centrali1aci(n te(rica y al psicologi1ar o psicoanaliti1ar
Pero si" en /unci(n del a priori " se naturali1a esta producci(n" se cierra la interrogaci(n acerca de por qué" c(mo" para algunos dispara determina da signi/icaci(n" y no otra' 4a premura por encontrar el a priori en la *e,periencia* suele volver innecesaria toda investigaci(n" de tal manera que en ve1 de ser ésta un observable local a interrogar " se trans/orma
acent8a alguna de ellas -abrá que sostenerla vigilancia epistémica su/iciente que permita anali1ar c(mo juegan aquí los a priori conceptuales del *autonomus ego*" cuánto del dispositivo gestado" de la trans/erencia institucional o de los objetivos de la actividad reali1ada generan la ilusi(n de eliminar la tensi(n amena1a
C. Tercer m!ment! ei%t&mic!: el a"!tamient! del !,et! di%cret !

.i bien no se abordará el análisis minuci oso que los aportes de @ené a\s merecerían " particularmente en relaci(n a su /ormulaci(n de un aparato psíquico grupal" sí se subrayará que este autor mantiene operante su preocupaci(n por la articulaci(n de lo que él llama el *grupo de adentro* y el *grupo de a/uera*" o sea grupalidad interna y grupo real' Es más" reconoce en/rentarse con la di/icultad que signi/ica trabajar desde un solo campo disciplinado y no por ello dejar de tomar en consideraci(n aquellos organi1adores socioculturales que !n1ieu -abía anunciado como posiblemente e,istentes' Puntuali1a que el grupo" como objeto representado" es una imagen cuyos re/erentes son a la ve1 endopsíquicos y e,ternos" es decir" correspondientes a la realidad material y social' 7irá que tanto la ilusi(n objetivista como la subjetivista ocultan el -ec-o de que la representaci(n puede ser una codi/icaci(n simb(lica de varios (rdenes de realidad dentro de un sistema cognoscitivo y social' .ostiene que" tanto la e,periencia como el estudio de los grupos oscilan entre una tendencia a volver isom(r/ica la representaci(n inconsciente del objeto" el modelo socio
si bien tal categoría podría admitir la mediaci(n de niveles -eter(nomos como el psicol(gico y el social" sin embargo" no puede dejar de considerarse que /recuentemente y sobre todo en las /ases constitutivas de los campos disciplinarios" el resultado del debate evoluciona" generalmente" seg8n a\s" -acia posiciones reduccionistas' Por otra parte" tal articulaci(n no podrá evitar los reduccionismos se0alados en tanto no se abandone la epistemología las dic-a ciencias positivas" ensupone la cual aun -oy se /undamentan las Ciencias umanas" yadeque epistemología un objeto discreto" aut(nomo" reproducible" no contradictorio y unívoco; implica una l(gica de lo Uno" donde la singularidad del objeto te(rico no debe verse a/ectada" dado su aislamiento metodol(gico por las condiciones de posibles apro,imaciones con otros campos disciplinarios'(11 En WEl dispositivo grupal* ya se -abía se0alado que una eventual teoría de los grupos no -abía constituido su objeto te(rico" indicando que esto pudiera deberse a las características especí/icas de los acontecimientos de los cuales debe darse cuenta; se -a insistido también en la insu/iciencia de abordajes reali1ados desde un solo campo disciplinario dados los m8ltiples atravesamientos de los grupos" como así también las dudas epistémicas que o/rece la posibilidad de postulaci(n de un objeto /ormal abstracto grupo' 7e todos modos las e,igencias de buscar" por ejemplo" *el objeto /ormal abstracto* 9!lt-usser<erbert:(1# de una disciplina" operaron en nuestro medio" en la década del BM" tanto en un sentido positivo corno en un sentido negativo' En el primer aspecto actuaron como denunciantes de la /alta de sostén te(rico de la mayoría de las técnicas grupales 9e,altaci(n de la e,periencia" la sensitividad" la creatividad" etc':; en el segundo aspecto" en el terreno de las psicologías" quedaron devaluados todos aquellos campos disciplinarios entre ellos el grupal< que no quedaran claramente incluidos dentro del campo psicoanalítico" en tanto este era el 8nico campo que -abía constituido su *objeto /ormal abstra cto*' Por otra parte" posiblemente" éste -aya sido uno de los muc-os y complejos vectores que con/luyeron en la restricci(n emblemático
6nteresa resaltar el esbo1o de apertura epistemol(gica que a partir de estas consideraciones podría inici arse" al -acer visible una suerte de agotamiento de las lógicas de ob&eto discreto para pensar lo grupal ' 7e ser así" queda planteado un desa/ío en la indagaci(n de los nudos te(ricos grupales) re/le,ionar sobre la pertinencia de en/oques epistemol(gicos transdisciplinarios' Caítul! 'II

EL NUDO GRUPAL

A. L! "rual c!m! cam! de r!,lem0tica%

4a cuesti(n de los organi1adores grupales -a remitido a un t(pico altamente complejo; así" por ejemplo" se vio en el capítulo anterior c(mo los dispositivos grupales psicoanalíticos concuando respectosurge a loslaorgani1adores de los grupos; pero la abrieron di/icultadvisibilidad se presenta necesidad de/antasmáticos poner en juego organi1adores socio
investigaci(n(1& y aplicaci(n clínica y docente de la técnica de multiplicaci(n dramática' (1) 3ontada como laboratorio" dic-a técnica a través de la multiplicaci(n de escenas -a -ec-o visible que tanto en cada una de las escenas de una multiplicaci(n" como en su secuencia" operan simultáneamente inscripciones muy diversas de re/erentes deseantes" grupales" institucionales y sociopolíticos; lo mismo sucede en los momentos discursivos del trabajo 9tomando" claro está" tanto la dimensi(n de lo dic-o como de lo no dic-o del discurso:' inscripciones producen simultáneamente" no los son -omologables" pero tienenTales en com8n que todasseescapan al registro consciente de integrantes' Cada escena" lo mismo que su secuencia" más allá de sus componentes e,presivos" comunicativos" es generadora de m8ltiples sentidos' Por otra parte es imposible leer dic-o sentido e,clusivamente desde la coordinaci(n; los comentarios grupales posteriores" en su dimensi(n de lo dic-o y lo no dic-o" -acen posible acceder a algunas de las líneas de sentido operantes' >unca" por lo tanto" se está en presencia de un s(lo sentido que pueda /uncionar como cierre" dando cuenta de lo multiplicado' !parecen m8ltiples sentidos y aun así" se *sabe* que lo acontecido en una situaci(n grupal es muc-o más que aquello de lo que se puede dar cuenta; al igual que el ombligo del sue0o /reudiano en un grupo siempre -ay un plus del acontecer" que escapa a su inteligibilidad" rare1as" sinsentidos que sorprenden" interrogan y desdicen las racionalidades construidas' 6nsisten algunos interrogantes" así por ejemplo" +son los organi1adores /antasmáticos quienes tienen la capacidad de determinar 9*organi1ar*: el conjunto de los acontecimientos grupales? .i se intenta desmarcar la /orma de indagaci(n de una l(gica de objeto discreto" se tiende a pensar en el atravesamiento de di/erentes organi1adores; el criterio de operar con una sola línea de organi1adores" o jerarqui1arlos en /orma estable" se vuelve restrictivo para pensar lo grupal' Esto" sin duda" no debe e,cluir que en determinados momentos grupales se vuelven más signi/icativos unos organi1adores que otros; por otra parte" el resaltar la singularidad del acontecimiento no implica pensar éste por /uera de las legalidades' 3ás bien se plantea la necesidad de abrir el pensamiento de lo grupal $acia lógicas pluralistas 'ue legitiman epistemológicamente (1

atraesamientos disciplinarios' (1& ;rupo Con-ergencia, :9uego de roles y registro Gílmico n instrumento interacti-o para la Gormación de psicólogos y psi6uiatras:, Congreso de =edios no Con-encionales de EnseUanlga :Contri4uciones del psicodrama a la psicoterapia de grupos:, en Lo grupal , B3s6ueda, Buenos Aires, ("& (1 Es elocuente al respecto el enGo6ue epistmico%metodológico adoptado por algunas de

Puede observarse que en cualquier grupo -umano se producen movimientos muy diversos) resonancias /antasmáticas" procesos identi/icatorios y trans/erenciales" intensos sentimientos de amor
.i los organi1adores /antasmáticos son aquellos que -acen posible que el sujeto -aga *nudo*" y si no se con/unde el sujeto con el W autonomus ego*" /'u( otros organizadores $acen posible 'ue los integrantes $agan 7nudo7  /:ómo operan las ariables institucionales para trans-ormarse en organizadores grupales? En el intento de salvar el riesgo del reduccionismo es que se enunciaba líneas arriba que las producciones grupales se reali1an a través de la imbricaci(n caleidosc(pica de sus organi1adores; a partir de allí es que se orienta la indagaci(n -acia la necesidad de abordajes transdisciplinarios para la teori1aci(n de lo grupal' Un criterio transdisciplinario supone replantear varias cuestiones' En primer lugar" un trabajo de elucidación crítica sobre los cuerpos te(ricos involucrados" que desdibuje una intenci(n legitimante de lo que ya se sabe para poder desplegar la interrogaci(n de -asta d(nde sería posible pensar de otro modo' 6mplica asimismo el abandono de cuerpos nacionales -egem(nicos de disciplinas reinas7 a cuyos postulados" c(digos y orden de determinaciones se subordinan disciplinas satelizadas; sobre estos presupuestos se crean las condiciones para la articulaci(n de contactos locales y no globales entre di/erentes territorios disciplinarios" como así también que aquellos saberes que las disciplinas -egem(nicas -abían sateli1ado" recobren su potencialidad de articulaciones multivalentes con otros saberes a/ines' 7e esta /orma los cuerpos te(ricos /uncionan como * ca&as de $erramientas](1" es decir" aportan instrumentos y no sistemas conceptuales; instrumentos te(ricos que incluyen en su re/le,i(n una dimensi(n -ist(rica de las situaciones que anali1an; -erramienta que junto a otras -erramientas se produce para ser probada en el criterio de su universo" en cone,iones m8ltiples" locales y plurales con otros que-aceres te(rico s' las, in-estigaciones en :istoria de las =entalidades: .ase .eyne, P ;acer la ;istoria, ?aia, Barcelona, ("# (1" Foucault, = La micro#ísica del $oder, ?a Pi6ueta, =adrid ("'

.e -ace clara entonces la di/erencia con producciones te(ricas que se trans/orman en concepciones del mundo" que se autolegitiman en el interior de su universo te(rico institucional y que por lo mismo e,igen que toda cone,i(n con ellas implique instanci as de subordinaci(n a la globalidad de su cuerpo te(rico' Por lo antedic-o" junto a esta /orma de utili1aci(n de las producciones te(ricas como cajas de -erramientas" un en/oque transdisciplinario presupone un actuar" desdisciplinar de objeto discreto y seguramente en el plano del cierto las disciplinas desdibu&amiento de los per-iles de pro-esionalización " por lo menos en aquellos más rigidi1ados' !quí es pertinente distinguirlos criterios epistemol(gicos transdisciplinarios de la *epistemología convergente* de Pic-on @iviére' !mbos intentan dar respuesta a problemáticas que resistan ser reducidas a un solo campo disciplinario" pero los caminos elegidos son di/erentes' 4a *epistemología convergente* aspira a que en tal convergencia todas las Ciencias del ombre /uncionen como una unidad operacional y aporten elementos para la construcci(n de los esquemas re/erenciales del campo grupal'(#$ Una epistemología que -aga posible una *Teoría del ombre Entero 9entero incluso en su escisi(n constituyente:]' (#( Como puede observarse esta opci(n epistémica se sustenta en una noci(n de ombre muy característica de los paradigmas -umanísticos vigentes en los a0os [M; en la ilusi(n de lo Uno" donde en su convergencia las di/erentes disciplinas pudieran con/ormar un discurso totali1ador' 7onde si bien evitan el reduccionismo de dar cuenta del campo grupal desde una sola disciplina" poniendo las di/erentes ciencias en interrelaci(n" no cuestionan a las ciencias positivas en la territoriali1aci(n de sus saberes' 4os criterios transdisciplinarios se sustentan" justamente" a partir de una elucidaci(n crítica de este tipo de locali1aciones" buscando nuevas /ormas de articular lo uno y lo m8ltiple' En su propuesta de contactos locales y no globales locali1an un *t-ema* en su singularidad problemática y éste es atravesado por di/erentes saberes disciplinarios; sin embargo no pretenden uni/icarlos en una unidad globali1ante' Por lo tanto" más que una b8squeda de universales" indaga matrices generativas" problemas en relaci(n a los cuales los atravesamientos disciplinarios puedan dar cuenta de las m8ltiples implicancias del tema en cuesti(n' Esto -ace posible elucidar tanto las convergencias como las divergencias disciplinarias en relaci(n al mismo' Este movimiento que propone el atravesamiento de di/erentes áreas de saberes" a (#$ Pichon 2i-ire, E, :Estructura de una escuela destinada ala Gormación de psicólogos sociales: ("&"Q, en El Proceso ;rupal, Nue-a .isión, Buenos Aires, (") (#( Bohola-sRy, 2 :;rupos propuestas para una /eoría:, 2e- Argentina de Psicología, nD '', Buenos Aires, ("))

partir de *t-emas* a elucidar" sostiene varias y complejas implicancias" En primer lugar" cuando cierta regi(n de una disciplina se transversali1a con otros saberes" pone en crisis muc-as de sus 1onas de má,ima evidencia' En segundo lugar" e,ig e la constituci(n de redes de epistemología crítica abocadas a la elaboraci(n de aquellos criterios epistémicos que en su rigurosidad -agan posible evita r cualquier tipo de patc$)*or+s te(ricos' En tercer lugar" y ya en el plano de las prácticas" vuelve necesaria otra /orma de constituci(n de los equipos trabajo; sinono disciplinas Wreinas* tampoco -abrá pro/esiones -egem(nicas" Estede pluralismo es-ay sencillo de lograr'

En /unci(n de lo aquí esbo1ado es que se -a propuesto pensar los grupos" más como campos de problemáticas que como campos intermediarios entre lo individual y lo social(#' o como eventuales objetos te(ricos; en ese sentido es que se los enuncia como *nudos te(ricos*" aludiendo al des
#. Un n;mer! numera,le de er%!na% 6cuer!% di%cerni,le%7

Como es sabido la identi/icaci(n en su doble dimensi(n constitutiva es
que aquí interesan tienen la particularidad de producirse entre un n8mero numerable de personas' Esto" sin duda" establece una de las especi/icidades de lo grupal; los enlaces identi/icatorios presentes en todo /en(meno colectivo" adquieren características propias" cuando" a di/erencia de una reuni(n de individuos innumerables" tales agrupamientos se constituyen en un n8mero numerable de personas' El carácter numerable del grupo introduce peculiaridades los $ace procesos identi/icatorios" en tanto los cuerpos de los otros se -acen discernibles'deAlgo nudo' 4a distribuci(n circular del dispositivo opera e/ectos más allá de lo espacial" -aciendo posible una particular organi1aci(n de los intercambios entre los integrantes; todos están e,puestos a la visi(n de los otros y pueden" a su ve1" ver a todos y a cada otro; esta situaci(n particular genera condiciones de *mirada*; mirada que se desli1a entre las tensiones del reconocimiento o el desconocimiento" de la amena1a o el sostén; juegos de mirada que desencadenarán resonancias /antasmáticas y -arán posibles" o no" procesos identi/icatorios y trans/erenciales; juegos de mirada que a/ectan y desa/ectan los cuerpos en sus juegos productivos de deseo y poder' Esta característica de los procesos identi/icatorios de un n8mero numerable de personas donde los cuerpos se -acen discernibles" a/ectados unos y otros a juegos de mirada" establece las condiciones para la organi1aci(n de identi/icatorias y redes grupo un nudo' trans/erenciales' Tal peculiaridad identi/icatoria en red -ace del peque0o >udo que se constituye en las alternancias de enlaces y desenlaces de subjetividades' .e propician" de tal modo" singulares anudamientos y desanudamientos que orientan al peque0o colectivo por los avatares de sus producciones" institucionali1aciones y disoluciones' Aale la pena detenerse para puntuali1 ar una cuesti(n que el trabajo con escenas marca en visibilidad' El despliegue de una escena cotidiana en un grupo que utili1a recursos psicodramáticos en el marco de la clínica" permite e,plorar los juegos identi/icatorios(#1 poniendo de mani/iesto la relaci(n entre resonancia /antasmática e identi/icaci(n' +Con qué" con quién" c(mo" se produce un enlace identi/icatorio? En primer lugar" la pregunta no es con quién" sino con qué" el quién" personaje sostenido por alg8n integrante del grupo abre el con qué" +con qué singularidad de alg8n rasgo de (#0 Freud, 9 $sicología de las masas % Análisis del %o, Bi4lioteca Nue-a, =adrid, ("&) Esta puntuación Greudiana ha permitido diGerenciar tales condiciones estructurales de una narrati-a psicoanalítica o psicológica generalmente de estilo Gamiliarista, 6ue intenta eHplicar los procesos de masas, la -ida en las instituciones, los acontecimientos grupales, etc,desde una particular -ersión de Edipo ampliadoZQ por la cual a6uella noción estructural del psicoanálisis pasa a Gormar parte de un 4agaje terminológico 6ue eHplica o comprende 4risas, tragedias y tormentas del cotidiano institucional el jeGe es un padre autoritario, la institución una madre de-oradora, en un 4aile de analogías y eHtraterritorialidades sin Gin (#1 Per cia, = Clínica Grupal e .denti#icaci+n Facultad de Psicología, 8to de Pu4licaciones, Buenos Aires (")

ese personaje se juega un enlace identi/icatorio?" con aquel rasgo que resuena por similar u opuesto" complementario" suplementario; con aquella posici(n en la escena /antasmática motivo de sus repeticiones' @esonancia /antasmática" condici(n estructural para que el sujeto -aga nudo' Fantasma) escena donde repite una posici(n insistente' @epetici(n recreada en el espacio grupal' @epetici(n que en el mismo acto de repetir di/iere en las sutile1as de los engarces de /antasma y cotidianeidad' @epetici(n que aspira" al desplegarse dramáticamente" a e,plorar otras posiciones de su teatro interior' +Sué acontece cuando un n8mero numerable de personas -ace nudo? .e producen redes de procesos identi/icatorios y trans/erenciales propios y 8nicos de ese grupo' Puede considerarse que dic-a red constituye una primera /ormaci(n grupal' Pero aquí no se agota la productivi dad de ese peque0o colecti vo' l grupo, en tanto espacio táctico" genera e/ectos singulares e inéditos" despliega la producci(n de sus /ormaciones" la generaci(n de multiplicidades imaginadas e imaginarias" invenciones simb(licas y /antasmáticas" como así también sus niveles de materialidad' (## En síntesis" un grupo inenta sus -ormaciones " es decir inventa las /ormas o /iguras de sus signi/icaciones imaginarias' Estas sostienen la tensi(n de inventarse en su singularidad y en su atravesamiento socio<-ist(rico
(## 8e Brasi, 9 C, :8esarrollos !o4re el ;rupo%Formación: en Lo Grupal 5 B3s6ueda, Buenos Aires, (")

Estas producciones colectivas son componentes siempre presentes en los grupos" orientan muc-os de sus movimientos" son absolutamente singulares de cada grupo y suelen ser de gran incidencia en las /ormas o estilos de trabajo de un grupo' Podría decirse entonces que los mitos grupales son aquellas signi/icaciones imaginarias que un grupo construye" al dar cuenta de su srcen novelado" imbricados con las utopías del grupo y apoyados en la -istoria real de tal conjunto de personas' El componente -ist(rico opera aquí en di/erentes niveles; ya sea una dimensi(n temporal signi/icada por el tiempo de organi1aci(n del grupo como tal con su -istoria particular" entrecru1ado por las; -istorias propias de los integrantes que lo componen; el momento institucional preciso en que ese grupo se -a /ormado" en /unci(n del cual los impensables institucionales inscriben sus marcas en el grupo; el momento socio< -ist(rico
.e -ace necesario
imaginario social" imaginario institucional" imaginario grupal" etcétera' En primer lugar es necesario distinguir ta,ativamente esta acepci(n del signi/icado que tiene corrientemente en psicoanálisis) imagen de" especular' !quí su utili1aci(n es tributaria de la acepci(n que este término toma en las ciencias sociales" particularmente en la corriente -istoriográ/ica de -istoria de las mentalidades' (# Esta corriente utili1a esta noci(n sin de/inirla" aludiendo a la mentalidad de una época" le sprit du temps " etcétera" Es Castoriadis en Teoría política< quien se aocupa de de/inir conlleva mayor precisi(n esta
(# .o-elle, = .deologíes et mentalités, F=7Fondations =aspero, Paris, ("' (#" Castoriadis, C La instituci+n .maginaria de la Sociedad, /us6uets, Barcelona, ("0 (&$ Castoriadis, C 6omaines de L";omme Les Carre#ours du la*%rinthe, 8u !euil, Paris, ("&

.i se intenta pensar esta noci(n en el campo grupal" podría a/irmarse que las ilusiones" mitos y utopías que un grupo produce /orman una suerte de imaginario grupal en tanto inventan un conjunto de signi/icaciones" propias y singulares de ese grupo" pero tributarias
C. La relación te
+C(mo puede ser pensada la articulaci(n entre todo aquello que sucede en un grupo y el acontecer social en que tales actividades se desarrollan? Tradicionalmente" esta relaci(n e,presarse también en términos antin(micos"de tales el *adentro* y el *a/uera* suele grupal; se propone" entonces" la interrogaci(n lascomo supuestas barreras adentro
(&( na primera -ersión de este apartado Gue desarrollada en :?os gr upos y su conteHt o:, !ev Argentina de $sicología % $sicoterapia de Grupo, nD ', /omo I*, Buenos Aires, ("& (&' An
Pavlovs5y'(&0 Plantea el primero c(mo en un seminario de dinámica de grupos reali1ado en #$[% en París mientras transcurrían los acontecimientos del llamado *3ayo Francés*" se reproducía en el propio proceso grupal" la evoluci(n de lo *inconsciente social* de los /ranceses de ese período; así observa este autor la dinámica de un grupo reproduciendo la dinámica social' Por su parte" Pavlovs5y dice) el grupo es -ablado por el argumento del drama inconsciente social en su trama argumental' Cada integrante act8a a un personaje principal de esa trama' 4o -abla su inconsciente individual" pero al servicio de una trama argumental que alude o sugiere una /antasmática social'

@e/le,ionando sobre las particularidades de su práctica como psicoterapeuta de grupo durante los 8ltimos a0os de represi(n política en la !rgentina" constata c(mo aparecen en los grupos nuevos personajes investidos de sospec-as terrorí/icas que dan cuenta del pro/undo entramado de la /anstamática individual y lo imaginario social' 7ice así) *4a 6nstituci(n de la 3uerte" recreada" reinventada en la gran imaginaría grupal" padeciendo y recreando los terrores in/initos*' En tal sentido +puede -ablarse de c(mo o cuándo lo social *in/luye* sobre lo que acontece en un grupo? +Puede considerarse la relaci(n grupo
Lo grupal .,

(&1 8el mismo modo Gue planteada la diGicultad de sostener la relación indi-iduo%sociedad en Gorma antinómica .ase capítulo II, :?o singular y lo colecti-o:

aquello que va con el te,to" que lo rodea; a-ora bien" +qué sería el te,to grupal?" ya que no puede obviarse que el término te,to remite a un orden de lenguaje' !sí" con el término te,to puede suceder algo similar a lo que -an planteado 7ucrot y Todorov (&# para el término lenguaje') en ese sentido no debe resultar para nada ajena la advertencia de estos autores" quienes plantean que cuando se toma el término lenguaje en su sentido más amplio" es decir" como un sistema de signos" abandonando así el ámbito especí/ico del sistema signos de verbales" el término vuelve tan vasto e indeterminado quetodo puede ser elde re/erente todas las ciencias se -umanas" ya que
ejemplo" en una multiplicaci(n dramática" donde desde el lugar de la coordinaci(n" más que develar el sentido oculto" más que comprender aquello que la escena representa" comunica o e,presa" puede verse c(mo la misma escena es generadora de un juego de combinaciones de las distintas /iguraciones que sus signi/icaciones imaginarias inventan' 4a secuencia de escenas se ubica más allá de un nivel e,presivo comunicacional; produce" genera" dispara" inventa" diversos sentidos' !sí" la intervenci(n interpretante" lejos de constituir una unidad cerrada" lejos de la intenci(n de encontrar el sentido" punt8a; esto es" marca alg8n punto de la red de sus producciones simb(licop (& Bauleo, A Comunicación personal

represor" en la escena participa un tercer personaje que incentiva al torturador a continuar con su tarea' El torturado no grita ni -abla durante la escena' Una ve1 /inali1ada la escena" la coordinadora muy cordialmente le dice a este participante) *Suerés decir algo?*D .e evidencian aquí dos momentos de esta situaci(n grupal) por una parte" un cable" seguramente utili1ado en la realidad para conectar los micr(/onos" atraviesa la escena dramati1ada del !teneo" es a-ora una picana" se vuelve te,to grupal y genera sentidos; por otra" la coordinadora que dice a la persona real que -a -ec-o de torturado" una ve1 terminada la dramati1aci(n *+Suerés decir algo?*; ante las miradas que se cru1an signi/icativamente entre los presentes" ella e,plica al grupo que" como el participante ni siquiera -abía podido gritar pens( que podría -aberse quedado muy *cargado*' En la dimensi(n de la escena *real* encontramos una coordinadora muy ave1ada que conoce todo lo que puede *cargar* a un participante reali1ar un personaje de tales características" y en actitud de contenci(n le o/rece un espacio de e,presi(nudo' 38ltiples -ilos de di/erentes colores e intensidades lo constituyen) deseantes" -ist(ricos" institucionales" econ(micos" sociales" ideol(gicos" etcétera' Pero en realidad" lo e/ectivamente registrable no son los -ilos que lo constituyen sino el nudo' Complejo entramado de m8ltiples inscripciones) todo está a-í latiendo; todas las inscripciones están presentes en cada uno de los acontecimientos grupales; variarán sí sus combinatorias en cada momento grupal como también su nivel de relevancia en tal momento; pensar la cuesti(n de esta manera im plica" obviamente" aceptar que en un grupo se están generando muc-ísimas más producciones que aquellas que pueden (&" Esta consigna es parte de la tcnica de tra4ajo En una secuencia de dramati
leerse o anunciarse'

D. La latencia "rual

4o que no e,iste insista' 6nsiste para e,istir' @obinson de 3' Toumier

Todo está a-í" latiendo' Con esta /rase se propone provocar una primera interrogaci(n que permita repuntar te(ricamente el sentido de un término tan controvertido como latencia grupal' Es /recuente" en nuestro medio" pensar lo latente
e,tra0a decisi(n esta que valori1a ciegamente las pro/undidades a e,pensas de la super/icie y que quiere que super/icial signi/ique no vasta dimensi(n sino poca pro/undidad" mientras que pro/undo signi/ique" por el contrario gran pro/undidad y no peque0a super/icie'

También se acerca a 4eYis Carroll en #lia  Bruno" donde la bolsa de Fortunato

está presentada como anillo de 3oebius" es"'a -ec-a de pa0uelos" cosidos 7in t$e *rong *a7 de manera tal que su super/icie e,terna es prolongaci(n de la interna; envuelve el mundo entero y -ace que lo que está adentro esté a/uera" y lo de a/uera" adentro' ()$ ! partir de la /igura del grupo como nudo" se pretende problemati1ar iet1sc-e4-iamente la Gigura anillo de =oe4ius tiene en Psicoanálisis, a partir de ?acan, precisas reGerencias Es empleada para dar cuenta de la noción de sujeto :desmarcada: de la noción de indi-idualidad /omando esta noción en un sentido muy amplia puede decirse 6ue e-idencia similares preocupaciones epistmicas 6ue las a6uí presentadas ()( /erán, >, en = Foucault, )l discurso del poder, Folios, Buenos Aires, ("0

la vida" se valoran los actos" se organi1an los saberes' Crisis de la teoría de la representaci(n
.e intenta pensar los acontecimientos sin renunciar al análisis de las legalidades grupales' 4a b8squeda por la estructura grupal de la cual los dinamismos y procesos grupales serían e/ecto" -a sido una /orma
Toda una generaci(n -a estado durante muc-o tiempo en un callej(n sin salida pues tras los trabajos de los etn(logos" se estableci( esta dicotomía entre las estructuras por una parte o se trata de colocar todo en un mismo plano" que sería el del acontecimiento" sino de considerar detenid amente que e,iste toda una estrati/icaci(n de tipos de acontecimientos di/erentes" que no tienen ni la misma importancia ni la misma capacidad de producir e/ectos' El problema consiste" al mismo tiempo" en distinguir los acontecimientos" en di/erenciar las redes y los niveles a que pertenecen y en reconstruir los -ilos que los atan y ()1

que los -acen en/rentarse unos a otros*'

Entonces" todo está p cit ()0 Bohola-sRy, 2 >p cit ()1 Foucault, = La micro#ísica del poder, ?a Pi6ueta, Barcelona, ("$

/lujo de sucesos" advenga un acontecimiento? .i acontecimiento es producci(n de sentido" dependerá de las /iguras que el caleidoscopio identi/icatorio
E. Lu"ar del c!!rdinad!r

4o -asta aquí planteado lleva a revisar ciertos aspectos de una teoría de la lectura que" aunque /uera una /orma implícita" opera muc-as veces en el trabajo interpretativo de los coordinadores de grupo' !quello que circula en el plano discursivo" gestual psicodramático" los silencios" la organi1aci(n de los espacios y tiempos grupales" etc'" suele ser interpretado desde una particular teoría de la lectura por la cual los acontecimientos grupales serían e2presión de un sentido oculto" pro/u ndo" que la interpretaci(n debe develar y en ese acto llevarlo a la super/icie' Está en juego a-í una teoría de la representaci(n" al decir de Castoriadis" de gran rémora de la caverna plat(nica'()) El acontecimiento no representa ni e,presa; está todo a-í" en tal inmediate1 que suele volverse invisible' .i se acepta que el nudo grupal está atravesado por m8ltiples sentidos y más de un sinsentido" siempre e,cederán aquellos que desde la implicaci(n intepretante pueden puntuar; el coordinador puntuar sentido" interrogar unaserare1a" resaltar una paradoja" indicar s(lo algunapodrá insistencia y yaalg8n no será quien descubra la verdad de lo que en el grupo acontece' !l resituar la /unci(n interpretante desde el lugar develador de verdades pro/undas -acia la puntuaci(n interrogante" la otra escena no es una escena escondida;

()# Esta enumeración no pretende ser eHcluyente de otras implicaciones ()& 8eleu
-a estado a-í todo el tiempo" late" insiste" y aun así muc-as veces su presencia permanece denegada' Esto sin duda rede/ine un cierto lugar de Wpoder] del coordinador' Como pudo verse en el capítulo 6A" cuando los psicoanalistas incorporan a su trabajo con grupos reglas técnicas y conceptos te(ricos del dispositivo psicoanalítico" además de abrir el campo de la clínica grupal produjeron un importante descentramiento' Crearon las condiciones la separaci(n del lugar de tipo la coordinaci(n los lidera1gos superandopara gran-acer parte posible de los e/ectos de sugesti(n y del de violenciade simb(lica que ella implica' 4os requisitos para tal descentramiento /ueron presentados por auleo en #$BL cuando a las ya establecidas condiciones de neutralidad que el dispositivo analítico -abía aportado acent8a la e,igencia -acia el coordinador en la devoluci(n de los lidera1gos" de la no apropiaci(n de las producciones grupales por parte de éste y la elaboraci(n desde el momento mismo de la /ormaci(n del grupo" de su pérdida' !dvierte asimismo que e,presiones tales como Wmi grupo] por parte de un coordinador" más que alusiones identi/icatorias e,presaban un deseo inscripto en criterios ideologi1ados de propiedad' () Estas sucesivas puntuali1aciones rede/inieron el lugar de la coordinaci(n con respecto al coordinador
busca a'uella posición 'ue -acilite la capacidad imaginante singular)colectia'

4. La dimen%ión in%tituci!nal de l!% "ru!% ($

.in duda las re/le,iones se0aladas en el punto C de este capítulo" con respecto a las relaciones entre las signi/icaciones imaginarias grupales y lo imaginario social están re/eridas a situaciones políticas límite" que constituyeron verdaderos traumas sociales' Podría abrirse una pregunta) +tan particula r relaci(n de te,to y conte,to es privativa de situaciones sociales límite o" por el contrario" es una constante del /uncionamiento de los grupos? 4o que se interroga es si tal ligadura del grupo con los acontecimientos de la realidad *e,terior*" se produce s(lo cuando lo social adquiere un signi/icativo nivel de turbulencia" o si -ace a una constante de su /uncionamiento' 3ás bien podría pensarse que este entramado es constitutivo de lo grupal' .i bien esta opini(n deberá /ortalecerse con /uturas indagaciones" aun cuando se la mantenga como -ip(tesis" deberá reconocerse que ésta no es una manera -abitual de pensar la relaci(n de los grupos con su conte,to; más bien opera con muc-a /recuencia corno un impensable de lo grupal' Tal ve1" especularmente capturados en los grupos plegados sobre sí mismos sólo se $izo isible su presencia en las -ormas límites de lo social' 4o social siniestro no s(lo comen1( a re/utar con insistencia el arti/icio de los grupos
($ na primera -ersión de este punto y el siguiente pueden encont rarse en B3s6ueda, Buenos Aires, en prensa

Lo Grupal @,

(( Fue en este sentido 6ue ya en :El dispositi-o grupal: se aGirma4a 6ue los grupos no son islas por cuanto están siempre inscriptos en instituciones y operan en ellos m3ltiples atra-esamientos .ase A Fernánde<%A del Cueto, :El dispositi-o grupal:, en ?o ;rupal ', B3s6ueda, Buenos Aires, ("#

Tiende a normatiizar el tipo de enunciados 'ue es pertinente en cada una de ellas autorizando algunos  e2cluendo otros;(' por /uerte que sea su inercia burocrática" no es una cosa" sus límites son siempre provisionales y siempre es posible despla1arlos en los juegos instituyentes' En ese sentido una institución es una red simbólica socialmente sancionada en la 'ue se articula &unto a su componente -uncional un componente imaginario'(0 7esde esta noci(n de instituci(n" (1 puede pensarse a los grupos desplegánd ose en lo imaginario institucional donde inscriben sus prácticas; lo imaginario institucional tanto puede promover como di/icultar las actividades de grupo' En ese sentido es que se considera restrictivo leer todos los procesos que en un grupo acontecen s(lo desde los llamados dinamismos propios de un grupo o desde el producto de las resonancias /antasmáticas de las singularidades que componen tal colectivo' Cuando en #$%" al retomar la docencia universitaria" se propuso como una de las primeras consignas para los trabajos prácticos de una cátedra que se estaba organi1ando" que los alumnos se sentaran en círculo y se presentaran" esta mínima consigna de comien1o de una actividad grupal" produjo di/erentes e/ectos de con/usi(n y pánico" que con/iguraron una verdadera situaci(n colectiva' 7urante la dictadura el anonimato y la serialidad eran la /orma de conservar la vida en las aulas universitarias; el peligro real -abía pasado" sin embargo en lo imaginario institucional operaba manteniendo determinadas signi/icaciones imaginarias que impedían cualquier agrupamiento" identi/icaci(n individual" etcétera' !quí tal ve1 /uera pertinente otra re/le,i(n' El ejemplo que antecede tiene la impronta de lo social siniestro; sin embargo pueden encontrarse algunas cuestiones relacionadas a lo que en él se relata en otras situaciones más cotidianas' Cuando se implementan dispositivos grupales en instituciones escolares primarias
organi1aci(n circular del espacio se sostiene en la intenci(n de /avorecer determinado tipo de enlaces
4íneas arriba se -a se0alado que la dimensi(n institucional trasciende los edi/icios' En tanto red simb(lica que articula componentes /uncionales e imaginarios" su presencia en los grupos puede tener di/erentes grados de visibilidad o invisibilidad' !sí" por ejemplo" podría suponerse que en aquellos grupos psicoterapéuticos o de /ormaci(n que no inscriben su práctica en instituciones p8blicas" la dimensi(n institucional en el grupo no o/rece demasiada relevancia' .in embargo" en el circuito pro/esional privado ésta se constituye a partir del sistema de reglas que el coordinador instituye con/ormando un sistema simb(lico' Coordinaci(n y sistema de reglas operan como disparador de lo imaginario y crean algunas de las condiciones necesarias para que ese grupo comience a dise0ar sus propias /ormaciones grupales' Por otra parte la membresía del coordinador a determinadas instituciones te(rico< pro/esionales es una dimensi(n institucional en el grupo *privado* que no debe subestimarse' El coordinadores investido como el *representante* de ellas en el grupo' 7e tal /orma el sistema de avales o descali/icaciones a la coordinaci(n suele operar como mediaci(n de avales o descali/icaciones a dic-as instituciones' En este sentido" la coordinaci(n soporta también allí no s(lo los movimientos trans/erenciales clásicamente estudiados por el psicoanálisis" sino también toda suerte de trans/erencias institucionales'

"as instituciones -orman parte de las redes del poder social ' En circuitos macro o micro" la instituci(n constituye un /actor de integraci(n donde las relaciones de /uer1a se articulan en /ormas) -ormas de isibilidad como apara tos institucionales y -ormas de enunciabilidad" como sus reglas' En tanto /igura intersticial" la instituci(n será un lugar donde el ejercicio del poder es condici(n de posibilidad de un saber donde ejercicio del saber se convierte en instrumento de poder; en tal sentido es un ylugar de el encuentro entre estratos y estrategias<" donde arc-ivos de saber y diagramas de poder se me1clan o interpretan sin con/undirse' (# 4a inscripci(n institucional de los grupos constituye" al decir de 4apassade" su impensado" el negativo" lo invisible" su inconsciente' Suiere resaltarse que las producciones de un grupo nunca dependerán e,clusivamente de la particular combinatoria de identi/icaciones" trans/erencias" resonancias /antasmáticas" etc'" entre sus integrantes' Tampoco será mero re/lejo o escenario donde lo imaginario institucional podrá desplegarse' En cada grupo" la combinatoria de sus di/erentes inscripciones producirá un nudo propio singular irreductible' 7e esta /orma" se pretende inscribir lo grupal en lo institucional" sin perder lo especí/ico de la grupalidad' Es necesario sostener tal especi/icidad sin -acer de los grupos islas y" al mismo tiempo" tomar como vector de análisis la dimensi(n institucional' .e piensa más bien en un movimiento tal" donde grupo e instituci(n se signi/ican y resigni/ican mutua y permanentemente' Porque si bien no -ay grupos sin instituci(n" +qué instituci(n podrá ser aquella que no sea -abitada por grupos por momentos aliados o antag(nicos" en con/licto" o naciendo a su ve1 a redes solidarias; vacilando entre los caminos de la burocrati1aci(n" repetici(n" disoluci(n" invenci(n y nacimiento de lo nuevo? En síntesis" un grupo se inscribe en un sistema institucional dado, de la misma manera 'ue la institución sólo ie en los grupos $umanos 'ue la constituen.

G. Al"un!% imen%a,le%

+C(mo opera e/ecto s la instituci(n en un grupo? Es importante se0alar que las normas

(# =orey, = Prólogo a ; 8eleu
de -uncionamiento, la coordinación  el contrato son los indicadores del sistema simb(lico
5ormas de -uncionamiento

4as normas de /uncionamiento" si bien tienen una operatividad evidente en tanto permiten a un grupo organi1arse" no es éste el nivel de e/icacia que se desea aquí subrayar" sino que se está -aciendo re/erencia a los e/ectos implícitos que laten
circular en /orma implícita produciendo signi/icaciones imaginarias donde se atraviesan diversas inscripciones' Suiere resaltarse la coe,istencia de posicionamientos singulares de los distintos integrantes' Sue algunas impresiones pudieran cobrar cierto grado de generalidad o consenso en -ipotéticas /uturas reuniones no suprime las particularidades' Tampoco es condici(n la construcci(n signi/icaciones imaginarias que lasm8ltiples posiciones con respecto apara ella por parte de los de integrantes sean -omogéneas' 7e los sentidos que los te,tos grupales disparan" los movimientos grupales suelen cristali1ar algunos dando srcen a los mitos" ilusiones y utopías de ese peque0o colectivo' !un así esto no signi/ica que se -omogeinicen los posicionamientos; s(lo sugiere que se -an puesto en juego dentro del grupo actos de nominaci(n" procesos de producci(n y apropiaci(n de sentido" narrativas" meta/ori1aciones" etcétera' Es decir que tal colectio $a creado las condiciones para los pliegues  despliegues de sus acciones, sus relatos  sus a-ectaciones@ sus inenciones  sus políticas, sus consensos  sus disensos '

"a coordinación

El tema de la coordinaci(n rebasa ampliamente el nivel e,plícito /uncional" operando desde m8ltiples e/icacias simb(lico
•

la relaci(n entre las /ormas de coordinaci(n y sus posibles lugares de poder;

•

la caracteri1aci(n de los movimientos trans/erenciales en los grupos'

Con respecto al primer punto debe se0alarse que los posibles lugares de poder que la coordinaci(n ocupe varían seg8n la /orma de coordinaci(n adoptada' Es importante aclarar que la menci(n de este posible lugar de poder no supone que éste sea el 8nico lugar de poder dentro de un grupo ni el más signi/icativo' Es s(lo uno posible'(& En el punto E" *4ugar del coordinador*" se -a se0alado la importancia del (& Para un análisis de las relaciones de poder en los grupos -ase 8e Brasi, 9 Apreciaciones so4re la -i-encia sim4ólica, la identidad y el poder:, en Lo Grupal , B3s6ueda, Buenos Aires ("&

descentramiento producido por el aporte de los dispositivos psicoanalíticos en el trabajo con grupos' Estos" al permitir la di/erenciaci(n de la coordinaci(n de los juegos de lidera1gos crearon las condiciones para superar gran parte de los e/ectos de sugesti(n y el tipo de violencia simb(lica que caracteri1a a sus mecanismos de inducci(n' .e puntuali1a posteriormente que la devoluci(n de los lidera1gos al grupo debe ir acompa0ada de la elaboraci(n por parte del coordinador de la renuncia al grupo desde el comien1o mismo de la actividad' Estas sucesivas demarcaciones -icieron posible delimitar un lugar de la coordinaci(n ya de/initivamente di/erenciado del per/il de coordinaci(n que durante a0os -abía instituido la microsociología' 7e aquel coordinador<6íder a un coordinador4sr-ese 6ue se ponen en juego a6uí dos instancias de la dimensión ilusional, a6uella

7oble e incesante movimiento que novelará sus relatos" caracteri1ará sus prácticas y los implicará en la istoria' Con respecto a la caracterización de los moimientos trans-erenciales en los grupos es obvio que la coordinaci(n produce e/ectos de e/icacia induciendo y o/reciéndose para la producci(n de amplios y variados movimientos trans/erenciales' (" Pero importante detenerse un momento en este punto porque no s(loense elmueven aquí es lga :?a transGerencia en grupos psicoteraputicos de Psicodrama psicoanalítico:, !evista Argentina de $sicología % $sicoterapia de Grupo, /omo *I, nD 0%1, Buenos Aires, (" ("$ 8eleu :;rupos, teoría y tcnica:, en ; Barem4lit compQ, I4rappsi, 2ío de 9aneiro, ("0

-amiliarizando, edipizando sus rebeliones  sus sumisiones' 4a propia e,istencia grupal implica para subsistir reglas y obligaciones" lleva en sí la violencia que los dispositivos de las @elaciones umanas -an enmascarado" o que ciertas narrativas psicoanalíticas -an reducido a espejismos edípicos' 4a emergencia de la irreductible violencia" cuando se vuelve visible a sus integrantes" de/ine la dimensi(n política del grupo" es decir" la dimensi(n de sentido con respecto al poder" ejercicio puede llevarse a cabo a través de diversas /iguraciones y modalidades) la cuyo propiedad de los bienes
l contrato o la edad del capitán


pensamiento operatorio de los ni0os" y la l(gica del contrato didáctico' Una pro/ana" l(gica natural" la otra sagrada" ritual" que está inserta en la trama del contrato' .agrada en tanto organi1ada en el ritual escolar" pro/ana en tanto abandonada en la puerta de la clase' Como puede observarse se necesita una intervenci(n disruptiva
.orprendente investigaci(n' En nuestro campo también el contrato grupal al e,plicitar las normas de /uncionamiento establece un acuerdo entre las partes" un c(digo y sus rituales' Esta es su dimensi(n e,plícita /uncional; a partir de ella se disparan diversas signi/icaciones imaginarias 9ver ejemplo de dramati1aci(n de obesos an(nimos:' >unca está todo dic-o en un contrato' .us dimensiones no dic-as" implícitas" operan sus e/ectos en latencia' ! partir de allí puede in/erirs e que en el contrato grupal
7e todas /ormas /cuál será la edad del capitán en nuestros contratos 7psi7 

ADDENDA EL CAMPO GRUPAL: CURA E IMAGINARIO )OCIAL ("1

El universo de la signi/icaci(n clausura toda posibilidad de acceso a la singularidad del sentido'

Cean Dur

El campo grupal se despliega en la compleja labor de desmontar dos /icciones" siempre recurrentes) la /icci(n del individuo 9sujeto indiviso de conciencia: que impide pensar cualquier plus grupal" y la /icci(n del grupo como intencionalidad que permite imaginar que tal plus grupal radicaría en que ese colectivo
("1 Ponencia presentada en el . Congreso =etropolitano de Psicología Buenos Aires, (""

Esta permanente revisi(n de los criterios te(ricos y de los dispositivos dise0ados -a constituido una constante epistémica de nuestro trabajo con grupos' 7esde tal perspectiva se abordan en esta ponencia una serie de consideraciones sostenidas desde una interrogaci(n) +qué instituimos cuando instituimos grupos? 4os dispositivos grupales" en tanto espacios tácticos pueden dise0arse e implementarse de maneras muy di/erentes' .i por cura entendemos aquel operador conceptual _pero también ético< que -a permitido desmarcar las intervenciones *psi* de los discursos y dispositivos médicos de la curaci(n" pero también aquel conjunto de nociones que permiten interrogar a una intervenci(n *psi* por sus eventuales e/ectos de sugesti(n" supresi(n de síntomas" ortopedias del yo" maternajes terapéuticos" etc''" la problemática de la cura abre en el campo grupal varias cuestiones especí/icas' .i bien tales cuestiones suelen -acerse más evidentes en el dise0o del lugar de coordinador" atraviesan todo el dispositivo grupal' El lugar de la coordinaci(n se instituye desde la renuncia al lidera1go y al saber< certe1a de lo que en un grupo acontece' 6mplica" por ende" crear condiciones para superar los e/ectos de sugesti(n y el tipo de violencia simb(lica que caracteri1a a sus mecanismos de inducci(n' .us intervenciones punt8an insistencias" interrogan rare1as" resaltan sinsentidos y paradojas de manera tal que al interrogar el universo de signi/icaciones circulantes" crea condiciones de acceso a la singularidad de sentido' 4a cuesti(n de la articulaci(n singularlga :2iesgos del grupalismo y del psicodramatismo: ;ili, Edgardo, Percia, =arcelo :El riesgo del psicodramatismo Apuntes para un de4ate interno: En !ev Arg de $sicodrama % Técnicas Grupales, nD 1, Buenos Aires, (")

Estas sinonimias suelen apoyarse en ideologías que valoran la espontaneidad y la creatividad /ruto de los *buenos* vínculos" soslayando en relaciones -umanas no con/lictivas la irreductible violencia' 4a preocupaci(n con respecto al montaje de dispositivos grupales e/icaces en disponer condiciones para la gesti(n y la producci(n colectiv a ersus la manipulaci(n y la los colectivos -umanos
.i estos requisitos son in-erentes a todo dispositivo grupal que sostenga las prioridades antes se0aladas" la dimensi(n institucional
II

=tro punto que interesa abordar en esta ponencia se re/iere a la implementaci(n de dispositivos grupales clínicos en servicios -ospitalarios' 7ic-a implementaci(n no se agota con *abrir grupos psicoterapéuticos*' 4os grupos en serie o serie de grupos resuelven s(lo un problema) la cantidad
con/lictos" en sus atravesamientos" políticas" etc' Es importante di/erenciar esta propuesta de algunas concepciones que estimulan un grupismo en los equipos y que tiende a producir narrativas a/ectivo
•

una o/erta de grupos" presupone una organi1aci(n grupal del servicio;

tal o/erta y tal organi1aci(n dise0an sus dispositivos" sus necesidades de /ormaci(n" a partir de la especi/icidad de la instituci(n donde inscriben sus prácticas' •

Para trans/ormar estos lineamientos generales en el cotidiano de un servicio" las di/icultades son de todo tipo; desde aquéllas más generales que implican desmarcarse de /uertes pautas de la cultura -ospitalaria' donde o/erta y demanda se sostienen desde criterios de curaci(n" pasando por la inestabilidad de los equipos por concurrencias ad $onorem" las inercias burocráticas" la /alta de presupuesto" etcétera' 2unto a estas di/icultades generales quiere subrayarse un obstáculo particularmente e/ectivo en la organi1aci(n grupal de los servicios) un peculiar imaginario *psi* que vuelve invisible lo especí/ico del espacio p8blico y trata de re
(") Fatala, Nelly, >p cit /am4in Lonon-ich, B :Psicodrama comunitario con psicóticos:, Amorrortu, Buenos Aires, ("( (" .le< de ;allegos, Edith :Algunas reGleHiones acerca de los o4stáculos al intercam4io en el ám4ito institucional:, !ev Arg de $sicodrama, nD ', Buenos Aires, (") /am4in Fernánde<, Ana = :J?egitimar lo grupalK Contrato p34lico y contrato pri-adoQ:, en Lo Grupal , B3s6ueda, Buenos Aires ("

III

!ntes de comen1ar a desarrollar las re/le,iones al respecto" se -ace necesario demarcar el uso que se da al término imaginario en esta ponencia' Tal término no se utili1a aquí en su acepci(n psicoanalítica' Por el contrario" se trabaja con la acepci(n que en los 8ltimos a0os va adquiriendo en istoria y Ciencias .ociales' +! qué se alude con el término 6maginario .ocial? Este término" de uso /recuente pero ambiguo en la istoria de las 3entalidades" es precisado por C' Castoriadis ("" para re/erirse al conjunto de signi/icaciones por las cuales un colectivo" un grupo" una sociedad" se instituye como tal" inventando no s(lo sus /ormas de relaci(n social y sus /ormas contractuales" sino también sus /iguraciones subjetivas' !sí" por ejemplo" la !ntig^edad" para instituir la esclavitud" tuvo que inventar" imaginar" que un grupo de personas /ueran percibidas como animales' En tal sentido" la esclavitud
I'

("" Castoriadis, C ?a institución imaginaria de la sociedad, /us6uets, Barcelona ("0 /am4in 6omaines de l2homme Les carre#ours du La*%rinthe, 8u !euil, Paris, ("& .ase Cap .II

El imaginario *psi* al que -acemos re/erencia produce sus contratos" dispositivos rituales y emblemas invisibili1ando la especi/icidad del p8blico' En tanto re
a: 6nstituci(n de un sistema de signi/icaciones que tiene la particularidad de /ormarse en un conjunto de oposiciones distintias' 7e esta manera toda práctica o propuesta de trabajo es evaluada en /unci(n de este sistema de oposiciones; lo que se organi1a entonces es un proceso de signi-icación) instituci(n de un conjunto de signi/icaciones imaginarias que establecen lo permitido y lo pro-ibido" lo bueno y lo mato" lo bello y lo /eo" las prácticas legitimadas y aquellas que deben sancionarse en su transgresi(n'

'$$ Baudrillard, 9ean :Fetichisme et ideologic la reduction semiologi6ue:, en 4ouvelle !evue de $s%chanal%se, ND ', Paris, (")$

b: Pero este sistema de op osiciones que e stablece la signi/icaci(n no es neutro; siempre jerarqu i1a en privilegio de uno de los términos del sistema de oposiciones' .e establece un proceso de discriminación' Es importante aclarar que la signi/icaci(n no implica necesariamente procesos de discriminaci(n jerarqui1ado 9sí de di/erencia: pero que" por el contrario" la discriminaci(n jerarqui1ada supone siempre la /unci(nKsigno reductora de las signi/icaciones' c: Estos pr ocesos de signi/icaci(n y discriminaci(n conducen a una autonomía /ormal de los sistemas de signos ) autonomización del código ' 4os re/erentes así autonomi1ados trabajan sobre sí mismos" permitiendo que tal trabajo se realice sobre un material -omogéneo<-omogenei1ado que la autonomi1aci(n del c(digo -i1o posible' d: 4a reducci(n semiol(gica genera una /unci(n de co -erencia" sutura de contradicciones y limitaciones' !llí radica su poder de /ascinaci(n) se instituye la -etic$ización del código'

Es interesante la observaci(n que reali1a audrillard al respecto' Plantea que el e/ecto de /ascinaci(n no es producido por virtudes intrínsecas del c(digo" sino porque el sistema de signi/icaciones que establece permite *olvidar las di/erencias*' Esta totali1aci(n permite no s(lo olvidar las di/erencias /etic-i1ando el c(digo" sino que
'

'$( Baudr illard, 9ean 0p cit  /am4in 8e Brasi, 9C :Crítica y transGormación de Getiches:, en Lo Grupal ,, B3s6ueda, Buenos Aires, ("

@etornando lo planteado en el punto II" una o/erta de grupos presupone una organi1aci(n grupal del servicio' Esta -ace posible el dise0o de dispositivos de trabajo y planes de /ormaci(n en virtud de las características de la instituci(n donde inscribe sus prácticas' .i esto es así" se vuelve imprescindible incluir en nuestro instrumento de trabajo la re/le,i(n y acci(n en relaci(n a las organi1aciones -ospitalarias y a las características de las regiones de la comunidad que utili1an los servicios -ospitalarios a los que concurrimos' .i bien en la -istoria de sus abordajes -ospitalarios" las intervenciones *psi*
Pról!"! de un! incluid! c!m! lect!r en el te
!rmando auleo

Intr!ducción

!' Para una elucidaci(n crítica del campo grupal ' ' Una manera de lee r" una manera de pensar C' 4os tres momentos epistémicos

I

El vocablo grupo y su campo semán!ca

!' Producci(n -ist(rica del vocablo grupo ' 4íneas de signi/icaci(n C' @e/erentes etimol(gicos 7' Primeras puntuaciones antes de avan1ar

II

Lo s!ngular y lo colec!vo

!' !ntinomia individuo
E' Problema epistémico

III

La "eman"a por los grupos

!' 4a ilusi(n de los orígenes ' 4a dinámica de grupos C' Criterios epistémicos de urt' 4eYin 7' Primer momento epistémico) el todo es más que la suma de las partes E' !nálisis de la demanda F' El nacimiento de lo grupal

I#

$ac!a una cl%n!ca grupal

!' Primeros dispositivos grupales terapéuticos ' !plicaciones iniciales del psicoa nálisis a los grupos C' El todo no lo es todo 7' 7el líder al oráculo

#

El segun"o momeno ep!s&m!co

!' Cierta especi/icidad grupal 9la noci(n de supuestos básicos: ' El segundo momento epistémico) los organi1adores grupales C' El encargo a ion y su produ cci(n te(rico

#I

Los organ!'a"ores (anasmá!cos

!' acia la enunciabilidad de los organi1adores /antasmáticos ' Problemas de demarcaci(n C' Tercer momento epistémico) El acotamiento del objeto discreto

#II

El nu"o grupal

!' 4o grupal como campo de problemáticas ' Un n8mero numerable de personas 9cuerp os discernibles: C' 4a relaci(n te,to
A""en"a

El campo grupal) cura e imaginario social

.e termin( de imprimir en el mes de 7iciembre de #$%$ en los Talleres Grá/icos C!@ET' 4a @osa #M%M" !drogué" uenos !ires