UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE HONDURAS MODALIDAD ON LINE ASIGNATURA
Etica Profesional
CATEDRATICA:
Claudia Geraldina Paz Rodriguez
ALUMNA:
Carmen Gabriela Rosado
NUMERO DE CUENTA:
201510050001
FECHA:
04 de abril de 2018
LA FELICIDAD VERDADERA
La felicidad verdadera consiste en disfrutar una vida libre de sufrimiento y gozar de bienestar, prosperidad, diversión y placeres. Sin embargo, si continúas leyendo descubrirás como la felicidad no tiene en realidad una definición única y válida para todos los seres humanos, sino que puede manifestarse de formas distintas en función de distintos factores, y también de nuestros valores. Una de las definiciones que más me gustan es la de Eduard Punsed: "La felicidad es la ausencia de miedo". Y es cierto, cuando no tenemos miedo y miramos al presente y al futuro con esperanza y optimismo somos felices. Después aparece un punto en el cual comenzamos a sospechar que todo va también que seguro que viene algo malo; es en ese momento, en el de preocuparnos en exceso en el cual aparecen el miedo y la ansiedad, y por lo tanto aparece la infelicidad. La felicidad de nuestra vida es también como la felicidad en un película. Hay momentos que gozamos de entera felicidad, y otros de conflicto, tristeza, amargura y desanimo. La razón de vivir es por tanto aprovechar al máximo los momentos de entera felicidad y encarar con fuerza los momentos malos. Aprovechar los momentos buenos presentes nos ayuda a mantener una actitud positiva.
Las personas que parecen tenerlo todo en la vida, no siempre son felices, incluso algunas, en la cúspide del éxito se suicidan porque no le ven sentido a la vida. Como no son las cosas externas las que nos hacen felices, nos tenemos que concentrar en la felicidad interior. Recién ahora los científicos están investigando seriamente la felicidad humana, porque antes, la psicología ponía todo su empeño en estudiar en profundidad, la infelicidad; así como la medicina estudiaba la enfermedad. En la actualidad, tanto
la medicina como la psicología están La vida tiene momentos dolorosos que quedan grabados en nuestra memoria y que alimentan nuestra imaginación. Sin embargo la vida es cambio y solamente el hecho de no conocer nuestra identidad auténtica hace que la vivamos como una fuente inagotable de sufrimiento. Si logramos acceder a las profundidades de nosotros mismos, más allá del ego, de la mente y del intelecto, encontraremos nuestro ser auténtico y descubriremos el secreto de la felicidad; porque todos estamos conectados con la fuente de la creación, que es lo único que no cambia, en un mundo de cambio permanente. Entonces cual es la clave para poder obtener la felicidad verdadera? La época que nos ha tocado vivir tiene una obsesión por el bienestar y el placer, que a veces son confundidos con la felicidad. Podemos caer fácilmente en la trampa de buscar la felicidad por medio de los bienes materiales, o por el reconocimiento social. Si creemos que está en nosotros mismos la solución para la felicidad, por supuesto terminaremos solos en esta búsqueda. La felicidad verdadera y profunda es mucho más que solo aprender a disfrutar las cosas pequeñas y cotidianas, o aceptar nuestras cualidades y limitaciones. Una actitud positiva ayuda, pero no es necesariamente la llave para la felicidad. Cuando volvemos la mirada a Dios, encontramos la única felicidad verdadera. Desde el Antiguo Testamento las Sagradas Escrituras nos dicen que es feliz quien ama a Dios, quien o podemos aspirar a la felicidad “en solitario”. Jesús es el amigo
que nunca olvida, el consuelo siempre presente. Él nos explicó cómo podemos reconciliarnos con Dios y llenar nuestra vida de alegría. Con Él podemos encontrar la auténtica felicidad. le busca y espera en Él.