Cómo llevar a cabo la técnica de penetración coital para favorecer la estimulación de la próstata y desencadenar la Eyaculación Femenina Biol. Alberto Rubio Casillas y César Manuel Rodríguez Quintero
Antecedentes La capacidad de las mujeres para eyacular durante el orgasmo es poco conocida. Sin embargo es relativamente fácil provocar una eyaculación en una mujer, las mejores posiciones sexuales para estimular esa área y las recomendaciones técnicas están descritas en este documento en términos breves y sencillos. Es una guía general, tu pareja y tú aprenderán a hacer los ajustes necesarios. Nosotros partimos del supuesto de que la mayoría de las mujeres pueden eyacular si se les proporciona información teórica y metodológica para lograrlo, con esto en mente hemos elaborado esta guía. Les invitamos a que asuman una posición intelectual de apertura que les permita disfrutar el proceso, pues puede ocurrir que algunos vean este aprendizaje como una situación desencadenante de ansiedad, frustración, miedo o inseguridad, cuando lo que aquí se aquí se persigue es el desarrollo de la capacidad para el disfrute responsable de la sexualidad. Les proponemos que usen esta información como pretexto para autoconocerse, mejorar su comunicación, para hablar de lo que les agrada, y disfrutar plenamente de su vida sexual.
Sobre el Punto G, la Zona G, la próstata femenina y la eyaculación femenina Antes de continuar es importante hacer algunas aclaraciones. La existencia del Punto G es muy popular y ampliamente conocido, sin embargo a fechas recientes se ha propuesto que se le denomine Zona G, pues es más descriptivo dado que en realidad no se trata de un punto, sino de una zona, localizada a 2 o 3 centímetros de la pared anterior de la vagina. Además de lo anterior debe saberse que las mujeres poseen una próstata que al ser estimulada es capaz de desencadenar orgasmos eyaculatorios. La próstata femenina se localiza alrededor de la uretra que es el conducto por dónde sale la orina.
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El secreto para lograr la eyaculación femenina consiste en darle estimulación suficiente a la próstata de la mujer.
A la próstata se accede a través de la vagina. En la ilustración anterior se puede observar la ubicación de la próstata femenina y su cercanía con la pared anterior de la vagina. Así que debe tenerse claro que para obtener orgasmos eyaculatorios la penetración debe dirigirse hacia la próstata. ¡Esta es la clave!
En la imagen de la derecha se puede apreciar una penetración que se enfoca en estimular la entrada de la vagina y apunta hacia arriba rozando la Zona G y estimulando la próstata femenina.
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Tradicionalmente la técnica de penetración se enfoca en alcanzar la mayor profundidad posible, hemos aprendido tácitamente que se debe penetrar profundamente, teniendo como blanco u objetivo el cérvix o cuello del útero.
Como se dijo anteriormente los varones hemos aprendido que se debe penetrar profundamente, teniendo como blanco u objetivo el cérvix o cuello del útero. En la ilustración anterior se representa una penetración profunda, que incluso alcanza, sin problemas, el cuello uterino o cérvix. Esta penetración es muy placentera y se disfruta mucho, pero como también puede observarse, hay poca estimulación de la Zona G. Para fines ilustrativos la Zona G está encerrada en un óvalo. A continuación examinaremos algunas posiciones sexuales y haremos algunos comentarios sobre su capacidad para favorecer la estimulación de la próstata vía pene coital.
Posturas coitales La posición de perrito La de perrito es una excelente posición coital, tal vez una de las mejores, ya que evolutivamente descendemos de primates y estos copulan así. Esta posición permite que se coloquen unas toallas debajo del cuerpo de tu pareja en caso de que se produzca la eyaculación. Así pues, si la 3
estimulación la haces como en la siguiente figura la penetración es profunda y placentera, pero no es la ideal para inducir la eyaculación femenina.
Ángulo de penetración inadecuado para el orgasmo eyaculatorio
Si se quiere proporcionar una estimulación adecuada para provocar la eyaculación femenina hay que hacer ajustes a esta posición, pues aquí hay 2 cosas que hacer notar: 1) La penetración es profunda y hacia el fondo de la vagina y lo que se busca son penetraciones cortas dirigidas hacia la Zona G.
Si bien es importante alternar penetraciones profundas con cortas, debe tenerse en mente que hay que estimular principalmente la Zona G. Como se ha dicho antes, esta se encuentra en los 2 a 3 primeros centímetros del canal vaginal, en la pared anterior. 2) El ángulo de inclinación del cuerpo femenino debe corregirse para que la espalda y la cabeza estén hacia arriba para lograr que el glande friccione y haga presión sobre la pared anterior de la vagina.
Observa que el cuerpo está demasiado inclinado hacia abajo, y la cabeza de la mujer casi pega con la cama. Para estimular de una manera más directa el Punto G, la mujer tendrá que apoyarse sobre sus manos y levantar más su cabeza. La mujer debe tener su cabeza y su espalda en alto como se observa en algunas de las siguientes figuras.
Posturas recomendadas Las siguientes ilustraciones sugieren las posiciones más adecuadas para estimular la Zona G y la próstata de las mujeres.
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La ilustración anterior representa una de las mejores posiciones para estimular el Punto G, actualmente conocido como la Zona G. La penetración es vaginal, no anal, aunque no se descarta esta última, ya que también a través de la penetración anal se puede estimular la próstata femenina. En general se trata de hacer penetraciones poco profundas, digamos que usando únicamente el glande. Así podemos lograr que nuestra pareja alcance niveles de excitación muy altos, además la fricción y la presión del glande con la zona G es muy satisfactoria para los varones. Al poco tiempo de ejecutar esta técnica de penetración poco profunda, las mujeres experimentan un deseo de orinar muy intenso. En este momento es donde la mayoría de las mujeres se inhiben y no continúan, de manera que consideramos que es importante la comunicación entre la pareja y estar informados para que las mujeres entiendan que NO VAN A ORINARSE. Si van al baño en este momento no lograrán orinar y si lo hacen el volumen será mínimo. El eyaculado femenino no es orina, eso hay que tenerlo claro. Este deseo de orinar es sólo un reflejo, pues con esta técnica de penetración se estimulan zonas nerviosas comunes a la vejiga y a la próstata. Otro elemento que nos indica que el líquido expulsado no es orina es que, las mujeres que eyaculan habitualmente pueden orinar antes de iniciar la relación sexual, y aún así, con la vejiga vacía, experimentan la sensación o deseo de orinar cuando se estimula su Zona G. El deseo de orinar indica que la técnica de penetración está siendo bien ejecutada, que se está estimulando la zona correcta. Si la mujer siente deseos de orinar quiere decir que va por buen camino y en poco tiempo la mujer tendrá una eyaculación. Hay que continuar así. En la comunicación está el meollo del asunto. Platica con tu pareja y juntos lean la información que les hemos enviado. Millones de mujeres en todo el planeta se han inhibido durante miles de años, pensando que se van a orinar. Hay que continuar la estimulación, a algunas mujeres les gusta lentamente y a otras rápido. Aquí la comunicación con tu pareja es muy importante.
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Otras posiciones apropiadas Las siguientes dos, son otras posturas muy apropiadas.
En RESUMEN Sólo hay que enfocarse en rozar los primeros 2 a 3 cm de la pared anterior de la vagina con tu glande durante algunos minutos. Al cambiar la inclinación de la vagina podrás estimular de una manera más efectiva el Punto G. Entonces tu pareja empezará a sentir deseos de 6
orinar. Debemos recalcar que no todo es estimulación superficial, hay que intercalar penetraciones profundas.
No hay 2 mujeres iguales, y tampoco la respuesta sexual es igual en las mujeres, por lo que es de vital importancia que la pareja dialogue. La mujer debe indicar a su pareja de qué forma le agrada más la estimulación.
¿Cuál es la recompensa? Multiorgasmos eyaculatorios Si la mujer logra eyacular, es posible que en pocos minutos tenga otro orgasmo. Si se continúa la estimulación en la misma zona, al poco tiempo tendrás a tu pareja teniendo otro orgasmo eyaculatorio y si continúas después del segundo tendrá una serie de orgasmos uno a continuación del otro, con diferencias de 2 a 4 minutos. El potencial para el disfrute de la sexualidad de las féminas siempre nos deja maravillados a los varones.
Orgasmos más intensos Las mujeres podrán gozar de unos orgasmos muy placenteros e intensos, más que los obtenidos por medio de la estimulación del clítoris. Según las descripciones de las mujeres que regularmente los experimentan los orgasmos son “mejores”.
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Hay evidencias de que los orgasmos que se acompañan de eyaculación son más placenteros que los orgasmos en los que no hay eyaculación. Las ramas nerviosas que participan son distintas, el orgasmo que se desencadena por estimulación del clítoris viaja por el nervio pudendo. El orgasmo que se desencadena por estimulación de la próstata viaja por el nervio hipogástrico, el pélvico y el nervio vago. En 1982 el Dr. John Perry (famoso sexólogo que dio nombre al Punto G, junto con la Dra. Beverly Whipple), realizó un estudio para investigar si existían diferencias físicas detectables entre los orgasmos del clítoris y los del Punto G.
En esta imagen puedes observar un estudio denominado MIOGRAFIA, que es el registro de las corrientes eléctricas que pasan por los músculos. Durante un orgasmo del clítoris hay muchas contracciones del músculo pubococcígeo (línea roja) y poca actividad en los músculos uterinos (línea negra).En el orgasmo del Punto G, hay mucha actividad de los 2 grupos musculares, y se puede apreciar la diferencia en la intensidad de las contracciones en los 2 tipos de orgasmos.
Hay algo más que pudiera ser de interés científico y además ser un incentivo para nuestras féminas. Resulta que a nivel fisiológico, cuando se produce el orgasmo, se libera una hormona llamada PROLACTINA, que es considerada como el indicador de la “saciedad sexual”. Después de un orgasmo vaginal o del Punto G, se produce 400% más prolactina que en un orgasmo del clítoris. 8
O sea que en buen castellano, podemos decir que las mujeres quedan más SATISFECHAS con este tipo de orgasmos que con los orgasmos del clítoris. Ahora que si una mujer experimenta los dos tipos durante la relación sexual pues ¡ESTUPENDO!
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