Resumen "Tiempo entre costuras" - María Dueñas

Resumen “Tiempo entre costuras” Autora: María Dueñas

Syra Jiménez-Pajarero Arias http://camino-syra.blogspot.com/

RESUMEN Capítulo 1 Una máquina de escribir Hispano-Olivetti cambia el destino de Sira y su madre, costurera asalariada. La protagonista había nacido en 1911 en Madrid. A los 12 años contaba con estudios elementales y era aprendiz en el taller de costura de doña Manuela Godina, en el que trabajaba su madre. Realizaba tareas como ir a comprar hilos y botones a Pontejos. A los 14 años aprendió a coser y a los 16 ya sabía distinguir telas e incluso llevar a cabo tareas más delicadas. Se le auguraba aventajaría a su madre. Sira conoce en los años 30 a un joven, Ignacio, en “La Bombilla”. No quería seguir los pasos de su madre y estar sola. El objetivo de Ignacio era ser funcionario. Una mala época en la que la capital estaba muy agitada. Finalmente el negocio cierra. Ignacio aprueba las oposiciones y plantea casarse con Sira. La madre les aconseja una boda religiosa y hablan con el sacerdote de la iglesia de San Andrés, en la que 24 años antes, un 8 de junio bautizara a Sira. Mientras tanto Ignacio la convence para que también prepare oposiciones. Y como desea que tenga una máquina de escribir propia la acompaña a una tienda. No podía imaginarse que esa compra sería la sentencia de muerte de un futuro en común. Capítulo 2 Desde el interior de la oficina, el gerente, Ramiro Arribas, observa a Sira. Tras encomendarle al empleado otra tarea se ocupa él mismo de la venta que será una Hispano Olivetti Lettera 35 portátil. Esa noche Sira duerme inquieta, pensando en no ir ella a recoger la máquina pero a la mañana siguiente se arregla con mucho esmero y acude a la tienda. Nada más verla Ramiro la invita a ir al Café Suizo. Sira siente un momento mágico cuando él la acaricia suavemente la boca limpiándole supuestas manchas de chocolate ante la admiración de un grupo de ancianos que contemplan la escena. Sira recobra la lucidez y se levanta de la mesa. Ramiro le suplica que regrese. Pasan 8 días de zozobra, sin ilusión, en los que Ignacio y su madre están inmersos en los preparativos de la boda. Sira regresa al 9º día y Ramiro la recibe con un beso apasionado. Finalmente Ignacio y la madre comienzan a sospechar la doble vida de Sira. En el mismo banco, donde siendo novios habían quedado tantas veces, Ignacio descubre la verdad y tras aseverar que nadie la querrá tanto como él, se aleja.



Capítulo 3 Sira aprende a ser una persona independiente de su madre con un objetivo: hacer feliz a Ramiro. Con él descubre otro Madrid, el de lugares sofisticados y de moda, restaurantes, espectáculos nocturnos…. También Ramiro le enseña a conducir su Morris, descifrar las cartas del restaurante, prendado de su inocencia y a la vez su aire de diosa. Un diamante en bruto. Su madre no aprueba su relación con Ramiro con el que además vive sin estar casada y se distancian cada vez más. Sin embargo, una mañana se presenta ante su hija para anunciarle un hecho: debe ir por la tarde a la dirección y hora indicada para conocer a su padre, don Gonzalo Alvarado Allí acude, a la calle Hermosilla nº 1, con su madre, la cual de joven había sido costurera en esa casa en la que tuvo un romance con don Gonzalo que terminó por decisión de ella. El propósito es que sepan que se acercan tiempos difíciles y que está poniendo en orden su vida. Se ha dado cuenta, a pesar de estar casado y tener 3 hijos, que de los recuerdos lo que más ha valido la pena ha sido Dolores y su hija, Sira. Lamenta no haberlas visto más y desea entregar a Sira la cantidad de 150.000 pesetas como parte de su herencia además de unas joyas de gran valor con un documento en el que se justifica su cesión, la constancia ante notario de que Sira es su hija y un sobre con fotografías. Don Gonzalo finaliza con un consejo y es que se vayan lejos sugiriendo el Protectorado español. La sirvienta, Servanda, los observa, igual que hiciera 20 años antes. Capítulo 4 Sira regresa a su casa y le enseña a Ramiro la herencia recibida. Se le ocurre la idea de montar una Academia en el Protectorado Español, al estilo de las existentes en Argentina, “Pitman” destinada a la población europea que vive en Marruecos (Tánger) o Tetuán (capital del Protectorado español). Ramiro se encarga de crear la empresa y Sira de firmar. El Frente Popular ha ganado y la Falange se vuelve agresiva. Ellos comienzan una nueva etapa. Capítulo 5 En marzo de 1936 se instalan en Tánger. Mientras llega la carta de las Academias Pitman se alojan en el Hotel Continental y descubren la vida tanto diurna como nocturna. Tras un periodo de pasión y de románticos paseos por el Boulevard Pasteur, las cosas empiezan a cambiar en la pareja. Ramiro con su personalidad sociable e irresistible se gana simpatías en la vida local. Sira deja de acompañarlo en las salidas nocturnas y él llega cada noche cada vez más tarde y con frecuencia bebido. Sira nota malestar y acude al médico. Está embarazada. Cuando regresa al hotel se encuentra la habitación como si hubiesen robado; sin embargo la realidad es bien distinta. En una carta Ramiro le explica que intuía su estado y decidía irse para emprender un buen negocio. Se llevaba como préstamo su herencia. Esperaba devolvérselo algún día y le aconsejaba que se marchase del hotel pues la factura no estaba abonada.



Sira prepara una pequeña maleta y sin saber adónde ir abandona el hotel. Cogerá un autobús, dirección Tetuán. Despertará en un hospital cuidada por monjas. Capítulo 6 Sus primeras palabras son “Quiero ir a casa” pero le informan de que es imposible dado el peligro existente en Madrid. Un día llega el comisario Claudio Vázquez quien enterado de la deuda contraída con el hotel le explicará a Sira su difícil situación. En el registro ha encontrado documentos en los que afirma que su padre le ha dado las joyas; sin embargo su medio hermano le ha denunciado. Además le hace ver el tipo de hombre con el que ha convivido. Solo se quiere a sí mismo. Existe un documento proveniente de las Academias Pitman en el que se señala que no desean ampliar academias. Incluso para obtener más beneficios con la empresa Hispano-Olivetti la ha implicado. Aunque no irá a la cárcel debido a su delicado estado de salud, no podrá abandonar Tetuán sin su consentimiento. Capítulo 7 Al darle el alta, el comisario va a buscar a Sira. Tiene un año para devolver la deuda del Hotel Continental. Le recuerda que estará vigilada y él conservará el pasaporte. La deja en una pequeña pensión de la calle Luneta regentada por Candelaria Ballesteros. El comisario le pide que la ayude a buscar trabajo como dependienta pues Sira no conoce a nadie en Tetuán. Durante el almuerzo se habla de la guerra y sabrá que Badajoz acaba de caer. Capítulo 8 Candelaria acompaña a Sira a buscar trabajo. Corren tiempos difíciles en los que nadie tiene interés en expandir negocios o contratar personal. El estado de salud de Sira mejoraba aunque el pánico de pensar en su madre en Madrid, su situación y la deuda al comisario la acechaban. Sira aprende a vivir sola y olvida poco a poco los 8 meses en los que Ramiro era su único pensamiento. Colabora cada vez más en las tareas del hogar hasta que un día vuelve a coger la aguja y se da cuenta de la satisfacción que le producía. Cuando Candelaria se da cuenta de la maestría de Sira le da una serie de ropas viejas que tenía en el armario para su arreglo. A partir de ese momento serán retales que se convertirán en prendas de ropa que harán las delicias de Candelaria. Hasta ese momento se siente pagada pero es consciente del talento de Sira y le propone montar su propio taller. Ella piensa que debe ofrecer algo diferente. De momento realiza encargos humildes que la alejan de la desolación. Capítulo 9 El encuentro de Candelaria en una peluquería con una señora alemana distinguida que precisaba de alguien que cosiera bien va a impulsar a la apertura de un taller cuanto



antes. Candelaria le confiesa a Sira la existencia de unas armas dejadas por un cliente que podrían ser vendidas y así elegir un buen local en Tetuán. Sira accede a los deseos de la “oportuna y luchadora “Candelaria. Capítulo 10 Una madrugada regresa Candelaria con la fatal noticia de que el ejército controla todas las entradas a Tetuán y no ha podido hacer la entrega de las pistolas; le pide a Sira que se encargue de ello pues en el camino de regreso se ha encontrado con el policía Palomares, de mal carácter, y la ha amenazado con una visita imprevista a la pensión esa noche. Sira se viste con un haik, babuchas y se ajusta las pistolas al cuerpo. Al salir se tropieza con un plato de Talavera, un quinqué y un vidrio de un marco de fotos que hacen un estrépito mayúsculo lo que origina que se despierten los huéspedes. Candelaria le explica a Sira el lugar apalabrado, la estación de tren, y el horario, las 6 de la mañana. La resolución y firmeza de Candelaria es determinante. Capítulo 11 De camino, la presencia de dos militares la desorientan y se pierde en la medina hasta que logra finalmente reconocer la puerta de la Luneta. Los controles militares se repiten. Con valentía se dirige a la carretera de Ceuta. Llega a la estación, se fija en un gran reloj que marca las seis menos veinte. Se sienta y a menos cinco se acerca a la cantina. Allí escucha la voz de un camarero con la contraseña prevista. El siguiente paso es ir al urinario cerrando la puerta. El hombre, español, y como ella vestido le ayuda a quitarse las pistolas. No llegan hasta el final pues las voces del control que se ha adelantado se escuchan ya. Así que a través de una ventana, Sira, es impulsada para escapar. Le da el dinero en una bolsita y tira con fuerza la de las pistolas. De pronto los gritos del control que han descubierto al hombre en el urinario de las señoras y su lance al exterior hacen correr a Sira con todas sus fuerzas. Deja la bolsa en el lugar pactado y se deshace en el camino de regreso del resto. Va descalza y ya no tiene que simular un paso lento, no puede más. Comienza un nuevo día en Marruecos. Capítulo 12 Sira regresa a la pensión y ve cómo en su ausencia el policía Palomares se ha presentado de madrugada y registrado las habitaciones dejando todo levantado. Aún así Candelaria manifiesta su satisfacción porque no ha encontrado nada. Sira no entra en detalles sobre la experiencia vivida y se limita a relatarle a Candelaria que se efectuó la entrega de las pistolas y ha recibido el dinero. Mientras se desnuda Candelaria ve los hematomas de su cuerpo. Sira cae dormida.



Capítulo 13 Recuperada la normalidad, Candelaria busca un piso para el taller de costura y lo encuentra en el Eixample de Tetuán, en la calle Sidi Mandri, un lugar construido con criterios europeos. Sira decide que a partir de entonces el objetivo era HOY, el presente y además cambia de estilo. Una nueva Sira Quiroga se abre paso, con una fingida arrogancia y seguridad. Sira aprecia en Candelaria como en su madre la virtud del esfuerzo y la lucha sabiendo que a partir de ahora sus vidas tomaban rumbos diferentes. Capítulo 14 En menos de una semana Sira se había instalado y le pedía a Candelaria el mobiliario y maquinaria necesaria para que su taller se asemejase a los de Madrid. Aplica las ideas aprendidas en el taller de la señora Manuela. Tras unos días de incertidumbre aparece la primera visita: la señora alemana Frau Heinz quien le hace el encargo de dos vestidos chaqueta de noche y un conjunto para jugar al tenis. Sira pone sus cinco sentidos en su primer encargo. Capítulo 15 Sira necesita el dibujo del conjunto de tenis. Lo ve en una revista, orientada por el señor Anselmo de la pensión, y se dirige a la escuela del pintor Mariano Bertuchi, famoso en Marruecos, en la puerta de la Reina. En el camino el señor Anselmo le cuenta que Bertuchi ha hecho los “segells” del Protectorado con dibujos de Alhucemas, el Ksar-elKébir, Xauen, Larraix y Tetuán. Sira entra sola y precisamente le sale al paso un hombre que además es vecino suyo. Se ofrece a realizar los dibujos y esa misma noche se los acerca. Son excelentes. La mañana siguiente se presenta el comisario Vázquez y le pregunta por la instalación de este negocio. Sira le dice que ha pedido el dinero prestado a Candelaria y con voz firme le cuenta cómo ha sido su infancia rogándole le permita trabajar honradamente. El comisario accede. A los cinco minutos llega Frau Heinz.

II PARTE Capítulo 16 La relación de Sira y el vecino se estrecha a raíz de tener que realizar una factura para Frau Heinz. Con elegancia Félix la prepara en una noche de tormenta y nace la empresa CHEZ SIRAH. Así descubre cómo Félix, tras morir su padre, y a pesar de ser halagado por su madre en público es con frecuencia ridiculizado por ella siendo la diana de sus frustraciones. Sira recuerda con melancolía a su madre, Ignacio y todas las presencias invisibles.



Capítulo 17 Con la primavera aumenta la tarea. Aparecen nuevas clientas como la imprevisible Rosalinda Fox, inglesa, o Elvira Cohen (hija del propietario del Teatro Nacional). Adelantándose a la fecha fijada llega Rosalinda con la demanda de un nuevo vestido, muy elegante, para esa misma noche. Sira se disculpa pues no ha terminado sus encargos pero Rosalinda quiere una solución. Desgraciadamente se resigna ya que Sira no tiene ningún vestidos de esas características. Capítulo 18 Sira ve en un ejemplar de la revista Madame Figaro un modelo creado por Mariá Fortuny y logra en las pocas horas que le quedan realizar lo que ella designaría como el vestido más fraudulento de toda la historia de la alta costura. Cuando Rosalinda, la dama inglesa, llega poco antes de las 20 h y se lo prueba, emite un grito de sorpresa ante la perfección del modelo. Un éxito rotundo. Capítulo 19 Al día siguiente Sira se entera por Félix que Rosalinda es la amante del teniente coronel Juan Luis Beigbeder y Atienza, alto comisario de España y Marruecos, hombre muy culto. Capítulo 20 Llega la primavera. La radio y la prensa confirman la muerte del general Mola y el comienzo de la batalla de Brunete. Sira es avisada del fallecimiento del señor Anselmo. Se dirige al barrio de la Luneta. En la misa Sira le pregunta a Candelaria sobre la posibilidad de traer a su madre a Tetuán. Candelaria le explica que es muy costoso y que a través de algún puerto de Valencia suelen embarcar. La Cruz Roja Internacional facilita la gestión. Sira decide otra solución. Capítulo 21 Sira va a ver al Comisario Vázquez para pedirle el pasaporte y así irá a Tánger con el fin de renegociar la deuda del Hotel Continental ya que desea traer a su madre. El comisario se lo entrega con un salvaconducto y 12 horas de plazo. Su presencia llama la atención masculina. Capítulo 22 De camino a la estación de autobuses Sira piensa en lo doloroso de recordar Tánger y lo allí vivido con Ramiro. Un coche negro se acerca invitándole a subir; es Rosalinda que también se dirige a Tánger. En el trayecto le hará partícipe de episodios de su vida como la relación con el general Sanjurjo quien le presentaría en Berlín a José Luis. Una mujer que ha viajado mucho: Portugal, Londres, Marruecos … Llegan a un lugar de control y les piden el pasaporte (las llaman mehanis). Aparecen finalmente en la plaza de Francia.



Rosalinda debe acudir a un banco y comprobar que su marido le ha ingresado la pensión. Quedan de nuevo a las 13 h. Capítulo 23 En el bar del hotel “El Minzah romania” se vuelven a ver. Sira observa que el barman es el mismo, Dean, que en la época que lo frecuentaba con Ramiro. Rosalinda se encuentra con unas conocidas. Capítulo 24 Rosalinda le describe a Sira su relación con José Luis, su primer encuentro, el posterior en Berlín, en Tetuán y su decisión de estar juntos. Su deseo es que el militar se lleve bien con los ingleses. Sira le cuenta su propósito de traerse a su madre de Madrid y es sincera con ella sobre su modesta posición además de relatarle lo sucedido con Ramiro. Rosalinda la anima. Capítulo 25 Sira va a ver al comisario para comentarle que no ha podido negociar un aplazamiento de la deuda con el Hotel Continental. Así que lo paga y se resigna a seguir ahorrando. Al poco tiempo se presenta Rosalinda, le dice que se arregle pues van a ir a ver a una persona que las puede ayudar: Leo Martín. Rosalinda recibe una llamada de un periodista quien le propone un chantaje: proporcionarle el contacto en Madrid a cambio de una entrevista con Juan Luis. Capítulo 26 Se produce el encuentro con Marcus Logan, el periodista británico enviado para cubrir la guerra española. Rosalinda le confirma que está autorizado para acudir a actos entre los que destacan algunos por su relevancia, como la llegada del cuñado de Franco: Ramón Serrano Suñer. Rosalinda le pide que se haga pasar por amigo suyo y así tendrá más fácil la entrada en los círculos de Tetuán. A Leo le parece buena idea y les confirma que tiene arreglado el traslado de la madre de Sira. El contacto es un ingeniero inglés: Christopher Lance. Rosalinda debe marcharse y Sira se queda a solas conversando con Leo quien le pone en antecedentes de la grave situación existente en Madrid. La acompaña a su casa tras un breve episodio en el que Sira solloza al explicarle el motivo de querer que su madre esté con ella. Capítulo 27 Al día siguiente Marcus Logan realiza la entrevista con éxito y Rosalinda consigue un permiso de residencia temporal en el Protectorado. Sira es requerida por Rosalinda a través de Jamila, antes de irse Marcus la invita a asistir con él a la recepción de Serrano Suñer, casado con Zita, hermana de Carmen Polo, y … accede.



Capítulo 28 Sira le comenta a Rosalinda la propuesta del periodista y le parece bien. Félix la ayudará hablándole de las personas que van a asistir a la fiesta y del protocolo. En 5 horas debe arreglarse el vestido. Capítulo 29 Llega Candelaria y el “equipo de emergencia” para ayudarla a arreglarse. Le da un detalle: una polvorera. Al aproximarse a la Alta Comisaría ven que está custodiada por soldados árabes a la hora. Rosalinda se ha ausentado por sentirse indispuesta. Capítulo 30 El periodista le pide a Sira que se entere de que están mostrando los alemanes a Serrano en un círculo. Ella descubre que son unas fotografías y al ir al aseo se ve envuelta en una delicada situación. Entra en una estancia en la que seguidamente hacen su aparición un alemán y Serrano para mantener una conversación secreta (Johannes Bernhardt) sobre acuerdos, intercambios y negocios. Se lo cuenta a Logan y al escuchar el “cara al sol” le pide que la saque de allí. Capítulo 31 Sira va a visitar a Rosalinda quien se encuentra fatal y abrumada por la noticia de que su marido, Peter Fox, tiene previsto llegar a Tetuán tras no verse en 5 años. Debido a sus problemas de salud, tuberculosis bovina, la había repudiado enviándola a Inglaterra. Después con su hijo se había ido a Portugal, sur de Francia, España… Capítulo 32 El marido de Rosalinda se manifiesta tal cual era: egoísta, caprichoso, borracho, arrogante, déspota, solo preocupado por su bienestar. Juan Luis le invitará en varias ocasiones. Completamente distintos, ningún punto en común, como dos líneas paralelas. Sira va enamorándose de Marcus. Le confirma que su madre ya ha comenzado el viaje. Marcus se despide de Sira, su trabajo en Marruecos ha terminado. III PARTE Capítulo 33 Cuando llega la madre de Sira, ésta no da crédito a lo que ve. Parece que ha envejecido 20 años. Sira se propone cuidarla e intentar que suba de peso. Capítulo 34 En abril de 1939 se recibe la noticia del fin de la guerra. A Juan Luis le nombran ministro de Asuntos Exteriores y Gobernación. Su destino es Burgos. Rosalinda organiza la mudanza a Madrid, en la calle Casado del Alisal, despidiéndose de todos.



Sira le regala un detalle: una cajita de plata marroquí a modo de pequeño costurero. El 3 de septiembre de 1939 Gran Bretaña declara la guerra a Alemania. Juan Luis se aferra a la nostalgia del tiempo vivido en Marruecos. A finales de mayo de 1940 es nombrado Churchill primer ministro y todo va a cambiar. Capítulo 35 Llega Sir Samuel Hoare, finalizando mayo 1940, como embajador extraordinario. No le gusta el cargo, se da cuenta del poder de los alemanes en la vida española, el control de Serrano Suñer en la prensa sobre las noticias del III Reich y cómo el antagonismo entre Suñer y Beigbeder se hacía más evidente. Agosto 1940. Capítulo 36 Sira, desde la llegada de su madre, se habitúa a leer mucho. Recibe una invitación inesperada en el Bar de Dean que había cambiado de sitio. Era de Rosalinda. Le ofrecía ir a Madrid pues estaba a punto de estallar otra guerra y de colaborar con actividades de espionaje (Secret Intelligence Service) a través de un nuevo taller de costura en Madrid para las mujeres de altos cargos alemanes. Las telas vendrían de Tánger. Sire rehúsa. Capítulo 37 Sira pasa la noche en el hotel que Rosalinda le sugiere y al día siguiente regresa a su casa. Le cuenta a su madre la negativa de colaborar y montar el taller en Madrid pero sin embargo ésta, tras haber sufrido la guerra civil, le aconseja que haga lo que pueda por evitar otra ya que los españoles solo tienen fuerza para llegar a sus muertos. Ella se quedaría en Tetuán, al frente del taller. Capítulo 38 Sira entra en el hotel Palace y allí en Madrid sigue los pasos que Rosalinda le escribiera en una carta. Convoca a Mr Jason quien le explica con más precisión su labor de facilitarles informes sobre ciertos alemanes. Además estará acompañada de 2 niñas, 12 y 17 años, quienes comprenden y hablan fluidamente alemán.A través del sistema Morse, se encriptará la información. Sira propone ponerla en patrones y dos días a la semana se la remitirá, en una peluquería y el Museo del Prado. Capítulo 39 Sira come con Hillgarth. Él le pone en antecedentes de personas como la Baronesa de Petrino, casada con el jefe de prensa y propaganda de la embajada alemana; Gloria von Fürstenberg, viuda de un noble alemán, Elsa Bruckmann, adoradora de Hitler; la condesa Mechrhild, una espía (agente nazi) entre los españoles (marquesa Piedad Iturbe, marquesa Sonsoles de Icaza, amante de Ramón Serrano Suñer), le aconseja que tenga cuidado con los funcionarios de los servicios nazis; le previene de locales como Chicote, Pasapoga … Le da dos sobres (uno con credenciales y el otro con dinero). Se



despiden como si no se conocieran. Será desde ahora el agente especial del SOE, clase SIDI. Capítulo 40 Nadie sabía en Tetuán las verdaderas razones de la partida de Sira, excepto su madre. Se instala en un piso de Núñez de Balboa. Comienza a trabajar con Dora y Martina. Llegan los primeros clientes, la primera Gloria von Fürstenberg, después con una amiga. Dora se encarga de anotar los datos de las conversaciones pensando que es una tarea del negocio. También llega la baronesa de Petrino y amigas. El trabajo no cesa ni las conversaciones. Sira, asiste a la embajada, un ambiente de sofisticación. El trabajo aumenta, apenas descansa, recuerda con nostalgia el inicio en Tetuán, hace ya 4 años. En el traspaso de información recibe el mensaje del que habrá una gran cena el día 14 con personalidades. Capítulo 41 Sira va a visitar a la señora Manuela y le propone que cosa con ella. Allí le cuenta que su madre dudó en ir a Tetuán y ella le aconsejó que lo hiciera. Le dice Sira el perfil de las señoras que hacen encargos en el taller y le confiesa la verdadera razón. Ella sonríe y accede. Se incorpora a la vida y al ritmo de Sira. Pronto, en un paseo se da cuenta de que la siguen. Unos golpes en la puerta inesperados. Es Juan Beigbeder Atienza. Le han cesado del puesto. Su postura es contraria a la guerra. Le explica a Sira hechos vividos con Franco sobre Serrano Suñer cuando él era capitán y Franco comandante. Le confiesa que se ha quedado solo, difamándole. Además Rosalinda ha tenido que huir a Lisboa pues la Gestapo ha recibido una filtración. Le deja a Sira unas cartas para que se las entregue a Rosalinda. Se lo llevarán arrestado a Ronda. Capítulo 42 Sira se dirige a la peluquería pensando en cómo hacer llegar la noticia del cese a Hillgarth en la embajada. Después va a un cine y nota que el hombre de la gabardina también está en la sala “Palacio de la Música”. El argumento de la película flota como Sira. Cuando llega a casa se da cuenta de que la gabardina está colgada. Capítulo 43 En el salón de su casa estaba Ignacio, el hombre al que cinco años antes Sira dejara por Ramiro. Ahora trabaja en la Dirección General de Seguridad del Ministerio de Gobernación y debía vigilar a los extranjeros que atravesaban las fronteras españolas. Le pide documentación. Al observar el pasaporte Ignacio le pregunta por qué ha cambiado de nacionalidad. Se excusa diciendo que lo había perdido y un amigo, de nacionalidad marroquí, le había ayudado. Ignacio contempla el lujo de la casa y está seguro de que el taller de costura es una farsa. Le recrimina que no se ha pasado por su



barrio para saber cómo estaban sus vecinos y amigos. Le relata el desgraciado destino de Norberto, Andrea, Sole, Agustina y Nati... Le cuenta que él está casado y tiene dos hijos pequeños. Finalmente la increpa por su egoísmo y se marcha. Sira ve la caja de bombones en la mesa con el mensaje secreto que convoca una reunión urgente.

4ª PARTE

Capítulo 44 Comienza el año 1941 y Sira está invitada en el Casino de Madrid. En la reunión se habla de que se supone que la presión alemana sobre España se incrementará y hay que mantenerse alerta. El trabajo en el taller aumenta y Sira se dedica a pasar clandestinamente la información sobre la llegada de altos cargos nazis. Capítulo 45 Sira se vuelve a encontrar con su padre en la celebración de la Nochevieja. Su futura nuera, Marita, es una de sus clientes. Entabla conversación y le cuenta su nueva vida en Tánger, el robo de las joyas, la denuncia de su hijo Enrique … Recibe el Año Nuevo con un abrazo de su padre. Capítulo 46 Posteriormente se vuelven a ver en L´hardy y su padre le explica la realidad que ella desconocía. Los anuncios sobre el poder de los alemanes crece. Sira acude con su padre al Hipódromo de la Zarzuela, un lugar que durante el reinado de Alfonso XIII era encuentro de alta burguesía.

Capítulo 47 Su padre le presenta amigos ingleses que son precisamente de los que ella debía evitar el contacto. Se siente mal. Ve al capitán Hillgarth que entra con su mujer. Las miradas de desconcierto se cruzan. Está en la boca del lobo. Sira finge un desmayo para que la Cruz Roja la sacara de allí. Gonzalo, su pade, le dice a Hillgarth que se la lleve. Debe salir con la cara tapada por el cabello. Capítulo 48 Hillgarth se reúne con Sira. Le explica el riesgo que corre al verse con Gonzalo Alvarado, afín a ingleses siendo ella afín a alemanes. Sira propone dejar de colaborar con ellos pero Hillgarth le informa de que la necesitan y además desde Londres. Tendrá que viajar allí.



Capítulo 49 Sira llega a Lisboa. Se aloja en el Hotel Do Parque, clientela internacional, más alemanes que ingleses. Capítulo 50 Le comunican a Sira los pasos a seguir en Lisboa. Debe acercarse al señor Manuel de Silva, un empresario muy bien relacionado y del que quieren que averigüe nombres, negocios, empresas… Capítulo 51 Se produce el primer encuentro con Manuel de Silva y así Sira le explica sus intenciones del negocio textil. Él queda en proporcionarle todos los contactos y la compañía de Joâo. Capítulo 52 Joâo la lleva a las gestiones mientras le cuenta y anima a conocer de cerca sus costumbres. Ve a Marcus Logan quien la reconoce pero ella no contesta a su llamada. Capítulo 53 Sira descansa en el hotel y se acerca a la playa. Alrededor de las 15 h regresa y ve el coche de Manuel Da Silva conducido por Joâo. Se arregla y baja a la planta principal. Recibe un mensaje de Manuel Da Silva informándola de que al día siguiente la recogerá Joâo Capítulo 54 La oficina de Manuel Da Silva se encontraba en la céntrica calle Rua do Ouro. En ella Sira intenta averiguar al lado de quién estará y diplomáticamente Da Silva habla de las alianzas entre portugueses e ingleses. Le facilita la lista de proveedores. Manuel recibe la llamada de su secretaria. Debe reunirse con Herr Weiss. Capítulo 55 Sira se había traído de Madrid un cuaderno de dibujo con la intención de incluir los datos de interés. Visita a los proveedores facilitados por Manuel Da Silva y cena con él. Resulta ser un gran bailarín. Da Silva saluda a Marcus Logan con el que ha tenido trato comercial. Propone a Sira jugar a la ruleta; ven el juego hasta que finalmente Da Silva la deja en el hotel.



Capítulo 56 Sira va a la oficina de Manuel de Silva con el objetivo de obtener información de la secretaria. Está Beatriz, la joven, con la que intenta familiarizarse. Hablan de la población, de Salazar, de la neutralidad de los portugueses y Sira, a pesar de preguntarle por la relación de Manuel con los alemanes, no recibe respuesta. Capítulo 57 Sira sale de nuevo a hacer gestiones. La siguiente orden es acudir a la iglesia de Sâo Domingos. Se trata de Beatriz quien le informa de que Manuel de Silva tiene contacto con alemanes: Weiss, Wolters, con relación a una mina. Piensan, si es necesario, matar a varios ingleses y entre ellos a Marcus Logan.

Capítulo 58 Las suposiciones de Hillgarth se habían confirmado y Da Silva estaba con los alemanes; además si los antiguos amigos molestaban pues se liquidarían. Le pregunta a Sira sobre el ambiente de Madrid y el número de alemanes. Ella sabe qué responder matizando que se ha convertido en una colonia ideal. Da Silva sugiere iniciar la cena pero Sira manifiesta cansancio prefiriendo posponerla para el día siguiente pero Da Silva alega un ineludible compromiso que disgusta a Sira que debe ya regresar a Madrid el viernes. Finalmente da Silva la invita a acompañarlo a la que será una reunión de amigos alemanes y portugueses. Capítulo 59 Sira no puede conciliar el sueño, sentimientos de satisfacción por su logro y ansiedad por lo que le esperaba. Decide vestirse y en plena noche se presenta en casa de Rosalinda y le expresa su deseo de encontrar a Marcus Logan. Rosalinda le comenta que ha abierto un club “El Galgo” y Logan había ido allí preguntando por su paradero pero ahora no sabía dónde estaba. Sira le resume la historia de Da Silva y sus intenciones insistiendo en que le ayude a localizarlo. Rosalinda la previene del peligro de mezclarse en ello y se compromete a informar a Hillgarth de las otras personas con destino similar. De Juan Luis le confirma que está en Ronda con arresto domiciliario y viviendo en un hotel. Ella había conocido a Dimitri quien la convenció de ser su socia en el club. EL piso en el que vivía lo había convertido en una especie de residencia. No pasaba factura y cada uno contribuía como podía. Antes de despedirse vuelve a prevenirle sobre la figura de Manuel da Silva.



Capítulo 60 Sira es requerida en el hotel para abrir la puerta para un cambio de toallas. Es Marcus Logan quien la recomienda se aleje de Manuel da Silva y se vaya a Marruecos. Ella le dice que vive en Madrid y que simplemente ha ido a Lisboa a comprar género. Tocan a la puerta y resulta ser Gamboa, el ayudante de Da Silva quien le trae un ramo de orquídeas. Al ir a dejarlas se da cuenta del sombrero de Marcus Logan. En cuanto cierra la puerta se despiden deseando haber intimado más en Tetuán. Capítulo 61 Sira es llevada por Joâo a la finca de Manuel da Silva (Sintra) con un escudo de armas. Ya había tres parejas de portugueses y dos de alemanes. Sira intuye que Da Silva quiera que le ayude siendo una anfitriona ejemplar. Da Silva hace las presentaciones y Sira reconoce a Johannes Bernhardt dándose asimismo cuenta de que Da Silva está metido en el negocio de un metal que serviría a los alemanes a reforzar su armamento multiplicando su capacidad de matar. La cena comienza y tras ella los hombres y mujeres se retiran a espacios diferentes. Sira intenta escuchar su conversación que se refiere al wolframio. La noche avanza y también el temor que Sira sentía. Cuando ya apenas tenía temas de conversación con las señoras se da cuenta de que los hombres han cerrado el trato. Capítulo 62 Sira apenas duerme 3 o 4 horas ya que quiere descifrar los mensajes escondidos en su cuaderno de dibujo. A media mañana recibe una llamada de Manuel quien desea agradecerle su ayuda como anfitriona y además acompañarla a la estación de Santa Apolonia a las 9 h. La va a recoger en un flamante Aston Martin deportivo en vez del Bentley de Joâo. En la misma puerta del vagón nº 8 Da Silva manifiesta su agrado por haberla conocido. La besa y desaparece. Capítulo 63 Sira recuerda lo sucedido los últimos días como si lo estuviera viendo en una pantalla de cine. El retrovisor le pide los billetes y distingue las sombras de dos hombres. Cierra la puerta hasta que escucha con insistencia unos golpes y una voz que la instan a abrirla. Es Marcus quien asegura que esos hombres son enviados por Da Silva y deben huir. Capítulo 64 Marcus le pide que coja solo la documentación imprescindible. El tren está a punto de arrancar. Sira desea llevarse el cuaderno con los falsos patrones. Pronto los gritos del jefe de estación y los ferroviarios se escuchan. Logran saltar y comienzan las carreras hasta que con la respiración entrecortada Sira le explica por qué se acaban de jugar la vida por ese cuaderno.



Capítulo 65 Marcus explica a Sira cómo se había dado cuenta de que la seguían. Ella se lo agradece y con suspicacia se preguntan ambos del lado de quién están. Pasan Badajoz y Mérida. Afloran recuerdos pero en la conversación relativa a Bernhardt y Da Silva saben que ambos mientes. Llegan a Madrid casi a las 7. Marcus la deja en su casa y él tiene planes de alojarse en el Palace. Quedan para comer. Capítulo 66 Tras pasar la noche con Marcus, éste desaparece. Ese día Sira tiene cita en la consulta del doctor Rico con Hillgarth. Siguen el mismo protocolo. Sira le informa de sus últimas averiguaciones sobre la relación de da Silva con los alemanes y el suministro de wolframio. Otro agente del servicio de Inteligencia ya le había también informado; sin embargo Sira tiene todos los detalles en el cuaderno. Capítulo 67 De camino a casa Sira se siente orgullosa de sus capacidades y resistencia. Sabe que ha llegado el momento de evitar que la manejen. Se encuentra un sobre debajo de la puerta con el sello del hotel Palace. Marcus le dice que vuelve a Lisboa y le pide que lo espere. Sira va a casa de su padre. Está en la biblioteca. Le pide un favor. Necesita un sitio para reunirse con 5 personas. Una fiesta privada. Accede. Capítulo 68 Sira queda con Marcus en la casa de Gonzalo Alvarado. Los presenta. Una llamada telefónica hace que Gonzalo se ausente. Marcus sorprendido le pregunta a Sira el porqué de este encuentro. Ella le confiesa que quiere saber algo de su pasado: qué había ido a hacer a Marruecos. Deciden sincerarse. Sira le dice que sabe que es miembro del Servicio de Inteligencia militar británica y Marcus efectivamente explica que su objetivo en Marruecos era obtener información de los alemanes. Su marcha súbita del Protectorado se debió a las sospechas. Ahora es Marcus quien le pregunta sobre el cambio de una inocente modista a una mujer tan diferente. Se oye la voz de su padre. Llegan los otros invitados: señor y señora Hillgarth. Sira descubre que es hija de Gonzalo. El desconcierto de Marcus y Gonzalo es enorme asó como el de la mujer de Hillgarth. Sira da su palabra de modista y espía de dejarse la piel en futuras misiones. Capítulo 69 Marcus y Sira salen de casa del padre de Gonzalo. El agregado naval Hillgarth le pide a Marcus que le acompañe para hablar de la situación planteada y Sira regresa sola. Horas después llega Marcus con una sencilla rosa y le recuerda a Sira la difícil y peligrosa situación en la que se van a adentrar luchando con fuerza por una causa común. Se miran y afloran sus vivencias del pasado en tierra africana. Se abrazan con la certeza rotunda de que en esta conjunta misión no van a fracasar.



EPÍLOGO Sira asevera que ha relatado su historia imbuida de la nostalgia que se origina con el paso de los años. Mantiene su taller hasta finales del 45 convirtiéndose en una virtuosa del doble juego. Resume la vida de las personas que han aparecido en este relato: •

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Beigbeder: después del término de su arresto en Ronda, estuvo en Madrid y se salvó de dos intentos de asesinato. En 1943 Franco reclama de nuevo sus servicios, le asciende a general y es enviado a Washington. EL objetivo quizás era restablecer relaciones y convencer a los norteamericanos de la absoluta neutralidad de España en la guerra o deshacerse de Beigbeder incitándola a caer en una vida de vicio. Al finalizar la guerra mundial irá a Lisboa donde se producirá el reecuentro con Rosalinda. Participa en conspiraciones contra Franco que no llegan a nada. Pasará en 1950 a la reserva y acabará sus días completamente pobre. Un amigo marroquí le dará trabajo como administrativo hasta su muerte acaecida en 1957. Un viejo conocido de su Marruecos feliz recoge la documentación de su pensión. Rosalinda Al final de la guerra mundial Rosalinda traspasa el club “El Galgo” y se marcha de Portugal instalándose en Surrey, Inglaterra. Aparece de nuevo su marido, Peter Fox, y por tercera vez reanudan su vida en común lo que será imposible por su carácter egocéntrico. Se irá a Londres donde abrirá el club “El Patio”. No pierde el contacto con Beigbeder volviéndolo a ver entre 1946 y 1950. Percibe el deterioro del militar y lo acompañará en la última etapa de su vida quien sigue soñando con Marruecos a pesar de haberse disuelto el Protectorado recuperando el País su independencia. Rosalinda busca un sitio al sur, frente al mar y elige Guadarranque (Cádiz). Compra una casa y un terreno regresando a Inglaterra para hacer frente a su negocio. Días después recibe la noticia de que Beigbeder ha fallecido. Decidirá trasladarse al lugar elegido para ambos donde vivirá hasta los 93 años. Serrano Suñer Los alemanes lo envían a Rusia en junio de 1942. Dispuesto a seguir apoyando al III Reich organizará la División Azul, una caravana de desgraciados voluntarios que acabarán muriéndose de frío o jugándose la vida para una guerra que no era la suya. El 3 de septiembre de 1942 es cesado de todos sus cargos. A pesar de ser muy útil a Franco su persona generaba un odio popular. Se dedicará a partir de entonces a la abogacía, empresas privadas y colaboraciones periodísticas. Alemania se rinde el 8 de mayo de 1945. Tras la firma del Acta de Rendición, 5 de junio, los aliados entran en los edificios que habían sido ocupados por los nazis. La documentación había desaparecido; sin embargo logran recuperar el botín más valioso: lingotes de oro sin inventariar.


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En cuanto a España se pensaba en la pronta restauración de la monarquía, la llegada de un régimen más aperturista pero no fue así. Se le niega la entrada a las Naciones Unidas. Alan Hillgarth Es trasladado en 1944 como jefe de inteligencia naval a la Far East Fleet y vivirá retirado en Irlanda. Las tropas españolas, con la llegada de la paz mundial, abandonan Tánger tras 5 años de ocupación. Comienzan los movimientos anticolonialistas de la zona francesa y el 2 de marzo de 1956 Francia concede la Independencia a Marruecos. Las tensiones también afectan al Protectorado español y el 7 de abril de 1956 llega a su fin. Decenas de miles de españoles comienzan el drama de la repatriación con la nostalgia de África en lo más hondo de su alma.

Sira no desvela el destino real de su padre, Gonzalo Alvarado, ni el de su madre, Dolores, su amiga candelaria, Félix Aranda o el propio Marcus. Nada queda escrito. Al fin y al cabo: “habían vivido como invisibles figuras en un tiempo entre costuras”

Resumen "Tiempo entre costuras" - María Dueñas

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