¿POR QUÉ SURGE EL MOVIMIENTO MODERNO? El llamado Movimiento Moderno, también conocido como estilo internacional , surge a principios del siglo XX. Este movimiento parte de las vanguardias europeas de principios de siglo y se va extendiendo a finales de los años veinte. Habiendo concluido la Primera Guerra Mundial (1914-1918), la sociedad atravesaba por una etapa de cambios, desde económicos hasta sociales y artísticos. Estos cambios reflejaban un nuevo pensamiento, que en arquitectura se tradujo como el abandono de los “estilos” cargados, ornamentales, esos en los que la importancia radicaba solamente en la parte estética de un edificio, donde también había desperdicio de espacio. Así que se pone mayor énfasis en la funcionalidad de una edificación, esto es, que las decoraciones y ornamentos pasaron a tener un papel sin importancia, puesto que no cumplían con una función determinada, así que se opta por trabajar espacios “pensados” para el hombre, con espacios pensados y útiles que pudieran aprovecharse de
la mejor manera posible, sin desperdicio, sin ornamentos. Este fue uno de los principales móviles de este movimiento: Ajustar la arquitectura a la realidad -Sucesos anteriores al inicio del movimiento Moderno: Primera Gran Guerra o Guerra Mundial: 1914-1918 Movimiento Arts & Crafts: 1840-1890 La constitución de la segunda y la tercera República Francesa: 1848 y 1871 ¿QUÉ ARQUITECTOS SON LOS QUE INICIAN ESTE DENOMINADO D ENOMINADO MOVIMIENTO MODERNO (1920)? Le Corbusier en Francia, Mies van der Rohe y Walter Gropius, estos últimos fueron directores de la Bauhaus en Alemania (La Bauhaus fue una de las más importantes escuelas europeas, y su mayor preocupación era la experimentación con las nuevas tecnologías industriales). ¿CUÁL ES LA ESTÉTICA, O, EL RESULTADO FORMAL Y TEÓRICA DEL MOVIMIENTO MODERNO (1920)? Adopción del principio de que los materiales y requerimientos funcionales determinan el resultado: la forma sigue a la función, Adopción de la estética de la máquina, como consecuencia de lo anterior, Materiales y técnicas de nueva invención, como el hormigón armado, Rechazo del ornamento como accesorio; la estética resulta de la propia finalidad expresiva del edificio, de los materiales empleados y sus propias características; Simplificación de la forma y eliminación de los detalles innecesarios, llevado al extremo en las obras de Mies van der Rohe, Expresión formal de la organización estructural de la edificación. ¿DÓNDE SURGE EL MOVIMIENTO MODERNO? El período de entreguerras (1918-1939) es el de los locos años veinte y la depresión de los años treinta, que presencia el surgimiento de los totalitarismos fascista y soviético como alternativas al liberalismo de las democracias capitalistas, tildadas de decadentes. Los programas arquitectónicos de la Italia fascista, de la Alemania Nazi y de la Unión Soviética, como sus propuestas estéticas, van de un inicial vanguardismo (constructivismo ruso) a una repetición de modelos historicistas de ocupación de los espacios públicos compatible con un estilo de fácil consumo popular que simultáneamente se impone para las artes plásticas (realismo socialista , realismo heroico ), aunque en fechas tan tardías como 1938 la arquitectura italiana desarrolló programas tan vanguardistas como la EUR(exposición EUR(exposición universal que no llegó a celebrarse, prevista para 1942, y que planificaron arquitectónicamente Marcello Piacentini y Giuseppe Pagano, coordinando criterios estéticos opuestos).
No obstante, fue en la democracia socialmente avanzada de la Alemania de Weimar previa al ascenso del nazismo donde se produjeron los acontecimientos más importantes para el surgimiento de una arquitectura moderna en el sentido de estética y funcionalmente renovadora: los trabajos de la escuela de la Bauhaus (Walter Gropius, 1919-1933) 1919-1933).. La Francia republicana vio surgir el taller de Le Corbusier, de influencia comparable. No sería posible identificar sin más al funcionalismo racionalista con la arquitectura moderna, en el sentido de única posible alternativa de innovación; porque, además de no monopolizar la creación arquitectónica, tampoco sus partidarios se limitaron creativamente. Las alternativas desarrolladas incilleron destacadamente la arquitectura orgánica de autores como Frank Lloyd Wright (uno de los líderes del movimiento moderno que se movía dentro de los parámetros del funcionalismo), así como versiones más neoclásicas o monumentalistas, como la del neo empirismo nórdico (los suecos Erik Gunnar Asplund, Sune Lindström y Sven Markelius, y el danés Arne Jacobsen). Jacobsen). ¿QUÉ ES EL RACIONALISMO? El término “racionalismo” tiene un significado muy amplio: en general, llamamos racionalista a toda
posición filosófica que prima el uso de la razón frente a otras instancias como la fe, la autoridad, la vida, lo irracional, la experiencia empírica, ... Es racionalista todo aquél que cree que el fundamento, el principio supremo, es la razón. Junto con ello, cabe ser racionalista en relación con un género de cuestiones y no serlo en relación con otro: por ejemplo se puede reivindicar la necesidad del ejercicio de la razón en política y rechazarlo en religión. Pero el término “racionalismo” se usa comúnmente en la historia de la filosofía para designar una
cierta forma de fundamentar el conocimiento: cabe pensar que el conocimiento descansa en la razón, o que descansa en la experiencia sensible; así, puesto que valoraron más la razón que los sentidos, sentidos , podemos llamar a Parménides, Platón y Descartes racionalistas; y podemos decir d ecir que Aristóteles, Santo Tomás y, por supuesto, Hume, tienden al empirismo, dado el valor que dieron a la experiencia sensible o percepción. Sin embargo, a pesar de que pueda recibir distintas acepciones y aplicarse en esferas distintas, el término “Racionalismo” se utiliza primordialmente para referirse a la c orriente filosófica de la Edad Moderna que se inicia con Descartes, desarrolla en la Europa continental con Spinoza, Malebranche y Leibniz, y se opone al empirismo que en esta misma época tiene éxito en las Islas Británicas. Los rasgos que mejor caracterizan al racionalismo moderno son los siguientes: 1. La tesis de que todos nuestros conocimientos acerca de la realidad proceden no de los sentidos, sino de la razón, del entendimiento mismo. 2. El conocimiento puede ser construido deductivamente a partir de unos primeros principios. 3. Los primeros principios del conocimiento no se pueden extraer de la experiencia empírica sino que se encuentran ya en el entendimiento: el innatismo de las ideas. 4. Consideración de la deducción y más aún de la intuición intelectual como los métodos más adecuados para el ejercicio del pensamiento. 5. La consideración de la matemática como ciencia ideal. 6. Reivindicación del argumento ontológico para la demostración de la existencia de Dios. D ios. 7. La apreciación optimista del poder de la razón , ésta no tiene límites y puede alcanzar a todo lo real. El racionalismo arquitectónico corresponde a una tendencia introducida en Europa a comienzos del siglo XX, que mantiene un fuerte compromiso con las conquistas de la estética del cubismo. La experiencia de la Bauhaus (1919) es decisiva para el desarrollo de un linaje racionalista en el campo de la arquitectura. Las investigaciones formales y las tendencias constructivas realizadas son lo
máximo de ahorro en la utilización del suelo y en la construcción; la atención a las características específicas de diferentes materiales (madera, hierro, crista, metales, etc.), la idea de que la forma artística proviene de un método o problema previamente definido, lo que conlleva a la correspondencia entre forma y función. Además, se plantea el uso recurrente de la snuevas tecnologías al momento del diseño diseño y la construcción. Estos puntos son primordiales para la escuela escuela creada por Walter Gropius. También se retoman bases propias del cubismo y constructivismo, utilizando formas elementales en la composición composición arquitectónica arquitectónica con la intención intención de obtener simetría, equilibrio y regularidad en el conjunto diseñado. La utilización de nuevos materiales, la estructura aparente, las cubiertas planas, la sencillez de la ornamentación, las grandes superficies acristaladas y la preocupación por el espacio interno del edificio constituyen otros puntos centrales de la llamada arquitectura racionalista. ¿QUÉ ES EL FUNCIONALISMO? El concepto de funcionalismo funcionalismo aparece en diversas ciencias y ramas del arte para nombrar a la corriente que anuncia la preponderancia de los componentes formales y utilitarios. El término puede referirse, por lo tanto, a una doctrina de la arquitectura, una escuela de la lingüística o un movimiento de la psicología, por citar algunos casos. En el siglo XX se hizo popular la frase del arquitecto de Chicago Louis Sullivan, que dice que la forma sigue siempre a la función. Con ella él expresa que particularidades como: las dimensiones de la edificación, su masa, la manera en que se distribuya el espacio, entre otras tantas, resultan en función del objetivo de la obra, es decir, que al cumplir con el requerimiento de la funcionalidad, la estética irá surgiendo naturalmente. Los arquitectos funcionalistas, consideran incluso que los ornamentos o rnamentos no desempeñan ninguna función y Sullivan algunas veces los utiliza de manera inexplicable; además no se sabe de qué tipo de función habla en su credo, pues no especifica en ningún momento. Sin importar para quien se diseñe, es frecuente que el arquitecto tenga sus diferencias con los clientes por ejemplo, en cuanto al aspecto o asuntos relativos, pero la idea de que sea funcional y como resultado, estético, agrada a todos. ¿QUÉ ES EL ESTILO INTERNACIONAL (1950)? El Movimiento Moderno no es identificable solo con el “Estilo Internacional”, sino que se considera, al igual que Ernesto Nathan Rogers, que el Movimiento Moderno es la “expresión de un método que ha intentado establecer nuevas y más claras relaciones entre los contenidos y las formas, entre la fenomenología de un proceso histórico-pragmático, siempre abierto , que en la medida que excluye todo apriorismo en la determinación, de aquellas relaciones relaciones no puede ser juzgado por esquemas”. (Ernesto Nathan Rogers; Continuitá o ciris?. Abril-Mayo, 1957, Milán.
Tras la Segunda Guerra Mundial predomina el desarrollo del Estilo Internacional, de una arquitectura de planteamientos racionalistas. Ello se manifiesta tanto en la producción más cualificada de los maestros de la arquitectura moderna como en la producción cuantitativa de los países desarrollados: Francia, Alemania, Inglaterra, Holanda, Japón o Estados Unidos. Uno de los principales conceptos que se manejan en el Estilo Internacional de a partir de los años 50’ es el seguimiento hasta cierto punto de las ideologías del movimiento Moderno de los 20’s pero
agregando, o más bien, volviendo a retomar o incluir, algunos tipos de ornamentación, que supuestamente, acercaba de nuevo al hombre con el arte y a su lado humano. ¿QUÉ ES EL MOVIMIENTO POSMODERNO? Tomado de Wikipedia: La Arquitectura postmoderna es una tendencia que se inicia en los años 1950, y comienza a ser un movimiento a partir de los años 1970, continuando su influencia hasta la arquitectura de nuestros días. El postmodernismo se dice que está anunciado por el regreso de "el
ingenio, el ornamento y la referencia" de la arquitectura, en respuesta al formalismo causado por el Estilo Internacional del movimiento moderno. Al igual que con muchos movimientos culturales, algunas de las ideas más pronunciadas y visibles del postmodernismo se pueden ver en la arquitectura. Las formas y espacios funcionales y formalizados del estilo modernista se sustituyen por diversas estéticas: los estilos colisionan, la forma se adopta por sí misma y abundan las nuevas formas de ver estilos familiares y espacios. Quizás siendo lo más obvio, los arquitectos redescubrieron el valor expresivo y simbólico de los elementos arquitectónicos y las formas que se habían desarrollado través de siglos de construcción, que habían sido abandonados por el estilo moderno. Posmoderno: Como reacción al International Style, y de forma más genérica al movimiento moderno, apareció en la década de 1960 un movimiento filosófico y artístico que se conoce con el nombre genérico de posmodernismo. Entre las tendencias que podemos encontrar en este movimiento se distingue una de tipo clasicista, originada a partir de la publicación en 1966 del libro de Robert Venturi Complejidad y contradicción en la arquitectura, en el cual defendía la vuelta a los modelos de la arquitectura tradicional. También el camaleónico Philip Johnson se adscribió a esta corriente, apoyándola desde su puesto directivo en el MOMA (Museo de Arte Moderno de Nueva York). Otros arquitectos que han seguido los pasos de Venturi son Michael Graves, Robert A. M. Stern, o el catalán Ricardo Bofill. En la década de 1960 surgió entre muchos arquitectos un sentimiento de rechazo hacia el International Style, que había degenerado desde su pureza inicial hacia fórmulas que parecían monótonas y estériles. Una de las corrientes arquitectónicas que va a reaccionar contra la ortodoxia del racionalismo será la denominada posmoderna, ligada al movimiento filosófico del mismo nombre. El posmoderno en arquitectura no pretendió ser un movimiento conexionado, sino una serie de actitudes individualistas que varían desde las tendencias neohistoricistas de Ricardo Bofill o de Óscar Tusquets hasta los extremados rasgos del deconstructivismo que practican Frank Gehry o Zaha Hadid, pasando por la ironía de Robert Venturi, Helmut John o Michael Graves. El polifacético Philip Johnson dio un espaldarazo a la corriente posmoderna con la erección del edificio AT & T (1982) de Nueva York, un rascacielos coronado por un frontón partido. Posmodernismo: Movimiento internacional extensible a todas las artes. Históricamente hace referencia a un periodo muy posterior a los modernismos, y en un sentido amplio, al comprendido entre 1970 y el momento actual. Teóricamente se refiere a una actitud frente a la modernidad y lo moderno. Se trata de un movimiento global presente en casi todas las manifestaciones culturales, desde las películas de Quentin Tarantino y Pedro Almodóvar a la arquitectura de Ricardo Bofill, desde la literatura de William Burroughs y John Fowles a la pintura de Guillermo Pérez Villalta, y desde la filosofía a la televisión. El posmodernismo literario tiene su origen en el rechazo de la ficción mimética tradicional, favoreciendo en su lugar el sentido del artificio y la intuición de verdad absoluta y reforzando al mismo tiempo la ‘ficcionalidad’ de la ficci ón, un ejemplo español puede ser Mariano Antolín Rato y sus novelas Cuando 900 mil Mach aprox (1973) o Mundo araña (1981). En la literatura en lengua inglesa las teorías posmodernistas han sido empleadas a menudo por escritores enfrentados a la experiencia poscolonial, como Salman Rushdie en Hijos de la medianoche (1981). El movimiento se acercó también a formas populares como la novela policíaca (El nombre de la rosa, 1980, de Umberto Eco), la ciencia ficción (Canopus en Argus: archivos, 1979-1985, de Doris Lessing), y los cuentos de hadas (Bloody Chamber, 1979, de Angela Carter). Los teóricos de la posmodernidad sólo coinciden en un punto: que el escándalo radical provocado en su momento por el arte moderno ha sido asimilado y recuperado por esos mismos burgueses
liberales que en un principio tan sorprendidos y críticos se mostraron con él. Lo moderno ha llegado a integrarse en la cultura institucional elevado a los altares en galerías de arte, museos y programas de estudios académicos. Sin embargo, no hay consenso entre los posmodernistas sobre el valor de lo moderno, como tampoco hay consenso cultural sobre el valor del posmodernismo. En el caso de la arquitectura, el rechazo posmoderno del brutalismo y el International Style asociados con Le Corbusier y su sustitución por un estilo alusivo y ecléctico que alude en una suerte de pastiche caprichoso o paródico a estilos anteriores (desde el neoclasicismo al manierismo o el rococó) ha sido el centro de numerosos debates públicos. Tales debates olvidan con frecuencia el regreso aparente a los valores tradicionales, sin reconocer este hecho como un intento de aludir inconscientemente a estilos anteriores, más que de asimilarlos. El posmodernismo está más marcado por el camp y el kitsch que por la nostalgia; en términos generales, carece de la gravedad propia de los artistas y movimientos modernos de principios de siglo. Sin embargo, puede considerarse como la consecuencia lógica de la ironía y el relativismo modernistas, que llegan a cuestionar sus propios valores. El tono lúdico de la posmodernidad hace que resulte más fácilmente asimilable por la cultura popular o cultura de masas. Por otra parte, su aceptación superficial de la alienación contemporánea y su transformación de la obra de arte en fetiche han sido objeto de acusaciones de irresponsabilidad política. El filósofo francés Jean-François Lyotard considera que la explosión de las tecnologías de la información, y la consiguiente facilidad de acceso a una abrumadora cantidad de materiales de origen en apariencia anónimo es parte integrante de la cultura posmoderna y contribuye a la disolución de los valores de identidad personal y responsabilidad. Con todo, entiende la multiplicidad de estilos posmodernos como parte de un ataque al concepto representativo de arte y lenguaje, con lo que afirma más de lo que rechaza el modernismo de altos vuelos y allana paradójicamente el camino para su regreso triunfal.