Planetas Retrogados y Reencarnacion[1]

PLANETAS RETRÓGRADOS y REENCARNACiÓN: ASTROLOGíA KÁRMICA 11

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Martin Schulman

PLANETAS RETRÓGRADOS Y REENCARNACiÓN ASTROLOGíA KÁRMICA 11

IN@IGO www.edicionesindigo.com

NOTA DEL AUTOR A menudo los planetas aparecen en movimiento retrógrado cuando están en oposición al Sol. Entonces, simbolizan un vórtice en la conciencia que puede llamarse el no-Sol de la realidad. Se recomienda al lector que no intente experimentar la vibración retrógrada sobre los niveles intuitivo o psíquico, ya que el efecto de muchos planetas retrógrados puede situarle fácilmente en disarmonía con su propia vibración. Además, se sugiere que, excepto para aquellas posiciones planetarias particulares que aparecen en su propia carta, se lea este libro con enorme imparcialidad, para que no le lleve al vórtice máximo de la vibración retrógrada.

Título original: Karmic Astrology. Volume JI Retrogrades and Reincamatioll Traducción: Joseph M. Apfelbaume Diseño portada: Nacho Antolín © 1977 Martin Schulman © 1989 Ediciones Indigo © 2004 Ediciones y distribuciones Vedrá, S.L.

Primera edición: septiembre 1989 Segunda edición: septiembre 2004 ISBN: 84-86668-17-4 Depósito legal: B-34.343-04 Edita: Ediciones Indigo Zamora, 91-95, 60, In - 08018 Barcelona Avd. Centenario, n° 607 - Col. Lomas de Tarango Del. Alvaro Obregón - México D.F. 01620 Fotocomposición: Pomertext Lepanto, 264, 30, E - 08013 Barcelona Impresión: Liberdúplex Constitución 19, bloque 8, local 19 08014 Barcelona Encuadernación: Encuadernaciones Roma Feixa Llarga, 70 - 08907 L'Hospitalet (Barcelona)

NOTA DEL EDITOR INGLÉS

Dado que el autor siente la imperiosa necesidad de realizar un libro más contemporáneo, se han omitido las siguientes posiciones planetarias: 1. Urano desde Capricornio a Piscis. 2. Neptuno desde Aries a Cáncer, y de Capricornio a Piscis. , 3. Plutón desde Aries a Géminis, y de Sagitario a Piscis. La mayoría de ellas están demasiado alejadas en el futuro o, en muchos aunque no todos los casos, bastante lejos en el pasado respecto al límite de la actualidad que nos interesa. Si fuese necesario estudiar cualquiera de ellas, uno puede leer la posición de la casa correspondiente en relación con el planeta en cuestión; por ejemplo, para Urano en Piscis, léase Urano en la Casa duodécima. Aquí es importante tener en cuenta el elemento del signo, su regente y su cualidad para que puedan guiarle en una interpretación práctica. Las fases planetarias también pueden deducirse de modo similar, pero con menor exactitud. Aquí, como en toda interpretación astrológica, una observación minuciosa, un conocimiento completo de la carta natal y de la vida de una persona le darán la información necesaria'para una interpretación razonable. CLARK STILMMAN

... A mi queridísima princesita Penny Sue Que brota y crece como una flor entre espiJias y maleza. y con suaves gotas de lluvia, que mojan sus sedientos pétalos, florece sin cesar...

INTRODUCCIÓN Tanto los estudiantes como los astrólogos se encuentran con muchas dificultades para asegurar si un planeta es retrógrado o no cuando confeccionan una carta. Pero ¿'qué sucede después? Aparte de una comprensión bastante vaga sobre si un planeta proporciona los beneficios individuales contrarios a los que derivan del movimiento directo de los planetas, cualquier intento de interpretar e"1 significado exacto de estas obvias «rarezas» no sólo ha sido confundido, sino relegado a cualquier comprensión implícita. Como resultado, todo el tema conlleva una intriga bastante misteriosa, ensombrecida por numerosas suposiciones que parecen contradecirse unas a otras. Para la mayoría, el problema ha sido las múltiples dimensiones del efecto retrógrado. Sabemos que en muchas áreas de la astrología, la propia interpretación radica en descubrir si la dimensión a través de un planeta, signo, casa o aspecto concreto funciona para el individuo. Eso mismo es cierto para los planetas retrógrados. Mientras los astrólogos han estado buscando «un» efecto verdadero, han omitido el hecho obvio de que los planetas retrógrados actúan de diferente manera al mismo tiempo. Ésta es, probablemente, la razón principal por la que no se ha entendido claramente todo el tema hasta ahora. Los planetas retrógrados inician una nueva y más profunda comprensión del individuo de la que la astrología ha intentado descubrir con anterioridad. De hecho, hay una experiencia un tanto única en la conciencia; al describir mucho de lo que le sucede o no a un individuo en la ac9

Planetas retrógrados y reencarnación

tualidad, se encuentra una expresión de su vida externa. Y, la parte más fascinante de todo esto es el tremendo grado de seriedad, introspección y profudidad a que puede llegar una persona comprendiendo y utilizando sus planetas retrógrados. Tras muchos estudios sobre este tema, resulta fácil ver cómo las cosas de la vida son diferentes entre sí, sin que necesariamente sean mejores o peores unas que otras. El autor espera que estas páginas ayuden a aquellos que buscan comprender los procesos retrógrados.

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PRIMERA PARTE:

GENEALOGÍA DE LOS PLANETAS RETRÓGRADOS

1. UNA EXPERIENCIA EN

RELATIVIDAD Planetas retrógrados y magnetismo No hay nada en el universo que no tenga cualidades magnéticas. Es sabido que el propio pensamiento atrae pensamientos similares. Cada individuo tiene sus propias energías magnéticas basadas completamente en cómo utiliza la disposición planetaria de su horóscopo. Todas las configuraciones atraen ciertas cosas, y al mismo tiempo repelen otras. De este modo, todo el mundo está en una condición positiva y negativa al mismo tiempo. En el horóscopo individual, algunos planetas desde su propia situación envían constantemente sus energías al mundo por radiación. Otros se encuentran como puntos de absorción por los cuales el individuo es capaz de asimilar y comprender el universo que necesita. Verdaderamente, el modo en que el individuo utiliza sus planetas es lo que determina sus cualidades magnéticas en cualquier momento dado por encima o por debajo de la cualidad magnética propia del planeta. De este modo, incluso los planetas que absorben pueden irradiar, dependiendo de cómo esté polarizado el propio individuo en cada momento. Cuando una persona experimenta una gran cantidad de energía, mayor de la que necesita en ese momento, la mayoría de sus planetas actúan como irradiadores y se convierte en un individuo que da a los demás. En el caso con13


trario, cuando una persona tiene en un momento dado menos energía de la que necesita habitualmente, sus planetas se vuelven absorbentes, tomando de los demás la energía que le falta. De hecho, ¡de vez en cuando el hombre tiene la facultad de controlar su propio campo magnético! Para entenderlo, considérese el planeta Venus, que está magnetizado negativamente y al que, en general, se le considera como absorbente. Sin embargo, cuando un individuo tiene, a través de todos los demás planetas, más energía de la que necesita en un momento dado, usará su Venus para irradiar amor a los demás. Esto mismo es aplicable a Marte, a menudo considerado como agresivamente masculino y egocéntrico. En las mismas circunstancias, cuando un individuo tiene más energía de la que necesita, utiliza a su Marte para transmitirla a los demás. Esto ocurre con todos los planetas. Momento a momento, día a día, cada planeta es en parte irradiador y en parte absorbente. Hasta qué punto uno de ellos ejerce un dominio sobre los demás en un momento dado de la vida de un individuo es lo que concierne a la astrología. Y el astrólogo intenta, con sus mejores habilidades, mostrar a los individuos cómo usar sus planetas en ambos sentidos. Cuando un individuo es capaz de utilizar todos sus planetas como irradiadores y absorbentes, cambiando sus polaridades según lo necesite, no le hace falta leer el horóscopo. Pero raramente existe un astrólogo que sea así. Generalmente, el individuo tanto es absorbente como irradiador, en mayor o menor proporción, según cómo combina y mezcla todas las energías planetarias de su carta. Para el profano, esto se define como tener problemas personales que no sabe cómo resolver. Para el astrólogo, es sólo una polarización de la energía magnética y, tan pronto como es posible enseñar a un individuo a comprender y desarrollar un control sobre sus propios campos de fuerza magnéticos, 14

Una experiencia en relatividad

¡muchos de sus problemas personales desaparecen milagrosamentel No hay duda de que los planetas retrógrados crean un campo de fuerza bastante diferente para el individuo en relación con los planetas directos. Ha sido esa falta de comprensión general de este campo de fuerza lo que ha llevado a tantos individuos a experimentar muchas dificultades personales en esta área. La tendencia general del individuo es intentar utilizar sus planetas retrógrados exactamente de la misma forma en que usa los planetas directos. Y cuando eso no funciona, empieza dividiéndose a sí mismo en varios estadios aislados que pueden convertirlo en un auténtico desdichado. Con los planetas directos al individuo le resulta muy fácil cambiar el énfasis de la energía planetaria hacia sí mismo en un momento dado, cuando la trayectoria de su energía total es mayor o menor. Sin embargo, cuando intenta hacerlo con sus planetas retrógrados, cae en una situación bastante diferente. En primer lugar, en un momento dado está yendo hacia la parte del umbral de los procesos retrógrados. Está: 1. Saltando fuera de sí mismo, tratando de vivir el futuro ahora. 2. En el proceso de vivir el futuro, teniendo la sensación de ya haber estado allí anteriormente. 3. Repitiendo mentalmente la primera fase, de modo que, en realidad, está reviviendo la mirada hacia el futuro que ya ha ocurrido. Cuando el individuo está en la primera fase (saltando fuera de sí mísmo para intentar vivir el futuro ahora), le resulta casi imposible emplear el planeta retrógrado negativamente, ya que está tratando de usar toda su energía para

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la propulsión del movimiento de avance. Así, durante esta fase, irradia de modo que puede magnetizarse a sí mismo hacia toda la gente y condiciones que le deparen experiencias futuras. Durante la segunda fase (cuando en realidad está viviendo la experiencia), no es consciente a menudo de la primera fase que, de hecho, la ha originado. Pero expetimenta más sentimientos de «déjalo correr» que los planetas individuales directos. En otras palabras, tiene la impresión de que ha experimentado esto antes, pero no sabe exactamente cómo, cuándo o por qué. Es esa ambivalencia la que crea una vibración cruzada allí donde opera negativa y positivamente al mismo tiempo. Palie de él está irradiando positivamente su deseo de completar la experiencia, mientras que la otra parte está buscando negativamente absorber y comprender por qué esta experiencia le parece repetitiva. Naturalmente, es durante esta fase que los demás comprenden menos al individuo. Finalmente, en la tercera fase, donde repite mentalmente la mirada hacia el futuro que ya ha vivido, se vuelve en una sincronización fuera de tiempo con el resto del mundo cuando intenta reabsorber a los individuos y las circunstancias que le devolverán a su pasado. Durante esta fase, es más comprensible, pero también drena más energía que los demás porque no está irradiando prácticamente ninguna energía al exterior. Resulta interesante advertir que las fases primera y segunda -el intento de vivir en el futuro y la vibración mutua de futuro-pasado- son tan íntimas del individuo que la astrología difícilmente las advierte como características del planeta retrógrado. En lugar de eso, la tercera fase del proceso retrógrado (el pasado persistente o característicamente repetitivo) siempre ha sido la más notable. Esto quizá ocurra porque esta fase final es en la que el individuo no sólo pierde más el tiempo, sino que también reacciona

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de un modo evidentemente diferente frente a la sociedad en general.

Planetas retrógrados y el factor tiempo A causa del triple proceso retrógrado, el individuo experimenta su vida en diferentes secuencias de tiempo, contrariamente a aquellas personas con planetas directos. De hecho, las etapas de su vida que están influenciadas podas planetas retrógrados son completamente diferentes de las que siente a través de sus planetas directos. Cuando la secuencia de acontecimientos transcurre en su mente en sentido contrario o en dirección distinta de acontecimientos de su propia vida, en realidad está rompiendo la barrera del tiempo. Dependiendo de la fase en la que se encuentre, está viviendo al menos parte de su vida en un tipo diferente de deformación temporal. Aquí, en esta asombrosa trascendencia del tiempo a través de los planetas retrógrados se halla la llave principal del karma.

Planetas retrógrados y karma Los planetas retrógrados no sólo llevan al individuo de regreso al día de ayer, al mes anterior y al año pasado, sino qlie también inducen hacia antiguas vidas cuyos recuerdos lleva fuertemente en su actual encarnación. Estos recuerdos representan acontecimientos específicos o individuales que fueron lo bastante significativos en otra vida como para estar ahora tan arraigados en la persona. En cualquier lugar del horóscopo en que aparezca un planeta retrógrado, el individuo no sigue adelante en la secuencia de tiempo paralelamente al resto de su carta. En

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lugar de eso, sigue tratando de resolver anteriores circunstancias que todavía parecen estar inacabadas. En estas áreas específicas de su vida no parece haber una demarcación entre una vida y otra. Estos recuerdos son también tan vívidos que ni siquiera los identifica como recuerdos, sino que, es más, cree que son el presente. Sin embargo, vive en una fase estancada de otra zona del tiempo cuyo irresistible magnetismo parece aun más importante que su vida cotidiana.

Planetas retrógrados que aparecen en los signos Un planeta retrógrado qU,e aparece en un signo adquiere todo el colorido de éste y dirige sus energías retrocediendo en el tiempo. El individuo revive en esta vida exactamente el mismo tipo de experiencias que ya han ocurrido en pasadas encarnaciones en relación con el planeta retrógrado en cuestión. Pero, por alguna razón, quizá profundos sentimientos de que la lección kármica no había terminado, o que no descubría la satisfacción personal de su parte más íntima, el individuo sigue llevando adelante esas mismas situaciones en esta vida. La verdad es que está intentando llevar su vida de regreso a una zona aún no resuelta. Y ya que la calidad de vida, así como el lugar de cada uno en ella, se basa en la percepción del mundo que le rodea, este individuo no está viviendo, de hecho, en la zona de tiempo presente con respecto a sus planetas retrógrados. Por esta razón, los astrólogos siempre han dicho que los planetas retrógrados no rinden en su mejor potencial. No es tanto que no funcionen bien como el hecho de que el individuo no los aplique demasiado en su vida cotidiana. En lugar de ello, intenta hacer encajar el mundo de hoy en sus conceptos del pasado. Obviamente, es este tipo de vida

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la que origina gran parte de la disarmonía que a menudo se atribuye a los planetas retrógrados. El triple proceso retrógrado, que no sólo opera en esta vida sino que también tiene tendencia a romper barreras temporales en otras vidas, actúa de un modo ligeramente distinto en cada signo. Por ejemplo, el individuo con Mercurio retrógrado en Aries que experimenta la primera fase (saltando en el tiempo fuera de sí mismo), se presentaría a sí mismo p~sitivamente, lo que es completamente armóqico con la cualidad marciana del signo. Durante la tercera fase (en la que retrocede en su procesos de pensamiento), estaría en completa disarmonía con la vibración de Aries. Quizá ésa sea la razón por la que personas con Mercurio retrógrado en Aries experimenten tanta tensión en sus vidas y raramente se sientan unidos a sus pensamientos y a la habilidad de exteriorizarlos. El individuo con Mercurio retrógrado en Tauro está en menor armonía consigo mismo durante la primera fase. El salto hacia adelante en el tiempo del retrógrado contradice totalmente las cualidades receptivas latentes del signo de tierra regido por Venus, que se sentiría más protegido en la seguridad experimentada durante la tercera fase, en la cual el individuo puede vivir hasta el final de su trayectoria de energía a lo largo de un camino que le resulta vagamente familiar. De este modo, con cada planeta retrógrado, el individuo está más acorde consigo mismo durante una u otra fase del triple proceso retrógrado, dependiendo en gran manera de la naturaleza del signo en que se encuentre aquél. Hasta ahora, la astrología ha tratado más sobre los efectos de los planetas retrógrados que con su proceso actual, pero es gracias a la comprensión de estos procesos que el individuo puede conocer por fin lo que está en armonía y lo que no y por qué.

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El pistoletazo de salida actual del proceso empieza en el momento en que el individuo experimenta su primer pensamiento dirigido hacia cualquier manIfestación. La duración de cada fase depende muchísimo del signo en el cual está situado el planeta. El hombre siempre intenta prolongar sus sensaciones de placer y acortar las de dolor. Así, es de esperar que cualquier fase del proceso retrógrado que esté más en armonía con el signo en el que se halla el planeta retrógrado se extienda más en el tiempo, y de este modo, aparentemente, ser visto como lo más característico del individuo. Al mismo tiempo, cualquier fase que esté menos armonizada con las características del signo no . sólo se manifiesta menos en el tiempo, sino que también refleja muchas de las quejas del individuo sobre su vida.

Planetas retrógrados que aparecen en las casas Cuando un planeta retrógrado aparece en una casa, enfoca el triple proceL retrógrado hacia el área de experiencias que la casa representa. El individuo intentará expresar y expandir en el tiempo aquella fase del proceso retrógrado que esté en armonía con las cualidades de la propia casa y también acortar en el tiempo aquella fase que esté en disarmonía con las áreas de experiencia de dicha casa. Consideremos un individuo con Venus retrógrado en la Casa décima. El planeta está más en armonía con la casa de la experiencia durante la tercera fase donde es posible repetir mentalmente lo que ya ha sido experimentado. Eso se debe a que la Casa décima simboliza un proyecto cristalizado, no tanto el trabajo hacia él como un cumplimiento de éste. Así, cuando el individuo es capaz de absorber magnéticamente el aprecio de sus semejantes por el trabajo bien hecho, está más en armonía con su Casa décima con Venus retrógrado. Y, en consecuencia, ello se verá como

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el significado más característico de esta posición planetaria para él cuando procure expandir esta fase de absorción en el tiempo. La expresión más negativa de Venus retrógrado en su Casa décima se encontrará cuando vaya hacia la primera fase retrógrada, el salto hacia adelante en el tiempo, tan poco típico de Venus y también totalmente disarmónico con el restrictivo Saturno que rige la Casa décima, donde puede encontrársele quejándose del gran esfuerzo que 1<,; espera. En consecuencia, durante la primera fase, donde manifiesta su Venus positivamente hacia un futuro constructivo, todo lo que puede ver ante él son los muros, aparentemente insuperables, de las experiencias saturninas. Quizá por eso desee tanto aprecio por el tiempo que en realidad está completando hacia la tercera fase. En esta particular posición planetaria, el individuo tiene sentimientos positivos durante la segunda fase, en la que avanza por terreno seguro hacia un objetivo específico. Como otro ejemplo, considérese al individuo con Marte retrógrado en la Casa duodécima. Durante la primera fase, Marte está en armonía consigo mismo, pues se afana en saltar hacia el futuro, pero al mismo tiempo está completamente en disarmonía con la casa de la experiencia, que está profundamente enraizada en el pasado. Durante la tercera fase, en la que el planeta retrogrado está evidentemente revisando experiencias pasadas, Marte está en total armonía con las cualidades futuristas del propio Marte. Durante la segunda fase, donde el individuo sobrevive a lo que ya ha vislumbrado previamente, la cualidad de Marte del deseo de acción es cumplimentado al mismo tiempo en que su cualidad de retrógrado (o carácter retrógrado) está de acuerdo con las cualidades de la Casa duodécima (del pasado). De este modo, la segunda fase es la que resulta más confortable para este individuo y, en consecuencia, es en ella donde intenta vivir durante más tiempo. Por consi-

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guiente, los demás le ven repitiendo en la acción muchos de los efectos del karma de su vida anterior. Y, si a la sociedad le gusta o no lo que hace, para él es con mucho el modo más confortable de vivir. Cuando intenta vivir en la primera fase, las experiencias de la Casa duodécima le empujan, lo que le hace sentirse demasiado incómodo en sus acciones presentes. Al mismo tiempo, al tratar de vivir en la tercera fase, lo encuentra demasiado difícil para absorber vibraciones magnéticas a través del activamente expresivo Marte. Pero es durante la segunda fase cuando queda atrapado en una vibración cruzada de fuerzas opuestas que es, lo crea o no, lo más acorde con la verdadera nauraleza de todo su ser.

Planetas retrógrados e individualidad Es interesante ver cómo los signos y las casas en que aparecen planetas retrógrados llevan al individuo a seleccionar qué fase del proceso retrógrado es más cómoda para vivir. Como resultado, diferentes individuos que tengan los mismos planetas retrógrados, pero situados en casas y signos diferentes, desarrollarán espontáneamente diferentes fases del proceso retrógrado. Por lo tanto, los individuos con los mismos planetas retrógrados pueden actuar de forma diferente. Es por esta razón que la verdadera naturaleza de los planetas retrógrados ha sido tan ilusoria durante tantos años; como algo inherente en ellos, hay un incomensurabIe número de elecciones por las cuales puede llegarse a expresiones originales. En un sentido bastante literal, la combinación de doce posibles casas con 360 grados para un mismo signo, el planeta que está retrógrado nos deja con una posibilidad más restringida. Y así es como aproximadamente uno de cada cuatro mil trescientos veinte indi-

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viduos es probable que use un planeta retrógrado exactamente del mismo modo que otro individuo. Naturalmente, esto hace muy difícil el trabajo de interpretación por parte del astrólogo, así como explicar más gráficamente por qué durante tantos años los planetas retrogradas permanecen en el dominio de lo desconocido. Pero, en un sentido más realista, señala de nuevo la libertad que un individuo conserva al elegir cómo usar sus planetas en su vida personal.

Planetas retrógrados y dimensiones múltiples Para comprender en su totalidad la naturaleza de los planetas retrógrados, es importante comprobar que éstos· operan a través de múltiples dimensiones al mismo tiempo. Primero, el individuo experimenta el triple proceso retrógrado, que tiene una fuerte tendencia a expulsarle de la sincronización con el momento presente. Pero al mismo .tiempo que pasa por una de las fases de este proceso, también intenta corrregir el karma de otra vida. De este modo, tanto está detrás como delante de sí mismo en esta vida mientras todavía pueda haber una parte de sí mismo que aún no esté en esta vida. Además de esta falta de sincronización con el tiempo cronológico, que en sí mismo sería suficiente para trastornar a muchos individuos, también experimenta discretamente, en otro plano, una orientación muy particular en el espacio.

Planetas retrógrados y el factor espacio Una persona en la primera fase del proceso retrógrado (saltando hacia afuera de sí mismo para intentar hacer que el futuro ocurra ahora) trata de presentarse a sí mismo des23


de un punto de vista magnético tan positivo que actualmente se mueve en el espacio mucho más cerca de las cosas y de la gente, que el individuo sin planetas retrógrados. Es precisamente durante esta fase que interfiere en las auras de los demás, interrumpe el final de las frases de la gente y literamente ruega, toma prestado o roba toda sustancia en la forma que crea necesaria para su experiencia. Todo el mundo tiene un espacio psíquico personal a su alrededor, y que es privado hasta el punto que una irritación en potencia se pone de manifiesto cada vez que dicho espacio es violado por los demás. Para comprobarlo, la próxima vez que se halle en un restaurante con otro individuo, intente deslizar un cubierto hasta el centro imaginario de la mesa, de la forma más sutil posible. Observe la reacción del individuo con quien está cenando cuando él o ella sienta que está invadiendo un espacio psíquico que no es el suyo. Eso es 10 que suele pasar con un individuo cuando experimenta la primera fase del proceso retrógrado. En tantas maneras como le sea posible, estará expandiendo su propio espacio psíquico. Es durante este período que se muestra ofensivo y agresivo con aquellos que le rodean. En la segunda fase, donde vive activamente toda la información y espacio que ya ha cartografiado para sí, se preocupa menos por llevarse bien con los demás. Pero en el momento en que entra en la tercera fase, donde mira atrás con expectación hacia un futuro que ya ha pasado, se vuelve extraordinariamente introvertido. Al encerrarse en sí mismo, utiliza cada vez menos espacio a 10 largo de este período, y no puede entender por qué los demás emplean tanto. De hecho, durante este tiempo el individuo se aparta de los demás, y aquí tenemos 10 que se ha calificado durante tantos años como la característica más notable del comportamiento del planeta retrógrado. Sin embargo, mientras regresa a su pasado, también absorbe las radiaciones de todo cuanto le rodea. 24


Y, aunque proteste contra esa absorción, la necesita para alumbrar el momento en que entrará en una nueva experiencia de primera fase en la que empezará a irradiar energía otra vez ya expandir tiempo y espacio.

Planetas retrógrados y la ley de la relatividad Dado que las diferentes concepciones del tiempo de los planetas retrógrados también llevan al individuo a experi~ mentar percepciones variables con el tiempo, la experiencia última de la vida siempre es especialmente distinta de lo que podríamos llamar la norma. De acuerdo con las leyes de la relatividad, en el universo nada existe por sí solo, sino que de algún modo opera siguiendo las leyes de todo aquello con lo que está conectado. Así, las ruedas de un coche se mueven proporcionalmente a la presión ejercida sobre el pedal del acelerador. Al mismo tiempo, la tierra parece moverse en relación a las ruedas, y así sucesivamente en todo el universo. Así como los individuos con planetas directos tienen su percepción del espacio y del tiempo, ya través de ella viven su vida, el individuo retrógrado* tiene sus relaciones espaciales y temporales. Pero su percepción de estos planos de existencia es diferente a la del individuo sin planetas retrógrados. De hecho, su orientación en el tiempo y el espacio a través de los planetas retrógrados también es diferente a la orientación espacio-temporal que siente en otras partes de sí mismo mediante sus planetas directos. Una parte de él es relativa al universo en un sentido, mientras que otras partes son rela-

* Individuo retrógrado: Este término, usado con frecuencia a lo largo de este libro, hace referencia a aquel individuo que tiene tres o más planetas retrógrados en su carta natal, cualquiera de sus planetas interiores retrógrados o incluso un solo planeta retrógrado situado cerca del ascendente o del medio cielo. 25


tivas al universo de otras muchas maneras. Es importante destacar que el universo actúa sobre él en gran medida, de acuerdo con los modos en que él lo percibe relativamente. Algunas personas perciben el mundo entero mediante los ojos de la materia, la sustancia y la forma. Otros ven el mundo a través de la ventana del espíritu. Y aún otros pocos sienten su relación con el mundo que les rodea gracias a la visión de su alma. La mayoría de la gente experimenta una mezcla de todos ellos, con predominio de uno u otro sobre los demás según el momento. El planeta retrógrado, con las poderosas lecciones kármicas que conlleva a lo largo de esta vida, tiende a enfatizar el lado material o formal de la vida conduciendo al hombre hacia los rincones más primitivos de sí mismo, donde su lucha por la supervivencia entre las condiciones y la gente que le rodean predominan sobre la satisfacción de su alma. Eso se hace más intenso en el caso de los planetas retrógrados internos (Mercurio, Venus y Marte), mediante los cuales el hombre se relaciona con las partes más íntimas, personales y privadas de sí mismo con las que ha estado luchando desde el principio de los tiempos. Y mientras es absolutamente cierto que cuando el hombre se mueve de una fase del proceso retrógrado a otra, tiende a cambiar ligeramente su énfasis entre materia-espíritu-alma, debería acordarse de que el alma y el espíritu están por encima de las leyes del karma. Así pues, siempre queda un residuo de sustancia y materia (particularmente etérica) en todas las fases retrógradas. Estas huellas de materia etérica o astral, que casi siempre acompañan la expresión de planetas retrógrados, contienen la información para la satisfacción kármica. Y, dado que la materia está implicada en ello, uno siempre siente los planetas retrógrados de otro individuo como ligeramente o, en ocasiones, inusualmente más pesados que los planetas directos. Es por ello que los individuos que se muestran a sí mismos a través de sus planetas retrógrados

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tienen una tremenda habilidad para causar una fuerte impresión sobre sus oyentes. La persona a la que están hablando puede optar por ignorar momentáneamente sus palabras, pero es difícil ignorar la materia etérica o astral que las acompañaba, y que mantendrá grabado el mensaje en la memoria del individuo hasta que esté lo bastante preparado como para aceptarlo o descartarlo, basado en futura información que vaya acumulando sobre ello. Por esta razón, las formas de pensamiento en un individuo retrógrado son raramente intensas, y especialmente durante la pri- ' mera fase, en la que son aumentados y expulsados con algo de fuerza, se vuelven particularmente difíciles de llevar, j a pesar de que la tendencia natural debida al modo en que se expresan es hacer precisamente eso!

Planetas retrógrados y evolución No todo el mundo tiene planetas retrógrados, pero existe más gente de la que uno cree. Hay estudios que demuestran que aproximadamente un 92 por ciento de la población mundial tiene por lo menos un planeta retrógrado, y no es extraño que llegue a tener hasta tres. Dado que estos planetas tienen la capacidad de «adelantar» el pasado y de volverlo de nuevo hacia atrás, resulta evidente que representan, a nivel cósmico, el hilo de la continuidad de la humanidad entre el presente y el pasado evolutivo de toda la raza.

Planetas retrógrados y sexualidad Los planetas retrógrados son unos de los principales causantes de los problemas sexuales en el mundo actual. La riqueza y satisfacción sexuales se basan casi por com27


pleto en la conciencia de dos individuos que se encuentran y armonizan en todos los niveles del espacio y del tiempo. El individuo que tiene un planeta retrógrado influyendo en su sexualidad no puede experimentarla en total armonía. Dado que siempre se encuentra en una u otra fase retrógrada, sus percepciones espacio-temporales le impiden experimentar completamente el aquí y el ahora. Los hombres con Venus retrógrado tienden, en lo más profundo de su ser, a sentirse mejor evitando al sexo opuesto. Al mismo tiempo, las mujeres con Marte retrógrado experimentan dificultades similares al relacionarse con los hombres. Cuando Mercurio o Urano aparecen corno planetas retrógrados, una sobreactividad del triple proceso retrógrado en el plano mental trastorna la sexualidad. En estos casos, el individuo se .encuentra demasiado activo mentalmente corno para sentir una riqueza sexual equilibrada en su contexto físico y emocional. Cuando Plutón es retrógrado, la actividad sexual se basa en recuerdos de anteriores vidas sexuales enterradas en lo más profundo del inconsciente. Así, mientras un individuo vive el presente, su naturaleza sexual puede reflejar las preferencias y moralidad a las que estaba acostumbrado en un período anterior, y generalmente menos evolucionado, de la historia. Es importante señalar aquí que la heterosexualidad normal arranca de un estado magnético, sumamente polarizado, de energías opuestas que tienden a la neutralidad en su culminación. La homosexualidad, o el experimentar dificultades con el sexo opuesto, es el resultado de energías de neutralidad semejante que atentan contra la sexualidad estableciendo una serie polarizada de energías magnéticas opuestas. Ya que éstas se atraen, es obvio que el ser homosexual debe crear más de una necesidad para expresar su sexualidad, mientras que en los heterosexuales

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ello puede acarrear una mayor satisfacción gracias a la neutralización de energías. Ahora, no hay duda de que un individuo puede tener muchos planetas retrógrados y no ser homosexual. Pero el individuo que experimenta una influencia retrógrada en su sexualidad tiene que pasar por las tres fases retrógradas. En la primera fase, sobrerreacciona ante la expectativa de verse involucrado en una relación sexual, sobre todo precoz y desproporcionadamente, de acuerdo con la realidad futura. Luego, es atrapado en la vibración cruzada de l'a segunda fase, donde el acto se transforma en algo así como un fraude, puesto que ya lo ha experimentado en la conciencia (yen algunos casos incluso puede ser impotente porque ha consumido demasiada energía esperando). Finalmente, se asusta de sí mismo durante la tercera fase, en la que se da cuenta de que ha sobrepasado sus propios límites; y entonces, tímidamente, vuelve sobre sus pasos hacia sí mismo. Literalmente, ha pasado de una extroversión durante la primera fase a una total introversión durante la tercera fase. En muchos casos, el fracaso sexual, sea homosexual o heterosexual, se debe a este tipo de influencia retrógrada. * Si el triple proceso retrógrado, que causa deformaciones de espacio y tiempo, no bastara para confundir al individuo con muchos planetas retrógrados, existe aún otro factor bastante común: el replegamiento de las energías que, por naturaleza, se proyectan hacia el exterior. Cuantos más planetas retrógrados tiene un individuo, más crece su introspección, y más desarrolla en su interior otra vida diferente que, a menudo, puede oponerse a la que tiene que exteriorizar en bien de la sociedad, cuya aceptación necesita. Todo lo que comprende sobre sí mismo y sobre el mundo está frecuentemente más allá del conocimiento de los demás.

* Véase Astrology of Sexuality, de M. Schulrnan, Sarnuel WeiserInc.

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Cuando las energías que normalmente se proyectan hacia el exterior se vuelven hacia adentro, el individuo empieza a personalizar el universo fuera de sí mismo. De algún modo le cuesta distinguir realmente dónde termina él y dónde empieza el universo exterior. En consecuencia, a menudo se hace daño a sí mismo al tomar para sus adentros más de lo que debe. Al comprobar sus sentimientos hacia el entorno, va construyendo un muro a su alrededor. Entonces, una vez recluido tras ese muro, corta en seco con todos sus problemas, pero no puede comunicar necesariamente lo que sabe a quienes viven en el mundo exterior del que ha decidido apartarse. Su contacto más fuerte con la sociedad se produce durante la primera fase, en la que que se proyecta a sí mismo en un intento de alcanzar, más adelante y más allá, su experiencia de la vida cotidiana.

Planetas retrógrados y proyección del pensamiento Uno de los aspectos más fascinantes de los planetas retrógrados tiene lugar a nivel inconsciente. El individuo proyecta las energías de sus planetas retrógrados sobre cada persona con la que se comunica, pero lo hace de un modo tan sutil que resulta prácticamente invisible a la conciencia del observador. En realidad, desliza imperceptiblemente pensamientos telepáticos en la identidad de la persona con la que está hablando. Y mientras parte de él permanece en sí mismo, otra parte se sitúa en el espacio psíquico de su interlocutor. Por un momento, el otro individuo pierde su propia identidad y empieza a asumir ideas y deseos del individuo retrógrado como si fueran suyos. Mientras tanto, lo que ocurre es que la persona retrógrada está realmente hablando consigo misma. 30


Si tiene el kanna de no querer tratar con él, entonces procura realimentarse a sí mismo a través de la otra persona, que se convierte así en un espejo. Por desgracia, no suele darse cuenta de ello, y cree que es la otra persona quien origina una expresión negativa. En aquellos casos en que el individuo retrógrado tiene un karma muy positivo o elevado en sus planetas retrógrados, puede transferir la conciencia que ha adquirido de otros individuos mediante este proceso de proyección del pensamiento. De este modo, puede convertirse en un profesor místico en niveles muy subliminales. Sin embargo, debemos contestar una pregunta: ¿Cuánto dura esta yuxtaposición antes de que cada individuo vuelva a asumir completamente su identidad original? En el caso en el que aparezca el intercambio de karma negati~ va, ello dependerá exclusivamente de cuánta buena voluntad del individuo no retrógrado asuma. Y en el caso de intercambio de karma positivo, estará en función de cuánto tiempo sienta el individuo que necesita cualquier conocimiento que haya recibido. En ambos casos, la transferencia de karma suele durar hasta que el individuo alcanza su propia verdad sobre la materia, y una vez lo consigue, tanto si el intercambio era negativo como positivo, puede volver a asumir su propia identidad enriquecida por la experiencia. Es interesante destacar cómo tienen lugar en realidad estas proyecciones de pensamiento. Mediante las palabras o acciones del individuo retrógrado, la persona no retrógrada empieza a experimentar lo que cree que son sus propias emociones, sean de entusiasmo, alegría, dolor o tristeza, referentes a la naturaleza del tópico del pensamiento que se proyecta. Una vez el individuo empieza a sentir algo a nivel emocional, piensa, lógicamente, que se trata de sus propias emociones y, por lo tanto, debe actuar en consecuencia.

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De este modo, está claro que todo el proceso de proyección de pensamiento sólo funciona cuando es posible una «identificación» inconsiente entre dos personas. En realidad, de esta forma se intercambia una gran cantidad de karma, y si de veras libera a la raza humana de un dolor y trabajo mayores de los que que realmente necesita es algo a lo que sólo Dios puede responder. Pero desde un punto de vista individual, eso da a la persona la oportunidad de decidir, consciente o inconscientemente, cuánta ayuda exterior quiere aceptar para resolver sus problemas internos o cuántas interferencias está dispuesto a recibir para que actúen como un revulsivo que le permita ver con claridad. En el fondo, debe decidir por sí mismo. Como nota interesante, diremos que, con algo de práctica, un astrólogo puede llegar a conocer exactamente, a nivel instintivo, los planetas retrógrados de un individuo gracias a las parte de sí mismo que le parezca haber perdido al hablar con el individuo.

Planetas retrógrados y pensamientos obsesivos El triple proceso retrógrado hace que el individuo reviva todo lo que experimenta. Ello tiende a atrapar la mente en una constante repetición, a modo de «eco», de modelos de pensamiento. En un intento de hacerlo comprensible, la persona puede verbalizar todo lo que le molesta de los demás pero, al hacerlo, crea aún más circunstancias susceptibles de repetirse en el futuro. De este modo, la cadena se hace interminable. Así, es más fácil que el planeta retrógrado sea el instigador de pensamientos o acciones posesivas que el hecho de que dicha conducta provenga de un planeta directo. Este efecto del proceso de pensamiento del planeta retrógrado es particularmente evidente en la constante repe32


tición de fobias neuróticas, de los que ellos mismos se hacen eco años después de que el objeto atemorizador ya no esté presente en la vida de una persona. Resulta interesante ver cómo a los individuos con Neptuno retrógrado les asustan las grandes masas de agua, siendo hipnotizados y profundamente enredados por algo cuyo resultado no es muy claro. Al mismo tiempo, las personas con Plutón retrógrado· suelen tener inhibiciones sexuales inconscientes, acompañadas de un temor a la muerte tal que no les permite disfrutar de la riqueza de la entrega sexual. A un Satur-' no retrógrado no le atraen los espacios cerrados, mientras que un Júpiter retrógrado a veces muestra acrofobia (miedoa los espacios abiertos). Lo interesante de los planetas retrógrados es que en cualquier papel que jueguen, estimulando y haciendo perdurar fobias, también representan el modo más fácil de curación. Todo lo que el individuo necesita saber es que cualquier cosa que piense en relación a sus temores no es más que la repetición del eco de un pensamiento anterior, y que es completamente libre para no reaccionar ante tal eco. Cuando se da cuenta de ello, es posible una conducta completamente nueva. Pero cada vez que el individuo se permite a sí mismo reaccionar ante el eco de un miedo lejano, crea una nueva experiencia que sólo origina futuros ecos mediante el proceso de repetición del planeta retrógrado. Evidentemente, esto dificulta la superación del miedo. De esta forma, muchos hábitos tienen sus raíces en los procesos retrógrados. El individuo sigue respondiendo a los ecos de antiguos pensamientos, pero cree que siempre está respondiendo al pensamiento original. Y cada vez que lo hace, convierte al eco en la experiencia original, porque cree que es así. Esto sólo le hace susceptible de responder a los ecos futuros de un mismo pensamiento. Muchos fumadores tienen a Neptuno retrógrado en sus cartas, y todo lo que tienen que hacer para romper con el hábito de fu-

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mar es dejar de reaccionar ante los ecos de las imágenes que relampaguean rápidamente delante de ellos antes de coger un ciganillo. Al vencer ideas, sentimientos u opiniones negativas, que tienen lugar como resultado de los procesos retrógra- . dos de repetición, todo lo que los individuos tienen que hacer es negarse a convertir su realidad en ecos. Con el tiempo, éstos desaparecerán, yen su lugar descubrirá que puede controlar verdaderamente su propia persona.

Planetas retrógrados y crecimiento espiritual Lo más asombroso de los planetas retrógrados es que todos los problemas personales que hacen que el individuo experimente en su vida privada son las claves espirituales hacia la resolución de entidades de pensamiento kármico. Todos nosotros experimentamos dualidades en nuestros sistemas de identidad. Una parte de nosotros es el «yo», mientras que otra parte -la parte social, tradicional y 10 que nuestros padres nos han enseñado- es el «no-yo». Sin embargo, debido a nuestra formación ya un deseo de aceptar el mundo exterior de las apariencias, esta identidad del «no-yo» es bastante fuerte en algunas personas. No sólo origina actitudes críticas, miedos e inhibiciones, sino que casi induce y reta a la identidad del «yo» a expresarse a sí mismo. En el momento en que un individuo es consciente de estas dos partes de sí mismo y aprende a separar todo lo que ha sacrificado para construir su identidad del «no-yo» desde su auténtico «yo», ha dado el primer paso adelante en la comprensión de su verdadera naturaleza cósmica. La gente con planetas retrógrados tiene una gran habilidad para ver diferencias entre ellos, ya que a través de la naturaleza introspectiva del planeta retrógrado (mediante cual34


quier planeta o casa de experiencia que represente) empiezan a alcanzar su indentidad del «yo». Mientras tanto, el mundo exterior de tradición y apariencias se encuentra con dificultades para comprender a esta supuesta «oveja negra», debido únicamente a las diversas ideas y filosofías que el individuo tolera. Del mismo modo, una persona difícilmente contactará con quien no es secretamente envidioso (en su identidad del «yo») del individuo que realmente ha dejado de vivir la vida del «no-yo». Así, a través de los planetas retrógrados de uno mismo, uno puede convertirse, en último término, en su propio gurú mediante la enorme autoconciencia que emerge en el instante que la identidad del <
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SEGUNDA PARTE:

LOS PLANETAS RETRÓGRADOS

1. MERCURIO RETRÓGRADO Mercurio retrógrado como símbolo esotérico Tradicionalmente, se ha atribuido a Mercurio el papél de regente de todas las formas de comunicación. Su símbolo ( (( ), formado por el círculo del espíritu descansando entre la media luna del alma y la cruz de la materia, muestra que el hombre consigue la unión entre estas tres partes esenciales de sí mismo comprendiendo cómo se integran en toda su expresión creativa. La media luna, que aparece en la parte superior, simboliza el alma que se vierte activamente hacia el espíritu, el cual, a su vez, lucha por manifestarse empujando hacia abajo sus ideas hasta la cruz de la materia. Para que se realice este proceso, el hombre debe llegar a comprender que todo conocimiento proviene de un plano más alto que se va desplazando hacia un nivel más inferior. Cuando el hombre está en armonía consigo mismo, todo el saber que se origina en su alma, y que luego penetra en su espíritu, busca su expresión externa a través de las acciones de su cuerpo y sus respuestas al conjunto de formas que ve en el mundo que le rodea. De este modo, la expresión del hombre depende sobremanera de su percepción de las cosas, así como de su espíritu o su cuerpo. Y la percepción está principalmente bajo el dominio de la normativa de Mercurio. Como tal, el hombre puede usar su Mercurio para experimentar su alma, expresar su espíritu o satisfacer las necesidades de su cuerpo. Puede manifestarse activamente basándose por completo en su esencia divina y de ese modo 39


ver el mundo entero como la experiencia del alma en todas las cosas. También puede intentar manifestarse a través de su espíritu, y así colorear su percepción del mundo que le rodea como un vívido caleidoscopio de la vida en movimiento. 0, como tercera posibilidad, puede tratar de usar toda expresión en términos de satisfacción de sus necesidades físicas. De este modo, puede ver el mundo a su alrededor como material y físico. Todos los hombre pueden hacerlo. Pero la mayoría de los individuos designa un modo de expresión como superior frente a los otros dos. Cuando Mercurio aparece retrógrado, la prioridad natural del alma sobre el espíritu y de éste sobre la matelia se invierte. Al individuo le interesa más su estilo de vida, así como el comprender la forma de todo lo que le rodea. Así, mediante su percepción de si tal forma encaja o no con las ideas de forma que ha establecido en sí mismo a través de anteriores encarnaciones, reacciona en espíritu. Finalmente, cuando ha satisfecho la forma, y el espíritu está activado, logra la satisfacción con la forma y se permite a sí mismo experimentar su alma. Es esta trinidad de alma, espíritu y materia la que hace de Mercurio el planeta más importante en términos de cómo percibe el individuo su experiencia global de la vida.

La personalidad de Mercurio retrógrado Cuando Mercurio aparece retrógrado en el horóscopo, la mente consciente del individuo es capaz de grabar ideas en la conciencia universal desde épocas pasadas. Generalmente, no se da cuenta de ello, pero sí de que no puede hacer comprender fácilmente a los demás todo lo que sabe. Eso es debido, en parte, a la inversión del símbolo de Mercurio, donde la importancia de la materia predomina sobre

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Mercurio retrógrado

el espíritu y el alma. Ello hace que el individuo se preocupe de la forma de sus ideas, lo que constituye un bloqueo para la esencia de su conocimiento. Además, hablando en términos de vida mental, su longitud de onda es ligeramente diferente a la del resto de la sociedad. Los procesos de pensamiento tienden a repetirse como un disco rayado, yen consecuencia la mayoría de las cosas que crea son de distintas clases y formas, copias en papel carbón de lo que ya se ha hecho. Al hablar, le cuesta proyectar con exactitud las imágenes telepáticas que representan el significado de sus pensamientos. Por eso, a menudo se siente incomprendido y se pregunta si los demás no ven las cosas como él. Se siente más apartado de la sociedad de lo que lo hace una persona con Mercurio directo. En consecuencia, intenta desesperadamente entrar en contacto con los demás, de manera que a menudo enfatiza sus ideas hasta el punto que éstas llegan a convertirse en una molestia para quienes le rodean. Incómodo en compañía, intenta afanosamente ganarse la aceptación de los demás. Pero al menor indicio de rechazo puede rendirse muy fácilmente. Al final, comprende que su seguridad consiste en crecer de forma más distante e impersonal que la gente con Mercurio directo. Los demás suelen interpretar esta actitud como «frialdad», pero no es más que la vibración de Mercurio retrógrado, que es obviamente disarmónico con vibraciones de movimiento directo. Bajo ese muro aparente, este individuo es mucho más sensible de lo que muchos imaginan. Una vez se ha cruzado la barrera de la comunicación, existe una gran perspicacia derivada de Mercurio retrógrado. Para facilitar las cosas, el individuo retrógrado no intentaría hacer encajar la forma de su vida en las ideas y opiniones de los que están a su alrededor. En lugar de eso, se encontrará más a gusto mostrándose agradecido debido a su forma especial de ver las cosas.

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Resulta interesante destacar que ha habido muchos grandes genios de la música con Mercurio retrógrado. Quizá su conciencia de las dificultades del lenguaje hablado les llevó a otra forma de comunicación que tiene una mayor libertad y niveles más sutiles de expresión mental y emocional. En áreas en las que se requiere concentración, este individuo puede ser un excelente estudiante, aun cuando le lleve algún tiempo entender ideas y principios. Al final, conocerá el tema más ampliamente y con una mayor profundidad que los individuos con Mercurio directo. Eso ocurre porque, literalmente, él no ignora nada. En áreas de conocimiento, es incapaz de saltarse cualquier punto que le deje intrigado. A pesar de la impaciencia de los demás compañeros de su clase, volverá a insistir repetidamente en algunas cuestiones anteriores hasta que la respuesta quede clara. Es muy bueno en historia, donde el estudio del pasado de la naturaleza humana le permite conocer cómo puede actuar uno en el futuro. Amante de enseñar a los demás bajo sus diferentes puntos de vista, tiene la facultad de hacerle caer en la cuenta a uno de antiguos detalles que son necesarios en la actualidad para recoger y ensamblar las piezas de un rompecabezas que de otro modo se perderían. Para ello, parece ir siempre contracorriente, lo que le lleva a no ser comprendido por quienes están cerca de él. Esto causa nerviosismo e irritabilidad cuando demasiada concentración desencadena sentimientos de separación de aquellos a quienes quiere acercarse. Dado que se inspira en desechadas, aunque útiles, ideas del pasado, tiende a entrar en contacto con aquellos individuos que se precipitan hacia el futuro tan de prisa que se han dejado algunas piezas tras ellos. Él puede llenarles este vacío tan pronto como se detengan para escucharle.

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Al tratar con diferentes períodos de tiempo a la vez, el individuo con Mercurio retrógrado actúa como embudo e intérprete. Siempre existe un poderoso mensaje, pero procurará no comunicarlo a menos que se sienta aceptado en ese momento. En el terreno de la sexualiad, esta posición dificulta el establecimiento de una comunicación serena con el sexo opuesto. En algunos casos puede indicar homosexualidad, especialmente si se halla en conjunción o cuadratura con Marte, Venus o Neptuno, o si se encuentra en la Casa óctava formando cualquier aspecto con Urano.

El karma de Mercurio retrógrado El individuo con Mercurio retrógrado experimenta un karma no resuelto en las relaciones. Tiene tendencia a comportarse con los demás como si representaran personajes de su pasado. Así, le resulta difícil mantener todo el énfasis de su conciencia en el «aquí y ahora». Generalmente, sus dificultades se ponen de manifiesto con la familia. Pero la cuestión de las relaciones va más allá de cómo se comunica uno con la gente. A menudo existe un problema inherente a Mercurio retrógrado en términos de ver lo que podríamos denominar una realidad invertida. El individuo tiene dificultades para comprender la relación más básica entre causa y efecto. Se cuestiona la esencia misma de la vida, de modo que a menudo no puede ver los vínculos más sencillos entre las cosas, las circunstancias y la gente. Perdido en los pensamientos que están más allá de su comprensión, debe aprender a contentarse con las bases más simples sobre las que se fundamenta la vida. De lo contrario, se empeñará tanto en descubrir lo que está más allá del conocimiento que casi omitirá lo que es obvio. 43


Desde un punto de vista kármico, este individuo debe aprender cómo centrar su atención en la realidad del presente más que perderse en todas las capas transparentes que percibe. Una vez hecho esto, será capaz de establecer un firme punto de referencia en el aquí y ahora a través del cual todos los descubrimientos que haga puedan expresarse en el mundo exterior.

Mercurio retrógrado en Aries Aquí el individuo se encuentra más cómodo a lo largo de la primera fase, donde su sed de conocimientos le precipita hacia lo cardinal, cualidades marcianas de Aries, de modo que vuelve a experimentar una parte primitiva del desarrollo de su mente a partir de antiguas encarnaciones. Todo su pensamiento y modelos sensoriales reflejan sus deseos casi infantiles de demostrar su competencia mental. Falto de paciencia, a menudo emite juicios pobres mediante su pensamiento impulsivo. Eso le pone en una situación de desfase respecto a la mayoría de las personas con las que habla. Sin embargo, este individuo es un buen discutidor, que disfruta con el reto del estímulo mental. Eso le impide mostrarse honesto consigo mismo, aunque las razones para que se crea inadecuado no provienen de esta vida. Preguntándose constantemente si es lo bastante bueno a los ojos del mundo, se apresura en demostrar que puede encontrar los retos de su pasado. Curiosamente, los individuos cuyo conocimiento quería en un principio, ya no están en la imagen. Mercurio retrógrado está en menor armonía con el signo de Aries durante la tercera fase, en la que el individuo retrocede en conciencia para volver a experimentar lo que ya ha vivido. Es por ello que este individuo odia repetirse

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y no hace más que quejarse de tener que vivir en un mundo que echa a perder su estímulo intelectual reconsiderando constantemente aquellas acciones que ya ha completado.

Mercurio retrógrado en Tauro En este caso, el individuo se siente más a gusto en la segunda fase, donde las absorbentes cualidades de un Tauro regido por Venus le permiten morar en la segura comodidad de comprender un pasado que ya ha vivido. Es un pensador lento y cauteloso. E incluso después de haber terminado una acción, vuelve a retroceder mentalmente hacia ello para asegurarse de que tenía razón. Algunas veces, se fija en un pensamiento durante tanto tiempo que la idea se convierte, de hecho, en una obsesión. Es siempre consciente tanto de los sentimientos del lenguaje como de su interpretación mental. Y, en un esfuerzo por comunicar dichos sentimientos, dará a las palabras una importancia más egoísta de la que puedan tener en realidad. Siendo ésta su cualidad más negativa, es característica de la primera fase, en la que se encuentra menos cómodo. No le gusta convencer exteriormente a los demás, si bien puede haber exagerado sus sentimientos para darse importancia, en realidad es muy introvertido. Sin embargo, este individuo tiene grandes aspiraciones para lograr un crecimiento mental, y está dispuesto a trabajar duramente para conseguirlo. Esquiva todo aquello que resulta fácil, y prefiere seguir un largo, seguro y monótono camino. Su preocupación por el dinero y su miedo al futuro son símbolos kármicos de problemas que ya ha vivido en el pasado. Ahora, está reviviendo todas sus ideas de inseguridad en un intento de autoconvencerse de que está seguro. A menudo se habla a sí mismo de modo que el oír el sonido 45


de su voz interior le haga volver a creer en su propia seguridad. Le gusta pensar que todo lo que ha vivido ha sido lógico, práctico y parte de un proceso de crecimiento que tiene un sentido para él. Quizá su mayor fuerza, procedente de anteriores encarnaciones, estribe en que sabe ser un constructor de forma, y puede ser sumamente edificante para otros individuos durante la primera fase, en la que manifiesta sus ideas únicamente a aquellas personas que necesitan saber cómo unir las suyas.

Mercurio retrógrado en Géminis Aquí, el individuo experimenta la cambiante adaptabilidad de Géminis cuando actúa con Mercurio retrógrado moviéndose a lo largo de sus tres fases. A causa de la naturaleza dual de este signo y de su intensa búsqueda del saber, así como de una mutabilidad camaleónica que depende de las influencias externas, este individuo es capaz de sentirse cómodo en todas y cada una de las tres fases retrógradas. En realidad, se halla en diferentes niveles de pensamiento al mismo tiempo. Su capacidad para experimentar diferentes frecuencias de pensamiento simultáneamente le permite rebatir la hipocresía mejor que en cualquier otra 'posición zodiacal. También puede ser un excepcional y ágil comunicador aunque a veces sus pensamientos parezcan algo inconexos. Eso se debe a que, aunque le cueste ordenar las cosas, tiene la facultad de ver instantáneamente la esencia de una idea. Es bueno escribiendo música y poesía, pero a menudo se adentra en un laberinto mental para intentar comprobar los poderes de su pensamiento. En algunos casos, existen residuos de vidas anteriores en su relación con un hermano o hemana. Y, cuando las

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dificultades obvias en esa área continúan en la presente vida, aún sigue tratando de resolver la anterior encarnación a través de los actuales actores. Su karma en sus relaciones con los demás y todo por lo que pase a lo largo de su vida son parte de su aprendizaje para comprender la naturaleza de la dualidad que hay él. Su mayor fuerza reside en el hecho de que es un estudiante nato, ya pesar de que le lleve más tiempo que a los individuos con Mercurio directo aprender algo, finalmente lo comprenderá en un nivel más profundo. '

Mercurio retrógrado en Cáncer Con esta posición, el individuo experimenta su mayor armonía durante la tercera fase, donde puede absorber la conciencia de los demás individuos que le hacen volver a representar a través de su memoria los pensamientos que todo aquello que ya ha experimentado. Su mente y sus emociones están tan entrelazadas que todo pensamiento crea un sentimiento y todo sentimiento crea un pensamiento. Ambos están tan profundamente arraigados en la experiencia anterior que sigue intentando recrear su niñez. A causa de ello, la educación es importante, deberá llevar consigo como un residuo muchas experiencias de la infancia a lo largo de toda su vida. Esta persona es emocionalmente sensible y necesita libertad de pensamiento y estabilidad emocional al mismo tiempo. Éste es un equilibrio difícil de conseguir, puesto que si tiene que contar con el apoyo de los demás para su seguridad, pierde su libertad de pensamiento y también la seguridad emocional que se ha ganado apoyándose en los demás. La solución más fácil para él es crecer emocionalmente siendo posesivo con sus pensamientos, que, por desgracia, le comportan muchos complejos neuróticos que 47


se siente incapaz de pasar por alto. Es muy difícil para él enterrar el pasado e ir adelante, hacia el futuro libre y claro. Puesto que es más propenso a analizar sus sensaciones que a dejarlas correr, en realidad puede intensificar estados emocionales negativos, haciéndolos mayores de lo que son en realidad sin darse cuenta siquiera. Desde el pasado, ha traído consigo a esta encarnación muchas ideas de dependencia. Y es a través de tales ideas que continúa haciendo papeles de niño-padre con todo aquel con quien se relaciona. Al buscar tanto la satisfacción emocional como la mental al mismo tiempo, se siente incompleto si recibe la una sin la otra. No entiende plenamente el concepto de crecimiento y sigue creyéndose incapaz de prescindir de las primeras etapas de su vida. Alllegar a la vejez, mantiene una relación muy hermosa con los niños, cosa que a la larga se convierte en una de sus mejores cualidades.

Mercurio retrógrado en Leo La mayor armonía entre el planeta y el signo en esta posición se encuentra en la primera fase del proceso retrógrado. En ella, el individuo intenta irradiar sus ideas autoritarias a los demás para intentar impulsar ahora el futuro. Sigue tratando de pensar cómo puede vencer los obstáculos del mañana. En su entusiasmo, puede haber una fuerte tendencia a la exageración. Dado que es extraordinariamente orgulloso, siente celos en silencio de todos los logros en los que no ha podido tomar parte personalmente. Es el individuo que está menos cómodo durante la tercera fase, en la que no se siente partícipe de todo lo que ocurre a su alrededor. Los pensamientos de poder en una vida anterior conti-

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núan filtrándose en su mente consciente, convirtiéndole en alguien deseoso de éxitos. Eso fue probablemente cierto en alguna de sus encarnaciones pasadas, pero al confundir el pasado con el futuro, intenta presionar a su conciencia para que piense también en esta vida. Le gusta la atención que recibe por parte de los demás a lo largo de la primera fase y la echa mucho de menos durante la tercera fase, donde su amor propio le impide pedir aquello que necesita. Realmente tampoco se siente del todo a gusto en la primera fase, ya que su honestidad leonina le impide hacer sónar la trompeta prematuramente. De este modo, tiende a guardarse muchas cosas en su interior en cualquiera de las fases por las que pase. Aunque las anteriores encarnaciones le han enseñado a hacer proyectos de gran envergadura, suficientes para superar estrechos marcos o pequeñas ideas, la frustración del proceso retrógrado hace que le sea difícil poder expresar siempre lo que sabe. Su mayor ventaja es su habilidad para evaluar la totalidad de las situaciones que los demás sólo ven superficialmente.

Mercurio retrógrado en Virgo Aquí, el individuo se beneficia de la regencia planetaria, gracias a la cual las cualidades mutables de Virgo se mezclan con la infinita curiosidad de Mercurio para proporcionarle un cierto grado de comodidad en las tres fases retrógradas. La menor armonÍa con el signo tiene lugar en la primera fase, en la que el individuo intenta dar un salto adelante, fuera de sí mismo, pero ya no puede hacer realidad todo lo que quiere. Eso explica el extremo nerviosismo que se observa durante la primera fase. En consecuencia, existe la tendencia de permanecer un poco más en la segunda fase, donde el individuo puede expresar todo lo que le resulta familiar. Luego, en la fase final, desarrolla

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sus tendencias más críticas cuando vuelve la vista atrás hacia lo que ya ha completado, estudiando sus defectos y contrastándolos con el ideal de su mente. Puede mostrar su lado estricto y frío manifestando su poca tolerancia al desorden. También tiene sólidas opiniones sobre lo que está bien y lo que está mal, en relación a cómo deberían vivir su vida los demás. Sin embargo, se aparta de la tensión de las relaciones complicadas, sintiéndose mucho más cómodo cuando existe una pequeña distancia entre él y quienes le rodeart. Sin que la posición de Mercurio sea particularmente cálida para las relaciones personales, esta posición da al individuo las cualidades de pensador hábil e imparcial. En anteriores encarnaciones, pasó por experiencias que le enseñaron un método particular de pensamiento para comprender todas las complejidades de sí mismo y del universo. Aprendió a ver la gran diferencia existente entre el funcionamiento real del mundo y cómo lo haría según sus ideales. Ha descubierto que todo tipo de mecanismo puede estar más cerca de los ideales que considera que los mecanismos de las relaciones humanas. Así, en su trato con la gente procura que todo concuerde con dichos ideales «estilo computadora», establecidos años atrás. Su alegría proviene de su confianza para la resolución de problemas que comportan detalles que los demás no són incapaces de dominar. Puede que no tenga muchos amigos, pero los más íntimos habrán sido cuidadosamente seleccionados.

Mercurio retrógrado en Libra Ésta es una de las posiciones más complicadas para un Mercurio retrógrado. Durante las fases primera y segunda, el individuo se siente lejos del equilibrio de la delicada

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necesidad de centrarse que tienen los Libra. Durante la segunda fase, cuando experimenta algo del pasado junto con el presente, así como ligeras indirectas de que en el futuro volverá exactamente a donde está ahora, podrá estar en mayor armonía con las características básicas de Libra. Durante esta fase recobra mayor importancia su fuerte sentimiento de vagar sin rumbo fijo. Aporta a su vida un karma de indecisión en sus procesos de pensamiento, y cuando inclina la balanza a un lado y a otro, la gente se pregunta a qué está esperando. AlIÍlismo tiempo, al no estar seguro de adónde le conducirán sus decisiones, le interesa saber si la gente, en su pasado, aprobaría o no las decisiones que él toma ahora. En ocasiones puede actuar de un modo completamente contrario, y si Mercurio retrógrado está mal aspectado, incluso puede ser deshonesto. Valora más el tacto y la diplomacia que la verdad. Es interesante observar que la definición que da el diccionario de la palabra «tacto» también es la de «discreción». En la vida actual, este individuo está en conflicto con sus padres, y en la edad adulta sigue pensando que debe conseguir estar en armonía con ellos. De hecho, intenta hacerlo con toda persona que conoce. Sin embargo, confunde sus niveles de sentimiento y pensamiento y puede mostrarse tímido a la hora de expresarse. A menudo cree que revelándose tal como es no será aceptado por la gente que quiere. Eso puede llevarle a ver el mundo de color de rosa, con tendencia a evitar ser personalmente responsable de sus pensamientos. En consecuencia, tiene problemas para saber cuál es su propia identidad. Pero lo más interesante es que precisamente eso es lo que le capacita para ayudar a los demás a serenarse, ya que de vez en cuando se pone en el lugar de varias personas para comprender cualquier situación desde todos los puntos de vista posibles. 51


Mercurio retrógrado en Escorpio Aquí el individuo experimenta su mejor unión durante la primera fase, en la que la necesidad de actividad de Mercurio se mezcla con la búsqueda de descubrimientos de Escorpio, inquietando a la persona para que sienta fuelies deseos de adentrarse en áreas aún desconocidas para él. En consecuencia, desarrolla una mente extraordinariamente aguda (durante la tercera fase) con capacidad de análisis para descubrir la esencia de las cosas que los demás han pasado por alto. Es capaz de redescubrir lo que está enterrado en el pasado, lo que le confiere un instinto especial para cualquier aspecto de naturaleza científica. Extrañamente profundo, es totalmente capaz de resolver sus propios problemas. Así, suele ser una persona más bien callada que raramente habla de aquello que le preocupa. Al mismo tiempo, su mente consciente puede ser destructiva si ve cosas que no responden a sus idealistas expectativas. Puede ser distante sexualmente y carecer del calor que los demás esperan de él en el terreno sexual. Al mismo tiempo, también puede sentirse sexualmente preocupado a nivel mental. En vidas pasadas, hubo muchos trastornos en la experiencia consciente. Ahora, el individuo debe aprovecharlos para mantenerse alerta y no caer en experiencias negativas. De este modo, puede desconfiar de los demás, astuto y discreto, pero es un buscador de la verdad a toda costa. En esta situación, la mente consciente funciona mejor cuando se centra en el viaje espiritual. Muchos de los individuos que tienen a Mercurio retrógrado en Escorpio han experimentado la separación de un ser querido a temprana edad en una anterior encarnación. Ello hace que dichos individuos sean capaces de aguantar muchas cosas en esta vida, llevando a cuestas una cierta so52


ledad interior que no hace más que reforzar su individualismo.

Mercurio retrógrado en Sagitario Ésta es una auténtica alma perdida que necesita mucha ayuda por parte de los demás si quiere encontrarse a sí mismo en la gran extensión de su mente distraída. En otras encarnaciones fue un buscador, pero sus divagaciones aú'n no han establecido un marco de referencia en el que pueda catalogar cualquier información. Sigue tratando de abarcar tantos temas que a menudo no sabe cuando empezar a hablar, o qué es realmente lo que vale la pena comentar. . Esta posición dificulta la concentración, puesto que cuando el individuo procura enfocar en profundidad un tema en concreto, sus pensamientos son siempre interrumpidos por distracciones externas. Ello le da la impresión de que cualquier cosa en la que piense difícilmente merecerá mucha atención. Por eso, deja muchos de los problemas de su vida sin resolver. Saca mucho provecho de los signos de tierra, ya que le ofrecen la estabilidad que necesita. La mayor dificultad estriba en que su mente quiere comprender todo lo que hay bajo el cielo para recuperar la información de un tiempo pasado y aplicarla a los problemas no resueltos todavía. El problema aquí es que la información obtenida suele ser dispersa y superficial, hasta el punto que le resulta difícil aplicarla en cualquier terreno. Desgraciadamente, sigue intentando utilizar la impersonal sabiduría jupiteriana que refleja las grandes verdades cósmicas tanto para sus propios problemas personales del pasado como para elevar su vida presente a un nivel cósmico. No le gusta que los demás le impongan sus ideas, pues utiliza gran parte de su independencia mental para corregir injusticias pasadas. Curiosamente, el efecto de Júpiter 53


es el de alejar suficientemente a Mercurio para que le sea imposible hacerlo, aunque siga intentándolo. Incluso cuando regresa al presente, tiende a exagerar todos esos pensamientos de forma desproporcionada respecto a las realidades que representan. En este signo, Mercurio se encuentra en dificultades en las tres fases del proceso retrógrado. Nunca tiene la oportunidad de sentir una influencia lo bastante estabilizadora como para que aclare y concrete sus ideas sobre un modo natural de vida. Sin embargo, a pesar de todo ello, es curiosamente un mesajero espiritual y místico para todo aquel que conozca.

Mercurio retrógrado en Capricornio Este individuo es un pensador muy profundo y concienzudo. Si alguna vez ha cometido un error, tiene la capacidad de comprenderlo en profundidad con un gran sentido de la perspectiva. Entonces puede acercarse a la fuente o a una situación similar y hacerlo funcionar correctamente. En su juventud, parece hacer las cosas del modo más arduo, pero eso le ayuda a conseguirlas más tarde. Le cuesta expresarse, ya que intenta con esfuerzo dar con lo que quiere decir exactamente. Así, sólo le gusta hablar de cosas que tanto son importantes como serias o denotan sobriedad. No vive una vida espontánea, pues le resulta más fácil estar en concordancia con el propósito de sus propias líneas de pensamiento que con el discurrir de las fuerzas del mundo que le rodea. Siempre considera el resultado final de las cosas incluso antes de considerar los pasos que debe seguir para conseguirlas. Por ello es sumamente pragmático y práctico. Al traer consigo a esta encarnación el saber cómo consigue el hombre sus logros físicos en· esencia, conoce los

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pasos que debe seguir para conseguir algo material, y aprovechará una y otra vez los conocimientos adquiridos en vidas anteriores para intentar comunicarlo a los demás, que siempre buscan la salida más fácil. Se le comprende mejor en su madurez, cuando el peso de sus pensamientos encuentra una salida en la sociedad tradicional. En la primera mitad de la vida, puede atravesar por períodos de paranoia, donde se estanca en su propia profundidad. Sin embargo, es muy capaz de volver a encontrar con esfuerzo una salida. ' Los mayores problemas se le presentan en sus relaciones personales, ya que los demás suelen perder la paciencia con todas las empresas que intenta. Sin embargo, la mayor fuerza de esta posición tiene lugar durante la tercera fase del proceso retrógrado, en la que, considerando sus pensamientos ya cristalizados en el pasado, puede absorber más conocimientos para construcciones futuras.

Mercurio retrógrado en Acuario Ésta es una de las mejores posiciones para Mercurio retrógrado. El aéreo carácter uraniano de Acuario permite a Mercurio tener una gran capacidad para sentirse cómodo en el triple proceso retrógrado a través de las diferentes dimensiones de espacio y tiempo. En la primera fase, el individuo es feliz al dar el salto hacia el futuro, pero no quiere internarse en el espacio de otras personas. Durante la tercera fase se alegra de no violar el espacio de otra gente, y no le desagrada volver a explorar el pasado para desentenar extraños hallazgos que pueden ser útiles incluso para ocasiones futuras. En la vibración cruzada de la segunda fase, descansa momentáneamente de sus exploraciones, pero le gustará ayudar a los demás. De este modo, en todas y cada una de las tres fases hay algo en este Mercurio 55


retrógrado en Acuarioque convierte al individuo en una persona encantadora y original. Aunque parezca que no siempre tiene sentido común, y a menudo muestre una estabilidad menor que la que los demás querrían ver en él, posee un tremendo espectro de ideas procedentes de los aspectos más insólitos que la sociedad generalmente prefiere pasar por alto. Puede aprovechar conceptos tan antiguos como una montaña, convirtiéndolos en ideas que quizá no sean aceptadas hasta cientos de años después de haber sido propuestas. Sus energías mentales suelen pasar de una cosa a otra más que centrarse en un tema durante mucho tiempo, y puede hablar sobre una gran variedad de temas en una simple conversación. Cuando parece que nadie hace caso de sus observaciones, consigue salirse con la suya de la forma más inverosímil, y los demás le comprenden mejor días, semanas o meses después de la discusión que en el preciso instante en que ésta tuvo lugar. Tiene tanta inventiva que a menudo traslada los detalles necesarios para demostrar una gran ingenuidad de una vida pasada a la presente, en la que el mundo esté más preparado para aceptar sus ideas.

Mercurio retrógrado en Piscis Con esta posición, el individuo experimenta una gran confusión en la mente consciente. Continúa pensando que está perdido y que ya no puede dar fácilmente con la tónica de su sentimiento. En una encarnación anterior, sintió una gran desesperación en sus pensamientos. Ahora sigue recreando esas mismas circunstancias y acontecimientos que le permiten volver a representar esta desesperación para que de alguna forma pueda encontrar finalmente la solución que ha estado buscando. Descubrirá que sólo po-

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drá encontrar una respuesta cuando sea consciente de las preguntas que formula. Uno de sus problemas es que le cuesta separar las energías mentales de la intuición. Perdiéndose en la imaginación, pensamientos y fantasías, puede perder el contacto con los límites de la realidad. A menudo cree que los demás no comprenden la gama de ideas que intenta expresar. Es capaz de conocer y comprender ideas que están más allá de las palabras, pero cuando intenta comunicarlas mediante el lenguaje, siente que ha perdido literalmente la esencia de la idea. Al traer consigo a esta encarnación un sentido de idealismo cósmico, que le resulta difícil de explicar, sólo experimenta conflicto entre unir el mundo tal y como lo ve ahora y su deseo de escapar de él. No se cree realmente merecedor de la aceptación de los demás, y sin embargo, se pregunta si el valor de la aceptación social representa alguna realidad. Se encuentra más cómodo en la tercera fase retrógrada, en la que, al absorber vibraciones, puede meditar sobre todo lo que ya ha vivido. La menor sensación de comodidad la experimenta durante la segunda fase donde a lo largo de la vida actual, fuera de todo lo que ya ha vislumbrado, tiene la peor oportunidad para la expresión de su imaginación y su originalidad creativa.

Mercurio retrógrado en la ([;asa primera Aquí, el individuo se encuentra más a gusto en la primera fase de la experiencia retrógrada,' donde el pensamiento se centra en la esperanza de un autodesarrollo. Es impaciente, con tendencia a sacar conclusiones que más tarde deberá corregir. El horóscopo entero se vuelve infantil cuando la mayoría de las energías planetarias se reorientan hacia el interior para centrarse en uno mismo. 57


Esta posición empuja al individuo a asociarse con personas jóvenes e inmaduras. Trae a esta encarnación un karma elemental básico en su autodesarrollo. Al no comprender plenamente cómo dirigir sus energías mentales hacia el exterior, se convierte en parte de todo lo que cree proyectar. Así, le cuesta distinguir dónde empieza él y dónde el mundo exterior. Necesita atención igual que un niño, pero no siempre sabe qué hacer con ella cuando la consigue. Le aterroriza caer en situaciones sólo para retraerse en sí mismo una vez está en ellas. Su mayor problema es descubrir quién es en realidad, pues siempre lo tamiza todo a través de un karma en el que se pregunta constantemente sobre su propia identidad. Y de nuevo como un niño, está impaciente por descubrirlo. Dado que nunca espera conseguir la comprensión del mundo, se precipita en él para conocer todo lo que pueda, el ayer. Sin embargo, le cuesta medir lo que sabe cuando encuentra lo que cree que ha estado buscando. El astrólogo debería esperar un ligero desequilibrio en todos los demás planetas del horóscopo con respecto a esta posición, ya que la lente focal de Mercurio para manifestar todas sus energías está sujeta al triple proceso retrógrado.

Mercurio retrógrado en la Casa segunda En este caso, el individuo e~tá más cómodo durante la tercera fase, en la que muchos de sus pensamientos se basan en lo que ya ha visto en el pasado. Puede ser un acérrimo defensor de los sistemas de valores que tanto trabajo le ha costado cristalizar. Al crecer posesivamente en relación a sus sentimientos pasados, es capaz de pasar deunaoJJsesión a otra. Centra gran parte de su atención en el dinero, e incluso puede transformarse en un entendido en pesetas o en un 58


loco del gran capital, dependiendo de la fase en la que se encuentre en ese momento. La dificultad de esta posición radica en que los procesos de pensamiento pueden llegar a enraizarse tan profundamente en la materia que al individuo le cueste ver la importancia relativa de otros aspectos de la vida. Tiende a repetirse mucho, cosa que acaba por aburrir a cuantos le rodean. Esta posición dificulta que Mercurio sea lo suficientemente libre como para que el individuo pueda experimentar su amplia gama de mecanismos de res-' puesta conscientes. En casi todo lo que hace hay un animal de costumbres y tiene dificultades para romper con cualquier modelo de comportamiento anterior relacionado con la tolerancia. Algunas veces, esta posición puede conducir a un exceso de peso, ya que la necesidad de expresión oral de Mercurio retrógrado, combinado con las cualidades posesivas de la Casa segunda, y el gran amor del regente Tauro por la comida, provoca deseos de darse un atracón. En otros casos, los rasgos posesivos de la Casa segunda- se combinan con la introversión de Mercurio retrógrado para originar un individuo propenso a las úlceras que, más que expresar todos sus valores, se irrita sobremanera por gué el mundo no lo acepta. Este es el individuo que incorpora a esta vida un pensamiento cristalizado de karma en su sistema de valores, que se empeña en conservar mucho después de que su expresión sea apropiada para el mundo. Puede ser la persona más feliz de todas una vez trasciende las viejas y obsoletas líneas de comportamiento que siempre le han derribado.

Mercurio retrógrado en la Casa tercera AqUÍ, el Mercurio retrógrado aparece en la casa que él mismo rige. Como tal, experimenta una gran flexibilidad 59


al moverse a lo largo de las tres fases. El individuo es muy activo mentalmente, y concentra muchas de las energías de su carta en intentar que los demás le comprendan. Suele inhibir toda explicación si siente que los demás malinterpretan sus palabras. Al pasar por la tercera fase, gasta mucha enegía volviendo a anteriores pensamientos para asegurarse de que los comunicó a los demás del modo en que quería hacerlo. Las mayores dificultades con las que tropieza se hallan en sus relaciones con los demás, cuando trata de sintonizar lo que él comprende con lo que comprende la gente a su alrededor. A menudo existen problemas familiares con un hermano o hermana. Con esta posición, el individuo aporta a esta vida una fuerte relación karma. Y, dado que en su vida siempre está estudiando las relaciones entre todas las cosas y la gente, cambia constantemente su longitud de onda de acuerdo con lo que percibe a su alrededor. A menudo, esto puede originar tartamudez u obstáculos para la expresión mental. Así, pese a su mentalidad flexible, tiene grandes dificultades para seguir un camino llano cuando trata de expresar lo que sabe. Quizá se atasque en el uso del lenguaje al intentar buscar constantemente la palabra exacta que exprese aquello que quiere comunicar. Entonces, una vez haya hablado, comprobará la reacción a lo que ha dicho para saber si puede saltar a otra fase retrógrada o permanecer más tiempo en la presente que puede resultar exitosa. Sin embargo, es uno de los pensadores más analíticos del zodíaco.

Mercurio retrógrado en la Casa cuarta En este caso, es en la tercera fase donde el individuo se siente más cómodo. Aquí puede absorber todo lo que en el pasado haya representado recuerdos de seguridad. Por eso

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II


pasa mucho tiempo.en esta remota, introspectiva y absorbente fase, donde se siente más seguro. Su infancia fue importante, así como muchos de los pensamientos que ahora se centran en los sentimientos que experimentó en esos primeros años. Quizá piense que las necesidades de los demás le retienen, particularmente los de su propia familia, pero en realidad es su necesidad de casi todo lo que él manifiesta en un entorno donde está muy seguro de sí mismo. El mundo exterior no constituye tal entorno. Por ello, no siempre expresa lo más ge-' nuino de su identidad y sus propósitos de forma ordinaria, sino que en su lugar tiene una fuerte tendencia a permanecer en estadios infantiles, quejándose de por qué su vida no se desarrolla del modo en que él cree que debería hacerlo. Aporta a esta encarnación un karma que retiene sus procesos mentales en las primeras etapas de su desarrollo emocional. Así, es sólo el haber nacido dentro de unos niveles emocionales superiores lo que le proporciona la seguridad de expresarse adecuadamente en el plano mental. Experimenta confusión entre dominio y sumisión, pues siente la efusividad cardinal de la Casa cuarta y, al mismo tiempo, es tan inmaduro emocionalmente al dirigirse a los demás que tiende a entrar en pleno conflicto consigo mismo, por lo que cierra la puerta a cualquier expresión, exceptuando formas más limitadas que no le hagan completamente feliz. Es ésta una posición muy difícil para Mercurio retrógrado, ya que tiñe toda la carta con pensamientosemocionales pasados, que, según su naturaleza, tanto pueden permitir como impedir expresarse al resto del horóscopo.

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Mercurio retrógrado en la Casa quinta Aquí, el individuo se encuentra mejor en la primera fase, aunque las tres fases representen una frustración en su estilo de vida. Dado que le resulta difícil concentrar sus energías mentales, desarrolla un karma para aprender cómo conseguir que su plano mental sea productivamente creativo. La curiosidad le empuja a adentrarse en multitud de ideas que le gustaría crear. Sin embargo, le resulta más fácil pensar en decir a los demás lo que le gustaría crear que llevar a cabo sus proyectos hasta el final. Experimenta grandes tensiones sexuales, cuyas energías se desbordan constantemente sobre sus centros mentales. Atraído por los jóvenes, le resulta más sencillo comunicarles las radiantes cualidades de la primera fase antes que la espontánea tendencia a la introversión del planeta retrógrado. Cuando se halla en compañía de personas de su edad o mayores que él, se siente más inhibido. De las doce casas, es en ésta donde dicha característica es más exagerada, ya que el individuo se enfrenta al conflicto entre ser el protagonista de su vida o un mero espectador que se limita a observar lo que hacen los demás. Le atrae la lectura de novelas románticas, así como las historias en las que la gente alcanza la fama, aunque a él le cueste llevar a la práctica sus conocimientos. Frecuentemente piensa que debería hacer más de lo que hace yeso hace que su mente se precipite más y más en el futuro, mientras la característica natural de los retógrados de mirar atrás sigue recibiendo «f1ashes» de las pocas cosas que llevó a cabo en el pasado. Debe aprender a superar esas imagenes frustrantes que hay en su mente y que le impiden ser todo aquello que quisiera. Algunos con esta posición se inclinan a alejarse, asustados, del sexo opuesto cuando los problemas de su infancia

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se proyectan en los individuos del sexo contrario, tanto en el presente como en el futuro. Además, tienen tendencia a proyectar sus incapacidades infantiles en sus propios hijos. En esta posición, el karma consiste en poder comprender cómo organizar y crear el presente a partir de todo aquello de 10 que el individuo fue consciente en el pasado.

Mercurio retrógrado en la Casa sexta Mercurio se halla aquí en otra de las casas que rige. Las características de mutabilidad de la Casa sexta se combinan con la flexibilidad natural de Mercurio para conferir al individuo una aguda aproximación analítica a la organización de su vida. Aunque experimenta un cierto confort en las tres fases, sigue sufriendo dificultades a la hora de llevarse bien con los demás, particularmente en el ámbito laboral. Durante la primera fase, a menudo intenta imponer sus ideas a las de las otras personas, mientras que en la segunda fase vuelve justo a tiempo para analizar críticamente si esas ideas fueron llevadas a la práctica correcta o incorrectamente. Le ponen nervioso las reacciones que provoca en la gente. Al creer que ésta espera algo de él, desarrolla el sentimiento de tener obligaciones para con ellos. Para organizar sus hábitos de trabajo, debe comprender el resultado final y volver a las primeras etapas que le conducirán a su objetivo. Puede ser muy crítico consigo mismo, gastando muchas energías para preguntarse si debería seguir juzgando su propio interior o bien proyectar sus energías mentales hacia el exterior, en un intento de corregir sus errores mediante el servicio a los demás. Sin embargo, hay veces en que éstos declinan su ofrecimiento, y de este modo se siente frustrado en su trato con ellos. Es mejor organizando cosas que dirigiendo a la gente.

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Una de las mayores dificultades con las que se encuentra es su tendencia a complicarse la vida autoimponiéndose restricciones. A veces, acepta responsabilidades que cree que no debería asumir, al tiempo que se aparta de aquellas que cree que tendría que aceptar. Aporta a su vida un karma de discriminación, mediante el cual intenta constantemente que la gente y las cosas encajen en su orden preconcebido del universo. Es un excelente trabajador, especialmente cuando se trata de seguir procedimientos creados en el pasado. Debe aprender a ser más tolerante con el factor humano, de modo que sus grandes ideales de orden y perfección no le lleven a adoptar actitudes negativas hacia la gente con la que trabaja y la sociedad en que vive. Llegará un día en el que se dará cuenta de que tiene una fuerte tendencia a juzgarse a sí mismo a través de sus ideales, al tiempo que juzga a los demás por sus actos.

Mercurio retrógrado en la Casa séptima Ésta es una de las posiciones más complicadas para un Mercurio retrógrado, ya que los intentos del individuo a la hora de analizar las cosas siempre están teñidos por lo que ve a través de los ojos de los demás. Así, durante la tercera fase dedica gran parte de su tiempo a volver a clasificar lo que ya ha vivido en base a cómo se equilibra con lo que gusta o no a la gente que quiere. Se siente frustrado en los terrenos del matrimonio, carrera y familia, e intenta seguir retrocediendo para armonizar todas las ideas de la gente que le rodea. Puede enfadarse si no es capaz de dedicar el tiempo suficiente a pensar sobre sí mismo. A menudo, aquellos a quienes intenta explicar cosas no le comprenden porque tiende a concentrar sus energías más en sus mentes que en la suya propia. Eso hace que se sienta nervioso en presen64


cia de otras personas y, en consecuencia, nunca mostrará todo lo bueno que hay en él. Su cónyuge puede ser algo infantil, y en algunos casos puede estar buscando en él las antiguas cualidades de un hermano o hermana. Es tremendamente indeciso, y a menos que otros aspectos de su carta sean muy fuertes, tiene tendencia a apoyarse en los demás, pues no está seguro de las decisiones que toma por sí mismo. Al mismo tiempo, de buena gana tomará decisiones por los demás. Frecuentemente, se encuentra metido en situaciones conflictivas, convirtiéndos~ en el mediador entre puntos de vista opuestos. Kármicamente, está aprendiendo a equilibrar el centro de sus ideas mediante las necesidades de los que están a su alrededor. Ello obstaculiza la autoexpresión pero, a su vez, intensifica enormemente su capacidad para comprender a los de- . más. Con frecuencia retrocede, reevaluando ideas en las que la gente apenas ha profundizado, observando las dos caras de la moneda y así, finalmente, ser capaz de desarrollar una perspectiva más amplia. Lo que hace tan difícil esta posición es que tiene tendencia a utilizar sus energías de una forma más impersonal. De este modo, resulta más adecuado Olientarlas hacia el aspecto de un individuo que hacia necesidades personales. Desde luego, la frustración obedece a que Mercurio es un planeta personal, y dado su carácter retrógrado, tiende a ser introvertido. Aun aquí,en la Casa séptima, no puede funcionar ni personalmente ni de manera introvertida.

Mercurio retrógrado en la Casa octava Aquí, Mercurio recibe una fuerte energía debida a los trastornos plutonianos que comportan el final de diversos episodios de la vida de un individuo. Pasa gran parte de su tiempo en la tercera fase, reconsiderando constantemente 65


la forma en que ha sido regenerado hacia niveles de conciencia más elevados. Es un pensador extraordinariamente profundo, y sus procesos de pensamiento irán directamente al corazón del sentido esencial de la vida. Es frecuente que tenga problemas sexuales, puesto que la profundidad de su pensamiento le hace cuestionar insistentemente el valor de cualquier expresión física. Nunca acepta respuestas superficiales a sus preguntas, sino que más bien procura conocer la razón última de todo cuanto existe. Tiene tendencia a evitar las relaciones íntimas con los demás, y aun cuando se ve envuelto en ellas, guarda para sí muchos de sus pensamientos, mientras observa silenciosamente el significado de todo lo que le rodea. Aporta a su vida el legado de la búsqueda, y sigue las huellas del significado más profundo que pueda encontrar en aquello que percibe. A veces piensa que está apartado de la sociedad y, a menos que posea un alma sumamente desarrollada, puede convertirse fácilmente en producto de pensamientos destructivos. Si tiene tales pensamientos, puede intensificarlos mediante la absorción de ideas procedentes de la conciencia universal durante la tercera fase del proceso retrógrado. Debe procurar convertir sus visiones del pasado, incluyendo las de su herencia y antepasados, en formas más apropiadas que combinen acciones constructivas. Kármicamente, es un regenerador del pensamiento humano, y tiene que aprender a escuchar con atención los consejos que da a los demás ya que, a la larga, esas mismas palabras pueden convertirse en una guía para él mismo.

Mercurio retrógrado en la Casa novena Aquí, en la Casa novena, Mercurio se encuentra con mucho en su posición más difícil. Si el individuo avanza o 66


retrocede, expandiéndose o contrayéndose en dimensiones de espacio o tiempo, está, sin embargo, demasiado alejado del centro de todo lo que ve para conseguir que su percepción sea acertada. Así, cuando intenta mezclar las energías de las que se ocupa, puede convertirse en un filósofo sobre trivialidades, aun calificando como tales todas las ideas filosóficas que representen respuestas a su vida. Le cuesta consultar con los demás, y tienden a acentuarse en él los aspectos fijos de su horóscopo, que le hacen conservar su afán de libertad. Suele estar en contra de t9da obligación, y en su carrera de un lado a otro, recorre una distancia mayor de la que realmente necesita cubrir. Sin embargo, eso le convierte en un gran transmisor de comunicación para los demás, y aunque él mismo experimente un alto grado de confusión, para los demás será un mensajero de mente privilegiada que viene del pasado, y que intenta desesperadamente coordinar todo lo que ve en un lenguaje comprensible para aquellos a quienes se dirige. Es muy independiente, y rara vez acepta los tradicionales enfoques de la vida. Si no se usa adecuadamente, esta posición puede hacer del individuo un glotón mental o espiritual, que busca cada vez más informaciones que casi nunca le proporcionan la sabiduría que cree estar buscando. Tiende a ser un mal organizador, que presenta sus pensamientos de tal manera que hace difícil que los demás le entiendan. Por lo general, procura estar de viaje espiritual, e incluso está tan arraigado en el plano mental que todo lo que experimenta regresa a los niveles más bajos de la mente, donde pierde la mayoría de sus propiedades espirituales. Realmente, ésta es la clase de individuo que podría experimentar el nirvana, y entonces, repitiéndose mental- \ mente una pregunta tras otra, analizarlo hasta el extremo de despojarlo de su significado esencial. Yen consecuencia, en muchos sentidos, ésta es la persona que está siendo kármicamente probada para superar su mente inferior.

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Cuando más la utiliza, menos trabaja para él. Es consciente de las muchas incoherencias de sus ideas, pero se mantiene en la actitud de que para él es más importante exteriorizar todos esos pensamientos, brindando a las generaciones futuras la oportunidad de corregirlos y clasificarlos, que tener que evitar esa manifestación limitando la cantidad de ideas que posee. De este modo, en esta posición, no se siente completamente cómodo en relación con los demás. Durante la primera fase, trata de vertir sobre ellos miles de ideas, pero cuando se halla en la tercera fase, le gusta estar solo, considerando a los demás como un estorbo para su pensamiento. En la primera fase, puede exagerar fácilmente la relevancia de sus ideas al comunicarlas, mientras que en la tercera fase puede deprimirse al comprobar interiormente la poca importancia que en realidad tienen. De hecho, en la segunda fase la experiencia está demasiado centrada por el Mercurio retrógrado en la Casa novena para que se sienta cómodo en él durante períodos de mayor o menor duración. En medio de 10 que parece ser una expresión caótica, debería observarse que todo 10 que dicen estos individuos es importante. Pero le corresponde al oyente distinguir 10 que es más relevante que una gran cantidad de información, en 10 que concierne a su beneficio personal.

Mercurio retrógrado en la Casa décima En este caso, el individuo se siente más cómodo durante la tercera fase, en la que puede meditar sobre éxitos pasados, observando si están a la altura de sus expectativas. En esta casa, todos los niveles del pensamiento consciente se orientan hacia los padres. El individuo crece con la imperiosa necesidad de impresionar a los demás y, al mismo tiempo, inhibir su autoexpresión mediante su adiestra-

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miento anterior en el decoro, la prudencia yla cautela. Le gusta ver el resultado práctico de sus ideas y tiene una fuerte tendencia a construir su futuro del mismo modo en que construyó su pasado. Siempre se preocupa por darle un rumbo a su vida. En muchos casos, puede mostrarse muy maduro para su edad durante las primeras etapas de su vida. Más adelante, regresa a esos primeros años para crear su futuro. Aquí encontramos una fuerte necesidad de reabsorber las enseñanzas anteriores del padre. Por último, vuelve a colocar en su lugar su propia identidad según el éxito que haya obtenido en base a su capacidad para transmitir sabiduría a los demás. Por eso intenta categorizar constantemente sus conocimientos, para asegurarse de que estarán a punto para usar en cualquier momento que los necesite. Puede sentirse muy desdichado en su vida privada, ya que se ve obligado a cumplir con las expectativas mentales de su karma anterior. Casi todo lo que hace en su vida está destinado a crear en su interior sentimientos de competencia mental que finalmente se convierten en su principal vehículo de autoconfidencia. Suele menospreciarse a sí mismo en silencio, y consecuentemente sigue empeñándose en compensarse en exceso. Quiere impresionar los rincones más profundos de su ser que son más difíciles de convencer. Por eso, trabaja en un karma para tratar de convencerse internamente a sí mismo de que sus pensamientos están creando constantemente una dirección que acabará por proporcionarle sentimientos de mérito.

Mercurio retrógrado en la Casa undécima Aquí, el individuo siente una mayor libertad mental que en la aplicación práctica de sus ideas. Durante su mo~ vimiento por las fases retrógradas, puede inspirar ideas a

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los demás durante la primera fase o, en el otro extremo, soñar despierto durante la tercera fase, meditando sobre 10 que podría haber hecho y no hizo. La necesidad uraniana de emociones y la necesidad mental de estimulación hacen de la segunda fase la más incómoda para el individuo, ya que es durante este período cuando se halla en un estado general más bajo. A resultas de ello, la combinación de las fases primera y tercera le llevan a experimentar gran cantidad de pensamientos poco prácticos. Le resulta difícil establecer un sentido significativo para las cosas y, sin embargo, 10 encuentra necesario para seguir adelante. Busca 10 inalcanzable, un arco iris intangible que está completamente convencido de que existe. En consecuencia, es una de aquellas personas que antes que pájaro en mano prefiere ciento volando. Es un solitario, y a pesar de todo necesita a la gente, aunque sólo sea para dar una nota de color a sus ideas. Al mismo tiempo, sabe cómo permanecer mentalmente alejado. Puede ser frío e impersonal, evitando cualquier comunicación íntima en una estrecha relación. No le gusta larigidez de pensamiento de los demás. Para él, es más importante tener libertad de pensamiento que el resultado final de cómo 10 aplica. Necestia espacio para pensar y se siente incómodo entre la muchedumbre. En algunos casos, puede que no responda sexualmente, ya que no se encuentra totalmente a gusto en situaciones íntimas. Finge estar de acuerdo con el matrimonio, los niños y las tradiciones, pero su principal fuerza reside en ser un difusor de ideas para los demás. Encuentra más fácil personalizar los problemas en la sociedad antes que tratar de aquellas cosas que tenga más a mano en su vida. Si se indigna por el largo retraso de las reformas sociales, puede que ignore la reforma personal de sí mismo. De este modo distorsiona el orden de prioridades en sus relaciones con la sociedad en que vive, con su familia y consigo mismo. Es

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una persona inaccesible a los demás, dado que puede rebelarse contra todo aquello que lo ate. No obstante, es un buscador universal, que concentra principalmente sus energías mentales en la comprensión del desarrollo de la raza humana. Los procesos de evolución de la humanidad le interesan más como teoría que como hecho. No le gusta enfrentarse con el núcleo central de la vida. En cambio ,es feliz observándolo todo desde la barrera. Ello tiende a introducir todo el horóscopo en el estilo de vida de un individuo que tiene grandes dificultades para orientar su vida en sénsibles direcciones mediante significados equilibrados. Kárrnicamente, se ocupa del estudio de los niveles de conciencia, sin comprometerse necesariamente con ninguno de ellos. Compara las ideas pasadas con las realidades actuales y los sueños futuros, de modo que un día comprenderá qué es lo que está buscando. Sin conocer las preguntas, difícilmente puede comprender las respuestas, pero aún es un buscador de primera, y haría bien en estudiar los métodos del taoísmo o el zen, donde algunas de sus ideas poco convencionales podría encontrar un paraíso de la verdad a nivel universal.

Mercurio retrógrado en la Casa duodécima Aquí, el individuo pasa gran parte de su tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, donde, al absorber vibraciones introspectivas, se guarda sus ideas para comprender la naturaleza más profunda de su ser. En esta posición tan especial, todo pensamiento consciente es kármico. Todo lo que el individuo percibe es una continuación de las antiguas ideas en su mente, concernientes a las relaciones entre cosas, gente y circunstancias en el universo. Tiende a encerrarse en sí mismo y su personalidad se vuelve introvertida. Sin embargo, se pasa el tiempo pensando. Suele repe71


tir antiguas conversaciones durante días y semanas después de que hayan tenido lugar. De algún modo, experimenta la esencia pura de la percepción en su forma más directa, cosa que para muchos individuos resulta muy difícil de captar. Su frecuente desorientación en el espacio y el tiempo no conoce límites, y a menudo se mueve más allá de las fronteras de la vida ordinaria, así como del planeta en que vive. Puede orientarse místicamente al tratar de percibir el universo a través de sí mismo. De este modo, tiende a experimentar en su vida cualquier cosa que le permita pensar. Verdaderamente, éste es el individuo que se convierte exactamente «en lo que pensaba». Los demás casi nunca le comprenden, pues la esencia neptuniana de sus ideas se complica cuando intenta transmitírsela durante la introvertida y absorbente tercera fase del proceso retrógrado. Se subestima a sí mismo, tendiendo a apartarse de la vida antes que poder expresarse con facilidad. Algunos de los que están en esta posición poseen un gran talento musical, ya que las palabras les suelen resultar una forma de expresión inadecuada, cosa que lleva a la persona hacia otras áreas creativas para expresarse. En la vertiente negativa, algunos de quienes están en esta posición pueden experimentar largos períodos de depresión mental, durante los cuales intentan clasificar la multitud de pensamientos que han absorbido del universo informe. Aquí, el individuo debe comprenderse a sí mismo a un nivel muy profundo. Para ello, pasa mucho tiempo lejos de las actividades del mundo exterior, que de otro modo le impedirían ver la semilla de lo más profundo de su ser. Por eso evita el lado agradable de la vida y pone más atención en los misterios insondables que se enfrentan a su pensamiento interior. Es un gran estudioso del pasado, y puede convertirse en un excelente metafísico si dirige sus energías mentales hacia el conocimiento universal. 72

2. VENUS RETRÓGRADO Venus retrógrado como símbolo esotérico Venus, el regente del amor, la belleza y la armonía', se simboliza por ( <;( ) el círculo del espíritu sobre la cruz de la materia. Aquí, el espíritu del hombre vierte a raudales la expresión de la forma, creando así la vida. Cuando la forma se crea fuera del espíritu se transforma en algo hermoso, ya que todo lo que el hombre crea emana de su naturaleza etérica. A través de Venus, la belleza, la armonía y el amor en el espíritu del hombre pueden encontrar su camino hacia la materia. Cuando Venus es retrógrado, esta progresión, al igual que en el caso de Mercurio, se invierte, y el hombre depende de la forma para activar su espíritu. Así, si el lado material de su vida es incoherente con sus experiencias con forma en pasadas encarnaciones, suele dejar que el espiritu niegue todo lo que existe en realidad. Con todos los retrógrados, la forma o parte material de su vida domina cuando el individuo sigue tratando de comprender todo el karma que ha cristalizado en materia en antiguas encarnaciones. El individuo con Venus retrógrado no es tanto un actor en vida como un reactor en ella. Es importante comprender que la media luna del alma no figura en el símbolo de Venus y es por ello que se atribuye a Venus la parte más personal de la naturaleza armónica del hombre, mientras que Neptuno, que contiene el símbolo de la media luna del alma, permite al hombre experimentar toda la belleza des73


de su origen cósmico. Siempre que el alma se presente como fuerza consciente, la parte personal del hombre estará subordinada. De este modo, vemos manifestarse muchas cosas a través Neptuno. Pero, cuando el alma esté austente como fuerza consciente, la parte personal de la naturaleza humana tomará una mayor relevancia. Por eso vemos a tanta gente buscando una satisfacción personal a través de Venus. Eso es realzado por la naturaleza retrógrada hasta tal punto que el individuo desarrolla fuertes vías de reacción a todo cuanto le sucede en la vida, juzgando cada acontecimiento, circunstancia y relación según cuánto le hayan querido o cuánto le hayan denegado experiencias amorosas. De este modo, el efecto genérico de Venus retrógrado se deja sentir en la parte más personal de la vida que no se alimenta gracias al alma, sino sobre todo un intento de dar forma a la madre del espíritu. En consecuencia, el lado material o físico de la vida toma el mando.

La personalidad de Venus retrógrado La personalidad del individuo con Venus retrógrado es marcadamente diferente de la de las personas con Venus directo. Existe una tendencia a interiorizar aquello que hace daño, operando en sí mismo lo que Venus en movimiento directo trataría de exteriorizar. A menudo, Venus retrógrado no sólo crea ese dolor, sino que también tiende a exagerar su efecto. Enfatiza exageradamente sobre el amor (o amores) de su vida. Para esta persona, éste no descurrirá por derroteros sencillos. Extremadamente consciente, suele preguntarse si los demás no le prestan tanta atención como la que se presta a sí mismo. No siempre positivo respecto a lo que le gusta o le disgusta, tiende a diferenciar entre vivir su vida y ser

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Venus retrógrado

consciente de ello. Puede estar profundamente enamorado y no saberlo hasta muchos años después de terminada la relación. Pasa por muchas formas de comportamiento similares, todas ellas destinadas a negarle en realidad lo que cree que verdaderamente necesita. Siempre tiene dificultades con el sexo opuesto, tiende inconscientemente a programar de antemano sus relaciones futuras de modo que encajen en los modelos de su pasado. Una gran inseguridad acompaña a esta posición, pues el individuo procura comportarse siempre de modó que sienta que encaja con los demás. Pero al hacerlo de forma semiinconsciente, sigue alejando a los demás de él, de modo que nadie le conozca lo bastante a fondo como para amenazar cualquier asomo de seguridad en el que haya basado su identidad. Esta posición tiende a hacer la vida más solitaria interiormente, dado que el individuo se automargina de la felicidad al intentar conseguirla por la vía más difícil.

El karma de Venus retrógrado Cuando Venus es retrógrado, el individuo lleva consigo una gran incomprensión del amor en vidas anteriores. Generalmente, siente tal dolor que ya no quiere experimentar la riqueza del amor por miedo a que vuelvan a herirle. Sea hombre o mujer, en esta vida tiene muchas dificultades en sus relaciones con el sexo opuesto. Al intentar vivir el presente, recrea sin cesar un viejo recuerdo de amor de una antigua encarnación que aún sigue eludiendo. Reacciona ante el presente como si en realidad estuviese viviendo en el pasado. En este sentido, ha permanecido fijo en un punto en el tiempo, y cualquier cosa que allí haga difícilmente parece ser el progreso que dice desear. En las cartas de los varones, eso indica a veces un kar75


ma relacionado con la homosexuali,dad. Pero incluso ésta tiene sus grados, que van desde el hombre sin pelos en la lengua que intenta vender políticamente la homosexualidad al mundo, hasta el hombre casado que no desea que se nombre esa palabra en su presencia, aunque busque la menor oportunidad para evitar a las mujeres, mientras demuestra su masculinidad. Este último tipo de hombre es la clase de individuo cuya vida se centra en sus amistades masculinas, empleando todo lo que sean asociaciones, clubs, aficiones, etc., como una excusa para evitar a las mujeres. Pueden comportarse respetablemente en sociedad, pero sigue siendo un homosexual en potencia. Con menor frecuencia encontramos reacciones similares en la mujer con Venus retrógrado. La tendencia kármica más notable es que el individuo, hombre o mujer, suele desconfiar de muchas ofertas de amor, pensando que los individuos que las realizan lo hacen generalmente con fines sospechosos.

Venus retrógrado en Aries Aquí, el individuo se siente más cómodo en la primera fase, donde vive esperando crear todo aquel sentimiento que le proporcione una autoestima. Al ser una persona concienzuda, siempre se preocupa de lo que los demás piensen o sientan por ella. Puede ponerse a la defensiva si tiene la impresión de que le están poniendo en un aprieto. Por ello pasa mucho tiempo solo. Es muy susceptible a la idea que los demás tienen de sí mismos, y si siente que alguien tiene un mal concepto de sí mismo que está a punto de influir en él, correrá rápidamente en otra dirección. Una de sus mayores dificultades estriba en su tendencia a llegar a conclusiones sobre sus sentimientos. Precon76

Venus retrógrado

cibe sus percepciones hasta el punto que antes de seguir la corriente de lo que la vida pueda depararle, expresa sus sentimientos sobre algunas experiencias aun antes de haberlas vivido. No obstante, busca situaciones que le permitan comprobar si sus fórmulas eran correctas. Para esta persona, el matrimonio no es tarea fácil, debido a una falta de confianza, combinada con un excesivo compromiso personal, que le impide experimentar toda la riqueza del otro individuo a nivel íntimo. Suele sentirse aburrido, pero no de la vida o de los demás, sino más oien de sí mismo. Antes que afrontar y llegar a comprender esto, a menudo se esmera en llenar su vida con una distracción tras otra hasta estar convencido de que su problema no tiene remedio. El día que aprenda a aceptarse a sí mismo, su vida cambiará por completo. Se esfuerza en superar un karma anterior en el que estableció una separación entre sus propios sentimientos y los de los demás. Es el residuo de esta sutil enajenación respecto a la gente lo que le mantendrá huyendo de sí mismo hasta que llegue a darse cuenta de que todas las actitudes que adopta, hacia sí mismo y hacia los demás, sólo son aquello que existe dentro de su propia mente. La primera fase le mantiene en karma, pero las fases segunda y tercera le muestran el camino a casa.

Venus retrógrado en Tauro Aquí, el individuo está más a gusto durante la tercera fase del proceso retrógrado. En ella puede sumergirse en todo lo que siente que ha adquirido en el pasado. Identifica constantemente su sentido de seguridad y sus sentimientos de autoestima con lo que ha conseguido o comprendido para sí inconscientemente en antiguas encamaciones, así como cada momento anterior al presente. 77


En algunos casos, este individuo está kármicamente ligado a un amor de una vida anterior del que nunca se dio cuenta plenamente. En consecuencia, la cantidad o la calidad del amor en su vida nunca parece ser suficiente para llenar el espacio vacío dejado por esa antigua relación. Está acostumbrado a los sentimientos de absoluta seguridad y no está dispuesto a aceptar en esta vida un amor que le ofrezca menos. En su juventud suele ser una persona tímida, y a lo largo de su vida se retraerá en sí mismo mientras ruega discretamente a los demás que le dejen en paz. Desea que la gente se le acerque y se comunique con él, aunque no quiera admitirlo. Intenta solapadamente atraer a los demás hacia él, pero al mismo tiempo les teme. Su mayor problema se centra en la tendencia a hacer cristalizar algunos sentimientos ya en los albores de su vida, y a medida que los años y las circunstancias de las experiencias pasan, él sigue agobiado por antiguos sentimientos, intentando desesperadamente volverlos a aplicar en cada nueva situación. Si eso no funciona, empieza a creer inconscientemente que, al menos, parte del mundo no le hace caso. Sus expectativas sobre el sexo contrario son generalmente irreales, debido a la fuerte desilusión de sí mismo que ha ido almacenando durante tantos años. Si un individuo pudiera acumular en su hombro una astilla tras otra, tranquilamente, hasta llevar a cuestas todo un árbol invisible, sería una persona con Venus retrógrado en Tauro.

Venus retrógrado en Géminis Aquí, el individuo pasa mucho tiempo intentando saber qué piensan de él los demás. A menudo, cambia sus predilecciones para estar de acuerdo con quienquiera que esté en ese momento. Hace eso porque necesita retroali78

Venus retrógrado

mentarse de los demás con el fin de comprender aquellas partes de sí mismo que cree que le gustan. Por consiguiente, su vida se orienta más hacia la aceptación de los demás que hacia un objetivo personal. Debido a las cualidades mutables de Géminis, este retrógrado puede funcionar durante las tres fases, pero aquí, Venus nunca adquiere completamente la riqueza personal que pretende instaurar. En cambio, todo tiene lugar en niveles de pensamiento en los que finalmente la naturaleza amorosa del individuo llega a basarse en ideas y conceptos más que en sentimientos personales. Es importante comprender que, dado que esa naturaleza está constantemente reidentificándose a causa de los pensamientos que recibe de los demás, este individuo es más impersonal consigo mismo que muchas otras personas. Su vida tiende a centrarse en las ideas de los demás, que poco comprende. En consecuencia, sus relaciones tienden a confundirle. Cuando se encuentra en dificultades con el sexo opuesto, busca razones en sí mismo para explicar la inquietud que siente en su presencia. El problema es que su parte mental (Géminis) tiene características duales y masculinas, mientras que su parte emotiva (Venus retrógrado) tiene unas características femeninas y de tenacidad innatas. La mezcla de todas ellas crea una vibración cruzada que origina inseguridad cuando se enfrenta con el terreno se~ xual. Todos los hombres somos medio varones y medio hembras, pero durante los años de formación de la infancia, la mutabilidad de Géminis, influenciada por el efecto retrógrado, dificulta al individuo el establecimiento de una identidad sexual fuerte en la que pueda creer firmemente. Sin embargo, a medida que madura y revive algunos de los conceptos de su infancia, empieza a transformar sus pensamientos en una nueva comprensión de su parentesco con la humanidad. Para conseguirlo, debe superar el karma de una vida anterior en la que tuvo dificultades para identifi79


car las partes masculina y femenina de sí mismo. En la vida cotidiana, intenta satisfacerlas a ambas inconscientemente, hasta que se da cuenta de que esta identidad no se basa en niguna de ellas, sino más bien en la interacción de las energías positiva y negativa que, al mezclarse, constituyen la fuente de todo pensamiento creativo.

Venus retrógrado en Cáncer Aquí, el individuo se siente mejor en la tercera fase, donde revive constantemente el papel de las relaciones con sus padres durante su primera infancia. En el hombre, eso puede comportar un fuerte «complejo de Edipo», en el que nunca llega a comprender el amor que siente por su madre. También existe el equivalente en el caso de la mujer con el «complejo de Electra». En ambos casos, el individuo mantiene su deseo de independencia, pero bajo esa afirmación no sabe en realidad cómo liberarse del sentimiento de protección que necesitaba en su niñez. Viviendo a través de una dependencia kármica, cada paso que da hacia su futuro le acerca cada vez más al seno materno del que nunca quiso salir. Reconstruye su vida con personas que representan todos los conflictos de su más tierna infancia de los que no supo cómo librarse. Uno de sus mayores problemas es que tiende a establecer sentimientos y reacciones frente a la gente basadas en viejos recuerdos de aquellos a quienes le recuerdan. Por desgracia, cada vez que 10 hace queda atrapado en más karma. En el matrimonio, proyecta en su cónyuge los primeros sentimientos hacia sus padres. En algunos casos, puede llegar a casarse con una persona que le recuerde a su progenitor del sexo contrario. Al basar gran parte del concepto que tiene de sí mismo en 10 que los mayores opinan de 80

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él, tiene que aplicarse en tratar de desarrollar su propia estima por su valía personal. Todos sus sentimientos se basan en una visión del mundo como si fuese una «familia». Eso le brinda un escudo de protección tras el cual puede echar un rápido vistazo a . todo lo que le rodea. Paradójicamente, también se queja de que ese escudo le impide experimentar todo aquello que quisiera. Sin embargo, su fuerza mayor llegará en posteriores etapas de su vida, en las que será importante para él proporcionar a sus hijos y nietos toda la seguridad y la comodidad alrededor de las cuales ha construido su escala de valores.

Venus retrógrado en Leo Aquí, el individuo se siente más cómodo durante la primera fase del proceso retrógrado. Al poseer un extraordinario complejo de superioridad, se proyecta en todo lo que hace. Cuando está inspirado, es capaz de transmitir una gran fuerza a la gente, pero nunca está seguro de la sinceridad de los demás y tiende a juzgarlos en silencio. En ocasiones, les pone a prueba para ver si son dignos de su compañía. Por consiguiente, tiende a soportar más cosas de lo que en realidad necesita. Pero, al mismo tiempo, esas cargas artificiales aumentan sus sentimientos de autoestima. Interpretando el papel de mártir, es capaz de convencerse a sí mismo de que tiene que cargar con una cruz en lo que se refiere a ofrecer un amor que no es apreciado. Su mayor problema es que quiere ser autoritario y extrovertido, pero la vibración retrógrada no siempre produce en los demás los efectos que tan arduamente intenta conseguir. Durante la primera fase, en realidad, el poder de su franqueza llega a asustar a los demás, y al darse cuenta

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de la reacción negativa que ha provocado, se aparta de todos aquellos individuos de quienes quiere estar más cerca antes que admitir que ha sido él quien se ha excedido. Esta posición de Venus es menos perjudicial para este individuo que para quienes desean entablar una relación sincera con él, cosa que encuentran difícil. Aporta a su vida un karma que le lleva a estar siempre en primer plano. Y, cuanto más es objeto de evidencia, menos capaz es de experimentar la riqueza de la interacción con los demás a un mismo nivel.

Venus retrógrado en Virgo Ésta es una de las posiciones más complicadas paraVenus retrógrado, por cuanto el individuo aporta a su vida un ideal muy fuerte de lo que debería ser el amor. Por eso, casi nunca lo siente con las personas con quienes se relaciona, ya que no alcanzan el nivel que él esperaba de ellas. Inconscientemente, juzga las imperfecciones que cree ver en los demás. Por consiguiente, no sólo se vuelve poco dispuesto ante la experiencia del amor, sino que cuando tiene la desgracia de sentirla, sigue apartándola hasta que dichos sentimientos no son más que una mera colección de teorías analíticas. Permanece principalmente en la tercera fase, en la que se vuelve introvertido por miedo a que los demás le hieran. De hecho, este individuo está experimentando el karma que le obliga a comprender la fragilidad de los hombres, ya que la perfección del amor, como ideal al que todos aspiramos, no debe considerarse como una realidad en la condición humana. Es durante la tercera fase que el individuo se pregunta por qué ninguna de sus relaciones anteriores satisfizo sus necesidades. Y es exactamente esa organización del pensamiento -«hacer que el amor funcione»- lo

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Venus retrógrado que desde siempre lleva al individuo a descubrir lo que es en realidad la experiencia del amor. La acción retrógrada del planeta no sólo le permite juzgar los defectos de los demás sino que, al dirigir la energía hacia el interior, tiende a transferir este karma a sí mismo. En consecuencia, siempre se encontrará en una situación de inferioridad en base a lo que debería ser a los ojos de los demás. Debe procurar verse tal y como es y aprender a gustarse a sí mismo, no en términos de todos los ideales que hqn cristalizado en su mente, sino de la antigua perspectiva de la realidad del mundo en que vive.

Venus retrógrado en Libra Aquí, el regente Venus se siente como en su casa más que en cualquier otra posición. Cuando la persona se mueve de una fase retrógrada a otra a través de los diferentes individuos de su vida, vuelve a sentirse necesitado. Posee un concepto del amor tremendamente romántico que depende más de las ideas o las cosas que la gente represente que de la satisfacción de sus propias apetencias y necesidades físicas. Algunos de los que tienen esta posición experimentan una especie de homosexualidad, ya que su necesidad de amor se burla de los convencionalismos sociales. Existe una terquedad inconsciente que se pone de manifies-' to en casi todo lo que hace el individuo. Será generoso, a condición de que no le hagan preguntas, servicial, si alguien le necesita, y sumamente obediente mientras nadie le obligue a serlo. Raramente responde a la fuerza, presión o peticiones de los demás. Su característica natural es la de descubrir solapadamente las necesidades de los demás y, de alguna manera, ser lo bastante útil como para satisfacerlas. En un nivel más profundo, no está totalmente seguro de lo que real-

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mente quiere para sí mismo. Está en un continuo estado de cambio, intentando sintonizar con cualquier cosa que pueda complacer a los demás. Sumamente consciente de los juegos psicológicos de la sociedad, puede ser, de hecho, uno de los más diestros jugadores. Se autoconvencerá de que algunas personas no pueden vivir sin él cuando, en realidad, eso no es más que una proyección en sentido contrario de su propia necesidad. Puede sentirse feliz contentándose con casi todo aquel que se adapte a sus gustos inconscientes, ya que nunca se relaciona con los demás, sino que simplemente se divide en dos -y entonces usa al otro individuo como un espejo para la parte de él con la que quiere identificarse en ese momento, dejando de ser su amigo, de hablarle y, sí, ¡incluso haciéndose el amor a sí mismol Su karma está arraigado en el equilibrio de su sistema de valores a través de las relaciones, y sólo cuando esté seguro de ello, sentará la cabeza y defenderá la idea que más le guste.

Venus retrógrado en Escorpio Ésta es una posición muy difícil para Venus retrógrado, ya que el vigor de Escorpio sigue impulsando al individuo a conseguir su propia satisfacción. Nunca se siente satisfecho, aunque todo 10 que busca esté justo a la vuelta de la esquina o enterrado en el pozo de su mente. Pasa mucho tiempo en la primera fase buscando futuras gratificaciones, pero desgraciadamente sigue pensando que encontrará su ideal en otra persona, lugar o situación más que en 10 más recóndito de su ser. Su carácter respecto al amor es ne!Vioso y reservado, pero al mismo tiempo se siente profundamente interesado por los sentimientos íntimos de los demás. Por ello, debido a todo 10 que ve en sus semejantes,

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le cuesta darse cuenta de qué es lo que está buscando en sí mismo. Atraviesa por largos períodos en los que está convencido de que su descontento es de origen sexual, pero que en realidad va mucho más allá. Lo cierto es que en pasadas encarnaciones pasó por experiencias que a nivel inconsciente provocaron una no aceptación de sí mismo. Se siente alejado de los ideales que siente en su interior y, por más que lo intente, parece incapaz de autoconvencerse de sus propios méritos. ' Mientras siga esta tónica, será propenso a un comportamiento que refuerce sólo sus sentimientos más profundos de fracaso y le alejen aún más de aquello que realmente desea. En algunos casos, la raíz del problema quizá se encuentre en un amor de una vida anterior del que dependía y del que finalmente se desengañó. Si ése es el caso, generalmente se producirá una repetición de la misma experiencia en los primeros años de su vida. Le resulta difícil sentirse completamente a gusto con el sexo contrario y, a menos que se enfrente a sí mismo, puede inventar muchas razones para ello. Sin embargo, no se permite ser vulnerable ante los demás en los niveles más profundos de su ser, debido a que le hirieron en el pasado. Aprender a perdonar es importante para aquellos que tienen a Venus en esta posición, pero el individuo debe comprender que el perdón no es posible sin el olvido. Con esta situación, la persona puede funcionar a lo largo de las tres fases retrógradas, pero su mayor evolución se registrará durante la tercera fase en la que, mediante una reevaluación de todo lo que ya ha vivido, puede trascender los sentimientos de niveles kármicos inferiores de su pasado.

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Venus retrógrado en Sagitario Ésta es una posición muy solitaria para Venus retrógrado. El individuo valora más su libertad que la intimidad que promete Venus. La primera fase del proceso retrógrado se acentúa de modo que la persona se proyecta de un arco iris a otro, sin permanecer nunca en un lugar el tiempo suficiente que permita a Venus absorber todas las vibraciones de su entorno. No acepta de buena gana los consejos de los demás. De todas las posiciones zodiacales, es el que más experimenta, y al mismo tiempo tiene la impresión de que aún se le escapa algo. También es una posición difícil para el matrimonio, y a menudo es causa de divorcio debido a un temperamento excesivamente inquieto. Existen dificultades para satisfacer todos sus sentimientos individuales, yen consecuencia suele confundir a los demás. Ve el mundo como un buffet gigante con un sinfín de platos para degustar, y no le gusta profundizar nunca en nada. La cantidad de experiencias de la vida se vuelve más importante que la calidad. Y mientras su brillante mente vaga por los rincones más alejados del universo buscando un lugar donde pueda sentirse como en casa, tiende a ignorar cada pájaro en mano para buscar otros ciento volando. Sus ideales derivan de vidas anteriores y, aunque no siempre los siga, continúa buscando gente, lugares y circunstancias que le hagan sentir más cerca de esas experiencias ideales del pasado. Por lo general, tiene un buen concepto de sí mismo y un ego bastante fuerte que le mantienen sano al sumergirle en casi todo lo que la vida le ofrece. A pesar de que esta posición dificulta las relaciones íntimas duraderas, proporciona al individuo un espectro de experiencias sumamente variado. En anteriores encarnaciones aprendió a desarrollar un sentimiento natural por el mundo que le rodea, a sabiendas de que depende más de

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sus propios conocimientos que de las palabras de libros y profesores.

Venus retrógrado en Capricornio En esta posición, Venus suele indicar un matrimonio con un compañero de más edad o con un individuo· que simbolice la autoridad del pasado. En algunas ocasiones, el cónyuge representa las restricciones impuestas durante la infancia y en otras aporta al individuo las que tuvo que acatar en una vida anterior. El período más cómodo es el correspondiente a la tercera fase, donde se repiten los viejos tiempos que representan seguridad y protección mientras el individuo sigue intentando volver a experimentar relaciones protectoras. En muchos aspectos es un coleccionista; ya sean antigüedades, recuerdos de tiempos históricos, o incluso gente, ello siempre simboliza su necesidad de aportar algo a lo que cree que es una realización necesaria. Su vida está llena de contornos y formas, dado que desea que todo lo que siente cristalice en sí mismo para satisfacer la sensación de seguridad que intenta establecer. En su juventud puede parecer muy maduro para su edad, pero entretanto se rebela interiormente contra todo aquello que restrinja su libertad. Retiene pensamientos, ideas y sentimientos (incluyendo los negativos) durante años, y tiende a negarse a sí mismo el placer o la felicidad durante la primera mitad de la vida a la espera de alguna gran promesa en tiempos venideros. Sin embargo, a medida que se hace mayor, llega a darse cuenta de cuánto ha intentado recrear el pasado y lo mucho que eso le ha limitado. Entonces, cambia radicalmente y empieza a adquirir un punto de vista más práctico en lo que a sus propias necesidades se refiere. Mientras tanto, se siente desconectado de la gente

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de su edad. Básicamente, tergiversa su vida, experimentando el peso de la vejez en su juventud y la libertad de los años de adolescencia durante su senectud. Éste es uno de los indicadores de karma familiar del horóscopo. Normalmente, procede del pasado un desequilibrio tal, que se repite durante los primeros años de su vida, que el individuo pasa la mayor parte del tiempo huyendo de sí mismo. Luego, hacia la mitad de su vida se da cuenta de ello e intenta recuperar todo aquello que sabe que ha perdido.

Venus retrógrado en Acuario Aquí, el individuo se encuentra más a gusto en la primera fase del proceso retrógrado, en la que puede explorar las necesidades que vislumbra momentáneamente, antes de sentirlas realmente en su vida. A veces puede tener la imperiosa necesidad de ayudar a los demás hasta el punto de que puede llegar a estorbarles si no tiene razón de ser. Es tremendamente independiente y no acepta con facilidad restricciones o limitaciones en su vida. A veces, repartirá su cariño entre muchas cosas, personas y experiencias, lo que hará que quienes le rodean sientan frustradas sus propias capacidades para concentrar sus energías. No obstante, gran parte de esta dispersión es un mero reflejo de su carácter fuertemente cambiante. A menudo es extremadamente susceptible a su entorno y debe procurar cambiar su actitud ante la vida para sentirse equilibrado. Se trata de una persona rebelde y amante de su libertad. Es demasiado susceptible a la gente que le impone su voluntad, pero al mismo tiempo es consciente de qué es lo mejor para los demás. Por eso suele carecer de perspectiva en sus relaciones personales. Siente un ávido interés por casi todo, y suele verse in-

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volucrado con algunas de las personas más extrañas. Los convencionalismos le resultan demasiado aburridos como para prestarles una gran atención, a pesar de que los necesite para sentirse seguro. En realidad, está mucho menos seguro de sí mismo de lo que creen los demás. Durante la primera fase, explora activamente lo desconocido, mientras que en la tercera fase vuelve a explorarlo o bien examina pequeñas muestras de conocimiento del pasado. Es a lo largo de esta tercera fase que muchos de, los que tienen esta posición disfrutan investigando antiguas civilizaciones o documentos poco conocidos de otras épocas. En otros muchos, comporta un gran interés por la astrología y los temas esotéricos. Dejando aparte toda la artificialidad de la vida, es una persona muy solitaria. En realidad, su necesidad impersonal de ayudar a los demás no es más que un disfraz para tratar de conseguir su regre~ so a la humanidad que de alguna forma le rechazó en otra encarnación. Así, no espera nunca una total intimidad durante un largo período de tiempo, pero se contenta sabiendo que ahora sus creencias y sus ideas son aceptadas. Y se desviará de su carnina kilómetros y kilómetros sólo para ganar su aceptación.

Venus retrógrado en Piscis Aquí, el individuo pasa la mayor parte del tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, puesto que sigue reabsorbiendo el sueño de un antiguo amor. Experimenta una enorme soledad y, en silencio, tiene la impresión de que está separado de la realidad tangible que cree desear. Tremendamente romántico en anteriores encarnaciones, sigue remontándose a viejas fantasías. Es poco convencional y le gusta sentirse independiente mientras pueda contar con el apoyo de alguien. Fuertemente impresionable en su 89


juventud, muchas de las experiencias por las que pasa son repeticiones de las escenas de los cuentos de hadas con los que se identificaba. De hecho, no empieza a darse cuenta de ello hasta la mitad de su vida. Es una persona difícilmente accesible porque, en realidad, es muy posesivo de las ilusiones que le impiden verse a sí mismo, y cada vez que su espejo está a punto de hacerse añicos vuelve a crear nuevas ampliaciones para dichas fantasías, de modo que puedan liberarle todo lo posible de las restricciones que sufre en su realidad actual. En realidad, no se encuentra cómodo en las circunstancias que le rodean en esta encarnación. Sin embargo, no se da cuenta de que es él mismo quien las elige ni quiere hacerse cargo de ello. Encuentra más fácil creer que la vida le ha estado arrastrando, a veces incluso contra su propia voluntad. Tiene un miedo terrible a ser poseído, tanto por la gente como por las circunstancias que en algún momento del futuro puedan exigirle algo. En esta inseguridad inconsciente siente que quizá no sea capaz de cumplir con tales exigencias. Esta posición de Venus tiende hacia un masoquismo que origina muchas situaciones que castigan al sí-mismo cósmico y al mismo tiempo crean un gran dolor en su interior. Cuanto más permite esta persona que las viejas ilusiones penetren en sus actuales sentimientos, más se separa de los sentimientos del presente que dice querer experimentar. En sus relaciones con los demás, tiene tendencia a retraerse en la pisciana niebla gris que le envuelve como un amortiguador contra el presente. Ésta es una de las posiciones más difíciles para la comprensión de un amor personal. Por ello, a través del karma debe procurar alejar sus esperanzas del plano personal de expectativas para su sí-mismo inferior, y en su lugar empezar a sentir una armonía divina sobre la cual basar su realidad.

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Venus retrógrado Muchos individuos con esta posición han experimentado la pérdida de un amor personal en una encarnación anterior. Ahora, en esta vida, siguen buscando inconscientemente aspectos de ese amor en cada persona que conocen, hasta el día en que se den cuenta de que su alma ha preferido transformarse más allá de las necesidades de una gratificación egoísta. En consecuencia, en esta posición el dolor aparece en la tercera fase del proceso retrógrado, en la que el individuo se transforma en un activo dador para la humanidad al pasar impersonalmente a la primera fase.

Venus retrógrado en la Casa primera Este individuo necesita que se le preste mucha atención, y a pesar de todo nunca se siente totalmente satisfecho. Le preocupa cómo se muestra a los demás. Existe un gran egocentrismo cuando los sentimientos narcisistas se mueven más de prisa a nivel consciente que a nivel inconsciente. En su constante búsqueda de atención, hay mucha ambivalencia en sí mismo. Aunque se considera una criatura del amor, no suele comprender cuánto amor debe dar a los demás. Tanto puede dar mucho como poco. En general, todo el amor que da o recibe nunca es el apropiado para la situación. Le gusta que los demás le dejen vivir su vida y, sin embargo, puede mostrarse excesivamente posesivo con los demás por miedo a que le dejen solo. Este conflicto puede causar muchos problemas en el terreno de las relaciones así como en el del matrimonio. En sus experiencias amorosas, pasa por el triple proceso retrógrado que intensifica aún más su carácter positivo y negativo, de acuerdo con la fase en la que se encuentre, que si las circunstancias en sus relaciones con los demás garantizan sus respuestas. No es necesariamente un gran emi-

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sor de amor, pero puede absorber mucho de la gente. Lo necesita para confiar en sí mismo. Esta posición implica muchos problemas durante la segunda fase del proceso retrógrado porque la necesidad de armonía combinada con la expresión de unidad consigo mismo de la Casa primera no tolera una vibración cruzada durante un largo período de tiempo. Se siente más a sus anchas durante la primera fase, en la que la expectación llega a su punto culminante. Incluso en esta fase, mientras intenta reforzar su Venus positivamente para adentrarse en el futuro, experimenta aún el carácter magnético negativo de Venus, mediante el cual espera ser un receptor de amor. La clave principal hacia la felicidad en esta posición se basa en una autoaceptacióq realista.

Venus retrógrado en la Casa segunda Aquí, el individuo se siente mejor durante la segunda fase. En ella, los rayos de Venus, absorbentes por naturaleza, intentan recrear anteriores experiencias que dan al individuo sensación de seguridad. Es extraordinariamente posesivo en relación a todos los antiguos sistemas de valores que fueron válidos para él. Le gusta absorber el universo que le rodea, puesto que vuelve a ofrecerle la seguridad que estaba tan acostumbrado a sentir. Puede ser tremendamente materialista cuando intenta reestablecer y fortalecer todo viejo sentimiento de autoestima. Dada su fuerte tendencia a repetir todo lo que le gusta, se convierte en un animal de costumbres. Es tan grande su necesidad de seguridad en el plano físico y material, que le resulta difícil ser generoso en exceso sin sentir que está perdiendo algo en el proceso. Con esta posición, el individuo intenta interiorizar todo lo que aprecia del universo. En muchos casos, eso incrementa la posesividad característica de la Casa segunda.

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Venus retrógrado Dada su gran necesidad de protección, no es muy competitivo, ya que existe ahí una cierta dosis de pereza. El individuo se encontrará en dificultades con el sexo opuesto debido a su fuerte posesividad o a su miedo a ser poseído. Es parco para expresar afecto, y al mismo tiempo tiende a exagerar interiormente sus sentimientos. Le gusta hacer las cosas a su manera, y puede llegar a enfadarse si ve que los demás le obligan a hacerlas a su modo. Muchos de los que tienen esta posición pueden convertirse en grandes artesanos, pero siempre construirán alg6 del pasado. Si alguna vez existe un individuo que decide ganarse la vida construyendo elegantes carros del siglo XXI, ése será un individuo con Venus retrógrado en la Casa segunda. Aquí, el individuo siente un karma de cariño hacia el amor y comodidad de una vida anterior en términos de personas, objetos y circunstancias. Basa toda su seguridad en la continuidad de formas y sustancias en la vida actual.

Venus retrógrado en la Casa tercera Ésta es una posición muy difícil para Venus, puesto que la imprevisibilidad de Géminis envía constantemente al individuo de una fase retrógrada a otra. Parece estar desincronizado enJa mayoría de sus relaciones. Incluso ama en un grado mayor o menor según el amor que reciba del otro individuo. No obstante, su amor no está sintonizado en la dimensión temporal, de modo que puede sentir un gran amor por un individuo mientras se dispone a estar con él, experimentando una baja vibración durante un contacto personal real, y luego siente gran parte de ese amor cuando ya no está con esa persona, a quien buscará y recreará en su mente. De este modo, en su vida amorosa y en sus relaciones 93


con los demás, el individuo se encuentra con grandes problemas cuando intenta vivir el aquí y el ahora. Las fuerzas externas a él actúan constantemente sobre su Venus retrógrado, provocando situaciones para las que no se siente preparado o que ya le han sobrepasado. Y, mientras atraviesa por esas condiciones de su vida, sigue intentando armonizar sus sentimientos bajo el dominio de sus actividades mentales. Por consiguiente, pasa mucho tiempo analizando todo lo que siente. Ésta es una posición complicada para el matrimonio, ya que las propiedades mutables de la Casa tercera siguen manteniendo al individuo desconectado de sus propios sentimientos. A la hora de expresarse, el individuo tiende a no dar sentido a lo que dice, sino que se interesa más por el sentimiento que ello crea en su interlocutor. Es básicamente inseguro, especialmente con gente de su misma edad. Frecuentemente, para ser aceptado, dirá o hará cosas que sabe que no son él mismo, pero que le permitirían ganar la aceptación que ansía de la sociedad. Su karma reside en los sentimientos de los demás, ya que sigue intentando encontrar el modo de poder satisfacer a los demás así como a sí mismo. Existe una buena cantidad de soledad kármica inherente a esta posición de Venus' y gracias a ella el individuo puede sentirse solo entre la muchedumbre.

Venus retrógrado en la Casa cuarta Venus se halla bien situado en la Casa cuarta, disfrutando de un alto nivel de confort a lo largo de las tres fases retrógradas. Aunque las últimas dos fases pueden hacer que el individuo se vuelva algo introvertido, eso no le hace sentir demasiado incómodo. Le gusta tener a una persona del sexo opuesto en la que apoyarse, dado que su concepto del amor siempre implica un cierto grado de protec94

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ción paternal que, a pesar de que pueda resentirse exteriormente, la necesita mucho interiormente. Al igual que un niño, recrea continuamente el tipo de amor que sintió en sus primeros años. El individuo nunca ha conseguido superar el amor y el apego hacia su progenitor del sexo contrario. Por eso, sigue intentando regresar al seno materno. A veces siente miedo de la gente, y por ello le resulta más difícil expresar sus preferencias al mundo exterior que a aquellas personas más cercanas a él y que conoce desde hace mucho tiempo. Le cuesta entenderse con' extranjeros, pues en lo que al amor se refiere, concibe el mundo como una familia gigante, ¡la suya! A menudo se siente obligado a relacionarse con los demás como si realmente fuesen su propia familia, cosa que hace inconscientemente, pero añade una carga a sus espaldas al limitar el número de individuos y situaciones externas en las que pueda sentirse a gusto. Se abre paso a través de un karma que le mantiene repitiendo los principios de las experiencias amorosas hasta tener la suficiente confianza como para creer que, en realidad, es gracias a ella que consigue la seguridad que necesita para poder expresarlo al mundo.

Venus retrógrado en la Casa quinta Aquí, el individuo se siente más cómodo durante la primera fase del proceso retrógrado. Suele tener un ego muy fuerte que se manifiesta a través de los procesos creativos. Por consiguiente, a veces puede abrumar a la gente por la cantidad de confianza que parece tener en sí mismo. En realidad, no se trata de eso, pues la combinación entre el planeta y la casa le convierten en un gran actor en presencia de los demás, de modo que el individuo pueda vivir con su propia autoconciencia. Tiende a proyectar sus sentimien95


tos hacia los demás porque no tolera el rechazo. Sin embargo, puede repudiar a los demás antes de sentirse repudiado por ellos si considera que no encajan en sus criterios. En algunos casos soporta un orgullo interior de sí mismo que los demás deben reforzar antes de que les permita entrar en su círculo. Se alejará de su camino para mantener lo que cree que es el autorrespeto, y a menudo puede negarse toda la alegría de la vida tratando de justificar una imagen que él mismo ha creado. Se siente mejor cuando puede ayudar a los demás si los ve menos capacitados que él. Así, algunos de los que tienen esta posición pueden obtener un gran placer enseñando a niños retrasados o a individuos minusválidos a ser más expresivos. Una de las mayores dificultades en esta posición de Venus es que el individuo se frustra constantemente al ansiar cosas totalmente ilusorias. Es incapaz de encontrar a la persona perfecta que pueda proporcionarle todo cuanto cree que necesita. Así, de la forma más elemental, se dedica a la lección kármica de contentar. Puede llevar a cabo un mayor crecimiento interior si se da cuenta de que su vida depende de los demás menos de lo que cree. La insatisfacción que advierte respecto a los demás es siempre la que ha creado en sí mismo. Cuando aprenda a esperar menos de su propia vida, encontrq.rá la alegría que está buscando.

Venus retrógrado en la Casa sexta Ésta es una posición muy inestable para el sensible Venus, ya que el individuo siempre se exige mucho a sí mismo debido al sentido del deber que experimenta. Existe una tendencia a sentirse decepcionado en las relaciones, parti-

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cularmente en aspectos relacionados con el trabajo. Aunque las tres fases son difíciles, el individuo se siente más seguro en la tercera, en la que se retrae en sí mismo, vuelve a tomar sus sentimientos e intenta racionalizar todo lo que él es con todas las cosas que debe ser para los demás. Eso provoca un dolor interior que le impide funcionar al máximo rendimiento. Tiene que evitar sentimientos extremos, ya que inconscientemente cree que el mundo es un lugar caóticamente contaminado. Da la espalda a los demás cuando no consigue entende.r cómo tratar los defectos que encuentra en ellos. Uno de sus mayores problemas es que puede automatizar sus sentimientos, efectuando una programación previa de los mismos de modo que pueda calcular cómo funcionarán en adelante. De este modo, su acercamiento a la gente es pura- . mente mecánico y considera cada pensamiento o acto que recibe de los demás como parte de los muchos movimientos que constituyen el juego de ajedrez de su vida. Puede hacer muchos favores a sus semejantes, pero sólo se contenta si sabe que pueden devolvérselos. Desgraciadamente, tiende a juzgar a los demás por lo que hacen, comparando sus actos con sus ideales. Así, vive con un doble criterio, sin llegar a darse cuenta de que los ideales de todas las personas que conoce bien pueden ser tan elevados como los suyos propios, y que su incapacidad de seguirlos en su presencia es reflejo de su fragilidad humana. Emplea gran parte de su energía en sublimar y reprimir muchas de sus necesidades. Desde su limitada posición estratégica, en su karma se ocupa de intentar crear la perfección en su entorno. Debe aprender que el mundo ya es perfecto y que él no puede mejorarlo. Un lugar entre su idealismo y la desconocida necesidad que tiene de los demás es el equilibrio que le dará la felicidad.

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Venus retrógrado en la Casa séptima Ésta es una de las posiciones más especiales de Venus retrógrado. Como regente de la Casa séptima, puede ser muy beneficioso si el individuo lo utiliza para ver el auténtico reflejo de sí mismo a través de los ojos de aquellos que quiere. Sin embargo, si teme que muchas de sus ideas, pensamientos y sentimientos puedan ser rechazados y no comprende por qué, entonces puede llegar a provocar un desequilibrio en todo el horóscopo. Su humor y sus sentimientos se ven influidos por el mundo que le rodea; no hay límites entre los que surgen en su interior y los que interioriza de los demás. Al deslizarse de una fase retrógrada a otra, asume diferentes identidades, dirigidas todas ellas hacia el sí-mismo aunque ninguna constituya su auténtico centro. Es extraordiariamente consciente de cómo puede cambiar completamente, perdiendo la espontaneidad en aras del deseo de que la gente le conozca mejor. En ese sentido es un extremista. En el transcurso de un día cualquiera, puede cambiar radicalmente de estrategia en un fuerte deseo de disgustar a los demás. Sus sentimientos son como un péndulo que el aliento de los sentimientos de otras personas balancea de un lado a otro; siempre pasa por el centro, pero raramente se detiene allí. Nunca está lo suficientemente seguro de si actúa correctamente o no a través de los ojos de los demás. Muy susceptible al medio que le rodea, al principio se inclina ante él, se abandona y luego huye para recuperarse. Sin embargo, no le gusta hacer las cosas solo yeso le hace sentir la frustración de querer conocerse a sí mismo a pesar de no desear separarse completamente de los demás. Dedica todo su karma a experimentar los aspectos más desequilibrados de sí mismo mediante el modo en que los demás le ven.

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Venus retrógrado

Venus retrógrado enZa Casa octava Aquí, el individuo pasa gran parte de su tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, en la que su deseo natural incrementa la necesidad de producir ahora una satisfacción futura. Siente un gran nerviosismo interno que no descarga fácilmente. Los sentimientos amorosos se mezclan a menudo con anteriores enfados y resentimientos dirigidos hacia algún individuo o experiencia que le causó dolorosos recuerdos. Es tremendamente perspicaz, mas no le gusta que los demás vean en su interior. También posee unos ideales muy elevados, pero si el individuo es incapaz de darse cuenta de su sueño en la vida real, sus acciones pueden correr en dirección opuesta. En el terreno sexual, oscila desde períodos de intensa necesidad hasta períodos de una falta total de interés. Su comportamiento sexual está relacionado con su fuerte posesividad. A veces puede estar secretamente celoso de los demás, quienes parecen tener mucho más que él. Tiene tendencia a esconderse de sus propios sentimientos yana querer enfrentarse al muro que erige entre su vida cotidiana y su vida íntima. Existe una gran impaciencia en esta posición, puesto que el individuo no sólo experimenta sus necesidades más profundas, sino que también sufre las influencias de las necesidades de otras personas. Con frecuencia, eso conduce a un conflicto entre la forma en que se relaciona con la sociedad y el modo en se siente en realidad. En esta posición de Venus suele existir un enorme resentimiento, ya que el individuo se siente engañado o privado de muchas de las cosas que cree que en derecho le corresponden. Tiende a pasarse la vida haciendo cosas de la manera más compleja, envidiando la forma en que los demás consiguen los mismos objetivos con menos esfuerzo. 99


Esta posición comporta una sensación de aislamiento del mundo. Existen restos de un amor perdido. Por consiguiente, al individuo le cuesta confiar plenamente en las personas que conoce en su vida cotidiana porque ve, inconscientemente en cada uno de ellos, uno de los aspectos simbólicos del amor de los que se vio privado en el pasado.

Venus retrógrado en la Casa novena Aquí, el individuo siente una necesid~d imperiosa de libertad personal. No permite que los demás interfieran en su espacio. En algunas personas, esta posición manifiesta una fuerte inclinación hacia la vida espiritual. Aislado del fuerte carácter subjetivo de las relaciones sociales, busca la paz consigo mismo mediante su habilidad para mantenerse alejado del centro de las cosas. Esto puede manifestarse como el deseo de recluirse en un monasterio, cerca de un manantial en la montaña, o de caminar descalzo por el bosque. Existe aquí una gran necesidad de sentir la grandeza de la vida, y el individuo suele sacrificar su proximidad a los demás para satisfacer dicha necesidad. Es muy indepen~ diente y no le gusta que le encasillen en los deseos de otras personas. Al mismo tiempo, ésta es una difícil posición para el matrimonio o cualquier otra relación duradera, ya que en la Casa novena las cualidades personales de Venus son transferidas a una realidad más cósmica. De este modo, el sentido de la propia identidad del individuo es distinto del que tiene la otra gente que encuentra. Por el modo en que ve el flujo y el reflujo de la marea universal de la vida, no le gusta hacer compromisos permanentes. Hará solo muchas cosas, y vivirá numerosas experiencias con personas muy diferentes, la mayoría de las cuales

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Venus retrógrado

son representativas de filosofías bastante ajenas a las ideas en las que se ha educado. Tiende a ser una persona difícil de comprender, dado que no suele motivarse con las ideas que incitan a sus contemporáneos. En realidad, ésta es la única persona que puede conseguir un inusitado grado de paz en medio de un mundo caótico. Sin embargo, no puede transmitirlo a los demás. En algunos casos, puede poseer talento artístico, derivado de una antigua encarnación. Cualquiera que sea su estilo de vida, experimentará cierta conflictividad entre el sentimiento de que debería comprometerse con las necesidades de la sociedad y el saber que tiene muchas razones para no hacerlo. Kármicamente, marcha al ritmo de otro tambor, y aporta a su vida una fuerte tendencia a hacer lo que quiere cuando quiere. Es fácil llevarse bien con él, pero resulta imposible poseerlo, puesto que su instinto más arraigado es el de ser un espíritu libre.

Venus retrógrado en la Casa décima Aquí, el individuo pasa gran parte de su tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado. Le gusta mirar atrás hacia las realizaciones de los deseos y necesidades de su vida para saber si es aceptado por aquellos a quienes había admirado anteriormente por creerlos superiores a él. Quiere la aceptación social, pero no le gusta buscarla. Así, la manifestación de su creatividad se ve obstaculizada por el hecho de si espera o no el rechazo de los demás. Puede ser una persona sl,lmamente consciente de cómo se integra con el resto de la gente y, en consecuencia, volverse tremendamente susceptible a las situaciones sociales. Capaz de interiorizar los sentimientos de los demás, se 101


siente a menudo responsable de satisfacer los deseos de quienes le rodean. Eso tiende a hacerle sentir incómodo cuando se halla en público. Suele ser autoconsciente y a veces da marcha atrás ante las direcciones que más le gustaría seguir. Siente fuertemente la responsabilidad del pasado, y no está seguro de poder vivir con arreglo a él. En el horóscopo de un varón, eso puede originar problemas con las mujeres, como consecuencia de estar bajo el dominio de una mujer mayor en los inicios de su vida. Generalmente, existe una gran capacidad creativa ya revelada en antiguas encarnaciones, pero el individuo debe fomentar la confianza en sí mismo si quiere expresarla. Kármicamente, va por la vida intentando recoger los sentimientos que le proporcionen el sentido de resolución que necesita. En cuanto lo haya hecho, empezará a plasmar en su vida el sentido que ha estado buscando.

Venus retrógrado en la Casa undécima Ésta es una de las posiciones más difíciles de Venus retrógrado, ya que se aparta del proceso creativo. El individuo raramente se siente tranquilo. Las pacientes cualidades de Venus se alteran al dejarse llevar por una omnipresente curiosidad durante la primera fase del proceso retrógrado. Logra la satisfacción de muchas formas al mismo tiempo. Algunas veces, su sentido de la realidad es tan peculiar que el individuo está casi totalmente separado de su identidad en esta tierra. Quiere probarlo todo, pero no sabe por qué. En ocasiones, se vuelve muy posesivo del pensamiento mismo, hasta el punto que la injusta codicia que ve en los demás en el plano material es un reflejo de lo que él mismo está haciendo mentalmente. Debe aprender a diferenciarlo, pues mientras cada nuevo capricho o quimera que le

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Venus retrógrado atraiga sea bello dentro y fuera de él mismo, la mezcla de todos ellos suele ser más disarmónica que aquello con lo que él cree sentirse cómodo. Expresa un fuerte rechazo personal que en el fondo hace que se vuelva más independiente. Explorando los muchos niveles y posibilidades de pensamiento que existen en el universo, no siempre sabe cómo combinarlos en su vida personal. No obstante, puede servir de más ayuda a los demás que a sí mismo. Una de sus mayores dificultades es que su secreto deseo de vivir sus experiencias por sí mismo le mantiene un tanto alejado del resto de la humanidad que tanto quiere. Algunos de los que tienen esta posición atraviesan raras expriencias sexuales puesto que su necesidad de explorar siempre intenta trascender las normas sociales. En anteriores encarnaciones, vivió tantas experiencias diferentes que le atrajeron que se convirtió en un tenaz buscador de todo aquello que aún no había experimentado. Sus sueños pueden ser irreales, pero la naturaleza de su realidad personal es tal que está totalmente desinhibido de las restricciones de la sociedad convencional. Su futuro se basa enteramente en el grado en que se aferra a sus viejas fantasías.

Venus retrógrado en la Casa duodécima Aquí, el individuo permanece en la tercera fase del proceso retrógrado, donde no expresa abiertamente los sentimientos que cree pueden ser rechazados. En muchos casos, existe un apego a un amor de una vida anterior que aún no ha terminado, y dado que el individuo vive cada día de su futuro, sigue intentando recrear su pasado. Puede ser feliz cuando está solo, pero no le gusta sentirse abandonado por los demás. Al menor síntoma de rechazo, puede atra-

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vesar por largos períodos sintiendo lástima de sí mismo, pues sabe casi instintivamente que llegó a esta encarnación dejando atrás a su verdadero amor. Por eso intenta contentarse encontrando aspectos simbólicos de ese amor en la gente que conoce, pero bajo toda su energía emocional aún está sujeto a conceptos románticos de un tiempo pasado. Así, le resulta difícil sentirse plenamente satisfecho de las experiencias de su vida cotidiana, pues todo lo ve según el color del cristal de sus ideas preconcebidas. Camina por la vida con un silencioso dolor y no le gusta que los demás le pidan nada. Normalmente, en esta posición existe una gran dosis de emociones contenidas, y mientras los demás raramente lo ven, el individuo casi siempre es consciente de esa parte de él que sigue negándose a incorporarse a la vida cotidiana. Puede ser tremendamente creativo si no se le fuerza, pues tiende a pasar mucho tiempo viviendo en sí mismo cuando en realidad puede ganar su esfuerzo, pero reabsorbiendo inconscientemente antiguos recuerdos de momentos en los que estuvo verdaderamente en paz consigo mismo. No busca tanto la popularidad en el mundo exterior como la satisfacción interior. Algunas veces, en esta posición se dan casos de amores clandestinos, mediante los cuales el individuo intenta mantener en el presente la ilusión de lo que una vez fue realidad en el pasado. Comedido emocionalmente, tiende a dejar escapar muchas oportunidades en su vida. Alcanzará la felicidad cuando se dé cuenta de que en realidad no está perdiendo su pasado viviendo el presente.

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3. MARTE RETRÓGRADO Marte retrógrado como símbolo esotérico Marte, el planeta de la vitalidad, la energía, la sexuálidad y el deseo de expresarse, se representa por Ce!) la cruz de la materia dispuesta en ángulo sobre el círculo del espíritu. En la simbología moderna, la cruz aparece como una flecha, indicando así la naturaleza marciana de ir hacia adelante. Pero es interesante destacar que la cruz o la flecha están siempre inclinados, mostrando un desequilibrio, así como un estado incompleto en este símbolo. Así, se proyecta fuera de sí mismo como la cruz o la flecha se aceleran desde el círculo del espíritu para encontrar lo completo en las cosas eternas o en otras personas. Éste es el único planeta personal en el cual la cruz de la materia está situada sobre el círculo del espíritu. Por eso, la necesidad de una satisfacción carnal, material y física predomina aquí sobre el espíritu y, de hecho, puede satisfacerlo. Cuando Marte es retrógrado, el significado del símbolo se invierte y el individuo se niega a aceptar la satisfacción de su espíritu por sus logros y conquistas en el aspecto material o físico de su vida. En anteriores encarnaciones, apendió a sublimar, retorcer, rechazar, distorsionar o negar la satisfacción de sus necesidades físicas, a menos que tropezase primero con las necesidades de su espíritu. Es interesante advertirlo porque la cruz de la materia está inclinada incluso cuando este símbolo se invierte, y si-

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gue representando un desequilibrio. Probablemente más aun, ya que la flecha-cruz del deseo de satisfacción material no sólo apunta hacia el pasado sino que también da menos estabilidad al círculo del espíritu como para que permanezca en su lugar. Es casi como si el círculo del espíritu intentara encontrar el presente al tiempo que arrastra, como un lastre, los deseos físicos del pasado.

La personalidad de Marte retrógrado Este individuo experimenta una falta de contacto con la más pura realidad de su sistema de necesidades. Por eso, se encuentra en dificultades a la hora de coordinar pensamiento y acción. El pasado de su vida, que en realidad está viviendo, está ligeramente arrancado de su conciencia. También experimenta problemas sexuales a causa del magnetismo inverso del planeta retrógrado. Eso se debe principalmente a su incapacidad para regular el flujo de energía que esta posición le lleva a experimentar. Muchas de las situaciones por las que pasa dependen menos del pensamiento o de las emociones que de su habilidad para manejar sus propios niveles de energía coordinadamente con aquellas energías que recibe de los demás. Puede reaccionar enérgicamente ante una persona y desarrollar un poderoso sentimiento, tanto en sentido positivo como negativo, basado meramente en el nivel de energía que está recibiendo antes que por las razones humanas que añade a sus relaciones. A causa de ello, las relaciones del individuo son casi siempre desafortunadas, y en el terreno sexual parece simbolizar más una lucha por la supervivencia que una verdadera unión con otra persona. Puede sacar conclusiones al tiempo que retrasa las acciones necesarias que evitarían todo aquello que le preocu-

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Marte retrógrado

pa. Si Marte retrógrado se halla en un signo de aire, es muy activo mentalmente y le resulta difícil aprender a relajarse. Esta posición de Marte es más difícil para una mujer que para un hombre, porque el sistema de energía puede ser desproporcionado al resto del horóscopo y tiende a disminuir su feminidad. Existen muy pocas mujeres con esta posición que, a nivel inconsciente, sientan amor alguno por los hombres. Sin embargo, a nivel consciente, elopuesto aparente se manifiesta a veces poniendo a los hombres en pedestales, creando una especie de culto al ídolo que acerque al individuo a su realidad inconsciente, que recrea interiormente la necesidad de derribar ese pedestal. En muchas posiciones, Marte retrógrado provoca sentimientos de culpabilidad y lástima que aíslan al individuo, apartándolo del libre intercambio de relaciones personales que experimenta la gente con Marte directo.

El karma de Marte retrógrado Cuando Marte está en posición retrógrada en el horóscopo, todas las acciones del individuo en su vida cotidiana son recreaciones del pasado. El individuo intenta encontrar en su vida gente que simbolice a todos aquellos que le satisficieron en anteriores encarnaciones. En su mente, les asigna los papeles de aquellas figuras que ya no existen. Con ellos intenta manifestar todo lo que no podía expresar antes. Tiende a sobrerreaccionar en un intento de introducirles a la fuerza en papeles imaginarios que ha concebido para ellos. Así, desarrolla un rechazo demasiado fuerte y vívido pero, sin entender por qué, se encierra en sí mismo sin experimentar nunca por completo las relaciones de su vida cotidiana en el momento presente.

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Tiene tendencia a centrarse en un tiempo de su pasado que representó una fuerza de la que tenía que ocuparse. Ahora, vibra inconscientemente con esa misma fuerza, sea de rabia, venganza, hostilidad o acciones erróneas de cada persona del presente. En algunos casos, puede llevar a cuestas el rencor de una vida anterior que le hace desconfiar de las acciones de los demás. Al menos en una vida pasada ha sufrido acciones sospechosas o decepcionantes por parte de los demás. Esos restos pesan considerablemente en el comportamiento actual en su vida cotidiana.

Marte retrógrado en Aries Aquí, Marte retrógrado se siente más cómodo en la primera fase, donde las cualidades impulsivas de Aries se combinan con la confianza marciana de intentar crear el futuro enérgicamente antes de que lo haga ninguna fuerza exterior. Hay tantos residuos de inseguridad de una vida anterior que al individuo le resulta difícil pasar por la tercera fase, en la que deberá evaluar sus acciones pasadas y calcular todas sus posibilidades. Aún intenta empezar lo que inició antes de esta vida. Es primitivo, muy subjetivo y, de hecho, puede vivir durante muchos años sin tener conciencia del mundo que le rodea. Sólo ve las visiones que crea y casi siempre está insatisfecho sexualmente. En muchos casos, tiende a caer en la trampa mental de la sobreexpectación. Por consiguiente, durante esos momentos en que se mueve a través de la segunda fase, siente un enorme aburrimiento viviendo aquello que no es realmente nuevo para él. Su descontento general consigo mismo hace que le sea difícil reflejarse bien en los demás. Cree que sabe lo que quiere, pero una visión general y objetiva de su vida indica que no suele

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Marte retrógrado

estar en contacto consigo mismo el tiempo suficiente para comprender sus verdaderos e íntimos deseos. La belleza de esta posición es que, mientras vive la vida, la acción retrógrada del planeta le hace retroceder hacia sí mismo de modo que al final llega a comprender que sus deseos nunca fueron los símbolos que buscaba en el mundo exterior, sino más bien un deseo mucho más profundo de establecer en sí mismo la esencia de la autoestima. Ésta es una posición muy difícil para el matrimonio, ya que el individuo es extremadamente autoconsciente. Necesita desarrollar una mayor sensibilidad hacia los demás. Demasiado a menudo, les ve como competidores en el ruedo de su propio crecimiento, antes que como personas individuales con necesidades y sentimientos que pueden ser tan intensos como los suyos. Puede conseguir muchas cosas una vez se compare consigo mismo antes que con otras personas o fuerzas exteriores que escapen a su control.

Marte retrógrado en Tauro En Tauro, Marte se encuentra mejor durante la tercera fase, en la que el individuo reabsorbe su pasado de modo que le proporcione la seguridad que está buscando. Le asusta básicamente emprender nuevas acciones. En consecuencia, construye su vida de acuerdo con su pasado, sintiéndose entonces más seguro de que todo irá bien. La programación de sus necesidades físicas es fuerte. Tiene resentimiento, y a menudo dirige erróneamente su rabia hacia sí mismo, a modo de castigo. La persona quiere sentirse cerca de los demás, pero se aparta de ellos, creando en su lugar tensiones internas. Eso es particularmente frustrante porque el deseo tauriano de calor e intimidad es inhibido por la tendencia de

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Marte retrógrado de persistir en la tercera fase que simboliza introspección. En muchos sentidos, éste es el eterno niño que se resiste a crecer y a transformar los modelos de su juventud. Es un animal de costumbres, y puede retener muchos malos hábitos simplemente porque la cantidad de experiencia es capaz de satisfacer la necesidad tauriana de abundancia. Le gusta pasar momentos solo, pero gusta de saber que no le han abandonado. Así, retrocede de los avances hechos mientras, al mismo tiempo, sabe que sería miserable si no existieran. El karma de esta posición relaciona el aprendizaje del individuo con la aceptación de sus propias necesidades físicas y sociales. En realidad, puede agotarse debido a la interiorización de sus conflictos en estas áreas.

Marte retrógrado en Géminis Marte retrógrado se combina con la flexibilidad de Géminis para poder funcionar durante las tres fases retrógradas. Durante la primera fase, la curiosidad mental empuja a la persona hacia experiencias futuras. Se muestra vivamente interesado por todo lo que no ha experimentado aún. En la segunda fase, se siente menos eufórico y experimenta un cierto grado de decepción al observar en la realidad todo lo que vio en su imaginación durante la primera fase. Sin embargo, experimenta las preferencias que a Géminis le gusta expresar más que aquellas de las que está seguro, mientras comprueba lo que no ha experimentado. En esta fase es donde se vuelve mucho más responsable de sus acciones. Eso le lleva a la tercera fase, en la que se repite a sí mismo constantemente. De todas las posiciones de Marte retrógrado, ésta es una de las más fáciles de tratar. Su lección 110

Marte retrógrado

de vida es aprender cuál es la fuerza más apropiada que debe usar en sus relaciones con los demás. Algunas veces, origina sobrerreacciones en sí mismo durante la tercera fase, puesto que la inactividad de Géminis le provoca ansiedad durante este período típicamente retrospectivo. Sexualmente, experimenta una frialdad que en ocasiones le lleva a juzgar a los demás, particularmente en 10 que se refiere a sus motivos. Su karma consiste en aprender quién es a través de la forma en que se relaciona con otras personas. Cambia su actitud ante la vida de acuerdo con la dirección en que soplan los vientos de la suerte en un momento dado, ya que le interesa más cómo se las arreglará que llevar una vida aferrada a un principio determinado. Así, es menos honrado que adaptable a cualquier cosa que la vida ponga en su camino. Al evitar compromisos serios, tiende más hacia la superficialidad que a vivir la vida en profundidad. Debe aprender que los fuertes deseos que ve en los demás están en realidad en sí mismo. *

Marte retrógrado en Cáncer Ésta es una posición muy frustrante para Marte retrógrado porque su carácter cardinal mantiene fija a la persona en la primera fase, en la que existe un fuerte deseo de nuevas experiencias. Además, la sensibilidad emocional junto con la necesidad infantil de protección confinan al individuo en la tercera fase, donde sus cualidades de introversión tienden a hacerle vivir su vida más en un plano emocional que a través del mundo que le rodea.

* Véase el apartado "Planetas retrógrados y proyección del pensamiento», p. 30.

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En algunos casos, particularmente en mujeres, puede darse un fuerte complejo de Electra, en que sus sentimientos sexuales hacia el padre, reprimidos en su infancia, siguen dominando muchos de los deseos de su vida. Al individuo le atrae la gente del sexo opuesto de edad muy diferente a la suya. Existe una tendencia a intentar hacer que los demás formen parte de su propia familia y desear acercarse al mundo exterior que le rodea. Dado que Cáncer tiene mucho que hacer durante sus años de formación, las cualidades naturales de introversión y absorción de la tercera fase crecen y se intensifican cuando todo deseo futuro sirve para intentar recrear la seguridad de los inicios de la vida. El individuo reacciona enérgicamente ante la gente mayor según sea o no capaz de responder a sus expectativas. Puede reservarse sus deseos para sí mismo durante muchos años, y aun cuando ésos no le satisfagan, le cuesta reorientar sus energías. Debe aprender a estar más en contacto con los impulsos que afloran de su inconsciente, de modo que no se sienta impulsado a rehacer el mundo tal como había sido su vida de familia. En otras encarnaciones, sus experiencias traumáticas duraron hasta su juventud, y es sólo cuando los representa simbólicamente a través del papel que interpreta ante los demás que puede, de hecho, convertir el deseo en parte de él en la vida cotidiana.

Marte retrógrado en Leo Aquí, el individuo puede convertirse en una isla respecto a sí mismo. El orgullo de Leo se combina con la fuerza de Marte para producir un sentido interior de dominio sobre otras personas. El individuo raramente reconoce el 112

Marte retrógrado

efecto que causa sobre los demás. Puede crecer demasiado fuerte, haciendo que los demás se alejen de él por miedo cuando se enfrentan con la debilidad que hay en sí mismos. La semilla a partir de la cual ello tiene lugar durante la primera fase aumenta la intensidad de la reacción. El concepto que el individuo tiene de sí mismo es muy subjetivo, y se basa más en su impulso actual que en el modo en que los demás se lo reflejan. Si alguien tuviera el fuerte deseo de ser amable y el de vivir egoístamente al mismo tiempo, sería él. A veces existen dificultades para criar a un niño varón y el individuo puede, de hecho, impedir su progreso si espera mucho de él. Esta persona no pide consejos. Se mantiene a la defensiva porque teme perder la ilusión de la posición que ha conseguido para sí y, de este modo, de vez en cuando provoca fuertes roces con los demás. Sus metas son tan elevadas, al estar potenciadas porMarte retrógrado, que quiere lograr que todo lo que ve le llene completamente. Debe procurar comprender lo ilusorias que son dichas expectativas en su vida diaria. Aporta a su vida un fuerte deseo de estar al mando, de modo que sigue estableciendo situaciones competitivas allí donde ni siquiera son factibles. De todas las posiciones marcianas, ésta es una que no soporta perder. Aparentemente, algunos de sus anteriores esfuerzos no fueron satisfechos ni recompensados. Ahora, el individuo intenta volver a capturar su pasado convenciéndose a sí mismo de que tiene un alto grado de poder sobre su vida y todos aquellos a quienes permite que se acerquen a él.

Marte retrógrado en Virgo Ésta es una de las posiciones más difíciles de Marte retrógrado en lo que a las relaciones personales se refiere. Si 113


Marte no fuese retrógrado, el individuo mediría todo deseo en términos de ideas perfeccionadas. El planeta retrógrado cambia estos sentimientos hasta el punto que el individuo se ve forzado a vivir sus ideales antes que esperar sólo los de los demás. Así, se juzga a sí mismo mientras intenta mantener sus ilusiones de perfección. Interiormente, tiene miedo a los demás y se relaciona más fácilmente con los objetos que con la gente. Es tremendamente sensible y reacciona enérgicamente contra la presión de cuantos le rodean. Muchas personas con esta posición se protegen tanto contra una reaparición de dolores pasados que a menudo se privan a sí mismos de desalTollar cualquier intimidad real con los demás. Frecuentemente, se siente ofendido por aquellos a quienes trató de agradar en el pasado. A esta persona le resulta difícil relajarse, ya que la energía mental es estimulada por la fuerza del sexo. En ocasiones, eso origina un interés muy fuerte por la sexualidad, aunque con escasa expresión física. El individuo tiene la fuerte necesidad de buscar la perfección en sí mismo. En vidas anteriores, aprendió a distinguir entre sus diferentes deseos y ahora lo separa todo categóricamente en pequeños compartimentos estancos en su mente. Al percibir los defectos de las acciones de los demás, puede sentir una desconfianza extrema hacia la gente que conozca. Como revelan las relaciones, intenta descubrir ese defecto en el carácter de otra persona que, finalmente, le convencerá de que su modo previamente programado de tratarla era justo y COlTecto. Si la persona con Marte retrógrado en Virgo escuchara lo que dice o piensa de los demás, aprendería que la perfección que busca empieza en sí mismo.

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Marte retrógrado

Marte retrógrado en Libra Ésta es, quizá, la posición más difícil para Marte retrógrado. Aquí, el individuo no sólo tiene dificultades para identificar sus propios deseos, sino que asume los deseos de los demás creyendo que también son suyos. En consecuencia, experimenta un estado de limbo, puesto que se siente zarandeado a un lado y a otro a través de los deseos y necesidades de todos aquellos que forman parte de su vida. Trae consigo a esta encarnación un karma de seguir' sin entender realmente lo que quiere. En el pasado, vivió por los deseos de los demás. Ahora, siente la dificultad de encontrar el centro mismo de su ser. Por consiguiente, la búsqueda de una autoidentificación se vuelve tan fuerte que muchos con esta posición se sienten poderosamente atraídos por miembros del propio sexo, a través de los cuales esperan, finalmente, encontrarse a sí mismos. La fase retrógrada en la que el individuo pasa su tiempo, seguirá cambiando de acuerdo con la persona con la que se encuentre. Dado que tiene muy poca autoestima, intenta interrelacionarse con la cualidad de Aries de aquellas personas que encuentra. La frustración que experimenta el individuo aumenta cuando intenta equilibrar armoniosamente los diferentes impulsos y deseos de la gente que conoce. A la larga, eso provoca en él una especie de parálisis emocional junto con cierto grado de credibilidad hacia su entorno. Kármicamente, está siendo forzado a saber quién es de entre todos aquellos que cree que puede ser.

Marte retrógrado en Escorpio Puesto que Escorpio es el signo de la transformación y Marte el planeta que da energía a toda emoción, esta per115


sana experimenta una vida interior muy activa. A lo largo de las tres fases, el planeta trabaja en beneficio del individuo, pero la introversión del retrógrado junto con el empuje constante de Marte nunca dan la oportunidad de descansar al individuo, que siente constantemente que no está consiguiendo todo aquello que debería. Cuando Marte se utiliza físicamente, en algunos casos ello puede traducirse en una intensa glotonería. Incluso si el individuo dirige su vida por el camino de lo espiritual, se enfrenta con tentaciones. Siempre siente que existen fuerzas externas que le impiden alcanzar sus objetivos. De este modo, desarrolla una intensa energía en su interior para vencer a esos imaginarios enemigos de su progreso. Otras veces está fuera del alcance de sus propios sistemas de necesidades. Puede sentirse tremendamente impaciente en la primera fase, totalmente aburrido en la segunda e insatisfecho en la tercera, cuando intenta culminar el ardiente impulso que nunca termina. Con frecuencia, arrastra rencor de otra vida e incluso en esta encamación, antes que olvidar a aquellos que le hirieron, entierra su rabia en su inconsciente donde continuará cargando con ella como parte fundamental de su carácter. De este modo, puede convertirse en su peor enemigo. Kármicamente, debe aprender que en lugar de destruirse a sí mismo, debería destruir las partes de su yo anterior que le han mantenido alejado de los demás.

Marte retrógrado en Sagitario Aquí, la impulsividad se encuentra en su punto más álgido, ya que el individuo quiere experimentar el mundo entero ... el ayer. Su inquietud es tan profunda que casi nunca conoce las prioridades de sus necesidades. Esta dispersión no sólo ocurre en las cosas que hace, sino también 116

Marte retrógrado

interiormente, en su autoidentificación. Intenta percibir el mundo en todo su colorido y aroma dentro de sí mismo. Algunas veces, la animosidad que guarda para más adelante en la presente vida impide que el individuo vea a los demás desde una perspectiva real. Gran parte de su vida, así como el modo en que ve al resto de la gente, no tienen base en la realidad. Le cuesta concretar sus deseos lo suficiente como para saber si son significativos para él. Durante la primera fase puede parecer sumamente extrovertido y nada a lo que as'pira representa la plenitud de todo lo que busca. Intenta justificar sus motivos y le gusta creer que tiene razón. Ésta es una posición especialmente pobre para el matrimonio ya que ésta es una persona tan individualista, así como algo soñadora, que difícilmente permanece en un lugar el tiempo suficiente como para sentir que otro individuo le llena. Kármicamente, se esfuerza en encontrar su lugar en el mundo. Necesita conocer la razón de su existencia y encuentra partes de dicha razón en cada nuevo lugar que visita o en cada nueva persona que conoce. Debe aprender a equilibrar las necesidades filosóficas de Sagitario con la física sed de experiencias de Marte. Finalmente, el carácter retrógrado hace que se vuelva hacia su interior donde aprenderá a transformar sus experiencias en lo que debe convertirse en la razón de su existencia.

Marte retrógrado en Capricornio Aquí, el individuo gasta la mayoría de sus energías intentando construir sus propios sentimientos de autoestima. Tiene tendencia a recopilar todos los pensamientos externos, cosas y personas con las cuales construir una pirámide en la que finalmente se asentará. 117

Planetas retrógrados y reencarnación Experimenta un conflicto entre la impulsividad de la juventud y la reticencia de la vejez. En consecuencia, crea constantemente experiencias de la vida con gente de edades distintas a la suya mientras intenta ganar aceptación mediante varios grupos semejantes. Se toma muy en serio todos sus actos y a veces, cuando se encuentra en la tercera fase, incluso puede imaginar responsabilidades por las acciones de los demás. Capricornio, signo especialmente kármico debido a la regencia de Saturno, lleva al individuo a experimentar los efectos y sus causas más que cualquier otra posición zodiacal, puesto que finalmente se da cuenta de que es responsable de todas sus acciones. Quiere ser responsable de sí mismo y no correrá riesgos en la vida, pues puede quedar expuesto al rechazo o al fracaso. Si estos individuos deciden seguir una trayectoria espiritual, no hay límites para lo que quieran conseguir, puesto que ellos mismos son su mejor guía. Sumamente decididos durante la primera fase del proceso retrógrado, completamente prácticos durante la segunda y profundamente introspectivos durante la tercera, estas personas saben exactamente adónde se dirigen en esta vida, así como el modo de llegar hasta allí.

Marte retrógrado en Acuario Aquí, el individuo se encuentra más cómodo en la primera fase, en la cual desea vagar por donde no haya huellas delante de él. No pone limitaciones a la libertad que desea sentir y trae consigo a esta encarnación la continuación de un instinto liberado, desarrollado en vidas anteriores. Apresado una vez por los límites de la sociedad, se rebela contra las normas de la vida ordinaria, y buscará nuevas reglas que trasciendan a las ya existentes. 118

Marte retrógrado

Su vida, extraordinariamente llena de color, refleja una actitud de «todo marcha bien», y todo lo que le impide percibir el mundo como un patio de recreo son las instituciones y las tradiciones con las que tropieza. A éstas, las evita con facilmente. Sexualmente, es un experimentador inseguro, pero a todos los niveles es un buscador de todo aquello en lo que el mundo no parece estar interesado. Sumamente cambiante, sus energías fluctúan día a ~ía y con ellas forja su concepto de quién es. Intenta interiorizar el futuro, considerando todas las ideas de ciencia ficción como probabilidades que es capaz de experimentar personalmente. Le gusta la gente, pero es un solitario y no acepta que las ideas de otras personas le limiten. Kármicamente, vive en muchos reinos trascendentales de realidad al margen de las normas tradicionales.

Marte retrógrado en Piscis

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Aquí, el individuo gasta la mayor parte de sus energías en la tercera fase, en la que interioriza sus acciones pasadas para poder obtener un fiel reflejo de sí mismo. A menudo, eso le causa una gran tristeza, ya que tiende a culparse a sí mismo del daño que ha causado en los demás. Prefiere apartarse de la gente antes que ser responsable de la causa de su dolor. Tiene una imagen de sí mismo extremadamente pobre y no lucha por lo que cree que está bien. Cuando quiere poder agradar a los demás, a menudo ve la inutilidad de sus planes y acciones. Al creer que las dificultades de la humanidad se están acabando, no entiende, más que de vez en cuando, que el mundo sólo está transformándose más que ser ya un producto final. Es esa falta de comprensión lo que hace de él alguien que escapa, más que permanece en el centro de todo lo que le rodea. Tien119


de a absorber más de lo que puede abarcar porque se ve más integrado de lo necesario. Kármicamente, se esfuerza por una identidad cósmica dentro de sí mismo, y debe aprender a no confundir las acciones de otras personas con la esencia de todo lo que desea ser.

Marte retrógrado en la Casa primera Aquí, el individuo se siente mejor en la primera fase del proceso retrógrado, en la que intenta proyectarse a sí mismo hacia el futuro que desea ahora. Cuando no puede hacer que las cosas ocurran instantáneamente, suele utilizar la proyección del pensamiento para introducir a los demás en sus deseos kármicos, hasta que acabe creyendo que en realidad puede hacer que el futuro se realice más de prisa de lo que lo haría si él no interviniese en ello. Es muy inseguro, particularmente en el terreno de la sexualidad, donde en muchos casos parece haberse quedado fijo en su juventud. A causa de su impaciencia, tiende a realizar actividades y conductas aparentemente inútiles que intentan crear todo aquello que tiene lugar espontáneamente. Es el guerrero solitario de sus deseos en una vida anterior que vuelve a manifestar en la presente encarnación, queriendo que los demás se unan a él y, sin embargo, no permite que nadie entre en su espacio psíquico. Por eso vive solo gran parte de su vida. Es extremadamente autoconsciente y ve buena parte del mundo exterior como una amenaza a su ego personal. Es por eso que trata de crear situaciones en las cuales pueda demostrarse a sí mismo que él es el maestro. En consecuencia, se muestra bastante agresivo con los demás, dándoles apenas una oportunidad para pensar. En ese sentido, está seguro de que sus ideas no serán rechazadas.

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Marte retrógrado

Continúa el karma de una vida anterior construyendo su propia identidad y gastando grandes cantidades de energía defendiendo cualquier terreno que haya conquistado previamente. En esta vida, debe aprender a ver y a estar en el «aquí y ahora», de modo que no sobrerreaccione ante las situaciones que él mismo ha creado.

Marte retrógrado en la Casa segunda Aquí, el individuo gasta la mayor parte de su tiempo y de sus energías en la tercera fase del proceso retrógrado. Tiene muchos deseos en la vida, pero no siempre posee la fuerza para dar marcha atrás a sus deseos a causa del duro trabajo que representa hacerlos realidad. A veces puede sentirse muy celoso de los demás cuando, de hecho, sólo está enfadado por su propio fracaso para alcanzar el potencial que siente en su interior. Puede dar vueltas y aferrarse a argumentos que pasaron hace ya mucho tiempo. Esto es así porque es tan sumamente subjetivo que no siempre considera el punto de vista de otras personas. Kármicamente, aporta a esta vida un carácter con fuertes deseos de los que deberá ocuparse a todos los niveles. A veces tiende a autocompadecerse para conseguir la ayuda de los demás. En este sentido, puede reponer la energía que había gastado criticándose a sí mismo por su fracaso. Puede alabar a los demás sin hacer nada práctico, reconociendo sus logros, pero interiormente no les brinda ningún elogio. En realidad, desearía que sus éxitos hubieran sido los suyos propios. De este modo, tiende a usar un proceso de proyección del pensamiento a fin de identificarse con las hazañas de los demás, esperando, mediante algún método desconocido, interiorizar y hacer suyos los progresos que ellos han hecho por sí mismos. 121


Tiende a retraerse sexualmente, temiendo secretamente poder perder algo. Eso se debe a los miedos infantiles, procedentes de su primera educación, de que en realidad el mundo puede quitarle algo. Encontrará la felicidad cuando se dé cuenta de que es el creador de todo aquello de lo que tiene que ocuparse en la vida, y que todo cuanto posee o desea poseer es meramente la simbología colectiva de todo aquello que valora.

Marte retrógrado en la Casa tercera El individuo se siente aquí fuera de la línea de su proceso comunicativo. Tiende a pasar mucho tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, intentando duramente demostrarse a sí mismo de algún modo que, en realidad, ha hecho mella en los demás. Ofende la sensibilidad de la gente siendo extremadamente franco, o usando demasiada fuerza cuando intenta impacientemente hacer que se acepte su opinión. En el horóscopo de una mujer, esta posición puede significar a menudo una atracción por hombres subsexuados o varones que son inalcanzables. La mujer no busca la energía del hombre a nivel sexual, pues ofendería su propia sensibilidad. En lugar de eso, prefiere las relaciones platónicas. Con esta posición, la tercera fase del proceso retrógrado también entra en juego, ya que existe una fortísima tendencia a seguir reflejando acciones y pensamientos mucho después de que haya terminado la experiencia original. Así, en el lado personal de la vida, todo lo que siente el individuo se convierte a la larga en un eco sin fin. Vive un karma en el que aprende a ocuparse de su sensibilidad hacia el mundo exterior en el campo de sus relaciones personales. Alcanzará la felicidad cuando supere la

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Marte retrógrado

necesidad de personalizar su entorno. A la larga, puede vencer el deseo de una parte activa de todo lo que ocurre a su alrededor. Cuando lo aprenda, experimentará la nueva sensación de libertad que sus almas han estado pidiendo.

Marte retrógrado en la Casa cuarta Aquí, el individuo pasa mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, en la cual trata de revivir las' experiencias emocionales del pasado. Tiende a combatir su propia evolución natural, ya que un tremendo deseo inconsciente de volver al seno materno le mantiene arraigado en algún estadio temprano de fuerte conflicto psicológico con uno de los padres. A medida que pasan los años, el individuo parece relacionarse mejor con gente de edad muy diferente a la suya. Puede adquirir mucha fuerza de aquellas personas mayores que él mientras que, al mismo tiempo, pone a prueba la suya propia ante los más jóvenes. Este individuo necesita que le animen constantemente si quiere hacer algo constructivo en su vida. Puedeconstituir un enorme sumidero de energía de quienes le rodean, ya que tiende a necesitar su energía para dirigirse a sí mismo. Todas las posiciones de Marte retrógrado tienden a consumir energía de los demás, pero aquí, en la Casa cuarta, la influencia acuática lunar incrementa ese efecto hasta el punto de que las necesidades internas del individuo pueden dejar completamente exhaustos a cuantos le rodean. Siente una fuerte dependencia del karma cuando en realidad no quiere ser independiente en esta vida. Tiende a querer compartir sus responsabilidades con aquellos que considera más fuertes que él. Generalmente, escogerá como amigos a personas que sean figuras paternales simbólicas. Es a través de esta gen-

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te que culpará a uno de sus padres por todos los obstáculos que no ha podido superar en su vida. En la mujer, el evitar a los hombres se ve reforzado en la posición de esta casa. Se convierte en prisionera de sus miedos hasta que se da cuenta de que ha estado activando negativamente recuerdos de una vida anterior.

Marte retrógrado en la Casa quinta Con esta posición, el individuo tiene dificultades para expresar su creatividad. A nivel sexual, su vibración atrae y repele alternativamente mientras atraviesa las diferentes fases retrógradas. Existe una tendencia a estar desconectado de las fuerzas cósmicas naturales, ya que el individuo trata arduamente de ser él mismo. Algunas veces, siente que está luchando contra la marea, pero intenta crear esas corrientes para tener algo contra lo que nadar. En esta posición, los asuntos amorosos se ven obstaculizados y el impulso sexual no fluye llanamente. Al mismo tiempo, cualquier rasgo infantil en el horóscopo aumenta. En un momento de su vida, consumirá energías para comportarse como un niño retraído o como con un joven que se niega a encajar en un molde de conducta previsible. El concepto de progreso representa para él una frustración, ya que el individuo siente constantemente que debería hacer otra cosa distinta a la que está haciendo. Tiende a meditar sobre los contratiempos de su vida antes que aspirar a nuevos horizontes. Experimenta el karma de revisar todo su proceso creativo, ya que mucho de lo que creó en el pasado no ha hecho más que disgustarle. Ahora debe aprender lo que realmente hay de valor en él en lo que a sus sentimientos de bienestar se refiere. Será capaz de hacerlo mejor cuando supere los inconscientes sentimientos de superioridad que

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Marte retrógrado

han estado alimentando su ego en lugar de aumentar su confianza.

Marte retrógrado en la Casa sexta Aquí, el individuo está atrapado entre el conflicto de cuánto debería hacer por los demás y cuánto debería hacer por él mismo. Se resiente si los demás le dicen cómo debe hacer las cosas y, sin embargo, desea inconscientemente' sus consejos. Tremendamente independiente, se esfuerza en ser quien dirija su propia vida en medio de una avalancha de circunstancias externas que dictan el rumbo de sus energías. Es muy consciente de no querer ser utilizado por los demás, y sin embargo es precisamente esta idea la que le hace seguir introduciendo en su vida a esa misma g 'nte que puede hacer eso para él. Puede ser inusitadameate frío en situaciones que reclaman calor, puesto que aún no ha aprendido a confiar completamente en los motivos de otras personas. En el terreno laboral, tiende a subestimar la validez de su propio rendimiento. Busca su propia perfección a pesar de sus actos, y como es excesivamente crítico consigo mismo, también espera mucho de la gente. En algunos casos, eso se traduce en una tendencia a juzgar a los demás. Puede ser llevado hasta el extremo en que la mente inconsciente del individuo no vea a ningún ser humano capaz de responder a todas sus expectativas. También puede llevarle a experimentar períodos de frialdad sexual, que a veces se traducen en una impotencia total. Todo ello se debe al hecho de vivir el karma de la búsqueda de la perfección en acción. Y cuando intenta ordenar el mundo a su alrededor, empieza lentamente a ordenarse a sí mismo. Sin embargo, su acercamiento a la vida es excesivamente violento, ya todos los niveles, haría bien en seguir el consejo de

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Desiderata: «Antes que nada - sé amable contigo mismo». Cuando aprenda esto, su visión de los demás cambiará dramáticamente.

Marte retrógrado en la Casa séptima El individuo se siente aquí desorientado en sus relaciones con los demás. Le resulta difícil estar casado, ya que la parte de sí mismo que ve en su cónyuge es generalmente 10 que es menos capaz de aceptar. En el horóscopo de una mujer, esta posición indica a menudo un odio hacia los hombres en una vida anterior. En la vida actual, tenderá a buscar razones que justifiquen sus sentimientos. A menudo, existe el temor a que su compañero (o compañera) ¿ntente herirle deliberadamente. Hay muy pocos individuos con esta posición que no lleven inconscientemente una pajita en el hombro. Con frecuencia, esto se manifiesta en relaciones que son fuertemente argumentadoras, cuando el individuo no desea entablar ninguna en absoluto. Básicamente, existe desconfianza hacia la gente. El individuo está constantemente en guardia ante la posibilidad de ser herido. Y es este mismo preprograma lo que le lleva a originar en los demás sentimientos hostiles que confirmen su opinión. Kármicamente, esta persona tiene mucho que aprender del toma y daca de las relaciones íntimas. Su vida es una continua lección para su ego, de modo que un día puede adquirir una perspectiva equilibrada sobre el efecto que causa en los demás. Hasta que sea capaz de com,.. prender esta lección, sentirá inconscientemente en su interior todas las reacciones negativas que ha provocado en los demás.

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Marte retrógrado

Marte retrógrado en la Casa octava Aquí, el individuo atraviesa por muchas tensiones internas. No expresa fácilmente las frustraciones que siente debido al modo sutil en que conecta con los deseos de la gente. A menudo, no puede separar las necesidades de los demás de las suyas propias, yeso le hace dudar a la hora de expresar el fuerte impulso que siente. Esta posición suele ocasionar problemas sexuales, ya que el individuo siente interiormente la posibilidad de re... chazo que asocia rápidamente en su inconsciente con el miedo al abandono, a la deserción y a la misma muerte. Tiende a alienarse de muchas de las cosas que le aportarían la satisfacción que cree estar buscando. De este modo, se siente apartado de la sociedad. Mientras sigue negándose a sí mismo esa satisfacción, está secretamente celoso de los demás. Si se usa negativamente, esta posición puede ser particularmente destructiva, pues el individuo experimenta en su interior bajas vibraciones en el éter que le rodea. Sin embargo, en su parte positiva, la persona puede utilizar esta posición para dar salida a los altos ideales que siente intuitivamente en los niveles más profundos de su ser. Eso transformará tanto a él mismo como a quienes están a su alrededor. Kármicamente, experimenta interiormente una naturaleza deseosa del mundo en que vive, y si prefiere manifestarlo durante las fases primera o segunda, u observar cómo actúa sobre él durante la segunda fase, eso se opone, sin embargo, con la superación de sus impulsos físicos. Conseguirá la felicidad el día en que se covierta en el amo de sus necesidades. A través de la profundidad y de la perspectiva que la Casa octava le proporciona, posee la habilidad de ver el núcleo mismo de su naturaleza ansiosa.

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Marte retrógrado en la Casa novena Con esta posición, el individuo siente un gran deseo interior de libertad. Algunas veces, es libertad de la esclavitud de las emociones de otras personas, pero en niveles superiores se convierte en una búsqueda que trasciende el propio pensamiento humano. En suma, eso ;nanifiesta una fuerte busca religiosa o espiritual que roza el fanatismo. El matrimonio no es frecuente con Marte retrógrado en la Casa novena, ya que el carácter solitario de Marte se mezcla con la tendencia a la soltería de la Casa novena haciendo que el individuo desee ser un espíritu libre. En algunos casos, la persona no está en contacto con sus energías sexuales aunque, de hecho, puede estar proyectando fuertes impulsos de este tipo durante la primera fase del proceso retrógrado sin tener conciencia alguna de ello. Para un buscador espiritual, esta posición crea dificultades que resultan de la incapacidad para controlar o estabilizar el cuerpo astral. Aquí, la orientación de un maestro es de suma importancia antes de intentar cualquier forma de proyección astral. Kármicamente, Marte retrógrado en la Casa novena proporciona una vida que es algo así como una bendición solitaria. Mediante los períodos de aislamiento y las circunstancias que fuerzan al individuo a considerar sus actitudes internas y sus efectos, aporta expresiones de su naturaleza ansiosa a la cámara sagrada de su mente superior, donde de una vez por todas pueda lograr la unión consigo mismo. Cuando todos esos deseos sean transformados y llevados a un plano más elevado, será capaz de completar finalmente la lección shakespeariana: «Para ser tú mismo, sincérate» .

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Marte retrógrado

Marte retrógrado en la Casa décima Aquí, el individuo encuentra conflictos que rodean las decisiones que debe tomar para establecer la seguridad de su futuro. Muchas de sus metas están basadas en el pasado, y por ello cada paso adelante trae consigo todo el peso de su destino. , Tiende a sentir que las barreras le retiemen, pero en realidad son él mismo. Deseoso de ganarse la estima de sus semejantes, suele comprobar una y otra vez sus acciones' hasta parecer un indeciso. Se andará por las ramas y hará infinidad de cosas antes de dar el único paso que sabía que iba a dar desde el principio. La carrera de la vida tiende a gravitar hacia atrás, en el ~entido de que el individuo se esfuerza muy pronto en llegar a la cima de la montaña. Más tarde, vuelve sobre sus pasos para situarse de un modo realista en los niveles que debía haber considerado anteriormente. La vida es una sucesión de pasos que evita dar, y sobre los que más tarde vuelve, mientras sigue intentando estabilizar sus fundamentos. Kármicamente, esta persona está aprendiendo a descubrir su futuro. Y es siempre el reseguir y el llenar los vacíos de su pasado lo que hace más seguro su exitoso futuro. A medida que se hace mayor, aprende cómo crecer del modo que sea más significativo para sus últimos propósitos, antes que trabajar bajo el influjo de la ilusión de una vida anterior que puede conquistar un mundo demasiado formidable para ser dominado.

Marte retrógrado en la Casa undécima Con Marte aquí, existe un fuerte deseo de soñar despierto. El individuo se introduce en estados de conciencia

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que le permiten revivir momentos de su pasado. Tiende a eludir responsabilidades forzosas, pero puede asumirlas por sí mismo a condición de que nadie le haga sentirse responsable. Puede pasar muchas horas ya sea solo o involucrado en actividades que a los demás no les parecen prácticas. La verdad es que la mayor parte de sus energías se orientan hacia sus sueños, pero disipa tanta energía que raramente es capaz de convertirlos en realidad. A menudo se despega de su deseo sexual, y tiene grandes dificultades para integrarlo en el resto de su vida. La principal dificultad es que ve lo rápida y fácilmente que sus ambiciones, sueños y esperanzas surgen de la realidad de sus fantasías, pero sabe cuánto esfuerzo le costaría llevar esos sutiles deseos a su vida cotidiana. Ése es el punto en que se bloquea a sí mismo. El muro imaginario entre fantasía y realidad mantiene gran parte de sus energías centradas en sus sueños. Kármicamente, está aprendiendo a dar energía a sus ambiciones de modo que después de experiencias imaginativas sea capaz de romper con la barrera mental que les ha estado impidiendo convertirse en realidad. Las dificultades que experimenta al relacionarse con los demás no son más que los catalizadores que le llevan a trascender sus supuestas incapacidades de modo que desarrolla el deseo suficiente como para cambiar esta identificación con el mundo. Cuando pueda hacerlo, sus acciones derivarán de una perspectiva nueva y mucho más satisfactoria. Es interesante destacar que en esta posición de Marte, el ligero carácter errático de la Casa undécima tiene menos que ver con las fases retrógradas que vive el individuo que con el actual signo del zodíaco que aquí aparece.

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Marte retrógrado

Marte retrógrado en la Casa duodécima Aquí, toda la naturaleza ansiosa está enraizada en el karma de una vida anterior. Por lo general, han existido situaciones desafortunadas que han dejado al individuo con una enorme rabia contenida. Tiende a verla en los demás porque la está buscando, pero raramente la reconoce en sí mismo. En el horóscopo de una mujer, eso hace que las relaciones con los hombres sean casi imposibles, pues cada nuevo varón simboliza de algún modo el individuo que le hirió profundamente en una vida anterior. Por consiguiente, existe una fuerte tendencia a desconfiar de las intenciones de los hombres porque el individuo siente que hay pocas razones que permitan esperar un trato mejor en el futuro. Con esta posición, la energía vital se orienta hacia atrás en el tiempo con la esperanza de encontrar finalmente dónde y qué estaba mal. Así, sea hombre o mujer, es muy difícil para esta persona vivir en el presente. Todo intento de ayudar al individuo tiende a fracasar hasta que la persona encuentre en lo más recóndito de su conciencia lo que cree que está buscando. La lección kármica en esta vida es aprender a perdonar. La persona debe comprender que no es posible perdonar sin olvidar. Cuando lo haya hecho, el individuo ya no tendrá que interiorizarlo todo y podrá liberar las partes de sí mismo encerradas en el pasado.

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4. JÚPITER RETRÓGRADO Júpiter retrógrado como símbolo esotérico Júpiter, el gran benefactor, se simboliza por la metlia luna del alma que se erige verticalmente sobre el brazo occidental de la cruz de la materia ( 2!). Cuando la materia y el alma se combinan en armonía, pueden satisfacerse mutuamente. Es interesante destacar que el brazo occidental de la cruz es muy significativo, ya que el Oeste siempre simboliza la madurez de todo aquello que ha derivado de su nacimiento en el Este. En el símbolo normal, la cruz de la materia aparece al Este de la media luna del alma. Así, lo que el individuo materializa en las primeras fases de la vida constituirá más adelante su sabiduría. Para Júpiter retrógrado, el símbolo invertido muestra la media luna del alma en el Este, desplazando la cruz de la materia hacia el Oeste. De este modo; aquello que el individuo conoce mediante su alma al principio de su vida (como fruto de anteriores encarnaciones) siempre da lugar a lo que experimenta más tarde a nivel material. Eso puede hacer de la experiencia retrógrada un viaje tremendamente espiritual si el individuo prefiere utilizarlo para sus mejores capacidades. Existe un tipo incorruptible de empeño por la verdad en Júpiter retrógrado, ya que no depende tanto de los cambios de la materia que suelen influir en el significado de tantas otras configuraciones planetarias. El individuo es libre de sentirse en un nivel más puro si su verdad dependía de su existencia material. Al mismo tiempo, dicha configuración origina un con133


flicto con el mundo exterior, ya que el idealismo predomina sobre el espíritu práctico. Una afinidad natural por la pura verdad de Júpiter crea un disgusto por las mundanas experiencias cotidianas de la vida.

La personalidad de Júpiter retrógrado El individuo con Júpiter retrógrado es una verdad viviente hacia sí mismo. Sus ideas sobre lo que está bien y lo que está mal, la moralidad del mundo por el que viaja, y la imparcialidad de las opiniones de los demás apenas influyen en lo que siente en su interior. En un poderoso intento de ser honrado, esta persona desarrolla su propio sistema de valores. Raramente, éstos proceden de anteriores experiencias personales en los primeros años de su vida, así como de otras encarnaciones, y no reflejan necesariamente una conciencia colectiva tal y como hace la concepción del universo que previamente se forma el individuo. Es sumamente consciente de lugares diferentes y de cuánto se parecen entre sí. Al mismo tiempo, conoce los diferentes niveles de sus formas de pensamiento. Al ser siempre un estudioso de la mente, busca experimentar una abundante riqueza en sí mismo que espera iguale a la larga las posibilidades que el mundo exterior tiene disponibles para él. A menudo eso le causa un gran descontento, que se traduce en un desasosiego interior. Le gustan las cosas que captan la esencia de una idea y que conciernen a su importancia antes que los detalles necesarios para poner en práctica dicha idea. Si está bien aspectado, puede estar fuertemente automotivado, pero debe evitar tratar de hacer demasiadas cosas a la vez. Básicamente, es un espíritu libre. Y aunque se conforme con los ideales de la sociedad que le son útiles, lucha 134

Júpiter retrógrado

constantemente por mantener su sentido de la individualidad. Algunos con esta posición poseen una gran sabiduría, que casi llega ser una capacidad profética. Callados, a menos que hablen, pueden resumir en pocas palabras la esencia de proyectos enrevesados que atraparían a los demás en un montón de trivialidades. Todo lo consciente que pueda ser un individuo, la intrínseca honestidad consigo mismo es una de sus caraoterísticas más importantes. Si está pobremente aspectado, Júpiter retrógrado puede conservar rencores de anteriores encarnaciones. En estos casos, puede proyectarse de nuevo en el presente un deseo muy lejano de posesión en personas distintas. Afortunadamente, ésta es la excepcióIi que confirma la regla, ya que Júpiter retrógrado brinda al individuo la oportunidad de verse a sí mismo a través de su mente superior. Al hacerlo, algunos de sus propios compromisos dan paso a un grado de comprensión más elevado e impersonal. El desarrollo del ser interior acaba predominando sobre el deseo de adquirir riqueza en el mundo exterior.

El karma de Júpiter retrógrado El karma en Júpiter retrógrado siempre versa sobre la introspección a través de la mente superior. El individuo debe ser capaz de justificarse a sLmismo para sentirse verdaderamente merecedor del respeto y el honor que Júpiter promete. En alguna encanación anterior, respetó mucho algún principio espiritual o religioso que el individuo ha visto violado. En la vida actual, está aún más decidido a conservarel valor de dicho principio en su mente. Tiene que evitar pronunciarse sobre los demás, ya que 135


ve un mundo exterior que vibra según unas reglas que no puede llegar a comprender. Sin embargo, debe ser paciente con los demás si espera que escuchen la expresión de sus verdades interiores. A otro nivel, existe una gran cantidad de experiencias ya vistas inherentes a Júpiter retrógrado. Todos los instantes y lugares del pasado se mezclan en un presente continuo, de tal modo que en un momento dado o en un lugar concreto, el individuo está en condiciones de generalizar ese instante o lugar con todos los instantes y lugares que ha sentido. De este modo, su conciencia se expande simultáneamente a través de esas dos dimensiones, y a menudo sin limitaciones. No sabe obligar a su mente a enfocar un punto determinado en su interior. En su lugar, absorbe de su entorno los símbolos de sus pensamientos, para aprender, finalmente, que cualquier sitio es su hogar, iY que cualquier momento es ahora! Cuanto más representan esos símbolos las verdades que aprendió en una antigua vida, más cómodo se encuentra.

Júpiter retrógrado en Aries Aquí, el individuo se siente más a gusto en la primera fase del proceso retrógrado, en donde la expansibilidad de Júpiter satisface la necesidad de una esperanza futura. La dificultad reside en que el individuo se enfrenta a cada nueva situación con ideas preconcebidas sobre cómo será. En consecuencia, tiende a intentar controlar las circunstancias de su vida antes que dejarse llevar por cada nueva experiencia. Con esta posición, existe una gran sed de revivir el pasado, mientras el individuo se convence de que está moviéndose hacia el futuro. Con frecuencia existe un fuerte sentido de honradez consigo mismo que impregna la mayoría de su pensamien136


to, acompañado por un gran espíritu de libertad en el nivel más instintivo. El individuo se esfuerza en respetarse a sí mismo y tiende a juzgar a los demás, a quienes considera de un valor moral inferior al suyo. Puede volverse tremendamente tese tarudo cuando llega a una identificación religiosa o espiritual y a veces se equivoca al clasificar a los individuos de acuetdo con las filosofías que siguen. Posee una inquietud interior que le empuja a probar todo aquello que aún no ha experimentado. También puede ser ingenuo como un niño, sin ver globalmente la situación o circunstancia en la que se encuentra. Cuando ve el cuadro en su totalidad, a menudo tiene que retroceder. Este tipo de conducta es extremadamente difícil para el matrimonio, ya que brinda poca estabilidad a la pareja. Kármicamente, el individuo está aquí para aprender sus propias verdades en los niveles más básicos. Prosigue con la lección de que ser honesto consigo mismo es la clave de su mayor seguridad.

Júpiter retrógrado en Tauro El individuo se encuentra más cómodo en la tercera fase del proceso retrógrado, donde puede reflejar todo lo que ha acumulado a lo largo de la vida. Concentra mucha energía en demostrar que siempre tiene razón. Eso hace que le resulte difícil adaptarse a la forma de pensar de otras personas. Justifica continuamente su conducta y tiende a mantenerse fijo en sus filosofías, así como a agarrarse firmemente a sus antiguos conceptos. A menudo se gana la vida mediante oficios que hoy se consideran artes casi olvidados, tales como l~sde calderero, linotipista, calafateador o encuadernador. Otros le ven como alguien que tiene un problema de 137

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ego relacionado con sus expectativas irreales de la vida. Es importante para él sentirse dominante y se engaña a sí mismo de muchas maneras mientras sigue pensando que tiene el control de las circunstancias de su entorno. Así, vive en un mundo que ha interiorizado y, en consecuencia, cae en la ilusión de pensar que todo control sobre sí mismo es, de hecho, el que ejerce sobre los demás. Cuando cree estar juzgándoles, en realidad se está juzgando a sí mismo. Existe mucho descontento centrado alrededor del mundo material, puesto que el individuo sigue pensando que debería hacer más de lo que verdaderamente está haciendo. De este modo, existe una tendencia a ponderar sus logros en relación a los de la gente que le rodea, yeso sólo hace más difícil que pueda encontrarse a sí mismo. Ilumina su karma cuando comprende que las mayores verdades vienen a él de la forma más espontánea y sólo en los momentos en que no trata de impresionar a los demás o que se esfuerza demasiado.

Júpiter retrógrado en Géminis Ésta es una de las posiciones más difíciles para Júpiter retrógrado, puesto que en ella se enseña al individuo a unificar sus mentes superior e inferior tras mucho tiempo de conflicto entre ambas. Está acostumbrado a basar sus filosofías de la vida en ideas de otras personas. Así, ha aprendido a separarse conscientemente de su propia verdad, mientras que sus valores filosóficos y sus ideas se ven fuertemente influenciadas por cuantos le rodean. Absorbe las ideas de unos y otros sin llegar a comprender cuál es válida para él. Cuando se siente inquieto durante la tercera fase del proceso retrógrado, en la que acepta las verdades de otras personas, se impacienta para redistribuir cada fragmento de 138


información que ha aprendido entre aquellos que está a punto de conocer. Durante la primera fase proporciona tanto información como desinformación, porque no se toma el tiempo necesario para seleccionarlo por sí mismo. En esta vida, debe aprender a orientar sus ideas y preferencias y ver cómo las usan los den.ás. A menudo es un observador de las vidas de los demás que discurren a través de él. Eso le frustrará hasta que aprenda a adquirir una perspectiva práctica de la vida, distinguiendo cuáles de'las verdades expresadas por los demás debe aceptar y de cuáles no debe hacer caso por no ser aplicables. La mayoría de ellos tiene que procurar no forzar a los demás a pensar como él, ya que su mayor problema es la tendencia a creer que sus actitudes son las más adecuadas para aquellos a quienes cree que debe enseñar.

Júpiter retrógrado en Cáncer Aquí, el individuo se encuentra más cómodo en la tercera fase del proceso retrógrado, donde sigue tratando de volver a desarrollarlos rasgos infantiles de su pasado. Vive la vida con un tipo de inocencia que le hace creer que no es sofisticado. Así, tiene grandes dificultades durante la vida adulta porque vivir el presente tiende a arrancarlo de un período de tiempo que pudo haber representado una mayor libertad que su realidad cotidiana. Su concepto de la verdad siempre ha sido más emocional que mental, y por consiguiente no responde bien a razones, sino que en su lugar trata de desarrollar todos sus conocimientos a partir de sus emociones. Eso enfatiza sus características infantiles. Durante la etapa adulta, existe una tendencia a limitar las cualidades expansivas de Júpiter dentro de los confines de anteriores experiencias. Cuando las energías del plane139


ta intentan expandirse, el individuo siente la necesidad canceriana de encerrarse. Mientras tanto, el movimiento retrógrado de Júpiter empuja todo este conflicto no sólo hacia adentro sino también hacia atrás, hacia el pasado. Así, la persona atraviesa un conflicto emocional y mental al mismo tiempo. Sus recuerdos son a menudo exagerados, ya que intenta corregir todas las situacipnes anteriores en que no se expresó completamente. Y tiende a repetir sus experiencias como si por la sola repetición se sintiese más seguro de la corrección de su conducta en el pasado. Todos los conocimientos de la mente superior de su vida anterior se ponen ahora a prueba, puesto que se le pide que lo viva a nivel emocional. Por eso debe aprender a creer firmemente y a actuar según sus propias verdades.

Júpiter retrógrado en Leo Aquí, la primera fase representa la experiencia más cómoda, ya que el individuo puede comunicar a los demás su ilusión por la vida. Al mismo tiempo, existe una tendencia a residir en el propio orgullo de tratar de vivir una vida moral. Puede ser brusco con los demás, interrumpiendo a menudo sus procesos de pensamiento cuando desea que le escuchen. Ésta es la clase de individuo que piensa que puede enseñar a todo el mundo cómo vivir. Le gusta creerse noble y, en realidad, puede que haya vivido una vida anterior en la que haya desarrollado esta característica, apoyándose en una poderosa idea o principio. Le gusta sentir que todo lo que hace en la vida simboliza progreso. Por ello sigue adoptando una postura cómoda para incrementar la cantidad de todo lo que cree que merece la pena. Le atraen todos los aspectos de la vida que tienen la apariencia de una recompensa. Dado que es tremendamente independiente, no acepta consejos de los

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demás, pero los escucha, yen algún momento del futuro se dará cuenta de las verdades que le han dicho. Uno de sus puntos débiles es su prisa por llegar a conclusiones durante la primera fase, mientras que sólo tiene que reevaluar sus juicios más tarde. Esto sucede porque la naturaleza personal de Leo bloquea a menudo la conciencia impersonal de la mente superior de Júpiter. Esta persona puede estar más desconectada de su verdadera naturaleza de lo que piensa. Su filosofía y su visión de la vida tienden a ser diferentes de las de quienes le rodean, y es importante para él aprender que las cosas pueden ser distintas sin que se las califique de buenas o malas. Cuando el exagerado ego que tan a menudo acompaña a esta posición empiece a disminuir, el individuo será capaz de experimentar una de las más bellas visiones cósmicas del universo.

Júpiter retrógrado en Virgo Con esta posición, uno de los problemas más difíciles que tiene que afrontar el individuo es su falta de perspectiva. Muchos hipocondríacos tienen a Júpiter retrógrado en Virgo. Existe un conflicto entre la conciencia interior de la mente superior, obtenida en vidas anteriores, y las experiencias de la realidad mundana de la vida actual. Tiende a encerrarse en sí mismo cuando ve el cuadro en su totalidad. Así, ve partes de la totalidad y les llama «todo». En sus relaciones con los demás es más un fugitivo de la intimidad que un buscador del calor jupiteriano. Su idealismo es tan alto que resulta imposible que la gente responda a lo que espera de ella. Va por la vida con muchos ideales concretos que conforman la cristalización abstracta de lo que está buscando. En consecuencia, tiende a ser tan estricto consigo mismo como con los demás. Considerándose a menudo por encima de los aspectos más básicos de la vida,

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puede que desarrolle un ego espiritual exagerado. A través de la pureza de sus ideales, en el fondo llega a creer que puede ser espiritualmente superior a los demás. Por eso se autobloquea, luchando contra sus necesidades y aislándose de las realidades de su existencia. En encarnaciones anteriores se utilizó a sí mismo para la construcción de un sistema de creencias ilusorio que ahora trata de justificar. Conseguirá la satisfacción cuando deje de intentar ser un símbolo para todo lo que cree que la humanidad espera de él.

Júpiter retrógrado en Libra Aquí, el individuo se mueve en las tres fases retrógradas de acuerdo con la gente con la que se encuentra y las ideas a las que se enfrenta. Los conceptos de justicia e imparcialidad fueron establecidos de forma tan innata en antiguas encarnaciones que no siempre expresa lo que siente, si cree que eso pude herir a otra persona. Si se usa negativamente, esta posición puede aportar hostilidad de una vida anterior. En muchos casos, la identidad de la mente superior no pertenece verdaderamente al individuo. Más bien es una colección de ideas de alguien a quien conoció en su pasado. Cuando se vuelva realmente consciente, comprobará que está interpretando los problemas de los demás, haciendo un gran esfuerzo por buscar comprensiones que le ayuden a resolver un laberinto de conflictos que, para empezar, nunca fueron suyos. Cuando se dé cuenta de ello, será capaz de separarse de todo aquello que le ha incomodado. Entonces empezará a entender que gran parte de la inquietud que ha experimentado no era la suya, sino más bien los deseos de las demás de que solucionara sus problemas. Cuando se enfrente a su propio ego, comprenderá por qué no sólo acepta esos deseos, sino que de hecho los busca.

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Por otra parte, le gusta ponerse en el lugar de otra persona para poder desarrollar una visión más equilibrada de las cosas desde esa ventajosa posición. Pero cuanto más lo hace, menos sabe en qué se apoya verdaderamente. Continúa con el karma de aprender a estabilizar su mente superior en lugar de vacilar entre diferentes puntos de vista. Logrará su mayor alegría cuando sea capaz de centrar su perspectiva de la vida.

Júpiter retrógrado en Escorpio Aquí, gran parte del tiempo se gasta en la primera fase del proceso retrógrado, ya que el individuo intenta proyectar en los demás aquello que cree que es verdad. No obstante, éste es el único signo en el cual la persona también es consciente de que aquello de lo que está convencido que es la verdad no es en absoluto toda su verdad. Así, puede proyectar lo que cree de modo superficial que es adecuadamente completo, mientras, aun sabiéndolo, experimenta al mismo tiempo una comprensión más profunda a otro nivel. Aporta a su vida el recuerdo de luchas por el honor, y cuando experimenta su karma, se convierte en una prueba en este terreno para otras personas. Puede sacar a relucir lo mejor y lo peor de sí mismo y del resto de la gente al mismo tiempo. Esto provoca en él una peculiar paradoja ya que, alternativamente, es comprendido e incomprendido, respetado y degradado, amado y despreciado por todo lo que representa para los demás. Su vida es una constante transformación, puesto que cada día simboliza nuevas oportunidades para luchar que le ayudarán a surgir del sí mismo inferior que ahora ve, pero que todavía le ata a la vida cotidiana. Muy extremista, aspira al cielo y al infierno al mismo tiempo. Sus ideales suelen ser muy elevados, pero durante la primera mitad de su vida tiene dificultades 143


para separar su mente superior de los fuertes impulsos sexuales que trae consigo a esta vida. No le gusta que le confinen en ningún terreno, ya que, generalmente, llega solo a las profundidades a las que se dirige y, a menudo, completamente incomprendido por los demás. Debe disponer de esta libertad para explorar los rincones desconocidos del universo que están llamándole.

Júpiter retrógrado en Sagitario Aquí, el individuo disfruta de la primera fase del proceso retrógrado. Está ansioso por experimentar todo lo que el mundo le ofrece y le resulta difícil serenarse. Miles de cosas diferentes a la vez atraen su mente superior, y simultáneamente trata de entender cada una de ellas de modo que no le aparten de todas las demás. Aunque pueda parecer ligero y superficial, puede ser profundamente profético, capaz de conocer la esencia de algo sin tener que pasar mucho tiempo hablando sobre ello. Cuando esta posición se utiliza en su mejor potencial, el individuo lleva consigo muchos conocimientos universales adquiridos en una previa encarnación. Generalmente, tiene un alto nivel de energía y su inquietud mental hace que quiera ampliar su conocimiento dondequiera que vaya. Al mismo tiempo, tiene la costumbre de justificar sus propias virtudes, y le resulta difícil aceptar el consejo de los demás. No absorbe ideas sino que aprende gracias a la experiencia. Esta posición de Júpiter disminuye el impulso sexual y también tiende a llevar las relaciones a un plano más superficial. De todos modos, éste es el individuo al que le gusta pensar por sí mismo y, especialmente durante la segunda mitad de la vida, no le gusta que el pensamiento convencionalle limite. Sus ideas referentes a la religión pueden

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ser infinitamente profundas, pero raramente se ajustan a las convenciones y las prácticas de cualquier grupo, secta o Iglesia. Su karma en esta vida es vivir según su propio conocimiento. Debe apender a valorar lo que comprende de sí mismo antes que comparar los valores de los demás con sus propios ideales. Si se revela a sí mismo, podrá ser verdaderamente un gran maestro de todos aquellos que buscan sinceramente la verdad.

Júpiter retrógrado en Capricornio El individuo experimenta aquí un conflicto constante entre la necesidad de expansión, entusiasmo y optimismo de Júpiter, y la tendencia de Capricornio hacia las limita~ ciones, la sobriedad y la reserva. Por eso debe conseguir un equilibrio entre esos dos extremos antes de alcanzar una sabiduría más amplia de la que esta posición es capaz. Es mucho más feliz al final de su vida, cuando sabe orientar su mente superior hacia los valores que son importantes. Durante su juventud, suele intentar comportarse como si fuera mayor de lo que es. Aunque pueda ser muy prudente, no se le presta atención hasta al final de su vida. En tipos negativos, esta posición puede ser sumamente materialista, especialmente cuando otros indicadores de la carta señalan muchas inseguridades personales; pero cuando se usa en su nivel más alto, puede ser muy espiritual. El individuo puede tener una fuerte intuición religiosa que desarrolló en antiguas encarnaciones. Además, tiene la capacidad de ponderar cosas de modo que finalmente queden equilibradas desde una perspectiva centrada. En su vida de acción, sin embargo, experimenta una vibración alternante que no siempre le permite hacer todo aquello que quisiera. A menudo se paraliza al considerar cosas hasta el punto que utiliza más campo de acción del que necesita en

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realidad. En este sentido, puede exagerar demasiado la importancia de las cosas al ver gran parte de la vida tanto a favor como en contra de los principios en los que cree que se apoya. La tercera fase del proceso retrógrado se pone en relieve aquí ya que el individuo vive un karma de maduración de su comprensión de sí mismo y del mundo que le rodea.

Júpiter retrógrado en Acuario Aquí, el individuo se encuentra más cómodo en la primera fase, donde está impaciente por vivir el futuro. Quiere conocer todo aquello que la sociedad tradicional aún no ha explorado. Es una posición muy inquieta para Júpiter retrógrado puesto que el individuo se siente atraído por todos los caminos que se extienden ante él al mismo tiempo. Es un idealista y un explorador. Aunque a veces sea demasiado entusiasta, puede contribuir enormemente a la evolución de la humanidad. Ésta es una posición difícil para el matrimonio, puesto que la persona considera que necesita su libertad para que su mente superior funcione a pleno rendimiento. Lo que realmente le hace falta es más una libertad mental que física. Y, el impulso hacia esa libertad no procede de las situaciones de la vida cotidiana, sino más bien del instinto de su vida anterior, que trasciende los límites mentales y espirituales. Quiere vivir una vida de entusiasmo, y mientras desee ayudar a todo el mundo apartará a cualquiera que desaliente su espíritu. Para esta persona es duro orientar su vida en una sola dirección. Se siente más cómodo corriendo de aquí para allá con intenciones cambiantes. Su karma consiste en aplicar su sabiduría anterior a la experiencia futura. Para ello, viajará mucho y conocerá a gente de toda condición a través de la cual pueda compartir y comuni-

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car su conocimiento. La naturaleza retrógrada del planeta hace de esto más un proceso dador que un proceso receptor, puesto que se otorga a sí mismo menos de lo que quiere impartir a los demás. Algunos con esta posición sienten claustrofobia, dado que intentan a toda costa liberar su vida de todo lo que simbolice una atadura. Por el lado positivo, ésta es una de las mejores posiciones para buscar un conocimiento superior.

Júpiter retrógrado en Piscis Aquí, el individuo pasa la mayor parte del tiempo en la tercera fase, tratando de absorber su verdad a partir del mundo que le rodea. Puede ser profundamente espiritual y místico pero no siempre dice lo que sabe. Se inclina a pasar mucho tiempo clasificando el misterio de la vida que experimenta. Le resulta difícil comprender a la gente. En una antigua encarnación puede haber pasado algún tiempo estudiando una religión o filosofía, pues aunque no pueda explicar cómo sabe todo lo que sabe, posee un profundo instinto de la verdadera importancia de la vida. Sin embargo, con todo lo que siente, todavía está en conflicto entre su armonización cósmica y su capacidad de integración con el resto de la sociedad. Puede ser sumamente creativo si se le deja hacer las cosas a su manera. Uno de sus mayores problemas es aprender a dejar de dudar de sí mismo. El estudio del misticismo oriental, que justifica el sentido de no compromiso que siente, puede ayudarle a confiar más en sí mismo. Vive a través de un karma continuado de aprender a dejar de dudar de sí mismo. Mediante el uso de su mente superior, evitaría todos los posibles detalles complicados que pueden apartarlo de la esencia de su verdad. No le gusta juzgar ni las situaciones ni a la gente porque

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sabe que nada de lo que piensa es una conclusión sino un simple camino hacia otra idea. La dificultad estriba aquí en que suele carecer de criterio y le resulta difícil mantener su vida y la gente que forma parte de ella ordenados en su mente. Al ser su propósito más universal que personal, en su vida necesita a gente con los pies en el suelo como anclas estabilizadoras.

Júpiter retrógrado en la Casa primera Aquí, el individuo pasa la mayor parte del tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, ansioso por experimentar el futuro a través de su propia individualidad. Es muy competitivo, en particular consigo mismo, ya que es un idealista y no se siente a gusto en esta vida conformándose con menos de aquello a lo que puede aspirar. Quiere que se le reconozca por sus progresos. Existe un conflicto natural en esta posición, debido a que los restos de una vida pasada de Júpiter retrógrado impulsan al individuo a hacer muchas actividades a la vez, mientras que a la auténtica naturaleza de Aries le gustaría empezar cada cosa a su tiempo. Sin embargo, la combinación del planeta y la casa proporciona al individuo un alto nivel de entusiasmo para emprender nuevas iniciativas. En ocasiones, tiene tendencia a exaltarse, y puede que salte antes de mirar. Eso hace de él un pionero nato, pero alguien que no siempre anda por terreno llano. Vive su vida a toda prisa y no le gusta desperdiciar energía. En esta vida, tiene que seguir desarrollando su conciencia de sí mismo a través de su mente superior, pero no nombrarse a sí mismo como juez de los demás. Sabe mucho sobre la experiencia del ser exterior, y puede expresarlo a los demás, aunque debe procurar no transmitir su conocimiento demasiado a la ligera.

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Esta posición convierte al individuo en alguien muy independiente, y le hace ser fuertemente consciente de su relación con el universo. Sin embargo, tiene que trabajar para mantener un sentido de la proporción razonable de modo que no vea las cosas mayores de lo que son. Kármicamente, sigue una lección sobre la evaluación de su propia verdad, ya que ésta es la única posición de Júpiter retrógrado que le fuerza a vivir personalmente su filosofía.

Júpiter retrógrado en la Casa segunda Aquí, el individuo sigue tratando de restablecer una sensación de riqueza, prestigio y justicia a las que se estaba acostumbrado ·en anteriores encarnaciones. La mente superior se centra en el sistema de valores y en muchos casos se queda absorta en el lado físico de la vida y enredada en el deseo material. A veces, éste es el individuo que experimenta un karma que critica a los demás por tener más que él; pero cuando se usa constructivamente, eso permite al individuo reajustar sus valores al verdadero sentido de la vida que su mente superior conoce. Todo lo que tiene que hacer es enseñar a su mente inferior a aceptar su conocimiento. En muchos casos, siehte que no consigue lo suficiente de la vida. En ocasiones, le gustaría que los demás experimentasen su interior, y le cuesta distinguir las verdaderas diferencias entre sus propios valores y las del mundo exterior que trata de interiorizar. Como prefiere pensar a gran escala, tiende a sobreestimar sus necesidades. En algunos casos el individuo desea poseer cosas que en el mundo existen en libertad. Incluso se vuelve posesivo respecto a la idea de su propia libertad. Júpiter retrógrado en esta posición prefiere pasar por la primera fase, pero aquella en la que el individuo pasará 149


más tiempo estará regida por las características del signo que haya en la cúspide de la Casa segunda. Si ésta se encuentra regida por un signo negativo con la tierra o el agua como elemento, existe una fuerte probabilidad de que el individuo pase a la tercera fase, que es la más disarmónica con las características expansivas de Júpiter. Si la Casa segunda está regida por un signo positivo y por elementos de fuego o aire, entonces el individuo pasará la mayor parte del tiempo en la primera fase. Es durante esta fase que el individuo intenta convencer al mundo de sus cualidades, mientras que durante la tercera fase asume esos valores del mundo. Ahora, en ambos casos, manifiesta el valor de sus actitudes en vidas pasadas.

Júpiter retrógrado en la Casa tercera Ésta es la posición más difícil para Júpiter retrógrado, ya que las ideas del individuo sobre el universo al que estaba acostumbrado en vidas pasadas influyen hoy en sus relaciones cotidianas. Está atrapado en el vaivén de intentar vivir según los ideales que ha desarrollado en el pasado y sacrificar lo que sabe para congeniar mejor con quienes le rodean. A veces puede ser extremadamente franco, ya que el tacto (falta de sinceridad) es ajeno a su naturaleza. Tiende a ser áspero con la gente, intentando cubrir una gran distancia en poco tiempo y, a pesar de ello, ser extramadamente hablador. Al pasar la mayor parte del tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, no siempre es plenamente consciente de la gente con la que está hablando. Es más un consejero que alguien que escucha a los demás, y aunque pasen muchas personas por su vida, no se siente atado a ninguna de ellas. Es tan extraordinariamente inquieto que tiende a derrochar sus propias energías mentales mientras critica discretamente a los demás por hacer lo mismo.

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Siente grandes deseos de viajar, y cuando no se mueve físicamente lo hace mentalmente. La mayor dificultad en esta posición está en desarrollar la capacidad de vivir en el mundo de los humanos lleno de dualidades aparentes e hipocresía. Por ello, procura no desarrollar una actitud de crítica hacia los demás. Una personalidad muy desanollada posee la capacidad de decir mucho en pocas palabras, mientras que en las personas que experimentan un karma más elemental parece existir un efecto similar al de un disco rayado en su forma de expresarse. Durante su vida, ambos consiguen comunicar su mensaje a aquellas personas que viven atrapadas en su mente inferior. En antiguas encarnaciones, Júpiter retrógrado se reveló a través del uso de la mente superior. Pero ahora, el individuo se siente frustrado cuando intenta expresar sus conceptos en el lenguaje ordinario que su mente inferior es capaz de comprender.

Júpiter retrógrado en la Casa cuarta Aquí, la expansibilidad de Júpiter choca con las características protectoras de la Casa cuarta, ya que el individuo trata de romper con los muros emocionales que sigue erigiéfldo. Así, las infinitas cualidades de su mente superior se ven obstaculizadas por la inseguridad de sus recuerdos emocionales. Normalmente, existe un período durante la infancia en el que le es posible de destacar y, en consecuencia, sigue intentando recrear los símbolos de esa época a lo largo de su vida adulta. Depende del reconocimiento de los demás y, aunque no siempre lo demuestre, posee una fuerte tendencia a ser demasiado emotivo. Pasa mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, mirando atrás hacia los momentos más felices de su

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pasado. El individuo orientado negativamente tiende a aferrarse a recuerdos de antiguas injusticias. Le resulta difícil desentenderse de sus pensamientos porque muchos de sus conocimientos son de naturaleza puramente personal. Júpiter retrógrado hace que en ocasiones el individuo disipe su energía emocional, dificultándole el poder orientar su trabajo o su carrera en una sola dirección. Puede mostrarse tan decidido a descubrir la verdad de todo aquello que aún no comprende de su pasado que sigue mirándose a sí mismo tan de cerca que los árboles no le dejan ver el bosque. Necesita de la estructura familiar como un fundamento, a pesar de que tiende a encontrar muchas razones por las cuales quienes le rodean impiden sus progresos. Esta persona haría bien en comprender que muchas de las reacciones extremas que experimenta se deben a actitudes de vidas anteriores que ya no son aplicables a su entorno actual. Vaya donde vaya o haga lo que haga, intenta ganarse los elogios de personas allegadas que puedan ver los motivos de sus actos con mucha más claridad que él. Se conocerá a sí mismo cuando comprenda por qué la necesidad de controlarse es más fuerte que su necesidad de vivir el mundo exterior.

Júpiter retrógrado en la Casa quinta Aquí, el individuo pasa la mayor parte del tiempo en la primera fase del proceso retrógrado. Trata de manifestar las actitudes creativas que desarrolló en anteriores encarnaciones. Ve la vida a gran escala y los límites de la sociedad convencional como una pasarela que debe superar a cualquier precio. Si el resto del horóscopo es fuerte, eso conttibuye a un carácter dominante. En aquellas cartas que contienen muchas cuadraturas,

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junto con un énfasis en los signos fijos, Capricornio o un Saturno en los ángulos, el individuo no suele ser consciente de los consejos de los demás. Tiene tendencia a invadir el espacio psíquico de otras personas sin darse cuenta de ello. Sus metas son muy elevadas, pero a menudo sobreestima su capacidad para llegar a conseguirlas. A veces puede exigir mucho a los niños porque mediante ellos extiende las ideas que no es capaz de poner en práctica. Vive en una actitud de «no me detengan», ya que se precipita a probar todo lo que la vida le ofrece. Al mismo tiempo, sú gran sentido del orgullo le impide meterse en problemas a la vista de los demás. Le gustaría lanzarse de una experiencia creativa a otra que puede parecer errónea a las personas cuya estima desea. Vive en base al principio de que si corre lo bastante de prisa bajo una tormenta, no se mojará. Ésta es una posición difícil para el matrimonio y las relaciones duraderas, ya que la verdad más elevada del individuo está siempre en relación con la opinión que tiene de sí mismo más que con la interpretación de las críticas que puede recibir si permite que los demás le conozcan demasiado bien. Aquí, el sentido de identidad del individuo se basa en la distinción entre los ideales establecidos en antiguas encarnaciones y todo lo que él crea en esta vida. Así, es verdaderamente la persona que «es lo que piensa, habiéndose convertido en lo que pensaba», y en los últimos años de su vida se conocerá a sí mismo a través de lo que haya creado.

Júpiter retrógrado en la Casa sexta El individuo emplea aquí gran cantidad de energía personalizando la mente superior para que pueda resolver los problemas a los que deberá enfrentarse a lo largo de la vida. Se enreda demasiado en iniciar muchos proyectos

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que quizá no termine, deseando meter baza en cada uno de ellos. Se interesa por la justicia en el terreno laboral, y tiene dificultades con sus colegas y superiores por tratar de defender constantemente lo que cree que es justo. A menudo hace una montaña de un grano de arena, y de todas las posibles posiciones de Júpiter retrógrado, ésta es la menos capaz de ver la vida desde un punto de vista cósmico. Mientras busca el modo más fácil de hacer las cosas, tiende a distraerse por tantas pequeñeces que le resulta difícil seguir un único camino. Aquí, la mente superior es extremadamente sensible a los malos pensamientos de los demás. El individuo puede distraerse prestando atención a todos los detalles del mundo exterior que llaman la atención a sus prejuicios. Ésta es la persona que cree que sabe cómo funciona el mundo, y sin embargo, aunque piense así, parece perder siempre el compás. El problema está en que tiende a ver sus estrechas ideas como representantes de toda la verdad. Puede ser extraordinariamente moralista en sus expectativas sobre la gente, pero, a través de las cualidades computerizadas de su mente superior, ve a los demás como un rompecabezas que debe resolver antes que comprenderles a ellos y a sus fTagilidades humanas. Aporta a su vida el karma de esperar demasiado de un mundo diferente a los ideales que construyó en el pasado. Alcanzará la felicidad cuando encuentre un punto medio entre esos antiguos ideales y la realidad práctica con la que se enfrenta cada día. En un momento u otro de su vida quizá tenga problemas legales que pueden estar relacionados con su énfasis en aspectos de escasa importancia. Debe aprender a establecer prioridades de modo que pueda liberar las energías de su mente superior antes de que sean tachadas de inútiles, minucias que él mismo ha creado.

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Júpiter retrógrado en la Casa séptima Esta posición de Júpiter retrógrado hace que el individuo pase mucho tiempo mirándose a sí mismo como si fuera a través de los ojos de la gente. En consecuencia, existe una tendencia a sentirse impaciente por complacer a los demás, aunque no siempre está seguro de qué es lo que le incita a ello. Puede mostrarse demasiado ligero intentando ganarse el respeto de aquellos que admira, y no obstante sabe que con ese esfuerzo aún es incapaz de agradar a todo el mundo., En antiguas encarnaciones se enseñó a sí mismo a mostnirse del modo en que pensaba que los demás le admiraría'n. Ahora, siente a menudo que su sensación de libertad d~pende demasiado de los ideales de otras personas. Casi nunca señala acertadamente todo lo que sabe de la vida. Las respuestas parecen volar cuando intenta leer los pensamientos de los demás para entender sus propias verdades. Esta persona discutirá más por defender un principio que tenga la apariencia de ser una verdad de carácter universal que por su propia necesidad de ganar. De este modo, puede convertirse en una persona muy justa. Tendiendo a conceder demasiada importancia a las ideas que los demás le comunican, corre constantemente hacia la gente cuyas actitudes filosóficas ante la vida van en sentido contrario a las suyas. Este individuo vive la lección kármica de aprender que las diferencias entre lo que está bien y lo que está mal están únicamente en la mente del observador. Cuanto más se da cuenta de ello"empieza a adquirir conciencia de ver lo infructuoso que es para él tomar decisiones o hacer juicios por otras personas. Si está casado, estará unido a una pareja que puede ser demasiado estricta. Por lo tanto, en muchos aspectos al mismo tiempo, está aprendiendo a equilibrar la naturaleza de la verdad a través de las muchas formas en que se expresa a todas las personas de su vida. I

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Júpiter retrógrado en la Casa octava Con esta posición, el individuo posee un sentido muy desarrollado de los valores de otras personas. A veces tiende a intentar dar cuando debería estar recibiendo. Experimenta también una gran inquietud sexual. Lo que desea son muchas experiencias sexuales, pero sus necesidades, aunque piense que son físicas, son decididamente mentales. Le gusta reformar a los demás, y el conocimiento adquirido en pasadas encarnaciones le lleva a pensar que tiene la suficiente sabiduría que le capacita para hacerlo. Le interesa saber cómo son los demás delante y detrás de sus apariencias. No obstante, es renuente a mostrar sus propios colores. Existe un conflicto natural en esta posición, puesto que el deseo de apertura de Júpiter choca con la necesidad de discreción de la Casa octava.

En el comercio y en los negocios, éste es un individuo que debe trabajar por sí mismo. Puede haber fuertes tendencias psíquicas junto con un deseo de utilizarlas de la forma más honrada. Uno de los mayores problemas con que nos encontramos aquí es que, ocasionalmente, el individuo tiende a juzgar a los demás porque no conocen las expectativas que se ha forjado sobre ellos. Eso tiene lugar especialmente durante la tercera fase, donde tiende a expresar su introspección en lugar de ocultarla. Preguntándose siempre sobre la validez del conocimiento de otras personas, permanece firme a lo que él sabe. Kármicamente, trae consigo a esta vida los frutos de un estudio profundo de la gente y del universo. Pero debe aprender a comprender que las verdades más profundas que busca ahora sólo aparecerán cuando no las interprete a nivel personal.

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Júpiter retrógrado en la Casa novena Aquí, Júpiter retrógrado se encuentra en su propia casa. Por ello, el individuo puede funcionar cómodamente en cualquiera de las tres fases retrógradas. Al mismo tiempo, su vida incomoda a las personas cercanas a él. La Casa novena es la de la soltería y con el instinto natural por la libertad de Júpiter retrógrado, ésta se convierte en una mala posición para cualquier tipo de compromiso duradero. Existe una tendencia a apartarse de la gente, ya que el individuo desea vivir cada vez más su entorno natural en lugar de la sofisticación necesaria para responder a las expectativassociales de los demás. A este individuo le cuesta traducir en palabras lo que sabe. Es capaz de comprender su mente superior, pero no siempre cree ser capaz de comunicar sus conocimientos a los demás. Tiene muchas dificultades a la hora de vivir situaciones corrientes y demás circunstancias. Al relacionarse con la gente, suele saber al instante lo que va a decir. Sin embargo, evitará hacerlo hasta estar seguro de que el lenguaje que usa será aceptado por la otra persona. Le gusta ir de aquí para allá, y no le agrada pasar mucho tiempo en un mismo lugar. Por eso es como un nómada, vagando por la vida para poner a prueba el conocimiento adquirido en experiencias de encarnaciones anteriores contra las circunstancias actuales. Algunos de los que tienen esta posición poseen una comprensión de Dios muy desanollada, mientras otros que creen que sus almas son de naturaleza menos religiosa lo expresan mediante una explicación sobre cómo funciona el mecanismo del universo. El mayor crecimiento en esta vida tiene lugar cuando el individuo entiende que el mundo que le rodea se parece mucho a la Tone de Babel. Las personas son incapaces de comunicarse unas con otras porque tienen diferentes comprensiones conceptuales para las palabras más simples.

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Una persona con esta posición de Júpiter asume que la calidad de comunicación con los demás es siempre inferior de lo que sabe que podría ser. Siente la interrupción en el flujo constante de pensamiento que causan las barreras del lenguaje. Su karma consiste en conocer, comprender y enseñar allí donde le preguntan, pero nunca en convencer a aquellos que no pueden entender su sabiduría innata.

Júpiter retrógrado en la Casa décima Aquí, el individuo desea dar una imagen respetable al mundo, al tiempo que mantiene su completa libeliad de pensamiento y de acción. A menudo cambiará su dirección antes que esforzarse en algo, debido a su gran necesidad de conveniencia. Ve claramente el conflicto entre lo que piensa que el mundo espera de él y cómo le gustaría ser realmente. Eso hace de él una criatura de extremos, vacilando entre mucha y poca autoafirmación. Si está bien aspectada, esta posición de Júpiter retrógrado puede dar lugar a una gran sabiduría que puede ser útil no sólo para el individuo sino para todas aquellas personas que conozca. Es interesante destacar que durante la primera fase, la energía planetaria predomina sobre las líneas de conducta propias de la casa, de modo que el individuo puede superar la prudencia típica de la Casa décima. No obstante, durante la tercera fase, no es capaz de hacerlo y se vuelve sumamente introspectivo. Pero su expriencia más difícil tiene lugar en la segunda fase, donde las energías del planeta y de la casa luchan entre sí. Durante este tiempo, experimenta un alto grado de frustración que casi llega a paralizar sus acciones, ya que al seguir cuestionando el valor de todo lo que le gustaría hacer, contrastándolo con el gran 158


campo de su sabiduría, sigue sintiendo el ímpetu hacia la acción por la acción. Así, tanto está sin actuar, pero deseandohacerlo, o actuando y deseando no hacerlo. Odia volver a recorrer un terreno que ya ha cubierto, y sin embargo, a veces, en especial en relación a su carrera, debe hacerlo para reponer las piezas de lo que ha dejado incompleto. Está impaciente por triunfar y a menudo se interesa más por los resultados finales que por los pasos que le conducirán hasta ellos. No siempre vive según la filosofía que predica, pues cree profundamente que el fin justifica los medios. Sin embargo, en su comunicación con los demás no le gusta comprometerse con dicha filosofía. Además, le incomoda que alguien intente atarle a una filosofía concreta. Es capaz de defender a capa y espada sus ideas y actitudes, puesto que ha luchado duramente durante mucho tiempo para construirlas. Le gusta controlarse, y así debe ser, para llevar a cabo el karma de ir rumbo a aquello en lo que cree, independientemente a cualquier oposición. En algunos casos, defiende durante toda su vida una actitud o idea que deriva de algún brillante éxito en una antigua encarnación.

Júpiter retrógrado en la Casa undécima Aquí, la mente superior está estimulada por la necesidad acuariana de exploración. Durante la primera fase del proceso retrógrado, el individuo siente una gran curiosidad por todo lo que no ha probado aún. Aporta del pasado una necesidad de experimentar libremente muchas situaciones distintas para ampliar su conocimiento de la vida. Puede seguir buscando un objetivo que ha estado persiguiendo durante una eternidad. A menudo, existe una tendencia a ser negligente en relación a los detalles de la vida.

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También puede pasar largos períodos de tiempo viviendo en sueños. Sin embargo, es idealista y tiende a adoptar una actitud abierta hacia la vida. Con frecuencia, sus metas parecen inalcanzables, puesto que trata de pensar más allá de las posibilidades humanas. Eso le convierte en un ser sumamente individualista. Se disgusta ante la idea de conformarse con menos de lo que sabe que es posible obtener, y tiende a rebelarse contra todo aquello que le confine al pensamiento tradicional. Puede conseguir una extraordinaria relevancia entre los grupos sociales siempre que le permitan hacer las cosas a su manera. Trae consigo a esta vida el karma de comprender la verdadera naturaleza de sus sueños. En este sentido, puede construir una realidad determinada conociendo los motivos de sus metas, esperanzas y ambiciones. De todas las posiciones en el zodíaco, es el más orientado hacia la libertad. Le falta sentido práctico y no es feliz al aceptar las responsabilidades que comportan las relaciones íntimas. Pero, a pesar de todo eso, su sed de comprensión es tan grande que ocasionalmente se convierte en uno de los pocos que alcanza la verdad de la ley cósmica.

Júpiter retrógrado en la Casa duodécima En este caso, el individuo pasa mucho tiempo buscando en su alma para llegar a su ser interior, psicoanalizándose. A menudo comete el error de pensar que los demás pueden ayudarle a conocerse mejor de lo que ya lo hace. En realidad, le resulta fácil conocer su propio interior, pero a menudo puede ser tan fácil que intenta utilizar otros planetas de la carta pensando que debe buscar algún gran misterio más allá de lo que cree que es capaz de comprender. La riqueza que consigue a lo largo de la vida está construida sobre una profunda seguridad en sí mismo que,

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aunque no siempre parezca llevarse bien con el mundo exterior, le proporciona una comprensión ilimitada de su ser interior. Ésta es una posición muy kármica para Júpiter, ya que el individuo aprenderá a comprender finalmente la verdad sobre sus anteriores encarnaciones y, por consiguiente, la razón de su vida actual. A veces es demasiado cruel consigo mismo y debe aprender a juzgarse con más benevolencia a través de su mente superior si quiere estar a gusto con su alma. Esta posición hace que la vida sea muy introspectiva, ya que se pasa mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado. Sin embargo, una sabiduría interior, procedente de un invisible guía espiritual, impregna todo el estilo de vida tan pronto como la persona está dispuesta a aprovechar su riqueza interior. La mayoría de las veces, su conocimiento está más allá de las palabras que pueda encontrar para transmitir todo lo que sabe, pero se comunica muy bien a nivel telepático.

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5. SATURNO RETRÓGADO Saturno retrógrado como símbolo esotérico El símbolo de Saturno está compuesto por la cruz y la media luna ( Aquí, la materia y el aspecto formal de la vida deben unirse con el sincero deseo del alma de manifestarse. Así, todo lo que el individuo hace lo cristaliza en aquello que añade a la naturaleza de su alma. Ve el valor de las cosas a través de su propia alma, que debe diferen~ ciar entre lo que quiere aceptar y lo que quiere evitar. Cuando el individuo observa la vida a través de su Saturno, puede parecer serio y sombrío, pero lo que hace es considerar la relación entre idea y forma. Le interesa su capacidad de ver qué parte de su alma puede expresar realmente con materia. Así, llega a ser importante para él ver sus actos como un reflejo de su verdadero ser interior. La naturaleza retrógrada del planeta le lleva a experimentar gran parte de ese reflejo como una lucha interna entre la conciencia de sus ideales, su sentido práctico y su capacidad de vivir de acuerdo con ellos. Así, Saturno retrógrado se conVierte para muchos en su conciencia y su guía, sirviendo de mediador entre el ser superior perfeccionado y cuánto debe aprender aún para vivir en la tierra.

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La personalidad de Saturno retrógrado El individuo con Saturno retrógrado se toma muy en serio el completar aquello que dejó inacabado en su pasa-

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do. Tiende 'a querer retroceder para llenar cualquier hueco en lo que anteriormente se apresuró en considerar terminado. Por eso, tiende a ser serio y constante. A veces quizá parezca demasiado prudente o demasiado frugal, pero cualquier reserva por su parte se basa plenamente en su necesidad de conservar la esencia para determinados usos. No cree en despilfarros o extravagancias, dado que lo expe,rimentó en otras vidas. Ahora aprecia profundamente todo cuanto aprende o recibe. A menudo se siente en deuda con Dios, lo que se traduce en un fuerte sentido de gratitud por todo lo que ve a su alrededor. Intenta enseñar a los demás, menos entendidos o expertos que él. Sin embargo, no tiene éxito si no han pasado por su vida anterior como «caídos del cielo» ni por su gran lucha que le ha hecho volver atrás. En consecuencia, existe una madurez interior en Saturno retrógrado que uno no puede conseguir sin un gran sacrificio y esfuerzo personal.

El karma de Saturno retrógrado Saturno retrógrado siempre indica la continuación de un karma de antiguas encamaciones. Cualquiera que sea la lección, el individuo es extraordinariamente lento en llevarlo a cabo. Así, en esta vida, necesita llevar en su alma un peso extra de una vida anterior, de modo que cuando finalmente se combinen las dos, eso le resulte lo bastante evidente como para comprender completamente su auténtica misión. Mucho de lo que hace en esta vida es una repetición de lo que su Saturno representa. Pero ahora, afronta situaciones y circunstancias que son ligeramente diferentes. La acción retrógrada del planeta puede hacerle sentir su fuerza restrictiva, particularmente si intenta escapar de la carga de su lección. Pero si sigue con ello, comprendiéndolo gracias a que la paciente guía que recibe le conduce

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Saturno retrógrado

lentamente a identificarse con algo superior a lo que había imaginado, podrá apreciar verdaderamente el funcionamiento del bello universo de Dios a través de este planeta. Saturno es el maestro, y cuando aparece retrógrado, el individuo ya ha recibido enseñanzas similares antes de esta vida. Como revelan los años, existe gran cantidad de sabiduríaque fluye constantemente de Saturno retrógrado. De todos los planetas, éste es el que se siente más cómodo en esta posición retrógrada, puesto que proporciona al individuo una especie de segunda oportunidad para mejorar la relación establecida entre su alma, las circunstancias a las que se enfrentó en una encarnación anterior y cómo las entendió. Ahora, bajo la dulce guía de Saturno, es capaz de dar forma a todo lo que aprendió en el pasado.

Saturno retrógrado en Aries Aquí, el individuo aporta a su conciencia actual todo lo que aprendió sobre sí mismo en vidas anteriores, pues experimentó muchas formas de tratarlo con responsabilidad. Como tal, tiende a ser firmemente independiente y no le gusta que los demás vean en él flaqueza alguna. Todo lo que es importante para él en la vida lo consigue por sí mismo, puesto que ha aprendido a poner de acuerdo sus ideas ya dirigir sus energías hacia un propósito. Esta configuración aporta fuerza y poder al horóscopo ya que la fortaleza interna de Saturno retrógrado estabiliza la ambición ariana y le da sentido. Al fin y al cabo, el individuo se convierte en una especie de padre para sí mismo en la medida en que él es su mejor guía a través de la vida. Cuando madura, la confianza consigo mismo se hace más fuerte y las habituales manifestaciones del ego ariano son menos marcadas. El individuo basa su sentido de la autoestima en lo que construyó en su interior en el pasado. En algún mo-

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mento de una vida anterior se le forzó a valerse por sí mismo a muy temprana edad. Por lo tanto, entra en esta vida con un fuerte sentido de lo importante que es desarrollarse por sí mismo. Esta posición también tiende a aportar paciencia y consideración a lo que de otro modo sería un carácter impulsivo. Pasará toda su vida tratando de convertirse en su propio maestro. La primera fase del proceso retrógrado destaca aquí, puesto que el individuo trata de proyectarse hacia un futuro que asegure su autoestima. Kármicamente, utiliza la fuerza adquirida de actitudes de vidas pasadas que le ayuden a hacer un nuevo principio en esta vida a través de la casa que Aries rige en la carta. Y serán sólidas ideas, filosofías y juicios que se han estructurado a sí mismos en su Saturno retrógrado los que finalmente se convertirán en su fortaleza.

Saturno retrógrado en Tauro Puede sentir un gran cariño por cosas, lugares e ideas que puedan recordarle todo aquello a lo que estaba acostumbrado en el pasado. Con esta posición, la naturaleza fija de Tauro se refuerza porque las pautas de comportamiento de antaño se repiten una y otra vez. En ocasiones, existen dificultades para expresar lo que el individuo sabe, ya que el lenguaje no es su punto fuerte. Aquí, destaca fuertemente la tercera fase del proceso retrógrado, ya que el individuo intenta recrear todo aquello material que valora. Le interesa estructurar su vida de modo que finalmente tenga la impresión de que se ha ganado su seguridad. Hasta que lo sepa, puede temer que le quiten su seguridad. Por eso, tiene que trabajar para que esa sensación de bienestar interior se convierta en parte de él.

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Saturno retrógrado

Lo interesante de Saturno retrógrado en Tauro es que proporciona al individuo la capacidad de poder cambiar cualquier karma físico negativo que haya acumulado en el pasado. En su lugar, puede construir de nuevo todo aquello que sea significativo para él. Para ello, encauza su conciencia para reevaluar todas las cargas de su pasado hasta que se dé cuenta de lo mucho que su alma se ha acostumbrado a hacer las cosas de la forma más complicada. Hasta que no deseche su anticuada visión de la vida, será un pensador negativo. Como tal, puede acumular rabia a causa de lo difícil que le resulta la vida cuando parece ser tan sencilla para los demás.

Saturno retrógrado en Géminis Aquí, el individuo tiene dificultades para comunicarse. A menudo sabe lo que quiere decir, pero no cómo decirlo. Prosigue con la lección de una vida anterior en relación con otras personas. Al intentar encontrar los medios para ganarse la aceptación y la aprobación de aquellos a quienes deseaba complacer, recogió un sólido pensamiento tras otro. En esta vida, sus más mínimos pensamientos llevan consigo el peso de todas las antiguas ideas a las que se aferraba. Por eso, le resulta difícil alcanzar la misma esencia de la comprensión que busca sin haber escudriñado todos los pensamientos saturninos que había interconectado. Las personas con esta posición tienden a preocuparse discretamente por los demás. Saturno retrógrado en Géminis cree que es un guardián de los pensamientos de los demás. Al mismo tiempo, existe una enorme repetición de los propios procesos de pensamiento del individuo. Busca constantemente estar seguro de sí mismo, pero cuantas más ideas recoge, más duda de lo que sabe. Curiosamente,

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esas dudas son muy buenas para él, porque le facilita liberar las fOlmas de pensamiento que forjó en el pasado. Así, su misión kármica consiste en realidad en un proceso de desaprendizaje, mediante el cual pueda alcanzar el estado simplista de comprensión que una vez conoció antes de empezar a cargarse con una «excesivo equipaje de opiniones cultas». * Es durante la primera fase del proceso retrógrado que en realidad se complica la vida reuniendo demasiadas ideas. Entonces, después de haber vivido muchas preocupaciones y confusiones en la segunda fase, puede librarse finalmente de todo aquello que no tiene ningún valor durante la fase final.

Saturno retrógrado en Cáncer Aquí, el individuo pasa la mayor parte del tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, donde sigue meditando sobre las emociones de su pasado con las que tiene que cargar. Tiende a progresar lentamente en su vida, pues tiene la sensación de que debe estar constantemente seguro de sí mismo. Su necesidad de seguridad es fuerte. Desgraciadamente, cuanta más enegía gasta para intentar liberarse de su bloqueo emocional, tanto más se recrea en los mismos bloques que le seguirán rodeando más adelante. Para ser libre, debe dejarse llevar a través de ellos sin utilizar la fuerza. En toda materia aparentemente sólida existe un espacio por el que puede filtrarse el agua. En muchos casos, un fuerte apego a una figura de la vida anterior que representaba protección y seguridad se transfiere a un padre o figura autoritaria de más edad en esta vida, ya que el individuo no comprende consciente-

* Zolar, The Encyclopedia ofAncient and Forbidden Knowledge.

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Saturno retrógrado

mente cómo puede vivir sin la protección del seno materno. Cuando intenta expresarse, no está seguro de ser plenamente aceptado por los demás. Entonces, tiende a encerrar las emociones en su interior, como si las guardara para el único individuo que encontrase en un futuro que fuese representativo de la vieja seguridad que ya daba por perdida. Intenta mantener en su mente el concepto de familiaridad. Incluso cuando viaja, sigue identificando cada nuevo lugar con un pasado en el que ya se sintió a gusto. Así, puede ir por la vida con el sentimiento de que está firmemente enraizado, sin importarle dónde o con quién esté. Dado que vive en un mundo que parece ir cambiando a su alrededor, sería mejor que en vez de intentar hacer que el presente encaje en su pasado, se dé cuenta y acepte en su interior la vieja seguridad que ha conocido, de modo que no tenga que buscarlas constantemente en el mundo exterior. De esta forma podrá satisfacer su karma de nacimiento siempre presente.

Saturno retrógrado en Leo Aquí, el individuo se enfrenta con un karma de éxito. No se sentirá útil interiormente a menos que pueda llevar a cabo todo aquello de lo que se sienta capaz. Es importante para él sentirse importante, tanto para sí mismo como para los demás. Se esfuerza en hacerse con el mando de todo lo que hace. Ya los obstáculos que cree que debe superar les falta grandiosidad. A menudo sufrirá por causa de los demás, ya que siente una gran satisfacción al asumir las responsabilidades de otras personas. Al mismo tiempo, puede ser dominante y voluntarioso. Aporta a su vida el residuo kármico de poder; las épocas de la historia de la humanidad en las que podía hacer justicia. Y le preocupa mucho ser justo a los ojos de los de-

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más. Quiere ser respetado, y se desviará de su camino para defender posiciones o cruzadas por razones que le hacen aparecer más al mando de sí mismo. Es un padre estricto y un adversario más que formidable, pues siempre se interesa más por el poder de la posición que persigue que por defenderse a sí mismo. Para responder a las expectativas que de él se tenían en un pasado, intenta asumir las cargas de aquellos que le rodean. Así, lleva una vida de supuestas responsabilidades antes que una existencia normal. Debe aprender a reconocer primero sus propias responsabilidades y no asumir las de los demás.

Saturno retrógrado en Virgo Esta posición indica una persona que intenta alcanzar sus antiguos ideales. Profundiza constantemente en su interior para valorar qué aspectos de su vida concuerdan con 10 que cree que debería ser. Aunque pueda parecer muy interesado por los detalles que configuran la estructura de su vida, es a través de dichos detalles que es capaz de crear un universo cuidadosamente ordenado que puede tener sentido para él. Ve el mundo dividido en partes independientes unas de otras. Entonces intenta hacer encajar dichas partes en todo lo que creó en su interior en el pasado. Así interioriza 10 que cree que son fragmentos correctos del mundo exterior. Entonces, a partir de ellos se construye una vida estructurada. Cree que para conocerse a sí mismo tiene que entender el funcionamiento de todo lo que su vida abarca. El principal problema es que, debido a la naturaleza retrógrada de Saturno, programa de antemano y sin darse cuenta su percepción de las cosas de modo que puedan encajar en sus conceptos ya confeccionados. Eso le convierte en alguien 170

Saturno retrógrado

extraordinariamente rígido y tiende a disminuir la mutabilidad de Virgo. En su trabajo puede ser extraordinariamente eficiente, especialmente cuando sabe que los demás dependen de él en lo que respecta al orden y a la eficacia. Kármicamente, éste es el individuo que se ve forzado a vivir el mundo idealizado que le gustaría ver a su alrededor. Una vez se ha dado cuenta de lo irreales que son sus expectativas, puede sentirse más cómodo en este mundo tal como es. La perfección que ya existe le resultará entonces aparente. A causa de las muchas observaciones inherentes a esta posición sobre la vida de otras personas, el individuo vive la tercera fase del proceso retrógrado antes de que pueda manifestarse activamente en las fases primera y segunda.

Saturno retrógrado en Libra En esta posición, Saturno retrógrado aporta madurez interior al carácter por otra parte indeciso de Libra. El individuo siente una gran responsabilidad hacia los demás. A menudo vive sus karma más que ellos mismos. Naturalmente, eso puede desequilibrarle. A la larga, sus opiniones son muy sólidas y es capaz de serenarse a sí mismo. Pacificador nato, a menudo se encuentra en medio de personas o ideas opuestas. Desde esta posición, intenta aportar armonía estableciendo un equilibrado tercer punto que exprese el lado positivo de ambas posturas. Tiene la habilidad de cambiar y alterar las direcciones kármicas de las personas con las que entra en contacto. A resultas de conocerle, empiezan a reconsiderar y a sopesar proporcionadamente sus propias creencias anteriores y la dirección en la que se han estado moviendo. Así, esta posición les da a muchos la oportunidad de echar un vistazo objetivo a sus propósitos en la vida, de modo que puedan

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juzgar su validez. Para el individuo con Saturno retrógrado en Libra, la vida consiste en una serie de vueltas y giros hasta comprenda que su misión kármica en esta encarnación no es para él mismo, sino más bien para ayudar a los demás a dirigirse hacia unos objetivos más equilibrados. Ello se consigue poniendo un ejemplo de equilibrio armonizando las cosas que en apariencia son antagónicas. Lo lleva a cabo encontrando la unidad esencial de los ideales humanos. Su adaptabilidad le permite pasar de una fase retrógrada a otra dependiendo completamente de las necesidades del momento. De este modo, es verdaderamente uno de los ayudantes más versátiles y valiosos de Dios.

Saturno retrógrado en Escorpio Aquí, el individuo siente el significado de la vida en su nivel más básico. Posee una profundísima intuición, procedente en su mayor parte de sus propias experiencias. Viviendo constantemente al borde de su propia destrucción, sigue desechando todo lo que consigue a causa de la poca importancia que en el fondo ve en casi todas las cosas. Cree que detrás de lo que percibe en un momento dado se encuentra la realidad que sabe que existe. La construcción de su esencia tiene lugar en la profundidad de su subconsciente y las fascinaciones momentáneas de la vida no le satisfacen en lo más mínimo. Es consciente en todo momento de una realidad cósmica interior que sigue atrayéndole hacia su centro. En el mundo exterior, es una persona de ideas fijas, y hay pocos que puedan disuadirle de cualquier intención que tenga. Pue.de ser un cruzado que intenta transformar la sociedad en que vive, un rebelde contra la tradición ortodoxa que trata de transformarse a sí mismo, o un buscador de

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Saturno retrógrado

la verdad que desea transformar a la humanidad. Todo depende del nivel de karma con que llegue a esta vida. Generalmente, esta situación de Saturno es exteriormente una experiencia de primera fase, mientras que, interiormente, una experiencia de tercera fase actúa como una corriente subterránea que origina toda acción aparente. Así, las reflexiones internas del individuo sobre su lugar en la sociedad en que vive se convierten en un estímulo hacia el modo en que le gustaría transformarla.

Saturno retrógrado en Sagitario La vida se basa aquí en antiguos principios. Sumamente independiente, el individuo no puede ser dirigido por los consejos de los demás. En ocasiones parece demasiado terco, pero la fuerza con que expresa sus ideas a los demás no refleja verdaderamente su afiliación a ellas. Cualquier causa, principio o misión de las que aparenta ser partidario cambia constantemente. Suele representar la necesidad del hombre de alejarse de todas las tradiciones que parecen haber sobrevivido a su utilidad. Generalmente, el verdadero carácter del indiviuo no aparece hasta la mitad de su vida, después de haber probado los modos de vida convencionales y haberlos encontrado demasiado restrictivos. Preferiría ser su propio ordenancista que seguir los dictados de los demás, pues cree que no saben realmente qué es lo mejor para él. En muchos casos, parece rejuvenecer a medida que se hace mayor. Con el tiempo, aprende a ver con más claridad las cosas que una vez fueron gravosas para él. Tiene que controlar su tendencia a juzgar a los demás, ya que puede enajenarse si lo hace. Sin embargo, debe tratar de ser más benévolo en su apreciación de la gente. 173


Vive el karma de aprender a dejar que su mente s.uperior comprenda y corrija sus viejos errores. En postenores etapas de la vida, se encontrará haci~n.do todo aq~ello que sabía que podía hacer cuando era mas Joven. Aqm, el ~fe~ to retroactivo del retrógrado se ve reforzado, pues elllldlviduo vive la tercera fase del proceso retrógrado durante la mayor parte de su vida adulta, después de constatar que la segunda fase que intentaba vivir en su juventud no parecía satisfacerle tanto como a sus superiores.

Saturno retrógrado en Capricornio Con esta posición, se pasa mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, puesto que el individuo trata de restaurar una antigua imagen de sí mismo. Está acostumbrado al trabajo duro, y le gusta la posibilidad de poder volver a desempeñar algún día trabajos y proyectos que ya había realizado. Al poseer la singular habilidad de cerrar las puertas a las interferencias, puede orientar su vida hacia una meta provechosa mejor que cualquier otra posición zodiacal. Éste es el don que le permite tener tanto éxito. Al mismo tiempo, trabaja al revés, es decir, no empieza nada si no conceptualiza de antemano el producto final. Eso aumenta su visión práctica de la vida. Puede ser sumamente reservado y a menudo callado, ya que en su planificación interna no cabe dejar entrar a las distracciones externas, que de otro modo pueden apartarle del rumbo que él mismo se ha marcado. Es especialmente bueno para reponer las piezas del pasado que la sociedad ha omitido, y hacer que a partir de tales fragmentos aparentemente inútiles resulte una vida magnífica. Por eso no tolera el derroche. Kármicamente, vive una misión de realización, pero lo que consigue en el mundo exterior no es tan importante como el profundo significado que esos éxitos le aportan. 174

Saturno retrógrado

En esta vida, completará todo aquello para lo que recogió datos en una encarnación anterior. Con la madurez de esta posición, su alma ya está preparada para realizar muchísimo trabajo siguiendo una trayectoria determinada. Cualquiera que sea la casa en la que aparezca, es en el área de la vida donde podrá conseguir, si quiere, una realización kármica.

Saturno retrógrado en Acuario Aquí, el individuo es sumamente original e independiente. Le interesa todo aquello que la vida pueda ofrecerle. Sus reglas y costumbres están al margen de las normas convencionales, ya que representan el acúmulo de todo lo que ha recogido de fuentes radicalmente diferentes. Sin embargo, la originalidad de sus ideas tiene una base sólida y, aunque le gusta escuchar cualquier información nueva que aumente su stock de conocimientos, sigue, sin cambiar las actitudes básicas subyacentes que creó en una encarnación anterior. De este modo, mientras intenta alcanzar el futuro, aún mantiene un fuerte vínculo con el pasado. Hasta puede agotar a los que proyectan el futuro, dada su constante necesidad de hacer encajar nuevos descubrimientos en antiguos conceptos. . A causa del carácter errático de Acuario, vive todas las fases retrógradas. Increíblemente curioso, trata de llegar a comprender tantas cosas que en realidad consume la frescura de todo lo que es novedad. De este modo, hace que lo no convencional quede anticuado antes de tiempo. Al hacerlo, está forzando casi inconscientemente a la sociedad a aceptar lo nuevo añadiéndole unas notas de tradición, convencionalismos e incluso aburrimiento. Cuanto más peso añade a todo lo que es nuevo quitándole importancia, tanto más posesivamente quiere protegerlo la sociedad. Así, su misión kármica consiste en seguir a los precursores del futuro y ser

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un puente entre todo lo que descubren y todo lo que la humanidad necesita saber y utilizar ahora.

Saturno retrógrado en Piscis Aquí, el individuo pasa la mayor parte del tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, puesto que sigue repasando la esencia de su pasado. Piensa que su vida es aburrida y más dura que la de los demás, y tiende a refugiarse en antiguas penas mucho después de haber podido afrontarlas y superarlas. Falto de confianza, tiende a rendirse ante la vida con demasiada facilidad. La fuerza que necesita para sacar a la luz su creatividad siempre procede de la inspiración de los demás. Pero el verdadero visto bueno que necesita no es tanto el de quienes le rodean como el de la comprobación según su propia escala de valores. Sin ser nunca de aquellos que se comen el mundo, es bastante tímido en su juventud. Sin embargo, al crecer, un poder empieza a surgir en su interior desde la misma esencia de su alma. Parte de su existencia se basa en la realidad de su vida cotidiana, pero la mayor parte de su ser interior ya se forjó antes de esta vida. Ha realizado y superado muchas de las pruebas por las que los demás aún tienen que pasar. Por eso, la falta de confianza que experimentó durante su juventud es reemplazada por un firme conocimiento interior, dado que crece en estrecho contacto con su alma. Kármicamente, se inspira en la fuerza interior que posee para relacionarse con el mundo exterior. Generalmente, esta posición indica un fuerte valor espiritual, y la persona no tiene que mostrarse agresiva en la vida para demostrar sus propias cualidades. Mucha de la comprensión inherente a esta posición es no verbal. El individuo no habla de las muchas formas en que sabe que puede ayudar a los demás. Tiene el don de poseer una guía interior que ad176

Saturno retrógrado

quirió en una vida anterior, y ésa es la fuente de gran parte de su capacidad creativa actual.

Saturno retrógrado en la Casa primera Aquí, la primera fase del proceso retrógrado se pone de manifiesto cuando el individuo intenta encontrar una impresionante y formidable estructura de identidad con la que pueda vibrar el mundo que le rodea. Trata de impóner su realidad porque desea realimentarse más adelante, cuando pase por las otras dos fases. Hay algo que falta considerablemente en la estructura de su personalidad, y por ello existe una fuerte tendencia a compensarlo. Normalmente, hay una serie de barreras entre el individuo y la gente a la que le gustaría acercarse. Una especie de actitud desconfiada impregna toda la estructura de su identidad debido a alguna situación de una vida antelior en la que se sintió apartado o alejado de lo que trataba de conseguir. Ahora, en vez de asumirlo, intenta ser importante para que los demás lo tengan en consideración y quizá se relacionen con él de forma que no le hieran. Este individuo es muy susceptible, aunque no lo parezca. Kármicamente, aprende a valerse por sí mismo, y dado que este proceso es tan lento, teme sobremanera que alguien pueda intentar derribarle antes de que haya podido construir sus propios fundamentos. Sobre todo, pasa toda su vida construyendo un castillo de normas, que al final será la estructura de identidad que quiere conseguir.

Saturno retrógrado en la Casa segunda Aquí el individuo aprende lecciones kármicas sobre posesión. En vidas anteriores trataba de cristalizar todo lo

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que tenía valor para él y ahora intenta volver a aplicar dichos valores a las situaciones con que se encuentra cotidianamente. Al pasar la mayor parte del tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, sigue acumulando todo aquello que le proporcione su vieja seguridad. Por eso es sumamente reticente a cambiar. Tiende a ver el mundo desde algún punto del pasado en el que una vez se sintió a gusto. En consecuencia, sigue desechando todo aquello que le retiene. La verdad es que no llega a comprender cómo encajan sus capacidades en el mundo que ahora ve a su alrededor. Así experimenta una barrera entre lo que siente y lo que es capaz de vivir, yeso puede alejarle de lo que quiere. A menos que Venus se encuentre extraordinariamente bien situado, esta posición tiende a bloquear las demostraciones de amor. Cada vez que el individuo trata de dar su amor a otra persona, pone en duda si responde o no a sus principios. Siempre tiene la impresión de que se equivoca, pero le cuesta reconocerlo. Por lo general, esto es debido a un sentido de culpabilidad subyacente en términos de cómo trata a la gente en relación a las cosas. Alcanzará la felicidad en el momento que compruebe claramente lo desleal que fue consigo mismo en el pasado.

Saturno retrógrado en la Casa tercera Aquí existen grandes dificultades para la comunicación. El individuo no puede expresar fácilmente sus ideas con las palabras que sabe que los demás comprenden. Parte del problema estriba en que formula demasiadas ideas en blanco y negro y no se da cuenta de los muchos tonos de gris que existen entre ambos. Dado que le cuesta mucho comunicar sus ideas a la gente, aunque interiormente piense que no es tan recepti178

Saturno retrógrado

va como le gustaría que fuese, tiene grandes dificultades en todas sus relaciones. A menudo, impide que su mente inconsciente sea sensible a las señales que provienen de lo más profundo de su ser. En consecuencia, no está en completa armonía consigo mismo. Las partes de sí mismo que puede entender conscientemente son, en gran medida, una fachada de pensamientos, razonamientos e ideas preconcebidas que considera socialmente aceptables. Ninguna posición de Saturno cristaliza todas las formas de pensamiento de la vida cotidiana con tanta fuerza como ésta. Hay tanta importancia involucrada en cada pensamiento, que en realidad el individuo se abruma con una cuestión tras otra. Lo interesante es que ya ha programado de antemano las respuestas. Eso dificulta el proceso de aprendizaje, puesto que lo que codicia sólo es lo que justificará aquello que ya ha sido formado sólidamente en sus critenos. Al pasar gran parte del tiempo en la segunda fase del proceso retrógrado, atraviesa por un conflicto entre la información recibida y la emitida. En vidas anteriores ha pasado tanto tiempo aprendiendo a aprender que, de hecho, se ha convertido en una víctima de los hábitos que le conducen a saciarse a sí mismo con más información de la que realmente necesita. Kármicamente, debe aprender a establecer unas prioridades claras entre sus pensamientos, desechando todo cuanto sea superfluo mientras trata de expresar mejor aquello que sea significativo.

Saturno retrógrado en la Casa cuarta Aquí gran parte de la vida discurre en la segunda fase del proceso retrógrado, ya que el individuo sigue tratando 179


de encontrar qué es lo que le incomoda en las mismas raÍces de su alma. A pesar de todo lo que hace, dirige gran parte de él hacia sí mismo casi todo el tiempo. En su personalidad hay un complejo de Edipo por resolver, compuesto por muchos problemas procedentes de su más tiema infancia. Una fuerte persistencia de fijaciones emocionales puede inducir a este individuo a seguir durante la mayor parte de su vida la huella de sentimientos ya cristalizados. A consecuencia de ello, tiende a cargar con mucha materia astral, y puede resultar molesto para los demás debido a todo el peso de sus conflictos emocionales intemos. Incluso cuando obtiene respuesta a sus preguntas, parece que no sabe cómo utilizarlas en la resolución de sus problemas. Tiende a impedirse a sí mismo la visión del significado profundo de las cosas, cosa que en verdad le liberaría. Para muchos de los que tienen esta posición, existe una continuación de las fobias reveladas durante los primeros años que debe ser superada si se deben trascender las actitudes persistentes que bloquean la conciencia de sí. De todas las posiciones de Satumo, ésta es una de las más fuertes en lo que concieme a mantener al individuo atado a su pasado. Puede pasar literalmente cuarenta años tratando de resolver las molestas responsabilidades que le inculcaron a una edad demasiado temprana. En su propia familia adulta, sigue volviendo a representar los traumas de su juventud, pero a menudo lo hace a un nivel tan inconsciente que cuantos le rodean difícilmente se dan cuenta de los papeles que interpretan en ellos. El karma aquí consiste en aprender a tolerar las emociones de las personas con quienes está en estrecho contacto sin interiorizar o cargar con la culpa o la responsabilidad por todo lo que ocurrió en el pasado. Tan pronto como el individuo pueda aprender a vivir sólo el momento presente, comprobará cuántas de sus preocupaciones no son reales.

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Saturno retrógrado

Saturno retrógrado en la Casa quinta Con esta posición, el individuo siente la fuerte necesidad de superar los obstáculos que advierte en su proceso creativo. Sigue teniendo la impresión de que debería hacer en la vida más de lo que está haciendo en realidad, pero tiende a dejar para más adelante gran parte de su rendimiento. Siente la necesidad de crear algo con un valor duradero para sentir firmeza. En algunos casos, tendrá que llevar una pesada carga en lo que se refiere al pago de una deuda kármica a un niño. Sin embargG, si puede hacerlo, se ayudará a sí mismo a establecer la firmeza en su busca. Tiende a ponerse obstáculos infranqueables, que retrasan cualquier progreso que haga en la vida, porque tiene miedo a comprometerse. Sin embargo, no importa lo observador que sea en la vida, sigue cayendo de una situación a otra, donde todo el peso de la responsabilidad recae en él. Cuanto más busca el placer, más responsabilidad tiene que asumir. En gran medida, eso le enseñará lo que es realmente la vida. Los asuntos amorosos prosperan lentamente ya que debe verificarse una gran madurez antes de que una relación íntima pueda desarrollarse sin dificultades. El individuo tiene muchas dudas sobre sí mismo cuando tiene que expresar sus habilidades creativas. No cree que pueda estar a la altura de los valores de los demás. Así, se priva a sí mismo de mucho de lo que realmente necesita. Puede cambiar probabilidades que podrían alcanzar a dichos obstáculos que se convertirían en demasiado remotos con respecto a su vida para que pueda alcanzarlos. Se preocupa demasiado por los temores infantiles de incapacidad que todavía operan en su inconsciente. Kármicamente, debe aprender a dejar de perpetuar los miedos que bloquean su caudal creativo. Tan pronto como lo haga, no sólo superará muchos de esos obstáculos, sino

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que también podrá realizar una importante contribución a la humanidad.

Saturno retrógrado en la Casa sexta Aquí, el individuo siente una fuerte responsabilidad hacia los demás. Si pudiese, le gustaría ser capaz de llevar sus cargas por ellos. En el trabajo, puede resultar un organizador fantástico, ensamblando las piezas desordenadas que los demás no saben cómo manejar. Al mismo tiempo, debe aprender a no atropellarse, ya que a veces abarca más de lo que es capaz de hacer cómodamente. Al ser más un hacedor que un pensador, puede hacerse literalmente daño tratando de conocer lo que los demás esperan de él. Le gusta vivir con decisión, pero cuestiona el origen de todas las cosas. Eso forma parte de su lucha por descubrir si la vida del hombre está predestinada o si depende de sus propios actos. Debe aprender que, aunque se comprometa en una misión de servicio a los demás, no le toca a él decidir cuáles son las necesidades específicas de quienes le rodean. Puede empantanarse tanto en trivialidades, tratando de contentar a todo el mundo, que pierde de vista el hecho de que sólo Dios es el único que satisface. Trae consigo a esta vida un sentido de la dedicación, y para aquellos que necesitan una orientación, su mera presencia les ayudará a encontrar sus propios objetivos. Debe procurar no tratar de imponer sus metas a los demás durante la primera fase del proceso retrógrado. Al trabajar mejor como servidor, puede funcionar sin problemas durante la tercera fase, en la que es capaz de revisar los dilemas de otras personas para intentar ayudarles a cristalizar soluciones.

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Saturno retrógrado en la Casa séptima Aquí, el karma del matrimonio se aprende en su totalidad. El individuo siente a menudo que su cónyuge le está atando. Incluso si permanece soltero, sentirá el peso de los demás tratando de hacerle volver sobre sus pasos para obtener una visión más madura y equilibrada de sí mismo. En algunos casos, esta posición indica una boda con un compañero de más edad que el individuo pudo haber cónacido en una antigua encarnación. Las lecciones más importantes se centran en el establecimiento de una armonía con los demás. Lo sabe, pero su ego tiende a rebelarse cuando el camino se hace difícil. Sin embargo, en anteriores encarnaciones ha aprendido que su verdadera seguridad procede de los demás más que de sí mismo. Necesita sentirse protegido. Como tal, incluso si se queja de que el matrimonio es aburrido, sabe que es un ancla estabilizadora que le aleja de lo que de otro modo podría ser un estilo de vida, que le resultaría demasiado agitado como para poder vivirlo y aprender de él. Kármicamente, esta posición de Saturno retrógrado le da al individuo la oportunidad, no sólo de resolver los problemas de la infancia con un padre dominante escogiendo a un compañero con un carácter similar a la hora de casarse, sino también de compartir el desarrollo de su vida con el de otra persona,que en muchos casos parece ser el antiguo compañero de estudios, pero que en realidad resulta ser el profesor. De este modo, hay mucho que aprender de esta posición si el individuo se permite vivir la tercera fase del proceso retrógrado, a través del cual puede ser receptivo a las ideas que parecen estar más allá de su actual nivel de madurez.

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Saturno retrógrado en la Casa octava Con esta posición, existen muchos intercambios kármicos con los demás. El individuo se inclina a vivir las cualidades de otras personas con el fin de transformarse a sí mismo mediante lo que los demás han considerado útil. Como resultado de antiguas encarnaciones, aún no ha tomado una resolución para sí mismo: Así, oscila bajo la influencia de su cónyuge y de las demás personas que haya en su vida. Sexualmente, existe una restricción que roza la impotencia debido a los muchos miedos kármicos que se han ido acumulando. Existe una gran preocupación al respecto y repite pruebas de sexualidad casi para ver si está ahí. Muchas mujeres con esta posición tienen experiencias sexuales desagradables con un hombre adulto en los primeros años de su infancia. Ésta es la causa principal de frigidez, culpabilidad y vergüenza más adelante. En todos los casos, el carácter sexual está arraigado en el pasado. El apego a todo lo que tiene un valor maduro en los demás otorga al individuo una gran firmeza y sentido común en el mundo de los negocios, donde su cautela saturnina funciona en su beneficio práctico. Para el estudiante místico, esta posición de Saturno retrógrado capacita al individuo para invocar viejos karma a fin de desarrollar una nueva perspectiva sobre antiguos modos de pensamiento. De este modo, será capaz de volver a nacer cuando pueda librarse para siempre de antiguos criterios que nunca fueron realmente suyos, pero con los que trató de conformarse en el pasado. Dado que muchos de los valores del mundo son dependientes en gran manera de la evolución sexual de la raza en un momento dado, esta posición de Saturno en la Casa octava refleja gran parte del pensamiento del mundo a través de la propia vida del individuo. Gran parte del tiempo trans-

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curre en la tercera fase del proceso retrógrado, ya que las viejas tradiciones han permanecido contra los patrones habituales de la sociedad. Kármicamente, el individuo revisa y transforma todo lo que la humanidad estableció como una antigua tradición.

Saturno retrógrado en la Casa novena Saturno encuentra aquí una casa especial, ya que pone al individuo en contacto con las partes ya configuradas de su naturaleza superior. En muchos casos, aporta a su vida un maduro sentido de la sabiduría que desarrolló en antiguas encarnaciones. A pesar del nivel de su cociente intelectual, que a menudo piensa que no es el que debería ser, posee más sabiduría que conocimientos. Sin embargo, la naturaleza retrógrada del planeta le hace dudar a menudo de sí mismo, y provoca el hecho de que busque su entendimiento más arduamente de lo que en realidad debería hacerlo; pero eso sólo será hasta que aprenda que todo el esfuerzo que emplea en intentar hallar soluciones a sus problemas es meramente una parte de su aprendizaje sobre cómo dejar de pensar. En el momento que lo haga, ¡empezará a darse cuenta de que la respuesta está siempre ahí! Para muchos, esta posición de Saturno representa un largo viaje espiritual al término del cual el individuo hallará el respeto a sí mismo antes que a Dios. Empezará su viaje tratando de leer cada libro, de prestar atención a cada lectura y, literalmente, de intentar «agarrar» cada idea superior, con la esperanza de que, mediante la simple posesión de muchos conocimientos, encontrará lo que está buscando. Al final, la mayor parte de lo que aprende le llega a través de muchos medios totalmente normales.

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Debería intentar una proyección astral; se daría cuenta de que su cuerpo astral es bastante pesado y tiene tendencia a molestar a los demás, a menos que sus proyecciones sean benévolas. Kármicamente, es un buscador de primera clase y prosigue en esta vida una misión que ya empezó anteriormente. Experimenta todo el proceso retrógrado, puesto que sigue dando forma a sus creencias filosóficas y espirituales, ¡transformando así su colección de opiniones en un auténtico sentido de conocimiento!

Saturno retrógrado en la Casa décima Aquí, Saturno se encuentra en su propia casa. El individuo pasa mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado revisando el prestigio y la dignidad que alcanzó en el pasado. A través de ello, determina la opinión que actualmente tiene de sí mismo. De este modo, es consciente de su categoría, particularmente en su propio grupo. Inusitadamente, se juzga a sí mismo en relación a anteriores grupos a los que perteneció y en cómo ahora se equipara o se siente superior a ellos. Ésta es una posición de dedicación para Saturno retrógrado. El individuo tiene un gran sentido de la responsabilidad y tiene que rendir cuentas consigo mismo de todo lo que hace. Así, le preocupa profundamente el ver su vida como una sensible estructura formativa que ha seguido más o menos una trayectoria sensata desde que tuvo uso de razón hasta el momento actual. Tiende a ser muy rígido en ese aspecto, y la razón y la lógica pueden eludirle si se desvía de su preconcebido sentido del deber para con su propia imagen. Este efecto procede de los raros momentos en que experimenta, muy en privado, la primera fase del proceso retrógrado.

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La única forma de disuadirle es si ello significa la posibilidad de mejorar su propia imagen en el futuro, mientras en el proceso no se destruya nada de su pasado. Kármicamente, trata de establecer unos principios que no formó a lo largo de vidas anteriores, y que en realidad no tiene en esta vida actual más que en su carrera, su imagen pública y su sentido del deber para con la sociedad.

Saturno retrógrado en la Casa undécima Ésta es la posición del idealista. El individuo tiene que ocuparse de la cristalización de sus sueños, esperanzas y objetivos. A él no le basta soñar simplemente con ellos, como hacen otros. Tiene que sentirse realizado antes que verse a sí mismo como una persona importante. Como tal, tiene la difícil tarea de aprender a mezclar su realidad con lo que le gustaría que ésta fuese. A menudo, eso implica cargar con las responsabilidades de sus amigos, ya que la propia vida del individuo no es lo suficientemente grande como para incluir la realidad de todos sus sueños. Por esta razón, debe ampliarla atrayendo hacia sí todos los individuos cuyas vidas simbolizan aquellas partes de sus sueños que no desea o no es capaz de vivir por sí mismo. El proceso retrógrado cambia con esta posición de Saturno, que depende muchísimo de las otras personas que haya en la vida del individuo. Es un muy buen consejero, porque todo lo que sugiere a los demás es lo que haría él en realidad si viviese la vida de las otras personas. Hasta cierto punto, esta posición crea una especie de «karma expectante», en el cual el individuo no es tanto el centro de su propia vida como el centro de su sueño, que puede muy bien ser muchas vidas de los demás. De este modo, sin importar quién sea realmente en esta vida, eso es lo que ellos esperan que sea más importante que lo que verdaderamen-

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te son. Incluso si intenta atraer a gente importante hacia sí, este individuo se preocupa más inconscientemente del qué y el porqué de su fama que de quienes son en realidad.

Saturno retrógrado enZa Casa duodécima La tercera fase del proceso retrógrado se pone aquí de relieve, puesto que el individuo se vuelve profundamente introspectivo. Su mayor preocupación es que desarrolla una verdad interior que permanece invariable bajo las presiones del mundo o de su propia suerte: Así, construye un fundamento en su interior, y por eso tendrá que confiar en el conocimiento que ha acumulado en antiguas encarnaciones para consolidar ese fundamento. Puede sentirse en deuda con los que son menos afortunados que él. Y no hay razón para ello, pues él mismo ha sentido el gran peso de Saturno en vidas anteriores. Ahora ve sus responsabilidades más como una deuda cósmica hacia el universo que como una deuda personal hacia alguien en concreto. Muchos de quienes tienen esta posición de Saturno se vuelven tan extraordinariamente introspectivos que empiezan a cuestionar la validez y la importancia de todo lo que hacen, y su identificación con la importancia colectiva o la falta de ella, en el mundo que les rodea, que en cualquier momento afecta enormemente su visión de la vida. Mucho más que eso, la lección aquí consiste en ser sincero con uno mismo desde todas las perspectivas ventajosas posibles. De todas las posiciones de Saturno, ésta es una de las que aporta al individuo un mayor grado de madurez interna. Cualquier cosa que le pida el mundo exterior, su sentimiento más fuerte será el de laseguridad que siente interiormente siendo fiel a su Dios..

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6. URANO RETRÓGRADO Urano retrógrado como símbolo esotérico

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El símbolo para Urano ( ~) está formado por dos medias lunas del alma opuestas y unidas a través de la cruz de la materia. Como un travieso vagabundo de los cielos, Urano siempre ha estado en relación con todo lo que simboliza las propias y singulares capacidades del hombre de ir más allá de las cosas mundanas. Para ello, debe romper a toda costa con los convencionalismos, partiéndose a menudo en dos durante el proceso. Las medias lunas del alma apuntan en direcciones opuestas, recordándonos los símbolos lunares del cuarto creciente y cuarto menguante. Cada uno de ellos presenta un lado distinto de la vida, como las dos caras de una moneda que, aunque sean de naturaleza tan opuesta, no pueden existir la una sin la otra. La cruz de la materia permanece en el cent:eJ de estp. tira y afloja, simbolizando todo lo que el hombre ya ha establecido como sus bases tradicionales. Desde los brazos de esta cruz, las dos medias lunas del alma tiran en sentidos contrarios y en direcciones hasta ahora inexploradas. La naturaleza del alma, tratando de descubrir lo desconocido, fuerza al individuo a decidirse continuamente entre la estabilidad que ya conoce y las posibilidades positivas y negativas de todo lo que todavía no ha probado. Así, el símbolo de Urano no representa tanto la imprevisibilidad del hombre como su lucha por liberarse de la materia o el lado formal de la vida, que obstaculiza todas

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la posibilidades existenciales que, de forma innata, sabe que puede alcanzar. Cuando el planeta es retrógrado, uno se lo toma como una cruzada personal, sintiendo en lo más profundo de sí mismo la responsabilidad del progreso de toda la humanidad. Al invertirse, el símbolo acerca las dos medias lunas del alma hacia la tierra. Así, al individuo no le basta con liberarse a sí mismo. Debe sentir la libertad de cada uno en su espacio vital antes de contentarse con el hecho de que la liberación de su propia alma ha penetrado en la materia de todo lo que ve a su alrededor.

La personalidad de Urano retrógrado El individuo con Urano retrógrado muestra una personalidad bastante singular. En sus niveles más. profundos, es un rebelde contra todo aquello que lo at~. Si ~s una persona miedosa, puede sentir claustrofobia.·. Si es una persona atrevida, intentará derribar todo aquello que ya no tiene ninguna utilidad. No puede contentarse sólo llevándose bien con li;l,yj¡ja, ya qU@ existen muchas cosas que podrían enriquecef'a·la humani.dad sólo si la sociedad se desprendiese de todas sus falsas anclas de seguridad. , De hecho, se preocupará si los demás empiezan a aceptarle demasiado, pues entonces sentirá que ha perdido gran parte de sí mismo. En este sentido, de vez en cuando perderá muchos amigos y conocidos, algunas veces empleos, y romances todo porque la rareza de sus ideas es a menudo demasiado difícil 0(:: aceptar por los demás. Y sin embargo, años después, cuando la sociedad evoque todo aquello que él presentó una vez, ya no se interesará por cualquier teoría avanzada o actitud que promovió en su momento. De este modo, es un pionero del futuro. Debi-

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Urano retrógrado

do a ello, puede experimentar una gran soledad, pero nunca renunciará al don de su originalidad a cambio del compañerismo de los demás. Sabe que, por encima de todo, su alma debe ser libre, y expulsará de su camino cualquier cosa que impida dicha libertad. Para aquellos que son capaces de comprenderle, es una de las personas más fascinantes que han escuchado, pues está literalmente lleno de todas las ideas que la humanidad necesita para el futuro de la raza humana.

El karma de Urano retrógrado A nivel personal, Urano retrógrado hace estragos en las relaciones humanas. El individuo experimenta una va-· riabilidad interior que a menudo hace que sea hipócrita consigo mismo. Sus niveles mental y emocional suelen luchar entre sí, de modo que pueda conocer algunas cosas que le llevarán en dirección a lo que apunta el conocimiento; pero al mismo tiempo, siente otras cosas que pueden conducirle hacia una dirección completamente diferente. Vive un karma de aprender a expresar la libertad interior que aporta a esta vida. Y no debe atarse tratando de hacer entrar en razón en todo momento a los demás, o incluso a sí mismo. Un espíritu libre no siempre aparece para hacer entrar en razón, ni debería hacerlo. El hecho es que una lógica permanencia de sentido común en un individuo es más un rasgo saturnino, atado por la rigidez del orden, la disciplina, y el orientarse a sí mismo hacia objetivos específicos. Pero el individuo con Urano retrógrado no vive talkarma. Para explorar su ser interior, así como muchos otros reinos de comprensión que la humanidad en su conjunto aún no ha alcanzado, su camino suele ser largo y tortuoso. Se precipita hacia esta dirección y la búsqueda de las fór-

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mulas que hagan que el mundo funcione. Sin embargo, sabe que su busca es un proceso interminable, porque cada nuevo descubrimiento conduce a su vez a otra pregunta. Puede ser tremendamente feliz mientras otros no intenten imponerle moldes de pensamiento y modelos de conducta a los que ya ha trascendido debido a los insensatos papeles que interpretan en su percepción del esquema general. Ha aprendido a ser independiente en antiguas encarnaciones, y ahora debe usar esa independencia para volver a descubrir y comprender la sensatez que originalmente deseaba.

Urano retrógrado en Aries Aquí, el individuo pasa mucho tiempo repitiendo en su interior cambios que se iniciaron en otra encarnación. Es sumamente individualista, independiente y único. Vive por la espontaneidad en sí mismo, tratando de librarse de las barreras que le tendrían atrapado en cualquier tipo de tradición. Es extraordinariamente rebelde contra todo lo que considera demasiado tradicional o sólidamente formado como para darle la oportunidad de mejorarlo. Es un gran buscador de emociones y generalmente está dispuesto a renunciar a cualquier seguridad por la promesa de alguna clase de intensa estimulación que aún no haya experimentado. Eso hace que le resulte difícil contentarse durante un gran período de tiempo con el matrimonio, una asociación o incluso trabajos o una carrera que puedan llegar a ser demasiado aburridos. En ocasiones, puede convertirse en líder de causas impopulares. Independientemente de lo que haga, debe probarse a sí mismo que ninguna persona o idea (que no sea de su propia elección) puedan atarle. Es probablemente una de las personas más interesantes y originales del zodía-

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ca. Al pasar la mayor parte del tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, es un verdadero pionero, que busca explorar todo lo que la sociedad ha pasado por alto. Se exalta rápidamente porque no tiene paciencia por nada ni nadie que impida su avance. Eso le incapacita para liberarse de las limitaciones de las cultas opiniones de la sociedad. Su karma consiste en caminar por donde no haya huellas delante de él, forjando nuevos principios mentales en todo lo que hace. Debe aprovechar sus conocimientos de yidas anteriores, de modo que pueda aplicar cada gramo de la ingenuidad que desarrolló para dar sentido a nuevas iniciativas. Aunque a veces tenga que recorrer un camino tortuoso, sin él habría muy poco progreso para la humanidad.

Urano retrógrado en Tauro Aquí destaca la tercera fase del proceso retrógrado porque el individuo sigue reevaluando todo lo que ya ha vivido. Su seguridad financiera y emocional se vuelve inestable, pero esto sólo hace que el individuo esté más decidido a crear un negocio sólido. Al mismo tiempo, experimenta un fuerte interés sexual por cualquiera que parezca excitante o diferente. En anteriores encarnaciones reveló serios conflictos en su sistema de valores, que deben romperse ahora si quiere hacer progresos en su interior. Y mientras esas sólidas partes de sí mismo siguen seduciéndole para aferrarse a la protección y seguridad de su pasado, Urano retrógrado sigue apartándole de su nivel inferior, metiéndole en situaciones que le hacen ser consciente de que gran parte de su sentido de la seguridad y del bienestar se asienta en falsos fundamentos. De este modo, se mueve constantemente entre la tranquila serenidad y la excitante exploración de

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nuevos límites que pueden tener pocas o nulas perspectivas de resultados prácticos. De muchas maneras, esta posición de Urano da lugar a un individuo que quiere tener su ración del pastel y comérsela. Le gusta estar casado, pero al mismo tiempo creer que es libre. Le agrada trabajar en un empleo monótono mientras se convence a sí mismo de que no está atado por él. Le gusta seguir una religión mientras piensa interiormente que en realidad no le comporta ninguna obligación. Así, no es tradicional, en el sentido más tradicional de la palabra. Cuando se enfrenta con la oportunidad de ser verdaderamente libre en el matrimonio, empleo, religión y otros aspectos de la naturaleza formal de su estilo de vida, salta rápidamente hacia la seguridad del seno materno que Tauro siempre busca. Kármicamente, esta posición aparece en las cartas de los individuos cuyas almas tratan de romper con modelos cristalizados de pensamiento de antiguas encarnaciones, pero que aún no están preparados para-desprenderse de la importancia que originalmente habían dado alIado físico de la vida.

Urano retrógrado en Géminis El individuo experimenta aquí una vida mental sumamente activa. Sigue cambiando de una fase retrógrada a otra mientras trata de encontrar aquella identidad en la que se encuentre más a gusto. Al ser extraordinariamente nervioso y excéntrico, está muy influenciado por el pensamiento del mundo exterior. Eso hace que le resulte difícil persistir con un tópico o cualquier otro proyecto durante un largo período de tiempo. Tiene demasiado interés en explorar todas las posibilidades mentales que hay en él, de que su vida se convierta literalmente en un almacén de

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ideas sueltas y actitudes. Al no tener la suficiente confianza en la singularidad de sus propios pensamientos, tiende a identificarse con la originalidad de los demás. Existe una gran estabilidad con esta posición de Urano retrógrado. Algunas veces, el individuo puede hacerse daño a sí mismo tratando de comprender tanto de lo que hay fuera de la periferia de la normalidad esperada, que, en realidad, puede perder su perspectiva de la realidad. Eso se produce como resultado de la interiorización de sus criterios, cosa que no sólo le distrae de los progresos que cree que le gustaría hacer, sino que también le aleja de cu~l quier enfoque realista de la vida. La esencia del problema es que, inconscientemente, es muy crédulo. Al darse cuenta de ello, debería procurar tener cuidado en el área de la hipnosis u otras técnicas mentales pro-. fundas que tienden a llevarle demasiado de prisa hasta niveles de su ser que aún no está preparado para considerar. Es tan activo mentalmente que incluso su interés por la sexualidad asume más el colorido de la exploración mental que el de cualquier satisfacción física o emocional. Como una de las personas más curiosas del zodíaco, vive el karma del investigador que no podría decidir cuál de los caminos que le dan a elegir es el que más le conviene. En este aspecto, conoce gente cuyos estilos de vida son muy diferentes, representando cada uno algo que le gustaría in~entar. Si se esfuerza en elevar su conciencia, un día se dará cuenta de la gimnasia mental que ha estado utilizando durante siglos y que le ha impedido experimentarse a sí mismo.

Urano retrógrado en Cáncer Aquí el individuo experimenta cambios en su estructura familiar. Existe un trastorno emocional constante que-

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deriva de experiencias para las que aún no esta preparado. En la mujer, esta posición indica en ocasiones un niño nacido fuera del matrimonio. Cuando surge la cuestión del aborto, se enfrenta a su necesidad canceriana de maternidad en conflicto con la necesidad de Urano retrógrado de la libertad personal. Sea hombre o mujer, el carácter disarmónico emocional es debido a preguntarse y analizar constantemene todas las cosas, hasta tal punto que el individuo nunca se permite a sí mismo el completo desarrollo de una vida emocional estable. Al pasar mucho tiempo en las fases primera y tercera del proceso retrógrado desea respuestas instantáneas a todos sus sentimientos, pero en su búsqueda tiende a retroceder hacia sus viejas respuestas. Puede volverse sumamente inquieto tratando de resolver una y otra vez problemas que en realidad ya vivió muchos años atrás. Su mayor dificultad estriba en sincronizarse consigo mismo en la dimensión temporal, donde sigue reevaluando su pasado con la esperanza de que eso cree un futuro mejor. Y sin embargo, al hacerlo, su futuro actual se convierte de hecho en la imagen especular de su pasado. Existe siempre una frustración emocional cuando intenta rebelarse contra su familia mientras todavía se beneficia de todo lo que ésta le brinda. La lección kármica consiste aquí en aprender a contentarse emocionalmente. A partir de experiencias de encarnaciones anteriores, el individuo aún no ha desarrollado en su interior un verdadero sentido de la gratitud por todo lo que le ha sido dado.

Urano retrógrado en Leo Aquí, el individuo experimenta un nivel de energía extraordinariamente alto. Sintiéndose más a gusto en la pri-

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mera fase del proceso retrógrado, es realmente el verdadero comandante de su vida. Raramente se deja llevar por los demás y difícilmente les pide consejo. Cuando se usa negativamente, puede convertirse en una posición fanática y egocéntrica, porque al individuo no le gusta que los demás cuestionen sus ideas. Así, puede vivir toda su vida completamente apartado del camino, sin comprender lo esencial, escuchando como todos y cada uno de sus amigos, vecinos y parientes le dicen siempre lo mismo, aunque nunca les escucha. Al experimentar una constante confusión entre lo singular y lo convencional, se identificará de vez en cuando con cualquier cosa que le dé el sentimiento de poder individual más fuerte. Puede volverse tremendamente agresivo, perdiendo el control de sí mismo, siempre que sus ideas se vean amenazadas. Es una persona con la que resulta difícil convivir, ya que pone a prueba constantemente la lealtad, la sinceridad y el honor de cuantos le rodean. Al mismo tiempo, se niega a conformarse con las normas establecidas por aquellos a quienes considera, inconscientemente, de categoría inferior. La gente anda de puntillas a su alrededor por miedo a provocarle, mientras él sigue con su juego mental de acabar con el ego de todo el mundo, salvo con el suyo propio. Kármicamente, este individuo es tremendamente insaciable. Como tal, nunca está contento con lo que tiene. Incluso si busca respuestas espirituales, se vuelve extraodinariamente celoso, demasiado posesivo y tremendamente orgulloso de cualquier conocimiento que alcance. El carácter retrógrado del planeta dirige su descontento hacia el interior, al mismo tiempo que telepáticamente, a nivel inconsciente, vierte los restos de su infelicidad sobre quienes le rodean. Su mayor área de discordia radica en que la libertad rebelde del carácter amoroso de Urano retrógrado debe vivir en los confines tr~dicionales de los principios

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leoninos. Y nadie puede resolver este dilema por él, puesto que si realmente puede alcanzar el poder que sabe que puede tener, ¡debe encontrar su origen en su interior!

Urano retrógrado en Virgo Aquí, el indiviudo experimenta la primera fase del proceso retrógrado cuando trata de ordenar mentalmente en su interior todas las cosas, planificando el futuro orden de todo lo que ve a su alrededor. Su capacidad de pensar con claridad es fantástica, pero tiende a sacar conclusiones precipitadas. Sabiendo cómo deben ser las cosas, debe tener la paciencia de dedicarse a la vida de forma metódica antes de poder crear el tipo de mundo que concibe. Tiende a vivir la vida en grandes depósitos de energía nerviosa. Existe una especie de inmediatez en todo lo que hace. Por encima de todo es un hacedor. El problema es que no siempre persevera en las cosas el tiempo necesario para terminarlas completamente ni para alcanzar el profundo nivel de satisfacción que podría obtener de ellas. En sentido positivo, esta posición puede añadir un toque de genialidad y clarividencia al horóscopo. El nivel de la conciencia es elevado e instantáneo. La intuición es fuerte cuando se convierte en espíritu práctico para los demás. El individuo, sin embargo, tiene más dificultades para verse a sí mismo. Kármicamente, aporta a esta vida multitud de ideas, que debe aprender a poner en práctica. Tiene que superar su tendencia a revolotear de una cosa a otra, utilizando toda la alegría de la vida tan rápidamente que, en realidad, pierde el entusiasmo a una edad muy temprana. Si vuelve su conciencia hacia niveles espirituales, descubrirá que es una de las personas más juiciosas de todo el zodíaco.

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Urano retrógrado en Libra Aquí, el individuo experimenta las tres fases del proceso retrógrado. Su vida está muy controlada por todos los desequilibrios que observa en la gente que le rodea. Quiere la paz, pero en realidad le aburriría. Sin embargo, cuando siente demasiada agitación desea la paz. Para encontrar el equilibrio entre ambos, va de una persona a otra, manifestando a menudo sus karma debido a la poca seguridad que tiene en sí mismo. Las decisiones son difíciles, y antes preferiría que otros lo hicieran por él que asumir la responsabilidad de orientar su propia vida según su voluntad. Así, puede dejarse llevar como una hoja en el viento de acuerdo con los principios e ideas de la gente con la que se asocia. Trata de mantener su propia independencia en medio de todo ello, lo que se convierte en una especie de justicia imparcial hacia todo aquel que conoce. En realidad, eso le molesta cuando las circunstancias le obligan a tomar palie en cualquier cuestión. Es sumamente hábil mirándose a sí mismo a través de los ojos de los demás. Por desgracia, eso no es igual que verse a sí mismo a través de sus propios ojos. De este modo, la estabilidad que finalmente alcanza se basa más en lo que percibe fuera de sí mismo que en lo que puede conseguir en su interior. Siempre atrapado entre personas de diferentes ideas, actitudes y formas de conduc;ta, trata de mantener el equilibrio mientras no haga que se tambaleen los principios de la gente que ama. Es el camaleón kármico del zodíaco. Satisfecho de estar siempre al servicio de cualquiera que le necesite, no debe aferrarse realmente a ningún criterio propio en especial, excepto al de que está aquí para ofrecer amor y cualquier conocimiento que hay~ aprendido a quienquiera que lo necesite.

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Urano retrógrado en Escorpio Aquí, Urano retrógrado encuentra una hermosa casa, puesto que sigue iluminando las grandes profundidades de la búsqueda del conocimiento del individuo. Nunca está contento de dejar las cosas en su valor aparente, sino que sigue excavando para encontrar las raíces de aquello que aún no parece resuelto. Es un genio cuando empieza a investigar. Además, es tremendamente psíquico, y conoce la esencia de las cosas al instante. Tiene poca paciencia, pero descubre las cosas tan rápidamente que de hecho no tiene que dedicarse a ellas durante largos períodos de tiempo. A nivel personal, pasa por muchos cambios en materia sexual a lo largo de la vida. Durante una época puede estar buscando todo tipo de emociones que aún no haya experimentado, mientras que en otra puede pasar a un completo celibato. Es extremista en todo lo que hace, sin permanecer nunca en el punto medio de la trayectoria de la vida. Posee un nivel energético alto y bastante intenso, ya que cuando conoce la verdad no deja que los demás le disuadan de cualquier línea de conducta independiente de la que haya elegido embarcarse. Ésta puede ser una posición sumamente espiritual, en particular durante la tercera fase del proceso retrógrado, en la cual el individuo puede alcanzar su conciencia del universo en su interior. No se engaña a sí mismo, ni vive de ilusiones, sino que se siente orgulloso de ver las cosas tal y como son en realidad. Aporta a su vida una gran capacidad para entender mucho de lo que el resto de la sociedad no sabe ni que existe. Kármicamente, vive esta vida para jugar un papel muy activo para dar forma al mundo en que vive. No es persona que se siente a lamentarse por todo lo que ve que está mal a su alrededor, sino que es uno de los líderes de la transformación de la conciencia humana.

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"Urano retrógrado en sagitario Aquí, el indivdiuo pasa la mayor parte del tiempo en la primera fase del proceso retrógrado. Sintiendo comezón por los horizontes futuros y lejanos que aún no están a su alcance, sigue aspirando a todo lo simbólico de lo que está más allá de las cosas mundanas de la vida. En consecuencia, le cuesta estabilizarse en su vida práctica de cada día. No puede concentrarse en pequeñas cosas o detalles durante mucho tiempo, pues se aburre con facilidad. Necesita constantemente nuevos estímulos que satisfagan su activa sed por la vida que sigue empujándole hacia adelante. Le encanta viajar, y si no está haciéndolo físicamente su pensamiento vaga entonces por todas las regiones desconocidas que todavía no ha explorado. Sin embargo, no es necesariamente una persona profunda. En lugar de eso, es campo, aliento y grandiosidad lo que está buscando. Ésta es una posición bastante difícil para el matrimonio, puesto que el individuo se siente amenazado cuando está limitado. Necesita espacio para explorar todas las posibilidades que encuentra en su mente superior, y cualquier lazo con una persona le privaría de las ventajas de experimentar superficialmente muchas de ellas. Esta misma actitud se presenta de nuevo en la mayoría de las áreas de su vida. Seguir una religión violaría la necesidad uraniana de ser justo con los demás y se uniría con el impulso sagitariano de experimentarlas todas. Atraviesa cambios en su carrera por la misma razón. Mientras todo esto parece indicar que se trata de una persona muy dispersa según el criterio de otras personas, él lo ve como satisfaciendo su insaciable curiosidad por experimentar todo lo que hay que vivir. Y, cuando se le deja seguir sus múltiples direcciones (que no siempre parecen relacionadas unas con otras) es capaz de mantener un alto grado de entusiasmo.

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Eso le pemite ser una especie de mensajero kármico, que trae para todo aquel que conoce el pedazo de vida que necesita en ese momento. De este modo, mientras se divierte con cada nuevo descubrimiento, es en realidad un difusor de semillas que otros cuidarán, alimentarán y ayudarán a madurar hasta que se convierta en la futura conciencia del hombre.

Urano retrógrado en la Casa primera Ésta es la posición más fuertemente individualista de Urano retrógrado. El individuo tiene poco interés en las normas o tradiciones de la sociedad en que vive. Se identifica con todo 10 que es nuevo y único, y saldrá de su camino para rebelarse contra todo aquello que le atrape o le haga parecido a los demás. Lucha por establecer su propio sentido de la unidad, de modo que pueda distinguir su propia identidad entre el millón de identidades que ve a su alrededor. Eso se expresa generalmente en la primera fase del proceso retrógrado, en el cual el individuo experimenta un gran temor esperando que los demás le empujen hacia sus realidades. Trata de mostrarse todo el tiempo tan rápida y espontáneamente como puede. Es ésta una posición muy complicada para el matrimonio, pues el carácter del individuo es sumamente imprevisible, ya que trata de romper lazos con la sociedad convencional. Existe un cambio continuo en cuanto la persona comprende que su verdadero propósito no es dedicar su vida a cualquier principio o pauta de comportamiento que pueda suavizar su espíritu de aventura. No hay duda de que pasó otra vida aprendiendo a explorar las vastas regiones de las posibilidades existenciales que permiten al hombre dejarse llevar por su insaciable curiosidad. Ahora sigue haciéndolo, pero en un mundo más grande y con más

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posibilidades de las que experimentó anteriormente. Como buscador de primer orden, sacrificará muchas de las comodidades de la sociedad tradicional para ser libre y descubrir aquello que existe justo más allá de los límites de sus contemporáneos.

Urano retrógrado en la Casa segunda Aquí el individuo experimenta constantes cambios y fluctuaciones en sus criterios. Los principios de los que es partidario no proceden de ningún origen particular. Por ello, resulta difícil saber qué es lo que espera realmente. Por lo general, la primera fase del proceso retrógrado es la que destaca aquí, pero la naturaleza del signo puede cambiar esta influencia. En un signo positivo, el individuo trata de expresar todas las diferencias que existen en su interior, de modo que los demás puedan experimentar lo mismo. En un signo negativo, todo este panorama adquiere algo más que un colorido introspectivo a posteriori. Así, un individuo impone su realidad en el universo mientras el otro reacciona ante un universo de diferencias. En ambos casos, la perspectiva financiera y los apegos del individuo son situaciones febriles que nunca parecen brindarle la estabilidad que desearía. Kármicamente, existe un miedo a comprometerse y ser dirigido. Antes que definirse hacia un camino específico en la vida, a esta persona le gusta probar bocados y trocitos de diferentes posibilidades que un día pueda atribuirse -¡tras haberlo probado todo! Es un explorador de los ideales ,principios y razones o intenciones por los que vive la mayoría de la gente. Desgraciadamente, no quiere adherirse a las cosas que descubre. Así, puede ser de gran ayuda para los demás mientras no comprueben personalmente los verdaderos principios de sí mismo. Cuando aprenda a

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ser impersonal, verá la luz del verdadero significado de la vida. De este modo, el compromiso que finalmente adquiera estará basado en lo que el universo le muestra impersonalmente como su verdad.

Urano retrógrado en la Casa tercera Ésta es una posición sumamente ingeniosa, aunque también muy rebelde, de Urano retrógrado. El individuo insiste en ser absolutamente diferente de la sociedad en que vive. Como tal, sus ideas y principios siguen cambiando junto con sus irregulares modelos de comportamiento. La totalidad de todo lo que es viene a representar mucho de lo que su entorno tradicional no es. Incluso cambia de fases retrógradas tan a menudo que también aquí resulta difícil ver cualquier pauta real de su estilo de vida. Sin embargo, debido a ello es uno de los pensadores más originales del zodíaco. Su inventiva no tiene una razón o intención definida, y no le estorban los límites que atan a los demás. Al mismo tiempo, esta posición origina dificultades para llevarse bien con los demás en el trabajo o las relaciones personales porque hay una gran insistencia en expresar la individualidad cueste lo que cueste. Rápido aprendiz, tiene cierta tendencia a pasar las cosas por alto. De este modo, el acercamiento a la comprensión es atropellada más que minuciosa. En años posteriores, esta persona volverá indudablemente sobre muchas de las cosas por las que pasó de prisa anteriormente. Kármicamente, esta posición añade un toque de genialidad y/o locura al resto del horóscopo. El individuo pasa toda su vida aprendiendo a aprender, y aunque sus fuentes puedan ser fragmentos procedentes de muchos individuos diferentes, frases de muchos libros (cuyos textos completos no ha tenido la paciencia de leer), y puntos de diferen204

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tes experiencias, su vida tiene una tremenda riqueza al respecto en términos del campo de conocimiento que abarca.

Urano retrógrado en la Casa cuarta En esta posición, el individuo experimenta un fuerte desorden emocional. Quiere romper con su «herencia»simbólica, sea la religión en la que le educaron, los principios morales o éticos que le enseñaron o la personalidad de sus' padres. Cuanto más concentra sus pensamientos en ello, más sigue vibrando ante el conflicto original fuera el que fuese. Busca la individualidad, pero sólo en el marco de algún tipo de estructura familiar o límites de organización que demuestren a quienes le atan que es realmente libre. Así, vive la ilusión de la libertad en la prisión que él ha creado. Pasa mucho tiempo en la introspectiva tercera fase del proceso retrógrado, mediante la cual revisa todo lo que ya ha vivido. A nivel emocional, su concepto del tiempo es muy diferente de la realidad cronológica. Incluso cuando ocasionalmente experimenta la primera fase sale de su cascarón sólo para mirar atrás y asegurarse de que su seno materno sigue ahí. Kármicamente, experimenta muchas dudas sobre sí mismo mezcladas con momentos de extrema confianza en sí mismo. A lo largo de su vida, oscila entre uno y otro tratando de encontrar el lugar en el que sus esperanzas sean emocionalmente estables. Hasta que esté totalmente seguro de dónde está, se pegará fuertemente a las trabas de las que dice estarse librando.

Urano retrógrado en Casa quinta Aquí, el individuo se dedica a la creación de un estilo de vida original que le impide mezclarse con el mundo en

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que vive y, al mismo tiempo, le hace sentirse una parte particularmente independiente de él. Teme que la sociedad le atrape y por eso tiende a adelantarse lanzándose a la primera fase del proceso retrógrado, en la que puede evitar todo aquello que le haría parecer convencional mediante el establecimiento previo de su identidad poco convencional. Es un pensador ingenioso y como tal no tiene problemas para seguir las ideas de los demás. Sus apegos son únicos y prefiere convivir con otro individuo antes que casarse. Una de sus mayores virtudes es su habilidad para animar a los demás sobre ideas que estaban en el borde de su conciencia pero que les parecían demasiado heterodoxas como para explorarlas. Kármicamente, es una de las almas más independientes de todo el zodíaco, puesto que no sólo se preocupa de su carácter incomparable, sino también de la originalidad de todo lo que crea. Indudablemente, en alguna vida previa debe de haber experimentado el verse forzado a entrar en algún molde muy distinto al que sentía en su interior. Ahora, sale de su camino para estar seguro de que es él mismo a toda costa.

Urano retrógrado en la Casa sexta Aquí el individuo puede mostrar grandes innovaciones en su rutina diaria. Es capaz de realizar las tareas más mundanas y descubrir formas especialmente interesantes de ocuparse de ellas. Al mismo tiempo es muy sensible. Eso le hace particularmente vulnerable a las influencias del medio externo que, en contrapartida, le hacen sentir la necesidad de ser activo en todo momento, pues puede volverse interiormente inquieto. No importa que el individuo diga lo mucho que quiere la paz, tiende a vibrar con todo lo que aparta la vida de lo

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trivial y lo lleva hacia el terreno de lo emocionante. De este modo, si es la paz lo que busca realmente, tiene una fuerte tendencia a frustrarse a sí mismo. Una de sus mayore preocupaciones es preguntarse por qué los demás hacen las cosas como él. Esa forma de pensar le lleva a tratar de entender constantemente las motivaciones de cuantos le rodean. Kármicamente, es un gran innovador en el terreno física. Anteriores encarnaciones le han proporcionado una gran comprensión de las relaciones y los procesos del mundo físico. Independientemente de la fase retrógrada en la que se encuentre en un momento dado, busca incesantemente comprender, o procurar aplicar su entendimiento, de modo que pueda prestar un servicio mejor al mundo que le rodea. Todo lo que tiene que aprender es cómo mantenerse sereno y tranquilo durante el proceso.

Urano retrógrado en la Casa séptima Este individuo experimenta la necesidad de desarrollar la confianza en sí mismo. Para ello, tiene tendencia a atraer a aquellas personas en las que cree poder apoyarse. Pero, dado que son de naturaleza «uraniana», su inseguridad acaba obligándoles a volverse más fuertes en su interior. Esta posición de Urano retrógrado denota una siega de karma, particularmente en las áreas del matrimonio y las relaciones, hasta que el individuo aprenda a ser más impersonal a la hora de definir sus necesidades. Debe llegar a cOplprender que en vidas anteriores creció esperandomucho de los demás, y que continuar con dicha trayectoria es algo tan irreal como innecesario. A menudo, esta posición indica más de un matrimonio. También indica las dificultades para mantener un nivel de calidez sexual con el sexo opuesto. Las relaciones se con-

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vierten en un caleidoscopio de acontecimientos inesperados que parecen sucederse constantemente. Tan pronto como el individuo sea capaz de comprobar que él es su propia pareja a nivel espiritual, podrá experimentar un cambio radical en la forma en que los demás le tratan. La dificultad antes de que dicho entendimiento se realice es que los demás siempre se relacionan con su parte impersonal o uraniana, cuando espera que se relacionen con su parte personal. Así, existe un gran crecimiento forzado del alma en esta posición, ya que el individuo está aprendiendo, quizá después de muchas vidas, a ser finalmente él mismo. La fase retrógrada experimentada cambiará constantemente de acuerdo con el carácter de la persona de que se trate, puesto que existe un esfuerzo incesante cuando el individuo trata de sincronizarse con los demás, hasta que aprenda que no tiene que hacerlo. Entonces, desarrollará una conciencia interior de sus relaciones cósmicas con todo aquel con quien entre en contacto.

Urano retrógrado en la Casa octava Aquí, el individuo experimenta el cambio de los criterios de otras personas. El apego a amigos y amantes resulta complicado, puesto que el constante cambio de ideales hace difícil una seguridad estable. A pesar de los muchos conocimientos que recibe mediante el estudio de los demás, a la persona le resulta duro aferrarse a aquellos que le proporcionaron su información. Durante la primera mitad de la vida tienen lugar experiencias sexuales insólitas, que a la larga servirán como herramientas que conduzcan al individuo a una conciencia sexual superior. Algunos de los que tienen esta posición pasan por experiencias sexuales horribles, así como períodos de celibato.

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Urano retrógrado

Existe siempre una gran profundidad de comprensión relacionada con áreas muy distintas de la vida. Eso hace de esta persona un individuo interesante para los demás. Pero debe aprender a expresar sus ideas franca y discretamente. El karma consiste aquí en apreciar los principios independientes y singulares de la gente, de modo que el individuo aprenda a ofrecer a los demás su propio espacio físico. En vidas anteriores sin duda experimentó períodos en los cuales fue extraordinariamente posesivo. Incluso en la vida actual, esta posición estabiliza esa tendencia en el resto del horóscopo. El carácter introspectivo de la Casa octava junto con algunas tendencias asexuales de Urano retrógrado dan lugar en ocasiones a una existencia eremítica. Eso permite que la persona aprenda muchas cosas sobre su propio sentido de las prioridades. Las fases retrógradas desarrolladas aquí suelen depender de otras personas, así como del signo presente en la cúspide de la Casa octava. De otro modo, el individuo experimentaría las tendencias de la primera fase de Urano retrógrado junto con las características de la segunda fase de la Casa octava. Así, el signo y los factores externos en su vida se combinan para hacerle vibrar con cada fase particular en un momento dado.

Urano retrógrado en la Casa Novena Aquí el individuo atraviesa por una aventura extremadamente singular en la conciencia. A un cierto nivel, experimenta la primera fase del proceso retrógrado durante, la cual asimila ansiosamente nuevas filosofías y conciencias espirituales junto con el deseo de ingerir todo lo que pueda. Existe una búsqueda de todo lo que tiene valor para su ser superior. Al mismo tiempo, a un nivel mucho más profundo, aporta a esta vida una conciencia espiritual desarro-

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lIada hace mucho tiempo. De este modo, puede experimentar una abundancia de conocimientos sagrados desde los tiempos bíblicos de su pasado, que crean en él un poderoso deseo de traerlos a su presente. Su mayor comprensión de la vida parece proceder de una fuente distinta a la habitual, dado que su forma de manifestarse es siempre bastante original. Siente una gran afición por la idea de «Dios», pero no por el formato oficial o por cualquier tradición religiosa en concreto. Luchando contra las normas, conoce las reglas interiores que le harán bien. Algunas veces puede perder su concienzuda forma de pensar, porque le interesan tantas cosas que le cuesta reducir su campo de atención. Kármicamente, está aprendiendo a ser independiente espiritual, filosófica, religiosa y emocionalmente. Debe desarrollar su visión de la vida independientemente de aquello que es socialmente aceptable para el resto del mundo, y ser capaz de quedarse con lo que sabe que le es útil. A menudo, eso le llevará a sufrir muchas críticas por parte de sus amigos y semejantes. En algunos casos, incluso puede romper sus lazos conyugales. Pero, sin embargo, su confianza definitiva debe provenir de su propio sentido de la identidad antes que de cualquier necesidad de compromiso que conozca con motivo de su aceptación personal.

Urano retrógrado e11, la Casa décima Aquí la persona busca un sentido de la identidad interior que le proporcione un carácter incomparable en el marco de la sociedad en que vive. Expelimenta el conflicto de comprometer su individualidad para mantenerse en una posición desde la que finalmente pueda expresarla más. Es capaz de cambiar de dirección muchas veces, hasta

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Urano retrógrado

que encuentre una posición especial desde donde pueda mostrarse realmente. Ésta es una posición excelente y especial para las carreras de publicidad y medios de comunicación de masas, a través de las cuales la persona puede mantener su versatilidad junto con la seguridad que necesita. Debe tener el espacio suficiente para seguir sus instintos creativos sin estar forzado por las presiones de la responsabilidad. ¡Sin embargo, asume responsabilidades maravillosamente cuando no es consciente de estar haciéndolo! Cuando puede vivir y trabajar día a día lo hace mucho mejor que cuando se enfrenta a proyectos que impliquen una planificación a largo plazo. Sin embargo, es muy capaz de desarrollarlos siempre y cuando no considere que encierran su futuro. Suele pasar mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado asimilando las necesidades de su entorno inmediato, y a partir de ello es capaz de comprender cómo hacer frente a lo que le rodea. No obstante, existe una tendencia a estar ligeramente desfasado, particularmente porque Urano rige el futuro, mientras las tendencias saturninas de la Casa décima están más relacionadas con las características del pasado. Al mezclar ambas, a este individuo le cuesta mucho obtener una perspectiva equilibrada en el tiempo. Posee una enorme inventiva, y generalmente puede mostrar una rara genialidad para entender cómo hacer las cosas que nadie de cuantos le rodean comprende. Kármicamente, aprende lecciones de autodisciplina, de modo que toda la inventiva interna que siente pueda ponerse en práctica en el mundo en que vive en la actualidad. Debe aprender a ser diferente sin preocuparse por las estructuras que a la larga desea mejorar.

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Urano retrógrado en la Casa undécima Aquí, el individuo experimenta una nueva conciencia en las áreas de la amistad, los objetivos y los ideales. Hubo impedimentos para ellos en el pasado, pero ahora es capaz de recibir entendimiento en los niveles más profundos de su conciencia interior. Es un pensador muy original, dado que sus ideas no están ligadas por la realidad mundana de la sociedad. A nivel personal, sin embargo, tiende a malinterpetar las amistades, de modo que al final tiene que revisar su significado, cambiando más tarde sus conceptos. Atrae a personas de todas clases para que sus ideas, sus sueños y su propio punto de vista sean tremendamente pintorescos. Considera que la gente no siempre reacciona como él espera que lo hagan, yeso le enseña a respetar la individualidad de los demás. Se vuelve objetivo e impersonal, pero eso le ayuda a conseguir la iluminación desde la ventajosa posición de la objetividad. Aunque se rebele contra todo lo que oprime a la gente, en realidad trata de mantenerse al margen de interferir en sus cargas kármicas personales. Defensor del juego limpio, raramente toma partido en una disputa, por cuanto es lo bastante inteligente como para ver en primer lugar lo insensatas que suelen ser. Cuando topa con personas que se ciegan a sí mismas, le gustaría poder abrir sus ojos a una conciencia superior. Pero nunca obligará a los demás para que vean las cosas a su manera. Antes bien, esperada poder servirles de ayuda, sabiendo que una de las reglas de este mundo es que el crecimiento de cada hombre debe manifestarse a su propio ritmo. Kármicamente, experimenta un claro sentido de la realidad que sólo él conoce, pero mediante la primera fase del proceso retrógrado es capaz de proyectar su iluminación de modo que quienes sean capaces de ver puedan tener una 212

Urano retrógrado

visión momentánea de un impersonal y elevado estado de conciencia.

Urano retrógrado en la Casa duodécima Aquí, el individuo experimenta la tercera fase del proceso retrógrado durante el cual el individuo se detiene en la conciencia y el conocimiento que ha conseguido en an- , tiguas vidas ya que ve la necesidad de utilizarlas ahora. En algunos individuos esto puede indicar una comprensión de la astrología en una vida anterior. En otros, donde ése no es el caso, Urano retrógrado simboliza cambios importantes en la conciencia que tienen lugar en el individuo. El potencial para un auténtico autodesarrollo es muy grande. Si las circunstancias de la vida cotidiana del individuo y sus pautas de conducta lo anuncian, junto con la confirmación procedente de otras áreas del horóscopo, esta posición de Urano también puede ser indicador de algunas formas de anormalidad sexual o de homosexualidad en una vida anterior. Sin embargo, sin importar cómo funcione a niveles personales, esta posición muestra una ingenuidad interior que procede de los canales más elevados de la conciencia. Esta persona sabe cómo funcionan las cosas en el mundo exterior y, en consecuencia, no siempre los experimenta en acción. Su mente interior lo experimenta todo constantemente. Es sumamente adaptable y cambiará de opinión porque no es posesivo en sus ideas. Tampoco intentará armonizar constantemente pensamientos incoherentes. Tiene una gran capacidad para dejar que el universo sea, de modo que le proporcione a cambio la libertad interior que necesita. Aunque ese cambio de opiniones pueda parecer a veces bastante excéntrico, no obstante no está restringi213


do por el formato de la tradición que mantiene a la mayor parte de la sociedad atada con sus propias cadenas. Aun .así, tiene que vivir en sociedad, y los sanos aspectos hacia Saturno le impedirán poner su conciencia uraniana en interacción práctica"entre su saber y el mundo que haya su alrededor.

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7. NEPTUNO RETRÓGRADO Neptuno retrógrado como símbolo esotérico El símbolo de Neptuno ('!') está formado por la me~ dia luna del alma ascendiendo desde la cruz de la materia. La línea horizontal de la cruz cae cerca del pie de la figura, sugiriendo casi una inversión del símbolo de la cruz, puesto que parece desprenderse desde la naciente media luna del alma. Aquí, lo informe surge de lo ya formado, ya que el sincero deseo del alma surge por encima de la menor importancia de la materia. Como si fueran aguas espirituales sobre la tierra, el símbolo representa la disolución de la materia que ya no necesita ser cristalizada. Es interesante notar que la cruz invertida indica una especie de dejarse caer hacia mundos inferiores. Eso describe, en gran manera, las cualidades místicas del planeta. Cuando Neptuno es retrógrado, la cruz aparece en vertical en el símbolo invertido, y el individuo es más consciente de su alma cuando la media luna aparece más cerca del plano terrestre. En este caso, desarrolla una poderosa necesidad interior de acercarse a los aspectos materiales del mundo en lo que se refiere a la trascendencia más profunda que tiene para el alma. Entonces, hasta cierto punto, Neptuno retrógrado puede proporcionar también al individuo la oportunidad de manifestar un estadio evolutivo muy avanzado, ¡puesto que le obliga a vivir en este mundo, pero no a pertenecer a él!

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La personalidad de Neptuno retrógrado La personalidad del individuo con Neptuno retrógrado no es fácilmente comprensible por los demás. Sus razones no poseen el sentido común que uno espera que haya en la raíz de toda motivación. En lugar de ello, vibra con una música superior que sólo él puede oír. Sus percepciones no proceden del plano material, sino que están en conexión dire,cta con su alma. Así, puede ser sumamente espiritual y preocuparse poco del aspecto formal de la ortodoxia de las religiones. Puede sentir un gran amor por la música, pero no puede apuntarse a cualquier estructura hecha por el hombre dentro de ella. Lo siente prácticamente todo, pero reI;:lciona sus sentidos no tanto con su realidad física como con su percepción del universo cósmico. Sabe mucho más de lo que pueda expresar nunca con palabras, ya que aquí vuelve a considerar las caractelisticas limitadas del lenguaje como otro límite formal que podría rodear su comprensión infinita. Es capaz de ver las apariencias y las ilusiones en las que viven los demás, y por ello debe tratar de hacer el mejor trato entre no derribar sus castillos de arena y seguir conservando todas las verdades interiores que conoce.

El karma de Neptuno retrógrado El individuo con Neptuno retrógrado vive el karma aprendiendo a distinguir entre lo que es real según sus ideales y lo que aparentemente satisface sus sueños. Sabe lo que necesita, pero le cuesta encontrarlo en el mundo exterior. Viviendo sin cesar un sueño tras otro, a menudo acaba huyendo de sombras imaginarias mientras persigue fantasías ilusorias. No obstante, debe encontrar sus ideales en el mundo de la «no forma» que ejerce un dominio tan fuerte sobre él. Se equivoca con frecuencia al proyectar viejos

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Neptuno retrógrado sueños en situaciones actuales, cosa que no le permite ver la realidad del presente con claridad. Es sumamente intuitivo, y a través de las diferentes fases retrógradas a menudo es capaz de conocer cómo acabarán las situaciones mucho antes de entrar en ellas. Pero hasta que no aprenda a hacer frente al flujo sutil de energía de Neptuno que siente en su interior, no confiará fácilmente en su intuición. Estos individuos deben aplicarse en integrar sus sentidos con los ideales y los sueños que aportan a esta vida. En lugar de tratar de distorsionar las percepciones para hacer que el presente encaje en el pasado, debe existir una conciencia de qué aspectos del presente simbolizan verdaderamente los aspectos del pasado kármicamente incompletos.

Neptuno retrógrado en Leo Aquí, el individuo experimenta con frecuencia delirios de grandeza. Vive en la apariencia del encanto, el brillo y todo el esplendor de ilusiones suntuosas. Al pasar mucho tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, es muy importante para él impresionar a los demás. De lo que no acaba de darse cuenta es de que eso nunca le aportará toda la satisfacción que busca, puesto que se deja impresionar fácilmente por quienes hacen lo mismo con él. Esta posición de Neptuno tuvo lugar durante la gran época cinematográfica de Hollywood, cuando estaba de moda identificarse con las estrellas de cine en un intento de encontrar un poder más creativo en la imagen de uno mismo. Las casas estaban amuebladas con lámparas de cristal, sillas de terciopelo y muchos objetos de los decorados de distintas películas. A nivel individual, esta posición de Neptuno lleva a

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una persona a identificarse con el poder. En último extremo, necesita experimentar la sensación del éxito. Para su propio desarrollo, debe elevar su conciencia hasta el punto que vea su necesidad en términos de sus verdaderos objetivos espirituales antes que de los símbolos de belleza que es capaz de acumular en el plano físico. Kármicamente, tiene que asumir el enorme poder de la positiva escala de valores con la que ha venido a esta vida, contactar con ella y, entonces, ayudar a crear el mundo mejor con el que ha soñado su alma.

Neptuno retrógrado en Virgo En esta posición, Neptuno se halla en su declive astrológico. Incapaz de experimentar toda la libertad que desearía, los procesos imaginativos se enfocan hacia un mundo demasiado pequeño como para permitir su total manifestación. El individuo observa la totalidad viendo todas y cada una de sus partes separadamente. Aunque eso le permita cristalizar fácilmente sus impresiones, le hace pas!lr por muchas etapas detalladas que un Neptuno situado más cósmicamente no necesitaría. Sin embargo, es capaz de combinar una infinita imaginación con el sentido práctico del mundo real, y así poder ver las relaciones entre lo que se halla en el reino de los cinco sentidos y lo que está más allá. En la generación de Neptuno en Virgo encontramos una gran clarividencia. A nivel puramente personal, el carácter retrógrado del planeta tiende a lanzar al individuo de aquí para allá entre las fases primera y tercera. Primero percibe el futuro, y luego, cuando ya está viviendo en él, comprueba que más adelante pasará mucho tiempo reflexionando sobre su pasado. Por ello, la experiencia de la segunda fase es crucial en esta posición, ya que la persona abarca su futuro y su pa-

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Neptuno retrógrado

sado mientras vive en el mundo de la experiencia exterior. De hecho, son dichas experiencias las que hacen que su pasado y su futuro se unan en su realidad interior. Mientras no confunda su visión microscópica del universo con lo que comprende a nivel macroscópico, caminará literalmente en dos mundos al mismo tiempo. Kármicamente, considera y sabe que en este mundo hay más cosas de las que aparecen a primera vista. Al mismo tiempo, comprende que debe cerrar un auténtico trato con la realidad de su presencia en su vivir de cada día. Lo ' hace cuando puede sincronizar su intuición con lo que es práctico y realista, tamizando en el proceso todo aquello que no es importante.

Neptuno retrógrado en Libra Aquí, la tercera fase del proceso retrógrado tiene lugar cuando el individuo absorbe impresiones de su entorno de forma impersonal. Generalmente, piensa que todos los sentimientos que experimenta son él mismo y que a la larga requieren algún tipo de acción o solución por su parte. Sin embargo, lo cierto es que esta posición brinda al indivi,duo la oportunidad de experimentar gran parte del universo, aunque en realidad no esté obligado a personalizarlo. Es sumamente sensible, particularmente a la música y a las artes, y le cuesta muchísimo enfrentarse con la dureza de la vida, a la cual es muy abierto. Con el fin de estabilizarse, comete el error de querer equilibrar todo lo que haya su alrededor. Eso hace que tienda a interesarse por los negocios de otras personas más que por aquello que en realidad es bueno para él. Debería comprender que cada nuevo grano de arena que añade a la balanza de Libra como una solución equilibrada a lo que ya está ahí, vuelve a crear otro desequilibrio que requiere una nueva solución. Muchos de

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los que poseen esta configuración se frustran al tratar de centrar el mundo a su alrededor, cosa que con el tiempo resuelven con drogas u otras formas de evasión que les impiden reconocer que sus propias dificultades derivan de problemas que no necesitan solución. Cuando esta configuración se usa correctamene, proporciona al individuo una tremenda visión en el espejo de sí mismo, o bien ese aspecto de su identidad que ve a través de los ojos de los demás. Kármicamente, puede aprender a integrarse mejor en la sociedad a través de este tipo de visión. Al mismo tiempo, acabará alejándose cada vez más de su esencia básica porque trata de experimentarse a sí mismo a través de los demás. Alcanzará la felicidad cuando se dé cuenta de que uno no debe buscarla, puesto que se encuentra en su interior en un estado de satisfacción más o menos permanente con la experiencia de la vida individual de uno y la parte del minuto que uno representa en la totalidad del plan cósmico.

Neptuno retrógrado en Escorpio Ésta es una posición muy especial para Neptuno retrógrado. Añade sutilidad y perspectiva al interior del individuo. Las características visionarias aumentan junto con una comprensión intuitiva del inconsciente. Capaz de funcionar en todas y cada una de las tres fases retrógradas, esta persona puede transformarse lentamente tanto a sí mismo como al mundo que le rodea. Puede ser fuertemente impersonal en lo que respecta a sus necesidades y a la dirección en la que cree que se está moviendo el mundo pero, al mismo tiempo, la objetividad neptuniana y su influencia disolvente evitan que las impresiones sensoriales le abrumen. La generación con esta posición va a llevar a cabo una completa transformación de la música, las artes y la medi220

Neptuno retrógrado cina, sacando a la superficie muchos de los aspectos pasados por alto que sólo su aguda conciencia es capaz de encontrar. A menos que uno lo experimente personalmente, resulta difícil imaginar la tremenda profundidad que es posible alcanzar cuando la naturaleza introspectiva del retrógrado pone al sutil inconsciente de Neptuno en pleno contacto con el poder plutoniano de Escorpio para el cambio. Los individuos con esta posición alcanzarán su máxima fuerza hacia la mitad de su vida, cuando satisfagan su kar~ ma ayudando amablemente al mundo al final de la Era de Piscis. Eso se hará reemplazando todo lo que estaba muriendo con la nueva conciencia espiritual que sólo ellos son capaces de comprender en toda su profundidad. La persona con Neptuno retrógrado en Escorpio es aquella que, a nivel individual, disuelve el pasado. Es un pionero del futuro, que vuelve a configurar lo informe para las necesidades del crecimiento significativo.

Neptuno retrógrado en Sagitario Aquí, el individuo experimenta una elevada conciencia del mundo y del lugar que ocupa en él. Aprende a vivir sin anclarse en las raíces. Al contrario, vive una existencia más natural, dejándose llevar por las corrientes de su fortuna. Es un espíritu libre, con muy pocas ataduras que sean significativas para él en el plano físico. Con una visión casi profética del futuro, puede comprender instantáneamente la esencia de las cosas, pero le cuesta estabilizarse en los aspectos prácticos de cada día. Jugará un gran papel a la hora de comunicar el mensaje de la Era de Acuario. Su vida se basa en la expansión de los horizontes indefinidos que siente en su interior. Al mismo tiempo, es un transmisor inagotable de información y conocimiento a los demás.

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A través de la primera fase del proceso retrógrado puede percibir posibilidades remotas como probabilidades muy reales aquí y ahora. Es un soñador de primer orden, pero sus sueños son más una visión para la humanidad que una satisfacción de sus propios deseos. Más que con otras posiciones, ésta proporciona un fuerte sentido de la totalidad cósmica que tiene lugar en uno mismo. Rebosante de vida, esta persona es la pura expresión de un alma finalmente liberada. Kármicamente, no es una persona que se deje atar más que por lo que cree que son las verdades más profundas de su interior. Evitará los movimientos de masas, organizaciones, clubs, la institución matrimonial y otras estructuras creadas por la mano del hombre que le impiden experimentar todo lo que siente en su interior.

Neptuno retrógrado en la Casa primera El individuo vive constantemente en un estado de ilusión. Al pasar mucho tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, se imagina continuamente bajo diferentes identidades, pues continúa tratando de suprimir una constante sensación de soledad. Gran parte de su vida se desarrolla a nivel inconsciente, ya que sigue cambiando en su naturaleza informe para intentar establecer un sentido concreto de pertenecerse a sí mismo. Al igual que un camaleón, está en un estado de cambio continuo, reajustándose siempre al medio en que se encuentra a cada momento. La mayoría de la gente con esta posición tiene tendencia a autocompadecerse, creyendo siempre que ha perdido algo que debe encontrarse en otra persona. Este senti~ miento puede superarse en cuanto el individuo acepte la parte informe de sí mismo como su verdadera naturaleza, entendiendo que eso le da la libertad de mezclarse con su

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Neptuno retrógrado . entorno, por lo que su verdadera identidad es más cósmica que personal. En algún momento de una vida anterior empezó a imaginarse diferente a las ideas que tenía sobre sí mismo. Y sabiéndolo o nO,ése fue el inicio de su viaje espiritual. En esta vida, sigue sacrificando viejos aspectos de su identidad hasta que finalmente se combina con su naturaleza cósmica superior. Aprenderá que todas las cosas de la vida no son más que apariencias, incluyendo la imagen que cree tener de sí mismo.

Neptuno retrógrado en la Casa segunda Aquí, el carácter informe de Neptuno presenta un conflicto natural con la estructura formal de la Casa segunda. Al individuo le cuesta definir su sistema de valores y tiende a ser indeciso. Puede ser extraordinariamente generoso a lo largo la primera fase, mientras cree que debe evitar perder cosas durante la tercera fase. En anteriores encarnaciones aprendió a valorar las artes, y generalmente sabe apreciar la música, pero el carácter retrógrado de Neptuno no le permite dedicarse a ellas tanto como quisiera. Si apareciesen como influencias en su vida, sería muy feliz, pero el impulso natural de buscarlas deriva de algún otro lugar del horóscopo. Neptuno es una fuerte desventaja en la Casa segunda porque sigue disolviendo todo lo que el individuo trata de conseguir. Su seguridad financiera es confusa, como los principios de los que es partidario. Cada vez que intenta ser firme, se vuelve más flexible. Durante sus primeros años, puede ser particularmente susceptible y, a menudo, incluso crédulo. Pero a medida que crece, gran parte de ello se convierte en un carácter verdaderamente tierno y compasivo.

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A pesar de que le cuesta mucho ser fiel a lo que cree que es correcto, eso sólo es parte de su karma. Vive esta encarnación con el fin de disolver cualquier principio falso dentro de él que haya traído desde el pasado.

Neptuno retrógrado en la Casa tercera Con esta posición, el individuo experimenta las tres fases retrógradas. Trata de sintonizar con cualquier persona con la que se comunique, pero a menudo tiene dificultades para ir al grano. Puede andarse por las ramas, mareando a su interlocutor antes de decir lo que sabía que quería decir desde el principio. En muchos casos, en las relaciones existía una gran tristeza de una vida anterior que el individuo trata inconscientemente de olvidar. Eso le trae problemas a la hora de demostrar confianza en las relaciones de su vida cotidiana. Es fácil de complacer, pero le cuesta creer que es capaz de complacer a los demás. Con frecuencia, se desvía sobremanera de su camino tratando de conseguir su aceptación. Puede ser sumamente psíquico, pero hasta que no desarrolle una mayor confianza consigo mismo, ese don puede ser para él un obstáculo más que una ayuda. Si esa falta de confianza le lleva a ser un pensador negativo, entonces la mayoría de sus impresiones psíquicas se hallarán en el lado sombrío y negativo. Pero una vez supere su propia negatividad, los elevados rayos de Neptuno le brindarán una idea más clara y hermosa de la gente con la que le gustaría relacionarse. Dado que es extraordinariamente susceptible a los demás, debe procurar creer en las virtudes de cuantos le rodean. En el momento en que lo haga, su vida cambiará radicalmente para mejor. Vive el karma de aprender una forma de comunicación 224

Neptuno retrógrado

extraordinariamente sutil y bien desarrollada que acabará proporcionándole la comprensión que el lenguaje no puede expresar.

Neptuno retrógrado en la Casa cuarta Aquí el individuo experimenta una gran desilusión en cuanto al lugar que ocupa en la familia. Le resulta difícil identificarse con las estructuras de los roles familiares a lo largo de toda su vida porque a la larga tiene que basar sus fundamentos en una realidad más cósmica. Cuando trata de ser personalmente posesivo del pasado, éste parece eludirle. Las anclas de la vida a las que uno trata normalmente de aferrarse no se lo permiten. De este modo, debe encontrar otra realidad más universal en la que construir sus fundamentos en lo intangible antes que en la solidez de las cosas y las relaciones estrechas. Sin embargo, hasta que no aprenda eso pasará la mayor parte del tiempo en la segunda fase del proceso retrógrado, lamentando todo el dolor que siente al ver cómo se disuelven las raíces que tiene bajo sus pies. A menudo, desearía volver al pasado y construir lo que nunca existió. Pero, kármicamente, debe llegar a comprender que su alma nunca necesita realmente la clase de base sólida que ve en los demás. . Cuando se dé cuenta de ello, experimentará una pérdida del «pequeño yo» (o, como dicen los psicoanalistas, «el niño») para hacer sitio a un adulto más sintonizado cósmicamente. Ésta es una posición difícil para el matrimonio porque cada año hay una necesidad cada vez mayor de ser independiente. Cuando el deseo de seguridad emocional disminuye, este individuo puede llegar a grandes alturas espirituales si aprende a orientar su imaginación creativa en la dirección correcta.

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Neptuno retrógrado en la Casa quinta Aquí, se pasa mucho tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, en la cual el individuo inicia su vida creando a través de sus sueños. Al ser sumamente intuitiva, tiene la habilidad de ver sus propias creaciones con tal de no engañarse a sí mismo sobre la realidad. Algunas veces, existe una tendencia a crear su propia realidad en el lugar del mundo en el que vive. Entonces, trata de proyectarlo al exterior, haciendo que todas las personas que encuentre encajen en los caracteres de los papeles que representarán en la obra que él mismo ha creado. Al mismo tiempo, responde a un instinto creativo muy sutil y hermoso. Puede tener talento musical o artístico, pero debe aprender a hacer acopio de fuerzas para hacer de dichas aspiraciones su realidad. En muchos aspectos, sigue ritmos diferentes y a menudo se extraviará antes que aceptar los confines de la sociedad en que vive. Desea siempre un sueño personal con el que identificarse, que le haga diferente al mundo trivial que ve. Normalmente, sus creencias religiosas son muy distintas a los principios establecidos en la ortodoxia de cualquier religión. Existe una gran dosis de sensualidad con esta posición. Ésta es otra manifestación del sentimiento interno del individuo de la libertad de expresión neptuniana de sus impulsos creativos inconscientes. Kármicamente, su vida gira en torno a aprender a creer interiormente en aquello que desea que los demás crean exteriormente. Así, en todas las formas que pueda expresarse o impresionarse a sí mismo, hará todo lo que tenga que hacer para establecer, y más tarde construir, unos criterios que fueron demasiado débiles en vidas anteriores.

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Neptuno retrógrado

Neptuno retrógrado en la Casa sexta Éste es el auténtico ángel de la guarda. Aquí, las cualidades disolventes de Neptuno retrógrado se ofrecen a los demás en una misión de curación, servicio y gran sacrificio personal. Muchos médicos y enfermeras, así como pastores espirituales, son bendecidos con esta posición. Expresado generalmente en la primera fase del proceso retrógrado, el individuo busca las oportunidades y las situaciones en las que puedan necesitarle. La mayoría de sus sueños y ambiciones están dedicados a cómo puede servir crea,tivamente a la sociedad que tanto le dio en el pasado. Verdaderamente, ésta es una de las posiciones especiales de Neptuno, ya que permite a cuántos la tienen aportar su comprensión cósmica al plano terrestre donde pueden ser útiles a los demás. En esta casa, Neptuno se encuentra en su declive astrólógico, describiendo con exactitud lo difícil que es hacerlo personalmente. Pero Neptuno no es un planeta personal. Mientras el individuo pueda ser un siervo sin ser un esclavo, hará lo posible para llevar una vida de dedicación humanitaria. Kármicamente, vive una vida de servicio, y cuanto más sirve, más se libera de la rueda del karma.

Neptuno retrógrado en la Casa séptima Esta posición obliga al individuo a ser muy independiente. Se rechaza la fuerza prometida de los demás, tanto mediante la huida de un cónyuge como de la irrealidad de otras personas en la vida del individuo. Aprende a confiar ya depender de sí mismo. La fase retrógrada que se acentúe dependerá, naturalmente, del signo que esté en la cúspide de la Casa séptima, pero también extraordinariamente del compañero del individuo. 227


Por lo general, el sujeto reacciona con una especie de segunda respuesta al modo en que sus seres queridos utilizan este planeta. Mediante una tremenda sensibilidad hacia los sentimientos de otras personas, se vuelve más apasionado a medida que pasan los. años. Aprende a esperar menos de aquellos que no son tan capaces de dar, y también a fortalecer más su interior. Vive un karma muy espiritual de experimentar amor impersonal en esa área de su vida donde espera conscientemente un amor personal. Aunque sufra algunos disgustos en sus relaciones íntimas, goza de tremendas oportunidades para el crecimiento de su alma mediante un sacrificio sincero. Tendrá que hacer uso de una gran fuerza interior porque en esta encarnación experimentará una buena dosis de soledad. Y mucho del amor que espera recibir de los demás será, en realidad, el reflejo exacto de lo que él mismo ofrece. Así, lo que siente no es tanto el amor de los demás como cuánto le demuestran el amor que él está dando. Si está casado, pagará su deuda kármica a su pareja a través de un amor sacrificado.

Neptuno retrógrado en la Casa octava Ésta es una posición muy fuerte para Neptuno retrógrado, que proporciona al individuo una aguda intuición sobre los valores de la gente. J..,e gusta servir, y es sumamente consciente de las necesidades de los demás. Al mismo tiempo, el carácter retrógrado del planeta tiende a hacerle retroceder. Guarda sus impresiones para sí, pareciendo en ocasiones que se halla en un estado de movimiento detenido, hasta que sienta que se requieren sus servicios. Existe aquí una gran visualización sexual semiconsciente, basada en lo que la persona cree que necesita de la vida. Sin em228

Neptuno retrógrado bargo, en este terreno, así como en el de los negocios y las finanzas, necesita una dirección que le impida confundirse a sí mismo. La naturaleza retrógrada de Neptuno, combinada con las tendencias a la interiorización de la Casa octava, le convierte en alguien sumamente introspectivo, ya que pasa la mayor parte del tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado. Una de las características más peculiares de esta posición es que el individuo nace con un talento mediumístico natural que, si se desarrolla convenientemente, puede conducirle a una rica vida de continua realización cósmica.

Neptuno retrógrado en la Casa novena Aquí, Neptuno retrógrado encuentra un lugar especial en el que sus poderes intuitivos exaltan la comprensión de la mente superior. Si está aspectado positivamente, la profundidad de la inspiración puede ser enonne. El individuo es capaz de comprender la esencia superior de la vida y su verdadero significado. A menudo experimenta un rechazo y una sensación de soledad en sus relaciones personales, pero eso sólo sirve para hacerle más consciente cósmicamente de su naturaleza divina. Es extraordinariamente susceptible a su entorno, tendiendo a veces a exagerar sus sensaciones. Su humor está fuertemente influenciado por las condiciones meteorológicas y las vibraciones armónicas de los lugares en que se encuentra a cada momento. Al ser un alma muy compasiva, puede dirigir sus sentidos intencionadamente si cree que así responde a una llamada superior. Es durante la primera fase del proceso retrógrado donde las características visionarias de esta posición se vuelven excepcionales. Kármicamente, el individuo está destinado a comprenderse a sí mismo en los niveles más sutiles.

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Retiros temporales de la sociedad le ayudan a ver su esencia superior con más claridad. En esta vida, sigue buscando la verdad mediante el seguimiento del orden de la naturaleza y la ley natural cósmica.

Neptuno retrógrado en la Casa décima Aquí, Neptuno retrógrado se encuentra en una posición difícil. La propia necesidad del individuo de una dirección en la vida es continuamente disuelta por la informidad de la realidad cósmica que alcanza. A menudo se siente confuso sobre sus objetivos porque siente el plan infinito del mundo y le cuesta comparar cualquier cosa que pudiera hacer contra él. Por eso, puede tener una tremenda intuición, pero sus impulsos se ven debilitados por la naturaleza no competitiva de su ser. Puede ser suamente creativo y debería trabajar en un oficio en el que se necesiten inspiración y cualidades visionarias. Si el signo de la cúspide de la Casa décima es negativo, el individuo pasa entonces mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, en la cual no sólo absorbe los ideales de sus semejantes, sino que también tiende a ser tímido cuando se encuentra en público. Se aplica en un karma de aprender a no ser solamente impersonal en su carrera, sino también a identificarse con un estatus o posición social. Una vez aprenda esto, puede ser muy intuitivo y sumamente profético, experimentando un gran éxito social, debido a que no lo desea. Quizá, el modo más simple de conseguir la auténtica comprensión de sus sentimientos se produzca cuando se dé cuenta de que quien gana la «carrera de las ratas»* ha probado sencillamente que es la rata más grande.

* Lucha competitiva incesante para obtener prepotencia. 230

(N. del T.)

Neptuno retrógrado

Neptuno retrógrado en la Casa undécima Aquí, el individuo tiende a abandonar el proceso creativo. Pasa la mayor parte del tiempo en la tercera fase, refugiándose en un mundo de sueños que ha convertido en su realidad. Tiende a estar en el lado no práctico, ya que el campo de su imaginación supera con mucho la realidad del mundo que le rodea. Es muy compasivo y a menudo se sacrifica mucho por las necesidades de los demás. Aprecia la vida tan profundamente que el hecho de crear cosas para sí mismD es mucho menos importante para él que experimentar simplemente la esencia de todo lo que puede absorber. Le gusta sentir que sus amigos le necesitan ya que obtiene de ellos un profundo significado. Con esta posición el individuo aporta a su vida un karma construido en sueños pasados. Eso le convierte en alguien extraordinariamente realista, hasta el punto de no ajustarse fácilmente a las normas de la sociedad. Siempre tiene la impresión de que existe una música superior, un significado más sutil de la vida y una comprensión profunda de lo que el mundo llama amor. De todas las posiciones zodiacales, éste es el único individuo que puede dar generosamente, no sólo sin esperar nada a cambio, sino sin querer que la otra persona sepa que él es quien da. El nivel de conciencia puede ser extraordinariamente elevado, puesto que las tradiciones y las restricciones de la sociedad no constituyen trabas para la imaginación creativa del individuo. Soñador en vidas anteriores, buscador de la conciencia uraniana en esta vida, debe aprender a equilibrar todo lo que intuye con todo aquello con lo que debe tratar en niveles más triviales y prácticos. De este modo, no le basta imaginar algo idealmente maravilloso. A través de otras áreas de su carta debe encontrar los medios para plasmar sus sueños en su realidad creativa.

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Neptuno retrógrado en la Casa duodécima Aquí, en su casa natural, Neptuno retrógrado proporciona una gran intuición sobre toda la realidad cósmica. El individuo es capaz de ver la totalidad de las cosas sin tener que diseccionarlas. Su visión es objetiva e impersonal porque puede disolver fácilmente kaIIDaS anteriores gracias a no formarse una opinión de él. Muchos con esta posición son capaces de ser médiums, ya que pueden comprender la esencia de las cosas sin verse involucrados en ellas personalmente. El pasado se disuelve con facilidad, puesto que el individuo sabe instintivamente que no tiene bases en la realidad. Durante la primera mitad de la vida, los menores atributos cósmicos de Neptuno retrógrado no son muy pronunciados. El individuo experimenta una tristeza interior que le convierte en una especie de cubo de la basura psíquico para todo aquel con quien entre en contacto. Pero una vez empiece a captar la verdadera esencia de las cosas, gran parte de su propia autocompasión será reemplazada por una mayor tolerancia hacia el universo en que vive. Existe una fuerte tendencia a experimentar la tercera fase del proceso retrógrado cuando retrocede hacia las imágenes de todo aquello por lo que ya ha pasado, en una realidad más sutil, de modo que todo lo que no necesita llevar consigo hacia el futuro se pierde. Casi siempre, esta posición otorga al individuo la capacidad de sintonizarse a sí mismo con su verdadera identidad cósmica.

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8. PLUTÓN RETRÓGRADO Plutón retrógrado como símbolo esotérico En el símbolo de Plutón (~) encontramos el círculo del espíritu yncumbrándose libremente sobre la conexión entre la media luna del alma y la cruz de la materia. Eso es muy indicativo de las áreas desconocidas por las que el hombre debe pasar antes de conseguir finalmente una comprensión de sí mismo en los niveles más profundos. Cuando el alma y el aspecto material de la existencia no están en contacto con el espíritu esencial de la luz, el individuo experimenta las energías plutonianas más básicas. Pero cuando empieza a trascender la parte desconocida de sí mismo, es capaz de salvar el vacío existente en su vida inferior y unirla finalmente con el espíritu de la luz dorada purificada que Dios pretende que conozca. Cuando el hombre es capaz de conseguirlo, entra en contacto con esa parte de sí mismo que es tan esencialmente buena que está seguro de que ninguno de sus conocidos le creería. Ésta es su verdadera identidad. Las grandes dificultades que entraña el alcanzar dichas energías plutonianas radican en que, al igual que una gaviota que vuela hasta lo más alto con sus propias alas, cada individuo debe trascenderse a sí mismo. Los desenlaces caracterizados por Plutón son el desprendimiento de las fases que ya no son necesarias para el desarrollo del individuo. Puesto que Plutón es retrógrado casi la mitad del tiempo, esta configuración aparece en el horóscopo natal de un 233


alto porcentaje de la población mundial. Estos individuos acabarán preocupándose más de las transformaciones que se producen en su interior que de los intentos menos útiles de tratar de reformar el mundo exterior. Al invertir el símbolo, todo surge a partir de la manifestación del espíritu divino que se expresa aquí en la tierra.

La personalidad de Plutón retrógrado Este individuo con Plutón retrógrado piensa en los males de la sociedad como una razón personal para transformarse a sí mismo. Sabe que no puede cambiar el mundo, No obstante, le gustaría hacerlo si eso fuera algo práctico o posible. Pero puede cambiar el mundo dentro de sí mismo, acabando con los lazos de todo lo que le ata a cosas inferiores a su ser purificado. Éste es un proceso que supone varios años, y a veces muchas vidas para conseguirlo. En su más alta manifestación, representa la verdadera conciencia de Cristo de traer a este mundo la forma más pura de amor. En menor medida y con menos frecuencia, elimina continuamente de su vida todos los factores que impiden el progreso de su alma y la expresión de su espíritu. El individuo con Plutón retrógrado experimenta la lucha de la humanidad como una lucha personal consigo mismo. Personalmente, siente la necesidad de vencer en su interior todo lo que ha estado disminuyendo su conciencia de la sociedad en que vive. ASÍ, reacciona enérgicamente ante la falta de honradez de otras personas hacia sí mismas, considerándolo como una afrenta personal a su propio progreso, que cree que debe hacer por el bien último de la civilización de la que él es parte importante. Debe aprender a alejarse un poco de los hábitos y de la forma de comportarse de los demás, cuyas vidas tienen poco que ver en realidad con su propia realidad interna. 234

Plutón retrógrado

El karma de Plutón retrógrado El individuo con Plutón retrógrado vive un karma de experimentar la conciencia colectiva en sí mismo. Siente el impacto del pensamiento mundial, y es consciente de cómo se relaciona éste con las ideas del mundo en todas las épocas. Al no expresar siempre lo que sabe, tiende a ver a los demás como parte de una totalidad más amplia y exclusiva ant,es que como una base en proporción constante uno a uno. En su vida personal, es mucho menos importante lo que hace que lo que piensa sobre lo que hace. La mayor parte del tiempo vive dentro de su conciencia, cribando la multitud de sentimientos que experimenta en su interior. El crecimiento espiritual posible con Plutón retrógrado sólo está limitado por la mente consciente del individuo. Puede mostrarse literalmente superior a la mayoría del karma de toda la raza si así lo decide. Curiosamente, si trata de evitar la elevación de su karma, sentirá de todos modos los karmas inferiores de cuantos le rodean. Así, si escoge elevarse a sí mismo, empezará a vivir realmente la parábola de Jesús de «estar en este mundo pero no pertenecer a él». Para conseguirlo a la larga, atraviesa por retiros temporales durante la primera mitad de la vida, hasta que aprenda a ser impersonal con la intensidad del mundo que siente fuera de él, de modo que al final alcance el punto que ya no sentirá actuar en su interior.

Plutón retrógrado en Cáncer Con esta posición, se pasa mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, ya que el individuo sigue ocupándose de los trastornos de su pasado. Pasa toda su vida tratando de crear un renacimiento del conjunto de sus re235


cu(':rdos para que pueda abrir desde su conciencia todo 10 que previamente le perturbó a nivel emocional. Desgraciadamente, esta posición tiende a hacer que el individuo se fije justo en sus puntos traumáticos. De este modo, cada nueva persona o circunstancia de su futuro es solamente el símbolo del pasado que no ha dejado atrás. Cuanto más se esfuerza en matar el pasado, o incluso en esconderse de sí mismo, más se concentra en ello. Cuanta más comprensión busca para crear en su interior, más es atraído como un imán hacia las razones que le harán buscar el entendimiento en primer lugar. Así, seguirá en la monotonía hasta que entienda que la intensidad de los recuerdos muere con el tiempo si no se la refuerza negativamente. Resulta curioso que muchos de los que tienen esta posición han experimentado un' largo y persistente trauma con uno o ambos padres, y la crisis familiar parece no terminar nunca. El individuo, aunque trate constantemente de poner fin a todo 10 que le incomoda, nunca vibra realmente lejos del problema de sus dificultades. Toda la generación de Plutón en Cáncer estuvo emocionalmente traumatizada a causa de la situación mundial de su época. Guerras en los continentes, la destrucción originada por Ado1f Hitler y la subsiguiente desintegración de las familias dejan muy pocas cosas de las que estos individuos puedan sentirse emocionalmente seguros. Como generación, están muy unidos silenciosamente por el miedo; a nivel individual tienden a pensar firmemente en proyectar sus dependencias 'inconscientes en todos cuantos les rodean. Existe un gran sufrimiento interno con esta posición, que quizá sea la razón por la que estos individuos con Plutón retrógrado interioricen y personalicen toda la conciencia de la gente de su edad, tratando de encontrar una seguridad suplente en el otro mundo de las posesiones materiales. Por supuesto que la clave para terminar con el sufri-

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Plutón retrógrado

miento de viejos recuerdos desagradables no es volver a originarlos procurando evocar símbolos, sino más bien considerando cada día como el nacimiento de otra novedad.

Plutón retrógrado en Leo Esta configuración habla del desmoronamiento de la fuerza para la propuesta de transformación. A nivel mundial, la generación de Plutón en Leo llega a un mundo debilitado por sus dependencias emocionales, engañado por un sucedáneo del materialismo, y ajustado a valores del pasado que ya no tienen ninguna utilidad. A la vista de. esto, la nueva generación no fue dispersada por un mundo desgarrado por las guerras, sino que creció en la conciencia de un período de reconstrucción en el que se hacía hincapié en la capacidad del individuo de desarrollar la fuerza dentro de sí mismo de modo que (como parte de una generación) pudiese vencer a la opresión. Así, encontramos al individuo con Plutón en Leo preguntándose sobre la validez del «sistema». Se da cuenta de que un millón de personas débiles pertenecientes a cualquier ideología u organización que parezca darles fuerza, no sólo pueden ser una fachada sino que toda la construción creativa puede estar basada en falsos principios. A través de su deseo leonino de un mundo del que pueda sentirse orgulloso de vivir en él, es perfectamente capaz de destrozar todo lo que fue construido con anterioridad a él sobre fundamentos que no considera significativos. El carácter retrógrado del planeta hace que el individuo vea este mundo sin valor alguno como una cruzada personal en la que tiene que desempeñar algún papel intrínseco. A nivel personal, pone en duda su identidad en términos de lo que él mismo hace para hacer más significa237


tivo este mundo. De este modo, pasa mucho tiempo en la primera fase del proceso retrógrado, puesto que trata de proyectar una· sensación de seguridad firmemente construida sobre bases honestas a un mundo que apenas la necesita. , A nivel kármico, siente la obligación de vencer todo lo que ha debilitado a la humanidad. Así, pasa toda su vida con un solo objetivo en mente: en primer lugar, desarrollar el poder sobre sí mismo, y luego-, por ejemplo, sobre las falsas estructuras de la sociedad que necesiten unos fundamentos más creativos y honorables.

Plutón retrógrado en Virgo Con esta posición, el mundo entró en la era del análisis. La conciencia colectiva empezó a tratar de comprender el mecanismo que originaba sus defectos. El psicoanálisis se puso de moda y empezaron a emprenderse literalmente miles de incursiones hacia la mente humana. Un efecto de compartimentación impregnó al mundo, pues el hombre trataba de clasificar todo aquello que hacía el mundo tal y como era. En la carta de un individuo, esta posición favorece los poderes de concentración interna. La persona es capaz de enfocar su inconsciente de modo que pueda constituir una verdadera dinamo en aquellas áreas específicas hacia las que dirige su atención. Al mismo tiempo, el carácter retrógrado del planeta provoca el deseo de que no interfieran las fuentes externas. De hecho, la persona muestra su alegría cuando descubre las cosas por sí misma. Finalmente, es él quien ha resuelto sus propios misterios y sabiéndolo, hace que sean dignos de ser resueltos. El individuo experimenta a conciencia la primera fase del proceso retrógrado. En la experiencia de su vida activa, su 238

Plutón retrógrado

propia timidez con la gente es la clásica expresión de la tercera fase. Kármicamente, trata de comprender cómo funcionan las cosas. Su acercamiento a la vida parece un tanto mecánica, pero es así como alcanza sus comprensiones más claras.

Plutón retrógrado en Libra Los individuos con esta posición tienen una excepciónal experiencia en la conciencia. Son observadores de la evolución y transformación del mundo, pero en realidad no sienten el deseo de ser parte intrínseca de él. Por un lado, experimentan personalmente la conciencia de todos. cuantos les rodean, cosa que les convierte en una curiosa mezcla de todo lo que han visto o tocado. Por otra, no se relacionan con ellos mismos personalmente. Así, no representan aquello de lo que parecen ser partidarios. El resultado es que esta posición actúa como una ventana a través de la cual pasa la conciencia de la raza. Un fuerte sentido de la responsabilidad sobre los demás otorga un silencioso complejo de mártir a muchos de los que tienen esta configuración. Creen que su capacidad para equilibrar todo lo que les rodea se reflejará a la hora de pasar cuentas con Dios. Ésta es una de las posiciones más difíciles para Plutón retrógrado, puesto que la fuerza del cambio trastorna el estado de suave inercia de Libra. Existe un impulso hacia la realización junto con un deseo de no participación. Cuando Plutón entró en Libra, muchos de los grandes «movimientos gurú» ganaron en popularidad. Incluso el gran advenimiento de la meditación trascendental es una aplicación peculiar de esta posición. La fuerza de Plutón es para trascender; hacerlo a través de la meditación representa la serena no-actividad de Libra. 239


A nivel individual, la acción retrógrada del planeta otorga a la persona la capacidad de interiorizar la conciencia humana, de modo que pueda mezclarse con la totalidad de todo lo que percibe. Eso hace que permanezca en la tercera fase gran parte del tiempo. Kármicamente, aquellos que han nacido con esta posición tienen interiormente un deseo tranquilo e impersonal de transformar la época en que viven. Su objetivo es un estado de conciencia más pacífico y armonioso.

Plutón retrógrado en Escorpio En Escorpio, Plutón encuentra su propio hogar. Aquí liega a su fin la larga espera de la transformación espiritual del mundo. Grandes cataclismos derriban muchas de las primeras creaciones de la humanidad, ya que el fin de la Era de Piscis empieza a hacerse más evidente. Nuevos descubrimientos científicos en el terreno de las leyes y la física, principios de medicina y métodos naturales de curación ganan aceptación. El mundo se divide cada vez más cuando la lucha entre el «bien» y el «mal» emerge en grandes proporciones. Gigantescos movimientos sociales y políticos, cuyas semillas se plantaron con anterioridad, empiezan a surgir con un enorme poder. Cuando Plutón es retrógrado, el significado de esos cambios radicales generalizados se siente íntimamente a nivel personal. Los siglos de búsqueda de una comprensión de la sexualidad del hombre, su empeño en encontrar a su Dios (y la posible conexión entre esos dos impulsos), se convierte en una simple búsqueda personal para cada individuo. Para los nacidos con esta posición plutoniana existe un poderoso deseo de superar todos los fracasos anteriores, sacándolos a la superficie y eliminando las causas ocultas de su debilidad.

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Plutón retrógrado

El hombre se destruye literalmente a sí mismo para volver a nacer. Éste es uno de los períodos más tumultuosos de la historia humana, ya que la propia Biblia empieza a ser puesta seriamente en duda como un preludio para un Tercer Testamento que aún debe escribirse. El fanatismo predomina en todas partes, ya que un mundo cansado de dos, mil años de sufrimiento humano empieza a agitarse prepararándose para la Era de Acuario. Los individuos con Plutón retrógrado formarán parte de esas extensas transformaciones, ayudando a estimular (a través de la primera fase del proceso retrógrado)' el renacimiento del hombre: fuera de este estado de sueño y hacia una conciencia más elevada y despierta.

Plutón retrógrado en la Casa primera Ésta es una posición extremadamente dinámica para Plutón, puesto que sitúa al individuo en una búsqueda eterna para purificarse a sí mismo. Experimenta continuas transformaciones, ya que su constante deseo de buscar le lleva a muchas e intensas experiencias. Durante su juventud es sumamente impulsivo, como lo demuestra en la primera fase del proceso retrógrado. En la segunda mitad de su vida se vuelve más introspectivo. Entonces, en lugar de querer mostrarse al mundo, trata de comprender hasta que punto es un producto del universo en que vive. En todo lo que hace existe un poderoso impulso interior que le motiva. Raramente está contento y es tremendamente difícil de complacer, puesto que lo que busca suele estar más allá del alcance de aquellos que tratan de ayudarle. Con Plutón retrógrado en la Casa primera, el matrimonio y demás relaciones son difíciles, ya que el trastorno interior del individuo hace que trate constantemente de desarraigarse y de trasformar sus necesidades y deseos bá-

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sicos. Pasará la mayor parte de la presente encarnación transformando sus propios conceptos y aprendiendo a trascender el karma de su identificación personal, puesto que descubre la realidad cósmica. Su ansiedad para conseguirlo es la razón por la que vive durante tanto tiempo en la primera fase; pero su verdadera evolución siempre deriva de las comprobaciones a posteriori que realiza en la tercera fase.

Plutón retrógrado en la Casa segunda Aquí, el individuo vive un karma de esclavitud. Tanto si está encadenado a los principios de la sociedad como a su propia vida anterior, los pensamientos obsesivos deben sacarse a la superficie para ser eliminados. En realidad, no importa lo que le ate. Lo importante es que llegue a entender que debe destruir literalmente su vieja escala de valores si aún quiere conseguir la felicidad. Durante la primera mitad de su vida, no ve el mundo con claridad. Tiende a culpar a los factores externos de privarle de todo aquello que cree que necesita. Debe entender la diferencia que hay entre lo que desea y sus necesidades, pues aunque raramente llegue a obtener lo que quiere, siempre tendrá exactamente lo que necesita. En su vida pesonal, puede ser sumamente posesivo, increíblemente terco y asombrosamente resistente a cualquier estímulo externo que trate de hacerle encajar en el mundo que le rodea. Preferiría ver doblarse el mundo para responder en sus ideales. En consecuencia, vive en sus propias ataduras, despreciando silenciosamente todo aquello que no concuerde con sus ideas. Esta posición puede denotar los restos de una vida anterior de su ser animal, que trae a esta encarnación para ser vencido. Para transformarse a sí mismo, este individuo debe estudiar cuidadosamente sus motivos internos duran-

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Plutón retrógrado

te la tercera fase del proceso retrógrado y comprobar que la mayoría de las cosas a las que se aferra y que busca tiene poca base en la realidad de lo que le haría verdaderamente feliz en la vida actual.

Plutón retrógrado en la Casa tercera Aquí, las tres fases del proceso retrógrado juegan un papel importante en la vida del individuo. En el terreno de las relaciones, tiende a vivir su vida a la inversa. Primero, considera los resultados finales. Luego, sigue tratando de manifestarse de modo que consiga los resultados antes de realizar la preparación necesaria al principio. Más tarde trata de volver sobre sus pasos, reuniendo las piezas· que ha perdido. Su campo de acción es muy amplio y es muy sensible a los pensamientos inconscientes de otras personas. Eso le causa un gran dolor porque a menudo ve a través de las máscaras que lleva la gente. En consecuencia, le cuesta confiar plenamente en la gente porque se da cuenta de sus motivos ocultos y quizá inconscientes. Ésta es una posición extraordinariamente psíquica y el individuo es perfectamente capaz de comunicarse íntimamente con las personas que conoce durante sólo unos minutos. Eso le ayuda a ver la verdad si puede interpretar sus percepciones de modo impersonal. Kármicamente, se le pide que domine sus sentidos. Ésta bien podría ser una de las lecciones más difíciles de todo el zodíaco. En su juventud, es tremendamente susceptible a su entorno. A medida que se hace adulto, llega a darse cuenta de que sólo percibe aquello en lo que se fija. En consecuencia, debe trabajar duro para transformar sus actitudes hacia el mundo que le rodea, dado que, literalmente, tiene todo el mando del nivel de conciencia en que vive. Lo hace 243


mejor cuando comprueba que ningún pensamiento que pudiera tener sería suyo propio. Ni siquiera sus i?eas ,de transformar a los demás fueron realmente suyas, SIlla solo las ideas inconscientes que otras personas tenían de sí mismas que él era lo bastante capaz de comprender. Puede ser un comunicador muy potente y sumamente influyente a la hora de cambiar el pensamiento del mundo una vez se haya orientado impersonalmente.

Plutón retrógrado en la Casa cuarta Con esta posición el individuo pasa mucho tiempo en la tercera fase del proceso retrógrado, en la que tiende a alejarse asustado del hecho de expresarse en un mundo que siente ajeno a él. A menudo acompañan a esta posición muchas fobias y temores de la infancia. Éstos se manifiestan como fuertes dependencias emocionales. Le disgusta intensamente este aspecto de sí mismo y sigue tratando de destruir todo lo que le da la seguridad suficiente como para robarle una sensación de crecimiento. Este conflicto incorporado puede provocar bastantes sentimientos paranoicos puesto que el indivduo proyecta sus propios impulsos autodestructivos en los demás. En realidad, está experimentando una completa transformación de su alma para que en sus propias raíces pueda brotar una nueva flor. Eso significa que hará un gran esfuerzo por romper con todas sus viejas costumbres, particularmente con aquellas que creaban la comodidad que le empujaba hacia su pasado. Por eso, nunca está completamente seguro de dónde está. Es casi como si la tiena en la que se encuentra fuese cambiando bajo sus pies. En realidad, está rechazando consantemente lo viejo mientras sigue temiendo lo nuevo. No obstante, sabe que en adelante es la única dirección en la que puede ir. Durante muchos 244

Plutón retrógrado

años, la vida le parece una carrera de aquí para allá a través de un puente, sin querer tocar siquiera la orilla por miedo a perder las posibilidades de experimentar lo otro. Esta posición de Plutón indica que el alma ha llegado al final de un larga forma de comportamiento en la que ha estado atrapada durante muchas vidas .. En ésta, se lleva a cabo finalmente un nuevo nacimiento desde el interior.

Plutón retrógrado en la Casa quinta Aquí, el individuo pasa mucho tiempo en la primera fase del proceso retrógrado. Trata de expresarse para demostrarse a sí mismo que el mundo le aceptará algún día. Puede ser enérgico y dinámico. Tiene un potente carácter sexual. Su visión global de la vida junto con su energía pueden ser despóticos. Al ser tan subjetivo en su perspectiva de la vida debe aprender a ser más consciente de los sentimientos de otras pesonas. En cuanto lo haga, podrá cambiar sus percepciones, ya que el mundo es realmente más impersonal de lo que a él le gustaría creer. Con esta posición, existe a veces un niño que puede ser difícil de educar o duro de alcanzar en lo que se refiere al propio sentido de la individualidad del niño. Generalmente, éste se niega a ser moldeado fácilmente. En algunos casos, el niño trata de ser el profesor de su padre. El carácter amoroso de Plutón retrógrado en la Casa quinta crea una gran inquietud interna, puesto que el individuo pone en duda constantemente los diferentes papeles en los que se ve a sí mismo. Puede sentirse profundamente ofendido, y trata sinceramente de encontrar razones para aceptarse a sí mismo y a la sociedad en que vive. Ello adquiere a menudo la forma de una activa cruzada por alguna forma de expresión personal que la sociedad en general no aprueba fácilmente. De este modo, cree que es ca245

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paz de probarse a sí mismo que es digno de su propia existencia. Alcanzará la felicidad cuando,deje de intentar derribar el mundo y se acepte a sí mismo sólo como una parte de él. Casi siempre existe un karma relacionado con un mal uso del proceso creativo en vidas anteriores. Con frecuencia, eso ha tenido lugar en proyecciones de pensamiento de arraigo sexual. Ahora, el individuo debe aprender a ofrecer un espacio psíquico libre a cuantos le rodean. Cuando lo haga, se encontrará con una gran abundancia de nueva energía para dirigirla hacia nuevas áreas de creación y realización.

Plutón retrógrado en la Casa sexta Aquí, el individuo experimenta una gran conmoción en sus condiCiones laborales, las relaciones con sus superiores y el toma y daca general de su sentido del deber con el mundo. Sufre extrañas enfermedades que suelen desaparecer tan misteriosamente como surgieron. Debe aprender a no personalizar un sentido de misión en la vida puesto que, si lo hace, se vuelve universalmente personal en su sentido más negativo. En realidad, si lo hace, puede absorber inconscientemente todos los males de la sociedad. Ello se produce a causa de su deseo inconsciente de transformar el mundo de forma que se ajuste a sus propias ideas de perfección. Vive un karma de servicio impersonal en el cual todas sus acciones no se relacionan no tanto con la identidad individual como con su papel en el plano cósmico. Así, funciona mejor como un misionero universal. Hasta que lo descubre, tiende a sentir cierta amargura hacia el mundo que, aparentemente, le estafa todo lo que se merece. Cuando se vuelve introspectivo durante la tercera fase del pro-

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Plutón retrógrado

ceso retrógrado, se hiere a sí mismo al entrar en su interior y encontrar allí el mundo y sus problemas en lugar de la identidad que está buscando. Eso ocurre porque está tan ocupado penetrando en todo lo que le rodea que más tarde se confundirá con la pura esencia de sí mismo. Alcanzará la felicidad cuando deje de intentar ver «dónde arraigan sus pies» y, en lugar de eso, empiece a andar con ellos. De hecho, toda su vida está dedicada a las costumbres, que derivan de una comprensión instintiva, antes que a tratar de hacer consciente la comprensión inconsciente.

Plutón retrógrado en la Casa séptima El individuo encuentra aquí grandes obstáculos que debe superar en sus relaciones con los demás. En el matrimonio puede tender inconscientemente a romper con la armonía que cree estar buscando. Al gastar buena parte de su energía tratando de reformar a los demás, nunca se mira claramente a sí mismo. En esta posición se experimentan todas y cada una de las tres fases retrógradas, porque dependen en gran medida de la persona con la que el individuo se relacione en un momento dado. En toda persona existen al menos dos conceptos principales del yo diferentes. Uno de ellos se basa en lo que uno piensa de sí mismo; el otro, en lo que una persona cree que los demás opinan de él. Es este segundo yo el que el individuo con Plutón retrógrado en la Casa séptima se esfuerza en transformar kármicamente. En consecuencia, el entorno en que se mueve le controla más de lo que él cree. Absorbiendo constantemente la conciencia externa de su vida exterior, es una curiosa mezcla de todo lo que la sociedad piensa en un momento dado junto con una fuerte hostilidad inconsciente en el yo primero u original, ya que no es capaz de mostrar 247


sinceramente (no influenciado por la sociedad) su carácter. Por lo tanto, ésta es una posición sumamente difícil para el matrimonio porque cualquier relación íntima intensifica esta lucha entre hacer encajar en algún molde y querer destruir en'el mundo todo lo que crea dichos moldes. Se produce una gran transformación en el descubrimiento de la verdadera base de su realidad. El hecho es que la sociedad en que vive, con todas las quejas que tiene de ella, incluyendo las instituciones que establece y que le limitan, son exactamente lo mismo que necesita para vibrar con la esencia de la vida misma.

Plutón retrógrado en la Casa octava Ésta es, sin lugar a dudas, la posición con una mayor profundidad de todo el zodíaco. Plutón no sólo rige la Casa octava, sino que el carácter introspectivo de su naturaleza retrógrada se halla en completa armonía con la posición de su casa. Aquí, el individuo pone en duda constantemente los principios de los demás. Trata de comprender los misterios más profundos. Para él, la sexualidad representa la cuestión más insondable de todas. Pocos aspectos de la vida pasan por él sin que los haya estudiado clínicamente. Posee un carácter sexual muy intenso. Sin embargo, su energía no es sólo física, sino también mental y cósmicamente orientada. Tanto si la expresa físicamente o la transforma en las regiones de su mente, esta energía impulsa todas las cosas del universo que trata de comprender. Manifestada generalmente durante la primera fase del proceso retrógrado, esta posición crea de forma agresiva una constante destrucción de los viejos hábitos tradicionales, de modo que el individuo pueda experimentar, finalmente, un renacimiento en los niveles más profundos de su interior. 248

Plutón retrógrado

Se halla tan vinculado a los principios de los demás que, tanto si le gusta como si no, está fuertemente influenciado por la conciencia colectiva. Aporta a esta vida el legado de la energía de Plutón para cambiar, y cuanto más se disgusta con el mundo que le rodea, más empieza a profundizar en los misterios de su interior.

Plutón retrógrado en la Casa novena Aquí, el individuo experimenta la primera fase del proceso retrógrado cuando trata de explorar todo lo que percibe en el universo. Eso hace que sea una persona difícil de comprender por los demás, más arraigados en la realidad práctica del mundo de cada día. Tanto si se da cuenta de ello como si no, tiende a una proyección astral de un lugar a otro, y dc un reino de la conciencia a otro en una base casi constante. De todas las posiciones del zodíaco, ésta es una en la que la conciencia del individuo está menos conectada con su cuerpo físico. El pensamiento del mundo le atrae constantemente, y muchas de sus ideas no tienen tanto que ver con su propia vida como con el universo que explora inconscientemente en un momento dado. Es un rebelde contra las restricciones, pues considera el mundo como un terreno de juego donde su alma se ejercita y desarrolla. Tiene la capacidad de comprender tantas cosas que debe aprender a concentrarse en un solo pensamiento o proyecto cada vez. Existe una gran sabiduría en esta posición, tan pronto como el individuo aprenda que puede caminar con su cabeza en las nubes mientras sus pies estén firmemente en el suelo. Al ser tan receptivo, acaba volviéndose muy seguro de sus opiniones y actitudes, lo que puede causarle muchos problemas en su relación con los demás, que no comprenden plenamente sus fuentes de información.

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Kármicamente, aprende a hacer frente a toda la esencia de corrientes de pensamiento, no limitadas por la posesividad individual. Es una de las pocas personas del zodíaco que sabe realmente que una persona no es lo que piensa. Si se usa correcta!llente, y con una formación adecuada, ésta puede constituir una posición extraordinariamente espiritual para Plutón retrógrado.

Plutón retrógrado en la Casa décima Con esta posición, el individuo siente un fuerte impulso interior para establecer una identidad sólida en medio de sus semejantes. Generalmente necesita estudiar una carrera. La idea de un trabajo cualquiera no basta para satisfacer las demandas de la dinámica energía de Plutón. . Ésta es una de las pocas posiciones en las que el deseo que procede del inconsciente no se manifiesta necesariamente a nivel sexual. Al individuo le preocupa demasiado la sensación de tener que justificar su sentido de la autoestima para dejar que sus energías se disipen en otras áreas que no sean las relacionadas directamente con los objetivos que se ha marcado. Muchos con esta posición buscan un trabajo en el que puedan sentir que están ayudando a transformar o a informar al público, satisfaciéndose de este modo a sí mismos hasta el punto que satisfagan al mundo en que viven. Existe un fuerte sentido de la responsabilidad, pero no siempre hacia lo tradicional. En cualquier caso, esta persona quiere romper las trabas que le impone la sociedad, de modo que pueda formar parte de algo nuevo que, a la larga, ocupe su lugar. Oscila entre las fases primera y tercera del proceso retrógrado, ya que compara todo lo que podría ser el mundo con todo lo que él sabe que fue en el pasado.Personalmente, identifica grandes causas con grandes fracasos,

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Plutón retrógrado

y se siente el más feliz de la tielTa cuando cree que está formando parte de alguna gran transformación mundial. Vive un karma de aprender a dirigir la fuerza constructivamente para hacer el mejor bien posible a la sociedad en que vive.

Plutón retrógrado en la Casa undécima Aquí, Plutón encuentra su posición más idealista, ya que el individuo quiere lo mejor para sí mismo, sus amigos y el mundo en que vive. Normalmente, eso causa muchos estragos, ya que considera que existe un abismo entre su carácter idealista y el modo en que son las cosas en realidad. De esta forma, puede mostrarse como un rebelde que trata de llenar ese vacío destruyendo literalmente todo lo que cree que carece totalmente de sentido. Suele considerarse a sí mismo como la conciencia de sus amigos. Cuando está motivado por un deseo sumamente espiritual, eso suele originar grandes tensiones. Contempla gran parte de su vida desde el punto de vista de un espectador, y los procesos creativos pueden verse perturbados cuando el individuo pone en duda el significado de las cosas, incluso quizá más que participar personalmente en ellas. Se toma sus amistades muy en serio, y se identifica con sus éxitos y sus fracasos. Esta posición suele manifestar la tercera fase del proceso retrógrado, donde la interiorización de conciencias anteriores motiva al individuo hasta el punto en que puede inspirar a los demás. De este modo, casi puede conseguir sus objetivos, sueños y ambiciones mediante lo que hacen los demás. Kármicamente, este individuo puede ser un fugitivo, pero le molestaría dejar que sus amigos o el mundo siguiesen la misma trayectoria. Él mismo huye para cambiar y poder constituir una gran ayuda personal para los demás al no estar ligado personalmente al mundo.

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Plutón retrógrado en la Casa duodécima Con esta posición, el individuo experimenta casi siempre la tercera fase del proceso retrógrado. Es muy introspectivo y extraordinariamente profundo en su conocimiento de la vida tal como es. En el interior de su mente, es consciente de las ataduras de la sociedad, pero tiene la fuerza suficiente como para abrirse paso entre ellas si quiere. A menudo es sumamente reservado, ya que no está plenamente en contacto con lo más profundo de sus motivos. Sin embargo, es lo bastante receptivo como para saber que gran parte de su vida exterior está condicionada por la sociedad y le convierte en un hipócrita para su ser interior. Experimenta grandes períodos de soledad y abatimiento. La persona se siente incomprendida. Con frecuencia le gustaría llevar hasta el final algunas situaciones molestas y, a consecuencia de ello, poder estimular conscientemente las fuerzas destructivas de los que le rodean. De todos los individuos del zodíaco, puede que éste sea el más negativo en relación a los esfuerzos positivos de los demás para ayudarle salir de su cascarón. El uso de drogas es peligroso para esta persona, ya que tienden a llevarlo más allá de un estadio de presencia en la realidad del aquí y el ahora. Kármicamente, trata de encontrar un sentido en su alma, y a través de un agitadísimo proceso de eliminación, acabará descartando todo aquello que no tenga sentido para él, de modo que finalmente consiga identificarse con su esencia. Su viaje se dirige hacia las regiones desconocidas del hombre y su universo, y aunque pueda experimentar las mayores dificultades por el camino, su recompensa será el descubrimiento de su alma.

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ÍNDICE Introducción

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PRIMERA PARTE:

Genealogía de los planetas retrógrados

11

Capítulo 1. Una experiencia en relatividad

13

SEGUNDA PARTE:

Los planetas retrógrados

37

1. Mercurio retrógrado

39

2. Venus retrógrado

73

3. Marte retrógrado

105

4. Júpiter retrógrado

133

5. Saturno retrógrado

163 ....

189

7. Neptuno retrógrado ...

215

8. Plutón retrógrado

233

6. Urano retrógrado

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OBRAS DE MARTIN SCHUL11AN RELACIONES KÁRMICAS. INTERPRETACIÓN DE LOS ASPECTOS ASTROLÓGICOS En esta obra Martin Schulman considera las relaciones mutuas entre planetas bajo una perspectiva kármica. Compara todas las combinaciones posibles el aspecto dominante, mostrando al lector cada una de las facetas de la personalidad representadas por un planeta, con respecto a los planetas del tema natal de su pareja.

NODOS LUNARES Y REENCARNACIÓN (ASTROLOGÍA KÁRMICA 1) En este primer volumen de Astrología kármica se describe con gran detalle cada una de las posiciones de los nodos lunares a través de cada signo y de cada casa. Además se presentan los aspectos de los nodos, la interpretación de las cartas astrales tomadas como ejemplo y efemérides completas de los nodos desde el año 1850 al 2000. PLANETAS RETRÓGRADOS Y REENCARNACIÓN (ASTROLOGÍA KÁRMICA 11) Martin Schulman presenta una de las interpretaciones más radicales hasta el momento enunCiadas por los planetas retrógrados. Cada planeta se discute según su posición

en cada signo y cada casa. Además examina el simbolismo esotérico y kármico iniciado en el volumen 1: Nodos lunares y reencarnación. LA PARTE DE FORTUNA EN EL HORÓSCOPO (ASTROLOGÍA KÁRMICA III) Investigando en los principios de la antigua astrología, Martin Schulman presenta una discusión completa e innovadora de uno de los elementos más usados pero tal vez más incomprendidos de la carta natal: la parte de la fortuna. De todos los puntos arábigos, tal vez éste es el único utilizado por todos los astrólogos, pero aún no se han explicado los principios por los cuales se gobierna su afortunado efecto. Esta obra analiza la parte de la fortuna en los doce signos y casas con ejemplos e interpretaciones de natividades notables. A la vez se contemplan las leyes del karma para este misterioso y vital punto del horóscopo. EL KARMA DEL PRESENTE (A'STROLOGÍA KÁRMICA IV) El último volumen de la serie Astrología kármica contempla la unión de la astrología con la realidad mediante un análisis fiel y profundo. Basado sobre el principio de que el pasado y el presente existen sólo como una imagen, mientras que el presente existe a p.esar de la imaginación. Estudiando los planetas a través de los signos, Martin Schulman nos muestra cómo usar las energías planetarias y eludir los complejos del pasado, así como los posibles aspectos negativos del futuro.

Planetas Retrogados y Reencarnacion[1]

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