PHILIP DE SOUZA
Introducción: Introducción: la terrible terrib le marea m area de la gu guer erra ra
Guerr a e historia están inextricablemente relacionados. relacionados. La historia se desarrolló como género en primer lugar en la Grecia Antigua, con el propósito de dar un paso más allá de una mera relación de episodios de grande s gue rras e intentar explicar sus orígenes. orígenes. Pero an tes de ésta, el registro de batallas batallas y campañas había llegado llegado a s er una práctica regular entre las civilizaciones más antiguas. Aunquela tecnología de la guerra ha cambiado hasta hacerse irreconocible desde el antiguo tipo de combate cuerpo a cuerpo con lanzas, espadas y escudos, completado con jabalinas jabalinas,, hondas y arcos, mucha gente cree que se pued en obten er enseñanzas en muchos de los aspectos políticos, sociales y psicológicos de la guerra con la misma facilidad del estudio del mundo antiguo que del moderno. La guerra antigua continúa siendo estudiada por especialistas militares actuales por po r las leccio lec cio nes ne s que q ue se p ue den de n e xt ra er toda t odavía vía d e aco nte cim ien tos com o la bata b atalla lla de de Cannas en el 216 a.C., donde el ejército cartaginés, mandado por Aníbal destruyó un ejército romano mucho mayor gracias a la estrategia y la táctica. La Guerra del Pelo pon eso, es o, librad libr adaa e ntre nt re Ate nas y E sp ar ta en tre tr e el 431 y el 404 a.C. sig ue sie ndo un capíar te de tulo tulo esencial en el currículum de las academias m ilitares. ilitares. El tratado chino El arte la guerra, del siglo rv a.C., atribuido a SunTzu se convirtió en un texto clásico, leído y aplicado por estrategas de todas las clases desde mandos militares a directores de empresa. Aunque hay otros libros sobre la guerra antigua, ninguno de ellos la aborda de manera auténticamente global global y pocos ofrecen ofrecen muc ho más que una simple simple narración de las grandes batallas y campañas, intercalada con descripciones del personal y el equi pam iento ien to de los ejérci ejé rcitos tos antiguo ant iguos. s. Este Es te volum vol umen en es único únic o e inno i nno vador vad or po porq rque ue combicom bina la discusión del desarrollo de los avatares políticos y la evolución de las estructuras militares en todo el mundo con un análisis solvente y una explicación de los factores subyac entes sociales, económicos y culturales que confo rmaron la naturaleza de la guerra en el mundo antiguo.
Este adorno de muñeca laboriosamente trabajado muestra al faraón Tutmosis IV (14001390 a.C.) ejecutando ejecutando a un prisionero de guerra. Esto puede simbolizar el castigo a vasallos rebeldes en Siria o Palestina. Tutmosis lleva una peluca de estilo nubio y está coronado con un disco solar. Es observado por el dios guerrero Montu.
LOS ORÍGEN ES DE LA GUERRA GUERRA colectiva Si definimos la guerr a en un sentido amplio como cualquie r form a de violencia colectiva realizada entre dos grupos opuestos que se han arma do y organizado pa ra estefin , entonces se podría pen sar que la guerra siempre ha estado con n osotros. En el capítul capítuloo inicia iniciall de este libro, libro, no obstante, Brian Ferguso n desafía esta opinión opinión comúnm ente aceptada, aduciendo que m uchos de los datos sobre el inicial inicial desarrollo social humano humano encajan con la noción de que hubo «un tiempo anterior a la guerra». El demuestra que «la terrible corr iente de la guer ra que llega ininterrump idame nte hasta el presente» presente» hace su aparición aparición má s temprana en torno a 8000 8000 años a.C. a.C. en el Iraq sep tentrional y está pres pr es en te en Europ Eu rop a Centr Ce ntral al ha cia el 5000 a.C. Sin e mb arg o, no hay h ay un p atrón atr ón uniform unif ormee a través del globo y la guerra parece haber llegado relativamente tarde a algunas culturas. Las fortificaciones fortificaciones neolíticas en el norte de China comienzan hac ia el 300 30000 a.C., a.C., pero la aparición aparición de la gu erra en el Japón pue de ha ber sucedido tan tarde como el 300 a.C. De modo similar, algunas partes de América proporcionan indicios de 7