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traducci6n de nora rosenteld de pasternac jose aric6 y santiago tunes
el (re)comienzo del materialismo dialectico aloin badiou materialismo hist6rico y materialismo dialectico louis althusser discusi6n sobre el pensamiento de antonio gramsci
8CUADERNOS DE PASADOY
PRESENTE
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primera edici6n, 1969 septima edici6n, 1979 © ediciones pasado y presente impreso y distribuido por siglo xxi editores, avo cerro del agU8 248 - mexico 20, d. f. ISBN 968-23-0393-1
S. 8.
derechos reservados conforme a Ia ley impreso y hecho en mexico/printed and made in mexico
1a problematica abierta con Ja hUblicaoi6n ide" disti.tltos'mlculos' del· filOsofo marxista franch l.oUis Althusser en un Cuademo anterior... EI ensayo de Alain ~. uno de los colaboradores inmediatos de Althusser, ~ne el mer-ito de analizar las condiciones para un re-comienzo ,~1 materialismo dialectico a partir del analisis de sus trabajos :~s, .importantes: La revoluciOn te6rica de Marx y Le(}r El ca .Pft(il, el prJmero publicado por la editorial Siglo XXI y el se gundo anunciado ya por la misma editorial. EI otro texto de Althusser utilizado por Badiou es el que se induye aqui ('on ~l ,titulo de "Materialismo historico y materialismo diaIectico". Vale decir que el lector de habla espanola tiene en los dos cuademos publicados el conjunto de los trabajos "menores" (Ie Louis Althusser que complementan nccesariamente la lec tura de su opus magna: Leer El capital. Sin embargo; mal hariamos en pensar que nos encontramos aqui con unpensamicnto concluido. Tal como senaIabamos en la advertencia con que precetlimos el Cuaderno N9 4, es esta unn concepcion te6rica donde algunas formulaciones son 'provisorias y destinadas a rectificaciones parciales. EI mismo Althusser senala, por ejemplo, en su (:arta a un critico italiano, que un aspecto tan importante como el de la rclaci6n entre fila sofia y ,wUtica fue dcjado de ludo en sus trabajos y que mere ce no obstante un amllisis espedaJ. En ese sentido agregamos algunos tcxtos que mucstran que las rclaciones entre la posi ,cion althusseriana y las elul)()raciollcs de unO de los te6ricos • Louis Althusser, La tUolotia como anna de la. 'reootuciOn, Cua demos de Pasado y Presente N9 4.
8
Advertencia
marxistas mas renovadores de este siglo, nos referimos a Anto nIciGramsCf, no pueden ser estudiadas con Ia- parcialidad ron que 10 haec el pensador frances en uno de los capitulos mas inlportantes de su obra, dedicado a demostrar Ia oposici6n en tre historicismo y marxismo. Los textos agregados configuran una rapida puesta al dia de Ia confrontaci6n entre marxistas franceses e italianos alre dedor del pensamiento de Gramsci en relaci6n con el de Althu sser. Ann cuando uno de los proximos Cuademos estara dedica do en especial a Gramsci y el pensarniento socioI6gico y poli tico modemo, hemos querido arnpliar el materml presente COD una discusi6n quetiene 'enormes inlplicanciaspoUtieas. ,"
.Pasado y Presente
Alain hdlou EI {re)comlenzo del materlallsmo dlal6ctlco
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:1A!obrade Alfhusser armooizacon nuestra cQyuntura poHli .'cuya 'inteligibllidad 'asegura' seniliandO': S\1 [)Topia urgencia. 1.0 que hay de inquietante, de esenci3.1mente desviatfo en Jill' declaraciones de los partidos ····comunistll$ "occidentales". '1; en primer terminodel P.C;,delaU.R:S.S.~ 'puede ser' defi -tti.do segUt1 i ;Ia :effcacia' permailente' de 'unsileneio 'tt16rico: aquello de 10 que ,DO Se habIa, salvo para dar forma:' 8:l DO ~ecir ~D' el palabreri.o de' las' oondena$ ....:.en sintesis: el sta linismo y ,Ia China- estructura integralmente 'aqueHode 10 -que sf se.hablaj porque esnecesanorectit:.lrlr lu'lagunas y .deformar hl ,cadena entera para quepiJedan entrar eQ'ella los significantes de ese encubrimiento. Todo ewto DO sin aI gunas Ilvedas, ya qu,", el rigor del discurso marxista" esta en situaci6n de empalme con laspal'tes enruina y neva III propia vida cland~ina OOjo los aIardes nominates de Ia ReVisi6n. ··Para callarse'rnejor, las Oficinas ideol6gicas insti tucionalesse yen asi obJigadas)1 abandonar' progresiva.m~n te la' teoria para' 'recogeten las jactancias portatiles del mo mento, induso en los arroyos no muy linlpios' del ecuinenis rno post-conclliar, eSI) queseanuncia conel nombre de mar zismo. ' . 'Esas mercaderias averuidas son tcidasresuItado de UJ) efec to general del qu,e. Maf,J comenz6 el analisis ,a: prop6sitodel paso de la 'e~oJ,lOmia cJasica (Smi~h - ,Bic,ard9) a la ecorio mla .vulgar (Bastiat ..,.511)"" .etc.): . ~l efecto de re-in.,cnpcf6n eJl el espaciQ id~oI6gieo de .los co~ptos de la cUincia. p~e viamente transformados en nociones h0m6ninlas. Sabemos
10
Alain Badiou
\qu,e.~a,n~aci6n
se sixve de la herencia filos6fica para pro ceder a su deformaci6n especifica de tres maneras dileren
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la ciencia, pretende fun darfe los conceptos con un gesto inaugural y resolver la com plejidad del discurso te6rico en una transparencia instau radora. b) POI' debaio de ella, utiliza el pseudo-coneepto de re sultadol para reabsorb~r los conceptos en la extrapolaci6n sis tematica de un Todo en el que vienen a figurar los preten didos "resultados", mediocres figurantes en efecto, de este ~eatro Ae. so,xpbras,. en el ,qlJe:l!QiclPS, acepta@,.:ignorado bajo los. ;OJ::opeJes del. fjlO"ofema ,humanista, '.~' natUl~ta, maneja yictoriosaIllente los hilos. . '.'" . . .G)·M ?qdq, 0 sobre ella, invel!ta llPc6digo para traducir. .~rt~,
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·De alH lastr~ esr:>eeies 96. ":marxi$mp"·;i.el£\¥ldamental. el tot~litarip Y ,el anlll(lg:k;o."" .,'; , . • ....• . cEl,~'x4'mo J"~fnental..consagrado ..casi. exclusivamente ~~; la U1t~plin.a1:lle ~~gesis. d~.. los Manu~itQS' de 18442, se revela indif(u;ente.a·la.construceion cientificat;Ie MllIX, a la eterminacionsingular. ~e &.Us QbWQs-de-cooocimiento, y pro poD,e ~nl.\ antropologiQ".general cen~n\(la: :cn Ia nOcion multi y.ocad,e tr~~aj(). L!\ histori;l, h,gar @l{;'.xiIiQy la·escisi6n es H»".e~ndidaCO:ln;q .Pqrusia difcridade la' transparcncia; co J1lO;.f'etal'do. escncial donde se invGota el lIamhre to.ta!. Se declara pt)siblc unq. Ie' ctUl'jl ,cihaustiva. a ,partir de .nodoncs covl;lriAllte~como las dc. pn\xisy ali~nadoll,3 cuya. combina ci6n "<1ial¢ctica" rcitcra. ,jn(.'Ollscknt~mente la' vicja ~anci6n de cuna cmbrollada del bien y del mal. 1.1wl'xi81l10 totfllitario exalta iosistcotcmcntc In cicntifid· d~ld.Pcro ('I ~~(lJl(:('plo dc' cicl)cia aT que se ~cmit~ cs In apli cal'i~n c3squcni~lica·.· a: U!ll'l ,tolali(ra(thist6ril'()-na~nral empi ric;,injente recillida (1e, prd(~lldi(hls"l('Yos dial{>ctil'as"1 :y entre eUus'la Inas l'lllhm'azosacs h, 'dc frunsfOl'I11ad6n dc' c:inlidad ell caHdad. Para'; cl·· Jl'llrx'isllIb" tiltaIitaril)j Marx entra .por en tero en el fr;'i'gt1 sish'llltl de 'las extrapolaciones de Engels.
4
11 '~>.aLMarx
de 1a juventud del marxismofundamental;el tUma :YBUbaltenro de las dialectiCas Ott\aHrrales".4 " ar«ilOgico a ptimera viSta 'patrece centtat" me se preocupa pOl'.
como pu.ro )soqlo.rfisnlo. ~I conocim. ien es,~efinido aqui por cl sistema de Jal>, hmciones que. ~r,.J"~'. t;~noceren un nivel Ja mi.srn4 "organiZ3cion. (~l '.et;~ ~;'o~fo. Y experimentar .Q.Sl la invarianeia de [cieJ'tas ·Ii :~gn~ sO!l ~s ~tucturas q~eeombina~iones "planas" ,~~,p1£ll)entos dlStmhvos.. EI. marJoSilllo anal6glco' .es un mat' ~qde;:Ja .identidad. Bajnsu forma mas' groset~, vincula :~t~8mo totalitario, del que posee ta rigidez 'mecanicista al mal'lismo. fundamental, del que reStaura, con el pretexto ~, •.tulidtid'de prineipiode las figuras, la transparenda. es cJ~itjluilt.~Baj(}su forma ImlS refinaua, no evita stIbstitllir la ~enmcf.a inuefiIlida de' cu~stiones' pre-dadas, somctidas ,,8 ~;recijrrehciade riivdcs mas 0 mcnosisomorfos dela tota ,~ial'1enlllgal de la constitud6n problem~ticade un :fHJ~-c()n()cimiento. AlIi donde dcberla prcsl)Jllarse, dcn "Jcln.,otd~n mismo del discursQ dave ue la , .. , . . . . . # la euesti6n .. ' . " .c~~(fcsfru.ctw:al, c~ dedr de la cficllclaesp(Jdlica, de una ~~~~~ur? ,s?hre~s ('lempntos,debclUl)s contenlaruos cpn un ~~mOl jL'f(Lrqt)ico dn pareddosy dih;!n~o(,:ias. De tml{) dlo j~sqlta.l una :ulnlteraci6nrctroactivll dc'los elementos tt!oriCJIt .w~~in~C)r[l()rados a In C()IlSt~'ucei(,o, pmqlle,. si IIcgauu oell ~'e. lugar flue les.asigna la descril}citJn ~JtI las cmTI'SpOn :.u~!JJcias, t'S(JS clcJll(mt os so trlmslorlllan en re,~tiltacl(}8 U(!svin ~Jadpsy' a su vcz iuncionan ~, partir de alH e()JIIO simples &lldiu(()s( uescdplivos.
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.Alam Badiou
La principal importallcia de la obra de, Altbusser consiste en reconstruir bajo nuesb.-os ojos el lugar comun de eso que en 10 suces~vo y ~iguiendo el ~jemplo de Marx, llamaremos las variantes del marxismo vulgar. Se: .trat& alli tambien .del des cubrimiento de: 10 que esas yariantes no dicen, o 'sea del siste ma de supresiones que constituye, por encima de su antago nism.o aparente,. el secreto de su. unidad. . El e£ecto. propio del m~mo vulgar as la desapariciOn de una difere'llCria, desaparici6n realizada en el abanico COm pIeto . de sus instaI)Cias.· , . . . . La forma aparente de esta diferencia suprimida, su forma de presentaciOnen la '. historia. empirica, es la antigua cues ti6n de las reJaciones' entre Marx y Hegel. Las variantes del marxismo vulgar tienen 'en comUn 10 siguiente: engendran la CfJesti6n de esarelacwn en funci6n de las variantes de' una respuesta Unica donde se afir'ma en todo caso Stl importancia e$enctal~ Los oonceptosde "inversi6n", deoposici6n, de reali zaci6ll, etc.,llenan sllcesi'Vamente los lugares posibles, asig nados originariamente po:r.la esenciaJidad de la relaci6n. Y, Como. 10 .pretende,la siempre msponibledialktica de los mar .xis.mos vulgares. tod"1 negaci6n aparente .de la continuidad Hegel-Marx produce la forma refleja de suafirmaci6n. Los primeros text.:>s de Althusser estanconsagrados sobre todo a desEmtrafiar la diferencia e.scondida. Restaurar la dife rencia sigpifica ,mostrar que el problema de las "relaciones" entre la empresa te6rica de: Marx y,la ideologia he:geliana 0 post~hegeliana es, en rigor, insoluble, es decir informulable.8 Informulable precisamente porque su formulaCi6ri es el ges to que recubre la'dif('rencia, diferencia que no es ni una in version, ni un conflicto, ni un prestamo de metodo, etc., sino una ruptura epistemo16giea, es decit la constrncci6n reglada de un nuevo ob;eto dentifico cuyasconnotaciones problema ticas rio tienen nada que ver con la ideologia hegeliana. Muy Jiteralmente~ a partir de los anos 1850, Marx se coloca en otra parte, alIi donde ·105 cuasi-objetos de la filosofia hegeliil' na y sus formas de vincularse -Ia "dialectica"- no pueden Sel' ni invertidos ni criticados,por la simple raz6n de que no los reencontramos mas,. que son inhallables, a tal punto que no se podria proceder ni siquiera a su expulsi6n· puesto que eJ
~f6Jcomlenzo del materialismo dialectico
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';Iiest!NlCiO de ,Ia ciencia se constituye con sU amencia radical;& }a:. ruptura produce de maneraretrospectiva lil er-resJjeeialidad de la ciencia, aquello de 10 que segun nos epistemolllgia Ia ciencia sesepara.' el descubierto de la ciencia podemos tratar de locali "borde" de la ruptura,10 el Iugar idool6gieo donde S6 .:Wtque~ bajo la form';!. de un I'espiiesta sin pregunta, el ne ;~fe.attOli.eambiQ de tPrreno. Solamente,en paginas notables I; 11-31') ., Althusser· ha' determinado' darallteD.te· el'otro' . ~~o (Ie, Marx, y' no se trilla de 'lae~eCt1Jaci6ri hegelia de la· economia clasiea de Smith y de Ricardo.' ~,fttamos f~nte a una casualidad: una ohm dejuventud ..wlonad& constantemente por el marxismo '. fundamental ,.tibila Critica de In filosofia del Estado de Hegel; la obra deDt fffca, Et capital, tieneeQmo subtitulo: critic a de 'Is eeo ',.~ .politica. Prod°Jdendo los coneept6s de una disciplina '~l.1'Rente nueva (lllciencia de la historia), Marx no soIa , ~ \abandon a el (~spacio de la ideologia hegeliana; sino "',,hpuede decirse 10 cambia porOfro: esa otra parte en que rif,,~loca noes 18 patria hegeliana. De esta manera' Marx; con I~t()·· a las ideologias post-hegelianas, se manifiesta en eJ::rJieclw radicaldesu ser-otr().' " ., ~!Jl;a:' 'Simple consideraci6n te6rica de cste hecho: Marx fun dGlQila 'nueva ciencia, nosindieala diferencia conceptual an ~t1a~'lmal:toda disimulaci6il de larnptura hist6riea, por"un ef~l defivado, 'rea1iza III supresi6n:' Est&. diferencia eseri cial, interior esta vct: al proyecto te6,ieo de Marx,' y e,n la' gift!' 'la~diferefidaHep:ell ,Marx eS'la evfdencia hist6nco-em ~, 1!s' la diferenc ia de' Ia ciencia marxista (el Jllateri~1i!; ~<;hist6ricb) y dela dfsciplitlO. en Ctl!lo interior es posible "?'a~cho, enuncia" la cientifiddad de eStadencia. Althn~. rwfUama a esta segur..da disdplina. confoimc a unatradid6'l' pl'C!hablementediseutib1e, materialisTIlo 'dialectic/), y la !lC ~da generaci6n de sus textos .esta .centrada en In distincion
>1;: '. ·'IPu!a faaUtar 18 utUizaeion de"los textos de Althusser utllizattlos bw;.". ;1IiOt.Je.".te .. 8 nemenc.Il!.turas: .. (LC. I .LiTe.. l.~.Caf)ital., M.aspero.; Pl! rts.:19~;. JltTM) La Tevoluc~6n teOTlCa, de. MUT.t r,. Slglo XXI. Me-. xteo;1967'y (MH· MD J Mnterialismo histOTico Yl'witeTinliS;1llo dia
uetleo, traba;lo .inelufdo en et' presentc volumen IN. 'del E\.'
14;
,Akrin. lJadioa.
~o del materialismo dialec:tico
}L de, mate1'ialmmo dial&'!tico, la teona de ",de S11 difereti.~ia, clesu complejidad, ;~~~a..por 'el eSpaciaxnientb de los termi ,j~:.re~'l~41'~~ tiemP.o,J~ qlasificaci6n siste
Mat~rialisn;:t.() ... hi~6rico- Materialismo
diqJectico: dis.tinci6n; ca pjtal,auDql}.fl mas; J:lO ,.sea dentro. de.la .~rategl;L te6rica,. que A,ltbusser, no pierde .lamas de :vist;!, Las~arlantj:Js (del mar nsmo vulgar se e$pecifican. en., efe¢to,~n lo~ diferentes prQ!:!edimientos ,de .• d,e.<,aparicioode estadUerencia:. ..-:-El. m~smo .fUI\dapwnta} ba.ce entral' al materialisrno dia-. lectico dent:r0del materialisma hist6r ico. ElectivaB.'lente,. con sidc::ra JaQbra de. ,Marxcon,lO una .antropolgia dialectiCcl dpnde .la. ~~OJ:lcidadd~~ "uD$ . ca~ori~ik lundadora y no un conc~pto cops~id(;)., Destr~yendo deesta manera 131 concepto de historia, 10 ampHa a las ,dimensiones, .nocionale$ d,e un IIJIed~o , tPtal,iza!1te ,en el que ~a reflexiOn de. las estructuras, ,su "int;eriorb:aci~n"." es un,a £unci6n mediailora de las estmcturas ~mas.u ,', ;', '. . , "7:lnversamente, al marxismo totalitariQ haee entrar al mate- Iialismo. hist6rico ,dentJ:O del ma.terialis~ dialectico. En efec to,trata, alacontradicci6n,'CODlouna ley abstracta valida pa ra cualquier, opjet()j y consi,dera· las contradicciones 8structu-. rales, de. un modo de prod~ci6n. determip.!ido ..cQmo casos, par tipu~ares $ubsumidos bajo la uru.versaUdad de la ley, Enesas c~mdic~ones, los procedi,mientos de copstituci611 del objeto ,es pecifico del materialismo hist6rico son StIPI;imlQ9,S.· y lQs "re sultados" de Marx. :incOl:poradQS a una sf~tesis gloQalque.no PQdrfa. tI:aI,lSgr.e,d4: Ja regla, ,otor~do a 10, inIaginariotqda a~unci6n Q e I a TotaIidad! Extr,uia. Jllet€:JlIP1licosis .de la q1.ff.l M~ sale dis£~dq,coIllasotana,."c6sJllica" del Padre T~lhard... ' , . . ' , .... :T'~l JlIat~1ismo '~ruJI6gico, finalmeQte, ¢stablece, entre el ma~erialismo hist6rlc::o y el ,materiali~o, dialecticq una ,rela ci6.n d,~ COtrE\SPond~nci~ q1!:e, y~pone los qOS terminos, sien. do la ·filoBofia . marxista a cad~ ~ant;e el doQk estruc«tral de un estado ,dado ..en.la formaCi6I); S()CiaI, y ~yparticular mente, de la forma, objetiva {l~' la ~elaci6n de ciases.: .' La. determinaci6n c!~unQ. de 10,& telVlinos ppr J'l otr()~ ,~ pura' redundancia, tales son los tres procedimientos generales de p11rlficaci6n de l~ diferencia., Perocomo 10 bare notar con toda fuerza }a.cques'Derrida, una difereI"lci.a pmificada' 8610 esla derrotade utla i'dentidad.Toda difetenCiaauten-' fica eS imfrurlli12 l~. preserv:aci6n'de (os con.ceptOs :~, nWI~
15.
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de las variautes del marxiSmo' ,vulgar: Y esto no es
~.de~ ·Ja~duerenc~·del materialismo hist6rico- :ydel
~alWno: ,iriaIeCtico ....10&. designaremos .en adelante:: MH 1'~ ~,la .extens.i6n d.elarevoluciOn: ,te6rica mancista:
.~.~:lmid_61ide ,la' diencia dB' la hist~ia,estarevoluci6n ~tlltdiO'l61oico t'Il:el devenirdel S8.~,JafundaciQn:de ~~a,,;abiolutam~te' nueva,' de. 'uwi filosofia «que" ha·
1)ecbo, ,pasar la filosoffa del estado de ideologfa al estado de dillaiplilfd 'cient~ i( Mill'>' MD,.l13.), de tal manera .que ]a ai.'tii.etMm!sei pt6SeDta, eoll1O 'Una· doble fundaci6n en una sola roptura.O mas blen: una doble ruptura.enuna SQla£un~ ~;;::,
~~.
>':~i.
Distinguir claTamente el MH y el MD, la ciencia (dela hliIdodarp'" ;la. oiencia de·la cientificidad de ·las oiencias, .es .~ .14 .lJII1ditla ,de, Marx yen. consecuencia asignarle' su ~d"P";LSU doPle funci6n -,-cientifica y c~ntlficj)-fUos6£i~ ~•. ~p:o ~;#,. c!JY,'unturaintelectual compleja en Ii\. .que se~~9lf1~e. ~~llestr~,prQpia ~a la iQeolRgla pominante .!tL~J~nu~: .. ~J)de~1jsmp' f~noI)fenol?gico,' .' . ,~~: ~a manera. a.su c~I?-texto, estrate~co.. la obta' Ge AlthusSer puede ser recorfida en el orden de sus ra-. zonaJlliento~. No se trata aqul de contarla, ni. de eorurontarla a:;~'t&r~ @~eDtes ci a un concepto indifere~dadode 10 ~~\sttro !'#s"''bien cIe replegatla' sobre 'sl' misma, .de hacerla ~~V~J.taBt&quel teorla,lIegrnfltis;con,cePtOl, metate6ricos ~'Jlri:Kllit\e;;tde'6xaminar si obedece a las :regIas que sd
16
'AlaIn BIJ.J.iot,
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-,urae1onaUJrDo esuna filosotja que DO, ne ~,eoJDieD1.o: ,e1 r~onalismo perteDe~. al orden Clel recomietu:o. Cuan@ Ie 10 define en una de 'Sus· 'operaclones. baee,mllcbo qUe' bll reo eOmemado". c. BAcitItI:..UD. lie' ractoMlilme Gpo PHQl.Ci~'P.' Ill. '
Podriamos. tratar:.·de 'preceder segUn ladifeiencia .inaugural que desdobla,la revoluci6n marxista, y distribuir los P{Q b1emas ,en Qos,registros: lacontribuci6n .de Althusser1. alma. terialismo histOrico 'pm- una pSrte:. yal matetialismo! dialecti co'por 1a otra. Digarr-os.'de eDtrada!,que serfa,entonces,Qisj molal'. ·10' esencial. 1a impureza.-eomplejidad . "de' ·,Ia c:lifemncia. Efectivamente:. a) La distinci6ndel MD y de1MH: uinterior al MD, cosa que vuelve vana toda.· simetria, :toda" distribucian analftica de los problemas. , b) lPodemos verdaderamente pronunciar aqui el discurso te6rico del MH? ' o bien, narramos eUpticamente esta, ciencia y cacmoS asl en la trampa que nos hace decir justamente aqoetlo que la obi-a" de Althusser se propone no dejarnos dedr:.· determinan- ' do 61 tharxismo' como iristauraci6n de una ciencia, AIthussM' nos recuerdaque es'impoS1b1eorlentarel'd~ane de las prue bas hacia. resultad
oor
t!dmid6n, .del MD. Del MH, soJa podcmos exhibir aqui 10 que ocupa un lugar
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".:(r8~ZO del materialismo dialectico
17
MD. Nuestra exposici6n sera pues, enteramente interior .lMD, incluldos los dificiles problemas del status tOOrlco del mismo MD, abordados al final. c) Y sin embargo, de conformidad con 10 que seria nece sarlo Hamar la paradoja de la doble ruptura, el MD depende del M H, con una dependencia te6rica aun oscura: no sola .1aente porque el MD puede producir el concepto de las "nu& vas fermas de racionalidad" sQlo a partir de la consideraci6n de ~iencias existentes, alIi donde, segnn una enigmatica expre- $l6n de Althusser, esas fonnas existen "al estado pnlctico"; sino ams esencialmente porque a difetencia de las epistemologias fdealistas, el MD es \1Oa teorla hist6rica de la ciencia. EI MD es "h teoda de la ciencia y de la historia de la ciencia" (LC II, 110). Lo que ocurre es que en realidad no existe otra Warla de la,' ciencia distinta de Ia historia te6rica de las cien cias. La epistemologia es la teoda de la historia de 10 te6 rico; ·la filosofla es "la teoda de la historia de la producci6n de los acontecimientos" (LC I. 70). Y es asi c6mo la ftln~ daei6n revolucionarla de la ciencia de la historia, en tanto haee posible una historia cientifica de laproducci6n de los aContecimientos dent ificos, produce tam bien una revoluci6n filos6fica, sefialada por el' MD. 15 'Vemos pues hasta' que punto ladiferencia del MD y del MH es no distributiva. Tenemos aqui una diferencia no dife renciante originalmer.te mezclada: impura. La. intrincaci6n del MD contodaslas ciencias,pero sobre todo con el MH, no pimefin a la autonomia del procesode conocimiento cienti fico.,· Sin embargo constituye esta autonomia, ese retiro, en forma'incluso de presencia en el Seno del MD. EI MD se rnantiene, si podemosdecirlo asi, "al ras" de la ciencia, de manera' que la {alta de 1a ciencia, el silencio en que su discur so es' mantenido a uistancia, es la c3rencia determinante de Ia epistemologia, donde esta' ciencia esbl constantementemen clonad.a en·, $U ousenci.a, ya que el conocimiento de 1a cienti ficidad es tambUm cr-nocimiento de Ia imposibilidad especi fica de lln relatod'e iaciencia, conocimiento de la no-pre Fencia de la ciencia en otra parte que en ella misma, en el producir real ae: sos objetos. Interior al MD, nuestrapuesta a prueba de los conceptos de· Althllsser estara estructurada
Alain Badiou
18
no obstante por la inmanencia a1JSente del MH, figura de 1a carencia que sigue siendo la suya.
•
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Por razones que inln apareciendo a medida que avancemos, ordenaremos el amllisis alredcdor de dos diferencias: la de la c~encia y 1a ideologia, la de la practica determinante y la practica dominante. Hablaremos pues sucesivamente de la teorto del discurso y de la teoria de la eausalidad estructural. I -
CIENCIA E lDEOLOGlA
De la definici6n del MD (disoiplina en la que se enuncia la cientificidad del MH), resulta inmediatamente que el con cepto que determina su campo es el de la cienda. EI MD no podrfa exhibir sin duda la identidad de la ciencia en un "'mi rar" que no se puede dcscomponer: tambiCn aqui la primero es la pareja dJferenc:al cienda-idcologia. EI objeto propio del MD, es el sistem:). de las diferencias, pcrtinentes que des vincula y une a la VPZ la ciencia y la idcologia. -Para caracterizar en principio groseramente a esta pareja digamos que la cienda es la pd.ctica productora de conoci mientos, cuyos" medi'J3 de producci6n son los eonceptos; en tanto que la ideologia es un sistema de representaciones, cu ya funci6n es practicfl-social, y que se auto-designa dentro de un con junto de nociones. El declo propio de 1a ciencia "efedo de conocimiento"- es obtcnido por Ia producci6n re glada de un objeto csencialmente distinto del objeto dado y distinto incluso del (Ibjeto real. En cambia la ideologia ar acula vivido, es dedr no Ia rclaci6n real de los hombres con sus condiciones de existencia, sino "la maneTa en que vi ven [los hombres] iU relaei6n con sus eond,icioncs de exis lencia" (RTM. 194). En consecuencia la ideologia produce un efedo de rBeano chniento y no de conoC"imiento; para hllblar como Kicrkegaard, es la relaci6n en tanto que me esta relacionada. En Ia ideo logia, las condiciones presentadas son re-prescnladas y no co
w
,".dle~ZO del materialismo dialectico
19
La, ideologi~ es un -proceso de redoblamiento, intrin -aunque misteriosamente, al menos en el estado <~,~~nuestros conocimientos- vinculado a la estructura _~. ,de la fantasla. 16 En cuanto a 1a funci6n de _!~blamiento, consiste en intrincar 10 irnaginario y 10 uIW. forma especifica de necesidad que asegure el electivo, por hombres determinados, de las tareas "al vacio' por diferentes instancias del todo so
",,_ia: mencia es un
proceso de trans/of'1'1UJCiOn, la ideologia. que 10 inconsciente viene a constituirse y arraigarse un, proceso dp, repeticiOn. de que la pareja exista primero, y no cada uno ,.Jos teJ;minos, significa -y esto es capital- que Ia oposici6n ~logia no es distributiva: no permite tepartir in "J;Ke las diferentes practicas ydiscursos, menos atm -, ~r" abstractarrente la ciencia "contra" la ideologia. 4,,~ verdad, la tentaci6n es demasiado evidente. En la ~da PuHtica. y hente al relajamiento te6rico del P. C., ~,fEemos el riesgo dt'. hacer funcionar la pareja de oposici6n i}Qmchuna norma, y de identificarla a In pareja (ideol6gica ) JerQa
20
"p""
Alain BadzOfJ
a) La ciencia .es Ciencia de la ideologta. Aparte de repetir que la ciencia es ciencia de su objeto, cosa que es una pura tautologia, la pregunta «dDeque es ciencia la ciencia?" no admite otra respuesta que: la ciencia produce el conocimien to de un objeto cuya existencia estll. indicada por una region determinada de la ideologfa. ' En efeeto, Jas noc'ones de la ideologia pueden ser descrip tas como indicadores 17 sobre los cuales operan £unciones de vinculacion. EI sistema vinculado de los indicadores re-produ ce la unidad de las existencias en un complejo normativo que legitiman los datos £enomenicos (eso que Marx llama la apa riencia). Como dice Althusser, laideologia produce el sen timiento de 10 te6ri::o. Lo imaginario se anuncia aSl en la relaci6n con el "mundo" por una presiOn unificadora, 18 y la funci6n del sistema global consisteen proporeionar un pen samiento legitimamente de todo 10 que se da como real. En estas condiciones, esta claro que esen el interior mismo del espacio ideologico donde seencuentra producida la designa cion de ·'los "objetos reales" de los que la cicncia prOdu(~e el objeto de conocimien~o, came por otra paTte, 'la indicacion de la existencia del propio ob/eto de .conocimiento (pero no el efecto de conocimiento quc induce). En este' sentido, la ciencia aparece siempre como "transformacibn dc una gene Talidad ideol6gica en una gcneralidadcicntHica" (RTM, 153). b) Reciprocamente, la ideologia' es siempre ideologfa para fAJ:Ia ciencia, El mecam.mw ideol6gico de la dcsignaci6n totali~ taria Y'·normativa d9 los existcntcs· s610 es descubierto (co nocido) porIa regi6n cn la que estlm designados los existen tes 'de una ciencia, ec; deck los objetos rcalcs para los cuales una ciencia realiza la apropiaci6n cognitiva. Sinduda podc~ mos designaT formalmente comoidco16gicos a numerosisimos OisCUI'SOS. No dejamos de hacerlo en la practica poHtica. Pero precisamcnte porque es una designaci6n; esta evaluaci6n es ella mismaideo16gica. Los unicos discursos conocidos como ideo16gicos, 10 son en la retrospecci6n de una cicncia. Ma.rx s6lo nos ha dejado la teOrla dcsarrollada (,incluso de bi6 consagrarle todo cl libro IV de El capitall) de' una sola ideologfa: la ideologia economka, divisible en cconomia dB.
del materialismo dialtctico
21
"en el borde de la ruptura") y economfa vul propiamente dicha).19 Ocurre que 5010 ba ~El capital conceptos cientificos regionales -los instancia eeon6mica- en cuya retrospecci6n 5010 podia esta ideologfa. Se mideasi la. complejidad de las Ie entre la ciencia y la ideologia, su movilidad organica. ~ deci." que el MD llega a su, apogeo en este 'In~~ dc6mo per-sar la articulaci6n de Ia ciencia y de =,~ no ,10 es, preservandoal mismo tiempo laradicalidad ."" 'Ae 1a di£erencia?~C6mo pensar la no-relaci6nde 10 "'f~ doblemente relacionado? Desde este punto de vista ~'P~ clefinir el MD como la teoria formal de las; rupturtJ8. )'~1J.0 problema ocupa Iugar dentro de un contexto con ceptual mas vasto, qut: concieme a todas las formas de ar ~~Il y de ruptura entre instancias de uua formaci6n .'(,:SOOOlOglii
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T-'
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.;ll"CAt1SAL1DAD
ESTRUCTUBA.L.
;¥~ a tratar de ser tanrjgurosos como sea posibIe, aun ~~,.de no dar cuenta mas que de una parte del esfueIZo de. Altbusser. ,.A~, tOda construcci6n deconcepto, el conocimiento del :'~anismo .de producci6n del efecto de sociedad"', objeto ,PWPlO slel MH, (LC, I, 84) presupone (invisiblemente ) una :t~ia general.
zH. ciencia es en eJecto un discurso demostrativo relacio . , en 10 que haca al orden de sucesion de los conceptos, . pon una sistematica combinada que los jerarquiza "vertical ~te". La analogia bnguistica nos haria deeir que el proceso ~ exposicwn en que s~ manifiesta apodicticamente el objeto ~~, la dencia es el sintagma de un paradigma teorico: 1a "es ~ de organizaci6n de los conceptos en 1a totalidad-de ~miento 0 sistema" (LC I. 81).20 POI ejemplo, la demos traci6n de Marx relativa a la ley de caida tendencial de la lasa de beneficio aparece 16gicamente subordinada a cons ttuc.eiones conceptuales "anteriores" (teoria del valor, cons~ tnJcclOn del concepto de plusvalia, teoria de ,la reproducci6n Simple. etc.). Pero csta .subordinaci6n diacr6nica remite a
22
.Wt't)comienzo del materialismo dialectico
Alain Badiou
un conjunto sincronico complejo donde ElDcontramos: 19) un sistema vinculado de conceptos que tienen'leyes de combina cion, 29 ) formas de orden del discurso que organizan el des pliegue que prueha d sistema. La teona del efect'l de conocimiento tiene por fin ten'lati zar la diferencia-unidad, el "decalage"" (LC" I, 87) entre e] orden de combinaci1n de los conceptos dentro del sistema, y su orden de presentaci6n-vinculacion dentro de la discur sividad cientffica. T ooa la dificultad del problema se centra en el hecho de que el segundo orden no es deninguna mane rael recorrido del primero ni su duplicaci6n, sino suexisten. cia detenninada por la ausencia misma del sistema, y lain manencia de eeta allsencia: su no-presencia en' el interior de su propia existenc:a. Esto equivale adecir que Ia explicaci6n del sistema no po dria ser el efecto dd discurso ( cientffico ), cuyo funciona miento requiere predsamente la no-explicitaci6n de la combi nacion "vertical" que' hacc existir. En consecuencia, la pre sentacion te6rica del sistemo. de una ciencia no pertenece a esta ciencia.21 De hec:ho, la presentati6n del sistema del MH, Ia teoria del tipo especial de causalidad que exhibe co mo ley de su objeto, no pertenecen a] MH y no pueden per tenecerle. Los tenos fundamenta]es de Althusser sobre la estructuracon dominante (RTM, 132 - 181), Y sobre el db jeto de El capital (LC II, 127 - 185), tampoco pertenecen al MH, sino a1 MD. E3'l'l conceptos se despIiegan en el MD se gun Jormas de sucesi6n diacronieas, el1as inismas vinculadas cd si.tJtemo. (aUS6nt~) que puede ser indicado' como e1 gene;'al, c] sistema dd MD, 0 Te(~da. ' Consideremos pues ]a oJ'ganizaci6n sistematica de los con ccptos del MH tal camo la produce' e] MD. Esta organizad6n comienza por darse palabras primitivaS, es. decir nocioncs no definidas que sen'm transformadas en coneeptos por su vinculaci6n ""axiomatica" dentro del sistema.
mas
"'DecaZage = despla'7.amienta en el tiempo y el espacio / Modi ficaci6n de la posiei6n do<: un 6rgano filo en relaci6n con uO' organo movible I Figuradamente quiere dedI", distancia entre doscosas: entre el pensamiento y su expresi6n por ejemplo - (N. del T.).
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Dociones elementales estan reunidas en la deHnici6n de] mas general del MD: el concepto de prtictica. :1BiIII';.1I)!flttic·a en:general entenderemos todo proceso de trans de una materia prima dada determinada en un determinado, transformaci6n efectuada por un tra '/_,l~humano determmado, utilizando medios (de "produc determinados. En toda practica aSI concebida el mo J1ilenttr( 0 el e]emento) determinante del proceso no es ]a ma ~prima ni el producto, sino la practica en sentido estricto: .~;biomento mismo etel trabafo de transformaciOn. que pone t1II&illll:Ci6n, dentro de una estructura especHica, hombres, me ~'Yun metoda b~cnico de utilizacion de los medios" (RTM,
.,.,
,
~De, hacho, las nodones' primitivas son: 1) fuerza de tra lajb, ,.2) medios de trabajo, 3) formas de aplicaci6n de Ia ..... ,a los medias. Los dos extremos, (materia prima a la eabada y producto ala salida son s6]0 los lfmites ,del pro ).: ; Una combinacion {','lpeci/ica de esos tres tchminos, pensa .~mI suestructura propia "que es en todos los casos la es blWtura de una prodcccion" (LC I, 74), define una practica. (iPQr" 10 tanto, elprimel' coniunto construido de esta manera ~:!lalista de las pra-;ticaS. Althusser ofrece varias y la mayor ~, abiertas. E] segmento invariante de esas listas compor ttf::;1a practica econ6mica (cuyes limites son la naturaleza y ~)J.lroductos de uso}; ]a practica ideo]6gica; ]a practica po .unCi';' la practic'a te6r~ca. ·~.l>!>a::ir' que el concepto de practica es el concepto mas ge ~rdelMD (su primera combinaci6n reglada de nodones), - ~h 'que en el "todo social" s6lobay practicas. Todo otro :o'pretendidamente simple no, es un objeto de conod Il!iento, sino un indicador ideo16gico. Es decir tambilm que li:C:g~~raIidad de eS'1 concepto no perlenece a1 MH, sino ~l~~lilt~ a] MD, la practica no existe: "no hay practica en gc:lIl~ral: sino pra,ctica ~ distintas" (LC I, 73). Debemos enten dm-; :,~,historia, tal como es pensada por el MH, S910 cono <:e.practicas determinfldas. .'~ esas' coIl(liciones, ]a Mica "totalidad" concebib]e es
..
24
Aloin Badiou evidentemente -Ia unidad compleja de practicas que existen en una sociedad dada" (RTM. 136).
cwil
Pero e es el tipo de unidad que articula las, diferentes practicas unas .sobre otras? Convengamos en principia en· Ilamar instancia de una for macion social a una practica en tanto que articulada sobre todas las otras. 22 La determinacion de la autonomia dne rencial de unas instancias con relacion a otms, es decir Ia construccionmisma d:~ su concepto (10 que hace que se pue da hablar de una histotia de la ciencia, de una historia de la religion, de "10 politico", etc.) es al ·mismo tiempo la deter minacion de su articulacion Y de su jerarquia en e1 interior de una sociedad dada. En efecto, pensar las relaciones de fundacion y de articulacion de las diferentes instancias, es pensar "su grado de independencia, su tipo. deautonomia 're Iativa'" (LC I, 74). Una instancia esta enteramente de£inida por la relaci6n espeeifica que sostiene can tadas las otras: 10 que "existe" es la estructura articulada. de las instancias. Solo queda desa"ollar su conocimiento. En la asignacion df· lugares determinada de esta manera, para un estado de una sociedad dada puede existir una ins tancia privilegiada: III instancia cuyo concepto es necesario para pensar la eficar:w efectiva de las otras. 0, mas exacta
mente, aquella a partir de la cual, para una "estasis" dad~
de un todo social, se pued~ recQnerrac~onalmente el sistema
completo de las instancias en el ord~n efectivo de sus clepen
dencias de eficacia. Convengamos en lla'IDar cOYtlntura al
sistema de las instancias en tanto que pensable segun e1 re
canida prescripto PO! 1~ jerarquias m6viles de las efica.cias.
La coyuntura es antes que nada la detel"minaci6n de Ia ·.ins
tancia dominante, cu)-a localizaci6n fija el pu.nto-de-partiiUJ,
del analisis racional del todo. La primera gran tesis de MD -considerada aqu! como epis temologia del MH-, plantea que el conjunto coyuntural 0 di cho de otra manera, que e1 "'todo complejo posee la unidad de una estructura articulada can dominante" (RTM, 167). Ahora, es evidente que la coyuntura cambia. Queremos de cir que )a coyuntura es e1 concepto de las f01"1na8 tk exiaten cia de) todo-estructurado, y no e1 de la variaci6n de esas for
del materialismo diaIectico
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colocarnos de entrada en la hip6tesis maxima, po- , admitir que si un tipo coyunturat es definido poria ins que ocupa "el primer papel" (RTM, 177) -dominan 'pensable cualquier Hpo coyuntural: coyuntura con do- poHtica (crisis en el Estado), ideol6gica ( combate como en el siglo XVIII) , econ6mica ( gran , cientifica ( ruptura decisiva, como la creacion de galileana ), etc. A partir de aUi. 10 importante es de 10 invariante de esas variaciones, es dedr, el mecanis de produ.cciQn del efecto-de-coyuntura, que se confunde, otra parte, con el efecto de existen€ia del tooo. en Hamar determinaciOn·:a la producci6n de
efecto. Se notar-i que la determinaci6n se de£ineexbaus
por su efecto~ el cambio de la coyuntura, e:1 mis
identificable con el desplazamiento de la dominante'cPe
~tcual esla eficacia de Jaque resulta el desplazamiento? ... • !.iUna observaci6n previa: en todo caso; no es en las instan cias, 0 practicas pensadas segUn· ·sus relaciones completas con tooas las demas· instancias, en donde podremos encontrar el secreto de la determinaci6n. A nivel de las instancias, solo existe la estructura Ill'ticulada con dominante. Creer que una instancia del todo determina la coyuntura, es confundir ine vitablemente la determinaci6n (ley del desplazamiento de' la dominante) y Ia dominaci6n (funci6n jerarquizante de las eficacias en un tipo ('oyuntural dado). Tal es en S\lmala lafz de todas las desViaciones ideol6gicas del marxisrno y en e'lpecial la mas temible de tadas, el eco nomismo. Enefecto, e! economi!lmo pastula que la economfa es siempre dommante, que todo es "econ6mico". Es cierto que una instancia econ6mica figura siempre en el todo· articu lado.Pero puede 0 no ser dominante: dependede la coynn tura. La instancia econ6mica no tiene ningun privilegio de derechm Si ninguna instancia puede determinar el todo, es posible en cambia que una practica, pensada en su estructura propia, estructura por asl rlecirlo desfasada [decalee 1 en relaci6n con la que aeticula esa practica como instancia del todo, sea deterrninante frente a un tododentro del cual £igura bajo fonnas descentradas.Podernos imaginar que el desplazamien
26 Alain Badio1l.
to de la dominante y la distorsi6n correlativa de la coyuntura es el efecto de 1a suhyacencia, en una de las instancias, de una estructura-de-pra('tica en no-coincidencia con la instan cia que Ia representa en el todo. Podemos imaginar que uno de los terminos de la combinaci6n social (termino invariante esta vez) realiza en :,u propia forma compleja:. elrecubrimien_ toarticuIado de dos h:nciones: la funci6n de instancia, que 10 relaciona con el toclo jenhquicamente estructurado; la .fun ci6n de practica detr.rminante, que se "ejerce justamente,en la historia real, en laspermutaciones del primer papel entre la economia, Ia politica y Ia teoria, etc." (RTM, 177), resu miendo, en el desplazamiento de Ia dommante y la fijaci6n de Ia coyuntura. Unll pnlctica semejante, como la naturaleza espinozista, seria a 1a vez esuucturante y estructurada. Es tada colocada dentro del sistema de Iugares que determina. En tanto que determinante permaneceria sin embargo "invisi ble", no estando in'esentadaen la constelaci6n de las instan cias, sino sola mente rE::preseBtada. 23 Tal es, abruptamente esquematizada, la segunda gran tesis del MD: existe una practica determinante, y esta pmctica. es 10 practica "econOmica" (mas exactamente: Ja pmctica cu y06 limites son Ia mt uraleza y los productos de usa) . Estemos .atentos, porque el tipo de causalidad de la deter mmante es tota1ment~ original. En efecto, pensada como prin~ cipio de la determin&ci6n, Ia practica econ6mica no existe. La que figura en el t0do- arti culado-con-dominante (unico exis tente efectivo), as Ia instancia econ6mica que no es la repre sentante de lapractiQ:ihom6nima. ,Ahora bien, esta represen sentc'Ulte esM 'ella misma, tomada en Ia determinaciOn (segun que la inst£Jncia economica sea dominante 0 subordinada, se g{m la extensi6n,prescripta por Ia correlaci6n de las instancias, de su efkacia coyuntural, etc.). La causalidad de Ia pnlcti ea econ6mica es causalidad de una ausencia sobre un todo ya estructurado, donde aparece n:ipresentada por una instancia (LC II, 156). . EI problema de Ia causalidadestructural, problema de
'}comienzo del materialismo dialectico
27
de la "determinaci6n de una estructura subordinada estructura dominante" (LC II, 167), se encuentra de tnanera colocada en Ia forma que Ie asigne el MH: uni descentrada entre la combinaci6n de las instancias - "es de desigua]dad' con dominante especffica del todo siempre- ya - dado" (RTM, 180)-y ]a determina de ese todo -"proceso complejo"- por UIill:l..Il:il represent ada pero sin otra existenciaque Ia de
~a
problema, que segun A]thusser "resume ( ... ) el prodi \ descubrimiento cientifico .de Marx ( ... ) como una ex inaria cuesti6n te6rica contenida en estado practico en. el .. titflIa.zgo cientifico de Marx" (LC II, 167), este problema de dfmpos, esta lejos de ser resuelto., Incluso no es seguro que es f~os en condiciones de plantearlo (te6ricamente). tal' vez ~r el momento s610 podemos !ndicarl(). Y esta. indicaci6n sin ()iIda debem tomar la forma mesperada de una lectura de Spinoza, para transformars'e en el objeto de conocimiento que Ii su vez indica. 24 De todos modos el progreso ulterior del ~ depende de la soluci6n opor' 10 menos del p]anteo del problema de Ia caus..lidad estructural.
..
(I
..
Es men ester insistir linalmente en los "elaros" principa]es de la' empresa, .aqnelloscuyos efectos deformantes sobre e] texto I1lismo s()n' localizab~ef,eri los, nive]es. que hemos. distinguido (diferencia inaugural entre 1a ciencia y la ideologia; teoria de la causalidad estructura]). Esos elaros pueden ser menciona-, dos con cie'rtarigidez bajo la forma de dos preguntas. a) dCual es el status trorico del MO mismo?' b) cLos estructura~ donde se ejerce la determinacion, es bin deUnidas sobre conjuntos? En. caso contrario, dPuede con cebirse rea]mente 'lIn"!. combinaci6n sin tener el concepto de un "espacio" de los lugares, y sin especificar, por su capaci dad propia de, QCupa,-distribuir lugares, los elementos .com binados? . .
iIfiI.1cmnienW del materialismo dialectico
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Alain Badiau
La cuesti6n del status del MD no puree plantearse sin men cio~ la segundap-regunta, porqueella pone en juego los enigmas de la representaci6n. Se trata de saber si el MD esta re:presentado en las distinciones. ~peratorias. que 10 hacen po sible y. organizar su discursividad propia. lEI MDse encuen tra prisionero de la configuraci6n formal de las practicas "cog nitivas" que tiene por funci6n sefialar?25 dEs el MD una den da? y si no, des una ideologia? . Con respecto a esto Althusser muestra ciecta vacilaci6n, al punto de designar a menudo al MD como filosofia. El hecho de que esta dp.signaci6n nos haga avanzar mtiy poco ceriva de. que la P!ll'eja de oJ.>osiciones ideologia/no-ideologfa vale para la £iloso£fa~ de que el trazo (/), e,scansi6n de la rup tura, afirma precisament.e al MD, sobre el que aparece por fin enunciada y denundada, la relaci6n-espejodonde se clan sura el viejo problema (ideoI6gico) del conoc:imiento: "toda la historia de la filof'.ofia occidental esta d~minada no por el problema del conocimiento, sino por la solucwn ideol6gica, e:-. :decir, impuesta de antemano por intereses practicos, re ligiosos, moraleS y poHticos, extrafios a la realidad del conoci miento, que' ese problema ~eb1a recibir (LC I, 66). dLa me jor definicion que se pueda dar del MD serla la de "'£iloso fia no-ideo16gica"'( Pero este agregado nominal s610 es signi£i cativo si se piensa la lelaci6n intrinseca de la filosolia con 10 no-ideol6gico como tal (Ia ciencia). .En efecto, Althussel piensa esta relaci6n bajo la forma de "]a produc<'i6n porparte de Ia filoso£fa de nuevos conceptos te6ricps que· resuelven los problemas te6ricos, sino planteados e~Hcitamente, al' m~nos contenidos en estado practico en los grandes descubrimiilDt9s cienti£icos'; (LC II, 166). A cada rup tura cienti£ica viene a corresponder una "reanudaci.6n" £ilos6 fica, que produce baJo forma re£lexiva y tematica los concep tos te6ricos utilizados demanera pnlctica, es decir, operato ria, en las diversas dencias. Asi Plat6n. para la geometria, Des cartes para Ia nueva fisica, Leibniz para el calculo di£eren cial, Kant para Newt.:>n, el MD para el MH, Marx (fil6sofo) para Marx (cienti£ico). ' . . :p~o 10 que l\.lthusser no nos dice es~ a) Lo que distingue esta "reanudaci6n'" de la pura y sim
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ripcwn ide:)~6gica del hecho nuevo que es una denque distingue a' esta repeticion de una desarticulaci6n de'los conceptos de la ciencia que van a reflejar-aeS-' Ia diferencia absoluta del discurso .cientifico en la , ilusoria del discurso ideologico, por el camino oblicuo uperadores idec16gicos de "verdad" y de "fundamento"; e distingue. Ia filosofiade. una regi6n particularm nte dede la ideologia,la region en que se opera la ideolo de 10 que es principalmente 10 no-ideo16gico radical, ; si la correlacion empiricamente evidente entre Ia y la filosofia no reside en el hecho de que la filosofia efectivamenteespecializada '~en" la ciencia, queremos , eSpecializada en 1a disitnulaci6n unificante4undado unico diseurso cuyo proceso especi£ico es irreductible lr'ideologia: el diseurso cientifico. ) Lo que distin~ue al MD, represent ado como filosoHa, lasepistemologias anteriores (filos6ficas), consagradas ex mente a produdr, diferenciar Y luego redtidr, e1 cori~ de ciencia. A1thusser no nos indica c6mo evitar, 0 cir , los isomorfismos Iocalizables entre el MD y In for ,'general de la. ideoiog{a filos6fica tal como d MD mismo coneeptualiza, Althusser sabe muybien que las cnracterls ia formales mas manifiestas dela filosofla idcolog son ia las ,cl atribuye a \ cdcctidsmo (RTM, 44): la tcleolog teo y la auto-inteligibiJidad. Ahof<\ bien, el MI>, en tanto que d$ciplilY.t te6rica "suprema" que "esbOZ'l las condiciones for· Il\hles" de toda practi!'1l te6riea (RTM, 137), lasp{ISee nccc i stttiamcntc: cl MD (,!! inevitahlemente autoiutclig ble y cir~ ~lar, si es verdad ~ieas, el MD (a diferencia (lc todas las otras ('iem:ias) dt'hce'slar en condiciones de llcnsar sn pro piaruptura, de f(1/1exionar su dilerencia, en ('uanto U/l(1 ciencia s6lh es c1 acto desarrollado (k esa difcrencia mism::l.. El MD restaura asicn sn hencfido la ideologia de b pre sencia para sl del la diferenda, Itt ideolo!!;la de laidentidad de transparencia. "Capaz £Ie dar cuenta de St, tomund05C por objeto" (RTM,31), el MD difiero mucho menos del saber
~zo del materialismo diaUctico
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Alain Badiou
absoluto de 10 que A1~husser Ie concede, puesto que contiene en su seno los elementos con que pensar, ademas de su propia esencia, la cientificidad de todaciencia, su esencia no visible, pero realizada, y porque articula asi los modos de produccion reoricos como figuras formales de su propio proceso. EI MD corre el gran riesgo de ser, esta vez a propOsito del MH,otra repeticion "filos6fica" mas, la perpetuaci6n de la tarea a la que se consagra Ia hisf oria de Ia filosofia;. el imposible encie rro de Ia apertura cientlfica en la ilusi6n de cIausura de la ideo logla. EI MD corre el riesgo de ser muy simplemente la ideo
logfa que el MH "necesita". Pero -:-segundo claro-, incluso en esta perspectiva limitada, las dificultades son considerables, porque el concepto domi nante del MD en tanto que epistemologia del MH (el con cepto de c3usalidad estructuraI) plantea mas problemas de . los que resuelve. Hemos ya. mostrado que entre la pnictica determinante (Ia practica ecooomica) y su "presencia" a titulo de instancia en el todo, habfa una distorsi6n - unificaci6n muy enigmatica, cuya rdacion cmtesiano-espinozista entre Dios y la idea ade cuada de Dios proporciona indudable-mente el primer "mo deIo". Aqui, como en Spinoza, el problema sigue siendo el de la "dedu('ci6n"de los modos, as dedr, el de la detenninaci6n del "eso que" es ('stmctUl'ado por la estructnm, de eso sabre lo etlal In estrllctura es dcfinida. Se dira. sin duda que esta dcfinida sobre eI sistema de las instancins. Pero, en principio, esto plantea .el problema de la Hstao enullwraci6n, de las pnlcticas: ni la dcterminaci.on, que' se mapifiesta en la multi llliddad ligada de las instancins pOl' t'fedos de desplazamicnto, y por 10 tanto de limitnei6n de efit-acia, ni la dominante a pnrtir de la (111l' se pu("de p<'ns;u' la eOyllntura, 0 tipo de lInidad exist elite de las inl>iandas, l}(~l'mit('n produeir d coueepto (;olecliviumlc d(~ las inslandas. La distindon de los niveles de una formaci6n social (politi('a, cst{~tica, c(:onornica, etc.) {'sta prcsllpul'sta ell 1,\ (,(lllstnH'dbn misma del ('(m('('pto de deter rninadbn, puesto que la
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de' Uamar teoria de los conjuntos historicos, que alm los protocolos de "donaci6n" de las multi etlos pur~~ sobre las que las estrucluras son progresiva ,l;,aciplln , estrechamente dependiente, en su desarrollo
laa matematica de los conjuntos, desborda sin
'&imple donaci6n de un procedimiento de pertenencia, ..sistema inaugural de diferenci as vadas. En efecto, .que la coyuntura debla ser pensada como un siste -hHlares" donde las instancias viene n a articularse unas Desde este punto de vista, la dominante (como seg{m' Althusser) es esencialmente un distri de lugares y un definidor de funciones (I.e II, 157). mismb:OC con la determinante que es la asignaci6n, instanurre detenninada, del lugar dominante. A partir ina cia In constru completa del conccpto de deterrn cci6n los operadores fonnales siguientes: 27 conju I. de lugares, () espacio (vacio), de las efi nto
combinadas;
conjunto F de funciones, 0 practicas, que dtstribllyen esas funciones , _ a las propias funciones. por 10 tanto n sobre una parte de F y toma sus valores en cas L: distribuyen-OCupan lugares. De£ininlOS las practi como ~ciones de lugares a otl'as procticas. ' ' .. La imagen en L de una fundo n l)Or ot1'a funci6n f se llamae f reg,in 0 "distanc!a de elicaci' f - f· Sepued en pa<"kula. " de/in"la (,i 1.a parte de Fn cual f '" dcllnid.!' conticne la in,tand de f ,scsi· (.,a f (f) ). E,t. " 1. ,.Slan,,' d. el lugar que f sc asigna a 51 misnul. ",' On sub-('on)unto J t de F (por 10 tanto un conjunto de pr.lc t1cas) sera Ham hist(lricCllllcnte representable si sc cumplen ado
las
I) Una, condicwn de cletermitlMi(}n.Por cjemplo: existe en II una funcion det () que eS una aplicad6n biuniv()ca de H aobrc L; iCet () distrihuye pues las practkllS de H sohrc todos los1ugarc5 de L, y se distribuye ell particular a sl mismo. Esta ,eprese en L por lit instaneia d&>t (det).
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33
3.2
Ala'n Badieu
II) Una condiciOn de dominaciCR. La teoria de Iascondi. dones de dominaci6n es ya fuertemente regional, en e1. scntido de que el concepto decausalidad estructural obtenido dcpende esenciaImente del tipo de dominancia adoptada. EI que yo propongo aquia titulo de ejemploagudiza intencionalmente 1a diferencili conceptual entre· determinacion ydominacion: unademostraci6n trivial, quedejamos a cargo del lector, muestra en efecto, que la existencia representativa de ]a prac tica determinante no puede oeupar el lugar dominante. Notemos en· primer lugar que la bi-univocidad de det () nos permite considerar que en cada lugar de L reside una pmctiea (earaeter acabado de una forma social). Dada· una funcion h de H, de£inida en todas .partes dentro deH, yun lugar I de L, definiremo8 h (1) como siendo h (h'), con det(h') = 1. Dicho de otro modo, h (I) = h {det 1 - (l): la funemn toma pOl' argumento la fundon que oeupa el lugar L De este modo S6 puede· considerar que una funci6n h opera sobre l08 lugares en tanto opera sobre las funciones que han sido asignadas a esos lugarcs por la dcterminante: en una situad6n dada una fundon h (definida. sabre H) es conside rada como unendomorfismo de los lugares. Sea ahora dom ( ) nna fimcibn de :U definida sobre H. Vanios a ddinir el lugar n-dmn por recurrencia: I-dom=det (dom) (illstancia de dom POt In determinante) .,
,.
del materiatismo diaUctico
........ ,,' ...... . ..... .
"
~
n.:...dom+dom ( (n-I) "'Clom) (definida como rolis arriba h(p) l Se ve que dom opera·' primero sobre sl misrna (porque 2 '- aom = dam' (dom) ), lu('go sobre la .£uncioh enviada pOI det al lugar al que dum se envia a sl mismLi, dCSpll{iS sobrela: f undon qlle ocupa (pOl' det sicmpre) eI hlgar asf opttlilido, ~tc. Dir~mos qucdom esta en posicibll de imtancia dominant" si, por cada lug,';! 1, existc un n{lIno1'O n t~l que: n - clam;
=I
En l"ste caso, una cspecie de recnrrcncia sobre.1a instancia dominante, recurreneia que se constmye sobn!:ln "distaneiaa,' de tIlltt practica h a la delerminante (sea dct( h). ) ;permite
,"tID .cierto orden _jerarquia de las instancias- el
ares de lug H de. F hist6ricamente representable que b-eonjunto $Vla instancia determinante y una '. solainstancia serll llamado hist6ricamente representado. ente de esas {ormas, e "'ineorporando" progresivam ente fundamenta1es del MH, se podra probabtem concepto de una coyuntura. Sin pretender una b,zaci6n mas acll. de la cual se encuentra demasiado s e1 esquema: citado mas arriba, creemo nece e1 interv abstracto que separa, en el interior del concepto dealo practica del concepto de articulaci6n-uni ticO indicar la manera de su cumplimiento problema . ~emoS que esta constituci6n esta inacabada y oscura.. todo que, evidentemente, Althusser cree poder deeUa. TodosU esfuerzo esta orientado a realizar para una disciplina sin tradici6n, 10 que los matema penosamente de obtener a traves de la teoria nacien28 Categorias: una determinaci6n directa del concepto de n que deje de lado la subyacencia de un co junto. mi parte, creo que la prudencia epistemol6gica iropone e1 mom una formalizaci6n "c\asica'. Todo hiperes ento tfUcturalismo prematuro deja inevitablemente incompleta, cci6n y en cierta med;da. noelona! (p,e-toorica ) ]a constro de \0' C6nceptos fundamentales del MH (estructura con dominante, estructur de estructuras, determinaciOn). Creo que en el MD.
mom a de la teoria "I>ura" de los conjuntos hist6rica ento
mente representables debe' preceder a la teoria de las estruc
el
turas hist6ricas.
o
co
0
Para conduir, qUISlera subrayar la necesidad absoluta, y al ente mistnO tiempo e1 riesgo de ese (re) comienzo del MD. Ante todo. debo detirque en mi opinion no existe actualm otra posibilida , 8i se quiere poder hablar a1 menos a de aqueUo d a trave del cual la realidad silenciosa (silencioS en lo. nesteoria) s nOS interpe1a y nos hace los "portadores" de funcio hist6
\
34
:Akzi,n. Badiou
ricamente .detel'minadas. No existe.otra posibilidad, si quere mos pensar 10 que constituye nue8tra c.oyuntura pplitica~ la destalinizaciOn y .la "coexistencia pacifica';" ligadas a, esa" forma de transicion regf'esiva que define al regimen ~ovikticQ; el imperialismo americana y, la revolu(:iou ~hina, Otra especie de trilnsiciOn. Solo.a·1& lueidez epistemo16giea ;de los marxistas que traba" jan alrededor de Altbusser. debemos laposibjlWa9 de reflexio nar, ,esta coyuntura politiea en nuestra COyf,lntura t~6rica e inversarnente. Si no lucra. por esto .estariamos ,reducidos a maehacar sobLe las descripciones delmatxismo vulgar y aban donar la cienda viviente, bajo todos sus aspectos, a la derecha lormalista y a .Ios te6logos de 1a .Literatura. A esos; niarxistas dehemos laactualidad de los conceptos del MH, ypodernos decir que los han literalmcnte des-cubierto, puesto que desde Marx no habian sido olvid,:;1dos sino .disfra zados; re-inscriptos, reprimidos. Por haberme consagrado al MDpor razones ncccsarius, apcn"d,Sho hablado. de ]a ciencia de la: historia, propiamcnte dic.ha (pcro que se lea a" MaIX: en 10 sut.:esivo podemos hacedo h por 10 tanto quiero m~cio oar aqui los seroicios rendjdos en la: pnktiea politica misma por los sorprendentcs resultados obtenidos por E. Balibar en 10 CIue eon.deme jllstamente a las fQtmas~de transil:;i6n(L <;: 11, 277-332). Sin ,uuda la teoda de la instanda poHticacsta aUI;I por haccrse. Pero' sabcriJQs que algunos marxistas ,est{m en eso; y ya es mueho que cstc clara mente dcsignado el Lugar de .tal teoda. En el momento cnqQelu euyuntura nosimpone, mas alla ue Ia critica comun del iucalislllO fenomC)Il;oiogico, pre servar a traves de las eonfigurat:iories cienlHicas nuevas y en elIas mismas el rigor radonalista y revoiul:ionario de las orga nizacioncs tie clase, pensar tlue a Ia prad if:a poliliea se Ie asignani su status ua forma a nueslra exigerwia. Sin emhargo, la o1>ra iutcrpeiauora .tle Allhusser estll en situacion' 'de" tuptura. En rnuehos aspectos, cl rc.wmtimicnto teoricola gobierna aun yla vIJ(:ive a vec(!s ciega [t, locio 10 que hay encHa de la trauieUm filos6fiea, incluso ](kol.l'lgica, Sin duda cada uuodc nosotros .dehe dcs}lacerse pm .su propia cucnta, ascsjnandola, de 1... illayo( tiralliu tcl,rica bajo
~o del materialismo dioJ.ectico
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a&rAprendimos a hablar: la mania hegeliana. Pero no es declarar~ fuera de Hegel para .escapar efectiva un reino maId ito donde, como se sahe, no hay nada que cantar indefinidamente en el mismO sitio 1a ~epartida.
"~esume provisoriamente la empresa hegeliana en los correlativos de totalidad y de negatividad, se dir3. w)lilSten dos maneras de desembarazarse del maestro segun que obstruyen esos dos conceptos. acceso a Ia totalidad nOS estavedado es 10 que esta rigor la primer a critica kantiana; 10 estab1eci6 desde y sin ;pretender redncirlo ni deducirlo del puro la. cienda. En muchos aspectos, la dialectica tras es e1 gobiemo secreto de Ia polemica althusseriana. ftso quc no, debemos asombrarnos si tantas descripcio- . ."""" Lire leCapitol. relacionan el objeto de conocimiento f:;ondiciones de. produccion (a su problematica por ;~lo) de una manera que recuerda mucho Ia empresa _9"gI.'esiva y constituyente de Kant. IncIuso cuando para salir "circulo" empirista que confronta indefinidamente el ~jeto al objeto, Althusscr habla del "mecanismo de Ia apro ~jlCion cognitiva del objeto real por medio del objeto d-e coJlodmiento" (L C I, 71), no esta tan lejos del esquematismo ~e' rodea igualmente los problemas de garantia, de "polida" de 10 vcrdadero y la cucsti6n positiva de las estructura3 de tuncionamiento del concepto. La teona de Ia producci6n de lOs conocimientos es una especie de esquematismo practico. l.a filosofia del concepto, esbozada por Althusser como 10 babia sido por Cavailles, se parece mucho a la exhibici6n del ~nlpO estructurado
36
Alain Badiou
Finalmente, la verdadera cue&tian es saber si hay compati_ bilidad entre eI kantismo de 10 multiple que percibimos en laepistemoJogia "regional" de Althusser, y el spinozismo ·de la causalidad que regula los presupuestos de su epistemologla "general". Dicho de otra manera, la cuestion es la de la unidad del MD, hasta incIuso la de su pura y simple existencia como disciplina tearica distinta. Porque no nos engaiiemos: Kant y Spinozapueden ser men cionados aqui en la medida exacta en que 8Uprimlmos 10 que pod ria aproximarlos superficialmente: Suprimido el libro V de la Etica, donde se encuentra restaurada una forma de co-pertenencia del hombre al ultimo fundamento en el amor inteJectual de Dios, Suprimida la segunda Critica, donde la libertad se abre camino hacia 10 trans-fenomenico. Queda por pensar la diffciJ Vinculacion de una epistemologia regional, historica y regresiva, y de una teoda global del efecto de estructura. Althusser, 0 para pensar al modo de Marx, Kant en Spinoza. Tal es la dificil figura aIegarica a partir de la cual es necesario decidir si, efectivamente, el materiaIismo . diaIectico (re) comienza.
Louis Althusser Materialismo hist6rlco y materialismo dialectico
REVOLUCION TEORICA DE MARX
'yez planteado como primer principio que nuestra accian ~IUQionaria se basa en la doctrina cientifica marxista, hay ..responder a Ia pregunta: len que consiste esta doctrina? 'Aqui tocnmos una cucstion de suma importancia. 1'1:,La doctrina marxista presenta, en efecto, Ia notable parti .[fandad de estar oonstituida por dos disciplifUlS distintl£S, . s una a Ia otra por razones hist6ricas y teoricas, pero en Pmlidad distintas una de Ia otra, por cuauto tienen distintos ~~ietos: el materialismo historieo, 0 ciencia de Ia historia, y el ~tcritllismo dillMctico, 0 filosofia marxista. :' Esta c:listinci6n ha sido confirmada por Ia tradician marxista. Sin cl1lb~lrgo, ha sido refutndn por algunos tearicos marxistas que In han .aiterado 0 negado, reduciendo el materialismo hihtorico a1 matcrinlismo diaicctico 0, a In inversa, el materia lismo dialCdico al materialismo hist6rico, como por ejemplo I:nbriola, cl joven LukU('s y, en cieI1a medida, basta el propio Cramsd. Esta altcracion se debe al hecho de que la filosofia m.'\rxista no dio Iugar a obras de )a amplitud y el rigor de El capital. y In mayor parte de las obms filos6ficas plantean prohlemas de intt~rpl'ctaci6n h
~'!htst6rtCo !I 38
Louis Althusser
..\.
E~ MATERIAlJSMO HIsrOmoo ES LA CIENCIA DE LA HlSTORL\.
Precisando un pOCO mas poc:lemos decir que el materialismo hist6rico tiene por objeto los modos' de producciOn que han surgido y que surginln en la historia. Estudia su estructura, su constituci6n y las for'llllU de transiciOn que permiten el paso de un modo de producci6n a otro. El materialismo, por tanto, no se refiere solamente al modo de producci6n capitalista, sino a todos los modos de produc ci6n, a quienes proporciona una teona general. EI propio Marx 10 sefiala para condenar la interpretaci6n de un cntico que consideraba que, la nueva teoda de Ia historia concemfa sola mente a la sociedad capitalista y nQ a las formaciones sociales de Jaantigii~ad (Atenas y Roma) y de la Edad Megia: el malerialismo bist6rico se refiere tanto a la antiguedad y al medioevo como al mundo moderno. Y podemos anadir que concierne igUalmente a las sociedades' primitivas, a todos los modos deproducci6n existentes en la historia. 'Sin embargo, y debemos decirlo tambien, Marx nos dio en El capital ]a teada desarrollada de un solo y. linieo modo de producci6n: el capitalismo. No nos di6 la tearia desarrollada d~ otros modos de producci6n tal~s como eIde las comuni dades primitivas, el esclavista, "asiatico", "germanico", ,feu dal, socialista y comunista. Sobre estos modos de producci6n poseemos solamente algunas indicaciones y, en el mejor de los casos, algunos esbozos. Tampoco nos dio Marx -y esta· ausencia tiene una' impor tancia decisiva- ninguna teona scetea de las formas de tran sicion. de un modo de producci6n' determinado a otro, sino solamente indicaciones y esbozos. El mas desarrollado de es tos esbozosse refiere a las formas de transicion del modo de producci6nfeudal al capitalista, particulalmente en el capi tulo de El capital dedicadoa la acumulaci6n primitiva. Por otra parte, poseemos algunas indicaciones, preciosas aunque escasas, sobre ciertos aspectos de las fOJ;inas detransici6n del modo de producci6n capitalista al inodo de producci6n so cialists, y luego comunista: en particular, en la Cr£tica del programa de Gotha. Marx insiste alUen Ia fase de transici6n a la que designa con el nombre de "dictadura del proletaria
materialismo dialectiCo
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_Jtulfima lasees objeto de num~rosas reflexiones de ~iilmente en' El Estado !J la f'e1:lo1ucwn , Y sobre .~ escritos del perl.odo revoludonario ypos-revoluLa importancia de una teoria desarrollada acerca !;~as' de transici6n hacia el socialisIno Y el comunis
iP' que 'no puede escll-par' a ninglin marxista. En cfec onocimiento cientifico de esas ·formas influye' directa , toda la actividad :econ6mica, politica, jurldica e de ta "construoci6n del sudalismo" Y del "tnlnsito
.,rtecesarta unaprecisi6n mayor sobre el materia os tst6tico y sobre toque Marx nos di6, 0 dej6 dedarn dos de la historia, teoria de los diferentes mo de es,por derecbo' propio; Itt ciencia de la "totali (Marx') 0 estructurtt que constituye toda fot~ o --1 debidu~a: un modo de produc ci6n ,deterininad . t)leu, eada estrttctura soeial comprende, como 10 ex es ,Man, el conjunto articulado de 'los, diferentes "nivel " lstftncias"de esa esttuctur a : Ia infraesttucturaecon6mica, rajuridico--politica y la sUpet'estrncturli ideo16 •ia teor1a de 'la bistoria b materialismo bist6riCO es 1a ta. naturaleza de' esa "totalida:d "organics" ",ftt;rt:ictura, 'Y por tanto del' corijunto de sus "niveles" Y del 'Ilpo, de articulaci6n y determinaci6n que los vincula entre a ]A ...,!. que fondamenta a so v".la dtpendenci de ' . estructuta con relaci6n al nivel econ6mico ---dctenninan ultim1dnstanciaP - y el grado de "'autonomia relativa." "ileeada uno' de los "'niveles". Enlamedidaen que esos "ni ftIeS'" pase tal "autonomfa relativa", pueden ser considera.~ en como' "un todo parcial" ,una estructura "regio .dtti cadauno te liar 'y Ser objeto de un' tratamiento cientifico relativamen
ae'
especific~
11''£' '~'''en
cu~tJta
indepet;ldiente. "::i\:si, es"coriecfu estudiaraparte;teniendo en su "au totiomia telativa", el "nivril econ6mico"; el "nivelpolitico" de 1fu thodo de' prdducci6n dado, 0' cU111esquiera de susforma~ clOnesideoI6gica:s, filos6ficas,;" estetieas, "cientffiCil.s. Esta pre cisi6n es' importante ptiestoqne en ella se, fundamenta ente la po sibilidad de una teorla de la bistoria (relativam aut6tio
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Louis Althusser
rna, y de una autonomia variable, seg{tn los casos} de los "niveles" 0 reaJidades respectivas: por ejemplo, una teoria de la historia de la politica, de la filosofia del arte, de las ciencias, etc. En ella se basa igualmente la posibilidad de una teoria realmente autonoma del "nivel econ6mico" de un modo de prod uccion determinado. El capital, tal como se nos ofrece, incompleto (Marx que ria en el analizar tambien el derecho, el Estado y Ie ideolo gla del modo de produccion capitalista), representa justa men te el amilisis cientffico del "nivel econ6mico" del mododepro ducci6n capitaJista. Es por esto que se,lo considera general mente, y con raz6n, ante todo como la tcoria del sistema eco nomico del.mooo de producci6n capitalista. Pero como estateorfa del· "nivel ec0n6mico'" del mQdo de producci6n capitalista supone necesariamente si no la. teoria desarroUada por 10 menos algunos elementos te6ricos sufi cientes sobre los dema,s "niveles" (juridico-po]Jtico, ideol6gi. co), EI capital no puede limitarse solamente a ]a economiaJ "a mucho mas alia de esta, siguiendo el criterio marxista de Ia reaUdad espedfica de 10 econ6mico. Es por ello que ]a economia no puede sercomprendida y analizada cnsu con cepto solarnente como un "nive}", una "region", jnscriptos' ,or ganicarnente en la estructura. del conjunto del modo de pro . ducci6n considerado. He aqui por que aunque· Marx no nos haya dado una teo ria de las superestructUJas (juridico-politica e idcologica) en (ontramos en .El capital elementos. te6ricos para claborar esa teorla. Dichos elementos no estan real mente dcsarrollados, pero son suficientes para gUiamos: en ]a tcoria de las super estructur3l', aUOlJue csta· DO haya· ~ido nuncl,l emprendida (os importante a] rcspccto la obra de Gramsci), ni tampoco re motamente realizada. . Del mismo modo, aunque ,Marx Jl0 nos baya dado una leona de los otros modos de producci6n ni de las .fomlas de transici6n, encontramos en ~ capitalqlcmcntos te6ricos que se refiercD a ellas. A decirverdad, elcment(Jsno des a rro])ados, pcro.sl sufieientes. para guiarnos en su estudio rico auo no realizado. . .
tca
Materialismo hut6rica y materialisma dialectica
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lPo! que eS tan importa!lte sefialar 10 que El capital da 0 deja de dar, 10 quecontiene de hecho y de derecho? rorque Ia representacion que se haee de la naturale~ de El capital determina la representaci6n que se haee de la naturaleza de la ciencia marxista de la historia. Si El capital no contiene otro conocimiento que el del mo do de p;roduccion eapitalista. sipermaneee te6ricamentecen trado en' el presente hist6rico, si no eS mas que la "expresion" de este presente, entonccs su validez puede ser reconocida para el prescnte, pero discutida para el pasado y el futuro. Todavia hay que ir mas lejos: es Ia propia idea de la ciencia Ia: que se encuentru afectada. Si no hay oba ciencia que la del "presente", si toda ciencia no es mas que Ia expr.esi6n de su"tiempo", de su "presente", enionces la ciencia de Ia historia se encuentra privada del, stalus de las dermis ciencias y. se aproxima singular mente al status hcgeHano de la filoso fia, que es la "concicnda de sldel prescnte", 0 la "e"pre si6n" teo rica del prescnte historico. Por estc camino se pue de Ucgar a la tentaci6n. efe asimi!ar Ia ciencia marxista de In lUstoria a una simple filosofla y a cOllsiderar \11 materialis mo historico como una filosofia. Si Ia ciencia marxista de Ia historia -.es ya Iilosofia, el maLcrialismo diaIL'Ctico se torna su pcrfluo, a sospechoso de pccado meLaHsico. Si ]a del~cia mar xista de la historia cs por cxccbncia "I a cxpresion de su tiem po", entonces el marxismo cs pcnsado como un historicismo. como una radicaHzaci6n del historicismo hcgcliano. Todos es tos wmas reapareccn dc una manu"a explicila 0 cncllbicrta enalgunas intcrpreladones del marxismo, pOl ejcmp}o, en eI joven Lukclcs 0 en elpropio Gramsci, y en mayor 0 mc nllr mcuida son sicmpre procJives a caer en cI uogmatismo especulativo 0 cn C1 ctllpirismo, amhos ideoIogi~s de Ia cien cia, a lu que desconoq:m. Si, en camhi'l, nos lJacemos una idea justa de 10 qlle con ticn(~ 0 no El capital, cxtracrcmos (Jtm concepci6n del mar xismo, conforme a la idea que potlcmos hac:crtl(Js de una cicncia. En c:.1e caso dirclIIos qlle El catJita.l 110 cs In "expl:csion" de su tiCIllPO, sino cl cOlloc;itmeulo d(: Sll tiempo,mlte todo ~ la "regiOn ceon6mit-a"dd modo de produccion capitalista.
,', LOuis 'AlthtlSsfJr
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Este conocimiet'Jto de unmpdo de produccl6n partiCular" es posible solamente por la practica de losprincipio! ' fe6ric08 generales cuyo efecto 'es, en su cdndici6rt "de' priltcipios te6 ricos ' generales, producir el ' conociiliienfo ':de eSa realidad particular que es el modo de' producci6n 'capitalistiL Si estu:' ~!alnos ' , deCerc~ El' 'capita1 podeinos eXtraer 'de el. 'esos prin~ cipios general,es' que permiten elabotar' la te6tfa de todos los, modos de producci6n' 'posibles y, 'poi" hlnto;.J1o s6lo :del ' mOdo d'e ' pnklucei6il capitalista, sino , tambien de los' dem's modos de' producci6ii~ :pasados y ~ftittiros~ , ' Podetnos ' enunCiar" e'~tos principios, ver en' 'que. condici()nes~ ~ se lospudo ' poner' en 'pdc;. fica Ja tooriade , la C'regi6n" ecori6mica delcapitalismo, una vez em-aidos y enuriciados, se" 'nos presentaran 'como principi.os teoikos ' generales ,que permiten plantear 'el problema ' de 1a :naturaleza: de las ' atrar "regiones", es decir; crear ,la ' teorfa de las superesttu~s. " Vemos ,asf que Itl ciencia existent~ ' en E1 capitQl no :se ': com., pottAde ' un modo distintd que las' bttas ciencias: 'se 'a~eja de la, iitosofia :y ' se conf~n4e, en su principio, con' las 'demas: cienCia's. Deja 'de ' servir de pretexto a 'una mterpretaci6n -1iis.. toricista»" del ' 'marxismo 'y ~ la, confu'si6n : ~el Iruiterialismo hist6ric'oy lafi~osofla. "Una ' vez' 'reconbcid'oS' :lOs t{tulos ' de la Ciencia de la hiStoria ' marxiSta, hay lugar para tiila filOsofia marxista, 'distinta del materialismo hist6rico. La teoriaCien-', tifica recnpera, contra ' laespe,culaci6il y el 'e'inpirismo, SUS derechbs de ,te'aria y se haceposible un ' coiIocnnientonuevo de la especificidad de ' la ; practica :ciendfica. " Dicho de otrii mane~a, el materi~lismo dialectico se hace pensable. 1
1
B. '
EL
MATERt\usMo DLu..Enoo . MARXISTA
£s> LA ,
m.osoru
La ' situaci6n 'excepclonal de 'MarX ' en ' la 'historia del ' saber huinan9 conSiSte en que, ' til fundar esta nueva ' crencia (1& cienciade IS: histOria), cre6 "al 'mi8mo tiem"o otradiscipliDa'
Materialismo hist6rico y materialismo dialectico
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te6riea: el materialis~o dialectico 0 filosoHa marxista. Bernas visto que la identificaci6n de ',la ' ciencia de la his toria. no :se; producia sln; plantear ciertonumero de problemas hist6ricos , y te6ricos. Sin embargo, estas dificultades no , son nada ,' comparables a , las: dificultades con que tropieza toda tentativa de 'definir el Ii'uiterialismo dialectico. , No hay, enefecto, uinguna : medida comun entre a1 ampli tud y sobre ' todo el rigor de los' text os que tratan de la cien cia de la historia y ,los textos que tratan del ' materialismo diaiectico. Ni. Marx ni sus sucesor-e8 'nOS han 1egado' nada que pueda ,compararse ni remotamentea E1 capital. 'W s textos que hemos heredado, ademas de plantear delicados ' problemas' de interpretaci6n, no ,sOn, : te6ricamente' hablando, textos mar xistas. Me refiero a lostextos mas expHcitamentefilos6ficos de Marx: ' sus escritos de juventud. Asi, puesto que nos , proponernos ' definir' la filbsoffa marxis ta, nos ericontramos ' 'en una situaCi6n smgulatmente dificil. Por un lado, la tradici6n marxista, afirmada ineqllivocada mente por , Marx, Engels y ' Lenin, no nos 'deja: duda alguna en ,cuanto~ a "la 'existenc·ia de una filosoffa " rnarxiSla distinta del materialismo bist6tico. Por otra parte~ esta filosofla no la recibimos sino indirectmnente ' y por tanto " e's indir-ecta mente ' comopodemosllegar, a ella. Verdaderamente,( la ·filosofia ;marxista nunc'a 'nOs es ' aada en una forma adecuada a su ' objeto,- esta contenida en "esta d,o pnlctico~ en, El ropital y eI;l los result~dos de la, actua Ci6n ,de los partidos _comunistas, asi como e~ las reflexiones po.1iticas de ~s grande~ .dirigenteS, ~nin por ejemplo. Esta contenida' en ' estado implfcito en la liiStoria de por que "Marx abandon6 ]a ideologfa de su juventud; se nos ofreceen una forma aun , parcialmente ideolQgica en los grandes textos po leinicos de Engels y Lenin. En ninguna de ,esas ,"obras" .se , n~s da la filosoHa marxista 'en una ' forma 'verdaderamenteade cuada y rigurosa~Sabemos que existe, sabemos d6nde , contrarla, i maspara obtenerla, tenemos que arrancarl~pre cisamente de los ' textos que la ' contienen; dedudrla mediante un' proftiIidotrabajocritico y un analiSiS rigurosode los textos' y de las obras, te6ricas y practicas, que nos legaron. EI primero y el mayor de los obstaculosque tenemos que 1
en
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Louis Althusser
veneer en nuestrotrabajo de investigaeion de la, filosofia marxista ~ representado 'por las o,brQ8 fUoso/lctl8 de juven tud de Marx. Estas obras,fueron descubiertas en tiempas de la ill Intema,cicnal y son actualmente objeto de una verda. dera especulacion ideologiea, y politica. Inclusivemuchos marxistas, reaccionando. contra eJ dogmatismo del periodo ,del "culto", buscan en. ellasalgo que satisfaga' y sUva de base a susprotestas numanistas" y' a su necesidad de "libertad". Sin embargo, .Marx afirm,o claramente que habfatenido que rom per' en 1845 con', su ..conciencia filosofica anterior" y, e5ta rtIp lura esta consignada en las Teria sobre Feuerbachy en La Ideologfa alema1lll. Los tenos filosoficos de Marx ge 1841 a 1845. incluyendo I"a sagrada familia.estan construidos sobre una problema tica idealista. ya sea idealista liberal 0 idealista antropologica. que Mane debio criticar' radicalmente para poder fundamen tar su nuevateoria de la WstorU,t. y ]a nueva filosoffa que Ie corresponde. ESinteresame anotar a que consecuencias te6ricas conduce toda' interprctacion que considere como marxistas los princi pios teoricos de b,ase (]a problematica) de las obras de ju;.. ventud de Marx. Se les puede dar ,tres interpretaciones, las que desemboca en la negaciOn de la filoso/iaconsagrada pm Ja,proclamacioll del "fin de la mosoffa" hajo las formas de'la etica, del bistoricismo, y del,positivismo. 1. Algunostextos de juventud de Marx (184244 )anuncian eI..fin de Ia filosoffa por SU "rea1izacion", Suponen que la fi. losoffa no ha existido, antes, de FCllcrbaeh, sino bajo una foro:: especulativa, contemplativa, abstracta e idealista, que exprc,saba. bajo las formas "enajcnndus" dc la espccll)acion. los idetloles ylas reivindicacion(!s dc la naturalcZa hlUn:\D.a., Seria ~~~sarioprovo('ar una revolul'i6n en clsiams, deJa' filoso£tapaia haccr aparcc(~r y rcalizar Ia vcrdatl
lIla
M aterialismo hist6rico y mnterialismo dlilUctico
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politica., a la practica revolucionaria y alas demas pmcticas concretas. En resumen, suponenque antes de Marx la mision de Ia filosoffa habrla sido Ia de expresar, bajo ]a f()rma "eoo jeooda"' de la abstracci6n especulativa. Ia esencia humana,' 0 sea los ideales humanos con que los hombres reflexionan- acet ca desu ootura1eza profunda. Con la filosofia pasada a Ia: realizaci6n de esos ideales' y' desaparecertacomo 'filaso ffa en au realizaciOn. La politica revolucionaria.f todas las pnicticas concretas de transformacion del mundo, tieman que ocupar el lugar deIa filosoffa. Esto quiere decir que ya no hay lugar para la filosoHa, que seha' convertido totalmente en prtfutica concreta. En estas' condiciones, el materialismo diaIecticodesaparece para confundirse con el materialismo historico. .
Marx.
2. La irit~rpretaci6n historicista.. se funda en otros te~os de juventlld de Marx, de resonancia hegeliana. Considera a IafiloSoffa cOmO una ideologfa privilegiada, que tiene Ia funcion especlfica de expresar adecuadamente Ia esencia de un momenta hist6rico; La filosofla es representada entonces como la conclencia adecuada de un perlodo histOrico-social. Cada periodo historico se reconocerla individualmente pues to que 8e expresarfa de un modoadecuado en Sll filosofia, la que a su vez seria su conciencia y su conocimiento. De este modo, el cartesianismo serfa la conciencia de sf de las capas mancfactureras en Ia monarqufa absoluta, el ilUIriinismo la conciencia de sl de la butguesfa ascendante hacia; el pader. En'cuanto'ial marxismo (y asf 10 concibe Same )seria la' con cicnciade sf del perlodo contempomneo caracterizado por Ia hegemonfa creciente del proletariado. 3. En La fdeologia alemana, en particular, se denuncia la ffiosoffa como una, pUfa y simple ideologfa. ilusion que debe destruirse'para eXtracrlas vias del conodmiento' cientifico. plantea la cuestiondel "fin de Ia filosoria", pero en un sentido diferente 'at 'de Ia interpretacion etlca. La filosoHa debemorir no realizdndose. puesto que e1 contemd,o de su ailtigua existencia especulativ~ no eta mas que idealista; sino desapareciendo por completo, disipandose como una mera ilusion.Entonces hay que criticar y redueir· a: la :nada Ja
Se
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. Lou.i8 Althusset
HusUm ideol6gica de Ia filosoffa y pasar· al estudio ,de las cosas "positivas", es decir.al conocimiento cientifico. eCuaI puede ser ento!.lce5el papel que se otorgaa la' filosofiadesde que .esta deja su Iugar a la ciencia.? El ro1 positivista~ pura mente epifenoroenico, de la "agrupacwn" y ~generalizaci6n» de los resultados cient~icos y ningUn otto, puesto' .qUe la filosc;>Ha ya no Hene objeto propio; Giertas £nrmulaciones de Engel.~ (en especial en su popular teno: Ludwig Feuerbach y el fit) de la filo$Qfia. cldsica aleffl4nll) proporcionan el pre te;xlo para esta interpretacion positivista,. 10 mismo que cierto lenguaje, .de uso muy corriente en los partidos comunistas, que considera la "generalizacion" de Ia experiencia de las masas" como un conocimiento. Sin embargo, un conocimiento no Se reduce jamas a una simple generalizacion, as elempi rismo positivista el que tomo la 'generalizacion de la expe riencia" como un conocimiento. Mediante esta clesviacion in terpretativa Ia filosoHa marxista pierde todo derecho de existencia y ya no subsjste ante nosotr05 mas que el matei-ia !ismo hist6ricO. Para poder. plantear el problema de la natura1eza de In fi losoHa marxista as neeesario comenzar par e1iininar. todas estas tentaeioncs que ofreccn Jas obras de juventud de Marx y cicdos tcxtos de La ideologia alemana. Para e1iminar esas tentaeiOIl(,s, ('5 evidenteque haec falta un riguroso trabajo de eriticahist6rica y teorka.. j>cro este trabajo, allllque decisivo, no es sufidente toda via. l>ara IIcgar ala filosofla mauista, es preciso superar otro ohslaeu)o! d de Ia forma en (jue otros textos (~elebrcs nos pre s{,lIlan esta filosofia. Los lextos de Marx de que disponclllos son con frccucneia ('Uigllllttit'OS (las Tt'sis sobrc FCIlCdwch), d{'liberadall){,~lte pp~ lClllicos (Laidcoiogia alc1Iltl1U1, Miscria de la. filosofia) , 0 rrllly clipti<-os (JlItI'Otlw;cUJu (l l(~ cOlltribucion a .la crifiCiI de fa ('conOlui(! l)olitic(f, de ]857). EI h'xto tn{IS illlportante cs HlaS lilt t<~xto d(' Hll'todo]ogia que de filosofia: I€ ] POSf/llciQu ]a s(·gun.da cdi<'i611 aleJllan:! de E1 Capital, cn cl qn~ fjguran los faJllosos pasaj<'s sohre ladialc\·lieu. No h'nemos nada de Marx
jJaterialismohfltorico fI 'fJ'Iilterialismo dialectico
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En ~to a las pbras:£.ilqs6Hcas de. Engels (Anti.-Diihring.
llWlect~, de, 14fl4t:uJ:'tikza" Ludwig Feuerbach) y las de Le nin (MateriaUsmo y errtpiriocriticisrno,. C~rnos filos6fic08) no se sUuan al niv.?~ ieorico de El ca.pital.Para comprender esta diferencm de., Divel, ~s necesario saber que los .. grandes textos d,e Engels y de Lenin. princip~lmente Anti-Duhring Y Materialismo Y ernpiriocriticisrno, fueron concebidos y reali zad,os como medidas defemivas. urgente.$ contra graves ata ques 0 desviaq.;mes ideo16gicas.:r~qtq:Engels com.o Lenin se vieronobligados, segUnpIopiacomesion,a "seguir a sus ad
versari9s", a "ver ~u pIopio terren«: e1 de la iileologfa. Ba
pend~ con lo~ mooiosde qpe disponi~n, Y qu~ incluian lasn i:R:nJ,as del ~oorsario que les· serviao para atacarlos, liQraro
pues ~,lucha ideologica inspirada sin duda en los, princi pios de la filosof4t' marxista. " Estos textos traspuestos . en 01 elemento de Ia ideologia filoso£ica quedan marcados por las circu~tancias de su composicion: polemicos, parcialmente ideologicos, no pueden tener 1a pretension de aleanzar eI ni vel de e1abora(:ion te6riea y la sish,:natizaci6n, Y par consi guiente .la cientificidad, d.e una obra como E1 capital. Eqtre el materialismo, historic9 y las fo{mas del materialis mo di;llectico que nos l~ga Ia tradicion marxista, subsi~te una sensible de!>jgualdJUi. de nivel y de rigor tc6rico. l)ebep:1os ~er conscien~esde, el}oy ,extraer las con,secucncias dehidas, Es por 10 ,tanto ,indispensable un gran trabajo,de critica para extracr de los textos dc, EngGls y I.c,nin los principios de ia filosofia marxista. Comhfnada eon la critiea de Jas obras de juvcntud, asta ultima c,riticapncde serun prcambulo para eI estudi 9 de las obras positiv~~en las. Hne ta Jilo50fia marxis ta CXIstc, ,Principalrncntc cn El capitfll., Lenin 1() habb ('om prc~did() perfecta mente cuamlo, 'dedan\ba que habia que in~ vcstigar Ia Iogiea prcscnte en El carJital para l1egar a 1a filo sof.iamarxisla. Nuevamcnte nos vemos en la nc('csidad de fO~l~ular esta exigcncia: ~s en 01 estudi() de i~l. capitaZ doode eslan ]ubmtcs no sbl() e1 desarrollo ncecsario dd materia1ismo histprico, slop ta~nhi6J) la.. c:.;~nstituci6n yla dcfinici6n' rigu rosa del. materialislIlo diuMdk:o.' . En' est~s c(mdkioncs y tcnjcll{lo (m c~enta los primeros truhajos .de quIY, disponcmos, ~cual os laprim£ra definicion
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Louis AlthUBser
aproximada que podemos dar del materlalismo dialectiCoi' EI materialismo" dialectico es una disciplina t~6rica' distin ta del materialismo hist6rico.Ladistinci6ri de 'estas 'dos diS. ciplinas' se funda en 1a distinci6n de' sus obfetos. EI objeto delinaterialismo hist6rico esta' constitufdo por los 'modos 'de producci6n, S1i "constitucion, su funciorulmiento y sus tranSformaciones " " , EI objeto del' materialismo diaIectico eSti constituido' por lq que Engels llama' "lahistoria; del pensamiento"', 0 10 que' Lenin denoinina', "la historia del transiUi de la ignorimcio. ul conocimiento"~ Podenios desigIlareste .{)bjet6 con mas 'pre cisi6n como la historia de la producci6n de los conocimhmtos en tanto que conocimientos, definici6n que' abarca y 'resume otras' definiciones 'posibles: la diferencia hist6nca' entre, den cia e ideologfa, la teoria de ,la histona de la cie'ntificidad. etc. " Tod6s~stos problemas ocupan ei::tgeneral el campollamado par en Ia filosoHa 'cIasica: "'Teoria del coriocimientO".Poi te, la nueva teoriaye no puede ser, Porno la: teorla cIasica del conodimento, 1llli;\ ,teona de, las' 'coridiciones' forinales atemporales del conocimiento,' del c6gito'" (Descait(ls, 'Bus serl), 'de Jas fomaSa priori delespmtu bumano(KaDt),ni del saber absoluto (Hegel). La nueva teor:la s6Iopuede ser una teoria de la' bistona de la produCci6n de los conocinUentos, es decir, una teodade .las c~mdiciones'reales '( materlales y sociales por una parte, intemasa IS. practica cientifica por la: otra) del proceso de esta producci6n; " ", " , Ademas, Ia nueva teona' cambiacompletillnente elipToble rna . tradicional 'de la, "teor:la del, conocltnientd':' en Iugar de plimtear' la ,cuesti6n 'de las .garantf.as del concihlmiento, plan tea la' cueSti6n del mecanismo' de la producci6n de' eonoci-, mientos en t~nto que conodmiEmtos. " ,'" . " 'Parfl p~hsar Ia naturaleza ~Specffica de Ia: practica produ~ tora ,de conocimientos,' la filosofia, ,IIlarxista', debe, tena-' 'de ella. una, concepci6ri, difereDe~a:t: 0" sea pensar "Ia telaCi6n exis terite entreesta prlictica' y 'bisotras, prlictiea~.· ,perisar almis.. mo ,tiempo, ~ ,,~~aleza especfFi~a' d~ estas 'otras practicasf econ6mic/l (transf~rmaci6n de Ia Jlaturaleza), 'politica' ( trans~ famad6n de las teladones 'sodales) 'El ideo16gica (transfor
una
MaterialisJtWhist6rlco fJ materialismo dWlectico
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maci6n de las "farmas de ~onciencia ,social"). 19ualmente de be pensar,enaquelloque le conciern~. en los tipos de deter minaci6n (articulaci6n ) propios que viriculan entre sf las diferentespracticas yexplican, por ejemplo, la autonoiniare lativa de la'pmctica ideoI6gica y de la pmctiea cientffica. En su propia perspectiva y enfunci6n desH propio {)bjeto, el materialismo dialecticoabarca problemas quecorrespon den tambien al materiallsmo' bist6rico. Esta mezcla parcJa1 podrla haeer, renacer, si se 10 'considerasuperfidalmente; la bip6tesis de Ia identidad de los ob/etos del materialismo 'his t6rico y del dialectico.' Pero en realidad, elmaterialismo dia Merico eontempla· las diferentes practicas y sus' articulacio nes desde un angulo que noesel del materialismo bist6rico, es decir, en fundoD de un objeto distinto. El materialismo dialcctico' no serefiete a las distintas pmctieas'sino al"aspec.. to de S'U intetvenci6n, en la' pl'odaccf6n ,de los conocimientos )ino como instnncias cOll8tituyentes de -los modos de produCo< cion, 'que son el objeto del materialismo bist6rico. Paraexponercon toda claridad ladiferenda de objetoqu~ distingue ,a estas dos disciplinas, diremos .que el b~rmino 'de finitivD' delamllisis,en 'el materialismo bist6rico, -concierne a hi teorln dela produ('cion del "efecto de conocimiento"por una practiC3r te6riea dada. Si ciertos terminos son comunes en ambas diseiplinas la diferencia, de ,las practicas intervienen de modo diferente en elIas bajo la .forma de combinaciones distintas, y comO respuesta a, cuestiones distintas. Luego, el objcto •del materialismo dialPctico es, sin,' discusi6D' alguna, distinto dd objeto del.materialiSmo hist6rieo. ' Para' dejar ',bien aclarado que la filosoHa marxista, a due reDcia de In' ideologiu filosafien con la cunl: rampe,fiene ca~ ractt~res totalmmtc compnrnbles" a los dcuna dencia. dire l1)os que, corilOtoda d'is(>lplinade caroctercientifico,se 1l1ani fiesta' bajodos aspectos: ' ' 1. ' Unll teorfa, que eontiene el sistema conceptUal te6rico en que se picnsa su objeto. " ",' , 2. Un mhodo que, en su apIi('ucion'a su abjcto, expresa la relaci6n que mantiene la, teona con este. Ahora bien, ,teoria y metodo estan profundamente unidos
: Louis AlthussBf'
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y cc;>nstituyen dos' aspectos de una misroa realidad: .. la disci plina cientifica en su cperpo,. deconceptos .(teoda)y. en su vida, su practicamisma (metodo )', Sin embargo, es mllY im portante ~tir a la, vez en, esb:\. identidad y epesta Pistin ci6n. Efectiva~ente.' en la actualidad. vemos· prevalecer , co p:ientemente una concepcron "metodologistar" (y pQl' tanto ideol6gica) de las cien~: laexistencia de un simple mt1todo suficiente para conferir a una. disciplina sus titulos de .cienti ficidad, En realidad todo metodo cOIIiporta ,una t~da, yasea explfcita a implicita. Hablar del .metoda sin mencionar la. teoda significa mpy frecuentemente ocultar una teona' 'idepl6gica latente bajo lasapariencias de un m~todo "cientifico".E,staimposturaes frectiente en· ntiestr,Os dias e:n la mayor parte de las llamadas ci~ias humanas, que. a mtlll,udo Se consideran.. ciencias por.. que mampulan, pOl' .ejemplo~,·m6todos matematicos, sin plan tearse la, cuesti6n de la valide~.de su objeto, \l sea ,sin p~an", tearse la cuesti6n de la. teoria (expli~itao implicita) corres.. pondiente· a este objeto. Elmaterlalismo diaIectico nc;> esta libre de esta tentaci6n ~metodol()gista" ,en la .0uaI la teona (materialismo) sesacrificaen aras delm6todo .( dialectica): la interpretacl6n sartriana del' l;Ilar,xismo· nos oErece ·'una' de SUS variantes. , , Resultap-qes muy importante distinguir ,(para pensQl'SU unidad) Ja teona del metodo. ,Es el Unico mediodeno, caer en confusiones. que 'puedan' dar lugar, a, una, interpretacwn metodologista (en la que el· metodo absorbe ,a,. la teona, dejar de ser un merc;> reflejo. delateoria ep la •. pnictica. tc:it riCa) 0 a una interpretacwn dogm4tiCa( en lacuallateona se considers acabada), ,0 se, mega la vida de 1a teona en m aplicaci6n alu objeto: el.metodo,;&tas oonfusionesno,son imag:ina.$s. han existido y, existen todavfa en la historia tc6rica y pmctica del marxismo. EI perlodo del "cu,lto de,laperso,nali-: dad" nos btl ensefiado los peligros del dogmati8rrw en, el· que 1a: ciencia .y la' filosoffa mlmdstase 'conSidera~ aeabadaS. y Be sacruicaba el metodo por una toorUl: que,' pOr cierfu~em
.8m
uematica: '
eSc!
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'. ,'..'". ,,.. .. . , . . ' ,
Puede que esto nos haya \'\lelto meboS sensibles' a los pe libros de' una intetpretacl6n rrietodologisfa del marxismo cu--
MaterialismO .historlco II fI1/Iteriolismo dlal6ctico
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ya tentacl6n aparece en GraUlSCl, par ejemplo. He. aqui uno de los efectos dela reduccwndelmaterialismo dialectico al materialismohlst6rico y' dela concepci6n· "bistoricista" del
matxiBmo. '
'
No dejapues de tener interes ofrecer algunas indicaciones sobre la distinci6ny 'elcontenido de la teona y del'mModo. Se 'puede considerar esquematicamenle que en el mate rlalismo dialectico es el fI1/Iterfa1Jsmo' 10 que representa el aspecto'de lateoria. rirlentraS'la diaUctica representa el aspec to delmetodo, sin dejar de tenermuy presenteque carla uno de. ambos terminos nos reDlite al otro, al cual incluye.· El mo.terialismo expresa los principios de .las condiciones de la praCtica que produce los conocimientos. Sus dos prin cipios fimdamentales son:' , . I,La p~ada4e 10 real ~obre su conocimiento? 0 priina:cia dels!'l1'sobte !!U p~nsarirlento. ', , ' " , 2.1Adistinci6n entre 10 real: (el sel) ysu conocjmiento. Esta distifici6n tl,e realidad' es correlativa, de una Corfe&pon ~ de ~lento' entre elconooimiento' Y su obje.to. ~neralm~nte .se insiste' en el·· prWrer principia,·perono siempreBe . demu~ el segunclD. que as sin embargo esen cia! (como bien 10 demostt6 Marx,en su. InttoducciOn.8 la ContribuciOna lacritka de la econommpoUtical1851) y basta sucede que Be Ie sustituye por el principiD idealista dela. iden tidad.del. pensamiento y el s e r . · /El segundo prinC!ipio es .SJ]lllllIDeme importante:. protege al materia.lisma contra una dable .caida ene! i~alismo,ya sea enel e&peculativo (~uereduce el I,er· a. su· conooimiento ),. ca mo , en. el empirista (q\le reduce el conocimiento a suobjeto . ' , ' ' . real) .~ Asumido ,con serledad, estesegundo principio,. present&, li\.demas, la particwarldad de que exige un ,eompll3mento ted ,rico: la,distincwn materialista' entreel objetoy, sulconoci miento impUca. necesariamentela presencia te6rica de··Ja his taria de la producci6n de esta diferencia y de su efecto ( Ja (:orrespondencla '. de conocimiento). He aqui por que eil ma .terialismo es necesariamente ,diaUctico. BajD Jaforma de la dialectica es la historialaq\le est8 presentecoDlO categoda ;
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Materlidismo hist6rlco y materialismo dlidectico
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LoUis ;Althus$B1'
constit;uyente del: propio materlalismo, ,no la historia, en, el sentido,ideo16gico. sino. en el sentido te6rico.EstQ: ,signifiea que los ,dos principios del ,materialismo pueden ser.. concebi dos como los principios de una relaci6n interior en el proceso de una, bistoria de la producci6n de los conociInientos, y no comoprincipios que: valdxian por SI mismos y que se aplica rian consecuentemente desde el exterior a diferentes, objetos, uno de enos la', historia.. Aqui vemos que desde las premisas de su definicion el ma terlalismo marxista incIuye la dialectica. , Esta misma dialectica reaparece ahora, a plena Iuz, en el metodo de esta teoria. : Nopuede sorprendemos la circunstaneia, de que sea ' una verdad de hecho que el materiaIismo diaIectico s610puede producir conocimientos bajq Ia ley que rige en, todo proceso productor de conoeimientos: la ley, ~lel eoncepto, de historia. lQue es el metoda en reaJidad? Es la forma de aplicaci6n . .le la ,teoria al estudio de' su objeto, es por'lo tant(j Iii Jorm!c1 'vi 'viente de' ·Ia practica te6riea: en su producci6n de nuevos co nocimientos. Ahora bien, esta producci6i'f es la de un' proceso de repJ.1)duc~i6n:y deproducci6n que, como tal, tiene la for madE'! una Historla. Dccir que el mctodo del materialismo Ia diaIectica equ.ivale a decirque la pl'oducci6n diaICctico de conocirnientos, medi::tnte Ia aplieaci6n de la teoria del ;ma terialismo asuobjeto (que es historia de par sl),revistc nc cesariamente la forma de una hisforiacuyosmecanismosex pone la ,diaICctica. Vemos as! que el materialismorceneucn tra dos veccs ladiaICetic.:a: en su objcto, qUC,eg la, historiude laproducci6ri de conodmicntos, y en su praclica propiu, ya que 61 mismo csuna disdplina que 'prOdtlCCConocimientos. Lo que distingllc la diaU:ctica marxista dc todu dial6clica anterior, principa:hllCDLe de la plat6niea y d(~ la hegeliulHt, ca lificadas, de idealistas. reside en que lti diaMetica marxista es neccsariamente materialista. Vcrifieamos (tllC esta distillcion tiene fundamcntos,aunque sean()cesario profundizurla. De hceho, cuaIesquicra sean las rclacioncs hist6ricas, qlIe sc puc dan ifivocarcntrc cl materialismo marxista y(;SOS flIaterialis mOs "mctaHsicos" 0 "mecanjcistas'~, por un Judo, y enlre la dia16ctica marxistay la hegelian a, por otro, cxistc una dife-
es
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renCia de esencia fundamental entre 1a filosofia marxista y todas las demas filosofias. , Actua1izar euidadosamente esta diferencia,: definir y pen sar tan rigurosamente como sea posible esta diferencia espe dfica: tal es en la, actualidad la tarea que, debenafrontar loS £i16sofosmaIxis.tall., Precisemos,:no se trata 'de, pensar, esta diferencia por el mero placer de crear una obra de erudici6n. Se trata d~ pen'.ilil', atra$ d~, estasdiferencias, las categorlas especl£icas de la £iloSofUi marxista y, en particular, las ,es,., trueturas espectficas de'Ia dialectica marxista, en, aquello que, las. distingue rll;dicalmente de lasestructuras dela dialectica hegeliana.Saoomosque ~arx: D,O pudo realizaresta taroo ala q~e asignaba una unportil.ncia' fundamental. En, nuestia ex':' perieneia hist6rica paSada, ~l igualque e.n lit presente, henlos tenielo suficientes' motivos y, oc;asiones para reconoeer ,Ia: ur genda de ~se, tr,abajo de 'inyestigaci6n "te6rica, ,par~ recalear su importancia,·. pues el' ,ID,ismo domin,Ii' la posici6n· ypor I() \ tanto ,Ia soIuci~ride numerosos, probIe,mas. Para' nosotros as neeesario Proseguir la obili de Many termmar Jo que el no" puoo realizar,' extmyendorigurosanlente to4as las· cons~uEm c~as de la. obra que nos Ieg6. ,', ' , ' ,AI fundar el materlalismo dialeCticc), Marx realiz6ep. filo sofia una ohm tan revolucionaria 'como la qlle realizQ, en el. campo de la bisto:ril;l al fundar el, materifllisroo ,hist6rieo, per debemos saber que 18, filosofia ,marxistllr esta en sus cornien zos. ,Sus progresos dep~nden de nosotrQS.
a'
PROBLEMASPLANTEADOS POR U.EXl8TENCIA DEL
MATERIA1..ISMO HIS:rORICO Y,.DEL. DIALECTICO
COMO DOS ,DISCIPLIN,AS DIST~NTAS
La existeneia conJuntfl: 'de' estas dos disciplinas," (, •sea, el ~a terialismobist6rico, Y e~ materialismo dial~ctico, ,plantea dos problemas: a) dPor · que lafundaci6n del materialismo hlst6rico pro voc6' necesaria1!lente la ,.fundaci6n del materialismo diaJ.ec lieo?
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,Louis AlthU8$6't
b, dCuaI e.i la funci6n propia del materialismo dia]ectico, cuaIes son SUS ieIaciones con las clencias y, en particular, can e] materialismo hiSt6rico?
,--
Pregunta arpo~emos;.uin'nar .de m~era ~~y,esquenllitiC!l que Ia jUndacipn del mat~ialismo hist6rico," 0 ciencia de ,'la histo~rieeesariamente 'trafo consigo ]a fundaci6n del 'mate riw,mo' d.ialllcticd debido al principio sigtJiente: '" Sa.bemos que: en ]ahistoria del vensamie~to hu.man~ ]a, ftin~ dacion, de Una ~ue,:,~ ciencia, important~ siempre altem, y re nov6 la filosoHa existente." , ,Eso ocunio can las niatem!ticas ,griegas, queinfluyeroo D.1Ucho en la: modific~cl6p 'te6rica ,qu~ desemboc6 en Ia~ filo..: soHade Plpt6n; con laHsica modema que provoc6 las rev~ luCiones'~e6t:icas que dier()D ,por, re~lbido la filosofia de J;>escartes (despues de Galileo) y mas ta~de lade Kant (des pues de Newton); con la invenc'i(ln ael, calcu10: infinitesimal que provoc6 en graninedidaIa'modificaci611 filos6fipa. de Leibnitz;y con Ia I6gica matematica modema,' que' oomVro meti6. a, ,Bussed a::emprendei ,eI-~a:mino :de ljl' fenomenologra trascendentaI. La' inisma 'observaci6Ii puedeapJjcarsea' II;!. obra cientlHca de Marx: la ciencia de la'historiaprovbc6 una revolubi6nen Ia filos6Ha,' que' entran6 ' el nacimiento' del ma terialismo :dlaIectit::o.' ,:' ' ". S~n embargo, debemos' Jr mas' lejos,' y mostrarque en' rela.; ciOn"con loslijemploshist6ncos que' acaoomos de c::itarj ila filosofia de Marx ocupa "un-lugar' excepciorkll en la historia. de 1a filosoffa. Guardando las debidas proporciones, la ~ueva filos()ffa fundadapor Marx esta _en,la misma re~ci6n respec to·a )as-filosotias ,cIasicas q~ una-nueva ciericia que aeaba' de ser fuil,dada ~ntespecto' Ii 'prehisthrm ltkolOgiCa. La revoluei6nde i Marx nafieiie lug~r, como -laS rev61uciones an teriores, dentro ,del campo, de la ldeolog£a filos6fica. Muy a1 oon1:rano.'ostenta, ef'cataCter,' umco en Ja'historm di:l'Ia fila so{ta,dC:irmnper ~dti.6se past:ldOid6o16gfi:o y'de inshuirarla filosofia sObre nuevas bases, que Ie conBeren un caracter de objetividady: rigol' te6rlcos totahnente comparable,: a los dewa_ ciencia. Asi, pues, Ia :revQluCi6n, te6Tica .quefund6:la ciencia de la IDstoria tuvo el efeeto de descncadenar al mismo
.su
Materlaliwno histOrico tl mo.terialisnw dialectico
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tiempo una revoIuci6ri te6riCa en la filosofia que hizo. pafar a la, filosoffa del estado de ideologia al estado de disciplina cientifica~
dC6mo e,xplicar Ia necesidao de -este encadenamiento? Po demos afirmar: :que •Marxestuvo, por decklo as!,' obligado, por una lOgicaimplacable,- a, fundar una filosofianuev~, revolucio naria con'respecto a 13$ ;filosofias cI8sicas; a causa del ca mcteE' muy particular .de'la "nueva cienciaque'eI. habia ins taurado:la> cienC!a de la historia. Un :vinculo muy profundoune' realmente el ob/eta de la nueva ciencia a la revolucion filos6fica sin precedentes que ella ha prnvocado. Porprinlera vez en la historia," en la que ningunaide()logia' ni filosofia' anterior 'habia side capaz -de pensar_.' _' , Para producir su teorla de ,Ia historia, Marxse eDfrent6a la necesidad.de criticar yrechazal' todaforma de filosofia (idea-: 16gica)de In historia.Tuvo' q'ue romper con todaS las. tradi.:. eiones, anteriores, religiosas: y" filos6ficas, que habian culmina: do en la-filosofia hegeliana de la historia. , Ahara bien,en el curso de este gigantesco'trabajocritico~ Marx comprendi6que existfaSunvmculoriltiy prbfundo'y'ocul to entre las teorfas clasil'as del conocimiento y ,Iafilosoffa de ,la historia., Incapaces de explicar -la' realidad de la historia de la ,producci6nde losconoCimientos,las' filosoffasclasicas clteraban, trasponiany' sublirnabanla historia,s~arada dl3 la· teorla ,del conocimiento, ,en "una filosofia de ia historia idea-~ lista. destinadaa llenar eseiacio~. . ' 'Desde, su, cnticade las filosoffas dela
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Louis AlthU8861'
to (y noya comounobjeto .ideoI6gicp).cn su ciencia de la
..--
h:istoria. , .'. En el campo de la ciencia de la h:istoria Marx encontraba no s610 la historia de los mooos de producci6n (en el' limi tado sentido econ6mico) sino la h:istorladel conjunto delas "instancias" constituyentes de un modo de producci6n; no s6 10 'Ia economia y la politica, sino tambien las diferentes ideo logfas; entre las cuale.s, esia la filosofia, en especial la· filoso~ fla de Ia historia, aI igual que las diferentes formasdel saber que se separan de su base ideologica, adoptando la forma "dt"
ciencWs. }lensando cientificamente· la realidad "de la historia, MIlIx se vio en el deber y en la situaci6n de pensar igualmente la historia de las ideologfas, y en particular de Ia filosofia, asi como la historia de' la producci6n' de los conocimientos; Las filosofias se .Ie presentaron como formaciones teoricas que, al sefialar la "verdad", desempeiiaban tambien, una funcion' so,. cial y pertenedan por derecho propio,.a la historia: al mismo tiempo a la historia social de la humanidad y a Ia histOfW de la producci6n del saberhumano. Por;eso' Sevio obligadoa alterar, el antiguo estadode la filosoffa, para ,poder tener ,en clienta: . su nuevo obfeto, que descubna a traves de su teoda de Ia historia., Poreso lahistoriaentr6 por sus propiosmedios y por derechopropio en, la filosofia, no soIamente para ex:' plicar'Y criticar' la" funcian social. de· las fiIosoHas ideoIogicas c1asicas, sino tambienpara constituir,el nuevo objeto de la filosofia. AI dejar de ser "teonadel conocimi~nto" esie nuevo objeto se convirtio 'en. teoria de la historia'de.la'1"oducciOn de
los, conocimientos. ' Las filosofias idealistas cIasicas, al igual· que las "materia listas" pre-r;narxistas" eran incapaces, depensar la historia, y por tanto suprbpia historia; no solamente el hecho de apare cer en cierto 'moment9 de Ia historia, sino tambien' e1 hecho de pt)'rtenecera una historia, de tener detrasde, sl uncpasado hist6rico, fundado, en la relaci6nde la historia de Ia filosoHa con ]8 histaria de las practicas humanas. Desde el momenta en queseprodujo un verdadero conocimiento de Ia histona. la filosoHa no ..pudo seguir desconociendo, rechazando ni su blimando su relacion CQn la historia, tuvo que astimir y pen-
MaterlalismD hist6rlco y 11Ulterlalismo diaIectico
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sar e$ta .relaci6n. Debi6 "cambiar de terreno",adoptar 1!D.a problematica~ nueva, definir su QQjeto mediante nuevas cues tiones, pru:a .pensar en..1a fi1Qsofia mismaesta relaci6n con 1a historia. al xnisIno tiempo que esta relaci6n con el conod miento. . POI: .eso, las. filosQfias anteriores, al igual que . las posterio res, eran rechazadas. La; gran tradici(m de la filosoHa . critlca, desde Descartes h~ta· I(ant, ,y actualmente i{ussed, era COlD batidafundflmentalmente ..pqrque trataba· al conocimiento como un "'problema~, y Ie planteabala cuesti6n de su "garan tfa" de derecho, en t:.nto que- el con<:>cimiento no es sino el proceso de su propia producci6n, y ..s610 se puede planteru:. la cuesti6nde laseondiciones Y del mecanismo de su pro ducci6n. . Lll;s 'fil~sofias dogma~cas cIasicas, las opto]oglas antiguas y modernas que no plantean ninguna cuesti6n al conocimiento, se veian con mayor raz6n rechazadas.Laimpotencia de todo eF pasado filosOfieo, de toda Ia filosofia ideo16gica anterior para pensar laWstoria de los '.conocimientos, separaba radi ealmente la filosofia nueva de su prehistoria. Las otras trans formaciones 0 revolueiones acaecidas· en filosofia, unidas a ,la aparicion de una ciencia . (matematicas 0. ciencias naturales) no habian nunca abordado~ sinq eludido sieropre, 131 proble ma de la historia.· Habian recurrido o. bien a una negaci6n ideol6gica <1e.. la realidad, de la existencia misma de la histo ria, en. este caso sllblimada .en Dios (Platon, D~cartes" Lei bnitz) , o. bien .a ima. concepci6n ideoI6gica de la. historia, concebida como la realizaciqn de Ia propia filosona. (Kant, Hegel. Husser!). Jamas habian sabido considemr' seriamente y pensar la realidad de 1a historia. . He aqui por. que existe entre esas filosonas, dogmaticas, empiristas, criticas, filosofias del hombre, delsujeto tras cental Q del saber absoluto, por una parte, y la filoso£1amar xista 'por otra, una verdadera rnptura epistemo16gica, compa rablea la que separll atoda ciencia nueva de sri prehistoria ideo 16gica. He ahi por que la revoluci6n filosofica de Marx es sOlo en parte comparable a las revoluciones filos6ficas anterio res. Antes de Marx 'Ia aparici6n de una ciencia nueva pro- vocaba una 'alteraci6n 0 una revoluci6n de la filosofia.peIo'
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LOuis ~ Althus8er
enel momento :dela Iileologw. filosdffca. cu.yospostulados fundamentales' subsistfan ~bajo laS modificaciones te6ricas. Con Marx. elsurgimiento de 1a ~ ciericia de ~ la historia' hace que la
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filosoHa experimente una revoluci6n que la hace esca.par al elemento ideoMgico y Ie da ·Ios caracteres de unadisciplina cient/fica. Indudablemente noes casual qUe'las ciendias ma tematicas y niltutales hayaD' hansformado Ia filosoffa s610 an el inferior de Ia ideologill; mientras que la a.paricion de la ' ~primera "ciencia humana" (la. ciencia' de la historia), por aiiadidura ciencia humana fundamentOl, baya ocasionado esa ruptora. revolucionaria y ~ que Marx 'tuViera que romper ex pHcitamentecon las filosoffas' chisicas y 'las filosoffas ~ de' Ia historia para cieada. Tampoco escasual que su creacion haya provocado, por una necesidad ~ absolutamente perentoria,el adveniIniento de un~ filosoffa:radicalmente nueva;'
Pregunta b) Respecto a 1a funci6n propla de 'kfilosu/fa, a sus relaciones' con las cienciasyen particular con el materla lismo hist6rico.estas descansan tambiensobte profundas ra zones tooricas.' . ;Enge1S, en elAntl-DUhring y sobre todo en' ciertOs pasajes de los manuscritos de DiaMctica de la 'fiaturakza, y LeniD'. en Mate1'l.olismoy empiriocriticismo; ~ ~Xpusieron eorl claridad mendiana.ConSideraron q~e lafilosofla desempeii6siempre tin papal impor{ante 'y a veces~ decisivo~n la,~ constittlci6n y desarrollo del conocimiento, desde' Sus- £ortnas mefamente ideo16gfcas hasta sUs forinas, cientificas. La- filosofia, lTJar~s~ tano hace mas que asumir~sepapEllpor su, cuenta" p~ro deS de luego con medios totalmente~ di~in~OS.l~JD~chQS puros, ,'" ~ ~, y fecundos. , " " ~ Sabem~ en efecto, que elconocimiento, que,en sU s~tido general ~e.conopimjento cientifico, no~ Dace ni ~ (le$8."olla enllD compartirniento estanco~ p:ro~egido~ pOI; no ~ se, ~bf;l que milagrQ de ~ todas las .influencias del ~medio ~ambiente. Entre esas,influencias,aquel1as sociales ypoHticas,p~edetl intervenir! directaroente en, Javida de .Iallciencias, comprometeJ;' grave., men~e.su curso y hasta amenazar sq existencia. Pero: hay in fluenciaS,' ;menos Visibles; igualmenteperniciosas e inc1usomas
mas
M.ateri,alismo hist6rico y moieriallsmQ dialectlco
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pellgrosas justaDlente porq'\lepasan jnl1dveJtidas: son las in-~ £luencias ideoWgicas. , ~,. ,~ ~, " ~ ,~ ~. \ ~, ~ Marx,~ pudo crear .la' ciencm de ,la rustoria, porque rompi6.. como conclusion de un esforzado tra~jo critico, co~ las,' ideo logias d(() la ~ historia,exisf;ente. sabemos tanibien,por la 1u cha de Engels contra Di~ing Yla, deLenfn contra,19s dis cfpulos pe Mach que, una~ vez fllDdada ,por Marx la ciencia d~ la historia no lta po~do escapar,~ aI, asedio de las ideologi81l. de ,sus in£luencias, y agresjones. En.efecto, todas, las ciencias. las ~ociales al igua1, qu!'! las naturales, estan constantemente sometidas ,al aSeWQ de, las' ideologias existentes, en especial de eSIl,ideologiaaparentemente no ~de(l16gica en 1a que al sabio:ref1e~ona~. "espontru;ieamente"su propia "p~ctica: lJi ideologia em.pirista ,0 positivista. ~, ,\' , ~. . C~mq d~ciaEngels, todo sabio, quieralo 0 110, practicD,;' ine vitap}emente una,}ilosoHflde l~ciencia y, pelf 10 wnto. n~ puede presc~dir de ~a filqsofla. . . , ' ~.. ~, Todoel problema radica .~Iltonces en. saheJ,"qu6fil,osl1/f4, debe tener por, comI»1fiera: luna ideolog1aque ~eforme' ~u propia. practica clentIfica, o ,una ~ filo,sofia rigurosa ,que clCpliquey la<;omprenda?"lunQ. ideolo~iaqu~ 10f;lSclavi~e a sus errores e ilusiones 0, poi e1 con,trario,~na filosoHaque)e abJ;'~los ojos, 19, ljb~re de los ~it9,~yJ~;p.ermita Mt:nb:~arver': daderamente su· 'pi-actica te6i::ic;a y s~ef!'lctPs? La ~ respue~a no deja lri~ adudaS7 , ~,'. ~. ~ ~., ~,'! ' . ,', ~ Tal es, en principia, 1R raz6n que justifica ci1 palmI de 1a filosO(ia marxista en su 'relitci6il can los conocimientos cicm... · dEices. 'Unaciencia .quese,.apoyaenooa falsa rcptescntaci6n de las condIciones desu 'pr{lctica .tcorica y de llrrelaci6n de esta practica'con las demas; carre e1 riesgo~' de 'aminorar' .su avance 0 de meterseen callejones siilsalida, oiilclusiV'e de considerarque' susjprcpias crisis de trccHnientoson crisis de la 'cicnciacomri tal; proporeionundo con cUo, argtIl11eni:os a. to das. •las , especulaciones ',ideo16gicas 'y. religiosas 'que se 'pucdan concebir.De'ello hemosjtcnidoejemplos ~ revientes cn'~ la ·'crisis ~ de la, ~ ciehcia" modema~, ·analizada', porLenin, Ademas,. cuimdouna,cienciaesta a punto de,n3ccr, ,c011"~e. elI'iesgo de, poner al s~rvicio de sus: incvitablcserrores la~ ideologiq de la qu¢ seimpregna., Ejemplos nqtables de" eS!o .nos,.1o ;ofrepen
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-Louis Althuaser
las na'Inadas ciencias "humanas", que a menudo no son; siIlo tecnicas, bloqueadas en su' desarrollo por la ideologfa empi" rista 'que 'las domina, que les prohibe discernir Su verdadero fundamento,defirili'su'objeto y hasta: buscar y hallar, en dis" ciplinas que aUnque exiSteIl.·son rechazadas·. por int~dicciones o prejuicios ideol6gicos, .sus verdaderos principios de base. Y' aquf estoy pensando en el materialismo hist6rico, teotia fundamental para la mayor parte de las ciencias "humanas" posibles y que prncticamente hasido proscripta ,de la historia de estas.Por no estar basadas en 10sprincipios del materialis" mo hist6rico y sus consecuencias, la mayoria de las "ciencias humanas" permanecen prisioneras def empirismo ()' spmetidas a los obleduos de los que ellas son las' tecnicas. En ambos ca sos les £alla su ob/eto y son casi incapaces de hacer la teona de ese 'Objeto. ttC6mo sacarlas de esta condici6n sin~1 recurso.de una filoso£fa que critique sus principips ideol6gicos 0 tecnicos y que les ayude a plantear rigilrosaniente' el problema de sU objeto y por ende de .sU teona? Loque es aplicabl~ a estas ciencias, puede aplicarse en primer' lugar 8.1 propio' matetialismo·. hist6rico, que es una' ciencia entre las demas y que enestesEmtido no goza 'deni:h~ gUn priviJegio .de inmtinidad. ,'. , ' Tambien el materialismo hist6ricb esta constantemente am6" nazado por 'la ideolC!g{a' ddminante y ya conocemos el r6" su1tado: 1asdiferentes £ormas de revisionismo que, en su principio, y sea cual £uere Ia forma de su'existencia (econ~ mica, poIitica, social, te6riea) 'se deben sien;Jpre .adesviacio nes de cmcter £ilos6£ieo, 0 sea a Ia influeneia directa 0 iIi directa de. Iilosofias ideol6gicas. Lemn 10 mostr6cIaramente en Materialismo y ernpiriocriticismo al afirmar que la raz6n deser del mater,ialismo dialectieo es e1 heeho de que propor cionaprincipios que permiten distinguir la ideologfa de la cieIlcia y, por .10 tanto, eludir las trampas de la ideologla hasta en lasinterpretacionesdel propio materialismo·hist6.. rico. EI mismo Lenin demostr6 que .10 que denomin6' como "espfritu de partido en filosofia", 0 sea elrechazo de toda ideologfay la conciencia' exacta de las exigencias de cienti/i ciilad, era' una . exigencia Vital para Ia 'existencia y desarrollo
Mate.rltilfsmo hist6rico y materialismO dio1Bctico
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no s610 de las ciencias naturales, sino tambiEin de las ciencias sociales y principalmente del materialismo hist6rico. Se ha dicho, con justa razon, queel marxismo era como teoria "una guia para la acci6n". Puede ser una "guia" porque es una ciencia y unicamente por esa raz6n. Para adoptar la misma imagen, y tomando todas las precauciones indispen sables para esta comparaci6n, se puede deck que en num6" rosas circunstancias tambUin las ciencias necesitan una "guia", no una guia falsa, sino una gula verdadera. Y entre las den cias, el materialismo hist6rico, mas qu~ cualquiera otra, ne cesita de una "guia". Esta "guia" de las ciencias no puede menos de ser una "guia" te6ricamente ealificada: el mate rialismo dialectico.
EI materialismo diaIectico no esta por encima de las cien cias, no es sino la teona de su praetica cientifica. Si noestu viera constantemente sometido a las ciencias, si no estuviera atento a· todos los acontecimientos, a todas las revoluciones que caracterizan 1a existencia de las ciencias, sencillamente no e:tistina. Pero en la medida en que devuelve a las cien cias, en forma de conocimientos de Ia historia de las condi ciones y de 1a diaIectica de su propia practica, 10 que ha reci bido de ellas, afiade algo esencial a los conocimicntos produ citIos .por las ciencias. En este sentido e1 materialismo dia lectico puede en ciertas ocasiones servirles de "guia" y, en otras, de "'guardilm" vigilante, pncsto que 61 mismo no es mas (Jue la teoria, el conocimiento' de 10 que constituye la cientiHeMad dc las ciencias. Como no puedc haber oua "guia" por endma del materia lismo ,diaMctico, se comprcndc que Lenin haya. utrihuidn a la tom a de posit·i6n cicntffica en materia de filosofia el camctcr dc una vcrdaclcra "toma de partido polltica", vale dedr, que Ie. haya rcconocido una imporlancia vital decisivn. Se COffi prende que, al dcsempefiar ese papel, el matcrialismo dia lCctico exija 1a mas clevada conciencia, el. mas alto rigor cicntUico. la mas clevada vigilancia te6rica, pueslo que cn 01 dominio teorico cs el ultimo recun;o, la ultima instandn po" lIihle pam los homhrcs quc, como los marxistns, se libraron de los mitns de la omnisciencia divina 0 de la forma profana de In religi6n: cl dogmatismo.
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loulaAlthusser Advertencla a Is 8egunda edlcl6n francesa . . deuleer EI' cap,tal"
1. Esta edici6n de Leer El capitol dHiere en' varies aspe~os de la p:dtnera edici6n. .. 'Poi ~ ~do. es una edici6n parcial porque. para permitir la publicacl~n en formato reducido. hemos suprimido, algunas contribuciones importantes (las ex:posiciones de Rariciere. Ma.. cherey y Establet). . . .'., . Por otro lado. se trata de una edicl6n revisada y corregida, y .por ello nueva, en parte: varias pliginas, especiahnente enel texto de Balibar, son ineditas en frances. .' Sin embatgolas rectificaciones (cortes y agtegados) que hemos. reillzado al fexto original no coileiert:ren nFa> la termi nologfa, ni a las categorias y conce,ptos utilizados. nl a sus relaciones internas, ni en consecuencia a la interpretaci6n ge neral que· hemos' dado de la ,obra de Marx. " Esta edici6n de Leer El capital, diferente de la prlmera. ali-. gerada y~ mejorada. -reproduce y representa asifJStrlctament8 laS posiciones te6rlcas del texto original.. "
2..' Esta ultimaprecisi6n era necesaI'U!.. En efeeto. por respe to at lector. y por simple honestidad, hemos .respetado· inte., gralmente una terminologfa y las posicionesfilos6ficas que n~ pareeen sin embargo, ahora indispensables de rectificar en dos p'unto~ pn'}Cisos. ' '.' . ,.., . A pesar de las precauciones tomadas para distinguirnos ·.de la ideologfa "estru~ta" (hemos dicho muy claramente que la "combinaci6nn que se encuentra en, Marx ~nada, ti~J18 q1,le ver con U113 combinatoria a pesar 4e la intervenci6n decisiva de categorias extraiias a1 "estructuralismo'" (determi H
).
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Louis AlthUS8e1'
naci6n en ultima instancia, dominaci6n, sobredeterminaci6n, proceso de producci6n, etc.), la tenninoIogfa que bemos em pleado. estaba Qajo diversos aspectos. demasiado cercana a la tenninologla "estructuralista" como para no dar Iugar a un equivoco. Si se exceproan ciertas raras excepciones (algunas criticas perspicaces han marcado la diferencia), nuestra· in terpretacion de Marx ha sido reconocida y juzgada, en gene ral, en homenaje a la moda actual, como "estructuralista". Pensamos que la tendencia profunda de nuestros textos no Se vincula, a pesar de los equivocos de terminologia, con 1a ideologia "'estructuralista". Espel'amos que el lector querra re cordar esta afinnaci6n, verifiearla y suscribirla. Por el contrario, tenemos ahora todas las razoriespara pen sar que una de II!-s tesis que hnbia adcJantadoacerca· de Ia naturaleza de .la filosoffa expresa, no obstante todas .Ias preci siones dadas, una tendent'ia "teoricista'" cierta. M6.s precisa mente, Ia definicion (dada en La revolt/cion te6rica de Marx y retomadaen el Prefacio de Leer m capital), de Ia fHosoffa como· teorfa de la practica te6rica os unilateral y por consi. gniente inexacta. En este caso no se tra~a de un simple error de terminologia, sino de· un error {'ll Ia co!'eepci6n misma. De finir In filosoHa de manera unilateral t'OIllO 'l\~()rla de las rm1c tieas tc6ricas (y, en consccuencia,. como Teorfa de in dift-'ren. cia de las pracUcas) es una fOrnlulaqne no pucde sino pro vocar efcctos y ecos te6ricos y polltieos, sea "cspcculativos", sea "positivistas". Las consccucncias de ('ste error, que concieme a In dcfinl· ci6n d£l In filosolia, puedC'nscr rcC'onoddas y ddimitadas en algunos puntos preciscs dd PrcCado a Leer El capital. Pero, apm-tc de cicrt'os delalks menon's,· sus ('OllS('l'tU'llcins no capital ( "£1 obje invnlidan ('} amHisis quc }WIl10S dado (Ie· ' to dd Capit:d", y la t'Xposl('ion dl~ Uali!u'lr). T('ndremos {)casionde rectifiear 141 tcrmiuolop;la y dc cone gil' In. definici6n de- 1a fHosofla cn 111111 serie de pr6ximns e!I tudios.
Louis Althus..r Rlno Del SeS80 Nicola Badalonl . Luciano Gruppl Lucio Lombardo Radice Galvano .Della Volpe Dlscusl6n sobre el pensamlento de Antonio Gramsc'
m
(Advcrtt;neia a la edid6n aparcddll de I_ite Ie Cllpital ('n Hlfl8, editions Frau('ois Maspcro, Pelite Collection Maspt'to, Paris. tomo I,pag. 5~6.).
.,
La tilosofla/la poUUea y la elenela-
Querida compafiera: ' Con :r:nucho mtereli he Ieido ttl nota sobre mi, escrito, "'El marxlsmo no'es Ipstoricismo",publicadoen ll:!-revista Trlmes-: tre. 'Observo que tufu'itiea, 'aun cuanda plantea, objeciones de fondo. trata de indagar tobre 16 que he tratado de "decir", in eluso aIlfdondeno'16-16grepor completo. Tienes ra2;on; -I¢groseraaproximaci6n -entre aIgtlIlos te-' mas ·deGramsCi yalgunaS' teliis de' Colletti nose apoya en'las necesiuias justllicaciones .hist6ricas y - te6ricas. . .,.. ., Me day euenta que as preciso ser cautosen 1a mterpretadon de ciertas 'formulaciones "'te6ricas"de Gramsci. Si se 'qUiera' juzgarlo es necesario no apartarse del pensamienta ~concre" to" de Gntmsci. Pera eoincidiras conmigo que la referencia a la existencia del "pensamiEmto concreto" de Un autor 'no basta para disipar automaticame~te Ids equivocos que pueden estar . impUcitos en las formulas "abstract as" de su "teoria", EJ1trela teorla abstractay el pensamiento concreto de.un autor. en es~ pecial si es maduro y resptinsable como Gramsci; debe:existir eiertamente una profunda "i:uiidad' deinspiraei6n.SL esta 0 aquella fonnuIaci6n "te6rica", "abstracta". da . Iugar a eq1.livo eO$ necesario 'Veri,ficar si' su "'pensamiento' concreto"refl~ ja.ycoilSagra ("concretamente"), 0 al contrarlo, corrig~y eli. sipa '('"concretaniente") tales equivocos. La existentiade lm· upensamiento c()Qcreto~ nOesn~sariamente laprueba de que e1' equ(voco pres~nte en Una f6ni1ula uabstracta" ha sido corre gido. talcorrecci6~, debeser ,d6m~raiia en et' "pensarriiento conpreto" a fiP de que .Iii .referencia ", al ~pensamiento cQllcre " to" no 'vaIga soIaxriente como garantia moral. Sin embargo, debo ,confesar que los mejqresestudios sobie' el, ~pen~iento'" .de Grams<::i. que. pude leer no. djsiparon el
es
• El19~e diciembre .~ lo967, Rino Da~S~sso pJlbllc6en ,RtnaS cita un comentario sobre un capitulo de. Leer' Sl' capitald,e Louis AlthuSser aparecido e nla revista Tri'Tl14!8tre'dePescara. Althusser respondio con eata carta. que fuepublicada en Rinascita junto con una breve respuesta· de Dal. Sasso ]I con intervencioneB de Nicola Badalo~ Galvano dena: Volpe Y Luciano GruppL .. o
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DiSC1l8iOn sabre el pensamiento de A. Grll'lMd
equivoco "teoricQ"que. tratare alipJ."a de ilustrar. Y he aqriI el punto perfectamente individualizado en el que, a mi entender. esta presente un equivoco "teoricQ", Contra las corrientes positivist as de interprel:;lcion ..deI'mar: rismo (y al respecto" sU}llerito esinmenso porquetuvo la.lu cidez y el coraje. de luchar contra las opiniones dOminante'l), Gramsci vio Y peIlSo con. fuerza una de.las dos deter~aci~ nes. de toda filosofia: la relacion e~tre filoso{fa y politica. . Pero no vio con igual vigor~ ni aislo, ni pens6 la. Qtra' deter . minaci6n: la relacion entre filosoHa y ciencia. .' En-el planoteoricp. e~e es .el puntodebilde Gramsci. -AI,,: gunos filosofos marxistas italiallos subraY{llon con claridad di; chadebilidad. Gramsci sostiene una concepcion evidentemen': te .insuficiente,si nQ. directamente falsa, de las ciencins; Y . es to 10. hace ·solo en ~lguna.s paginas .escritas de modo. !!.pr~sura': do y superficial. GrainsGi se lirnita.· Ii: ;~epetir formulas total mente equivoc!!.S y con· reminiscencias ',crocianas: teoda "ins_ trumental" de las cicnci(lS. y teoria"superestructural" de, l(lS ciencia,s; . . '. .' " Sise trata de aprehender claspcct~ objetivo de. tales formu:" Iaciones podemos decir que, elIas indicim: ,. 1) el puesto que una c~en~ia oeupa en., .upa pI'actica ,deter minada, de Ia quees solo uno de .los c1en/.<:lnto~.cpnstitutivos enb:eotros, y lafuncion por clladcseUlpciiad~ cndicha pnic tica (ejemplo: la teoria marxista, eS u~o de . los ele~entos de la.praetica politica marxista,y valccom.o::ins~rumento" del . . "'metodo" y "guia" p~ra Iil. "acpiOn");' ." . 2J el pueStoque hiscieridas .ocu.pan, e;n rolaci6n a 'sUs.ihs taPcias (infiacsfrucfur!l,.sup'crcstrtzctura· jurrdico-l?oHtic~' SJ.l perest~ctura id!,!o16gicaJ~ en una formation social. dada (a este respcctci,]as cienciasocupan un PU(,lsto"~n la superes': ,<.' tructura").. . "., .' . " . . . Pero ,tales formulaclones,' que asignnn'a las Cicncias 'Ull puesto 1a topica,' no agotan"lo que es e'specifico de '1aS"cieni cias: la produccion de conocimientos. abietivo8. De aq'uf,se,deriYa.aI m~no~ una condus~9n' lmportante':' .Xa: que Gramsci DO' piensa larelacion cspccifica entre l~, filosofia y las ciencias tiende. continuamcnle a redueir y" a asi roilar pot completo, 'con algona :varianlc tncramentc formaI.la
en
"'filosofio." a la "concepcldndel
mundo"~'
' . , . '.
Dfscusi6n 80breel pensamiento de A. Gramsci
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,En efectQ, 1.0 que a los ojos de. Gramsci distingue a Ja filo-, sofia ("'de los fil6sofos")de Ia concepcion del mundo (de todos los hombtes, en cuanto todo hombre tieneuna "concepcion del mundQ"": Cramsci dice que ""tOM hombre es. fil6sofo") con· siste 8610 en esto: que la· filosofiaesta caracterizada por una mayor "coherencia... · Es c1aroque tal diferencia ess610 far mal,. porque Gramsci la califica solamente con una difer~('ia. en el grado de "cohereneia", sin darla razon ni de talCCeohe_ rencia"'ni de la diferenciade grado.. Es.cierto que Gramsei ba bla tamblen del caracter ~sistematico·". del caracter "racional'" de 13 filosoffa (de los fil6sofos y .del marxismo), pero esos tI~r minos, que no,.explican nada de especifico,no·hacen sino repe tir con distintas palabras el caracter ya definidQ de la "coh& reneia", ' , Pero la coherencia( 0 la sistematicidad, es decir, la raciona lidad) DO son criterios especHicos. en cuanto.tales, ni distinti vos de la fi1,osojfa. Existen, concepciones del mUMo que se.ex presan con perfecta coherencia, con sistematicidad y hasta con "racionalidad"',.y que sin embargo no sepuedenconfundir con 1a filosofia:por ejeroplo, las expresiones' tc6rlcas de la; concep ci6n religiosa del mundo, en la teologia. '. . Enrealidad, para comprender verdaderamente 10 que Gram sci trata de deslgnar como propio .de Ia filosoHa cuando invoca su "coherencia"', es necesario hacer intervenir la relacion cs-. pecifica que mantiene la filosoHa con.las ciencias. Solo esta re laci6n confiere ··a Ia filosofia los caraeteres (coherencia, siste maticidad yracionalidad) exigidos por Gramsci;;. pero a esta: altura dichos ccaracteres no tendran ya s6Io un car:acter' forro'll, sino queadquiricin un caracter preciso, definido JlO por)a "racionalidad'" en general, sino par la forma esp.ecifica ,de "ra cionalidad" dominante que eriste en un determinado momen.. to. en las ciencias cOli las que la filosoHa ins~aura unarela ci6n especifica. Las "concepciones del· mllndo" cpntempora. neas, 0 no tienen relacion alguna con las eiendas( y con. su. "racionalida.&':'}. 0 bien instaman .con las ciencias una "rela cion" .distinta de,Ia filos6fica. .. .' .. ." Si este ana.lisis aunque esquematico esta fundado, deberia. ser evidente. que las. filosoffas instauran tambienuna relaci6n determinada con 12.$. "coucepciones .del mundQ" existentes. Di eha r!')lac~on •..en definitiva, es' 18 ;rela~ion organica entre filosa
10 fiaiy
DiscwlOn
sobre el: fJen3arn4tmto de' AGrtJ'J'JVCt
po'lttIcrJ (p6rqueen la: lucha ideologica de':1 cIasej 'que es
un 'mom~ilto ,de ·la Iucha· de;cla'ses 'en I el sentido propio del te-r.
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mino; esdecir~'de1a:,politica;sedan :s61oconcepcibneS del mundo Opu-estas) .Pero lasfilosoHas' no Be caracterizan s6lo , enrelaci6nala;politica (de otramanera'serian simples con. cepciones del mundo, aunque'''politicas''). Como filosofiasellas Be definen (1 tal 'as su diferencia ,e.speC£fica) cen base a Ia ,rei> la:ci6n queinstauran, 'lJl'mJ,smo ti.empO; ,can, las ciencias,. y.. mas precisamentecon 'Ia forma de ~racionalidad'1 dominante eXis b~nte en ,un momento dado ·en -las ciencias. Esta doble reIacionimpUcita, dalugar·a i una smtesis oiigi~ rutl,' en la cualconsiste; precisamente la naturaleza de las fila,. sofias como/ilosO/fll8; distintas de las concepciones del mlJn~ do y de las ciencias. Sera. claro asf par que las filosoHascon tielien en s1' concepciones 'del mundo, omejorc6mo son.el efecto deconcepcIenesdel mundo: deaqui:la fJaZidez de, 13 teorfa englllsiana, yleniuista de la tucha de las dos' tenden(~ias, materlalista e idea:listaj cola 'histormde las filosofias, dado ,que tallllclia~es'unaluclia 'ide()}ogicade clase'entre conccpoiones delmundo opu'cstas' entre Sl.,y; almismotiempose compren depor que son siempre,distintas de ,las .concepeiones dcJmun_ dono filos6ficas.pot'cuanto/a'diferencm de las'simples con Cepcionesdel m,imd6,el1as' instl;lllfan con las cicndaS una re;;, lad6n 'espccificl;l..· ",:' 'Mepa:rece evidente que;, dado esto, Grrunsci. no pudo, en, ausehcia de una concepCion corrccta dc,lasciencias y, de lare bci6n especffiM de la filosofia. con las 'ciCncias', dar una defi nicion completa y corrc~ ·ta de ·la 'fiJ()s()Ha~, Es. cierto .que corti. preridi6 la .reIaci6n, fundamental ·qne cxistla. entrc1£ilbsoffac y politica.Pero no 'comprendi6-,larclaci6n~ cspedfica. entre filo sofia y.' ciencias. De aqui result6' un (lClUlvoco' indudablc en so concepci6n"te6rica" de 'In filr)Sofia:Y ami cntender, este cquf..~ voco"tc6rico" no es disipadoPbl" el "pensamiento conercto" de Gramsti." . . , ' . . ' ••... . ., Si·'se estade'acuerdo en·la 'exis'tcncia dc" tal' cqUlVoC(},. rcsul tara claro' de. inmediato c6nw deeldcrlva '1a' tcndert(~ia, , (tue' Gramsci acentuada,a:' cr>nfundit la fi1os()fiarnarxista (materialismoilja16ctico)l'conlacii:mda dela hillTotia( dcla qtleeI '''materiallsmo ~ist6rico": st.']'la la '!'teorfa gcnl!ral").. Esta conflisi6n"es consagrada:porGtamsci: It' cuandu sllpilme, cl
en
'es.
I
D~ '10M. eI,~nto dB.A.
Cramsci'
11
tennino"Cl3.sreode' imttetialiSmo:dialecfico tal quc'reptdchaba susecospositiWitas,:sin advertiiel :real'contetrldb de tal'defi. nici6n, vale' deciir/ la: '. relaci6n ' entre filospfia iyci~ricias);' "2) : cuando identifica laciencia de' la. historiactil11a filosoHamat;" xiSta e~ Ia· 'uniCa',;exPresi6I1 d~ '''filosoffa.: de 'la:' praxL\>". Pienso' que eneste' caso Db estnlnqs ftel1lea: '~a' simple: euesU6n' ter~' mino16gica; privada de 'eob,secuenems 'teoticas', y. pfli¢~c~. . .Me doy cuenta queeI!-, m'insistenr:iacQri que pongo'el acentt'i en 14$'c~enCi.~s )lebeeXistii '~lgo:~ue e~'propi~de Ia"t£adi Ci9u ~ ciUtw#jranpesa'\desu: ';ililininisniO". Peropieriso tliJil... bi~n,que no se'ptiede resbl"'et.isenamie~te el'problema bbjetivo deumi Jeot'ia'c~rrect~ "d'elliscienciM, y de la: 'relacioncde=la' filosoH~'con 'las' 'cien,das, 'Dli>di$te un;!.! exp1icaCi6n. de', tipo lilitoricista: '''s,9ciblogin' del. cotl.ooiniien~o"~'El~mo·: prpcedi miento, , es 'dedi ,la invo('aci6J;t de .In. '"ti:adici6n i~a1iai\ll"'" no valdria por derlo .tampooo; palla' resolver el problema , StlsCita:do par las tesis .de G11lll)Sci. T~nemos, todosel suIiciente d,istaJ:li.: ciamientofrente a, 'las "respectivas ~tradidiohes1'riacidna\es"~ somos todes 10, bnstantemarxista-l~lliniStas y, por, corisigui~'nte;' estamos todos,Io sllficientemcnte inmllnizados' contraelrela.; tivismqsocioI6gico,que es ,',tin :producfo diretto 'deila"ideblo gl~ btirgucsaen Ia historla, p;lTa>techazar este punto de'Visfa "comparativo" •superficia1, 'q1ie . Hene ,el . valOr . de· una .m.-::ra ideologlu ctiando:'pretende' eXpliea,r' el, .contenido' te6rmo',. de una prop()s(9i6n~ Tal "sooiol()g1sin()'~es;,por as1' d'ecftlor;ttn ejcml11o"optimo" de los'pcrjUicios "qne. puede'ptovocar'UJia' ,.' ". '., COll('l)pdon "bistonC'ista'" vulgare del "Iriarxismo. ," , , Oigo'''vtIlgl\r''''c'bnvcnddo'de qnellpesardb susequtv~Os objctiv6s la c:oncePCion 'gbimscianadel :"histpricism~'r 'e~' rouy ll,j()s de ser "vulg~r"., Pero' prc,cisamen,tif poi-'esta, la' eX!lCricn('ia' que cotidiimumenfe,y en la~"!lrcllnStnricii1S mas eli vorsilS; p(ldl,mos t«;lnerd.e los nCfa:rt:oscfectos ,teoTicos y pra6ti~QS' dclequivoco objctivo que, 11 prsci:r, de todnslas"precauciones quc'ad()l~~a Crnmsci, .',' ("ontiene .'L~, n~ci6n de' qiStoricisri:io~ (aunqu~~~adefiriin'tns' nIh\, '(lctnI p'rQb~eIna' menlO: mcntepragl1111.ticO, de sus tltu1ostC(J1u:osde odlidez. ,'. ." ,Par cl1<:ima' ttcto~Q~ dcbeinbs "sal\tar~;' 's.nIvaglialdar,:it PCSIil', de su' forinulaci6n dttdosa 'Y' de sus' ineVifribles' equIvocas teO:' i
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--
.
Discusi6n roMe el pensamiento de A Gramscl
ricos; 10 . qne el 1$f;oricism9, de Gramsci· tiene de ·~fJtlco. El caracte! ,antentico del ~istoricismo gz:amsciano. consiste fnndamentalmente ~n.1a. reivindica9i6n de la~tnralezaPQU tica ,dela filosQIfa d~, las fonnapiQnes (Y. de StlS modos. de prodncci6n), en, la tesis· cprrelativa qe;la posibilidad de la z:evolnci6n~. en b!., engellcia de 1a JJrUdail. deteoria y pra:m, etc. tlPor qne no definir ·tales real,i.da,des . par el. nowqre :Y~ consagrado por una larga .ttadic;iQn? '. '. . .' '. .. .E;n compensaci6n". si. es obligatorio. ~salvar" 10 gne hay~ de . antentico Em el ,"'histC/ricismo~ grl,lmscj.ano,. debf(mos tambie!l a .toilo:. costa. .evitar comprometerlo~ (como ..tambiell el. mero u,so de 1a palabra .nosobliga a. hacerlQ d,econtiriup) con las ideologfas . relaqyistas (bw;gnes~) deLconocUniento" las cuales estanconvencidas'. de haber. resnelto tlD. contenido tea:' rico objeUvo' (conO,Ci,miento dentifico verd!Jdero () tesi$ .de hi.. filo~ofia justa) una vez. qne .10 han .re~,nel~o. ~n, s~s c,?ncU,:.. eiones ,"'hiSt6li~".·. . . . ' . ...... '. . . '. .. I4l historia 4~ .I()s ~nteIlidos 'te6rlc:oS .(vale decir? cielltlfieos. y filos6ficQ$, en•. el, selltidopropio del ·~~o).: eS" ~~ duda. . .. ' . .',., una hlBtoria. J?e1'Q:' ..... J).esta;hiStoria,nol:d~b~ s~r c~cebidacamo:un mera deye nit. empiricp a~egist:rar en una cr6nica: depeser pe:!lSada; den~ trode "Conceptos te6ricos de la Ciencia marxista, de la. hlstc;)ria; 2) .se .,ata de nDa historia..~ generis.qnea6n :reiptrodn ciendos~ . en la historia; de lI,ls fOl1l1aciones~ociaIes. y estando articnlad~ sobreesta, liistoria. (qllees 10 que llamaJ:listoc ria. tout court). ,no es redllctible de , nn, modo puro y: lIimp~e a la. historia de las formaciones soCiales,8;tlDqlle.sea concebida en .termW,os ngempmcos sino .. segu.n los conceptos mariistas , ' , Cd' ]a hist . " de la'.' .CWncl~ ~'.'". or:m. ,:. . (. '"' . ' Pero con, estas ,distinciones, a mi enten4cI' e.senciales) retor DaDl()sa la tDterpretaci6nde1 D;laixismo a .Gramsci~Podemos ~delantar la"sospecha, de. qn~, tambien. aeste"respecto. yale decir"cn.,~,inodQ de concebir ur tier;r.cia inarxista de labisto ria .( cOmO distinta de ~ fa(}80fZfJ marXista) )os eqn{yoc~ de GI'Ilmsci '. fr~te .a la' cieJ)(!ia. y a. la filolloHa (y ante, todo. sn si1cllcio sobre 1a xelaci6n ~ filosoHa~ciencias) prOv~. conse-· cnencias te6ric~ y p.r:4cticas., . . .',. .' .' , E!!pero poder. retornar mas e~e~amente. .sobre., e.stos pro ble.D)as.~eJ:o' entretanto . me sent:irta .sati$ecPo si loscama~.
se
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,
"
'I'"
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Di8cUsi6n 80Me el. ptm8amfento de. A. Gramsci
radas italianos qne conocen, bi,en a Gramsci, nO' s610 su "teona arstracta" " sino tambi6n sn Gpensamiehto concreto", meran unll contribnci6n a estas reflexiones qne se vincnlan en· todas partes a problemas de gran actnalidad. Lams ALTI:tUSSEIt , ~ !
M6lodo d.
..emr.
En mi ,brevisima nota al capitulo de Althnsse:r titnlado:. "El IDarxismo no es historicismo.", c.melimitaba a: algunas obser vaciones sobre el "metodod~ Jectura".- No acusaba a Althus ser de que no snstentar8; sn aproximaci6n de. Gramsc;i. a Colletti con "1as necesarias. jnstificaciohes hist6ricas y te6ricas". S61() queria decir 10 signiente: con el metodo ."extract:ivo" s~ .llegs. a' asimilar escritores qne' tienen inspiracioJ;l.esy, significados, muy 'distintos, El"historicismo" gramsciano pnede .seracep tado,! rechazado. pero de ningUp modo. pnede .ser aproxi mado a posiciones como Jas de Colletti (en,el caso de marras) ruya .teo:ria . no por casnalidad no c816 nnnca ,en 1a historia ' .' .,,' c pasado-presente. .' . Si, parecen existir 'analogfas en las forn::tnlaciones,. se trata en realidad de posiciones incomparables', entre .si,. por:que' la misma. f6rmnla gramsciana del "'seccionamiento del presente" fiS cODlpre~sibles610 en relacicSn diaIecti~Con Ia historiza,-. cion,.. ~con, aqn~Ull.~ " famosas,"medi,aciones" sin las, cnale.s 6se' mismo .~secciona.miento del presente" se conv~rtirla en Qfra cosn. ,La ~naloga teoria de. CollettI jamas (lio Ingar (ni .tam~ poco fue postnlada metodo16gicamente.} .111 discnrso hist6rico. Qnizils hayaqne rechazar por. completo la posici6n de. Gra,msC'~ pero. a condici6n.de definirla. tal como amnygrandes rasgas acabo. de, hacer. El 11echo deqne la haya teorizado 0 .no, y teorizado. con. rigor,. Uene muy. poca, importancia,. Y es aqni donde la cnesti6n del "m6todo de lectnra" adqniflre. ulla 4nportancia. fnn.damenta11 de princjpio. Althusser prpcedepor extracci6n, .~oncedllseme. sin embargo,. que tlD antor, un
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Discusi4n 80hre elpensamiento de ~. Grarnscl
un
,-
estnti;lr . (talilbien un' fil6sofo ) Hene ·.valor . y .un,a .sign.lfi,:" cacien en sil ·totalidad~' .resJ?ecto a la Cti.ar ciertosaspectos y formuJaeioI1es . paruculm-es ,Puedenser contradichas'ti lib·- com..' cidir a la 'penecci6n, &-,~n fin,~ masexadamcnte, se enenen tran en relaci6n dialectica. As! son leidos los poetas, ademas de losfil6sofos. Una Jectura correcta de uneseritor sera siempre aquella que establezca una re1aci6n diaIectica entre las dos momentos (el global y el de las forrnu1aciones y de las . bUsquedas . particulares en las que se articula la obra). relaeion cada vez mas pr6xima a la diaJecticareal de .la pro ducci6ri del pensainiento y de 1a obracxaminados. Me desa grada usar una fraseo1ogia tan generica y normativa, pero ayeces tengola impresi6n de que las premisas metodoI6gicas de Althusse:r se coloell11 exa.ctamente en' 1as·antIpoda.s: .:61' parece estatconvencido de que de un escritor. (fil6sofo, te6 rico; para tainbien erltico~· ensayista, . etc. )es ·posible· "extract"?· elj,cnsanliehfd,aisludo y' obseJVarlo itlvitro. Parecp ,estill'; conv~ncid6 -dc: qu~es'posible llcgaraformulacioues4inivocas, a .tcodas reinisibles a una f6rmulaemallstiviX, sohre l()sescrl~ tores (y,fjJ6sofos)dignfls, dolnombre de'tat 'Yo'plirticipo d~1 critetio opuesto; ';r.' piel'lso (ItlC procooi(·ndo COil su ·metodn s¢Uega a una verdad'erll masacre y a una pen:nanente inc()m~ prens16ri (~dsigujficadoclcllautpt'. Sin (,lllbargo. ·('S daraque lJega'ilb' Ii este punto :1a· discusi6n:se· diJatnenorrnemente, hasta desbordar los Hmites, (que ya comprendeu'lui temtodo roPy vasto) plantcadaspor AlthtlSSerell SU '('arta; pero ·quizas por es'te ellinino Se llegarfa tnmbien a] n{ld(~p ddproblema. Me liinitarc p{lrelJo a algunas notnssobrc. tlil '-cuesti6fi: prclimiaar.En (l "i:CoI:ilivisllJo".' Esto pn~ej im1it'ar (I"C' Ili) s(iky'>' altmta. y "'gJuhalmentc"Ios textos'de Gmllls(>i; .qnesigilifi6111 lIn'p(~1'I'lQtl('ntc:' l)(,IlS()' :11 historidsino' '(~slw('uJa:H"o.' Lo lIIisnUl' vale llarh Jns Ihlmlulo$ "r~siduos" ~ro~ cianos: 1QllCCi!f('(i' (.'lit{{ en' (~l fondo' de $\,. 'filnllad66C.iilturli) Y ifj]osofica, tItle tengnde '61 una opini6,1"eli:htgda"; e.
un
lJist;1J8i6n,mbr8 el pensamumto d¢A. Gramsci
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da~osubrayado por el propioGram:sci.'Pero el hechoes que Grallisc:f' trata: de arti~tdarJa crltica-qmarxist\l'~·prccisamente enconfrontaci6n 'Con a1 pensatniento Crociano. (no solo era:
tiea", donde .BU reHexi6n es mas d6bil y fragmentaria). Creer
haber descubierto algo atraves de WIn formula (yen pro
de la discusion puedo dar por sentado que Ia "teoria grams
dana de las ciencias tiene el significado que Ie atribuve
AIthusser), exclamando "'aqui te pesquc", da la impresion de
un _juegodt!:masiudofacil, que os frutu ~c Ull modo de leer
desartieulado, "cxtructivu", en fin, cScoJustico.
yldmismo pllede dedricdcl pfOblclnade la;tcorla de la: cienciri: Yo mislno; al final detninofa;Jha'da.:liIend6n-'del prohlema, que' 'no estu J vinc'Ulad.) tanh) it Iii. - justa solndon:. "te6rica" dc' Ia rdacion "cic'nCia-nistoria", como asu formula.. ci6n pnlctica .ceirrccta· (a 'la'{ormulaci6ticorrccta tIc'b pre;;1 sC'ncja 'tIc- 'lils ciencias en Idsm:i'cduu, In eultura, d Elstado. ctc.);scsahcpor cxpqricnda 'Idc In tCill'iznd6ntIe-la cMnda cQnc!ujo. prccis1uWerite· tiil. e.l n1c)viinicntor-cvoJnei('lmlrio 3.. ubc iraci(jnc~,. y bnstaria .; dt,IIIIas 10Cllras ltnplicsla~CiJn" las' teo~ riaS~e LYScIlkq. La articulacWn dc' luSdCIJdns, de tildas lull cicncius,rio' pnedc sin(}cl(jrivur. de una vision dialccHca tIel mundo, dondc el lOill:ncIito del;lS ci(ilidas cnctlClItra' autcmiJmiu.'y:, al JllisUlotielilpo sus Hmltes~ Cilrim aulonomla y Ihnites ·cnclintl'ura ' tamhj{!h'd'jn(}JUcnto de lu"poHtica; dGriiillsd pell'llO:~ilgllna' V('Z. dtJillillwnidistinla? ~Nocs so invostigacioll hjSI{lI',iy~l Y. Sll teiitaliv:ldoTuildar d(~ lIi(llJ,n dt·n tifico la hist()ria '( ell pol{:mka ('Oiltnl d ('spccnlafivisIlHi cro~ ciuno) prLiC"isltJllcJlle min i'lldkadbll /Ildj)ddlli~ka dc;lil nn:l(J~' nhllli;i de los Jl]Cllllen[OS tUal{.('lidis? .T:H ('\1" '!liliuy W'imclt!S rllSbtl)S; Cls(~rilidh gloJ)al, ll(lCW{IS .del pllrti('ular, ,d(~ .Gr:tJtlsd. Grmnscl dehe stir ]diM' siguieJl(Jcj It din!(,d{,u g(~jl(~nll .tksu ptmSllmicmlo; ]~ (~xperibii(:iW dCCOUjllllt,i
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Discusion 80breel pensamlento de AGramsci
dijo, so ,pena de reducirlo .a formulario y. catecismo. Quiz6.s una lec.tura mas orgamca y "cientifica~ anoje una "desvalo.; rizaci6n'" (una dl:lterminaci6IJ,) mayor. Pero no yeo emU puede ser la utilidad y ~estimulo qn,eproduzca una operaci6n "extractiva" en relaci6n a un autor que a pesar de SU bag mentariedad (\'In parte neeesaria, en parte. voluntaria) ,se distingue por su eoherencia yorganicidad. .'--
RiNo
DAL SASSO
La tarea,., del 016sofo, La intervenci6ndel. companero Althusser me parece bastante' interesl;lIlte no s610 por lascosas quedil(e, yque hacenpen sar, sino tambien por ,el esfu.er~o para asi~r un espacio a la relaei6n.entre filosoHa ypoHtica. En esta intei:Venc~6n nC? hay senales de la anogante separaci6n de la teoda de la poUtieR queconstituye uno de los. aspectos mas i,rritantes de su; ,elaboraci6n precedente. D,ebo', decir que. es interesante tambien el modo como 6lencara el problema 'de.Ja, relapi6n, filosoffa:-eieneia.La tarea del fil6sofo seriapor un lado.Ia de desen-brrr la. determinaci6n hist6ricadelas eoneepciones del mundo, por, el otro la de individualizar la raeionalidad. do:rni nante en un cierto periodo hist6rico. ". , A esta altura surgen. sin el!lbargo algunos problem!!,! y difieultades. PaJ:'a' que la.soluei6IJ, ,de Althuss,er, pueda ,ser en mi opinion .~tisfaetorla, d\'lberfa lograr eompr~der e1. nexo eIJ,tre la· primera y la ,segunda fUIJ,ei6IJ,de la, filosofia. Uno de los ]imites mayores ,de, laposici6n de Althusser, eS precisa mente haber,ignora.do esta, re,laci6n.Con ellQ quiet;odeeir que la J:'aciona}idad domiIlante en las, ciencias' (ill, up cie~o p~rlodo ,no puede ser fijada 9Omo una. esencia" cQmo una ealidad,sino que, desde ,el puntode vista de la filosofia, debe entenderse como un sistema de ten,siones ()perantes en, forma. dialectiea que af~ta (precilJamente a nivel,de la ,filosoHa \ a las eoncepciones del mnndo existentes. La determinaci6n de estas tensiones ( tarea en la que eonsiste en, gran parte la
niscJ.isid,. 80bre eZ' pensamiento de
A Gramscl. .
'11
raeionalidad cientifica. y en tdmQa'la cuaI, sigUierido a Gram sci, 'pero tambien eon el eSfuerZo de una critiea interna de su' pensainiento, ,'tratamos de trabliiiir desde haee ,tiempo) erea el problema'de,una reIa:ci6n entre la: racionalidad dow nante, en las ciencias y Iasle.nsiones practicas' que Ie corres ponden. ,," . La carenciade ahmci6n aeste momentc;> diaIectieo (que es, porej~mpl0. el mismo 'que impulsa 'a Voltaire, a"inteJ;Pretar' ya'corregir 'radicalmerite el sentido mos6fieo de la ciencia newtoruana) induCe' con freeuenciaa Althusser a ocuparse s610 de la racionalidad dominante en las ciencias; y esta· unilateralidad impulsa a' su vez por Un lado a ]a tentaci6n deconstrutr, usando la teona, una verdadera metahistorla de .conceptos puros, y' pot el ,otro lado;' a acentuar de. modo' paradojal elprincipiode que 'la eonciencia que una epoca tiene de sl, misma es enteramente - falsa. Sobre ·este ,tema tenertlO~tambU!n' en los elasieos·deltnarxismo, ejeroplos' has tantt~' conspieuos del modo. en que {luede set encarado el problema de dar significado a detemiinados hechos'cmpiricos y,11 determinadas con.cepciones ide ales, ,sin recurrir aldesalen tadorprlncipio dela ausencla total de significado de 10'factual yde,lo emplrico.La Investigaci6tihist6rica que sesostiene te6ricamente, tiene formas de intentlir lacolocaci6n de ·los hechos en ',.detenilinados contextos, tiene formas de' verificar Sll cornpatibilidad.Ademas,' enriquece: la teoi:!a al vincularla con lava,riedad'y ]0: riquezade 10 factual, de quien descobre, el significado: Esto es posiblepotque la Tacionalidadde las; ciencias !dommant s ,en' un derto' perioao Sa dispone precisa~ 7 mente' en una ,re1aci6n dialccHca" eon su propia" cpoM .. y ,con las ,(.'P0casp'asadas., , " " . .". '" ,... ' '.' : Deciainos mas arriba queen lacarta de 'Althusscr elilisla..: nHentode Ia tcoTia tiende a {lpsaparecer'enfl'l reconocimiento de Ia doble 'fllnci6n del filosof:ir. I Sin> cml,>argo; existc ~t()(lavla un pUDto en el que 'secv'idcncia~ Enefccto, Althilsscr define i }a relaci6n de la filosoflaconla p~Utk~ como UIla rclaci6n con coneepcwnes del milndo; H(,rClaci6nr!onla cienciil ('mIlO una: relaciortcon latadoMIidad dcnt~fica. 'Pcro yo me pre- . gunto, .~ell?rdblcmfl de lavinculaci6n con la poTftica, 'no a£('(',ta': tambiCn, dosdeel punto del vista de la filoso£la, a la raeiona-J~ liaad 'eientllica?" , , '.. ' "
78"
D~1i ~br6 eJ;psf'lSCl!Jn.iento de ~ A.Gr~r#
"Al~~~ no. ~e elpr,oblema porq~e el .define como cien,. flfft;Q. ,todo.C("ont~xtoen,elque esdejadade lado lah1teJ¥:i()
nalida,d ,hU,ID.anaysubj#:i.va. Esto podni ser ver,dadero pa~ ciencia;perono.porcierto p,~Ja:f~losofia si.es.:a cumple ]a m hi 6 n de extra~ la. raciorutlidad· cientifiea domi nante. Lli validez CleDtHic8" de-El "Capiial> "~osexplica Althus,." "&er, reside ep elhecho Q,e, que en et son dejadas de. la,.qo laS' intencion!ilidades, hJ.lIDa.naS1 ~ Y "tooos, "lOs ,actgs .voltllltano~ s~ t()~. imposiblt'!8por ·la. pliesellcia consbictiva-.. de ,]a .esiruc" ~". p~ estocel,mandsmo, as un. antihumaniSlXl,o :Y.un . anti:" historicismo. Pero. en mi opini6n,. esta es.• una interpretaci6n . parcial de MlUX. En e,fecto•. la .automatizaci6I;l de., l~. ,explota: douy su olvid,o tlDla conciencia .vivida .del obrerq~ "Qen,en en el.descubrkniento" de los modos de la repetibilidad, auto., maticids,tto djrectamente pretenq.roa naturaUp,ad. de la"explri . "'., .. '"" ." ." " taci6ii, su>verdad~o enemigo.,. , ' . .gC6mo ocurre que .m realidad.dela socieclllc:lcapitalista pasa a Self CJ.lestionflda? Cqando la conciencia de los obrems y deJos"explot~dos por las necesidades,.de sabe~, pot losde~ seos:de'gozar.por la,c:lecisi6n deregularlibrem'ente la, propia, v;icla. S,e colocalllasl,lllay desde Iuera:d~ 10 que pUfide ofr~cer la;.,sociedadpfesente, ex;ttonces el ca,pita]~mo deja, de .; tenei',. raz6n de $Elr. lPero que .' vent!lja signifi.(:a ,neg~ <;Iue, filo~6fic~-' rne.nte .bablando, la eOllciencia cienpfica, pueqe cOllvertirsEl.en intencionalida,dsubietivaP.l~~ fue quiz#,~' pri?pi~ M~ quieti afirmQ. que Ja,s condiciones actualesq.e lapr9dq~ci6n. >56 ma~ nifiestan ~n; el mQvimiento tl~su. abolici9P y ya bajQw,Jorma decondicionesbjst6ricas'de un madonuevo d~la socieiliW? . POl' cbnsjgui!'lnte;.desde ei PHnio de,vi~ .de ..a fllosoffa" la., ,t:a~ , cionalidad Cientlfica impone reestructurar la dimensi6i1.d~_ subjfltividad eIllu'-lilaq.ir~cqj6urevolllciona~a y EI. camtal".de.. bidojtlstameAte; a.8U cientificidac:l, estableee, una detei:miDada tensi6.n conila politic1i~, La eonci~c~a rfilvolucipnaria'se; enn~' quece conla radonalidad cient1£ica;,y.hace de est~ Wi .modo de. fra~~Ja estructuracapitalista., . ". . '. .." Se .por :las, o~~ dli':' Althtisser,que .el tiene otraidea Qe la. accion. revoludonaria; ella $e 'Ieaparece' mas como.Un, hepbo . espontaneo yin:efrena:hJe respectoal eualla' politicacumple la~cion de favorecer la. fusi6n del material incaIn:lescente. Comprendo esta coneepcion suya,sin embargorlaidea de ]a
QiscU.ri6'(1.sobte ,I pensandento dB;,A,. Gr.(Jffl.$Ci
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Gramsqi ite q~ la f"!ler~ reYohicionaqa, delle soldaPI6en UD blaque historlco de intereses,de convil;Ciones, ,etc" ya enca minadohacia el nuevoqrden 8odal.,m~,p!l,.tece que es elum,. co modo posible dehacer valerl,IDa: luerte y, amenazadQra presencia oprera '1D qna sociedad como 1,a nuestra. Nos,..dice, Althusser que. C~amsci estallepo de de£ectosiy.de errores; que' a veces acepta ver s610 el aspecto inteQcional y la relaci6n cpn la politica; que CO,D' .Irecuendano V6 elp~oblema de 1a relaci6n C9D la·. racionalidadcien~ifiea. de. su' propia .epOCI,l Y abandons. . por 10 .tanto .elJIJatEn'ialismod,ialectico y~se.deja atrder.PQ~el idealismo, Todo~ E(sto PQede ser , cierto; peroel slgnificado mas profundo de GJ;all)SQi no. esta..abi., La c()nrp.-.
bueion mayor de. Gqtmsci consisteen habe;rcaracte~ado .5U
propia ,investigaci6n .cOxPO derivadl.ldel.leninismo y.en plan:"
tear, elprob,lem~ de la revoluci6nen con(lici911es hls1;6rieas ,
dis.tintas y mas avanzadas, en sentido capit~ta,qu~· laS con-,
" .' '.. .
dicionesde Rusia. "Por o:ttapal"l:e,y ~9P respecto a,Gramsoi, Althusser.estado-:
roinag o.por dps;. in~eieses.. Por . un' lado tiepde .amostrllt··•. SU5
insuficiencias. Y a esterespecto, debe seiialatSe qul';!no sie1I!,:" pre es·. justo, For . ejemplp, cuando Gramsci .habla dese~o c(nR.Un ihablasiempre de ,un elementod,isgregado re~pectode una determinaci6nsoeia1; .Y ··cuaQdo habla .decoheteneia ,la define en r elaci6n. a esa mismadeterminaci6n social.·No eS'l e1 , caracter .de' coherencia formal lQ que.·:lllodi!ica ladisgrega.. ciQn•. sino en ca:mb~oJa coherenciadehtinterpretapi6n de un.1l situlicion sociaL determinada. :SegUn Ia itlt:a. IIlad:urada por Gram~ci . :del... desarrono. del capitalismo (en la epoea ' impe rialist.a y. far;;cista ),.e'ite ulti~o' puedeimponerse s610 a· condi ci6n de· ejercer una violencia. no·ya metliata sillodirecta sobre nte lqs . explotados.. De, ~qui :se.' de:riva .elhecho hist6Jic.8ll1e , nuevo .de, qJJ,een e1 mismo~enti.docom{indisgrega9t?"lle tras.,,; parenta'\lDR.· inquietud,una.Jl.verSi6n, ha,cia, .lbssectoies~(Jo::-, minantes, que permanece no. .. obstapte incoherente., $plp. e1 partidQ ..puep~ .unificar,:Qna Plqmetu4 ,tal,pero:un ,partido que sea. sensible a ella,. elevandQ la,,conciencia disgregapa a1 esta~ .' dOJ;D~ .mad'U;l'o .1;list6rlcQ.mente .posible d,e la )ucha dE) clases. Althusser puede muy bien. no estarde acuel,"doc.on .estaidea de Ia .coherencla ell sU . relac.i6n '. c~nla espon,tl!-neidad; puede muy. bi~D~.O estarQeacuerdo: COD el hecho c:le que esta,Ulti,. "\
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D~n;sobr.e el pens~ntQ .de,. .A., Graffl$ci . )'
so
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~;ercer' 1.lDa., permanente
Di8cusiOn 80bte el penssmiento de A. Gl'amsci
rna contiene ya en parte a Ia ciencia; J?uede muy ~ bien pen~ sar que al. socialismo de nuestra epoca es una fortaleza ase diada, y que el sentido comfin, en la actualsituaci6n hist6rica~ es totalmente incapaz de ~ comprender las raices de· la' ~ expl~ tllci{jn. Lo que~bo puede. hacer, sin embargo, esconvertir a. la teona gtaIIisciana del sentido comun, queestasiempre vinculada a determinadas situaciones historicas, en. ~ una Worla general del- sentido comun. y no 'puede hacer, dela teorla' gramsciana de la coherencia ~ (que reproduce en las nuevas coooiciones la tematica leninista de' Ia relaci6n ~ entreespon taneidad :y conciencia) una teorlade la coherencia en general o directain'entedela coherencia formal. ' AhOra bien, ....:..yaqui· aparece el otro interes' de Althmser.:. Gramsci ,~tdbuye gran, importancia te6riea·· al principio mar;. mtn de' que loda proceso hist6rico' oseila sienlpre entre dos puntos: ~ a } que riinguna sociedad Se plantea objetivos· para cuya soIud6n ~o existan ya 0 esten en vias de aparici6n Jas condiciones necesarins y suficicntes;. b} que ninguna soeiedad desaparece:antes de haber expresado todoSu'contenido p~ tencial. Gramsci interpreta cste principio en el sentido de que talesoondieionescxisten y de que Ju'vieja socicdad asta en su, fas'e suprcma.::considt>ra, sin' enlbargo, quc su~aida exige una fuerte voluntad· ~colediva. 'Dada por, desc()ntu(l~.la exac· titud del anaUsis te6dl'O S011]OS' aspectos 'voluntaristas los que' apiirccen como decisiv()s. Los aspcdos volnntaristus e "hist~' ricista-voluntarlstas· delpensamicnto oe Granrsci tienen por 'loJ tanto un fnndamcntd tcorico. Prirnen 10 querespecta a Althu~" s5O,r 'la polemka con Gramsci" cs en cstc' (',lSOuna' falsa nletil ~ que tiene por objctivo rcal a
.
.'.
presiony pr~s{ln~!l obr~a. En el fondo. e1 historic,isino marxista significa 'e sto ; Ia impOrtancia central y, decisivadeu:p.a pr~sl:JIlcia' obr(;:~~en,una. sociedad en la ~ cual ,sEi" mantieneIl, ~ ademas de 1~ esq:uctur~s capitalist!lll, losgermen~s ,01:(1 fascismo ydel ixnperia1js~0.' En e1. momento a~tu,a1'~Il1eparece que np efisten las '~cpndiciones para ,pen~ar e,nu,n .pasaje. espgnbineq (0, sea, , deteIminado .en \1Il que'i).p sell"el de lavoluntad political hacia e1 ,sqcialismo~.y p,or, .unbistpricism.0 miU',qsta. tlvamente, SI la cIentiflcldad fqera ex:clusWa , yale, declt. 81; 'P9 mediara en 1a relaci6n con la praxis. en.tonces la, determiriaci6n en el interior c;le una cierta formaci6n social seria absoluta. y S1 admitin1(~s' que 1a cuesti6n de 1a deterf!linaci6n pudiera disponerse en una rclaci6n' no sOlo con una formacion social determinada sino con una continuidad bist6rica que 50 expre· sara: en cada momento a, wives de 10 que Altbusser llama cJe placement, seguiria sieildo' misterioso que pudiera producirlo, desde el momento que el bombre ha "muerto". Y este es e1 errqr en eLque cae)" ~l me,nos eIl. parte, Al,tbusser ; es tambien error,de fonoo enel.caenalgunos.de ~ll amigos.~L.amuerte del bombre qlliere dedr, para Foucault el renacimiento del nietzchism Y del beideggerismo, sobre un forido,~ no .dialec o que, una veZ el,carQ.cter do millante de 'las, ciel1cias en ~Wl periodo' bistOrico deterininadCl. bste se baee aQsorbente, y ieducea ,su ,p-iedioatodo aquel10 que ,podia la iD'U?resi(m, En, estascondicio: nes es obvio que toda presellcia histpricista (en e1 sentido roM :. que politi<:oya, senalado) no 1 ndo "Iltprcocuparme el11 u 'es 10 nlismo? ' vez ,,' " -" ' Fero nna II.\, presencia hisJ:6r:j.ci:\ .debe sersie~prevUelt\l afundar. Estil fundaci6n: e~a (lnda. ,por, lar~pi:esentaCi6n d~ los catacteres a p:.'1111:m('ot('s 0 ya solidificados el} todas ,partes .del forma-. s a ,dim ••y, 'p,Qr ,n,"evD c:: ;' n~dcrG~ que deben ser c:omprendu,los en su Ia~2i: teoricl;\ y e~ sn fundonalidad bist6rkn. En generlll,pueq<;l ,decir~e que (,,,isle un ~ prolMma dcentciidinliento de 1a raciono1idad de li'~, (icnd:ls;ll<:, nuestra l-poCai'y ade~1~.s"1acio unproplema ~ de ,f.e . de. SU;significado envincu .,. pronle
,s~ntiqo Nte~a~
esto.sig~t;I; en<~~e:n~ia
~
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el
ti~o,de,.maneratal
dar
~stablecido
~
~ d~oPQ,ners~le.
tie~1(\ se~~ido.~.Por d~be J,lo~. lahistOliasLtP~pe:q. ~ebatido e~ofjaml:li'mdebl) r~coIl.0¢er qu~
cc:()n61nico.s~ci~1 caJ:lital~ta
lcv'W~i~llto
tanl~ien
CQ~ ~o~
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82
DisOOs16n 'sobreelpensmnifmto 'dSA.Gro1n8c1
fuas.d~.nl!~C) tiemp6; Para uiutproblemaJica d~ esietiPo .las. sugerencW .y .las . investigaciones" de' Alt1lusserhabrian podidosermuyvaliosas S1 el y sus alni~()SquE! 'colabm:aron en ~er ~l, ~piial' 'no hubi~r~ aese~o crear las ¢olldi~~IoJles .del wslannento de Ia teona ooJola forma de la; alternativa al his toricisino 'y' a:la!concienciaviVida.La.~a •sobre Gramsci, no' obstante' sufuerte cOIltemdo ¢rltico; :dmdica'una, c(lrrec cion? Me parece qtle sf. De todasntaneras.,nos 'eg£orzaremos en' extraer de .,susinteligenies' srigerenciAs' cUant.o 'nos .l?atez~ util al'rnaixismo contemp0r'3neo. ., '.' ';,
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LbuisAlthuss¢j"planteaen sti ~a' Uri proble~a'qu,emerece seriamerite:,el del puestO que 'Qcupa"'eri ~l pensamieI;ito .de GramSci" la:relaci6nhoritbre-1illturmeZtt. filo..
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'... Es' .necesario .reconocerde' inmediato' queios problemas que p~~ocupa,n ,~sencialinente a. Gramscf son ·los. de las0ci8dqd~ delospa.nidos 'y del Estado, de la complej~'relaci6nentre estrucl:urtot y superestrUctuta;; cC!xhge~os coDfigriran·en su,concepcioh dellihegemorua; . ' . ' '.', ...... ~ .. " , , '.,lIaydos ra~onespa~a' ellmla"primera es la,de, que GramsCi es un.: peiisador revohi'cionano;' que Opera en' tina", socieda:d dOJ:!.d~ 1a clase obrera s~encqentra enJa oposici6n yen. la 'que Ia prbn~ra 'cuesn,6n 9.u~se 'J?lantea a.las fuerza~ l'~oluCiona das espI'eci&amente.la -deIa' 'transformac16ndeestlt 'soCiedaQ.. ",.La, segun:dar~6n,es 1ii, deqbe Gi!1.~sci est! prb£undainen~ teemp~fiado .en'una' ll0Ieclicaantiposit~vista '. ypor .'ello toda suatenci6n, 'esta ditigida ~ permitii iifugriria.rediIcci6n tpositiviSta) 'las leyes que gobiernan.la sociedad 'a. aquElllas
tar
de
que, rige~(]atiattiraleZa.
se.
no'
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,',n, .'..
..,...
,. ."...'
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La tercera raz6n es~sin 'UInguna'dilda, la' 'de ~:condiciona':' ll1~entoL:Ultutali, tfpicamente italian6y: paiticularfuenteacti vc) ensu 'tierPpo..Pero esta,'. esa miparecer lA jJltima ya
.razo,n,
83
~n sobreel~ode A. Gra1'1l8Ci
que la, decisivaproviene en cambio de lil perspectivarevolu~ cionaria enJa que el sa coloca.. '. . . . , ..' En consecuencia,equien quiera avanzar en la linea de pensamiento de Gramsci se en£rentaa la tarea de una mas .am plia y profunda reflexi6n sobre' e1 p,roblema de lanaturaleza ." . ' , ' ," y de la ciencia? Me.parece quesi. :" QUeda POI' ver, sin embargo, sien -Gramsci. falta, (!omopa'" reee affrmar .Althusser,la Jndicac16n de cual debe ser: 'el pun.,. to.de .'Vista en, elque debemoscolocarnos paTaa£rontar el problema de lasciencia y de la naturaleza.Mi opini6neS"oue estepuntode vista existe, allidonde escribe, por ejemplo.: ~ •..BI hombre noentra· en relaei6n con la, naturaleza sim plementepor elbecho de, ser al mismonaturalezal ,sino ac tivamente, por mediodeltrabajoy dt;! la .tecnica"(cf.lLm~ teriallsmt>StorlCo e ta /UQsofi,a dt Benedetto. Croce, Einaudi, ror:inp~ 1948,p. 28). lfenemas; aqU! dosindicaciones: una, a'cercadel nodualismo y sleen cambio de,Ia unidad.hombre. . naturaleza;y'otra, enla'quequiero detenerme. de ,lacielloia -como f1taiis.· como ,actividad transformadora, queprueba 'en .estacapaddad transfonnadora, suya ·la ' validez ,de· sus propias empresas (vease la segunda tesis deMan, sobreFeuerbach). ~omeparece quehayaaqwruj.da,de Ilsimilablea la posi 'ci6n de Croce,paraquien la:ftmci6n practicade lascienc~as las degrada a pseudo- concepto, encuanto la dialecticabefl~ liana deltrabafo ha desapareCido en Crocey para ella, pra m seseparadel momento teoreticQ" mientras ·que, para,... el marxisrno y para Gramsci, lapraxis reune en siteorla. yapci6n y representa el momento· de la verdad, de la,cieneia. "Sinel hombredque, significarialll realidad del universo? Toda la deneia 'esta vinculada·a las necesidaq.es,; a la. Vida, a la actividad delhombre~ (c!. id.,p. 55);, "'. ',; ' ...' Enel .modo en que Cramsei 'considerael ,problema de' ,18 ,objetividad "y' de la naturalezaexiSten. inflexiones i9,ealistas, .peroellasson, :superadaspgrc6mose despliega; concretamen~ te .su, pensamiento;. porIa eritica a la que,somete el'bistorl cismo ,crociano, por 'Stt .. pennaIlente ,referenCia' a la" base de clase, econ6mica, dela histaria,de laisociedad V de la cultu ra. As! que no me paxcceria'justo afinltar que ei problem!! de lasciencias .y' de lanatmaleza petmaneceda ocultodebido "a estas inflexiones ide.alistas. Mas ann,predsamente debidQ;a f
84
,-;""
Discusi6n '6Qme el
pe~entO.
de A.
Gram~
como ,Gramsci, vincula las ciencias a la t6cnica, altrabajo, a 1a praxis humana, coloca su visi6nepistemo16gica en ·'un ' marco materitilista. , .• , Elmodaen que Gramsci vincula Ia. ciencia "a las ,necesi cades, ala 'vida, a la. actiVidad de hombre. nos lleva a Gon siderar la relacion entre cienci(l, y superestructura. :Escierto que· -como' observaAlthusser-,- 'f;ln Gramsci la rcfl~xi6n, es al respecto apresurada, de modo. tal que nos enfrentamos a una asimilaci6n de la ciencia aIa superestructura. que es inacr-pta ble. ,porque' .sabemos muybien que las.' adquisiciones ,ciJ!nti ficas son vaJidas en tanto superan las ,posicibnes de. dase. ~e roesigualmente derto que las ciencias;, su vida, y. su histor ia, no puedenser compremlidas !lise prescinde de surelacion.con ·lae8t1'1J.Ctwra y co~ Iii s.1lperestructura~ Las· relacWnea de pro~ duccwn, en efecto;' dan impulso a ciertas investig~iQnescjen~ ,tfficas y a otras no; Se cstabIcce·. tambicn .una relaci6n dir~cta entre fUet'zaSproductivtts .( aun alIa deJas ·relaciones de. prodilcci6n enlasq1l6 cUas se desarrollan) yciencia8. que. son desconocida:s aotrl!s f()rmasdel .pensamiento. Ademas•.la mpere8tructura ''''':'Ias . ideologias dominantes-condicionan a Euvez eldesarrollo cientifico. ', Ahora bien, me:parecc que In ,rclaci6nciencias,m;ltUr:aleza y flWt;ofia-ciencias puCdc serphintcaua correctamcnte' aUi !lon de Iil filosofia cs concchiua como una visi6n d~ conjunto de In telaci6n hOTfl,1!re-sociedad-naturaleza y 'comQcapacidad. de ubicar en e1>tarelaci6n Ia funci6n de las ciencias. EI.momen to unificadoresta dado por lapraXi8. .' Para Althusser, en c.,mbio,csta unidad scrompc:, se pro duce una escisi6n' entre' Ia rclaci(mfilosofia-cienciasyla, rc laci6n' filoKofia-politica. .La filosofia so· rcUl:lce u cpistcmo]ogia y noes concepci(}n del .mundo. La cQncepcic5n del' mundo. esb! en ielacion' con In poHtica (praxis),' peru no ~'fm la filosofia y las .ciencias. Por consiguicnte•. tcncUlns por unlado !lna restauraci6n especulativa de Ia filos(Jfia .. (en cuanm' se sepnra de la 'praxis), que avanza' endire~'Ci6n opucsta dc la, crltica mnrxian:laJa mesofia (SPCl'ul:llivu.. ' Tmlt'Hlos tina rcduc ci6n de la fi)osof;a a {pistcmolrig:a (]\lC p:\ga Ull trihulu. cxee sivl) .at pcsith·islDCl !tJgico, p"r 11:') dedr. ttl positivism:! tout courc.Por cI, ntro ludo, {enemos lInarcdu(:( i6:l dc h clIIlcerr cion. del mundo y dJ Ja pnHlica u :d:W!O~;Cl. a no·cicmcia, allf
mas
Discusi6n SobrB
el.pEm84Tfl.ienfo de·,A. Gramsci
85
donde todoel esfuerzo, del marxismoestp. pues1:oprecisa men,.._ te en lacritica de Ia ideotogia'y cp.. SU' superaci6n.Aqui el tributo espagado a Levi-Strauss· .:.:tuna ve?; .Jru\s, b~jo,}a. forma' de positi~. para. gUien: ·lapoHtica .sena precisl;lmente ,Ia '1l'/J;tDlogfa (y porello la·ideologia). de nuestro tiempo.". . Nadie nfgara que la politica esb! llena de mitQ8 (dP ero Ia ciencia es inmnnea elios?). Nadienegara q1,J,e lo~ mitos puedenestar presentes en :elmovimiento obreroy en;las propiasconc'epdones de los ma.hcistas. ,Pero elmax-1dsmo.es· tal en cuanto se·, esfuerza por' una.constante superacion critica de ;e-sosmomentos ';ideQlOgico~ que:estan presentes;en . sU·CQU.. cepci6n y queuo rigenla experiencia y . la .praxis. El. mar.P.~- . mo,Su metodo. Ia concepcion del.~undo· que· ~Cpermite, it cODstruyendo~ no mas como concepci6nespeculativa -:'-cle,du:" cidade .tnariera putamente conceptual-·sino cOlllQ- Contm1,J,a. construccionen la prd:xis. enla confrontaci6n critica de lo~. datos de la experiencia ,quepermite indivW.ualizar. Y .1!uperI,lT sus .contradicciones, parapasar de la, ,aparienciadelfeno7 , mena.a su esetiCia; el marxismo,esta construe.ci6n, suya de, la., reIaci6n h01'Tlb1:e-sociedad 1Ult.uralcZa. es precisamente al esfuer-, zo pm: fundar .de manera cieptifica Iapolitica,. liberllndoIa de la ideologia (a traves del.analisis de laestruetw.a de clas~s de ,·111. . sooiedad, de Ia rt~laci6n.· Estadp-so~i~qad. partidos y sociedad, ideologias y sociedad).; En.. A.ltbusser.m.ep~rec~ que 10 que, se pierde es,la noci6n revolucioD¥ia de Iapr~~. de.Ia .praXis que es· revoluciOllaria" transfpl1n!ldora, en Ia medi<;laen quees cientHicamenttl. valida y capaz elf) probar, su' propiavalidezen su propia capacidad transfqrmad;ora. . VoIvam()s a Ia separaci6n entre teona.y prQxi.s, alduali;smo de la filosofia . especulativa.tradicional.dQue ,significa.....en. efecto. Ia presencia en ,Althusser de Ia di$tincion entre. m.aterla~,' lismodialectico (como·. filosofia. general) ymateriplismo hJs.;. farico, (como aplicaci6n del materiall$Jllo ,dia,Ieqicoa, la sociedad)? dQue .significa esa distincion que Grl;uDsci t:ritica. en Bujarin yquesevuelve a encontrat en e1.IV capitulo'de la Historiadel Partido Comunisto. (b) dela URSS.redactado par. Stalip.?No puede significar cosa que el Jeto~o 11 una concepci6n metaffsica del marxismo. Cuando Ia ~oQ.e~~., oion materiaUstay dialectica no deriva de la eXperienc~ de Ia Iucha· de e1as~ de 1a. cop.tradiccion a partir de Ja eua!
otra.
86
DisCfl8iOn 8Ob1'e eZpen.tamitmto de' ,AGrams~
esta'I!C'desarrolla. de la expedencia de la'relaci6nentre' clases:' y cultura, ellaesdeducida, soJ.amente'de,manera: trascenden-' tal, especulativa.idealista" Una, Juildad6n ' DO' :metafisica de; lateorla, mepareceque, esposible"solo'cuando la, teOrla' se presenta como expenencia mstorica'que se:bace crlticamente, consciente de '51 misma; :, Cuando GramsCi conCibe a ladUilectica> como diaIectica historica, y fundasncamctermaterialista en la estTtwtUf'a, econOmica, no 8610 :retorna, a1 genuino"pensamiento mamant) -en el que DO se puede encontrar.' en mi opini6n, la subsi guient£! ,: distincion escohistica' ,y pedanteentre, materialiIDlo, dia]Cctico' y materialismo his~orico-, sino, que reafiEma el', upi('o modo deftindaruna concepciOn del mundo:no espec;u1lltiva, no, ideol6gica,sino cientlfica, porque esta vinculada ala prarl~:y, cbl~ca~ an una vinculacion justa (dialecticQ'Y node identifi(,Il" ci6n mecanica) con, lapo!£tica. 1\.St, colocando' ciencias yte~i~ ('CtSen!'Ja relacion de Iii ptaiis hutnanac()nla naturaleza, GramS!" cLasta mas a1I4del'dualismo del hlstoricismotlpico{Dilthev) entre,,8ocieaady "fiataraleza, y encucntrala posibiHdadde extelk' der ladia16ctica histoticay roateriaIista 'a, lanaturaleza. precisa,;, mente:ii pot el hechO, delluela relaci6n conla' natural(:"za esta. dada pdr 11,1, praXis. 'Esto septi~de vet en la ,obscIvaci6n quehace'R, Lukacs~'''Debe sefiahtl'se la posici6ndel prbfe sor Lukacs haciaHi ' filosoffa de Ia praxis. Parece que; Lukacs afitllla' que sepuede hablar dediaICctica s6Io.para·:la hi~to.. ria di;:' los 'hotribresy no pant; Itt natutaIeza,' Puede stat equivocado YPllede tener'razon. Si 'su afirm~ci6n prestip'one. un diialistIl0entfe Ia: 'naturalezaycl hombre estaequiv;ocado p6rque eaeen' una concepciondela i naturalcza. propia dela reJigion y'de la·fiJosoffa' greco·c'ristiana. y tambienprdpia del. idcalisIno, que realmenteno logra:uilificar Y" poneI' en rela ci6'n a:l'hombte -con la:, nafuraleza de! ottO'moda'que verbal. mente. Perbsilahistoria htunana dcbecoiroebirsetambillD cOmo,historia deela· naturaleza (auna:tra~es' de la historia de: la ciencia) •. leoma la··· diaicctica" puede .set separada·.dp la" na.turaleza? . Quiz8s' Lukacs, pOt "reaccion' a: las .teorlas. barto casdel'EmttyopOp1Jla,; ha 'caldocilel ,error opuesto;en.una.l fattria.,'de'ideali'lrrio" (d.'id. p~ '145). ;. . .r " Aqwesta. la inditaci6n, "aunque'sea ~um~iar del·caminO' quese debesegub'. pata esta:blecer .Ja unidad.entre, hombre,."
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sobtp filZ .pensamlent() ,Ie .A. Cramsct , ,.
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8oci¢ad~nq;t~Taleza
.para construir una,relaci6n unitada del saber humi:!Do. fuDda,ndoIa' sin cJ1:lbargQ no en' Ia vision meta· f{sica de diaIectic3: mUli y paramo smo. de ~ dia16ctica que deny!!. y encuerlfra S,ll fundaCi6n objetiva en la' reIa,ci6n .' eI(ltreel h~b~e y:}a natUTaleia, en Ia p.ftzxis. .. ' i
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LVCIANoGR11PPI
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Por'una feliZ !rioincid~ncia, pude'leer Iii carta de Lou:iS Alth'IS":' ~cr a RinD Dal Sasso sobre el peDs!1miento de GrarnSci, publi: cada .por . Rinascita .. 'el . 15 "de' Iiiarzo "~on el. titUlo ae "La filosofia, la po~ti~a y 18; cienda"'. cn elm()mepfo en que ,estaba teleyendo IlJs'pagin~ fWldamentaIes" de Gramsci recO gid cQmentadas, ,<,on inteUgenda P0,f Giovapru Urbani (On la ~tpJogia La fQnnozione d~ll'uoino ('EditQri Riilniti 1967). Esta, relectiira. ell '10.' concerniepte 'a"105 fragmentosreferidos a la'concepci6n del Iqundq;.a .lit.: hegemt)llia ya, la filosofla escogidos. ,porUrba~i: . fuel. iluniiri~da por. In obserVacion central de.la clUta de A1thusser,:' , . . , ' . ""; '''Critmscivid, y pens6'ton fuerzat,nt£de. las, dos deterrni·; n~iolle~ qe., tpda Jilos~#(J:.J~ reI~ci6J:l entr~fposOf)a' y :pqUtictl. r~ro J:lo yiocor' 19;u~l y,~gor,riiajs16,la 'otra deteiminacion:
Ia .r(lIqci6Jl entre:, filosoHa y cie~cia ... 7,D,e" aquf ,deriva. '1il
telldeQci3:.!qu,eeil"Cr~p1sci esa('eJ1tullda, a:" confundir lafiIb':'
sofia r,n;arx~stiJ,' (pIateriilJisr,no 'dill;IecticQ tcon., la ,'ciencia ,,'de ,Iii"
hi!:itor1a,,( de Ia , q~leeL "iQaterialismo' historico" seda: la
"teori,a 'geneml") :~.:.- SA. ,en 'lu~~; 'dEl~" ~~6rif~hdir~.,,:.con" ,se
escribe ,"
por 10 demns, 10 li~ce Altlius~r ,aI, fin~l 'de' sU cartl;l)', ,!11~
Gramsci 'concebfaa ,'a CJencw. mar~ista de lahistoria" como'
",jistint~ ,de 'hl' f4.~f!fI~'('m#~sta"::,~i,,"respuesta ir:re£1exiva;
instint.ivae.s: ,":sf~p~a ~uert.e nuestra";" : . • " .,' .
, En los textos de Cra,nsci reencu~ntro;'pr~isl;ldd y ~ecl fica(lO',aq~~l,~si".No ~i#a'lue'Crat!ls~i,c()nf1,l,ule, Ia fila.ofit
as y
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'f'I :~
J
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Dise:u8wn sobre eZ' ~£ento de' 'A.
88
Gramsd
mams.ta,'co~cebitla:en toda su.generalidad.~o1i la.c~encia de Ja ,historia y' de su desarrollo segUnUrul. "vollmtadracionaJ." (cienc~ maqdstf,t de)a !~voluci6n):~Diria~' bi~n, q1,le al Gramsci politico . le, inteJ:esa prefeJ:entemente ]a. ciencia mU' xista de la revohici6ri/ a 1a que con frecuencm llamaba en form~ abreviada, "filosoffa", omitiendo el adjetivo "politica". "Es necesario... poner como base de Ia filosofia la "volnn tad" (en ultima instancia la actividad practica 0 poHtica), pero una voluntad racional, no arbitraria. que se realiza en cuanto corresponde a necesidades hist6ricas objetivas, vale decir en <;uanto es la. propia historia universal'en eI momento de su progresiva reallzaci6n" (antologia Urbani, p. 236). 1,05 fil6sofos marxistas interesan a Gramsci exclusivamente ( 0 casi •exclusivamente) .como fil6sofospolitiqos, como intelec tnales' organicos de~asa, C11pacc$de.. i~labo~a:.r . y baeer con:' cretos . los proble,mas. que plafi,tea'11 " las .masas ..con una aetivi';; dad practic;a, eonstituyendoasi~ bloqu~ cBlturaly socw." (ilJidem;, p. 222 ) ' .. EIl .. smtesili1 'la cpnC'Wci~n del' IllllDdo que' in~ere~a a Grarpsci es la: "cQncepci6~ fmplieita. '€ in Ia a:ctividad, bumana" .(p~ 227) '., Las fil6sofiaS, de las que tiene neces~~ad y con" las "que delle Illedfrse c9mo dirig~rite revoluCionario" son, Jag, ..construeciones .que CbiTespondell las, ,engeDeias de :.. ' . .' . un periodo bi$t6rico complejo" (p.:231) ." dPor que 'a la aguda obserVaCi6n de Althusser respOJido no solalllente Msi", sinoagrego ~e,jmnewato' e iristintivamente:.:..· .' ..... , ' ' . '.' '.' . '" '.'.' "para suerte nriestia"? LoluigQ porque, GraInsci, conoontrandod~i ,n:iodoquei'se l dijo su interes .sobre el marxisIno cOril()filosofla de Ia praxis, como ciencia' de la bistoriayde larevoluci6n:, llevo al. par':' tid~Comunista Italiano a. '.tiJia"~oncePci9n j~stay Coriecta de la, un~dad ideal 'sus mierph~9,s(Y" a" una 'jusril'yc~tteCta pmctica correspo~~eJlte) .Por,~ lado,GramSci subray~, la, nec~si,dacJ vital de'que "tlIla roasa de bomb,res, sea' Aevaqa a, peIisar. de. manera cqherente 'I unit~ el' ;presente rt!aI". ,y la. perspectiv~ rilcional-cientific,a. ,de su transfonnaCi6ri;' Cons,.;':' truyo; por' .10 tanto1 al p.!utido, revolucionario Como' una .a.~o ciaei6n de' bombres que ,·tieilElIl.~ una '. yolWitad po1itica comlin porq\letienen (en fonna.mas 0 mepo,s 'Cflmpleta yconscien Ie) una concepci6n comWide la hj,st(jria. EI partido revi>]u c.ionario es. en Ia mwn y en Ia 'ooDstrucci6n pr8cl:iC8.' ~
*
J
de
DlsCust6n
80bre
e1 pen;samiento de
A, GrmnsCi
89
ciana~uti .partido que tiene tiha Cienriia'de la hlstoria:!y d~ 'la' r~oluci6~ .,< q~e (;~ci llaz.na; con~ecuencia ,:'concepci6n
del, mundo •. ;p~ro con. e1, "significado, queya espec:ificairlos), i pero;quc', c~ ~al -com9' partidO-::: no'pene 'Una, filosofia.. gen~ratLae~resi~~ "p,;utido m~#~a"contiene,'cn,si)~a ~bigijedad; ,p'orqti~ tiene: dos sigID!jcadqs p()sibles:. 1) . ~a,r
tido:que. 'como 'tal, tien~'una "filosofia general:el mat~tia
~~Q di!llectico;2) pat;tkloguiado por la c'ienCia dela bistona .
'I' de lli,'revoliJci6n fundadaparK,arl, Marx, 'Gra~\)S~i escogi6
c~3:~lente 'htsegunda interpreta:ci6i1; y T?@atti la 'd~sa~'
llon6 ; cobetentemente. " '. , . ' ,
Ha:bl~cio,del Dlarxismo COIlUf(y ef:!. cuanto)gUiate6rica d~ . .Bartido tevoluCionario, 'J;ahrrlro ~ggliatti ~ba el' b~rmino , dOcttif14 (n(t~filoSoffa" y ni siquiera "concepci6n 'del mun.., do"), Asi, en el cuartoDUmero 'de Rinascita: es decir. iifiries . . ' de 19#, escribia:. '"Guf!'i'idepI6gica de este partido (el "partido nue~o" '
P~T. se' ,~prestaa construir te6ri¢a ypracticamente ya desde
, el .momento de su'retorno •a . Italia' desde. el axillo). no ptiede ser otra. que la dactrina',manista y leninista, la: Unicaque per~Ui un'anillisis ,completo de todos los -'ellmientbs de. la:' r~ali~dad •. a~; 's~ l~e~a~aiffie~t6y .de' su d~~~()llo, y, P?r;.con." slgulente,la Umca. que pennlte adecuar. de'manera exacta ala re~lida? la acci6n J?blitic~ dem clase op~era 'de' Un granpar1.' tic;lo". ' Y' en el discurso pronunclado Florencm el 10 de ener,o de lQ47, fund.am:en:tif 'como siritesiS de la cc;mc;epei6n togliatWmaj del artidonuevo. decla:l . ' ";,"','" "d', ~.'q'!l: eli .'. ne~~ario .esttiwar? '¥te' todo es pr~c~o estu diar n.~estrlil·docl:I;4ui .fun~ta:l. ,Ia doctrina. politica dt" Ja clase' obrera:, ~.el maJ;Xism(j,~lleninismo, .la brujl:lIaq,ue nos, ba' dirigi90;;duiante ,veintc alloS d~n'!lestta.1rlStoria YQlle n,s dirigira.alin para. enCQntrar eI caminoju.sto; el cammo italia no .de 18: luCI,ap
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mar. ,
Discusl6n 8Qbr~ el'Pff.ns4T{f.iento
90
de A..
a,~'icl
deben 10grar. hacer hoy. los dirigentes. de .'qupartido . .obrero mamsta". '. .' '.' . '. . .... " ', :" , Baj<)ja guIa te6rica:~y pnictica'de Paliniro Trigliatti"euru:f' perfod~ de veiqtea.iios~ de,l944 a t964~eI marxismo. -:-co,mo doctrina d,elpartjdp.:.., fuecOnsidera,d(! par los comtfuis~as:: italianos com() ,'.Una . ~tl~oHa P9li,fi~Ii,. c~~~ mia, "docti~ politica de la' cl!l:Se obrera»~' como: la,"cienciq irlatnsta d,e la,' historia; .. distintade la filosOfia DlarXista"~ ," ,,'., '. ',;"\ ,.. J'(lra., suerle rj-ueSfra,. porquehaber d.ada esfasqluc,6n a .Ia relaci6n teoria ,~oluCionaria~partido re:volucionario:'p~rmiti6 ai' PCI reuniten su seno y en toma asia, todof los' revo]u cionarios, guiadospor la eonceP
pEln4tetiterne.'!~~ ,de "~lilosOf~~ g~nerales po/'ell(Js prdfesa-~ da$ (en parti<;:ular, mdependientemente del hecho de que elIas fueran cristianos 0 attios). . , , , . ' , , " ' :' ~sta. es mircspl.1esta en)o que se rene~eala di#(!l;Cidn entre ,ci~ncj~.marXis~a ,l,le,Ja:hiStoria y filosofia ~anist~~ Mas diflciJ, po:r; ci,e"io; 'es,re$PQnder;ala,' qtia ,cuesti6ri ;planteada, por, e1. companero ,Althtisser ~ Iii, de la r~lacipn. eritre filosi;>ffa: man(ista (m'a~erialismo, .~iaJecpco ),:;y )!iimciaJ~ ,}de lin;titare' un", 1)r€fve.~onsiderllci6n acEirca de.Jlir~laci6n e~~re; aqui materiaJ~smo dia,lCcti{-.!o y:~iencia,.Q1a,oosf;ade lahis~ori~; La,S, opinio,nesq~~ expresare~~e :ref~an s~,eijlbarg() a',Ja fem'\~, de la relaci6n y por eUb pueden ser' trarisferid~s sin pipbIe:.' mas \a la r,elaci~!l entre filo$9Ha ml1:rxista yci(1ncias ;eQ, g~perar , Cr~o en ,la, existencia de rinavincuIaci6n, esti-echa , entre filosofhI, 'conccbida com'o "lup6fesis "geh~a}) dq " ti:aQajo'~ y::' te~pascientffjcas- en: e.1 1ll0mentQ de' StJ '{undad6n.. Creo~ "al mismo ti~~Po, ~n una amplia. independenda qe, i~s'teoifas dc\~tmcas'con fes~e'cto ,JlJa filosofia que n(robsta~t¢l~. ha: inspirl.).clo"uT,la Vez ,qtie e,sas teodasscan v¢rificadascoin~ mstrumentos ,vtllidos.. de 'conocimiento, deni:ro de lfmites ofuenQs 'amplio~,'YaJe dCl'ir: creo ,.e,11 la lakidad.cktoda den~: cia, . en "su 'compatil)ilidad cOn:' filosofi~s distintas' deaq~ena que ftJe d~tetrninante. para So. formaci6n,. '. Lasdjl$' afinnacioncs po, ~,!Ii' contradic~otia~. SOY, apasioDa-:, daincnte engcl$ia,pp en: gue concierne (la I;latalla ~el~al( C()mpa~ero de ¥arx,,¢ontra., el, pt:etelldido agnost:i.cism() filos()'" fi~o . de La, " de~cia ,que se 'alitoprodama positiva ( (jbjetiva.:
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C
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'0,
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DisCf.l8l6n 80bre el, pensamiento ~ A. p~mente ,factUal, etc.}.
Gr~
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LOS investigadol'esdela. natural~ creen llberarse de la filosofia ,por el. procediniiento de ign
92
DisC1.l8fOn sobre elpensamiento de A. GrfJl'll..'fci
tesisdirectamente.opllestas ·a 'la originaria. Asi,. la cienC'ia galileana'ntr eraeompatibleeon la filosofia 'de las "virtudes~ ocultas.del· aristotelismo eseoIa:stico' tardio, y tanto menos con la teologfa· que' .ptetendia interpretar los feno.menos natura les . con la Biblia enla' manti; .Asi, .Ia ,ciencia marxista. de la histona. noeS compatible eon la .concepcion. heterogenea de la humanidad asociada y' de . su evoluci6n, con una· concep cion de la wtona hUItlana ·dirlgida por u:na· ~'providencia" enema a e l l a . ' . . . Pero esto signifiea precisar el termino lakidad, y no va anular la distinci6n entre una teotia cientifica y la filosoHa que fue su hipotesis generildora.·· Era esta distinei6n 1a que deseaba hacer aquf, porque preeisamente de' ella· surgietOn, a mi entender, los gran~~ desarrollos positivos de la filosofia politica .marxista en' Italia. Partiendo deesa' formulaei6n . (de esa distfuewn). nuestro; partido plante6 11i! laieidad del Estado' socialista, la fibre' confrontaci6n' de ideas, la posibilidad de valores . fuera del niax:tfSmo' (vease . el memorial de Yalta), lit el. pluralisD;\O y la articulaci6n de'la soci~ad socialistaque DOS proponemos eonfuuir. DO como concesiones a la pequefia bm:guesiao, todavfapeor,al adversariode eWe, sino como necesidades~ales de la: propia' batalla y' esttategia revolu cionaria. . . LUCIO'LOMBAlIDO lit
Discu&ic,Sn s,obre... el. pensamiento tIe A•. Gramscl,
93
s610 por ~l motivo mas gener,al de .que' esa polem.ica .formula .:lion althusserianaequivale, a. mientender , deb,ido a, su falta de verdad :hist6rica y. teariea, a .la aserci6n, por ejempl0, de que.•. "el cartesianismo es historicismo", etc., etc. Me ~deja perplejo por el. moPvo particular de que Ia divaganteearta (iWtigramsciana) .evita ,responder a la acusaci6n de.~c~iias filQs6Ucas" con Ia que .Dal Sasso resumio }a"'dificuItad" (y no la unica) indicad~ por quienescribe, aquf en. Ri~~~ (10 de noviembre .deJ961) y en atras. paI1:es;: en 19. interpretaci6n althusserlana del desarrollofilosoficQ d,el pensamiento marx jano. Esta,difieult!ld es (junto a'9tras )no s610 un tipico p~d\lcto. .de 'la £9,rmaci6ri "estruetural" de 1a problematic~ marx,iana ,sino. tambienunll. dificultad pr~judicial ~uyasubes 'timaqion .impide tpda discusi6n "rigurosa"'. de la "filbsofja" que es' el inarxisino. Dejo, 'a~ cpmpafiero Althusser' la .iniciativa de afrontlltla d6nde y cuando quiera,pero csineVitable. para un diAlogo fecunQo,a,I' IT!~nos a juicio del suScrito! . . CALVANO' DELLA VOLPE
Re..,uesta • Antonio Pesentl sobre "Leer el capital"
RADICE
Se ·refiere al "testamento" de Togliatti. Cf. Pasado yPr6sente
n' 5-6, 1964, PP•. 1120118.
Un planteo. "estructural" La difundida carta de Louis Althusser en respuesta ale com~n tarlo de Rino DaI Sasso a la traduecion del capitulo de Leer El capital que neva el programatieo titulo de "EI· mabdsmo' no es historicismo", me deja ttancamente" muy perplejo.· No
Queriuo eompaiicro' Pesenti: Ld su articulo sobre cl tema "Leer Elcapitar' public-ado. en Rinascita dcl 13 GC' diciclllbre de 1968,' y dcseo agradecer Ie '.Ia atencion que ha ucdicado a· mis . cnsayos Y a Ips de Etienne Balibat. . . Estoytotulmcntc uc actlcruo conUu.En distintoslugl'lros cl tC':-:lo cs inutil11lenie dirieil y si tuvicflUIlOS quo volvera cscrihirln lu:y, (llall'Oufios despucs ue Iu ptimera rcdacci6n, crco quc \lsada:ncs UI1 lcngup que la clifitultacl 'I1IC hemos cncontrauo cnf'abrimos un ('a mino" ('nuna ohr;l inmcnsa como El capital es una cliffc'ul tau suhjclha 'illC S;! ha tmnsr(~rid() u la rcuacd6n ue nuns ll'CIi lcxlcS;( n ('W f!llOlltCS' no hahriamos podiclo actuar de ofro .n:ot!o. c:sldu pm' (·ndma de nucstms fUCiLl.1S.
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DiScusi6n sabre elpensamiento de A. Gram..wi
Nos sentimos tomplacidos porhaber emrentado cultad y haberla Superado; por haber ,sabidover de 'ella 'If>s pocospuntos importahtes 'que tratainos ,'. , .' rrollar. '
~sa diH.. mas ana dedesa.:. .
Me parece haber comprendjd6 el espfrifu. de sus reservas. En nuestro libro falta algo muy importarite:·.digamos, til eco de la, practica politica 'de los partidos ·comunistas. SOY'Dei: fectamenteconscientl~ de elldy eil:Cierta medida la.entreviS ta con L'Unitti contiene algurias "t¢Sis" que, desde esfep\.ln to de vista, estan deStlrladas a "colmar"' dicha laguna.: Pt>tO desearlli hacerle notargue ngsotros qUisfntos sobre' todo dar cuentasdel mecanismo te6rico de El 'capital dedicado,en prllne:.: lugar,' al .eshidio' de Iii "region" econoi:i:Iica del' mqdo de producci6n capitaliSta.'En esta"regi6n" los, "'hombres" (y es un.' punt~, de. vista dentffico perfectamente ftindarlq) son considerados' por 16 ~ que' son: "poitadores'" (Trage1') . 'de fuDciones econ6micas, que ocupan ."imestos" (Sfellen)eri Ja estructura de)a produ~ci6n. . Es necesario comprender que El capital, tal como ha lle gado a nosotros, Sa limita esencialmente a la, '"esfera de 1a producci6n y de la reproducci6n capitalista" y a sus leves tt.ndenciales. Esto no excluye que se deba "~ompletar" 10 que Marx no pudo terminar, y ,hablar de)asupere~u.ctura, juri dico-politica y de aquella ideol6gica en la que los hombres. los propios "hombres", no tienen ya el "estatuto" te6rico que tenian en la es£era de la producci6n. En part:icul;u:, Ja itJ'Ja. logia. :"elementp en .elque". se deSarfQlla unaspecto deter miJ)ante~de la Jucha;de" c4tses (es ,alli dande los hOlllb~s to~ man conciencia "d~ sll;pertenenci/l,a una clase ,yIlevan ~'has ta el fondo" su lucha), transform a el "estatuto te6rico" 4e esps m.ismo.s ·homhl,'es:ellos secpJ)vil;)rten eqtoqces,en "s~je tos"(y.no:ya en simples ~soportes"). Creo,q)l~. es~a prj:}Clsi6n responde a'alguna de Sus ,pl'eocupac~onEls, y. en, particular .a sus expeliencias ppliticas., ' , ' ... ." Gracias nuevamente de todD caraz.6n. Un saludo fratemQ. "
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DEL ,:MA:r~SMO DIALiCTlCO
. l . E I pseudO:Conceptq ~e' ~(!S1lltado . pretende de~cribir la clen cill CO:m,O, \Ul cOnglomerado M. "ver:iaoes" desllgadas de derecho deJ.proceso de., s"prod"c~iqn.,:prec~ente ,en nODl:br.edeestades ~c$ci6n, Hegel pron\Ulc!a la con(iena' del, conoclDliento, Dl:ate maU
qfrecerla
colores
Pans .
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97
N0fa8
La critiea hegellana del resultado no tiene pues ninguna rela. ci6n con aquello a 10 que apunta la ciencia. En cambio prepara la valorizaci6n·· correlativa de la experieneiasuiriente, del cris tianismo subUmado donde Be resuelve esta "critiea". 2. En eonsecuencia, no hay que asombrarse de ver a Althu sser dedlear extensas desarrollo! a la situaci6n geneal6gica de las obras de juventud de Marx (d. por ej. RTM, 39-70. Ver tambien el texto de J. RANCIERE, LC I, 95-210). 3. Cf. La critica de este falso conceptQ en el articulo de E. BALIBAR: "Les ideologies pseudo-~tes de l'alienation", en ClaTte, enero 1965. 4. Asombra ver la celeridad ron que Garaudy pas6 del tota· litario al fundaD1ental, de la libertad segUn Stalin a la libertad BegUn Juan XXIII. 5. Althusser dlstingue tres conceptos de la causalidad: car tesiano. leibniziano y spinozista (LC Ii,'167-171). . . . ., 6. Como en las obras mas recientes de L. Goldmann.. Se lle ga .alli' basta identifiearpura y siuiplemente. ias estructuras homo 16gicas "descubiertas" porGoldmaw,s: "De este 'modo las dos e~ truetilras, la de u'nilnporbl.nte gerier;o nbvelesco y la del. inter ciunbio. ' se revelan cOItlorigul-osamente· hOI\lol!:igas. alpuntoque se p()dMa hal;lIar de 1U,la' sola y niiSmaesh,l,ctui-a' qli~ .se manifeSta ria: . en dos pIanos diferentes''''{POU1'' U1re' sociologie .dv. .Toman. Ga l.li.inard; iSM, ·p.26) .IAdmirable SImpliCidad! " ", , . . ',7 .El ejemplo ,mas' acabado. es .sindtida la':psieolog,ia hist6; nca" p.e J.P. Vernant. TranSgrede,: gozosamente SWI propios pre supueStos teoricos. Se comprendera' todasu 'ambigiie'dad leyendo. entre otros, elUltilno capitulo de M'l/the et pemee .chez les (kees, Maspero; 1965. . . . ' ....' . 8. "EIHombre s610 plantea: los problemaS. 'que pu~de r.isol ver": lacelebrefrase sirvi6 decauci6n' para las ~mallvariadas desviaeiones del marxiSUio y sobre todo para ~i bistoricismo em· pfrico 4;UYO proceso inStruye Alth\lsserlLC n. 73 sgs). ~omo asf tambh~n . para las. oscuras especW3cio~es. r~latlvl1sa la ''linidad 4~la teoda y de. Ia.pructiea" (probIt:nt3 que ,i)o~enening6,n ~D: 'Udo en, In epistemologiapost·bachelardiana, donde la. teOr!a .. mis· rna .es originariamcnte pensnda como 'proceso de' prbducci6n; es decirt:omo pfdct~. te6ric~L La"c~lebre: fOrmula" quleredecir simplemente que un p~blema ~(cientlf,icol sol~puedes~ procIu cido ItIt tunto que prab1ema'si IIU e/lpacio t,ie posici6J1 -:-In J!~Oble maUca de suobjeto-: h~, Bida a su ve; p:t:odueldo., . .', .. ' '" . 9. A'sf ocurre con elconceptoaristotelieo. de "Naturalezs", :eu Yl1 ausencla -:-Ia ilnposibiUdiid de ~nstruirIO-. de~~ina.' la 11 slen FostgaIUclln:J. l!-:n. rigor. 710 ('xi.stc .,ninguna relaci6n,. III slquJe I'll negativa. ill\'c:tid:l ninlln crItlca, .entre lanueva "fisica" y 10 Clue UJ:lva esc nomhrc('n ]a lilooofia eo .Arist6tetes. Pel objeto de Arill!Otcles. III .ljsi~a llositievnno .podri~, nl siqul~a afirmarque .no existe. Do esc o~jcto 110 tiCllC nada. qu.e dcciT,,~, ,"nadll" "sda-
Notas slgnada por Bachelard como ruptura . ePiStemol6glea [ coupure epf.stemotogtqu.e 1· ' . . 10. Esa localizac16n constituye la geft.ealogtade unaciencia..
LostrabajoS de Koyre o.1os deCanguilhem $On genea16gtCOlL 100
que separa a Althusser de la sorprendente empresa .en que esti
comprometido Foucault --eDlpresa de la .que una' obra maestra.
Et nacimiento de 14· cUnica. (Siglo XXI. 1966 ) rnanifiesta au tm.
po\'1ancia exc.epclonal- es 13 convicci6n te6rica de' que sl bien
una geftC!alogio. tic!' J.a, cle1!cia. Y una ~
son posib1es, nopodrla exlatir en cambio.nJ.D,gUna aT
tlU'a sistematica dlstinta de s1 m.tsnm. sin "melo" ·fundamental.'y
esto en.la medlda exacta en que todo melO constltuyente. esel
Ineonseiente te6rieo de la tdeologio.. ,TrataremoS de explicar' a partir de esta ·discordancia:
0,) la impotencia de FoucaWt para produclr sabre el fondoes.
tructural, 'Y sin embargo universal, que. 61 esboza.· los operadorell
distintivos de la cienclayde 1a no-clencla;sli necesaTia limit& c16n a 1a arqueologla de laS pseudo-cienci!iS;
i" b) la Ugereza pre.te6riea de susiuiclos . sabre :M:a:rS., (of. LtLB pa14brll$ yIas cosas, Slglo JQCI. 1968,. 255·256). 11. sartre constituye aqul un ejemplo asombroSO, Y desde ,este· pUDlO de vista. La. critice de Ia 1'4%671 dmlectica es un momento' del "marxismo metatisieo'~. Sin embargo,el easo te6rico de Sartre es mas compleJo de 10 que parece Y Althusser se·apreS1l1'O un po-' co al colocarlo dentro. de los '~ideaUsmoS racionalistaS"· Entre la transparencia originaria de 1Ji . praxis indiVidual Y la inercia formal de las e~cturas, ,existe en Sartre undescentranlientoeapcciflco, provoeado por la exterioridad radical Y anti·dialectlea del en:.si. La dialectica ,sartriana es una ·dialiictiea fracturada,en' cuyo in teriOJ." esposible reflexlonar. parcia1n:tenteciertasdlstorsiones as-· ~ctura1es, .incl!JSo '. plantear .0 al menos traducir lOs problemas fundamentales 'del'materialismo tllalectieo. ,acambio Indudable mente del usou.,. pocoaleg6rlcodiOOs coneeptos. (Cr. CTitiCa de la ,azon, diatectica, Losada, 1963)., 12. J. DERRIDA. ~'Le theatre de la crtUlU~ etla cloture de' la representation", en Critique.n·.,23D, ; juliO 1966. p. 61'1. nota 13: LPuede pensarse .. al misIno tiempo" la leetura de Marx porAu thusser, 1a de ,Freud, porLacany la. de Nietzcbe-Heidagger por Derrida? Esta es la formulacl6n, en nuestracoyuntura, de In pre gunta mas profunda. conslderando eoos t.res discutsos . eilSUaf> nte tualidad integral. la reapuesta ,es. para. m1 tnevitableme nega tiva. MAs BUn: '. aproxImarSe . Indefinidamente . a . aquello' que los mantiene mO.s alejadps entre s1 es la condlci6n de progreso de cada mio de ellos.· Desgraciadamcnte. en. el'mundo tnstantaneoB eD que los conceptos Be' comerciaUzan•• e1 ec1etiilismo es laregl .'· 13. Essabido que,.el' concepto de suture fue introducido por ' 1. Lacan 'Y J.A. Miller para .pensar ~l lUgar·dcaplazado delaujeto
98
N
en' el campo psicoanalitico.Ct;·"Cahie'l's pour J'a.na.tyse, n. ·1,' enei'o 1966. EI uso que hago de el es indicativo. :14. :Subrayamos de una "vezpor .todas', que l"estr.!ngiEmdo' nues tro examen a los :caneeptos'esenoiales lntroducidos,.Pol" Althusser, nopretendemosde, manera ,alguna disiinular el becho de que ya el (re)comienzo ,del marxismo :e's una'obra co1ectiva, milS colectiva' que cualqiIiera. otra, yesto debido. a su· exciusivo 'destino' polftico. 15. Sobre, todo .6sto "er Mll·MD p. 42 del presente volumeD. 16,. :Eneste punto precisamente 'se' situ aria laarticulaci6n del mamamo y del status que e1 psicoanMisisacuerda a loimagina· rio; Como asi tambien .el rieago de'que esta articulacion 'sea pro visoriamenteinhallab1e. Las especulaciones mAs rec'entc:ig'deLac:an sObre, el ; teQla ;de la clencia 'no depenhacernosolvidarque; para' e1 marxismo, el tema esuna nocUln'propmmenteideoZ6gict£;, 1'1. EI mejor termino :seria tal vez "denotador~ 0 un,' equfva lentedel ing1t!is ".designator" (Cf. CA;RNAP,.'Meaning aM Nece ssity, Chicago, 1956, p. 6 ) . , " ',',,' , La teoria,.forma!',de la denotac16n,Y'mas generalniente la se mantica formal, tal como ladesarrolla elempirismo 16gicn anglo sajon,ofrecen ':a .mi eutender la 'armadura de un analis'is estruc tural de l.a ideologia.v Nattfralmente, para Carnap la seminUcaes una.teoria de la clencla. pera ,ocurre que el empirismo 16gico; es II su· vez una ldeologia. Queda~el liechode queemprende el in ventario.·sistematico de las formas generales mAS abstractas de todo' discurso ideol6gico. "18; .El'~ cOnct:!pto· de: totalldad, tomadoensusentldo, absoluto, eJi elejemplo. arquetipico de unailusion: teorica; La totaUzaci6b s~rtreana ~s..la critics Uusoria,de.1a llusi6n;es' undespwamierito progreso'~ntra-ideoI6g1Co; ... .' . ' . ' c. ' . . , , • 19. La econornia' vulgaresta.caracterizada enmuchoslugares.' Pol" ejetnplo; "laeconomia vulgar' (. .;.) no· pasa ;de~' las apa liencias.runUa eonstantemente, en su propio interelil y para vul· garizar los. mas groseros fenomenos,: los ma:terlal~s, ya 'elaborados' POl' SUS predece50resy se llm1ta a~erigir,en sistema de un modo pedantesco y a proclamar como verda'des.eternas Ias?fiUBiones con que gusta alburgues poblarsu mundo:el :mejorde"los mundos posibles" rEl capital,E.D.A.F., 1967, I,p:74 notah' De este mQdo la ideologia;·. . '. , , .a..) l."epite 10'. inmedtato. Ua apariencill), 0 seala nusi6n 'obJe tiva;,,:', '1 " '". • '.' ,',. ~ : .'l ' bJremscribe. ',eriese' inmedllito' te.presentado los eonceptos cietltificosmismo$" (matedales elaboFados); ' .. 'C) '.totaliza 10 re-presentado'(sistema.) '. yJo plensacmno Ver· dad: la, ideologfa ail auto-:-designa como cieneia; ~ : d} tienepor.funclcm' Bervir'. los Intereses de una t:lase~ 20. La'distinci6n esencial' entre ,elobjetoode-conocimiento ., el objeto-real,la teoda del conocirQiento' como PFoduccI6n;'!a di ferencla .entre. sistep.:m Y PJ'Oceso de ,elQ)osic16n,tcdo eaoes elfr'uw
.Matas
99
de una reflexi6neBtrlctaxeaUzada a partircdel texto '~can6n1co" de Marx, 18 Introduccion de 185'1 a la Critic{/. de 'Zaecooomfll p.o litiea. (Cf. la nueva traducciOn. inclulda en :Cuadernos de Pasado lI'P:resente, Cordoba. .1968, .n. l,pp.27-79). - , ~ ~1. La tesis contrariaessostenida~ ·firmemente ,por SalTes'en 10 que concierne a las matemAticas (M. SERRES, "La. querelledes ~ncie1l$ et des moderneslmm.u:thematiqu,es", en Critlquei·en. 198, noviembre196~). BegUn Serres la' 'm.atematica .moderna sa t-om.pn s1 misma POl' objeto y ha importado progresivJ.mente,5upropia epistemQlogia. Mas en general, una ciencia"Q.ueHega"a su madu· ,razes !~aciencia que comports la auto-regulaci6n de su llropia ,region,y. POI". consiguiente, su epistemologia ;8ut6ctona, su teoma sobre sf misma,expresada·en su lengunje, segUn:!a descripcion,el fUlldamento yla norma"(idem, 1001>' .La. discusi6n' pFecisa ,de esta'tesls esti .aqui £uera de cuesti6n.Indiquemos.simplemente. que elfundamento·lIl que Serres alude· esta. dirigldo ,8 una perspectiva trascendental. Sf en cambio, nos cufdamos de definir la ciencia co mo prOdUicci6n- de.un decto '(i!spccifico, ,y la .epistemolDgia .como bistoFia de lbs modos de·producci6n 'de ese efecto; parece que la importaeion .ep~temologica .es 'imposible. En. reaUdad, 10 que la matematica. ha "tratado" ,efectivamentenoes la leyr.enlde su praceso; ,sino una re.presentacion ideologic a de ias'm.atemati.cas, una nusion de epistemologia. Y es{e tratamiento .le 'era objetiv4 mente. necesario"pues.~ como toda 'ciencia, la ematematica es cien clade 1a ideologia.La"singularidad de las,matematicas esta en 'el hecho" de que 'au:. "-exterior" ,determina:do no 'es, masque' la: region de la ideologia' donde las' mfttemdttctLl! ·1il.iS1ruls 'estan" indicadas. Tal es elconteliido real del caracter "a-prioristieo" de esta Ciencia~ soia se 'oeripade Sl.lpropiO hecho tal ccano sedemuestra en la re ' .' ' . . '. . .' .: pFesentacion.' . ' . . 22. En los;textos de La TeVoluc!on teOricade .i\'laT:t, po~ un reSto de consideraciOn hada' In ftadicion y paraapoyarse mi~jor en' un" texto 'c6lebre ' de" Mao, Althusserllamaaun' a :laprac1ica articulada,uri,a .contradic~i6g; No.sotros abandonamos 'resuelt3ruen,te ~sta desigmici6ri confUS:l; , " ' . ",' . 23. El prQbleriia funliani~nt\!l de'toM 'estructur~Us.mo' no ; el del. te~iio d~ dOble.. fu~ti6n que ",detel'milla III pe·rte~enci,a. d~Jos otroaterininos a,18 t;l$tr.icitUrura.Q.el~igit1!icant~:ce.ro (Cf•. lntrodi:ctlon a, l:oeuvr~ :de ,Ma~$.· :p~V;~;: '~959. XLVlI$s. ),. : Lo~qli;za~!9~)del·luga,r'>l)!!u.p'a dQ p.or~1 t~i~o. que indica la exclusl(lD e~cifica. ,,Ii;! ,~:useBcia pertinente, 0 'sea la'iietenninat;;Pll. 0 :'e~tru~turpli4l'19F ,4e ,41 ,~§trlJ~: turi}. ?. :A:.j.\tiJJe\Jla, OfJ;~~dq \ll,lll,..e~osi,cion. de ,e5t~,pr901e.~~ ;.~ la
es
de
,100
Notas
que es necesario remiUrse . (Ci. "La. suture", Cahiers pour L'analy . Trataremossin embargo .de demostrar en otro lugar que: It) el uso -extraordinariamente ingenioso- de la Coustrucci6n del nfunero par Frege a los fines de Uustrar el problema de la causalidad estructural as epistemo16gicamente inadecuado; , b )no se podria pensar la '16gica del' significante como tal (del significante. "en general"), salvo reforzando 1a estructura de 1a metaf£sica. 24. Cf. por ejemplo LC I, 49. La causalidad Inmanente-de la austancia no es otra cosa que au efecto: la movilidad intra-modal de la Naturaleza naturalizada, cuya Naturaleza naturalizante es la determinacion ausente. Sin embargo, Dios esta efectivamente repre sentOOo como modo' (por au idea adecuada). En la conilgurac16n ·estructtiral que se llama el hombre,ese representante· de la deter minacioo puede ser no debe ha. Cern~s olvidar el caso en que .ese circulo es justamente el circulo de la ideologfa. "Pero el· circulo de esta operaci6n no es, como. todo drculo de este genero, sino el cIrculo dlalectico de la cuesti6n plan teada a un objeto sobre au naturaleza, a partir de una problema tica te6ricaque,poniendo au ()bjeto a prueba, se. somete a la pme ba de au oldeto" (BTM, 31). De acuerdo. Pero. J,cuando el objeto, como en e1 casa del materialismo dialecticQ, es el .conocimiento mis mo, .es decir justamente la relacion de todo objeto cientifico: posi ble con au' problematica? Entonces la cuast16n plariteada a ea6 objeto instituye un problema euya estructura es abso1utamente ori ginal: el problema de la problematica. LNo nos arriesgamos a cons tatar ·;!J.ue este objetotan particUlar es un objeto paradojal, como cierlos "objetos" de la teeria ingenua de los conjuntos? ..i.No nos exponemos a designarlo s610 por enunciados infalsab1es? . 27. Las indicaciones que siguen, bastante aridas, son extrema damente sumarias. Apoyandome anelhecho de que Althusser' de: termina generaimente la eficacia "global" de unn instancia par efectos· de desplazamiento, he construido unejempl9' te6dco mAs completo, que utUiza como funciones de base pe'l"'ln'Utaciones de permutaclones. Este ejemplo es demasiado' tecnico para ser trans mitiflo liqui; 8010 seiialo su existencia. . . 28. La teoria de las Cate~orfas es qulzas el acontecimiento epislIe, n. 1; enero1966).
Notas
101
temologico mAs significativo de estos Ultimos anos. por el esfuerzo
de abstraccion radical que testimonia: las estructuras matematicas
ya no son construfdas propiamente hablando segUn vlnculaciones
operatorlas entre elementos de una multlpUcidad pura (conjunto)
mas bien aparecen como "cUspides" de una red de recorridos don
de las correspondencias estructurales (los morfismos) son prima
rias (este as el concepto utUizado) asi esbozado. Estructuras de
las estructuras. la multlpUcidad s610 es una estructura entre otras:
. hablaremos de la Categoria de los conjuntos como de la categoria
de los gropos, etc .... Puesto que estoy en las matematicas, debe subrayar el peligro latente de un cierto "aristoteUsmo" en Althusser. de un movimien to de pensamiento mas "organico" que matematico. En efecto, en sus tenos encontramos: a) La' subordinacion de las matematicas a una conceptualizaci6n no-matematica: "La formalizaci6n matematica no puede sino es tar aubordinada a la mirada de la formallzaclon conceptual" (LC II, 163); b) La identificacion del concepto con la definicion: .. ( ... ) la euesti6n del status de 1a definicion, es declr del concepto" (LC n,67). Esto significa volver un poco precipitadamente a la Antigua ideologfa de la matematica-lenguaje. Recordemos que los concap tos de una ciencia son necesariamente palabras no definidas; que una definicion no es nunca otra cosa que la introducci6n de un simbol0 abrevlador; que, en consecuencia, la regularidad de la eficacia de un concepto depende de la transparencia del codigo en que figura, es decir de au materiallzacion virtual; que finaimente la matemiitica no es, en fisica, en bl010gia fundamental, etc., su bordinada y expresiva sino primaria y productorCt. 29. Release el prefacio de la segunda edicion de la CTftica de la. razoo pura. Kant multiplica aIll los indicios de una singulari dad sin concepto, de un casi milagro que preside el strrgimiento "practico" de la ciencia: "revolucion debida a un solo hombre" ..• "felia idea de ,unensayo··. :. i'quien tuvo ladicha de realizarlo'· .• ~ "tocado por una gran iluminacion". La ciencia es el hecho puro "por debajo" del cual no hay' nada.
-I.
INDICE Advertencia
7
Alain Badiou
El (re)comienzo d6l materialismo dialectico
9
Louis Althusser
Materialismo hist6rico y moterialismo diaUctico
37
Louis Althusser Prologo a la 2{l ediciOn frtmeesa de "Leer El capital"
63
Discusi6n sobre el pensamiento de Gramsci Louis Althusser La filosa/fa, la pol£tica y la ciencia
67
,-(
RinD Dal Sasso
NOTA DEL EDl'l'OR
AUtodo de lectUT(J
73
Nicola Badaloni La taroo del fi16sofo
76
Luciano Gruppi La relaci6n hombre-naturaleza
82
Los'ttabajos que lntegran.este. Cuaderno fueronexkaidos, de. tas
siguiente)5 publlcaciones: . '.' . . .. 1. Alain Badiou, "Le (re) comencement.du .tx;lateriallSl.I1e dialeg" tique", rcvista Critique, mal 1967, pp. 438-467. Traducido por Nora Rosenfeld de Pasternac. :1 • Louis Althusser, "Materiallsme historique et maierialisme dia lectique", CahieT's maT~tes.leninistes, n. 11, avril 1966. Tradu cido por Jose Aric6. 3. Louis Althusser. Traducido POI" Santiago Funes. 4. La discusi6n sobre el pensamiento de Gramsci fue tomada del semanario comunista italiano, Rinascita, n. 11 (15 'marzo 1968). n. 14 (5 abrlle) 1968 y n. 13 (28 lriarzo 1969) y traduclda por Jose Aric6.
Lucio Lombardo Radice
Sf, para suerte nuestra
87
Calvano Della Volpe
Un planteD "estructuraZ"
92 "'
Louis Althusser Respuesta a Antonio Pesenti 80bre "Leer EZ capitar
93
Notas
ys'