ARMAS NINJA EL MANEJO DE LAS ARMAS NINJA ADOLFO -SAN- PÉREZ © Ediciones Masters Baleares, 57-4ºA
28019 MADRID http://www.ediciones-masters.com
[email protected] Diseño portada y maquetación: Roberto-Carlos Pérez Rodríguez ISBN:978-8496319-65-3 Depósito legal: Aparentemente, la gran diversidad de armas atribuidas al ninja suponen un problema para el aprendizaje -de por sí muy complejo-, del arte supremo del Ninjutsu; pero como este libro demostrará, el eje de todas ellas gira en torno a un simple bastón de apenas 1,20 metros: el Hanbo. A partir de él y mediante sencillas modificaciones, un experto ninja no tendrá problemas para manejar con habilidad cualquier arma que tenga en sus manos. La otra cuestión sería: ¿qué papel cumplen en el siglo XXI armas rudimentarias que fueron creadas para una civilización en la cual apenas si se empleaban las armas de fuego? Procedentes la mayoría de los utensilios de labranza más ancestrales, su gran ventaja era que podían ser transportadas ostentosamente sin que nadie considerase que se trataba de armas muy letales. Ahora, sin embargo, un simple palo (un Tanbo, por ejemplo), provocaría rece-lo si lo llevásemos en la mano dentro de un autobús lleno de gente, y no diga-mos nada de llevar un Ninja-to o un Kusarigama. Es por eso, y precisamente por eso, que el Ninjutsu cobra cada vez mayor interés en los aficionados a las artes marciales, ya que la gran diversidad de armas que tiene que aprender el practicante le hace ser diferente... aunque ni siquiera pueda llevarlas legalmente por la calle para autoprotegerse. ¿Para qué aprender, entonces, a manejar algo tan eficaz si luego no podremos emplearlo como arma en nuestra vida cotidiana? La respuesta a este planteamiento es sencilla y consta de tres razonamien-tos: Las armas ninja son una prolongación de nuestras armas naturales (patadas,
puñetazos, codos…), contribuyendo a fortalecer nuestros brazos, muñecas, codos y hombros, dotándolos así de unas cualidades físicas que no podríamos conseguir por otros medios de entrenamiento. Tanto es así, que numerosos cuerpos de élite de la policía y el ejército están incorporando desde hace años las técnicas y armas ninja, plenamente vigentes en un mundo en el cual no siempre se pueden emplear armas de fuego para controlar a personas violentas o delincuentes. Del mismo modo que una simple barra de hierro o un cuchillo de cocina se convierten en un arma letal en manos de personas adecuadas, las armas ninja están allí dispuestas para ser empleadas en situaciones límites que espe-ramos nunca se den. Además, para manejar con eficacia cualquier utensilio doméstico como arma disuasoria o contundente, deberemos haber aprendido primero a manejar las tradicionales armas ninja, consiguiendo así que los simples elementos de uso cotidiano puedan transformarse en nuestras hábiles manos en armas de increíble potencia y efectividad. Finalmente, la cultura de nuestros antepasados hay que conservarla, del mismo modo que se conservan los libros, la naturaleza y los monumentos históricos, y el arte del Ninjutsu es algo que nunca se puede perder. Advertencia Aunque el uso de las armas en la sociedad actual está alcanzando unas cotas de violencia y sadismo insoportables, no se pueden meter en el mismo cajón de sastre a las folclóricas armas orientales, por más que de ellas también se haga mal uso. Si a todas las fuéramos a catalogar por igual, de la misma manera podríamos incluir a los cuchillos de cocina, a la fusta de los jinetes o al bastón de los cojos. No interprete, pues, el lector de este libro, que lo que se pretende con él es enseñarle a matar o, simplemente, a intimidar a alguien con las armas que aquí se explican; el único propósito es poner a su alcance una visión actualizada de la tradición de los pueblos orientales en su faceta guerrera, nada más. Si alguien insiste en hacer un uso delictivo de lo que aquí se enseña es res-ponsabilidad suya, ya que las leyes prohíben de manera expresa manejarlas o portarlas fuera del gimnasio. Solamente personas cualificadas y con la licencia deportiva pertinente podrán tener, portar y manejar las armas orientales. Los demás
deberán conformarse con decorar alguna pared de su casa con tales utensilios. Por otra parte, y pensando en la diversidad de lectores que puedan leer mi obra, así como de sus conocimientos o no de algún arte marcial, he dejado casi siempre a un lado la nomenclatura oriental, bien sea japonesa, china o coreana, y toda la explicación técnica de su manejo está hecha enteramente en español, sin concesión alguna a palabras imposibles de comprender por quien no practique determinados estilos. No obstante, y para que el legado cultural no se pier-da o desvirtúe, algunos términos japoneses aparecen descritos para una mejor comprensión. Introducción Antes de comenzar a recorrer y enseñar el apasionante mundo de las armas ninja, necesitamos definir algunos términos, tal y como anteriormente decíamos. ¿Qué quiere decir la palabra Ninja? En sí misma deriva de Shinobi-no, que se escribe con dos caracteres kanji que se pueden pronunciar como nin-sha, si la pronunciación oriental se utiliza en lugar de otra. El primer carácter, nin, sugiere ocultación, mientras que el segundo, sha, persona. Ninja: una persona que oculta su presencia. En japonés, sin embargo, la palabra se aplica a una persona que hace operaciones secretas militares. No podemos dejar el término con una definición tan alta, pues de ser así la CIA, el FBI, y los marines se podrían considerar también ninjas. Y aunque soy seguro que hay muchos marines que quisieran creer que son como ninjas, nos debería preocupar que ciertamente lo fueran. Al hablar del Ninja, entonces, también nos referimos a una organización, una fraternidad, o un clan secreto, cuyas habilidades y conocimientos bélicos se han pasado en secreto de generación en generación. En suma, ser considerado un ninja, como lo entendemos a través de la aceptación popular y de los maestros modernos del ninjutsu, un ninja debe: practicar el arte de la ocultación entrenar las técnicas de guerra entrenarse para operaciones militares secretas pertenecer a una fraternidad de ninjas usar traje negro, y diversos accesorios. Como veremos, los primeros tres puntos tienen antecedentes históricos en Japón,
aunque no de forma exclusiva, puesto que muchas personas realizan actos comunes en cualquier guerra alrededor del mundo y no por ello emplean el término ninja. Los dos siguientes puntos tienen más de calidad mítica y quizá es lo que les diferencia de otros grupos belicosos. No obstante, creemos que el ninja moderno, aquel que está inmerso en la sociedad y la familia tradicional, y que practica en pequeños dojos abiertos a cualquier estudiante, se diferencia de los antiguos en su finalidad, que no en su entrenamiento. Hoy en día, las habilidades marciales de los cinturones negros superan con mucho a la de nuestros antecesores puesto que tenemos mayor fortaleza física, un equilibrio psicológico más estable, menos presiones externas para mejorar en el entrenamiento y un dominio de la biomecánica que antes no tenían. Hemos perdido, quizá, motivación, pero lo hemos suplido con la constancia en el entrenamiento y un deseo imperioso de alcanzar mejores metas cada día. ¿Por qué aprender Ninjutsu? No es una casualidad que al Ninjutsu se le haya considerado como el arte supremo. Alejado deliberadamente de la faceta deportiva, sin katas (formas) memorísticas, ni corsés de los cuales el alumno no puede salirse, debemos reconocer que es un arte marcial difícil de aprender. Se necesitan aproximadamente 4 años para conseguir el Cinturón Negro bajo la supervisión de un maestro experimentado, aunque en este entrenamiento no hay logros colectivos, sino progreso individual. Se juzga el progreso del aprendiz de ninja mediante la observación de los cambios ocurridos durante el paso de los meses y años, no mediante una tabla de habilidades estándar. Los entrenamientos están dirigidos a potenciar todas las facultades disponibles en el ser humano, entre ellas potencia, velocidad, precisión, agilidad, coordinación muscular, equilibrio, timing, sigilo y resistencia; pero también se le exige habilidades mentales como la percepción, la serenidad, corazón benevolente, ausencia de temeridad, filosofía budista, y todo ello sin olvidarnos de conocimientos amplios de preparación física, biomecánica, alimentación, primeros auxilios y el uso adecuado de las plantas medicinales. Como vemos, la capacidad de autodefensa no se limita, al contrario que el resto de las artes marciales, a lo puramente físico. Por todo ello, alertamos al futuro aprendiz que elija con cuidado a su maestro, evitando ponerse en las manos de bravucones y exhibicionistas musculares, cuya única misión es que el alumno copie milimétricamente sus habilidades circenses.
En la sumisión no está el secreto del aprendizaje, pues eso nos lleva a ser sombras de alguien; pero sombras al fin. CAPÍTULO 1 La confusión de la historia Que China y Japón no poseen la inmensa riqueza de documentos históricos que occidente es obvio, más que nada porque la escritura se desarrolló mejor en el mundo latino y árabe (Grecia y Roma, en especial), lo que permitió trans-cribir a papel los documentos gráficos e iconográficos existentes. Desde entonces, la transmisión de la historia y los conocimientos ya no se pasaban de boca en boca, ni mucho menos en reducidos clanes familiares (como ocurría en el Japón), lo que permitió su expansión, primero, y también la no alte-ración de los textos iniciales. En occidente leemos con demasiada frecuencia (y este libro describe más adelante esta tesis), que todo el origen de las artes marciales proviene de China, y el Ninjutsu no se ha librado de esta teoría. No obstante, si tenemos en cuenta que en China existen varios dialectos opuestos, entre ellos el canto-nés (tradicional), el mandarín y el wu, y que solamente los dos primeros desarrollaron una forma escrita, nos daremos cuenta que mucha de su historia, especialmente la de los pueblos y aldeas, se ha podido perder, al menos en C cuanto a credibilidad. Es más, entre estos dialectos escritos existen numerosas contradicciones, así que lo que para unos es sí, para otros pudiera ser quizá. A Para complicar más las cosas, debemos recordar que las formas escritas del P chino incluyen un alfabeto tradicional y un chino simplificado (Pinyin), el cual se originó en 1948 después del establecimiento de la República Popular de Í China, para hacer el idioma escrito más accesible a la población en general. T Poco que ver con las formas antiguas.
U Admitiendo la insistencia en que el famoso templo Shaolín es el origen de L las artes marciales orientales, encontramos un arte guerrero denominado como Tzu, el cual fue descrito alrededor del quinto siglo A.C., y que contiene un O capítulo sobre la importancia del espionaje. Algunas de las tácticas descritas en este libro, específicamente el capítulo dedicado a este tema, fueron atribui-1
9 EL MANEJO DE LAS das posteriormente a los ninjas. Por esta razón, las habilidades del ninja se describen a menudo como de origen chino, aunque en este libro no había nada particularmente secreto, lo que supone una contradicción al describir unas técnicas que deberían estar ocultas para su efectividad. Esta es la razón por la cual estas tácticas no fueron empleadas por los japoneses, mucho menos por los ninjas, admitiéndose como válidas solamente las técnicas guerreras que luego serían asumidas por los samuráis. Con todo, nadie admite hoy que la forma de pelear de los samuráis tuviera su origen en China. La escuela filosófica de la guerra pudo haber comenzado en China con el estilo Tzu, pero el sistema creado en Japón que incluía algo de esta información y que posteriormente evolucionó hasta las artes Ninja, son una creación única de Japón. Hay también otro mito, y es el referido al príncipe legendario héroe Yamato y que es descrito en dos de los más antiguos textos escritos en Japón, el Kojiki y el Nihon Shoki. Ambos dicen mucho sobre el origen y la historia de los guerreros japoneses, pero son una mezcla de folklore, hechos, y leyendas. Escritos en el siglo VIII por la casa imperial, la historia del príncipe Yamato es señalada generalmente como una referencia al antiguo arte del ninja, pero creemos que sería más justo mencionarlo como un “proto-ninja”, o sea, un antecesor de lo que posteriormente sería considerado como un ninja. Así pues ¿en qué fecha podemos confirmar el inicio del ninjutsu? Si deja-mos la pasión a un lado y tratamos de ser puramente historiadores, parece que la primera referencia a un ninja la encontramos en un libro titulado Taiheiki, C
escrito alrededor de 1360, y en el cual hacen mención a un acontecimiento ocurrido en 1338. En las cortas letras nos hablan de unos guerreros vestidos A de negro y enmascarados que matan a un hombre aprovechando la oscuridad P de la noche. No es mucho, la verdad. Sin embargo, en los años venideros las hazañas de guerreros similares y el término ninja comienzan a proliferar, forÍ mando parte incluso de las fábulas y leyendas folclóricas. Así llegamos hasta T el siglo XVI, cuando el Japón entra en una guerra, en la cual participan ya de una forma fehaciente y eficaz los guerreros ninja provenientes de Iga y Koga. U L O 1
10 ARMAS NINJA EL NINJA HISTÓRICO IGA Y KOGA La era Sengoku marca un siglo de guerra en Japón, durante cuya última mitad se incrementan los esfuerzos por hacerse con el poder, finalizando cuando Ieyasu fue nombrado Shogun en 1603 después de ganar la batalla de Sekigahara. Durante este tiempo, la actividad documentada del ninja estaba en plena eclosión. Las incursiones de los ninjas, los asesinatos planificados, las misiones de reconocimiento, y otras operaciones militares, fueron registradas en documentos semi-históricos tales como el Hodo Godai-ki (una crónica del clan Hojo), el Shinchoko-ki (biografía de Oda Nobunaga), y el Irán-ki, o cró-
nica de la provincia de Iga. Estas referencias, cuando se leen en su totalidad, revelan exactamente qué papel desempeñó el ninja en la guerra. SIGILO E INFILTRACIÓN Ésta es en gran medida la habilidad más a menudo atribuida al ninja. La capacidad del ninja para entrar sigilosamente en un castillo y lanzar un ataque sorpresa contra los habitantes, creando confusión y terror, fueron sus mejores armas. Es más, la estrategia consistía en lograr que el grueso del ejército del C castillo saliera al exterior mediante señuelos, dejando una pequeña guardia que podría ser fácilmente reducida. A El ninja escalaría hábilmente las paredes del castillo aprovechando las P noches oscuras o las nubes ocultando la luna. No usarían su tradicional traje negro, y en su lugar empleaban una vestimenta similar a los defensores del Í castillo, haciendo difícil que alguien supiera si era amigo o enemigo, al menos T durante los primeros minutos. Esta confusión podría emplearse para hacer creer que se había declarado una rebelión dentro del castillo, creando un caos U que dificultaría una defensa eficaz. L Una fuente dice que los ninjas podían simular un ataque que nunca se iba O a realizar, acosando a los defensores pero sin hacerles daño, lo que obligaría a estar siempre alertas y no poder descansar, y en ocasiones ni siquiera comer. Esperando siempre un ataque inminente que nunca se producía, el agotamien-1
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to era cuestión de pocos días. De este modo, cuando el ataque se efectuaba realmente, las tropas defensoras estaban maltrechas sin ni siquiera haber peleado. EXPLORADORES Los ninjas fueron empleados a menudo para probar la fuerza relativa del enemigo. Ocultos aprovechando los accidentes de la naturaleza, la hierba o las plantaciones, permanecían allí varias horas para volver a su reducto con los informes precisos. En la mayoría de los casos, sin embargo, el explorador iba simplemente a caballo, efectuando un servicio similar a los carteros o vigías. ASESINOS Esta es la faceta que ahora menos agrada a los ninjas del siglo XXI. Sin embargo, durante el siglo XVII existen numerosas referencias de los múltiples asesinatos que efectuaron, incluso hacia personas inocentes o no involucradas con el poder. Todos los generales importantes temían ser asesinados por algún ninja oculto, pero la realidad es que la mayoría de los asesinatos no fueron realizados por ninjas, sino por traidores que vivían como personas inocentes. Un ase-C sinato bien conocido, el de Oda Nobunaga, fue realizado por uno de sus generales, y no por un ninja, y lo mismo podríamos decir del resto de asesinatos A efectuados hacia personas importantes. De hecho, en ningún documento se ha P podido encontrar un solo asesinato realizado por un ninja. Indudablemente existía esa posibilidad, pues sus habilidades así lo decían, pero parece ser que Í la posibilidad nunca se convirtió en realidad. T Si tomamos con referencia los múltiples asesinatos ocurridos en occidente durante el siglo XX, atribuidos a personas a quienes se ajusticiaba antes de que U se pudiera demostrar su inocencia, no nos debe extrañar que la leyenda de los L
ninjas como asesinos se hubiera podido forjar de modo similar. O Su habilidad para matar era comúnmente en el campo de batalla, como por ejemplo cuando simulaban estar muertos mezclados con cadáveres reales. En el momento en que el enemigo se acercaba para robar o descuartizar al supues-1 to fallecido, se levantaban para matarle rápidamente.
12 ARMAS NINJA Las ciudades de Iga y Koga (provincias de Mie y Shiga), son consideradas como la patria ancestral de las artes del ninja, y parece de hecho ser el área principal de su actividad. Consciente de ello, Oda Nobunaga decidió masacrar a todos los habitantes de Iga, lo que ocasionó la huida de los ninjas por todo Japón. Dondequiera que fueran, su fama como guerreros les precedía y eran requeridos para solucionar no pocos conflictos, como la batalla de Sekigahara, aunque sin involucrarse demasiado. Después de la rebelión de Shimabara, la paz se estableció de forma consolidada. ¿Cuál era entonces la misión de un ninja? Bien, comenzaron entonces a fundar escuelas de artes marciales, publicar algunas guías del manejo de las armas, y sentarse en las asambleas locales para controlar el buen desarrollo de la política. MITOS Y LEYENDAS DEL NINJA Durante la época misteriosa del período Edo, bajo el reinado del Shogunato Tokugawa, los artes escénicas prosperaron. Las historias e incluso los juegos infantiles, contaban historias dramáticas del pasado. En estos cuentos, el ninja se convirtió en un ser mítico, con capacidad para ocultarse, permanecer silencioso, sitiar castillos, y matar, siendo capaz de proezas sobrehumanas, lo que se explicaba por la canalización de energías sutiles y hasta la brujería. También hablaban de su capacidad para volar, algo que ahora denominamos más acerC tadamente como rapell, maniobra de descenso con cuerda controlando la velo-A
cidad y la bajada por medio de la fricción contra la cuerda. P Parte de la aureola mística que rodea al ninja puede ser debida a su asociaÍ ción durante años con los monks, especialmente los yamabushis, habitantes de T las montañas cuya forma de vida austera proporcionaba un endurecimiento corporal y mental muy alto. Esta mezcla de meditación y ayuno sacaría a relu-U cir energías internas ocultas a la mayoría de los seres humanos. Las provincias L de Iga y de Koga, siendo muy montañosas, eran lugar preferido para los yamabushis. Si agregamos a esto los rumores de que los ninjas se disfrazaban a O menudo como monks que vagaban en misiones de inteligencia, es fácil explicar cómo las energías mágicas atribuidas a ellos tuvieran cierta base sólida. 1
13 EL MANEJO DE LAS Mientras que la leyenda del ninja crecía, una gran cantidad de figuras históricas pasaron igualmente a ser ninjas. Cualquier samurai que hubiera vaga-do durante un largo tiempo por las montañas era ya un candidato a ser un nuevo ninja. El guerrero Yagyu Jubei, que sirvió al Tokugawa pero que desapareció inexplicablemente durante diez años, es un ejemplo típico. También, los centenares de cuentos que se han escrito en esos años o sobre esa época, relativos a hechos misteriosos, han sido atribuidos a personajes ninja. Y podía ser verdad. Poco a poco, la figura de un guerrero vestido con traje negro, generalmente solitario, y que se ocultaba con facilidad de sus enemigos antes de masacrarles, entró a formar parte de la historia... salvo que estuviera escrita por un samurai. Ningún shogun podía admitir que sus poderosos guerreros, dotados
de gruesa armadura y con suma habilidad en el manejo de la katana, podían ser derrotados con facilidad por un menudo ninja surgido de entre las sombras de su propia fortaleza. Así que lo mejor era borrarlo de la historia. Además de las capacidades en las artes marciales y la magia escénica, los ninjas tenían una capacidad intuitiva y perspicacia fuera de lo común, facultades nacidas mediante la observación del enemigo. Desde el siglo XVIII, el arte erótico entró a formar parte de las armas psicológicas del ninja. Generalmente, las imágenes mostraban invasión de dormitorios y violaciones violentas, en las cuales el ninja, usando su fuerza, podía entrar en cualquier lugar por protegido que estuviera, matando a los varones y violando a sus mujeres. Ello ocasionaba que se dejara de proteger las fortaleC zas para salvaguardar en primer lugar los hogares. Lo que no existieron nunca fueron relatos en los cuales la chica se enamoraba del ninja violador, tal y A como ahora se describe en el síndrome de Estocolmo. P Con todas estas historias del ninja, era solamente cuestión de tiempo que aparecieran en el teatro Kabuki. Y entonces, los escenógrafos tenían un dileÍ ma: ¿cómo representar a un ninja? Y más importante: ¿qué clase de traje debía T utilizar? A veces, usaron el tradicional kamishimo samurai, pero la reputación de los ninjas como los amos de la noche y la invisibilidad sugerían otra vesti-U menta. Así que ¿qué mejor que vestir a los ninjas igual que la noche oscura? L Después surgieron sus habilidades para hacerse invisible o volar, lo que obli-O gó a los tramoyistas a un duro trabajo imaginativo. El fondo de la escena siempre era negro, lo mismo que las cuerdas que debían simular el vuelo. Pero la vida real era distinta y el traje del ninja debía ser más práctico, livia-1
no, oscuro por supuesto, acolchado y con multitud de bolsillos para albergar 14 ARMAS NINJA las armas y documentos necesarios. Así que ahora muchos ninjas modernos acuden a los Takais (concentraciones) con esa extraña vestimenta empleada en los escenarios creyendo que representan la tradición guerrera; pero no es así, aunque resulta agradable que todos los crean. Es difícil averiguar los elementos empleados realmente por los ninjas, pues su obligada ocultación ha ocasionado que los documentos, denominados como torimakis, estén ya convertidos en polvo, habida cuenta del material tan perecedero del soporte. En los pocos que hay rescatados, se habla con cierto detalle de las armas, medicinas, y recipientes para almacenar alimentos durante largo tiempo. Seguramente –y esto es solamente una probabilidad- muchos de los documentos más valiosos estén todavía ocultos en casas de montaña, pues habida cuenta de que ni siquiera la familia del ninja conocía su andanzas guerreas, los documentos escritos nunca pudieron ser encontrados. No se encuentra lo que no se busca, por explicarlo de otro modo. C A P Í T U L O 1
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EL MANEJO DE LAS Armamento Ninja Mucho del misticismo ninja exagera su armamento. Los libros publicados en el siglo XVII reproducen con dibujos sencillos muchas de las armas y las técnicas del ninja que funcionaban. Pero nuevamente nos encontramos con el protagonismo de los samuráis, ya que las principales armas usadas por el ninja eran las mismas empleadas por el samurai: la espada o katana (denominada Ninja-to por sus diferencias), la espada pequeña o wakizaki, el arco y flecha. Otras armas, sin embargo, parecen haber sido únicas en el arte del ninja, o al menos estamos seguros que los samuráis nunca las emplearon. He aquí las más importantes, aunque luego los describiremos con todo detalle: Armas de garra Hay dos clases principales: las garras neko-te o “del gato,” y las garras shuko o “del tigre”. El neko-te consiste en trozos de metal afilados que extien-den el extremo de cada dedo, como las garras de un gato. Esto nos lleva a un arma defensiva, usada principalmente por ninjas femeninos. El shuko, por otra parte, tiene muchos usos. Además de uso en combate, pueden también ser utilizados para escalar paredes y árboles. Los ashikos serían su equivalente para los pies. C Armas de hoz A La hoz corta, o kama, es un arma que se empleaba también en el kárate, pero que estaba prohibida por los samuráis. Cuando se le añadía una cadena P con un peso al extremo, se le denominaba como kusarigama, esta vez típica Í del ninja. Lo cierto es que el kama era básicamente una herramienta agrícola, por lo que se podía llevar ostentosamente sin llamar la atención. T U
Armas arrojadizas L El shuriken está anexionado tradicionalmente al ninja, aunque los dardos O provienen de China. No eran tan efectivos como el cine nos muestra, pero indudablemente son atractivos de manejar. 1
16 ARMAS NINJA Armas de invisibilidad A estas alturas nadie se cree que los ninjas se podían hacer invisibles, aunque admitimos que habían desarrollado enormemente su habilidad para ocultarse y desaparecer, lo que equivale a lo mismo. Su capacidad para quitarse de la vista del enemigo fue siempre uno de los rasgos característicos del ninja, y lo que contribuyó a perpetuar la leyenda. Ayudado en ocasiones por bombas de humo o por los polvos cegadores, el ninja desaparecía bruscamente de la vista de su enemigo, aunque lo más fácil es que estuviera escondido a pocos metros. Los simples polvos de pimienta metidos en una cáscara de huevo, eran una de las mejores opciones. Mudras Suponen la parte mística y esotérica de las habilidades ninja. Estos Mudras o gestos con las manos –más conocidos como kujikiris-, siguen siendo uno de los componentes básicos del entrenamiento ninja, y se pueden ver en muchas películas. En leyendas y mitos del ninja, esta forma de entrelazar los dedos era realizada generalmente antes de emprender alguna acción, lo mismo que para curarse o prever acontecimientos. Sin embargo, creemos que no eran empleadas con frecuencia y probablemente solamente son una parte de la mitología del ninja como parte de su asociación con los yamabushis, los peregrinos de las montañas. C
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17 EL MANEJO DE LAS Los Ninjas en el teatro y el cine En Japón, los Ninjas eran bastante populares antes de su eclosión en el cine y la televisión. El éxito de la trilogía Ninja (El retorno del ninja, La venganza del ninja y La dominación), así como su aparición en películas de Chuck Norris (Duelo final) y en “Guerrero americano”, fueron el detonante para el fenómeno ninja que se desarrolló en todo el mundo. Multitud de vídeos y libros salieron al mercado mundial, mientras que algunos maestros dirigidos por el sensei Hatsumi, se ocuparon de divulgar personalmente las artes ninja y formar a los nuevos instructores. Uno de estos primeros Cinturones negros fue Adolfo –SanPérez, el autor de este libro, allá por los años 80. En el siglo XXI el interés por el Ninjutsu decayó lo mismo que el resto de las artes marciales, por lo que podemos considerar que hubo cierta regresión que ahora se está corrigiendo. Películas como “Shinobi” y “La maldición de la flor dorada”, así como “Batman begins”, están contribuyendo a un nuevo renacer por el guerrero de las sombras. Por supuesto, la faceta cómica refle-jada en “Las tortugas ninja” sirvió para quitar agresividad al legendario personaje, haciéndolo asequible incluso a los niños. La última película realizada mediante infografía,
evitando los personajes reales, no tuvo el éxito deseado, aunque técnicamente estaba bastante lograda. Como resumen de la producción de filmes sobre ninjas realizada recientemente en Japón, he aquí la siguiente relación (los títulos son orientativos, puesto que algunos no se han estrenado en occidente): C A Shinobi Drama histórico sobre la vida y amores de Ishikawa Goemon, un Ninja P entrenado para asesinar a Oda Nobunaga. Í Guerras Ninja Hiroyuki Sanada es Jotaro, un ninja que busca vengar a su novia cuya cabe-T za fue puesta sobre el cuerpo de otra mujer por un grupo de malvados. U Crónicas Ninja Unas mujeres Ninja (kunoichi) protegen a un recién nacido usando su L magia. Un clan malvado de hombres ninja intenta arrebatárselo y matarlas. O Dragón Ninja En un día del moderno Japón, unos héroes Ninja defienden a las chicas de la Escuela Secundaria de unos asesinos. 1
18 ARMAS NINJA Ninja en la guarida del dragón Hiroyuki Sanada se disfraza como Ninja para derrotar a sus enemigos. Duelo a muerte Solamente sabemos que está dirigida por Ching Siu-Tung. Trampa mortal Ninja Relata un episodio de Ti Qi Jiguang, el famoso general de la dinastía de Ming, ahora peleando contra los ninjas. C A P Í T U L O 1
19 CAPÍTULO 2
La historia del Ninjutsu, según hemos leído El Ninjutsu no fue reconocido inicialmente como un arte marcial, y tuvieron que pasar muchos siglos para que se estableciera como un sistema inde-pendiente con su propia metodología. Inicialmente era una actividad delictiva, algo que se oponía simplemente al poderío del Samurai gobernante, y sólo por esta razón, los orígenes del arte se mantuvieron ocultos durante siglos, rodea-dos de misterio, ocultación, y de confusión deliberada. Cuando comenzamos a mirar la historia del Ninjutsu, rápidamente comprendemos que no hay ningún lugar específico para empezar. Las primeras raíces no hablan de un sistema denominado como Ninjutsu, en incluso sus técnicas y modos de operar no se parecen nada al Ninjutsu practicado en los tiempos modernos. Los primeros ninjas, o proto-ninjas, fueron un eslabón más en la historia de las artes marciales orientales, adaptándose a los cambios físicos y ambientales de cada lugar y época. Para hacer la tarea más difícil, encontra-C mos que hubo (y hay) una gran variedad de escuelas ninja (conocidas como ryu) y que cada una tiene su propio lugar en la historia. De hecho, algunas de A las escuelas estaban seriamente enfrentadas entre si. En cada caso, ahora esta-P mos intentando llegar atrás en la historia de cada ryu, al menos de aquellos que dejaron un legado. Las fuentes más amplias y fiables nos llevan a finales del Í siglo XVI y principios del XVII, comenzando entonces una historia más conT fusa y oculta, quizá cuando sus actividades marciales, y en ocasiones delictivas, les obligaron a no dejar huella de su existencia. Ahora sabemos que los U ryu nunca desaparecieron, pero dada su condición de proscritos se vieron en L la necesidad de practicar en el seno íntimo de las familias, evitando que nadie les señalara como ninjas. Paradójicamente, esa fue la época de mayor progre-O so en sus artes guerreras. 2
21 EL MANEJO DE LAS Períodos Período Nara El Período Nara (710-784 D.C.): nos habla de que el Ninjutsu no procedía del Japón, sino que tiene sus orígenes en China. Durante este período, China estaba en un estado de constante guerra civil y muchos guerreros chinos, estudiantes, y monjes se expatriaron al santuario de Japón. Ellos trajeron la sabiduría acumulada de las filosofías religiosas chinas, folklore, cultura, medicina, y las estrategias militares. Al diseminarse por Japón, difundieron una cultura que contribuyó no poco al desarrollo japonés. Uno de los monjes que huyeron a Japón fue En-no Gyoja, el fundador del Shugendo, un estilo de vida filosófico cuyos practicantes (llamados shugenjas o yamabushis) llevaban una vida rural, a veces como ermitaños, buscando en las montañas el cumplimiento espiritual a través de la austeridad y la reflexión. Se piensa que estos shugenjas fueron los antepasados de los ninjas porque muchos de los escritos nos recuerdan a los ninjas modernos. Se cree que En-no Gyoja era un Lin Kuei, o demonio del bosque. Durante este lapso de tiempo, Lin Kuei capitaneaba una pandilla de bandoleros chinos del bosque que vivían del robo, la amenaza y en ocasiones el asesinato. Según algunos, Lin Kuei fue el responsable de que el Ninjutsu se desarrollara de una forma consolidada. En-no Gyoja figura ya acreditado como fundador de de un ninja Ryu durante los años 710s ó 720s. C A Período Heian Entre 794 y 1185 DC los ninjas no eran propiamente guerreros, y aunque P
dominaban perfectamente las artes de lucha preferían enseñar filosofía en las Í zonas montañosas. Aunque en los dibujos su atuendo era parecido al actual, suponía más un acercamiento a la vestimenta de un místico que a la de un gueT rrero. En el Período Heian comenzaron, no obstante, a refinarse las técnicas de U lucha, siempre en secreto, compaginándolas con las de ocultación, estrategia y formas de desaparecer que caracterizan al Ninjutsu. También es durante este L tiempo en que los diferentes ryu se desarrollaron. O Mientras los ninjas de Fuma evolucionaron del shugendo, la mayoría de los clanes famosos eran adiestrados bajo las enseñanzas del kenpo chino. Uno de estos maestros fue Tatsumaki Hoshi, un monje budista que había abandonado 2
22 ARMAS NINJA China también durante el derrumbamiento de la Dinastía Tang. No tuvo apenas alumnos, pero uno de ellos fue el hijo de Mochizuki Saburo Kameie, un guerrero que se había distinguido en la batalla contra Taira-no Masakado en 939, y había sido premiado con un terreno al sudeste de la provincia Omo. Esta tierra se denominaba Kogagun, y cuando fijó allí su residencia la cambió el nombre por el de Koga Oni-no Kami Kameie. Unas décadas después de que el Koga Ryu fuera fundado, otro notable chino se estableció en las montañas cercanas a Koga. Ikai i Chan Busho (también conocido como el General Ikai) era un guerrero chino de la Provincia de Shitio. Cuando murió, Gamon Doshi y su alumno, Garyu Doshi, viajaron a Iga para seguir enseñando el estilo, logrando una gran reputación con sus escuelas. Por ello, Gamon Doshi es considerado por muchos como el fundador de Iga Ryu en 1065. Iga Ryu realmente es una recolección de muchos estilos de ninjutsu, denominándose más coloquialmente como “artes libres”.
A la muerte de su maestro, Garyu Doshi fundó el Hakuun Ryu en 1074, ahora considerada como una de las muchas escuelas de Iga Ryu. Garyu enseñó a Hachiryu Nyudo, un experto en kosshijutsu o arte de atacar los músculos y articulaciones del atacante. Hachiryu enseñó a su vez a Tozawa Hakuunsai que formalizó el Gyokko Ryu en 1156 y se acreditó como uno de los primeros soke. La escuela Togakure proviene de Togakure Daisuke, fundada entre el año 1180 y principios del 1190. Allí entrenaba otro samurai que luchó junto a Togakure en la batalla de Awaza-no Kassan: Shima Kosanta, quien pasaría a convertirse en el segundo soke, mientras que su hijo Togakure Goro sería el C tercero, formalizando ya el estilo que conocemos hoy. A Al finalizar el Período Heian, muchas de las disciplinas marciales y tácticas importadas de China habían encontrado su acomodo en el Ninjutsu. La P práctica del mikkyo, por ejemplo, un entrenamiento en algunas escuelas de Í pensamiento budista, se estaba extendiendo rápidamente entre los ninjas. La T técnica se basaba en el disimulo y la improvisación, aunque el único cambio importante que los ninjas les quedaba por incorporar era el concepto de luchar U en grupo o como equipo. L Período Kamakura O Entre los años 1192 al 1333 apenas hay documentos que hablen de los ninjas. Ello se debe principalmente a que las familias ninjas adoptaron el secreto como su forma de vida, pues en ello les iba su supervivencia. En esa época el 2
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EL MANEJO DE LAS emperador fue depuesto, así como toda su corte y el gobierno central tradicional, comenzado así la Edad Media japonesa. Los bushi habían empezado su versión del feudalismo, durante el cual el poder civil, militar y legislativo estaba ahora en sus manos, alcanzando el poder absoluto. Esto ocasionó que muchas familias emigraran a las regiones montañosas fuera de influencia de los bushi. El lugar predilecto fueron las montañas de Iga y las regiones de Koga. Fue precisamente cuando los ninjas empezaron realmente a cambiar a lo que ahora consideramos como un auténtico ninja, aunque no alcanzaron esta categoría hasta el siglo XV. El motivo principal para su desarrollo es que los bushi estaban usando su poder absoluto para reprimir al pueblo. El ejército recibía un entrenamiento muy intenso, así como el armamento más sofistica-do de entonces. En contestación a esto, las familias ninja tenían que crecer en secreto, lo mismo que su entrenamiento y puesto que no disponían de elementos guerreros, tuvieron que adaptar artículos de uso común para conseguir que se transformasen en armas letales. Con el tiempo, fueron protegidos por los propios bushi. Período Muromachi También llamado Período de los Estados Belicosos, se desarrolló entre 1338 a 1573, y se mezcló con el Período Sengoku de 1467 a 1617. Para los aficionados fue “la Edad Dorada del Ninjutsu” y, de hecho, fue el período de más intensa acción para los ninjas, incluyendo su mayor difusión social. Así, C mientras durante el Período Muromachi los ninjas siguen entrenando en secreto en las colinas, pronto salen para entrar a formar parte de la historia del A Japón. P Los daimyo tenían metas individuales, pero lo cierto es que lo único que buscaban era permanecer en el poder. Cuando los daimyo crecieron económiÍ camente, buscaron más datos sobre sus enemigos, viéndose en la necesidad de T recurrir a los ninjas. Según muchas escuelas ninja modernas, casi todos los
daimyo famosos de entonces estuvieron asistidos por ninjas que actuaron U como espías, saboteadores, y asesinos. Takeda Shingen se alineó con Sanada L Masayuki y sus hijos, pero también con ninjas de Koga para atacar a los daim-O yo más poderosos. Tokugawa Ieyasu, el hombre que gobernaría Japón después, se alineó con los ninjas de Iga, y el clan de Hojo lo hizo con los ninjas de Fuma. 2
24 ARMAS NINJA Período Sengoku Considerado por algunos como el verdadero Periodo de los estados belicosos (1467-1615), fue el fin del shogunato de Ashikaga, lo que originó una guerra civil en el Japón. Algunos daimyo establecieron sus propios dominios independientes, mientras otros conquistaron lugares de alrededor. Los campesinos y monjes formaron sus propios grupos autónomos a lo que denominaron como ikko-ikki. Durante este Período los ninjas abandonan su secreto y declararon abiertamente la guerra a sus enemigos, uniéndose a daymios diferentes, siendo entonces la época más excitante del ninja. Ninjas famosos El Iga Ryu esta dominado por tres familias: el clan de Fujibayashi controlaba las partes norteñas de Iga, el clan de Hattori las partes centrales, y el clan de Momochi gobernaba las partes del sur de Iga. En el siglo XVI nació Momochi Sandayu, el ninja de Iga más famoso. Sus primeros años se pierden en la historia, pero está reconocido como un ninja distinguido que difundió el Ninjutsu con su campo de entrenamiento de Hojiro, en donde entrenarían dos de los ninjas más legendarios de todos los tiempos. El primero de ellos fue Hattori Hanzo, nacido alrededor de 1541 en Mikawa. Hanzo nació en una familia de samuráis bajo el clan de Matsudaira (después pasó al clan de Tokugawa) y estaba especializado en ellos. Sin embargo, dado
que el clan Hattori tenía sus raíces familiares en Iga, Hanzo fue enviado siendo joven a pasar algún tiempo con esa familia. En sus viajes a Iga C aprendió las artes del Ninjutsu con Momochi Sandayu. Se dice que era tan A aplicado que apenas con doce años se convirtió en un ninja completo y cuando cumplió los dieciocho era ya un maestro. Cuando en 1557 Hattori Hanzo P estuvo luchando junto a su señor, Tokugawa Ieyasu, tenía entonces solamente Í dieciséis años y el futuro shogun apenas catorce, lo que no les impedía que T efectuaran correrías nocturnas contra Uzichijo Migawa. Hanzo se distinguió en el campo de batalla y recibió el apodo de “Hanzo el fantasma” por sus habi-U lidades excepcionales. L Durante mucho tiempo Hanzo fue considerado como el mejor ninja, hasta que fue desplazado por Fumo Kotaro. Este hombre había nacido en la provin-O cia de Sagami a principio del año 1550, y se cree que durante su niñez estaba unido al clan de Hojo. Una vez que creció se convirtió en un jonin, o líder, del Fuma Ryu. 2
25 EL MANEJO DE LAS Durante bastante tiempo los ninjas de Fuma se habían convertido en una banda de gamberros y piratas más que el ninjas. Tenían atemorizados a Tokugawa Ieyasu con sus incursiones a Yokohama, hasta que éste decidió que ya era suficiente. Hattori Hanzo había recibido muchos premios y por ello le enviaron a Kanagawa para poner fin a Fuma Kotaro y sus asesinos. Fuma tenía dominada la zona costera, pero Hanzo consiguió su propia flota, consiguiendo destruir todas las embarcaciones enemigas, menos una. Cuando su flota se acercó para detener
el barco final, una marea empujó su flota hacia un cauce estrecho y comenzó a resquebrajarse contra las zonas rocosas. Casi todos los guerreros acabaron en el agua, pero los ninjas de Fuma habían llenado las aguas de aceite y le prendieron fuego. Hattori Hanzo pereció en el agua el 4 de diciembre de de 1596. El otro ninja fue Ishikawa Goemon, aunque no fue del agrado de Momichi Sandayu, siendo la razón por la cual no aparece en el registro de Iga Ryu. También hubo entonces kunoichis (mujeres ninja o “flor mortal”) populares, como Mochizuke Chiyome, una viuda que vivió en el siglo XVI en la región de Koga y que tuvo conexiones con los clanes ninja. Aun siendo consciente de su papel de mujer, era de una casta rara de mujeres fuertes deseosas de luchar como los hombres por su familia y creencias. Después de la muerte de su marido, Chiyome creó en el pueblo de Nazu en la Provincia de Shinano una fuerza de ninjas hembras diferente a lo hasta entonces conocido, trabajando con frecuencia a las órdenes de Takeda Shingen, un daimyo rival del clan Hojo. C Fuma Kotaro empleaba sus habilidades como ninja al servicio de cualquie-A ra que quisiera pagar por ello, tal y como ocurrió cuando le encargaron asesi-P nar a Takeda. Actuando como un francotirador, de un certero golpe le dejó malherido, aunque no moriría definitivamente hasta tres años después. Í También durante 1570 fue popular Ishikawa Goemon, quien mató a un T hombre durante su primer robo, lo que le impidió volver a su vida legal al verse perseguido, empezando a usar sus poderes ninja desde entonces como un U bandolero. L Otro ninja famoso fue Ukifune Jinnai, un enano que apenas medía el O metro
de altura. El 14 de abril de 1578, entró sigilosamente en la fortaleza del daimyo Uesugi Kenshin, y aprovechando su diminuto tamaño se escondió en el retrete del Kenshin, por entonces una letrina en el suelo. Cuando Kenshin 2 se sentó, el ninja empujó una lanza en su recto ensartándole, huyendo rápida-26 ARMAS NINJA mente. Después de cuatro días, Uesugi Kenshin moría a consecuencia de las heridas. A lo largo del Período de los Estados Belicosos, los ninjas de Iga, como tantos otros clanes ninja, habían estado trabajando en secreto para cambiar el futuro de Japón. Oda Nobunaga, en sus esfuerzos por conseguir el mando de la nación, se interesó por el poder militar de los ninjas de Iga. Conocía el éxito de sus misiones, y vio que esos ninjas le ganaban incluso en popularidad. Sin embargo, los ninjas de Iga habían ganado poder popular y eso podía afectar a los poderosos. Determinado a derrotarlos, envió en 1579 a su hijo Oda Nobuo a Iga en una misión para destruir a todos los ninjas. La región de Iga es húmeda y montañosa, y el cubil de los ninjas estaba en una zona oscura e inaccesible. Una vez que Nobuo localizó el escondite de los ninjas, los consideró militarmente insignificantes y ordenó el ataque. La consecuencia fue que Oda Nobua sufrió una derrota humillante a manos de los ninjas de Iga. Mortificado por haber perdido el prestigio por el clan ninja, Nobunaga lanzó una campaña de exterminio en 1581. Envió a 10.000 soldados a aniquilarles en la batalla de Tensho Iga, empleando un gran número de guerreros que utilizaban armas de fuego y hogueras, con el fin de lograr que salieran a campo abierto. Lo cierto es que a base de cañonazos consiguió destruir al clan y su refugio, pero no les consiguió exterminar, lo que demostró que su estrategia de ocultación y escape les dio buen resultado. Los sobrevi-vientes se esparcieron como el viento y se afiliaron con las fuerzas de Tokugawa Ieyasu. En marzo de 1581, la fortaleza de Hojo fue atacada por las fuerzas de C Takeda Katsuyori, quien había preparado su base en una gran montaña, justo A al lado opuesto de las fuerzas de Hojo. Kotaro y sus ninjas fueron enviados para hacer el trabajo sucio consistente en espiar, secuestrar, robar y ataques P
falsos. Las fuerzas de Katsuyori sufrieron una gran desconfianza y paranoia a Í causa de los múltiples informes falsos y cuando los dos ejércitos finalmente se T enfrentaron, el clan de Hojo consiguió una fácil victoria. En 1603, el shogunato de Tokugawa comenzó una época de relativa paz y U permitió que los ninjas volvieran de las sombras. Volvieron a luchar en la L Batalla de Invierno y la Batalla de Verano en 1614-1615, y posteriormente en la Rebelión de Shimabara de 1637-1638. Hay también historias de guerras O ninja que tuvieron lugar contra rivales antiguos, pero la evidencia de tales hechos no es segura. 2
27 CAPÍTULO 3 Habilidades del Ninja Ninja, el guerrero supremo A diferencia del resto de expertos en artes marciales, los ninjas dominaban la mayoría de las técnicas letales, pues además de ser eficaces pateando y pegando puñetazos, sabían estrangular, luxar, voltear, paralizar con sus ataques a centros nerviosos vitales y, lo más importante, conocían la psicología del ser humano con sus debilidades y fortalezas. Aunque un puñetazo en la cara puede derribar a un adversario, si se impacta en la garganta lo anulará totalmente, e incluso le matará por asfixia. Agarrar era una parte fuerte en la técnica de lucha del ninja, aunque para ello debían fortalecer hasta límites poco usuales sus dedos, convertidos con el paso de los años en una tenaza imposible de liberar. En ese momento el adversario sentía tal miedo que era incapaz de reaccionar adecuadamente, flaqueza que era aprovechada por el ninja para estrangularle o romperle una articulaC
ción. El ninja aprendió una variante del Taijutsu, en el cual eliminaron los rígi-A dos movimientos y posturas que le aproximan al kárate. En cambio, enfatiza-P ron en la fluidez, el movimiento natural y espontaneidad, evitando realizar movimientos que le agotaran prematuramente. Su obsesión era guardar enerÍ gías para después, pues nunca sabía cuándo finalizaría definitivamente la T pelea. Así que aprendieron a golpear en las articulaciones y hacer presa en los puntos de presión, evitando parar los ataques con bloqueos contundentes. Su U economía del movimiento no consistía en un golpe único y demoledor, tal y L como preconiza el kárate, sino en golpear en un punto determinado que anu-lase al adversario de forma decisiva e inmediata. O Poco a poco buscó la muerte de sus enemigos como mejor manera de asegurarse un futuro tranquilo, pues sabía que la mayoría de los enemigos derro-3
29 EL MANEJO DE LAS tados volverían a buscarle, ahora con mayor fuerza y agresividad. Para lograr tal eficacia buscaba invertir cualquier situación o ataque, pasando de atacante a agresor en fuga, o de inocente labriego a despiadado guerrero. La mentira y el engaño, pues, constituían la mayoría de las veces su mejor arma, lo mismo que su leyenda. Cuanto más se hablase de sus hazañas y de sus despiadados ataques, más miedo tendrían sus enemigos cuando se encontrasen con un ninja delante. Silencioso y sin dejarse llevar por las amenazas o las súplicas, mira-ba a sus enemigos apenas unos segundos antes de su impecable ataque.
Desde niños aprendían en sus juegos tanto a amarrar a un enemigo, como a liberarse rápidamente de la mejor atadura, y eso en cualquier lugar o circunstancia. La idea era escapar rápidamente si la oportunidad de ganar no estaba clara, pues siempre habría una nueva oportunidad de ganar. En el transcurso de su vida el anonimato era esencial, no tanto por tener el factor sorpresa siempre de su lado, sino por proteger a su familia. Así que el buen comportamiento en sociedad era un requisito esencial para no albergar dudas sobre su honradez. Su ego no estaba cubierto, pues, por los aplausos, ya que al regresar a su hogar nadie sabía que en ese aparente hombre rural estaba escondido un eficaz ninja, sino más bien en la satisfacción del deber cum-plido. Las medallas y los rangos nunca colgaron de su kimono negro. Cuando nos superamos ante la adversidad sin necesidad del reconocimiento ajeno, hemos alcanzado cotas de eficacia y satisfacción mucho mayores a cuando reclamamos una medalla, un beso o dinero. Dejemos para los mediocres los aplausos y las palmadas en el hombro, pues el conocimiento y la sabiduría no C se consiguen con ellos, ni los títulos son una garantía. A Para la gente ajena al mundo del ninja, el Ninjutsu se describe como la P colección de habilidades utilizada por el ninja, mientras que el Ninpo, a menudo llamado “el orden superior del Ninjutsu,” implica una filosofía para vivir Í basada en los principios de Nin. ¿Y qué es Nin? Nin se traduce por paciencia, T pero también puede implicar la perseverancia, o el disimulo. El término japonés de Nin consiste en dos partes o radicales. El radical superior se llama yaiba U que se refiere al borde cortante de una hoja, mientras que el más bajo se lee L como kokoro, habilidad mental. Se podía decir que tenemos una ley natural O para practicar artes sofisticadas de lucha como el judo, kárate, o aikido, pero cuando llegamos al Ninpo vemos que realmente nos hablan de un entrenamiento mental, por una preocupación en el desarrollo interior junto con las 3 habilidades técnicas de entrenamiento marcial. No es suficiente con saber 30
ARMAS NINJA sofisticadas técnicas de lucha si nuestro carácter no ha mejorado, pues en la valía del ser humano priman el corazón y el espíritu. Por esta razón, Ninpo enfatiza el entrenamiento filosófico y espiritual junto con la educación física. Este refinamiento del espíritu de uno es conocido en japonés como el seishinteki kyoyo. Cuando nos referimos al Ninjutsu como Ninpo, estamos enfatizando el entrenamiento psicológico junto a las prácticas corporales. Un ninja no se puede medir solamente por sus habilidades marciales, sino también por su corazón benevolente y por ese espíritu que le hace diferente a los demás. El ninja se sabe poderoso e importante, pero nunca lo exterioriza, salvo en la pelea. El Ninpo se preocupa por la defensa del ego, esa sobrevaloración de las cualidades que se convierten en una amenaza para la supervivencia y la felicidad, evitando caer en la trampa habitual de compararse con las personas. El arte misterioso del ninja estaba basado esencialmente en la estrategia, influenciado en gran medida por el budismo que nos enseña a estar en la vida en concordancia con la naturaleza. A lo largo de la historia el ninja fue conocido como un guerrero peligroso, como alguien que no renunciaba nunca a cumplir su misión, aunque los métodos que empleaban no eran siempre orto-doxos ni nobles. Si la pelea entre seres humanos es deplorable en sí misma ¿por qué tratar de adornarla con palabras como nobleza o respeto? Perdonar la vida en el último momento a un enemigo a quien se ha intentado matar es solamente un acto de hipocresía, pues lo razonable sería no haber salido de C casa con la intención de matar. A Es probable que el Ninja hubiera adquirido varios de sus secretos de los P Yamabushi, especialmente aquellos que involucraran a los conocimientos de Í parapsicología, resistencia al dolor, etc., esencialmente por su preocupación de T la efectividad. De hecho, este mundo extraño de técnicas parapsicológicas está
más que nunca de moda. La noción japonesa de michi (hacer), expresa la fuer-U za o energía disponible para poder hacer algo. Para capturar esta fuerza de la L naturaleza, existen una serie de sistemas para desarrollar “poderes” diferentes, entre ellos el hipnotismo sutil o manipulación, así como el manejo de las debi-O lidades del ser humano. Un Ninja no era alguien excepcional, pero tampoco una persona ordinaria; más bien se trataba de una clase diferente de hombre lograda mediante entrenamientos largos y muy arduos que solían empezar a 3
31 EL MANEJO DE LAS una edad temprana, en la niñez. Entre estas habilidades estaban el apretar sus articulaciones para introducirse en lugares angostos, subir a los árboles como un gato, resistirse el frío, esconderse bajo el agua respirando a través de una caña, hacerse invisible o desaparecer tras una pantalla de humo y caminar silenciosamente en el agua. En una palabra, todas sus acciones estaban dirigidas a encontrar el punto de menor resistencia de su enemigo, su punto débil. Los ninjas se dividían en tres grupos: el Jonin, quién planifica la misión, su ayudante o Chunin, y el Genin, el agente real que lleva a cabo las misiones. El último se consideraba que era la clase más baja de la sociedad japonesa. Una vez capturado, normalmente era torturado y desmembrado. Si lo comparamos con un Samurai, vemos que la diferencia estaba en que el Ninja no tenía ningún honor, ya que para ellos el tener ego, orgullo y honor podían significar la diferencia entre la vida y muerte, el fracaso o el éxito. El código más significativo y el que ha sido la llave de la supervivencia del Ninja y el éxito, es que el ninja no tenía ninmujoku (vergüenza). Por eso los Samuráis despreciaron al Ninja, más que nada porque ellos estaban limitados por su código de honor. Obviamente, en el mundo moderno no es muy ético conservar esta teoría que solamente busca el propio beneficio, pero estamos hablando de épocas distintas.
La base de Ninjutsu puede ser dividida en estas técnicas: C Taijutsu que incorpora: Bugei Juhappan (18 Artes del Samurai) y Ninjutsu Juhakkei (18 Artes de Ninjutsu). A Jiu-jutsu: arte de la defensa personal P Ken-jutsu: arte de la espada de madera Iai-jutsu: arte de desenvainar Í Kusarifundo-jutsu: peso con una cadena T Kusarigama-jutsu: hoz y cadena Bo-jutsu: arte del bastón largo U Naginata-jutsu: arte de la alabarda L Suiren-jutsu: arte de nadar O Kisha-jutsu: arte del tiro con arco a caballo Kyu-jutsu: tiro con arco Kumiuchi-jutsu: combate con armadura
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Jutte-jutsu: manejo del jutte
32 ARMAS NINJA Tessen-jutsu: arte del abanico de hierro Hobaku-jutsu: arte de atrapar con sogas Ho-jutsu: manejo de las armas de fuego Shuriken-jutsu: tirar las estrellas metálicas Hiken-jutsu: manejo de espadas (Tanto, Kodachi, Odachi, Ninjato) Sanjakubo-jutsu: manejo del Jo y Hanbo Inton-jutsu: arte de desaparecer Hoko-jutsu: arte de acercarse furtivamente Henso-jutsu: arte del fingimiento Gunryaku Heiho: arte de la estrategia Ninyaku: dominio de la medicina y las drogas Las habilidades especiales Integrarse en la naturaleza Dado que el Ninja tenía que sobrevivir en la naturaleza, adquirieron numerosos conocimientos naturalistas para ser capaces de distinguir los alimentos saludables, las plantas medicinales y venenosas, las trampas, construir refugios improvisados, encontrar agua y hacer fuego. Uno de los métodos para encontrar agua se basaba en la observación de los insectos del lugar. Por ejemplo, si había una concentración alta de hormigas o grillos, sabía que había agua cerca. Otra manera de encontrar el agua estaba reconociendo los tipos de plantas que viven cerca del agua. Si el Ninja encontraba cualquiera de esas plan-C tas, sabía que el agua estaba cerca. A
Conocimiento del cuerpo humano P Al ser el ninja un especialista en la lucha cuerpo a cuerpo, sabían paralizar, Í pegar o matar, aunque para ello debían aprender perfectamente la anatomía y T fisiología del cuerpo humano. Además, eran unos expertos en psicología y lo que ahora conocemos como lenguaje no verbal, el estudio del pensamiento U mediante la observación del cuerpo. Por ello ante un enemigo poderoso solía L demostrar debilidad para que bajase su guardia, mientras que ante varios enemigos demostraba una fiereza tal que les asustaba o al menos les desconcerta-O ba. Otra de sus cualidades era la paciencia y el control de sus emociones, evitando atacar cuando todo estaba en su contra, aunque sus sentimientos estuvie-3
33 EL MANEJO DE LAS ran ardiendo. Siempre buscaba el mejor momento para el devastador ataque, no aceptando casi nunca los retos directos de los bravucones. Su conocimiento del cuerpo humano era tal que aprendió a evitar los movimientos rígidos de otras artes marciales, buscando la flexibilidad y el ahorro de energía como su fin primario. Kuji-in y Kujikiris El Kuji-in es un tipo de entrenamiento ninja que se basa en las raíces del Daoísmo y que busca la energía interna. También se refiere a las prácticas esotéricas, como predecir el futuro o recitar frases mantras cuando se practican los kujikiris, los nueve gestos mágicos del poder interno.
La primera manera de utilizar provechosamente los kuji es de forma individual cada vez que se necesite. Para el ejemplo: estamos manejando material demasiado pesado para nuestra complexión muscular, así que buscamos el gesto adecuado, nos concentramos y tratamos entonces de concentrar toda nuestra fuerza solamente en los músculos necesarios para el movimiento. Los gestos de las manos realmente no proporcionan más energía y habilidades que aquellas que ya tenemos, pero que normalmente no sabemos utilizar o se encuentran bloqueadas. Es la unión entre la fuerza espiritual y mental que todo ser humano posee lo que permite el milagro. Del mismo modo que hay personas que consiguen grandes metas gracias a su voluntad, convicción y tenacidad, asombrándonos por haber logrado progresos en donde los demás fracasan o abandonan, los kujikiris pueden ser el camino adecuado para ello. C No se desaliente durante las primeras sesiones y persevere hasta que logre aislarse del entorno cuando los realice. Poco a poco verá que su fuerza física y A mental aumenta, así como su capacidad para presentir el peligro. P Aunque en nuestro primer libro, EL ARTE SECRETO DEL NINJA, los describíamos con detalle, tanto los gestos como las palabras, se los recordareÍ mos ahora someramente. En todos, el dedo pulgar (Ku) representa la fuente de T poder, y los otros dedos las cuatro manifestaciones elementales. Ellos son Chi (la tierra - los sólidos), Sui (el agua - los líquidos), Ka (el fuego - la combus-U tión) y Fu (el viento - los gases). L Aunque se conocen 81 símbolos de la mano que el budismo nombra como O Mudras, el Ninjutsu solamente emplea 9 primarios: Rin, Pyo (Hei), Toh, Sha, Kai, Jin, Retsu, Zai, y Zen. Cada símbolo invoca fuerzas diferentes y habilidades en un ninja especializado: Rin trae la fuerza a la mente y cuerpo; Pyo gene-3
ra el poder psíquico para descubrir al enemigo; Toh permite al ninja alcanzar 34 ARMAS NINJA un equilibrio entre los estados sólidos y líquidos del cuerpo que lleva a una armonía mayor con el universo; Sha se usa para sanar a sí mismo u otro; Kai proporciona el control de la mente sobre el cuerpo, permitiendo clarificar los pensamientos y soportar el calor extremo y el frío; Jin aumenta los poderes telepáticos de la mente, dándonos la habilidad para leer los pensamientos; Retsu aumenta nuestra capacidad para aturdir al enemigo con nuestro carácter y potenciar nuestros golpes; Zai extiende la armonía conseguida con el entrenamiento y unirnos al universo; Zen nos lleva al esclarecimiento y entendimiento. Debemos advertir al lector que ninguno de estos efectos positivos se logrará si dudamos de su eficacia y no les dedicamos una práctica diaria. La agresión en la calle Nunca infravalore a su antagonista o sus armas. Si su agresor es inexperto lo percibirá enseguida por cómo habla y gesticula. Siempre se acercan demasiado para intimidarle y sus manos se mueven amenazantes hacia usted, pero descuidando su guardia. Sus palabras son más ofensivas que sus posibilidades. Sin embargo, cuando el asaltante es experimentado, el silencio en sus labios y la mirada también le delatan, pero al menos usted podrá estar alerta. La idea primaria es evitar cualquier confrontación, siempre que nuestro honor no quede en entredicho. Este concepto es especialmente importante cuando su antagonista tiene un arma o hay más asaltantes. En este aspecto es donde su C nivel de entrenamiento le servirá de gran ayuda, siempre y cuando su maestro A le haya pedido reiteradamente que improvise, no que memorice. La observación del entorno le dirá si existe un lugar o grupo de personas P que le podrían ayudar, aunque siempre debe confiar solamente en sus propias Í posibilidades; la sociedad actual no se involucra en los problemas de otros T
cuando su vida también está en peligro. Mirar a su alrededor le servirá no tanto para pedir ayuda, como para encontrar elementos que le puedan servir: palos, U piedras, arena, escondites… Si su entrenamiento ha sido correcto, cualquier L cosa a su alcance se transformará en un arma eficaz, por ejemplo: La chaqueta o suéter envuelta alrededor de su brazo izquierdo le dará ade-O cuada protección contra navajas o incluso para golpear al rostro del enemigo. Golpee con la zona de botones o cremalleras. 3
35 EL MANEJO DE LAS El cinturón es siempre un elemento extraordinario, pues se maneja de forma similar al kusarifondo. Enrollado en su mano le permitirá disponer de un puño demoledor e incluso de una cuchilla para los golpes circulares. Las bolsas de la compra y el bolso tradicional en las mujeres suelen ser adecuados para protegerse e incluso golpear. Pueden utilizarse como distracción antes de emprender la huida. Si el lugar por donde pasa es potencialmen-te peligroso, meta una piedra en su interior. Los cubos de la basura, las mesas, etc., son extraordinarias barreras entre usted y su antagonista, lo mismo que los coches aparcados. Si es usted ágil, no dude en pasar velozmente entre los coches que ruedan por las calles. Un periódico fuertemente enrollado, un peine o un bolígrafo de metal, casi siempre están disponibles y los podrá utilizar para atacar y causar dolor y daño no letal. Así, si es denunciado por el asaltante, nadie le podrá acusar de emplear armas blancas. Le recordamos que en los ataques con cuchillo lo mejor es mantener la distancia de seguridad, evitando realizar esas técnicas aprendidas en el gimnasio que resultarían insensatas en un uso real. Para desarmar a un agresor armado se
necesita otra arma, pero en caso contrario, ataque siempre sin piedad a sus puntos vitales, incluso cuando esté derribado en el suelo. Recuerde atacar a sus ojos, mentón, rodillas y genitales en primer lugar, aunque para ello deberá haberlo practicado antes miles de veces en su dojo. Si su estilo es deportivo no le dejarán que practique esta autodefensa. Si su adversario porta armas blancas largas tendrá ventaja en distancias lar-C gas, pero estará más torpe en la lucha cuerpo a cuerpo, mucho más si el cuchillo solamente tiene un filo, como ocurre con los de cocina. Si tiene un estilete A pequeño le será fácil controlar y mantener alejado, pero cuidado con las disP tancias cortas. Cuando le asalten de forma imprevista y no haya tenido tiempo de elaboÍ rar una estrategia, debe confiar en sus instintos, dejando que su cuerpo fluya T sin meditar. Se asombrará de lo eficaz que es cuando no piensa en nada concreto. Por supuesto, no trate de emplear aquella técnica tan bonita que hacía U en el dojo. Las circunstancias y el agresor han cambiado. L Mantenga siempre el control de la pelea, y no permita que sus emociones O o su enemigo le marquen el ritmo. Ataque el primero, elija su distancia de combate. Si está con amigos debe velar también por su integridad. Ahora todo se 3 complica, pero para eso es usted un ninja moderno.
36 ARMAS NINJA No se asuste ante un golpe o tajo; todavía sigue vivo y debe evitar males mayores. Recuerde que una herida no es la muerte.
No crea que su enemigo se apiadará de usted. Si ha decidido atacarle es porque quiere hacerle daño, y sus palabras sensatas o su debilidad solamente le harán creer que le tiene miedo. Entrene en su dojo situaciones próximas a la realidad, con diferentes compañeros, fuertes o débiles, pues cada uno le someterá a tensiones diferentes. Si la técnica le sale mal, improvise y resuélvala finalmente con eficacia. No crea que ser un ninja le mantendrá a salvo de ser atacado en la calle. Esa posibilidad la tenemos todos, aunque hay ciertas señales sutiles de debilidad que el asaltante valora. Si cree que usted será un oponente difícil, se decidirá por otra víctima. El aplomo en el andar, la mirada oteando el entorno pero sin girar la cabeza, las manos siempre libres y la respiración controlada, serán sus señales sutiles para no ser agredido. Del mismo modo que aprendemos a defendernos contra un agresor armado, también debemos saber utilizar las armas, y en eso el ninja no tienen ningún problema. Los cuchillos son fáciles de obtener, fáciles de ocultar, sencillos para atacar y silenciosos en la acción. Eso lo sabe su enemigo, pero usted también. Utilice sus habilidades ninja para el engaño, por ejemplo: cuando le pidan la cartera muéstrese torpe para sacarla, mientras mira a su adversario y posibles cómplices. En ese momento en que aparentemente parece débil y asusta-do es cuando debe golpear, siempre al más fuerte primero. También puede dejarla caer al suelo como señal de nerviosismo, aprovechando que se baja a C recogerla para golpearle duramente en sus genitales. A Sepa que mientras que el enemigo habla no le atacará, así que aproveche sus palabras para atacarle justo en ese momento. P Í La invisibilidad
T U El arte de la invisibilidad siempre ha sido un tema popular, sobre todo en los L medios de comunicación. Esta popularidad se sacó por los libros, revistas y en las apariciones de los ninjas en el cine, e iban incluidas junto con el sigilo, la O supervivencia, ocultación; en esencia “el arte de no estar allí”. Permítame empezar diciendo que no hay ningún secreto oscuro profundo sobre el arte de la invisibilidad, pues se trata simplemente de unas técnicas y 3
37 EL MANEJO DE LAS habilidades que desarrollaron los ninjas. Por eso, a ninguno de los lectores se le enseñará simplemente a desaparecer. Si un instructor alardea sobre sus habilidades para hacerse invisible, simplemente pídale que realice una demostración. Si usted quiere dominar el arte de la invisibilidad de verdad debe ser rea-lista, pero no escéptico, porque la técnica existe. Le sugiero un experimento: sitúe su dedo índice a unos diez centímetros de sus ojos, justo en el medio. Enfoque su vista para lograr verlo con perfección. Sin moverlo de este sitio, ahora enfoque a la lejanía, un árbol, una casa, cualquier objeto. En ese momento verá con nitidez el objeto elegido y si sigue enfocándolo notará que su dedo índice casi habrá desaparecido de su visión. ¿Hay truco? Ninguno, pero podríamos decir que el dedo índice que tenemos delante ha desaparecido casi de nuestra vista. Otros ejemplos son muy ilustrativos, y el camaleón es un ejemplo de ello, aunque no el único. Usted verá mejor a una persona vestida de verde en un ambiente amarillo que en un entorno verde, del mismo modo que la luz que nos permite ver todo nos dejará deslumbrados y ciegos ante la realidad si es demasiado intensa.
Una persona quieta pasará más desapercibida en una muchedumbre igualmente quieta, que si todo su entorno se mueve frenéticamente; y al revés. El silencio, los colores grises, el sigilo y una apariencia vulgar, nos hacen pasar prácticamente desapercibidos, lo que equivale a ser invisibles. Ese era el secreto de la invisibilidad atribuido a los ninjas. Lo demás, las bombas de C humo que les permitían esconderse allí mismo, casi al lado del enemigo, o su habilidad para aprovechar las sombras, eran los detalles que terminaron con A darme fama legendaria a su facilidad para esconderse, para hacerse invisible. P Í Sigilo T U Se trata de una técnica de una gran plasticidad, en donde el equilibrio se une a la torsión del cuerpo y una gran maestría en el desplazamiento del cen-L tro de gravedad. Mantenga el control de su equilibrio permitiendo que su peso O no se concentre en un solo punto y llevando las rodillas profundamente encorvadas. Estas son unas recomendaciones: Recuerde respirar controladamente a lo largo de su movimiento, inspiran-3 do en las pausas y espirando al moverse de nuevo. Si sostiene su respiración 38 ARMAS NINJA demasiado tiempo, la tensión de los músculos le hará quedarse en tensión y cualquier ruido o luz imprevista le sobresaltará. Esté preparado a lo imprevisto y no se vuelva bruscamente si oye un ruido a sus espaldas. Los ojos y la cabeza en esa dirección es lo único que debe mover, alertando a sus oídos para que se concentren en esa dirección. Si cree haber puesto los pies en un lugar inadecuado quédese quieto sin moverse, hasta que pueda decidir dónde ponerlos de nuevo.
Use todas las articulaciones para moverse, mientras da énfasis a la fluidez a través del compromiso entre los tobillos, rodillas, y caderas al caminar. Evite el hábito perezoso y peligroso de tensar las rodillas y girar la pierna entera desde la cadera. Mantenga su peso en el centro, aunque la pierna que descansa bien apoya-da en tierra debe ir cediendo peso soportado hacia la otra que comienza a moverse. Es un desplazamiento de la masa corporal sencillo. Cuando el silencio absoluto es un imperativo, evita distribuir su peso al mismo tiempo enci-ma de ambas piernas. Sus manos deben controlar siempre el entorno, especialmente la yema de los dedos, alertas hacia los volúmenes y la temperatura. También le ayudarán a equilibrar su cuerpo si necesita hacer movimientos con gran desplazamiento del centro de gravedad que, por cierto, está situado dos centímetros más abajo del ombligo. Cuando creamos que hemos efectuado algún ruido, nos detendremos y agudizaremos el oído. Flexionaremos las rodillas, tomaremos aire y lo soltaremos lentamente buscando relajarnos. Hay que continuar con la pausa hasta que C recuperemos la calma y no percibamos nada nuevo en el entorno. A No crea que para ocultarse debe alejarse siempre lo más posible de las personas. Las distancias largas son siempre un peligro para ser descubierto, así P que busque el lugar más cercano posible, normalmente el más ruidoso. Í T La guía básica del sigilo U L
Caminar Ésta es una habilidad más importante que quedarse en silencio. Usted O depende de sus pies para moverse y la práctica del andar sigiloso le marcará la diferencia. Esta habilidad no consiste solamente en caminar encorvado, como un felino apunto de atacar, ya que así seguramente llamará más la aten-3
39 EL MANEJO DE LAS ción que andando con naturalidad. Lo importante es el reparto de pesos entre sus piernas, soportando casi todo en la atrasada, mientras la otra realiza el avance. Le recomendamos equilibrio y armonía, elegancia. El tacto Caminar sigilosamente es sólo el comienzo. Use sus manos y pies para sentir los obstáculos. Los zapatos con suelas gruesas no son adecuados y son ruidosos en terrenos duros. Lo duro requiere lo suave, y viceversa. En ocasiones deberá andar descalzo, pero no crea que será el mejor sistema siempre. Lo importante es que pueda sentir el terreno sin necesidad de mirarlo. Exhale No mantenga su respiración cuando se mueva. Respire y espire suavemente controlando en todo momento su respiración que no sea ruidosa y no le mantenga los músculos tensos incapaces de reaccionar con rapidez. Atención Preste la atención a su alrededor y no sólo a la tierra que pisa. Mantenga una visión global en todo momento, enfocando el camino pero sin dejar de prestar atención a su ambiente. Esto incluye todos sus sentidos y no simplemente el visual. Escuche
C Preste atención a todo sonido que no parezca pertenecer al ambiente. Deténgase completamente si hace ruido, mientras escucha cualquier reacción A o señal de que ha sido descubierto. P Tolerancia Í La paciencia es la clave para estar callado. Si no es paciente, sus movi-T mientos serán torpes y ocurrirán errores. ¿Cuánto tiempo puede permanecer en pie? ¿Cuánto tiempo puede permanecer completamente callado? ¿Cuánto U tiempo puede tolerar tener la pierna helada o dormida? L O Armonía Quédese estable, mantenga las rodillas dobladas y mueva al unísono todas las articulaciones involucradas, ni una más. Muévase como un gato, equilibra-3 do, paciente y fluido.
40 ARMAS NINJA Diferentes ejercicios 1. Acérquese lentamente a un amigo que esté de espalda y con los ojos cerrados. Tóquelo antes de que descubra su proximidad.
2. Acérquese nuevamente, pero antes de tocarle haga ruido en un lugar apartado para que crea que se acerca por ahí. Puede tirar algo como una pelo-ta de papel o una simple moneda. 3. Su trabajo consiste en llegar a la meta antes que el centinela. Si es visto, ambos echarán a correr, uno para dar la alarma y otro para entrar. 4. Ahora acérquese al confiado centinela y bruscamente déle un susto. Cuando esté desconcertado desármele o golpéele. 5. Camine sobre hojas secas sin hacer ruido. Procure no pisarlas y en lugar de ello trate de entrar por debajo de ellas, buscando el terreno firme. 6- Cuando esté en el campo, en su casa o en el transporte, intente dife-renciar los olores que hay. Tanto los perfumes, como la humedad, los materiales y el propio sudor humano. Lo importante es que perciba incluso los más tenues. 7. Cuando camine con varias personas y no quieran hacer ruido, deben unificar sus pisadas y su ritmo. Sea invulnerable No le estamos pidiendo que sea un superman, pero sepa que la invulnera-C bilidad es una actitud, una calidad, una manera de ser. No es tanto un estado A estático como un proceso fluido. Hacerse invulnerable es ponerse inaccesible en lugar de indestructible. No hay nada que nos pueda hacer totalmente invul-P nerables físicamente. He aquí diez requisitos para ser invulnerable. Í T Sea tranquilo, calmado. La quietud es primero una cuestión física, antes que mental. La calma es el resultado de una quietud mantenida con el tiempo. U
Por sí solas, la quietud y la calma son frágiles. Mantenga ambas ante situacio-L nes exteriormente caóticas o amenazantes. Centrarse es una función de movimiento. La persona centrada, aunque O exteriormente parezca muy calmada, trabaja a dos niveles, uno visible y claro para los demás, otro escondido e invisible. Es este segundo nivel el que debe mejorar, agregando fluidez y capacidad de adaptarse a lo imprevisto. 3
41 EL MANEJO DE LAS Esté siempre enfocado. Debe evitar dividir su atención entre el pasado, presente y el futuro, pues le debilita. Enfocar exclusivamente en el presente es aumentar sus poderes de concentración y ejecución inmensamente. La llave para lograr este enfoque es levantarse todas las mañanas, como si fuera la última de su vida. Así hará más largo cada día, aprovechando cada minuto y segundo, consiguiendo enfocar sus acciones. Cualquier tarea insignificante le parecerá grandiosa, aunque no le importará el resultado. Esté abierto a experimentar. La experiencia es una cadena de eventos significativos. Hay dos elementos aquí: la franqueza, y la capacidad de diferenciar entre lo significativo y lo trivial. Esta forma de discriminar le llevará hasta el conocimiento pleno, como una voz en su interior que le dirá lo verdadera-mente importante. Eso se llama intuición. La franqueza es el verdadero poder, para ser utilizada cuando estemos abiertos a unir, mezclar y redirigir los acontecimientos que hemos experimentados. La experiencia debe saborearse en lugar de devorarse. Piense en esas personas que visitan un lugar histórico y que solamente tienen un día. Tan ansiosos están por verlo todo que nada sabo-rean. Sostenga a un recién nacido en sus brazos o ponga una aguja en el agua tan suavemente que no se hunda, y sabrá lo que es vivir intensamente cada momento. Hágase un guerrero. Hacerse un guerrero es convertirse en juez de uno mismo, descubrir su propia verdad y vivir por ella. No es dominar ni ser dominado. No
es ni una religión ni una filosofía. Es un estilo de vida que exige que todo nuestro potencial se manifieste en cualquier circunstancia, respetando al C noble y atacando al innoble. Pero es importante entender que debemos recorrer nuestro propio camino y no esperar que exista un premio al final. Lo que A espera un guerrero es que nuestros actos tengan una utilidad para él o los P demás. Que su preparación y lucha no sean estériles o destructoras. Viva tácticamente. Consiste en tratar los problemas de la vida sabiamente, Í no impulsivamente. Un guerrero planifica todas sus acciones y momentos T decisivos, nada lo deja al azar. He aquí siete ejemplos: (1) Tome las decisio-nes tan cuidadosamente que nada pueda perturbarlo o perder su equilibrio. (2) U Póngase inaccesible o accesible según las opciones (3) Escoja su tiempo y su L jardín (4) Aprenda la sabiduría de no-combatir (5) Conozca a su enemigo (6) O Permita y facilite que los enemigos le puedan hablar (7) No permita que otros le resuelvan sus problemas. Ya tienen bastante con los suyos propios. Reconozca un poder superior. Ésta es la opción que representa la diferen-3 cia entre lo ordinario y una vida extraordinaria. La llave al reconocimiento está 42 ARMAS NINJA permitiendo liberarse de sus prejuicios, sus gustos favoritos, y su obsesión por ser correcto. Si no espera nada de nadie, nunca le podrán decepcionar, y cuando obtenga algo de los demás le parecerá ciertamente un premio. No pida amor, otórguelo. No se ama con condiciones, en el sentido de “te querré si haces esto”. Los sentimientos no deben ser como quien invierte en la bolsa buscando una rentabilidad. La dulzura cura más heridas que la ira, la paz es más saludable que la guerra. Un ninja, aunque la gente lo crea así, no es una persona agresiva, no es un bravucón; es sencillamente una persona poderosa que solamente utilizará su poder para hacer justicia, como un juez, o para defender al débil o a sí mismo.
Adquiera una filosofía de vida. Su vida debe cambiar desde el momento en que comenzó a emprender la senda del Ninpo. La gran fuerza que obtendrá proviene del esfuerzo físico continuado en busca de la perfección, pero esencialmente será su mente la que mayor beneficio obtendrá. Cuando alcance la maestría del legendario ninja la vida cotidiana alcanzará otra dimensión, y tendrá una visión más objetiva y serena de los problemas. Los avatares de la vida le seguirán preocupando, pero ahora tendrá más recursos para resolverlos con éxito. Su libertad de pensamiento le hará menos vulnerable y manipulable, comenzando entonces a marcar su propia senda y no a ir detrás de la manada. Será libre psicológicamente y eso le permitirá resolver sus problemas con mayor eficacia. Elegancia. Parece un término ligado a la moda, a los vestidos, pero en realidad ser elegante es una cuestión del cuerpo y la mente, no tanto de la ropa que se compre. Sus andares y porte mejorarán de manera clara con el Ninjutsu, C lo mismo que cualquier acto cotidiano como sentarse, estrechar la mano, ges-A ticular o trabajar en una fábrica. Su aspecto cambiará drásticamente y es posible que un día se mire al espejo con gran satisfacción. P Intuición. Es una cualidad que nace de la observación, de ver un poco más Í de lo habitual, de leer el rostro de las personas. Acostúmbrese a ir por la calle T observando los pequeños detalles de su alrededor, evitando concentrarse en lo grande y llamativo. Mire los artículos más escondidos de los escaparates, los U objetos arrojados en las aceras, los diferentes tipos de ventanas de los edifi-L cios. Observe a la gente cómo caminan, la dirección en que van y si rectifican el paso. Así estará desarrollando poco a poco su capacidad para prever los O acontecimientos antes de que se realicen. Respuesta correcta ante los problemas. Esto no es fruto de la casualidad, sino de la suma de todas las virtudes y facultades anteriores. Su cerebro pro-3
43 EL MANEJO DE LAS cesará los datos disponibles con una gran velocidad y le dará una solución casi siempre acertada. Nada hay de precipitado ni de impulsivo en ello, sino un análisis que usted será capaz de realizar en varios segundos, mientras los demás dudarán demasiado tiempo antes de tomar una determinación. El camuflaje Obviamente queremos pasar desapercibidos cuando vamos a un lugar conflictivo. Lo más habitual es ese ropaje de colores verdes que sirve para ocultarnos entre matorrales. Un camuflaje (artificial o natural) realmente es cualquier vestimenta que pase desapercibida en un lugar concreto (una sotana dentro de un monasterio), pero también las habilidades desarrolladas para permanecer inadvertido. Esto incluye la vista, sonido, olor y tacto. La vista El ojo humano ve primero el movimiento que la quietud. Así que, ésta es su prioridad para quedarse fuera de la vista, pero para ello necesitamos saber lo que podemos hacer y lo que presuntamente hará el enemigo. Requisitos: Necesitamos estar bien estables para movernos con paciencia y fluidez. Los movimientos bruscos son fáciles ver. También, no perturbe la paz en un C ambiente natural, como provocar el vuelo de los pájaros. Si usted se oye al andar o respirar, no crea que también será oído. Sin A embargo, si usted ve al enemigo es factible que también sea visto a no ser que P cambie el ángulo. Por ejemplo, una persiana permite ver al exterior, pero apenas el interior. Los pisos superiores nos permiten ver una gran zona, pero Í desde abajo apenas le percibirán.
T No se olvide de las sombras, le acompañan siempre como fiel perro. Tampoco del color de su vestimenta. En la oscuridad el negro y el azul U marino son la mejor opción, pero a plena luz del día destacan mucho. Ahora L le serviría un color gris. En la naturaleza el verde y el castaño. O El movimiento Siempre muévase de sombra a sombra, de obstáculo a obstáculo.
3 Normalmente usará el ambiente de dos maneras: escondiéndose detrás o en 44 ARMAS NINJA un lado. Si el área que ha elegido no oculta su figura totalmente, entonces es importante que contorsione su cuerpo para integrarse en el obstáculo. Por ejemplo: tumbándose en un campo, agachándose de forma redondeada entre las piedras, o extendiendo sus brazos y piernas a lo largo de las ramas de los árboles. La visión nocturna Algunas personas tardan hasta treinta minutos en adaptar sus ojos a la oscuridad para poder ver con cierta precisión. Usted no puede permitirse tanto tiempo, así que si es su caso deberá tomar vitamina A para corregir este problema. Utilice un fogonazo de luz intensa para deslumbrar a sus enemigos, pero cierre los ojos en el momento de activarla. Si no es prudente perder la visión total, al menos baje la vista al suelo o a un lugar más oscuro (su propio traje o una cortina), eso evitará que se deslumbre. El sonido
Otro ingrediente importante en el arte de quedarse invisible es su habilidad para moverse en silencio en cualquier terreno. Esta es una técnica que se aprende después del sigilo. Ya sabe que un sonido oculta otro sonido, así que aproveche los ruidos naturales para mezclarse entre ellos y seguir su cadencia. Para entrar en silencio, debemos prestar atención a los ruidos del lugar. C Escoja las opciones A De acuerdo, ha llegado a un punto donde debe escoger uno de los dos caminos. Un camino está abierto y con arena, mientras el otro es estrecho y con los P árboles. ¿Qué camino tomaría? El camino de arena será más fácil de seguir Í pues salvo usted no hay nada que se mueva. Sin embargo, el camino de árbo-T les ofrece camuflaje y sabemos que es importante no ser visto ni oído. U El terreno L Las áreas secas son más ruidosas que las verdes y a menos que lleve un cubo de agua para mojarlas, intente evitarlas o deslice sus pasos por debajo de O ellas. Ponga atención a las ramas secas; chascan muy bruscamente. Los días lluviosos son los mejores para la infiltración y además borran nuestras huellas. 3
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El olor Debería lograr decir: huelo a un kilómetro de distancia el peligro. La colo-nia y los perfumes son fáciles oler, lo mismo que un Mcdonalds o el sudor; pero ahora nos estamos refiriendo a los olores casi imperceptibles, como oler el peligro, la sangre, la agresividad, las minas o el acero de las espadas. Si usted quiere que el olor corporal no delate a los perros, sumérjase en barro o arcilla húmedos. C A P Í T U L O 3
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CAPÍTULO 4 ARMAS, utilidad, manejo
y características Espadas NINJA-TÔ (Ninjaken o Shinobigatana) C A El ninja-tô (al cual denominaremos Ninjato, espada de ninja), fue según dicen un sable roto durante el combate, aunque nos parece más acertada la cre-P encia de que se trataba simplemente de una espada mal forjada, sólida y con Í bastante menos peso que la katana samurai. Si tenemos en cuenta la dificultad para forjar una espada curva y el gran desarrollo que estaba teniendo la T espada recta de dos filos en occidente (más frágil) o las cimbreantes espadas U chinas y árabes (aptas solamente para guerreros sin armadura), nos daremos cuenta de la necesidad que tuvieron los ninjas para fabricar en poco tiempo L una espada correcta. Pudiera ser, no obstante, que el Ninjato recto apareciera O ya durante el periodo Nara (710 - 760 adC.), coincidiendo casi con la progre-siva implantación de la Katana. 4
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3 P La hoja mide aproximadamente 65 cm de longitud, aunque la parte visible Í es más corta al incrustarse un extremo en la tsuba (protector) cuadrada, en este T caso un poco mayor y más gruesa que las convencionales samurai. La longitud total de la espada es de un metro, la anchura de la hoja 32 mm, y el espe-U sor unos 6 mm. Para saber si está equilibrada la debemos apoyar en la yema L de un dedo a una distancia de 12,5 cm de la tsuba. No se debe balancear hacia ninguno de sus extremos. La tsuka es la empuñadura que debe estar forrada de O auténtico same (piel de raya) y con ito o trenzado natural en cuero negro. Este cordón (sageo) es igual al que contiene la saya (vaina) en su parte posterior, 4
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EL MANEJO DE LAS la cual solía ser de madera negra con incrustaciones diversas en latón, metal que también se empleaba para el habaki, o engaste –tope- de la hoja.
Al ser de menor peso (unos 1.140 gr sin la saya) y tamaño que la katana, permite una portabilidad más versátil, especialmente para ser llevada en la espalda. Si tenemos en cuenta que el ninja se escondía, trepaba, reptaba y se ocultaba en lugares especialmente pequeños y estrechos, esta pequeña espada recta le permitía olvidarse de ella en sus correrías. Además, era más adecuada para espacios angostos y en las distancias cortas, facilitando su manejo con una sola mano o, más frecuentemente, para llevar dos espadas; obviamente, una en cada mano. También la empleaban para escalar muros clavándola en la madera o agujeros de piedra, lo mismo que solían utilizarla como garfio de escalada a modo de kaginawa. C A P Í T U L O 4 4
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5 P El sageo o cordón de la vaina es más largo que los habituales, y su trenzado más rudimentario, empleándose para estrangular, así como para improvisar Í un soporte y atar al enemigo, entre otros usos. T La tsuba, además de proteger la mano, era también un minúsculo pero sóli-do escalón para saltar muros, mientras que la parte inferior de la saya (vaina) U llevaba un agujero (mizizutsu) que serviría para bucear o expulsar polvos cegaL dores hacia sus enemigos. O En las peleas con los samuráis estas espadas no eran muy eficaces, no solamente por ser más cortas, sino esencialmente porque nunca alcanzaron la dureza y el filo tan cortante como las curvas. Además, y aunque pesaban algo 4
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EL MANEJO DE LAS menos, en proporción eran más pesadas a causa del deficitario temple que tenían. Por eso, un ninja casi nunca aceptaba peleas directas con un samurai. No
obstante, en caso de no poder eludirla, la técnica que empleaban consistía en utilizar todo su cuerpo para darle una fuerza adicional al corte, técnica muy eficaz cuando se realizan simultáneamente giros y posiciones muy amplias. De este modo, esta rudimentaria espada podía atravesar e incluso fragmentar los duros metales de las armaduras, consiguiendo en ocasiones romper bruscamente las refinadas espadas samurai. C A P Í T U L O 6 4
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ARMAS NINJA El practicante deberá emplearla, pues, utilizando golpes y tajos muy amplios, mejor en círculo o diagonal, ejecutando finalmente varios tajos por si el primero no ha sido suficientemente efectivo.
Otra versión de la espada ninja era la shikoro ken o espada sierra, la cual era usada para serrar puertas de madera, y posteriormente cortar a los enemigos.
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ARMAS NINJA KATANA La Katana es ya un nombre genérico para definir a cualquier espada proveniente de oriente, más concretamente del Japón. Popularizada por los samuráis ( bushi u hombre de guerra), la casta guerrera vinculada a algún clan o daimyo (soberano feudal), tuvieron no obstante su versión plebeya es los ronin, aquellos que no tenían un señor a quien servir, lo que para entonces suponía cierto desarraigo. Lo cierto es que la katana formó casi parte indisoluble de la vestimenta de los samuráis, e incluso de sus trajes ceremoniales, ya que se consideraba que el alma del guerrero se anexionaba a la espada. Aparte de estas connotaciones místicas que hoy en día siguen vigentes en los buenos aficionados, lo cierto es que nunca constituyó su arma favorita para la batalla, prefiriendo el arco o yari. Los aspirantes a samuráis debían esperar a cumplir los 15 años para poder portar, por fin, una katana, hecho que tenía lugar mediante una ceremonia C denominada como Genpuku, en donde se le entregaba una katana que le acom-A pañaría toda su vida y recibiría un nombre de adulto. Técnicamente se trata de un espada ligeramente curva, al que otorgaron el P
nombre de “Oda Nobunaga”, en alusión al Shogun creador de dicho modelo. Í La espada mide 1 metro de longitud total y un 1 kilo de peso, y está dotada de T un filo esmeradamente afilado, así como de un lomo lateral más robusto para absorber la fuerza usada durante el corte, la estocada y el bloqueo. Su carac-U terística de espada curva la hace mucho más adecuada para el corte que para L la estocada (penetración frontal), siendo todavía más potente en los cortes oblicuos y amplios. El hecho de que su mango sea grande posibilita que pueda O ser agarrada con ambas manos para aumentar su potencia, al mismo tiempo que la gran diferencia entre el peso de sus extremos le proporciona una gran inercia en los tajos. Estos cortes en oblicuo o tangente dificultaban el bloqueo, 4
63 EL MANEJO DE LAS lo que la hacía mucho más eficaz. Si a estas características le añadimos la letal técnica del Aijutsu o arte de desenvainar y cortar en un solo movimiento, nos encontramos con un estilo de lucha que se demostró muy superior a la tradicional técnica del esgrima europeo. Para asegurarse de que no se saliera de su funda durante la carrera o la lucha cuerpo a cuerpo, la katana dispone de una cuerda cuya única misión era asegurar el desenvaine accidental, debiendo liberarse cuando la pelea era inminente. Además, posee un tope en la parte superior de la hoja que la mantiene en su sitio, fijación que es percibida con un sonido característico que nos indica que ya está asegurada. Su uso estaba bastante restringido y nunca se desenvainaba por juego o placer, hasta tal punto en que una persona que la llevara desenvainada indicaba que quería pelear o que iba a matar a alguien. La técnica de fabricación ha sido siempre un secreto, aunque ahora parece que
parte de ello ha sido desvelado. En una fragua era sometida a un calenta-miento continuado, mediante el cual se plegaba y unía el metal, purificándolo con el golpear reiterado. La curvatura se debe, en parte, a las diferentes temperaturas a que eran sometidas, aunque solamente se dotaba de una gran dureza al filo, evitando que el metal se contrajera para lograr la curvatura deseada. La combinación de un lado duro y otro permitía que el filo de la katana samurái fuera algo único y cortante. Aunque ahora se trabaja con el acero AISI 1050, con el cual se consigue una dureza óptima a bajo precio, antiguamente el proceso era muy lento mediante el cocimiento en un horno cerrado de disC tintas capas de hierro, carbón y material orgánico secreto durante más de un mes. El acero resultante se doblaba sobre sí mismo 8 a 12 veces, obteniendo A así varias capas unidas entre sí. Con más de 12 plegados la estructura del acero P se debilita. Para crear el filo, se utiliza un segundo ladrillo con 4 a 5 doblajes en su proceso, extremadamente duro pero muy frágil si impacta en algo más Í duro. Su resistencia, pues, dependía de la velocidad de ejecución, más que de T la dureza. Finalmente se sometía a un temple, el cual consiste en elevar la temperatu-U ra de la hoja a una temperatura prefijada, introduciéndola inmediatamente en L agua fría. Luego se le da el hamon o línea de templado, finalizando con el O pulido final durante el cual se va pasando la hoja por sucesivas piedras cada vez más finas, evitando arruinar su simetría. En total, el proceso de fabricación era desde un mes a un año, destacando entre todas las elaboradas por Hatori 4 Hanzo.
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ARMAS NINJA WAKIZASHI (Kodachi) El Wakizashi es un sable corto tradicional japonés con una longitud de entre 30 y 60 cm, mas pequeña que la Katana y el Ninjato, de rápido desenvaine y muy maniobrable, especialmente útil en lugares reducidos, como en pasillos, cuartos pequeños o templos de techo bajo.Katana y wakizashi (shoto) solían en ocasiones llevarse juntos, pues la inferior longitud de este (60 cm), le hacían idóneo para lugares angostos, aunque mayormente fue asumida por el pueblo como su mejor arma, ya que los samuráis no mostraban gran predi-lección por llevar un arma tradicional de las mujeres y la casta inferior. El ninja prefería indudablemente el Ninjato, una mezcla entre katana y wakizaki, pero con frecuencia solía manejar ambas juntas, una bloqueando los ataques y otra cortando, o simultáneamente, como si fuera una técnica de tanto doble o lo que denominamos como kali. Para los samuráis esta pequeña espaC da nunca fue algo peligroso, hasta tal punto en que cuando entraban en un ediA ficio debían dejar su Katana en la entrada, sin embargo, podía llevar consigo el Wakizashi. P Í T
TANTO U El artículo más interesante hoy día para los coleccionistas de cuchillos es L el Tanto, un cuchillo japonés de un sólo filo, que permaneció mayormente sin sufrir modificaciones en su diseño a lo largo de 700 años. De tan (corto) y to O (filo), se trata de un simple cuchillo, aunque para muchos es una katana en miniatura, tal es su parecido, portándose habitualmente en el Obi (cinturón). 4
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EL MANEJO DE LAS La medida más adecuada es aquella que coincide con la longitud del antebrazo del portador, en torno a los 30 centímetros, pudiéndose encontrar con una hoja afilada curva o recta, aunque en el ninjutsu es siempre recta y pinta-da en negro.
Cuando la tradición oriental se unió con el ingenio americano, el diseño de las hojas y especialmente el de las empuñaduras, cambió, resultando en una proliferación de cuchillos modernos de alta calidad tipo Tanto, imitaciones baratas y todo lo que puede incluirse entre medias. Es la versión oriental del puñal occidental y, al igual que éste, su C forma y manejo son muy variados. La versión japonesa sin A guarda se llama Aicuhi o P Kusungobu, pasando a llamarse Tanto cuando la guarda tiene basÍ tante importancia. El Aicuki era
T sencillamente una hoja metálica afilada por un lado, cuyo mango U estaba cubierto de madera o piel,
1 L pasando a utilizarse posteriormente una pequeña arandela como guarda, cuya misión no era tanto proteger O al guerrero como el permitirse hacer más fuerza en sus ataques. Su utilización se hacía en las fases de lucha más delicadas cuerpo a cuerpo o cuando el ad-4 versario estaba rendido y había que rematarle.
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2 El Tanto se puede considerar más una Katana en pequeño y se solía utilizar junto con ésta, sobre todo cuando la batalla estaba muy generalizada y los enemigos podían venir de cualquier parte y estar a cualquier distancia. Una pelea multitudinaria obligaba a tener a mano un arma pequeña, ya que la espada tradicional requería al menos un metro de distancia para poder ser utilizada con efectividad. Llevar un Tanto en la mano izquierda facilitaba la lucha C contra toda clase de adversarios, estuvieran próximos o lejanos a uno. Muchas de las versiones modernizadas cuentan con mejoras significativas A que hacen a los nuevos Tanto más aplicables a las realidades del combate en P tiempos modernos: hojas de mayor grosor, metales nuevos como el acero inoxidable, construcción en una sola pieza y empuñaduras de goma. Aun así, Í
los coleccionistas serios invariablemente se lanzan a la búsqueda del genuino T artículo japonés, y se encuentran con el frecuentemente desconcertante mundo de los Tantos y Katanas tradicionales. U Un Tanto tradicional es generalmente recto, a veces con un ligero punto de L caída. Modelos muy posteriores fabricados principalmente para la exportación O (o para la Yakuza con pretensiones de ascendencia samurai), tienen una curva pronunciada que se aproxima a la de la Katana. Esto los hace más vulnerables en las punzadas y dicha curva pronunciada sugiere un trabajo de calidad infe-4
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EL MANEJO DE LAS rior. La excepción la constituyen ciertos Tanto de combate, cuya hoja es excepcionalmente gruesa. Los Tanto suelen tener más grabados decorativos (Horimono) que las armas de mayor longitud. Míralos con detenimiento: los
forjadores pobres a veces los aprovechan para disimular grietas o signos de preforjado. Como los Tanto eran a menudo espadas de adorno, estos gravados podían ser bastante elaborados al igual que suele estarlo la vaina, empuñadura y otros accesorios.
3 C Los tres lugares en donde el talento del forjador se hace más aparente son la punta, las tres esquinas, y el hamon o línea de temple. Incidentalmente, la A cresta que tan a menudo se ve en los Tantos modernos, casi nunca se encuen-P tra en las piezas más antiguas, y nunca en el periodo Koto. Parece ser que son una evolución del siglo XIX, aunque puede ser que se iniciara anteriormente Í en casos en que el Samurai hacía que los trozos rotos de su Katana fueran T remodelados como Tanto, (esta circunstancia también justifica la curvatura de algunas piezas antiguas). Los Tanto antiguos tienen los lados completamente U planos, como en un cuchillo de cocina, y a menudo tienen estrías (hi) cerca del L canto. O Realmente nos encontramos con un arma muy versátil que fue empleada abundantemente para el suicidio ritual o seppuku (harakiri), una costumbre 4 que todavía persiste.
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ARMAS NINJA Su reducido tamaño permite mantenerlo oculto entre la ropa o las botas, y emplearse de forma eficaz, tanto como defensa protegiendo el rostro y el
antebrazo, como realizando un ataque rápido e imprevisible a cualquier zona del cuerpo.
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La forma de atacar permite casi todas las variantes, entre ellas el corte penetrante y recto, el oblicuo ligeramente descendente, y hasta el horizontal, sin olvidar que puede ser empleado hacia atrás y de forma vertical hacia abajo. Hábilmente manejado entraba en el vientre del enemigo, y una vez en el interior se le giraba bruscamente para sacarle por un costado. C A P Í T U L O 1 4
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Aunque en el dojo recomendamos seriamente el uso del puñal de madera por el riesgo tan alto de lesiones serias, esporádicamente el alumno tendrá que familiarizarse con el de metal de filo cortante. La impresión psicológica que ocasiona un cuchillo de estas dimensiones moviéndose cerca de nuestro cuerpo, obliga a extremar todas las precauciones para atacar sin que nos hagan daño. Con un chuchillo de madera, obviamente, la tensión se relaja demasiado y nos aparta de la realidad callejera. Una variante es el Aikuchi, un puñal sin tsuba (protección) que se empleaba mayoritariamente para ser arrojado. C
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ARMAS NINJA KAIKEN Esta arma muy utilizada por la Kunoichi, es una especie de puñal pequeño.
De fácil transporte y utilización, la mujer ninja la llevaba escondida en las mangas de su vestido. Garras SHUKOS (Tekagi) Los Shukos o “garras en las manos” inicialmente fueron diseñados para escalar por muros empedrados o árboles, aunque posteriormente se le encontró una C buena utilización en la lucha contra las katanas. A Formados por una placa metálica muy dura, de la cual emergían cuatro afiladas pero gruesas P púas, podían absorber sin daño alguno para la Í mano los poderosos golpes de las afiladas katanas. T Los bloqueos eran tan contundentes que incluso podían desarmar al enemigo con un rápido giro de la U muñeca, pues la hoja estaba ya atrapada entre las L púas. Asegurados en las muñecas mediante una tela trenzada, podían hacer una escalada e O inmediatamente rasgar la cara de un centinela antes de que se apercibiera del peligro.
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EL MANEJO DE LAS Arma igualmente efectiva para las kunoichis, su reducido tamaño permitía que se pudieran portar sin ser notadas, lo que contribuyó a su versatilidad y expansión. Otra aplicación no menos importante era su eficaz labor de destrucción de muros y maderas, tal y como hacen las fieras con sus garras cuando quieren invadir las madrigueras de sus presas. Ahora apenas se ven en los lugares de entrenamiento de ninjutsu, pero creemos que es un arma a considerar, pues su pequeño tamaño y gran versatilidad permite emplearla como defensa y ataque, siendo, además, un utensilio eficaz para la escalada. No obstante, recomendaríamos al usuario que antes de escalar realizara una prueba de resistencia de los garfios, pues si son de hierro quizá se doblen. Como arma de mano se empleaba para desagarrar zonas blandas (cara, vientre…), siendo poco eficaz, aunque igualmente muy dolorosa, cuando se atacaban zonas óseas sin apenas músculos, como las rodillas o los codos. ASHIKOS C
A P Í T Los Ashikos o “garras en los pies”, suponen el complemento a los shukos, U pues ambos eran imprescindibles en la escalada. No obstante, se empleaban L incluso como arma de pelea en caso de ataques en terreno arenoso o nevado. O Con ellos en los pies, la estabilidad era muy alta y permitía, además, que las patadas adquirieran una letal eficacia al golpear. Cuatro púas entrando en el cuerpo del adversario, capaces de traspasar sin problemas la ropa e incluso las 4 armaduras, hacían del pie del ninja una extraordinaria arma de combate. Para 74
ARMAS NINJA completar su eficacia, solían poner un shuriken entre los dedos, con el cual las patadas se convertían en una penetrante arma blanca. Atados a los tabis (zapatos ninja) mediante correas, fueron puestos al día por la Togakure Ryu Ninjutsu, escuela especializada en la infiltración y escape. No obstante, una vez alcanzado el terrero habitual, especialmente si es pedregoso o
muy sólido (cemento o baldosas), hay que quitarlos pues es casi imposible andar con ellos. KAKUTE El Kakute o “dedo del cuerno”, consiste en un anillo de metal que en lugar de un diamante o piedra preciosa contiene 2 púas de metal unidas. Normalmente es llevado en el dedo medio e indudablemente añade un daño adicional al pegar puñetazos. Cuando los golpes son dirigidos a zonas concretas, como ojos, nariz, labios, e incluso de forma circular para penetrar o desgarrar la piel, el daño es considerable. Las kunoichis le solían añadir veneno, siendo llevados especialmente cuando simulaban haber sido seducidas por un enemigo. Así, aprovechando el abrazo íntimo C le clavaban las púas en la espalda, aunque su infeliz A víctima creía que el dolor estaba producido por las uñas de la kunoichi, a quien había provocado ardores sexuales por su pericia como amante. P Í T NEKOTE U
Se trata de unas “uñas de gato” que en realidad son dedales terminados en L afiladas púas, aunque con frecuencia eran simples uñas artificiales elaboradas con metal cortante. En casos excepcionales, mediante endurecedores especia-O les elaborados con resinas y limaduras de hierro, el simple esmalte de uñas transformaba las uñas de la mujer en un arma poderosa en apariencia inofensiva. 4
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EL MANEJO DE LAS Sus puntas afiladas se empleaban para desgarrar la cara como si fueran las garras de un felino, o punzando zonas muy sensibles como los ojos, el interior de las orejas, los genitales o las axilas.
C A P Í Armas arrojadizas T U SHURIKEN (Shaken) L El Shuriken es quizá el arma más conocida del Ninja a causa de la imagen O presentada en las películas y video juegos, pero en la actualidad existe cierto abandono de su práctica a acusa de estar considerado como arma blanca. Aunque en las películas vemos que un simple dardo afilado clavado en la 4 espalda es capaz de derribar a un confiado centinela, ello no es posible en la 76
ARMAS NINJA realidad, ni siquiera aunque estuviera impregnado de veneno de cobra o de escorpión. También hemos visto escenas en las cuales un shuriken se incrusta en el cráneo del confiado enemigo y le mata, algo que es casi imposible dada la naturaleza de la cabeza humana, redondeada y sumamente dura. Por ello, los debemos considerar como un arma de distracción o para ins-C pirar temor, y que deberían ser arrojados a zonas muy específicas del cuerpo, vestido con prendas livianas, desde una distancia no superior a los cinco A metros. Analizando su posible eficacia, las zonas de elección podrían ser la P cara (mejilla, ojos), los huecos entre las costillas, el cuello por su parte frontal y la zona lumbar. Las zonas óseas o muy blandas, como es el caso del vientre, Í serían poco adecuadas e inútiles.
T Como precaución, recomendamos no manejar elementos arrojadizos de hierro por su facilidad para la oxidación y la posterior infección incluso por U tétanos. Antiguamente se los impregnaba incluso con estiércol, pues era más L fácil de encontrar y manejar que los venenos. O El significado es Shu (mano), ri (libertad) y ken (cuchillo), lo que traduci-do ampliamente nos describe a una cuchilla oculta en la manga o en la mano, aunque las kunoichis preferían ocultarlas en el pelo. Los dardos, también 4
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EL MANEJO DE LAS entrarían en la misma nomenclatura. Nos encontramos, pues, ante un elemento metálico, dotado con frecuencia de varias puntas afiladas, y que ahora se vende con una amplia variedad en cuanto a su forma estrellada, aunque muchos de ellos son solamente adaptaciones modernas de los tradicionales. En su favor, debemos decir que los que se fabrican ahora son de fuerte acero y con los filos indesmallables y sumamente penetrantes, además de estar exentos de oxidación. Si queremos practicar con eficacia, los recomendamos aunque nos alejemos algo del esquema tradicional.
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3 Los Shuriken pueden elaborarse de distintas formas: hara (plano), sanpo (triángulo), juji (cruz), happo (estrella), tatamijuji (cruz doblada), y bo (recto). Históricamente hay referencias de un arma denominada como Bo-Shuriken (dardos), la cual era manejada con cierta habilidad y velocidad por Miyagi, un samurai que vivió durante el periodo Edo (1603-1867). La escuela Togakure ryu, por el contrario, hizo un uso habitual del shuriken de cuatro puntas pinta-do en negro, aunque en el museo ninja podemos encontrar una gran cantidad de diseños, entre ellos los cuchillos arrojadizos y los tonki. C A P Í
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EL MANEJO DE LAS Hay también shuriken que son simplemente flechas de hierro, con unas medidas de 15 cm, aunque la tradición nos habla de 18 cm y no estaban impregnados de veneno. La razón para ello es que llevarlos ocultos y pelear con ellos suponía un riesgo extremo por la presencia de veneno, lo que se podía convertir en un arma letal para el portador. Algo menos peligroso era impregnarles de óxido, aunque el efecto maligno no se manifestaba hasta varios días después.
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3 La práctica habitual nos lleva a tres maneras básicas de lanzamiento, que son: frontal (omote), desde la oreja hacia el frente; de lado (yoko), con el shuriken en posición horizontal y partiendo del costado izquierdo; y posterior (ayaku), en la cual partimos desde abajo con el arma vertical. C A P Í T U L
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ARMAS NINJA Dentro de la variedad de elementos afilados de pequeño tamaño, arrojadizos o no, los tonki constituían un arma de indudable eficacia para las kunoichis,
esencialmente porque en apariencia eran simples alfileres para coser o reforzar la ropa. Sin embargo, un observador experto vería inmediatamente las diferencias, que no son otras que su mayor grosor y su afilada punta. Así, la bella y seductora kunoichi dejaba que el confiado enemigo se acercara a ella y mientras simulaba una pasión inexistente, sacaba de entre sus ropas un afiC lado tonki que clavaba profundamente en la garganta o los ojos. Las Kunoichi utilizaban también el kanzashi, una varilla afilada, a veces A doble como una orquilla, que sujetaba el pelo y que tenía un canal en los extreP mos para llevar el veneno que se inoculaba al clavarlo en el enemigo. El kaiken era una pequeña daga que se guardaba entre las botas o el cintuÍ rón, la cual podía ser usada como puñal o como arma arrojadiza, siendo esta T la razón por la cual también se le considera un shuriken. Finalmente, unas minúsculas agujas o dardos pequeños (fukumi-bari) que U eran escondidos en la boca dentro de pequeñas cañas o pajitas, se comportaL ban como cerbatanas (fuki-bari) para distancias cortas, aprovechando las sombras de la noche o durante el abrazo amoroso. Tan afilados estaban estos darO dos, que el inocente amante confundía su punta con una picadura de avispa. 4
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EL MANEJO DE LAS FUKIYA (Fukidake)
La Fukiya o cerbatana, en ocasiones nombrada como Fukidake, estaba inicialmente hecha de una pieza única de bambú de 20 a 40 pulgadas de longitud. No obstante, los nudos internos y la dificultad para encontrar tubos hueC cos perfectamente rectos, dificultaron la precisión al lanzar los dardos. La utilización de venenos (doku-jutsu) era una asignatura ligada a las técnicas de A fuki-dake, pues los dardos o proyectiles (denominados frecuentemente como P fukiyas) estaban empapados con venenos letales de serpientes o plantas, consiguiendo eliminar al enemigo en pocos segundos. Uno de los preferidos era Í el curare, una sustancia extraída de diversas especies del género Strychnos, la T cual paralizaba primero el sistema muscular y posteriormente a todo el sistema nervioso, con lo cual la víctima dejaba de respirar. U Otra de las utilidades de la cerbatana era la de convertirse en un respirador L (shindake) para inmersiones en agua, tierra o nieve, lo cual permitía al ninja O ocultarse de sus enemigos incluso estando a pocos metros de ellos. Cuando estaban más confiados, salían de su escondite para huir o atacarles. En situaciones imprevistas y de emergencia, un pedazo de papel enrollado 4 –un simple periódico- podría usarse como una cerbatana temporal. Los dar-92
ARMAS NINJA dos no son difíciles de fabricar, y basta una aguja muy fina de acero, con los extremos conteniendo los aletines que le darán estabilidad al salir proyectados con fuerza por nuestro soplido. Indudablemente hay cerbatanas de gran precisión y eficacia, capaz de lanzar los proyectiles a casi 50 metros de distancia en días de poco viento. Para ello se requieren tubos de un metro y medio y una anchura no superior al centímetro y medio. Incluso se le podría acoplar un mecanismo de enfoque para lograr mayor precisión, tal y como llevan las escopetas. FUKIBARI C Se trata simplemente de agujas escondidas en la boca y que mediante un A arqueado de la lengua para formar un tubo, son proyectadas hacia delante, en busca justo de los ojos del enemigo. Otras maneras de lanzar las agujas con-P sisten en utilizar un pedazo pequeño de bambú en la boca o un canuto hueco Í formado por simple cartón o papel. Se pueden disparar hasta 12 agujas al T mismo tiempo.
U KUNAI L El kunai es un cuchillo de 35 cm de longitud, que se desarrolló ampliamen-O te durante la Era Tensho (1573-1591). Su utilidad era diversa, pues podía emplearse como un sencillo cuchillo para distancias cortas, como arma arrojadiza, y hasta como pequeña sierra para barrotes de hierro o madera. 4
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EL MANEJO DE LAS En su extremo solía amarrarse una cuerda delgada pero resistente, lo cual permitía lanzarlo para trepar y luego ser recuperado. También era habitual usarlo para excavar, cavar y cincelar, e incluso como palanca para puertas o violentar cerraduras. Debido a su forma (parecida a un pez), al ser lanzado siempre se golpea con la punta. TSUBUTE Un Tsubute es un disco de C metal plano usado por los ninjas de forma similar al A shuriken. Tirado a un enemiP go le podían cuando menos aturdir, aunque en ocasiones Í lograban destrozarle la cabeT za. En ocasiones, llevaba una U cuerda en uno de los bordes
que servía para recuperar el L arma después de ser arrojaO da, e incluso para estrangular. 4
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ARMAS NINJA TETSUBISHI Arma curiosa y peculiar en su aspecto, que consistía en piezas de forma irregular con puntas afiladas, que al ser pisadas se clavaban profundamente en el pie del enemigo, traspasando sin problemas el duro cuero de las botas. No eran
obviamente elementos letales, salvo que estuvieran oxidados o impregnados en veneno, y lo que se pretendía era impedir las persecuciones cuando los ninja huían de las fortalezas. Pintados habitualmente en negro, prácticamente pasaban desapercibidos en la penumbra e incluso en los terrenos irregulares quedaban camuflados hasta C que el confiado enemigo los pisaba. A Generalmente el Ninja buscaba ser perseguido para poder arrojar tras de si P estas diminutas armas, aunque en su ausencia los suplía con castañas (Hishi) Í verdes, cuando la dura corteza aún conserva los pinchos. Si disponía de sufi-T ciente tiempo, sembraba inteligentemente todo el suelo, buscando rendijas, huecos y sombras, incluso a plena luz del día, camuflando los tetsubishi de tal U manera que solamente un experto oteador las pudiese descubrir. Ni que decir L que en el interior de las casas japonesas, en donde habitualmente la gente anda descalzos, su eficacia era mucho mayor. O En ocasiones se arrojaban directamente al rostro del enemigo para cegarle, efecto que unido a los que se caían al suelo, dejaban al herido con pocas posibilidades de respuesta. 4
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EL MANEJO DE LAS Los Igadama, que estaban formados por bolas de hierro minúsculas o perdigones, eran utilizados para retrasar a los perseguidores e incluso a los perros de presa. Bastones HANBO (San Sakku Bo) Nos encontramos con el arma más versátil de todas, y la única que se puede encontrar fácilmente en nuestra vida diaria. Además, es una de las pocas armas ninja que se pueden portar por la calle, ya que no entra dentro de la categoría de armas blancas. Han significa medio y bo bastón, lo que nos lleva a denominarle como bastón mediano, estableciéndose así la diferencia con el Bo. De formas cilíndricas y elaborados con madera de roble (pesado y robus-C to) o bambú (ligero y flexible), sus medidas estándar son entre 90 y 120 cm, muy alejadas del Bo con sus 180 cm. Si quisiéramos tener un Hanbo adapta-A do a nuestra fisonomía, deberíamos escoger uno que tuviera una altura desde P el suelo hasta el hueso de nuestra cadera. Hasta tal punto es el arma más interesante de todas (por su tamaño, peso, Í facilidad de transporte y aspectos legales), que podemos evaluar a un artista T marcial experto en Ninjutsu simplemente viéndole manejar ese bastón. Es U más, podríamos asegurar que un artista marcial que no sepa manejarlo con sol-
tura no debería conseguir nunca el cinturón negro. L Hasta tal punto es esencial su aprendizaje, que una vez dominado, el resto O de las armas serán de fácil manejo y entendimiento, pues todas tienen una base centrada en este bastón. Repasando la historia marcial del hombre, nos damos cuenta que fue el bastón de madera la primera de las armas empleadas, y si 4 miramos un poco más cerca en el tiempo, a China y los monjes del templo 96
ARMAS NINJA Shaolín, veremos que el tradicional bastón del peregrino o monje itinerante, era también su arma preferida. Cuando nuestras patadas y puñetazos no son suficientes para reducir a varios adversarios, ¿qué mejor que tomar un palo, paraguas, escoba o barra para defendernos? Es por eso que reiteramos la enseñanza en todos los gimnasios de esta extraordinaria y noble arma, capaz de reducir sin apenas dañar, inmovilizar,
luxar, aturdir si es necesario y hasta golpear fuertemente para anular definitivamente a uno o varios adversarios. C
1 A La técnica del hanbo es sumamente vistosa, con sus giros circenses y sus P ataques sonoros cuando corta el viento, pudiéndose golpear de cualquier Í forma conocida, y sin necesidad de tener una gran fortaleza en los brazos. T Otros palos similares son el Shinshin Bo de 20 cm, el Tanbo de 40 cm, el Jo de 120 cm y el Bo de 180 cm. Sin embargo, el hanbo reúne lo mejor de U todos ellos y ninguno de sus inconvenientes. Ni muy corto como es el tanbo, L ni tan largo como el bo, imposible de manejar en circunstancias y lugares habituales. O La fuerza del golpe tiene que lograrse mediante un uso inteligente de la inercia y el peso del propio cuerpo, mientras que una sólida y fuerte muñeca conseguirán que podamos enlazar varios golpes consecutivos. 4
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ARMAS NINJA BO (Rokushaku) C A La palabra Bô hace referencia a un bastón que fue usado cuando la caballería era
el medio preferido para el ataque de guerreros bien armados. P Escondidos detrás de los árboles o semienterrados en la arena, los ninjas salíÍ an bruscamente para golpear a los jinetes y derribarles, momento en el cual T estaban ya al alcance de sus armas cortas. En repetidas ocasiones, no obstante, debían romperlo en dos trozos para usarlos como un simple tanto de mane-U jo doble. Sin embargo, el Rokushaku Bô nunca fue el arma preferida de los L ninjas, pues su largo tamaño, aproximadamente 1,80 cm, dificultaba llevarla de manera discreta. O El Bo se empleaba también como pértiga para salvar muros o fuego protector, así como larguero entre dos tejados a través del cual el ninja conseguía llegar al lugar elegido amparándose en las sombras de la noche. 4
103 EL MANEJO DE LAS En casi todas las culturas del mundo el humilde palo y sus muchas variantes se han usado como utensilio agrícola y como arma. Al igual que en otras culturas, Japón desarrolló sus propias técnicas de combate basadas en el bastón de madera, creando una de las versiones más populares de este arma, el BO. Sin embargo, debido a que la madera tiende a degenerar bajo la mayoría de las condiciones climáticas, quedan muy pocos ejemplares de instrumentos o armas del neolítico japonés, aunque todavía existen restos bien conservados de utensilios de piedra, algunos con la forma de útiles largos, tipo pértiga, que sugiere fueron basados en prototipos hechos de madera.
Estos bastones o pértigas probablemente fueron empleados por la sociedad cazadorarecolectora de las culturas tribales de Jomon y Yayoi como instrumentos para la caza, las labores de granja y como arma. Otros instrumentos de piedra son largos, con extremos abultados, que sugieren una probable utilización como maza. En la época de las guerras Gempei de finales del siglo XII, escuadrones enteros de soldados de infantería blandían bastones BO. Sin embargo, a medida en que el arte de la metalurgia mejoraba el filo y prolongaba la vida útil de las armas blancas, el BO fue modificado o desplazado por otras armas de guerra. Aunque aún contaba con aplicaciones prácticas como arma de guerra, la fabricación de espadas, de armaduras, y la tecnología de los primeros fusiles, volvieron al BO cada vez menos eficaz. Por ello, el BO y otras armas de madera como lanzas y garrotes de bambú, fueron relegados al uso de los contingen-tes de campesinos reclutados forzosamente, los cuales eran demasiado pobres C para tener armas metálicas. Muchos de ellos fijaron sus hoces de mano al extremo del BO, transformando éste en una rudimentaria arma de mango largo A llamada Naginata, la cual adquiriría después un inexplicable prestigio en P manos de las mujeres guerreras. Cuando las últimas guerras del medioevo terminaron hacia 1600, el BO Í había perdido gran parte de su eficacia en el campo de batalla frente a las muy T desarrolladas armas cortantes y la nueva tecnología de las armas de fuego. En el subsiguiente período Edo (16001864), fue usado principalmente por la po-U policía para contener y controlar a las masas y criminales sin tener que matarL los. La longitud del Rokushaku BO (1,8 m) era más práctica que la del actual O bastón policial, ya que los agentes del orden público de entonces podrían tener que enfrentarse a un samurai criminal blandiendo una espada larga. El BO generalmente era manejado con ambas manos, debido a su peso y 4 longitud, pero el Taiheiki (libro tradicional) señala que un soldado era lo bas-104
ARMAS NINJA tante fuerte para voltear un BO con una sola mano. Generalmente se empuña equilibradamente entre la parte adelantada y atrasada: las manos dividen su longitud en tres partes iguales: extremo frontal, extremo atrasado y centro (entre las dos manos). Esto permite golpear rápidamente hacia delante y atrás a corta distancia, una buena ventaja al luchar contra un guerrero desarmado o con armas blancas. Sin embargo, el BO del koryu japonés a menudo se empuñaba con una mano en un extremo del palo y la otra en un tercio de la longitud total. Esto permitía un alcance algo mayor, necesario al combatir con un esgrimidor. El JO (yonshaku), el bastón de 120 cms de largo, es el típico bastón del caminante y el ovejero. Su uso es más sencillo que el del bastón largo, ya que sus 60 centímetros menos en longitud lo hacen más versátil en el combate contra atacantes con espadas. TANBO y tanbo doble (keibo) C A
P Í T U Tan (pequeño) y bo (bastón, palo), nos definen a un bastón corto, similar al L que llevan los cuerpos de policía urbanos. Se trata de un bastón de unos 40-50 centímetros aproximadamente, aunque la medida correcta es la de nuestro pro-O pio antebrazo. Es decir, una longitud igual a la comprendida entre el codo y la punta de los dedos, aunque diferencias menores no son significativas. 4
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109 EL MANEJO DE LAS Con un grosor mínimo de 2,5 centímetros y no más de 3, podemos agarrar-lo sin problemas, siendo la madera más adecuada la de haya, algo más liviana que el roble, aunque el bambú sigue siendo el material más adecuado para entrenar, debiendo desecharse el pino o los materiales plásticos. La escuela Kukishinden Ryu (Escuela de los Nueve Dioses Demonio) es una de las que más interés puso en este corto bastón, demasiado olvidado por los nuevos ninjas El primer sistema implantado de Tanbojutsu fue fundado por Muso Gonnosuke y se llamó Shindo musoryu. Muso primero estudió el BO bajo el sistema del Katoriryu, aparte de otros, y aunque se convirtió en un experto en el manejo de varias armas, su favorita era el bastón. Para ampliar su conocimiento del bastón estudió el gran estilo Kashimaryu, notable por sus técnicas con esta arma. Muso conoció la derrota en combate con el gran escrima-dor Minamoto Musashi, pues aunque empleó un Bo fue derrotado por el estilo de las dos espadas de Musashi, cuando éste atrapó el BO de Muso mediante un apresamiento hecho con las espadas. Afortunadamente, Musashi le perdonó la vida. Los años pasaron y Muso no vivía en paz con su derrota, corroyéndole interiormente. Frustrado, se marchó al monte Homan para vivir allí recluido, donde la leyenda dice que recibió la inspiración divina y se le dio un mensaje para que fuera consciente de los puntos vitales del palo. Muso interpretó que él debía inventar una versión más corta del BO y construyó otro mucho menor con el roble blanco más duro que pudo hallar. Dicha arma le permitía atacar C los puntos vitales del cuerpo, ya que el combate se llevaba a cabo en distancia corta, algo que la longitud del BO no permitía. En un combate de revancha con
A Musashi, Muso derrotó al invicto maestro de la espada, pero igualmente le P perdonó la vida. Lo cierto es que aunque de aspecto inofensivo, el Tanbo es capaz de proteÍ gerlos de ataques con armas como hachas, palos y cadenas, además de ser un T elemento adecuado para repeler agresiones con sillas y otros objetos calleje-ros, mucho más cuando el agresor porta una navaja. U Manejado con rapidez y no buscando obsesivamente golpear con él a la L cabeza, podemos disponer de un arma contundente, aunque no letal, lo que nos O evitará luego remordimientos de conciencia y problemas legales. Una vez comprendido su esencial manejo, cualquier utensilio aparentemente inofensivo, como un periódico o revista enrollado o un paraguas plega-4 ble, se transformará inmediatamente en un tanbo de fácil manejo. Además, en 110
ARMAS NINJA manos de un experto se transformará un arma con la cual podremos inmovilizar y estrangular, lo mismo que luxar y controlar presionando en zonas adecuadas con sus extremos.
Recomendamos especialmente golpear al adversario en zonas óseas noto-rias, como los codos, clavícula, rodillas, nudillos y nariz, mientras que para punzar con un extremo los lugares más adecuados son el esternón, las costillas, la tráquea y los ojos. C A P Í T U L O 4
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P Í T U Una modalidad mucho más versátil y demoledora la tenemos en el uso del L bastón doble, popularizados como kali por su procedencia filipina. Con ellos podremos controlar a varios adversarios y golpear de manera tan rápida que en O pocos segundos habremos descargado varios golpes a distintos lugares del cuerpo. Un experto con estos bastones dobles se convierte en una máquina de 4 golpear, con tantos puntos de contacto que resulta imposible de parar. Lo 112
ARMAS NINJA importante es la movilidad del cuerpo y las piernas, pues es un arma que implica desplazamientos y agilidad con la cintura, además de requerir gran velocidad y coordinación entre ambos brazos.
C A P Í T U L El manejo de los palos cortos como arma defensiva por parte del pueblo O filipino es bastante antiguo y los primeros datos se remontan al año 1520. En esa época, los bastones de madera se endurecían al fuego y se les barnizaba con resinas especiales, al mismo tiempo que se les adornaba con pinturas de 4
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EL MANEJO DE LAS guerra. Durante la dominación, los filipinos siguieron practicando con sus palos, pero ahora como parte de sus danzas folclóricas.
Su aprendizaje no difiere del resto de las armas y consta de cinco golpes básicos, cinco bloqueos para cada uno de estos golpes, desplazamientos para el ataque y la defensa, para posteriormente pasar al manejo de los dos bastones simultáneamente. Con ellos, mientras uno defiende el otro puede golpear, de igual manera que se hace en las técnicas de mano vacía.
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BOKKEN Traducido como bok (madera) y ken (espada), y renombrado en ocasiones como Bokuto, es el sustituto habitual de la katana en los dojos. Se compone de Tsuka (Mango), Monouchi (tercera parte del sable en la parte superior), Kissaki (punta), Tsuba (protección decorativa que separa la tsuka de la hoja), Mune (parte contraria al filo o lomo del sable), y Shinogi (línea que se encuentra en la parte media de la cara de la hoja del sable). Generalmente miden entre 100 y 105 cm de longitud, siendo unos 28 cm de mango y el resto de hoja, estando elaborados con la dura madera del roble. Tiene similitud con el Shinai, aunque es bastante más duro y su forma en cuña imita el filo de una katana. También es más pesado, ya que se trata de aproximarle al peso de la katana real. La historia nos lleva hasta el periodo Muramachi (1336-1600 DC), cuando el bokken se hizo popular debido a que los guerreros comenzaron a utilizar el arte del duelo contra un opositor en lugar de la lucha en un de campo de batalla. Para no poder efectividad y preser-C var así la integridad física, se establecieron pronto estilos o escuelas (Ryu).
A Uno de sus mejores difusores fue Miyamoto Mushashi, un samurai a quien P se atribuye la fundación de la Nito Ryu, quizá la primera escuela en estudiar la esgrima con dos sables. Hasta tal punto alcanzó maestría, que llegó a emplear Í el bokken en la batalla, en lugar de la tradicional katana metálica.
T Para el entrenamiento se suele emplear el bokken simple, sin la vaina, e incluso hay quien tampoco utiliza la tsuba o protección de la mano. De este U modo se aproxima a un hanbo o palo, aunque la técnica de entrenamiento debe L ser la de una espada, buscando el corte. Una variante algo más corta es el O Shoto, equivalente a la espada Wakizashi (espada corta). Nuestra recomendación es que se entrene preferentemente con un bokken, pero esporádicamente y en lugares amplios en los cuales no exista el peligro 4 de dañar al compañero se vuelva al entrenamiento del ninjato, pues el compo118
ARMAS NINJA nente psicológico que proporciona una espada real no se puede conseguir con un utensilio de madera. Le falta el “alma”, el sentimiento interno que nos traspasa el metal, y que solamente se puede percibir con armas reales. El kenjutsu fue el arte marcial creado a través del entrenamiento con bokken, pues permitió el entrenamiento colectivo y que los aprendices pudieran entrenar sin peligro físico. No obstante, recomendamos que el maestro mues-tre siempre los movimientos y técnicas manejando la espada tradicional.
SHINAI Se trata de una variante del bokken, o arma de madera para el entrenamiento. Elaborada tradicionalmente con bambú por su menor peso y flexibilidad ante los golpes, consta de cuatro láminas de bambú, una empuñadura (tsuka) forrada en cuero y la guarda (tsuba), teniendo entre la punta en cuero (sakiga-wa) y el cuero que cubre la tsuka una cuerda (tsuru), ceñida en su primer tercio por una pieza en cuero (nakayuki).
C La longitud es entre 100 y 120 cm, el peso entre 260 y 510 gr, y el diáme-A tro entre 24 y 26 cm. El Shinai o espada de bambú nos permite hacer golpes con espíritu real de P combate sin tener que preocuparnos por herir al compañero. Í
T SHOBO (Yawara)
L El Shobo era un simple y pequeño palo corto que se ocultaba en la mano, siendo renombrado en ocasiones como Yawara y utilizado en combates cerra-O dos. Se le solía utilizar habitualmente en las ceremonias budistas, aunque posteriormente derivó a un uso marcial para sustituir al puñal Tanto, más peligro-4 119
EL MANEJO DE LAS so y letal. Con el paso del tiempo, este pequeño cilindro pasó a ser considerado un arma adecuada para la defensa personal, pues al no ser repudiado legalmente se puede llevar sin problemas en cualquier bolsillo. Se emplea como método de golpeo en la nariz, las mejillas, las costillas y la clavícula, esto es, zonas ni muy duras ni excesivamente blandas, como pudiera ser el vientre. Algunos pueden contener un anillo de cuero en el centro para introducir el dedo anular e impedir que se caiga durante la pelea.
SHISHIN BO Shishin (dedo meñique) y bo (bastón) nos define un bastón para el dedo C meñique, el cual nos lleva al golpe denominado Shishin Ken , una forma de ataque tradicional en el ninjutsu en la cual se emplea solamente el dedo meñi-A que para punzar puntos sensibles, al igual que se hace con el Shishin Bo.
P Su forma es la de un palo pequeño (15 centímetros de longitud) y de menor grosor que los demás bastones, lo que se asemeja a la forma y tamaño de un Í simple bolígrafo. Es por eso que en ocasiones basta con un sencillo lápiz o T bolígrafo de acero, para comprender y entrenar con esta pequeña arma. La historia nos lleva en origen a la India, donde los monjes llevaban un U arma llamada Vajra, el rayo diamante, aunque ellos insistían en que era sim-L plemente un elemento religioso. Lo cierto es que en ocasiones se vieron obli-O gados a utilizarlo para defenderse, lo que llevó a crear en el Japón una escuela denominada Kukishinden Ryu, de donde proviene el Shishinbo y las técnicas que estudiamos sobre él. Luego fue incorporado al estilo Goshin Jutsu y 4 de ahí al ninjutsu. 120
ARMAS NINJA Los puntos de ataque son varios, entre ellos los orificios de la nariz y la oreja, los ojos, la zona de la unión de las mandíbulas en la mejilla, el hueco de la clavícula, la axila, el plexo solar y cualquier otra zona no ósea en la cual se pueda clavar o introducir un arma no demasiado afilada y pequeña. La forma de agarre es similar a cuando pulsamos un bolígrafo en su extremo, pudiéndose entonces atacar punzando en cualquier posición, incluso de forma circular hacia la cara. Dado que un bolígrafo se puede llevar siempre con nosotros, es obvio que disponemos cómodamente de un arma eficaz y sin ostentación.
Bastones articulados
NUNCHAKU
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T Como una evolución del bastón corto o Tanbo, nos encontramos con un U arma procedente de los campos de arroz, donde se la empleaba para golpear el L cereal durante la recolecta. Que luego haya sido el arma oriental más difundi-da, incluso más que la katana, se debe no solamente a las películas de Bruce O Lee, sino a que fue asumida como una de las mejores armas de autodefensa, incluso en manos de personas poco entrenadas. La popularidad del Nunchaku hace unos años fue tal que en la década de los años 80, aproximadamente el 4 121
EL MANEJO DE LAS 60 por 100 de los jóvenes tenían uno en su casa, llegando esta cifra al 90 por 100 si eran practicantes en algún gimnasio. Incluso en los torneos se veía gente practicando por los pasillos, aunque se trataba de un entrenamiento infantil, consistente solamente en balanceo y recogida. Se realizaban muy pocos bloqueos, apenas golpes con ambos palos y mucho menos estrangulaciones. Realmente nos encontramos con dos palos de madera, o cualquier otro material duro, de forma cilíndrica de 33 cm aproximadamente, unidos por un segmento de cuerda o cadena de 10 a 20 cm. Al igual que el resto de las artes marciales, las téc-
nicas del Nunchaku han
tenido que evolucionar y adaptarse a sus nuevos portadores, en primer lugar, y lo más importante- a los nuevos agresores, los cuales están alcanzando unas cotas de eficacia terribles. Cuando la gente no sabía defensa personal ni existía la posibilidad de que llevaran alguna arma defensiva,
los agresores actuaban de
una manera instintiva y poco elaborada. Pero ahora,
cuando el ciudadano medio
P ya entrena o al menos sabe cómo defenderse mediante Í diversos utensilios, el male-
ante ha tenido por fuerza que ser más experto en su
U labor. Lejos están, pues, los
movimientos floridos y el
O baile que tanto impresionaba antaño, dejando a cambio un modo de ataque sim4
ple basado esencialmente 122
ARMAS NINJA en los golpes circulares de derecha a izquierda y viceversa, evitando cambiar-lo de mano o por la espalda.
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O El aprendizaje del Nunchaku no debe empezarse sin tener una buena base en algún arte marcial de al menos un año. Es importante que se aprendan los fundamentos de un arte básico (kárate o ninjutsu) y solamente después pasar 4 123
EL MANEJO DE LAS a enseñar las armas, pues de no hacerse así convertirían el uso del Nunchaku en un mero bailoteo circense, sin eficacia alguna en la pelea real. Es obvio que cualquiera puede coger un Nunchaku y jugar con él, e incluso impresionar con su destreza al neófito. Es normal que un niño de apenas doce años alcance más destreza bailándolo que un experto cinturón negro. Pero el Nunchaku no es un instrumento para bailarlo con la mano. En primer lugar, la muñeca juega un papel primordial, de igual manera que ocurre cuando se maneja el BO o el Tonfa. Una vez que se aprende la utilidad de la muñeca, hay que coordinarla con el movimiento del brazo y del hombro, e incluso tiene que existir un fuerte movimiento de la cadera. Todo esto es fácil de asimilar por una persona
que domine un estilo de lucha, siendo también
importante adoptar una disciplina mental, pues
hay que respetar el arma ya que no es un juguete y así se evitarán lesiones. Con el tiempo se le llega
a querer como si tuviera vida propia, al igual que
C ocurre con la Katana.
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SHINOBI ZUE El Shinobi Zue es una funda de madera hueca con estiletes o cadenas ocultas. Externamente se asemeja a un simple palo de madera, algo más pequeño que un hanbo, pero en su interior albergaba elementos letales, incluso polvos cegadores o envenenados. Usado por el Ninja cuando iba disfrazado de monje itinerante, el Shinobi-Zue puede constituir un sustituto del hanbo, ya que juega con el factor sorpresa, aquello que nos permite ganar rápidamente a adversarios confiados en nuestra aparente debilidad. Cuando el estilete sale al exterior por uno de los extremos, se convierte en una pequeña lanza, mientras que si descubrimos el extremo opuesto lo que aparece es una cadena con un peso en su extremo. En ese momento se convier-C te en una porra medieval de suma eficacia en distancias cortas. Cuando el shinobi zue está fabricado en forma de tubo hueco de metal, su A resistencia al golpe aumenta, pudiéndose emplear como cerbatana, así como P para albergar documentos secretos, apalancar, o disparar proyectiles. Í
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ARMAS NINJA
Armas de enganche
KAGINAWA
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L Una de las cualidades requeridas por las herramientas y armas ninja era la O versatilidad en la función, y de hecho, muchos de los accesorios utilizados servían como herramienta y arma. Éste es el caso, entre otros muchos, del gancho metálico conocido como Kaginawa. 4 131
EL MANEJO DE LAS Se cree que en su origen fue un instrumento marino medieval, usado tanto en Europa como en Extremo Oriente para múltiples cometidos, tales como recoger objetos que hubieran caído por la borda, llevar barcos más pequeños a remolque, etc. Debido a que los puertos de mar son históricamente conocidos como lugares excelentes para reunir, obtener y transmitir información, algunos ninjas relacionados con estas actividades ejercían sus funciones en estos lugares. De ahí la teoría de que el ninja introdujo entre sus utensilios el gancho y la cuerda a partir de sus actividades entre la gente del mar. No obstante, esta teoría no tiene en cuenta la explicación más simple de que los ganchos formaban parte corrientemente del equipo de combate del samurai. El Kaginawa solía llevar una cuerda con gancho y algunos historiadores lo diferencian del Kagi, el cual era menor y sin cuerda. Fácil de transportar y generalmente más práctico que otros utensilios para la escalada, servía para una gran variedad de misiones ninja. Como medio de infiltración y escape, se llevaba consigo en aquellas misiones en donde se esperaba tener que escalar, ya que no siempre se encontraba un sitio adecuado para entrar en los recintos enemigos. Siendo como era un estratega excepcional, el ninja sabía lo bastante como para evitar regresar por el mismo camino que entró, siempre que fuera posible, y cuando no había escaleras disponibles y la arquitectura del edificio no le daba oportunidades a los ágiles dedos del edificio, el Kaginawa servía como un rápido método de escape, en especial si la amenaza de captura era inminente.
C Para preparar trampas, al ser perseguido por un enemigo mejor armado que él, el ninja enganchaba el Kaginawa en un árbol y otro lugar sin necesidad de A hacer nudos, emboscándose después a cierta distancia del lugar de sujeción.
P Cuando el enemigo se aproximaba, tensaba la cuerda tirando del extremo libre enviando a su perseguidor al suelo. Entonces, era ya fácil inmovilizar al eneÍ migo poniendo en práctica las técnicas de control con cuerda.
T Como medio defensivo, en las raras ocasiones en que el ninja se encontraba sin otra arma que el Kaginawa, éste servía tanto como medio defensivo que U como arma de ataque. Las púas curvadas hacían un buen trabajo en distancias L cortas, desviando las armas enemigas tanto de madera como metálicas, al O mismo tiempo que el arma, mano o manga, quedarían enganchados sin dificultad, redirigiéndose el ataque lanzado y contestando a su vez con otro ataque. Las puntas aguzadas y a veces dentadas de las púas podían desgarrar par4 tes vulnerables de la anatomía, como los muslos, abdomen, garganta y cara. 132
ARMAS NINJA Naturalmente, como ya se mencionó, la cuerda en sí también podía ser utilizada en el combate, pues con diez pies de longitud y manejada con destreza, podían apresar, estrangular o controlar al oponente. El pesado gancho proporcionaba firmeza a la cuerda según el ninja la arrojaba para rodear y trabar a su oponente. Otras vueltas posteriormente tendidas con la cuerda alrededor de los miembros y el cuello, podían entonces tensarse para terminar de anular al oponente.
KAGI Los ganchos utiliza-
dos habitualmente en los mataderos para col-
gar y mover la carne
son una herramienta similar al Kagi, aunque en este caso se le añade una soga. Así se consi-
gue un arma apta para
atrapar el enemigo por su ropa, desgarrarle la
piel y posteriormente huir empleándola como garfio de escalada.
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EL MANEJO DE LAS
Armas punzantes JUTTE (Jitte) Durante el siglo xv se ideó un arma exclusivamente para uso de la policía, la cual recibió el nombre de Jitte y que según para la misión que se fuera a emprender era de un tamaño u otro; la más corta para desarmar a malhechores y la más larga para las peleas a caballo. Precisamente ha sido la más corta la que ha perdurado á través de los tiempos. El Jitte consiste en una varilla de acero similar a la que utilizan los carni-ceros para afilar los cuchillos y con una lengüeta protectora de la mano. También ésta misma lengüeta adopta diversas formas, ya que se podía utilizar exclusivamente para proteger la mano contra golpes o para enganchar Katanas, piernas o cuellos enemigos. Su manejo es bastante fácil de comprender, ya que básicamente se utiliza la punta para picar, el mango para golpear y la guarda curva para enganchar o proteger. Se mueve de manera similar al Sai, aunque también existen técnicas que se asemejan al uso del Tanto o cualquier espada pequeña. Enganchando una cuerda al extremo del mango, se puede uti-C lizar contra enemigos a caballo o para enganchar centinelas, lo mismo que A para trepar. El uso con cuerda como técnica para enganchar los pies de personas que huyen es altamente eficaz y recuerda al de las boleadoras argentinas.
P Las ventajas residen en su corto tamaño y la facilidad que tiene para maneÍ jarse en distancias cortas o largas, así como las distintas posibilidades de transformarse en otra arma. La desventaja está en la carencia de filos laterales, T lo que limita su uso a los ataques frontales, con la punta.
NAGINATA
O Se trata de una antigua arma blanca, grande y voluminosa, empleada casi exclusivamente en la guerra contra ejércitos numerosos. Tiene una gran similitud con la cimitarra árabe, el Kwon-do chino y la alabarda europea, tanto en 4 134
ARMAS NINJA su aspecto como en su manejo y utilidad. En contraste con el diseño de las naginatas de hoy en día, en el Japón feudal había muchas versiones, entre ellas los Sohei y los Benki, así como una poderosa de tremendas proporciones llamada Shobozukurinaginata, que tenía una hoja de más de cuatro pies y mangos de siete pies o más de longitud (los dos metros eran habituales). La razón para que el mango fuera tan grande era el gran peso de la hoja, tan grande que cuando se movía era imposible bloquearlo y hasta las armaduras más robustas se quebraban. La variedad no estaba solamente en la longitud, sino también en la forma de la hoja, pues algunas eran rectas, mientras que otras tenían una ligera curvatura, e incluso podía tener doble filo. Posteriormente la hoja se hizo más pequeña hasta tener apenas uno o dos pies de largo (recuerden que el pie equivale a unos 30 centímetros según el país) y el mango de madera dura de cinco a nueve pies de longitud. La hoja se extiende desde su base a la punta, curván-C dose hacia arriba en su tercio superior y está afilada sólo por un lado. También A posee una a cuatro estrías o canales para sangre, que le confieren robustez a su estructura, mientras que el rukago puede ser tan largo como la hoja. Junto a la P base de la hoja está la tsuba (guardamanos) que tiene por lo común de una a Í cuatro pulgadas de diámetro. Similar a la tsuba de espada, se usa para engan-T char, parar, bloquear otras armas y evitar que se deslice a lo largo del mango. Esto permite a la mano adelantada deslizarse hacia arriba, bajo la tsuba, y eje-U cutar varias técnicas mientras permanece al resguardo de la hoja enemiga. En L el mango suele haber una cubierta decorativa o de protección. Entre los materiales utilizados para decorar el mango están el brocado, madreperla, plata, O cobre y hierro, siendo elaborado con madera lacada y coloreado de negro. En su extremo inferior hay un pomo de hierro que se usa para golpear y como contrapeso de la hoja.
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EL MANEJO DE LAS El peso total de una auténtica Naginata dependía de su composición y longitud. El guerrero necesitaba una gran fuerza y coordinación para usarla efi-cazmente, ya que era una de las armas con mayor dificultad en su manejo. La hoja se guardaba en una vaina decorada. El tajo se lanzaba usando la mano adelantada como un punto de apoyo mientras que se impulsaba hacia arriba con la otra, logrando un golpe mucho más rápido que con la Katana. Con el tiempo hubo una escuela que se dedica-ba exclusivamente a su estudio y manejo, creando el Naginatajitsu del cual se derivaron unos 18 métodos distintos, ahora agrupados en la Federación de NaginataDo. Técnicamente es más aparatosa que otras armas largas, aunque la gran longitud de su mango le hace ser muy destructiva, pudiéndose emplear simplemente como un bo. Usada en los bosques de bambú y zonas con vegetación, la Naginata atravesar árboles y cañas de hasta tres pulgadas de espesor. La práctica del Naginata jutsu se proscribió junto al resto de las artes marciales después de la Segunda Guerra Mundial. Una vez que la prohibición terminó, con la partida de las fuerzas de ocupación, la práctica de la naginata se reanudó en forma de Do (filosófica) más bien que la de Jutsu (guerrera). Respecto a la naginata ninja, era algo distinta, con el mango de madera más corto y su peso más liviano por las maderas y tipos de hojas usadas. A menudo el Ninja ataba en su extremo un Rokushaku Bo (palo de 1,80 Cm), un wakizashi (espada corta) o un Tanto (cuchillo).
NAGAMAKI
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U Inicialmente adoptó el nombre Nasakami, aunque posteriormente se estaL bleció definitivamente la denominación Nagadachi y algo más tarde O Nagamaki, aunque muchos creen que se trata de distintas armas. Sabemos que los Sohei (siglo XVI), emplearon dos armas parecidas, la Naginata y el Nagamaki, pero la creación de nada menos que 425 ryu de Naginata-ryu ori-4 ginó que esta última quedara prácticamente en el olvido. 136
ARMAS NINJA En su origen, era un arma masculina debido a su peso y a que su utilización requería gran cantidad de fuerza y precisión, pero actualmente es usada preferentemente por mujeres, lo mismo que en el periodo Kamakura. El Nagamaki, tiene una hoja relativamente más larga y el mango más corto que la naginata, llegando a medir la hoja hasta siete pies, aunque por lo común estaba entre los tres y cuatro pies de longitud. El mango generalmente era más corto que la medida convencional, unos cuatro pies, dando una longitud total de siete pies, aproximadamente. La técnica de manejo era casi igual en ambas armas, pero su uso predilecto no era contra los jinetes, sino desde el caballo para atacar a los soldados de infantería. BISENTO (Binsen-tô) Es una variación de la Naginata, con una pesada hoja metálica que permite destrozar las armaduras de los adversarios y derribar sus caballos. Es un arma basada en otra similar de origen chino llamada Dao o tao y que fue intro-ducida en el Japón en el siglo V. Ambas, por tanto, son iguales al Kwan-dao chino, pero los ninjas la empleaban de un modo peculiar, siendo adaptada rápidamente por la kunoichi. Su mayor ligereza en comparación con la naginata C y gracias a que tenía un borde punzante y un A doble filo, le permitía hacer alternativamente movimientos circulares de ataque y defensa, P incluso contra varios enemigos o jinetes. Í Además, se podía emplear en interiores con la T misma eficacia que en los espacios abiertos.
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Cadenas
MANRIKIGUSARI El ManrikiGusari, arte de utilizar la cadena, fue inventado, y sobre todo puesto a punto, por un maestro de nombre MasakiToshimitsu Innoshin. Era el jefe del correo en la entrada principal del castillo de Edo. Para proteger esta entrada –un lugar que consideraba sagrado-, de cualquier intrusión sin tener que matar inventó este arte del manejo de la cadena al que dio el nombre de ManrikiGusari, Del mismo modo, será él quien desarrollará este estilo modi-C ficando los puntos fijos de los extremos. Probó, por ejemplo, a enganchar A varios instrumentos pesados, ligeros... y después de varias experiencias llegó a la conclusión de que uno o dos pesos eran suficientes, ya que un número eleP vado de pesos no aportaba ninguna eficacia suplementaria. Í El nombre de Manriki significa «mil poderes», pues la cadena tenía, según la leyenda, mil formas de utilización y esto no parece totalmente desacertado, T ya que cuando se visitan algunos dojos japoneses se puede constatar la rique-U za de esta disciplina marcial. La cadena permite luchar en igualdad de condiciones contra varios adver-L sarios armados. Invisible, silba y da muerte más rápidamente que la más terri-O ble de las serpientes, mientras que lanzada a gran velocidad contra el atacante, podía estrangularlo enrollándole la garganta, o desequilibrarle por los tobillos. 4 138
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KUSARIFONDO Denominado como Manrikigusari en las artes marciales chinas, se trata de una extensión del Manriki, una cadena pesada de 1 a 2 mts de longitud, con 2 pesos en cada extremo. El término kusari se refiere a cadena y en este caso nos habla de un arma ninja de una longitud de 60-70 centímetros, con dos pesos largos en los extremos. Cuando se trataba de una cuerda con pesos se denominaba entonces como kusarinawa. La historia nos lleva hasta el periodo Edo, cuando un samurai de nombre C Masaki Toshimitsu Dannoshi diseñó una cadena corta de apenas 60 centíme-A tros con dos pesos en los extremos, que luego empleó como arma. Después la combinó con una hoz agrícola (kama), pasándose a denominar kusarigama.
P No es un arma que en apariencia proporcione respeto (tampoco ocurre con Í el tessen o abanico), pero manejada con rapidez y siempre que esté dotada de T dos pesos bien sólidos, su eficacia es tal que se puede controlar a varios adversarios al mismo tiempo.
U Los ninjas, además, utilizaban también variantes como el Chigiriki, que L está constituido por un bastón y una cadena, con unos pesos en sus extremos de forma similar a los mazos medievales.
O Su mayor ventaja es que puede llevarse perfectamente oculta, incluso con la ropa veraniega, bien sea dentro de un bolsillo o simplemente ocultándola en la mano. En un momento dado y sin que el enemigo presienta la presencia de 4 143
EL MANEJO DE LAS un arma oculta, la cadena silbará en el aire antes de golpear intensamente la cara del adversario. Un golpe ejecutado con velocidad y precisión puede resquebrajar sin problemas los huesos de la cara, rompiendo dientes y nariz, e incluso penetrando en el cráneo. También, podrá servir para enganchar manos e incluso estrangular. Si se trata de controlar a varios adversarios, se emplearán movimientos circulares a la altura de sus cabezas, hasta que un movimiento oscilante del tronco nos acerque hasta un punto vital elegido y le golpeemos con dureza. Y todo eso sin apenas fuerza muscular y tomando siempre la iniciativa en el ataque.
Armas de hoja y hoz
KAMA
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ARMAS NINJA El Kama era, como puede suponerse, una herramienta agrícola para cortar hierba utilizada ampliamente por los orientales y que consistía en un mango de madera de 30 cm de longitud, de cuyo extremo salía una hoja curva. Su utilización como arma guerrera obligó a reformar tanto la dureza de la madera original como la calidad de la hoja, con el fin de lograr un arma útil contra las katanas del enemigo. El mango tenía la misma longitud que el antebrazo y se le reforzaba con láminas metálicas para poder bloquear con seguridad los tajos de las espadas. Cuando el Kama demostró su utilidad en los combates, los nativos comenzaron a utilizarlos por parejas, ya que mientras un Kama para-ba y desviaba los golpes, con el otro se podía atacar y matar al enemigo. La incorporación en el mango de una pequeña cadena (sin llegar a convertirse en un Kusarigama), permitió que pudiera utilizarse en tajos circulares sin demasiada fuerza, lo mismo que se podían entonces bailar ambos Kamas delante del enemigo con una destreza tal que le desconcertaba. Actualmente, su aprendizaje está concentrado casi exclusivamente en algunos estilos de Kárate y Ninjutsu, empleándose un Kama de muy poco peso y medida, con el fin de evitar lesiones involuntarias. Las ventajas de esta arma radican en su utilización por parejas, su facilidad para el golpe curvo y la posibilidad para defenderse contra golpes. Los inconvenientes están en la relativa lentitud para pasar del bloqueo al ataque y la dificultad para llevarlos adecuadamente en el traje.
KUSARIGAMA
C Como una derivación
A del kama, el Kusarigama permitió tener dos armas
P en una sola mano, aunÍ
que bien empleada sus
T utilidades se multiplicaron.
U Mezcla de la unión
L de un kama (guadaña corta) y un manriquigu-
O sari (cadena de pesos),
antes de su empleo por los ninjas ya era utiliza4 147
EL MANEJO DE LAS da ampliamente por los labradores para defenderse de los ataques de los señores feudales, ya que sus labores cotidianas permitían camuflar perfectamente la cadena y simular que solamente tenían en sus manos el instrumento de labranza. La cadena (Kusari) era de metal con una longitud de 1 a 3 metros y en el extremo de esta un peso de hierro o piedra (omori). El omori solía ser una esfera o un cono, a veces de forma puntiaguda, de unos 3 o 5 cm de diámetro. Sus comienzos fueron en los años 11601170, pero no sería hasta el siglo XVII cuando se establecieron diferentes escuelas para su aprendizaje. El origen del KusariGama que se utiliza en nuestros días es por ello relativamente reciente y se remonta a la época en la que los habitantes de las islas de Okinawa tenían prohibido llevar armas. Los arrendatarios intentaron buscar, en secreto, algunas técnicas que compensaran la no-utilización del sable y fue así como nació el Kobudo, que revalorizaba el manejo del bastón, de los remos, de pequeñas guadañas, de los magales (nunchaku), etc. Hay otros datos que nos llevan a un pasado más remoto, al siglo XII, hasta Yamada Shinryukyan, quien junto a treinta lanceros se le encomendó la tarea de matar a un famoso esgrimidor. Después de muertos los treinta y siete, se cree que el método Kusarigama resolvió la batalla. Este KusariGama no procedía del kama, sino de un arma denominada como NageKama, una especie de lanza provista de una cadena en su extremo, siendo utilizada también en China y en la India. Todo ello nos lleva a establecer que los diferentes Kusarigamas varían C especialmente en la forma de la guadaña, la cual puede ser en forma de cuchillo o de sierra, así como en la largura de la cadena -hasta cinco metros y el A peso final. Esto nos deja entrever las enormes posibilidades de esta arma, uti-P lizada como hoja para dar tajos, como porra golpeante con el extremo del mango, como sierra para abrir brechas en la madera o romper huesos, y como Í elemento de escalada. Otras aplicaciones pueden ser como liana para pasar de T
un lugar a otro, cuerda para estrangular a un individuo lejano y boleadora para golpear sin ruido a un centinela.
U Su manejo por parejas es bastante complicado y se hace imprescindible utiL lizarlo con una cadena muy corta, dejando las cadenas más largas para su uti-O lización simple. Agarrada una de sus partes con la mano se puede golpear con la otra; por ejemplo: cogemos la cadena con una mano y golpeamos con el Kama, o bien bloqueamos con el Kama un ataque y lanzamos la cadena al cue-4 llo del adversario. 148
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U Algunos historiadores aseguran que el Kusarigama es una versión mejora-da de la maza de guerra europea, provista con bola y cadena utilizada para traL bar espadas o simplemente golpear la cabeza protegida con un yelmo. Aunque O no hay pruebas de que tenga ese origen europeo, el Arakiryu puede que fuera el primer sistema en Japón que enseñó esta arma de la mano de Araki Muninsai, quien abrió una escuela cerca de Nagoya. Otros miembros de la 4 149
EL MANEJO DE LAS escuela Isshinryu creen que el inventor del arma fue un monje llamado Jion, del templo Jufuku en Kamakura. Una de las ventajas del KusariGama era que podía ser utilizado tanto por los hombres como por las mujeres, las cuales debían, sin embargo, estar entrenadas en las artes de guerra. Delante de esta arma más de un esgrimista ha encontrado la derrota. Se piensa generalmente que el KusariGama era más eficaz en la llanura donde la cadena era utilizada, dada su longitud de más de 4 metros, para tumbar a los jinetes, dejando a su portador lejos de los golpes mortales. Pero existían también técnicas en las que se utilizaba una pequeña parte de la cadena, lo que permitía su empleo en espacios mucho más reducidos. Era, también, un arma maravillosa para abrir camino entre las filas enemigas o hacer un cercamiento. El KusariGama, por su extraordinaria potencia, impuso un cambio en la construcción de ciertas armaduras y en los combates a corta distancia el Kama en la mano izquierda y la cadena tendida en la mano derecha bloqueaban el ataque. En este caso se utilizaba el arte del ManrikiGusari con sus múltiples técnicas, pues se ignoraba dónde y cuándo la cadena iba a atrapar.
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KYOKETSU SHOGEI
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U Una de las armas más esbeltas, el Kyoketsu Shogei está constituido por un L cuchillo con un gancho, atado a una cadena o cuerda de aproximadamente 3-5 m, con un aro de metal al final de aproximadamente 15 cms de diámetro. O Aunque de manejo complejo, cuando se domina sus posibilidades son amplias, convirtiéndose en poco tiempo en el arma ninja más versátil de todas. Se 4 puede utilizar para subir o bajar de algún sitio, así como inmovilizar al enemi156
ARMAS NINJA go con la cadena y el anillo. En distancias cortas tenemos simultáneamente una daga y una hoz, constituyendo un eficaz escudo con el cual podemos desviar y atrapar armas afiladas sin peligro para la mano. Su uso se amplía cuando nos damos cuenta que se trata de un utensilio adecuado para escarbar, romper maderas y hasta horadar muros. Si disponemos de un experto en cuchillos nos podría cambiar uno de los cortantes filos por una sierra, con lo cual aumentaríamos su versatilidad. 1
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EL MANEJO DE LAS Se dice que fue creada por un Samurai que vigilaba un templo, quien al no poder desenvainar su espada buscó un arma que la pudiera sustituir con igual o superior eficacia. Su manejo involucra ambas manos en la mayoría de las técnicas, aunque en sitios angostos también se puede utilizar con la cadena y la hoz recogidas en una sola mano. 3
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EL MANEJO DE LAS
Pinchos
SAI Es una especie de puñal no demasiado afilado por los lados y algo más por C la punta, el cual contiene dos guardas en forma de asta que le dan buenas pro-A piedades para luchar contra espadas largas. Aunque normalmente se trabajan por parejas, se solía llevar otro Sai de repuesto entre las ropas, ya que la pér-P dida de esta arma era bastante frecuente. Í De manejo bastante complicado y aprendizaje muy largo, el Sai va unido a la práctica del Kárate y el Ninjutsu, sirviendo los ataques y blocajes normales T para el manejo del arma. Las defensas se suelen realizar poniendo la hoja U pegada al antebrazo, mientras se agarra con la mano una o dos guardas. El hábil giro de las muñecas le da una vistosidad especial a su manejo y es pre-L cisamente en el manejo de la muñeca donde reside su efectividad y complici-O dad. Su utilidad es principalmente como arma contra ataques de espada o Bo, ya que aunque pequeña resiste bien los golpes fuertes y puede llegar a enganchar 4 166
ARMAS NINJA en un momento dado el arma del adversario. Podríamos definirla como un puñal para clavar frontalmente (los tajos no son muy efectivos con ella), con la posibilidad de poder desarmar a nuestro adversario si éste porta un palo largo o mucho más una cadena, la cual será muy fácil de enganchar con las guardas del Sai. Como inconvenientes, tenemos la dificultad en su aprendizaje y su complicado manejo en el combate. Como ventajas, su pequeño tamaño y su solidez a prueba de golpes. Para obtener el máximo rendimiento, hay que adquirirlo teniendo en cuenta varias cosas: primero, es necesario determinar qué longitud es la mejor para cada constitución corporal. Lo ideal es que la barra del cuerpo central sobre-salga aproximadamente dos centímetros más allá del codo, protegiendo así el antebrazo. La siguiente consideración es sobre la forma del cuerpo. Existe de cuerpo redondeado o en facetas. La ventaja del tipo redondeado es que resiste el descascarillado, ya que el cromado termina cayéndose la mayoría de las veces. La ventaja del Sai en facetas es su capacidad para lacerar la piel con un fuerte golpe y la desventaja es que con el uso prolongado se desfigurará. Los orígenes exactos del Sai no están claros pero, no obstante, los historiadores han expuesto varias teorías sobre su procedencia. La primera es que el Sai fue importado. Encontrándose en la India, China, Malaca a Indonesia, su presencia en Okinawa probablemente se deba a los contactos con uno o varios de estos países. Existen evidencias que señalan a Indonesia como su lugar de origen y el prototipo de su origen pudiera ser el Trisula, una antigua arma en C forma de tridente. En las antiguas civilizaciones indonesias de Sumatra y Java A se usaba esta arma en combate y en la estatua de Basera una obra de arte japonesa de la era Kamakura la deidad se defiende contra una espada china con P un arma de aspecto muy similar al Sai. No obstante, el arma tipo Sai nunca se Í hizo popular en Japón y fueron los habitantes de Okinawa quienes perfeccio-T naron su uso.
Otros historiadores dicen que el Sai era en su origen una herramienta de U granja en Okinawa, usada para plantar arroz o semillas. Ciertamente, la apaL riencia del Sai se asemeja mucho a la de la horca pequeña. Los defensores de esta teoría creen que el Sai experimentó una transición como herramienta de O jardinería a arma durante la ocupación de Okinawa por los Satsuma. Juntando ambas piezas de acero, el granjero modificó su herramienta en un arma tosca, pero eficaz. 4 167
EL MANEJO DE LAS Por último, otros aseguran que el Sai se diseñó específicamente para defenderse de la espada samurai, pues gracias a su construcción metálica, permanecía intacto incluso ante un golpe de espada. Un guerrero entrenado podía desviar la espada, atrapar la hoja inmovilizándola entre el cuerpo central y la prolongación lateral, y así controlar o romper la espada. La mayoría de los granjeros que usaban los Sai los llevaban en grupos de tres, uno por cada mano y otro más por si decidían lanzarlo como un venablo. Ocasionalmente se ataba una cinta al pomo del Sai de manera que se pudiera recuperar después de lanzarlo.
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Arcos y armas arrojadizas YUMI (Kyu)
P Hay varios tipos de arco en Japón: el Dai kyu, un arco grande que se usa a caballo (Yabusame), el Yumi o arco clásico que se usa a pie y que era el prefeÍ rido del ninja, el Ashi kyu un arco grande que sirve para disparar tumbados y T sujetándole con los pies, y el menos conocido, el Han kyu o arco plegable. La flecha se denomina Ya, y tiene una gran variedad de puntas que servían para U albergar venenos, explosivos o elementos con fuego, aunque la forma más L habitual era de emplearlas como simple proyectil silencioso. Los arcos más O modernos están ya muy lejos de los tradicionales, disponiendo ahora de tenso-res y estabilizadores, y en ocasiones puntos de mira. Indudablemente para seguir gozando de la magia de antaño, cuanto más simple mejor. 4 183
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U La técnica para disparar implica poseer una adecuada fuerza en el brazo L derecho que tensará la cuerda, mientras que el izquierdo controlará la estabilidad y la dirección.
O Las flechas pueden ser de bambú o plástico duro, siendo el requisito imprescindible que sean totalmente rectas y dispongan de las plumas direccio-4 nales. La longitud apropiada de la flecha se establece extendiendo el brazo 184
ARMAS NINJA izquierdo del arco hacia un lado, a la altura del hombro, con los dedos extendidos. La distancia desde la nuez hasta la punta del dedo corazón, más dos o tres dedos de grueso, es la longitud de la flecha. En ocasiones, y para protegerse de posibles errores, en la mano derecha se emplea un guante para tirar de la cuerda, pero no es imprescindible. Para el agarre de la flecha hay dos métodos: el occidental que sujeta la cuerda con los dedos corazón e índice arriba y abajo de la muesca de la flecha, y el oriental que emplea el pulgar y el índice. Este último es menos aconsejable. Para disparar se mantiene una pierna delante, habitualmente la izquierda, con las piernas separadas y algo tensas para conseguir estabilidad. Se inicia una respiración profunda, se tensa la cuerda manteniendo el codo hacia atrás y en horizontal, se mira el objetivo y sin moverse se dispara. Una vez disparado, hay que seguir la flecha hasta el blanco con la vista y después descender las manos con lentitud. Como recomendación, se deben elegir arcos livianos, no demasiado pesados, y que se pueda tensar la cuerda al máximo de nuestra potencia y de la largura de los brazos. En el punto de máxima tensión no debe quedar la cuerda floja en absoluto, ni tan tensa que provoque vibraciones mientras apuntamos el objetivo.
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YARI El uso de la lanza fue en oriente tan habitual como en el resto del mundo, y en la lucha contra ejércitos numerosos o un tropel de atacantes se demostró sumamente eficaz, pues era capaz de traspasar las armaduras más robustas. Además, cuando la distancia ya hacía imposible su manejo, era empleada como un sencillo hanbo o bo, pero ahora dotado de una afilada punta. Por supuesto, arrojadas desde las almenas o lugares altos, su eficacia era menor, pero en caso de acertar con precisión el guerrero era abatido. En cuanto a la variedad de lanzas tenemos: El Kamayari, la cual tenía un filo en forma de arpón que podría apuñalar, atravesar o ser usado para escalar árboles o paredes. El Suyari, o lanza vacía, consistente en un palo con punta de hierro que se usaba como arma para punzar y rara vez, si alguna, se empleaba como proyectil. La Jujyomonjiyari, o lanza de cruz, con una barra cruzada y punta ahorquillada que se estrechaba desde un lado e iba paralela a la punta. Se empleaba para efectuar paradas y atrapar el arma del oponente para desarmarle. La Jujiyari, otra versión de la lanza de cruz, tenía una barra cruzada con una punta de acero de un pie de longitud. Era C empleada para protegerse de los ataques o empujar hacia atrás el arma del con-A trario. La Hozuinyari, consistía en una hoja sujeta al extremo del bastón, con la P que se podían dar cortes además de punzadas. Í La Kudayari, tenía un tubo cilíndrico de cuatro a seis pulgadas de diáme-T tro y un pie de longitud o más, que se deslizaba sobre el palo de la lanza. La Hagiyari, la cual disponía en su extremo de una especie de shoge que U
era empleado para desarmar al enemigo con un giro de muñeca.
L La Magariyari contaba con una barra de hierro de unos treinta centímetros de longitud, perpendicular a la pluma principal de la lama, quedando así una O lanza en forma de cruz. La Etayari era una hoja de hierro mediocre unida a un asta, empleada por los guardias para decapitar al condenado o hundirla en su garganta. 4 189
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Otras armas populares TESSEN (Uchiwa) Aunque al principio el abanico era una norma social, tanto en los hombres como en las geishas, posteriormente fue el último recurso del samurai contra los ataques por sorpresa. La costumbre de obligar a cada visitante a que deja-C ra sus armas a la entrada de las casas fue una excusa para numerosas traicio-A nes, ya que el invitado así desarmado voluntariamente era presa fácil de las Katanas de su anfitrión.
P Para solucionar esto, y dado que el abanico nunca se consideró un arma, se Í elaboraron abanicos de hierro que eran depositados en el suelo al comenzar la conversación. Ante un ataque inesperado, bien sea de Shuriken o de Katana, T el invitado siempre podía parar los golpes y tratar de contraatacar utilizando U para ello los bordes afilados de su abanico. Desplegado, podía desviar las Katanas y golpear con eficacia a su vez, ya que su peso (casi dos kilos) le hacía L ser una buena porra. Su eficacia, pues, estaba en su apariencia inofensiva y la O posibilidad de dar tajos circulares con un pequeño movimiento de muñeca. De aprendizaje muy sencillo, no se requieren cualidades especiales para poder usarlo, bien sea por mujeres o incluso niños. Los inconvenientes son obvios, 4 190
ARMAS NINJA ya que su reducido tamaño se vuelve contra él y de no poseer hojas muy gruesas se suele romper en los primeros momentos de la confrontación. El Tessen no es un arma que veamos habitualmente en los practicantes de ninjutsu, ni siquiera en las kunoichis, pero indudablemente nos encontramos con un utensilio sorpresivo sumamente eficaz. Se fabricaba con diferentes elementos, comúnmente con las costillas internas de bambú para asegurar su flexibilidad, mientras que las dos últimas externas eran de hierro o acero afilado. Eso le convertía en una daga y en un elemento para golpear. Además, podía servir como escudo para repeler elementos arrojadizos o para bloquear ataques con navajas. En ocasiones, y cuando las agresiones eran frecuentes, todo el entramado era de metal. La tela era de seda (Washi), aunque en ocasiones se empleaba un papel fuerte tratado con aceite para evitar su deterioro, lacado y con incrustaciones de oro o plata. Hubo un tiempo en que eran utilizados también por la policía y los asistentes de los samuráis, pues
se consideraba como una insignia o placa distintiva. El motsu shaku era un tessen
elaborado todo con madera de roble, más asequible para el pueblo llano, convirtiéndose así en algo práctico, de poco peso, y mediante el cual se estableció un
C lenguaje no verbal para intimar o
A insultar a distancia. Los dibujos podían contener entonces poemas,
P símbolos de rango y figuras de Í animales. Finalmente, el inocente
T cordel colgante podía soportar en ocasiones una bola de acero con
U púas escondidas entre los hilos.
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TORINAWA Torinawa es un término que significa “capturar con una soga”, y que define una técnica (hojo-jutsu) empleada para atar al prisionero, sujetando brazos y cuello. La importancia de esta técnica era que la soga
que apretaba el cuello estaba diseñada de tal modo que
si el prisionero intentaba escapar se estrangulaba él mismo. Con el tiempo el arte de atar se extendió a otras facetas de la vida, tanto para bul-
tos como para las embarcaciones. Según los expertos, un acusado no
declarado culpable aún era atado usando esta técnica y se le mos-
C traba así en público para que sintiera vergüenza y confesara su delito sin más presiones. En ocasiones, en lugar de afianzar el lazo con nudos, el alguacil A cogía el extremo de la soga y caminaba delante del prisionero, como si lleva-P ra un perro u otro animal. Esta tortura psicológica parece ser que daba buen resultado y los reos confesaban hasta lo que no habían hecho. Í
T La longitud habitual de estas sogas de cáñamo era de 25 pies de largo (un pie tiene 28-33 cm), y debía tener de diámetro unos 6 milímetros, pues en oca-U siones iba a ser utilizada para ahorcamientos o crucifixiones. También se le L sujetaba para arrojarle lanzas o para quemarle en la hoguera.
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KEMURIDAMA Las Kemuridama o bombas de humo están hechas con diferentes materiales como el que describimos: Humo blanco 4 porciones de azúcar 6 porciones de nitrato de potasio (salt Peter) Caliente esta mezcla sobre una llama baja hasta que se derrita, revolviendo bien. Viértala en un envase y, antes de que solidifique, inserte algunas cerillas (fósforos) en la mezcla para utilizar como fusibles. A nivel de entrenamiento y juego, basta con introducir harina o polvos de talco en un globo que luego inflaremos hasta el máximo de su resistencia. Al tirarlo al suelo con fuerza propagará los polvos por el ambiente sin peligro para nadie.
METSUBUSHI Los Metsubushi o polvos cegadores, son aquellos elementos utilizados para dañar la vista del adversario, entre los cuales se cuenta la arena, el polvo, líquidos, etc. Como vemos, estos elementos los podemos encontrar fácilmente a nuestro alrededor, aunque los ninjas emplearon mezclas de harina con pimienta, vidrio, metal molido, venenos... El ninja solía cargar estos elementos en C cáscaras de huevos o en sacos de papel, aunque también los proyectaba A mediante cerbatanas o al final de la saya de las espadas.
HASHIGOYARI Í
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EL MANEJO DE LAS El Hashigoyari es la lanza-escalera, el cual tenía el mismo uso que el Kamayari, siendo utilizado también como utensilio para medir. Este utensilio tenía orificios hechos a distancias fijas unos de los otros para insertar clavijas o estacas para ser usadas como escaloncillos y facilitar su uso como herramienta de escalada. Como los espacios entre las clavijas eran de distancia fija, se prestaba para medir.
MIZUGUMO El Mizugumo es un pequeño flotador para cruzar el agua, aunque también se utilizaba en terrenos pantanosos. Tiene un asiento inflable que rodeaba la C cintura del Ninja y lo mantenía suspendido en el agua. En ocasiones se empleaba como zapato.
HASAMIBUNE Í Este cajón de madera era uti-
T lizado por los ninja para llevar a
U través de la superficie del agua
el equipo necesario para su
L misión y que no podían llevar en
O su cuerpo. También se empleaba en ocasiones como barca improvisada. 4 198
ARMAS NINJA Cuando debía transportas muchos elementos ataba varios de ellos, uno a continuación del otro, denominándose entonces como Tsugibune, convirtiéndose así en una pequeña barca.
KYORORO KAKI Es utilizado para forzar ventanas.
KIKIGAMI Es utilizado para escuchar conversaciones tras las paredes.
TSUBOGIRI Herramienta utilizada para barrenar, parecido a un tenedor grueso de 2 puntas, el cual se coloca en la madera para hacer agujeros.
SHIKORO El Shikoro o sierra pequeña, posee un filo fino usado para penetrar paredes y puertas de madera.
YAJIRI El Yajiri es una sierra un poco más grande que el Shikoro, pero mucho más pesada y gruesa.
Otras armas menos conocidas
A Los Ozutsu (cañones) que construían podían ser usados para lanzar una llu-via de pequeños proyectiles hacia su objetivo.
P Otras pequeñas bombas eran las Metsubushi (cerradoras de ojos) rellenas Í con arena y a veces con virutas de metal. Esta arena era transportada en seg-T mentos de bambú o en huevos ahuecados y, una vez arrojada, la cáscara se partía diseminando su contenido.
U También empleaba minas terrestres que activaban mediante un detonador L mecánico o una cuerda empapada en aceite y encendida. Los Ashiaro eran suelas de madera unidas al tabi del ninja (zapatos grue-O sos con separación para el dedo pulgar). Estos ashiaro se tallaban para que parecieran una pezuña de pata de animal, permitiéndole al ninja dejar huellas que no serían reconocidas por los guardias. 4 199
EL MANEJO DE LAS También tenían un pequeño anillo llamado Shobo usado en el dedo del ninja para el combate con las manos. Tenía una pequeña protuberancia de madera usada para golpear puntos vitales del enemigo provocando un dolor agudo, y parálisis temporal en algunos casos. El Suntetsu es muy similar a un shobo y consistía en una pequeña pieza oval de madera fijada al dedo por una pequeña atadura. Cuando se golpeaba con él se apuntaba a puntos de presión como el plexo solar. ARMAS ESPECÍFICAS DE LA KUNOICHI
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ARMAS NINJA Formando parte de su vestimenta, la kunoichi desarrolló cuatro armas básicas: Los zapatos de madera (Geta) que empleaba para patear huesos y articulaciones. La faja (Obi) que proporcionaba una atadura flexible para enredar y controlar los miembros de los enemigos. El peine de madera (Kushi), empleado para rastrillar los ojos de su víctima. El paraguas (Kasa), con diversas utilidades como punzar con su extremo, golpear con el conjunto o empujar y protegerse cuando estaba totalmente abierto. De entre su arsenal oculto destacamos: El anillo (Kakute) que habitualmente llevaba girado para que no se vieran las púas para desgarrar la piel. Un dedal (Kaiken) que llevaba incorporado una daga afilada. Una bolsa pequeña que contenía diez Nekote (uñas de acero) con las cuales la Kunoichi convertía sus dedos en hojas afiladas. En el caso de tener que huir, el guerrero hembra estaba armado con dos armas:
A Un recipiente delgado que alojaba un manojo de Hari (agujas afiladas) para lanzar al enemigo.
P Una bolsa conteniendo Metsubishi (polvos cegadores) que impedía al Í mismo tiempo la visión y la respiración.
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EL MANEJO DE LAS Otras fotografías
Manrikigusari vs tanto 1
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Ataque al centinela con manrikigusari
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EL MANEJO DE LAS 4
Tanto doble vs nunchaku
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EL MANEJO DE LAS 4
Un paraguas como arma
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ARMAS NINJA 2
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EL MANEJO DE LAS 4
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ARMAS NINJA
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EL MANEJO DE LAS 2 3
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Shogue
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ARMAS NINJA ÍNDICE Capítulo 1: La confusión de la historia…………….......................…….9 El ninja histórico…….................................................................…..11 Armamento ninja….............................................................................….16 Los ninjas en el teatro y el cine…......................................................…18 Capítulo 2: La historia del ninjutsu, según hemos leído….........…….21 Períodos…....................................................................................…22 Capítulo 3: Habilidades el ninja…...............................................……..29 Las habilidades especiales…..........................................................….33 La agresión en la calle………..........................................................…..35 La invisibilidad……........................................................................……37 Sigilo…………..................................................................……38 Sea invulnerable…................................................................................…41 El camuflaje……...............................................................................……44 Capítulo 4: Armas, utilidad, manejo y características…….........……47 Espadas……..................................................................................……..47 Garras…........................................................................……73 Armas arrojadizas….......................................................................……76 Bastones…........................................................…………96
Bastones articulados…….................................................................…..121 Armas de enganche…….................................................................……131 Armas punzantes…..............................................................................134 Cadenas……...............................................................................……..138 Armas de hoja y hoz……….......................................................……144 Pinchos………….......................................................................……….166 Arcos y armas arrojadizas……..............................................…….183 Otras armas populares……………................................................……..190 Otras armas menos conocidas…………....................................……..199 ARMAS ESPECÍFICAS DE LA KUNOICHI……..............………200 Otras fotografías………............................................................………202
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