FORMACIÓN
FUNCIONES
Es el resultado de la interacción entre la actividad del niño en cuanto buscador de contacto y vinculación, y la actividad de los p adres.
1. Objetivamente, favorece la supervivencia manteniendo cercanos y en
- Sincronía Interactiva: En los primeros meses el adulto controla la
2. Subjetivamente, busca seguridad en la presencia y contacto con las figuras de apego.
interacción y se adapta al ritmo biológico del niño, éstos muestran capacidad para sincronizar su conducta con los cuidadores.
contacto a niños y progenitores o quienes hagan su función.
complementarias: 3. Otras funciones complementarias:
- Desformalización: El código de comunicación es poco o nada
a.
convencional. Los cuidadores con la mirada rompen el espacio interpersonal, usan fonemas, palabras que no existen, ponen emoción a sonidos, se tocan, abrazan, acarician, etc.
b. c.
- Multifuncionalidad de la Interacción : La interacción no es únicamente prestar cuidados físicos y cognitivos, sino afectivos, placer y juego. Por ello, los niños no se vinculan preferentemente a quien satisface sus necesidades fisiológicas, sino a quien le ofrece una interacción en que el afecto, placer y juego tienen un rol fundamental.
d.
Ofrecer Ofrecer y regular regular la estimul estimulación ación que necesita necesita un un niño niño para su desarrollo. Adecuadas Adecuadas relaciones relaciones de apego apego fomen fomentan tan la salud salud física física y psíquica. Las figura figurass de apego apego tienen tienen influenc influencia ia decisiva decisiva en el desarrollo desarrollo social. Las condu conductas ctas de apego apego tienen tienen un ffin in en sí mismas, mismas, pueden pueden convertirse en juego placentero.
EL APEGO Es un lazo afectivo fuerte desarrollado por los niños y personas, estableciéndolo con pocos individuos. Considerado como una conexión que impulsa a buscar la proximidad y contacto a lo largo del tiempo, con el fin de perdurar.
DESARROLLO EN LA PRIMERA INFANCIA Fase 1. (0-3 meses). Desde los primeros momentos las personas tienen un
TIPOS Apego seguro: Los niños exploran activamente su entorno en presencia
lugar especial entre los elementos que rodean al bebé, sus características perceptivas atraen su atención, y a los 3 meses tenemos una progresiva orientación de las conductas y señales emocionales hacia los humanos.
de la figura de apego, en ausencia decae, pero al regreso muestra alegría y activa sus conductas de apego hacia ella. Al ser fácilmente consolados y reconfortados, en breves recuperan la exploración. (65 y 70% dentro de categoría).
Fase 2. (3-7 meses). El desarrollo de la percepción visual e intermodal
Apego ansioso ambivalente: El niño explora los entornos en presencia
permite al bebé integrar percepciones de la cara, olor, voz y otras de quien le cuida, llevando el reconocimiento de la figura, sin rechazar desconocidos. Entre las conductas infantiles que afirman el reconocimiento materna en este período está: sonrisa, vocalización, llanto, interrupción diferencial del llanto.
de la madre, sin alejarse, y cuando lo hace hay ansiedad por la separación, y el recuentro es ambivalente, la quiere cerca y lejos al mismo tiempo, son niños difíciles de consolar.
Fase 3. (8-12 meses). Las figuras de apego actúan como base que da seguridad y que permite explorar ambientes e interactuar con desconocidos. La seguridad emocional depende de los vínculos de apego, el tipo de relación con los iguales y la autoestima.
Apego evitativo: Se muestran pasivos o indiferentes, manifiestan escasa o nula ansiedad ante la separación y evitan contacto cuando la figura de apego vuelve, en relación a extraños no muestran inquietud. También demuestran inseguridad. (20% dentro de categoría).
Fuente: Fuente: López S. F. (2014) El desarrollo del apego en la infancia. Desarrollo Desarrollo afectivo y social, 1, 40-59 4 0-59
2. Elabore un cuadro comparativo comparativo entre el desarrollo emocional de la primera infancia, segunda infancia y en la edad pre – escolar y escolar.
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Las señales de interés y alegría comunican a los padres la disposición del niño a mantener la interacción, les informan que lo hacen bien y les motivan a prolongar la interacción, las de ira inducen a los padres a cesar la actividad que altera al bebé, y la tristeza y miedo señalan que necesita protección y consuelo.
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La experiencia emocional como proceso interno toma forma lingüística: “estoy triste”, “estoy contento”, “estoy asustado”. Se requiere que el niño sea capaz de un conocimiento objetivo de sí mismo, de evaluarse a sí mismo.
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Los niños saben que las situaciones causan emociones, descubriendo los nexos entre acontecimiento – emoción y generalizan este conocimiento a otras situaciones, y comprenden ciertas emociones en sí mismos y los demás. Luego explican emociones en términos de deseos resultados y comprenden: a) No es la situación objetiva, sino la evaluación personal lo que explica la emoción, b) Que ésta no sólo depende del deseo, sino también de creencias y, c) Que éstas pueden ser erróneas.
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A lo largo de los dos primeros años, las emociones se diferencian más entre sí, se hacen más selectivas y se manifiestan con mayor rapidez, intensidad y duración.
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Los padres con el reconocimiento del estado emocional, imitación de su expresión emocional y la etiqueta verbal sensibilizan al niño a las señales emocionales, proporcionándoles las conexiones en la conciencia entre respuestas emocionales y estados subjetivos.
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Se da un avance respecto a la comprensión de la posibilidad de experimentar emociones contrarias en una misma situación y pueden explicar esta ambivalencia haciendo referencia al recuerdo de experiencias pasadas y de procesos internos. El control de la expresión tiene 2 funciones: protegerse a sí mismo y a los otros.
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La capacidad para interpretar las expresiones es clara a los 8 - 10 meses, cuando dirigen su mirada a la madre y utilizan la información de la expresión de ésta, como referencia, para valorar la situación y regular su conducta.
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Decrece la expresión abierta de ira, aumentando la agresión verbal y la habilidad para hablar de lo que le frustra o encoleriza. (Descenso del llanto).
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Manejan el recurso de la distracción conductual y elaboran un mecanismo de distracción cognitiva complejo, convirtiéndolo en una estrategia efectiva para afrontar emociones en los que no es posible un cambio de situación o una huida de la misma.
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La referencia social indica que, a finales del 1er año, los niños son capaces de responder adecuada y selectivamente a las expresiones faciales de la madre, y en un gran indicador del papel organizador de las emociones.
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El lenguaje interviene también en la capacidad de modificar los estados de los otros, expande la capacidad de consuelo, de divertir a los demás, de compartir el humor y permite mayor intimidad en las relaciones sociales.
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Desde los 7 años son conscientes que la emoción pierde intensidad a lo largo del tiempo porque se deja poco a poco de pensar en lo que la causó. Una importante tarea evolutiva es aprender a expresar la emoción de manera que tenga consecuencias satisfactorias para sí y los demás.
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Los niños necesitan que los tranquilicen si están angustiados. Cuando esto sucede, desarrollan una percepción de seguridad y confianza con los de su alrededor. Usan esas experiencias positivas para aumentar sus estrategias de tranquilizarse a fin de seguir organizados, empezando a manejar sus sentimientos.
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Los niños son capaces de una autoevaluación. El orgullo y vergüenza no se identifican con alegría y tristeza, pues éstas acompañan al éxito y fracaso al margen de la dificultad y esfuerzo.
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La edad incrementa las experiencias emocionales, por lo que los recuerdos que sustentan la respuesta empática son variados y profundos. La comprensión de la emoción del otro se basa en la experiencia de que las situaciones generan ciertas experiencias, ampliándose con el conocimiento situacional.
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Los cuidadores les dan un modelo y apoyan a los niños para que aprendan a dar una pausa entre los momentos de sentir algo y de tomar acción.
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Se muestran patrones de respuesta para vergüenza y culpa, con intentos de reparación a la culpa, entre el año 2 y 3.
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El progreso de la empatía requiere un distanciamiento psicológico que permita identificar las necesidades del otro, las condiciones que pueden mejorar su situación.
Fuente: López S. F. (2014) El desarrollo del apego en la infancia. Desarrollo afectivo y social, 1, 99-115
3. Elabore un cuadro sinóptico de acuerdo a las diferentes teorías sobre el desarrollo de la moralidad.
Centrado en el mundo afectivo. Su objeto de interés son los afectos morales (cul pabi li dad). El determ inante de l a moral l o const ituye n las e xpe rienci as afectivas de la infancia, experiencias de enfrentamiento con normas imperantes en el ambiente (parentales).
- El niño se rige por sus impulsos, que trata de satisfacer sin sentir límite por ninguna regla moral. - Seforma el yo y,con él, aparece la moralidad. - Con la formación del superyo resultado de la resoluci ón del compl ejo de Edipo, se produce el paso decisivo en la génesis de la conciencia moral.
La moral heterónoma:
. Pi aget conci be l a moral como un si stema de reglas sobre las acciones y relaciones i nterpersonal es que el niño construye e n su práctica social, de relaciones con adultos y otros niños. La moral surge de la comprensión consciente de dicha práctica social. A su vez, dicha comprensión va a regular la práctica social. Centrado en el componente cognitivo de l a moral idad. Su objeto de interés es el razonamiento o juicio moral. El desarrollo moral surge de la construcción por parte del sujeto, a partir de su propio desarrollo cognitivo y estimulación que le da la interacción social, de criterios morales cada vez más ricos, a partir de los que ejerce sus juicios morales.
Resultado de la interacción de: el egocentrismo representacional del niño y la relación de autoridad del adulto con él.
La moral autónoma: Se supera el egocentrismo, el realismo moral y manifestaciones. Por otra part e, las rel aci ones de presión y respeto unilateral hacia el adulto sustituidas por relaciones de cooperación con los pares, basadas en igualdad y respeto mutuo.
Centra su estudio en el juicio moral. El desarrollo moral está formado por auténticos estadios o estructuras jerárquicas de conjunto.
Los juicios sociales se organizan dentro de distintos dominios de pensamiento, distinguiendo dos fundamentales: el de la morali dad y el de convenci ón. Su di ferenci a resulta a partir de las experiencias e interacciones sociales asociadas a los distintos tipos de acontecimientos. Justin Aronfreed. La conducta moral es el resultado de un condicionamiento de ansiedad. El proceso por el que se adquiere consiste en la asociación del castigo y la ansiedad que provoca, con señales que acompañan a la transgresión, de modo que adquieren un papel de contr ol afectivo sobre la conducta. . Centradas en el estudio del componente conductual de la moralidad. Su objeto de interés son las conductas de resistencia a la transgresión y otras manifestaciones de internalización moral como el retraso de la gratificación, las respuestas de confesión y l as respuest as de cul pa. El factor determinante es el ambiente.
Albert Bandura. El condi ci onamie nto cl ási co y el operante no son suficientes para dar cuenta de la conducta moral. Se explica a través de los dos procesos básicos del aprendizaje social: la observación y el refuerzo directo. Centrado su est udi o en: el influjo de las técni cas disciplinarias en la internalización moral y el papel de las emociones en la moral. Hoffman ha subrayado el papel motivacional de emociones como la empatía y la culpa en la conducta prosocial, y ha profundizado en el desarrollo de la empatía y su relevancia en la moral.
Fuente: López S. F. (2014) El desarrollo del apego en la infancia. Desarrollo afectivo y social, 1, 181-205