Trabajo de Cátedra de la paz
Grupo
Nobel de la paz : Dalai Lama
Renato Vallejo Ronald De la Cruz Ma. Belén Patiño Renato Cruz Ma. Auxiliadora Ortiz Katherine Espín
Profesora
Ivonne Nuñez
Fecha de entrega
14 de junio de 2013 1
Índice Contenido
Página
Introducción………………………………………………………………………………………………….2 Historia de los Dalái Lama………………………………………………………………..……………3-4 Biografía de Tenzin Gyatzo……………………………………………………………..……………..5-6 Premio Nobel de la Paz para Gyatso………………………………………………………………6-7 Conflicto en el Tíbet……………………………………………………………………………………….7-8 Conclusiones…………………………………………………………………………………………………..9-10 Bibliografías…………………………………………………………………………………………………….10
Introducción “Es muy importante generar una buena actitud, un buen corazón, tanto como sea posible” son las palabras, humildes y unificadoras, que son mencionadas por la persona de quien narraremos en el presente trabajo, el décimo cuarto Dalái Lama Tenzin Gyatso, en una de sus muchas citas en la búsqueda de la paz en su pueblo y del mundo. Realmente el camino que ha seguido Gyatso es digno de profundizar y llegar en detalle ya que podemos encontrar cómo ha sabido mantener una lucha en la que siempre impera el proceder pacífico y del diálogo. El tema principal del accionar del Dalái Lama es la búsqueda de la autonomía del Tíbet, la región china que fue ocupada por más de 50 años por manos del país comunista, cuando el Nobel apenas tenía 15 años y era el Jefe de Estado tibetano. De ahí en adelante, ha habido eventos recurrentes en donde ha existido la violencia, situación que deploró Gyatso y por lo cual constantemente ha buscado métodos para concientizar la paz, siendo su período más activo en el último cuarto del siglo XX.
“Es muy importante generar una buena actitud, un buen corazón, tanto como sea posible”
2
El Dalái Lama Historia de los Dalái Lama Para comprender mejor la vida del actual Dalái Lama Tensin Gyatso, es necesario explicar la historia del budismo tibetano y en particular la de la escuela Guelug, a la que pertenece el Dalái Lama. Después de la muerte de Tsóngkhapa, el maestro fundador de la escuela Guelug, su sobrino Guendun Drup fundó el monasterio de Tashilhunpo en Shigatse. Él era el tercer abad del monasterio de Ganden, considerado la reencarnación del segundo abad del mismo monasterio. Fue así como surgió la sucesión a través de reencarnaciones. En aquella época existían sólo dos líneas de sucesión: la de las reencarnaciones de Guendun Drup y la de su maestro, el primer abad de Tashilhunpo. Más adelante, estas dos líneas se conocieron respectivamente como la del Dalái Lama y la del Panchen Lama. El actual Dalái Lama es el decimocuarto de su línea de sucesión y el último Panchen Lama ha sido el décimo de su linaje.
La figura del Dalái Lama representa el principio del ideal del Bodhisatva, que se comprende en el contexto de la idea del karma y el renacimiento, que expresan que uno no sólo vive una vida en esta tierra, sino que experimenta una sucesión de vidas. Según el budismo y sus enseñanzas, el renacimiento ocurre debido a los deseos, aversión e ignorancia que quedan en la conciencia de una persona al morir. Si mediante la práctica espiritual se logra eliminar esos tres venenos, se alberga un gran estado de paz, amor y sabiduría, donde se deja de estar atado a la vida y a la muerte y no se renace más. Según el mahayana, se presentan dos posibilidades: disolverse en el nirvana o elegir renacer para ayudar a los demás seres. Esta elección se basa en la leyenda del Bodhisatva Avalokiteshvara (“el señor que mira hacia abajo”), quien fue un gran yogui que estaba a punto de alcanzar la iluminación. Sin embargo, al alcanzar la orilla de un gran océano de luz, todos los estados elevados de conciencia que había alcanzado y todo lo que había experimentado desapareció, y solo percibía ese océano de luz. Tuvo un gozo muy profundo y supo que al fin iba a “fundirse” con la misma realidad. De repente escuchó un sonido que parecía venir por debajo suyo y se dio cuenta que eran muchas voces que gritaban y gemían. Era un sonido cada vez más intenso, por lo que dejó de fijarse en el gran océano de luz y miró hacia abajo, donde vio a millones de seres que sufrían de diferentes maneras, pero sobre todo por su ignorancia y su falta de instrucción espiritual. Pensó: “¿Cómo puedo abandonar a esos seres? ¿Cómo puedo fundirme en este océano de luz y salvarme sólo yo cuando en el mundo hay tantos que necesitan ayuda?”, por lo que regresó al mundo.
3
Al Dalái Lama se le considera una manifestación de Avalokiteshvara, el bodhisatva de la compasión, y el Panchen Lama es una manifestación de Amitaba, el Buda de la Luz Infinita. Desde su más tierna infancia, los Dalái Lama reciben una intensa enseñanza que cubre todos los ámbitos de la vida budista, donde aprenden a meditar siguiendo un difícil curso de estudio y de práctica. Cuando un Dalái Lama llega a la mayoría de edad, ya conoce muy bien todos los aspectos de su tradición. No obstante, su autoridad y prestigio nunca es visto como una suprema autoridad doctrinal, es decir que no es el responsable de establecer un modo de practicar. La posición del Dalái Lama en el budismo tibetano no es análoga a la del Papa de la Iglesia Católica Romana, ya que este define la moral y el dogma, pero el Dalái Lama no.
Han existido 14 Dalái Lamas a lo largo de la historia, de los cuales se puede destacar a los que son considerados los más importantes y que han dejado mayores aportes: Gyalwa Gendun Gyatso (1475 – 1542). Segundo Dalái Lama. Ubicó la residencia definitiva para los Dalái Lama en el monasterio de Drepung, en la ciudad de Lhasa, Tíbet, cuya práctica fue seguida por sus sucesores. Descubrió el Lhamo Latso, un lago sagrado en el cual los practicantes avanzados pueden encontrar visiones acerca de quién será el nuevo Dalái Lama. Gyalwa Sonam Gyatso (1543 – 1588). Tercer Dalái Lama. Fue el primero en recibir aquel título y se le atribuye el asentamiento de esta civilización en el Tíbet. También logró convertir a los mongoles hacia el budismo y llevarlos por el camino de la paz. Gyalwa Lobsang Gyatso (1617 – 1682). Quinto Dalái Lama. Asumió el gobierno del Tíbet. Gushi Khan, un importante líder militar mongol, fue quien lo ayudó en la unificación de la región del Tíbet al conquistar otros pueblos cercanos, y quien le dejó toda la autoridad del lugar. Construyó el Palacio de Potala en Lhasa, desde donde ejercía el poder. Gyalwa Thubten Gyatso (1876 – 1933). Décimo tercer Dalái Lama. Recordado como uno de los grandes después de periodos fallidos y como un gran líder tanto en el aspecto de gobierno como en lo espiritual. Le tocaron las invasiones por parte de los ingleses, así como del ejército musulmán de la China Manchú. A pesar de los ataques logró conservar su nación como un estado independiente. Tenzin Gyatso (1939 – a la fecha). Es el actual Dalái Lama. Fue reconocido desde los dos años de edad como tal y ha sido blanco de algunos ataques, así como grandes reconocimientos como el Premio Nobel de la Paz en 1989. No pudo combatir la invasión de China y decidió llevarse a cerca de 70 mil exiliados a la India y, aunque fue invitado a regresar al Tíbet, prefirió seguir conservando la esencia de su doctrina en otros lugares como Nepal y Bután. Su mandato ha sido fuente de inspiración de algunas películas como Siete Años en el Tíbet.
4
Tenzin Gyatso: Actual Dalái Lama El Dalái Lama es el líder político y espiritual de los seguidores del budismo tibetano, también conocido como Gyalwa Rinpoché (Precioso Vencedor), Kundum (la Presencia) o Portador del Loto. El XIV Dalái lama, Tenzin Gyatso, nació el 6 de julio de 1935 en Amdo, en el este de Tibet, con el nombre de Lhamo Dondhup, fue el noveno de los dieciséis hijos de un matrimonio de agriculturores. En 1932 el XIII Dalái Lama realizó una estremecedora profecía acerca del futuro de su país, el describió muy vívidamente el futuro que veía y temía para el Tíbet, en el cual sacarían a la gente de sus casas, los monjes serían desalojados de sus templos y toda la cultura que él había trabajado para proteger quedaría reducida a escombros, él dijo que a consecuencia de eso moriría antes de tiempo, ya que cuando esto ocurriera él querría tener una edad en la que pudiera servir de ayuda. En 1937, tras la muerte del XIII Dalái Lama, un grupo de monjes emprendieron un viaje desde Lhasa por todo el Tíbet para encontrar la siguiente encarnación del espíritu de su gobernante. Ellos iban guiados por diferentes claves místicas y de visiones de la pequeña aldea de Taktser, al noroeste del Tíbet, allí conocieron al pequeño Lhamo Dondhup con apenas dos años de edad. El grupo de búsqueda que llegó a la casa de los padres, fue un grupo de monjes ancianos disfrazados, el mayor de los monjes se acercó al pequeño para poder observarlo mejor y es ahí cuando el niño comienza a jugar con su rosario y con el dialecto del Tíbet, el cual no era conocido en Amdo y que sus padres no conocían, le habló al monje y le dijo que ese rosario le pertenecía. Como era costumbre, le realizaron una serie de pruebas y exámenes, incluyendo la conocida del reconocimiento de pertenencias, en la que demuestra que reconoce las cosas que fueron suyas en su vida anterior. En poco tiempo los monjes estuvieron convencidos de que este niño era la XIV reencarnación del Dalái Lama. Una semana después de su cuarto cumpleaños fue llevado al palacio de Potala en la capital del Tíbet. En una ceremonia oficial se lo declaró como el XIV Dalái Lama y recibió un nuevo nombre tibetano, Tenzin Gyatso, que significa “Océano de sabiduría”. Su rigurosa educación se inició de inmediato, supervisada por una serie de tutores personales que gobernarían el país hasta que él cumpliera 18 años. Pese a que solo era un niño se estaba preparando para tomar el control espiritual y gubernamental de su país. A la edad de 7 años ya estaba recibiendo a los emisarios del Presidente de Estados Unidos, durante la Segunda Guerra Mundial. A la edad de 11 años vio el estallido de una guerra civil a su alrededor en Lhasa, compitiendo por el poder. Su tiempo libre estaba limitado a los festivales de budismo tibetanos celebrados por toda Lhasa. En 1949, la recién formada República Popular de China bajo el liderazgo de Mao Tse Tung, anuncia su plan para enviar tropas de su ejército a liberar al Tibet. La República Popular de China tomó al Tíbet por asalto en Octubre de 1950 y comenzó a abrirse paso hasta la capital Lhasa. La única salvación de los tibetanos era su protector el Dalái Lama, a quien le faltaba aun 3 años para llegar a los 18, antes de que las tropas Chinas llegaran a Lhasa, el Dalái Lama
5
nombró dos primeros ministros tibetanos, luego por su propia seguridad se fue a un monasterio en el sur del Tíbet. El Dalái Lama envió una delegación a Beijing para intentar negociar con China, pero en vez de negociar, China forzó a los delegados a firmar un acuerdo de 17 puntos en el que se afirmaba que el Tíbet había acordado retornar a la madre patria China. En 1954, a los 19 años, el Dalái Lama fue invitado por el líder Mao a visitar China junto con Panchen Lama, el Dalái Lama esperaba persuadir a Mao relajar la presión sobre el Tíbet y también aprender de él. Mao encantó al Dalái Lama con sus planes para el Tíbet, inspirado quería dar por cierta la palabra de Mao que China solo quería ocupar el Tíbet para modernizarlo y que como parte de China al Tíbet se le permitiría preservar su cultura. El engaño se hizo claro en la última reunión con Mao, cuando el líder se acercó y le dijo: “Pero por supuesto, la religión es como el veneno”, el budismo tibetano era el alma y corazón del Tíbet sin esto él sabía que el país estaría perdido, el Dalái Lama regresó a casa temiendo el desastre. Como monje budista el Dalái Lama solo podía orar y aconsejar la no violencia. En 1956, el Dalái Lama fue invitado a la India, el aceptó de inmediato ir, durante la visita el Dalái Lama tuvo una reunión secreta con el Primer Ministro de India, el Dalái Lama solicitó asilo en India, la cual le negaron y volvió al Tíbet. El Dalái Lama decidió exiliarse en India, considerando que su partida iba a liberar de la opresión a su pueblo, en este viaje el Dalái Lama junto con 80 mil tibetanos cruzaron los Himalayas a pie. Antes de abandonar el suelo tibetano, el Dalái Lama formalmente repudió el acuerdo de los 17 puntos al que China obligó al Tíbet y luego informó que formaría un nuevo gobierno tibetano fuera del Tíbet. El 31 de Marzo de 1959 el Dalái Lama cruzó la frontera hacia India y hacia el exilio. Al darse cuenta que su vida en exilio podía ser permanente, el Dalái Lama de 24 años y su pueblo se establecieron finalmente en Dharamsala, Himachal Pradesh, al Norte de India; en 1963 estableció una constitución democrática para el Tíbet al tiempo que fundó más de 200 monasterios y varios centros de enseñanza. Desde su exilio ha venido testificando en todos los foros internacionales la pérdida de la soberanía de su nación, ha viajado por el mundo para promover los derechos del pueblo tibetano, sus enseñanzas han sido escritas en varios libros y través de los años se ha convertido en una persona internacional, conocido como una persona de paz llena de energía, jovialidad y principalmente sabiduría. Le concedieron el premio Nobel de la Paz en 1989, en 1990 publicó su autobiografía, Freedom in Exile y en 2007 recibió la Medalla de Oro del Congreso de los Estados Unidos.
Premio Nobel del Dalái Lama Tenzin Gyatso El 10 de diciembre de 1989 le fue concedido el Premio Nobel de la Paz por su resistencia constante al uso de la violencia en la lucha de su gente para recuperar la libertad del Tíbet. El motivo principal del premio nobel de la paz fue por su oposición pacífica a la dictadura china en el Tíbet, la postura que adoptó frente a esta imposición del gobierno chino fue distinta a la que todos se esperaban; fue dócil, paciente y contaba con una gran sabiduría que le permitió
6
expresar la preocupación por su pueblo, conmover a todo el mundo y hacer un llamado a su atención para valerse de eso y apelar a la posición de china en el Tíbet. Efectivamente, Dalái Lama en su premiación al Premio Nobel de la paz realizó un discurso en el cual con sencillez y mucho tacto comenzando con un reconocimiento de que básicamente todos somos humanos y eso es lo que nos une, reconociendo también que en nuestra esencia siempre hay un deseo de encontrar la felicidad; recalcándolo como una verdad universal, Después expuso la triste situación de su Pueblo al encontrarse en busca de algo que es necesario, su libertad. El discurso fue básicamente acerca de la responsabilidad de cada uno de nosotros con el resto del mundo entero y nuestro compromiso por mejorar con nosotros y para el mundo, al final concluyó con la siguiente oración:
“Por tanto tiempo como dure el espacio y tanto tiempo como permanezcan seres vivos, hasta entonces, pueda yo también permanecer para disipar la miseria del mundo”. Las reacciones que se obtuvieron una vez efectuada la premiación de Tenzin Gyatso fueron diversas debido al efecto al que traería sobre el gobierno Chino y este gran llamado de atención hecho y expuesto ante el mundo y todas las reacciones externas en un conflicto que es relativamente de intereses políticos en china, pero también los intereses de los que defienden la libertad como derecho Humano.
Conflicto del Tíbet El conflicto que el territorio tibetano mantiene por motivos de autonomía territorial lleva más de 100 años; desde 1904 con la invasión británica inicio un período de casi 50 años de pujas armadas, rebeliones e invasiones esporádicas que involucraron al Imperio Británico, China, India y el propio Tíbet. Fue en 1949 cuando el Ejército Popular de Liberación, instaurado por la naciente República Popular de China (RPC) de Mao Tse Tung, invade de manera definitiva la región con la premisa de “expulsar a los invasores extranjeros y reintegrarla a la Tierra Madre”, en donde, contando con un ejército compuesto de cerca de 80000 militares, derrotaron fácilmente cualquier contraofensiva tibetana y se firma el Acuerdo por la Liberalización Pacífica del Tíbet. El acuerdo hace que el territorio sea administrado casi en su totalidad por el país comunista, salvo la política interna (de menor importancia) que fue dada al Dalái Lama Tenzin Gyatso, quien tenía 15 años cuando ocurrió la invasión y era Jefe de Estado. En 1950 los chinos entran en Lhasa y así ocuparon la totalidad del país. Seis años después se crea la Región Autónoma del Tíbet, cuya formación generó una rebelión en los territorios tibetanos de Kham Oriental, Amdo y Lhasa, rebelión apoyada por la omnipresente CIA estadounidense. En 1959 grupos leales al Dalái Lama iniciaron en Lhasa el Levantamiento Nacional Tibetano, el cual fue la mayor manifestación en pro de la independencia de la región. El resultado no fue positivo para los tibetanos; el ejército chino reprimió la insurgencia de un grupo poco numeroso y desorganizado, además de gestar una matanza de miles de tibetanos. El Dalái Lama y sus colaboradores huyeron a la India, en donde apoyaron cualquier acto
7
rebelde en contra del gigante asiático hasta 1969, cuando la CIA les retiró el apoyo y la comunidad occidental se desinteresó en el tema. Con la Revolución Cultural de Tse Tung se vivió el período nefasto pos ocupación; la destrucción del patrimonio cultural tibetano: Se destruyeron templos y monasterios y varios monjes fueron asesinados. Se instaura el ejército rojo y lleva la fisiología comunista china a la zona. En 1979 se restituirían las libertades de culto salvo con algunos condicionantes a los lamas concernientes a la libertad de expresión. Durante las épocas de ocupación, el Dalái Lama buscó la ayuda internacional para que tome cartas en el asunto de su tierra, y logró el apoyo de la ONU quien emitió resoluciones mediante su Asamblea General de los años 1959, 1961 y 1965, donde se solicitó al gobierno maoísta que respete los derechos humanos de los tibetanos y sus ansias de autodeterminación. Fue el mismo Dalái Lama quien modificó sus demandas a cerca del Tíbet, queriendo que fuera un territorio autónomo y democrático, en asociación a la RPC. De aquellos tiempos a los actuales, se han vividos esporádicos momentos de represión en la región: en 1988 se produjo una oleada de protestadas fuertemente reprimidas y veinte años después, en la antesala a los JJ.OO. de Pekín, se avivó el tema de la libertad y soberanía del Tíbet. El Dalái Lama igualmente ha estado muy activo en favor a la causa, teniendo viajes a EE.UU., Taiwán, entro otros para mediar por lo que ocurre en la región; además, hasta marzo de 2011, fue líder político del Gobierno Tibetano en el Exilio, ente que se encarga en velar por los ciudadanos tibetanos exiliados en India, Nepal, Bután y en todo el mundo.
8
Conclusiones De este informe sacamos muchas conclusiones y se aprendió mucho. Es fascinante ver cómo actúa la cultura del Tíbet y más que nada como han mantenido sus creencias a pesar de estos más de 50 años de represión china y como han defendido a su mayor representación que es el Dalái lama. El actual Dalái lama Tenzin Gyatso es un hombre muy sabio y pacifico quien por algo ganó el Premio Nobel de la Paz; todo esto por sus intentos y su mentalidad pacífica de demandar que la República de China les devuelva la independencia con la que contaban hasta antes que los invadieran. Pero el Dalái lama no es solamente un hombre pacífico también sabio por la educación que les proporcionan a los Dalái en su preparación para reemplazar al anterior Dalái. Pero todo esto que no es más que datos nos ponen a pensar en que con la sociedad actualmente no es necesaria solo la violencia para dar a conocer un problema e incluso pelear por una causa en este caso una noble como es la liberación del Tíbet. Esto es lo que ha hecho el dalái lama, con su sabiduría y la creencia de su gente en él ha logrado dar a conocer y mantener este conflicto aun en la mente de todos a pesar que lleva más de 50 años; es más es un hombre tan reconocido al igual que su trabajo y por eso recibió el Premio Nobel. Sin embargo este conflicto aún no se puede resolver y debemos preguntarnos: ¿acaso es necesaria solo la violencia para poder remediar estos conflictos internacionales? Y si es así pues ver que hemos hecho mal en el camino para llegar a una sociedad así donde todo se desarrolle con violencia en lugar de poder vivir en un mundo donde se respeten los derechos de los otros y nos preocupemos porque se respeten los derechos ajenos y propios; uno de los pilares en los que se basa la doctrina del Dalái lama. Lo que el Dalái Lama refleja es paz y aunque hay muchos significados para esta palabra él lo engloba en algo simple que todos podríamos seguir; más que nada el predica el hecho de preocuparnos por los demás respetar sus religiones acordando que todas buscan el desarrollo de un corazón humano más positivo y eliminar los sentimientos oscuros. No necesitamos ser sabios para saber que podemos vivir así, sin recurrir a la violencia por todo además que un mejor sistema de educación de manera rigurosa mejorará la capacidad de pensamiento y se puede asimilar esta forma de vida como la hizo el dalái lama quien vive bien así en paz y luchando por la causa noble como es liberar al Tíbet de China de una manera que no incluye para nada la violencia sino el entendimiento y la creencia de su gente en él. El Dalái lama es un ejemplo a seguir en cuanto a su forma de vida y protesta por su pueblo; lamentablemente no seguimos este ejemplo cuando en los actuales tiempos deberíamos hacerlo buscando paz; una paz que actualmente es lo que menos hay todo por sentimientos de odio o resentimiento que ocasionan conflictos. Sin lugar a dudas eso es lo que nos falta ahora y citando al Dalái Lama: “Sentimientos de rabia, resentimiento y odio de los enemigos son negativos si los mantienes dentro de ti. Dañarán tu cuerpo y salud”
9
Esta frase debe la humanidad adoptarla y hacerla efectiva en su día a día solo así conseguiremos paz; una paz que no existe hoy por hoy.
Bibliografía http://es.wikipedia.org/wiki/T%C3%ADbet http://www.20minutos.es/noticia/361022/0/cinco/claves/tibet/ http://4grandesverdades.wordpress.com/2012/07/06/los-14-Daláilamas-en-la-historia/ http://www.ehowenespanol.com/recorrido-Dalái-lamas-historiaimagenes-galeria_94883/ http://www.budismo.com/articulos/reencarnaciones.php
10