CASA-CIUDAD – una perspectiva de género autora: Renata Fragoso Coradin tutora: doctora arquitecta Zaida Muxí Martínez
Máster Laboratorio de la vivienda del siglo XXI – 2008/2009 (5ª edición) Fundación UPC – Universidad Politécnica de Cataluña, Barcelona. conclusión: mayo de 2010 dirección: Josep Maria Montaner + Zaida Muxí coordinación: Roser Casanovas revisión textos: Isabel Aparici ilustración portada: Graziela de Oliveira Becker
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
ÍNDICE
ÍNDICE
03
PARTE IV
PRESENTACIÓN
07
Conciencia de género en Brasil............................125 Pedregulho...........................................................126 La participación de Portinho.................................136 Relaciones............................................................139 Parque Guinle.......................................................141 Dos proyectos, prioridades distintas.....................148
PARTE I Una perspectiva de género......................................13 Casa-Ciudad............................................................16 El espacio doméstico...............................................17 El espacio urbano....................................................20 Desde el barrio.........................................................23 Desde el edificio.......................................................31 Desde la casa..........................................................34
PARTE II Urbanismo y género: El barrio de Gràcia.................47
PARTE III El ejemplo de Viena.................................................77 Frauen-Werk-Stadt I................................................82 Frauen-Werk-Stadt II.............................................101 Frauen-Werk-Stadt III............................................111 FWS I,II y III...........................................................120
PARTE V De la década de 1940 a la contemporaneidad.....153 Edificio Japurá......................................................155 Vila Mara e Rio das Pedras..................................161 Reflexiones...........................................................169
PARTE VI Experiencia Concurso Premio Caixa – IAB 2008/2009............173
CONSIDERACIONES FINALES
185
BIBLIOGRAFÍA
189
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
AGRADECIMENTOS A Zaida, que me acompañó y me orientó en todo el proceso, gran responsable de la materialización de este trabajo. A mis padres, Luiz y Vanda, a mi hermana Roberta, a mi novio Rodrigo y a mi amiga y compañera en los desafíos de la profesión, Fabricia. Siempre me incentivaron y me apoyaron, y también han participado en la realización de esta tesina. A todos mis queridos compañeros del Máster, que han marcado de manera muy especial esta etapa de mi vida.
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
“La vida moderna no es tan moderna como la venden y es que, en pleno siglo XXI, las tareas del hogar siguen llevando nombre de mujer. Sólo en el 9,77% de los hogares catalanes hombres y mujeres comparten las tareas de forma igualitaria , mientras que en el 74,5% de los casos siguen siendo ellas quienes organizan lo que se tiene que hacer.” (Lopez, M., www.20 minutos.es, abril de 2010)
Así pues, al hacer visibles las diferencias y valorar las necesidades cotidianas que condicionan nuestras vidas, este trabajo tiene como objetivo incentivar la reflexión sobre los espacios en que vivimos a partir de cuestiones como: ¿En qué espacios queremos vivir? ¿Cuáles son nuestros deseos y necesidades? ¿Cómo sería una casa o una ciudad construida desde la perspectiva de género?
8
PARTE I
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
UNA PERSPECTIVA DE GÉNERO Hacer una tesina basada en la perspectiva de género es asumir que hombres y mujeres tienen concepciones y experiencias distintas en relación a los espacios en que vivimos. Si es así, para alcanzar el objetivo de construir una sociedad más equitativa y con mejores condiciones de vida para todos, deberíamos tener en cuenta y sacar provecho de esas diferencias. Los espacios no son neutros, no se puede hablar de su organización sin relacionarlos con las actividades que en ellos realizan hombres y mujeres en la vida cotidiana. Observando atentamente su configuración podemos notar que existe una estrecha relación entre espacios y cuestiones de género, así como entre los lugares y la asignación de roles y responsabilidades a los miembros de la sociedad. Las primeras reflexiones desde el feminismo sobre lugares y espacios aparecieron en el tránsito del siglo XIX al XX, con el movimiento de planificación urbana impulsado por algunas mujeres norteamericanas, coincidiendo con la primera hornada de los movimientos feministas. (Hayden en Bofill, 2005, pág.12). Así pues, desde mediados del siglo XIX ya es posible identificar la participación de las mujeres en la arquitectura, predominantemente en temas relacionados con la vivienda, con reflexiones y formulaciones de propuestas referentes a los espacios domésticos.
“La vivienda, como espacio de responsabilidad y control asignado en la división de tareas según el género a la mujer, será el primero sobre el que incidirán las mujeres que, desde diferentes ámbitos, reflexionarán sobre los espacios de la vida cotidiana.” (Muxí, 2005, pág. 28)
Es interesante destacar que estas primeras participaciones no partieron concretamente de profesionales graduadas sino de asistentes, clientes, teóricas, decoradoras o simplemente amas de casa que se dedicaron a reflexionar sobre la relación entre los espacios interiores y la realización de las tareas domésticas. Entre las primeras mujeres que trataron el tema de la vida doméstica encontramos a Catharine Beecher, quien se preocupó por la falta de servicio doméstico y sus consecuencias, como que el cuidado del hogar recaería sobre la mujer. (Muxí; Covaleda, 2005-2006, pág. 04)
13
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
hoy pocos miembros y representan la mitad del resto de grupos de convivencia. La inmigración también es un factor a ser considerado por haber aportado una mayor diversidad de costumbres y culturas en las ciudades. En definitiva, la incorporación de la perspectiva de género busca valorar la experiencia femenina de la vida y considerar la diversidad social y cultural de la población en las acciones de transformación del entorno y del territorio (Bofill, 2005, pág. 12). Pero ¿cómo se diseña una ciudad con perspectiva de género? De acuerdo con lo aportado por Carmen Morán en un artículo para El País (Morán, (Morán, 2007, El País ), ), no se trata de facilitar la vida a la mujer sino que estos cambios, que a las mujeres nos beneficiarían en mayor medida dadas las tareas que tradicionalmente desarrollamos, sean en realidad útiles para todos.
CASA-CIUDAD “Dado que aquello que llamamos género es una construcción social y cultural que asigna roles y responsabilidades – al tiempo que fija límites– el espacio en que desarrollamos nuestras vidas está organizado para albergar estas diferencias impuestas. La escenificación y puesta en práctica de roles tiene dos espacios primordiales: la casa y la ciudad.” (Muxí, 2008, pág. 06)
Si la casa es el lugar de la primera socialización, podemos entender que es también el espacio donde se desarrollan las primeras relaciones de género. Pero la gestión de la vida cotidiana no tiene lugar solamente en el interior, es también un conjunto de actividades y comportamientos que se producen en el espacio público, es decir, en la ciudad. La relación casa-ciudad, por tanto, es complementaria y presenta un doble significado, como si reuniera dos mundos, uno interior, privado, relacionado con el trabajo reproductivo y asignado al género femenino, y otro exterior, público, vinculado al trabajo productivo y asignado al género masculino. Esta división imaginaria que relaciona los espacios de la ciudad con el hombre al mismo tiempo que excluye a la mujer de la vida pública, muestra la importancia de incorporar la perspectiva de género en el planeamiento urbanístico, el diseño del espacio urbano y la organización de la vida cotidiana, incorporando la experiencia femenina a la construcción de mejores condiciones de vida para todos y todas.
16
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
El ESPACIO DOMÉSTICO Soledad Murillo, autora de El mito de la vida privada, aborda la relación entre espacios públicos y privados añadiendo un tercer término: el espacio doméstico. Para Murillo, espacio privado no equivale a espacio doméstico cuando se habla desde la percepción de las mujeres. De una manera general, al espacio privado se vinculan actividades tranquilas, de descanso, es un lugar reservado e íntimo. En cambio, las mujeres lo relacionan con un conjunto de prácticas afectivas y materiales orientadas al cuidado y la atención de otros, a demandas que les impiden de apropiarse de un tiempo en singular. Los distintos usos de los espacios distribuyen lugares y asignan protagonismos. De esta forma, Murillo concluye que el ámbito público no pertenece a las mujeres que no realizan trabajo productivo y el privado está tan próximo al universo doméstico que, para ellas, se convierte en inexistente. Por contra, a los hombres les pertenece tanto el espacio público como el privado. La domesticidad forma parte del trabajo reproductivo, se define por el comportamiento, la disposición a prestar atención y dar respuestas a las necesidades del otro, al cuidado de las personas y del hogar. Como cita Atxu Amann en su tesis de doctorado, el trabajo doméstico es como un ritual de actos secuenciales basado en una sensación de mantenimiento que sólo se percibe cuando no existe (01) [Amann, 2005, pág. 81].
(01). Mantenimiento del hogar, una tarea invisible.
“Los estilos de vida cambian al ritmo que las sociedades avanzan, entretanto la domesticidad parece permanecer ajena a las transformaciones sociales.” (Murillo, 2006, pág. 09)
17
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
En el periódico de distribución gratuita 20 minutos , un artículo de 14 de abril de 2010 destaca que sólo en el 9,77% de los hogares catalanes hombres y mujeres comparten las tareas de forma igualitaria.
“En cuanto al tiempo semanal destinado a llevar a cabo las tareas domésticas o al cuidado de personas con dependencia, ellas (las mujeres) siguen ganando por goleada: casi triplican el tiempo destinado por los hombres. Así, las mujeres dedican una media de 23 horas por semana a llevar a cabo estos quehaceres, contra las 7,6 horas de ellos.” (www.20minutos.es)
Mientras tanto, en Brasil, según una encuesta realizada por el IBGE (Instituto Brasileiro de Geografía e Estatística) en 2004, las mujeres dedicaban una media de 22,1 horas por semana a las actividades domésticas, más del doble de las 9,9 horas semanales empleadas por los hombres. Si consideramos una hipotética jornada diaria de 8 horas en un periodo de 5 días, sería posible afirmar que las mujeres ocupadas trabajan, además de la jornada laboral, una media de 4,4 horas cuidando de las tareas domésticas, frente a las 2 horas adicionales dedicadas por los hombres a estas actividades. (www.ibge.gov.br)
(02). Hogar y familia – Personas que realizan cada actividad en el transcurso del día (%). Fuente: www.ine.es
19
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
El gráfico anterior, publicado en el boletín informativo del INE de abril de 2007, representa el porcentaje de tiempo que hombres y mujeres dedican a cada tipo de actividad doméstica durante el día (02). En él podemos advertir que la mayor diferencia de participación de los miembros se da en las actividades culinarias y en las relacionadas con el mantenimiento del hogar. Por otro lado, la jardinería, el cuidado de los animales y las actividades relacionadas con la construcción o reparación son llevadas a cabo mayoritariamente por hombres, mientras que las gestiones del hogar son compartidas por los dos miembros de la pareja. (www.ine.es)
EL ESPACIO URBANO Hombres y mujeres tienen diferentes formas de utilizar el espacio urbano y de desplazarse por él. En general, los hombres se caracterizan por sus movimientos lineales, desde casa tienen el trabajo como único destino y muchas veces hacen el recorrido en coche. Por su parte, las mujeres, en su mayoría las responsables del trabajo reproductivo, realizan desplazamientos poligonales, es decir, salen de casa con un itinerario que recala en diversos puntos antes de llegar al destino final y para cuya realización normalmente utilizan transportes públicos.
(03). Conferencia de Franziska Ullmann, 2008.
20
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
densa e intrincada diversidad de usos que se sostuviesen y se apoyasen unos a otros, tanto económica como socialmente.
“... los tipos de calle seguros y los tipos de calle inseguros; la razón de que algunos parques urbanos sean tan maravillosos y otros casi trampas y hasta trampas mortales; porqué cierto barrios bajos siguen siendo los infectos barrios bajos de siempre y otros han conseguido regenerarse venciendo resistencias oficiales y hasta financieras; por qué se desplazan los centros de ciudad y las áreas comerciales; qué es una vecindad autentica y cómo se puede levantar una verdadera vecindad en las grandes ciudades.” (Jacobs, 1961-2007, pág. 01)
También Dolores Hayden, en la década de 1970, criticó el tejido de los suburbios americanos y la manera como las mujeres acababan recluidas dentro de sus casas debido a la monofuncionalidad de los espacios de las ciudades. Como ya hemos citado anteriormente, estas ciudades disgregadas, donde las viviendas están a kilómetros de los centros de trabajo y éstos, a otros tantos kilómetros de los lugares de ocio, no favorecen la integración de los ciudadanos y el desarrollo de la vida cotidiana. La arquitecta española Anna Bofill defiende el modelo de la ciudad racimo de uva donde a medida que aumenta la población, se va añadiendo otra uva (Morán, 2007, El País ). Bofill quiere enfatizar el de hecho de que una buena estructura de ciudad sería en realidad un conjunto de microciudades , zonas con todos los servicios, equipamientos y comercios, viviendas, áreas deportivas, de ocio y de cultura necesarias: todo ello próximo al ciudadano, que no exija a los habitantes grandes desplazamientos. En la década de 1990 se presentó la Carta europea de la mujer en la ciudad , resultado de un proyecto de investigación realizado por un equipo europeo y subvencionado por la Comisión de la Unión Europea (Unidad de igualdad de oportunidades). Su objetivo era evaluar la situación de las mujeres en la ciudad y abrir un debate entre todos los participantes porque la igualdad en democracia mejoraría las condiciones de vida de todos. Son muchas las experiencias desarrolladas a partir de la situación de las mujeres y la condición de las ciudades, como por ejemplo el proyecto “Mujer y ciudad” en la comunidad de Madrid (1995-1996) o el I y II Congreso de las Mujeres de Barcelona (1999 - 2009).
22
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Todas las pautas se sitúan más o menos en los mismos campos de acción: el equilibrio social, la valoración de lo local frente al global, la variedad, la complejidad, la consideración de las necesidades diversas y la sensación de seguridad como principales concepto debatidos. También es importante destacar que el objetivo principal es favorecer de forma equilibrada a todos los grupos sociales que componen la ciudadanía y que este planeamiento para la igualdad no es responsabilidad exclusiva de las mujeres, de la gente mayor o de los inmigrantes. Aunque incorporar las voces y percepciones de las mujeres sea una parte fundamental en el proceso, la responsabilidad del diseño sensible de un planeamiento para la igualdad corresponde a todas y todos los técnicos y políticos, no únicamente a las mujeres o grupos afectados (Velázquez, 2001, pág.04). Por tanto, basándose en estos estudios y experiencias, la intención en este trabajo es unir algunos criterios clave en la creación y desarrollo de espacios, desde la casa hasta la ciudad, que sirvan para la reflexión y sean útiles para la construcción de viviendas más flexibles y adaptables tanto a las personas como al tiempo, y de ciudades más amables e igualitarias.
DESDE EL BARRIO
“Para desarrollar la vida personal en igualdad de condiciones y oportunidades, la vivienda debe situarse en un entorno que facilite las múltiples variables que la conforman. Se debe considerar el barrio como el espacio urbano en el cual desarrollamos nuestra vida cotidiana. Su tamaño está medido en función de la distancia que se puede hacer en 5 o 10 minutos a pie. Es dentro de esta distancia donde se debe encontrar la variedad de ofertas de equipamientos, viviendas, trabajos, comercios y espacios públicos para desarrollar una vida cotidiana que favorezca la plena integración de todos los habitantes en la vida privada y pública.”
(Muxí, 2009, pág. 18)
Empezaremos por una escala general pero, en lugar de tratar directamente de la ciudad, nos acercaremos a una realidad un poco más próxima al ciudadano: el barrio o la unidad vecinal. La razón es sencilla: si logramos que cada
23
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Los recorridos realizados a pie propician el encuentro y la relación entre los vecinos. Además, las zonas con mezcla de usos, donde los comercios suelen ocupar las plantas bajas de los edificios, tienen vida y actividad en las calles lo que repercute positivamente en el incremento de la seguridad local.
Sensación de seguridad Los espacios no son neutros, existe una clara conexión entre el diseño urbano y la violencia hacia las mujeres, la cual acaba limitando sus desplazamientos y sus actividades al incrementar el sentimiento de inseguridad. Este es un sentimiento difícilmente cuantificable que reposa en elementos emocionales y está en estrecha relación con la calidad, el confort, el acondicionamiento, la limpieza, el mantenimiento y la actividad en los espacios urbanos (Bofill, 2008, pág. 48). La sensación de inseguridad, que afecta mayoritariamente a las mujeres, acaba generando un uso restringido de la ciudad. Es decir, para salir a las calles acaban eligiendo ciertos lugares y determinados horarios del día que transmiten una mayor sensación de seguridad. La libertad de ir y venir está estrechamente conectada con el concepto de seguridad en el espacio público pues, si los espacios no transmiten sensación de seguridad, las personas pasan a elegir horarios menos conflictivos para realizar sus tareas, priorizando los momentos del día en que hay luz y mayor cantidad de gente en las calles. Por este motivo, las zonas con diversidad de usos favorecen la seguridad ya que generan actividad y vida en los espacios públicos, además de asegurar la presencia de comerciantes y trabajadores que están constantemente realizando una vigilancia natural. Igualmente la existencia de equipamientos nocturnos como bares, restaurantes o cines garantiza la presencia de personas en las calles también por la noche.
“Es una cosa que todos ya saben: una calle con actividades consigue garantizar la seguridad; una calle desierta, no. Pero, ¿cómo es que ocurre eso, en realidad? ¿Qué hace a una calle tener actividades o ser evitada?... Primero, debe ser nítida la separación entre el espacio público y el espacio privado. El espacio público y el privado no se pueden mezclar como normalmente ocurre en los suburbios o en conjuntos habitacionales.
26
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Segundo, deben existir ojos para la calle, los ojos de aquellos que podemos llamar de propietarios naturales de la calle. Los edificios de una calle preparada para recibir otras personas y garantizar la seguridad tanto de ellas cuanto de los habitantes deben estar vueltos para la calle. No pueden estar en los fondos o un lado muerto para la calle y dejarla ciega. Y tercero, las aceras deben tener usuarios transitando todo el tiempo, tanto para aumentar en las calles el número de ojos atentos como para inducir un número suficiente de personas de dentro de los edificios de la calle a observar las aceras. A nadie le gusta estar en la puerta de una casa o a la ventana mirando una calle vacía...” (Jacobs, 1961-
2007, págs. 35 y 36).
El concepto de visibilidad es muy importante para la sensación de seguridad, como se desprende de la cita de Jane Jacobs; poder ver y ser vista garantiza una mayor tranquilidad. Poder observar los espacios exteriores, públicos e intermedios desde el interior de las casas se transforma en un mecanismo de control visual que es realizado por la propia comunidad. Generar espacios y accesos transparentes también facilita mucho este control visual; si las escaleras, las paradas de autobuses, los accesos a los aparcamientos y al metro tienen una buena visibilidad se tornan elementos fácilmente controlables y más seguros. Una buena iluminación en las calles y espacios públicos es otro factor de fundamental importancia, pues nadie se siente seguro al cruzar lugares oscuros, que no ofrecen una clara lectura y comprensión de su trayecto. Si hay iluminación, hay más gente por las calles, mayor actividad y, consecuentemente, mayor sensación de seguridad. Es importante que calles y plazas estén siempre bien señalizadas para que las personas sepan dónde están y a dónde se dirigen. También se deben evitar guetos y calles sin salida, así como que límites y muros no sean altos y sin visibilidad. Generar espacios urbanos permeables también es una cuestión de seguridad.
27
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
La variedad de horarios debe ser tenida en cuenta: el servicio debería atender las franjas con mayor flujo de gente pero también las necesidades de las personas que circulan fuera de los horarios considerados “normales” y que necesitan el transporte público. Como citó Zaida Muxí en su conferencia Desvelar el género: la vivienda del siglo XXI (IV Projetar, São Paulo), la “ciudad 24 horas” nunca es para la gente real. Al definir los horarios de los transportes nadie se acuerda, por ejemplo, de las personas que trabajan antes o después de las horas más habituales y que a veces no disponen de transporte para ir al trabajo o volver a casa. Facilitar una accesibilidad adecuada en los transportes públicos es otro de los puntos a destacar. Las plataformas de acceso para discapacitados en los autobuses y los ascensores de las estaciones de metro son recursos básicos para responder a las necesidades de muchas personas. En ocasiones, moverse con un carro de la compra o de bebé no es tarea fácil. Seguramente todos hemos presenciado los apuros de una madre para subir las escaleras de una estación de metro con un carrito. Esta y muchas otras situaciones pueden evitarse con el desarrollo de un buen proyecto de accesibilidad y movilidad.
Espacios públicos El conjunto de calles, plazas, parques y otros tipos de espacios comunes configura los espacios públicos. La calidad y buena conexión entre estos elementos ayudan a generar una ciudad más agradable e igualitaria. El concepto de espacio público está fuertemente conectado a los criterios de movilidad, incluso resulta difícil determinar un límite claro entre ellos ya que ambos abordan la accesibilidad y el privilegio del peatón frente a los coches, así como la construcción de aceras suficientemente anchas para acoger diferentes actividades y la seguridad. Es importante que las personas se identifiquen y se apropien de ellos, convirtiéndolos en habitables y activos. Los espacios públicos deben favorecer la autonomía y la socialización de las personas ya que han sido trazados para responder a las necesidades de mujeres y hombres (Montaner/Muxí, 2008, pág. 04). Es importante que las mujeres se sientan confortables y seguras en estos lugares: hoy en día el espacio público ya no pertenece sólo a los hombres y debe ofrecer toda la infraestructura necesaria para acoger también a las mujeres, los niños y la gente de la tercera edad.
29
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Las actividades que llevan a cabo los niños en la calle no son las mismas que desarrollan los jóvenes o la gente mayor, por tanto debe tenerse en cuenta la variedad de espacios necesaria según la edad, el sexo o la cultura de procedencia de los usuarios de los mismos. Deben incluirse a su vez espacios de descanso para madres y padres cerca de donde juegan los niños y lugares adecuados para realizar actividades deportivas que den libertad a los jóvenes. Para la gente de la tercera edad hay que pensar áreas de descanso pero también espacios donde puedan desarrollar actividades como algunos juegos (petanca, etc.), bailes o paseos con trayectos para caminar. Sólo de este modo se puede responder a las particularidades de toda la gente. El mobiliario urbano completa los espacios públicos al mismo tiempo que los ornamenta. Ofrecer una variedad de colores, texturas y materiales refuerza la identidad de los lugares. La presencia de bancos a la sombra y de zonas de descanso favorece la relación entre las personas y entre éstas y los lugares, incluso colabora con la seguridad local gracias al control visual y la presencia en las calles. La presencia de vegetación y agua también es fundamental cuando se pretende crear un espacio urbano acogedor y agradable. Eso sí, hay que prestar atención para que los espacios verdes no sean muy extensos y actúen como grandes barreras. Los árboles también son muy importantes pero no deben interferir la iluminación ni la seguridad de las calles. Si se tienen en cuenta estos conceptos, seguramente los barrios se beneficiarán de una mayor calidad espacial y las personas obtendrán mayor calidad de vida al poder reconocer cerca de sus casas espacios agradables para pasear, estar y encontrarse con los demás.
30
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
DESDE EL EDIFICIO El edificio concentra una serie de conceptos que bordean el límite entre el barrio y la vivienda. Presentaremos ahora algunos criterios relacionados con estos espacios que no están ni dentro ni fuera y otros vinculados a la estructura del propio edificio que, a pesar de vincularse directamente con los espacios interiores de la casa, pertenecen al ámbito más general del edificio o del conjunto residencial.
Espacios de transición
“Los espacios intermedios surgen como aquellos espacios que están al otro lado de la puerta de la vivienda y que no son la calle o la plaza dominada por los vehículos. Son lugares dentro del tejido de una unidad vecinal que, no siendo la vivienda, son espacios de tránsito o de encuentro de peatones, cubiertos o descubiertos, pero abiertos al aire libre y comunitarios.” (Bofill en AAVV, 2006, pág. 211)
Los espacios de transición son los responsables de la conexión gradual entre lo público y lo privado. Pueden ser identificados como espacios semi-públicos por tener uso común por parte de los habitantes del edificio o del conjunto habitacional, y son ejemplos de ello las instalaciones para el uso de los vecinos, los espacios de juegos para los niños, las zonas para reuniones, los espacios de almacenaje común, las lavanderías y los huertos comunitarios. Las azoteas, cuando son accesibles, también se consideran espacios de uso común donde se pueden llevar a cabo varias actividades. Cuando existen, los pasillos de acceso a las viviendas actúan como extensiones de las casas: además de simples espacios de paso, son también zonas donde los vecinos se encuentran y donde pueden jugar los niños. Toda esta serie de espacios de relación y de paso desde lo público hacia lo privado, los cuales facilitan el incremento de las redes de relación entre las personas, son un factor más a tener en cuenta en la evaluación del concepto de seguridad.
31
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Como se observa en el esquema siguiente, la presencia de ventanas, balcones, pasillos exteriores o azoteas accesibles proporciona visibilidad, es decir, desde dentro de los edificios las personas ven la calle, hecho que aumenta el control visual (04).
(04). Esquema sobre los espacios de transición – concurso: Premio Caixa – IAB 2008/2009 – 4ª edición. Coradin/Zulin/Cuzziol. Coradin/Zulin/Cuzziol.
Este esquema se desarrolló para la propuesta de Vivienda social del concurso Premio Caixa–IAB 2008/2009, en São Paulo, Brasil, que se abordará extensamente en la PARTE IV.
Mezcla de usos La mezcla de usos en los edificios también es un otro factor que favorece la seguridad, además de proporcionar infraestructura a las necesidades de la vida cotidiana de los habitantes. Así pues, es aconsejable que la planta baja esté ocupada por equipamientos, actividades comerciales o de servicios. En las plantas superiores, de uso residencial, ofrecer variedad de tipologías y una posible integración entre los ámbitos de las viviendas son buenas estrategias para atender las múltiples composiciones familiares y de grupos de convivencia existentes en la actualidad.
32
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
De acuerdo con un artículo de Anna Bofill, en Europa ya son más de un 60% las personas que no viven en familias nucleares y, en Barcelona, estas modalidades diferentes de convivencia, que empezaron a emerger hace 20 años, ahora ya se dan aproximadamente en un 50% o más de los hogares (Bofill en AAVV, 2006, pág. 210).
Adaptabilidad Dada la actual variedad de usuarios, debemos pensar edificios y viviendas a partir del concepto de la adaptabilidad, es decir, que ofrezcan capacidad de adecuación a las diferentes situaciones familiares y agrupaciones de personas que pueden sucederse con el paso del tiempo y la superación de las sucesivas etapas de la vida de sus habitantes (05). Para hacer posible la variedad tipológica y la integración entre ámbitos deben pensarse sistemas constructivos independizados que no condicionen la división de los espacios. El uso de una estructura modular también facilita la flexibilidad y adaptabilidad del edificio y permite la adición o sustracción de módulos de acuerdo con las necesidades de los habitantes (06).
Sostenibilidad Además no debemos olvidarnos de la importancia de proyectar edificios basados en los criterios de sostenibilidad, considerando los flujos de materiales y energía utilizados en su construcción (07).
(05) Adaptabilidad
(06) Sistemas constructivos independizados
(07) Flujo de materiales y energía
33
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Los edificios también deben contar con los principios básicos de buena orientación en relación al sol, buena iluminación y ventilación natural cruzada, así como la presencia de vegetación pues, cuando se utilizan correctamente, estos recursos mejoran la calidad del conjunto y disminuyen el consumo de energía. La altura de los edificios, además de respetar las normativas de ocupación del suelo, debe considerar siempre no hacer sombra al resto de edificaciones para garantizar así la buena iluminación de las viviendas.
DESDE LA CASA Durante los últimos 30 años la vivienda ha cambiado muy poco y es cada vez más evidente que las distribuciones actuales de los pisos no se adecúan a las formas de vida y de relación que existen hoy día, sobre todo para las mujeres (Bofill en AAVV, 2006, pág. 209). Hasta hace poco la composición del grupo familiar era bien distinta de las actuales. Lo más común era la familia tradicional, es decir, la patriarcal, en la cual el hombre era responsable del trabajo exterior y la mujer la encargada del cuidado del hogar y de los niños. En el transcurso de las últimas décadas la sociedad ha cambiado y la mujer ya no está únicamente en casa; muchas trabajan y tienen su espacio en el mundo exterior. Entonces ¿quién cuida ahora de la casa? Como vimos anteriormente, las mujeres que trabajan fuera aún dedican gran parte de su tiempo a las tareas domésticas y, poco a poco, los hombres también empiezan a colaborar con la realización de estos quehaceres, pero las casas en que vivimos no facilitan estas actividades. De acuerdo con Atxu Amann, las viviendas de hoy son espacios de ayer, proyectados bajo los patrones racionalistas del CIAM, a los que se le han sobrepuesto instalaciones y adaptaciones para dar respuesta a las necesidades de la vida cotidiana, superando la arquitectura. (Amann, 2005, pág. V) Las cocinas, por ejemplo, son normalmente espacios muy cerrados que no invitan a los otros miembros de la familia a compartir las tareas que en ella se realizan. Por tanto, es importante revisar el concepto de vivienda considerando que los espacios dedicados a tareas domésticas han de facilitar la participación de todos (Muxí, 2009, pág. 05).
34
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
No es que exista una tipología espacial única e ideal, tampoco se trata de desarrollar “el modelo de la vivienda contemporánea”, pero hay varios factores que pueden ser tenidos en consideración en el diseño de los espacios domésticos de tal manera que faciliten nuestro día a día. Para ello debemos aspirar a la máxima flexibilidad de resultados y la máxima capacidad de alternativas. Los espacios construidos deben tener en cuenta la pluralidad de usuarios, de culturas y de momentos pero, sobre todo, deben atender la cotidianidad, pues sólo valorando nuestras actividades y necesidades cotidianas encontraremos las respuestas para la casa que buscamos.
¿Cómo es mi casa? ¿Cómo me gustaría que fuera? ¿Qué cosas mantendría? ¿Qué cambiaría? ¿Qué actividades realizo en casa? ¿Los espacios son adecuados? ¿Dónde guardar? ¿Dónde dormir? ¿Dónde comer? ¿Dónde estudiar? ¿Dónde conversar? ¿Cómo usar? ¿Con quién? ¡Sólo yo! ¡Todos nosotros! ¿Por qué no unir? ¿Por qué no separar? ¿Cómo hacer? ¿Cuándo hacer? ¿Cómo debería ser?
(08). Taller La casa sin género . Máster Laboratorio de la vivienda del siglo XXI (5ª edición). Renata Coradin.
35
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Los esquemas anteriores son el resultado de un trabajo realizado para el taller La casa sin género del máster Laboratorio de la vivienda del siglo XXI (5ª edición). Su objetivo era representar las diversas relaciones entre las actividades, las necesidades, los objetos, las personas, los espacios, los ambientes y los tiempos (08). A través de estos esquemas se intenta replantear las estructuras de los espacios para habitar, proponiendo diversidad de usos y flexibilidad de los espacios de acuerdo con las posibles necesidades de las personas que ahí van a vivir.
“A medida que los miembros de la familia o del grupo social comparten responsabilidades domésticas, se hace necesario, para mantener viva la relación del grupo, que la vivienda contemple, como mínimo, una estancia para todos y habitaciones individuales que favorezcan la propia privacidad. Porque la vivienda es el espacio cotidiano para alimentarse, trabajar, descansar, gozar y procrear y también para compartir, amar, conocer, colaborar y comunicar.”
(Bofill en AAVV, 2006, pág. 209)
De acuerdo con Bofill, es fundamental pensar en nuevas distribuciones y nuevas formas de usos y espacios para la vivienda que se correspondan con una convivencia sin jerarquías, creando nuevos tipos de viviendas para las familias y las otras modalidades de convivencia en grupo. Basándonos en las necesidades actuales, podemos definir algunos criterios para la vivienda que, sumados a los conceptos aplicados al edificio, dan como resultado espacios más adaptados a nuestras vidas y necesidades. Explorando los espacios que componen una vivienda y a partir del concepto de la diversidad espacial, es posible determinar la formación de la vivienda a partir de tres tipos de ambientes: los ámbitos especializados, los no especializados y los complementarios (09) [Montaner Muxí Arquitectes, Definición, condiciones y criterios de diseño para la vivienda del siglo XXI en Andalucía , 2008]. Ámbitos especializados: son los que necesitan de instalaciones específicas e infraestructuras para su funcionamiento, como conducciones de agua y gas, desagües y salidas de humos. Son ejemplos de estos ámbitos la cocina, el baño y los espacios para el cuidado de la ropa y de la casa.
36
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Ámbitos no especializados: son los que no necesitan de instalaciones específicas o infraestructuras para su funcionamiento. Están relacionados con las actividades humanas de descanso, estar y trabajo, y deben adecuarse a los estándares de confort y habitabilidad. Ámbitos complementarios: son los espacios considerados de apoyo dentro de la vivienda y que pueden funcionar asociados a otros espacios como, por ejemplo, los espacios exteriores y los de guardado. Para trabajar este concepto se desarrollaron diversos estudios sobre la disposición del mobiliario básico para cada espacio, determinando una medida mínima dentro de la cual se pueda inscribir un círculo de 2,80 m para garantizar un buen aprovechamiento espacial.
(09). Ref. Montaner Muxí Arquitectes, Definición, condiciones y criterios de diseño para la vivienda del siglo XXI en Andalucía , 2008.
Pensar las viviendas a partir de estos ámbitos es una manera de no determinar el uso de los espacios y potenciar la apropiación diferenciada e individualizada de cada zona por parte de los habitantes.
37
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Adaptabilidad Al igual que en los edificios, internamente en las viviendas también se debe aplicar el concepto de adaptabilidad a los diferentes momentos y agrupaciones familiares. En una misma casa y a lo largo de los años hay momentos en que viven dos personas, otros en que ésta puede llegar a acoger hasta cinco ocupantes y también ocasiones en que vive uno solo. Así pues, es importante que la vivienda se adecúe a los posibles cambios.
(10). Concurso: Premio Caixa–IAB 2008/2009 (4ª edición). Coradin/Zulin/Cuzziol.
Que la estructura sea modular y los sistemas constructivos sean independizados es importante para facilitar y colaborar con las adaptaciones necesarias. Si en un edificio los núcleos húmedos están concentrados en un mismo eje, además de la economía en material, se consiguen espacios libres adaptables gracias a la concentración de las instalaciones (11). La iluminación y también la ventilación natural son conceptos básicos al abordar la habitabilidad. A ellos podemos añadir la presencia del espacio exterior propio, la importancia de los espacios de guardado y la desjerarquización de los espacios.
38
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Espacio exterior propio Por espacio exterior propio, entendemos los espacios internos de la vivienda que se comunican directamente con el exterior, donde se puede las personas pueden descansar, reunirse, leer, conversar o realizar otras actividades del habitar. También es importante que este elemento actúe como dispositivo de control térmico. Como ejemplos podemos citar los balcones y las terrazas privadas (12). En estos espacios, es posible también el mantenimiento de plantas y flores y el cultivo de pequeños huertos, hecho que favorece la integración de la vegetación en los hogares.
Espacios de guardado
“...una casa es una vivienda más la gente que la habita y los objetos que guarda...” (Monteys / Fuertes, 2001, pág.
14)
En realidad, creo que no tenemos la noción real ni de la cantidad de cosas que guardamos dentro de nuestras casas ni de la importancia que tienen los espacios de guardado en la organización de los espacios. Por ello deben preverse lugares para los diferentes tipos de guardado y almacenaje. Externamente a la vivienda, en trasteros individuales o comunitarios, podemos contar con lugares de guardado para elementos de gran volumen, donde puedan ser colocados los carros de la compra o de los bebés, las bicicletas y otros objetos grandes. Dentro de la casa es importante disponer de espacios más específicos para cada tipo de guardado: las ropa limpia y la sucia, la de otra estación, la ropa blanca de cama, mesa y baño, los objetos utilizados en el baño, los objetos y productos de cocina, los de limpieza del hogar, etc.
39
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
También cabe estudiar la localización de cada uno de estos espacios dentro del hogar para que optimicen la utilización de cada uno de ellos y el tiempo dedicado en general al cuidado de la casa. Una alternativa es ubicar los armarios fuera de las habitaciones, por ejemplo en los pasillos, pues de esta manera la habitación queda con las paredes libres para permitir cualquier disposición de mobiliario y los pasillos, que normalmente son zonas sin actividad, ganan estos espacios de guardado (13). Considerar el volumen de la vivienda en su totalidad también proporciona algunos lugares para almacenaje. Es decir, sobre algunos ámbitos que no necesitan mucha altura se podrían generados espacios de guardado en el techo. Lo mismo pasa con el diseño de los muebles: es posible obtener espacios de guardado, accesorios muy útiles, por ejemplo, con cajones bajo las camas o armarios hasta el techo, aprovechando toda la superficie de las paredes. Gran variedad de muebles pueden diseñarse para optimizar el uso de los espacios. Los ámbitos especializados, como cocinas y baños, necesitan de espacios propios de guardado más específicos y próximos que faciliten la realización de las actividades de la vida cotidiana.
(11) NÚCLEOS HÚMEDOS
(12) ESPACIO EXTERIOR PROPIO
(13) ESPACIOS DE GUARDADO
(14) DES-JERARQUIZACIÓN
(15) INTEGRACIÓN ÁMBITOS
(16) INTEGRACIÓN
Concurso: Premio Caixa – IAB 2008/2009 – 4ª edición. Coradin/ Zulin/Cuzziol.
40
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Des-jerarquización Este concepto está también relacionado con la idea presentada de los ámbitos no especializados, pues es una manera de no determinar usos específicos ni jerarquías espaciales y de favorecer una utilización más flexible y no predeterminada de los espacios. Al definir una medida mínima, que en el caso de este estudio se definió con un círculo de 2,80 m, los espacios pueden ser adecuados a varios usos de acuerdo con las necesidades de los habitantes (14). Este hecho se ve facilitado cuando se puede contar con estructuras modulares e independizadas; así es posible la integración de ámbitos dentro de la misma vivienda (15) y también entre viviendas vecinas (16). En los baños, la separación de funciones también evita jerarquías y hace posible la utilización simultánea, aumentando las posibilidades de uso y la cantidad de personas que pueden realizar estas actividades a la vez. Los esquemas siguientes forman parte del proyecto para el concurso Premio Caixa–IAB 2008/2009 y, de manera general, representan cómo pueden aplicarse estos criterios a una vivienda.
La relación entre los espacios Para un buen desarrollo de la vida cotidiana es importante que los espacios del hogar se relacionen adecuadamente, promocionando la participación de todos los miembros en las tareas domésticas y la relación entre los habitantes de la casa en las actividades de ocio y diversión, así como también en las de trabajo y estudio si es necesario. Empecemos por la cocina, el espacio de la casa que más modificaciones ha sufrido a lo largo de los años y que aún está relacionado con las responsabilidades de la mujer. Promover la visibilidad e integración de la cocina con los otros ámbitos del hogar es una manera de valorar y compartir las tareas domésticas, pero que esté visible todo el tiempo tampoco es la mejor alternativa, pues su visibilidad constante obliga a un mayor mantenimiento y cuidado, lo que puede acabar siendo molesto para sus habitantes (Muxí, 2009, pág.36). El comedor es un espacio común que acoge actividades diversas además de comer: en este espacio también poden llevarse a cabo trabajos productivos, reproductivos, de estudio o de ocio. La integración de la cocina con el comedor genera dos espacios comunitarios y favorece la relación con las otras zonas de la casa.
41
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
La conexión cocina – salón – comedor, debe ser tomada con atención proporcionando el posible aislamiento de la cocina en determinados momentos. Cuanto a los pasillos, deben tener otros usos complementares como espacio para juegos, espacio para las tareas domésticas como planchar o plegar la ropa o espacio de estudio. Volver los armarios para el pasillo también es una manera de darle más actividad además de dar mayor versatilidad a los espacios de las habitaciones. El lavadero, o el espacio pensado para el cuidado de la casa y de la ropa, debe estar vinculado a los espacios de baño y de las habitaciones pues, si analizamos el ciclo de la ropa, nos damos cuenta de que la mayor parte de prendas salen sucias del baño y vuelven limpias a las habitaciones. Si existe la posibilidad de que la zona de lavado tenga contacto con el exterior cabe aprovecharla y permitir el secado de la ropa al sol.
(17).
42
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
(18).
Los esquemas anteriores presentan la aplicación de los criterios de género a un apartamento cualquiera (las plantas provienen de material publicitario). Es posible percibir la diferencia entre la relación de los espacios y la realización de las actividades domésticas cuando éstos han sido bien distribuidos y están correctamente relacionados entre sí. En el recorrido de la ropa, por ejemplo, es mucho menor y más organizado cuando el espacio para el lavado se encuentra próximo a las habitaciones y baños, y no integrado a la cocina como se observa en las primeras plantas. La conexión cocina-comedor también disminuye los recorridos, mejora la integración entre los espacios y la ventilación cruzada dentro del hogar. Es conveniente permitir que la cocina se cierre siempre que sea necesario. La separación de funciones en los baños hace posible la utilización simultánea por más de una persona y los espacios de guardado en los pasillos liberan el interior de las habitaciones para conseguir una mayor variedad en la distribución del mobiliario y en las posibilidades de uso.
43
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Participación Para lograr una vivienda que esté conectada al barrio y a la ciudad, flexible y con calidad espacial, cuya organización colabore a un mejor y más equitativo desarrollo de las actividades cotidianas, hay que tener en mente algunas estrategias en el proceso de diseño. Los procesos de participación son muy importantes, fundamentales para conocer las necesidades de las personas y proporcionar mejores soluciones a su día a día. Eso sí, se debe considerar la opinión y la participación de todos los miembros de la comunidad, incluyendo hombres, mujeres, jóvenes y gente mayor; solo así se pueden conocer los deseos y necesidades de todos. Además de fomentar la participación, estos procesos también deben proporcionar la información necesaria, ser divulgativos y llevar el debate al alcance de todos. También deberían tener en cuenta la valoración de las experiencias personales: las encuestas de satisfacción ayudan a conocer la opinión de los habitantes y proporcionan la posibilidad de acumular conocimiento y experiencia para los siguientes proyectos. Por tanto, a través de la definición de estos criterios intento encontrar herramientas para analizar proyectos e identificar propuestas de calidad que tengan en cuenta la perspectiva de género. De este modo se pueden trazar caminos que nos lleven, en algunos años, a unas ciudades más igualitarias y a unos hogares más adaptados a las necesidades cotidianas de todos los habitantes a lo largo de sus vidas.
44
PARTE II
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
URBANISMO Y GÉNERO El objetivo de esta parte del trabajo es incentivar la reflexión sobre los espacios urbanos a la luz de los conceptos desarrollados en el capítulo anterior. Es decir, pensar los espacios de la ciudad desde la perspectiva de género, desde el punto de vista de los diferentes colectivos y teniendo presente el desarrollo de las tareas de la vida cotidiana. La idea es que el espacio urbano de referencia sea la “ciudad próxima” de cada uno, el entono más cercano a nuestras casas y trabajos, lugares por los cuales pasamos habitualmente y que forman parte de nuestro día a día. Así, reflexionar sobre estos espacios significa analizarlos a partir de nuestras experiencias personales, deseos y necesidades cotidianas. En relación a la movilidad en las ciudades, Carme Miralles afirma que el uso social del territorio influye en el tiempo cotidiano, es decir, en el tiempo empleado en la realización de las diferentes actividades:
“Los lugares donde se trabaja, donde se compra, donde se vive dibujan un conjunto de interrelaciones y de conexiones que se gestionan a través de la planificación y la ordenación del territorio (y por consiguiente, de la ciudad), así como de la construcción y la gestión de las redes de transporte. La configuración física del espacio y de las infraestructuras de apoyo a la movilidad condicionan las dinámicas territoriales, que a su vez determinan los tiempos de desplazamientos.” (Miralles, 2006, pág. 09)
Según Miralles, la manera como están formadas las ciudades incide directamente en los desplazamientos realizados, así como en la gestión del tiempo utilizado en el desarrollo de las tareas relacionadas con el mantenimiento de la vida cotidiana. De este modo, entendemos que las ciudades funcionales (las que se encuentran divididas en zonas para vivir, para trabajar y de ocio) no favorecen lo cotidiano, no tienen en cuenta los desplazamientos a pie y están vinculadas a la circulación y el uso masivo del trasporte privado, haciendo más compleja la realización de las actividades cotidianas y la gestión del tiempo social (Miralles en AAVV, 2006, pág. 217).
47
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Por otro lado, la proximidad de los equipamientos hace posible una mejor gestión del tiempo y de los desplazamientos. La movilidad no debe pensarse únicamente desde la perspectiva de las grandes circulaciones y del uso del transporte privado sino que debe tener en cuenta los pequeños desplazamientos realizados dentro de cada barrio, para generar desde ahí una red de transporte público que abarque las diferentes escalas de circulación, desde la más pequeña hasta la más compleja. Sin embargo, la intención de este capítulo es rescatar la idea de la ciudad “racimo de uva”, desarrollada por Anna Bofill, donde cada barrio debería ofrecer, además de las viviendas, los equipamientos, comercios y servicios necesarios para generar oportunidades de trabajo.
El barrio de Gràcia Para ejemplificar la aplicación de los criterios desarrollados, y basándonos en el concepto de la proximidad, vamos a mirar la ciudad desde la escala de los ciudadanos y ciudadanas que salen a trabajar, que llevan los hijos a la escuela y hacen compras habitualmente. Para ello, se presentará un análisis sobre el barrio de Gràcia, en Barcelona, realizado en el curso de Género y urbanismo: teoría y proyecto, a cargo de la arquitecta Zaida Muxí, en el máster oficial de Urbanismo (ETSAB–UPC), donde se explora las ventajas y desventajas presentes en él y proponiendo algunos cambios que podrían llevarse a cabo para mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
Los personajes Con la intención de acercarnos más a la realidad del barrio, se propone conocer mejor las actividades cotidianas y los desplazamientos que realizan con mayor frecuencia algunos personajes que viven en Gràcia. De una manera general, analizaremos protagonistas de diferentes edades y con ritmos de vida diversos: algunos salen constantemente del barrio para realizar actividades (ir a trabajar o a estudiar) y dependen del transporte público mientras que otros desarrollan su vida en el entorno próximo a sus casas. Para realizar este análisis se ha establecido un límite en el barrio teniendo en cuenta los principales elementos, la red de transporte público y la oferta de equipamientos y servicios, tal y como puede observarse en el mapa adjunto (2). Posteriormente se han marcado sobre el plano los recorridos de los protagonistas por esta zona y definido los caminos y el uso de los espacios realizados por cada uno de ellos.
48
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Ana tiene 10 años y todos los días va de casa a la escuela. En el recorrido pasa por tres plazas que encuentra en su camino y, siguiendo las recomendaciones de su madre, elige las calles peatonales.
Juan tiene 35 años, vuelve del trabajo en metro, recoge a los niños en la escuela y juntos pasan por la plaza del Diamant para jugar un rato en ella. Escogen para regresar a casa las calles más tranquilas para pasar con el cochecito de bebé.
Manuel tiene 45 años y vive cerca de la plaza Joanic. Tiene coche y lo deja en el aparcamiento de la misma plaza. Algunos días, al llegar del trabajo, va a la plaza Vila de Gràcia para reunirse con sus amigos.
Julia y Mariana tienen 20 y 22 años, respectivamente. Son universitarias y comparten piso. Vuelven de la universidad en metro y de camino a casa pasan por el supermercado. También frecuentan la biblioteca y la plaza del Sol, donde se reúnen con sus amigos.
Alice tiene 32 años y vuelve al barrio en metro. Pasa por el colegio para recoger a su hijo Francisco y con frecuencia pasa por el mercado para comprar algo. Algunas veces van hasta la plaza John Lennon para jugar pues en la plaza Vila de Gràcia, que queda al lado de su casa, no hay espacios de juego para niños.
Joana tiene 85 años y vive en una residencia para gente mayor. Algunos días le gusta ir a desayunar al café que hay detrás del mercado y, cuando está animada, entra en el mercado para comprar alguna fruta de temporada. Si hace buen tiempo camina hasta la plaza de la Revolució para charlar con algunas conocidas.
María tiene 38 años y trabaja en una entidad bancaria del Passeig de Sant Joan. Al salir, pasa por el supermercado antes de recoger a los niños en el colegio. Viven en un edificio en la plaza John Lennon y siempre, antes de subir a casa, se quedan ahí jugando algún tiempo.
Miguel tiene 28 años y no vive en Gràcia, pero trabaja cerca y siempre va al gimnasio después del trabajo. Al salir de allí, pasa por la plaza Vila de Gràcia o por la plaza del Sol para ver si encuentra algún colega con quien pueda charlar un rato. Después coge un autobús en Gran de Gràcia para volver a casa.
(01). Personajes: Plan piloto Mariahilf (6º distrito), Viena: KAIL; IRSCHIK; ZUCKERSTÄTTER-SEMELA; POSCH. 2005.
49
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Mapa del barrio
(02).
50
escuelas de primaria
guarderías
escuelas de música
vías peatonales / plazas
vías para bicing
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Mapa de recorridos
(03).
escuelas de primaria
guarderías
escuelas de música
vías peatonales / plazas
vías para bicing
51
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Infraestructuras para la vida cotidiana en Gràcia Como se observa en el primer mapa, y siguiendo los recorridos de los protagonistas, el barrio de Gràcia cuenta con una oferta bastante grande de equipamientos y servicios. En un entorno próximo es posible encontrar mercados, supermercados, farmacias, guarderías, escuelas de primaria y de música, residencias para gente mayor, centros de salud, biblioteca, bares, restaurantes y cines. Además las diferentes plazas distribuidas por el barrio sirven como lugares de encuentro a los vecinos.
(04). Centro de salud Gràcia – Biblioteca Vila de Gràcia – Supermercado en la calle Verdi – Mercado de l’Abaceria. Fotos: Renata Coradin.
Sin embargo, también es importante destacar que Gràcia es un barrio de estructura antigua que ha sufrido adaptaciones diversas a lo largo de los años, lo que determina algunas de sus características, como la estrechez de las aceras y la escasa adecuación de las calles para el tránsito de vehículos. De este modo, a lo largo del análisis iremos profundizando en los criterios escogidos e identificando qué elementos aún hacen falta en el barrio, por ejemplo equipamientos deportivos. En la zona sólo existen dos gimnasios privados, uno de los cuales está indicado en el mapa, y no hay instalaciones deportivas de uso público. Por otro lado, hay colegios en la zona que cuentan con estas instalaciones y que podrían, si se consigue una gestión bien planteada y organizada, extender su utilización a la población del barrio.
52
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
De acuerdo con el PAD 2008-2011 (Programa de actuación del distrito de Gràcia), está previsto garantizar la continuidad de coordinación y el impulso para la utilización de los espacios escolares en horario extraescolar de modo que se puedan llevar a cabo actividades asociativas, deportivas y cotidianas (siempre en el marco de los acuerdos entre consejos escolares y usuarios, en los que se recogen los compromisos concretos) y desplegar el proyecto “Patios abiertos” (PAD, 2008, pág. 15).
(05). Colegio municipal de educación infantil y primaria Reina Violant – Calle Trilla; Colegio de educación primaria y secundaria Escola Patufet – Calle Bruniquer; Niños sin espacio para jugar a la pelota. Plaza John Lennon. Fotos: Renata Coradin.
Hasta ahora los patios de las escuelas han continuado cerrados mientras la población espera que este proyecto sea puesto en práctica pues, como queda patente en las fotos, no hay espacios específicos para jugar a la pelota en todo el barrio. Aún en el apartado de las infraestructuras y observando los horarios de los equipamientos, comercios y servicios, es importante resaltar que la mayoría de éstos funcionan de las nueve de la mañana hasta las nueve de la noche aunque cierran al mediodía. De manera general, podemos decir que dan respuesta a las necesidades de los residentes en lo tocante a la realización de las actividades de la vida cotidiana. Además, los bares y restaurantes de la zona suelen estar abiertos hasta las dos de la mañana, lo que garantiza actividad y tránsito de gente por la noche. También es importante destacar que la biblioteca Vila de Gràcia tiene un horario especial y abre la sala de estudios hasta la una de la mañana de lunes a viernes, hecho muy ventajoso para las personas que buscan un espacio para estudiar o trabajar por la noche.
53
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
El siguiente mapa forma parte del PAD de Gràcia y nos permite observar la gran oferta de comercios y servicios distribuida en el barrio. A su vez nos permite identificar una mayor concentración de estas actividades en las calles Verdi, Torrent de l’Olla, Travessera de Gràcia y Escorial, vías que representan importante ejes de la zona.
(06). Plan de actividades: oferta de comercios y servicios en el barrio de Gràcia. PAD, 2008-2011. Fuente: www.bcn.cat
Carácter de las calles Profundizando en la concentración de comercios en estas calles principales, cabe identificar qué tipos de tiendas son, qué ofrecen y cuál es el estado de estas calles. También debemos tener en cuenta que en Gràcia hay una red de vías peatonales con una gran concentración de establecimientos. Notamos que en estas calles peatonales se da un mayor número de bares, restaurantes y comercios “de segunda necesidad”, como tiendas de ropa, librerías y locutorios, entre otros.
54
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
El comercio de primera necesidad (mercados, fruterías y supermercados) se encuentra a lo largo de calles no peatonizadas, con tránsito de vehículos y aceras estrechas, como Travessera de Gràcia, Torrent de l’Olla y Gran de Gràcia. Esta última es la que mejores condiciones presenta para los peatones. Sin embargo, basta analizar el mapa de la zona desde una perspectiva más global para reconocer que estas calles con comercios de primera necesidad forman parte de la estructura viaria de la ciudad y actúan en la conexión de importantes vías, por lo que no pueden ser peatonalizadas. (07). Establecimientos de las calles principales: Travessera de Gràcia: supermercados – mercados – panaderías – farmacias – carnicería – bancos – cafés – bares – bibliotecas – tiendas de ropa y calzado – bazares chinos – tiendas de electrodomésticos – tiendas de muebles – agencias inmobiliarias – agencias de viaje – floristerías – papelerías – fruterías. Gran de Gràcia: tiendas ropa y calzado “de marca” – perfumerías – supermercados – tiendas de electrónicos – restaurantes – farmacias – ferreterías escuelas – guarderías – escuelas de idiomas – despachos profesionales en las primeras plantas – acceso al metro – tiendas de productos para la casa – tiendas deportivas – gimnasio – bancos. Verdi: bares – restaurantes variados – tiendas de ropa y calzado “de marcas alternativas” – librerías – quioscos – locutorios – cines – farmacias – tiendas de dulces – peluquerías – un supermercado. Asturias: panaderías – cafés – restaurantes – tiendas de ropa “de marcas alternativas” – papelerías – despachos – bancos – colmados – farmacias – fruterías – estanco. Torrent de l’Olla: tiendas de ropa y calzado – bares – restaurantes – bancos – bibliotecas – fruterías – bazar chino – supermercado – colmados.
Movilidad y relaciones Como ya hemos citado anteriormente, debido a la antigua estructura del barrio y especialmente en las calles más centrales, el tránsito de vehículos es bastante complicado tanto para los coches privados como para los transportes públicos que circulan por las vías principales, en el borde de la zona estudiada.
55
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Aunque la movilidad de los vehículos sea complicada, la oferta de transporte público es bastante variada e incluye autobuses, autobuses de barrio y nocturnos, dos líneas de metro (L3, L4), una estación de Ferrocarrils de la Generalitat y diversas estaciones de bicing distribuidas por el barrio. Es importante resaltar que no hay carriles de bicing por la zona: el más próximo se encuentra en el Passeig de Sant Joan.
(08). Plan de movilidad: calles peatonales y oferta de transportes públicos. Travessera de Gràcia ; Travessera de Gràcia x Torrent de l’Olla; Calle Quevedo; Fotos: Renata Coradin.
En lo tocante a las vías peatonales, se puede considerar que el barrio cuenta con una estructura bastante fuerte que permite a las personas evitar las vías con mayor flujo de coches. Ello representa una gran ventaja para la movilidad de los peatones pues, en calles como Travessera de Gràcia, las aceras son tan estrechas que dificultan el paso. Si retomamos los recorridos de nuestros protagonistas, veremos que, siempre que les es posible, prefieren caminar por las vías peatonizadas pues son más tranquilas, principalmente para los niños y los ancianos. También sería conveniente prestar más atención a los tiempos de los semáforos, que siempre privilegian a los coches y nunca tienen en cuenta el tiempo real que la gente mayor y las personas con discapacidad necesitan para cruzar la calle. Un buen ejemplo de ello es la esquina de Travessera de Gràcia con Torrent de l’Olla, uno de los peores cruces del barrio pues las aceras no tienen anchura suficiente para albergar de forma segura a los peatones que esperan para poder cruzar.
56
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
En estas imágenes es posible identificar algunas situaciones por las cuales pasan las personas que circulan por el barrio.
57
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Por último, es importante destacar la presencia de luminarias en las calles, iluminando las calzadas y también las aceras donde pasan las personas.
59
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Las escuelas El carácter de las calles donde están ubicadas las escuelas también es muy importante, en especial en cuanto a sus espacios de relación. Normalmente las horas de salida son bastante tumultuosas, el espacio se llena de niños y adultos que les esperan (algunos con carros de bebé), escena que se complica cuando hay tránsito de vehículos por allí.
(10). Escuela Patufet; Guardería municipal Sant Medir; Escuela Sant Josep; Colegio Bailén. Fotos: Renata Coradin.
Excepto las escuelas ubicadas en Gran de Gràcia, el resto de las que se encuentran en la zona de estudio se localizan en calles con menor flujo de vehículos, aunque solo algunas se encuentran en calles peatonales. También es importante destacar que prácticamente ninguno de los centros cuenta con espacios donde los padres puedan esperar la salida de sus hijos. De las seis escuelas analizadas, solo la guardería de la calle Santa Rosa ofrece un espacio interior, compartido con la asociación de jóvenes ubicada en el mismo bloque. Abundando en la ubicación de las escuelas, hay que destacar su proximidad a las plazas del barrio donde hay zonas de juego infantil. Trazamos círculos con un radio de 300 metros (distancia que puede cubrirse a pie en 5 o 10 minutos) para delimitar las áreas de influencia de las seis escuelas estudiadas para verificar esta proximidad. Con este estudio fue posible constatar que cinco de ellas tienen a una distancia inferior a 300 metros plazas y áreas de juego para niños y que la sexta escuela, en Gran de Gràcia, cuenta con ellas en u n radio de 500 metros.
60
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
(11). Radio de influencia: 300 metros Escuelas y plazas. Escuela San Josep; Plaza de les Dones del 36; Fotos: Renata Coradin.
Las plazas de Gràcia Vamos ahora a observar más de cerca cada una de las plazas que se encuentran dentro del límite analizado para verificar qué tipo de elementos ofrecen a los vecinos. De las nueve plazas insertas en este contexto, solo cinco ofrecen áreas para juegos infantiles y, de ellas, únicamente dos cuentan con espacios de juego para niños mayores de cinco años. En ninguna de las plazas hay espacio para jugar a la pelota, lo que acaba llevando a los pequeños a jugar en lugares que no están adaptados y en ocasiones no son adecuados, lo que genera conflictos de uso (12). Por ejemplo, en la parte central de la plaza Joanic hay un espacio con arena donde los niños mayores suelen reunirse para jugar a la pelota, pero también es un espacio por el que circulan las personas que salen del metro, lo que genera un poco de confusión, fácilmente evitable si existieran instalaciones adecuadas. En las plazas analizadas tampoco hay actividades para la gente mayor, con excepción de la plaza Joanic, donde hay algunas mesas de ping-pong. Ninguna ofrece espacios para actividades como la petanca, por ejemplo. Y dentro del barrio, solo en la plaza Lesseps y en el Passeig de Sant Joan se encuentran espacios adaptados para esta actividad.
61
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
(12). Carteles: Pl. de les Dones del 36; Pl. Joanic; Pl. del Diamant; Pl. John Lennon. Imágenes: Pl. del Diamant; Pl. John Lennon; Pl. Joanic. Fotos: Renata Coradin.
Además no todos los espacios de juego ofrecen bancos para que los adultos vigilen el juego de los pequeños. Hay casos, como la plaza Joanic, que cuentan con bancos dentro de estos espacios, pero en otros, como en la plaza de la Revolució, no hay bancos cerca. Sin embargo, hay bancos en todas las plazas -en algunas más que en otras- y la disposición de éstos también interfiere bastante en la relación entre las personas. En plazas como la Virreina, la del Sol y Vila de Gràcia, donde hay mayor concentración de bares y restaurantes, casi no hay asientos, pero sí hay muchas mesas con sillas en las terrazas de estos restaurantes, que tienen un uso vinculado al consumo. De esta manera se observa que el tipo de plaza está completamente vinculado al uso de las personas: donde hay bares, restaurantes y pocos bancos públicos, sin espacio para juegos infantiles, el uso se da mayoritariamente por parte de jóvenes y adultos, normalmente sin hijos pequeños (15). Sería recomendable incluir en estas plazas mesas y sillas públicas, disponibles para ser usadas por todos, pues así las personas podrían comer, estudiar o jugar a las cartas en los espacios públicos donde hoy, en general, sólo hay bancos, lo que limita las actividades ahí desarrolladas. Otro elemento que merece un poco más de atención son los baños públicos: a pesar de toda la oferta de restaurantes y bares en estas plazas, ninguna cuenta con servicios abiertos, lo que una vez más acaba vinculando el uso de los espacios al consumo en estos establecimientos.
62
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
63
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
En lo tocante a la presencia de equipamientos y servicios en estas plazas, ninguna está directamente relacionada a escuelas, bibliotecas o guarderías. Es cierto que la oferta de estos equipamientos en el barrio es bastante grande y que no están a más de cinco o diez minutos a pie, pero no hay relación directa. Por otro lado, lo que sí se encuentra en ellas son comercios de segunda necesidad, además de bares, cafés y restaurantes, así como librerías o papelerías.
(14). Cuadro de las plazas, con los equipamientos e instalaciones existentes.
(15). Las plazas y sus usuarios.
64
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
65
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
De las nueve plazas, la única que no cuenta con comercios en planta baja es la plaza de les Dones del 36, la más nueva del barrio y cuyas características son bastante distintas. A diferencia de las otras, que son plazas completamente abiertas y conectadas a la estructura del barrio, ésta forma parte de un proyecto de viviendas y está rodeada por rejas que se cierran por la noche. El nombre dado a esta plaza homenajea a las Dones del 36, mujeres que lucharon por la libertad y la igualdad en la guerra civil española, pero es completamente contradictorio a la manera en que la plaza se relaciona con el barrio, generando un espacio semi-público que choca frontalmente con el carácter completamente público del resto de plazas. Además de tener un horario de apertura y de cerrar por la noche, tampoco los espacios comerciales de las plantas bajas están siendo utilizados. Prácticamente un año después de la inauguración, estos locales siguen vacíos, lo que también acaba influyendo mucho en el uso de esta plaza, mayoritariamente frecuentada por madres con niños pequeños en los horarios de salida de las escuelas.
(17). Plaza de les Dones del 36: Rejas - entrada a la calle de Santa Ágata. Madres con niños por la tarde. Fotos: Renata Coradin.
La memoria del barrio Además de este homenaje en la plaza de les Dones del 36 también hay otras manifestaciones de memoria histórica en el barrio, principalmente en las plazas, en forma de escritos en el suelo o esculturas. Por ejemplo, en la de la Revolució, cuyo nombre recuerda el levantamiento que propició el derrocamiento de la reina Isabel II, está escrita la palabra “revolución” con letras sueltas. En la del Diamant, una escultura y unas frases en el suelo rememoran que es
66
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
el escenario principal de la novela homónima de Mercè Rodoreda. Otras maneras de manifestar la memoria son las celebraciones tradicionales del barrio, como la fiesta mayor del mes de agosto, de gran participación vecinal, o la fiesta del inicio de la primavera, organizadas ambas por las asociaciones del barrio.
18 . Plaza de Trilla; Plaza del Diamant; Plaza de la Revolució; Fiesta ma or de Gràcia; Fiesta del inicio de la rimavera. Fotos: Renata Coradin.
Sensación de seguridad El barrio de Gràcia, en general, no transmite sensación de inseguridad, principalmente en las calles con mayor movimiento de personas debido a los comercios y servicios locales.
(19). Plaza de la Revolució; Calle Verdi; Plaza de la Revolució; Plaza del Diamant. Fotos: Renata Coradin.
67
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
En su mayoría, las edificaciones del barrio cuentan con comercios y servicios en las plantas bajas y viviendas en las superiores, lo que garantiza la actividad tanto durante el día como por la noche, momento estelar de los bares, restaurantes y cines existentes en esta zona. También el hecho de que las viviendas de las plantas superiores tengan sus ventanas a la calle aumenta aún más la sensación de seguridad, gracias al control visual realizado por los propios vecinos. Pero, a pesar de la presencia de estos factores positivos, es importante que por la noche haya buena iluminación en todas las calles, privilegiando los caminos por donde van los peatones.
Propuesta (20). Plan de propuestas.
Vías peatonales Instalaciones de cruce Tiempo de los semáforos Equip. para gente mayor Equip. para niños + de 6 años Equip. para jugar a la pelota Patios abiertos Mesas con bancos / sillas Espacio para presentaciones Esp. para ferias de artesanía Abrir las rejas Baños públicos
68
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
En las imágenes que siguen se presentan algunos ejemplos de instalaciones y elementos propuestos para estas plazas, como por ejemplo las instalaciones para jugar a la pelota, que responden al deseo de prácticamente todos los niños, y la casa de madera, o casa del árbol, para las niñas. Los juegos para niños mayores también son bastante importantes en estos espacios. Hay que tener en cuenta las necesidades de todas las generaciones, no únicamente las de los más pequeños. También se observan las intervenciones en los espacios de descanso que, además de los convencionales bancos, incluyen mesas con sillas, bancos más cómodos e incluso hamacas donde las personas puedan estar más relajadas. En varios espacios encontramos plataformas que pueden utilizarse para sentarse y descansar o también para que los niños jueguen. Otro factor importante es la variedad de materiales empleados y la diversidad de pavimentos, criterios que hacen aún más indicados estos espacios para el uso por parte de todas las generaciones.
70
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
71
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Cabinas telefónicas: ejemplo de Viena.
Placas de explicación en los contenedores: ejemplo de Viena.
Viena: cuidado con los espacios frente a los colegios y guarderías; instalaciones de cruce; reductor de velocidad.
Cruces universales: tener en cuenta todos los grupos de personas, las generaciones y discapacidades. (23). Fotos: Renata Coradin. Imagen 10: KAIL; IRSCHIK; ZUCKERSTÄTTER-SEMELA; POSCH. 2005. Imágenes 11 y 12 Internet.
73
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Otro elemento interesante, y que podría ser implementado muy fácilmente, son las placas de explicación sobre el reciclaje al lado de los contenedores. Mucha gente puede tener dudas sobre lo que va en cada contenedor y estas informaciones en ocasiones no son visibles o suficientemente claras. Además se propone dedicar máxima atención y respeto a los ciudadanos que van a pie, teniendo en cuenta a todas las generaciones y discapacidades, a través de la instalación de cruces y semáforos universales que privilegian a los peatones frente a los vehículos. La intención es que el barrio de Gràcia, que en principio ya ofrece bastantes facilidades a sus habitantes (gran variedad de comercios y servicios, diversas plazas distribuidas por la zona y estructura de vías peatonales), pueda ser aún mejor para la población que ahí vive a partir que algunas intervenciones. En general estas intervenciones plantean criterios desarrollados desde el punto de vista de las personas que utilizan el barrio en su día a día para realizar sus tareas cotidianas, como por ejemplo los personajes citados al inicio del capítulo y que desarrollan todas sus actividades dentro del barrio, utilizando los comercios, las plazas y también las calles peatonales, siempre más tranquilas frente a las vías por donde pasan los coches. Considerando todos los grupos de personas, de diferentes sexos, culturas y edades, es posible identificar elementos y situaciones que hacen más agradable la vida en sus barrios. Este análisis desarrollado en el barrio de Gràcia, sirve como ejemplo para que todos pensemos en la realidad de nuestros entornos a partir de nuestras necesidades diarias, buscando cuestionar intervenciones posibles para hacer de nuestros entornos espacios cada vez mejores para nuestras vidas y para la convivencia con familiares y vecinos.
74
PARTE III
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
La Oficina de las mujeres
En este contexto, fue en la década de 1990 cuando este tema ganó fuerza. Según Eva Kail, jefe del departamento de género de Viena, todo empezó en 1991 con la exposición Who owns public space? Women’s everyday life in the city” (¿A quién pertenece el espacio público? La vida cotidiana de las mujeres en la ciudad). Esta muestra se centraba en asuntos relacionados con los intereses de las mujeres en el contexto urbano de Viena y fue un gran éxito, pues atrajo casi 4.000 visitantes (www.wieninternational.at, Kail, 2008). Posteriormente, en 1992, se fundó la Oficina de las mujeres (Women’s Office) y algunos años después, en 1998, se abrió oficialmente el Departamento de género de Viena y su Oficina de coordinación (The Coordination Office for Planning and Construction Geared to the Requirements of Daily Life and the Specific Needs of Women) , liderado por la urbanista Eva Kail. La importancia del departamento de género de Viena radica en que está situado en una posición relativamente alta dentro de la jerarquía, a la cabeza de los departamentos técnicos. Según su coordinadora, no se conoce otra ciudad donde pase lo mismo (www.wieninternational.at, Kail, 2008). Entre las actividades desarrolladas por el departamento de género podemos citar: -
-
Concepción y ejecución de proyectos piloto. Desarrollo de guías con recomendaciones de planeamiento. Importantes representaciones en jurados. Trabajo de consultoría y asesoramiento. Investigaciones de fundamentos básicos. Promoción de una red de transmisión de conocimiento.
Además, sus principales áreas de actuación son: -
78
Proyectos de vivienda diseñados por mujeres. Diseño de espacios de ocio teniendo en cuenta los criterios de género. Espacios públicos seguros. Planeamiento del tráfico tomando en consideración los criterios de género. Prioridades de género en el planeamiento (Gender Mainstreaming).
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
2001
2005
2009
Es importante destacar la gran dedicación de este departamento a divulgar los criterios de género y hacerlos visibles en las viviendas y en la ciudad a todos los usuarios. La guía de criterios que han elaborado es de libre acceso a todos los profesionales del área. Además existen varias publicaciones editadas por la misma oficina sobre proyectos y estrategias relacionadas al tema que, de algún modo, ayudan a divulgar el trabajo realizado. La imagen superior muestra algunas de estas publicaciones. La primera portada remite al Frauen-Werk-Stadt I, el primer proyecto impulsado por la Oficina de las mujeres, antes incluso de la fundación de la Oficina de coordinación . La segunda pertenece a un plan piloto desarrollado en un distrito especifico de Viena, Mariahilf , donde se trabajaron cuestiones relacionadas con el barrio. Por último, la más reciente es un resumen de todos los trabajos promovidos por el departamento hasta 2009, desde los concursos residenciales hasta los proyectos urbanos.
Los proyectos
En 1993, un año después de su creación, la Oficina de las mujeres lanzó un concurso para un proyecto modelo, el Frauen-Werk-Stadt Model Project que podríamos traducir por “Mujeres de la Ciudad del Trabajo”. Según Eva Kail, la idea del Frauen-Werk-Stadt surgió en un grupo de estudio a partir de la pregunta ¿cómo sería un distrito planteado desde la perspectiva de las mujeres? La idea fue llevada al Consejo de la ciudad y finalmente
80
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
FRAUEN-WERK-STADT I
El Frauen-Werk-Stadt I fue el primer proyecto y el más grande de los concebidos por el Departamento de género de Viena. La propuesta de la arquitecta Franziska Ullmann fue la elegida dada la variedad de unidades propuestas y la sensibilidad en la resolución del diseño de los espacios abiertos. El jurado contaba con la presencia de varias expertas en el ámbito de la arquitectura y de la planificación del territorio, entre ellas, a modo honorífico, la arquitecta Margarete Schütte-Lihotzky (Bauer, 1995, p.09). El master plan propuesto por Franziska Ullmann fue el vencedor del concurso, el jurado eligió también el plan paisajístico de Maria Auböck y recomendó la participación de otras tres arquitectas para la realización de subproyectos individuales. Gisela Podreka, Else Prochazka y Liselotte Peretti se encargaron de sendas partes del conjunto, como puede observarse en el esquema (01). (01). Perspectiva, esquema de las arquitectas. Ilustración: Franziska Ullmann, en Kail, 2001.
(02). Esquema de implantación. Ilustración: www.ullmannf.at/FWS/
El terreno elegido, de 2,3 hectáreas, se encuentra en la frontera con el distrito de Floridsdorf de Viena, en una zona caracterizada por viviendas y pequeñas industrias.
82
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
El emplazamiento está situado en Donaufelder Strasse, 93 (21º distrito), forma parte de una zona de expansión urbana y tiene fácil conexión con la red de trasporte público. En el entorno aún se encuentran edificaciones de pequeña escala y baja densidad pero la previsión es que, dentro de algunos años, esta zona sea un distrito de alta densidad al norte del río Danubio (Kail; Bauer; Zwingl, 1996, pág. 07). Franziska Ullmann explica que al sur del terreno hay una gran avenida y al norte, una serie de pequeñas casas y una villa, así que, desde que entró en contacto con el lugar, le pareció importante mantener la conexión entre el transporte público y las personas que vivían en esas construcciones (02) [entrevista, marzo de 2010]. En las fotos que siguen es posible identificar estas características citadas por Ullmann. En la primera podemos ver la fachada sur del proyecto y la conexión con el transporte público que, en este caso, no es el metro sino una especie de tranvía conectado a la red de transporte público (03). En la segunda foto es perceptible el cambio de escala cuando nos encontramos con esta serie de casa con jardines que caracterizan toda esta parte norte del emplazamiento (04). (03). Fachada sur del proyecto. Foto: Renata Coradin
(04). Pequeñas casas al norte del terreno. Foto: Renata Coradin
Otro factor importante destacado por la arquitecta es la preocupación por conectar todas las entradas, es decir, concentrar el movimiento de las personas generando un eje de actividad que favorezca el encuentro e incremente la sensación de seguridad (05).
83
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Trabajando este eje, y con la intención de atraer a las personas hacia el interior del conjunto, se crea una plaza paralela a la calle en la entrada de Donaufelder Strasse, como se observa en estas imágenes.
(05) y (06). Esquema / Planta: eje conector. Ilustracion: www.ullmannf.at/FWS (07). Foto: Renata Coradin.
De acuerdo con las indicaciones anotadas en el análisis del plan general se advierte que, además de las viviendas y de los espacios comunes propuestos en varias escalas de privacidad, el conjunto también cuenta con una zona comercial, una oficina de policía y una guardería (08). En relación a este jardín de infancia, Franziska Ullmann comenta que inicialmente estaba pensado para ser ubicado en la parte posterior del terreno, zona que la arquitecta denomina “Village Green” pero, a sugerencia del jurado, este equipamiento fue reposicionado más al sur, camino del transporte público. Como ejemplifica la arquitecta, por la mañana las madres salen hacia el trabajo, normalmente en dirección al transporte público, y pasan por la guardería para dejar a sus hijos. El hecho de que se encuentre en un lugar de paso hace más fácil la organización cotidiana (entrevista, marzo de 2010, Viena).
84
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Plano general
(08). 1. Ed. Franziska Ullmann 2. Ed. Elsa Prochazka 3. Ed. Gisela Podreka 4. Ed. Lieselotte Peretti 5. Guardería 6. Espacios cubiertos para juegos 7. Área de juego para jóvenes 8. Playground 9. Plaza central 10. Village Green 11. Tranvía Entradas aparcamiento
85
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Esquemas y análisis (09).
(10).
(11).
En el esquema de usos (09) se nota que la zona comercial está ubicada exactamente en la parte del proyecto que da a la calle principal; en el interior del conjunto, las plantas bajas ganan uso residencial, donde las arquitectas trabajan con filtros que generan una gradación de privacidad desde las zonas de paso común hasta las puertas de las viviendas. El comercio ahí existente incluye desde una farmacia a una tienda de automóviles y garantiza la actividad principalmente durante el día. Franziska Ullmann también comenta que tenían la intención de que existiera un café en esta entrada, lo que no acabó siendo posible al estudiar el ruido y las molestias derivadas que podría generar a los vecinos (entrevista, marzo de 2010, Viena). En esta fachada principal también se encuentra la oficina de policía y más hacia el interior está ubicada la guardería, que aprovecha toda un área de recreo en esta parcela izquierda del terreno. En relación a los accesos, todo el espacio interior del conjunto es únicamente peatonal y no se permite la entrada de coches. Los accesos al aparcamiento subterráneo están localizados en el lateral y en la parte posterior del terreno. También queda patente en el esquema que las circulaciones se conectan al mismo tiempo que se mezclan con los espacios de ocio (10).
86
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
El principal eje de circulación del proyecto es también un espacio común, donde los chavales pueden correr, montar en bicicleta o patinar. En los laterales, y con un carácter un poco más privado, se encuentran los espacios más contenidos donde están los juegos para los niños de menor edad (11).
Espacios comunes
Otros elementos que se identificaron como equipamiento en el primer esquema y que aquí se repiten como espacio común son las dos zonas cubiertas proyectadas pensando en los niños mayores o adolescentes, para que puedan reunirse o jugar a la pelota (12). Este es un factor importante a destacar, pues raramente se incluyen espacios como estos. Lo más común es que se propongan espacios de juegos para los niños más pequeños, como los playgrounds , pero nunca se piensa en los adolescentes, quienes también necesitan un espacio propio.
(12). Espacios cubiertos para adolescentes. Fotos Renata Coradin.
Aún en relación a los espacios comunes, podemos identificar la gradación de privacidad que los define de acuerdo con su posición dentro del conjunto. Los espacios más contenidos se comportan casi como extensiones de estas viviendas y son zonas donde los niños pueden jugar bajo la atenta de sus padres (14).
87
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
PÚBLICO
SEMI-PÚBLICO
PRIVADO (13). Esquema. Ilustración: www.ullmannf.at/FWS/ (14). Fotos: Renata Coradin.
También la posición de la guardería en relación al conjunto, como si fuera un brazo que sale del edificio, acaba por definir un espacio más reservado de carácter semi-público o semi-privado (15).
(15). Guardería Fotos: Renata Coradin.
Los accesos
Pasando en los espacios de transición, es interesante notar la localización de los accesos y la manera en que se plantearon algunos elementos, que trabajan como filtros en estos espacios (16).
88
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
(16). Accesos. Ilustración: conferencia Franziska Ullmann. (17) Fotos: Renata Coradin.
En la planta baja, por ejemplo, se utilizaron elementos como escalones, pasillos y vallas con vegetación para dar más privacidad a los accesos de las viviendas (17). Tanto la entrada como las conexiones entre patios se realizan a través de pasajes de pequeña escala, cruzando los edificios, lo que los hace más agradables y atractivos (18).
18 Pasa es. Fotos: Renata Coradin.
89
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Ver y ser vis to
Otro criterio que podemos ver claramente aplicado en este proyecto es la seguridad. Cuando Franziska Ullmann comenta la importancia de conectar todas las entradas y concentrar el movimiento de las personas, incide en garantizar que por estos caminos las personas puedan ver y ser vistas (19). En los accesos a los edificios, el uso de cristal proporciona más transparencia a esto espacios que, en la mayoría de los casos, son siempre muy impersonales y poco agradables. Un elemento que merece ser destacado es la escalera que da a la plaza principal, toda revestida con cristal, en el edificio desarrollado por Franziska Ullmann. De una manera sencilla, este elemento proporciona realmente sensación de seguridad: imaginemos lo extraño que sería entrar en esta caja si estuviera toda cerrada y contara con poca iluminación (20).
(19). Accesos. Ilustración: conferencia Franziska Ullmann.
(20) Fotos: Renata Coradin.
Analizando la sección de este mismo edificio podemos percibir la superposición de tipologías y también la manera como se alternan, generando movimiento y actividad en las dos fachadas. Franziska Ullmann explica que de esta manera se evita que una fachada sea nocturna y otra diurna, situación reforzada con la colocación de las cocinas bien a la plaza bien a la calle (21) [entrevista, marzo de 2010, Viena].
90
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
COCINA SALÓN BALCÓN DE VIDRIO (21). Sección. Ilustración: conferencia Franziska Ullmann / (22). Fachada exterior e interior. Fotos: Renata Coradin.
Además, los balcones y las ventanas proporcionan control visual desde dentro de las viviendas, convirtiéndose en lo que la arquitecta, siguiendo la terminología de Jane Jacobs, llama social eyes. Como ya hemos apuntado, en la planta baja de este edificio hay espacios comerciales que, tal y como se aprecia en la sección, tienen también un acceso secundario o de servicio desde el interior del conjunto. Las plantas superiores están configuradas en dos niveles de dúplex más un piso superior. El acceso a estas viviendas se realiza a través de dos núcleos de circulación vertical donde están los ascensores y las escaleras. Desde el vestíbulo de este núcleo de circulación, en los dos niveles específicos está el acceso a los pasillos exteriores. La opción de distribuir las viviendas en estos pasillos promociona el encuentro y la convivencia entre los vecinos. También es interesante en este vestíbulo la existencia de un espacio para guardar los carritos de bebé. Esta es una apuesta fuerte en el proyecto y, en realidad, es muy útil en el día a día pues no es sencillo encontrar dentro de casa un espacio adecuado para dejar la sillita de paseo infantil o el carro de las compras (23).
91
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Espacios de guardado
(23) Pasillo de acceso a las viviendas / Espacio de guardado / Hall vestíbulo. Fotos: Renata Coradin.
Abundando en los espacios de guardado, en el la planta baja también encontramos unas instalaciones proyectadas para guardar bicicletas. Su cerramiento translúcido de chapas de acero perforadas no las hace totalmente transparentes pero sí es posible desde fuera ver si hay alguien dentro (24).
(24). Espacio de guardado para las bicicletas. Imagen: Kail, 2001, p.33. Foto: Renata Coradin.
92
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Las lavanderías comunitarias
Si abordamos los usos comunes debemos incluir las terrazas, que también ofrecen espacios de ocio y para la convivencia. Franziska Ullmann cuenta que, debido a la fuerte tradición de vivienda social en Viena, las lavanderías comunitarias se continúan incluyendo en los proyectos (entrevista, marzo de 2010,Viena). Así, en las azoteas hay equipamiento y espacios cerrados para las lavanderías comunes, que en los edificios proyectados por Elsa Prochazka podemos identificar por su forma: son los bloquecitos curvos que observamos en la parte superior de los edificios. Es cierto que hoy en día la mayoría de las personas tienen su propia lavadora dentro de casa, por lo que estos espacios también pueden utilizarse para reuniones de vecinos o cualquier otro uso comunitario (25).
(25) Terraza: espacio de ocio / Lavandería comunitaria. Imagen: Kail, p.33, 2001
Adentrándonos en el tema de las viviendas, el conjunto cuenta con una gran variedad de tipologías, propuestas por cada una de las cuatro arquitectas, que tuvieron en cuenta el hecho de que muchas mujeres critican la vivienda tradicional por sus aspectos “poco prácticos” y por la falta de consideración en relación a las necesidades del hogar y del trabajo familiar.
93
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Tipologías
Los hogares con niños o personas con discapacidad requieren una gran cantidad de atención y de trabajo familiar. La mayor parte de éste sigue siendo realizado por las mujeres, independientemente de si tienen o no un trabajo (Kail; Bauer; Zwingl, 1996, p. 13). Por ello se propusieron pisos con una, dos, tres y cuatro habitaciones. Las arquitectas explican que los de tres y cuatro dormitorios no fueron dibujados exclusivamente para el descanso y el ocio después de un estresante día de trabajo, con un salón soleado, un balcón y un silencioso dormitorio sino que también prestaron atención al resto. Según ellas, la vivienda debe ofrecer óptimas condiciones para el cuidado de la casa y de la familia, así como espacios de calidad para los niños. En muchos casos, la cocina es un ambiente central y también un punto de encuentro. Es el espacio para preparar la comida, lavar los platos, supervisar el trabajo doméstico y también conversar sobre cosas importantes. La cocina debe tener dimensiones suficientes para llevar a cabo el trabajo doméstico y también debe estar ubicada de tal modo que facilite el control visual sobre los niños, ser soleada, tener buenas vistas y estar cerca del comedor (Kail; Bauer; Zwingl, 1996, p. 13). A partir de estas reflexiones, miraremos con más detalle algunas de las tipologías desarrolladas.
(26).
94
CASA-CIUD CASA-C IUDAD AD – una perspect perspect iva de género
En el edificio desarrollado por Liselotte Peretti, los puntos más destacados de estas dos tipologías analizadas son el espacio exterior propio y la relación cocina-comedor, proporcionando también la posibilidad de que la cocina sea aislada cuando se desee, además de la ventilación cruzada en la propuesta con los dos balcones opuestos (26). Pasemos al ámbito de los baños. En el primer ejemplo, aunque se trata de una vivienda con una sola habitación, los espacios del baño están divididos funcionalmente. Por parte, en el segundo, donde sería posible el uso de dos dormitorios, el baño tiene todas las funciones en el mismo espacio y además está prácticamente vinculado a la habitación de mayores dimensiones. Es interesante señalar que, según la normativa de Viena, todos los pisos deben contar con un vestíbulo en la puerta de entrada y con un espacio de guardado de al menos 2m² en el interior de la vivienda, prescripciones que observaremos observaremos también en los próximos proyectos. En cuanto a las tipologías de Gisela Podreka, la des-jerarquización de los ámbitos parece el concepto mejor desarrollado. Las habitaciones tienen todas más o menos las mismas dimensiones y los baños, a pesar de ofrecer todas las funciones concentradas, no están vinculados a ninguna habitación específica. Además, la habitación cerca de la entrada, en la segunda tipología, debido a su ubicación con respecto a los otros espacios, permite su uso como espacio de trabajo, posibilitando la conciliación de actividades entre el trabajo reproductivo y la casa. Los espacios exteriores propios y la ventilación cruzada son otros dos puntos positivos de esta propuesta (27).
(27).
95
CASA-CIUD CASA-C IUDAD AD – una perspecti va de género
Franziska Ullmann propone soluciones que refuerzan la sectorización. La segunda tipología presentada forma parte de las que están ubicadas en la fachada frontal y tienen sus accesos en el pasillo externo. Podemos observar que las áreas húmedas, como la cocina y el baño, fueron posicionadas en relación a este pasillo mientras que los otros espacios, como el salón y la habitación, habitación, dan a la calle. En este caso, el ejemplo es un piso de un único nivel, pero también encontramos los dúplex que, de manera general, presentan la misma solución. El primer ejemplo estaría ubicado en el brazo más largo de este edificio y al contrario que el primero, su cocina da al exterior mientras que las dos habitaciones habitaciones dan al interior del conjunto, reafirmando la idea expuesta por la arquitecta de alternar la posición de las cocinas. Las propuestas tampoco presentan jerarquías o privilegios y las cocinas tienen una comunicación directa con el comedor o el salón y permiten también ser aisladas fácilmente en ocasiones específicas. Además, así como en el ejemplo anterior, la habitación cerca de la entrada posibilita su uso como espacio de trabajo (28).
(28).
96
CASA-CIUD CASA-C IUDAD AD – una perspect perspect iva de género
Por último, las tipologías desarrolladas por Elsa Prochazka refuerzan los criterios de integración entre cocina– comedor y salón, la separación de funciones de los baños y la des-jerarquización de los espacios (29).
(29).
En las extremidades de los edificios a los que se dedicó la arquitecta, se propuso otra distribución de espacios a partir de la evolución del dibujo de este segundo ejemplo ejemplo (30).
(30). Cocinas sobresalientes. Edificio Elsa Prochazka. Fotos: Renata Coradin.
97
CASA-CIUD CASA-C IUDAD AD – una perspecti va de género
Prochazka cuenta con la ventaja de construir en las puntas de los edificios y genera un volumen sobresaliente donde define la cocina, y desde ahí ofrece vistas al playground y a la calle interna. El espacio restante del piso se dividió en seis partes con aproximadamente el mismo tamaño, donde se distribuyen el resto de funciones.
(31). Tipologías Elsa Prochazka. Imágenes: Kail, 2001, p.30 y 31.
98
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
el descanso, tal vez podría considerarse la instalación de más bancos y mesas para dejar que las personas se apropiasen definitivamente de este espacio. Como ya hemos comentado con anterioridad, este es uno de los pocos ejemplos donde se aplicaron los criterios de género y seguramente nos servirá de referencia para seguir generando espacios cada vez más agradables. Tras el éxito del FWS I, siete años más tarde se inauguró el Frauen-Werk-Stadt II y, muy recientemente, a finales de 2009, acaba de concluirse la tercera edición dentro de esta misma línea de proyectos.
100
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
FRAUEN-WERK-STADT II
Al igual que el FWS I, este proyecto es también resultado de un concurso promovido por el Coordination Office y focalizado en las necesidades de la vida cotidiana y las reivindicaciones desde la perspectiva de las mujeres . Basado en el concepto de Multigeneration Housing , su principal inquietud fue propiciar una base de convivencia a partir de una red social entre los vecinos en relación con la gente mayor. Claudia König-Larch y Christine Zwingl son las arquitectas responsables del proyecto y explican que, para ellas, partir de este concepto significó pensar en viviendas tanto para familias con niños como para los más mayores. Son pisos para personas con ganas de tener vecinos y dispuestos a prestar atención a los ancianos. De acuerdo con Claudia Prinz, una de las arquitectas del departamento de género, la diferencia entre este proyecto y el primero es que en FWS II los residentes son más conscientes de que viven en un conjunto que ha sido desarrollado a partir de unos conceptos especiales basados en la convivencia entre personas adultos y gente mayor (www.wieninternational.at, Prinz, 2009). Otra gran diferencia es la dimensión de los proyectos: mientras que el FWS I ofrece 360 viviendas, este segundo es un proyecto mucho más pequeño, con un total de 144 viviendas de las cuales 42 son para la tercera edad y 5 están adaptadas a personas con discapacidades.
(32) Componentes A, B y C. Fotos 1 y 3: Renata Coradin / Imagen 2: König; Zwingl, 2002.
101
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
La propuesta consta de tres edificaciones principales, que las arquitectas llaman Componentes A, B y C, implantadas en el terreno, en la Troststrasse, 73 (10º distrito), zona más consolidada y bien atendida por transportes públicos. En esta misma calle, al norte del solar, pasa el tranvía, que en pocas paradas conecta con la red de metro y otros medios de transporte público.
Plano general A. Componente A B. Componente B C. Componente C 1. Edificio existente 2. Espacio de juegos infantiles 3. Lavandería 4. Espacio para guardar las bicicletas 5. Patios privados Entradas aparcamiento
(33).
102
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
En sentido longitudinal, y casi de una esquina a otra del terreno, existe una acentuada diferencia de nivel, solucionada con la extensión de una plataforma desde el edificio, conectando esto pisos en diferentes alturas. En este mismo sentido, se propuso un paseo que conectara la fachada sur con la esquina norte del terreno, donde está el acceso al transporte público. Toda esta idea de permeabilidad acabó generando un espacio abierto en el centro del conjunto que, por un lado, garantiza la buena iluminación y la circulación de los apartamentos, y, por otro, proporciona un interesante espacio común con jardines, playgrounds y espacios de ocio en planta baja, tal y como se observa en el plano general (33).
Esquemas y análisis (34).
(35).
(36).
Complementan esta zona de uso común la lavandería, la sauna, las terrazas accesibles y los espacios de guardado, pensados para bicicletas y los cochecitos de bebé, que se definen como volúmenes sueltos en la plataforma (37). Además el conjunto también cuenta con instalaciones para la comunidad, distribuidas por diferentes lugares y dirigidas a las diferentes franjas de edad: hay espacios para ancianos, niños y jóvenes. Esta diferenciación es muy beneficiosa pues muchas veces los espacios comunes son tan impersonales o universales que acaban no siendo usados por nadie.
103
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
La planta baja es mayoritariamente residencial pero también cuenta con algunos espacios de uso de la comunidad y una oficina de policía, ubicada en la entrada de la calle Zohmanngasse.
(37) Volúmenes – Espacio de guardado para bicicletas y lavandería. Fotos1 y 2: Renata Coradin / Imagen 3: Kail; Irschik; Prinz. 2009.
Es importante destacar que, a pesar de que no estamos frente a un proyecto de grandes dimensiones, la circulación interna es estrictamente peatonal y que los accesos al aparcamiento en el subsuelo están localizados en la calle Troststrasse, al norte y en la calle Fernkorngasse en el lateral oeste (35). Merece la pena comparar la circulación interior de este proyecto y del FWS I. Aquí este paseo tiene un carácter mucho más reservado, las entradas no invitan a las personas que no viven ahí a pasar, son más tímidas y además llevan unas rejas bajas que generan dudas sobre si entrar o no. En cambio, el primero se abría al exterior prácticamente induciendo a las personas a cruzar hacia el interior.
Espacio Público
Como ya hemos comentado, los espacios públicos concentran en toda el área central del conjunto, ofreciendo espacio de descanso, para el estar y para el encuentro, así como un playground para los niños más pequeños.
104
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Es interesante advertir la interesante presencia de estos largos bancos de madera alrededor del playground , porque proporcionan espacios para los adultos acompañantes de los niños y también para el descanso de los más mayores cuando bajan a tomar el sol. Este uso es posible incluso en los días de sol más fuerte gracias a una tela de protección sobre este espacio, tal y como puede observarse en la imagen (38). Este espacio exterior también está conectado a una sala de juegos y un espacio para jóvenes, ubicados en la planta baja del edificio C.
(38) Espacio público central. Fotos1 y 2: Renata Coradin / Foto 3: Luciana Tessio.
También debido a su posición central, este espacio está más controlado por los vecinos desde las ventanas de los edificios alrededor. Como veremos más adelante analizando las tipologías, en algunos casos, incluso las cocinas están implantadas en la fachada interior lo que permite que los adultos puedan estar mirando a los niños mientras preparan la comida. Además, la sensación de seguridad se ve reforzada con el uso de cristales en gran parte de los espacios cerrados y de los accesos.
105
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Ac cesos transparentes
En las fotos siguientes podemos observar que en prácticamente todos estos espacios internos de uso común y en los espacios intermedios (vestíbulos de acceso, cajas de escaleras y pasillos de acceso a las viviendas), el revestimiento es transparente (39).
(39) Transparencias. Fotos: Renata Coradin .
En relación a la distribución de los pisos, se ofrece diferentes formas de alojamiento para las varias generaciones que están repartidas por todo el conjunto. También es interesante observar la flexibilidad de uso y las diferentes posibilidades de integración entre las viviendas algunas veces en el mismo nivel y otras, como es el caso del edificio C, entre niveles sobrepuestos.
Tipologías
Gracias a los esquemas podemos identificar la distribución de viviendas en los niveles superiores de las edificaciones y el esmero en las viviendas especiales para discapacitados, que se concentran todas en el mismo edificio, el cual posee una sauna y una terraza comunitaria en su último piso (40).
106
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
(40) Tipologías nivel 1, 2 y 3. Imágenes: König; Zwingl, 2002
Los edificios, o Componentes, A y B son los que proponen viviendas con posibilidad de integración entre los pisos vecinos. De esta manera, cada acceso da inicialmente a cuatro viviendas, dos de ellas más pequeñas (de apenas una habitación) y las otras de dos habitaciones.
(41). Tipologías Edificio A.
107
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
En esta propuesta es importante también observar este salón exterior para uso común de los vecinos, al lado de la escalera, y que también da acceso a un balcón volcado al interior del conjunto. A su vez, las cocinas de los pisos de dos habitaciones tienen abiertas sus ventanas hacia el patio interior, con una buena vista de la zona de juegos infantiles exterior (41). Además la distribución interna de los espacios propicia la integración entre la cocina y el comedor-salón, generando espacios más diáfanos. Todas las habitaciones tienen las mismas dimensiones y los baños de los pisos más grandes presentan independizadas las diferentes funciones. También vale la pena destacar que hay balcones a lo largo de todo el edificio, en las dos fachadas, hecho que reafirma el ideal de los espacios exteriores propios. Integración entre los pisos
(42). Tipologías para gente mayor - Edificio A y B, calle Zohmanngasse.
Pero lo más interesante es observar cómo estos pisos pueden integrarse y dar como resultado una vivienda más grande, para una familia o un grupo de personas que la quieran compartir (42).
108
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Estos ejemplos muestran las tipologías para gente mayor dispuestas a lo largo de la calle Zohmanngasse y las dos esquinas, que siguiendo la misma línea de las tipologías de este edificio, generan la integración espacial y un uso des-jerarquizado de las habitaciones y del baño en uno de los casos. En cuanto al edificio C, la propuesta de integración se da entre pisos sobrepuestos que pueden o no acoplarse. De las siete alturas (planta baja más seis), las inferiores están dedicadas a espacios comunes para juegos y para los jóvenes. El primer piso se compone de viviendas de una habitación que tienen el acceso desde el exterior por la calle Fernkorngasse, a través de un pasillo donde están distribuidos los pisos. Los balcones de estos pisos dan al patio interno y en la esquina hay un espacio de guardado para carritos de bebé y bicicletas con un revestimiento de vidrio (43).
(43) Tipologías nivel 1 - Edificio C. Fotos: Luciana Tessio.
En las plantas 2, 4 y 6, el acceso a las viviendas se da también por un pasillo acristalado en la fachada interna, pero los niveles 3 y 5 están vinculados a sus pisos inferiores por medio de estas escaleras, que pueden ser incorporadas a los pisos en el caso de un dúplex o proporcionar acceso individual a los pisos superiores, siempre desde los mismos pasillos (44). Todas las plantas tienen balcones exteriores a la calle y los intermedios, es decir, el tercer y quinto nivel también cuentan con balcones al patio interior. Estos pisos de los niveles intermedios, gracias a la doble fachada se ven favorecidos por la circulación cruzada y, al igual que los otros ejemplos de este proyecto, ofrecen espacios des-jerarquizados y una buena integración entre los ambientes.
109
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
(44) Tipologías niveles 2,4 y 6 / Tipologías niveles 3 y 5 / Detalle de la escalera.
En todos los ejemplos también podemos identificar los espacios de guardado internos exigidos por normativa a todas las viviendas. Es importante destacar que en las plantas inferiores tanto del edificio C como del B hay un espacio con divisiones de trasteros para cada apartamento, donde las personas pueden guardar objetos de grandes dimensiones o poco utilizados. Como ya citamos al inicio de la exposición de este proyecto, la sensación de comunidad es más fuerte que en el FWS I debido a que la escala de la propuesta es menor y a la existencia de una gran oferta de instalaciones para el uso de los vecinos, dirigidas a las diferentes edades. También es importante destacar que las viviendas propuestas presentan tipologías bastante adaptables y con gran capacidad de integración entre sí, pudiendo ser adecuadas para las más diversas formaciones familiares y grupos, por lo que dan cumplimiento al objetivo multi-generacional que dio inicio a este proyecto.
110
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
FRAUEN-WERK-STADT III
Si el FWS II transmite una mayor sensación de comunidad que el FWS I, en el tercero esta sensación es aún más fuerte, pues el proyecto cuenta con la participación de una asociación de mujeres que participó durante todo el proceso, desde la elección del terreno hasta en la definición de los espacios en que deseaban vivir. La asociación [ro*sa] inició su andadura en 2003 por iniciativa de la arquitecta y catedrática Sabine Pollak, quien logró reunir un grupo de mujeres interesadas en realizar un proyecto de vivienda desarrollado por mujeres para atender sus propias necesidades y deseos, basándose en la participación activa de todas ellas. En realidad la propuesta no era de realización tan fácil y, desde que emergió la idea, el grupo pasó algunos años buscando el terreno ideal. Durante este período muchas mujeres pasaron a formar parte de la asociación pero también muchas la dejaron debido a la urgencia por conseguir una vivienda. Hacia la mitad del proceso la asociación llegó a dividirse: algunas integrantes cambiaron de proyecto ante la duda de si se alcanzarían los objetivos. Pollak y una mitad del grupo siguieron la búsqueda hasta que, en 2007, lograron encontrar su terreno. Como explicó Eva Kail, los concurso sólo se convocan para proyectos con más de 50 o 100 viviendas; los menores simplemente deben desarrollar una propuesta y presentarla al jurado, quien lo evaluará, pero no pasan por la fase de competición. Así pues, como se trataba de un proyecto pequeño de apenas 44 viviendas, el FWS III no fue el resultado de un concurso sino de la perseverancia de la arquitecta Sabine Pollak y de este grupo de mujeres, que no desistieron de sus objetivos. Finalizado en diciembre de 2009, el conjunto se encuentra en Anton-Sattler-Gasse, 100 (22º distrito), al norte del río Danubio, al igual que el FWS I. Según la asociación, esta es una zona residencial tranquila que cuenta con dos escuelas, una guardería, una pista de tenis, un parque y una piscina cubierta en las proximidades y también con un centro comercial cercano (http://www.frauenwohnprojekt.org/index.htm). El solar se encuentra a aproximadamente 300 metros de la estación de Metro más cercana y, según una de las residentes e integrante de la asociación, en más o menos 20 minutos se llega al centro de la ciudad (entrevista, marzo de 2010).
111
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
La asociación
Como hemos comentado anteriormente, la asociación logró un acuerdo con la administración y la mitad de los 44 pisos fueron directamente entregados a sus componentes. La otra mitad siguió los patrones normales de entrega de viviendas en Viena. La asociación logró algo más que la mitad de los pisos pues consiguieron que los contratos de arrendamiento tuviesen que estar exclusivamente a nombre de mujeres, es decir, a través de un proceso de discriminación positiva pasaron a privilegiar a las mujeres en el acceso a estas viviendas.
(45). Asociación y encargados: inicio de las obras. Reunión de la asociación. Fotos: http://www.frauenwohnprojekt. org/index.htm
La asociación también deja claro que el objetivo del proyecto es reunir personas que quieran vivir en cooperación y comunidad, participando en un proceso de autoayuda que cuenta con la colaboración de todos y todas, y en el que son bienvenidas personas de cualquier sexo, edad y cultura. El edificio tiene la forma sencilla de un rectángulo alargado, perforado por tres patios que configuran unidades de menor escala y con un revestimiento de paneles de fibrocemento en dos colores para personalizar sus fachadas (46). Si trazamos una línea del más al menos permeable, este tercer proyecto sería el más cerrado de los tres ya que no ofrece libre acceso a los patios interiores, es más reservado a los residentes y aporta poca calidad espacial al barrio. Además, no ofrece espacios comerciales y los espacios comunes de que dispone son todos de uso exclusivo de la comunidad.
112
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Plano general 1. Edificio 2. Patios interiores 3. Jardín posterior 4. Accesos cubiertos 5. Espacio público – playground 6. Guardado para bicicletas 7. Entradas aparcamiento (46).
(47). Imagen FWS III: http://www.frauenwohnprojekt.org /index.htm. Pancarta de la asociación [ro*sa]. Foto: Renata Coradin.
Como la asociación tuvo la oportunidad de participar durante todo el proceso de concepción del proyecto, todos los espacios creados son acordes a las necesidades planteadas por estas mujeres. Espacios de uso común
El edifico cuenta con espacios de uso común distribuidos por todos los niveles. Empezando por la planta baja, además del aparcamiento con luz natural, los residentes también cuentan con una serie de trasteros donde pueden guardar objetos poco utilizados o demasiado grandes como para estar dentro de casa (48).
113
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
También en esta planta hay un taller de reparaciones, que la comunidad está montando para facilitar estructura y herramientas al vecindario. Les pareció muy bien tener un espacio dedicado a este uso ya qua hay ciertas cosas que son difíciles de reparar dentro de casa y no todo el mundo cuenta con el material necesario para, por ejemplo, arreglar una bicicleta o una silla rota. Como esta planta está en un nivel inferior al de la calle se propusieron pisos dúplex con las habitaciones ubicadas en la parte de abajo.
(48) Taller de reparaciones y trasteros. Fotos: Renata Coradin. Planta nivel -1.
(49) Planta baja – accesos / espacios de uso común.
114
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
En la planta baja a la mayoría de las viviendas se accede desde el exterior, así como al espacio de guardado para las bicicletas y el espacio para los residuos reciclables (49). En el interior está el espacio para guardar los cochecitos de bebé y la sala principal de la comunidad para reuniones e incluso exposiciones internas, como puede apreciarse en la foto. También en este mismo salón se está montando una cocina para el uso de la comunidad (50). Desde este espacio se puede acceder al patio posterior que, en realidad, no es nada más que un espacio verde al fondo del terreno. Ya en el lateral, donde también está la rampa de acceso al aparcamiento, se está construyendo un espacio con playground , mesas y sillas para la comunidad; sin embargo, este espacio no será cerrado de modo que las personas del barrio también podrán utilizarlo.
(50) Salón principal, patio posterior, playground en construcción. Fotos: Renata Coradin.
Cabe aclarar que todas las fotos que ilustran el trabajo fueron realizadas en marzo de 2010, tres meses después de que se entregara el edificio a los residentes. Es por ello que se observan todavía espacios sin acabar, pues la obras finales aún estaban en curso.
115
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Esquemas y análisis (51).
(52).
(53).
En relación a los usos, la movilidad y los espacio de uso común, el proyecto es bastante simple y como es solo una edificación, no tiene mucha permeabilidad en cuanto a circulaciones internas y, como máximo, ofrece como espacio público al barrio el playground que se está construyendo al lado del edificio. (53). Retomando el tema de las instalaciones para el uso comunitario, el edificio también cuenta con una biblioteca en el segundo piso, una lavandería, una sauna y un espacio para relajarse en la última planta, donde también está la terraza comunitaria.
La terraza comunitaria
(54) Azotea / Lavandería comunitaria / Sauna / Huertos. Fotos: Renata Coradin.
116
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Estas terrazas, además de proporcionar conexión con la lavandería desde el espacio exterior, hacen posible que en los meses más cálidos las personas puedan tender allí su ropa que se seque. La comunidad también cuenta con espacios creados para su uso como huertos (54).
Los pasillos
Los espacios de transición también se desarrollaron totalmente vinculados al día a día y las necesidades de las futuras residentes. Ejemplo de ello son los anchos pasillos creados a las puertas de las viviendas, como se puede observar en las fotos. En épocas de mudanza, aunque estos pasillos estén llenos de enseres, aún queda espacio para el paso lo que difícilmente ocurriría en un corredor de dimensiones mínimas (55). Tal y como comenta una de las residentes, ellas mismas pidieron que los pasillos fueran más anchos para poder sacar una silla allí y pasar un buen rato charlando con las vecinas (entrevista, marzo de 2010, Viena). Otros elementos interesantes que merecen ser destacados son la presencia de grandes ventanas en estos pasillos y, principalmente, la profundidad de las mismas, las cuales fueron pensadas exactamente de ese modo para que las personas pudieran sentarse a conversar o a contemplar el paisaje.
(55). Pasillo; Ventanas en profundidad. Fotos: Renata Coradin.
117
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Tipologías
En relación a las viviendas, Sabina Pollak comenta que su intención fue generar una gran variedad de tipos y garantizar la libertad dentro de los pisos para facilitar futuros cambios o la integración entre viviendas vecinas.
(56). Variedad de tipologías. Imagen: http://www.frauenwohnprojekt.org/index.htm
(57). Tipologías 1ª planta
118
Tipo 1 – Tipo 2 – Tipo 3 – Tipo 4
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Entre toda la variedad propuesta la arquitecta cita 4 tipos principales: el tipo 1 incluye mini-apartamentos o boxes individuales, para una persona; el tipo 2, se desarrolló para parejas o madres solteras y puede acoger hasta dos personas; en el tipo 3 pueden vivir familias o comunidades de la tercera edad, y, por último, el tipo 4 es un piso pensado para una familia de tres generaciones. La arquitecta también añade que, para generar una mayor flexibilidad y la posibilidad de integración entre las viviendas, todos los servicios, cocinas, baños y espacios de almacenamiento están concentrados en una franja de 1,50 metros y posicionados en relación al corredor.
(55). Tipologías 2ª planta
Analizando las tipologías propuestas se nota que realmente la integración y la fluidez de los espacios son los puntos más ampliamente desarrollados. Sin embargo, no existen posibilidades prácticas de que las cocinas puedan ser aisladas en algún momento, lo que acaba por generar la obligación de mantenerlas siempre limpias, tarea que en la mayoría de los casos es realizada por las mujeres. En relación a los baños es importante destacar que ni en los pisos más grandes se ha considerado la división de funciones, lo que acaba por limitar el uso del espacio dependiendo de la cantidad de personas que vivan. Respecto a los espacios de guardado, éstos se localizan en la franja de servicios, lo que propone un mejor uso de éstos que básicamente no tienen una función determinada para el hogar. También la mayoría de las viviendas cuenta con balcones, que se van alternando en las fachadas del edificio y constituyen espacios exteriores propios.
119
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Una residente miembro del [ro*sa], comenta que las mujeres de la asociación pudieron opinar sobre sus casas en el transcurso del proyecto, y enseña la suya muy contenta por haber conseguido finalmente que se llevara a cabo el proyecto y explica que las personas están muy satisfechas de vivir ahí.
(56). Interior vivienda / Exterior. Fotos: Renata Coradin
FRAUEN I, II y III
Una vez trazado el panorama general es posible observar los tres proyectos a la vez e identificar qué tipo de aportaciones hace cada uno hace al tema de la vivienda desarrollada desde la perspectiva de género. Como ya hemos mencionado, a pesar de formar parte de un mismo programa los tres proyectos presentan características y objetivos bastante diferentes. El FWS I, el primero y más grande, es, comparado con los otros dos, el que menos enfatiza la idea de haber sido un conjunto desarrollado “por y para mujeres”, desde el punto de vista que quien lo habita. Es decir, mientras el FWS II plantea la integración entre generaciones y la asistencia a los ancianos, y el FWS III se apoya en las expectativas de un grupo específico, el FWS I es un proyecto construido en base a criterios especiales para todos los grupos y generaciones.
120
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
desarrollado por Elsa Prochazka, y otra, que los vidrios del vestíbulo del edificio de Franziska Ullmann, que son translucidos, sería mejor que fueran transparentes. Los otros proyectos aún no han realizado esta encuesta, la cual arrojaría datos muy importantes en relación a la satisfacción de las personas que viven en estos edificios. Los proyectos demuestran que la experiencia desde el punto de vista de las mujeres reivindica cuestiones que, al ser aplicadas, favorecen la construcción de espacios de calidad para el desarrollo de nuestras vidas. De modo general, son proyectos que se diferencian exactamente por haber sido planteados a partir de las necesidades cotidianas de las personas y de los futuros habitantes. El hecho de proponer un cambio de normativa para garantizar que el proyecto contara con una infraestructura demuestra esta visión. En especial enfatizan las relaciones entre las personas, reforzando el carácter social y proponiendo gran variedad de espacios colectivos para facilitar la convivencia. Por otro lado, desde una perspectiva general, atienden las particularidades y son proyectos que fueron pensados desde las necesidades de cada grupo. No tienen la pretensión de generar espacios universales para todos pero intentan responder con la máxima calidad en todos los espacios propuestos. Sin embargo, estos tres proyectos son ejemplos de la efectiva participación de las mujeres en la construcción de las ciudades, sea desde la perspectiva de las técnicas que aplican sus experiencias en el desarrollo de los proyectos o desde su posición de ciudadanas que plantean sus deseos y necesidades de la vida cotidiana. De este modo, estos proyectos quedan aquí como ejemplos -cada uno a su escala- de que es posible dar forma concreta a los ideales de generación de espacios más igualitarios y agradables para los diferentes grupos de personas.
122
PARTE IV
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
CONCIENCIA DE GÉNERO EN BRASIL Después de haber explorado los ejemplos de Viena y la manera como incorporan en sus programas criterios que ayudan a una mejora de la vida cotidiana, daremos un salto en el tiempo y en el espacio para analizar el caso brasileño. Nos centraremos en algunos proyectos significativos para observar si encontramos esa sensibilidad hacia las cuestiones de relación social y de ayuda en las tareas cotidianas que ya hemos visto aplicados en las obras vienesas. Retrocedamos a la década de 1950, época de gran éxito para la arquitectura moderna, cuando se levantaron los primeros conjuntos residenciales sociales en Brasil. Analizaremos uno de los proyectos más paradigmáticos del momento, el conjunto residencial Pedregulho, realizado por el arquitecto Affonso Eduardo Reidy pero que contó con la influyente participación de la ingeniera Carmen Portinho. Portinho, la tercera mujer graduada en ingeniería del país, fue una figura de gran importancia en el movimiento feminista y tuvo una participación histórica en la modernización de la arquitectura brasileña que, en sus luchas feministas, defendía la igualdad en la profesión.
“En las profesiones no hay sexo predominante y sí talento, estudio y mucha dedicación al trabajo. El resto es invención de quien quiere explorar el trabajo de los otros.” (Portinho en Andrade, 1999, pág. 62).
Siguiendo en la misma época analizaremos otro proyecto, el Parque Guinle, realizado por el arquitecto Lucio Costa. Éste sirve de contrapunto al Pedregulho dadas las características bastante distintas de ambos conjuntos. Mientras el Pedregulho es un conjunto residencial destinado a la clase obrera, el Parque Guinle se presenta como un conjunto de apartamentos destinados a la clase alta. Así, más allá de las diferencias sociales, la propuesta es explorar estos proyectos a partir de la perspectiva de género, observando cómo se llevaron a cabo, resaltando los puntos positivos y negativos presentes en cada uno y analizando las experiencias que nos pueden transmitir.
125
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Plano General
(01). 1. Bloque de viviendas A 2. Bloque de viviendas B 3. Bloque de viviendas C 4. Escuela 5. Gimnasio 6. Piscina 7. Vestuario 8. Cantro de salud 9. Lavandería 10. Cooperativa 11. Playground 12. Guardería 13. Pasaje subterráneo
Por otro lado, el hecho de que existiera una lavandería común hizo posible que el coste de la construcción se redujera gracias a la eliminación de las áreas de servicio de cada apartamento, con las ventajas económicas que supuso. Es interesante observar cómo la implantación la lavandería comunitaria pudo mejorar la vida cotidiana de las personas. Lo mismo puede decirse en relación a la presencia de la guardería, pues seguramente ha facilitado mucho
127
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
la vida de estas madres tener un lugar cerca de casa donde dejar los hijos mientras salen a trabajar. También la proximidad del centro de salud y del mercado colabora con la realización de las tareas del día a día y del cuidado familiar. (02)
(03)
(04)
En el primer esquema es posible identificar la mezcla de usos obtenida por la implantación dentro del conjunto de edificaciones tanto de viviendas como de equipamientos, comercios y servicios. Este equilibrio de funciones beneficia a los residentes gracias a la proximidad de infraestructuras y hace más fácil el mantenimiento rutinario del hogar en el día a día (02). En el esquema que representa la movilidad se advierte que las calles para vehículos marcan el contorno del límite del terreno y dan acceso a los aparcamientos próximos a los bloques de viviendas. Este gráfico también destaca la prioridad dada a los trayectos peatonales frente a los de vehículos y su fuerte papel integrador en las conexiones del conjunto, entre los edificios de vivienda, de equipamientos y los espacios públicos (03). Todo el espacio restante, alrededor de las edificaciones y delimitado por los accesos, es considerado espacio común. Las áreas verdes, de ocio y para el juego de los niños son las zonas libres, que representan una gran parcela del terreno (04).
128
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
En la foto aérea es posible observar la relación entre las edificaciones y el protagonismo del edificio curvo. También queda clara la posición central que ocupa la plaza del conjunto respecto a los otros elementos, constituyendo la principal área de ocio del proyecto. (05)
(05). Foto aérea del conjunto. Relación entre las viviendas y los equipamientos. Foto: Archivo Carmen Portinho, en Bonduki, 2000, pág. 89.
Las vivi endas El proyecto consta de cuatro bloques de viviendas y propone una densidad de unos 500 habitantes por hectárea, equivalente a 89,6 viviendas por hectárea. De acuerdo con el reglamento vigente en la época de la construcción, las viviendas estaban destinadas al alquiler para funcionarios municipales y sus familias. De este modo, durante el desarrollo del programa se realizó un censo que concluyó con la inscripción de 570 familias, cuyas condiciones sociales fueron analizadas para servir de base a la elaboración del proyecto. La realización de este censo hizo posible la verificación de la necesidad de disponer de diferentes tipos de viviendas, variando las acomodaciones: desde pequeños apartamentos de una única pieza con cocina y baño hasta apartamentos de tres y cuatro habitaciones, dependiendo de las condiciones de las familias que iban a ser alojadas.
129
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
El bloque A, el edificio curvo que destaca y se presenta como el icono del proyecto, cuenta con 260 metros de largo y 272 apartamentos de diferentes tipos. Los bloques de viviendas B, las dos edificaciones que se repiten, tienen 80 metros de largo cada uno y dos niveles de dúplex de 2, 3 y 4 habitaciones, con un total de 56 apartamentos entre los dos. El bloque C no llegó a construirse, pero en proyecto proponía doce plantas con apartamentos de 2, 3 y 4 habitaciones, y era el único que contaba con ascensores.
(06). Bloque A: sección y alzado.
Debido al gran desnivel del terreno, durante la construcción del bloque A se creó una planta intermedia para facilitar el acceso al edificio a través de dos puentes que lo conectan al nivel más alto del terreno, como se observa en la sección (06). De hecho, esta planta intermedia también puede considerarse un espacio de transición, pues hace de manera gradual la conexión entre el exterior y el interior del edificio. Ahí están la guardería y el servicio social del conjunto pero, por ser un área parcialmente libre y bien protegida, es también un lugar para el ocio, para el juego infantil y para el encuentro de los vecinos (07).
130
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Este espacio puede considerarse correcto respecto a la seguridad de los niños que juegan ahí, y transmite tranquilidad a las madres. Dada su posición elevada en el terreno, proporciona una vista más completa de todo el conjunto y colabora en el control visual realizado desde las ventanas y balcones de los residentes.
(07). Bloque A: planta del nivel intermedio.
En la imagen es posible identificar los dos puentes que conectan la planta intermedia con el nivel más alto del terreno y la calle que limita el terreno en este lado. También con las partes cerradas donde están la guardería y el servicio social, configurando los espacios libres para el juego infantil y la charla de los vecinos. Otro elemento importante a observar en esta imagen es la modulación de la estructura, lo que seguramente facilita la integración de ámbitos dentro del hogar y entre viviendas vecinas. Los dos pisos inferiores al piso intermedio son apartamentos de una única pieza con cocina y baño, y los pisos superiores son dos niveles de dúplex que pueden tener desde una hasta cuatro habitaciones, según la agrupación de las unidades. La solución del dúplex fue elegida para conseguir mayor rentabilidad y hacer posible el acceso al 4º piso sin necesidad de instalar ascensores.
131
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
(08). Imagen del piso intermedio y puente de acceso. En los dos pisos superiores están los dúplex y abajo los apartamentos de una única habitación. Foto: Archivo Carmen Portinho, en Bonduki, 2000, pág. 91.
Los pasillos de circulación son exteriores, lo que mejora las condiciones de ventilación e iluminación (10). Además, estos corredores funcionan como espacios de transición donde tiene lugar el contacto entre los vecinos y donde los niños pueden jugar bajo en control de los familiares, actuando como filtros desde la calle hasta el interior de las habitaciones. La presencia de todos estos espacios comunes propicia el intercambio entre las personas y también la seguridad, pues la visibilidad desde estos pasillos, por ejemplo, es una manera de control visual realizado por la propia comunidad.
(09). Fachada. (10). Pasillo de acceso a las viviendas. Foto: (09,10) Nabil Georges Bonduki, en Bonduki, 2000, pág. 92.
132
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
(11). Bloque A: plantas de las tipologías.
Al analizar las tipologías que forman parte de este conjunto es importante recordar que es una agrupación destinada a personas de baja renta que, en la gran mayoría de los casos, trabajan fuera de casa para garantizar el sustento de la familia, tanto hombres como mujeres. También son numerosos los casos de familias monoparentales, en especial las formadas por una madre que debe encargarse tanto del trabajo exterior como de las tareas del hogar. Las habitaciones de la primera y de la segunda planta tienen aproximadamente 35m² y plantean un espacio fluido y continuo. La divisoria en el medio del salón, que aparenta segregarlo en dos espacios, es de poca altura, por lo que deja pasar la luz y el aire mientras ofrece un poco de privacidad al espacio más próximo a la ventana. En los dúplex es interesante notar la preocupación por la ventilación de baños y cocinas. Por este motivo los baños están en la planta superior, de manera que estos dos ambientes pueden contar con ventilación natural sin necesitar mecanismos artificiales complementarios. Debido a la posición del baño, la habitación vecina no alcanza los 2,8 metros de ancho (definido como medida mínima ideal en este trabajo) pero, a pesar de ello, los aproximadamente 12m² de superficie hace que sea un buen uso de este espacio, como puede observarse en el esquema adjunto. De hecho, también el baño podría adaptarse a la separación de funciones y hacer posible su uso simultáneo por al menos dos personas (12).
133
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
(12). Posibilidad de usos: habitación y baño dúplex (Bloque A).
También algunos espacios como el situado bajo la escalera o en el pasillo superior, fueron aprovechados como zonas de guardado, hecho que merece ser destacado en el análisis de esta tipología. Es interesante observar que, a pesar de tratarse de una vivienda bastante compacta, no olvida el aprovechamiento máximo de todos los espacios. En relación a las tipologías desarrolladas en los bloques B, ésas no son tan compactas pero cuentan también con espacio exterior propio. Los edificios están formados por dos niveles de dúplex superpuestos y tienen la planta baja libre, pensada como un área de sombra para la convivencia.
(13). Bloques B: fachada y escaleras laterales. Foto: Archivo Carmen Portinho, en Bonduki, 2000, pág. 94.
134
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Este proyecto fue elaborado en la década de 1950, cuando toda la arquitectura en Brasil estaba bajo la potente influencia de la arquitectura moderna y de los Cinco puntos de Le Corbusier. Aún así, en este caso, la planta baja puede ser interpretada como un espacio de sombra, de juegos y de paso, pues el proyecto considera la mezcla de usos a través de los equipamientos que garantizan la actividad en todo el conjunto. La tipología desarrollada para estos edificios propone una mayor relación entre los espacios comunes dentro de la vivienda. Como queda patente en los siguientes esquemas, hay una clara integración entre los espacios de la planta inferior, entre el salón, el comedor y la cocina (14). En este nivel también se plantea el espacio de guardado y el balcón, que caracteriza el espacio exterior propio y proporciona contacto con el medio exterior. Al igual que en el bloque A, los accesos a las viviendas se dan a través de los pasillos comunes, que realizan el papel de espacios de transición. En el nivel superior están las habitaciones, que, dentro de lo posible, no presentan una jerarquía espacial. Así como en otras tipologías, hay una habitación de menores dimensiones y el baño. Éste, por sus medidas, puede tener separadas sus funciones aunque no conste en el proyecto.
(14). Bloques B: plantas por tipología y alternativas.
135
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
La última planta del esquema presenta como alternativa la integración de los ámbitos de viviendas vecinas y muestra la posibilidad de adaptación del edificio a las necesidades de los residentes. Esto es únicamente posible por la modulación de la estructura. Todos estos conceptos contemplados en el proyecto proporcionan mayor calidad espacial y mejores condiciones de vida a sus habitantes. Desde los equipamientos propuestos hasta las soluciones espaciales internas fueron pensados a partir de las necesidades de las personas en la realización de sus tareas cotidianas.
LA PARTICIPACIÓN DE PORTINHO Portinho, como directora del DHP (Departamento de Habitação Popular), participó activamente en la concepción de este conjunto residencial. No solo se involucró en el diseño del programa de viviendas propuesto sino que también coordinó las obras y luchó para obtener los recursos necesarios para llevar a cabo el complejo.
“Una vez asumí [el encargo de directora del Departamento de Habitação], el primer proyecto fue la construcción de conjuntos residenciales bajo nuevo concepto de vivienda, destinados a la población de baja renta y, principalmente, ubicados cerca de sus lugares de trabajo. Así ahorrarían el tiempo y dinero utilizados en el transporte. Finalmente, serían viviendas dignas, que respetan al trabajador, poniéndole al alcance todas las comodidades de la vida moderna, integrándolas también a las artes.” (Portinho, 1998, en Bonduki, 2000, pág. 82)
Durante la segunda guerra mundial, la ingeniera fue candidata a una beca del Consulado británico para trabajar en la reconstrucción de áreas destruidas y, a su vuelta a Brasil, trajo consigo el concepto de comunidad y unidad vecinal que, sin perder tiempo, aplicó al Pedregulho.
136
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
(15) Foto: Nabil Georges Bonduki. (16) Foto: Paulo dos Santos Baptista, en Bonduki, 2000, pág. 98.
En el Pedregulho se plantearon conceptos que hasta el momento nunca habían sido abordados en otro proyecto de vivienda social en Brasil, como por ejemplo la integración con las artes, que, de hecho, fue la gran aportación de Portinho al proyecto. Los paneles azules de Portinari para el gimnasio (15) y los de Burle Marx para el patio de la escuela (16) confieren mayor calidad e identidad a los espacios. Escuela, guardería, centro de salud, mercado, lavandería y conjunto deportivo fueron concebidos como componentes indisociables de un conjunto residencial que se relacionaba con los presupuestos de la arquitectura moderna y concordaba con el movimiento internacional de emancipación femenina, desencadenado en la década de 1910. Se observa un fuerte cambio de actitud en el proyecto, en su concepción, que prevé una nueva forma de vivir y se vincula a la revisión de un conjunto de valores relacionados con la “vocación natural” de la mujer para la maternidad y las tareas domésticas. Redefinir la posición de la mujer en la sociedad y romper su clausura en el hogar eran los ideales feministas en los que se asentaba el concepto de vivienda defendido por Carmen Portinho. En 1942 Portinho escribió un artículo en la Revista Municipal de Engenharia , editada también bajo su coordinación, que vale la pena citar para determinar claramente sus ideales.
“El hombre civilizado del siglo veinte perdió el contacto con el problema de la vivienda, mientras el hombre primitivo siempre buscó construir un abrigo con toda simplicidad, sin pretensión, sin énfasis y sin falsedad. El Homo Sapiens del siglo veinte vive en casas mal proyectadas desde el punto de vista técnico y económico, construidas en desacuerdo con la escala humana, de ínfimo nivel sanitario, sin aire, sin luz, sin vistas y, casi siempre, abarrotadas
137
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Los lavaderos son comunitarios y allí se hacen pequeños servicios. Mientras una arregla el pelo de las chicas, la otra vende dulces.” (Portal PUC Rio digital, 2008)
El proyecto fue desarrollado por Reidy y concebido por Portinho siguiendo la idea de integrar la vivienda en los servicios y espacios destinados a la vida comunitaria, teniendo en consideración todos los factores que, en la primera mitad del siglo, conllevaron cambios sustanciales en las relaciones familiares, en la sociedad y en el rol de la mujer. (Um século de construção, 2000. www.piniweb.com.br)
RELACIONES La arquitectura moderna brasileña se caracterizó por una producción dentro del lenguaje de los Cinco puntos para una Nueva Arquitectura sistematizados por Le Corbusier, visión adoptada y adaptada por los brasileños (Drebes, 2003). Le Corbusier estuvo en Brasil en la década de 1930 y, posteriormente, durante su estancia en Europa, Portinho le visitó en París para enseñarle el proyecto del MEC (Ministerio de la Educación y de la Salud), realizado por Lucio Costa y un equipo liderado por él e integrado por Carlos Leão, Oscar Niemeyer, Affonso Reidy, Ernani Vasconcellos, Jorge Machado Moreira, Le Corbusier (como consultor), Burle Marx y Portinari (Andrade, 1999). También Reidy mantuvo una estrecha relación con Le Corbusier durante todo el proceso de desarrollo del proyecto del Pedregulho, como podemos comprobar en la correspondencia cruzada del inicio de la década de 1950 (Spindler, 2005). En la misma época en que se diseñaba el Pedregulho, Le Corbusier se dedicaba a la Unité d’Habitation de Marsella, en Francia, de manera que ambos arquitectos estaban siempre intercambiando informaciones y fotos. Pero, aunque la similitud de los programas era muy grande, en algunos elementos los proyectos presentan soluciones distintas. A pesar del uso de pilotis en ambos casos, la diferencia topográfica generó soluciones distintas. En el Pedregulho se planteó una segunda línea de pilotis en el acceso al edificio: aquí es importante destacar la presencia de la guardería y del servicio social, lo que proporciona mayor actividad a este nivel, genera espacios más contenidos para estar y aumenta la sensación de seguridad de las personas.
139
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Otro punto a ser tenido en cuenta son los equipamientos: en la Unité de Marsella se encuentran agrupados y aislados en un elemento que se articula solo, reforzando la separación de funciones, mientras que, en el Pedregulho, están distribuidos en las diversas edificaciones, poniendo en valor las relaciones espaciales. Teniendo en cuenta estas referencias se puede concluir que las diferencias detectadas en el proyecto se refieren a las relaciones entre los espacios y las personas. La distribución de los equipamientos en el conjunto sugiere una escala de proyecto más próxima a los residentes. Los conceptos de proximidad, mezcla de usos y atención hacia la vida cotidiana de las personas, que pueden ser identificados en el Pedregulho, forman parte de los ideales defendidos por Carmen Portinho y seguramente por ello fueron incorporados al proyecto. Basándonos en estas diferencias, en los criterios de género, y con la intención de generar un contrapunto de experiencias, analizaremos otro proyecto llevado a cabo por Lucio Costa también en la década de 1950: el Parque Guinle. Al igual que el Pedregulho, este es uno de los proyectos de referencia de la arquitectura moderna brasileña. Ambos representan los dos extremos en la escala social pues, mientras el Pedregulho había dedicado sus viviendas a los funcionarios públicos, los edificios del Parque Guinle iban destinados a las familias pertenecientes a la clase alta de la población. Así, considerando las diferencias entre estos dos proyectos, analizaremos las características observadas en el Parque Guinle y sus relaciones con los conceptos desarrollados en este trabajo, explorando qué otros criterios podrían incorporarse para un resultado más cercano a la escala de los usuarios, de manera que proporcione mayores facilidades para el desarrollo de las actividades cotidianas.
140
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
PARQUE GUINLE El conjunto residencial del Parque Guinle también se localiza en la ciudad de Rio de Janeiro, en este caso en el barrio de Laranjeiras, donde está el Palacio de las Laranjeiras, actual residencia del gobernador del estado. El proyecto inicial desarrollado por Lucio Costa constaba de seis edificaciones, con una de ellas posicionada frente a la calle Gago Coutinho y las otras cinco en una línea quebradiza alrededor del parque (17).
(17). Croquis: implantación, Lucio Costa. Foto: Costa, 1995, pág. 206.
Sin embargo sólo fueron construidos tres de los seis edificios: Nova Cintra, Bristol y Caledônia, en los años 1948, 1950 y 1954, respectivamente. Los otros edificios que se observan en el plano general son de MMM Roberto y no tienen relación con los tres primero construidos (18). Como ya hemos apuntado anteriormente, los principios de Le Corbusier eran decisivamente incorporados en los proyectos realizados en Brasil en esta época, y en el caso del Parque Guinle no podía ser de otro modo. En la perspectiva dibujada por el propio Lucio Costa podemos identificar los bloques lineales de estructura independiente y plantas bajas libres elevadas sobre pilotis. A diferencia del Pedregulho, este proyecto no cuenta con equipamientos o estructuras para la vida cotidiana. Los espacios comunes se resumen en un gran parque donde hay dos plazas con playground para los niños, un área para realizar ejercicios, la cascada y el estanque.
141
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
De los tres edificios, solamente el Nova Cintra presenta uso comercial en la planta baja. Lucio Costa había previsto para este piso una confitería pero desde el inicio de la ocupación el proyecto sufrió alteraciones y este espacio fue dividido en tres locales comerciales menores.
Plano General
(18). 1. Ed. Nova Cintra 2. Ed. Bristol 3. Ed. Caledônia 4. Ed. MMM Roberto 5. Palacio das Laranjeiras 6. Entrada del parque 7. Estanque 8. Plaza 9. Cascada 10. Área para ejercicios
Un análisis de los esquemas que siguen nos permite identificar en el primero la falta de variedad de usos. Es cierto que en la planta baja del edificio Nova Cintra hay tres espacios comerciales, pero en todo el proyecto no existe ningún equipamiento o servicio propuesto para atender a las necesidades de la población de estos edificios (19).
142
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
También es posible percibir la prioridad de los vehículos frente a los peatones. La principal calle de acceso a los edificios esta construida con aceras y diferencia de nivel, lo que demuestra el predominio de los coches frente a los peatones (20-22). En un nivel inferior están las calles peatonales que se concentran en el medio del parque, conectando las plazas y los espacios comunes. (19)
(20)
(21)
El parque, proyectado también por Burle Marx, presenta una arborización bastante densa, hecho que, si bien favorece el confort térmico, acaba por perjudicar la sensación de seguridad debido a la falta de visibilidad e iluminación.
(22, 23). Privilegio de los vehículos / Arborización densa. Foto: Ana Carolina Ogata, 2004.
143
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
(24). Edificio Nova Cintra: planta baja.
Otra característica también relacionada con la tradicional casa brasileña es la presencia de dos terrazas por vivienda, una social para recibir y otra de servicio en la parte posterior, conectada al comedor, a las habitaciones y al servicio (Costa, 2005, pág. 212). Es importante destacar que, en Brasil, el trabajo doméstico tiene una fuerte presencia dentro de las viviendas, principalmente entre las clases medias y altas. La distinción de las circulaciones sociales y de servicio, así como las habitaciones de servicio, son cada vez más comunes en edificios de alto nivel social. De este modo, la integración entre los ámbitos se ve bastante perjudicada pues, debido a la separación de las circulaciones, los apartamentos están divididos en zonas sociales, privadas y de servicio, tal y como puede observarse en la tipología del edificio Nova Cintra (25).
145
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Se puede decir que privacidad es la palabra clave en este proyecto, debido a la separación de los accesos y la división de los espacios dentro de la vivienda. Por otro lado, este es un factor desfavorable para la relación entre las personas si no hay la posibilidad de integración entre los espacios.
(25). Edificio Nova Cintra : plantas según tipologías.
146
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
espacial con que cuenta, debido principalmente a la tan marcada separación de funciones, en especial en el área de servicio, que representa un espacio aislado frente a los otros espacios de la vivienda.
DOS PROYECTOS, PRIORIDADES DISTINTAS Por tanto, la reflexión a partir del análisis de estas dos obras nos permite reconocer que, mientras en el Pedregulho es posible identificar la preocupación de sus creadores por el conjunto, la vida cotidiana y la relación entre las personas, el Parque Guinle, proyecto no de menor calidad, prioriza lo individual frente a lo colectivo y se apoya sobre las diferencias sociales y de género para garantizar su mantenimiento. Estos dos proyectos representan dos extremos sociales y dos modos de vida bastante diferentes. Es interesante comparar cómo se desarrollaron de manera tan distinta conceptos espaciales y de relación entre las personas. El Pedregulho deja claro el compromiso con lo común, con la red de relaciones entre las personas y con los vecinos. Este proyecto fue pensado teniendo en cuenta el ritmo de vida de sus futuros habitantes y las necesidades que tendrían en sus vidas cotidianas. Por ser un conjunto destinado a una población de baja renta, se priorizó la practicidad de los espacios interiores, a pesar de las pequeñas dimensiones de las viviendas. Los espacios comunes son la clave del proyecto: los pasillos de acceso a las viviendas que funcionan como extensiones de los espacios de la casa o los equipamientos propuestos (lavandería, etc.) favorecen la vida cotidiana de sus habitantes debido a su proximidad. Por otro lado, el Parque Guinle parece intentar concentrar dentro de las viviendas todos estos espacios comunes desarrollados exteriormente en el Pedregulho. El área de servicios, por ejemplo, ocupa una parte considerable del piso, gestiona todo el funcionamiento y mantenimiento de estas casas pero siempre con una presencia invisible. Como hemos analizado, la relación entre los espacios interiores se da de tal manera que el sector de servicio se articula de una manera secundaria, sin vincularse a los espacios privados o sociales de estas viviendas.
148
PARTE V
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
“Si las décadas de 1940 y 1950 estuvieron marcadas por la discusión y por las propuestas de vanguardia en los territorios urbanos, en el municipio de São Paulo, el inicio de los años 90 estuvo subrayado por la participación de la población organizada en movimientos pro-vivienda y por algunas intervenciones positivas.” (Rubano, 2005, pág.
112)
A principios de la década de 1990 la situación distaba bastante de la perspectiva democrática imaginada y deseada en los años 40 y 50. Sin embargo, lo importante es la permanencia de las referencias de esta época como cultura de proyecto y no únicamente como repetición (Rubano, 2005, pág. 113).
“ A partir de 1964, los programas de vivienda popular del gobierno militar pasaron a adoptar un carácter sobre todo funcional, con proyectos estandarizados y de ejecución casi siempre precaria. Estos ‘conjuntos-paquetes’, generalmente en las franjas periféricas de las grandes ciudades, se componen de edificios dispuestos en paralelo y sin ninguna relación con el entorno. Acumulando errores y equívocos a lo largo de décadas, esta política habitacional no logró solucionar el problema de la vivienda, agravado dramáticamente en São Paulo en los años 80.” (Serpa, 1997, pág. 01)
Como afirma Angelo Serpa, tras un período de muy malas construcciones, de repetición de modelos sin relación alguna con el entorno, en la década de 1980 el déficit de vivienda había alcanzado dimensiones enormes. El ayuntamiento de São Paulo buscó revertir la crítica situación con nuevas construcciones para “vacíos urbanos” y terrenos localizados en zonas ya urbanizadas, con el objetivo de evitar la extensión horizontal de la ciudad y aproximar la vivienda a los centros de trabajo, aprovechando las redes de servicios, de equipamientos urbanos y las líneas de transporte público ya existentes, a la búsqueda de relaciones con el entorno (Serpa, 1997, pág. 01). El conjunto residencial Vila Mara e Rio das Pedras forma parte de esas “nuevas” edificaciones surgidas a partir de la articulación entre los espacios libres y los construidos, que busca generar zonas colectivas de calidad e incentivar el intercambio y la convivencia entre los residentes.
154
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
EL EDIFICIO JAPURÁ El edificio Japurá, proyectado en 1947, está situado en la región central de São Paulo. Ocupó el lugar de Navío Parado, un gran complejo de cortiços (edificios bastante antiguos, generalmente en muy malas condiciones de conservación, ocupados por muchas familias de pocos ingresos y podríamos traducir por “conventillos”) . Éste fue demolido en 1948 y el desalojo de toda la población de inmigrantes negros e italianos que habitaban el complejo generó un grave problema social en aquel momento (Bonduki, 1994, pág. 171, en Rubano, 2005). Promovido por el IAPI (Instituto de Aposentadoria e Pensões de los Industriários), este proyecto también formó parte del Perímetro de Irradiação , un plan de avenidas que proponía una renovación urbanística del área de expansión de la ciudad que recuperara ese sector, que se encontraba bastante infravalorado. Debido a la poca anchura de las calles, la normativa no permitía la implantación de una edificación de gran altura junto a la calle. Por ello Kneese de Melo retiró el edificio principal hacia el centro de la manzana y construyó una edificación más baja, de dos plantas, en el alineamiento de la calle Japurá. El proyecto proponía un edificio más alto, compuesto por 288 viviendas distribuidas en 14 plantas, y una edificación más baja, con una zona comercial y de servicios prevista en la planta baja, abierta a la calle, que albergaba en la primera planta tipologías de alojamientos pensados para los obreros solteros, con dormitorio y salón integrado, cocina y baño. Plano general 1. edificio 14 plantas 2. edificio 2 plantas 3. galería de cristal 4. calle Japurá 5. jardín 6. pista deportiva (01). Imagen: E.K. de Melo en: Antonucci, 2007.
155
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
La conexión con la calle se propuso a partir de dos galerías, llamadas galerías de cristal, que definen el acceso peatonal al edificio y rememoran las pasarelas que existían anteriormente en los cortiços que habían sido demolidos (Galesi; Malta Campos, 2002). Sin embargo, hoy en día sólo una de las galerías está abierta al acceso peatonal: todo el edificio está vallado y su acceso está controlado (02).
(02). Accesos: galería de vidrio, entrada de vehículos. Fotos: Fabricia Zulin.
En el subsuelo, además del aparcamiento estaban previstos un restaurante y una lavandería comunitaria (que ya no existe) para uso de los residentes. El empleo de pilotis en la planta baja proporcionaba un espacio libre que se abría al encuentro entre los vecinos y donde también se incluían zonas de juego infantil. La cubierta ajardinada proyectada por el arquitecto representaba otro espacio para la convivencia.
(03)
156
(04)
(05)
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
“El Japurá – IAPI, São Paulo, unidad habitacional de nuevo cuño, ‘resumen de ciudad concentrada’, incorpora en el edificio diversas funciones, haciendo viables espacios de un nuevo tipo. Además de estos elementos, más relacionados con la tipología y las conformaciones urbanas, había en esta propuesta nuevas intenciones con respecto a la vida colectiva en las ciudades. Los pilotis, de 8 metros de altura, dejaban la planta baja libre; las cubiertas-terraza representaban importantes espacios para la vida comunitaria; las calles internas iban a tener tiendas y servicios; al final el edificio se dibujaba para que estuviera esencialmente dedicado a la vida colectiva.” (Rubano, 2001, pág. 34)
De acuerdo con Lizete Rubano, la propuesta de variados elementos y espacios que favorecen la vida colectiva hace de este edificio un “resumen de ciudad”, el cual concentra diversas funciones pues a las zonas comunitarias añade usos comerciales y de servicios en la planta baja del edificio de menor altura.
(06). Sección – Plantas: tipologías.
157
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Se propusieron dos tipologías principales: los dúplex, que se concentran en el edificio más alto, y los alojamientos para solteros, ubicados en la primera planta del edificio que da a la calle. La opción de los dúplex se debió a la reducción de gastos: hizo posible un menor número de paradas del ascensor y diferentes alturas entre pisos, haciendo que los pisos impares, donde se encuentra el salón y la cocina, tuvieran apenas 2,50 metros de altura, mientras que el superior tendría 3 metros, de acuerdo con la normativa (Rubano, 2005, pág. 09). El acceso a las viviendas se realiza a partir de un pasillo interno central que aparece a cada dos pisos, como podemos observar en la sección anterior. Sin embargo, la posición de estos pasillos acaba condicionando la utilización de iluminación y ventilación artificial. Aunque haya cristales en los extremos, la longitud de este corredor hace necesaria la iluminación artificial. También en estos dibujos es posible identificar los pozos de ventilación interna definidos a partir de las propias tipologías (06).
(07). Pasillo interno del edificio más bajo; fachada del edificio más alto. Fotos: Fabricia Zulin
El proyecto propone espacios des-jerarquizados en la tipología de aproximadamente setenta metros cuadrados. De todos modos la relación entre los ambientes no surge de manera fluida: podemos observar que casi no hay pasillo pero no se identifica conexión entre los espacios. Es cierto que la cocina es de dimensiones suficientes como para ser comedor, pero prácticamente no hay relación con el salón. Si por un lado es correcto que los ámbitos no estén predefinidos por funciones específicas y hagan posible que las personas se apropien de los espacios de acuerdo con sus necesidades, por otro sería mejor que hubiera un poco más de conexión y relación entre estas zonas para propiciar el contacto, la convivencia y la coparticipación entre los moradores. Quizás si planteáramos la posibilidad de prescindir de los elementos divisorios resultarían espacios mucho más interesantes.
158
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
En el caso de los alojamientos propuestos, se trata de tipologías de aproximadamente veinte metros cuadrados destinadas a trabajadores solteros. Además del baño y de la cocina, encontramos un salón abierto que concentra el resto de actividades como, por ejemplo, comer, dormir y estudiar, todo en el mismo espacio. Con respecto al área de servicio, Rubano comenta en su tesis doctoral que, a pesar de haber sido centro de intensas investigaciones y de redefiniciones en proyectos de vivienda, principalmente durante las décadas de 1920 y 1930 en Europa, en Brasil es un tema menos abordado debido a la resistencia a hacer colectivas las tareas entendidas como domésticas y también a las referencias culturales que diferencian el uso de estas áreas. La arquitecta también se refiere al cambio estructural y espacial propuesto por la “cocina de Frankfurt”, y reconoce que prácticamente no aparece en los proyectos de vivienda pública de Brasil. Aunque en algunos de ellos sí se pudo experimentar de una revisión programática que se expresó en propuestas espaciales como la eliminación de las áreas de servicio del interior de las viviendas o su reubicación y redimensionamiento en el interior de los hogares (Rubano, 2001, pág. 44). En el Pedregulho, por ejemplo, estas áreas fueron eliminadas del interior de las viviendas y se apoyó la propuesta de la lavandería mecanizada. En el caso del edifico Japurá, estas áreas prácticamente desaparecieron, y solo se conservó un lavadero en el interior de los baños (Rubano, 2001, pág. 45). En este proyecto Kneese de Melo también propone una lavandería colectiva en el subsuelo, que ya no existe, así como otros espacios comunes que poco a poco fueron siendo “desactivados”. Actualmente, el edificio, recién reformado, está ocupado por una población de clase media, se encuentra cerrado con rejas y, a excepción de un espacio donde hay un juego para niños y una pista deportiva, no hay muchos más zonas de convivencia donde los vecinos pedan reunirse.
(08). Pista deportiva; juego infantil; galería inactiva; aparcamiento. Fotos: Fabricia Zulin.
159
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Una de las galerías ya no se utiliza para el acceso y, como se observa en la foto, está hoy llena de mesas ya que funciona como un espacio supletorio conectado a la sala de reuniones del edificio. La terraza ya no es un espacio común, el acceso es restringido y apenas la transita el conserje del edificio; la zona en la planta baja, entre los pilotis, ha sido transformada en área de aparcamiento para aumentar el número de plazas disponibles para los residentes, olvidando definitivamente que había sido planteado como un espacio de ocio y encuentro (08). El edificio más bajo del conjunto pertenece al INSS (Instituto Nacional de Seguridad Social) y se encuentra completamente abandonado y degradado, sin utilización. Este hecho es muy desfavorable para el edificio, la calle y toda la zona en general, además de contravenir la intención primitiva del arquitecto al proponer un espacio comercial que se comunicara con el barrio aportando actividad y calidad al barrio (Sumaquero Gutmann; da Silva Schicchi, 2005, pág. 09). El conjunto está muy bien ubicado en el centro de São Paulo, en una zona con gran variedad de oferta comercial y de servicios pero, en cualquier caso, la falta de cuidado y de utilización de este edificio más bajo es un punto bastante desfavorable en cuanto a la calidad del espacio pues, si fueran utilizados, seguramente se generaría una situación mucho más agradable no sólo para los habitantes del edificio sino para toda la población de esta zona, y colaboraría también a aumentar la sensación de seguridad si acogiera actividades en la planta baja. Por otro lado, la propuesta de los alojamientos para solteros está en sintonía con una de las grandes problemáticas de la ciudad: muchas personas de clase obrera, que viven en periferias distantes y trabajan en el centro de la ciudad, no pueden volver a sus casa todos los días y acaban durmiendo en las calles o en habitaciones en muy malas condiciones. Estos alojamientos podrían ser una alternativa para esta gente si el edificio funcionara tal y como proponía Kneese de Melo -un resumen de ciudad- ya que aumentaría la calidad del barrio y tendría en cuenta las necesidades de la vida cotidiana.
160
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
VILA MARA E RIO DAS PEDRAS El conjunto residencial Vila Mara e Rio das Pedras es uno de los proyectos ejemplares desarrollados por el ayuntamiento de São Paulo y promovidos por el programa de vivienda popular de la SEHAB (Secretaria da Habitação e Desenvolvimento Urbano [Secretaría de vivienda y desarrollo urbano]) entre los años 1991 y 1997.
“Buscamos romper el mito de que los buenos proyectos son incompatibles con la vivienda económica. Los trabajadores, organizados de forma colectiva, tienen derecho al servicio de los arquitectos, a discutir y decidir sobre las alternativas de proyecto de sus casas. Esto se viabilizó sobre todo en el programa de producción de vivienda en ‘mutirão’ (grupo de personas) y autogestión, basado en la asociación entre la administración popular y organizaciones no gubernamentales, como ocurrió en Rio das Pedras.” (Bonduki, 2000, pág. 125)
Este conjunto residencial se erigió gracias a la promoción de la asociación comunitaria de construcción, con recursos del ayuntamiento y fue una de las cinco experiencias pioneras de construcción de edificios de cuatro plantas por mutirão y autogestión (programa FUNAPS Comunitario – revista Projeto, nº 147, 1991, pág. SP11, en Rubano, 2005, pág. 106). La participación popular garantizó la formación de una comunidad, por lo que, además de los bloques de viviendas, también lograron construir una guardería, talleres culturares y un centro cívico entre otras actividades, que resultaron en un espacio de uso colectivo que generaba una fuerte identidad entre los residentes y sus viviendas en una zona tan gris y periférica de la ciudad de São Paulo (Bonduki, 2000, pág. 126).
(09). Imagen aérea: Fuente: Google Earth
161
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Plano general 1. Bloques de viviendas 2. Vilas – patios en planta baja 3. Centro cívico 4. Aparcamiento 5. Bicicletario 6. Escuela primaria 7. Espacio para jugar a la pelota 8. Centro de informática 9. Espacio para skates – patines 10. Estación de tren – Vila Helena 11. Acceso a la estación
Como se observa, el proyecto engloba tres manzanas: dos destinadas prioritariamente a edificios residenciales y una tercera, a la implantación de equipamientos comunitarios. Sin embargo, en el centro del los bloques de viviendas también hay un centro cívico que no constaba inicialmente en el proyecto y que fue construido por la propia comunidad dentro de cada uno de los conjuntos.
(11)
162
(12)
(13)
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
La ocupación perimetral del bloque se ve fuertemente marcada por las edificaciones paralelas que conforman espacios lineales entre cada dos edificios, denominados vilas, que en realidad son patios cerrados pertenecientes a las viviendas ubicadas en la planta baja (14). En el centro de cada conjunto hay un espacio más amplio que en principio fue pensado como zona común para los vecinos, donde los niños pudieran jugar. En la actualidad ha sido transformado en aparcamiento debido a la falta de espacio para los coches, para los cuales se habían previsto las dos franjas grises que aparecen en el esquema, a lo largo de los edificios y con acceso desde la avenida del Vale, a oeste, donde la fachada es más permeable (12).
(14). Vilas / Espacio en el centro, hoy utilizado como aparcamiento. Fotos: Hector Vigliecca Associados / Luiz Roberto Coradin
Los dos conjuntos fueron construidos igualmente por sus habitantes en el proceso de mutirão, pero su gestión se lleva a cabo de manera separada y por ello se aprecia en las imágenes que hay diferencia entre los conjuntos, principalmente con relación a los acabados y al mantenimiento posterior. Por otro lado también es importante destacar que las imágenes cedidas por el despacho de Hector Vigliecca son de la época de la inauguración mientras que el resto son actuales. Esto nos permite ver, por ejemplo, cómo el espacio central anteriormente era utilizado como área de juegos y para el ocio, y hoy aparece como aparcamiento. Con respecto a los equipamientos implantados en la tercera manzana, encontramos una escuela primaria, un bicicletário (espacio para aparcar bicicletas) que permite a los habitantes del barrio dejar sus bicicletas ahí para coger el tren y un telecentro (centro de informática) donde se imparten clases de informática a la población (15). Según el conserje de uno de los dos conjuntos, quien también trabajó en la construcción, la guardería a la que se refiere Bonduki existió únicamente mientras los conjuntos estaban siendo erigidos para que las mujeres que
163
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
trabajaban en la construcción tuvieran un lugar donde dejar a sus hijos. Actualmente la guardería ya no existe y este espacio ha sido ocupado por el telecentro.
(15). Estación; campo de tierra; escuela primaria; espacio de estar; telecentro; bicicletário. Fotos: Luiz Roberto Coradin
Además de estos equipamientos también hay un campo de tierra para jugar al fútbol, un espacio para monopatines y patines, un playground y un área bajo los árboles con algunas mesas y bancos donde las personas pueden estar y descansar. También es interesante reseñar la conexión con la estación Vila Helena, que se realiza a través de la pasarela que atraviesa la vía llegando al lado opuesto, lo que favorece la movilidad de las personas de esta zona, facilita el acceso y vence barreras urbanas como la vía del tren.
(16). Foto: Luiz Roberto Coradin. Foto y croquis: Hector Vigliecca Asociados
Los conjuntos residenciales tienen las esquinas marcadas por volúmenes más altos, donde se ubica el depósito de agua, y por los accesos a la galería del segundo piso, una pasarela que recorre todo el conjunto conectando los
164
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
bloques de vivienda y que da acceso a los pisos de este nivel y del superior. En las imágenes que siguen, tanto en la foto como en el croquis del arquitecto, se observa este volumen en la esquina y el acceso a la galería. En el segundo croquis destaca también el espacio central, hoy tomado por los coches (16). Esta galería, además de conectar los bloques, también actúa como espacio de transición para las viviendas ubicadas en este nivel y en el superior, y tiene acceso desde varios puntos dentro del conjunto como las escaleras de las esquinas y también por escaleras internas (17).
(17). Fotos: Hector Vigliecca Asociados – Luiz Roberto Coradin.
Como se observa en las plantas que siguen, los accesos a las viviendas están distribuidos por todo el conjunto a lo largo de los bloques, cada entrada da acceso a cuatro viviendas, dos en la planta baja y dos en la primera planta; lo mismo sucede desde la galería, que permite acceder a los pisos de la segunda y tercera planta, situación observable con más detalle en las plantas de las tipologías (18).
(18). Accesos: planta baja y segunda planta. Fotos: Vanda Coradin / Luiz Roberto Coradin.
165
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Sin embargo, toda esta red de accesos se planificó para un conjunto abierto, donde las personas podrían llegar a sus casa desde cualquier parte, lo que hoy es bastante complicado ya que el complejo ha sido cercado con rejas. Según el conserje, se tomó esta decisión por motivos de seguridad. Desde entonces sólo se utiliza una única entrada, ubicada en una de las esquinas, donde hay una cabina de control. Aunque el conjunto está ocupado mayoritariamente por viviendas, los residentes también cuentan con algunos espacios comunes, como el centro comunitario (construido en el centro), un salón para fiestas y ocho habitaciones de uso comunitario (que hoy se usan como espacio de mantenimiento, aulas para clases de enseñanza a adultos, oficina del conserje y una oficina de asistencia a la mujer, vinculada al departamento de policía de la mujer, que además del conjunto atiende a todo el barrio) [19].
(19). Único acceso; asociación de las mujeres de Zona Leste; espacio para reuniones y fiestas; centro comunitario. Fotos: Luiz Roberto Coradin.
Sobre los espacios de uso común, el conserje comenta que, una vez que el área central ha sido ocupada como aparcamiento, los niños se han quedado sin espacio para jugar, por lo que la comunidad tiene planes de construir un espacio de juegos en la cubierta del centro comunitario. Hoy en día los niños suelen reunirse en los pasillos o entre los coches, espacios nada adecuados. Cada conjunto cuenta con 296 viviendas, que se distribuyen en planta baja más tres niveles, y en total viven aproximadamente unas 1.200 personas. Los accesos a estas viviendas se dan de diferentes maneras en cada nivel. Cuatro viviendas comparten acceso, dos de ellas en planta baja y dos de ellas en planta primera, que deben salvar una escalera. De igual manera, la galería que recorre los edificios permite acceder a dos viviendas de la segunda planta y dos de la tercera, estas últimas también mediante escalera.
166
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Los pisos ubicados en la planta baja son los únicos que cuentan con patio privado, y algunos también con una otra habitación externa. Sin embargo, en todas las viviendas existen áreas de servicio ya que para los propios habitantes que impulsaron su construcción era culturalmente difícil prescindir de ellas y colectivizar determinados servicios. Con respecto a las tipologías, los espacios propuestos no presentan jerarquías y, a pesar de no alcanzar completamente la referencia de los 2,80 metros de diámetro en las habitaciones, presentan dimensiones suficientes para una buena distribución del mobiliario y cierta flexibilidad en cuanto a las funciones. Por ejemplo, en las viviendas en planta baja podría darse un uso comercial a la habitación que da a la calle sin que ello interfiriera en el resto de la vivienda. Es interesante como la relación entre la cocina y el lavadero se ve mucho más clara que entre la existente entre la cocina y el salón, o comedor. Al analizar el ciclo de la ropa, se nota que la ubicación del lavadero genera un largo recorrido por la casa que interfiere con las funciones de la cocina. Cabría trabajar un poco más el concepto del ciclo de la ropa para que, poco a poco, tanto los habitantes como los técnicos tomen conciencia de que estas funciones pueden estar separadas.
(20). Plantas: tipologías
167
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
De este modo podemos percibir que cada proyecto, de acuerdo con sus condiciones específicas, utilizó determinados conceptos para favorecer la calidad de vida de sus residentes y actuar como un elemento dinamizador del barrio donde se encuentra. Dentro de estos ejemplos, vale la pena resaltar la fuerte presencia de la conciencia de comunidad impuesta por Carmen Portinho en el Pedregulho, a partir de la conciencia de género que ya en aquella época tenía la ingeniera, retomada posteriormente en el residencial Vila Mara e Rio das Pedras por los vecinos que se organizaron, construyeron y actualmente gestionan el conjunto.
170
PARTE VI
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
EXPERIENCIA Ya hemos desgranado tres casos de estudio: la aplicación de los criterios de género en el barrio de Gracia, en Barcelona; los ejemplos de los FWS en Viena y la comparativa entre una obra en Rio de Janeiro y otra en São Paulo. En este último capitulo presentaremos la propuesta ganadora del concurso Premio Caixa–IAB 2008/2009, localizada en la ciudad de São Paulo. Junto a la arquitecta Fabricia Zulin, y con la colaboración de la arquitecta Vivian Cuzziol, tuve la oportunidad de participar en la realización de esta propuesta, que resultó vencedora en la modalidad “Intervenciones en áreas urbanas degradadas” del concurso “Ideas y soluciones para la urbanización y vivienda social en Brasil”. El proyecto se formuló a partir de una crítica a los tradicionales modelos de conjuntos residenciales que no corresponden a las necesidades reales de la población y que únicamente ofrecen soluciones de gran escala, sin variedad de tipologías ni infraestructuras para la vida cotidiana. El principal objetivo de esta propuesta es la aplicación de conceptos espaciales que proporcionen mayor calidad de vida a los futuros habitantes así como espacios de convivencia, y que aseguren la permeabilidad del conjunto, buscando una relación de armonía con el entorno urbano próximo. Como la convocatoria era un concurso de ideas, el proyecto se enfocó principalmente hacia los conceptos que podrían ser desarrollados en la construcción de un conjunto residencial de calidad. De esta manera, la propuesta se presentará a partir de las tres escalas definidas al inicio del trabajo (el barrio, el edificio y la casa) verificando qué criterios podrían ser aplicados en cada una de ellas.
Desde el barrio
En cuanto a la oferta de infraestructuras para la vida cotidiana, el proyecto plantea espacios comerciales y de servicios con la finalidad de que complementen e interactúen con la infraestructura ya existente en la región central de la ciudad.
173
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
El terreno elegido forma parte de la zona central de São Paulo, zona con una amplia oferta de comercios y servicios. La idea generatriz de este proyecto es impulsar pequeños comercios de primera necesidad, como fruterías, panaderías, farmacias y pequeños supermercados, principalmente para la población más cercana. Es importante destacar que el barrio de Santa Cecilia, donde se localiza el emplazamiento, cuenta con una oferta de seis EMEIs (Escuelas Municipales de Educación Infantil), diez escuelas particulares de educación infantil y cuatro guarderías municipales. Según la ley de usos del suelo, el área de intervención es una “zona especial de interés social”, con inmuebles infrautilizados y sin articulación con el entorno.
01 Foto: www.novocentroarouche.com.br/fotos.as / Límite de intervención / Vista desde el Elevado Costa e Silva. Foto: Fabricia Zulin.
En las fotos adjuntas es posible identificar algunos elementos presentes en la zona, como el Elevado Costa e Silva, una vía elevada que forma límite en casi toda la fachada oeste del bloque. Bajo él se encuentra la estación terminal de autobuses Amaral Gurgel, un punto bastante importante para la movilidad local, de difícil acceso y que no tiene relación con la zona. Bajo el Elevado, donde se localiza esta terminal de autobuses, encontramos un espacio sin tratamiento, sin visibilidad y que no transmite ninguna sensación de seguridad a las personas que lo utilizan o a las que pasan por ahí. En la parte posterior también es posible identificar edificaciones en pésimo estado de conservación. Las áreas verdes existentes se encuentran cercadas con rejas y no pueden ser utilizadas libremente por la población.
174
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
(02) Vista aérea desde el Elevado Costa e Silva - Foto: www.novocentroarouche.com.br/fotos.asp /Terminal Amaral Gurgel - fotos: Fabricia Zulin.
A partir de una evaluación sobre el estado de conservación de los edificios existentes, se realizó una selección y únicamente se preservaron los edificios que se encontraban en buen estado de conservación y de uso, pues muchos de los que se ven estaban abandonados y en pésimas condiciones (03).
(03) Esquema de edificios derribados. Fotos: Fabricia Zulin.
Esta zona cuenta con una red de trasporte público bastante variada y es fundamental en la propuesta eliminar las barreras existentes para generar flujos y recorridos que conecten los accesos de esta red. De esta manera, la
175
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
implantación de los nuevos edificios, se pensó a partir de estos ejes propuestos para favorecer los recorridos realizados por las personas.
(04). Propuesta de implantación / Perspectivas.
El Elevado Costa e Silva es un elemento determinante en la implantación de la propuesta, pues esta vía elevada alcanza una altura equivalente a unos tres pisos y es un fuerte generador de contaminación sonora por pasar muy cerca de las ventanas de los edificios. Con la intención de filtrar las molestias proporcionadas por este transporte aéreo, que es conocido como “minhocão” (lombriz gigante) debido a su gran extensión y por la manera como atraviesa la ciudad, el edificio propuesto en esta fachada se retiró en dirección al centro de la manzana. También se previó un área verde con densos árboles que actuara como un filtro.
176
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
Desde el edificio Las soluciones en una visión de conjunto parten principalmente de las relaciones que se desea generar con la ciudad. La relación de la planta baja con el entorno se da a partir de los recorridos creados y de la configuración de espacios público variados, áreas verdes se van mezclando con plazas duras desde los espacios más abiertos hasta los más contenidos, en una gradación desde lo público hasta los espacios más privativos.
(05). Planta baja – estudio de los flujos – permeabilidad y conexiones.
Las plantas bajas alternan espacios comerciales y los accesos a los edificios, lo que, de hecho, garantiza la actividad y el control visual por parte de los tenderos y usuarios, proporcionando mayor sensación de seguridad tanto a los habitantes como a las personas que apenas cruzan por estos espacios.
177
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Es importante destacar la intención de que estos accesos sean transparentes para dar mayor visibilidad y sensación de seguridad, así como que los pasajes por los edificios tengan una escala agradable, como sucede en el FrauenWerk-Stadt I, con el objetivo de atraer las personas hacia el interior del conjunto o animarlas a cruzar por él. La propuesta es que este nivel fuera un espacio de transición entre la ciudad y los edificios, configurado por diferentes escalas, desde los espacios de pasaje para las personas que únicamente han de cruzar el conjunto hasta las que utilizan el comercio local o los espacios de ocio, así como también los lugares pensados para la permanencia, donde los vecinos pueden descansar o quedar con otras personas. También en la planta baja, entre los comercios y servicios localizados a nivel de calle están los accesos a los edificios, a partir de los cuales, gradualmente, se va llegando al interior de los hogares a través de los espacios de transición generados, como escaleras y pasillos.
(06). Espacios de transición y de relación.
Los accesos a las viviendas se distribuyeron en pasillos, los cuales articulan los edificios proporcionando espacios de encuentro y convivencia entre los vecinos, así como espacios para que los niños jueguen frente las puertas de sus casas bajo la mirada de los adultos (07). También las terrazas de los edificios más bajos son espacios accesibles para el uso de la comunidad, donde pueden existir desde espacios para juegos infantiles hasta huertos o espacios de descanso bajo el sol.
178
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
(07). Pasillos que articulan los edificios.
Con respecto al programa tipológico propuesto, se definieron cuatro tipologías principales que pueden ir variando, uniéndose o separándose según las necesidades de los futuros residentes. De las cuatro, la denominada “alojamiento” es la que merece mayor atención en la propuesta, pues fue creada pensando en la necesidad de las personas que trabajan en el centro y viven en la periferia, y que, debido a las dificultades para volver a casa todos los días, duermen en el centro, muchas veces en la calle.
Estos alojamientos son habitaciones de aproximadamente 20m², con baño interior, y cuentan con espacios de uso común para completar sus necesidades, como cocina, comedor, sala de estar y lavandería. El resto de tipologías se definen como “mínima”, “básica” y “familia” según sus dimensiones. La “mínima” está formada por un piso de cuarenta metros cuadrados para una o dos personas, mientras que la llamada “familia” alcanza los setenta metros cuadrados, pensada para que puedan vivir grupos de personas o familias más extensas.
179
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Sin embargo, debido a la modulación de la construcción y al planteamiento de sistemas independientes, estas tipologías pueden agregarse para formar otros tipos de vivienda de acuerdo con las necesidades de los habitantes. También es interesante destacar que estas tipologías están distribuidas en altura según sus características. Por ejemplo, considerando que el barrio ofrece mucha actividad, y consecuentemente genera mucho ruido en la calle durante el día, en las primeras plantas se concentran las viviendas mínimas y los alojamientos pues, en general, serán ocupadas por jóvenes o por personas que trabajan mañana y tarde y estarán en sus casas por la noche, horario en que ya ha descendido el nivel de ruido. En los niveles intermedios aún hay una gran concentración de viviendas “mínimas”, dado que también la gente mayor puede vivir en estos pisos, pero ahí empiezan a aparecer las viviendas “básicas” y “familiares”, que son mayoría en los pisos superiores, más tranquilos durante el día al estar más distantes de los ruidos de coches y de la cuidad.
(09). Sección longitudinal – distribución de tipologías
Desde la casa Los interiores fueron generados partiendo de los conceptos de diversidad espacial y tomando como referencia el trabajo de Montaner/Muxí Arquitectes Definición, condiciones y criterios de diseño para la vivienda del siglo XXI en Andalucía (2008), ya citado anteriormente en este trabajo. Basándonos en él, se pensó la vivienda a partir de tres
180
CASA-CIUDAD – una perspect iva de género
tipos de ambientes -los ámbitos especializados, los no especializados y los complementarios-, buscando no condicionar el uso de los espacios. Las áreas húmedas concentradas proporcionan mayor economía de instalaciones y dejan el resto de espacios libres para diferentes usos, que pueden cambiar según combinaciones espaciales variables.
(10). Tipologías: Alojamiento / Básica – Mínima - Familia
(11). Análisis de las tipologías.
181
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
En relación a los espacios exteriores propios, a excepción de los alojamientos, las otras tres tipologías propuestas cuentan con balcones exteriores, que además permiten la ventilación cruzada. A ello se añadirían los pasillos de acceso a las viviendas, que ya representan extensiones del espacio interior. En estos pasillos exteriores de acceso a las viviendas se dejaron algunos agujeros, que funcionan como filtros de privacidad en relación a las ventanas de estas casas, tal y como se observa en los esquemas anteriores. También la des-jerarquización de los espacios fue uno de los conceptos clave: los baños tienen el lavamanos separado de las otras funciones y las habitaciones de dimensiones mínimas respetan el círculo de 2,80 metros que garantiza la variedad de usos. El siguiente esquema es una sección conceptual que concentra las consideraciones y los criterios que se pretendieron desarrollar en esta propuesta, como la superposición de diferentes tipologías o los espacios exteriores propios y los pasillos de acceso, que también son zonas de usos comunes.
(12). Sección conceptual
182
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
De esta manera, buscando solucionar las dificultades y responder a las necesidades locales, el objetivo final es generar espacios de calidad donde todos los colectivos -hombres, mujeres, jóvenes, niños y ancianos- puedan llevar a cabo y disfrutar sus rutinas diarias.
184
CONSIDERACIONES FINALES
BIBLIOGRAFÍA
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
BIBLIOGRAFÍA AMANN ALCOCER, Atxu. Mujer y Casa – Tesis doctoral. Madrid, 2005. ANDRADE, Geraldo Edson de. Por toda a minha vida, Carmen Portinho. Rio de Janeiro: EDUERJ, 1999. AA.VV. Urbanismo y Género, Una visión necesaria para todos. Barcelona: Institut d’Edicions de la Diputació de Barcelona, 2006.
BAUER, Ursula; KAIL, Eva; KLEEDORFER, Jutta; KOSE, Ursula; LICKA, Lilli; TILLNER, Silja. Richtlinien für eine sichere Stadt! Beispiele für die Planung und Gestaltung sicherer öffentlicher Räume , Schriftenreihe frauen, Band1.Vienna: Magistrat der Satadt Wien, 1995. (título-traducción: Directrices para una ciudad segura. Ejemplos de planificación y diseño de espacios públicos más seguros).
BOFILL, Anna. Planejament urbanístic, espais urbans i espais interiors des de la perspectiva de les dones Quaderns de l’Institut. Barcelona: Institut Català de les Dones, 2005.
BOFILL, Anna. Guia per al planejament urbanístic i l’ordenació urbanística amb la incorporació de criteris de gènere. Barcelona: Institut Català de les Dones/Departament de Política Territorial i Obres Públiques, 2008.
BONDUKI, Nabil (Org.), Affonso Eduardo Reidy: arquitetos brasileiros. São Paulo, Lisboa: Editorial Blau & Instituto Lina Bo Bardi e P.M. Bardi, 2000.
BONDUKI, Nabil. Habitar São Paulo, reflexões sobre a gestão urbana. São Paulo: Estação Liberdade, 2000 COSTA, Lucio. Lucio Costa: registro de uma vivência. São Paulo: Empresa das Artes, 1995 – 2ª ed. JACOBS, Jane. Morte e vida de grandes cidades. São Paulo: Martins Fontes, 1961-2007, 4ª tiragem (1ª ed. 2000). KAIL, Eva; BAUER, Ursula; ZWINGL, Christine. Model Project “Frauen-Werk-Stadt”. Viena: Women’s Affairs Division, 1996.
KAIL, Eva. Frauen-Werk-Stadt. Viena: Stadt Wien, 2001. KAIL, Eva; IRSCHIK, Elisabeth; ZUCKERSTÄTTER-SEMELA, Renate; POSCH Hanna. Stadt Fair, Gender Mainstreaing in Mariahilf . Vienna: Stadt Wien, 2005.
191
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
MIRALLES-GUASCH, Carme. Usos del temps i mobilitat. Barcelona: Regidoria Nous Usos Socials del Temps a la Ciutat. Ajuntament de Barcelona, 2006.
MONTANER, Josep Maria; MUXÍ, Zaida. Criterios para la ordenación y evaluación urbana de nuevos barrios y genealogía de barrios de las ciudades contemporáneas . Barcelona, 2008.
MONTANER MUXÍ Arquitectes S.L. Definición, condiciones y criterios de diseño para la vivienda del siglo XXI en Andalucía. Octubre de 2008.
MONTEYS Xavier; FUERTES, Pere. Casa Collage. Un ensayo sobre la arquitectura de la casa. Barcelona: Gustavo Gili. 2001.
MURILLO, Soledad. El mito de la vida privada. De la entrega al tiempo propio . Madrid: Siglo XXI de España editores, S.A., 2006 – 2ª ed..
MUXÍ, Zaida. Recomanacions per a un habitatge no jerarquic ni androcéntric . Barcelona: Institut Català de les Dones/ Departament de Medi Ambient i Habitatge – Secretaria d’Habitatge, 2009.
MUXÍ, Zaida. Urbanismo y Género. El papel de las mujeres en la configuración de la ciudad . Programa Municipal Dona, Dossiers en Femenino. Ajuntament de L’Hospitalet, 2008.
MUXÍ, Zaida; COVALEDA, Ximena. Arquitectura en femení. Primera generació d’arquitectes catalanes. ETSAB 1964-1975. Barcelona, 2005-2006.
RUBANO, Lizete M. Tesis de doctorado: Cultura de projeto: um estudo das idéias e propostas para habitação coletiva. FAUUSP, 2001. Director: Prof. Dr. Dacio Ottoni.
192
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Artículos AA.VV. La Carta europea de la mujer en la ciudad , Bruselas (Bélgica) 1996. ANTONUCCI, Denise; MONTANS ACKEL, Luiz Gonzaga; NOGUEIRA SILVA, Taisa; SCHWEIGERT, Roberto. Verticalização, habitação social e multifuncionalidade. Edifícios dos IAPs em São Paulo. III Forum de Pesquisa FAU Mackenzie, São Paulo, 2007.
BAUER, Ursula. Un barrio de Viena desde la perspectiva de género. 1995. BOFILL, Anna. "Vivienda y espacio comunitario" en AA.VV.: Urbanismo y Género, Una visión necesaria para todos. Barcelona: Institut d’Edicions de la Diputació de Barcelona, 2006. paginas: 209-212.
COELHO, Carla Maria Teixeira. O Moderno já Passado / O Passado no Moderno . Docomomo 7. Porto Alegre, 2007.
COMAS, Carlos Eduardo. A racionalidade da meia lua. Apartamentos do Parque Guinle no Rio de Janeiro, Brasil, 1948-52. Vitruvius, Arquitexto 010, março de 2001.
DREBES, Fernanda Jung . O edifício residencial e a arquitetura brasileira (1945/55) . Docomomo 5. São Carlos, 2003.
GALESI, René; MALTA CAMPOS, Candido. Edifício Japurá: Pioneiro na aplicação do conceito de “Unité d’Habitation” de Le Coubusier no Brasil. Vitruvius, Arquitexto 031, diciembre de 2002.
HORELLI, Lisa. “La gestión del tiempo y el espacio de la vida cotidiana en el contexto nórdico” en AA.VV.: Urbanismo y Género, Una visión necesaria para todos . Barcelona: Institut d’Edicions de la Diputació de Barcelona, 2006. paginas: 249-258.
MIRALLES-GUASCH, Carme. "Transporte y accesibilidad" en AAVV: Urbanismo y Género, Una visión necesaria para todos. Barcelona: Institut d’Edicions de la Diputació de Barcelona, 2006.
MORÁN, Carmen. Una ciudad para tod@as. Madrid: elpaís.com, 2 de abril de 2007. MUXÍ, Zaida. Mujeres y arquitectura: teoría y práctica de la vivienda. COAM-340, Barcelona, 2005.
193
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
OGATA, Ana Carolina. O Parque Guinle e a construção da paisagem moderna no Brasil: um referencial de projeto para a ocupação de encostas . Trabajo de investigación de la Universidade Federal de Santa Catarina, tutora: Profª Drª Sonia Afonso. Florianópoli, 2004.
PFEIFFER, Albert . Lilly Reich. http://www.core77.com/AWID/reich.html RUBANO, Lizete Maria; FIDALGO YAMAMOTO, Aline; MAZZER CONSTANTINO, André; STEINER ROCHA, Fabio; PANDORI GIANCOLI, Giulliano; BOUCINHAS, Hamílcar; DE OLIVEIRA, Lilian Regina M.; NADER, Mario Sérgio; CAMPAGNUCCI Simone. Duas experiências modernas focando edifício e cidade: IAPI Japurá e IAPC Cidade Jardim. III Seminário Docomomo estado de São Paulo, agosto de 2005.
RUBANO, Lizete. Habitação social: temas da produção contemporânea. Vitruvius – texto especial 469 – arquitextos 095, abril de 2008.
SERPA, Ang elo. Por uma nova paisagem habitacional. Piniweb – noticias, 01 de abril de 1997. SPINDLER da Silva, Rafael. O conjunto Pedregulho e algumas relações compositivas . Vitruvius – texto especial 318, julho de 2005.
SUMAQUERO GUTMANN, Carolina; DA SILVA SCHICCHI, Maria Cristina. Estado atual dos edifícios construídos pelos IAPs em São Paulo: análise dos aspectos de projeto. III Seminario DOCOMOMO de São Paulo, agosto de 2005.
VELÁZQUEZ, Isabel. Hacia un urbanismo con perspectiva de género. El tiempo de las certezas. Reflexiones sobre la ciudad desde el feminismo. Opinión: Mujeres, Medio Ambiente y Desarrolla Sostenible, 2001.
ZEIN, Ruth Verde. Vitruvius. Minha Cidade 136 - junho 2005. Texto originalmente publicado en el periódico: O Estado de São Paulo, Caderno 2. São Paulo, 2 jul. 2001.
194
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
Catálogos CIOCOLETTO, Adriana; PARICIO, Ana; TARRATS, Clara; CRUELLS, Eva; TESSIO, Luciana; FONSECA, Marta; CASANOVAS, Roser; COVALEDA, Ximena; MUXÍ, Zaida. Col.lectiu Punt 6 . Mujeres públicas. Urbanismo y género. Generalitat de Catalunya. Institut Català de les Dones. Gender Mainstreaming Good Practice Projects. BOKU, Analysis Phase 2: Analysis of Projects, Processes and Procedures.
KÖNIG, Claudia; ZWINGL, Christine. PROJEKTBESCHREIBUNG, Viena, 2002. Descripción del Proyecto – Frauen-Werk-Stadt II.
KÖNIG, Claudia; ZWINGL, Christine. Frauen-Werk-Stadt II – Mehrgenerationenhaus, 2002, Viena. PAD – Programa de actuación del distrito de Gràcia, 2008-2011 . Barcelona, Ayutamiento de Barcelona, 2008. Planning recommendations for the gender-sensitive design of public parks . Co-ordination Office for Planning and Construction Geared to the Requirements of Daily Life and the Specific Needs of Women. Municipal Department 42 Parks and Gardens.
Otros CIOCOLETTO, Adri ana; FONSECA, Marta. (tal ler) La Casa sin Género. Máster Laboratorio de la vivienda del siglo XXI (5ª edición), 2008-2009.
CORADIN, Renata; ZULIN, Fabricia; CUZZIOL, Vivian. (Concurso): Premio Caixa – IAB 2008/2009 (4ª edición), São Paulo, 2009.
MUXÍ, ZAIDA. (taller): Interiores Domesticos. Máster Laboratorio de la vivienda del siglo XXI (5ª edición), 20082009.
195
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
MUXÍ, Zaida. (Conferencia): Desvelar el género: la vivienda del siglo XXI . IV Projetar – São Paulo, octubre de 2009.
MUXÍ, Zaida. (curso): Género y urbanismo: teoría y proyecto. Máster oficial de Urbanismo DUOT–ETSAB–UPC, 2009-2010.
ULLMANN, Franziska (Conferencia) : ENJOY CONTEXT. The individual and the public. Conjuntos residenciales y espacio urbano - quarters and neighborhoods in social housing in Vienna. Máster Laboratorio de la vivienda del siglo XXI (5ª edición), Barcelona, noviembre de 2008.
Internet http://www.bcn.cat/congresdones09/es/index.html (II Congrés de les Dones de Barcelona) – acceso: enero 2010 http://www.punt6.net (Col.lectiu punt6) – acceso: enero 2010 http://www.ine.es (Instituto Nacional de Estadísticas) – acceso: enero 2010 http://www.ibge.gov.br (Instituto Brasileiro de Geografia e Estatísticas) – acceso: enero 2010 http://www.elpais.com (periódico El País) – acceso: enero 2010 http://www.folha.uol.com.br (periódico Folha) – acceso: enero 2010 http://www.youtube.com/watch?v=FVEyA_NdnTI (Entrevista Zaida Muxí) – acceso: enero 2010 http://www.iabdf.org.br/premiocaixaiab/resultado_profissional.html (concurso Premio Caixa) - acceso: febrero 2010 http://www.vitruvius.com.br (Vitruvius) – acceso: febrero de 2010. http://pt.wikipedia.org/wiki/SESC_Pompeia (SESC Pompéia) - acceso: febrero de 2010. http://puc-riodigital.com.puc-rio.br (Portal PUC Rio Digital) – acceso: febrero 2010. http://www.piniweb.com.br/construcao/noticias/um-seculo-de-construcao-84434-1.asp (AU-Carmen
Portinho)
acceso: febrero de 2010. http://www.wieninternational.at/en/node/8638 (Eva Kail - mayo de 2008, Viena) - acceso: febrero de 2010.
196
–
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
http://www.wieninternational.at/en/node/13321 (Claudia Prinz, marzo de 2009, Viena) - acceso: febrero de 2010. http://www.wien.info/es (Viena) - acceso: febrero de 2010. http://www.wien.gv.at/english/ (Viena) - acceso: febrero de 2010. http://www.frauenwohnprojekt.org/index.htm (Frauen-Werk-Stadt III) - acceso: marzo de 2010. http://www.nextroom.at/building.php?id=33374 (Sabine Pollak) – acceso: marzo de 2010. http://www.ullmannf.at/FWS/ (Franziska Ullmann) – acceso: marzo de 2010. http://www.frauenwohnprojekt.info/pages/kalypso.php (proyecto Kalipso) - acceso: marzo de 2010. http://www.wohnmodelle.at/index.php?id=88,79,0,0,1,0 (Sarg Fabrik) – acceso: marzo de 2010. http://www.bestpractices.at/main.php?page=vienna/best_practices/gender/gender_mainstreaming&lang=en (gender mainstreaming) – acceso: marzo de 2010. http://www.ultimosegundo.ig.com.br - Percentual de mulheres que trabalham no Brasil é superior a de países europeus. 09/10/2009. – acceso: abril de 2010. http://www.20minutos.es/noticia/676966/0/comparten/tareas/hogares/ - “Hombres y mujeres comparten las tareas sólo en uno de cada diez hogares catalanes”. 14/04/2010 – acceso: abril de 2010. http://www.bcn.cat/ - (Ayuntamiento de Barcelona) – acceso: abril de 2010. http://www.piniweb.com.br/construcao/noticias/imprime84768.asp - (Angelo Serpa) - acceso: mayo de 2010. http://www.core77.com/AWID/reich.html - (Lilly Reich) - acceso: mayo de 2010.
Entrevistas Eva Kail , urbanista, coordinadora del Departamento de género de Viena, 11 de marzo de 2010, Viena. Entrevistada por Renata Coradin.
Franziska Ullmann , arquitecta responsable del proyecto del conjunto de viviendas Frauen-Werk-Stadt I, 11 de marzo de 2010, Viena. Entrevistada por Renata Coradin.
197
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
Miembro de la Asociación [ro*sa] y residente del conjunto de viviendas Frauen-Werk-Stadt III, 12 de marzo de 2010. Entrevistada por Renata Coradin.
Referencias complementarias ÁBALOS, Iñaki . La buena vida. Visita guiada a las casas de la modernidad. Barcelona: Gustavo Gili, 2000. BISQUERT, Adriana; NAVARRO, Isabel. Ciudad y mujer – Actas del curso: urbanismo y mujer nuevas visiones del espacio publico privado. Málaga, 1993 – Toledo 1994.
BOURDIEU, Pierre. La dominación masculina. Barcelona : editorial Anagrama, 5ª ed., 2007. COLOMINA , Beatriz. La Domesticidad en guerra. Barcelona: Actar, 2006. COLOMINA , Beatriz. Sexualitat i espai. El disseny de la intimitat. Barcelona: Edición UPC, 1997. GODINHO LIMA, Ana Gabriela. Arquitetas e arquiteturas na América Latina do século XX, disertación de maestría presentada en la Universidade de São Paulo - FAUUSP. Dirección: Prof. Dr. Paulo Bruna, 1999;
GODINHO LIMA, Ana Gabriela. Revendo a história da arquitetura: uma perspectiva feminista . Disertación de doctorado presentada a la Universidade de São Paulo – FAUUSP. Directora: Prof. Dra. Cynthia Pereira de Sousa. São Paulo, 2004.
GUIMARAENS, Cêça de. Lucio Costa: um certo arquiteto em incerto e secular roteiro . Rio de Janeiro: RelumeDumará, cop. 1996.
HAYDEN, Dolores. Redesigning the American Dream. Gender, Housing and Family Life . New York, W.W. Norton and Co, 1984.
HAYDEN, Dolores. The Grand Domestic Revolution. Cambridge, MIT Press, 1995. KAIL, Eva; IRSCHIK, Elisabeth; PRINZ-BRANDENBURG, Claudia. 10+1 Jahre, Alltags- und Frauengerechtes Planen und Bauen. Vienna: Stadt Wien, 2009.
198
CASA-CIUDAD – una perspectiva de género
LLEÓ, Blanca. Sueño de habitar. Barcelona: Gustavo Gili, 2005. MASSEY, Anne. El diseño de interiores en el siglo XX. Barcelona: ediciones Destino, 1995. MORAES, José. La disolución de la estancia. Transformaciones domésticas 1930-1960. Madrid: editorial Rueda S.L., 2005.
MUXÍ, Zaida. La Arquitectura de la ciudad global. Barcelona: Gustavo Gili, 2004. RIVERA GARRETAS, María-Milagros. Mujeres en relación. Feminismo 1970-2000. Barcelona: Icaria editorial, 2ªed., 2003.
RYBCZYNSKI, Witold. La casa. Historia de una idea. Madrid: Nerea, 1986.
Artículos complementarios Aspern Airfield, MASTER PLAN. The future Vienna. Vienna City administration, 2008.
EDWARDS, Julia; McKIE, Linda. Los sanitarios públicos para las mujeres. Un asunto grave para la política del cuerpo. Revista Feminista, año 9, vol.17. abril de 1998, páginas: 111-129. (edición original European Journal of Women Studies, nº 3, vol.3, agosto de 1996).
FALÚ, Ana; MOREY, Patricia; RAINERO, Liliana. “Uso del tiempo y del espacio: Asimetrías de género y de clase”. En el libro: Ciudad y vida cotidiana. Asimetrías en el uso del tiempo y del espacio. Córdoba, Argentina: 2002. páginas: 15-53.
HAYDEN, Dolores. ¿Cómo sería una ciudad no sexista? Especulaciones sobre vivienda, diseño urbano y empleo, California (EE.UU.), abril de 1979.
MASSEY, Doreen. Espacio, lugar y género. Revista Feminista año 9, vol.17, abril de 1998, páginas: 39-46 (texto del libro Space, Place and Gender – Cambridge Plity Press, 1994).
MUXÍ, Zaida. Ciudad próxima. Urbanismo sin género. revista Ingeniería y territorio, nº 75, 2006 La ciudad habitable.
199
CASA-CIUDAD – una perspecti va de género
RENDELL, Jane. Gender, Space, Architecture. Del libro: Gender Space Architecture. An interdisciplinary introducción. Editoras: Jane Rendell, Barbara Penner y Lain Borden. Editorial Routledge: 2000, Londres y Nueva York, páginas: 225-239.
RIVERA GARRETAS, María-Milagros. La teoría de los géneros. Del libro: Nombrar el mundo en femenino. Pensamientos de las mujeres y teoría feminista. Editorial Icaria, 1994, páginas: 151-178;
SPAIN, Daphne. La importancia de los espacios de género urbanos en el ámbito público en AA.VV.: Urbanismo y Género, Una visión necesaria para todos. Barcelona: Institut d’Edicions de la Diputació de Barcelona, 2006, paginas: 199-208. Vienna’s Urban Development Plan 2005. D.I. Mittringer MA 18, Department for Urban Development, 2005.
Nota: todas las traducciones han sido realizadas por la autora.
200